Ritual Del útero

Creación del espacio sagrado (invocación a las direcciones) Todo el trabajo espiritual, como aquí en la iniciación del Munay Ki, se desarrolla en un lugar seguro y sagrado. Dentro del chamanismo se trabaja en un lugar sagrado, en un lugar en el cual las energías y los espíritus son invocados para protegernos y para que nos ayuden en nuestro trabajo celestial. Para crear un espacio sagrado, mirando hacia el rumbo cardinal al cual se invoca, se dice haciendo sonar tu maraca:

“Invoco a los Guardianes del SUR, invoco a la Gran Serpiente, Ayúdame a dejar el pasado atrás, a cambiar de piel, Enséñame a seguir mi sendero de amor, Y guíame en el sendero de la belleza interior.” AHÓ!

“Invoco a los Guardianes del OESTE, invoco a la hermana Puma / Jaguar, Protege mi espacio medicinal, y muéstrame el camino de la suavidad y de la paz. Enséñame a vivir sin apegos, sin angustia, Y muéstrame el camino más allá del miedo, más allá de la muerte.” AHÓ!

“Invoco a los Guardianes del NORTE, invoco al hermoso Colibrí Real, Lléname de tu néctar y dulzura, para que sólo vea alegría. Saludos también a los abuelos y abuelas de la Tierra, los honro Y les pido que compartan conmigo su sabiduría ancestral.” AHÓ!

“Invoco a los Guardianes del ESTE, invoco al gran Águila / Cóndor, Ayúdame a que mi espíritu remonte vuelo. Enséñame a volar. Muéstrame las alturas, en dónde sólo me atrevo a soñar.” AHÓ!

“Invoco a la Madre Tierra, Pachamama, llena de amor y gratitud te saludo, Gracias por todos tus frutos y bendiciones que me brindas, Por sostenerme, por darme tu medicina.” AHÓ!

“Invoco al Padre Cielo, al Gran Espíritu, a PachaTata, al reino angélico. Les agradecemos por reunirnos y por enseñarnos a entonar la canción de la vida Para poder llevar una vida iluminada cada día.” AHÓ!

“Y en el centro estoy yo”

Al final de la ceremonia despides a las direcciones, guías y maestros por realizar su labor. Mientras miras hacia el rumbo cardinal al cual se invoca, se dice:

Saludamos y damos las gracias a los Guardianes del Sur, a la hermana Serpiente, Saludamos y damos las gracias a los Guardianes del Oeste, al Gran Jaguar, Saludamos y damos las gracias a los Guardianes del Norte, al hermano Colibrí. Saludos a los abuelos, abuelas y antepasados. Saludamos y damos las gracias a los Guardianes del Este, a la gran Águila/Cóndor, Saludamos y damos las gracias a la Madre Tierra, Pachamama, Saludamos y damos las gracias al Padre Cielo, Gran Espíritu, Pachatata.

“EL ÚTERO NO ES UN LUGAR PARA GUARDAR MIEDO O DOLOR, EL ÚTERO ES PARA CREAR Y DAR LUZ A LA VIDA” El rito del útero, es el rito número 13 de las iniciaciones del Munay Ki y fue entregado en el año 2014 a Marcela Lobos, por un linaje de mujeres medicina de la comunidad shipibo de la Amazonia Peruana. Estas mujeres han podido liberarse del sufrimiento ancestral y a través de Marcela, esta sabiduría llega al mundo. Este rito fue entregado para sanar y liberar las memorias de sufrimiento, miedo, dolor, opresión y abusos generados por desbalances en las energías femeninas y masculinas ocurridas desde tiempos inmemoriales en el planeta Tierra. En estos tiempos de integración, el espíritu femenino de la selva ha querido que las mujeres sanen desde el lugar donde florece la vida antes de nacer en la Tierra. Esta sabiduría se transmite de útero

a útero, desde tu 2do chrakra al 2do chrakra del iniciado/a, invocando la energía del linaje de mujeres medicina que se han liberado de estas memorias de miedo y dolor. El espíritu fememino de la selva nos recuerda esta vital y simple verdad: “El útero no es un lugar para guardar miedo o dolor, el útero es para crear y dar luz a la vida” Una vez que recibes el rito del útero, te conviertes en Guardiana del Útero y se te invita a que lo compartas a todas las mujeres posibles para seguir extendiendo la sanación de Gaia. Sanemos nuestra matriz; sanemos los úteros de nuestras madres, hermanas e hijas. Sanemos todas las memorias de dolor, sufrimiento y abusos sobre la energía femenina que habita cada ser humano y de esta manera, brindémosle sanación, alegría, amor compasión a nuestra Madre Tierra y a todas nuestras relaciones. En este Rito el hombre se convierte en Guardián de la Vida, cuidando y protegiendo el espacio sagrado que se abre en la iniciación. Todos conectamos con este Rito como muestra de gratitud hacia nuestra Madre Tierra que sustenta la vida, a través del deseo sincero de iluminar nuestra matriz, amar, sintonizar con la energía creadora y convertirnos en medicina. Este rito conecta con lo divino en nosotros, entre nosotros. Es buscar convertirnos en canales de luz, por donde fluya energía pura del amor maternal, paternal y de nuestro corazón hacia el corazón de la Madre y a todo ser viviente. Los sentimientos de apertura y amor por toda la creación empiezan a tomar un nuevo sentido. Tu cuerpo, tu mente y tu corazón se abren para crear una nueva realidad, reconoces que eres el co-creador con el Gran Espíritu y dejas fluir la fuerza creadora que hay en ti, el Universo y el linaje de mujeres medicina, te acompañarán en el proceso para cuando sientas invocarlo. Carta de Marcela Lobos (primera iniciada como Guardiana del Útero) para todas las mujeres que han sido iniciadas como Guardianas del Útero: Queridas mujeres, Estoy muy agradecida por cada una de ustedes que recibieron el Rito del Útero y también estoy muy agradecida de que quieran compartirlo con otras mujeres. Después de los eventos en Omega, Miami, y Joshua Tree, me siento completa con la tarea de entregar este rito al mundo. Ahora le pertenece a todas las mujeres que están abiertas a recibirlo, y también a los hombres que lo consideren esencial para su sanación. Ahora le corresponde al linaje seguir llevando esta bendición a las cuatro esquinas del mundo, y de esta manera, traer sanidad a nuestra Tierra. Y ahora tú eres el linaje tanto como yo soy el linaje. Nos estamos convirtiendo en aquellas mujeres que se liberaron del sufrimiento. Sigan nutriendo el rito hasta que no haya más miedo o dolor en sus úteros. Mucho amor siempre, Marcela Lobos

Creando el espacio Sagrado para transmitir el Rito: Es muy importante crear un ambiente acogedor que invite al linaje a venir cuando compartes el Rito. Si el espacio se siente atractivo para ti y para las mujeres y hombres que van a recibir el Rito, entonces también será atractivo para el linaje. Abre el espacio Sagrado llamando la energía de las 6 direcciones.

ESPACIO INTERIOR Si la ceremonia va a suceder en un espacio interior, entonces debes construir un altar. No necesita ser grande o complicado, pero si debe evocar belleza y sacralidad. Sobre una superficie plana, como una mesa o un banco, coloca una manta bonita y en el medio de ella un recipiente con agua. Este es el elemento más importante del altar, ya que el agua absorberá las oraciones de la ceremonia y luego se la ofrecerás a la Tierra para su sanación. A continuación, puedes añadir trece velas, alrededor del agua, para honrar las trece lunas del año y también para activar el altar con fuego. Por último, puedes mejorar el espacio y la ceremonia agregando flores o pétalos de flores en el altar (especialmente lavanda y rosas). Después de seguir estos pasos conéctate con tu intuición y con el linaje para saber si debes agregar alguna otra cosa. Haz una pregunta y sintonízate para recibir la respuesta, recordando que tú también eres el linaje.

EXTERIOR Si tienes acceso a un lugar en la naturaleza que sea atractivo y acogedor puedes realizar la ceremonia allí. Una laguna o lago es especialmente ideal porque representa el útero de la Tierra y queremos compartir esta sanación con Ella. Pero, también puede ser debajo de un árbol, en un bosque, junto a una gran roca, junto a un río, en una montaña, o en cualquier lugar que te ayude a comulgar con el carácter sagrado de la vida.

OFRENDA (opcional) Ya sea en interiores o al aire libre, es importante compartir la sanación con la Madre Tierra. Cada mujer que recibe el Rito puede ofrecer una oración de sanación para ella. Si estás en un lugar interior, puedes utilizar los pétalos de las flores para soplar en ellos tus oraciones y luego ponerlos en el recipiente con agua. Al final de la ceremonia vacías esa agua directamente sobre la tierra, o se la das a un río o a un lago. Si estás al aire libre, también puedes soplar tus oraciones en los pétalos y dárselos directamente a la Madre Tierra. Si sientes que hay algo más apropiado que soplar en tus oraciones, confía en tu intuición.

CÓMO INICIAR: 1- Levantas tus manos e invocas al linaje diciendo: El útero no es un lugar para guardar miedo o dolor. El útero es para crear y dar luz a la vida. 2- Activas el rito dentro de ti misma poniendo ambas manos sobre tu vientre y repitiendo: El útero no es un lugar para guardar miedo o dolor. El útero es para crear y dar luz a la vida. 3- Transmites esta sabiduría desde tu útero al útero de la inciada: El útero no es un lugar para guardar miedo o dolor. El útero es para crear y dar luz a la vida. Ella confirma que ha recibido esta sabiduría en su útero poniendo sus manos en su vientre y repitiendo: “El útero no es un lugar para guardar miedo o dolor. El útero es para crear y dar luz a la vida.”

Cómo Nutrir el Rito del Útero Una vez que has recibido el Rito del Útero puedes nutrir su poder con las siguientes prácticas:

SIEMBRA TU LUNA 1.- Si eres una mujer que menstrúa, en tu próximo ciclo encuentra un espacio y tiempo íntimo para darle un poco de tu sangre menstrual a la Tierra. Haz un huequito y sangra directamente sobre la Tierra o recolecta un poco de tu sangre en un pequeño recipiente o copa menstrual y luego derrama en el huequito mientras repites, por ejemplo, las siguientes palabras: Suelto mi miedo para abrazar la libertad Suelto mi dolor para abrazar la alegría Suelto mi rabia para abrazar la compasión Suelto mi pena para abrazar la paz Puedes agregar cualquier palabra o frase que resuene dentro de ti. 2.- Si eres hombre o una mujer que está en sus años de plenitud, pasada la menopausia, entonces puedes hacer un ritual en la próxima Luna Oscura. Crea un espacio íntimo para ofrecer, por ejemplo, “vino tinto” a la Madre Tierra, mientras repites las siguientes palabras: Suelto mi miedo para abrazar la libertad Suelto mi dolor para abrazar la alegría Suelto mi rabia para abrazar la compasión Suelto mi pena para abrazar la paz

Puedes agregar cualquier palabra o frase que resuene dentro de ti. Haz este rito al menos una vez y hasta trece lunas para empoderar completamente a tu útero. 3.- Si una niña que aún no menstrúa recibe el rito y ella quiere hacer un ritual para honrar su útero, entonces ella debe ofrecerle flores a la luna llena. Esto es porque su útero aún está floreciendo y no ha soltado su primera flor. Ella también puede repetir las palabras: Suelto mi miedo para abrazar la libertad Suelto mi dolor para abrazar la alegría Ella debe ser guiada a decir, por ejemplo, sólo las dos primeras líneas y luego puede agregar lo que necesite para su bienestar. 4.-Puedes compartir este rito con las mujeres y hombres de tu comunidad… Cada vez que lo trasmites refuerzas el poder en tu útero y sanas tu energía femenina.