Filosofía Franciscana -alejandro De Hales

FILOSOFÍA FRANCISCANA ORIGENES DE LA ESCUELA FRANCISCANA

Alejandro de Hales “Doctor Irrefregabilis”

Filosofía del Franciscanismo • La orden franciscana fue fundada por san Francisco de Asís a principios del s. XIII, por la misma época que la de Predicadores. • El franciscanismo es un impulso de amor hacia todo lo creado, que representa la obra de Dios, y canta en su ser las perfecciones del Creador.

El espíritu que difundió el Santo de Asís fue la humildad y la caridad fraterna. Respondiendo a este espíritu, en un principio la orden se mantuvo alejada de las actividades intelectuales. Pero en 1235 uno de los más famosos maestros de París –Alejandro de Hales- solicitó el ingreso a la orden. Con él se inicia una gran corriente de pensamiento filosófico que reanudará la filosofía teocentrista y afectiva del agustinismo.

ALEJANDRO DE HALES

Contenido 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9.

Métodos y escritos Contingencia del mundo Hilemorfismo general Antropología Teoría del conocimiento El libre arbitrio Existencia y esencia de Dios El hombre imago Dei Contribucion de Alejandro de Hales

Alejandro de Hales • Los datos biográficos de Alejandro de Hales son un poco imprecisos. Parece ser que nació hacia 1185-1186, en Hales, la actual Owen en el condado de Gloucestershire en Inglaterra.

• Estudió en París, en donde llego a ser maestro en artes. Entre los 25 y los 30 años se matriculó en la facultad de teología de París, ocupando tiempo después la cátedra de Teología hasta poco antes de morir. • Hacia 1235-1236 entró en la orden franciscana, cuando ya tenia los 50 años cumplidos. • A partir de entonces inició la primera escuela franciscana en París.

• Además de la enseñanza desempeñó diversos cargos oficiales ante el rey y ante el Papa. • Por parte de la Orden se le encomendó la primera exposición de la Regla. • En 1245 participó en el Concilio de Lyon y, apenas vuelto a París, fue victima de una grave enfermedad que le llevó a la muerte el 21 de agosto de ese mismo año, cuando tendría unos sesenta años de edad.

• Los años de enseñanza en la Universidad de París fueron turbulentos por la cuestión del pensamiento aristotélico y su interpretación por la escuela árabe de Córdoba. • Con Hales la escolástica latina asume una posición neta frente al aristotelismo.

Métodos y Escritos • Los métodos de enseñanza y las formas literarias de Hales son los comunes de la Escolástica. • La enseñanza en el Medievo se desenvolvía en dos modos diferenciados: 1) La disputatio: era un verdadero dialogo entre maestros y discípulos, en donde esgrimían argumentos en pro y en contra de una tesis cualquiera. 2) La lectio: muy parecida a una clase actual, consistía en que el profesor comentaba las sentencias y dichos de autores famosos y reconocidos.

• Alejandro de Hales escribió: 1. Summa Theologica, llamada en su tiempo Summa Fratris Alessandri. 2. Glossa in quatuor libros Sententiarum Petri Lombardi. 3. Quaestiones disputatae, antequam esset frater. 4. Expositio regulae quatuor magistrorum. (solo coalboró).

Contingencia del mundo • Alejandro de Hales afrontó decididamente uno de los temas característicos de la escuela franciscana: la contingencia radical del mundo y de sus seres. • Este problema de la temporalidad o eternidad del mundo es uno de los puntos diferenciales entre franciscanos y tomistas, lo que en el fondo es la oposición entre San Agustín y Aristóteles.

• Mientras que Santo Tomás y otros teólogos cristianos opinaban que se podía concebir la creación eterna, sin que ella perjudicara la grandeza divina, los franciscanos defendieron a ultranza la temporalidad de la creación. • Según Hales, la eternidad es una categoría divina y una propiedad incomunicable de Dios. Por tanto, ningún ser, fuera de Él, puede ser eterno.

• Dado que consta que el mundo y las cosas creadas son creaturas o entes que proceden de Dios en diversidad de sustancias, es imposible que el mundo y las cosas creadas sean eternas o que no tengan el principio de su duración. • En la Summa Theologicae, Hales comenta lo siguiente: “La creación, pues, es algo eterno y algo temporal: eterna es la acción divina y temporal es el efecto creativo. En Dios son eternas las ideas como paradigmas de los seres creados. Es eterno su querer, su conocer, su decir y su actuar, pero ello no exige que el mundo, en cuanto creación, deba ser eterno”.

Hilemorfismo general • Aunque Alejandro rechace la tesis aristotélica de la eternidad del mundo, sin embargo admite y defiende el hilemorfismo del estagirita. • Una de las grandes ideas de Aristóteles es el hilemorfismo, es decir, la teoría metafísica de materia y forma como clave filosófica de una concepción totalitaria del ser. • Según Hales la composición hilemórfica se encuentra en toda creatura, ya que la materia equivale a la potencia y la forma al acto. La composición hilemórfica alcanza incluso al alma.

• Además de la composición hilemórfica existe otra más fundamental en toda creatura, y es la que se da entre el quo est (qué es) y el quod est (quien es). • El quod est se refiere al ser concreto, por ejemplo un caballo, un hombre; y el quo est se refiere a la esencia abstracta, a la caballez, a la humanidad.

Antropología • Alejandro da un gran espacio al tema del hombre. • El hombre para Hales es interpretado en clave hilemórfica, como compuesto de alma y cuerpo. • Toda su reflexión se apoya sobre la parte más noble del ser humano: el alma. • Para el filósofo franciscano todas las almas son creadas por Dios. Por tanto, no son emanación de Dios ni son parte de la sustancia divina.

En sintonía con su espíritu compilador recoge diversas definiciones del alma: 1. “El alma es un espíritu deiforme de vida” (San Agustín) 2. “Es una cierta sustancia partícipe de razón hecha para regir el cuerpo”. (San Agustín) 3. “Es una sustancia espiritual creada por Dios, estable, vivificante del propio cuerpo”. (Casiodoro) 4. “Es un espíritu intelectual, ordenado a la felicidad en sí y en el cuerpo”. (Séneca)

Pero Hales insiste en afirmar que el alma no es sólo una sustancia en el sentido que es una forma sustancial, sino que es una sustancia simpliciter un ens in se “compuesto de forma y de materia intelectual”. • El alma esta unida al cuerpo según el esquema hilemórfico de la unión de la forma con la materia. Pero esta unión se explica e interpreta en la línea agustiniana, ya que “el alma racional se une a su cuerpo como el motor al movible y como la perfección formal a la realidad que perfecciona”.

• Para Alejandro de Hales el alma posee tres facultades: ▫ Intelectiva ▫ Sensitiva ▫ Vegetativa El alma no puede subsistir sin sus potencias ni puede actuar sin su colaboración, como tampoco las potencias son inteligibles y operativas si se desvinculan del alma.

• Alejandro de Hales en la Summa Theologica menciona lo siguiente en torno a la esencia del alma: “La esencia del alma, pues, es aquello por lo que el alma es absoluta esencia, la potencia es aquello por lo que el alma es capaz de hacer o recibir algo”.

Hales prueba la inmortalidad del alma con diversos argumentos: 1. Por razón del deseo intrínseco de felicidad que tiene todo espíritu. 2. Tomado de la justicia de Dios. Es necesaria la inmortalidad del alma para hacer justicia a los buenos y a los malos. 3. Del hecho ontológico de ser imagen de Dios “el alma posee la inmortalidad porque su naturaleza consiste en ser imagen de Dios”.

Teoría del conocimiento • Según Hales, es necesario distinguir en el hombre el entendimiento posible. • El entendimiento posible y el entendimiento agente se interpretan como dos partes, “dos diferencias” en el alma racional, ambas necesarias para llevar a cabo todo el proceso del conocimiento. • El entendimiento agente está de la parte de la forma del alma misma, en cuanto espíritu; y la otra, es decir, el posible, está de la parte de la materia, con la que es ente en potencia respecto a los cognoscibles que se hacen en esa parte.

• Para Hales hay en nosotros una luz natural, el entendimiento agente, el cual tiene la capacidad de hacer inteligibles en acto la realidad, que solo es inteligible en potencia. Esta luz natural está inscrita en nosotros y es proporcionada a nuestra capacidad de conocer. • El entendimiento aristotélico se refiere a las formas incorpóreas y que son abstraídas por los phantasmata (imágenes). El entendimiento en sentido agustiniano, en cambio, se refiere a las formas incorpóreas, espirituales. Pero cuando se trata de conocer estas formas o seres espirituales, que son superiores al alma, entonces el entendimiento es incapaz por sí mismo y necesita una iluminación especial proveniente de Dios.

El libre arbitrio • Una de las grandes características del hombre que le diferencian del animal y de los seres inferiores es la capacidad de decisión, que implica una opción según unos criterios axiológicos. • Si el hombre decide por las cosas terrenas, en su alma se crea como una distorsión (curvitas animae), pero si se decide por las realidades supremas, entonces el espíritu adquiere su natural rectitud. • Esta facultad de decisión y selección se llama libre arbitrio. • El hombre posee el libre arbitrio porque ha sido creado a imagen de Dios. • El libre arbitrio en cuanto arbitrio se identifica con la razón y en cuanto libre se identifica con la voluntad.

• Hales subraya que el libre arbitrio en el hombre es una facultad o función de la razón y de la voluntad conjuntas, y únicamente en esta conjunción es comprensible y explicable. • En cuanto que está íntimamente vinculado a la razón y a la voluntad, es inseparable del alma y es expresión de la libertad natural.

Existencia y esencia de Dios • El teólogo-filosofo Alejandro de Hales distingue claramente el problema del conocimiento de Dios en tres partes: 1. Por parte del objeto conocido (si Dios es cognoscible y en qué). 2. Por parte del que conoce (cómo y quién puede conocer a Dios). 3. Por parte de los medios del conocer (si se conoce naturalmente o a través de la gracia). Hales parte de la tesis sorprendente de que es imposible no conocer a Dios. Todos los hombres, buenos o malos, pueden conocer la existencia de Dios, aunque niega que el hombre pueda conocer el misterio trinitario a través de la razón y sin la ayuda divina.

• El autor hace una neta distinción entre la existencia de Dios y la naturaleza de Dios y afirma que todos los hombres pueden conocer la existencia de Dios a través de las creaturas, descubriéndole y reconociéndole como causa eficiente y causa final. • En cuanto al conocimiento divino, Alejandro sostiene que Dios conoce todas las cosas en sí mismo y por sí mismo. Las ideas ejemplares o modelos eternos de las cosas están en Dios, aunque analizadas en sí mismas no constituyen pluralidad, sino que se identifican con la esencia divina.

El hombre imago Dei • Que el hombre es imagen de Dios es una tesis común, según la enseñanza del Génesis. • Según el pensador franciscano, el hombre es imagen de Dios no solo en cuanto al alma, sino también en cuanto al compuesto de alma y cuerpo, según el modelo de la encarnación en la que Cristo asumió nuestra propia naturaleza. • El cuerpo para Hales no es un impedimento para el alma. Más aún, lo ve y lo interpreta con su dinamismo natural como orientado hacia el alma. En el cuerpo se da también una armonía y una belleza como resultado de la conjunción de todos sus miembros.

Contribución de Alejandro de Hales • Hales hace una exposición unitaria y sistemática del pensamiento filosófico-teológico de su tiempo; pero el doctor franciscano no confunde la teología con la filosofía ni ésta con aquélla. • Alejandro de Hales está íntimamente ligado a la tradición que sigue la línea de Agustín, Anselmo, Juan Damasceno y Bernardo. • Alejandro representa una fase y una corriente nueva de la filosofía occidental en cuanto que cono y utiliza explícita o implícitamente la obra de Aristóteles y de los aristotélicos, aunque los critica porque no ofrecen una filosofía completa, ya que les faltaba la luz de la revelación.

• En Alejandro se observa un sentido acentuado por lo concreto, por la prioridad de la voluntad sobre el entendimiento y por el sentido práctico del estudio. La filosofía es para él un camino hacia la verdad, y con ella hacia el bien y hacia la perfección.