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Arte y Cultura en

MAGALLANES Aportes para la memoria visual

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ARTE Y CULTURA EN MAGALLANES Aportes para la memoria visual

Investigación: Francisco Vera Buzolic María José Santa María Kraemer Diseño: Mario Aguilera Larenas

Andros Impresores

Este catálogo fue financiado por el Fondo Nacional de Desarrollo Cultural y las Artes (Fondart) Región de Magallanes y Antártica Chilena Línea de Formación e Investigación 2014. Impreso en Santiago el 30 de Agosto de 2014 por Andros Impresores Santa Elena nº1955, Santiago de Chile. Agradecemos a: “Centro de Estudios del Hombre Austral”- Instituto de la Patagonia - Universidad de Magallanes. “Archivo Fotográfico y Biblioteca Patrimonial del Museo Regional de Magallanes (MRM)” - Dibam - Ministerio de Educación. Los ejemplares de este catálogo serán donados a las bibliotecas públicas, centros culturales y organizaciones sociales de la región y estará disponible en versión digital en la página web: www.memoriasdemagallanes.cl

INDICE PRÓLOGO 5 Una aproximación a los conceptos de arte y cultura. 5 Arte y Cultura en el siglo XX. 6 El caso de Magallanes. 7 I. PUEBLOS ORIGINARIOS Autonomía Cultural de los Pueblos Originarios de Magallanes. La Colonización del Estado Chileno. II. EL ARTE Y LA CULTURA EN EL PROCESO DE CONFORMACIÓN DE LA SOCIEDAD MAGALLÁNICA (1890-1930) Espacios y prácticas de la aristocracia. La organización social de la población y el desarrollo educacional. Arte y Cultura en el Movimiento Obrero.

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III. ESTADO E INDUSTRIA CULTURAL (1930-1973) Nuevos Medios e Industria Cultural. Los Gobiernos Radicales (1938 – 1952) y la presencia del Estado en Magallanes. El regreso de Ibáñez y el Puerto Libre (1956) Los años 60’ y la Unidad Popular.

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EPÍLOGO: ARTE Y MODELO NEOLIBERAL

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REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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PRÓLOGO

expresiones de los pueblos originarios de Sudamérica como arte “indígena”, “nativo” o “primitivo”.

Una aproximación a los conceptos de arte y cultura

En rigor el concepto de arte proviene del latín ars (y de su equivalente griego τέχνη, raíz de la palabra “técnica”) y en su origen señalaba la destreza en los más variados oficios y actividades. Ya en el renacimiento se aíslan las artes de los demás oficios y se le comienza a atribuir otro significado al concepto. Es en esta época en que nace la Teoría e Historia del arte, lo que determinará que de aquí en adelante las civilizaciones europeas distingan entre las “Bellas Artes” y las “Artes Menores” y que se intente construir una metodología para descubrir el significado de las distintas obras y expresiones.

Esta investigación utiliza los conceptos de arte y cultura para describir parte de la historia de la actual región de Magallanes. Estos conceptos, sujetos constantemente al cuestionamiento y transformación de sus nociones, merecen entonces una clara delimitación previa. Arte y cultura son conceptos habitualmente emparentados, de hecho las manifestaciones artísticas parecieran indisociables del concepto de cultura. Ambos conceptos hacen referencia a las expresiones más distintivas y relevantes de una sociedad, definiendo su comportamiento, su forma de entenderse a si mismos y al mundo, se trata del ingenio creativo humano y de sus infinitas manifestaciones. Si bien las sociedades actuales parecen reconocer al arte como un producto de la cultura, ambos conceptos cuentan con caminos particulares que revelan sus similitudes y diferencias.

Por otro lado el concepto de cultura es aún más genérico que el de “arte”. Raymond Williams, uno de los mayores exponentes de los estudios culturales como campo de investigación, realizó el trabajo de definir históricamente el concepto de «cultura» y ha logrado establecer que existen diversos usos de esta palabra, relacionadas con el tiempo y ámbito en donde se utilice. De esta manera, el autor reconoce que, para la palabra ‹cultura›, existen tres categorías generales activas de uso: (i) el sustantivo independiente y abstracto que designa un proceso general de desarrollo intelectual, espiritual y estético, a partir del siglo XVIII; (ii) el sustantivo independiente, ya se lo utilice de manera general o específica, que indica un modo de vida determinado, de un pueblo, un periodo, un grupo o la humanidad en general, a partir de Herder y Klemm y (iii) el sustantivo independiente y abstracto que describe las obras y prácticas de la actividad intelectual y especialmente artística. Con frecuencia, éste parece hoy el uso más difundido: cultura es música, literatura, pintura y escultura, teatro y cinematografía (Williams, 2003: 91).

En el caso del arte, las mutaciones que ha sufrido este concepto se pueden exponer de acuerdo a las distintas funciones y significados que se le han atribuido a lo largo de la historia. Desde el campo antropológico se considera que para los primeros homo sapiens el arte cumplía una función ritual, mágica o religiosa, lo que hoy se denomina como “arte paleolítico”. Esta función originaria y su cercanía con el origen del ser humano llevó a Vincent van Gogh a decir que el arte era el hombre agregado a la naturaleza, de manera tal que el arte podía entenderse como toda expresión del ser humano. De la misma manera, y adjudicándole una función similar a la del arte paleolítico, hoy se catalogan las distintas 5

De esta manera, comprendemos al arte y la cultura como conceptos hermanos, con múltiples definiciones y en constante transformación. A partir de estas nociones, entenderemos como arte cualquier actividad, manifestación o producto realizado por el ser humano que revele un sentimiento o pensamiento y que se diferencie de cualquier otra actividad humana por su finalidad estrictamente creativa, comunicativa e intelectual. A su vez entenderemos que la cultura incluye las manifestaciones artísticas y a su vez otras expresiones de carácter más general, que dan cuenta de la forma de vida y cosmovisión de una sociedad. En esta investigación nos centraremos únicamente en las manifestaciones culturales que se relacionen con el quehacer artístico, y no en una definición o caracterización global de la cultura magallánica.

la escritura llegara a serlo también gracias a la imprenta. Son conocidas las enormes transformaciones que la imprenta, la reproducción técnica de la escritura, ha suscitado en la literatura (…) Gracias a la litografía, la gráfica fue capaz de acompañar a la vida cotidiana, ofreciéndole ilustraciones de si misma (…) Si en la litografía se encontraba ya virtualmente la revista ilustrada, así, en la fotografía, el cine sonoro. La reproducción técnica del sonido fue emprendida a finales del siglo pasado» (Benjamin, 2003: 3940). Benjamin señala que en la época de la reproductibilidad técnica de la obra de arte lo que se pierde es el “aura” de esta última. Para el autor el “aura” es la singularidad, la experiencia de lo irrepetible, y lo que la técnica reproductiva realiza es la desvinculación de lo reproducido del ámbito de la tradición.

Arte y Cultura en el siglo XX El siglo XX se caracterizó por un desarrollo desmesurado en tecnología y ciencia y por un sinfín de trastornos socioculturales provocados por la llamada globalización. Ya en el año 1936, y en relación a este fenómeno, Walter Benjamin escribía su ensayo “La obra de arte en la época de su reproductibilidad técnica”, en el cual reflexionaba de la siguiente manera sobre el efecto que a su juicio había tenido el avance tecnológico en el arte hasta ese momento:

En los años 40, Theodor Adorno y Max Horkheimer, de la llamada Escuela de Frankfurt y muy cercanos a Benjamin, postularon una relación entre la economía capitalista (producción en serie, industrialización, mercancías, etc.) y la producción cultural. Desde esta relación nacen los conceptos de “Industria Cultural”, y de su producto, la denominada “cultura de masas”, revelando así la mercantilización del arte y la cultura en las sociedades capitalistas del siglo XX.

«En principio, la obra de arte ha sido siempre reproducible. Lo que había sido hecho por seres humanos podía siempre ser rehecho o imitado por otros seres humanos (…) Comparada con la imitación, la reproducción técnica de la obra de arte es algo nuevo que se ha impuesto intermitentemente a lo largo de la historia, con largos intervalos pero con intensidad creciente. Con el grabado en madera, la gráfica se volvió por primera vez reproducible técnicamente; lo fue por largo tiempo antes de que

Luego, en la década de 1960 se fundan los llamados “estudios culturales” como un campo de investigación de carácter interdisciplinario, que explora las formas de producción o creación de significados y de difusión de los mismos en las sociedades actuales. Estos estudios se caracterizaron por analizar sus materias como prácticas culturales y en relación a su contexto político y social, específicamente con el poder. 6

Nuestra investigación rescata estas perspectivas con el fin de profundizar sobre las relaciones establecidas entre arte, cultura y sociedad. El caso de Magallanes Originalmente esta investigación abarcaba un periodo delimitado por los años 1890 y 1960, pero en la práctica estas fronteras se diluyeron en tres ejes analíticos que dieron cuerpo al presente trabajo. Para analizar las transformaciones que ha sufrido Magallanes en el ámbito cultural y artístico comenzamos abarcando el proceso de sometimiento de los pueblos originarios, como una especie de preámbulo al auge económico (1890-1930), pero en realidad se trata de procesos paralelos. En el segundo capítulo desarrollamos esta época de auge y abordamos el proceso de colonización que replicó la concepción europea del arte, segmentada por clase social. En última instancia analizamos el rol del Estado en el apadrinamiento de la producción artística cultural y la presencia de una industria cultural mundial propagada por lo que hoy conocemos como “globalización”. Esta parcelación de la historia del arte y la cultura de Magallanes, si bien se corresponde con determinados momentos históricos, no señala periodos sino procesos que se entrecruzan. Todos estos procesos son los que intentamos describir brevemente en este trabajo, que en formato de catálogo fotográfico permite comprender de mejor manera las complejas transformaciones artísticas y culturales que ha vivido la región de Magallanes.

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I.

PUEBLOS ORIGINARIOS

Su tradición artística se encontraba asociada especialmente a la pintura, el tejido a telar y la música. Poseían instrumentos musicales propios como el Koolo, el Chelper, el Sonajero, el Aple, el Rambo o el Tarrum y practicaban numerosos ritos, danzas y cantos. El testimonio de Teófilo Schmid, alrededor del año 1860, afirma que para los tehuelches «cada situación o hecho es motivo de canto, no necesariamente premeditado. El canto es espontáneo, es una manifestación de ánimo» (Schmid, 1964:14).

Autonomía Cultural de los Pueblos Originarios de Magallanes La colonización definitiva del extremo sur del continente sudamericano, a más de tres siglos de la llamada “Conquista de América”, no la realizarían los imperios europeos sino los nacientes Estados Nacionales de Chile y Argentina. En efecto, para el año 1843, cuando el Estado Chileno tomaba posesión efectiva del Estrecho de Magallanes, habían transcurrido ya tres siglos desde que los Pueblos Originarios de la región habían hecho contacto con distintos navegantes europeos, sin embargo, es este hito el que marcará la colonización definitiva de sus territorios y culturas.

La llegada de los europeos marcó el comienzo de su extinción debido a las pestes traídas por estos que diezmarían considerablemente la población. Además en el siglo XVII y XVIII, con la llamada araucanización de las pampas y de la Patagonia, comenzó a su vez la penetración de los mapuches desde el oeste, los que influenciarían notablemente a la cultura tehuelche, pero que reducirían también su número debido a las guerras sostenidas entre ambas etnias.

Dentro de las fronteras que delimitarían el Estado Chileno y el Argentino convivían distintos grupos étnicos y lingüísticos que, hasta el proceso de colonización de sus tierras, podían catalogarse como autónomos. Dentro de las actuales fronteras de la región de Magallanes hoy se tiende a distinguir principalmente a cinco de estos grupos, estos son: Aóni-kénk (Tehuelche), Selk-nam (Onas), Haush (Man(e)kenk), Kawésqar y Yámanas (Yaganes).

En la Isla Grande de Tierra del Fuego habitaban a su vez dos pueblos nómadas terrestres, los Selk-nam y los Haush, ambos grupos estaban fuertemente emparentados entre sí, y además, según la evidencia que se conserva de tradiciones, lengua, y cultura, se ha postulado que corresponderían a Aóni-kénk (Tehuelches) que se habrían instalado en la Isla. El nombre Selknam de hecho les fue dado por los Aóni-kénk, mientras que el de Onas proviene del idioma Yagán. El médico etnólogo Robert Lehmann Nitsche postuló que el idioma Selk-nam pertenecía a la lengua Chon, familia de lenguas indígenas de la Patagonia que incluiría a la Aóni-kénk y a la Haush.

Los llamados Aóni-kenk son los grupos tehuelches que se ubicaron desde Chubut (Argentina) hasta el Estrecho de Magallanes, un vasto territorio que hoy pertenece en su gran mayoría a la llamada Patagonia Argentina. Hasta el siglo XVI, cuando comenzaron a transitar las primeras embarcaciones europeas por el estrecho, los tehuelches eran tribus nómades, con un modo de vida cazadorrecolector, que se desplazaban de acuerdo a las estaciones climáticas y a la localización de las manadas de guanacos.

Los Selk-nam habitaban principalmente el norte y centro de la isla, mientras que los Haush estaban localizados en el sureste. Ambos

Los Aóni-kénk poseían numerosas expresiones culturales. 8

grupos eran cazadores recolectores nómadas y se organizaban en clanes patrilineales, los cuales tenían territorialmente dividida la Isla de Tierra del Fuego. Tanto Selknam como Haush poseían expresiones culturales impresionantes y el amplio mundo espiritual que desarrollaban lo representaban en complejos ritos y ceremonias.

artísticas y que recién comenzamos a comprender y valorar. Hoy sólo nos quedan los archivos y los testimonios de las generaciones portadoras del legado que nos permite vislumbrar la complejidad de sus culturas.

Estos 2 pueblos terrestres que habitaban la isla, compartieron también parte de su territorio con dos grupos nómades marinos: los Kawésqar y los Yaganes, quienes poseían notables diferencias físicas, de lengua y de costumbres con Selk-nam y Haush. Los Yaganes son el pueblo originario más austral del continente sudamericano y en sus canoas recorrían los canales del estrecho al sur. Estas canoas eran la propiedad más importante para la comunidad y a su vez, una de las máximas expresiones de su artesanía. Las mujeres Yaganes utilizaban junco para crear todo tipo de cesterías y otros adornos y utensilios. Tanto hombres como mujeres utilizaban también distintos tipos de artesanías confeccionados a partir de huesos de animales y conchas. Si bien el área que abarcaban los Yaganes era enorme, la de los Kawésqar era aún mayor, abarcando desde el Estrecho de Magallanes hasta los canales del norte donde se comunicaban con los Chonos provenientes del archipiélago de Chiloé. Al igual que los Yaganes, la canoa era su principal patrimonio material, la confeccionaban con corteza, principalmente de coigüe, y representaba más que un medio de transporte, una vivienda flotante. En síntesis, estos 5 grupos poseían infinitas expresiones que no podremos abarcar, pero que la sociedad actual cataloga de 9

Imagen nº 1: Mujeres y niñas Tehuelche junto a su telar. Alrededor de 1900, autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 10

Imagen nº 2: Mujer Tehuelche junto a su telar. Alrededor del año 1900, autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 11

Imagen nº 3: Hombres Selk-nam vestidos para ceremonia. Autor Martín Gusinde. Año indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 12

Imagen nº 4: Mujeres Selk-nam en toldo. Año y autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 13

Imagen nº 5: Hombres Selk-nam, cuerpos pintados para ceremonia. Año y autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 14

Imagen nº 6: Mujeres Kawesqar probablemente en Puerto Edén. Hacia 1940. Autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 15

La colonización del Estado Chileno

Hacia fines del siglo XX el Estado Chileno buscaba cohesionar identitariamente un territorio que poseía notables diferencias culturales, étnicas y religiosas; y para cumplir con esta tarea tuvo como uno de sus mejores aliados al sistema educacional, a través del cual se cimentaron las nociones de Dios y Patria como las bases identitarias de las nacientes generaciones.

El año 1844, a sólo un año de la toma de posesión del Estrecho de Magallanes y durante la gobernación de Fuerte Bulnes del Sargento Mayor Pedro Silva, se firmaba un “Tratado de Amistad y Comercio” con el cacique Aóni-kénk Santos Centurión donde se acordaban cuestiones de tránsito y comercio.

La Iglesia Católica estaba presente en Chile desde la Conquista Española y con el proceso de Independencia, si bien fue perdiendo injerencia en muchos ámbitos de la sociedad, siguió jugando un rol preponderante en muchos aspectos, sobre todo en el educacional. En Magallanes los salesianos implementaron reducciones indígenas conocidas como misiones y que se instalaron en territorio chileno y argentino desde fines del siglo XIX hasta las primeras décadas del siglo XX. Estas misiones reconocían como su misión la “evangelización” y/o “civilización” de los indígenas y en un contexto donde se les cazaba como animales encontraron una justificación para concentrar en sus misiones a estos grupos.

Con este precedente, y luego del traslado de la población a la naciente colonia de Punta Arenas, se logró establecer una verdadera relación de intercambio que devino tradición y que significó que los tehuelches se incorporaran en varias actividades y celebraciones realizadas en la colonia. Una de estas instancias eran las carreras troperas o “a la chilena” a las cuales llegaban a competir también los caballos del llamado “Cacique Mulato”1. Los tehuelches habían adoptado el uso del caballo con la llegada de los españoles y para la colonización de Magallanes ya eran eximios jinetes. Sin embargo este proceso de aparente intercambio cultural llegó a su fin con el progresivo despojo de sus tierras gatillado por el inicio de la actividad ganadera y minera. En la década de 1880 la fiebre del oro en Tierra del Fuego provocó las primeras grandes matanzas de Selk-nam donde destacan por su crueldad el rumano Julius Popper, el argentino Ramón Lista y el neozelandés Alexander Cameron, entre muchos otros.

La “Misión Salesiana de San Rafael”, ubicada en lo que hoy en día se conoce como Isla Dawson, permaneció activa entre los años 1888 y 1911. En el año 1895 los estancieros habían llegado a un acuerdo con la misión de acuerdo al cual les pagarían una libra esterlina por cada indígena deportado a la Isla. De esta manera se llegó a albergar a más de 800 individuos a los cuales se intentó evangelizar y educar según los parámetros salesianos. En su gran mayoría morirían rápidamente debido a enfermedades y al cambio de estilo de vida.

1 El llamado Cacique Mulato, cuyo nombre real era Chumjaluwün, es reconocido como el último gran jefe de los Tehuelches en tierras magallánicas y fue cacique desde 1892 hasta el año 1905, cuando el gobierno de Chile subasta sus tierras a la Sociedad Explotadora de Tierra del Fuego y este muere un tiempo después a causa de la viruela.

Otra misión importante a la cual llegarían los Selk-nam se llamó “Nuestra Señora de la Candelaria” y se ubicó en Río Grande, Tierra del Fuego (Argentina). 16

En Magallanes los descendientes de las distintas etnias que habitaron este territorio se encuentran hoy profundamente transculturizados y la memoria de sus pueblos ha sido utilizada por una narrativa nacional que, con el fin de cohesionar identitariamente a la nación, tiende a folclorizar lo indígena, es decir, a hacer parte de su historia la historia de las etnias que extinguió, como si se tratara de una etapa embrionaria del nacimiento de Chile. Esta folclorización ha encontrado actualmente otro nivel de enajenación a partir de la explotación comercial y turística de lo “indígena” como una moda, marca y/o motivo. Este fenómeno, propiciado por la imperante economía de mercado, se expande por toda la gama comercial vinculada al fenómeno turístico, líneas aéreas, agencias, empresas, comercio, transporte, artesanía, hoteles y restaurantes. De esta manera, y lamentablemente, muchas de las instancias actuales en las cuales se re significan aspectos culturales de los pueblos originarios de Magallanes se hace con una finalidad comercial.

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Imagen nº 7: Al centro el Cacique Mulato. Alrededor del año 1900. Autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 18

Imagen nº 8: Mujer Tehuelche a punto de montar en su caballo. Faja en cuello de caballo. 1895-1900. Autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”,Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 19

Imagen nº 9: Mujeres y niñas Tehuelche delante de un toldo. Año y autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”,Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 20

Imagen nº 10: Mujeres y niños Selk-nam en Misión Salesiana San Rafael de Isla Dawson, 1891. Autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 21

Imagen nº 11: Misión Salesiana de Isla Dawson. Alrededor de 1900. Autor indeterminado. Colección perteneciente al “Archivo Fotográfico y Biblioteca Patrimonial del Museo Regional de Magallanes (MRM)” – Dibam – Ministerio de Educación. 22

Imagen nº 12: Mujeres Selk-nam en la misión salesiana Nuestra Señora de la Candelaria, Río Grande, Tierra del Fuego, Argentina. Año y autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 23

Imagen nº 13: Mujeres Selk-nam en Misión Salesiana San Rafael de Isla Dawson. Año y autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 24

Imagen nº 14: Mujeres y niño Kawésqar en Cuter Cove (Península de Brunswick) hacia 1907. Autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”,Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 25

Imagen nº 15: Mujer Tehuelche tejiendo una faja. Río Gallegos, Argentina, alrededor de 1930. Autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 26

Imagen nº 16: Familia Tehuelche en el lago Cardiel, Argentina. De Agostini, 1938. Autor indeterminado Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 27

II. EL ARTE Y LA CULTURA EN EL PROCESO DE CONFORMACIÓN DE LA SOCIEDAD MAGALLÁNICA (1890-1930)

se desarrollaron los diferentes gustos artísticos de este grupo. El despliegue artístico y cultural del resto de la población surgió con la creación de sus distintas organizaciones que, en muchos casos, reprodujeron la tradición artística de sus lugares de origen. A su vez, el avance que se vivió en este periodo en materia educacional significó la creación de los primeros establecimientos educacionales que se transformarán en espacios de gran importancia para la formación sociocultural de las juventudes magallánicas.

En la última década del siglo XIX y hasta la tercera década del siglo XX, se desarrolló en Magallanes un importante proceso histórico, fundante en muchos sentidos y que expresó transformaciones en diversos ámbitos: políticos, sociales, económicos y culturales. El inicio de este periodo, catalogado por la historiografía regional como «la edad de oro», está marcado por una intensificación generalizada de las actividades económicas que responden en gran parte a la condición de Puerto Libre que Magallanes gozaba desde 1867. Los beneficios arancelarios con los que contaron los colonos en la segunda mitad del siglo XIX permitió el desarrollo de la actividad minera y ganadera y, sobre esta base, la conformación de las grandes fortunas “pioneras”. Con los remates de las tierras fiscales a principios del siglo XX y la conformación de las grandes sociedades ganaderas, el territorio comenzó a explotarse de manera intensiva y el sector económico sufrió una expansión en todos los niveles.

Por su parte, en el mundo obrero se le otorgó gran relevancia al desarrollo cultural e intelectual de los trabajadores. Esto se expresó en un amplio desarrollo de su prensa escrita, en la creación de cuadros artístico-culturales y en una intensa producción xilográfica, por nombrar algunos. En síntesis, en esta época las manifestaciones culturales cumplieron un rol de congregación social y, en ese sentido, ayudaron a consolidar las distintas identidades que iban emergiendo. Espacios y prácticas de la aristocracia

El sistema económico instaurado significó la conformación de distintos estratos socioeconómicos, los cuales se identificaron con determinados patrones y expresiones culturales que, de manera paralela, confluyeron en la región.

El auge económico de la “época dorada” fue conformando un grupo social que acumuló las riquezas producidas por las actividades económicas de la región y que fue adquiriendo las características

Dentro de la naciente aristocracia magallánica se reproduce la concepción europea de las llamadas “Bellas Artes”2 , que había promovido un desarrollo elitista de manifestaciones como la pintura, la arquitectura, el teatro, la danza y la música. En este contexto, se constituyen espacios y círculos exclusivos en donde

2 Concepto propio del paradigma de la modernidad el cuál apuntaba al perfeccionamiento moral, intelectual y estético de la humanidad. Fue este modelo el que fundamentó la creación de escuelas, academias y conservatorios de arte, que en efecto producirían un arte “más elevado” posible de apreciar sólo en espacios exclusivos. Así nacen los Teatros y Museos.

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de un Oligopolio Económico3. Se formaron grupos familiaresempresariales que terminaron por controlar todos los rubros económicos de la colonia: el comercial, el marítimo, el ganadero, el minero, el bancario y el sector de los servicios. Ellos eran los Braun Hamburger y los Menéndez Behety (Martinic, 2006: 907).

que gozaba este grupo social, así como también lo era el acceso exclusivo a conciertos musicales desarrollados al interior de estos palacios. Pintores europeos, en su mayoría ingleses, españoles, franceses, austriacos e italianos, basados en la tradición clásica o académica de las escuelas de Bellas Artes del viejo mundo, realizaron las pinturas que adornarían estos palacios.4 No es casual que los integrantes de las familias más acomodadas se encuentren representados en estos cuadros; la tradición europea de encargar retratos como una forma de exaltar el poder político y económico, se instaló también en Magallanes.

La máxima expresión de su poderío económico lo encontramos en la construcción de grandes mansiones residenciales que, conservadas hasta el día de hoy como patrimonio histórico de la ciudad, nos dan señales de sus gustos artísticos y cultura. Arquitectos europeos diseñaron entre 1891 y 1895 los palacios de los “pioneros” más acaudalados, como el de Sara Braun, José Menéndez, Mauricio Braun y otros.

El auge económico de este grupo social y la influencia que ejercieron en el ámbito de lo cultural tiene su máxima expresión en la construcción del Teatro Colón (que pasaría a llamarse José Menéndez y que hoy es el Teatro Municipal Jose Bohr). En 1897, el empresario José Menéndez contrata al mismo arquitecto que había diseñado el Palacio Sara Braun, el francés Numa Mayer, para que diseñara el Teatro Colón. Su fachada responde al estilo neoclásico francés y su interior se asemejaba al Teatro Colón de Buenos Aires.

En la construcción de estos palacios se refleja el aspiracionismo cultural de este grupo social, basado en el esplendor de la «Belle Epoque» Europea y el «Art Nouveao». Esta última fue una corriente modernista que buscaba marcar la autenticidad de una época que nacía de la mano de la revolución industrial y el ascenso de la burguesía. Aplicada principalmente al diseño y la arquitectura, este estilo promueve el uso de líneas onduladas y asimétricas y la incorporación de los nuevos materiales que la creciente industria fuera produciendo, como el hierro y el cristal. Tanto en las construcciones como en el diseño de la decoración y mobiliarios, se utilizaban motivos de líneas curvas, destacando entre ellas las flores, las hojas y la figura femenina.

Antes de la creación de este teatro los espectáculos artísticos se realizaban en el cuartel de la compañía de Bomberos ubicada frente a la Plaza Muñoz Gamero5. Sin embargo, la gran afluencia artística y el esplendor cultural que fue gozando la ciudad,

Además, el acceso a esculturas, pinturas, telas, mueblería, etc. realizadas por artistas europeos, era un símbolo del privilegio

4 Interesante en esta materia es revisar el trabajo: Investigación sobre la colección de arte del Museo Regional de Magallanes. Catálogo que ordena las pinturas que conserva el Museo Regional, financiado por el FONDART regional 2013, a cargo de Claudia Bahamonde Gallardo.

3 Término que hace referencia al control que un pequeño grupo ejerce sobre la totalidad del mercado de un territorio.

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producto de su condición de puerto principal, la fue convirtiendo en un gran centro cosmopolita que atraía a artistas de los más diversos lugares. Así, la ciudad de Punta Arenas comenzó a demandar un salón a la altura que albergara a la cada vez más creciente variedad de espectáculos que arribaban y que tenían como destino final las grandes ciudades del Pacífico o Atlántico. Con este fin se inaugura a mediados de 1899 el Teatro Colón6. En él se presentaron principalmente operetas y zarzuelas y se realizaron las primeras exhibiciones de cine mudo.

5 El Club de Bomberos servía de lugar de esparcimiento y sociabilidad; en él se realizaban obras de teatro y conciertos musicales en donde destacan nombres como los de Ana y Fanny Braun, Domitila Pinto de Navarro, Edelmira Gómez, Dolores Dómine y Juan Meidell. Su repertorio incluía piezas selectas diversas y también de música ligera (Martinic, 1988: 293). En este club se presentaron las primeras compañías de opereta y zarzuela de Punta Arenas. 6 La información sobre el Teatro Colón fue recogida fundamentalmente del libro de Dante Baeriswyl Rada Arquitectura en Punta Arenas, primeras edificaciones en ladrillos 1892-1935. Punta Arenas: La Prensa Austral Impresos, 2001. Pág. 130-132.

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Imagen nº 17: Edificio (Casa Habitación) Sara Braun hacia 1935. Autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 31

Imagen nº 18: Retrato Braun Menéndez. Colección perteneciente al “Archivo Fotográfico y Biblioteca Patrimonial del Museo Regional de Magallanes (MRM)” – Dibam – Ministerio de Educación. 32

Imagen nº 19: Aspecto frontal del Teatro Municipal. Alrededor de 1900. Autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 33

Imagen nº 20: Teatro Municipal en su interior. Año y autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 34

La organización social de la población y el desarrollo educacional.

El desarrollo educacional fue otro de los aspectos de esta “época de oro”. Según el censo de Lautaro Navarro, hacia 1907 existían ocho escuelas primarias fiscales y municipales con una matrícula que doblegaba el promedio de población escolar de toda la República (Martinic, 1988:873). Desde el seno de los establecimientos educacionales se comenzó a gestar un importante desarrollo artístico en los jóvenes, que se expresó tanto en el ámbito literario como en el musical y visual.

La época dorada no sólo tuvo su expresión en la conformación de las grandes fortunas y el esplendor arquitectónico de la ciudad, sino también en los altos niveles de sociabilidad y de desarrollo cultural que fue experimentando la población. Entre 1890 y 1920 se fundaron la gran mayoría de las organizaciones sociales, entre ellas las sociedades mutuales de inmigrantes, las sociedades filantrópicas y de servicios (como los bomberos y la Cruz Roja), las organizaciones deportivas y las principales sociedades y gremios de trabajadores. La población organizada de esta forma generó un florecimiento de sus capacidades artísticas.

Un hecho que representa el auge de este desarrollo cultural en los jóvenes es el nacimiento de la Revista Germinal en 1928, que nos permite visualizar la intensa vida artística que se vivía al interior de los Liceos.

Fue de la mano de inmigrantes europeos que nacen las primeras agrupaciones artísticas. En 1899 los colonos alemanes crean el Deutscher Maenner-Gesangverein “Eintracht” (Sociedad Coral Alemana “Eintracht”). En 1904 los croatas fundaron el Hrvatsko Tamburasko Drustvo “Tomislav” (Estudiantina Crota “Tomislav”) y ese mismo año el Hrvatsko Omladinski Dramatskp Drustvo (Conjunto Dramático Juvenil Croata). En 1906 los españoles crearían el Orfeón Español.

Como es declarado desde su primer número, Germinal fue una publicación creada exclusivamente por los alumnos; no sólo fue escrita por ellos sino también compuesta, corregida, impresa, encuadernada y vendida por los liceanos. Esta revista funcionaba como promotora del desarrollo cultural y artístico de los jóvenes, no sólo porque en ella se publicaran sus principales actividades recreativas, sino también porque la revista misma servía de tribuna para los escritos de los alumnos.

Las artes literarias florecieron de igual modo en este periodo. En la década del 10’ se encontraron en Magallanes reconocidos poetas y poetisas que por diferentes motivos llegaron a vivir a la región. Entre ellos quienes más destacan son Julio Munizaga Ossandon, Gabriela Mistral (que llego a Punta Arenas como directora del Liceo de Niñas en 1918) y Olga Acevedo. Entre ellos se originó una fecunda actividad literaria e intelectual que culminó con la publicación de la revista Mireya en 1919.

Destacados poetas regionales como Francisco Coloane, José Grimaldi y Roque Scarpa, estudiantes del liceo, publicaron sus primeros trabajos en Germinal. De hecho José Grimaldi fue su primer director y luego, desde su publicación n° 4 lo fue Roque Scarpa. Es interesante destacar la formación de distintos colectivos interesados en promover la sociabilidad de los estudiantes a partir 35

de actividades artísticas y culturales. En su primera edición de Mayo de 1928 aparece el nacimiento del “Grupo Estudiantil Revelación” que perseguía “difundir la literatura y las bellas artes entre la juventud estudiosa, y aunar las fuerzas materiales e intelectuales del estudiantado magallánico» (Germinal n°1, mayo 1928). El 25 de mayo de ese año, se forma el Centro Cultural “Ateneo Cultural” con el propósito de estrechar lazos entre la juventud estudiosa de Magallanes y organizar veladas de beneficiencia para ayudar a los estudiantes de escasos recursos. Su primer presidente fue José Grimaldi, secretario Roque Scarpa y tesorero L. Proust. En Junio de 1929 aparece la formación de la Academia Literaria Andrés Bello, donde los alumnos podían exponer sus producciones literarias. Los temas de la academia versan sobre literatura, filosofía, historia e idiomas. Grandes personalidades pasaron por la academia, como Mario Garay (importante periodista y escritor magallánico), quien fuera su secretario desde 1932, mismo año en que comienza a desempeñarse como secretario de redacción de la revista Germinal. También aparece ese mismo año la formación del Grupo Artístico de Dibujo en Linolium (Xilografía). En la primera etapa destacan alumnos como Mario Garay, Francisco Brzovic, Andrés Kelly y Juan Doberti. Resulta interesante el interés de este grupo por la vida y el arte indígena. Además de sus dibujos y escritos que hacían referencia a la cultura mapuche, pintaron también el telón de boca y los bastidores del Liceo con motivos araucanos, planteando el interés por crear “estilo chileno de arte decorativo” (Germinal n°11, diciembre 1929).

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Imagen nº 21: Estudiantina Croata “Tomislav” 1918. Autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 37

Imagen nº 22: Inauguración Teatro Apolo. Antes de 1930. Autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 38

Imagen nº 23 y 24: Revista “Mireya” 1919. Poemas de Gabriela Mistral. Colección perteneciente a la Biblioteca Nacional. 39

Imagen nº 25 y 26: Revista “Germinal”. Selección 1928-1933. Colección perteneciente a la Biblioteca Nacional. 40

Imagen nº 27 y 28: Revista “Germinal”. Selección 1928-1933. Colección perteneciente a la Biblioteca Nacional. 41

Imagen nº 29 y 30: Revista “Germinal”. Selección 1928-1933. Colección perteneciente a la Biblioteca Nacional. 42

Imagen nº 31: Revista “Germinal”. Selección 1928-1933. Colección perteneciente a la Biblioteca Nacional. 43

Arte y Cultura en el Movimiento Obrero

en todos los cines. A veces había cine y otras veces había teatro, que hacían los mismos federados aficionados» (Pascual Guerreo, 1985; en Rodríguez, 2004:393).

La memoria de los obreros que protagonizaron los primeros movimientos sociales en Magallanes, es la memoria de hombres, mujeres y niños que convivieron durante un importante periodo de sus vidas no sólo en base a huelgas y luchas, sino también en base a momentos festivos y de gozo que fueron tejiendo lazos y amistades.

Hacia los años 20’, década del boom de los teatros en la región, se suscitó entre los obreros las primeras presentaciones cinematográficas. Hay que destacar al teatro Politeama de Punta Arenas, en donde además se realizaban tradicionalmente los eventos de conmemoración obrera, como el primero de mayo y el 27 de julio.

El movimiento obrero que se organizó en Magallanes le otorgó una importancia fundamental al desarrollo cultural y artístico de los trabajadores, pues para ellos había que elevar al pueblo no sólo en lo material, sino también moral e intelectualmente. Prueba de ello es que cuando en 1911 se funda la Federación Obrera de Magallanes se crea también un periódico (“El Trabajo), una biblioteca y un Teatro Popular.

En Puerto Natales la Federación Local se reunía principalmente en el Teatro Libertad construido alrededor de los años 14 o 15 y adquirido posteriormente por el Sindicato de Campo, Frigorífico y oficios varios. Se ubicaba en la esquina de las calles Manuel Bulnes con Juan Ladrillero, al lado de la sede del Sindicato Mar y Playa y cercano al local de la imprenta “El Esfuerzo”. Conocido también como Teatro Obrero o el Teatro del Pueblo este espacio fue de gran importancia para el desarrollo del arte y la cultura dentro del movimiento obrero natalino. Su interior estaba decorado con pinturas de José Caniggia Porta, vecino italiano gran colaborador del Sindicato de Campo y Frigorífico. Desde 1936 el sindicato adquirió la maquinaria para exhibir películas acompañadas de un pianista. También se presentaron en él veladas de boxeo y fue en una de sus salas que se proclamó al primer diputado de la provincia de Magallanes, Juan Efraín Ojeda.

La sede de la Federación se fue convirtiendo también en un espacio de concentración artística y cultural que, hasta el ataque incendiario del año 1920, se preocupó de formar cuadros de Teatro Popular y de ofrecer todos los meses una velada popular gratuita, en donde se proyectaba una película. Según el relato del federado Pascual Guerrero: «la Federación tenía una buena sede... los días festivos también pasaban películas, me acuerdo que costaba 50 centavos la entrada...se pasaban películas, funciones teatrales para entretener a la gente, y durante el día había charlas o una especie de controversia, porque en el día los hombres trabajaban y muchachos como yo lo pasábamos en la Federación, mujeres, chicos, de todo” y luego agrega: “siempre había mucha gente, porque iban a la biblioteca o a tomarse un café, al cine y se iban a la matinée o a la función de la noche, como

«El teatro Libertad fue el centro motor de las actividades obreras y en este local se gestó la vida de Natales como pueblo. Las asambleas se realizaban los días miércoles y sábados. Cada frigorífico enviaba a sus directores a rendir cuentas sobre la marcha de las actividades laborales y las gestiones sindicales. A 44

la Asamblea General asistían todos los obreros de las diferentes estancias. Aquí rindieron examen, ante numerosa concurrencia, los primeros líderes de la causa obrera, la mayoría muy joven, que con su capacidad de oratoria conquistaban a los asistentes, apoyados por la corriente socialista que era mayoritaria dentro de la organización » (Bitterlich, Revista Impactos: 28).

trabajadores fue interrumpido durante la dictadura de Carlos Ibáñez del Campo (1927-1931), en donde el movimiento obrero fue reprimido fuertemente, sus periódicos clausurados y sus dirigentes obreros socialistas, comunistas y anarquistas perseguidos y apresados. En este periodo, el movimiento sindical se dividió entre quienes apoyaban al gobierno de Ibáñez y quiénes no. Los Ibañistas controlaban los sindicatos y las actividades obreras se realizaban bajo el control de las autoridades. Esto fue propagando un clima de desencanto que repercutió en el número de asistentes a las reuniones y conmemoraciones.

Luego de la oleada represiva de fines de la segunda década del siglo XX, marcada por el incendio de la Federación, las huelgas de Natales y las matanzas de Santa Cruz, se produce un periodo de reorganización sindical y las expresiones artísticas de los trabajadores viven un nuevo empuje. Las actividades conmemorativas cumplieron un papel muy importante en este proceso. A partir de 1921, se comenzó a conmemorar el 27 de Julio (día del incendio de la FOM) que junto con las conmemoraciones del 1° de Mayo y del 23 de enero (Comuna de Natales), se transformaron en instancias en donde se desarrollaron importantes manifestaciones artísticas y culturales. En 1922 la Federación, en pleno proceso de reorganización, creaba un Cuadro lírico, «con el cual se comenzaron a realizar actos y veladas de beneficio, a favor de los detenidos de los sucesos de Natales» (Rodríguez, 2004: 705). Unos años después surgen centros culturales como el “Ateneo” y el “Rosa Luxemburgo”. Ligado a este último estaba una organización llamada “Comité de Acción Común de Asalariados” que publica un periódico titulado “La Acción”. Este periódico contiene valiosos carteles xilográficos que representan a su vez el desarrollo que tuvieron las artes gráficas dentro del Movimiento Obrero Magallánico7.

7 Sobre Arte Gráfico dentro del Movimiento Obrero revisar nuestro trabajo anterior “El Cartel en Magallanes. Rescate del Arte Gráfico presente en la prensa Ilustrada 1905-1927” Proyecto Financiado por Fondart regional 2013.

Todo este proceso de desarrollo artístico y cultural de los 45

Imagen nº 32: Huelga FOM, 1916. Autor indeterminado. Colección perteneciente al “Archivo Fotográfico y Biblioteca Patrimonial del Museo Regional de Magallanes (MRM)” – Dibam – Ministerio de Educación. 46

Imagen nº 33: Invitación del Teatro Libertad de Puerto Natales. 47

Imagen nº 34: Obreros en Última Esperanza. Año y autor indeterminado. Colección Privada. 48

Imagen nº 35: Obreros en Última Esperanza. Año y autor indeterminado. Colección Privada. 49

III.

ESTADO E INDUSTRIA CULTURAL (1930-1973)

esos años se encontraba en crisis debido a los efectos prolongados que la depresión del 29’ y las guerras mundiales habían dejado sobre la economía ganadera.

Para el año 1930 Magallanes había recién abandonado la denominación de “Territorio de colonización” (1856-1929) para convertirse en la nueva “Provincia de Magallanes”. Este hecho coincidió con el proceso de consolidación en Chile del Estado de Bienestar o Estado desarrollista, que implicaba que el Estado comenzaba a conducir la estrategia de desarrollo económico y social de la nación.

Asimismo, para consolidar el grupo humano que llevaría a cabo este desarrollo industrial se crea en 1947 la Universidad Técnica del Estado (UTE) sobre la base de la mítica Escuela de Artes y Oficios fundada en 1849. Esta Universidad adquirió una relevancia trascendental en el desarrollo cultural y artístico no sólo de los estudiantes, sino que de toda la población a través de sus programas de extensión universitaria.

Desde mediados de la década del 20’, cuando bajo la presidencia de Alessandri Palma se crean las primeras leyes sociales de protección, y hasta 1973, año en que asume la conducción del país una Junta Militar y se instala un nuevo modelo económico de libre mercado que traspasa a los capitales privados la responsabilidad del desarrollo económico y social, los gobiernos que asumieron el control estatal creyeron firmemente en el rol que el Estado debía cumplir dentro de la industrialización del país y en la consecuente mejora de las condiciones de vida de la población. Si bien hubo grandes diferencias entre los distintos gobiernos siempre existió una continuidad en la confianza hacia el modelo desarrollista.

«Todo el sistema de la Universidad Técnica del Estado destinó, desde su base hasta los niveles superiores, personal y medios que llegaron a todos los sectores con las escuelas de temporada, audiciones radiales, ediciones de libros, revistas, periódicos y carteles; cine, teatro, música, ballet y folclor. Es lo que la Comisión Internacional de la Educación denominó “la ciudad educativa”» (Kirberg, 1981, Cap. IV). La UTE se funda en 1961 en Magallanes y significó un nuevo impulso para toda la actividad cultural desarrollada al interior de los establecimientos educacionales y liderada por la juventud.

Es sobre todo con el ascenso de los gobiernos radicales al poder (1939-1952) y la consolidación del modelo ISI (Industrializador Sustitutivo de Importaciones), que la región de Magallanes cobra una relevancia particular dentro de este proyecto desarrollista.

Además, estos procesos se conjugan con la penetración de los sistemas de comunicación global y la conformación de toda una industria cultural asociada a la música, el cine, la radio y luego la televisión que van a ir adquiriendo cada vez más protagonismo dentro del desarrollo sociocultural de la población.

En 1950 la Corporación de Fomento a la Producción (CORFO) crea ENAP (Empresa Nacional del Petróleo), para explotar los yacimientos descubiertos entre 1945-1950 en Tierra del Fuego y en el Estrecho de Magallanes. Esto cambia drásticamente la totalidad de la estructura socioeconómica de Magallanes, que por 50

Nuevos Medios e Industria Cultural

magallánico Domingo Tessier relata una llamativa anécdota: «En ese tiempo las compañías teatrales, como ya dije, luchaban –entre otras calamidades- contra un terrible enemigo que les salía al paso: el cine parlante. La crisis fue de tal magnitud que la Sociedad de Autores Teatrales alzó su airada voz para solicitar al Supremo Gobierno que prohibiera el cine sonoro en Chile “ya que atentaba contra la actividad teatral” ». (Tessier, 1996, 19).

A nivel mundial la década del 30’ tiene como antecedente originario la crisis económica de los años 1929-30 y se sitúa además entre la primera y la segunda guerra mundial. En este contexto se articulaba mundialmente la llamada Industria Cultural, comprendida como la producción y distribución de bienes culturales en forma masiva y comercial propia de los sistemas capitalistas. Esta “Industria” cimentó una estructura cultural basada en los nuevos medios de comunicación (cine, radio, fotografía) que se reafirmaría con la propagación mundial de la televisión entre los años 50’ y 70’.

En Magallanes, el cine mudo ya cumplía tres décadas de cultivo, y por lejos lo más relevante había sido lo producido por la dupla entre José Bohr y Antonio Radonich, quienes fundaron Magallanes Films y Patagonian Films. Algunas de sus producciones fueron: “El desarrollo de un pueblo/Magallanes de ayer y hoy” (19171918), “Noticiario Actualidades magallánicas” (1919), “Como por un tubo” o “El boleto de lotería” (1919), “Mi noche alegre/ los parafinas” (1920), “Esposas Certificadas/ Casarse por poder” (1921). Estos noticiarios y cortometrajes se exhibían en el salón Alhambra de Arturo Lilley y más tarde en el Teatro Royal. Antes de que Bohr partiera a Buenos Aires y se disolviera la dupla, habían creado “Bohr y Radonich Magallanes Film Co.”

A nivel nacional la primera transmisión radial oficial se realiza en Santiago el año 1922. En Magallanes la radio se masifica en la década del 30’, cuando nacen una gran cantidad de radioemisoras como Radio Austral (1932), La Voz del Sur (1933) o radio Polar (1940), ocupando un rol fundamental en la difusión de las demandas sociales y económicas de los habitantes del territorio. Para el año 1940 los radioteatros hacían furor en Magallanes. Grandes exponentes de esta actividad fueron María Elena Vukovic o Juan Marino, entre muchos otros. Este último fue el creador del internacionalmente conocido “Doctor Mortis”, personaje creado en Punta Arenas en noviembre del año 1945 e inspirado en un personaje de Boris Karlof, de la BBC de Londres, que realizaba un programa similar de cuentos de misterio. El programa de Marino se transmite por última vez el año 1982 por Radio Portales habiendo sido llevado de la radio a la televisión, historietas, novelas y discos.

Otro personaje precursor de la producción cinematográfica en Magallanes fue Alberto de Agostini, quien filma desde 1918 varios cortometrajes documentales que editados conformarían la película “Tierras Magallánicas” estrenada el año 1933. Ahora bien, en lo que respecta al cine sonoro, el gran precursor y representante de Magallanes es Jon McBeth Skirving, nacido en Escocia el año 1909 y erradicado en Punta Arenas desde su primer año de edad. El año 1939, con tan solo 20 años rodaba con un libreto de José Kramarenko la película “La Posada Sangrienta” (1939), también realizaría “Fuerzas Ocultas” (1939), “Noticias

Por otro lado, el año 1931 llega por primera vez a Punta Arenas el cine sonoro, el cual había sido creado a nivel mundial sólo cuatro años antes. Sobre la irrupción del cine sonoro en Chile el actor 51

son noticias” (1940), “La Bruja” (1944), “Mariana zarpa un barco” (1944) e “Iván el Pirata” (1948). Si bien antes del 30’ Magallanes poseía numerosos espacios cinematográficos8, a lo largo de esta década se consolidarían varios más, como el emblemático Cinema Porvenir (1930), el Palace Natalino (1934), el Libertad (1936), también el Natales y el Prat (1939). En 1938 se inaugura el Teatro Cervantes, estrechamente relacionado con la Sociedad Española de Socorros Mutuos de Magallanes. Este se convierte en un espacio fundamental para el desarrollo social y cultural de esta época, en él se desarrollaron funciones de cine, teatro y espectáculos varios.

8 Como el Fagnano (1908), el Lilley (1913), el Edison (1914), el Selecto (1916), el Electra (1918), el Apolo (1920), el Politeama (1920) o el Victoria (1920), que primero cambiaría su nombre a Regeneración (1921), luego a Select (1923) y luego a Armonía (1934).

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Imagen nº 36: Teatro Palace 1936. Autor Esteban Scarpa. Colección perteneciente al “Archivo Fotográfico y Biblioteca Patrimonial del Museo Regional de Magallanes (MRM)” – Dibam – Ministerio de Educación. 53

Imagen nº 37: El Teatro Politeama 1936. Autor Esteban Scarpa. Obra “Prostitución”. Colección perteneciente al “Archivo Fotográfico y Biblioteca Patrimonial del Museo Regional de Magallanes (MRM)” – Dibam – Ministerio de Educación. 54

Imagen nº 38: Casa España, costado sur de la plaza de armas, entre 1920 y 1925. Autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes”. 55

Imagen nº 39: El Teatro Cervantes el año 1945. Autor Esteban Scarpa Colección perteneciente al “Archivo Fotográfico y Biblioteca Patrimonial del Museo Regional de Magallanes (MRM)” – Dibam – Ministerio de Educación 56

Imagen nº 40 y 41. Portadas de Comics “Doctor mortis”. Colección Privada. 57

Los Gobiernos Radicales (1938 – 1952) y la presencia del Estado en Magallanes

También el año 1950 la Sociedad Gimnasio Cerrado inaugura el mítico Gimnasio de la Confederación Deportiva de Magallanes, que albergó numerosas actividades artísticas, políticas, sociales y deportivas. La Confederación Deportiva «financiaba artistas y grupos nacionales o extranjeros para que actuaran en Magallanes en variadas funciones que incluían pasajes, alojamiento, y un viático para que los artistas pudieran desplazarse y hacer sus presentaciones no solamente en la ciudad de Punta Arenas, sino posibilitando de esta manera la llegada del quehacer artístico a otros puntos apartados de la Provincia...» (Hernández y Kuscevic, 2008:23)

El triunfo del Frente Popular en 1938 marca la consolidación del Estado de Bienestar que asumirá el desarrollo del país tanto en términos económicos, a través del fomento a la industria, como en términos sociales y culturales, asegurando el acceso a la educación, salud y vivienda de la población. En respuesta a la crisis mundial del 29, donde quedó al descubierto la total dependencia de Chile al mercado mundial, los planes de industrialización del Frente Popular buscaban diversificar su producción, reducir la dependencia externa y seguir el proceso del entonces bullente concepto de “desarrollo”.

Durante estas décadas se realizaban también los carnavales populares conocidos como la “Fiesta de la Primavera”, que inundaron las calles de Punta Arenas con las más diversas actividades y por largos años.

Con estos fines, en el año 1939, se crea la Corporación de Fomento de la Producción (CORFO), que entraría a jugar un rol fundamental en el desarrollo industrial del país. A través de ella se crean importantes empresas estatales como Endesa, Enap y Iansa, por nombrar algunas.

El regreso de Ibáñez y el Puerto Libre (1956) Este proceso de creación de la infraestructura cultural asumida por el Estado, vive un empuje especial cuando Magallanes vuelve a ser declarado Puerto Libre (1956-1977) durante la segunda administración de Carlos Ibañez del Campo. «La consumación de esta Ley para Magallanes tuvo una importancia trascendental: Se construyeron numerosas Obras Públicas, se crearon variados complejos habitacionales, se importaron manufacturas y tecnologías de primer nivel, así como también alimentos, vestuario y calzado desde los países más desarrollados del planeta» (Hernández y Kuscevic, 2008:12)

Así también a través de la CORFO se crea la infraestructura que albergaría a la naciente industria cultural que se estaba articulando. El año 1942 con el objetivo de impulsar el cine chileno CORFO crea Chilefilms, y más tarde Televisión Nacional de Chile. En Magallanes, desde mediados de la década de los 50’ comienzan las construcciones de los primeros campamentos de ENAP, como Manantiales, Cerro Sombrero y Posesión. En estos campamentos se desarrolló una intensa vida social y cultural bajo la tutela estatal y se conformó una importante infraestructura cultural asociada a la construcción de bibliotecas, gimnasios y cines.

Fue durante la administración de Ibañez que la ciudad experimentó un fuerte crecimiento; la población urbana aumentó, se crearon 58

nuevas poblaciones y se pavimentaron calles y avenidas. Otras obras importantes de este periodo fueron la canalización del río de las minas y la construcción del aeropuerto de Chabunco. Según Víctor Hernández y Niki Kuscevic «La bonanza económica y social asociada al Puerto Libre tuvo como consecuencia directa e indirecta la creación y desarrollo de una Infraestructura Cultural sin precedentes en Magallanes» (Hernández y Kuscevic, 2008:7). Esta infraestructura cultural aplicada desde el Estado chileno supuso la facilitación de insumos, la construcción de recintos y la inyección de recursos económicos que facilitaron la gestión cultural. Según los autores, gracias a esta ley y la dotación de recursos se construyeron escuelas, se instalaron Institutos Chileno Extranjeros de Cultura, se contrataron diversas manifestaciones artísticas y se trajeron importantes artistas e intelectuales de carácter nacional e internacional, como escritores, cineastas, pintores, fotógrafos conferencias y músicos. Además, esta ley fomentó el desarrollo de la actividad artística local que se manifestó en la creación de nuevos grupos artísticos. Además, en 1956 se inauguran importantes espacios, como el Salón de Actos de la Escuela Nocturna Popular y la Escuela Municipal de Bellas Artes que contaría con una sala de conciertos, una sala para exposiciones y conferencias y otra para un Museo de Artes Plásticas.

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Imagen nº 42: El Teatro Armonía el año 1936, Concentración Frente Popular. Autor Esteban Scarpa. Colección perteneciente al “Archivo Fotográfico y Biblioteca Patrimonial del Museo Regional de Magallanes (MRM)” – Dibam – Ministerio de Educación. 60

Imagen nº 43: Protesta Teatro Politeama 1939. Autor Esteban Scarpa. Colección perteneciente al “Archivo Fotográfico y Biblioteca Patrimonial del Museo Regional de Magallanes (MRM)” – Dibam – Ministerio de Educación. 61

Imagen nº 44: Teatro Don Bosco 1940. Autor Esteban Scarpa. Colección perteneciente al “Archivo Fotográfico y Biblioteca Patrimonial del Museo Regional de Magallanes (MRM)” – Dibam – Ministerio de Educación. 62

Imagen nº 45: Gimnasio de la Confederación Deportiva. Autor Esteban Scarpa. Año indeterminado. Colección perteneciente al “Archivo Fotográfico y Biblioteca Patrimonial del Museo Regional de Magallanes (MRM)” – Dibam – Ministerio de Educación. 63

Imagen nº 46: Cine Palace Arquitectura 1950. Autor indeterminado. Colección perteneciente al “Archivo Fotográfico y Biblioteca Patrimonial del Museo Regional de Magallanes (MRM)” – Dibam – Ministerio de Educación. 64

Imagen nº 47: Murga Fiesta de la primavera 1953. Autor Esteban Scarpa. Colección perteneciente al “Archivo Fotográfico y Biblioteca Patrimonial del Museo Regional de Magallanes (MRM)” – Dibam – Ministerio de Educación. 65

Imagen nº 48: Rodaje de la película “Cabo de Hornos”, alrededor de 1955. Autor indeterminado. Colección perteneciente al “Archivo Fotográfico y Biblioteca Patrimonial del Museo Regional de Magallanes (MRM)” – Dibam – Ministerio de Educación. 66

Imagen nº 49: Rodaje de la película “Cabo de Hornos”, alrededor de 1955. Autor indeterminado. Colección perteneciente al “Archivo Fotográfico y Biblioteca Patrimonial del Museo Regional de Magallanes (MRM)” – Dibam – Ministerio de Educación. 67

Imagen nº 50: Cerro Sombrero, estación de servicio y talleres. Año y autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 68

Imagen nº 51: Cerro Sombrero desde el aire. Año y autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 69

Imagen nº 52: Posta médica y Cine de Cerro Sombrero. Año y autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”, Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 70

Imagen nº 53: Cine de Cerro Sombrero, a la derecha piscina y jardín botánico. Año y autor indeterminado. Colección perteneciente al “Centro de Estudios del Hombre Austral”,Instituto de la Patagonia, Universidad de Magallanes. 71

Los años 60’ y la Unidad Popular

En el año 1969 se instala además el primer canal de televisión (canal 6 de televisión nacional), se otorga organización jurídica al Instituto de la Patagonia y se da inicio al Festival Folclórico de la Patagonia.

A los años 60’ se le conoce como la “década de las ideologías”, denominación que tiene un antecedente fundante en la Revolución Cubana de 1959. A lo largo de toda esta década los movimientos sociales marcarán presencia alrededor de todo el mundo. En Europa se vive el llamado Mayo Francés, en Estados Unidos el movimiento por los derechos civiles y el año 1969 las protestas en contra de la guerra de Vietnam se esparcirán por todo el mundo.

Las tendencias socioculturales que se habían originado en los años 60 se intensificaron durante la Unidad Popular. Muchos de los músicos de la llamada Nueva Canción Chilena (1968) o de los cineastas del “Nuevo Cine Chileno”, por nombrar solo algunos de los campos artísticos, apoyaron activamente al gobierno de Salvador Allende.

En Magallanes el año 1960 coincide con el despegue de la televisión, en efecto, la primera demostración pública experimental de televisión se realizó en la sala “Grunding” de DIMARTEL, ubicada al frente del Teatro Politeama el 7 de diciembre de 1960 en donde asistieron alrededor de 2000 personas y pudieron observar una programación de 3 horas que contaba con un informativo, una interpretación musical de tango y una presentación de títeres (Hernández y Kuscevic, 2008:73).

Para 1970 en Chile y Magallanes, al igual que en gran parte del mundo, la articulación entre los movimientos sociales y el arte se expresaba en contenidos de canciones, en temáticas cinematográficas y en todo tipo de actividades políticas, sociales y culturales. Son los tiempos del arte como herramienta política y al servicio de las luchas sociales.

El año 1961 se crea también en Punta Arenas la Universidad Técnica del Estado, cuya Aula Magna acogería muchas de las más importantes actividades políticas, sociales y artísticas de la década.

Por su parte, tras la reforma universitaria de 1970, la UTE crea en este periodo la Secretaría de Extensión y Comunicación que tenía como principal objetivo: «coordinar, correlacionar y desarrollar la extensión universitaria posibilitando que ella sea un canal de comunicación entre el quehacer académico y de la investigación con la comunidad. Propender a que su acción ayude en la formación de una cultura verdaderamente nacional y popular, incorporando activamente al pueblo a la literatura, al arte y a los medios de comunicación de masas; contribuir a crear una conciencia crítica que ayude en la construcción de una sociedad

Otro hito importante para el arte y la cultura en Magallanes tiene lugar en el año 1967, cuando el diputado Alfredo Lorca logra promulgar la Ley #16.708 que posibilitó la llegada de grandes artistas y deportistas y a su vez promovió la salida al exterior de grupos escolares, embajadas y clubes deportivos de Magallanes.

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nueva» (Universidad Técnica del Estado, Catálogo General 1972: 35.)

en la esfera artístico-cultural.

Desde esta secretaría se crean las Escuelas de Temporada que funcionaban en las distintas estaciones y en donde se dictaban cursos de las más diversas materias, tanto artísticas como técnicas, que duraban entre dos a tres semanas y que se encontraban dirigidos a toda la población. Preferentemente obreros, amas de casa, estudiantes, empleados, en fin, personas de extracción popular, asistían a estos cursos. En Magallanes esta secretaría llego hacia la década de 1970 y significó un gran empuje para la actividad de extensión de la universidad y el desarrollo artístico y cultural asociado a ella. Destacan las Escuelas de Invierno en donde se desarrollaban diversas actividades. Entre ellas, la creación de grupos de Teatro como el FARTUM, que organizaba festivales y participaba de las diversas actividades que se realizaban a nivel local, regional e incluso nacional. Otro grupo de teatro creado bajo el alero de la Escuela de Invierno es el Teatro Obrero Luis Emilio Recabarren (TOLER) quien presentó obras de alto contenido social, como su interpretación de “¿Cuánto cuesta el hierro?” de Bertold Brecht. Es impresionante observar el nivel de organización y desarrollo que existía en la década de los 70’ asociado a las actividades artísticas y culturales y canalizadas a través de la Universidad. En estos tiempos, las obras artísticas estaban íntimamente relacionadas con el álgido clima social y político que se vivía en el país, el que a su vez iba produciendo un nivel de participación cada vez mayor

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Imagen nº 54: Campaña Presidencial Salvador Allende 1964, Puerto Natales. Autor indeterminado. Archivo Personal Ramón Arriagada. 74

Imagen nº 55: “Teatro Elemental”; Tercera Escuela de Invierno U.T.E. Agosto, 1971. Autor indeterminado. Archivo Personal Jeannette Antonin. 75

Imagen nº 56: Grupo de Teatro TOLER (Teatro Obrero Luis Emilio Recabarren), Obra Infantil, 1972. Autor indeterminado. Archivo Personal Jeannette Antonin. 76

EPÍLOGO: ARTE Y MODELO NEOLIBERAL

En dictadura se eliminó la Corporación de Magallanes, la “Ley Lorca” de 1967 y muchas otras conquistas sociales. A contar del primero de enero de 1978 comienza a operar oficialmente la Zona Franca dando fin al Puerto Libre (1956-1977). El mismo ministro Roberto Kelly anunciaba en Julio de 1978 “no habrá beneficios especiales para Magallanes”.

En general, en el ámbito de la producción de arte, el neoliberalismo ha significado la privatización o la colusión entre el sector público y privado para subsidiar al arte. Más o menos en la última década (mucho antes en Estados Unidos), han jugado un papel importante en la inversión en cultura. Esto se debe a que tanto instituciones como corporaciones han buscado tomar un papel visible en comunicar la perspectiva de la empresa privada en una variedad de temas públicos críticos.

A nivel nacional la década de los 80’ estuvo marcada por la crisis económica y las protestas que harán caer la dictadura de Pinochet. Magallanes no fue la excepción, sorprendiendo con la primera manifestación pública, a nivel nacional, en rechazo al Régimen Militar, conocida como “Puntarenazo” (1984). También en la región se organizaron diversas actividades culturales y artísticas cuya principal temática sería la lucha por la vuelta a la democracia.

Irmgard Emmelhainz (en “Neoliberalismo y autonomía del arte”, enero 2014). El golpe de Estado del 11 de Septiembre de 1973 significó la supresión de todas las garantías individuales de la población. Además de las sistemáticas violaciones a los derechos humanos se creó un clima de terror que inhibió la casi totalidad de las expresiones artísticas y culturales que se desarrollaban libremente hasta el momento.

En la década de los 80’ Chilefilms se privatiza totalmente, al igual que la mayoría de las empresas estatales creadas durante los gobiernos radicales. En síntesis, en esta década la dictadura militar llevó a cabo una serie de reformas políticas y económicas que significarían el desembarco definitivo de una economía de libre mercado en Chile.

En Magallanes se cierran todas las radioemisoras menos la “Presidente Ibáñez” y la “Minería”, conservadas únicamente para emitir las noticias de la junta militar. La radioemisora “La voz del sur” es desmantelada y clausurada el mismo 11 de septiembre. Se clausura también la “Radio Polar” y el periódico “El Magallanes”, dejando en circulación únicamente a “La Prensa Austral”. Se allanan la Universidad, los partidos y un sinfín de espacios de reunión social, política, cultural y educacional.

Este sistema permitió la mercantilización de los derechos básicos que había otorgado el Estado Chileno por décadas; educación, salud y cultura, entre otros, se convertirán en nuevos mercados donde los privados nacionales y extranjeros realizarán lucrativos negocios. Con el regreso de la democracia y la creación del FONDART

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(Fondo Nacional de Desarrollo Cultural y las Artes), en el año 1992, se instala en Chile un modelo basado en el financiamiento por concurso del arte y la cultura. Sin desconocer la existencia imperecedera de expresiones autónomas y auto gestionadas a lo largo de todo Chile, el Mecenazgo Estatal es hoy la principal fuente de financiamiento de los proyectos artísticos y culturales que se desarrollan en el país. Este sistema de financiamiento por concurso se corresponde también con la explosión de escuelas del campo de la cultura y las artes que surgieron con el retorno de la democracia y con la amplia oferta que ofrecía el lucrativo mercado educacional universitario.

Cine Latinoamericano” se realizaba en Chile, se vendieron casi 75 millones de entradas, con una población de 9 millones de habitantes. Hoy, con casi el doble de población, se bordean los 20 millones de espectadores al año. Los libros y la lectura son otro caso entristecedor a nivel nacional. En 1971, con el fin de democratizar el acceso a la lectura el gobierno de Allende había creado la Editorial Quimantú, que sería clausurada tras el golpe militar, pero que en su corta vida alcanzó a producir 500 mil ejemplares al mes y publicó 250 títulos impresos en 10 millones de libros. Hoy en día, los libros más vendidos en Chile bordean los 20 mil ejemplares.

El año 2003, con la creación del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes el sistema se amplía abarcando un sinfín de expresiones y actividades y aumentando aceleradamente su presupuesto. El presente gobierno de la Nueva Mayoría tiene dentro de sus promesas la creación de un “Ministerio de Cultura y Patrimonio” y la duplicación de los recursos destinados a cultura en el presupuesto de la nación.

En Magallanes, la destrucción en el año 2007 del Gimnasio de la Confederación, que albergó gran parte de las actividades sociales desde el año 1950, y la posterior construcción de un casino en su lugar es la triste metáfora de cómo han cambiado los principios y prioridades de nuestra sociedad. El último párrafo de este trabajo invita entonces a reflexionar acerca de la autonomía del arte y la cultura frente a la vorágine neoliberal y al creciente apadrinamiento y financiamiento estatal, invita también a tomar conciencia de lo que es producir arte y cultura de manera autónoma, financiada y/o lucrativa, y a distinguir entre los distintos procesos que atraviesan estos tipos de producción.

Por qué entonces, estos presupuestos y programas gubernamentales no se condicen con la realidad sociocultural de la población. La comparación entre nuestra realidad cultural actual y el contexto nacional previo al golpe de Estado de 1973 nos ayuda a comprender de mejor manera el daño inferido a los procesos culturales que vivía la población chilena desde mucho antes que asumiera Allende.

El Equipo.

El año 1967, cuando el primer encuentro del llamado “Nuevo

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Partimos de la base de que las particularidades históricas de la región, tanto en su esfera económica como en su composición social, son factores clave para analizar el desarrollo del arte y su situación actual. De esta manera, “Arte y Cultura en Magallanes” es un proyecto de investigación que se propone contribuir en el conocimiento acerca de la historia del arte y la cultura de Magallanes, desde un enfoque histórico en donde las expresiones artísticas y sus transformaciones se entienden en relación con el desarrollo del resto de las esferas sociales.

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