Corintios

  • Uploaded by: ALVARO
  • 0
  • 0
  • February 2021
  • PDF

This document was uploaded by user and they confirmed that they have the permission to share it. If you are author or own the copyright of this book, please report to us by using this DMCA report form. Report DMCA


Overview

Download & View Corintios as PDF for free.

More details

  • Words: 42,856
  • Pages: 101
Loading documents preview...
Las epístolas a los corintios Libro de texto de estudio independiente por James D. Hernando

Traductor: Marco Ogalde Editor: René Arancibia

Escuela de la Biblia Berea, Una escuela de Global University 1211 South Glenstone Avenue Springfield, MO 65804 USA 1-800-443-1083 Fax: (417) 862-0863 Correo electrónico: [email protected] Sitio Web: www.globaluniversity.edu

La amplia experiencia de enseñanza del Dr. James Hernando abarca niveles públicos, universitarios y graduados de educación. Él ha sido un autor que ha colaborado para Signs and Wonders in Ministry Today, en “Greek Word Studies” en la Complete Biblical Library, en el comentario sobre 2 Corintios en el Full Life Bible Commentary to the New Testament, y autor de varios artículos en Paraclete, Pentecostal Evangel, y Pathways for Young Adults. El Dr. Hernando posee un B.A. de la State University de New York, un B.S. del Northeast Bible College, un M.S. de la State University de New York, un M.Div. del Assemblies of God Theological Seminary, y de la Drew University posee un M.Phil. y un Ph.D. El Dr. Hernando es actualmente profesor de Nuevo Testamento en el Assemblies of God Theological Seminary.

Global University Springfield, Missouri, USA (Traducido del inglés Corinthian Correspondence, primera edición, 2006) © 2009 Global University Todos los derechos reservados. Primera edición 2009 A menos que se indique de otra manera, las citas bíblicas se toman de la Biblia versión Reina Valera 1960. ©Registro de propiedad literaria de Sociedades Bíblicas Unidas. Todos los derechos reservados. Usada con permiso. PARA SER USADO CON: Material del alumno, primera edición PN 01.09 ISBN 978-0-7617-1324-1 Impreso en los Estados Unidos de América

Índice Página Información de matrícula para cursos Berea ........................................................................... 5 Cómo usar los cursos Berea...................................................................................................... 6 Introducción al curso...............................................................................................................10

UNIDAD 1 PAUTAS PARA EL DIARIO VIVIR (1 CORINTIOS 1–10) Capítulo 1

La conducta y las actitudes no cristianas (1 Corintios 1–4).....12

Lecciones 1.1 Una introducción y el trasfondo de 1 Corintios (1:1–9) 1.2 Las divisiones en la iglesia: Las causas y los resultados (1:10–3:23) 1.3 Las divisiones en la iglesia: El remedio (4:1–21)

Capítulo 2

La conducta cristiana (1 Corintios 5–7).....................................22

Lecciones 2.1 La disciplina en la iglesia (5:1–13) 2.2 Las disputas legales e inmoralidad (6:1–20) 2.3 El matrimonio (7:1–40)

Capítulo 3

Las decisiones cristianas (1 Corintios 8–10)...............................30

Lecciones 3.1 La libertad cristiana y carne ofrecida a los ídolos (8–9) 3.2 El ejemplo de los israelitas (10:1–11:1)

UNIDAD 2 PAUTAS PARA ADORAR Y CREER (1 CORINTIOS 11–16) Capítulo 4

La adoración cristiana (1 Corintios 11:2–12:11).......................38

Lecciones 4.1 Instrucciones sobre la adoración (11:2–16) 4.2 Instrucciones sobre la Cena del Señor (11:17–34) 4.3 Instrucciones sobre los dones espirituales (12:1–11)

Capítulo 5

Las relaciones cristianas y los dones espirituales (1 Corintios 12:12–14:40).............................................................44

Lecciones 5.1 Los dones espirituales y el cuerpo (12:12–13:13) 5.2 Los dones de profecía y lenguas (14:1–40)

Capítulo 6

La doctrina cristiana (1 Corintios 15–16)..................................52

Lecciones 6.1 Verdades acerca de la resurrección (15:1–58) 6.2 Asuntos e instrucciones finales (16:1–24)

UNIDAD 3 EL MINISTERIO APOSTÓLICO DE PABLO (2 CORINTIOS 1–9) Capítulo 7

Un repaso al pasado reciente de Pablo (2 Corintios 1:1–2:13)...................................................................60

Lecciones 7.1 Introducción a 2 Corintios (1:1–2) 7.2 Consuelo en la aflicción (1:3–11) 7.3 Pablo defiende su cambio de planes (1:12–2:11)

Capítulo 8

El ministerio apostólico de Pablo (2 Corintios 2:12–7:16).......66

Lecciones 8.1 La grandeza del ministerio de Pablo (2:12–4:6) 8.2 Las pruebas y victorias del ministerio (4:7–5:9) 8.3 La naturaleza y función del ministerio (5:10–6:10) 8.4 La intimidad y el gozo del ministerio (6:11–7:16)

Capítulo 9

La ofrenda macedónica (2 Corintios 8–9)..................................74

Lecciones 9.1 La gracia de dar (8:1–9:5) 9.2 Principios de dar (9:6–15)

UNIDAD 4 EN DEFENSA DE LA AUTORIDAD APOSTÓLICA (2 CORINTIOS 10–13) Capítulo 10

Pablo confronta a sus críticos (2 Corintios 10:1–11:15)............82

Lecciones 10.1 La verdadera autoridad apostólica (10:1–11) 10.2 Gloriarse o no gloriarse (10:12–18) 10.3 Los falsos apóstoles desenmascarados (11:1–15)

Capítulo 11

Jactancias extrañas (2 Corintios 11:16–13:14)...........................90

Lecciones 11.1 Las jactancias de Pablo (11–12) 11.2 Las advertencias finales de Pablo (13:1–14) Glosario...................................................................................................................................97 Bibliografía seleccta................................................................................................................99 Lista de lectura sugerida...................................................................................................... 101

Información para matricularse en los cursos de la Escuela Berea

5

Información para matricularse en los cursos de la Escuela Berea Esta versión impresa del libro de texto de estudio independiente representa solamente uno de los varios medios en que usted puede estudiar en la Escuela de la Biblia Berea de Global University. La universidad también ofrece herramientas digitales para el aprendizaje con la intención que no tenga que usar materiales impresos, con la excepción de los libros de lectura recomendados. Herramientas digitales para el aprendizaje Global University ha unido esfuerzos con una prestigiosa compañía de software bíblico para crear nuevos parámetros en la educación ministerial a distancia. Berea Digital ofrece a sus alumnos la alternativa de una experiencia de aprendizaje completamente interactiva utilizando una computadora personal sin la necesidad de conectarse al internet. Tendrá acceso al material del curso en cualquier momento o lugar a través de su computadora. Como parte de las herramientas digitales para el aprendizaje de Global University, puede adquirir una biblioteca completa con biblias y otras fuentes de información bíblicas. Su tiempo de devociones va a mejorar con alternativas para el estudio bíblico diseñadas para usted. Sus sermones tendrán un alto contenido bíblico al utilizar nuestras herramientas avanzadas para la preparación de sermones. Su estudio personal lo llevará a una profundidad mayor en la Palabra de Dios a través de las alternativas adicionales de aprendizaje por internet. Las herramientas digitales para el aprendizaje también interactúan con nuestros recursos de aprendizaje en el internet, brindándole la oportunidad de aumentar aun más su conocimiento. Estas herramientas han sido diseñadas específicamente para el contenido de cada curso. Esta tecnología adicional ha sido ubicada en lugares apropiados a través de las lecciones para ampliar su conocimiento y para ayudarle a recordar el material. Cursos por Internet Pronto, usted podrá estudiar todo su programa de capacitación ministerial por Internet. Sírvase llamar para saber si está disponible. Opciones de aprendizaje totalmente interactivas le ayudan a lograr el conocimiento amplio que usted necesita para ganar a este mundo para Jesús. Además del fácil acceso a sus materiales de estudio, Berea por internet es también más accesible, puesto que no se requiere un libro de texto de estudio impreso. Berea por internet le da las opciones y los precios para suplir sus necesidades de capacitación ministerial sin afectar su presupuesto ni su horario. ¡Usted estudia cuando quiere y donde quiere! Aun si usted elige estudiar usando un libro de texto impreso, puede tomar su examen final por Internet y recibir los resultados de inmediato. No tiene que seguir revisando su casilla de correo o esperar su calificación; ésta la consigue de inmediato con nuestra opción de examen por Internet. Sírvase llamar para saber si está disponible. Reglas y procedimientos de matrícula Las reglas y procedimientos de matrícula, incluyendo la cantidad de tiempo permitida para completar un curso de la Escuela de la Biblia Berea, son provistas en la versión más reciente del Catálogo Académico de la Escuela de la Biblia Berea. Una versión electrónica de este catálogo está disponible en la página Web de Global University o puede solicitar una copia impresa por correo electrónico o por teléfono. Para información sobre matrícula, comuníquese por Teléfono: 1-800-443-1083 (9 a.m. hasta las 6 p.m., de lunes a viernes. Horario Central) Los representantes para el idioma español están a su disposición para brindarle mayor información. Correo electrónico: [email protected] Sitio Web: www.globaluniversity.edu Fax: 417-862-0863 Dirección postal: 1211 S. Glenstone Ave., Springfield, MO 65804

6

Las epístolas a los corintios

Cómo usar los cursos de Berea El estudio independiente es uno de los métodos educacionales más dinámicos y con difusión cada vez mayor. Aun cuando difiere del estudio tradicional en una sala de clases, la meta es la misma: Guiarle a usted, el alumno, mediante un programa de estudio sistemático y ayudarle a obtener nuevo conocimiento y habilidades. Los cursos de Berea son cursos de estudio independiente. Algunos alumnos, sin embargo, pueden participar en un centro de aprendizaje de Berea, donde un instructor amplía la experiencia de aprendizaje para un grupo de alumnos de Berea. Los cursos de Berea ofrecen también el opción de aprendizaje en CD-ROM para el alumno de estudio independiente de hoy. Todos los cursos de Berea están impresos en un completo libro de texto de estudio independiente. El libro de texto de estudio independiente es su maestro, libro de texto y guía de estudio al mismo tiempo. Una vez que usted se ha familiarizado con los componentes del curso, cuya explicación viene a continuación, estará listo para comenzar a estudiar. Bien sea que usted estudie para su desarrollo personal o para la obtención de un diploma, el profesorado de Berea, los

consejeros y los representantes para servicio a los alumnos están a su disposición para ayudarle a sacar el mayor provecho de su programa de Berea. Diseño general del curso • Cada curso se basa en los objetivos del curso. • Cada curso está compuesto de varias unidades. • Cada unidad está compuesta de varios capítulos. • Cada capítulo está compuesto de dos o más lecciones. • Cada lección contiene uno o más objetivos de la lección. • Cada objetivo de la lección corresponde a un contenido específico de la lección. Objetivos del curso Los objetivos del curso representan los conceptos, o ámbitos de conocimiento, y las perspectivas que el curso le enseñará. Repase estos objetivos antes de comenzar a estudiar, para tener una idea del enfoque que debe tener durante su estudio. Los objetivos del curso están en la página de introducción al curso.

Panorama de la unidad Un vistazo panorámico de la unidad permite ver el contenido y esboza el desarrollo de la unidad. Capítulo, Contenido de la lección, Objetivos de la lección, y Sistema de numeración Cada capítulo comienza con una introducción y un bosquejo. El bosquejo presenta los títulos y los objetivos de las lecciones del capítulo. El capítulo consiste de lecciones breves que le permitirán completar una lección de una vez, en lugar de todo el capítulo de una vez. El contenido de la lección se basa en los objetivos de la lección. Los objetivos de la lección presentan los conceptos importantes y las perspectivas que se estudiarán en el curso. Cada capítulo, lección y objetivo está numerado de manera particular. Este sistema de numeración tiene el propósito de ayudarle a relacionar el objetivo de la lección con el contenido correspondiente de la misma. Los capítulos están numerados de manera consecutiva a través del curso. Las lecciones están numeradas dentro de cada capítulo con un número decimal de dos dígitos. Por ejemplo, la lección 2 del capítulo 3 se designa 3.2. El primer número corresponde al capítulo (3), el segundo número es la lección (2) dentro del capítulo. Los objetivos de la lección se identifican con un número decimal de tres dígitos. Por ejemplo, capítulo 1, lección 1, objetivo 1 se identifica como Objetivo 1.1.1. El capítulo 1, lección 2, objetivo 3 se designa Objetivo 1.2.3. El primer número es el capítulo, el segundo es la lección, y el tercero es el objetivo. El sistema de numeración le ayudará a identificar, localizar y organizar cada capítulo, lección y objetivo.

Cómo usar los cursos de Berea

7

Qué vemos en los márgenes Los márgenes a la izquierda contienen los números de las unidades, de los capítulos y de las lecciones. Además, los márgenes contienen dos herramientas de aprendizaje: los objetivos de las lecciones con sus números respectivos y las preguntas interactivas que se concentran en los principios clave de la lección. Lea, entienda y use siempre estas dos herramientas de aprendizaje mientras estudia las secciones de la lección con las que están relacionadas. Las preguntas interactivas se relacionan con contenidos específicos de la lección, los que a su vez se relacionan con objetivos específicos de la lección. Las preguntas interactivas, juntamente con los objetivos de la lección, le ayudarán a aprender los conceptos y las perspectivas importantes mientras estudia. Las preguntas de examen se basan en estos conceptos y perspectivas fundamentales. Las preguntas interactivas están numeradas en forma consecutiva en cada capítulo. Las respuestas a estas preguntas se hallan en el material del alumno. Procure entender bien la pregunta interactiva. Una vez que usted entiende bien la pregunta, busque la respuesta mientras estudia el contenido pertinente de la lección. Los objetivos de la lección presentan los conceptos clave y perspectivas que hay que aprender. Estas ayudas para el uso de los objetivos de la lección le servirán para captar el contenido del curso y estar preparado para los exámenes: • Identifique los conceptos clave y las perspectivas de éstos en el objetivo. • Identifique y entienda lo que el objetivo le pide que haga con los conceptos clave. • Piense en el objetivo como en una pregunta de ensayo para una prueba. • Lea y estudie el contenido de la lección relacionado con el objetivo, y busque la respuesta a la “pregunta de ensayo para una prueba”, el objetivo. Títulos y subtítulos de la lección Los títulos y subtítulos de la lección identifican y organizan el contenido específico de la lección. Palabras clave Las palabras clave están impresas en letra negrita y su definición se encuentra en el glosario al final del libro de texto de estudio independiente. Las palabras clave son palabras con las cuales usted tal vez no esté familiarizado, o que se usan con un significado especial en la lección. Citas bibliográficas Las fuentes externas se documentan mediante el uso de citas entre paréntesis en el texto. Estas fuentes están recopiladas con más detalle en la Bibliografía selecta que se encuentra al final del libro de texto. Autoexamen La sección de autoexamen concluye el capítulo con preguntas de selección múltiple basadas en los objetivos de la lección, en las preguntas interactivas y en el contenido de apoyo de su lección. Las claves de respuesta para el autoexamen se encuentran en el material del alumno. Glosario, Bibliografía selecta Un glosario (que define las palabras clave) y una bibliografía selecta (lista de obras citadas en cada capítulo) van después del último capítulo del texto. Libros de lectura recomendados Un libro opcional es recomendado para cada curso. El libro recomendado para acompañar este curso se encuentra listado en la portada del Material del alumno. Algunos cursos pueden proveer listas adicionales de lecturas sugeridas después de la bibliografía selecta. El Material del Alumno contiene •

Respuesta para las preguntas interactivas



Claves de respuesta para los autoexámenes



Instrucciones del informe Vívalo y compártalo



Las evaluaciones de unidad y las respuestas a éstas



Instrucciones para tomar el examen final y una solicitud de examen impreso

Requisitos para completar el curso y calificación Para recibir una calificación por este curso usted debe seguir las instrucciones del Material del alumno para enviar un informe Vívalo y compártalo. También usted debe tomar un examen final. La calificación de su curso se basa en el examen final. El informe Vívalo y Compártalo se requiere pero no se lo calificará. La escala de calificación de la Escuela de la Biblia Berea es: A, 90–100%; B, 80–89%; C, 70–79%; F, 0–69%.

8

Las epístolas a los corintios

Métodos de estudio MÉTODOS DE ESTUDIO



Si sigue cuidadosamente los métodos de estudio sugeridos a continuación, usted podrá completar este curso con éxito. Cuando complete cada capítulo, haga una marca en la columna correspondiente a ese capítulo frente a la instrucción que siguió. Luego, siga estudiando los capítulos restantes del mismo modo.

  1. Lea la introducción en el libro de texto de estudio independiente para que aprenda cómo usarlo.   2. Estudie el índice para familiarizarse estructura   y el contenido del curso.

con

la

CAPÍTULOS

1

2

3

4

5

6

7

8

9

10

11

  3. Organice su tiempo de estudio de tal modo que estudie al menos dos o tres veces por semana. Planee cuidadosamente para que pueda completar el curso en el período de matrícula permitido. Estudie al menos una lección completa en cada sesión de estudio.   4. Lea las referencias bíblicas en más de una traducción de la Biblia para una mejor comprensión de los pasajes bíblicos.   5. Subraye, marque y escriba notas en su libro de texto de estudio independiente.   6. Mientras estudia cada capítulo, haga buen uso de las herramientas de referencia, tales como una Biblia de estudio, una concordancia, un diccionario bíblico y un diccionario de la lengua.   7. Complete todas las preguntas interactivas y las actividades de aprendizaje durante el curso de su estudio.   8. Como preparación para el autoexamen al final de cada capítulo, repase el capítulo. Preste especial atención a los objetivos y a sus notas personales, para reforzar los principios clave aprendidos en el capítulo. Después que haya tomado el autoexamen, verifique sus respuestas con las que se hallan al final de su libro de texto de estudio independiente. Repase cualquier asunto que halla respondido incorrectamente.   9. Comente con otras personas lo que está aprendiendo. 10. Aplique lo que ha aprendido en su vida espiritual y ministerio.

EVALUACIONES DE UNIDAD

Haga un repaso de cada unidad antes de proceder a la evaluación de ésta, volviendo a leer a. los objetivos de cada lección, para asegurarse de que puede lograr lo que declara. b. las preguntas que contestó erróneamente en el autoexamen de cada capítulo. c. el desarrollo de la lección, para repasar los temas que necesita recordar.

12

13

14

15

16

17

18

Cómo usar los cursos de Berea

9

Registro del alumno Este gráfico es para que usted registre en él su progreso personal en este curso. Procure mantenerlo al día para una rápida referencia.

En los espacios más abajo registre el número de la unidad, la fecha en que espera completar cada capítulo, la fecha que lo completó y la fecha del repaso. Número de la unidad

Número del capítulo

Fecha posible de término

Fecha de término

Fecha del repaso

 1  2  3  4  5  6  7  8  9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 EVALUACIONES DE UNIDAD

Fecha de término

Evaluación de unidad 1 Evaluación de unidad 2 Evaluación de unidad 3 Evaluación de unidad 4 Evaluación de unidad 5 Evaluación de unidad 6 TAREAS ESCRITAS Y EXAMEN FINAL Informe vívalo y compártalo Examen final Todos los materiales de tareas escritas entregadas y examen final (El informe Vívalo y compártalo no le aplica a los cursos de práctica ministerial.)

Fecha de término

10

Las epístolas a los corintios

El maravilloso mundo de Corintios ¡Bienvenido al maravilloso mundo de Corintios! Usted está a punto de embarcarse en una emocionante aventura a través de las dos cartas canónicas de Pablo a la iglesia de Corinto. Aunque estas dos cartas fueron escritas a la misma iglesia, por la misma persona, ellas son muy diferentes. Primera de Corintios es única entre las cartas de Pablo. Aun cuando los diversos problemas en la iglesia tuvieron su origen en errores teológicos, es el comportamiento o resultados éticos de esos errores lo que Pablo está tratando de rectificar. Por lo tanto, aunque uno encuentre teología en 1 Corintios, esa teología está siendo aplicada en la práctica de la misma forma que la nueva fe de los cristianos es probada severamente por sutiles influencias del entorno pagano. En Gálatas el evangelio mismo fue puesto a prueba a causa de las intromisiones del judaísmo. Ahora es puesto a prueba de nuevo, pero las intromisiones vinieron del sector pagano. ¿Puede el evangelio realmente sobrevivir cuando los nuevos creyentes todavía piensan y actúan como sus vecinos no cristianos? Uno puede ver fácilmente cuan independiente del tiempo es el mensaje de tal carta. Porque donde quiera que el evangelio vaya, la gente lo oye y se vuelve para seguir a Cristo, aun cuando tienen que seguir viviendo en sus antiguos ambientes. Pero ahora ellos son ciudadanos del cielo; son miembros de una nueva raza, ¡el nuevo pueblo de Dios! Por lo tanto, no pueden pensar y actuar más en conformidad con aquellos que le rodean. Pero, ¿cuán lejos puede ir esto? ¿Cuánto difiere el comportamiento cristiano de aquellos que no lo son? ¿De qué forma es diferente el punto de vista cristiano de las cosas? ¿Abandona el cristiano su cultura de la misma forma que abandona el comportamiento de sus cercanos? ¿Hasta qué punto nuestro comportamiento es sólo cultural? ¿De qué modo plantea también sugerencias éticas y teológicas? Este es el tipo de preguntas que un estudio de 1 Corintios debiera ayudarnos a responder. Segunda de Corintios, por otro lado, tiene poca similitud con 1 Corintios. Aunque unos pocos temas (muy pocos de hecho) son una especie de continuación, el problema ahora se centra primeramente en una cosa, la autoridad apostólica de Pablo, que ha sido rechazada por algunos. Esta carta es la más personal y autobiográfica de las cartas de Pablo. Como un erudito ha dicho: “Aquí, quebrado bruscamente, sin ningún borde regular, tenemos un pedazo de la vida de Pablo, auténtico, sin censura, tremendamente complicado, pero asombrosamente interesante” (Hanson 1954). Así que prepárese. Proceda con un corazón dispuesto y una mente lista para pensar. Si sigue cuidadosamente el libro de texto de estudio independiente, se abrirá para usted un emocionante y nuevo mundo, ¡el maravilloso mundo de Corintios! Descripción del curso BIB313S Las epístolas a los corintios (5 CEUs) Un estudio de 1 y 2 Corintios, provee al estudiante verdades para enseñar y predicar así como una ayuda práctica en el trato de temas que la iglesia enfrenta hoy. El alumno aprenderá cómo instruyó Pablo a los corintios para tratar con las divisiones y dificultades. Al aplicar estos mismos principios, el alumno estará preparado para tratar con los desafíos del ministerio en el siglo veintiuno. Objetivos del curso Al completar este curso usted podrá   1. Citar el trasfondo histórico y la información acerca de la paternidad, fecha y receptores originales de las cartas a los corintios.   2. Describir la ciudad de Corinto, incluyendo características únicas de la cultura y su historia.   3. Explicar las situaciones que guiaron a escribir 1 y 2 Corintios.   4. Referir y explicar la respuesta de Pablo a temas y conflictos específicos en Corinto.   5. Identificar cómo muchos principios de las cartas a los corintios se aplican a todas las culturas y tiempos.   6. Resumir varias verdades teológicas enseñadas en las cartas a los corintios acerca de Cristo, el Espíritu Santo y la resurrección

1

UNIDAD

Pautas para el diario vivir (1 Corintios 1–10) Imagine que usted es un pastor y que tres amigos se han presentado a su puerta con una extraña solicitud. Estos amigos son miembros de una iglesia que usted fundó hace varios años. Su ministerio pastoral entre ellos fue prolongado, y cuando usted dejó la iglesia, era una iglesia fuerte y creciente. Ahora sus amigos dicen que es una iglesia llena de problemas, que no pueden seguir ignorándose. La iglesia ha tenido varios pastores después de usted, cada uno con sus enseñanzas peculiares. Como resultado, la iglesia se ha desviado peligrosamente de la verdad y ha admitido enseñanzas no bíblicas. Otras situaciones que han surgido a causa de esas enseñanzas amenazan el bienestar espiritual de la iglesia. En un esfuerzo por solucionar sus problemas, la iglesia ha celebrado una reunión y ha formado un comité. El comité eligió a sus tres amigos para que le visiten y le pidan que usted responda a una lista de preguntas relacionadas con estos problemas. Puesto que usted fue el pastor fundador, y es bien respetado, ellos confían en su sabiduría y su consejo. Por muy improbable que pueda parecer la historia, es una descripción muy cercana a lo que tuvo que enfrentar el apóstol Pablo cuando escribió 1 Corintios. Pablo fue el fundador de la iglesia en Corinto durante su segundo viaje misionero. Cuando la dejó, la iglesia era una comunidad vibrante y creciente. Ahora se entera, a través de algunos delegados provenientes de la iglesia (1 Corintios 1:11; 16:17) que tienen una gran cantidad de problemas. En gran medida, estos problemas han surgido a causa de que adoptaron los Corintios creencias, valores y actitudes que produjeron una conducta no cristiana. Ellos olvidaron y mal interpretaron gran parte de lo que Pablo les había enseñado. Ahora el corazón pastoral de Pablo no puede ignorar la situación de ellos. Les escribe una carta relacionada con sus preocupaciones y les enseña valiosos principios para el diario vivir cristiano.

Capítulo 1

La conducta y las actitudes no cristianas (1 Corintios 1–4)

Lecciones 1.1 Una introducción y el trasfondo de 1 Corintios (1:1–9) 1.2 Las divisiones en la iglesia: Las causas y los resultados (1:10–3:23) 1.3 Las divisiones en la iglesia: El remedio (4:1–21)

Capítulo 2

La conducta cristiana (1 Corintios 5–7)

Lecciones 2.1 La disciplina en la iglesia (5:1–13) 2.2 Las disputas legales e inmoralidad (6:1–20) 2.3 El matrimonio (7:1–40)

Capítulo 3

Las decisiones cristianas (1 Corintios 8–10)

Lecciones 3.1 La libertad cristiana y carne ofrecida a los ídolos (8–9) 3.2 El ejemplo de los israelitas (10:1–11:1)

12

1

Las epístolas a los corintios

La conducta y las actitudes CAPÍTULO no cristianas (1 Corintios 1–4) Corinto era el centro del comercio y de las artes en el mundo antiguo, y aunque la ciudad se jactaba de su riqueza y progreso social, también era una ciudad moralmente perversa. Pero Dios había dirigido a Pablo para fundar una iglesia ahí, una iglesia que llegaría a ser un ejemplo positivo y negativo para los cristianos de cualquier lugar. Al escribir a esta congregación, Pablo menciona en primer lugar la falta de unidad entre los cristianos de Corinto. La desunión se centraba en cuál líder espiritual los creyentes deberían seguir. Apolos fue un orador elocuente, Pablo fue un hombre de poderosas demostraciones del Espíritu Santo; Cefas o Pedro fue el héroe de Pentecostés (Carlson, Hamar y Wisehart 1989, 267); y Cristo… bueno, por supuesto, Él no necesita presentación. En lugar de celebrar la diversidad en el liderazgo y la unidad como cuerpo, muchos creyentes corintios se dividieron en varias facciones en torno de un líder. Por lo tanto, Pablo buscó enseñarles la importancia de la unidad bajo Cristo.

Lección 1.1

Una introducción y el trasfondo de 1 Corintios (1:1–9)

Objetivos 1.1.1 Resumir los hechos relacionados con la paternidad literaria de 1 Corintios. 1.1.2 Identificar las preguntas problemáticas y los asuntos a los que Pablo se dirige en esta carta. 1.1.3 Describir cómo la iglesia de Corinto podría ser llamada una iglesia bendecida.

Lección 1.2

Las divisiones en la iglesia: Las causas y los resultados (1:10–3:23)

Objetivos 1.2.1 Explicar cómo y por qué la exaltación de ciertas personas causó divisiones en Corinto. 1.2.2 Clarificar cómo los corintios entendieron mal la sabiduría de Dios. 1.2.3 Comentar los efectos de las divisiones en la madurez espiritual.

Lección 1.3

Las divisiones en la iglesia: El remedio (4:1–21)

Objetivos 1.3.1 Describir la perspectiva de Pablo acerca del ministerio como mayordomía ante Dios. 1.3.2 Resumir las instrucciones de Pablo a los corintios para remediar sus divisiones.

La conducta y las actitudes no cristianas (1 Corintios 1–4)

1.1

LECCIÓN 1.1.1

OBJETIVO

Resumir los hechos relacionados con la paternidad literaria de 1 Corintios.

1 ¿Por qué cree usted que la Biblia no incluye la carta previa de Pablo a la iglesia de Corinto?

1.1.2

OBJETIVO

Identificar las preguntas problemáticas y los asuntos a los que Pablo se dirige en esta carta.

13

Una introducción y el trasfondo de 1 Corintios (1:1–9) Los contactos y correspondencia de Pablo con Corinto Según el libro de Hechos, Pablo visitó Corinto por primera vez durante su segundo viaje misionero, probablemente por el 50 o 51 d.C. Esta fecha es bastante fidedigna, porque durante sus dieciocho meses de permanencia en Corinto, Pablo compareció ante Galión, el recién nombrado procónsul romano, cuyo tiempo en el poder ha sido establecido por hallazgos arqueológicos como entre el 1 de julio del 51 y el 1 de julio del año 52 (Murphy-O´Connor 1983, 141–152; Carson, Moo y Morris 1992, 223–231). Pablo llegó a Corinto después de una serie de dificultades y circunstancias penosas en las provincias de Macedonia y Acaya. En Filipos (Hechos 16:12), él fue liberado milagrosamente después de ser azotado y puesto en prisión. Escapó a duras penas de un trato similar en Tesalónica y Berea (Hechos 17), habiendo sido expulsado de la ciudad por los judíos. En Atenas, su espíritu se enardeció debido a la idolatría generalizada que encontró; su predicación del evangelio fue recibida con desprecio y escasa respuesta. No es de extrañar que él se aproximara a Corinto poco después con “debilidad, y mucho… temblor” (1 Corintios 2:3). Animado por Cristo en una visión nocturna (Hechos 18:9–10), Pablo trabajó en Corinto por un año y medio (18:11) junto con Priscila y Aquila, que habían venido recientemente a Corinto desde Roma debido a la persecución por el emperador Claudio (18:2). De allí, viajó a Éfeso, donde dejó a Priscila y Aquila y luego partió para Palestina por barco. Llegó a Cesarea y fue a Jerusalén para saludar a la iglesia. Más tarde, viajó a Antioquía de donde comenzó su tercer viaje misionero. Después de cruzar por Asia Menor y fortalecer a las iglesias (18:23), Pablo vino de nuevo a Éfeso (19:1). Lucas indica que la estadía de Pablo en Éfeso fue de por lo menos dos años y medio (19:8–10; 20:31). Considerando el tiempo de su visita inicial a Éfeso, y permitiéndole viajar desde y hacia Jerusalén, la estadía de Pablo en Éfeso finalizó en el año 55 d.C. Pablo escribió 1 Corintios desde Éfeso probablemente en la primavera (antes de Pentecostés, según 1 Corintios 16:8) del 55 d.C. Mientras se hallaba en Éfeso, oyó inquietantes noticias de los problemas en Corinto, resultando la siguiente secuencia histórica más probable: • Pablo escribe una carta conocida como la “carta previa” (1 Corintios 5:9) en la que advierte a los corintios que no se junten con personas inmorales. La carta fue aparentemente mal entendida y guió a algunos a la confusión (5:10–11). • Quizás mientras se enteraba del mal entendido, Pablo también oye de otros desórdenes en la iglesia, por boca de los miembros de la “casa de Cloé” (1:11). Además, llega una delegación desde Corinto compuesta por Estéfanas, Fortunato y Acaico (16:17). Ellos traen una carta (7:1) bosquejando varias preguntas que la iglesia quiere que Pablo responda. • En respuesta a la carta e informe, Pablo escribe 1 Corintios y la envía a través de Timoteo (16:10–11; Hechos 19:22).

Corinto: Una iglesia problemática Una revisión rápida de 1 Corintios revela que Pablo esta respondiendo a los problemas y preguntas acerca de los cuales la iglesia le había escrito. En 7:1, él

14

Las epístolas a los corintios

2 ¿Cómo se relaciona la instrucción doctrinal con la salud y la vida de la congregación?

presenta su introducción sobre el matrimonio con las palabras, “En cuanto a”. Expresiones similares aparecen en 7:25; 8:1; 12:1; y 16:1; estos cuatro pasajes reflejan la frase griega peri de, que significa “ahora en cuanto a”. Las palabras de Pablo en 1:11 y 5:1 indican también que éstas son sus respuestas a las preguntas y asuntos presentados a él. En conjunto, Pablo considera una amplia gama de asuntos relacionados con la fe, la conducta y la práctica de iglesia, como se bosqueja en el siguiente cuadro: Problema o asunto

1 Corintios

Divisiones internas: el problema del espíritu partidista

1–3

Desafíos al (o rechazo del) ministerio apostólico de Pablo

4

La inmoralidad sexual: El incesto

5

Los litigios entre cristianos

6:1–11

La inmoralidad sexual: El libertinaje

6:12–20

El matrimonio y celibato

7

El uso de carne ofrecida a los ídolos y asistencia a templos paganos

8:1–11:1

Las mujeres, adoración y preguntas sobre cubrirse la cabeza

11:2–16

La conducta apropiada en la Cena del Señor

11:17–34

La naturaleza, propósito y funciones de los dones espirituales

12–14

La necesidad e importancia de la resurrección corporal

15

En un examen más cercano, los temas arriba mencionados se clasifican primariamente en tres categorías: (1) moral o ético; (2) litúrgico; y (3) doctrinal o teológico. Estos asuntos no fueron algo superficial para Pablo sino que representaban los problemas que planteaban una seria amenaza para la fe y el bienestar espiritual de la congregación. Como su “padre” en le fe (1 Corintios 4:15), Pablo se sintió obligado a protegerlos proveyendo instrucción y corrección adecuada cuando fuera necesario. Así, 1 Corintios presenta una serie de instrucciones de Pablo sobre materias de vital importancia para la iglesia. Aun cuando el tiempo y la cultura moldean la vida y práctica de la iglesia, esta epístola contiene principios que son tan relevantes hoy día como lo fueron en los días de Pablo. Un buen estudiante de 1 Corintios no solo buscará el significado de las palabras de Pablo a sus receptores originales sino también lo que esas palabras nos enseñan acerca de la voluntad de Dios para la iglesia hoy.

1.1.3

OBJETIVO

Describir cómo la iglesia de Corinto podría ser llamada una iglesia bendecida.

Corinto: Una iglesia bendecida Es raro que Pablo describa a una iglesia con tantos problemas como muy bendecida. La fuente de esa bendición es la gracia de Dios dada a los corintios en Jesucristo (1:4). La gracia de Dios se refiere a toda la obra de salvación y a las bendiciones espirituales que resultan de ella. Por lo tanto, es a través de la obra redentora de Jesucristo, su crucifixión, resurrección y ascensión a los cielos, que esas bendiciones han venido a los corintios. Sin duda, es por esto que Jesús dijo que era para nuestro bien que Él se fuera, refiriéndose a su ascensión después de la cruz y resurrección. Su partida le permitió enviar al Paracletos, o el Espíritu Santo, a nosotros (Juan 16:7). Más tarde, Pablo explica que el Espíritu Santo da y distribuye los dones del Espíritu dentro del cuerpo de Cristo

La conducta y las actitudes no cristianas (1 Corintios 1–4)

3 ¿Cómo puede una iglesia con tantos problemas recibir tal riqueza de dones espirituales?

1.2

LECCIÓN 1.2.1 OBJETIVO

Explicar cómo y por qué la exaltación de ciertas personas causó divisiones en Corinto.

15

(1 Corintios 12:4–13). Curiosamente, la palabra griega para “dones espirituales” (charismata) es derivada de la palabra gracia (charis).1 Por lo tanto, los dones espirituales son “dones de gracia” o bendiciones espirituales de la salvación de Dios, hecha posible por la redención de Cristo y el ministerio del Espíritu Santo. Pablo observa que, con respecto a los dones espirituales, los corintios no carecían de ninguna de estas dotaciones de gracia del Espíritu Santo (1:7). En 1:5 Pablo toca dos áreas en las cuales los corintios habían sido ricamente bendecidos: (1) en palabra (griego logos) y (2) en conocimiento (griego gnosis). La cultura griega y su fascinación con la filosofía y la religión les había enseñado a tener en alta estima la habilidad de hablar con elocuencia y adquirir un conocimiento especial o revelado (Fee 1987, 39–40). En su elección de términos aquí, Pablo intenta incluir los dones de declaración y revelación: lenguas, interpretación, profecía, la palabra (mensaje) de ciencia y la palabra de sabiduría (1 Corintios 12:8–10). Los corintios habían recibido el testimonio de Pablo con respecto a Cristo, incluyendo la promesa que Jesús los bautizaría con el Espíritu Santo (Mateo 3:11; Juan 1:33). Pablo indica ahora que este testimonio fue confirmado por el Espíritu Santo, que había capacitado a los corintios con un conjunto completo de dones espirituales en su vida colectiva, de adoración y servicio a Cristo.

Las divisiones en la iglesia: Las causas y los resultados (1:10–3:23) La exaltación de personalidades Después de su saludo e introducción, Pablo empieza con una apelación formal a la unidad. Esta es la primera declaración de preocupación entre muchas que él pudiera haber mencionado. Con fuerza les pide que hablen “todos una misma cosa” y a estar “perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo parecer”, para que no hubiera divisiones (griego schismata) entre ellos (1 Corintios 1:10). Pablo deseaba que los corintios fueran completos en su fe, y la falta de unidad estaba estorbando su crecimiento espiritual. A través de los de Cloé supo que la desunión de los creyentes había resultado en disputas. El erudito pentecostal Gordon Fee desafía el punto de vista tradicional que Pablo está escribiendo a una iglesia dividida en facciones o “partidos”. Él prefiere ver las divisiones como una representación del conflicto entre Pablo, el fundador, y la comunidad entera, aunque admite que textos como 1:10–12; 3:4–5; y 11:18–19 presentan claramente divisiones internas. Más tarde, Fee reconoce que las divisiones resultaron de las opiniones de varios líderes y que los de Cloé se habían declarado como “aquellos que seguían a Pablo” (Fee 1987, 4–8, 47–66). En mi opinión, esto parece definir un cisma o un partido de opinión dividida. Cuán definidos eran estos grupos puede ser debatible, pero parece cierto que estos grupos existieron. Stanley Horton sugiere que tales divisiones no fueron reales sino más bien en proceso (1999, 23). Sin embargo, los textos de 1 Corintios citados anteriormente parecen indicar otra cosa, especialmente 11:18, donde Pablo dice que las divisiones (schismata) están “entre vosotros”. Por otra parte, tales facciones (heireseis) debían estar entre ellos para identificar a aquellos que eran aprobados por Dios (11:19). El término heireseis puede

16

Las epístolas a los corintios

4 ¿Por qué la unidad en la iglesia es tan vital para su salud espiritual?

referirse bien a un grupo o a una secta (Hechos 5:17), o la falsa enseñanza de tal grupo (1 Pedro 2:1). El contexto de 1 Corintios parece favorecer el sentido anterior y hace de las divisiones y facciones paralelas términos equivalentes. En cualquier caso, aun si Pablo quiso referirse con esos términos a las diferentes enseñanzas, es imposible separar las enseñanzas de aquellos que él identifica como poseedores de ellas. Aunque el pasaje no especifica el motivo exacto de la disensión, toda la epístola parece indicar que involucró enseñanzas y prácticas conflictivas dentro de la iglesia. La fuente de diferentes opiniones giró en torno a competencia de lealtades a personalidades específicas. Los rivales que claman ser de Pablo, de Apolos, o de Cefas revelan que dentro de la iglesia se fueron formando grupos en torno a las enseñanzas de varios líderes. Estas preferencias fomentaban el orgullo espiritual, como se ve por la reprensión que hace Pablo a aquellos que se enorgullecían de quien les había administrado el bautismo (1 Corintios 1:14–15). Pablo les recuerda que Cristo no está dividido. Sólo Cristo, en cuyo nombre ellos fueron bautizados, es la fuente de su redención (vv. 13–16). Pablo sabía que las divisiones no solo fomentaban el orgullo sino que también socavaban la predicación del evangelio (v. 17). Por exaltar la personalidad humana, los corintios ponían un énfasis peligroso en la manera o forma de predicar más que en el contenido centrado en la cruz del evangelio. La advertencia de Pablo resuena en los pasillos del tiempo hacia aquellos que en nuestros días prefieren el estilo de la predicación por sobre la sustancia

1.2.2

Entendiendo mal la sabiduría de Dios

Clarificar cómo los corintios entendieron mal la sabiduría de Dios.

Junto con exaltar a ciertos individuos, las divisiones en la iglesia de Corinto eran el resultado de una observación equivocada del evangelio mismo. En 1 Corintios 1:17, Pablo declara que Cristo no lo envió para predicar el evangelio “con sabiduría de palabras”. Aquí, Pablo usa la frase griega en sophia logou (literalmente, “por sabiduría de palabra o lenguaje”), la cual puede referirse tanto a la forma o contenido de lo que se habla. Mientras que Pablo puede y debe haber tenido la forma de sus palabras en su mente (2:1, 4), él no separa la forma del contenido de su mensaje (2:2). Los antiguos griegos tenían en alta estima a aquellos que buscaban la sabiduría y la verdad a través de la mente y razón. De hecho, el término filósofo significa “amante de la sabiduría”. En 1 Corintios 1, Pablo hace un contraste exacto entre los dos tipos de sabiduría: la sabiduría del mundo (o “este mundo”, v. 20), y la sabiduría de Dios (v. 21). Estableciendo el contraste en términos de la escatología, Pablo no presenta similitudes entre las dos, ya que a través de la sabiduría el mundo no conoció a Dios (v. 22). La sabiduría de Dios no pertenece a este mundo sino a un mundo nuevo que comenzó con la venida de Cristo y, específicamente para Pablo, con la muerte y resurrección de Jesús.2 Ahora, a través de la predicación del evangelio, la sabiduría de Dios puede ser oída en el mensaje de la cruz (vv. 17–18). El contraste es tal que aquellos que pertenecen a este mundo ven sólo locura en este mensaje. Pablo explica por qué el mensaje de la cruz oculta la sabiduría de Dios a judíos y a griegos. Los judíos, que buscan señales de la sabiduría y del poder de Dios encuentran la cruz intolerable. ¿Cómo pudo el Mesías (griego Christos, “el ungido”) escogido de Dios ser crucificado? Tal pensamiento los escandalizó, puesto que sus propias Escrituras enseñaban que “maldito por Dios es el colgado” (Deuteronomio 21:23; Gálatas 3:13). Para los griegos, la muerte pertenecía al reino de los mortales y al mundo material. Por tanto, era inferior al

OBJETIVO

La conducta y las actitudes no cristianas (1 Corintios 1–4)

5 Relacione Santiago 3:13– 17 con la conversación de Pablo acerca de la sabiduría de Dios en 1 Corintios 2.

1.2.3

OBJETIVO

Comentar los efectos de las divisiones en la madurez espiritual.

17

reino espiritual al cual pertenecían los dioses inmortales. ¿Cómo podía revelarse la sabiduría y poder de Dios (1 Corintios 1:24) a través de algo tan débil y humano como la muerte? Pero Pablo les recuerda a los corintios que la sabiduría del mundo está en contra de la sabiduría de Dios, y que será apartada y finalmente destruida (1:19; Isaías 29:14). De hecho, en la crucifixión de Cristo descansa el diseño de Dios para la iglesia. Dios ha escogido revelar su sabiduría y poder a través de la debilidad humana, lo que es considerado una locura por este mundo. En resumen, Él ha escogido a los “nadie” de este mundo para predicar el mensaje de la cruz de Cristo, en quién descansa no solo la sabiduría de Dios sino que también nuestra justicia, santidad y redención (v. 30). Los corintios, de igual modo, habían entendido mal la naturaleza de la sabiduría de Dios y su fuente. Dada su afición por la filosofía, ellos pueden haber creído que tal sabiduría se obtenía por una búsqueda intelectual y por preguntas. En 1 Corintios 2, Pablo corrige esa idea, enseñando que tal sabiduría es espiritual en dos sentidos de la palabra: 1. La sabiduría de Dios no viene por medio de un esfuerzo intelectual sino que es a través de la revelación del Espíritu de Dios. Sólo el Espíritu, que “todo lo escudriña, aun lo profundo de Dios” (2:10), conoce los pensamientos de Dios (v. 11). Mientras la sabiduría de Dios está oculta del mundo (v. 8), Dios la ha revelado a nosotros “por el Espíritu” (v. 10) Los cristianos no han recibido el espíritu de este mundo, sino el Espíritu Santo, que es de Dios (v. 12). Solo Él puede impartir la sabiduría de Dios al corazón humano. 2. La sabiduría de Dios es espiritual por naturaleza. Esto es, tiene una dimensión espiritual que demanda fe (2:5) y una nueva naturaleza para recibir y entender. Jesús le enseñó a Nicodemo: “Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es” (Juan 3:6). La carne, como Juan la usa aquí, habla de la vida humana natural fuera de la vida eterna de Dios, la cual es sobrenatural. En el mismo pasaje, Jesús explicó que solo aquellos que son nacidos de nuevo (o “de arriba”) pueden entrar en el reino de Dios (v. 5). Aquellos que han experimentado este nuevo nacimiento se dice que son “nacido[s] del Espíritu” (v. 8). Sin mencionar un re-nacimiento espiritual, Pablo no obstante edifica sobre la enseñanza de Jesús. Sólo aquellos que son “espirituales” por naturaleza pueden entender las verdades que el Espíritu revela y enseña. La naturaleza humana, confiando solo en el intelecto humano y sabiduría, no puede aceptar y entender estas verdades enseñadas por el Espíritu, porque ellas “se han de discernir espiritualmente” (1 Corintios 2:14).

La pérdida de la madurez espiritual En 1 Corintios 3, Pablo centra su atención en las consecuencias que esperan a los corintios si sus divisiones no son bien manejadas y resueltas. A saber, tal división interna estorbará su crecimiento espiritual. Pablo describe su inmadurez como sarkinos, o “mundana”. Aquí tenemos el contraste de la batalla entre la carne y el espíritu de Pablo, que empezó en los pasajes anteriores, que corresponde y representa el carácter de aquellos que viven en dos mundos (Fee 1996, 49–61, 126–138). La triste realidad es que los corintios vivían como si todavía pertenecieran al siglo del cual fueron librados (Gálatas 1:4). Pablo les dice: “Aún sois carnales”

18

Las epístolas a los corintios

6 ¿Cómo pueden los creyentes estar seguros que su servicio a Cristo es aceptable y será recompensado?

1.3

LECCIÓN

(1 Corintios 3:3). La presencia de celos, disensiones y divisiones otorgó la evidencia que este era el caso. Además el espíritu partidista que elevaba a un líder o maestro sobre otro mostraba que los corintios no lograban entender la unidad del cuerpo de Cristo y su compañerismo con Dios en la obra de la iglesia. (vv. 4–9). Pablo concluye su discusión de las divisiones de los corintios y la ignorancia que revela, con la consecuencia última: la pérdida de su galardón celestial por su servicio a Dios. Exaltar a una personalidad sobre otra dentro de la iglesia es dejar de reconocer que el ministerio de cada persona, como el de Pablo, es un don no merecido de la gracia de Dios (v. 10). Porque los creyentes son mayordomos de cada ministerio que se les ha confiado, Pablo insta con firmeza a cuidar la manera de conducir los negocios de la iglesia. Usando la analogía de un edificio, Pablo enfatiza que Cristo es el único y exclusivo fundamento de la iglesia. Consecuentemente, los ministros del evangelio deben preocuparse de cómo presentan a Cristo y su obra redentora. La regla por la cual se medirán todos los ministerios es la doctrina de Cristo. La manera en que los individuos construyen sobre el fundamento se relaciona con la calidad de su obra (v. 13). Pablo no explica qué implica edificar con heno, madera, hojarasca, oro, plata y piedras preciosas. No obstante, el contexto amplio de la epístola muestra que nuestra forma de edificar debe relacionarse con el carácter y contenido de nuestra enseñanza. Aquellos que predican la verdad del evangelio, que glorifican a Dios y equipan su iglesia, están edificando con oro, plata y piedras preciosas. En cambio, todos aquellos que rompen la unidad de la iglesia por la predicación de humana sabiduría o que corrompen el evangelio con falsas enseñanzas, enfrentarán un triste final. En el día del juicio, cuando Dios evalúe el carácter y el trabajo de cada persona, fuego consumirá los actos que son perecibles como madera, heno y hojarasca. Este juicio no determina la salvación eterna de la persona, pero sí la obtención o pérdida del galardón (v. 15). Sin embargo, Pablo advierte solemnemente a aquellos que destruyan descuidadamente el templo de Dios con enseñanzas basadas en la sabiduría de este mundo: “Si alguno destruyere el templo de Dios, Dios le destruirá a él” (v. 17).

Las divisiones en la iglesia: El remedio (4:1–21) Como Gordon Fee observa, las corrientes de divisiones internas en Corinto parecen fluir hacia un río de oposición contra Pablo (1987, 5–6, 8). La sabiduría y el orgullo del mundo movieron a los corintios a exaltar a un líder sobre otro (1 Corintios 3:22), promoviendo la amonestación de Pablo de dejar de gloriarse en las personas (v. 21). Esta comparación mundana de líderes parece haber sido el resultado de las críticas de Pablo. Así en 1 Corintios 4, Pablo responde a esta crítica negativa, proveyendo intuición e instrucción de cómo prevenir las divisiones tan molestas en Corinto.

1.3.1

Mayordomos del ministerio

Describir la perspectiva de Pablo acerca del ministerio como mayordomía ante Dios.

Pablo les recuerda a los corintios que él y aquellos con los que está siendo comparado (Apolos y Cefas) son meramente hombres y siervos de Cristo. Su ministerio de predicación del evangelio es una mayordomía que Dios les ha dado. Como custodios de esta verdad, ellos deben ser fieles; pero si ellos son fieles

OBJETIVO

La conducta y las actitudes no cristianas (1 Corintios 1–4)

7 ¿Cómo deberían los ministros del evangelio manejar la crítica de su ministerio?

19

o no será determinado o juzgado sólo por Dios. Él es quién les ha confiado el evangelio, y Él es quién los juzgará en el tiempo señalado. Consecuentemente, Pablo no permite que las críticas lo abrumen, y es más, él evita las autocríticas (1 Corintios 4:3), que pueden ser igualmente condenatorias. Mientras su conciencia es clara ante Dios, Pablo sabe que la única prueba real de inocencia es el juicio del Señor reservado para el tiempo de la venida de Cristo. En ese tiempo, Dios traerá a la luz las cosas ocultas, aun los motivos ocultos del corazón de las personas. Pablo exhorta a los creyentes a no adelantarse al Señor y enfrentar el juicio ahora. Evidentemente, tal juicio prematuro no es aún de ellos hacerlo. La declaración de Pablo aquí nos recuerda su rechazo a los romanos por juzgar el siervo de otro hombre (esto es, del Señor) en asuntos de conciencia (Romanos 14:1–12).

1.3.2

Las lecciones de Pablo

Resumir las instrucciones de Pablo a los corintios para remediar sus divisiones.

Para evitar las humanas jactancias que fomentan divisiones, Pablo declara que los corintios deben poner atención a sus enseñanzas, que no se conforman a la sabiduría de este mundo sino a lo “que está escrito” (las Escrituras del Antiguo Testamento).3 La sabiduría del mundo produce el tipo de orgullo que pone el ministerio de una persona en contra del otro (1 Corintios 4:6). Así, las distinciones y comparaciones a las que han recurrido los corintios revelan su orgullo e ignorancia. Pablo pregunta: “¿Qué tienes que no hayas recibido? Y si lo recibiste, ¿por qué te glorías como si no lo hubieras recibido?” (v. 7). Para enfatizar su punto, Pablo traza algunas comparaciones del mismo para mostrar el vano orgullo de los líderes corintios. Con ironía y sarcasmo, él contrasta sus exaltadas demandas y actitudes arrogantes con la humildad, humillación y sufrimientos de él mismo y de los otros apóstoles. Él no escribe para avergonzarse de ellos sino para mostrarles que, como su padre en la fe, les ama y quiere advertirles que se alejen de esa senda destructiva. Él busca corregir su curso para promover la madurez y bienestar espiritual. Como un padre espiritual, Pablo se da cuenta que la instrucción más eficaz requiere más que palabras; necesita un modelo. Por lo tanto, él llama a los corintios a que lo imiten en su servicio a Cristo (1 Corintios 4:16). Para ayudarlos, Pablo envía a uno de sus fieles y amados hijos en la fe a Corinto. Habiéndose desarrollado junto a Pablo, Timoteo está bien familiarizado con la vida y enseñanzas de Pablo. Él puede testificar de la integridad de la vida y ejemplo de Pablo y su consistencia con lo que él enseña en las iglesias en todas partes. La combinación de palabra y hechos es por mucho la más poderosa forma de instrucción. Hoy día, haríamos bien en aprender que nuestras buenas obras pueden caer en oídos sordos cuando son ahogadas por una vida de contradicciones y transigencia. En Corinto, algunos declaraban arrogantemente que las advertencias de Pablo eran meras palabras. Quizás ellos interpretaron su demora en venir a ellos como un desgano para respaldar sus palabras con acciones autoritativas. Pero Pablo pone las cosas en su lugar: Él irá pronto. Cuando llegue, emitirá algunos juicios para ver si las palabras de los líderes arrogantes son igualadas con los hechos de poder. Si ellos están verdaderamente predicando la verdad del evangelio, el poder del reino de Dios que acompaña su predicación (v. 20) debiera estar presente. La predicación y el ministerio de Pablo fueron consecuentes. Él no enseñaba de un poder que no hubiera experimentado. Como dijo anteriormente: “Y ni mi

OBJETIVO

20

Las epístolas a los corintios

palabra ni mi predicación fue con palabras persuasivas de humana sabiduría, sino con demostración del Espíritu y de poder” (2:4)

Notas para el Capítulo 1 1. El término charisma es raro en el Nuevo Testamento. Aparece diecisiete veces, una sola vez en 1 Pedro 4:10 y todas las otras ocurre en los escritos de Pablo. Pablo la utiliza como una palabra compleja con un amplio espectro de aplicaciones. Para una excelente discusión de este término, véase Schatzmann 1987, 1–11. 2. Esto es a menudo llamado la armazón escatológica de la teología del Nuevo Testamento. Para una breve pero útil discusión de esta armazón, véase Fee y Stuart 2003, 131–133. Para un tratamiento más completo, véase Pate 1995, 71–98. 3. La mayoría de los comentaristas interpretan estas palabras como referidas al Antiguo Testamento, porque la palabra griega gegraptai (“escrito está”) presenta normalmente citas del Antiguo Testamento. No obstante, también es posible que, puesto que esta no es la primera carta a los Corintios, Pablo se refiera a la instrucción en la actual y previa correspondencia. Si es así, esto indica que Pablo observa sus cartas apostólicas como teniendo autoridad de Escritura. Algunos eruditos creen que esto es impensable, considerando que tal nivel de autoridad fue un desarrollo posterior dentro de la iglesia. Aun así, esto es algo sostenido ciertamente por pasajes como 1 Corintios 14:37 y 1 Tesalonicenses 2:13.

La conducta y las actitudes no cristianas (1 Corintios 1–4)

T

Autoexamen

21

1

CAPÍTULO

Encierre en un círculo la letra que corresponda a la mejor respuesta. 1. La fecha y lugar más probable de origen para la 6. Las divisiones en la iglesia de Corinto fueron escritura de 1 Corintios fue resultado de a) 52 d.C. en Corinto. a) poner a Cristo por encima de los líderes b) 52 d.C. en Éfeso. humanos. c) 55 d.C. en Corinto. b) adquirir demasiado conocimiento. d) 55 d.C. en Éfeso. c) rechazar la sabiduría mundana. d) un mal entendido de la sabiduría de Dios. 2. Primera de Corintios fue la _____________ carta de Pablo a la iglesia de Corinto. 7. A diferencia de la sabiduría mundana, la a) primera sabiduría de Dios b) segunda a) muestra la sensatez de la cruz. c) tercera b) pone su enfoque en la mente y en la razón. d) cuarta c) es de esta época. d) es destructible. 3. Uno de los temas tratados por Pablo en 1 Corintios es 8. Las divisiones en la iglesia de Corinto NO a) el matrimonio y el celibato. resultaron en b) la armadura de Dios. a) celos y envidia. c) la justificación por fe. b) inmadurez espiritual. d) una dieta vegetariana. c) eterna destrucción. d) pérdida de recompensa espiritual. 4. La iglesia de Corinto fue bendecida principalmente debido 9. La mayordomía involucra principalmente a) a la revelación. a) la jactancia de las visiones celestiales de uno. b) al conocimiento. b) la declaración de estar libre de toda obligación c) a la gracia. moral. d) a la fe. c) preocuparse de algo que a uno le ha sido encargado. 5. La raíz de las divisiones en la iglesia de Corinto d) imitar el ejemplo de alguien. fue a) los celos. 10. Para evitar las divisiones al estilo corintio, los b) el orgullo espiritual. líderes cristianos deben c) la competición. a) considerar el ministerio como una posición de d) el poder. poder. b) no involucrarse en ninguna crítica constructiva. c) juzgar a otros por su mayordomía del ministerio. d) guiar por medio de la palabra y del ejemplo.

22

2

CAPÍTULO

Las epístolas a los corintios

La conducta cristiana (1 Corintios 5–7) En 1 Corintios 5–7, Pablo menciona el comportamiento moral y ético que los miembros de la iglesia de Corinto estaban practicando. Había una situación tan despreciable que el apóstol la describió como un pecado aun peor que el de los paganos. Continuando con el estudio de la Palabra de Dios relacionado con los asuntos en la iglesia de Corinto, debemos poner atención a los principios que el Espíritu enseña a través de Pablo. Puede que alguno de nosotros nunca sea confrontado con relaciones incestuosas en nuestra congregación, sin embargo enfrentaremos otras situaciones que involucrarán asuntos de integridad social y espiritual. Los principios de este capítulo servirán como guía en la mención de tales asuntos.

Lección 2.1

La disciplina en la iglesia (5:1–13)

Objetivos 2.1.1 Describir la situación moral que exigía disciplina inmediata. 2.1.2 Identificar cuatro razones de la necesidad de disciplina en la iglesia hoy día.

Lección 2.2

Las disputas legales e inmoralidad (6:1–20)

Objetivos 2.2.1 Explicar cómo y por qué Pablo utiliza los fundamentos escatológicos para reprender a los corintios. 2.2.2 Identificar e ilustrar las maneras en que el destino de los últimos días debe afectar la conducta actual de los cristianos.

Lección 2.3

El matrimonio (7:1–40)

Objetivos 2.3.1 Explicar por qué los corintios fracasaron en entender el plan de Dios para la realización sexual en el matrimonio. 2.3.2 Resumir los consejos de Pablo a aquellos que consideran permanecer sin casarse. 2.3.3 Explicar por qué Pablo aconseja contra el divorcio.

La conducta cristiana (1 Corintios 5–7)

2.1

LECCIÓN 2.1.1

OBJETIVO

Describir la situación moral que exigía disciplina inmediata.

1 Explique por qué aun los inconversos tienen conciencia moral (véase 1 Corintios 5:1).

2 ¿De dónde reciben los cristianos instrucción moral y sexual?

2.1.2

OBJETIVO

Identificar cuatro razones de la necesidad de disciplina en la iglesia hoy día. 3 ¿Fue la enseñanza doctrinal de Jesús a los primeros creyentes más allá de los asuntos de fe? Explique. 4 ¿Cómo pudo un pecado tan grosero como el incesto ser tolerado en la iglesia de Corinto? 5 ¿Cómo el fracaso para disciplinar en la iglesia ayuda a la difusión del pecado?

23

La disciplina en la iglesia (5:1–13) La disciplina exigida Entre los problemas informados a Pablo hubo un escandaloso caso de inmoralidad: ¡un hombre estaba viviendo con la esposa de su padre! Asumimos de la descripción de Pablo que ésta no era la madre del hombre sino su madrastra. Sin embargo, el incesto fue prohibido por la ley judía (Levítico 18:6–18; Deuteronomio 22:30; 27:20–23). Casi podemos escuchar la exclamación de Pablo cuando menciona que este tipo de inmoralidad no era ni aun practicada entre los paganos. En el mundo grecorromano, el incesto entre padres e hijos era universalmente condenado (Keener 1993, 462). Por eso la declaración de Pablo fue significativa porque los griegos fueron conocidos por sus pecados sexuales, y ninguna ciudad griega tuvo una reputación peor que Corinto. Un escritor griego acuñó el término korinthiazein que significa “actuar como un corintio” o cometer fornicación (Fee 1987, 2). No hay duda que la presencia de templos paganos y el acompañamiento de templos de prostitución contribuyeron en la reputación de la ciudad. Aunque generalmente los eruditos consideran que el relato del antiguo historiador Strabo de miles de prostitutas en el templo de Afrodita es una exageración, quedan pocas dudas que la descripción de Strabo de una ciudad llena de excesos sexuales es esencialmente correcta (Fee 1987, 3). No debería sorprendernos que los cristianos corintios crecidos en este clima inmoral atentarían contra la pureza sexual. Sin embargo lo que escandaliza a Pablo no es sólo que este tipo de pecado existiera, sino que fuera tolerado por la comunidad de creyentes. Claramente aquí hay una situación donde la iglesia debiera haber ejercido disciplina.

Los beneficios de la disciplina en la iglesia Pablo señala que el orgullo de los corintios no les permitió lamentarse o sentirse afligidos por tal pecado en su medio. Ellos toleraron con arrogancia este pecado en vez de disciplinar al ofensor, apartándolo de la iglesia y prohibiéndole la comunión. Si ellos hubieran actuado con apego a la moral y disciplina, habrían puesto atajo a este pecado y orgullosa rebelión. En su fracaso para disciplinar, los corintios no solo toleraron este pecado sino que lo fomentaron. Así como cualquier padre sabe, una disciplina apropiada y consecuente desalienta el mal comportamiento y establece una norma de comportamiento aceptable. En la iglesia, la disciplina reduce el pecado, mostrando a los miembros lo que será o no aceptado. Enseña también las normas morales de la Palabra de Dios y permite a su pueblo atesorar esa palabra en su corazón para no pecar contra Él (Salmo 119:11). Pablo sugiere que la disciplina también puede ser preventiva. En la literatura judía, la levadura (leudar) representaba comúnmente la influencia corrupta del pecado (Barclay 1975, 45). En el uso de este símbolo, Pablo expresa su preocupación que al fracasar en la disciplina se amenaza la pureza moral de toda la comunidad. Pecados que quedan sin castigo y disciplina son como la levadura que esparce su efecto por toda la masa horneada (1 Corintios 5:6). Pablo demanda disciplina al poner al hermano ofensor fuera de la iglesia (vv. 2, 13). Hacerlo así preservaría la pureza moral de la congregación al prevenir la contaminación espiritual por propagación. Finalmente, Pablo entrega la razón más importante del porqué él aconseja disciplinar al hermano ofensor. Su motivo no es castigar sino restaurar. Su propósito

24

Las epístolas a los corintios

es redentor por cuanto la disciplina debe ser aplicada “para destrucción de la carne, a fin de que el espíritu sea salvo en el día del Señor Jesús” (v. 5). Cómo se relaciona la disciplina con la destrucción de la naturaleza pecaminosa (griego sarx, “carne”) es algo que no se explica. Sin embargo, está claro que Pablo identifica apartar al hombre de la iglesia con entregarlo a Satanás. Probablemente, Pablo ve tal disciplina como someter a este hombre a la obra destructiva de Satanás, quien tomará ventaja de su rebelión y traerá alguna clase de enfermedad o aflicción sobre él. Pero Pablo ve un lado redentor de este desarrollo. La salvación de su espíritu puede ocurrir sólo si el hombre se arrepiente. Por siguiente, Pablo probablemente ve la aflicción como una manera de traer al hombre al arrepentimiento.

2.2

LECCIÓN 2.2.1

OBJETIVO

Explicar cómo y por qué Pablo utiliza los fundamentos escatológicos para reprender a los corintios. 6 ¿Qué perspectiva debiera motivar y formar la vida y servicio a Dios de los cristianos en la actualidad?

Las disputas legales e inmoralidad (6:1–20) El ejercicio de la disciplina y del juicio En el capítulo 6, Pablo continúa su exhortación a la iglesia para que practique la disciplina. Mientras que en el capítulo anterior el asunto era bien específico, involucrando adulterio e incesto, el apóstol ahora los exhorta a resolver disputas internas juzgando asuntos de la vida diaria (6:4). Curiosamente, la razón que Pablo entrega para practicar tal juicio es la escatología. Esto es, los corintios no deberían vacilar en juzgar asuntos terrenales, porque ellos están destinados para participar en los tiempos finales de Dios y el juicio final del mundo. La civilización romana tenía un alto respeto por la ley, de hecho, veía que toda la vida se alineaba en alguna categoría de ley (Ferguson 1993, 21, 61–62). Además, los romanos eran aficionados a ir a las cortes y arreglar las disputas civiles. Los creyentes corintios, que venían de este trasfondo, no habrían visto nada malo en llevar a un hermano al tribunal. Pero para Pablo, tal práctica era impensable. En efecto, él pregunta: “¿Cómo se atreven a hacer tal cosa?” Él está escandalizado e indignado por sus acciones. Su reacción parece venir del pensamiento de pedir que incrédulos juzguen a los cristianos (1 Corintios 6:1, 6). Pablo sostiene que si los corintios están destinados para juzgar el mundo (v. 2), ¿por qué piden a los incrédulos juzgar a los santos de Dios? Si un día ellos presidirán en las cortes celestiales que juzgaran a los ángeles,1 ¿cómo es que no pueden ver con suficiente claridad para juzgar asuntos terrenales entre creyentes? Ciertamente, no tiene sentido entregar tales asuntos a aquellos que no participan en la iglesia, quienes no tienen parte en los juicios finales sino que serán juzgados en ellos.2 El consejo de Pablo es éste: Es mejor sufrir injusticia o equivocación que llevar a un hermano a la corte y pedir a un incrédulo que arregle la disputa. Las palabras de Pablo nos dejan con una incómoda pregunta: ¿Qué tipo de testimonio recibe el mundo cuando un cristiano va a la corte contra otro creyente?

2.2.2

No debemos perder la herencia eterna

Identificar e ilustrar las maneras en que el destino de los últimos días debe afectar la conducta actual de los cristianos.

La mención de incrédulos presenta otro asunto para Pablo. Antes (6:1), él se refirió a ellos como “injustos” (griego adikoi). Ahora advierte a los corintios que ningún injusto heredará el reino de Dios. Pablo hace una lista de diez tipos de pecadores que calzan en esa categoría. No es de sorprender, dado el clima moral de Corinto, que cuatro de los diez tipos tienen que ver con pecados sexuales.

OBJETIVO

La conducta cristiana (1 Corintios 5–7) 7 ¿Concibe actualmente Pablo la situación donde un verdadero creyente pudiera perder su salvación?

25

Al disponer esta advertencia tanto al principio del 6:9 como en la conclusión del 6:10, Pablo utiliza un recurso literario bien conocido, llamado inclusio, para enfatizar la importancia y urgencia de la advertencia. Sus razones para incluirla dos veces, son claras: Los corintios no debían involucrarse en estilos de vida pecaminosos que caracterizan a los injustos, los que no recibirán una herencia eterna en el reino de Dios. Con seguridad, algunos habían estado comprometidos en tales pecados, pero Dios los había redimido. Ahora ellos estaban limpios de pecado, consagrados a Dios y hechos santos y justos ante Él (v. 11). Volver atrás y vivir tal estilo de vida pecaminosa sería negar la obra de gracia y salvación de Dios en su vida, para vivir como si todavía pertenecieran a este mundo que tendrá su fin y que está destinado para juicio (7:31; 1 Juan 2:8). Por ultimo, vivir en pecado es arriesgar la pérdida de la herencia en el reino de Dios. Si la iglesia disciplina el pecado, mantendrá la pureza espiritual dentro de sus rangos al sostener y reforzar las normas morales del reino de Dios.

Glorificando a Dios en nuestro cuerpo En el principio del versículo 12 y otra vez en el versículo 13, Pablo está citando probablemente un dicho popular de los cristianos corintios: “Todas las cosas me son lícitas.” En arrogancia, algunos corintios pensaron que por su nuevo estado “espiritual”, ellos estaban más allá de las restricciones morales o de la necesidad de reducir los apetitos corporales. Pablo está de acuerdo que hay libertad en Cristo, pero no es una libertad desenfrenada para hacer todo lo que queramos con nuestro cuerpo. Él enseñó en otro lugar (Gálatas 5:13) que los cristianos no deberían usar su libertad para satisfacer su naturaleza pecaminosa. De hecho, tal perspectiva de la libertad les llevaría directamente a atarse a esa naturaleza, dándole el dominio sobre ellos. Sin embargo, la verdadera tragedia de adoptar un estilo de vida libertino es ignorar una profunda verdad de la vida cristiana: El cuerpo físico es una parte integral de una persona y es importante para Dios. Es tan importante que Dios lo resucitará por su poder (1 Corintios 6:14). El cuerpo es “para el Señor, y el Señor para el cuerpo” (v. 13). Así, una persona no puede cometer inmoralidad y evitar las consecuencias de su relación con Cristo. Tal pecado no sólo ofende a Dios sino que también constituye un pecado contra su propio cuerpo que está pensado para ser útil en el servicio y adoración del Señor (v. 19). Una verdad final tratan de evitar los corintios libertinos: Existe una unidad espiritual entre el creyente y el Señor. Esta unidad no sólo abarca el ser espiritual o material sino que la totalidad de su persona, incluyendo el cuerpo físico. Dada esta verdad mística, cuando un creyente se compromete en fornicación, involucra a Cristo en una unión impía con una prostituta. Las palabras de Pablo son sin duda desconcertantes, tal vez incomprensibles. Cristianos que se aferran de esta verdad se dan cuenta de por qué nuestro cuerpo es el templo del Espíritu Santo (v. 19), nuestra meta suprema es usar nuestro cuerpo para glorificar a Dios.

26

Las epístolas a los corintios

2.3

LECCIÓN 2.3.1

OBJETIVO

Explicar por qué los corintios fracasaron en entender el plan de Dios para la realización sexual en el matrimonio. 8 ¿Por qué los cristianos no debieran avergonzarse de preguntar sobre asuntos de la sexualidad humana?

2.3.2

OBJETIVO

Resumir los consejos de Pablo a aquellos que consideran permanecer sin casarse.

9 ¿Tiene la opinión de Pablo menos autoridad que sus otras enseñanzas? ¿Por qué sí o por qué no?

El matrimonio (7:1–40) Matrimonio: El plan de Dios para la realización sexual La filosofía griega tenía la tendencia de asociar el cuerpo material con el mal, y así despreciar el cuerpo físico. A menudo esto guiaba a dos posiciones opuestas. La primera veía el cuerpo y sus deseos como de poco valor. Por lo tanto, la gente podía hacer lo que quisieran sin afectar su espíritu. Esta posición fue llamada libertinaje, porque promovía la libertad total para satisfacer los apetitos del cuerpo. La otra posición, llamada ascetismo, veía el cuerpo y sus deseos como algo que podía ser dominado y puesto bajo sujeción. Esto requería un programa estricto de disciplina y negación que a menudo incluía ayuno o abstinencia de relaciones sexuales. Algunos en Corinto habían adoptado esta segunda posición. Pablo ahora responde a aquellos que le habían escrito preguntándole acerca del consejo que habían recibido de “no tocar mujer”. La expresión traducida en el 7:1 como “no tocar mujer” es usada por toda la literatura griega como una forma cortés para referirse a no tener relaciones sexuales (Horton 1999, 67–68). Algunos pudieron haber pensado que el celibato era más espiritual que el matrimonio, quizá interpretando mal Lucas 20:34–35 y suponiendo que su nuevo estado en Cristo les llamaba a vivir una existencia sin sexo, como los ángeles (Horton 1999, 68). Sin embargo, Pablo les instruye a la luz de una sociedad desenfrenada en inmoralidad, aconsejándoles avanzar y casarse. Por lo tanto, Pablo no sólo está diciendo que el matrimonio es una forma práctica para satisfacer los deseos sexuales de uno y evitar la inmoralidad. Él está declarando el plan de Dios para la humanidad. Dios ha hecho al hombre y a la mujer seres sexuales y ha creado el matrimonio como el contexto en el cual ellos pueden experimentar la realización sexual.

Celibato: La opción preferida y el don de Pablo Aun cuando Pablo entendía el propósito del matrimonio en el plan de Dios, prefirió permanecer sin casarse por razones prácticas. Más adelante, en los versículos 25–35, explica que el soltero (a) no esta dividido en su devoción y servicio al Señor. Los solteros son libres para servir enteramente al Señor sin competir con obligaciones y distracciones. Con esa ventaja en mente, Pablo desea que todos permanezcan sin casarse. Sin embargo, se da cuenta que no todos lo pueden hacer así porque cada uno tiene su propio “don”. A partir del uso que Pablo hace de la misma palabra griega como lo hace para los dones (charismata) del Espíritu en el capítulo 12, podemos concluir que él ve la habilidad para servir a Dios sin casarse como una capacidad del Espíritu. Pablo agrega algunos consejos prácticos relacionados con la decisión de casarse. Aunque las vírgenes, jóvenes y viudas eran libres para casarse (7:28, 36– 39), Pablo sentía que los tiempos difíciles y circunstancias de su época hacían del matrimonio algo poco prudente (v. 26). Los que escogieran casarse enfrentarían muchos problemas (v. 28). En consecuencia, Pablo aconseja a la gente de ese tiempo no cambiar su estado marital. Al ofrecer este consejo, él no puede dar un mandamiento directo del Señor pero está confiado que lo que dice es fidedigno y viene de alguien que ha recibido la misericordia del Señor (v. 25) y el Espíritu de Dios (v. 40). Aunque Pablo no está en contra del matrimonio, él cree claramente que la persona no casada tiene ventajas sobre el casado.

La conducta cristiana (1 Corintios 5–7)

27

2.3.3

El divorcio

Explicar por qué Pablo aconseja contra el divorcio.

La discusión del divorcio en 1 Corintios 7 parece reflejar las preguntas que los mismos corintios hicieron relacionadas a las situaciones internas de la iglesia. Algunos pudieron haber pensado que llegar a ser cristiano significaba separarse uno mismo de la unión impía con un incrédulo. Sin embargo, respecto a la práctica del divorcio, Pablo no da su opinión propia sino que repite la enseñanza de Jesús (Marcos 10:1–12). Un cristiano no debería buscar divorciarse. Mejor aún, un esposo (a) cristiano debería permanecer casado con el cónyuge incrédulo tanto tiempo como éste quiera vivir con él o ella. Pablo piensa que el cónyuge incrédulo es santificado por el creyente. Por esto, tal vez Pablo haya querido decir que la familia es apartada para Dios y puesta bajo la influencia de su gracia a través de la vida del creyente. Está en juego nada menos que la salvación del cónyuge incrédulo. La única excepción para no permanecer en la relación es si el compañero incrédulo abandona el matrimonio. En ese caso, el creyente no puede forzar a su cónyuge para que permanezca. Entonces, el creyente no está atado ante Dios hacia ese matrimonio. De acuerdo a Craig Keener, la frase “sujeto a” (1 Corintios 7:15) viene de las expresiones de los contratos de divorcios de esos días, que siempre estipulaban la libertad de volverse a casar (2005, 65).

OBJETIVO

10 ¿Son los cónyuges incrédulos considerados cristianos ante la vista de Dios por causa de sus cónyuges creyentes?

Notas para el Capítulo 2 1. Según Horton, 1 Corintios 6 incluye una referencia al juicio final mencionado en Judas 6, que incluye el juicio de espíritus malvados (1999, 60). 2. Es posible que 1 Corintios 6:4 pudiera interpretarse como una ironía. Pablo estaría, entonces, mandando a los creyentes a señalar al menos notable en la iglesia para juzgar en esta materia, porque ellos están mejor calificados para juzgar que alguien de afuera (Barclay 1975, 47).

28

T

Las epístolas a los corintios

Autoexamen

2

CAPÍTULO

Encierre en un círculo la letra que corresponda a la mejor respuesta. 1. La palabra griega acuñada para describir la 7. Al contrario de los griegos, Pablo enseñó que inmoralidad extrema es a) el cuerpo físico es parte integral de una a) adikoi. persona. b) korinthiazein. b) no necesitamos restringir nuestros apetitos c) charismata. corporales. d) sarx. c) debemos abstenernos de toda relación sexual. d) todo es permitido a los cristianos. 2. El incesto tal cual se menciona en 1 Corintios 5 era 8. La pregunta de los corintios respecto de no a) aceptado con moderación. casarse (7:1) probablemente tenía su base en su b) aceptado en el mundo griego. a) libertinaje. c) condenado en el Antiguo Testamento. b) ascetismo. d) condenado tanto por judíos como por gentiles. c) escatología. d) celibato. 3. Los corintios no disciplinaron a su hermano ofensor principalmente a causa de 9. Pablo no ordena a todos los creyentes que sean a) orgullo. célibes porque b) su propia inmoralidad. a) el matrimonio es lo establecido por Dios para c) engreimiento. la satisfacción sexual. d) avaricia. b) el celibato es un “don” de Dios a creyentes selectos. 4. La disciplina en la iglesia es esencial porque c) el matrimonio es mayormente un asunto de a) concede más control a los líderes de la iglesia. libertad personal para el creyente. b) constituye al pecador en un ejemplo. d) Todas las anteriores c) mantiene y promueve la pureza espiritual. d) confirma que la salvación de una persona no se 10. ¿Qué es algo que Pablo NO enseñó respecto al pierde. divorcio? a) Un creyente no debiera buscar, o iniciar, un 5. ¿Sobre qué base doctrinal reprendió Pablo a los divorcio de un incrédulo. corintios por llevar los creyentes al tribunal? b) El creyente no es contaminado al permanecer a) Teología casado con un incrédulo. b) Eclesiología c) Si ya está divorciado, un creyente debiera c) Escatología volver a casarse tan pronto como sea posible. d) Cristología d) El divorcio es permitido si el creyente es 6. ¿A quiénes advirtió Pablo que no heredarían abandonado. el reino de Dios por causa de su estilo de vida pecaminoso? a) Los judíos b) Los gentiles c) Los corintios incrédulos d) Los creyentes corintios

La conducta cristiana (1 Corintios 5–7)

29

30

3

Las epístolas a los corintios

Las decisiones cristianas CAPÍTULO (1 Corintios 8–10) En los capítulos 8–10, Pablo continúa respondiendo las preguntas relacionadas con los asuntos éticos de la iglesia. Ahora la discusión se traslada específicamente a la libertad de los creyentes para comer alimento ofrecido a los ídolos. Esencialmente, algunas cosas en la Escritura son claramente correctas, o claramente incorrectas; otros asuntos son materia de conciencia. Pablo sugiere a los santos en Corinto que en asuntos de conciencia ellos deben ser sensibles a los efectos potencialmente adversos de sus acciones en otros, particularmente en los creyentes débiles. Ellos no debieran permitir que sus libertades personales ofendan o desalienten a otros. El amor debe ser la principal motivación.

Lección 3.1

La libertad cristiana y carne ofrecida a los ídolos (8–9)

Objetivos 3.1.1 Describir el problema relacionado con la carne ofrecida a los ídolos. 3.1.2 Explicar cómo el conocimiento debiera gobernar la libertad cristiana.

Lección 3.2

El ejemplo de los israelitas (10:1–11:1)

Objetivos 3.2.1 Identificar los factores que guiaron a Israel a la idolatría y que ejemplifican lo que los creyentes no deben hacer. 3.2.2 Explicar por qué Pablo hace una enérgica advertencia contra la participación en la adoración pagana.

Las decisiones cristianas (1 Corintios 8–10)

3.1

LECCIÓN 3.1.1

OBJETIVO

Describir el problema relacionado con la carne ofrecida a los ídolos.

31

La libertad cristiana y carne ofrecida a los ídolos (8–9) En los días de Pablo el sacrificio a los ídolos era muy común y también era una parte esencial en la vida religiosa del mundo grecorromano. Para los paganos estos sacrificios simbolizaban la devoción a una deidad en particular y eran considerados un medio de entrada a la comunión espiritual con esa deidad. Solo una pequeña parte de cada sacrificio era dedicado a ese dios; el resto era dado a los sacerdotes que oficiaban y a los adoradores. A menudo se lo encontraba en la mesa para una fiesta o, en el caso de los sacrificios públicos, en las tiendas de carne en el mercado (Barclay 1975, 72).

La libertad en Cristo 1 ¿Cómo se difieren los sacrificios del Antiguo Testamento de aquellos practicados por los paganos en los días de Pablo?

3.1.2

OBJETIVO

Explicar cómo el conocimiento debiera gobernar la libertad cristiana.

2 ¿Por qué el hermano débil es “destruido” (v. 11) por algo que Pablo indica que no es pecado y que es de poca importancia para Dios (v. 8)?

Pablo se refiere ahora a un asunto que sin duda turbó a los corintios: ¿Es propio que los cristianos coman carne que ha venido de sacrificios paganos ofrecidos a los ídolos? Finalmente Pablo responderá que los creyentes son libres para hacerlo así. Pero antes, él hace una suave reprensión a aquellos que ejercen su libertad fuera del conocimiento y sin amor. El numeroso uso de las palabras conocimiento y conocer sugiere que algunos en Corinto se estaban jactando de un conocimiento superior en la materia. Pablo les dice que el conocimiento sin amor sólo puede guiar a un orgullo destructivo. Por otro lado, el amor no sólo puede crear una comunidad de creyentes, sino también invitar y promover un íntimo conocimiento de Dios. Con todo, Pablo no niega que el conocimiento es importante. Él quiere que los creyentes sepan varias cosas acerca de la idolatría pagana, incluyendo que no hay realidad detrás de los ídolos. Quizás repitiendo los pensamientos de Isaías en relación a la necedad de la idolatría (Isaías 2:8; 40:18–20; 41:7; 44:9–20; 46:1– 2), Pablo quiere que los seguidores se den cuenta que los ídolos son creaciones humanas sin vida y sin poder para hablar o actuar (Horton 1999, 79). A pesar de la adoración pagana de muchos “así llamados dioses” y “señores”, los cristianos deberían saber que “no hay más que un Dios” (1 Corintios 8:4), quien es Dios el Padre y Creador. Además, hay un solo Señor, el Señor Jesucristo, quien junto con el Padre, crea todas las cosas y da vida a todo (v. 6).1 Jesús dijo que lo que va al estómago de una persona no es lo que contamina (Marcos 7:15–19). Más adelante Pablo hace notar que no todo cristiano sabe que para Dios no tiene importancia lo que comemos o no (1 Corintios 8:8). Por tal ignorancia, algunos creyentes corintios fueron afligidos en su conciencia cuando se enfrentaban a comer carne del mercado o de la mesa de un incrédulo. Entonces, Pablo da esta instrucción a aquellos cuyo conocimiento les permitía comer tal alimento: No usar la libertad en una forma que haga que el hermano más débil tropiece con el pecado. Tal pecado ocurre si los creyentes más débiles violan su conciencia o sus convicciones personales ante Dios, por comer comida que ellos creen que está prohibida por su fe en Cristo (v. 12). En ese caso, “el que duda sobre lo que come, es condenado, porque no lo hace con fe; y todo lo que no proviene de fe es pecado (Romanos 14:23). El consejo de Pablo es no destruir al hermano (a) por quién Cristo murió (1 Corintios 8:11), por consiguiente repite Romanos 14:20: “No destruyas la obra de Dios por causa de la comida.”

La relación con los derechos personales Continuando el tema de la libertad cristiana, Pablo se usa a sí mismo como ilustración: Seguramente su nivel como apóstol le concedía ciertos derechos.

32

Las epístolas a los corintios

3 ¿Cómo sirve la contextualización para la propagación del evangelio?

3.2

LECCIÓN 3.2.1 OBJETIVO

Identificar los factores que guiaron a Israel a la idolatría y que ejemplifican lo que los creyentes no deben hacer.

No obstante, en Corinto como en Galacia,2 Pablo enfrentó oposición de aquellos que no aceptaban su apostolado. Sin embargo, Pablo está confiado de su llamado apostólico, que provino de una revelación divina. Por cuanto el Cristo resucitado se le apareció personalmente (1 Corintios 9:1), su apostolado no es inferior al de los apóstoles originales (vv. 2–6). Además él ha llegado a ser un padre espiritual para los corintios llevándoles el evangelio (4:14–15). Ellos mismos son la marca o sello de identidad de su apostolado (9:2). Como un apóstol, Pablo tiene el derecho de vivir de la predicación del evangelio (vv. 4–11), cosa que él quiere aclarar a través de varias ilustraciones comunes y una cita del Antiguo Testamento: “No pondrás bozal al buey cuando trillare” (Deuteronomio 25:4). Aún así la verdadera libertad cristiana significa ser capaz de rechazar todo uso de nuestros derechos y libertad. Esto es lo que Pablo hace exactamente con respecto a los corintios. Él tiene todo el derecho de esperar su sostenimiento económico por su trabajo en el evangelio. De hecho, Pablo dice que tal sostenimiento fue mandado (griego diatassō, “cargar”) por el Señor mismo (1 Corintios 9:14). No obstante, aunque él no explica las razones para hacerlo así, Pablo opta por no tomar tal sostenimiento por causa del evangelio. Pablo declara que hacerlo así “pon[dría] obstáculos al evangelio de Cristo” (v. 12). Además su decisión está basada en su llamado divino para predicar el evangelio y su deseo de ganar los perdidos para Cristo. Por esta razón, él ha determinado no hacer nada que pudiera estorbar su meta, más bien hacer todo para cumplirla. Pablo no predica el evangelio por ganancias monetarias. Al contrario, él considera que es un privilegio y honor predicar sin salario. Como en 2 Corintios 11:11–12, él se refiere a esta práctica como su “gloria”. Usando la ironía, Pablo declara que su “galardón” es predicar el evangelio “gratuitamente” (1 Corintios 9:18). Él no solo está dispuesto sino que tiene obligación divina, y declara: “!Ay de mí si no anunciare el evangelio!” (v. 16). Al predicar el evangelio, Pablo es constreñido a decir “a todos me he hecho de todo, para que de todos modos salve a algunos” (vv. 20–22). Hacer que el mensaje y verdad de la Escritura sea relevante y entendible a la audiencia receptora o cultura, es lo que llamamos contextualización (Hernando 2005, 17, 81). Para una mayor explicación de su motivación, Pablo compara su trabajo con un campeonato de atletismo (vv. 24–27). Él es llamado a cumplir las demandas, sacrificios y disciplina necesarios para conseguir la corona de gloria. A diferencia de la corona marchita y arreglada que se daba en los juegos griegos, la corona que Pablo espera es imperecedera, promesa de vida eterna y gloria divina (2 Corintios 4:17). Así él entiende que mientras trabaja para llevar la salvación a los gentiles a través de la predicación del evangelio, él ha llegado a “participar” de lo que ellos participan.

El ejemplo de los israelitas (10:1–11:1) Un ejemplo que no se debe seguir Al final del capítulo 9, Pablo dio una motivación negativa para su autodisciplina y sacrificio en busca del galardón eterno. Él no quería ser “eliminado” de recibir el premio (9:27). Pablo no estaba hablando acerca de perder las recompensas del servicio cristiano. Más bien, él usó la palabra griega adokimos, que describe a aquellos que son pecadores depravados (Romanos 1:28) y falsos maestros (Tito 1:15–16), que claramente no están destinados para vida eterna. En

Las decisiones cristianas (1 Corintios 8–10)

4 ¿Por qué la idolatría es tan ofensiva para Dios?

3.2.2

OBJETIVO

Explicar por qué Pablo hace una enérgica advertencia contra la participación en la adoración pagana. 5 ¿Es el pecado de idolatría limitado a la adoración de un dios falso en un templo pagano?

33

otras palabras, la advertencia de Pablo es clara: A través del descuido moral, los corintios pueden fallar en obtener el premio escatológico de la salvación eterna. Los que rechazan tal interpretación de este pasaje lo hacen por su compromiso teológico previo, no por lo que el texto dice (Fee 1987, 440). En el capítulo 10, Pablo presenta al Israel histórico como un ejemplo de aquellos que usaron mal su libertad y llegaron a ser “eliminados”. Pablo toca tres factores que guiaron a la idolatría a Israel y al fracaso para entrar en la tierra prometida: su ingratitud, indulgencia pecaminosa y perversión de su conocimiento de Dios. A pesar de la protección y provisión de Dios en el desierto, Israel tentó a Dios en forma repetida (Números 14:22). En particular, Pablo menciona que Dios los sostuvo milagrosamente dándoles agua de la roca. Llamando a Cristo la roca (1 Corintios 10:4), Pablo hace una analogía entre lo que Dios hizo físicamente por Israel como su roca (Deuteronomio 32:4, 31) y lo que Cristo ha hecho espiritualmente por los corintios. En ambos casos una provisión sobrenatural los salvó a ellos. Por la ingratitud y rebelión de los israelitas, ellos perdieron el favor de Dios, forzando a Dios a disciplinar a una generación entera, que finalmente moriría en el desierto. De los tres ejemplos que Pablo parece tener en mente (Éxodo 32; Números 11; 25), queda claro, entonces, que las quejas desagradecidas y regaños precedieron a la idolatría de Israel. Esto fue acompañado con una entrega a los apetitos de la carne. La lujuria por la comida y bebida los guió a desear la maldad e inmoralidad sexual (1 Corintios 10:6–8). Tales licencias de la carne (comunes en la adoración pagana) guiaron a Israel a comprometer y pervertir la adoración del único y verdadero Dios.

El ejemplo y consejo de Pablo Dos veces (10:6, 11), Pablo declara que las Escrituras se refieren a la historia hebrea como ejemplo y advertencia para el pueblo de Dios de no seguir la senda de los israelitas. Pablo desea preservar la pureza de los corintios en su devoción a Cristo. Les advierte que huyan de la idolatría (v. 14), sabiendo que la participación en la idolatría pagana es nada menos que adoración de demonios e incompatible totalmente con su comunión y compañerismo con Cristo (vv. 16–21). De nuevo el tema presente conduce a la cuestión de comer alimento ofrecido a los ídolos (1 Corintios 8). Pablo quiere estar seguro que los corintios saben que él no está poniendo restricciones en comer tal alimento. No obstante, aun si ellos saben que tienen tal libertad, no deben usarla egoístamente (10:24). En vez de eso, ellos debieran tener consideración y sensibilidad hacia la conciencia de todos los creyentes, judíos y griegos. Nuestra meta debería ser edificar, no traer condenación sobre la conciencia de otro (vv. 23–29). Una libertad tan generosa en el servicio a otros llevará gloria a Dios. En la búsqueda de agradar “a todos”, Pablo usa su libertad para un propósito: que todos los individuos pudieran ser salvos (v. 33). Es un ejemplo que él quiere que ellos sigan, un ejemplo que nos dejó el mismo Señor (11:1).

Notas para el Capítulo 3 1. Observe que de acuerdo a la doctrina de la Trinidad, el Dios único existe en tres personas. Aquí, vemos la unidad de la acción divina entre Dios el Padre y Dios el Hijo. Pablo no ve contradicciones al señalar que hay un Dios y al asignarle al mismo tiempo actividad divina a Jesucristo. 2. En particular, véase la defensa que Pablo hace de su apostolado en Gálatas 1:11–2:10 y 2 Corintios 10–13.

34

T

Las epístolas a los corintios

Autoexamen

3

CAPÍTULO

Encierre en un círculo la letra que corresponda a la mejor respuesta. 1. ¿Cuál pregunta refleja en mejor forma el asunto 6. Debido a su libertad cristiana, Pablo perdió su que trata Pablo en 1 Corintios 8? derecho para a) ¿Son culpables de idolatría los cristianos que a) comer carne ofrecida a los ídolos. comen carne sacrificada a ídolos? b) recibir pago por predicar el evangelio. b) ¿Debieran los cristianos comer carne, siendo c) llegar a ser todas las cosas a todos. que la mayor parte de la carne proviene de los d) vivir como un gentil. templos paganos? 7. De acuerdo a la práctica de Pablo, la c) ¿Debieran los cristianos comer carne contextualización se expresa de mejor manera como proveniente de templos paganos, sin considerar a) “Me he hecho débil a los débiles” (1 Corintios a los creyentes más débiles? 9:22). d) ¿Debieran los cristianos comprar en los b) “¡Ay de mí si no anunciare el evangelio!” mercados donde se vende carne de los (1 Corintios 9:16). sacrificios del templo? c) “A los judíos como judío” (1 Corintios 9:20). d) “A todos me he hecho de todo” (1 Corintios 2. Pablo NO enseña que la libertad cristiana 9:22). a) debiera estar fundamentada en el amor. b) es producto del conocimiento. 8. Cuando Pablo habló de ser eliminado, se refería c) debiera considerar a los de conciencia débil. a su d) es una cuestión de decisión personal. a) condición de apóstol. b) salvación y vida eterna. 3. Cuando la enseñanza de Pablo sobre la libertad c) recompensa celestial por servicio. cristiana es ignorada, d) condición de creyente judío. a) se desarrollan los celos. b) los hermanos cristianos son conducidos al 9. Un factor que condujo a la descalificación de pecado, violando sus conciencias. Israel para la tierra prometida fue su c) los creyentes no son edificados. a) falta de gratitud. d) Todas las anteriores b) auto negación de los apetitos carnales. c) búsqueda de agua en una roca. 4. En este capítulo, los débiles se refiere a d) comer alimentos ofrecidos a un ídolo. cristianos a) inmaduros, a los que les falta conocimiento. 10. Pablo advierte a los corintios que huyan de la b) tradicionales o conservadores. idolatría porque él c) nuevos, recién salvados. a) está enojado con ellos. d) gentiles. b) está muy orgulloso de los logros de ellos. c) desea preservar la pura devoción de ellos a 5. La marca de autenticidad del apostolado de Cristo. Pablo era d) desea verlos libres para hacer lo que ellos a) la gente de Corinto. quieran. b) los cristianos de Corinto. c) los cristianos maduros de Corinto. d) los que caminaban en la libertad cristiana en Corinto.

Las decisiones cristianas (1 Corintios 8–10)

35

EVALUACIÓN DE UNIDAD 1 Ahora que ha completado la Unidad 1, repase las lecciones como preparación para tomar la Evaluación de Unidad 1. La hallará, junto con su hoja de respuesta, en el material del alumno. Responda todas las preguntas sin consultar ningún material del curso, su Biblia o notas personales. Cuando haya completado la evaluación, verifique sus respuestas con las que aparecen en la clave de respuestas que se encuentra en el material del alumno. Repase cualquier dato que usted respondió incorrectamente. Una vez hecho esto, puede proceder con el estudio de la Unidad 2. Las evaluaciones de unidad no cuentan como parte de su calificación final en este curso. Sin embargo, su rendimiento al tomarlas le indica cuán bien ha aprendido el material y cuán bien podría desempeñarse en el examen final.

36

Las epístolas a los corintios

2

UNIDAD

Pautas para adorar y creer (1 Corintios 11–16) En 1 Corintios 4:15 aprendimos que Pablo fundó la iglesia en Corinto. Aun cuando en los Hechos no se registra correspondencia con los corintios, las epístolas de Pablo indican que él les escribió en repetidas ocasiones (Hernando 1999, 916–917). Hechos registra dos visitas de Pablo a Corinto (Hechos 18:1; 20:2), y 2 Corintios 13:1 sugiere una tercera. En al menos una ocasión (Hechos 18:11), Pablo ministró allí durante dieciocho meses. Esta era una iglesia que el apóstol conocía bien y que amaba. Aun más, a pesar de las controversias y de los problemas, esta era una iglesia que reconocía a Pablo como su “padre espiritual” y que buscó su consejo en una variedad de asuntos. En esta sección de la epístola, podemos ver dos categorías de asuntos: litúrgicos y doctrinales. Los primeros ocupan gran parte de la atención de Pablo, puesto que parece que la iglesia de Corinto tenía muchas interrogantes relacionadas con la adoración. Los estudiosos de las cartas de Pablo reconocen que no es fácil separar la adoración de la doctrina. Efectivamente, buena parte de la teología más profunda de Pablo aparece en porciones de sus cartas que tratan problemas o situaciones prácticas. En 1 Corintios 12–14, encontramos uno de los componentes más importantes de la comprensión de Pablo respecto del Espíritu Santo y de su obra en la iglesia. En el capítulo 15, Pablo trata la doctrina de la resurrección y hace notar la importancia que tiene en la fe cristiana.

Capítulo 4

La adoración cristiana (1 Corintios 11:2–12:11)

Lecciones 4.1 Instrucciones sobre la adoración (11:2–16) 4.2 Instrucciones sobre la Cena del Señor (11:17–34) 4.3 Instrucciones sobre los dones espirituales (12:1–11)

Capítulo 5

Las relaciones cristianas y los dones espirituales (1 Corintios 12:12–14:40)

Lecciones 5.1 Los dones espirituales y el cuerpo (12:12–13:13) 5.2 Los dones de profecía y lenguas (14:1–40)

Capítulo 6

La doctrina cristiana (1 Corintios 15–16)

Lecciones 6.1 Verdades acerca de la resurrección (15:1–58) 6.2 Asuntos e instrucciones finales (16:1–24)

38

4

Las epístolas a los corintios

La adoración cristiana CAPÍTULO (1 Corintios 11:2–12:11) Las circunstancias detrás de 1 Corintios 11 han difícultado a los lectores modernos ver el respeto y aprecio de Pablo por las mujeres. No obstante, la gran mayoría de los comentaristas está de acuerdo que aquí las instrucciones del apóstol son de preocupación local y de costumbres sociales temporales. Entender cómo se relacionan esas costumbres con los principios espirituales es el desafío para el lector moderno. Más adelante en el capítulo, Pablo responde a informes de que la celebración de la Cena del Señor por parte de los corintios había llegado a ser una deplorable fiesta de gula y desenfreno. Por eso, Pablo les enseña acerca de los dones espirituales. Su mensaje promueve la verdad de que las “manifestaciones del Espíritu Santo poseen unidad y variedad” (Carlson, Hamar y Wisehart 1989, 413). Esta demostración de unidad en la diversidad es un concepto fundamental que los corintios necesitaban entender.

Lección 4.1

Instrucciones sobre la adoración (11:2–16)

Objetivos 4.1.1 Describir el problema relacionado con la adoración que originó la enseñanza de Pablo sobre la autoridad (cabeza). 4.1.2 Identificar los tres grupos de relaciones que usa Pablo para ilustrar la autoridad (cabeza).

Lección 4.2

Instrucciones sobre la Cena del Señor (11:17–34)

Objetivo 4.2.1 Identificar los principios que debieran gobernar la manera en que los creyentes participan de la Cena del Señor.

Lección 4.3

Instrucciones sobre los dones espirituales (12:1–11)

Objetivos 4.3.1 Describir cómo la Cristología sirve como un modelo para juzgar la profecía. 4.3.2 Resumir los principios que enseñó Pablo acerca de los dones espirituales.

La adoración cristiana (1 Corintios 11:2–12:11)

4.1

LECCIÓN

4.1.1

OBJETIVO

Describir el problema relacionado con la adoración que originó la enseñanza de Pablo sobre la autoridad (cabeza).

4.1.2

OBJETIVO

Identificar los tres grupos de relaciones que usa Pablo para ilustrar la autoridad (cabeza).

39

Instrucciones sobre la adoración (11:2–16) Con 1 Corintios 11:2, Pablo comienza a referirse a varios temas y asuntos relacionados con la adoración. Él elogia a los corintios por recordar las instrucciones que él les enseñó y les exhorta a que sigan practicándolas. En la iglesia del Nuevo Testamento, la palabra tradición (griego paradosis) se refería a lo que los apóstoles habían enseñado y entregado en relación a la conducta cristiana y a la adoración. El término se centra menos en lo que se cree y más en lo que se practica. No obstante, se originó un problema y Pablo trata con las típicas dificultades al enseñar verdades fundamentales. El asunto se relaciona con la conducta adecuada durante la adoración, en particular si las mujeres debían cubrirse la cabeza mientras oran y profetizan. Para responder a este asunto, Pablo enseña sobre una triple autoridad (cabezas): la de Dios, la de Cristo, y la de la humanidad. El pasaje gira en torno al versículo 3 y al significado de cabeza (griego kephalē). En este pasaje, el término es usado en ambos sentidos, como cabeza física literal (vv. 4–7) y figurada (v. 3). Es en este último sentido que se debate el término. Por lo tanto, la controversia se originó sobre cómo se entendía la palabra cabeza en el antiguo mundo griego. Las dos opciones consideradas pero no exclusivas son “fuente”, hablando de origen (Gill y Caveness 2004, 87–92; Kroeger 1993, 375–377), y “cabeza” o “autoridad”, designando autoridad sobre (Grudem 1985, 38–59; 1990, 3–72; 2001, 25–65). Las opiniones están divididas sobre el asunto, si las mujeres o esposas cumplen algún rol de subordinación hacia el hombre o esposo. Para los cristianos que creen en la Biblia y desean ser fieles a ella, es muy importante lo que Pablo quiso decir con este término. Una cosa es bastante cierta: El significado de cabeza en el versículo 3 deber permanecer igual en los tres usos. Respecto del asunto de cubrirse la cabeza, eso es claro: Ciertas mujeres en Corinto preferían no cubrirse la cabeza durante las adoraciones públicas. En la cultura oriental, ver una mujer sin velo o sin cubrirse la cabeza era vergonzoso y una inmodestia (Barclay 1975, 97–98; Kenner 1993, 475). Pablo es sensible a la cultura y enfatiza asimismo que tal conducta es vergonzosa. No obstante, sus razones para insistir en cubrirse la cabeza tienen más que ver con el orden de la creación y la relación de los cónyuges dentro de ese orden. Un hombre debería orar o profetizar con su cabeza descubierta porque él “es imagen y gloria de Dios; pero la mujer es gloria del varón” (1 Corintios 11:7), habiendo sido creada del varón (v. 8) y por su causa (v. 9). Pablo ve la falta de cubrirse la cabeza en la mujer, de algún modo como una falta de respeto por el esposo en su papel de “cabeza”. Parece claro que en este contexto cabeza no significa “fuente”. La interpretación histórica-ortodoxa de la Trinidad ha rechazado siempre cualquier idea que el Hijo fue creado o que su existencia de algún modo dependió del Padre. La iglesia en los siglos tercero y cuarto debatió acaloradamente la deidad de Cristo y cómo las personas de la Trinidad se relacionan entre sí. Al afirmar toda la deidad y humanidad de Cristo, la iglesia ortodoxa primitiva rechazó cualquier aspecto que (1) veía al Hijo de Dios como creado o (2) que consideraba que su ser esencial se había derivado o generado en un sentido temporal (González 1970, 344–362). Por lo tanto, la “salida” del Hijo del Padre (Juan 16:28) debería ser entendida solamente en términos de la encarnación de Cristo y el envío por parte del Padre para acabar el plan de la redención. En consecuencia, la sujeción del Hijo al Padre dentro de la “familia” de Dios utiliza

40

Las epístolas a los corintios

1 ¿Qué dos conceptos comunica Pablo con la metáfora cabeza?

2 Explique por qué las palabras de Pablo no significan que las mujeres son inferiores a los hombres.

4.2

LECCIÓN 4.2.1

OBJETIVO

Identificar los principios que debieran gobernar la manera en que los creyentes participan de la Cena del Señor. 3 ¿Cuál es el significado y origen del término Eucaristía?

el término cabeza en el sentido de “autoridad”, puesto que el mismo concepto de subordinación lo requiere. Ya que Cristo es el agente de Dios en la creación (Juan 1:1, 3), la afirmación que Él es la cabeza de todo hombre (1 Corintios 11:3) pudo referirse al hecho que Jesús es la fuente de toda persona. Pero la posición de Cristo como Señor, y su papel como Creador, son inseparables. Pablo en otra parte enlaza el señorío autorizado de Cristo a su autoría en la creación (Colosenses 1:16–18; 3:1–10; Efesios 2:10) y a su exaltación y honor como “cabeza sobre todas las cosas a la iglesia” (Efesios 1:22). En este rol exaltado como cabeza, Cristo posee autoridad suprema y universal. Dios “sometió todas las cosas bajo sus pies” en sujeción (1:20–22). Pablo tiene claro en mente el contexto de la creación (1 Corintios 11:7–9), y parece correcto interpretar al hombre y a la mujer en el versículo 3 como una referencia a “esposo” y “esposa”, y no como los géneros masculino y femenino. (Considérese 1 Corintios 14:35, donde Pablo aconseja a las mujeres “pregunt[ar] en casa a sus maridos” acerca de las enseñanzas en la iglesia.) Esta es una diferencia importante. Es decir, cualquier sujeción que la cabeza pudiera transmitir debe ser entendida como una sujeción funcional y voluntaria de la esposa a su esposo (Efesios 5:24; Colosenses 3:18; Tito 2:5; 1 Pedro 3:1) (Horton 1999, 99). Es importante también notar que sumisión no es lo mismo que inferioridad. Jesús honró a su Padre y libremente se sometió a su voluntad. Con todo, esto no significa que Él tenía menos dignidad o era inferior. Su sumisión fue exigida por su papel en la redención. Del mismo modo, la sumisión de una esposa a su esposo debe verse como voluntaria y entre iguales. Con todo, la sumisión de la esposa honra al esposo como cabeza y reconoce su responsabilidad y función no sólo para guiar y dirigir, sino también para amarla sacrificadamente, alimentarla y protegerla de acuerdo al ejemplo de Cristo (Efesios 5:24–29).

Instrucciones sobre la Cena del Señor (11:17–34) En la última porción de 1 Corintios 11, Pablo vuelve a otro problema relacionado con la adoración, la forma en que los creyentes estaban practicando la Cena del Señor. Aparentemente, en Corinto algunos consideraban la Cena del Señor como un banquete muy similar a los realizados en los festivales religiosos griegos. La iglesia primitiva había empezado la costumbre de hacer una comida de compañerismo llamada fiesta de ágape (amor), que ellos parecen haber realizado junto con el partimiento del pan en la Cena del Señor (Hechos 2:46), también llamada Eucaristía o Santa Comunión en algunas iglesias. Quizá describiendo el origen de la fiesta, en Hechos 2:42–47, Lucas enfatiza la unidad y devoción entre los creyentes. En contraposición, los corintios se condujeron egoístamente, revelando sus divisiones y bandos (1 Corintios 11:18–19). Ellos venían a la fiesta con su propio alimento y comían sin compartir o esperar a los otros. Aquí estaba envuelta una gran ironía. La Cena del Señor tenía la intención de ser una celebración que simbolizaba la unidad y comunión de todos los creyentes en los beneficios redentores de la muerte de Cristo. En cambio, había llegado a ser un testimonio de división y falta de verdadero compañerismo. Pablo

La adoración cristiana (1 Corintios 11:2–12:11)

4 Al decir que algunos comían y bebían de forma indigna, ¿a qué falta específica se refiere Pablo?

4.3

LECCIÓN 4.3.1

OBJETIVO

Describir cómo la Cristología sirve como un modelo para juzgar la profecía.

41

no esconde su obvio descontento y les hace una aguda reprensión (v. 22). La conducta egoísta de ellos era una manifiesta y vergonzosa falta de respeto por los pobres y equivalía a despreciar la iglesia de Dios. Para corregir la situación, Pablo les recuerda las enseñanzas que habían recibido del Señor y que él les había impartido en otras ocasiones. Enfatiza la solemne verdad detrás de la Cena del Señor. Es una celebración, sí, pero también es un recordatorio y testimonio de la muerte de Jesús. Es su muerte la que instituyó un nuevo pacto por el cual todos los creyentes están en una comunión viva con Él. Es su muerte por nosotros lo que proclamamos cada vez que participamos de la Cena del Señor. Pablo concluye advirtiéndoles a los corintios que no participen en esta fiesta “indignamente” (11:27). Por eso, Pablo tal vez tiene en mente la egoísta y desconsiderada conducta que él describe (vv. 20–22, 33–34). Entrar en la Cena del Señor en una forma que es una burla de su significado es un asunto muy delicado. En claros términos, Pablo declara que tal actitud es una ofensa que invita a Dios a disciplinar y a juzgar (vv. 28–32). Para evitar esto, los creyentes debieran aproximarse a la mesa del Señor con un sobrio auto examen, para discernir si necesitan corregir o arrepentirse de algo.

Instrucciones sobre los dones espirituales (12:1–11) Los dones espirituales y la enseñanza de Jesús El capítulo 12 comienza con una discusión acerca de los dones espirituales, un área de práctica en la cual la iglesia de Corinto había experimentado dificultades. En el versículo 1, Pablo utiliza el término más amplio pneumatika (“cosas espirituales”) para introducir el asunto del fenómeno espiritual, o cosas que pertenecen a la vida en el Espíritu. Pero él cambia rápidamente la terminología. En el 12:4, él usa el término charismata para referirse a los dones de gracia de Dios a través del Espíritu Santo a la iglesia. En el Capítulo 1 de este curso, vimos que charismata se deriva de charis, que significa “gracia”. Estos dones, de origen y naturaleza sobrenatural, capacitan a los creyentes para llevar a cabo el ministerio vital dentro de la iglesia y el mundo. Los corintios no eran ignorantes del fenómeno espiritual. En particular, la religión grecorromana incluía sitios para los oráculos paganos, donde la gente buscaba guía sobrenatural de profetas inspirados por espíritus. Recordando su trasfondo idolátrico (v. 2), Pablo les enseña entonces cómo juzgar la profecía. Ya que el Espíritu ha venido para dar testimonio de Cristo (Juan 15:26), debemos juzgar la profecía por lo que los profetas digan respecto de la persona de Jesús. Después de todo, tal como el apóstol Juan escribió: “El testimonio (respecto) de Jesús es el espíritu de la profecía” (Apocalipsis 19:10). La verdadera profecía no disminuye la obra redentora de Cristo ni niega su señorío (1 Juan 2:18–23; 4:1–6). Además de eso, desde la perspectiva de Pablo sobre la salvación, la doctrina de Cristo y la doctrina del Espíritu Santo son inseparables; de hecho, en los tiempos de Pablo la cristología (el estudio de Cristo) y la pneumatología (el estudio del Espíritu Santo) iban juntas. Por ejemplo, Pablo le dice a los creyentes romanos que ellos están en “el Espíritu” (en pneumatic), si el Espíritu de

42

Las epístolas a los corintios

Dios mora en ellos. Luego él se refiere al Espíritu como el Espíritu de Cristo (Romanos 8:9) y agrega, “pero si Cristo está en vosotros” (v. 10). Otros pasajes enlazan la obra del Espíritu tanto con la predicación de la iglesia de Cristo (Romanos 9:1; 15:19) o la resurrección de Jesús y los creyentes (8:11), la liberación de la ley del pecado y de la muerte (8:2), la obra de santificación y justificación (1 Corintios 6:11), y otros. Recordamos todo esto para subrayar que el Espíritu hace una obra mediadora y trae todo lo que la vida de un cristiano necesita de la obra redentora de Cristo.

4.3.2

Los dones espirituales y el Espíritu

Resumir los principios que enseñó Pablo acerca de los dones espirituales.

El uso de los dones espirituales había sido problemático y divisorio en Corinto. Para remediar la situación, Pablo enfatiza la unidad de la fuente divina de los dones, a pesar de su número y diversidad. Ellos son la obra del triuno Dios. Esto es, son dones del Espíritu Santo y hacen posible el ministerio del Señor Jesús a través de las operaciones sobrenaturales de Dios el Padre. No obstante, en la economía de la Trinidad, la distribución de los dones en el cuerpo de Cristo es principalmente el papel del Espíritu. Entonces, cada don es llamado “la manifestación del Espíritu” (1 Corintios 12:7). Pablo repetidamente señala que a pesar de que los dones son muchos y diversos, ellos son obra del “mismo Espíritu”, quien los reparte a través del cuerpo “como él quiere” (v. 11). Además, Pablo enfatiza la unidad del propósito para los dones. Ellos son dados para “el bien de todos” (v. 7), esto es, para bendecir y beneficiar a todo el cuerpo.

OBJETIVO

5 ¿Por qué el Espíritu Santo otorga manifestaciones a cada creyente?

La adoración cristiana (1 Corintios 11:2–12:11)

T

Autoexamen

43

4

CAPÍTULO

Encierre en un círculo la letra que corresponda a la mejor respuesta. 1. En la cultura grecorromana de los días de 6. La referencia de Pablo en cuanto a comer Pablo, la mujer que no usaba cobertura para la la Cena del Señor de manera “indigna” (11:27) cabeza era significa comer a) casada. a) como un glotón. b) soltera. b) de un modo egoísta y desconsiderado. c) inmodesta. c) sin considerar la limpieza de los alimentos. d) elegante. d) sin un tiempo previo de arrepentimiento. 2. El término cabeza en 1 Corintios 11 envuelve el sentido de a) fuente. b) autoridad. c) unidad. d) honor.

7. Debiéramos juzgar la veracidad de la profecía de acuerdo a la doctrina de a) los tiempos del fin (escatología). b) la iglesia (eclesiología). c) la salvación (soteriología). d) Cristo (cristología).

3. La comida de fraternidad que seguía a la Cena del Señor era llamada la a) Comunión. b) Eucaristía. c) Fiesta ágape. d) Pascua.

8. La palabra raíz para charismata (“dones espirituales”) significa a) “gracia”. b) “poder”. c) “espíritu”. d) “divino”.

4. Respecto de la Cena del Señor, Pablo reprende a los corintios por a) tratarla como si fuera un banquete. b) traer imágenes de ídolos a la fiesta. c) discutir respecto de la comida que era apropiada. d) esperar que todos llegaran para comer.

9. Para corregir los problemas de los corintios con los dones espirituales, Pablo pone el enfoque en a) la prioridad de la profecía sobre los demás dones. b) la función primaria de Jesús en la distribución de los dones. c) la unidad de la fuente de los dones, el Dios trino. d) los diferentes niveles de los varios dones.

5. Pablo enseñó que la Cena del Señor debiera practicarse a) con discernimiento personal. b) de acuerdo a las enseñanzas de Jesús. c) en unidad. d) en todas las maneras mencionadas.

10. ¿Qué es lo que Pablo NO enseñó respecto de los dones espirituales? a) Aun cuando los dones son diversos, todos tienen la misma fuente: Dios. b) El Espíritu Santo es el principal distribuidor de dones. c) Los dones espirituales son dados para beneficio de todo el cuerpo. d) Los dones espirituales son dados para edificar al individuo.

44

5

Las epístolas a los corintios

Las relaciones cristianas y los dones CAPÍTULO espirituales (1 Corintios 12:12–14:40) El cuerpo humano tiene centenas de músculos, huesos, tendones y ligamentos, además de casi una docena de sistemas orgánicos. Sin embargo, cada parte trabaja en conjunto con las otras. De la misma forma, Dios diseñó el cuerpo de Cristo —con millones de iglesias locales y miembros alrededor del mundo— para trabajar en sincronía, en medio de su evidente diversidad. En tanto que la iglesia universal exprese esta unidad, el Espíritu Santo continuará produciendo en nosotros actitudes, motivos y conductas que reflejen el amor de Dios. Cuando este amor motiva y controla la operación de los dones espirituales, todas las cosas se harán decentemente para la gloria del Padre.

Lección 5.1

Los dones espirituales y el cuerpo (12:12–13:13)

Objetivos 5.1.1 Explicar por qué Pablo escogió la metáfora del cuerpo para enseñar acerca de los dones espirituales. 5.1.2 Aclarar cómo el amor es el “camino mucho más excelente” en relación con los dones espirituales.

Lección 5.2

Los dones de profecía y lenguas (14:1–40)

Objetivos 5.2.1 Explicar por qué los dones espirituales son dados a la iglesia. 5.2.2 Identificar el valor de la señal de lenguas en comparación con la profecía. 5.2.3 Resumir los principios clave que aseguran que los dones espirituales edifican la iglesia.

Las relaciones cristianas y los dones espirituales (1 Corintios 12:12–14:40)

5.1

LECCIÓN 5.1.1

OBJETIVO

Explicar por qué Pablo escogió la metáfora del cuerpo para enseñar acerca de los dones espirituales. 1 ¿Es el bautismo del Espíritu en 1 Corintios 12:13 el mismo que el bautismo de Pentecostés en Hechos 1:5?

2 ¿Qué comunica la distribución de los dones que hace Dios respecto a sus anhelos?

45

Los dones espirituales y el cuerpo (12:12–13:13) Nuestra formación Pablo presenta ahora los dones espirituales como fundamentales para el plan de Dios para la iglesia, usando el ejemplo de un cuerpo para ilustrar su punto. Aquí no se explica por qué escogió Pablo esta metáfora, pero en otra parte él la usa para enfatizar la unidad orgánica entre la iglesia y Cristo, su cabeza (Efesios 1:22–23; Colosenses 1:18; 2:19). La figura es muy conveniente también para una discusión de la composición del cuerpo de Cristo. Así como el cuerpo físico tiene muchas partes separadas con diferentes funciones, así el cuerpo de Cristo tiene muchos miembros, cada uno teniendo una función importante. Estas funciones representan los ministerios necesarios para el funcionamiento total del cuerpo de Cristo. La habilidad para ministrar en esas capacidades viene de varios dones espirituales (griego charismata). Sin embargo, los diferentes miembros y dones vienen de un mismo Espíritu. El Espíritu es responsable de colocarnos (“bautizar”) en el cuerpo de Cristo y, al hacerlo así, nos capacita para participar (“beber”) de un Espíritu (1 Corintios 12:13). Pablo quiere que entendamos que la unidad puede existir junto con la diversidad. De hecho, la diversidad dentro de la unidad es una parte integral del plan de Dios para la iglesia. Pablo quiere que los corintios reconozcan que cada miembro del cuerpo de Cristo ha sido dotado para llevar a cabo una función necesaria en el cuerpo (vv. 15–26) y que ese ordenamiento proviene de Dios. Dios los ha puesto soberanamente en el cuerpo “como él quiso” (v. 18).1 Por lo tanto, nadie tiene motivos para sentirse inferior, celoso (v. 15), orgulloso o superior (v. 21). Además, dentro del cuerpo de Cristo, todos los miembros se complementan y son interdependientes unos con otros. Cada miembro necesita del otro para una función propia del cuerpo. Esta profunda armonía los une en una experiencia común. Cualquier gozo o sufrimiento que viene sobre uno es llevado por todos (v. 26). Tal arreglo es obra de la mano de Dios; no es sólo su diseño, sino que también es su derecho. Él ha puesto (“señalado”) a cada miembro capacitado en la iglesia para su propio propósito: el ministerio dentro del cuerpo. El verbo griego para colocar (v. 18) o poner (v. 28) está en voz media, indicando que el sujeto (Dios) está actuando en relación a él mismo o para su propio interés. Pablo señala claramente que los dones espirituales crean la capacidad para ministrar dentro del cuerpo de Cristo y que todos los miembros son capacitados para servir. Sin embargo, ellos no tienen los mismos dones. Por esta razón, las respuestas a las preguntas en el 12:29–30 (por ejemplo: “¿Son todos apóstoles? ¿Tienen todos dones de sanidades?”) deben entenderse como negativas. No hay un don que sea propiedad de todos, porque la diversidad es parte del diseño de Dios para su iglesia. Los “mejores dones” que se pueden anhelar no son los de mayor importancia, porque eso contrastaría con la enseñanza de Pablo en los versículos 15–26. Más bien, el término mejores dones probablemente se refiere a aquellos dones con una capacidad mayor para edificar el cuerpo mediante una palabra entendible (Godet 1977, 657–658; Fee 1987, 623–625), un tema que Pablo tratará con más detalles en 1 Corintios 14.

46

Las epístolas a los corintios

5.1.2

El amor y los dones espirituales

Aclarar cómo el amor es el “camino mucho más excelente” en relación con los dones espirituales.

En el capítulo 13, Pablo explica sobre el “camino mucho más excelente”, el amor (12:31). Él no está diciendo que el amor sobrepasa o reemplaza a los dones espirituales, haciéndolos innecesarios. Más bien, él dice que el amor es el camino mucho más excelente para expresar o practicar los dones, por las siguientes tres razones: 1. Sólo los dones administrados en amor liberan una bendición o beneficio al que ministra (13:1–3). Y, quizás, sólo los dones administrados en amor tienen verdadero valor ante Dios.2 2. Como un fruto del Espíritu que encuentra expresión a través de los dones espirituales, el amor en acción promueve la formación del carácter cristiano. Dios dio los dones del Espíritu para servir dentro del cuerpo, para provecho y beneficio de todos (12:7). Sin embargo, tal como Pablo amonestó a los Gálatas, los creyentes deben servirse “por amor los unos a los otros” (Gálatas5:13). Para hacer esto, ellos deben “anda[r] en el Espíritu” (5:16) así su vida se caracterizará por el fruto del Espíritu (5:22– 23) del cual el amor es el primero en ser mencionado. Así, un servicio capacitado por el Espíritu, motivado y rendido en amor, es el camino mucho más excelente. 3. El amor nunca falla (1 Corintios 13:8). Esto es, el amor, a diferencia de los dones espirituales, tiene valor y relevancia permanente. Los dones pertenecen al ambiente temporal e imperfecto de la existencia terrenal.3 El amor, en cambio, junto con la fe y la esperanza, es fundamental en nuestra relación interminable con Dios. Así, el amor da valor eterno a nuestro servicio a Dios y al ministerio en los dones espirituales. De las tres virtudes mencionadas, el amor es el mayor, porque expresa el mismo carácter redentor de Dios, que es amor (1 Juan 4:8), y es el motivo divino por el cual fuimos redimidos (Juan 3:16) (Horton 1999, 130).

OBJETIVO

3 Según Pablo, ¿cuál es superior: el amor o los dones espirituales?

5.2

LECCIÓN

5.2.1

OBJETIVO

Explicar por qué los dones espirituales son dados a la iglesia.

Los dones de profecía y lenguas (14:1–40) El propósito de los dones espirituales La próxima exhortación de Pablo a los creyentes es “seguid el amor” (14:1). El verbo traducido aquí como seguid (griego diōkō) significa también “buscar” y a menudo “perseguir”. Quizá Pablo está sugiriendo que nosotros debemos “ir tras” el amor en forma vigorosa e incesante. Esta exhortación enlaza el capítulo 13 con todo el tema de los dones espirituales y es una conclusión apropiada a su instrucción sobre el amor como “el camino mucho más excelente”. De lo que sigue, parece que los corintios necesitaban instrucción especial relacionada con dos dones en particular: lenguas y profecía. El valor que la cultura griega daba a la elocuencia retórica hizo que hablar inspirado por el Espíritu fuera algo muy estimado. Pero de lo que Pablo escribe, está claro que el uso de las lenguas (griego glossolalia) por parte de los creyentes corintios no se caracterizaba por el amor. Como resultado no se construía o edificaba la iglesia (14:4–5, 12) que es el propósito de todos los dones espirituales (12:7).

Las relaciones cristianas y los dones espirituales (1 Corintios 12:12–14:40)

47

4 Indique las razones de Pablo para preferir la profecía sobre las lenguas.

Para elaborar este último punto, Pablo compara los dones de lenguas y profecía en su valor para edificar. Él prefiere la profecía por sobre las lenguas, no porque sea superior, sino por su función y valor relativo. Mientras que la profecía edifica la iglesia, el don de lenguas sólo edifica al que habla, a menos que sea interpretado. Las lenguas junto con la interpretación son de igual valor a la profecía, porque ellas comparten un igual grado de alcance o edificación (14:4– 5). Pablo presenta tres ilustraciones del hecho que las lenguas sin interpretación no pueden ser entendidas y por lo tanto no son de provecho en la adoración pública (vv. 7–11). Puesto que el amor “no busca lo suyo” (13:5) sino que edifica, en la iglesia Pablo preferiría profetizaría antes que hablar en lenguas. Al mismo tiempo, Pablo aprueba las lenguas en el 14:18. Él deja claro que no está tratando de disminuir el valor de las lenguas o limitar su uso en la iglesia. De hecho, él más tarde da una orden directa: “No impidáis el hablar lenguas” (v. 39). El problema no era con el don de lenguas en sí sino con su abuso y énfasis desmedido.

5.2.2

Una comparación del valor de las señales

Identificar el valor de la señal de lenguas en comparación con la profecía.

Si las lenguas y la interpretación tienen el mismo alcance de edificación que la profecía, ¿por qué tres dones cuando uno solo lo podría hacer? Pablo responde que las lenguas y la profecía tienen cada una un propósito distinto. Primero, las lenguas sirven como señal a los incrédulos, tal como el idioma extraño de los asirios sirvió como una señal al rebelde Israel (14:21; Isaías 28:11). Por esto, Pablo se refiere a la ocasión cuando, después de ser capturado y desarraigado de la tierra prometida, el reino del norte de Israel recibió un mensaje de Dios: Las extrañas e incomprensibles palabras de sus captores asirios significarían el juicio que los israelitas ya no estaban en un pacto de amistad con Dios. De igual forma, el don de lenguas señala que los incrédulos son extraños y carecen de comunión con Dios. Por otro lado, la profecía es una señal a los creyentes; históricamente, Israel entendió que los profetas declararon la voluntad de Dios a su pueblo. A través del don de profecía, lo creyentes reciben una señal de que Dios habita con su pueblo y les revela su voluntad. Pablo se refiere entonces al problema de las lenguas sin interpretación. El don de lenguas no es entendido en sí mismo. Entonces, si cada uno habla lenguas al mismo tiempo en la adoración pública, reina la confusión, y la crítica se levanta de los incrédulos y de aquellos que no están familiarizados4 con los dones espirituales (1 Corintios 14:23). Sin embargo, la profecía es hablada en el idioma de la gente y por lo tanto es entendida. A través de ella, Dios puede hablar a todos, tanto incrédulos como creyentes. La profecía llega a ser el medio por el cual Dios puede convencer a los incrédulos y revelar su verdadera condición espiritual. Entonces, la profecía es una poderosa herramienta y un testigo del Espíritu Santo para guiar a la gente a ser responsables ante Dios.

OBJETIVO

5 ¿Cómo hablar en lenguas sin interpretación viola la ley del amor?

5.2.3

OBJETIVO

Resumir los principios clave que aseguran que los dones espirituales edifican la iglesia.

Principios para la edificación Pablo da ahora algunas normas para el uso correcto y edificante de los dones espirituales. Él comienza con el ideal para la adoración pública, que todos los presentes participen usando sus dones espirituales para edificar la iglesia (14:26). Sus palabras indican que él estaba promoviendo un amplio y diverso uso de la charismata. Con todo, esto no significa que su uso debiera quedar sin regulación. De hecho, las restricciones expuestas parecen indicar que los corintios, además

48

Las epístolas a los corintios

de ejercitar los dones en una forma poco amorosa, estaban dando énfasis exagerado al uso de ciertos dones (esto es lenguas y profecía) en desmedro de los otros dones. En el caso de las lenguas, Pablo sugiere que ellas están limitadas en su uso (dos o tres por turno), conducidos en una manera ordenada (uno a la vez), y acompañado por el don de interpretación. Con respecto a la profecía, Pablo da una restricción igual, pero enfatiza la necesidad de juzgar la validez de la profecía. Sin duda, Pablo estableció estas restricciones sobre la profecía porque cualquiera puede pretender hablar por Dios. En el Antiguo Testamento, Moisés bosquejó el criterio para juzgar a los verdaderos profetas y sus profecías (véase Deuteronomio 13:1–18; 18:20–22). De igual forma, el Nuevo Testamento entrega el criterio para detectar a los falsos profetas (véase Mateo 7:15–23; 1 Corintios 12:3; 2 Pedro 2; 1 Juan 2:18–23; 4:1–6). Mientras que en el Antiguo Testamento los falsos profetas eran juzgados por la voluntad revelada por Dios en la ley; en el Nuevo Testamento los falsos profetas eran detectados por su separación de la doctrina de los apóstoles en relación a la persona y obra de Cristo. Observe que junto con la guía para una conducta y orden propio, Pablo declara que “podéis profetizar todos uno por uno” (1 Corintios 14:31). Esto confirma la perspectiva de Pedro en Hechos 2:17–18 que en los “postreros días”, comenzando con Pentecostés, Dios ha creado dentro de su iglesia una comunidad de profetas. Otra vez, como en las lenguas, Pablo no trata de limitar a aquellos que son usados en el don de profecía; él simplemente quiere asegurar que su uso no cause confusión sino que edifique a toda la iglesia (1 Corintios 14:31, 33). Finalmente, Pablo enseña que los dones espirituales deben ser practicados en sumisión a la autoridad espiritual. La falta de tal sumisión crea problemas, como lo indican sus palabras siguientes. Primero, algún tipo de molestia había ocurrido que involucraba a mujeres que hablaban en la iglesia en una forma incorrecta. La amonestación de Pablo a las mujeres de “guardar silencio” y su declaración que a las mujeres no les está permitido hablar no puede ser un absoluto, puesto que antes (11:5) él instruye a las mujeres profetizar con sus cabezas cubiertas. Si bien la naturaleza exacta del problema no se describe, Pablo ve claramente como las mujeres fracasan en someterse de acuerdo a la ley (14:34).5 De nuevo, Pablo parece señalar la sumisión definida por los papeles de los cónyuges dentro de la familia, no por el género (femenino o masculino) sino por sus papeles en general. Probablemente él ve la conducta de ellas como un fracaso para someterse al orden propio de la iglesia y servir de modelo en un papel de sujeción hacia sus maridos (Efesios 5:22–29). Este fue un problema sintomático de un problema mayor en Corinto. En su celo por los dones espirituales (1 Corintios 14:12), los corintios estaban ejerciendo una desenfrenada e independiente autoridad espiritual. No estaban debidamente sumisos a la práctica de la iglesia como un todo (v. 33) ni a su enseñanza apostólica. Entonces Pablo les pregunta si ellos pensaban que la Palabra de Dios había venido solamente a ellos (v. 36). Contra tal actitud, él les da una reprensión y advertencia desafiante. Si ellos pretenden ser un “profeta o espiritual”, debieran poder discernir que las instrucciones de Pablo llevan la autoridad de los mandamientos del Señor. Si no pueden llevar a cabo este juicio, no serán reconocidos por Dios (Fee 1987, 712). Pablo finaliza el capítulo 14 repitiendo el pensamiento con que comenzó. Su meta era ayudar a los corintios a reconocer que antes que un uso excesivo y sin restricción de las lenguas, ellos deberían desear honestamente edificar la iglesia a través del uso de la profecía (1 Corintios 14:1). Sin embargo, él tampoco quiere

Las relaciones cristianas y los dones espirituales (1 Corintios 12:12–14:40)

49

dejar la impresión que esto significa un cese de las lenguas en la iglesia. La orden en el versículo 39 sugiere que algunos habrían tratado de solucionar el problema prohibiendo las lenguas, un camino que él no aprueba. Él dio instrucciones y restricciones sobre las lenguas y profecía para promover el orden y llevar al máximo la edificación de la iglesia.

Notas para el Capítulo 5 1. La distribución de los dones es atribuida al Espíritu Santo en el versículo 11, pero aquí (v. 18) es atribuida a Dios el Padre. La unidad de acción divina de los miembros de la Trinidad hace que este tipo de intercambio sea posible sin contradicción. 2. Lo que Pablo quiso decir con “de nada me sirve” (1Corintios 13:3) no está claro. Él pudo referirse a la falta o pérdida del galardón mencionado antes (3:10–15). Si es así, Pablo está declarando que sólo la obra del evangelio motivada por el amor lleva la promesa de galardón celestial (3:14). 3. La venida de lo “perfecto” (13:10) se identifica con venir al conocimiento pleno y siendo plenamente conocido. Esto puede referirse solo a la parousia o segunda venida de Cristo (1 Juan 3:2–3). Mientras que la revelación de los dones de conocimiento y profecía tendrán su uso hasta la segunda venida de Cristo, el amor continúa para siempre como la base de nuestra relación con Dios. 4. El término idiotes es asociado aquí con los incrédulos, pero ¿se está mencionando otra categoría de personas? Dado el uso de la palabra en Hechos 4:13 para los apóstoles a quiénes les faltó educación formal y en 2 Corintios 11:6 para personas “inexpertas”, parece entenderse mejor este término como refiriéndose a aquellos que no habían experimentado los dones espirituales. 5. El versículo 35 sugiere que Pablo tiene en mente una enseñanza general o principio de la ley que pone a una esposa en un estado de sujeción hacia el esposo. El propósito de los versículos 34–35 es tan claro que Fee los considera como incompatibles con las enseñanzas de Pablo en otras partes y argumenta que esos versículos no son auténticos sino que son adiciones tardías al texto (1987, 699–705). Sin embargo, Fee también admite que el sustento textual para este punto no es sustancial (1987, 699; véase también Carson 1987, 124–125).

50

T

Las epístolas a los corintios

5

CAPÍTULO

Autoexamen

Encierre en un círculo la letra que corresponda a la mejor respuesta. 1. Ningún creyente debiera codiciar el don 6. Ciertos dones de revelación, como lenguas y espiritual de otro porque profecía, cesarán porque a) la codicia disgusta a Dios. a) pertenecen a esta época de conocimiento y b) con suficiente dedicación y práctica, todos entendimiento incompleto e imperfecto. pueden adquirir las mismas habilidades. b) son dones inferiores que no tienen lugar en el c) el cuerpo tiene muchos dones y miembros que cielo. realizan la funciones necesarias. c) en el cielo no hay iglesia. d) todos los creyentes tienen al menos un don. d) el amor los hace innecesarios. 2. a) b) c)

NO es verdad que los dones espirituales operan solamente cuando la gente ama. crean la habilidad de ministrar en el cuerpo. son la habilitación por gracia del Espíritu Santo. d) son todos necesarios en la iglesia. 3. ¿Qué expresa en mejor forma la verdad establecida en 1 Corintios 12:18, 24, 28? a) Los dones espirituales son necesarios e importantes. b) Los dones espirituales expresan diversidad dentro de la unidad. c) El Espíritu Santo es la fuente de todos los dones espirituales. d) Dios planeó, dispuso y señaló dones espirituales para la iglesia. 4. En 1 Corintios 12:31 Pablo menciona los “mejores dones”, dando a entender a) los que son de mayor importancia. b) los que edifican el cuerpo mediante una voz inteligible. c) los dones de lenguas e interpretación. d) nada; todos los dones son de igual valor. 5. Pablo incluye el capítulo 13 durante su instrucción sobre los dones espirituales porque a) una persona que ama cumple la ley. b) el amor cubre una multitud de pecados. c) el amor define el carácter y la expresión de los dones. d) el amor hace que los dones sean innecesarios.

7. a) b) c) d)

La palabra griega traducida como “lenguas” es pneumatika. propheteia. charisma. glossolalia.

8. Respecto a valor, el don de lenguas a) es el más espiritual porque tiene una comunicación directa con Dios. b) es igual a la profecía. c) tiene igual capacidad de edificar el cuerpo cuando va acompañado de interpretación. d) no tiene valor a menos que esté acompañado de interpretación. 9. ¿Qué declaración es verdadera al comparar lenguas y profecía? a) Lenguas es el don más prominente. b) La profecía es el don más prominente. c) Ambos tienen la misma función y propósito. d) Cada uno tiene un propósito distinto. 10. ¿Qué es lo que está en el corazón del problema que discute Pablo en 14:34–40? a) La sumisión a la autoridad espiritual b) El rechazo del apostolado de Pablo c) El quebrantamiento del orden de la iglesia d) Las profetisas

Las relaciones cristianas y los dones espirituales (1 Corintios 12:12–14:40)

51

52

6

Las epístolas a los corintios

La doctrina cristiana CAPÍTULO (1 Corintios 15–16) Esta sección en nuestro estudio de 1 Corintios nos lleva a una profunda mirada respecto de la doctrina de la resurrección de los muertos. La resurrección había sido una doctrina discutida entre los creyentes corintios por dos razones: (1) la filosofía griega, con su arrogancia en el razonamiento humano, se burlaba de la idea de los muertos siendo resucitados, y (2) la secta judía de los saduceos rechazaba la resurrección de los muertos. Estas escuelas de influencia crearon confusión e incertidumbre entre los cristianos de Corinto. Así, la confianza y la esperanza de la resurrección es la verdad penetrante que Pablo deseaba dejar en los creyentes corintios. Con seguridad, una profunda convicción de esta última realidad iría más allá, para poner todos los otros asuntos y problemas en la perspectiva de la eternidad.

Lección 6.1

Verdades acerca de la resurrección (15:1–58)

Objetivos 6.1.1 Describir el error doctrinal que motivó a Pablo a enseñar sobre la resurrección. 6.1.2 Identificar cuál es la situación si Cristo no resucitó corporalmente de los muertos. 6.1.3 Explicar el evento que señalará la conquista final de Cristo sobre la muerte y el cumplimiento de la esperanza cristiana.

Lección 6.2

Asuntos e instrucciones finales (16:1–24)

Objetivos 6.2.1 Explicar cómo usa Pablo la recomendación para preparar una cálida recepción para sus colaboradores. 6.2.2 Identificar los principios relacionados con hacer discípulos.

La doctrina cristiana (1 Corintios 15–16)

6.1

LECCIÓN

53

Verdades acerca de la resurrección (15:1–58) Está claro a partir de 1 Corintios 15:12 que algunos en Corinto estaban negando la resurrección corporal de los creyentes. Aunque la razón exacta de tal negación es incierta, probablemente venga del pensamiento griego que tendía a ver el cuerpo físico como sin importancia. Una posible clave descansa en el 14:37, donde Pablo sarcásticamente menciona a sus adversarios como aquellos que piensan que son “espirituales”. Algunos pudieron haber relacionado recibir el Espíritu y los dones espirituales (específicamente las lenguas) como prueba de su nivel “espiritual” (Fee 1987, 715). Por su parte, esto pudo haberlos guiado a la idea que los creyentes ahora participan en un reino espiritual de existencia, haciendo que la resurrección corporal fuera innecesaria e irrelevante, o al menos impensada.

6.1.1

La resurrección corporal de Cristo: Un hecho histórico

Describir el error doctrinal que motivó a Pablo a enseñar sobre la resurrección.

Pablo comienza respondiendo a este error doctrinal estableciendo primero una base común. Él les recuerda a los creyentes corintios lo que ellos ya saben, creen y predican: la resurrección de Cristo (1 Corintios 15:1). Ellos conocen bien esta doctrina porque Pablo había vivido con ellos y les había enseñado la palabra de Dios por dieciocho meses (Hechos 18:11). En su defensa de la resurrección de Cristo, Pablo establece varias verdades muy claras. Primero, la resurrección de Jesús fue un hecho de la historia, basado en la mención de Pablo de una larga lista de testigos oculares, incluido Pablo mismo (1 Corintios 15:5–8). Estos mismos testigos predicaron la muerte, sepultura y resurrección de Cristo de acuerdo a las Escrituras (vv. 3–4, 12). Que su resurrección fue de la muerte física se establece por los detalles que Pablo menciona: Cristo “murió” por nuestros pecados y “fue sepultado” y entonces “resucitó” de la muerte al tercer día. Con seguridad esta es la misma interpretación que nos dan los autores de los evangelios.

OBJETIVO

1 ¿Cómo contrarresta Pablo la idea que la resurrección de Jesús fue una ilusión?

6.1.2

La resurrección de Cristo: Indispensable para el evangelio

Identificar cuál es la situación si Cristo no resucitó corporalmente de los muertos.

Segundo, la resurrección de Cristo es indispensable y fundamental para el mensaje del evangelio (15:1–4). De hecho, no hay evangelio sin resurrección. Pablo subraya su importancia al recordarle a los corintios que su salvación vino por creer en este mensaje y permanecerá tanto tiempo como sigan creyendo en ella (v. 2). En los versículos 12–19, Pablo bosqueja la secuencia lógica de negar la resurrección. Él dice que no tiene sentido predicar la resurrección de Cristo y negar la futura resurrección de los creyentes. Las dos son inseparables (v. 12). Negar la resurrección de los creyentes es negar la resurrección de Cristo mismo. Tal negación hace de la predicación del evangelio no solo una promesa vacía sino que una mentira. Los cristianos que han creído en semejante evangelio están sin duda en una penosa condición. Ellos han creído en vano, están todavía en sus pecados y están sin esperanza de vida eterna después de la muerte. Además, si Cristo no resucitó de los muertos, Pablo y los otros apóstoles son falsos testigos que predicaron una falsa esperanza en la resurrección. La esperanza sería falsa porque reclamaría que Dios ha hecho algo que Él no ha hecho, esto es, resucitar a Cristo de los muertos. Sin embargo, la redención comprada a través de la muerte de Cristo en la cruz es ratificada y validada por su resurrección. En esencia, Dios declara en la resurrección de Cristo que la obra de Jesús fue aceptada y efectiva. Por lo tanto, puesto que la resurrección de

OBJETIVO

2 Aparte de la resurrección de Jesús, ¿qué es fundamental para el mensaje del evangelio?

54

Las epístolas a los corintios

Jesús testifica que Dios ha aceptado su muerte como la expiación por nuestros pecados (Romanos 4:25), negar la resurrección podría significar solo una cosa: Estamos todavía en nuestros pecados, nuestra fe en el evangelio no tiene valor y nuestra esperanza de vida eterna es una triste ilusión (1 Corintios 15:18–19). Sin embargo, el evangelio otorga a los cristianos la esperanza de conquistar la muerte junto con Cristo (vv. 20–25). Su resurrección no es sino las “primicias”, la prenda de una futura cosecha que de seguro vendrá.

6.1.3

OBJETIVO

Explicar el evento que señalará la conquista final de Cristo sobre la muerte y el cumplimiento de la esperanza cristiana.

3 Bíblicamente hablando, ¿es correcto hacer referencia a las “almas” que estarán en el cielo?

6.2

LECCIÓN

La victoria de Cristo sobre la muerte La esperanza de una futura resurrección presenta naturalmente el tema de la vida después de la muerte. En 15:35–50, Pablo argumenta que la resurrección es necesaria para preparar a los creyentes para su morada eterna en el cielo. Él utiliza la creación de especies animales para ilustrar que los cuerpos están adaptados a diferentes ambientes. Así como el cuerpo humano está adaptado para la vida en la tierra, así la vida en el cielo necesitará un tipo diferente de cuerpo, adaptado para un ambiente nuevo y diferente. El teólogo Stan Grenz se refiere a los humanos como “seres encarnados” diciendo que el cuerpo es esencial para el ser humano (1998, 29–43). Entonces, nuestro cuerpo natural y perecible debe ser equipado para una existencia celestial. Esto requerirá un cuerpo que sea espiritual, imperecedero y eterno. Pablo nos cuenta ahora que la transformación que acompañará nuestra futura resurrección ocurrirá en una fracción de segundo. El lenguaje que usa Pablo es apocalíptico y describe la parousia o segunda venida triunfante de Cristo. La figura, que incluye la trompeta de Dios señalando su liberación triunfal y victoria final sobre la muerte por los creyentes (1 Corintios 15:51–52); sugiere con fuerza que Pablo tiene en mente el arrebatamiento y resurrección descrita en 1 Tesalonicenses 4:13–17. Para Pablo, la resurrección de los creyentes declara y consuma la victoria de Cristo sobre la muerte, comprada con su muerte y resurrección. Usando pasajes del Antiguo Testamento que describen la humillación de un enemigo conquistado (Isaías 25:8; Oseas 13:10–14). Pablo se mofa y burla de la muerte al ser conquistada en la luz de Cristo (1 Corintios 15:54–55). Implícito en esta dramática descripción hay una imponente verdad: El pecado no era parte del plan eterno de Dios para los humanos, ni la muerte como su consecuencia. La muerte es el enemigo de Dios (vv. 25–26); y metafóricamente hablando, ¡Dios en Cristo fue a pelear para vencerla! Los creyentes pueden alegrarse con gratitud de la victoria de Cristo sobre la muerte. Su aguijón ha sido sacado, su poder quebrantado. Por lo tanto, los creyentes pueden permanecer firmes en su fe y ser fructíferos en la obra del Señor, sabiendo que su futuro eterno está seguro.

Asuntos e instrucciones finales (16:1–24) Pablo termina su carta informando a los corintios de sus planes y les instruye cómo prepararse para su venida. A causa de su preocupación por los pobres (Gálatas 2:10), Pablo había tomado una ofrenda para los cristianos de Jerusalén y Judea que habían sido víctimas de una hambruna reciente (Hechos 11:28). Para evitar encontrar a los creyentes corintios mal preparados para participar en

La doctrina cristiana (1 Corintios 15–16)

6.2.1

OBJETIVO

Explicar cómo usa Pablo la recomendación para preparar una cálida recepción para sus colaboradores. 4 ¿Por qué piensa que Pablo promovía la generosidad?

6.2.2

OBJETIVO

Identificar los principios relacionados con hacer discípulos. 5 ¿Cómo muestran las cartas de Pablo a Timoteo y Tito su cuidado por ellos?

55

la ofrenda, él les da algunas instrucciones acerca de cuándo y cómo tomarla. La mayor prioridad para Pablo fue la bondad (ayuda material para los pobres, los afligidos o aquellos en miseria) lo que requeriría organización y planificación.

Sumisión a los siervos de Dios Pablo espera que sus colaboradores llegarán antes que él, por eso trabaja para asegurarles una cálida recepción recomendando el servicio de ellos y exhortando a los corintios a someterse a su liderazgo. Conociendo la juventud de Timoteo y quizá su timidez natural (1 Timoteo 4:12; 2 Timoteo 1:7), Pablo les pide que tengan un cuidado especial con él y no lo amedrenten, “sino encaminadle en paz, para que venga a mí” (1 Corintios 16:11). También regresando de una visita reciente a Pablo en Éfeso están Estéfanas, Fortunato y Acaico. Pablo distingue el dedicado ministerio de la “familia de Estéfanas” (v. 15) con un reconocimiento especial. Semejantes hombres son dignos no sólo de reconocimiento y estima (v. 18) sino que también de sujeción (v. 16). En relación al discipulado, observe que Pablo conoce muy bien a sus colaboradores. Él ha dedicado tiempo para capacitarlos y conoce sus fortalezas y debilidades. Además tiene una gran preocupación y afecto por ellos. Él se regocija en su compañía (v. 17) y se preocupa de cómo serán recibidos (vv. 10– 11, 15–18).

Despedida, advertencia y bendición En su estilo típico, Pablo termina su carta con saludos de las personas que están con él y que son conocidas por los corintios. Priscila y Aquila están en primer lugar de la lista, como lo estuvieron con Pablo en Corinto (Hechos 18:1), Pablo también anima a los creyentes corintios a compartir el símbolo del amor y unidad cristiana, un “beso santo” (Hernando 1999, 960). Él sigue abruptamente con una maldición sobre los que no aman al Señor. Dado el anterior énfasis de Pablo sobre el amor (1 Corintios 13), su advertencia probablemente refleja la raíz de muchos de los problemas de los corintios y siendo así tal vez se lo merecían (Palma 1999, 912). Entonces Pablo utiliza la expresión aramea maranatha, que puede significar tanto “nuestro Señor viene” o “nuestro Señor, ven” (Palma 1999, 913). La última es preferible (Apocalipsis 22:20), pero en ambos casos la misma verdad asoma: El amor es la mejor preparación para el retorno del Señor. Pablo termina con una bendición expresando su deseo que la gracia y el amor del Señor Jesús esté con ellos.

56

Las epístolas a los corintios

T

Encierre en un círculo la letra que corresponda a la mejor respuesta. 1. Pablo enseñó acerca de la resurrección porque a) era un concepto nuevo para los corintios. b) algunos corintios consideraban que la resurrección era innecesaria. c) sólo unas pocas personas habían presenciado la resurrección de Jesús. d) él deseaba enfatizar su naturaleza espiritual. 2. a) b) c) d)

Pablo afirma que la resurrección de Cristo fue una ilusión. meramente de naturaleza espiritual. algo no acontecido en la historia. confirmada por testigos oculares.

3. En 1 Corintios 15, Pablo afirma que la resurrección de Jesús es fundamental para a) el evangelio. b) la profecía. c) la tradición cristiana. d) las Escrituras. 4. La negación de la resurrección corporal de Cristo conduce a la conclusión que a) nuestro espíritu, no nuestro cuerpo, será lo que resucite. b) tal negación no afecta la resurrección de los creyentes. c) nuestra predicación del evangelio y nuestra fe son sin valor. d) los cristianos necesitan un nuevo Salvador. 5. La resurrección es necesaria para la vida de los cristianos en el cielo porque a) Jesús es los primeros frutos de la resurrección. b) ningún pecado puede entrar en la santa presencia de Dios. c) nuestro cuerpo debe estar adaptado a un estado de existencia celestial. d) los creyentes son hijos tanto de Dios como de Adán.

6

CAPÍTULO

Autoexamen

6. La resurrección declara la victoria final sobre el pecado y a) la rebelión. b) el sufrimiento. c) el mal. d) la muerte. 7. ¿Cuál declaración expresa mejor la actitud de Dios hacia el pecado y la muerte? a) El pecado está en el mundo desde la Caída, y Dios lo tolera con benignidad. b) El pecado y la muerte, como enemigos de Dios, fueron derrotados por la muerte y resurrección de Jesús. c) El pecado tiene como consecuencia la muerte, y Dios juzgará a todos los pecadores. d) Dios aborrece tanto al pecado como al pecador. 8. a) b) c) d)

En 1 Corintios 16, Pablo NO trata el asunto de los profetas falsos. una ofrenda de misericordia. preparativos para sus asociados. el amor cristiano.

9. Según 1 Corintios 16, el servicio cristiano a) requiere planificación y preparación. b) es suficiente recompensa, sin afirmación y estímulo. c) promueve la independencia de los creyentes individuales. d) le dará al obrero un salario apropiado. 10. De 1 Corintios 16 aprendemos que Pablo a) dedicó tiempo a conocer y dar tutoría a sus discípulos. b) estimuló firmes relaciones entre los creyentes. c) con frecuencia elogiaba a sus discípulos y asociados. d) Todas las anteriores

La doctrina cristiana (1 Corintios 15–16)

57

EVALUACIÓN DE UNIDAD 2 Ahora que ha completado la Unidad 2, repase las lecciones como preparación para tomar la Evaluación de Unidad 2. La hallará, junto con su hoja de respuesta, en el material del alumno. Responda todas las preguntas sin consultar ningún material del curso, su Biblia o notas personales. Cuando haya completado la evaluación, verifique sus respuestas con las que aparecen en la clave de respuestas que se encuentra en el material del alumno. Repase cualquier dato que usted respondió incorrectamente. Una vez hecho esto, puede proceder con el estudio de la Unidad 3. Las evaluaciones de unidad no cuentan como parte de su calificación final en este curso. Sin embargo, su rendimiento al tomarlas le indica cuán bien ha aprendido el material y cuán bien podría desempeñarse en el examen final.

58

Las epístolas a los corintios

3

UNIDAD

El ministerio apostólico de Pablo (2 Corintios 1–9) La identificación del período de tiempo y de las condiciones de la comunidad de creyentes en Corinto es importante para entender la relación entre la iglesia y el apóstol Pablo. Han transcurrido alrededor de uno o dos años entre la escritura de 1 y 2 Corintios. La primera de estas cartas da énfasis a las relaciones correctas entre los miembros del cuerpo de Cristo. La segunda recalca la relación entre el cuerpo y el apóstol Pablo, su líder espiritual. Pablo escribe la mayor parte de 2 Corintios para expresar su alivio porque la “carta triste” y la misión de Tito han sido un éxito. Luego, prosiguiendo Pablo en su preocupación pastoral por la iglesia, toma tiempo para defender su ministerio y apostolado y para enseñar a los corintios principios de dar.

Capítulo 7

Un repaso al pasado reciente de Pablo (2 Corintios 1:1–2:11)

Lecciones 7.1 Introducción a 2 Corintios (1:1–2) 7.2 Consuelo en la aflicción (1:3–11) 7.3 Pablo defiende su cambio de planes (1:12–2:11)

Capítulo 8

El ministerio apostólico de Pablo (2 Corintios 2:12–7:16)

Lecciones 8.1 La grandeza del ministerio de Pablo (2:12–4:6) 8.2 Las pruebas y victorias del ministerio (4:7–5:9) 8.3 La naturaleza y función del ministerio (5:10–6:10) 8.4 La intimidad y el gozo del ministerio (6:11–7:16)

Capítulo 9

La ofrenda macedónica (2 Corintios 8–9)

Lecciones 9.1 La gracia de dar (8:1–9:5) 9.2 Principios de dar (9:6–15)

60

7

Las epístolas a los corintios

Un repaso al pasado reciente de Pablo CAPÍTULO (2 Corintios 1:1–2:11) Pablo escribió 2 Corintios desde algún lugar en Macedonia, probablemente Filipos, en el año 56 d.C. durante su tercer viaje misionero. (Cuando se compara con Filipenses 4:15, Macedonia en 2 Corintios 11:9 parece referirse a Filipos). Muy probablemente escribió después que Tito se unió a él en Macedonia, como se describe en 2 Corintios 7:5–7. Pablo visitó por primera vez Corinto en el 51 d.C. (Carson, Moo y Morris 1992, 223–231) durante su segundo viaje misionero y fundó ahí la iglesia. Por medio del evangelio, él había llegado a ser el “padre espiritual” de ellos (1 Corintios 4:15). Pero su relación con la iglesia fue tempestuosa y no exenta de problemas. Intrusos que anhelaban el título, prestigio y poder para sí, presentaron un serio desafío a su apostolado (2 Corintios 11:12–13). Por eso, Pablo comienza su carta con una clara declaración de su apostolado, que es el resultado de la elección de Dios (Hechos 9:15) e intervención en la vida de Pablo (Gálatas 1:15–16).

Lección 7.1

Introducción a 2 Corintios (1:1–2)

Objetivo 7.1.1 Resumir las circunstancias históricas que guiaron a Pablo para escribir 2 Corintios.

Lección 7.2

Consuelo en la aflicción (1:3–11)

Objetivos 7.2.1 Identificar las verdades que Pablo enseña que pueden ayudar a los cristianos a enfrentar las pruebas. 7.2.2 Aclarar por qué Dios permite las pruebas en la vida de los creyentes.

Lección 7.3

Pablo defiende su cambio de planes (1:12–2:11)

Objetivos 7.3.1 Analizar la respuesta de Pablo a las falsas e injustas acusaciones, e identificar los principios que ayudan a los creyentes para tratar con tales situaciones hoy. 7.3.2 Identificar las verdades o principios que Pablo enseña acerca de la disciplina en la iglesia.

Un repaso al pasado reciente de Pablo (2 Corintios 1:1–2:11)

7.1

LECCIÓN 7.1.1

OBJETIVO

Resumir las circunstancias históricas que guiaron a Pablo para escribir 2 Corintios. 1 ¿Fue 2 Corintios la segunda carta que Pablo escribió a la iglesia de Corinto?

61

Introducción a 2 Corintios (1:1–2) La interacción de Pablo con Corinto fue larga y compleja (Hernando 1999, 915–917); él conocía muy bien la congregación. El libro de los Hechos nos cuenta que Pablo fundó la iglesia de Corinto durante su segundo viaje misionero y trabajó ahí por lo menos dieciocho meses (Hechos 18:1–11). Desde su perspectiva, y probablemente desde la de ellos también, Pablo fue su “padre espiritual” (1 Corintios 4:15). Dada su larga y permanente historia con la iglesia de Corinto, no es una sorpresa que Pablo con frecuencia les recuerda de su conducta entre ellos cuando responde las acusaciones y cargos de sus adversarios. De acuerdo a la información en 1 y 2 Corintios y Hechos, Pablo había escrito por lo menos cuatro cartas a los corintios y los visitó dos veces (Hechos 18:1; 20:1–2; 2 Corintios 2:1–4). Ellos habían escrito al menos una carta a él (1 Corintios 7:1) y enviaron una delegación para entregarla (16:17), después de lo cual Pablo escribió 1 Corintios desde Éfeso. (Véase el Capítulo 1 para revisar una detallada historia que rodea los escritos de Pablo de 1 Corintios.) El siguiente es un resumen de los eventos entre los escritos de Pablo de 1 y 2 Corintios: • Después de enviar la epístola de 1 Corintios (Corintios B; una “carta previa” fue Corintios A) a través de Timoteo (1 Corintios 4:17; 16:10–11; Hechos 19:22), Pablo intenta permanecer en Éfeso hasta Pentecostés, viajar a través del mar Egeo a Macedonia, y luego visitar las iglesias mientras viaja al sur hasta Corinto. Aunque había esperado pasar el invierno en Corinto (1 Corintios 16:5–6), aparentemente cambia sus planes. Luego intenta visitarlos en dos ocasiones, una en su camino a Macedonia y de nuevo al regresar, navegando de Corinto a Judea (2 Corintios 1:15–16). • Sin embargo, pronto se da cuenta que la iglesia de Corinto no recibió favorablemente su carta (esto es, 1 Corintios), o a su mensajero. Pablo viaja a Corinto en su camino a Macedonia, pero ella llega a ser una “triste visita” (2 Corintios 2:1), la que resultó en una acalorada confrontación. Por esto, Pablo descarta sus planes para volver a Corinto a su regreso de Macedonia esperando “ahorrarles” otra tensa visita (1:23). • En cambio, al regresar a Éfeso les envía otra carta (Corintios C), “por la mucha tribulación y angustia de corazón” (2 Corintios 2:4) en un intento por corregir la situación. Ésta, así llamada “carta penosa” (7:8), es llevada probablemente por Tito (8:6), quien también está encargado de completar la generosa ofrenda para los santos de Jerusalén. • Más tarde, Pablo parte de Éfeso hacia Troas, donde espera noticias de Tito (2 Corintios 2:12). Desilusionado que Tito no hubiera llegado (2:13), Pablo va para Macedonia, donde se dedica al ministerio pastoral (Hechos 20:1–2) y a levantar la generosa ofrenda en las iglesias (2 Corintios 8:1–4; 9:2). • En Macedonia, Tito, quien acaba de venir de Corinto con buenas nuevas, se une a Pablo. Su última carta (Corintios C), si bien provocó dolor “por algún tiempo” (7:8), fue bien recibida, y la iglesia se había arrepentido. Pablo se regocija (7:6–7). Él escribe 2 Corintios (Corintios D) para expresar su alivio que la carta penosa y la misión de Tito han sido todo un éxito. Observe que ni Corintios A o Corintios C ha logrado sobrevivir en ninguna forma. Sabemos de ellas solo por las referencias en 1 y 2 Corintios.

62

Las epístolas a los corintios

Resumen de las visitas y cartas de Pablo a los Corintios Fundación de la iglesia







→ →

La “carta previa” (1 Corintios 5:9) 1 Corintios

“Visita triste” que no terminó bien







→ →

La “carta triste” (2 Corintios 2:3–4; 7:8) 2 Corintios

Otra visita después que 2 Corintios fue escrita y enviada

Al leer 2 Corintios, observe el cambio preciso de tono después del capítulo 9. Algunos han sugerido que los capítulos 10–13 son una carta tardía y aparte, lo que es improbable (Hernando 1999, 918). Deberíamos recordar que Pablo probablemente escribió 2 Corintios en un período largo de tiempo. Los capítulos 1–9 fueron escritos inmediatamente después de las buenas noticias de Tito. Sin embargo, durante el tiempo que Pablo está escribiendo, probablemente recibió más noticias relacionadas con una serie de eventos perturbadores reflejados en los capítulos 10–13. Aparentemente, sus antiguos adversarios estaban muy vivos y creando problemas. Pablo cambia de tono y dirección en esos capítulos finales, donde confronta a sus oponentes de una forma más directa para corregir la situación.

7.2

LECCIÓN

7.2.1

OBJETIVO

Identificar las verdades que Pablo enseña que pueden ayudar a los cristianos a enfrentar las pruebas. 2 ¿Cómo le ha ministrado personalmente el consuelo o la misericordia de Dios?

7.2.2

OBJETIVO

Aclarar por qué Dios permite las pruebas en la vida de los creyentes.

Consuelo en la aflicción (1:3–11) Dios de consolación Luego de los saludos iniciales en sus cartas, Pablo por lo general alaba a la iglesia en cuestión dando gracias a Dios por alguna demostración de su fe o nueva vida en Cristo. Pero en esta ocasión, el recuerdo de una reciente liberación parece tan intensa, que Pablo comienza alabando a Dios por su gracia en medio de las pruebas (2 Corintios 1:8–11). El carácter compasivo de Dios, o de misericordia (Éxodo 33:19; Salmo 111:4), y consolación (Isaías 40:1; 66:13) era bien conocido por su pueblo en el Antiguo Testamento. Misericordia (oiktirmos) es la cualidad de Dios que lo mueve para responder con bondad y compasión hacia aquellos que sufren o están en angustia. La consolación (paraklēsis, 2 Corintios 1:3) se refiere a su ayuda y lleva la idea de consuelo o ánimo. De su experiencia personal, Pablo testifica que Dios es una fuente de ilimitada misericordia y consolación para los cristianos que están sufriendo .

El propósito divino en la pruebas Parte de la consolación de Pablo viene de asumir la perspectiva de Dios sobre las pruebas. De acuerdo a 2 Corintios 1:4 resistir las pruebas a través de la consolación divina es parte del plan de Dios para equiparnos y calificarnos como sus agentes de consolación. Este principio de identificación descansa en el corazón de la encarnación de Cristo, quien, como nuestro sumo sacerdote,

Un repaso al pasado reciente de Pablo (2 Corintios 1:1–2:11)

3 ¿Cómo puede su propia resistencia en pruebas similares proveer consolación y ánimo a alguien que está sufriendo?

4 ¿Vio Pablo la resurrección sólo como un suceso futuro?

7.3

LECCIÓN

7.3.1

OBJETIVO

Analizar la respuesta de Pablo a las falsas e injustas acusaciones, e identificar los principios que ayudan a los creyentes para tratar con tales situaciones hoy.

5 ¿Protege al ministro de falsas acusaciones el hecho de tener integridad?

63

es capaz “de compadecerse de nuestras debilidades” porque fue sometido a las mismas tentaciones humanas, pero sin pecado (Hebreos 2:10; 4:14–16). Las propias aflicciones de Pablo y la consolación que recibió de Dios lo prepararon para ofrecer ánimo divino a los corintios cuando ellos se enfrentaron a pruebas (2 Corintios 1:5–6). Observe que la palabra griega soteria, traducida como “salvación” en el versículo 6, no siempre se refiere a la salvación eterna sino que también puede significar liberación o rescate del peligro (Lucas 17:1; Hechos 7:25). O bien, Pablo puede referirse al hecho que sus aflicciones resultaron no sólo en consolación, sino que también en el mensaje de salvación. Cual sea el caso, el estímulo de Pablo capacita a los creyentes para perseverar en la fe a través de “los mismos sufrimientos” que él resistió, asegurando así la liberación de ellos. Como la experiencia de Pablo lo demuestra, los corintios pueden estar seguros de la ayuda de Dios. Pablo enfrentó peligros de muerte en Asia. De hecho, la carga de la prueba fue tan dura que él “perdi[ó] la esperanza de conservar la vida” (1 Corintios 1:8) y sintió como si una “sentencia de muerte” hubiera sobre él (v. 9). Pero el Dios que resucita los muertos había liberado muchas veces a Pablo. Es en Él que Pablo pone su esperanza para su liberación futura (vv. 8–10).

Pablo defiende su cambio de planes (1:12–2:11) La integridad en el ministerio A través de 2 Corintios vemos la evidencia que los opositores de Pablo están acusándolo falsamente. De hecho, él menciona sus “peligros de muerte” en primer lugar para acallar las acusaciones que su retraso y cambio de planes prueban que él no puede ser digno de confianza para mantener sus promesas (1:15–2:4). Pablo desea que los corintios sepan que ni la más dura de las pruebas podría impedirle ir como lo había planeado. Pero Pablo está impertérrito por esas acusaciones, no sólo porque ellas son infundadas, sino porque también su conciencia es clara. Él ha caminado con ellos y “en el mundo” con integridad y franqueza transparente. La palabra sinceridad (griego eilikrineia) en el versículo 12 lleva la idea de pureza en los motivos (véase también 2:17). Además, la conducta de Pablo no ha dependido de la sabiduría mundana (o “carnal”, griego sarkikos) sino de la gracia de Dios. Los obreros cristianos necesitan cobrar ánimo y seguir las instrucciones del ejemplo de Pablo. No hay mejor antídoto para una crítica injusta que una clara conciencia ante Dios. Como resultado de la sinceridad de Pablo, sus epístolas tienen el carácter de la integridad. Él escribe lo que piensa, y piensa lo que escribe. No hay un mensaje secreto o un significado escondido tras sus palabras. Pablo predica el mensaje de Dios. Puesto que Dios es fiel, las palabras de Pablo son del mismo modo tan confiables y seguras como las promesas de Dios en Cristo (1:17–20). Esta sección retrata el corazón pastoral y sabiduría de Pablo. Incluso mientras reconoce la dificultad en su relación con los corintios, sus palabras hacia ellos están llenas de ánimo. Él expresa su esperanza que ellos entenderán y apreciarán completamente sus verdaderos motivos y ministerio entre ellos (vv. 13–14). Al mismo tiempo, afirma que ellos ya habían empezado a hacerlo. Su esperanza

64

Las epístolas a los corintios

6 ¿Cómo respondió Pablo a las acusaciones de sus adversarios?

mira hacia delante, al “día del Señor Jesús” (v. 14), cuando ellos estén tan orgullos de él como él de ellos. Pablo entiende la importancia de ser franco y honesto en sus relaciones. Más que tratar de defender su retraso en su visita y ocultar su verdadero motivo, él les dice la verdad. Su reciente visita fue tan triste para él que no quería repetirla (1:23–2:4). La disciplina pudo haber sido necesaria, pero como un verdadero padre espiritual, Pablo no se regocija en ponerlos tristes.

7.3.2

Disciplina y separación

Identificar las verdades o principios que Pablo enseña acerca de la disciplina en la iglesia.

Parece claro a partir de 2 Corintios 2:5–11 que la disciplina de Pablo se centró sobre un cierto individuo que desafió su autoridad. A causa de la triste carta de Pablo (2:4), la iglesia se arrepintió y disciplinó a este hermano ofensor. No obstante, en su celo por hacer las cosas bien (7:11), ellos pudieron haber sido algo duros. Más que deleitarse en su justificación personal, Pablo les aconseja terminar el castigo al hombre por temor a abrumar su espíritu con dolor excesivo (2:7). Al hacerlo así, Pablo muestra una notable habilidad para poner a un lado sus sentimientos personales y ver el cuadro general. El interés es el bienestar espiritual de un hermano caído y más que eso, el de toda la iglesia. (v. 10). Pablo también se da cuenta que la verdadera disciplina no busca castigar sino corregir y restaurar una relación rota. Así, él insta a los creyentes corintios ofrecer el perdón al hermano, como el mismo Pablo lo había hecho. Perdonar es fundamental para las relaciones sanas en el cuerpo de Cristo y es un reflejo de la gracia de Dios mostrada a nosotros en Cristo (Colosenses 3:13). Nuevamente, el propósito de la disciplina en la iglesia es traer unidad, reconciliación y restauración total de la salud espiritual. Para lograr esto, Pablo insta a los creyentes que consuelen al hermano y confirmen su amor por él (2 Corintios 2:7–8). Pablo les advierte que una excesiva disciplina puede abrumar a una persona con tristeza, dando a Satanás una oportunidad de transformar el dolor en resentimiento y amargura, y el celo por la disciplina en orgullosa venganza.

OBJETIVO

7 ¿Cuál es la mejor forma en que una iglesia discipline a un miembro del equipo pastoral sorprendido en una falta moral?

Un repaso al pasado reciente de Pablo (2 Corintios 1:1–2:11)

T

Autoexamen

65

7

CAPÍTULO

Encierre en un círculo la letra que corresponda a la mejor respuesta. 1. Pablo escribió 2 Corintios desde 6. Según Pablo, Dios permite que los creyentes sufran diversas pruebas para a) Corinto en el año 56 d.C. a) castigarlos por sus maldades. b) Macedonia en el año 56 d.C. b) nada en particular. c) Corinto en el año 51 d.C. c) probar su devoción a Él. d) Macedonia en el año 51 d.C. d) equiparlos para consolar y estimular a otros. 2. Pablo declara enfáticamente su apostolado para 7. El cambio de planes de Pablo hizo que sus a) reflejar su función como el padre espiritual de opositores lo acusaran de la iglesia de Corinto. a) ser indeciso. b) garantizarle aceptación como líder en Corinto. b) ser poco fiable. c) responder a los desafíos interpuestos por los c) tener una falta de integridad. adversarios. d) Todas las anteriores d) obtener el prestigio y poder que justamente merece. 8. A través del ejemplo de Pablo, aprendemos a enfrentar las acusaciones injustas con 3. ¿Cuántas cartas escribió Pablo, con toda a) sinceridad. probabilidad, a los Corintios? b) enojo. a) Seis c) actitud defensiva. b) Cuatro d) silencio. c) Tres d) Dos 9. Un líder de iglesia que debe disciplinar a un hermano o hermana que ha pecado debiera 4. En manera diferente a lo acostumbrado, Pablo a) expulsar al ofensor, para que no corrompa al inicia 2 Corintios cuerpo de Cristo. a) alabando a Dios por su consolación y b) ser agresivo en administrar la disciplina. misericordia en las pruebas. c) trabajar para traer al que ha pecado a sanidad b) alabando a los corintios por soportar duras espiritual. penalidades. d) usar al ofensor como un ejemplo negativo c) escribiendo una oración para la iglesia de delante de la iglesia. Corinto. d) dando gracias a Dios por la fe de los corintios. 10. Pablo advierte que la disciplina en exceso puede causar que 5. La cualidad específica que mueve a Dios a a) los ministros busquen venganza personal y actuar con compasión es su soberbia. a) poder. b) otros sientan temor de unirse a la iglesia. b) misericordia. c) la persona disciplinada sea abrumada por la c) justicia. pena. d) santidad. d) la iglesia sea entregada al control de Satanás.

66

8

Las epístolas a los corintios

El ministerio apostólico de Pablo CAPÍTULO (2 Corintios 2:12–7:16) Segunda Corintios 2:12–7:16 se centra en el ministerio apostólico de Pablo bajo el nuevo pacto. Dentro de esta porción hay trozos de evidencia clave que señalan las razones de Pablo para escribir esta carta. Los falsos apóstoles que se han infiltrado en la iglesia de Corinto están teniendo cierto éxito en convencer a los cristianos para que sigan el liderazgo de ellos antes que el de Pablo. La elocuente descripción que hace Pablo de su ministerio cristo-céntrico es una parte importante de su propósito para desenmascarar a estos alborotadores como falsos obreros. Al estudiar esta lección, tenga en mente que Pablo escribió 2 Corintios en los primeros años de la iglesia, cuando los creyentes judíos todavía luchaban por desprenderse de miles de años de enseñanzas y creencias. Muchos rechazaron por completo abandonar su dependencia de la ley para la salvación y crearon muchos problemas tratando de convencer a otros de sus puntos de vista. Aparentemente, los falsos apóstoles con los que Pablo se está confrontando son de esta posición, y Pablo está ansioso por demostrar la superioridad del nuevo pacto bajo el cual él ministra para Cristo.

Lección 8.1

La grandeza del ministerio de Pablo (2:12–4:6)

Objetivos 8.1.1 Discutir la relación entre incertidumbre y fe. 8.1.2 Explicar cómo Pablo consiguió su confianza de Dios. 8.1.3 Contrastar el antiguo pacto de la ley con el nuevo pacto.

Lección 8.2

Las pruebas y victorias del ministerio (4:7–5:9)

Objetivo 8.2.1 Examinar las paradojas del tesoro en vasos de barro y de la vida por medio de la muerte.

Lección 8.3

La naturaleza y función del ministerio (5:10–6:10)

Objetivos 8.3.1 Indicar cómo el temor y el amor motivaron a Pablo en el ministerio apostólico. 8.3.2 Explicar por qué Pablo no se avergüenza de sus sufrimientos soportados por la causa de Cristo.

Lección 8.4

La intimidad y el gozo del ministerio (6:11–7:16)

Objetivos 8.4.1 Describir el gozo de Pablo en su relación con los corintios. 8.4.2 Identificar cómo Pablo protegió y restauró su relación con los corintios.

El ministerio apostólico de Pablo (2 Corintios 2:12–7:16)

8.1

LECCIÓN

8.1.1

OBJETIVO

Discutir la relación entre incertidumbre y fe. 1 ¿Indican los sentimientos de incertidumbre y ansiedad una falta de fe?

67

La grandeza del ministerio de Pablo (2:12–4:6) Pablo se vuelve ahora brevemente a la historia que explica su conducta reciente y cambio de planes. Habiendo enviado su tercera carta a los corintios con Tito, Pablo se quedó a la espera de noticias. Se trasladó hacia el norte, a Troas, donde planeaba encontrarse con Tito si las cosas iban bien en Corinto. Cuando no encontró a Tito en Troas, se fue a Macedonia. Pablo debe haber esperado noticias de Tito con un buen manejo de la ansiedad con oración. No hay duda que cuando Tito no logró encontrarlo en Troas, los temores de Pablo parecieron materializarse. La situación lo dejó sin “paz mental” (literalmente “no tuve reposo en mi espíritu”, 2:13). A menudo el temor paraliza, aparta de la gracia de Dios. Pablo reposó en la gracia de Dios (v. 14) y permaneció ocupado en la obra del Señor. Por otra parte, a pesar de sus ansiedades, conflicto interno y futuro incierto, Pablo estaba confiado de un resultado victorioso. En el versículo 14, él demuestra esa confianza al expresar agradecida alabanza a Dios. Sin duda está recordando cómo sus ansiosos temores tuvieron alivio cuando Tito vino con noticias alentadoras (7:6, 13).

8.1.2

Confianza en el triunfo de Cristo

Explicar cómo Pablo consiguió su confianza de Dios.

Al agradecer a Dios (2:14), Pablo dibuja en la mente de sus lectores una extraña pero memorable escena, la triunfante procesión romana. Señalando una gran victoria de un general romano, la procesión triunfante incluía un desfile de cautivos, esclavos y botín de guerra conquistados de territorios enemigos, seguido por el general honrado y algunas de sus tropas (“Triunfo romano” 2006). Aquí, Pablo describe a Cristo como el vencedor que guía a Pablo como uno de sus cautivos en una muestra y testimonio público del triunfo de su redención.1 La paradoja es que, mientras Cristo nos ha tomado “cautivos” (Salmo 68:18; Efesios 4:7–8, 10), nos ha dado libertad final de nuestra esclavitud del pecado. Pablo deriva confianza de saber que su vida está “en Cristo” quién ya ha conquistado el pecado y la muerte (1 Corintios 15:54–57). Por medio de la predicación del evangelio, Pablo declara la victoria de Dios en Cristo sobre el pecado y la muerte. Al mismo tiempo, entiende que su predicación ayudará a determinar el destino eterno de los individuos. Es un asunto de vida y muerte espiritual. Pablo se siente humillado por tal pensamiento, y admite su incapacidad para tan grande responsabilidad. Sin embargo, la confianza de Pablo no está en sí mismo sino en su integridad ante Dios. Él proclama el evangelio con un corazón puro y sincero ante Dios. Él no es como muchos de su época, que “medran falsificando la Palabra de Dios” (Martin 1986, 344). El pensamiento de sus adversarios (2 Corintios 2:17) hace que Pablo se aparte más de ellos. Ni el carácter de su ministerio ni el contenido de su predicación pueden ser comparados con el de sus adversarios. A diferencia de ellos, el respaldo de su ministerio no descansa sobre la aprobación humana. Él no necesita el testimonio externo de cartas recomendando su apostolado. Más bien, la validez de su ministerio viene a través de la obra interior del Espíritu vista en los mismos corintios (3:1–3). Pablo deriva su confianza del hecho que Dios en Cristo ha establecido un nuevo pacto, un pacto que está en total contraste con el antiguo. A diferencia del pacto de la ley, el nuevo pacto provee la dinámica y el poder transformador del Espíritu Santo (3:4–6).

OBJETIVO

2 Describa su reacción al saber que su obediencia al llamado de Dios puede afectar el destino eterno de otros.

8.1.3

OBJETIVO

Contrastar el antiguo pacto de la ley con el nuevo pacto.

68

Las epístolas a los corintios

Para desarrollar su punto, Pablo se refiere al antiguo pacto como “el ministerio de muerte” (v. 7) y declara que “la letra mata, mas el espíritu vivifica” (v. 6). En Romanos, Pablo dice que el conocimiento del pecado viene a través de la ley (Romanos 3:20) y que la ley trae la ira de Dios (4:15). La ley provoca y aumenta la incidencia de pecado al obrar a través de las pasiones pecaminosas en la naturaleza humana caída (7:5, 8). En esa forma, llega a ser un instrumento de muerte. Irónicamente, aunque la ley en sí misma es “santa, justa y buena” (7:12) y fue pensada “para traer vida”, “resultó para muerte” y condenación (7:10) exponiendo nuestro pecado. En contraposición, el nuevo pacto trae a todo el pueblo de Dios al poder de la vida del Espíritu a través del nuevo nacimiento (Juan 3:3–8) y la regeneración (Tito 3:5). Cuando Pablo observa la magnitud y carácter sobrenatural de su ministerio, se siente humillado. Se da cuenta que nada dentro de él es suficiente para cumplir las demandas y responsabilidades de su llamado apostólico. Reconoce que la obra y el poder del Espíritu de Dios lo capacitan para el trabajo (2 Corintios 3:5). Además de eso, es a través del Espíritu que Pablo es capacitado para cumplir ese llamado (v. 6). 3 ¿Cómo es la gloria del nuevo pacto diferente de la del antiguo?

Gloria en el nuevo pacto En 2 Corintios 3, Pablo presenta la superioridad del nuevo pacto al comparar y contrastar su gloria revelada de Dios con la del antiguo pacto. Él afirma que el antiguo pacto vino con gloria (v. 7) y les recuerda a los corintios de la inauguración del mismo en el monte Sinaí. En esa ocasión, la revelación de Dios fue tan resplandeciente que Moisés llevó el fulgor de su encuentro divino al bajar de la montaña. Pero Pablo señala rápidamente que la gloria estaba desapareciendo mientras que el “ministerio del espíritu” será “más bien con gloria” (v. 8). Dios constituyó a Pablo un ministro de este nuevo pacto del Espíritu, que, en contraste con la ley, da vida y viene con una gloria mayor del Espíritu dador de vida (vv. 6– 11). Esa gloria que permanece está disponible para todos los creyentes en Cristo. El contraste entre el antiguo y nuevo pacto está claro por el evangelio que Pablo predica, pero aquellos que atan su salvación a la observancia de la ley resisten su mensaje. En otra parte (Gálatas 4:3; 5:1), Pablo describe ese acercamiento a la salvación como esclavitud espiritual. Aquí Pablo compara la situación con la ceguera espiritual, que es fomentada por su apego a (“lectura” de) la ley. Sus ojos permanecerán cerrados hasta que ellos se vuelvan en fe a Cristo y reciban la libertad que da vida del Espíritu (2 Corintios 3:12–17). El Espíritu provee libertad y capacita a los creyentes para servir al Señor. Esta provisión también viene con una revelación de la gloria de Dios (vv. 16, 18) y con el poder de transformación espiritual. Al contemplar la revelación de la gloria de Dios presentada ahora en Cristo, los creyentes son progresivamente transformados hacia la misma imagen de gloria. Como Pablo lo describe, esa transformación ocurre “de gloria en gloria” (v. 18). Pablo reconoce la dificultad y desafíos de traer tal revelación a la gente que ha estado espiritualmente ciega por el dios de este mundo (4:4). La oposición es grande, y él reconoce los cargos falsos en su contra, aun el de predicar para ocultar más que revelar la verdad (v. 3). Sin embargo, él está decidido a iluminar el mundo de oscuridad espiritual predicando a Jesucristo, quien es la “imagen de Dios”. La luz del evangelio es la revelación de Cristo mismo y su gloria divina. Así, el evangelio es el instrumento de Dios de iluminación, que trae la revelación de su gloria “en la faz de Jesucristo” (vv. 1–6).

El ministerio apostólico de Pablo (2 Corintios 2:12–7:16)

8.2

LECCIÓN

8.2.1

OBJETIVO

Examinar las paradojas del tesoro en vasos de barro y de la vida por medio de la muerte.

4 ¿Trae la muerte el fin de nuestro servicio a Cristo?

69

Las pruebas y victorias del ministerio (4:7–5:9) En la sección anterior, Pablo habló en encendidos términos de su ministerio bajo el nuevo pacto con la grande y gloriosa esperanza que espera a los creyentes. El evangelio que él predica es sin duda un tesoro. Es la revelación de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo (4:4, 6). A través de él, Dios ha traído su luz inextinguible al mundo (Juan 1:4–10). Pablo no sólo entiende su papel como un vaso escogido para llevar esa luz tanto a judíos como a gentiles, sino también el sufrimiento que su llamado demanda (Hechos 9:15–16). Pablo nos presenta ahora una paradoja: un “tesoro en vasos de barro” (2 Corintios 4:7). Él está impresionado por el contraste entre el incalculable y durable valor de este “evangelio-tesoro” y la indignidad y debilidad humana (“barro”) de aquellos que ahora lo llevan al mundo. Esto es, Dios ha escogido mostrar la grandeza de su poder a través de la debilidad humana, para que no haya dudas de quién es el que hace la obra. La paradoja continúa cuando el evangelio declara que Dios ha traído vida a través de la muerte. Jesús murió y resucitó para que los creyentes pudieran recibir la vida de Él. Pablo y sus colaboradores modelan esa verdad al arriesgar repetidas veces su vida para llevar el mensaje del evangelio que da vida (vv. 10–11). Además, la vida de resurrección de Dios está obrando al sostener a Pablo y a sus colaboradores, librándolos de la muerte física (vv. 8–9). Pablo describe esas experiencias como identificándose con y aun participando en la muerte de Jesús. Al mencionar la muerte de Cristo y su propia participación en ella, Pablo completa la paradoja. La muerte vergonzosa de Jesús en la cruz ha llegado a ser la ocasión y el instrumento para promover la gloria de Dios (v. 15). En aquellos que sufren por la causa del evangelio, produce un incomparable y eterno peso de gloria (v. 17). En otras palabras, cualquier sufrimiento que pudiera ser resistido por la causa de Cristo es insignificante (“leve”) y pasajero (“momentáneo”) e indigno de ser comparado con la gloria eterna. Ahora resulta claro que Pablo es sostenido en medio de sus pruebas por su esperanza y fe en la promesa de una resurrección.2 Aun la perspectiva de la muerte no puede quitar su confianza, porque él está seguro que cuando su cuerpo, como un tabernáculo, llegue a estar gastado, derribado y destruido, Dios proveerá uno nuevo (5:1). Pero a diferencia de su tienda terrenal, ese “edificio de Dios” pertenece al reino celestial y es eterno. Con tales afirmaciones, Pablo muestra que, a diferencia de los segmentos del mundo griego, él no ve el cuerpo como malo en sí mismo, sino como una parte esencial de la humanidad (Grenz, Guretzki y Nordling 1999, 16). Sin el cuerpo físico, un ser humano está incompleto. Por lo tanto, anhelamos ser vestidos con nuestro cuerpo celestial después de la muerte, cuerpos que serán adaptados para la vida eterna (1 Corintios 15:35–50; 2 Corintios 5:2–4; Hernando 1999, 938–939). Además, Pablo sabe que la muerte no termina la relación de un creyente con el Señor; más bien, es el principio de una intimidad mayor. Él la describe como estando “presentes al Señor” (2 Corintios 5:8). La muerte no termina nuestra comunión con Cristo sino que nos lleva a su presencia. Esto es, la resurrección crea una continuidad entre esta vida y la vida por venir. El denominador común es el Espíritu Santo a quién tenemos ahora como una garantía, pero le conoceremos en plenitud en el cielo (v. 5). Por lo tanto, mientras el intercambio de nuestro cuerpo terrenal por uno eterno es esencial, el elemento más importante de nuestra futura resurrección es la continuidad de nuestra relación con Cristo. Entonces, como ahora, seremos capaces de amar y servir a nuestro Señor Jesucristo. Todavía buscaremos agradarlo, del mismo modo como eso es nuestra suprema ambición en esta vida.

70

Las epístolas a los corintios

8.3

LECCIÓN

La naturaleza y función del ministerio (5:10–6:10) Las motivaciones y el mensaje del ministerio de Pablo

El pensamiento de nuestro servicio eterno a Dios presenta a Pablo una verdad impresionante: Todos los creyentes estarán un día ante el tribunal de Cristo y darán cuenta de su vida. Nuestras obras, hayan sido buenas o malas, serán 8.3.1 juzgadas y recompensadas (5:10). OBJETIVO Pablo aplica esta verdad a su propio llamado como apóstol, subrayando dos Indicar cómo el temor y el motivaciones mayores que guían su ministerio. Primero, la comprensión que amor motivaron a Pablo un día rendirá cuenta de su apostolado introduce el “temor del Señor” (v. 11) en el ministerio apostólico. en la ecuación. Este temor no es un terror paralizante, sino una reverencia llena de temor por lo sagrado y por las consecuencias eternas de su servicio. En el 5 ¿Quién enfrentará el juicio de Cristo al fin de los Antiguo Testamento, el “temor del Señor” caracterizaba al pueblo de Dios y les tiempos? hacía andar en sabiduría (Proverbios 1:7) y evitar el mal (Job 28:28; Proverbios 16:6). El temor del Señor fue un requisito si Israel quería andar en los caminos de Dios, amarlo y servirlo con total devoción (Deuteronomio 10:12). En la iglesia primitiva, vivir o andar en el temor del Señor era asociado con la obra del Espíritu (Hechos 9:31). En otros pasajes, después de exhortar a los creyentes a “ser llenos del Espíritu”, Pablo les dice que se sometan unos a otros “en el temor de Dios” (Efesios 5:21). En 2 Corintios 7:1, él presenta la reverencia o temor de Dios como la actitud que los creyentes debieran tener en su vida mientras “se perfeccionan en la santidad”. Aparentemente, en la mente de Pablo, tal actitud de reverencia debiera caracterizar la vida de la iglesia llena del Espíritu. En un nivel personal, tal actitud lo motiva para persuadir a los individuos a que acepten el evangelio de Cristo. Segundo, “el amor de Cristo” constriñe a Pablo para servir (2 Corintios 5:14–15), algo que debiera ser el principal motivador tras el servicio y obediencia de todo creyente a Cristo (Mateo 22:37; Marcos 12:30; Lucas 10:27; Juan 14:15, 21, 23). El contexto de la declaración de Pablo aclara que es el amor de Cristo por él y no el de Pablo por Cristo, lo que lo constriñe.3 Cuando Pablo evalúa la magnitud del ilimitado y universal amor de Jesús, manifestado en su desinteresada muerte por todos, Pablo debe servir; él no puede hacer menos que eso. Lo que hizo Jesús lo impulsa a servirle, por gratitud y amor. La cruz y la resurrección han puesto fin a la antigua vida de Pablo. Su unión con Cristo le introduce en una esfera de existencia totalmente nueva. Él es un nuevo hombre, con una nueva identidad (Gálatas 2:20) y pertenece a otro mundo. Pablo habla de la vida previa a la conversión del creyente como una vida estando “en Adán” y la contrasta con estar “en Cristo” (Romanos 5:12–21; 1 Corintios 15:21–22). El contraste es la diferencia entre la vida y la muerte. El cambio es tan dramático que puede describirse sólo como una “nueva criatura” (2 Corintios 5:17). Todas las cosas de su vida antigua, sus relaciones, condiciones y situaciones, han pasado y han sido reemplazadas por una nueva vida “en Cristo”. Tan grandes cambios pueden venir sólo de Dios (v. 18). Para producir esos cambios, Dios necesitó hacer algo respecto al problema del pecado. Pablo nos da la solución en una palabra: reconciliación. La reconciliación es el aspecto más relacional de la redención de Dios. Pablo se ve a sí mismo como un embajador de Cristo y como la voz de reconciliación de Dios (v. 20), llevando las buenas nuevas: Dios y la humanidad ya no son más enemigos. A través de la muerte de Cristo, Dios ha quitado la enemistad que permanecía entre la humanidad y él mismo y la ha reemplazado con la paz (Romanos 5:10–12; Efesios 2:13–15).

El ministerio apostólico de Pablo (2 Corintios 2:12–7:16)

71

8.3.2

La recomendación del ministerio de Pablo

Explicar por qué Pablo no se avergüenza de sus sufrimientos soportados por la causa de Cristo.

En 2 Corintios 6:3–10, Pablo describe su forma de vida y ministerio. El versículo 3 continúa la declaración que comenzó en 6:1, interrumpida por la cita del Antiguo Testamento en 6:2. Conectada, se leería: “Os exhortamos también a que no recibáis en vano la gracia de Dios…, no damos a nadie ninguna ocasión de tropiezo.” Esto es, mientras exhorta a otros a recibir la gracia salvadora de Dios, la preocupación más grande de Pablo es nunca estorbar esta obra de gracia en nadie. Siempre y en todo, él desea vivir de una forma que hable bien de él como siervo de Dios. A pesar de sufrimientos y penurias inimaginables, Pablo se conduce de una forma digna de elogio (v. 4). Observe que Pablo no se avergüenza de las penurias que sufre por la causa de Cristo. De hecho, en esta carta, él intencionalmente los expone (4:8–9; 11:23–29; 12:10). Como se señaló en el 4:7–11, Pablo comprende que sus sufrimientos atraen la atención no sólo al poder de Dios operando a través de la debilidad humana, sino también a la experiencia común que Pablo comparte con su Salvador.

OBJETIVO

6 ¿Ve usted sus dolores como bendiciones o maldiciones?

8.4

LECCIÓN 8.4.1

OBJETIVO

Describir el gozo de Pablo en su relación con los corintios. 7 ¿Aconsejaría Pablo a los líderes espirituales mantener una distancia emocional de aquellos a los que sirven?

La intimidad y el gozo del ministerio (6:11–7:16) El afecto verdadero Pablo detiene su relato de los sufrimientos apostólicos con una apelación emocional a los corintios para una franqueza y afecto mutuo (6:11–13). Este tipo de discurso directo es extraño en las cartas de Pablo; cuando ocurre, revela su intensa pasión, afecto y preocupación. Aquí, como el “padre” en la fe de los corintios (1 Corintios 4:15), Pablo anhela intimidad con sus hijos espirituales. Sabiendo que el afecto verdadero es dado libremente, no obstante, él trata de convencerlos sin dar órdenes. Les insta a corresponder su afecto, a “abrir” su corazón hacia él, como él lo ha hecho con ellos. Parece extraño que en medio de una demanda por afecto y franqueza mutua, Pablo se dirija de una manera tan aguda a un problema no resuelto, del que él había advertido a los corintios: la idolatría (1 Corintios 10:1–22). Quizá, dada la prominencia de la idolatría en la cultura corintia (Murphy-O’Conner 1984, 147–159), la total condenación anterior de Pablo y la amenaza de juicio cayeron en oídos sordos. Ahora sus palabras de advertencia son dolorosas, pero su severidad viene precisamente porque él les ama mucho. Él sabe que la idolatría podría destruir la relación de ellos con Dios. Observe que en su mandamiento de no estar unidos con los incrédulos (2 Corintios 6:14), Pablo no está prohibiendo todos los vínculos con ellos. Eso sería imposible y el reino de Dios no avanzaría. Más bien parece que él se refiere a formar relaciones que aten al creyente con el incrédulo, guiándolo hacia alguna forma de compromiso espiritual con el paganismo, particularmente con la idolatría. Exactamente qué tipo de relaciones tenía él en mente es incierto; Pablo no fue específico. Sin embargo, nos deja un principio claro para aplicar bajo la guía del Espíritu Santo: Los cristianos debieran ser sabios y evitar entrar en cualquier relación (personal, de negocios o de otro tipo) que los lleve a situaciones de compromiso y que amenace la pureza de su devoción a Cristo (véase 2 Corintios 11:3).

72

Las epístolas a los corintios

8.4.2

OBJETIVO

Explicar cómo Pablo protegió y restauró su relación con los corintios.

El arrepentimiento y la restauración Con 7:6, Pablo vuelve a la narración respecto de sus planes cancelados, la que interrumpió después de 2:13. Repasando, los problemas anteriores habían provocado que Pablo hiciera una visita apresurada a Corinto en un esfuerzo para arreglar las cosas. Pero la visita sólo hizo que las cosas empeoraran, lo que fue profunda y personalmente doloroso para él. Poco después de regresar a Éfeso, todavía afectado por su experiencia con los creyentes corintios, él escribió una severa y apasionada carta para reprender a la iglesia (2:4–5) que envió a través de Tito. Su esperanza de volver a reunirse con Tito en Troas se convirtieron en una frustración (2:12), así que siguió hacia Macedonia. Para Pablo, la eventual llegada de Tito a Macedonia fue nada menos que el consuelo misericordioso de Dios. Tito le habló del genuino pesar de los corintios por pecar contra Pablo y su afecto y ardiente preocupación por él. La disciplina que Pablo se había obligado a ejercer fue valiosa porque produjo “tristeza según Dios” y verdadero arrepentimiento (7:8–11). La tristeza pasajera que él les produjo había llegado a ser la ocasión de gozo porque su relación con ellos estaba ahora restaurada.

Notas para el Capítulo 8 1. El verbo griego thriambueō, “guiar en proceso triunfal”, sólo aparece en otra parte en Colosenses 2:15. Ahí, son los poderes y autoridades espirituales quienes son desnudados, desarmados y hechos un espectáculo público en reconocimiento de la victoria de Cristo en la cruz. 2. Como un miembro de los fariseos (en contraste con los saduceos), Pablo creía en la resurrección de los justos (Mateo 22:22–23). 3. Sin embargo, los dos conceptos no son mutuamente exclusivos. Una traducción más literal en el centro de 2 Corintios 5:14 diría: “Habiendo considerado o concluido (griego krinantas) esto.” Esta cláusula no solo presenta la demostración del amor de Cristo, “que uno murió por todos”, sino que también explica por qué el amor de Cristo constriñe a Pablo a un servicio consagrado.

El ministerio apostólico de Pablo (2 Corintios 2:12–7:16)

T

Autoexamen

73

8

CAPÍTULO

Encierre en un círculo la letra que corresponda a la mejor respuesta. 1. Ante la adversidad, incertidumbre y pruebas, la 6. El aspecto más relacional de la obra de Dios en confianza de Pablo es sostenida por la redención se llama a) la gracia de Dios. a) justificación. b) el conocimiento del triunfo final de Cristo. b) reconciliación. c) la integridad personal de Pablo ante Dios. c) santificación. d) Todas las anteriores d) salvación. 2. a) b) c)

El nuevo pacto difiere del antiguo por el ministerio profético del antiguo pacto. la ausencia de Cristo en el Antiguo Testamento. el poder del Espíritu que imparte poder a todos los hijos de Dios. d) la expansión de las Escrituras del Nuevo Testamento. 3. El contraste que hace Pablo del antiguo y nuevo pactos se centra en a) la vida y la muerte. b) el espíritu y la carne. c) la esclavitud y la libertad. d) Moisés y Cristo. 4. Según Pablo, el velo de incredulidad de una persona es quitado a) al volverse a Cristo con fe. b) al predicar el evangelio. c) al unirse a la iglesia. d) por la perfección en santidad. 5. a) b) c) d)

El “tesoro en vasos de barro” se refiere al cielo. a la vida eterna. al evangelio. a la ofrenda de Pablo para los pobres.

7. ¿Cuál es la actitud de Pablo respecto de sufrir por Cristo y el evangelio? a) Un firme rechazo b) Vergüenza y elusión c) Comprensión y aceptación d) Frustración por no sufrir más 8. La relación de los corintios con Dios fue amenazada principalmente por a) la codicia. b) el egoísmo. c) la inmoralidad. d) la idolatría. 9. La advertencia de Pablo de no “unirse en yugo con los incrédulos” NO se refiere a a) una relación que conduce al pecado. b) todas las asociaciones o comunión con los incrédulos. c) la adoración idólatra con los paganos. d) un lazo que amenaza la devoción de una persona a Cristo. 10. Según 2 Corintios 7:8–11, la “tristeza según Dios” conduce a) al bautismo del Espíritu Santo. b) a sentimientos hondos y personales. c) al arrepentimiento verdadero. d) a la consideración de las opciones de uno.

74

9

Las epístolas a los corintios

La ofrenda macedónica CAPÍTULO (2 Corintios 8–9) La preocupación por los pobres había sido una de las prioridades de Pablo a partir de la confirmación de su apostolado por los otros apóstoles en Jerusalén (Gálatas 2:9–10). En este tiempo, Judea pasaba por duros momentos debido a una hambruna y muchos creyentes estaban en aflicción (Hechos 11:28–29). Para ayudar, Pablo había estado levantando ofrendas en dinero para los santos en Jerusalén por algún tiempo.1 Pablo sentía que las iglesias gentiles tenían una deuda de gratitud con la iglesia de Jerusalén por su papel en traer a otras congregaciones a la fe en Jesús (Romanos 11:13–25; 15:27). Sin duda, él consideró que esta ofrenda era un símbolo poderoso de unidad espiritual de judíos y gentiles en Cristo (Efesios 2:13–18). Los corintios habían empezado a ofrendar (2 Corintios 8:6; 1 Corintios 16:1–4) pero se habían detenido debido probablemente a los conflictos internos de la iglesia. Ahora, con las buenas noticias de Tito, Pablo se siente confiado a instarlos para que acaben con su ofrenda.

Lección 9.1

La gracia de dar (8:1–9:5)

Objetivos 9.1.1 Resumir qué enseña la ofrenda macedónica acerca de la mayordomía cristiana. 9.1.2 Aplicar los principios de los métodos de Pablo del manejo financiero. 9.1.3 Analizar 2 Corintios 9:1–4 y explicar cómo el elogio y la alabanza de Pablo ayudaron en la motivación.

Lección 9.2

Principios de dar (9:6–15)

Objetivos 9.2.1 Explicar por qué 2 Corintios 9:6 no garantiza prosperidad a un dador. 9.2.2 Enumerar los principios de generosidad que Pablo enseñó a los corintios.

La ofrenda macedónica (2 Corintios 8–9)

9.1

LECCIÓN 9.1.1

OBJETIVO

Resumir qué enseña la ofrenda macedónica acerca de la mayordomía cristiana. 1 ¿Debieran los ministerios de compasión y benevolencia ser una prioridad para cada congregación?

9.1.2

OBJETIVO

Aplicar los principios de los métodos de Pablo del manejo financiero.

2 ¿Cuál es la cualidad más importante para un tesorero de iglesia?

75

La gracia de dar (8:1–9:5) El sacrificio y la devoción personal Para animar a los corintios a reanudar su ofrenda para los creyentes en Jerusalén, Pablo apunta al loable ejemplo de las iglesias de Macedonia. Aunque los macedonios habían experimentado intensa persecución (1 Tesalonicenses 1:6– 7; 2:14) que les había dejado profundamente empobrecidos, ellos respondieron en “riqueza de su generosidad” y dieron en forma sacrificada en esta ofrenda para los pobres (2 Corintios 8:2–3). Parece que los macedonios no solo dieron voluntariamente sino que en forma espontánea y con gran gozo. Para Pablo, su conducta desinteresada es la evidencia de la operación y capacitación de la gracia de Dios (v. 1).2 La gracia que habilita tal acto de generosidad y desinterés fluyó de la devoción de los macedonios al Señor (v. 5) y de una genuina compasión y amor por otros (vv. 7–8). Como el apóstol Juan lo indicaría más tarde, esos dos aspectos de la vida cristiana, el amor por Dios y el amor por otros son inseparables (1 Juan 4:20). Además, la dádiva generosa que Pablo alaba aquí refleja el carácter amable de Dios mismo, quién con generosidad redentora nos rescató de la pobreza espiritual a través del don de sacrificio de su Hijo (Romanos 5:6–8; 6:23). Ya que la ofrenda para Jerusalén es tan importante para Pablo, él da algunos pasos para asegurar su éxito. Su estrategia es triple: (1) Él prepara a los corintios para recibir a los responsables para colectar los fondos, alabando sus virtudes y cualidades (2 Corintios 8:16–24). (2) Él expresa nuevas alabanzas a los corintios por su celo y voluntad para participar, instándoles para que cumplan su gloria y confianza en ellos (9:1–5). (3) Él anima su generosidad y participación, enseñándoles los principios de dar (9:6–15).

El manejo financiero Pablo sabía que tenía enemigos y críticos en Corinto. Él también sabía que ellos no vacilarían en desacreditar su obra acusándolo de usar la ofrenda para lucro personal. Previamente, él ha negado enfáticamente que sea como muchos que “medran” con la Palabra de Dios. Por lo tanto, en 2 Corintios 8, leemos de las precauciones que toma Pablo para asegurar que tales falsas acusaciones sean totalmente difíciles de hacer por cualquiera. Primero, Pablo sabiamente deja el trabajo de terminar la ofrenda en Corinto a personas confiables. Esos hombres no solo son conocidos y bien respetados por los corintios, sino que también son leales a Pablo. En 8:16–17 Pablo menciona a Tito como uno de sus recaudadores confiables. Tito es quién había llegado a Macedonia con buenas noticias acerca de la respuesta positiva de los corintios a la carta disciplinaria de Pablo (7:5). Tito no sólo fue bien recibido sino que había desarrollado un afecto especial por los corintios (7:13–15; 8:16). Luego los versículos 18–24 nos presentan dos hermanos anónimos que acompañaron a Tito. Ellos son tan bien conocidos que la identificación no es necesaria. El primer hermano es “cuya alabanza en el evangelio se oye por todas las iglesias”, y las iglesias lo han señalado para que viaje con Pablo para recoger la ofrenda (8:18– 19). El otro delegado, presentado como “nuestro hermano” (v. 22), también viene con credenciales genuinas y un ministerio probado. Pablo cuenta que este hermano ha sido probado en muchas formas (literalmente “cosas” o situaciones) y se ha encontrado celoso (o “diligente”, griego spoudaios). Él también tiene

76

Las epístolas a los corintios

3 Enumere formas prácticas en que su congregación puede aplicar las advertencias de Pablo en el manejo del dinero.

9.1.3

OBJETIVO

“mucha confianza” entre los corintios. Aquí hay alguien que Pablo y los corintios conocen y respetan, alguien que con seguridad cree en ellos. Debido a estas credenciales, Pablo no podría haber escogido mejores delegados para Corinto. En Tito, él tiene un compañero y colaborador de confianza (v. 23) que había trabajado entre los corintios, ganando su respeto y corazón. En los dos hermanos anónimos, él tiene hombres a quienes las iglesias personalmente señalaron y cuya labor en el evangelio fue conocida por los corintios y había traído gloria a Cristo. Por lo tanto, sus adversarios se habrían visto presionados duramente para montar un ataque creíble contra la integridad de Pablo, puesto que (1) Pablo no está recaudando personalmente los fondos y (2) sus colaboradores, que pueden responder personalmente por él, son altamente respetados dentro de la iglesia. Segundo, no queriendo exponerse a mayores malentendidos con tanto en juego, Pablo traza claramente sus planes, deseos y expectativas. Aun así, él dice por qué está haciendo aquello: para que nadie pueda desacreditar el manejo de la ofrenda (v. 19). Al terminar 2 Corintios 8, Pablo exhorta ahora a los creyentes corintios que no defrauden su confianza y buenas expectativas de ellos al terminar la ofrenda. Haciéndolo así, también demostrarían su amor a las iglesias. Si Pablo usó intencionalmente la frase “mostrad ante las iglesias” como una presión sutil para que ellos respondieran, es difícil determinarlo. Él puede haber querido simplemente subrayar la unidad de todas las iglesias en esta ofrenda. En cualquier caso, los cercos rotos de la comunión habían sido reparados, el arrepentimiento de los corintios había restaurado su comunión con Pablo. Ahora era el tiempo para que los corintios demostraran su amor obedeciendo este llamado a la acción.

Alabanza por el pasado

La exhortación de Pablo a la generosidad continúa en 2 Corintios 9. Aquí Analizar 2 Corintios 9:1–4 aprendemos algo acerca del contenido de su gloria en relación a ellos. También y explicar cómo el elogio podemos ver más del “Pablo motivador” mientras él sigue animándoles para y la alabanza de Pablo ayudaron en la motivación. terminar la ofrenda de misericordia. Pablo comienza con una enfática declaración (casi un alarde) de su confianza en ellos: Él no necesita escribirles acerca de este ministerio a los 4 Dé un ejemplo personal de cómo la alabanza motiva santos de Jerusalén porque él ya conoce cuán ansiosos y listos están ellos para más eficazmente que la responder a la necesidad. De hecho, él ha dicho que los de Macedonia y de crítica. Acaya (incluidos los corintios) estaban listos y preparados para dar desde el año anterior. Claramente Pablo está usando el ejemplo de una iglesia para motivar a otra. En el capítulo 8, por ejemplo, él presentó a la iglesia de Macedonia como ejemplo de dar en forma desinteresada. Ahora aprendemos que la respuesta de los macedonios fue motivada parcialmente cuando Pablo puso como ejemplo a los de Acaya: “Y vuestro celo ha estimulado a la mayoría” (9:2). De nuevo, parece que cuando Pablo estaba motivando a las iglesias, él se “gloriaba” de una iglesia a otra. De esto emerge una maravillosa lección: La alabanza es un motivador más potente que la crítica.

La ofrenda macedónica (2 Corintios 8–9)

9.2

LECCIÓN 9.2.1

OBJETIVO

Explicar por qué 2 Corintios 9:6 no garantiza prosperidad a un dador.

9.2.2

OBJETIVO

Enumerar los principios de generosidad que Pablo enseñó a los corintios. 5 ¿Pueden los creyentes esperar recibir más de Dios de lo que ellos han invertido en la obra de Dios?

77

Principios de dar (9:6–15) El dador alegre El paso final de Pablo para motivar a los corintios es enseñarles varios principios bíblicos relacionados con el dar. El primero podría llamarse el “principio de la siembra y cosecha” para el cual él usa la figura de una cosecha (2 Corintios 9:6).3 La lección es muy simple: Mientras más siembra el granjero, más grande será la cosecha. Tenga en mente que Pablo no está enseñando formulas mecánicas para dar sino que está declarando la verdad de Dios. Dios da abundantemente y quiere ver la misma generosidad en sus hijos. Junto con la generosidad, Dios ama al “dador alegre”, quien da libremente, no de mala gana o por obligación (v. 7; Romanos 12:8). Un incentivo para dar de esta forma es que “poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia” (2 Corintios 9:8). En el contexto, Pablo usa la palabra gracia para referirse a la generosa provisión de Dios, espiritual y materialmente. La abundante gracia de Dios resulta en que los creyentes no solo tienen lo que necesitan sino también una reserva para participar completamente en toda buena obra, tal como la ofrenda que iba a ser tomada. Así como los macedonios, la participación de los corintios en la ofrenda iba a ser una expresión de la gracia de Dios. Como Dios, quien proveía para los pobres de la tierra en el antiguo Israel (Levítico 19:9–10; Deuteronomio 23:24–25), los corintios pueden demostrar su misericordia y compasión por los pobres. Tal cuidado por los pobres caracterizó también el ministerio de Jesús, quien vio las multitudes de personas hambrientas siguiéndolo, y fue movido a compasión (Mateo 9:36). De hecho, Jesús pronunció juicios sobre aquellos que fracasan en mostrar compasión hacia aquellos en necesidad física (Mateo 25:42–46). Además, la participación en actos de generosidad puede tener un beneficio espiritual. Para ilustrarlo, Pablo cita una porción de Salmo 112:9: “Repartió, dió a los pobres; su justicia permanece para siempre.” Aquí, justicia (griego dikaiosunē) no tiene el significado legal de ser rectos ante Dios (como en Romanos 10:3 o Filipenses 3:9); en cambio se refiere a un sentido de rectitud moral o excelencia (Hodge 1973, 222). El judaísmo tenía mucha consideración al dar limosnas a los pobres con un grado de justicia (Martin 1986, 291). Sin embargo, Pablo no está contradiciendo su propia doctrina de justificación por fe, aparte de las obras de la ley. Más bien, su punto es el mismo del salmista: Mostrar misericordia al pobre tiene un eterno y permanente efecto sobre el carácter moral de una persona. Entonces Pablo entrega un incentivo final. La generosidad de la contribución de los corintios producirá que muchos se transformen en corazones agradecidos a Dios en gratitud y alabanza (9:11–13). Los receptores verán en este don la prueba de que los corintios no sólo profesan el evangelio sino que también viven en obediencia a sus enseñanzas. Pablo no podía habernos dado un incentivo más fuerte para practicar y vivir las buenas nuevas. Cuando el pueblo de Dios refleja su misericordia a través de sus actos de compasión y amor, crea un poderoso y eficaz mensaje, difícil de resistir.

78

Las epístolas a los corintios

Notas para el Capítulo 9 1. En los escritos de las cartas a los corintios (55–56 d.C.), la ofrenda fue progresiva y Pablo le dice a la iglesia de los corintios que sigan el ejemplo de las iglesias de Galacia y Macedonia en la forma de recaudarla (1 Corintios 16:1–2; 2 Corintios 8:1–6). Cuando Pablo escribió a los Romanos, alrededor de dos años más tarde, la ofrenda para “los pobres entre los santos de Jerusalén” todavía estaba en proceso y a punto de completarse (Romanos 15:26). Para una amplia discusión de esta ofrenda y sus propósitos, véase McKnight 1993, 143–147. 2. La palabra gracia (griego charis) aparece diez veces en 2 Corintios 8–9. Pablo la utiliza en una forma que enfatiza primeramente lo que Dios ha hecho y provisto en la redención a través de Jesucristo. 3. Aunque el paralelo exacto a 2 Corintios 9:6 no aparezca en las Escrituras, el principio está implícito en Lucas 6:38. Véase también Proverbios 11:25; 22:8–9.

La ofrenda macedónica (2 Corintios 8–9)

T

Autoexamen

79

9

CAPÍTULO

Encierre en un círculo la letra que corresponda a la mejor respuesta. 1. Para Pablo, la ofrenda para los creyentes de 6. Para motivar a los corintios a dar, Pablo NO Jerusalén significaba a) los criticó. a) la independencia de las iglesias gentiles. b) los alabó. b) las recompensas celestiales para los verdaderos c) les aclaró cuáles eran sus expectativas. creyentes. d) expresó confianza en el deseo de ellos de dar. c) la unidad de los judíos y gentiles en Cristo. 7. Segunda de Corintios 9:6 enseña el principio d) las diferencias entre los cristianos gentiles y que judíos. a) Dios es generoso con la humanidad. 2. La ofrenda de los macedonios fluyó de su b) el monto de la siembra nada tiene que ver con a) orgullo en poder hacerlo. la cosecha. b) abundante riqueza. c) mientras usted más da, más será lo que consiga c) respeto por Pablo. de Dios. d) amor por Dios y por los demás. d) la prosperidad de un dador generoso está garantizada. 3. La ofrenda de los macedonios pudo llamarse la “gracia de Dios” porque 8. Según Pablo, Dios se complace con los dadores a) provenía de la riqueza que Dios les había dado. a) alegres. b) reflejaba la dádiva generosa de Dios de sí b) generosos. mismo en la redención. c) bien dispuestos. c) ilustraba que Jesús vino voluntariamente a la d) Todas las anteriores tierra. 9. Como un incentivo, Pablo declaró que la d) simbolizaba los dones espirituales que reciben ofrenda de los corintios los creyentes. a) provocaría alabanzas y acciones de gracias 4. La triple estrategia de Pablo para asegurar el entre el pueblo de Dios. éxito de su ofrenda NO incluyó b) les garantizaría riqueza y prosperidad futura. a) preparar a la iglesia para recibir a los que c) les haría superiores a los macedonios. enviaba para colectar. d) les ayudaría a ganar su justificación. b) asegurar que sus obreros tenían credenciales 10. La palabra gracia en 2 Corintios 9:8 indica que impecables. a) dar aumenta la justicia de una persona. c) motivar a la continua participación de la iglesia b) Dios provee un excedente espiritual y material con alabanzas y elogios. que permite la generosidad del creyente. d) enseñar principios de dar para estimularlos. c) mientras más da la persona, más recibirá. 5. El aspecto más importante de elegir gente para d) Jesús juzgará a los que no dan con manejar las finanzas de la iglesia es generosidad. a) reconocer el potencial de crítica y de quejas. b) reconocer el potencial de malos manejos. c) elegir personas de buen carácter y reputación. d) elegir personas con experiencia en los negocios.

80

Las epístolas a los corintios

EVALUACIÓN DE UNIDAD 3 Ahora que ha completado la Unidad 3, repase las lecciones como preparación para tomar la Evaluación de Unidad 3. La hallará, junto con su hoja de respuesta, en el material del alumno. Responda todas las preguntas sin consultar ningún material del curso, su Biblia o notas personales. Cuando haya completado la evaluación, verifique sus respuestas con las que aparecen en la clave de respuestas que se encuentra en el material del alumno. Repase cualquier dato que usted respondió incorrectamente. Una vez hecho esto, puede proceder con el estudio de la Unidad 4. Las evaluaciones de unidad no cuentan como parte de su calificación final en este curso. Sin embargo, su rendimiento al tomarlas le indica cuán bien ha aprendido el material y cuán bien podría desempeñarse en el examen final.

4

UNIDAD

En defensa de la autoridad apostólica (2 Corintios 10–13) En los capítulos de cierre de 2 Corintios, Pablo se dedica a responder las acusaciones de los falsos maestros y de sus adherentes, que desafiaban su autoridad apostólica. El cambio de tono del capítulo 10 es apropiado para los asuntos que trata Pablo, y para el estilo de argumentación que se acostumbraba en su tiempo. Efectivamente, Pablo enfrenta el problema de los falsos maestros que trabajaban en la iglesia para desviar y confundir a la gente, tan seriamente, que él desafía a los corintios para que vean si están debidamente relacionados con la fe y con Cristo. Estos capítulos finales de 2 Corintios son una poderosa advertencia para aquellos que predicaban un evangelio diferente en Corinto, como también para aquellos que aceptaban esta enseñanza errónea.

Capítulo 10

Pablo confronta a sus críticos (2 Corintios 10:1–11:15)

Lecciones 10.1 La verdadera autoridad apostólica (10:1–11) 10.2 Gloriarse o no gloriarse (10:12–18) 10.3 Los falsos apóstoles desenmascarados (11:1–15)

Capítulo 11

Jactancias extrañas (2 Corintios 11:16–13:14)

Lecciones 11.1 Las jactancias de Pablo (11–12) 11.2 Las advertencias finales de Pablo (13:1–14)

10

82

Las epístolas a los corintios

Pablo confronta a sus críticos CAPÍTULO (2 Corintios 10:1–11:15) La mayor parte de 2 Corintios trata sobre los ataques de los críticos de Pablo y de las acusaciones que ellos le presentan. Sin embargo, el apóstol enfrenta ahora a esos adversarios y hace una larga defensa de su ministerio apostólico. Mientras sus críticos cuestionan la legitimidad de su oficio apostólico, Pablo dedica un tiempo considerable para defenderse personalmente. Kruse observa que la “crisis que Pablo enfrentó en esta situación fue la más crucial en todas sus relaciones con los corintios” (1987, 170). Por lo tanto, es comprensible que el tono de Pablo estuviera marcado por expresiones de sátira. Es esta burla lo que motiva a Pablo a usar de jactancia en contra de sus opositores, jactancias que pronto veremos, son agudas en sarcasmos.

Lección 10.1

La verdadera autoridad apostólica (10:1–11)

Objetivos 10.1.1 Apreciar la crítica de los opositores de Pablo y el falso concepto de lo que es la autoridad apostólica. 10.1.2 Identificar las verdades que Pablo enseña acerca de la autoridad apostólica.

Lección 10.2

Gloriarse o no gloriarse (10:12–18)

Objetivo 10.2.1 Analizar 2 Corintios 10:12–18 y describir la jactancia que es aceptable para los creyentes.

Lección 10.3

Los falsos apóstoles desenmascarados (11:1–15)

Objetivos 10.3.1 Describir la pasión y objetivo de Pablo para los corintios. 10.3.2 Describir cómo evaluarían a Pablo sus opositores. 10.3.3 Resumir la evaluación de Pablo de la verdadera identidad de sus opositores y el carácter de su ministerio.

Pablo confronta a sus críticos (2 Corintios 10:1–11:15)

10.1 LECCIÓN 10.1.1

OBJETIVO

Apreciar la crítica de los opositores de Pablo y el falso concepto de lo que es la autoridad apostólica.

1 ¿Hay apóstoles en la actualidad?

10.1.2

OBJETIVO

Identificar las verdades que Pablo enseña acerca de la autoridad apostólica.

83

La verdadera autoridad apostólica (10:1–11) En 2 Corintios 10 encontramos un dramático cambio de tono.1 Si esta carta fue escrita en un extenso período de tiempo, es posible que Pablo haya recibido inquietantes noticias de un problema reciente causado por sus adversarios. Estos capítulos fueron entonces redactados para responder a esa situación. Al exhortar y advertir a toda la iglesia, Pablo identifica específicamente los puntos de vista de sus opositores (por ejemplo, 11:4, 12–13, 15, 20–23; 13:2) Esto le otorga peso a la posición que Pablo escribió esos capítulos teniendo en mente ante todo a los falsos maestros (11:13–15) o apóstoles fraudulentos y a sus seguidores (Hodge 1973, 228).

¿Qué es un apóstol? El tema principal de controversia parece centrarse en las demandas de Pablo por el apostolado. ¿Cuál era la función de un apóstol en la iglesia primitiva? ¿Encaja Pablo en esta categoría? La palabra apóstol (griego apostolos) significa “delegado, mensajero o uno que es enviado”. Específicamente se refiere a un embajador del evangelio o comisionado de Cristo. La mayoría de los eruditos bíblicos reconoce que el Nuevo Testamento describe más de una categoría de apóstol. En particular, ellos distinguen entre (1) apóstoles originales quienes recibieron su llamado apostólico directamente del Señor Jesús y (2) un grupo más amplio de apóstoles eclesiásticos, los que son enviados por la iglesia. William W. Menzies (2005) se refiere al último grupo como apóstoles generales, que fueron o son comisionados por la iglesia local para una tarea especial. En esta categoría, él incluye a Silas y Timoteo (1 Tesalonicenses 1:1), Epafrodito (Filipenses 2:25) y Tito. Menzies distingue a éstos de los apóstoles originales, que incluyó a los doce, a Pablo y un círculo más amplio llamados asociados, tales como Marcos, Lucas, Santiago, Judas y quizá el escritor de Hebreos (Hebreos 2:3–4). Depurando la clasificación de Menzies, podría ser que viéramos a Timoteo y Tito no como apóstoles generales sino como delegados apostólicos de Pablo, asignados a una región específica (Timoteo a Asia Menor y Tito a Creta) para llevar a cabo el liderazgo apostólico en lugar de Pablo (Bittlinger 1973, 51; véase también Taylor 1959, 626). Si bien el Nuevo Testamento no coloca a Pablo en la categoría de los apóstoles originales, sí lo ubica en un nivel igual con los Doce. Este grupo selecto de apóstoles es único e irreemplazable en que ellos llevaron a cabo una función que fue cumplida dentro de la historia redentora. Estos primeros apóstoles fueron los fundamentos de la iglesia (Efesios 2:20; 3:5) y actuaron como transmisores y portadores autorizados de las enseñanzas de Jesús (Mateo 10:1–7; Hechos 1:2–8). Sus enseñanzas y escritos llegaron a ser la norma y el criterio por el cual la iglesia primitiva determinaría el contenido del canon del Nuevo Testamento. Al respecto, su autoridad para determinar las normas doctrinales del cristianismo no tuvo rivales ni desafíos posteriores. Pablo definitivamente fue una persona clave en este grupo de apóstoles.

El carácter de Cristo Para desenmascarar a sus oponentes y sus errores, Pablo los contrasta consigo mismo y su ministerio. De 2 Corintios 11 aprendemos que ellos estaban celosos del nivel de Pablo como apóstol y codiciaban ese nivel para ellos mismos. Así, Pablo describe el verdadero carácter de una autoridad apostólica. Él entiende

84

Las epístolas a los corintios

2 ¿Cómo puede uno evitar el potencialmente corruptor orgullo de poder?

10.2 LECCIÓN 10.2.1

OBJETIVO

Analizar 2 Corintios 10:12–18 y describir la jactancia que es aceptable para los creyentes. 3 ¿Es equivocada la jactancia de todo tipo?

que como apóstol tiene una responsabilidad de imitar a Cristo. El discipulado para Pablo involucra vivir como un modelo del carácter de Cristo. De esa forma Pablo puede usar su propia vida como instrucción: “Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo” (1 Corintios 11:1). Sus oponentes criticaron específicamente la falta de valentía de Pablo y la confundieron con debilidad y timidez. En respuesta, Pablo señala que la autoridad apostólica debe ser moderada “por la mansedumbre y ternura de Cristo” (2 Corintios 10:1). Algunos se contaminan con poder o autoridad. Ellos disfrutan mucho la oportunidad de usar tal autoridad porque les hace sentirse importantes. Como su Señor, sin embargo, Pablo entiende que una persona puede poseer autoridad sin usarla en un estilo déspota o dictatorial. Jesús enseñó: “Sabéis que los gobernantes de las naciones se enseñorean de ellas, y los que son grandes ejercen sobre ellas potestad. Mas entre vosotros no será así, sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor” (Mateo 20:25– 26). Pablo no se deleita en usar su autoridad apostólica para ejercer disciplina, de hecho, él retrocede ante tales expectativas (2 Corintios 10:2). Además, él sabe que su autoridad ha sido dada primeramente para la edificación de la iglesia, para edificarla, no para derribarla (13:10). En contraste, los oponentes de Pablo ponen tales valores en la disciplina correctiva y demostraciones de autoridad que se acomodan a los modelos del mundo (10:2). Tales formas carnales son armas inadecuadas para la guerra espiritual que Pablo lleva en la obra del evangelio. Además, ellos olvidan que Cristo dio a sus apóstoles autoridad, no para asustar o destruir a los santos, sino para edificarlos (vv. 8–9). Sin embargo, Pablo no se intimida o asusta al enfrentar y corregir el error cuando es necesario (v. 6). Pablo está listo para castigar la desobediencia y oponerse a toda idea que desafíe o corrompa el verdadero conocimiento de Dios (vv. 5–6).

Gloriarse o no gloriarse (10:12–18) El excesivo uso de Pablo de la palabra gloria (griego kauchomai) en 2 Corintios 10–12 (veinte y seis veces) parece tocar el orgullo y la mal encaminada jactancia de sus oponentes (Hernando 1999, 921, 952). De hecho, Pablo, antes de contrastar su gloria con la gloria mundana o carnal de ellos, revela lo necio que se ve el orgullo en sus oponentes. Lo que él describe tiene matices de humor. Con gran sarcasmo, él declara que no puede igualarse con la audacia de ellos. Algunos son tan egocéntricos que neciamente se transforman ellos mismos en la medida con la cual miden a otros y se jactan de que ellos cumplen con esa medida. En la tradición literaria griega, la comparación y la auto-recomendación eran aceptables si se hacían con moderación. Aquí, Pablo muestra cuán necia era su práctica, aun si se medían de acuerdo a las normas del mundo (Keener 1993, 509). A primera vista, parece que la jactancia de Pablo (2 Corintios 10:13–14) compromete su crítica de la jactancia del todo. Sin embargo, él tiene un tipo diferente de gloria en mente, una que no involucra orgullo pecaminoso sino que se centra en el “factor divino”, esto es, lo que Dios está haciendo a través de él. Pablo claramente ve su éxito como apóstol como producto de la gracia y respaldo de Dios de su llamado apostólico. Consecuentemente, si una persona se gloría, exhorta Pablo: “Gloríese en el Señor” (v. 17).

Pablo confronta a sus críticos (2 Corintios 10:1–11:15)

85

Pablo está seguro y contento de trabajar en el campo de cosecha que Dios ha preparado para él, es decir, los gentiles. Corinto perteneció a este campo de servicio y Pablo fue allí en obediencia al llamado de Dios. A diferencia de sus oponentes, Pablo determina limitar su gloria “a la regla que Dios nos ha dado por medida” (v. 13). Él no va a ir a una iglesia fundada por otro y tratar de llevarse el crédito por el trabajo y fruto del ministerio de algún otro (vv. 15–16). Además, “no es aprobado el que se alaba a sí mismo, sino aquel a quién Dios alaba” (v. 18).

10.3 LECCIÓN 10.3.1

OBJETIVO

Describir la pasión y objetivo de Pablo para los corintios.

4 ¿A qué se refiere el término evangelio en el Nuevo Testamento?

10.3.2

OBJETIVO

Describir cómo evaluarían a Pablo sus opositores.

Los falsos apóstoles desenmascarados (11:1–15) Un evangelio totalmente diferente Pablo se da cuenta que en respuesta a sus críticos, él debe hacer más que defenderse. Si la obra de Dios debe ser preservada, él debe proteger a los corintios de aquellos que dañarían su fe. Pablo lleva en su corazón un celo divino (11:2) que busca proteger y salvaguardar la pureza espiritual de ellos. Él toma del Antiguo Testamento la imagen de un esposo celoso, donde Dios dice estar “celoso” de su pueblo (Éxodo 20:5; 34:14; Deuteronomio 4:24), con quién se ha desposado (Oseas 2:19–20). Pero en 2 Corintios, Pablo identifica al desposado con Cristo y a él mismo como el padre de la novia. Su deseo actual es preservar y proteger la pureza de la iglesia y la devoción a Cristo, con quién ellos ahora están comprometidos (11:2). De este modo, para proteger la novia de Cristo, Pablo debe desenmascarar a estos críticos, sus falsas enseñanzas y el carácter engañoso de su ministerio. El versículo 4 provee una llave para entender a los adversarios de Pablo, a los que se dirige en los capítulos 10–13 (Martin 1986, 334). Ellos son guiados aparentemente por un cabecilla (griego ho erchomenos, “uno que viene”) que viene y predica “otro Jesús” (griego allon Iēsous), diferente del que predicaba Pablo. Es imposible saber con certeza qué predicaban estos oponentes acerca de Jesús. Sin embargo, dadas las repetidas jactancias de debilidad y buena disposición de Pablo para identificarse con los sufrimientos de Cristo (2 Corintios 11:23–33; 12:7–10; 13:1–6), los falsos maestros pueden haber fallado en dar el crédito debido a la instrumentalidad de la crucifixión para asegurar la salvación de Dios. Aún más probable es que ellos fracasaron en ver la muerte de Jesús en la cruz como un modelo del poder de Dios perfeccionado en la debilidad (13:4). Cual haya sido el contenido, tal predicación de otro Cristo es equivalente a ofrecer a los corintios un “espíritu diferente”2 y un “evangelio diferente” del que ellos han recibido (11:4). Esto es, los falsos maestros presentaron en forma equivocada a Jesús y la obra del Espíritu, que traen al creyente a la realidad de la salvación (Fee 1994, 344). Recuerde que para Pablo hay un solo Jesús, un Espíritu y un evangelio. Él está preocupado que a los corintios se les esté ofreciendo una versión falsa del cristianismo, y para su asombro, ¡ellos están dispuestos a aceptarlo!

Juzgando a Pablo Lo más revelador es el criterio mundano que los opositores de Pablo utilizan para criticarlo. Para ellos, Pablo no cumple las normas de un verdadero apóstol (2 Corintios 11:5). Anteriormente, ellos lo culparon de falta de autoridad y

86

Las epístolas a los corintios

5 A la luz de las palabras de Pablo, ¿debieran los predicadores estudiar estilo?

valentía. Ahora ellos señalan que a Pablo le faltaba elocuencia retórica (algo que para los estadistas y filósofos griegos y romanos era muy estimado). Él responde que si aun él no es brillante en la palabra, no es que le falte conocimiento. Esto sería obvio para los corintios, que habían estado mucho tiempo bajo las enseñanzas de Pablo. Las palabras de Pablo llevan una aguda reprensión a aquellos que, cuando pesan el valor de un predicador, prefieren el estilo por sobre la sustancia, y el carisma por sobre el contenido. La crítica de los falsos maestros a Pablo va más lejos, por no aceptar dinero por su predicación del evangelio. Ellos relacionan esta anomalía a su acusación que Pablo no está actuando como un verdadero apóstol.3 Para ellos, su rechazo en tomar el salario por sus predicaciones les parece extraño, dadas sus enseñanzas anteriores que los apóstoles tenían el derecho a vivir del evangelio (1 Corintios 9:6–14). Aunque él también tenía ese derecho, ya había dejado claro que estaba decidido a no “poner ningún obstáculo al evangelio de Cristo” (1 Corintios 9:12). Tal impedimento habría ocurrido ciertamente si Pablo hubiera dado a sus opositores alguna base para acusarlo de medrar “falsificando la Palabra de Dios” (2 Corintios 2:17). El evangelio de Pablo no es por contrato asalariado, y él no quiere que a su ministerio se le pongan etiquetas de precio. Mientras sus oponentes quieran gloriarse en su estado como apóstoles “sostenidos”, Pablo se gloriará escogiendo ofrecer el evangelio gratuitamente (11:7–12).

10.3.3

Agentes de engaño

Resumir la evaluación de Pablo de la verdadera identidad de sus opositores y el carácter de su ministerio.

Repentinamente, ante la mención de estos supuestos apóstoles en el versículo 12, Pablo recurre a desenmascararlos y revelar su verdadera identidad. Ellos son “falsos apóstoles” y obreros de engaño, que se disfrazan como apóstoles de Cristo. Lo que es más condenable todavía, son agentes de Satanás, el maestro del engaño (Juan 8:44) quién oculta la verdadera naturaleza de su obra (1 Pedro 5:8) haciéndose pasar él mismo como un ángel de luz. ¿Sería extraño, entonces, que sus siervos sigan su ejemplo y traten de pasar como “ministros de justicia? La última frase del versículo 15 no deja duda de que Pablo ve la obra de ellos como digna del juicio de Dios. La frase “lo que sus acciones merecen”, literalmente dice, “conforme a sus obras” (griego kata ta erga auton). Esto es casi idéntico a las palabras de Pablo en 2 Timoteo 4:14 cuando condena la oposición de Alejandro el calderero, quién causó a Pablo “muchos males”, y a quién Dios pagará “conforme a sus hechos” (griego kata ta erga autou).

OBJETIVO

Pablo confronta a sus críticos (2 Corintios 10:1–11:15)

87

Notas para el Capítulo 10 1. El notable cambio de tono no necesita ser visto, como algunos lo demandan, como evidencia de un fragmento de una carta aparte. Dramáticos cambios de tono ocurren en otros escritos paulinos, incluyendo Romanos 11:33, 1 Corintios 16:1; Gálatas 3:1; y Filipenses 3:2. Un cambio del tema en cuestión, o a un diferente tipo de audiencia, son explicaciones posibles. 2. La NVI coloca en minúscula la palabra espíritu, quizá sugiriendo que los corintios habían recibido un espíritu diferente del espíritu de Cristo (no el Espíritu Santo) (Martin 1986, 336). Aunque esto daría apoyo a nuestra opinión de que los opositores de Pablo no tenían la debilidad, entrega y humillación de Cristo, se echa de menos el gran cuadro de lo que Pablo está tratando de describir, que sus oponentes están predicando un evangelio extraño. 3. Las objeciones de sus opositores reflejan la actitud de aquellos que se criaron en la tradición filosófica griega, en la cual los filósofos comúnmente aceptaban dinero por sus enseñanzas. De hecho, los sofistas relacionaban el rechazo de una persona a tomar dinero por su enseñanza como una segura señal que su enseñanza no tenía valor. Por otro lado, Sócrates, Platón y Aristóteles enseñaron que la sabiduría no era para ser vendida (Martin 1986, 334).

88

T

Las epístolas a los corintios

Autoexamen

10

CAPÍTULO

Encierre en un círculo la letra que corresponda a la mejor respuesta. 1. El drástico cambio de tono en 2 Corintios 10 6. Para Pablo, la jactancia aceptable ocurre probablemente porque a) se centra en lo que Dios ha hecho. a) Pablo acaba de recordar una antigua ofensa de b) no comienza con uno mismo. sus opositores. c) no se apropia el crédito por la obra de otro. b) Pablo recibió recientemente malas noticias d) incluye todo lo anterior. respecto de antiguos opositores y el daño que 7. El campo que Dios le asignó a Pablo está mejor están causando. representado por c) Pablo está respondiendo a una carta de sus a) los gentiles. opositores. b) los corintios. d) Timoteo acaba de llegar con buenas noticias. c) la provincia de Acaya. 2. Los opositores de Pablo critican su expresión d) Asia Menor. a) del gozo de Cristo. 8. Los opositores de Pablo NO b) del amor por Dios de Cristo. a) predicaban ni enseñaban un falso evangelio. c) de la mansedumbre y humildad de Cristo. b) representaban erróneamente el carácter de d) de la fidelidad de Cristo. Jesús. 3. Según Pablo, la verdadera autoridad apostólica c) enseñaban que Jesús es el novio celoso. a) debiera ejercerse en el carácter de Cristo. d) representaban erróneamente el carácter del b) disfruta con la perspectiva de ejercer disciplina. Espíritu Santo. c) jamás pretende disciplinar a los creyentes. 9. Los falsos maestros criticaban a Pablo porque d) cambia para adaptarse al carácter del apóstol. a) no era un predicador elocuente. 4. Al condenar a sus opositores, Pablo se gloría b) no aceptaba dinero por su predicación. por c) le faltaba la autoridad y valentía de un apóstol. a) la urgencia de defender su apostolado. d) Todas las anteriores b) sarcasmo para exponer el orgullo pecaminoso 10. Pablo NO dice a sus opositores que de ellos. a) son falsos apóstoles. c) inconsistencia, contradiciendo su propia b) se encaminan hacia el juicio de Dios. enseñanza. c) son obreros engañosos. d) el conocimiento que su jactancia es menor que d) son siervos de justicia. la de sus opositores. 5. El “factor divino” en la jactancia de Pablo es a) la obra de Dios por medio de Pablo. b) mirar más allá del presente a los asuntos eternos. c) buscar la voluntad de Dios en todo. d) la enumeración de sus logros para Dios.

Pablo confronta a sus críticos (2 Corintios 10:1–11:15)

89

11

90

Las epístolas a los corintios

Jactancias extrañas CAPÍTULO (2 Corintios 11:16–13:14) Pablo está bien consciente que no sólo su apostolado está bajo ataque, sino que más importante aún, la integridad del evangelio está siendo amenazada. Así que, después de disculparse por ponerse al nivel de sus oponentes, continúa defendiendo la legitimidad de su ministerio al comprometerse en “necias” jactancias. La lista de logros incluye sus requisitos de raza, pruebas y sufrimientos, experiencias de gran revelación, y prueba final de su apostolado. Desafortunadamente, la defensa de Pablo no señaló el fin de los falsos maestros. La iglesia actual es aun más susceptible a los peligros de falsos maestros. Así que, los líderes cristianos deben ser mayordomos vigilantes del evangelio de Jesucristo y deben enseñar a sus congregaciones a ser igualmente cautelosos respecto de la integridad del evangelio.

Lección 11.1

Las jactancias de Pablo (11–12)

Objetivos 11.1.1 Describir las maneras en que las jactancias de Pablo difieren de las de sus oponentes. 11.1.2 Explicar la importancia de las visiones y revelaciones para los oponentes de Pablo y por qué Pablo se jacta de lo que el Señor le entregó. 11.1.3 Identificar las cosas que marcan a Pablo como un verdadero apóstol de Cristo.

Lección 11.2

Las advertencias finales de Pablo (13:1–14)

Objetivo 11.2.1 Explicar cómo la pasión de Pablo tiene como resultado una advertencia y amenaza de disciplina.

Jactancias extrañas (2 Corintios 11:16–13:14)

11.1

LECCIÓN 11.1.1

OBJETIVO

Describir las maneras en que las jactancias de Pablo difieren de las de sus oponentes.

1 ¿Cuáles son los peligros de la comparación?

91

Las jactancias de Pablo (11–12) Pablo prosigue para establecer un contraste entre él y sus oponentes al fijar la atención en el orgullo de ellos y su amor por la jactancia. Ellos están prestos a señalar su herencia espiritual o su linaje como judíos (considere Filipenses 3:3– 5). Este necio orgullo guía a un abuso opresivo de autoridad, que los corintios parecen haber aceptado con gusto (2 Corintios 11:19–21). Continuando con el sarcasmo, Pablo les dice a los corintios que se pondrá al nivel de ellos y que en algo habrá de jactarse. Pero muy pronto se clarifica que Pablo no se gloría “según la carne” (v. 18) como los “falsos apóstoles”. Si su audiencia espera animadas historias de plantación de iglesias y hazañas misioneras, van a ser defraudados y desilusionados. En cambio, la gloria de Pablo como un “siervo de Cristo” no es más que pruebas y aflicciones sin fin que él resistió en su servicio (11:23–33). En esto descansa la única y genial estrategia de la gloria de Pablo. Sus adversarios representaron para los corintios el amor y la fascinación por los asuntos externos. Para ellos, los verdaderos apóstoles eran conocidos por su elocuencia retórica, su forma autoritativa y su presencia carismática. Los milagros, señales y maravillas (12:12) estaban a tono con estos criterios, y los oponentes de Pablo los consideraban como las marcas de autenticidad de un ministerio apostólico. La incomparable gloria de Pablo fue que él no tuvo rivales en su imitación de los sufrimientos de Cristo al obedecer a la voluntad de Dios. Esto demandaba nada menos que morir a sí mismo (Romanos 6:6; Gálatas 2:20; Efesios 4:22–24; Colosenses 3:3–9). Sin embargo, la orgullosa exaltación de sus oponentes permaneció en rígido contraste con la senda que Jesús tomó en su camino a la cruz. Al gloriarse de sus sufrimientos por la causa de Cristo, Pablo se ajusta al deseo de comparación de sus oponentes citando sus credenciales apostólicas. Sin embargo, él también pone por delante el criterio que ellos no pueden cumplir: una vida de negación y sufrimiento en obediencia a su llamado apostólico.

11.1.2

Una gloria de grandes revelaciones

Explicar la importancia de las visiones y revelaciones para los oponentes de Pablo y por qué Pablo se jacta de lo que el Señor le entregó.

Aunque Pablo duda que pueda ser de algún provecho, se siente impulsado a seguir con la jactancia. Sus oponentes presumían probablemente que predicaban una verdad dada a ellos a través de visiones y revelaciones. Por lo tanto, ahora Pablo se gloría de las visiones y revelaciones1 que el Señor le ha dado. Aunque no se menciona, Pablo probablemente tiene en mente la actividad del Espíritu. En 1 Corintios 14, por ejemplo, él usa la palabra revelación (griego apokalupsis) para designar el don del Espíritu a través del cual Dios se comunica con su pueblo (vv. 6, 26, 30). En otras casos la palabra se refiere a la revelación personal de Jesucristo que acompañó al llamado apostólico de Pablo (Gálatas 1:12; Efesios 3:3–4). Sin embargo, por muy importantes que considere Pablo tales revelaciones personalmente, aquí él no las considera como una prueba de su apostolado. Para Pablo, las visiones y revelaciones son un asunto privado de espiritualidad personal. Él neciamente se gloría de tales visiones y revelaciones sólo para poner en evidencia lo que sus oponentes erradamente relacionan como una marca de identidad de un apóstol. Esto es, puesto que se ha visto obligado a defender la legitimidad de su apostolado, Pablo reconocerá sus revelaciones (2 Corintios 12:1), pero no quiere que ellos piensen que estas revelaciones lo

OBJETIVO

2 ¿Cómo aconsejaría a un creyente que pretende seguir al Señor a través de visiones o revelaciones?

92

Las epístolas a los corintios

3 ¿Está de acuerdo o no con lo que Pablo habla de sí mismo en 2 Corintios 12:2–4? ¿Por qué?

hacen a él alguien especial o le han dado el derecho para gloriarse de alguna clase de condición especial. Como resultado, él de mala gana se gloría al decir “conozco a un hombre” (v. 2) antes que referirse directamente a su propia experiencia, aunque parece casi cierto que aquí él está describiendo su propia experiencia.2 De hecho, las únicas circunstancias que hacen sentir cómodo a Pablo al gloriarse, son aquellas que revelan su debilidad (v. 5) y una de esas ocasiones es la que viene a su mente. Una vez, para evitar que la grandeza de ciertas revelaciones lo guiara a la auto exaltación, se le dio un “aguijón en la carne”, lo que él también llama “un mensajero de Satanás”, que lo atormentara (v. 7). Esta referencia a Satanás podría hacer que algunos objetaran a una aparente alianza impía entre Satanás y Dios. Sin embargo, aun cuando Pablo a veces presenta a Satanás como un instrumento de disciplina en las manos de Dios (1 Corintios 5:5; 1 Timoteo 1:20), debemos tener en mente que Dios limita las obras del maligno para realizar sus propósitos soberanos (véase Job 2:1–10). Así, las revelaciones que Pablo recibió no lo exaltaron sino que lo humillaron. Tal disciplina del Señor es redentora y mantiene a Pablo consciente de su dependencia de la gracia y poder de Dios (v. 9). Ahora Pablo no sólo resiste el aguijón, sino que también se gloría en la debilidad que requiere morar en el poder de Cristo. A través de esto, Pablo puede imitar a Cristo y mostrar la sabiduría divina de la cruz: el poder de Dios mostrado a través de la debilidad humana.

11.1.3

Las marcas de un verdadero apóstol

Identificar las cosas que marcan a Pablo como un verdadero apóstol de Cristo.

Terminando su discusión acerca de las revelaciones, ahora Pablo está listo para resumir las marcas de un verdadero apóstol (12:11–13). Alguna discrepancia gira en torno a la interpretación del versículo 12. Considere estas dos traducciones un poco diferentes: Las señales de un verdadero apóstol fueron hechas entre ustedes con toda perseverancia, con señales, maravillas y milagros. (NASB, traducido del inglés) Las marcas distintivas de un apóstol, tales como señales, prodigios y milagros, se dieron constantemente entre ustedes (NVI). Especialmente entre pentecostales y carismáticos3 muchos suponen que las señales o cosas que marcan a un verdadero apóstol son actualmente las señales milagrosas, prodigios y milagros mencionados, como la Nueva Versión Internacional (NVI) parece indicar. Sin embargo, aunque la NASB (una traducción significativamente más literal del texto griego original) usa la palabra señales tanto al principio como al final del versículo, parece probable que Pablo quiso establecer una diferencia entre las dos. Por una cosa, el termino señales tiene un rango más amplio de significado, que simplemente el de “milagros” (por ejemplo, Mateo 26:48, el beso de Judas; Romanos 4:11, la circuncisión; 2 Tesalonicenses 3:17, la firma de Pablo). También, según se ve en la versión NASB, la gramática de este versículo indica que los términos al final de la frase describen la forma en que se realizan las señales de un verdadero apóstol. De hecho, Pablo ha estado refiriéndose a las marcas o señales distintivas de un verdadero apóstol en 2 Corintios 10–13. Además del poder espiritual para enfrentar la maldad (10:3–4, 8–11; 13:2–4, 10) y de las revelaciones divinas (visionarias) éstas incluyen rasgos como (1) celo en el cuidado de las iglesias (11:6); (2) verdadero conocimiento de Jesús y su evangelio (11:6); (3) auto sustento sacrificial para así no ser carga a las iglesias (11:7–9); (4) ausencia de

OBJETIVO

Jactancias extrañas (2 Corintios 11:16–13:14)

4 ¿Cuál debería ser la principal pasión de un pastor espiritual por su rebaño?

11.2

LECCIÓN

11.2.1

OBJETIVO

Explicar cómo la pasión de Pablo tiene como resultado una advertencia y amenaza de disciplina.

93

servirse a sí mismo o disciplina pesada (11:20–21); (5) buena voluntad para sufrir y ser afligido por la causa de Cristo (11:23–29); y (6) paciente resistencia del aguijón de la carne (12:7–9) (Grudem 1993, 63–66). Éstas son, entonces, las “señales de un verdadero apóstol” (2 Corintios 12:12). Por lo tanto, el primer uso de la palabra señales en el 12:11 (NASB) se refiere generalmente a las cosas que marcan a un verdadero apóstol, y la frase “en toda perseverancia” indica el carácter interno para resistir pacientemente los sufrimientos como un verdadero apóstol de Cristo. Entonces, la segunda referencia para señales indica la presencia de milagros como la confirmación del poder de Dios y actividad divina. Observe que los falsos apóstoles vinieron disfrazados de parte de Satanás como “ministros de justicia” (11:13–15), una descripción quizá basada en su ostentosa muestra de justicia y demandas legalistas. Posiblemente ellos vinieron también con falsas señales hechas por Satanás. Sin embargo, cuando Pablo quiere defender sus demandas de un genuino apostolado, él señala primero que, no los milagros sino su semejanza a Cristo es lo que refleja su conducta intachable, servicio sacrificado, carácter evidente (12:13–18) y buena voluntad para sufrir por la causa de Cristo. Nuevamente, para Pablo esas cualidades son las marcas de un verdadero apóstol. Estas cualidades son una clara ayuda contra el criterio carnal y superficial de la auto promoción de los apóstoles en Corinto. Además, el apostolado de Pablo está marcado por una preocupación paternal y pastoral por los corintios como su padre espiritual. Como un padre, Pablo está dispuesto a sacrificarse por su cuidado y beneficio. Su amor es evidente, pero él anhela que sea recíproco (v. 15). Entonces aparece otra referencia sutil a la costumbre de Pablo de no recibir ayuda de su trabajo en el evangelio (vv. 14–18). Quizá algunos habían torcido los motivos de Pablo, declarando eso como una prueba de la falta de amor de Pablo (v. 5) o de algún otro propósito intrigante. Aparentemente ellos lo habían acusado de “astuto” (v. 16), diciendo que él engañosamente rehusó tomar el dinero directamente, pero obtenerlo indirectamente a través de su ofrenda para los creyentes de Jerusalén. Sin embargo, tal estrategia es de dudosa eficacia en una iglesia donde la integridad de Pablo y sus colaboradores es bien conocida y de largo tiempo atestiguada (vv. 17–18).

Las advertencias finales de Pablo (13:1–14) Tiempo para la disciplina Habiendo expuesto sus temores personales en torno a su inminente tercera visita a Corinto (12:20), Pablo ocupa la autoridad de un apóstol realizando una doble advertencia. Primero, los corintios pueden estar seguros que la verdad será descubierta y revelada. Para sostener su posición, Pablo cita una porción de Deuteronomio 19:15: “Por boca de dos o de tres testigos se decidirá todo asunto.” Probablemente los testigos se refieren a las previas visitas de Pablo (13:2) cuando él les había dado unas advertencias similares. Ahora, él repite la advertencia “ahora que estoy ausente”: Los corintios habían sido advertidos ampliamente; ahora es el tiempo para que los falsos apóstoles y sus seguidores sean llamados para dar cuenta. Estos impostores se burlan de la humildad de Pablo (10:1) e

94 5 ¿Por qué Pablo recurriría a la disciplina en la iglesia de Corinto?

Las epístolas a los corintios

identifican que la manifestación externa de autoridad que ellos hacen es la prueba de su apostolado, prueba de que Cristo hablaba a través de ellos. Su fascinación con tal autoridad exterior delata su ignorancia de lo que es un siervo apostólico de Cristo. Ellos también fracasan en entender que Cristo no dio autoridad a sus apóstoles para destruir la iglesia a través de pesada disciplina sino para edificarla a través de la enseñanza y corrección amorosa. En términos claros, Pablo les hace saber que si ellos están buscando evidencia de apostolado la encontrarán cuando él vaya. Por lo tanto, en la segunda parte de su advertencia general, él les asegura a los corintios que su inminente visita involucrará disciplina. Él no excusará a nadie. Después de todo, el Cristo que habla a través de Pablo no es débil sino que poderoso entre ellos (13:3). En medio de esta severa advertencia, Pablo otra vez revela su corazón pastoral. Él no quiere disciplinar con dureza a los corintios, así que con fuerza les insta y dice: “Examinaos a vosotros mismos” (v. 5). Tal autoexamen o inventario espiritual los podría ayudar a reconocer si están viviendo de acuerdo a su fe en Cristo. Si no es así, ellos pueden hacer las correcciones necesarias y así evitar la disciplina. La preocupación y esperanza de Pablo es que ellos “ninguna cosa mala hag[an]” (v. 7) y que “no est[én] reprobados” (v. 5). Él quiere que ellos estén completos, o espiritualmente maduros en la fe, sea que lo aprueban o elogien a él personalmente, o que no lo hagan (vv. 6–8). Su mayor deseo es que toda la bendición de la redención sea su continua posesión, “la gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, y la comunión del Espíritu Santo” (v. 14).

Notas para el Capitulo 11 1. Pablo probablemente no pretende distinguir entre los términos visiones y revelaciones. Por ejemplo, su visión de Cristo como es registrada en Hechos 9:3–9 es llamada una revelación en Gálatas 1:12. 2. En una sección donde él se inclina ante el nivel de jactancia de sus oponentes para defender la legitimidad de su apostolado, ¿por qué Pablo habría de mencionar la experiencia visionaria de otro hombre? Además, la jactancia de Pablo a favor de este “otro hombre” parece resultar directamente en su “aguijón en la carne” dada “la grandeza de las revelaciones” (2 Corintios 12:7). ¿Por qué las revelaciones de otro resultarían en la exaltación de Pablo y requerirían un aguijón de disciplina? En cuanto al tiempo, Pablo dice que su revelación ocurrió catorce años antes (v. 2) de escribir 2 Corintios (56 d.C.). Esto la coloca alrededor del año 42–43 d.C., que calza dentro del período que Pablo estuvo en Siria y Cilicia (Gálatas 1:21; 2:1), acerca de lo cual Hechos guarda silencio (véase Hechos 9:30; 11:25). 3. Para definiciones de pentecostales y carismáticos, lo mismo como para un comentario más amplio del movimiento carismático, véase Hernando 2005, 154, 170.

Jactancias extrañas (2 Corintios 11:16–13:14)

T

Autoexamen

95

11

CAPÍTULO

Encierre en un círculo la letra que corresponda a la mejor respuesta. 1. En contraste a sus opositores, Pablo se jacta de 6. Pablo se regocija en el poder de Dios en la debilidad, mayormente porque a) cosas vanidosas y carnales. a) refleja la encarnación de Jesús. b) su prosperidad en Cristo. b) renueva la promesa de resurrección. c) sus visiones y revelaciones. c) le permite a él imitar a Cristo. d) su debilidad. d) es una señal de un verdadero apóstol. 2. Pablo considera que la jactancia es 7. A diferencia de Pablo, sus opositores estaban a) necedad. empeñados en b) instrumental. a) una disciplina eficaz. c) aceptable. b) un evidente amor por los demás. d) valiente. c) una auto promoción y vanidad. 3. Pablo considera las revelaciones y visiones d) una celosa preocupación por la iglesia. como 8. En la mente de Pablo, las señales de un a) una señal de debilidad. verdadero apóstol probablemente NO incluían b) una auténtica marca de un apóstol. a) los milagros. c) una señal de madurez espiritual. b) la disposición a sufrir por Cristo. d) un asunto privado de espiritualidad personal. c) un servicio sacrificado. 4. Pablo declara que le fue dado un aguijón en la d) una preocupación apasionada por la iglesia. carne para 9. El mayor temor de Pablo respecto de los a) castigarle por su orgullo espiritual. corintios es que b) evitar su auto exaltación. a) él tuviera que disciplinarlos severamente. c) conducirle al arrepentimiento. b) ellos fracasaran en la prueba y se hundieran d) imitar a Cristo. más en el pecado. 5. Respecto del aguijón en la carne, NO sabemos c) rechazaran su apostolado. si d) los maestros falsos regresaran. a) fue parte de la disciplina del Señor. 10. Para cerrar, Pablo desea que los corintios b) involucraba a un mensajero de Satanás. recuerden que c) Pablo pidió repetidamente ser liberado, pero a) no pueden evitar su disciplina. que le fue negado. b) pueden evitar la disciplina si se juzgan a sí d) fue una enfermedad física de alguna clase. mismos. c) él desea la aprobación y el elogio de ellos. d) Tito lo acompañará cuando les visite.

EVALUACIÓN DE UNIDAD 4 Y EXAMEN FINAL Usted acaba de completar todo el trabajo en este libro de texto de estudio independiente. Repase con detención las lecciones de esta unidad, luego responda las preguntas de la última evaluación de unidad. Cuando haya completado la evaluación, verifique sus respuestas con las que aparecen en la clave de respuestas que se encuentra en el material del alumno. Repase cualquier dato que usted respondió incorrectamente. Repase para el examen final estudiando los objetivos del curso, los objetivos de cada lección, los autoexámenes, y las evaluaciones de unidad. Repase el contenido de las lecciones para refrescar su memoria. Si repasa con cuidado y puede cumplir los objetivos, no tendrá dificultad en aprobar el examen final.

96

Las epístolas a los corintios

Glosario

97

Glosario Capítulo apocalíptico

— relativo al tiempo del fin; describe la profecía visionaria que trata con el

6

arrebatamiento

— también llamado la “esperanza bienaventurada” (Tito 2:13; 4:13); un

6

ascetismo

— la práctica de una estricta (y con frecuencia extrema) auto-negación en pro de

2

Asia Menor

— la antigua región equivalente a la moderna nación de Turquía. Los griegos

1

autoridad apostólica

— la autoridad que poseían los apóstoles, esto es, aquellos discípulos de Jesús

10

Corinto

— una ciudad griega ubicada en el istmo entre la Grecia central y la sección

1

encarnación

— Dios Hijo tomando sobre sí una completa naturaleza y existencia humana

4

Eucaristía

— el rito de la Santa Comunión o Cena del Señor; tomado de la palabra

4

filosofía

— la búsqueda intelectual de conocimiento, sabiduría y verdad

1

triunfo final de Dios sobre el pecado y la muerte al fin de la época, o de la historia humana como la conocemos. acontecimiento asociado con la segunda venida de Cristo que incluye una resurrección de los creyentes que han muerto, quienes, juntamente con otros creyentes que estén vivos cuando Él vuelva, serán tomados arriba en las nubes para encontrarse con el Señor un desarrollo espiritual; usualmente incluía la negación o postergación de ciertas necesidades o deseos físicos, con el fin de dedicarse a las cosas espirituales se referían a ella simplemente como “Asia”; sin embargo, Asia se refería más comúnmente a la parte occidental de Asia Menor, con su ciudad principal de Éfeso. escogidos para testificar del Cristo resucitado y para recordar y trasmitir sus enseñanzas a la iglesia por medio del poder del Espíritu (Juan 14:26; 15:26–27; 16:14; Mateo 28:18–20)

sur conocida como Peloponeso. Con puertos tanto en el golfo de Corinto como en el Sarónico, tenía ubicación estratégica para controlar las principales rutas de comercio. En los días de Pablo era colonia romana, muy próspera y asiento del templo de Afrodita. También se destacaba por su inmoralidad, aun entre los griegos. en la persona de Jesucristo, con el propósito divino de redención

griega eucharistein, que significa “dar gracias”; conmemora la acción de gracias de Jesús antes de bendecir el pan y la copa en la comida pascual (Mateo 26:27; Lucas 22:17–19)

98

Las epístolas a los corintios

Capítulo gloria

— un término complejo que se deriva de la palabra hebrea kabod, que se

8

lenguas

— griego glossolalia; un don del Espíritu que permite a un creyente hablar en

5

libertinaje

— la creencia que la fe en Cristo lo libera a uno de toda obligación moral de

2

litúrgico

— perteneciente a la práctica de ritos y costumbres dentro de la iglesia

1

Palestina

— un término antiguo con el que originalmente se designaba el territorio de

1

santificado

— hebreo qadash o griego hagiazo; apartado o consagrado para el uso o

2

refiere con frecuencia a la presencia revelada y al poder de Dios en una variedad de formas. Pablo usa en manera similar la palabra griega doxa en 2 Corintios para referirse a la manifestación o revelación de la verdadera naturaleza, presencia y poder de Dios, especialmente como se revela en Cristo y por medio de la obra del Espíritu un idioma no aprendido, para edificación personal o para la edificación de la asamblea de la iglesia, cuando va acompañado del don de interpretación la ley. Unida a la noción griega que el cuerpo y el espíritu de una persona están radicalmente separados, con frecuencia conduce a inmoralidad sexual.

los filisteos (enemigos de Israel) que los hebreos conquistaron y ocuparon después del Éxodo; se extendía originalmente desde Dan en el norte hasta Beerseba en el sur, y desde el mar Mediterráneo en el oeste hasta el territorio este del río Jordán. Actualmente: es una referencia común al territorio de Israel. propósito santo de Dios

Bibliografía selecta

B

99

Bibliografía selecta

Barclay, William. 1975. The Letters to the Corinthians. Rev. ed. Philadelphia: Westminster Press. Bittlinger, Arnold. 1973. Gifts and Ministries. Grand Rapids: Eerdmans. Carlson, G. Raymond, Paul A. Hamar, y Russell Wisehart. 1989. Romans–Corinthians. Vol. 6, The Complete Biblical Library, ed. Ralph W. Harris. Springfield, MO: World Library Press. Carson, D. A. 1987. Showing the Spirit: A Theological Exposition of 1 Corinthians 12–14. Grand Rapids: Baker. Carson, D. A., Douglas J. Moo, y Leon Morris. 1992. An Introduction to the New Testament. Grand Rapids: Zondervan. Fee, Gordon D. 1987. The First Epistle to the Corinthians. New International Commentary on the New Testament. Grand Rapids: Eerdmans. ———. 1994. God’s Empowering Presence: The Holy Spirit in the Letters of Paul. Peabody, MA: Hendrickson Publishers. ———. 1996. Paul, the Spirit, and the People of God. Peabody, MA: Hendrickson Publishers. Fee, Gordon D., y Douglas Stuart. 2003. How to Read the Bible for All Its Worth. 3a ed. Grand Rapids: Zondervan. Ferguson, Everett. 1993. Backgrounds of Early Christianity. 2nda ed. Grand Rapids: Eerdmans. Gill, Deborah M., y Barbara Caveness. 2004. God’s Women: Then and Now. Springfield, MO: Grace and Truth. Godet, Frederic L. 1977. Commentary on First Corinthians. Grand Rapids: Kregel Publications. Gonzalez, Justo L. 1970. A History of the Christian Thought. Vol. 1. Nashville: Abingdon Press. Grenz, Stanley J. 1998. What Christians Really Believe and Why. Louisville, KY: Westminster-John Knox Press. Grenz, Stanley J., David Guretzki, y Cherith Fee Nordling. 1999. “Asceticism.” En Pocket Dictionary of Theological Terms. Downers Grove, IL: InterVarsity Press. Grudem, Wayne. 1985. “Does kephalē (Head) Mean ‘Source’ or ‘Authority Over’ in Greek Literature? A Survey of 2,336 Examples.” Trinity Journal 6 NS (1): 38–59. ———. 1990. “The Meaning of kephalē: A Response to Recent Studies.” Trinity Journal 11 NS (1): 3–72. ———. 1993. “Should Christians Expect Miracles Today?” En The Kingdom and the Power, ed. Gary S. Greig and Kevin N. Springer, 63–66. Ventura, CA: Regal Books. ———. 2001. “The Meaning of kephalē (‘Head’): An Evaluation of New Evidence, Real and Alleged.” Journal of the Evangelical Theological Society, 44 (Marzo): 25–65. Hanson, R.P.C. 1954. II Corinthians. London: SCM Press. Citado en Micheal Grant, St. Paul (London: Phoenix Press, 1976), 5.

100

Las epístolas a los corintios

Hernando, James D. 1999. “2 Corinthians.” En Full Life Bible Commentary to the New Testament: An International Commentary for Spirit-filled Christians, ed. French L. Arrington and Roger Stronstad. Grand Rapids: Zondervan. ———. 2005. Dictionary of Hermeneutics: A Concise Guide to Terms, Names, Methods and Expressions. Springfield, MO: Gospel Publishing House. Hodge, Charles. 1973. An Exposition of the Second Epistle to the Corinthians. Grand Rapids: Eerdmans. Horton, Stanley M. 1999. I & II Corinthians. Springfield, MO: Logion Press. Keener, Craig S. 1993. The IVP Bible Background Commentary: New Testament. Downers Grove, IL: InterVarsity Press. ———. 2005. 1–2 Corinthians. New Cambridge Bible Commentary. New York: Cambridge University Press. Kroeger, Catherine. 1993. “Head.” En Dictionary of Paul and His Letters, ed. Gerald F. Hawthorne and Ralph P. Martin, 375–377. Downers Grove, IL: InterVarsity Press. Kruse, Colin. 1987. The Second Epistle of Paul to the Corinthians: An Introduction and Commentary. Tyndale New Testament Commentaries. Grand Rapids: Eerdmans. Martin, Ralph P. 1986. 2 Corinthians. Vol. 40, Word Biblical Commentary, ed. David A. Hubbard and Glenn W. Barker. Waco, TX: Word Books. McKnight, Scott. 1993. “Collection for the Saints.” En Dictionary of Paul and His Letters, ed. Gerald F. Hawthorne y Ralph P. Martin. Downers Grove, IL: InterVarsity Press. Menzies, William W. 2005. “Apostolic in Doctrine.” Encounter 2, no. 1 (invierno), http://www.agts.edu/ encounter/articles/2005_winter/menzies.htm. Murphy-O’Conner, Jerome. 1983. St. Paul’s Corinth: Texts and Archaeology. Collegeville, MN: Liturgical Press. [2002. Tercera edición revisada y ampliada.] ———. 1984. “The Corinth That Saint Paul Saw.” Biblical Archaeologist 47: 147–159. Palma, Anthony D. 1999. “1 Corinthians.” En Full Life Bible Commentary to the New Testament: An International Commentary for Spirit-filled Christians, ed. French L. Arrington y Roger Stronstad. Grand Rapids: Zondervan. Pate, C. Marvin. 1995. The End of the Age Has Come: The Theology of Paul. Grand Rapids: Zondervan. “Roman Triumph.” 2006. Wikipedia, the Free Encyclopedia. http://en.wikipedia.org/wiki/ Roman_triumph (visitado 12 septiembre 2006). Schatzmann, Siegfried S. 1987. A Pauline Theology of Charismata. Peabody, MA: Hendrickson Publishers. Taylor, Vincent. 1959. The Gospel according to Mark. London: Macmillan & Co.

Lista de lectura sugerida

101

Lista de lectura sugerida Arrington, French L., y Roger Stronstad, eds. 1999. Full Life Bible Commentary to the New Testament: An International Commentary for Spirit-filled Christians. Grand Rapids: Zondervan. Bruce, F. F. 1977. Paul: Apostle of the Heart Set Free. Grand Rapids: Eerdmans. Elwell, Walter A., y Robert W. Yarbrough. 1998. Encountering the New Testament. Grand Rapids: Baker. Hawthorne, Gerald F., y Ralph P. Martin, eds. 1993. Dictionary of Paul and His Letters. Downers Grove, IL: InterVarsity Press. Lee, Edgar, ed. 2005. He Gave Apostles: Apostolic Ministry in the 21st Century. Springfield, MO: The Assemblies of God Theological Seminary. Longenecker, Richard N. 1971. The Ministry and Message of Paul. Grand Rapids: Zondervan. Palma, Anthony D. 1998. The Holy Spirit: A Pentecostal Perspective. Springfield, MO: Logion Press. Ridderbos, Herman N. 1975. Paul: An Outline of His Theology. Trans. John Richard de Witt. Grand Rapids: Eerdmans.

Related Documents


More Documents from "Luciano I de Samosata"

Isa 101
March 2021 0
March 2021 0
March 2021 0