La Sabiduria Y Magia De La Luna

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MARTES 10 DE ENERO 2012 LA SABIDURIA Y LA MAGÍA DE LA LUNA Los ritmos de la Luna y su influencia en la Vida La luna ha ejercido siempre una mágica influencia sobre la tierra y sus habitantes. El hombre de las cavernas fue el primer ser viviente fascinado por el misterioso astro de la noche, antes de que los antiguos griegos y egipcios lo adoraran como guía de sus vidas. Y así, a través del tiempo, la luna ha desplegado su extraño poder sobre nuestro mundo, incidiendo poderosamente sobre la vida animal y vegetal, rigiendo las mareas ejerciendo una acción decisiva y constante sobre los fenómenos meteorológicos y hasta sobre todo las emociones de las personas Desde tiempos remotos se comenta y se ha llegado a decir que la luna afecta o influye en el comportamiento de todo ser viviente, muchos creen en ello y otros simplemente pasan por desapercibidos aún teniendo en frente a la hermosa madre luna. Esta comprobado científicamente que tanto la Luna como el Sol ejercen una gran influencia gravitacional sobre la Tierra, lo cual refleja los flujos y reflujos y las oscilaciones de la parte sólida de la corteza terrestre. En otros tiempos las creencias eran totalmente distintas a lo que hoy en día estamos acostumbrados a ver o a oír, desde el nacimiento de la civilización el fenómeno menstrual fue rodeado de todas las supersticiones y leyendas posibles. Parecía dramática no solamente la hemorragia misma, sino también su coincidencia aparente con las fases de la Luna. UNA LEYENDA DE NUEVA GUINEA: Según una leyenda de Nueva Guinea en épocas remotas la Luna vivía en la Tierra en la figura de un joven. Este era muy apuesto y con frecuencia trataba de seducir a inocentes muchachas y jóvenes mujeres. Una joven esposa cedió a sus persuasiones, pero en ese momento el esposo, que había regresado a casa, descubrió a su rival e incendió la casa. El joven pereció y su sangre se elevó hacia los cielos y se transformó en la faz de la Luna. La Luna observaba periódicamente a la Tierra en toda su hermosura y en su mortal ofensa se vengaba de todas las mujeres: cada mes en la Luna llena, ellas debían perder sangre. La venganza de la Luna sólo perdonaba a las mujeres viejas y embarazadas. La menstruación era considerada no sólo como un castigo por los pecados, sino también rebajaba a la mujer: en algunos pueblos a las mujeres se les prohibía tocar cualquier cosa durante la menstruación y en otros hasta eran expulsadas de las aldeas por ese tiempo. El eco de esas primitivas supersticiones durante mucho tiempo se conservó en la sociedad civilizada. Aún en el siglo pasado, en algunas refinerías de azúcar de Francia a las mujeres que menstruaban las apartaban del trabajo temiendo que en su presencia el azúcar se tornara oscuro. Origen de la Luna: Algunos investigadores creen que la Luna y la Tierra fueron en un tiempo un solo planeta; otros, que la Luna fue atraída dentro del campo de gravedad de la Tierra en algún momento. Otra hipótesis más es que ambos se formaron a la vez del mismo polvo espacial y gases cósmicos. El origen real de la Luna sigue siendo un misterio.

Sin embargo, ya antes de que el primer hombre pisara en la Luna, en 1969, se había establecido que, sin apenas aire y sin agua, era imposible que en la Luna hubiera vida tal como la conocemos. Como la órbita de la luna es elíptica, puede estar a entre 356.398 y 406.698 km de la Tierra. Este patrón orbital también implica que sólo podemos ver una cara de la Luna. Las temperaturas de la superficie oscilan entre -233 °C por la noche y 127 °C al mediodía, cuando la Luna refleja la luz que recibe del Sol sobre la superficie de la Tierra. Una conjunción de Luna-Sol crea el aspecto de luna creciente o nueva y la luna llena se produce cuando ambos están alineados. La Luna se está alejando lentamente de la influencia gravitatoria de la Tierra 3 cm al año, por lo que la duración de nuestro ciclo diario aumenta una cantidad minúscula cada año. La Luna tarda 27,3 días en orbitar alrededor de la Tierra, pero como la Tierra y la Luna giran alrededor del Sol a diferentes velocidades, la Luna tarda en realidad 29 días, 12 horas, 44 minutos y 28 segundos en completar una órbita de la Tierra, de luna nueva a luna nueva.

Es increíble que desde mucho tiempo atrás la luna haya podido influir de manera tal en algo tan íntimo como es la menstruación de la mujer, pero no solo es ese aspecto a provocado innumerables cambios, estudio realizados en diferente lugares del mundo han dado muestra del comportamiento del individuo ante las fases de la luna. Normalmente, conocemos cuatro tipos de fase lunar, que son: Luna Nueva, Cuarto Creciente, Luna Llena y Cuarto Menguante. Los Calendarios Primitivos y la Luna: Los calendarios primitivos eran principalmente calendarios lunares, es decir, los meses del año se contaban por ciclos completos de la Luna, por ejemplo, desde una luna nueva hasta la siguiente luna nueva. Una lunación dura, como promedio, 29 días, 12 horas y 44 minutos. Un año de 12 meses lunares es unos once días más corto que un año solar de 365 días.

Las fases de la luna

Los

cambios de las posiciones relativas de la Tierra, la Luna y el Sol producen las fases lunares. El porcentaje de la superficie lunar iluminada por el Sol que podemos ver desde la Tierra cambia, este ciclo se repite periódicamente cada 29,5 días. Luna nueva:

Cuando la Luna está en conjunción, su lado oscuro mira directamente hacia la Tierra, por lo cual debería resultar invisible. A pesar de esto, es posible observar el disco lunar a causa de la luz solar que la Tierra refleja sobre él. Es la fase propicia para gestar, sembrar la idea en el interior, la esperanza, el deseo o la iniciativa concreta. Es el momento ideal para la meditación y la introspección. Es el mejor tiempo para iniciar nuevos proyectos, para comenzar cualquier tipo de cura depurativa; es la indicada en la agricultura para arar, podar, efectuar injertos, eliminar las hierbas parásitas o aplicar un tratamiento a una planta enferma. Cuarto creciente: Los días que siguen a la Luna nueva, se suceden fases crecientes en las que el porcentaje iluminado de la cara visible de la Luna aumenta progresivamente, hasta llegar a verse iluminado la mitad del hemisferio lunar. A medida que la luna va creciendo en luz, el organismo está más predispuesto a crecer y expandirse. Es el período de la acción. En esta fase aquello que se ha sembrado está en desarrollo, toma impulso, se multiplica. Luna llena: Las fases crecientes continúan aumentando hasta que la Tierra se encuentra entre la Luna y el Sol, lo que permite que desde la Tierra pueda verse iluminado la totalidad del hemisferio lunar Es la fase de culminación y expresión. Los procesos se hallan en su máxima expresión La luna, llena de luz, inquieta los ánimos, desata las emociones y el organismo tiende a alterarse con más facilidad. Estando más expuestos a crisis de ansiedad, stress, depresión, agresividad. Lo más recomendable es mantenerse en quietud aprovechar esta fase lunar para cerrar ciclos, para completar procesos. Para hacer dietas purificantes a nivel físico e interno, que cierren procesos. Cuarto menguante: Son los días que siguen a la Luna llena, las fases menguantes en las que el porcentaje iluminado de la cara visible de la Luna disminuye progresivamente, hasta llegar a verse iluminado la mitad del hemisferio lunar. Las fuerzas y las energías se vuelcan hacia el interior, un tiempo de disminución, es la oportunidad para la reflexión y la introspección,. En esta fase la luna decrece en luz, influye en el cuerpo con la tendencia a desprenderse de todo lo que sobre: se facilita la eliminación de líquidos, grasas y toxinas, es buen periodo para comenzar una dieta de adelgazamiento o una cura de desintoxicación. Y… vuelve a iniciarse el ciclo, las fases menguantes continúan aumentando hasta que una semana más tarde la Luna se encuentra nuevamente entre la Tierra y el Sol y entra una vez más en la fase de Luna nueva.

La influencia de la luna y sus ritmos: La influencia de la luna es observada desde la antigüedad. En la naturaleza, la luna mueve las grandes masas oceánicas de la Tierra, las mareas y el agua en general. Más de 85% del cuerpo humano está compuesto de agua, la Luna influye en el cuerpo y en las emociones. La Luna para la mitología: Es la Diosa Madre, la Reina del Cielo. Expresa el aspecto femenino, contenedor, nutriente, cálido de la persona, el vínculo con lo femenino y la maternidad. En las mujeres rige el útero, el ciclo de menstruación, de gestación y las mamas con que se alimentan los hijos. La luna alimenta la imaginación, los sueños. En el plano anímico: los humores, el instinto y la hipersensibilidad. La luna simboliza el aspecto más inconsciente del ser humano, está ligada a la memoria que guarda el inconsciente, las emociones, sentimientos, hábitos y creencias incorporadas en la niñez y que subyacen en la personalidad. “El Ingeniero Santiago Bakach Sevilla en su edición del Calendario Lunar explica:

Las fases lunares y el cuerpo humano: “* Las fases lunares son en esencia las que determinan el grado de movimiento y turgencia interna de los fluidos (como se indica en el gráfico). En la práctica toda actividad que signifique sobrecarga, daño o herida de cualquier naturaleza al cuerpo deben ser evitadas bajo la influencia de las lunas llena y nueva y, por lo tanto deben practicarse con las lunas creciente y menguante. Contrariamente, toda actividad que represente beneficio a través de plantas medicinales, tratamientos energéticos u otras prácticas médicas en las que no existan efectos secundarios, debe elegirse las fases de luna nueva y luna llena. * El ciclo de las fases lunares marca períodos alternados de actividad (crecimiento) y descanso (conservación), estos momentos deben escogerse de acuerdo al objetivo de la actividad que realizamos. Así, toda actividad cuyo objetivo sea el de lograr la regeneración o un buen crecimiento debe realizarse en los días posteriores a las cuadraturas lunares hasta antes de la luna llena o luna nueva; y toda actividad cuyo objetivo sea lograr la conservación o eliminación definitiva de algo, debe realizarse en los días posteriores de luna nueva y luna llena.

* En todo tratamiento de enfermedades infecciosas y sus posibilidades de contagio debe tenerse especial cuidado durante la luna nueva, pues en esos días es cuando más se multiplican bacterias y otros organismos patológicos. * Los mejores momentos para intervenciones quirúrgicas debe elegirse los días de las "lunas armónicas", sextiles o trinos lunares, de acuerdo al objetivo de la misma. * La fuerza de las fases lunares se encuentran en íntima relación a la distancia de la Luna con la Tierra en un momento determinado. Las lunas con mayor cercanía o fortalecimiento lunar y las lunas a mayor distancia o debilitamiento lunar. * La declinación lunar genera un efecto de alejamiento-acercamiento de la Luna con respecto a una latitud terrestre. Este movimiento da una mayor acción en los procesos metabólicas internos y externos de acuerdo a la latitud geográfica. Así, si la declinación lunar va alejándose de la latitud donde vivimos su acción se manifestará en los procesos internos; si por el contrario la Luna se está acercando su acción dominante se manifestará en los procesos externos. * El paso de la Luna delante cada constelación zodiacal y su elemento asociado influirá energéticamente en cada actividad aportando cualidades particulares en el momento que esta se realice, para ello se debe guiar por la información relacionada con la influencia de las constelaciones en las actividades recomendadas. * En todo proceso de curación se debe observar la fase lunar de nacimiento del paciente pues, durante esos días el paciente tiene mejor disposición para mejorarse. * Toda actividad que se realice en cualquier fase lunar es muy recomendable hacerla con pureza de corazón, amor , pensamiento positivos, con mucho respeto hacia nosotros mismos, la persona o el objeto de nuestro interés. Pues por muy favorable que este el ciclo lunar con la actividad que deseamos desarrollar tendrá una influencia negativa sino tomamos en cuenta esta forma de sentir y actuar. Siempre con Pureza de Corazón y Amor. Las fases lunares y la actividad agrícola. * Las fases lunares determinan el movimiento interno de los fluidos (savia) de las plantas en la práctica toda actividad que represente sobrecarga, daño o herida de cualquier naturaleza (física o energética) a la planta o una de sus partes que deseamos beneficiar, deben ser evitadas bajo el influjo de las lunas llena y nueva y, por lo tanto deben practicarse con las lunas creciente y menguante. Contrariamente, toda actividad que represente alimento, estimulación o apoyo a las plantas a través de riego, abonos, tratamientos energéticos u otras prácticas en las que no existan efectos secundarios de envenenamientos, debe elegirse las fases de Luna llena o Luna nueva según convenga. • Las fases lunares marcan períodos alternados de crecimiento y conservación. Toda actividad cuyo objetivo sea el de lograr la regeneración o un buen crecimiento debe realizarse en los días posteriores a los cuartos de luna hasta antes de la luna llena y luna nueva; y toda actividad cuyo objetivo sea lograr la conservación o eliminación definitiva de algo, deben realizarse en los días posteriores de la influencia de luna nueva y luna llena. • El paso de la Luna delante de las constelaciones zodiacales estimula genéticamente el crecimiento de los distintos órganos de la planta (flor, hoja, raíz, fruto/semilla). Procurar sembrar en los días recomendados de acuerdo al órgano estimulado que desea cosechar. Supersticiones Lunares: Las festividades lunares de la Antigüedad se solían celebrar con música y baile. La música

se asocia desde hace mucho con la Luna. Las danzas sagradas culminaban en ritos orgiásticos o sacrificios para asegurar buenas cosechas, buen tiempo y salud para la comunidad tribal. Al ser la que trae nuevas oportunidades, la luna nueva señala el momento apropiado para mezclar las monedas en el bolsillo mientras te inclinas ante la luna creciente en el firmamento nocturno para que estimule la mejora de tu economía. No dejes la ropa tendida durante la noche. Si la luz de la Luna brilla sobre ella, brilla sobre la ropa de un funeral. Cambiate de casa en Luna Nueva, pues de esta forma te aseguras tener experiencias positivas rápidamente y un nuevo comienzo afortunado. Tocar una moneda de plata, cuando miras la Luna Creciente te traerá buena suerte y fortuna. Los espejos desempeñan un papel destacado en la tradición lunar por sus cualidades reflectoras y se emplean desde hace mucho en la adivinación. En Gran Bretaña, en el siglo XIX, era una costumbre tradicional que las chicas utilizaran un espejo y la luna llena para saber cuánto tiempo tardarían en casarse. Se dice que, 2.500 años antes, las mujeres sabias de Tesalia enseñaron a Pitágoras la adivinación por medio de un espejo. Se considera funesto casarse durante el mes de mayo o durante cualquiera de los cuartos menguante/nueva. Por el contrario, trae buena suerte casarse en junio y durante la fase creciente o de luna llena; sin embargo, no dejes que la luz de la Luna brille sobre tu lecho nupcial o te expondrás a la mala suerte. Un niño nacido durante la luna llena tendrá fortuna durante toda su vida Trae muy buena suerte sostener en brazos a un niño recién nacido a la luz de la luna nueva y dar gracias y orar por una larga vida.

Diosas de la Luna: Muchas civilizaciones antiguas veneraban a la Luna porque veía que influía en la germinación y el crecimiento de las cosechas, que coincidía con el ciclo menstrual femenino medio de 28-30 días y que afectaba al clima, así como su habilidad autorregeneradora en las fases creciente y menguante, apareciendo primero y volviendo a desaparecer. Incluso se consideraba que la fase oscura de la Luna guardaba secretos sobre la muerte y el velo que separa el espíritu de la materia. Sus antiguos fieles la llamaban la «Reina del Cielo» y creían que poseía la clave para entender la sabiduría honda y profunda de los ritmos y los ciclos de la existencia humana y del mundo natural. A fin de encontrar una forma de expresar sus creencias, en un momento en que la estructura del Cosmos todavía era un misterio, recurrieron a arquetipos que personificaban estas creencias en forma de dioses y diosas. Como era importante establecer una diferencia entre las fases de la Luna, cada una de ellas se representaba con una diosa diferente, un privilegio no concedido a ningún otro espíritu celestial. Los griegos, por ejemplo, veneraban a Artemisa en la luna creciente, a Selene, en la luna llena y a Hécate en la luna menguante y nueva. Las diosas de todos los tiempos son en realidad una y la misma: mezclan y reúnen los poderes de la Luna para tejer una forma inmortal. Las diosas de la Luna fueron absorbidas por otras culturas a medida que evolucionó la civilización. La Artemisa griega se convirtió en la Diana romana, por ejemplo, y Maat, diosa de la verdad y consorte del dios lunar egipcio Tot, era conocida por los gnósticos con el nombre de Sofía. El culto a la diosa egipcia Isis, la «Diosa Madre», se extendió por los imperios griego y romano y duró hasta bien entrada la era cristiana. Diana era una diosa romana triple: Virgen, madre de la naturaleza y cazadora. Diana

cazadora constituye el aspecto destructor de la Luna. cuando fue absorbido por el culto a la virgen María, quien también era una señora de la Luna. Era tan fuerte la compulsión a honrar a la diosa Luna y mantener su benevolencia que se celebraban ritos y sacrificios con la esperanza de que si la apaciguaban, sería comprensiva con las necesidades de alimentos, agua y regeneración que tenían los seres humanos. Todas las fases de la Luna guardan secretos acerca del ciclo de la vida. Venerando a la diosa Luna apropiada, los seres humanos podían contar con su influencia (y tratar de domesticarla).

Diosas de la Luna La diosa Luna también recibe el nombre de «triple diosa» por sus tres fases: Nueva, Llena y Menguante/Oscura. Esta trinidad lunar representa a la doncella, a la madre y a la anciana. También se la conoce como la «Gran Madre» o «Magna Dei». Y existen asimismo dioses de la Luna: Uno es Tot, el dios egipcio de la Luna y otro es Sin, el dios Sumerio. LAS DIOSAS LUNARES:

Artemisa, griega: Lleva una aljaba llena de flechas y un arco; la acompañan leonas, ciervos y pájaros: Se encarga de los Partos. Selene, griega: Tiene alas y una cinta en la cabeza; conduce un carro tirado por caballos blancos:Te ayuda en la Magia y a desarrollar más tu intuición. Diana, romana: Lleva un arco y una flecha y la acompañan un perro de caza y un venado: fertilidad y naturaleza. Hécate, griega: Una diosa con tres cabezas; por lo general, se la representa al lado de un caballo, un perro de caza y leonas: magia, brujería, muerte y averno (infierno) Sofía de Frigia: Representación femenina del espíritu santo: conocimiento divino y sabiduría. Arianrhod, celta: Lleva túnicas plateadas y sostiene una rueda de plata: Adivinación. Ceridwen, diosa celta de la luna nueva: Lleva un caldero y una cerda blanca: hierbas y granos, adivinación, hechizos, muerte. Isis (arriba), egipcia: Lleva un tocado en forma de luna creciente que sirve de sostén a una luna llena: magia, fertilidad, regeneración. Cibeles, frigia: Diosa de la luna nueva; lleva un tocado en forma de luna creciente, con granadas

y abejas que transportan huesos de dedos: naturaleza, fieras salvajes y nos enseña a distinguir la magia blanca, de la magia negra.

EL ANGEL DE LA LUNA: Como Gran Madre, la Luna tiene una influencia considerable sobre sus «hijos» humanos, al igual que los ángeles. El ángel vinculado a la Luna es Gabriel, el que todo lo cura. Se suele aludir a Gabriel como «él», aunque en realidad, los ángeles no son masculinos ni femeninos. Es el Ángel de la Anunciación, el que visitó a la virgen María (que es una señora de la Luna) y su visita se describe en un himno: «El ángel Gabriel bajó del cielo con las alas como nieve caída y los ojos como llamas». A veces se representa con azucenas y está íntimamente relacionado con la curación y el alivio del sufrimiento en la Tierra. Gabriel también nos ayuda a descubir nuestra misión interna, nuestro plan divino. En la rueda lunar, Gabriel se sitúa en el oeste, en la posición de la luna menguante. La dirección oeste se representa con el elemento agua. Si buscas la curación o vas ha realizar ceremonias de curación para otros, situate de cara al oeste durante la luna menguante (sobre todo, si está en un signo de agua) para recitar las plegarias de curación. También deberás situarte mirando al oeste para hacer una ofrenda de agua. Una ofrenda de agua puede ser cualquier cosa que se obtenga de las aguas de la Tierra, como los berros, una piedra de río o algas marinas. Puede que prefieras buscar una valva de molusco u otra más grande y llenarla con agua de manantial. Para las ceremonias u oraciones que te apetezca

celebrar. El poder de las llamas espirituales de Gabriel puede llenar cualquier espacio en el que entre. Ejerce su dominio sobre todas las enfermedades y , por lo tanto, posee grandes poderes curativos.

Animales simbólicos de la Luna ALGUNOS ANIMALES TIENEN profundos vínculos con la Luna y se han convertido en sus símbolos. Aparte de los siguientes, cualquier animal que tenga que ver con el agua, como la rana, el sapo o el pez, guardará relación con la Luna en alguna medida.

EL LOBO: El lobo se relaciona con los aspectos psíquicos de la tradición lunar y con los aullidos a la luna llena. Es posible que las leyendas sobre gente que se transforma en hombre lobo durante la luna llena tengan una cierta base real. Los síntomas de un extraño estado médico llamado licantropía, en el que el paciente cree ser un lobo, parecen desencadenarse por la luna llena y ésta podría ser la base de las leyendas de los hombres lobo.

LA LIEBRE: Se han encontrado imágenes pictóricas de liebres en relieves asirios y en el antiguo Egipto. El mito de la «liebre en la Luna» es muy conocido en Extremo Oriente, África, Sudamérica y Europa. La liebre representa los ciclos lunares: de nueva a llena y de menguante a nueva; de la concepción a la gestación; del crecimiento al declive y la muerte. Asociada desde hace mucho tiempo a la fertilidad y a su ciclo, las culturas antiguas consideraban a la liebre andrógina (con atributos masculinos y femeninos). Esta característica era representativa de cómo percibían a la Luna: la luna creciente era el aspecto masculino y la luna menguante, el aspecto femenino. La diosa anglosajona de la fertilidad, Eostre, se representaba con cabeza de liebre y en otras

muchas culturas -entre ellas, las culturas celta, india, budista, china y amerindia- las deidades lunares se ilustraban llevando una liebre. El héroe amerindio Manabazho, representado como una liebre, es un importante símbolo de la creación. Utiliza los remedios de la liebre cuando lleves a cabo ritos, oraciones o deseos de fertilidad, cuando busques dicha e iluminación o cuando necesites resultados rápidos.

LA RANA La rana es la que trae las lluvias y también es un símbolo de fertilidad asociado a la Luna. Heket, la diosa rana de los antiguos egipcios, tenía el potencial de las aguas fértiles que simbolizan el nacimiento y la fertilidad, y la rana verde, que habitaba en la región del Nilo, era venerada como portadora de vida nueva y de fructificación. La rana también es un animal totémico de los indios norteamericanos, para quienes simboliza el elemento agua, un poderoso purificador. El sagrado Manitú («gran espíritu») del pueblo algonquino, vive en la Luna e influye en las aguas del mundo y en el clima. El clima, como todo lo que se asocia con el agua, está relacionado con la Luna por la fuerte influencia que ésta ejerce sobre él. Utiliza los remedios de la rana cuando quieras pasar de una situación a otra sin obstáculos, cuando trabaje en la purificación de las emociones y durante las plegarias de fertilidad.

EL GATO: Es difícil llegar a conocer a un gato, ya que mantiene una cierta distancia y misterio para nosotros. El gato se relaciona con la diosa griega Artemisa, conocida en la mitología romana como Diana. Los antiguos egipcios adoraban a Bast, una diosa con cabeza de gato; herir o matar a un gato en Egipto se castigaba con la muerte porque se tenía en gran estima a estos animales. El gato se conoce desde hace mucho tiempo como un «espíritu familiar» de los practicantes de magia, sobre todo de los que practican la magia lunar. También en otras culturas la mitología del gato se considera importante. Por ejemplo, Shosti, la diosa hindú del parto, se representa a lomos de un gato, y Freya, la diosa nórdica del amor y la fertilidad, se muestra conduciendo un carro tirado por gatos. El gato, como símbolo lunar, representa su misterio. Durante la era cristiana, el gato negro ha estado relegado al campo de la brujería y la hechicería, en lugar de considerarlo representante de las enseñanzas de la Luna. Utiliza los remedios del gato cuando quieras mejorar tus capacidades mentales o durante las ceremonias de protección psíquica. Convoca a la diosa Bast cuando estes buscando a un gato perdido, ya que posee mucha influencia en las criaturas felinas.

LA VACA Animal sagrado de Isis, la diosa madre del antiguo Egipto, la vaca representa la fertilidad. Es también la que da la leche que nutre a los hombres y a su ternero. La leche, como el agua, se asocia a los dones de la Luna. La diosa Luna se veneraba en el antiguo Egipto en forma de vaca de oro de largos cuernos. En el solsticio de invierno, Isis, coronada como vaca-luna, daba siete vueltas alrededor del ataúd de su consorte, Osiris. Esto simbolizaba las siete rotaciones de la Luna desde el invierno hasta el verano, lo que significaba la vuelta de la rueda a una nueva vida y la resurrección del espíritu universal. En las tradiciones de los amerindios, las personas del clan del búfalo eran quienes tejían las oraciones. Usa los remedios bovinos o proca la ayuda de la vaca sagrada o utiliza objetos que simbolicen a la vaca cuando recites las oraciones, cuando pidas bendiciones y cuando busques la iluminación espiritual.

LA LECHUZA Las lechuzas representan la sabiduría y cuando más se escucha su canto es en las noches de luna llena de los meses de invierno, permaneciendo en silencio durante la mayor parte del resto del año. Vinculada a Hécate, diosa de la luna nueva, es significativo que a menudo se haga notar justo antes de la muerte de alguien cercano. Más que una intención diabólica, el sonido del canto de la lechuza o la aparición súbita e inusitada de una lechuza, debe contemplarse como la reafirmación de que el espíritu de la Luna llama para ayudar al alma a volver a su verdadero hogar. La lechuza también puede representar temores profundos, el inconsciente y el miedo a la oscuridad. Oír el canto de una lechuza cerca puede no significar muerte, sino una llamada de atención para entender algo sobre ti mismo que reside en lo más profundo de tu mente. Busca la sabiduría de los remedios de la lechuza cuando intentes aumentar tu conexión con el maestro interior o cuando estés en una crisis espiritual o de cambio de vida.

OTROS ANIMALES EMBLEMÁTICOS Otros animales que tienen relación con la Luna son el sapo, el león, el oso y el zorro. En la mitología china, un sapo de tres patas representa el yin, o aspecto femenino de la vida, y la explicación que se daba tradicionalmente a un eclipse lunar era que el sapo se había tragado la Luna. Algunas tribus indias norteamericanas asocian el sapo con la fase oscura del ciclo lunar, en otras palabras, el período de tiempo más silencioso y profundo durante el que es posible enseñar y encontrar la sabiduría. El león representa desde la Antigüedad los poderes del Sol, pero se dice que la leona representa los poderes de la Luna y varias culturas han pintado leonas con las deidades lunares. El oso está vinculado a la diosa lunar Diana: Como es uno de los grandes animales chamánicos, del que se dice que es el responsable de enseñar el camino de la medicina sagrada, no es de extrañar que se relacione con las enseñanzas de la sabiduría de la Luna. El zorro, famoso por su astucia y habilidad para cambiar de forma, es conocido en Norteamérica y Japón como el portador de la lluvia. Como tal, se asocia con las influencias atmosféricas que ejerce la Luna en el clima. Conviene llevar animales simbólicos de la Luna a modo de amuletos o talismanes, a ser posible de plata, el metal de la Luna. Los sueños relacionados con cualquiera de estos animales bien podrían significar la inminencia de un cambio importante o una época de mayor fertilidad (como la ovulación), un nacimiento, la muerte de lo viejo o un tiempo para aprender y crecer. RECUERDA: ESTO ES FUNDAMENTAL Toda actividad relacionada con los Ciclos Lunares, debe realizarse con Amor y respeto a todos los seres humanos, a las plantas, a los animales, a la naturaleza, a los elementales, etc, etc, etc.. Si realiza un trabajo, desanimado, con pensamientos negativos, enfermo, bajo el efecto del alcohol u otra droga, logrará resultados nefastos, aún cuando realices la actividad con la influencia de una fase luna favorable.

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