Mipe 2.pptx

  • Uploaded by: VD S Antonio
  • 0
  • 0
  • February 2021
  • PDF

This document was uploaded by user and they confirmed that they have the permission to share it. If you are author or own the copyright of this book, please report to us by using this DMCA report form. Report DMCA


Overview

Download & View Mipe 2.pptx as PDF for free.

More details

  • Words: 2,559
  • Pages: 27
Loading documents preview...
Universidad Veracruzana Facultad de Ciencias Biológicas y Agropecuarias “Manejo e Integrado de Plagas y Enfermedades del cultivo de Sandía (Citrullus lanatus). Experiencia Educativa:

Manejo e Integrado de Plagas y Enfermedades. Académico: Rafael Antonio Verdejo Lara. Nombre del alumno:

Saúl Antonio Vázquez Díaz

Carrera: Agronomía

Periodo: 4 Mayo / 2019

La sandía (Citrullus lanatus (Thunb.) Matsum. et Nakai(Thunb.) Matsum. et Nakai.).

Mayo/2019

Taxonomía. Nombre Científico: Reino: División: Clase: Subclase: Orden: Familia: Subfamilia: Tribu:

Subtribu: Género: Especie:

Citrullus lanatus (Thunb.) Matsum. & Nakai

Origen y clasificación La sandía (Citrullus lanatus (Thunb.) Matsum. et Nakai.), es una planta herbácea monoica cuyo origen se presume en África, donde aún hoy crece en forma silvestres. Variedades de sandías triploides no desarrollan semillas, sólo rudimentos seminales que son digeribles. Actualmente Asia es el principal continente productor de sandías, con más del 80% de la producción mundial. África, Europa y Norteamérica tienen producciones destacables. China es el principal país productor.

Tipos de sandías

Se clasifican por diferentes características agronómicas, como el color de la cáscara, tamaño del fruto, forma, sabor, etc. La fruta generalmente presenta una forma redondeada o alargada, con diámetros que pueden alcanzar los 30 cm, una gama de colores en la piel que abarca la mayoría de tonos verdosos y un característico color rojo, que puede ser rosado, anaranjado o amarillo, en su pulpa.

Izquierda: Sandía pulpa amarilla. Derecha: Sandía pulpa rosada.

Descripción morfológica, fisiológica del crecimiento y la reproducción Es una especie anual, monoica, herbácea, sin tronco, de tallos o guías tiernas, blandos, flexibles, rastreros que pueden alcanzar 4 a 6 metros de largo, provistos de zarcillos bífidos o trífidos, por medio de los cuales puede tener hábito trepador, su fruto es climatérico, corresponde a un pepónide (falsa baya) con gran contenido de agua mayor a un 90% y sabor dulce.

En la sandía, las hojas son pecioladas y partidas, se presentan divididas en 3 a 5 lóbulos, el limbo con haz o cara superior suave al tacto y, el envés áspero y con la nervadura pronunciada. La nervadura principal se ramifica en nervios secundarios que se subdividen para dirigirse a los últimos segmentos de la hoja, imitando la palma de la mano.

Es una planta monoica, en la que las flores femeninas no aparecen, como en el caso del melón, en ramificaciones alejadas de la base. La presencia de un gen recesivo (a) proporciona plantas andromonoicas. Las corolas son amarrillas, y la polinización es entomófila. Una planta monoica es aquella que contiene a la vez unidades reproductivas (flores, conos o unidades equivalentes) masculinas (que tienen los estambres, órganos masculinos generadores del polen) y femeninas (que tienen gineceo, órgano femenino generador de los óvulos). Femenina / Masculina

Para tratar de soslayar esta problemática, con síntomas externos de madurez de los frutos de sandía, se suelen señalar los siguientes: el zarcillo, situado junto al fruto debe de estar marchito; el pedúnculo del fruto debe de estar tierno; la parte basal de la pepónide debe estar amarillenta; la epidermis del fruto adquiere un aspecto liso, sin observarse, apenas, la capa pruínica que lo recubre; el golpeteo ligero a la pepónide produce un sonido sordo y especial; si se raya la corteza, esta se separa con facilidad.

Adaptabilidad Para conseguir una buena germinación, el mínimo térmico necesario se establece en 15,5 °C y el óptimo entre 21 y 38 °C. El intervalo térmico óptimo para el crecimiento entre 21 y 30 °C, mientras que la temperatura mínima y máxima de desarrollo vegetativo se establece en 18 y 35 °C respectivamente. La floración, el cuajado y la maduración de los frutos exigen temperaturas superiores a 18 °C. La floración de la sandía requiere entre 18 y 25 °C, temperaturas más bajas, pueden interferir negativamente en la polinización y cuajado de frutos, y éstos, aunque se desarrollen, pueden aparecer deformados y/o ahuecados.

Prefieren terrenos de textura media o limoarenosa (crece satisfactoriamente con pH comprendidos entre 5,0 y 6,8).

Valor nutricional Cultivo de amplia difusión en el país y de consumo generalmente crudo como postre, resulta una fruta muy refrescante que aporta muy pocas calorías, algunas vitaminas y minerales, compuesta en más de un 93% de agua, la hacen una fruta muy hidratante propia de la temporada de verano.

Plagas en sandía Mosca de la almaciguera, Delia o Hylemia. Larva de díptero que afecta semillas en germinación y plántulas, penetrando en la zona del cuello. En la confección de plantines se debe prevenir su ataque usando sustrato desinfectado o fumigado.

Ejemplar adulto de mosca de la almaciguera

Gusanos cortadores, Agrotis spp. Que atacan en primavera. Se alimentándose por la noche y se entierran en el suelo durante el día. Si ataca a sandía lo hace en los primeros días después del trasplante, cortando plantas a nivel de cuello y hojas más cercanas al suelo, cada larva puede dañar total o parcialmente tres o cuatro plantas en la hilera. A menudo los ataques más intensos se producen cuando el potrero viene de una empastada de fabácea (leguminosas), el suelo es pesado o tuvo una densa población de malezas.

Control; Aplicaciones de control dirigidas a la base de la planta, en caso de emplear cebo. El control es más efectivo si el suelo tiene una humedad adecuada. El uso de Bacillus thuringensis. Temperaturas superiores a 30 ºC y humedades relativas altas disminuyen su actividad.

Cara oles y babosas, Helix sp., Limax sp., Son imales de ambiente húmedo que durante el día permanecen escondidos en la tierra. No len sino en tiempo nuboso y húmedo en busca de comida, pero siempre de noche. Su acti dad se ve favorecida por condiciones de alta humedad del suelo y del aire y te eraturas entre 15º a 20 ºC, por suelos con alto contenido de materia orgánica y re uos en superficie y praderas en las cercanías. Destruyen las plántulas, cotiledones y ho s, llegando a causar su muerte. Un individuo puede llegar a comer hasta la mitad de su p pio peso en una sola noche.

izquierda. Uso de cebo químico comercial. Derecha. Cebo preparado por el agricultor. Control; Las formas de control de estas plagas incluyen métodos tendientes a sus deshidratación, ya sea, cambiando el hábitat o por medio de compuestos químicos o sustancias de uso doméstico, como sal, levadura, cerveza. mbién se puede utilizar cebos en base a metaldehído.

osca minadora, Liriomyza spp., Las hembras depositan sus huevos en forma aislada bajo la epidermis de las hojas. A los pocos días nace una pequeña larvita que comienza a alimentarse cerca de las nervaduras de las hojas realizando galerías, las cuales van aumentando de tamaño a medida que la larva crece.

Adulto de Liriomyza spp.

El principal daño que causan; reduce la capacidad de hacer fotosíntesis de las plantas y las hojas afectadas mueren prematuramente. Si el ataque es severo las plantas se marchitan y pueden perder la mayor parte del follaje. Si el ataque ocurre con fruta cuajada, la defoliación puede disminuir el rendimiento.

Control; El uso de trampas adhesivas amarillas son una buena herramienta para hacer el monitoreo. El plaguicida de ingrediente activo ciromazina, tiene bajo impacto sobre abejas adultas. También se puede usar abamectina, acaricida e insecticida natural, de acción traslaminar y sistema localizada

Trips, Frankliniella occidentalis y Thrips tabaco

El daño al follaje se manifiesta inicialmente como pequeñas manchas decoloradas que pueden alcanzar a todo el limbo de la hoja. En la fruta se observa inicialmente una pérdida de color y al crecer la fruta se produce un russet. El russet es un fenómeno irreversible, que representa un cambio importante del aspecto de la piel de la fruta, que causa una pérdida parcial de su brillo por falta de la capa de cera; la cutícula se quiebra y endurece, separándose en escamas, perdiendo su efecto protector; la epidermis forma suberina o corcho Control; Un manejo que permite minimizar la incidencia de esta plaga, es disponer de hospederos alternativos aledaños al sandial, como zarzamoras u otros. En la medida que sea posible, con poda de rebaje, lo que permite reducir el área de dispersión de la plaga por el viento.

Mosquita blanca, Trialeurodes vaporariorum West., El daño directo producido por esta especie es por succión de savia, durante la cual inyecta toxinas, lo que en altas infestaciones puede provocar debilitamiento de la planta, detención del crecimiento, deshidratación y disminución del rendimiento. Estas mismas altas poblaciones producen una gran cantidad de mielecilla sobre la que luego se desarrolla el hongo Capnodium sp. causante de la fumagina, que cubre hojas y frutos, provocando una disminución de la calidad de la cosecha, costos por limpieza de frutos y dificultad en la penetración de los productos fitosanitarios Control; Se deben usar trampas amarillas pegajosas para monitorearla. El control biológico puede ser realizado principlamente por Encarsia formosa, hymenóptero, parasitoide que ataca cualquier estado ninfal, depositando sus huevos dentro de las ninfas. Entre los predatores se ubican las chinitas.

Arañita, Tetranychus spp., Se alimentan sólo de hojas, hojas tiernas y jóvenes, pero completamente desarrolladas, desde donde succionan el contenido de las células epidérmicas, producto de esto, la hoja adquiere una apariencia deslustrada, provocan una decoloración intervenal de la lámina, deformación de los tejidos y su deshidratación que puede llevar a una defoliación, disminuyendo la capacidad fotosintética y por ende el crecimiento de frutos y otros organos de la planta. Control; Las arañitas rojas poseen enemigos naturales, de ellos el más importante es: Stethorus histrio, una chinita pequeña de color negro. Oligota pygmaea, pequeño y de color negro. Chrysoperla sp., un depredador de pulgones, mosquitas blancas, trips y tetraníquidos.

El uso de azufre permite mantener a discreción el problema, en caso de ataque severo debe aplicarse acaricida Ejemplares de Tetranychus spp.

Enfermedades fúngicas de importancia en el cultivo de la sandia Enfermedades de semillero  



Fallos en la nascencia, irregularidad en el desarrollo y marchitez de plantulas de sandía por Acremonium curcubitacearum





Utilización de semillas de calidad con un buen poder germinativo. No realizar siembras muy densas ni situar los semilleros en lugares mal iluminados ya que inducen el ahilamiento. Utilizar sustratos sueltos y con un buen drenaje, evitando la formación de costa que dificultaría la nascencia. No reutilizar las bandejas ni el sustrato sin una desinsectación previa. Asimismo, lavar y desinfectar periódicamente los útiles del trabajo. Procurar que el agua llegue al semillero mediante una tubería directa para evitar la introducción del patógeno.

Fusariosis o marchitez vascular causada por Furarium oxysporum f. sp. Niveum

Primeros síntomas de fusariosis en plantas de sandía: aparición de estrías necróticas en ramas y presencia de exudados de color pardo oscuro.

Marchitez de ramas de sandía afectada de fusariosis.

Necrosis de vasos en la planta de sandía atacada por Fusarium oxysporum f. sp. niveum.

Control; La aplicación de fungicidas contra la marchitez causada por F. oxysporum f. sp niveum no es eficaz, por lo que tradicionalmente, las medidas de control están restringidas al uso de material de plantación o semillas sanas y la plantación de cultivos vares resistentes. Asimismo se recomienda las rotaciones amplias o la siembra terrenos donde nunca antes se ha cultivado sandía ya que el monocultivo tiende a elevar la cantidad de inóculo en el suelo.

Chancro gomoso del tallo y necrosis foliares causadas por Didymella bryonice

Hoja de sandía en la que se puede observar la extensión de la lesiones causadas por Didymella bryoniae.

Chancro gomoso del tallo causado por Didymella bryoniae en una plantula de sandía.

Control; Es aconsejable establecer rotaciones en las que las parcelas afectadas se mantengan un mínimo de dos años sin cultivo de curcubitaceas. Hojas de sandía con lesiones incipientes de Didymella bryoniae.

Respecto al control químico, existen diferentes materias activas de acción protectiva efectivas frente a este patógeno como mancozeb, metiram, propined, clortalonil, etc. También se dispone fungicidas con capacidad de penetración en los tejidos vegetales como benomilo, metil-tiofanato, iprodiona, procimidoma, azoxystrobin, kresoxim-metil, etc

Necrosis foliares causadas por Alternaría cucumerina.

Necrosis foliares en hojas de sandía causadas por Alternaria cucumerina. Control; al igual que para D. bryoniace, es necesario evitar la condensación de agua sobre las plantas. Como rotación es recomendable mantener las parcelas afectadas un mínimo de dos años sin cultivo de cucurbitáceas.

Las materias activa recomendadas son las mismas que las indicadas D. bryoniae, excepto los bencimidazoles (benomilo y metil-tiofanato) que carecen de acción sobre A. cucumerina.

Oidio Control; Para el control de esta enfermedad es importante evitar los cultivos demasiado densos así como las dosis excesivas de abonado nitrogenado. Se pueden utilizar fungicidas protectivos pertenecientes a diferentes a diferentes grupos, como dinocap, quinometionato, clortalonil y azufre.

Ataque de oidio en planta de sandía.

Entre los fungicidas penetrantes podemos destacar varios grupos que actúan inhibiendo la síntesis del ergosterol como los triazoles (miclobutanil, ciproconazol, triadimefon, ect.), las pirimidinas (fenarimol, nuarimol) y la triforina. Como grupos con diferente modo de acción están las estrobirulinas (kresoxim-metil, azoxystrobin), los benzimidazoles (benomilo, metil-tiofanato) y otros como pirazofos y tridemorf.

Manejo de malezas en el cultivo de sandía Se define como maleza o mala hierba, a toda planta que está presente, que crece donde no es deseada. Las malezas se caracterizan por competir con los cultivos por agua, nutrientes y luz; además pueden ser hospederos de plagas y enfermedades que producen un daño económico al reducir la calidad y/o la cantidad de fruta cosechada o porque dificultan las labores propias del manejo del sandial.

Izquierda. Malezas entre hilera. Derecha. Malezas en hoyo de plantación.

Período crítico de competencia Las características más importantes de las plantas cultivadas, asociadas con la habilidad competitiva respecto a las malezas, son en orden de prioridad: el índice de área foliar y la altura; aunque también se ha observado que tienen efecto la forma y el tamaño de la hoja.

El período del ciclo del cultivo en el cual la presencia de malezas reduce el rendimiento se denomina período crítico de competencia y refleja la etapa del ciclo del cultivo que debería permanecer libre de malezas para que no se produzcan pérdidas significativas de rendimiento.

Como regla general, los períodos críticos de competencia suelen extenderse desde un tercio hasta la mitad del ciclo de los cultivos. Para la sandía de cultivo forzado, se hace más determinante el tener baja presión de malezas en su período crítico de competencia

Alelopatía, malezas y sandía

El fenómeno de la alelopatía fue definido por Molisch en 1937, como el proceso por el cual una planta desprende al medio uno o varios compuestos químicos que inhiben el crecimiento de otra planta que vive en el mismo hábitat o en un hábitat cercano.

Las especies de malezas más frecuentes en la zona de cultivo de sandía, en la región, son: ortiga, Urtica urens; chufa, Cyperus esculentus y Cyperus rotundus; pasto bermuda Cynodon dactylon; maicillo, Sorghum halepense; duraznillo, Polygonum persicaria; bledo, Amaranthus spp.; malva, Malva sp.; chamico, Datura sp.

Bibliografía Abarca, P. (2017). inia. Obtenido de manual del manejo agronómico para el cultivo de sandía: http://www.inia.cl/wpcontent/uploads/ManualesdeProduccion/02%20Manual%20Sandia.pdf

Abarca, P. (2017). inia. Obtenido de manual de manejo agronómico para el cultivo de sandía: http://www.inia.cl/wpcontent/uploads/ManualesdeProduccion/02%20Manual%20Sandia.pdf Maroto Borrego, J. V. (2002). Bótanica (taxonomía fisiología) y adaptabilidad de la sandía. En el cultivo de sandía (págs. 33-37). España: Mundi-Prensa. Maroto Borrego, J. V. (2002). Bótanica (taxonomía y sisiología) y adaptabilidad de la sandía. En el cultvo de sandía (págs. 39-40). España: Mundi-Prensa. Maroto Borrego, J. V. (2002). Enfermedades fúngicas de importancia en el cultivo de la sandía. En el cultivo de sandía (págs. 217-228). España: Mundi-Prensa.

Related Documents

Mipe 2.pptx
February 2021 0

More Documents from "VD S Antonio"