Historia Del Uruguay 4.pdf

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Ti

i^

Jrí^riá,

HISTORIA DEL URUGUAY

EDUARDO ACEVEDO

HISTORIA DEL URUGUAY

TOMO

ÍV

ABARCA LOS GOBIERNOS DE GIRÓ, FLORES Y PEREIRA DESDE 1852 HASTA 1860

MONTEVIDEO Imprenta Nacional 1922

1105984

r

I

GOBIERNO DE GIRÓ.— 1852-1855

Digitized by the Internet Archive in

2010 with funding from University of Toronto

http://www.archive.org/details/manualdehistoria04acev

CAPÍTULO

I

Movimiento político La lucha Cuando elecciones

presidencial.

general Garzón entraba en agonía, tenían lugar las generales de diputados y senadores, de acuerdo con

el

programa de estricta igualdad que aquel procer había pro;iu puesto y hecho aceptar a los grandes partidos en lucha. Según el doctor Manuel Herrera y Obes, los blancas y los colorados se hablan comprometido a votar listas comunes, y hamuerte del general Garzón, República, no hubiera dado consideraran desligados del compro-

brían cumplido su coniipromiso

candidato único a

la

lufar a que los primeros se

obteniendo

miso,

si

presidencia de

así

la

la

una pequeña mayoría de dos votos en

la

Asamblea. Otro testigo de la época, don Juan José Soto, rectificando un del senador brasileño Montezuma acerca de la actua-

discurso ción

d?

de Oribe en

las

elecciones

de

1851,

escribía

a

mediados

1853:

ganó las elecque Oribe se encuenti-e al fr^>nte del partido que dirige los negocios de la República Oriental. Las elecciones que dieron por resultado la Legislatura que hoiy está funcionando, se hicieron con el concurso de todos los orientales y no fueron obra de un solo partido. Una comisión compuesta de hombres de adentro y de afuera, formó en combinación las listas, y no puede

"No

es exacto que el partido de Orihe fué el que

ciones, ni

con razón decirse que su resultaido fuese el triunfo de un partido. El general Oribe murió civilmente el 8 de octubre de 1851, pues aunque no recayese entonces sobre él ninguna condenación judi. cial, sintió la reiprobación de todos los orientales, que en aquel

mismo

día se separaron de él y desde entonces

ha sido constan-

temente excluido de los negocios." Era de práctica que los senadores y diputados fueran electos con prescindencia de vinculaciones locales. Pero los primates de 1851 resolvieron desde

el

comienzo de sus trabajos que

la elec-

HISTORIA DEL UEUGUAY

ción

por

recayera en ciudadanos de los departamentos respectivos o menO'S muy vinculados a ellos.

lo

Ha dicho también el doctor Herrera y Obes que la mayoría blanca no era homogénea y que cuatro de sus miembros habían expresado la resolución de adherirse a una candidatura colorada, siempre que los colorados se pusieran de acuerdo en su proclamación. ciertamente un candidato colorado: el propio doctor Herrera y Obes, a quien apoyaban Urquiza y el GoDieruo Brasileño, según asi resulta de la correspíjudencia entre el candidato y el doctor Lamas, publicada por el doctor Palomeque. "El día que loe médicos desahuciaron al general Garzón me dijo Urescribía Herrera a Lamas en diciembre de 1851 debe reemque usted opinión es quiza: "¿Y qué hacemos? Mi

Había

?;Ianuel





sin esto yo lo tenía pensado"; y entró en sus razones. usted se hará cargo que rechacé la proposición como una herejía. Vio después al conde (Caxías) y hablando del mismo

plazarlo;

Ya

asunto, le dijo: "o debe ser Herrera o Giró: éste no lo puede ni 19 debe, porque tiene el pecado muy grave para nosotras de ha-

candidato de don Manuel Oribe y haber estado con último momento. Preciso es que lo sea Herrera, aun cuando él no lo quiera. El conde afirmó su opinión. La misma Conversación tuvo con Pontes y fué después de ese acuerdo que ber sido

el

hasta

el

él

é)

empezó a vulgarizar la idea, apoyándola decididamente." "Hablamos con el seiior Paulino (Soarez de Lima, Ministre de

Negocios Extranjeros 'del Brasil) acerca de a Herrera



Lamas

encontramos de acuerdo en iiáato

el



la

escribía

futura

a

los

pocos

presidencia;

momento mismo. Es

usted

días

y

nos

el

can-

que debe sostenerse y el señor Honorio (Carneiro Leao, sostendrá esa candidatura Brasil en Montevideo)

Ministro del con

todos sus medios."



"Anoche volvía a escribir Lamas a Herrera en enero de 1852 tuve una larga, muy larga conferencia con el señor Paulino y los Ministros de Hacienda y Guerra, que ocupamos casi totalmente de la candidatura de usted. Cuanto aquí podía hacerse, queda



hecho. El Brasil lo sostendrá a toute outrance, sin retroceder ni ante la la

Idea de aplazar la reunión de las Cámaras, con pretexto de guerra, etc., hasta el triunfo de Urquiza, si como es de es-

perar ese jefe se conserva leal en las opiniones que tan enérgica-

mente ha manitestado y su triunfo le da influencia material. Est&í. son las mismas ideas, tal vez un poo extremadas, en que

GOBIEBXO DE GIRO

quedaba

el

señor Carneiro Leao. Este caballero queda con carta La candidatura de usted

blanca para hacer en este sentida. es

conservación de

la

tiata'dos. son

de

.

.

alianza, la alianza son los tratados,

la

los

existencia del país."

la



agregaba Lamas a mediados del mismo mes "Este Gobierno aprueba la idea no sólo de la suspensión, sino de enero



de

disolución

la

la

Asamblea

Asamblea,

Esta

electa.

como

tal

está compuesta, no puede dejar de producir la guerra civil o la

guerra extranjera, o

dos azotes a la vez. Miran, pues, su diso-

los

como el medio único de impedir esa desgracia o de hacermenos intensa y durable. No tienen todavía los blancos los me-

lución la

dios

físicos

morales del gobierno del país y la alianza tiene le da su triunfo y la reunión y colocación de

y

loda la fuerza que

sus fuerzas."

No

podía,

pues,

más formidable

ser

presión de la alianza

la

Pero

a favor de la candidatura Herrera.

los colorados

no pudie-

ron iponerse de acuerdo, ni acerca de Herrera, ni acerca de nin-

gún otro candidato de su mismo credo

político.

legisladores blancos y tres legisladores colorados

A rancho, Sayago

y Gayoso



Y



entonces los los

unieron en torno de

se

señores

la

candi-

datura de don Juan Francisco Giró.

Apertiu'a de las sesiones ordinarías. El

siones

15

de febrero de

ordinarias

de

Senado don Bernardo yoría blanca,

y la

la

1852 tuvo lugar la apertura de las seAsamblea, oicupando la presidencia del

P.

miembro descollante de la maCámara de Diputados don

Berro,

presádencia de la

Jdsé María Muñoz, miembro descollante de pieSitigiados por el voto de sus colegas de

Don Joaquín Suárez. que todavía

se

la

minoría colorada,

ambos bandos.

conservaba

al

frente

del

mensaje de práctica. "La guerra que la República soportó por más de quince años, terminó al fin, dejando sólidas decía en ese documento f.Trantías de que la paz, tan costosamente adquirida, no volverá a ser alterada"... Durante ese largo período en que ha

gobierno, leyó

el





-

actuado la acción i.ido

disolvente

de

"su nacionalidad", contra

el

Rosas,

la

programa

República del

ha

soste-

dictador argen-

que era de "sometimiento pasivo y absoluto". Eliminado Rosas mediante el esfuerzo de la República y de sus aliados los Gobiernos de Entre Ríos, Corrientes y Brasil, el Uru-

tino,

HISTORIA DEL URUGUAY

10

guay, «que

de

intereses

por ée

tiempo fué

tanto

por

presa de

discordias

las

hoy ve a todos sus hijos reunidos en torno de

tinas,

patria

la

decididos

y

curar

a

solos

heridas

propias

sus

intes-

los

el olvido simcero de un pasado desgreciado y el ejeTcicio una abnegación generosa"... Ha tratado el Gohierno con

sus

"palabras y sus actos de llevar La confianza y el amor a Toca ahora obrar a la Legislatura...

todos los corazones"...

«Entre

males

los

raente a vuestra

de

situación

la

aleación

actual,

ruina de

la

la

muy

señalo

riqueza

;ierturbación que ella ha Llevado a todas las clases. a

especial-

pública

y la El remedio

ese mal no puede

facilitando

abandonarse a solo el tiempo; a él es incon buenas instituciones de crédito que movimiento y circulación de los capitales y po-

concurrir

dispensable

el

niéndolos

al

alcance

de

todas-

necesidades,

Las

sean

a

la

vez

un medio de fomento y un eLemento de orden y poder para la Nación"... Como resultado de la guerra "encontraréis una deuda cuyo arreglo y pago pesa sobre el honor de la Nación''.

.

Han

.

Gobierno recursos para la realización ha fundado un Colegio Nacio-

faltado al

mejoras... nal, creado un

"Sin

de

eonbairgo,

Ge-ográñco, otro de Instruc-

Institu-to Hisitórico y

ción Pública y erigido y dotado la Universidad

Mayor de

la

Re-

pública".

Apenas terminada la lectura del mensaje presidencial, pidió don José María Muñoz, y así quedó resuelto, que el Presidente del Senado don Bernardo P. Berro se hiciera cargo del poder ejecutivo, de conforn^idad a determinantes disposiciones de la Con.stitución

de

la

República.

a un incidente que, fuera del amque reinaba en Montevideo a raíz de la terminación de la Guerra Grande, habría provocado fuertes sacudidas políticas. Don Joaquín Suárez, que presidía un gobierno de hecho, entendía que su mandato no expiraba el 15 de febrero, sino el 1.» ¿e marzo, o sea el día señalado para la eilección presidencial. Y

Esa resolución dio lugar

biente

de concordia

en

sostenía,

ante

el

consecuencia, que

Presidente

del

Senado,

él

no debía resignar

sino

ante

el

el

Presidente

mando de

la

República, El doctor Herrera y Obes, que era Ministro de Gobierno, esinteresadp sin duda alguna en el mantenimiento de una

taba

que favorecía

situación dencial,

y

fué

de resistencia

con al

el

desarrollo

toda seguridad

mandato de

la

el

de

su

candidatura

instigador

Asamblea.

presi-

de ese conato

H

GOBIEBXO DE GIRÓ

Pero l;i AsunibleLí, lejos de inmutarse y dando, al contrario, prueba de una serenidad verdaderamente extraordinaria, se limitó a ordenar el archivo del mensaje, san digaarse discutir Siquiera las observaciones que

Poder Ejecutivo formulaba. Y un segundo mensaje, en. el que manifestaba el propósito de poner al Presidente del Serado en posesión del mando, como efectivamente lo puso breves

don Joaquín Suárez

entonces

el

dirigió

horas después.

El equilibrio de

dos partidos.

los

L,a p&iiueña ventaja de dos votos que tenía el Partido Blanco en esa AsambUea dio lugar más de una vez a profundas recriminaciones de los que entendían que la lógica de los sucesos

aseguraba

mayoría

Partido

Colorado; que la fórmula de 1S51 "no hay vencidos ni vencedores", estaba reñida con lia verdad de las cosas; que Orilje había sido vencido real y positivamente por la coalición, que encabezaba el general Urquiza. pacificación

la

de

al

octubre de

Aún cuando las cosas hubieran pasado así. el triunfo militar del Partido Colorado no habría sido suficiente para asegurar la victoria la

en los comicios.

campaña bajo

Durante ocho años había estado toda dominación de Oribe y el triunfo debía ser

la

lógicamente de los candidatos blancos. Si las ventajas no fueron mayores, debe atribuirse a que en general prevalecieron las listas mixtas que había prestigiado el general Garzón.

Pero ¿era cierto tidos sobre el

ío

deil

triunfo militar de

uno de

los dos par-

otro?

Cuando Urquiza cruzó el río Uruguay, las tropas blancas que cubrían el litoral de Salto y Paysan'dú, se plegaron al ejército entrerriano, y en seguida comenzó en toda la campaña el gran movimiento de concentración en torno de Garzón, que dio por resultado que Oribe quedara reducido a los batallones argentinos acampados frente a los muros de Montevideo y tuviera luego que rendirse, todo

ello sin

que fuera necesario derramar una

scla gota de sangre, si se prescinde de incidentes aislados y sin

importancia, inevitables en días de conflicto.

Oigamos

al

doctor Manuel Herrera y Obes, actor principal en

Uruguay, Entre Ríos, CoRosas y Oribe, y del con-

los sucesos, acerca de la coalición del

rrientes y el Brasil para voltear

curso prestado a

la

a

obra por ambos partidos tradicionales:

HISTORIA DEL URUGUAY

12

se había pedido y combinado sobre un interés. todos los Estados que la componían: la guerra a Rosas, la destrucción y desaparición de su monstruoso y agresivo^ poder, tan funesto para las libertades y el bienesitaír del pueblo-

"Esa coalición

camún de

como incompatible con

argentino,

la

tramquilidad

y

seguridad

de los Estados que lo avecinan. Esa coalición era, pues, completamien.te ajena a lae cuestiones de los partidos preexistentes

ambas

en

repúblicas

la

enseña de

la

quisieran para

si

la

del

libertad y sí



mejor dicho, levantandollamando a su a'lrededor a cuantos

Plata,

y para su patria, lejos de servirlos tendía

no a su an,iquiilamiento, a su descomposición y mejora por lo

menos, abriéndoles un naievo palenique para sus luchas y temla irritación de sus odios poír la fraternidad y comunidad íe los peligros y los sacrificios.. Así fué que ella alario sus filas^

plando

desde luego, a cuantos quisieron pertenecerle, sin distinción de denominación de partidos, y fuesen cualies hubieren

colores ni sido

antecedentes partidarios,

sus

que todos mezclados y con-

fundidos vistieran una solai, una misma divisa, cayeran sobre Cerrito y Palermo, pulverizaran el solio, ensangrentado de esos dos

Montevideo y con su triunfo dejaran y progreso en que estos dos países marchan hoy ardorosos y firmes, sin que para operar tanto prodigio les hu.biera sido necesario nada más que esos cinco meses de inolvidable campaña que hizo para siempre célebres los campos de Caseros". "Terminada asi esa gigantesca lucha, ¿quiénes fueron en ella liárbaros

tiranos,

salvaran

a

expeditas esas dos anchas vías de libertad

vencidos y quiénes los vencedores? ¿A quién los derechos, honor y la gloria del triunfo? ¿Pertenecía sólo a Montevideo? ¿Era la obra exclusiva de sus defensores? ¿Sus aliados ninguna parte teniían en ello? ¿Los generales" Garzón y Gómez eran vencidos? ¿Lo eran esos numerosos jefes y oficiales que con todas sus divisiones y cuerpos corrieron inmediatamente a form.ar parte del ejército aliado, dejando reducido al general sitiador al solo apoyo de los soldados de Rosas que comandaba?" Precisamente porque las cosas habían pasado así, es que el ambiente que se formó a raíz de la coniclusión de la guerra, concordante con la fórmula "no hay vencidos ni vencedores", era los

el

Ce concordia plena, de olvido real y sincero de las divergencias anteriores que quedaban relegadas a la liistoria, tal como la decía

el

doctor Eduardo Acevedo en estos párrafos de "La Cons-

titución":

GOBIERNO DE GIRÓ

13

"Soistenid remos, pues, la necesidad de la extinción completa y absoluta de los antiguos pantidos; ,pero para conseguirlo sostendremos también la igualdad de esos partidos ante la Constitución de la República y la necesidad en que tcdcs estaraos de abjurar nuestros pasados errores, de tirar nuestras antiguas divisas y de trabajar por el bienestar futuro del país, sin que nadie tenga facultad de eniro,strar al otro con el pasado y sus

En

conisecuencias.

pues.

Las

porvenir

el

acusaciones

rectamente a

nada nos separa. Abandonemos, que no® llevarían di-

recriminaciones,

y

anarquía. Si es necesario rivalizar, rivalizarey respeto a la Constitución, en franco deseo de iaacti'carla y hacerla practicar..." la

mos en amor

"Todos están convencidos de que, sean cuales fueren las pequeñas divergencias que todavía nos separan, la patria exige ante iodo a sus hijos que ,se comsagren a cicatrizar las llagas de la lucha pasada.

Un

ipoco de tolerancia de

que pueda detener empieza a recorrer.

liabrá

.

"Nosotros,

.

ail

una y otra parte, y nada en la senda de progreso que

país

'

colotcándonos

en el puntO' de vista de la Constitución y la justicia, rechazamos toda solidaridad con los actos majóos de los dos partidos en que ha estado dividiida la República,

ptro aceptamos todos los actos buenos de los unos y de les otros. Recogemos el bien donde se encuentra, sin preguntar su origen, sin averiguar si se debe a los antiguos blancos o a los antiguos colorados.

En nuestro empeño de formar un

todo nacional com-

pacto, sólo excluímos lo malo, ya venga de los unos o de los otros. XíO bueno nos pertenece: es la herencia de los orientales",

ü^dhesión de los militares.

Dio lugar

Asamblea

a

la

apertura de las sesiones ordinarias de

una expresiva nota de

jefes prestigiosos.

"El olvido

d'e

lo

pasado



felicitación

decían



el

la

nueva

de un grupo de*

remedio de

los

males

unión de todos los orientales, la estabilidad de las leyes, las garantías de la independencia y la conservación de nuestras relaciones externas, son puntos que preocupan a todos Ijresentes, la

10.=?

ciudadanos, pero que sólo los elegidos

solver con acierto y con

derecho.

.

.

No

d'e

la

está

Nación pueden distante

la

re-

época

funesta guerra por que hemos pasado; pero fué

calamitosa de

la

bastante que

cuatro

mil

valientes

hicieran

contrapeso

al

ejér-

HISTORIA DEL URUGUAY

14

oita con les,

que

zo fuerte del

Rosas sofocaba

generail

el

para que todos

opinión de los natura-

la

apoyarse en

los orientales corrieran a

magnánimo general Unquiza y

el

bra-

se pronunciaran por

paiz, por la unión y la Constitución ... A esa valiosa y generosa cooperación, a ese patriótico pronunciamiento de los orienla

tales

debemos hoy

el ieliz

a'contecimiento de vuestra reunión, y

si

nuestra patria goza

la

fusión de to'dos los oirientales, no ha manifestado otro interés

ya de los bienes de sus leyes, justo e.s que presente un tributo de gratitud a nuestro libertador, que haciemdo desaparecer la inifluen'cia extranjera y traibajanido por ni

ha

exigido

recompensa sino

otra

tenga independencia

leyes

y

ver que nuestra patria

el

y los habitantes

C3s de la paz, de la paz, señores repres'enta,nteis,

de nuestra

necesidad toda él

no puede El

general

existir

es la

los

go-

primera

y que es necesario conservar a no se sacrifique el honor, porque sin

sociedad

siempre que

costa,

disfruten

que

una nación."

Lavalleja,

primer firmante

de

esa

nota,

acabaiba

de realizar una jira por los departamentos de Cerro Largo, Minas y Mailidonado, en cumplimiento de instrucciones del gobierno de Suárez, para vencer resistencias locales contra las

autorida-

des constituidas y solucionar incidentes ocurridos en la frontera de

Río Grahde.

Pi'eparativos para la elección presidencial.

Otro grupo de ciudadanos, encabezado

por

los

generales La-

y Nicolás de Vedia, lanzó La idea de organizar una guardia de honor para acompañar al ciudadano que fuera electo PreViilleja

sidente hasta la Casa de Gobierno.

daba

ella

ficación

Y

pocas horas después quey c,iviles de signi-

formada con elementos militares

en los dos partidos militantes, bajo

la

presidencia

del

Costa y de don Carlos Navia. La bandera de esa guardia de honor fué confeccionada por doña Inés Pérez de Herrera, doña Joaquina Vá.siquez de Acevedo, doña Carolina

coronel don José A.

Triaca de Muñoz, doña Zelmira Rodríguez de Pérez y doña Ju;i?na González de Joanicó,

y entregada

de todas las señoras de Montevideo.

al

Presidente en nombre

GOBIERNO DE GIRÓ

La

15

elección de Giró.

El

de marzo de 1852 resultó elegido Presidente de

1."

pública don Juan Francisco Giró por gisladores

presentes.

favor

general

del

Los

votos

restantes

Martín García de Zúñiga. Al tiempo de prestar juramento dijo

"En

las

sociedades

Eran

38

la

los

Rele-

dados a don Florentino Castellanos y don

tres

Lavalleja,

votos.

35

cimentadas

soibre

el

fueron

Presidente electo:

bases

sólidas

y perma-

nentes, la misión de los gobiernos es comparativamente fácil, porque por lo general se reduce a la continuación de la marcha í-eguida por el gobierno anterior. Eso no es así en países nuevos

como

el

aun en los tiempos normales, porque las inshan podido echar raíces. Las dificultades embargo, incomparablemente mayores en épocas como en nuestro,

tituciones políticas no son, sin

que el país se encuentra, en que los sucesos del período que ha concluido se complican de un modo tan grave con la época que empieza. La misión entonces de un gobernante es difícil y peruosa, tanto que al pensar en las dificultades que presenta no puedo prescindir de cierta impresión de terror, conociéndome la

como me conozco sin la capacidad necesaria para superarlas". Don Juan Francisco Giró había sido votado, pues, casi por unaaimidaid. Momentos antes de adherir a su candidatura, don Jrsé María Muñoz, don Salvador Tort, don Enrique Muñoz, don }3runo Mas, don Tomás Gomensoro, don Tomás L. Rodríguez,

don León Zubillaga, don Francisco Hordeñana, don Juan Miguel Martínez, don Apolinario Gayosis y don Pedro Bustamante, miem. bros colorados de la Asamblea, le dirigieron una carta en que explicaban así el voto que habían resuelto darle: "Terminada la lucha fratricida que desgarraba el seno de nuestra patria, las dulces y atractivas palabras de fusión y vido encontraren eco en

el

ol-

corazón de todos los orientales"...

Era una necesidad de nuestra actualidad "la representación equilibrada y completa de los partidos en que desgraciadamente habíamos estado divididos"... Uno de esos partidos domina, sin embargo, en la Asamblea y por eso hemos creíd'O deber insistir en que la elección de Presidente de la República "recayera en una persona que hubiese pertenie<;ido al otro partido, o que, por lo menos, no hubiese pertenecido a ninguno"... Pero "nuestros esfuerzos en este sentido han fracasado y poniéndonos en el caso

HISTORIA DEL URUGUAY

16

de adherimos

al

candidato de la mayoría para no dar pábulo a

escisiones inconvenientes, lo

hacemos en

la

persuasión,

como

se

POS ha hecho sentir, de que su programa político se elevará a la altura de los caros intereses que se le confían... que realizará una política prudente y digna en el exterior, y en el interior una política liberal, de fusión, de olvido absoluto del pasado, con en una pala-

exclusión completa de toda tentativa reaccionaria; bra,

una

política

estrictamente ceñida a los principios constitu-

remedio a los males del pasado y única base sóuna paz de que tanto necesitamos y que tanto debemos

cionales, único

ida de ;lesear."

La Asamblea habla

al país.

Esos mismos legisladcres de la minoría y todos su colegas la mayoría publicaron el día de la elección presidencial un patriótico manifiesto en que decían al país: '•Hoy empieza una nueva era para la República, que esperade

mos en el faívor del Ser Supremo lo será de paz y prosperidad. Vuestras Cámaras contraerán toda su atención a dictar medidas eficaces a fin de cicatrizar las heridas abiertas en el seno de la

madre

patria;

pero para que ellas no sean inútiles, para que no

sean estériles los sacrificios de tanitos; para que podamos conseguir el objeto deseado de todos los buenos, es menester que en el

la ley, en aombre de Dios y de la Patria y en resmemoria de tantos de nuestros conciudadan.os como sa--

santuario de

peto a

la

crificaron sus vidas por nuestra existencia política,

juremos un ab-

soluto olvido de todo lo pasado. Desde los primeros días de la Re-

pública nos mostramos al

mundo

valientes;

mostrémonos también

generosos; cesen esas odiosas distinciones de colores políticos; no

mencionen esos part,idos que desde este momento deben dejar existir. La unión más estrecha y los más fraternales sentimientos liguen a todos los. orientales. No haya más distinciones que

se

de el

mérito,

gamos

el

saber, la virtud y el patriotismo.

Rodeemos y

sosten-

seamos estrictos y escrupulosos observadores de la ley; respetemos la propiedad y la seguridad individual, y tendremos una patria feliz; pronto se curarán sus males y no nos quedará más que un triste recuerdo de lo pasado, que nos servirá de lección para el porvenir. ¡Orientales! las

vuestros

senadores y

honran en 1*«

autoridades legalmente constituidas;

felicitaros

representantes

al

y en recomendaros

dirigiros

la

palabra

se

nuevamente olvido de

pasado, unión y respeto a la Constitución."

GOBIEBXO DE GIRÓ

17

¡El olvido del pasado! Tal era la suprema aspiración del momento, no sólo aquí, en el Uruguaiy, sano también en la Argen-

t'na a despecho de las

vencidos

en

medidas que

bien

Caseros,

"ni vencidos ni

cificación:

allí

de

distinta

vencedores".

se

tomaban contra

nuestra

fórmula de

los

pa-



"Mirar para atrás, en estos tiempos, decía el general Mitre al asumir la redacción de "El Nacional" en 1853, es exponerse a ser convertido

en

de

estatua

sal,

como

la

mujer

de

Lotih".

Des'pués de un sitio de nueve años, antecedido de guerras san-

en

grientas,

que

población y sus fuentes de riqueza habían el sentimiento de la paz predo-

la

cruelmente exterminadas,

sido

minaba en todos bajo

consecuenicia,

espíritus, y el nuevo golbierno surgía, en un ambiente de plena y entusiasta coacor-

los

día cívica.

Para cerrar cicatrización

mayoría,

la

Co.

la

puerta a peílgrosos debates y facilitar así la la guerra, uno de los diputados doctor Eduardo Acevedo, propuso en antesa-

de las heridas de el

comienzos de la labor parlamentaria, un proyecto de declaración que decía asi: "Consdderanido que durante la situa,ción que acaba de terminar con el restablecimiento del orden constitucional, han existilas,

desde

los

do dentro y fuera de la Capital diferentes autoridades; Considesi la República no puede reconocer como suyos ni san-

rando que

jionar como legítimos hechos inicompatibles con la condición fundamental de su existencia o con disposiciones de la ley, debe, sjn embargo, aceiptar aquello en que no haya habido infracción a la ley. Todos los actos de los gobiernos y autoridades que han regido el país durante la lucha que acaba de terminar, en que no haya habido infracción a la ley, se tendrán por válidos y subsistentes. En cada caso particular, siendo necesario, los Tribunales decidirán si ha habido o no infracción de la ley". La sanción de este proyecto haibría dado a la propia Asamb'.ea una norma salvadora para resolver muchos de los conflictos que ya asomaban, evitando controversias que a la fuer.:ía tenían que excitar las pasiones de todos los que habían actuado .

en

.

guerra que tan patrióticannente se trataba de olvidar.

la

Desgraciadamenite no

para revalidar los acto^ labia hecho en 1839 la

Asamblea abocada 2

-IV

al

triunifó, diel

y

como tampoco

se

gobierno de la Defensa,

terminar

la

hizo

na.la

como

se

dictadura de Rivera, quedó

a graves y terribles debates históricos.

HISTORIA DEL URUGUAY

Empiezan

los conflictos.



gobieino de Giió anula los contra-

^El

tos de enajenación de rentas.

Estalló

primer conflicto en torno de los contratos de enacelebrados por el gobierno de la Defensa. cómo trazaba el Ministro de Hacienda don Manuel el

jenación de rentas

Véase Errázquin

el

cuadro

de

finanzas

las

nacionales

iniciarse la

al

administración Giró:

"Las rentas estaban vendidas i'c

o

afectadas a diversos pagos;

en largo tiempo,

podía disponerse de eUlas

sino

de

insigni-

babía una deuda enorme aún no conocida y considerable recién contraída que se debería pagar

ficantes cantidades;

muy

otra

inmediatamente por sueldes

veincildos

de año, por fletes de tropas para

la

de amibas

desde 1.° por los con-

listas

pacificación,

sumos durante ella ocaisionados, por los sueldos que se abonatan a los guardias nacionales al despedirlos del servicio, por las cuatro pagas acordadas a las viudas y huérfanos a que no corres-

pondía

la

cédula, y por diferemtes reclamaciones de depósito. El

acababa de

iiaís

pobre,

de una larga y desastrosa «u'erra, estaba fortuna particular arruinada; las propie-

sal/ir

y casi toda

la

en su mayor parte: no era poside contribución alguna, antes bien, era pueblo, auiuque no fuese más que por el tiem-

dades públicas ya no ble

el

exisitían

establecimiento

necesario aliviar al

po preciso para que empezase a proporcionarse medios de subsistencia, de las enoirmes cargas que sobre él pesaban". A las afectaciones de rentas realizadas durante las angustias de la Defensa, se habían lincorporado otras igualmente gravosas en

la

víspera

misma

del

reingreso del país a la vida constitu-

cional.

En

noiviembre de 1851, un mes después de celebrada la paz, gobierno de Suáreiz celebraba un contrato de préstamo mediante el cual pasaba la administración de Aduanas a manos de un directOTio compuesto de representantes del Estado y de los capitalistas, y en enero del año siguiente designaba como delegael

dos a don Juan Miguel Martínez, don José María Muñoz, don Alvarez y don Nicanor Costa.. El 14 de febrero, horas ^ntes de transferir el mando al Presiidente del Senado, firmaba don Joaquín Suárez un nuevo contrato por el cual adjudicaba de

.Julián

inmediato

a

aduanera, obtenerse

otro e^l

diversos ¡prestamistas 12

y

Vz

%

para

el

12, el

y

caso

%

Se

de

de

que

la

renta

pudiera

aplazamiento del reintegro del subsidio del Gobier-

GOBIERNO DE GIRÓ

19

to Francés, y un 10 ',t más desipués de can'Celado un contrato de compra de armas y equipos en Río de Janeiro que se absorbía el 20 % de la renta. En resumen: los prestamistas percibirían el 35 % del producto de la Aduana una vez cumplidas las diversas condicionies del contrato. los últimos cartuchos que podía quemar e^ gobierno de Defensa a favor de los acreedores que apremiaban ante el peligro de que el restablecimiento del régimen constifucional pusiera en tela de juicio la legitimidad de sus créditos.

Eran

'.a

Ya todos

los impuestos quedaban hipoteoa-dos y en cuanto a propiedades públicas baste saber que a mediados de 1853

las

tramitaban todaivía

los

expedientes de don Samu-^'i

Lafone para

cancelación de un préstamo con garantía bipatecaria del edi-

la

de don Francisco Hocquard para el rescate Dragones y de la Plaza Independencia; y de doña Matilde Raña de Montero adquiriente de la P'azr Cagancha por la suma de 16,000 pesos, pagadera mitad en dinero y mitad en del Cabildo;

ficio

del Cuartel de

contra ei Estado, amén de otros expsdienres ya liquidados sobre rescate de la Plaza Constitución. Sólo podía sailirse de esa situación tan angustiosa mediante ura rápida, operación de crédito. Y comprendiéndolo así el Precréditos

el acto a la Asamblea solicitando auun empréstito de 300,000 pesos con ga-

sidente Giró se dirigió en torización para realizar

Una vez obtenida la autorización, acreedores hipotecarios, es decir, a los que

rantía de las rentas generaJies.

llamó a todos

habían

los

adquirido

la

administración

de

las

rentas

para

asegu-

pago de sus anticipos o préstamos, y les propuso que tomaran a su cargo el empréstito. Algunos se ofrecieron a concurrir con el 5 % de sus afectaiciones. Pero otros no, faltando enton'ces la unanimidad que era necesaria para la realización inmediata de la oiperación. De ahí e)l sensacioinal decreto del 30 de marzo de 1852, que devolvía al Estado la administración de las rentas hipotecadas, arrebatando a los acreedores la garantía que les había dado el rarse

el

g'cbierno de la Defensa.

"La administración de todas decreto



ae hará en el

modo

En

su

das

las otras relativas a las

las

rentas públicas

y forma que

la



decía

ley determina.

el .

.

consecuencia desde esta fecha cesa en sus funciones la Comisión mixta que estableció el decreto^ de 10 de enero último, para la administración de las rentas de Aduana, y también to-

demás rentas públicas".

HISTORIA DEL URUGUAY

20

Explicando esa medida, decía

Poder Ejecutivo

el

a

la

Asam-

blea:

"Uno de no

el

sus

principales

cuidados,

al

Presidente de la RepúMica, fué

el

encargarse del gobierinformarse de las ren-

ta?; públicas, paira regularizar su marcha y atender a las más urgentes necesidades del Esitado. De su examen resultó que todas

estaban

venididias

p.uticiipacicnes filias;

nas,

que

se

porque

o

que estaban afectadas

al

ipago

de

gruesas

que absorbían por muchos años el producto de hallaba también sin propiedades públicas ninga-

ellas

en tu totalidad,

Casa de la Representación que no podía disiponer más que producían las- rentas y deuda recién contraída, otra puestos im(pagos

de

la

lista

con

la

sola excepción de la

Nacional, habían sido enajenadas;

que de insigniflcan.tes cantidades que pesaba sobre el Estado una

mayor más antigua, y civil

y

los

presu-

Creyó al prindificultades mediante un

militar"...

Goibierno que podía vencer las préstamo de 300,000 pesos. Pero "ese empréstito no se ha pedido realizar sino en una parte tan pequeña, que hace insignificante el remedio"... Entretanto "crecían los apuros del erario... los los destacamentos .de Policía se disolvían por falta de pago abastecedores de ellos se negaban a hacer más suministros; la campaña reclamaba un ipronto arreglo y una numerosa Policía; cipio el

;

clamaban

a

las puertas

de la Tesorería los inválidos, las viudas

y ^os empleados civiles; los cuerpos de la guarnición estaban llenos de necesidades; los valientes que sostuvieron el honor de la

bandera en los campos de Caseros, de vuelta a sus hogares, permanecían impagos; y con jusitas y numerosas reclamaciones afiigían ál Gobierno diariamente multitud de acreedores... Y como por un?, consecuencia inevitable se ve el Gobierno sin los medios indispensables para marchar y saitisfacer a los fines de su institución, cree que en esa situación extraordinaria, que

emenaza

Estado y la vuelta al desorden por atender a la subsistencia del Gobierno, ha llegado etl caso de atenerse a la ley suprema de la salvación de la Naición, de que emana una oibligación superior la

falta

:ia

disolución

de medios con

del

que

a todas".

Juntamente con su mensaje presentó el Gobierno cuatro proencaminados a solucionar las graves dificultades financieras del momento. El primero autoriza^ba al Poder Ejecutivo paTa disponer de la totalidad de las rentas, manteniendo en suspenso los contratos

yectos de ley,

de enajenación o de afectación legados por su antecesor.

GOBIERNO DE GIRÓ

segundo

El

una Comisión encargada de

establecía

todos los créditos existentes contra

que

de

cia

21

eil

Estado, con

la

clasificar

adverten-

Asamblea arbitraría oiportunamente fondos para

¡la

cubrirlo^s.

El tercero ordenaba categorías:

tres

res a

consolidación de

la

paz de octubre de 1851;

la

día

to'dos

los

sueldas

demás

los

in'ifpagos

préstamos; y

deuda pública en

la

reducida a los préstamos posterio-

exigible,

la

la

amortizable, que compren-

la

atrasada,

que comprendía

rubros.

otros

El cuarto creaba una Caja de Amortización de la Deuda, con el

%

de los dere';hos de exportación y papel cellado, pateates y herencias.

50

tas de

Una de

el

20

al '¡f,

subsidio francés

a varios

de las ren-

el

25



manos de

el

decreto

los acree-

afectación de la renta adua,

el

al

12

12 y i^

contrato del Banco

Mauá

y % %, a la sociedad contrato Maines el 6 %,

%, al %, a los acreedores de 1850 y 1851 %, a Hocquard, Bustamante y Buschental el 12 9c. ¡Ni un

al

contrato Recáete

el

2

En

imipuestos de

prestamistas

compradora de 1848

solo

los

detallaba en esta forma la

dores,

%

10

publicaciones de la época, justificando

lao

gubernativo que arrancaba nera:

el

el

el

10

centesimo quedaJba disiponible según el

de

acto

aparecer

el

decreto

se

el

cómputo!

reunió

el

directorio

a

cuyo cargo estaba la Aduana. Los delegados del Gobierno, que eran don Juan Miguel Martínez y don León Pereda, expresaron que se da'ban por dimitidos; los demás, que eran don Pedro Portal en representación de diversos acreedores, idon Manuel Fernández Guimaraes en representación de los vendedores brasileños de armamento y equipo en 18 50, don Eugenio Legran-d por la Sociedad de Aduana y don Esteban Antonini en representa-

ción de los prestamistaisi de 184

i)votestando oonitra

el

6,

se declararon destituidos, pero

decreto que desconocía sus derechos.

A

esa

una representación de los acreedoa-es al Gobierno, en que se hacía constar que el contrato dejado sin efecto había sido reconocido y cumplido p'or el proipio Giró al tiempo de protesta

siguió

ordenar

la

distribución

de

las

rentas

procedentes

de

la

recau-

dación de febrero, y asimismo en. las gestiones para la contratación del empréstito de 300,000 pesos.

Ardorosos debates parlamentarios subsiguieron a ese decreto. la mayoría era aplicaible el artículo constitucional que

Para

incluía entre los cometidos del Presiidente de la República

"cuidar de

la

recaudación de las rentas".

el

de

HISTORIA DEL URUGUAY

22

Para la minoría los contratos susipendídos eran verda'deras leyes, que sólo la Asamblea podía derogar. Una de tantas cuestiones, como se ve, que hubieran podido solucionarse en forma general, cuando el doctor Acevedo pre-

sentó su fórmula anticipá-ndose a las controversias que ya aso-

maban. Cerrado el debate sancionó del día que decía asi:

la

Cámara de Diputados una orden

la Cámara que el artículo 8 2 de la ConstituEstado disipone expresamente que al Pre&iden.te de la República compete cuidar de la recaudación de las rentas y contribuciones generalesi y de su inversión conforme a las leyes, y que en consecuencia el Poder Ejecutivo ha podido y debido re-

"Conisiderando

ción

del

asumir

la

en

de todas las r.^ntas

posesión

dispuesto por dicho artículo constitucional,

cumplimiento de Cámara pasa a

la

lo la

drden del día". Dos considerandos más decisivos pudieron invocar los partidarios del

decreto.

En primer

carecían de autorización

lugar que las garantías hipotecarias

legisilativa.

taria era ese el vicio incurable;

Para

para

la

mayoría parlamen-

minoría,

la

el

gobierno de

Defensa reasumía todois los poderes y el vicio no existía. En segundo lugar, que no podía marcharse sin dinero. Era una cuestión de vida o muerte que se le planteaba desde el primer día a la

administración

la

que

las

Giró;

recaudaban-,

o

o se

quitaba las

derrumbaba

rentas ella

a

los

acreedores

misma bajo

¡a

pre-

sión de la bancarroita.

Lo deplorable para

era

el

procedimiento empleado por

salir del atolladero.

En

el

Gobierno

vez de tirar un decreto administra-

que traducía funciones tan dictatoriales como las que censual Gobierno antecesor, pudo y debió el Presidente Giró recabar una autorización legislativa que pusiera término a la admi-

tivo

raba

canjeando en tal caso que se dejaban sin efecto por otras que no hubieran obligado al Estado a caer en bancarrota. Un año más tarde, cuando ya ei gobierno de Giró empezaba a vacilar fuertemenite, el doctor Juan Carlos Gómez presentó a la Cámara de Diputados un plan de arreglo de la deuda pública que reintegraba a las empresas particulares la administración QC las rentas de que habfan sido desposeídas. Los acreedores de-

nistración de las rentas por particulares, ias garantías

bían verter en la Tesorería 15,000 pesos mensuai^^s, por concepto de patentes y papel sellado, y 6,000 pesos por concepto de de-

GOBIEU-VO DE GIRÓ

23

recho's aiduameroia, emboteanido todos los excedentes hasta la total

cancelación de sus créd'itos.

Para "La

un plan palítico, más que se pretendía en realidad era un.a desautorización del título con que el Gobierno había dictado su decreto de marzo. Y que no era equivocado el juicio, se encargó de comprobanlo el propio doctor Gómez a raíz Conistituciónj"

se

trataba

de

que de una medida financiera, como que

lo

del derrumbe del gobierno de Giró, pues entonces en vez de reproducir su proyecto sostuvo la tes,is de que el Gobierno debía se-

guir administrando las rentas de acuerdo con

He

a luí,

el

decreto de marzo.

efectivamente, lo que escribía en "El Orden" de octubre

de 1853, refutando a um colaborador que lo invitaba a pedir que

Aduana fuera devuelta

la

a los acreedores despojados por Giró:

El Gobiernio Provisorio ha hecho lo que debía hacer:

mado

ha

lla-

a los acreedores para pedirles "los alimentos del Estado"

y entregarles la Aduiana para que se cobren

sobrantes.

los

co'n

Pero Los acreedores no han querido entregar nada y entonces el Gobierno tendrá que entenider&e con los que le ofrezcan la cantidad necesiaria, porque según la doctrin.a sostenáda por los hombres del actual Gobierno Provisorio en la prensa y en la tribuna, antes que los derechos de los acreedores está "el derechoi a los alimentois".

dereoho a los alimentos! Tal había sido también en el como hemo.s visito, el verdadero inspirador del decreto de marzo. ¡Bl

fondo,

La

abolición del impuesto de puertas y ventanas.

Pocos días después de esa primera contienda parlamentaria

se

eitablaba francamente en la Cámara de Diputados el tema de la legitimidad de los actos del goblei'no de Suárez, con ocasión de

un proyecto del Poder Ejecutivo cuarta

parte

el

impuesto de luces,

por

el

como

puesto de puertas y ventanas creado por

que asi la

se se

reducía

llamaba

a la

al

im-

Legislatura que ac-

tuaba en 1844. El Poder Ejecutivo, al referirse do

ipor

En cambio, dión

a

ese impuesto,

decía

"crea-

ley de 2 de agosto de 1844»,

total

del

Comisión de Hacienda,

la

impuesto,

decía

«Creado

al

por

aconsejar

la

determinación

aboli-

de

25

de julio de 1844".

Hubo, con

tal

motivo, a principios del mes de abril un fuerte

HISTORIA DEL UBUGUAT

24

cébate ique arrastró a los oradores a las polémicas que se habían querido evitar con tanto empeño, dando lugar a que el doctor

Cándido Joanicó exclamara en un arranque, deseoso de igualar condiciones de los viejos contendientes:

las

"La lucha por que hemos pasado durante nueve años ha sido Ha sido una lucha en que la parte oriental ha sido la menor. una lucha de extranjeros... Peirmítaseme hacer una explica.

ción

. .

.

".

No pudo continuar gado

a

.

suspender

la

el

orador, porque

sesión en

el

medio de

Presidente se vio oblilos gritos, las interrup-

ciones y protestas de lia Sala y de la barra. Serenado el ambiente y vueltos los diputados a Sala, triunfó la fórmula que hacía referencia a la ley de 1844.

El doctor Joanicó resolvió entonces recurrir a precisar su del

Dijo

pensiamien.to.

la

que había propuesto

prensa para la

abolición

impuesto, sin referirse a la ley de su creación, porque no

deseaba "abrir

la

puerta a reclamaciones co^rtra

el

Gobierno Na-

cional por indemnizaciones de daños y perjuicios durante la lu-

cha que acababa de terminar, reclamaciones que una vez en la necesidad de admitir, suhirían a cantidades a,brumaidoras para agregaba en que todos los orienia República". Esa lucha





fuimos víctimas, ha sido una lucha de inñuencias extranjeras* unas contra otras, empe'zando por el ejército argentino que tales

invadió la República en el

año 1843... No podríamos reconocer No podríamos

el

carácter de leyes a los actos de esa lucha

.

.

.

como nuestras, sin reconocernos responsables de los daños que por ellas han sufrido nacionales y 'extranjeros...".

admitirlas

Tal era

lo

que quería

decir,

"cuando una explosión de interruphijas sin duda ánimos, vino a cortarme completa-

ciomes de la Sala y demostraciones de la barra, del

estado

vidrioso

de

mente la palabra". La minoría opositora

los





escribía "El Comercio del Plata" ha querido vindicarse en esa sesión tumultuosa, tanto como en la relativa al proyecto sobre administración de rentas afectadas, demostrando que al adherir a la candidatura Giró, había obrado

patrióticamente,

pero

sin

suicidarse

como alguien

se

lo

había

increpado.

Otro debate de menios resonancia se produjo en la Cámara de Diputados en estís misimos días, con motivo de un dictamen de la Comisión de Dietas, que hablaba de la ley de julio de 1845. Uno de los oradores pidió que en "vez de invocarse una ley se

GOBIEKXO DE GIKO

invocara

sobre

constitucional

artículo

el

dietas,

que no prosperó, dio mérito para que otro de

y

los

moción

esa

oradores

di-

jera:

"El dictamen de de

ley

Comisión de Dietas está basado en una

la

quinta Legislatura

la

constitucional

de

República,

la

y

su validez y legalidad Incuestionables no dan mérito a discusión

de ningún género. tamente necesario

iSe

e

pretende, sin embargo, que no es absolu-

indispengable que quede consagrada

la

pa-

y yo insisto en que no se o^mita. Es preciso establecer. señor Presidente, de un modo firme e inquebrantable, el respeto labra

ley,

que han emanado de la quinta Legislatura constituLa Asamblea carece de facultades para alterarlas en lo más mínimo y si lo hiciere saldría de sus atribuciones, abusaría

a las leyes cional.

le la deiega'ción que ha redibiido inmensa responsabilidad".

Prosigue

el

de

la

Nación y se atraería una

debate hlstóiáco con motivo de una jubilación.

Antes de terminar acerca de

(de

la

el

mes de

abril volvió a

abrirse

el

debate

legitimidad de los actos y atribuciones del gobierno

Defensa.

la

El Seicretiario de la Cámaira de Diputados don Juan Manuel de la

Sota, que

estaba jubilado con la

mitad

decreto del gobierno de Suárez expedido en a

la

Asamblea alegando que

él

de

sueldo

su

1S49,

había continuado

su cargo y que en consecueacia le correspondían

se al

las

poi'

presentó frente

de

dos terce-

ras partes del sueldo.

La Comisión de Peticiones aconsejó el otorgamiento de la mitad del sueldo, o sea lo mismo que recibía el solicitante, y explicando su dictamen, decía el' miembro informante que se concedía a de la Sola "una jubilación válida en vez de la nula que tenía". Uno de los oradores de la minoría, luego de establecer que el

Presidente Suárez había reasumido funciones ejecutivas y ledijo que la Cámara debía desechar ese documento

gislativas,

infame,

"por ser atentatorio a

la

legitimidad

del

gobierno

de

Defensa". Se le replicó que lo de faculitades legislativas del Gobierno constituía "una herejía constitucional ', y eso dio mé-

la

rito

a

otro de los diputados para formular

el

elo\giO'

de la De-

fensa y del gobiernio que la había presidido, en medio de aplau-

HISTORIA DEL URUGUAY

26

estruendosos de

SOS

barra,

la

que empezaba ya a ejercer pre-

sión en los debates.

Hubo

deseaba abstenerse

serenara

se

cjue

nuevo incidente varias sesiones

del

raíz

a

La mayoría

Pera

amibienite.

el

de concurrir, la

a

minoría

quorum.

sin

la

espera

de

que

la

exigió

cumplir las disiposiciones reglamemtarias conjtra los Mesa inasistentes, y ante esa actitud rescJlvieron los diputados de la mayoTÍia solicitar que las is-esiones, en vez de realizarse de nohiciera

cñe como era de l)ráctiica constante, tuvieran luigar de día, "deseando ^decían evitar la repaíicióm de las escenas de que ha sido teatro la barra en las últimas sesiones". Volvieron a caldearse los ánimos con motivo de ese pedido y volvió la barra términos que obligaron al Presidente de la a las andadas en Cámara don José María Muñoz a decir que si seguían las de-



mostraciones Calmara".



se

él

En medio Ya tica

al

^hemois

el

interna

gravísimo conflicto de los tratados con en

dicho

del

qué

al

los

e&clavos el

del

desarrollo

saladeros

consistían

Brasil

el

Brasil.

tratados:

esos

el

de

en director armado de la polí-

el de subsidios, que complementaba poderoso resorte de los préstamos; el de

Uruguay;

esa influencia con el

mular

la

de estos incidentes parlamentarios quedó abocada la

extradición, que obligaba al

de los

presidir

Brasil.

que convertía

alianza,

para

'Mmhabilitado

Pero quedó resuelto el cambio de hora.

Los tratados con

Asamblea

consideraría

Uruguay

Im'perio;

el

a convertirse en

de comercio,

de los saladeros brasileños

a

que

el

orientailes;

y

el

de

límites

carcelero

destinado a

esti-

expensas doictor

de

Juan

Gómez ha caracterizado así: "Por medios ilegítimos y nulos nos arrebató en 1816 toda la extensión al norte del Ibicuy, que comprende los ríos Mbutay, Ybacacuá, Piratiny, lyuy, Piray, CeboUatí y toda la extensión al noirte deJ Yaguarón hasta la Laguna Merim. Esta

Carlos

extensión arrebatada en 1816 encierra un, área de 2,920 leguas. Luego con la incorpora.ción nos arrebató toda la extensión que

media entre el Ibicuy y Cuareim, aprovechándose de esa gran vena de agua del Ibicuy y temando por línea, desde el Cuareim, cerros, el río Santa María y Santa Tecla, en direclos once ción al Yaguarón. nos quitó otras 1,400 leguas marítimas. Los tratados

de

1851.

sancionando esas diversas

usurpaciones

con-

GOKIERNO

tra

a

de

tratados

los

cha

1777

Yaguarón y

del

nuestro

27

GIRÓ

apoderándose de

y

mordisco

de

margen

la

Merim hasta

Laguna

la

otro

territorio

DE

marítimas».

leguas

280

dere-

Chuy, dieron

el

Cuando el iniiijerio empezó a preparar estos cinco tratados como precio de su concurso para voltear a Rosas, el gobierno de Suárez se dirigió a la Asamblea de Notables que actuaba en reemplazo del Cuerpo Legislativo, en demanda de la autorización necesaria para celebrar los pactos respectivos.

La

dicho

terminación

a la

subsiguieron

de

a que

los tratados

relatar

al

la

fueran

cargo de que

pero con

venia,

ción

como hemos

Asamblea,

se arribara,

Guerra

acordó la

sometidos a su

considera-

acuerdo con

de

que

sucesos

los

Grande,

Estatuto

el

gobierne proyectado en 1846 por el orgánico Reglamento de la Defensa y sancionado luego por aquella corporación. Una de las cláusulas del Estatuto obligaba efectivamente a la Asamblea

o

a velar sobre la observancia de la Constitución y las leyes y otra Ejecutivo adoptar por sí mismo ninguna disal Poder

prohibía

Pero

carácter

de

posición

gobierno

el

malidades

a

a principios de

ratificó

creado

ción del

Brasil

por

noviembre de

blea de Notables, con

habrían

haciendo

obligado por

estaba

que

Asamblea,

de la

legislativo.

de Suárez,

claro

el

serios



de

las

for-

el

voto

Estatuto y por

ante

tratados

cinco

los



disuelta

declaró

1851 y

la

Asam-

propósito de evitar debates que

conflictos

de quedarse

y

omiso

caso

el

dada

internacionales,

de cualquier

modo con

la

una

le

resolu-

parte

considerable de nuestro territorio.

Una semana antes de esa ratificación abusiva, no de Suárez había publicado sin embargo un cesar todas las 'disposiciones

dictadas en

— decía

el

propio gobier-

decreto haciendo

consideración

al

estado



preámbulo de defender los derechos de la República, obligó al Gobierno a dictar medidas extraordinarias y excepcionales que deben cesar desde que el restablecimiento de la paz ha puesto en completa vigencia las leyes y el régimen constitucional». Es que los estadistas de la Defensa tenían que hacer causa co-

«La

de guerra.

mún

con

el

principio, y

ción

necesidad

Brasil

más

del gobierno

razones de

por

tarde por

el

solidaridad

como medio de el

Partido

evitar la

Blanco.

Y

internacional

al

absoluta absor-

eso les impedía leer

serena y tranquilamente los tratados y los empujaba a precipitar su ratificación con violación de las formas institucionales. «Felicito

a usted

cordialísimamente y

me

felicito

por sus tra-

HISTORIA DEL UBUGUAT

28

tados,

—escribía

el

Ministro

de

don Manuel

Relaciones

y Obes a don Andrés Lamas a fines de octubre más brillante e importante complemento de

Ahora estoy andado

darán

como amigo

felicísimo y

paquete los

el

Poco

quiza y otras propias, retroactividad de las

gados del territorio Imperio,

al

do

rrera

—«los

más

cláusulas

la

no

la

extradición de esclavos fu-

Cebollatí

de levantar

Tacuarl

y

que se

ratificaoión



observaciones

las

Ur-

de

Martín García, a

inconveniencia

del

He-

doctor

el

for-

cedidas

exclusiva de la Laguna Merim,

navegación

tratados

enva-

serán

observaciones

de

la isla

sobre

costa

la

perjuicio de

Atendidas

mediato.

me

eso

Tengo esperanza

Paulino.

algunas

imperial, a la

y a la

sin

ello

be-

el

tratados

noviembre,

de

Lamas

relativas a

en

brasileñas

talezas

principios

a

doctor

al

señor

el

lleve!).

después,

días

trasmitía

rrera

usted

Los

merece.

Es

triunfo.

revelará. Usted ha

los

sincere de

al

nuestro

hacen a usted,

ellos

tiempo

que

justicia

la

asegúreselo usted

ratificados:

de que

país, sólo el

al

Espere usted

nece.

honor que

satisfecho. El

neficio que le

Herrera



de 1851.

podrán

agregaba de ser

dejar

to-

practicarta de ,n-

He-

doctor

el

con

aceptados

el

hombres que vengan al poder en nuestro país; y basados en una altura de ideas y de miras como las que encierran, esos tratados serán una grande

verdadera

entusiasmo

por

indiscutida prenda

e

de

cualesquiera

de

paz, de

los

unión

y de

amistad

eincera entre los dos países».

La voraz

diplomacia

brasileña tenía

de

disposiciones

celentes

aprovechar esas ex-

que

cancillería

la

uruguaya,

expuestas

desaparecer una vez practicadas las elecciones de senadores y to

de

la

futura

cia diplomática

Asamblea,

noviembre

de 1851

consecuencia

impedía

las

legalidad

salvarlo

orden

mismos

legal;

actos.

que nos

encontrásemos el

él

vo-

por Rosas

misma ocupación

asegurar

y

se

y

presentásemos

viciásemos nuestros

ocupación de

por esa

tenía

para

del

hacemos. Traté en

el

corresponden-

doctor Palomeque.

el

invasión y

sospechar que los viciásemos luego

recabar

la

al

de que la

elecciones,

que nosotros

dad y

idea d^

demuestra

— escribía Lamas a Herrera a mediados de — supone que la autoridad que regía pais,

bastante

restablecimiento

desastre la

según lo

que ha publicado

«El señor Paulino

a

como un

juzgaba

putados, y

a di-

su

toda la

salvación

mostró

dudas sobre nuestra

Aún me

de propósito,

pareció tal

desembarazados,

acto de destruir

y

el

incomodado de

vez

legali-

inclinarse

a

para anular,

todo lo

que hoy

esa sospecha que tan fu-

GoiiiERNo

giró

di:

29

puede sernos, tan inmediatamente funesta; pero el señor la conversación, declarándome que no admitía ratificación alguna dependdenite de la futura Asamblea; que si había cláusula que a eso se refiriese, la rechazaría aunque viniera cambiada; que tal cláusula es, como es en efecto, sin ejemplo; que el acto quedaría consumado, o no habría acto alguno, lo qu& tal vez s.6ría mejor en el camino que llevan la.s cosas. Percibí uesta

Paulino cortó

bien que en esto había algo de más alto que el señor Paulino, y con concienicia de no equivocarme digo a usted Herrera que si esto sigue asií, vamos mal. Es preciso querer o no el apoyo del

Lrasil y quererlo o no francamente. Si lo

queremos

levantar

condiciones

estas

sospechas

y

aceptar

las

no

es preciso

tales

como

son".

El gobierno de Giró considera que los tratados deben ser sometidos a la ratificación legislativa.

El Presidente, que tenía naturalmente dudas acerca de la le-

gitimidad

de la ratificación prestada

recabar La sanción

po>r

su antecesor, resolvió

precisame-nte

.Era

legislativa:.

el

Brasil ha^bía querid'O evitar, persiuadido de que

trámite que

debate parlamentario en torno de 'lais monstruosas concesiones arrancadas al gobierno de lá Defensa bajo la presión de las circunstancias, e;

bí^bría de

el

promover un movimiento formidable contra

el

Imperio

y contra los trata.dos.

A

la

nota del

plenipotenciario

brasileño

Carnieiro

Leao,

exi-

giendo a principios de marzo de 1852 el nombramiento de un Comisario que juntamente con el del Brasil procedería a la demarcade límites en la frorntera, contestó, pues, nuestro Ministro de Relaciones Exteriores:

ción

"He para

— decía

recibido orden.

declinar

la

el

exequibilidad

negativa.mente

doctor Florentino Castellanos de

los

ajustes

que contienen

dichos tratados, poirque en su capacidad constitucional no

le

permitido

leyes

llevar

a

la

inmediata

ejecución

que lo son porque se conforman Fundamental del Estado".

La aprobación de

esos

a

tratador,

las

sino

aquellas

condiciones

agregaba,

de

la

corresponde

es

Ley den-

Cuerpo Legislativo. El propio gobierno de Suárez se encargó de declarar antes de ratificarlos que el restablecimiento de la paz había hecho cesar todas sus facultatro de nuestra Constitución al

des extraordinarias y de excepcicm.

No

podría,

por

lo

tanto,

el

HISTORIA DEL URUGUAY

30

gobierno actual prescindir de la sanción Legislativa sin atentar en graves responsabilisim incurrir contra da Oonstitución y dades.

Contestó Carneiro Leao que los tratados eran válidos atento que ya estaban rati-

a la época en que habían sido celebrados; ficados desde sil

noviembre del año anterior; que asimismo

dispuesto

estaría

a

el

Bra-

conceder aLgunas modificaciones en ma-

después que

teria de límites, pero sólo

la cancillería oriental

hu-

biera reconocido la validez de lo pactado. Concluía la nota exigiendo una reconsideración rápida, con la alarmante adverten-

de que el Ministro tenía "órdenes terminantes para intimar Gobierno Oriental las medidas que en prevención de semejante procedimiento el Imperio se juzgara compelido a tomar, de conformidad con su dignidad, su derecho y seguridad". Por una segun.da nota (inserta como las lainterioires en el Relatorio que el Ministro Paulino presentó en. 1853), el plenipocia

ai

brasileño fijaba

tenciario

plazo perentorio

el

apercibimiento de dar cumplimiento a

que

lo

de tres días bajo le

prescribían sus

instrucciones!

Los

(los

contendientes se dirigen a Urquiza.

Er^ muy grave

la

controversia,

que había formado parte de

acampado en

territorio

la

oriental

porque

el

y

tenía

ejército

contra

coalición

brasileño

Rosas estaba

instrucciones

para

ha-

cer efectivos los tratados a viva fuerza.

ayuda de Urquizia podía tenerse alguna probabiPero la diplomacia brasileña se encargó de demuestra la documentaalejar esa probabilidad, según lo ción existente en el larchivo de la cancillería argentina que el rloctor Ramón J. Cárcano acaba de exhibir, aclarando en forma definitiva ese cuadro desesperante de los comienzos del gobierSólo con

lidad

de

la

éxito.

no de Giró.

El

Bra.sil

pide la ayuda

dle

Corrientes y Entre Ríos contra la

ReiJÚblioa Orientivl.

Pocos días después de Caseros, en bierno en

de

Suárez,

recibió

las postrimerías ya

instrucciones

Montevideo para obtener

el

concurso

la

de

Legación

del

go-

Brasileña

Urquiza contra

la

GOBIEBNO DE GIRÓ

probable resistencia de

Cámaras

las

31

orientales a los tratados de

Lamas.

He

aquí

lo

que decía

Ministro Carneiro Leao

el

al

vencedor

de Caseros: El Partido Blanco procura el poder con ánimo de ayudar a Rosas. Sus hombres ejercen hostilidades contra las tropas bra^

sueñas acantonadas en la Colonia y hacen propaganda contra los tratados de Lamas. El día 1.'^ de marzo ese partido conquistará la presidencia de la República y entonces se encontrará habilitado para desconocer la validez de los tratados. El Emperador está resuelto a emplear medidas coercitivas y en caso necesario a declarar la guerra al Estado Oriental. Pero podría evitarse tal violencia si los gobiernos de Entre Ríos y 'Corrientes tyudaran al Brasil en el ejercicio de su derecho. La situación de la República Oriental contestó Urquiza tstá ya normalizada y no pueden los aliados mezclarse en el movimiento de los partidos internos. Si la guerra civil volviera



encenderse,

a

los laliados

a pesar

que prestar su apoyo a

tendrían

En cuanto a los de que emanaban del de

autoridad legal.



tratados de

la

1851, conste que

alianza y constituían parte integrante del tratado definitivo, fueron celebrados sin la concurrencia del Gobierno Argentino, cosa que no pudo ni debió hacerse.

Agregaba Urquiza que había comunicado la nota imperial al Gobierno Uruguayo y que éste declaraba que jamás faltaría al tratado de alianza y que tampoco ejecutaría acto alguno que pudiera provocar el estado de guerra con el Brasil, desvaneciendo así

todo motivo de duda acerca de su actitud.

la nota de Carneiro Leao y la respuesta de Urquiza, se habían cruzado otras notas en que el vencedor de Caseros contestaba con evasivas y el plenipotenciario brasileño insistía en

Entre

recibir manifestaciones terminantes.

Esas evasivas coincidían con trabajos de la cancillería de la de Buenos Aires a favor del Uruguay. Don Vicente López, a quien Urquiza había confiado el gobierno provincial, Provincia

decía a su agente diplomático

instrucciones res

redactado

doctor Lu'.s José de

por la

el

el

gf^neral Guido, en

Ministro

se

tratado definitivo de paz estipulado por la

un pliego de

Relaciones Exterio-

Peña:

"Apenas reciba alguna insinuación, nar de 1828". Acordará

de

prestará a celebrar el la

libre navegación

Convención Prelimidel

Paraná para

la

HISTORIA DEL URUGUAY

32

bandera brasileña, salvando los derechos de soberanía de la Argentina como dueña de la embocadura. Iguales condiciones podrían fijarse respecto del Uruguay, pero "de acuerdo con el Estado Oriental, con quien comparte la navegación común". Si el gobierno de Giró ha aceptado ya el tratado de límites negociado por Lamas, nada dirá. En caso contrario reclamará el derecho de intervenir en el nuevo pacto a celebrarse. Se trata de un derecho que el Brasil jamás debió desconocer o postergar "no sólo por haberse mancomunado ambos Estados para la creación de la República del Uruguay, sino también por la solidaridad de las

mismas naciones contratantes en

defensa de su

ia

independen-

cia y porque la paz del Brasil con la República uruguaya no puede ser sólida, si no afianza la seguridad de los Estados colin-

dantes".

A

mará

Presidente Giró y

al

su paso por Montevideo

el

General Guido se aproxiel Gobierno Ar-

manifestará que

le

gentino está resuelto a prestar su cooperación "para todo cuanto afecte la política y seguridad del Estado Oriental". En cuanto a plenipotenciario sostendrá los del Tratado de San

limites, el

Il-

defonso, salvo que ya estén aceptados los tratados de Lamas en cuyo caso se limitará a la determinación de la linea divisoria entre el

Imperio y

Provincia de Corrientes por una

la

Comisión

mixta.

La cancillería argemtina

se

del gobierno de Giró para

el

1S51, reclamaba

ponía asi deciididaimente del lado reconocimiento de los tratados de

derecho de inteirvenir en

el

los

nuevos trata,

dos de a/Cuerdo 'com la convenctlón preliminar de 18 28 y se atenU a los viejos y saneíados títulos de San Ildefonso para el man-

hnimiento de la integridad territorial del Uruguay. Desgraoiadamente la misión del general Guido no alcanzó a para realizarse por falta de poderes en el Gobernador López de las relaciones exteriores, y cuando llegó el model reconocimiento de la persone-

ejercicio

el

nien.to

ría

de

reanudarla, a raíz

de Urquiza por las demás provincias argentinas, ya el venrumbo y la balanza se in-

cedor de Caseros había cambiada de ciinaba

decididamente dei

Urquiza resuelve apoyar Urquiza confió tor

al

Luis José de

Oriental y

el

lado

de

política

imperial.

al Brasil.

mismo autor la

la

Peña,

la

del pliego de instrucciones doc-

plenipotencia

Gobierno Brasileño.

ante

el

Gobierno

33

GOBIERNO DE GIRÓ

Ya

conocido en Rio de Janeii o

era

argentina,

política

y

apresuró a dirigir a Urquiza una

que

expresaba que sabia

le

entrase en

la vía

la

se la

Ministro Carneiro Leao que

interpuesto su influenciia para "que

hci'bía

Lima

de

Soai'ez

de conigr'atulación, en

notia el

poír

cambio operado en

el

Paulino

Ministro

el

ei

Gobierno Oriental

de la justicia", ahorrando así

al

lucha cuyo resultado no podía serle favorable".



Uruguay "una



agiiegaba renacía el "Caducaido el tratald'o !de límites deredho que teníamos a la fro^utera mairciada por la convención de 1819 y por eW'o se expidió orden al conde de Caxías para que pasase inmediatamente a ocuparlla, para lo cual ya se había pues-

en imarcha. Al misimo tiempio se expidió criden

to

señor con-

al

sejero Carneiro Leao para exigir del Gobierno Oriental

pago de

como ral

de que es deudor

la sumía

indemnización de

la

Oribe

territorio

a

orienital

adyacente

garantía de sus pagos, en

Terminaba

el

los

perjuiciois

a

casio

causaidos por

ocupáiDdose

súbditcs brasileños,

los

pronto

el

Brasil y sus intereses, así

al

aqueillia

frontera

gene-

el

una parte de

del

para

1819,

de que no se lefectuaseu".

Ministro Imperial

expresando que con

nom-

el

oportunidad de ceilebrar bramiento ded doctor iPeña un nuetvo tratado, enicaminado a asiegurar a la República Argentina en el Eistado Oriental "la misma influencia y garantías" que ya tenía el Brasdl y que no habían podido incluirse en los Llegaba

la

tratados de octubre de 18 51 poirque al tiempo de celebrarlos todavía desempeñaba Rosas la jefatura de la Confederación.

Tales

eran

Uruguay no

las

amenazas de

acataba

los

la

tratados

cancillería

de

brasileña.

Lamas,

clararía la guerra y ocuparía militarmente ,una

el

Si

Brasil

el

de-

parte considera-

de su territorio. Adviértase que eso deoía cuando ya el go. bjermo de Giró se había sometido a la presión de los acontecimientos y que antes se había mostrado más parca ante el temor

ble

de que la opinión argentina hiciera causa co^mún con oriental frente al heclho de la declaración de guerra.

En cuanto de Lamas,

la

a la prescindencia de la

Argentina en

el

los

pueblo

tratados

explicación del Imperio resultal)a sencillamente una

Es cierto que em octubre de 1851 todavía o^cupaba Rosas gobernación de Buenos Aires. Pero también lo es que desde mayo de ese mismo año ya el dictador había sido deshancado de las relaciones exteriores y en camibio estaba Urquiza a la uurla.

ia

cabeza

de

3

-IV

coalición

la

acuerdo con

el

oriental-argentino-brasileña,

nuevo orden de cosas y con

la

y

era

de

Convención Pre-

HISTORIA DEL UEUGUAY

34

Imperio tenía que haber dado entrada al representante argentino en el tratado de límites. Para halagar a Urquiza se le ofrecían las mismas influencias y seguridades que el Imperio había arrancado al gobierno liminar de

de

1828, que

absorción de territorios, anulación de las indus-

Defensa:

la

dando que

hasta una

era

ofrecimiento de

lo

y militar, etc., olvidignidad argentina ese

financiera

intervención

nacionales,

trias

el

ofensa

j

la

que todavía conservaba

la

víctima de los tra-

tados de octubre.

Pero Urquiza, que ya había interpuesto su influencia a

fa-

aceptación de los tratados, se limitó a protestar por algunas la forma en que haibían sido negociados y a rechazar braterritorial voracidad insaciable de las pretensiones de la

vor de

la

sileña.

"Hallándome por beza de

los



los sucesos

decía en su respuesta



a la ca-

intereses argentinos, tenía que exigir lo que a ellos

que había sido desconocido por un total olvido que indispensablemente debían aparecer concluida la lucha en cuyo intervalo se habían hecho esos tratados con demasiada premura e imprevisión." El arreglo terri1819 quedó anulado por la Convención de Paz de torial de

era

debido,

lo

circunstancias

de las

1828. "La pretensión de la ejecución inmediata de los tratados atacaba lo pactado el 28 con la República Argentina".

del 11,

el Gobierno del Uruguay deteniendo en cuenequitativamente, embargo bían considerarse sin ta que mucha parte de las estipulaciones de Lamas estaban cumplidas. "Por eso interpuse mi valimiento y mi voz para que a la vez que ambos poderes discordes comprendiesen la parte movediza

Los defectos de forma opuestos por

del

de

terreno la

paz y

nes a límites

que se afirmaban, lecapacitaran que

en

un mismo sin

el

interés

obligaha a concurrir en sus pretensioes decir, a convenir que todo arreglo de

la justicia les fin,

concurrencia

nuestra

nevaba

un

defecto

insanable

que era preciso evitar". Declaraba, pues, Urquiza que todo arreglo sobre límites pactado sin la concurrencia argentina,, era insanableimente nulo

régimen creado «por la Convención Preliminar de asimismo 1828 y que a los tratados de Lamas les faltaba la Pero agregaba que estaban ejecutados en sanción legislativa.

dentro

del

gran parte, prestación

lo

de

cual

no era exacto, pues salvo alguina que otra todo lo demás estaba pendiente de cum-

dinero,

plimiento, sobre todo

el

tratado de limites que

el

Uruguay en-

GOBIERNO DE GIBÓ

tero rechazaba

tratados

se

Y

como un atentado.

incorporase

35

advertía

concurrencia

la

que

argentina,

a

si

esos

entonces

ya

ninguna objeción podrían merecer. Quedaba, pues, resuelto el sacrificio .de;l Uruguay en holocausto al mantenimiento de la cordialidad de relaciones entre la Argentina y el Brasil y quedaba también trazado el programa de

Peña.

misión

la

La misión Peña. Montevideo en plena la mayoría blanca Asamblea rechazaban en absoluto los tratados de Lamas.

áe El

argentino

plenipotenciario

El

efervescencia la

Ministro

llegó

a

El gobierno de Giró y

politica.

Leao

Carneiro

brasileño que todavía estaba

amenazaba a Giró con el ejército acampado en territorio oriental y

estimulaba a la minoría colorada con la esperanza de la conquista del gobierno. "El Brasil entra para sacar tajada", aca-

baba de decir en medio de una acalorada discusión, Carneiro Leao al doctor Eduardo Acevedo. El doctor Peña levantó como símbolo de unión entre los parLidois orientales la bandera de los hedhos consumados. Hay que juzgar los tratados, decía, como "uno de los tantos hechos que

quedaron indisicutibles en derecho", por efecto del transcurso del tiempo y de la pacificación de la República. Su desconocimiento conmovería por otra parte a la República Argentina y ésta desea, en consecuencia, una pronta solución que aquiete a todos los gobiernos de la alianza.

Su fórmula, que

al

fin

quedó aceptada, establecía que

el

Go-

bierno Oriental pasaría una nota a la Legación Brasileña reco-

nociendo los tratados

como hechos consumados, y que en

s-e-

an pliego concurrencia argentina de modificaciones, mediante el cual el Imperio desistiría de la

guLda se

suscribiría

con

1.a

cesión de una media legua de terreno en las márgenes del Cebo:iatí

y

das por

media legua en las márgenes del Tacua.rí, pactaLamas, y se alteraría la línea del Chuy en forma de

otra

otorgar al Uruguay alguna ventaja territorial.

Antes de someterse a la formida'ble presión de el gobierno de Giró de modificar

mientos, trató

los la

aconteci-

actitud

de

Urquiza y envió con tal objeto a Entre Ríos una Comisión c:mpuesta del Presidente del Senado don Bernardo P. Berro y del Jefe Político de

Montevideo coronel Venancio Flores.

HISTORIA DEL URUGUAY

36

"La



tino el

en

'decía

Brasil,

municaciones está impuesto

nota

su

cual

tal

adoptada

últimamente

política

— respecto

ha fonmulado

la

por

de el

el

Gobierno

nuestras

Argencon

cuestiones

señor Peña

en

sus

co-

sospechar que V. E. no verdadera situación de este negocio o due

este Gobierno, nos liace

a

de

la

hay aligún error de concepto que e¿ urgente aclarar". Psrc los comisionados regresaron a los pocos días con la desalentadora noticia de que el mandatario argentino instaba por

la

regreso

con

el

ve.aciimiento

del

plazo de tres

Imperio, y cnitonces el gobierno de Giró, estaba amenazado por el ejército imperial del conde de

días del

que

de los tratados.

aceptacicín

Coincidía ese

ultimátum

del

Caxías -acampado a

poca

de

distancia

Montevideo y por una

que la Legación Brasileña trataba de estimular en toda forma, resolvió ceder con el propósito patriótico colorada

revolución

de

evirar

otra

,al

guerra

recién

país,

que

ya inerme en manos de "Nuestra

salido

habría

lo

cancillería

una guerra d- nueve años, para siempre,

arrojándolo

voraces estadistas imperiales.

los

pasó,

de

destruido pues,

una nota en que decía

a

la

Legación Brasileña: "El

Gobierno Oriental habiendo encontrado dichos canjeadas sus por el Gobierno Provisorio,

ratificados

ciones

y llevadas a ejecución

tratados ratifica-

en su mayor parte, los considera

como hechos consumados, cuyo respeto le interesa sostener como continuación de la política r'el gobierno constitucional". Urquiza actuaba sin duda en un medio agitado por- los problemas orgánicos de la unidad argentina y tal pudo ser la determinante de su actitud en la contienda entre y el Imperio. Pero es posible que si la diplomacia brasileña no hubiera descu'bieTtto esa actitud desde los comienzos de su campaña contra el Uruguay, las cosas no se hubieran

circunstancia el

Uruguay

tampoco le convenía una gran guerra que lo habría hecho bambolear y que habría agrupado quizá para siempre, en torno de una misma bandera, a las antiguas Provincias Unidas del Río de la Plata. Don José Vázquez Sagastume, que acompañó a Berro y a extremado, porque

al

Brasil

Flores en su misión, ante Urquiza, ha referidc al :lcc'.or A'.beiío Palomeque que el Ministro Brasileño Carneiro Leao, que también

para ción,

iba

duda de que se le escauno de sus momentos de exaltamesa con el puño, que si los orientales no

en la coimitiva temeroso sin

la presa,

llegó a decir en

golpeando

la

GOBIEE>'0 DE GIRÓ

cumplían

los tratados la

37

escuadra brasileña bombardearía a Mon-

tevideo; y que entonces Urquiza, dando otro golpe, contestó que

en

tal

caso los argentinos se pondrían del lado de los orientales.

exclamación hubiera terminado la entrevista, la habría entrado en vereda y el sacrificio del Uruguay no se hubiera consumado. con

Si

esa

diplomacia

brasileña

Coadyuvando a

No

la

se contentó

misión Peña.

el

general Urquiza con enviar a su Ministro

de Relaciones Exteriores a Montevideo para inclinar la balanza a favor de la aceptación de los tratados de Lamas. Se dirit

prohombres de la mayoría parlamentaria con el mismo objeto. Al doctor Eduardo Acevedo le decía: "Como general vencedor pude imponer condiciones, pude apoyar mi triunfo en uno de los partidos que allí contendían. No gió a la vez a ¡os

quise hacerlo.

Preferí unir al pueblo oriental y dándole garan-

para que fundara sus

instituciooiies, quise dejarlo unido y que proisperara a la sombra de los buenos senitimientos de sus hijos. Desgraciadamente parece que ©sitos mis votos no se realizan. La situación interior del Estado Oriental se com.plica y quizá va a ser envuelto en la guerra iCivil. Su situación externa se ha hecho también muy crítica y viene a complicar la primeproporra. La cuestión de los tratados con el Brasil ha tomado ciones tan gigantesicas que aanenaza turbar La paz de esa República con el Imperio y arrastrar a la República Argentina a los vaivenes de esa guerra... Los orientales han olvidado los sucesos de octubre: han olvidado que yo senté como condición de paz la unión de los orientales de todos los colores, que procla-

tías

mé el olvido de lo pasado y declaré no había en la República vencedores ni vencidos... La reacción está a la puerta... Hoy se discuten ihasta los hechos consumados, hasta losi hechos envueltos en esa amnistía plena y entera que bajo mi insipiración Sfi

dieron los partidos..."

El doctor Acevedo contestó de

la

presión

el

mismo

día

en que por efecto

y de la actitud de Urquiza se gobierno de Giró a aceptar los tratados como

militar

brasileña

obligado el hechos consumados.

vpía





"Es un hecho ^decía: que este país se encontraba dividido en partidos con pretensiones exclusivas y enconiti'adas. Esos partidos,

ligados

con los

que dividían

la

Confederación Argén-

HISTORIA DEL UBTTQTIAT

38

tina,

mucho tiempo merced

lucharon por

intervención

la

a

tranjera que sostenía a los unos y a los otros.

.

.

En

los

ex-

últimos

nueve años han existido dos gobiernos o autoridades de hecho .La lucha empeñada pudo concluir en la República Orienital ce tres modos... por el triunfo del gobierno que existía fuera de Montevideo, por el triunfo del que se siostenía en la Capital o por la unióin de los orientales tomando por base la Cons.

.

.De estos tres modos posibles de soque se realizó? .. .Ahí están las memorables La palaibras de V. E. mo habrá vencidos ni vencedores reacción está a ,1a puerta, como dice V. E. tan acertadamente. Pero es necesario averiguar de dónde viene esa reacción Esa reaccióm no viene del partido que se denominó Blanco, ni dfc la mayoría del que se llamó Colorado. Esa reacción viene de una muy pequeña parte del antiguo Pairtido Colorado: de la parte interesada en perpetuar la marcha torcida, que las circunstancias imprimieron al Gobierno que existía dentro de Montevideo. .Nosotros pretendíamos echar un velo sobre el pasado: nos'Oitros pretendíamos no discutir los hechos envueltos en la amnisitía plena y entera que bajo la insipiración de V. E. se de la Reipública

t.tución.

lución,

¿cuá'l

el

esi

.

.





.

.

.

.

.

.

.

.

.

dieron los partidos. co

fué vencido y

.

el

Se

.

n!os

ha contestado'

quJe el

Partido Blan-

Partido Colorado fué vencedor;

que

pri-

el

mero no tenía otro caráicter político en esta tierra que el de hombres que se habían puesto aJ servicio de los intere;es del tirano de Buenos Aires, mientras que el segundo defendía la el valo sobre el pasado, pero un unos a la presencia de los otros. Un velo que nos ha/biJite a todos para trabajar con nuestra frente erguida en el sólido aíianzamiento de las instituciones de la P.epúbli'ca. A eso se liga la acusación de no respetar los hachos con&umadois. Nosotros, colocándonos en el punto de vista de la Constitución y de la justicia, rechazamos toda solidaridad con los actos malos de los dos partidos. No queremos respon-

causa

njacionatli.

.

.

Quieríainos

velo que no humille a

.

sabilidad

los'

.

moral, ni de las degollaciones y de las confiscaciones

de los unos, ni de los asesinatos y depredaciones de les otros: pero aiceptamos todos los actos de los dos gobiernos en que no

haya habido infracción de la ley, dejando a los Tribunales, siempre que fuera necesario, la decisión de si se ha infringido o no la ley. Los actos verdaderamente consumados nadie entre nosotros

piensa

consumado,

tocarlos.

que se

¿Pero

presente

se

llamará,

por

un hombre con

ejemplo,

un

acto

crédito

de

GOBIERNO DE GIRÓ

39

M7,Ono patacones por 40 bolsas

df^ íariña que vendió al Gobierno hace tres o cuatro años? .iRespecto de la cuestión brasileña, hoy arreglada, creo inútil entrar en detalles que serían in.

Con

tempestivos.

.

aceptación

la

pone

tero ha repudiado, se nos

de los tratados que el país enen el caso de ser brasileños.

¡Quiera Dios que no. haya con el tiempo motivo de arrepentimiento y se eclhe de menos la base de la conivención de 182 que dio existencia a esta República!"

La

el

p:'e.sión

brasileña por medio de las bayonetas.

Pocas horas después de haber cedido el gobierno de Giró ante ultimátum brasileño, escribía "El Comercio del Plata": "El ejército brasileño, una vez arreglada

la

cuestión

de los

marcha hacia Río Grande. Cónstanos que conde de Caxías tenía en esta ciudad uno de sus ayudantes pa-

tratados, va a seguir su el

ra que esperase el resultado de la negociación pendiente y ese oficial

debe haber marchado ya con pliegos para

sileño,

portadores

del

feliz

aquel ejército se hallará

Todo

el

lucha

días del

contra

la

Rosas,

de marzo en territorio,

muy

brasileño^

ejército

que había quedado en la

arreglo

de

la

el

cuestión.

general bra-

Según

esto,

luego en su territorio".

que había actuado en Caseros

Colonia a estaba

la

o

espera del desenlace de

acantonado desde

les

primores

en Santa Lucía y en otros punto.-! dando lugar a sangrientos incidentes, como uno el

Cerro,

en el curso del el Departamento de Florida, mes de mayo mientras proseguía la negociación diplo-

que ocurrió en propio

mática y ejercía su presión el plenipotenciario brasileño. Según el parte del ayudante del conde de Caxías, una fuerza oriental había atacado a los brasileños cerca de su camipamento, poniéndolos en el caso de defenderse y de matar a varios de

agresores. Pero según los partes orientales los brasileños habían atacado a la policía matando a la mitad de sus componentes y llevándose prisioneros a los demás.

los

Tuvo

parlamentaria ese incidente. I,ns según los datos suministrados por uno de los senadores, andaban arreando caballadas, y al ser contenidos en sus atropellos por una partida policial de catorce hombres, mataron a la mitad de sus componentes, dando lugar repercusión

intensa

soldados brasileños,

con ello a que

el

vecindario corriera a las armas para repeler

y dispersar a los atacantes. Cotaentando los

senadores

el

suceso, decía otro de

HISTORIA DEL URUGUAY

40

"Se nos amaga, se trabaja incesantemente para espantarnos con la infalible y próxima guerra con el Brasil, si no aceptamos inconstitucioualmente sus onerosos tratados; y no se advierte

que la inseguridad, disgusto y malestar de nuestra campaña forzarán a sus moradores a armarse para guardar sus haciendas, a repeler la fuerza con la fuerza y a colocarnos quizá de repente y sin quererlo en ese rnismo estado de guerra tan temido y tan

ciertamente

Era tanta

la

lamentable".

agitación de la campaña, que

el

Ministro de

la

Guerra, contestando una interpelación del Senado acerca del incidente de la Florida, declaró que el Gobierno luchaba con obsel mantenimiento del orden. decía en el estado en que "Los tratados con el Brasil están, hacen imposible la consolidación de todo arreglo". Las mismas calles de Montevideo solían ser teatro de conflicto? íevelaidores de la excitación de los ánimos. Durante el mes de íibril promovieron un barullo en el muelle los marineros brasi-

táculos invencibles para asegurar



leños, y

un

cabeza de



del ejérciito que ppr aJlHií pasaba se puso a la guardia de Aduana, entablándose entonces una fu-

capiítán la

muertos y heridos. año siguiente que Carneiro Leao

riosa pelea, de la que resultaron varios

El senador Masini agregó

había exigido

el

al

destierro de varios de los opositores a los tra-

tados^.

La presión brasileña por medio de

la revolución colorada.

La astuta diplomacia brasileña no

satisfecha

con

la

presión

militar del ejército de Caxías, azuzaba a la vez las disidencias partidistas de los orientales para estimular

de nuevo la guerra

civil,

que acaso

un motín y encender al Imperio el

podría dar

resto de los territorios no absorbidos por los tratados de 1851.

Ha dejado constancia el doctor Juan Carlos Gómez de algunas de esas maquinaciones. El gobierno de Giró escribía en 1855 a don Andrés Lamas





^que estaba

los

aceptado por todos, cuando se produjo

tratados resolvió recabar

con prescripciones expresas de "El señor Carnoiro Leao

la



la

sanción

legislativa

la

de

crisis

de

acuerdo

Constitución.



agregaba hoy Presidente del Consejo de Ministros y entonces Ministro del Brasil en la República Oriental, se opuso a tal sometimiento de los tratados a las Cámaras... Ante la resistencia del señor Giró, ¿cuál fué

GOBIEENO DE GIRÓ

41

ipolítlca del señoi* Carneiro Leao? Buscar a los jefes de la Defensa de Montevideo, a los adversarios naturales de la Admi-

la

proponerles el derrocamiento del ssñor Giró, prometiéndoles hacer retroceder en su ayuda al ejército brasileño

nistración,

que aún se hallaba en territorio oriental en marcha para su Los Ministros diplomáticos no consignan de cierto en escrituras públicas tales promesas, no son tan inhábiles para dejar

país.

pero

de ellas rastros palpables, ciones,

yo

apelo

testimonio

al

d?

los

de Montevideo que recibieron tales indica-

jefes de la Defensa

de muchos ciudadanos y extranjeros respetables que de

conocimiento y

ello tuvieron

al

del g-eneral Urquiza y sus Minis-

tros en aquella época, a quienes el Presidente Giró envió en mi-

sión al general Flores, actual Presidente de la República, y al señor don Bernardo P. Berro, solicitando su apoyo para resistir al amago del Ministro Brasileño. Los hombres de la Defensa de Montevideo se mostraron dignos de sus hermosos antecedentes, se negaron a toda tentativa para derrocar el orden constitucional. Pero sacrificando lo que juzgaban mero interés de principio

leña

interés inimeidiato y urgente

al

Carneiro

exigencia del señor

consumados nas

así

Refirién'dose la

Leao

República, apoyaron

la

de que se dieran por

tratados de comercio

los

modificaciones

para dejar

^i'T

de salvar la alianza brasi-

que consiideraban un bien para

y

límdites

que fuesen sometidas

mediante

Poder

al

la

hechos algu-

Legislativo

a cubierto los priincipios". a

ese

dipllomacia

mismo

brasileña,

trabado de disgiregación emprendido decía

el

doctor

Acevedo

en

"La

Constitución":

"Para juzgar de

los tratados de

1851 nunca ha habido antiguos

blancos y antiguos colorados. Todos han sido unánimes en timiento de reprobación que hizo nacer

documentos.

Contra ellos levantaron

nt.taJbles

antilguo

de'l

la

existir,

mucha

cuestión de los partidos la

cuestión

'de

los

el

sen-

conocimiento de esos los hombres más muOho después que

grito

Partido Colorado. Fué

trabaJ9,ndose por algunos con

con

el

el

habilidad, logró complicarse

que ya no existían

ni

podían

tratados."

Otra forma de la presión brasileña:

la suspensión

de los sub-

sidios.

Juntamente con

la

presión militar y con

para que los blancos y colorados

se

el

persistente trabajo

echaran de nuevo

los

unos

HISTORIA DEL rHUGÜAY

42

contra crisis

los

Por gado

au. la

crisis

el

Gobierao Imperial complicar

la

financiera.

tratado de subsidios de octubre de 1851 se había obli-

el eil

procuraba

otros,

política

Brasil

reembo'lsable,

a la

entregar al Uruguay, ea caliidad de préstamo cantidad mensual de sesenta mil patacones por

el tiempo que el Gobierno Imperial juzgase conveniente, pudiendo retirarla, sin embargo, sin previo aviso becho tres meses antes". de los trataidos La cancillería Apenas promovida la discusión bí-asileña suspendió el pago de los subsidios que ya había em-

todo

'•no

pezado a entregar, y ber

la

quedado triunfante

terpusiera

niniguna

suspensión continuó aún después de ha. la

diplomacia

imperial,

que

sin

protesta o reclamo inmediato por

se

in-

acé-

estar

nuestra Legación en Río de Janeiro». Las primeras medidas del gobierno de Giró figuraba el negociador de los tratados de 1851. El Presidente, del cese escribía el Minisitro de ReiLaciones Exteriores doctor Florentino íaila

Entre





"cree comunicar es'e oese a don Andrés Lamas, y yo también, que para obtener alguna modificación a los ajustes que nos habiliten para pedir la aprobación de la Asamblea, usted no puede tener la libertad necesaria en la negociación a que he-

Castell!an)3s al

mos

invitado al plenipotenciario brasileño".

Después de aprobados los tratados, el Gobierno se dirigió a la Comisión Permanente en demanda de venia para ratificar su maurdato al diplomático' cesante, y una vez confirmado en su pjesto pidió don Andrés Lamas el pago de las tres prestaciones mensuales siguientes al cese y la continuación de los pagos "hasta febrero de 18 5 3 por lo menos", alegando la situación apulada del Tesoro público. El Gobierna Imperial accedió finalmente a lo primero, no atreviéndose a ir contra el texto expreso del tratado, pero se negó resueltamente a lo segundo, a título de que "los sacrificios pecuniarios que había hecho el Imperio eran bastante abultados y deBinteresados", el

Ministro Paulino Soarez de

mayo

.de

Es que Giró,

en

Lima en

el

según

decía

18 53. el

Imperio

castigo

deseaba hundir

áeñ

de haberse alzado contra

todo los

al

gobierno la

de

como marcha

tratados y

medio de robustecer su ya formidaible influencia en del Uruguay.

política

lo

Relatorio presentado en

43

GOBIEENO DE GIRÓ

La sanción

legislativa.

Constaba de tres artículos el tratado de modificaciones a que se liabía arribado. Por el primero, se alteraba un poco la línea desembocadura de dila del Chuy, haciéndala correr desde cho arroyo por el punto de San Miguel hasta encontrar la Laguna Merim y la boca del Yaguarón. Por el segundo, quedaban sin efecto las dos medias leguas cedidas al Brasil en las márgenes del CeboiLlaití y Tacuarí. Por el Tercero, se declaTaban en vigor

todjos

asimismo

los

demás

del

artículos

trataido

los tratados de ailianza, extradición,

de

límites

comercio

y

sub-

y

sidios.

El Senado votó en silencio un dictamen suscrito por don Juan Miguel Martínez, don Tomás Gomensoro, don Francisco Solano ae Antuña, don Antonio tuis Pere'ra y don Francisco Araucho, en

que se decía que

límites

los

fijados

eran "los mismos del año

1828, o sea el uti possidetis'".

Eu Todos

la

Cámara de Diputados

se

discatió, en cambio, con calor.

estaban de acuerdo en

los legisladores

la

necesidad de

la

mayoría sostenían que debía decretarse con una salvedad a manera de protesta que permitiera gestionar enmiendas en el porvenir, en tanto que los de la minoría colorada opinaban a favor de la sanción lisa y llana, tal como se había pronunciado en el Senado. El informe de la Comisión dictaminante, suscrito por don Eduardo Acevedo, don Salvador Tort, don Atanasio Aguirre, don Pedro Bustamante y don Mariano M. de Haedo, fundaba así el voto de la mayoría: "La Convención introduce importantes modificaciones en el tratado de límites del 12 de octubre de 1851, aunque no estasanción;

blece el

pero los de

la

verdadero uti possidetis

del

aparecer en los demás tratados

el

expresado año 1828. Entretanto

la

año

1828,

ni

logra

hacer

espíritu de la convención

del

Comisión, que ha oído las ex-

plicaciones del ministerio y comprendido la verdadera situación

en que se encuentra

como riores

la

la

República

al

celebrar esa convención, así

esperanza que fundadamente alimenta de obtener ulte-

modificaciones,

se

ha

creído

en

el

caso

de

aconsejar

a

minuta de decreto. La Comisión ha considerado que debe hacerse ese sacrificio a la necesidad que reconoce de conservar nuestras buenas relaciones con eil Imperio y de afianV. H. la adjunta

zar para la República los beneficios de lá paz de que ha carecido

por tanto tiempo".

HISTOBIA DEL UBUGUAY

44

"Con acuerdo daderos

esperanza de ulteriores modificaciones que pongan de 12 de octubre de 1851 con los verIntereses de la República... apruébase el tratado de

la

las estipulaciones de

mayo por

de este año con

la

por

celebrado

modificaciones

Poder Ejecutivo

el

el

día

15

de

plenipotenciario del Brasil y garantido

el

Confederación Argentina". el debate, dos de los firmantes de ese informe,

Al Iniciarse

Pedro Bustamante y don Salvador Tort, pertenecientes a la ir.inoría colorada, dejaron constancia de que ellos eran contrarios al preámbulo. El mismo señor Tort se opuso luego a que e. fion

preámbulo fuera discutido y votado. El Presidente de la Cámara don José María Muñoz bajo de su asiento para impedir también que se votara el proyecto sin el preámbulo. Sostuvo, en cambio, el doctor Acevedo, según la crónica de "El Comercio del Plata", "que se necesitaba algo que demos-

Cámara no estaba divorciada con el sentiNación y que era menester satisfacer la ansiedad que en seguida adhirió al general". Don Ambrosio Velazco, preámbulo, formuló esta moción que no fué apoyada porque era el derrumbe del país por la guerra extranjera y la guerra c'vil: "Difiérese la aprobación del tratado celebrado por el Poder trase al país que la

miento de

Ejecutivo

la

tanto

ficaciones a los

base el '

de

mayo

de este año con el plenipotenciario del Poder Ejecutivo haya obtenido las moditratados del 12 de octubre de 1851, tomando por

15 de

el

Brasil,v hasta

límites

el

el

possidetis,

uti

establecido

por

el

tratado

preliminar de paz de 182S, celebrado entre la República Argentina y el Brasil, y para los demás los verdaderos y recí.irocos intereses de la República y del Imperio del Brasil".

Cerrado

el

la

el preámbulo 14 diputados, topreámbulo 9 diputados, todos de

debate, votaron por

dos de la mayoría, y contra

el

minoría colorada.

Tuvo que volver el asunto al Senado, y entonces el constituyente don Ramón Ma-sini, que no había estado presente el día de la sanción, tomó la palabra para formular el proceso de la presión brasileña en estos términos candentes: "Enhorabuena que esos tratados deban ser aprobados

por

estamos en el caso de arries?:iT nuestra existencia poon qua '^1 Brasil, por medio de su con la nueva guerra lítica plenipotenciario, nos ha estado constantemente amenazando, si no tuviéramos justicia, medios, valor ni dignidad para arrosNo se alegue nunca que no se ha hetrarla como otras veces. fuerza,

si

.•

.

.

45

GOBIERNO DE GIRÓ

la libertad de que debe gozar un Estado como el nuestro, para hacer un tratado válido con una riación con que se halla en paz y que es una de las signatarias del tratado solemne que en 1828 estipuló con la Argentina la

cho constar que nos falta toda

integridad de nuestro

dependencia.

.

territorio,

mismo tiempo que

tera casi al

nuestra libertad y nuestra

El "Brasil, señores, ha traspasado nuestra

.

se celebró la convención de S de

octubre con un ejército que la ocupó después de la guerra

civil.

Esos tratados son perjudiciales y atentatorios contra nuestra dependencia y nuestra libertad. Por más que se diga que hoy

nemos

libertad para

discutirlos

in-

fron-

y rechazarlos y que su

in-

te-

aproba-

ción es legal, yo sostengo y sostenldré lo contrario".

En un por

el

editorial de

"La Prensa Uruguaya",

comentaba

así

año siguiente una información de Río Grande

al

sobre disidencias en la demarcación de

la

línea fronteriza:

•'Bastante se ha hecho por parte de ésta tal)

escrito o inspirado

constituyente cuyas palabras acabamos de reproducir, se

(la

en obsequio a la paz. El año pasado s«

le

República Orienhizo guardar

si-

y discutir en esta materia. Entonces todo se conjuraba en nuestro daño: fuerzas extranjeras dominando o amenazando en la campaña, la prensa del Estado vecino hostilizándonos en una cuestión en que es preciso no tener ni

lencio, se le impjdió hablar

una gota de sangre española en las venas para no mirar sin dolor la injusta e impolítica desmembración de nuestro territorio.

En na, lo

fin:

no teníamos de hecho libertad de imprenta ni

de

tribu-

probaremos cuando se quiera y si hay alguno que dude. Así se ha ventilado en silencio y por mudos, como si

como

lo

estuviéramos en Constantinopla, la cuestión de los tratados, y así se ha conseguido esa aprobación nula arrancada a las Cámaras Legislativas por la fuerza, por el temor. No importa, esto la justicia que en el decurso de medio siglo está dando sangrientas lecciones y proclamando entre ruinas que fueno hay más que ra de la moral y de los derechos del pueblo

hará brillar más

abis7nos''\

Triunfó

quedando la

fórmula de

la

sancionada

así

esperanza

acuerdo intereses

las

de

de

la

Cámara de Diputados en

la

ulteriores

estipulacioines de los tratados... la

Para algunos

el

Senado,

en julio de 18i5 2 "con pongan de modificaciones que

ratificación

con los veMiaderios

República". de

los

im.pugnadores

del

taba de un voto platónico. Para ocros, de

preámbulo, se trauna ofensa al Impe-

HISTORIA DEL URUGUAY

46

rio que podría dificultar planes de política interna. Para otros, de hostilidad al gobierno de la Defensa que había firmado y ratificado los tratados. "El Coimercio del- Plata", que a raíz de la primera sanción del Senado juzígaba ya serenada la atmósfera política, volvió a alarmarse ante la publicación del informe de la Comisión especial de la Cámara de Diputados, afirmando que el preámbulo que allí se aconsejaba constituía un acto de

Svárez y aún contra el prola sanción lisa y llana. Era, sin embargo, lo menos que podía hacerse contra la incontrarrestable presión militar brasileña y a la vez lo más que contra

hostilidad

toleraba

de

estabilidad

la

toda

a

sa'lviar

gobierno

el

de

de Giró que había pedido

rio gobierno

costa,

situación

la

idespecho

a

de

de algunos puntos del país, entre Salto

que pedía a

cinco

tratados,

timos

de

una

del

rechazo

liso

los

vecindario del y llano de los intereses

legí-

infamantes y comindependencia de nuestra

anticonstitucionales,

sosiego

dignidad,

la

ellas

el

que había que que llegaban

prdtestas

porque eran "perjudiciales a

República,

la

prometían

Asamblea

la

política

las

e

patria."

Y

el preámbulo como un voto que encargarán algún día los progresos económicos del Uruguay de recoger pacífica y tranquilamente sin protestas de nadie y por la sola razón de las supremas conveniencias de unois y otros!

ahí ha quedado y quedará

acaso,

y

sioi

acaso,

se

Entre presión y presión un pedazo de teiTitorio pasaba

al Brasil.

Tocaba ya a su término el debate parlamentario, cuando la oriental tenía que dirigirse a la Legación Brasileña para denunciarle que una columna de 1,000 hombres del ejército imperial había acampado en ¡as puntas del Minuano, destacando guardias en dirección al Paso de Carpintería en Río Negro y notificando al Juez de Paz de Aceguá el cese de sus cancillería

funciones.

Quince días después de veíase tal,

el

y

la

sanción definitiva de los tratados,

obligada a insistir en sus reclamos la cancillería esta

vez

para

prevenir

encargado de hacer

oficial

Aceguá

había

arrestar

y

exhibido

hacer

al la

intioiíación

instrucciones

conducir

al

orien-

que

plenipotenciario brasileño

que

al le

Juez de Paz de habilitaban

para

campamento a dicho magistrado

persistía en seguir ejerciendo sus funciones!

si

47

GOBIEEXO DE GIRÓ

Esos reclamos, que extractamos del Relatorio del Ministro de Negocios Extranjeros del Brasil, fueron contestados finalmente en forma tran
Pero

desocupación se Oiperaba con tanto desgano, que a cuando ya se preparaban a trabajar sobre

la

nes de octubre, terreno en

María Reyes por todavía

rio,

de

trazado

el

Uruguay y

el

dias invasoras que habían

.principios

Janeiro

'de

dloctor

al

los

a

el

Impe-

mismas guar-

reclamos de

la

can-

18 5 3 escribía don Juan Soto desde Río de Acevedo, refiriéndose a conversaciones con una

persona influyente en tirar la línea d&l

a»!

dado lugar

las

uruguaya.

cillería

A

Aceguá

ei.

el

coronel José

el

general Andrea por

el

estacionadas

seguían

fronteriza

línea

la

fi-

que

la política brasileña,

Yaguarón Chico a

general Andrea,

el

barra del San Luis, ha-

la

un trozo imiportante de indiscutible posesión urucomplacer a un estanciero Llamado Honorio, que quería vivir dentro de la jurisdicción brasileña!

bía arrancado

guaya,

para

Y

la

ima

de

persistencia y tenacidad

vida

en

la

de esas tarascadas,

instruye

mismo año, (promodoctor Ambrosio Ve-

parlaimentaria de julio del

interpela.ción

Cámara

Diputados por

de

el

suministrados según

iazco, sobre la base de datos

el

interpelante,

demarcador, de los que resultaba que se hacían graves modificaciones en la línea del Chuy, naturalpor

propio Comisario

el

mente que en perjuicio del Uruguay. La interpelación fué aplazada a la espera de los antecedenoes de la denuncia y luego quedó totalmente abandonada por efecto

En mayo

de de

cidente,

la

revolución que echó abajo al gobierno de Giró.

Relatorio

el

1853,

que

el

del

Ministro

decía,

se

con

Paulino

referencia

Souza,

de

seguramente a ese

in-

Soarez de

Comisario oriental sostenía que

comprendía todo

el

terreno

raguayo, mientras que

el

situado

al

el

utis

possidetis

sud del Puntal del Pa-

Comisario brasileño invocaba

a

su

fa-

hecho de que ese terreno "estaba ocupado desde muchos años por familias brasileñas sin mezcla de morador alguno oriental". Y agregaba que la duda había quedado resuelta y

vor

el

que los trabajos habían sido reanudados, en razón de que "el Gobierno Oriental se habla mostrado de acuerdo con la línea

Gobierno Imperial." Imperio tenía un poderoso aliado Tesoro público, que él calmaba con los

propuesta y aprobada por

Hay que recordar que en

las

angustias

del

el

el

HISTORIA DEL URUGUAY

48

subsidios o QA'ivaba con

la

interiupción de los pagos, según las

momento.

conveniencias de cada

de los partidos en

1/a coparticipación

el

poder.

Las agitaciones parlamentarias d i que liemos hablado, eran simplemente el reflejo de movimientos más profundos en el campo donde durante tantos años se había estado luchando c:n las armas en La mano. Había triunfado el candidato presidencial del Partido Blanco. Pero el Partido Colorado era el tínico dueños de la situación,

porque tenía César Díaz,

iieraJl

Ministerio de

el

la

la

Jefatura Política

Guerra a cargo

ge-

del

Monteivideo

de

cargo

a

fiel coronel Venancio Flores y toda la tropa de línea a cargo de las coroneles Palleja y Solsona. Y de esa situación de absoluto predominio no fué desalojado jamás. Cuando el general César Díaz renunció por efecto de desinteligencias políticas, pa-

só-

a

ocupar su puesto

antes

el

derrumbe de

del

coronel Flores

Giró.

pocas semanas

hasta

Mayor era todavía

en los cuarteles, pues ni aun a raíz del motín

estabilidad

la

del

de julio

IS

pensó en el) reemplaizo de los jefes que abierta y decididamente arrimaban el hombro contras las autoridades consti-

se

tuidas.

Es que

los dirigentes de la situación trataban de combatir el es-

'.icipación,

único medio en concepto de elics de arrancar

de las garras de desangrado.

La

mediante un iDrograma amplísimo de copar-

de bandería

píritu

la

guerra

civil

que tan cruelmente

era la aspiración de todos,

como

Jo

al

país

habían

constar

el

general Rivera en una expresiva carta al Presidente Giró, en

la

pa/z

lo

hacía

término de las oísicil alciones, que habían afligido a la patria por tanto tiempo", agregaba que todos sus esfuerzos propenderían a! plan de "contribuir a la

que luego de

conservación

Pero

el

"felicitarlo

de

la

por

el

paz".

sentimiento

de

partido

continuaba

vivo

de todos los esfuerzos de los hombi-«s del gobierno.

a

A

despecho raíz

de!

decreto de marzo de 18 52 que suspendía las afectaciones de ¡as rentas constituidas por

las

autoridades de la

Defensa, hubo

violentas polémicas, en que los unos exaltaban las glorias de la

ciudad sitiada y los otros la causa del campo sitiador, y hasta manifestaciones callejeras con arranques oratorios de peligrosa resonaincia.

49

GOBIEENO DE GIRÓ

Un

día

Alcalde

se

le

Oriental N.°

de

de

9,

depositada

fico,

ocurrió

Ordinario

heroica

en

na'ciones

contra

de'l'

actuación

entregar

al

Regimiento

del

en las campañas del Paci-

dio origen

a

disol'i-

la

recriml

violentas

donante, que llevaba una vida oscura en su

el

Migueléte, increpándosele, con tal mic'tivo to'da

consolidación

la

bandera

Córdoba después de

de

gre que había derramado en

de

¡a

La entrega

ción del Regimiento.

fjuinta

Unión

iglesia

la

Manuel Oribe

general

al la

de

la

san-

la

curso de sus campañas a favor

el

dictadura de Rosas en las provincias

argentinas.

El Presidente Giró, ique creía sin embargo afirmado ruiento de


paz,

decía al clausurar las sesiones

Cuerpo Legislativo en "Mediante vuestros

julio-

el

senti-

ordinarias del

de 1852:

patrdóticos

esifuerzos,

apoyados

por

el

¿entimiento nacional, esta patria que encototrasteis poco ha dilacerada y moribunda bajo los gclpes de nuestras discordias emipieza Ihoy a levantarse de su prolongado martirio y dar señales de vida y ele vigor, que anuncian para una época no muy di&tanite un venturoso porvendr. En verdad no hemos civiles,

a

andado gran trecho en el camino de la reorganización nacional, porque no se reparan en poicos días diez años de ruina; pero te-

nemos

paz, orden, libertad, independencia, estas únicas y solibases del bienestar y proisperidad de los pueblos y esto basta para glorlficaír la época del pTimer período legislativo".

ólas

Pocas horas después de 1.a Lectura de este mensaje, empezaban los festejos conmemorativos de la Jura de Ja Consititución con el concurso de tOido el pueblo de Montevideo. El programa comprendía desifile de los niños de las escuelas públicas, para-

da

corrida

militar,

de máS'Caras;

entrada a

"Al

la

y

de

sortijas,

reaJizado

Policía.

sin

artificiales, comparsas un solo incidente que diera

juegos



un pueblo entero decía renovando de los fesitejosi

ver

crónicas

fué



"La Constitución" en su juramento de sostener

el

en

toido trance el paeto cons'títucional, nadie habría sdquiera sospecbado que ese pueíblo poco ha dividido en bandos escanda-

mundo con las escenas de sus discordias y miserias; todos aparecían animados de la misma idea, convencidos de que el único puerto de sailvacióa en el futuro es el cumplimiento

lizada al

leal

y franco de la Coinsititución



de

la

República".

"La República Oriental. agregaba algunos K.ismo diario marcha indudablemente en una



4

— IV

días vía

después ese de progreso

HISTORIA DEL URUGUAY

50

Nadie

engrandecimiento.

y

que

la

recorriera

hoy,

conocer

s'n

antecedentes podría siquiera sospechar que acaba de salir de una guerra atroz, en que se agitaron- todas Jas pasiones y se

los

cuestión

en

pusieron

fundamenitos más

los

sagrados

de

la

so-

sentimiento generad de que todos hemos errado y de que nadie tiene derecho a tirar la primera piedra, hace que exis.ta una tolerancia recíproca respecto de lo pasado y que todos nos entreguemos con anisia a trabajar por la consolidación

ciedad'.

.

.

Eil

orden y de Las instituciones. El recuerdo de lo pasado no sirve, sino como servía a los jóvenes espartanos la presencia de los ilotas ebrios que se hacían circular por las mesas comunes, para apaTtarnos de todo aquello que pudiera conducir-

del

nos

a la situación desgra'ciada de que atcabamoB de sialir... El que hoy viniera a promover cuestiones sO'bre lia justicia de las pretensiones que respectivamente sostenían los partidos que dividieron al país, no sólo aparecería como hombre de otra época, eino que maniifestaría' que no tiene corazón o que no lo inflama

no.?

el

sagrado deber de

"Nos encontramos cio del Plata",

— en

la

al

patria".



fin

exclamaba

a su

turno "El Comer-

aquella situación feliz eu que de todos los

la República no parte una voz, no se manifiesta un sentimiento que no sea con tendencia a estrechar los lazos fra-

puntos de

ternales entre los hijos de

Empieza a

la

tierra".

sentirse el malestar.

Desgraciadamente

acción

la

gubernativa

no

respondía

a

las

exigencias del momento.

Faltaba empuje para resolver los gravísimos problemas económicos y financieros que había planteado la larga guerra que •acababa de terminar,

y

malestar de todas las clases, produ-

el

cido por la destrucción de la riqueza pública, tenía que acentuarse y se acentuaba día a día.

Dándose cuenta de trabajar en

torno de

ello,

los

la

prensa

sugería

Ministerios inactivos

la

idea

de hacer

una cincuentena

ciudadanos, que se distribuirían en grupos o subcomisiones para el estudio de iniciativas y tareas relacionadas con la reconstrucción general.

de

"La situación ta" en

es de malestar

octubre de



decía "El Comercio del Pla-

1852. Es una situación de absoluto descono-

GOBIEBNO DE GIRÓ

51

cimiento de las exigencias del país, que reclama actividad y obun quietismo pernicioso, que exige iniciativa franca, deci-

sei'va

dida, ilustrada, y ve en su lugar una negación completa de ella. Es una situación que mantiene al país en una expectativa fatigosa acerca de sus grandes intereses, de sus menores necesidades, de su presente y de su futuro. Es una situación en la cual no se considera la miseria, no se atiende a remediar el atraso, no se provee a la falta de población. Es una situación en la cual cada día que transcurre nos lleva a un precipicio por la incertidumbre en la Hacienda, más encarecida aún en vista del sistema de no publicidad tan exageradamente observado. Por todo esto es de malestar la situación y desde luego el país reclama su cese inmediato, so pena de que no se tenga derecho a contar con su

apoyo".

Los primeros rumores de revolución.

A

mediados de mayo de 1852

la

Cámara de Senadores

inter-

peló al ministerio con motivo de los tumultos de la barra de la

Cámara de Diputados los decretos del

Uno de se

hallaba

barra;

los la

sobre

al

discutirse la legitimidad de algunos

gobierno de

la

oradores habló "sobre

el

estado de coacción en que

Cámara de Diputados por los

de

Defensa.

las

demostraciones de

rumores circulantes acerca de

la

actitud

la

que

asumido algunos jefes brasileños y el Ministro de la Guerra en el caso de que los tratados de 18 51 no se hubieran aprobado; sobre la existencia armada de la división oriental; sobre la medalla que debía distribuirse a los soldados de Caseros en uso de facultades que sólo a la Asamblea correspondían; habrían



Guardia Nacional". "que la concurrencia a la barra de la Cámara de Representantes de oficiales de la división oriental, era motivada por el interés de las cuestiones que se debatían y

y sobre la necesidad de restablecer la

El Ministro contestó

jamás por un objeto dría lugar el 2

5,

hostil;

que

la

distribución de medallas ten-

por haberlas concedido

y que respecto de los rumores a que

el

Gobierno Provisorio;

hecho referencia, nada contestaba, porque nadie podía juzgarle sino por sus actos se había

públicos".

Tales eran las palabras del acta sivas que las

oficial,

mucho menos

expre-

de la crónica parlamentaria de "El Comercio del

HISTORIA DEL UKXJGUAY

52

según

Plata",

la

cual

Ministro

el

de la Guerra general César

Díaz, había sido acusado sobre la base de

rumores de revolución

connivencia con los brasileños para

caso de que no fueran

f-n

los tratados de 1851,

aprobados

el

originándose con

tal

violenta discusión a la que hubo de poner término

motivo una Ministro

el

que el Gobierno estaba resuelto a adoptar como línea de conducta el respeto a los hechos consumados, juzgando que remover el pasado sería huncon

doctor 'Castellanos,

la

declaración

de

dir al país en el caos.

La crónica de "El Oriental" ponía en boca Díaz

respuesta dé que

la

"sii

él

lo

independencia de la República, no al frente de una revolución".

ia

del general César

creyera necesario para salvar

inconveniente

tendría

en

ponerse

Una revolución que se dirigía no contra el gobierno de qae formaba parte el Ministro, sino contra la mayoría parlamentaria que pretendiese dominar con sus decisiones! Otro diario, "La Patria", publicó una versión parlamentaria más extensa, con numerosos párrafos entre comillas que denunt-iaban la prolijidad de sus informaciones, y que vamos a extractar:

Senador Masini tes.

la



En

todas partes

circulan

rumores

alarman-

La Cámara de Diputados aparece cohibida, o por lo menos, mayoría se abstiene de concurrir a las sesiones a causa de

desórdenes de la barra. No se or-ganiza la Guardia Nacional, que es la mejor garantía de las libertades públicas. Senador Antuíia La situación del país es gravísima, ex-

:os



traordiniaria y

sumamente

peiligrosa. Es necesario que el minisSenado si responde de la tranquilidad púcompleta libertad de la Asamblea en el ejercicio

terio declare ante el

blica y

de

la

de sus funciones.



Ministros de GoMerno y Guerra Nada hay que temer del doble punto de vista de la tranquilidad pública y de la libertad

de los debates parlamentarios. \Senador

Antuña



La mayoría

de

la

Cámara

de Diputadoa

está notoriamente coacta, por efecto de los desenfrenos

de una barra compuesta de gente armada y de gran número de militares. En todas partes se dice que esos desórdenes son promovidos por el propio Ministro de la Guerra general César Díaz, quien

Con

busca esta

dose que

un

el

para

pretexto

disolución

nos

Ministro de

disolver

el

Cuerpo Legislativo.

amenazan desde hace la

Guerra está resuelto

días, a

asegurán-

derrumbar

al

53

GOBIERNO DE GIRÓ

Gobierno

no se aceptan

si

Ministro

el

ciue

tratados con

los

con

connivencia

en

está

Brasil.

Se agrega

ejército

brasileño,

el el

Santa Lucía, y que las fuerzas de caballería de ese ejército sólo aguardan para volver sobre Montevideo un aviso del plenipotenciario Carneiro Leao. Estos rumores pue-

acampado sobre

el

den ser exagerados

pero hay varios hechos que próximo reparto de medallas a de la Asamblea que lo autorice,

el

dados de Caseros sin ley manencia y acuartelamiento de todas actuaron en tativa

del

no obstante

Caseros,

de línea, y

ejército

los co-

o falsos,

como

rroboran, tales

la

la

sol-

la per-

fuerzas orientales que

las le'y

los

de

Presuipuesito,

no convocatoria de

la

limi-

Guardia

Nacional'.



En cuanto a la Ministro de la Guerra general César Díaz. medalla siento no haber venido a la Cámara trayéndola en el medalla debe ser respetada, porque emana de la auque podía decretarla y además porque se trata de un hecho consumado. En cuanto a los militares de la barra de la

p(

cho.

Esia

toridad

Cámara de Diputados,

ellos

asisten

su

en

carácter de

ciudada-

nos y son incapaces de promover desórdenes. No ha sido convocada todavía la Guardia Nacional en razón de no estar pro-

En cuanto a las que se me dirigen, las rechazo en ejército, pero agregando que si fuera necesario no barazo en ponerme a la cabeza de una revolución

acusaciones

vistas todas las Jefaturas Poilíticas.

de

la

revolución

nombre

del

tendr.a

em-

para salvar

patria. '^'^nador Masini.

Ante

nistro.

no

Ministros,



revoluciones contra

En

Pido que se

llame

orden

al

al

señor Mi-

Senado que está habilitado para juzgar a los puede jactarse el genieral César Díaz de hacer

el

el

orden constitucional.

el senador Masini a lo que debía entenderse por hechos consumados, habló de la venta

de

la

el

curso de su réplica, refiriéadose

Iglesia

Matriz y de

Plaza Constitución por

la

de Suárez, y ello dio mérito

a esta

frase final

del

el

gobierno

Ministro de

Guerra:

la

"No

sólo la Iglesia Matriz, sino vn

berse vendido

si

pueblo entero debería ha-

eso hubiera sido necesario para salvar todo

un tirano como Rosas". Eran tan formidables los rumores ique habían

pueblo de la

un

cuchilla de

interpelación del Senado,

üi-iltuosa nesi

la

sesión,

se

dirigía

dado base a

que pocos días después de esa tuel

Miniátro

de

Gobierno y Relacio-

Exteriores doctor Florentino Castellanos,

brasileño doctor Paranhos, en

demanda de

al

plenipotenciario

auxilios.

HISTORIA DEL TJEXTGUAT

54

"Se trata hoy



le decía en nota ''le principios de junio de 1852 infundados pretextos de partidos que han debido quedar muertos para bien de la patria, de hacer una revolución contra la

— bajo

diciendo que se cuenta pc
iiutoridad,

fuerza de los

la

batallones de línea acantonados en esta Capital y que formaron la división oriental en el grande ejército aliado a las órdenes

señor general don Justo José de Urquiza". Todo

del

lo

cual se

Paranhos lo ha referido al Ministro firmante. Es necesario, pues, que en el día baje de la escuadra brasi'leña, de conformidad a los tratados de 1851, públicamente y

declara

propio

ei

doctor

'"toda la fuerza disiponible".

Contestó

cuando

no

escuadra

la

había

que

Brasileño

Ministro

el

"aún

necesarias

dado

las

tropas

tenía

órdenes des-

de

€-mbarco'".

Pero

de

antes

que

ejecución

tuvieran

ellas

apresuró

se

a

Legación Brasileña que ya habían desaparecido los motivos a que respondían. "El espíritu de orden y de conicordia 'decía en su nuerva nota domina completamente a los espíritus alucinados en mala hora".

anunciar

cancillería

la

oriental

a

la



Refiriéndose

estos

a

encargó de documentar



mismos conatos de revolución, que

mayo de 18 53, decía mismo año:

su Relatorio de

se

Ministro Paulino Soárez de Lima, en

el

cancillería

la

oriental a la

Asalmblea en marzo del

"En el

primeros días de junio del año anterior se propagó

los

rumor de que de

Presidente el

la

República

convencimiento de que

domima

que

atentado. pidió

al

Sin

en

al

el

ánimo

embargo,

no

le

no

todos

de

ipermitiría

semejante

como medida de prudente precaución,

Ministro residente

Brasil

del

que desembarcara escuadra, de conformidad a

niente para la

un movimiento militar. El daba crédito, porque tenía espíritu de orden y de concordia

se trataba de hacer

que dispusiera

lo

conve-

fuerza que tuviera disponible

la lo

estipulado

en

el

tratado

de

inmediatamente por el representante del Imperio, y aumque no fué necesario el desembarco, el Gobierno agradeció la prontitud, lisonjeándose hoy mismo de no haber sobrevenido motivo para tal auxilio". Tres meses después de la crisiis que acabamos de historiar, llegaban rumores de alzamiento en Paysandú. La división del general Servando Gómez allí destacada, que debía ser licenciada en cumplimiento de la ley de Presupuesto, se negaba a daalianza.

Esta

obligación

efectividad a tal medida,

fué

reconocida

según

las

versiones

circulantes.

Pero

GOiiiKu.Nü

gikó

di;

55

coronel Flores, que habla reemplazado al general

el

en

Ministerio de la

el

Guerra, salió a campaña y

César Díaz

disolvi(3

esas

fuerzas sin embarazos de ning-una especie.

lívolución de los partidos.

Había una revolución en marcha. Pero nadie quería cargar con

la

responsabilidad de resucitar las divisas de guerra.

Todos consideraban que era un crimen levantar el estandarte blanco o el estandarte colorado que tantas y tan cru'-les desagracias habían traído al país durante el pei-íodo de guerra qu3 corre de 1836 a 1852. Por eso, cuando los prohombres de la Defensa de Montevideo resolvieron estrechar ñlas y prepararse para la lucha lo hicieron sobre la base del repudio de las viejas denominaciones y de los viejos exclusivismos.

La "Sociedad de organizó

tiva,

se

pero

cc:i

los

Amigos

dentro

un programa

orientales

que

de

que

dei

un

podía

contribuir

quisieran

País", nacida de esa

ambiente ser

suscrito

por todos

afianzamiento de

al

inicia-

netamente colorado, la

lo?

paz

y de las instituciones.

Véase bre de

que decía ese programa que se publicó en noviem-

lo

1852:

"La pacificación de Ja Repviblica en octubre de 18 51 hizo nacer en todos las más grandes esperanzas de prosperidad. Un año ha trani&currido, y no viendo realizadas esas esperanzas, el ha sucedido a las lisonjeras expectativas de los primeros días de la paz. La prolongación de semejante estado de cosas, originando el descontento, traería cuaado menos la indi-

malestar

ferencia por

guiente titud

sistema

el

fácil

con que

paz,

la

el

el

hará por

orden la

constitucional y por consiRepública, mientras que la pron-

país reporte en el

todo sentido los beneficios de

que ciudadanos".

contrario

enérgica en todos los

"Dejamos

del

trastorno de

la

decisión

de sostenerlo^ sea

a la historia y a la opindón el juicio de Jo

como de

que

fué.

hombres, no reconociendo más juez que la historia para decidir de qué parte haya estado el error político, ni más juez que la opinión para juzgar los extravíos individuales. Sólo el crimen y Va inmoralidad no tienen derecho por lo pasado a más consideración que el olvido y así

el

respecto de los sucesos

desprecio".

los

HISTORIA DEL UBUGUAY

f)6

iSe

propone reunir

orientales." Acepta

de partida de de

la

la

ley,

nuevo paitido

el

nueva

la

constitucional."

era

de

realidad

la

constitución,

orden,

paz, la consolidación del

la

"a

todos

solución de oictubre de 1851

la

el

Quiere

buenos

el

imperio

mantenimiento de

obediencia a

la

los

"como punto

la

autoridad,

sistema del gobierno constitucional, la sucesión constitucional de los Presidentes, la moralidaid en el gobierno, la pureza en la administración, el afianzamiento del crédito público, la pronta el

acción de la justicia,

el

respeto a lo^ tratados, el progreso de la

Repúiblica por todos los medios que conduzcan a la

mayor

civi-

y prosperidad.

lización

"Consideramos coimo un mal para

el

país

modo como

el

partidos han hecho sentir antes de ahora su vida

pública;

los

de-

que si podemos llegar a ser un partido político, rechazaremos con todas nuestras fuerzas cuanto pueda contribuir a la existencia de un partido personal"; Centenares de ciudadanos de uno y otro partido, entre los que figuraban don José María Muñoz, don Joaquín Requena, don Melchor Pacheco y Obes, don Salvador Tort, don Lorenzo don Fermín Batlle, don Enrique Muñoz, don Estanislao Vega, Ferreira, don Francisco Magariños, don Carlos Anaya, don José María Castellanos, don Juan Carlos Gómez, don Pedro Bustamante, don Eduardo Acevedo, don Manuel Freiré, don Saturnino Alvare?, don Miguel Alvarez, don José G. Palomeque, don José claramos

María Solsona, don Francisco Tajes, don Adolfo Rodríguez, don Doroteo García, don Mateo Magariños, don Ambrioso Velasco, don Federico Nin Reyes y don Atanasio Aguirre se apresuraron £.

suscribir

tan

declaraciones.

patrióticas

Luego de recogidas las primeras adlhesiones, ciadora compuesta de don José María Muñoz y

Gómez nión de

dirigió

se

en

los

los

a

los

salones

la

nuevos miembros y

que asociada

a

la

Mesa

Unftversidad, el

se

Comisión

ini-

Juan Carlos invitándolos para una reu-

adherentes

de

la

don?

"para

la

incorporación

nombramiento de una Comisión

encargaría

de redactar

el

proyecto

ce Reglamento".

Uno de diciendo

los

adherentes,

el

doctor Eduardo

Acevedo, contestó

que estaba dispuesto a concurrir "a una reunión ge-

neral en que se arreglarían lo© estatutos de la

asociación,

mas

no a in'corporarst; a una soiciedad "ya instalada y organizada". "Para acabar con los anA/ceptaba la fusión, no la absiorción. .

.

gobieb:ío de giró

tiguos partidos

57

era necesario igualailos ante la

Constitución

de

República".

la

Ampliando esas

observaciones,

decía

Acevcdo

doctor

el

en

Constitución":

'"La

El programa por

suscrito

aunque iniciado por un círculo, fué en hombres que no pertenecían a esa

el

los

acto

círculo.

Era un programa, de "ideas, no de personas. Pero sus iniciadores lan resuelto otra cosa. Han resuelto organizarse ellos en par-

demás como incorporados. En vez de la Lo natural era que después de firmado el programa, hubiera una reunión general en que se efectuase la fusión. Con la actitud de los iniciadores podría darse el caso de que frente a la Sociedad de Amigos del País, iniciada por tido

y

fusión,

aceptar

la

colorados,

los

los

a

absorción.

organizase

se

que divide hoy a

lo

Tuvo lugar aplazado

el

tidista

los

de

en

que jamás

el!

exactamente

blancos,

sino las personas

fomdo resulta una ten-

L'riversidad

hasta

fué convocada,

y la

esa

y enterrar

reemplazado

a

la

misma

de

idea

la

en

quedó

ella

celebración

en'cargándose

acontecimientos políticos de extremar

el

espíritu

incorporación

primitiva de fusión, tan llena

de

entrepar-

que ha-

de popula-

la paz.

íliputación del Salto.

Hubo una de

la

estatutos

los

lidad y de prestigio a raíz de

La

los

las ideas

En

orientales.

reunión

la

estudio

asamblea

tanto

bía

so.t

de resurrección de los viejos partidos.

tativa

-^tra

los

por

otra

con las mismas ideas, porque no

Giró:

la

sola del

elección

de

Departamento

cante que se había producido

candidatos se disputaban

mez, proclamado por

clamado por

los

los

el

legisladores del

en

-a

triunfo:

Salto,

durante

el

gobierno

para llenar

una va-

Cámara de Diputados. Dos el

doctor Juan Carlos Gó-

colorados, y don Francisco Lecocq, pro-

blancos.

Gómez acababa de llegar de Cíhile después de una larga y brillantísima campaña en la prensa del Pacífico, que le había valido al tiempo de su reigreso a la patria honrosas demostraciones populares, consistentes en un banquete El doctor Juan Carlos

y en el regalo de una obra de arte con esta inscripción: "El comercio de Valparaíso a Juan Carlos Gómez".

HISTORIA DEL URUGUAY

58

Su candidatura estaba apoyada por el Presidente Giró, según ¿e encargó de comunicarlo el Ministro de Gobierno doctor Florentino Castellanos al Jefe Político don Bernardino Alcain: "Sin que esto importe la imposición de candidato alguno, decía

el

Ministro en su nota

me

muy





me hago un deber

en indicar a

que aquella elección reGómez, pudiendo doctor Juan Carlos persona del cayera en la asegurar a usted que ella será también de la aprobación y simpatía de Su Excelencia el señor Presidente de la República". usted que

seria

Aunque todas

las

apreciable

el

simpatías de la Jefatura Política de inclina-

ban a la candidatura de don Francisco Lecocq, se desenvolvió en forma tan correcta el proceso electoral que al llegar al término de la jornada cívica, fué vivado el Jefe Político con igual entusiasmo por amigos y adversarios, dando eso lugar a que "El Comercio del Plata" señalara el caso del Salto como un ejemplo de "libre ejercicio del derecho del sufragio".

La lucha fué reñidásima, como

lo

demuestra

el

votos obtenidos por cada uno de los dos candidatos: tor

Gómez

y

2

número de 274

el

doc-

Comercio

del

69 su antagonista.

Luego de conocer

esas

agregaba

cifras,

"El

Plata":

"Merece notarse, en toridad

local

tan

vista de lo publicado,

influyemte

como

lo

es

en

que cuando una audepartamentos los

un Jefe Político, no ha sido bastante a arredrar al pueblo a expresarse libremente, podemos decir que la conciencia de los ciu-

dadanos va fortificándose respecto de sus derechos y que el poal círculo de acción puramente administrativo que la ley le señala en los departamentos como en der empieza a verse reducido

la

Capital".

Terminada la lucha, fué el doctor Gómez al Salto para agradecer el honor que se le había dispensado, y allí coronó la campaña con una hermosa nota de concordia cívica. "No admito, señores, dijo que haya habido en el país rartidos criminales; jamás un gran número de hombres se une



para cebarse Cada uno de

en

el

crimen,



para

degradarse en

la

infamia...

ha obedecido a convicciones, ha creído sostener principios, conveniencias del país en la lucha; pueden haberse equivocado, pero han sido sinceros". los partidos

OOBIEBNO DE GIRÓ

r>9

üefoiTuas electorales.

Aparte de este acto comioial de resonancia, liubo durante Giró varias elecciones

ministración

ad-

la

Alcaldes Ordi-

corrientes de

narios y Defensores de Menores, que la legislación de la época

Y

airibuía al pueblo.

esas elecciones sólo en un caso dieron lu-

consideración. Nos refeDepartamento de Tacuarembó a principios de 1853. De los antecedentes remitidos al Senado resultaba que se había ejercido presión sobre la mesa electoral "por grandes grupos de hombres armados", y que se había admitido el voto de muchos extran.ieros sin la previa comprobación de que estaban domiciliados en el paj's o que ejercían una industria, o que ha-, bían contraído matrimonio con hijas del país. Pero si no hubo otros actos electorales, en cambio mucho se

gar a protestas dignas de tomarse en

:mios a

y bastante se

discutió

Iragio

del

la

en

las

legisló

elecciones

que

la

pureza

habrían

de

su-

del

realizarse

1854.

en

.La

de

ley

junio

de

1853,

Eduardo Acevedo, reglamentó trictez

y

eficacia

debida el

que permitían

a

la

iniciativa

del

doctor

Registro Cívico con toda las

circunstancias

de

la

la

es-

época.

debería abrirse en enero y clausurarse en agosto año en que hubiera comicios. Para obtener la inscripción

El

registro

del el

para asegurar

generales

interesado debería acreditar ciudadanía, que tenía

más

de 20

de edad y que sabía leer y escribir. En septiembre cada Juzgado publicaría en un cuadro, a la vista de todos, la nómina ;iños

de

los

por la

la

ley.

ria,

inscriptos.

Durante ese mes cualquiera podría reclamar

no inscripción

tachar a las personas inscriptas

o

Las tachas serían resueltas por

la

mesa

electoral

contra

prima-

con apelación ante la mesa central del departamento. Cada recibiría un certificado de su inscripción. Nadie po-

inscripto

dría inscribirse ni votar fuera de la sección de su domicilio-, teiidjénldose

meses en Otra la

de

la

ley

por domicilio

misma

práctica

que

residenicia

continua por

se>is

o

en'-

más

localidad.

importante

ley reglamentaria

la

la Asamblea en esa oportunidad: ciudadanía legal. Hasta entonces era

dictó

de

la

Asamblea

con ocasión de se pronunciara que presentara el extranjero que aspiraba a entrar al goce de la ciudadanía legal. La le,y de que nos ocupamos estableció que en adelante el extranjero que qui-

cada solicitud

la

particular

HISTORIA DEL URUGUAY

C.O

adquirir ciudadanía, tendría que presentarse al Juez Letrado de su domicilio y producir ante éste la prueba de que reunía algunas de las condiciones exigidas por la Constitución siera

para entrar quedaría

al

g|oice

liaibiliitado

de los deretíhos polílticos, concluido lo cual para pedir carta de naturalización al Poder

¿;ecutivo.

Pero antes

,de

llegarse

a

interesantes debates en

e

de]

da

la

sanción

de esa

Pai^lamento y en

el

hubo largos

ley, la

prensa, acerca

alcance de las dis'posiciones constitucioinales que se trataba reglamentar.

Los doctores José María Muñoz y Juan Carlos Gómez predictamen que fué rechazado, por el que se declaraba que el extranjero que reuniera las circunstan'Cias constitucionales para el ejercicio de la ciudadanía, era ciudadano por minásterio de la ley y no tenía necesidad de recurrir al Cuerpo sentaron un

ejercicio de los dereLegislativo, bastándole para entraír al chos políticos una simple manifestación de voluntad, cual sería su inscripción en el Registro Cívico. La carta de naturalización



los cia

agregaba derechos de

la

dictamen

el

políticos,

ciudadanía,



pero

no es necesaria para si

habría

quiere obtener

se

que

pedirla

al

ejercicio de

el

como constan-

Poder

Ejecutivo,

que está obligado a darla. Vivían en Montevideo y en los departamentos millares de ex-

que durante el transicurso de la Guerra Grande habían sido arrastrados a las filas combatientes, y la mayoría de la Asamblea pensó sin duda alguna que no convenía que esa tranjeros

masa exaltada quedara incorporada tro

Cívico;

que

dbriendO' sólo

era

el

sin

más trámite

prudente establecer algunas

escenario

político

a

favor

al

Regis-

formalidades,

de aquellos que es-

tuvieran resueltos a suscribir una declaración judicial

solemne,

hasta como medio de que luego de actuar en la política no

lle-

nacionalidad de origen para pesar sobre país con alguna reclamación de índole económica. g.qran

'Con

a invocar su

ocasión

de los

debates

a

que daba lugar

ley

la

de

el

la

ciudadanía legal, recordó "La Constitución" que ha'bía dos leyes olvidadas, sancionadas ambas por la Constituyente, que podían y debían considerarse como la interpretación auténtica de la disposición constitucional que se trataba de reglamentar.

"Luego de jurada la Constitución mandará el Gobierno que en todos



los

un registro en que se inscriban todos

decía

una de

las leyes^

departamentos

los individuos

sie

forme

que tengan



GOBEEEXO DE GIBÓ

calidades designadas por el artículo 8." ide la Constitución para ser ciudadanos, exceptuando los que expresamente renunciasen la ciudadanía, negándose a ser inscriptos".

icis

De acuerdo con

la

otra ley,

los'

Jueces de Paz estaban obligados

Tenientes Alcaldes, un registro de todos los vecinos de sus secciones y distritos que tuvieran las a

levantar, con

cíilidades

ayuda de

prevenidas en los artículos constitucionales sobre ciu-

dadanía natural y Si

la

legal.

revolución del 18 de julio no hubiera hecho tabla rasa

todo

de

lois

existente;

lo

si

se

hubiera

dejado

las

a

autoridades

constitucionales organizadas a raíz de la terminación de la Guerra

Grande desenvolver todas sus energías tranquila y serena-

cumpliesas Olvidadas leyes habrían podido recibir miento y dentro de un ambiente de calma hubiera tenido el problema de la naturalizacióin de los extranjeros una solución racional, exenta de los temores que creaban las pasiones en choque y el estado terriblemente anormal del país.

mente,

El Presidente Giró i-ealiza lui viaje de estudio a la campaña.

No

quiso

Presidente Giró terciinar

el

el

primer año de su ad-

ministración sin hacer una visita a todos los departamentos de

campaña, para enterarse de sus necesidades y atenderlas

con

pleno conocimiento de causa.



"Hasta aihora decía "El Comercio del Plata" señalando la novedad del programa los Presidentes de la República nunca han salido a la campaña sino para ponerse al frente de los ejércitos, dejando siempre por doquier que pasaban una huella de



desolación y de ruina". La jira fué iniciada a fines de octubre de 1852. El Presidente

Giró salió acompañado de su Ministroi de

Gobierno y Relacio-

nes Exteriores doictor Florentino Casteltonos y de los generales Juan Antonio Lavalleja y Anacleto Medina, las dos figuras militares de

más

relieve a la sazón dentro

de

partidos que ha-

los

bían estado frente a frente.

Un

crecido

número de ciudadanos

escoltó al prim.er

mandata-

rio hasta la

Unión, siendo esa la primera de una serie de grandes manifestaciones en todas y cada una de las etapas de la jira. Una o dos leguas antes de la llegada a cada pueblo, el vecir darlo en ma.'sa salía a recibir al Presidente,

espectables

rruaje.

tomaban

¡a

y los vecinos más

cuarta para apresurar la

marcha

del

ca-

HISTORIA DEL VRUGUAY

(;2



escribía "El Comercio del del 1." de marzo hoy objeto de una ovación literalmente nacional... Representa para el país la idea pacífica y constitucional que debe dominarlo todo... Como tal lo miran ios pueblos; le salen a

"El

Plata"

elegido



es

su encuentro y

le

como

ofrecen su concurso;

tal

timientos de orden, fortifica las esperanzas en

promete a ser

fiel

a lo que de él exige

Al llegar a cada capital

enteraba de

locales,

se

opinión

respecto

acta

las

a

él

expresa sen-

com-

futuro, se

país".

el

Presidente reunía a las autoridades

el

.las

el

aspiraciones

reíormas a

cada

de

realizarse

Más de una

detallada de la entrevis-ta.

y

vez

una,

su

daiba

levanta/

hacía

tuvo oportuni-

también de tranquilizar los animaos con palabras de concordia. En Cerro Largo, por ejemplo, la población estaba dividida en bandos tan antagónicos que se habían formado dos codad

de recepción, cada una de

elilas con alojamientos preprimer mandatario. El Presidente llamó a los dirigentes y después de una breve alocución obtuvo que se refundieran en un solo grupo. Pero si había entusiasmo en todas partes y si la campaña entera procuralba llenar de flores el camino que recorría el Presi-

nilsiones

para recibir

parados

dente,

al

cambio era de intensa

en

tristeza

guerra recién



la

de

la

larga y asoladora

terminada.

""Tremendas han sido ca.

espectáculo

el

riqueza pública en escomibros, por efecto de

las crisis

por que ha pasado

Repúbli-

la

decía una de las Juntas Económico-Adminisitrativas al Mi-



Memoria del año siguiente y lejano que vea cicatrizadas todas sus heridas. Hay una inmensa distancia de La agonía a,l estado normal Huellas terribles habrá visto por doquiera el supremo gobierno en su tránsito por los departamentos y ellas le habrán atestinisterio de Gobierno en su

e?tá

el

día

en

todavía

.

.

.

guado que sólo una voluntad firme y una asidua perseverancia en los medios puede sacarla del letargo en que tanto tiempo hace

está sumida".

departamento,

"Este

decía

la

Económica

Junta

del

Salto

en su Memoria, se hallaba en un estado floreciente antes de guerra y absorbía raguay,

Corrientes

el

y

comercio de cuatro

Entre

Ríos.

Hoy

fronteras,

está

circunscripto

la

Pa-

Brasil, a

su

despoblado territorio y a una parte del de Misiones".

Uno de

los

acompañantes

del

Presidente

escribía

ciudad de Maldonado haciendo la crónica de la jira: "Los campos que hemos recorrí lo hasta aquí están

desde

la

pidiendo

GOBIERNO DE GIRÓ

la

ciue

mano

hombre

del

los

son escasas, calcuTándose en en

30,000

el

En una de

63

haga productivos.

40,000 cabezas

Las

haciendafi

ganado manso y

el

alzado".

paradas

las

que

la

comitiva hizo

en

el

Departa-

mento de Cerro Largo, el Presidente Giró entró en un rancho habitado por una madre viuda cou 14 hijos. "Somos pobres, la guerra nos ha dejado señor le dijo al ofrecerle una silla





en ruinas, pero que Dios bendiga nuestra paz y no ambiciona-

remos más riqueza". A mediados de enero de 185 3 resolvió el Presidente regresar a Montevideo, después de dos y medio meses de fecunda j.'ra.

Al anunciarse que había llegado iniciativa

le

"Deseando

de una gran

comercio

el

a la Unión,

tomó

el

comercio

demostración popular. naciOinal'



decía

Ilai

convocatoria



ofrecer al Presidente de la República una sencilla pero ingenua cemostr ación, de su adhesión y respeto y en agradecimiento por su parte a los esfuerzos de S. E. por el mantenimiento del orden, la. paz y la libertad de La RepúbMca, ha resueílito salir a" recibirlo Si

a su

triunfad

cribien.do

Heigaida".

— —

había sido

homenaje

decía "El

Comercio del Plata" des-

recorrida

poT los departamento-'?, demostración que le hizo la población de Jíontevideo. Entró el Presidente por la caiUe 18 de Julio acoinpañado por todo el pueblo a caballo., en coches y a pie, coronadas de señaras todas las azcrteas y balcones de esa calle y en metriiinifal

dio

El

el

fué también

de salvas de

Presidente

entero; ya está

momento de

ila

la

artilllería".

— agregaba

al



el mismo diario ha oído al país cabo de sus necesiidades; ahora ha llejtado el

darle satisfacción.

Camijaña contra

el abigeato.

:

Como

resultado de Uí: prirao; as medidas adoptadas a raíz de ganó inmensamente la seguridad de la campaña, según se encargaron de revelaa-lo las ciomunicaciones subsiguientes de las la

jira,

Jefaturas Políticas

de los departamentos.

La de Cerro Largo, al

a .'a-.^o -le .Ion Jcsé María Morales. Ministro de Gobierno en abril de 18 53:

•'Los

habitantes del

departamento gozan de

la

'l¿cía

más completa

HISTORIA DEL URUGUAY

64

seguridad y sosiego y hasta se puede asegurar que el crimen del ha desaparecido". La de San Josié, a cargo de don José C. Sienra, decía en el

abigeato

abril que los partes mensuales demostraban "el mantenimiento del orden público, siendo de notar que en dicho mes no había ocurrido un solo caso de abigeato en ninguna de las secciones del departamento". Don Bernardino Alcain, Jefe Político de Salto, se expresaba

mismo mes de 1-erfecto

en términos todavía

más

expresivos;

"El abigeato, que se había hecho tan general en ha desaparecido completamente".

Un

campaña,

la

interinato fecundo en proyectos.

El Presidente Giró, antes de emprender su viaje puso en posesión

mando

del

Presidente

al

del

Senado

don Bernardo P.

Berro.

meses de su interinato, trazó don firma del coronel Venancio Flores, que actuaba como titular de Guerra y encargado de las carteras de Gobierno y de Relacio^nes Exteriores, un plan de hermosas iniciativas, que contrastalban con eL deplorable marasmo que

Durante

dos y medio

los

Berro,

Berrrardo P.

con

la

hasta entonces había reinado en la Casa de Gobierno. Instituyó

comisiones

encargadas de redactar

el

Código Ru-

de proyectar estímulos a la inmigración, de establecer una Sociedad de Beneficencia a cargo de señoras; reorganizó la estadística; fijó las garantías de las guías de campaña; reglaral,

mentó

la

colonización

decretó

dos orientales; y abordó "Babel de

tal

empresas",

el

estudio

la

de las cuestiones de vialidad.

proyectos",

escribía

acordó ayuda a los emigrafundación de una granja experimen-

particular;

desde

"foco

de

asociaciones",

San José uno de

los

"fiebre

de

corresponsales

al aproximarse Montevideo y enterarse del tren ce actividad en que andaba

que formaba parte de la comitiva presidencial, 'á

la

presidencia" interina.

La medalla

a los vencedores de Caseros.

Dos días antes de la apertura de las sesiones ordinarias de la Asamblea, don Joaquín Suárez, ya en la víspera de su descenso de! gobierno, decretó honores a los jefes, oficiales y sol-

GOBIERNO DE

que había 'actuado en Caseros: ei César Díaz y una medalla lema "Al vencedor en los Santos Lugaires", a cada uno

dados de

la

grado de con

65

(iIRÓ

el

división

oriental

para

general

el

coronel

de sus subalternos.

La

oriental

división

regresó

a

Montevideo en

los

comienzos

de la administración Giró y fué Oibjeto de grandes demostracio-

El Gobierno declaró feriado

nes.

puso que

día

el

del

Guardia Nacional concurriera

la

al

desembarco y dismuelle pÉira pre-

homenaje. Varios ciudadanos pertenecientes a los dos luchado durante la guerra que acababa de terminar, tomaron la iniciativa de una reunión encaminada a

£idiv

(?1

partidos que habían

preparar

programa

recibimiento

que habría de hacerse habían agregado un laurel a nuestras armas, haciendo tremolar con gloria el pabellón de nuestra patria en los campos de Caseros". Entre los firmantes de el

"a esos bravos

ique

convocatoria

la

ya en las

del

— decían —

filas

figuraba Leandro Gómez,

de saliente actuación

Partido Blanco. Hu.bo un banquete de

del

100

hombres importantes que habían estado hasta entonces en campos separados, pronunciándose brindis patrióticos por los señores Eduardo Acevedo, José María Muñoz, Cándido Joanicó, Fermín Ferreira, Mateo Magariños y el general César Díaz, quien dijo al alz-ar su copa: "Que la unión realizada alrededor de esta mesa sea tan sólida y durable como se requiere para la dicha de nuestro cubiertos,

que

al

concurrieron

todos

los

país".

Al reparto de pués en la Plaza nes

de

las

infantería

división

oriental

medallas,

Constitución,

y a

la

batería

órdenes

de

que tuvo lugar concurrieron

tres

los

de artillería que sus

meses des-

cuatro batallo-

integraban

la

comandantes Lezica, Palle-

Solsona, Abella y Mitre. El Presidente Giró, al entregar personalmente las medallas, dirigió una proclama a la tropa, que estaba encabezada así: '"Soldados! fracción importante del

jas,

grande ejército aliado de Sud Amé' ica a las órdenes del genedon Justo José de Urquiza, representantes armados del principio de libertad e independencia de la patria en la gran jornada de Monte Caseros!"

ral

La 'demostración bahía rivalizado ciara

la

Rosas, jes

a

lo la

ocasión 5

corrido sobre rieles. Todos habían una sola rota discordante que denunexistencia de antagonismos anteriores a la caída de cual sirvió sin duda alguna para que los homenadivisión oriental se renovaran al año siguiente con

en

del

-IV

ella,

sin

primer aniversario de Caseros.

HISTORIA DEL URUGUAY

66

"Esa bizarra del

día



tropa

mando

al

formaba

sar Díaz,

— decía extrema

la

Estado Mayor

el

comandante en

de su

destinada

y fué

iziquierda

una orden don Cé-

en

general

jefe

por

el

Excelentísimo General en Jefe don Justo José de Urquíza para

más rudo

sostener

lo

avistada

¡a

de

combate; y en efecto, luego que fué mancíharon intrépidos, armas a disa un frente, por en medio de una lludel

eneimLga,

direclamen te

creción,

via

línea

balas

las cuatro

de

projectiles

y

llave de la posición

más

barras azules sobre lo

romper

hasta

especie,

torlf;

enemiga y ostentar glorioso

el

la

pabellón de

Monte

alto del edificio de

Caseros".

Al

finalizar

blea

el

ordinario

período

Paunero y Ramón Cáceres, solicitando

Caseros,

oriental

sión

quie

el

había actuado

la

los

y

a

coroneles

también

actores

goce de

presentaron

se

Medina

Anacleto

general

(?1

en

la

medalla acordada

baje,

mando

el

del

la

Asam-

Wenceslao de

batalla a

la

divi-

general Cé-

Díaz.

sar

Y tados

esa pelición dio lugar en mar?c

cuanto a premio.

justicia

la

solicitantes,

podía

Todos

debates.

pero no

Para

ser

los

los

del

de 1853 a grandes y agiestaban ck acuerdo en

otorgamiento de

en cuanto

unos

discutido;

legisladores

el

a

decreto

la

la

medalla a

los

tres

manera de hacer lugar del

gobierno

al

de Suárez no

para los otros debía ser ratificado por

el

Cuerpo Legislativo.

La

ijrensa tercia en el debate.



"Los actos verdaderamente consumados decía "La Constitunadie piensa tocarlos, ya vengan de los unos o de los otros; pero cuando se trata de actos que tienen tracto sucesivo, ¿puede nadie sostener que esos supuestos bechos consumados se pongan encima de la Constitución de la República y la modifiquen? Ei velo sobre el pasado importa no traer a cuestión, no acusar las anteriores infracciones de la Constitución, pero en manera alguna puede importar ia autorización de seguir infringiendo la ley fundamental. Es ".o mismo que si en u.n indulto general hubiera sido coaiiprendido un adúltero y pretención"

diese



fundarse en ese indulto para seguir adulterando. No, se

perdona a usted e! adulterio pasado, pero no perdonar el que cometa ahora mismo y el que cometa en adelante. Lo contrario sería inmoral y haría imposible el establecimiento del orden en las sociedades". le

diría:

se

le

se,

puede

le

GOCIKRNO UE GIRÓ

El

67

buen sentido, agregaba en otro artículo, aconseja no

to-

car los hechos consumados, los que han pasado para no volver;

pero ¿puede nadie pretender que nos quedemos observando disposiciones que importan la modificación de nuestra ley fundamental? El mismo buen sentido aconseja que vuelto el país a su estado normal, aproveche las ocasiones que se presenten de conformar a la Constitución las disposiciones de tracto sucesivo, a medida que la oportunidad se vaya presentando. Dos decretos del Gobierno Provisorio, anteriores al de honores a la (iivisión oriental, abonan esa manera de pensar: el decreto dic-

tado a raíz de la paz, en que se declara "que la necesidad de defender los derechos de la República obligó al Gobierno a dic-

medidas excepcionales y extraordinarias, que deben ctesar el restablecimiento ha puesto en completa vigencia las leye'3 y el régimen conistituiclonal", y el de disolución de la Asamblea de Notables, cuyo preámbulo dice así: "Considerando cesados los motivos y objetos que aconsejaron la creación de la Asamblea de Notables y que su existencia es incompatible con la de los mandatarios que la Nación tiene ya electos para tar

desde que

representarla".

í

ónio termina

Triunfaron

ineidente.

el

sotenedores

los

de

mismo mes de marzo una

esta

saucioifándose

tesis,

en

que aprobaba la medalla concedida por decreto del gobierno de Suárez y la extendía a todos los orientales que hubieran combatido "en aquella gloriosa jornada en comisión o con permiso del Gobierno". La minoría colorada publicó entonces un manifi(!sto en qi;,.el

sostenia

que

Giró,

ejecMíar

al

dentro

del

Constitución.

Y

doctor Juan

Carlos

criterio

decreto

'^1

ley

dando

de

de su

forma

Gómez en

la

al

la

mayoría

sesión

determinar Ccná'Jtución de de

febrero de

18i5'2

si

la

y

el

Presidente

caso del artículo

la el

subsiguiente de la Cá-

mara de Diputados una moción que decía "Se declara llegado

el

había viciado pensamiento, formuló

antecesor,

así: 26

de la Constitución,

suipremo del Estado ha violado la República, por ejecutar el decreto del 13 de el

si

jefe

hay lugar a foirmación de causa".

La Comisión especial encargada del examen de esta moción produjo dos informes. Para los señores Bustamante, Tort y Zubillaga

no

exi.stía

violación:

la

ratificación

del

decreto

parecía

IIISTOKIA DEL rRUCiCAY

6S

indicar lo contrario;

pero los hechos anteriores a

la

instalación

de los poderes constitucionales eran hechos consumados y entonces la ley aprobatoria sólo podía significar un acto de adhesión al decreto del gobierno de Silárez. Para el doctor Gome/,

no correspondía hacer declaración alguna, por más evidente que cjue el Presidente Giró se había limitado a ejecutar un

fuera

decreto

del

de Suárez. fueron rechazados,

gobierno

Ambos informes

según

el

acta,

"por una

unanimidad de votos". Habían terminado Ioís debates parlamentarios de la mejor manera posible; pero quedaban en la Asamblea, en el gobierno y sobre todo en el ejército, gérmenes morbosos que no tardarían casi

en provocar terribles conflagraciones partidistas.

Organización de

la

Guardia Nacional.

temas más calurosamente discutidos en el curso Guardia Nacional. Desde mediados de 185 2 había publicado el Gobierno el decreto de convocatoria de acuerdo con la ley de 1835 que mandaba crear en cada pueblo de la República un batallón de infantería, una compañía de artillería y dos escuadrones de caballería, con ejercicios en los días festivos de febrero, mar:o y

Uno de

de esta

los

crisis

política fué el de la

acordaba a los soldados enrolados, la elección de los y a éstos la de los jefes, con encargo de someter les " nombramientos a la sanción gubernativa. abril;

y

oficiales

El decreto tuvo cumplimiento en todos los departamentos, con excepción del de Montevideo, donde quedó en suspenso a la espera seguramente de una reforma de la ley solicitada a instancias

del

Ministro

de la Guerra coronel Plores, que entre otras el nombramiento de jefes y oficial-^s.

cosas atribuía al Gobierno

La Cámara sin alterar el

y

el

Senado

de Diputados sancionó el proyecto de enmiendas, procedimiento de

sancionó

Ejecutivo para llamar

otro al

la

elección de los jefes y oficiales

proyecto

servicio

que

al Poder Guardia Nacional,

autorizaba

activo a la

la ley de reemplalz-o de la tropa de línea. Estaba ya la Asamblea en las postrimerías de las sesiones ordinarias, y aún cuando las Comisiones militares se apresuraron

mientras no se dictara

a aconsejar la sanción definitiva de ambos proyectos, llegó hora de lá clausura sin que las Cámaras pudieran ultimar trámites

respectivos.

la k's

QOBIEENO DE GIBÓ

69

El doctor Juan Carlos Gómeiz que era uno de los que encabe-

zaban

la

resistencia

yecto de ley, ejercicios

con

el

de

por

a

el

G-uardia

la

presentó

convocatoria,

la

cual

un

pro-

tercer

suspendían durante tres años

se

Ea-a

Naciion-al.

los

una idea que contaba

apoyo decidido del Ministro Flores, quien en su Memola Asamblea invocaba la necesidad en que estaban

anual a

ria Icf

rurales de contraeirse al cuidaido de

vecin.da'i'iio's

Rebatiendo Militar

de

¡a

el

doctor Gómez,

proyecto del

sais

intereses.

la

Comisión

decía

Cámara de Diputados:

La Guardia Nacional

una

es

institución

que

conso-

en

está

nancia con nuestro sistema democrático, y la suspensión de sus ejercicios dejaría un vacío difícil de llenar. Sólo a los gobiernos arbitrarios puede infundir repugnancia el enrolamiento de ciudadanos.

los

La Guardia Nacional

es

más bien un derecho

qie un deber, una prerrogativa de la que no debe ser privado el ciudadano. Y en cuanto a los inconvenientes, ninguno puede resi los ejercicios se limitan a los días festivos de un trimestre del año, es decir, a 12 o 16 días inútiles para el trabajo. La mayoría de la Cámara desechó el proyecto del doctor Gó-

sultar

mez después de un

largo debate, en que también terció a favor

el doctor José María Muñoz, que era el verdadero jefe de la minoría colorada. Advertiremos que en el curso de esos debates quedó incorporada a la ley de Presupuesto General de Gastos del Ejercicio 1854 una partida de 80,000 pesos, con destino a la plana mayor

de

la

de la

suspensión de los ejercicio»

GuaMia

Nacion.ai

de

toldo el

país,

y otra de 3 0,000 pesos la Guardia Na'.cional

destino al servicio activo de la parte de

c'jn

que fuera convocada. Había, como se ve, una fuerte discrepancia entre

minoría

la

y la mayoría del Cuerpo Legislativo en lo que atañe a nización y convocatoria de la Guardia Nacional.

la

orga-

La mayoría quería que los jefes y oficiales fueran elegidos popularmente por los mismos ciudadanos enrolados. Quería que hubiera ejercicios doctrinales en los días festivos de tres meses año. Y quería que una parte de la Guardia Nacional fuera llamada a prestar servicio activo a la par del ejército de línea.

al

,La minoría colorada, jefes y oficiales ria,

que

ticar tivo.

la

en cambio, quería que

emanara

del

Giuardia Nacüonal

ejercicios

doctrinales,

Gobierno

y,

la

elección

como medida

de los

transito-

no fuera convocada, ni para pracmenos para prestar servicio ac-

ni

HISTORIA DEL VRUGUAY

70

¿Cuál podía ser

razón

la

La base militar

contestar.

de

la

mente colorada. Ministro de

la

No

discrepancia?

gobierno

del

de

Giró

es

era

difícil

esencial-

Guerra colorado. Jefes y

oficia-

de batallones, colorados. Soldados, los mismos que habían actuado dentro de los muros de Montevideo. La Guardia Nacional estaba destinada a servir de contrapeso al ejército de línea, les

y

tal

era la causa, sin duda alguna, de las resistencias que en-

contraba. Hubiera podido obtenerse

el

mismo resultado median-

un cambio radical en el personal de jefes, del- ejército de línea. Pero al Presidente Giró

para

y clases

oficiales

te

le

empuje

faltaba

ello.

Uno de

los

órganos de

reacción colorada, "El Orden", de-

la

de la revo'lución contra Giró, inisistiendo en la necesidad de arrancar a los ciudadanos el privilegio de elegir a sus a

cía

jefes

raíz

y

oficiales:

al Poder Ejecutivo. La Constitución lo ha circundado de obstáculos y dificultades. Se temía en 1830 la organización de un poder fuerte en medio de la fiebre de la época, que era de exageración de liberalismo. Ha sido un error

"Hay que robustecer

,

América y eso explica las convulsiones por las Pero sin salir de las disposiciones constitucionales, se le pueden aumentar sus atribuciones, dándole todas aquellas que la Constitución no confiere a la Asamblea o ai Poder Judicial, ¡jor ejemplo el nombramiento (le jefes y oficiales

general

en

la

cuales ha pasado.

de

la

Guardia Nacional. Blanco



El Partido

escribía



guiente en "El Nacional" ¡os

L.a

general Pacheco la

año

al

el

si-

supresión de

batallones de línea y el Presidente Giró no atreviéndose

ejecutar la medida tomó dia

el

había pensado en

temperamento de organizar

la

a

Guar-

Nacional.

obra de re<'onstniccióii económica queda relegada al «segundo plano.

Todo estaba por hacerse ]ioblación

nacional

dislocada,

exhausto.

la

al

Si

el

la

en

elección de Giró:

escombros,

el

la

tesoro

La obra de reconstrucción era considerable,

pero considerable era también pantanio.

tiempo de

riqueza pública

la

energía del país para salir del

Presidente se hubiera puesto a la tarea, todos

le

habrían ayudado y los problemas candentes de la política partidista habrían quedado quizá relegados a! segundo plano. Des-

71

GOBIERNO DE GIRÓ

t;raciadamente don Juan Francisco Giró &e contentaba con mirar cuadro cruzado de brazos. La prensa de la época acusaba a

el

que era de una esterilidad absoluta. ¿Pero por removía el Presidente? Posiblemente porque ]2 fallaba el empuje que reclamaban las circunstancias. Quizá también porque la situación política anormal que creaba la exisministerio,

su

oué no

tenlcia

lo

de un Presidente de origen blanco sostenido por un ejér-

colorado, trababa movimientos, creaba preocupaciones y ab-

cito

!esultaban

A

de

perjuicio

los

problemas económicos que

indefinidamente aplazados.

así

hubo en los Ministerios varias reuniones encaminadas a prestar ayuda al estudio de algu-

principios de 1853

de ciudadanos .10S

en

energías

sorbía

de los problemaiS más urgentes de La situación. De esas reuresultó el nombramiento de comisiones encargadas de

niones

proyiectar

la

to

la

reforma militar, la forma de reclutamienrealización de una idea lanzada

la

deuda,

Guardia Nacional y

ejército de línea.

del

de

consolidación

organización de

Era

la

la

la

Uno

"La Constitude Los diarias, nombramiento de Comisiones perTnanentes en torno de cada Ministerio, como medio de que sus miembros estudiaran anticipaidamente las necesiidades del país varias veces por

había

ción",

V

la

prensa.

pugnado por

el

estuvieran así habilitados para trabajar en todo

momento con

pleno conocimiento de causa.

Pero cié

la

vida

ministeriaL

volvió

dos los matices. El

ministerio

del

señor

"no ha traído una sola sociales. La situación es de

a

quedar paralizada

después

esos aleteos auspiciosos, y así lo declaraban los diarios de tq-

la

Giró

idea.

falsa,

incapacidad ministerial.

tucional

franca

y enérgica,

miento".



escribía

Hay malestar errada,

"La Constitución" en

todas las clases

improductiva por efecto

Urge aplicar una

deaemba.razada

de

polrti.ca

consti-

todo vano mira-





decía. "El Comercio del Plata" verdadero abisimo en qu? podrá naufragar el país". Sería posible conjurar el mail, pero el Gobierno no se preocupa de estudiar un plan de impuestos capaz de hacer frente a las exigen-

"La situación financiera

es

el

cias del

momento.





se halla en Gobierno decía "La Prensa Uruguaya" verdadeTO desicubierto, que paira nosotros es el cargo más funilado que pudiera hacérsele. No se ha ,puesto a la cabeza del movimiento intelectual y civilizador, ha dejado hacer y dejado pa"Eil

HISTORIA DEL URUGUAY

"laisser faire, laisser passer";

sar,

de que se espere de sus

cio

pero no está

scTaiS fuérzaos

el

país en esta-

Ids adelan.tOiS

que en

to-

dos los ramos necesita. Un pueblo que saile de una larga lucha, como la guerra de nueve años, dividido en partidos que poco a poco han ido acostumbrándose a tratarse como amigos, aunque de diferentes ideas o conveniencias políticas, necesita un gobierno no mire con apaitía, sino con empeño, los progresos intelectuales y las mejoiras de toda clase que el país reclama. El Gobier-

c;ue

no mirando la estrechez de suis recursos, ha procedido con alguna indiferencia sobre ciertos puntos que debían haiber lüamado seriamente su a-tención. Ha adoptado por desgracia un cierto aislamiento quie lo ha privado de muchas venitajas".

Mas

de una vez ese

abandon-o estuvo a punto de promover

conílictos con la -Comisión

Permanente. Véase cómo se expresa-

ba esa corporación en febrero de 1853, luego de referir vairios casos de infraicción de la Constitución y de las leyes, especialmente relacionados con el Presupuesto:

"Esas advertemcias, la Comisión siente decirlo, no han sido justamente avalloradas, sin embargo de haberse hecho hasta par segunda vez, y esio después de haiber llamado a su seno ai Ministro. Grave y delicada es la situación del país y grandes son también los servicios que el Poder Ejecutivo le ha rendido pacimentar la

ra ciufe

to

paíz

pública,

y con

ella" la

y

lia

el el

al

La Comisión,

en consecuencia, se ha deteniproximidad del periodo legislativivo deseo, de que jamás pudo prescindir, de no menoscrédito y la autoridad del Poder Ejecutivo".

prosperidad.

do ante la consideración de vo y cabar

completa de engrandecimien-

libertad

gozamos y que rápidamente nos conduce la

Renuncia del ministerio. Era tan premiosa la necesidad de un cambio ministerial, que Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados resolvió en mayo de 1853 aprovecliaír la, oportunidad de la contratación de un empréstito para encabezar el respectivo proyecto de ley con este preámbulo encaminado a precipitar la crisis: "iConsiderando que annque la capaioidad aidmánistrativa del rainisterio no inspira la confianza necesaria, es indispensable proveer al Poder Ejecutivo de los medios de atender el pago indebidamente retardado de los servidores del E.-5tado..." Los oradores de 'a mayoría acusaban ai ministerio de haberIn

GOniEKXO DK GIRÓ

apartado de

73

de Presupuesto, y los de la minoría encabezamiento era inconstitucional. Después de un ardoroso debate, los oradores de la mayoría retiraron el enca.bezamiento jusjgando que ya había producido el efecto político que buscaban, o sea el de romper toda solidaridad se

sostenían

con

la

que

salvando

ministerio

el

ley

el

al

Presidente

Giró,

y

el

empréstito

quedó sancionado. "El ministeri.0

mayoría



fué

escribía



atacado violentamente y derrotado por la diputado don Pedro Bustamante a don

el

más VLHaLba (cartas publicadas por el do'ctor Palomeque). Por esta vez el ministerio se ha encontrado solo, porque a la

T.

verdad era imposible sostenerlo sin perderse en el concepto público, sin hacersie cómplice de sus abusos. Muchas veces durante el receso de las Cámaras,

le

instamos

al

señor Castellanos para que

ministerio nos habilitase a defenderlo...

El ministerio no lia que valían y hoy está recogiendo los frutos de su obstinación. Lo que se ha dicho ayer p >r la mayoría no sé que se haya dicho entre nosotros a ningún otro mini8.terio. Se le ha acusado de iadoLencia por los intereses públicos, de parcialidad y hasta de malversación de rentas, y lo yeor es que algunas de esas acusaciones son harto fundadas". e!

querido tomar esas advertencias en

No sis

lo

fué suficieTite esa sesión tempestuosa para producir

mayoría celebraron una reunión en

la

que

la

cri-

ministerial que se provocaba, y entonces los legisladores de

el

vida,

la

que luego de declarar

ministerio del doctor Castellanos carecía de condiciones de resolliviieron

no prestarle su apoyo. Ante esa declaración

ol

Presidente Giró invitó a los mieimbros die la mayoría a una sesión en su domicilio y entonces el doctor Castellanos resolvió renunciar.

Ya

Contra él sin embargo mayoría parlamentaria. La dimisión del Ministro de la Guerra recono'Cía causa más honda, según todais Las informaciones de la época: la negativa a poner su firma al cúmiplase de la ley ratificatoria de la medalla de Cáselos. "La Sociedad de Amigos del País", en su répliica a don Andrés Lamas, reiprodujo tres años después las cartas cambiadas

no

s'e

entre

se había

retirad-i

dirigían ni

el

la

el

coronel Floréis.

prensa ni

Presidente y

el

la

Minlistro

dimi/tente,

reveladoras

de

ia

que ya entonces asomaba co-n violencia. "Me ha sonprendido mudho la renuncia que hace usted d? su cargo y las razones que para ella da (escribía el Presidente Giró crisis

a su Ministro) ...

No me he

opuesto hasta ahora a ninguna me-

HISTORIA DEL URUGUAY

74

dida de usted, que se me haya presentado como necesaria al resSi usted sale del Ministerio, yo tamtabledimiento del orden. bién salgo de la Presidenicia. Vaya usted aihora al Fuerte y habla.

remos. De

lo

independencia

.

que resulte pende la guerra civil y la sombra de y nacionalidad que hoy tenemos', o el bien de

nuestra tierra."

"La

que usted me hace

cita



p'ores

me

es

al

Fuerte

imposible en estos



contestó

momentos

el

cor:nol

poí^que he venido

a darle un aidiós a mis hijos, que tengo en este destino (la chacra) resuelto a separarme de mli país por algún tiempo. Después de esto mi renuncia es im-prescinjdrbl.e y no iharé retroceso en

no quiero hacerme responsable de una situación que no pende de mí dominar. Cree haber 'hecho cuanto !ha dependido de un hoimbre de honor para consieguirilo. Todo ha sido inútil; nada roe resta por hacer sino evitar envoilverme en una crisis funesta y salpicarme qu)lzá con sangre de mis compatriotas, cuya idea me ella;

aterra."

Esa renuncia fué precursora de una crisis política que el Goel nombramienitc de un Ministro de Guerra do filiación blanca, el general Brito del Pino, para dirigir un ejérbierno agravó con

de linea netamente colorado.

cito

blea sio

el

Ya había empezado en

movimliento de unificación con

©1

la

Asam-

triunfo de don Atana-

Aguirre para Presidente de la Cámara de Diputados, en reMuñoz que había ocupado ese puesto

eniplazo de don José María

en 1852. la Guerra siguió el de Hacienda don Manuel reemplazante el doctor Bernabé Cararvia no alcanzó Errázquin. Su a estar veinticuatro horas en la Casa de Gobierno, por efecto de un programa de aidministracion que publicó, en el que luego

Al

Ministro de

de referirse a la neceslidad de cumplir estrictamente la ley de Presupuesto y de gai-antizar el deredho de todos los acreedores del Estado, establecía que había habido en las gestiones anteriores extravíos o errores que era necesario horrar. Fué nombrado para sustituirle <.Ic

don Viicente Váziquez, quien renunció ante

el

fracaso

un empréstito destinado a cubrir el déficit. La vacante del doctor Castellanos fué llenada con don

Bei'

nardo P. Berro, a quien también se le confió interinamente la cartera de Hacienda. Estos cambios ocurridos a principios de julio de 1853, dieron lugar a Insistentes (V'nt?

trató

rumores de reacción colorada que el Presicontrarrestar, mediante el ofrecimiento

en vano de

GOBIERNO DE GIRO

al doctor Manuel Herrera y Obes, al Lorenzo BaClle, a don Gabriel Antonio Pereira, a dou Juan Miguel Martínez y a otros ciudadanos die filiación colorada, que contestaron sencillamente que no, o que sólo aceptarían en el caso de que a la vez se proveyera con determinada persona el

de c

cartera de Hacienda

la

ronel

Mini&terio de

la

Guerra.

"La Constitución" y "El Comercio del Plata" recogían, aunque para desmentirlos, ©sos rumores de revolución o de movimientos militares próximos a estallar en Montevideo, encabezados por militares que, olTiidando sus deberes, habrían prorrumpido en amenazas contra las autoridades; mientras que otros como "El Noticioso" abrían sus columnas a artículos de violenta propaganda en que se hablaba de serenatas con vivas a la fusión y acompañamiento de violines y violones, "mstvnmentos introducidos nuevamente en el país con el objeto de reformar, metodizar, organizar y aniquilar a los añejos que constantemente han estado

viendo

al

sir-

país."

Pireparando la revolución.

El general Pacheco ha señalado así en carta cisco

Tajes

(publicada por "El Nacional")

vimiento revolucionario que echó abajo

al

al

coronel Fran-

comienzo del mogobierno de Giró: el

"¿Recuerda usted el día que fui a verle en su casa para decirle mi resolución de cambiar un orden de cosas que hacía la desgracia del país? Era el 3 de abril y entonces la administración que ha caído parecía sólidamente establecida. Entramos a luchar con un gobiern; que contaba con los recursos del país. Luego debimos encontrar oposición hasta en muchos de nuestros amigos; tuvimos, en fin, todo género de contrariedades. Sin embargo, a los seis meses nuestra obra se ha consumado sin arrancarse una lágrima, sin derramar una gota de sangre, sin viola) un derecho."

En carta al general Rivera (publicada por "El Orden") agregaba el general Pacheco con referencia a la" reacción blanca que encabezaba el Presidente Giró: "A pesar de eso yo me resistía a admitir como remedio un movimiento armado y si llegué a pensar en él seriamente fué cuando t.uve el convencimiento de que él Presidente de la República desser hombre de partido, y cuando sien/do pública la de Unquiza con los blancos, pareció probable el triunfo

cendía a alianza

HISTORIA DEL URUGUAY

76

c'.e

caudillo

ese

por

el

vencimiento de

la

escuadra

Fué entonces, señor General, que, como cpmé por una revolución como el tínico medio de

Aires.

.

.

lo

de

Buenos

he indicado,

salvaimos, por-

que yo veía que triunfante Urquiza en Buenos A.ires, se repetiría la inigerencia de un caudillo argentino en nuestros negocies con el fin de aniquilar al partido político que quiere antes que

para la patria... Aceptado como medio de empleo de la fuerza, quise explorar la opinión de 'a campaña, para ver si podíamos tentar ese medio. Lo que adquirí iodo

inde:pen[dencia

salvación

el

que podíamos apelar a las armas, no sino también de evitar 'a fv.erra civil. Me a'brí entonces con los amigos y tuve muy luego a n.i disposición las fuerzas de línea. Trabajé también a la campaña, obteniendo los mejores resultados, pero a los amigos de la campaña, como a los del ejército, les d'je siempre que nada se haría sin estar de acuerdo con usted, porque es usted el jefe del Partido y sin usted no debe tomaiie ninguna resolución im)üe

sClo

dio

convicción

la

con

la



certidumibre úe triunfar,

portante."

Los preparativos de la revolución se hacían públicamente y explica que no hubiera necesidad de reservas desde que los directores del movimiento tenían en sus manos toda la tropa de línea y estaban resueltos a no dejarse desalojar de sus posise

ciones^

Una semana

antes del movimiento decía "La Constitución": "Hace quince días que no se habla sino de movimientos revolucionarios que deben estallar en la ciudad y en la campaña. Se señala el día, se nombran los jefes, se enumeran los elementos con que cada uno cuenta, y se dan detalles como si el hecho a que se refiere hubiera ya acaecido. Para algunos es tan cierta la noticia de una revolución en Montevideo, que sólo dudan respecto del día... Fluctúan entre

el

15,

dia de la clausura de las

Cámaras, y el 18, aniversario de la Jura de la Constitución. Por lo demás, refieren el programa del movimiento con tanta exactitud, como si se tratara de las fiestas julías". El Jefe Político de bierno,

a

estallaría

tada

principios la

por otra

la

Colonia don Luis Gil anunciaba

de julio, que según sus noticias

el

al

Go-

día

18

revolución en Montevideo. Su nota iba complemendel

Cnrn.nnd:inti'

Militar

del

mismo departamento

coronel Lucas Moreno, denunciando que los revolucionarios diligían invitaciones para colaborar en su obra y que en presencia de ello había reunido una fuerza de 800 hombres para sostener al Gobierno.

GOBIERNO DE GIBO

Den Tomás

Villalba, Jefe

Gobierno

iro de

a raíz del

decía

Político de Soriano,

movimiento, que

la noticia

Minis-

al

había "in-

ánimos fuertemente exaltados ya en (lias anteriores rumores de una próxima revolución", agregando que había creído necesario armarse y que el vecindario estaba ya 'completamente en pie y resuelto a defender al Gobierno y a las instituciones que se creían heridas mortalménte". El mismo día en que estallaba el motín, escribía desde Río de Jíineiro don Juan José Soto al doctor Acebedo: "Según me han dicho personas bien informadas, hoy debe haber estallado un motín en Montevideo". Sólo una medida preventiva resolvió adoptar el Presidente Giró: la convocatoria de la Guardia Nacional de Montevideo, aplazada hasta entonces por efecto de las circunstancias de que hemos hablado anteriormente. Ya habían transcurrido los meses de los ejercicios doctrinales y hubo que optar por un enrolamiento voluntario, le que no impidió que la concurrencia a los cuarteles fuera numerosa

Mamado

con

los

los

y que la medida diera origen a debates ardientes en la Cámara de Diputados, donde el doctor Juan Carlos Gómez pidió, aunque

que el ministerio fuera interpelado. Apresurémonos a agregar que no obstante

sin éxito,

trabajos

los

revolucionarios,

la

publicidad

la

notoriedad

de

más bien dicho con

que se hacían, nadie en Montevideo, con excepción de los conjurados, consideraba posible que hubiese ciudadanos capaces de atentar

contra

Por eso

el

autoridades constituidas.

las

Presidente Giró conc irrió lleno de optimismo a

la

Asamblea

el

sesión de clausura de las sesiones ordinarias de la

15 de julio, tres días antes del motín.



tancia para

el

mejor gobierno de

progresivo de

llo

mucho

pero

resta

la



dijo serena y confiadamente ha sido fecundo en leyes de alta impor-

"El período que hoy concluye en esa oportunidad

la

población, de

que'

República y para industria y de

la

hacer todavía para satisfacer

í!ades de nuestra sdtuación. Esto será trcs

comunes

esfuerzos.

Entretanto

el

el

desarro-

la

riqueza;

las

necesi-

ohra del tiemyo y de nuesGobierno,

durante

vuestra

ausencia, se esmerará en el mantenimiento del orden pilblico y en estricta

i:

diante por

el

una

observancia de política

buen sentido

la

Constitución

conciliadora,

y de

equitativa

del pueblo oriental, esijoa

las

leyes; y me-

y firme,

que cuando

auxiliado el

deber

os llame de mtevo a este recinto, la situación de la República será (

ra

todos

un motivo de mutuas

felicitaciones».

HISTORIA DEL URUGUAY

78

El Presidente de tuña,

consideró

se

la

Asamblea, doctor Francisco Solano de Ansin embargo, a decir algo acerca

obligado,

de los rumores de revolución, aunque sin atribuirles

la

enorme

gravedad que tenían.

"La representación nacional, mento el honor de ser órgano

de

la

— — dijo

que tengo en este mocomplace en reconocer

se

el gobierno de V. E. es un gobierno verdaderaun gobierno verdaderamente constitucional, y tal que para conseguirlo tanta los orientales cual lo anhelaban sangre han derramado. V. E., señor Presidente, justo aprecia-

y

declarar uue

mente

libre,

y liberal además por carácter, gobierna al país conforme a la Constitución y de que seamos en la actualidad un pueblo verdaderamente libre; pero los hombres no avenidos a este sis-

dor

las

libertades

puede

gloriarse

de

bien

pú'blicas

que

de

que no sean capaces de valorarlo, tal vez atrilo que es puramente un deber. De aquí acaso esos rumores, esas voces subversivas que de vez en cuando se levantan y que aun cuando los orientales las desprecian porque saben que nada valen, sin embargo espantan a los extranjeros que no nos conocen, alarman, al comercio y efectivamente

tema,

aligunos

buyan

a

debilidad

dañan."

El

militar.

iii\)tíii

El

de

18

julio

efectivamente tivos

El

de

la

el

de

1853,

conflicto

Jura de

Batallón

su jefe

el

2."

de

la

que

ere

el

día

anunciado,

en medio de los festejos

estalló

conmemora-

Constitución.

Cazadores,

qvc estaba bajo

el

mando de

coronel Palleja, hizo fuego sobre la Guardia Nacional

que carecía de municiones, y que por eso mismo se dispersó en acto, perseguida en todas direcciones por la soldadesca des-

el

-

enfrenada.

Ninguna duda cabe acerca de la iniciativa del ataque, reconoel doctor Juan Carlos Gómez en 1857 desde las columnas de "El Nacional". Pero no sucede lo mismo respecto del número de las víctimas. En su ya mencionada carta al general Rivera, decía el general Pacheco que la Guardia Nacional había tenido 7 muertos y 19 heridos y la tropa de línea 2 muertos y 6 heridos, y agrecida lealmente por

gaba:

GOBIEEXO DE GIRÓ

completamente

"Dispersada a

la

plaza

se había 2.0

y

me

y

me

pronunciado por

Guardia

la

encontré con

la

79

yo

llegué

Batallón

el

I.»

Gobierno. Creí entonces perdido

el

coloqué a su frente para correr

momento después

pañeros... Un

Nacional,

de que

iioticia

t(

da

guarnición

la

al

suerte de mis com-

la

había

se

pronunciado y el Presidente tenía que consentir en encargarme del orden público". Otro de los testigos de la época, el doctor Antonio de las Carreras, en una poliémica con el doctor Mateo Magariños Cervantes,

elevó a

una cincuentena el ntim3ro de los caídos de la la formación y en la persecución sub-

Guardia Nacional durante

sobre todo, en la cual murieron, Núñez, Pozo, Barboza, Dubrcca y otros.

siguiente

El

propio

doctor

Debates" de 18 58

a

decía,

jóA'enes

los

Juan Carlos Gómez, refiriéndose en "Los uno de los prisioneros de Quinteros y a

la manera cómo fué Eduardo Acevedo, ha racha de muerte que

salvado escrito se

por

estas

había

prisionero

ese

palabras

extendido

por

doctor

el

reveladoras

de

la

calles

de

la

las

ciudad:

"Fué salvado por ese mismo Pagóla el 18 de julio de 1853, por ese Pagóla que reconociéndolo ¡-upo contener a los soldados exaltados que conducía e imponerles respeto por el doctor Acevedo indefenso". .Es conveniente agregar que en jsos mismos momentos otro grupo de soldados volteaba de ua balazo a don Manuel Acebedo, confundiéndolo con el hermano a quien el capitán Pagóla acababa de salvar.

Sedimentos del motín.

Terminada

la

persecución

tallones de línea a

los

por

cuarteles,

las

y

calles,

consideraba con fuerzas para dominar

Stí

con

sus

adversarios,

regresaron

los

ba-

Presidente Giró, que no

el

el

motín, resolvió pactar

creyendo

erróneamente que las autoridades constitucionales podrían consolidarse mediante ese sacrificio personal y político.

Por efecto de

ello

volvió

a

ocupar

el

Ministerio

rra el coronel Venancio Plores, en reemplazo del

de la Gue-

general Brito

el doctor Manuer Herrera y Obes entró de Hacienda que corría interinamente a cargo del Ministro de Gobierno don Bernardo P. Berro.

del Pino, a

que renuació, y

desempeñar

la

cartera



1II.STOUI.V

DEL flíUGL'AY

Los departamentos de campaña, que a la primera noticia del movimiento producido en la Capital se habían puesto de pie, volvieron a lia vida normal, disolviéndose las divisiones que ya habían empe2a>do a formarse, en Canelones por el general Ignacio Oriibe, en San José por don rafael Zipitría y en la Colonia por el

coronel Lucas Moreno.

También

se llamó a sosiego movimiento, según él mismo

el

general Rivera que estaba en

encargó de documentarlo con ayuda de una proclama dirigida desde la villa del Yaguarón, donde vivía, a las autoridades de Cerro Largo y Tacuarembó que el Jefe Político del primero de esos departamentos comentaba así, en nota al Ministerio de Gobierno de principios de agosto; "Puede el Gobierno dormir el sueño de la confianza, porque el

e]

al

se

semblante que presentaban las cosas al primer golpe de vista leer la nota imperativa que me pasó el general Rivera, ha

desaparecido".

Había necesidad de tramquilizar al país y el Presidente Giró una proclama en que decía: "La primera necesidad de la República es la paz doméstica. Juremos todos no ahorrar ningún género de sacrificios Todos nuestros esfuerpara mantener ese bien inestimable zos deben dirigirse a asegurar el orden bajo el amparo de la expidió

.

.

.

ley y de

la

.

.

autoridad".

íambién resolvieron hablar

los

Ministros.

El de Gobierno y Relaciones Exteriores don Bernardo P. Berro,

se dirigió en estos términos a los Jefes Políticos:

"El orden público perturbado por Hicnte tuvo lugar

en el día

d'e

aiyer

el

conflicto

entre

las

que ocasional-

fuerzas de línea

Guardia Nacional, ha sido completamente restablecido. La ha vuelto a su tranquilidad, la tropa a la ob3:lienc!a, Gobierno en todo el lleno de su autoridad constitucional el y seguirá ocupándose de sus tareas administrativas". escribía a su turno el Ministro de la Guerra El Gobierno coronel Flores, a los comandantes de Guardias Nacionales de ha dispuesto que cesen las reuniotodos los departamentos nes, que el vecindario quede habilitado para ocuparse de sus tareas, y que se libre a la sola acción de las policías el manteni-

y

la

Capital





miento del orden, "deseoso de conservar el sosiego público por todos los medios que están en sus atribuciones". Algunos rumores habían corrido acerca de trabajos de la mayoría parlamentaria a favor de la instauración de un proceso

GOBIERNO DK GIKO

18 de julio. Pero "El Orden", órgano del partido político a que pertenecían los revolu-

a los autores del movimiento militar del

cionarios, se apresuró a prevenir desde el día de su aparición en

estadio de la prensa, que si talies rumc'res "tomasen fuerza y fueran prohijados por el primer magistrado, vendrían a compro-

ei

r-tter

nueivo

die

la

pública".

paíz

La revolución quedaba, pues, en pie y debía fatalmente completarse con el derrumbe de las autoridades constituidas. Un mes después volvía a Intranquilizarse el país con el anunde convulsiones a estallar en la campaña, y

cio

Ministro

el

Bt?-

que dirigirse a los Jefes Políticos pidiéndoles que infundieran calma y confianza acerca de la estabilidad de la situación. "La inquietud y la agitación que aun se sienten tenía

rro

les

gar en

por consecuencia de los sucesos que han tenido

mes

el

Pero

efectois".

y entonces circular:





decía

anterior,

el

produciendo

está

Ministro se vio

el

los

anunlcio de convulsiones seguía

Los Jefes Políticos



más perniciosos tomando cuerpo

obligado a dirigir •

decía en ella



>

lu-

una

segunda

deben emplear

"iodos liois mediols quíe esitán en la esfera de sus atribuciones para atajar esos rumores y provocaciones que tanto mal hacen, debiendo considerar y tratar a sus autores como perturbadores del orden público".

Por su parte, el Ministro Flores resolvió recorrer personalmente los departamentos que parecían más agitados, y a principios de septiembre, de regreso de' su jira, comunicaba al Presidente "que la tranquilidad y el sosiego público se hallaban restablecidos en

todo

territorio

el

de

la

República".

El deiTiimbe del gobierno de Giió.

campaña. En cambio enmundo hablaba de un nueivo movimiento cuartelero que produciría el derrumbe de las autoridades constituidas, y con tantos detalles, que el Ministro de Gobierno y Relaciones Exteriores resolvió pedir el

Quedaba restablecida

traba en

ebullición

concurso de en

surtos

el

la

la

la

calma en

Capital.

la

Todo

el

marinería de los buques

puerto de Montevideo,

orden público. Véase

lo

que decía

el

de guerra

extranjeros

mantenimiento ;!el Ministro Berro a las Le-

para

el

gaciones en su nota circular del 21 de septiembre:

"La Capital se halla según parece amenazada de una conmoque puede venir acompañada de grandes desórdenes, slu

ción,

6

-IV

HISTORIA DEL URUGUAY

82

que

Gobierno

al

le

sea dado impedirlo por

En

fuerzas a su disposición...

brrno

propiedades, y en ios

Go»

el

seguridad, ni de las personas, ni de las virtud cree ser llegado el momento de iiue

de

reisipom/der

absoluta de

falta

la

situación no puede

esta

la

tal

agentes extranjeros con

armada de que

fuerza

la

dispóngate

ee encarguen de la protección de la ciudad".

Tres días despuás de escrita

buscaba

asilo en la

He

asonadas".

esa

circular

Giró

Presidente

él

Legación de Francia para escapar a "nuevas

aquí,

efectivamente,

que escribía

lo

doctor

el

Eduardo Acevedo a don Juan José Soto el 3 del mismo mes: "La fuga del Presidente desconcertó por un momento a loq anarquistas. Ellos, que pretendían llevar ese día la violencia a

sus últimos límites, al salir de un banquete de 20

cubiertos que Pacheco había mandado preparar en una fonda de la plaza, se determinaron a cejar y el banquete se concluyó muy tranquilamente. Todos los preparativos de desorden quedaron sin efecto. I -éter minaron hacer creer entonces que el paso del Presidente no i'.abla sido proivocado, qu'e no había existido peli.gro ailiguno ni para

persona ná para su autOTÍdad, y que el asilo que había ido a buscar era una especie de acto de demencia. Supongamos que s,r

así

fuera:

en

lo

calles,

supongamos que

el

Presidente, en vez de refugiarse

Maillefer hubiera

áe Mr.

salido

tirando

piedras

por

las

¿era eso motivo para que desconocieran las demás auto-

¿para que prescindieran de la Comisión Asamblea General y de la autoridad que ipso jare inviste el Presidente del Senado en los casos de fallecimiento, ausencia o renuncia del Presidente? La conducta de los revolucionarios no tiene excusa ni pretexto. En una reunión tumultuaria echaron por tierra todas las autoridades constitucionales y nombraron, o mejor dicho, nombró Pacheco el singular triunvirato que asume hoy el nombre de Gobierno Provisorio

rJf'ades constitucionales?,

Permanente, de

de

la

la

República".

Don Bernardo

P.

Berro

se

apresuró a dirigir una circular al

.Cuerpo Diplomático para explicar las causas determinantes de la

diendo a

la violencia,

autoridad en

Uesde que

la

les decía

él

ejercicio de su

Capital,

y proveer a su

seguridad

"ce-

personal".

motín del 18 de julio el primer mandataresultados, juzgando que podría conjurarlos me-

estalló el

rio previo esjtos

diante

ha tenido que suspender





gravísima resolución presidencial. El Presidente

concesiones.

Pero,

inútilmente.

"La autoridad

bierno desconocida en la Capital ha hecho lugar

ai

del

mando

Goirres-

83

GOBIERNO DE GIRÓ

(Paclieco) que quiere parodiar a a estos países, sin tener en han deshonrado los cuenta las desgracias que serán la consecuencia necesaria Ob tales procedimientos. En semejante situación el señor Presidente de la República, que no quiere ensangrentar inútilmente las calles de Montevideo, se ha decidido a abandonar el campo a los revoltosos, antes que prestarse a humillaciones que harían más deplorable la guerra que ya no puede evitarse". Los promotores de la revolución publicaron un Manifiesto en eme decían que pocos días antes de que se extremaran así los sucesos, el Ministro Flores había pedido al Presidente la remo-

ponsable

ele

un jefe militar

caudillos que

ción de los Jefes Políticos del Salto, Durazno y San José, viéndose obligado a renunciar por no haber sido atendidas sus gestiones; que el Presidente dando largas a la aceptación de la re-

nuncia, había recabado de su Ministro un programa político y la garantía de la Legación Brasile-

administrativo que tuviera ña; que nistro

al

enterarse Giró del resultado de las gestiones del Mihabía exigido la salida del país del general

Brasileño,

Pacheco,

lleTando

aceptada por

el

que

una misión diplomática, exigencia

fué

interesado bajo la condición de que habría de

darse a los colorados tres Jefes Políticos, como medio "de que al menos estuvieran en igualdad los dos partidos en el gobierno

de los departamentos"; y que era en los momentos en que el Ministro Brasileño daba trámite a las nuevas gestiones que se había producido

la

fuga del Presidente.

El coronel Flores asumió la representación gubernativa y en tal carácter se dirigió a la Comisión Permanente para expresarle que "abandonado el gobierno de la República por el señor Juan Francisco Giró, su Presidente hasta ahora", había quedado en sus manos "la fuerza pública de que estaba encargado como Ministro de la Guerra" y pedirle que resolviera ilo que hu-

biera

lugar.

Otra nota de mayor gravedad dirigió el mismo día Flores' al Encargado de Negocios de Francia.

"Habiendo abandonado



le

decía



el

señor

el

coronel

don

Juan

Francisco Giró su puesto de Presidente de la República, dejando al Estado sin gohierno y en la más completa acefalía, y habiendo quedado la fuerza pública en mis manos como Ministro

Guerra hasta ahora, me hallo colocado en la necesidad y deber de emplearla en salvar las garantías sociales y el porvenir de la Nación. En esta situación me he dirigido a la Co-

de

la

en

el

HISTORIA UFL URUGUAV

84

Permanente de

misión

Honorable Asamblea,

la

comunicándo-

y espero su resoilución. Entretanto la deserción deil Presidente de su puesto y la circunstancia de haber buscado asilo en casa de V. E., que no ha podido dárselo sino en el carácter de Simple ciudadano, me obliga a dirigirme a V. E. manifestándole mi confianza de que V. E. no permitirá que el señor Juan Fran-

selo

que ha buscado a un punto cualla guerra civil bajo el preque él ha desertado". una autoridad legalidad de texto de la Faltaba un último número del programa, el número que el general Pacheco anticipaba así al sargento mayor don Benito cisco Giró se traslade del asilo

quiera de

República a encender

la

Hubo en carta "Ha llegado

del

mismo

día de ia fuga:

Ha llegado el caso de tomar armas para evitar que nuestros enemigos sean dueños absolutos del país y puedan saciar en nosotros sus rencores... Agotados, pues, todos los medios de conciliación, hemos resuelto tomar las armas. Mañana declararemos por un acto público que el

caso

de obrar.

las

don Juan Francisco Giró ha dejado de ser Presidente". El 2 6 de septiembre hubo una reunión en la Casa de Gobierno, a la que asistieron según los apuntes del general Enrique Martínez,

los

generales Pacheco, Lavalileja y Díaz, coroneles Flores

Lavandera y ciudadanos don Jote María Muñoz, don Juan •Carlos Gómez y don Fermín Ferreira, y en ella quedó resuelta coronel del la (íreación de un gobierno provisorio compuesto Flores y de los generales Rivera y Lavalleja. y

La parte El

del Bríisil en la caítla del gobierno de Giró.

Presidente

Giró

desconocido

había

la

legitimidad

de

los

mayoría parlamentaria que respondía a su política había discutido agriamente esos tratados, sancionándolos al fin para evitarle al país una catástrofe, pero con el voto de reprobación que significaba el célebre preám--

tratados

bulo de

De

octubre

de

la

de

1851

ley ratificatoria

ahí arranca

la

contra

volucionarios

y

la

de 1852.

colaboración del Brasil en los trabajos reel

gobierno

Juan

de Giró,

del

doctor

transcripto,

y

colaboración siguió sin

el

la

Carlo¿.

valga

el

Gómez que

irrecusable

testimonio

antes

hemos

interrupción hasta que

derrumbe se produjo. Puede decirse que la Legación Brasileña era

el

centro obli-

85

GOüíEs.No m: GIRÓ

gado de todas

reuniones encaminadas a precipitai*

las

la

caída

de Giró. El doctor Juan Carlos Gómez ti.ecía en 1857 desde las columnas de "El Nacional", describurndo los preparativos de la víspera del movimiento revolucionario: lEn la noche del 17 de julio estaban reunidos en la Legación Brasileña a cargo del Ministro Paranhos, don Manuel Herrera y Obes. don Juan Miguel Martínez, el general Pacheco y otros muchos ciudadanos. El general Pacheco dijo allí que él "res-

pondía con su cabeza de que se salvaría la paz pública al día si se evitaba La reunión de fuerzas armadas en la anadió en el estado plaza pública, porque no podía responder siguiente

de



irritación

de

ciera disparar los fusiles por

pidieron

sentes

ante

el

fuerzas.

Y

Minisrro Paranhos

el

había hablado con Giró y que

y a

su

la

su

in-

reunión de

regreso

dijo

siguiente no saldrían

día

hi-

los pre-

interpusiera

de evitar

fin

.salió

al

que

accidente

Entonces todos

Paranhos que

Presidente Giró a

fluencia



cualquier

solos".



Ministro

al

de

espíritus,

los

que las

fuerzas.

El

rio

director

de "El Comercio del Plata", otro testigo presen-

de los sucesos, escribía a raíz del moviimiento revoluciona-

cial

del

18 de julio:

Los decretos de nombramiento del coronel Flores y del doctor Manuel Herrera y Obes para dos de los Ministerios de Giró, se extendieron en la noche misma del 18 de julio como consecuencia de una reunión de personas notables de la mayoría y de la minoría de las Cámaras que tuvo lugar en la Legación del Brasil.

El

mismo doctor Gómez,

dirigida

al

doctor Andrés

más

Plata" diez años

"En vísperas el

tarde)

conflicto

185'5

(que reprodujo "El

decía lo siguiente: o

motín del 18 de julio de 1853,

Presidente Giró requería del Ministro Brasileño

tipulado 12

del

en una carta sobre política brasileña,

Lamas en

por los

artículos

de octubre de

6.o

1851, por

y el

7.o

del

tratado

auxilio es-

de

cual se obligó el Brasil a sos-

tener al gobierno constitucional fuere cual fuere los sublevados, a

el

de alianza

el

pretexto

de

no rehusar su auxilio bajo ningún pretexto"...

Pero su nota recién fué contestada cuatro días después del 18 de julio y entonces en forma de lamentación de los sucesos ocurridos.

Otro testigo presencial de los sucesos,

el

doctor Eduardo Ace-

HISTORIA DEL URUGUAY

86

vedo, decía a don Francisco Lecoc
necesidad del país, se debe exclusivamente a la política insende los estadistas brasileños, c.ue creen favorecer los intereses de su nación aniquilando la nuestra para absorberla des-

sata

pués más cómodamente. Llamo insensata esa política porque aún

suponiendo que

brasileños consiguiesen su

los

sus fronteras hasta

nacionales

habitantes

estos

mentar

los

Río de

el

elementes

la Plata,

extranjeros,

y

objeto y trajesen

consumando no

ruina de

la

harían

au-

sino

que encierra en sí más temprano traerán su

desorganización

de

y que más tarde o adquisición de este país sería para el BraLa desmembración. sería fatal a su poseesil un nuevo vestido de Dejanira, que dor... ¡Qué lástima que la Francia no se haya apercibido del papel que estaba llamada a desempeñar en estos países! Cuando estaba por retirarse en 1852 la columna expedicionaria francesa Que mandaba Mr. Bertin Ducliateau, pedimos al almirante Le Predour que retardara la partida de la expedición para que nos

mismo

el

Brasil

sirviera de escudo contra las injustas y exageradas pretensiones

brasileñas. El almirante no se creyó autorizado a ceder a votos

que salían de tido

la

los

en

francesa

el

ventajas reportarían

cuántas

noció

mismos que más ardorosamente habían comba-

intervención

Plata.

El almirante no

intereses

los

co-

franceses

de

s-emejante concesión hecha a antiguos adversarios que venían a reclamar la intervención pacífica Ce la Francia para sostener \a

de

independencia

la

República

j

la

consolidación

orden

del

constitucional."

La confesión El sil

brasileña.

Relatorio

ferencias

Ministro

del

correspondiente

al

doctor

del

Luego de hacer

la

de

Negocios Extranjeros

del

Bra-

año 18 53 se encargó de confirmar las reGómez en términos todavía más graves.

crónica de los sucesos del 18 de julio, de áo-

ñalar las causas del debate relativo a las medallas de Caseros, de hablar de "la debilidad del Gobierno", de la renuncia del Ministro

Castellanos y del nombramiento

de Berro,

agregaba

la

cancillería impe'-ial:

Al aproximarse

el

18

de julio era ya

entre la fuerza de línea y

Giró

recién

se

dio

cuenta

temida

una

colisión

Guardia Nacional. El Proside:ií-3 del peligro en la noche del 17 de la

87

GOBIERNO DE GIRÓ

de fuerzas brasileñas. Contestó Legación que esas fuerzas no tomarían parte "en la lucha civil", pero que desembircarían cuando fuere necesa'-io para mantener el orden público. Más tarde, al producirse la renunjulio y entonces pidió el auxilio la

de los colorados que entraron a integrar el ministerio, el la Legación que había llegado el caso de que los agentes extranjeros protegieran la ciudad con toda la fuerza armada de que pudieran disponer, porque el Gobierno carecía de elementos para mantener el orden. El Ministro Flocia

Ministro Berro expresó a

era uno de los renunciantes, volvió a su puesto, y en-

res que

tonces

Ministro Brasileño fué invHado por

el

reunión en que se

le

Gobierno a una

el

autorizó para asegurar a los descontentos

se concederían las Jefaturas Políticas a condición de

que

Pacheco

general

del

saliera

país.

Pero

que

Presidente,

el

el

sin

¿'guardar la respuesta se asiló en la Legación de Francia y desde allí preguntó a la Legación Brasileña qué actitud pensaba asumir,

contestando ésta

que observai-ía "la más absoluta absten-

ción".

Ese mismo Relatorio complementaba su documentación con una nota del Gobierno Brasileño a su Ministro doctor Amaral comentando la respuesta de Giró a otra nota de 30 de enero de 1854, en que la Legación le anunciaba que el Brasil había resuelto prestar su reoonocimiento al gobierno de Flores.

En

su respuesta afirmaba

el

ex Presidente Giró que

sido derribado sin que el Brasil le prestara los

él

auxilios

había solici-

todos antes y después del derrumbe, y agregaba rechazando pretensiones

de

tutoría

de

la

Legación Brasileña:

"Todo Gobierno independiente rehusar, según

le

tiene

derecho

de

aceptar

o

parezca justo, los consejos que quieran darle

sus aliados y amigos, porque

si no tuviera ese derecho no sería independiente y el cumplimiento de sus mutuos pactos y la conservación de sus relaciones dependería exclusivamente de la

voluntad de una sola de las partes". Pues bien, la parte principal de la nota del Gobierno Brasileño a su Ministro Amaral estaba destinada a demostrar que el

que se había obligado el Imperio podía ser '"de conque los consejos habían sido desatendidos por Giró, quien sólo se preocupaba de recabar auxilios materíales; y que la fuerza militar que existía en el puerto de Mon-

auxilio a

sejo" o "de fuerza";

tevideo no era suficiente para sostener

Véase

sin

embargo

lo

que

al

establecían

Gobierno. los

artículos

5.",

6."

HISTORIA DEL I'KrOUAY

88

y 7.° del tratado de alianza entre el Uruguay y el Brasil, uno de aquellos famosos tratados de 1851 por los que el Imperio se tragó buena parte de nuestro territorio y nos convirtió en carceleros de sus esclavos y en tributarios de sus industrias:

"Para

la

fortificar

interior y de

jestad el

lo,s

nacionalidad oriental por medio de

hábitos constitucionales,

Emperador

del

Brasil

se

el

la

paz

Gobierno de su Ma-

compromete

a prestar eficaz

apoyo ai Presidente que debe elegirse constitucionalmente en la República Oriental por los cuatro años de su duración legal. "Este auxilio sera prestado por la fuerza de mar y tierra del Imperio a requisición del mismo gobierno constitucional de la República Oriental, en los casos siguientes: 1.° en el de cualquier movimiento armado contra su existencia o su autoridad, sea cual fuere el pretexto de los sublevados; 2." en el de dedel Presidente por medios inconstitucionales. "El Grobierno Imperial no podrá, bajo ningún pretexto, rehu-

posición

sar su auxilio en cualquiera de los casos del artículo anterior".

Una

interpelación ruidosa en Río de Janeiro.

A

185 4 hubo una tempestuosa sesión en finéis de mayo de Parlamento Brasileño. El senador por Marañón formuló el proceso de la política imperial en la forma ique extractamos a,

el

continuación: El señor Giró pertenecía al Partido Blanco y llamó mucho la atención que fuera elegido Presidente en circunstancias en que partido, era apenas tolerado en Montevideo. Gobierno dirigieron acusaciones a nuestro Enviado Extraordinario y Ministro Plenipotenciario por no haber

Oribe,

jefe

de

"Los amigos

ese

del

tratado de frustrar semejante resultado". Los comienzos de Giró fueron tranquilizadores y la opinión camibió hasta que desatendidas ciertas peticiones de- nuestro agente diplomático empezaron a enfriarse nuestras relaciones. Una de esas peticiones era la confirmación de don Andrés Lamas. El Presidente Giró se

negaba

menos

decididamente ese".

a

ella,

diciendo:

Llegó, sin embargo,

"elijan

cualquier

un momento en que

'.as

otro críti-

Uruguay obligaron al gobierno señor Lamas, que vivía desde un año atrás

cas circunstancias financieras del

de Giró a nombrar

al

en

la corte sin credenciales. Esa concesión animó al Gobierno Imperial y a sus repres3ntante. El hecho es que el doctor Pa-

ranhos resolvió presentarse "como agente diplomático de un país

gouiku.no

protector

reducir

y

Producida

di;

Montevideo

a

gihó

al

^í)

protectorado

del

Brasil".

escisión entre los partidarios de Giró y los colori-

la

dos, el doctor Paranhos,

que observaba que éstos ganaban terrellegando hasta influir en favor de algu-

no, resolvió ayuda.rlos,

nombramientos.

nos

"A

todo ello se prestó el señor Giró durante algún tiempo. Al la primera tentativa de revuelta en julio de 1853,

producirse

aconsejó Flores

y

'

Paranhos

señor

el

Herrera,

a

el

pretexto

nombramiento de de

conciliar

los

Ministros

lo.^

partidos...

Vi-

desórdenes de septiembre y la conducta del señor Paranhos se hizo sumamente dudosa, llegando el orador hasta soiS'pedhar que S. E. estuviese al corriente de la oonsipiración y nieron

que

la

los

alimentaba

al

mismo tiempo que hacía grandes

protestas

señor Giró"

al

Caído Giró se organizó un gobierno provisorio, en generales Lavalleja y Rivera, "los dos

fTresaron los

el

que

in-

más encar-

el primero apenas un mes, no hubiera habríamos visto todo lo que hubiera sido así "ya y hecho". En cuanto al segundo, si él también no hubiera muerto al poco tiempo "habría sido Presidente de la República y estaría causando ahora grandes embarazos al Brasil". Por los tratados estaba obligado el Brasil a sostener al go-

nizados enemigos del Brasil". Vivió si

lierno de Giró con las fuerzas de

mar

y tierra, sin que en nin-

gún caso pudiera negarse a prestar el auxilio. La nota del doctor Paranhos acerca de la prestación de esos auxilios, revela "la chicana de que echó mano para no cumplir los tratados", ganando así tiempo a fin de evitar que Giró volviese al gobierno.

Cuando

el Gobierno Imperial tuvo noticias de la organización gobierno provisorio y supuso que Rivera podría llegar a la presidencia de la República, trató de apoyar a Giró con el propósito de evitar un mal mayor. Pero muerto Rivera, el Gobierno

del

Imperial cambió de "Si el

la

orador

maPdha



bierno de

si

rumbo previendo ya

del el

Gobieirno

hubiera

la

elección de Flores.

sido

otra,



Ministro Brasileño hubiera declarado

entonces que

el

Brasil

en

ejecución

de

los

concluía al

Go-

tratados

enviaría fuerzas para

el sostenimiento a toda costa de la autofracción que protegió a Flores no hubiera osado tentar una rebelión y después de ella la deposición del gobier-

ridad

no;

lega'l,

la

y entonces viéndose el señor Giró seguro en el puesto, se hubiera prestado de buen grado a las exigencias del Gobierno Brasileño, como se presió en los primeros tiempos y aun des-

pués".

HISTORIA DEL UliUGUAY

9(J

Terminado

sensaicional

ese

subió

discurso,

a

la

tribuna

el

Negocios Extranjeros. Pero no para rectificar las gravísimas revelaciones del senador interpelante, sino para atenuarlas sosteniendo que el Uruguay repudiaba al gobierno de de

Ministro

Giró; que

Brasil podía intervenir a su favor

el

"como

auxiliar",

no cómo "agente priniciipal", y que sin embargo habría le, rido que hacerlo en esta última forma desde que en Montevideo todos abandonaban al Presidente, y en campaña eran rápida-

mv.^

mente sofocados los levantamientos producidos. Defensa acusadora, como se ve, que dejaba subsistente el cargo fundamental de

y decisivo de la acción incesante

derrumbar

a

azuzando

Giró,

a

Legación Brasileña para luego

la

colorados y negando

los

gobierno, que todavía estaba en pie,

al

evitado

habría

Habla

la

de

después,

en

julio

Congreso Brasileño

el

tema de

en

el

concurso militar que

el >Iiiiistro Paranlios.

Un año

derrumbe de

imperial

ría

el

caída.

el

1855, volvió a debatirse la

responsabilidad

en

el

Imperio

del

Giró. Estaba entonces al frente de la cancille-

mismo doctor Paranhos que había colaborado

en los sucesos de 1853, convirtiendo su Legación en foco prinde

cipal

la

revolucicn colorada.

Ferraz pidió explicaciones al ministerio acerca un empréstito que intentaba realizar el Estado Oriental, y de promesas que se decían hechas para asegurar el pago del servicio de la deuda consolidada. Hizo referencias a la cuestión diputado

El

de

presidencial

que debía resolverse

1."

el

de marzo de

Presidente Flores, según sus informes, intentaba gir.

1856.

El

hacerse reele-

También hacía trabajos un personaje que había estado siem-

pre ligado a Rosas. ¿Qué hará en medio de esto

La

política del

quien

triunfe".

sileña?

"viva

conciliación

Brasil

la

fuerza bra-

en los sucesos de 185 3 fué

Fué todavía más:

con los que se sublevan,

la

fué

la

del

rechazo

política d'e

la

de

"de la la

re-

que atacan la autoridad legítima ... Si no fomentamos esa revuelta que llevó al poder al Ministro de Guerra revoltoso, a lo menos le dimos toda la fuerza".

presión

contra

Después

de

los

esta

contestó diciendo que ni

interpelación el



que

el

Ministro

Paranhos

Brasil no había prometido empréstitos,

tampoco ofrecido garantías para el servicio de la deuda conaun cuando era verdad que esos auxilios habían sido

solidada,

GOBITRNO

solicitados con

GIKÓ

di:

91

empeño, y en cuanto a Flores que no

capaz del plan de reelección qu'e se

atribuía

le



lo

juzgaba

siguió inten-

el debate parlamentario en forma que obligó al docParanhos en agosto a pronunciar un extenso discurso que puede resumirse así: "Habiéndose colocado (Giró) fuera de las condiciones de la alianza; habiendo hecho inminente la guerra civil; no habiendo querido entenderse con el Gobierno Imperial sobre las condi-

sificándose

tor

ciones de

no habiéndose prevenido contra las even-

alianza;

la

tualidades de una guerra sólo

civil

que sólo

él

podía prever, porque

podía medir las consecuencias de su pensamiento; no ha^

él

hiendo requerido en tiempo

el auxilio del Gobierno Imperial para que éste pudiera intervenir eficazmente cuando fuera necesario...

Gobierno Imperial estaba obligado y al Estado Oriental, para restablecer la persona de ese Presidente en el primer cargo d'e la República?-. Le aconsejé que entrase francamente en el camino de la alianza, en la política que los dos partidos habían aceptado en presencia de los aliados cuando depusieron las armas; qu'e ¿podía yo declarar qu-e

dispuesto a llevar

.

el

guerra

la

.

practicase algunos actos que pudieran inspirar confianza al partido descontento,

volución...

porque no había

Sólo después

18

del

medios de evitar

lOtros d'e

julio

el

Presidente

la re-

"com-

prendió toda la gravedad de la situación" y lleívó al ministerio al doctor Herrera y Obes y al coronel Flores. Pero no pasó de ahí

el

cambio de política "y

la

minente". El 23 de septiembre del

señor Giró sobre

ría a la autoridad". rial

el

guerra fui

apoyo que

civil

volvió a hacers'e in-

consultado por los Ministros el

Ministro Imperial presta-

Contesté que no podía pres'tar apoyo mate-,

alguno, "que no debía desembarcar los pocos marineros que

teníamos en aquel puerto para exponerlos a un inútil sacrificio de sangre en las calles de Montevideo". La Legación ofreció en

cambio "su apoyo moral". miento comunicaba

el

Pocas horas después de ese ofreci-

Presidente por intermedio de sus Minis-

que estaba dispuesto a otorgar concesiones, pero que dela Legación del Brasil ejerciese influencia para dominar la i-'evolución. Consistía una de las causas del descon-

tros

seaba que

tento en que la casi totalidad de las Jefaturas Políticas estaba

en manos de'l Partido Blanco y que eso permitiría al mencio-. nado partido ganar de nuevo las elecciones de senadores y diputados. El Presidente Giró hizo saber a la Legación que es-. taba

resuelto

a

conceder dos Jefaturas,

a

condición

de qu'e

el

HISTORIA DEL URUGUAY

92

general Pacheco se alejara del país, y ya la Legación había conseguido que Pacheco se decidiera a salir cuando llegó la noticia de que

Presidente se había asilado en

el

la

Legación de Francia.

Tales fueron las declaraciones oficiales del Ministro Paranhos.

En resumen: que

la

verdadera

sobre

tutoría

Legación del Brasil pretendía ejercer una el

Presidente

Giró

para

ayudar a

la

colorada, y que cuando el Presidente se sintió vacilar y reclamó la ayuda militar del Imperio, de acuerdo con cláusu-

leacción

expresas del tratado de 1851, la Legación le contestó que no suministraría ni un solo solidado, pero que en cambio le seguiría dando consejos, a favor naturalmente del partido revolulas

el ejército y que además quería tener todas administración.

cionario, que tenía

de

las

llaves

La

libertad de la pi-ensa duraaite el gobierno de Gii*ó.

la

'En dos oportunidades tuvo que oicuparae de la prensa del- go-

bierno de Giró: en febrero de 1853, cuando las agitaciones de la política

amenazaban

argentina

aumentar

las

ya

graves

agita-

ciones de nuestro propio ambiente político; y en septiembre del

mismo

Lonstitucional, año, cuando la autoridad ya maltrecha motín militar del 18 de juho, creyó evitar el derrumbe impidiendo el debate histórico entre blancos y colorados. En la primera de esas oportunidades el Ministro de Gobierno

por

y

el

Relaciones

Exteriores

Florentino

doctor

gió a la Jefatura Política

Castellanos

se

diri-

ordenándole que notificara "a todos los impresores o encargados de periódicos creados o por crear, que se abstuvieran de dar lugar en sus co-

lumnas

a

todo

de

Capital

la

tendiente

articulo

herir

n

partidos de la República vecina, bajo •dad,

limitándose sólo a narrar

dad y a la inserción de "El Gobierno deicía



en .los

especial

que

la

la

negocios

donde

los

Estado

de

los

resiponsabili-

hechos con toda imparciali-

el

campo de contendientes extraños,

se asesten tiros a

garanten

cualquiera seria



en que se encuentra dividida

leyes del

a

más

documentos oficiales". nota: que se ha trazado una marcha de Buenos Aires, no puede permitir

prensa nacional sea

ni el baluarte de

tidos

los

la

la

la

libertad

uno u otro de

los par-

República Argentina. Las de expresión

del

pensa-

miento, pero esa libertad en nada queda herida por prohibirse el

debate de las cuestiones argentinas en momentos de una agidesde que el Gobierno quiere dejar libre

tación tan palpitante,

(ORIERNO DK GIRÓ

93

pensamiento para juzgar de los actos de su administración. se ataca la ley prohibiéndose que se viole la neutralidad y ésta quedaría Comprometida si se tolerase por más tiempo el el

No

abuso que se hace tratarse

de

cuestiones

otras

la

prensa

que

las

nacional,

donde

que llevan por

no debieran ayudar

oibjeto

marcha de progreso, lenta pero segura, en que ha entrado jl para convertirla en arma peligrosa de dos partidos que como argentinos tienen todas las s.mpatías del Gobierno de la

la

país,

República".



"Esa neutralidad salvadora agregaba el Presidente en su mensaje de apertura de las sesiones ordinarias de la Asamblea en febrero de 1853



preservánidonos de los males que en otros tiempos pesaron sobre nosotros, nos ha habilitado también para ofrecer a los partidos contendientes de la Confederación nuestros buenos oficios, mediando entre ellos para promover la paz que les deseamos tanto como para nosotros mismos". Véase cómo fundaba el Ministra de Gobierno y Relaciones Exteri'ores docto-r Castellanos, el decreto en su Memoria anual a la Asamblea:

"La

imprenta no había previsto el caso de los ataques La guerra que asóla la Provincia de Buenos Aires, empezaba a tener ecos parciales en los diarios de la República. El Gobierno había declarado la neutralidad más esley de

a países extraños.

tricta

en esas cuestiones. Temía que se abusara sin responsabi-

lidad efectiva de

un derecho que

nido en vista para los

Constitución sólo había te-

la

asuntos peculiares- de

la

administración

que son los que interesan más inmediatamente al país. Por eso ha tomado sobre sí la responsabilidad de mandar se abstengan los diarios de publicar nada que pueda herir a cualquiera de los partidos que dividen a la República Argentina y ordenado que se limiten a narrar los hechos con toda imparinterior,

cialidad y a

la

inserción de los do.íumentos oficiales. Los hábi-

tos constitucionales la

energía

ele

necesaria

no han tomado todavía entre nosotros toda para salvarse

a

despecho de

los

intereses

familia y vecindad que nos ligan a los argentinos. Era nece-

sario poner con tiempo un pronto lemedio a los males que otras

veces han pesado sobre

el país y ¿e acordó esa medida. El Gobierno no ha esquivado su responsabilidad por eso: ha declarado

Que

la Constitución y la ley de imprenta dictada para regir en República y para los delitos que aquí sean verdaderamente punibles, tengan en ella todo su imperio. Así ha creído guardar la

la

URUGUAY

IIISTOIUA DEL

94

ley,

concilian-do

viene seguir

al

sus

presicripciones

con

política

la

Esas medidas ahorrarán a

país.

que con-

República re-

la

clamaciones y harán cesar disgustos y controversias personales". Se entabló con tal motivo un amplio debate acerca de las facultades del Gobierno para limitar la propaganda de la prensa,

reinando conformidad acerca de

la

inconstitucionalidad

del

de-

no así respecto de otros puntos conexos. La ley de 1829 decía el doctor Eduardo Acevedo en "La sancionada por la Asamblea Constituyente en Constitución" los precisos momentos en que se discutía la carta fundamental, quedó redactada así: "todo ciudadano puede por medio de la prensa publicar libremente sus ideas sobre cualquier materia sin previa censura". Con esa ley en la mamo puede el Gobierno impedir que los no ciudadanos usen de la libertad de escribir. Podrá debatirse la justicia de tal restricción, pero la ley existe y el Gobierno estaría habilitado para exigir su cumplimiento. En cambio, no hay ley alguna que impida a la prensa ocuparse de los intereses de los demás países, y si el Gobierno juzga que existe un vacío, debe presentar un proyecto de ley a la Asamblea, en vez de dictar un decreto. creto, pero



La

tesis

relativa



a

los

extranjeros

órgano de la prensa, y entonces

el

fué

contradicha

director de

por

otro

"La Constitución"

creyó obligado a sostenerla. Véase su argumentación: ¿Es o no conveniente que el extranjero goce de la libertad de la prensa? ¿La Constitución de la República acuerda ese derecho? Son dos cuestiones diferentes. La libertad de la prensa es un derecho político, y así lo han

se

reconocido Las

más

liberales

claración de los derechos

nal de Franlcia, acordaba "a

El proyecto de Dede la Convención Nacio-

conistituciones.

del -hombre

todo liomhre la libertad de escribir,

de imprimir su pensamiento". Pero esa forma de redacción que-

dó rechazada y en su lugar se sancionó esta otra: "La libre comunicación de los pensamientos es uno de los más preciosos derechos del hombre; todo ciudadano puede, pues, hablar, escribir e imprimir libremente, salva la reponsabilidad del abuíc de o.:ci libertad en los casos determinados por la ley". La Constitución española de 1812, que es una de las grandes fuentes de la nu<^simtra, dice: "Todos los españoles tienen la libertad de escribir, primir y publicar sus ideas políticas, sin necesidad de lice'K';i. r«ívisión o aprobación alguna anterior a la publicación, bajo las restricciones

y responsabilidades que establezcan

las

leyes".

La

GOBIERNO

Constitución

Nueva

de

libremente exponer, las

York,

escribir

illí

dice:

GIKÓ

í)r»

"Cualquier

y publicar

ciudadano

su opinión

sobre

puede todas

materias".

En cuanto a la otra cuestión, la ley de imprenta sancionada por la Asamblea Constituyente en los mismos momentos en que se discutía y sancionaba la Constitución, establece "que todo liudadano te sus

puede

por me'lio de

la

pr9nsa

piibl-c^;-

^'br'^ni^n-

ideas sobre cualquier materia sin previa censura".

curso de la discusión, propuso permitiera

a

extranjeros

los

En

el

doctor Julián Alvarez que se imprimir avisos con cerní entes a el

porque entendía que la ley en la forma en que estaba redactada, les impedía escribir cosa alguna. Pero en la sus

negocios,

moción.

sesión

siguiente

con

objeto de que pasara a Comisión y se redactara un ar-

el

retiró

su

Otro

diputado

la

reprodujo

Y

también fué rechazada esta moción. No cabe de que los constituyentes quisieron reservar la libertad de imprenta a los ciudadanos. Se objetará que el artículo constitucional consagra la libertad de imprenta en forma absolutamente general. Pero no debe olvidarse que el mismo artículo al hablar de las responsabilidades del autor o impresor, dice "con arreglo a la ley" es decir a la ley de imprenta que la Asamblea sancionaba en esos mismos momentos. Hay algo más. Al discutirse la ley de imprenta se acordó practicar su revisión luego de sancionada la Carta Fundamental, tarea que abordaron los propios constituyentes en julio de 1830, sin mejorar la condición de los extranjeros. Ambas cuestiones quedaban agotadas y el Gobierno aunque no derogó su decreto lo dejó prácticamente en desuso o sin efecto. Hubo asimismo manifestaciones parlamentarias do desaprobación. La Comisión especial del Senado encargada del estudio del mensaje presidencial y de las memorias ministeriales, declaró que el Poder Ejecutivo había atacado la ley de imprenta, y el doctor José María Muñoz presentó pocos días antes del tículo adicional.

duda, por

lo

tanto,





motín una tardía moción de intenpelación

al

ministerio, que

fué

rechazada.

El segundo decreto sobre la prensa apareció a mediados de septiembre de 1853, cuando ya* el gobierno de Giró estaba bajo el tutelaje de los revolucionarios del 18 de julio. Ese decreto,

que lleva a su pie la firma de los Ministros don Bernardo P. Bedon Manuel Herrera y Obes y coronel Venancio Plores, pro-

rro,

hibía a la prensa todo debate acerca de las disensiones partidistas

anteriores.

HISTORIA DEL ^"RrGUAY

r6





decía el decreto que toda recriminación '"Considerando sobre opiniones y actos referentes a la guerra que terminó en octubre de 1851, es una violación flagrante de los pactos que

República... Que la obsera la conservación de la Queda de todo punto prohibido a la prensa pe-

precedieron a

vancia

paz publica... riódica

de

pacificación

la

de esas estipulaciones

el

traer

será

trasgrosión

desorden y a

la

a

juicio

actos

los

clasificada

la

interesa

y

u

penada

opiniones referida?...

como una concitación

La al

anarquía".

El Presidente Giró ya estaba en vísperas de asilarse en la Legación de Francia para escapar "a otras asonadas y el nuevo decreto restrictivo de la libertad de imprenta no tuvo la misma

resonancia

que

el

anterior.

Los sucesos argentinos.

La

política argentina, causa eficiente de uno de los dos decreque acabamos de examinar, tenía que actuar y siguió actuando después de la paz de octubre, por la estrecha vinculación que los acontecimientos desarrollados desde 1830 habían creado y fortalecido entre los partidos de allende y aquende el Plata. Como consecuencia de esos acontecimientos, el Partido Blanco estaba vinculado al gobierno de Urquiza y el Partido Colorado al gobierno de la Provincia de Buenos Aires constituido por los mismos emigrados porteños que habían combatido desde las murallas de Montevideo contra las tropas de Oribe. Poco tiempo después de Caseros, en septiembre de 1852. la Provincia de Buenos Aires se alzó contra Urquiza, encabezando el movimiento el general Piran con la ayuda del general Madariaga y de la tropa correntina que allí había quedado después de la caída de Rosas. "Nuestro Gobierno, nuestra Asamblea, nuestras rentas, nuesdecía en su proclama el general Piran tro ejército de todo se nos ha despojado a cambio de una mentida libertad: como si ella pudiera existir sin el ejercicio de los primeros derechos de

tos



los



pueblos".

La Sala de Representantes

se apresuró a lanzar un manifiesque hacía su expresión de agravios contra Urquiza por su conducta a raíz de Caseros: había fusilado 200 prisioneros y transportado otros 700 a Entre Ríos, todos ellos oriundos de Buenos Aires; había impuesto a la población el uso del cjntito en

GOBIERNO DE GIRÓ

97

punzó símbolo de la dictadura de Rosas; y se había hecho en una reunión de gobernadores, poderes inmensos, como medio de que la organización constitucional de la Confederación quedara entre sus manos y no en las del pueblo argentino. Al principió Urquiza resolvió eludir la lucha, y en tal senlio

dar,

se

t'do

dirigió

al

país.



"Pueblos confederados decía en su proclama de octubre yo habría podido en vuestro nombre y con el poder que me habéis dado, someter a los díscolos y hacer cesar inmediatamen-



te el

escándalo que dan a

la

Nación y

mundo

al

entero. Pero he

preferido sujetarlos a vuestro juicio y entregarlos al fallo que

sobre ellos pronunciéis... tir

he ofrecido no omimi parte hasta ver or-

os

Paz y unión fraternal enel lema de mi bandera, resumen de mi programa y el objeto de mis ardientes votos". Pero al finalizar el año 1852 estalló la guerra, una guerra

ganizada y constituida tre todos el

Argentinos:

esfuerzos, ni perdonar sacrificios por

los

la

llena de alternativas y de

ambiente

Nación.

.

.

argentinos, ha sido y es

político,

honda repercusión en nuestro agitado

circunstancia

que

indujo

al

a ofrecer su mediación a los dos contendientes.

La República

Oriental,



beneficios de la paz pública,

decía en su nota,

Presidente



Giró

"goza de

los

después de largos años de guerra,

y deplora que ésta se haya encendido entre hermanos". Urquiza aceptó la mediación; pero el gobierno de Buenos Aires no la tomó en cuenta. Después de ocho meses de lucha el ejército de Urquiza se retiró a Entre Ríos, justamente en los momentos en que el motín del 18 de julio hacía tambalear al gobierno de Giró.

Glorificación de la obra de Artigas.

No cerraremos políticos

dt

Ir

este

paréntesis

relativo

a

los

acontecimientos

Argentina, sin destacar un hecho de alta signi-

del punto de vista artiguista. Al reinstalarse don Bartolomé Mitre en Buenos Aires después de una larga actuación dentro de los muros de Montevideo, resolvió fundar un diario destinado a servir de baluarte contra Urquiza. Este diario, llamado "Los Debates", apareció en abril ficación

lo que decía su ilustre fundador y redactor al señalar los rumbos del nuevo órgano de publicidad en uu articu-

de 1852, y véase lo

titulado

7-IV

"Profesión de fe":

HISTORIA DEL URUGUAY

98

"Todas las cuestiones de organización nacional serán consideradas del punto de vista del derecho público federativo. El. federalismo es la base natural de la organización del país. Todos los antecedentes constitucionales del pais son federales. Todas las caestiones económicas, tales como la navegación de los ríos, sistemas de Aduana, percepción de las rentas, etc., no son otra cosa que cuestiones federales que deben resolverse por el mismo sistema qué las ha hecho surgir. Todos los tratados interprovinciales han sido hechos sobre la base del pacto federal. La voluntad de la mayoría se ha pronunciado a favor de ese

no sólo la única posible, que se apoya en la tradición administrativa y revolucionaria; la que satisface a todas todos los intereses; la que tuvo por las exigencias, concilla sistema.

La organización federativa

sino que también

la

más

es

racional;

la

Moreno en 1810 y la que reúne en su apoyo primera república del Orbe".

apóstol al célebre

ejemplo de

No ción

la

el

era esa, ciertamente, la tradición de Mayo, sino la tradi-

de Artigas. Los

proceres

absoluto, a la dictadura

de

de

la

gas que trataba de implantar en

Mayo tendían

al

centralismo

oligarquía porteña contra Artiel

Río de

la

Plata

el

régimen

norteamericano, con gobiernos provinciales autónomos, provistos de sus tres poderes, Legislativo, Ejecutivo y Judicial, y un gotierno federal provisto de iguales resortes para el manejo de les 'intereses

tigado con

de

todas

un decreto

las

provincias,

programa grandioso

de expulsión por

cas-

Congreso ConstituOrienitales permaneció

el

yente de 1813, y al que el Jefe de los absolutamente fiel en todas y cada una de las etapas de esa lucha gigantesca que se extiende hasta el año 1820 y que al fin tuvo que cerrar con su expatriación definitiva al Paraguay, firme en la resolución de no aceptar transacciones en materia principios

de

El nombre

hemos

institucionales.

de Mariano Moreno, escrito por un

•üebería,

en

error

que ya

primer vomo de esta obra, podría y conseicu encía, ser susMtuído por el de Artigas en

rectificado

en

el

a la verdad histórica y como glorificación efectiva de famosas Instrucciones que él dictó en 1813 frente a los muros de Montevideo.

homenaje 'aK

CAPITULO

II

Movimiento económico población después de la GueiTa Grande.

Jja

Un año de

desjpués de la terminación de la

1852, decretó

el

Gobierno

el

Guerra Grande, a

fines

levantamiento del censo de

la

República.

Esa operación arrojó un total de 131,9 69 la forma que sigue:

"habitantes,

distri-

buidos en

Montevideo

33,9 94

Canelones

17,817

San José

13,114

Colonia

7,9 71

Durazno

5,591

Soriano

9,031

Pay&andú

6,247

Sa,lto

7,3 64

Tacuarembó ICerro

6,567

Largo

6,451

Maldonado

9,733

Mináis

8,0 8 9

Se debió luchar con grandes diificultades al descomponer El hedho es que las clasiñcacionies por nacionalidad,

c'ufras.

rado

civil,

edad, sexo,

etc.,

quedaron

muy

lejos

del total

las es-

de la

población. Ninguna de ellas alcanzó a redondear la cifra d^ cien

mil 'habitantes, sin duda por efecto los

die

omisiones imputables a

encargaidos de la recolección de los datos.

de esas

claisificaciones

He aquí algunas

incompletas:

Nacionalidad Orientales

67,568

lEtxtranijeroai

28,586

HISTORIA DEL URUGUAY

100

Estado

civil:

Casados

22,915

Solteros

69,574

Viudos

5,104

Raza:

Blancos

84,525

Negros Mulatos

6,,5i37l

5,031

Estado sanitario: Sanos

.

92,620

.

Bníermas

1,318

Distribución por edades:

Montevideo

.

Hombres

Mujeres

Niños

Personas de 60

hasta 59 años

hasta 59 años

hasta 14 años

años arriba

101

GOBIERNO DE GJBO

ANOS

Población

Montevideo total

1829

de la República

IIT'ÍTORIA

102

el

activo

DEL URUGUAT

movimiento de repoblación. Pero véanse

cogidas por

Población "

de

la

ciudad

"

"

campaña

y

suburbios

los 1,977 habitantes de la ciudad del iSalto,

blancos 1,831,

aquí

cómo

4,977

1,462 eran na-

se distribuían:

59

años

Mujeres ídem ídem Niños de 14 años abajo Personas de 60 años arriba

.Comparado diferencias:

1,977

extranjeros.

Hombres hasta •

re-

Del punto de vista del color, eran Y en cuanto a edades, mulatos 59. negros 87 y

cionales y 515

lie

cifras

3,000

Total

De

las

Jefe Político:

el

641 601

717 18

este censo con el de 1852- aurojaba las siguientes

COmKR.N'O UE CIKÓ

103

Apenas encontramos algunas citras aisladas o al año 1852: por ejemplo, que en las parroMatriz, San Francisco, Carmen y San Agustín, de hubo 429 matrimonios y 2,123 nacimientos; y que de la ciudad, no comprendidas las parroquias del la Aguada, hubo 969 defunciones (correspondiendo menores de 7 años), cifra enorme, que el doctor.

todavía.

zarse

truncas relativas quias de la

Montevideo, en

el

casoo

Cordón y de 394 a niños Martín

de

esta

obra,

sión

de

la

tadora de

Moussy atribuía, según consta en otro volumen de cambio de régimen de vida que trajo la conclu-

al

guerra, a los calores excesivos y a la acción devasla

langosta.

Estadística quedó reorganizada a fines de 18 52 mediante un decreto que obligaba a los curas párrocos a formar

La Mesa de

cuadros a

los

trimestrales

de

los

matrimonios

bautizos,

y

entierros;

administradores de hospitales un estado de altas y bajas,

con especificación de enfermedades; a los médicos, una relación

semestral

de

enfermos,

con

detalles

acerca

de clase

de las defunciones y crímenes de su sección;

ción

de

enfer-

a los Jueces de Paz, una rela-

medades y resultados obtenidos;

a

los

Juzga-

dos y Tribunales, una relación de las causas en trámite; a loa Jefes Políticos, una memoria de los sucesos de sus departamentos y datos sobre las

industrias.

Pero este decreto quedó en susipenso por efecto de sucesos

políticos

que se desarrollaron

a

los graves

mediados del año

si-

guiente.

Ij'a

corriente inmigratoria.

En 3,056

el

curso del

inmigrantes,

terio de Gobierno.

año 1852 llegaron según

las

se

puerto de Montevideo oficiales

del

Minis-

1,471 de ellos procedían de Italia, según los

cuadros complementarios de

La corriente

al

publicaciones

la

prensa de

la

época.

acentuó con eaergía en 1853. En un solo día

de enero llegaron de Europa 363 inmigrantes con destino

al

Río

que sólo 60 siguieron viaje para Buenos Aires. En febrero,' el número de inmigrantes subió a 840. En marzo declinó a 344. En abril volvió a subir el nivel, como que la Sociedad Protectora de Inmigrantes tuvo que alojar o simple;le

la

Plata, de los

mente atender a 828 pasajeros llegados de distintos países europeos. En mayo la entrada fué muoho mayor y ante el halaga

HISTORIA DEL URUGUAY

104

del

aumento empezó

a

dedicarse

de

resultando

portuaria,

durante dicho mes entraron sajeros y salieron

En

las

544

de

277,

más atención

a

la

estadística

dados a la publicidad, que puerto de Montevideo 2,049 pa-

datos

los

al

quedando un saldo favorable de 1,772.

entradas figuraban 75 pasajeros de puertos orientales y puertos argentinos, destacándose asi las procedencias

europeas y brasileñas:

Bayona Coruña Genova Burdeos

598

•.

266 219 128

Brasil

Pero cuando siderable

la

95

inmigración

restableciendo

la

europea tomaba

corriente

de brazos

así

cuerpo con-

y capitales

de la

segunda administración Rivera, empezaron a nublarse los horizontes con los amagos de revolución y de nuevo las barcadas de hombres de trabajo volvieron a pasar de largo por Montevideo con rumbo a Buenos Aires.

La Sodiedad Protectora de Inmigrantes de que hemos hablado, una institución particular cuyo programa abarcaba la propaganda en Europa, el alojamiento y manutención de los inera

que

migí'antes

para

la

desembarcaran

colocación

en Montevideo, y las gestiones de los mismos en las distintas esferas de la

nacional. Fué fundada a fines de 1852 por don Juan Ramón Gómez y desde el primer momento funcionó bajo la presidencia del doctor Juan Caries Gómez. Durante los breves meses que los acontecimientos políticos dieron ambiente a la realización de su amplio programa, reunió 400^ socios suscritores, cobró por concepto de ciotas mensuales 4,150 pesos, alojó y dio manutención a 500 personas y proporcionó colocación a un número mucho mayor de inmigrantes que iban directamente de los muelles a las casis o establecimientos que te-

producción

nían necesidad de sus servicios.

K-stíniulos a la

Sobre

la

Estrázulas, los

a

la

i luni}"

ración y colonización.

base de un proyecto preientado por la

Asamblea acordó en 1853

inmigración:

absoluta

los

el

doctor Jaime

siguientes

estímu-

exención de derechos portuarios

105

GOBIERNO UK GIRÓ

por

el

término de ocho años a

transporte

al

aduaneros por mientas,

dos a nias

familias

de

mismo

el

exención

agricultores;

plazo

de madera

edificios

o

a ͣvor de de hierro

derechos

de

herra-

semillas,

las

y materiales

destina-

con destino al establecimiento de colocompuestas de diez familias por lo menos; exenque llecuatro años de toda contribución personal

construcción,

su

agrícolas

por

ción

gara a establecerse. Autorizaba asimismo la ley tivo para contratar un empréstito de 10.000,000 a la par, de

íes,

exclusivamente

los biuiues destinados

de

%

6

de interés, con

destino

Poder Ejecu-

al

a

de

pesos

la

colonización

fuer-

de 500,000 cuadras de tierras públicas o particulares.

programa de colonización

El

a

Que respondía esa ley había

por varios capitalistas y empresarios extranjeros

sido propuesto

representados por el comerciante de esta plaza don Fernando Menck, quien luego de sancionada la ley se embarcó para Europa, muy ajeno al derrumbe, que ya estaba en plena incuba-

gobierno de Giró.

del

ción,

No

inclinaba

Constitución", blación.

embargo el "Todos

sin

colaboración

la



¿Pero

en

el

la

época

a

^

extremar

manera?

"La aumento de la poEl Gobierno sólo debe remover

orden

las

que

qué

de

asegurar

obstáculos,

de

criterio

estamos

oficial.

de acuerdo

fomentarse

debe

y

decía

el

garantías

para

las

personas

y las propiedades, dejando lo derhás a los extranjeros ya vinculados al país, cuyas cartas a los parientes y amigos surten

más

efecto

y de

los

que

palabras de los empresarios de colonización

las

Cónsules".

Nuestra policía marítima vigilaba 1835 imponía

reglamento del año a

los

pasajeros

Jegalizados

por

la

obligación

los

resolvió castigar con res,

la

vez al inmigrante.

Cónsules

los

orientales.

El

gobierno

una multa de dos patacones de las

Un

capitanes de buques y de traer sus papeles y pasaportes

multa que fué objeto de

juzgarse que excedía

a y

críticas

facultades

severas en

Giró

de

a los infractola

prensa,

por

Poder

administradoras del

Ejecutivo y que constituía una traba a la inmigración. Durante el interinato a que dio lugar la jira presidencial de de 1852 y principios de 1853, el Presidente en ejercicio don Bernardo P. Berro nombró una comisión popular con "el encargo de proponer al Gobierno cuanto estimase conveniente

fines

respecto las

de inmigración y colonización, y abrir dictamen

cuestiones que fueran sometidas a su consideración".

nas instalada tudio

el

la

comisión sometió

siguiente cuestionario:

el

Y

sobre ape-

Presidente Berro a su es-

HISTORIA DEL URUGUAY

106

¿Debe colonizarse concentrando a

1.0

diseminándolos en

agrícolas?

distritos

los colonos en

Ventajas

e

pueblos o

inconvenien-

de uno y otro sistemas.

tes

¿La colonización puede quedar abandonada a los colonos una empresa? Hay que conceder franquicias a las empresas colonizado-

2.0

u sometida a 3.0

¿Pero hasta qué límites?

vas. 4.0

Modos de

distribuir

la

nación, por venta. ¿Cuál es

el

por arrendamiento, por do-

tierra:

mejor?

5." La Constitución, consagra la bemos prescindir de las creencias

de cultos;

libertad del

pero ¿de-

inmigrante o conviene

te-

cuenta? período próspero que antecedió a la Guerra Grande y que siguió a la paz de 18 51, ihabían ocurrido desinteli-

nerlas en

En tn

el

el

gí^nciajs

y conflictos entre em|presarlos y colonos que la Asam1853, me/diamte una ley cuyas

blea creyó necesario prevenir en

prescripciones principales pueden s'ntetizarac asi:

Corresiponde a los Jueces de Paz

de todas

las

sobre

cuestiones

el

conocimiento y resolución y cumplimiento de

inteligencia

inmigrantes y las personas que ban pagado sus pasajes o adquirido derecho a sus servicios. De las sentencias de los Jueces de Paz sólo habrá recurso para ante el superior inmediato, quien conocerá en método verbal y sin apelación. Los colonos que no cumplan sus contratos, serán compelidos con multas desde 10 hasta 100 pesos, o en su defecto los contratos entre los colonos o

días hasta tres meses, en proporción al desde diez tiempo que falte para llenar los contratos. Los colonos podrán dejar el senvicio de los patrones pagando la cantidad que les adeudan y un monto igual a esa cantidad por concepto de in-

prisión

demnización de perjuicios. En el caso de que los colonos reciban mal tratamiento, podrán ser autorizados por los Jueces para pasar al servicio de otros patrones que re&pondan a los prilo que falte para cubrir sus anticipaciones. El doctor Eduardo Acevedo, autor de esta ley, justificaba así

meros de

su necesidad en la

Una de mento ridad

las

de

lia

no

Unib

compeler a

'los

y

poiblación,

hacer nada

debe

gada a remoiver Eratoria.

Cámara de Diputados: más imperiosas de

exigencias

los

de

aunque

yo

este país

entiendo

directamente,

cree

es

que

el la

que está

au-

autoobli-

obstáculos con que lucha la corríente inmi-

estos

colonos

obstáiculos al

es

la

cumplimiento de

falta los

de medios para compromisos con-

GOBIKRNO DE GIRO

Hombres que en Europa

traídos.

nar

3

o

107

duras penas consiguen ga-

a

cuatro pesos mensuales, reciben,

propuesta de venir

la

üiediante doce o catorce pesos, y la aceptan como muy ventajosa. Pero luego de llegar aquí encuentran quien les ofrece el dobl.-

de

lo

que

les

marca

el

contrato y entonces abandonan sus com-

promisos, sin que los patrones tengan medios eficaces para compp'erlos a su cumplimien'to, porque hay que seguir un pleito largo que generalmente termina con una sentencia ilusoria a causa de

la

insolvencia del ejecutado.

Debemos buscar seguridades

que existen en los Estados Unidos. La perspectiva cumplimiento forzoso bastaría para que el colono no se al-

análogas del

zara

a las

contra su contrato.

Era tan intenso el deseo de incorporar brazos a la producción nacional, que aún antes de la conclusión de la guerra se dio el caso de vecindarios de campaña que allegaran recursos para traer inmigrantes europeos. En 1849 resolvieron, por ejemplo, los vecinos de Gerro Largo fundar una colonia de 100 familias de labradores y en breves días quedaron suscritas 80 de las 100 acciones necesarias para la realización del pensamiento. El agrimensor Eguía hizo el trazado de la colonia y ya estaban combinadas las bases para la contratación de agricultores europeos, cundo la paz de 1851 vino a crear otras necesidades mis urgentes, pero sin que se abandonara ese proyecto que continuó todavía sobre el tapete y que habría sido llevado a la práctica dentro de un ambiente de mayor tranquilidad política que el de la administración

La

Giró.

edificación.

El censo de 1852 clasificadas

demostró

la

existencia

En

el

Departamento

de Montevideo

Casas de azotea »

con paredes de material

Ranchos

de 16,858 viviendas

así:

En toda

la

República

4.019

5,504

524

2,898

1,676

8,456

6,219

16.858

HISTORIA DEL fRUGLAV

108

Guerra Grande empezó en toda la Reencaminado a la reinstalación de los hogares destruidos y a la explotación de las fuentes de riqueza durante tan largo tiempo abandonadas.

Apenas terminada

la

pública un activo movimiento

Como prueba de la situación angustiosa de las ciudades de campaña, a que era necesaTio poner remedio, bastará decir que el censo de la ciudad del Salto levantado a fines de 1851 por el coronel Lavalleja, concentraba la edificación de la ciudad y suburbios en estas cifras:

Casas de

Han

azotea,

casas

51;

221. Total de cases:

ranchos,

paredes

con

apenas catorce meses

transcurrido

material,

de

13 2;

4 04.

de la paz,

escribía

"Eí Comercio del Plata" al finalizar el año 1852, y lo que es le 3 signos -;; la capital de la República paa-ecen ya borrados de

guerra.

la

"Diríase

Montevideo que

de

una

es

raíz

de vigorosa

llena

savia que no obstante los repetidos cortes de la hoz retoña con

más \a

que

luego

vida

Borrando con

mayor parte de

y valiosas;

calles

minuyendo

así

eche ei

el

la

los

propio impulso... pronta reedificación de

abandoi:a a su

la

nuevos y con destruidos

la

todas

las

señales

esos

q^ue

Levántanse por todas partes obras serias apenas trazadas vanse orillando de casas dis-

dejaron...

extravíos

nueva,

se

edificios

vista,

espacio

el

Cordón, se

la

nota

arrimo de materiales

la

La

vacío.

Aguada,

los

planta

ciudad

vieja,

ciudad

la

suburbios, dondequiera que se

una obra empezada,

de

o se oye el

se

ve

martillo que labra las can-

para proveer de piedra a los nuevos edificios". Había ambiente también para los grandes edificios públicos. Desde mediados de 1852 se inició con éxito un movimiento de teras

suscripción

de acciones para construir locales amplios con

des-

tino a la Bolsa de Comercio, al Casino y al Baile Montevideano,

y los generosos anhelos de '-ealizado

nuevo

ail

si

los

factores

esas

distintas

políticos

no

país por la pendiente de su

El espíiitu

(le

empresas

hubieran

se

habrían

empujado de

ruina.

asociación.

misma

que resurgía vigohay que acref'itar una sociedad de socorros mutuos funda-da por el gremio de zapateros que alcanzó a tener 2C0 socios, con amplio servíAl haber de esa

rosa

desde los comienzos

iniciativa particular

del

gob'eino

de Giró,

GOBIERNO DE GIRÓ

Cío

109

médicos, botica y asistencia h las familias, y un Club de al elemento nacio-

(le

Extranjeros cuyo programa estrecho excluía nal por efecto

"Una de

ser.

que más han

pro-

circunstancias



contribuido

a

desgracias decía "La Constitución" estimumovimiento ^y a deteneruof, en el camino del progreso que estábamos destinados por la fertilidad de nuestro suelo,

nuestras

longar

lando 3

de prevenciones que ya no tenían razón de

las



el

salubridad de nuestro clima y

la

liberalidad de nuestras ins-

la

ba sido indudablemente la falta de espíritu de asociación". .Todo lo hemos estado aguardando de los gobiernos. riemos empezado a reaccionar, según lo revelan las empresas áe inmigración, puentes, caminos, muelles, aduana, y baile mensual, planteados en los últimos tiempos. Habría que crear ahora asociaciones para reformar la enseñanza, para reformar las cárceles y para reformaa' los hospitales. Convendría crear tituciones, .

.

.

también una sociedad de beneficencia de señoras con ramificación en todos lo? departamentos para distribuir premios a y

siguiendo en parte rante

virtud

el

y

sitio.

el

última

Esta

la

fundar escuelas de niñas, grande ejemplo dado por las señoras du-

organizar hospitales

trabajo,

a!

la

bre

escuelas

las

dio

idea

creando

de

origen

Damas

Sociedad de

niñas,

decreto

al

de

expósitos

de

asilos

de

abril

de

18 5

3

Caridad con atribuciones soy

hospitales

de

mujeres.

Todavía

la esclavitud.

A despecho de todas las leyes contra la esclavitud dictadas por nuestras Asambleas antes y después de sancionada la Conshombres autorizada y Repiública, la venta de titución de la practicada por el Brasil continuaba realizándose dentro de nuespropis

tras

mente

al

fronteras,

legislador a

bajo

que

disfraces

dictar nuevas

y

más

obligaban eficaces

incesante-

medidas de

represión.

En 1853 empezó

a

generalizarse

la

introducción de esclavos

bajo forma de contratos en que el negro se obligaba a servir durante 24 años por el precio anual de al

4 7

territorio

%

•oriental

patacones.

El

producto

de

las

24

anualidades

cons-

patacones repi'esentativo del valor corriente de un esclavo. Con el propósito de cortar ese abuso, el Senado sancionó un proyecto de ley por el que se decl.iraba sin tiluía

el

capital

de 1,14

HISTORIA DEL URUGUAY

lio

fuerza alguna "los contratos sobre servicios personales celebra-

dos con personas de color fuera del territorio de la República". Los negros contratados debían quedar- bajo la protección del Defensor de Menores y no podrian ser retirados del territorio sin su expreso y libre consentimiento ratificado ante Alcalde Ordinario y Defensor de Menores, bajo pena de 500

nacional el

pesos de multa.

Este proyecto no alcanzó a ser convertido en

ley por efecto de los trastornos políticos que sobrevinieron.

Otro abuso no menos grave se cometía con color a la

sombra

del

yes dictadas contra la esclavitud. El patronato c!;do

tículo

menores de

los

patronato establecido por las propias o

tutela

le-

conce-

a los antiguos amos había llegado a convertirse en un arde comercio que restablecía la esclavitud durante la mi-

noría de edad de la víctima. El Senado creyó combatir

el

ab-

mediante una nueva reglamentación del patronato. Pero la Cámara de Diputados resolvió mostrarse más radical. La institución del patronato emanaba del concepto de que el esclavo estaba incapacitado para el ejercicio de la patria potestad. Abolida la esiclavltuld, era absurdo, sin embargo, que (prosiguiera ese régimen que desconocía el derecho del padre sobre sus hijos. Votó, pues, la Cámara de Diputados un proyecto sustitutivo de acuerdo con esas ideas y su criterio fué también aceptado por el Senado, sancionándose así la ley de 1853 que hizo extensivas a los menores de color las disposiciones generales sobre menores. Otra ley se apresuró a dictar

la

Asamblea en

el

curso del mis-

mo año, por la se declaraba piratería el tráfico de esclavos. El gobierno de Giró al recabar la sanción de esa ley, decía en que

su mensaje: rritorio,

este

"Aunque la República no tiene esclavos en su tehecho magno de sus instituciones no ha recibido

aún su cumplimiento". Pero era el espectáculo del tráfico de esxílavos en la frontera lo que real y positivamente movía al de l'oder Ejecutivo en su campaña humanitaria, aun a riesgo embravecer al Brasil y de aumentar la herida abierta por el debate de los tratados de 1851, inclinando a los voraces estadistas del los

Imiperio a reanimar la boguera de la guerra

civil

entre

partidos orientales.

Intereses comerciales. Cifras del censo de 1852.

Hay

carencia absoluta de cifras oficiales acerca del comercio

exterior durante la presidencia de Giró. Pero de la importancia

r.üi5ii;KN0

Di;

111

oiuó

impulso inicial da idea una ley de julio de 185 2 autorizando Poder Ejecutivo para contratar con don Hipólito Doinnel una gran aduana, con muelles, ramblas y calles de acceso, de costo máximo de 600,000 pesos. La propuesta aceiptada fijaba como asiento de la obra 8,000 varas de terrenos del empresario y n.OOO que se ganarían al mar en la zona llamada "Baño de los Padi-es", adaptándose como modelo el plano de la mejor aduana francesa. El Estado no quedaba obligado a desembolsar sumí ¿c]

al

alguna, aun cuando podría hacer anticipos cada vez que la situación

con

Tesoro lo permitiera. Los 600,000 pesos se cubrirían producto de los derechos de almacenaje y eslingaje de los

del el

y muelles proyectados.

edificios

El censo de 1852 demostró

la

existencia en toda la P.epúbilca

de 114 casas de comercio mayoristas y 1,769 minoristas, entrando en esas cifras el Departamento de Montevideo ron 73 de las

primeras y 79 4 de las segundas. He aquí algunas de sus cifras más importantes: Boticas

40

Cafés

87 51

Confiterías

231 94 108 104

Carpinterías

Pondas Herrerías

Hornos Hojalaterías

35

Jabonerías

21

Panaderías

54

Platerías

50

Quintas

verdura

de

Saladeros

.

y mataderos

.

.

.

...

85

Sombrererías

32

Tn-e

del

la

12

estadística levantada a fines de 18 51 por

Salto coronel



193

Zapaterías iSegún

57

Sastrerías

Velerías

lítico

400

Manuel Lavalleja,

la

el

Jefe Po-

ciudad de ese nom-

y sus suburbios tenían en aquellos momentos 8 casas may 53 minoristas, y los diversos e.stablecimientns que

yoristas

subsiguen: rías,

3

5

saladeros,

sastrerías,

3

5

panaderías,

jabonerías,

3

10 caiipinterías,

3

herre-

confiterías,

1

botica.

cafés,

3

HISTORIA DEL URUGUAY

112

1

sombrerería,

rías,

Xúniero

velerías,

2

platerías,

2

2,

zapaterías,

5

4

fondas,

3

hojalate-

quintas de verdura y 10 hornos de ladrillo.

patentables.

(le

La Administración de Paped Seltedo y Patentes publicó a meque resultaba que se hadel de 18 53 un cuadro

diados bían

expedido

a

comerciantes

los

e

de

industriales

Montevideo

2,202 patentes des'tribuídas en la forma que sigue:

Para Para Para

De 478

la

ciudad

el

resto

varios

d,e

del

Montevideo departamento

puntos

de

las patentes expedidas-, a

la

1,505

491

campaña

206

1,724 corresipondían a extranjeros y

nacionales.

un númeí'o pequeño. Pero recién empezaba el trabajo de en medio de los escombros amontonados por la guerra. Que los comienzos eran ausipiciosos lo demuestra la fuerte tentativa a favor de las organizaciones gremiales de que hemos hablado anteriormente. lEra

reconstrucción

Eí servicio doméstico en 1833.

La

Policía de Montevideo llevaba

un registro

del servicio do-

méstico, del que extraemos los siguientes datos relativos al

de

mayo de 1853: Sirvientes

blancos

Lavanderas Cocineros

Amas

63

color

315

blancas

197

de

721

de

color

blancos

107

de

455

color

de leche blancas "

de

color

38 5 6

Costu'-eras

32

Planchadoras

47

2,031

i

mes

GOBIEEXO ÜE GIRÓ

113

Gestiones coiuoi-ciales.

Cox LA Argentina.

Un decreto de Rosas correspondiente al año 1836, de que hemos hablado al ocuparnos de la administración Oribe, castigaba con el 25 '/c el comercio de la Argentina con Europa por intermedio

de Montevideo. Para escapar a ese considera-

del puerto

recargo, los buques

])le

ultramar tenían que seguir a Buenos

d,e

Aires a despecho de las facilidades portuarias de Montevideo y de las ventajas del depósito en almacenes fiscales que teníamos

nosotros y de que carecían los argentinos. los iprimeros días del gobierno de Giró empezó un acmovimiento a favor de la derogación de esa medida que Rosas había dictado con el propósito claro y manifiesto de arruinar el comercio de Montevideo o por lo menos de aniquilar su gran corriente de tránsito. Un grupo de comerciantes de Bue-

Desíde

tivo

Aires adhirió a los trabajos mediante una representación Gobierno Argentino en que se invocaba la armonía de interesies comerciales a uno y otro lado del Plata.

nos al



"Hoy más que nunca

agregaba

graves perjuicios a esta plaza

el



representación

la

superior decreto en

causa

cuestión,

careciendo nosotros de una aduana de depósito y conteniendo Montevideo una grande y variada cantidad de manufacturas extranjeras que hacen gran falta en nuestro mercado...".

Hizo concebir muchas las

esperanzas

resultado

el

inmediato de

gestiones iniciadas, y en presencia de ello salieron de nues-

puerto

tro

varias

que liquidar

las

mercio

la

mercaderías con pérdida, iporque

mantuvo en vigencia. Expresando agravios, oriental

reanudar

para

expediciones

interrumpida

de tránsito. Pero los barcos tuvi,eron que

corriente

decía

a la argentina, que

de

del Brasil

Montevideo

en

en

el

agraívado

de

de

condiciones

que estaba exento del

cargo acababa de ser

mayo

decreto de

25

por

9c.

1852

regresar

o

el

decreto se

la

cancillería

1836 colocaba inferioridad

Y agregaba que

un nuevo decreto

al

co-

respecto tal

re-

Go-

del

nacional según el cual todas lais mercaderías reembarcadas en Buenos Aires para cabos adentro debían ir en buques

bierno

bandera

con

argentina,

exclusivismo

absoluta igualdad de las dos bainderas blica Oriental. 8

-IV

inexplicable

decretada

frente

por la

a

la

Repú-

HISTORIA

114

OÍX.

TJEUGUAY

Adviértase efectivamente que por decreto de marzo de

1852,

primeros del gobierno de Giró, los buques de la matrícula de Buenos Aires habían quedado asimilados a los orientales, en la forma ya acordada a la Provincia de Entre Ríos

uno de

los

cuando se preparaba la alianza contra Rosas. Y adviértase tamque el gobierno de Buenos Aires había contestado en el acto asimilando por vía de reciprocidad los buques de cabotaje oriental a los de la provincia que regía.

bién

La

cancillería argentina pasó el asunto a estudio del gobierno

provincial de

Buenos

Aires,

el

cual reconoció ia justicia del re-

agregado de que antes de atenderlo era necesario que la Aduana organizara almacenes de depósito como los decía por su de Montevideo. "Favorecida aquella plaza clamo, pero con

el





situación y su puerto, se establecería en ella cial del el

Plata

si

derogara ese recargo del

se

emporio comer-

el 25

que

Cr

es

como

contrapeso que restablece la igualdad entre ambas aduanas".

En agosto, finalmente, quedó derogado el recargo del 25 %, mediante un decreto del gobierno de Urquiza cuyo preámbulo decía así

"Considerando que el decreto de 4 de marzo de 18 3 6 que esun recargo de la cuarta parte más sobre los efectos de ultramar que se introdujeran a la provincia por trasbordo o reembarco de cabos adentro, tuvo por objeto establecer un justo tableció

equilibrio

entre

Aduana de Buenos Aires

la

blica Oriental, pues

que

sin

este recargo

y

de

!a

nuestra

la

plaza

Repúhabría!

quedado en una positiva dependencia de la de aquella República por las franquicias que su ley de Aduana concede y que la ¡nuestra negaba a los introductores, y habiendo desaparecido estosr motivos desde que el decreto del 2 6 del corriente ha permitido el depósito de mercaderías en la Aduana de Buenos Aires...".

En cuanto

a

la

reciprocidad de bandieras para

el

comercio de

cabotaje, ni una sola palabra mereció a la caoicilleria argentina decisiv.3 argumento del Gobierno Orien'tal y, en consecuencia, quedó subsistente el privilegio local como medio de seguir obs-

c-1

taculizando la corriente de tránsito por vía uruguaya.

Cox EL Brasil. La Cámara "municipal de Río Grande inició a mediados de 1853 el Gobierno Imperial pusiera sus tarifas de aluana al nivel de las tarifas orientales. Justificando su pedido gestiones para que decía:

115

GOBIEENO DE GIBÓ

La Provincia de Río Grande exporta por tino

yerba mate,

oriental

territorio

al

la frontera

con des-

tamangos,

corretag,

cal,

madera, aguardiente, monturas, tablazión y cereales y recibe en cambio del territorio oriental carne salada, cueros, grasa, sebo, ganados y asi'mismo articulios de procedencia eurapéa descaí'gados en el puerto de Montevideo. Esos artículos se contrabandean enormemente. La peque&a villa oriental conocida cotí el nombre de Arredondo, podría ser bautizada con la denominación de Aduana de la Provincia de Río Grande, de tal manera acuden ;

a ella, para organizar sus surtidos, nuestros coimerciantes y nuesfamilias.

tras

qué razón? Per las diferencias de precios a tarifas aduaneras cuyo margen alcanza en

¿Poi'

que dan origen

las

ciertos

100

pues

casois



al

%. Pafa combatir

Cámara municipal

concluía la

contrabando habría,

el



que uniformar

las ta-

rifas brasileñas a las orientales.

Es sensible que

ni

Aduana de

la

allá ni la de acá, publicaran

estadísticas en esa épooa.

Cox

Italia.

El Senado

devolvió

Poder Ejecutivo

al

señalaba

defectos

en

1S5 3

un tratado

Rey de Cerdeña, cuyas marcando nuevas normas a nuestra can-

de comercio y navegación celebrado con así

el

cillería:

Acuerda

al

tavoreciida, les

a

reino de Cerd'eña

atándonos

España y

ventaj'als

forma.

a

Acuea'-da

establece la

a

tratamiento de

países sudamerieanois,

los

mercantiles

el

o

los

la

políticas

especia-

cambio de otras

dignas de compensarse en

subditos sardos

todas

pero sin prever

Constitución,

a

más

nación

manos para conceder béneñcios

las

el

las

esa

que

garantías

caso de que

ellos

tomen parte en las cuestiones loc&ilieis, armándose e interviniendo tn los comidos con las reisponsabilidades consiguientes. Y acuerda indemnización a terción

los

subditos sardos en oaso' de secuestro o de-

de buques, sin dejar a salvo,

medidas represivas

del

JloWniiento de buques en

En

18 52

procedentes:

entraron en

como

sería necesario,

las

contrabando.

el

el

puerto de Monte^ádeo. puerto de Montevideo

1,724 buques,

HISTORIA DEL URUGUAY

116

620

De ultramar Da cabotaje La Aduana expidió en

1,104

mismo año 13,980 permisos

el

cla-

así

sificados:

Tomando cuan'do

mente, en

el

el

Desoarg-a

5,941

Trasbordo

1,325

Reembarco Embanque

4,585 2,129

al azar un día cualquiera de los comienzos de 18 5 3, movimiento portuario se babía noínmalázado entera-

encontraríamos fondeados el 25 de enero por ejemiplo, puerto de Monüeivideo 104 buxiues m'ercantes de ultramar

por razón de operaciones Lajs estadísticas

producido en

carga

die

"voLúmenes

los

cj

descarga.

de un día determinado del año que hemos reanteriores,

106 buques de

arrojan

ultramar en plena guerra civil y 151 después de la paz durante el año 1838; 191 buques en 1840; 122 en 1842. Y las estadísticas recapituliativas del año completo, arrojan 512 buques para 1S39, y sucelsivatm'ente 700, 789 y 824 para 1840, 1841 y 1842. iSeñalaba,

pues,

descenso

el

mO'Vimiento de ultramar con

re-

lación a los períodos próst)eros anteriores al sitio grande.

Obi'as portuarias iiialogi'atlas por efecto de la guerra.

'La

dársena empezada a construir bajo

gobierno

el

Oribe

de

de una

empresa particular, cuya base financiera estribaba en un derecho a cargo de los buques que utilizaran la -obra, quedó detenida por la revolución de Rivera primero y por la Guerra Grande desjpués; y el Directorio reunió a los accionistas en 1853 para enterarlos del estado de la liquidación

por iniciativa

y hacer

el

reparto del activo.

Establecía

mios jes,

de

el

los

sena;

el

Directorio en su

subsiguientes

financieros

Gobierno terrenos

había

Memoria que durante

a

la

vendido

indispensables

interrupción

feus

para

que como consecuencia de eUo

la

acciones

de

y

construcción

se había

apre-

los los

traba-

una de

rescindido

parte la

dár-

el

con-

venio y adquirido con destino a los accionistas 13,500 varas de tierra

amurallada

y

14,400

de

plava.

que

al

precio

corriente

(JOUIKK.XO

áe 10 pesos las primeras y

que computando

pesos; y

otros

-97,000

podía

enseres,

4

el

de

la

obra,

una

de

activo

el

capital

93,000 pesas, r'esultaiba fpara los

df.

fracaso

representaban 193,000

de los materiales de

estimarse

y que como

pesos;

117

las segundas,

valor

el

GIKÓ

Di;

la

era

social

líquida

de

draga en

simplemente

no

accionista*,

ganancia

la

sociedad obstante

el

más de 100,000

pesos.

La prensa insinuó

la idea de qiu; el Gobierno nombrara una encargada de restaurar la draga y proceder de inmediato a la limpieza del puerto. Pero el ambiente político estaba ya muy agitado y nada se hizo en definitiva.

comisión

Controversias sobre jui'isdicfdón fluvial.

A

mediados de 18 52 el gobierno de Urquiza dictó un dea la marina mercante extranjera la navegación de los ríos Uruguay y Paraná, y establecía a la vez en la isla de Martín García una aduana de registro, bajo severas reglamentaciones encaminadas a dificultar el contrabando. Todo buque procedente del extranjero que se dirigiera a '.os puertos argentinos del Uruguajy y Paraná o al Paraiguay, debería entrar por el canal de Martín García, bajo pena de confiscación del barco y de su carga Todo buque que pasara por Martín García quedaba obligado a fondear en el puerto de la isla, a efecto de ser visitado y gestionar permiso para pasar al puerto de su desTino. La aduana de Martín García estaba autorizada para cobrar a cada buique que subiera un deretího de visita de 4 pesos creto que abría

fuertes y otro de 6 a 12 pesos por concepto de pase.

en los mismos momentos el gobierno de Urquiza susun tratado con Francia, qu2 establecía la libre navegación del Uruguay y del Paraná; que reservaba al Gobierno Oriental el derecho de hacerse parte en el tratado; y que agregaba ''las altas partes contratantes reconociendo que la isla de Casi

cribía

Martín libre

García

puede por su posición

navegación

de

los

confluentes

embarazar o

del

Río

de

la

impedir Plata,

la

con-

en emplear su influjo para que la posesión de dicha no sea retenida ni conservada por ningún Estado del Río de la Plata o de sus confluentes que no hubiera dado su adhesión al principio de su libre navegación".

vienen isla

Mucha polvareda gobierno

de

Giró

levantó

el

despachó en

inusitado decreto de Urquiza. el

?.cto

una misión

El

diplomática

HISTORIA DEL L'RUGUAY

118

cargo de don José Brito del Pino, para de esa medida que respondía a exigencias Gobierno de la Confederación y el de- la un plan de absorción Aires, más que a

obtener

a

Mientras el

la

derogación

guerra entre

la

el

Provincia de Buenos

verdaderamente inex-

aquellos momentos.

plicable en

con

de

el

Brito

general

Pino iniciaba sus gestiones y

del

propósito de precipitar su desenlace sin duda alguna,

gobierno de Giró dictó un reglamento en virtud del cual buque que marchara a puertos orientales debía entregar copia de su manifiesto

Esta vez reclamó

la

una

General de Higuerita5.

a la Receptoría

Perj contestó

argentina.

cancillería

el

todo

el

Go-

bierno Oriental que su derecho era indiscutible como condómino en las aguas. Y los dos reclamos, el argentino y el oriental, que•

daron para ser solucionados a

No

vez.

la

era por razones de exclusivismo local que así procedía

el

gobierno de Giró, sino por principios de judisdicción y soberain'a territorial según lo demuestra el proyecto que presentó a la

Asamblea

en junio de

1853, en

víspera

la

de la

"abriendo a los buques y comercio de todas puertos habilitados del río Uruguay.

"La República

Oriental^

— decía

el

revolución,

naciones",

las

los

Gobierno en su mensaje

desde los primeros días de su emancipación concibió

el

designio

de ^brir sus puertos a todas las barderas, como ha franqueado su

territorio

tiene rio

a

han

agregaba,

todas

venido

las

naciones."

aplazando

Pero

osa

luchas

las

intestinas,

hoy mismo

que

iniciativa

que ser incompleta por impsdir todo acuerdo acerca del el estado de guerra civil en que se halla la Re-

Uruiguaiy

pública Argentina.

La comip

de junio del

ley

de

rriente

ideas

año siguiente, debida

liberales,

fué

todavía

imás

esa

a

lejos

declaró "abiertos a los buiques y comercio

naciones los ríos navegables de

todií

la

misma al

co-

declarar

de todas

las

República".

El debate se extiende a Martín Gai-cía.

No

se

limitó

una aduana de

el

gobierao de Urquiza

registro en

al

Gobierno de la Provincia de Buenos Aires fin de proiveer ipor este medio decía



"a

!cis

de

la

la



la

vez

cesión de la a

.la

de del isla,

seguridad de

y a la conservación del territorio e intereses República ... La calidad de territorio nacional que

ríos interiores

fiscales

establecimiento

Martín García. Recabó a

^

GOBIEENO DE GIRÓ

punto

tiene este

pone también...

lo

bajo

la

119

vigilancia e

inme-

diata inspección y resguardo del director provisorio". Por distintas circunstancias, pues, volvía a figurar en

la

den del día el tema de la jurisdicción de la isla. "La Constitución" se ocupó de inmediato del histórico

pleito.

El tal

Gobierno Argentino —

que

la

isla

esitá

em.

decía

— alega

su territoirio.

Como

la

posesión;

el

or-

Orien-

todavía no ha llega-

oportunidad de celebrar el tratado definitivo de paz que ha de determinar los límites del nuevo Estado de acuerdo con servir ¡a convención de 1828, la posesión argentina no puede navegación comercio tratado de prescripción. El título de y de do

la

Uruguay de octubre de 18 51, cuya acepta1'5 de mayo de 18 52 ha garantizado propio general Urquiza, establece una fórmula encaminada

entre

Brasil

el

y

el

ción por la convención del el

a orillar las dificultades mientras no se resuelva f-ndo.

Es

esta:

la

cuestión de

ambas partes contratantes resuelven oponerse

que la soberanía de la isla deje de pertenecer a uno de los Estados ribereños y solicitarán de aquel a quien pertenece o venga a perteimecer "que se rbligue a no servirse de ella para embarazar la libre navegación de los otros ribereños y a consena

tir

en su neutralidad en

Y agregaba

tiempo de guerra".

examinando el nuevo conflicto aduanero que a todos preocupaba: "Pendiente todavía la cuestión relativa al do-minio de Martín García, ha dictado el Gobierno Argentino un decreto que reglamenta la navegación del Uruguay e impone condiciones y que

gabelas nadie se

común

le

en

otro

artículo,

se pretende aplicar a ha ocurrido negar que el

Repiiblica

la

Oriental.

A

Uruguay pertenece en de límite. Ni el mismo contrario numerosos do-

río

a los dos países a quienes sirve

Rosas lo desconoció jamás, habiendo al cumentos suyos en que reconoce la comunidad". Don Mateo Magariños, reidactor del "Diario Nacional", publicó también un artículo sosteniendo los derechos orientales sobre Martín García, que dio mérito a una réplica de "El Progreso" de Buenos Aires, en la que se condensaban así los argumentos a favor de la Argentina: Martín García ha estado desde el coloniaje bajo la dependencia de Buenos Aires... Al pactarse la independencia oriental en 1828, se habló únicamente de la provincia de Montevideo o Cisplatina. En el acta de incorporación de julio de 1821 de .

la

.

Provincia Cisplatina, se

fijó

como

límite el Río de la Plata y

HISTORIA DEL URUGUAY

120

incluirse la isla... La primera vez que flabandera oriental fué en 18 3 8, cuando la escuadra francesa bloqueadora se apoderó de ella ... El general Lavadle al emprender su campaña de 18 39 enarboló allí la

el

río Ul•uguaJ^

meó en

la

sin

isla

la

Reanudadas las hostilidades de Francia, bandera argentina tomaron posesión de la isla basta 18 51 en que el almirante francés la abandonó y ©1 Gobierno Argentino la ocupó... La mayor proximidad a la costa oriental no es un título... Aunque es verdad que el canal más hondo está del lado :)ipue'sto a la costa oirientail, también lo es que entre la isla y "a costa oriental hay otro canal navegable para buques de me.

.

.

los orientales

nor calado.



— contestó

estuvo durante el coel doctor MagariiioiS dependencia de Buenos Aires del mismo modo No se hizo mención de Martín Garque lo estaba Montevideo. cía en el Congreso Cisplatino, pero lo mismo podía decirse de las islas de Lobos y de Flores... Tampoco se habló de ella en

La

isla

loniaje

bajo

la

.

porque no se trataba de delinear lími' en globo la independencia del Uruguay... Hajy que tener en cuenta, además, que a esa corivención no concurrió el Gobierno Oriental, como concurrirá sin duda alguna el día que se arribe al tratado definitivo de paz. conivención

la

tes,

A

sino

de

18 28,

de reconocer

favor de la libre navegación del Platia y sus afluentes.

A mediados de 185 2, llegaron a Montevideo than y Georges, Ministros respectivamente del nico y del Gobierno Francés. De sus discursos sultaba que habían sido comisionados para una

los señores HoGobierno Britá-

de recepción reacción conjunta,

que según las inlformaciones de la prenlsa se relacionaba la libre navegación del Río de la Plata y sus afluentes.

l-'ai-olas

Trató

con

y balizas para dar seguiidatl a la navegación.

el

gobierno de Giró de prestigiar

el

video mediante un amplio plan de mejoras en

puerto de Monteel

servicio de lu-

sitio

grande, volvió

ces y balizas.

La farola a

del

Cerro, destruida

durante

el

funcionar des'de mediados de 1852.

Fueron sacadas a

licitación las obras de abalizamiento del es-

gobieb.no de giró

eolio

(le

la

121

Panela, tan peligroso para los barcos de

de Buenos Aires y de l03 ríos. Se decretó la construcoión de

la

farola

de

la

la

carrera

Colonia sobre

base de un derecho portuario, cuya creación dio margen a observaciones de la Comisión Permanente que aplazaron la ejela

cución del proyecto. Se ma'ndó

estudiar

la

construcción

de una farola en

pun-

el

más conveniente de la embocadura del Plata, señalándose luego como resultado de esos estudios la isla de Loh^ts La Comisión Topográfica quedó encargada del levantamiento to

un plano de las costas del Este, para la instalación de un faro el Cabo de Santa María en combinación con un servicio te-

-lí

en

legráfico hasta Montevideo.

Tambléa abordó

el

Gobferno

el

estudio

de

un proyecto

de

Señores Jones y Ma.ck:nnon .para el establecimiento en el Ban-^ co Inglés y en varios bancos diseminados entre los puertos de !ú3

Montevideo y Buenos Aires, de un tipo de boyas ya adoptado en Southampton, que consistía en un pequeño bote salvavidas provisto de una campana de fuerte repercusión y de un espejo destinado a reflejar los rayos del sol y de la luna hasta de distancia.

6

y

7

mi-

llas

La Cámara de Diputados

se

ocupó

a principios de

18 5 3 de un

proyecto de abalizamiento del rio Uruguay. La Comisión informante proponía el aplazamiento de su sanción a la espera de

un acuerdo previo con

la Argentina en su calidad de ribereña trabándose en torno de ese dictamen un importante debate en que el doctor Juan Carlos Gómez se opuso a que se declarara de

una manera absoluta la falta de dereoTio para abaliza;r y cobrar imipuestos, a los buques que arribaran a puertos orientales. Consecuente con sus opiniones, presentó el doctor Gómez algunas meses después un proyecto que autorizaba al Poder Ejecntivo para

abalizamiento del Uruguay y para cuun nuevo impuesto de medio real por tonelada a cargo de todos los barcos que entraran o salieran de puerto oriental en el expresaido río. contratar

el

brir los gastos con el producto de

Era una

tesis de combate contra el exclusivismo de argentina y bien explicable por lo mismo en los tos en que era lanzada.

cillería

la

can-

momen-

HISTORIA DEL URUGUAY

122

La navegación a

Ea

vapoi".

IS'Sái se inició

en Montevideo

la

formación de una compa-

ñía encargada de establecer dos vapores para el servicio del Río

de

la

Plata y sus afluentes,

sobre

la

base de

2

acciones de

00

500 patacones cada una. el año se inauguraba el servicio de Monmediante el vapor "Progreso", subvencionado por el Tesoro público con 300 pesos mensuales duramte los primeros seis meses de la carrera. Desde 1843 debió quedar inaugurada esa obra de progreso por la comipañía inglesa de don Juan Halton Buiglanid, fraca-

Y

antes de finalizar

tevideo

sada

La

al

Salto

a raíz de la guerra civil que estalló ese

mismo

año.

vapor transatlántica, reducida hasta entonces al servicio de la compañía inglesa que había empezado a actuar en 1851, recibió también un fuerte impulso gracias a la organización de dos nuevas compañían en Genova y en Burdeos para

naivegación

el

a

establecimiento de vapores con destino al Río de

la

Plata.

La riqueza ganadera. Bl

censo

de

18'52

demiostró

mientos de pastoreo en todo ganadera:

el

la

existencia

país,

con

la

de 4,478

Vacunos costeados

1.267,522

a:2adC3

621.100

Caballos

estableci-

siguiente población

121,119

Potros

32,252

Yeguas Muías

973,698

Burros

2,247

17,243

Cabras

1,406

Cerdos

25,300

Ovinos mestizos

133,747

criollos

662,542

Tenía ya la campaña un año de vida tranquila cuando ese cenfué levantado y muchas de las estancias totalmente arrasadas durante la guerra habían vuelto a funcionar con ayuda de

so

123

GOBIERNO DE GIRÓ

tropas traídas de Río Grande y de Corrientes.

Pero asimismo

de los años más castigaios. En 1835, por ejemplo, se estableció una patente extraordinaria sobre los ganados, y no obstante las enormes ocultacicnos «ganadero

stock

el

estimuladas por

apenas excedía

al

de medios de contralor, los ~¿recauíladores revelaron un monto de 1.600,000 la

falta absoluta

p-istros de los animales vacunos.



escribía el Jefe PolíLa riqueza ganadera de Tacuarembó de ese departamento don Eufrasio Báilsamo en junio de 185-3, viene aumentando gracias a las fuertes importaciones del Brasil y de Corrientes. Hoy puede estimarse su existencia en 180,000 animales de cría. Desgraciadamente hay una peste que mata de 100 a 200 reses diarias. En cambio el abigeato bal agregaba desaparecido casi total'mente. En cuanto a precios abónase corrientemente en este departamento 10 pesos poi^ tico







novillo

de saladero.

encarecer el estado de miseria a que ha queescribía el doctor Pedro Bustadado reducida la República Cielo y pasto mante desde MaldonadO' a principios de 1853 Mal'donado. entre Minas No alviajero que encuentra el es lo y canzan a cuatrocientos entre vacunos y caballares los que he visto en esa faja de terreno de 16 leguas. Estancieros hay que se

"No

es posible





mantienen de dharqui y arroz, y asado no puede llamarse pobre".

Don Tomás los

el

que

Te

tal

superficie



450 leguas de ese deagregaba pudiera ser

las



explotada reproductivamente debería tener

Un recuento

practicado en

levantamiento del censo

animales

vacunos

criollas y

12,940 merinasi.

costeados,

el

guerra



demostró



1.350,000

cabezas.

Departamento de San José antes

arrojó 320 12,0 00

Otro recuento más prolijo hecho por en noviembre de 18 51 la

presenta a usted un

Villalba, Jefe Político de Soriano, fijaba en 150,000

animales vacunos que pastaban en

partamento. Para que

del

.

estancias con

alzados,

el

de

210,000' ovejas^

Jefe Político del Salto

un mes después de existencia

2i3i8,000

la

terminación de

90 establecimientos

de pastoreo distribuidos en 750 leguas cuadradas. En esas 290 estancias había simplemente 180,000 vacunos costeados y 120,000 alzados. En cuanto a ovejas, ni una sola había dejado la cuchilla

devastadora de

la

la guerra.

2

El censo del año siguiente no demos-

tró progreso sobre esas cifras tan

extremadamente pobres.

HISTORIA DEL TRUGUAY

124

Importación de ganados. El gobierno de Giró trató de activar la importación de vacas.

octubre de 1852 envió un comisionado ante

En

el

general Ur-

quiza para gestionar permisos de importación de ganado.

Ya ha-

bían empezado las alarmas políticas y por eso un diario época, al dar la noticia del

clamaba: "Que abunden contra

el

nombramiento

las vacas y ya

de

del comisionado,

la

ex-

desaparecerán los gritos

Gobierno!"

Hasta llegaron a proyectarse empre'sas para la repoblación ganadera del país. Una de ellas ofreció al Gobierno traer 500,000 '-acunos de dos años arriba que se comprarían en la costa argentina al precio de 3 y i/4 a 4 pesos, y se revenderían en la Colonia a 5 pesas. Para el pago se acordaría el plazo de 4 años con

interés del 12 9c anual, bajo garantía hipotecaria de los

el

camlpos, aforados a un término

de

medio de dos mil pesos

la

suerte

estancia.

No quedó olvidada en cría

la

campaña de repoblación ganadera

esta

de ovejas.

primeros meses de 1853 llegarobi de Europa 77 ovejas y carneros merinos con destino a las estancias de don Juan JacksQU. Venían al cuidado de varios peones contratados para 'ilrigir su multiplicación y habían sido adquiridos eia las caba-

En

los

las de origen hembras.

al

precio de 19 libras esterlinas los

machos y 14

las

entusiastas propagantambién a la reanudó distas de la raza merina en el Uruguay, que hab-a campaña la país del progreso sombra de la paz y del

Don Benjamín Poucel, uno de

los

más

empezado en 1840 en su gran establecimiento ganadero de thinango en

la Colonia.

La condición de

este

presta admirablemente a

suelo la



cría

decía

los

principales

territorio

países

criadores,

uruguayo equivale

a 4

señor Poucel



se

En cada legua cuaComparada esa cifra con la

de ovejas.

drada pueden pastar 10,000 ovejas. de

el

Pi-

del

que una legua de Cabo de Buena Esperanza,

resulta

a 3 de Australia y a 2 de la Rusia meridional. En otros términos, que a igual superficie de tierra explotiada el estanciero uru'-'uayo

tres

mayor que en mayor que en Australia y dos veces mayor

obtiene un resultado cuatro veces

veces

Rusia. Rivadavia estimuló oficialmente la

e!

Caoo.

que -^n importación de merinos

Gomi:i:.\o

ije

125

cikó

en 1823. En los treinta años transcurridos desde entonces han mado mucho impulso los embarques de reproductores parü concluía el Argentina y Río Grande. En cuanto al Uruguay

\i





por Poucel

to-

se-

acción destructora de la guerra sólo ha dejado

la

dos majjadas puras de raza: la de don Rujperto de las Carreras en Canelones .y la de Pichinango. en

¡pie

Plaga.s

A

los

camiTaña.

(le la

males de

agregábanse

escasez

la

ganado alzado

del

los

y do los perros cimarrones, otros dos colazos del abandono forzoso de las estancias durante la guerra.

El ganado alzado que existía en casi todos los -departamentos, sin

asiento

fijo

en ningún campo,

era

explotado

en

la

misma

unas veces por agentes autorizados, y otras por ladrones, simplemente para la utilización del cuero, y ello dentro de un ambiente de eternas

forma destructora

que durante

el

coloniaje,

querellas entre los estancieros, porque dada la falta de marca era imposible deslindar

dad de advertir que

el

las

derecho de cada uno. No hay necesi-

crías eran las

primeras victimas de

las

corridas, con lo cual se dificultaba también la repoblación gana->

dera de las estancias. El gobierno de Giró, excediéndose en sus facultades, pasó a mediados de 1852 una circular a los Jefes Políticos por la que declaraba que el ganado orejano pertenecía al dueño del campo en que estuviese; prohibía las corridas en campos que notoriamente no contuvieran ganado a'.zado, y obligaba a notificar atticipadaimente las matanzas a los linderos a efecto de que pudieran presenciarlas. Per.0

más

terribles

que

los

cuereadores de ganado

eran

los



Guerra Grande decía uno de ios diarios de la época aunque los perros se contaban por docenas, en cada estancia, su acción no preocupaba a las autoridades públicas. Fué sóilo después del abandono en que quedaron los establecimientos ganaderos como consecuencia de la invasión de Oribe que apareció realmente la plaga, poiique entonces los perros quedaron obligados a buscarse ellos mismos el alimento

perros

cimarrones.

Antes



de

la

y a la vez en condiciones de multiplicarse

indefinidamente.

Al

guerra limitaban sus ataques a los rodeos de ovejas. Pero luego se dirigieron también al ganado vacuno y al

principio

de

la

ganado yeguarizo, organizados en grandes bandadas que

se

auxi-

1II3T0KIA DI'L

126

forma de hacer continua

y escalonaban en

iisbaii

URCGUAY

la persecución,

incesante incorporación de perros de refresco. Concluida la refriega, quedaban los campos, cubiertos de cadáveres. En el solo rincón del Tacuarí, Departamento de Cerro Largo,

mediante

la

/.larrones, cifra

¡Desgraciando,

trece

viil

perros

ci-

— decía "La Constitución" — que da una idea de

magnitud de esa plaga

la

1852

mediados de

a

sacrificados

ijeron

agregaba,

a

que no escapa el hombre mismo. que tiene que recorrer ciertas zo-

la

del

al viajero ipor

centenares!

nas,

porque los cimarrones siguen

J.os

saladeros orientales bajo la acción del tratado de comercio

allí

de 1851. Sólo trabaja un saladero en toda escribía



la

costa

del

un corresponsal

18 54

de

principios

a

río

del

Uruguay Salto

"El

a

de Lafoiie, y ese mismo no puede luchar con los establecimientos similares de Río Grande,

Comercio del Plata": por. la libres

impuestos,

fuertes derechos

a

en

saladero

que

ellos

tanto

que

de

razón

sencilla

de

el

compran nuestros ganados nuestro

de importación en

el

tasajo

sujeto

está

Brasil.

La verdadera compensación de la ventaja acordada por el coUruguaíy a los saladeros ríograndenses, habría consistido en eximir al tasajo orienmo Vo observaba "La Constitución",





de derechos en todas las aduanas brasileñas, y no simpl-elas de Río Grande, donde funcionaban saladeros que elaboraban nuestra propia materia prima en condiciones que oriental en invernada de convertían realmente el territorio tal

mente en

esa provincia brasileña.

Según en

seían

los protocolos

1850

los

del

tratado de

siguientes

1857,

establecimientos

los

brasileños po-

ganaderos en

te-

rritorio oriental:

Sobre la frontera del Chuy y San Miguel, puestas de 342 leguas cuadradas. Sobre

la

3 6

estancias com-

frontera del Cuareim, 161 estancias con

381 leguas.

A\ Sur del Arapey, 77 estancias con 227 leguas. Y sobre las fronteras del Yaguarón y de Bagé 154 estancias

con

8'32

En tera

el

leguas.

conjunto,

4

28

estancias

con

1,782

leguas

sobre

la

fron-

simplemente.

Era necesario completar la obra de absorción realizada por tratado de límites, mediante el an¡iquila;miento de los sala-

GOBIERNO DE GIRÓ

Jeros orientales, y de ello se enca''gó

127

tratado de comercio

el

La República

inmediata.nente

abolía

ganaido que trasijonía

impuesto

el

sobre

Pocos años des-

Brasil!

el

pués del tratado la Asamblea dictó una ley gravando c"ie ganado de cada departamento con un impuesto reales por cabeza.

un

impuesto

interno.

No

era un deretího

Pero

Brasil

el

salida

la

y

de

local

de exportación,

exigió

el

¡Y

frontera con destino a Río Grande.

la

qué amplitud da'ba a esa franquicia

''os

d'i

¿De yuó manera?

1851.

obtuvo

sino

que se un depero que

.declarara que en los casos de extracción de animales de

partamento

otro

a

departamento, regiría

el

impuesto;

cuando los ganados marcharan de cualquier departamento a Río Grande! El Imperio se obligaba a su turno a mantener la exención de impuestos de consumo de que ya gozaban el charque y deRío Grande por la a Tnás productos ganaderos importados conviniendo en que continuasen equipaterrestre, frontera ladüs a los productos similares de dicha provincia. Eran impuestos que estaban suprimidos desde 1847, para dar mayores facilidades al mercado brasileño, 'de maneita que nada nuevo Fisco

fel

se

abstendría

cobrar

de

República en compensación de lo que ella cedía. mantenimiento de esa misma franquicia no tardó en objeto de retaceos, como medio de seguir arruinando a la

cbtenía

Pero ser

la

el

industria oriental. Al celebrarse

braba

al

charque

frontera

su

un

derecho

por mar mandaban por

exportaban

orientales

En

terrestre

cambio,



lo

el

tratado de 18 51,

po^

introducido

del

tenían la

el

Brasil co-

aduanas que

otras

25

9r.

Si

las

de

los

saladeros

el

impuesto.

que pagar

frontera gozaban de la exen-

ción de dere'dhos sobre el tasajo argentino o de otra procedencia extranjera. Bien pronto, sin embargo, emprendió el Imperio la reforma de sus tarifas, bajando sucesivamente el dere-

%

al 11 y al 8 '/c, con lo que anulaba la ventaja concedida, a vez que sometía a iuiaguantables trabas el pasaje del charque

cho la

por



mediante

frontera,

la

impoisíción

de trasbordos y otros

requisitos que tenían que desalentar a nuestros exiportadores.

Golpeaba lanza de

así

qive

el

los

Brasiil

^a

los

el

ofíenta'lies

similiaires

de

en

la

espe-

Río Grande

lle-

cuantioso conisiumo de charque, consejero Paranihos fijaba así para todo él Imperio en su

garían a cubrir íntegramente

que

saladeros

estalblecimientois (el

memoria parlamentaria de mediados de 1857:

HISTORIA DEL URUGUAY

128

Arrobas

Zafras

1848-49

2.433,915

1849-50

1853-5'4

2.165,078 2.215,869 2.184,634 2.260.256 1.904.127

1854-55

1.668.350

'.

.

.

.

1850-51 1851-52 1852-53

Del

resultado

otro cuadro

del

efectivo

reproducimois de cancililería

de

una de

planes brasileños instruye

los

Lamas

notas de don Andrés

las

eSte

introducido en Río Grande, Kiue

oriental

tasajo

a

la

de Río de Janeiro: Zafras

Arrobas

1850-511

618,926

1851-52

256,076

1852-53

231,030

1853-54

212,545

1854-55

126.002

^Corresponde a este imismo períoldo de crisis saladeril una tende don Tomás Oliden paira aibaratar el tasajo, mediante

tativa

un específico que en conlcepto de su inventor estaba idestina'do a la sal en la elaboración de ese producto. El Gobierno una encargada examinar designó comisión de el nuevo procedimiento, P'ero él interesaida no quiso realizar las pruebas suprimir

que

ise

cieto,

sivo

le exigían,

aileg^ando

el

peUigro de ;a divu'lsación

lo

cual

no impidió que se

por

diiez

años,

aunque

sin

le

cotícedier;'.

garantirse

naí'.iralmenio

al Poder Ejecutivo componentes de su específico.

obligado a comunicair

el

se-

excluni

la

quedaba nombre de las ma-

prioridad ni el mériio de la invención. El inventor

terias

del

privilegio

s^ólo

La agricultura. Apenas concluida taración de'

la

la

tierra

Guerra Grande empezó el trabajo de rolos depalrtamentos que ya habían he-

em

cho su aprendizaje en ese ramo de

Todos

lo's

la

producción.

vecinos qiue halbían emigrado al Brasil



escribía

GOBIEUXO DE GIRÓ

lili

oorriesparusal

en

pilena

labor

de

M-alljdonajd'o

agrícola,

y.

si

1852

en,

©1

iaño

129



están

de regreso y

bueno la cosecha consumo entero del

resuUta

departamento alcanaará para cut)rir el que no había exageración en esas palabras sie encargó de demostrado en seguida una estadística levantada por la Jefaitura de Policía, de la que resultaba que la siembra de la ju-^ rlsdicción de Maldonado, San Carlos y Rocíha, había absorbido del

país. 'Y

fanegas.

2,08-8

en

Tam^biién

muy

resultados

un

de

icuialdro

Departamento de Montevideo se trabajó con según lo comprueban estas cifras polivciail -de la ocisledha recogida ha'sfta marzo de el

satisfaotordos,

15,587 fanegas de trigo y 6,660 fanegas de maíz.

1853:

Empresas de inmigración y colonización.

Un grupo «ion

de ciudadanos presidido por don Jaime Estrázulas, Lecoaq, don Feíd'erico Nin Reyes, don Cándido

Francisco

Joanicó y don Atanasio Aiguirre, a quienes eir el acto se incor])oraron extranjeros de fuerte empuje como don Samuel Lafone, finéis de 18 52 una imlportante empresa bajo el nomde "iSocieldad de Población y Fomenta", cuya tarea princidebería consistiir en la organiaación de colonias agrícolas

estableció a bi'e

pa,

dentro de los ejidos de todos los pueblois de la República. Era base indeOlinable isegún los estatutos la transmisión efectiva de la propiedad de las chacras y tierras a los colonos que cumplieran sus comprofmisos con la Sociedad, en forma de que siempre tuviera lugar "la división y subdivisión de la propiedad". Rá-

pidamente

icellebró

lia

Sociedad ¡contrato® de colonización con las PayColonia, Soriano, de

Eiconóimico-Adminisitrativas

Junta©

Cerro Largo y

Du-

lazno, fracasando en otros departalmentos cuyas lauitoridades

mu-

Canelones,

sandú.

nicipales rras

de

ele siu

San José, Tacuarembó,

a desprenderse d'e las tieentne ellas la \del Salto que alegó que jurisdicción, níegairon

absoluta miente

no necesitaiba ayuda ajena para poblar &u ejido. La misma Sociedad estableció en el Carmelo una empresa

ella

bajo

nombre de "Sociedad

el

acciones y

emitió

adquirió

500

Agrícola

y

cuadras

de

filial

que

Filantrópica", tierra

próximas

al

familias. Fundó también un establedonde instaíó 3 cimienito agronómico, especie de lescuela práctica encargada de Tjrugualy,

hacer conocer

los

mejiotes praceídimientos

de

y de infundir eniseñanzas útiles, bajo

tierra 9

-IV

la

explotación

de

la

dirección de don .

HISTORIA DEL URUGUAY

180

Martín Martínez Castro, progresista vecino de la zona, y una granja de propagamda em CaneUones .bajo la dirección del señor Dureau, xlestinajda principalmente a la formación de almacigos de árboles y a producir las ajlimentcs necesarios a los colonos c\ue 'arribairan ad país. Esta última granja recibió, con fines de divulgación y da eiis'eñanza, una máquina ingLesa de trillar con capacidad para maniípülar 60 faoiiegas por día, una máquina limijiadora

de

itrigo y otros implementos una verdadera novedald en

aigrícollas

que

entonces

Río de la Plata. La Sociedad d/e Población y Fcmeimto ofreció también su ayuda a la empresa de don Fernando Menck para el planteamiento de su banco colonizador. En una propuesta que presentó al Goconstituían

el

bierno, ponía a disposición de esle banco las 140 leguas de campo que exigía su proigrama y que ella iposeía lindepenldientemente de ¡as tierras de lo's eijidos de los pueblos que trataba de colonizar. Con el ipropósito de hacer frente a sus compromisos de colo-

nización

de

los ejidos, la Sociedad

circulares

rigió

Europa y

a

de Población y

firmó

contratos

con

Fomento los

di-

señores

Treussein y C." para la importación de 1,000 familias alemanas; con el señor Becú para la importación de 2 50 familias de la misma procedencia, y entabló gestiones para la contratación de f.anilias

ccn

beiligas

cinco

it.T^sta

do's

20

ellas

i.rabajo

'y

mil

suizas.

familias,

Sus dirigentes hablaban de contratar comjpuestas de cinco personas arriba menos, y de escriturar a cada una de

hombres por lo cuadras una vez cumiplido

e]

plazo

de cinco años di

continuo.

propaganda europea comtaba con elementos de tan como el doctor José Ellauri, quien en una de sus colnunicaciones recordaba que ya en 1830, como Ministro de Rivera, había dictado medidas eficaces "ipara atraer una gran población de las Islas Canarias", y que nueve años después, esPara

'-ilta

la

preparación

tando a cargo de la Legación de Francia, había trabajado con fomento "de esa emigración vasca que tantos adelan»

éxito en el tos

ha producido

al

país".

Juntamente con la Sociedad de Poblaición y Fomento actuaban en el paás diversas empresas colonizaidoras con elementos de valía que aseguraban de antemano el éxito de los planes truzudos:

La ds don José de Buschental para colonia agrícola de 200 familias en

yos

Sauce y Víboras y

el

rio

el

el

establecimiento de una

rincón formado por los arro-

Uruguay, y un pueblo sobre

la

131

GOBIKKXO DE GIRÓ

margen del Uruguay con 200 casas, que tendría por asiento ol paraje conocido por Nueva Palmira. El Estado cedería las tierras fiscales comprendidas dentro de esa zona.

La de don Martín Martínez y

Calvo para

don Carlos

el

don Federico Nin Reyes

Castro,

establecimiento de una "Colonia

Agrícola Pastoril de Merinos" en un campo de 4,000 cuadras, de propiedad del primero de los proponentes, destinando mil cuadras a la erección de un pueblo y tres mil a tíhacras de 16 cuadras cada una. El Estado debería establecer las autoridades, habilitar el puerto de Carmelo o el de Higueritas y eximir de dere-

chos de importación durante tres años 'los artículos destinados al consumo de los colonos. La de don Lucas Moreno y don Luía Gil para la colonización de los suburbios de la ciudad de la Colonia, sobre la base de la contratación de 50 fan^ilias canarias y el fraccionamiento de

una suerte de estancia .Las acciones destinadas a la realización de este plan fueron suscritas en gran parte desde el primer momento.

para la colonización del proponente la adjudicaqión de todas las tierras dentro y fuera de Soriano que no fueran de pjopiedad particular, con el com,proTnisO' de colocar 200 personas en cada legua cuadrada que se le escriturara por ese concepto. La Junta Económico-Administrativa aceptó la propuesta, pero reduciéndola a la villa de. Soriano y con estas modificaciores: en ca;da legua cuadrada se establecerían 75 familias; a cada

La de don Domingo Gounouilhou

ejido y villa

familia se

gua

le

de Soriano. Pedía

adjudicarían

por legua abonaría habría

La

lo el

diez

menos 10

el

cua'dras cuadradas; familias'

nacionales;

en

cada

por

le-

cada

concesionario 2,0 00 patacones.

agrimensor don Manuel Bguía para el planteamiento de una colonia en los alrededores de la villa de Meló, compuesta de 80 chacras de 40 cuadras cuadradas cada una, de acuerdo con del

un plan ya esbozado y aceptado en

las

postrimerías de la Gue-

rra Grande.

Dentro de este amplio movimiento colonizador no podían quedar olvidadas las familias nacionales que vagaban por la campaña o se estacionaban en los caminos y en las márgenes de los hogar y sin otros recursos que los del robo de ganados. abatimiento de la riqueza rural decía "La Constitu-

ríos, sin

El

ción"





limita considerablemente la

desocupados tienen que buscar

demanda de brazos y

su alimento por medios

los

ilícitos.

HISTORIA DEL TRUGUAY

132

Habría que concentrar esas familias en

los arrabales

de los pue-

gastos de transporte e instalación por las blos, arbitrándose Juntas, sobre la base de una suscripción pública a la que todos los

los estancieros .para evitar las carneadas y 'os e ntribuirían: pueblos para aumentar el número de sus habitantes. La traslación serla especialmente beneficiosa para esas familias desamparadas, porque al aproximarse a un centro encontrarían mil me

dios de hacerse de recursos por el trabajo".

indicación

lEsita

encontró eco simpático en

Gobierno

el

y en

Asamblea.

la

El Gobierno se dirigió en septiembre de 18 52 a los Jefes Polípara ordenarles que procedieran a la reconcentración de

ticos las

familias en los ejidos de los pueblos y al racionamiento de

las

más

hasta

necesitadas

el

máximo de una

res

por

día.

La

prensa, que iiabía estimulado esa medida^ pedía a la vez que se

proporcionaran materiales para la construcción de viviendas y yuntas de bueyes para el laboreo de la tierra, que darían con gusto los estancieros con tal de verse libres de la plaga de los

desocupados en

También las

se

lindes

las

de

sus establecimientos.

resolvió arbitrar recursos para la repatriación

de

familias que habían emigrado y que no podían regresar al

país.

La base principal debía obtenerse mediante una

ción

popular,

porque

cribía la acción

A

el

estado

angustioso

del

suscrip-

Tesoro circuns-

directa del Estado.

1853 comunicó lá Jefatura de Paysandú que agotados los fondos destinados a las familias indigentes y emigradas, y contentó el Ministro de Gobierno que no era posible realizar nuevas remesas con destino a las primeras y que principios de

estaban

para

la

repatriación de los emigrados se había resuelto acordar

700 pesos

mente

el

al

Salto,

200 a Paysandú y 200

a

Tacuarembó. Feliz-

país entero se había puesto de ^ie y las angustias del

fueron rápidamente contrabalanceadas por las comisiones populares encargadas de completar su obra. Algo más amplio trató de realizar el Gobierno: el reparto gra-

Tesoro público

tuito de todas las chacras y solares baldíos de los ejidos de los

pueblos de campaña.

En

julio de

1852 pidió con

tal

objeto a las

Juntas Ec:.nómico-Administrativas un estado de los solares y chacras rl,isponibles, y no habiendo obtenido los datos dio orden a la Comisión Topográifica para que enviara agrimensores a los departamentos con el encargo de formular los planos respectivos.

GOBIERNO UK OIRÓ

133

Una ley de julio de 1853 complementó esas medidas disponiendo que se diera preferencia a las familias nacionales en el reparto de solares y chacras de los pueMos de Santa Rosa, Queguay y Artigas, mandados crear por leyes de la época. Don José María Cantilo y don Nepomuceno Madero, redactores de "El Comercio, del Plata", dirigieron una circular a los Jefes Políticos a fines de 1852, ofreciéndoles las columnas de su diario para fines de propaganda iocal. Y esa circular dio base a (Ion

Tomás

Mllalba,

Jefe

en esos momentos. "Otro aspecto tomaría



para

Soriano,

de

Político

adherir a

idea de la colonización que a todos preocupaba intensamente

la

la

campaña



decía

el

señor Villalba

si en cada departamento de destinaran diez leguas cuadradas de tierra, en fracciones cuando menos de una legua, y se dieran con buenas garantías al primer individuo o sociedad na-

cional o extranjera que estableciera dentro de los dos primeros años 100 familias labradoras en cada legua de tierra, haciéndolas

propietarias de

facilitarles

para

subsistencias

25

bestias

las

el

cuadras cuadradas, con necesarias,

obligación

la

herramientas,

semillas

y

de las

primer año. Deberían quedar exentas de

todo servicio y tributo por seis meses y bajo las garantías de las leyes y convenios que hicieren con las sociedades colonizadoras!

para indemnizarles sus adelantos. Deberían

asimismo compren-

derse en las condiciones de tales colonias, todas las familias pobres que vagan actualmente de estancia en estancia

mendigando

que viven en pequeñas chozas en las costar arroyos, alimentándose con la caza o con la carne de ye-<

la

subsistencia,

vle

los

gua cuando en tierras

la

al

o

merecen...

Habría que invertir

200,000

pesos

precio de 2,000 pesos la legua cuadrada..." Pero

gastar con provecho y utilidad no es

Cuando

más que un

principio de

"que para una familia que tiene algo de qué vivir hay 50 que nada tienen de productivo. Departamento hay cuyo ganado vacuno puede apacentarse perfectamente en 30 leguas de campo, mientras que economía.

.

.

se publique el censo se verá

cuentan con 300 de superficie". Toda esta fecunda obra de reconstrucción económica a base de inmiígración europea y colonización nacional quedó bruscamente truncada y abandonada por efecto de la revolución que echó abajo

al

gobierno de Giró.

HISTORIA DEL UBUGUAY

134

El Gobierno pide recursos para practicar estudios geológicos.

Uno de

los

primeros mensajes del gobierno de Giró

Legislativo fué

mediante y competentes".

territorio

científicos

Cuerpo

al

de marzo de 185 2, encaminado a obtener un

30,000 pesos con destino a

crédito de del

el

nacional

la

la

exploración geológica

contratación

"de

hombres





el Gobierno decía ese documento "Restablecida la paz ha contraído su más seria atención a investigar los medios da subsanar las pérdidas que ha sufrido el primer ramo de riquez.i nacional, que es la cría y beneficio de los ganados. Uno de esos medios que más urgente juzga el Gobierno poner en ejecución,

exploración

consiste

en

hombres

científicos,

la

territorio

del

de

la

República,

por

en los abundantes gérmenes que ofrecen l03

reinos de la Naturaleza.

No

se

oculta

a

V.

H. que existen en

nuestro suelo minas de metales y piedras, como igualmente variados e importantes productos vegetales que sólo las calami-

dades de

la

guerra han podido mantener improdu'Ctivos a

la.

in-

dustria y al comercio".

No

encontró ambiente en

el

Parlamento esa

iniciativa

fecunda

y he aquí por qué motivo según la minuta de comunicación cloQada por una de las dos ramas del Cuerpo Legislativo:

"La Cámara de Senadores entiende que siendo per ahora,

me

lo

será por muclio t'iemipo,

la

s-^n-

co-

única riqueza de la República

más urgentemente reGobierno y que por conáiguiente la primera y más manifiesta necesidad es de establecer una buena policía en la campaña, consultando el mayor acierto en la elección de las autoridades departamentales... Cierto es que la exploración de nuestro suelo, rico en minerales y produccría de ganados,

la

clama

la

protección

es

y

este el

cuidado

objeto que del

vegetales, proveería al Gobierno de informes científicos con que alentaría las empresas particulares que atraerían al Estado importantes recursos; pero no sería bien recibido por la tos

ios

Nación que estando gravada con una deuda inmensa, bien conocida ni liquidada, se destinara una parte de pública para aquellas exploraciones...

No

aún no la

renta

Poder Ejecutivo ni el Judicial casas adecuadas para su residencia; no lasr tienen las Cámaras Legislativas, ni tiene el país una sola cárcel tienen

el

en lugar aparente, cómoda y segura". lEra

un error. Precisamente porque había deudas mülonarias

135

GOBIEBNO DE GIRÓ

porque

y

por

más urgentes obras públicas quedaban aplazadas

las

angustiosa situación financiera, es que convenía promover

la

explotación de todas las fuentes de la riqueza pública y au-

la

mentar neral y

capacidad económica del país. Pero

así la

el

error era ge-

proyecto quedó desechado.

el

Habían empezado

multiplicarse

a-

en

momentos

esos

las

de-

nuncias de minas de oro y de cobre en Tacuarembó y Salto, bajo impulso de don Federico Nin Reyes, don Atanasio Lapido el y otros ciudadanos, y con

el

objeto de interesar al capital extran-

el "Jornal do Commercio" algunos capítulos de su oibra "Notidias sobre la República Oriental", con datos y observaciones tendientes a divulgar el conoci-

don Andrés Lamas en

publicó

jero

miento de

riquezas de nuestro suelo.

las

Diversas industrias.

Otros ramos pública

ción

industriales

en

el

también

fueron

objeto

de

aten-

la

período de resurgimiento que arranca

de

la

Guerra Grande. Entre ellos el de la cal en el Departamento de jNIinas, ya es-« tudiado con entusiasmo por el ingeniero Pellegrini con ocasión del proyecto de obras de puerto presentado en 1833 al gobierno terminación de

do Rivera.

Ha

la

escrito Pellegrini qu

cuando fué a Minas para estu-

materiales que podrían utilizarse en las obras portua-

diar

los

rias,

trabajaban

16 caleras para las plazas de Montevideo y

allí

que a recorrerlas encontró en un rancho una :ii] flaca y negruzca pero de tal poder que habiéndO'la desleído en un plato de loza tuvo que romper el jdato para desprender

Buenos Aires;

cal

la

que

se había

¿ano dueño verlo romsper

de el

pegado y hedho cuerpo con

esa

materia

plato:

tan

preciosa

decía

y que el paicon fastidio al

él;

"la beneficié por mis pecados, pues nadie

juiere dó esta inmundicia".



^El Gobierno envió a Inglaterra muestras de algodón cosechado en el Salto, que fueron clasificadas como de primera ca-

lidad.



'La

de

repoblación de los montes públicos fué también materia

estudios,

aunque

ciudadanos que

Juan

P.

más

sin

se

Caravia. sostuvo

arribarse

habían el

a

nada práctico. Uno de

destacado

derecho de los

este

ramo,

pos contiguos. Ellos se consideran, decía, con titulo a los tes

públicos que forman

la

prolongación

los

don propietarios de camen

mon-

de su propiedad y de

HISTORIA DEL UBUQUAT

136

que realmente están en posesión. Si no hubiera sido por su ya los montes tiabrían desaparecido. Por otra parte, los campo» que tienen monte se cotizan a más alto preios

acción vigilante,

que

cio



gaba, si

los

al

deredho de los



Todo

lo cual demuestra agremontes conviene contemplar propietarios de campos contiguos.

que no

que

tienen.

lo

dictarse la ley de

—Respondiendo

exigencias de varias industrias en

a

tren

de

marcha, presentó el doctor Juan Carlos Gómez a la Cámara de Diputados un proyecto que eximía de derechos de importación hierro en barras y en plancTias,

al

maderas de construcción,

las

a

Asamblea dicta

ÍaH

Los que

al

al

bronce y acero sin labrar,

i'quitrán y la resina.

vina ley de privilegios industi'iales.

movimiento industrial- tenían que ese Asamblea en demanda de privilegios que eran de liamitación forzasamente lenta, aun cuando se tratara de empresas tan reclamadas como la de Theil para el establecimiento de una fábrica de azúcar de remolacha, la de Nouthon de S. Amat para el planteamiento de un lavadero público, y la de Vernet a favor de un específico destinado a impedir la filtraimpulsaban

lecurrir a la

ción de los aceites y grasas de nuestra exportación. En circunstancia determinó a la Comisió,i de Peticiones de la Cámara

de Diputados a en

redactar un proyecto de

carácter general

La

ley

de 1853

para

cutivo

al

Poder Eje-

exclusivo

en los ca-

que nos referimos, autorizó

a

patentes de

expedir

privilegio

de invención, mejora de invención e importación

sos ción.

que

acto fué sancionad^i.

el

La Nación no

g'arantizaria ni el mérito ni la

de inven-

prioridad de

las

invenciones o mejoras, librando a los Tribunales la decisión

de

todos

privilegio el

los

reclamos y cuestiones que pudieran suscitarse. El de 10 años para el autor, de 8 para

exclusivo sería

introductor y de

Por

tal

6

para

medio quedaba

citudes y estimulado

el

el

perfeccionador. la tramitación de las solide empresa en forma eficaz y

facilitada

espíritu

amplia.

Ejiípresas de

ómnibus y de

ferrocaiTiles.

Desde principios 'de 18 53 quedó establecido un excelente serómnibus entre Montevideo y la villa de la Unión. Cada

vicio de

137

GOBIEBNO DE GIRÓ

coche tenía capacidad para

viaje

el

el

pasaje costaba un

se

hacía

carruaje

en

costo era de medio patacón.

el

y

personas y

3

Antes de esa mejora

fuerte.

i-eal

Como prueba

de

época

cas de la

la

vitalidad

la

servicio,

del

de 300 pasajeros en

cifra

citaban

cróni-

las

día de la

el

inau-

La carrera empezó con dos ómnibus, pero en seguida hubo que encargar tres más a Inglaterra. Es que los empleados públicos y los mismos empleados i.articulares, según observaba uno de los diarios, empezaban a uirigirse a la Unión en busca guración.

tíe

hogares amplios y baratos.



emlpresa

^Otra

de

línea

extender

Montevi

entre

servicio a

el

establecer en

resolvió

diligencias

leo

esa

diversos pueblos de

daba resultados. ^^Tampoco quedaron



rezagadas

misma época una

y Minas

empresas

las

ánimo de

con

campaña

si

ensayo

el

ferroviarias

y

telegráfica.s.

Una de culaba esa

le

¡a

en Eil

tráfico

al

línea de Montevideo a la Unión.

la

140,000

pesos,

camino tendría general

todo

y 3

el

Cal-

mitad varas de ancho, debiendo espacio que no absorbieran pedía

al

Estado

la

rieles.



de

iQtra,

res Isola f:co

solicitó

obra

suma.

übrarso 'os

ellas

más amplias prayecciones, encabezada por los señouna línea férrea y servicio telegrá-

y Nin, proyectaba

a'iexo

desde

Montevideo

hasta

la

ciudad

de

la

Colonia,

en Las Piedras, Santa Lucía, San José y Colla. El Estado debía suministrar a la empresa algunas man¿;anas de ¿Olí

estaciones

tierra en los puntos terminales y además una faja de 3 a 10 cuadras de ancho a cada lado de la vía y una cuota mensual de mil a dos mil pesos durante los primeros 25 años de funciona-

miento efectivo del ferrocarril. A los cincuenta años el ferrocapasaría' al dominio del Estado, pero no así los terrenos a lo largo de la vía. La empresa quedaría autorizada para estalilecer un muelle en la Colonia y un servicio de vapores hasta rril

Buenos Aires. El proyecto fué sancionado por la Cámara de Senadores paco antes del derruimbe del gobierno de Giró y no alcanzó a convertirse en ley por efecto de los trastornos que sobrevinieron.

—Y una

tercera empresa, encabezada por don Miguel Valencia,

realizó trabajos eléctrico de

para obtener

Montevideo

a

el

Buenos

establecimiento de un telégrafo Aires,

pasando por

la

Colonia.

HISTORIA DEL UBUGUAY

138

Bancos, boKsas y monedas. señor

El

presentó

Picconi

con capital de 2.500,000 pesos. de su capital efectivo; dio

con

millón,

cunero

sobre

abriría

del

el

de bonos

garantía

frutos

Gobierno

de 1852 un "Banco Oriental", Emitiría billetes hasta el monto una cuenta al Gobierno por me-

al

proyecto de Banco emisor, bajo

de

5

%

descontaría

país;

fines

a

de

título

anual;

letras,

y

adelantaría haría

prés-

tamos hipotecarios.



el Monte de Piedad y Caja de Ahorros Jaime Estrázulas. En poco días quedaron colocadas la mitad de sus occiones. Tendría un capital de 10,000 pesos. El Monte de Piedad haría pequeños présta-

^Más resonancia obtuvo

proyectado

por

mos de 10

a

el

doctor

100

pesos,

bajo

garantía

prendaria,

hasta

tres

meses de plazo, vencido el cual se procedería al remate de la garantía. La Caja de Ahorros abonaría el V2 9t mensual y sus utilidades acrecerían

—Antes

capital

el

del

Monte de Piedad.

año 185 2 quedaban muy adelantados los trabajos para la fundación de la Bolsa de Comercio, con local propio y un amplio programa encaminado a facilitar las reuniode finalizar

nes de comerciantes,

el

el

establecimiento de cotizaciones oficiales,

y la reconcentración de corredores e intermediarios de negocios en "general. Con el propósito de apresurar la iniciación de las obras, se fusionaron los accion,istas de la Bolsa con los del Casino,

otro

est^ablecimiento

que había despertado mucho

interés

en Montevideo.

Completando el programa de servicios de la Bolsa, proyectó den Mauricio Blanes el establecimiento de una "Sala de Comercio y Telégrafo Marítimo", destinada a ofrecer en sus mesas de lectura y en sus pjizarras informaciones sobre ventas, entradas y salidas de buques con nombres, banderas, procedencia y manifiestos, y un sdstema de señales ,para anunciar el movimiento de los barcos.

— Pocas fines

semanas antes de

de enero de 18 52, dictó

la el

terminación

de

su

mandato,

a

gobierno de don Joíuquín Suárez

un decreto autorizando la circulación de diversas monedas de extranjeras, que tomaba por base de las equivalencias el

ero

peso y la ley de ejemplo, tendría 20,000

reis,

la

onza de oro española. La libra esterlina, por

el

valor de 5.75. el áiguila

pieza

de

mercado de Montevideo. Según

la

12.15 y

la

13.26.

Ese decreto, convulsionó

al

139

GOBIERNO DE GIRO

más difundicla, aseguraba a las monedas extranjeras un mayor que el de la cantidad de oro puro que contenían.

opinión valor

La

libra

vez de

en

esterlina,

valía

5.750,

atento a que

5j568,

la par sobre Londres era de 42 peniques por peso uruguayo. Un grupo de comerciantes adhiriendo a esas op,iniones, pidió a'. Go-

bierno la suspensión del decreto, hasta que

la

Asamblea

dicta-

ra una ley, y así lo acordó don Bernardo P. Berro durante su breve interinato presidencial de febrero de 18 52.

Los

intei-eses tlevenf^ados

durante la GueiTa Grande.

La Guerra Granie había dejado planteadas numerosas y comde contratos, que recarga-

plicadas cuestiones sobre inejecución

ban

las tareas

A

mismo Cuerpo Legislativo. Asamblea resolvió solucionar en tér-

de los Tribunales y del

mediados de 1852

minos generales

la

más grave y apremiante de

la

esas cuestiones:

del dinero por efecto de obligaciones exi-

la relativa a intereses

gibles ,o contraídas en el transcurso 'de la guerra.

He

aquí en qué

forma:

"Toda cuestión sobre ciembre de 18 42 y los

el

devengados entre

intereses 8

el

6

de

di-

de octubre de 18 51 queida sometida a

principes establecidos por las leyes para los casos

fortuitos

y de fuerza mayor".

Quedaban expresamente excluidos

los

conflictos

que pudieran

suscitarse con motivo de obligaciones ya cumplidas, transadas o

resueltas por sentenc^ias ejecutoriadas.

Durante

la

guerra



Idecía la

Comisión



ide

Legislación de la Cá-

mara de Diputados en su informe Ihan vivi'do los país bajo el peso de una calamildaid incontrastable

habitanites del

ha causapropiedad territorial, industrial y comercial, e inhabilitado para el cumplimiento de las obligaciones contraídas. Y es un principio de jurisprudencia que el caso fortuito no debe perjudicar a los impedidos o imposibilido

el

desquicio y

la

ruina de

fiue

la

tados.

Pero

el

la ley a la

Poider Ejecutivo no era de la

Asamblea alegando que

mi&ma opinión

ella venía a

nes anteriores a su

y devolvió resolver cuestio-

promulgación y que, en consecuencia, era una ley de efecto retroactivo. Llegado el momento de la votación, resultó que sólo estuvieron por la afirmativa 21 legisladores y por la negativa 15, quedando desechada la ley de acuerdo con las prescripcjones constitucionales.

CAPITULO

III

Movimiento administpativo El producto

Según

los

(le

las ventas.

estaldos

de

la

CoMaduria

Genevail

de la Nación,



Tesoro público recibió en 1852 la cantidad de 3.206,000 i>esos, .sobresalienldo en los ingresos los deredhos de importación por 931,000,

el p'apel

sellado y

'las

patentes de giro

215,000 y los

¡por

contratos de préstamos ipor 94i9,000, y en los egresos las planillas del Minislterio

de Guerra por 810,000,

ses préstamos por 772,000,

y

la

el

¡el

reeniTíOlso de diver-

rescate de propiedades por S4,000

amortización del smbsidio francés

p.cr

154,000. Al cerrar el

quedaba un déficit de 843,000 pesos. La documentación de ese ejercicio pasó a informe de la Comisión de Cuentas del Cuerpo Legislativo, resultando de un estudio muy prolijo practicado por el Contador don Miguel Forteza, que las rentas habían dado 1.750,370 pesos, y los gastos habían absorbido 2.439,294 pesos. La Comisión de Cuentas de la Cámara de Diputados, compuesta de don Juan C. Gómez y de don José Zubillaga, y la del Senado compuesta de don Antonino Domingo Costa y don Juan Miguel Martínez, presentaron dos informes en los que hacían graves inculpaciones. decía En todos los ramos de la Administración de Rentas reina el más profundo desorden. Mienuno de los informes tras los libros de la Tesorería Colectora, por ejemplo, denuncian ejercicio





una entrada de 1<354,116 pesos, los de la Contaduría sólo arrojan 1.291,865. Faltan asientos, figuran pagos de ingentes sumas por concepto de empréstitos, intereses y comisiones sin la intervención de la Contaduría. Hay aforos rebajados en un 20 y an 25 por ciento. Hamse acordado devoluciones de derechos poi' simlpiles

Aduana y

sito.

las

notas de Vistas de Existen diferencias en

"Finalmente i:in

el

foliatura"

,a

partidas

veces sin

de los

desorden más completo, pues hasta



rrar su informe.

dióho requi-

mismos

libros.

los libros están

decían, los senadores Costa y Martínez

al

ce-

GOUIIÍRNO

Podían

estar

recargadas

141

(JIKÓ

llt

como represalia contra

tintas,

las

decreto que había arrebatado la Aduana al Directorio mixto que la administraba. El doctor Juan Carlos Gómez había comel

batido crudamente

al

Gobierno con motivo de ese decreto y don

Juan Miguel Martínez formaba

parte

Directorio

del

cesante.

Pero en el fondo el desorden existía, y el Senado dándose cuenta de ello, mandó pasar copia del informe de su Com^isión de Cuentas al Poder Ejecutivo "con el fin decía en su minuta de que se provea a los inconvenientes que en él se notan".





Conoci^das las dos

"de

lais

cifras

globaüíes

más importantes



de las rentas, veamos

de AJduana y

la

la

el

detalle

de papel se-

llado y patentes.

La

renta de imipoTtación

pesos,

distriburdos

en

Enero

la

,y

de exiportación produjo

1.430,339

forma que subsigue:

f

Febrero

66,631

Julio

77,786

Agosto

126,652

.

127,446

Marzo

155,596

Septiembre

143,793

Abril

105,599

Octubre

150,077

Mayo

134,508

Noviembre

106,527

Junio

140,444

Diciembre

101,277

.

El repunte de septiembre y ofetubre concidía con la afluencia de el puerto de Montevideo por efecto de las agitaciones

tarcos en políticas

de que era teatro

la plaza

de Buenos Aires en esos mo-

mentos.

En una

liquidación correspondiente a los primeros siete meses

montaba a 807,219 pesos, la importación figuraba «on 554,000, la exiportación con 66,000, ei deredho municipal con 134,000 [y con cifras de menor cuantía otros rubros. del

año, que

Las patentes de

giro, papel selllado, alcabala, patente de cabo-

taje y otros impuestos

más pequeños redituaron en 1852

tidad de 215,000 pesos,

correspondiendo 164,000

de la Capital y 51,000

al

En ban

los

de giro por 102,000, por 16,000.

las patentes

Muy

la

can-

Departamento

resto del país.

164,000 pesos del Departamento de

y la alcaibala

al

el patpel

la

Capital

figura-

sellado por 34,000

son los datos de 185 3, año de derrumbe de y de agitaciones políticas que ciaban peco ambiente a las publicaiciones estadísticas.

las

inicoimplletos

autoridades

constitucionales

Sólo conocemos estas cifras parciales de

ilos

ingresos de Aduana:

HISTORIA DEL rSUGUAY

142

Febrero

103,747

$

Marzo

130,274

Abril

105,796

Mayo

109,762

Septiembre

153,000

a'e;lación a las de 185 2. Pero hay que que el deretího Mamaido municipal quedó suprimido en 1S53 y que no toído -debe cargarse en. consecuencia a la disminuc'ón de los consumos. El monto de los impuestos recaudados en 1852 ($ 1.750,000) corresponide a los niveles allicanzaidois durante el gobierno de Ori-

Denunician Tetroceso con

advertir

be,

en que las rentas oscilaron de 1.400,000 a 1.600,000, según

los

datos que hemos reiproducido en

el

Tomo

II.

Pero reflejan

baja «norme con relación a los años 1840 y 1842, del gobierno de Rivera, en que el producto rentístico osciló de 3.029,000 a ¡Efecto de la Guerra Grande! medidas encaminadas a facilitar' el contralor admi-

3.500,000 pesos.

Entre

las

nistrativo y parlamentario de este perríodo, se destacan el decreto de junio de 1853 obligando a las oficinas recaudadoras a verter

sus íondos en la Tesorería General, y la ley de julio del mismo año que prescribía que cuando la Coimisión de Cuentas del Cuerno terminare su tarea dentro del período ordinal-O' Legislativo i:o, la Comisión Permanente la llevaría hasta su fin.

el Gobiei-no

Signe

Hemos hecho t:oinado

por

el

endeudándose cada vez más.

referencia

al

préstamo de 300,000 pesos

ges-«

gobierno de Giró desde los primeros días de

^>u

administración.

Fracasada

la

negociación con los acreedores de

la

Aduana, se

Gobierno con un grupo de capitalistas que encabezaba don Carlos Navia. Obligábanse los capitalistas a anticipar entendió

el

los

300,000 pesos a dos, tres, cuatro, cinco y seis meses de pla-

zo,

bajo forma de vales que serían descontados en plaza, o por

'os

mismos prestaimistas

fecto

de reembolso de

crédito

ror

la

contra

el

si

las

así lo resollviera

sumas

.prestadas,

el

Gobierno.

los

Gobierno que tuviese Navia serían

Aduana en pago de derechos. Tal era

lo

En

de-

documentos de recibidoa

que establecía

el

contrato. Pero luego de entregados 78,000 pesios, surgieron desinteligencias que condujeron a la rescisión del préstamo.

143

GOBIEBNO DE GIBÓ

La Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados practicó mediados de año el examen documentado de esa operación parcial, resultando de su estudio que el erario público había paa

letras y comisiones

gado por concepto de descuentos y primas de 7,800 pesos, o sea justamente

el

10

de

'/<.

la



cantidad recibida.



agregaba la Comisión Era eso, sin embargo lo más económico a que podía aspirar el Gobierno dentro de las circunstancias, y entonces lo que convenía era aprobar lo hecho y derogar lu ley acordada para mayor cantidad. Desipués de esa primera operación, realizó varias otras el Gobierno, llegando a estabilizarse el recurso de salir de los apuros •

de cada mes mediante siguiente. Véase el

negociación de los ingresos del mea

la

monto de

los

más importantes:

Junio

$

79,000

Julio

65,000

Agosto Septiembre Octubre

60,000

120,000

Noviembre

250,000

Diciembre

120,000

73,000 '

% 7(67,000

Las

circunstancias

financieras

debían

empeorarse,

y

emt

se

comienzos de 1853, bajo la doble presión de oposición colorada que ya había puesto la proa al gobierno de

peoraron desde la

los

G'ró con ánimo de echarlo abajo, y de los propios elementos

si-

que trataban de provocar un cambio de ministerio que llevara a la administración hombres de más empuje y do tuacionistas

más

empresa que los que rodeaban al gobernante. Poder Ejecutivo pidió en marzo autorización para negociar un erqipréstito de 60 0,000 pesos con destino al pago de los sueldos civiles y militares atrasados y de otros compromisos. Lag iiecesidades creoían con tal rapidez, que fresca todavía la tinta de ese proyecto y antes de que la Asamblea hubiera tenido tiemT espíritu de

lEl

po

'de

sancionarlo, tenía que pedir el ministerio que

el

fuera elevaklo a un milllón.

"Como la

el estado de apuros en que se halla el Tesoro Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados

restiltado

de

la

marcha

generail

que

el

ministerio

crédito

— —

ha

,

decía es

el

seguido

HISTORIA DEL URUGUAY

144

desde su advenimiento al poder", parecería llegada la hora de definir posiciones aplazando el proyecto; pero se ha optado por 3^ despacho "a presencia d-e la necesidad premiosa de atender a los pagos atrasados que en su mayor parte son el alimento de Estado".

los servidores del

La Asamblea votó el millón pedido con la garantía de un derecho adicional de Aduana, bajo la expresa condición de que el

%

interés no excedería del 24 1

anual y que

operación se rea^

la

izaría a la par.

Con

la nueva operación debían cubrirse, según Hacienda en la Cámara de Diputados, 500,000 Ministro de

producto de

el

dijo el

pesos de deuda exigible, y otros 500,000 por varios atrasos, enque figuraba un préstamo de 144,000 pesos de don Ireneo

tre los

Evangelista de Souza, barón de Mauá, al gobierno de fensa, para compra de material de guerra.

la

De-

Lo difí'Cil era, sin embargo', encontrar quién se arriesgara a desembolsar dinero en una situación tan apurada y tan llena de incertidumbres.

Había de

S

anticipado

Ministro

el

que

propuestas

existían

hasta

y 10 millones procedentes de plazas extranjeras, y que el

mismo comercio de Montevideo estaba en tren de facilitar sumas al 1 y % % de interés mensual, que era el más

tes

rable que regía para las firmas de prestigio. Pero

revolucionario

del

18

de julio

sorprendió

en la tarea de encontrar capitalistas que

el

movimiento

Gobierno

al

fuer-

favo-

estuvieran

todavía

dispuestos

a entregar su dinero al Estado. Efl

miniaterio

nudó

con bríos

acordadas

surgikio la

go'bierno

a]

dfe

tarea

de

ese movimiento revolucionario readurante las pocas semanas de vida Giró.

Don Manuel

Herrera y Obes

que desempeñaba la cartera de Hacienda, convocó a los más importantes miembros del comercio de Montevideo para pedirles su concurso sobre las siguientes 'bases:

Los prestamistas entregarían 322,000 pesos en vales al por3 y 4 meses de plazo; las sumas prestadas no devengarían interés; el Gobierne daría órdenes de pago a tador pagaideros a

cargo de

la

plazos de

3

Colecturía por

y

4

el

importe de los vales, a los mismos

meses, que serian aceptadas en pago de dere-

ohoQ de Aduana; Jas rentas de Aduana, papel sellado y mercado quedarían hipotecadas en garantía de la oiperación.

Pero

la

suscripción

pesos y entonces

el

del

comercio apenas

Gobierno resolvió dirigir

alcanzó a la

vista

al

150,000 Brasil,

GOBIERNO DE

en

esperanza de

la

Asamblea. Un Plata»

de

gestiones

rial

garantizara

nueva a

por

la

del

que

so

a

que

tendientes

creada a raíz de

aseguraba

que ha-

Gobierno Impe-

el

empréstito, sin perjuicio de la

mensual de

subsidio

autorizado

como «El Comercio

situación

decir

realización del

la

del

millón

el

informado

llegó

julio,

diplomáticas

bía

reanudación

allí

vinculado a la

tan

y

revolución

la

levantar

diario tan bien

14Ó

(Hiló

patacones

60,000

del

tra-

tado de 1851 que también estaba en trámite.

El

en los pagos.

íitraso

Por

enero

decreto de

que se restableciese suspendido

militares

exenciones

vez

las

las

concesiones

de

mandó

1852

toda

impuestos,

alojamiento

sueldos

los

suministros

los

que hasta

con

de

para

las

operaciones

de

crédito

no era

y la

víveres

y

habían

entonces

y sus familia?.

Los pagos debían hacerse por quincenas anticipadas. Pero con rentas tan exiguas como las que había, biente

civiles

Defensa, suprimiendo a

la

de los empleados

necesidades

de Suárez

gobierno

el

de

regular

servicio

durante

de

de

atendidas las

sido

el

y sin am-

que

posible

el

decreto tuviera cumplimiento.

Los zar

sueldos

se

fueron,

primer año de

el

«Nos

encontramos

nistro de la Guerra

bierno

Hoy

doctor

estamos meses;

tres

si

da

nos

pagar el

el

atrasando,

todo

sobre

lista

mundo

civil

finali-

escribía



noviembre de 1852 y van corriendo miseria, y

tocar al Gobierno del

algunos

por

Mi-

el

y militar

desespera de

recurso

subsidio

al

Flores al Ministro de Go-

en

Castellanos la



peor de recursos

Venancio

esto

como usted debe comprenderlo. Yo creo

como único

sable y

cada día coronel

Florentino sin

todo

trascendencia,

pues,

administración Giró.

la

meses

para

Brasil, salir

de

es

indispen-

de

ver

a

este

estado».

«A

los

en la

empleados públicos agregaba

meses»,

el

se

Ministro de

les

debe

sus sueldos

Hacienda

Cámara

a

de cuatro

mediados de 1853 después expresaba

de Diputados. Pocas semanas Juan C. Gómez en esa misma Cámara que el atraso había aumentado a cinco meses. La Cámara de Diputados, tomando una hermosa iniciativa, votó un proyecto de ley por el que se suspendía el abono de las el

doctor

a

dietas,

la

espera de

la

normalización

Senado no siguió su impulso y 10

-IV

el

de los

pagos;

proyecto quedó rechazado.

pero

el

HISTORIA DEL URUGUAY

146

Eu

julio,

gobierno

liempo de

al

de

estallar

habían

Giró,

motín

el

subido

a

seis

contra

militar

ei

presupuestos atiM-

los

sados.

Los

que veían

militaren,

que indefectiblemente

gestionar

resolvieron

tes,

En una

montaña de

crecer la

sueldos

todos los

irían

sanción

la

deuda, a

la

de leyes

la

pendien-

atrasos

y

de sus

tutelares

Cuerpo Legislativo encabezada por los generales Juan A. Lavalleja, Enrique Martínez, Antonio Díaz, César Díaz, José A. Costa y Andrés Gómez, pedíin intereses.

representación

declarase «que los

que se

venientes de servicios a sobre

vilegio

todas

en su

reconociera

de Diputados,

sólo

obra

la

"ozabaii

La

contra».

Comisión

despachar ese asunto que

vez

de la deuda

clasificación

en la

junio de 1853,

de

Militar

pública.

pri-

y

erario nacional

el

la

Cámara

la

justicia de la

oportunidad de de-

Asamblea

la

sueldos pro-

prelación

reconoció

de que la

advertencia

una

llegaría

de

que

pasivas

cuentas

mediados de

sentado a

originarios por

créditos patria,

la

las

pero con la

prelación, clararlo

de

al

al

Y

acometiera

la

informe pre-

ese

de

víspera

clau-

la

sura de las sesiones ordinarias, dio lugar a que los generales peticionantes

volvieran

gozan

militares

de

«para implorar

presentarse,

a

en

paladina y

declaración

la

prelación

la





decían

día de que en efecto los haberes

el

hemos

que

privilegio

y

invo-

cado».

Una

de ultimátum,

especie

tar

El

de

como

empleados

esperación de los

eu

que denunciaba

se ve,

víspera del

la

la

movimiento

desmili-

julio.

déficit.

Véase cómo describía zas

nacionales al

lativo en febrero de «¡Las

rentas

fin

a

la

República; les,

ley

el

celo

el

Cuerpo Legis-

de

las

el

diversos

del

Presupuesto

derechos con

el

necesidades supervi-

gastos de pacificación de la a

la

lista

militar

de

aumento de plazas en

otras en las

de los departamentos;

para

los

sucesiva

de viudas;

cálculo

el

pero las

comercio;

al

de Presupuesto;

guardo; la creación de caciones

excedido

que se hizo de

incorporación

de inválidos y

policías

han

públicas

la

estado de las finan-

1853:

de dar facilidades

nientes

el

ordinarias del

sesiones

las

supresión

a pesar de la

Presidente Giró

el

abrir

oficiael

oficinas de recaudación

Res-

y de

armamento de algunas embarestablecimiento de una el

costas;

147

GOBIEBNO DE GIBÓ

aduana de depósito en

Colon^ia,

la

para

indispensables

traordinarios

y otros gastos pendientes exmejor servicio del Estado,

el

han ocasionado un déficit mensual en Tesorería que el Gobierno ha llenado por medio de empréstitos sucesivos, calculando dentro de la cantidad para que estaba autorizado". Dos meses más tailde el Ministro 'de Hacienda declaraba ante Ja

de

Cámara de Diputados, con ocasión un millón

da

que

pesos,

el

del proyecto de empréstito

déficit

montaba

a

1.768,000,

wicluíido el lya existente en agosto de 1852 por 439,000. La prensa de la época señalaba especialmente entre los factores del desequilibrio la afectación del 25 % de la renta adua-

subsi'dio acordado por el Tesoro franDefensa y la abolición del impuesto municipal. Dentro del presupuesto de 18 meses destinado a regir desde junio de 1852 hasta diciembre de 1853, representaba el primero la pérdida de 450,000 pesos y el segundo de 270,000, c sea un promedio de 40,000 pesos mensuales, cuya disponibilidad habría permitida ayudar fuertemente a la i-egularizac'rní ce

nera

cés

reembolso

al

gobierno de

al

deil

la

los pagos.



escribía Juan C. Gómez ai adeudan más de (iOü.OOO pesos: se 17,000 por febrero. 220,000 por marzo y abril, y 369,000 por mayo, junio y jtilio. "Persistir por más tiempo deo'a "El Comeicio del Plata" pu el estado actual, que es un,i bancarrota menos el nombre, drjar ciue se acumulan impagrg los sueldo.-, da los servidores públicos, que no se vea una luz que indique que los acreedores del Estado pueden conlar con alguna cosa de lo

concepto de sueldos

Sólo por

finalizar

mes de junio

el







aue se les debe, y por fin noi mirar en la situación violenta que nace de ahí sino una situación normal, que no exige nada r^e parte del Go'bierno, aberra :'ón deplorable es de veras una y peligrosa".

Empieza

la

liqíiiiílación

de

la

deuda pública.

Uno ide loa trata^dos ide 1851, el de préstamos, ^iniponia a3 Uruguay la obligación de organizar de inmediato una Junta de Crédito

Público

la 'deulda,

encargada

de

la

liquidación

y

y de convertir dentro del primer semestre de 18 52 todo l:CjUi(dado

del 6

%

de

clasificación

en la que tenidría entrada un delegaklo del Imperio;

y clasificado en de interés ,al año.

títiutlos

de deuda consolidada

eil

monto

idel

3

y

HISTORIA DEL URUGUAY

14b

Por efecto del

proceso de

pi'opio

Recién

cláusulas.

esas

reconstrucción

la

hubo que aplazar

iniciado a raíz de la paz,

en

julio

1852

ile

nacional

cumplimiento de quedó instalada la el

Junta de Crédito Público, actuanfdo én noim'bre del Im'perio don Manuel Viera Braga primeramente y luego el señor Tolenlino, y en nombre del Gobierno don Cristóbal Salvañach, don Vicente Vázquez y don Alejandro Chucarro. Mucho había trabajado la prensa, sin embargo, ejecución

rápida

la

movilizar

enterrar

de

tica

capital

el

el

indicando

tratado,

del

la

favor

de

conveniencia

de

a

muerto de la deuda y la necesidad patriópasado de luchas partidistas de que esta

deuda emanaba.

Empezó

Junta de Crédito por darse un reglamento,

la

diflposición

decía

sustancian

cuya

así:

"La Junta de Crédito Público llamará por edictos publicados en

los diarios

de esta

bierno,

iciuldad

a

todos los acreedores del Estado

documentadas y reconocidas por el Goreclamaciones que tengan despacho de éste, para que

deudas

cuyas

o

estén

y clasificadas por la misma Junta, señalando término de cuatro meses, contados desde el día 1." de septiembre, (para íque le sean ipresen.ta>das". Sólo concurrieron tres reclamantes el día de la apertura del

£ean

liquidadas



registro: Tió

de ellos

dos

volrvieron

estaban en forma, y

por

solo, asiento

48

el

a

registro

llevarse se

pesos pertenecientes a una

¡Tal fué el moide'sto comienzo de la

de deuda con que debía cerrarse Ketícias

de

la

Precisando

mos

su

el

papeles,

porque

estrenó entonces con un

pobre mujer.

montaña de 100

registro

instituido

miltlones

por exi-

dií)lomacia brasileña! el

alcance de la cláusula del Reglamento que he-

un decreto gubernativo que la Junta sólo admitiría los documentos o títulos de crédito contra el Estado que habieran seguido su tramitación en forma y esrepro(ducido, ipres'cribió

tuvieran

reconocidos

por las autoridades

administrativas o ju-

que no exhibieran documenlos o títulos aaí reconocidos o que sólo tuvieran a su favor simples informaciones, deberían aguardar la autorización del Cueripo Legislativo, "no considerándose el Gobierno autorizado para su reconocimiento". diciales

correspondientes.

Aquellos

COliltUNO

Los perjuicios df

{•uon-a.

fuera

Quedaban, pues,

forma por

f>!i

todos

Público

Crédito

149

GIRÓ

1)K

guerra

de

perjuicioo

por sentencia judicial. Pero la Asamblea sancionó a meuiados de 1853

umpliaba

notablemente

•'Sólo se

de

bienes

o

autoridades

por

una ley que

marcos.

los



efectos

tículos,

defecto

reconoce como deuda nacional por razón de perjuicios decía esa ley- el importe de los animales, ar-

guerra

la

su

en

o

autoridades a'dministrativas

las

la Junta de no reconocidos

de

r.u-ibuciones

las

de

los

tomados

públicas

o

inutilizados

militares

o

a

particulares,

depondientes

civiles

de

dentro y fuera de cualquiera de ¡os Montevideo han regido el país hasta el 8 de octubre de 1851". La justificación se haría ante los Alcaldes Ordinarios de todo un agenel país. El Gobierno designaría en cada departamento

gobiernos que

respectivos

de fiscal .con

cuail

en

último caso.

el

se sustanciarían

por

interpondrían

se

1

el

escrito

o

ílas

causas. .Los

verbalmente,

Una vez concluidas

las

reclamos

levantándose

acta

informaciones, serían

al Poder Ejecutivo para que éste dicdictamen del ministerio fiscal. En caso resolución, el Poder Ejecutivo mandaría li-

emitidos los expedientes

tara

resolución

previo

de ser favorable la quidar, documentar e inscribir ineterlo a la revisión

quedaría libre

reclamante

presentarse

btrian

desde

al

el

el

legislativa".

dentro

nombramiento de

la

del los

crédito,

En

"sin

perjuicio

de so-

caso de ser desfavorable,

acción judicial. Los reclamos de-

de seis meses computados agentes fiscales en los departa-

plazo

mentos.

A un

verdadero

tembladeral

empujaba

así

el

legislador

en

deseo patriótico de echar una palada de tierra sobre los agravios de la larga y asoladora guerra que acababa de terminar. el



decía en 1857 el docla tierra han consagrado el principio de que el Juan Carlos Gómez Estado no debe indemnización por perjuicio de los hechos de las guerras civiles, siendo eLlas calamidades que pesan sobre todo el país, de que sufren todos sus habitantes y con cuyas consecuencias todos deben cargar en la parte que les haya cabido,

"Casi todos los pueblos de

tor



ccmo las inunidaciones, los terremotos, los imcentdios, y otras grandes desgracias de las sociedades".

las

epidemias

HISTORIA DEL VRUGÜAY

150

Proyectos de consolidación de la deuda.

funcionamiento

Quedaban ya abiertas y en pleno grandes canillas de

deuda pública:

la

dos

las

de los créditos recono-

la

por las autoridades administrativas o judiciales y la de de guerra a base de informaciones sumarias en

cidos los

perjuicios

los

departamentos y de resoluciones ministeriales más sumarias

todavía.

Una

ley

1852

sancionada en

autoriza^ba

al

Poder

Ejecutiva

para iniciar con los acreedores, previa liquidación y clasificación de la deuda general, los arreglos convenientes, y también para preparar y acordar las operaciones de crédito necesarias, todo ello con cargo de dar cuenta instruida a la Asamblea y proceder en definitiva conforme a

A

lo

que ésta resolviese.

hubo una numerosa reunión de legisla' dores y hombres de negocios en el Ministerio de Hacienda para .cambiar ideas acerca de la forma en que debería efectuarse el principios de 1853

arreglo y pago de

deuda. Varios proyectos surgieron de esa

la

i?iiciativa.

Uno de liiTfio

.íitos

ellos, suscripto

por don Francisco Magariños. don Ata-

Aguirre y don José María Muñoz, establecía qur, los créprovenientes de depósitos, los pactados con garantía hipo-

tecaria de las rentas y los consolidados serían convertidos en

tulos de deuda de

6

%

de interés;

los

tí-

procedentes de suminis-

tros, contratos y préstamois sin garantía hipotecaria, serían convertidos en títulos de 3 9<- de interés; y todos los demá? en tí-

tulos de deuda sin interés alguno. Para se crearía

un adicional

pesos con

la

el

pago de

los intereses

importación y para e' pago del capital se negociaría un empréstito de 8 millones di del

garantía de

la

4

9f

sobre

la

contribución directa y de otras ren-

tas.

Otro de don Pablo Duplessis, limitábase a

fondo amorttizante a expensas de ^aP.

la

la

un

creación de

contribución directa y diver-

rentas.

Un

tercer proyecto de

tratación y.aciones

don José Zubillaga, autorizaba

de un empréstito de quincenales

de

2

100,000

millones destinados a pesos

cada

una,

al

la

con-

amorti-

precio

de

plaza, lo cual permitiría en un año rescatar 12 millones. El préstito

Sfc

empagaría en diez años mediante una entrega mensual

ce 20,000 pesos de rentas generales. El autor calculaba que

la

151

G031EKX0 DE GIKÓ

liquidación de a planear

la

la

deuda llegaría a 30 millones, pero

más de

extinción de algo

la

se

limitaba de esa

tercera parte

suma. Otro del coronel Lorenzo Batlle, proiponía la contratación de un empréstito para amortizar, al precio de plaza, la totalidad de

deuda.

la

La Junta de Crédito Público presentó un nuevo proyecto que dividía la deuda en tres categorías: la i." constituida por los créditos hipotecarios y los títulos de reforma militar; cr(í|dit03

los

no hipotecarios;

y

la

3."

por las

2.-'

la

demás

por

ideu'das.

Para el pago de los capitales de la primera categoría, se emitiría una deuda consolidada de 6 H de interés y 2 ^/i de amortización. Para los de la segunda categoría, se emitiría deuda de 3

%

de interés y

títulos de

1

'//

1

'A

de amortización.

de interés y

"^j

9?

Y para

los de la

última,

de amortización. La consolida-

ción recaería exclusivamente a favor de los capitales originarios,

debiéndose recabar de los acreedores la renuncia de "en vista de la carencia de recursos".

La Junta de Crédito Público partía de

la

los intereses

base de que

la

deuda

reconocida no excedería de 40 millones de pesos, y suministraba

un dato revelador

del

estaban registrando:

se

cruel las

desprestigio

de Jos créditos que sueldos de emplea-

liquidaciones de

vendían con la enorme pérdida de 99 %. o sea al precio de % %. Agregaba que la mayoría de los documentos registrados no estaban ya en manos de sus dueños primitivos, sino que habían sido negociados a un promedio que podía fijarse en la décima parte de su valor nominal. Sobre la base de estas diversas fórmulas y muy especialmente de la última, formuló el Gobierno un último proyecto que fué sometido al Cuerpo Legislativo en mayo de 1853. Dividía la deuda en cinco categorías: capital originario ínte-

dos y

civiles y militares se

V-i

gro de los contratos hipotecarios y de la reforma mil,itar; capioriginario de los empréstitos y contratos no hipotecarios con

tal

rebaja del 40 ojo; capital originario de alquileres con rebaja del 60 ojo; capital originario de las demás deudas con rebaja del 85 •ojo; capitales rebajados e intereses corridos hasta diciembre de 1852.

Las cuatro primeras se pagarían con títulos de deuda consode 6 ojo de interés y 1 ojo de amortización. La quinta

lidada <'on

títulos

de deuda flotante,

se efectuaría por •efectiva

el

sin

intereses.

La

amortización

precio de plaza y sólo empezaría a hacerse

pasados cuatro años.

HISTORIA DEL UKUGUAT

102

el mes de julio, último de las sesiones ordinarias, sin Asamblea abordara el examen de ese proyecto, y entonlanzó la idea de convocar a sesiones extraordinarias que

Llegó

que

la

ces se

dedicarían

se

Pero

la

exclusivamente

a

caso, decía

de

la

deuda.

"La Constitución":

Por ahora tenemos bastante con Ejecutivo a celebrar

der

consol,idación

la

idea no encontró ambiente y dando las razones del fra-

que establece

la

ley

la

con

arreglos

los

que autoriza al Poacreedores y la ley

Caja de Amortización. Antes de consolidar, es

preciso que 'quede terminado y cerrado el expediente de la deu-

Constitución atribuye a la Asamblea la deuda nac^ional y consolidarla. En un año que lleva de funcionamiento apenas ha realizado la Junta de Crédito Público la mitad de su tarea. ¿Cómo hablar entonces de consolidación? Es cierto que el Tratado de Préstamos con el Brasil impuso la obligación de consolidar durante el prnier semestre de 1S52. Pero al redactarse el Tratado se suponía que la liquidación y clasificación de los créditos quedarían terminadas en ese plazo y no en el otro mucho mayor que va resultando. El artículo 17 de

da.

la

facu'ltad de contraer la

T'iia

propuesta eui'opea ligada con la colonización.

Otro proyecto más importante presentó don Fernando ]\Ienck,

comercio de

del

Montevideo,

a

nombre de varios capitalistas deuda consolidada de 40 mi-

franceses. Partía de la base de una llones y para rescatar esa

15

deuda a

tipos

que podrían oscilar del

40 por ciento, ofrecía diez millones de pesos efectivos. El

al

Estado abonaría

el

por espacio

d.icat3

interés del >áe

6

diez años

o|o al

año y entregaría

al

sin-

500,000 cuadras de tierra cul-

ti\rables para ser coilonizialdais con 10,000 familias de 5 inidividuo» cada una, término medio. A los 5 años la mitad de las tierras se-

rían

adjúdica'das

sindicato

el

en propiedad a

devolvería

al

Estado

las la

y a los 10 años mitad valorizada por

familias,

otra

trabajo de los colonos.

el

proyecto fué acepttaido en principio y el Gobierno anunpropósito de entrar en negociaciones previa autorización legislativa. Pero ya el ambiente político estaba muy agitado y Es.te

ció

el

las autoridades constitucionales, arrastradas a la pendiente del derrumbe, no tuvieron ni t^iempo ni oportunidad de llevar más

adelante las cosas.

153

GOBIERNO DE GIRO

Se establece una raja de aiiiortizarión

Una

1852, debida

de

ley

a


deuda.

iniciativa

la

del

doctor

Eduardo

Acevedo, afectó todas las tierras y propiedades públicas a la amortización de la deuda; autorizó al Poder Ejecutivo a emprender de inmediato la mensura general del territorio, con exade la titulación privada; y prohibió desde ese momento admitir denuncias y realizar enajenacion'es de las pertenencias del

men

EJstado

Apoyando esa

decía

iniciativa

en su informe

Hacienda del Senado: "Después que la Nación ha visto enajenar

Comisión de

la

los cuarteles

de

la

todos los edificios públicos y hasta las plazas de la Capide temer es que la codicia por una parte y la indolencia por

ti.Oipa,

tal,

vuelvan a combinar para desapropiar aJ Estado de las que aun tiene en su vasta campaña. Es incalculable la riqueza que todavía poseemos en tierras de pastoreo; pero no otra

se

tierras

por los cuidados de las administraciones anteriores sino por su propio abandono en recibir y titular agrimensores de niimero a cualquier extranjero que se ha presentado con tal solicitud.

¿Qué podría importarles a éstos que al recibir el área de un campo que iba a vender el fisco se escribiesen cuatro leguas en vez de ocho, si su mensura no habría de /rectificarse desde que no hubieran s^do perjudicados? Y así es que heun agrimensor que constaba de 60 leguas un campo cercado por límites naturales, cuando tenía más de

ios colindantes

mos

visto asegurar a

400".

Otra

ley

de

obra

1853.

también

del

doctor

Acevedo,

creó

Caja de Aimortización y Rescate, sin perjuicio de las demás peraciones que pudieran hacerse en adelante. La Caja traba-

ui.a (

jaría con

ayuda

del

5

de las rentas generales y

'"á

el

producto

de las tierras públicas, y sería administrada por una Comisión compuesta de un senador, dos diputados y un representante de los acreedores.

sualmente,

bajo

El rescate

forma

más ventajosas para Explicando ce

las

el

el

de

de

la

deuda

efectuaría

se

cerradas

men-

aceptándose

las

Estado.

propósito

publicaciones

de

propuestas

la

que perseguía, Junta

de

dijo

Crédito

su

Público

autor

que

resultaba

que la liquidación de la deuda no quedaría pronta antes de algunos meses y que era entretanto necesario que la Asamblea biiciera algo en obsequio de los numerosos acreedores que estaban postergados en sus pagos.

HISTOKIA DEL URUGUAY

154

Complementando

programa

el

Caja de Amortización, abordó

práctico

que

a

Asamblea

respondía

la

forma de pago de varios créditos de importancia, entre ellos los que gestionaban los iseñores Pereda, GounouiLhou, Costa, Murguiondo,

Mientras a

la

razón

progreso en

y

y



la

pesos mensuales, se aplicaría a su rago

creciendo

arreglo

el

como representantes de otros acreedosuma de t?'es y medio de millones de renta de Aduana no excediera de 150,000

Agell y Maines, por res hipotecarios, por pesos.

la

de 1/2

% más

el

1

cada

por

y la cuota iría

9Í-

25,000

pesos

de

renta.

la

La Caja de Amortización empezó a funcionar en la últimas semanas del gobierno de Giró y q.iedó envuelta en el derrumbe de ese gobierno.

Tesoro especial para



el servicio

de la deuda.

Poder Ejecutivo presentó en esa misma oportunidad un encaminado a asegurar el servicio de la deuda sobrs la

El

plan

base de los siguientes recursos:

Un impuesto tuadas en

de

%

6

sobre

los

alquileres

de

las

fincas

si-

ciudad de Montevideo, que se recaudaría durante

la

'os años 1S53 y 1854; una contri-biición directa &obre las proPiedades inmuebles de toda la República, que empezaría a recau-

darse desde

el

primer año,

ci

años

año 1855 en adelante con la tasa de 4 por mil mil el segundo y 8 por mil en los 6 por

un derecho adicional de Aüuana del 4 % un canon sobre el capital de los montes

subsiguientes:

sobre

importación;

la

que seria del 6 por mil del valor de tasación de los montes en el primer año y 8 por mil después. Desde el año •1855 en adelante los compradores de tierras públicas pagarían públicos

precio

el

exclusivamente en

y recursos se •

depositarían

de deuda. Todas una caja provista de

títtilos

en

rentas

las

tres

llaves

Que estarían en manos de un diputado y dos senadores. La Asamblea no llegó a ocuparse de este plan. Pero en cambio

incorporó a

pesos con

la

destino

ley al

de Presiupuesto una partida de

servicio

de

Es interesante agregar que al de la deuda, uno
:solidación

Noticioso -bre

la

Universal",

base

habló

la

600,000

deuda.

el estudio de la conórganos de la prensa, "El de implantar el papel moneda so-

iniciarse

los

de igarantías ihipotecarias

suficientes.

Felizmente

GOBIEBNO DE GIRÓ

la

mucha polvareda

idea levantó

-j

]

55

quedó abandonada. El país

continuaba salvándose así del emnapelamiento en lo más recio de sus crisis, gracias a las resistencias de un comercio sano y sólido acostumbrado a cumplir honradamente sus compromisos y p.or lo mismo a comprar y vender en metálico.

El monto de

A

la

deuda.

mediados de 1852,

al pedir a la

Asamblea autorización para

entrar en arreglos con los acreedores, calculaba asi

de Giró

el

monto de

el

gobierno

deuda pública:

la

Deudas contraídas con afectación de rentas hasta octubre

de

1851

Deudas contraídas en

5.632,80-9 la

misma forma después de 468,481

octubre Cálculo de

deuda pendiente en enero de 1852.

la

.

18.972,934

25.074,224

En el primero de esos rubros figuraba ©1 subsidio del Tesoro francés al gobierno de la Defensa por cerca de un millón y medio de pesos y otras operaciones realizadas por el mismo gobierno para

Las

el

levantamiento de fondos.

rentas

públicas de 1853 habían sido calculadas en 1.613,800 pesos, y basta poner frente a frente ambas cifras, la de la deuda y la de los recursos, para palpar lo angustioso de la

embargo que cuando esos cuadras se formulaban, todavía no había empezado a funcionar la Junta de

situación. Adviértase sin

Crédito Público y que, en consecuencia, el cálculo de la deuda pendiente carecía absolutamente de base. A mediados de 1853 el monto ya liquidado y clasificado por

Junta de Crédito Público llegaba a 26 millones. íruelanio todavía montañas de expedientes por liquidar y clasificar! ia

A'alor de los

documentos de

crétlito.

Señalando los efectos de una saludable reacción en el nivel del crédito público, obra del esfuerzo en favor del arreglo de la deuda, decía 'E! Comercio del Plata" en marzo de 1853:

'

HISTORIA DEL URUGUAY

lótí

"Documentos que hasta hace poco no

compraban sino

se

cuarto por ciento y a un octavo por ciento, tienen hoy

% y aún del 6 Vf". La reacción era grande,

un

a

precio

el

del 5

por ciento. Pero

sin

duda alguna: de un octavo

¡cuánto trayecto

malizar y prestigiar

al

seis

para no]-

crédito del país!

el

Ijegislación tributaria.

recorrer todavía

a

—La

ley de

Aduana.

Eu 1853 fué sancionada una ley de Aduana derogatoria de la Que venía rigiendo desde 1837. Ein materia de importación queda^ban exonerados de impueá1o las máquinas, el carbón de piedra, las cascaras para curtir, la

sal,

el

ganado en

general 15

%

el

20

'^/c,

los

pie,

otros artículos de la

misma

frutes similares de los índole.

del país y Se establecía como derecho

porcentaje se

y ese

ejemplo,

por

bajaba,

a favor de los tejidos de hilo o de seda y al 6

%

del hierro sin labrar, o se alzaba al 25

para

ba, el café y los comestibles en general, al

ropa hecha,

bles, la

tanas, y al

35

''/o

el

al

a favor

el

azúcar, la yer-

Te

para los mue-

jabón, los sombreros y las puertas y ven-

para las harinas, los fideos,

teca, los cigarros, las velas de sebo,

cerveza.

30

%

Deberían liquidarse

precios corrientes al por

los

el

derechos sobre

mayor con

La exportación de frutos

el

del país

queso, la

aguardiente, 10

el

'/c

la

man-

vino y la base de los

el

de rebaja.

quedaba absolutamente exo-

nerada de derechos.

Y

en cuanto

trasbordo y

La misma

el

al tránsito,

eran declarados libres de derechos

el

reembarco.

las aduanas y receptorías de MonteSan Salvador, Carmelo, Mercedes, Higueritas, Paysandú, Salto, Santa Rosa, Constitución, Rosario, Ar-

ley habilitaba

video,

Colonia,

tigas,

Cebollatí,

se

Suriano,

Taicuarembó

autorizaba en Montevideo,

.y

CuaTeim. Pero el depósito sólo Maldonado, Colonia, Higueritas,

Paysandú, Salto, Santa Rosa y Constitución. Apenas promulgada la ley, el comercio de Montevideo se presentó al Gobierno reclamando contra el almacenaje. La ley de 1837 fijaha ese Siervi/cio en un oictavo (por ciento y la nueva ley un cuarto por ciento. El derecho quedaba, en consecuencia, duplicado en circunistantcias en que convenía atraer al puerto en

la

mayor corriente comercial

e'

Gobierno un decreto suspendiendo

posible.

Convencido de el

ello,

cobro del recargo.

dict6

If)?

GOBIEBNO DE GIBO

Por las mismas razones de conveniencia portuaria, la Cámara de Diputados rechazó a mediados de 1853 dos proyectos qua gravaban el trasbordo y el reembarco. En cambio fueron sancionadas dos leyes estimuladoras de la la de mayo de 18 52 que exoneraba de derechos a c-xportación :

los cueros caballares secos y sallados, y la de junio siguiente que reducía fuertemente el derecho sobre los cueros vacunos secos

o salados. Justiificando

Hacienda de la

la

de

esas

leyes

decía

Comisión

la

de

Cámara de Diputados que era necesario fomentar

extirpacum de

campos de

primera

la

la

la

inmensa cantidad de yeguas que inundaba

los

República.

la segunda, pidieron algunos diputados que el impuesto sobre los cueros vacunos fuera abolido en vez de rebadecía el doctor José María Muñoz jado. Nuestros derechos

Al

discutirse





son

rmájs altos

que

los argentinos, y a

causa de ello

los

cueros

dí;l

contrabando con rumbo al puerto de Buenos Aires. Otro diputado, don Salvador Tort, corroborando esa tesis invocó una inspección personal que acababa de realij;ar en Buenos Aires. Durante tres días de operaciones portualitoral

rias

oriental

salen

de

realizadas a su vista, había constatado que

de los cueros que salían

para

ultramar

eran

la

de

sexta parte

procedencia

oriental.

Otra forma de contrabando más grave preocupaba tle

Montevideo:

la

que

se

realizaba a

la

sombra

del

comercio reembarco

al

trasbordo de mercaderías extranjeras. Y para combatirlo propusieron los comerciantes, en una reunión celebrada en la Coo

un plan de contrallor que sinltetizaban así: Los buques que operan en los puertos del litoral deberán presentar sus guías en forma; las receptorías devolverán a la Aduana de Montevideo las guías originales cumplidas; la policía aduanera ejercerá una vigilancia especial en las operaciones de

lecturía General,

removido.

Sobre la base de ese plan dispuso el Gobierno en 18 52 que las autoridades portuarias del Uruguay sólo admitieran los buiques que llevaran las guías lacradas y selladas por la Aduana de Montevideo,

Oriental

PaLmira o Higueritas, o procedían de puertos argent,inos.

Colonia, si

por

el

Consullado

También fué restablecida la Receptoría General de Higueritas y se dirigió el Gobierno a la Asamblea en demanda de autorización para comprar y armar un buque destinado a la policía del río Uruguay.

HISTORIA ÜEL URUGUAY

158

La escasez de instalaciones dificultaba grandemente la aplicade algunas de las medidas adoptadas para dar facilidades

ción al

comercio y combatir

ceptorías fluviaües,

cuencia a permitir

el

donde el

contrabando, principalmente en las reel

Gobierno se veía obligado con

fre-

depósito particular por falta de almacenes

fiscales.

Se establece la Contribución directa.

La idea de establecer la contribución directa fué lanzada desde las columnas de "La Constitución" en 1852. Una vez generalizado e'. verdadero concepto del impuesto escribía el doctor Eduardo Acevedo la neces,idad de que todos contribuyan en proporción a sus facultades al sostén de las





cargas públicas nuestro



podrán realizarse reformas

importantes

en

sistema económico. Establecido el imipuesto capital, vendría la abolición de las aduanas que

viciosísiimo

directo sobre el

la más desigual de las contribuciones. La reforma supone la previa organización de las municipalidades, auxiliares poderosos para la repartición y recaudación del impuesto, y el levantamiento del censo de la población y de las propiedades. Tomadas estas medidas se principiaría con una cuota muy peque-

constituyen

ña disminuyendo proporcionalmente los derecihos de aduana, y por algunosi años hasta arribar gradualmemte a la abolición de las aduanas y a la organización de una contribución directa con recursos fijos para atender a todas nuestras necesidades. Por el momento podría destinarse su pro'íucto a la amortización de la deuda general. así se seguiría

La

ley

de Contribución

Directa

proyectada y

1853, establecía la cuota uniforme del 2 por



sancionada on sobre todcs los

Los contribuiyentes deberían hacer la ante las Juntas Económico-Administrativas o Comisiones Auxiliares, y en caso Ü3 no hacerlo así o de disminuir notablemente el capital, practicaría el avali'io un Jurado compuesto del Juez de Paz y do dos vocinos sorteados de una lista de veinte formiada por los propios Juecr-s :le Paa al principio de cada año. Quedaban exentas del impuesto las propiedades de mil pesos abajo, y las urbanas o rurales improduccapitales de la Reipública.

declaración

de

siu's

capitailes

tivas.

Otra ley sancionada en ducto del nuevo impuesto el

déficit deJ

Presuipuíesto.

la al

misma oportunidad pago de

la

aplicó el

pro-

deuda, luego de cubierta

GOBIERNO

GIRÓ

I)K

Establec.ase una cuota moderada del igual

i)ara

todos los capitales,

de Hacienda de

de un vez a ser inmediatos".



C inviene

159

— —

decía !a Comisión

Cámara de Diputados ".le que principie habitual el sistema, más que por sus resultados la

agregaba

la

Comisión

tablecer un sistema de rentas que ponga

eventualidades que presenta

las

por mil absolutamente

2

como medio

el

dictaminar '.• al



'es-

erario al abrigo d?

que actualmente existe en

la

República".

La 18.54.

una

contribución

debía al

empezar a rpíaudiñ-'se desde año siguiente, y entonces con

adicional que autorizaba a los impuesto con títulos de deuda por última amortización mensual.

cláusula

cancelar

de

directa

Pero sólo fué aplicada

la

el

contribuyentes el

a

precio máxi''To

Pittentes de giro.

La

ley

de Patentes de Giro sancionada en 1852 establecía

categorías con cuotas que oscilaban

de

10

a

1')

100 pesos. La de

100 pesos era aplicable a los saladeros y panaderías y la de SO las casas de consignación y boticas al por mayor. La

pesos a í,ian

mayoría de

los

establecimientos pagaba

en

consoouencia,

cuotas extremadamente moderadas en armonía con las estrecheindustriales de la época. Las casas extranjeras estaban obligadas a pagar la patente inmediata superior o en su defecto el 25 por ciento de recargo,

ces

que tuvieran empleados dos jóvenes del país, tratándoscy uno tratándose del comercio minorista. Quedaban prohibidas las tiendas volantes o mercachifles.

salvo

del comercio may:rista,

Papel sellado.

La de Papel Sellado del mismo año establecía nueve

sellos,

de 20 centesimos aplicable a las obligaciones de menos no 20 pesos, hasta e\ de 9 pess aplirable- a las obligaciones de

clesde el

20,000 pesos arriba. Al Impuesto de papel sellado quedaban los

vales y

escapaban

sujetos

demás documentos otorgados entre

los

pagarés,

particulares, pero

los recibos por cancelación de contratos consumados de actos condluídos, otorgados por vía de resguardo simplemente, como los recibos de alquiceres y jornales.

ü

HISTORIA DEL imUGUAT

160

Kiiajenación de rentas.

PQder Ejecutivo fué auitoriaado en 1853 para vender la mitad de las rentas de Aduana, mercados, .corrajles y lotería, por uno o dos- años. Los rematadores intervendrían en la adminisEJl

tración y recaudación de las rentas y iprqpon'drían toldo

el

perso-

nal subalterno, el cuail sería amovible a voluntad del Poder Eje-

El

cutivo.

nombramiento

de jefe

ele

la

oficina

sería

privativo

del Gobierno.

Prestigiando

el

proyecto,

decíJa

la

Comisión de Hacienda de

Cámara de Diputados:

la

-Es

un pensamiento "digno de fer secundado por cuanto él a la buena administración de las rentas, que para exis-

conduce tir

necesitan

inteligente

y

activa

fiscalización!.

.

.

Encomendar

una parte de este trabajo y de ese deber al interés individual más apropiado de alcanzar todos los resultados es el medio í'petecibles, y de cierto que una vez reconocida esa conveniencia sería lástima no aplicarla a otras rentas del Estado..." Esa ley tenía su principal antecedente en la de 1834, obra de

la

administración

Rivera,

largamente

gobierno de Suárez durante todo

el

luego

aplicada

período de

cunstancia que fué invocada por los oradores de

la la

por

Defensa,

el

cir-

minoría co-

lorada para oponerse a la nueva enajenación. El gobierno de Giró



decían

-- despojó con ^u decreto de

marzo de 1852 a los compradores de la renta de Aduana y demás rentas enajenadas por el gobierno de Suárez, a título de que la recaudación de impuestos orrespondia al Presidente de la Repú'bl;^ca. Puesto que albora se reaicciona, lo que corresiponde tes reintegrar en el ejercicio de sus derechos a lo.s compradores despojados. Tal era la argumentación de los doctores •José María Muñoz y Juan Carlos Gómez. El Presidente Giró había dictado su decreto ante la necesidad de vivir e invocando que las /hipotecas constituidas por su antecesor reconocían un origen pura y exdlusivamente administrativo, es decir, sin ley que las autorizase. Eran razones que podían discutirse sin duda y que se discutieron con calor en la Aisamblea |de 1852, pero que no (podían invocarse contra la autorización que peldía Go])i'erno al único Poder ^capacitado ,eil

;para otorgarla.

GOBIKRNO DE GIRÓ

Abolicióu

(!«'

inii)u<'slos.

fueron

impuestos

Varios

Giró a despecho de

.cuota. Ste

y fn

cobraba

conc'eipto k\e

medio

de

facilitar

durante

abolidos

angustioso do

lo

En primer lugar, la Cámara de Diputados la

161

La Comisión de Hacienda de

alcabala. la

''/

4

Ca .Comisión

de'bía

transacciones

las

la

reforma mediante la rebaja de sO'bre el vallor de los bienes raíces

"inició

'61

administración

la

situación financiera.

la

cobrarse

el

2

combatir

de

y

Vr el

,

como

fraude.

el doctor Eduardo Acevedo, y llana. Pero en el Senado prevaleció la idea abolicionista, y cuando el asunto volvió a la Cámara de origen pudieron uniformarse las opiniones en el mismo sen-

A]

discutirse

sin

éxito,

la

resultando

tido,

propuso

proyecto

el

abolición

de

lisa

la

ello

de julio de 1852

ley

impuesto antieconómico que

bienies

enicarecienido

inmu'el)l'eis

trababa

que suprimió

de los acostumbraba a vendedores y compradores a establecer precios ficticios para defraudar fisco. En segundo lugar, el impuesto municipal creado por decreto

ese

'los

la

circulación

trasipasos y riue

a'.l

Defensa en 1849. Era un derecho adicional 4 el Ve todos los artículos de

del

gobierno de

de

Aduana que recargaba con

la

importación y con

dos y medio pesos

El gobierno de Giró se presentó a autorización

licitando

para

la

cada barrica de harina. Comisión Permanente so-

suprimirlo,

y

esa

corporación

le

juzgando que se trataba de un impuesto que "causaba gravámenes de consideración al comercio del país y fomentaba un escandaloso contrabando". Ya anteriormente habían sido aibólidos o notaMiement,e rebajados algunos derechos de exportación, según lo hemos dicho al ocuparnos del impuesto acordó

la

venia

de Aduana.

En

tercer

lugar,

y ventanas

puertas

el

impuesto llamado de luces, o sea el de en 1844 durante el gobierno de la

creado

Defensa. Era un impuesto antihigiénico que inclinaba al contribuyente a disminuir el número de aberturas de los edificios. El Podter Ej,ecutiivo

de

la

cuota

a

ise

la

dirigió a

cuarta

había ¡deas más radicales y de junio de 1852.

ley

11

-IV

la

parte. el

Asamblea

pUdienldo la reduocióa

Pero en el Cuerpo Legislativo impuesto quedó abolido por la

HISTORIA DEL URUGUAY

](>2

Cioación de impuestos (por simples

mismo gobierno que

El ción

o

ires

dificultades

estuvo

abolición

expuesto

concepto

acerca

Al tiempo de

tomaba

así

de

iniciativa

la

la

reduc-

de impuestos gravosos a despecho de las enorfinancieras conflictos

a

alcance

del la

que

rodeaban,

le

parlamentarios de

sus

más de una

por

facultades

seiialó

al

celo

de

la

nente varios impuestos que había decretado

constitucionales.

La Comisión

el

1852,

Comisión PermaPoder Ejecutivo

sin

autorización

rio,

y éste contestó que efectivamente había creado

legislativa.

vez

equivocado

su

clausura de las sesiones ordinarias de

Cámara de Diputados

ia

^cleoi^tos.

interpeló

al

ministe-

un derecho

cobre ¡la ina-vegación en etl puerto die ía Colonia, un peaje en e
Pi esupiiefjtos.

El de

A

1853.

me'dia'dos

de 1852 fué

isanci.ona-do

un Presupuesto que debía

regir hasta fines de 1853, o sea por espaicio de 18 meses.

Los gastos anuales estaban fijados en 1.760,879

¡pesos así

cf!s-

tjibuMo's:

Cuerpo

Leigisilativo

Ministerio

$

de Gobierno^ y Relaciones Exteriores " Hacienda

Guerra

Y f

los

recuj-sos

en 1.613,800

.

67. 266

514,515 239,507 939,592

pesos a cargo

de las seguientes

'lentes tributarias:

Aduana de Montevideo

1.200,000

Tmipuesto municipal

180,000

Papel Sellado y Patentes

150,000

163

GOBIEKNO DE GIRO

Puerto

8.000

I

30,000

de Montevideo

Policía

9,000

Correo Corrales de Montevideo

3

6,000

800

Juzgaido Ordinario

La

Policía

del

Departamento de M'ontevideo

costaba

al

año

68,000 pesos por corucepto de suéldeos de 16 comisarios, 16 sargeatos, 20 cabos y 40 celadores. Y la de todo el resto del país 177,000 ipesos. Al Depantamento de Maldonado, que entonces abar-

caba también Rocha, se gen'tos, cinco

cabos y 40

le

asig-naban cinco comisarios, cinco sar-

rielaidores.

Con Jigeras variantes, eran

de todos los o;tras departamentos. La enseñanza pública en todos sus grados absorbía

las

cifras

4

0,000 pe-

comprendidos los cursos universitarios a cargo de tres catedráticos de Derec'ho y cin,co de Preparatorios, la ÍEscuela Normad, el Colegio Nacional |y las 3 5 escuelas primarias que funcionaban a la sazón. srvs,

De

esos 40,000

pes'OS,

corresiponidían

a

la

enseñanza primaria

28,673 por los siguientes conceptos:

Su'edos

$

23,760

Gastos

3,329

Alquileres

1,584

El Ministerio de la Guerra se llevaba en cambio más de la mitad del monto total de los ingresos, por efecto naturalmente de la gruesa herencia de sueldos y pensiones amontonados durante la larga lucba que acababa de terminar. Véase el número de los jtfes, oficiales

y soldaJdos comprenididos en sus planillas:

Estado Mayor Activo

9 Brigadieres.

Estado Mayor Pasivo

Plazas del Ejército de Línea

UISrOUIA UEL lkuguay

164

Comparados los ingresos con los egresos, resultaba un déficit de cerca de .150,000 ipesos, que a naidie ailarmaba en esos momentos de fuerte oiptimismo. Haciénidose eioo del sentimiento general escribía "La Constitución": Hay idiiversas rentas 'de oaimipaña ique no están callcuJladas y las rentas tcalcuiLadas están en su mínimo. El Poder Ejecutivo, de

deberá librar al erario de adigunos recargos. habrá entonces sobrante. Y es por comprenderlo atsí quie él Gobiier-no ha rediuci|do el Lmipuesto «obre los cueros id e dote reales a 75 .centésiimos y ha sulprimfdo el derecho de acuerldo oom la

En

vez de

puertas lEn

^y

liey

déficit,

Ventanas, Ja aftcabala y el i!mÍpu,©&to municiipai. la Asam'bliea extendió a 'las viudas e 'Kijos menores de

.l'8 5i3

los jubillados

ila

ley

nuievo

rubro de

puesito

de Gastos.

El üe

de pensionéis de 183 8, icrean,do con

dentro

egreiscs

idel

ya

diesequilibrado

^ello

un

Presu-

1854.

Varios meses antes

que acabamos de

die

tíerminar el

ipllazo

fijado al Presu^puesto

extractajr, fué sancionado' el

El nuevo Presulpuesto, en

el

qu'e figuraba

de 18 54. por lírimera vez

el

servicio de la <deu]da/ pública, su'bía a 2.8i36,84:8 pesos, distribuidos

en

la

siguiente forma:

Cuerpo Legislativo

$

Ministerio de Gobierno y Relaciones Exteriores. "

Haicienda

"

Guerra

Deuda Pública La

Policía del

65,2 52

634,402

489,916

1.047.278 600.000

Departamento de Montevide/o aparecía con 120

celadores y la de cada una de Los departamentos de

campaña con

guarismos que denunciaban progreso sensible con relación a os á&\ año anterior. El número de escuelas primarias subía a 55, correspondiendo 11 al departamento de la Capital y 44 al resto del país, con un costo de 71,78 pesos, distribuidos en esta forma: 5 6, I

GOBIERNO DE GIRO

165

Departamento de Montevideo

Los demás departamentos

Maestros.

42,240 7,920 4,400 3,000

Alquilere.*

Gastos

.

Útiles

La

planilla ide la Uniíver.sida(cll seguía íimitada a 11,48

p'esos

con destino al siguiente cueiuio de profesores: un oaítedrático de Derecho Civil y de Gentes; un catedrático de Derecho Administrativo lios

y Economía

temáticais y Latín;

cuatro

Política;

para la enseñanza de

la

catedráticos

de

Preparato-

Física Experimental, Filosofía,

dos profesores de idiomas vivos, uno

Ma-

de

di-

bujo y un maestro de lia, Escuela Normal. En cuanto al ejército de línea, véanse las cifras del Presupuesto de 1854: Estado Mayor Pasivo

Estado Mayor Activo

9 Brigadieres. 4

Coroneles Mayores.

Plazas del Ejército de Línea

35 Coroneles.

Artillería

65 Tenientes Coroneles.

2 Batallones

72 Sargentos Mayores.

152 Capitanes.

81 Tenientes

480

tería 1

26 Ayudantes Mayores.

126

de Infan-

Escuadrón de Caba120

llería

1.'^.

726

59 Tenientes 2°. 97 Subtenientes.

Dos diferencias de bulto resaltan de

la comparación de estas con las del año anterior: el fuerte eumeuto de! cuadro Estado Mayor pasivo por efecto de la reincorporación de

cifras

del

jefes y oficiales, y la reducción a la mitad dé los soldados de

lí-

nea. Cojnlpüíetanfio

los

datos del PVesu^'uesto con

otrais

informado^

ues de origen ofidaL, (fijaba así "/El Colmiercio del Plata" el número (de individuos dependientes d'e la.s diversas planillas del Ministerio de la Guerra en

1853:

HISTORIA DEL URUGUAY

166

Número de

Lista Militar Activa

.... .... ....

Pasiva Oficinas de guerra Viudas, menores e inválidos »

»

.

individuos

Sueldos y Pensiones

167

GOBIEKXO ÜE GIBO

ttgido por

Presupuesto

el

185E. Fatltanja todo


el

segundo

18'53. Pero el déficit un millón y medio de pesos, computando las adicionales que había votado la misma Asamblea por pesas, y los pagos fuera de Presujpu'esto que montaban a incluidos 43'9,000 del déficit que ya existía a mediados

mestre de

maba

y

i

se-

ya producido y liquidado se aproxi-

a

79,000 :pesos pagaidos

partidas

498,000 955,000,

de 1852

Tesoro framqés por concepto de reem-

al

bolso del subsidio al gobierno de la Defensa.

Coíno no bastaba votar los ipagos, dedde que el desequilifinanciero seguía acentuándose, la As.imblea autorizó timbléu por otra ley la contratación de una operación de crédito por

brio

un millón de pesos con garantía de un derecho

Aduana creado con

adicional

de

ese objeto.

Pesaba ya tan rudamente el déficit en m^yo de 1853, que la Cámara de Diputados sancionó una moción del doctor Eduardo

de los

que se establecía que el Pode Ejecutivo disronde les fondos destinridcs al pago de las dietas legisladores, mientras no quedara recule rizado el sueldo

de

empleados públicos.

Acevedo por rlría

la

librtrr.-cnte

los

La en.señanza

i>íil)lica.



primarias.

l^^s rsciieLis

Bajo la presión de la guerra habían ido desapareciendo casi todas las escuelas del país por falta de maestros o de recursos para pagarlos. dos

en

públicas

escuelas

a meidiados de 18 52 establecer pueblo de campaña, y al comuMinistro de Gobierno doctor Flo-

de Giró resolvió

El gobierno

nicar esa resolución

cada

decía el

rentina Castellajios a las Juntas Econcanico-Administrativ,a,s: "Una de las primeras atenciones del Gobierno entre las muy

numerosas sido

que

facilitar

prende que

los

ella

rodean

le

medios de

ni

educación

constitucional,

pública,

ha

porque com-

de nuestras instituciones". después a la Asamblea el propio sin instrucción no puede haber paz

es la base y garantía

— decía poco Giró — de que

"Convencido Presidente

la

marcha

su

desde

mejora posible,

el

Gobierna

decretó

establecimiento

el

nna escuela de niñas y otra de vaiones en cada pueblo". Antes de finalizar el año 1852 se practicó un recuento ¡os establecimientos

escolares que

mento de Montevideo. Dentro de de la Aguada. Cordón. Paso del

funcionaban Ir

ciudad

Molino,

y

en.

de

Uíiión,

de

de

&\

Departa-

los

distritos

Miguelete

y

HISTORIA DEL URUGUAY

168

había 4 9 escuelas, entre particulares y gratuitas, con alumnos, de los que 680 eran niñas y 1,110 varones. No se establecía en el recuento cuáles eran las escuelas públicas y cuáiles las particuilares. Pero las primeras estaban en notable minoría, según resulta de una exposición que va-

Cerro j.

,79

meses después, en mayo de 1853, presentó el doctor Palomeque atl Instituto ,de Instrucción Pública. En la ciudad de Montevideo decía el doctor Palomeque ííólo está abierta la escuela primaria de la Universidad que sostiene el Instituto. No hay una sola escuela pública de nirios





'

ñas en todo

el 'departamento die la CaiJital, y las de varones del Cordón, Aguada, Unión, Reducto y otros puntos están cerradas por falta de maestros, o más 'bien dicho por la irregularidad de

ios pagos.

No podía

ser

más ventajosa, naturalmente,

situación

la

de

campaña. Contestando una circular del Ministerio de Gobierno y otra del Instituto de Instrucción Pública, véase los datos que suministraban las Juntas Económico-Administrativas acerca del estado de Sa enseñanza pública a fines de ias

3

escuelas

de

852 y principiosi de 1853: San Josc. iFunciona una sola escuela con



que

emplean:

se

la

cartilla,

catón,

el

5 5

libro

el

alumnos. Textos de los niños,

2. o

"gramática de Herránz y Quirós y el catecismo. El maestro empieza por "la enseñanza de la escritura en papel rayado por la

los

mismos alumnos; sigue más adelante con

i-uentas;

con

¡a

lectura;

gramática,

la

después

ortografía práctica o sea escribiendo los alumnos

voz se les dicta. de

multiplicación.

éstas

en bandos

obtienen Salto.

Como remate Los con

de tareas se

alumnos

dos

h.íllanse

asientos

con

finalmente

y

con

las la

que a viva resuelven problemas lo

divididos

l.onoríficos

cada

en

clases

uno que

y se

como premio.

—Hasta

marzo de 1853 no

existía

una

sola escuela

pública

y la única que se fundó en esa oportunidad tuvo que cerrar sus

puertas por falta de recursosi,

cin-co

desamparados los 62 alumnos que a en cambio dos escuelas particulares.

meses después, quedan^do concurrían. Funcionan

ella

Soriano.—'Lia única escuela pú'bllca de varones que funciona en Mercedes está clausurada por falta de recursos. Se sostenía con el producto del impuesto de Corrales actualmente rematado. Su director don Ptídro Mizaga se ha asociado a líos presbíteros don Carlos Palomar y don José Policarpo Amilivia para la fundación

169

GOBItR.XO DE GIRÓ

una escuela particular, a la qno ha sido cedido el material de bancos y útiles de la escuela pública bajo el compromiso de dar enseilanza a una veintena de niños pobres. Por estos 'datos que extraemos de las no'tas dirigidas al Miele

li

de Gobierno, es fácil juzgar del estado desesperante de

isterio

enseñanza pública en la campaña. Las eiscuelas se cierran decía "El Orden" en agosto de 1853 y los maestros se van huyendo del hambre, en busc.i de otros trabajos que les

la





permita

vivir.

Faltaban

Pública

trucción

Pero no

recur.^os.

los

demuestra una

lo

gesf.ón

los

anhelos de progreso, según

Presidente del

del

Manuel Herrera y

don

Instituto

Obes,

de Ins-

mediados de

a

1852, a favor de la instalación de una Escuela Norma.l encargada de formar maestros para toila la República.

Contra

las (iislinciciii

.s


ch'tst's.

Dentro de ese misimo miserable ambiente de las escuelas púuna vez la idea -de excluir al niño blicas surgió más de pobre a título cíe mezquinas distinciones anatematizadas por la Constitución de la República.

En 1852 excluir

a

trataron

los

una maestra

de ponerse de acuerdo

alumnos de al

Instituto

color.

de

Al año

Instrucción

regencia de la escuella de niños de

la

los

maestros para

siguiente

se presentó

Pública solicitando

Unión bajo

la

la

condición de

que no serían admitidos los menesterosos. El doctor Joaquín Requena,, que formaba parte del combatió esa pretensión monsfFuosa. Ya en 18 8 8



Instituto,

dijo



hubo tentativas análogas, y entonces por indicación del orador se orilló la dificultad, como podría orillarse ahora, dando a los preceptores particulares una retribución por cada alumno pobre que admitan mientras no haya escuela pública abierta. Y el Instituto

Una

hizo suyas esas

escuela



ideas.

coIcí-.

Con el propósito de combatir esas mismas tendencias el docEduardo Acevedo, ayudado por los ¡doctores Antuña y Palomeque, acometió la fundación de una escuela de adultos de color. La escuela empezó a funcionar a fines de 1852 con cincuenta

tor

HISTORIA DEL rRUGüAT

170

y tantos alumnos en los salones de la Universidad, bajo

la

ción de don Mariano Pereira, colaborando en las tareas de

señanza

direcla

propio doctor Acevedo y los dos ciudadanos que

el

enlo

habían secundado en su empresa.

Quedan de

la

ban

allí



unidos

decía

instalación de la escuela

"La Constitución" al dar cuenta "los mismos que ayer se mata-



piedad".

sin

Conflictos
No estaban

bien deslindadas las atribuciones del Instituto de

de las Juntas Económico-Adminisdeterminaba frecuentes rozamientos y hasta ver-

Pública y ías

Instrucción

trativas y eso

daderos conflictos entre ambas corporaciones. En 1853 llegó al Instituto la denuncia de que

el

escuela de don José María Cordero, una de las

Ja

pas escuelas

particulares de Montevideo,

ayudante de

más

prestigio-

había roto los dientes

y desarticulado las mandíbulas a un niño. El Instituto en

el

dentes

nombró

acto una comisión investigadora y luego pasó los anteceail

Juz-ga.do del

Crimen y mandó olausurar

la es'cuela, has-

que los Tribunales resolvieran lo que creyeran conveniente. Pero. el director reclamó ante la Junta y ésta dispuso la reaperta

tura de

la

escuela.

El Poder Ejecutivo puso

fin

al

conflicto

mediante un decreto

que d'eclaraba que el Instituto era el encargado de dirigir la enseñanza como cuerpo cons'ulitivo de>l Gobierno pero sin invadir las atribuciones municipales. La enseñanza, agregaba el decreto marcando la función que asignaba al Instituto, requiere un centro común sin el cual ella tiene que carecer de base y de uniformidad.

La

en.señanzji secunílaiiía

y suporipr.

El Colegio Nacional que funcionaba de tiempo atrás en cail

de

la

Universidad, fué tras-jadado en 1852

gio de la Unión, esipacioso edificio

momento

av

cimiento.

Al ordenarse

mentar

el

que permitió

a'l

el

lo-

Ülamado Cole-

des'de

el

primer

número de alumnos

internos del estable-

traslado se

también que

el

resolvió

las

Juntas Econcmico-Administrativas de la República dispondrían de varias becas con destino a los alumnos de sus respectivos de-

171

GOBIERNO DE GIRÓ

partamentos, que ellas elegirían "entre las familias más pobres y más recomendables por sus servicios prestados al país y consultando también las aptitudes de dichos alumnos". Al alejarse del ambiente universitario, sufrió algo

Lo demuestra una denuncia

del establecimiento.

según

te,

en

la cual

él

cuarto que

el

del

la moral año siguien-

rector del colegio destinaba

alumnos, había calaveras y canillas humanas colocada-s aMí sin duda alguna para infundir sentimientos de de

a corrección

Les

pavor.

Las clases de estudios preparatorios prosiguieron en

el

viejo

local de la calle Maciel esquina Sarandí, con notables ampliacio-

nes según lo acreditan los cursos de extensión universitaria «argo del profesor Amadeo Jacques y del químico Lenoble. El profesor

de

cia

la

Amadeo

a

Jacques, distinguidísimo hombre de cien-

Universidad de París, que llegó aquí emigrado en 1852,

al Gobierno un plan de organización de la enseñanza secundaria que las penurias del Teroso público no permitieron aceptar, viéndose obligado por tal causa su autor a trasladarse

presentó

Buenos Aires, donde encontró cado inútilmente entre nosotros. a

He

las

facilidades

que había bus-

aquí las Líneas generales de ese plan:

del programa de estudios de la Universidad de Montevideo denuncia un vacío entre la enseñanza superior de

examen

El

las lenguas y literaturas filosofía,

latina y francesa, la jurisprudencia,

matemáticas, que sólo aprovechan

las

periores de la sociedad, y

estrictamente

necesario

la

para

a

las

enseñanza primaria limitada las

la

clases su-

más simples exigencias

a

lo

socia-

Entre los hombres de pensamiento y los que sólo actúan por 'bl'azos, es aiecesario que exista una clas'e intenmedia apta para la dirección práctica; y si esa clase es necesaria, también debe serlo el funcionamiento de los estudios para formarla. El nuevo programa debería componerse de tres partes principales, como medio de abarcar la agricultura en su acepción amplia y comprensiva de las riquezas vegetales y animales, la industria

'.cs.

sujs

transformadora de Tal era

Jacques

Física

I. s*

productos brutos y

el

comercio.

que enseñaría:

tico,

1(

la

los

programa, y para realizarlo proponía el profesor fundación de una escuela científica de carácter prác-

el

y química elementales, adaptables

produiotos de

fano

e

la

industrial y al

al

cultivador

sean Vegeta'les o animales, comerciante.

tierra,

al

de

arte-

HISTORIA DEL URUGUAY

172

Mecánica

II.

práctica,

adaiptable

rurales

tareas

las

a

in-

e

dustriales.

y geometría ap!li)cada<s, adaptables a los ofiaiplioación a lai ten'eduría de dibros y oipecon rio,s comerciattes raciones de banco y de cambio. Este importantísimo plan para cuya buena ejecución tenía so-

Aritmética

III.

bradas aptitudes el profesor Jacquos. no pudo ser considerado según hemos dicho, dentro de la angustiosa situación financiera fiue subsiguió a la Guerra Grande; pero no obstante ello, su auestaba en(Cariña(do con el país, trató de vincularse a la enseñanza universitaria, mediante la fundación de un curso gratuito, (de fí'Sica y químida experimentales con ajjyuda de los elementos de laboratorio que había traído de Europa. El excelente tor, ique

resultado de ese ensayo

lo

determinó en 1853 a dictar cursos

pagos. Pero sobrevinieron luego los incidentes políticos del

derrumbe del gobierno de Giró y marchó para Buenos Aires donde obtuvo

de julio y

ques se

el

el

la

mes

profesor Jacdirección del

Colegio Nacional.

La

iniciativa

del

ilustre

franicés

prolfesor

estimuló

al

señor

Lenoble, com'petentísimia proíesor de química de la Universidad, a dictar un curso experimenital de La asignatura a su cargo, que

por espacio

funjJionó los

áe varios meses con

alumnos en general y de

se interesaren 'decide

,e1

gran beneplácito de Montevideo que

los intelectuailes de

(p'i'imea-

momento por

esta enseñanza tan

Uiieva y de tanto interés para nosotros.

Corresponide a este mismo períoido de intensa actividad la inccrporación del do'ctor Plácido Ellauri a la cátedra de Filosofía de la Universidad que habría de desempeñar durante cuarenta y tantos años, colaborando eficazmente en todo ese lapso de tiem-

— no

po^

tanto por su bagaje científico cuanto por

su juicio, la moralidad de su vida, criterio ia.'^

siempre



cuestiones!

las varias

jado

el

generaciones que desfilaron



po.r

la

puesto desooiHante en Al ^destacar

la

su cátedra.

vacante que había deregresar a

al

la

República

desipués de largas años de ostriaclsimo graiudemente

aprovedhados por

gastos

ua

ampllio

doctor Luis José de la Peña

.Argentina

serenidad de

y ecuánime para resolver todas en la organización de la estructura intelectual de liberal,

doctor Elilauri entraba a ocupar

.El

la

culto a los (principios y

ell

intelectualidad uruguaya el



para ocupar un

gobierno de Uiiquiza.

'los iprincipailes

rubros

hemos dicho ya cuáles eran

;dell

las

Fresu^juesto gen'eral de

cátedras de estudios pro-

173

GOBIERNO DE GIRÓ

que funcionaban en la Universidad durante este peDerecho en 1852 y simplemente dos en 1853, estas últiimas 'r-iara 'la len'señanza 'del .Derecho Civiil, .del Derecho 'de Gentes, idel Derecho Aídiministnativo y de la Economía Política, y cinco cátedras de Preparatorios en 185 2 y simplemente cuatro al año siguiente para la enseñanza de la Filosofía, de las Matemátifesionales

tres de

ríodo:

de

cas,

Un

la

i>lan

Física experimental y del Latín.

do reorfianizacióii ñv la enseñanza.

Era una

planilla

estredhez

¡por te

extremadamente pobre, como

ide

se

ve,

pero no

la

tirantez

ideas (dominant'es, .sino ipor

.las

íinanci'era iciuo imipe'día (hacer otra cosa.

Pa-eci^ame'nte

cuando

se

abordaba el estudio del Presupuesto en 18 5 2, publicaba la prensa como elemento de jui'cio para el estudio de la reforma de la enseñanza públiica el plaa de estudios primarios, secundarios y superiores que el doctor Eduaird:, Acevedo formulara dos años antes.

He

aquí las líneas de ese plan:

iNSTurccróx PuniAiuA.

La instrucción primaria será gratuita y obligatoria. La concurrencia de 20 alumnos bastará para el establecimiento Id'í una e&cueila ipública. Se le'StaÜlecerán as'Jmismo y con i.gual asisasegurada escuelas de adultos. CapitJal funcionará una escuela norlmal en 'que se cursará

tencia

En

,lia

escritura,

1-ectura,

aritmética, gramática,

país, .doctrina cristiana

d&igogía

rales

más

'sagrada, pe-

y práctica, examinándose las cuestiones geneenseñanza y los diversas méto'dos conoci^dos y 'ejercitán-

l'Ois

alumnos en

favorables a

En

historia y geografía del d'e Ihistoria

teórica

Idle

dose a

con desarro'lios

la

la

práctica de los métodos

más simples

y

instrucción.

las escuelas públlicas se

enseñará lectura, escritura, elemen-

tos de aritmética o sean las cuatros reglas primarias

sobre ente-

quebrados y decimales, agregándose en las escuelas de niñas costura y corte. (A*d)viértase que* este iplan s'e "hiabía re.dactado en plena Guerra Graníde y que la falta absoluta de maestros imporos,

nía excepcionales restricciones).

Se aplicará plo,

en

l'a

el

díase

método de

la

enseñanza mutua. Así, por ejem-

de aritmética habrá un

pizarrón y uno

de los

HISTORIA DEL URUGUAY

174

alumnos ejecutará las operaciones, estando atentos todos los demás para enmendar los errores y responder a las interrogaciones del profesor.

El maestro dirigirá a los alumnos por medio de recompensas castigos. Consistirán las recompensas en notas que según su im'portancia ste acordarán a los ajluiminos, .se enviarán a. los y

paidres,

rán a

se transcribirán en las pizarras de clase y se comunica-

la'S

Jíuntais

Econó)mlco-A',dministrativ1as. 'Los castigos se re-

ducirán a n^otas malas, avisos a los padres, doble tarea, eacierro y

nombres en los pizarrones, quedando prolhibido todo castigo que como los de azotes, palmetas, penitencias públicas, tieniden a envilecer y degradar el carácter de los niños. La iffispeicción y dirección de las escuelas públicas en cada de-

pubiica'ción de

paitaimento p:erten'e'ceTá

.a

la respettiva Junta iEconómioo-A,'dmi-

nistrativa y la inspección y dirección general de Jas escuelas de

todo

el

país corresponderá a un Consejo Nacional de Instrucción

Pública.

E>SEÑAXZA SECU.NUAKIA Y

SUPERIOR.

Los estudios universitarios

se Idiviidirán en preparatorios y

de

Facultades ma'yores.

Los estudios preparaitorios tendrán seis años de duración y abarcarán per ahora latín, inglés, francés, filosofía, retórica, geografía,

historia,

elementos de

ihistoria

natural, matemáticas ele-

mentales, naciones de física y química, dibujo lineal y descriptivo,

economía imdu&trial y Para el estudio de

estadística. la

ñsica

experimental habrá un gabinete

de instruaiie!ntos y .málqui,nas. Pata el estudio de la química, un laboratorio en que puedan realizarse los experimentos necesalicis. Para el esltudio de la historia natuxad, aiin gabiniet'e de i)roduociones

zoolóigltías,

Los estudios

botánicas y .mineraJlóigicas.

superiores

se

cursarán

en

las

Facultades



Ciencias Sagradas, Jurisprudencia, Medicina y Matemáticas trascendentales.

En (la Facultiad de 'Ci'encias Sagradas se ense'ñará teología, moral, escritura sagrada, derecho eclesiástico, derecho de gentes constitucional. Los cursos durarán tres años. Los estudios de la Facultad de Jurisprudencia comprenderán f:l derecho civil, el derecho penal, el derecho eclesiástico, el derecho comercial, el derecho de gentes y el derecho constitu-

y dereoho

175

GOBIERNO DE GIRÓ

Los cursos la Academia. Los estudiantes

•cirna;!,

idura'ián lies años, con

tendrán

notariado

de

ejei'cicio.s

que

prácticos en

todos

seguir

los

estudios de jurisprudencia, aparte de los especiales que establez-

can los respectivos reglamentos.

En la Facultad 'de iMe!dicin/a 'durarán los cursos cinco estudiándose anatoanía descriptiva, general .y comparada,

añ:s, física

química médicas, fisiología, historia natural médica, higiene, materia médica, terapéutica y farmacología, medicina operatoria, patológica, clípatología interna, patología externa, anatomía y

interna

nica

y

medicina

externa,

medicina

operatoria,

legal

y

partos.

En

un nn-ograma

la Facultad de Mateaniáticas regirá

para

afios

lel

'estuídio

úe

das .siguientes

miateirias:

ide

cuatro

comtp-lementos

de álgebra, geometría deiscriptiva, secciones cónicas, cálculo diferenciad

-6

iinteg'rail,

fílsíoa

general

industrial, (m'ecánilca igeneral,

le

industrial, quílmica gieneral e

construcción

iTiáiquinas, ¡arquitectura ,g*eneral, ihistoria

grafía matemática y elementos

diversos

los

v.^n

ramos

de

los

¡y

establecioniento de

natural e industrial, geo-

de astronomía, diseño y trazado trabajos

industriales

civiles,

y

públicos.

Cada

la

tenga por

lo

sos

de medicina tendrá los instrumentos y útiles nece-

sala

A

siiriios.

de esta

clínica

médrca estará adscri'pta un sala que

menos 40 enfermos que presenten ciencia. En el mismo local deberá

los

.con-

diversos ca-

existir

un anfi-

teatro para las autopsias.

Los

cursos

rarán hasta

la

l.«

de

marzo y du-

conclusión de los exámenes. El

l.o

de noviembre

universitarios

se

abrirán

el

empezarán los repasos y a fines del mismo mes los exámenes. La .Universi'dad tendrá un (Rector y un Cousejo Nacional de Iiistruccióin 'Fúbiliica, comipuesito d'el Rector, de dos vocaies que designará

el Gobierno y de catedráticos delegados de departamentos de estudios o Facultades.

Desarrollando algunas de en "La Constitución":

las

ideas

de su

plan,

los

decía

cinco

el

au-

tor

La enseñanza primaria debe ser gratuita y obligatoria. Graporque el derecho a la instrucción es tan sagrado como cualquiera de los otros de que goz.i un hombre en la sociedad; tuita,

obligatoria, porque la Constitución declara suspendida la ciudadanía a los que no sepan leer ni escribir e impone, por consecuencia, la necesidad de evitar que tal suspensión se produzca .

.

.

mSTOiUA DKL URUGUAY

176

ihermanar

•Es necesaiio

greso de

inistrudción y

,1a

El (pro-

eclu'fca'Ción.

'la

instrucción no siempre es indicio de progreso en lo

la

moral ... Las primeras impresiones que se reciben en siguen en todas las épocas de

la

vida,

la

nos

infancia

y deoiúen muchas veces

ide la juve'ntuid 'cfebe ser un obPero esa educación no se recibe exclusivamente escuela. Empieza en el hogar doméstico y se extiende a to-

de 'nuestro iporvenir. iLa 'edufcación jeto preferente.

en

la

dos los lucEines en iQue Ta juiventuid se re.Uine. .Es una triste e'd.icación la que se limita a enseñar a leer y escribir al pueblo. Se necesita algo más: se necesita imprimir en

el

á'nimo de los n.iños

esos principios que sirven de base para todas las grandes accio-

La

humanidad, son ideas que deben primeros momentos. Así se logra impedir que cunda ese miserable egoísmo que es el cáncer de las viejas sociedades. Cuando las ideas de conveniennes.

familia,

patria,

la

la

hacerse comprender a los niños desde los

cia

emípiezan

individual

justicia

ocupa

'de

ly

a

sobreponerse a

principios

los

conveniencia genera'l, cuando

,1a

el

que

me

la

lugar del patriotismo, de la humanidad y de todos los

el

sentimientos nobles, poca esperanza puede depositarse en venir

de

importa-

de un país.

hacer ique

aiiños

'los

'tas nacionales

En

.

.

ese

tomen

sentido 'parte en

hemos aplaudido 'la

la

el

por-

ide.i

soleiunización de las

d-;

fies-

.

La instrucción pública debe

estar centralizada. Pero

como me-

dio de armonizar tal exigencia con el artículo constitucional sol)j

e

Juntas

jEconcimicc-íAjdminisitraitiva'S,,

debe 'darse a estas cor-

inspección y direcqión de las escuelas de cada departamento, atribuyendo a un Consejo Nacional la inspección y

poraciones

la

dirección general de las escuelas de toda la República.

El reglamento que liemos extractado establecía 'para la lectura libros de tor,

moral y un catecismo

redactó en 1852

escuelas

el

constitucionall.

Y

su propio au-

catecismo constitucional destinado a

las

primarias.

Conipleincntos de la enseñanza universitaria.

Los modestos estudios de derecho que se cursaban en las sade la Universidad tenían su complemento en la Academia de Juris^prudencia, cuya presidencia desem¡peT(.órico-
las

tudios se publicaba.

GOBIEBNO DE GIRÓ

Bajo

la

iniciativa

del

177

doctor Salvador Tort,

tam-

intentaron

bién los escribanos dai'se una organización gremial cuyos dos objetos principales serían la reforma de los aranceles y la funda-

ción

del

Colegio de Escribanos. Rápidamente quedaron redacta-

dos los proyectos que habrían de elevarse

al

Cuerpo Legislativo

el movimiento político de julio de 1853 paralizó los trabajos. No podían los ,miédicos organizar su academia de práctica como los abogados, porque el establecimiento de la Facultad de

por intermedio del Tribunal Superior de Justicia. Pero

Medicina había quedado de nuevo librado a tiempos mejores. Pero en cambio fundaron a fines de 1852, bajo el título de "Sociedad de Medicina Monteivideana", un centro que debería encarsegún los estatutos de "establecer discusiones científicas

garse

sobre las enfermedades reinantes y los puntos

más importantes

medicina, cirugía y farmacia, asi como las cuestiones de medicina legal e higiene pública*'. de

la

Esa Sociedad de cuya mesa fundadora fomabaí parte ios docFermín Ferreira como Presidente y Martín de Moussy y

tores

Enrique Muñoz como Secretarios, emipezó a trabajar activamenle desde los primeros meses de 1853, abocándose al estudio de la epidemia de viruela que en esos momentos flagelaba a la población de Montevideo. Muy cerca del ambiente universitario, el constituyente don Ramón Masini alternaba sus funciones de senador con las da taquígrafo •Tue

una oirreru

Asamblea, procurando prestigiar

de la

con

entonces lucihaba

enormes dificultades

y

a

la

que,

en

consecuencia, nadie quería consagrarse.

Otros hombres de progreso fundaron a mediados de 185 2 una sociedad para

el

establecimiento de una biblioteca y sala de

tura que funcionarían

de

la

noche,

ourgid'o

9

de la

como medio de conaurrir

a raíz de

La población

desde las

la

conclusión de

la

mañana hasta

las

lec-

11

movimiento civilizador Guerra Grande. al

universitaria.

Véase ouál era el número de alumnos que tenía la Universidad a mediados de 18'52, según el informe presentado en esa oportunidad por don Manuel Herrera y Obes a tores:

12- IV

la

sala de

doc-

IIISXOIUA DEi>

178

UUUGÜAV

Jurisprudencia

28

Filosofía

17

Matemáticas

........

Fran,cés

30'

Enseñanza primaria

elemental

120

superior

y

24 15

Latín

Advertía eil Rector iqüe esas ciíras eran inferiores ¡a la's de 1851, año de guerra, pior efecto de los nuevos rumbos abiertos a los emigrados argentinas y a lo» de nuestra campaña ci'ue habían vuelto a sus hogares o que encontraban aquí mismo trabajo remunerador que le,a obligaba a abandonar las auilas. Y termina.ba su iníorme diciendo que estaba "urgentemente reclamada la erección de las aulas d'e Medicina y Ciencias Naturales".

Un año rentino

desipuiés el

Castellanos

nuevo Rector de

Universida/d don Flo-

la

presentaba este otro resumen de

la

pobla-

universitariai:

ción,

Jurisipruden.cia

20

FlLosoifía

40

FíisicoHMatemáticas

16

Latín

36

27

Inglés Franicés



.

Colegio Nacional

55

216

Enseñanza primaria

En

55

ese misono año tuvo lugar la colación de grados en la Ca-

de lois Ejercicios-, comprendida dentro de losi muros de la Universidad, recibiendo el grado de doctor un alumno de teooilla

logía y doce de derecho.

L/Os

abogadcs orientales en Buenos

Desde

el

año 18 3 9 regía

e-n

la

Aii-es.

República un decreto del go-

bierno de Rivera que ordenaba la revalli'dación de los diplomas de abogados otorgados por oualesiquiera de las reipúblicas americanas, sin pruebas de examen, mediante la simple exhibición de los

títulos

o diplomas respectivos.

GOBIERNO DE GIRÓ

Esa franquicia dio lugar plazante de Rosas en

la

179

a que el doctor Vicente López, reemgobernación de Buenos Aires después

de Caseros, dictara un decreto de reciprocidad, que decía así: "Todo profesor de algún ramo científico que presentase certificados en forma de haber hecho los estudios preparatorios en los establecimientos nacionales de la República Oriental y de

haber recibido

la

competente para

licencia

ejercer

en eWa la

profesión científica que en virtud de aiquellos estudios y de los respectivos exámenes

Provincia de

Buenos

que acreditase, los

bubiere ganado, Aires,

sin imás

será

por profesor

formalidad que

'la

tenido en 'toda la

en el ramo de la ipresentación de recibido

debidos comproibantes".

Orientales en Europa.

De

vez en

poirque

otra

cuando, pero siempre cosa

Asamblea otorgaba

no

con

explicable

parsimonia

consentían las estrecheces del erario,

bolsias

la

de viaje a los alumnos que deseaban

leaUzar estudios en Euroipa.

A

mediados de 1852 iniciaba sus estudios médicos en la FaGualberto Méndez, gracias a una de esas modestas bolsas de viaje que apenas ll6ga,ba a 60 pesos mensuales. Cuando él rendía su primer examen preparámdose para conquistar una de las cumbres de Ha ciencia módica uruguaya, otro compatriota eminente, el 'doctor Teodoro Vilardebó, ^terminaba a su lado un segundo ciclo de estudios de medicina, después de haber actuado con brillo en ese mismo teatro donde se había graduado y aquí en su patria donde había ejercido la medicina adcultad de París don

mirado por su saber y por su altruismo incomparabUe. (Honrando en igual forma a la patria, don Alejandro Magariños Cervantes escribía en España obras como "Cellar", que aplaudían todos los literatos españoles con "Ventura de la Vega y Eugenio de Ochoa a la cabeza, y preparaba una "Revista Es'pañoila de Ambos Mundos" que debía proporcionarle medios de vida

complementarios de los que de aquí le eran enviados por sais amigos y admiradores, que hasta levaataron con ese objeto una suscripción pública a mediados de 1853.

HISTORIA DEL UETJGÜAY

180

La enseñanza

En 1852 rural

agi'onóniica.

sugirió

mediante

la

la

prensa

creación

la

idea

de estimular

establecimientos

de

— —

progreso

el

modelos.

Eduarfomento de la agricultura. ¿Cómo podrían las Juntas realizar esa función? Rero.oviendo obstáculos e ilustrando a los agricultores. No pueden forzarse las cosas. La agricultura nace después que se produce lEntre las funciones de las Juntas

do Acevedo

"La Constitución"

en

exceso de capitales en

ganadería,

la

surgen después que abundan

los

escribía el doctor

figura

como

el

las industrias fabriles

capitales empleados en la agri-

Las Juntas deberían someter proyectos apropiados a

cultura.

Legislatura. La propaganda

más

eficaz es la del

la

ejemplo. "Que-

rríamos que se establecieran chacras modelos donde se hiciera uso de los nuevos arados y de todos los útiles recientemente introducidos,

t'enen

de los que

apenas un cierto número de individuos

conocimiento entre nosotros".

•Como medio de impulsar la agricultura, proponía a su turno "El Comercio del Plata" la idea de fundar en cada capital de departamento una escuela agraria que enseñase agricultura y

que cultivase terrenos bajo puesto del

Jefe Político,

A'dministrativa y

ideQ

la fiscalización

del Presidente

de un directorio com-

de La Junta Económico-

Cura párroco, todo

ello

bajo

el

programa

de formar capataces.

Pocos meses después emprendía su jira a los departamentos Presidente Giró, y don Bernardo P. Berro que entró a reemplazarle como Presidente del Senado, se apresuraba a recoger esas ideas, a las que daba forma mediante un decreto de enero

el

de

1853 refrendado por su Ministro de la Guerra coronel Vela Granja Experimental de Montevi-

nancio Plores, que creaba

deo bajo

la dirección

de don José A. Zubillaga, don Doroteo Gar-

el siguiente notable programa: Hacer ensayos de todo género sobre cultivos de las variedades de trigo y demás granos y plantas y árboles en general des-

cía

y don Francisco Lecocq, con

conocidos en el país; dar aplicaciones industriales a los productos

die

la

agricultura con

determinación de

los

lucros

líquidos

de esos productos; experimentar el uso de los instrumentos, má-

quinas

e

ingenios aplicables a

la

agricultura;

sas cualidades de las tierras y el destino

car los mejores

estudiar las diver-

que debe dárseles; bus-

métodos de cultivo; estudiar todo

lo

relativo a

181

GOBIEBNO DE GIRÓ

mayor economía de

la

cultores

y

casa de' campo;

la

empresarios

de

trasmitir

establecimientos

a

agrícolas

los

agri-

todos

los

descubrimientos y observaciones que puedan serles de utilidad.

Organizjación de la Alflminfetilación de Justicia.

La Asamblea abord(3 glamento

de

a

mediados de 1853

Administración

la

Eduardo Acevedo, que reducía fuertemente

simplificaba

cias,

de

e

doctor

deH

reformaba

el

injusticia notoria, dividía

lasi

ejecutivo,

juicio

el

recurso extraordinario de nulidad

estudio de un re-

obra

ordinario a dos instan-

juicio

el

el

Justicia,

funciones del ministerio fiscal entre dos magistrados consagrado el uno a los intereses morales y el otro a los intereses mateestablecía

riales,

tribunales

el

letrados,

requisito

limitaba

escribanos y exigía a estos

de

la

firma de abogado

ante

los

número de los procuradores y últimos el mismo programa de tres el

años de Jurisprudencia que tenían que un examen especial de competencia.

cursar

los

abogados y

ese reglamento en todas sus Apenas alcanzaron a entrar en vigencia mediante la ley

No hubo tiempo de considerar rartes.

de julio de 1853 los capítulos relativos a los recursos de apelarevisión, nulidad e injusticia notoria y procedimientos del

ción,

juicio

ejecutivo,

entre

otras cosas

Dando una de

y

las

un capítulo de disposiciones generales que la pena de confiscación de bienes.

suprimía

muchas razones

a favor de la reorganización

de la Administración de Justicia, decía

"La Constitución":

procedimientos es una circunstancia que asusta a todo el que quiere litigar. iSe sabe cuándo principia un pleito, pero no se puede precisar cuándo concluirá. Eso

La

lentitud

'de

nuestros

basta para dstoner a un país en su progreso. Véase uno de sus mientra.? que,

efectos:

el

interés comercial es del

interés hipotecario oscila del

18

al

24

%

porque

hipoteca es un pleito que puede durar uno o

hoy

se

9

la

más

al

12

%,

el

escritura de años.

Lo que

llama por una especie de burla juicio ejecutivo, es nece-

sario que lo sea de verdad para que el capital afluya a nuestro lais.

Complementando esie reglamento, la Cámara de Diputados un proyecto de orgamiza'ción de la justicia penal obra

t>ancicnó del

do'ctor

AntO'nio Luis Pereira,

"colo'cado

tos y su inteligencia a la cabeza de los

por sus conocimien-

abogados de Montevideo"

HISTORIA DEL URUGUAY

182

— decía

"La Constitución". Establecía

el

nuevo proyecto jurys de-

partamentales compuestos del Juez Letrado y siete jurados elegidos por las respectivas Juntas Económico-Administrativas, para eil conjócimienito de las causas de vagancia, embriaguez, peheridas leves, injurias, abigeato y robo sin violencia; y tres compuestos del Juez Letrado y doce jurados, para co-

lea,

altos jurys

nocer en todas las demás cansas, con jurisdicción cada uno souna zona territorial de cuatro departamentos.

bre

dell doictor Pereira ya había resuelto e*I proyecto Comisión inlfoirmautíe de -la Cámara de Diputados sustituir el jurado por un tribunall cooupuesto del Juez del Crimen y de dos letrados que conocerían del hedho y del derecího, que era precisamente lo que establlecía el Reglamento del doctor Acevedo al r(-aocionar contra los innumerables vicios del simulacro de jurado que a la sazón existía. Pero la Comisión encontró que todos ios inconvenienites desaparecían con la fórmula del doctor Pe-

Al publicarse

la

reira

y resolvió aceptarHa.

Véase cómo señalaba el doctor Acevedo los vicios del régimen del Juradlo, tal como funcionaba entonces y tal como siguió funcionando por cuanto la revolución de 1853 dejó sin efecto la reforma sancionada:

Tomar de

sus

casas algunos

propietarios,

comerciantes o ar-

tesanos, embutirles 300 o 400 fojas de autos en que se hace uso

do lenguaje extraño para ellos y en que se han agotado quizá to-

dos los

recursoisi de la Ohioana; y preguntarles después si está no está pnobado el deilíto de que se trata, es una verdadera burla de la institución del Jurado. ¿Qué puede quedar a los hom-

o

bres buenos

bano y que a

Un

nada.

te

die

esa lectura que con voz

monótona hace

el

escri-

vecéis se

prolonga por muchas hoi'as? Absolutamen-

tribunal

semejante,

además de todos sus inconve-

de alejarnios cada día más de la benéfica institución d)el Jurado, tan recomsnd'ada por nuestra ley fundaimental, en que los homhres buenos ven y oyen al acusado y a

nientes notori'os, tiene

los

el

testigos y adquieren

los

datos indisp^ensables para

producir

su juicio.

Una de titución

las más vivas aspiraciones de la campaña era la susde los Alcaldes Ordinarios por Jueces Letrados. De to-

dos los departamentos llegaiban protestas contra los Alcaldes. Pero la falta de letrados suficientes impedía abordar

la

reforma

t-n

teda su amplitud, razón por la cual "La Constitución" indicaba como fórmula transaccional la creación de tres grandes zonas ju-

GOBIERNO DE GIRÓ

risdiccionales a cargo de letrados, cuyo

medida

'QUie

aumemUase

(él

de

los

183

número

iría

creciendo a

abogados.

Eti materia de legislación se procuraba, pues, emprender obra grande y definitiva. Lo único que seguía en el mismo estado de angustias causado pox la guerra, e'ra el^u'eljdode los Jueces. Log

miembros a

del Tribuna'l ihabían

conseguiído estcap/ar al atraso de

presupuestos mediante un decret'o de 18 50 que

los

les

autorizaba

cubrir sus haberes con los proventos de Las escribanías del Es-

todo.

Pero

el President'e.Giró dierogó ese ipriviltegio

ipienzos de

su

administración,

dlsponiend'o que las

desde los coentradas de

escribanías fueran vertidas en la Tesorería.

las

Ti-aba.ios

de codificación.

Dos códigos fueron sometidos a la sanción de la Asamblea oue empezó a actuar en 1852: el Código Civil del doctor Educido Aceviedo y el Código Rural de don Püáícido Lagunia. Hasta ese momento todos los países sudamericanos, sai-vo BoLivia graicia.9 al poder incontrastable dell miarisVal Santía Cruz, se.4uían viviendo bajo el régimen de la leigislación colonial, una leg-islación atrasada y verdad'epamente caótica compuesta de más de cincuenta mil

leyles

dictadas para

diferentes

edades y dife-

rentes pueblos'.

El doctor Aoevedo consagró las Mrgas horas de la Guerra Gran-

de a

la regularizacic/n,

me montaña de 'a

fuente

leyes.

misma de

metodización mejoramiento de esa enorPartiendo del Derecho Romano o sea de ij'

las leyes españolas

redactó un Código que adoptanído aparecía sin embargo

como

lo

y de las leyes francesas,

mejor de

tod'os los

modelos,

reflejo exclusivo de las disposiciones

que constituían nuestro deirecho nacional. Centenares de artículos sugeridos ipor los 'comentadores diel Derecho Romano o del Código Napoleón, aparecían así en su Proyecto como emanados de las leyes españolas o de los comentaristas españoles. Es que se había prepuesto alejar toda 'Jacha de

exotismo que pudiera obs^

taculizar la sanción de su trabajo. Ello no obstante,

causó profunda alarma por algunas de

las

el Proyecto reformas con que se

anticipaba a los tiempos, especialmente la secularización del Registro del civil

Estado

Civil y la separación absoluta de la jurisdicción

y de la jurisdioción eclesiástica en la institución del matri-

moaio: el establecimiento del Registro de Estado Civil y civil en una palabra.

tT'monio

el

m'a-

HISTORIA DEL URUGUAY

184

El Código Rural de don Plácido

Laguna principiaba por

deter-

niinar las obligaciones del estanciero. -Era necesario declarar an-

Juntas

te las

Eiconóiinico-A)dm.inis(tratlva¡s

l'a

superficie de los cam-

pos explotados y el número, clase, marcas y señales de los ganados. En cada suerte de estancia, compuesta de 2,700 cuadras, nj podría haber más de dos mil vacunos, inicluído el procreo del año, o su eiquivalente en otras especies calculadas a razón de un o de 4 lanares por cada vacuno. Las 'hierras se practien dos épocas fijas del año con previo aviso al Teniente Alcalde y a los vecinos. Para la extracción de ganados de un distrito habría que dar aviso al Teniente Aflcalde y parar rodeo. El

yeguarizo

carían

número

perros se fijaría según la importancia de cada esta-

ide

blecimiento, no pudienjdo en ningilm lOaso «xoeder

die

doce.

Determinaba luego los deredhos de los estancieros. La marca de los animalles vacunos y yeguarizas y 'lals señales en los ovipropiedad de los ganados. El estanciero tendría derecho de marcar a todo animal orejano de dos años arriba que estuviera en su campo aunque siguiera a madre ajena. El que i'os fijarían la

con

justificaj-a

dos testigos

ante

ibalstaintes

eil

'Tenien'te

AlcaMe

que otro estanciero le había carneado animales, adquiriría el dereclho de ser indemnizad'O de inmediato con cuatro animales por cada uno dte los carneados. El dueño de un camipo habitualmente invadido ipor lo« ganados de los vecinos, ¡podría cobrar un arrendamiento provisional mientras no fueran retirados los animales. En todas las cuestionles relativas a ganados y diferencias entre estanicieros,

los

actuaría

como

juez

el

Teniente Alcalde con ape-

de Paz, 'pero sin perjuicio de cumplirse de inmediato los falles de primera instancia. Ambos Códigos fueron pasados a estudio de comisiones que la'cic.n

ante

eJ

Juez

no alcanzaron a expedirse por efecto de los acontecimientos políticos de 1853, manteniéndose empero en la orden del día el Código Civil como lo' veremos más adelante.

Las confiscaciones de Por uno de del

sitio,

los

ordenó

la

GueiT'a Grande.

decretos el

dictados

gobierno

propiedades puestas bajo

la

de

a

raíz

Suárez

la

del

levantamiento

devolución

de

las

administración del Estado en Mon-

tevideo y las confiscadas por Oribe en

el

resto de la República,

cometiendo la resolución de las cuestiones que surgieran a un jurado compuesto del Jefe Político c del Alcalde Ordinario y de

185

GOBIERNO DE GIKÓ

cuatro vecinos pi'op,i«tarios y de responsa'billlidad, bajo

concepto

el

de que una vez reinstaladas la& Jantas E|conómico-A
Luego de restablecido

el

Económico-Administrativa

de

régimen constitucional, la Junta Montevideo y la de Canelones

Gobierno para manifestarle que ese al en mo'mentos á'^ aoefalía de iLas auitorrdades constituidas, no podía mantenerse en vigencia, y que era neceencomendado a las sario que la tarea judicial que '¿c había Juütas fuera transferida a los Tribunales. Pero el Presiiidente dirigieron

después

se

c'Jecreto,

explicable

Giró mantuvo

dad de

el

decreto

facilitar la

antecesor,

de su

invocando

la

necesi-

devoilución de las propiedades confiscadas.

A fines de 1852 ya habían sido devueltas todas las propiedades confiscadas y sólo subsistían las cuestiones emergentes de fruto de las propiedades, ganados vendidos, la devolución: arrendamiieutos a ipaganse ly liquidación de los Idafios o de las mejoras

correspondientes

según

y no otros,

tiempo de

al

detentación, siendo

la

"La Constitución",

los

esos

que daban

asuntos

motivo a las Jun'tas ipara pediill/e ail Goibierno que las eximiera de entender en tareas iprivativas de líos Tribunales. Ei Ministro de Gobierno doctor Castellanos se encargó de agregar en su Memoria de marzo de 1853, que de las mismas cuestiones robre frutos sólo qued'aban en pie alguna /que ,otra y que ell Poder Ejecutivo había dado por terminadas sus tareas librando a los Tribunales esos po'cos expedientes en trámite.

En

el

mismo año

tenía el

una vez más al Cuerpo de una parte de lo que de las revoluciones

general Lavalleja que presentarse

Legisilativo se

le

em

demanda

reintegro

del

había confiscado a consecuencia

promovidas contra

el

primer

gobierno de

demora inconcebible que daba base a la Comisión dé Peticiones de la Cámara de Diputados, de )la que formaba parte el doctor Juan Carlos Gómez, liara exhibir el cuadro de la Rivera,

desesperante situación del jefe de los Treinta y Tres.

"Consta



decía



entrar hasta ahora en

que

el

general Lavalleja no ha podido

goce de !os campos con que

le pagó Estado en años anteriores parte de su fortuna de que lo despojó... El Estado debe además al general Levalleja 121,648 el

el

pesos en letras ministeriales con

despojada le

adeuda

..

ic.ue

también ipagó

.No habiéndole abonado sus sueldos por 16,9 25

pesos,

e'l

getnerail

Lavallleja

la

los

fortuna cuales

exipone haberse

HISTORIA DEL URUGUAY

186

en la necesidad de contraer compromisos para subsistir que absorben hoy en pago de intereses las entradas que podría visto

destinar a la subsistencia de su

numerosa

familia".

de expi-opi^icíón.

Lai ley

Borrados ya los últimos vestigios de las confiscaciones de Oribe y de las requisas del gobierno de la Defensa, había que garantizar el dei'eoho de propiedad contra los avances de la autoridad.

Es

lo

que

presentación

se

por causa

ción

propuso

doctor Cándido Joanicó mediante la

el

de un proyecto

de

utilidad

de ley según pública

sólo

el

cual la expropia-

podría

tener

efecto

cuatro condiiciones': que lia Asamblea votara una ley autorizando la expropiación, que el Poder Ejecuan'do se reunieran

eisitlas

cutivo dictara un decreto designando la propiedad a expropiarse

publicara

y

emplazando a

edictos

todos

interesados,

los

Tribunales OTidenaran por sentencia •ejíecutoriada

los

piación, y que

cuyo

para

ei

propiettario recibiera

señalamiento

se

tendrían

arrendamientos más recientes de

\b

ilia

que

expro-

una justa lindemnización en

cuenta

las

misma propiedad

ventas o

y

de las

inmediatas.

Fueron incorporadas íntegraanente esas condicionies

Los plazos Esta tías

(le

otra

de

"La nos

a Ta ley de

de 1853.

julio

la

ley

en

los aiTendamíentos.

importante relacionada

disposición

con las garan-

propiedad territorial dictó la Asamblea en 1853:

no reconoce

los

contratos

las

de

estipulaciones verbales

arrendamiento.

prueba de término establecido que

No

se

sobre

térmi-

admitirá otra

qne resulte de documento

¡a

escrito".

Se

quería

poner

fin

con

ella

despojos consumados a la sombra el

a

un régimen

de la prueba

de

incesantes

de testigos, y

remedio resultó de una eficacia absoluta.

El abigeato.

Había que perseguir también

a

I019

ladrones de ganados, fa-

vorecidos por la forzosa confusión de animales en campos abiertos y sin cercos de

ninguna

especie.

GOBIEBNO DE GIRÓ

La

de julio de

ley

1853,

calcada

en

Jaiime Estrázulas, «aiátü-gaba al ladróin de

de pri&ión y trabajos públicos

i-;es

triple y el quíntuplo

o)

la

187

un proyecto del doctor

ganadas oon

primera vez, y con

tres el

me-

duplo,

de esa pena en caso de reincidencia; asi-

robo de ganados

la destrucción o desfiguración de mary señalamiento de animales ajenos y la compra a sabiendas de cosas robadas; y prevenía que dichas penas en ningún caso podrían conmutarse.

milaba

al

cas, la marcacióii

Colaborando en esa obra /de isamí-amiento rural, .el Gobierno un reglamento de guías a base de publicidad y fiscalización y ordenó a los Jefes Políticos que hicieran reconcentrar en los ejidos de los pueblos a las familias dispersas que constituían una amenaza constante contra el estanciero, aunque sin consedictó

guir resultados del todo eficaces por la resistencia de los intere-

sados a

la

reconcentración.

Cái-ceíies.

Todos tución"

se



confunden en un mismo local decía "La Constiel régimen carcelario de 1852 los ase-



describiendo

sinos famosos, los ladironas, los ebrios y ños autores Ide pequeñas faltas

que no demuestran perversidad moral; y de esa confusión malo y que el hombre que todavía no

resulta el contagio de lo

ha deiscendl'do, des'cienda y se hag;; candida'to p'ara el crimien. Habría que implantar agregaba el régimen penitenciario que mejora la condición de los mismios delincuentes con aiyula do la instrucción, del aprendizaje de un oficio y de la formación de un pequeño capital.





Los patios del Cabildo donde se amontonaban

los presos,

fue-

ron luego divididos en dos compartimientos. De un lado quddó instalada lo que podríamos llamar cárcel de policía bajo la inmediata dependencia del Jefe Político, con destino a los contraventores de reglamentos y a los condenados a trabajos públicos

por un corto número de días. La Policía utilizaba los huéspedes de ese patio para el barrido de las calles de la ciudad, compostura

de

empedrados, rellenamiento de pantanos y otras de

tareas municipales que entonces le incumbían.

el

las

patio con-

quedó instalada la cárcel de seguridad con destino a los de delitos comunes, bajo la inmediata dependencia de Jueces y Tribunales. Estos otros huéspedes que en 1852 He-

tiguo

autores ios

En

HISTORIA DEL UKUGUAY

188

ijabaa a 67

pasaban

el

nada hacían, ningún trabajo tenían a su cargo, y se tiempo en jugarretas que más de una vez degenera-

ban en reyertas furibundas. A mediados de 1852 fueron interrumpidos los debates de la Cámara de Senadores por una de esas reyertas en que los presos lucían filosos cuchillos. Intervino el cuerpo de guardia, y los

peleadores fueron puestos en

el

pero

cepo,

continuó

gritería

la

todavía estimulada por uno de los penados que amenazaba su adversario con darle de puñaladas el día que saliera de

a la

cárcel!

"Esos sosiego

exiclamába

gritos, la

'de

Cámara,

nos ocupemos de

la



dieíbem

Masini, que

sena cor

Llaimar inuestra atención

construcción

de

alteran

el

para que

una cárcel en lugar más

aparente".

Y algunos meses después el Senado sancionaba como consecuencia de esa iniciativa un proyecto que autorizaba al Poder Ejecutivo para la construcción "de una cárcel pública, segura, cómoda y

adelantakla,

dar

¿para

ocupación a los

presos en be-

mismos".

neficio de ellos

Eistiadístlica judiicial.

Son extremadamente incompletos publicaciones

oficiales

la

los

época.

datos que registran las

Damos

continuación

a

los

Asamblea el Ministro de Gobierno doctor Casreflejando el movimiento de 1852:

que presentó a tellanos,

de

la

Montevideo: iCau&as s'ubid'ais al Tiiibunal en aipelación 7 7. Juzgado Ordinario de Montevideo: causas iniciadas 224; trámite 117;

en

concluidas 107.

Juzgado de Paz de la Capital: 687 causas. Colonia, Maldonado, Cerro Largo, Salto, Canelones, Soriano, Mercedes, San José y Minas: causas pendientes 110; concluidas 70.

Explicando tar el

la

ausencia de algunos departamentos hacía cons-

Ministro que en

el

Durazno "no había habido

ni

un solo

pleito".

Ti'atado de

exti'a
De acuerdo los

con

el

cíoii

el

Bitasil.

tratado de

extradición

cinco negociados por don Andrés Lamas,

die

el

1851,

uno

ide

Gobierno dirigió

189

GOBIERNO DE OIKO

una circular a los Jefes Políticos estableciendo que debían ser devueltos los esclavos que fueran reclamados por el Presidente de la Provincia de ¡Río 'Granide o por el amo que penetrara en territorio nacional persiguiendo al prófugo. Pero con la importante advertencia

sus

amos

de que

territorio

al

'de

el

esclavo

que fuera introducido por

ia Repúbiiaa, se reputaría

hombre

^li-

bre y en consecuencia no podría ser materia de extradición.

Intereses municipales.

Frente

al

renacimiento del espíritu de empresa





decía

"El

que quiere tranlsformar la Capitial, no Comercio de'l deben quedar en olvido los departamentos: hay que preocuparse de fundar escuelas, de mejorar las vías de comunicación, de Plata"

organizar las policías y de arbitrar a las Juntas recursos para ejercer la caridad en la campaña, tarea esta última que les está

vedado hacer d'entro ^de losi catorce pesos y medio que les asigna el Presupuesto vigente! decía a su turno "La Para que nuestra Carta Fundamental Constitución" entre en las costumbres y no sea una ley en ei papel, es necesario que haya leyes secundarias. Al discutirse en el seno de la Constituyemte el capítulO' relativo a régimen de-





partamental, propuso

el

iconstituyente

G-arcía

que

se incluyera

entre las atribuciones de las Juntas la de establecer ayuntamien-

Pero se consideró que era innecesaTia la declaración, porque ella podran esitabileoense ayuntamientos o cabiiMo's d'onde conviniera instalarlos. Habría, pues, que restablecer los cabiltos.

aun

isin

medio de ique se acostumbraran los ciuidadanos a conaar más en sus fuerzas, a desarrollar el espíritu de asociación, desarraigar el caudillaje. Por lo pronto habría que organizar ;i

dos, icomo

comisiones

die

vecinos para

el

estudio de las necesidades, estu-

dio que daría luego a las Juntas ocasión para cumplir la misión

constitucional

"de proponer a

la

Legislatura

das las mejoiras necesarias o útiles".

En lo



conceipto de lo® cooistituyentes

debían marchar a

mento y

la

La

par

la

o

— agregaba

al

Gobierno

to-

en otro artícu-

administración del departa-

de los municipios, y es por ello que sostenemos la neel vecino que

cesidad de crear esos últimos, persuadidos de que tiene inconveniente

en ipagar dos tiesos mensuales para rentas

generales, pagaría gustosamente cuatro para ser invertidos ante

sus ojos, en beneficio del pueblo que habita con su familia.

De

HISTORIA DEL URUGUAY

190

modo

ese

se

famentarian

las escuelas^, los hospitales,

y se daría inipmliso ai le^spíritu de asociación.

Cada

las

cárceles

puieblo se con-

como una gran asociación en que cada individuo lapornn contingente en relación con sus facultades. Aumentaría die lois que se interesan en la cosa púbilica y £isí el número ecabaría j)or desterrarse else egoísm.o miserable que ha empesideraría taría

zado a invadirnos.

encaminada a pvoimo'Víer el resurgimiento de empezó la prodjucir resultados en 185 3. Hl Dr. Francisico Solano de An'tuña ipresentó a. la Cámara de Senadores un proyecto por el cua^l ¡se entregaban a Has Juntas Económico'propagauida

E^sita

la vida municipal,

Administrativas

la

recaudación

e

inversión de dos impuesítos de

papel sellado, patentes y corrales de abasto y &e declaraba a la vez de cargo de las mismas Juntas el pago de las planillas de la

Administración de Justicia, Enseñanza primaria y superior y Jetodo ello oon arreglo a la ley de Presufatura de Policía,



puesto. Los departamentos cuyas rentas fueran insuficientes rían ayudados por los que

La institución de dando su proyecto



Juntas decía el doctor Antuña funno ha respondido hasta ahora a los fines los antiguos cabildos incumbía la adminislas



constitucionales.

A

s-e-

tuvie.rau ;9obra,ntes.

económica local con atribuciones muy extensas. Al excinguirlos pa^ra que no quedasen vestigios del régimen colonial, &9 consideró que toidas sus funciones quedaban traspasadas a las Jumtas Económico-Ad'ministrativas, verdaderos cabildos 'Con otro nombre. Pero los icabildos tenían rentlas mientra-j que las Juntas ni siquiera disponen hoy de fondos propios para costear un escribiente o pagar el alquiler de la casa en que sesionan. El día en que los contribuyentes sepan que lo que pagan es para aplicarse a sus respectivos departamentos decía "La Constitución" desaparecerá la idtea odioisia que hoy tienen tración





del

fisico.

No quiso en

'

por vas Ce

el

Presidente Giró quedar exaluído de

de ideas que respondía a un gran clamor de

to

marzo de 1853 presentó un proyecto de el

cual

e(l

ríos,

sie

adjudicaba a

'las

ley

movimiencampaña, y a la Asamblea

leste

la

Juntas Económico-Adiministratá-

derecho de abasto, el registro de marcas y el peaje bajo la condición de que el importe de las rentas sería

íiplicado

de acuerdo con

el

Poder Ejecutivo.

GOBIERNO DE GIBÓ

Obrap

191

pavimioiitación.

(le

presidencial de don Bernardo P. Iíííim decreto sobre vialidad que determinaba ©1 ancho de los caminos" de Montevideo; el de la Unión tendría 30 varas, el idel Cerrito 20 y e\ del Miguelete otras 2 0. Eran las •res grandes vías que reconocía el decreto. Todas las demás tendrían de 8 a 20 varas de ancho, según el uso a que estuvieran

Durante

rro

se

el

interinato

dictó

r'es*^inadas.

Criticando estas dispots-iciones recordaba "La Constitución" el decreto de 1840. obra de la administración Ri-vera, que fijaba a los

caminos 40 imetros



.de

ancho. Si se iconsiidera



decia aquel

anchura de ooho varas apenas alcanzará para los hombres a cabailllo. Deberían tener, varas, según su im,portancia, dado e^l o 40 agregaba, 2 0, 3 escaso valor del terreno y habría a la vez que preocuparse de su conservación, tarea más importante que la de construirlos, valga el ejemplo de Atenas donde el Senado mismo era el encargado de la vigilaucia de los camino©. Algo intentó hacer también el Gobierno en favor del empedrado de las calles de Montevideo. Llegó hasta formaliz-ar un contrato a'i pre'cio ide 6 j V2 reales (la vara, cuadrada, lo que diario

lo ique

ilais

zanjas inutilizan,

arrojaba 400 pataconeis

"por

la

cuadra, garantizando los 'pagos con

pateóte de rodados. Pero era tan angustiosa

el

producto de

líi

situación del erario público que los trabajos quedaron reduci-

la

dos a trechos insignificantes, viéndose obligados por ello

más de

en ayuda del ^Gobierno. Tal es lo que ocurrió a principios de 1853 con el arreglo de la calle Ibicuy des/de la Plaza Cagancha hasta la playa de la Aguada reali-

una vez

los

vecinos a

ir

zado mediante una, suscripción pública.

El

soi'vicio

de serenos.

El servicio de serenos fué reorganizado a mediados

por una Comisión delegada de

la

de

1852

Junta lEconómioo-Ad'ministra-

número de agentes que sólo llega-ba a 4 0, fué elevado a cada sereno se le dotó de un capote, una linterna y una p-stola. En cambio se les prohibió que llevaran perros, por hativa.

60.

El

A

berse comprobado



decía

el

informe



que algunos utilizaban

esos animales para echarse a dormir y tener a su lado quien los

HISTORIA DEL XJBUGUAY

192

desipertara

al

acercarse un transeúnte. La.s calles ^quedaban de-

medianoclie y cualquier ruido producía 'la algarabía de los perros, dando tiempo al sereno para pararse y enfocar la

siertas

a

linterna en

dirección al

trasnochador.

Todavía a mediados de 18 52 protestaba "El Comercio del Plata" contra la costumbre de los guardias noicturnos de interrogar al 'transeúnte: "¿Quién va a'l sereno?", que el interrogado contestaba según su condición, con las palabras de "Vecino", "Ciu-

dadano", el



agregaba "Militar". A buen seguro que ningún ladrón responderá: "Ando en ace-

"Extranjero",

articulista



cho".

El aliuiibrado a gas.

Don Demetrio y don Aquiles en abril de 18'52 solicitando

Isola se presentaron al Gobierno

una concesión exclusiva para

la ex-

pjotación dei servicio de iluminación a gas en las calles y cios

En compensación de

de Montevideo.

bía durar quince años,

ofrecían

edifi-

ese monopolio que de-

iluminar gratuitamente durante

algún tiempo las calles 25 de Mayo, Rincón, Zabala, Misiones, Treinta y Tres, Ituzaingó, Cámaras, Cerro y Juncal. SPocas semanas después los proponentes realizaban un ensayo de iluminación a gas en la botica de don Mario Isola situada en la calle 25 de Mayo, para que toda la poiblación pudiera aipre-

que hasta entonces era absolutamente descono.cido en el Río de la Plata. El ensayo resultó decisivo. Los dos pequeños tubos de la botica de Isola iluminaban más que los quiniqués de múltiples mecheros de las casas de cociar las ventajas de ese servicio

mercio contiguas.

Y

en

el

acto quedaron colocadas las acciones

nombró una comisión compuesta de don Eduardo Acevedo, don Avelino Sierra, don Carilos Joanicó, don Manuel Illa y don

y se

Pedro Piñeyrúa para el estudio de las bases de puesta que haibría de presentarse al Gobierno. Anticipándose

al

ia

nueva

iiro-

resultado de la tramitación de esa propuesta,

prosiguieron sus trabajos los empresarios y los accionistas alentados por el tren de progreso en que estaba Montevideo. El in-

geniero don Demetrio Isoia marchó a Europa en busca de maquinarias y materiales y en julio de 1853, en la víspera misma del movimiento revolucionario que habría de colocar de nuevo una

capa de plomo sobre la República, quedaban iluminadas por vía de ensayo 14 cuadras de las principales calles y se procedía a la

G0i5ii;r.N()

amó

i)K

193

ipor una .comisión que Javier Alvarez, soMartínez don Miguel y encabezaban don Juan bre la base de un capitaH ,de 60,000 pesoo en acciones de 250 pesos cada una. El derrumbe del gobierno de Giró paralizó ese ráp'do movimiento que colocaba a Montevideo, del punto de vista de la iluminación pública, a la cabeza de la América del Sur, pues tíiecos

ledaccicn de los •estatutos de la Sociedad

Aires

mismo no había podido

y del

kerosene.

Higiene pública. El servicio

En

otro servicio

eidi'licio

Montevideo

también

dt*

aceite

del

Je potro

caños maestros.

de enorme

toadas

a

todavía

salir

las

importancia anticipábase

demás ciudades

de

la

Améri-

del Sur.

o¿

A mediados de lles

185 2 resG'lvieron cotizarse

75

veicinos de las ca-

25 de Mayo, Rin'cón, Cerrrto, Zabaila, Piedras, Misiones, Itu-

zaingó y Treinta y Tres, para

la

instalación de un servicio de ca-

ños maestros propuesto por don Genaro de las Hivas. Poco después el mismo empresario se presentaba al Gobierno solicitando ¡a

contribución

Tesoro

'del

tro .corresipondienite

a

las

para ía parte de caño maes-

púlWiic(?

bocacallles y 'asimismo

que

diera a todos los propietarios le obligación de costeai' trozo correspondiente

Casi

al

a!l

mismo tiempo

frente

(de

el

se

exten-

pago dei

sus respectivas propiedades.

se presentaba

a,l

Gobierno Ion Juan José

de Arteaga con otra propuesta para la cons'crucción de una red cloacal en toda la ciudad de Montevideo, prov.ista de amplias bó-

vedas en forma de permitir su recorrido a los empleados y encargados de la conservación y buen funcionamiento de la obra. Los propietarios

deberían

pagar diez pesos por cada vara de caño

construido al frente de sus casas.

Ambas propuestas fueron pasadas con marcada preferencia a favor de

la

Cuerpo Legislativo, pe: o formulada por el señor Ar-

al

teaga, que en concepto dell Go'bierno era la más ventajosa. Los planos y memorias correspondientes a esa propuesta, eran obra del fceñor Aulbourg, distinguido arquitecto francés que había venido

Montevideo

edificación de la nueva Aduana. "To"La Constitución" que es una obra magnífica, y hay quien duda de que sea un negocio para el em-

a

dos entienden

a

d,irigir



decía

la



presario".

En

la

13

Cámara de Diputados triunfó también -IV

la

propuesta Ar-

HISTORIA DEL URUGUAY

194

el Senado donde fué rechazada a mérito de Comisión Especial en que S'e sostenía que la led cloacal debía costearse con impuestos y no mediante el pago de cuotas del vecindario directamente favoreciido a una empre-

leaga, pero no asi en

dictamen de

ii'.i

la

particular.

sa

Hcspitales.

Véase

número de enfermos que

el

se

alojaban en

el

Hospital

de Caridad a mediados de 1853, según una comunicación de la

Junta Econcimico-Ajdminis'trativa al! Gobierno, encaminada a demostrar la escasez de los fondos aplicables al servicio:

.

.

.

.

.

Depositados

Mujeres

30

Expósitos

Oficiales

17

Locos

Soldados

26

Entre

los

enfermos figuraban

En un informe

27

...

3

....

8

10

variolosos.

Comisión delegada de la Junta mensuales pesos fijaba en 2,3 70

año 18 5 2

del

Económico-Adlministrativa

la

Hospital y en 3,000 los gastos indispensables. de los ingresos subió después, pero no con la energía

ingresos del

'os

nivel

PJl

110

'

Civiles

necesaria para cubrir

el

déficit.

Explicando esa situación decía la Junta Económico-Administrativa al Gobierno en marzo de 1853:

Para

el

sostenimiento del Hosípital sólo se contaba hasta ha-

mensuales emanados de la lotería. El rematador de esa renta, que era a la vez el encargado del suministro de artículos de consumo, anticipaba a la Junta 1,200 ce poco con 900 pesos

pesos, reintegrables el día del oese del contrato, lo que equivalía

a asegurarle indefinidamente la lotería, desde que cada vez era

más V

difícil el

subir a

reembolso de

la

suma

anticipada cuyo monto llegó

13,200 pesos. Gracias a un nuevo contrato

percibirá ahora

3,000

pesios,

zación de la deuda y 2,500

al

de cuya suma 500 irán

la

a

Junta amorti-

Hospital.

La situación debió seguir mejorando por efecto de la incorporación de nuevos recursos, según lo demuestra un estado parHospital de Caridad

cial

del

días

corridos desde

el

1."

relativo

a

los

de agosto basta

el

cincuenta y tantos 22

de septiemJbre

19&

GOBIERNO DE GIRO

mismo

c;el

año.

Los ingresos habían subido a 9,645 pesos, co-

rrespondiendo 5,500 a

2,400

lotería,

la

al

Vz

%

de

Aduana

y

resto a divei*sos rubros.

el

La población extranjera tendía Hospital de Caridad niediante tos particulares.

En mayo de

a

la

vez a descongestionar el

organización de establecimien-

la

fué colocada

18 53

la

piedra fun-

damental del Hospital Italiano. Durante todo el período del sitio había estado el Hospital de Caridad a cargo de la "Sociedad de Caridad Pública", instituida por decreto de noviembre de 1844. El gobierno de Giró derogó ese decreto en 1852 y puso el Hosipital bajo la dependencia de

a

Junta lEconóimico-tAdminisitrativa. Por otro decreto de fines del mismo año, correspondiente al interinato de don Bernardo P. Berro, fué nombrada una comisión compuesta por don Eduardo Acevedo, don Juan Carlos Gómez, don Cándido Joanicó y don Francisco Magariños para proyectar la fundación de una sociedad de señoras que tendría in-

de beneficencia. La comisión un informe que fué aceptado por el Gobierno y de base a ía creación de una sociedad de señoras bajo

tervención en los establecimientos expidió en

se

que

sirvió

título de

el

Sociedad de Caridad que tendría a su cargo las es-

cuelas de niñas, las casas de expósitos y los hospitales de

mu-

jeres.

Para el servicio de cuarentenas, previsto de tiempo atrás en reglamentos redactados por el doctor Vilardebó, fué habili-

los

tada

la

de

Isla

El sei'vicio

íle

A mediados de

Libertad.

coai'e>o«.

de 18 5 2 se llamó a propuestas para la conducción

correspond'encia

la

muy

la

altos

los

por conductores

ciera

al

interior del

precios acordó

el

país,

y habiendo resultado

Gobierno que

particulares,

el

servicio se hi-

que saldrían a campaña

el

y estarían de regreso el 14 y el 3 de cada mes. Muy grandes debieron ser las dificultades, porque tres meses después el Gobierno volvía al régimen que había resuelto abandonar, y contrataba con don Atanasio Lapido el servicio de co1

y

el

16,

rreos en toda tista

la

República, bajo las siguientes bases:

establecería cinco carreras

el

contra-

de postas provistas de sucursa-

les en varios puntos y con salidas ordinarias el 1 y el 16 de cada mes, y percibiría por concepto de retribución 1,000 pesos men-

HISTORIA DEL UBUGÜAY

196

suales durante zó

El ejército de

nuevo contrato empe-

el

línea.

De acuerdo con mediados de

de Presuipuesito

ley

la

gobierno de Giró

el

un decreto que organizaba en esta

18'52

dictó a

ma

Y

plazo de seis años.

el

ejecutarse con éxito.

a

for-

ejército de línea:

el

Dos batallones de infantería compuestos de 350 plazas cada uno, en los qjue serían refundidos los cuatro que existían antes

de prom'u'llgarse

Pnesuipuesto,

el

cargo

a

María Solsiona y León de Palleja. Una brigada de artillería- compuesta cada

soldados

61

bajo

una,

de los coroneiles José de

mando

el

dos

del

compañías de Mariano

coronel

Vedia.

mando de

el

de

escuadrones

Cuatro bajo

150

de

caballería

plazas

cada

uno,

coroneles Francisca Tajes, Lucas Moreno,

los

Francisco Olivera y José María Pinilla.

La

infantería y la artillería que constituían

la

guarnición de

la Capital, quedaban en manos de jefes colorados, y los escuadrones de caballería en manos de blancos y colorados. Agregúese que el Ministerio die la Guerra estaba en manos de jefes colorados de alto prestigio como los coroneles César Díaz y

Venancio Flores

ly

se tendrá la clave del

derrumbe

del gobierno

de Giró. La Guardia Nacional era naturalmente mucho más numerosa. Según lia Memoria que a principios de 185 3 presentó a la Asamblea el «oronel Flores, .La caiballería de toda la República tenía

En

feaha

la

todavía

de la

organizada

precisamente, de 1853

lo

que

la

antes

didho en

entrado a

"Esta es

que hemos

la la

otro

Memoria no estaba la

Capital,

capítulo,

y

fué

su llama-

conmemorativas del 18 de Julio motín militar de ese día.

del

el

motín

dle

la

primera vez

señalaba con satisfac-

el

y Solsona,

"La Prensa Uruguaya" país poner en práctica lo que decía

los

derrum'be de Giró, habían

para oír misa.



nuestro

piensa

coroneles Palleja

actuar en

Iglesia Matriz

visto en

de

las fiestas

los batallones de los

mismos que habrían

esa

Guardia Nacional

que precipitó

Dos meses

de

presentación

como hemos

miento parcial para

ción

27 escuadrones.

8,074 soldados, distribuidos en

— se

GdBIEBNO

ordenanza

t^iK'da

y

durante el

mundo. Con el

caza

o

hombres, rtalizada aquí

de

propósito

cortar

de

raíz

do

doctor Eduardo Acevedo a

el

un proyecto que decía

Poder

"El

exclusivamente de

casi

noche y en campaña en pleno día

la

presentó

compuestos

de linea

escuadrones de línea eran remontados con ayuda

los

leva

la

(le

La

leva.

la

batallones

iLos

prescribe

lo

militar"'.

sii|)riini
."iegros

197

GIRÓ

todas las naciones cristianas según

en

practica

i)E

la

a

en

la

abusiva

práctica

esa

Capital

la

vista de todo

Cámara de Diputados

así:

Ejecutivo

hará

cesa;

inmediatamente

sistema

el

Fundamental de las levas para Sólo serán atender al reemplazo del ejército permanente... destinados al ejército permanente en calidad de vagos los que y contrario a la Ley

inmoral

fueran declarados tales por Juez coimpetente".

ambas ramas

proyecto marchó sobre rieles en

El

del

Cuerpo

Legislativo y pocas semanas después quedaba convertido en ley

de

RepúbM'ca.

la

Los

t-astigos corporales.

Otra lacra igualmente terrible presentaba

A

principios

marzo denunció

de

la

soldados de línea había sido castigado con

denuncia dio mérito para que luego

de rectificar

cifra

la

que uno de

1,500

azotes,

los

y esa

coronel Palleja, jefe del cuerpo,

el



ejército.

el

prensa

500

palos y no

1,500



agre-

gara:

"Deploro como tigos

tenido

corporales

el

que más

que

que reprimir

la

prescriben

terrible

nuestras

necesidad de los casleyes

mis sentimientos para

Pero échese

militares

y

he

habituarme a pre-

una

mirada por el personal actual de son compuestos de una gran cantidad de esclavos africanos, indolentes y acostumbrados al rigor, que sólo con él se consigue que se vistan, que se aseen y que observen los deberes del líoldado. y de otra parte peor senciarlos.

nuestros

rerlutada

cuei-pos

en

la

de

línea;

crujía

de

éstos

la

cárc?';

hombres

incorregibles,

que

HISTORIA DEL URUGL'AY

198

fuera a darse cumplimiento a

&i

que prescriben

lo

zas militares, sería necesario fusilar- con

Es muy justo

abolir los castigos corporales?

de

libertad y de

la

refórmese

persotta'l

eíl

de

civilización ej^ército,

diél

la

¿Se quiere

y'

muy

a

República;

purgúese

a

altura

la

pero antes

hez y

éste de la

criminales".

de

los

1.a

reforma militar. princLpios de 1853 reanudar reforma militar iniciada en 1835 bajo la adminis-

gobierno de Giró resolvió a

El la

la

ordenan-

las

frecuencia.

obra de

la

tración de Oribe y anulada luego por efecto de las revolu

nuevo

.''iones,

reformados y que imjpQdían ajdemás al Tesoro público pagar regularmente sus capitales a los militares ya desvincula'dos de la ley de Presuipuesto. De una i-eunión de ciudadanos espectables verificada en el Ministerio de la Guerra, surgió una Comisión que luego de estu-

que

obligaban

diar

el

a

convocar de

punto propuso

redactar

el

a

los

adopción de las siguientes bases, para

la

proyecto de ley que habría de someterse a

Asam-

la

blea: '

La reforma y no de

debe títulos

tivo,

hacerse

mediante

entrega

o seis veces más, agrandando así e^ miento de

La reforma actual como a

entregarse

a

cada

dinero

de

efec-

de crédito qu.^ obligarían a gastar cuatro

la

de 1835 debe

reformado

de

deuda; cantidades

la

fijar

conformidad

las a

ley

la

de

retiro;

A

los jefes

vicio,

sólo

y oficiales reformados en

debe

1835 y vueltos

tiempo

ser-

al

subsiguiente

a

su

Los fondos deberán obtenerse mediante un empréstito en

el

ex-

reconocérseles

el

reingreso; tranjero.

Fueron aceptadas estas bases

y,

en consecuencia,

el

Ministro

de la Guerra coronel Flores, presentó un proyecto de ley a la Asamblea, que establecía el retiro de todos los jefes y oficiales

que no fueran necesarios para el servicio público, y '.)or una sola vez del siguiente capital:

la

entrega

Dos años de sueldo a los que tuviesen de 5 a 9 años de antigüedad en el servicio; tres a los que tuviesen de 9 a 15; cuatro a los que tuviesen de 15 a 21; cinco a los que tuviesen de 21 a 25. y seis añcs de sueldo a los que tuviesen arriba de 25 años de antigüedad.

COBIEBXO DE GIBÓ

199

El proyecto fué rápidamente sancionado y en seguida empeza-

ron los preparativos para su ejecución. El Poder Ejecutivo se divigió a la Comisión Permanente en demanda de venia para se-

abonando medio sueldo

guir

a

los

jefes

y

oficiales

reformados

mientras no recibieran sus respectivos capitales, y a su turno la Cámara de Diputados empezó a estudiar una operación de crédito por dos millones de pesrs con destino al pago de esos capitales.

Pero

motín del IS de julio ya estaba encima y

el

la

obra que-

aó inconclusa.

Honores a

los generaliN A^lvear y Gai-zón.

Washington a ñnes de 1852. NuesCuerpo Legislativo, asociándose a los homenajes argentinos, sancionó un proyecto de ley que acordaba pensión a la viuda El general Alvear murió en

tro

del

ilustre jefe

En

de Ituzaingó.

del ejército

mismo momento

ese

producto de una

recibía la viuda del general

soiscrijpciión

Garzón

pública destinada a honrar

la

el

me-

moria del procer que tan hon'do vacío había dejado en nuestro po'llti'co. Ascendía lo recolectado a 12.129 pesos, quedando pendiente de cobro un saldo de 4.144 pesos. escenario

Servicios


la

l'clicía.

Desde los primeros meses de 1852 inició la Policía una campaña encaminada a reprimir los abusos de la mendicidad. En vista de que muchas personas decía una de sus ordenanzas aptas para el trabajo se dedican a la mendicidad, iodo ol que se considere en estado de implorar la caridad pública de-





berá concurrir

a

Policía,

la

expedirá una tablilla con ca",

que

el

el

donde previo examen médico se le membrete: '"Merece la caridad públi-

interesado deberá llevar al cuello.

Fué sorprendente

resultado. Los grupos de mendigos que re-

el

corrían las calles se fueron disolviendo poco a poco y a mediados

de añ: hacia constar

que en toda

el

médico de Policía doctor Gabriel Mendo-

la

ciudad de Montevideo sólo había 77 mendigos

Luego abrió un

registro del servicio d.méstico aplicable a las

za,

autorizados.

pardas y morenas que

la

abolición efectiva de

la

esclavitud ha-

HISTORIA DEL URUGUAY

200

una situación mal definida, que daba margen a inDe acuerdo con la ordenanza respectiva todas las pardas y morenas dedicadas al servicio doméstico deberían concurrir a la Poilicía caída vez que cambiaran de casa, a íín de hacer constar la causa de la salida, en forma de que quedara establecida la buena o mala conducta observada. También se ocuipó la Policía de mejorar algunos de los servi-

bía deja'do en

cidentes de todo género.

cios

más urgentes de

fcaber a la población liría

la

limpieza.

que

En 1852

publicó un aviso haciendo

ha.bía celebrado

un contrato que permi-

de las basuras domiciliarias tres veces por caso de lluvias muy copiosas en que el servicio

recolección

semana, salvo el ouedaría suspendido

ha^sita

el

siguiente.

día

Prevenía a

vez

la

cue desde ese momento quedaba absolutamente prohibido arrojar basuras a la calle, a los "huecos" y a la costa del mar. Eran esos los tres vaciaderos a que recurría la población. Los /ecinos que tenían que valerse de sus propios brazos, se limitaban a volcar sus tachos en la calzada; los que tenían algún muchacho a su servicio, hacían conducir las basuras a los huecos, decir, a los solares baldíos situados entre dos edificios; y las de mayores recursos o que no tenían huecos próximos, enviaban Jíi carga hasta la costa del mar.

es

La matanza de perros, otro de quedó reanudada a raíz de

los

ción sustancial

números

del

programa

Guerra Grande

la

cial,

sin

poli-

modifica-

en los procedimientos de exterminio.

extramuros maniobraban con sus lanzas a todo el correr de los caballos. Al año siguiente iniciaba uno de los diarios el estudio comparativo del palo y del veneno para la matanza en las calles de Montevideo, con marcada pre-

En 1852

las policías de

ferencia a favor del primero.

Y

el

palo entró a figurar en

la

or-

den del día de la Jefatura, seguramente porque dentro de las angustias del Tesoro público significaba un ahorro sobre el veneno.

matanza inaugurada en marzo de 1853, que en la puerta principal del mercado de la Cindadela (actual Plaza Independencia) actuaba un grupo de celadores armados de lazos y de gruesos palos y que el ex-

Dando cuenta de

refería

uno de

la

los diarios

terminio se realizaba

allí

mismo

a

la

vista

del

público estacio-

nado para presenciar el horrible espectáculo. De cómo se comprobaba la importancia de cada .iornada instruían los partes tharios de los Comisarios al Jefe Político, que solía publicar la prensa de la época. Uno de ellos comunicaba la matanza de 21

201

gobieb:no de gibó

porros "cuyas lenguas se acompañan para constancia", se apre-

suraba a prevenir

Comisario.

el

«uando antiguas funciones edique en parte había sido despojada por las Juntas Económico-Adiministrativas. A mediados de 185 3 abordaba con ayuda de los celadores y de los presos la tarea de eliminar un Policía reanuidaiba de vez en

La

lícias

de

gran

peñasco

las

en

situado

calle

la

Treinta

Tres

y

entre

de

25

Mayo y Cerrito, que por su forma convexa constituía un serio peligro para los transeúntes. El resultado se consiguió con ayu-

muy pequeñas

da de minas numerosas pero a

edificios

los

para no perjudicar

contiguos.

La necesidad de ampliar los servicios policiales dio oportunidad más de una vez durante la administración Giró para traer a colación una minuta de la Asamblea Constituyente de abril de 1830, recomendando como medida de economía la provisión '

empleos

(le (;\.o



^decía

civiles

"La

con militares en goce de sueldo. Sería

Constitución"

utilizar los servicios de

Tentativa para abolir doctor Juan

El

— de

ahorrar

muahos hombres

dinero

y

a

el

la

m'^-

vez

aptos.

pasaijorte.

el

Carlos

Gómez presentó en

18 53

do ley aboliendo el pasaporte. "En un país esencialmente comercial como

el

un proyecto

— —

nuestro

de-

todo Comisión de Legislación adhiriendo al proyecto que facilita el movimiento de la población es de incuestiona-

cía

la

io

ble

utilidad".

Como medida

de policía

Constitución" procl'amando del

todo ineficaz:

sólo

lo



^había

la

dicho

dos

misma reforma

respeta

el

meses antes "La



el pasaporte que no ha delinquido;

es

y

como recurso financiero, es de una pobreza extrema. La Cámara de Diputados lo suprimió para el interior de la República, manteniéndolo para el exterior. Y el Senado, más apegado todavía a ferible no alterar

mo

proyecto

la

lo

vieja traba colonial, encontró

que era pre-

existente y en consecuencia rechazó

el

mis-»

Cámara de Diputados.

restringido de la

El pasaporte que según todos los datos publicados constituía un rubro muy poco importante para el escuálido tesoro policial, resultaba sin embargo muy pesado para el viajero: tres pesos y seis reales tratándose de

pasajes para

nez del producto emanaba de jaba

entonces.

la

el

exterior.

La peque-

poca frecuencia con que se via-

HISTORIA DEL l'KCGUAY

2ü2

La Iglesia y

el

Estado.



Gobierno- hace

^El

valeí-

sus derechos de

patrono.

Proseguía nuestra Iglesia en situación anormal por eil aplazamiento (MI la creación de la diócesis del Uruguay, no obst; nte todas

las

obra de Sólo

gestiones

se

con

acuerdo

de

realizadas

Asamblea

la

ley

la

de

conseguido que Larrañaga, que actuaba

había

18S0

Con.&tit'uyente.

delegado del obispo de Buenos Aires, recibiera en 1832

el

r;->n-

nom-

bramiento de "vicario apostólico en la parte de la diócesis de Buenos Aires que se llama República OrientaJl", decía el respectivo decreto. Era la independencia del nombramiento, per no de

la diócesis.

Muerto Larrañaga, fué elegido en el mismo carácter don Lorenzo Antonio Fernández que ya ejercía funciones análogas dentro de la plaza sitiada, por delegación

del titular.

Oribe resolvió

rechazar ese nombramiento ique empequeñecía su autoridad fren-

gobierno de

te a la dé\

Defen&a. Hizo intervenir

la

obispo de

al

Buenos Aires que ya no tenía jurisdicción interna en cios de

la

Iglesia

oriental,

<>sí

que

el

presbítero

Manuel Rivero fuera nombrado

exce,pción

la ipllaza

',de

nego-

al

Janeiro, por intermedio de la

Uruguay ccn

los

delegado apostólico de Río de Legación Argentina, consiguiendo

y

vicario del

de Montevideo, que quedaba

a cargo de Fernández.

Concluida Janeiro que Ilivero,

la el

guerra,

obtuvo

la

Legación Oriental en Río de

delegado apostólico revocara

quedando entonces

renzo Antonio Fernández.

Pocos meses después

a

nombramiento de

el

cargo de toda

la

vicaría

se presentó al

Ministerio de Gobierno

provisor don José Joaquín Reina, pidiendo

la

dad", que

el

Gobierno

la Sie

el

aprobación guber-

nativa a favor del nombramiento de provicario que

tendido Fernández con

don Lo-



le

había ex-

calidad de "mientras dure mi enferme-

negó a

ratificar

invocando incompatibi-

lulades de carácter eclesiástico que determinaron

la

presentación

de un nuevo nombramiento.

En

curso de ese incidente se produjo el fallecimiento del viFernández y entonces surgió un nuevo interes.a.do a la vicaría, el presibítero Rivero, con un pliego en que Fernández le delegaba sus funciones y que el Gobierno encontró suficiente y el

cario

aprobó. El provisor Reina

seguía sin embargo atribuyéndose derechos

GOBIERNO DE GIRÓ

al

203

puesto vacante y el Gobierno resolvió entonces suspender a los contendientes y aguardar la resolución del Papa.

ríos

El

decreto respectivo, expedido durante

el

interinato del

Pre-

sidente del Sena*do don Bernardo P. Berro, establecía que en di-

versas oportunidades las autoridades orientales habían áu exequátur a las provisiones eclesiásticas sin

la

prestado

previa presen-

tación al patrono, condescendencia que debía cesar, y agregaba:

"Que importa ya hacer entender de manera muy

sieria

y

muy

Gobierno no tolerará que nadie desconozca, le Jispute ni contraríe esas prerrogativas y derechos que no puede 3in desdoro abandonar". que

decidida

el

Orgianización de la estadística.

Mucho

se

la estadística

ocupó don Bernardo P. Berro de la organización de durante los dos meses de su actuación presidencial.

Por un primer decreto creó una Mesa de ii'sterio

E-stadística en el Mi-

de Hacienda.

Por un segundo decreto instituyó en cada departamento una Comisión de estadística compuesta del Jefe Político y de dos vecinos, la

con facultad de estatílecer subcomisiones de distrito bajo

presidencia

"convencido obtener para

del

el

la

Juez

Gcbierno

de



Paz

'decía

o el

Teniente Alcalde respectivo, decreto

r>conómicas un conocimiento completo de

sus especies y del la

— de

la

necesidad dí

exactitud y acierto de los cálculos y operaciones

modo como

la

riqueza nacional, de

se halla distribuida la población

de

República"..

Por un tercer decreto trató de regularizar el suministro de daMesa de Estaldística y a las Comisiones departamentales. Los curas quedaban obligados a pasar trimestralmente a los Jefes Políticos una lista die los casamientos, bautizos y defunciones; y con la misma periodicidad quedaban obligados a pasar al Ministerio de Gobierno la Administración de Vacuna una nómina de los vacunados, los médicos de Policía y del Hospital y los médicos en general una relación de los enfermos que hu'bieran asistido; 03 Jueces y Tribunalles una relación de las causas en que intervinieran; el Instituto de Instrucción Pública un estado de las escuelas; la Comisión Topográfica una relación de las mensuras; irt Administración de Correos un informe del servicio postal; !a Colecturía un estado de las rentas; las Jefaturas de Policía un estado de su movimiento y un cuadro anual de la ganadería, agritos a la

nultura e industrias de sus respectivos departamentos.

HISTORIA DEL URUGUAY

204

Teatros y espectáculos públicos.

Las obras del Teatro Rivera y detenidas por

comenzadas durante

Solís,

gobierno de

el

de Oribe, volvieron a entrar

inivasión

la

en actividad a fines de 1852, después de una larga paralización de diez años.

La Comisión Direotiva reunió en esa oiportunida'd a los acciode la empresa para entregarles los planos del arquitecto Garmendia y enterarles de la reanudación de los trabajos. Dentro del edificio empezado decía en su informe se guardaban el valioso cargamento de maidera que habíamos hecho traer de Europa, las columnas de mármol, los clhapiteles y las pizarras destinadas a cubrir los techos. Durante la guerra sóilo quedaron dentro de imuros dos de los miembros del Directorio: don Juan

nistas





Miguel Martínez y don Florentino Castellanos, y ellos se constituyeron en guardianes de esas existencias, y arrendaron el resto

que permitieron pagar algu-

del terreno, obteniendo así re'oursos

nos gastos y dejaron un exceidente de 1,782 pesos. Lo invertido hasta ahora, terminaba el Directorio, 85,7

ipesos, ipor

85

construido

ficio

Uno de

los

monta

a

concepto de comtpra de terreno, parte del ediy materiales

acopiados.

redactores de "La Constitución", describiendo

tado del local momentos antes de

la

reanudación de

las

el

es-

obras,

que Las columnas de mármol, los chapiteles y los zócalos estaban eniterradois en gran parte; que algunas de las pilas de madera estahan apoülladas; que los cimientos y lO'S arcos se en-

refería

contraban en buen estado. Y agregaba que en todo edificio se criaban aves de corral y se

El

mensual"

"baile

mediados

desde

deano", al

bajo

el

durante

de un

primer

con relación a

gran salón de

baile la

concurrieron

de

título

tantas energíasi que hasta

con

construcción

que

implantado

1852

de

el

interior del

cuidaban animales de carga.

se

fiestas

700

sitio

el

resurgió

"Baile Montevi-

resolvió

sociales.

r-^rsonas,

abordar

la

Baste saber cifra

enorme

exigua población de Montevideo en esa época.

La gran

fiesta cívica de octubre fuié solemnizada en el misimo embanderamiento, fuegos artificiales, una magnífica fiesta en el Baile Montevideano y una función de gala en el teatro, representándose el drama de don Francisco X. de Acha, La Fusión", ailusivo a la fórmula de la paz: "Sin vencedores

año

con

'

ni

vencidos".

En

esos

mismos momentos

se

fundaba una sociedad por ac-

COniKUNO DE GIRÓ

ciones para

establecimientos de las carreras inglesas en Ma-

el

ioñas y principiaba Unión.

anuncio

El

construcción de

la

restablecimiento

del

bierno, de

de

creto

la

en

inspirado

paz de cctubre y

la

Creación

"La

Hasta ahora de



y

(le

por

dela

a

consecuencia de

traslación de la

las

Ih

capital

(le

la

a

residieron

gobierno

el

capital a

de

Giró

una

un punto céntrico



no ha habido disposición Montevideo el carácter de capital

decía ese diario

Canelones.

suspendieron

de Suárez

m"seria como

durante

inició

que dé Durante

alguna

Poderes públicos José

gobierno

Durazno.

República.

la

la

favor del traslado de

del territorio.

legislativa

la

clausura del puerto del Buceo.

la

Constitución" a

toros

lugar en

dio

deseo de dar nueva vida

eil

puebles. Proyecto

(le

R*'pública al

campaña

en

Unión, reducida a

la

de

corridas

las

a

postrimerías del

las

1852,

de

villa

de

la

una interpelación al Ministro de Goque resultó que esos espectáculos habían sido au-

Cámara de Senadores torizados

Plaza de Toros en

la

un largo paréntesis de diez años,

de

desipués

205

guerra

la

de

independencia

la

alter.iativamente

Por resolución íe

6

eu

Florida,

1829

se

continuarlas en

la

de febrero

sesiones en Canelones para

los

San

de

Aguada, y el 14 de marzo siguiente se determinó que luego de evacuada la plaza por las tropas brasileñas se trasladaría a ella Es la única resolución que puede la representación nacional. considerar invocarse para a Montevideo como capital, y de ella

han emanado muchas de nuestras desgracias, por efecto descuido en que ha quedado la campaña. Para la capital das las mejoras y

para res.

las

la

obsei"vancia

estricta

de

la

del to-

Constitución;

la campaña el abandono y el despotisimo de jefes militaDebemos procurar que la vida anime iguakmente a todas

partes del cuerpo social, que no haya sombrero

Y

de gigante

medio de conseguirlo sería la traslación de la capital de la República al punto de la campaña que se considerase más aipropiado. 'Estableciéndola en un punto central como el Durazno, la acción del Gobierno se sentiría efien busto de pigmeo.

cazmente en los

toda

la

el

República;

caminos de hierro y todos

los

s'í

construirían

los

puentes,

medios conocidos para acor-

HISTORIA DEL URUGUAY

236

tar

las

cia

en

distancias;

todo

se

haría posible

la

administración de justi-

un valor inmenso

adquirirían

país;

el

los

terrenos

nueva capital y los comprendidos en el tránsito entre ella y Montevideo cuya importancia como primera ciudad no desaparecería absolutamente por la traslación de la próximos

a

la

capital.

Tal era

ai-gunientación

la

Don Antonino Domingo

Eduardo

doctor

del

inmediatamente

encontró

(^lla

en

eco

uno

Cosía,

Cuerpo

el 'die

Y

Acevedo. Legislativo.

los -constituyentes

y a

sazón senador, presentó un proyecto de trasilado de la capital al Doirazno. Para la construcción de los edificios destinados a los Poderes piúiblicos se retiraría de rentas generales la canla

tidad de cinco mil pesos mensuales durante dos años.

La Comisión de Leigislación, compuesta de los doctores Francisco SolaTio de Antuña y Antonio Luis Pereira, a cuyo estudio pasó

de

vir

una

introdujo

proyecto,

el

estudiaría

variante:

punto del centro de

el

asiento

a

la

capital

informaría

e

presentación de los planos de

Poder

el

a

Asamblea

la

nueva ciudad

la

Ejecutivo

República que debería ser-

la

con

erigirse.

a

muy

especialmente del Salto y mensajes de felicitación, y el prctyecto pasó por siete votos contra dos. Pero no pudo prose-

De varios departamentos y San José partieron entusiastas guir

trámite porqu.e la revolución del

su

de julio paralizó

18

en absoluto la acción legislativa.

Esta misima Leigislatura blos:

y

el

de Santa Rosa en

Ñaquiñá con

Acevedo con por

el

de los

Grande con del

del río río

la

del

nombre de

el el

,1a

creación

confluencia

Uruguay, proyectado por

el

río

Olimar;

el

el

en

pue-

Senado cambió

proyectado la

varios

doctor Eduardo

el

de Sarandí en la

Catifs,

de Treinta y Tres

de

de los ríos Cuareim

nombre de Bella Unión que

el

que lleva actualmente; arroyos Sarandí y Las

legislador;

cia

el

deca'etó

confluencia

por

confluencia

de Constitución

en

la

el

mismo

del

Yerbal

confluen-

Ramírez con el Uruguay; el de Cuareim en la costa mismo nombre. Y dio al pueblo de Arredondo el Villa

de Artigas.

II

GOBIERNO DE FLORES.

1853-1856

CAPÍTULO

IV

Movimiento político El triunvirato creado a raíz del den"*iunbe d©l gobiei-no de Giró dirige

un manaf.Hfsto

Ya hemos dicho que

al

el

paLs.

Presidente Giró con

propósito

el

de

escapar a nuevas asonadas que estaban en preparación, se asiló en la Legación de Francia el 24 de septiembre de 1S53 y que

hecho fué aprovechado horas después para la creación de un gobierno provisorio compuesto del coronel Flores y de los generales Rivera y Lavalleja. El general Pacheco y Obes, verdadero promotor y organizador del movimiento revolucionario, resolvió asumir la jefatura del PJstado Mayor y eso por algunas semanas simplemente, transese

curridas las cuales escribía al coronel Francisco Tajes:

"Ahora que nadie puede dudar de que si yo quisiera el más destino lo tendría, ahora mi amigo me retiro", sin asomo cíe descontento personal que no podría atribuírseme tratándose de una administración donde figuran Batlle, Juan Carlos Góalto

L'iez

y Lavalleja.

nuevo gobierno publicó un manifiesto con

El

las

firmas

de

Lavalleja y de Flores y de sus Ministros Gcmez, BatWe y Sayago, explicativo de los sucesos ociirridos. El Presidente Giró, decía en ese documento, se dejó arrast'-ar

una reacción insensata, desoyendo

a

vor de una política tidos en

nacional.

el

todas partes, llegando en ciertos

veer con hombres de existen y 10 de las

vano era señalarle desposeído de la

Rompió

pacificación

la

la

las

momentos hasta

12 Jefaturas de Policía que funcionan. las

fa-

de los parpro-

reacción dos de los tres Ministerios que leyes

octubre

"En

votadas en agravio del partido ya

participación del Poder que

de

indicaciones a

eíquilibrió

le

había prometido

y patentizarle el grave peligro que corría la paz pública desde el momento en que un partido viéndose sin la salvaguardia de la ley y objeto de la malquerencia de la autoridad, no podía dejar de creer llegado el caso de la 14

— IV

HISTORIA DEL URUGUAY

210

legítima defensa

de sus más esenciales derechos y de sus

más

caros intereses".

Todas

las

garantías

constitucionales,

agregaba,

están

en

vi-

A

ningún ciudadano se le tendrá en cuenta sus anteriores opiniones políticas. El Gobierno sólo reprimirá a los que con las armas en la mano pongan obstáculo a su misión. Restablecido el orden público convocará "una grande Asamblea de dogencia.

número de representantes

ble

senadores,

de

y

prevista

por

el

artículo 159 de la Constitución de la República, y entregándolos

destinos del país a esta

Asamblea

se inclinará ante su soberano

fallo".

Nadie piensa en la

contu'ai'rlevolueión.

En los primeros días ide su asilo en la Legación de Francia permaneció el Presidente Giró ajeno a todo plan de restauración las

<3e

autoridades

Ya

constitucionales.

lo

había

su

campo

fjue

Y

al





el

al

comunicar

anticipado

Cuerpo Diplomático el paso dado por el señor Giró. "El Presidente de la República decía en su circular que no quiere ensangrentar inútilmente las calles de la ciudad, se ha decidido a abandonar Ministro don Bernardo P. Berro

a los revoltosos, antes de prestarse a las humillaciones

harían más deplorable

la

guerra que ya no puede evitarse".

una nota al Encargado de Negocios de Francia. "Mientras he permanecido en vuestra casa, escribía el 28 de septiembre al Ministro Maillefer no han salido de mis labios y de mi pluma sino palabras de paz y de conciliación entre todos los orientales bajo el imperio de la autoridad y de la ley". Con esa declaración quería desautorizar sin duda estos documentos que acababan de publicarse bajo su firma: Una proclama en que declaraba que no había hcclio dejación se encargó de ratificarlo el propio Giró en



de

la



autoridad, sino que había "buscado un asilo suspendiendo

temporariamente

el

ejercicio de su autoridad en

sustraerse a las violencias que se

le

la

Capital para

hacían":

Varios decretos por los que se colocaba a la Aduana bajo la bandera francesa, se autorizaba a los Ministros para el desembarco de Tuerzas destinadas a

la protección de las personas y propiedades de sus connacionales, se facultaba a los residentes extranjeros para armarse contra la rebelión, se designaban co-

mandantes de armas en

los

departamentos, y se disponía que los

OOniERNO DE FLORES

211

Políticos iTccedieían al llamamiento de la Guardia Nacio-

.Tefes

nal;

Y con a

una circular Guardia

firma del Ministro Berro simplemente:

la

Jefes Políticos disponiendo la convocatoria de la

los

Nacional y dos notas. Una

ail general Servando Gómez con las "Eg preciso proceder con el mayor orden en la reunión de la fuerza y demás pasos. Nada que parezca espíritu de partido. Levántese la bandera constitucional, Usted, Gela bandera de la autoridad nacional y nada más. neral, es llamado a sostener el orden y el gobierno legal como uno de los más distinguidos patriotas y guerreros del país. Muy pronto irán las órdenes convenientes. Usted puede ponerse a la cabeza de las fuerzas que juzgue conveniente reunir en los departamentos de Pays^ndú, Salto y Tacuaremíbó." Y otra al coronel Gervasio Burgueño, en que le decía "reúna a toda la gente que pueda, proclamando al gobierno contra los anarquistas, apoderándoss del departamento, cortando las comunicaciones de Montevideo con Flores". Eran documentos de autenticidad muy sospechosa, y por ello

Kig-uientes

instrucciones:

.

í\

gobierno

para

resolvió

pasarlos

a

los

Tribunales

averiguación correspondiente.

la

Ante

revolucionario

.

el

Juzgado del Crimen desfilaron varios

testigos,

y apo-

yándose en algunas ce sus dedlaraciones afirmó eil Fiscal que en su concepto estaba "bastantemente probado que el auto^ era don Bernardo P. Berro y la presunción de que al proceder así estaba de acuerdo con

el señor Giró". Otro docum.ento apareció en esos días con

una proclama contra

la

la

firma de Berro:

armarse proclama que

a los residentes extranjeros invitándolos a

rebelión.

"Tiempo hace



decía

esa



están combatiendo dos principios en esta parte de América, a saber, el principio de la ley y el principio de la espada:

de

la.iley

greso;

el

barbarie,

es

e
orden, la justicia, la paz,

la

el

principio

civilización,

el

pro-

principio de la espada es la tiranía, la guerra civil, la el

atraso".

El general Pacheco, en la creencia de que con él rozaba la estocada, publicó en el acto una contraproclama a los legionarios

franceses e italianos:





"Giró y Berro, les decía dos hombres de Rosas, dos de ruestros antiguos enemigos, de los que aplaudían cuando alguno de vosotros caía degollado... esos dos hombres comensales del Cerrito habían llegado al poder porque en la victoria fuimos

HISTORIA DEL URUGITAY

212

el poder cuando no podían esperar el veros decalumniaban, os negabain justicia". Continuó durante algunos días la publicación de documentos, entre ellos una circular con la firima de Giró, en que el ex Presidente, que había i'paiado de la Legación a un buque de guerra

lioclerados y en

gollados,

OíS

francés, deolaTaha que no había renunciado a su alta investidura y que simplemente se había asilado pa^ra e&capar a las violencias de que estaba amenazado. Pero la prueba irrevocable de que nadie había pensado en la contrarrevolución está en la actitud absolutamente pacifista de los prohombres del gobierno derrumbado. A principios 'de octubre el general Servando Gómez escribía al

'oronel Venancio Flores acatando

al

gobierno surgido de

la

re-

volución. "Sabe usted, le decía, que soy un patriota desnudo de

toda aspiración y que nunca me llevará otra cosa que lidad de mi país y la unión de los orientales".

la

tranqui-

Algunos días después don Bernardo P. Berro bajaba de un buque en que estaba asilado y se alojaba tranquilamente en su quinta. Y antes de finalizar el mes de octubre hacía lo mismo don Juan Francisco Giró; el general Manuel Orilbe, que estaba en otro buque de guerra, emprendía viaje a España; de toda la campaña llegaban noticias tranquilizadores respecto de la actitud de los principales jefes del gobierno derrumbado; y el coronel Flores, que había salido a recorrer los departamentos de Canelones, San José y Colonia en previsión de posibles resistencias, regresaba a Montevideo luego de disolver alguna que otra pequeña fuerza arma-

da y sin derramar una sola gota de sangre. Explicando el desconcierto general, escri'bía

el doctor Eduardo Acevedo a don Juan José Soto: "Los jefes departamentales no tenían instrucciones de ninguna especie y el gobierno se vino ahajo en la Capital sin hacer el menor esfuerzo para sostenerse en otras partes. Eso explica que Flores haya pendido llegar sin ninguna especie de obstáculo hasta San José con poco más de 20 infantes y 50 caballos".

Muere

A

el geiieral Lavalleja.

los

veintitantos

repentinamente

eil

días

de

"La pérdida del fundador decía

al

la

creación

general Lavalleja en

la

del

triunvirato,

murió

Casa de Gobierno.

ilustre de la nacionalidad oriental

día siguiente un decreto firmado por Flores y sus Minis-

GOBIERNO DE FLORES

"213



Juan Carlos Gómez, Lorenzo Batlle y Santiago Sayago es calamidad nacional, es uno de los hechos que hacen época en la vida de los pueblos y que la moral pública exige pasen a las generaciones acompañados de los altos testimonios de respeto y gratitud que merecen los héroes a quienes Dios reservó la re-

tros

una

dención de las naciones».

Se

ordenó

construcción en la

la

para guardar sus restos, con podría

que

Tesoro público se

virtud de que

que

que

la

muerte

3Iuere

llevaran

públicos

que fué

autopsia,

la

derrumbe

el

Impuesto por

en

de ese

la

guerra

Defensa y

de 1854

Pero

Gobierno.

mismo mes en

cerca del arroyo

desde

ran

a

traídos

cuatro años

puso en viaje para ocupar muerte le sorprendió a meDepartamento de Cerro Largo,

el

manchados con sangre de una merecida excepción a

mandó

revocado

se

contados

civil

Haciendo

el

la

uno de sus

Conventos,

a Lavalleja,

todavía

destierro de 1847

el

pacificación de 1851.

la

el

en Yaguarón

abandonado

haber

sin

que se alojaba

de enero

principios

puesto

Giró,

gobierno de la

el

después a raíz de

diados

médicos, resultó

general Rivera, vivía

el

de

territorio brasileño en

A

espacio de quince días.

luto por

practicada por once

producido por congestión cerebral.

se había

Otro de los triunviros,

su

resolvió

general Rivera.

el

cuando

se

todas sus deudas, en

Estado había absorbido su fortuna particular y al borde de la miseria; y se dispuso que

el

empleados

De

de esa iglesia;

cargo de

hiciera

muerto

había

los

bóvedas

bajo las

construirse

el

tumba

de una

Iglesia Matriz

advertencia de que ninguna otra

la

Gobierno

el

Montevideo

e

que

escenarios

de

prisioneros. la

exclusividad restos

de

inhumados

en la

Iglesia

junto, a la fosa del jefe de los Treinta y Tres,

acordada

Rivera fue-

los

Matriz,

como efectivamente

se hizo.

Concluida casa

de

la

la

ceremonia

viuda

doña

fúnebre,

se

Bernardina

dirigió

Fragoso

Acuña

de Figueroa recitó unos versos que «Quién fué tan grande como él?... Nadie en doctor

Estanislao

«Nuestra

tierra

patria es la

Del

Vega

es la

creación

domicilio de la

pronunció

madre de sus

del

un

terminaban

el

que

Rivera, pero

trabajos y el teatro

viuda marchó

tierra!»

en

cortejo

a

la

donde

Rivera,

la

discurso

general

cortejo

el

de

así:

y

el

decía:

nuestra

de sus glorias».

a la

Casa de Go-

HISTORIA DEL URUGCJAT

214

Presidente del Tribunal de Justicia don Franallí el Araucho dijo dirigiéndose aK coronel Flores: «El Poder Judicial se auna en su sentimiento a V. E. y a todos los orientales cuyo segundo patriarca y jefe ya no existe». bieino, y cisco

Don

1816 a 1820,

y jefe de los

orientales.»

mo

permitido


¿Quién había

Arístides,

jefe

sido

en la nota

en las

gloriosas

«segundo

patriarca

primero?

el

de

pésame

a

El misla

viuda

Misiones. Véase en qué forma:

del conquistador de las

nuestro

llamaba a su

nombrarlo

encargó de

se

Rivera

soldado de

Araucho,

Francisco

campañas de

recordar

otra

vez

General,

ínclito

al

don José

ciudadano

virtuoso

al

Artigas

a



a un lado miserias y partidos».

Poco

después se

dirigía

Bernardina

doña

Fragoso

Rivera

de

Gobierno y hacía entrega de la espada de su marido en esdignos de ella y de las grandes señoras de su tos términos al

tiempo

que

trabajaban

por la

desatender

patria sin

las

nobles

tareas del hogar:

«Yo

he creído

muerto

que

general

el

Rivera,

su

espada no

puede pertenecer a su familia; he creído que es una propiedad de la Nación. Llenando así lo que de mí exigían mi doble de ciudadana y de viuda...»

título

En

dispuesta

creada

Caridad en

mismo

del

abril

estaría

a

por

hizo

preguntar

el

Gobierno

colaborar en las

tareas de

la

Sociedad de

año

le

decreto

del

año

anterior,

y

ella

si

contestó

acto:

el

«Hacer

bien o ayudar a

el

corresponde a

la

hacerlo,

es la

sola

ocupación que

viuda del general Rivera».

El vnun\ii'ato degenera en dictaílura


uno

solo.

En menos

de cuatro meses había desaparecido, pues, el triunquedando el coronel Flores a cargo de la dictadura que ya ejercía de hecho desde la muerte de Lavalleja, dada la au-

virato,

de

sencia

líajo

la

En nerales.

Rivera.

dictadura de Flores.

octubre

Cada

de

1853

fué

departamento

y diputados con

amplios

convocado elegiría

el

doble

poderes para

país a

niimero

elecciones

de

proce
ge-

senadores

reforma de

215

ÜOUIEKNO UE FLOKK.S

de

Constitución

la

Los comicios tendrían lugar la Asamblea empeza-

Repúbílica.

la

último domingo del mes de noviembre y ría sus sesiones e"! 1." de enero de 18 54. el

No

era

ese

una

Constitución

trámite

el

primera

De

constiuicional.

debía

L^egislatura

acuerdo con

indicar

la

la

necesi-

reforma, una segunda concretar las reformas a realitercera sancionar o rechazar esas reformas, con douna zarse y ble número de senadoras y diputados en el caso de cambio do

dad de

la

forma de gobierno. procedimiento a que recurría

E'l

Plores

gobierno de

el

era,

pues,

un procedimiento revolucionario que hacía caso omiso de

{odO'S

los

en

trámites previos,

deseo de precipitar

el

¿En Uno de los

mas.

.

qué consistían esas reformas?

.



las

refor-



ocupándose ^"El Nacional" diarios de La época grande Asamblea, señalaba la necesidad de vigorizar la acción del Poder Ejecutivo, de aumentar el plazo del mandato de

la

de

presidencial,

personal

con

modificar

administrativo,

el

de

sistema electoral,

armonizar

la

estado de nuestra civilización, de deis'lindar

el

disminuir

de

de

libertad

el

el

imprenta

Poxler

mu-

nicipal y de centralizar las policías.

El doctor Juan Carlos Gómez, inspirador de esa grande Asamblea,

como un

cruzíó

reliámipago por

Casa de Gobierno, expi-

la

diendo en los treinta y tantos días de permanencia en el ministerio un decreto que abría a los bulques y al comercio de tC'das naciones

las

re&tab'lecía

e'l

los

ríos

pacto

de

naveigables

suisipenidía el uso del pal'co por tratarse "de una costirmhre

XLue

&

los

hábitos

proipiedad a

los

de

pacificación

RerpúlbÜica;

la

de

octubre

de

otro

que

1851;

otro

en eil Teatro San Felipe régimen colonial contraria

oficial defl

democráticos y atentatoria a lies derechos de la y una circular en que se recoimendaba

particular";

Jefes

que hicieran efectivas las garantías que fueran moderados, parcos en dictar reso-

Políticos

constitucionales:

luciones y firmes en cumplirlas una vez dictadas;

vieran

de

parcialidades

y

preferencias;

que se abstuque seleccionaran su

elementos dignos de la consideración de los veque sólo emplearan la coacción de la fuerza después de agotar los medios persuasivos; que hicieran respetar la inviolabilidad de la correspondencia y no trabaran la circulación personal entre cindarios;

de

imjpresos, fuere cual fuere su contenido. El acuerdo gubernativo que restablecía

hay vencidos

ni

el pacto de 1851 "no vencedores", llevaba las firmas de Laval'leja y

HISTORIA DEL URUGUAY

216

de sus Ministros Juan Carlos Gómez, Lorenzo Batlle y Santiago Sayago, y estaba concebido así: "El pacto de octubre que quitó las armas de la haciendo suceder la paz a una guerra

orientales,

que caducó...

fué falseado por la administración

orden en

Estado y reconocida

Gobierno Provisorio,

del Ir.

el

contradicción

sin

él se aipresura

ejecución del pacto de octubre

mano

Afianzado la

el

autoridad

a proclamar que

mira en

base más sólida de

la

de los

destructora,

la

paz

y que se reconoce obligado a la ejecución leal de sus condiciones... Todos los orientales que por ese pacto pudieron consi-

derarse autorizados para vivir en

pueden volver a excepción El

el

garantiendo

él,

el

el

país,

goce de los derechos que

doctor Juan

Gómez

Carlos

si

han abandonado

lo

Gobierno a todos sin ninguna la

ley les acuerda".

renunció a principios de no-

viembre de 1853 y pocos días después abandonó también la redacción de "El Orden", diario que había fundado con el propósito de colaborar en la obra revolucionaria que hizo tabla rasa del gobierno de Giró. Juntamente con él se retiró del ministerio el coronel Batlle, síntoma claro de que habían surgido fundamentales en el seno del gobierno revoluciodisidencias nario.

El Presiiclente Giró se lanza a la contraiTevolución.

La situación de Flores había quedado entretanto plenamente normalizada. Nadie discutía sus títulos. E'I proipio Presidente derrumbado había abandonado su asilo y entrado de nuevo a sa hogar, resuelto a aceptar el hecho consumado, sobre el que ya parecía absolutamente imposible volver.

Pero

la

diplomacia brasileña, que tan activamente

laborado en

la

caída

del

había co-

gobierno de Giró, resolvió ayudar

al

Presidente derrumbado para que a su turno volteara a Flores. Era el medio de que no desapareciera el estado de guerra en. este ensiaiLgrentado suelo que él Iim|perio había decidido anarqui-

como medio de absorberlo mtás rápidamente. el mes de octubre de 1853 quedaba en armas el Departamento de Cerro Largo bajo la acción del coronel zar

Antes de concluir

Dionisio Coronel, y pocos días después, a principios de noviembre, -tamibién

coronel

lo

estaban

Diego Lamas,

uardino Olid,

la

la

la

de

división

de San José a órdenes del

MaMonado

a

las

del

coronel

Be»'-

de Tacuarembó a las del coronel Jacinto Barbat,.

y la de Colonia a las del coronel Lucas Moreno.

217

GOBIERNO DE FLORES

Como consecuencia de esos levantamientos fueron desterrados don Bernardo P. Berro, don Cándido Joanicó, don Eduardo Acebedo, don Francisco Solano de Antuña, don Jaime Estrázulas, don Bernabé Caravia y don Ambrosio

Vellazoo,

efecto

y por

ciudadanos de

otros

subsiguientes

complicaciones

lasi

d'i

filiación

don Manuel Herrera y Obes. el general César Díaz y marchó a los departamentos del litoral, al mismo tiempo que el general Anacleto Medina se dirigía a Cerro Largo al frente de una disit/uacionista entre ellos

Flores ddlegó

visión

el

gobierno en

de mil hombres.

Tan distantes estaban,

sin

algunos de aque'.dos ciu-

e'm'bargo,

dadanois de la idea de la revolución, que en los tos

en que

retiro de su íi

favor de

diplomacia brasileña sacaba

la

hogar para conflagrar concurrencia

la

los

a

la

al

mismos momen-

Presidente Giró del

campaña,

ellos

trabajaban

comicios generales de senadores

diputados a que había convocado Flores. En carta del 1." de noviembre que la prensa puiblicó al año s-iguiente, expresaba

j

doctor Eduardo Acevedo

al caudillo de Cerro Largo don Dioque era necesario ir a las elecciones, salvo que se contara con elementos para dominar la campaña, cosa que él debía reputar imposible dados los términos de la carta a don Juan /osé SO'to, que antes hemos reproducido.

el

Pisio Coronel,

.Actcs úe

violencia duTívnte la lucha.

Durante su interinato

el

general César Día^ dictó varios de-

cretos sensacionales con la firma de sus Ministros el general En-

rique Martínez, don Joisé Aguiar y don José Zubillaga.

Por uno de rro,

bajo

dtberían

ellos

ordenaba

el

arreato de don Bernardo P. Be-

advertencia a todas las autoridades del país de que pasarlo "por las armas, sin más formalidad que la la

preám-

justificación de la identidad de su persona". Invocaba el

bulo

como razones

concordia de

í-us

deteriniinantes

habitante.s,

la

la

tranquilidad

rebeldía de

del

Berro, bajo

llujo se había producido el levantamiento en armas, y

de Ministro que todavía

sie

atriibuía en

país,

cuyo el

la iii-

título

sus co^municaciones.

Por otro establecía una Comisión militar "jpara el conocimiento y sentencia de todas las causas por delitos militares" y en general de to'da clase de personas aicusadas "por los delitos de traición o conspiración contra eil Estado". La Comisión ¿grcgaba el decreto "procederá con arreglo a las ordenan-





HISTORIA DEL URUGUAY

218

aunque ver'balmente, en

zas,

las

causas en que tenga que cono-

y sus fallos serán inapelables". Invocaba el preámbulo la cecesidad de "facilitar la represión y castigo de todos aquellos delitos atenta-torios del orden y de la seguridad pública". cer

Y por

pago de los gastos de guedon Bernardo P. Berro, don Dionisio Coronel,
rra los bienes de

obedecía al tirano de Buenos Aires y que fué vencido por las armas de la República y de los poderes aliados". Ante esta serie de gravísimos decretos decía editorialmente "El Comercio del Plata" bajo el epígrafe de "Sálvense los principios":

La causa de

¡a Defensa de Montevideo era una causa de Esa causa está hoy comprometida. Eli Go'bierno Provisorio declaró al tiempo die su advenimiento al poder en pleno

principios.

vigor

las garantías

constitucionales

a

favor

de

la

vida y de

La opinión pública

desaprueba lías medidas que en contra de los principios proclamados ha adoptado el Gobierno y desaprueba los actos que han sucedido a algunas de propiedad.

la

esas medidas. Esitas y otras protestas debieron e.iercer alguna presión en la Casa de Gobierno. El hecho es que el general César Díaz aprovechó las noticias de la paz que llegaban de campaña para dejar

efecto

sin



rando

el

bando de muerte lanzado contra Berro, "consideel decreto que es humano y santo el prin-



decía

cipio de unir el triunfo a la indulgencia".

No

registra la prensa de la época a,ctos de sangre con los ven-

Amarillo en Paysandú bajo la acusación de traición. Pero ocho años después, el i'octor Antonio de las Carreras aumentó l\a lista con las siguiencidos, fuera del fusilamiento del capitán Javier

tes

víctimas:

El alférez Justino Bolarte, esesinado en su casa; N. Silveira y

S.

Sánchez, degoilados en Minas;

sinado

en

Florida;

el

el

sargento Alejandro, ase-

comandante Polanoo y sus compañeros,

GOlüEKNO

219

FLORES

I)E

el comandante hermanos Hieres, León Urán y

asesinados en Tacuarembó desipués de rendidos;

Reyes, degol!lado en

el

Coria; los

Juan Cepeda, asesinados en Cerro Largo.

Triunfan rápi(laiuentf> las fuerzas del Gobierno.

Fué muy

hubo un encuentro de resoel gobernador Flores fueron derrotadas y desbandadas por las del coronel Lucas Moreno. Pero la revolución carecía de elementos y no pudo sacar nanc^'a,

en

corta la campaña. Sólo

el

que

que mandaba

las tropas

partido de ese triunfo aislado.

Treinta y tantos días después de iniciado rro

Largo,

coroneles Dionisio

los

ponían las fronteras de Río Grande;

vadeaba

el

fuerzas del

el

movimiento en Ce-

Barbat y Olid trascoronel Lucas Moreno

Coronell, el

Uruguay en dirección a la costa coronel Lamas se desbandaban.

entrerriana y las

El coronel Flores reasumió el gobierno a principios áe enero de 1854 y en el acto suprimió la divisa colorada como distintivo do gueirra; acordó un indulto del que qiuedaban excluidos los jefes

del

movimiento don Lucas Moreno, don Diego Lamas, don

Dionisio Coronel, don Juan Barrios, don Juan Carvallo, don Jacinto Barbat, don Bernardino Olid, don Francisco Laguna, don

Pedro Carro, don Lázaro Pérez, don Juan P. Pastrana, doo Timoteo Aparicio, don Cipriano Ca-mes y don Doroteo López; y dio de baja a todos los jefes y oficiales que se hubieran ailzado

an armas contra

&1

Gobierno.

Los favorecidos por

el indulto quedaban obligados a gestionar ante los Jefes Políticos "el respectivo resguardo para no ser mo-

lestados".

Transcurrieron algunas semanas antes de que los sucesos volla plena normalidad. El Presidente Giró, que se había mantenido en el puerto de Montevideo a bordo de un buque de guerra brasileño, recién siguió viaje para Buenos Aires a me-

vieran a

diados de febrero y allí continuó hasta el mes de mayo, en que regresó a Montevideo para instalarse de nuevo en su casa.

El Brasil era

el

promotm- de

la eontrai'revolución.

El ex Presidente Giró estaba asilado en al

tiempo de quedar conflagrada

la

la

campaña

Legación del Brasil y de

la

Legación

HISTORIA DEL URUGUAY

210

pasó a un buque de guerra llegadas de

noticias

brasileño a raíz

Cerro Largo,

de

las

primeras

quedar en situación de

para

instalar su gobierno en cualquier parte de la costa,

según rezaba

una comunicación del coronel Moreno aJl coronel Báez. Entre los documentos secuestrados a las fuerzas de Cerro Larfiguraba una carta de don Bernardo P. Berro a don Dionisio fc'o Coronel, avisándole que la Legación Brasileña estaba resuelta sostener

al

que

la

cia,

a.

gobierno de Giró y que era necesario, en consecuenautoridad de ese gobierno apareciera sostenida por

todo el país. Tal era

el

origen del movimiento revolucionario que estallaba

t'uando todo ya se había normalizado,

cuando

Giró había vuelto a Montevideo y estaba en

gobierno de hecho que

al

lo

31

el

Tomás

— no

leunicn de

la

acatando

la

revolución de septiembre

— es-

doctor Florentino Castellanos a don

el

(correspondencia publicada por

Villalba

meque) lios

de octubre

ex Presidente

casa

había suplantado.

"La situación producida por cribía

el

su

la

acepta

el

el doctor PaloGobierno Imperial. No consiente en la

doble Asaanblea a que se convoca.

pecuniarios.

Ha

visto

en pelligro

el

No prestará

auxi-

tratado de alianza. De-

que se excuse la continuación del señor Giró en la presidende la República que las Cámaras actuales pr.K/ean a su reemplazo, pero que al hacerlo entiendan que no p.-eten le con

feca



cia

su cooperación que triunfe un partido".

Hemos

en el capitulo I el importante debate que Senado brasileño a mediados de 1854 con mo-

extractado

tuvo lugar en

el

tivo de los sucesos del Plata. el senador interpelante, surgió un gobierno que formaban parte Rivera y Lavalleja, "los dos enemigos más encarnizados del Brasil"; y entonces el Gobierno Imperial, que supuso que Rivera podría ocupar la presidencia, trató de apoyar a Giró, y así lo hizo hasta que la muerte de aquél le Fermitió cambiar de propósito y sostener a Flores. Y adviértase que eso dijo el senador interpeilante sin ser rectificado en sus graves confidencias por el Ministro de Negocios

Caído Giró, dijo

del

Extranjeros ique estaba

Habla

el

allí

presente!

doctoi* Jiian Carlos Góiiifz.

Refiriéndose a estos frecuentes cambios de rumbos de

plomacia imperial con

¡a

invariable

la

di-

amenaza de intervenciones

GOBIERNO UE FLORES

armadas, escribía en 1855 tor Andrés Lamas:

el

Sil

doctor Juan Carlos

Gómez

al

doc-

"Muchas veces el doctor José María Muñoz y yo hemos repetido al señor Paranhos, Ministro Brasileño en Montevideo, estas no hay pleito entre colorados y blancos; el Brasil quiere para traernos un arhitraje forzoso... Después de

pallabras:

crear

iñeito

el

haber apoyado, después de haber reconocido al Gobierno Provisorio ipor actos públicos, cuando ya hacía cerca de un mes que el señor Giró estaba en su casa", le dirigió el Ministro Paranhos una nota en que le daba "el tratamiento de Presidente de la República que había cesado de darle..." La nota de Giró a

Paranhos era del llegó el 30 del

1.°

de octubre y

contestación

la

mismo mes. Entre una

del

y otra nota había

Ministro

quedado

gobierno y el señor Giró se había retirado a su casa. En su respuesta decía Paranhos que el Imperio acababa de "aprontar en la frontera un ejército de 5,000 hombres y de auinstalado

mentar plearía

el

la estaciíón naval en Montevideo", y advertía que em"todos los esfuerzos a fin de que quedara restablecida

autoridad

constitucional" de Giró. "La guerra civil que noviembre de 18 53 fué, pues, obra de la política brasileña. No hay en la República Oriental un solo hombre blanco o colorado que no tenga hoy ese convencimiento".

la

.

.

estalló en

La confesión

brasileña.

No hay exageración en confirmadas por toda

tán

Hemos entre

tas

hecfho referencia el

esas la

en

el

Ministro Amaral y

tivo del anuncio de

que

el

formidables

documentación caipítulo el

I

palabras. oficial

de

Ellas la

es-

época.

a un cambio de no-

ex Presidente Giró con

mo-

Brasil había resuelto reconocer al go-

bierno de Flores.

Véase ahora la respuesta del ex Presidente Giró a esa decisión del Imperio, respuesta publicada en la prensa de Montevideo casi al mismo tiempo que en el Relatorio del Ministro de Negocios Extranjeros dell Brasil:

Tanto

el

18 de julio

como

ell

25

en su nota datada en Buenos Aires

de septiembre el

1."

decía Giró de marzo de 1854

el auxilio del Brasil sin conseguirlo. La Legación sólo intervenía para obtener concesiones a favor de los revoluciona-

solicité

rios.

su

Estos parecían contentarse al principio con dos Ministros ie pero una vez satisfecha su exigencia, pidie-

filiación política;

HISTORIA DEL URUGUAY

222

ron

destitución

la

mente

el

INIinistro

todo ello hasta

el

de varios Jefes "Políticos, siendo invariableBrasileño el intérprete de sus exigencias... 3

de octubre en que

la

Legación me dirigió

una nota en que expresaba: "Que S. M. estaba dispuesto a cumplir refligiosamente el tratado de alianza y a prestar eil apoyo de sus fuerzas de

mar y

tierra para el restablecimiento

no constitucional toda vez que

del

gobier-

fuese requerido y se verificase

le

no como parte principal que gobierno que él repeliese". hubiese de imponerle al país un Adviértase que la cancillería de Río de Janeiro lejos de oculcaso de obrar

el

como

auxiliar, y

maquinaciones las divulgaba con lujo de detalles, según demuestra este extracto de una crónica de los sucesos contenida en el Relatorio del Ministro de Negocios Extranjeros correstar sus lo

pondiente a mediados de

1854:

El Presidente Giró bajó a tierra y se alojó en su casa parti.

cular

el

21

de octubre de

1853.

Una semana después

la

Lega-

que había recibido de Río de Janeiro, se dirigió al señor Giró para decirle que el Brasil estaba dispuesto a cumplir el tratado de alianza y que por lo ción,

de a^íuerdo con

las instrucciones

tanto auxiliaría a los ciudadanos que se propusieran restablecer

autoridad depuesta. Contestó el señor Giró que él se consideraba inhabilitado para tomar disposiciones sobre el particular. Pocos días después estallaban movimientos aislados en diversos departamentos y entonces el señor Giró se asiló en la Legación Brasileña iy allí estuvo desde 01 6 de noviembre hasta el Ta

3 de diciembre en que pasó de la casa de la Legación a un buque de guerra brasileño. Mientras estuvo asilado no obtuvo el señor la intervención del Brasil. En seguida se dividió el Partido Colorado en dos fuertes grupos y la acción de Ha Legación fué solicitada por el señor Giró y por el Gobierno Provisorio. El 30 de enero finalmente comunicó la Legación que el Brasil había

Giró

resuelto apoyar al gobierno de Flores y entonces

abandonó su

asilo en la

el

señor Giró

corbeta brasileña y se dirigió a Buenos

Aires.

Tal es la crónica del Relatorio concordante con todos los daque hemos reproducido. Es el proceso de la diplomacia im-

tos

formulado con todo desenfado por la misma cancillería de Río de Janeiro, que hoy daba elementos a un partido y mañana se los quitaba para dárselos al otro con la esperanza menguada de que bajo la presión del cansancio, de la desesperación perial

223

GOBIERNO DE FLORES

y de la sangre derramada alcanzaría fronteras hasta el Río de la Plata!

Imiperio

el

correr

sus

intervención brasileña fomiulado por los partida-

Vn podido de de Giró.

rios

Esa nota del 30 de enero que ponía bruscamente término a un período durante el cual el Brasil no había cesado de estimular a los partidarios de Giró para que se alzaran en armas contra los colorados que el mismo Brasil había ayudado a apoi derarse

Poder,

del

coincidió

con

la

organización

de

una serie

de trabajos que parecían bien encaminados del punto

de

la

Así que partidarios a

Brasil resolvió dar la espalda a los revolucionario^

el

18 de julio y arrimar

de!

de vista

orientación de la diplomacia imperial.

el

hombro

del restablecimiento

Río de Janeiro

del

a la revolución blanca, los

gobierno

de

Giró

enviaron

doctor Jaime Estrázulas para coadyuvar a

al

nuevas instrucciones del Ministro Amaral, y como consecuende las insinuaciones imperiales fueron redactados dos documentos destinados a provocar el restablecimiento del gobierno .as

cia

de Giró.

1868 por "El Siglo",

Esos dos documentos, reproducidos en

llevaban las firmas de un centenar de hombres representativos, entre los que figuraban don Luis de Herrera, don Enrique de

Arrascaeta, don Federico Nin Reyes, don Pantaleón Pérez, don Francisco Solano de Antuña, don Santiago Botana, don Cristóbal Salvañach, don Avelino Lerena, don Doroteo García, don.

José Vázquez Sagastume, don Juan José de Herrera, don LesBastarrica, don Antonio de las Carreras y don Ignacio Ur-

mes

tubey.

El primero de ellos era una representación al Ministro ral

concebida

"Los habitantes de la

más viva

oíros,

Ama-

asi: la

ciudad de Montevideo hemos visto con

satisfacción la presencia de V. E. en

porque estamos ipersuadidos de

les

medio de nos-

beneficios de la

mi-

Emperador del Uruguay. Nos hallamos

sión de V. E. y de la elevada política de S. M. el Brasil respecto

del

Estado Oriental del

de consiguiente íntimamente penetrados de que perial el

al

el

Gobierno Im-

prestar su generoso apoyo a la República lo

espÍTitu

letra de los

basa en genuino de Oa convención de paz de 18 28 y en la tratados de 1851 que vinieron a complementar y ga-

HISTOUIA DEL URUGUAY

224

que

Tantir aquella convención;

los fines

que se propone son los

soberanía de este Estado y concurrir a la estabilidad de su independencia combatida por tantos elementos disolventes; y que estando reconocido y consignado en do-

de sostener incólume

cumentos

la

y solemnes que

clásicos

el

interés

que mueve

al

Go-

bierno Imperial es santo y legítimo porque se funda en compro-

misos públicos y propende a afianzar la paz y todas las garantías sociales, no trepidamos en declarar a V. E. que el concurso que el

como

Brasil ofrece a la República es considerado por nosotros

generoso, noble, desinteresado, sin que empañe en lo más mí-

Una serie de años calamitosos para ha conducido a la anárquica y difícil posición en que lo ve sumido V. E., y para que el comercio y la industria y todos los elementos de prosiperidad y de riqueza puedan desnimo

este

la

dignidad nacional.

pueblo,

envolverse,

lo

sólo

se

necesita paz, garantías sociales y concordia

entre sus hijos. Si para conseguir tan benéficos resultados fuera

necesario el

el

auxilio de la intervención

armada, como ya

de medios pecuniarios para atender a los gastos de

la

es

lo

Admi-

nistración, esa intervención armada sea bien venida, porque llenará nuestros deseos y servirá de sostén al orden y las instituciones de la República. Estos son, Excelentísimo Señor, los motivos

V.

E.

que llevan la

a

la

población de esta Capital a presentar

franca exposición

tanta

mayor

tiene

de

satisfacción

las

altas

de

sentimientos," y lo

sus

cuanto que es grande

cualidades

personales

y

la

certeza

elevado

a.

hace con

que

caráctel'

de V. E.". El otro documento que llevaba a su pie las mismas firmas,

era una declaración de propósitos que decía así: "Nosotros, los ciudadanos orientales que firmamos sentación anexa, declaramos que

la

repre-

hacemos persuadidos de que alude es indispensable no sólo

lo

armada a que ella para darnos garantías sociales, pero también para ponernos en el pleno goce de nuestros derechos políticos, de los cuales de

la intervención

facto

nos

hallamos privados,

porque anarquizado

el

país,

sin

garantías de género alguno, necesitamos de la intervención ar-

mada

a fin de que el Brasül, en cumplimiento de los tratados de

12 de octubre de 18l51, haga efectivos y duraderos la paz,

den y es

el

el

or-

imperio de las instituciones".

Ambos documentos fueron firmados el 30 de enero de 1854, decir, el mismo día exactamente en que el Ministro Amaral,

inspirador de los trabajos, se dirigía al ex Presidente Giró para

GOBIERNO DE FLORES

decirle

que

el

Brasil había

225

reconocer

resuelto

gobierno de

al

Flores y por lo tanto abandonar los planes de reacción que hasta entonces había estado promorviendo.

La diplomacia brasileña había arrancado una prenda valiosa de adhesión a los propios autores del proceso de sus maquinaciones infernales y podía en con:3ecuencia dar la espalda al Presidente Giró a fin de quedar en condiciones de introducir el

germen de

la

guerra

muy

de julio, ya

18

que probaban

civil

mismos revolucionarios

entre los

tranquila

con

posesión

la

de

del

documentos*

altura de sus miras!

la

Con pocos días de diferencia recibía la Legación otra nota suscrita por don Florentino Castellanos, don Francisco Solano de Antuña, don Luis de Herrera, don Enrique de Arrascaeta, don Avelino Lerena y general Brito del Pino, seis personas nofables de Montevi'dieo, pidiendo al Ministro Amaral que obstara a los comicios generaLes a que había convocado gobierno de Flores. Invocaban los firmantes, en apoyo de su

direciamente el

pedido, La circular de la cancillería brasileña

mático

sobre

intervención

armada

al

Cuenpo Diplo-

en

Brasil

del

la

República

Oriental, la falta de garantías para el ejercicio de los derechos

violación constitucional que entrañaba la convouna doble Asamblea sólo autorizada para el caso de cambio de forma de gobierno. Lo singular es que un órgano de publicidad tan vinculado a

políticos

y la

cación de

como "El Orden" acogió

situación

la

el

runior de que entre los

firmantes de uno de los documentos dirigidos a

podría ser

el

relativo al

don Joaquín Suárez,

Lia

el

aplazamiento de patriarca

de

la

los

la

Legación, que

comicios, figuraba

Defensa.

grande Asamblea se transfomia en Legislativa

La elección de

los

diputados y senadores de

la

or
grande Asam-

blea debía tener lugar a fines de nO'Viembre. Pero la guerra vil

que estalló entonces bajo

leña,

obligó

al

la

gobernador Flores a

previa consulta con los hombres

A

ci-

presión de la diplomacia brasi-

decretar

más

su

aplazamiento

notables de la nueva

si-

primer aplazamiento sucedieron otros a la espera de la completa normalización del país, hasta que finalmente los comicios pudieron celebrarse luego de derogados los decretuación.

ese

embargo de bienes y

tos de

tivos a los jefes 15

-IV

de

destierros,

la contrarrevolución,

exceptuándosie los rela-

que

se

dejaban vigentes.

HISTORIA DEL rRUGUAY

226

Pocos días antes de

las

elecciones hubo una reunión política

formaron las listas que haLos colorados conservadores no habían sido invitados. "El Nacional" se aipresuró a decir que la reunión había sido promovida por los amigos del gobernador, T^ero que éste había expuesto su propósito de no presentar candidatos. Adviértase, sin embargo, que otro diario situacionista, "El Orden", había publicado desde noviembre de 1853 las listas de candidatos a senadores y representantes, diciendo que eran Yelas que recomendaba a sus amigos el benemérito coronel don en

el

brían

domicilio de Flores y

de votarse en todo

allí

se

país.

el

r.ancio Flores.

Ya anteriormente

liabía

habido

varias

reuniones

parciales

de doña Bernardina Fragoso de Rivera, para uniformar opiniones y estrechar filas en torno del coronel Flores. en casa

El día de la elección corrió tranquilam.ente. Para "El Comercio del Plata"

no hubo lucha y

mucha



deteiminacicn de abstenerse, según que a las pocas horas de instaladas las

lo

las

indiferencia y abierta

comprobaba el hecho de mesas de Montevideo ya

Comisiones receptoras estaban descansando por

falta

de ta-

reas.

La grande Asamblea empezó

a funcionar

a

mediados de mar-

zo de il8'54 dentro de un ambiente caldeado por dos tesis radi-

calmente opuestas. Según la primera de ellas, que estaba sostenida por don José María Muñoz, don Juan Carlos Gómez, don Pedro Bustamante. don Marcelino Meziquita y otros de los prohombres del Partido Colorado que empezaban a distanc,iar3e de los caudillos, la grande Asamblea no debía dividirse en Cámara de Senadores y Cámara de Diputados. Debía mantener trabajar

conro

si

constituyera

la

integridad de sus funciones y

un solo cuerpo. Tampoco debía

ocuparse del nombramiento de Presidente de

la Repúb'líca,

y sus

lunciones debían, en. consecuencia, correr paralelamente con las

Gobierno Provisorio que a la sazón existía. Según la otra tesis, la grande Asa.mbdea era una Legislatura como cualquier otra, que debía fraccionarse en Cámara de Senadores y Cámara de Diputados y nombrar Presidente, sin perjuicio dQ abordar la reforma constitucional. En el fondo de esa controversia había un fuerte interés de círculo: una parte de la Asamblea rechazaba al coronel Flores y esperaba posiblemente verlo caer de su alto puesto en medio de aquellas maquinaciones infernales del la Legación Brasileña; la del

GOEIKRNO

respondía

otra

dictadura

en

caudillo

al

presidencia

La mayoría,

estaba

y

227

resuelta

transformar

a

segunda

esta

República por

nom-

resolvió

tesis,

complementa-

período

el

de la presidencia de Giró, es decir, hasta marzo de 1856;

también

vió

convertirse

ella

misma

en

1853,

hasta

Legislatura derrumbada en

la

debiendo en

de esa Legislatura,

mente

que

nacional

interés

el

simple

de

de nuevo

declaró

y

1854;

mandato

el

llamarse

reforma de

exigía la

io

resol-

prolongación de

completar

consecuencia

en noviembre

generales

comicios

a

su

constitucional.

inclinándose a

brar Presidente de la

FLORES

r»B

Anuí-

Consti'^u-

la

ción de la República.

Los colorados

de

dose

comienzo de

el

organi-

gobierno de Giró, vién-

el

quisieron

tareas

las

re-

no habiendo sido aceptadas sus renuncias resolvieron

y

abstenerse de los

desde

derrotados

nunciar,

verdaderos

conservadora,

fracción

la

zadores del movimiento militar contra

concurrir,

y así

hicieron hasta que

lo

Cámara

la

declaró cesantes.

— Su programa de

Flores es elegido Presidente de la República.

concordia cívica.

La

Asamblea

nal por dos

pues,

eligió,

años

Y complementando

Giró.

Plores

a

redondear

hasta

homenaje

su

constitucio

Presidente

plazo de la

el

presidencia de

otorgó en

le

seguida

el

grado de general.

Fueron

tranquilizadores

primeros

los

de

días

la

nueva

situa-

ción.

Flores empezó por dirigir una proclama

«A

los

esfuerzos

cima a la comenzando por afianzar sólidamente para dar.

mos alcanzado... Penetrado de que precursor tria,

mi

de

la

política

opiniones

prosperidad

no

moíleradas.

país en que decía:

al

y patriotismo de mis obra de reconstrucción

y

la

conciudadanos

que

paz

que

engrandecimiento

puede ser otra

procurando

felizmente

supremo bien

ese

apelo

país necesita,

el

de

es

el

he-

solo

nuestra pa-

que la de conciliar todas las

cicatrizar

las

heridas

que

han

dejado las pasiones desenfrenadas».

Y

luego se

dirigió

a la

Asamblea

para

recabar una

declara-

ción que dijera:

«Todos

los

individuos

del

territorio de la

él.

El

que por

causas

República quedan

Poder Ejecutivo

cuidará

políticas

hayan

habilitados para

de que

las

salido

volver a

autoridades

subal-

HISTORIA DEL DBUGUAT

228

ternas pongan

mayor

el

esmero

para que

toda la

realidad que la

tenga

pasadas

sensiones propone».

«La

debe partir de

reclaman

ses del país

han

alterado

de

consolidación

comprendidos en goce de

fecto

unión de

se

su men-

decía en

ocurrencias

orientales

los

Declárase

disposición

la

di-

lej'

declaración en estos términos: olvido todas las

paz...

la

las

concurrencia de todos sus hijos».

la

la

de

presente

autoridad, y los bien entendidos intere-

la

La Asamblea sancionó la «Danse al más completo que



de una conciliación sincera

iniciativa



saje

olvido

el

todos

a

anterior en

artículo

del

la

a

la

individuos

los

derechos y garantías que

todos los

políticas

obstado

y

per-

el

Constitución

acuerda».

En .

Cámara de Diputados

la

sultado

empleos militares

jefes

los

y

sin

re-

grados y habían sido dados de en

repuestos

que

oficiales

aunque

moción,

hizo

se

fueran

para que

favorable,

sus

baja y en sus empleos los funcionarios civiles destituidos.

Inspirándose

de

en contra

en

alegando

Visorio,

denaba

muerte

la

proclamaba

la

mismas

las

no podía

que

de los actos

aceptarse ni

Bernardo

de don

algunos

ideas,

aprobatoria

ley

la

P.

senadores

el

votaron

Gobierno Pro-

del

decreto que or-

Berro, ni

el

decreto que

de bienes.

confiscación

Ese progiania de concoidia no era una novedad dentro del ambiente político de la época.

derrumbe iniciado

El se ve,

18

el

quebrar de inmediato

a

surgido a raíz

horror a

trataban de

aunar

el

la

había

Guerra

reanudación de las

voluntades en

como

alcanzado,

formidable sentimiento pacifista

conclusión de la

de la

que tenían

de julio no

Grande. Todos los contiendas

torno de una

amplia

civiles,

bandera

de concordia.

Antes y después de su asilo en del

Brasil,

tud que

le

recabó opiniones

redactado

con la

propaganda que

Constitución»,

por

diario

el

interior.

constitucional.



doctor

había

que

1852 y que cesó de aparecer el

Legación de Francia y en

la

Presidente Giró acerca de la

la

acti-

convenía asumir, y entre las que obtuvo figura este pro-

grama

«jEh

el

empezó el

Unión de

Eduardo

hecho a

Acevedo de acuerdo las columnas de «La publicarse a mediados de

desde

día del motín: los

orientales

Observancia estricta de

la

bajo

el

Constitución

estandarte

de

la

Re-

GOBIERNO DE FLORES

229

sus menores detalles, sustituyendo a la vida que ha desolado a estos países, la vida del derecho, la vida de la Constitución. Extinción absoluta y completa de los antiguos partidos que nada representan, ni pueden representar en principio. Necesidad en que estamos todos de tirar las antiguas divisas y de trabajar por ei bienestar futuro del país, sin que nadie tenga facultad de enrostrar al otro con el pasado y sus consecuencias. Arreglo pronto de la deuda general del Estado, de modo que concilie todos los intereses legítimos. Reducción de los gastos, fiscalización de las rentas y creación de nuevos recursos que nos pongan en el caso de equilibrar nuestras entradas con las cargas que reconocemos. Reprobación explícita de los med,ios revolucionarios, vengan de donde

pública hasta del

en

caudillaje

vinieren. jeros,

Favor a

haciendo

al

introducción

la

efecto

<Je

prácticas

brazos y capitales extranlas garantías que la

todas

Constitución confiere a las personas y a las propiedades". Respeto a todos los derecihos adquiridos "En el exterior.





y cumiplimienito de toldos los deberes que imponen la amistad y buena inteligencia. En lo que toca ail Brasil principalmente, hacer que 'los intereses comerciales vengan en apoyo de los víncu-

que ya unen a los dos países y llevar adelante el cumplimiento de los tratados existentes, sin perjuicio de solicitar las modificaciones que sirvan para estrechar más y imiás la amistad y buena inteligencia". !os

Obstáculos que encontraba la fusión entre les revolucionarios.

Dos semanas antes del derrumbe de septiem'bre escribía "El Oden" comentando las tentativas de fusión a que en esos momentos se consagraban los prohombres de la administración Gjró:

"La fusión es posible, es cierto; pero sobre esta base indecliuna mayoría del Partido Conservador y un Presidente del Partildo Conservador en e'l próximo período. Dennos hoy lo que nosotros les dimos ayer". El programa era justo. Lo malo era el procedimiento de ejenable:

cución.

Para asegurarse esa mayoría habían realizado

el motín no contentos con el motín estaban organizando nuevas asonadas cuando el Presidente Giró resolvió

militar del 18 de julio, y

guarecerse en

la

Legación de Francia.

HISTORIA DEL URUGUAY

230

El Pai-tido Conservador.

¿De dónde salía ese Partido Conservador que venía a terciar en el campo hasta emtonces dominado por los blancos y los colorados? "El Orden", que aipareció a raíz del motín

dell

18 de

ju'lio,

lo

explicaba así:

"Asegurada la paz, el partido de que este periódico es el órgano da el bello ejemplo de adoptar una divisa de paz denomiSus antecedentes son "los prinnándose Partido Conservador. .

.

las ideas y los intereses sostenidos en

ci,pios,

'la

defensa del país

contra las agresiones de don Juan Manuel Rosas" ... Y su iprograima es el mismo que formuiló Ta Sociedad de Amigos del País,

"cuando quis.10

seiducida ¡por

lia

ilusión generosa de

establecer lo que ahora se

interesado

en

la

paz,

en

el

eslttablece,

orden,

en

una vasta fusión" "un partido

es decir,

la

conci'liación

de

los

orientales y en la tolerancia para con todas las opiniones".

Antes de finallizar el año "El Orden" arriaba sin embargo su bandera y se presentaba como órgano del partido de la Defensa. Los redactores que habían sustituido al doctor Juan Carlos Gómez dijeron explicando el cambio, que su antecesor había sostenido "una idealidad", "una ficción", "un interés de círculo", porque invocaba la existencia de un partido desconocido en la República. /El

doctor José Pedro Ramírez atribuyó en 18 68

ción al

chazar la paternidad.

No

la

denomina-

doctor Juan Carlos Gómez, pero éste se apresiuró a re-





mía dijo. Siempre opté por la de Partido ColoPero encontré resistencias. En 1852 mis amigos optaron por la de Sociedad de Amigos del País. Al año siguiente fué por iniciativa del general Flores que "El Orden" aparec'ó como órgano del Partido Conservador. Creo que la denominación fué insinuada a Flores por el Ministro Paranhos, que era conservador en el Brasil. Con el cambio de bandera de "El Orden" no desaparecieron es

rado.

sin

embargQ

bía iniciado a

nuestro

ni la el

denominación

ni el

programa con que

se ha-

Conservador quedó incorporado como una fracción de principias

diario. El Partido

escenario

político,

dentro del Partido Colorado y en pugna con la otra fracción colorada dominada por los caud,illos más que por los principios.

GOBIERXO DE FLOKES

Kciiac»'

la

in(íi)af;an
231

cxíUi-sivista.

Detrás de "El Orden" apareció "El Nacional" resuelto, decía en su programa, a trazar "a los hombres de Pafermo y del Carrito la historia de sus hechos, denunciando de nuevo al mundo

crímenes con que se mancharon,

los

los

males que hicieron

al

paíis".

Ya anteriormente, con ocasión de

las grandes demostraciones muerte de Rivera, había tenido que denunciar "El Comercio del Plata" la costumbre que empezaba a generalizarse "de poner una estrella roja en vez del sol que debe llevar la bandera nacional".

de duelo arrancadas por

Extremando putados

mandaba

misma

la

la

nota

partidista,

Cámara

la

de Di-

sancionó a mediados de 1S54 un proyecto de ley que celebrar el aniversario de Cagancha en todos los pue-

blos de la República, "con una acción solemne de gracias al To-

dopoderoso". El primer aniversario de la revolución del 18 de julio fué solemnizado tranquilamente con un funeral en la Ig'lesia Matriz,

que asistió el Presidente del Senado don Alejandro OhucaPero no así el segundo. Estaba anunciada una misa en su-

al

rro.

fragio de una de las víctimas de ese día, y a la hora señalada,

cuando ya las familias llenaban eíl templo, hizo irrupción una compañía de línea con banda de música y la comitiva se dispersó en medio
"Es urgentísimo sustituir por

es malísima,

la

la

base de la tropa

base de un programa legal.

.

.

de línea, que Detenga usted

esos fusiles. Contenga usted esa ñera que se llama caudillaje. que nos va a devorar de nuevo". Pero ya la máquina destructora estaba en marcha y el medio ambiente había entrado en plena agitación, desalojando los sen.

timientos de

.

concordia y dando entrada a los sentimientos de que era lo que aguardaba la diplomacia brasileña para volver a encender la guerra civ.il entre los orientales, según ya lo hemos visto y según volveremos a verlo en el curso de este misodio,

mo

capítulo.

HISTORIA DEL I'RUGUAY

232

Cómo

repei'cute enti'c los

paganda

hombres del Partido Blanco esta pro-

partidista.

Los prohombres del Partido Blanco trataron a su turno de organizarse, a mediados de febrero de '1854, en torno de su vieja

bandera, aunque protestando que cunstancias, a

lo

hacían como recurso de

más

espera de una época

la

cir-

propicia a la fusión

de blancos y colorados y a la proscripción de las divisas partidarias.

iCelebraron varias reuniones secretas, con asistencia de los se-

Arrascaeta,

Aguirre,

ñores

Carreras,

Botana,

Espina,

Lerena,

Errasquin y otros de los ciudadanos que no habían salido de IMontevideo o que habían regresado después del fracaso de la contrarrevolución promovida por seguía era, según

el

el

Brasil. El objeto

que se per-

acta de la primera reunión, organizar

asociación tendiente al restablecimiento del régimen de titución en el gobierno de la República". tido

ejercida por una Junta Central

sería

dos para

P.

La autoridad del parnombrada a dos gra-

Berro, a quien fué confiada

formuló

reunión,

esa

"una Cons-

reuniones numerosas.

evitar

-Don Bernardo de

la

un

la

presidencia

programa que puede sintetizarse

así:

"Entre

partido de la Defensa y las potencias interventoras

el

hay cierta solidaridad de lucha

(Francia,

Inglaterra

contra

Partido Blanco. Al Partido Blanco

el

y Brasil)

conviene enton-

le

en vez de levantar una bandera y una divisa que producirían alarmas, limitarse a contestar las acusaciones que le dirices,

gen los colorados, pero

sin

mengua

del pacto de octubre de 1851,

humillación de nadie..."

que no quiere

la

menos de

adhiriendo a ese principio salvador:

lo

pasado y

es que: to

irse

igualdad proclamada por

la

el

Lia

nación no ¡puede el

olvido de

pacto de octubre. Así

habrán conseguido cuanno se consigue, si los colorados persisten en necesariamente han de sucumbir a la larga

o se consigue eso y los blancos

necesitan;

o si

no adherirse a

él,

y quedar subordinados. Ligar, pues, a los blancos a ese porvenir es hacerles el mayor beneficio que se puede imaginar para favorecerlos;

es restablecer su

puesto que

al

fin

buen nombre y consolidar su poder, el Partido Blanco ese resul-

convirtiéndose en

tado definitivo servirá

lo

mismo para

presente que su pasado procedimiento".

justificar

y

glorificar

su

233

GOBIKRNO UE B'LOUES

Varias cartas explicativas y de propaganda escribió Berro en oportunidad. En una de ellas decía: "La existencia del Partido Colorado no quiere decir otra cosa que guerra a los blancos; la del Partido Blanco expresa la retal

sistencia a esta agresión. Así fué desde el principio; así es ahora

también". Los blancos se han limitado a defender los puntos en que legalmente estaban colocados, a defender un gobierno que

no dilapidaba, que respetaba todos los derechos y todas las garantías. Los que los han despojado de sus puestos quieren tenerlos en perpetua sumisión... "Sin embargo, aunque sea lícito que los blancos se liguen otra vez en forma de part'do y aunque no puedan dejar de hacerlo, deben con todo desear que desaparezca la necesidad que a ello les obliga y obrar siempre de modo que no se haga imposible o dificulte eso; es decir, no cerrar la puerta sino propender en toda oportunidad que se presente a la supresión de los partidos, disolviéndose juntamente

con sus contrarios... El Partido Blanco y el Partido Colorado no están separados por ideas, ni por clase o condición. Igual e£'

su

composición,

división

es

iguales

también sus principios

políticos.

Su

toda personal o corresponde sólo a las personas de

que se componen". Estas ideas fueron aceptadas y en consecuencia se acordó la organización

del

partido

bajo

las

denominaciones de

"blanco"

y "constitucional" con un programa transitorio que se daría por terminado una vez que el régimen institucional imperara de

nuevo en

la

Trata

Bi-asil

el

República.

de afirmarse

sobre su pi-esa

ti-ansportamlo

iiiv

ejército a Montevideo.

Pocas Semanas antes de celebrarse estas reuniones, en enero la cancillería de Río de Janeiro a cargo entonces del Ministro Paulino Limpo de Abreu, había dirigido una circular de 1854,

í.l

Cuerpo Diipllomático acerca de sus relaciones con

el

Gobierntí

Oriental. Véase lo que decía en ella:

Por efecto de la actitud de Rosas no le fué dado al Braintervenir durante la Guerra Grande, a pesar de las estipulaciones de la convención de paz de 1828. Recién pudo hacerlo

sil

en

1851.

de

la

Derrumbada entonces

coalición

organizada

por

la

tiranía

el

Brasil,

gracias

quedaba

a

las la

fuerzas

campaña

HISTORIA

234

rRUGUAY

DEL

La ciudad de Montevideo había sacrificado puede sacrificar; el paíis contaba apena»* 130,000 almas; su ganadería estaba aniquilada; sus capitales haen ruinas.

oriental

un pueblo

cuanto

bían desaparecido; los hábitos de trabajo estaban olvidados;

lasi

y las propiedades públicas haljían sido enajenadas por largo tiempo; una deuda enorme había surgido "y gran parte

rentas

de la población reclamaba del Gobierno subsistencia, recompen-

indemnizaciones".

sas,

El

representante

diplomático

oriental

al

"propuso y presentó los proyectos de tratados que se concluyeron el 12 de octubre de 1851". Desgraciadamente "las buenas intenciones del Brasil no fueron bien apreciadas por los que tomaron la dirección de los negocios". El describir ese cuadro,

Presidente Giró, que se vino

al

s^uelo sin

fuerzo alguno para sostenerlo, solicitó

pero

sil,

y así se

Gobierno Imperial no

el

se

el

que el país hiciera esapoyo militar del Bra-

consideró obligado a

hizo saber. Estalló luego una revolución en

lo

ello,

campaña

que fué dominada por las fuerzas del Gobierno. La situación La población acaba oriental sigue emipeorándose entretanto. de sufrir una

nueva ipérdida de 15,000 almas. La corriente

in-

migratoria que anuía a Montevideo se dirige a otros puertos; los

que habían empezado a aparecer, vuelven a ocultarse, es peor que todo, las pasiones y los odios civiles se enfurecen caída vez más por la proscripción de Ion hombres, por

ca'pitales

"y

el

lo

que

secuestro de los bienes y por



la.s

de toda especie".

violeTicias



agregaba la circular ha requerido auxilios militares y el Brasil ha resuelto intervenir de acuerdo con los tratados de alianza de 1851, porque entiende que tal acEl Gobierno Oriental

titud será

mirada como un acontecimiento

amigas. El Brasil se limitará "a asegurar

feliz la

por las naciones

existencia del

Es-

tado, el ejercicio de los derechos de todos sus habitantes, la paz V

el

sosiego

público

gular y durable".

No

y el establecimiento de un gobierno requiere "para sí, cualesquiera que sean las

circunstancias, ningún predominio ilegítimo en tal".

y

el Estado Orienningún aumento territorial y considera solemnemente como límites definitivos entre el Im-

Tampoco "aspira

declara

perio y

el

a

Estado Oriental,

los

que se han fijado en

e!

tratado de

12 de octubre de 1851".

Tales eran las protestas de

la

diplomacia imperial. El Brasil,

que se había tragado la mitad de nuestro territorio y que para completar su obra de absorción había mantenido al país en permanente pie de guerra, iba a enviar un fuerte ejército a Monte-

GOBIERNO DE FLORES

235

video con noble altruismo, sin ánimo de conquista, sólo para establecer la paz entre los orientales que se estaban despedazando

emipujados unos contra otros por la proipia diplomacia imperial! Esa circular fué expedida el 19 de enero de 1854, el propio día en que el general Rivera, uno de los miembros del triunvirato, tos,

era sorprendido por la muerte al llegar al arroyo Convenen viaje para Montevideo a donde lo llamaba el ejercicio

de su alta investidura. lEl

que dirigía precisamente su proa contra

Brasil,

rato por las sospechas que

entenderse con Flores a

le

fin

triunvi-

el

infundía Rivera, resclvió entonceá

más rápidamente

de instalar

raás economía de sangre sus batallones en

el

centro de

y con

la

codi-

ciada presa. el mes de enero llegaba a Montevideo el munido de las instrucciones necesarias para dar

Antes de finalizan doctor Amaral,

curso a las ideas de

la

circular.

"La misión que S. M. el Emperador del Brasil se ha dignado decía en su discurso de recepción tiene por cometerme,





prestar a la noble Naci'ón Oriental la cooperación del Brasil,

fin

desinteresada pero enérgica, para la ¡paz

etl

restabliecimiento del

orden,

las instituciones constitucionales".

y

Y horas después de

la ceremonia obtenía el doctor Amaral la conformidad que anhelaba para la entrada del cuerpo de ejército encargado de la conquista pacífica de nuestro territorio.



"Reconociendo decía el encabezaimiento del acuerdo de 31 de enero de 1854 firmado por Flores y sus Ministros don Enrique Martínez y don José A. Zubillaga en los actuales momen-



tos,

como de

la

mayor importancia

la

entrada

Repúiblica de una fiuerza de cuatro mil

territorio de la

al

hombres del

ejército bra-

conformidad a las altas y elevadas miras de S. M. el Emperador del Brasil, porque esto importaría la más eficaz gasileño,

d'e

lantía para los intereses generalles de

la

Nación, que

S.

M. tan

generosa y dignamente protege..."

La tropa cruzaría rrerían de cargo

Otro diante

bierno

acuerdo el

dirigía

el

el

3

de

el

marzo y sus gastos

el

insuficiente

equilibrio

Flores a

la

Ministro

Tesoro brasileño

un subsidio mensual 'de

suma debió parecer se

frontera

Tesoro uruguayo. complementario firmó

cual se obligaba

Oriental

asegurar

la

co-

del

[pa.ra

financiero,

30,000

una

al

Go-

patacones.

La

pagos y semana después

restablecer

porque

Amaral me-

entregar

a

los

Legación solicitando que fuera elevada

a

HISTORIA DEL VRUGUAY

236

60,000 patacones y que además se acordara un préstamo extraordinario de 180,000 patacones. El Ministro Imperial que había traído instrucciones

más modestas, tuvo que recabar nuevos poal doble el monto

deres que no tardaron en llegarle para elevar del subsidio.

La intervención brasileña «ntp

Una vez instalada la

la

gran

A.'íaniblea.

gran Asamblea, Flores recabó venia para

la

entrada del ejército brasileño.

La Cámara de Senadores abordó de inmediato y fundamentales

pancias

estudio

el

de

discre-

sin

sensacional

esa

autoriza-

ción.



"Tal proceder del Gobierno Provisorio



informante

es no sólo digno de

la

alta

Comisióa

decía la

misión que asumió

al

instalarse el 26 de septiembre, sino salvador de las instituciones

y garantías que acuerda

Código Fundamental

el

a

todos los ha-

bitantes".

De perfecto acuerdo con su Comisión dictaminante, votó el penado una minuta de comunicación en que dejaba constancia, de que

Gobierno,

el

pactar la entrada de la división imperial,

al

había obrado dentro de ciones del

"Ha

la

órbita de sus deberes de

tratado de alianza de

la-s

estipula-

1851.

de Relaciones ExSenado en su minuta que en el estado a que los acontecimientos anteriores condujeron al país no sólo se hayan conservado las buenas relaciones con las potencias extranjeras, sino que se hayan estrechado más aún las del Imperio del Brasil que por tratados solemnes y por su cooperación en visto con

teriores

el



decía

empeño de

nuestro

aliado

satisfacción a la repartición

salvar

y



el

la

amigo.

independenc,ia de la Si

la

política

del

República, era ya

gobierno

Giró había sido dudosa por no comprender bien país,

ni

apreciar

las

estipulaciones

la

que garantían

del

señor

situación del los

derechos

de todos los habitantes nacionales y extranjeras, así como las que establecían las bases para el renacimiento del crédito público, garantías para la paz y conñanza en el porvenir de la República,

el

Gobierne Provisoaño autorizando con nuevos podedon

res al Ministro de la República residente en Río de Janeiro

Andrés Lamas, ha obtenido su reconocimiento y la revalidación del Tratado de prestaciones que había paralizado la administración que caducó".

237

GOBIEBNO DE FLOBES

No

reinaba

mara de

misma

la

Diputados y

El de la mayoría, concordante con

gobierno de

el

pactar la

(la

Comisión)

in-

no sólo

alianza con

la

nece-

las

atribucio-

división brasileña. «Cree necesa-

entrada de la

al

rio

acuerdo con

esfera de sus

dentro de la

situación y

nes

Cá-

la

establecía que

del Senado,

el

procedido de

había

Flores

sidades de la

en

dictaminante produjo dos

Comisión



contradictorios.

formes

conformidad

desconsoladora

la

el

VcZ

Brasil, SlnO a ia

armada con el fin de fortificar la nacionalidad oriental por medio de la paz interior y de los hábitos constitucionales y ofrecer mayores garantías al desarrollo de la auxilio de la

el

fuerza

y a

industria

capitales

de

inversión

la

empresas

en

útiles

al

país».

llevaba una

El de la minoría, que

nando Torres, aconsejaba sora de

caso concreto de

Qidamente por nes ble





decía

mensual ejército

10(1,000,

de 72,000 brasileño,

ejército

manantial de

el

y un

contra

De

acuerdo con quedaría de la

lo

Imperio, brasileño:

otro el

otros

gastos

por otra

sarcasmo

Ese

expensas,

sus

a

parte,

a

la

«un pre»

Su permanencia en Montevifuerza el

moral y material,

la

porvenir».

triunfó la

Comisión en

minuta

mayoría, por

del

Se-

.34

vo-

por

la

gran

Asamblea

el

auxilio

orden y el autoridad constitucional y cesaría inmediatamente

acuerdo con

de

déficit

costo del

subsidio.

será,

votación

resuelto

limitado

que hubiera llenado esos

Pero

rentas

la rechazaban.

militar ejercicio

las

un el

sangriento

absoluta de

la

y

del

mantendrá

presente y la duda en

que

4

cuarteles

pesos

60,000

de la República».

Llegado el momento de la nado que había hecho suya tos

mensuales y consecuencia

habrá que agregar

necesidades,

propias

deo significará «la falta en

que

República

la

disensiones

tendida debilidad debilidad

en

entero los

que

desatendiendo sus

pesos

reparaciones de

las

brasileño

172,000

resultando

pesos, al

por

absorberán

que

al

planillas del

absorben

producen

sólo

revi-

cuanto

invocando razones financieras y razoPresupuesto y de la deuda exigi-

negativa,

Las

políticas.

en

ontrada de las tropas brasileñas, optaba deci-

la

la

don Fer-

firma, la de

de Flores, y

de la dictadura

decretos

los

única

nombramiento de una comisión

el

hacer

«a

restablecer

el

fines».

los

programa bien

planes

y

distinto

tendencias

seculares

debía realizar

el

del

ejército

de avivar los odios, armando a los orientales unos

contra otros para que bajo

la

presión del cansancio corrieran sin

HISTORIA DEL URUGUAY

238

estrépito

que

fronteras

las

imi>eriales

ejército supo cunxplir

el

Adluesiones que recibe

Comercio

«El

pazo

que

en

Uruguay

al

ner

lejos

procuró

convenía

le

de

señalar

demostrar

peligro

el

un

en

aliarse al Brasil

robustecer la

estabilidad,

Y ya veremos

Plata.

el

Legación del Brasil.

la

Plata»,

del

perspectiva,

hasta

programa monstruoso.

ese

del

largo

como

zar-

editorial

medio de

te-

Gobierno y auxiliar su

acción del

tesoro.

«El Orden», a

circular

la

luego de

referirse

Cuerpo

del

a la

prestación del

Diplomático,

decía lleno

subsidio y confianza

de

en las intenciones del implacable devorador de territorios:

«Son otros tantos .

diremos

ción,

afirman

que

actos

persuasión de que

en la

tes

es

a

llegado

cansados habitan-

los

día

el

de

regenera-

la

en que reformándose todo, modificándose todo,

así,

porvenir dichoso no sea más burlada, como ha sido en otras ocasiones». El doctor Mateo Magariños Cervantes, apoyando la entrada de tas tropas brasileñas al territorio oriental, daba estos fundamenla

esperanza en un

desgraciadamente

que se echaba de menos que

tos en los

nuestra

de

te

lo

era

desgracia

como benefactor: «Abramos nuestra

causante de buena par-

el

Imperio

propio

el

que

exhibía

él

desde que nos constituímos en naveremos a los pueblos trabajados por revoluciones que todas no han tenido más objeto que el predominio de uno o de otro caudillo. Vemos a la primera presidencia en campaña a los dos años por la revolución de Lavalleja; vemos historia

independiente, y

ción

a la segunda en campaña también por la revolución de Rivera y desde entonces convertida la República en un vasto campo de batalla, y si examinamos las causas encontraremos que a ex-

cepción del

Montevideo la sangre ha corrido sólo por un ambicioso». Amaral le habían sido entregadas anteriormente de

sitio

las impaciencias de

Ministro

Al

varias

que

repres'^ntaciones

trataba

de

estimuladas

consolidar

su

choque de intereses políticos que

Entre

ellas

ción del

de firmas

Ministro

sus planes:

la

diplomacia

la

o

brasileña

provocadas

misma diplomacia

por

recogidas en

Imperial y de la

el

comercio

Policía que lo

el

caldeaba.

calcada en otra que hemos reproducido, que

esta,

vaba un millar

por

influencia,

lle-

por instiga-

secundaba en

239

GOBIERNO DE FLORES

"Nos hallamos íntimamente penetrados de que

el

Gobierno

hace basado en Imperial al prestar su apoyo a la el 2 7 de celebrada paz convención de de genuino la el espíritu agosto de 1828 y en la letra de los tratados de 12 de octubre de 1851 qiue vinieron a completar y garantir aquella convención... República

serie de años calamitosos para este pueblo lo

Una £1

lo

amarga y

la

difícil

han conducido

posición en que lo ve sumido V. E.

Y

para

que el comercio y ila industria y todos los elementos de prosperidad y riqueza puedan desenvolverse sólo se necesita paz y gaSi para conseguir rantías sociales y concordia entre sus hijos. .

tan benéficos resultados fuera necesario

el

.

auxilio de

una

inter-

de los medios pecuniarios para hacer frente a los gastos de la administración, esa intervención, tenor, sea bienvenida, porque llenará nuestros deseos y servirá

vención armada como ya

de sostén

lo

es

orden y a las instituciones de

al

la

República".

La prensa gubeanista entretanto redoblaba sus aplausos Brasil.

al





decía "El Orden" "Sostendrá este estandarte nacional que muchos opinan maliciosamente viene a destruir, y lo sostendrá quizá con más honor que nosotros lo hemos hecho, con más honor decimos, porque nuestras guerras no han sido en de-

fensa de la patria sino de los partidos".

Voces de piotesta contra Estas palabras de testa a c'e

los

la

intervención.

"El Orden"

arrancaron una nota de pro-

colorados disidentes que habían adoptado

consevadores.

el

nombre



de"Nos creemos en el deber de rechazar tamaño ultraje don PeMuñoz, María Gómez, don José don Juan Carlos cían dro Bustamante, don Lorenzo Batlle, don Fernando Torres, don Francisco Tajes, don Gésar Díaz, don Miguel Ailivarez, don SalvaLos vencedores del Rincón dor Tort y don Enrique Muñoz. y del Sarandí no tienen nada que aprender de los brasileños en el modo de sostener con honor su pabellón". Juan Carlos Gómez, emprendió a la vez una ardorosa campaña contra la intervención armada del Imperio. Es útil decía la alianza de la República con el Brasil, I-ero la intervención armada que se anuncia pone en peligro la alianza. El tratado de octubre de 1851 sólo autoriza la interven-





ción



de fuerzas a pedido del Gobierno Oriental en los casos de

HISTORIA DEL URUGUAY

240

o deposición viole.nta de las autoridades. Ac-

movimiento armado

Tualmente la República se encuentra en paíz y el Gobierno está acatado por todo el país. El efecto político que se busca con la intervención, ,puede obtenerse sin ella situando a'l ejército brasileño en la frontera brasileña. La intervención será siempre un

pretexto para la inestabilidad de las instituciones, porque el partido vencido ha de alegar la nulidad de todo lo que surja de la situación sostenida por esa fuerza. Se hablla de un memorial con al Ministro Ámaral, entre las cuales figu-

mil firmas presentado

de mucihas casas de comercio. Pero la República cuenta ron 130,000 habitantes y esos mil no tienen su representación. Bien sabemos por otra parte como se firman tales memoriales,

ran

las

«on

los

que hubiera sido posible canonizar a Rosas y a Oribe. Esmili pesos mensuales, 5

te ejército brasileño va a absorber 40 o

mitad de nuestras rentas. La intervención armada "va a que es nuestra garantía, nuestra prenda de por-

o sea la

matar

la alianza

venir, nuestro bien



Existe la

tre

conquistado".

agregaba en otro artículo

situación

actual

y

la

de

1817.



similitud perfecta en-

También entonces Lecor

anunciaba en sus programas 'que no traía ningún propósito de CQnquista, ni de predominio territorial; también entonces el ejército portugués se denominaba pacificador; tam.bién entonces se .iba a la incorporación al Brasil mediante peticiones de nacioal doctor Amaral! "El Comercio del Plata" contestó a Juan Carlos Gómez, supri-

naies análoigas al memoriail presentado

miendo con

La

pluma todo

el

pasado:

"El Brasil no puede querer nuestra absorción, porque sus necesidades internas y su inmenso territorio despoblado, sus inmensas costas desiertas, le fuerzan a contraer a sí mismo los elementos, que nunca serían bastantes, que quisiera destinar a conseguir la absorción".

El general Tomás Guido que tuvo que salir a la defensa de la convención de 1828 atacada por "El Plata Científico" de Bue-

nos Aires, 'aiprovedhó la oportunidad para hacer estas marcadas referencias al pasado que olvidaba "El Comercio del Plata": "Inútil

es decir

que no siempre las dificultades que subvier-

orden de un Estado nacen de lo's defectos de su constitución política o de su situación moral. Muchas veces las influencias extemas vienen a fecundar los gérmenes de perturbación que fermentan de continuo en el fondo de todas las sociedades, ten

y

el

muy

especialmente en

las

nue/as,

sufriendo

así

intermitien-

GOBIEUNO DE FLORES

terribles

Cías

241

que han puesto a prueba el vigor de las repúbliBien analizada la historia de la Banda Orien-

cas americanas...

no sería

tal,

ejemplos de que no siempre sus disturun origen de que ese país sea tan solamente res-

difícil hallar

bios tuvieron

ponsable".

Entra

A

brasileña en Montevideo.

la división

fines de

marzo de 18 54

el

ejército brasileño cruzó la fron-

tera.

Se

c:mponIia de

5

batallones

de

infantería,

piezas de ar-

8

regimientos de caballería de línea y una división de guardias nacionales de caballería. En conjunto, 5,145 plazas, se3

tillería,

gún

de

Relatorio

el

mismo

*la

brasileña

cancillería

correspondiente

al

año.

Su jefe, el brigadier 'Pereira Pinto, al tiempo de emprender mardhas ex
la

organización de este país".

Un mes después

llegaba

brasileño al Cerrito de la

ejército

el

Victoria y los batallones de infantería y artillería penetraban en la lies

ciudad de Montevideo y se alojaban en los cuarteles que se había preparado de antemano, quedando la caballería en las

afueras. El

ma

Presidente

Flores

en

dirigió

oportunidad una procla-

tal

a los orientales y otra a los brasileños.

A

los

primeros

les

decía:

"La ruina que viene cado a

la

Nación

de

tras

Orienta'l

las

disidencias

ha

civiles

colo-

en graves apuros para sufragar

las

de una organización tan vigorosa como es indispensable en el estado de desquicio a que nos ha conducido el cataexigencias

clismo que

ha tenido en peligro por largos años

la

existenicia

de lia Reipúb'lica. Las fatigas de los puebles si no han superado a nuestra constancia, han afligido a todas las familias, y no debe prolongarse el malestar, la inseguridad en que podría ponernos la

impaciencia de algunos...

tud de guerra de un

Y

modo

No

es

posible

conservar

la

acti-

indefinido."

decía a los segundos:

"Digna y generosa 16

- IV

es

la

misión

que vais

a

desempeñar en

242

HISTORIA DEL URITGL'AY

patria de los

la

que

orientales:

f-raternidad

la

iguate a la dis-

ciplina y al valor, y los objetos humanitarios de la intervención

corresponderán a tan alta misión."

También

el

"Nuestro

Ministro Amaral proclamó a sus compatriotas.

deber



decía

les

El Soberano del

tratados.



cionalidad oriental por medio de

A

nuestros

en

fortificaT

na-

la

paz interior y de las prác-

la

mediados de año se firmó en Río de Janeiro un protocolo cual

el

se

establecía

Negocios Extranjeros

L.e

definido

constitucionales."

ticas

por

está

BrasiL ha prometido

sileñas

tenia

sólo

por

— — que

siegún

el

Relatorio

entrada de

la

objeto "fortificar

del

Ministerio

tropas bra-

las

nacionalidad orien-

la

por medio de la paz interna y de los hábitos constitucionales"; que el auxilio militar no podría prolongarse más allá del

tal

de

período

la

presidencia

de

Flores,

.hacer cesar en cuallquier moimento

de

perjuicio

sin

poderlo

Gobierno Oriental o el G-obierno Brasileño; que accediéndose al deseo del Gobierno Oriental quedarían a cargo á&l Tesoro brasileño los sueMos de la del Tesoro troipa de línea, su equipo y armaínento, y a cargo orienta]

los

demás gastos de

Guardia Nacional; que

Ya

tículo

del

tratado

de

la

el

tropa

de línea

y

todos los de

Gobierno Oriental cumpliría

ell

alianza

de

1851 que

imponía

le

el

la

ar-

obli-

gación de hacer efectivas las garantías constitucionales en todo país.

el

Guardia Nacional de Río Grande no tardó en regresar a quedando entonces reducida la división brasileña 4,000 hombres. Lra

la ?.

frontera,

,

La

demai'cacióii de límites.

Ya

el Brasil un ejército ea Montevideo destinado a fasus seculares planes de fomento de antagonismos internos y de incorporación total de territorios. Pero estaba resuelto a

tenía

cilitar

la

la

como en ISl», a tragarse, mayor suma de tierras posible,

vez,

fracasar

la

absorción

total

a da a

sombra de sus tratados,

fin

prevalecieran

de que en por

lo

el

caso de

menos algunas

absorciones parciales.

Los tratados de 1851 le habían adjudicado grandes y valiozonas de las que jamás había estaido en posesión. Pero eso apenas había servido para hacerle abrir las fauces. Estaba

sas

todavía

pendiente

la

demarcación definitiva de

la

línea

fronte-

243

GOBIERNO DE FLORES

y

riza,

Uruguay con sus agitaciones políticas inexhausto y en permanente demanda de Tesoro brasileño, se prestaba admirablemente para

situación del

la

Tesoro

con su

ternas,

auxilios

al

nuevas usurpaciones.

A

marzo de

de

fines

cuando

18.J4

imperial

ejército

el

cru-

Comercio del Plata » reproducía un artículo del «Jornal do Commercio» acerca de desinteligencias surgidas entre el Comisario imperial general Andrea y el Comisario oriental coronel Reyes. Según el diario de Río de Janeiro,

zaba nuestras

ninguno

fronteras,

El



Yaguarón reunía

gajos del

de los dos

Y un

negociado

entre

gobierno

el

de

Flores

Amaral un protocolo para remover origen

A

'leí

de

que

establecía

plenipotenciario

el

Reyes

habían

surgido nuevas

acerca de la

guna había

«Jornal do

oportunidad

tenido

entre

de las

de Aceg.iá

líneas

que

duda

sin

memorándum

el

el

Comisario oriental

el

Nacional»,

de leer

corres-

en la que

discrepancias y

dirección

director de «El

El

Luis.

Commercio»

al

barón de Casapava

una

Nacional»

«El

Grande

brasileño

y de San

transcribía

1855

de Río

Comisario coronel

y

dudas a que estaba dando

las

trazado de la línea del Chuy.

el

mediados

pondencia se

condición

la

de límites, y tal era el origen de las desinteligencias. mes después anunciaba «El Sol Oriental» que se había

tratado

del

al-

co-

comentando esa correspondencia decía que el Conegaba su conformidad a la pretensión brasileña y demostraba gráficamente «la importancia de las pérdidas ronel

Reyes,

misario

oriental

que disminuían

territoriales

Algo más grave manifestaba términos segiin «Declaraba

Gobierno

de transmitir esas perio,

exiguos límites de la República».

el

Comisario oriental. Véase en qué

redactor de «El Nacional»:

el

al

los

que

mismas

dar

al

paso

ese

demostraciones

antes

previo,

Comisario del Im-

al

había tenido presente que en la penosa y crítica situación

en que se

encontraba

opiniones

con

trabar

marcha

su

nacionales

con

agobiados

nuación

el

y

de

los

su

política,

subsidios

para

los

estas

consideraciones

en

tanto

no

le

fueran

quizá sus

vez

de

hal)ía

conocidas

que

otras la

relaciones

con

él

debían

República.

vistas

del

sus

en

que

conti-

la

no

r.

inter-

aliviar

gestiones

abstenido de las

de

contrariar

momentos

negociaba

se

pecuniarios

a la

se

conformidad

precisamente en

interes-es

de

no

debilitando

financieros

promoviéndose

importantes

la

podría

exigencias

gabinete,

de apuros

aflicciones,

República

la

aquellas

sus

menos

Que en fuerza toda

discusión

gabinete,

des-

HISTORIA DEL rBUGUAT

244

pues de instruido del protocolo de esas negociaciones, para obrar

consonancia con

en

ellas.»

Prevenía «El Nacional» que Reyes para rizado al coronel a

salta

que

ojos

los

gobierno de Flores

el

mantener

su

instrucciones y

las

liabia

auto-

discrepancia.

Pero

sobre

todo su

cumpli-

miento efectivo allá en el desierto de la frontera y sin no podía obstaculizar gran cosa los planes del barón sapava

para

tragando

irse

tornillos

que

Gobierno Oriental:

la

distintos

ayuda a

En un

en

podía

cuarteles,

los

de los

aplicar

subsidio,

el

al la

conservadores para voltear a Floras!

los

mismo año empezó a

febrero de ese

sobre

estudio

intervención

la

especialmente

1851,

tropa

de Ca-

presión

la

brasileña

cancillería

la

bajo

territorios

testigos,

bía arrebatado la

de

el

que

límites

tercera

parte

publicar

brasileña

y

según ese

de nuestro

«La Nación» tratados

de

diario nos

ha-

los

abriendo

territorio,

además a nuevas invasiones merced a la fijación de línea fronteriza en una forma vaga y sujeta a inevitables con-

horizontes la

troversias

tiempo

al

de la

demarcación

redactor de

«La Nación»

definitiva

sobre

el

te-

rreno.

Pues

bien,

el

de Gobierno y

allí

Presidente Flores

el

fué llamado le

a la

prohibió que

Casa conti-

nuara su prédica, invocando la legislación de imprenta vigente. Tras esa amonestación vino el arresto y el periodista fué llevado patio de

al

Cesáreo

dad en

Río de la

el

fué puesto

en libertad previno

lo

le

escribir

Este

de complici-

contra la

política del Bra-

varias horas de detención,

redactor de «La Nación», pero

el

en nombre del

Presidente de

la

el

Jefe

República

que se

le

ponía en libertad a

condición de

no volver

sobre lo mismo».

suceso

Diputados,

dio

sin

origen

a

una interpelación porque la

consecuencias,

en la Cámara de

conducta

del

Gobierno

aprobada.

fué

Podían, línea al

Después de

con don

encontró

acusados

había arrestado por haber escrito contra la intervención

brasileña y a

donde se

unos versos

Plata.

Político

«que

Jefatura,

Santiago Botana

don

y

divulgación de

la

en

sil

presos de la

Villegas

pues,

fronteriza.

avanzar

Todo

tranquilamente los demarcadores de la ayudaba su obra. Por eso, dando cuenta

surgidas con Parlamento Brasileño de las desinteligencias determinación del gajo del río Yagriarón a que ha(le la

motivo tía

San

querido referirse Litis,

el

tratado

decía la cancillería

de

1851

y del verdadero arre yo de confianza, en su

imperial, llena

Relatorio de mediados de 1855:

GOBIEKXO DE FLORES

"Es

(le

creer,

245

embargo, que esas dudas tengan una solu-

sin

razonable y pronta y no embaracen demarcación".

ción

La solución razonable

continuación de

la

naturalmente,

era,

la

de seguir avan-

la

zando en territorio oriental!

La

cuestión do Mai-tín García.

A

mediados de 1854 don Patricio Vázquez presentó a la Cáparte, una minuta de comunicación al Poder Ejecutivo aprovechando la oportunidad de una misión diplomática que en esos momentos proyectaba nuestra cancillería. Esa minuta que fué apoyada por "El Nacional" que ora el órgano oficial del gobierno de Flores, iba derechamente

mara de Diputados de que formaba

a la reivindicación de Martín García.

He aquí

en quié términos

la»

fundaba su autor:

La

isla

territorio.

ve desde

de Martín García forma parte integrante de nuestro

Está inmediata a la

la

costa oriental y en cambio no se

mantuvo

costa argentina. Durante el coloniaje se

la

jurisdicción de Montevideo sobre esa isla y las de San Gabriel y

de Hornos con las que forma un triángulo a

de

Colonia.

la

Como

la

altura del puerto

consecuencia de las agresiones inglesas,

el

Gobierno Español otongó recomipensas a los que habían actuado en la defensa y reconquista de los pueblos del Río de la Plata. A don Antonio Tejo, vecino de Buenos Aires, le fué regalado Martín García. Y

la

real orden para la entrega y posesión de la

cometida al Gobernador de Montevideo, prue>ba incontrastable de que la tierra cedida estaba bajo su jurisdicción teisla

vino

rritorial.

La convención de paz de 18 2 8 no

e^'f-bleció los límites

de nuestro país, librando este punto al tratado definitivo en el

naturalmente tendrá que

cual

En 1838 maron tro

las

armas

iposesión de la isla.

consentimiento,

orientales 18'5i2,

la

representado con

Dos años después

devolvió

reconquistaron

su

a

la

el

Uruguay.

de Francia, to-

Francia, sin nues-

Eu 1845

Rosas.

posesión

las

las

armas

mantuvieron

hasta Gobierno Oriental la entregó a requerimiento dei Argentino, pero bajo una solemne protesta que de-

en que

Gobierno

esta^-

orientales, en unióii

y

^a

el

jaba a salvo nuestros derechos.

Agregaba don Patricio Vázquez en su minuta que las grandes potencias habían estipulado en sus trátalos con la Confederacón

HISTORIA DEL UBUGUAT

246

Argentina que era necesario que Martín García se conservara en poder de aquel estado ribereño que no se opusiera a la navegación de los ríos interiores; que el Parlamento Oriental se manifestaba resuelto a dictar una ley que declarase la libre navegación de nuestros ríos en una forma amplia que el Gobierno de Buenos Aires parecía no aceptar por el momento; y que hael andar del tiempo y modificándose a

bría que evitar que con ese

respecto

argentino

criterio

el

obtener de los tratados lo que otros con mejores

nuestros

lilegaran derec^iio

el

vecinos

a

nos acordaba a nos-

títulos.

ambiente político estaba absorbido ipor los problemas internos y la minuta quedó ap!aza-.!a indefinidamnnte en las carpetas de la Comisión dictaminaate. Pero

el

La absorción

como paso previo a

coiiiei»cial

la

absorción

po-^

lítica.

En noviembre

cuando la política brasileña precipiUruguay, don Andrés Lamas, que seguía al frente de la Legación de Río de Janeiro, se creyó obligado a levantar su voz contra lo que al fin y al cabo era la consecuencia lógica de los tratados que él mismo había negociado en 1851. íafba

de

1854,

su plan de a^bsorción

Véase

lo

que decía a

la

dell

caacillería brasileña

haciendo

hiá-

la

toria de los tratados:

"Toidos

esta

deseaban

apariencia

la

era

paz,

todos la pedían,

singularmente

todos

favorable

la

para

creían. el

Y

Estado

amparaba, el Brasil tomaba ante el mundo, solemne compromiso de ayudarlo a reorganizarse, de mantener su orden constitucional, de mantener su paz interior. Podía, pues, esperarse que tan lisonjera, tan seductora perspectiva produjera inmediatamente sus consecuencias naturaOriental. El Brasil

por así decirlo,

les.

\ig

el

La más natural de sus consecuencias era convertir en

terri-

torio agrícola, en territorio exjplota,ble y exiplotado por la inmigra-

ción y capita/Ies extranjeros, todo

desocupado por

la

el

litoral

ganadería por resultas de

y sud la

del

río

Negro Esa

úiltima guerra.

conversión era la salvación del Estado Oriental. El artículo del tratado d« comercio

consumaba

la

4.»

desocupación de esa zona

de territorio, relegaba la ganadería al norte del río Negro, y bajo ese aspecto concurría a acelerar la revolución importante,

de importancia incalculable, que debía verificarse por

el

cambio

247

GOBIEKNO DE FLORES

de la fuente de producción al sud del río Negro. Por desgrac.'a de todos, la situación n/o fué ni altamente comiprendida, ni alta-

mente manejada en

...

Lo que debía

todos lo saben,

verdad,

ka quedado en

lo

Ni

que ha resultado

un

prestigio

solo

misma alianza y más que la intervención armada del Brasil se ha despresti-

pie,

alianza escrita la

resultar,

todos lo ven.

puesto que aun

la

giado y se ha esteri'lizado. Frustradas así las bases reacionales que fué admitido el artículo 4." del tratado de comercio,

soibre

ese artículo

ha contribuido

a aigravaí

la

situación actual. La ga-

nadería que existe se ha concentrado sobre

más provechoso

porque es

el

productos.

Lo poco

ique

el

la

frontera terrestre,

canal para la exportación de sus

produce sale por

país

del país, el 'litoral, está muerto.

No

tiene

de exportación produce sus resultados naturales,

la

El resto

allí.

que exportar

ly

falta

la

despoblación,

desaparecimiento del comercio, etc. Aun hay sobre esto una muy grave y que debe influir de diversos modos sobre la alianza y la intervención brasileña. Hl litoral y gran el

consideración

parte del país mueren, en provecho de la faja de tierra que se extiende sobre la frontera bra&Üleña, y esa faja de tierra está

mo-

nopolizada por los criadores brasileños, de manera que no sólo grande parte del país, todo su litoral muere en provecho de la extranjeros no pueden aprovechar beneficios de aquella fracción de territorio en que se ha con-

fracción

fronteriza,

brasileños que se los

sino

que

orientales,

los

encuentran en

el

los

país no

centrado casi toda su producción". Del grado de

eifi'cacia

de estas protestas de

la

Legación Orien-

instruye un sensacional decreto del gobierno de la Provincia

tal

de Río Grande, de marzo de 185'5, que prohibía en absoluto el es-

tacionamiento en La margen oriental del Yaguarón de embarcaciones que no llevaran pabellón brasileño o que no tuvieran auto.-

de las autoridades aduaneras brasileñas; que prohibía atraque de embarcaciones no autorizadas a los establecimien-

rización el

charque ubicados en territorio oriental; que prescribía embarcaciones fondeados en la costa oriental de-

tos

de

que

los botes y

berían quedar amarrados con cadenas de hierro' durante la noche,

y que establecía otras trabas

miás,

que en concepto de

la

Jefa-

tura Política de Cerro Largo destruían "la industria de las char-

queadas del

litoral

de la Laguna

Yaguarón y cerraban

la

de nuestros productos".

Merim y

sus afluentes en

frontera brasileña

para

la

el río

exportación

HISTORIA DEL UBUGUAT

24tí

¿Planes de incorporación

A

mediados de

185'5

BrasiJ

al

?

don Andrés Lamas, que acababa de ser

destituido del cargo de Ministro Plenipotenciario en Río de Janeiro, publicó

un manifiesto en que a

que presentaba a sus

Xa vez

com'patriotas un programa de concordia cívica encaminado a la

lormación

un partido verdaderamente nacional formado por

d'e

blancos y colorados, Ihacía graves revelaciones acerca de lítica brasi'leña en el Río de la Plata.

Todo



país

el

decía el doctor



po-

pedía la interven-

brasileña a raíz del derrumbe de Giró bajo la presión de

ción

apremios financieros, con un

ios

Lamas

la

aterrador de tres y me-

déficit

dio millones de pesos que era el resultado del proyecto de Presu-

puesto y de Los atrasos existentes; y desde Montevideo le fué inal pllenipotenciario oriental que algunos de los hombres

sinuado

allegados

al

Presidente Flores juzgaban que podría gestionarse

una

del Brasil

es|¡:e'Cie

de incorporación u ocupación en forma de

protectorado por doce años y una emisión de doce millones de pesos papel garantizada por ei Imperio.

TaJ debió ser sin duda uno de los

^

gestiones que dieron por resultado

brasileña

al

piunitos

de arranjque de las

circular

Cuerpo Diplomático, anunciando

mano

tervenir a

la

de

el

cancillería

la

propósito de in-

arma'dia en los sucesos del Uruiguay, la expedi-

ción militar a cargo del general Pereira Pinto y la misión ante las cortes

europeas confiada ai autor de la circular Paulino SoaUruguay, acerca de la cual decía en

rez de Souza, vizconde de

mayo de

"O Cruzeiro", uno de los humilde y franca opinión, lo E. haya sido encargado de negociar en incorporalción del Estado Orientail del 185/5

diarios

Imperio:

del

"lEn nuestra

más probable

S.

Francia

la

reco^nstituyenldo

En

ell

bate en

así

la

Senado

Imperio,

al

mes de mayo hubo un ruidoso

de-

con ccasión de la respuesta aH disbarón de Pindaré interpeló al ministerio

brasile&oi,

curso del Trono, y

el

acerca de los planes que se atribuían

al

Imperio con respecto a

Repúbllica Oriental.

la

iNo debe olvidarse

que ría el

que

antigua Provincia Cislplatina."

curso de ese misimo el

Uruguay

es

Inglaterra

e

se 'había





dijo

reconocida la

que fresca todavía

independencia

oriental,

la

tinta

la

con

cancille-

imperial enviaba instruicciones a Europa para unir de n'uevo

Uruguay

al

que imperaba en

Brasil.

La

la épo
política actual

de

la

es la

misma

política

dominiación portuguesa. Por eso

GOBIERNO UE FLOKES

que

«>s

en

el

Uruguay reina tan grande desconfianza. ¡Cuánto los cuatrj mil soMados que a-llí tenemos fue-

que

sería

iciejor

249

tea destinados a establecer colonias militares en iSe

Brasil!

e'l

limitó a contestar el Ministro de Negocios Extramjeros que

misión del vizconde de Uruguay era completamente ajena Lstado Oriental.

la

Pero

el

d'-ietor

Juan Carlos Gómez que estaba en París,

bía en octubre del

"La misión

al

escri-

mismo año: señor Paulino

Europa

tiene sin duda relaempezado aún a desTal vez porque la Franícia se halla mal dispuesta arrollarla. respecto al Brasil con motivo de la navegación del Amazona^ Entretanto el Brasil paga artículos de propaganda encaminados del

a

ción con la Reipúblioa Oriental, pero no ha .

.

.

a desacreditar a Monitevideoí y exaltar al

Imperio haciendo ver que nosotros somos incapaces de gobierno y dejando deducir que no hay para nosotros otro prospecto posible que la aaex¡ón al Brasil." I

lias elecciones

generales de 1854.

La gran Asam'blea convocada ;para completar el periodo de Cámaras de Giró debía terminar su mandato en febrero de :.S5ú. En coinsecuencia fué llamado de nuevo el país a eJecciones

las

generales de senadores y diputados en noviembre de 1854. Ei (le

Partido Blanco, que se había ahstenido

gran Asiamblea,

la

resioilivió

concurrir esta

en vez

las

a

elecciones las

urnas,

y para unitormar opiniones instaló un club electoral en la villa de la Unión, fundó un diario de propaganda "La Unión", y or-

un Comité directivo de Bernardo P. Berro, d^on Manuel

ganizó

los J.

trabajos

compuesto de don

Errázquin, don Ambrosio Ve-

don Framcisico Solano de Antuña, don Luis de Herrera, don Santiago Botana, don Hermenegildo Fuentes y don Pedro

"azco,

P'uentes.

El ir

Partido

Blanco según

e'l

programa de "La Unión", debía

a ios comicios con una amplia bandera de fusión análoga

a

que había enarbolado anteriormente. El Comité publicó una circular en la que luego de proclamar '.a libertad electoral, aconsejaba la aceptación de cualquier candidatura que reuniera las condiciones legales, "sin exc*luir ninguna", fiel al principio de que todos tienen derecho a ser );i

representados en los tres Poderes públicos del Estado. Exigía a

HISTORIA DEL UEUQUAT

250

candidaitos adhesión a la indeipenldencia nacional, a la Cons-

los

titución de la

RepúMica, a

libertad de industria, a

la

pelía a propeinder

mento de

a/1

La

lals

libertad de pensamiento escrito, a

com-

franiquicias comerciailes, y los

desarrollo de la educación pioipular,

fo-

al

inmigración y de la aigricultura, a la mejora de la aclministra'ción de justicia, al arreglo de la deuda y al desenvolvimiento de las Juntas Económico-Administrativas sobre la base 'la

de rentas propias que capacitaran

a

esas

corporaciones

para

cumiplir sus fines conístitucionales.

Lamas que

El coironeí Diego

continuaiba emigrado en Concor-

a sns aAnigos del Salto pidiéndo'les que secunda-ran al iCotmité central de la Unión, y lo mismo hicieron los coronedia, se dirigió

Jacint'> Rairbat y Lucas Moreno en Cerrc en Tacuarembó y en el litora'l. El gobierno de Flores, a su turno, que parecía resuelto a abs-

les

Dionisio Coronel,

Lair'goi,

tenerse de

Jefes

toda participación en en :una

Políticos

g'?neral

circular

lucha comicial, decía a .la refrendada por su Ministro

los e!

Enrique Martínez:

"Ed CódigO' Político de la República acuerda a 'los ciudadanos ÚQ ella libertad absoluta en Icis comicios fpúblicos... Esa Liberrad que es indispensable para que los elagidos sean la verdadera

expresión de

la

voluntad de

(los

pueblos que ihan de representar^

quiere el Gobierno hoy que sea una realidad... cia,

recomienda a V.

S.

haga en

las

En consecuen-

próximas elecciones de

presentantes y senadores que las autoridades de su mento se conserven simples espectadoras de la lucha

re-

departaeilectoral,

tomar más ingerencia en ella que la de mantener el O'rden, iniípidiendo que sie cometan avances contra ilas mesas encarga£in

das de

reicibir

los

votos,

las

cuales

están en

el

deber

de res-

petar." los trabajos eilectorales dentro de un amHeno de esperanzas para todos los que anihelaban Ja reconsitrucción ipicllítica del país a la sombra de la con-

Imdciábansie,

pues,

ciente tranjquilo y

coirdia

de sus hijos.

La abstención Pero ya en

del

'la

Pai-tido

lilan<-o.

víspera de las elecciones

el

Partido Bianco re-

solvió abstenerse y así lo com'uniícó al Presidente Flores en

nota que llevaba la firma de 'la mayoría de lables de esa aigrupación política.

los

una

ihombres espec-

QOBIEBNO DE FLORES

251

Decían los firmantes de esa nota que habían conourrido a los promesas del

actos preparatorios á&l sufragio alentados por las

Presidente y de

de

la poilítica

promesas

sus

la

circular de la cancillería brasileña acerca de

la

Gobierno

el

haibíia

dio de la leva; que los Jefes Políticos /!0?

que no querían votar las

con

la

persipectiva

los jefes

y

de

olficia'les

leva;

la

el

de todas

mi'litarizado

y los aihuyentaban

Estado Mayor llamaba a

que no estaiban en actividad y

los

conminaba

sin otro delito que el de su independencia de opiniones;

había violado

la

leiy

al

Durazno por meamenazaban a los ciudadael

listas oficiales

que

desipecilio

eimibargo

sin

fuerzas organizadas en

distribuiyemdo

3)aís,

que a

intervención ai-mada;

que

^e

en la formación de las mesas primarias de

Juagados de Montevideo y de varios departamentos.

líos

El doctor Aímbrosio Velazco se dirigió en esos mismos tos

momen-

Ministro Amaraü adjuntándole una represien/taición firmada

ail

per treinta y tantos ciudadanos de San José. decían los firmantes de ese documento Una vez anunciado





que

el

Biraísil

se

proponía fundar

la

paz y radicar las

insti-

tuciones, fué aceptada la intervención por la generalidad del país.

Pero

el

Tiedho

es que

en este período electoral

mengua

se

hace uso de

proclamado por ia intervención. Correisponde en consecuencia que el Ministro Brasileño, "como representante del poder interventor, se digne adoptar medidas que basten a garantir los derecíhos de todos, dando f.sí realiidad a las promesas imiperiales". A su turno el Comité Electoral de la Unión dirigió un manifiesto al paíls en que invocaba como razón deteirminante de la fuerza y se viola la ley en

ta

del fin

abstención, las violaciones y fraudes llevados a taH extremo, de-

que en

los departamentos de campaña se ha dado el caso de arrestado y deportado un ciudadano cuyo único d'elito consJistía en haber hecho uso del dereciho de protesta autorizado por !a ley de elec^ciones.

cía,

ser

l-'l

fraude

oficial

provoca también disidencias entre

Es que no obstante ios Jefes Políticos,

el

los coloradofl.

las promesas contenidas en la circular a Presidente Flores había resuelto centrali-

zar las eléíociomes en la Casa de Gobierno.

Después de una José,

grupo

departamentos de Canelones, San realizada en compañía de un ministros y legisHadores para reunir y disciplinar jira

a

los

Colonia, Durazno y S-oriano,

de

HISTORIA DEL URUGUAY

252

luerzas

electorales,

prinicipio los

acometió

la

excesos de la intromisión

En

dada de proyectar el

Capital,

al

efecto

de

oficial.

A

candidatos a la representación

de

listas

las

el Teatro San Felipe, en !a Magariños Cervantes que acababa de predoctor Mateo

naciona'l.

que

la

víspera de las eleccion'es huho una reunión en los pala Aduana, donde quedó nombrada la Comisión encar-

la

de

tios

mi?4na tarea en

pero luego con protestas por

tropiezos,

sin

esa reunión siiguió otra en

renuncia del Ministerio de Go'bierno y Relaciones Exteque el Presidente de la República, ejerciendo un

sentar

exipresó

riores,

derecho que

como ciudadano, había

tenia

confeccionado listas

que lo que convenía entonces era que la Mesa fuese autorizaida para a<^ercarse al general Flores y preguntarle qué candidatos tenía y con ese antecedente confeccionar sus listas; que el paftido debía robustecer la acción del Gobierno y evide

canldidatos;

tar

divisiones.

las

Fué

aceiptada

obtenida

la

la

lista

proposición

oficial

doctor Magariños.

del

de candMatos por

Montevideo, volvió a sesionar

la

Lamas

Muñoz, especialmente invitados por

rJa

Una vez

Departamento de

asamblea popular en

con asistencia de don Luis

esta vez

el

y de

el

teatro,

don José Ma-

los iniciadores de los tra-

bajos.

Lucas Herrera y Obes, encargado de expresar objeto de la asamblea, dijo que la composición de la lista doctor

E]/l

el ofi-

ria.l y la manera de presentarla suiponía la abdicación de los deredhos del pue'blo y que el pueblo esta;ba alli reunida para resistir pacílñcamente a la imipcsición; que f-ra menester sin

duda evitar también que

triunfo de

el

los

los

blancos,

pero que era

candidatos colorados ofrecieran

menester

amplias garan-

iias al partido.

Don Luis Lamas

contra les candidatos por

protestó

la

Capi-

tiil,

y agregó

que con esa muestra poca confianza podían inspi-

rar

las

oficiales



listas

enviadas a los departamentos.

Don José María Muñoz ifestado^ una abnegación

dijo

la

entonces ¡que

lista

la

oficial

ol

Partido Colorado había ma-

toda

la

República para no dividirse,

dividía

al

partido y que era necesaria al nombramiento de una

confección de las listas en

pero que

que

connpleta al abanfdonar al Gobierno la

asamblea procediera

Comisión encargada de proponer candidatos populares. Así se hizo y en seguida la asamblea designó otra Comisión

encargada de acercarse

al

Presidente y proponerle como tran-

(lOniKIlNO

Fl.oüK.S

DI-;

sacción que de la lista popular compuesta de ocho candidatos acep-

sustituyendo los restantes en la forma que quisiera.

tara cuatro,

Pero

Flores

que

contestó

no variaba

él

su

lista

que

y

los

ciu-

dadanos tenían libertad para votar por otros candidatos. En los mismos momentos en que tenía lugar esa entrevista,

una

publicaba

se

«Amante



nacional

de mi

tos

dadanos

el

que más de

decía

el

Presidente

si

no

corazón

como en

cooperación debida

tranquilidad

la



desmentiría

corriera a tomar

ciudadano

tal

sentimien-

parte con mis conciu-

próximas y traicionano prestara además la

si

acto solemne de

el

prosperidad

y estos

votaciones

trascendentales

deberes

Presidente a los vecinos del

del

de candidatos a senador y diputados.

lista

la

como

en las

mis

ría

carta-circular

adjuntándoles

Salto,

republicana...

vida

la

Llevado de estos sentimientos y seguro de que toda mi vida pú blica ha de oponerse a toda mala interpretación que algunos esquerrían

píritus

darle,

didaturas que he tria,

nos a

la

todo

a usted acompañándole las

dirijo

que creo

presente en

que usted las

para

llenarán

bien de

el

nombre

mi

a

los

can-

la

pa-

ciudada-

departamento y les invite a contribuir con sus votos de una Asamblea que ha de excederse en senti-

de ese

formación

mientos nar

me

formado y

de

un

paz,

deber

de

de

estabilidad y

En

progreso...

ejerciendo

conciencia,

un

esto

creo

que

derecho

lle-

t'ene

ciudadano.»

Lo que había ocurrido,

según las manifestaciones del doc'or amplia información periodística de «El

Muñoz corroboradas por

la

Comercio

que los colorados, para no dividirse frenorganizaban con entusiasmo, delegaron

a

te

del Plata»,

es

blancos que se

los

sus derechos cívicos en tar

las

listas

resolvió

el

Presidente Flores y que éste

dejar de

lado

a

que

los

al

redac-

comulgaban

no

con sus ideas, es decir, a los colorados llamados conservadores.

Fué una

que continuó acentuándose hasta

escisión

de los comicios en medio de las

no

todavía

había

trascendido

al

el

día antes

más grandes inquietudes porque pueblo

resolución

la

abstencib-

nista de los blancos.

Bajo

la

Flores,

presión de esas arribar a una

delegada y

entonces la

inquietudes

fórmula

pudo

al

asamblea popular

del

la

fin

transaccional con

el

Teatro

Comisiór Presidenre

San Felipe

que se había declarado en sesión permanente, volvió a sesionar.

Don José María Muñoz, que era el encargado de dar cuenta de! hecho que sellaba la unión colorada, al anunciar que el partido votaría

una

lista

mixta dio

dos vivas:

«a

la

soberanía popular»

HISTORIA DEL HBUGUAÍ

254

Presidente de

y «al

cabezada por

calle

la

una

a

en honor de la

vador, la tarea de llevar la palabra ante

Coincidieren de que

Ya

estos

con

fes-tejos

tocó al

culminante

figura

otra

la

la

sa-

en-

Las

Flores.

que

colorada, en la

fusión

Gómez,

Carlos

repitió,

columna

Partido Conser-

del

jefe

incesantemente

continuaron hasta la noche, rematando con

ciones

manifesta-

una serenata doctor Juan

Partido

del

Conser-

Presidente Plores.

el

de

divulgación

noticia

la

Partido Blanco había resuelOo abstenerse.

el

no

había

Presidente

el

asamblea

la

organizando

y

doctor Muñoz,

propio

el

aclamaba

que

vador,

que

República»,

la

continuo a

liendo acto

ser

votadas

que

se

lucha,

Y

canónicamente.

encontraba en

contra Ici

abandonando miento del orden les,

entonces

fuerzas

las

público.

Legación Brasileña empujar a los unos

la

de

programa,

invariable

del

país

hecho

«Ese

resol-

sobera-

la

batallones imperia-

ciudad a los

de la

alejar a

conservador tenían que

una prueba de respeto a

vió dar el día de los comicios

nía nacional. Hizo

grupo

imposibilidad

la

combinadas por

mixtas

listas

acuerdo con su

de

otros

Las

pues.

delegación del

y la

del

-tarea

la

manteni-

hacerse constar

debía

y

eso hacemos», decía «El Comercio del Plata»!

de la Unión, que había continuado siendo

autoridades

Blanco,

Partido

del

generales,

de las elecciones

Treinta y tantos días después villa

fué

de

teatro

la

asiento de las

el

divereos

actos

de

violencia con motivo de las elecciones de Alcalde Ordinario.

Disputábanse

triunfo

el

cabezada por don lorado

Villegas y

cuando

la primera,

se apcdenó

de

los

Interpeló la

Gobierno

instruir

Contra

la libertad

un

de

Y

Partido Co-

gru-

palos y pu-

distribuyó

situación.

contestó

hechos, pero

que

el

Ministro que

había mandado

nada más volvió a saberse.

la prensa.

revolucionario

decr3to

contra la

los

que

libe'tad

administración

tela de

la

del

Iba predominando

Medidas adoptadas a

raíz dol de-

del gobierno de Giró.

El gobierno

la

la

mesa fué asaltada por un

Permanente y

era extraño a los

un sumario.

rrumbe

con

Comisión

la

registros y que

ñaladas hasta quedar dueño de

el

Partido Blanco en-

del

la

Luna y

encabezada por don Juan F. González.

fuertemente

po que

dos listas:

Cesáreo

dejaba

se

estrenó en

septiembre

sin

efecto

medidas

de imprenta Giró,

dictadas

las

en

las

de 1853

restrictiv^as

postrimerías de

cuando este ciudadano vivía bajo

mismos que acabaron por echarlo

abajo.

la

tu-

DK

(i')HIERN()

Antes do colocada

finalizar

«La

de

inmoral

hoja

el

como delegado de

César Díaz,

El general

publicación

año volvía, sin embargo, a quedar régimen de las medidas restrictivas.

niiíimo

el

prensa bajo

la

contraria

de respeto que se había trazado

que por

ra

misma imprenta

la

de «El Sol Oriental», previniera a los

se daría otro diario bajo

que

editores

deberían

título

el

Policía para que

la

«abstenerse de trabar la

sana razón

la

moral pública».

la

y

programa de orden y Y como se anuncia-

al

Gobierno.

delegado se dirigió a

el

la

en una

que

Gobierno con discusiones que ofendían

del

política

el

Flores, suspendió

invocando

Oriental»,

Es-trella

por lo tanto

y

255

l"L')UKS

iiionstiiiosa

Rej>;laiii(Mita«'i«')n

cjiíe

contra la prensa propone

Go-

el

bierno.

A. raíz de

1854,

piaron

Ministro

vió

al

la

Ama ral

por

división

entonces

y

He

aquí los

Ministro

el

que alar-

Presidente Flores resol-

e!

ley

don

de la

restrictivo

lineamientos

Gobierno

de

brasileña, en

tendencias

Asamblea un proyecto de

de imprenta.

refrendado

de la

empezó a revelar

prensa

la

presentar a

libeitad

Montevideo

llegada a

la

mayo de

de ese proyecto

Mateo Magariños

Cervantes:

Xo

podría

obtuviera te».

ningún

publicarse

Ministro de

«del

La autorización

grama

del

diario.

suspender la

deberían

Poder

El

publicación

o

principios subversivos

y

a

la

nacionales y de

Los editores

extranjeros.

de

que

previamente

autorización

se

competen-

todo

cinco mil tratándose de

presentar

Ejecutivo

orden

del

consultando

religión,

sin

acordada mediante fianza do dos

sería

sólo

mil pesos tratándose de

diario

Gobierno la

Ministro

al

diario

«que

público,

el

autorizado

estaría

proclamase ideas

contrarios a la

previamente a

pro-

para

una

moral

Comisión com-

de tres miembros del Cuerpo Legislativo o de la ComiPermanente en su receso» Grandes y legítimas protestas levantó este proyecto de ley. «Si el mal destino quiere que en mi tierra brote la suma del Poder público escribía don :Manuel Herrera y Obes al Direc-

'puesta

sión



tor

de «El Comercio

hombre más que un ser

I>eligrosas,

error,

son

Plata»

del

del 43 y

el

es

del 51.

un

— El

no dude

que he

proyecto del

atentado:

sus

de

volver a

Gobierno es algo

tendencias no

sólo

s;m

insensatas».

Flores se creyó obligado a dirigir una proclama

al

país,

en

la

HISTORIA UEL URUGUAY

256

que atribuía



dido

contra

didas



que en

continuara

cional,

do así

polvareda a los cons^ervadores que habían preten-

la

decía

«A patria

de

y agregaba:

complicaciones

las

desenfreno de la prensa, por por

desgracias,

tras

siendo ella paralizado

nuestro

roso

de

grito

medida para preservar a la que ocasiona el que aún están palpitantes nues-

internacionales la

visten

ha proclamado

Gobierno

el

malos

docena de que

clamo-

el

ciudadanos aso-

como esa alarma puemismo tiempo llegue

prensa, y

quiere

familias,

guerra que ha

sangrienta

engrandecimiento,

manejadores de esa

ciados a los

innumerables

luto

envolvió en la

alarma media

de sorprenderos a vosotros

que

la

que nos

la

rechazan-

habían sido impuestas por

enunciación de una

simple

la

Presidente constitu-

hecho. Afirmaba que las me-

de que

generalizada

Legación Brasileña;

ia

de

prensa eran espontáneas del Gobierno,

la

versión

la

nombrarse

vez de

s-ituación

la

al

eco de su voz paternal y justiciera».

el

La Asamblea sanciona

de imprenta con algunas enmiendas.

la ley

En la Cámara de Diputados marchó el proyecto del Gobierno a tambor batiente. El mismo día de su presentación fué despactado favorablemente en cuarto intermedio por la Comisión de Leque el Poder Ejecutivo tengislación, con esta sola enmienda: dría que asociarse a

la

sancionó

de

Y

La

Legislación. 2

en

Encontró,

sesión había

cambio,

Legislación

durado

serias

Cámara

día también la

desde las

8

en

el

informes:

el

resistencias

produjo dos

llanamente

aconsejaba lisa y

que

mismo

de la noche

de la madrugada!

Comisión de ría

el

proyecto con la enmienda propuesta por la Comisión

el

hasta la

parlamentaria para suspender

Comisión

publicación de un diario.

la

el

rechazo,

Asamblea carecía de facultades omnímodas, ría que lo depuraba mediante la supresión de

y

la

la

La

Senado.

de

la

mino-,

invocando que el

de

la

mayo-

fianza y de ;as

licencias.

El

Senado sancionó

mayoría, y ese

de

la

cia de

misma Cámara de ello

la

der Ejecutivo

terminado alterar

el

proyecto

el

la

proyecto sustitutivo de la Comisión sustitutivo

para

mayo de

el

en

seno

público»,

1854 que

facultaba al Po-

recoger y

prohibir por tiempo de-

cualquier

escrito

«comprometer

las

«mandar

circulación»

orden

también en

Diputados, promulgándose en consecuen-

de 22 de

ley

triunfó

de

que tendiera «a buenas

relaciores

GOBIERNO DE FLORES

con

de

207

Gobiernos amigos" o enrrometerse "en

los

vida

la

privada

ciudadanos".

los

El Gobierno que tenía ya en

mento de

la

mano

ese formidable

presión, se creyó obligado a tranquilizar al

viniendo en una circular a

prensa, suscrita por

la

instru-

país,

pre-

Ministro de

el

Gobierno doctor Mateo Magariños Cervantes, que la censura de actos gubernativos no se consideraría como un abuso de la libertad de imprenta y que tampoco quedaba prohibida ;a discusión razonada de la alianza con el Brasil y de los acontecimientos políticos de la Argentina, a condición de que se conservase "la dignidad y respetos debidos al Gobierno y a las personas". los

La Asamblea reacciona contra su

obra.

Corta duración tuvo esta ley monstruosa exigida por la Legación del Brasil. Dos meses después de haber estado en vigencia, don Francisco Hordeñana presentó un proyecto derogatorio en forma de adicional a

la ley

de imprenta dictada en 18 29 por

Asamblea Constituyente, y ese proiyecto respondía a un sentimiento tan premioso que en veinticuatro horas quedó sancionado por ambas Cámaras. He aquí lo que disiponía la nuBiva ley de julio de 185 4: "Toda publicación por la prensa deberá llevar el nombre y la firma de su autor y en caso de no ser conocido o no encontrarse responderá el impresor... Queda prohibido a la prensa la

atacar,

injuriar o denigrar

con palabras o conceptos a los Go-

República se conserva en paz y buena amistad ... Le es igualmente vedado tomar parte en la apreciación de las cuestiones de política interna de cada uno do aquellos países cuando ellos tengan perturbada la paz entre sus habiernos

con

quienes

la

bitantes'.

Vuelve

el Gobiei-no a las

Al aproximarse

mo

los

medidas

re-strictivasv

comicios generales de noviembre del mis-

año, quedó de nuevo la prensa bajo

nazas gubernativas.

En nota

general don Enrique Martínez

"El desborde de

manda una 17.

- IV

seria

la

la

presión de las ame-

de 31 de octubre decía al

prensa ha llegado a

consideración

el

Ministro

Jefe de Policía:

por

parte

tal

de

ecstremo, que -dela

autoridad

.

.

.

HISTÜKIA DEL URUGUAY

258

Haga comparecer imprentas de

a

su despacho

todos los encargados de las

a

Capital, significándoLes que el Gobierno está re-

la

suelto a aplicarles con toda severidad las penas de la ley".

febrero de 1855 empezó la prensa a ocuparse de la acti-

En

tud del Brasil y eso dio mérito para que

el

Presidente Flores

llamara a su despacho a los periodistas y les previniera que estaba resuelto a proceder con la mayor energía, dando mérito

con

ello

una

a

crisis

parcial

ministerio

del

momento por don Francisco

Hordeñana,

el

constituido

general

en

ese

Enrique

Martínez y el coronel Lorenzo BatUe. El renunciante era don Francisco Hordeñana.

Pero lo que no podía ir a la prensa responsable se desbordaba en publicaciones anónimas a despecho de todas las medidas inspiradas por la Legación del Brasil. Una mañana apareció la ciudad una hoja suelta que el Ministro de Gobierno

en toda

don Alejandro Ohucarro describía

en

así

la

Cámara de Dipu-

tados:

"Una verdadera concitación

a

insurrección

la

desde que acriminando malignamente Imperial en dencias de fidencia,

lo

que concierne

a

la

y

la

revuelta,

conducta del Gobierno

la

República, acusando las ten-

alianza entre los dos Estados de una cubierta in-

la

despertando en

las

masas

desconfianza

la

y

los

odios

con recuerdos gloriosos, azuzando los belicosos sentimientos del pueblo, se le quiere precipitar en luchas y sucesos que si tulugar pondrían en peligro nuestra nacionalidad o, por menos, serían el principio de las más íntimas desgracias para

vieran lo

país".

el

La

Policía

practicó

diversos arrestos

José María Muñoz para promover en una ruidosa interpelación al Ministro éste

de Gobierno, en la que sostuvo que las medidas no habían sido solicitadas por la

Legación del Brasil y anticipó que a

la

que dieron base a don Cámara de Diputados

la

acción de

Se inicia un

la

justicia

los

presos serían sometidos

ordinaria.

fuert*» nioviniiento

de fusión entre los

pai-ti(To«;

ti^-

(licionaies.



Hemos hecho referencia Lamas a raíz de su

drés

a un opúsculo publicado por don Andestitución

Uruguay en Río de Juneiro.

del

cargo de Ministro del

Ü»^BIBRNO DE FJ.ORES

Ya

más

militar

dos a nosotros Flores

a

Para

salvar al

sado,

porque

el

Es

combate.

Colorado

no

libro

para

libra-

apoya

Flores aspira

Partido Blan-

el

más

tiene de

sino

sirve

oponen

«cerremos

necesario que

quiere

retiro de

Colorado

que

notorio

Partido

no

el

Quedaremos

Partido

propósito se

país es

ese

parte del

tal

que a

que

co y todo lo

Una



opúsculo

apronta para

se

Montevideo.

en

existente

otra lo

la

y

en ese

Uruguay y

al

mismos".

a la reelección y

Lamas

decía

dinero

división

la



Brasil

el

prestar

259

valimiemto.

libro del

el

pa-

No

dividirnos».

es

nueva esta idea. En 1851, antes de la paz, cuando ya se aproximaba la solución, yo escribía al canciller brasileño: «el Parencierra mucha parte de tido Blanco tiene de malo la cabeza;

más

lo

distinguido y de lo

colorados

blancos y ción

una

de

descrédito esos

ciso

nulidad

la

Mía

es

ni vencedores.

regular;

renunciar a

divisas

las

de ideas que paita

para

caudillos

de

creael

disolver

partido de gobierno y admi-

de octubre:

pacificación

la

formar

personales

cumplimiento

ütl

la

aprovechar

preciso

es

de los

gran

Para

aun

pacificación y

la

fórmula de

esa

la división

ilustrado del país;

actual

organizar un

partidos y

vencidos

ni

administración

y

nistración».

más

imposibilita

nuevo

el

y de

partido es pre-

un programa

redactar la

Constitución

de la

República y propenda al progreso del país en todo sentido. Ese opúsculo publicado en Río de Janeiro, llegó a Montevideo

de 1855. El momento no podía ser más oportuno para una propaganda de concentración. Los conservadores acentuaban su oposición y los blancos seguían combatiendo al gobernante que los había obligado a abstenerse cuando ellos se juzen agosto

gaban

con

fuerzas para

ganarle

batalla

la

al

pie

de las urnas.

En uno

y otro campo, en

blanctos,

debía encontrar, pues, y encontró eco simpático la palabra

del

el

de los conservadores y en

P.

Berro fué

uno de los primeros en apoyar el mediante una serie de cartas que

movimiento de

concentración

publicó en «El

Comercio del Plata» y

copiladas en un folleto con

Remontándose señor

rigida

hubiera

gónicos,

a los

Berro que

embravecer las

de los

doctor Lamas.

Don Bernardo

el

el

los

la

podido ánimos,

resueltos a

razones con que

el

que más tarde fueron

re-

título de «Ideas de fusión».

comienzos de la intervención solucionar

la

dividiendo

exterminarse a

Guerra Grande, que

anglo-francesa. crisis,

al

país

había

sostenía

bien

contribuido

di-

a

en dos bandos anta-

despecho de

cada uno apoyaba su causa.

la

igualdad

de

Ambos habían

HISTORIA DEL ITBUGUAY

260

recibido

patrocinio

el

De

otro.

haber traído

extranjero,

europeo

partido

reprochara

cada

que

ahí

que ambos se acusaran de servir el cionar la independencia. La paz de 1851

de los

igualdad

la

ciliación:

el el

doméstica y interés extranjero y de trai-

ingerencia

la

a su

extraña a una

americano antagonista

uno,

el

cuestión

dos bases a

fijó

partidos y

con-

la

reconocimiento de

el

la

buena fe con que habían luchado. que constitucional Ocupándose luego de la reorganización subsiguió a la paz, recordaba Berro que los hombres más influyentes de ambos partidos habían hecho prácticas las ideas de fusión en los comicios y que muerto el general Garzón que era candidato de todos, se buscó a un hombre que fuera bueno el don Juan dades, de

Francisco

que

las

que

Giró,

no

efectivamente

reunía

desprendió en

se

triunfando así

para dominar,

condiciones

pero sin

e inteligente

esas

cuali-

curso de su gobierno,

el

partido, jamás fué hombre de volunhombre de atraso y brutalidad. Caílo Partido Blanco continuó aclamando la unión y los colo-

pues jamás fué hombre de

tad dominadora, jamás fué Girp,

el

«ons-tituyendo

S

un partido de «Los

agrupándose

dividieron

rados se

no están

orientales

de

algunos

en

unos

torno de Flores

mayor valimiento

intelectual,

oposición.

estando solamente por a

los

de

los

otros,

los

los

que

éstos

divididos

por

hechos,

ya

por la

sucedieron

principios

tiempo

político.^;;

de aquéllos

aplicación

Respecto

atrás.

conformes y se puede decir que todos pertenecen a la misma escueda. Justamente con civilizado y libre en que haya dificultad se" encontrará un país especulativas,

a las ideas

menos pios,

cosa que ciertamente

gobierno

tocantes

de opiniones

diferencias

practicado

biendo sido

están

todos

tenía que

sino

breves

por

aún no ha habido

adoptado,

a

doctrinas

suceder

y princi-

porque no ha-

así,

espacios

el

sistema

que se

tiempo de

de

hayan

formado opiniones diferentes sobre infinidad de cuestiones a que una larga práctica daría ocasión. La división ha estado en los hechos;

1^ división

La unión que

primer

paso

a

con la paz y bres». la

de la

«creación

la

con

El olvido

obra

el

país

propender a

del>e

políticos;

el

recuerdo de esos hechos».



agregaba

el

del

unión.

regular

desarrollo

«Hay un

lo

no

«verdadera

partidos

de

pasado es

una



de

fusión»

ideas,

de las

santo;

contra-

corrí

compatibles

instituciones

más importante y silencio

debe redu-

de nuestros

a las personas y derechos

cirse al respecto rios

existe por

necesita

esencial

hay una

li-

en

mudez

261

GOBIEENO DE FLOKES

hemos de callar y mirando sólo ade¿Por qué no hablamos solamente de nuestros deberes de hoy, de nuestros deberes de mañana, sin tocar a lo que hicimos y a lo que dejamos de hacer ayer?"... La desunión nos desunión nos mate mata. Matemos la desunión, antes que la salvadora. ¿Por qué no nos

lante?...

a nosotros".

\uevas y violentas medidais

comti'a la preiLsa.

Bajo la influencia de estas ideas varios jóvenes del Partido Colorado fundaron un diario, "La Libertad;", "órgano de la generación que se levanta" rezaba su lema, con el concurso de los estudiantes de la Universidad y de los abogados recién egresados.

Su primer número, condenaiorio de los caudillos y de los que habían levantado y seguían levantando a los caudillos hasta

en

colocarlos

de

presidencia

la

la

concluía

República,

así:

"Eí luto, la orfandad,

Esos charcos

hambre

el

sangre, esos

de

debemos a los caudillos. humanos que se en-

lo

esqueletos

cuentran en nuestros campos, es obra de los caudillos. ¡Oh! deno basta ya de caudillos, decid ahora si no os encon-

cid ahora si

tráis con ánimo suficiente para rechazarlos, para clamar por .hombres de inteligencia y de orden! El país está en la peor situación. Bajad la cerviz, hincaos y permitid que reine el

caudillo,

pero

no

abriguéis

contad segura la ruina de Flores del Cerro

teguir la

cerró a

y lacró

la

menor

la

la

patria,

imprenta,

esperanza

la

encerró

y

de

en

la

uno de sus redactores, don Antonio Tomé,

con ello

su

incorporación

de

objeto,

poiique

nuevo

un

el

felicidad,

ruina vuestra".

volvió

diario

a

fortaleza sin

con-

salir

con

don José María

colaborador,

Muñoz. Juntamente con

la orden de clausura el Presidente dictó un refrendado por sus Ministros don Salvador Tort, don Francisco Agell y el general Enrique Martínez, en que sometía a la prensa a un régimen todavía más atentatorio que el que se había empleado en las crisis anteriores.

decreto

"Queda la

prohibido

publicidad

de



Ministerio de Gobierno tener

dicha

decía

periódico

autorización

La

el

alguno

decreto de sin

10

de ago-;o

autorización comipetente los

directores



obtener previamente del de

los

.

.

.

Para ob-

periódicos

esta-

IIISTÜIUA DEL UKUGL'Ay

262

blecidos o

que en

lianza

diez

de

aprobación

sucesivo

lo

se

del

pesos,

someterán

así

El no cumplimiento de lo dispuesto en

los

una

prestarán

establecieren

como también mismo Ministerio el programa mil

del

a

la

periódico...

artículos

anteriores

penado con la suspensión de i^n año del periódico y mil pesos por la primera vez, y por dos años y dos mil pesos la segunda... El juicio de calificación se comete a los Jueces del Crimen, de lo Civil y de Hacienda, formando tribunal". será

mismo

El

columna

don

diario

del

don Nepomuceno Madero en

constar

hacía

día

de "El Comercio del Plata"

editorial

María

José

vaba

el

la

redactor

sido llamado por el desagrado con que obser-

había

Cantilo

Presidente Flores para expresarle

cjue

el

propaganda de "El Comercio del Plata" y prevenirle que la imprenta si continuaba

la

metería en un calabozo y cerraría escribiendo en la misma forma. lo

Gobierno

El

creto saje del

acto

el

la

a

Comisión Perma-

clausura de "La Libertad" y del de-

la

restrictivo de la libertad de imprenta. Decía en su menque aquel órgano de publicidad lanzaba ideas subversivas orden público; que según las informaciones recibidas se

trataba oficial

convulsionar

de del

el

país;

que

el

y que tal había sido dictado contra él.

ejército

arresto

del

en

dirigió

se

nente dando cuenta de

estudiante

razón

la

Tomé

era

determinante

grupo de legisladores conservadores, encabezado por don María Muñoz y don Pedro Bustamante, se dirigió a la Comisión Permanente pidiéndole que hiciera efectiva su misión El

José

ante

constitucional

prensa, ante

chas

de

la

decreto

el

personalmente por

los

diarios.

restrictivo

de

la

libertad

de

la

clausura de imprentas y ante las amenazas he-

Y

trativa de la Capital

el

primer mandatario a los redactores la Junta Económico-Adminis-

misino hizo

lo

ail

protestar contra el atropello de que había

la de "La Nación". La Comisión Permanente pasó el mensaje a estudio de dos de sus miembros, don Mateo Maga.-iños y don Eugenio Fernán-

sido víctima otra imprenta,

dez,

los

cuales

adhirieron

bierno.

El Poder Ejecutivo de

la

facultad que

le



por

decían

concede

la

completo



a

la

actitud del Go-

ha hecho en este caso uso

Constitución, la de tomar me-

prontas de seguridad en los casos de ataque exterior o conmoción interior. Ha tratado de corregir desmanes de la prensa qu9 llevan a los espíritus "el convencimiento pernicioso

didas

GOBIERXO DE FLORES

de que hay patriotismo en -iutoridad".

En cuanto

resistencia

la

decreto,

al

263

es

mandatos de

los

a

la

que establ3ce

cierto

lo

efectividad de las penas y para la realizacometiendo el proceso a un tribunal compuesto por los jueces de primera instancia. '"Son conocidos de Vuestra Honorabilidad y de todo el mundo los inconvenientes que ofrece la reunión del Jurado y la facilidad con que se elude la

para

garantíais

ción

la

del juicio,

responsabiliidaid

Cediendo

a

de los que injurian por las

clausura de imprentas y

la

prensa".

la

Comisión Permanente aprobó reglamentación restrictiva: lo priera efectivamente 'cierto que se

mismas ideas la

la

como podía hacerlo si estaba tramando una revolución para derrocar mero,

según

des,

grante

lo decía

violación

el

de

Ministro de Gobierno; los

principios

a

las

la

autorida-

segundo, oon

constitucionales

Presidente en vez de pedir una ley a

el

lo

desde

Asamblea

fla-

que

se había

erigido en legisilador y había redactado una verdadera ley de im-

prenta.

Estas

medidas

contra

la

prensa

contribuyeron

formidable-

movimiento de fusión iniciado por don Andrés Lamas y don Bernardo P. Berro. Los ciudadanos se acera impulsos de ideas can escribía "El Comercio del Plata"

mente

a acentuar el





de concordia y el pueblo se resiste contra los atentado? del Gobierno sin salir del terreno legal.

De la influencia de los partidos en lucha puede dar idea el hecho verdaderamente extraordinario de que el diario "La Libertad" clausurado por el Gobierno y sometido luego al decreto restrictivo

de

la

libertad de

imprenta,

y otra cosa y siguió publicándose sa

como

hizo si

el

caso omiso de una régimen de la pren-

no hubiera sufrido modificaciones!

l*aj-a

salvarse del desastre

el

Gobierno deroga su

diecreto.

Apenas diez días alcanzó a contar el decreto. El 20 de ugosto quedó sin efecto, por haber "terminado las causas", decía el Gobierno en su revocatoria. Juzgando ya serenado el ambiente, Flores promovió en su despacho una numerosa reunión de hombres de todos los partidos. Deseaba atraerse voluntades. Dijo en esa reunión que las medidas restrictivas habían respondido al propósito de mantener

la

paz,

pero que en adelante "su programa sería

mcás amplia libertad basada en

la

unión de

los

el

de

la

orientales", por-

HISTORIA DEL URUGUAY

264

(!ue

ma



Gobierno

"el

de que

la

paz y

necesidad de



recalcó

tiene

el

convencimiento íntimo

confraternidad de los orientales es

la

la

y concluyó

patria";

haciendo

la

supre-

alusión

al

brusco ca.mbio operado en la diplomacia brasileña, "al desvío (son palabras de la crónica periodística de la época) que de

poco tiempo a esta parte se notaba en

el

agente imperial

en.

apoyo que tenia derecho a esperar de él el Gobierno", Trataba, pues, el Presidente de buscar apoyo entre los hom-

cuanto

al

bres representativos de ambos partidos y

para

los blancos cito

resistir

muy

especialmente de

Ministro Amaral, que tenía un ejér-

al

de cuatro mil brasileños en Montevideo y que estaba acosa influir decisivamente en la marcha gubernativa.

tumbrado Pero

ciudadanos a quienes ahora buscaba querían

los

turno sacar partido de las eternas insidias de sileña, res,

y contaban con

la

a

su

diplomacia bra-

Ministro Amaral para voltear a Flo-

el

como antes había contado

el

mismo Flores con

el

Ministro

Paranhos para voltear a Giró. ¡Exteriorizando las ideas de todos los que

como

él

pensaban,

colorados y blancos, dijo en la reunión de la Casa de Gobierno el doctor Francisco Solano de Antuña, procer del Partido

Bianco:

Procura de

los

Gobierno

el

encarrilarse

al

en la senda de

orientales

y

revocar la

suprimir

el

decreto contra la prensa

Constitución, promover la unión

toda

influencia

extraña.

Puede

pensamiento de la unión, pero no así el rechazo de la intervención brasileña que emana de tratados o sea de verdaderas leyes. El comentario público atribuye la clausura de imprentas a la propaganda unionista que el folleto de don Andrés Lamas vino a despertar y a la aplaudirse

el

decreto revocatorio y

el

propaganda contra la ree'Ieeción del Presidente Flores, y es del ataque a la prensa que ha resultado actual desinteligencia la entre el Gobierno y la Legación Brasileña. El rechazo de la intervención en estas circunstancias signiñcaría un acto de venganza más que un esfuerzo a favor de la unión de los orientales.

Los blancos, por otra parte, no pueden tener confianza en

d^ un gobierno que se arma y que persigue en toda campaña a sus adversarios políticos. Con estas manifestaciones quedaba fracasado el objeto de la acción

la

la

reunión y los invitados regresaron a su centro de propaganda

para precipitar por

el

la

caída

del

Partido Conservador.

gobierno de Flores, ya

decretada

GOBIERNO DE FLORES

265

La revolutión de agosto de 1855. La situación

Gobierno se había ido complicando

del

ataques del Partido Blanco y de

la

diplomacia brasileña

o,

dicho, del ejército brasileño que guarnecía la plaza de

joi-

Y

tevideo.

Flores

convocatoria de tro

y

así

la

bajo

presión de los ataques del Partido Conservador, de los

triple

la

la

resolvió

contener

Guardia Nacional,

su el

meMon-

derrumbe mediante

la

establecimiento de cua-

comandancias militares en los departamentos de campaña requisa de armas de guerra existentes en manos de parti-

culares.

El domicilio de don José María Muñoz, jefe del Partido Con-

servador, efectos

proceder

los

que debían ser inspeccionados a

los

requisa de armas, y la Policía recibió orden de

la

su allanamiento y asimismo al arresto de aquel ciucaso de resultar cierta la denuncia.

a

dadano en

el

No había la

uno de

era

de

tal

armamento, pero

la

noticia

de

la

orden dada a

Policía atrajo al domicilio del jefe de los conservadores a nu-

merosos ciudadanos, practicara

el

dís'puestcs

a imipedir a

todo trance que se

registro.

"Propiamente dicho, escribía "El Comercio del Plata", no se trataba de una revolución, sino de una resistencia a la dictadura, y para demostrar esta verdad baste decir que los que iniciaron este movimiento son la juventud ilustrada del país, los hijos de las familias más acomodadas y más altamente coilocadas. Allí no había proletarios, ni vagos: eran doctores, ciudadanos, estu-

diantes. El pueblo entero los siguió y todo un pueblo no se eciui-

voca".

Procuró la Poilicía disolver ese vasto grupo, pero inútilmente. porque el número de ciudadanos crecía a cada instante. El Presidente Flores, que se daba cuenta de la gravedad del momento, resolvió ir personalmente a gestionar la disolución. Salió de la Casa de Gobierno al frente de una fuerza armada, pero al aproximarse al domicilio del señor Muñoz dejó la fuerza y avanzó él solo para hablar con el jefe de los conservadores, como efectivamente lo hizo. A ninguna fórmula transaccional pudo arribarse en esa entrevista y entonces el Ministro de Gobierno, don Salvador Tort, que acompañaba al Presidente, pidió al pueblo allí reunido que nombrara una Comisión delegada que expusie-

ra

sus deseos.

La Comisión delegada, de

la

que formaban parte don. Manuel

HISTORIA DEL URUGUAY

26tí

Herrera \' Obes, clon Pedro Bustamante, clon Lorenzo BatUe y don Jaime Estrázulas, concretó las aspiraciones populares en estas tres exigencias: que el periodista Tomé fuera puesto en libertad; que se otorgaran garantías a todos los ciudadanos; que cesara la movilización de la Guardia Nacional. El Presidente, s:n admitir

la petición en cuanto calificaba de medidas discutidas, contestó respecto del periodista, que estaba redactando el decreto derogatorio del arresto aplicado por su calidad de militar; respecto de garantías, que al día siguiente publicaría un mani.fie&to que ya tenía pronto, en que diría que la Constitxición sería siempre su norte y que sin el cumplimiento de sus cláusulas "no creía posible ninguno de los goces a que debemos aspirar como nación libre e indepen-

arbitrarias

diente";

las

y respecto a los preparativos bélic:s. que "ellos tenían

por objeto defender necesario, y

la

independencia de

dignidad nacional ajada por

la

la

República,

si

fuera

Ministro Imperial",

el

nd debiendo olvidarse que existían dentro del país "cuatro mil soldados extranjeros".

Cuando

la

Comisión delegada daba cuenta de esas

ciones al pueblo estacionado en

al

todos

solvieron

los

la

oposición.

circunstantes

'Tjar»ft'Sl;í-

la

nr^sa

del

a

ir

Y

la

ante esa noticia re-

Casa

de

Gobierno y

abajo a Flores.

La columna ipopular de

de

el

gente de tropas para sofocar

'ícliar

alrededore-^

rumor de que el Presidente había ccmuMinistro Amaral que de campaña ll9..;;i'. !a un contin-

señor Muñoz, llegó nicado

los

se ,puso en

iban don José María

ella

marcha en seguida. Al frente el coronel Batlle. La guar-

Muñoz y

dia de la Casa de Gobierno se plegó al movimiento.

Solsona,

el

comandante Vedia y ctros

de artillería y

al cuartel

jefes

y

El

oficiales

coronel

entraron

obtuvieron que ese cuerpo se pronuncia-

también a favor de la revolución. El coronel Francisco Tajás plegó igualmente con la fuerza de caballería que comanda-

ra

se ba.

Y

el

coronel Palleja, que estaba

Policía en

la

al

Jefatura, se retiró a su

frente de un piquete de casa,

dejando

la

trepa a

disposición del doctor Muñoz.

Los dirigentes del Partido Blanco habían ya adherido

al

plan

de los conservadores en una gran asamblea celebrada en la vís-

pera

de la revolución, de la que resultó el nombramiento de Comité encargado de dirigir tcdos los trabajos. Ese Comité, 'jae estaba formado por don Luis de Herrera, don Francisco Solano de Antuña, don Ambrosio V'elazco, don Pedro Fuentes y 'in

267

GOBIEBNO UE FLORES

Enrique de Arrascaeta, publicó al tiempo de esta-llar el momanifiesto que decía: "Derrocado el Gobierno y levantada la bandera de la unión y la Constitución, esa- es desde boy la causa de todos los orientales. Unidos todos sin distinción, tomemics las armas por la li:'.on

virniento un

jurando no deponerlas mientras que

bertad,

legítimamente representada conforme nido

con

los iprimeros

Constitución! E:1

solo,

¡Viva

Presidente de

salió

la

la

hombres Unión!"

FJores,

-que

del

se

la

Nación

Comisión

la

Partido

lo

Colorado.

no

ba

sea

conve-

¡Viva la

quedado absokita-mente

había

ciudad con rumbo a Las Piedras, en busca de

los contingentes que venían de camipaña, y desde allí lanzó una proclama en que decía: "Un tumulto infame, encabezado pCT tres o cuatro traidores,

ha tenido lugar en la capital de la República contra el Gobierno Juventud incauta de la Capital, volved por vuestros pa-

legal... .sos,

abandonando a esos demagogos ambiciosos y

Gobierno

constitucional

vuestra

de

que descargar sobre vosotros

el

patria

castigo

el

evitaréis

disgusto

gl

de tener

que deben esperar

los

revoltosos."

Los levoliuionarios organizan un gobierno provisorio.

Don José María Muñoz, niíiestO'

en que decía que

jefe el

del

movimiento, publicó un ma-

orden público estaba amenazado por

autoridad misma; que les extravíos de Flores eran otras tan-

ia

las

causas para su destitución; que era imiposible, sin embargo,

se decretase dentro de las formas legales, mandatario contalba con la aiprobación de la misima Asamblea encargada de refrenarlo. "En nuestra actitud agregaba no hay ninguna tendencia anárquica, no hay la aspiración nacional de nadie. Esperemos, ciudadanos, que por los mismos resortes constitucionales se regularice cuanto antes la siijue

esa

porque

destitución

el





tuación actual".

Hubo en seguida una numerosa reunión de la que resultó el nombramiento de un gobierno provisorio compuesto por don I.uis Lamas como gc/bernador y por el coronel Lorenzo BatUe. don Manuel Herrera y Obes y don Francisco Solano de Antuña ('conservadores

los

primeros

y

blanco

el

último)

como Minis-

tros.

Véase

el

manifiesto con que se estrenó

el

nuevo gobierno:

UISTOKIA DEL TRUGUAY

268

el modo de usar lícitamente de faTampoco hay quien pueda dárselas: necesita... La ley natural y positiva auto-

"El Gobiernio no re'conoce cultades lio

extraordinarias.

quiere, ni las

las

riza al

hombre para defender su vida

a

que

costa de aquel

y este derecho lo tiene también el provisorio y usará de él en juicios breves y sumarios, tenta

quitársela;

in-

gobierno sin faltar

formas... Estrecihémonos, orientales, dentro del círculo de la unión que hemos pactado. No quede esfuerzo que hacer para salvar esta vez el código sagrado que juntos todos hemos levantado de nuevo. Abjuremos las malas pasiones a

ninguna de

las

y no pensemos en más que en mostrar la undón, que todos sus esfuerzos

'lo

los antiguos partidos,

al

único hombre que detesta

han de venir

a

estrelilarse

circular a los d.:'

la

contra

el

voto nacional."

Guerra coroael Batlte dirigió también una jefes de campaña, en la que luego de darles cuenta

El Mjnistroi de

la

organización del nueivo gobierno,

les

decía:

"Pero no es este (el nombramiento del gobierno provisorio) el heoho grande e im^portante; el principal y de mayor trascendencia eis la unión y fraternidad de toidos los orientales bajo la spla bandera de la patria, sin distinciones ni excepciones algunas, sin las antiguas divisas de partido... Todos los ciudadanos, pues, sea cual haya sido su color político, están llamados a la causa

Síervados

común; todos deben considerarse reintegrados

o

con-

en sus puestos, cesando inicuas y odiosas proscripcio-

nes."

Los partidarios de la nueva situación resolvieron además promover la fcirmación de un gran partido nacional, en el que ingresarían lois blancoá y los co'lorados, y dando comienzo al cumplimiento de la idea dominante resolvieroai tirar las viejas divisas de guerra y adaptar como simboltoi de unión "el color celeste

de

la

bandera nacional".

la primera de esas ideas, decían en un manifiesto don Fermín Ferreira, don Pedro Bustamante, don Manuel Herrera y Obes, don Luis Lamas, don Francisco Hordeñana y don Enrique Muñoz entre los firmantes de filiación colorada, y don

Prestigiando

Leandro Gómez, don Luis de Herrera, don Cándido Joanicó, don Ambrosio Velazco, don José Brito del Pino, don Antonio de las Carreras y don Enrique de Arrascaeta entre los de filiación blanca:

"Los ciudadanos que suscribimos, reunidos en asociación pocon el desigTiio d'e formar un gran partido nacional que

lítica

269

GOBIERNO DE FLORES

los

rija

deslinos

sacándolo

país,

del

de

la

condición

que

a

lo

han reducido las disensiones civiles, hemos acordado.... Promover y sostener la existencia de gobiernos regulares que arrancando de la vo'luntad nacional legitimameate expresada por mtde los comicios públicos, radiquen su existencia en

dio

vancia de ciitios

Constitución y

la

que

obser-

la

respeto a cada uno de los prin-

Aceptar

consigna...

ella

el

leal

y decididamente, como

medio de arribar a este grande oibjeto, la aliauiza brasileña, digTrabajar en la extinción de na y benéñcamente entendida. ios odios y prevenciones que ha dejado la lu'dha entre lois dos .

grandes

cando

la

patrtidos

que

en

.

estuvo

unión entre todos

los

dividida

oirientales y

la

República,

parte que les corresponde en la reorganización del país.

como...

tar

predi-

dándoles a todos .

.

la

Acep-

punto de partida... la actualidad creada por los a que ha dado lugar la marcha arbitraria y

a'ci'ntecimieintois

de

a*^^entatoria

A

la

presídemela

don Andrés Lamas no

le

del

general

Flores."

parecían suficienites esas terminan-

r.f-s

declaraciones, que sin

embargo

traduiclaii

Sius

propias ideas sobre

pasado y

el

Ustedes



escribía

a

el

principios

con toda valentía

porvenir de los partidos.

septiembre

de

a

doctores

los

Francisco Solano de Antuña, Manuel Herrera y Obes y José Maríc. Muñoz proyectan una coalición, una tregua, dejando en



lo^s colorados. Pero lo que necesita el país una verdadera fusión de esos blancos y colorados y la formación de un nuevo partido. Los blancos y los colorados que "no representan más que pasiones e intereses personales egoístas, mezquinos, son insanablemente impotentes para el bien".

a los blancois y a

pi.:'

es

li.a

fusión enti-e los partidarios de Flores.

'El movimiento de fusión promovido por el opúsculo de don Andrés Lamas y Los artículos de don Bernardo P. Berro había

hecho, pues, notables progresos entre los dirigentes del Partido

Conservador y del Partido Blanco. Los floristas habían tratado también "Te

conciliación

bajo

fiíiea!

concretaba

antes

de

la

el

así ,el

de

revolución:

"Propender por todos del orden público.

ción

robusteciendo

de fundar un partido "Sociedad de la Paz", cuyos programa publicado veintitantos días

titule

la

los

medios

Sostener

a

su alcance a

las

autoridades

acción del gobierno

emanado de

la

la

conserva-

constituidas, ley.

Contri-

HISTORIA DEL L'KVGUAY

270

biiir

a que se proceda con moderación en

el ejercicio

de los gran-

des actos populares. Propagar dcictrinas de paz y de conciliación

vor medio de

palabra y de

la

República. Fomentar

ia

la

prensa en todo

espíritu

el

de

territorio de

el

asociación

y

fraternidad

lecíproca de los asociados."

programa de la Sociedad de la Paz coinpuerto de Montevideo del general Manuel Oribe, procedente de España donde había vivido dos años. Oribe

La publicación

del

cidió con el arribo

al

Pero

pidió y Oibtuvo autorización ,para desembarcar.

al

llegar

i.ido.

Una de

versiones

las

medida con exigencias

más generalizadas

esa

rela'cionaba

del Ministro Brasileño A'maral y

agregaba

lue era con el prepósito de evitar comentarios ardientes que Gobierno había clausurado la imiprenta de "La Nación". Así que estalló .

a

Capitanía recibió orden de regresar al barco en qiue había ve-

la

con

laciones

vnfrse

contra

sin los

el

el

el

movimiento revolucionario y rotas ya las reAmaral, Flores y Oribe resolvieron

Ministro

embargo para combatir contra blancos que intentaban

los conservadores adueñarse del gobierno.

y



"Los generales Oribe y toda la población de la Unión deel Presidente Flores a don Francisco Vidal en carta data la \n el Paso del Molino el 3 de septiembre se han ligado para ayudar a la aiitoridad legítima de la Nación." escribía don Manuel Flores a don Santiago "El Presidente se Sarza en carta datada' en Trinidad el 15 de septiembre halla rodeado no sólo de la mayoría del país, sino que el 2 de don Ignacio y don Manuel Orib» se han eL--te mes los generales cía





nnido a

i"

lores

él

con todo



el

Partido Blanco para sostenerlo."

renuncia y asuine

el

poder ejecutivo

el

Presidente del

Senado.

Fué de muy

corta

duración

la

lucha

entre

los

revoluciona-

que contaban con la fuerza de la Capital y el Presidente res que se encontralba a la vista de la ciudad con 600 a 700

rios

rií

hombres de cabaillería. El movimiento revolucionario repercutió al prinicipio en departamentos de campaña como un resultado de la presión

los

ex-

clusiva del Brasil contra Flores, tan activa era la colaboración, de

diplomacia imperial en los sucesos internos del país. Por efecto de ello algunos jefes desafectos al gobernante se apresuraron a la

rodearlo. Pero luego que se vio actuar a un grup.T

numeroso de

271

GOBIERXO DE FLORES

en torno de

los partidos

ciudadanos de todos

la

nueva situación,

CFOs jefes volvieron a sus hogares, sin ánimo para reanudar

guerra

la

civil.

Los coroneles Diego Lamas y Lucas Moreno que estaban emigrados en Entre Ríos, se dirigieron desde los primeros días de septiembre

al

gobierno provisorio de don Luis

"Fuera de

corazón en

ella,

Lamas

ofrecién-

con el participamos de las ideas de los buenos ciudada-

dole sus servicios.

patria,

la

le

decían,

pero

nos que olvidando los antiguos partidos no tienen otra enseña que estandarte nacional y el sostenimiento de las instituciones". decía el corola paz y la seguridad pública

el



"Ansioso por

cuentro nuevamente



me

en-

entre vosotros, diSipuesto a ser vuestra

ga-

nel Dionisio Coronel a los habitantes de Cerro Largo

rantía para cualquier caso en que la luciha existente entre la Ca-

y sus alrededores pueda querer envolver nuevamente a esta guerra civil. Nada de armas, nada de lucha sangrienta: la paz, la tranquilidad, la seguridad pública, pital

población en la funesta

propiedades resipetadas bajo

las

sen los anhelos de

la

población y

la

custodia constitucional: estos lo

que

la

población anhela es

mi deseo."

No podía haber

luOha, pues, y no

Flores se aproximaron un día a salieron a su encuentro;

Tjlaza

llas se

un

mezclarom en

la

la

la

hubo. Las caballerías de

ciudad y

las

fuerzas

de la

pero los soldados de las guerri-

zona intermedia

sin

que nadie disparara

tiro.

Dos días después

del

movimiento revolucionario

salió

una de-

comercio para entrevistarse con Flores y traer a 'a plaza una fórmula de conciliación. Contestó el Presidente que ul se tratalba de una guerra civil, sino de una verdadera guerra nacional, aludiendo sin duda a la parti :ipación principalísim? legación

del

diplomacia brasileña en los sucesos del día. Pero la delecomercio siguió trabajando, y el Presidente persuadido ya de que los contingentes que aguardaba de campaña no

•lo

la

gación del

modificarían fundamentalmente su situación militar, resolvió entenderse con ella en la forma alta y desinteresada que imponían ;0ír.

intereses

del

país.

Propuso, pues, a los intermediarios que se diera participación •'.n las negociaciones al Presidente de la Comisión Permanente y que dicho funcionario reuniera a la tral,

entre

la

plaza

de

narios, y la villa de la

Asamblea en una zona neuMontevideo ocupada por los revolucioUnión ocupada por las fuerzas guberna-

HISTORIA DEL URUGUAY

272

promesa de que una vez reunida la varía renuncia de su mandato ipresiiden'cial. Era las fuerzas armadas de Montevideo se pondrían a meral Anacleto Medina, y que se gestionaría la con

tivas,

la

Asamblea

ele-

entendido

que

órdenes del gegarantía mor^l

ve los agentes diplomáticos de Francia, Inglaterra

Mientras Asamblea,

se el

España

a

llenaban los trámites de la convocatoria de la Presidente Flores dirigió una proclama a las tro-

que guarnecían a Montevideo y otra proclama

bra'sileñas

])aR

y

cumplimiento del pacto.

del

f;ivor

al

pueblo.

En

la

hablaba

primera,

de

con

desinteligencias

la

Legación

que esas desinteligencias no podían debilitar la estimación que le merecían los soldados brasileños; agregaba que había dado cuenta a la cancillería de Río de Janeiro de la conducta del Ministro Amaral, y concluía anunciando el ces-3 imperial;

decía

inmediato de

En

la

intervención armada.

la

segunda, se

dirigía

a

los

hombres de todos

los

parti-

dos en estos términos patrióticos:

"Una

transitoria

desinteligenoia

trajo

país

al

la

situación

que nos hallamos colocados orientales contra orientales, unos a sostener legalmente la dignidad del gO'bierno que represento, y otros a defender ese principio de soberanía que nuestras instituciones reconocen en el pueblo y que se creen

bélica

agredidos a mérito de algunos de mis actos que no tuvieron otra tendencia que mantener en equilibrio las pasiones

yeron

que se desbordaban en la anarquía... Orientales: mis votos y mis trabajos en la vida privada en que muy pronto me veré colocado, no tendrán otro fia que el de que deeaparezcan entre vosotros los distintivos tidos para

bién

como

e

inconvenientes preocupaciones de par-

componer una sola la

paz

constituirá

familia, el

una

sola

masa, que tamde la Re-

engrandecimiento

pública".

La Asamblea General, que no liabía sido disuelta por el movimiento revolucionario, se reunió a principio® de septiembre y ante el'la presento Flores su anunciada renuncia. "Quiera este

la

Divina Providencia

paso a que

y felicidad

de

hermanios,

sea

responsabilidad

Fué aceptada

me mi

decía

en su nota al

para evitarle que corra saludablemente por todos:

patria,

acogido

recaerá sobre esa



resigno con gusto en obsequio

renuncia

quien tenga

y declarado

la el



que

bienestar

sangre de no,

de la

culpa".

dimitente

"bene-

GOBIERNO DE FLORES

mérito de sión

patria",

la

por

general la

ficaba

honor

alto

abnegación

noble

la

Comi-

la

digno

al

y

ejemplo con que

sin

paz de' la República y progreso nacional" sacricon que sus compatriotas lo habían hon-

en homenaje a el

dictamen de

el

que aconsejaba "un voto de gracias

especial

patriota

de acuerdo con

273

rado.

El Presidente del Senado asume

del gobierno el

se hizo cargo

Al día siguiente

poder ejecutivo.

el

Cámara de Senadores don Manuel

la

"Cuento

con

de

triotismo



El respeto

.

imparcialidad,

y

políticos

paz pios

el

a

la

con

todos

de

orientales...

los

Constitución

a

y

decía

la

prescindencia

toda

nada

y

podrá apartarme

Don Manuel al

raíz

del

que

le

de

afecciones

las

los

sugestiones

partidos

mis invariables princivinculado

estaba

el

presidencial

sillón

empujados quizá

Amaral",

Ministro

estrecha-

había resistido a

se

mismos reyolucionarios del

o

orden, la unión y la

el

florismo y por esa circunstancia movimiento de agosto a ocupar

ofrecían

pa-

el

proclama más completa su

ellos".

Bustamante

Basilio

en la

ley,

de

mejor deseo de mantener

con

buenos,

los



en toda la República, son y serán

mente

"por

concurso

el

todos

de

Presidente

Bustamante:

Basilio

de

que

hablaba

Flores en su mensaje a la Comisión Permanente.

Las primeras horas de su actuación fueron de grande incerPero el nombramiento de don Juan Miguel Martínez como Ministro general "cortó la crisis premiosa de aquellos momentos gravísimos", decía "\E1 Comercio del Plata", decretándose en el acto la disolución de la Guardia Nacional y el regreso a sus departamentos de las fuerzas que se habían aglomerado sobre Montevideo. tidumbre.

Algunas

semanas

más

tarde

el

Presidente

ex

regresaba

de

campaña y

se instalaba tranquilamente en su casa de Montevideo. Polemizando con " El Nacional ", órgano de Flores, decía " El

Comercio del Plata": La revolución ha restablecido restaurado

la

libertad

hombres honrados; concordia;

Sólo una de esas indiscutible: 18

ha

ha suprimido

- IV.

la

del

de

las

promovido la

garantías

imprenta; dictadura

ha

un

individuales;

traído

al

movimiento

en que vivía

verdaderamente

conquistas

era

formidable

movimiento

cítvico

cívico

el

ha

gobierno de

país.

saneada

que

e

agru-

HISTORIA DEL URUGUAT

274

a

í;aba

hombres bien intencionados de

los

de

torno

en

cionales

misma bandera,

la

y de un misimo programa, e! programa ción Institucional y económica del país.

favor de

a

tidos tradicionales.

De



JLa

reuniones realizadas

las

de

la

pa-

reconstruc-

la

completa extinción de los par-

la

unión

tradi-

bandera de

tria,

Nuevos esfuerzos

partidos

los

la

liberal.

al

tiempo de

la

caída de Flores

compuesta de don resultó el nombramiento de una don Jaime EstráBerro P. Bernardo don y Tose María Muñoz, zulas para la redacción del programa del nuevo partido que habría de fundarse bajo el nombre de Unión Liberal. Comisión



"La Sociedad



sión

decía

el

programa propuesto por

ComiRepú-

la

tiene por objeto robustecer la independencia de la

dando a su nacionalidad la fuerza de que carece para el interna, la observancia remantenimiento de la paz externa

blica,

r-

de

ligiosa

Constitución

la

queza pública y

supremo

la

del

Estado,

mejora moral del

el

de la patria a todos los

interés

desarrollo

de

la

ri-

Reunirá en el orientales, trabajando

pueblo...

de los odios y prevenciones de partidos y renunciando por consiguiente no sólo a toda recriminación sobre el pasado que feneció en 1851, sino aún al derecho de defenen

extinción

la

derse por

He

prensa sobre actos públicos de aquel pasado".

la

aquí

otras ideas

'Tolerancia res.

"Hacer ley

la

nocer

un la

;politicá.

del

del

programa:

Sostenimiento

de

los

gobiernos

regula-

principio de la autoridad en la ley y dentro de

punto

cardinal

posibilidad

legal

de

las

(reencias

de las facultades

políticas";

"desco-

extraordinarias

de

Poderes públicos"; proclamar para las elecciones populares la más amplia libertad; exigir la moralidad administrativa; propender al desarrollo del régimen municipal; emplear como los

medios para

]r,< fiiip-< He la Sociedad la libertad de d^cusión en la tribuna; promover el adelanto de la educación; dedicar una atención especial a las cuestiones económicas y propender en todo sentido a la mejora material

prensa y

la

del

país;

consoo-iiii-

la

atraer

al

inmigrante extranjero.

programa fué sancionado ae inmediato y suscrito por numerosas personas de significación como don Luis Lamas. (Ion Manuel Herrera y Obes, don Adolfo Rodríguez, don José Este

María Muñoz,

don

Francisco Tajes,

don

Lorenzo

Batlle,

don

gohikr.no ue fi.okes

275

Pedro Bustamante entre los colorados, y don Francisco Solano don Bernardo P. Berro, don José Brito del Pino, 'e Antuña, don Jaime Estrázu'las, don Luis de Herrera y don Atanasio Aguirre entre los blancos. Pocos días después se procedía en

a

la

instalación

Cancha de Pelota de Casenave en

la

asistencia

de

la

calle

partido

del

Rincón,

con

más de 500 ciudadanos.

Don Luis Lamas,

que presidía

asamblea, dijo

la

al

abrir

el

acto:

"Vamos Luestra

a

colocar

la

piedra

ív.ndamental

del

edificio

de

reorganización".

Para componer el Directorio fueron elegidos los señores Lamas, Cándido Joanicó, Atanasio Aguirre, José María Muñoz, Manuel Herrera y Obes, Jaime Estrázulas, Bernardo P. Berro, Francisco Solano de Antuña, Francisco Hordeñana, AmManuel Errasquin, Lorenzo brosio Velazco, Luis de Herrera,

Luis

Batlle

y

Fermín Ferreira. primera y la segunda reunión se había enfriado que hubo que citar por segunda vez al con recomendación a sus miembros de que deaceptaban o rechazaban el nombramiento. Don José

Pero entre tanto

el

Directorio,

clararan

si

María Muñoz,

mera

la

entusiasmo,

qiue

había figurado entre los inasistentes a

la

pri-

una cuestión previa. Es notorio, dijo, que en varios departamentos se agita la idea de celebrar nuevos comicios, y como diputado yo me opondré a toda recitación, planteó en la siguiente

solución en ese sentido que aparte de otros inconvenientes encendería la guerra civil en la República. Quería, pues, una deci-

Hay que

tranquilizadora.

sión

Colonia acababa de dirigirse los

comicios realizados bajo

lados por falta de libertad

que

se.

convocara

al

De acuerdo con

el

y

que el vecindario de la Poder Ejecutivo sosteniendo que

advertir al

gobierno de Flores debían ser anu-

que era necesario, en consecuencia,

país a nuevas elecciones. el

señor

Muñoz

resolvió

el

Directorio que la

Unión Liberal se abstendría de toda resolución sobre

el

parti-

cular.

Ya

los

sucesos empujaban de nuevo a los movimientos revo-

lucionarios y

el

Partido Conservador, que se aprestaba para echar

abajo al gobierno de don Manuel Basilio Bustamante por efecto de sus vinculaciones con el florismo, dejó que la Unión Liberal rodara al vacío.

HIíiTOlUA DEL

276

URUÜUAY

^

Los generales Flores y Oribe forman

su turno una

liga.

Los generales Flores y Oribe, que ya habían estado de acuerdo tiempo de la revolución de agosto, volvieron a ponerse al habla frente a ese movimiento de concordia entre los hombres de al

principios

el

cil

de

ambos partidos

con

tradicionales,

el

propósito de

Era un acuerdo fáque buscaban y rápidamente encontraron la fórmula de

influir en

la

elección presidencial de

18 5

6.

conciliación.

El general Flores reunió a principios de noviembre en su casa a un grupo de legisladores para anticiparles que se habla puesto de acuerdo con el general Oribe bajo el compromiso de sostener al candidato presidencial que fuera votado per la Asamiblea, y horas más tarde circulaba en toda la ciudad un manifiesto, datado en la villa de la Unión, con la firma de ambos generales, en que se establecía la fórmula del compromiso.

"La desgraciada cía el

isituación



manifiesto

en que se halla

proviene de

la

la

República

— de-

discordia que incesantemen-

ha conmovido desde los primeros días de nuestra existencia La desunión ha sido y es la causa permanente de nues)ntros males y es preciso que ella cese antes de que nuevas vulsiones completen la ruina del Estado extinguiéndose nuestra te la

política.

.

nacionalidad.

valiente

Mientras existan

en

el

país

los

partidas

fuego de .la discordia se conservará oculto en a inflamarse con el menor soplo que lo agite En esa inteligencia y persuadidos de que una de las causas que más contribuyen a agravar la situación del país procede de la3

que la dividen, su seno pronto

el

miras encontradas de esos dos partidos en convendría

uniformar

la

opinión

pública

los

momentos en que

acerca

llamada a presidir los destinos de la Nación desde zo del

5

6...

supremo familia

oriental,

pasadas

la

persona

el

1."

de mar-

invitan a todos sus conciudadanos a unirse en el

interés de la patria para formar

"Trabajar por tras

de

un solo partido de

la

adhiriéndose al siguiente programa: la -extinción

disensiones...

de los odios que han dejado nues-

Observar con

fidelidad

la

Consti-

Obedecer y respetar al gobierno que la Nación eligiese... Sostener la independencia e integridad de la República,.. Trabajar por el fomento de la educación del pueblo... Sostener por medio de la prensa la causa de las luces y de los principios, discutiendo las materias de interés general y propender a la tución...

marcha progresiva

del

espíritu

público para radicar en

el

pue-

277

OOIMERXO DE FLORES

blo la adhesión al orden y a las instituciones, a fin de extirpar por este medio el germen de la anarquía y del caudillaje".

Este programa fué en uno y otro caudillo.

Vut'lve a

aiii-aviirst'

el

acto suscrito por los partidarios de

Ja situan ixrtítica del

país.

Los revolucionarios de agosto, para quienes el interinato de don Manuel Basilio Bustamante era la continuación de la inPresidente Flores, seguían entretanto sus preparativos para dar un segundo golpe de mano. Reflejando la impresión general, decía uno de los diarios a fluencia

del

ex

principios de noviembre, que era muiy vacilante la autoridad del

Presidente del Senado en ejercicio del poder ejecutivo y por lo muy delicada la situación política.

tanto

Dos semanas antes de que aparec'era ese comentario, un exaltado había disparado dos tiros a través de las ventanas de la casa habitación del Presidente en ejercicio, y una comisión de cuatro diputados habíi ido a pedir a dicho magistrado que convo-

cara extraordinariamente a

nara sucesor para

el

Asamblea

la

a

efecto de que le desig-

caso de renuncia o muerte.

Los atentados estaban

a

mismo mes de noviembre

la

orden del

día.

En

el

curso

del

se retiraba el general Oribe de la casa

del Presidente, cuando le llegó la denuncia de una conspiración para secuestrarlo o matarlo. Oribe se dirigió entonces a caballo

Unión por caminos semi ignoTados, dejando que el carruala ciudad regresara por el camino que él seguía habitualmente. El carruaje fué asaltado por un grupo de hombres armados y Oribe escapó al atentado. Ya las pasiones hervían y el país estaba abocado a una nueva

a la je

en que había venido a

y gravísima crisis revolucionaria. Eran de tal manera notorios los detalles de

la

conjuración,

que el jefe del batallón de artillería ligera comandante Julio de Vedia y sus oficiales se vieron obligados a publicar un manifiesto, "con el objeto decían de hacer cesar la alarma causada en la población y en el comercio por los rumores y





en que se hacía desempeñar el principal escuadrón de artillería ligera". Luego de desmentir el

voces de revolución ... papel

rumor

al

se declaraban dispuestos a

te y a la

agregaban

que

le

sucediera

— emane

de

la

el

1."

ayudar a

la

autoridad existen-

de marzo "siempre que ella

libre voluntad del pueblo emitida



por

HI3T0UIA DEL URUGUAY

278

SU órgano natural y con arreglo a lo que

Constitución del Es-

la

tado tiene dispuesto para este caso".

Ese documento ro y

lejos de tranquilizar revelaba el propósito cla-

de favorecer

manifiesto

el

movimiento revolucionario que

en esos momentos se incubaba contra

Presidente interino y

el

contra sus dos tutores, los generales Flores y Oribe, que eran impulso a los trabajos realmente quienes daban políticos para '

elección presidencial de 1856.

la

Lia

revolución de noviembi'e.

mes de noviembre. Eduardo Beltrán y don Fernando trente de un centenar de hombres se apoderaron ás>

La revolución

estalló a fines del

ÍDon José María Muñoz, don

Torres

al

Casa de Gobierno, del Fuerte de San José y del Cuartel de Artillería, contando naturalmente con el auxilio de las fuerzas minutares que los custodiaban. la

El Presidente del Senado se instaló en

Jefatura de Policía

la

con 50 hombres de caballería, única fuerza de que pudo echar

primeros momentos, y nombró Comandante Geneal general Flores, q^uien de inmediato se ocupó de organización de las fuerzas con el concurso del general Oribe.

mano

en les

ral de

Armas

la

Cada uno de

los

dos contendientes estableció cantones en tor-

los

edificios

que ocupaba y

inmediato.

Uno de

los

no de

el

tiroteo

se

hizo sentir de

cantones gubernativos estaba situado en

torre de la Matriz y desde allí dominaba completamente Casa de Gobierno (lue estalla situada en la actual Plaza Zabala.

la

Los (Uplomáticoís t'.vtran.jei-os so dirigen a su¡s pidiéndoles que no intervengan en la luclui.

Los Encargados de Negocios de Francia Maillefer y Thornton y

el

a

aislarlos

"Siniestras

la

de^

Contra

ciudadanos

a

de

Inglaterra señores

a

sus connacionales encami-

contienda.

provocaciones,

de mueras os llaman

connacionales

Cónsul sardo señor Capurro se apre-

suraron a dirigir una exhortación

nada

e

la

las la



les

armas. A República

decían las



gritos

de odio y

armas ¿y contra quién?

Oriental,

contra

vuestros

GOUIKU.NO

1>K

279

l"I,OKES

hermanos de Francia, (le Inglaterra y de Italia tal vez. No: no las tomaréis esas armas fratricidas; quedaréis en vuestros hogares para protegerlos; plo

respeto a las

el

es necesario predicaréis con

si

leyes,

concordia y

la

ejem-

el

humanidad. Dejad

la

tempestad, ella durará tanto menos cuanto qu? los combatientes indígenas reducidos a sus propios recursos podrán menos contar con el concurso de los extranjeros. Después de

pasar

esa

haber hecho vanos esfuerzos para conseguir la conservación de paz piiblica, hemos al menos conseguido el poner la Aduana,

la

ese tesoro

todia

común de

de una

los particulares y del Estado, bajo

la

cus-

que han suministrado las fuerzas navales puerto. Este es otro ejemplo de buena armo-

fuerza

extranjeras en este

nía dado a los desgraciados orientales".

Gracias a esa exhortación los eont endientes abren un parénte.sis diirantí' e! tiroteo para que los extranjeros festejeai la caída

de Sebastopol. Al tiempo de estallar ese movimiento revolucionario se

maban triz

los

tedeum en

preparativos de un

Iglesia

la

y un gran banquete de 1,500 cubiertos en

la

de

la

ulti-

Ma-

barraca de Es-

teves con que los residentes franceses, ingleses e italianos feste-

jaban

triunfo de las naciones aliadas contra los rusos en Se-

el

bastopol.

El tedeum y

el

taba pronto para

banquete debían tener lugar la

celebración de

el

2 6.

esos actos, pero

Todo

los

es-

invita-

dos no se arriesgaban a cruzar las calles en medio del tiroteo de

los

cantones.

La Comisión organizadora de a

los

contendientes

en

los

festejos

se

dirigió

entonces

demanda de una breve suspensión de

quedando hostilidades y obtuvo pleno éxito en sus gestiones, transformada de inmediato la ciudad de campo de batalla en campo de jolgorios y de expansiones patrióticas. Al tedeum concurrió muchísima gente y con ella y la que había en

la

Plaza Constitución se formó luego una gran columna

los agentes diplomáticos y consulares de FranInglaterra e Italia, que recorrió las calles en medio de los

encabezada por cia,

vivas y aclamaciones de

mento abandonaban sus Llegada

la

las

fuerzas en

lucha que en

ese

mo-

fusiles.

concurrencia a

la

barraca Esteves, fué nombrado

HISTORIA DEL URUGUAY

280

del banquete Amadeo Bomipland, el ilustre compañero de Humboldt, que acababa de llegar a Montevideo.

presidente

Bompland brindó "por

restablecimiento

el

agricultura y del comercio de

"Hoy

la

de

paz,

la

República Oriental".

de

la



un día de luto para la República Oriental expresó Leonard las la guerra civil ensangrienta calles. Nuestro banquete ba dado lugar a una tregua... Que esta tregua se convierta en una paz sólida y duradera". es



luego

el

doctor

"A

la

pacificación

de

la

su copa don Adolfo Vaillant

que suspenden

el

;

República Oriental



progreso, traban



dijo

alzando

olvido de todas las discordias

al

comercio y coartan

el

la

pros-

peridad de este magnífico país".

Concluido

el

banquete salieron

los

comensales llevando gajos

de laureles en las manos, y de nuevo la columna recorrió las calles en medio del estruendo de los cohetes y a la vez de los preparativos de los cantones para reanudar

el

combate, que en

efecto reanudaron así que llegó el anuncio de la terminación de festejos.

los

LfOs i-evolucionarios se

"Pero

la

embarcan para Buenos

Aires.

número

lucha no podía prolongarse. El

de

los

revo-

lucionarios no aumentaba, en tanto que crecía de hora en hora

de los sostenedores del Gobierno.

el

Varias fórmulas de conciliación propusieron sin éxito don FloCastellanos y don Tomás VilLalba que actuaban como intermediarios del Gobierno. Los revolucionarios empezaron por rentino

nombrado

pedir y obtener que don Juan Miguel Martínez fuera

Ministro general, cargo que ya había desempeñado meses antes. Pero luego surgieron dificultades imposibles de allanar. El jefe

movimiento don José María Muñoz, pidió entonces al ministerio que el jefe del cuerpo de artillería, sargento mayor Vedia, quedara en su puesto, asegurándole que sería "un apoyo del

del

Gobierno protector de

nos", o que por lo

las

garantías

de

todos

menos fuera reemplazado por

los el

ciudada-

capitán Al-

decoa.

Ambas

proposiciones significaban

colocar

el

gobierno bajo

la

tutela de los revolucionarios, y Bustamante, lejos de aceptarlas,

contestó con un decreto en que prevenía que los que depusieran de inmediato las armas entrarían "al goce de las garantías individuales que

todos los ciudadanos tienen por la Constitución

281

GOBIERNO DE FLORES

tratados y por las leyes", y que los que las mantuvieran serían con toda severidad. Ante ese ultimátum los revolucionarios, que estaban vencidos, se dirigieron al muelle y se

embarcaron en número de dosmo-

cientos y tantos entre civiles y militares, sin que nadie los lestara.

La lucha

se

prolongado

había

desde

el

2.5

hasta

el

29

de

durante los cua'.es hubo 2 hombres muertos y 30 heridos, según las relaciones del ecónomo del Hospital de Caridad y de uno de los médicos que se ocuCinco

noviembre.

fuego

de

días

paban de la recogida de los caíd:s. El Gobierno pasó en el acto a la Comisión Permanente un mensaje en que daba cuenta de las medidas adoptadas y denunciaba como jefes del movimiento y responsables de todo lo ocurrido, a los diputados don José María Muñoz, don Eduardo Bel-

Fernando Torres.

trán y don

Fernando Torres se apresuró también a dirigir a la un extenso documento en que descriComisión Permanente bía los sucesos en la forma que extractamos a continuación: Desde mediados de noviembre corrían rumores alarmantes, vi al Presidente para aconsejarle un cambio ministerial y yo y la organización de un batallón de guardias nacionales, con jefes y oficiales que nombraría el Gobierno mismo para evitar los in-

Don

cidentes

partidistas

ya

ocurridos.

Otros

ciudadanos

se

aproxi-

La atmósfera se fué caldeando. El 24 se supo que en el Cabildo había un centenar de soldados de caballería. Fué una noticia que alarmó mucho. En casa de don José María Muñoz se congregaron

maron

40

al

Presidente

para

darle

análogos

consejos.

ciudadanos y habiéndose interrogado sin resultado satisfacacerca del objeto de ese armamento, pasaron el doctor

torio

Muñoz

y

también

sus

muy

amigos

al

cuartel

de

artillería

cuyo jefe

estaba

alarmado. En nuevas entrevistas se hizo saber

al

President3 que su conducta daba lugar a que algunos creyeran en be,

la

existencia de vínculos de solidaridad con don

creencia

los oficiales

robustecida

reunidos en

por el

la

filiación

política

Cabildo. Antes de

la

Manael Ori-

de

varios

de

ruptura de las

reanudáronse las conferencias sobre la base de un cambio ministerial, siendo nombrado entonces Ministro general don Juan Miguel Martínez, que satisfacía a los revoliícionarios. al mismo tiempo que era atacado uno de los cantones de la rthostilidades,

HISTORIA DEL URUGUAY

282

volución y que don Manuel Oribe entraba al Cabildo con mando de fuerzas, fracasando con ello las negociaciones y quedando rotas las hostilidades.

Después del triunfo.

Fué de

En

vez

semana que subsiguió

tolerancia para los vencidos la

a la terminación de

de

la

destituir

lucha. a

empleados

los

habían hecho causa común con Gobierno a disponer que todos

los los

civiles

y

que

militares

revolucionarios, se limitó

el

que se encontraran en ese

caso se presentaran a sus jefes inmediatos, bajo apercibimiento

de ser declarados cesantes.

Pero en seguida volvió a agitarse el ambiente ante el anunde un ataque por sorpresa que darían los mismos revolucionarios que habían emigrado a Buenos Aires, y el Gobierno conComandancia General de Armas al general firió de nuevo la Flores y tiró un decreto por el cual prescribía que los complicados en el movimiento revolucionario sólo podrían regresar

cio

país con permiso especial de

ai

La diplomacia

¡a

Policía.

brasileña durante las revoluciones que

acabamos

de historiar.

¡Hay que hacer ner en movimiento

justicia

a

a los elementos nacionales, a

que

tiera de ellos la iniciativa para

pazo más

diplomacia brasileña!

la

cómodamente

el

Sabía po-

de que par-

Brasil pudiera dar el zar-

aparecer

sin

y

fin

como

el

principal

pro-

motor de nuestras revoluciones.

Cuando Flores

dictó

decreto restrictivo de

su

la

libertad

de

imprenta en agosto de 1855, don Manuel Herrera y Obes dirigió al doctor Amaral, por insinuaciones de éste sin duda alguna,

una carta en que recababa su intervención El Presidente Flores



le

decía



a

favor del pueblo.

viola con

ese

decreto

la

que ha luchado por sus instituciones du rante doce años, se halla otra vez expuesto a la guerra civil Constitución.

El

país

amenazados y como signatavengo a solicitar el cumplimiende los tratados de alianza de 1851... "^En esa lucha entre pueblo y la autoridad rebelde al mandato que de aquél reci-

En nombre de todos rio

to el

de los pactos con

los

el

intereses

Brasil,

GOIÍIEKNO DE FLOBES

2>53

bió y de los deberes que con él aceptó, el Gobierno de S. perial ha pactado su asistencia y

todo de su apoyo

el

al

M. Impueblo

despojado de sus derecihos y amagado en sus .más caras libertades. El se ha constituido garante de esa libertad y derechos, haciendel cumplimiento condición inseparable do de su respeto una

de

deberes que contrajo en favor de

los

autoridad legitima-

la

mente constituida".

No siempre, sin embargo, era posible al diplomático imperial permanecer en la penumbra. A veces quedaban en claro sus manejos y entonces estallaba la protesta. A fines de agosto, por ejemplo, cuando se buscaban fórmulas de conciliación que al fin no se encontraron por culpa de la misma diplomacia brasileña, uno de los delegados populares, don Jacobo A. Várela, padre de José Pedro Várela, dijo al Presidente Flores que el MiAmaral

nistro

se había

presentado

pueblo reunido en los

al

al-

rededores del domicilio de don José María Muñoz, para ofrecer sus servicios, pero que todos habían contestado que no podían aceptarlos por

Tanto tutoría, ller

se

que

emanar de un Ministro extranjero.

preocupaba escribir

al

brasileño

en

la el

diplomacia Relatorio

imperial

de

de agrandar

no vaciló

185.5

el

su

canci-

estampar este estupendo párrafo relativo

al

decreto restrictivo de la libertad de imprenta:

"Las buenas relaciones tan largo tiempo sostenidas entre Legación Imperial y

el

Gobierno de

la

República fueron, a con-

la

El repentinamente. de aquellas medidas, alteradas Ministro del Brasil no podia dar su asentimiento a una medida

secuencia

excepcional que

el

orden público fuertemente defendido por la el derecho de ser

intervención brasileña no reclamaba. El tenía

oído previamente y de ser atendido respecto de medidas de se-

mejante naturaleza".

Una vez en posesión de

la

carta en que don

y Obes recababa su intervención, nota a Flores en que decía que

el el

bertad de imprenta era contrario a

Manuel Herrera

doctor Amaral dirigió una decreto limitativo

de

Constitución de

la

la

la

li-

Repú-

blica y debia por lo tanto ser derogado.

En

su respuesta a esa es'pecie de conminatoria, establecía Flo-

res que el

decreto era

la

consecuencia de

los

desbordes de

la

prensa, agravados por la llegada de don Manuel Oribe al puerto

de Montevideo y por trabajos hostiles a la tranquilidad pública. Agregaba que la actitud de Amaral estaba dando lugar a que

HISTORIA DEL UBUGUAT

284

se dijera que el ejército imperial era favorable a los planes de

Y

oposición.

la

concluía pidiendo al Ministro una manifestación

pronta, franca y £>üibrecogen

ánimo

el

leal,

encaminada "a calmar las inquietudes que manera alguna pueden afectar

pueblo, aunque en

al

Gobierno".

del

Como nada contestara Amaral, reiteró Flores su nota cuatro días después en estos términos:

El decreto restrictivo de

la

libertad de imprenta no ha produ-

cido -"el efecto saludable que se buscaba". Lejos de ello, ha sido

desacatado por dida,

que

y

el

tal

mismo

el

diario que había

dado mérito a

la

me-

hecho, unido a "las maquinaciones subterráneas de

Gobierno tiene conocimiento", hacen prever próximos des-

órdenes.

En

tal

pregunta

situación

Gobierno:

el

rá la actitud de la división imperial en

el

¿Cuál

1."

se-

caso extremo de un

ocurrido por la tenaz resistencia de aquellos que desconocen su autoridad? 2." Desenvueltos y precipitados los suconflicto

dando por resultado un motín, ¿cuál será la línea de conducta de la Legación Imperial ..." El Gobierno está decidido "a organizar elementos para rodearse de aquella respetabilicesos,

dad que su propia conservación y decoro requieren, en el caso no esperado de que los auxilios de su aliado no hayan de ser una realidad en un caso supremo".

Era imposible postergar por más tiempo Ministro Amaral que había

silencio.

el

resuelto erigirse en

Pero

director

g1

exclu-

sivo de la política oriental, contestó con el incalificable desenfa-

do

que

a

lo

tenían acostumbrado los acontecimientos:

El tratado de alianza "asegura Imperial

solamente para

la

fortificar

la

intervención

del

nacionalidad

Gobierno

oriental

por

medio de la paz interior y de los háibitos constitucionales... Las armas de la intervención imperial no deben por lo tanto apoyar sino la paz que tuviera por base los hábitos constitucionales. Esta base puede ser solapada o por las agresiones anárquicas de la multitud a la autoridad legítima del gobierno o por 'ar

exorbitancias dp este contra los derechos de los ciiidadanosi^.

"El Gobierno de repele la

la

calificación



Repííblica

que

S.

E.

el

replicó en el acto Flores

señor Amaral

hacer de su conducta cuando establece que tos

constitucionales

puede

ser

solapada

la

por

se

base de los hábilas

exorbitancias

del Gobierno contra los derechos de los ciudadanos.

tema que rige roc'.er

a la República del

Uruguay no



ha permitido

existe

Por

el

sis-

más que un

autorizado para censurar los actos opuestos del Gobierno,

FLORES

GOlílKK.NO DE

y ese poder representado por

Comisión Permanente ha com-

la

aprobando su conducta, nal que el Gol)ierno asumió ante

partido,

llos

285

responsabilidad

la la

Asamblea

actos... El auxilia estipulado, que

constitucio-

G-.'neral

por aque-

Imperio no puede ne-

el

gar bajo ningún pretexto, es precisamente para que se haga efecel eficaz apoyo que ambas partes contratantes conceptuaron necesario para robustecer la autoridad legal a fin de fortifitivo

car la

nacionalidad oriental por medio de

paz interior y de

la

hábitos constitucionales. La paz interior y los hábitos cons-

los

fin y no los medios de la alianza, y para conque se estipularon auxilios siempre que para sofocar la subversión del orden público, sea cual fuere el motivo, los requiriese el Gobierno de la República. De otro modo el

titucionales son

seguir ese

elemento

fin

de

el

es

la

alianza

un elemento de destrucción. De la imputación proclamada ya

sería

modo se tornaría en realidad en la misma tribuna imperial, que otro

el

representante de

la

alianza

fomentando nuestras pasiones y nuestras disensiones, está siempre pronto para vitorear al que vence". Concluía Flores su nota preguntando de nuevo si la Legación prestaría o no su ayuda militar, "bien persuadido de que pasadas veinticuatro horas

sin

verificarlo,

el

Gobierno

de

la

Re-

pública interpretaría su silencio como una ruptura del tratado de alianza".

El gobierno de Flores pide

el

cese de la intervención.

Pero pasaron las veinticuatro horas y otras muchas más, sin que el Ministro Amaral diera señales de vida. Producido finalmente el movimiento revolucionario, volvió Flores a dirigirse neral

en

la

villa

al

diplomático brasileño desde su cuartel ge-

de

la

Unión.





"Para sofocar a los anarquistas le decía que en el día de ayer se apoderaron de una parte de la ciudad, hollando de este modo los principios constitucionales, y. deseando evitar por todos los medios la efusión de sangre de orientales, espera de S. E. el señor Ministro la cooperación del ejército auxiliar a .

.

sus órdenes con arreglo a los pactos existentes".

La Legación siguió callada el

y el Gobierno reiteró su nota

mismo resultado negativo. Ya no cabían ilusiones de ninguna

con

especie acerca de la actitud del ejército imperial que estaba de guarn,ición en la plaza

,

HISTORIA DEL URUGUAY

286

de Montevideo, y Flores resolvió dar por concluidas sus relaciones con

Brasil.

el



decía al Ministro Amaral en una "Este suceso escandaloso la impunidad con que siguen aumentando sus última nota fuerzas los anarquistas y preparando puntos de defensa bajo la



protección de las fuerzas aliadas; la indiferenc^ia con que V.

mira

E.

actitud que debiera asumir con infracción del tratado de

la

S. M. el Emperador del Brasil, ponen a mi gobierno en el deber de protestar como lo hace contra la conducta observada por el señor Ministro plenipotenciario del Brasil" ... y de "suspender sus relaciones con el señor Ministro imperial hasta obtener una satisfacción de la buena fe con que la

alianza entre mi gobierno y

República aceptó los tratados de alianza". Y en el acto envió instrucciones a la Legación Oriental en Río de Janeiro para solicitar retiro del

el

cese de la intervención

armada y

el

Ministro Amaral.

La Legación Brasileña piocura evitar

el cese

de

la

intervención.

comienzo de este incidente diplomático el Ministro la noticia de que daría orden a las tropas brasileñas de esitación en Monteviideo para que se retiraran a Río Grande. Procuraba con ello poner en movimiento al comercio de Montevideo y en general a las clases conservadoras, como efectivamente lo consiguió bajo forma de representaciones destinadas a evitar que las sup^uestas órdenes tuvieran efectivo cum-

Desde

el

Am'aral hizo correr

plimiento.

El doctor Pico, agente de

la Confederación Argentina en Monque se daba cuenta de las maniobras de la Legación Brasileña, escribía a su Gobierno a propósito del retiro de ¡as

tevideo,

tropas

exigido

por

el

Presidente Flores

(nota

"La Reforma Pacífica" en 1864): "Pero no creo equivocarme anticipando que Presidente de

reproducida

por

petición

del

esta

República será eludida y sólo dará lugar a una nueva violaqión de los convenios existentes. El empeño que ha demostl'ado el señor Amaral por obtener peticiones de los habila

tantes solicitando su permanencia, los contratos que se han he-

cho para alquilar fincas en que vivan los jefes y oficiales de la dimisión, bastarían a demostrar su intención de permanecer, aunque no se tenga en cuenta que las cuestiones pendientes con el

Paraguay hacen para

el

Brasil

de una extrema necesidad

te-

OOIÜEKNO

287

FLOKKS

1)K

el Río de la Plata un puerto y una plaza en que abrigar abastecer sus buques, colocar sus depósitos y sus reservas y y ejecutar con libertad el movimiento de sus tropas".

uer en

a la revolución trató

La prensa adicta

más de una

vez de jus-

descarada violación del tratado de alianza. escribía un co"Somos de los que en las filas del pueblo

tificar la

rresponsal

de

Comercio

"El

atentados del Poder en de los que para burlar

los

del

Plata

últimos días.

los intentos





hemos res,istido los Somos por consiguiente

y las horribles consecuencias

que aquellos atentados llevaban consigo, trajimos a nuestro lado la intervención brasileña y utilizando los deberes que le impolos pactos existentes hemos reivindicado los derechos hollados y las libertades amenazadas sin la sangre y los escándalos que en otro caso y de otro modo hoy nos envolverían por todas

nen

partes."

Pero no todos los escritores revolucionarios cerraban en esa forma los ojos ante el espectáculo que tenían por delante. El doctor Gregorio Pérez Gomar, uno de los redactores de "La Libertad", precisamente el diario fundado para preparar la revolución contra Flores, escribía hablando de la intervención brasileña:

"Nada debemos, ni hemos debida al Brasil... Todos los acde éste que han tenido relación con nosotros han redundado en utilidad suya, como la demarcación de límites para tos

cuya operación escogió

el

gabinete brasileño una de las épocas

tenía que defenderse contra Roamenazaba, pero recién lo hizo cuando las fuerzas del Plata se organizaron en forma poderosa contra su adversario. Y en cuanto a su intervención actual, ella no ha impedido que la Constitución haya sido violadla. El doctor Juan Carlos Gómez, ocupándose de las revoluciones de 18 55 y de la subordinación de don Andrés Lamas a los estadistas brasileños, decía un año después en "La Tribuna" de Buenos Aires:

más sas

afligentes"

que

.

.

.

El

Brasil

lo

don Andrés Lamas sobre fusión de los particuando don Manuel Oribe viajaba en direcEse ción al puerto de Montevideo bajo la garantía del Brasil. folleto tendía a dividir a los colorados en el momento de mayor peligro. Unos cuantos jóvenes cíe los dos partidos siguieron la prédica de Lamas y fundaron un diario, dando lugar a la persecución de sus redactores y a la revolución que estalló el El

folleto

de

dos fué publicado

HISTORIA DEL URUGUAY

288

mismo mes. En

la

revolución

subslgAiiente

de

noviembre que-

daron tendidos en las calles de Montevideo ciento y tantos colorados y obligados a expatriarse a Buenos Aires más de trescientos. Por efecto del mismo folleto tiraron sus divisas Oribe y Plores y el país está ahora abocado a grandes sinsabores. Mucha exageración había sin duda en esas palabras, porque la idea de la fusión estaba en e<\ ambiente desde antes de la conclusión de la Guerra Grande, y era compartida por todos los hombres notables del país. Pero eMas traducen la impresión

de uno de los grandes testigos de

época acerca de los planes

la

de la diplomacia brasileña.

El gobierno de Flores da cuenta a la CJomlsdón Permanente de la connivencia brasileña con la revolución.

Véase lo que decía el Presidente Flores dando cuenta a la Comisión Permanente de la revolución de agosto de 1855: "Desde la corte del Brasil se hpbía enviado al Poder Ejecutivo una nota anónima en que se detallaba el plan de la revolución, designándose los autores que la realizaron el 28 de discurso que el Ministro de Relaciones Exterioel pronunció el 10 de agosto Imperio señor Paranhos en la Cáimara de Diputados se voían rasgos prominentes que aseguraban la realización del hechc"... Fué entonces que el agosto.

En

del

res

Poder Ejecutivo dictó el decreto restrictivo de la libertad de imprenta... "En tal situación, Las reuniones secretas de los conspiradores pasaron a ser públicas, asistiendo a ellas el señor Ministro del Imperio doctor José María do Amaral"...

No contento con al

eisto

el

Ministro Amaral

Poder Ejecutivo para oponerse

interpretación

constitucional

«que

S'6

dirigió

decreto

al

sólo

a

la

a

oficialmente

título

Comisión

una Perma-

de

El Gobierno exigió luego por escrito cumplimiento del tratado de alianza, en cuanto obligaba a las fuerzas del Imperio a prestar su cooperación para el mantenimiento de la paz, y preguntó con qué elementos contaría en el caso de estallar una revolución. Pero era el apoyo que el Ministro no contestó, porque su silencio

nente competía hacer... al

Ministro

necesitaban fin

la

Brasileño

los

el

revolucionarios

revolución y

el

para

Presidente

precipitarse...

salió

a

las

Estalló

afueras de

la

al

ciu-

donde se le reunieron algunas policías y un centenar de hombres que aportó el Jefe Político de Canelones, y con esas

dad,

289

GOBIERNO DE FLORES

avanzó al día siguiente üasta la ciudad nueva con el propósito de proteger la salida del Presidente del Senado, a quien el Ministro del Imperio instaba "para que ocupase el sillón pre-

luerzas

Ejecutivo volvió el Poder general en cuartel desde su dirigirse al Ministro »as Tres Cruces, exigiéndole la cooperación del ejército a sus órdenes, de acuerdo con el tratado vigente, sin obtener respuesta, y todavía reiteró su nota '-on el mismo resultado ne-

sidencial".

.

En

.

noche

la

del

£.

del

29

Brasil

gativo.

Fué

ante

actitud,

esa

Ejecutivo formuló su

concluía

protesta y

Mensaje,

el

suspendió sus

que

el

Poder

relaciones

con

Amaral, a tiempo que anticipaba a una comisión el de comerciantes que trabajaba en favor de la paz el propósito de realizar el sacrificio de s>u puesto y de renunciar a la primera magistratura en obsequio a la terminación de la iucha. Ministro

El retiro de

Como Flores

las tropas brasileñas.

consecuencia a

actitud

de las órdenes,

dadas por

el

gobierno de

Legación del Uruguay en Río de Janeiro y de la verdaderamente asombrosa de las tropas traídas para la

el orden, llegó a Montevideo en misión extraordinaun nuevo diplomático brasileño, el vizconde de Abaeté. Y a mediados de noviembre, ya derrumbado Flores y en la

manutener ria

segunda revolución de los conservadores, las troen marche con rumbo a Río de Jadespués de un cambio de notas en que la cancillería

víspera de

la

pas brasileñas se ponían neiro,

quiso

oriental

video,

con

el

arrumaco de que su

prueba

completa

constancia de la perfecta corrección y dis-

dejar

esas tropas durante su larga permanencia en Monte-

ciplina de

del

elevado

Gobierno Imperial en sus

No ¡a

era

ese

República.

partidos tear

uno

el

diplomacia

.

con

la

sentimiento brasileña

.

de

la

"la

política

más del

República".

que

había

predominaba mantenido a

en los

perpetua guerra, había volteado o tratado de vol-

en

tras

inundir en las necesario

ciertamente

La

relaciones

constituía

retiro

desinterés.

otro

a

clases

recurrir

al

todos los

gobiernos;

conservadoras protectorado

la

tratado de

había

convicción

extranjero

de

para

que era salir

del

misma promovía a manos llenas. Las tropas habían venido con ánimo de quedarse con la presa y se iban a disgusto, cediendo a la reprobación unánime o casi unánime casos que ella

19-IV.

HISTORIA DEL URUGUAY

290

que

país

del

las

rechazaba como un- gran factor de discordias

y que habría concluido por echarlas a ran pretendido quedarse en Monteivideo.

fuerza

viva

Cuando esas tropas se retirabaa en dirección a avanzaba desde Río de Janeiro coi rumbo fuerte

otro

tal

brasileño.

ejército

si

la

fronter.v,

territorio

al

La prensa

dio

la

hubie-

orien-

voz

de

alarma con detalles espeluznantes: que el Imperio se posesionaría de toda la zona del Yaguarón; que el puerto de la Colocomo prenda de las sumas anti ;ipadas nia pasaría al Brasil por

Tesoro imperial;

el

había

partidas

que en diversos puntos de la frontera El Gobierno desautorizó a invadir.

dipuestas

rumores, pero que algo de verdad había en ellos se ende demostrarlo una información de la pren^a de Río Grande que reprod>ujo la ú'e Montevideo, según la cual el Golos

cargó

bierno

Imperial

había

les

en

presencia

constituido

de

los

sucesos

políticos

orienta-

Yaguarón y Bagé des Ir principios

entre

octubre "un campo de oibseiwación", poblado naturalmente con fuertes contingentes militares. Si el manotón no se dio fué porque el ^pais entero lo habría rechazado, confundidos los floristas, los conservadores y los de

blancos en un solo movimiento bajo la presión de los mismos la demoledora diplomacia imperial. Alguna indicación importante debió partir también de la diplomacia europea, que desde meses atrás ejercía funciones de vigilancia, según resulta de este párrafo de la Memoria presentada a la Asamblea en mayo de 1855 por nuestro Ministro de Relaciones Exteriores don Alejandro Chucarro, al ocuparse del

abusos de

acuerdo en

que se fijaban

los

suxilio militar prestado por

el

fines,

condición

y

duración

de^

Imperio:

"La celebración de ese acuerdo era de tanta más conveniencia

cuanto que ya los Gobiernos de Francia

e Inglaterra,

por

me

dio de sus respectivos Ministros acreditados cerca de la corte del

Imperio,

habían

manifestado

al

gabinete

brasileño

las

apren-

siones que nutrían, a consecuencia di conservarse aún en Monte-

video una división imperial cuando parecían estar satisfechos los fines

El

de

lirasil

la

intervención".

trataba de extender sus garras al Paraguay.

También estuvo expuesto en esos momentos el Paraguay al zarpazo del Brasil y el zarpazo se habría dado en forma incon-

291

GOBIEBNO DE FLOBES

trarrestable

si

Montevideo

no

de

repelido

hubiera

su

seno

al

conquistador solapado.

A te

una fuerun cuerpo de

principios de 1855 el Gobierno Imperial despachó

contra

escuadra

ejército en

el

Paraguay

son de guerra por

el

hizo

e

avanzar

lado de las Misiones.

Paraguay lanzó en el acto un manifiesto anunciando al país esa doble agre:>ión. Pero el ambiente volvió a serenarse porque el almirante brasileño desembarcó en la Asunción con una carta que lo acreditaba como Ministro Plenipotenciario para celebrar un tratado de comercio- y navegación que fué ajustado sin dificultad, y un tratado de límites que fraPresidente

El

casó .porque torios

el

que no

del

inmensos

Brasil se atribuía derechos sobre le

terri-

pertenecían.

El período complementario de

la

administi-ación

Giró.

El general Flores había sido elegido para completar el período marzo de 185 2 a marpresidencial de don Juan Francisco Giró zo de 18 56

—interrumpido



,por la

revolución de 1853. Por efecto de

su renuncia subió a la presidencia de la República en septiembre de 1855 don Manuel Basilio Bustamante que ocupaba a la sa-

zón

la

presidencia de la

Cámara de Senadores, hasta febrero de

1856 en que entró a ejercer el man'do el nuevo Presidente del Senado don José María Pía. Como además hubo un interregno de dos dictaduras a raíz de la caída del gobierno constitucional y de una tercera antes de la caída de Flores, resulta que el período presidencial de marzo de 185 2 a marzo de 1856 llegó a contar dos presidencias constitucionales: la de Giró y la de Flores; tres dictaduras: la del triunvirato de Lavalleja, Rivera y Flores, la de Flores y la de

Lamas; y dos interinatos a cargo de

los

Presidentes de la Oáimara

de Senadores.

Cuatro años de cruda e incesante agitación política y de graves

subversiones

dad de verlo en

Itíis

institucionales, el

como hemos

tenido

oportuni-

curso de este capítulo.

liltimas palabras del constituyente Masini.

Estas luchas sangrientas,

que con tanta frecuencia se repecampaña,

tían en las calles de la ciudad o en las cuchillas de la

constituían la terrible pesadilla de los proceres de aquella

épo-

HISTORIA DEL URUGUAY

292

ca desgraciada en que lo normal era el combate y lo transitorio la paz.

En mas

enero de

1855,

muerte

cuando ya asomaban de

de la revolución

constituyente don

el

mas palabras según

el

los

Ramón

Masini;

primeros sínto-

enfermo

cayó

conservadores,

los

y he aquí sus

de últi-

después general Leandro Gómez, que

lo

asistía

"No crean que sienta dejar de vivir en una época tan fatal y en la cual no veo remedio eficaz a los terribles males que afligen a nuestra desgraciada tierra. ¡No! Yo recibiré la muerte como un beneficio de la Divina Providencia. Ustedes tal vez tendrán que verter algunas lágrimas más de dolor". Dando la explicación del pesimismo o, más bien dicha, de la desesperación en que vivían los prohombres de

don Manuel Basilio Bustamante .

sidencial

el

al

la

época, decía

terminar su interinato pre-

15 de febrero de 1856:

"La decadencia de nuestro comercio,

la

despoblación de nues-

tras ciudades y el desaliento de nuestra hacienda pública, son hechos de tal notoriedad que no vendría a mencionarlos espesi no fuera porque hay efectiva necesidad de recordar su existencia para acudir con el remedio que sea más conveniente, a fin de hacer cesar cuanto antes su per-

cialmente en este lugar

judicial y funesta

influencia.

La

princiipal

o

más

bien dicho la

única causa de este estado de cosas tan sensible, son nuestras desavenencias, nuestros odios recíprocos, nuestras discordias

ci-

Cuando en una sociedad, honorables senadores y representantes, tienen Ingar como en la nuestra los dolorosos sucesos que hemos .presenciado de cuatro años a esta parte, ¿cómo es posible que en medio del trastorno que ellos han traído, esa soviles.

ciedad florezca, que su comercio prospere, que su crédito se extienda y consolide? Bajo tales circunstancias, harto hace ella en conservarse y en resistir

el

influjo de tan poderosos

tos de disolución. Exigirle más, equivaldría a exigirle

ble en el orden natural de las cosas.

Con

este

del cual no es dudoso que participe V. H., el

elemenun imposi-

convencimiento,

Poder Ejecutivo

considera excusado manifestar aquí que en su concepto el grande obj-eto hacia el cual deben tender todos vuestros conatos en el

próximo período de vuestras sesiones

legislativas,

es

el

res-

tablecimiento de la concordia entre nuestros conciudadanos y la extinción comlpleta de esas insensatas pasiones políticas q^ue por tanto tiempo han desgarrado el seno de nuestra patria".

GOBIERNO DE FLOBES

No todo

era

pesimismo, felizmente, en ese terrible ambiente

de nuestro período de

En

el

Masini

curso del

formación.

mismo año

del fallecimiento del constituyente

Pacheco y el general Melchor lugar de su nacimiento, pero oriental por

murió en Buenos Ai^es

Obes, argentino por la

293

el

resolución persistente de su cerebro y los sentimientos de su

contra al salir de un ruidoso jury don Ramón Cáceres, había dicho contestando a los que ponían en duda sus grandes y ardorosos entusiasmos patrióticos: "Podrán disputarme la calidad de oriental .. Pero por nada en el mundo llevaría los colores de otro pueblo... Si viviera hoy la Roma que fué dueña del mundo, no cambiaría el título de oriental por el de ciudadano romano". corazón. Pocos meses antes,

.

CAPÍTULO V Movimiento económico población.

lia

Al finalizar

el

la población de ei

la

año 1854 "El Comercio del Plata" calculaba República en 130,000 almas y hacía notar que

Presupuesto General de Gastos absorbía al mes 130,000 peo sea justamente la cuota mensual de un peso por habi-

sos,

tante.

Los gastos estaban bien calculados. Pero

la cifra

de

la

pobla-

ción, casi igual a la del censo levantado a raíz de la conclusión 'de

la

Guerra Grande,

Como ria se líticos,

el

mismo

deibía ser

más

baja.

diario lo hacia constar, la corriente inmigrato-

había detenido totalmente por efecto de los trastornos po-

económicos y financieros que subsiguieron

al

movimiento

revolucionario de julio de 1853. Tcsdos o casi todofe los .pa&ajeros de ulltramar que bajaban a

nuestro puerto se reemibarcaban en

el

acto

para Buenos Aires

por falta de trabajo, y los mismos del país tenían que seguir el caimino del extranjero bajo la presión de las persecuciones políticas, la

de

la

inseguridad de

la

campaña y de

las

estrecheces Je

vida.

He aquí el movimiento de entradas y salidas durante los 16 meses corridos desde enero de 1853 hasta abril de 1854 según ¡os registros de la Policía de Montevideo (la primera columna indica los pasajeros presentados a la Policía y la segunda los pasaportes expedidos):

295

GOBIERNO DE FLORES

Tenían que ser muy deficientes los registres policiales, como se encargaba de prevenirlo la prensa de la época. El que arriba/ba al país estaba interesado en presentarse a la Policía para

En cambio, debían

impedir so&peclhas. clandestinas,

tanto porque

de dinero, como porque muabas veces a huir de la

debían

salida

ser,

numerosas

ser

las

las alternativas

de

la

política

obligaban

Las cifras correspondientes a según "El Comercio del Plata", un 25 % la

Policía.

más altas de las que arrojaba la contabilidad policial. Una ley dictada en 1854 suprimió el pasaporte para rior

y exterior

restableció liciales

y

esia

el

inte-

de la República. Pero otra sancionada en 18 55 retranca con propósitos financieros más que po-

políticos.

o

salidas

pasaporte imponía un desembolso

el

Cada persona adulta debía pagar dos pesos

la

cuarta parte de esa cantidad los menores de edad.

A

fines

de ese

mismo año

hacía constar

la

prensa de Monte-

video, llejia de lisonjeras esperanzas, que de las barcadas de ul-

tramar destinadas

al Plata habían quedado 163 colonos en nuesPero aligunos meses después, en septiembre de 1855, anotaba el dato pesimista de que de 600 inmigrantes llegados de Europa, todos habían vuelto a embarcarse rumbo a la Argentina, con excepción de cincuenta y tantos que seguían a la es-

tro puerto.

pera de colocación.

Y que

las perspectivas se

fueron empeorando

de dia en día lo reveían dos informaciones periodísticas de principios de 1856.

La primera de

300 inmigrantes y

el

ellas hacía constar la llegada

do

inmediato reembarco de todos ellos para

Buenos Aires. La segunda anuncia.ba la lilegada de 640 más y el reembarco subsiguiente de su casi totalidad para Buenos Aires y Entre Ríos.

En 1855 nombró el gobierno de Flores una Comisión encargada de promover la inmigración y la colonización y de correr con todo grantes.

lo

relativo al alojamiento y alimentación de los inmi-

La Comisión quedaba autorizada para establecer subco-

misiones auxiliares en los departamentos. a traducirse en hechos,

porque

No

alcanzó ese decreto

Comisión carecía de recursos y el país de ambiente tranquilo para la atracción de elementos de trabajo. Ya el año anterior había tratado el Gobierno, sin la

resultados, de estimular la organiz.acióñ de una sociedad por ac-

ciones con un programa idéntico.

Los brasileños seguían entretanto su nunca interrumpido movimiento de avance, explotando la ausencia de población en nuestras zonas fronterizas. Véase lo que decía en octubre de 1854

HISTORIA DEL URUGUAY

296

Ministerio de Gobierno

al

la

Junta Económico-Administrativa de

Cerro Largo, demostrando la necesidad de enviar allí un regimiento de línea destinado a servir de asiento a un, pueblo o colonia que detuviera la absorción: "Existe en este de'paa'tamento un distrito que merece que el

Gobierno fije en él su atenjción. Es el de Aceguá. Todos sus moradores son, con poquísimas excepciones, brasileños y apenas si se conoice en él el idioma castellano. La nueva demarcación de limites, próxima sin duda a llevarse a cabo, arrancará una buena porción de dicfho distrito y

tiempo sin fundar en

el

Imperio no

dejará

pasar

mucho

un pueblo. Las consecuencias son

él

fáci-

de calcular."

le.s

NO'

se

contentaba

Imperio con llenar de brasileños las zo-

el

nas fronterizas. También robaba a nuestros hombres de color para encadenarlos como esclavos en sus mortíferos estableci-

mientos agrícolas.

Don Andrés Lamas denunció de 1855

el

a la cancillería imperial

en enero

caso de un mulato oriental que había sido conducido

Río de Janeiro y allí torturado y vendido como esclavo. Su reclamo sólo dio por resultado que la víctima fuera sometida a nuevos y terribles castigos, según resulta de una segunda nota publicada diez años después. a

"He adquirido



en

decía

no

eoníveiDcimiento de que

esa

nota

nuestro

existe justicia para el

Ministro

y creo que buscando justicia sólo volverá a encontrarse de] castigo'

que dilacera



hombre de el

el

color látigo

las carnes."

Kl movimiento comercial.

Todo

el

período del gobierno de Flores fué de aplastamiento

comercial,

por efecto de las continuas agitaciones políticas que ahiuyentaban a los capitales lo mismo que a los hombres.

Nuestro comercio lamguidece ta"

en marzo de 1854





y para

decía

"El Comercio del

darle vida

Pla-

habría que supri-

las aduanas y crear un gran puerto franco. El puerto franco co'nstituía pretisamenfe en esos momentos

mir

una de líticos

las

preocupaciones del

desalojaban de

la

Gobierno.

orden del día

Pero los sucesos potemas económicos, y

a los

un año después, en mayo de 1855, anotaban los diarios el hecho entristecedor de que las casas de comercio se iban cerrando una tras otra por falta de movimiento.

üiJUlEU.NO

Cuadro de

291

UE FLOUES

las exportaciones.

comercio de exportación se mantenía con vida, graganadería que "progresaba a des,pecllio de las conflagraciones políticas y de las inseguridades de la camípaña. Pertenece a "El Comercio del Plata", tan exacto y tan proSólo

cias

al

el

la

en sus informaciones co'merciales, el siguiente cua^dro de nuestras exportaciones: durante los cuatro años de los go-bier-

lijo

nos de Giró y de Flores:

1852

Carne, quintales.

1853

1854

1855

HISTORIA DEL URUGUAY

298

Número

Valores

Tonelaje

embarcados

Buques entrados salidos

»

El

de octubre de

2

18 54

140

30,839

988,904

126

29,251

1.280,155

estaban fondeados en

puerto de

el

destacán^dose po^r sus ban-

buques de ultramar,

Montevideo 75

deras los españoles con 20 buques, los ingleses con 14, los franceses con 13 y los sardos con

El

9.

de febrero del año 1856

8

estaban fondeados

67

buques

ultramar

de

Son

fechas

dos

marítimas de

Estimulando Nuestra ipor

el

al

acaso

de

las

informaciones

de la época.

cabotaje.

navegación

argentina,

la

que tomamos

prensa

la

lilegó

de cabotaje, completamente absorbida en 1855 "a sus ú'ltJimas agonías", se-

gún las palabras pronunciadas por el diputado don Patricio Vázquez en la Cámara de que formaba parte, al presentar un que declaraba libres de derechos los frutos del país que se exportaran por los puertos de Montevideo o Maldonado y que se gravara con un impuesto los que se exportaran del litoral uruguayo para puertos extranjeros. La Cámara de Diputados, de acuerdo con el orador, impuso '.< productos uruguayos que no fueran exel 4 los a todos portados por Montevideo y Maldonado, salvo la carne y los derecho específico. El Sesujetos a un cueras que estaban proyecto

nado eximió

a

los

cereales,

piedra.

Y

la

aceptó

la

enmienda,

la

harina,

la

cal,

los

Cámara en que había tenido origen

ladrillos el

y

la

proyecto,

quedando en esa forma sancionada

la

ley.

Servicio de faros.

1855 estableció el impuesto de 40 centesimos de registro a los buques que navegasen de Montevideo o de la Colonia al interior del Río de la Plata o sus afluentes, con cargo a la construcción de una farola en el

Una

por

ley

de

tonelada

GOBIERNO DE FLORES

puerto de

Colonia. Otra

la

ley dictada

299

inmediatamente después

impuesto de tres cuartos de real por tonelada de registro a los buques de ultramar, con destino a la colocación de faros y de una barca de rofiigio cu el Banco Inglés y en la isla de Lobos. Y una tercera ley del mismo año autorizó al Poder Ejecutivo para iniciar arreglos con el gobierno de Buecreó

el

nos Aires y con el de la Confederación Argentina, tendientes a la reglamentación en común de los impuestos de faros.

Los

uruguayos abiertos a

ríos

Uno de

pocos

los

Juan

nuvegación del inundo entero.

la

decretos

del

Gómez

refrendados

triunvirato

como Ministro

por

Gobierno y Relaciones Exteriores en 1853, declaró "abiertos a los buques y comercio de todas las naciones los ríos navegables de toda República", invocando que el desarrollo de la riqueza nala

el

doctor

constituye

cional blica

Carlos

y

que

más amplia

el

bas3

la

modo más de

la

eficaz

afianzar

de

prosperidad

de

del

país

la

paz

radica

en

púla

libertad de comercio.

La gran Asamblea que puso término

a

la

dictadura de Flo-

res ratificó ese decreto mediante la ley de junio de 1854.

Construcción de una dársena.

Don Pablo de

Norvannais presentó

al Gobierno en 1855 una dársena en el paraje llamado "Baño de los Padres", comprendido entre la Aduana y el rompeolas. La dársena podría recibir 200 barcos de ultramar de 300 a 400 toneladas de registro. Estaría cerrada y tendría un canal de 30 varas de antíbo y una profundidad de 12 pies ingtteseis en bajia manea y 18 en alta marea, o sea un fondo igual al de las zonas más profundas del puerto de Monte-

una

propuesta

la

para

la

construcción

de

Dispondría de ramblas y embarcaderos y los barcos opeatra<^ad'o.s a Ta Atíuana. Para hacer frente 'al pago délas obras cuya ejecución estaba es/caüonada en tres años, se proyec-

video.

rarían

taba un impuesto de diez los barcos que hicieran

Cuando

se

empezaba

rea/les

uso de a

por la

estudiar

toneílaída de registro

sobre

dársena. el

proyecto

estallaron

las

revoluciones de los conservadores y la atención del Gobierno y

HISTORIA DEL URUGUAY

300

del

país

entero

blema portuario

quedó concentrada en )io

volvió

figurar

a

política

la

en

la

orden

y

ya

del

el

pro-

día.

Tentativa para formar una compañía nacional de segiu'os

ma-

rítimos.

Un grupo de comerciantes encabezado

por los señores Rossi, del Gobierno, en aprobación Charry y 1'8!54, los estatutos 'desuna socie'dlad ¡anónima de seguros marítimos, con capital de 300,000 pesos, iniciando con ello el pri-

Capurro,

sometió

a

la

del comercio de Montevideo para cubrir riesgos que basta entonces habían estado a cargo exclusivo de compa-

mer esfuerzo

ñías radicadas en el extranjero.

Número de

los

establecimientos de giro.

Ein 1855 funcionaban en toda la República 4,092 establecimientos comerciales e industriales sujetos al impijesto de patentes de giro. A'l

los

Deípartamento

:úe\

Montevideo

Qor'reis'pondían

1,9 70

y a

de campaña 2,122.

Del punto de vista de

la

nacionalidad de los propietarios, se

distribuían así esos establecimientos:

Pertenecientes a extranjeros »

He

»

2,730

nacionales

1,362

aquí algunas de las cifras parciales

cuadro general de donde extraemos

Almacenes por mayor

los

más importantes

datos que anteceden:

del

301

GOBIEBN'O DE FLOKES

La Plaza Cagancha era nuestro único mercado de frutos eu 1855. Las carretas de campaña, con sus largas hileras de yuntas üe bueyes, tenían en ella su paradero y allí descargaban. Por decreto

enero

de

funciones

la

del

año siguiente entró a desempeñar iguales

Plaza de Artola,

entre las dos plazas todo

La

el

dividiéndose

desde ese

tráfico de frutos de la

momento

campaña.

agi'icultiira y la t()lonizaci«)n.

El Ministerio de Gobierno se dirigió en 1854 a la Sociedad de Población y Fomento pidiéndole datos acerca del estado de los trabajos que estaban planeados al estallar el movimiento revo-

lucionario del año anterior.

El doctor Jaime Estrázulas, que presidía la Sociedad, produjo tal motivo un interesante informe del que resultaba que la empresa tenía en julio de 1853 varios e importantes contratos a realizarse en campos de su propiedad y en tierras municipa-

con

les,

destacándose los siguientes:

Con

la

razón social Treussein y

C.'',

manas de cinco personas cada una. Con la casa Carlos Becú por 250

por

1,000

familias

ale-

familias alemanas de cinco

personas cada una.

Con

la

casa

de Carlos Calvo, por

5,000

familias de

Alsacia-

Lorena, Suiza y Alemania.

Con

la

casa

de Agustín Murguiondo, por

50

familias de Al-

sacia.

En

conjunto,

6,300

familias,

con

31,500

dad había resuelto además cooperar diante

la

entrega de las

al

personas.

La Socie-

empréstito Menck, me-

500,000 cuadras destinadas a coloni-

zación.

Tal era

el

vasto movimiento paralizado por

administración Giró.

Aún cuando

el

el

derrumbe de

doctor Estrázulas indicaba

la la

emprender su reanudación, ya el país estaba muy agitado y la campaña muy intranquila y no pudo la emprendedora em,presa allegar los elementos que reclamaba la efectividad

posibilidad de

de su programa.

En

programa figuraba la reconstrucción y complementauna sociedad por acciones, fundada antes de concluir la

ese

ción de

Guerra Grande, para el establecimiento de una colonia en el ejido de Meló con destino a un centenar de familias alemanas contratadas por don Ruperto de las Carreras.

HISTORIA DEL URUGUAY

302

No

obstante todos

los

fracasos

imputables a nuestros conti-

nuos disturbios políticos, la agricultura nacional pudo continuar el fuerte impulso surgido a raíz del levantamiento del siun diario tan bien intio, y en forma tal que a fines de 1855 formado como "El Comercio del Plata" hacía constar que la producción uruguaya, luego de atender

el

bía cubierto el déficit de las cosechas de

consumo interno, haBuenos Aires durante

dos años segúidosi.

El mismo diario calculaba la cosecha de ese año en 140,000 fanegas de trigo y 25,000 de maíz y decía que durante los primeros ocho meses se había exportado a Buenos Aires por el

puerto de Montevideo 17,6i53 bolsas de trigo y que a esa cantidad había que agregar otros fuertes embarques por el puerto de Maldonado y también por

el

río

Santa Lucía, donde hubo bar-

co que llegó a

cargar 1,200 bolsas de trigo. El trigo alcanzó a )Fenderse en esa oportunidad a 8, 9 y 11 pesos la fanega.

Ya

la

colonización suiza quedaba prestigiada en la República

por un plantel de familias radicado cerca del Santa Lucía, que dio impulso a la industria lechera e inició con mucho éxito la .

de quesos

fabricación

tipo

gruyere.

Intereses ganaderos.

En 1854 invocando

prohibió

el

Gobierno

la

necesidad de impedir

matanza de vacas y terneros, aniquilamiento de

la

cría

ganadera. Pero cuatro meses después quedaba sin efecto

la

pro-

la

el

haber desaparecido sus causas



hibición

por

decreto.

La verdadera causa determinante de

decía

la

el

nuevo

derogación no

debía ser esa, sin embargo, sino la protesta de los ganaderos contra la traba

en momentos en que

la

intranquilidad de la cam-

paña obligaba a precipitar la liquidación de las haciendas. Apenas se vislumbró una esperanza de calma empezó en nuestras estancias un fuerte movimiento a favor de la refinación de las haciendas, destacándose entre todas la de San Jorge, en el Río Negro, que recibió de Inglaterra, a principios de 1855, un de vacas lechelote de yeguas y caballos frisones y un plantel

ras al cuidado de cinco familias de labradores ingleses llamadas a

formar ambiente

o escuela de intensos progresos rurales.

Una correspondencia

del

Salto

dirigida

a

"El

Comercio del

Plata" en marzo de 1854, establecía que las charqueadas de Río Grande habían pagado hasta 12 patacones por novillo, pero que

303

GOBIERNO DE FLORES

habían descendido luego a 10 para los nopara las vacas y que la carne gorda de consumo se vendía a la población del Salto a razón de medio patacón !a arroba. Del bajo valor de los- campos en esa época da idea la venta las

cotizaciones

villos y 8

de

estancia

la

del

entre Tacuabú y Ñaqniñá, compuesta de catorce leguas de suma de 30,000 pesos, o sea aproxima-

brigadier Olivero,

en el Departamento hermosos campos, por la damente a razón de dos mil pesos del

Salto,

la

legua.

Otras industrias.

En 1854 abordó

la

expilotación del cobre en la

"Mina

del Sol-

(Departamento de Minas) una empresa que disponía de 15,000 pesos levantados mediante la emisión de acc'ünes de 100 peros cada una. Desde el comienzo de la explotación trabajaba dado"

una treintena de operarios. Al año siguiente se inició la explotación del mármol de Pan de Azúcar en la estancia de Burgueño y de un nuevo enlosado que había empezado a usarse con mucho éxito en las calles de allí





"por una comnombre de asfalto". posición bituminosa Ante la Municipalidad de Maldonado se presentó en 185 5 don Juan María Rossi, solicitando con destino a la explotación de la sal los terrenos conocidos con el nombre de Rincón de Maldonado. El empresario ofrecía levantar un capital de dos mil pesos mediante acciones de 100 pesos cada una. No era una novedad, ciertamente. Ya se habían practicado estudios por don Luis Búrmester y en coasecuencia la Asamblea resolvió acordar Montevideo, constituido

decían los diarios

conocida

con

el

éste la prioridad bajo forma de privilegio exclusivo por diez años para la instalación y funcionamiento de la nueva industria. En 1855 empezó a funcionar el primer molino a vapor de Montevideo. Se trata de "un hecho que no merece dejarlo pasar al batir escribía "El Comercio del Plata" en silencio" palmas desde la sección editorial ante ese progreso industrial. La maquinaria del molino estaba sin embargo en el país desde a





iargo tiempo atrás. Pertenecía a la gran fábrica de estearina, áci-

do su'llfiirico y jabones, instalada en el Cerro por don Hipólita Doinnel poco antes de estallar la Guerra Grande y abandonada luego por efecto de

la

misma

las ruinas de la fábrica del alli

aplicada a

fuerza mctriz.

la

molienda

guerra.

Cerro hasta del

trigo.

Fué transportada desde el

Molino de Poujade y doce caballos' de

Tenia

HISTOBIA DEL UBTTUGAT

304

El ejemplo debió ser sugereute, j.ues en

el

acto pidió y obtuvo

años don Francisco Sainz Rosas para la instalación de otro molino a vapor con maquinaria de 100 caballos, privilegio que censuró la prensa por tratarse de una industria

cuatro

por

privilegio

que ya estaba planteada y en tren de manifiestos pro-

gresos.

En

18 54 llegó a Montevideo con procedencia

de Nueva York

primera máquina de coser. Su introductor la llevó en el acto al domicilio del Presidente Flores y allí la hizo funcionar en medio del asombro de todos los circunstantes. Acababa de exhibirse ese invento en las salas de una exposición industrial de Norte América, cuyas vastas y variadas maquinarias arrancaban la

siguiente comentario a uno de nuestros diarios, "El Orden",

el

muy

ajeno

movimiento de expansión del trabajo y abaratade que el mundo sería deudor a las máqui-

al

miento de

vida

la

nas:

"Deberá llegar un tiempo en que las tres cuartas partes de habitantes del globo no tengan en qué emplear sus brazos

los

para obtener

sustento".

el

Otra industria mencionaremos: una fábrica de pianos insta^lada en Mionteivideo por el señor Villadecants, que debutó &n 1855 con la construcción de tres hermosos pianos, que eran

también

primeros que se hacíai en

los

el

país.

y telégrafos.

FeíTocari'iles

Los señores Ronsttop y De Roy, capitalistas de Bruselas, presentaron al gobierno de Flores a principios de 18 54 un prode Montevideo yecto de ferrocarril a Río de Janeiro, sobre la garantía

base de la

primeros para

la

mínimum

un

de

de

interés

durante

los

años, cesión gratuita de las tierras públicas que ocu-

9

vía

y de todas

las

minas que

fueran descubiertas con

ocasión de los trabajos ferroviarios.

El

Gobierno

ferrocarril

sin

otorgó la

el

garantía

Fisco en las minas que

privilegiio

del

para

interés

el

planteamiento

y dando participación

del al

empresa pudiera descubrir.. Pero iio volvió a hablarse más de este pro^yecto incubado en los comienzos de la dictadura de Flores por el optimismo brasilleño que desbordaha ante el arribo del cuerpo de ejército destinado a la

la

conquista pacífica del Uruguay.

A

media-dos

de

1855

realizáronse

en

Montevideo

los

ensayos

UOBXKKNO DE FLORES

del

telégrafo

lón

de

a

mediante un cable tendido desde el saSenado basta la casa del señor Bertonnet,

eléctrico,

sesiones

situada

305

del

diez cuadras

de distancia.

Era la primera vez que tenían lugar en el Río de la Plata y la prueba constituyó un gran éxito. De la Argentina partieron indicaciones para que también allí se verificaran experiencias análogas, según resulta de una información de «El Comercio del Plata»» que hablando del empresario señor Bertonnet decía a fines

de ago.oto: «tal vez se traslade a Buenos Aires a hacer pública esta maravilla».

Corresponde a esos mismos meses de aparente resurgimiento económico la instalación de la "Sociedad Amigos del País", con un vasto programa de construcción de puentes en toda la República, a base de concesión de peajes.

debería empezar por

de Mataojo en

Ln

El programa de trabajo

establecimiento de un puente en

Paso

el

Caneíón Grande.

tierra pública.

Desde de

el

el

comienzos del gobierno creado a raíz del derrumbe quedó suspendida la ley del año anterior prohibitiva

los

Giró,

enajenación

de tierras públicas, invocándose las nuevas provocadas por los movimientos revolucionarios que tenían lugar en la campaña. de

la

'.¡ecesidades

Completando esa medida, designó el Gobierno una comisión compuesta de don José María Reyes, don Francisco Magariños, don Alejandro Ohucarro, don José Dellepiane, don Joaquín Requena, don Manuel B. Irigoyen y don Guillermo Hamniell, con el encargo de proponer los medios ¿e hacer efectiva la ley que disponía

el

terminar

la

desilinde general

parte del fisco.

de las propiedades rurales para de-

La comisión presentó

su

dictamen a

mediados de 1854.

La





de la República decía la comisión es de 60,000 millas cuadradas. Las adjudicaciones dentro de límites naturales arrancan desde los primeros tiempos del régisuperficie

r.9,000

a

men

colonial, y habría que clasificar los sobrantes de esas adjudicaciones de acuerdo con las leyes de 1835 y 1852. Pero lo que debería abordarse ante todo es el catastro, un catastro com-

pleto que podría quedar a cargo d?l

Estado

o

concederse

a

una

empresa.

Juntamente con estos 20 — IV.

estudios se multiplicaban

los

proyectos

HISTORIA DEL URUGUAT

306

inmediata de la tierra pública, destacándose uno Poder Ejecutivo que establecía que debían ser preferidos

utilización

íle

utíi

poseedores

los

aplioándose

sos,

de

de

en

tierra

la

su

producto a

el

la

patacones por legua en

1,000

y de

treintenaria

1,5 00

en

de

títulos

la

los

demás

ca-

consolidación de la deuda;

Cámara de Diputados que autorizaba

otro de la cio

mínimo de

precio

al

de posesión

caso

el

deuda

y

pago del pre-

el

consolidada

25

al

%

valor.

Examinando estos precios decía la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados: "En épocas las más felices para la República las tierras del Estado jamás valieron Ejecutivo, y hoy que

paña

enormemente

todo punto

el

&l

precio qiie se les asigna por

despoblada

imiposihle

es

el

Poder

país se halla emipo!breci'do, nuestra cam-

y

el

numerario

muy

raro,

de

enajenación de las tierras públicas

la

les asigna el Poder Ejecutivo. La Comisión mayoría tiene en vista que las tierras de proriedad particular no valen hoy Tas cantidades marcadas como precio a las públicas y tiene también el convencimiento de que el particular que quisiera comprar campos hallaría muchos cen-

por los va/lores que

de Hacienda en

tenares

de

leguas por mil pesos".

La Comisión do Hacienda proponía

mínimum

a

9

00 pesos, dejando iuiacto

la el

reducción

del

primer

segundo, en pesos co-

de odio reales, pagaderos no en dinero como pedí& Poder Ejecutivo, sino en títulos de deuda aforados al duplo

rrientes e¡

de su valor corriente. Pioder

Eljecutivo

para

Y proponía ambién

qu;2

s-'í

autorizara

enajenar las tres cuartas partes

de

ai

las

públicas. La cuarta parte restante quedaría afectada al cumplimientc de los compromisos pendientes con los legionario^

tierras

de la Defensa y a trabajos de coloiiiííación. Todos los proyectos de la época tendían a la negociación in-

mediata de

la tierra

pública con destino al pago de deudas. Pero

de vez en cuando surgían voces de protesta contra su idea inspi-

radora y a la vez de adhesión al plan primitivo de no desprenderse de ese rico patrimonio y de explotarlo bajo el régimen deles

contratos de arreindamiento a largos plazos.

La extinción de en 1855



la

deuda



debe buscarse en

el

don Juan María Torres cumplimiento estricto de la ley

escribía

de Presupuesto y no en la tierra pública. La tierra pública d=^be reservarse para otro destino más provchoso. Al norte del Río

Negro poseen

lo

estancieros brasileños

1,600

leguas.

Los orlen-

GoniKUNO m: flores

.Sí)7

tales, en cambio, todo lo han perdido en los cuarenta y 'antos años de revoluciones que llevamos. ¿Qué se obtendría con la venta de la tierra pública? No tenemos datos acerca de la im-

portancia de este arbitrio, que algunos calculan en

200 leguas,

mientras que otros hablan de 3,000 en un territorio que csci^i de 5,5 00 a 5,600 leguas. Son dos extremos inaceptables: el primero por

muy

bajo y

segundo por

el

mil leguas. Al precio los

lijan

más

proyectos, darían un

deuda consolidada se cotiza ble

amortizar

ción

saldo

fuerte,

46

al

al

10

pendiente casi tan

hoy tenemos. "Sean las leguas

que

alto.

Supongamos que sean

patacones cada una que

miiUón y medio de patacoiie-. La 4 y a tal precio sería imposi-

%

Pero a|)enas empezara

millones.

subiría

muy

alto de 1,500

o

al

12

V'

y

abrumador como fueren

perpetuar en ellas nuestra raza.



la

amortiza-

entonces quedaría

agregaba^

el

de

la

— conservadlas

Arrendadlas

a

in

deuda que para

puros ciudada-

nos ahora a 100 pesos por año; de aquí a cinco años a 150; de modo que con el tiem-

aquí a 10, a 200, y así sucesivamente, de

el progreso de la población lleguen a ser un manantial fecundo y perpetuo de las más sóilidas rentas de la República, manantial que según la cantidad de 'las leguas que sean, poirá un día permitirnos disminuir en su mitad y tal vez abolir del

po y

todos las de Aduana".

Hermoso programa,

sin duda, ya puesto en práctica desde comienzos de nuestra organización constitucional, pero que resultaba impracticable dentro de la vida tumultuoisa en que vilos

víamos y de las eternas angustias del Tesoro público. Algún reS'Ultadi3 alcanzó sin embargo esta prédica de lor, oc
acordaba plazos

para

el

pago de

los

cánones atrasados y autorizaba w\ Poder Ejecutivo para renovar los contratos por cinco años, al final de los cuales propondría a la

Asamblea el nuevo canon que hubiera de fijarse teniéndose el mayor valor adquirido por la tierra.

en cuenta

IIISTOHIA

3ÜÍ5

moneda

Ijh

Desde plaza sible

cii'culante.

primeros meses de

los

moneda

de

falta

la

DKL LT.IGL'AY

1854 empezó a notarse en

En marzo

divisionaria.

cambiar una onza de oro mediante

Y

la

sólo

era

la

po-

pérdida de medio

año siguiente, según resulta de una información de la prensa que señalaba a fines de 18 55 el quebranto de nueve reales por onza. Con el propósito de arbitrar remedios instituyó el Gobiern una patacón.

mal debió acentuarse

eil

al

>

comisión compuesta de don Tomás Tonkinson, don Pedro Sáenz de Zumarán, don Jaime Cibils, don Augusto Lascases, don Ed-

mundo

Barthold, don M. 1

Guimaraens y don Juan Ramón Gó-

.

mez.

La comisión

expidió en seguida,

se

escasez de las piezas de plata

la

en plaza y

la

suba de

la

el

moneda de

de gozaba de una prima del 15

%

indicando como causa

cíe

fuerte stock de oro existente

plata en Buenos Aires don-

sobre

el

oro y en

el

Para-

guay donde la prima alcanzaba al 45 %; y proponiendo la acuñación en Montevideo de 240,000 pesos en piezas de plata frac^cionarias de la onza; la acuñación en Europa de 25,000 pesos en piezas de crbre; y una bonificación del 6 Si- a favor de la

moneda

circulante de plata.

Como al

patacones

60,000

hasta i.as

estos estudios, la Asamblea autorizó mediados de 1854 para acuñar hasta en monedas de cobre con fuerza cancelatoria

consecuencia

Poder Ejecutivo el

5

9f

del

de

a

monto de cada pago, 200,000 patacones en

plata y 400,000 en

de

piezas de oro.

deberían hacerse en Montevideo, Para

Algunas

retiro

las

del

pie

acuñaciones

cobre circu-

Poder Ejecutivo hasta la suma de 6.000 semanas después quedaba instalado el taller

lante podría destinar patacones.

el

Todas

el

de monedas y en el acto se abordaba la acuñación de cobre. La escasez de piezas de oro divisionarias había dado lugar

que

Poder Ejecutivo se dirigiera a la Asamblea en cortar 200 a 300 onzas en criatro partes iguales "a efecto decía el Mensaje de facilitar f>ntes

a

el

demanda de autorización para



las



transacciones comerciales".

También autorizó la Asamblea la circulación de las monedas de oro y de plata del Brasil, repúblicas americanas. España y Francia, de acuerdo con una tabla ('e equivalencias que establecía

las

siguientes bases:

309

QOBI£BNO DE FLOBES

El peso de plata corriente conservará su valor de 8 reales, de 100 centesimos cada real; el peso ftierte español y el patacón brasileño valdrán 1,000 centesimos; la peseta española, 200

centesimos; la moneda de 5 francos, 900 centesimos; lL. moneda de oro española, compuesta de cinco pesos fuertes, 5$ 160; la brasileña, de 20,000 reis, 13$480; la francesa de 20 francos,

4$400. y

onza, 19$160.

la

Como complemento

de esta

tabla

de

equivalencias,

empezó

también la Asamblea del establecimiento de una oficina que tomaría a su cargo el análisis de las monedas de oro

a ocuparse

extranjeras y fijaría su valor sobre la base de la circulante en

República.

la

Eran de

tal

manera angustiosas

público, que precisado

las

circunstancias del erario

Gobierno a solicitar en abril de 1S54 anticipos de fondos a los rematadores del papel sellado y de las patentes de giro, sólo pudo obtenerlos al 1 y % % mensual, no obstante que

%

el

el

interés corriente para buenas firmas oscilaba del

%, según

las informaciones de «El Comercio del Plata». Por efecto de ello las medidas encaminadas a combatir la crisis monetaria no alcanzaban a traducirse en hechos, y la plaza que cada día veía aumentadas las dificultades resolvió salvarse con ayuda de sus propias fuerzas. al

IjCs

1

bancos y sus emisiones.

A mediados de« 1855 aunaron voluntades los comerciantes de Montevideo a favor de la fundación de una sociedaíl anónima con capital de 20,000 onzas de oro, equivalentes a 320,000 patacones, para practicar

el

descuento de letras comerciales y emiV4 de patacón hasta 8 patacones con-

vales de comercio desde

tir

vertibles a oro.

Era un verdadero banco emisor

y

tan lleno de prestigios que

en 1856 pidió autorización la Oficina de Papel Sellado y Patentes de Giro para recibir sus billetes y el Gobierno la concedió, irivocando los

la

escasiez de

componentes de

Ya habían

la

cambio menoT y institución

la

absoluta seriedad de

emisora.

sido antecedidos los comerciantes de la i'ap'tal por

sus colegas de Paysandú, creadores de una sociedad análoga con

6,000 pesos de capital para convertir los billetes de cambio menor emitidos por sus accionistas, y también por los del Salto,

que habían

reunido con

el

mismo objeto 4,000

conversión de los billetes de esa plaza.

pesos

para

la

HISTORIA DEL URUGUAY

310

Gobierno resolvió a su turno lanzar vales de Tesorería. éxito a causa del quebranto inmediato que sufrieron,

El

Pero sin Lien

explicable

y

temor de que

el

da'do

descrédito

el

Un año antes había fracasado en efecto

de

mismas

las

la

Cámara de Diputados, por

aprensiones, otra

Ion Manuel V. Muñoz emitir 300,000

iBonedd argent;i;n

papel

del

plaga pudiera echar raíces aquí.

la

realizada por

tentativa

nombre de una empresa que pretendía

a

patacones,

cantidad igual a su capital, en billeque tendrían fuerza can,celatoria en los pagos. La comisión de comerciantes a cuyo estudio pasó el proyecto, convertibles

tes

I'^-odujo

dos

Juan

Uno

dictámenes.

Capurro

de

ellos

favorable,

suscrito

por

don Jaime Illa y Viamont. El otro, que llevaba las firmas de don Juan Ramón Gómez y don Tomás Tomkinson, combatía el curso forzoso cue se asignaba a los billetes, sosteniendo que debía dejarse en libertad a los contratantes y combatía a la vez el monopolio a título de que dentro de in legislación oriental todo aquel que inspirara confianza tenía clon

B.

derecho

fe'

die

y

emitir billetes.

La Comisión de Hacienda de la iCámara de Diputados, abrien4I0 camino a algunas de las negociaciones que esta'ban en trámite, presentó a mediados de 1854 un proyecto que autoriza^ba a^ Poder Ejecutivo para promover y aprobar la organización de i:n Banco Nacional de descuentos, depósitos y emisión, con sucursales

en

los

firmas abonadas, rés

departamentos. Los descuentos se harían sobre fondos públicos, acciones o hipotecas; el inte-

no excedería del

triple

encaje

del

encargado de Banco auxiliaría

tor

¿iempi'e que

6

%

fiscalizar al

el el

Tesoro público en sus operaciones de crédito

fuera auto'rizado para

De ese proyecto emanó torizaba

la emisión podría extenderse al Gobierno nombraría un inspeccumplimiento de los estatutos; el

anual;

metálico;

la ley

de

ello. .nilio

del

Poder Ejecutivo para promover

al

Banco Nacional, con ,iara practicar

mismo la

año, que au-

fundación de un

capital de dos millones de pesos, habilitado

descuentos de firmas, fondos públicos

a un interés no mayor de curso obligatorio hasta

el

e

hipotecas,

anual, y para emitir billetes sin duplo del dinero que tuviera en sus 6

Vi

cajas.

La j

8

al

tasa

24

del

Vi

de reducirla se

dejaban

al

interés

aQ nivel

de

corriente

oscilaba

en

esos

momentos

del

año, y la prensa batió palmas ante la perspectiva

lado

europeo con una simple p^lumada por las

condicianes deplorables de

la

que

nuestro am-

3

QOBIEBNO DE FLOOES

biente econámico y las

más

deplora'bles todavía

1

1

de nuestro am-

por incesantes revoluciones que ha<;ían circulación. Y como era de presumirse, la

biente político, castigado

huir al dinero de

la

pero sin que iteclinara la esperanza de un Banco Nacional a base de capitales europeos. Desde 1853 h.abía empezado un intenso esfuerzo en ese sentido. Don í'ernando Menck, represjitante del sindicato europeo

cayó en

ley

el

vacío,

gran

proyectado

había

i!ue

Je pesos con destino a

la

la

operación

de

crédito

por

colonización de 500,000

millones

10

cuadras cua-

que antes hemos hablado, quedó autorizado, luego de el derrumbe del gobierno de Giró, para ampliar sus gestiones a favor de la fundación de un banco de descuentos, préstamos generales e hipotecas, coa capital de 3 millones de pesos, que estaría habilitado para emitir billetes hasta el triple i(r su capital, bajo la condición expresa de no poder subir la tasa del descuento arriba del 6 Oí anual.

iliadas de

producido

Después de larga residencia en Euroipa regresó el señor Menck el Gobierno pasó a la Asamblea y que ésta

con un proyecto que

sancionó a mediados de 1855.

Quedaba autorizado

el

establecimiento

Montevide3" con un capital de

d?.

3

del

"Banco Nacional

millones de pesos fuertes

en acciones de 100 pesos cada una. El Banco tendría

el

privile-

gio de emitir billetes por el duplo de su capital efectivo, que se recibirían

como dinero en

las oficinas recaudadoras del Estado; cambio y demás efectos de comerció de plazo no mayor de tres meses y con tres firmas de comerciantes nctoriamente abonados; prestarla al comercio sobre mercaderías

descontaría

letras

depositadas,

una cuenta .lí.bles

a

de

plazos no mayores de tres meses; abriría Gobierno hasta 50,000 pesos mensuales reemboltres meses, garantida con documentos contra la

por al

los

Aduana; practicaría cobranzas, acepcaría depósitos, tas

A

los

particulares no

abriría cuen-

podría cobrarles

más

d?l

anual y al Estaño más del 6 El Gobierno nombraría un contador fiscal. Los privilegios concedidos al señor Menck durarían doce años. i)

.

corrientes.

'/(

'/,

.

Menck trabajaba su proyecto en Europa, don promovía reuniones de capitalistas en Montevideo para proponerles la fundación de un Banco o caja de descuentos y depósitos con capital de 200,000 pesos en acciones de dos mil pesos cada una, que se pagiarían la mitad en efectivo y la otra mitad en vales al portador aprobado? y numerados por el Banco. Cuando

el

Carlos Navia

señor

HISTOIUA UEL URUGUAY

3r2

Esos vales bro. El

portador

al

los

a

cinco

Banco duraría un año, pero

dar su continuación

al

dinero

coano

plaza

en

circularían

convertibles

días

efectivo

y

presentados

de

serían al

co-

podrían acor-

los accionistas

vencimiento del plazo.

mismos momentos también don Andrés Lamas y el barón de Mauá hacían llegar al Gobierno otra propuesta, la más

En

esos

vasta de todas.

establecimiento que

El

de

Montevideo",

tendría

ppsos,

haría

desicuentos,

aceptaría

duplo

de

'•Banco

su

capital

realizado,

un

proyectaban de

caipital

depósitos y

y aún

hasta

se

emitiría el

llamaría

millones

5

triple

hasta

de el

mediante

Sus billetes serían recibidos como dinero en ias oficinas recaudadoras de impuestos. En ningún tiempo podría obligarse al Banco a hacer préstamos al Gobierno. venia gubernativa.

m

pues, energías de sobra para ayudar a la plaza obra de resurgimiento económico. Desgraciadamente la atmósfera revolucionaria que envoilvia al país no era propicia para ias operaciones de crédito, y uno tras otro cayeron en cilvido todos

Había,

.íu

proyectes presentados, quedando empero dos habrían de desarrollarse, vigorosamente después: ios

Camibios de Montevideo, de que emanaría i'

la

agencia bancaria instituida por

el

el

gérmenes que la

Sociedad de

Banco

barón de

Comercial,

Mauá desde

la

terminación de la Guerra Grande para el servicio de los subsidios del Tesoro brasileño a l3s gobiernos de Suárez, Giró y Flores,

y otras

operaciones

que se fueron

paulatinamente ensan-

chando, hasta dar a la agencia las características de un verdadero

banco emisor que

al

principio

ción gubernativa, según lo

funcionó sin

ley

y sin

veremos en otro capítulo.

autoriza-

CAPITULO

VI

Movimiento administrativo Primeras medidas finaiieieras del gobierno revolucionario. En;»je.naei«')n de la renta aduani'ra.

Un mes

Giró

gobierno

después de

la

caída

de

revolucionario enajenar

la

renta

aduanera como medio de pro-

curarse un

regular

ingreso

muchos

ya

i>an

"El Orden", órgano ciar

que

que

el

hecho

hipotecarios

preferencia

pagar

o

los

acababa de anunTesoro público, y

al

entonces

terminante.

derecho

'"al

Entre

presupuestos,

se

a

los

cumplir

los

optaría

de-

Era exactamente lo mismo que haGobierno de Giró en marzo de 1S52, contra el voto

el

lo

último.

de los que a)hora no vacilaban en

Antes de

gravita-

Ministro de Gobierno y Rela-

del

La advertencia era

cididamente por bía

oficial

Gobierno daría

contratos

Aduana

la

doctor Juan Carlos Gómez,

acreedores nada querían ceder

los

alimentos".

Sobre

el

importantes compromisos.

e

ciones Exteriores

de fondos.

resolvió

finalizar

el

imitarlo.

año 1853 quedó firimado

contrato con

el

un grujpo de cuarenta y tantos acreedores de los que habían admnistrado la renta hasta marzo de 1852, bajo el compromiso c'e

entregar

cantidad aplicar

el

al

Go'bierno

representativa

remanente

a

de la

130,000

pesos

mensuales,

que era

la

sueldos civiles y militares, y de amortización de sus respectivos crédilos

tos.

El

gobierno

revolucionario

reintegraba

pues

a

los

acreedores

desalojados por Giró, pero desalojando a su turno a los que en

momentos estaban percibiendo el producto de las rentas a mérito de contratos celebrados en legal forma. El doctor Juan Carlos Gómez describía así las estrecheces del erario horas antes de la firma del contrato, en carta a don Tvi-

e^cs

más Villailba meque) :

(correspondencia

publicada

por

el

doctor

Palo-

HISTORIA DEL UBCGDAT

314

más esfuerzos que hemoá hecho no ha sido posible arremás de 100,000 pesos de entrada mensual y la iLsta sube a ciento treinta mil y tantos. Para alcanzar esto mismo con las rentas empeñadas por tantos meses y en el profundo des••Por

glarnos

crédito en que dejó

Estado

-al

la

administración Giró, han sido

hemos resignado a

precisos verdaderos milagros. Así es que nos

pagar dos terceras partes de de suerte que

sos,

Policía

la

sueldos que pasen de

3

00 pe-

será pagada íntegramente,

hasta

los

que desempeñadas las rentas podamos pagar Integramente a todos los siete meses atrasados y la tercera parte que queda en suspenso y colocarnos al día". En esa misma época fijaba "El Orden" en 2.400,000 pesos

monto de

los

900,000 pesos los

créditos situados

srbre

monto de

siete

el

empleados

civiles

los

militares.

y

la

renta de

Aduana

el

y en

presupuestos adeudados a Dos compromisos agobiantes

que varias veces estimularon a los corresponsales y colaboradores del mencionado diario a realizar propaganda a favor de la emisión de papel moneda, como medio de cancelar las deudas y de llenar el vacío dejado por el retiro de las especies metálipas.

Son despojados

Xo

nuevos compradores de

alcanzó a tener larga duración

Desde torio

los

los

el

comienzos de 1S54 empezó

administrador de

trabajaba a favor de

la

la

la

renta aduanera.

nuevo contrato. 'la

lucha entre

Sociedad c;mpradora de

la

reducción de sus entregas, y

el

Direc-

renta, el

que

Gobierno

que tenía interés en recuperar la administración aduanera. La situación del país decía el Gobierno en febrero es actualmente mucho mejor que al tiempo de celebrarse el contrato. Hay mayor prosperidad y sobre todo se cuenta "con la poderosa protección del Brasil". El Gobierno se conformaría, sin embargo, con seguir recibiendo la cuota mensual de 130,000 pesos a condición de que la Sociedad administradora garantizase el pago de la mensualidad. La Sociedad compradora invocaba a su turno el descenso de



la

renta

exigía

el

sula del



como consecuencia de la confrarrevolución de Giró, y nombramiento de ábitro; de acuerdo con una cláucontrato que prevenía que el monto de las entregas po-

dría ser modificado por las partes contratantes.

Terminó

este primer incidente

mediante

la

aceptación por la

315

60BIEBX0 DE FIX)BES

Sociedad compradora de una fórmula propuesta por el Gobierno, bajo apercibimiento de rescición del contrato, que consistía en la reducción de la cuota a 100,000 pesos mensuales siempre

que

el

Pero

producto aduanero no excediera de esa cifra mínima. el Gobierno, que ya estaba resuelto a ir a su fin, luego

adoptar

de

algunas

medidas de contralor

tomó violentamente

Aduana, desailojando al Directorio administrador constituido por don Pedro Bustamante, don Bruno Mas, don Adolfo Rodríguez, don Juan José Sosa Díaz, don José María Muñoz como contador, y dirigió un mensaje explicativo a la Asamposesión de

la

blea.





celebró ese decía el mensaje Gobierno Provisorio contrato en el concepto de recibir cantidades fijas para atender Su cumplimiento resulta el pago de las necesidades públicas. ahora gravoso por haber rechazado la empresa varias modificaciones que le fueron propuestas. Ha tenido necesidad, además,

El

Gobierno de separar un miembro del Directorio que hacía de

el

tesorero y a varios empleados cuyos procederes perjudicaban los intereses del Estado. El contrato adjudicaba el 5 ^r de las rentas

de una categoría de créditos que resultaban Por todo ello, y de acuerdo con el artículo 8 2 de la Constitución, el Gobierno ha resuelto asumir la administración de la Aduana. Ya Flores había roto con los conservadores que tenían ei

a

amortización

la

privilegiados.

contralor del Directorio p:r medio

de algunos de sus primates,

Muñoz que era uno de ellos y que a la ocupaba una banca en la Cámara de Diputados, dijo a raíz d?l

vez

y don José María

des-

pojo que Plores había realizado mediante su intromisión en

Aduana actos de camurilla para echar sombras sobre

el

la

Directo-

y convertirse en apadrinador de prevaricadores.

rio

En

la

Cámaia estaban muy

divididas las opiniones y la divi-

sión se tradujo en dos dictámenes de la Comisión de

uno de

la

mayoría, que fué desechado, y otro de

la

Hacienda:

minoría, que

triunfó.

La Comisión en mayoría fué

a la

Aduana

y

allí

examinó

los

li-

contador del Directorio don José María Muñoz. Persuadida de que eran inexactos los cargos que habían dado base a las medidas gubernativas, presentó un proyecto de

bros

ley la

en

presencia

declarando que administración

del

el

de

el cual el Gobierno reasumía Aduana, "estaba destituido de funda-

decreto por la

mentos de hecho y de derecho".

HISTORIA DEL URUGUAY

316

"No de

la



primera vez

es la

presentado

la

interpretación

decía en su informe artículo

del

República para establecer

el

si

82

de



que se

lia

Constitución

la

Poder Ejecutivo tiene o no

facultades de confiar a particulares la recaudación de las rentas

por enajenación u otro contrato. La Cámara de Representantes, influenciada sin duda por espíritu de partido y de circunstancias,

negarlo en una declaración sobre el decreto do 30 de marzo de 1852; pero no tardó la Asam^blea en adoptar una re-

quiso

solución

contraria en

ley

la

de julio de 18 5^3

ción de la mitad de las rentas de

terpretado

y

que

establecido

el

para

la

Aduana, dejando con artículo

constitucional

enajenaello

no

in-

era

un obstáculo a la enajenación de las rentas, pues si lo fuera la Asamblea lo hubiera violado con la sanción de esa ley. La Comisión no puede menos que extrañar que el Poder Ejecutivo (Je semejante interpretación al articulo constitucional respecto de ;a enajenación de las rentas de Aduana y no la dé al mismo tiempo respecto de la enajenación de las rentáis de papel sellado, de mercados y de corrales, para cuya enajenación aparece en los periódicos un aviso en los momentos en que vuestra Comisión de Hacienda se expide en este informe. La Comisión informante no puede salir de este dilema: o no tiene el Podei Ejecutivo la facultad de enajenar o cometer la administración

de sus rentas, y en este caso viola a sabiendas el artículo conso tiene esa facultad, y en este caso está en el de-

titucional;

ber de respetar los compromisos que contrae y cumplir las obligaciones que estipula en los contratos de enajenación"

El

de

la

minoría declaraba simplemente que las cuestiones del Cuerpo Legislativo

contenciosas no eran de la competencia y

La

que en cosecuencia

sitiiaci«')n

Agrupando

la

Cámara debía pasar

a la orden del

día!

financiera en 1854.

las cifras relativas a los

bierno, decía Elores a la gran

primeros meses de su go-

Asamblea en su mensaje de mar-

zo de 18 54:

La

nueva

administración

1.786,337 pesos contraída por olla seis

meses de sueldos

septiembre de 1853. nad de las rentas. En a

A

se el

civiles

con una deuda de gobierno de Giró, incluidos en

encontró

y militares devengados de

esa deuda estaba afectada

tal

situación

el

abril

la casi totaii-

Gobierno realizó arreglos

con los acreedores que percibían los ingresos de Aduana, pape'

317

GOBIEBNO DE FLORES

La cuota de

sellado y mercado.

los

primeros quedó reducida a

49,000 pesos mensuales, corespondiendo el excedente al Gobierno. De las rentas de papel sellado y mercado quedó libre la mipara el Gobierno. Todos esos recursos no alcanzaban a t.ul

80,000

pesos,

erogaciones.

suma

para

insuficiente

cubrir

Hubo, pues, que enajenar

mercado y papel Pueden calcularse

ría,

más urgentes

las

renta aduanera, lote-

la

sellado de 1854.



agreigaba

-



mensuales del

gastos

los

Presupuesto en 135,000 pesos y en 37,000 los de la deuda ^xigiContando con el subsidio brasileño bastarían entonces ble. 100,000 pesos mensuales de rentas generales para establecer

el

equilibrio.

El

Ministro

de

Cuerpo Legislativo

Hacienda

Lorenzo

don

de 1855

a principios

Batlle

presentó

al

cuenta de ingresos y

la

correspondiente al año anterior. Tesoro nacional había tenido una entrada de 3.715,986 pesos por diversos conceptos, entre los que sobresalían estos egresos

El

cuatro:

Renta aduanera Papel sellado y patentes Subsidio

giro.

.

100,000

.

brasiileño

65 6,000

Em prest iitog

1

Entre los egresos sobresalían

iCuerpO'

1.405,000

S

de

los

"

$

de

Golbierno

de

Guerra Hacienda

de

Hacía constar

el

8

2,09 7

1.137. 8 20 (incluidos

por

pesoisi

cancelación

empréstitos)

Ministro

0\

406,038

1.289.000

de

3 3 5,0 O

rubros que subsiguen:

iLeglis/laitivo/

Ministerio

.

qué

la

1.867,858

renta de

Aduana

y

Recepto-

tiempo de formularse el Presupuesto en 1,725,000 pesos, había sufrido una merma de 300,000 pesos; que la renta de papel sellado y patentes, presupuestada en 280,000 pesos, había dado 180,000 menos; que todas las demás rentas habían dejado déficit; y que una de ellas, el derecho adicional i¡e Aduana, jamás había alcanzado a recaudarse.

rías,

calculada

al

HISTORIA DEL UBUUGAY

318

Agregaba sultaba un.a

que

computadas

merma

lecursos, y que

de

8

todas- las

demás

diferencias,

74,000 pesos con relación

como además

tado con un desequilibrio

re-

cálculo de

al

Presupeusto de 1854 había sido vo-

el

de 225,000 pesos,

era de un millón cien mil pesos en

desnivel

el

efectivo

números redondos.

Algo más prevenía el Ministro: que los disturbios políticos Je 1854 habían hecho subir el déficit a 1.292,000 pesos, y que ad'?"niás gravitaba sobre el Tesoro público un saldo de 1.434,000 pesos por concepto de créditos exigibles contraídos todos ellos liesde la terminación de la Guerra. Grande en ade'lante. lEn resumen: el déficit al finalizar el año 1854, era de pesos 726,976

2.

y se distribuía así:

...

Libramientos impagos de 1854

785,141

$

Presupuestos de septiembre, octubre,

noviembre y diciembre

Deuda

Tanto abundaban

créditos de la llamada deuda exigible

los

informaciones financieras de

las

517,689

1.424,146

exigible

la

época, al establecer

que

cálculo

el

*de ingresos y egresos de 1855, fijaban en 720,000 pesos anuales

el

(¡esembolso por ese solo concepto.

No podía cerraba

con

darse,

pues,

dían fuertemente.

Y

los

amagaban con nuevos

La

una situación más desastrosa. El año

presupuestos

cuatro

y

impagos.

Las

gastos en perpetuo

formidables

rentas

tren de

desequilibrios

descen-

aumento

financieros.

situación flnauciera se agrava en el curso de 1855.

A mediados de año se presentaron al Gobierno unos doscientos empleados militares y civiles, entre los que que había varios generales, expresando que su situación era afligente, como que tenían imcorresponpagos sus sueldos desde enero amén de. los atrasos dientes al año 1854. Pedían que se les pagara con bonos de la deuda consolidada

Como torizó

al

al

precio del

día.

consecuencia de esa y otras gestiones, la Asamblea auPoder Ejecutivo para girar vales de Tesorería contra

las rentas generales hasta 200,000 pesos por siete

mensualidades

de

50,000

pesos

cada

una

sola vez y 350,000 en

una.

La emisión y el Asam-

rescate quedaban a cargo de la Comisión de Cuentas de la blea,

del

Ministro de

Hacienda y

del

Contador General. Pero

los

OOBIEBNO DE FLORES

de

vales

Tesorería se estrenaron

a las pocas

semanas

se

más

hizo

con

319

un quebranto de

gravoso.

Y

el

6

<>c,

que

atraso siguió cre-

ciendo.

Ramón

El coronel don

Cáceres que acababa de llegar de campa-

ña en busca de recursos para hacer frente a hogar,

se

presentó

había hablado de

al

la

exigencias de su

las

Ministerio de la Guerra diciendo que se

cancelación

de

seis

presupuestos con

muy

do deuda exigible, pero que esos títulos estaban

le

títulos

depreciados

y que su aceptación le irrogaría grandes perjuicios. Prevenía que St le adeudaban sus haberes desde enero.

Ante que,

la

avalancha en perspectiva dictó

el

un decreto

Gobierno

luego de referirse a la ley de creación de la deuda exigible

disponía que en

y a la necesidad de darle estricto cumplimiento,

adelante no se admitirían en las oficinas públlicas solicitudes

sor-

bre pago de sueldos de 1853, 1854 y (primer semestre de 1855;

pero que en cambio se exipediría a los reclamantes que taran certificados por lo que el Tesoro les adeudara.

lo

solici-

Antes de dar ese portazo a los empleados, se había castigado Invocando que los ema los compradores de sueldos.

con otro

pleados públicos habían tenido que enajenar sus sueldos del pri-

mer semestre de 18 5 5 para subvenir "a nos días», rias

con

lo

del negocio,

la

subsistencia de algu-

que se quería evidenciar las condiciones usura-

resolvió

el

Gobierno que en

casos de enaje-

los

nación de sueldos o pensiones del segundo semestre, sólo se abona-

mitad de lo que perteneciera a cada empleado. Algunas excelentes medidas surgieron de esos atrasos emanados

ría la

en buena parte de

la

absoluta de contralor

falta

administrativo.

Entre ellas un decreto prohibiendo a las oficinas recaudadoras que atendieran órdenes de pago y mandando verter en la Tesolería General

las rentas

de todo

el

país,

a

fin

de que

la

Conta-

duría interviniera en la distribución de las mismas.

Veamos ie

albora el balance de 1855, tal

Asamblea a mediados

del

como fué exhibido ante

año siguiente.

Al Tesoro público había ingresado 2.578,5-48 pesos, destacándose estos rubros:

Aduana de Montevideo exclusivamente. ..$ Papel sellado y patentes de giro Corrales de Montevideo

Mercados de Montevideo Contribución

Empréstitos

directa

de

1

.

317,634 231,307 4 6,79 8

47,116

Montevideo

19.177 68 3,28 6

HISTORIA DEL URUGUAY

3-20

Quedaba se

cerrar

el

el

año un

encargaba de hacerlo notar

déficit de 3.357,190 pesos, que,

como

Gobierno, excedía en 1,324,000 pe-

el

sos a todo el cálculo de recursos de 1855!

Entre y

eso

año.

partidas componentes

las

adeudados

pesos

que

el

proscribía

barón

al

propio barón

en su

como dañosos

del

Mauá

de

de

concepto

propuesta bancaria

préstamos

los

figuraban

déficit

por

356,000

empréstitos del

mismo

Gobierno!

al

Ei subsidio brasileño.

De

estos

ana vez

el

extremos angustiosos había intentado salir más de Gobierno mediante el subsidio pactaido en los trata-

dos de 1851, que la diplomacia imperial explotaba invariablemente

tu apoyo de sus planes de anarquía interna y de absorción "

terri-

torial.

Producido

el

derrumbe

de Giró obtuvo

gobierno

el

de Flores

primera prestación de 30,000 patacones mensuales, que en pezó a haicerise efectiva en diciembre de 1853. Tres meses después fué elevada a 6 0.000 patacones, bajo la expresa condición de que el subsidio terminaría en diciembre de 18 54. En el tratado que se ajustó con tal motivo reconoció nufstra cancille-

una

ría como deuda internacional un préstamo de 84,000 pesos otorgado por la casa Guimaraens y C." al interés del 1 % % mensual, tasa que quedó reducida al 6 % anual que devengaban las prestaciones emanadas de los tratados de 1851. «No puede presentarse un testimonio más elocuente del vivo

mterés que inspira la

prosperidad de

decía

uno

de

los

al la

Gobierno de República,

documentos

S.

M.

el

Emperador

su organización relativos

a la

y

del Brasil

paz estable

ratificación

»,

parla-

mentaria de ese ajuste, tendiendo un velo sobre las intrigas de la diplomacia imperial para voltear gobiernos y sacar gruesas compensaciones territoriales de los subsidios de su Tesoro. Mientras se realizaban los trabajos de la demarcación de lídecía un diario en 1854 el déficit obligaba incesan-

mites,





Gobierno Oriental a recurrir al Tesoro brasileño. El subsidio agregaba otro diario en 185 6 sólo ha serví lo aquí para fomentar el despilfarro administrativo. temente

al





La Memoria de Relaciones Exteriores presentada por don Alejandro Ohucarro a la Asamblea a principios de 1855 contenía dos párrafos que hub!
GOBIERNO DE FLORES

mera de

esas

periodísticas.

críticas

vención de junio que elevaba suales, y en el otro hablaba de

demarcar

limites al

tí::



P'íiTnitido

decía

la

En uno hablaba de

con-

la

subsidio a 60,000 patacones n:tm-

el

de un error del tratado

la corrección

frontera del Chuy, corrección que había

Ministro

el

321



reanudar

trabajos que esta-

los

ban interrumpidos.

Según

cuadro de

el

préstamos

acordados

cancillería brasileña de abril de 1S55, los

la

por

el

Tesoro

1853 hasta diciembre de 1854 y

desde

imperial

adeudo

el

al

diciembre

de

barón de Mauá, mon-

taban a 720,000 patacones.

Poco después eran publicados, con motivo de una interpelación del

Senado

al

la

re-

el

esta forma: tos

Ministro de Haoienda, otros cuadros de los que

Tesoro oriental había recibido 864,000 patacones en 746,151 en efectivo y 117,849 por concepto de los crédi-

sultaba que

del barón de Mauá, y declaraba el Ministro interpelado que Contaduría no había tenido intervención en una importante par-

tida de 90,000 patacones!

Nuestra del

cancillería

abajo

al

en

enero

gobierno de Flores mediante

servador, y lo que •íu

gestionó

de

1855

continuación

la

subsidio. Pero sin resultado. El Brasil había resuelto ya echar

pudiera

desgracia,

También para

70

Fué una

la

le

la

sus

descalabradas

con empeño de

contratación

Con-

acción del Partido

interesaba era que ese gobierno, caídx)

regularizar

preocupó

se

Brasil '/f.

menos

de

obtener

finanzas.

garantía

la

un empréstito que

del

emitiría

se

al

gestión que prosiguió por espacio de varios meses,

según lo atestigua una nota de la Legación Oriental en Río de Janeiro a cargo del doctor Adolfo Rodríguez, al :Ministro Paranhos, cliciéndole en julio de ese

«obtener del Gobierno de llones de pesos fuertes ospecial

año que uno de sus cometlidos era S.

con su garantía

oficial»,

bajo expresa

hipoteca de algunos de los ramos de las rentas de

pública, cuya administración estaba dispuesto

gar a

el

de

M. Imperial un empréstito de dos mi-

el

la

y Re-

«gobierno a entre-

los prestamistas».

Agregaba emprender

el

la

doctor

reforma

Rodríguez militar,

que su Gobierno

can

lo

cual

se

aliviaría

proponía el

presu-

puesto de 45 a 50 mil pesos mensuales y convertiría a los militares de factores de disturbios en agentes interesados en el m?^ntenimiento del orden público. Pero, con resultado igualmente negativo, según se encargó de decirlo la cancillería imperial en el Relatorio presentado al Par-

liimento en IV -21.

mayo

de 1856.

HISTORIA DEL URUGUAY

322

No

fué obstáculo esta doble negativa para que la voracidad Imperio siguiera dando temas sabrosos a la prensa, y de tal

del

mismo año

calibre que a fines del

de que

«El Nacional» recogía

rumor

el

Brasil había ofrecido tres millones por la ocupación tem-

el

operaciones de guerra contra la Colonia como base de Paraguay y de comercio con la Provincia de Buenos Aires. Dfesmintieron la noticia los demás diarios y la Policía llamó al direcporaria de

el

tor de "El Nacional" para que indicara ción,

conseguir nada positivo;

sin

origen de su informa-

el

pero

la

momentos, como

lo

continuó

atmósfera

hemos dicho en otro de fuertes reucapítulo, era teatro la frontera de Río Grande niones de gente armada que coincidían con la orden de desalojo agitada, porque en esos

dada

a

las tropas imperiales

El producto

(le

de guarnición en Montevideo.

las rentas.

El Impuesto de Aduana.

La época era de frecuentes sacudidas

la Mesa de mismos con lamen-

políticas y

Estadística suministraba escasos datos y esos tables intermitencias.

En noviembre

y

diciembre

de

1853,

dos

expectativa a causa de los trabajos de

la

para

ex

provocar

contrarrevolución

la

del

meses

intensa

de

diplomacia brasileña Presidente

Giró,

la

Aduana produjo 137,000 y 70,000 i esos respectivamente. De marzo a noviembre (9 mesesí de 1854, hubo un ingreso de 1.131,240 pesos, correspondiendo la mensualidad más alta al mes de mayo que produjo 150,650 y la más baja al mes de noviembre que produjo 113,640. Hay que advertir que por decreto

de octubre de 1853 había quedado sin efecto

de 1/5

%

sobre la importación, votado

el

adicional

en julio de ese

mismo

año.

En

todo

transcurso del año 1855 la Aduana sólo alcanzó a pesos, contra 1,430,236 que había dado en 1852, primer año de la administración Giró.

producir

1

el

279,187

En enero y febrero de 1856, últimos meses del período complementario de la presidencia de Flore.s, la Aduana dio respectivamente 76,366

La Cámara ley

y*

79,728 pesos.

de Diputados

de Aduana.

Debemos propender



abordó

decía

la

en

1854

el

estudio de

la

Comisión de Hacienda en su

aOBIEBNO DE FLORES



dictamen

a que

comercio se concentre en Montevideo, en Buenos Aires como ocurre actualmente.

el

de concentrarse en

vez

Hasta

mismos pueblos

los

323

orientales

de

del

costa

la

Uruguay

en dicha plaza, porque ion argentinos han sabido dar

se surten

comercio toda suerte de facilidades, empezando por sus con-

al

siderables rebajas en las tarifas de Aduana.

Nuestro puerto

es,

Buenos Aires, donde la carga y descarga de un buque cuestan más que todo el flete de Europa embargo,

sin

Río de

al

"La

superior

Plata.

la

Aduana

ley de

de

al



agregaba



no es sollámente una ley

No solamente debe

de impuestos, sino una ley económica. por objeto crear rentas, sino favorecer

ducción del

En

país.

la

tenemos en

que

roso

tener

comercio y a la prosituación actual es un elemento pode-

mano para

la

al

hacer

revivir

el

comercio

moribundo de esta plaza, si establecemos aquellas franquicias que pueden atraerlo; o acabará de consunción si siguen las cosas como se hallan arregladas actualmente. Los solos consumos de

plaza de Montevideo son en

la

comercio

en



poca cosa para alimentar

e!

que nos prometen nuestro bello geográfica. Y asi mismo, los escasos

grande

la

escala

puerto y nuestra situación productos que ofrece el país por su devastación son insuficien-

a pagar las importaciones, resultando de aquí un déficii, que tenemos necesidad de pagar ea moneda metálica. Esta situación es ruinosa y debemos hacer todo esfuerzo para salir

tes

de

ella

cuanto

antes,

haciendo de

modo que

los

euro-

efectos

peos introducidos a Montevideo puedan repartirse en

puer-

los

Confederación Argentina y buscar allí mismo los frutos de exportación que necesitamos para los retornos. Este es único remedio que tiene por el momento nuestra situación el

tos de

la

mercantil".

Proponía

Comisión

la

ueran declarados los

del país,

la

libres

sal,

el

en su proyecto

de hilo

el

aceite

el

calzado,

el

30

Ve

y los los

los

y de seda;

comestibles

sombreros,

cigarros

y

Aduana que

maderas de construcción;

hierro, la hojalata, el zinc, las los tejidos

de ley de

maquinarias, los frutos similares a el ganado, etc.; que pagaran el 5 % las

los

en la

el

%

15

general;

ropa hecha,

azúcar,

el el el

8

%

yerba,

Ve

los

muebles,

vino,

los

cereales;

20

naipes. Las harinas

%

el

la

quedaban suje-

según su cotización en plaza. El derecho general era c'el 10 %. Pero computados global de para el movimiento los aumentos, resultaba todos tas

a

un derecho variable del 15

al

30

HISIOKIA DEL URUGUAY

324

promedio

un

importación

la

14

del

justamente

%,

igual

al

porcentaje argentino. La exportación y el tránsito por trasbordo o por reembarco eran declarados absolutamente libres.

Hubo una

discusión parlamentarla tenaz.

El Ministro

de Ha-

cienda se oponía a tan radicales reformas. Son reducciones buedecía para los países europeos y atin para el nuestro si nas





no estuviéramos en

en que estamos. Pero no es

las condici/ones

es-

ta la oportunidad de implantarlas.

momento

El evitar

el

era

riesgo

de desccn.so

y

reiitistico

de una reagravación del

quería

Ministro

el

déficit,

aunque

sin

te-

ner en cuenta que entre los factores del descenso figuraba precisamente el desnivel arancelario que la Comisión quería suprimir con

intuición

La Cámara ó el

patriótica.

Ministro y adhirió

cidía con el de la r.'as,

3

%

el

Comisión de Hacienda en 20

al

%

el

el

oateg"--

etc.

contrabando, y para Gobierno un pontón aduanero auxilia-

do por embarcaciones armadas, puerto de Higueritas. "Todo buque que navegue en



primeva;

las

de la ropa hecha, calzado, cereales,

combatirlo estableció

temores

derecho general de importa-

Otro de los factores del descenso era

creto

los

proyecto del Poder Ejecutivo que coin-

al

pero que elevaba

ción y al

embargo, por

se dejó impresionar, sin

en

el

el

el

río

Uruguay,

Uruguay



cerca del

prevenía

el

de-

con destino a puertos de este Estado, está obligado a

fondear cerca del pontón para sufrir

el

registro".

Los demás impuestos.

La Asamblea votó en 1854, a pedido del Poder Ejecutivo, un "impuesto de barrera" en el Departamento de Montevideo. De acuerdo con la ley respectiva, los ganados procedentes de campaña quedaban sujetos a una cuota de 20 centesimos por cabeza, aplicable a caminos, calzadas y puentes en todo el territorio

La

de la República.

sancionada por las Cámaras de de 1853, debía empezar a tener ejequción desde el año siguiente. Pero al vencer el término se resolvió aplazar su cumplimiento hasta enero de 1855, y aun enpara prevea la Cámara tonces fué el Ministro de Hacienda la

ley de contribución directa

administración Giró en julio

nir que

estado

la

de

ley seguía

en suspenso,

aniquilamiento

en

a causa



decía



que todavía se hallan todas

«del las

GOBIERNO DE FLORES

325

fortunas particulares y de las graves dificultades que presenta el establecimiento de esta imposición con la justicia y equidad necesarias para que ella no sga origen de continuas reclamaciones".

AI precederse ese mismo año a la revisión de la ley hubo una discrepancia importante en cuanto a la cuota. La Cámara de Diputados votó el 2 ^c y el Senado el 4 %c. Hubo necesidad de someter el punto a la Asamblea General y entonces prevaleció el 2

que era precisamente la cuota establecida por

'/f,

la ley

de

creación del impuesto.

El Presupuesto de 1855.



Presupuesto sancionada en 1854 con destino al año los gastos en 2.718,000 pesos y los recursos en 2.349,000, o sea con un déficit inicial de más de 350,000 ley de

siguiente,

fijaba

pesos.

He

aquí

cómo

se distribuían los 'gastos:

Cuerpo Legislativo Ministerio de Gobierno y Relaciones Ministerio de Guerra Ministerio de Hacienda Servicio

de

la

.$

66,430

771,288 914,014

Exteriores

247,134

Deuda

720,000

Total



íí

2.718,866

La Administración de Justicia absorbía 54,732 pesos. La Policía figuraba con cantidades muy bajas: 38,032 para el Departamento de Montevideo, con sólo 14 comisarios y 10 celadores,' y de 3,960 a 5,940 para cada departamento de campaña con uno o más comisarios según el número de los pueblos y sin

un solo celador. Pero, en cambio, se creaba un regimiento de un costo de 328,216 pesos.

policía de línea con 1,368 plazas y

La Universidad absorbía 12,280 pesos con destino al servicio de una cátedra de teología, una de derecho civil, una de derecho de gentes, una de filosofía, una de matemáticas, una de latín, una de inglés, una de francés, una de dibujo y una Esla Cámara de Senadores esta plaMuñoz votó en contra de la cátedra de

cuela Normal. Al discutirse en nilla, el

teología,

doctor Enrique

alegando que había necesidad de fundar escuelas pri-

HISTORIA DEL I-KrcrAY

o-Jb

"Cuando hay en

Diarias.

el



país

agregó



un Alcalde Or-

dinario que no sabe leer, no es propio que se sostenga una cátedra de teología".

Para

enseñanza primaria destinaba el Presuma debían ser atendidas 54 escuelas y un colegio superior. Montevideo tenia 10 escuelas con 14.200 pesos de costo, incluidos 3,000 pesos para alquileres, de

servicio

el

la

supuesto 7S,980 pesos, y con esa

y

los

departamentos de campaña 44 escuelas con un costo de

54.560 pesos, del que correspondían legio Nacional tenía

absorbía

8,300

36

Para

pesos.

7,920 a alquileres. El Co-

alumnos internos, cuyo había

textos

1,200

sostenimiento pesos.

También

figuraba en la planilla de Instrucción Pública una beca de 720

pesos para estudios de pintura en Europa.

En las planillas del Ministerio de Guerra destacábanse el Estado Mayor Activo compuesto de 6 brigadieres y 4 coroneles mayores y el Estado neles,

Mayor Pasivo con

34 coroneles, 63 tenientes coro-

72 sargentos mayores, 160 capitanes, 50 ayudantes mayores,

95 tenientes

1.'^. 49 tenientes 2." y 92 subtenientes. El ejército de línea, reducido a su menor expresión en virtud

de encontrarse ocupados los cuarteles de Montevideo por las pas brasUeñas. componíase de 102 soldados de artillería y dos nas mayores y dos cuadros de oficiales sin soldados.

En

el

cálculo de pesos,

2,349,000

1.800,000

pesos,

papel

el

sellado

recursos que

destacábanse las

ascendía,

receptorías

y las

como hemos

Aduana

la

de

giro con

206,000.

pla-

dicho,

Montevideo

y subreceptorias con

patentes de

tro-

a

con

130,000, los

corra-

de Montevideo con 50.000 y los de campaña con 6,000, el mercado de la Capital con 50,000 y el Correo con 20.000. Xo

les

figuraba la contribución directa, pero un articulo de la ley de

Presupuesto aplicaba su importe y

el

de las tierras públicas a la

amortización de la deuda.

Desde

los

primeros meses del año surgieron grandes dificulpresupuesto y el Gobierno resolvió diri-

tades para

cubrir este

girse

Asamblea en demanda

a

la

sueldos que oscilaría del 10 al 25

El Presupuesto



decía el

de

una rebaja

general

de

en su mensaje



^c.

Poder Ejecutivo

sube a 1.986,764 pesos sin computar la partida de 720.000 pesos de intereses de la deuda, que no ha recibido todavía cum-

Ese monto representa &1 mes 165.543 pesos. Tiene además 9.000 pesos por concepto de construcción de depósitos de Aduana y 10.000 por concepto de amor-

plimiento. el

erario que cubrir

desáa rum^Híídmia Ex. carjEHio l§4.i43 fo^ar esa erogacuai siio csaBz «^ con U3f,»f« pesos ia ^ámarna t lae \n ibitiwími y

ref-::

En

resx-

tix&elD-.

ze

corrales,

1&

T

TH'-mitr-

far»,

^

^

j

correos

^kaTaido&.

.

fueaii'S

d-eautá,-

Escal-es.

pesos áe ragreso- y 1S4. {•{*{' ¿~ egresos.. Coa. ay-.da de la proyecran^ r^^isoeiáE. ¿e sTiej-dx»* es5>=r£J>i peder obtener e-1 Poder E퀻CTitixo niia ec-os.'TTO^r. ce fí'.^M pesos 14*.í>^»f

ra-e-

aüreosBales.

o sea eerta,

Don Anlrés LAais¿ reii-^^eión



-de

riQaiexa

no

del déocii £iiS23¡X£.

^mn~aiha a CBMyK taiidsT -

er^s^

sikeMoe jn&disra so3wriiiaLrse la

•KR pilazi 7ná= Tasto, la.

la TmrL&d

S-e

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c—netas

Q.Tj.e

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sobre s^ nunto de

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L¿ nmíz'^iBQéaL dírecs^^ («e era e^ pTXBiG^al recsrss de ^<e plax. pcvteñr es sm rescrpeo alrededor ¿e IODlOQO peses ap&-

pedia

cazuio ia eaoca íp^'í

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V

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pesos

2.#frv

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I

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el

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3. «»«.*-»•

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¡esnis

S

y

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Corión kasia

el

pesos

5t»

Tol-edo. l.f4C».fiO'?

el

i^iuzlí&s

¿esde

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li

el

2

1.44{',frM

Paniasoso

liis::*

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Piedras y

i 15 pesos eiLaárs

varas

en

]a

eindad

TÍ'I.OtC "rieji.

& rrss

pkíís

3.T±*.fM

vara

Lo ediEcadc

eci

esos lerrencts, a rasón

de

mil

ciea.

l*,4MLfrM

pesos cuadra

LáOS-ífr? la

12.ff*.frfr*

As-iisñs

y Buceo,

PaTiis^ oso, ITaüo.

cuiára

13 leciis iesce

Lo

!«.»«-*»

-^

varas

en

la

dadid ameva,

&

íes.

aeso

!,»•,**

vara

edifleado ea esc« lerreaos. a raxon ce

?f'.t'ví«

pe-

sos CTiadra

i

.5f*,^M

?rc^K>nia,

adesaás. el docter TA7ntt> la ecmiraticíón ce tn ersde i Bullones de pesos al tij» de S5 '"r con -ax. s>ervicio de € <^T de interés y 1 '"^ de íiü orxiMmtaáB., «ara rescsTi-

i'r'^siiío

rerta de papel sellado iiipoiecada al ^Aréoi de

Man

pee 4? y re?Tilari«ar el pag-o de las iresspíiKsíae. C-e^ie me era poabJe que «J Frufiiay obmviera áiiíertu y sohre tedo en esa? P®5<*5

HISTORIA

328

momentos de intensa

condiciones, en

Lamas

doctor

dando que

URUGLAY

DEL

crisis

el Brasil

ya había resuelto cerrar

bolsa mientras no acabara de engullirse

los

cordones de su

el territorio

que nos había a

de corrección de errores o enderezamiento de líneas en

la

demarcación de

La

el

absorciones posteriores

por los tratados de 1851 y las

dejado título

indicaba

financiera,

que podría gestionarse la garantía del Brasil, olvi-

la frontera.

(leuda procedente de ijerjuicios de guerra.

Vencido para

1853

juicios

Público

de seis meses fijado por

el

plazo

la

presentación

presentó

momento. Las

Gobierno

al

que tenía

la

ley

de julio de

procedentes

reclamos

originarios

30.800,000 12.700,000;

En conjunto

4.000,000.

a

principios

liquidados y

aterradoras:

cifras eran

esos capitales,

pesos,

los

de

per-

sufridos durante la Guerra Grande, la Junta de Crédito

de los créditos

les

de

pesos;

por

de

1854

el

clasificados

cuadro

hasta

ese

concepto de capitaconcepto de intereses de por

por concepto de usuras o ganancias, cuarenta y siete y medio millones de

representados por

16,302

reclamos

que

se

clasificaban

así:

$23.370.559

Sueldos

Empréstitos

4.366,770

Pólizas

1.681,450

Reforma militar

1.643,453

eventuales

Servicios

369,161 2.134,753

Indemnizaciones Diversos

105,3 81

24.647

Perjuicios

126,310

Depósitos

Compra de propiedades Deuda flotante

....

54.106

2.160.027

Alquileres

9.994.733

-Suministros

No

estaba

1.563,574

terminada

la

operación.

Quedaban todavía numemonto

rosos expedientes en los departamentos de campaña, cuyo se calculaba ría,

pues,

en doce millones.

según

la

La liquidación

definitiva

oscila-

Junta de Crédito Público, alrededor de

se-

GOBIERNO DE FLOBES

millones

genta

1.117,395

y

de

pesos,

sin

brasileño

el

computar

por

329

sub3idi3

el

1.3Síi,049

al

francés

gobierno de

la

por

De-

lensa.

Partiendo de ese cálculo el Gobierno obtuvo de la Asamblea un crédito suplementario de cincuenta mil pesos mensuales con destino a intereses, que agregado al de los diez mil que absorbía amortización,

la

Público

Crédito

de

elevaban

el

Y en seguida procedió

pesos.

secciones

sobre

encargadas

la

monto a

del

servicio

a

sesenta

reorganización de

la

base

de

liquidación,

la

mil

Oficina

establecimiento de

del

res.pectivamente

la

tres

de

la

deuda, resolviendo asiempezaría a entregar l.o enero 1855 de de mismo que desde el intereses destinada a y amortización. General la cuota la Tesorería Pero apenas empezaron a moverse las reclamaciones semiconsolidación y de

la

amortización de

la

p.Tralizadas de los departamentos, se comprendió que el nivel calculado no tardaría en ser notablemente excedido. En marzo 'de 1855 las sumas liquidadas y clasificadas se aproximaban ya a

57 millones, y en presencia de ello

Asamblea para preguntarle

a la

si

el Gobierno resolvió dirigirse una vez alcanzados los 60 mi-

debería continuar o debería interrumpir su trabajo la Junta de Crédito Público. La Asamblea resolvió afirmativamente llones,

consulta.

¡a

Una excepción monstruosa a favor de

los

reclamantes

extran-

jeros.

Otra ley muy grave fué dictada en esa misma oportunidad a pedido del gobierno de Flores: la que autorizaba al Poder Ejecon

outivo,

la

sola

retranca

de dar cuenta a

Comisión Permanente, "para

la

mátic:;S"

vos

la

Asamblea

celebrar con los agentes

arreglos relativos a las reclamaciones

o

a

diplo-

de sus respecti-

subditos.

Ley incousulta los

permitía dar carácter internacional a ique reclamos por perjuicios de guerra de los numerosos extran-

jeros

país y que colocaba en manos de los un instrumento de opresión y de oproque tenían que abusar y abusaron según lo veremos más

domiciliados en

Ministros bio del

adelante!

diplomáticos

el

HISTORIA DEL URUGUAY

330

Consolidación de

la

deuda.

La Junta de Crédito Piiblico al presentar el cuadro de los reclamos clasificados y el cálculo de los que podrían presentarse en la campaña, que redondeaban en conjunto la suma de sesenta millones de pesos, proponía al gobierno de Flores un plan de consolidación con

3

%

de interés anual y un fondo amorti-

zante que permitiría extinguir

deuda en 32 años. El servicio

la

empezaría en IS'SS y terminaría en 188 6, con embolso:

Por Por

intereses

el

siguiente des-

$31.048,556

'

amortización

24 844,642 .

$ 55.893„19'8

Los recursos para puesto del

5

Vr

el

servicio

se

obten.drían

mediante un im-

%

sobre las ventas

sobre los alquileres, del 1

remate público, del 2 % sombre las transferencias de bienes raíces y de un adicional de imporitación del 5 al 10 % sobre las en^

bebidas alcohólicas y sobre los muebles. Un "mes después el Gobierno, que tampoco se

resignaba a

aguardar el resultado final de la liquidación, en la falsa creencia de que no seria excedido el límite de los 60 millones, presentaba a la Asamblea tres proyectos encaminados a promover el

arreglo de

Por •^

el

la

deuda.

primero se autorizaba

inutiliz.ar

conversión

al

Poder Ejecutivo para recoger

todos los expedientes, dando en su lugar títulos de hasta

la

cantidad

máxima de

40

Era entendido que en caso de contratarse abonaría por esos títulos arriba del 25

Por la

el

segundo quedaba autorizado

% el

el

millones de pesos. empréstito, no se

de sU valor nominal.

Poder Ejecutivo

paira

contratación de un empréstito destinado al pago de esos

tí-

%

de conversión. El empréstito tendría un servicio de 6 de interés y 2 % de amortización y poidrfa abonarse por concepto de comisiones y gastos hasta el 30 Se de su valor notulos

minal.

Por el tercero se autorizaba al Poder Ejecutivo para fundar un Banco nacional de descuentos, giros, préstamos hipotecarios y conversión de deudas. La Comisión de Hacienda de

la

Cámara de Diputados,

a

cuyo

GOBIEBN-O DE FLOBE3

pasaron

estudio

esos

proyectos,

plan gubernativo.

al



Existen



informe

un

dos bases para

contrario arreglo de

el

la consolidación y la amortización. La primera quedó

deuda:

la

decía la Comisión

produjo

331

establecida expresamente en los tratados de 18 51 que hasta fija-

ron las tasas del interés que habría de pagar 3

al

6

%. Es que en esa época

pasaría de 20 a nes.

Y

Hoy sabemos que

el

Uruguaiv:

que

del

deuda no

la

llega a 60 millo-

es imposible consolidar un pasivo tan grande. Al tipo mí-

nimo de sos,

millones.

2)5

se consideraba

tratados aibsorbería su servicio dos miillones de pe-

los

en cuyo caso tendríamos un déficit de

duciendo

interés al 1

el

%,

lo

tratador, el servicio absorbería

1.700,000.

Aún

re-

cual significaría apartarse de los

600,000 pesos.

No hay que

olvi-

además, que tenemos otras gruesas deudas que es forzoso pagar: la nacional exigible por 1.800,000 pesos; la francesa por 2.117,395; y la brasileña por 2.636,000. En conjunto cinco y dar,

medio millones de pesos. Aconsejaba, pues, la Comisión el rechazo de los planes del Gobierno fundados en la consolidación, y la sanción de un proyecto sustitutivo a base de amortizaciones con absoluta prescin-

dencia

de

intereses.

De acuerdo con de la deuda

el

nuevo proyecto

se destinaría a la extinción

%

de las rentas generales. Funcionarían dos Cajas de amortización. Una de ellas, que tendría el manejo de el

7

tercera parte del producto de la renta,

la

atendería

el

pago de

créditos hipotecarios y preferentes. La otra, con las dos terceras partes restantes, estaría destinada a los créditos genera-

los

les.

Ambas Cajas

funcionarían bajo la vigilancia de una Comiun delegado de las Cáma-

sión de comerciantes presidida por las.

La amortización

Ejecutivo quedaría

se

por

practicaría

autorizado para

trimestres.

El

Poder

contratar un empréstito

de

12 millones destinados a la amortización a la puja. Se haría pre-

sente al Gobierno del Brasil la imposibilidad de realizar solidación

Juzgaba 7

^¡v

pactada en los tratados de la

la

con-

18 51.

Comisión dictaminante que con

la

aplicación del

años de paz y de cinco y medio millones una gruesa parte de la

de las rentas generales bastarían once

buena administración para cancelar de las deudas preferentes

los

y amortizar

deuda por perjuicios de guerra. Al discutirse este dictamen en la Cámara de Diputados, expresó el Ministro de Gobierno que tanto el proyecto gubernati-

HISTORIA

3o2

DEL VRUGrAY

vo como el de la Comisión de Hacienda eran impracticables, y que comprendiéndolo así había formulado el Poder Ejecutivo un tercer proyecto en virtud del cual la deuda íiquidada por la

Junta de Crédito Público devengaría el 1 % de interés desde 1855, el 2 % des'de 1858 y el 3 % desde 18 61 en adelante. Para el servicio de la deuda se entregaría mensualmente 50,000 pesos con destino a intereses y 10,000 con destino a amortización. La Asamblea encontró preferible la fórmula del Poder Eje-

cutivo e inspirándose en ella dictó

1S54.

ley de julio de

la





decía esa ley "Queda reconocido como deuda naicional el monto de todos los documentois liquidados por la Junta de Crédito Público, con los intereses y ganancias que contienen y

todas las demás deudas que en lo sucesivo liquide pertenecientes a años anteriores al de 1852, procedentes de empeños del Es-

tado a particulares".

— agregaba —

Dicha deuda

será convertida en títulos conso-

lidados que devengarán intereses del del

2

%

desde enero de 18 5 8 y del

1

%

3

%

desde enero de 185.', desde enero de 18 61,

destinándose a su pago la mensualidad de 60.000 pesos, de los que se aplicarán 10,000 a amortización en la forma que dispon-

ga

decreto

el

La

ley

reglamentario.

fijaba

el

plazo de cuatro meses para

el

canje de los

créditos ya liquidados o en trámite y el de un año para la pre-

sentación y diligenciamiento de las reclamaciones por perjuicios de guerra que no hubieran podido deducirse y probarse por

en los departamentos.

falta de magistrados

El decreto reglamentario estableció que los tenedores de títulos de la deuda consolidada tendrían el derecho de formular propuestas taría

cido

las el

d*e

que

venta

a

la

Caja de Amortización y que ésta acepmás ventajosas. Quedaba así establ>

conceptiare

régimen de

la

amortización a la puja.

La bancaiTOta. Había juzgado ría

con

fuerzas

el

Gobierno

para

que

efectuar

el

Tesoro público

desde enero

de

se

185 5

encontrael

aparte

mensual de 60,000 pesos destinados al servicio de intereses y amortización de la deuda consolidada. Pero como se aproximara el vencimiento del primer trimestre sin que la Tesorería entregara los 150,000 pesos de intereses, la Cámara de Diputados interpeló al Ministro de Hacienda y supo

GOBIERNO DE FLORES

entonces que

el

333

apurtc no liabia podido hacerse por falta absoluta

de recursos.

Asamblea para

l'royeetos que surgen en la

evitar el

derrumbe

de la deuda.

Ante esa maaifestación de bancarrota entró la Cámara de Diputados a ocuparse de varios proyectos encaminados a detener desprestigio del crédito público: que el pago de la contribuel ción

directa

una parte de

con títulos aforados Caja

la

de

exclusivamente

practicara

se

que

solidada;

al

con

derechos

de

títulos

Aduana

de

se

l:i

con-

cubriera

doble del tipo de la amortización oficial; que

rechazara

Ainoi tizacíón

%

los

que

propuesta

toda

nominal de

no

ex-

que quedara en suspenso la ley de perjuicios de guerra como medio de detener el progreso de la deuda. De acuerdo con los dos primeros proyectos estableció la Cácediera del

5

del valor

títulos;

los

mara que la Aduana recibiría hasta la sexta parte del monto de los derechos en títulos de la deuda consolidada aforados al duplo de su última amortización, y que se

podría

cancelar

totalmente

con

contribución directa

la

aforados

títulos

mismo

al

dU'

pío.

Al pasar al Senado pidió

el Ministro de Hacienda un compás invocando gestiones iniciadas para obtener el concurso del Tesoro brasileño. Pero algunas semanas después vol-

de espera,

vió sobre sus pases en

anudado

el

debate,

con

yectos,

admisible en

virtud de haber fallado ese auxilio.

fueron sancionados por

modificaciones la

Aduana

que

reducían

el

el

ReSenado ambos promonto de la deuda

y el precio de la destinada al

pago de

la

relativa

al

cont"ibución directa.

De

estas dois leyes sólo

pago de

los

derecjhos de

alcanzó

a

Aduana con

Senado, quedando pendiente

la

promulgarse

la

reducción votada por el otra a la espera de una reunión la

de la Asamblea General, que no se produjo.

El Poder Ejecutivo se opone a esos proyectos invocando que cercenan sus rentas. El

Gobierno,

que

estaba

muy alarmado

con

esta

irrupción

le

de

proyectos de emergencia que conducían al cercenamiento de sus escuálidas rentas, resolvió llamar al orden a

la

Asamblea.

HISTORIA DEL URUGUAY

334

En

el

mensaje que

le

dirigió con tal motivo decía que la Te-

de fondos para atender

el servicio de intereses que en cambio había entregado y continuaría entregando religiosamente la partida de 10,000 pesos mensuales destinada a la amortización; que no se dispusiera de las rentas

sorería carecía

de la deuda;

anteo de la sanción del Presupuesto General de Gastos; y concluía

con estas frases:

"Asegurados

los

gastos

de la Administración

con

reducciones que creáis justo hacer, entonces destinad a bajo lia

las

más severas responsabilidades

cuanto

exceda

todas

las

la

deuda

de

aque

cifra".

La Comisión de Hacienda, que sintió rozada la dignidad de la Asamblea, presentó una minuta de comunicación en la que luego de lamentar que el Poder Ejecutivo hubiera llegado "en sus deseos por la mejora de la situación financiera de la República hasta sospechar o temer que pudiera faltarle a la Cámara de Diputados el buen tino, prudencia y saber que deben presidir sus deliberaciones», prevenía que la Cámara guardaba y defendía las conveniencias del pueblo "como un sagrado deber y ¡10 le era necesaria la comunicación del Poder Ejecutivo para cumplir dignamente con su misdón". Cuando se iba a considerar esta minuta ya habían pasado al Senado lo dos proyectos que más alarmaban al Gobierno, y entonces se dijo que puesto que la Cámara había hecho precisa-

mente lo que el Poder Ejecutivo quería que no se 'hiciese, bastaba con un acuse de recibo liso y llano del mensaje. Y así se resolvió. El

Poder Ejecutivo había estado, sin embargo, en

rreno al pedir a la

el

Cámara que aplazara sus proyectos que alteraba

buen

te

inconsul-

forma de pago de los deunos pocos acaparadores de papeles que no por eso dejaban de seguirse cotizando a tipos miserables, como así tenía que reconocerlo la propia Asamblea al derogar esa forma de pago a los cuarenta y tantos tos,

especialmente

rechos de

el

Aduana en

beneficio

la

exclusivo de

de haber estado en vigencia. Entraba en receso la Asamblea

días

en

esos

momentos

y

el

go

aprovechó la oportunidad para enriquecer el fondo amortizante de la deuda con una segunda mensualidad de 10,000 pesos y para establecer que la Caja de Amortización rerec/hazaría toda propuesta que no alcanzara al 5 olo del valor nominal de los títulos. Eran dos medidas que sólo la Asamblea podía autorizar. Hay que advertir que una de ellas, la que rebierno

de Plores

335

GOBIERNO DE FLORES

í-I fondo amorlizaute, había sido destechada por el Cuerpo Legislativo pocos días antes de que Flores tomara sobre sí la responsabilidad de dictarla; y que la otra, la que establecía un límite para la aceptación de las proipueMas, tenía la sanción de la Cámara de Diputados, pero no la del Senado. Dándose

forzaba

extralimitación, el Poder lEjecutivo volvió en guida sobre sus pasos derogando ambos decretos.

cuenta de su

Queda

la

Caja de Ainoi-tización como

linica contiibucióii del

se-

Es-

tado al servicio de la deuda.

Desde mediados de 1855 quedaba así servicio de la deuda la transformada en sección o departamento Público, con su fondo de 10,000 pesos la compra de los títulos que el público dicativo del

Y

por obra

ello

como único Caja

de

resorte in-

Amortización,

la Junta de Crédito mensuales destinado a

de

propusiera en venta.

le

mismo gobierno revolucionario que en su

del

decreto de octubre de 1853, a raíz del derrumbe de Giró, había

dando como fundamente que era inmoral, irrealizable y violatoria de tratados solemnes a que estaba obligada la República, como así volvió a repetirlo en su mensaje de marzo del año siguiente a la gran Asamblea. sus,penidió por inmoral la decía el mensaje El Gobierno creación de la Caja de Amortización y rescate de la deuda susipendiido la ley de creación de la Caja,





y la ley que aceptó del Estado. Recon-ciliado zación,

que era

con lo

la

de

la Caja de Amortique perntótían las circunstanépoca, procuró Flores asegurarle la efecti-

idea

único

cias angustiosas de la

vidad inmedinta

propuesta de arreglo con los acreedores

la

inspiradora de

pi-á.ctico

alji'Uiios

recursos votados

de los

por

la

Le-

gislatura de 18 53.

En a

,

la

tierras

el

curso del

mismo año

18 5

5

se

presentó con ese objeto

Asamblea pidiendo autorización para enajenar todas públicas,

sin

excluir las dadas en

enñteusis, al precio

las



cuya derogalas tierras y también ción parcial pedía propiedades públicas a la amortización de la deuda, pero dejaba en suspenso las enajenaciones a la esipera de una mensura

nimo

de

1,000

pesos el

la

legua.

Gobierno,

La

ley

de 1852

aplicaba

general del territorio del Estado que debería practicarse sobre la base de los títulos legítimos que presentaran los propietarios.

HISTORIA UEL URLGLAY

336

El monto de

deuda.

la

Poder Ejecutivo comunicó a la Asamblea a mediados de que ya se había lanzado a la plaza deuda consolidada por valor de 60 millones, o sea precisamente la cantidad tomada como máxima al fijar la partida de 50,000 pesos mensuales para El

18 5

5

intereses.

Al finalizar cina

año

el

la

deuda

de Crédito Público

clasificada y liquidada por la Ofi-

pesos, de

subía a 80.922.000

cuya suma

estaban ya convertidos en títulos de deuda 73.458,588, quedando pendientes de canje 7.463,558 pesos. El mismo cuadro de la Oficina de Crédito Público de donde extraemos esas cifras, hacía constar que en los o^cho primeras meses de 1855 se había amortizado la cantidad de 2.826,618 pesos en esta forma generalmente progresiva:

Enero Febrero

Marzo

.

.

.

.$270,011

Mayo

265,208

Junio

291,800

Julio

334,002

Octubre

.... ....

Abril

Había recibido a nos centenares amortización

de

la

vez la

miles

efectiva

de

de los

.

.

.

.$317,691

.... .... .

.

321,600 405,8u2 620.502

.

Aduana en pago de derechos pesos,

ocho

resultando

meses

del

cuadro

3.143,264 pesos. Para extinguir tan abultada masa de papeles sólo puesto el Gobierno de las siguientes cantidades: Entregas mensuales de Contribución directa Va

de los

derechos de

la

Tesorería

...

era

había

la

de

dis-

82,241

?

12,247

Aduana

19,286 $

Con algo más de

algu-

que

entonces

113,774

cien mil pesos habían quedado,

pues,

extin-

guidos tres m'llones largos de deuda consolidada.

El precio de las deudas.

Para íiue la

amortizar una cantidad tan importante, era necesario deuda se cotizara a precios miserables. Y así sucedía efee-

GOBIEBNO DE FLORES

tivaraente, s&gún lo

pagados por

cios

la

337

demuestra el siguiente promedio de los preJunta de Crédito Público en el curso de

1855:

Enero

29 reales por cada 100 pesos

Febrero

30

»

»

»

100

»

Marzo

27

»

»

»

100

»

Mayo

24

»

,

»

100

»

Junio

25

»

»

»

100

!>

Octubre

12

«

»

»

100

x

Noviembre Diciembre

13

»

»

»

100

»

12

»

»

»

100

»

Ni la ley que autorizaba el pago de la octava parte de los derechos de Aduana en títulos de deuda, ni el decreto que prohibía a la Junta de Crédito Público aceptar propuestas inferiores al

%

5

rrumbe de

consolidada y

A

principios

en que rigía

la

valor nominal, habían conseguido evitar el de-

del

que arrastraban la continua emisión de apremio financiero en que vivía el Gobierno. de noviembre de 1852, o sea en los momentos

los precios a el

Oficina de Crédito Público cerraba su cuadro, se di-

la

Comisión Permanente

al

Poder Ejecutivo para hacerle

siguientes advertencias

las

Que

el producto de la contribución directa no se aplicaba a deuda como lo mandaba la ley; que en septiembre y octubre no se había practicado la amortización mensual de la misma deuda; que los sueldos de los empleados públicos se pagaban con billetes de Tesorería ¡que sufrían en plaza un quebranto

la

20 %.

del

Y de

en cuanto a emisiones de deuda, bastará saber que

marzo

tario

de

ds 1856, día en que terminaba presidencia

la

alcanzó a

llenar,

el

el

período

el

I.»

complemen-

de Flores y que ésta como se sabe no la consolidada era de noventa y

monto de

otho y medio millones de pesos!

De empréstito en Véase

cómo

empréstito.

describía

"El

Nacional"

provisión de fondos que empezó a aplicar

el el

procedimiento

de

gobierno revolucio-

nario desde fines de 1853:

Necesita IV

-

dinero 22.

el

Estado.

Se

presenta

entonces un

corredor

HISTORIA DEL URUGUAY

338

que

ofrece vales de comercio a

le

sin

1/4

y

Esos vales

interés.

de

'/c

corretaje,

Gobierno atiende

El

contra

gan

interés del

pago de

1

el

o del

Tesoro abona como mínimo viértase que mientras

tado abona

al

el

el

Ministerio

el

y

1

En

principios de abril hasta .

Vr mensual. En resumen, e! mensual o el 36 al año. Ad'^/c

el

1

y

%

r:£,C'

dos

los

segundos se reciben

los

cuenta

la

de

a

mediados de 1854

género

realizadas

los

9c

mensual.

El

Ministro

de

"sobre

y

podía

capitalistas

con

la

cifra

la

cubrir

Mauá, y la

habían intervenido

que

en

Pero en seguida

el

Gobierno resolvió

Legación Oriental y

la

ratificar

sanción legislativa, invocando

el

esa

de

de levantar fondos

esperanza

más

llegaron noticias de Río de Janeiro acerca de una operación

vasta

el

interés de^

absolutamente

base de las rentas que estaban libres.

la

al

promovió a principios de 1855 una reunión

presupuestos,

comerciantes

no

que

Hacienda,

por

meses transcurridos desde

de junio arribaba a

principios

Es-

el

a pesar de que los

''/r,

de 30 empréstitos por un total de 534,000 pesos 2

mensual.

lo?

%

3

operaciones

Hacienda.

de

'/,_

y 1/2

1 el

como metálico en la Aduana. "El Comercio del Plata" hizo de

de interés

^r

2

el

comerciante firma vales sin interés,

por los suyos

número

3/4

y

Tesoro

primeros carecen de garantía, en tanto que

del

1

préstamos mediante letras admisibles en pago de derechos que deven-

Aduana,

la

el

para

sea

o

cuatro meses de plazo

es o

ti

descuentan

s-e

operación,

sin

la

Casa

aguardar

apremio financiero del momento.

Tratábase de un contrato por 400,000 patacones, incluidos 100,000

que se adeudaban a Mauá. El interés era del 12

una comisión

del 2 y

^4

%

a favor de Mauá.

Vf

En

vicio de intereses y amortización del empréstito,

al año,

amén de

garantía del ser-

quedaban afectadas

de patentes de giro y papel sellado. Todo ello bajo esta cláusula verdaderamente asombrosa que sin embargo no vacilaron las rentas

tn ratificar con sus firmas

el

Presiilente Flores y sus Ministros don

Lorenzo Batlle, don Enrique Marti a-'z y don Francisco Hordoñana, cediendo a las estrecheces del momento: •í-El Gobierno de la República reconoce en el prestamista el derecho de reclamar la protección oficial del Gobierno de su país y en éste

el

derecho de intervenir y obligar a la República por

todos los medios autorizados por

fielmente

todas

y

el

derecho de gentes a cumplir

cada una de las condiciones de este contrato

en el caso absolutamente inesperado de cumplimiento de alguna de ellas.»

faltar

la

República

al

339

GOBIEBNO DE FLORES

cuarenta y tamo?; días de li ratificaeñón f:e Gobierno a pasar una copia del contrato a la Asamblea General. Ya nada había que hacer, pues se trataba de una operación consumada, y el contrato, con su formidable cláusula,

después de

Sólo

arriesgó

el

quoídó en pie.

Un alivio muy transitorio fué el que resultó de esa operación. En mayo ya tenía el Gobierno que volver a sus procedimientos habituales

prestaciones

de las

de diciembre del año pidió

tas de

Aduana, y

y

al

mismo

para

subsiguientes"

ses

y dar

lios

al

sueldos

los

cuenta

de los apremios del

salir

ocuparnos de

a

de

de los

por

ren-

las

arbitrio volvió a recurrir en los

me-

matizando

día,

más vastas de que ya hemos

sus operaciones habituales con otras

hablado

algo

garantizados

pesos

obtuvo 130,000

enero,

Para cancelar

locales.

anterior

la situación

financiera en 1855.

vales de Teisci-eiía.

Lna de las leyes dictadas a mediados de ese año facultaba al Poder Ejecutivo para girar gradualmente vales de Tesorería hasta el

monto de

la

emisión con

550,000

reembolsables

pesos,

haría la

primeros vales fueron girados en

j^os

al

finalizar

el

curso del mes de

El comercio de Montevideo se apresuró a darles

moneda

papel

plazo

el

de

ayuda de entregas mensuales de 25,000 pesos que Tesorería a la Junta de Crédito Público.

y

lo

eran

efectivamente

por

su

el

julio.

calificativo de

Desde

forma.

el

primer día de su aparición sufrieron un descuento del 3 al 5 «tt. que siguió acentuándose en los días subsiguientes y que salvó a la plaza de la plaga de que se juzgaba amenazada. El

gobierno de hecho surgido de la revolución de los conserva-

dores suspendió la emisión de esos vales, y la administración regular que reemplazó a dicho gobierno trató de efectuar su retiro

mediante un contrato por a

cargo

su

120,000

pesos

la

el

cantidad

sobre

las

cual

un grupo de comerciantes tomaba levantaba un gravamen de

circulante,

rentas

de

Pero

el

contrato no alcanzó a realizarse y entonces

resolvió utilizar

recursos.

que

el

160,000

A

de nuevo

fines

los

vales

mensual-

Aduana y entregaba

mente al Gobierno 60,000 pesos, todo ello a cambio de ae Aduana, corrales y mercados hasta febrero de 1856.

los

el

Gobierno

de Tesorería para hacerse

de 1855 hacía constar «El Comercio del

Ministerio pesos y que

de el

rentas

ie

Plata»

había lanzado a la circulación quebranto de dichos papeles había subido

Hacienda

HISTORIA DEL URUGUAY

340

20

al

no obstante

'/i,

cual continuaban siendo recibidos por su

lo

valor nominal en pago de los derechos de Aduana.

Un nuevo grupo de comerciantes se organizó entonces para eliminar de la plaza ese elemento de perturbación financiera. Don Carlos Navia, que era

representante del grupo, empezó

el

por

ofre-

cer a cambio de la renta de mercados y corrales a percibirse

rante

año

el

oro y

1856,

pagadera

pesos

150,000

parte

du un

en vales de Tesorería que serían retirados y can-

resto

el

suma de

la

jeados por vales de comerciantes, fraccionados en forma de poder

como moneda menor en

str utilizados les

serían

convertibles

Dichos va-

las transacciones.

deberían quedar retirados dentro de un

y

p.azo de tres años. El sindicato prestaría a la vez al Gobierno tres

mil onzas de oro

No habiendo

al

el

%

1

de interés mensual

.

Gobierno encontrado equitativas esas bases,

el

sindicato ofreció entre otras ventajas la tercera parte de las entra-

das líquidas de las rentas enajenadas, y entonces su propuesta encontró ambiente y fué aceptada.

La deuda Otro de

e.xigible.

gubernativos

proyectos

los

Asamblea juntamente con a

Junta de Crédito Público para

la

créditos

nio

devengados

de 1855.

desde

6

%

esos

mil

No

pesos

la

créditos al

emitirían

se

de

ju-

títulos

de

el

año y se establecería una

a la que se entregaría la

suma de

mensuales.

era un pensamiento nuevo.

Gobierno a

ei

la

y liquidar todos los

clasificar

de interés

caja especial de amortización,

cinco

en ley por

mes de enero de 1853 hasta

el

Para cancelar

«Deuda Exigible» con

convertidos

de los vales de Tesorería, autorizaba

el

Ya en

1854 se había presentado

Asamblea pidiendo autorización para cancelar con

de deuda exigible los créditos y sueldos posteriores al l.o marzo de 1852, y para establecer una caja de amortización que recibiría hasta la suma de 200,000 pesos por año. Cuando el Gobierno iniciaba esas gestiones, hacía constar «El Comercio del Plata», como un síntoma revelador del renacimiento de la con-

títulos

dt

fianza 1

y

%

pública,

que

los

créditos

de su valor, habían subido

El desorden financiero

(':<>nu>

La Comisión de Cuentas

y al

mal de

del

sueldos 2

la

Cuerpo

que

se

cotizaban

al

%! época. Legislativo

se

dirigió

en

febrero de 1855 a la Comisión Permanente para darle cuenta «de la

deformidad del desorden en que se hallaba la contabilidad».

GOBIERNO DE FLORES

341

«Inmensas cantidades de cargo entradas en la Caja sin conoci'Gruesas suni intervención de la Contaduría General... mas en recibos provisorios por pagos que ha practicado la Teso-



Hiiento

rería General

sin

orden, escrita del Ministerio respectivo y menos

aún con noticia tan siquiera de la Contaduría... Falta absoluta de balances, ni mensuales ni anuales, entre la Tesorería y la Contaduría.

para

.

.

—^Distracción

de

los

fondos

exclusivamente

destinados

presupuestos y aplicados a ramos y objetos no presupues-

los

tados.»

Tales eran las acusaciones que arrancaba

el

examen de

año 1853. Pero

la

Comisión dé Cuen-

correspondiente

tabilidad

apresuraba a prevenir que

se

tas

al

cual

administración,

a

señalaba no

ella

que no se aplicaban a

todas

administraciones

las

que eran abusos «cuyo origen se perdía en

las

épocas;

cia

tempestuosa de

formas

sino

que

vicios

los

eran transitorios, sino permanentes;

con-

la

la

tal

o

todas

y

existen-

República» y que, por lo mismo, exigían reen el régimen de la contabiLidad nacional

la

sustanciales

Pocos días después de publicado

informe de

el

Comisión de

la

don Manuel Figueroa y entraba a reemplazarle don Tomás Villalba, uno de los ciudadanos más

Cuentas,

se

jubilaba

el

Contador

indicados para aquel delicado cargo público, por sus probadas apel desempeño de varias Jefaturas Dos decretos de importancia subsiguieron

titudes en

Políticas de a

campaña.

cambio de per-

este

sonal.

«La es

la

ce

Contaduría llave

General

de

la

Nación



de todas las oficinas de Hacienda:

superintendencia

sobre

En

ellas»...

decía las

adelante

el

primero

fiscaliza el

y



ejer-

Contador

in-

tervendrá todas y cada una de las órdenes de entradas y salidas de fondos de la Tesorería General y devolverá al Gobierno con observaciones los libramientos

de pago que

den mérito para formu-

larlas.

Por

el

decreto se prohibía

otro

a

las

oficinas

recaudadoras de

fundos pagar órdenes libradas contra ellas y se les mandaba verter sus rentas en la Tesorería General.

Don Tomás

alcanzó a

construir sobre los escombros Comisión de Cuentas una obra que es todavía honra y prez de la administración financiera del Uruguay. Villalba

que había encontrado

Miijulí'iaiiiiento

No quedó informe de

de

la

uii

Ministro.

limitado a ese la

cambio

de

funcionarios

Comisión de Cuentas, como de

ello

el

efecto del

instruye un

es-

HISTORIA DEL URUGUAY

342

ciito

putados que

le

promoviera en

Constitución,

]íi

Cámara de

de don Manuel Acosta y Lara pidiendo a la

ante

juicio

de

virtud

habérsele

de fondos

lumniosas sobre manejo

Di-

Senado de acuerdo con

el

dirigido

durante

acusaciones

desempeño

el

ca-

Mi-

del

nisterio de Hacienda.

Don Manuel Acosta y Lara había del

po

de

la

presentación

La Cámara sión

de

su

de

el

produjo

ésta

Senado

tiem-

al

escrito.

de Diputados pasó

Peticiones y

el

Hacienda

de

Ministro

sidc

gobierno de Flores y ocupaba una banca en

asunto a estudio de

un

informe en

el

la

Comi-

que estable-

que de los antecedentes traídos a la vista resultaba «el convencimiento del espantoso despilfarro de las rentas públicas y entradas del Tesoro Nacional durante la administración del señor cía

Acosta dales

y

Lara»,

públicos,

existiendo

envueltos

dilapidación y peculado»,

ra de Diputados acusara

casos

«de

algunos con por todo lo al

malversación

de

cau-

los

vehementes presunciones de cual procedía que la Cáma-

peticionario ante

el

Senado «por

el

de-

Lto de malversación de fondos públicos».

La Cámara de Diputados

resolvió aceptar

el

temperamento acon-

sejado por la Comisión de Peticiones y a fines de

mayo

entabló

la

Senado designando para llevarla adelante a los diputados don José María Muñoz, don Fernando Torres y don Mateo Magariños Cervantes.

acusación ante

el

El Senado nombró una Comisión encargada de ponerse

con la acusadora y de informar luego sobre

si

al

habla

había o no lugar a

formación de causa. Pero surgió entonces un incidente de fondo, porque la Comisión acusadora consideraba que ella tenía mandato para acusar ante el Senado y no ante una Comisión delegada., argumento que no era nuevo píira la Comisión del Senado puesto que ella también había puesto en duda la personería de sus colegas de la otra rama del Cuerpo Legislativo. lEl incidente se prolongaba y la Comisión del Senado resolvió solucionarlo mediante la presentación de un informe, que fué sancionado por dicha rama del Cuerpo Legislativo, en que se declaraba que el ex Ministro Acosta y Lara había satisfecho a todas las observaciones y quedado a cubierto de toda imputación deshonrosa. La' Comisión acusadora se presentó a la Cámara de Di-

putados protestando contra esa decisión, violatoria en su concepto

de disposiciones constitucionales, puesto que con



juicio.

que

el

Pero

la.

Cámara mandó archivar

asunto estaba realmente concluido.

el

escrito

ella

se

eludía

considerando

GOBIERNO DE FLORES

L;í

enseñanza DÚblica: escuelas primarias.

Por efecto de

sucesos políticos de 1853 y de la crisis finan-

los

ciera que se acentuó a raíz

de la caída de Giró, quedaron clau-

suradas casi todas las escuelas de

En marzo de

1854

empezó

la

nistro

República.

Gobierno

el

vor de la reapertura de algunas de

ellas,

trabajos a fa-

a

realizar

y

un año después

el

Mi-

de Gobierno don Alejandro Chucarro hacía constar con sa-

tisfacción ios

343

ante

la

Asamblea que funcionaban en

la

Capital

departamentos más de cuarenta escuelas entre públicas

y «n par-

y

ticulares.

La Escuela Normal reabrió sus puertas de don Marcos

rección

dirección de don Juan

Entre

escuelas

las

el

mismo año

Sastre y fué reorganizada

bajo la

luego

bajo

di-

la

Manuel Bonifaz. seguía

particulares

destacándose

el

«Colegio

de los Padres Escolapios», reorganizado en 1853 por don Pedro Giy don Joaquín Rivas, hecho que provocó una nota de aplauso

ralt

y de adhesión de parte de los ex alumnos del establecimiento doc-

Muñoz, Conrado

Enrique

tores

Rücker,

Marcelino

Mezquita,

Ja-

Mateo Magariños, Adolfo Petíralbes, Marcos Baeza y José María Montero. Un año después tenían lugar con su acostumbrado brillo los exámenes bajo un programa que comprendía lectura, gramática, aritmética, matemácinto Susviela, Alejandro Magariños,

ticas,

dibujo,

inglés,

Han quedado miento de

la

francés y estudios comerciales.

datos estadísticos

más completos acerca

enseñanza primaria en

los

del

movi-

departamentos de cam-

paña.

A

fines de 18.J4

tituto

de

realizó

Instrucción

una

Pública

jira

de inspección

doctor

José

G.

el

vocal del Ins-

Palomeque, y como

resultado de su viaje presentó en enero del año siguiente este cuati

''o

de las escuelas públicas que funcionaban a

la

sazón:

344

HISTORIA DEL URUGUAY

345

GOBIERNO DE FLORES

FI estado de

Ya con

enseñanza.

la

anterioridad a. la jira del doctor Palomeque había tenido

que ocuparse

de

Instituto

el

estado de la enseñanza en

Pública

Instrucción

calamitoso

del

campaña, con motivo de una nota

del

Ministerio de Gobierno llamando la atención acerca de la frecuencia

con que los maestros abandonaban sus escuelas.

Tal

abandono



marchan

decía



bía pasado la nota

Comisión especial a cuyo estudio ha-

la

puede provenir de aquellos maestros que se

sin permiso y a quienes «no sería dado sujetarlos a ser-

público sin que se les proporcionase los medios de existir», o

vir

L'i

de

aquellos

otros

que recaban permiso de las Juntas, pero luego

quedan por largo tiempo en la Capital a causa «de las privaciones y dificultades que experimentan en el pago de los sueldos». Concluía la Comisión proponiendo una resolución según la cual

se

los

maestros no podrían ausentarse de las escuelas «so pretexto de

recurrir al Gobierno en reclamo de sueldos», debiendo en todos los cansos

para sus gestiones de

valerse

los

pagadores o habilitados.

Dentro de ese ambiente en que todo faltaba, terriblemente pobre debía resultar la obra de la enseñanza.

Un maestro

de Minas,

don Bonifacio Montes de Oca, describía así el estado de la escuela que acababa de entregársele, en nota dirigida a la respectiva Junta

Económico-Administrativa en 1854:

Cuarenta y

niños

siete

cuenta la escuela. Ninguno de ellos

be leer correctamente. Ninguno

sabe escribir

guno sabe colocar en orden

sumandos para hacer

más elemental de

la

tado de la escuela «es

Los niños de

los

aritmética. el

Y

con ortografía. la

sa-

Nin-

operación

en cuanto a moralidad,

el

es-

más lamentable».

color.

Otro asunto Pública en esa

muy

interesante estudió

misma

época:

si

los

el

Instituto

de

Instrucción

niños de color debían ser ad-

mitidos en las escuelas públicas.

Para don José María Muñoz

la ley

no podía establecer distincio-

nes; pero las preocupaciones sociales y la falta de aseo de los niños

de color aconsejaban cierta separación en beneficio de los

niños bargo,

quena

Los programas de enseñanza debían absolutamente iguales para todos. Para don

de

color.

la clase

propios sin

em-

Joaquín

R'>

ser,

de color había estado siempre, y seguiría estándolo

HISTORIA DEL URUGUAY

346

por largo tiempo todavía,

al

servicio

de las

que convenía enseñarle era la plancha,

io

debate prosiguió sin que

el

y

entonces

lavado y otros

que-

domésticos.

naceres

Y

familias,

el

el

Instituto adoptara

ninguna

re-

solución,

posiblemente por no poderse formar mayoría todavía en

torno de

la

tesis les

que luego habría de resultar indiscutible, de

tesis

que proclama

en

perfecta igualdad

la

programas de

escuela, sin distinción de bancas ni de

la

la

de todas las clases sociaen-

señanza.

In.sti'ucciones

mismo

El

Instrucción

de

Instituto

instrucciones

de

pliego

a los miaevsitros.

a

los

don Joaquín Requena,

rlo

en

aprobó

Pública

maestros,

que se contenían

el

en

1855

un

redactado por su Secretalas

siguientes

normas:

No conviene emplear estudio.

Las promesas

mentan

la

medios extraordinarios

mucho

cVe

valor,

los

para estimular

honores exagerados

el

fo-

el orgullo en los unos y el desaliento y Es necesario excluir los castigos humillantes y los rigores excesivos... Debe observarse el culto de la verdad... La disciplina es el alma de la escuela... La enseñanza moral no debe limitarse al tiempo que marque el horario de clase. Es un ramo que no debe abandonarse en ningún momento. el

presunción y

odio en los otros...

La enseñanza secundaria. Dos

decretos

de

reorganización

gobierno de Flores. Por

miento incorporado a

la

el

del

primero de

Colegio ellos

Universidad y bajo

sejo Universitario en todo lo relativo al

Nacional

dictó

el

quedaba, ese establecila

vigilancia del Con-

cumplimiento de

las

leyes

y reglamentos respectivos. Por el segundo volvía el Colegio a recobrar su autonomía, o mejor dicho a completar esa autonomía,

como que

se le erigía en universidad

menor y

se le habilitaba para

expedir diplomas de bachiller en ciencias y letras.

Los exámenes fueron

presididos

de

1854,

que

el

doctor

por

vuelto a instalarse en sofía

y

matemáticas

fuerte actuación

en

gran pompa, Peña que había

con

lugar

Luis José de

la

Montevideo y a dictar sus cátedras de filode el Colegio, después de un paréntesis cancillería de la Confederación Argentina.

en la

tuvieron

GOBIEBNO DE FLORES

alumnos

los

Rector

El

examinados

fueron

en

menroria en que estudiaba

Desde hace dos años

tablficimiento.

filosofía,

retórica,

Antonio M. Castro,

Colegio doctor

del

eia oportunidad una

Nacional

en

físico-ma-

y francés.

latín

te".:iáticas,

347

la

ararecido ahora

Unión.

de la

villa

concurso de todos



decía



la

presentó en

marcha

funciona

el

por

distancia.

la



es-

Antes de su traslado tenía

catedráticos de la Universidad, que

los

del

Colegio

La escuela

pública de

ha

el

des-

la

vi-



Unión agregaba ha sido anexada al Colegio Xac.onal como medio «de que la enseñanza desde los primeros elementos sea conducida bajo un sistema uniforme». de la

lla

El

establecimiento

cuales

procedían

25

sostenidos por

A

el

esos momentos 48 alumnos, délos departamentos de campaña y estaban

en

tenía

de

los

Tesoro público,

hubo de agregarse Adadus Calpe (A. D. de Pascual) quien también presentó al Gobierno un proyecto de Academia en que se enseñaría lenguas clásicas- y modernas, bellas leí ras, geografía, matemáticas, historia nacional americana y unicolegios

los

que ya existían

particulares

otro más, «El Ateneo Oriental», proyectado por

versal,

filosofía,

química, física, mineralogía, geología y botánica.

«El Estado Oriental di'irio

«La América

del



decía

Sur»



el

autor de esos proyectos en su

tiene

hombres de saber y jóvenes

grandes esperanzas: una historia que contar, llena de episodios

dt

sublimes;

como dechados a la posuna misión augusta sobre todo decir, y es llamar

tiene biografías que presentar

teridad...

tiene

hacia sus ubertosas playas millares de pobladores». único de los pueblos de campaña que tenía enseñanza Dábase esa enseñanza en el Colegio de Humanidades de don Pey Escuela Pública que funcionaba bajo la dirección dro Andreu. A los exámenes de 1855 concurrieron 111 alumnos inSalto era

el

secundaria.

cluidos los de enseñanza primaria.

terrogaciones sobre gramática, sica,

1/íi

teneduría

de libros,

ética,

La Mesa examinadora hizo

catecismo,

geometría,

aritmética,

álgebra y

francés,

in-

mú-

geografía.

enseñiinza iinivorsitai'ia.

En l£. vieja casa universitaria de la calle Sarandí esquina Maciel, donde había funcionado también el Colegio Nacional, se daba enseñanza primaria, enseñanza secundaria y enseñanza superior, porque los estadistas de entonces no admitían las autonomías que hoy abundan y reconocían la necesidad de someter a una misma au-

HISTORIA DEL URUGUAY

348

dirigente

técnica

toridad

esos

tres

de la enseñanza

grados

pú-

blica.

Terminados

exámenes de 1853 en medio de

los

agitaciones

las

a que había dado lugar la contrarrevolución del ex Pre-

políticas

sidente

resolvieron

Giró,

autoridades

las

universitarias

realizar

acto público la distribución de grados.

en.

lugar en enero del año siguiente, ante una

La ceremonia tuvo

concurrencia numerosísima, de la que formaban parte las autoridades públicas y hombres culminantes de la Defensa

Uno de

José María Paz.

llantemente

su

preparatorio de

curso

dro Ramírez, dirigió

como

el

genera!

alumnos premiados que concluía

los

bri-

José Pe-

físico-matemáticas,

Gobierno y a sus compañeros de aula una el hecho verdaderamente nota-

al

alocución en la que hacía resaltar ble de que

aún en

lo.s

momentos en que

orden público obligaba a llamar

ei

diantes

al

quedaban exentos

universitarios

necesidad de restablecer

la

país a las armas, los estuservicio

del

las

y

aulas

continuaban regenteadas por sus profesores.

«Cuando parecía

-^-

agregaba



que un solo punto debía tener

coucentrada la atención del Gobierno por su importancia, sus ojos se desviaban por

netrar en del

país,

modo

el

momentos de

ese importantísimo punto para pe-

recinto donde día a día se trabajaba por

el

cuyo presente presente y

el

le

estaba encomendado,

y

el

la

Universidad una segunda fiesta

grado de doctor en jurisprudencia a 15 alumnos

de bachiller en ciencias y letras a otros

el

porvenir

porvenir.»

Dos meses después organizaba para discernir

el

acercando de este

6.

El doctor Juan Carlos Gómez, padrino de uno de los graduados,

prenunció estas palabras dignas de esculpirse en

el

aula de juris-

pindencia:

«No sin

olvide usted que

el

abogado

es el paladín

moderno: paladín el pecho des-

coraza y sin espada, pero pronto a acudir con

cubierto al peligro en defensa del perseguido, en protección de la inocencia, de la orfandad,

pañero,

que la misión

del

riel

desvalimiento.

abogado

es

No

extender

olvide usted, com-

su

mano

al

que

srfre.»

He 1854,

aquí

según

el

el

alumnos que tenía la Universidad en informe rectoral de don Florentino Castellanos:

número de

GOBIERNO DE FLORES

Enseñanza

349

primaria

300

Francés

60

Inglés

24

Latín

28

Físico-matemáticas

16

Filosofía

26

Jurisprudencia

12

466

Al

finalizar

ese

año volvieron a abrirse

los

¿alones

de la Uni-

versidad

para recibir las pruebas de sus alumnos. Las clases de enseñanza primaria que contaban con 250 niños estaban a cargo de don Martín Pais y don Lindolfo Vázquez, la cátedra de jurisprudencia estaba desempeñada por el doctor Marcelino Mezquita, la

de filosofía por

ticas

doctor Plácido Ellauri, la de físico-matemá-

el

por don Alfredo Pasquier,

1?,

de francés

por don Domingo

Gounouilhou, la de latín por don Pedro Giralt y la de inglés por don Federico Morador. El número de cátedras fué aumentado en esa

oportunidad

con

de derecho de gentes confiada

la

Juan Carlos Gómez, y un año después con

Muy

duro resultó

La Universidad Palomeque

el

la

al

doctor

de química.

año 1855 por efecto del atraso financiero.



escribía el Secretario don José G. derrumba la enseñanza Rector don Manuel Herrera y Obes se



al

sigue atendida por

el

desinterés de los profesores, pero los emplea-

dos abandonan sus puestos porque no se les pag-a.

Por iniciativa del doctor Salvador Tort, miembro del Tribunal, se realizó a

mediados de 1855 una reunión para promover

el

esta-

blecimiento del Colegio de Abogados. Fué nombrada una comisión

encargada de proyectar

los

Cuerpo Legislativo. Pero

la

estatutos que habrían de presentarse al

idea

no marchó dentro de aquel am-

biente tan intensamente agitado por la política.

El

doctor

Eduardo Acevedo que había instalado su estudio de

abogado en Buenos Aires a conáecuencia del destierro dictado contra él a raíz del derrumbe del gobierno de Giró, recibía en esos mismos momentos una distinción de la Universidad bonaerense. La alta Cámara de Justicia de aquella ciudad había formado una terna para la elección

no figuraba los alumnos biendo

la

el

se

de Profesor de Jurisprudencia, en la que

doctor Acevedo por su calidad de extranjero;

presentaron solicitando que fuera incluido, y

Cámara

co de la materia.

pero ha-

accedido fué nombrado dicho abogado catedráti-

HISTORIA DEL URUGUAY

350

La Sociedad de Medicina Mont«*videana. La

de

ley

incorporaba

que

1833

dos

cátedras

de medicina y

cirugía a la enseñanza universitaria, seguía aplazada por efecto de

guerras

nuestras

civiles

vían nuestros gobiernos,

y

de

penuria

la

financiera

en

que

vi-

debiéndose a ello que Buenos Aires pu-

diera anticiparse de hecho a Montevideo al crear su Facultad

de

Medicina en 1852. Pero

nuestros

si

médicos carecían de cátedras, tenían en cam-

una institución privada a

bio

que cada uno aportaba su caudal

la

de clínica y de investigación. Nos referimos a la «Sociedad de Me-

Montevideana».

dicina

Desde su fundación en noviembre de 1853

no cesó el esfuerzo de los doctores Ferreira, Vilardebó, De Moussy, Vavasseur y otros, para asegurarle toda la robustez a que tenía derecho por los altos antecedentes de la ciencia médica uruguaya. Celebrando

primer aniversario de su fundación decía en 1854

el

Fermín Ferreira: «Fiel a sus estatutos, empezó sus tareas dando prioridad a las enfermedades que sucesivamente han reinado desde su instalación, investigando sus causas, observando su marcha y discutiendo los medios terapéuticos con que debían combatirse... Ningún interés doctor

el

máíi

para

vital

La

dades...

nuestras

cuando

saludables

de

aparición

condujo a discusiones

Bajo

el

la

la

difícil

en

tarea

la

de

últimos

enfermemeses,

trascendental,

la

com-

revacunación, para

lo

denomina, se ha lanzado sin

presentar

En

con consejos

de resultados satisfactorios...

ella se

de

los

de utilidad

necesidad de

ensayo de sus propias fuerzas. gistran

acometidas

son

viruela

reiterados ensayos

modesto con que

título

embargo a

la

científicas

prendiendo en su vistas cual se hicieron

que ilustrarlas

poblaciones

desgraciadamente

al

mundo

científico

el

sus anales trimestrales se re-

algunas memorias y observaciones prácticas sobre puntos

importantes de la ciencia.»

En

misma reunión

conmemorativa fueron leídos trabajos doctor Martín De Moussy acerca del clima, régimen de vida y enfermedades de Montevideo desde 1840 hasta 1854, de que ya hemos tenido oportunidad de hablar en esa

tan importantes come

el

del

otro volumen.

Entre

los

temas generales que

1S54, figuraban

la

la

Sociedad abordó y discutió en

viruela y los medios

más

eficaces para la pro-

vacuna, la fundación; de una escuela de medicina Universidad de Montevideo, el contagio de la fiebre amarilla

pagación de en

la

la

351

OOBIEBXO DE FI>ORES

en diversos países, el proenfernierlades epidémicas y de otras yecto de construcción de caños maestros para la ciudad de Montevideo,

dios

la

reglamentación de las inhumaciones.

Y

entre los estu-

presentados los que indicamos a continuación:

de la uretra «Caso de imperforación del glande y obstrucción por medios quirúrgicos», por nacido, curado

en un niño recién

doctor B. Odicini.

el

«Análisis químico del floripondio», por

el

Domingo Pa-

profesor

rcdi.

«Historia de

con

uii

un caso de ligadura de la arteria ilíaca externa por el doctor Fermín Ferreira.

éxito completo»,

«Acción del perclorureto de hierro en «Estudio sobre

el

percloruro

la

curación de las várices».

de hierro en medicina». Hospital

«Estadística médica de las salas del

de Caridad».

«Estudios sobre la fiebre amarilla».

«Tablas de mortalidad correspondientes a 1853». «Estudios sobre la constitución médica reinante en Montevideo

en la quincena anterior a la reunión de la Sociedad». «Estudio sobre el contagio de la fiebre amarilla», por

el

doctor

Francisco A. Vidal.

«Medidas policiales sobre la inhumación de cadáveres». «La spina bífida curada por inyecciones yoduradas». La actividad de la Sociedad debió disminuir en 1855 por efecto de las levciuciones ¿jue alteraron el ambiente. Apenas encontra-

mos en la prensa la crónica de una sesión correspondiente al mes de mayo con la siguiente orden del día: «¿Hay posibilidad de distinguir la sangre humana de la que no lo es, en las ropas manchadas con sangre? ¿Puede distinguirse la sangre del hombre de la sangre de la mujer?». Los médicos

«En

el

allí

presentes contestaron por unanimidad de votos:

estado actual de la ciencia

distinguir, en

manchas secas

la

es

sangre

completamente imposible

humana

animales y es igualmente imposible distinguir

la

de

la

de otros

sangre del hom-

bre de la de la mujer.»

La acción de

la

juveritiul.

No podía faltar en este período como tampoco había faltado en

ria,

tan los

agitado

de

nuestra histo-

anteriores, el apoyo entu-

siasta de la juventud a la obra de reconstrucción.

«El Eco de la Juventud Oriental», revista literaria

correspon-

HISTORIA DEL UBUGUAY

352

diente al año 1854, surgió pidiendo al Gobierno y a la Asamblea

apoyo para de

nuestro país,

de

la

campaña.



en medio de la lucha y aunque ensangrientan glori-

que

acontecimientos,

origen

el

educación de

la

decía en su programa

grandes

los

fican

Universidad y

la



«Nacidos

animados por

sentimos

nos

el

deseo ardiente de prepararle mejores días.»

misma juventud había

Pocos meses antes esa

en cuya lápida había una

blica,

«A

cripción:

trasladado los res-

Berro a un sepulcro construido por suscripción pú-

tos de Adolfo

lira

y estaba esculpida esta

memoria de Adolfo Berro. La juventud

la

Administración de

Justíciía.

El Código

ins-

oriental».

Civil.

El gobierno de Plores instituyó en 1854 una comisión de abo-

para

gados

estudio

el

del

Proyecto

Eduardo Acevedo que obraba en

las

Código

de

carpetas de

Civil

del

doctor

Asamblea de

la

Gii;ó.

«La ciencia



política

filiación

«El Comercio del Plata» refiriéndose a la

decía del

codificador

facilitando la concordia;

y

la



tiene

ese

peder de estrechar,

el

bien supremo a que

concordia es

debemos aspirar para no morir desesperanzados, habiendo vivido desunidos.»

Pero

la

nativos.

Comisión revisora no respondió a

Al finalizar

el

año hacía notar

«no había salido de

í.avía

el

la consideración

los

propósitos guber-

mismo

diario que to-

de los primeros artícu-

los», e invocando esa circunstancia pedía que el Código Civil fuera votado de inmediato, sin perjuicio de llevar adelante la tarea ya

emprendida y de que

se introdujeran en su oportunidad las modifi-

Código Civil, que nos rigen,

caciones necesarias. Casi todas las disposiciones del

agregaba,

están apoyadas

en las leyes españolas

el Código no tiene novedades; y a la vez parecen Código Napoleón, que actualmente es el modelo de

los

Códigos, prueba evidente de que lo único atrasado en nuestra

le-

prueba que

madas

del

to-

gislación colonial es la forma, no la idea o el fondo.

Bl Gobierno se dirigió a la Comisión

a

principios

de 1855,

en-

careciendo la urgencia del estudio del Proyecto, y entonces contestó el doctor Florentino Castellanos que no era posible sesionar por falta

de quorum.

Con más mento de

eficacia se

preocupó

el

gobierno de Flores del Regla-

Administración de Justicia del doctor Acevedo, sancionado a mediados de 1853 y suspendido a raíz de la caída de la

GOBIERNO DE FLOBES

Giró.

Antes de finalizar

353

año 1854 restablecía

el

Reglamento en

el

todas sus partes, excluidos los artículos que exigían la ciudadanía

para

abogado sin perjuicio de

ejercicio de la profesión de

el

res-

petarse el derecho de los extranjeros ya domiciliados en el país, y Jos que establecían el gremio de procuradores de número y obligaban a los litigantes a comparecer personalmente o por interme-

Y más

procuradores de número.

dio de

Asamblea pidiendo

ratificación de

la

adelante

se dirigía a la

su decreto.

Reoi-ganización do la magistratiu-a.

La Asamblea abordó en mediante

dicial ellos,

el

18.54

crsaciún

la

.Juzgado de lo Civil y

atendiendo

ya, seguirían

los

obra de

la

de

descentralización ju-

la

Juzgados Letrajos. Dos de Juzgado del Crimen, que existían

cinco

el

asuntos de Montevideo y los de los de-

partamentos de Canelones y San José. Los otros de

lo

lonia Cavia

civil

y

y del crimen, tendrían

Paysandú,

con

que serían

tres,

su asiento en Maldonado, Co-

jurisdicción

departamentos.

sobre otros

Juzgado Letrado tendría un agente

un escribano y un

fiscal,

alcaide.

empezó

Al finalizar el año

gado de

a

cumplirse

la ley,

departHi-^tíiitc;

Había un gran voto nacional a favor de Alcaldes ro

la

funcionarios

Ordinarios,

falta

tres los

el

la

cambio,

a pesar

Jueces

la

Asamblea

Letrados. a

misma reforma modesta con

los

Pe-

reducir lo

a

ve-

que se quería

la

país.

al

Gobierno arrió velas en otro caso de importan-

el

de

Nos referimos

Juz-

de los

sustitución

por

Juzgados de campaña, se encargaría también, como

dar un comienzo de satisfacción

En

legos,

de abe-gados que obligaba a

remos, de trabar esa

cia

instalándose

y del Crimen de Maldonado con jurisdicción en de Minas y Cerro Largo.

lo Civil

que había

mantener

abogados para

la

reforma.

Comercio suprimido por Plores en 1854 mediante un decreto en el que luego de invocarse que la innovación originaba trastornos e inconvenientes, que au-

mentaba que

los

equidad

los

al

Juzgado

gastos,

Letrado

que alargaba

el

de

tiempo de

Jueces Letrados no procedían con propio

de

los

comerciantes,

el

las

tramitaciones,

criterio práctico y de

restablecía

el

viejo

régimen

y convocaba a todos los comerciantes patentados para el nombramiento de Prior y cuerpo consular mercantil, instituciones que ya parecían absolutamente abandonadas. 23

-

IV.

HISTORIA DEL URUGUAY

354

Los Registros de ventas y de hipotecas.

La Asamblea

creó en 1855, en cada capital de departamento, un

Registro de escrituras de ventas, permutas y donaciones de propie-

dades raíces, para

nombres de

los

las propiedades.

La

efectos jurídicos.

cuota única de

3

la

de

fecha

extensión,

los

instrumentos,

y linderos de

ubicación

escritura que no fuera registrada carecería de Por cada toma de razón habría que pagar la pesos, prueba palpable de que el legislador no la

retribución

de

los

gas-

de funcionamiento del Registro.

Un año

antes la gran Asamblea se había ocupado de un proyec-

análogo,

to

anotación de

una fuente de recursos, sino

buscaba tos

la

otorgantes y

obra del

escribano don

Martiniano Mouliá, que crea-

ba además en Montevideo una oficina central destinada a de las anotaciones de todos los

dición

registros

la

refun-

departamentales.

Pero ese proyecto, aunxiue informado favorablemente por la Comisión de Legislación, había sido desechado por la Cámara de Diputados.

La nueva del

Legislatura, que estaba ya convencida de las ventajas

régimen de

la publicidad,

votó pocos días después de la san-

ción del Registro General de Ventas, la creación del Registro Ge-

neral de Hipotecas. Dos escribanos, don Félix de Lizarsa y don Pedro Díaz, se habían encargado de dar impulso a la idea. Es muy posible que el autor del proyecto de Registro General de Ventas conociera la ley Torrens que en aquella misma época P.

ora

aplicada con estrépito en Australia.

Pero

la

obra inspiradora

de ese Registro y del de hipotecas fué, con toda seguridad, digo Civil del doctor Acevedo, cuya sanción urgía en esos tos

el

Gobierno.

De acuerdo con

la venta de bienes

drían verificarse

raíces

por

el

citado Código,

y las hipotecas

instrumento

además en cada departamento una

público, oficina

el

Có-

momen-

efectivamente,

convencionales sólo po-

debiendo

establecerse

registradora

de las

se-

gundas.

Cárteles.

La

cárcel de Montevideo, ubicada en los patios del Cabildo, con-

a mediados de 1854, según los datos estadísticos de «El Comercio del Plata», 98 presos. En esa misma época tramitaban ante la justicia del crimen 70 tenía

causas que se clasificaban así:

355

GOBIERNO DE FLORES

Homicidios

35

Robos y abigeatos

23

Heridas

10

Varias

Uno de

2

procesados por homicidio fué fusilado en la

los

Cagancha antes de

En

patios

los

encausados.

los

con

finalizar

Cabildo vivían confundidlos los condenados y

del

Pero su

extraemos de

la

año 1854 y estén

el

Polí-

que esté por expidepartamentos sin aque-

realidad,

triste

la

las cabezas de los

Además de

(las cárceles).

edificios

la Jefatura

Ministerio de Gobierno:

al

«Parece imposible, pero es

hacinados hasta hace poco más de

que es más, confundidos

lo

comparada

tolerable

Memoria presentada en 1854 por

Cerro Largo

tica de

llos

resultaba

situación

de los presos de campaña, según lo revela este párrafo que

la

rar

Plaza

año.

el

los

allí

J/O

la inseguridad

hemos

visto

presos en un solo cuarto y

criminales con los que

vez

tal

no mefecerían más que trabajos correccionales.»

Entre

pensionistas del Cabildo figuraba Cabrera,

los

de Florencio Várela,

sin

sentencia definitiva

que nadie quería hacerse cargo de la defensa. obligado

el

marasmo y

Tribunal a salir del

las firmas de, los

matador

el

todavía a causa de

En

dictó

1853

se

creyó

un acuerdo con

camaristas Araucho, Vega, Antuña y Joanicó, por el Juez del Crimen compeliera a uno de los

que se disponía que

el

abogados a tomar gran escándalo en

defensa,

la la



«causando

decía

acuerdo

el

mengua y desdoro

sociedad no menos que



a la

el enorme retraso de la causa por ramás o menos motivadas de los letrados nombró sucesivamente para la necesaria

Administración de Justicia zón

de

las

excusaciones

número de

que en

:¿7

defensa».

Gracias a ese acuerdo

Crimen la

lo

Plaza

al

finalizar

el

año se veía

la

causa en

jurado declaraba culpable a Cabrera y el Juez del condenaba a la pena de muerte, que se ejecutaría en

público y

iicto

el

Cagancha,

debiendo

el

cadáver

quedar

suspendido

du-

rante seis horas a la expectación pública. Pero apelada la sentencia

e

iniciada la segunda

instancia,

volvieron los abogados a sa-

carle el cuerpo a la defensa del asesino, sin que esta vez del Tribunal,

que se reprodujo, actuara con

la

misma

el

acuerdo

eficacia.

HISTORIA DEL URUGUAY

356

Higiene pública. Al finalizar el año 1855 aparecieron en las fronteras de Río Grande algunos casos de cólera. Ya en otras provincias del Brasil había estallado la epidemia. La Junta de Higiene se puso a la obra en el acto. Trazó un plan defensivo de cuarentenas y desinfecciones, expidió un pliego de instrucciones a la población, encaminado a obtener e'' mejoramiento de las condiciones higiénicas, y dividió la ciudad de Montevideo en siete distritos a cargo de inspec-

formar en cada manzana ,una comisión

tores habilitados para

encargada de vigilar

cional

sec-

aseo interior y exterior, auxiliar a

el

pobres con alimentos, ropas y medicinas, fomentar la asisten-

los

cia escolar y

promover

to de nuevas

escuelas.

el

concurso popular para

Ese plan tan sabiamente combinado en

el

el

establecimien-

que entraba

con-

la

currencia de los niños a las escuelas como medio de mejoramiento higiénico, dio excelentes resultados, pues la ciudad se vio libre del

contagio.

Ho.spitales.

Véase cuál era

la

organización y

estado del

Hospital de

Cari-

dad en 1855: Sala de cirugía, con 52 camas, a cargo del doctor Odicini. Sala Maciel, con 35 afecciones

neumónicas,

camas, dividida en dos secciones: a

cargo

del

25

camas,

Sala de Medicina, con 21

camas,

de

Sala

crónicos,

con

doctor a

sífilis

y

Fermín Ferreira.

cargo del

a cargo del

doctor Odicini.

doctor

Enrique

Muñoz. Sal^ de Oficiales, con 16 camas, a cargo del doctor Ferreira. Zabala,

tSala

para mujeres,

con

30

camas,

a

cargo

del

doctor

Mickelson.

además un departamento de huérfanos, con internos y y un departamento de dementes. El departamento de dementes estaba unido a los demás del HosHí'bía

externos,

pital

En

y con frecuencia sus asilados hacían irrupciones peligrosas.

1854 uno

desde

allí

de ellos se corrió a una casa de la calle Maciel y sostuvo una larga lucha con la Policía, hasta que ago-

tadas sus fuerzas se entregó.

Eran bien exiguos

los

recursos

del

establecimiento.

Un

estado

357

GOBIERNO DE FLORES

relativo a los 16

oficial

meses corridos desde octubre de 1852 has-

enero de 1854, fijaba las entregas del contratista de la lotería

ta

den Francisco Estéves, en 52,577

pesos,

que representaba

lo

alre-

dedor de 3,000 pesos mensuales.

En

1855 la CoiniijiOn ad"iir¡:- radora

mamiento

lamidades de

los

últimos tiempos

hecho desaparecer había dotado

Con

el

blación

instituyó

ílospi.ül

un

iiizo

l!a





decía en su manifiesto

ca-

han

rentas con que la piedad de esta población

las

Hospital de Caridad».

al

propósito

obtener

y

del

en demanda de cobertores y ropa. «Las

público,

al

de organizar

apoyo de

el

el

concurso pecuniario de

la

po-

morales,

fuerzas

irreemplazables

Junta Económico-Administrativa una Comisión de caun hospicio para los dementes

la

balleros que lanzó la idea de crear

y una casa de trabajo para los mendigos;

mas que en

el

y otra Comisión de da-

acto se hizo cargo de la inspección de los huérfa-

nos en poder de amas y de la organización de un nuevo servicio los niños de menos de cuatro años de edad. Fué tan empeñosa y tan inteligente la gestión de ambas Comi-

con destino a

siones, que antes de finalizar el

sión de caballeros, don a

la

Junta

año 1855,

Económico-Administrativa,

lando ya regularizada

Presidente de la Comi-

€l

Juan Ramón Gómez, pudo pasar una la

situación

en

que

la

financiera

del

decía

not.-j

que

Hospital,

es-

había

llegado

la oportunidad de fundar en los suburbios de Montevideo un establecimiento para los dementes y una sección con destino a los mendigos, bajo el plan de suprimir la mendicidad calle-

jera y regenerar por medio del trabajo a todos aquellos

que pu-

dieran ser utilizados industrialmente.

iSecundando la

prensa

la

la

iniciativa

idea

de

las

organizar

de

autoridades

municipales,

lanzó

una Comisión popular encargada

de reconcentrar las dádivas de la población y de distribuirlas con acierto,

sin

perjuicio de la

mente incapacitados y de tudes

para

el

creación del

asilo

para los verdadera-

regeneración de los que tuvieran apti-

trabajo.

Paralelamente a cular,

la

la

destacándose

acción oficial se desenvolvía la acúón parti-

entre

conquistas

sus

la

Asociación

Española

de Beneficencia creada en 1853.

MeJOTas mumcipales. El

problema

de los caños

1853 por entender

el

maestros, resuelto

Senado que

la

negativamente en

obra debía imputarse a rentas

HISTORIA DEL ÜEUGUAT

358

hacerla recaer sobre

gf.nerales en vez

.le

de una empresa

particular,

volvió

Los propietarios de varias calles de ciativa

movimiento

del

propuesta

líi

Arteaga,

al

año siguiente.

ciudad tomaron la ini-

la

Flores aprobó

gobierno de

el

supresión

servirse de los

obligación de

gado

entonces

y

con

vecindario en provecho

el

plantearse

a

de

que imponía

base

la

y aunque todavía habría de emanados de la supresión de esa

sufrir nueve.-;

pensamiento,

el

aplazamientos

tiempo

la

saneamiento puesta

a

de

cuestión

era sólo

base,

trascendental obra de

construcción de la

orden del día desde

la

la

caños subterráneos Ya estaba arrai-

comietizos cel

los

gobierno de Giró. El

en

servicio

de iluminación

comenzado con tanto empuje

a gas

misma oportunidad, quedó trabado por

esa

de

revolución

la

y sólo pudo reanudarse y completarse bajo los gobiernos subsiguientes. Durante ese paréntesis de inactividad para' el Municipio de Montevideo, el de Buenos Aires implantó la ansiada mejora edilicia. La piedra fundamental de la usina bonaerense fué 1853,

efectivamente, en 1855. Algo se hizo, en cambio, en materia de pavimentación. La AsamMea concedió a don Jaime Castells, en 1854, en representación de

«."olocada,

Sociedad «El Progreso», autorización para construir una carre-

la

tera entre

Carmelo y Nueva Palraira, y un puente en

las Víboras,

sobre la base de un derecho de pontazgo, cuyo importe se repartientre la Junta y la Asamblea resolvió que ledradas ni reempedradas mentadas a costa de los ría



calles

empresa concesionaria. Un año después todas las calles de Montevideo no em-

de la nueva ciudad

con posterioridad propietarios, el

a

1835,

pudiendo

sistema ya adoptado

fueran pavi-

aplicarse

a

las

de piedras de

cuña o el de Mac-Adam. Las Juntas carecían de recursos y Flores trató de llenar en 1853 mediante un decreto que declaraba municipales

el

vacío im-

los

de corrales, ramos policiales y pasaje de ríos de los departamentos de campaña. Dichos impuestos deberían ser recaupuestos

dados por las Juntas y aplicados «considerando

rúblicas, tor

Juan Carlos Gómez

ferente

a

la

— —

ilustración

decía

que

de

la

sostenimiento de las escuelas

al el

el

decreto refrendado por

el

doc-

Gobierno debe una atención pre-

juventud,

en

que está

cifrado

el

porvenir de la Nación».

Una

ley dicada

nistrativas los .•oble

en 1855

impuestos

asignó a las

Juntas

EconómicoiAdmi-

pontazgo y barcaje, bajo la limitación de que sólo podrían recaudarse allí donde hubiera de

peaje,

359

GOBIEBIÍO DE FLORES

por

truidos

calzadas

Municipalidades

las

no excedieran

impuestos

jos

acueductos,

canales,

puentes,

o

o

servicios

por

máximum

del

de botes,

concesionarios,

que

fijaba

cons-

que

de

y

misma

la

iéy.

El Ejército.

Ya hemos dicho brasileña,

motivo de

que con

efectivos

los

llegada de la

la

de

ejército

del

línea

división

presupuestados para

1855 quedaron reducidos a un centenar de soldados de artillería y

dos planas mayores



í

y dos cuadros de oficiales sin soldados.

licénciamiento empezó antes de ponerse en ejecución

1

el

nuevo

presupuesto, dándose con ello lugar a una interpelación de la Co-

misión Permanente fundada en que para todo

:\da

intacta hasta

apoyo que

se

hizo oir contra esta

peligrosa confianza en

Brasil prestaría al Gobierno. Entre ellas la de don

el

Juan María Torres, quien proclamaba desde prensa la necesidad de restablecer insustituible

rantías

el



Torres

Juntamente

con

de

infantería

la

la

paí-s

el

en medio de revoluciones!

disolución

Capital,

ejército

del

En

Nacional.

solo

la

tormenta

í^uarnición en Montevideo

arreciaba

ayudaban a

y

las

los

neralizar la convocatoria y que dividir la

des

el

el

convocada

menor

peligro

Presidente Plores

tropas

opositores,

Un año

la

— —

des-

brasileñas

de

hubo que

ge-

campaña en cuatro gran-

zonas para organizar la defensa.

De'-rumbado Flores fué convocada otra vez para proceder sultados

al

nombramiento de

deplorables

del

del

momento. Triunfaron

tra

ese

ñoz

a

fuso

el

fué

efecto de cumplir las leyes en vigencia.

cuando

pués,

de línea empezó

1854

no porque hubiera

apresuraba a prevenir en su proclama al

la

como base



reclutamiento de la Guardia

.se

columnas de

mautenimiento del orden interno y de las gaTodas nuestras revoluciones decía el han sido realizadas por las milicias y con las

del

milicias seguirá viviendo

sino

las

ejército de línea,

internacionales.

señor

fi-

final.

el

Más de una voz el

fuerza de línea estaba

la

año 1854 y debía en consecuencia mantenerse

el

la

Guardia Nacional

y oficiales, pero con

re-

punto de vista de la política fusionista los blancos

en algunas compañías y con-

triunfo protestaron los colorados con don José María Mucabeza.

!a

Uno de

los protestantes,

como fórmula transaccional

blancos

jefes

y

la

el

diputado Beltrán, pro-

formación de compañías

compañías de colorados, con

oficiales

de

de

su respectiva

HISTORIA DEL UBUGUAY

360

idea peregrina que fué recibida con vivas y mueras,

lüiación,

di-

solviéndose en seguida la reunión.

Hasta en el seno mismo del Gobierno empezó entonces a abrirse camino la idea de restablecer el ejército de línea, según lo demuestran estas palabras del Presidente del Senado al abrir las sesiones

Cuerpo Legislativo en febrero de 1856:

del

«Es

honorables

necesario,

señores,

que

formación

la

una

de

fuerza de línea venga a reemplazar a las fuerzas ciudadanas, pues

que

de

ahí

resultarán

vuestra alta

grandes

ventajas

que

no

ocultarán

se

a

penetración.»

La reforma

militar.

de 1854 trató de llevar adelante la reforma mili-

'La Legislatura

Poder Eje-

tar sancionada bajo el gobiermo de Giró, autorizando al

cutivo para contratar

un empréstito de dos millones de pesos

cu-

yas bases deberían ser sometidas a la Asamblea.

Al año siguiente presentó don José María de Diputados un proyecto mediante

el

Muñoz

a

Cámara

la

reformados

cual los

recibi-

rían títulos de la deuda consolidada al tipo de la última amortización, 1858,

en cuatro cuotas que se entregarían en 1855, 1856, 1857 y el interés del 18 Vo anual, debiendo destinarse la mitad

con

de todo lo que se ahorrara deuda. Pero ni

el

al

ambiente

aumento

político,

ni

del fondo amortizante de la

mucho menos

el

ambiente

financiero permitían recurrir al crédito, y la iniciativa fracasó una

vez más.

La

Policía.

'El

gobierno de Flores presentó a la Asamblea en 1854

un pro-

yecto de reorganización policial, sobre la base de una Intendencia

radicada en Montevideo con jurisdicción sobre todas las Jefaturas de campaña.

La Comisión de Legislación de

la

Cámara de Diputados,

conocer que se trataba de una concentración era violatorio

del

régimen establecido por

creyó que

útil,

la

Constitución,

sentó otro proyecto que fué sancionado por dicha Legislativo,

que acordaba

perintendencia de la tal

objeto

una brigada

mismo proyecto

el

al

Policía

Jefe

Jefe

de

policial

Político

Político

toda la

de

rama

del

Montevideo

sin

des-

el

plan

y

pre-

Cuerpo la

su-

República y creaba con

de caballería. tendría voto

De acuerdo con

el

deliberativo en los

consejos de gobierno para todo lo relativo a los objetos de su ramo.

GOBIERNO DE FLOEES

361

Ya hemos visto en el curso de este mismo capítulo que la idea de la brigada policial encontró ambiente propicio al sancionarse j! presupuesto de 1855, pero sin los resultados que se esperaban sefún

demuestra

lo

quizá

plan

porque

documentación de

la

en buena parte

salido

cande que

una expedición revolucionaria que rumbo a Buenos Aires, invo habían recibido tres meses de sueido

nuestro puerto con

de

las

Jefe Político de la Capital, se disculpaba

haber disuelto

no

de

1856

había

época,

de organización.

Don Francisco Lecocq, en

la

considerable atraso en los pagos dificultaba todo

el

policías

sólo

el número de agentes era diez menor que el de la fuerza expedicionaria compuesta de doscientos hombres bien equipados y hasta con artillería! Recogiendo una idea lanzada por la prensa, dirigió ese nrsmo año el Ministro de la Guerra una circular a las Juntas Económi-

en todo

el

transcurso de 1855 y que

veces

co-Administrativas, estimulándolas a que pidieran a los estancieros y vecinos en general su concurso pecuniario para el

sostenimiento

de las policías. La de Montevideo nombró Comisiones seccionales

con ta! objeto y las de los departamentos la imitaron en el acto. El vecindario de Cerro Largo fué de los primeros en hacerse cargo del pago de las policías de varias secciones.

Tan

violentas situaciones creaba

nes de 1855

el

precipitadamente

dando con diera a la

el

atraso en los pagos, que a

fi-

Jefe Político de San José se vio obligado a salir

de

su

diepartamento

lugar a que

con

rumbo

a

la

Capital,

pueblo se reuniera en la plaza y piJunta que se hiciera cargo de la autoridad vacante. Es ello

el

que ya no tenía disculpas de qué echar

mano para calmar

las jus-

tas impaciencias de sus subalternos.



el de Paysandú nada menos que el coroAmbrosio Sandes, de valor realmente legendario fué asalta-

Otro Jefe Político, nel



do en

el

mismo año por

friega

el

cinto de oro que llevaba!

su propio asistente, perdiendo en la

re-

Fué para suministrar algunas migajas a los tesoros policiales que ona ley de 18S5 restableció el pasaporte. La Comisión de Hacienda el

de

asunto,

medida, y minante.

la

Cámara de Diputados,

invocaba la

la

vigilancia

al

despachar

favorablemente

portuaria que no

pobreza del erario que era realmente

justificaba la la

causa deter-

La Policía de Montevideo gestionó y obtuvo en 1854 un decreto que castigaba con multas de 50 a 500 pesos a los dueños de los establecimientos en donde se permitieran juegos de envite y que

HISTORIA DEL UBUGUAT.

362

aplicaba

importe de las multas a construcción y mejoramiento

el

de caminos.

Por otro decreto del mismo año,

el

Gobierno entregó a una Comi-

sión popular la recaudación y administración del

renos y

En

al

impuesto de

se-

Jefe de Policía la jefatura del Cuerpo de Serenos.

que nada se innovaba era en materia de extinción de la En 1854 informaba la prensa, en tono de protesta,

lo

raza camina.

que la matanza era realizada a palos en plena

que

calle;

la

ma-

yor parte de los perros quedaban durante largas horas con esterto-

que por todas partes había regueros de sangre;

que

res

de vida;

los

cadáveres quedaban en exposición hasta que se corrompían!

lia

Iglesia contra la >Iasonei*ía.

En

1855

anunció

la

prensa

la

inauguración

Y

sónica denominada «El Sol Oriental».

Gobierno

el

vicario apostólico don

en

el

de

una logia ma-

acto se presentó al

Juan Benito Lamas, diciendo que

esa logia que era la primera de su género que se establecía en

Uruguay, violaba

las

el

leyes y debía, en consecuencia, prohibirse su

funcionamiento.

No hemos

encontrado en

la

documentación

dato o antecedente que demuestre que

el

de la época ningún

Gobierno atendiese o

chazase la pretensión de la Iglesia, pretensión que. ella

en pugna con

el

régimen de libertad creado por

sí,

re-

estaba

la Constitución de

República y no contradicho por las leyes nacionales.

la

Correos.

En 1855

su el

Memoria

anual

Ministro de

al

Cuerpo

Gobierno don

Legislativo,

Alejandro

hacía constar en

Chucarro,

que «la

Administración de Correos se desempeñaba con bastante regularidad».

Y

correos

para demostrarlo decía que cada mes salían de Montevideo para los departamentos del interior, amén de uno par-

ticular que iba hasta Carmelo.

No

era seguramente

escribía los

bajo

la

como para

presión

de las

batir

gobiernos de entonces luchaban para

comunicaciones postales.

el

Ministro

dificultades

con que

palmas.

enormes el

Pero

establecimiento de las

363

OOBIEBNO DE FLOBES

Cantíos y sociedades.

Un grupo de empleados de comercio de Montevideo que nía estimular

espíritu

el

se propo-

de ahorro, fundó en 1854 una sociedad

denominada «Mutualidad», con

capital de

12,000

pesos en acciones

de 120 pesos integrables por cuotas mensuales. La sociedad duraría tres años, vencidos los cuales se procedería al reparto del capital y de las utilidades entre los socios. En 1855 empezó a funcionar en Paysandú una presidida

adherentes,

260

por

asociación

de

don Domingo

don Miguel Horta,

Mendilaharsu y don Vicente Mongrel, que sólo admitía «socios euy cuyos fines concretaban así los estatutos: «Prestarse

ropeos»

apoyo mutuo en

los socios

los casos de revolución

en

el

país, gue-

rra civil u otros trastornos políticos, para preservar sus personas en tales circunse intereses de todos los actos de violencia que tancias no puedan prevenir las autoridades legítimas de la República»; recabar el nombramiento de un Vicecónsul, llamado a ha-

de los españoles; socorrer a los pobres en casos de enfermedad u otros accidentes que inhabiliten para el traba.io; abstenerse de toda participación en la política interna del

cer respetar los derechos

país.

Pocas semanas después

pensamiento de

el

los

residentes

espa-

Paysandú repercutía entre los extranjeros de Montevideo, quienes fundaban también una sociedad de extranjeros bajo un reglamento que luego de referirse a la frecuencia de nuestros mo-

ñoles de

vimientos revolucionarios y a

la

insuficiencia de la protección de

gobiernos, señalaba así los fines de la sociedad:

'.os

iSocorrer

a

los

pobres,

dirimir las cuestiones

establecimiento de una

entre

extranjeros,

fomentar

la

inmigración, establecer un diario, defender contra todo ataque

ile-

provocar

el

colonia

agrícola,

gal la persona e intereses de los socios, abstenerse absolv.tamente

en

las

cuestiones de la política local.

Teatros y espectáculos públicos.

La

edificación

ralizarse bajo siguiente,

y

del

la

la

Teatro

presión

Solís,

reiniciada en 1852, volvió a

de los acontecimientos

paralización continuó hasta

1854

políticos

del

pa-

año

en que los accio-

nistas resolvieron llevar adelante las obras.

A

finalizar el

año 1855

el

Directorio que presidía don Juan Mi-

HISTORIA DEL UBUGUAY

364

Martínez,

guel

anunció a

los

accionistas que sólo

quedaban pen-

dientes las obras de ornato y de comodidad interior;

que había que

gastar para

que

el

teatro

que todo

abriera sus

lo

puertas se

reducía a 20,000 patacones, y que para obtener esa suma existía todavía en caja un saldo de once acciones de las trescientas representativas del capital de 180,000 pesos en que se había sido presu-

puestado rección

En

el

del

esa

se llamaba los

edificio.

Agregaba que

los

arquitecto Garmendia,

trabajos estaban bajo la

autor del

di-

plano.

misma asamblea, fué bautizado el teatro, que entonces «De La Empresa», con el nombre de «Solís». Uno de

accionistas propuso la denominación de Teatro de la

Paz,

in-

vocando que la obra había sido reanudada en una época de paz y de prosperidad y que era también en una época de paz que .legaba

a su

término.



«La sociedad formada para la construcción del teatro decía «El Comercio del Plata» ofrece tal vez el resultado más feliz de todos los que se han ensayado hasta hoy, gracias a la buena elección de mandatarios. La guerra, la miseria, no han sido bastantes a destruir el pensamiento de la sociedad. Ahí está el Teatro Solís, sirviendo de testimonio irrecusable de lo que pueden los hojnbres cuando quieren». Las obras del Teatro Colón de Buenos Aires fueron iniciadas el mismo año en que terminaban las de Solís. También en 1855 quedaron terminados los trabajos para el establecimiento de las carreras inglesas, de que hemos hablado al ocuparnos de la administración Giró, y en el acto fué inaugurada la pista. Era la primera vez que en Montevideo se corrían carreras inglesas, y la población se trasladó a Maroñas en carruajes, en carros y a caballo. Detrás del público seguía un convoy de carros



con comestibles y bebidas para las tiendas volantes instaladas a En el programa de la fiesta largo de la pista. la entrada y a lo inaugural figuraban

cinco carreras,

con entradas

de 4 patacones

por caballo y premios de 3 a 6 onzas de oro. Un mes después eran reanudadas en la Unión las corridas de toros en un local provisorio, porque todavía no había terminado la

construcción El

producto

de de

la

las

gran

plaza

corridas

que se

más adelante

destinaba

a

la

fué

estrenada.

prosecución

i&s obras. Según la crónica de esas primeras funciones,

el

de

número

de concurrentes oscilaba normalmente alrededor de 4,u00. Al finalizar sificó

el el

año llegó de España una cuadrilla de toreros que intenentusiasmo por esos espectáculos.

GOBIERNO DE FLORES

3G5

Todos los coches, carros, carretillas y caballos de Montevideo eran puestos a contribución en los días de carreras o de corridas. Los algunos con toldo y otros sin él, partían desde la Plaza Independencia bajo una tarifa moderada de seis vintenes por viaje.

carros, '

Los carruajes valían, en cambio, hasta cincuenta pesos.

El cadáveí' de Artigas abandonajdo en el rincón de una

pública

oficina

I

Desde mediados de 1853 obraba en el Ministerio de Gobierno una solicitud a favor de la repatriación de los restos de Artigas, promovida por los deudos del procer. El ambiento político estaba

muy

agitado

y

la

en que

siguiente,

solicitud

quedó olvidada hasta

gobierno de Flores

el

resolvió

enero

año

del

atenderla

y

en-

Paraguay presidida per don Manuel Acosta y Lara, de la que luego no volvió a hablarse por haber sido llamado dicho ciudadano al Ministerio de viar

con

misión

una

objeto

ese

especial

al

Hacienda.

En

nombrado

abril de 1855 fué

ante

confidencial

que figuraba

en

rrucciones

Gobierno

el

doctor Estanislao Vega agente

el

Paraguayo,

con

repatriación

la

de

un pliego de los

restos

ins-

de Ar-

tigas.

El doctor Vega marchó de inmedianto para su destino y a mediados

septiembre

de

estaba

con

regreso

de

las

preciosas

reli-

quias confiadas a su celo patriótico.

Artigas

su misión

poderoso

— decía — «es

e

dar cuenta al Gobierno del cumplimiento de primero sin disputa en cuyo corazón se alzó

al el

indomable

sentimiento de nuestra independencia na-

el

cional».



tuvo lugar

el 20 de agosto de 1855. El solar estaba señalado «con

una piedra

La exhumación



según

las

actas

acompañadas

de I3s que este país produce, con la inscripción General Artigas, año 1850». Lueo^o de levantada vara y l;añados

media hasta que apareció en

cloruro

Etcheverría, y

depositada

en

de

cal

colocados la

Iglesia,

«Uruguay» encargado

por

luego a

la

el

el

la

piedra «se

cadáver».

doctor

de oreados

José

Los huesos fueron Luis

en medicina don

en una urna que fué

espera de su conducción

del transporte.

Don

cavó como

al

vapor

El cura don Cornelio Contre-

ras ;iizo constar que por resolución del Gobierno Paraguayo ningún otro cadáver había sido enterrado en aquel solar. El doctor Vega desembarcó los restos de Artigas a raíz de la

HISTORIA DEL URUGUAY

366

Nadie

caída del gobierno de Flores. terribles

se

acordó en esos momentos

de exequias ni de honores y la urna quedó olvidada en

un rincón de

la

Capitanía del Puerto.

Un mes después

del desembarco,

Leandro Gómez pedía

al

nuevo

gobierno,

desde las columnas editoriales de «La Nación», que

cara los

restos

de

Artigas

«del

en que estaban abandonados, tos» la

y los hiciera conducir

misma

labras: el

losa que

les al

rincón

de

la

sa-

oficina pública^>

decretara «unos funerales modes-

Cementerio,

mandando

servía de mausoleo en la

esculpir

«en

Asunción» estas pa-

«Siempre patriota, siempre honrado, siempre pobre hasta en

sepulcro». iSe trata



exclamaba

el

futuro héroe de Pp.ysandú



«del pri-

mero y más heroico campeón, del primero y más eminente ciudadano, de la primera y más grande de nuestras glorias, del que íué siempre modelo de abnegación y del más puro patriotismo». Pero el país estaba en crisis. La diplomacia brasileña acababa (te armar a los orientales unos contra otros, para que se despedazaran;

las tropas

encargadas de recuperar la plaza ya conquistada el fuego en la esperanza de hacerse dueñas

en 1816, seguían atizando

de la codiciada presa; y los huesos de Artigas continuaron arrincola Capitanía, sin que la voz de Leandro Gómez encon-

nados en trara

eco alguno ni en

el

Gobierno ni en

el

pueblo!

III

GOBIERNO DE PEREIRA- 1856-1860

CAPÍTULO

VII

Movimiento político Preliminaa-es de la elección pi-esidencial de

1836.

—La

candida-

tura de don Gabi-iel Antonio Pei-eira.

Hemos hablado

en

capítulo

el

IV de

la

alianza política

de los

generales Manuel Oribe y Venancio Flores para luchar contra los

conservadores

Esa hasta

resolver

y

último

el

triunfante

día

de

la

candidatura

la

problema

el

presidencial.

surgida a raíz de la revolución de 1855,

alianza,

campaña presidencial

persistió

que

resultó

don Gabriel Antonio Pereira, patro-

de

dos militares que

cinada por aquellos

en

respectivamente

ejercían

la

Blanco y la jefatura del Partido Colorado Hemos hablado también de un decreto del mismo año según el

"jefatura

Partido

del

cual todos aquellos que hubieran emigrado a consecuencia de la re-

volución de noviembre sólo podrían regresar a la República con per-

miso especial de prohibió

la autoridad.

Un nuevo

decreto de enero de 1856

regreso de los diputados don José María Muñoz, don

el

Fernando Torres y don Eduardo Beltrán, hasta que la Cámara de si liabía o no lugar a formación de

que formaban parte declarara causa.

Xo cial

debían, pues, actuar los conservadores en

el

proceso presiden-

de 1856.

Las elecciones de Alcalde Ordinario y Defensor de Menores, pracficadas al empezar el año, denunciaban ya cuál sería la orientación

de les sucesos.

En

las

de Montevideo

tanciada de «La Nación» za Constitución y desde



allí

la

marchaban

compactas, con los oficiales a 'as urnas.

En

la villa de la



valga la crónica circuns-

Guardia Nacional formó en la

los

cabeza,

Unión

los

la Pla-

soldados en compañías

a depositar sus votos en

guardias nacionales votarom

también, uniformados y armados, con la sola variante de que al desfilar ante las urnas

daban vivas a Oribe. En

pa armada rodeó una mesa electoral para impedir

Juan

P.

Caravia, e impuso la lista

IV

-

24.

oficial.

la el

Florida la

tro-

triunfo de don

HISTORIA DEL URUGUAY

370

El general Flores, que seguía al frente de la Comandancia de Armas, se dirigió a principios de febrero de 1856 al Ministerio de la Guerra en demanda de autorización para reunir una fuerza de 300 a 400 hombres de pelea. estoy al decía fundando su pedido «Yo, como uno de tantos cabo de todos los resortes interiores y exteriores que se ponen en





juego en

pueblo y en

el

campaña para

la

alterar

orden público

el

y renovar las sangrientas escenas pasadas, con motivo de

ma Y

elección de Presidente

Supremo de

próxi-

la

República».

la

a raíz de concedida la autorización, promovía en su domicilio una reunión de diputados para uniformar opiniones a favor de la

candidatura de don Gabriel Antonio Pereira.

César Díaz.

Jja <"andi(latiira del genei-al

Los

periodistas

Montevideo

de

datura

opiniones y por general César Díaz.

del

proclamaron

Uno de

de 1855 y la

del.

gobierno de

Los

las publicaciones

candi-

le

nega-

de los revoluciona-

la

provincia de Buenos Aires,

la

Hcu^aolón esta última de que también se hacía eco

según una de

reunirse la

que

diarios

los

ron su voto decía que esa candidatura era rios

también

resolvieron

mayoría

para uniformar

el

general Flores,

del candidato.

presentan sus progi-amas.

canrlidato.s

El general Díaz, que desde 1853 estaba al frente de la Legación

Oriental

en

renunció

Argentina,

la

deo a ponerse

al

su

entonces un programa presidencial en

Observancia de travíos

de

los

partidos

políticos

que pretendiese envolver do

la

Don

ma

en

industria;

Gabriel el

el

que prometía

país

al

repatriación

en

la

sanción

cado en esa altura,

si

lo siguiente:

todo trance de

el

fomento

de los emigrados.

los

a

su

turno un

progra-

trabajos realizados por los la

la

política

de fusión

Constitución

a

buscaré

mis actos gubernativos... Colohombre privado conserva alguna simpa-

de el

a

nuevas desgracias»;

Antonio Pereira publicó

que luego de referirse a

y

Montevi-

cuanto a los antiguos ex-

que respondía su candidatura victoriosa: «En el franco y leal cumplimiento de fuerza

a

y rigor ejemplar contra todo

generales Oribe y Flores, decía afirmando

la

vino

y

Constitución, conservación

«tolerancia nacional en

paz interior,

la

la

cargo

de los trabajos de sus amigos, publicando

frente

.

todos

371

Q0BIKBT70 DE PEBEIBA

por

tía

Estado, padre de la gran fami-

el jefe del

cual partido,

tal o

no tendrá más colores que los purísimos colores de lia esos la bandera de la patria. Debajo de su sombra cabemos todos; colores simbolizan recuerdos sin mancha; son acaso el único vínculo que puede todavía unirnos. Ellos me impondrán el deber de oriental,

mi gobierno proclamando

iniciar

unión,

la

la

concordia,

el

olvi-

malas pasiones... Mande quien mande, la mitad del pueblo oriental no puede conservar en eterna tutela a la otra nuestras

de

do

mitad».

las niediflaifi (le fuerza.

Rcl(i-ii
presidencial quedaba, pues, empeñada. De un lado candidatura de don Gabriel Antonio Pereira, sostenida por los generales Oribe y Flores con toda la fuerza gubernativa en sus

La contienda

la

manos. Del otro

la

candidatura del general César Díaz, apoyada También figuraba, aunque en segundo plano,

los conservadores.

I,'or

una tercera candidatura,

impuesta por

que venía

cargo que rechazó

brasileña,

doctor Florentino Castellanos que

del

la

sostuvo

general Flores

el

la

diplomacia

candidato.

el

Las medidas de fuerza se iban entretanto acentuando a meque se aproximaba la fecha de la elección presidencial. A

dida

Comisión Permanente para oir Guerra acerca de denuncias

principios de febrero se reunió la

explicaciones

las

del

Ministro

que concretaba en esta forma «El día nesta,

se

del

2

corriente, a

tomaba a todas

de el

diputado don Mateo Magariños: salida

la

las

la

de una casa de familia ho-

personas que no tenían una papele-

de nacionalidad extranjera o que no llevaban en su bolsillo el diploma de excepción del servicio militar, llegando el desacato de

ta

ejecutores de tan arbitraria medida basta

los

presentante de

la

Nación,

coincidiendo ese

que ese mismo día se

lación

había hecho

detener a algún reacto

al

con

la

interpe-

Ministerio

respec-

También coincide ese proceder con la aglomeración de fuerzas de la campaña sobre la Capital, en circunstancias en que

tivo

.

.

.

debe abrir sus sesiones ordinarias Contestó se

que

el

Cuerpo Legislativo».

Ministro interpelado, en cuanto a las levas que sólo de arrestar desertores de línea y guardias nacionales

el

trataba

eludían

el

enrolamiento,

y

en

cuanto

fuerzas, que se trataba de 300 a 400

Comandante de

Armas

miento del orden en

la

general Capital.

cha con esas explicaciones.

Flores,

Y

a

la

aglomeración

hombres que había reunido

la

con

destino al

de el

manteni-

Comisión se dio por

satisfe-

HISTORIA DEL URUGUAY

372

sesiones ordinarias de la Asamblea, pidió el la don Enrique Muñoz que fuera llamado el mismo Secre-

Reabiertas

senador tario

de Estado para dar explicaciones acerca de las fuerzas reu-

nidas en

torno de

Asamblea como

si

Se hace

Capital.

la

careciera

de apoyo

sidad de sustituir ese apoyo por ción no prosperó y

el

el

aparecer



nacional y

dijo



a la

hubiera nece-

de las bayonetas. Pero la mo-

aparato bélico continuó su obra de coacción.

Ante esa ola de fuerza que avanzaba, el diputado don Patricio Vázquez dirigió una carta abierta a don Gabriel Antonio Pereira, para prevenirle que no debía contar con su voto. Los generales han prescindido deliberadamente de la del pacto le decía





opinión de los legisladores y

la

candidatura de usted es hoy abso-

lutamente rechazada por efecto de la intervención de Oribe. Una semana antes de las elecciones el Comandante de Armas general Plores pasó revista a las tropas en la plaza de Artola,

como

para exhibir los elementos con que contaba. Casi en los la

barra de

la

mismos momentos ocurrían escenas tumultuosas en Cámara de Diputados; se realizaban arrestos por

Policía de la Capital; y estallaba una asonada de italianos, a consecuencia de haber sido muerto un niño de esa nacionalidad por

ia

una^bala escapada del cuartel de guardias nacionales, asonada que dio lugar a la prisión y destierro de varios oficiales de la antigua legión de Garibaldi y a

un decreto que colocaba

el

Departamento de

Policía «bajo la dependencia del Ministerio de la Guerra».

El

César

general

Díaz,

sobre

cuyo domicilio ejercía

la

Policía

una vigilancia abrumadora, creyó necesario buscar garantías y se usiló en la Legación de España juntamente con el coronel Francisco Tajes y otros de sus amigos.

Recién ejercicio

el

del

día

antes de la elección

el

Presidente del Senado en

poder ejecutivo, don José María Pía, resolvió cerrar

su brevísimo período presidencial de quince días adjuntando a la

.\samblea un decreto por de regresar T.rán,

al

el

que se dejaba sin efecto

la

prohibición

país impuesta a los diputados Muñoz, Torres y Bel-

y se declaraba que todos los emigrados políticos tenían abier-

tas las puertas de la patria.

En

la

noche de ese mismo día

el

Presidente de la

Cámara de

Diputados reunió en torno de su mesa a los legisladores, y éstos después de concluido el banquete fueron en busca de los generales César Díaz, Enrique Martínez y del coronel Francisco Tajes, que estaban asilados, y acompañaron hasta su domicilio al primero de dichos ciudadanos.

GOBIEBNO DE PEEEIRA

Ya

contienda

la

triunfo

el

de

presidencial

podía

373

considerarse

terminada con

fórmula patrocinada por los generales

la

Oribe

y

Flores y ningún factor podía, en consecuencia, turbar la absoluta tranquilidad

del

ambiente

salvo

oficial,

prensa opositora apelaba con

el

del

tiempo, a que

la

palabras de «El Nacional» de

estas

1839:

«Todo

lo

que no va en armonía con las necesidades y gustos del momento. Hoja seca de un árbol

pueblo, es efímero, ridículo y del

verde y El

ce.

marchitada en medio de

vigoroso,

polvo sin

vida

la

para caer

al

ofender la marcha progresiva del ser a quien pertene-

pueblo es eterno, como el tiempo; sus voluntades son como las del Dios que interpreta, y un día, un día menos, un día, tienen su ejecución profunda e infalible».

eternas al fin

Complicaciones del lado ai'gentino.

Con el retiro de las tropas brasileñas había desaparecido momentáneamente uno de los dos factores de nuestros disturbios políinternos,

ticos

el

de

la

frontera terrestre que nos envolvía en la

anarquía para acabar de absorbernos. Pero quedaba en pie

el

otro

que fatalment3 nos envolvía en PUS propios disturbios por efecto de Aáejas y nunca interrumpidas

factor,

el

de

vinculaciones

la

frontera

entre

los

fluvial,

partidos

existentes

aquende y allende

el

Hata Aquí rrar

el

había

Y

había tratado por todos los medios imaginables de ente-

dicho

Urquiza,

repitiendo

era.

Ni vencidos

frase

la

día siguiente de la paz, blancos

al

sin

se

pasado y de abrir una nueva

de

ni

vencedores

don Andrés Lamas.

y colorados

se

confundían,

que un solo proceso viniera a alterar la perfecta cordialidad

del ambiente.

Terminada la batalla de Caseros matanza de prisioneros. El regimiento entero del coro-

Allá ocurría todo lo contrario.

empezó

la

nel Aquino, que se había sublevado para pasarse a Rosas, fué ex-

terminado. Las víctimas eran alineadas de a 10 y de a 20 para

ganar tiempo y los cadáveres quedaban en el camino o eran colgados en los árboles. Son datos del general César Díaz, testigo presencial

A

la

de los

el

ley.

campo de

batalla sucedió la

En diciembre de

1853 quedó

causa seguida a Ciríaco Cuitiño y Leandro Alem por asesinatos de 1840 y 1842. La sentencia los condenaba a la

concluida !os

de los sucesos.

matanza de prisioneros en Tribunales en nombre de la la

374

del uruguay

iii.srouiA

pena de muerte en una V-aza pública de Buenos Aires, con sus«los cadáveres en una horca por 4 horas». Cuando los

iiensión de

marcha para

reos, en

el

patíbulo, pasaban por la

Casa de Gobierno

Cuitiño vivó varias veces a Rosas, vociferando que «moría por

Todavía en 1857

Congreso Argentino seguía estimulando

el

procesos, con proyectos que patria»,

lesa

él

su causa».

piTr

y

sostiene que

como

hacían exclamar

el

doctor Félix Frías:

al

los

que declaraba a Rosas «reo de

«Hay quien

todo es permitido contra los tiranos. Xo, señores:

a

hombres de principios no les es permitido todo contra los tiranos; no les es permitido imitarlos». Habían seguido, pues, hirviendo las pasiones de partido en Buenos Aires, y eso en alguna forma tenía que repercutir entre los orientales, tan íntimamente vinculados a los argentinos hasta la conclusión de la Guerra Grande. A principios de 1856 salió de Montevideo una expedición de rei'olucionarios argentinos bajo el mando del general Costa. Esa '•xpedición desembarcó en la Colonia y luego de recibir algunas los

incorporaciones

cruzó

río

el

siguió

y

viaje

que

componían,

la

demás en

la

apenas

sobrevivieron

persecución o en

el

30,

completar

hasta

programa. Pero con resultado tan adverso, que de

los

su

16ü hombres

pereciendo

todos

los

patíbulo, en razón de que las tro-

pas gubernativas tenían la terrible consigna de fusilar a todos los prisioneros.

Pues bien: desde las primeras notas diplomáticas a que dio origen esa revolución, afirmó el Gobierno de Buenos Aires que el cuerpo expedicionario se había formado y reclutado en la Unión, ccn

ayuda de «un notable

jefe que ejercía poderosa influencia Gobierno Oriental», desempeñado a la sazón por don Manuel Basilio Bustamante. Y aclarando la referencia decía en otra ue sus notas el Ministro de Relaciones don Valentín Alsina: la

sobre

el

«Desde

la siniestra

aparición de Oribe en estas regiones copiosa

sangre ha corrido en ambas márgenes del Plata... cipal

sin

él,

tenido

impotencia.'

a su


el

prin-

él

los

que

Más

él

devorar los

empujó

sus

alentó

proveyó y armó;

servicio los

fin, los

Sin

profundos rencores a Buenos Aires, los conspiradores

sus

hubieran oro;

El es

autor de la situación que ambos Gobiernos deploran...

y

él

recursos de su a la

malvados deseos en su propia facilitó

la

obra;

él

derramó

cooperó a los enganches, posición

empresa temeraria

y

de su

él

su

puso

influencia;

él,

y a la muerte.»

Estas y otras acusaciones de connivencia provocaron la renuncia

GOBIEBNO DE PEBEIRA

375

de nuestro Ministro de üül)ierno docior Rodríguez y del Jefe de Policía don Francisco Lecocq, y un decreto gubernativo de des-

en el que se declaraba que los generales y coroneles argentinos José María Flores, Gerónimo Costa, José Joaquín Baltar, í'gravio

Ramón

Bustos, Hilario Lagos y León Benítez, «habían abusado del

que

asilo

República, promoviendo ilegalmente enganche y armamento de gente destigobierno vecino y amigo de Buenos Aires»,

concediera

les

dentro de su territorio a

riada

y

hostilizar

prohibía

les

el

al

la

el

regreso

«como indignos de

la

hospitalidad

del

i>ueblo oriental».

ambiente

El

quedaba

internacional

envenenado

represalia que habrían de tener ejecución bajo

Gabriel

el

con

de

ideas

gobierno de don

Antonio Pereira, ya próximo a estrenarse bajo

la

protec-

de Oribe y de Flores.

ción

La elección de don eonfrat^yn.Vlíwl


A

sesión del

la

1."

Gabriel política a

Antonio Pereira. que da origen.

de marzo de

185(j,

Manifestaciones

destinada a la elección de

Presidente de la República, concurrieron 33 legisladores de los 45

Mue formaban parte de

la

Asamblea. Tres de

los

inasistentes,

diputados Muñoz, Torres y Beltrán estaban en Buenos

mo hemos

los

Aires,

co-

un decreto de destierro revocado el decir, cuando ya no había tiempo para

dicho, por efecto de

día antes de la elección, es

que efectuaran

el

regreso.

Según «El Comercio», uno de y sus inmediaciones estaban

los

diarios de la época, la ciudad

convertidas

ese

día en

un cuartel

aglomeración de fuerzas que habla decretado

el

Comandante de Armas general Venancio Flores para garantir

el

por efecto de

la

orden.

De

los

33 legisladores presentes, 24 votaron por

Pereira,

i.onic

Ellauri y

Cuando barra:

1

7

don Florentino Castellanos,

por

don Gabriel Anpor

1

don José

por don Juan Miguel Martínez.

se

«¡Viva

proclamó el

el

resultado de la votación

Presidente de la República!

gritaron de la

¡mueran

los salvajes

unitarios»!

«Trataré de sacar el

al

país

del

caos

en que se encuentra»,

dijo

Presidente electo luego de prestar juramento. el mando que ejercía el señor Pía, habló el PreCámara de Diputados señor Palomeque, en términos

Al transferirse sidente de la

que fueron estruendosamente aplaudidos por todos

ban

el

salón de la Casa de Gobierno. «Hago votos

los al

que llena,

Ser Supremo

HISTORIA DEL URUGUAY

376

— dijo — para

que iluminando a V. E.

se oiga de boca ni se

quepa

le

gloria de que no

la

lean en ningún corazón oriental los títulos

devorantes y desastrosos de blancos y colorados, de conservadores

y floristas».

Era

voto que estaba en

el

el

La Comisión Directiva de que

«Unión Liberal» celebró una de expresar

en la que luego

extraordinaria

sión

ambiente.

la

se-

Presidente,

su

Sociedad había i>ermanecido a la expectativa por efecto de

la

pasiones de partido, pero que ya había llegado la oportunidad

las

de entrar en actividad, fué sancionada

siguiente declaración con

la

voto de don Luis Lamas, don Manuel Herrera y Obes, don Ber-

el

nardo

P. Berro,

don Jaime Estrázulas, don Manuel Errasquin. don

Hordeñana,

Francisco

don

don

Velazoo,

Aml>ro!sio

Oándido

Joa-

don Fermín Ferreira y otros ciudadanos: «El programa del Presidente de la República se armoniza cumplidamente con los principios y bases constitutivas de la Sociedad,

nicó,

en

y

consecuencia,

Respondiendo

los

mayo de

mensaje de apertura de las sesiones ordinarias, la Asamblea General en su minuta de

al

1856:

«La Honorable Asamblea General Legislativa, en propender

a la

desde su nacimiento y en en

ca

con su sanción

lo

político

civil,

análogas a nuestro cutivo

judicial

y

modo de

ser

no omitirá someter todos .

desgarrado

de que

el

los

de

interés

seno de

el

in-

pa-

la

administración públi-

la

sufra

actual,

el

completa de las

extinción

pasiones políticas que han

sensatas tria

del

meses después

dos

decía

resuelve apoyar y secundar la acción medios que sus estatutos le permitan.»

ella

Gobierno por todos

modificaciones

las

espera que

proyectos

más

Poder Eje-

el

necesarios

a

tan

gran objeto».

Ti'ata el Presidente electo

de indepeiMlSziarse de

siip

dos tutores.

Don Gabriel Antonio Pereira, impuesto por los generales Floros y Oribe, trató en el acto de tirar los andadores. Casi

mismo rales,

todos

los

diarios

día de la elección

pidiéndoles

que

de

declararan

época

están

una carta que

ellos

contestes

política a

en

que

el

dichos gene-

no tomarían

ingei'en-

marcha gubernativa. Y están contestes también

cia

alguna en

en

que Oribe respondió que

la

la

dirigió

no intervendría y que Flores mosvaguedades en su contestación, según unos, o no contestó abwiutamente según otros.

tró

GOBIERNO DE PEBEIRA

3-77

El primer empujón debía darse, pues, contra Flores y efectivamente así lo hizo el Presidente Pereira. Pocas horas de'jpnés de la toma de posesión del mando, dictó un decreto dejando sin efecto las medidas militares adoptadas en diciembre del año anterior, y entre ellas la Comandancia de Armas que desempeñaba

Al día siguiente se quiso paliar la destitución con

Flores.

gumento de que fu

renuncia.

Quedaba en suelto

hecho

El

dictado y que

pie

era sólo

y

Su.s prüiieros

Pereira constituyó

da

cartera de Gobierno y

García

e intensa labor:

la

Hacienda,

de

al

así

le

fué confia-

Relaciones Exteriores, a don coronel

al

Carlos el

Doro-

San Vicente

de

la

que procuraba

cal-

ávido de reformas:

público,

al

re-

un ministerio que era garan-

doctor José Ellauri

Guerra, y a la vez publicó un manifiesto en

mar

decreto se había

el

estaba producido.

de tiempo.

buena

teo

político

Pero su alejamiento estaba también

Oribe.

cuestión

tía de la

embargo, que

sin

aotos adniiimstJ'ativos.

Presidente

El

era,

rompimiento

el

ar-

el

propio Flores había presentado con anterioridad

el

medidas que la situación exige deben ser de alta importancia y grande trascendencia para el país. Nada más peligroso que precipitarse en semejantes casos. Confío, pues, que se espera«I^as

rá con calma

manda, les.

No

resultado de la meditación profunda que ella de-

el

como

así

el

de la ejecución rápida que

descuidaré, sin embargo,

el

me propongo

dar-

ocurrir pronta y eficazmente a

que no admiten dilación.

Las palabras que una promesa que he de sostener con lealtad y altura. Podré sucumbir en la lucha, pero mi divisa ha sido y será siempre paz, unión, progreso y libertad».

las

dejo

exigencias justas

aquí

consignadas

son

El Ministro de Hacienda don

pacho a todos

los

Doroteo García reunió en su des-

periodistas de Montevideo y les hizo conocer

el

programa, que había redactado en esta forma con su colega don José Ellauri:

completa;

«Solidaridad ministros; sual

de

puesto;

fiscalización

los

ingresos

equilibrio

Lueí?o de leído allí

reunidos:

y

celebración

de

de acuerdos

rentas;

las

egresos;

en

publicación

acatamiento a

la

consejo

diaria ley

y

de

de

menpresu-

.financiero».

ese programa,

dijo

el

Ministro a los periodistas

«El náufrago que se halla en la isla desierta y que

no tiene de qué

vivir, pide al

que va navegando que

lo salve, arro-

DEL URUGUAY

HISTORIA

378

de un

La prensa, que portadora

jáudole un poco de alimento.

gran contingente de ideas va de acuerdo con expresando las mxesidades del país, puede en

opinión pública

la

su

trayecto

soco-

rrer al ministerio arrojándole ideas y haciéndole advertencias opor-

tunas

encuentre

para que

para

Preparándose

cómo

necesidades.»

sus

satisfacer

obra

realizar

intensa,

Ministros

los

presen-

Presidente un proyecto de decreto que en el acto fué promulgado, por el cual se creaba un Consejo Consultivo, divitaron a

vez

la

al

dido en tres secciones que presidirían los secretarios de Estado. El objeto era obtener

el

asesoramiento de los hombres entendidos en

todos los asuntos de importancia ya planteados o que se planteasen en

porvenir. Era la realización de un

el

años antes por

el

pensamiento lanzado

doctor Eduardo Acevedo en "La Constitución" y

que más tarde habría de aplicar también don nistro de Hacienda del Gobierno de Berro. bió

encontrar en

pués quedó aplazado

el

Mi-

Villalba,

de-

embargo, porque pocos días desfuncionamiento del Consejo hasta nueva

práctica,

la

Tomás

Algunas dificultades

sin

resolución.

Los primeros actos del ministerio traducían, pues, un plan de contralor, orden y economía que los órganos más c^j-

publicidad,

racterizados de la prensa se apresuraron a aplaudir.

Uno de

los

tenedores de

diarios la

que habían formado en

las

de los sos-

filas

candidatura del general César Díaz, «El Mercurio»,

señalando esas tendencias sanas, decía:

«Jamás administración alguna halló

al

país en

estado de pos-

el

tración y desquicio en que lo encuentra la del señor Pereira;

tampoco

pero

ha encontrado jamás mayor cooperación, más sincero deseo de ser ayudada. Del exceso del mal ha surgido el bien. La animación que se nota, la confianza en el poradministración

alguna

venir y la esperanza que todos abrigamos de superar las dificulta-

des qne nos rodean, no tienen otra base que la persuasión en que todos estamos de que el Gobierno va a emprender con mano firme

reforma que

la

la

administración del país reclama,

y

de que

el

Gobierno va a reorganizar, regularizar y moralizar esa administración».

Eran grandes, luchar

Desde lla

te

el

la

sin

embargo,

las

dificultades

con

(|ue

tenía

que

ministerio.

caída de Rosas, decía «El Comercio del Plata», la ori-

aumento de población, de empuje mercantil, de progreso material, y la oriental de occidental del Plata es teatro de

fuer-

des-

población y «decaimiento de la riqueza casi fabulosa de los tiempos

GOBIERNO DE PEBEIRA

anteriores a

Tal

Es que

allá se

conservaron intactos

que aquí fueron destruidos por

tos vitales,

efectivamente

era de

tuación

184:'».

379

los

dos

país, pero le había

causa

fundamental había

asegurado

la

elemen-

los

guerra.

Rosas

la

paisas.

la

de

oprimido

diversa

la

brutalmente

si-

al

paz exterminando a todos los cau-

de las provincias, capaces de hacer sombra a su dictadura. Uruguay, en cambio, había vivido en plena guerra civil y sus

dillos

El

habían

liquezas

que

restablecida

devoradas por

sido

normalidad,

la

los

combatientes.

mientras

que

del

De manera

otro

lado

del

Plata se presentaban intactas las fuentes productoras, de este lado áólo escombros

!«'

nuevo bajo

Desde

la.s

agitaciones políticas.

primeros días de marzo empezó

los

que

grados

aparecían por todas partes.

se

habían

radicado

en

la

el

cuencia de los sucesos revolucionarios de 1855 ticas

regreso de los emi-

Argentina y

como conse-

agitaciones polí-

subsiguientes.

Uno de

ellos,

don Juan José Cernadas, argentino que

habíri

ad-

quirido carta de ciudadanía uruguaya, fué obligado por la Policía

La Cámara de Diputados, que

a reembarcarse en el acto.

ba en esos mismos momentos del decreto de^ permitía

se entera-

Presi-i-^ ;te

Pía c.ue

regreso de los desterrados, interpeló al Gobierno y con-

el

el

doctor Ellauri que se trataba simplemen'e de medidas po-

liciales,

«contra un hombre turbulento e inmoral en su conducta».

testó

Obligado a entrar en mayores detalles hizo un paréntesis n'siro só

para entrevistarse con

a la

Cámara para

el

Presidente Pereira y luego

el

.

Mi-

-.egre-

advertir que la medida no podía ser revoca-

da y que había recibido instrucciones «para no entrar en disculo que hacía presente a la Cámara para que ella resolviese».

sión,

También estaba intranquila donde según argentina,

el

las

la

campaña, sobre todo en Mercedes,

crónicas enviadas de aquella localidad a la prensa

Máximo Pérez había reunido

coronel

fuerzas,

invo-

cando instrucciones del general Flores para sofocar un movimiento revolucionario que se atribuía a los conservadores.

Grave agresión eontra Apenas terminado Entre

los

este

.Uputados consei'vadoi'es.

primer incidente, ocurrió otro más gra-

que habían regresado de

la Argentina figuraban los diputados conservadores don José María Muñoz, don Fernando To-

ve.

los

i

2

HISTORIA DEL URUGUAY

380

don Eduardo Beltrán. Subía

rres y

segundo de

el

ellos

escale-

las

ras del Cabildo para ocupar su banca, cuando fué brutalmente agredido, agresión

que se repitió con varios otros diputados

der las escaleras luego de terminada la sesión, todo ta de

la

descen-

al

ello

a la vis-

guardia de cárcel y de los agentes de Policía que esta-

ban como inmovilizados. Los mismos que agredían en esa forma a, algunos de los diputados, vitoreaban y alzaban en hombros al Presidente de la Cámara doctor Palomeque. El Presidente Pereira se dirigió a la Cámara con la promesa medidas enérgicas y a

ele

adoptar

de

desagravio.

«Un hecho inaudito



decía



vez

la

publicó

un manifiesto

acaba de tener lugar en

la

misma

impune y vilmente Código Fundamental del

casa de ia Representación Nacional, atacándose el

algunos miembros de

Estado que garante jer,

ella.

Ajado

así el

inviolabilidad de los que invisten tal carác-

la

Presidente de la República ha debido tomar y ha tomado

el

uimediatamente

las

disposiciones oportunas para castigar con todo

rigor de la ley a los que resulten autores de tan criminal aten-

ti

tado.»

medidas

Las

parecían

iniciales

ligo de los culpables.

Fué

realmente

destituido

el

César y se mandó instruir un sumario. claro ces

el

al

cas-

Pero en seguida resultó

propósito presidencial de salvar a los agresores, y enton-

doctor Ellauri

el

encaminadas

Jefe Político don Clemente

resolvió

alejarse

del

Ministerio de Gobierno

que desempeñaba.

Una vez

llenada la vacante con el doctor Joaquín Requena, apaun nuevo manifiesto en que el gobernante decía: «Que adherido con fuerte voluntad al programa de) Presidente,

reció

por norte :;es.

.

la

unión,

la

concordia,

el

olvido

de las

malas pasio

.?>

Era esa 'OS

que su constante anhelo tendría

Indeclinable en su decisión;

sería

la tercera

veintitantos

días

proclama de don Gabriel Antonio Pereira, en de

presidencia

que contaba,

como

lo

hacía

notar sarcásticamente la prensa.

El sumario, entretanto, en

el

que figuraba una declaración del

diputado don Fernando Torres con la lista de los agresores, quedó en los archivos del Ministerio de Gobierno durante 14 meses, hasta junio de 1857, en que fué pasado al Juzgado del Crimen con un decreto que prevenía que la indagación

«para hacer constar los promotores y principales autores de las ofensas de palabras y de he'ho contra algunos representantes, no había dado resultado».

381

GOBIEKNO UE PEBEIRA

Desoyendo esa recomendación indirecta a favor de los agresores, Juez de Crimen libró orden de arresto contra don Narciso 'icl Castillo, don Francisco Oril)e, don Eduardo Díaz, don Pedro P. Botana, don Manuel Méndez Caldeira, don Díaz, don Santiago Fiancisco Ramos da Rúa y capitán Malbárez, orden que la Policía ninguno de linio contestando que no había podido aprehender

ol

i

dichos ciudadanos, por lo cual dispuso

el

Juzgado que se libraran

exhortos a las autoridades de todos los departamentos y se pasara

nota

de

la

Ministerio de Gobierno solicitando que excitara

al

celo

el

Policía.

coujiu-aclón de los conservadores.

i;n;j

el primer mes de la nueva preun tercer suceso de mayor repercusión podefecubrimieuto de una conjuración de los con-

Todavía no había transcurrido sidencia cuando ocurría todavía:

lítica

el

servadores.

Pereira

Presidente

El

decretó

el

arresto

destierro

y

Buenos

a

Aires del general César Díaz, del coronel Francisco Tajes, del co-

mandante

y de los capita/íes Fernández y Larragoitia y Comandancia General de Armas que había suprimido primeros días de marzo, como medio de eliminar del esce-

Susini

restableció la

en los

nario político creto



general Flores. «Siendo necesario

al

atender a

la



decía

conservación del orden interno de

la

de-

el

Capital,

que aparece perturbado por hombres inquietos...» Al frente de Comandancia fué colocado el general Manuel Freiré.

Todos '.

periodistas de

los

eunión en

sente Jas

lo

Montevideo fueron

Casa de Gobierno, donde

la

difícil

de

la

situación

y

les

el

convocados a una

Ministro

pidió

la

les

hizo

pre-

que no contrariasen

medidas gubernativas porque se procedía sobre

la

base de he-

chos ciertos.

Según -rido

el

el'

acuerdo publicado en esos mismos momentos, había ocu-

caso grave de conmoción interior exigido por la ley fun-

damental para

más contenía ínensaje a la

«Que en

Iv,

la

adopción de medidas prontas de seguridad. Nada

documento para explicar Asamblea General, agregaba

ese

suceso.

Presidente Pereira:

noche del 26 (marzo) y en las noches anteriores, s'j en casa del general César Díaz, cuyo número

hacían

reuniones

llegó a

ser

de 80 y de 100 individuos,

y oficiales aue se nombran, .^asas

Pero en su

el el

entre ellos algunos

y eso sin contar otras

inmediatas a la del general Díaz;

que

ai

jefof,

reuniones en

mismo tiempo

se

HISTORIA DEL URUGUAY

382

iiiterlaba

aún

seducir

a

soldados

los

comandante

a yu

del

Escuadrón de

y

Artillería,

sargento mayor don Benigr.o Evia a quien

el

se ofreció con reiteración el

empleo de coronel de

absoluto del cuerpo y todo

el

mando

artillería y

dinero que necesitase para

su

y



familia, garantiendo esto con firmas del comercio de esta plaza».

La Asamblea General aprobó Ejecutivo por

medidas adoptadas por el Poder para perfeccio-

las

«absolutamente necesarias

juzgarlas

nar la grande obra de nuestra

reorganización social,

establecién-

dose así bajo bases duraderas y saludables esa paz tan anhelada por todos».

El general Manuel Oribe, que conservaba todavía sus posiciones fie

coautor de la presidencia Pereira, concurrió

la

autoridad

con

Batallón

2.°

el

de

sostenimiento de

al

Guardias

Nacionales

de

la

IJnión y otras fuerzas que había reunido desde los primeros ama-

gos de revolución.

Tranquilizados algo los espíritus, dirigió

marzo una circular confidencial

de

raes

que bregaba a favor de

la

Gobierno a fines del Jefes Políticos, en

el

a

los

extinción de los partidos tradicionales.

Véase en qué términos:

«He creído conveniente en

establecer con usted

confidencial,

carácter

sin

perjuicio

de

la

una correspondencia correspondencia

ofi-

que es de práctica, y que por ella me instruya de todo lo que se relaciona a las mejoras y adelantos del departamento, para

cial

Jomarlas en consideración y atenderlas según las circunstancias y estado

el

pasiones 'as

del

erario

rencorosas

lo

de

Y como desgraciadamente

permitan.

ciegan

partido

primeras y más serias atenciones de

de conservar

de

todos

modos

la

almas

las

los

ilusas,

Jefes

una

Políticos

las

de será

armonía y perfecta inteligencia

entre las autoridades locales para de

común acuerdo disponer de

los medios que estén a su alcance y que las antiguas divisiones de partidos desaparezcan para siempre y que todos los ciudadanos,

sin odiosas excepciones ni

quilo de sus

libertades

diferencias,

y de

entren

derechos

los

goce tran-

al

fin

al

que

les

acuerdan

las

?eyes.»

Una

inaiiifestación

Pero efecto

las

de

(lo

agitaciones

la'?

los

generale« Oribo y Flores.

volvieron

a

acentuarse en gran parte por

resultancias del sumario instruido a raíz de la

con-

juración que acababa de fracasar.

El senador don

Luis

Lamas

solicitó

su

pasaporte para alejarse

GOBIERNO DE PEREIRA

momentáneamente

del

comandante don Juan José Poyo campo y traído luego a un

El

país.

383

lué arrestado en su establecimiento de

de Montevideo.

cuartel

nminencia de que

«una

Uno

de

diarios

los

explosión

hablar

a

llegó

dando

terrible»,

con

lugar

de

la

ello

a

Policía llamara al editor y le previniera «que la autoridad

la

reprimir toda demostración en

¡L^abrfa

sentido de la referida ame-

el

naza». Varios individuos armados se atrincheraron en una barraca

de

Plaza Cagancha y desde

la

de fusilería con

que cayeron

Policía

la

y

allí

cabecillas y fué

los

mantuvieron un nutrido fuego

con un piquete de

tomada

En

que

había

pública

tranquilidad

la

resuelto

matar a dos Comisarios.

seno del Parlamento surgió entonces

el

iirmonía entre

sobre

factores

los

la

base del

la

idea de asegurar

de

restablecimiento

que habían contribuido a

problema presidencial, y dando manos a

le!

re-

de una

sultando de las averiguaciones practicadas que se trataba gavilla

haáta

artillería,

barraca por asalto,

la

la

la

solución

obra se acercaron

la

varios senadores y diputados a don Gabriel Antonio Pereira para

que tomara

reclirle

la

iniciativa

de una reunión a la que serían

•nvitados los generales Flores y Oribe.

Como

consecuencia

de esos

un manifiesto de solidaridad

apareció

trabajos política,

en

el

en

abril

que decían

de

los

1856

referi-

dos generales: «El

pacto

Jjierno

que

ceiebiamos

constitucional

que con

aceptación

que se pública

para afianzar había recayó

de en

la

elegir la

estabilidad el

1."

de

del

go-

marzo y

persona del distinguido

ciudadano don Gabriel Antonio Pereira, no sólo no ha desmerecido

un ápice de sus compromisos, sino que en la reunión confidencial que hemos sido invitados por el Poder Ejecutivo a solicitud de

í.

varios

senadores y representantes que

la

pidieron,

ha sido explí-

cita V

categóricamente por cada uno de los que suscriben ratificada, prestando cooperación franca y leal a sus actos.»

Era una declaración de forma. En el fondo continuaban los antagonismos que habían dado margen desde los primeros días de marzo a la destitución del general Flores. Por otra parte, el mal de

la intranquilidad reconocía causas más hondas, a las que el Manifiesto no podía absolutamente poner fin. El mes de mayo fué de intensas alarmas tanto en la Capital •omo en la camnaña.

Como el

resultado seguramente del acuerdo a que habían arribado Pereira y los generales Oribe y Flores, fué decre-

Presidente

tado

ol

licénciamiento de la guardia nacional de infantería de la

HISTORIA

384

URUGUAY

DEL

compañía de pardos y morenos.

Capital. Sólo debía quedar en pie la

Pero '4ue

hacerse efectivo

al

era

el

licénciamiento en la villa de la Unión

el

centro militar

de

desacató la orden

Oribe,

coman-

el

dante don Santiago Botana, a título «de que el Gobierno los dejaba atados con esa medida en virtud de haber contraído compro-

misos políticos». El comandante Botana fué destituido como consecuencia de ese desacato.

Casi en los mismos momentos llegaba a Tacuarembó don Pedro

Chucarro con y

nombramiento de Jefe

el

el

resolvía

sión

del

dillaban

fensa Jefe

departamento

impedir a viva fuerza que dicho ciudadano tomara posecargo. Los comandantes Barbat y Azambuya, que acauel

movimiento popular, organizaron cantones para

Político.

veces

contra

pueblo

del

mando

Manuel

del general lo

fuerzas

las

De Montevideo

que

policiales

salieron

entonces

la

de-

rodeaban

al

bajo

tropas

el

Freiré, que rodearon el pueblo y varias

atacaron con lamentables bajas de uno y otro lado. Des-

pués de nueve días de

sitio,

mediación y con

la

Jefe

el

mandantes Azambuya y Barbat 1.0S

Político de ese

vecindario estimulado por la Junta Económico-Administrativa

garantía

Chucarro y

Político

arribaron a un

del

general

co-

los

convenio bajo

la

Antonio Xetto, en que

contendientes pactaban de potencia a potencia, como verdade-

ros beligerantes.

He

aquí los términos de ese documento:

«Deseosos unos y otros de poner término a las aciagas escenas

que contristan

al

pueblo en estos momentos y

evitar

las

fatale.^

consecuencias que podrían surgir de su continuación, han acordado,

humanidad y de los vínuna misma patria, el Entretanto que la suprema auto-

poseídos del sentimiento de la paz, de la culos que a todos nos ligan

siguiente convenio:

Artículo

como a 1."

hijos de

ridad del Estado no adopte una resolución definitiva que concilie las

circunstancias desgraciadas en que se halla envuelto

depar-

el

tamento, las fuerzas de una parte del pueblo y las que conserva a sus inmediatas órdenes el Jefe Político cesarán desde este momento sus hostilidades y provocaciones, campándose las fuerzas de caballería fuera del pueblo a una legua de distancia entre los arroyos Tranqueras y Tacuarembó Chico, y la de los cantones

dentro de

la

misma población adonde mejor

tentar ninguna actitud tráfico

hostil,

lo

siendo permitido

de aquellos artículos de

prefieran,

además

primera necesidad sin

sin

'os

sería difícil la subsistencia de las familias y de las tropas.

os-

libre

el

cna'es



Art.

Será mandada retirar a sus respectivos distritos toda y cualespor las partes quiera fuerzas cuya reunión haya sido ordenada 2.".

GOBIERNO DE PEREIRA

385

contendientes para tomar parte en las hostilidades que no pueden ser permitidas por la ley.



Art.

El honor y la lealtad de los

Z."

ciudadanos en armas que toman por testigos a la Providencia y a la patria de la religiosidad y buena fe de este pacto dirigido

ahorrar la sangre de sus conciudadanos, dando un testimonio cuente de su respeto

al

Código de

la

Nación y a

poderes cons-

los

más exacto y

tituidos por ella, será la mejor garantía de su

.i

elo-

seve-

ro cumplimiento».

Pero salieron de Montevideo nuevos contingentes de tropas, y enAzambuya y Barbat tuvieron que someter-

tonces los comandantes

Montevideo, y sometidos a cuya jurisdicción permanecieron hasta paz do octubre, en que el Gobierno pidió el so-

se y fueron arrestados y conducidos a la justicia e'

del crimen, bajo

aniversario de la

breseimiento de la causa. El resto de la

campaña permaneció en

atmósfera malsana que don Juan

San José en junio de 1856: «No hay garantías para el

pero dentro de una

paz,

P.

Caravia describía así desde

trabajo.

El derecho de propiedad se

halla desconocido y sobre todo en la ganadería es enteramente ilu-

por el escandaloso abuso con que se comete el abigeato; y que es peor en esa lucha diaria del trabajo con la holgazanería, de la honradez contra el vicio, de la propiedad contra el robo, el hombre laborioso que no encuentra la protección que le acuerdan

sorio lo

las leyes sale vencido, el desaliento lo

luego la necesidad f-enta

lo

conduce

al

un cómodo y seguro modo de

Continúa

intvjMiuilidad.

la

reduce a

crimen, cuya

la

inacción y

impunidad

le

muy pre-

vivir.»

El gemejral Flores pide y obtiene au-

torización para alejarse del país.

continuaba a su vez bajo

Lia Capital

la

presión de grandes alar-

ma. En la Cámara de Diputados era interpelado Guerra sobre la reorganización de fuerzas en la centro de la influencia de Oribe, y contestaba se trataba del reclutamiento de

el

Ministro de la

villa

el

de la Unión,

Ministro que sólo

una cincuentena de guardias nacio-

nales a cargo del comandante Bastarrica, con destino a custodia de

capitán

El

presos.

Feliciano

González,

uno de

los

desterrados

a Buenos Aires por efecto de la conjuración de los conservadores,

que había vuelto a radicarse en Montevideo, era arrestado y emseguida. Contra el comandante Leandro Gómez se

barcado en

expedía orden de prisión por publicaciones relativas a los sucesos de Tacuarembó. IV

-

25.

HISTORIA DEL URUGUAY

386

Véase cómo describía «El Comercio del Plata» ii

mediados de julio: «Se intenta voltear

dicen

minisiterio,

el

unos,

estado del país

y

no

expresan

por qué. Habrá un conflicto, dicen otros, luego

lo intenta ni

f.ii\ién

el

(¡ue las Cámaras se cierren, y no se dice por qué ni para qué. El Gobierno está preparado y toma sus medidas, es también una moneda que corre y tiene crédito. Los generales del pacto se aprestan

y

cada uno reúne más o menos ostensiblemente sus recursos.

Y

en

medio de esta lluvia de rumores y de cálculos en que no intervienen sino los deseos puramente individuales, pocos se acuerdan de que en un país coiistitucionalmente dirigido, que tiene su carta clara y exque se halla en una época rigurosamente normal, radie gobierna sino el Gobierno, y que cada uno de esos rumores que toma cuerpo como los fantasmas de la noche en la imaginación de los niños, aleja de Montevideo a todo el que tiene algo que perder y en qué emplear su tiempo tranquila y útilmente. Así, de día en día, merced a esa fiebre de creaciones políticas, nos vamos quedando sin comercio, sin rentas, sin población, porque no hay que

plícita,

engañarse: el

si

a media docena de individuos puede

río se revuelva, a

quilo y claro

como

^-ien

convenir qu?

mil no les conviene sino que corra tran-

es naturab>.

Para el Presidente Pereira la causa principal del malestar emanaba de la pobreza fiscal, de manera que dominada ésta el país telita que entrar en un período de prosperidad. Véase cómo se expresaba si

cerrar las sesiones

al

a la

ordinarias

del

misma hora en que «El Comercio

Cuerpo Legislativo,

ca-

del Plata» presentaba

el

cuadro que acabamos de reproducir:

«Aunque la presidencia del 1." de marzo se ha dedicado empeñosamente a la conservación de la paz pública y del orden social por medio de una política equitativa fundada en las prescripciones de Iti Constitución, no puede lisonjearse de haberlo conseguido comel tiempo y la constancia han de remover que las antiguas y prolongadas disensiones civiles han creado. La pobreza fiscal es uno de esos obstáculos, el m \s difícil

pletamente, porque sólo

los obstáculos

do vencer,

el

que requiero mayor dedicación y más energías.

Era.

unos, necosurio buscar por una parto recursos y arbitrios y dismi-

nuir por otra parte las

ori>i;aciouo><

rable Asamblea General al sancionar

dc ni reducciones ni reformas,

ouodaudo púbHco:>.

ol

Podor Kjocutlvo sin

las lo

y los gastos; ol

y

como

la

Hono-

Presupuesto no ha efei'tua-

sesiones legislativas terminan iudisiHMisablo v>ara

el

servicio

GOBIERNO DE PEREIRA

A

387

de las sesiones extraordinarias de la Asamblea con-

la clausura

currieron 23 legisladores, de los que sólo 16 entraron a sala. Dan-

do las explicaciones del hecho decía

al

día siguiente

«El

Comer-

cio del Plata»:

«Parecen,

¿A

pues,

como

ñalaban

pasados

momentos que algunos rumores

los

se-

terribles».

cuál de los caudillos políticos podían referirse esos rumores?

Horas antes de

la

clausura de las sesiones ordinarias, el general al Presidente Pereira para anunciarle que

Flores se había dirigido tenía

el

propósito de alejarse del país, y a la Asamblea en

de venia para embarcarse.

demanda



«La alarma que mis enemigos esparcen decía en su nota al Prehaciendo creer a esta sociedad que soy el agente de nuevas conmociones políticas que traerán necesariamente desgracias insidente



mensas a mi patria, me impulsa a dejar esta tierra tan querida, probando una vez más que jamás seré yo quien promueva el desorden y el desquicio de ella»... Entendía que mi nombre jamás sería considerado como elemento desorganizador, «pero hoy que mis enemigos se empeñan en comprometerme para agitar la sociedad, y que aún el mismo Gobierno quiere creerlo tegún lo muestran las extraordinarias medidas que de su orden se toman, resuelvo alejarme...». Conviene «a los intereses del país decía en su nota a la Asamblea y a los míos particulares mi ausencia al extranjero por algún tiempo... Con este sacrificio doloroso creo hacer un nuevo servicio a mi querida patria».





El Presidente contestó que

no le faltarían garantías para vivir y que las medidas adoptadas, por extraordinarias que fueran, no podían afectarlo a él personalmente. en

país

el

Y

la

Asamblea acordó

cíe

abnegación

De

nufv<>^ los destieiTos.

y

la

patriotismo

venia

que

«reconociendo la

los

sentimientos

motivaban».

Parecía ya eliminado todo peligro de reacción. Pero

el

Gobierno

debió conservar vivoo temores. El hecho es que antes de finalizar el

mes de

(ion

julio, procedía al arresto del redactor de «La República» José P. Pintos, de don Narciso del Castillo y de don Pedro P.

Díaz.

Esos tres ciudadanos luego

embarcados

destierro decía

el

con

fueron

conducidos a

la

Isla

de

Ratas y

Buenos Aires. Justificando Poder Ejecutivo a la Comisión Permanente: destino

a

el

HISTORIA DEL URUGUAY

388

Con motivo de

rebelión de

la

ciamiento de sus promotores,

Tacuarembó y

los

del arresto y enjui-

señores Pintos, Castillo y Díaz ve-

nían extremando su propaganda de oposición. Espera

que

cutivo

la

el Poder EjeAsamblea aprobará esta medida, como ya lo hizo

anteriormente con otras análogas, a pesar de que entonces se

más representación

taba «de ciudadanos de

tra-

de otros méri-

social,

personales y de buenos servicios a la patria».

tos

argumento no era

El

atendible,

Que hubieran sido aprobados para que

en

el

los

sin

duda alguna. El hecho de anteriores, no bastaba

destierros

Gobierno siguiera desterrando cada vez que se alzara

prensa un voto de censura. Pero la Comisión Permanente se

la

declaró convencida y aprobó los decretos de extrañamiento.

Pocas semanas después regresaban de su destierro, con rización del Gobierno,

el

general César Díaz,

Tajes y los comandantes Solsona y

Susini,

el

y

la

auto-

coronel Francisco la

calma volvía a

aparentemente en Montevideo.

reinar

comicios pai'ciales de 1856. El Pi«esid«nte Pereira en lucha

J..O.S

con

el

general Oribe.

Cinco departamentos de sentación

Quedó para

en

las

resuelto, pues,

el

la

República habían quedado sin repre-

Cámaras y era que

el

necesario llenar

las

vacantes.

pueblo sería convocado con ese objeto

último domingo de noviembre de 1856. el general Oribe mantenían todavía inaunque habían estado a punto de romperagitaciones de julio, con motivo de varias reuniones

El Presidente Pereira y sus

tactas las

relaciones,

durante las

de guardias nacionales en la villa de la Unión, sin orden del Estado Mayor. Durante la función de gala dada en Oí;

el

el

Teatro Solís

aniversario de la batalla de Sarandí, Oribe tomó asiento a la

derecha del Presidente Pereira. La prensa de Buenos Aires señaló el

hecho como lina claudicación colorada, pero

adicta al Gobierno,

replicó

la

de Montevideo,

que Oribe había actuado en la batalla

que se rememoraba y que Pereira, por otra parte, no era un mandatario de

Pero

al

asegurarse

partido.

aproximarse la

los

comicios de noviembre trató Oribe de

adhesión de los electos y entonces se produjo

el

rom-

pimiento. El Presidente que estaba resuelto a imponer

sus propios candi-

empezó por dirigir una circular a los Alcaldes Ordinarios de todos los departamentos con el propósito de obstaculizar los datos,

trabajos de Oribe.

389

-GOBIERNO DE PEBEIRA





«el oaudidato de mi les decía Aunque ya conocen ustedes Aceptación entre los que se proponen para ese departamento, deb>)

Impedir que se abuse de mi nombre o del nombre del Gobierno por los agentes del general Oribe suponiendo que las candidaturas de éste son convenidas y acordadas conmigo o con Procure contrariar semejante abuso por medio de

Gobierno.

el

sus

.

relaciones

y de los Jueces de Paz o Tenientes Alcaldes, a iün de que se persuadan los ciudadanos de que con ese proceder se trata de encu o disfrazar una oposición

brir

puede ser perniciosa para

Presidente de la República que

al

paz...

la

Es natural que yo prefiera

para las bancas de la representación nacional entre buenos trados

ciudadanos a

Uno de

influencia

r.'t

de

más

recios

choques

los

departamento de

presidencial

datura del

Ambos adicta riaído



al

al

la del

de

eran

candidatos

compromisos

que

tuvo

en

llagar

el

general Oribe a favor de la candi-

filiación

Gobierno afirmaba que

serios

el

Castellanos.

Florentino

doctor

fué

con motivo de la elección de senador, se inclinaba a la candidatura de don

la Capital

Juan Miguel Martínez y

ilus-

e

cuya cooperación estoy seguro».

aquellos

el

políticos

Pero

colorada.

prensa

la

doctor Castellanos había con-

con Oribe, acusación que

obli-

candidato a salir a la prensa para desmentir a sus detrac-

tores.

En

la

víspera de los comicios

apareció

una declaración con

la

firma de ciento y tantos ciudadanos, entre los que figuraban los generales Manuel Freiré, Enrique Martínez y Anacleto Medina, que estaba así concebida:

«En presencia de en

la

crisis

la

electoral

actitud

que ha asumido don Manuel Oribe

que atravesamos

e

importando esa actitud

tendencia de restablecer su funesto influjo, es deber de

la

los

amantes de

valezcan

esas

las

todos

instituciones y del orden oponerse a que pre-

candidaturas,

no por éstas

en

sí,

sino

por

la

in-

fluencia que las recomienda. Por eso y a fin de robustecer la ac-

ción de la autoridad, los ciudadanos que suscriben votarán por la

candidatura del señor don Juan Miguel Martínez, aceptada por

el

pueblo y por S. E. el señor Presidente de la República.» Resolvieron también adherir a la candidatura de don Juan Miguel

Martínez

algunos

de

los

miembros más caracterizados

del

Partido Blanco, como don Francisco Solano de Antuña, don Ataaasio Aguirre, don Francisco T^ecocq, don Antonio de las Carreras

y don Federico Nin Reyes.

«La aceptamos



decían en su manifiesto



porque toda lucha

HISTORIA DEL UKUGUAT

390

hoy tendería a hacer revivir

electoral

espíritu y las animosida-

el

des de los viejos partidos, y porque la extinción de esos partidos es la primera necesidad del país, necesidad proclamada por el

República y uniformemente reconocida por todos y sensatos. La aceptamos porque a má" de

Pi'esidente de la

hombres

los

ser

pacíficos

irreprochable, hay notoria conveniencia en robustecer con

ella

voto popular

el

acción

la

Presidente

del

marcha de reparación y concordia que

de la República en la

con su programa.»

inició

Oribe sale del país. El

día

de

f»ntes

comicios

los

Comandante

Gobierno noaibró

el

de Armas al g-eneral Medina, segundo jefe de la Comandancia de

Armas

Guardia Xacional

Una

vez organizado ese Estado Mayor, que podríamos llamar de

al general Manuel Freiré y jefe de la de extramuros al coronel Francisco Tajes.

concentración colorada atento

ingreso del coronel Tajes



uno movimiento revolucionario atribuido al general César Díaz el Ministro de la Guerra dirigió una resonante nota al general Medina, en la que le decía que notificara a don Manuel Oribe, «cuyo nombre se invocaba por los agitadores», que el Gobierno lo hacía «responsable de cualquiera de

desterrados

los

a

el

consecuencia

del



alteración del sosiego público».

«La actitud que han tomado ciertos hombres de la íntima relaManuel Oribe agregaba esa nota alarma a la po-



ción de don

blación r.o



nacional y extranjera de esta Capital,

pacífica

se limitan a buscar tranquilamente el triunfo de

pues

ellor,

su lista sino

que amenazan con las vías de hecho.»



«Yo tador

del

contestó

Oribe



orden público, ni

nunca he autorizo

sido,

ni

soy,

ni

seré

agi-

a nadie para que propague

amenazantes del orden público.» Pero una semana más tarde pedía y obtenía sus pasaportes para

especies

alejarse del país por razones de seguridad

bién en

el

personal, y quizá tam-

deseo de eludir la polémica a que uno de sus correligio-

Ambrosio Velazco, electo senador por Canelones, un violentísimo artículo en que exhumaba acusaciones correspondientes a la época de la Guerra Grande, por narios,

lo

el

doctor

provocaba con

actos

emanados

a su cargo en

«C/ónica

de

del

el

Juzg-ado

campo

varios

de

sitiador.

hechos

del

lo Civil,

Véase

el

general

que

el

articulista tenia

epígrafe de ese articulo.

don

Miuu'l Oribe du-

rante la época de los nueve años, en que gobernó despóticamente

OOBIEBNO DE PEBEIRA

disponiendo a su

de

arbitrio

vida

la

391

de

y

la

reputación

de los

ciudadanos y administrando sin cuenta ni razón el Tesoro público. y apropiándose del niismo modo las haciendas de los habitantes la campaña.» Quedaban, pues, eliminados del escenario político los dos generales del pacto que había dado origen a la candidatura Pereira

de

y en tren de halagadora cordialidad las relaciones con los conser-

vadores

representados

por

coronel

el

Francisco Tajes.

El resultad<» de los comicios.

Con iodo

el

aparato de fuerza desplegado y con

prestaban los conservadores taba

descontado

En

el

el

y

los

de las

triunfo

blancos

concurso que

el

de

alejados

candidaturas

Departamento de Montevideo obtuvo

la

Oribe,

es-

presidenciales. lista

oficial

1,442

votos computadas las secciones üe la ciudad. Cordón, Aguada, Miguelete,

Peñaro;,

Manga

Unión,

y

Toledo,

contra 995 que alcanzó

don Florentino Castellanos sostenido por Oribe.

En

la

sección de

la Unión, centro de la inñuencia oribista, la candidatura Castellanos obtuvo 344 votos, contra 28 de la candidatura oficial. El Co-

hombres de uno y otro partido como don Joaquín Suárez, don Luis Lamas, don Atanasio Aguirre, don Francisco Solano de Antuña y don Octavio Lapido, nombró senador a don Juan Miguel Martínez y suplentes a don Francisco Solano de Antuña, don Cándido Joanicó, don Manuel Herrera y Obes

legio Electoral integrado por

y don

Manuel Errasquin.

un Colegio Electoral que nomRegúnaga y suplentes a don Juan bró senador al doctor Emeterio Rodríguez, don José Vázquez Ledesma Adolfo Gómez, don Carlos y don Domingo León Costa. El Alcalde Ordinario de dicho depar-

En

la

tamentolegio

Florida obtuvo

al

comunicar

triunfante,

lo

triunfo

el

al

de Gobierno la lista del Coen esta forma reveladora de la índole

Ministerio

hacía

de los procedimientos electorales del día:

«Esos ciudadanos son

que presentó

los

el

pueblo

al

Supremo GoRegúnaga

bierno, de quien mereció aprobación para elegir al doctor

senador de ese departamento.»

En Canelones triunfó la Velazco como senador

lista

en que figuraba

el

doctor Ambro-

como suplentes don Marcelino SantuRafael Zipitría y don Carlos Vidal. Suárez, don rio, don Joaquín El cómputo de las secciones de Guadalupe, San Juan Bautista,

sio

y

Tala y Las Piedras arrojó 582 votos a favor de

la

lista

oficial

y

HISTORIA DEL URUGUAY

>92

149

a

En

a favor de la lista de oposición.

torno de la Mesa

Pando hubo algunos desórdenes que obligaron

toral de

enviar

tropas al

allí

Terminados

general Freiré.

del

Presidente Pereira, tan dado a las dirigió un manifiesto al país en que lejos de ocultar,

proclamas,

confesaba

mando

comicios,

elec-

Gobierno

al

los

el

ambajes su acción prominente en

sin

proceso

el

elec-

toral.

«Conocido

de

es



todos

decía



origen

el

de

la

oposición

contra las

candidaturas del pueblo y del Presidente de la República; conocidas son sus tendencias, y sin embargo los agentes de eta oposición y sus adictos han gozado de la libertad más perfecta, de la más completa para procurar el triunfo de sus listas en todas las secciones

está

de

del

parte

departamento. Ellos no han triunfado;

de

quien

y de las instituciones;

debía

de

estar:

parte

de

la

el

triunfo

autoridad

pero los opositores no han sido vencidos

por ninguna coacción, por ninguna resistencia indebida y hasta la fuerza pública, las fuerzas del Gobierno, han servido para garantirles el libre ejercicio de sus derechos, si

autoridad principios,

constitucional,

contrariar

es derecho contrariar la

causa

la

del

orden

y

de los

a la verdadera causa del pueblo, por favorecer preten-

siones individuales y revivir influencias personales del pasado.»

El Senado anula uno de los diplomas.

Habían triunfado

las listas oficiales,

mentos con detrimento de

los

pero en uno de los departa-

mismos

intereses

a que

respondía

la

intervención gubernativa en los comicios, dándose con ello lugar

a

dificultades

que hubo que allanar mediante

candidato victorioso. Nos referimos

al

doctor

la

eliminación

del

Emeterio Regúnaga,

senador por la Florida.

La Comisión de Poderes rias

que quedara pendiente

pidió el

durante

las

sesiones

preparato-

estudio de su diploma, pero la

yoría del Senado lo declaró incorporado y desde entonces

Regúnaga concurrió regularmente

a

el

ma-

doctor

todas las sesiones.

Varios meses después volvió a abrirse

el

debate al averiguarse

no parte del Departamento de Florida una de las secc'ones que mayor nilmero de votos había dado al doctor Regúnaga, y la Comisión encargada del estudio de ese punto aconsejó la si

formaba

o

convocatoria a nuevas elecciones, sin que

el

Senado pudiera

re-

solver nada, por razón de empate, hasta mediados de 1859 en que el

asunto entró de nuevo en

la

orden del

día,

y entonces para

de-

393

GOBIEBNO DE PEBEIRA

el doctor Regúnaga, que ya había actuado como senador desde 1857, es decir, durante dos y medio años, debía ser des-

clararse que

pojado de su diploma.

Lo singular es que en el curso de esa larga incubación parlamentarla alcanzó a dictarse una ley que declaró que la sección discutida formaba parte integrante del Departamento de la Florida, pero con la advertencia de que no podía subsanar

tal

los comicios

declaración por ser posterior a vicio

el

imputado

al

diploma del

doctor Regúnaga!

Elecciones de Alcalde Onlinai-io.

A

comicios parciales de los cinco departamentos que cade representación legislativa, subsiguieron en 1857 los de Alcalde Ordinario, con detalles poco tranquilizadores del punto de los

recían

vista de

En

la

intervención

oficial.

Departamento de

el

la Florida,

el

mismo cuya

elección sena-

turial se había decidido anular, llegó la coacción oficial a los

mayo-

Según una representación suscrita por el Alcalde Ordinario saliente, don José "Vázquez Ledesma, el suplente de dicho magistrado y varios amigos suyos se posesionaron del salón donde estaba depositada la urna y nombraron una mesa a su pares extremos.

ladar que sólo dejaba entrar a los amigos, y eso con tal rigor que

hasta

al

propio Alcalde titular lo había hecho retroceder por medio de

un centinela.

En

elecciones

las

vención

oficial

y de

de la Capital ello

mante en su informe anual a

La Comisión nisterio

dos por

acerca el.



de

también saltante

fué

la

inter-

resolvió dejar constancia la Comisión Perla

Asamblea.

decía ese informe

«algunos

actos



pidió

arbitrarios

explicaciones al mi-

y

violentos

cometi-

Jefe Político de la Capital en la elección de Alcalde Or-

dinario y cuyos actos importaban una coacción impuesta por la au-

toridad al libre ejercicio del derecho electoral. Esos actos eran de pública; pero el Ministro de Gobierno declaró que no eran conocidos y prometió en nombre del Presidente de la República que se levantarían respecto de ellos los informes necesa-

notoriedad 1g

rios y se trasmitirían al conocimiento de la

A

pesar de esa promesa y

que ella fué hecha,

la

Comisión Permanente.

de haber transcurrido un

mes desde

Comisión no ha sido instruida del resultado

de las averiguaciones ofrecidas por

el

ministerio».

HISTORIA DEL URUGUAY

394

Una nota tranquilizadora después de Terminados

comicios trató

los

los comicios.

Presidente Pereira de llevar

el

la

pacificación a los espíritus.

Revocó

y

fes

y

Tajes

coronel

de la Guardia Nacional,

jetaitura

contra

nombramiento de los generales Medina para la Comandancia de Armas

decretos de

los

Freiré y del

»

Oribe.

los

ser revocados

Y mandó

generales.

de los

iniciarse

la

lucha je-

sucesos políticos de 1853 y

invocando que

años subsiguientes,

sólo podían

al

que habían sido dados de baja por simples decretos

oficiales

administraitivos a consecuencia

de

dictados

Reintegró en sus empleos militares a todos los

de

los

despachos militares

acuerdo con las ordenanzas y leyes

liquidar los haberes

vencidos a los

militares

reintegrados.

Eran medidas oportunas.

A

de 1857

fines

debían realizarse los

comicios generales de senadores y diputados y había necesidad de tranquilizar

ambiente, para que la nueva

el

e

inevitable crisis po-

no impidiera al país desenvolver sus fuerzas productoras tan largamente estancadas. La CómiBión Permanente, de la que formaba parte uno de los primates del Partido Conservador, el doctor Pedro Bustamante, decía respondiendo a ese anhelo general al dar cuenta a la Asamblea lítica

de los sucesos del año anterior:

«Vuestra

Comisión'

acción del

la

Permanente

se

ha esforzado por segundar

Ejecutivo, llevando al efecto su espíritu de concilia-

ción hasta donde era compatible con sus deberes constitucionales.

Esta política era en

el

sentir

de vuestra Comisión

la

única que

consultaba los intereses generales del país y las exigencias de actualidad, y a

la

Comisión

vo desde un principio

el

le

es

la

grato haceros saber que ella tu-

concurso del Presidente de la República.

Si bien ha habido alguno que otro acto gubernativo de que la Comisión Permanente no ha creído de su deber hacerse solidaria, nin-

guno de

ellos

extraoi^dinaria

era

de

de las

Empieza de nuevo

la

carácter

tal

al

reclamase

la

convocatoria

aigitación electoral.

Desde mediados de 1857 empezó lor

que

Honorables Cámaras».

la

prensa a preocuparse con

Como

ca-

en general Gobierno un programa intervencionista igual o más amplio que de las elecciones de

noviembre.

se atribuyera

GOBIEBNO DE FEBEIBA

395

que acababa de ejecutarse, creyó oportuno

el

bierno doctor Joaquín Requena

una circular a

Ministro de Go-

el

especie mediante

la

Jefes Políticos.

los



Hay quien invoca

decía en ella



el

nombre

del Gobierno en

pero es necesario que se sepa que

trabajos electorales;

los

desautorizar

bierno, lejos de proceder así,

el

Go-

«ni indica ni acepta candidatos,

ni

oficialmente ni privadamente, y que la influencia oficial se empleará sólo para garantir el derecho electoral de los ciudadanos».

Horas después era a los Jefes Políticos

el

propio Presidente Pereira quien se dirigía

para insistir en las mismas ideas. Véase en

qué forma:

Poder Ejecutivo, que profesa

<8E1

el

más profundo

respeto a los

principios del sistema que nos rige y al derecho inviolable de los

ciudadanos, quiere que positivo

práctico,

y

el

sufragio en las elecciones sea un hecho

dejándolo en toda la plenitud de su libertad,

para que así cada pueblo pueda darse

representantes que

los

la ley

acuerda, recayendo la elección en los que realmente merezcan su

le

confianza.

De

ese modo, dejando

el

Poder Ejecutivo a

departa-

los

iKentos en pleno goce del gran derecho consignado en nuestro Có-

digo Fundamental,

podrán con entera confianza entregarse a sus

solas inspiraciones, y entonces con madurez, con tino y patriotismo fijarse en

hombres que vengan a

la

Asamblea a representar y

sos-

tener los verdaderos y legítimos intereses del país bien entendidos j

fuera de toda mezquindad de círculo o de partido. Conviene, pues,

que tanto

los

ciudadanos de la República como

delegados del Po-

los

der Ejecutivo se penetren de que tal es la mente del Gobierno, los

primeros para usar de sus derechos depositando en rales la

el

la

urnas electo-

voto libre de su espontánea voluntad;

patria

juzgarán

de

la

rectitud

de

su

porque así Dios y conciencia que en vir-

En

tud de los resultados absolverá o condenará a cada uno.

to

solemne que

servar

el

la

orden,

dadano en

el

del

depositario de la fuerza

sostener

ejercicio

y

hacer

respetar

más grandioso de Esta es

única

las

regalías

su derecho en

del

el

prerrogativa del

popular.

única en que reserva toda su acción. De este

habremos dado un gran paso en beneficio de

la

ciu-

sistema

representativo

la

ac-

para con-

pública

Ejecutivo y

la

cuan-

para que no ejerzan otra influencia en aquel

to a los segundos,

Poder

modo

República, de

la

y sus garantías no serán ya más el juguete de los caudillos y de los ambiciosos». Los Jefes Políticos se apresuraron a poner su lenguaje al diapaz,

de las instituciones;

pasón presidencial.

396

HISTORIA DEL rSXJGÜAY

El de Tacuarembó don Pedro Chucarro se limitó a contestar que el Poder Ejecutivo se pondría coto a

con la actitud que asumía «la demagogia».

rrer su

Pero

pluma en

el

Durazno don Juan Coronel dejó co«No me son desconocidos los círcu-

del

esta forma:

los políticos que comienzan a poner en juego sus relaciones e influencias para llenar sus miras en la elección de diputados que debe tener lugar en noviembre del presente año. Conforme en un todo

con los patrióticos deseos de V.

emplearé cuantos medios

E.,

es-

mi alcance para conducir ai camino de la razón a los buenos ciudadanos que más de una vez engañados por la hipocresía de hombres que se llaman patriotas, caen en el lazo que les tientén a

den y cooperan sin conocerlo

Hombres de partidarios.

al

desquicio y ruina de su país

estos, señor Presidente,

.

.

.

pocos

reconoce sobrada-

vecindario pacífico y laborioso

El

muy

en campaña tienen

amparo protector del gobierno de V. E., para dejar de acatar con la mayor obediencia sus resoluciones superiores... Ese rumor que esparcen los ambiciosos, de que V. E. patrocina tales o cuales candidatos, no es más que la idea perversa de predisponer los ánimos de algunos desgraciados que aún mente

las ventajas

que goza

conservan viejos rencores

al

de

los

errores

diputados a sujetos que nada les debe disfrutamos. Yo,

Excelentísimo

el

Señor,

pasados,

para

elevar

a

sosiego y mejora que hoy

influiré

cuanto pueda para

que en el departamento que V. E. ha confiado a mi cargo se proceda con arreglo a ley, llegado el tiempo de las elecciones. No ha-

más que procurar se conserve el orden debido en los comicios y unir mi juicio al de las personas sensatas para elevar a la dignidad de representantes hombres cuyos antecedentes y sentimienlé

tos patrióticos sean conocidos».

Pero como

Presidente Pereira estaba resuelto

el

en

el

fondo a

seguir interviniendo, tenía que haber lucha ardorosa dada la resolución

que había en

los

partidos

de disputarse

el

triunfo

al

pie

de las urnas.

Continuaba en 1853 por las

debían

vigencia la

Cámaras de

abrirse

de

enero

legislación

a

agosto,

ciudadanía y tenía cada ciudadano la

electoral

sancionada en

Giró, según la cual los registros cívicos

inscripción de los demás.

era el

indispensable

acreditar

la

derecho de reclamar contra

GOBIERNO DE PEBEIBA

397

La propaganda partidista. Enipezaroii

Para uno de

los

diarios

ellos

tiadicionalistas

era Oribe «el

por

hombre

caldear

preciso».

el

Para

ambiente. otro,

sólo

una agrupación «cubierta de crímenes y de infamias» podía juzgar en tal forma «a ex degolladoires y ex cuereadores». Hasta llegó u

insinuarse

tranquilizar

No escapaba lémica.

idea

la el

de

escenario el

la

expulsión

de

Oribe

como medio de

político.

Gobierno a

las

Sólo que algunos atacaban

incidencias de al

esa ardorosa poprimer magistrado mientras

que otros se dirigían exclusivamente contra sus Ministros. Más de una vez hubo que desmentir las noticias revolucionarias que emanaban de esa agria y tenaz controversia. En mayo, por ejemplo, tuvo el Gobierno que dirigir una circular a los Jefes Políi'icos ordenándoles que desautorizaran los rumores circulantes.

La anexión

del L'niguay a las Provincdas Unidas del

Río de

la

Plata.

Al doctor Juan Carlos Gómez, que era quien atizaba más formidablemente el fuego desde las columnas de «El Nacional», se atribuía el doble propósito de promover un movimiento revoluel gobierno de Pereira, análogo al que había dede Giró, y de trabajar a favor de la reincorporación de la República a las Provincias Unidas del Río de la Plata. Había vivido el doctor Gómez tres años en Buenos Aires, ac-

cionario contra

rrumbado

al

la prensa como leader del partido unitario en una gran campaña contra Urquiza, llena de incidentes que culminaron en diciembre de 1856 con una racha de duelos provocada por don Nicolás Calve desde las columnas de «La Reforma Pacífi-

tuando en

ca».

E;

primero fué

con

el

propio

doctor

Gómez que redactaba

«La Tribuna». Se realizó en Palermo a 15 pasos de distancia, con una pistola cargada y otra sin cargar. Sonadas las palmadas reglamentarias, tiró Calvo. Pero su pistola estaba descargada. Juan Carlos Gómez no hizo funcionar la suya. ¿Por qué no tira usted?, increpó Calvo. Porque mi objeto, al venir aquí, contestó Gómez ha sido mostrar a usted que sé morir defendiendo los principios que sostengo, pero de ningún modo el de matar a usted». Cuando triunfante ya su propaganda, resolvió el redactor de «La Tribuna» regresar a Montevideo, sus amigos le despidieron







HISTORIA DEL URUGUAY

398

con un banquete, que tuvo enorme -resonancia por que asistieron y por lo que algunas de ellas dijeron

personas

las

tiempo de

al

brindis.

los



«Gómez

don Domingo

dijo



Sarmiento

Faustino

creía,

y

así nos lo dijo desde su llegada, que la salvación de la libertad de

lodos

estos

dependía de su triunfo en

países

Buenos Aires recoge hoy

Buenos

Así

Aires.

semilla que sembró en otro tiempo y

la

de los extremos del antiguo Virreinato acuden los patriotas argentinos de este o del otro lado del río a vigorizar en el centro los

nente; patria

han

que

principios

porque,

para

tarde

por

todo

nombre argentino

el

nieve de los Andes no la limitan

la

si

más

difundirse

de

señores,

al

conti-

el

estrecha

es

Oeste,

la

trópico

el

Gómez nos ha traído algo Norte y los rigores polares al Sur que nos faltaba y en cambio lleva a su país lo que Buenos Aires puede darle: simpatías, ejemplos y libertades conquistadas. Que

al

.

.

.

los males de cuerpo y alma que lo que recupere su bienestar y su salud y el pueblo volverá ojos adonde están sus amigos, sus compatriotas de sangre,

Montevideo se restablezca de afligen; los

de raza, de idioma, y un día buscarán en los Estados Unidos del Plata remedio a sus males.» ^

«Nuestro amigo



Gómez

doctor

el

agregó

Vélez Sarsfield que acababa de abandonar y

Relaciones



Exteriores

el

doctor

más noble pensamiento en el puemás sanos la victoria de lo

Buenos Aires para obtener

de

principios

sociales

había creado; en

consolidar

y el

Dalmacio

Ministerio de Gobierno

que con su fuerte palabra ha hecho

revivir los dormidos fuegos del

blo

el

momento

5

las

del

grandes

que

inátituciones

triunfo y cuando su

se

nombre era

abandona todo, su patria y sus amigos, un hombre puede ambicionar, y marcha a sacrificios oscu-

elevado hasta los cielos, cuant"b

trabajos

a

ros,

término,

sin

mismo no podrá

prever.

cuyos resultados

Que sea

feliz

y

consecuencias

en todos sus pasos;

él

que

alce su antigua patria de la postración y desgracia que sobre ella

pesan;

que

el

patrias

una

sola,

una

en

sola

y los hombres lo ayuden como antes lo fueron; que a

cielo

república

del

Estado Oriental y

a él

hacer de sus dos se

deba

de los

la

unión

Estados del

Plata.»

A

todos contestó

el

obsequiado,

refiriéndose al pueblo:

«El día está cercano en que poniéndose de pie en toda pública

brazo a el

aterre

robusto

su sombra,

su la

voz a los

bandera de

caudillos... la

nación,

y

enarbolando

la

Re-

con su

podamos todos reunidos

ciudadanos de una poderosa república, brindar por

gran pueblo de

los

Estados Unidos del Sur.»

399

GOBIERNO DE PEBEIRA

a.^.regar que «La Tribuna» de Buenos Aires, órgano gobierno de Alsina, hablando de la campaña periodística que doctor Gómez iba a emprender en Montevideo, decía lo si-

Hay que del el

guiente:

«El triunfo de los principios alcanzado en Buenos Aires no

completo

ría

si

La obra

ran también en xMontevideo. completarla.

se-

nuestros correligionarios políticos no lo consiguie-

La

tarea

es

ardua,

empezada y

está

llena

peligrosa,

de

.sólo

basta

escollos

y de

acometa con decisión y energía. El doctor Juan Carlos Gómez se ha encargado tspinas

que

faltado quien la

pero no ha

lastiman;

de iniciar la reacción a favor de los principios y de la causa de libertad.»

la

Tal era, pues, n^.ez

el

abandonaba

la

Ce Montevideo: la vincias

programa con que el doctor Juan Carlos Góprensa de Buenos Aires y se incorporaba a la caída de Pereira y la reconstrución de las Pro-

Unidas del Río de

Toman rumbos

tlistintos los

declara gubernista y

el

Plata.

la

geneíales del pacto.

Uno de

ellos se

otro opositor.

El general Oribe, que había estado alejado del escenario políti.o desde los comicios parciales de 1856, volvió a entrar en actividao al intensificarse la lucha electoral de 1857, bajo un programa de fusión

Poco

meses

de blancos y

después en

Entre

el

colorados,

general

Ríos,

se

pero francamente gubernista.

Flores

que

reincorporaba

había al

permanecido varios Partido

Conservador,

aunque sin abandono de las ideas de fusión que había sustentado juntamente con Oribe desde la proclamación de la candidatura presidencial de don Gabriel Pereira, según lo demuestran estas palabras del manifiesto que publicó al día siguiente de su desembarco

:

«En de la este

la

unión

de

República...

todos

los

orientales

está

cifrado

el

porvenir

Los representantes del pueblo que vengan en

mes tienen una gran misión que cumplir. El examen de los el Brasil cuya discusión ha suspendido la disolución Cuerpo Legislativo, requiere un contingente de patriotismo, de

tratados con del

saber, y sobre todo de ese puro sentimiento de independencia y

bertad que sostiene

el

li-

escudo de nuestras armas. Trabajaré, pues,

por que ese patriotismo y ese saber en alas de la unión de todo?, sea la expresión de las próximas elecciones».

Las ideas de fusión tan insistentemente proclamadas por

los

ge-

HISTORIA DEL URUGUAY

400

nerales que habían hecho triunfar la candidatura de Pereira, eran aceptaidas por rio político

todos los hombres que actuaban en el el

escena-

período electoral que examinamos.

mismo Juan Carlos Gómez

El

ma

casi

durante

se veía obligado a detener su plu-

ante ese movimiento intenso de reconcentración.

«No queremos ni gobierno colorado a mc^diados de año en «El Nacional»

gobierno

Instituciones,



ni gobierno blanco



de las garantías

y

de

libertades,

las

bierno que deje a los colorados y los blancos sostener sus

como mejor

las go-

ideas

les plazca».

partídarios del Gobierno fimdan el "Club de la Unión".

Ivos

te

decía

queremos gobierno de

Las primeros en organizarse fueron los partidarios del PresidenPereira. Unos meses antes de los comicios celebraron una reu-

nión en

Universidad por iniciativa del general Anacleto Medina,

la

el «Club de la Unión» bajo la diMedina y Brito del Pino, don Manuel Basilio Bustamante, don Luis Lamas, don Mateo Magariños, don Can dido Joanicó, don Julio Pereira, don Manuel Brrasquin, dot. José G. Palomeque, don Juan José Duran, don Antonio de las Caireras y don José Vázquez Segastume. De acuerdo con el programa votado en esa misma oportunidad, el Club tomaría «por base de sus trabajos el programa político da

quedando fundado de inmediato rección de los generales

S.

de

E.

señor

el

Presidente,

cuya realización constituía

buenos ciudadanos, la única tabla

todos los

de

anhelo

el

salvación

del

presente y la esperanza del porvenir».

AI aproximarse el día de los comicios publicó el «Club de la Unión» con la firma de todos los miembros de la Junta Directiva un manifiesto a favor de la siguiente lista de candidatos por el

departamento de Montevideo, en la que figuraban ciudadanos de toJoaquín Suárez, Manuel Herrera y Obes, Eduardo Acevedo, Juan José Duran, Francisco Lecocq, Cándido Joanidos los partidos:

có,

José

cisco

«En fiesto

Santiago

Ellauri,

Fisterra

F. la



orientales

Sayago,

Jaime

Illa

terminación de las luchas de bandería en

la

el

afianzamiento

Fran-



decía

el

mani-

extinción de los viejos partidos, en la unión de los

bajo los

no dudarlo,

Viamont,

y

y Martín Pérez.

únicos

colores

engrandecimiento

del

pabellón

positivo de la

de su independencia...

nacional,

está,

República por

Acompañemos,

a el

conciuda-

GOBIERNO DE PEREIRA

ayudemos con todo nuestro esfuerzo

nos,

401

Presidente de

al

la

Repú-

blica»

Ya

general Medina había publicado un manifiesto en

el

luego

condenar

de

alusiones

a

refiriéndose

en

representa

«Ella

de

hechos

los

pasados,

la

a

la

con

Gómez en

prédica del doctor Juan Carlos

la

decía

ciontil»,

debate

el

el

que

claras

«lil

Nu-

administración Pereira:

actualidad

la

transición

doloroso

de ese

período de desquicio y de desorden hacia un porvenir de paz, de

unión y concordia entre los orientales, que

al

base para hacer fuerte nuestra nacionalidad,

una verdad de

cer

Ta's

(

onscj'vadoi-í's

Frente

las

paso que es

lo es

única

instituciones democráticas».

fundan

"Club de la Defensa".

el

«Club de la Unión» que respondía

al

la

también para ha-

al

Presidente Pe-

se instituyó el «Club de la Defensa», de franca oposición al

reira,

Gobierno, por iniciativa de los generales César Díaz y Enrique Marcoronel Francisco Tajes, en cuyo programa, redactado por

tínez y

Fermín Ferreira

doctor

el

y Artigas,

se

leía

lo

siguiente:

«Declaramos que nuestros principios son los que se sostuvieron en la Defensa de Montevideo contra la invasión armada que trajo a

1

11

tercer

En rio

patria Manuel Oribe».

la

esos

grupo se coloca entre esos

dos.

mismos momentos apareció «La Opinión Pública», diaredactado por don José G. Palomeque y don Mateo

'jolorado

Proclamaba su absoluta adhesión a la Demás glorioso que se conoce en los fastos de la historia americana», pero condenaba eil debate del pasado que sólo podía conducir al embravecimiento de las pasiones y la

Magariños Cervantes.

fensa de Montevideo, «el hecho

desunión

de los

orientales,

y

proclamaba a

la

blancos y colorados con una sola base limitativa:

vez

la

fusión de

«la exclusión de

Oribe».

En

igual orden de ideas estaba don Joaquín Suárez, el patriarca

de la DcfensM, según

lo

aseguró don

polémica con don Juyn Carlos

José de Herrera en una

misma conDon Joaquín Suárez, decía el doctor Herrera en 1855 una carta a don Andrés Lamas adhiriendo a su

tienda e:octoral. dirigió

.'¡uan

Gómez en



el

curso de esta



base de unión de los orientales, de oltñdo del pasado, de exti7ieión de los partidos de guerra eivil. Yo he leído esa carta agregaba



IV.

-

26

HISTORIA DEL URUGUAY

402

—y

acabo de visitar a don Joaquín Suárez, a quien he encontra-

mismas

do con las

ideas de entonces.

Cuáles eran los pai-tidos en lucha.

como

Al aproximarse los comicios actuaban,

más

Carlos la;

matices:

distintos

Gómez

a la cabeza iban

los colorados situacionistas

derrumbe

al

que con

grupos de

se ve,

conservadores que con

los

el

los

Juan

doctor

del gobierno de Perei-

general Medina, don Ma-

el

nuel Basilio Bustamante, don Luis Lamas, don José G, Palomeque

don Mateo Magariños rodeaban al gobierno de Pereira y proclamaban la fusión de colorados y blancos; los colorados que seguían al general Flores con su programa de fusión de los partidos, pero de oposición a Pereira; los blancos fusionistas que con

y

don Manuel

Cándido Joanicó,

ilon

Errasquin, don

José Brito del

Pino, don Antonio de las Carreras y don José Vázquez

rodeaban

al

gobierno de Pereira;

y

los

Sagastume

blancos que con

idéntico

programa de fusión y de ahesión al Presidente Pereira respondían exclusivamente a la voz de don Manuel Oribe. Como resultado del movimiento de reconcentración que se operaba en

torno

cleto

del

Presidente

Guerra en

rio de la

la víspera

Pereira,

se

presentaron

al

Ministe-

de los comicios los generales Ana-

Medina, José Brito del Pino y José A. Costa y coronel Salva-

dor García, proponiendo la creación «de una guardia de honor de la

Constitución y del Gobierno»,

nías,

que tendría por

jefe al

compuesta de dos o más comp:i-

Presidente de la República en calidad

de coronel, idea que fué aceptada en neral

Muere En

Medina para

el

lo

el

desempeño

del

el

acto,

nombrándose

al

ge-

segundo puesto.

general Oribe.

más

álgido de la

campaña

electoral ocurrió la

don Manuel Oribe, desapareciendo con

mayor efervescencia

política

uno de en esos momentos.

Al inhumarse los restos dijo

el

ello

los

muerte de factores de

Ministro de Gobierno, aludiendo.

a la acción culminante de Oribe en la cruzada de los Treinta y Tres

Orientales:

«Ante estos recuerdos de grandeza y de gloria nacional deben las discordias de partido, deben extinguirse las mezquinas pasiones, de egoísmo y de individualidad. En este momento acallarse

doloroso y solemne no

somos, no

podemos

ni

debemos

ser

sino

403

OOBIEUNO DE PKKEIKA

orientales,

que

al

general don Manuel Oribe fué

el

no

no olvidaremos jamás,

orientales

los

y

que

olvidar

uno de

podremos los

héroes

lado de Lavalleja nos dieron patria y libertad.»

prensa recordó un episodio heroico de esa campaña, ocurricampo de batalla de Ituzaingó, cuando el regimiento 9 de Caballería retrocedía en desbande a raíz de una formidable carga con la que no había podido romper las líneas enemigas, y Ori-

Y

la

do en

el

be que era su gritaba a

los

al tiempo que las charreteras no quería mandar soldados que no

arrancaba

se

jefe,

fugitivos

que

él

fueran capaces de morir por

patria, consiguiendo con esa

la

acti-

tud que los soldados se rehicieran y volvieran, a la pelea!

El Presidente Pereira recun-e a medidas violentas. Fero ;a

el

proceso electoral hizo crisis de pronto bajo la presión de

propaganda del

sito

doctor Juan Carlos

del

Gómez

y del decidido propó-

Presidente Pereira de intetrvenir en la designación de los

representantes del pueblo.

Habían resuelto los colorados, para dar forma definitiva a sus trauna reunión pública en el Teatro San Felipe, el 1." de noviembre de 1857, y el Presidente resolvió prohibir esa reu-

bajos, celebrar

nión.

El decreto, que estaba refrendado por los Ministros don Joaquín

Requena, don Lorenzo Batlle y don Carlos San Vicente, prohibía no solamente esa reunión, sino «toda otra en que se levantase la

bandera de cualquiera de

«Empeñado

eil



on conservar

la

Constitución

antiguos partidos».

los

Presidente de

la

como

se

paz,

la

y

como



decía

preceptúa

muy

República lo

exigen los

lo

el

preámbulo

especialmente

verdaderos

intereses

del

país que empieza recién a reparar los inmensos quebrantos causa-

dos por las disensiones de partido;

persuadido íntimamente de que medio de conservar aquellos bienes tan deseados por la gran mayoría sensata y pacífica de la población nacional y extranel

ú;:ico

jera,

es

la realización

del

programa que regula

bierno y que ha sido aceptado por -nedio de anarquizar

el

país

el

el

país,

así

la

política

del

también como es

Goel

levantar la bandera de alguno de los

partidos que han ensangrentado la República. Y considerando que por mucho que sea el acatamiento del Gobierno al libre ejercicio del derecho electoral, que por lo mismo de ser sagrado dentro de sus justos límites no debe consentirse su abuso empleándolo para concitar a la guerra civil, alegando falsos peligros pa-

viejos

.

.

HISTORIA DEL URUGUAY

404

ra la independencia del país cuyo pat)ellón tiene el orgullo el Presidente de la República de mantener en su mayor altura...».

Horas más tarde eran aprehendidos y desterrados a don Juan Carlos Gómez, redactor de «El Nacional», te Garzón y don Isaac de Tezanos redactores de «El tal» y varios Jefes y oficiales, y se expedía un decreto res

Armas

general Medina Comandante de

al

Hubo con

Sol

Orien-

nombrando

de la Capital.

motivo fuertes debates en

tal

Buenos Aidon Vicen-

seno de la Comisión

el

tachaban de inconstitucionales esos destierros sin previa sentencia. Pero la mayoría no pairticipaba del mismo modo de pensar, y en consecuencia las mediporque algunos

Termanente,

legisladores

das del Poder Ejecutivo fueron aprobadas.

Concluido

el

incidente, el Presidente Pereira lanzó

un manifiestvi

en que decía:

«La paz continuará inalterable y

la

República marchará

hacia

su engrandecimiento. El Presidente de la República, que ha consa-

grado toda su vida a

independencia, a la libertad y a las

la

tuciones de la patria, no omitirá

el

sacrificio

insti-

de su persona para

mantener esos bienes».

Se realizan los comicios de 1857 en pleno ambiemte i-evolucionario.

Las elecciones coincidieron con vimiento revolucionario que te' la

el

los

preparativos de un nuevo mo-

Gobierno trató de conjurar median-

militarización del país.

«El Comercio del Plata» describía así la situación política una

mana

se-

antes.de los comicios:

«Conculcados todos

principios republicanos, no

los

podemos

reco-

nocer como elecciones los actos que se practiquen bajo la influencia

de esas conculcaciones.

Hoy empieza ya

el

primer acto de esa

Hasta hoy estuvimos en la resolución de concurrir, porque hasta hoy abrigábamos (en honor del Gobierno) la esperanza de que restableciese el sistema republicano bajo el cual únicamente se practican elecciones libres. Pero hoy es solemne transición de

ya reconocida seguridad

la

los

pueblos.

persistencia del Gobierno en tener suspendida la

individual

y

el

sistema democrático».

Sólo concurrió a las urnas

no del Presidente de

la

el

partido que se había reunido en tor-

República sobre

la

base del programa

fu-

sionista.

En

el

Departamento de Montevideo obtuvo

de diputados en

la

que fiíiurahan

al

el

triunfo una lista

lado de don .Joaquín Snárez, don

GOBIERNO DE PEBEIBA

405

Lamas y don Francisco Hordeñana, de tradon Eduardo Acevedo, don Cándido Joanicó, don Francisco Lecocq, don Jaime Illa Viamont, don Martín Pérez y don Juan José Duran, de opuesta tradición política. Esa lista alcanzó a

José Ellauri, don Andrés dición colorada,



tener hasta 2,012 votos.

En

el

Departamento de Minas

el

Jefe Político, que ya estaba en

tren de revolución, patrocinó una lista en la que figuraban los jefes civiles del Partido

Conservador radicados a

la

sazón en Buenos Ai-

don Juan Carlos Gómez, don José María Muñoz y don Pedro Bustamante. Luego de restablecida la paz, dictó el Gobierno un deres:

creto que anulaba esas elecciones y convocaba al

Departamento de Minas a nuevos comicios, usurpando con ello facultades privativas de las Cámaras, únicos jueces de la validez de las elecciones de sus miembros. «No habiendo podido efectuarse decía el decreto elec-





ción de representantes a la VIII Legislatura a causa de la rebellón ii'iciada

por

traidor Erigido Silveira sublevándose contra

el

el

Go-

bierno en los días en que ella debió tener lugar, expulsando del de-

partamento a

las autoridades legales

para hacer con sus secuaces la

farsa de una elección que diese por resultado

el

nombramiento de

individuos complicados en la rebelión».

Ya no deberían Pereira.

practicarse otras elecciones bajo

Pero la Asamblea resolvió abordar

el

el

gobierno de

estudio

de

algu-

nas reformas en la legislación electoral vivamente reclamadas por dictando finalmente,

experiencia,

la

según

a

mediados de

hubiera elecciones y se clausuraría en septiembre; rrieran, a

inscribirse

boleta con su

1858.

una ley

Registro Cívico se abriría en enero del año en que

la cual el

firmarían

en

los

registros

número de orden; en octubre

chas o reclamos,

fallando

el

se

y

los

que concu-

recibirían

una

deducía ían las ta-

Juez de Paz en primera instancia y

Alcalde Ordinario en segunda; y nadie podría votar fuera de la

el

sección de su domicilio.

También sancionó de

revisión

la

Cámara de Diputados en 1857 un proyecto No concretaba reforma alguna, limi-

constitucional.

tándose a establecer que se procedería a

que

la

nales».

yecto

modificar

«aquella

parte

experiencia haya aconsejado en pro de los intereses nacio-

Pero

la

iniciativa no prosperó en

fué rechazado.

el

Senado, donde

el

pro-

CAI'ÍTL'I.'t \III

Movimiento político

KI

dv Quinteros.

(ípisoflio

Merece capítulo aparte

la

de

revolución

1857,

por su gran epi-

ardorosamente debatido todavía debido a io incompleto de sus antecedentes y al hecho de no haber sido planteado dentro de la atmósfera de sangre que en esa época rosodio de

Quinteros,

deaba a todo

El

el

tan

Río de

la

Plata.

alzamiento del coronel Brígido Silveira.

Una de tro

vez

proclamada

suspensión

de

San Felipe y

del

la

la

abstención

como consecuencia

electoral

asamblea que debía realizarse en

ila

destierro del

Tea-

el

dootor Juan Carlos Gómez, em-

pezaron los conservado.res a organizar desde Buenos Aires un mo-

vimi'mto revolucionario para voltear

tabaa

con

raba en

la

el

concurso

Juan Carlos Gómez.

Bn

la

al

gobierno de Pereira. Con-

partido

unitario, el

que

impe-»

concurso moral de

había estado largamente vinculado

el

doctor

.

víspera de los comicios empezaron a acentuarse los rumo-

de revolución, y

res

del

Provincia de Buenos Aires, y con

prensa, a la que

su

material

Gobierno resolvió prepararse para contra-

el

rrestar el movimiento,

creando tres comandancias militares en

departamentos de campaña, a cargo de

los generales

los

Manuel Freiré

y Diego Lamas y del coronel José Villagrán. A mediados de diciembre hubo una tentativa de sublevación en el

Escuadrón de

Artillería,

que dio lugar

al

arresto y destierro del

general César Díaz, de varios jefes y oficiales y de los propietarios

y algunos redactores de «El Comercio del Plata». También fué

mado Jefe

el

coronel

Político

Erigido

de Minas,

Silveira,

pero

sus

que

desempeñaba

explicaciones

el

debieron

cargo ser

lla-

de

tran-

GOBIERNO DE PEBEIBA

puesto que

quilizadoras,

Gobierno

el

401

regresar a su depar-

dejó

lo

tamento.

Pocas horas después se alzaba, sin embargo, en armas

el

coironel

Silveira al frente de 500 hombres, y a su llamado se alzaban tam-

bién los comandantes Pollo, Caballero y

Primeras medidas que adopta

el

Farías.

Gobierno.

El Presidente Pereira, complementando uno de sus decretos andistribuyó

tt'riores,

departamentos

los

en

cuatro zonas

militares.

Los de Montevideo, Canelones, Florida, Colonia y San José quedaban a cargo de los generales Anacleto Medina y José A. Costa; de Paysandú, Soriano y Durazno a cargo del general Manuel

los

Jefe

Freiré,

Pollítico

primero de esos departamentos;

del

los

del

Tacuarembó y Cerro Largo a cargo del general Diego Lamas, y los de Maldonado y Minas a cargo del coronel José Vinagran. El general Medina conservaba, además, él nombramiento de

Salto,

General en Jefe del ejército de operaciones en campaña, con que investido desde los primeros rumores

había sido

La prensa, que ya había

sido

castigada con

gunos redactores, tuvo también su decreto «Levantado él estandarte de la rebelión contra

destierro de

el

al-

restrictivo.



decía ese decreto

— re-

programa de unión y de paz que forma la base políempeñan en revivir los odios del pasado, lle-

Gobierno, se

del

vando

de revolución.

gobierno constitucional de la República por los que,

el

pudiando tica

el

país

al

a

nuevos trastornos y calamidades, no puede per-

mitirse sin agravio de la moral, de la justicia y del derecho y dala causa pública. que ciertos periódicos de la Capital hagan publicaciones anárquicas en apoyo de la rebelión o con ten-

ño de

.

.

dencia a excitar los rencores de los antiguos pairtidos...

de

blicación

la

naturaleza

como participación ción

al

y

desorden y a

indicada

complicidad la

el

La coliuuna

.

.

en la

será

calificada

rebelión o

anarquía, precediéndose

impresor o editor y caso demande». contra

.

el

Toda puy

como

en

penada concita-

consecuencia

redactor con la severidad que

el

del coronel Bi'ígldo Silveira se pi*esenta delante de

Montevideo. Pocos días después de su alzamiento, se presentaba el coronel Erigido Silveira delante de Montevideo, luego de dispersar en el Co-

HISTORIA DEL URUGUAY

408

lorado a las fuerzas policial.3s del comandante Zenpn Freiré que ha-

bían salido a su encuentro.

En

rápido tiroteo que se produjo

el

al

avistarse las fuerzas, murió don Luis Pedro de Herrera, Comisario

da una de las policías dispersadas.

Y

tal

única baja que

es la

que agregan que

gistran las crónicas de la época,

el

re-

cadáver del

Comisario fué mutilado.

Con un doble objeto realizaba ese movimiento el jefe revoluciorecibir una expedición que debía salir de Buenos Aires y facilitar una conspiración que debía estallar en la plaza de Montevi-: nario:

deo.

Comprendía dos partes

el

programa de

miento de una compañía del cuerpo de dujo, pasando al campo revolucionario

la

conspiración:

los

el

alza-

hecho que se pro-

artillería,

soldados con su jefe

el

sargento mayor Aurelio Freiré; y la captura del Presidente Perei-

un grupo de cuarenta

ra por

tiempo y atacados en

la casa

italianos,

que fueron

descubiertos a

donde estaban reunidos para realizar

su plan.

Dominada e'

la

conspiración de «los lombardos»,

Presidente Pereira publicó un manifiesto, en

a los extranjeros la

fianaa en la paz, en a la ley.

«Sólo así

grientas,

como

más el



estricta neutralidad

orden, en

agregaba

bres

no se verá colocado en

que recomendaba

y que tuvieran con-

acatamiento a la Constitución y no se renovarán tentativas san-

las que con el auxilio de la

sido descubiertas y dominadas; blica

el



como fué llamada, el

Divina Providencia han

sólo así el Presidente de la Repú-

el

caso de ejercer sobre ciertos hom-

rigor de la autoridad y de la ley».

el

La expedición preparada en

la

Argentina realizó su viaje en

la

goleta «Maipú», un barco de propiedad del gobierno de la Provincia de

Buenos

Aires.

La «Maipú» arribó en pleno

día al puerto de Montevideo

el

6

de

enero de 1858 con setenta y tantos hombres bajo el mando del general César Díaz, comandantes Eugenio Abella y Juan C. Vázquez, sargentos mayores Felipe Arroyo, Esteban Sacarello y José M. Ca-

Manuel Pagóla y Juan Manuel de la Sierra. El desembarco se produjo en la costa del Cerro, donde ya se encontra-

bot y capitanes

ban

los

coroneles Silveyra, Caballero,

Hubo, Pollo

y

los

sargentos

mayores Freiré y Farías, con un millar de hombres, según la relación de uno de los expedicionarios don Juan Manuel de la Sierra. Un día después, las fuerzas del Gobierno se apoderaban de la goleta «Maipú», que había c.uedado abandonada en el saladero d« Lafone.

GOBIERNO DE PEBEIRA

El general César Díaz tomó

mando de

el

acto se dirigió al Cerrito y desde

el

con ánimo de atacarla, alentado por

cuerpo de artillería seguiría

allí

la

todas las fuerzas y en

a la plaza de Montevideo,

noticia de que

ejemplo de

el

4U9

la

resto del

el

compañía

mayor

del

Freiré.

La defensa de

Un año

la plaza.

antes del desembarco del general César Díaz, en febrero

de 1857, decía

Ministro de la Guerra general Carlos San Vicente,

el

en su Memoria anual

Cuerpo Legislativo: reducidas a un escuadrón de

al

(Las fuerzas militares están

artille-

compuesto de 150 plazas y un escuadrón de caballería compuesto de 69 plazas. El otro escuadrón fué disuelto con motivo ligera

lía

de los sucesos revolucionarios de 1855.

manente. Pero

el

No

hay, pues, ejército per-

Gobierno se preocupará de proyectar algo en

el

nuevo iPresupuesto. En cuanto al parque «no existe ni una tercerola, ni un sable, ni una canana: no hay más armamento que 400 fusiles recompuestos: tampoco hay más pólvora en depósito que arrobas».

60

Nadie

preocupó de llenar esos enormes vacíos, de manera que

se

producirse

al

el

ataque, los recursos escaseaban tanto

*La Capital estaba indefensa,

ces.

rra en su

Memoria de 1858

ganización





decía

como

Ministro de

entonla

Gue-

sin fusiles, sin municiones, sin or-

militar?).

La Guardia Nacional fué convocada declarado

el

el

estado de

el

mismo

día

en

que

era

sitio.

Horas después de su desembarco,

inició

el

ataque

la

columna

expedicionaria, y lo repitió en los dos días subsiguientes, avanzando

por

ol

Cordón hasta penetrar en

la

ciudad y adueñarse de algunas

de las barricadas que habían sido improvisaxJas por los jefes de la plaza.

Según

el

testimonio de don Juan Manuel de la Sierra, los ata-

cantes tomaron posesión de la Plaza Caganch-a, destruyeron dos de y por ellas se internaren hasta la altura del

las

irincheras,

plo

Inglés y de la calle Piedras.

Tem-

Pero después de recios tiroteos, en que hubo varias bajas, y ante la

certidumbre de que

movimiento, del

el

general

país y proseguir

el

cuerpo de artillería no se plegaría

César

allá

la

Díaz

resolvió

retirarse

al

al

interior

campaña en una nueva forma.

HISTORIA DEL URUGUAY

4 O

Las

de guerra.

(li\isas

Durante

como

pUaza,

la

hizo

se

extensiva

extraño a

los

el

de

Nación.

la

Presidente Pereira que

en

partidos

que habían

que

nacional»,

escarapela

la

todos los empleados

a

Quería demostrar con eso tenía

Gobierno dictó un decreto que

el

Ejército de línea y de la Guardia

distintivo del

«una divisa del color de

Nacional, luego

ataque a

el

prescribía,

estado

man-

se

él

divididas

los

orientales.

de

líeoi-setos

El

de proscripción.

y

de enero de 1858, a raíz del ailzamiento del coronel

I."

véJra

niuci-te

Sil-

apareció un decreto que decía así:

«Declárase reos de lesa patria a y demás

jefes

y

apoyar

la rebelión

civiles

y militar3s de

hendidos

contra

el

Silveiía

Bríg-ido

Gobierno. Ordénase a las autoridades

que en

República,

la

autores de

los

los traidores

que se hayan prestado o se prestaren a

oficiales

la

rebelión,

el

caso

de ser apre-

procedan a juzgarlos con bre-

vedad y pronta aplicación de lalev». Algunos días después fué instituido un tribunal militar «para juzgar sumariamente todo delito de rebelión, como conspiración, motín o connivencia con los enemigos del Gobierno». Por otro decreto del mismo

dadanos y dados de baja veira,

el

mes fueron arrestados varios

Freiic

Jefe

Político

l*icsid<>nte

ar-

Manuel comandancias

general

el

Paysandii y de una de las

de

Pereii-a

habla de

i-emuiciai*.

mismos momentos en que

los

de baja

campaña

de

militares

En

Sil.

Francisco Tajes y todos los demás oficiales alzados en

mas. También fué destituido y dado

Kl

ciu-

general Díaz, los coroneles Erigido

el

ejéacito

ba \oí suburbios de Montevideo y se dirigía a

atacante abandonala

campaña,

el

Pre-

sidente Pereira convocó a los principales jefes militares de la plaza,

para cambiar impresiones acerca de los sucesos que se estaban

desarrollando.

Según conocer

eil

el

acta valor

de esa reunión, de

las

el

opiniones

Presidente deseaba ante todo

que establecían

que

él

era

el

único obstáculo de la paz. Todos los invitados, entre los que figura-

411

GOBIERNO DE PEBEIRA

los generales Anacleto Medina, Ignacio Oribe, Servando Gómez, José Brito del Pino y José Antonio Costa, estuvieron de acuer-

ban

do en que

Presidente debía defender y salvar

el

régimen cons-

el

titucional.

El

levoliu'lonario

«'.¡éicito

queda rápidaniento vencido.

las opiniones autorizadas de la época, si el geCésar Díaz hubiera insistido en sus ataques, Montevideo habría caído en su poder, o por lo menos el gobierno de Pereira no hubiera podido sostenerse sin sufrir cambios fundamentales en su

Según algunas de

nera'

composición.

en

Pero,

üe

por

constituía

falta de vinculaciones de los revolucionarios fuera de la Ca-

la

como por

pital, el

ataque

de

el abandono un desastre irreparable, tanto

conformes es en que

que todos están

lo

líneas

las

la

abundancia de

Gobierno podía echar mano en

los

elementos militares de que departamentos.

los

La revolución había sido iniciada por con.servadores que constituían lorado,

tenían

sólo

prosélitos

los

conservadores,

los

y

elemento ilustrado del Partido Co-

el

Montevideo.

en

La campaña era de

los caudillos, del general Flores sobre todo, que a

la

sa^n

vivía

tranquilamente en Entre Ríos, donde también estaban los coroneles Ambrosio Sandes, :Manuel Caraballo y otros de los que tenían el

formar legión dondequiera que clavaran sus bandeErigido Silveira era una excepción. Todos los demás caudillos colorados, como lo hacía constar el doctor Vázquez Sagastume a raíz de la revolución, vivían en la Argentina ajenos privilegio

El

rolas.

al

de

coronel

conservadores.

de los

plan

En cambio

la Guardia Nacampaña, podía formar rápidamente fuerzas considerables con que anonadar a los revo-

cional

que había convocado a

Gobierno,

el

que tenía todas las policías

y

de

lucionarios.

DI al

del

ejército

general César

dirigirse al interior del país.

terminar

tes de

el

Díaz marchaba,

Y

el

pues,

mismo mes en que había atracado

costado del saladero Lafone y se había intentado

al

desastre

consumado

desastre quedó

la

asalto de

el

an-

«Maipii»

al

Mon.

tevideo.

El ia

de

16

enero

vanguardia

derrota Solís

a

la

del

anunciaba ejército

caballería

del

el

coionel

gubernativo, coronel

Bernardino Olid, que

Silveira

había

en

jefe

infligido

las

puntas

de

una del

HISTORIA DEL UEÜGUAY

412

Dos días después de

sidente

hecho

dirigía

se

para

República

la

coronel

el

Coronel

Ddoiiisio

comunicarle

resultado

el

Pre-

al

de

otro

armas más importante. El ejército del general Lucas él formaba parte, estaba acampado en Cagancha

de

Moreno, de que

cuando se avistaron las fuerzas revolucionarias compuestas de 500 hombres de caballería y 300 de infantería. Como jefe del ala

de

dispersado

había atacado,

izquierda,

enemiga. Pero

estaba

batalla

y

perseguido a

caballería

la

regresar se había encontrado con que

al

(.ampo

e^

abandonado y nadie tenía noticias acerca

del

general Moreno.

Las crónicas de caballería

del

había

fantería

gubernativo que

tenido

dueño

volucionario,

época aclaran ese extraño parte militar. La

la

ejército

había

retirarse

en

momentáneamente

pero

triunfado;

Y

derrota. del

in-

la

el

ejército

re-

campo de

batalla,

se

había visto obligado a retirarse también, porque ya se aproxima-

ba un nuevo y fuerte ejército Anacleto Medina.

Según rías al

relación de don

la

mando

restantes,

a

Gobierno

al

mando

la

Sierra, las caballe-

Juan Manuel de

general

del

directo del coronel Erigido Silveira fueron dispersa-

perdiéndose por

^das,

deil

tal

concepto más

de

400

hombres;

pero las

cargo del coronel Tajes y de los comandantes Pollo,

Caballero y Hnbó, persig-nieron a las fuerzas de Moreno, quedando entonces la infantería revolucionaria dueña del campo de batalla.

Fué en

ese

momento

de aparente triunfo

que

el

jefe

d^

re-

la

volución lanzó su manifiesto.

«De todas

las

administraciones



decía



que se han sucedido

en la República durante los años que cuenta de existencia, ninguna ha sido tan funesta a los intereses más vitales como la del ciu-

dadano don Gabriel Pereira; ninguna ha asestado golpes más rudos a la Constitución y a las libertades públicas y a los derechos pri-

mordiales de los ciudadanos;

ninguna ha abusado tanto de

pa-

la

ciencia de los pueblos y de su disposición a la paz».

Y

para justificar esas palabras, invocaba

el

general Díaz

tado del 18 de marzo de 1856 contra varios legisladores de sición, el destierro de ciudadanos, los

bertad de imprenta, la

el

el

la

aten-

opo-

decretos restrictivos de la

li-

encarcelamiento y destierro de periodistas,

prohibición de las reuniones públicas durante

el

proceso electo-

nombramiento de diputados por el Gobierno. La columna del general Díaz, reducida ya a 650 hombres, reanudó su marcha hacia el interior del país. All llegar al Paso de Quinteros, fué alcanzada por el ejército del general Medina que venía

ral

y

el

413

GOBIERNO DE PKREIRA

en su seguimiento, y de

diciones

después del desembarco en

días

La

revolución

hombres, en

mil

sólo el

alcanzado

había

mismo

la

Lamas;

Diego

coronel restantes

en

Moreno;

la

tes

alrededor

de

Gobierno

h:i-

informaciones

1,200

a cargo del

Medina,

y

los

relaciones con el de Buenos Aii*es

i*oini>e

la

Confederación Argentina y de|

ayuda prestada por

de que la goleta «Maipú» cruzara al

las

general

del

Gobierno de

el

vincia de Buenos Aires a los revolucionarios,

la Cancillería oriental

el

Montevideo.

de

su ayuda a los de

Era tan pública

congregar

según

así,

cargo

a

2,000

guarnición

la

El gobierno de Pereira y pide Brasil.

a

lapso de tiempo en que

1,500 a cargo del general

prensa:

de enero, veintitantos

28

el

Cerro.

el

reunido 5,000 que se distribuían

bia

de

tuvo que declararse vencida en las con-

allí

que después hablaremos,

el

la

Pro-

que varios días an-

Río de la Plata, se dirigía

Cónsul Argentino don Carlos Calvo, para

que en una casa del Bajo de Buenos Aires existía un depósito de armas y municiones, «según se susurraba salido

denunciarle

del

que estaban alistados

Parque»;

allí

200

legionarios

y

145

ne-

gros y que la expedición «según todas las probabilidades, desembarcaría en Punta Carretas o en

Invocando cerró

y

los

rincón del Cerro».

el

notoriedad de esa

la

puertos

orientales

a

las

ayuda

el

se dirigió a las cancillerías del Brasil

gentina, para requerirles

el

gobierno de Pereira

procedencias

y de cumplimiento de

y 1S56, obteniendo que ambos Gobiernos



la los

de

Buenos Aires

Confederación Artratados de 1828

en su mensaje Asamblea «se apresuraran no sólo a ofrecer, sino a poner práctica e inmediatamente a su disposición numerosos elemen-



a la

decía

bélicos de toda especie, capaces de concurrir en un momento, dado y de una manera eficaz al aniquilamiento de aquella rebelión vandálica, imprudentemente fomentada, organizada ^ auxiliada por elementos venidos de Buenos Aires». tos

Muy halagado el Presidente Pereira ante esa actitud de los dos Gobiernos que desde 1830 venían promoviendo y auxiliando nuestras revoluciones y que ahora estaban contra ellas porque asi convenía a sus intereses del

«Por medio ble,

de

podrá darse

da alterarse

el

día,

estipulaciones

agregaba en su mensaje: convenientes

y de carácter estaseguridad de que toda vez que en el futuro pueorden en el interior o se vea comprometida la inla

HISTORIA DEL UEUGÜAY

414

tegridad

independencia

e

ha de contar de antemano de entrambas naciones,

Estado,

del

con

gobierno constitucional

el

auxilio

el

la plenitud de esos de-

como que entrambas garantieron desde 1828 rechos

y

miso en con

existencia

la

tratado de

el

de

7

mayo

solemne

ese

compro-

de 1856, que debe complementarse

concurrencia del Estado Oriental del Uruguay».

la

de

edército

iE.1

renovando

efectiva,

Argentina

Confederación

la

había

sido

venci-

y la Provincia de Buenos Aires, donde e&e partido tenía su asiento, vivía independizada de la Confederación y en lucha con ella. De ahí el interés de Urquiza, jefe de la Confederación, en apoyar al Presidente Pereira, desde do por

unitario

partido

el



que

En

de César Díaz era

triunfo

el

triunfo

el

de la

influencia

uni-

Uruguay.

taria en el

cuanto

Brasil,

al

más vivo el inDon Andrés Lamas, que

más

todavía

era

directo y

terés en sostener al gobierno de Pereira.

estaba al frente de nuestra Legación en Río de Janeiro, había prevenido efectivamente en enero de 1858 al Ministro de Negocios Ex-

vizconde

tranjeros

gían

un

tuiría

de

anulación

la

casus

que

Argentina;

de belli

Maranguapé, tratados

los

para

el

que de

los

revolucionarios

Imperio y para

la

general César Díaz contaba con

el

exi-

que consti-

anulación

1851,

Confederación el

apoyo de

la

Provincia de Buenos Aires; y que el Uruguay solicitaba y aceptaba «con agradecimiento la intervención del Brasil y de la Confedera, ción Argentina para salvar los

elementos de

independencia na-

la

cional».

El general

Urquiza,

que tenía en

gobierno, resolvió de inmediato tería y

Casi resto fo

general Diego

el

todas se

sus

tropas

preparaba

alcanzado por

«Vamos

Entre Ríos

a

el

a

Lamas

a sus soldados

al

al

al

sti

cuerpo de ejército que

habían vadeado ya cuando llegó

general Medina en

anunciar ese

asiento de

norte del Río Negro.

hacerlo,

levantar nuestro

el

envío de 800 hombres de infan-

de caballería, con destino

1,000

mandaba

el

el

Uruguay y

el

río

la

noticia

del

el

triun-

Paso de Quinteros.

— decía general Urquiza triunfo — enemigo que íbamos

campo

el

el

combatir se ha rendido: aquel pueblo hermano no necesita ya de nuestros heroicos esfuerzos para restablecer el imperio del orden y la seguridad de su independencia y sus instituciones». a

Una de tinuó,

de li

diados

divisiones a cargo del coronel Santiago Artigas conembargo, en Paysandú hasta adquirir la certidumbre completa pacificación del país, repasando el Uruguay a melas

sin

de

abril.

410

GOBIERNO DE PEREIRA

Brasileño no tuvo tiempo para mandar

El Gobierno

por eso la marinería

de Río de Janeiro, limitándose

juntamente

cuadrilla a colaborar,

con

barcos de gue-

de los

la

refuerzos

de su es-

rra franceses, ingleses, norteamericanos y españoles, en la vigilan-

Aduana

cia de la

y seguridad de

población, mientras la guarni-

la

ción de la plaza se incorporaba al ejército de Medina.

Pero trató de ejercer presión sobre nos Aires, para

impedir

pú» y obtener su neutralidad en

caso

de

la

goleta «Mai-

contienda oriental. El Cónsul

la

Buenos Aires, a quien fueron enviadas instruccio-

del Brasil en

nes con ese objeto,

de

luego

cancillería provincial

la

de la Provincia de Bue-

el

la repetición del

recordar todo

lo

ocurrido, decia a

en nota de 30 de enero de 1858:

«Hecha la presente exposición de todos los antecedentes que han tenido lugar desde que la rebelión del coronel Silvei-. v tomó un carácter más serio, y explicado el pensamiento del Gobierno Imperial acerca de tan extraordinarios sucesos; declarada así también con la franqueza y lealtad que son

característico

el

del

go-

bierno de Su Majestad, la marcha que seguirá respecto a los mis-

mos

sucesos,

el

abajo firmado en virtud

de las

órdenes recibidas,

más severas órdenes para que no salga del puerto de Buenos Aires y de su territorio gente armada y aquí Gobierno

solicita del

organizada con

las

de

fin

el

engrosar las

hallan en campaña contra

se

pública

Oriental

cia de este

del

Uruguay.

Estado fuese poco

ros

burlar las medidas

das

con

tienen los

tal

fin,

las

que

fuerzas

orden de prevenir

la

Pero

si

por

que

revoltosos

fatalidad

la

Re-

la

vigilan-

y consiguieran tales aventure-

eficaz

el

de los

filas

gobierno constitucional de

el

abajo firmado

navales

del

realización

espera sean adopta-

Imperio de

esas

en

aguas

estas

expediciones por

medios que estén a su alcance».

Contestó

el gobierno de Alsina que «las exigencias que se le hacían no estaban en armonía ni con los usos más recibidos entre las naciones en casos de esta naturaleza, ni con los principios

del

Derecho Internacional».

Y como

ya había terminado

pacificado



territorio

el

revolución

la

orientail,

la

y estaba totalmente diplomacia brasileña se lla-

a silencio.

Cuando

el

Presidente Pereira

sultado

de sus gestiones

vención

de

1828,

la

ante

dio los

cuenta a países

la

Asamblea

signatarios

de

del la

re-

Con-

Cámara de Diputados respondió:

«La cooperación que han prestado a V. E. los Gobiernos del Bra. sil y la Confederación Argentina, merece la gratitud del pueblo

HISTORIA DEL URUGUAY

416

oriental.

Esos Gobiernos no podían dejar de reconocer que

belión preparada y auxiliada por

pública Oriental y

América

la

re-

la

Gobierno actual de Buenos Ai-

en sus consecuencias aniquiladoras no sólo a la Re-

ffectería

res

el

Río de

al

sino a

Plata,

la

toda esta parte de

Sur».

del

Los fusilamientos de Quinteros. Cuatro días después de consumada

rendición, fueron fusilados

la

generales César Díaz y Manuel Freiré, los coroneles Francisco

;os

Tajes,

Eugenio Abella

cíales

más. La

tos

en

realizados

y veintitantos jefes y

e Isidro Caballero,

lista fué

curso de la marcha

el

ofi.

creciendo por efecto de nuevos fusilamien-

hacia Mon-

ejército

del

tevideo.

El general Manuel Freiré era uno de los Treinta y Tres orientales

de

Cruzada Libertadora

la

había figurado con

el

general

del

Lavalleja,

en la que

grado de capitán.

Según una correspondencia dirigida a don Nicolás A. Calvo, rede «La Reforma Pacífica», el coronel Caballero, al despe-

dactor dirs.í

del

general

«C lando nos

César

pnonunloió

Díaz,

arrojamos

a

revolución,

la

paüabras:

estas

vinimos

a

triunfar

o

caso sabíamos que jugábamos nuestras pues, el momento de pensar en las balas que

a ser vencidos, y en este cabezas.

No

es este,

nos van a atravesar. Lo que es preciso es saber morir».

Y dando

unos pasos y abriendo la pechera de la camisa para que le tiraran, agregó: «Deseo que esta sangre que va a derramarse sirva realmente

para la verdadera unión de los orientales». Otra de las informaciones de

mayor don Juan Manuel de ronel

Caballero estas palabras

pero

de un partido, El

coronel

dos tiros de plicio, sin

¿Fué El

ese

al

ser

por

esicrita

del

si

cae

al

suelo la

suelo por

conducido

el

sargento

al

el

co-

suplicio: patria, mori-

capricho de un hombre o

han de recoger mis

Francisco Tajes, según

el

pone en boca del mismo

mi sangre habría de redimir a mi

«Si supiera que ría contento;

época,

la

la Sierra,

mismo

algún día».

hijos testigo,

revólver al tiempo de ser conducido al

se

sitio

disparó del

su-

conseguir matarse, y en esa situación fué fusilado.

un crimen de

Presidente

culminantes del

Pereira

pai-tádo?

y

el

general

Partido Colorado.

Medina eran dos personajes

Pero

ellos

contaban principal-

GOBIEBNO DE PEBEIBA

mente

con

el

concurso

de

antiguos

sus

blancos,

los

417

adversarios

dominaban en el ministerio con Carreras, Nin Reyes y Andrés A. Gómez, y en el ejército de Quintero? con Lasala, Dionisio Coronel, Burgüeño, Timoteo Aparicio, Madriaga, Rafael que

políticos,

Rodríguez y Bernardino Olid. La hecatombe, decía don Nicolás A. Calvo en «La Reforma Palas revoluciones y no cífica» de 1864, fué dictada para ahogar favorecer

para

un

a

político...

partido)

de

responsabilidad

«la

Quinteros no es de un partido, es de un gobierno y de un gobier-

no

mixto».

De un gobierno mixto en que dominaban

los blancos,

pudo y

de-

bió agregar.

Quince días después de Quinteros, Nacional de Montevideo don Jaime Iglesia

la

comandante de

el

lila

y

la

Guardia

Viamont, depositaba en

Matriz la bandera que había enarbolado la Guardia Na-

cional el 18 de julio de 1853, al ser atacada

por la fuerza de

nea que respondía a

los

Los fusilamientos

Villainayor en Buenos Aires.

(le

dirigentes

lí-

Partido Colorado.

del

Se trata, sin duda, de un crimen consumado a sangre fría con

¿Pero era

la

encuadraba

se

de guerra.

prisioneros

ilustres

política

del

Río

exclusiva

obra

de

exaltaciones

las

partidarias,

dentro del criterio de esa etapa de la de

Plata,

la

plagada de saltos

barbarie

de

o

evolución atá-

vica?

Hemos hablado en

el

capítulo

anterior

de

la

expedición revolu-

cionaria de los generales argentinos José María Flores y

Gerónimo

Costa, organizada en Montevideo a principios de 1856 contra el go.

bierno de

la

Provincia de Buenos Aires.

Y debemos

ahora comple-

tar nuestras referencias, con el episodio de sangre en que fué ahoga-

dicha

da luie

en

expedición,

porque

ese

episodio

es

el

antecedente

del

dos años después tuvo lugar dentro de nuestro propio territorio, el

Paso de Quintero, como corolario de la expedición del general

César Díaz, organizada con

la

cooperación del Gobierno de Buenos

Aires.

Estaba entonces

al

frente

del

Gobierno de

Pastor Obligado, con un ministerio de y moral: berto

de

la

Buenos Aires

más elevada

don Bartolomé Mitre, don Valentín Alsina y don Norla

Riestra.

Apenas divulgada la noticia de la expedición, el Gobernador gado y sus tres Ministros firmaron este decreto de muerte: 27

don

talla política

- IV.

Obli-

HISTORIA DELtTBUGUAT

418

«Habiendo desembarcado en el territorio del Estado un grupo de anarquistas capitaneados por el cabecilla Gerónimo Costa. con

criminal

el

contra

atentar

de

objeto

la

autoridad

constitu-

cional del mismo, para suplantar en ésta la del terror y barbarie

que caducó con

el

de Caseros, y siendo necesario que

triunfo

el

castigo de tan famosos criminales siga inmediatamente a la apre-

hensión de los mismos, a

para

plo

sucesivo

lo

de dejar sentado un saludable ejem-

fin

y

satisfecba

vindicta

la

dividuos titulados jefes

que

pública,

tan

mismos: 1." Todos los inque hagan parte de los grupos anarquistas

enérgicamente se ha pronunciado contra

los

capitaneados por el cabecilla Costa y fueren capturados en armas, serán pasadas por las armas inmediatamente al frente de la división o divisiones en campaña, previos los auxilios espirituales. 2." Los capitanes inclusive abajo serán remitidos, con la seguridad conveniente,

para que tengan entrada en

la

cárcel pública hasta nueva disposi-

deban ser

salvo aquellos que por circunstancias agravantes

ción,

comprendidos en

el

artículo

1.",

en cuyo caso se ordenará

lo conve-

niente».

La columna expedicionaria, compuesta de en Zarate en enero

^barcó

1856

y

se

150

hombres,

desem-

internó

en busca

de

in-

El Ministro de la Guerra coronel Bartolomé Mitre

corporaciones.

para dirigir las operaciones. Pero no tuvo necesidad de realizar

salió

grandes marchas, porque

da

de

alcanzados,

revolucionarios fueron casi en segui-

los

y exterminados

rodeados

en los campos de Vi-

llamayor.

Oigamos lo que decían los partes oficiales. El comandante Esteban García al Gobernador Obligado: «Rompimos el fuego y los llevamos por delante, matándoles 10 a 12 hombres, entre ellos Ramón Bustos, coronel, tomando prisionero al ex general Costa, un teniente coronel y otros oficiales. Por nuestra parte creo no tener desgracia ninguna. Costa ha sido silado

fu-

ya».

El coronel Emilio Conesa al Ministro de Guerra coronel Mitre: «Alcanzados y después de una ligera resistencia, murieron todos los

Réstame, señor,

traidores.

esta soez canalla ha tenido

el

felicitarlo

trágico

fin

una y mil veces porque

que de mucho tiempo atrás

debió tener».

Concluida licias

la

campaña

se

convocadas a raíz de

tunidad decía

el

procedió

al

la invasión, y

licénciamiento

de

véase lo que en

las tal

mi-

opor-

Gobierno de sus soldados en una proclama que

lle-

va las firmas del Gobernador Obligado y de sus Ministros Mitre,

Alsina y Riestra, consagrando la gran matanza de prisioneros:

GOBIERNO DE PEREIRA

«Al

volver

afirmado

vuestros

a

hogares,

orden público, pues

el

mover han expiado ya Sarmiento

llevad

la

conciencia

malvados que

los

.sus negros

419

lo

haber

de

pudieron con-

crímenes con sus cabezas».

también

a batir palmas ante la escena de carnicería realizada en los campos de Villamayor. «Han muerto decía en «El Nacional» o han sido fusilados

apresuró

se





en

acto

el

de

estará:

está lo

aprehendidos,

ser

¡voto

Bustos,

chápiro).

al

Costa,

Trofeos,

la

Olmos

no

(si

espada

luin y mohosa.

El carnaval ha principiado. Los paisanos han

mado

Los

Olmos.

a

paisanos

perseguido a Costa y Al

producirse

davía frescas

la

las

han

lo

invasión

escenas

han lanceado a Bustos,

lo

de Costa,

ellos

to-

han

fusilado». del

general

de Villamayor,

César

y

el

dichas escenas hecho por estadistas de la talla

y Sarmiento, debía repercutir aquende

para cerrar también con sangre

el

el

Plata

período

Díaz,

estaban

to-

ensalzamiento de de Mitre,

Alsina

como un estímulo

de las revoluciones

orientales.

Villamayor puede ser entonces considerado como padre de Quinteros,

y padre de ilustre abolengo, dada la alta autoridad moral y y aplaudieron ese acto de

política de los proceres que confirmaron

carnicería.

Villamayor era uno de los tantos epLsodios que ensangi-entaban gran escenario argentino.

No

era

tampoco

la

matanza de Villamayor una excepción,

e]

de

esas que a raíz de ocurridas obligan a los pueblos a reaccionar contra

extravíos

del

momento y a reprimir

la

efervescencia

de las

pasiones.

Nada

lo

demuestra tan concluyentemente como las luchas de la Argentina bajo las administraciones subsiguien-

propia República tes

de sus dos grandes estadistas

Deopucs

de!

desastre

de

Pavón,

Mitre y Sarmiento. tuvo lugar en noviembre

1861 el desquite de la Cañada de Gómez, en que

el

nancio Flores que

de

ció

al

estaba

general Virasoro,

al

servicio

infligiéndole

del

gobierno

de

general VeiMitre,

ven-

una baja formidable de 190

muertos y 144 prisioneros, la mayoría de ellos capturados por Urqulza en Pavón. Luego de dar esas dos cifras, agregaba el general Flores en su nota al Jefe del Estado Mayor general Emilio :Mitre: «Por nuestra parte sólo hemos tenido dos soldados levemente heuno del Regimiento Sol de Mayo y otro del Escuadrón de

ridos,

Arrecifes».

HISTORIA DEL UECGÜAT

420

El general Juan Andrés Gelly y Obes fué más explícito en una

Manuel Ocam-

carta que dirigió al Gobernador de Buenos Aires don

po a raíz del combate. «El suceso de la cañada de Gómez

muy comunes

liechos

pués

conocer su

de

no es de

te

general Flores y

que ha pasado.

lo

resultado

escuela

la

es



decía

le



del

por

aterroriza

Eso

terrorismo.

ello

Hay más de

es

que

lo

lado

la

Plata

del

le

és-

pasa

al

que no quiero

decir

detalladamente

300 muertos y

como

150 prisioneros,

heridos. Entre los muertos se encuentran

La matanza de

que des-

cuando

vencedor,

al

mientras que por nuestra parte sólo hemos tenido

este

uno de eso3

es

por desgracia en nuestras guerras,

muchos

2

muertos y

5

jefes y oficiales».

Cañada de Gómez suscitó fuertes críticas de entonces el doctor Fermín Ferreira y Ar-

y

tomó su defensa en «El Comercio del Plata». decía marcando la diferencia Cuando se mata a sangre fría cuando no se respeta el pacto que hacen los con Quinteros

tigas





valientes,

entonces

no por temor sino por salvar reprobación

la

es

co no es ya una disculpa en

campo de

el

mundo

la

vida de sus hermanos,

porque

universal,

asesinato

el

civilizado.

políti-

Pero cuando en

batalla, por deplorable que sea esa necesidad, se

el

extermina

enemigo para cortar con su derrota mayor derramamiento de

>al

sangre

para

y

alcanzar

más pronto

el

resultado de

feliz

salvar

inmunidad de tantos pueblos en atraso por el yugo del despotismo, no se puede tachar a los autores de esa propaganda li-

la

bertadora con esos epítetos infames que miga, ri

sino

con los

defensores

los

títulos

de sus

honorables

derechos.

ta el riego de la sangre, por ^idquirir

les

que

lanza la prensa ene-

la

humíinidad

El árbol de

medio de

la

la

libertad

"oucede necesi-,

cual llega solamente a

su frondosidad».

Pasemos a

las campañas argentinas de 1862 y 1863. Sarmiento era Gobernador de la Provincia de San Juan y a la vez director de la guerra contra las montoneras que acaudillaba el general Peñalosa (a) «El Chacho». Bajo sus órdenes estaba el coronel Ambrosio Sandes.

A

mediados de marzo de

de La

Rioja,

en

Salinas

1862,

Sandes venció a

Grandes, y dando cuenta

escribía al general Wenceslao Paunero, jefe del ejército

«Entre capitán jas,

los

de

montoneros su triunfo

primer cuerpo del

de Buenos Aires: los

don

prisioneros,

el

sargento mayor don

Cicerón Quiroga,

ayudante mayor don Carmelo Rotenientes don Nemoroso Molmé, don Ignacio Bilbao y don N. Policarpc

Lucero,

Ranión Gutiérrez y don Juan de Dios Videla. han sido pasados por las armas, según la orden de

alférez don

Vallejo,

Todos

421

DE PEREIRA

UUlilíJK.NU

ellos

V. S. y la necesidad dé hacer ejemplar el castigo de la ley con los

Con

armas contra

en

alzados

ocasión

tranquilidad

la

mismo suceso

del

pública».

armas

de

Sarmiento

escribía

Mitre:

r.

«El coronel Sandes llevó orden por escrito de pasar por las

mas

armas en

a todos los que encontrase con las

ejecutado en

mano y

la

lo

Sarmiento que eran triunfos que correspondían a Provincia de Buenos Aires.

Advertía de

escribía

le

las

diecirle

que a

la

espina

tal

habilidad

la

don Ambrosio

el

pasar su último ^litre:

talón,

ha

de un

extraída

sido

del

lugar

que se llama

facultativo

La acción

Sandes»....

al

Gobernador

al

La Rioja era una espina que tey hoy tengo la satisfacción de

decía que

usted introducida en

merced

Paunero

general

el

«En mi anterior nía

la

la

La campaña de 1862 concluyó rápidamente, y parte

ha

El triunfo del coronel Sandes

los jefes y oficiales...

termina con brillo la guerra civil, interior, que comienza en Cañada de Gómez y concluye en las Salinas de Moreno». tropas

ar-

doloroso,

coronel

el

Sandes «es una

de

repeti-

ción de la Cañada de Gómez, en su forma y resultados».

El

de

los

jefes

recibidas

dado

ejecutor

más

de

de

esas órdenes

de exterminio, era

relieve de la época, por su brillante foja

y las cincuenta y tres heridas que ostentaba con

servicios

gullo,

bían

Sandes,

coronel

uno de

al

casi

todas

regimiento

en

ellas

su

de

cargas

mando

el

memorables

rango

más

que

alto

en

or-

hael

Buenos Aires. Cid Campeador, le llamaba Sarmiento en una proclama de 1862. El cuerpo y el alma de Sandes, decía «La Nación Argentina» en 1863, «parecen vaciados en un molde sobrehumano». Y documentando su tesis publicaba ese diario una serie de anécdotas encaminadas a honrar su legendario coraje perejército

sonal.

de

Vayan

estas

como muestra:

una vez Sandes con su asistente por un camino solitario. De pronto el asistente se echa al suelo y empieza a quejarse. SanIba

des se baja del caballo y

al

agacharse,

el

asistente le abre el vien-

con su daga y monta a caballo y escapa. Sandes recoge sus entrañas y camina liasta una estancia vecina y obliga a los peones a que salgan en persecución del heridor y sólo después de

tre

aprehendido consiente en que

Marcos Xeira era

el

lo

curen.

terror de la

campaña

orient-il.

Sandes que estaba en un rancho con tres bandidos, y

Supo un día

allí

fué a bus-

HISTOBIA DEL UEUOUAY

422

cario.

Al llegar

al

rancho se paró en

que se entregaran.

tro

puerta y gritó a los cua-

la

Neira se abalanzó sobre

daga, pero cayó muerto en la lucha y sus tres

rindieron en

Sandes con su acompañantes se

acto.

el

una noche iSandes de su estancia en dirección al pueblo de Paysandú cuando fué asaltado por 16 hombres armados de carabina. El estaba solo, pero asimismo sostuvo y rechazó el asalto, Salía

hiriendo a varios de sus atacantes y saliendo herido.

Otra noche, cia

que

doblar una esquina, recibió una estocada tan

al

produjo la rotura

del

quedándole en

estoque,

re-

cuerpo

el

asimismo su camino y entró de donde permaneció largo rato. Recién al día siguiente llamó a su médico, el doctor Blancas, para que le extra, acero. Prosiguió

tres pulgadas de

en una

visita

jera

casa,

estoque.

el

Después de

campaña de

la

1862,

empezó

la

de 1863, con

el

mismo

espíritu de exterminio que acababa de salpicar de sangre al ejér-

de Buenos Aires.

cito

En

abril

comunicaba

coronel Sandes al general

el

un

Paunero

triunfo obtenido en Punta del Agua. Decíale en su parte que los montoneros habían tenido 150 muertos en una de las cargas y 74

'en otra, y agregaba que había tomado 24 prisioneros y que 4 de ellos

En

ha&ían sido fusilados.

mismo año comunicaba

junio del

general Paunero

el

al

Pre-

sidente Mitre una derrota de «El Chacho» en las inmediaciones de

Córdoba, que había costado a los montoneros 300 muertos. «Sandes





decía

ha dado una de esas cargas que

le

son familiares y

que han hecho del primer regimiento un cuerpo de caballería digno de rivalizar con los de nuestros mejores tiempos».

Algunas semanas después

la

prensa

de

Montevideo transcribía

de la de San Juan la crónica de las ejecuciones de varios de los prisioneros tomados a «El Chacho». Uno de ellos había sido ahorcado y

su

San Juan

había

cabeza

llamaremos



colocada

sido

luego

decía lleno de satisfacción

—esta

el

en

un

palo.

diavio «La

serie de coincidencias de venir

cayendo

«¿Cómo

Zonda» de al

término

de sus iniquidades y a manos de los hombres que llevan las

ar-

mas de

fe-

uno tras otro

la ley,

los feroces asesinos de las

hordas

derales? Justicia de Dios!».

Al finalizar

el

mes de

julio

daba cuenta

el

general Paunero

al

Ministro de la Guerra de la victoria alcanzada en las Playas de Córdoba contra «El Chacho». Los vencedores habían tenido 14

muertos y 20 heridos; 700 prisioneros.

los

montoneros, 1) heridos. ñOO muertos y

GOBIERNO DE PEBEIRA

423

La campaña de 186:^ terminó en noviembre con la captura de Chacho» en hu propio domicilio, y la inmediata ejecución y

«El

comandante Pablo Irrazábal,

mutilación

del

municar

suceso a Sarmiento, Gobernador de San Juan, prevenía

el

El

prisionero.

«que para escarmiento había colocado ("al

en

la

al

co-

cabeza del titulado gene-

plaza de Otta».

la

El gobierno de Mitre protestó contra la ejecución de «El Chacho»,

como más tarde Sarmiento, siendo Presidente de hostigado por

prensa opositora con

la

tuvo del general

Rivas

Ignacio

el

República, y

de que los

declaración

la

la

mote de degollador,

ob-

fusila-

mientos del coronel Sandes emanaban de órdenes transmitidas por propio Rivas, ajenas al Gobernador de San Juan, quien sólo ha-

el

bía tenido noticias de ellas después de ejecutadas.

Pero sin

hecho es que las ejecuciones de prisioneros se repetían

el

cesar y que los autores de esas ejecuciones seguían siendo lo£

militares de confianza de los estadistas argentinos, de los que ha-

bían recibido los

y

seguían

grados y honores que sólo a

recibiendo

grandes servidores alcanzaban.

Un año

necesidad de

antes había tenido

Argentina»

contra

otro

diario

protestar

«La Nación

Buenos

importante de

Aires,

«El

Nacional». Véase en qué términos:

«El

(leiiüelJo

indios,

si

no

de los niños. se

—'Nada

Apliquemos estos principios terminio.

vez la

al

Sin tomar prisionero

Pampa

sin perdonar al

se conseguirá en la guerra de los

aplican los principios del derecho de gentes.

les

o la espesura

indio. al

Llevémosle

la

guerra de ex-

grande, que ha de buscar otra

de las selvas para robar y asesinar,

que pequeño todavía tiene ya

el

odio instintivo al

hombre civilizado» Estas palabras atroces no !as ha escrito ningún tigre: pertenecen a la redacción 3e «El Nacional». Parece que hay tratadistas de derecho de gentes que aconsejan el exterminio .

de los prisioneros y si

se le

.

.

el

degüello de los niños... El

mismo

Calfucurá,

ocurriera hacer degollar a los hijos de sus enemigos, no

se atrevería probablemente luegd que aprendiese a escribir, a proclamar este crimen sin nombre como un principio del derecho de

gentes... ral

¡Quién creería que en medio del ilustrado, culto y libeBuenos Aires, por un Hiario que se i)retende órgano del partido

de los principios y de la civilización, se predica niño>!»

el

degüello de los

HISTORIA DEL rP.UGÜAT

424

Tampoco escapaba

el gemei-al

César Díaz a las influencias de la

época.

a

Esa atmósfera de sangre y de violencias envolvía con frecuencia Oriental y el jefe de la revolución no pudo susla República

traerse a su terrible influencia.

Ya anteriormente, en

postrimerías del año

las

cirse la contrarrevolución de res,

había puesto su firma, como gobernador delegado,

un decreto que ordenaba ]a

1853,

prevención a todas

el

las

«^pasarlo por las armas, sin

al

produ-

don Juan Francisco Giró contra Floal

de

pie

arresto de don Bernardo P. Berro, bajo

autoridades

del

de

país

más formalidad que

que deberían de

la justificación

la identidad de su persona», y de otro decreto que confiscaba, con

destino a gastos de guerra, los bienes de ese y otros ciudadanos

vinculados al movimiento de restauración del gobierno de Giró.

La revolución contra Pereira provocó en la prensa unitaria de Buenos Aires una propaganda de resurgimiento de odios y de actos de venganza, que extremaba así «La Tribuna» en un artículo que reprodujo la prensa de Montevideo en 1858: «Preciso es que los hombres de la Defensa recuerden lo que han y

¿fufrido

armas de

lo

que sufrirían en caso de tener algún contraste

la libertad.

frido la República, ocasionados por tria a

un

principio

domiren

las

Preciso es recordar los quebrantos que ha su-

hombres que vendieron su pamarchar con firmeza, dando

tirano, y con arreglo a ello al

las

exterminio y confiscación

armas de

la

libertad.

De

en todos lo

los

puntos que

contrario la guerra

es

desigual y viendo los soldados de la libertad que no se adopta una

m?.rchi enérgica y firme, pronto entrará

el

desaliento, faltarán los

tomarán vuelo y llevarán la ventaja que siempre han llevado... La experiencia nos ha mostrado ya que sin esa medida es imposible que se acabe la guerra civil en las dos márgenes del Paraná y del Plata, y siendo esta una necesidad imprescindible, es preciso endurecer el corazón y adoptarla: a quienes guerra a muerte saben hacer, con guerra a muerte se les debe responder. Si ellos abrieron la escuela para destruir todo lo bueno, para degollar a todo hombre de honor y si son los verdaderos autores de todos los males que han sufrido las dos Repúblicas del Plata, abren de nuevo la misma escuela de Rosas y Oribe que ellos establecieron para acabar con todo lo bueno y para asesinar lo más notable de nuestra patria, ;,qué cosa recursos, y ellos con su antigua táctica,

425

GOBIERNO DE PEREIRA

manchas de sangre?

sencilla que lavar con sangre la

más llana y ... La fusión

es

una mentira,

fusión es imposible,

la

es

toleran-

tismo, un crimen de lesa patria, y los soldados de la libertad deben preferir

que se acabe

humana, antes que

especie

la

se

pierda la

robo y el pillaje alentó Rosas y Oribe a sus tropas de bandidos; con el terrorismo se les debe contestar, y a quienes son tan amaestrados en la guerra a muerte, con

campana.

.

Con

.

el

terrorismo,

guerra a muerte se

la

Recogiendo

debe responder.»

les

Díaz a don Tomás Gomensoro de

batalla

la

Cagancha,

20

el

César

general

el

de enero de 1858, a raíz de

para

instrucciones

darle

al

escribía

consejos,

terribles

estos

el

el

levanta-

r.iento de fondos sobre la base de tributos de guerra a varios per-

sonajes del Partido Blanco:

«Xo

tenga,

usted

porque esas fortuna;: son nuestras,

escrúpulo,

de nuestros amigos, a quienes las han robado. crúpulo,

porque es necesario moralizar

tado,

crimine.s

No

tenga usted

porque esas fortunas cuando menos deben volver

al

es-

Es-

castigando los

la sociedad,

que con ultraje de Dios han estado impunes hasta ahora;

y disponiendo usted de ellas para el servicio de la cosa pública, no hace usted más que hacer uso legal de los dineros del tesoro nacional.»

«Es preciso





agregaba

que todo

Partido Colorado,

el

Tido de las tradiciones gloriosas de la República,

un

como

a esa canalla que prostituye destinos públicos. Es preciso extirpar esa raza maldita que más sólo

IOS

hombre para

el par-

se levante

gritar

Ce una vez ha entregado

el

¡atrás!

país al extranjero, y que

si

han tenido

deben a nosotros. Es preciso usar de rigor con los indiferentes, porque éstos han hecho los enemigos y con siempre en nuestras filas tanta brecha como aquéllos. Es preciso

y tienen patria,

qtie

corra

lo

sangre,

porque

ella

es

No haya

lástima,

todos

pudieran;

si

no,

con

esos

severidad,

necesaria para sellar la revolu-

demore

ción y hasta es moral que no se

castigo de los criminales.

el

que nos

bandidos,

amigo, y

mano

de

degollarían fierro

a

con esa

a todo el que no quiera plegarse a nuestras que no quiera aceptar las tradiciones gloriosas de

canalla. Fusile usted ideas, a todo el ia Defensa.»

Días antes, en otra carta dirigida a su esposa había dicho:

«He venido a San Partido Blanco en

que es el centro de los recursos del campaña, para proveerme de lo que yo ne-

José,

la

cesito.»

Debemos

advertir

que en 1831 sostuvo

el

doctor Mateo Magari-

HISTORIA DEL TJKUGUAY

426

ños Cervantes que la carta a don

Tomás Gomensoro no

era autén-

y que el doctor Antonio de las Carreras, con quien polemizaba contestó que el original existía. tica,

Los Jefes Políticos de Canelones. Florida y Durazno documentaron también varios actos de violencia personal, de contribuciones

de guerra y de saqueos de mercaderías, atribuidos a las fuerzas del general Díaz, de los que no podemos ocuparnos dada la imposibilidad

de

¿Hubo

lo

aislar

ción de lo que se

que

imputable a

realmente era

consumaba

sombra

a la

la

revolu-

del desorden reinante.

capitulación en Quinteros?

La matanza de Quinteros, antecedida de

matanza de Villama-

la

yor y seguida de las matanzas de prisioneros que eran el epílogo obligado de todos los combates dados por la consolidación de la nacionalidad

argentina, no

con

contrasta, pues,

el

época, que inclinaba al exterminio

como medio de

samiento político que inspiraba

enemigo.

Es un cuadro de

al

pero

carnicería,

que

tiene

criterio de la

destruir

sus

pen-

el

modelos en

Alsina

y

Sar-

miento, personajes de cumbre a los que bien podían imitar

el

Pre-

cuadros

otros

sidente

que

llevan

firmas

las

de

Mitre,

don Gabriel Antonio Pereira y su Ministro de Gobierno

don Antonio de

las Carreras.

¿Pero constituye

además

la

violación

de

una

de

capitulación

guerra?

lEmpecemos por ante

el

La palabra El

declaración del General en Jefe del Ejército

mismo

el

general César Díaz.

del general Medina,

día de la

general Medina

el

la

cual se rindió

al

rendición,

el

28 de enero de 1858, escribía

Presidente de la República:

«Hemos triunfado completamente, pues el ejército rebelde que logramos alcanzar, todo se ha sometido y ha entregado sus armas, pertrechos y bagajes... El general don César Díaz, Freiré, el colonel Tajes y 14 jefes más, están prisioneros en nuestro poder.»

Este primer parte llegó a Montevideo acto

empezó

el

el 1." de febrero y en el repique de las campanas y se organizaron manifesta-

ciones callejeras, con bandas militares algunas de ellas, que asalta-

ron

la

imprenta de «El Comercio del Plata» y realizaron otros

ac-

GOBIEBNO DE PEBEIBA

igualmente censurables, dando lugar con

tcíj

Gobierno se dirigiera a

lie

427

a que

ello

la Policía, diciéndole:

«Que

Ministro

el

habían

se

co-

metido algunos excesos que no podían tolerarse, porque ofendían decoro y la dignidad del país» y que era urgente que se

el

ins-

truyera un sumario para la averiguación de los culpables.

Al

siguiente

día

decía

«La

República»,

rematando sus comen-

tarios:

«Nos dirigimos de Cristo,

sericordioso

Pero

que quiera tener misericordia.»

el

director

el

señor Presidente para recordarle esa palabra

al

soberano juez del Universo, que dijo que ha ser mi-

el

diario

del

debió

sufrir

una formidable

crisis,

porque horas más tarde, reaccionando contra su editorial, expresaba que no debía haber clemencia con los jefes, que los jefes no debían ser perdonados, porque eran vándalos!

Dos días dspués de su parte al Presidente, se dirigía el general Medina al Ministro de la Guerra, desde Villasboas, dándole cuenta

más circunstanciada de En este nuevo parte letín el

la rendición.

del

de febrero, decía

2

mento en que ambos «Seguían estas

30 el

de enero, que fué publicado en bo-

general Medina describiendo

ejércitos habían

fuerzas por

margen

la

mo-

el

quedado en contacto: derecha del

río a

gran

galope, arrollando cuanto se presentaba a su frente, y al remontar

y disponer un ataque simultáneo con dichas fuerzas,

las cuchillas

apareció en cibir

del

los

rebeldes.

Lo mandé

re-

Geremías Olivera, segundo jefe Estado Mayor, cuyo parlamento ofrecía el sometimiento com-

pleto

por

teniente

el

coronel don

de los rebeldes y

por evitar

dignamente

la

rendición de sus armas, lo que acepté

efusión de sangre, quedando de este

la

irresistible

el

Paso un parlamento de

el

modo demostrado

poder del ejército de la República que sostiene tan gobierno y sus

su

instituciones...

Han quedado en

nuestro poder y a disposición del Gobierno prisioneros los generales

don César

Díaz y don Manuel Freiré, siendo el primero el el segundo su Jefe de Estado Ma-

General en Jefe del Ejército y yor,

más

Desde

9 jefes, 03 oficiales y la

te Pereira.

315 individuos de tropa.»

Florida volvió a escribir

Véase

lo

que

le

el

general Medina

decía en esa carta, datada

al

Presiden-

el 4

de febre-

acabamos de transcribir: «Respecto a lo que digan a V. E. de pasaporte y demás, no son sino absurdos, pues yo no estaba autorizado para ello. Lo que hay, señor Presidente, es que los hombres se vieron en una si-

ro,

o sea a los cinco días del parte que

tuación

dificilisima,

rodeados

por

todas

partes

por las

fuerzas

DEL TRUGUAT

HISTORIA

428

del

Gobierno

En

ese

que

ansiaban

momento

encima y

por caerles

exterminarlos.

como desesperados sobre el Paso con un parlamento pidiendo garantías. Yo les contesté que tenían media hora de plazo para rendirse, lo que efectuaron, y no hice sino buscar el medio de tomarlos, a fin de evitar el que corriera tanta sangre, pero sin contraer ningún compromiso para con arrojaron

se

e'^os».

Desde llegó

en los

Miguelete,

el

8

el

de febrero,

volvíió

escribir

Medina- Véase

general

el

adonde

Montevideo,

suburbios de a

que decía en esa carta comunicación al Ministerio de la Guerra: tolerar por más tiempo que los enemigos del or-

lo

«No debiendo

den continúen con

armas en

pretensión de obscurecer

la

de las

triunfo

el

Gobierno, propalando que la rendición de los rebeldes

del

Paso de Quinteros ha sido hecha bajo capitulación y que a

el

mi imprescindible deber como tal superchería, tcinto más

fsa capitulación se ha faltado, es de

General en Jefe del ejército desmentir

cuando han revestido

aquella impostura

figurando

condiciones y

basta circulando cartas apócrifas con la copia de un supuesto pasaporte dado por mí a César Díaz y demás rebeldes.

«Después de derrotados completamente guard(ia

del

Quinteros con su

so de

por

rebeldes

los

infantería

y

escuadrones

tres

van-

la

quedaron reducidos en

constitucional,

ejército

el

de

Pa-

caballe-

el grueso del ejército que había tomada la retaguarenemigo los embistió circunvalándolos para cargarlos. Entonces fué cuando tentaron la capitulación por primera y segunda

donde

ría,

dia del

que no

vez cera

en

vez,

les

quise oír,

intimé

hasta

que habiéndola

rindieran

se

propuesto por

discreción

a

y

ter-

condiciones

«In

término de media hora, so pena de ser inmediatamente acu-

el

chillados

por

rándolos,

como realmente

el

Se

ejército.

efectivamente

rindiieron

eran,

y

tomados con

traidores

conside-

las

armas

en la mano, los puse a disposición del Gobierno.»

¿Cuántos paiiainentai-ios enviaron

Hagamos, ante oficial

tas

al

aceptadas

de

general

la

Guerra,

en

los

parlamentos:

con

al

uno

figura la

carta

pero con propuestas

y en la carta

que tre? sucesivos, El

de

inmediato;

un solo parlamento, en absoluto;

resumen de

todo, el

-Ministro

les lovoliioionarios?

al

en

en

con

Presidente,

el

parte

propues-

también

de garantías rechazadas

Ministro de

propuestas

solo,

los

la

Guerra, nada menos

tres

casos

rechazadas.

Medina terminaba su cuarta comunicación diciendo

GOBIEUNO DE PEREIRA

que

él

ter.ía

429

derecho de ser creído, porque

el

derecho debía

tal

te-

ner «el veterano que desde la Independencia servía a su patria sin haber mancillado jamás su larga carrera por un acto de deslealtad».

Era

título glorioso

duda alguna,

y saneado, sin

el

Cfue

invocaba

viejo guerrero de los tiempos heroicos de la Independencia. Pe-

el

ro de esos tres documentos contradictorios, todos ellos con su

ma, ¿cuál era

el

que decía

la

fir-

primero, en que un

verdad? ¿El

parlamentario ofrecía una capitulación que era aceptada? ¿el segundo, en que un parlamentario ofrecía una capitulación que era rechazada? ¿o el tercero, en que aparecían uno tras otro tres parlamentarios con propuestas que eran invariablemente rechazadas? habían hecho firmar Al viejo servidor de la Independencia le declaraciones sucesivas, de acuerdo con

operaban en

ambiente de

el

la

las

modificaciones que se

Gobierno, y de ahí sin

Casa de

las contradicciones en que incurría. última de ellas debió sonrojar a sus propios autores, cuan-

duda alguna

Y

la

do teniéndola en su poder desde a darla a la prensa

publicada

por

el

día

8,

recién se

resolvieron

28, o sea veinte días después!, en que fué

el

«La República», en

sección

la

de documentos

ofi-

ciales.

propuestas

Jjas

En

el

los parlamentarios.

parte oficial del 30 de enero al Ministro de la Guerra,

gura, según

Y

tle

hemos

tal es la

dicho,

segunda observación que sugiere

Medina, cuando luego de

los

la

establecer que apareció

Quinteros un parlamentario

de

fi-

una propuesta aceptada de inmediato.

ofreciendo «el

nota del general en

el

Paso de

sometimiento completo

rebeldes y la rendición de sus armas», agregaba que había

aceptado «por evitar la efusión de sangre».

Esa

frase,

perfectamente explicable a raíz de una capitulación,

no tendría sentido tratándose de una rendición oficial

parlamentario

lisa

y llana. Si

hubiera ido a proponer una entrega a

creción, ¿por qué habría de decir al

Ministro de la Guerra

el

el

dis-

ge-

neral Medina que había aceptado para evitar la efusión de sangre?

El general los

jefes

del

Medina conocía el decreto de_ muerte lanzado contra movimiento revolucionario desde el alzamiento del

coronel Erigido Silveira, y tenía que explicar por qué no había

timado a

los

vencidos.

Oigamos ahora a

los

prisioneros.

ul-

430

La

HISTORIA

DEL UBUGUAT

de los prisioneros.

i)alabi'a

Durante cuatro días estuvieron

los jefes y oficiales revolucionadentro del campamento vencedor, tranquilos y respetados. He aquí algunas de las cartas que les fueron atribuidas por las pu-

rios

blicaciones

de

la

época:

Del general César Díaz a su hermana:

(Paso de Quinteros. 29

«Mi querida Angelita: ayer hemos sido obligados a capitular con el general Medina. Mediante un parlamento se convino en que serían garantidos todos los oficiales y soldados y que de enero)

los

obtendríamos un salvoconducto para

jefes

efecto, se nos dio el pasaporte,

expresando en

panados hasta

Brasil por

la frontera del

el

salir

del

país.

En

que seríamos acom.

él

Jefe Político de Cerro

Largo don Dionisio Coronel, y la tropa fué entregada con sus armas. Pero aún cuando estaba convenido de palabra que ayer mismo saldríamos para nuestro destino, estamos hasta hoy en el campo del ejército. Se nos dice que es para que marchemos junto con división de aquel departamento, que debe salir de hoy a ma-

la

ñana».

Del propio general César Díaz a su esposa (carta incluida en

el

«Mi querida Pepa: después de extraordinarios esfuerzos para sostener la campaña, nos hemos visto ayer obligados a capitular. El general Medina ha garantido la vida de tosobre de la anterior):

dos los oficiales y soldados que

y

los

demás

me acompañaban. En

frontera del Brasil, bajo una escolta

expresado pasaporte;

la

de las fuerzas a su mando.

Esto ha sido pactado antes de deponer las armas. bolsillo el

cuanto a mí

nos ha dado un pasaporte para marchar a

jefes,

mas según

lo

Y

tengo en mi

convenido debíamos

haber salido ayer para ese destino y hasta hoy estamos detenidos. No me figuro que el general Medina sea capaz de violar un convenio celebrado con todas las formalidades de la guerra;

pero no

puedo sin embargo hablar con seguridad de mi futura suerte. ¿Nos llevarán al Brasil? ¿Nos llevarán a Montevideo? ¡Quién sabe! Pienso a todas horas en

ti».

Del coronel Eugenio Abella a su esposa por la

mañana

se nos

fueron

del

(1.°

de Nicasio Borges, y otro de Goyo Castro,

tábamos

perdidos;

huyeron

como 100 hombres de dos

a

todo;

pero

cobardemente.

caballería y

nuestra

más de

situación

de febrero):

campo dos

era

«El 28

escuadrones, uno

diciéndonos

Nos quedaban

que

es-

todavía

300 de infantería, decididifícil...

El

general

Cé-

GOBIEEXO UE PEBEIRA

.ear

Díaz y demás jefes del Estado Mayor, resolvtieron hacer uaa para

capitulación,

manos...

Se

conclusión

el

se avino a jefes

los

evitai

derramamiento de sangre entre her-

el

mandó un parlamentario con general

Medina, jefe de

proposiciones fuerzas

las

un pasaporte con

dio

la

garantía

del

Coronel, y firmado

Dionisio

general Medina, cuyo pasaporte era para coltados por una fuerza hasta la frontera;

ha sucedido. Hoy hemos venido

Brasil

el

Jefe

por e

pero hasta

por

y

Gobierno,

del

para

dar fianza a todos los jefes y tropa dei ejército;

les

Cerro Largo don

c'e

431

Político el

mismo

iríamos la

es-

fecha no

Durazno como prisioneros y

al

ro-

deados de centinelas».

De don Vicente Garzón

me ha

loso con nosotros. Lasala

me

el

sido vencidos por

enemigo ha sido muy gene-

sacado de entre

los

prisioneros y

tiene a su lado».

§egún

el

sargento mayor don Juan Manuel de la Sierra

del general César Díaz a su

la

«Hemos

a su madre:

incapacidad de nuestro general;

la

hermana fué dada

al

la

car-

coronel Lasa-

quien la puso bajo sobre dirigido a persona de su familia (don

la,

Ignacio Soria) y

la

entregó

al

misino oficial conductor del parte

Medina.

del general

oficial

Llegaron, pues, las cartas del general Díaz a Montevideo

mo

día que el parte oficial

dirigido por

mis-

el

general Medina al Pre-

el

sidente Pereira.

En

acuerdo de gobierno que de inmediato se celebró, quedó

el

bajo

resuelto

la

presión

de

las

exaltaciones

políticas

del

día

el

fusilamiento de los jefes prisioneros.

El general

Enrique Martínez, padre político

Díaz, asilado a la sazón en

el

Consulado de

los

del

tó entonces de salvar la vida de los prisioneros,

cular al Cuerpo Diplomático, datada cía

los

el

2

general

César

Estados Unidos,

mediante una

tracir-

de febrero, en la que de-

siguiente:

a mis manos la carta que he depositado en las de S. E. señor Encargado de Negocios de Su Majestad Británica, en que general Díaz participa a mi famália que se ha entregado a las

«Ayer vino el el

fuerzas del Gobierno bajo la fe de

metía a

los

vencidos

el

una capitulación en que

poder pasar

libremente

olno del Imperio del Brasil, otorgándoles

La prensa Driginal,

sino

afín

una

al

el

ai

se pro-

territorio

v¿-

respectivo pasaporte».

Gobierno dijo

copia.

que no se había entregado el Por su parte el Ministro de Relaciones

Exteriores doctor Antonio de las Carreras, dirigió una contracircular al Cuerpo Diplomático, en que decía lo que extractamos a

continuación:

'

HISTORIA DEL UBUGUAY

432

Sabe

Gobierno que

el

el

general Enrique Martínez, asilado en

Norteamericano,

Consulado

se

jeros para que. intercedan en

haQiendo

efecto

al

ha

el

Agentes extran-

dirigido a los

favor de los vencidos de Quinteros,

«una inicua relación de aquel acontecimiento».

Se trata de «una torpe calumnia». El sometimiento de los revolucionarios fué sin pacto ni condición alguna... «Ni los conceptos del parte oficial, ni las correspondencias particulares del ejército re-

velan que hubiera habido capitulación ni convenio alguno... El general Medina, por

otra parte,

no podía hacer concesión alguna, ello- Todas sus instrucciones se

no tenía facultades para

•porque

reducían

cumplimiento

al

del

decreto

y

disposición

gubernativa

acerca de los rebeldes. El Gobierno no podía dar crédito a los ru-

mores que recién ayer llegaron a su conocimiento acerca de una capiitulación, porque esos rumores están en contradicción con lo que revelan los partes oficiales, que nada dicen de arreglo ni convenio alguno. Con todo, ante una copia simple y un pasaporte que se dice

dado por

el

general Medina

al

ex general César Díaz y en

el

interés de que no se le tachara de proceder

te,

mandó suspender

los

la ejecución ordenada,

hechos que se aducían».

Una

de don José María Castellanos.

cai'ta

La

de la capitulación circuló fuera de! campamento. Lo

noticia

demuestra esta carta que también registran época,

la

respetable hacendado don José

del

su esposa, datada en día

impremeditadamen-

hasta la verificación de

en que

minación de «El

el

Durazno

el

28

la

al

de

María Castellanos a

de enero o sea

general Medina daba cuenta

el

publicaciones

las

el

Gobierno de

mismo la

ter-

guerra:

portador de esta es

el

oficial

que conduce

el

parte oficial,

que dice que todo ha concluido. Las fuerzas del general Díaz han capitulado...

César Díaz, Tajes, Pollo y todos los oficiales pidieBrasil. Don al Dionisio Coronel los debe es-

ron ser conducidos coltar.»

El pasaporte de los prisioneros.

Asegura don Juan

Manuel de

Díaz tenía en su poder pedido

el

la

Sierra que

el

general César

pasaporte original y que habiéndoselo general Medina, sacó una copia con destino a don Juan el

433

GOBIERNO DE PEKEIRA

Kamón Gómez,

quien

entregó

la

Ministro Inglés Mr. Thornton

al

para que gestionara la derogación del decreto de fusilamiento. Es un testimonio que coincide parcialmente con las palabras que

don Antonio Díaz atribuye ouales

a raíz

al

coronel

Bernardino Olid, según

las

fusilamiento fué extraído del bolsillo de César

del

Díaz un pasaporte con

lista de

la

tidos al Brasil, extendido el

los

jefes

que marchaban garan-

28 de enero, con la firma de

Medina

«Es copia. César Díaz». archivo del doctor Luis Mellan Lafinur existe una de esas

esta certificación:

y

En

el

Jos copias.

Cómo

describe la capitulación el sai-gento

mayor don Juan Ma-

nuel de la SieiTa.

Don Juan Manuel de

la

Sierra,

uno de los oficiales subalternos forma la rendición de las

del general César Díaz, describe en esta

fuerzas de que

él

formaba parte:

Al llegar al Paso de Quinteros en

Río Negro, quedaron en

el

de Medina fuerte de 2,500 hombres alcanzaba a 500 en razón de haque Díaz, ya no y el de César berse retirado varias partidas ante el anuncio de una transacción. Después de algunos combates aislados, el general Díaz envió un contacto los dos ejércitos:

parlamentario contra a

el

opinión del coronel Tajes, quien se inclinaba

la

seguir luchando por falta de confianza en la actitud de los ad-

El

versarios.

mayor Espinosa, que era

una carta de Medina Tajes: «El general Medina con

todos nosotros; cos». Volvió

y,

el

me

al

dijo

regresó

César Díaz a

dice aquí que garante la vida de

por consiguiente trato con

Espinosa

parlamentario,

luego de leerla,

él

y no con los blan-

campo de Medina y regresó con un pliego

que establecía las siguientes condiciones: las fuerzas sublevadas se

someterán

al

jefe del

ejército constitucional;

dos serán conducidos a del

la

los

oficiales

y solda-

Capital para ser puestos a disposició;n

Presidente de la República;

el

general y los demás jefes pa-

sarán con sus respectivos pasaportes al Brasil... Estas condiciones estaban firmadas por Medina y fueron leídas a los oficiales y soldados después de su aceptación por los jefes superiores. Mientras se pactaba hubo una suspensión de armas, en que los jefes de la

Medina

se

daban por interiorizados de

las

condiciones de

capitulación.

César Díaz se quedó con firma a Medina. IV

-

28.

En

el

el

original y

acto del

pasó una copia bajo su

canje de las notas, don Dionisio

HISTORIA DEL URUGUAY

434

Coronel notificó a los jefes de la revolución que debían ponerse

tn marcha para

Brasil,

el

custodiados por

el

escuadrón del capi-

tán Alvarez, y ya la columna se había puesto en marcha y había andado unas tres leguas cuando se mandó retrogradar. 'Antes de llegar la orden de fusilamiento

movimiento contra

inmediato de

plimiento

hubo en

la

capitulación,

un cum-

ejército

el

vida de los prisioneros, que obstó

la

al

esperar la

resolviéndose

palabra del Gobierno.

La orden

llegó

— quien

Medina

cio y al enfrentarse con

minos:

de febrero y en el acto fueron fusilados al caminar hacia el sitio del supli-

1.°

el

general César Díaz,

el

«¿qué vale ya

neral Manuel Freiré,

la el

le

increpó su conducta en estos tér-

palabra de un general oriental?»

coronel Francisco Tajes,

el



el ge-

coronel Eulalio

Martínez, y al día siguiente los comandantes Isidro Caballero, Eu-

genio Abella,

Benigno

Islas,

Juan José Poyo y Ramón

Islas,

los

sargentos mayores Esteban Sacarello, Manuel Espinosa, Aurelio G. Freiré y varios oficiales subalternos.

Las órdenes de fusilamiento.

Vamos ción:

abordar otro capítulo

a

muy

interesante de la capitula-

de las órdenes de fusilamiento.

el

El 30 de enero de 1858, es decir, dos días después de la rendición

ejército

del

del

general

Díaz,

Presidente Pereira

el

uu acuerdo de Ministros para dictar instrucciones

al

celebró

general Me-

dina.

Todavía no se

conocía la

rendición.

chasque

El

parte oficial de Medina recién entró en Montevideo

Pero ya habían llegado rumores acerca de

ro.

ambos

ción de

ejércitos y nadie abrigaba

las

el

portador 1."

marchas y

dudas respecto

del

de febre-

al

situa-

desen

jace rápido de los suce.sos.

Como consecuencia la el

de ese acuerdo de gobierno,

Guerra general Andrés A. Gómez trasmitió

mismo

día 30

«Resuelto

el

el

al

el

Ministro de

General en Jef

siguiente decreto:

Gobierno a salvar

el

país

de

la

desmoralización

continuas maquinaciones de los enemigos de todo orden que sin más pretexto que sus bajas pasiones conspiran contra la sociedad atacando a los gobiernos legítimos a que lo

que

la

han conducido

las

representan, y no pudiendo clasificarse de otra

de banda

y del exterminio

la

manera que

entregados a todos los excesos del pillaje aglomeración de hombres que han osado venir

de forajidos

43Ó

GOBIERNO DE PEBEIRA

sobre la Capital y en cuya persecución han marchado las fuerzas en castigar a esos delincuentes

nacionales, que no pueden tardar

malvados, puestos ya fuera de í.rdenes dictados para

el

la

en virtud de

ley

los

decretos y

y considerando

caso de ser aprehendidos;

Gobierno que aunque autorizado pa> a usar de la clemencia c >n' patible con las circunstancias, no puede extenderla a los jefes y oficiales tomados con las armas en la mano, porque además de

ei

inconsecuente con las promesas

aparecer débil e

contraería para con

hechas

al

país,

una seria responsabilidad: en cumplimiento

él

lo dispuesto en el decreto de 1.1» de enero del corriente año, que declara reos de lesa patria a todos los jefes y oficiales que se hayan prestado o se prestaren a apoyar la rebelión contra el Go-

de

ha acordado que se oficie al General en Jefe del ejército para que haga pasar por las armas a los generales y que aprehenda hasta la clase de coronel inclusive, y que desde

bierno,

nacional jefes

de teniente coronel hasta la de alférez sean quintados para sufrir la misma pena. Y que si entre estos mismos hubiese algunos la

que se hubieran distinguido por hechos de una criminalidad remarcable en asesinatos y saqueos, sean exceptuados de la quinta y fusilados sin entrar en

ella.



transmitía

se

fjue

de las Carreras,

Pereira, Antonio

Juan A. Gómez, Federico Nin Reyes.» La nota original del iMinistro de la

Guerra general

Gómez, en

acuerdo que antecede, obra en poder de la

el

familia del general Medina.

Este bárbaro decreto, por

el

que debían ser fusilados todos

iefté de coronel inclusive arriba y quintados los de

debió llegar a su destino a los dos o tres días,

tiempo que demoró revolución

(.28

el

si

juzgamos por

chasque conductor del parte

de enero a

1."

el

de

el

la

chasque?

los

parte oficial de la rendición y salieron de

nuevas órdenes

tevideo

oficial

de febrero).

Pero en ese intervalo de días que correspondía a ordinarios, llegó

los

coronel abajo,

conducidas

por

que tenían instrucciones para apurar

las

tación en que hervían las autoridades y

chasques

marchas con toda los

Mon-

extraordinarios,la exci-

habitantes de Monte-

video, unos para que corriera sangre, otros para qi:e prevalecieran los

sentimientos de humanidad.

El

1.0

oficial,

y

de febrero, o sea

celebró

el

el

día

mismo de

la

llegada

del

parte

Presidente Pereira un nuevo acuerdo de gobierno

como resultado de ese acuerdo envió el Ministro de la Guerra Gómez la siguiente nota, por la que se mantenía la ejecu-

general

ción de los jefes de coronel arriba, pero se derogaba la de los ofi-

HISTORIA DEL URUGUAY

436

cíales

dina)

en poder de la familia del general Me-

(original

inferiores :

«Los

detalles

triunfo

del

obtenido

anarquistas en

sobre los

el

Paso de Quinteros y la consideración de que el escarmiento que él importa por lo subversiv;0 debe lograrse con el menor número de víctimas posible, porque demasiado es ya

el que ha costado la rehan torcido los sentimientos geneRepública y ha resuelto que quede sub-

belión a las familias orientales,

rosos del Presidente de la

sistente el acuerdo comunicad-o con fecha 30 del ppdo. en la parte

relativa a los generales y coroneles tomados, que debían ser pasa-

dos por las armas inmediatamente, y sin efecto la parte relativa a

quinta de comandante a alférez inclusive, los cuales serán exen-

la

de

tos

esa disposición,

sin

perjuicio del

castigo que

el

Gobierno

y en cuanto a aquellos que se hubieran

creyere deber aplicarles;

distinguido por robos, violaciones, asesinatos u otros delitos de esta clase, 1

sean pasados por las armas a

la

par de los generales y co-

oneles ya mencionados.»

Un

pai'éntesis

de clemencia para que
el

Cuerpo Diplo-

mático.

Cuerpo

El

impresionado por

Diplomático,

las

revelaciones

del

general Martínez, y muchas e influyentes personas de Montevideo,

asediaban entretanto

al

Presidente y a su familia, con gestiones

tendientes a evitar las escenas de sangre decretadas. ¿Qué resultó

de ellas?

En primer

lugar,

general Medina

al

blicó luego con la

tiones diplomáticas

carta que

esta

el

Presidente Pereira escribió

de febrero y que «La República» puadvertencia de que su autor había cedido a gesel

día

2

basadas en documentos apócrifos:

«El Gobierno ha ordenado la ejecución de los jefes de la rebe-

han caído en poder de las armas nacionales; pero atentas que han mediado en el sometimiento que recién conoce, y a consideraciones de que el Gobierno no ha podido pres-

lión que

las circunstancias

cindir, ordena a V. E. que en el acto de recibir este despacho, suspenda V. E. la ejecución, conduciéndolos a la villa de la Unión.»

En segundo el

ras

lugar, la clrtular que dirigió al

Cuerpo Diplomático

Ministro de Relaciones Exteriores doctor Antonio de las Carreel

día 3

de febrero, que ya hemos reproducido, en la que se

comunicaba que

el

Gobierno había mandado suspender

ordenada, a la espera de capitulación.

lo

que se averiguara acerca de

la ejecución la

supuesta

GOBIERNO UE PEREIRA

Había, en consecuencia, del

Presidente Pereira

dos

437

documentos concordantes:

carta

la

general Medina y la circular del Minis-

al

Carreras al Cuerpo Diplomático. ¿Quién podía dudar acerca de la sinceridad de estos documentos oficiales y de la absoluta verdad de la orden de suspensión de los tro

fusilamientos?

Kl Gobierno reiCera la oi"den de fusilamjúento. Pues bien: en

mismos

los

instantes en que el Presidente Pereira



carta que daba mérito al el MinisCuerpo Diplomático tro don Juan Andrés Gómez enviaba una nota al propio general Medina, en que le reiteraba la orden de fusilamiento, hubiera o no escribía su carta al general Medina,

Carreras para dirigirse

¿"octor

CAPiTLXAcióN, porque

que hayan sido

Esa de

la

que significaba la frase «cualesquiera

las condiciones

en que cayeron en su poder».

también obra

terrible nota, que

original entre

los

papeles

familia del general Medina, dice así:

«Febrero

do V.

tal es lo



al

S.

mandar

2



de 1858.

A

pesar de las órdenes que haya reoibi-

posteriores al acuerdo que se le remitió, V. S. procederá a fusilar

en

mismo

acto

el

beldes que comprende

el

de

recibir

ésta

a todos

los

re-

acuerdo del Gobierno del 30 del ppdo., que

por segunda vez se

le adjunta a V. S., previniéndole a V. S. que deben ser inmediatamente fusilados cualesquiera que hayan sido las

condiciones en que cayeron en su poder, pues están condenados con l.o de enero, como reos Gobierno no retrocederá en su resolución de

anticipación por decreto del Gobierno de

de lesa patria, y

el

justicia...

dará cuenta inmediatamente de su ejecución...

—Andrés

V.

Adviértase do

el

S.

A. Gómez».

que

por

esta

nueva resolución

acuerdo de 30 de enero, según

todos los jefes de coronel ronel abajo, y

ello,

dente

daba

Pereira

el

cual

quedaba

inclusive arriba y quintados

repetimos, a la

órdenes

al

misma hora en que

general

restableci-

debían ser fusilados los el

de

co-

Presi-

Medina para que suspen-

diera la ejecución!

Las alteraativas del Presidente Pereira. Están contestes

las

crónicas

de

la

época en que

el

Presidente

Pereira, achacoso ya y con la cabeza debilitada, vivía en esos días

HISTORIA DEL URUGUAY

438

un

en

Quinteros

de

ambiente de grandes alternativas,

tironeado

por centenares de personas que entraban a su casa, las unas para

conmiseración, las

sentimientos de

invocar

un escarmiento análogo gan que aquella cabeza

lo

para reclamar

otras

Y

de Villamayor en la Argentina.

al

misom quería contentar a

los

agre-

que pedían

humanidad, que a los que pedían sangre, resultando de ello las que revelan los documentos que hemos reprodu-

contradicciones cido.

¿Era más tolerable

ambiente del cam-panifento del general Me-

el

dina? general Medina había aceptado

El

capitulación,

la

en Jefe de un ejército en campaña tenía

General

proceder en esa forma, no obstante

el

porque como derecho de

decreto de Is de enero que

el

declaraba reos de lesa patria a Erigido Silveira y demás jefes y revolucionarios

ofioiales

Y

aprehendidos.

ordenaba su ejecución en caso de ser

y

era enemigo

porque

además,

del

derramamiento

de sangre y porque entre los prisioneros figuraban bles compañeros suyos en las guerras anteriores.

viejos y no-

Pero en su campamento había jefes que debían atribuir ese de humanidad a simples razones de camaradería política;

to

fes

no podían olvidar

que

que

aquellos

prisioneros

Quinteros eran los mismos que habían echado abajo

del al

Paso

acje-

de

gobierno

de Giró en 1853 y que habían expedido decretos de exterminio, de

proscripción

y

confiscación

cer ese gobierno;

contra

los

que

pretendían

restable-

que debían hablar con insistencia de

jefes

la ne-

cesidad de un escarmiento, que repitiera aquí lo que habían hecho los

argentinos en Villamayor bajo

tre,

de Sarmiento y de Alsina; jefes que debían mortificarlo a

la

influencia prestigiosa de Mica-

duda su derecho a otorgar capitulaciones, frente a un decreto de muerte que como subordinado estaba obligado a cumplir. da

Y

poniendo

rato

el

en

viejo guerrero,

que nunca había manchado su foja de

ser-

vicios, debió

quedar dominado por aquel ambiente de sangre de su

campamento

y por aquellas órdenes terminantísimas de Montevideo,

nue ponían en conflicto sus derechos y deberes de General en Jefe en el campo de batalla, únicos a que debía atenerse, con sus derechos y deberes de militar sujeto a la dependencia jerárquica del

Presidente de la República. Tal los

es

la

explicación

que

surge

documentos que hemos expuesto.

del

examen desapasionado de

439

GOBIERNO DE PEBEIRA

El mensaje del Presidente a la Asamblea haciendo

elogio de

el

los fusilamientos.

Véase cómo se expresaba

el

Presidente Pereira al abrir las

Asamblea en febrero de 1858: «Deshecha completamente la caballería enemiga en

se-

siones ordinarias de la

15

del

de enero, vinieron sus restos y toda

la

la

jornada

infantería con sus

generales y jefes a rendirse a discreción en las márgenes del Río Negro el día 28 del mismo mes, y el 1." del presente eran esos generales y jefes públicamente castigados con la última pena por las i.-.anos de la justicia nacional con arreglo a las leyes y decretos vi-

gentes y según lo reclamaban los altos y bien entendidos intereses del' país, al cual era preciso darle ejemplo saludable y seguridades d'^ que para el futuro no volvería la anarquía a levantar la cabeza en nuestra tan hermosa cuanto desgraciada patria. Por profundo (lue fuese el sinsabor que debía apurar el Gobierno aprobando y decretando ese grande acto de justicia penal, después de haber

perdón y el olvido en los primeros momentos, tuvo que sobreponerse a todo sentimiento de clemencia, para no mirar sino la senda estricta y severa del deber y de la necesiofertado inútilmente

el

dad nacional». «Por grandes que fueren Gobierno en

el

las

esperanzas que siempre tuviera

el

por incontrastable que

porvenir de la República;

hubiera sido siempre su resolución y su energía para conservar

incólume

el

edificio

caros para pediros

el

social,

jamás pudo prometerse que

tismo en la grande obra del progreso y de op

saludaría

en esta

más tranquilo en

la

al

convo-

concurso de vuestras luces y vuestro patrioocasión

más

lleno

posición que le

la felicidad

cupo recibir

de la patria,

más firme y

de júbilo,

por la disposi-

Providencia y por el voto nacional. Es a esa Providencia que vela por los destinos de la República, a la que

ción

de la Divina

debemos vores que

rendir se

ha

nuestras

timo período de días al

humildes

gracias

servido dispensarnos, corridos desde

el

por lo;

inmensos

particularmente 15

de

en

el

faúl-

diciembre de 1857

28 de enero de 1858, período breve en verdad, pero quizá

el

más

multitud y especialidad de los sucesos, como por las consecuencias que prepara para el bienestar y engrande-

fecundo así por

la

cimiento futuro de la patria».

HISTORIA DEL URUGUAY

440

Un

debate

A de ra,

sobre Quinteros.

i>erio<Jístico

fines de 1861 el doctor Antonio de las Carreras, ex Ministro Gobierno y Relaciones Exteriores de la administración Pereiabordó en su diario «La Discusión» la defensa de los fusila-

mientos en que tan prominente

Era necesario, síibía

que a raíz de

había tenido.

rol

impedir

decía,

revolución.

la

cada fracaso podía

bierno resolvió cortar

mal de

el

raíz

revolucionario

El

volver a su casa. El Go-

y por eso tiró su decreto de

muerte.

Pero como

increparan que la matanza había recaído después

le

de una capitulación, replicaba:

«Ahí están

los

documentos

Quinteros, en cién

el

que nada

el

febrero

día 2 de

de la época.

oficiales

primer parte del general Medina dice

datado en

sobre

de

los

y desde ese

el

Paso de

pacto o capitulación

llegó a oídos

bierno la palabra capitulación;

Ahí está

mismo

el

miembros

.

.

.

Re-

del go-

momento fuimos

nos-

otros a averiguar la verdad del hecho, diciendo que se suspendiese

ejecución

la

para castigar

sado las instrucciones que

Amaral una copia

del

al

general Medina

se le dieran.

si

hubiere ultrapa-

Presentándonos

el

señor

pasaporte que se decía dado por dicho ge-

neral a los principales

cabecillas

de la rebelión, llamamos inme-

diatamente la atención del Presidente de

la

República sobre ese

documento, exigiéndole la orden de suspender los efectos del decreto del día 30 de enero, porque si el hecho era cierto esos hombres no podían ser fusilados, debiendo responder del ejército

el

General en Jefe

ante un consejo de guerra del uso que hubiere hecho

de las facultades e instrucciones con que salió a campaña...

mada

la

orden

las señoras

contraban

(que vio después la luz pública)

la

Fir-

entregamos a

de la Sociedad de Beneficencia que a la sazón se en-

allí,

para que llegase a la mayor brevedad a manos del

general Medina y hubiese tiempo de conocer la verdad... Al día siguiente llegó el parte detallado que nada decía de capitulación y

quedaron desvanecidas

las

dudas que un momento abrigamos so Lo mos-

bre la lealtad del General en Jefe del ejército nacional.

tramos

ma

al

instante al señor Amaral, que lo leyó todo con la mis-

avidez que nosotros para buscar la verdad, para convencerse de

amigos de

después de leer-

lo

que

lo

por segunda vez nos lo devolvió manifestándonos

le

dijeran

los

los

de haber sido víctima de una farsa.

vencidos, y

la

convicción

Lo mismo pasó con

el

señor

441

GOBIERNO DE PEREIRA

Thornton al mostrarle la carta del general Medina en que rechazaba la calumnia de los enemigos... Se trata de una invención del general Enrique Martínez. Si no bastaran las palabras del general Medina, ahí está la carta de don Vicente Garzón: hemos sido rendidos por la incapacidad de nuestro general. El enemigo ha sido muy generoso con nosotros. Ni una palabra de pacto. ¿Qué más prueba

de

sulado

Inglés

la

mentira había

Se

propalada?...

dijo

una

depositada

sido

que

en

Con-

el

de

auténtica

carta

don César Díaz con el original del pasaporte. Eso es falso. El mismo Encargado de Negocios Mr. Thornton nos lo negó, asegurándonos que nunca había dado crédito por

lo

rumor sobre

al

capitulación,

la

cual no había hecho ningún caso de la circular de don En-

rique Martínez».

Pero aún suponiendo por un momento





agregaba

que hu-

biese habido capitulación, la responsabilidad tendría que recaer no

sobre

el

Gobierno, a quien no se

Medina que

la

le

comunicó, sino sobre

el

general

habría celebrado sin facultades y sin mencionarla

en sus partes.

Hasta con los

de Gobierno. Comparada hemos reproducido en el pará-

ex Ministro

ahí la defensa del

documentos

oficiales

que

grafo anterior, resulta que efectivamente

cretada la suspensión, las

órdenes

fusilamiento

pero

que

el

el

2

de febrero fué de-

mismo día fueron reiteradas

de fusilamiento y ello con la prevención de que debía consumarse fueren

cuales

el

fueren las condicio-

nes con que los revolucionarios hubiesen caído prisioneros, es dehubiera o no hubiera habido capitulación. La orden de suspen-

cir,

sión había

sido

decretada,

Diplomático y tranquilizar súplicas

al

pues,

para quedar bien con

del

al

Plata»,

sus

con

Presidente.

Don José Cándido Bustamante, que no conocía contestó

Cuerpo

el

a las señoras que asediaban

doctor

Carreras

desde

las

ese

documento,

columnas de «El Comercio

invocando cartas, actos y palabras de

los

prisioneros.

He aquí lo más sustancial de su demostración: La carta del general César Díaz a su esposa, que ya hemos

trans-

cripto.

Las palabras

del coronel Tajes a su batallón,

tregar las armas: das,

«compañeros:

que se negaba a en-

no tengan recelo por nuestras

El viaje emprendido por los jefes prisioneros con sil

rio

vi-

que están aseguradas».

rumbo

al

Bra-

en la tarde del 28 de enero, interrumpido luego por un emisa-

que se

le

del pasaporte.

acercó

al

general

Díaz para pedirle

la

devolución

HISTORIA DEL XTBUGUAY

442

Y char crita

la

increpación del jefe de las fuerzas revolucionarias

«General Medina:

suplicio:

al

¿qué vale ya

de un general oriental?», contestada en esta torma

«¡Vaya usted, que esa

interpelado:

es

mar-

al

palabra

la

es-

por

el

orden del Gobierno!»

la

Quinteros ante un tribunal de imprenta.

La polémica

se

fué enardeciendo en términos que decidieron al

doctor Carreras a recurrir al tribunal de imprenta, para que su adversario pudiera presentar las pruebas de la capitulación.

Tuvo lugar

el

jury a principios de 1862.

El doctor Carreras



empezó diciendo

señor Bustamante

el



debía haber traído aquí al general Medina para que declarara bajo

Me

juramento.

desafía a que presente la capitulación «que

tanta conciencia

como

yo que

existió».

No

tiene

él

Pero puedo

tengo.

la

invocar otros documentos.

En primer

lugar una carta del general Díaz a don Juan

Gómez datada en una copia ta

Villasboas

el

29

del pasaporte expedido por el general

dirigida a don Pedro

Ramón

de enero de 1858, adjuntándole

Zumarán, en

la

Medina y una

que figuraba

el

car-

siguiente

general Díaz transcribía a Gómez: mediante un parlamento, hice una capitulación con general Medina, el cual se obligó por escrito a garantir la segu-

párrafo que

el

«Anteayer, el

ridad en

el

país de todos los oficiales y soldados y a

y a los demás jefes un salvoconducto para salir

el

darme

mismo

a



día ha-

cia el Brasil.»

Agregaba

el

general Díaz que a pesar de

lo

parecer hacia Montevideo y concluía pidiendo

pactado marchaba al

señor

al

Gómez que

intercediera para evitar cualquier medida violenta y que diera noel general Enrique Martínez. don Juan Ramón Gómez no fué presentada original, sino en copia certificada por el escribano don Martín Ximeno, quien hacía constar que el original obraba en poder de don José Cándido Bustamante.

ticia

de todo a su padre político

La carta

a

En segundo

lugar, la carta del

comandante Abella que antes

he-

mos reproducido.

Y en

tercer lugar, las manifestaciones verbales del coronel Bur-

gueño y del coronel Dionisio Coronel, corroborantes de la capitulación, formuladas segíin el orador en presencia de los prisioneros. Después del ju7-y hizo constar el señor Bustamante, invocando

GOBIERNO DE PEBEIBA

443

gestiones de una persona a quien no podía desatender, que la carta

Zumarán no obraba en poder de

dirigida a don Pedro

a su esposa, datada la familia

I'cr

28 de febrero, que le había sido entregada

el

mismo

del

general:

«Esta tiene por objeto decirte que hasta dad, pero sin saber cuál será tado,

salir del

No

país.

hemos tenido un

trágico

fin

y Benito irán para pas están garantidos, y

Gobierno

Después de

en nuestra empresa.

diario

Aurelio.

Capital, pues todos los oficiales

la .los

jefes

lo pac-

salen

país hasta que

del

Gregoy troSu-

el

determine».

lo

de

imprenta

falló

cación del fallo dio lugar a que su

según

creo,

por eso cuando así suceda, pues

la polémica.

tribunal

El

fecha estoy sin nove-

la

mi destino; pero

aflijas

te

rio

perior

su destina-

en cambio,, publicó esta otra del general Manuel Freiré

rario. Pero,

pruebas de

las

la

Bustamante

contra el

y

la

publi-

doctor Carreras examinara en

presentadas

capitulación

por

su

an-

tagonista.

«Dos

cartas,

¿Pero

qué

ciales,

de

demás lio

una de

decía,

las

cuales se presenta

declaraciones

las

hechas

por

jefes del ejército que niegan el

sean

el

copia.

los

ofi-

los

hecho? ¿Quién asegura que

Y suponiendo que no

falsificadas?

como

documentos general Medina y

valen esas cartas en presencia de

lo

sean,

¿quién

res-

ponde de que esos hombres comprendiendo la enormidad de su crimen y la ignominia que iba a caer sobre su frente por el castigo de- la

cer la

ley,

no inventasen esa farsa de

víctimas de ley?

Nótese

una

felonía,

que esas

tar presos y que ellos

en

cartas

vez

capitulación,

la

de

han sido

mismos desmienten

para apare-

criminales castigados escritas el

después

de

por es-

cuento de que en con-

secuencia de la capitulación iban ya con dirección al Brasil cuandc

fueron

Medina

¿Por qué habría de ocultar el general Es cierto que César Díaz mandó al mayor parlamentar... «Apercibiéndose los jefes de que el ge-

destinados»...

la capitulación?

Espinosa a

Medina había recibido un parlamento, se reunieron y enviamayor Lacalle a decir al general que ellos habían venido a pelear y no a capitular y que no se, conformaban con nada que no fuese un sometimiento completo. El general Medina respondió que

neral

ron

al

esa era también su opinión y contestó a los rebeldes que se rin-

dieran en

mayor

el

término de media hora. Esto que nos ha referido

Lacalle,

nos

ha sido confirmado por

el

general

el

Medina».

HISTORIA DEL UBUGUAT

444

concluyó su

Así

explicación

ex

el

Ministro

Gobierno

de

de

la

administración Pereira.

En cuanto

a las

y que

fcificadas

de los

cartas

que podían

prisioneros,

ser

fal-

eran auténticas podían haber sido escritas pa-

si

en vez de reputarlos criminales los considera-

ra que la historia

como víctimas de una íelonía. Y en cuanto a las conferencias general Medina con el oficial parlamentario, que los jefes se

ra del

habían amotinado ante

una

tarse

Pero ¿quién había de

¿Cómo podían

tia?

simplemente de que pudiera acep-

idea

la

capitulación.

cartas en esas horas

falsificar

fraguar una

prisioneros

jefes

los

de angus-

capitulación

en su correspondencia íntima?

Un

Cuando

interesante.

detalle

en la prensa estos puntos

Montevideo

estaba

en

res

Ministro Inglés Mr.

el

jes habló ni se

El

de la grave controversia.

excusa alguna,

sin

ante

pedido

el

José Cándido Bustamante, reiterado por su abogado

mín Ferreira y Ministro

El se

el

A

para salvar

plenipotenciario

dirigido

raíz

del

vida

la

británico

combatir

en

de la

la

militares

las

de

la

lucha

antes

que

gestiones

prisioneros

los

don

sustraer-

del

Cuerpo

Quinteros,

de

Argentina Mr. Christie, había que acusaba recibo de las comugobierno

al

revoluoión de César Díaz, y

la

desenlace

auxilios

sobre

de

fracaso

una nota a Urquíza en

nicaciones

de

doctor Fer-

Thornton, en cambio, tenía motivos para

a la polémica.

Diiplomático

el

que compareciera a declarar.

de

Artigas,

Quinteros,

Thornton.

dio por entendido

Medina,

general

Jurado y

el

Medina y estaba en Buenos AiY ninguno de esos persona-

general

el

ante

discutían

se

de vista de la tragedia de

las

de

para

Pereira

agregaba, refiriéndose

tropas

argentinas

al

hubieran

tenido oportunidad de actuar:

«El

Gobierno Argentino

está

exento

responsabilidad

de

por

lamentable carnicería (massacre) de oficiales y extranjeros que guió a la rendición de las tropas revolucionarias mandadas por general

Díaz.

El

abajo

firmado

cuidará

bierno de Su Majestad que las tropas

de

argentinas

parte en los lamentables sucesos que han

conocer

hacer

no han

manchado

el

al

la si-

el

Go-

tenido

triunfo del

Gobierno de Montevideo».

Fué sa

y

esta

en

una nota que levantó gran polvareda en nuestra prencancillería, obligando seguramente al Ministro

nuestra

Thornton a no desplegar

los

labios en

todo lo relativo a sus ges-

tiones para salvar la vida de los prisioneros de Quinteros.

445

GOBIERNO DE PEREIRA

l>espués de Quinteros. Manifestaciones de adhesión jü Presidento Pereira.

Dk la Municipalidad de Montevideo. El

ejército

del

Medina regresó a Montevideo

general

pios de febrero de

princi-

a

1858 y una vez terminados los honores que

habían sido decretados por

Gobierno,

el

la

ie

Junta Económico - Ad-

ministrativa resolvió trabajar a favor de la libertad de los prisioneros.

En una nota que

llevaba las firmas de don Juan Ildefonso Blan-

don Luis Lerena y don Juan D. Jackson, luego de felicitar al pedía la Junta «un Presidente Pereira por el triunfo alcanzado, co,

magnánimo

y

generoso perdón

«Si halla V. E. que con

de

res las

queda

rebelión,

la

leyes,

la

sociedad y

administración

tuosamente

le

de

general»;

el

agregaba:

ultraje

satisfecho

el

Gobierno,

digno sería

acordarnos

1858

y

castigo infligido a los principales auto-

el

de

la

perdón

amplio

el

cometido

contra gloriosa

que

respe-

solicitamos».

El Presidente Pereira contestó que pondría en libertad a los prisioneros,

aplicar ticia

pero

después

sólo

de

penas correccionales a

una

los

clasificación

militares

y

ordinaria a los que tuvieran asuntos con

después mandó poner en libertad a 4

jefes,

que

permltáera

entregar ella-

Y

a

la

jus-

pocos días

26 oficiales y 283 sol-

dados, manteniendo en arresto una media docena y enviando a Ca-

nelones

para su ejecución

dos en

un asesinato.

Del Presidente

dei

Presidente

tres

soldados

Senado don Bernardo

Hemos reproducido el

a

Pereira

las

P.

que estaban complica-

Berro.

palabras sustanciales del mensaje en que

daba cuenta de

los

fus.ilamientos

al

abrir

Asamblea en febrero de 1858. La atmósfera estaba caldeada todavía y don Bernardo P. Berro no pudo sustraerse a ella al tomar la palabra como Presidente del las

sesiones ordinarias de la

Senado.

«Aún cuando no he





sido autorizado dijo como lo prescribe Reglamento para dirigir a V. E. palabras de ningún género, he creído sin embargo que en esta solemne circunstancia no podía permanecer silencioso, máxime cuando es tan necesario que el digel

HISTORIA DEL UaUQUAT

446

niagistraclo que está a la cabeza de los destinos de la patria conozca los sentimientos y las ideas de que se halla animado el

no

Cuerpo

Legislativo.

sus

sento

.

cordiales

En nombre,

.

felicitaciones

pues,

de

Asamblea

la

agradecimientos por

y

pre-

le

la

firme-

za y energía con que en los conflictos en que se ha encontrado

la

patria ha sabido, a la cabeza de la fuerza pública, a la cabeza de esos leales y bravos defensores del orden y las instituciones,

ven-

cer y escarmentar la rebelión».

De la Asamblea.

A so

esas

palabras

tan

expresivas

Presidente

del

del

Senado qui-

agregar otras más amplias la Asamblea. La Comisión de Men-

Cámara de Diputados, compuesta de don Juan José

de la

saje

Herrera, don Octavio Lapido, don Avelino Lerena y don Jaime

de Illa

y Viamont, formuló a ese efecto una minuta que fué sancionada con insignificantes aclaraciones de forma.



«La Asamblea General Legislativa decía minuta cumple con un deber y satisface



nacional,

í^entimiento

manifestando

Comisáón en

su

mismo tiempo

estimación

alta

la

la al

que

le

el

me-

recen los servicios prestados por V. B. a la República durante los el receso de las Honorables Cámaras, de que ha dado icuenta en su mensaje. La Asamblea Legislativa reconoce con V. E. que la Pro\^idencia Divina ha velado por la suerte

sucesos ocurridos en V. E.

de la República, puesta al boi^ie de su completa perdición por los

hombres que en los últimos seis años la han ensangrentado y arruinado sin piedad. Reconoce que V. E. ha sabido cuonplir con los deberes .que la Constitución impone al Jefe del Estado, llenando con fidelidad el progiama de unión, de concordia, de extinción de los partidos tradicionales y de obediencia a la ley, defendiendo con valor y perseverancia los principios de orden, moralidad y justicia, sin los cuales no hay sociedad civilizada ni regularmenviejos

te

constituida, sin los cuales ni la democracia,

presentativo

son

posibles.

Por eso

el

país

ni

entero

el

ha

sistema

rodeado

re-

a

V. E. cuando se ha visto de nuevo atacado en su vida, en su propiedad, en su nacionalidad por esa rebelión que en pocos días ame-

nazó convertirlo todo en un montón de sangrientas ruinas. El pue-

miembros

del

do los sucesos y saben que

V.

blo y

ración fra

con

y

los

él

la

tolerancia

conciliable

más

Cuenpo Legislativo han presencia^ E.

llevó

allá de

con la salvaguardia

la

prudencia,

donde era de los

posible,

la

mode-

de donde

sagrados intereses de

GOBIERNO DE PEBEIRA

aunque

447

República ha tenido que estremecerse a

la

sociedad;

la

presencia de hechos oprobiosos y brutales perpetrados en hom-

bres

y

indefensos

para salvar

en

y

el

aunque ha sido necesario

mujeres;

débiles

patria

la

la

y generosas

de víctimas nobles

sacrificio

que han rendido sus vidas en defensa de

Asam-

las instituciones, la

blea se complace de que la severidad de la ley no haya sido apli-

cada a

los principales autores de tantas

nes sino en

desgracias y tantos críme-

último extremo.»

el

Otros homenajes de la Asaíibi-ea. Veintitantos

después de

días

Gabriel Palomeque presentó a to de ley

por

que se declaraba

el

capitulación,

la la

Cámara

P^-esidenti

al

daño, benemcrito de la patria, «considerando

— que

lo

el

doctor

el

josó

de Diputados un proyec-



gran duda-

í'ereira

decía

preámbu-

el

ExcelentísimiO señor Presidente de la Repúblicn. llenan-

do fielmente su programa de par, de unión, de instituciones y de

mediante

bertad,

autoridad y

esa política y

el

perseverante

práctica

de

una

li-

eleva-

política

ha establecido sólidamente el principio de Que con su constancia en la ley...

noble e imiparcial,

da,

la

la

imperio de

con su abnegación personal ha creado para

la

Re-

pública, víctima antes de los odios de partido o de pretensiones per-

una época de

sonales,

esos

estabilidad, de orden y de progreso sobre las

demagogia...

Que

extinción

de

dos elementos del desquicio nacional y de la destrucción

de

ruinas

del

caudillaje

los pueblos, es

sin ot>stáculo,

y

de

la

un gran benefioio para al

la

la

República que progresará

amiparo del orden y de las instituciones

como un

efecto de la política de S. E.

Pereira.

los

el

.

.

.

Que

ciudadano don Gabriel A.

gloriosos sucesos de Callorda y Quinteros sobre

la

re-

importan un verdadero y exclusivo triunfo de la autoridad y de las instituciones de la República, quedando así labrada la base inmutable del orden y la mejor garantía para la felicidad cobelión

mún». El Presidente pidió a je,

que en

su

concepto

cos que profesaba

el

la

Cámara que

era

país».

opuesto

desistiera

«a

los

de ese homena-

principios

democráti-

Pero un grupo de cincuenta y tantos

ciudadajios, entre los que figuraban

don Luis de Herrera, don Joa-

quín Requena, don Francisco Solano de Antuña, don Antonino Do-

mingo

Costa, don Tristán Narvaja, don Joaquín Requena y García, don Hipólito Gallinal y don Martín Berinduague, solicitó la sanción del proyecto

«como expresión

del

recida justidia y de gratitud nacional».

voto público y acto de me-

HISTORIA DEL URUGUAY

448

Dos

informes

gada

del

divergentes

aplazamiento

de

la

Comisión

especial

encar-

el

el

agraciado bajara de

de la minoría que proponía que de inmediato

el

fuera acordado

En

la

homenajes hasta que

los

su alto puesto, y le

produjo

estudio del proyecto. El de la mayoría, que aconsejaba

al

Presidente

Cámara de Diputados

el

grado de brigadier general.

prevaleció

criterio de la minoría,

el

con expresa aceptación de los considerandos del proyecto del doctor

Palomeque.

El Senado, rías

ro

de

la

entonces

después,

en cambio, encarpetó

sin

para

en

la

rechazarlo

embargo,

jar de honrar al to de la

el

asunto hasta las postrime-

administración Pereira, en que

la

en

la

maiyoría

lo

discusión del

hizo reaparecer, pegeneral.

Pocos

mandatario de Quinteros, sancionaba otro proyec-

Cámara de

Diiputados,

el

de creación del «Pueblo Pereira»

confluencia de los arroyos Hospital y

San

Luis,

prestigiado

Comisión dictaminante como «un testimonio público de conocimiento a los servicios prestados» por aquel mandatario. por

la

días

Senado, que no quería de-

re-

CAPÍTULO IX Movimiento político

La acción

ai-gentina durante el gobierno de Pereira.

to de relaciones .con el

Como

Rompimien-

Gobierno de Buenos Aires.

resultado de la fuerte ayuda prestada a la revolución del

general César Díaz, nuestro Gobierno pasó una larga nota al de

Buenos Aires, en que hablaba «de

armamentos y enganches he-

los

chos pública y escandalosamente en

puerto y la ciudad de Bue-

el

nos Aires», "y de «la vejatoria indiferencia con que había sido desla carta-patente que acreditaba a don Juan José Ruiz Cónsul General de la República»... No le parecía posible, agregaba, «que un Gobierno amigo con el cual había

atendida la presentación de

procuTcido siempre estrechar sus leales relaciones, prohijara o consintiera

jamas directa o encubiertamente un ataque tan alevoso como el que acababa de dirigirse desde la opuesta por el enganche de tropas, embarque y conducción de

e.

inmerecido orilla,

con municiones y pertrechos de guerra, verificado con todo

ellas

escándalo en la goleta «Maipú» a

la

clara

luz del

día».

Pero ninguna explicación mereció esa nota y entonces nuestro Gobierno resolvió cortar sus relaciones diplomáticas con el de

Buenos

Aires

mediante

dos

enérgicos

decretos

dictados

en

ene-

ro de 1858.

Por

el

primero de ellos declarábase cerrados los puertos orien.

Buenos

tales a las procedenoias de

Gobierno





Aires, «en el deber

decía

el

de garantirse por todos los medios a su alcance de las

agresiones y expediciones armadas que parten del Estado de Bue-

nos

Aires

en

apoyo

de

los

anarquistas

encabezados

por

Brígido

César Díaz y otros caudillejos y atento a la injustificable tolerancia de las autoridades de aquel Estado respecto de esas

Silveira,

expediciones».

Por do

el

segundo

especial

IV -

29-

decreto

y Cónsul

se cazaba

General

del

el

exequátur

Estado de

dei

comisiona-

Buenos Aires don

HISTORIA DEL UKUGÜAY

450

Carlos Calvo y se

donar

enviaban sus pasaportes con orden de aban-

le

«en

oriental

territorio

el

ténnino

perentorio

el

de

veinti-

como fundamentos «el proceder del Gobierno de Buenos Aires o cuando menos su escandalosa tolerancia de las hostilidades que de allí se han dirigido y que según recientes cuatro horas», dándose

avisos de nuevo se dirigen contra

de la República»;

territorio

el

tono agresivo de la prensa oficial; y la resistencia del Gobierno

el

bonaerense

expedir

a

exequátur

el

Cónsul General de

al

Repú-

la

biica Oriental.

Actitud del Goibiemo de la Confederación Ai'gentina.

mismo tiempo

El Presidente Pereira se dirigió al

Gobierno de

al

Confederación Argentina para denunciarle «las hostilidades que

la

más

de la manera

pública y escandalosa se dirigían desde la ciu-

dad y puerto de Buenos Aires contra nuestro territorio» y para interrogarle «si en la eventualidad de desarrollarse algunas hostilidades y de verse comprometida la independencia nacional podría contar

con

el

apoyo y acción»

de

autoridad

la

nacional-

«simul-

tánea y separadamente con la del Brasil con arreglo a los trata-

más

dlos vigentes y a los

Véase cómo explicaba los

antecedentes de

«Todos

la

vitales intereses

el

de uno y otro Estado».

Presidente Pereira en esa

misma

nota

revolución de César Díaz:

arrancan como os notorio de la importancia que

ellos

Gobierno de Buenos Aires dio a

las

el

pasadas elecciones de repre-

sentantes de este Estado, en razón de depender de esas elecciones el

nombramiento para la próxima presidencia de el empeño de hacer revivir la lucha de

ahí todo

tidos contra lo establecido en ley

de

de la República, la

República, apoyado en

paganda de

mo

hasta

fin

la

tranjeros

la

De

antiguos par-

programa

político

voto de la Nación;

del

Presidente

de ahí

la

pro-

prensa demagoga, con sus doctrinas de exclusivis-

exterminio,

el

mismos que en

la

el

el

los

pacto de octubre de 1851, que es

el

y contra

la República.

traída y

mantenida

por

los

individuos

sustentaban en los diarios de Buenos Aires;

rebelión,

preparada

el

soborno,

con

la

iniquidad

de ahí

conspiración de mercenarios ex-

abominable;

reconocimiento de nuestro Cónsul General;

y

la

todo

resistencia

eso

al

acompaña-

do de armamentos de Buenos Aires, de enganches de filibusteros con oro cuyo origen no es dudoso para nadie, y del público embarque de éstos a tidos

los

gritos de

¡muera

el

Presidente Pereira!, repe-

por la prensa oficial hasta su aparición en este puerto en

un buque que

es

de notoria propiedad de aquel Gobierno».

GOBIERNO DE pEREIRA

El

tar

que presidía

Urquiza

general

respondió en

ción Argentina,

«su apoyo franco y leal

República, con

el

451

de

destinos

los

la

Confedera-

acto que estaba dispuesto a pres-

el

para

escarmiento de

la

los

completa pacificación de

la

criminales perturbadores del

orden público».

Es que entre el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires que ayudaba al general César Díaz, y el de la Confederación que enviaba sus tropas en ayuda de Pereira, existía un estado de guerra

mismos

latente que en esos

Después de a

la de



Caseros

días agitaba fuertemente los ánimos. cancillería de

decía la

Buenos Aires en febrero de 1858



la

Confederación

hubo que reorganizar

autoridad nacional que de hecho ejercía Rosas.

En

la

acuerdo de

el

Arroyos fueron acordados a Urquáza por el voto Pero la Provin-

Í5an Nicolás de los

de todos los gobernadores los poderes nacionales.

Buenos Aires desautorizó en seguida a su representante y quedó aislada de las demás. Se trata de una situación que no puede prolongarse. El Congreso Constituyente ha dictado una Conscia de

titución y

voto

necesario

es

de la Provincia

empleo de

que

antes

Constitución

esa

que

el

sea

sometida

Gobierno Nacional recurra

al al

fuerza.

la

El rapidísimo desenlace de la expedición de César Díaz impidió ciue

la

guerra

civil

argentina volviera a radicarse en

como habría sucedido dada bierno de Buenos Aires a la revolución.

rio

oriental,

I>a

guerra

Pero

la

civil

la

tro

territo-

argentina. Su repercusión enti-e nosotros.

guerra

civil

argentina tenía por

lo

menos que envolver

H los emigrados orientales que vivían con la idea cha,

el

intensa ayuda del Go-

preparando con

ello

fija

de la revan-

una nueva y formidable invasión

a nues-

territorio.

A mediados ral Plores, b

de 1859 el Presidente Pereira dio de baja al geneinvocando que dicho militar había pasado de Entre Ríos

Buenos Aires sin previo conocimiento de

les.

Y

poco

desterraba a varios

después

extraordinariamente a

«Por grande

que

la

las autoridades orienta-

ciudadanos y convocaba

Guardia Nacional.

sea la

Asamblea de estas medidas

confianza

—que

el



decía

al

dar cuenta a la

Gobierno deposita en

la decisión

orden y la paz, la reunión en la ciudad de Buenos Buenos Aires de los principales fautores de todas las revoluciones que en estos últimos años han ensangrentado y arruinado a la Redel país por el

HISTORIA DEL URUGUAY

452

armada que han asumido a

pública y la actitud

Gobierno, colocan repetición

la

alterar

el

al

Poder Ejecutivo en

las órdenes

de aquel

necesidad de prevenir

la

de

de las constantes hostilidades

dirigidas para

allí

orden público y envolvernos de nuevo en los desastres

de la guerra».

Ya en

esos

momentos quedaban

y la Provincia pasaba una circular

Pereira

rotas

las

de Buenos

Confederación

al

Cuerpo

hostilidades

entre la

el

gobierno de

Diplomático

anunciando

Aires y

su propósito de permanecer neutral en la contienda, y otra a los Jefes Políticos prohibiéndoles la admisión y venta de presas en los

puertos orientales, a la vez que escalonaba un cuerpo de ejército de 1,500 hombres en la costa del Uruguay para evitar pasajes de fuerzas a nuestro

Un

territorio.

incidente diplomático iiiidoso.

En una

de las alternativas de

la

lucha entró al puerto de Mon-

tevideo la escuadrilla de Urquiza y horas después entró también la

mar

de Buenos Aires pidiendo que se obligara a la primera a salir

afuera o en su defecto desarmarse. Nuestro Gobierno ordenó lida de

ambas

publicación de

sa.

y la orden se habría cumplido sin la

escuadrillas,

un parte

la

del

comandante bonaerense que terminaba

con estas palabras:

«Deseando patentizar una vez más nuestra superioridad sobre las al puerto de Montevideo pasando a tiro de pistola del fuerte de San José y a tiro de fusil de los buques ene-

fuerzas enemigas, entré

migos».

Ante esa alharaca resolvió mediante un

el

Gobierno volver sobre sus pasos,

que hacía constar que

en

decreto

la

salida

de

las

escuadrillas había sido dictada por interposición del Encargado de

Negocios del Brasil;

que

el

parte del jefe argentino que presenta-

ba a las autoridades orientales como cediendo a

cañones había causado honda sensación; llería

y

argentina no diera amplias satisfacciones,

quedaría

presión de los

la

que mientras la

canci-

la

orden de salida

suspendida-

Dio lugar ese decreto a una nota de

la

cancillería brasileña a la

Legación Oriental en Río de Janeiro que tuvo honda repercusión en el

Plata.

Gobierno

El su bre

escuadrilla la

base de

de de

la

Confederación

guerra

seis

en

el



propio



formó

decía

la

nota

puerto

de

Montevideo

barcos mercantes comprados

y

armados

soallí

GOBIEBNO DE PRBRIRA

mismo. Cuando puerto

escuadrilla

la

ción Imperial

si

en

el

de

preguntó

de Montevideo,

453

Buenos Aires entro también el

Gobierno Oriental a

al

Lega-

1?.

caso de conflicto podría contar con la arma-

da brasileña, y habiendo obtenido respuesta afirmativa intimó a los beligerantes que se abstuvieran de abrir

Los bu-

hostilidades.

allí

Confederación continuaron su armamento, y eso dio lugar a que la escuadrilla de Buenos Aires volviera a presentarse ques de

en

la

Fué entonces que

Montevideo.

decretar

salida

la

de

aimbas

el

Gobierno

Oriental

orden

escuadrillas,

resolvió

que acató

la

de

Buenos Aires y no la de la Confederación, a pesar del acuerdo a que se había arribado por intermedio de la Legación. Si el Gobierno Oriental no se mantiene neutral, el Brasil, «reservando plena libertad de acción, intervendrá solamente por intereses

del

bien de los grandes

el

Imperio, que puedan venir a quedar

comprometidos

en la lucha emergente».

Don Andrés Lamas

solicitó

instrucciones

Montevideo y mien-

a

enviaban surgió otro incidente que

se le

tras

la

cancillería orien-

apresuró a comunicarle en una nota de principios de noviembre que fué publicada de inmediato para tranquilizar al pueblo.

tal se

Empezaba diciendo nuestra que dejaba sin efecto

tivo

la

cancillería

no significaba una reacción contra

llas,

que

el

acuerdo guberna-

orden de salida de las dos escuadriel

principio

de

neutrali-

de lo cual había pretendido y seguía pretendiendo Legación Brasileña que se hiciera una nueva y amplia declaraa pesar

dad, la

de

ción

neutralidad.

reconocer que ría

además

la

Tal

esa

exigencia del

Lamas



es

inadmisible. la

Importaría

neutralidad y

deroga-

actitud que obligó a asumir la nota agraviante del

jefe de la escuadrilla de

Si

pretensión

Gobierno ha faltado a

el

Buenos Aires. Imperio



agregaba

la

cancillería

al

doc-

una condición para mantenerse en el compromiso contraído de apoyarlo en el sostén de la integridad y de la independencia de este Estado, renuncia desde ahora a ese apoyo que vendría .a imponérsele a costa de su dignidad y de su buen derecho. Declárelo así S. E. al Gobierno Imperial, manifestándole que el de tor

la

«es

República fiará de hoy en adelante

chos e intereses nacionales

al

la

salvaguardia de los dere.

solo esfuerzo y concurso de los bue-

nos ciudadanos, con los cuales ya los salvó otra vez de las garras de la anarquía y de las insidias de un gobierno extranjero». El mismo día en que era entregada la nota a la prensa, el Presidente

Pereira

dirigía

un

manifiesto

sus declaraciones sobre neutralidad.

al

país

para ratificarse

en

HISTORIA DEL URUGUAY

45á

grandes acontecimientos desenvueltos en el Río de la que la historia ha de recoger decía ese manifiesto

«Ante Plata

los





con avidez para juzgar a sus hombres y a sus pueblos, los momenvoz tos que atravesamos son solemnes y nunca mejor sentida la de la autoridad para hacerles conocer los principios de su conducta

política»

perfecta

Consiste esa política «en la conservación de la más absoluta neutralidad en toda clase de guerras extra

.

y

.

.

necesita conservarse neutralizada «por su Colocada por su situación geográfica en medio de dos naciones que alternativamente y en tiempos no muy lejanos se disputaron su predominio, en medio de dos naciones que desde la independencia de la República se han encontrado

La República

ñas»...

propia voluntad»

.

.

.

ora agitadas en su seno por

la

guerra

ora juntas, ora separa-

civil,

das por intereses políticos de cada una de

ellas,

vino a costa de

su sangre y de su tesoro a aprender que toda vez que por razones dtí

conveniencia siempre transitorias como lo es la de la política

que no busca base real en intereses mercantiles y económicos, en permanentes,

intereses la

una o de

se

la otra, bien

dejase

arrastrar

bajo

la

influencia

rras nacionales, sólo tendría que recoger por resultdo la

bración

de su

bienestar»...

vador de

la

empobrecimiento y Gobierno ha proclamado

territorio,

Por eso

el

de

a las luchas fratricidas, bien a las gue-

el

neutralización absoluta» y a

él

la

desmem-

ruina de su

«el principio sal-

conservará

se

fiel

en

tanto no vea comprometidos los derechos e intereses del Uruguay.

Tocaba en esos momentos a su término

la

contienda argentina

bajo la presión de la batalla de Cepeda y se iniciaban negooiacio-

nes de paz sobre

la

base de la reincorporajción de la Provincia de

Buenos Aires a la Confederación, actuando como mediador el Gobierno Paraguayo representado por el general Francisco Solano López.

Pero

Legación

la

Oriental,

que

había solicitado, resolvió contestar

ya tenía

las

nota de

la

la

instrucciones

que

cancillería brasi-

leña.

Insistía

el

doctor

Lamas en que

salida de las dos escuadrillas había

la

suspensión de la orden de

sido la consecuencia obligada

de la publicación del parte argentino que hería la dignidad nal; prevenía que algunos

nació-,

de los buques de la escuadrilla de Ur-

quiza habían sido armados en Río de .Janeiro y no en Montevideo;

y agregaba

para demostrar

al

Brasil la necesidad

Uruguay en su resolución de permanecer neutral en argentina:

de apoyar al la

contienda

GOBIERNO DE PEBEIRA

«Las autoridades

c^e

455

Buenos Airos siguiendo

duda una

sin

tradi^

cuyo rastro se encuentra en la política de todos los gobier-

ción

nos establecidos en aquella ciudad, permitieron que bajo sus aupicios

se

iniciare

allí

una soñada República

Plata que

del

debía

absorber la nacionalidad oriental.»

Un

artículo del

Jiuui

doi-tor

Uruguay debía

Carlos

Hacía referencia sin duda alguna paña periodística que había vuelto reincorporación

que

soslk'niendo

Gr4>nioz

el

reineori)orars<' a la Coiifederaeión Argentina.

de

la

República

Legación Ordental a

la camemprenderse a favor de la

la

a

Oriental

a

Confederación

la

Ar-

gentina.

Véase cómo planteaba desde

la

el problema el doctor Juan Carlos Gómez columnas de «El Nacional» de Buenos Aires en julio de

1859:

«Mientras

Estado

el

constituya

Oriental

una

naoionalidad

in-

habrá integridad nacional y por consiguiente no

dependiente no

habrá posibilidad de organización de la República. Lucharemos eu vano con lo imposible que es más fuerte que la voluntad de los hombres.

La

cuestión

de

integrádad

la

como Urquiza

Buenos Aires

en

finge

no

nacional

en

creerlo

sus

pues,

está,

propósitos

como los hombres de Estado han imaginado hasta ahora extraviados por ilusión de óptica que les hace ver allí el horizonte de la pa-

de caudillaje; no está en Entre Ríos,

Buenos Aires

en "tna

tria.

se

La cuestión nacional

de ha de debatirse, es sos que han

de

está en

allí

donde

darle solución

Estado Oriental:

el

la

es

allí

don-

Providencia prepara los suce-

definitiva.

Tan

ciegos están

a este

hombres de Estado de Buenos Aires y la gente de caudillaje de Entre Ríos que unos y otros en vez de allanar esa solución, aglomeran obstáculos para entorpecerla, abonando elementos e intereses inmorales en el Estado Oriental que han de oponer respecto

la

los

res'stencia

a

la

solución

del

problema.

El

Estado Oriental ha

de venir a la unión. Es cuestión de tiempo. Veintinueve años de desgracias y desastres esa

ficción

de

provincia brasileña, ventajas de las

le

han probado que la paz que lo mantiene en

nacionalidad

con

todas las

demás provincias

cargas y sin del

Imperio».

es la

imposible con

condición

ninguna de

de las

HISTORIA DEL URUGUAY

456

Queda

No

definitiva,

que había hecho bajar

lo

La contienda

sino

«El Gobierno



República

de la

decía

el

ella

los

que

pie

las



ve con pe-

República y aque-

preexistente entre la

cadas agresiones que desde

Estado durante en

Pereira

Presidente

el

(Buenos Aires) y ha tenido que conservar guardó desde 1858 a consecuencia de las

provincia

actitud

amagos de

pacto del 11 de noviembre no ha modificado como era

de esperarse la situación lla

argenti-

los partidos

tenía

al abrir las sesiones ordinarias de febrero de 1860

sar que

Go-

un simple compás de

armas a

las

que reabrirse y con nuevas invasiones a nuestro territorio.

nos.

el

Aii'es.

una pacificación

era

espera

amago de revoluciones ayudadas por

subsistente el

bierno de Buenos

contra

se dirigieron

allí

adminástración que ha caducado.

la

mismas

causas

injustifi-

paz

la

del

Han quedado

asechanzas, conserván-

continuas

de

misma

la

dose en posiciones oficiales a los mismos hombres que conspiraron

siempre contra

el

bienestar de nuestro país y este orden de cosas

no puede menos de inspirar desconfianzas y recelos... Dispuesto sjn embargo a mantener lejos del país, en el interés mismo de la paz, aquellos espíritus irreconciliables con

puertas de la

muy

principal

en

desórdenes

los

orden y

anteriores

a ella prometiendo que no contribuirían

bar

el

el

imperio de

una mano generosa y he abierto las patria a todos los que sin haber tomado una parte

instituciones, he tendido

las

el

en

regresar

solioitaran lo

sucesivo

pertur-

a

reposo que felizmente aseguran sus leyes».

El amago era real y habría de consumarse bajo la presidencia

don

de

que las

Bernardo

habían estado

P.

Berro

por

servicio

al

los

del

mismos militares orientales de Buenos Aires en

Gobierno

luchas contra Urquiza y que volverían a estarlo después hasel apoyo moral y material que necesitaban para

conquistar

ta

vencer.

l>a

diplomacia brasileña dui'ante

el

gobierno de Pereira. Liqui-

ílando antei'iores agi-avios.

Al discutirse en respuesta del sesiones

la

Senado

ordinarias

Cámara de Diputados en mayo de al

del

1856

la

mensaje presidencial de apertura de las Cuerpo Legislativo, don José G. Palome-

que se ocupó del retiro del Ministro Amaral gestionado por

el

go-

GOBIERNO DE PEREIKA

457

bierno de Flores con motivo de las revoluciones de 1855. Dijo que

había concedido un ascenso

al

que era necesario averiguar cuál había sido

la

Imperio lejos de acceder

el

doctor Amaral, y

al reitro,

actitud de la cancillería oriental ante semejante hecho.

La Cámara de Diputados resolvió pedir explicaciones al Poder minuta de comunicación en la que se es-

Ejecutivo y votó una

tudiaban los antecedentes del asunto. Se trata





decía la minuta

«de un hecho que mancilla dolo-

rosa y cruelmente la dignidad y honra de la República» ...

mara «mira con no de

el

más profundo pesar

M. Imperial en

S.

la

La Cá-

la representación del Gobier-

República en

persona de su Minis-

la

Excmo. Señor José M. do Amaral»... Por resolución de agosto de 1855 se ordenó que nuestra Legación en Río de Janeiro declarase «al Gobierno Imperial el cese de la intervención armada y pidiera en consecuencia su retiro y el retiro de S. E. el señor Ministro Amaral, contra quien el Poder Ejecuti-

tro

Plenipotenciario

el

vo tenía tan justos como dobles motivos de queja»...

Poder Ejecutivo

se

«contra la conducta

vio

posteriormente

inerte y

parcial

en

del

el

Ministro

El

de

caso

mismo

protestar

Imperial doc-

Amaral y en consecuencia suspender sus relaciones hasta obtener una satisfacción digna de su Gobierno por infracción de la buena fe con que el de la República aceptó los tratados de alianza con el de S. M. Imperial» ... Y a pesar de todo el señor Amaral fué ascendido a Ministro Plenipotenciario y recibido como tal tor

er

el

mismo año

1855 «con

más humillante y completo

el

olvido

de los antecedentes que marchitan los gloriosos colores de la patria».

Quiso eludir a esa minuta sistió te

la contestación le faltaba la

Poder Ejecutivo, pretextando que

el

sanción del Senado. Pero la Cámara

en su pedido de explicaciones y ante su actitud

el

in-

Presiden-

Pereira confió nuevamente nuestra Legación a don Andrés La-

mas, atendiéndose entonces por

que había anunció

encarpetado.

meses

después

bía terminado por orden

Otro solución

colazo

de

la

El al

del

importante división

la

hecho

brasileña

cancillería

que

es

Gobierno

Oriental

el

el

Ministro

que

su

pedido

Amaral

misión

ha-

fué

di-

Emperador. del

debate

brasileña

que

parlamentario había

estado

la

destacada

en

Montevideo y que todavía en mayo de 1856 se conservaba intacta en Pirahy Grande, Provincia de Río Grande, a la espera seguramente de un posible aviso de regreso! Según las informaciones de «El Comercio del Plata» recién en esa oportunidad fueron tribuidas las tropas

entre las distintas plazas de Río Grande.

dis-

HISTORIA DEL URUGUAY

458

La

revisión del tratado de alianza. la reiteración

Juntamente con

Amaral, anunciaba don Andrés

del pedido de retiro del Ministro

Lamas

a la cancillería imperial que

Presidente Pereira había resuelto «tener por único apoyo de su

el

autoridad las leyes y

opinión nacional».

la



«Habiendo sido prácticamente ineficaces



para afianzar

liales

restaurar

y

agregaba en su nota

paz pública, fortificar los hábitos constitucio-

la el

saludable principio de la autoridad

legítima

medios del tratado de 1861, tales como fueron empleados, S. E. entendió que la experiencia estaba de acuerdo con sus sentimien-

los

tos y opiniones personales y

Ja paz, a

que sólo llegaría a afianzar

fortalecer los hábitos constitucionales y a levantar el principio de la

autoridad

medio de un plan

por

legítima,

legal y resiponsable de la

personal,

Nación y no

llamando a su lado a

y

Presidente

el

jefe

el

candidato de un partido

el

orientales

los

todo nacional,

político

de justicia y de consideración sincera, siendo

que antes

divi-

dían las rotas y odiosas divisas de la guerra civil y del caudillaje que todos los buenos ciudadanos tienen en horror perdurable». Al

dar

sidente

cuenta de estas gestiones a

Pereira

en

su

Asamblea decía

la

mensaje de apertura

de

las

Pre-

el

sesiones

ordi-

narias de 1857:

«Siendo prácticamente ficar

los

tado de alianza con blica

a

para

ineficaces

afianzar la

paz y forti-

hábitos constitucionales los medios estipulados en el

Brasil,

únicamente

apoyarse

pretender apoyarse en

el

en

auxilio

do de alianza, expidió órdenes República para solicitar

inclinado

la

al

la

el

el

tra-

Presidente de la Repú-

opinión

popular...

armado que

le

lejos

garante

el

de

trata-

Ministro Plenipotenciario de la

revisión

del

en

tratado

el

sentido

de

que se dejen sin efecto aquellas estipulaciones».

La presencia de tivamente

ahondar

para

las

las

había

servido efec-

número de nuestras

revoluciones,

tropas brasileñas

multiplicar

el

sólo

divisiones entre los orientales y dar pretextos al Im-

perio para seguir tragándose los territorios fronterizos.

Uno de

los tantos inoAimiontos revolucionarios

fomentados por

ia

Lof^ación lirasiloña.

Antes de finalizar

el

la cancillería brasileña,

año 1856 pidió también

el

doctor

Lamas

a

de acuerdo con sus instrucciones, «una de-

GOBIERNO DE PEBEIRA

claracióu

explícita

sobre

ca Oriental

que

política

la

proponía seguir en relación a

459

Gobierno de

el

S.

M. se

negocios internos de la Repúbli-

los

Uruguay».

del

«La opinión corriente en

mas historiando

el

Río de

la Plata



decía

el

doctor La-



comienzos del gobierno de Pereira atribuía al Brasil haber ofrecido el apoyo de su fuerza morah a algunas individualidades con quienes los agentes brasileños habían mantenilos'

do y mantenían relaciones a las que se suponía carácter político» Era una clara referencia a las relaciones del Ministro Amaral con Oribe

descubrirse la conjuración del general César Díaz. De

al

que

las entrelineas de la nota resultaba

ver que

do

Oribe

acaudillaba

la

diplomacia brasileña

importantes,

fuerzas

le

había

al

insinua-

idea diabólica de echar abajo al gobierno de Pereira en vez

la

de sostenerlo. El Ministro Paranhos que estaba

al

frente de la cancillería bra-

sileña y que conocía bien todo lo que había ocurrido y seguía ocu-

Lamas que mantenido conversaciones privadas con los agentes brasileños, cuando apareció como jefe de fuerzas armadas en apoyo de la autoridad legítima;
rriendo en

el

Río de

la

Plata,

era efectivamente cierto que

contestó a don Andrés

Oribe

gar soltre objetos políticos», pero con todo «el apoyo moral que

gobierno

al

Era

la

constituido

confesión

y

el

había

que la

República

podía

contar

Brasil estaba dispuesto a prestar

legalmente

ejercido».

paladina de una nueva intriga

revolucionaria

que no había alcanzado a realizarse.

A

propósito

(le

la extiusióii

del

Uruguay en

el

tratado de 1856

entre la Argentina y el Brasil.

Una

tercera y

muy

importante gestión tuvo que realizar

la

Le-

gación Oriental en Río de Janeiro a fines de 1856. El

Brasil

y la Argentina acababan de concertar un tratado

amistad, comercio y navegación en

que

importaban un uruguaya.

el

desconocimiento

.le

que figuraban dos cláusulas claro y

manifiesto de la

so-

beranía

Ratificaban por una de ellas la Convención preliminar de paz de 1828 que imponía a las partes contratantes la obligación de defender la independencia e integridad del Uruguay; y agregaban

en la otra:

HISTORIA DEL URUGUAY

460

«Se considerará

atacada

independencia e

la

integridad

Es-

del

tado Oriental en los casos que ulteriormente se acordaren en con-

currencia con su gobierno y

mudar

pretendiese

y terminantemente en el cuando alguna nación extranjera

desde luego

declarada y

caso de conquista

forma de

la

gobierno o designar

imponer

o

persona o personas que hayan de gobernarlo».

la

Vale

la

mismo

ese

pena de agregar, dada su importancia histórica, que por tratado el Brasil y la Confederación Argentina recono-

cían la conveniencia de neutralizar la isla de Martín García en caso

asimismo

guerra, y

de

que

la

«oponerse

de

la

por

medios a

todos los

posesión de Martín García deje de pertenecer a uno de los

Estados del Plata interesados en su libre navegación». El Brasil y

prometen

a

Argentina

la

defender



decía

el

independencia

la

gravísima en que no ha intervenido

el

doctor



Lamas

Uruguay,

del

com-

se

estipulación

Gobierno Oriental, que im-

un desconocimiento de la independencia absoluta del Uruguay. La Convención de 1828 debió ser seguida del tratado definitivo de paz, varias veces promovido sin éxito por el Uruguay por

plica

efecto de la

Argentina.

resistencia de la

^tratado sin la

«La República Oriental disidencias, y

ni

del

Uruguay

ni

como

lo

decía

— En el



agregaba

será

los e":e

in le-

no hay p irinfrascrito al Gobierno

este punto

ningún proyecto de dominación encontraría cu en ninguna parte de ellos, cooperadores, cómplices, ni aún

Imperial en ellos

reúnen

se

la

pendiente mientras existan orientales. tidos

Y ahora

Argentina y del Brasil para redactar intervención uruguaya! de

plenipotenciarios

indiferentes;

como hay

1854,

y

el

que quisiera dominarlos tendría tantos enemigos

orientales...

por su derecho, sea impuesta, no

Quieren

ser,

serán

independientes,

porque

inconsultos

ellos

sus vecinos tengan la

benevolencia de constituirse los campeones perpetuos de

pendencia

«Xo son

pero

por su voluntad, no porque la independencia les

la

inde-

oriental.»

sólo el Brasil

y

la

Confederación Argentina los que se

consideran interesados y con derechos a mantener

la

independen-

La Inglaterra lo deduce de su mediación para la Convención de 1828. La Francia, del artículo 4." ¿el tratado de 29 de octubre de 1840. En virtud de esos títulos más o menos contestables y por otros que valían más que ellos, todas esas naciones han intervenido en el Estado Oriental, todas han asistitío a sus desastres, todas han dado sin quererlo alimento y asidero a las intrigas, a cia oriental.

los cálculos,

a las esperanzas,

a

las

decepciones, a los enconos de

461

GOBIEKNO DE PEKEIKA

ciegas de esa

encendidas y ciegas,

pasiones

las

\orliginosa, suicida que produce

la

ceguera horrible,

sangre de las guerras

civiles.

Esta es la verdad dolorosísima, pero incontestable. La experiencia ha demostrado que la intervención de una o dos potencias por actos aislados

no

produce

es conveniente. El aislamiento

celos,

rivali-

dades, sospechas de predominio o de propósitos de predominio...

independencia oriental ¿es un interés común federación

Inglaterra y a

Argentina, a la

concurso de todos

pues todos tienen

el

interesados

los

mismo

La garantía sea de

...



de

la

Bien:

con

todos,

interés en ella.»

«Tal es en breves palabras la base capital

Lamas

Francia?...

la

La

a la Con-

Brasil,

las garantías de esa independencia,

reconozcamos y formulemos ol

al

revisión que solicita



concluía

Gobierno de

el

la

el

doctor

Repvíblica

tratado de alianza de 1851.»

ciel

Como

consecuencia de estas

de 1857 un protocolo en que

el

gestiones

se

firmó

Brasil declaraba que

en septiembre el

tratado de

1856 no menoscababa la

y que se

tal

absoluta y perfecta independencia orienentraría en negociaciones para arribar al tratado

indicado en la nota de la Legación Oriental. tostó

la

Y

en igual forma con-

Confederación Argentina.

cancillería de la

Por el mismo protocolo se ponía fin a los auxilios militares pactados en 1851, evitándose con ello la repetición del desastroso espectáculo dado por las tropas gestionadas y obtenidas en 1854 por

el

gobierno de Flores.

Ocupándose de esta gestión diplomática decía el Poder Ejecutivo en su mensaje de apertura de las sesiones ordinarias de 1857: «La Confederación Argentina y el Imperio del Brasil celebraron entre sí un tratado de amistad, comercio y navegación, en el cual tuvieron a bien comprender estipulaciones que se refieren a nosotros,

obligándose los

dad

independencia de

e

poderes contratantes a defender la integrila

República Oriental del Uruguay y desig-

r-ando ya algunos casos en que la independencia debe considerarse

atacada.

Esta estipulación, por favorable que parezca para la Re-

pública, debía establecerse con acuerdo suyo.

La independencia

del

Estado Oriental es perfecta y absoluta. La misma Convención preliminar de paz que se invoca en el tratado lo declara así. Luego

ninguna otra nación, ninguna otra potencia, ni aún las signatarias de aquella Convención, pueden hacer estipulaciones que afecten al Estado Oriental y le obliguen de cualquier modo sin su concurso y

libre

consentimiento.

Siendo,

pues,

una condición esencial de

nuestra existencia entre las naciones la conservación

de nuestra

HISTORIA DEL XIRUGUAY

462

independencia y de nuestra soberanía sin menoscabo alguno, y el Poder Ejecutivo a mantenerla así, ordenó a la Legación

decidido

de la República en

Río de Janeiro y en

el

el

necesarias explicaciones. Así se ha practicado y

Paraná pidiera las el Poder Ejecutivo

confía en que la solución de este asunto ha de satisfacer amplia-

mente a

la República.»

Tal es

punto de partida del Tratado de Neutralización de que

el

hablaremos más

adelante.

4

El ti'atado de comei'cio y

de pennuta de

el

territorios.

Dos tratados de importancia ajustó al año siguiente nuestro MiLamas: el de comercio y el de permuta de te-

nistro don Andrés rritorios.

El primero llegó a Montevideo en septiembre de 1857 y

el

Go-

bierno se apresuró a divulgarlo mediante una circular a los Jefes

en

Políticos,

reportaría

al

la

que luego de hablar de las ventajas que su sanción

Uruguay, decía:

«Pero esas ventajas y aún

ejecución

la

misma de

las estipulacio-

nes del tratado dependen de la permanencia de la paz bajo la politica iniciada en el programa de S. E. el Presidente la República. Afortunadamente el espíritu pacífico de la población, fruto del amargo desengaño producido por una larga serie de calamidades y sufrimientos, es una garantía de la estabilidad de la paz y una prueba de la aceptación sincera que la gran mayoría de la nación

presta a la política del Gobierno».

A

principios

de

octubre

lenta

polémica entre

nados

popularmente

convocada

fué

Asamblea para abordar su

estudio,

vicentinos

dando

extraordinariamente ello

y alacranes

lugar

la

vio-

como eran denomi-

opositores y los partidarios

los

una

a

tratado,

del

Crimen trató inútilmente de poner término acusando ante el Jurado al doctor Juan Carlos Gómez por los términos ultrajantes que había empleado en «El Nadecía a

la

que

el

Fiscal

del



cional»

contra

el



negociador

Ministro

y

contra

el

Gobierno.

La controversia fué subiendo de tono, y en tal forma que antes de terminar el mismo mes de octubre y pendiente todavía el estudio del tratado, consideró te

«Convencido



el

Presidente Pereira que era pruden-

clausurar las sesiones extraordinarias.

que en

cuestión



decía

la exaltación

electoral

al

comunicar esa decisión a

la

Asamblea

en que están los ánimos con motivo de la

que se

debate

calorosamente

excitando

las

pa-

GOBIERNO DE PEBEIRA

siones.

no es posible, como

templada

discusión

prueba

lo

imparcial

e

463

día,

una

modificaciones,

que

de este

sesión

la

dichas

sobre

toman como pretexto para pretensiones que pueden

se

paz pública y alterar servar

Por

afectar la

Poder Ejecutivo debe con-

el-

orden que

la

República cedía

el

inalterable». el

otro

tratado

de territorio bastante para ejido de

al

villa

la

una

Brasil

de Santa

superficie

Ana do

Li-

vramento, a cambio de una superficie igual que en otro punto de frontera cedía

La Comisión

la

Brasil.

el

Legislación

de

doctor

Ambrosio Velazco,

ciones

del



tratado

Senado,

del

su

aconsejó

decía

en su

que

informe



constituía

la

«Las

aprobación.

están

el

estipula-

basadas

en

igualdad y los intereses recíprocos de ambos Estados».

la

Pero ya veremos

año siguiente el Senado un acuerdo rea-

que a mediados del

rechazó ese pacto sin debate, como

si

se tratara de

lizado en antesalas.

El tratado de gobierno de

límites.

Procedimientos de ejecución dm-ante

El tratado de límites impuesto cruelmente por luerno ticas

de

Suárez

venía

se

en

medio de una situación

el

el

de

y financieras que obstaculizaban la defensa

zonas que exigía

el

Pei-edra.

Brasil

al

angustias de las

gopolí-

extensas

Imperio como precio de su actitud contra Rosas,

ejecutando

sobre

el

terreno

en

medio

de

angus-

otras

que no cedían a las primeras en intensidad y que el Brasil aprovechaba para continuar su plan de usurpaciones territoriales.

tias

En marzo ros

de 1857 comunicó al Gobierno el general de Ingenie, don José María Reyes que habían terminado los trabajos de

demarcación sionales».

de

límites,

después

Quedan «demarcadas



de

cinco

decía



años

de

geodésica

tareas

y

profe-

astronó-

micamente 600 a 700 millas geográficas, a que se extiende na de sus límites con el Imperio... Con esta demarcación

la zola Re-

pública conserva con

cortas diferencias después de tantos sacudimientos y emergencias desgraciadas que pusieron en serio peligro su conservación y hasta su propia nacionalidad, los límites que heredó con su independencia política en 1828 y cuyo estatu quo le asignaron entonces los Poderes que la crearon».

Las eortas diferencias a que aludía el Comisario oriental eran zonas considerables a que nos hemos referido al ocuparnos de los tratados de 1851. Pero las angustias de la época obliga-

las

HISTORIA DEL URUGUAY

464

ban todavía a no disgustar al voraz Imperio que nos había enviado un ejército para atizar el fuego de la guerra civil y que seguía abriendo su bolsa para sacar de apuros a nuestro Gobierno. En su Relatorio de mayo de 1856 hablaba el Ministro de NegoExtranjeros del

cios

de

Brasil

Yaguarón y

línea entre el río

dudas ocurridas

la cuchilla de

demarcarse

al

Santa Ana, con

vertencia de que eUas habían dado lugar a que

el

la

ad-

la

Comisario orien-

se retirase por algún tiempo de la frontera.

tal

Otro Relatorio presentado a la Asamblea provincial de Río Granexplicaba así esas dudas al año siguiente:

de,

«La variedad y contradicción de nombres con que ciertos puntos, bañados o arroyos son conocidos en ambos países, la posición du. algunos

dosa

o

paso

haber

suscitado

bajo de la

Comisión.

rios

de

incierta

otros, necesariamente debían a cada embarazos para el pronto término del tra-

Sin

Comisa-

embargo, actualmente los dos

han conseguido vencer todos esos trabajos y

todas

resolver

dudas».

las

Es un comentario que basta y sobra para darse cuenta de extrema gravedad giendo entre bre

el

territorio

el

cieras

frecuentes

porque

obligaban

país

del

las

controversias

que

iban

a

circunstancias

las

y

políticas

el

«Se halla firmada por los Comisarios brasileño y oriental

demarcación de

tas que en falta de

brasileña.

nocida

por

para ese trabajo

el

la frontera

Minis-

el

ac-

de Aceguá y San Luis. Las rec-

divisas naturales

han de marcar

el

giro

de

el

de nuestra

de esa línea fué verificada y recodon Julio Reyes, debidamente autorizado

exactitud

Lia

ingeniero

por

fin

de-

finan-

de esas fronteras, fueron tomadas por la Comi'

la linea divisoria SÍÓ71

so-

contemporizar.

Léase este otro párrafo del Relatorio presentado por tro de Negocios Extranjeros del Brasil en mayo de 1858: ta de

la

sur-

Comisario brasileño que avanzaba paso a paso ajeno, y el Comisario oriental que no podía

energía

con

tenerlo

de

Comisario oriental, que no pudo asistir

Comisión y que finalmente dio

a

él

a

ese

su asenti-

miento».

Esta estupenda declaración dio lugar a el

que nuestro

general Reyes saliera a la prensa para explicar

el

Comisario hecho,

sin

negarlo, lo que no impidió que su actitud fuera aprobada mediante

un decreto

tiosas de

vía a la

la

del

mes de

junio, obra de las circunstancias angus-

época, que cerraba

así

la

grave polémica

que envol.

prensa:

«El Gobierno considera que quedaron perfectamente garantidos

OUUlKlíNU UL PEKEIKA

465

acierto y la exactitud de la operación por los conocimientos cien-

el

de los respectivos axiriliarcs de ambas comisiones». tan perfectamente acostumbrados los estadistas

tíficos

Estaban

leños a irse tragando gradualmente el

tomaban

siquiera se

la

territorio

brasi-

que ni

oriental,

molestia de encubrir sus formidables zarpa-

zos con algunos harapos al

redactar documentos oficiales de larga resonancia. Léase este otro párrafo del Relatorio presentado por el

Ministro de Negocios la

Extranjeros a mediados de 1859

demarcación de límites en

acerca de

de Aceguá y San Luis. «Fijadas definitivamente aquellas fronteras era de recíproca con-

veniencia

que

diatamente de

las los

las fronteras

brasileñas tomaran posesión inmecomprendidos entre la antigua y la

autoridades terrenos

nueva línea

divisoria,

la parte del

Imperio, ni por

por cuanto no habiendo la

de

allí

ni

policía

por

República, ser\ian esos terre-

la

nos de asilo seguro a

los criminales y desertores de uno y otro El Gobierno Imperial expidió las órdenes que para ese ob-

país.

jeto se le solicitaron y efectivamente esos terrenos

hacen hoy par-

del territorio del Imperio'».

te

que llegaba

E.vtrenios a

Hemos hecho

la

referencia en

sentada por don Andrés

absorción brasileña. el

tomo anterior

Lamas en

a un;, protesta pre-

contra las autoridades de

1857

villa de Yaguarón que negaban a los habitantes de Artigas permiso para conservar una canoa destinada a obtener auxilios médicos y religiosos en la margen brasileña. Hé aquí ahora los fundamentos de esa protesta, que constituyen todo un proceso contra

la

tratado de límites, formulado

el

por

el

propio Ministro negociador

de ese tratado:

La

villa

de Artigas, situada casi

sobre

la

margen

del

río

Ya-

guarón, queda inundada en las grandes crecientes y en esos mo-

mentos

navegan

lanchas fiscales brasileñas

las

mismas de

la

villa

oriental,

habiéndose dado

sobre las

calles

caso de aprehen-

el

der a título de contrabando artículos de comercio que se dirigían

Los habitantes de Artigas y

a otra parte de nuestro territorio... de toda

la

margen

del

Yaguarón que pertenece

nían desde tiempo inmemorial, do 1851, botes ple

antes

y canoas destinados

y

tar las

de

el

tratados

los

a usos comerciales

comunicación personal. Una noche cruzaron

fiscales

a la República, te-

después

y de sim-

río los

agentes

Imperio y robaron todas las embarcaciones sin respemismas que estaban en tierra firme a 20 varas de la cosdel

IV -30.

HISTORIA DEL URUGUAY

466

El vecindario de aquellos parajes que ocurría a la villa de Yaguarón en demanda de auxilios médicos y religiosos de que carecía, solicitó entonces la concesión de una sola canoa bajo la prota.

mesa de emplearla exclusivamente en dichos oriental se ofreció a garantir el

dad

La

objetos.

buen uso de

la

autori-

canoa.

Pero

empleados brasileños no sólo desecharon el pedido, sino que iniciaron pretensiones sobre el uso del agua del río... Si merced los

de famique han hecho la desgracia y debilitado la República, el Braexclusiva de la navegación comersil pudo adquirir la posesión cial del río Yaguarón a que no tenía título histórico, ni título de

a

las guerras extranjeras y sobre todo a las disensiones

lia

derecho, a que no tenía

ha despojado

al

ha conservado y

sombra de derecho, esa adquisición no

ni

soberano de sus otros derechos;

la

República

los

mantiene, decidida como está a que tengan un

los

definitivo los desxiojos que su desgracia facilitaron y consu-

liynite

maron.

En una segunda

nota expresaba

el

Lamas que

señor

la

autori-

dad local de Artigas había solicitado nuevamente la concesión de un bote destinado al salvamento de vidas en las crecientes del Ya-

guarón y que tampoco ese pedido había sido atendido. No puede agregaba el Ministro demorar por mucho tiempo, sin embargo Oriental — la provisión de tan urgente necesidad y una vez colo-



-

cada

bandera oriental en

la

embarcaciones

las

que

el

Gobierno

destine al servicio de seguridad y uso corriente de los habitantes

de Artigas, esa bandera no será aprisionada impunemente por nin. guna fuerza o autoridad extranjera. El Gobierno Brasileño al contestar ambas notas declaró que habían sido exorbitantes las medidas de ñscalización de que se quejaba río

el

plenipotenciario oriental y en cuanto a la navegación del

Yaguarón, que atento

ejecutara villa

el

lo

convenido en 1851 y mientras no se

nuevo tratado de comercio de

1857,

permitiría que

la

de Artigas tuviera dos canoas o botes de simple- transporte

de personas para los

fines

con

que los habitantes

solicitaban

la

que así obstaculizaba

el

concesión!

Vale

la

pena de agregar que

uso de una canoa en

el

río

el

Brasil,

Yaguarón, había arrancado

blica Oriental por los tratados de 1851

el

a

la

reconocimiento de

vegación común del río Uruguay y de todos sus afluentes.

Repúla

na-

GOBIERNO DE PEBEIRA

Un

acta histórica.

El lS.de Julio de 1809 tuvo lugar en piedra fnndamentai del

ia

dientes

de

Jefatura

la

cárceles

va,

y

de

Salto la colocación

el

.le

destinado a las oficinas depen-

edificio

Policía,

Junta Económico-Administrati-

En el acta conmemorativa suscrita por don Diego Lamas y por el Presidente de la Junta

cuartel.

Jefe Político

el

4tJ7

Económico-Administrativa don

Dionisio

iímites generales del Uruguay.

Y he

Trillo,

establecían

se

los

aquí para qué:

«Como un recuerdo de lo que la República es en la actualidad y en previsión de los azares del porvenir», atento a que ha sido «devorada aquélla por los

el

Brasil que en poco

más de un

hasta

ha absorbido más de

tiempos coloniales

r,iitad

la fecha se

siglo

desde la

de su territorio.»

(.'liando el Brasil

bierno tenía

apretaba

td-niquete era cuando nuestro Go-

el

mayor necesidad de

reciu-rir

a su tesoro y a su

ejército.

Al

estallar

Legación

la

manda de Entre

el

movimiento revolucionario de diciembre de 1857

Oriental se

dirigió a la

cancillería

brasileña en de-

tropas y de dinero.

los

anexos del Relatorio del Ministro de Negocios Extran-

jeros correspondiente a 1858, figura

Lamas hablaba

así

al

una nota en que don An.lrós mediados de enero de

canciller brasileño a

dicho año:

más reconocida importancia y urgencia que se aumenfuerzas imperiales en Montevideo, de manera que en algu-

«Es de ten las

la

las de las

puedan

eventualidades que

darse estén

en estado de

modo

eficaz y opor-

hacer efectiva aquella oposición en tiempo y de

tuno. El Gobierno de la República vería con satisfacción el aumento do las fuerzas imperiales para poder ocurrir oportunamente a tales 3.

eventualidades, y E.

el

si

eso se verifica puedo desde ya asegurar a

señor vizconde de Maranguapé que

pública haría cuanto estuviera

a

el

Gobierno de

la

Re-

su alcance para que las tropas

fueran alojadas conveniente e higiénicamente.»

Véase uno de angustias

del

los

párrafos

del

mismo

Relatorio

relativo

a

las

tesoro oriental:

«El Gobierno Imperial atendiendo a las dificultades financieras

en que los últimos acontecimientos de Montevideo colocaron

al

Go-

HISTOlíIA UEL

468

rUUGUAY

bieruo de la República Oriental del Uruguay y

imposibilitaban de

le

emprender cualquier operación de crédito para hacer frente a

como

gastos públicos,

fué

le

representado

por

misma República en esta Corte, vino una aliado con un empréstito de ciento diez

vez

i-u

No tos

es de

de

el

los

Ministro de la

más en

auxilio de

mil patacones.»

asombrar en presencia de estos continuos requerimienque los brasileños, acostumbrados a absorber

auxilios,

nuestro territorio, realizaran también de vez en cuando actos enca-

minados

a suplantarse a la justicia del país que así tenían domi-

nado. Dígalo una comisión de la escuadrilla surta en

el

puerto de

Montevideo, que en 1857 bajó a tierra en seguimiento de tres deser-

mató a uno de

tores y

ellos

que se resistía

cuchillo

en

mano

a

regresar a bordo!

El tratado de neutralización de la Repi'ibllca Oriental.

Como

consecuencia de los reclamos interpuestos por

ce Pereira contra la exclusión del Uruguay en por

la

Argentina y

el

Brasil en

el

el

gobierno

tratado celebrado

1856 y de los protocolos suscri-

año siguiente, de que ya hemos hablado, se arribó a principios de 1859 a un nuevo ajuste diplomático que fué suscrito por tos al

los

Ministros del Uruguay, de la Argentina y del Brasil, respecti-

vamente don Andrés Lamas, don Luis José de la Peña y don José María da Silva Paranhos. Empezaba el nuevo tratado por ratificar la Convención Preliminar de paz de 1828. Era necesario el mantenimiento de la República Oriental de acuerdo con la voluntad del pueblo uruguayo y como medio de remover las causas de guerras perennes sobre posesión de territorios.

La incorporación

Argentina o del Brasil alteraría

la

o protectorado en favor

las

de

condiciones de paz, equili-

brio y seguridad de estos dos países e igual peligro ocurriría con la incorporación

del

mundo. La

o protectorado a favor de cualquier otra potencia

superficie

territorial

disminuida «sin inconveniente para tf'ncia de esa nacionalidad». Ratificaba

reconocimiento de

el

país del

la

Uruguay no podría

ser

fuerza y aún para la exis-

independencia,

pero con

la

Uruguay no podría incorporarse a ninmundo y que tampoco podría ceder a nadie parte

doble limitación de que

gún otro

del la

el

de su territorio.

Facultaba

al

Uruguay para recabar de

la

Inglaterra y de la Fran-

469

GOBIEBNO DE PEBEIBA

cia o de otras potencias la garantía de su independencia con esas

aos limitaciones. El Brasil y la Argentina declarábanse obligados por su parte a ('efender

independencia e integridad

la

del

de que una potencia tratara de conquistar

ma

gobierno por

de

sola



Uruguay,

fraccionarlo

a emplearse

el

caso

su for-

ayudando una revolución interna,

o

intervenir en la designación de gobernantes, ocupar o

en

mudar

país,

el

su

territorio

para instalar gobiernos independientes. Los medios

para

defensa del Uruguay serían establecidos por

la

convenciones especiales y en caso de desinteligencia

se

ocurriría

buenos oficios de una nación amiga.

a los

Uruguay quedaba «declarado y garantido como Estado

El

soluta y perpetuamente neutro entre

ab-

Imperio del Brasil y la Confederación Argentina». En caso de guerra entre el Brasil y la Argentina no podría aliarse a ninguno de ellos, ni darle ventaja de

ningún género

el

ni tolerar a sus habitantes violaciones de la neutra-

lidad; y a su turno

ambas potencias obligábanse

lablemente cerrado

el

fuerzas

(íus

a considerar invio-

y neutro con relación

oriental

a

beligerantes.

"Comprometíase territorios

territorio

del

el

Uruguay

no apoyar segregación alguna

a

de

Brasil y de la Argentina.

Obligábase finalmente cada una de las tres partes contratantes íi

no permitir que en su seno

raciones

contra

En resumen:

cualquiera los dos

se organizaran revoluciones o conju-

de

ellas.

Estados que durante un cuarto de siglo ha-

bían estimulado y mantenido nuestras guerras

más voraz de

el

asegurar

en

ellos

paz

la

,y

buena parte de nuestro la

integridad

tragándose

civiles,

territorio,

convenían

Uruguay y en declararlo

del

mviolable en caso de que los dos garantes se trabaran en guerra.

¿Qué confianza podía inspirar

la

palabra de los signatarios

de

Convención Preliminar de 1828 tan solemnemente empeñada y

la

tan reiteradamente violada?

Prestigiando

su

don Andrés Lamas

obra decía

al

gobierno

da

Pereira a propósito de la Convención de 1828:

«En las

ella

vincia ni

se

estipulaba por

altas partes contratantes

Oriental.

una

sión a les,

pero

No

la la

aparecía

en

sola voluntad y en el interés de independencia de la entonces Proel

acta

de

nuestra nacionalidad

sola palabra que se refiriese a nuestra voluntad. Tal omi-

más de dolorosísima

las

toda

actas

era peligrosa.

diplomáticas

nuestra

historia

permitían protestaba

Los documentos sostener

contra

ella.

oficia-

esa

omisión:

Y

protestaba

HISTORIA DEL UEUGUAT

470

elocuentemente la historia especial de la guerra de 1825 a 1828 que dicha Convención ponía término- Treinta y Tres orientales de imperecedera memoria la iniciaron el 19 de Abril de 1825 por

muy a

igual

sin

acto

reunidos en

tes

en

Florida la promulgaron rodeados de las

netas extranjeras en

el

de todo

libertad

el

bayo-

acta de 25 de Agosto de aquel año, y nues-

tros conciudadanos solos, venciendo en la

representan-

nuestros

americanos;

fastos

los

la

Haedo y Sarandí, decidieron

de su patria, con la única excep-

territorio

ción de las plazas fortificadas del

Estos

litoral.

cuya

hechos

he-

roididad es parte de la gloria de los valientes soldados contra quie-

nes combatían los orientales, ese alzamiento unánime de todo

nc

pueblo que inicia, que delibera, que obra, que vence por sí solo, revela y constituye él solo una nacionalidad; es la voluntad y es el

derecho».

Había sin duda necesidad de arribar

tratado definitivo de paz

al

previsto por la convención de 1828, con la concurrencia de la Repú-

Oriental entonces excluida. Pero, ¿a qué pedir garantías de

blica

paz y de integridad territorial, que eran de franco y verdadero tua

telaje.

mismos signatarios de

los

convención

esa

tintaí

veces

violada?

Resistencia que el tratado encuentra en las tramaras. El tratado fué pasado en

el

acto a la

Asamblea y en

la creencia

de que su evolución parlamentaria sería rapidísima se apresuró

el

Gobierno, previa venia del Senado, a crear una misión diplomática

ante

Papa, ante

el

propio

el

Emperador de Francia, ante

y ante la Reina de España,

glaterra

Andrés Lamas una vez terminadas

don

todavía pendientes con

el

Brasil.

la

Reina de

In-

que se pondría a cargo del

Véase

el

las

programa de

negociaciones la

nueva mi-

sión:

«Conseguir

el

robustecimiento

de

las

garantías

de

la

indepen-



dencia de la República, de su integridad y de su paz impetrar la independencia de la Iglesia nacional para su erección en diócesis y

más

atendiendo por este medio a los

reglar su mejor servicio,

altos

intereses morales de la sociedad

zación definitiva de la hacienda y blico



y

triosa que

finalmente

el

— facilitar

la

promover una colonización moral

venga a aumentar

la

reorgani-

renacimiento del crédito pú-

riqueza, la

fuerza y

el

e

indus-

bienestar

de la nación».

Dos meses después

tenía,

sin

embargo,

el

Poder Ejecutivo que

QOBIEBNO DE PEBEIRA

dirigirse

a

Asamblea para urgir el despacho mes de abril

la



demora

471

La

tratado.

del



decía en mensaje del

puede producir

inconvenientes.

Por

Cámara de Senadores que

expidió la Comisión de la

se

fin

el

de

de

la

tenía a su estudio. Pero en dos informes contradictorios:

lo

mayoría, que era favorable a

la

la

minoría,

firmado exclusivamente

combatía

las



laje

vió

en

mayoría,

Gobierno pedir

el

en

Senado.



Poder Ejecutivo

tute-

el

informe

el

suceso

inesperado

tan

resol-

aplazamiento del debate con ánimo,

el

de organizar trabajos a

el

doctor Ve-

el

Uruguay.

el

ante

y

duda,

«El

decía

primera discusión general, fué rechazado

la

Comisión

la



tratado

el

Brasil y la Argentina sobre

Abierta de

don Ambrosio Velazco, que

por

de ser absoluta como, debe serlo, mantiene

lejos

del

el

cláusulas limitativas de la soberanía oriental.

La soberanía que nos reconoce lazco

sanción del tratado; y

decía

orden

to

al

mantenimiento

de

la

conservación de la paz,

tos

esfuerzos

del

sin

favor de un cambio de orientación

mensaje

su

en

público,

de

celoso

siempre aten-

extremo

el

inapreciable

bien

ese



hasta

que tan-

ha hecho y está dispuesto a hacer para que no se urgió al Honorable Senado para la discusión del Hoy... cree cumplir con uno de sus más importantes

arrebate...

riOS

tratado...

deberes pidiendo

al

Honorable Senado

sus.pensión

la

de

la

discu-

sión... apartando la posible eventualidad de un rechazo irreflexivo,

apasionado, sugestionado por un espíritu insensato y díscolo...

momento en que absorben

el

sucesos de alta trascendencia.

porta eludir

miembros

les

discusión,

la

atención preferente del Gobierno

.

Vese bien claro que eso no im-

.

para ilustrar

Gobierno.

del

en

la

que

Pídese

a

cual

la

ella

se

están

prontos

aplace para

una

ocasión en que la voz del patriotismo y de la sana razón pueda

hacerse

oir,

sin

que

la

audacia de

las

malas

pasiones,

siempre

prontas a aprovecharse de toda oportunidad, venga a dar' un

mento de trastorno a la situación.» El Ministro de Hacienda que concurrió a

la sesión

de

la

ele-

Cámara

de Senadores en que debía leerse dicho mensaje, pronunció estas palabras reveladoras de la honda preocupación que había alcanzado a

producir en las esferas oficiales

el

debate parlamentario promo-

vido por don Ambrosio Velazco:

«Se nota en blo

el

que necesita

comercio, en todas las transacciones de un puela

ralización debido a sición

al

tratado».

paz para ser grande y la

situación

intranquila

rico,

una completa pa-

producida por

la

opo-

HISTORIA DEL URUGUAY

472

Y

el

Gobierno y

que estaban en su misma corriente de ideas

los

trataron en seguida de preparar un ambiente

más

propicio,

obte-

niendo que don Cándido Joanicó, don Manuel Errasquin, don Luis de Herrera y

en

el

general Medina, promovieran una reunión pública

Teatro Solís para adherir

el

tos llegaran

al tratado y que de los departamenrepresentaciones de amplia solidaridad con la política

presidencial.

Otro proyecto

Uno

de

política, tico

amplio de neutralizaeión.

jiiás

los

iniciadores

para salvar

solidaridad

de

más

prác-

idea de la neutralización de las grandes y jus-

la

aprensiones

tificadas

manifestaciones

esas

de

doctor Cándido Joanicó, resolvió hacer algo

el

que suscitaba

de los signatarios

tutelaje

el

de la convención de 1828.

Véase que

que presentó

proyecto

el

formaba parte

a

la

Cámara de Diputados de

:

La República Oriental con todo su territorio se declara neutraEsa neutralización se entenderá exclusfivamente con las naciones que la acepten. Sobre ambas bases se autoriza al Poder lizada.

'

Ejecutivo

para

llevar

y Estados Unidos Argentina para la

la

adelante

con

negociación

Francia,

Inglaterra,

ya iniciada con

neutralización.

El

Poder

los

el

y

la

procurará

principio del ar-

para dirimir las diferencias que surjan entre

el

Uruguay

países que concurran a su neutralización.

Fundando su

proyecto,

complementario como se ve del que ha-

bía negociado Lamas, decía

No hay que confundir neutralidad

basta

neutralización

es

el

doctor Joanicó:

con la neutralidad. La un acto de soberanía. La un convenio con otros países a que pueden real

país

la

neutralización

fuerte

y

es

currir los que no se encuentren en esas condiciones.

poner

España,

Brasil

Ejecutivo

que en los tratados a celebrarse se establezca bitraje

y

el

el

Gobierno

el

acuerdo con

los países

mera vez que una República americana

Acaba de «Es la

pro-

limítrofes.

dice:

¡alto

ahí!

pri-

no quie-

ro tomar parte en las disidencias que puedan ocurrir en los países

que

me

rodean: quiero atenerme a mí misma, quiero ponerme a cu-

bierto de las vicisitudes que hacen

imposible

la

realización

de

to-

do principio social». «El pensamiento de la neutralización consiste en

ir

a

buscar

el

reconocimiento, la garantía de todos los poderes de la tierra para

que este país quede completamente apartado de las cuestiones

473

GOBTEBNO DE PEBEIRA

puedan ocurrir entre otros... Neutralizada la el territorio, está asegurada la soberanía, integridad del territorio oriental. Por eso donde

i:iternacionales que

neutralizado

República,

está asegurada la veo neutralización, veo todo lo que busco para el porvenir de la Las potencias europeas, no por el interés nuestro, líepública. .

sino por

.

el

de su comercio en esta situación privi-

suyo,

interés

legiada que forma la República Oriental, tienen Neutralizada la República, establecida der .

.

.

mucho a qué con

aten-

ayuda

la

de

las grandes potencias esa neutralización, infaliblemente vendría a ber el rincón privilegiado de la América y del mundo entero podría decirse. Porque habría quitado entonces el principal de fo-

tos los inconvenientes, ese

bre

a

laborioso,

que reoliaza porque espanta a todo homel decir que se viene al

todo hombre de orden,

donde no hay seguridad, que está sujeto a continuos trastornos, a continuas revoluciones, adonde no hay fijeza en la acpaís

tualidad, ni en

el

porvenir».

El proyecto del «Iwtoi' Joanicó es sancionado por Diputados.

Un dictamen muy

favorable

al



decía «La neutralización del Estado ha preocupado y preocupa actualmente

mamente

Cámara de

proyecto del doctor Joanicó pro-

dujo la Comisión de Legislación.

blica y al país entero.

la



es el

al

Gobierno

pensamiento que de

Repú-

la

El tratado definitivo de paz celebrado últi-

entre plenipotenciarios

de

República,

la

del

Imperio del

Brasil y la Confederación Argentina abraza entre sus estipulacio-

nes este punto importante y fija definitivamente la posición inter-

nacional de la República por medio de la neutralización de su

te-

motivo de disputa y lucha constante entre esos dos Estados... Tiene la Comisión el convencimiento de que la idea de rritorio,

colocar a la nación

na.ciones es

la

en una situación perfectamente neutral, vale

de garantirle tanto como es posible hacerlo por las cornbi-

decir,

humanas, su independencia, su tranquilidad y su reposo,

obra

más

patriótica a que podría

consagrarse la octava Le-

gislatura». «¡Los te

males que ha sufrido nuestro país proceden principalmen-

de las condiciones de su existencia. Nos erigimos en nación in-

dependiente

sin

contar

todavía

con

todos

los

elementos

necesa-

una vida verdaderamente independiente. Colocada la República en medio de dos naciones relativamente poderosas, no necesita demostrarse cómo ella ha sido y tendría que ser

rios para sustentar

.

.

HISTORIA DEL UEÜGÜAY

474

en

conmovida por

sucesivo agitada y

lo

los

intereses

y cuestio-

nes de sus vecinos, y que aún cuando no fuera más que en el interés de su equilibrio político, esas naciones no dejarán de disputarse

en

lo venidero,

como

han hecho en

lo

dominación de nuestro

En

país.

pasado, la influencia o la

el

esta situación la única solución fa-

vorable de las dificultades existentes, favorable para nosotros, para la Confederación Argentina y para

No pudiendo entonces

ción...

de

liar

el

Brasil,

es

la

n cutral' za-

Estado Oriental ser aliado o auxiConfederación Argentina o del Imperio del Brasil, no

la

el"

tendría ya sobre qué ejercitarse

interés de influencia o predo-

el

minio, que se tornaría desde luego en interés benéfico por

el

man-

tenimiento de nuestra neutralidad».

Cerraba su informe de

ca

Bélgica,

teatro

la

Comisión con un párrafo de Guizot acer-

de

mayoría de

la

las

guerras

europeas du-

rante cuatro siglos hasta 1830, en que las grandes potencias resol-

vieron acordarle

el

privilegio de la neutralidad.

Sólo uno de los diputados, tra

una verdadera humillación pa-

Argentina y el Brasil no habían vuelto a luchar por nuestro territorio después de constituido el país; que neutralización no podría salvarnos de la guerra civil que era la

ra

>

señor Iturriaga, se fué a fondo con-

el

proyecto. Dijo que constituía

el

que

país;

el

la

obra de nosotros mismos.

Llegado

momento de

el

la

votación,

del doctor .Joanicó por 19 votos contra

fué sancionado

el

proyecto

8.

La misma acogida favorable encontró en el seno de la Comidictaminante de la Cámara de Senadores, según la cual el

sión

doctor

.Joanicó

das contra

la

había

conseguido

intervención

del

eliminar

las

objeciones formula-

Brasil y la Argentina.

Sólo

el

doc-

tor Amhrosio Velazco salvó su voto invocando que el nuevo proyecto era también limitativo de la soberanía nacionalTocaba en esos momentos a su término el período de las sesiones ordinarias del Cuerpo Legislativo, y por esa circunstancia

no alcanzó

el

proyecto

a

completar su

evolución

parlamentaria.

gobierno úe Pí'veira roamulii su tentativa a favor del tratado

Fil

de perniuta de

teiTÍtorios.

Poder Ejecutivo, que juzgaba ya las cosas con más optimisextraordinariamente a la Asamblea para pedirle la sanción del tratado de neutralización ajustado con el Brasil y la Argentina y el de permuta de temtorios con el Brasil rechazado en El

mo,

convocó

primera discusión general por

el

Senado.

GOBIEKNO OE PKRKfRA

47Ó

Honda sensación había causado en Río de Janeiro tratado de permuta,

del

peranzas

presentado

cios

Extranjeros.



es-

al

al

La permuta de terrenos to

rechazo

Emperador, según resulta del RelaParlamento en 18r)9 por el Ministro de Nego-

tranquilizadoras

torio

el

obligando a nuestra cancillería a dar



Santa Ana do Livramen-

de

frente

al

son palabras del Relatorio

fué sancionada por la

Cámara

informada favorablemente por la Comisión de Legislación del Senado antes de ser rechazada por este cuerpo. El Diputados

de

Presidente

e

considera

Pereira

aceiptación

«la

referido

del

como una cuestión de honor para su gobierno», y Legación que Pero tanto

el

quedaron en

mo

la promesa además Asamblea Legislativa. como el de neutralización tratado de permuta carpetas de la Comisión dictaminante, y el mis-

asunto a

tuvo

el

la

formidable usurpador

La libertad de

la

de

Pocas semanas después prensa el

el

acto continuo

señor

pea»,

disposición

doctor

Joanicó de sus

disolvente

acción

incubadores de revoluciones los dos, territorios

uno de

ellos.

del

comienzo de su administración

la firma del

decretó

Devins,

se

Pereira a la Policía para que recordara a la

cumplimiento del artículo

nombre y

la

del

grandes aspiraciones de

las

preiisa dui'ant^ el gobierno de Pei-eii-a.

dirigió el Presidente

gía

de

contra

defensa del país

la

dos grandes vecinos, eternos j

complementario

proyecto

que exteriorizaba una

de

época:

la

las

destino

a pesar

el

acuerdo

ordenó a su

Gobierno Imperial con

lo dijera al

de recomendar

así

el

por

autor

arresto falta

del

1.°

al

de la ley de 1854 que exipie de toda publicación,

director de «La

de cumplimiento

a

la

y*

Unión Euromencionada

legal.

A principios de 1857 excitó el celo del Fiscal del Crimen para que entablara acusación contra «El Sol Oriental», por su propaganda contra las Cámaras. Pero fué recién en septiembre de ese año que extremó las medidas para detener la campaña de ciertos diarios contra el Gobierno, contra Oribe y contra

el

Brasil.

El acuerdo gubernativo de esa fecha, refrendado por los Ministros

don Joaquín Requena, don Lorenzo Batlle y don Carlos San establecía en su preámbulo que el Presidente estaba re-

Vicente, suelto

de tiemjpo atrás a adoptar algunas medidas

facultades

ba

la

constitucionales

con

relación

a

la

dentro

prensa

de sus

que predica-

reconstrucción de los antiguos partidos y comprometía las

HISTORIA DEL URUGUAY

476

Y

relaciones internacionales.

«Que de

amoneste a

se

los

concluía con la siguiente resolución:

redactores de los periódicos en nombre

común, para que abandonen las guardando en la discusión la tem-

paz pública, base del bien

la

recriminaciones planza

recíprocas,

cordura que

y

los

bien

entendidos

intereses

del

país

exi-

gen de todo buen ciudadano y para que se abstengan de toda alusión ofensiva hacia los pueblos del Brasil, de la Confederación Argentina y del Estado de Buenos Aires, y que se excite el celo del para

Fiscal

No

libertad

la

de-

caso de que esta amonestación sea desatendida.»

el

pues, en

era,

fondo una medida verdaderamente limitativa

el

de imprenta. Ciertamente que

el

Gobierno no tenía

derecho de amonestar que abusivamente se atribuía, pero como

el

no dictaba contra

la

prensa ninguna sanción administrativa, con-

stirvaban los diarios el derecho perfecto de desatender esa amonestación, sin del

más

riesgo que el de ser acusados por

régimen de garantías de

He

la legislación

aquí los considerandos en que

«Considerando que conforme con

más

Presidente y con las

Gobierno ha proclamado Tnalas

pasiones,

la

vitales

el el

que

Fiscal dentro

Gobierno fundaba su acuerdo:

programa de

S.

E.

señor

el

necesidades de la República,

unión, la concordia y

reconociendo

el

vigente.

el

el

olvido de las

mande quien mande,

la

mitad

no puede ni debe conservar en tutela a la otra afianzamiento de la paz es la única base sobre que

del ^'.T^hlo oriental

mitad;

que el puede establecerse la

paz es

la

el

orden, la autoridad

garantía verdadera de

tad de la nación y la

y las

instituciones;

que

independencia y de la liberfuente de poder y de progreso de los inla

tereses materiales y morales del país y que sin la paz no se puelos principios de justicia y de moralidad; y que la adquisición y conservación de tan grandes bienes no es posible por ningún medio que contrariando la política del Gobierno

den hacer prácticos

dolores del pasado y concite al desorden... Considerando igualmente que no es menos reprobable el empeño de complicar con peligro de los altos intereses de la República en sus

reviva los

cuestiones internas a los pueblos limítrofes y vecinos y a sus go-

tendencias alarmantes y desdorosas y falque expresamente prohibe atacar o denigrar con palabras d conceptos a los gobiernos con quienes la República se

biernos,

tando

imputándoles

así a la ley

encuentre en paz y buena amistad.»

Con una minuta de amplia solidaridad resolvió adherir la CoPermanente a la actitud del Poder Ejecutivo. «La Comisión Permanente que en estos decía la minuta

n.isión





GOBIEKNO DE PEREIRA

representa a la Honorable Asamblea General en receso,

r.iomeiitos

vo puede

sin

pios

1

ella

democráticos y

no

(¡ue

mengua de

porque

disposición,

se*

el

sus altas funcionss dejar dé aplaudir tal

es

a su juicio la expresión de los princi-

eco de

las

verdaderas libertades públicas,

desarrollan ni se vigorizan sino en medio de la paz.

beral administración del gobierno del

La

de marzo ofrece con esa

un elocuente testimonio de que es su voluntad buscar en leal cumplimiento de la Constitución la fuerza y la

«'•edida el

I.»

franco y

sanción de todos sus actos gubernativos,

como

el

sendero aceptable

para que los eternos principios de moralidad y de justicia sean una

La Comisión Permanente reposando en

realidad entre nosotros.

los

sanos principios que reglan todos sus actos, cumple bien manifes-

tando

al

apoyo

al

Poder

Ejecutivo que ella presta su franco y decidido expresado acuerdo, como cumple reiterándole sus ofreci-

de no economizar en todos los demás casos" el concurso busque en ella para mantener el orden y la paz pública.» raíz de la publicación del acuerdo el Fiscal del Crimen doctor

ivientos

que

A

se

Montero acusó un artículo de «El Nacional» que entre otras cosas establecía que en Cerro Largo se habían cometido 30 asesinatos. «En sus columnas decía el escrito de acusación po se registran sino recriminaciones a partidos que la política conciliatoria del Gobierno se ha esforzado siempre en extinguir; ataques





irrespetuosos

a

las

autoridades

expectación pública como

constituidas,

crímenes que exageran desfigurándolos, o se

dad sin más objeto que

presentándolas

a

la

autoras o coautoras de desórdenes y de

el

le

imputan con

false-

de desprestigiarlas y de botarlas al des-

precio de los que deben acatarlas, sembrando en

fin

la

discordia, la

alarma en el seno de un Estado que no tiene otro anhelo ni tampoco otra necesidad que la de ver cimentada la paz pública, la unión y concordia de sus habitantes y el respeto y división

s ;stén

y

!a

de sus instituciones.»

La acusación había

sido

el

a

contestar que

como

periodista

Nuevas notiJicaciones a

ante

la

justicia

ordinaria

tivas.

el

Brasil,

comparecería ante el

el

jurado

incidente.

la prcTiísa.

mediados de 1859, en

tina y

sólo

(juedando terminado con eso

popular,

A

interpuesta

doctor Juan Carlos Gómez, director de «El Nacional», se limitó

y

el

curso de los incidentes con la Argen-

volvieron a repetirse las reconvenciones guberna-

HISTORIA DEL TJRUGUAY

478

En a

lo

más

álgido de la polémica diplomática

Jefatura que llamara a los

la

para recordarles

ley

la

Gobierno ordenó

el

redactores y

editores

de diarios

de 1854 que prohibía a la prensa «atacar,

injuriar o calumniar con palabras o conceptos ofensivos a los go-

biernos con quienes la República se conserve en paz y 'buena ar-

monía»,

igualmente «tomar parte en

e

apreciación

la

de la

polí-

interna de aquellos países cuando ellos tengan perturbada la

tica

y para hablarles de la conveniencia de

paz entre sus habitantes»;

tratar «con altura y dignidad y de dar a la prensa

cuestiones políticas del exterior

las

nacional

'

de cultura que están

carácter

el

obligados a observar».

También

le

fué retirado a la prensa

mediante un

bierno,

sensacional

crecida subvención

«la

además de

acordada a

ser gravosa para

el

apoyo pecuniario del Goque

luego de hablar de

diarios

de la Capital, que

decreto los

erario nacional podía influir en el

el

que debe dominar en la prensa tratándose de los interepermanentes del Estado», agregaba: «y atendiendo a que en la presente época de reconstrucción moral y administrativa el Go-

espíritu ses

bierno

'

sana

nión

empeñado

está

en

que

debatidos y sometidos

ui.ente

pública,

e

ilustrada

de

los

administrativos a la opi-

órganos

verdaderos

como firmemente decidido

conveniente-

sean

intereses

esos

sus actos

de

la

opinión

está a reprimir, en obsequio del

orden y del respeto a las instituciones, la propaganda revolucionay cualesquiera publicaciones tendientes a agitar el espíritu de

ria

inmensos ma-

partido o a recordar las luchas fratricidas que tan les

han ocasionado

al

país...»

El doctor Antonio de las Carreras afirmó en 1860 que sidente

reconoció públicamente

tas y el periodista aludido

sentó a

la

Tesorería un

escrito

suma. Es un dato que permite venciones que dejaba sin efecto

Debieron prolongarse de

las

hecho y

el

en que prometía

Pre-

reintegrar

pre-

esa

formar opinión acerca de las subel

decreto de que nos ocupamos.

amonestaciones hasta

administración Pereira. Refiriéndose

la

el

regalado 3,000 pesos a uno de los periodis

Pereira había

al

prensa de Río de Janeiro, decía efectivamente

los

últimos días

tono agresivo de la el

redactor de «La

República» en enero de 1860 «que se abstenía de contestar, porque (jtro

artículo suyo acababa de atraerle «una amonestación del Gola Policía». Y advertía un colaborador del amonestación se había dictado a raíz de un

bierno por conducto de

mismo

diario

que

la

acuerdo que no alcanzó a consumarse, por cillería

el

cual intentaba

la

can-

brasileña valerse del Gobierno Oriental para fomentar los

conflictos

existentes entre Urquiza y

el

gobierno de Buenos Aires!

CAPÍTULO X Movimiento económico

Cákulo de

la

población.

Véase cuál era según

los

cados por

la población de la

cálculos la

estadísticos

República a principios de 1859,

de las Jefaturas

de Policía publi-

«Guía de Montevideo»: Habitantes

Montevideo

45,000

Canelones

12,000

San

15,000

José

Florida

13,000

Colonia

10,257

Soriano

17,000

Paysandú

10,673

Salto

16,000

Tacuarembó Cerro Largo Maldonado Minas Durazno

15,000 .

15,000 15,499

15,000

15,000

214,429

A de

mediados del mismo año tuvo lugar en

la

el

Salto la colocación

piedra fundamental del edificio destinado a Jefatura y Junta

Administrativa y en el acta de la ceremonia Económico buyó a ese departamento la población que subsigue: -

se

atri-

HISTORIA DEL URUGUAY

480

Habitantes

Ciudad

4,500

Constitución

100

Belén

50

Santa Rosa

250

San Eugenio

500

Chacras alrededor canipaña

de

pueblos

los

j 7,600

13,000

Es una

cifra bastante

prueba palpable de Pertenece

a

más

baja que la del cuadro que antecede,

poca prolijidad de los cálculos. Memoria del Ministerio de Gobierno correspon-

la

la

diente a 1856 el siguiente resumen recapitulalivo

de las defuncio-

nes ocurridas en Montevideo:

Varones adultos Mujeres

276

adultas

156 265

Párvulos

697

No dían

indica la esas

Memoria a qué parte aunque debe

cifras,

del

departamento correspon

suponerse que a

la

planta

urba-

na simplemente. contiene

El Registro Estadístico de 1860 plias r«ílalivas al

estas

cifras

más am-

año 1859:

Montevideo

1,067

Cordón y Aguada Unión (No figuran Reducto,

209 111 P.

del

Molino,

etc.)



1,38:

Entre (51),

las causas de las defunciones sobresalían la tisis

«el

disentería el

mal de (32),

crup (22),

la

los los

siete

días»

(49),

la

gastroenteritis

nacimientos inanimados

pulmonía (21) y

las heridas

(23), (21).

la

pulmonar (3:'.),

fiebre

'a

(23),

GOBlliKNO

48 í

PIÚKEIHA

üt;

Otro cuadro complementario que se encargó de publicar la Co-

misión Organizadora de

Londres en

Sección Uruguaya de

la

distribuía

1862,

Exposición de

la

defunciones de 1859:

las

así

Orientales

911

Extranjeros

467

Se

ignora

9

1,387

Y

agregaba este otro

de dicho año figuraban

guarismo de

plaga

que en las

interesante:

niños de

defunciones

día a 7 años con

1

fuerte

el

6//7.

Ijos es<"lavo*
Da

dato los

de

la

en tírritorio oriental. suprimida

esclavitud

por

nuestra

Constitución

y por nuestras leyes orgánicas, continuó desarrollándose bajo ¡a administración Pereira a la sombra de los tratados de 1851 (jue convertían

al

Uruguay en carcelero

Imperio.

del

Véase en qué términos protestaba don Andrés Lamas ante !a cancillería de Río de Janeiro en 1856 contra uno de los procediniientos

más

perpetuar

la

entre

vulgarizados esclavitud

Traen esclavos

a

la

en

estancieros

los

para

brasileños

oriental:

territorio

el

República bajo contratos que a veces se ex-

tienden a treinta años. Con esos contratos convierten

al

esclavo en

colono y cuando les conviene transportan a la victima al Brasil y entonces cae el disfraz. Los hijos de esos colonos son bautizados en Río Grande y nacen esclavos. «De esta manera en algunos tablecimientos del

Estado Oriental no sólo existe de hecho

sino que al

clavitud,

lado

del

es-

establece

un

de robar en nuestras

es-

de vacas

criadero

es-

la

se

peque fio criadero de esclavos». Otra de las prácticas corrientes era tancias

menores de

Grande.

En

color

para

la

venderlos

como

1858 presentó la Legación Oriental

esclavos en Río varios

casos

con-

humana en nuestro

cretos de esa forma de explotación de la carne territorio.

Obligada

a

dar

alguna satisfacción,

siquiera

sintió al fin la cancillería brasileña en firmar

que

consignaba

«El

Gobierno IV -31.

la

siguiente

Imperial

en

el

papel,

con-

un protocolo en 1858

declaración:

reconoce

el

principio de que

el

esclavo

HISTORIA DEL URUGUAY

482

por su

que fuera obligado

amo

a

prestar servicios en

el

Estado

debe ser corsiderado libre».

Oriental

Pero a raíz de ese acatamiento al principio, se agregaba para su cumplimiento y mantener la esclavitud en nuestro te-

eludir

que procedería

rritorio,

ra

la

extradición

cuando

línea fronteriza por alguna circunstancia

la

plo en

caso de

el

ir

esclavo

el

fortuita,

cruza-

por ejem-

en siguimiento de algún animal que hubiera

disparado, o cuando se tratara de estancias ubicadas sobre la fron-

teniendo parte de sus campos en territorio brasileño y parte en territorio oriental. Lo que se deseaba era dejar una válvula de

tera,

escape a los abusos y fraudes de los traficantes ríograndenses.

Ijti

foii'icnt»^

iinnigi'atoi'ia.

En 1856, según los registros policiales, entraron al puerto de Montevideo con procedencia del exterior, 3,233 pasajeros y salieron 2,900,

La

quedando reducido tomaba

Policía sólo

sentados, de los

manera que

que llenaban

las

el el

saldo favorable a 333.

dato de los pasaportes expedidos o pre-

las cifras de sus

cuadros eran relativas a

formalidades vigentes y no a todos

los

que en-

eraban y salían realmente de Montevideo.

Según

las

informaciones

de «El

Nacional»,

diciembre de 1856 desembarcaron en

el

en

el

solo

mes de

puerto de Montevideo con

Europa 2,039 pasajeros y quedando en el país u;i saldo de 966 inmigrantes. Hay que tener en cuenta, sin embargo, que muchos de los pasajeros procedentes de Europa bajaban en Montevideo al solo efecto de tomar los buques de la carrera a Bueuroredencia scilieron

de

la

Argentina,

Brasil

para los mismos destinos

y

1,073,

nos Aires.

Acerca del movimiento de 1857, sólo conocemos les

que

subsiguen:

las cifras parcia-

483

GOBIEBNO DE PEBEIRA

Pasajeros entrados

Ú

salidos

Saldo favorable

Entre

J

país

al

!

pasajeros desembarcados

los

figuraban 9S8 españoles, ses.

Rectificando la

931

en

italianos,

estadística

policial

el

882

1858

1859

8,928 2,582 6,346

4,361 3,092 1 .269

último

de esos años,

franceses y

392

ingle-

afirmaba «La Nación» que

sólo de los puertos de Galicia habían venido 987 pa.sajero.«, y

no debía estimarse en menos de gados a Montevideo en

Franquicias a

No eran

la

cifras

el

que

1,800 el total de los españoles lle-

curso de 1859.

inniigracipii.

halagadoras,

sin

duda alguna, y explicando

causas de su pobreza, decía uno de los diarios de 1858: «Hace años que en los intervalos de serenidad que nos dejó

huracán revolucionario que tan repetidas veces ha conmovido país, clamamos por inmigración, dibujándole el cuadro rico y de nuestra fecunda naturaleza.

llísimo te

se

Y

inexplotados los veneros

e

tesoro en su fecundísimo seno. fertilidad

de

ignotos

es proverbial en el

mundo. Ella

solitarias

que guardan

La fama de nuestro

nuestra tierra, de la riqueza

el

al

be-

embargo su corrien-

sin

desvía de nuestro suelo, permaneciendo

costas

las

nuestras

como un

clima,

de

la

de nuestro territorio

sola atrajo en los tiempos de bo-

nanza y en pocos años más de 33,000 inmigrantes a la República, y a la fecha podríamos tener otro tanto mediante los trabajos recomendables de la Sociedad de Población y Fomento. ¿Por qué se ha detenido esa corriente de inmigración que empezó a afluir a nuestras playas?... Son los trastornos frecuentes a que nos han conducido

exigencias

las

extremas,

la

exaltación

de

las

pasiones

de los gobernantes y gobernados, los que han alejado de nuestro país esa concurrencia de brazos y capitales que en otra época le dieron una preponderancia asombrosa, elevándo-

y

le

los desaciertos

al

mayor grado de prosperidad que hemos conocido». dirigió el gobierno de Pereira a la Asamblea con

Dos mensajes el

estimular el movimiento inmigratorio. primero de ellos que fuera prorrogada por ocho ley de 1853 que acordaba exención de derechos de puerto a

propósito

de

Pedía por

el

años

la

HISTORIA DEL URUGUAY

484

que se ocuparan del transporte de inmigrantes y exen-

los barcos

ción de derechos de importación a favor de los instrumentos de

branza, y que a dichas franquicias se agregaran estas otras: los colonos gozaran del privilegio de no ser ejecutados en

de

las

por

cinco sextas

años

cuatro

acordó

la

todo

hasta 1870, con la exención de im-

ley

la

a los productos de los colonos.

salvo los municipales,

puestos, iPor

de

el

segundo

dujera efectos

declaraba que para

se

más

de sus bienes y que quedaran exentos impuesto departamental. La Asamblea

partes

prórroga de

la-

que

que

matrimonio pro-

el

«no era necesario que hubiera sido consa-

civiles,

grado por ritos especiales», bastando que hubiera tenido lugar «de

manera permitida, tolerada

la

dencia

de

los

Fué suavizada también 1855 para

el

o autorizada» en

país

el

de proce-

inmigrantes. la

carga del pasaporte, restablecida desde

interior y el exterior tal

ley derogatoria de 1854.

La campaña

la

supresión de la retranca para

la

República como primer paso de

de los postulados de

la

el

como había regido hasta

la

de 1857 obtuvo

abolicionista

movimiento en

el

interior de

supresión total que era uno

la

época.

Estimules para la coloiüzacáón.

La Asamblea sancionó en ciante inglés don

1856 una ley que autorizaba al comerJuan Greenway para introducir familias de agri-

cultores y

artesanos

siguientes

franquicias:

y establecer exención

exención del servicio militar;

pueblos y ferrocarriles

impuestos

de

durante

con las 5

años;

exención de derechos de Aduana a

favor de los materiales de construcción e instrumentos de trabajo;

entrega de una cuota de 40 pesos por cada colono importado. Pero Presidente vetó

el

cia la

la

ley invocando falta de recursos y la existen-

ventajosos, y entonces

Asamblea volvió sobre sus pasos y la ley quedó desechada. El Poder Ejecutivo presentó un proyecto sustitutivo, que no

canzó a ser sancionado, por

el

las condiciones solicitadas por la

más

de otros proyectos de colonización

cuota de 40 pesos a

la

que se

le

Greenway, pero con

mitad. Era

el

al-

autorizaba a contratar en la

reducción de

resultado de una propuesta

por un Importante grupo de hombres de negocio, a cuya cabeza figuraban don Francisco Lecocq, don Pablo Dusplessis, don Pedro Sáenz de Zumarán, don Juan Quevedo y don Tomás Tomkinson, sobre la base de una prima de 20 pesos por colono importado, que sería descontada por la Aduana en pago de derechos de exportación e importación.

presentada

GOBIEBNO DE PEBEIBÁ

4»5

La Cámara de Diputados abordó el estudio de un tercer proyecto, tampoco obtuvo el triunfo, por el que se acordaba durante

CiUe

dos años a las empresas colonizadoras sobre

%

6

el

anual

de interés

de colonias

establecimiento

el

bajo la doble condición de que cada colonia debería

agrícolas,

mínimum

ner un

en

invertidos

capitales

los

de 1,000 almas y

que las familias

te-

habrían de

traerse de Europa.

Otro proyecto presentó

Poder Ejecutivo a

el

la

Asamblea en

1857,

autorizando a conceder con destino a empresas de colonización y por la mitad de su valor doscientos mil cuadras de campo en los

departamentos de Maldonado, Tacuarembó, Cerro Largo y Salto. «Los departamentos

fronterizos con el

dente Pereira en su mensaje

hacendados

por

el

Brasil



decía

Río Negro es

el

territorio

Presi-

el

mayor parte

están ocupados en su

La zona de

brasileños.

entre la frontera y



comprendida

criadero de los ganados

De

tinados para las faenas de los saladeros de Río Grande.

fles-

suerte

que una fracción importante de nuestro territorio se inutiliza para industria principal de nuestro país.»

la

«Pero no es eso solo luego de

señalar

el

per(lerá igualmente

defensa; y

si

que nuestro país perderá:

lo

mal de

la



agregaba

proscripción de la agricultura



en sus elementos de poder, de seguridad y de

continúan las cosas como están,

si

la

población brasi-

leña tan considerable ya, se hace exclusiva o predomina en aquella zona,

podrán sobrevenir en

lo

futuro dificultades tan graves que

Ke resuelvan quizá en cuestiones de nacionalidad y de independencia.»

La Legación Brasileña

se

apresuró a protestar contra esas apre-

ciaciones del mensaje que consideraba ofensivas a sus connacionales,

y entonces contestó la cancillería de Pereira que si el Gobierno simplemente porque

se había particularizado con los brasileños era la

mayoría de

las

estancias al

norte del

ñas, y porque esa zona lindaba con

el

que resultaban inaplicables a todos

los

tes

en

cero y

el

país.

Quedó en

las

Río Negro eran brasile-

Brasil, circunstancias

demás extranjeros

entrelineas

más formidable argumento,

el

ter-

argumento inspirador del proque ya se había apropiado zonas el

que el Imperio limítrofe, grandes y valiosas de nuestro territorio, abiertas para tragarse el resto. yecto:

de la respuesta

ambas

residen-

seguía

con

las

fauces

Fuera por efecto de esa protesta o de las indecisiones reinantes ño que dan idea los proyectos de que hemos hablado, tampoco esa importante iniciativa llegó a prosperar y de la frontera quedó abandonada.

la

obra de

la

colonización

HISTOBIA DEL TJRUOUAT

486

En

una empresa particular encabezada por don Dorodon Juan Quevedo y don Joaquín Errasquin, resolvió implantar a mediados de 1858 una importante colonia en el Rosario Oriental. A principios del año siguiente daba término al fraccionamiento de una zona de 4 leguas en chacras de 36 cuadras cada cambio,

García,

teo

una.

Y

inmediatamente después recibía de Europa

casi

el

primer

plantel de colonos compuestos de 40 familias piamontesas y agru-

paba en torno de

ellas

diversas familias procedentes de Santa

Fe

y Río Grande. Otras

más modestas figuran en

iniciativas

publicaciones de

las

la época, entre ellas la «Sociedad Agrícola de los Colonos»,

por don Pantaleón Pérez y don

Tomás Benvenuto,

fundada

a siete leguas de

Montevideo.

Concurriendo a ese mismo propósito de

falicitar la incorporación

de brazos extranjeros, fué ascendido don Alberto Dax, de .Cónsul

Havre a Cónsul General en Suiza, «con

en

el



decía

decreto gubernativo

el



el

de procurar

encargo especial la

inmigración y

colonización».

La edificación y

La

vialidad en la ciudad de Montevideo.

Policía de Montevideo,

diversos

1859

Ja

servicios

noventa y

que continuaba teniendo a su cargo

municipales,

siete

expidió

permisos para

para reedificar. Con esas dos cifras y

dado abierto lís

al

servicio piiblico

el

en

el

transcurso

el

edificar

año

dato de que había que-

Hotel Oriental en la calle So-

esquina Piedras, terminan las escasas informaciones de

Algo más amplios son los datos relativos en la ciudad de Montevideo.

A mediados

del

y cincuenta y siete

al

la época.

estado de la vialidad

de 1856 comunicaba la Comisaría del Cordón a la

Jefatura de Policía que entre los elementos de que ella disponía y

los

de la Junta Económico-Administrativa se había conseguido dos pantanos que obstruían la calle 18 de Julio, uno de

rellenar ellos

a la altura de la Capilla del Cordón y

todavía

talmente,

el

En la

a caballo y a pie,

más próximo to-

eran tan grandes que uno de

había exigido 356 carradas de piedra y los

otro

tránsito de las carretas, de los carruajes y de los mis-

mos transeúntes ellos

el

casco de la ciudad. Esos pantanos que interrumpían

al

mismos

el

otro 736!

días en que se publicaba ese informe denunciaba

prensa que en la calle Uruguay existía un pantano peligrosí-

simo, donde acababa de hundirse hasta la cabeza transeúnte.

el

caballo de

un

GOBIERNO DE PEBEIBA

No

de casos

trataba

se

aislados

sino

del

487

estado general

urbana. Véase cómo describía en 1856

vialidad

Comercio

del

Salimos por

el

de

la

director de «El

Plata» un paseo en carruaje al Paso del Molino:

Mayo en medio de un

25 de

la calle

infernal zango-

Uruguay hasta donde termina el empedrado. Allí tropezamos con una serie de zanjones capaces de producir un vuelco al menor descuido. La barranca de la calle Río Negro, bastante mala, remata en un pantano gue es como la loteo

continuamos por

y

de

la

boca de la calle Paysandú. Siguiendo por esta última aparece otro

enorme pantano que obliga a continuar así

al

pantano más, y luego por la peligrosas

cochero a recostarse a la acera y

hasta la bocacalle de Queguay obstruida por otro

A

sinuosidades.

calle

la

Ibicuy cubierta de profundas 7

altura

del

de la Aguada

templo

pantano y con dos más antes de llegar a lo de Suárez, y desde este último punto hasta el Paso del Molino seguimos haciendo zig-zags para eludir verdaderas series de pantanos tropezamos con otro

donde no es raro que tengan que acudir las yuntas de bueyes en allí se embarrancan. El número de los pantanos se fué multiplicando en los años

auxilio de los coches que

subsiguientes y a tal extremo que a mediados de 1859 la Jefatura de Policía pasó una circular a las Comisarías pidiéndoles una

r'e-

lación «de las calles intransitables, de los «huecos» transformados

en depósitos insolubres

(solares baldíos circundados

de edificios),

de las veredas por construir y de los caños maestros hundidos».

«Nuestra Capital



decía

Jefe Político en

el

su

circular



que

por su posición topográfica y la benignidad del clima está llamada ser

a

una de

las

ciudades

más

bellas y

más

salubres del universo,

sólo requiere para alcanzarlo el celo e inteligencia de la autoridad

competente cuando de

antemano puede

contarse con

la

decidida

cooperación del vecindario.»

Con de

los

Policía

primeros resultados de esa encuesta se dirigió a

la lista de los calles

Junta

Económico

-

Administrativa

el

Jefe

adjuntándole

pantanos y zanjones que obstruían el tránsito en las de la Aguada, Cordón, Paso Molino, Cerro, Mi-

y caminos

guelete.

y

la

Pantanoso y Peñarol. Comprendía centenares de pantanos, cuenta de que la obra de terraplenamiento excederla

dándose

a las fuerzas de la Municipalidad, apresurábase la Policía a ofrecer el concurso de todos sus elementos.

Antes de finalizar

el

año 1859 tenía a su turno

el

Ministro de

ílobierno que dirigirse a la Policía de Montevideo estimulando su Iniciativa y ordenándole que

estimulara la del vecindario a favor

HISTORIA DEL URUGUAY

488

del terraplenamiento y cercado de las ocho a diez

manzanas com-

prendidas entre las calles San José y Canelones, cubiertas de agua decía la nota y que obstruyen el tránsito por las calles An-





Convención, Arapey y Daymán». Varias veces se había ocupado la Asamblea de remediar ese

des,

tado de cosas.

pedrado de dradas

En

1855 estableció un impuesto para costear

las calles de la

es-

em-

el

ciudad vieja no empedradas ni reempe-

con posterioridad a la ley de empedrados

de

Y

1835.

en

Poder Ejecutivo para emprender la obra de terraplenamiento y nivelación de las calles comprendidas en el extremo norte de la ciudad (Cerrito, Juncal. Florida y Cerro Largo) y asimismo para obligar a los propietarios de esa zona a la realización de iguales obras bajo apercibimiento de hacerlo el Estado autorizó al

1857

de

y

sacarse

remate

a

los

terrenos

mejorados

para

cubrir

los

gastos.

Pero

la situación política de la

época y las estrecheces del Tesoro

público siguieron manteniendo la vialidad urbana en

el

mismo

an-

gustioso estado durante toda la administración Pereira.

El coinei'fio exterior. Estudiando

económico

desenvolvimiento

el

primer año de

la

del

administración Pereira, daba

el

país

durante

el

Ministro de Ha-

cienda estos datos a la Asamblea:

La renta aduanera ha producido en pesos.

Hállase

la

importación sujeta a

que puede calcularse en

suma de

1.362,000

un promedio de derechos

Los aforos

20 o|o.

el

1856 la

oficiales

se

estable-

cen sobre los precios de plaza que están recargados con los dere-

El cálculo

chos aduaneros y las utilidades del comercio. to

asigna a la importación un valor equivalente

los derechos: 5.440,000 para

país con

el

1856.

Y

tal es

al

realmente

más

exac-

cuadruplo de la

deuda del

extranjero.

Para cubrir

esa deuda hemos

exportado

bajo

forma de

novi-

faenados y novillos en pie con destino a los salade"os de Río Grande 225,000 cabezas que al precio de 20 pesos representan

llos

4.500,000

pesos.

Hemos embarcado además en

lanas

500,000

pesos

y en cueros de consumo, crines, huesos, cueros caballares y trigo

En conjunto 6.500,000 pesos exportados. Nuestros estancieros han aumentado sus vacas en una cantidad

1.500,000.

igual fcos

225,000 cabezas que a 20 peLas majadas de ovejas han experimen-

a la de los novillos faenados:

representan

4.500,000.

489

GOBICBNO DE PEBEIBA

un aumento de 1.000,000 de pesos. Los estancieros de Río han enviado nuevas tropas cuyo importe puede apreciarse en 2.000,000 de pe.sos. Nuestros campos han tenido un aumento de 500 pesos por legua, que representa una valorización de Tado

(irande nos

millones sobre el año anterior. concluía el Ministro Hechas todas las operaciones que el país ha tenido un enriquecimiento efectivo de 10 3 a 4





resulta 12

a

mi-

de pesos en 1856.

llones

La exportación ganadera en 1856 y 1858. De

los

cuadros de exportación

por

el

puerto de

Montevideo

co-

rrespondientes a 1856 y 1858 extraemos los siguientes rubros:

Cueros vacunos secos salados » de potro secos » » » salados. Quintales de carne tasajo Fardos de lana.

!

esos

1858

296,407 188,239

316,546 141,385 13,800 83,316 135,476 2,595

7-2,061

.

En

1856

85,347 210,979 2,798

mismos años llegaron

al

puerto de Montevideo con proce-

dencia de la Argentina y de Río Grande los siguientes productos:

Cueros vacunos secos salados » caballares secos » » salados Quintales de carne tasajo »

»

.

.

1856

1858

150,208 46,324 45,248 33,275 45,8!0

166,990

Desde principios de 1857 quedaron habilitados para ciones

de

importación

los

puertos

de Maldonado,

35,208

las

opera-

Colonia,

Nueva

Pflmira y Paysandú, aumentándose así las corrientes de tránsito que ya se realizaban por intermedio del puerto de Montevideo.

49Ü

Un

IIISTORIii

DEL URUGUAY

cuadro más amplio de las exportaciones.

Pero más interesante todavía

cimos de

la

es

este

otro

cuadro que

reprodu-

«Guía de Montevideo» de 1859:

CUEROS VACÓNOS

CUEROS CABAI^^ARES

M

GORDURAS

I>ASA

Pipas

Fardos

ZAFRAS Secos

1852-53

.

.

Salados

Secos

Salados

Quintales

491

QOBIEBNO DE PEBEIRA

Vamos a cerrar este parágrafo con un cuadro comparativo de las exportaciones ganaderas del Río de la Plata en 1859, obra de don Federico

redactor

Anavitarte,

comercial

(ANO CIVIL)

1859

Buenos Aires

.... ....

Cueros secos

Montevideo

415,164 194,008 24,707 109,051

1.013,113 517,078

salados » de caballo secos. » » s salados Lanas, fardos Cueros de carnero. Crines Aceite y grasa, pipas » » » cajones Carnes, quintales »

«La República»:

de

Gtí,692

101,646 43,938 10,854 1,898 13,094 3,988 483,280 983,909 8,869

....

.

.

Astas

Huesos y cenizas, toneladas

La exportación argentina no

como

tenía entonces,

siderable superioridad que adquirió después en

5,141 741 1,487

6.560 3,612 248,447 1.302,299 8,070 se

ve,

la

con-

Río de la Plata

el

gracias a la paz que se consolidaba allá cuando aquí ardía el país

tn

la

guerra

temente de

la

distanciaba

Sólo la producción lanar se

civil.

nuestra.

En

demás apenas alcanzaba

las

el

fuer-

puerto

de Buenos Aires a doblar las exportaciones orientales.

líl

comercio interior. El comercio de cabotaje trajo a Montevideo en 1859 los siguientes

frutos

Caeros vacunos secos

258,968 9,950

salados %

»

»

En

el

13,669

de potro secos »

salados

.

.

.

.

.

58,546

.

Lana, arrobas

33,557

Cueros de carnero

44,901

curso

según

los

mitad

del

mismo año entraron en

del

libros

Brasil

la

ciudad del Salto,

de la Policía, 73,527 cueros vacunos

y

el

9,926 arrobas de cerda

resto

de

la

campaña

del

(cerca de la mitad del Brasil);

bas de lana; y 35,853 yeguas para faenar.

(más de

la

departamento) 4.322

arro-

HISTORIA DEL XIErGUAT

492

Las exportaciones de tasajo. Al discutirse el tratado de comercio con el Brasil publicó «El Comercio del Plata» este cuadro de las exportaciones de tasajo por el

puerto de Montevideo (excluidas las exportaciones por las fron-

teras y

receptorías fluviales),

en 1855, 1856 y primeros diez me-

ses de 1857:

ANOS

1855 1856 1857

Mientras cionarios,

rapidez

Véase <<E1

que los

los

embarques para

el

Brasil

Brasil

Habana

Quintales

Quintales

42,974 35,897 43,109

18,000 29,820 99,520

121,980

147,340

permanecían

esta-

correspondientes a la Isla de Cuba crecían con una

extraordinaria. el

movimiento de

1859,

según un cuadro

may

prolijo

de

Telégrafo Marítimo»:

Quintales

Puerto de Montevideo

.... ....

258,100

»

»

»

»

»

>

»

»

Buenos Aires Gualeguaychú Concepción del Uruguay Paysandú

»

»

Concordia

52,900

»

»

Maldonado

3,500

»

»

Rosario

8,500

»

»

San Pedro

.S,200

484,100 80,500 82,900 3G,900

1.010,600

'La

Comisión Directiva del Club Nacional, constituida por don

Vicente Fidel López, don Jaime Estrázulas, don Francisco A. Gó-

mez, don Adolfo de la Riestra, don Ricardo Hughes y don Esta-

GOBIERNO DE PEBEIBA

Camino, publicó

nislao

siguientes

las

en

1862

otro

correspondientes

cifras

tasajo por el puerto de

493

cuadro, a

los

del que extraemos embarques de carne

Montevideo aisladamente, y en globo por

todos los puertos del Río de la Plata:

ANOS

Todo

Montevideo exclusivamente el

Quintales

1857. 1858. 1859.

Pertenece al

199,040 168,520 322,817

Precios

Río de la Plata

752,506 649,360 1.039,436

6 7 5

1/2

pesos fuertes »

»

»

»/4

mismo informe de la Comisión del Club Nacional número de animales vacunos faenados en los

este otro cuadro del .^íaladeros

argentinos y ríograndenses:

orientales,

1857-58

Saladeros orientales Saladeros arg-entinos Saladeros brasileños

1858

.

736,400

En

1859-60

59

243,300 675,600 280,000

168,100 378,300 190,000

.

-

272,000 625,000 360.000

1.198,900 1.257,000

1859 funcionaban seis saladeros en Montevideo y dos en Pay-

sandú.

Imiíortación de

De

la

sal,

carbón de piedra y

ina
«Guía de Montevideo» reproducimos

el

cuadro que subsigue:

Toneladas

ANOS

Fanegas de

sal

de

Pies de pino

carbón de piedra

1853-54 1854-55 1855-56 1856-57 1857-58

89,820 107,450 87,450 130,030 117,775

11,427 13,882 9,434 9,132 27,521

2.294,000 6.038,200 2.499,696

HISTORIA DEL UBUGUAY

494

Las escuadras extranjeras, y

muy

principalmente

brasileña,

la

hacían en esa época sus aprovisionamientos en Montevideo, y a sus

más que a

operaciones

del

las

en

las fuertes oscilaciones

el

consumo interno deben atribuirse

rubro del carbón de piedra que señala

cuadro que antecede.

el

Guerra de tarifas en

el Plata.

El comercio y la prensa de Montevideo empezaron a preocuparse

mediados de

desde

de

comerciales

de

1856

los

medios

de

enton-ir

los

resortes

plaza.

la



En

advertía «El Comercio del Plata» con Buenos Aires, de una representación de las principales casas importarige una legislación más liberal que la del Uruguay. Hay doras, ventajas en trasbordar o reexportar las mercaderías para Buenos Aires, donde los dereobos son más bajos y se pagan a plazos y no al contado como aquí. Tiene además el comerciante argentino

ocasión



derecho de fraccionar el contenido de los bultos y efectuar despacho pieza por pieza, ventaja enorme de que no goza el

ol

el

co-

merciante uruguayo.

Respondiendo a esa propaganda, se Asamblea en demanda de una ley que lo.s

derechos sobre las mercaderías

fuertemente

almacenes rechos diante

fiscales;

sobre el

número de

el

las

de

dirigió

fácil

crear una escala móvil

fomentar

el

Gobierno

contrabando;

excluidos del

artículos

harinas;

el

a

la

autorizara para rebajar

le

depósito

reducir

en los

reguladora de los de-

comercio de tránsito me-

fraccionamiento de los bultos.

Estaban esas medidas a estudio de las Comisiones parlamentacuando el Congreso de la Confederación Argentina, que tenía

rias,

su asiento en

según

la

el

cual

Paraná, sancionó una ley de derechos diferenciales

todas las mercaderías procedentes de cabos adentro

de la Confederación pagarían no estaban sujetas al régimen de 30 % ad valorem si lo estaban. Las

con destino a los puertos fluviales

duplo de los

«1

los

impuestos

derechos específicos y

procedentes

mercaderías alguna,- y

del

mismo

si

el

de cabos

manufacturados del Uruguay,

Era un

golpe

recio

para

del

no sufrirían

afuera

beneficio gozarían

Brasil

nuestro

los

y

alteración

productos naturales o del

comercio.

Paraguay.

Todas

las

merca-

derías europeas que bajaran a Montevideo para ser luego expedidas

en ble

tránsito

impuesto

los mercados argentinos, abonarían dopagaban derechos ad valorem y el 30 % si pagaban

con destino a si

GOBIEBNO DE PEEEIRA

derechos

evitar

Mon-

que

trance

todo

a

En

pudiera convertirse en puerto terminal o de tránsito.

tevideíD

exageración

la

Se quería

específicos.

495

decreto

del

por Rosas

dictado

en

1834

gravando

el 25 % el trasbordo de mercaderías en el Río de la Plata. Véase cómo comentaba esa ley el Presidente Pereira al abrir sesiones ordinarias del Cuerpo Legislativo en 1857: «La Confederación Argentina promulgó una ley imponiendo

con

las

el

recargo de derechos a las mercaderías que se introdujesen en sus puertos

procedentes

fluviales

de

cabos

Semejante

adentro.

me-

dida, tan falta de equidad y tan poco conciliable con los principios

de sincera amistad y recíproca benevolencia que deben regir entre

pueblos

vecinos

hermanos, afecta a

y

perjudicando

República,

la

sus intereses materiales. El Poder Ejecutivo no podía ni debía ser

y dio sus instrucciones cuando la ley estaba en pro-

indiferente,

yecto al Encargado

Negocios

de

de

República en la

la

Confede-

ración para que entablara la conveniente reclamación. Ella no ha deseado, pero ha de sostenerse con

producido üodavía

el

da

que requiere un asunto tan trascendental

insistencia

la

efecto

República y en que nos asiste tanta justicia.

la

será

enviado

Un

to-

par.;

agente especial

oportunamente.»

También formuló observaciones

la

Legación Británica, invocando

expresas del tratado de comercio con la Argentina, que

cláusulas

aseguraban

uniformidad de

la

los

Por

derechos.

menos

lo

así

lo

aseguró «El Comercio del Plata». La gestión británica había sido

estimulada seguramente por alguna de las fuertes casas

inglesas

radicadas en Montevideo, de amplias ramificaciones en los mercados

argentinos.

Entre tos

de

medidas prestigiadas en 1857 para disminuir los efeccomercial a que tendía la ley argentina, una representación del comercio a favor del estable-

las la

figuraban

restricción

de un un proyecto de

cimiento

derecho la

único

del 5

%

sobre la importación, y

Cámara de Diputados que acordaba

el

50

rebaja a las mercaderías trasbordadas en Montevideo con a puertos orientales y

recargaba

con

el

%

25

%

de

destino

mercaderías

a las

de ultramar procedentes de puertos argentinos.

Durante

todo

liberalización de

el

año

1858

prosiguió la

niercio que no cesaba de

insistir

en la

promedio de lo que absorbía sus argumentos, oscilaba alrededor del 18

derechos. El

redituaba

al

campaña

a

favor de

nuestro régimen aduanero, estimulada por

el

la

co»

necesidad de rebajar los el

%

Fisco, ,

según uno de

y ese derecho que

Erario 100,000 pesos mensuales, hacía pasar de con-

HISTORIA DEL UBUGUAY

496

trabando

mitad de

la

la

importación. El Ministro de Hacienda

ci-

fraba todas sus esperanzas en la adopción de una tarifa de avalúos sujeta a frecuentes revisiones, en reemplazo del aforo de las mer-

Memoria

caderías al tiempo del despacho, y así lo proponía en su anual.

De todas

esas

iniciativas

acogió

sólo

Asamblea

la

rela-

la

a la abolición del almacenaje, aunque sin resultado práctico,

tiva

Poder Ejecutivo vetó

porque

el

déficit,

que

invocando que había ya un

la ley

comercio tendría interés en prolongar

el

depósito,

el

y que sería necesario alquilar nuevos almacenes, observaciones que

fueron

La

reputadas atendibles.

uruguaya que había seguido trabajando a favor

cancillería

de la derogación de los derechos difereiiciales, obtuvo a mediados de 1859 pleno

éxito

en sus

gracias

gestiones,

tanciamiento cada día más agudo entre deración y

el

de la

Buenos

Provincia de

sobre todo

Gobierno de

el

Aires,

al

dis-

Confe-

la

que obligaba a

buscar un ambiente de simpatía de este lado del Plata. La ley

dic-

tada como consecuencia de dichas gestiones dejó en suspenso los derechos diferenciales «en cuanto afectan, ses

de

la



decía,



los

intere-

República Oriental del Uruguay».

Nuestro intercambio con Italia y España. Durante

el

año 1855 salieron de España con destino a puertos

uruguayos 162 buques con una capacidad total de 36,276 toneladas, trayendo en sus cámaras 2,023 pasajeros, y en sus bodegas mercaderías aforadas en 1.243,000 pesos fuertes, entre

las

que

fi-

guraban 436,263 arrobas de vino tinto y 14,829 de aguardiente. En el mismo año los mercados españoles recibieron del Uruguay 100,480 pesos fuertes en frutos y productos del país.

La tos,

estadística comercial española, de donde extraemos

atribuía

portado los

«al

mercados

el

fuerte

estado del

entre lo

desequilibrio

deplorable a

que

Uruguay después

habían

de la

estos da-

importado y lo exquedado reducidos

guerra

civil

de nueve

años».

Eü comercio de Montevideo con Genova, según los registros del

Cónsul

General

Mateo

Antonini,

del

Uruguay en

ascendía

a

las

los

Estados

siguientes

Sardos don

cantidades:

José

GOBIERNO DE PEREIRA

497

1859

Mei'caderias salidas de Genova con destino a Montevide(., francos Mercaderías salidas de Montevideo con destino a Genova, francos

1860



!j

2.642,849 4.168,327

¡I

Ij

2.498,129 4.059,430

Establecimientos de giro que existían en 1856.

Funcionaban en toda tablecimientos

la

industriales

República durante este

y

comerciales

sujetos

al

año 4,092 esimpuesto de

patentes, perteneciendo a nacionales 1,3 62 y a extranjeros 2,7

De de

Capital y 2,122 a los departamentos de campaña.

l*a

He

aquíi los

más numerosas:

Almacenes por mayor

menudeo

»

Asientos de atahona

.

.

.

.

82

Herrerías

80

.

85

Pulperías

1,736

.

Carpinterías

247

Tiendas

171

Zapaterías

Existían, además, en la Capital, para

mercaderías,

y

3 0.

esos establecimientos 1,970 corresipondían al departamento

86

carruajes,

473

el

carros y

al

menudeo

.

.

313 154

transporte de pasajeros carretas

y 228 embar-

caciones.

De

otra

mentó de

estadística Capital,

la

de

1859

relativa

extraemos estas

exclusivamente

al

departa;

cifras:

Casas introductoras y con signatarias

Registros

.

....

37

Fábricas de fideos

14

Fundiciones

.

1

....

5

.

Almacenes por mayor

22

Herrerías

Barracas de frutos

18

Jabonerías

6

6

Zapaterías

56

.

Fábricas de carruajes Carpinterías

La

crisis

36

50

.

comercial de 1858.

Hubo un momento de pánico en la plaza de Montevideo a prinde 1858. Ya se habían notado síntomas de paralización en

cipios

los negocios

IV- 32.

y de baja en

los precios,

cuando

la

casa de don Samuel

HISTORIA DEL UEUGUAY

498

Lafone llamó a sus acreedores para evitar lance no era alarmante:

bancarrota.

la

dos millones de pesos en

Su ba. un

activo y

el

millón en el pasivo. Tampoco lo era la propuesta de arreglo: el pago íntegro con un interés perfectamente seguro, durante la moratoria, del 1 % mensual. Pero el hecho solo de la momentánea suspensión de pagos de esa casa, que era la más importante de Montevideo, tenía que promover y promovió hondas sacudidas y la

más absoluta

restricción del crédito.

en los mismos momentos suspendían pagos importantes casas

•Casi

de Río de Janeiro, como la de Arango y C.^ y Pradella y C '\ y se debatía la plaza de Buenos Aires en medio de grandes dificultados, todo ello

meses

Unidos bajo de

y

como repercución de

había

antes

estallado

grave

la

prodigiosa

de

que algunos

crisis

Francia

Inglaterra,

y

Estados

de las minas de California

la presión del oro extraído

multiplicación

la

en

los

resultmte

negocios

de

esas extracciones.

I.a

zona franca en la Colonia.

La

idea de la zona franca, tantas veces acariciada, se exteriorizó

en un proyecto que

guna presentó

al

el

Jefe Político de la Colonia don Plácido La-

Gobierno de Pereira en 1856. El

podía ser más halagador: llevar a la Colonia sito

el

propósito

no

comercio de trán-

con las provincias argentinas y el Paraguay. Pero las dificulmomento obligaron una vez más a dejar de

tades financieras del

k;do esa persistente aspiración nacional.

Se creyó luego posible

respondiendo

y

lonia,

Castro,

en

al

representación

la

construcción de un puerto en la Cooficial presentó don Agustín grupo de capitalistas, una pro-

estímulo

de un

puesta sobre la base de la adjudicación de la cuarta parte de las rentas departamentales durante 10 años. Esa propuesta fué prohi-

jada por la Comisión de Hacienda de la

Cámara de Diputados en

1857, pero la crisis política que en seguida sobrevino dejó

paralizado

el

también

expediente.

El Uruguay y el Brasil an-iban en 1857 a un ti*atado de comercio con tendencias al libre cambio. El Brasil, Giró,

como hemos dicho

había procurado anular

al

la

ocuparnos de

la

única franquicia

Administración

acordada a los

GOBIERNO DE PEREIRA

499

*

saladeros orientales por los tratados de 1851, reduciendo a la ter.

%

cera parte el derecho aduanero del 25 los tratados

cobraba

al

que con anterioridad a

charque argentino. Su plan consistía siempre

en promover la liquidación de los saladeros orientales y en trans-

formar nuestras estancias en campos de engorde para el suministro de materia prima a los establecimientos similares de Río Grande.

En

consecuencia de ello

gobierno de

el

Pereira envió

Lamas para denunciar

ciones a don Andrés

de aquel año, una vez vencido

el

el

instruc-

tratado de comercio

plazo fijado para su vigencia.

Ante esa amenaza de represalias que

se

en

traduciría

el

resta-

blecimiento de los derechos de importación sobre los ganados destinados

a

los

saladeros

de

Río

Grande,

surgieron

negociaciones

nuevos y fecundos rumbos a nuestras industrias. El auropeo era de libre cambio en esos momentos, y el

que abrían

ambiente

plenipotenciario rrientes,

Ambas

oriental

presentó partes

colocándose

de

lleno

en

nuevas

las

co-

siguiente programa de franquicias recíprocas:

el

admiten

en

principio

la

conveniencia

del

libre

cambio de sus productos naturales y agrícolas y convienen en hacer un ensayo práctico de abolición de ciertos impuestos y reducción progresiva de otros. Los productos naturales, ganaderos y agrícolas del Uruguay, estarán exentos de derechos de consumo en el Brasil, ya se introduzcan por la frontera terrestre, ya se introduzcan por cualquiera de los puertos del Imperio. Los productos naturales y agrícolas del Brasil gozarán en las aduanas orientales de una rebaja del 2 % sobre el derecho general de importación a que están sujetos los productos similares de cualquiera di!

procedencia.

en

el

tratado

1851 acerca de la navegación de los afluentes del río

Uruguay

otra

se hace extensivo a

la

El

principio

navegación de

establecido

la

Laguna Merim y

del

río

Yaguarón.

Fué aceptado

el

programa del plenipotenciario oriental por la empezaron las conferencias, arri-

cancillería brasileña y en el acto

bándose finalmente en septiembre de 1857 a la redacción de un tratado cuyas cláusulas esenciales reproducimos a continuación: a) la

El Gobierno Oriental y

posición

geográfica

mente relaciones muy

de

sus

el

Gobierno Brasileño reconocen que

respectivos

especiales,

países

establece

mutua-

que deben ser regladas mediante

que al paso que favorezcan los intereses económicos y la prosperidad material de los dos países, liguen a sus habitantes y les hagan comprender prácticamente la estrecha deIHmdencia en que se encuentran la paz, la riqueza y el bienestar estipulaciones

HISTORIA DEL URUGUAY

500

Reconocen además

recíprocos.

conveniencia de

la

un ensayo que

pueda suministrarles los datos y reformas necesarios para asentar en ellos un tratado definitivo que traiga progresivamente lición de

la abo-

derechos fiscales y protectores sobre los productos agrícolas de los dos países y por fin el libre cambio,

los

naturales y

cuya utilidad recíproca reconocen en principio. destino a b) El ganado en pie que salga por la frontera con Río Grande estará libre de todo derecho de exportación y el ganado brasileño que se introduzca en territorio oriental para ser criado y engordado, estará exento de todo derecho de importación.

En compensación

c)

de estas

rechos de importación en

el

de

ventajas estarán exentos

de-

Brasil y equiparados a los nacionales

charque y demás productos ganaderos de origen oriental que introduzcan por la frontera o por los puertos del Imperio.

el

se

Los productos naturales y agrícolas del Brasil

d)

troduzcan

al

Uruguay que en

introduzcan

se

productos

los

al

Brasil

naturales

4

en

Ve

segundo y del

el

1

%

y

que

se

in-

agrícolas

del

gozarán de una reducción

derechos de consumo que será del

los

del

Uruguay y

3

%

en

el

primer año,

en cada uno de los años sub-

siguientes.

Queda

e)

reconocida

en principio la conveniencia

para

el

co-

mercio, las industrias y las benévolas relaciones de los dos países,

de abrir por concesión del Brasil la navegación de la Laguna Merim y del Yaguarón a la bandera oriental; pero dependiendo la de ese principio de exámenes y estudios a que

aplicación

mandará proceder desde

Imperial

bierno

negociaciones

ulteriores

cuando

se

luego,

aborde

el

será

tratado

Mientras tanto se concederán las mayores facilidades

que se hace por trasbordos f)

la

Laguna Merim y

el

el

Go-

materia de definitivo. al

comercio

Yaguarón, eximiéndolo de

forzosos.

El Uruguay concederá a las líneas de vapores brasileñas los

mismos

privilegios acordados a las líneas inglesas, la exención de derechos de anclaje, tonelaje y entrada de Adnana, y la exención de derechos al carbón importado con destino a esos vapores, com-

l)rometiéndose además a no alterar durante t.irifa rl

plazo de diez años la

servicio de las líneas brasileñas.

Suscripto ya lo

el

a que están sujetos los depósitos de carbón instalados para

pasaría

a

el

su

tratado, expresó el plenipotenciario oriental que Gobierno con la siguiente Interpretación de sus

dos cláusulas capitales:

Que

el

Brasil no podría acordar a ningún otro país la exención

GOBIERNO DE PEKEIRA

derechos

dfc

al

Compensación

charque y demás productos ganaderos acordada en libre pasaje del ganado por la frontera. Que

del

Laguna Merim

concesión de la navegación de la

la

501

y del

Yaguarón

otorgada en principio a la bandera oriental, restablecía la comunatural

i'.idad

cipio

de

aguas y que

axiuellas

práctica de

la

no podría quedar sujeta a ninguna condición que

la

Congreso de Viena.

el

polémica que se produjo en seguida entre

Uruguay doctor Lamas y

del

canciller

el

pero en cuanto

al

segundo

el

representante

el

brasileño

Maranguapé, resultó conformidad plena respecto

me

prin-

hiciera

debería regirse por las reglas universales admitidas en

ilusoria y

materia de navegación entre ribereños desde

De

ese la

del

vizconde

diplomático imperial se manifestó

en su propósito de subordinar

de

primer punto; fir-

concesión a la bandera urugua-

la

ya a condiciones dependientes de estudios que se mandaría practicar.

Quedaba, pues, en pie

cambio

exportaciones.

Las

muy de

libres

las

aguas fronterizas.

En

problema de

las

favorables

uruguayas

carnes

mercados brasileños

los

problema de

el

resolvía en términos

se

el

podrían

penetrar

en

todos

derechos y hasta con ventajas

sobre las de Río Grande sujetas a un impuesto municipal del 3

%

cuando cuando

%

se extraían con destino al interior del

exportaban para

se

el

Imperio y del

exterior, y^'otra ventaja

carnes argentinas que estaban gravadas con

Uis

gi'ay

el

15

a su turno eximía de derechos de exportación

7

mayor sobre 9^.

al

El Uruganado y

a los productos ganaderos que salieran por la frontera, vale decir,

mismo que

lo

En cuanto

establecía

el

tratado

de

1851

no vencido todavía.

a los demás productos, las concesiones eran recíprocas

y estaban encaminadas a una franca situación de libre cambio. Uno de los plenipotenciarios brasileños, el vizconde del Uruguay, decía en

el

curso de las

negociaciones,

sintetizando

el

cri-

terio a que respondía el tratado:

«Es fuera de toda duda que las carnes que produce Río Grande insuficientes para el consumo del Imperio. A éste interesa

son

que sean abastecidas por el

de

interés

que aquél

le

la

la República.

República

en

tener

Pero también es el

muy grande

importantísimo

mercado

ofrece a su única industria actual. El Estado Oriental

produce un excedente de carnes que nos son necesarias para llenar el

vacío que en nuestro

género.

El

aguardiente,

consumo deja nuestra producción de aquel

azúcar, yerba mate, café, tabaco, que consume y no produce el Estado Oriental. Las

Brasil

produce

relaciones comerciales de los dos paísee que son ya considerables.

HISTORIA DEL URUGUAY

502

por

eítán

lo

proximidad, d;

por decirlo

así,

perturbase

relaciones

esas

intereses

e

Un

perjudicaría

ya brasileños ya orientales, que concurren con tirgente para la única industria de esos parajes.» aquellos,

Trata

el

por su

circunstancias,

esas

por la conmixtión de la población

frontera, de su industria, relaciones e intereses.

la

Cjue

por

determinatlas

tanto

y,

Gobierno de propiciarse

el

apoyo del

sistema a su

todos con-

país.

Antes de pasar el tratado a la Asamblea procuró el Gobierno formar un movimiento de opinión a su favor, y con tal objeto dirigió una circular a los Jefes Políticos en que señalaba así las ventajas que encerraba:

«Asegura un mercado privilegiadísimo en los puertos del Brasil los productos del ganado del Estado Oriental y favorece a los

a

domas productos naturales y para

de

desarrollo

el

agrícolas.

.

Establece una gran base

.

comercio

industria y del

la

siguiente, para el desarrollo de la riqueza general

por con-

y,

del

país

y

el

bienestar de sus habitantes.»

Pero

la

prensa de oposición dü'ige su pi*oa contra

El doctor Juan Carlos

Gómez fué

el

desde las columnas de «El Nacional».

Lo que lie

el

el ti-atado.

primero en romper

Su oposición era

Brasil procuraba en su concepto era ratificar

el

el

fuego

absoluta.

tratado

que era nulo y que debía ser anulado en aqvü su argumentación:

límites territoriales

He Lamas equiparó en

vez de ratificado.

1851

«la detentación

o usurpación maliciosa

con la posesión que nace de un derecho». El Uruguay tenía un

mite de derecho y

de

Ibicuy y Yaguarón.

En

el 1

Cuareim y

ación,

hecho.

Era

acta declarada

nula,

línea

Lamas

vez de ella

Yaguarón. o sea

el

la

el

írrita

y

lí-

que forman los ríos

reconoció la que forman

límite

del

acta de Incorpo-

de ningíin

valor

en 1825.

Es un error de hecho que anula los tratados de 1851, tratados nulos además por falta de sanción legislativa y por la promulgación ilegal que de ellos hizo el gobierno de Giró al declararlos hechos consumados cuando el ejército brasileño ocupaba nuestro territorio y

locaba las

en

la

el

Uruguay

imposibilidad

salía

de

de una larga guerra que lo co-

sostener

en

aquel

momento con

armas su derecho. La cuestión de límites está pendiente ante

GOBIEBNÓ DE PEREIRA

derecho,

el

que

permanece irresuelta a pesar de la sanción indirecta Asamblea de 1852 con la esperanza de ulteriores

prestó la

le

por objeto asegurar

acuerda

más

línea

la

Su cláusula

divisoria.

capital

Uruguay i)or concesión del Brasil, Laguna Merim y (leí río Yaguarón. Todos los

efectivamente

navegación de

negociarse

comercio que acaba de

tratado de

El

modificaciones. tiene

5)03

la

la

al

de-

bordados hechos sobre esa tela para ocultar su

artículos son

trama.

Uno de

los diarios

adictos al Gobierno, «La Nación», replicó que

declaratoria de nulidad de la Sala de la Florida había quedado

la

y en cuanto a las

sin efecto por los tratados de 1851;

servaciones, que tanto

Asamblea

se

demás

ob-

Presidente Giró como la mayoría de su

el

habían manifestado opuestos a

los

que por

tratados;

efecto de ese rechazo la Legación Imperial se había visto obligada s

aceptar modificaciones;

había acordado su

voto

que aun después de «en

ello la

esperanza de

la

mayoría sólo

ulteriores

modifica-

combatida por don José María Muñoz y don Pedro Bustamante precisamente a nombre de los hechos consumados; que la actitud de Giró y de la mayoría parlamentaria era tanto ciones»,

frase

más notable cuanto que

Lo que había de los

estaban ya en plena ejecución

los tratados

tiempo de efectuarse en 18.52 Joaquín Suárez al Presidente de al

cierto

en

de don

Asamblea.

la

fondo de esa polémica era que

el

tratados de 1851 habían sido arrancados por

de una situación angustiosa en que rrestar sus terribles zarpazos;

mando

transmisión del

la

que

el el

el

Brasil

dentro

Uruguay no podía contragobierno de

la

Defensa que

por una resolución expresa de la Asamblea de Notables estaba obli-

gado

a recabar la sanción legislativa, disolvió la

y ante



promulgó

los tratados

dable hacerlo de inmediato;

que

Asamblea y por



y les dio ejecución en cuanto era el

Presidente Giró que se resistía

a aceptar esa herencia tuvo que ceder bajo la presión de los ejérbrasileños que ocupaban nuestro territorio, obteniendo, sin embargo, algunas modificaciones; que la mayoría de la Asamblea tuvo que ceder también, aunque con el preámbulo en que expresaba

citos

la

la

esperanza

de

mados no obstante el

ulteriores

modificaciones,

minoría colorada que aceptaba apoyo de

íR

la falta

y

los tratados

todo

ello

porque

como hechos consu-

de sanción legislativa, tenía a su favor

Legación Brasi'eña, interesada en echar abajo

al

gobierno de Giró y en reabrir el período de nuestras guerras civiles. Tales eran los hechos. Y bien considerados, sólo quedaba como

argumento de invalidez

la

falta de libertad

en 1852 para aceptar

HISTORIA DEL URUGUAY

504

Q rechazar los tratados, dado que la ^diplomacia brasileña que emlos partidos orientales para que corriera a bala-

pujaba a uno de

zos al otro, tenía a poca distancia de Montevideo

midable con que asegurar

El tratado de comercio ante

Hemos

dicho en

comercio

de

al

el

ser

el

ejército for-

Parlamento.

IX

capítulo

un

de sus planes.

la efectividad

suerte

fué la

cuál

tratado

del

sometido por primera vez a la consideración

legislativa.

El pais

entero

estaba en

argumento de todo

hacían

plena lucha

encabezados por

de oposición

tos

el

y los elemenJuan Carlos Gómez'

electoral

doctor

para crearle dificultades

Gobier-"

al

no y provocar un cambio violento de situación. El tratado de co-" mercio suministró nuevos combustibles a la hoguera y hubo que clausurar las sesiones ordinarias para cortar los debates, al

mismo

tiempo que se prohibían las reuniones políticas y que eran desterrados los periodistas que encabezaban la oposición. Un año después, en 1858, volvió el tratado de comercio a figurar orden del día de

Asamblea. Ya no había oposición, porque

en

la

la

oposición había quedado ahogada en Quinteros, y

la

el

tratado

si-

guió la tramitacióoi parlamentaria, tranquila y serenamente, como cualquier asunto de índole corriente.

A

mediados de año

la

Comisión de la Cámara de Diputados que

a estudio se expidió aconsejando su sanción. <4La situación creada a la industria y al comercio de la Repú-

lo tenía

blica

por

los

de

tratados

después de reducir

el

—decía

1851

Imperio a

la

en

mitad

su la

informe

—sobre

ventaja que

la

todo tarifa

de aquella época ofrecía a la exportación de nuestros productos por la frontera terrestre, es

onerosa» ...

responde

al

a todas luces leonina e insoportablemente

Se ha dicho por los opositores que el nuevo tratado propósito de «matar el hambre de los negros del Bra-

y para establecer en esta República con sacrificio de sus intereses un mercado privilegiado a favor de los productos del Brasil». sil

.

El hecho

es,

impuestos en

sin embargo, el

Brasil

a

tratado exime absolutamente de

que

el

los

productos

animales de procedencia

uruguaya y establece una rebaja progresiva a favor de ductos agrícolas y naturales bajo la única obligación

de

los

pro-

rebajar

progresivamente nuestros derechos a los artículos de procedencia brasileña.

GOBIERNO DE PEBEIRA



a

relativa

la

la

exportación uruguaya y vuelve la

hacerse

podrían

objeciones

dos

Sólo

forme

efectividad el

la

tratado

al

— agregaba

privilegio

del

ultraje a

505

acordado

el in-

a

la

dignidad nacional que en-

cláusula de la navegación de las aguas fronterizas. Pero

la

primera carece de importancia ante

tratado que establecen que la

compensación de

la

nota

final

el

que

las franquicias

en que

los

términos expresos del

privilegio que obtiene la República es

acuerda

ella

al Brasil

negociador oriental declara que

el

será sometido a la aprobación legislativa en

el

y de

tratado

concepto de que la

el

exención de impuestos constituye la compensación de las franquicias acordadas

y que esa exención

Brasil

al

dida a ningún otro país sin que

En cuanto

hecho. lidad

el

a lo de las aguas fronterizas, toda la responsabi-

sobre los sostenedores de la teoría de los

recae

ultraje

del

no podrá ser exten-

tratado quede anulado por

el

hechos consumados de 1852, de aquellos «que hallándose a la

ca-

beza de toda la fuerza armada del país y en medio de las angustias de

que se esforzaba por levantarse de

la República

la postra-

ción en que la había sumido la lucha de los nueve años, confesaban

en pleno Senado hallarse prontos a debelar las autoridades constir de

luidas

la

Nación,

poniéndose

frente

al

una revolución en

de

sostenimiento de todas las indignidades que se le imponían». El

miembro informante de

agregó refiriéndose

al

Comisión,

la

tratado de

don Cándido Joanicó,

comercio de 1851:

La exención de derechos de exportación tinado a la Provincia de Río Grande

a favor del ganado des-

impidió que tomara incre-

mento nuestra industria saladeril, porque toda ella se radicó en la frontera terrestre. Es verdad que por otra cláusula del tratado quedaban exentos de derechos los productos animales que se eX' portaran por la frontera terrestre. Pero esa franquicia no era suficiente

según

lo

para contrarrestar

demuestra

el

el

golpe asestado a nuestra

industria,

hecho de que transcurrieran varios años sin

que los saladeros pudieran sostenerse a pesar de las matanzas de animales alzados a que se veían obligados los estancieros para hacerse de fondos. zo

más

Y

el

Imperio no satisfecho con

intolerable nuestra situación.

de celebrarse

el

tratado gravaba con

de carne y ese derecho fué reducido

La el

al 15

tarifa

25

%

%

el

ello,

todavía hi-

vigente al tiempo

consumo interno

por efecto de medidaal

inspiradas en los intereses de la clase trabajadora del Brasil. Lai

única ventaja que se nos había acordado quedó anulada en consecuencia. el

No hay que pensar en

tratado de 1851. Ese es

el

tener saladeros mientras subsista

hecho. El nuevo tratado viene a dar

HISTORIA DEL URUGUAY

506

razón

preámbulo con que fueron" sancionados

al

a favor

to

dada

ulteriores

de

la índole

vierte a cada

modificaciones,

los de 1851:

de

voto

realización

el

vo-

fácil

de las industrias del Brasil y del Uruguay, que conlos productos del otro.

uno en consumidor de

Prevalecieron estas consideraciones en ambas ramas del Cuí''po Legislativo y en consecuencia el tratado de comercio fué sanciona-

do y previo canje de las ratificaciones empezó a ejecutarse por el Brasil desde diciembre de 1858.

el

Uruguay y

Escasa duración de este tratado. El tratado de comercio y

do ajustados por

el

de permuta de territorios habían

plenipotenciario del

el

Uruguay

mismo

el

si-

día;

pero sin ninguna cláusula que estableciera dependencia o siquiera entre los dos tratados.

relación

Ya había corrido un año desde la fecha del ajuste cuando la diplomacia imperial convertía en hermanos siameses al tratado de desbordante de liberalismo, y al de permuta destinado fundamentalmente a colocar las iniquidades de 1851 al abrigo de toda excepción de nulidad. Según las notas reservadas que se camliiaron en esa oportunidad la aceptación del tratado de permuta v-omercio,

era

condición indispensable

para

la

subsistencia

del

tratado

de

comercio.

Veía

el

fracaso

Brasil

que

el

primero de esos tratados después de su

en 1857 había corrido sobre rieles

al

afio

siguiente,

en

segundo era rechazado de plano por la Cámara de Senadores a pesar del informe favorable de la Comisión encargada tanto que

el

de su estudio. Gobierno,

a

Y entonces

fin

se propuso ejercer presión sobre nuestro

de hacer depender la vigencia de las fran(|uicias

comerciales de la aceptación del tratado de permuta.

Cediendo a esa presión sin duda el Gobierno de Pereira volvió a recomendar en 1859 la permuta de territorios, sin conseguir su objeto, porque la Comisión de Legislación orientada ya en las mismas ideas de la mayoría del Senado había resuelto aconsejar lisa y llanamente el rechazo. «El

de

Brasil

— decía

que sólo espera

la

Comisión en su informe

circunstancias

angustiosas

—ha

dado pruebas

para la

Repíiblica

para apropiarse de grandes zonas del territorio nacional y sería lo más peligroso para nuestra propia seguridad establecer tratados de cesión de territorios bajo el pretexto de permuta o de cualquier

GOBIERNO DE PEBEIRA

después

fJ07

negociar

para

precedente

Otro,

que

otros

en circunstancias adecuadas para su logro».

servirían

de

Todavía no conocían nuestros legisladores

las

notas

otro

y

reservadas

y sólo procedían bajo la impresión de las absoí clones territoriales de los tiempos anteriores, que no convenía de ninguna manera maley que luego podría servir de precedente para nue-

una

tizar con

vas usurpaciones.

Terminaba en esos momentos la administración Pereira y no el Senado de ocuparse del asunto, que pasó así sin resolución al nuevo gobierno juntamente con la divulgación de las notas reservadas. Y ya veremos que uno de los primeros actos de la administración Berro fué retirar el tratado de permuta y que tuvo tiempo

invocando ese retiro declaró en

ducado

el

acto el Gobierno Bi*asileño ca-

tratado de comercio y subsistente

el

de 1851, volviendo

el

de nuevo ambos países, por efecto de la insaciable voracidad bra-

régimen de represalias y de guerra económica de que se

sileña, al

Iiabía intentado salir.

La

cláusula de la nacáión

más

faivoi-ecida

en

los ti-atados

de co-

mercio.

Hasta nuestras

el

momento

tratamiento

En tra

al

examinamos había dominado en

histórico que

diplomáticas

prácticas

de la nación

más

el

principio

de

«la

1858 inició la cancillería oriental una decidida

ese

gos años

principio,

más

campaña

que habría de intensiñcarse hasta triunfar

de

conlar-

tarde.

La cláusula de

la

nación más favorecida, nos crea

moria de Relacioijes Exteriores de ese año tajosa, desde

igualdad

favorecida».

— una

—decía

la

Me-

situación desven-

que contraemos obligaciones a cambio de una recipro-

cidad que para nosotros resulta ilusoria y que además nos inhabilita

para poder arreglar nuestros intereses especiales de vecindad.

Segui'os marítimos.

Desde mediados de 1856 empezó a funcionar en Montevideo una de Seguros Marítimos y Terrestres del Brasil». La lista de accionistas estaba encabezada por el barón de Mauá. agencia de la «Compañía

HISTOBIA DEL UBUGUAT

508

Navegación de cabotaje.

La carrera del Río de la Plata y del río Uruguay adquirió un buen impulso durante el gobierno de Pereira. En 1856 se fundó una empresa que adquirió el vapor «Comercio» con destino a la carrera de Montevideo al Salto. Dos años después empezó a funcionar una nueva línea con los vapores «Corza» y «Sycce» y el mismo itinerario, pero pasando por Buesos Aires. Y en 1859 entró en actividad una tercera empresa, la Salteña, con los vapores «Salto» y «Montevideo», sobre

mensual de mil pesos obtenida por sentante de la Compañía.

el

base de una subvención

la

coronel Leandro

Gómez

repre-

Obras de abalizamiento y de iluminación.

También prosiguió

el

Gobierno

las

obras de abalizamiento e

ilu-

minación de nuestras aguas.

En

empezó a funcionar

1857

el

pontón-faro del Banco Inglés, de-

cretado por leyes y reglamentos de la administración ^

La Asamblea

estableció en ese

mismo

de abalizamiento, un impuesto sobre la navegación en

guay,

de 120

centesimos

anterior.

año, con destino a obras

(moneda antigua)

por

el

tonelada

río

Uru-

tratán-

dose de buques de ultramar y de 50 tratándose de barcos de cabotaje.

Fué una

dos optaba por

ley de incubación laboriosa. el

La Cámara de Diputa-

establecimiento liso y llano del impuesto, mien-

Senado juzgaba que sólo debía autorizarse al Poder el impuesto con la Argentina. Llevada la disidencia a la Asamblea General prevaleció la fórmula de la Cámara de Diputados. Todavía intentaron en esa etapa final los partidarios de la tesis del Senado la incorporación de un articulo que autorizaba al Poder Ejecutivo para no aplicar el impuesto en el caso de que así lo aconsejaran las negociaciones con el Gobierno Argentino, pero también sin resultado, porque el artículo fué

tras que

el

Ejecutivo para acordar

desechado. particular de la que formaban parte don Luis LeGómez se encargó en seguida de iniciar traLeandro don lena y bajos para la realización de las obras de abalizamiento, de acuerdo

Una empresa

con la fórmula del Senado. Empezó por gestionar ante nuestro Gobierno la contratación de las del río Uruguay, y una vez votada ía

ley

se

dirigió

favorable de la

al

Congreso Argentino, obteniendo

Cámara de Diputados

al

ñnallzar

el

una año

sanción 1858.

GOBIERNO DE PKREIKA

509

Los momentos no eran sin embargo propicios

para establecer

recargos a la navegación de cabotaje, que continuaba en crisis a

despecho de las medidas adoptadas en años anteriores.

Dando una de

«El Nacional»

las razones de la decadencia, decía

cue un barco costanero de 100 toneladas y 12 viajes al año, pagaba en la Argentina 5 patacones de patente, contra 225 que estaba obligado a abonar

en Montevideo!

La Comisión de Hacienda de en 1858

Cámara de Diputados abordó

la

estudio de un plan de franquicias sobre la base de la

el

supresión

de

los

derechos

que hacía extensiva a

patente

de

reños del Plata y sus afluentes. Pero a la espera de lo

y

de

adicionales

hospital,

de cabotaje de los países

los barcos

que estableciera

la

el

ley

ribe-

proyecto quedó aplazado

de Aduana.

Servicios de prácticos lemanes.

Otra reforma realizó decreto

de

el

gobierno de Pereira:

que autorizaba

1854,

de prácticos lemanes

para

el

el

la

establecimiento

servicio

derogación del de

de navegación

sociedades entre

los

puertos de Montevideo y Buenos Aires. El nuevo decreto de 1856

ya existentes y dejaba en y consignatarios para elegir prácticos, pero sin alterar la tarifa sancionada en 1840 y la de gastos y derechos de puerto, ambas excesivamente pesadas para el movimiento mercantil, según una de las publicaciones de la declaraba

completa

sin

efecto

libertad

las

a los

sociedades capitanes

época, la «Guia de Montevideo», que invocaba para demostrarlo estas

cifras

relativas a los buques de ultramar:

Al práctico, por traer un buque de fuera de cabos, 8 pesos; por abrir registro de carga, 24 pesos; por abrir registro de descarga, 20

pesos;

lada

por derechos de puerto^ 200 centesimos por cada tone-

(ya se percibían los derechos correspondientes a los faros de

Flores, Lobos, Cerro y Colonia).

El cabotaje en 1858.

De un cuadro

estadístico publicado por la

misma «Guía

de Mon-

tevideo» extraemos las siguientes cifras relativas al movimiento de

entradas y salidas de buques de cabotaje en

deo durante

el

año 1858:

el

puerto de Montevi-

510

HISTORIA DEL URUGUAY

511

GOBIERNO DE PEBEIRA

para los contratantes y ribereños que permitieran la misma navegación en la parte de su pertenencia, declaración esta última que el

Paraguay había aceptado en

principio.

y telégrafos.

Ferrocai'i'iles

Don Roberto Rowley eptablecimiento de un

obtuvo privilegio en 1856 para

pidió y

neiro.

El Poder Ejecutivo otorgó

cando

la ley de privilegios

el

Montevideo y Río de Jaconcesión por ocho años invo-

entre

ferrocarril

la

de 1853.

Y

luego de obtenida se presentó

el concesionario al Cuerpo Legislativo solicitando ampliación a noventa años, con la promesa de construir otras líneas en el interior del país, para ligar a la Capital con los pueblos de campaña. La Cámara de Diputados votó el proyecto, pero el Senado lo desechó de

acuerdo con carril

el

miembro informante, quien opinaba que

<era inútil por cuanto

faltaba en

el pais

la

ese ferro-

población,

ali-

mento principal de estas empresas». A fines de 1858 se organizó un empresa, de la que formaban parte don Francisco Hocquard, don Carlos Navia, don Leandro Gómez y don Pablo Duplessis para construir un ferrocarril de Montevideo a la Unión, y concentrar las tabladas en este último punto.

El Gobierno aceptó la propuesta y luego se dirigió a la Asamblea

en demanda de una ley que autorizara las expropiaciones de

tie-

Formulando el elogio del proyecto, decía Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados:

rras que fueran necesarias. la

«Es con

el

establecimiento de las vías férreas que se acortan las

distancias, se estrechan las relaciones de los pueblos y se

facilitándose queza,

de

la

el

comercio,

paz y del

aumenta

que es el agente más eficaz de la riengrandecimiento de las naciones. Plan-

teada una vez en la República esa importante invención, los benéficos

resultados que indudablemente producirá

servirán de

estí-

mulo para que mayores capitales invertidos en la misma especulación hagan desaparecer de entre nosotros las dificultades del transporte establecidas por la naturaleza. Cuando los desiertos y los ríos de nuestra campaña no detengan el pensamiento y las industrias, cuando nuestros hombres pastoriles y agrícolas estén vinculados con los centros mercantiles, cuando sea fácil la rerlslón de la riqueza de un punto a otro del Estado, habremos conseguido aniquilar

el

palmente retarda

progreso y

la

el

que es

aislamiento,

comunicación rápida de

las

el

la

causa que princi-

bienestar de los pueblos.

ideas,

con

el

Con

cambio recíproco de

HI3T0KIA DEL UBUGÜAT

512

irtereses y con

el

adelanto que necesariamente resulta del contacto

inmediato y frecuente con las sociedades, a la vez que será regular y las

más

fructífero el trabajo, cundirá

masas y con

fortificar la

No

paz y

se multiplicarán

ella el

imperio de la

los

más

ticas,

el

ellas

ley».

podía prosperar a causa de las agitaciones

Ferrocarril

del

Oeste

en

elementos que han de

faltaban, pues. Iniciativas de este lado del Plata. Pero

ninguna de

más

la ilustración

Buenos Aires,

de

como polí-

inaugurado en

quedó como el primero del Río de la Plata. Desde ese mismo año empezó a abrirse camino la idea de establecer el telégrafo eléctrico entre Montevideo y Buenos Aires, y 1857,

poco después llegó tre

el

representante de la Empresa de los cables en-

Europa y Norte América en busca de facilidades para extender beneficio de sus líneas a las dos capitales del Plata.

el

La

industria ganadera.

En

su Memoria anual correspondiente

nistro de Gobierno que en nuestra tro

millones

millón

al

año

1858, decía el Mi-

campaña pastaban cerca de

cua-

de animales vacunos, dos millones de ovinos y un

de caballares.

Vamos

a reproducir sus

cifras

por depar-

tamentos y también las de los establecimientos ganaderos que existían a la sazón según otro cuadro que don José Vázquez Sagastume presentó a la

Cámara de Diputados

refundición de impuestos locales:

DEPARTAME^fTOS

al

fundar en 1859 un plan de

GOBIEBNO DE PEBEIRA

en

5Io

En un cálculo estadístico presentado a la Cámara la misma oportunidad, se hacía ascender a 7,182 establecimientos,

los

un millar

correspondiendo

d3 Cerro Largo que en

de Diputados

número de

el

Departamento

al

cuadro precedente aparece en blanco..

el"

Según otros datos de origen oficial el Departamento de Tacuarembó encerraba realmente un millón de vacunos al tiempo de levantarse la estadística ministerial, pero como una parte consianimales

de esos

derable

invernada y estaba

de

era

Río Grande, sólo había computado

a los saladeros de

destinada

la Policía los

que podían considerarse como estables o permanentes. Advertiremos también que en el acta de colocación de la piedra

rodeos

fundamental atribuía

de

la

Jefatura del

de

Salto,

departamento por

ese

a

las

mediados de

propias

1859,

se

autoridades locales

600,000 vacunos, 200,000 ovinos y 130.000 yeguarizos.

Varios meses antes de que

parar

cuadros

sus

Director

el

Ministerio de Gobierno hiciera pre-

intermedio de

por

las

Jefaturas

Políticas,

de «La Nación» calculaba así las existencias,

el

invocando

datos suministrados por los ganaderos:

La República vacunos según

tenía en el

alrededor de 2.000,000 de animales

1852

de 2.500,000 computando las omisiones

censo, y

El procreo de nuestra campaña donde jamás hay pes-

del

censo.

ies

puede estimarse en

el

%

33

al

año.

Agregando

las

constantes

entradas de Río Grande y de Corrientes, resultará una existencia de seis millones de cabezas, que nos suministra

para consumo y 500,000 para saladero. aquí otro cálculo que al discutirse en 1858

villos

He una

extraordinaria,

patente

hacía

ingeniero

el

al

año 100,000 no-

el rendimiento de don Julio Reyes:

Ganado vacuno: 5.000,000. Ganado lanar: 10.000,000. Ganado caballar: 500,000. Volvió

Ministerio de Gobierno en 1859 a recabar datos esta-

el

dísticos a las Jefaturas de Policía.

ron publicadas, por

lo

No

todas las contestaciones fue-

que sólo podemos reproducir las que sub-

siguen:

San

Desde

José.

septiembre de 1858 hasta septiembre

de 1S59

fueron extraídos del Departamento 15,698 vacunos, 1,716 caballares

y 6,039 arrobas de lana. Porongos. Colonia.

Vacunos

No

206,367,

dos 1,960 (adviértase que en la existencia

IV

-

:33.

figuran

lanares el

las

290,509,

salidas

del

caballares

distrito

51,004,

de

cer-

cuadro ministerial del año anterior

de vacunos no pasaba de 85,000 cabezas).

HISTORIA

514

DE.L

URUGUAY

320 establecimientos ganaderos;

Florida.

Maldonado. 234,899 vacunos;

Todas estas

560 establecimientos de

simplemente.

de agricultura

121

pastoreo y agricultura;

70,774

ovinos;

58,669

caballares.

señalan sensible aumento sobre las del año

cifras

anterior.

Carne paia Durante de

jiilio

el

consumo de

doce meses transcurridos desde agosto de 1857 hasta

los

1858

fueron

En

animales vacunos. cifras,

población.

la

figuran

traídos

a

cuadro

el

cincuenta

Montevideo oficial

tantos

y

carneados

y

127,615

de donde extraemos estas

compradores,

algunos

de

ellos

en grande escala, como Lafone, por 25,000, Lucio Costa por 21,000,

Burzaco por

19,000,

Pedro Piñeyrúa por 10,000. el matadero estaban ubicados en

Los corrales de abasto y de

la

Aguada y de sus poco

instruye

satisfactorias

la

playa

higiénicas

condiciones

hecho de que dichos establecimientos figuraron entre

ei

los factores

de la gran epidemia de 1857.

Precios del ganado y de los campos. Al reglamentar el

la

Poder Ejecutivo

ley de contribución directa de 1856, estableció las

de los capitales sujetos

normas que subsiguen para al

apreciación

la

impuesto:

Una

suerte sencilla de estancia puede contener dos mil cabezas ganado vacuno y caballar o diez mil de ganado lanar. Cada suerte de estancia debe estimarse en dos mil pesos y el ganado

de

?.

los

siguientes tipos:

Ganado vacuno de cría o rodeo, 6 pesos; ganado vacuno alzado, 4 pesos; ganado caballar, 12 reales; ganado caballar alzado, 4

reales;

reales;

Tales

ovejas

finas,

6

pesos;

mestizas,

3

para

el

pesos;

criollas,

12

cerdos, 2 pesos.

eran

los

precios

establecidos

pago de

la

contri-

bución directa, inferiores algunos de ellos a los de plaza. Una correspondencia del Salto hacía notar en diciembre de 1856 que los novillos y las vacas que se habían estado cotizando respectivamente medio los primeros y a

d 14 y 11 patacones, habían subido a 16 y 16 las segundas.

Sobre «vEl

la base de los precios

Comercio

del

corrientes, apreciaba editorialmente

Plata» a fines del

mismo

año.

en seis millones

515

COIJIEHNO DE PEREIRA

de patacones

valor de la zafra ganadera terminada, entrando en

el

esa cifra las lanas por 600,000 patacones.

Véase cuál era

la

cotización de los cueros y lanas

do Montevideo a mediados de 1858

Cueros vacunos de saladtíro, 7ó libras »

»

matadero, 75 libras

"

.

.

Lana, arroba

De una

estadística

más amplia

producimos estos promedios 1858.

en

(pesos de ocho reales)

la

plaza

:

8 pesos 4 reaU's 7

»

6

»

3

»

6

»

de la «Guía de Montevideo» re-

de precios durante

el

trienio

nas a reales):

CUEROS VACUNOS

ANOS

Lanas Secos

1856

1856-

(El tasajo a pesos fuertes de 10 reales y los cueros y las

....

Salados

Tasajo

la-

HISTORIA DEL UBUGUAT

516

El Gobifcino aprobó ese sistema en' 1859, declaró que sus marcas

serían las únicas que servirían para acreditar la propiedad de los

ganados y estableció

como

por marca

precio de cuatro pesos

el

retribución al señor Blanco, invadiendo con

atribuciones pri-

ello

vativas de la Asamblea.

El robo de ganados.

Era tanto más urgente dera,

cuanto que

la

reglamentación de

propiedad gana-

la

robo iba asumiendo proporciones .asustadoras

el

por efecto de los hábitos desarrollados a la sombra de los desór-

denes de

la

guerra

civil

«Hay secciones en

y de la escasez de la Policía.

departamentos no lejanos

üecía editorialmente «El Comercio del Plata»,

de la Capital,





en que la contri-

bución violenta que soportan los honestos y laboriosos habitantes en provecho de los abigeos, vagos y ladrones, sería más que supara costear a toda una familia una vida no sólo cómoda,

ficiente

sino lujosa en medio de los placeres de roses por noche,

cuereadas o robadas,

Una, dos o tres

la Capital. al

precio que hoy tiene la

.hacienda, representan al final del año un fuertísimo capital que se

destruye en provecho del vicio, de la holgazanería y del sustento esos

df.

185'2

bárbaros de nuestros

en que empezamos

a

tiempos calamitosos. Desde

poblar

este

campo,



nos

de nuestros amigos estancieros que tiene 4,000 vacas,

el

año

decía uno



los veci-

nos que no poseen un solo animal, que no siembran, que no se con-

chaban y que viven con sus familias, entre las cuales hay una compuesta de 30 personas, nos han robado otro tanto de lo que tenemos.»

La doma de potros por En

ma

1858 realizó

el

cloroformo.

señor Munftar una curiosa experiencia de do-

de potro con ayuda del cloroformo. Volteaba

aspirar

una dosis de cloroformo, y en seguida

ensillaba y lo montaba.

de

el

La experiencia

al

animal,

lo

le

hacía

manoseaba,

lo

fué realizada en la barraca

Errasquin, durante varios días, con excelentes resultados.

Al año siguiente llegó de Hamburgo una fuerte partida de cloroformo, y varios estancieros resolvieron poner en práctica el procedimiento. Uno de ellos, el coronel Lucas Moreno, publicó el resultado de sus ensayos con grandes elogios. Decía que la

doma en

f;OnTEKNO

ia

forma corriente absorbía

Uli

517

PEREIKA

tres patacones, y

que

el

potro quedaba

de ordinario arisco y estropeado, en tanto que con el cloroformo ana el gasto era mínimo y eL resultado perfecto. Le había b-ístarto días tres dos o los en seguida sustancia, esa de aplicación sola del amansamiento a m'-.no. Completaba su relación Moreno diciendo que había despedido a sus domadores,

subsiguientes el

coronel

salvo un

peón extranjero, porque ningún criollo quería modificar

su sistema.

La

agricultura.

Las Jefaturas Políticas procedieron a principios de 1857 a la rede los datos relativos a la siemb?a y cosecha de trigo correspondientes al año anterior, con el "Fsultado qu" demuestra colección

este cuadro que

bierno:

reproducimos de

la

Memoria

del Ministerio de Go-

HISTORIA DEL URUGUAY

518

de Gobierno se publicaron

más

tarde,

entre ellas la de Canelones,

con 18,695 fanegas sembradas y 91,936 fanegas recogidas; y la del Salto con

fanegas sembradas y 1,318 recogidas.

107

Fué también muy abundante formaciones de

la

prensa,

cosecha de 1857, según las in-

la

que para demostrarlo exhibía

estado

el

próspero de la molinería nacional, ya con todos los contornos de

una fuerte industria. En el Departamento de Montevideo funcionaban cinco grandes molinos a vapor y muchos a viento. La estadística policial de la Colonia correspondiente a ese año arrojó 7,211 fanegas de trigo cosechado. Y la de Paysandú 1,538 cuadras sembradas con 1,303 fanegas de trigo y 85 de maíz. Prosiguió el trabajo agrícola con igual intensidad en 1858. El

padrón levantado por

la

número

Policía de Canelones fijaba así el

de fanegas de trigo sembrado:

Guadalupe

1,315

Puntas de Pando.

Pando

4,734-

Pedernal

San Juan Bautista

.

761

.

Piedras

1,239

Canelón Grande

...

741

.

....

Sauce Brujas

....

709

Vejiga

767

Sauce Solo

736

Mosquitos

3,307

Solís

... ...

Grande

366 998 360 93

.

.

604

Tala

El padrón policial de Montevideo arrojó estos datos relativos tam-

bién a la siembra de trigo

(fanegas)

......

Cordón

65

Pantanoso

Aguada

16

Peñarol

404

Cerro

876

Toledo

830

Unión Paso Molino

306

.....

86

725

319

Miguelete

Algunas de las zonas que hoy cubre por completo la edificación urbana estaban, como se ve, destinadas en esa época a la producción de trigo. La cosecha dio 38,738 fanegas, contra una siembra ce 4,422, incluidos algunos establecimientos omitidos en Ei

rendimiento era

de

9

en que había dado 22 por El

pad'rón policial

de

por

1,

habiendo

chacras

table

esos

la

padrón.

1.

Maldonado

daba como resultado

siembras de trigo una cós~echa de 56,090 fanegas. Al finalizar el año 1858 se calculaba corrientemente de toda

el

excepcionales

la

de las

cosecha

República en 600,000 fanegas, cifra reveladora de

intensificación

momentos de

3

del

trabajo

agrícola.

Cotizábase

el

la no-

trigo

en

pesos 4 reales a 4 pesos 2 reales por fanega

GOBIKUXO DE PEBEIRA

519

£lntio estaiuioros y j»j;ricultoie.s.

No hacían buenas

miga-s los estancieros y los agricultores de la

época que examinamos.

Y con sobrado motivo. Todos

estaban abiertos y los ganados c'estruir

las

sementeras, dando con ello origen a lachas que solían

En

degenerar en verdaderas batallas. <x

tiros

los

febrero

de 1859 se trabaron

agricultores y estancieros de Canelones y la lucha fué

arreciando en medio de grandes alarmas hasta que cedió

secuestro de

al

campos

los

encargaban frecuentemente de

se

1

la

l'olicía

pro-

500 a 2,000 vacas y caballos causantes del

conflicto.

Ya anteriormente la Junta Económico-Administrativa de ese departamento había expedido con motivo de otro conflicto un dictamen en que decía que Canelones era una zona esencialmente agrícola y que era necesario que los estancieros se acostumbraran a

no destruir

el

trabajo ajeno y a indemnizarlo en caso de

per-

juicio.

«Hay enemistad natural» entre ambos gremios información de donde extraemos estos datos

choque de ral

los





y

concluía

la

para evitar

el

intereses sería indispensable que cada productor ru-

quedara separado de sus vecinos.

El comercio interno.

la

Hasta fines de 1855 el mercado de frutos tenía su asiento en Plaza Cagancha y hasta allí llegaban las carretas de campo con

sus

interminables yuntas de bueyes,

cargadas

de lana,

cueros y

cereales.

En

1856 juzgó

obligaba a alejar firiendo

a

la

Plaza de Artola.

y hasta representaciones

terminaron

al

incremente de

el

al

edificación

Hubo con

hasta

frutos

en las barracas

Plaza

Cagancha allí

al

tránsito de carretas hasta la Plaza

mercados de frutos:

el

de

solo

existentes.

año apareció un tercer decreto por la

el

tal

p)otivo

Cuerpo Legislativo, que de-

Poder Ejecutivo a permitir que

traran

la

la

asiento de las carretas y dictó un deci'eto trans-

mercado

el

protestas

Gobierno que

el

el

efecto

pene-

las

carretas

de

descargar sus

Pero antes de finalizar

el

cual quedaba suprimido

el

Cagancha y

se habilitaban dos

Plaza de Artola que en adelante se

llamaría de los Treinta y Tres, y el de la Plaza Sarandí, ubicados respectivamente en los distritos del Cordón y de la Aguada.

HISTORIA DEL URUGUAY

520

Los propietarios de

alrededores de la Plaza Cagancha volvie-

los

ron en 1857 a gestionar

rehabilitación de su

la

antiguo mercado

Gobierno sin acceder a ello autorizó de nuevo el tránsito de carretas hasta las barracas que se habían mantenido

de frutos y

el

allí a despecho de las medidas decretadas, quedando como únicos mercados de frutos los de las plazas Sarandí y Artola. Sólo conocemos dos estadísticas parciales acerca del movimiento

de ambos mercados.

La de

meses de agosto, septiembre y octubre de 1858, que de 34,169 cueros vacunos y 16,183 fane-

los

arroja una entrada total

gas de trigo.

Y

primer semestre de 1859 que arroja 57,023 cueros va51,268 fanegas de 29,370 arrobas de lana,

la del

cunos, 4,939 de potro,

trigo y 5,462 fanegas de maíz.

Durante los

el

mismo semestre

llegaron por los ríos con destino a

mercados de frutos 54,753 cueros vacunos de potro secos,

cueros

5,524

11,632

secos,

salados y

5,095

salados,

arrobas de

19,666

lana.

La Junta Económico-Administrativa de Montevideo contrató en Lena la construcción de un mercado de co-

1856 con don Vicente mestibles,

el

se cubriría

luego

Jjos

al

Mercado de

Abundancia en

la

proventos

con los

de los

el

cuyo

Cordón,

costo

años, pasando

primeros 12

dominio municipal.

montes públicos.

El Ministerio de Gobierno se dirigió en 1856 a las Juntas Eco-

nómico-Administrativas y Jefaturas de Policía en demanda de datos y observaciones con destino a una reglamentación de los montes públicos. 1834,

Prevenía

inspirado

el

en

el

Ministerio en su circular que propósito de

conservar

esas

el

decreto de

fuentes

de

ri-

el primer momento olvidado «con ni')tivo de las frecuentes y prolongadas guerras que habían asolado al país y casi aniquilado sus instituciones». Y pedía que se le

queza, había quedado desde

remitieran

informes

«con

relación

al

estado

y

situación

de

los

montes,- causas que contribuyen a arruinarlos o mejorarlos, forma

que en ellos se efectúan, puede darse a sus productos, impuestos con que se pueden afectar y demás peculiaridades que conviniera tener pre-

de su administración, clase de faenas destino que

sente».

Contestando esa circular decía Joa'iuín Teodoro

Egaña:

el

Jefe

Político

de

Soriano don

GOBIERNO DK I'KKEIUA

521

Existen en nuestra campaña dos clases de bosques: dizos,

que orillean

ríos

los

por la corta duración de sus maderas;

últimos

los

propietario

al

anega-

y los montes altos, de es-

ñandubayses que dan madera dura. Nadie

pinillos, talas, algarrobos,

disputa

los

montes blancos

llamados

arroyos,

y

En

terreno.

del

cambio,

los

quedan por su misma situación expuestos a la acción destructora del vecindario. Agregúese a ello los defectos de las mensuras de los campos. Cuando faltaban o escaseaban agrimenprimeros

sores, recurríase a los pilotos de

mar que bajaban

su trabajo, y luego se embarcaban

realizar

Esos pilotos no incluían en sus mensuras gadizas, quedando entonces en

calidad

zonas bajas o ane-

las

de sobras las partes mon-

tuosas del campo, con fuertes estímulos los

de a bordo para

para no volver más.

avance y atropello de

al

vecinos.

Las Juntas Económico-Administrativas contestaron uniformemenque los montes públicos se iban extinguiendo por la forma irracional de su aprovechamiento, una forma en que todo el mundo te

cortaba y

nadie

preocupaba de replantar.

se

El Poder Ejecutivo presentó a la Asamblea a raíz de esta encuesta,

un proyecto de

ley

que establecía que

los

montes silvestres

podían ser del Estado, de las Municipalidades y de los particulares; que en los dos primeros casos correspondía su explotación a los propietarios

campo en que estuvieran ubicados

del

o

de los campos

contiguos, pero siempre bajo la vigilancia de las Jefaturas y Juntas

Económico-Administrativas; daría derecho

que

la

adquisición

a los montes que contuviera,

bieran sido tasados e incluida su tasación en

Pero en seguida volvió a hacerse tante tema y prosiguió en toda la los

un campo no

el

éstos

hu-

precio de venta.

silencio en torno del impor-

campaña

la

obra destructora de

montes públicos.

Tja propicílad

También

se

do las

niina.s.

preocupó

el

Gobierno de la reglamentación de

minas. El proyecto presentado a de inmediato por la las

el

de

salvo que

minas a

la

la

Cámara de Diputados,

Nación;

las

Asamblea en 1857 y sancionado atribuía la propiedad de

reconocía a los particulares

el

derecho de

obtenerlas en posesión o en propiedad bajo la obligación de trabajarlas;

y declaraba libre

el

cateo,

ciones a que hubiere lugar, y cuyo

deterniinaria por peritos.

sin

perjuicio de ^as indemniza-

monto en defecto de acuerdo

se

HISTORIA DEL URUGUAY

522

Destacábase ya

Departamento de Tacuarembó en

el

el

movimiento

administrativo por las múltiples denuncias de minas de oro a que

daba lugar.

Otras industrias.

En

1856 empezó a funcionar en Montevideo un gran molino ha-

más perfecto de los que trabajan en el Río de según «El Comercio del Plata». Pertenecía a los se-

rinero a vapor, «el



Plata»,

la

A

ñores Carrasco y Rosas.

de la República,

dente

sus

su inauguración concurrieron

Ministros

y

el

Jefe

el

Presi-

Político.

Don José de Buschental introdujo en ese mismo año 200 colmenas para ser distribuidas entre aiferentes personas. Los señores Scarcela y Gambarota establecieron en Minas una fábrica de baldosas,

cañerías,

ladrillos

y

tejas,

que según

certifi-

cados expedidos por varios arquitectos e ingenieros de Montevideo

podían competir «con

las

de igual clase de las que se confeccionan

Europa».

en

Los señores Portal obtuvieron en 1858 privilegio por ocho años para

la instalación

También en estearina

empezó a funcionar una fábrica de velas de

y de composición.

mismo Maldonado

El

acción ante

el

muestras de de

de una fábrica de aguardiente y de azúcar.

ese año

elaboradas por

sal

alambiques,

pareció despertar en 1857 de su larga

in-

excelente resultado de los análisis de las primeras

tachos

y

el

señor Búrmester, y la llegada

materiales de

destinados a

construcción

una fábrica de caña, azúcar y vinagre.

Luchaban algunas de nuestras industrias con pradores y

la

la

falta

de com-

Comisión de Beneficencia resolvió encabezar un movi-

miento destinado a asegurarles

el

mercado

interno,

mediante

exclusión de los productores extranjeros en todas sus licitaciones.

la

Y

comenzando de inmediato su campaña publicó avisos llamando a propuestas a los industriales del país para la construcción de 300

camas de

«Ha r»aís

hierro.

resuelto,

todo



decía en sus avisos,

cuanto necesita para

los



mandar construir en

establecimientos

a

su

el

cargo,

aún cuando pudiera hacerlo con más provecho en Europa, pues cree que los recursos que le proporciona la población deben volver a ella

misma

beneficiando a sus industriales.»

023

GOBIERNO DE PEBEIRA

La

Policía de la Capital realizada entretanto

de contralor que

le

fabricantes de velas.de sebo

los;

una de

funciones

las

atribuían los reglamentos de la época: exigía a el

peso establecido por los edictos

de 1851, y visitaba constantemente las panaderías para averiguar pí

pan tenía

el

ción

peso reglamentario, aplicando en caso de viola-

el

multas y decomisos.

Tierras públicas.

Había ido desapareciendo rápidamente

la

tierra

pública bajo la

presión de las leyes de la Asamblea, de las prodigalidades

t>iple

de los gobiernos y de los abusos de los particulares. Era necesario salvar

lo

que todavía se conservaba del viejo acervo nacional, y el período que exa-

no faltaron esfuerzo., en ese sentido durante

minamos.

En

1856

presentara

senador don Luis Lamas pidió al Poder Ejecutivo que una relación de todas las ventas de terrenos subma-

el

rinos.

codicia sobi-e los





los avances de la decía dominios de esa porción de agua tan sabiamente

no se contienen con tiempo

«Si



la Providencia para nuestra prosperidad y de tan para nuestro comercio, pronto nos encontraremos sin herencia que hacía nuestro orgullo y nuestra esperanza. Fe-

encajonada por g'-an e.-.ta

interés

lizmente aún no han empezado los compradores a construir en esos terrenos las obras de consolidación y edificación que proyectan, y

más

el perjuicio público y el suyo particular hagan remedio, es preciso que se adopte una providencia

antes de que difícil

concilie

el

ambos

Al año siguiente era l-i

iniciativa

el

propio gobierno de Pereira

para impedir que a la sombra de

gente se escurriera toda

«Es urgentísimo, i7iterpretación

que

intereses».



la

la

el

que asumía

legislación

tierra fiscal.

decía en su mensaje de febrera de 1857,

auténtica

del

vi-

artículo

de 1835. El Gobierno entiende que

el



la

de la ley de 24 de abril legislador quiso acordar por

11

ese artículo la propiedad de las tierras públicas a favor de los que

a

la

fecha üe

la

ley eran poseedores de

más de

significación a la ley sería desviarse del espíritu o

muy poco las tierras fiscales». Como consecuencia de esa iniciativa

la

40 años.

Dar otra

y reducir a nada

Asamblea

declaró

en

1857 que la prescripción cuarentenaria a que se refería la ley de

HISTORIA DEL URUGUAY

524

1835, era ia ya

comsumada

tiempo de su promulgación y no

al

iniciada o corrida con posterioridad a

la

ella.

Otra ley más restrictiva dictó la Asamblea al año siguiente, por la cual establecía que las oficinas del Estado no admitirían

denuncias de tierras públicas

y suspenderían todo procedimiento

contra las denuncias en trámite, hasta nueva resolución legislativa.

Poder Ejecutivo quedaba además obligado a presentar a Asamblea una relación de las tierras dadas en enfiteusis y de Ll

la los

expedientes en trámite.

Al sancionarse esa ley corrió la noticia de que

motivo en

la

Cámara de Diputados una

que dio lugar' a que cia y declarara

enajenación

y

tal

tentativa de interpelación

Ministro de Hacienda rectificara la noti-

el

que mal podía echarse mano de

desde que existía una

Poder Ejecutivo

el

a precios miserables y hubo con

de enajenar tierras

trataba

la

ley,

efectaba

esa

de julio de

parte

las tierras públicas

1852,

que prohibía su

patrimonio

del

nacional

a

la

amortización de la deuda.

Era necesario, entretanto, conservar

que aún quedaba dispo-

lo

nible de la tierra pública y con tal propósito se dirigió

el

Poder

Asamblea solicitando la creación de una oficina técnica especial, con el nomüre' de Departamento de Ingenieros, encargada de practicar la mensura general del territorio, proceder

Ejecutivo

a la

deslinde de la propiedad pública y de la propiedad particular,

al

formar

la

estadística general y dirigir e inspeccionar los trabajos

públicos.

La Comisión

especial de la

torizaba al

de

la

Poder Ejecutivo para contratar

República mediante

la

que resultaran de propiedad yecto y

]

el

Cámara de Diputados

un proyecto sustitutivo por

pasó* el asunto, presentó

cesión del fiscal.

Pero

8

la

el ''/,

a cuyo estudio el

catastro

cual se auterritorial

de todas. las tierras

Cámara desechó

el

pro-

asunto quedó de nuevo olvidado.

{ancos y monedas.

ocuparnos de

Al

la

Administración

Plores

hemos dicho cuáles

fueron las primeras exteriorizaciones de nuestro movimiento bancario

:

la

asociación

do

comerciantes

descuento do letras comerciales y

fundada en

emisión de

1855 'para

el

vales de comercio,

antecedida de asociaciones análogas en Paysandú y Salto; puesta de esa misma asociación, por intermedia de don

la

pro-

Carlos

Navia, a favor del establecimiento de un banco o caja de descuentos

GOBIEHNO DE

525

I'i;i{EIRA

y depósitos, cuyo capital consistiría en aportes en metálico y en vales al portador que circularían como dinero, y la gestión de don

Andrés Lamas

barón de Mauá para

y del

establecimiento de un

el

banco de descuentos, depósitos y emisión. Algunas de esas iniciativas prosiguieron importantes

lya

Sociedad de Cambios y

La Sociedad de Cambios amagos de

en

convertirse

Banco Comercial.

el

surgió

de vales de Tesorería que

serie

hasta

estableoimientoá" bancarios.

crisis antipapelista

la

a raíz

de la

emisión de una

plaza depreció en

que obligaron

al

con

acto,

el

Gobierno a proceder

rescate de la emisión mediante un contrato que resolvía el pro. blema del día y que a la vez atendía la viva necesidad de billetes que habían respondido los vales. s. De acuerdo con ese contrato las rentas de mercados y corrales quedaban transferidas a un grupo de comerciantes y capitalistas

al

que se obligaba a retirar

vales

los

de

Tesorería y a emitir

?u lugar vales comerciales a cargo de los componentes del

grupo o sindicato. Los vales de Tesorería que 80

'"a

cotizaban en

esos

momentos

al

de su valor, ascendían a 121,253 pesos y las rentas para su

rescate del

se

en

mismo

estaban calculadas en

150,000

pesos durante

tres

los

años

contrato.

En marzo

de 1856 empezaron a circular los vales de ese grupo

de comerciantes y capitalistas por valores que oscilaban desde 480 hasta 3.840

reis.

Llevaban las firmas más prestigiosas de

Pablo Duplessis, Jaime

Cibils,

la plaza:

Cruzet y Fernández, Carlos Navia,

Samuel Lafone, Zumarán y C". y Tomás Tomkinson. Tanta aceptación encontraron que al finalizar el año pidió el grupo emisor autorización para elevar su monto a 250,000 pesos, invocando la escasez de moneda. Advertía en su solicitud que

mandado grabar los billetes mismo régimen de precauciones empleadas por

para evitar falsificaciones se habían a Europa, bajo el

al

el

Banco de Inglaterra. El Gobierno acordó el pedido y designó la Nación don Tomás Villalba como inter-

Contador General de

ventor y encargado de inspeccionar los libros de interpeló

la

Comisión

ciones

legislativas

niendo

el

y

Permanente ante entonces

monto autorizado de

el

esa

Gobierno

121,000 pesos.

la

Sociedad. Pero

de

atribu-

atrás,

mante-

invasión volvió

'

526

HISTORIA DEL tjRUGÜAY

A el

mediados de 1857 la Sociedad de Cambios fué autorizada por Cuerpo Legislativo para establecer un Banco de emisión, depóy descuentos, bajo la responsabilidad ilimitada de sus socios

sitos

fundadores y la responsabilidad limitada de que se le incorporasen a base de acciones o

nuevos

los

títulos.

El

socios capital

de 600,000 pesos, pudiendo elevarse a dos millones. Los

sería

la escasez

más de una

de una onza o de

serían

lletes

moneda menor podría

de

el

onza,

Banco emitir

bi-

pero durante

cierta cantidad

de billetes fraccionarios hasta de un octavo de patacón. La emisión

no podría exceder del duplo del capital efectivo. Los convertibles

billetes serían

Banco entraría en liquidación. El Banco publicaría mensualmente un balance y el Gobierno nombraría un Comisario para examinar el registro de a

la

vista

y

en

su

defecto

el

emisión.

La Sociedad de Cambios fundó en

el

acto

el

Banco Comercial,

o mejor dicho se transformó en ese establecimientos bancario que

venía a dar considerable ensanche a su primitivo programa.

Un año más

tarde volvió a presentarse

al

Cuerpo Legislativo

Directorio del Banco Comercial para gestionar tiva

transformación:

Fundando su

de

solicitud,

sociedad

decían

solidaria los

una nueva y

en

señores

sociedad

Duplessis,

el

defini-

anónima.

Zumarán,

Tomkinson, Lafone, Cibils y Navia: «La experiencia ha hecho desaparecer los temores que a la iniciación de la Sociedad de Cambios abrigaban algunos espíritus inexperimentados y tímidos, temores de que V. H. no participó, de un diluvio de papel que haría desaparecer totalmente las monedas metálicas y dejaría en su lugar un papel inconvertible v de consiguiente de un valor puramente nominal».

Y la

a

mediados de

transformación

1858 quedó sancionada la

en

sociedad

ley

que autorizaba

anónima.

Kl ISaiU'o Mauá.



Cuando la Francia y la Inglaterra decía el vizconde de M.H'iíí en una exposición publicada durante la crisis de 1868 resolvieron



apoyo que prestaban a la Defensa de Montevideo, el Gobierno del Brasil que había resuelto terciar en la lucha centra Rosas, me pidió que auxiliaran al gobierno de Suárez mientras el suprimir

el

Imperio preparaba su ejército. Puse entonces a disposición del gobierno de Suárez los recursos del Imperio y los míos propios, resultando a la conclusión de la guerra acreedor por abuitudas sumas

GOBIERNO DE FLORES

527

cancelarse mediante amortizaciones mensuales sucePara cobrar esas cuotas tuve necesidad de establecer una igencia en Montevideo y de esa agencia resultó el Banco Mauá,

debían

Que

sivas.

en 1857.

En realidad el Banco Mauá empezó a funcionar desde mediados de 1856, con un capital de 50n,000 patacones, pero sin autorización de

ni

As?r.iblea

la

del

ni

Sos primeros

Gobií;.-no.

bill';'...^

provo-

caron con razón un movimiento de sorpresa que hubo de tr^iducirse en una interpelación a la que el Gobierno se anticipó niediaate la

orden de retiro de esos

billetes.

Dándose recién cuenta de la omisión padecida se presentó el Banco a la Asamblea en demanda de la autorización de lUe na-jta entonces había prescindido.

En

su escrito de febrero de 1857

citaba autorización para emitir hasta

pero sin privilegio alguno.

Gobierno gestionando

al

soli-

triple de su capital inicial,

el

Ya anteriormente

se

había presentado

sanción de una ley de libertad de Bancos,

la

sobre la doble base de la admisión voluntaria de los billetes y de quiebra del establecimiento emisor en caso de falta de conversión.

la

Como diados

consecuencia de ambas gestiones la Asamblea dictó a mede

ese

mismo año una

Evangelista de Souza

barón

de

y

emisión,

sería

depósitos

ilimitada,

pero

ley

descuentos.

podría

él

mente por sus aportes. El

que

de Mauá,

a

establecer

don Trineo

un

Bmco

La responsabilidad de Mauá

admitir

capital

autorizaba

para

sería

socios

de

responsables

1.200,000

sola-

pesos.

Los

mínimo de una onza de oro, pero durante la escasez de moneda menor podrían fraccionarse dentro del ii:í¡ite de un octavo de patacón, hasta el 10 Ve del capital. La emisión billetes tendrían el valor

no podría exceder del triple del capital y sería convertible a oro apercibimiento de liquidación inmediata en caso de no ha-

bajo

cerse.

tivo

El Banco publicaría balances mensuales y el Poder Ejecunombraría un Comisario para examinar sus registros le

emisión.

Juntamente con gestiones

incubación de esta ley habían empezado las

la

establecimiento del Banco Comercial, pudiendo en consecuencia decirse que del punto de vista legislativo relativas

al

ambas instituciones corresponden exactamente al mismo momento, aunque debe agregarse que la Sociedad de Cambios de que emanaba el Banco Comercial empezó a actuar como institución emisora con autorización legislativa cuatro meses antes de que ciera

Una

sin

autorización

sola

protesta

se

de ninguna especie alzó

el

lo

hi-

Banco Mauá.

contra esos dos establecimientos que

HISTORIA DEL URUGUAY

628

surgían llenos de elementos de vida:

la

de don Fernando Men;k,

concesionario del Banco Nacional de iMoutevideo, invocando

el pri-

acordado la Asamblea en materia de emisión

vilegio que le había

de billetes bancarios.

El Banco Nacional de Montevideo.

Banco Nacional

El

Menck por en

París,

según

de Senadores el

de Montevideo

concedido

ley de junio de 1855 alcanzó a tener lo

dijo

la

a

don Fernando

alguna repercusión

Comisión de Hacienda de

la

Cámara Ya

aconsejar en 1858 la prórroga de la concesión.

al

había conseguido otras prórrogas, entre ellas la

concesionario

de 1856, que el Poder Ejecutivo vetó invocando que de acuerdo con la ley de privilegios de 1853 sólo podía obtenerse la exclusividad

en

los

casos de invención, mejora de invención o importación de

y que en ninguno de ellos estaba el monopolio de la emisión bancaria concedida al señor Menck. Pero todos los plazos transcurrieron sin que el Banco se estainvención,

bleciera.

Bancos departamentales.

Hemos hablado

antes de ahora "de Tas pequeñas cajas locales fun-

dadas a principios de 1855

por los comerciantes del Salto y Pay-

sandú para suplir la falta absoluta de cambio menor. Fué un movimiento que se extendió a otros departamentos, al de la Colonia por ejemplo,

donde

los

comerciantes

se

sancionar los estatutos de una Caja. Era

reunieron en 1856 para

muy

miento de esas instituciones. Cada uno de

sencillo el procedi-

comerciantes aso-

los

ciados emitía vales con su firma, convertibles

en metálico por

Caja. Pero sólo se trataba <e suplir la falta de

la

cambio menor.

Los comerciantes y capitalistas del Salto resolvieron ampliar en 1S58

el

guiendo

programa de el

la

Caja y fundar un verdadero Banco,

si-

ejemplo dado por sus colegas de Montevideo. La Co-

misión organizadora de los trabajos, compuesta de don Mariano Ca bal,

don J^eandro Velázquez, don Manuel

J.

da Conceigao, don Andrés

Rivas, don Eleuterio Mujica y don Pastor Tejo, se presentó a la

Asamblea y obtuvo dación de una

de una ley qué autorizaba la funanónima y Banco de cambios, emisión,

la sanción

«Sociedad

descuentos y depósitos», con capital de 50,000 pesos, habilitada para emitir «hasta el duplo del fondo efectivo de la sociedad».

GOBIERNO DE PEBEIRA

529

Otros bancos.

El la

ríe

Poder Ejecutivo trató de orientar este movimiento a favor colonización de la campaña, presentando a la Asamblea en

18Ó8 un proyecto de ley de bancos hipotecarios con capital

dos

(le

millones

de

pesos,

facultados

tizados por la cartera hipotecaria hasta

estímulo se otorgaría vilegio de

para el

emitir

garan-

duplo del capital.

primer l)anco que se estableciera

al

mínimo

billetes

Como el

pri-

"depósitos judiciales.

los.

Pero

el proyecto quedó empantanado por falta ie ambiente y plaza se salvó de una emisión que habría resultado inconvertible

la

y fuente segura de empapelamiento.

lleficlanientos

bantarios dv faváctoi- general. I'

Dos

reglamentaciones

Legislativo en

Una por para

la

1857,

generales

sin alcanzar a

fueron

presentadas

al

Cuerpo

convertirse en leyes.

senador don Ambrosio Velazco, que establecía que

el

fundación do bancos se requería autorización legislativa y

capital social comprobado.

Otra por

el

diputado don José G. Palomeque sobre

la

base de la

libertad de bancos, que fué Informada desfavorablemente por la Comisión de Hacienda que presidía don Pedro Bustamante a mérito

de la prescripción constitucional que declaraba del resorte de la Asamblea «la aprobación o reprobación, la creación y reglamento de

cualesquiera

bancos que hubieran de establecerse».

El Gobierno reglamentó en 1859 la función de los Comisarios de Bancos Deberían dichos fuiuáonarios, según "él decreto respectivo, vigilar

la

tabilidad,

observancia de los estatutos, rubricar los libros de confijar

de acuerdo con los gerentes

el

número y destino

¿e los libros, examinar la contabilidad y los registros de emisión

en todo momento, asistir cada vez que lo creyesen conveniente a las

juntas de dirección y gobierno de los bancos y visar los ba-

lancetes mersuales y los balances generales.

Cifras de algunos balances bancario».

Corresponden estas cifras a uno de Banco Mauá, el de septiembre de 1857: 17-34.

los

primeros balances del

HISTORIA DEL TRUGUAT

530

Letras caja,

descontadas,

442,051

pesos;

cuentas

corrientes,

emisión circulante, 51,000 pesos. meses después adquiría fuerte impulso

532,346;

107,449;

Algunos

ese

estableci-

bancario y entraba también en plena actividad el Banco Comercial. Lo demuestran estas cifras que extraemos de los bal.^nees correspondientes a septiembre de 1858: i^-.iento

Mauá

Cuentas corrientes Diversos deudores. Emisión .

.

,

525.429 1.192,297 228,552

.

Avanzando otro año más encontramos

Comercial

$

17,828 1.073,061

303,727

estas nuevas cifras corres-

pondientes a noviembre de 1859:

Banco Comercial

Capital integrado $ 1.210,000

Banco Mauá

Banco Comercial

del Salto

GOBIEBNO DE PEBEIBA

531

operado en las del Banco Mauá, y en cuanto a los billetes la minución de un centenar de miles de pesos en cada uno de

dis-

los

dos bancos, todo ello por efecto dé la corrida.

Tal es la primera etapa de nuestro desenvolvimiento bancario, bien caracterizado por el resistente

empeño de

la

plaza en evitar

riesgo del empapelamiento.

el

La

tasa


En enero positantes

interés.

de 1859 los bancos de Montevideo pagaban a sus de-

el

9

'/<

anual y cobraban en sus de .cuentos

18 'A, ci-

el

fras reveladoras de la escasez del dinero a la vez que de las alar-

mas

políticas de la

época y del desequilibrio financiero reinante.

Acuñación de monedas.

Dando cumplimiento a Pereira cobre.

llamar

La

ley

la

ley

fijaba

el

de 1854

resolvió

para la acuñación

a propuestas

de 60,000 pesos. Pero

límite

propuestas se bizo por 100,000, dando

ello

monedas el

de

de

llamado a

lugar a una intei-pela-

Permanente que obligó

ción de la Comisión

gobierno

el

de

al

Gobierno

a redu-

cirse al límite legal.

Don ¡a

Hipólito Tampied, autor de la propuesta

más

baja, contrató

acuñación en Francia por no estar todavía instalado en Monte-

el taller de monedas" mediados de 1857 llegaron Pero en el acto se descubrió que

video

A

título

que marcaba

la

ley y

las

primeras

las

monedas carecían

remesas

de

cobre.

del peso

eso determinó fuertes alarmas en

mercado que dieron lugar a la intervención de la Asamblea. Ocupándose del asunto, decía la Comisión de Hacienda de

y el

la

Cámara de Diputados: Si la acuñación hubiera sido

biera embolsado

hecha en forma,

el

contratista hu-

%, dado el precio corriente del cobre en barras. Pero como además ha rebajado la cantidad de metal en una proporción que oscila alrededor del 20 %, resulta un margen considerable del 45 % como estímulo a la obra de los falsificadores. Adviértase que

el

al

25

extender

el

contrato

el

Gobierno impuso a Tam-

pied la obligación de abonar 300 onzas de oro por vía de prima

que la ley no autorizaba y que en cambio no procedió al rescate de la moneda vieja de cobre, como la ley se lo ordenaba. Consui

HISTORIA DEL TJBUGUAT

532

mada ya

la

acuñación sólo cabe recurrir a uno de estos dos arel cobre circulante y proceder a su reacuñación, o

bitrios:

recoger

reducir

el

40, a 15

valor cancelatorio de las piezas a 30 centesimos las de

centesimos las de 20 y a

4

centesimos las de

La Cámara de Senadores aceptando de llano por

la

5.

informe,

el

optó

reducción del valor cancelatorio, contra la opinión de uno

de los oradores, que observaba que con ese procedimiento se castigaba al pueblo y no al contratista que había violado

Fué

contrato.

el

esta la única de las acuñaciones autorizadas por la ley de

1854 que tuvo cumplimiento. Las de oro y plata que de acuerdo la indicación del Poder Ejecutivo debían contratarse en el

con

extranjero, mientras no se instalara la casa de video,

no

contrato

del

seguramente por

se llevaron a cabo

el

moneda en Monteresonante fracaso

Tampied.

El porcentaje de cobre en los pagos.

Había establecido la ley de acuñación que nadie estarla obligado a recibir moneda de cobre por más del 5 % del monto de los pagos. Pero una segunda ley sancionada en 1858 estableció que fuere cual fuere el monto de los pagos, nadie estaría obligado a recibir cobre sino hasta la fracción de un patacón. Era ese el medio único de evitar que el mercado se inundara de cobre, según dijo el Ministro de Hacienda en la Cámara de Diputados.

El valor legal de las

Hemos

monedas de

hablado en

la épcxa.

oportunidades del

diversas

del patacón y del ji^so fuerte, y es bueno precisar

esas

peso

corriente,

alcance

el

de

denominaciones.

El peso corriente se componía de 8 reales de 100 centesimos ca-

da

real.

Valía en consecuencia

que se llevaba

la

80
centesimos y era

la

moneda en

contabilidad general de la plaza de Montevideo.

El pe&o fuerte español y

el

patacón del Brasil valían 10 reales,

equivalentes a 1,000 centesimos.

Algunas de

las

publicaciones comerciales de la época señalaban

una diferencia entre bancario.

deo»

Así

la

el

valor de la pieza de plata y

tabla de

correspondiente

a

equivalencias

1859,

daba

al

de

la

el

del billete

«Guía de Montevi-

patacón de plata

el

valor

GOUIEKNO ÜE PEREIRA

de 10 reales, y

al

patacón de papel emitido por

Banco Comercial,

el

entonces

533

9

reales y

— agregaba —que.

60

el

centesimos de

una onza de oro

Banco Maúa o real,

podía

se

resultando

cambiar

en

plaza por 16 patacones en billetes o por 15 patacones y 360 cente-

simos de real en plata. Era

la

prima de

la plata sobre el papel

en

momentos.

esos

Dio lugar a fuertes debates una tabla de equivalencias de que se ocuparon en 1854 las Cámaras. El proyecto del Senado, que era el
el

valor de 960 centesimos,

y a

la

libra

esterlina

de 5.665. Pero no existiendo conformidad entre las dos ramas

el

del allí

Cuerpo Legislativo, hubo que recurrir a

la

Asamblea General y

fueron rechazadas las dos tablas.

Cambios sobre Londres.

He

aquí la tasa del cambio sobre Londres por peso de 8 reales c

de 800

centesimos

(«Guía de Montevideo»):

18f>3

1854

De 40

1/2

peniques a 43

HISTORIA DEL URUGUAY

534

las ventas de los

fondos públicos

y muy especialmente

las

ventas

a plazo.

El Tribunal Consular suspendió las ventas a plazo mientras essilas el asunto y luego formuló un reglamento sobre

tudiaba

guientes bases que fueron aprobadas por

En

corredores cuenta.

el

Gobierno:

operaciones sobre fondos públicos sólo podrán intervenir

las

patentados.

Ningún corredor

podrá

operar

por

su

El corredor expedirá a cada interesado un boleto en qu?

expresará las condiciones del negocio y los nombres de los contratantes.

sin

Ningún corredor podrá operar

previo depósito de un

40

%, que

a el

plazo en fondos públicos

vendedor constituirá en

comprador en metálico. Era una reglamentación verdaderamente eficaz que en puso término a la especulación que tanto había alarmado bonos y

bierno.

el

el

al

ac^o Gc!-

CAPÍTULO XI Movimiento administrativo íJuál era

la

.situaciim linamáei-a al inicáarso el

gobierno

(le

Pe-

reira.

En

junio de 1856, cuatro meses después de haberse hecho cargo

del gobierno, describía así el la

Presidente Pereira ante

Asamblea

la

angustiosa situación de las finanzas públicas:

año 1855 cerró con un

El

déficit

de

3.3")7,190

de créditos exigibles garantizados por

663,000

la

pesos,

incluidos

renta

aduanera.

Los impuestos de abasto y corrales estaban afectados a la canc«ílación de vales de Tesorería por 121,000. No tenía por consiguiente

administración actual la disponibilidad de una sola de )ks

la

rentas

señaladas

arreglos

en

readquiriéndose así

atender

más de que

Presupuesto.

Hubo que

el

una

pues,

entrar, la

en

Aduana,

parte de renta que habría bastado para

pago mensual de las

listas

civil

y militar que insume

pesos previa reducción a la mitad de todos los sueldos de

73,000

25 pesos, sin computar otras obligaciones de la administra-

anterior

ción

el

con los tenedores de créditos situados sobre

el

que era necesario también regularizar.

presupuesto del año corriente establece

$ 2.157,462

Adviértase de egresos,

contra 2.033,000 de ingresos. Pero como la administración anterior

enajenó y consumió anticipadamente parte de las rentas incluidas en el cálculo de recursos y otras rentas fueron calculadas en iiiás

de

lo

que podian producir, sólo quedarán realmente para cubrir

2.157,462 a que ascienden los pagos, 925,200 pesos, y lo tanto,

en vez de ser de 124,000 según

el

el

déficit,

los

por

Presupuesto votado, será

de 1.232,000 pesos.

Dos arreglos diplomáticos de importancia alcanzó a realizar el Gobierno en esos momentos: uno con los acreedores de 184S y otro con Gounouilhou. Los primeros tenían un contrato que les aseguraba la adminisAduana para percibir la cuarta parte de su producto, contrato no cumplido que el Presidente Pereira pudo arreglar tración de la

HISTORIA DEL rRUGUAY

536

reduciendo las entregas mensuales a la octava parte, con renunintereses que ascendían a 1.000,000 de pesos.

cia de los

El crédito de Gounouilhou por un 1.300,000 pesos fué arreglado también sobre la base de la renuncia de los intereses, ahorrándose el Estado otro millón por ese concepto. Al discutirse en el Senado estos dos arreglos diplomáticos ex puso el Ministro de Hacienda que ellos absorbían 22,000 pesos mensuales de la renta de Aduana;

que

entregar

8,000

50,000 de la de

que por diversos conceptos había mensuales de la renta de corrales y

pesos

que no quedaban recursos disponi-

papel sellado;

bles para cubrir las planillas ordinarias de

gastos y obli-

sueldos,

gaciones que ascendían a 120,000 pesos mensuales.

Un nuevo cuadro de

la situación financiera.

El Ministro de Hacienda don este

mediante

caos

ambiente

habiendo encontrado

Doroteo García trató de

creación

la

salir

municipales

rentas

de

Cámara

favorable en la

de

no

y

resolvió

abandonar su puesto. Su reemplazante don Lorenzo Batlle quiso formular una especie 'de inventario de las finanzas nacionales para que nadie se hiciese

acerca de

ilusiones

Véase

la

que decía

lo

extrema gravedad de Presidente

al

Pereira

la

crisis.

en agosto

de

1856,

pocos días después de su nombramiento:

La situación financiera

«es casi

desesperada» y conviene que se

conozca a fin de que «los ánimos se dispongan

al

sufrimiento»...

La renta de Aduana soporta un gravamen mensual de 64,470 pesos y como su rendimiento medio es de 111,000, sólo quedan disponibles 46,536... Los créditos que pesan sobre la Aduana de acuerdo con los contratos de 1855 y 1856

montan a 3.735,000 y en consecuencia muchos años antes de que la renta

será necesario que transcurran

que

ellos

absorben quede libre... «Las rentas de sellos y patentes, mercados ningún recurso dejan al Gobierno para

correos, corrales y las atenciones al

pago

del

fines de 1857. cit

premiosas que

le

cercan».

La primera

está afectada

empréstito de enero de 1855 y sólo quedará libre a

La segunda,

lejos de arrojar sobrante deja

un

défi-

de 700 pesos. La tercera está afectada hasta fines de 1858 en

garantía de operaciones de crédito realizadas con la sociedad que preside

el

señor Navia...

está afectada

cuelas...

pago

La renta de

de créditos y

la

receptoría de

Yaguarón

sobrante se aplica

a

es-

Las de policías y corrales de campaña se aplican por

las

al

el

537

GOBIERNO DE PEBEIRA

Jefaturas a gastos locales... El producto de la Lotería de Caridad o.ue

de

es

mensuales,

pesos

2,500

percibe

lo

íntegramente

la

Comisión del Hospital.

Hechas tedas cidos

las deducciones

pesos para cubrir

47,136

a

mitad

la

queda

Gobierno un remanente de

al

siguiente Presupuesto mensual

el

monto todos

de su

los

de

sueldos

(redu-

2.j

pesos

arriba)

....

Lista civil

militar.

»

Alumbrado

del puerto

48

42.945

Piquetes del Cerro

33,250

Eventuales del Fuerte

70

380

Depósito de pólvora.

96

.

Hospital

1,000

Manutención de presos

700

Alquiler del Fuerte

600

.

Obras del Cabildo

Suplemento de

1,000

.

los tres

departamentos

200

.

$

No

80,289

están computados los gastos por equipos y otros que pueden

estimarse en 4,000 pesos y

el

servicio de intereses

del

empréstito

de agosto de 1853 que monta a 1,500 pesos.

En

conjunto 85,789 pesos, y como para cubrir dicho monto sólo

se cuenta con 47,136,

resulta

u)i

déficit

mensual de más de 38,000

pesos.

Hay que

agregar que ese déficit se encuentra recargado con

el

de los meses de mayo, junio y julio, durante los cuales la Tesorería abonó por concepto de sueldos y gastos 86,604 pesos y quedó adeu-

dando

235,608.

«Tal es senta recibo

el

de

el

él.

Cuando lo



fiel

departamento

honor porque \.

cuadro

Hacienda

de V.

concluía

E.

me

el

en

ofreció

señor el

BatUe



que pre-

momento en que me

su dirección,

consideraba superior a mis fuerzas;

E. de sus sacrificios personales y apeló a

decliné

pero

el

habló

mi patriotismo para

que no rehusara aceptar una posición que veía erizada de

dificul-

tades y en la cual había adquirido en otras épocas alguna confianza el público. Yo cedí, Excmo. Señor, porque V. E. invocó sentimientos que tienen mucho poder sobre mi corazón, y aun cuando boy toco esas mismas dificultades superiores a las que yo

en

imaginaba, acompañaré a V. E. hasta que tenga

mis esfuerzos son

inútiles.»

la

evidencia de que

HISTORIA DEL URUGUAY

538

Cómo

A

cerró el primer año de la aílnvinistraición Pereu'a.

principios de 1857 decía

moria anual

a la

La renta aduanera que

merma

889,000

merma

por otros

agrega

se

si

y

su Me-

Ley de Presupuesto había calculado

la

en 1.700.000 pesos, tuvo una por esa

mismo Ministro BatUe en

el

Asamblea:

el

de 427,000. El déficit causado

conceptos

servicio

del

monta

700,000

a

y aún a

empréstito de los acreedores

de 1848. El tesoro no puede cubrir los pagos mensuales, ni

después de reducidos los sueldos a

la

aún

mitad. Nuestro déficit men-

sual es hoy de 40,000 pesos.

Publicábase en esos mismos momentos egresos

Entre

de

los

la

el

Nación

cuadro de ingresos y

correspondiente a

1856.

de empréstitos; y entre los egresos, 206,491 pesos en-

Banco Mauá por concepto de cancelación de empréstitos,

al

destacándose con bencaria

la

ingresos, que subían a 2.258,691 pesos, figuraban 234,000

procedentes tregados

Contaduría de

desde los

ello

la peligrosa

comienzos

de

nuestra

evolución

vinculación con la Tesorería General que diez

años más tarde habría de agravar tan cruelmente la crisis comercial

de 1868.

Un

detalle que revela la intensidad de la crisis.

En

1856 se dirigió

el

mico-Administrativa de varios

Ministro de Gobierno a la

la

Junta Econó-

Capital para decirle que los vecinos de

departamentos de campaña habían resuelto sufragar

total

o parcialmente el presupuesto de las policías y que era de desear

«que los de

la

Capital imitaran ese patriótico ejemplo cotizándose

con una cuota mensual, pero módica, aplicable

al

sostenimiento de

Policía».

la

Algunas semanas después dirigíase la Junta de Montevideo a Jueces de Paz y Tenientes Alcaldes, para pedirles que se aso-

los

ciaran a los vecinos

cedieran

al

más caracterizados de cada

levantamiento de fondos destinados

al

y propago de sueldos

localidad

y gastos de la Policía.

Ya en

algunois

departamentos de

campaña habían recurrido

efectivamente los respectivos vecindarios a

ese

arbitrio,

espon-

táneamente o cediendo al impulso de los Jefes Políticos. Desde agosto contribuían con una cuota mensual al pago de sus policías, diversas secciones de Paysandú y Maldonado, y otras como

P39

GOBIEBNO DE PEBEIRA

de Cerro Largo eixviabau reses a las Jefaturas para la alimentación de los presos. La circular de la Junta de la Capital contribuyó a sistematizar y agrandar ese concursó, de tal manera que en septiembre pulas

un

blicaba el Jefe Político de San José don Francisco Larriera

llamamiento

directo

pueblo

al

sufragar

para

presupuesto

el

p'olicial.

Poco tiempo antes ihabía publicado la prensa de Montevideo una correspondencia de la Florida, que entonces formaba parte de San José, en l'a que se establecía que de las cuatro secciones en que se gubdividía aquella jurisdicción, tres carecían totalmente de Policía y la del pueblo, única que existía, se componía de un Comisario y de tres negros!

Había que apurar también a

rubros

los

exhaustos

estaban

servicios

desiderátum

más

necesarios

Así en julio de

1856

pensión asignada

a

más

los

los

era

de

y la

para

cursos y

otrois

al

egresos.

la

pequeña

mitad

alumnos del Colegio Nacional por con-

un derecho de matrícula de 20 pesos

con

ir

los

cepto de alimentación, y gravó a los estudiantes de

sidad

los

recurrir

forzoso

modestos

ingresos

Gobierno redujo a

el

los

personal,

y a de

equilibrio

del

economías y como todos

las

de

la

Univer-

iniciar

al

los

20 al terminarlos; y a su turno la Asamblea su-

primió del Presupuesto los sueldos de los profesores de ensesecundaria del ColeigLo, ique perdió así su carácter de Universidad menor, según lo hacía constar el Ministro de Go-

ñanza

bierno en su

Continúan

Vamos cienda

de

luchar

La rales

a

.

el

en 1837.

extraer aihora algunos dates de la

correspondiente financiera

a

1857,

con

para

que desde

Memoria de Ha-

demostrar el

— empezaba

viensualmente

121,144

diciendo pesos

el

persistencia

la

primer día

gobierno de Pereira.

Tesorería

pagar

anual.

las estrecheceis financieras

crisis

la

Memoria

Ministro



tuvo que

tiene

que

por concepto de gastos gene-

y 22,978 por concepto de gastos departamentales así distri-

buidos:

HISTORIA DEL URUGUAY

540

Gastos generales:

Cuerpo Legislativo Presidencia

.

....

Secretarías ministeriales

Contaduría,

Colec-

turía. Tesorería.

Administración de Rentas

5,390

GOBIERNO DE PEREIRA

ingresos Ii0,215

La

A

y

el

de los

total

egresos,

541

mensual de

un di fifi f

resulta

pesos.

opideiiüa do liebre aiiiarilla agrava la las angustias

ya eiidémica.s de

gó a principios de 1857 amarilla de que lné

el

ci-isis.

finanzas nacionales se agre-

las

pánico causado por

víctima

en

esa

época

epidemia de fiebre

la la

población

Mon-

de

tevideo.

Por iniciativa del senador don Ambrosio Velazco,

Cámara de

la

Senadores sancionó un proyecto de ley que autorizaba Ejecutivo para suspender durante nes

que pesaban sobre

recursos a

rentas

las

la

al

Poder

epidemia todas las afectacio-

públicas,

a

fin

de aplicar esos

lucha en que estaba empeñada la Junta de Higiene.

la

Adhiriendo a la iniciativa dirigió el Gobierno un mensaje a la Asamblea, en que decía que ya que no era posible en esos momentos proyectar nuevos recursos, era forzoso echar mano de los existentes.

Poder Ejecutivo,

«El



decía

en

mensaje,

su

único medio adecuado es suspender por crisis

cruel

los

contratos que perciben

haciendo ingresar

blicas,

carlas rigurosamente a la

de la Capital y

Véase

al

el



que

cree

el

tiempo que dure esta

fondos por las rentas pú-

Tesoro todas aquellas sumas y aplimejora de las condiciones de salubridad

al

alivio de sus desgraciadas familias.»

cómo apoyaba

la medida el Ministro de Hacienda en una de las sesiones de la Cámara de Diputados: «A mí me sucede con frecuencia que cruzando las calles de

Montevideo soy detenido por familias de empleados dependientes del Estado, que vienen a exponerme sus necesidades y a pedirme les socorra. Los recursos del Gobierno son escasísimos para esas aten-

ciones; en vez de tener fondos retenidos, le son insuficientes.

como hace

n;ismo,

o 7 días,

6

La renta ha disminuido en sumas

considerables.

del

Gobierno

es

insostenible,

insostenible,

.

Los recursos del

Gobierno disminuyen mientras sus necesidades aumentan; sición

Hoy

no hay un solo real en Tesorería.

señores.

la

po-

Pide

re-

cursos, pues, porque no sólo no tiene para hacer frente a los gastos

la

qiip

Junta de Higiene Pública aconseja para volver

sa-

la

lubridad a esta ciudad, sino que no tiene para llenar en parte déficit

un

que

le

lado, y la

Como

el

dejan en sus ingresos las mayores necesidades por

mayor

consecuencia

deficiencia de las rentas por otro».

de

esta

iniciativa,

la

Asamblea

dictó

una

HISTORIA DEL UBUGUAT

542

ley

que autorizaba

l.ermanencia de

Poder Ejecutivo para suspender durante

al

la

amarilla todos los contratos de enajena-

fiebre

la

ción o afectación de rentas.

El oío brasileño.

Más de una vez tuvo que esta intensa crisis

el

En junio de

arcas de Río de Janeiro.

Mauá, según un estado de de capital y

recurrir

Gobierno en

1856

la Tesorería,

el

Mauá

financiera al oro del barón de

curso de o

de las

Estado adeudaba a

el

370,000 pesos por concepto

por concepto de intereses.

21,-575

Al año siguiente sancionó

la Cámara de Diputados un proyecto Poder Ejecutivo para obtener del barón de Mauá un adelanto mensual de 22,500 pesos con destino al servicio de

que autorizaba

al

amortización e intereses de anticipos

lo.s

además

al

Banco

Ljenor hasta

el

Aumentaron '

la

la

deuda consolidada. En garantía de

afectaría la contribución directa, concediéndose

se

privilegio exclusivo de emitir billetes de

el

20 las

'r

cambio

de su emisión autorizada.

dificultades

a principios de 1858 por efecto de

revolución del general César Díaz y del estado de alarma que

íAibsiguió a Quinteros, y entonces el Tesoro brasileño prestó al go-

bierno de Pereira 110,000 patacones bajo la expresa condición de Cjue

no sería

suma

destinada esa

al

pago de deudas anteriores,

«sino a gastos futuros de los departamentos de Guerra, Relaciones FCxteriores y Gobierno»,

suscrito por

realizado

que

el

el

el

según

así

quedó establecido en el protocolo el Ministro Amaral. Luego de

Ministro Carreras y

préstamo, pasó una nota

el

Ministro Amaral, diciendo

Tesoro imperial había desembolsado 119,450 patacones para

entregar los

110,000

del

préstamo, en virtud de comisiones

satis-

Banco Mauá y del elevado precio de las monedas bras-ileñas en ese momento. Y la cancillería oriental contestó reconociendo el aumento y consintiendo en que la nueva cantidad fuera fechas al

í.gregada a los préstamos anteriores.

Prosigue la

He

aquí

el

crisis

hasta

el

final

del

«iobierno

estado de las finanzas nacionales


al

Pereira.

terminar

el

go-

bierno de Pereira, según la Memoria de Hacienda presentada por

don Cristóbal Salvañach a la Asamblea en febrero de 1860: Las rentas de 1859 ascendieron a 2. .300, 000 pesos, cantidad no inferior

a la de los ingresos ordinarios. Pero sobre

la

Aduana y

543

GOBIEUNO DE PEBEIBA

No

papel sellado pesa una hipoteca de 767,000 pesos.

el

parte, que

por otra

darse,

berá 400, OÜU pesos. «La clusivamente a de

«anualmente un

ello

déficit

pesa principalmente sobre ses

como

pasivas,

viudas,

el

olvi-

de los tributos están destinados ex-

"niitad

de

satisfacción

la

debe

deuda fundada absor-

servicio de la

el

anteriores»,

créditos

resultando

de cerca de un millón de pesos que

servicio policial de la

inválidos

pensionistas,

y

campaña y claestado mayor

pasivo».

«Tal vez parecerá

una paradoja, pero

que

actual

probado,

situación

la

ahora que después de

guerra

desastrosa

la

un hecho material com-

es

de la Hacienda pública de

los

es

nueve

peor años.

ta el

empeñadas ahora, y continuaun nuevo sistema no viene en su auxilio, haspunto de producir anualmente un crecidísimo déficit y qui-

tarle

al

Las rentas

libres entonces se hallan

rán empeñándose

si

Gobierno

satisfacer

toda

libertad

inopinadamente

cada

acción

de

grandes

necesidades

vez

que

precise

extraordinarias».





gravita una masa de concluía la Memoria, regularmente o que pagan millones, que se excede de 4 créditos que

Sobre las rentas,

í^ifren todas las angustias del Tesoro.

Hay

otra

masa de

5.000,000

de pesos aún no situados sobre las rentas, aparte de los 4.000,000 a

que montan

amortizar 2.492,000

lo

la

deuda inglesa,

la

francesa y

que debemos a razón de

pesos,

Quiere decir,

o

5

ojo

la

brasileña.

Para

anual, necesitaríamos

sea todo lo que producen nuestras rentas!

pues,

que

la

angustiosa

situación

financiera

con

que se estrenó don Gabriel Pereira en marzo de 1856, prosiguió sin solución de continuidad hasta el término de su mandato presidencial

en marzo de 1860.

El producto

(lo

las rentas públicas.

El Tesoro público recibió en 1856 la cluidos

2.34,000

suma de

2.258,691 pesos, in-

procedentes de empréstitos. Los ingresos de

1857

subieron a 2.404. 788.

He

aquí las partidas

más importantes de

tados generales de Contaduría:

ese monto, según los es-

HISTORIA DEL URUGUAY

544

1856

Aduana de Montevideo

y Receptorías

Sellado y Patentes Contribución Directa de »

»

»

la

los

Capital

tos

Corrales de Montevideo »

»

los

departamentos.

Correos

Impuesto departamental Lotería

.

departamen-

$

1.377,222

1857

GOBIEBNO DE PEBEIHA

545

cou una rebaja del \0 "¡^. En caso de discrepancia entre el vista y el despachante resolvería un Jurado sorteado de una lista que somestralmente íormaría

Tribunal de Comercio.

el

El comercio importador quedaba habilitado para vender por bultos

más

modo que

del

o

despachar

los

No

conviniese.

le

obligación

tenía

destino a reembarco y

depositados con

efectos

de el

plazo de permanencia en los almacenes fiscales era indefinido.

reembarco y

El

también

por intermedio del puertos

trasbordo estaban

el

cada cuero vacuno

demás productos

el

4

'/c

caso de realizarse

el

Realizándose por otros

puerto de Montevideo.

uruyuayos,

impuestos y

exentos de

exportación de frutos del país en

la

pagaría

dos

reales

y

los

ad valorcvi. Era una retranca encaminada

a centralizar la corriente de exportación en

el

puerto de Montevi-

evitando que la del litoral uruguayo se negociara por inter-

deo,

medio

del Puerto de

Buenos Aires.

Al año siguiente fué

fundamental reproducía

sancionada otra la

de 1856, y

el

ley aduanera lue en lo hecho se repitió en 1858

aunque esta vez con tres reformas de importancia: el establecimiento de un tarifa de avalúos que .cada cuatro meses revisaría tina comisión compuesta de vistas de aduana y comerciantes, en reemplazo del aforo al tiempo del despacho; el aumento de la lista de artículos exentos de derechos de importación; y el sometimiento del

trigo a

las

harinas.

una escala móvil semejante a

la

ya establecida para

Aduana más innovadora presentó el gobierno de Asamblea en 1859. Concentraba en el puerto de Monte-

Otra ley de Pereira a

la

video las operaciones de importación, exportación, depósito y tránlimitaba las del Salto y Paysandú a la importación de mer-

sito;

caderías procedentes, de Montevideo y de frutos y articulns manufacturados procedentes de Corrientes y del Brasil, y las de las receptorías de Yaguarón y Aceguá a la importación directa del Brasil.

Los derechos de importación se cobrarían sobre

tarifa

de avalúos renovable

almacenes de

la

cada seis meses.

Aduana de Montevideo

sería

El por

la

base de una

depósito

en los

tiempo indefi-

nido.

Las mercaderías depositadas podrían ser vendidas sin nece-

sidad

de previo despacho. El almacenaje sólo se cobraría después

de un año.

Podría autorizarse

el

fraccionamiento de bultos como

medio de facilitar el comercio de tránsito. Ese proyecto, que fué bien acogido por la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, obedecía a un plan de medidas contra el contrabando que se consumaba en las aduanas del litoral a la IV-

35.

HISTORIA DKT ntUGUAT

546

«cmbra lilas

comercio de ininsiro, plan ya condenado por una ex-

del

;>€riencia

Precisamente a causa de su ineficacia es que

decisiva.

de una vez se había pensado en

el

seno de las Cámaras en

fiama para el otorgamiento de permisos de tornaguías que acreiiitasen que real y efectivamente

tránsito

exigir

ría había

A

quedado en

despecho de

ruerte tendencia

los

el extranjero.

apremios financieros de la época había una de los derechos de

a favor de la liberalización

Aduana, tanto que en ISot el Poder Eljecuiivo pasó a nn proyecto de don Pedro M. Isasa que rebajaba al recho aplicable a todos

cho de importación





loe

artículos

de

Asamblea

la 5

importación.

'

el

f

decía el autor del proyecto en su informe

sr monto, y sólo produce el 10

'

positivamente

de

precios de aforo vigentes.

En

ese

porque '

L

el

mitad, resultando

gresa lotí

t

y de ese mismo 10

ordinario se lleva la

al

mismo año

de-

El despa-

debería producir actualmente sJ fisco alrededor del 20

contrabando:

j"

mercade-

la

erario

las

de

presupuesto del personal entonces

público es

dos Cámaras

'^c

resto se lo absorbe el

el

el

5

que lo que

<"«

y no

se pusiercwi

de

el

20

in*<:

acuerdo

para suprimir un derecho de almacenaje votado en 1S56 con destino a la construccic n de la Aduana. Reaccionando algunos meses después contra el

plantar, la la

régimen de liberalidades que se deseaba

in-

Cámara de Diputados creó un derecho de pontazgo sobre

importación y

la

exporíacicn. con destino a la realización de

un plan de puentes y calladas en toda Dcr don Luií Lerena El Senado rechazó estado angustioso de la Hacienda pública,

la el el

campaña, presentado proyecte invocando

mismo

el

estado angus-

tioso que desde 1S57 obligaba a buscar la tabla de salvación en los

derechos de exportación y en los adicionales de importación.

La Adnaiui en poder de

particulares.

Prosiguiendo gestiones ya entabladas durante la administración un convenio con la

anterior, tí Presidente Pereira arribó en 18S6 a

Lesación Británica para la cancelación del crédito de la Sociedad corñpradora de los de reches adur^neros de 1^4^. que ascendía a '.^TT.O^ pesos. L¿ Sociedad acreedora se hacía cargo de la admiAduana a fin de percibir la octava parte del produc-

nistración de la

to Ikjuido del impuesto, con destino a la amortización de «u créditc-

El Poder Ejecutivo se reservaba la superintendencia autorizada el gobierno de la Defensa. Y el

por los contratos celebrados durante

GOBIERNO DE PEREIRA

Gobierno Británico



«inspeccionando

Tiil

comprometía a coadyuvar

íe

decía

el



convenio

los actas

mismo

al

objeto,

de las administra-

ción de la renta que se" entrega a la Sociedad de 1848, en la forma

y oportunidad que

considere necesario para mejor garantía del

lo

cumplimiento de parte de dicha Sociedad». El capital adeudado no excedía de 200,000 pesos. Se había quintuplicado, según lo hacía constar la

Memoria de Hacienda de

cesión

enorme

con-

reconocimiento del crédito millonario. Pero otro

el

más imperdonable

error

1858,

Ya encerraba una

por efecto de la acumulación de intereses. era la entrega de la

Aduana a

los acreedores

y la restauración del régimen del sitio de Montevideo, cuando ya no existían las razones que entonces habían justificado y hasta presti-

giado

procedimiento.

el

No tardaron en

En

to.

ocurrir graves rozamientos entre

el Gobierno y la año 1857 ocurrió el primer conflicAduana había empleados dependientes del Gobierno y em-

Sociedad del la

48.

Al finalizar

el

pleados particulares dependientes de la

Un buen

día

el

Directorio desconoció

el

nombrar a sus empleados, y entonces un decreto por el cual establecía que ner

Sociedad

administradora.

derecho del Gobierno para

el

Presidente Pereira dictó

el

Directorio cesaría de

te-

personal público sin perjuicio del nombramien-

la dirección del

empleados propios y por él costeados para fiscalizar la recaudación de la octava parte de la renta que le correspondía.

to de

No podían quedar terminados con terpelante aseguró que

A

eso los conflictos.

de 1858 hubo una interpelación ruidosa en la que

el

mediados

legislador in-

Directorio había negado al Ck)bierno, du-

el

rante las urgencias de la revolución del general César Díaz, los fon-

dos que

pertenecían, interviniendo así en la acción política: que

le

feguía desconociendo y

destituir

Comisión

el

derecho del Poder Ejecutivo para nombrar

empleados a cargo de rentas generales;

encargada de que

constatado bando.

los

Y

el

practicar

mismo

contestando

la

cienda que efectivamente

los

Directorio

cambios realizaba

interpelación, declaró el

de

actos

el

que una

personal

de

había contra-

Ministro de Ha-

Directorio desconocía y desacataba al

Gobierno, que hacía política de oposición, que se resistía no sólo a la

fiscalización, sino a la

rrespondiente

Ya no

al

misma entrega de

la

parte de renta co-

Tesoro público.

era posible la subsistencia del convenio y entonces la

Asam-

blea autorizó al Poder Ejecutivo para entablar arreglos sobre la base de la sustitución de la renta de

y

patentes.

A

mediados de 1858

Aduana por

se arribó al

la de

papel sellado

nuevo régimen con

in-

HISTORIA ÜEL UUUGUAY

[>i8

tervención de la Legación Británica.

administración de

la

y

patentes

electo

?.

la

Aduana y

de

percibir

La Sociedad

devolvía

del 48

se recibía de la de papel sellado

cuotas

anuales

de

pesos

144,000

hasta la completa cancelación de su crédito, que montaba en esos

momentos a 796,689 pesos. La Sociedad de nombrar y des.tituir los empleados, con tador interventor que designaría

el

reservaba

se

la sola

derecho

el

excepción del con-

Gobierno. Los gastos de la ad-

ministración y sueldos de los empleados serían de cargo del erario

público.

La prensa de la época no escatimó sus gún su¿ datos desde el 1." de marzo hasta rectorio había

entregado 336,548 pesos a

ajplausos al Gobierno. Seel

10 de septiembre el Di-

la

10 de septiembre hasta el 22 de diciembre del

Y

Tesorería.

mismo año

había sido de 415,539 pesos, incluida naturalmente

desde

el

ingreso

el

octava par-

la

te que antes retenía el Directorio y que había pasado al Estado eu

virtud de la sustitución de la hipoteca de la

Aduana por

la

de pa-

pel sellado y patentes.

El proclwcto

(le

la renta

de aduana

Pertenecen estas cifras a

Memoria de Hacienda de

la

1856

1855

Aduana de Montevideo

.

Receptorías del Litoral exclusivamente .

.

.

.

!$

Las receptorías de toda

la

la

de Yaguarón 25,188, a

tuantía a

l,as

la

1857

1.289,926

1.278,937

1.332,811

57,767

83,204

154,783

1.347,693 $

1.362,141

$

1.487,594

República produjeron 179,971 pesos en

1857, correspondiendo a la del Salto 102,928, a la de

a

1857:

Paysandú

25,474,

de Nueva Palmira 10,607, y en menor

demás.

Sólo hemos encontrado cifras aisladas en las publicaciones ciales

e

informaciones comerciales de

la

1858 y 1859, y esas mismas con relación exclusivamente a la

de Montevideo. Helas aquí:

ofi-

época acerca de los años

Aduana

GOBIEBNO DE PEBEIBA

Marzo 116,601

1858.

pesos,

tiembre 123,012,

Enero

18Í.9.

146,434,

julio

julio

136,930,

noviembre

116,035.

febrero

120,561,

549

145,001,

agosto 106,989, sep-

marzo

115,811,

mayo

151,347,

octubre 140,508, noviembre 133,238.

Papel sellado y patentes.

La

año 1858 establecía dos escalas:

ley de Patentes de Giro del.

ana más liviana para

más recargada para

los nacionales y otra

los

de extranjeros quedaban además

extranjeros. Los establecimientos

a sacar la patente superior inmediata a su categoría no matizaban su personal con dos empleados nacionales por lo

obligados si

menos. Eran las últimas exteriorizacioues del viejo prejuicio del coloniaje contra los capitales y brazos extranjeros a los que de-

bíamos ya sin embargo

los

nuestro

progreso

La más

alta era de 300 pesos

económico.

más

fuertes

impulsos

y

resortes

Había trece categorías de y se aplicaba a

de

patentes.

Los

los bancos.

esta-

blecimientos de campaña pagaban la patente anterior inmediata a de los establecimientos similares de la Capital.

la

La

ley de Papel Sellado de 1859 establecía

desde

el

de

1

ciones de 100 pesos abajo, hasta

nueve clases de

recibos, pagarés

real aplicable a los el

de

sellos,

u otras obliga-

pesos aplicable a los do-

9



cumentos de más de 20,000 pesos.

En pel

1856 surgió en

sellado

el

un timbre

Senado de

2

la idea

reales

de establecer aparte del pa-

aplicable á las* letras, vales y

pagarés y de 1 real a cada endoso de esos mismos documentos: y la Cámara de Diputados la de un «derecho de Bolsa» aplicable

en

a todo 1

real

documento de venta de

títulos de

deuda

pilblica, a

razón de

por cada 100 pesos nominales negociados.

Los impuestos de papel sellado y patentes aparecían eonfr.ndidos en las publicaciones de fuente tributaria.

dos a

la

He

la

época,

como

si

emanaran

de u-ia

sol';

aquí su producto según los datos suTninistrc

Asamblea por

el

Ministro de Hacienda:

550

HISTOBIA DEL UEtrQai.T

La Contribución Directa. La

ley

de Contribución Directa de 1856 establecía

dos por mil sobre

el

monto de

cuota del

la

los capitales declarados por los con-

tribuyentes, y a falta de declaración o en

caso de declaración

el

diminuta, por un jurado compuesto del Juez de Paz y de dos vecinos capitalistas sorteados de una lista de 10, formada por los propios Jueces. Todo su producto debería aplicarse a la amortización de la deuda consolidada.

Al revisarse

por

ley en los

la

jurado con

el

contribuyente y

el

blico en

dos años subsiguientes fué integrado

Juez de Paz

el

la

y, seis

Montevideo y por

los

recaudadores del impuesto en cam-

La modificación debió dar malos

paña.

El hecho es que

,

lor de la suerte

de rodeo en

V

el

1

las

y

jurado primitivo.

el

Poder Ejecutivo

de estancia en 2,000 pesos, pesos

6

mestizas y

resultados en la práctica.

de 1859 restableció

la ley

Al reglamentarse la ley de 1858

las

vecinos, la mitad propuestos

otra mitad por la Junta de Crédito Pú-

de las ovejas en

el

fijó

del animal

el

6

pesos

las

va-

el

vacuno finas,

3

criollas.

Produjo este impuesto 77,841 pesos en 1856 y 70,006 en 1857, los datos suministrados por el Ministerio de Hacienda en

según su

Memoria de

que no coinciden enteramente con

1858, cifras

las

de los estados generales de la Contaduría que hemos reproducido ai

ocupamos

seguramente

Muy

del

producto general de las rentas públicas, debido

a. las

deficientes

fechas de clausura de los cuadros.

distintas

tenían

que ser

los

empleados

procedimientos

para la fijación del valor de los capitales gravados.

En

los

cua-

Departamento de Montevideo con un valor declarado de 14.706,000 pesos, el de Paysandú con 1.264,507, el de Canelones con 2.760,000, el de Cerro Largo con

dros de 1856 figuraban, por ejemplo,

2.415,000, 1.718,000,

el

de

San

con

José

cifras todas ellas

el

1.474,000

y

el

de

notablemente inferiores a

valor de los campos, haciendas y

demás

Soriano la

suma

con del

capitales gravados.

El impuesto d€partain
las

primeras medidas del gobierno de Pereira para conju-

rar la crisis financiera legada por la administración anterior figu-

raba

el

Según

impuesto departamental. la

ley votada

a mediados de 1856.

el

ganado,

el

trigo,

la

COUIEUXO DK PEREIRA

r)51

leña, los cueros, la laua, la grasa, la piedra y la arena deberían pa-

gar un impuesto origen.

tiempo de su extracción del departamento de

al

impuesto estaba

El

debía aplicarse

pago de

al

cargo del vendedor y su

a

campaña.

policías de la

Ocurrieron muciías dificultades desde recaudación,

atendiendo

y

de 1857 que

ley

u razón

el

a

impuesto sobre

primeros meses de la

los

de

principal

la

ellas

prescribió la

ganado vacuno se cobraría

el

de 80 centesimos por cabeza, pero no sobre los animales sobre

sino

extraídos,

rnas productos

No

producto

enseñanza primaria y

de

planillas

las

se

procreos de

los

mantenía

cada estancia.

régimen

el

Para

do-

los

inicial.

habiendo conseguido dominarlas resolvió

el

Poder Ejecutivo

Asamblea pidiendo la abolición del impuesto. Invocaba en su mensaje que la recaudación se hacía en las circunstancias menos favorables para el contribuyente y que además exigía una fiscalización muy costosa. Y en seguida, sin esperar el voto legislativo, eximió a las harinas impuesto, «como del pago del medio de estimular» la producción nacional. Los impuestos agredirigirse

a

la



gaba

el



decreto

establecen siempre para

se

«puede

cios del Presupuesto, y entonces

que no den

llos

el

el

atender los servi-

Gobierno suprimir aqué-

resultado que se tuvo en vista al establecerlos».

monstruosa que autorizaba al Poder Ejecutivo a dejar sin efecto las lej'es fiscales, pero que pasó en silencio porque concordaba con una necesidad premiosa de la producción na-

Era una

tesis

cional.

El impuestx) de hei-encias. Existía desde 1837 un impuesto de herencias que gravaba a los

con

colaterales el

5,

el

el

6,

7

el

4

*;,

y

el

10

tratándose ^í,

según

cesiones intestadas, aparte de

de

sucesiones

testadas,

y con

parentesco, tratándose de su-

el

un derecho general sobre todos

los

bienes que hubieren de salir del país, que oscilaba del 10 al 16

Una nueva cuota

la

las

contributiva:

cuotas

oscilaban

intestadas en que las

una para del

4

al

cuotas

6

las ''^ :

sucesiones

oscilaban del

herencias directas pagarían

Las herencias dejadas

%

en

el

a

el

11

''/r

en

el

extraños pagarían

caso de salir del pafs.

testadas

para las

y otra

grado de parentesco de los colaterales. En nes hubiesen de salir del país se pagaría

8

''/r.

ley dictada en 1857 estableció dos escalas y modificó

6

el

al

10

que

en

sucesiones

%, según

el

caso de que los bie-

además

un

3

^r.

Las

caso de salir del país. el

12

^/c

y además

el

HISTORIA DEL URrGUAY

552

El impuesto Bajo

la


abasto.

presión de los apuros fiscales fueron alzados en 1856 los

derechos de eorrales y abasto en toda la República.

Por cada animal vacuno debería pagarse en adelante 12 reales en

Capital y 8 en los departamentos;

la

por cada cerdo

reales;

8

y por cada oveja 2 reales.

Pesca de

anlil>io«.

Don Samuel Lafone adquirió en de anfibios en las

por diez años, mediante

el

documentos de

de la pesoa

concesión

100,000

costas adyacentes,

pesos,

1837 y de alquileres de

razón

a

dinero efectivo y

el

provenientes de un contrato

crédito

ción celebrado en

la

Castillos y

precio de

pagaderos 20,000 en

10;000 al año,

1855

de Lobos,

islas

de

resto en

de inmigra-

una finca destinada a

cuartel.

CoiTeos.

En

1856 se

que la

estableció

para

correspondencia

debería ser franqueada en la Administración central.

ban exceptuadas



«para evitar anual a

la

franqueo las cartas enviadas por intermedio

del

de las diligencias,

interior

el

Sólo queda-

cuales

las

decía

el



Asamblea

en cambio

la

deberían

timbre

llevar

en su Memoria

de Gobierno

Ministro

necesidad del previo franqueo en

Administración General que no siempre podría obtenerse

a

la

horas

cómodas y con oportunidad para mandar las cartas por aquellas vías». Fué una reforma que impulsó la renta a pesar de la reducción del porte a la mitad dictada

Dos años bierno .



el

después

al

mismo

uso de sellos postales «como medio

de concluir

con

rando de este modo

tiempo.

Administrador de Correos

el

franqueo que

el



propuso

al

Go-

decía en su nota

se usa hasta

ahora, asegu-

y facilitando al comercio ventajas reconocid'as en todos los países que los han adoptado». Esa importante reforma quedó implantada desde junio de 1859. los derechos fiscales

El decreto respectivo les»

advertía

ninguna carta»; que llos;

al

establecer

«el

que sin dicha formalidad la

franqueo por sellos posta-

«no se daría dirección a

Administración de Correos vendería

los se-

que éstos deberían colocarse en un ángulo del sobre, y que

coi:iei:no

la

Administración

di:

5f)3

pi:keira

debería inutilizarlos

mediante

una marca

es-

pecial.

La Administración de Correos cuatro años para

el

celebró en

servicio de postas en

1858

un contrato poí

toda la República. Ha-

bría cuatro correos mensuales, en vez de los tres que habían fun-

cionado hasta entonces, y cinco carreras o postas con

el

siguiente

itinerario:

Desde Montevideo hasta José,

Carmelo, pasando por

Canelones,

San

Rosarlo y Colonia.

Desde Montevideo al Salto, pasando por Mercedes y Paysandú. Desde Montevideo a Tacuarembó, pasando por Santa Lucía, Flolida y Durazno.

Desde Montevideo a Artigas, pasando por Meló. Desde Montevideo a Rocha, pasando por Pando, Maldonado y San Carlos. Cada posta tendría alojamiento y caballos para los pasajeros, a precios que el mismo contrato precisaba. Véase cuál era el movimiento de la Administración de Correos, según las estadísticas oficiales de la época:

1857

Cartas recibidas del exterior

.

Impresos recibidos del exterior Cartas enviadas al exterior. Impresos enviados al exterior Cartas enviadas al interior. Impresos enviados al interior Renta de correos

....

f.0,824

1858

HISTORIA DEL URUGUAY

554

Más

notable es este otro resumen -de los ingresos y egresos del

Departamento Diego Lamas: Ingresos

del Salto en 1858 bajo la administración del coronel

Egresos

pesos.

27,805

concepto

por

de

planillas

del

Presupuesto local 20,282 pesos. Sobrante aiüicahle a mejoras locales

7,523 pesos.

Entre

ingresos

los

9,770 pesos,

destacábanse

ramos

los

el

policiales por

impuesto departamental por 6,414,

por 0,444 y el derecho de rifa por 1,008. Algo más amplio se propuso realizar

el

los

comienzos de su administración, según

fos

de

un Mensaje de

contribución directa

la

Presidente

refrendado por su

1856,

en

Pereira

revelan estos párra-

lo

Ha-

Ministro de

cienda don Doroteo García, quien poco después se vio obligado a

renunciar ante las resistencias invencibles que encontraban en la

Asamblea sus fecundos planes de descentralización

rentística:

«El Poder Ejecutivo se complace en observar que V. H. se ocupa de atender a una de las reformas indispensables y a

justamente reclamadas por

mayoría de

la

establecer rentas municipales y

partamento.

los

la

aplicables

Ejecutivo

al

que

piensa

más

vez

la

Nación y es la de servicio de cada deel

método a

mejor

este respecto sería el de cometer a los

^.adoptarse a

mismos

Poder

El

la

departamentos

facultad de establecer los arbitrios destinados a cubrir

servicios especiales de su localidad, designando previamente la

materia

imponible y

el

relación

proporcional

a

máximo los

del

departamental eu

impuesto

impuestos

quedando sólo

generales,

subsistente la centralización para la contabilidad. El Gobierno cree

también que a respecto

a

la

necesario que se

ministrativos

de salvar

fin

recaudación le

en

e

inversión

autorice para

los

de

las

rentas

pesa

él

creadas,

nombramiento de consejos

el

departamentos,

Económico-Administrativas como las

responsabilidad que sobre

la

compuestos de

es

ad-

.Juntas

las

y de personas más aptas y notables a las cuales deba confiarse la

gestión

corporaciones

constituidas

de la recaudación e inversión dentro de las partidas vo-

tadas en

el Presupuesto, de las rentas y su aplicación al servicio de cada localidad. Esta medida a la vez que desembarazaría a la

administración general de las dificultades de

la

rentas departamentales, aprovecharía a éstas por lecta

aplicación

la

di-

de esos fondos a las necesidades locales.»

De acuerdo con blea

percepción de las

un

esas ideas

proyecto de ley por

el el

de los departamentos proveería

Poder Ejecutivo pasó a cual al

se

establecía

la

Asam-

que cada uno

pago del servicio

local

de Po-

555

GOBIERNO DE PEBEIRA

Culto, Iiistrucíióii Pública y Administración de Justicia;

licía,

propondrían

Juntas

las

Poder

al

Ejecutivo

quedando facultado dicho Poder

necesarios,

que

que hubieran de aplicarse;

determinar

para

recaudación

la

que

impuestos locales

los

e

los

inversión de los

impuestos quedaría a cargo délas Juntas Económico-Administrativas.

El rivsupuesto de 1856.

Uesde la época del gobierno de Flores obraba en poder de la Asamblea el proyecto de Presupuesto General de Gastos de 1856. Pero sin ambiente para su sanción. Elevaba

egresos

los

pesos,

a 3.280,745

bierno y Relaeiones Exteriores 63 cienda 1.515,008, incluidos en este

Banco Mauá por 220,000 y

servicio de la

el

correspondiendo a Go-

Guerra 1.135,800, a Haúltimo rubro un empréstito del

',936, a

Deuda Consolidada por

720,000.

Y un

de 1.147,945, que ascendía realmente a 1.214,375 con la

incorporación íi

estableciendo con ello

recursos a 2.132,800 pesos,

reducía los déficit

de

planilla

la

del

Cuerpo Legislativo que figuraba

paite.

Ld Comisión de Presupuesto de

misma época ciftivo

pedido que

hal)ía

Cámara

la

de Diputados de esa

proyecto volviera

el

a efecto de que hiciera desaparecer

Poder Eje-

al

mediante

déficit

el

re-

bajas en los gastos o creación de rentas.



«Este Presupuesto

me En el

eventual,

déficit los

presenta un enor-

gastos se incluyen asignaciones ilegalmente concedidas por

Poder

además



decía en su informe

para llenarlo no se propone medio alguno.

y

Ejecutivo

más razón para

viudas

a

íntegro

sueldo

del

ello

y

que

viudas

supuestas

a

disfrutan

algunos

que una orden superior. En

inválidos,

e

militares el

sin

proyecto se

una administración montada con superabundancia de

presupuesta

empleados y gastes, desconociendo así el Poder Ejecutivo la indispensable necesidad de adoptar economías que hagan posible el equilibrio de las rentas con las erogaciones.»

El proyecto quedó así en suspenso hasta principios de 1856, en

que volvió

a

figurar

en

orden del día y fué sancionado con

la

modificaciones de importancia.

Los gastos eliminación

de

la

de

Deuda

2.033,000,

quedaron la

reducidos

partida de

Consolidada,

y

a

600,000 los

2.758,899

pesos

recursos

subsistiendo todavía un déficit de

pesos,

destinada

quedaron

más

mediante a

la

intereses

fijados

en

de 700,000 pesos.

HISTORIA DEL rEUGUAY

556

El

servicio

dores, y

del

policial

ser atendido por

17

Departamento de

Montevideo

campaña por

de cada uno de los departamentos de

el

debía

comisarios, 10 sargentos, 10 cabos y 80 cela8

comisarios y 60 celadores. La enseñanza universitaria quedaba a cargo de tres catedrático! de

enseñanza secundaria

de lenguas

matemáticas y química), tres uno de derecho (para la enmercantil y de gentes), uno de teología

(filosofía,

inglés y francés),

(latín,

señanza del derecho

civil,

y una Asademla de Jurisprudencia para la práctica de los estudiantes

de derecho.

Eu cargo

el

El

de

Instituto

Instrucción

Pública

tenía

a

Colegio Nacional compuesto de 24 alumnos internos y

un número mayor de alumnos externos. La enseñanza primaria debía ser atendida en

el

departamento de

44.

por 10 escuelas y en los departamentos de campaña por Las 10 de la Capital estaban presupuestadas en 14,200 pe

sos,

correspondiendo 10,000 a sueldos de maestros, 3,000

la Capital

a

y 1,200 a gastos; y las 44 de campaña en 43,616 correspondiendo 31,680 a maestros, 6,336 a alquileres, 4,400

leres

tos y

1,200

alquií-

pesos, a

gas-

a textos.

Frente a estas modestas cifras de

las planillas del Ministerio de

Gobierno, pongamos las del Ministerio de la Guerra. En el Estado Mayor General figuraban 7 brigadieres, 5 coroneles mayores y 3 coroneles; y en el Estado Mayor pasivo 40 coroneles, 76 tenientes coroneles, 64 sargentos mayores, 169 capitanes,

.57

ayu-

segundos y 111 subtenientes. Detrás de esa legión de jefes y oficiales sólo había un ejército de línea diminuto: 1 escuadrón de artillería compuesto de 143 pladantes mayores, 106 tenientes

zas

y

escuadrones

2

de

1.°,

.58

caballería

con

304

En

plazas.

todo,

447

soldados.

Los recursos calculados como hemos visto en 2.033,000 pesos,

de-

bían ser obtenidos por una decena de rentas, entre las que sobre, salían

las

siguientes:

Aduana de Montevideo

.

Receptorías Corrales

video

Con

el

.

.

.

.

.

.

Corrales de los de?

l.GOO.OOO

100,000

de Monte-

....

partamentos Mercados de Mon.

teviden 50,000

propósito de enjugar

el

Cont. Directa

déficit

votó

to de la tercera parte de todos los sueldos de

el

S

30,(X)0

.

.

50,000

.

.

100,000

Senado un descuen30 pesos men-

más de

557

G0B1£BN0 DE PEBEIRA

suales que la

Cámara de Diputados desestimó, y un

artículo por el

que se establecía que las vacantes que se produjeran en la administración pública serían llenadas con jefes y oficiales pertenecientes

Estado :Mayor pasivo y por inválidos, jubilados y pensionuevo destino y tuvieran aptitudes

al

uistas que quisieran aceptar el

para su desempeño.

Un

solo paréntesis se abrió en esta

nomías:

campaña

favor de las eco-

a

de la pensión a don Joaquín Suárez, materia de repe-

el

tidos debates durante el año 1S56, en que se invocaba por los im-

pugnadores

el

estado

angustioso de la Hacienda

pública.

El

pro-

yecto concedía una pensión vitalicia de 3,600 pesos anuales y de-

claraba que

el

agraciado había merecido bien de

la

patria por sus

grandes servicios. Ambas Cámaras estaban de acuerdo en menaje, pero disentían en cuanto a el

asunto a

la

Asamblea General, y

la

asignación.

allí

el

Hubo que

la ley fué

ho-

llevar

sancionada sin

apenas se supo por boca de uno de los oradores quo el procer acababa de ser demandado ante los Tribunales por no poder pagar algunas de sus deudas. resistencias

El Presupuesto Al sancionar

(le

el

1857.

Presupuesto de

1857

trató

Asamblea de

la

su-

mediante una fuerte reducción en el monto de los gastos públicos. Pero como al mismo tiempo decaía el nivel de las rentas, no pudo impedirse que la nueva ley resultara tan desprimir

el

déficit

equilibrada casi

como

Los gastos quedaron

la

anterior.

fijados en 2.327,034 pesos, así distribuidos:

Gobierno

$

ññ2,4(v2

Guerra

990,799

Hacienda

727,

Tribunales

,

U5

Ó6..358

Y

los recursos en 1.648,000 sobresaliendo la Aduana con 1.430,000, derecho de corrales con 80,000 y el Correo con 20,000. La enseñanza pública continuaba figurando con cifras de hambre: 6,800 pesos la Universidad; 1,324 el Instituto de Instrucción el

Pública; 57,816

la

educación primaria de las 10 escuelas de

pital y de las 44 de los departamentos.

En

la planilla

de

la

la

Ca-

Univer-

sidad figuraba una cátedra de medicina y cirugía que fué suprimida por la Cámara de Diputados.

HISTORIA DEL -URUGUAY

558

Las clases pasivas militares y civiles absorbían más de un midistribuido en la forma que subsigue:

llón de pesos

Número

Sueldos

de individuos

y

pensiones

Ag-regados al Estado Mayor Inválidos Viudas y menores militares Jubilados civiles .

El

.

.

.

alcanzaba a 300 plazas entre

de línea no

ejército

drón de artillería y

384,642 192,587 377,770 51,000

escua-

el

escuadrón de caballería, únicos que figura-

el

ban en el Presupuesto. Su costo era apenas de 50,000 pesos al año. Presidente Desde los comienzos de su administración dictó el

más

Pereira un decreto,

por

Presupuesto,

el

tarde incorporado al proyecto de ley

de

Contaduría sólo

li-

que se establecía que

la

quidaría la mitad de los sueldos y que la otra mitad se pagaría

cuando

lo

permitieran las entradas del Tesoro público.

taba de un aplazamiento transitorio, según

mostrarlo una manifestación

suscrita

por

varios

en marzo de 1857, pidiendo a la Asamblea sueldo íntegro,

destino

al

ley

jefes

y

oficiales

restablecimiento del

el

mismo año con

que mandaba separar

Presupuesto

de

la

el

5

9^

Administración

ocasión

del

al

veto

de las rentas con de

Justicia,

según

debían abonarse los sueldos no sólo con puntualidad sino

cual

la

la

se tra-

advertencia de la Comisión Permanente

y una

Poder Ejecutivo a mediados del opuesto a

No

encargaron de de-

se

también íntegramente.

Ijeyes de peiisioin's y

En

el

«le lí-íoniia

curso de este

ni»litJ»r.

mismo año abordó

la

relacionadas con la reducción de los gastos: las

pensiones a efecto de salir

del

que se vivía, y la consumación de

Asamblea dos tareas la

sistematización de

régimen sin normas la

fijas

en

reforma militar votada en

185.3.

En según

materia de la

cual

en

pensiones sólo caso

de

alcanzó a promulgarse una ley

muerte de un

inválido

pasaría

a

su

GOBIERNO DE PEREIRA

viucla e hijos

menores

la

mitad de

la

559

pensión de que

el

causante

hubiera gozado.

La Cámara acordaba a

Diputados

de

viuda

la

ministración una

según

el

del

50

y

e

hijos

pensión

del

número de años de '/r

sancionó también un proyecto que menores de los empleados de la ad3")

al

90

servicios

'/c

de los sueldos activos

prestados por

el

causante,

de la pensión tratándose de jubilados.

Para llevar adelante la reforma militar decretó la Asamblea una contribución extraordinaria del 1 Vr sobre todos los capitales en

existentes

país.

el

El Pi-esupuesto de 1858. Al acompañar

el

las rentas de 1857

nuevo Presupuesto decía el Poder Ejecutivo que no habían alcanzado a producir la cantidad cal-

culada y que por efecto de ello el déficit había subido a 800,000 pesos. Pero el Ministro de Hacienda se encargó de agregar en su

Memoria anual que el ejercicio dejaba diversos atrasos que elevaban el monto del déficit a una suma igual a la del cálculo de recursos del Presupuesto de 1857, es decir, a 1.648,000 pesos.

Bajo este ambiente de bancarrota se abordó el estudio del Presupuesto para 1858. Los gastos quedaron fijados en 2.473,510 pesos, así distribuidos:

Cuerpo Legislativo Mini.sterio de Gobierno y Relaciones Exteriores

Guerra

Hacienda

*

64,6btí

566,160 1.039,177

802,887

Para la Administración de Justicia se acordaban 58,540 pesos. Policía del (Departamento de Montevideo absorbía 86,736 pe. sos y las de todos los departamentos de campaña 215,040, teniendo

La

fcl

primero 200 celadores y 60 cada uno de los segundos. instrucción pública mantenía con pocas diferencias sus cifras

La

anteriores:

8,000 pesos la Cniversidad, 1,324 el Instituto de Instruc-

ción Pública y 56,616 las 54 escuelas primarias existentes en toda la

República.

En

el

nerales

Estado Mayor activo seguían figurando 7 brigadieres ge5 coroneles mayores. En cambio los agregados al Es-

y

tado Mayor pasivo se habían multiplicado a despecho de las crue-

HISTORIA DEL URUGUAY

560

les

estrecheces del erario, presentando estas cifras extraordinarias

para un ejército de línea reducido a un escuadrón de artillería y dos escuadrones de caballería con un efectivo, según la ley de Presupuesto, de

menos de 500 plazas:

39 coroneles

'



ayudantes mayores

145 tenientes 1.°

71 tenientes coroneles

85 sargentos mayores

61

2.°

>-

145 subtenientes

165 capitanes

Las rentas comprendidas en el cálculo de recursos sólo alcanzaban a 1.940,696 pesos, destacándose la Aduana de Montevideo y receptorías con 1.362,141, el papel sellado y las patentes con 300,000,

el

impuesto

departamental con 120,000 y

el

Correo con

22,000.

Comparados

más de

De

los

500,000

déficit

Hagamos

en el

gastos con los

recursos resultaba un

déficit

de

pesos.

déficit.

resumen de

los tres

primeros presupuestos de la ad-

ministración Pereira:

ANOS

Recursos

Gastos

votado

725,000 679,000 533.000

2.033.000

2.758,000 2.327,000 2.473,000

1856 1857 1858

Déficit

1.64.S.O0O

1.940,000

En conjunto un desequilibrio previsto de 2.000,000 de pesos en números redondos, aparte de los créditos suplementarios votados por la Asamblea, de los gastos autorizados administrativamente y del

menor rendimiento de

las

rentas

casi

siempre optimistas de

los

presupuestos.

Algo se intentó para enjugar

el

con relación a

déficit.

los

cálculos

El Poder Ejecutivo pidió

a la Asamblea, y su proyecto fué votado poi

la

Cámara de Diputa-

un derecho de exportación y un adicional a las patentes de giro. Y al año siguiente, renovando una iniciativa del Senado al discutirse el Presupuesto de 18.56, dictó un decreto por el cual establecía que los jefes y oficiales del Estado Mayor pasivo podrían dos,

optar a los empleos civiles.

GOBIEBNO DE PEEEIRA

561

Pero nada eficaz alcanzó a realizarse y el déficit que cada año se agrandaba acabó por envolver al Gobierno y al país en complicade

financieras

ciones

de^plorable

en

repercusión

escenario

el

po-

lítico.

El Cuerpo Legislativo con

el

propósito de colocar a su personal

abrigo de las angustias del Tesoro público, sancionó a mediados

al

de 1S58 una ley que obligaba a la Tesorería General a pagar los

presupuestos mensuales de Sala y Secretaría con el producto del 10 de las rentas destinado al pago de las dietas por resolución

%

de la Constituyente. La ley fué vetada por el Presidente Pereira, quien invocaba que si era explicable la retención tratándose de las dietas, desde que la Constitución establece que ellas deben pagarse con independencia del Poder Ejecutivo, no sucedía igual cosa coa de gastos. Pero la Asamblea mantuvo su resolución.

las planillas

Era muy discutible el fundamento del veto, pero lo explicaba sin duda el estado de miseria en que vivían los demás empleados sin que la Asamblea hiciera nada para facilitar la regularización de pagos.

los

Los presupuestos subsiguientes.

A mediados en

el

de 1858

el

Gobierno pasó un Mensaje a

que decía que tenía pronto

1859, pero que

el

Asamblea

la

proyecto de Presupuesto para

no se resolvía a pasarlo porque era

la

reproducción

del

Presupuesto anterior en que los gastos excedían a

los

recur-

sos.

Prevenía que

un

déficit'

el

Ejercicio de 1857 había cerrado con

de 800,000 pesos, porque los recursos no habían llegado a la canti-

dad calculada. Agregaba que había compromisos irreductibles «porque procedían de reconocimientos de créditos diplomáticos y de contratos por servicios indispensables», avaluados en 700,000 pesos. Y

terminaba pidiendo a la Asamblea que hiciera correr el Ejercicio económico de marzo a febrero y que autorizara al Gobierno para introducir reformas en

el

Presupuesto.

Era una pretensión monstruosa dado

el

largo tiempo transcurrido

desde la sanción del último Presupuesto. Pero vacilaciones

sin

y,

en

mico; dio carta blanca ción,

ciones

con de

al

la

modificó

Asamblea el

la aceptó

Ejercicio

Presidente «para hacer en

la

econó-

administra-

dentro de las cifras del Presupuesto, las reformas y reducque considerase necesarias a fin de igualar los ingresos

los la

consecuencia,

egresos»;

y

le

autorizó a la vez para proyectar

deuda con cargo de someter

lativa.

IV

- 36.

los

el

arreglo

convenios a la sanción legis-

HISTORIA DEL URUGUAT

562

Un año

después fué sancionado

vaba ficticiamente

el

Presupuesto de 1859. Mantenía (2.473,510 pesos), pero ele-

Ejercicio anterior

la cifra de gastos del

los recursos, de 1.940,000

en que habían sido

culados para ese Ejercicio a 2.531,000, inflando la

Aduana y

cal-

recep-

torías a 1.900,000, el papel sellado y patentes de giro a 260,000, los

demás impuestos.

corrales y mercados a 120,000 y en proporción los

Por una ley subsiguiente quedó hasta 1860 y autorizado

el

vigente

el

nuevo

Presupuesto

Poder Ejecutivo para atender a

los gas-

extraordinarios que demandara la defensa del país, pudiendo

tos

a tal efecto «realizar operaciones de crédito a la par al del 12

'-/c

de interés

al

año y a

los

más

máximun

largos plazos posible».

Inventario de la deuda pública.

En diciembre

de 1856 pesaban sobre

Nación 101.248,953 pesos destacándose en

la

de deudas liquidadas, clasificadas y reconocidas,

masa

esa enorme

las partidas

siguientes:

Deuda Consolidada

'ya Deuda »

»

de

Prcstnmi.stas

consolidar

.

exig-ihle.

.

853,997

Brasileña

.

1.964,544

.... Créditos eos ....

Francesa

.

1.063,587

Gounouilhoii

Inglesa

.

340,548

.

$

91.779,491

1848

$

.

651,568 1.988.099

.

Créditosatrasados

de 1855 y 1856. Al finalizar 110.334,254,

Deuda

el

Coi)solidadí\

Deuda exigible. Brasileña

»

»

el

monto de

deuda

la

1. -299,306

había subido a

sobresaliendo las siguientes partidas:

$

a consolidar.

X.

Ija

año 1857

1.015,891

británi-

9.156,627

905,298

.

.

Francesa

.

Ing-le.sa

.

.

90.844,615

'1.964,744

1.059,830

Créditos

británi-

....

eos

Gounouilhou

.

.

$

589,011 1.199,000

Atrasos de 1855 a 1857

.

.

.

.

1.925,468

540,510

Deuda Consolidada.

¿Cómo había Consolidada?

llegado a

formarse esa montaña aplastadora de

la

GOBIERNO DK PKREIRA

Desde

comienzos de

los

la

administración Pereira se dictó una

por la cual quedaba suspendida

ley

5(i.'3

la

tramitación

de

expe-

los

íMentes por perjuicios de guerra y se instituía una Comisión de

Poder Legislativo y otros tres del Poder Ejecu-

tres delegados del

con

encargo de practicar una revisión prolija

de lo actuado hasta ese momento. Fijábase un plazo de 45 días para la presentación de los expedientes, bajo apercibimiento de declarar-

tivo,

el

se prescriptos los créditos de los omisos.

Pocos meses después quedaba truncado el estudio por efecto de una disidencia fundamental acerca de la extensión de las facultades de la Comisión clasificadora. Tres de sus miembros se consideraban capacitados para realizar indagaciones tendientes a la comprobación

que no

de

mientras que

fraudes,

los

lo estaban.

los

otros

sostenían

tres

Había, pues, un empate, y un empate insoluble

dado que la Comisión se componía de seis miembros. Los que opinaban a favor de las indagaciones hicieron constar entonces en .

el

terminal estas declaraciones gravísimas reveladoras de los

acta

enormes abusos a cuya sombra había venido creciendo la deuda: «Que había en los archivos de la Comisión una nota del Jefe Político del Departamento de la Colonia ... en la que denunciaba la

existencia de

con

su

una sociedad para

respectiva

dotación

de

«Que también constaba

sos»...

de expedientes>

la fabricación

«testigos

supuestos

Comisión

a la

la

y

testigos

fal-

existencia de ex-

pedientes en que se habían corrido todos los trámites de la ley de-

jando un gran vacío o blanco para la vista del agente fiscal» Que había muchos expedientes «con enmendaturas y adulteraciones groseras»... Que varios interesados habían declarado a la Comisión «que existían aumentos y falsificaciones» en las cantidades .

y

reclamados.

objetos

.Que existían «incompatibilidades entre

.

número de ganados reclamado esos ganados

decía que

y

existían»

.

.

Que era sospechosa

«la

formidad de unos mismos testigos declarando en muchos de pedientes de un ticidad

mismo departamento»... Que

«muchos de

reclamantes y de

los

gla general no habían

contratos

.

el

área de los campos en que se

el .

.

carecían

los testigos^;...

uni-

los ex-

de auten-

que por

re-

sido presentados los títulos de propiedad o

«Y por último que constaba a

de arrendamiento...

Comisión que en un solo caso en que

ella

la

había hecho uso del de-

recho de pedir informes a las personas o autoridades del lugar a

que

reclamación

la

55,000

pertenecía,

cabezas de ganado.

probado

al

parecer

el

.

.

sin

resultado un aumento de embargo de estar perfectamente

había

expediente respectivo».

HISTORIA DEL UBUGÜAX

564

una correspondencia de la Colonia, inPlata», en que se establecía que antes del Comercio serta en «El sólo había en ese departamento tres Grande Guerra la estallar de estancias de 8 a lO.OOU animales vacunos, que eran las de Rodríguez, Calvo y Solano, y sólo una, la de Quintana, con existencia mayor; Pertenece a esta época

y en cuanto a lanares que aparte del establecimiento de Poucel y lanares C", que tenía 15,000 ovejas, sólo había de dos a tres mil más. Pues bien, agregaba el corresponsal: entre los expedientes en trámite figuran por decenas los que reclaman diez, veinte y con

animales,

mil

treinta

agravante

la

muchos de

que

de

ellos

no son conocidos en el departamento o son pequeños estancieros o pequeños comerciantes, sin volumen para gestionar reclamos fabulosos.

En

esos

mismos momentos

Francisco Caraballo

Jefe Político de Paysandú coronel

el

adjuntaba

nómina de

Gobierno una

al

los

abultamiento de

de personería, por

expedientes viciados por falta valores y por falsedades de todo género según el grupo de personas caracterizadas que había practicado el estudio minucioso de

reclamos locales.

los

Al abuso incalificable de las reclamaciones originarias, base

de las adulteraciones de los expedientes.

el

sa publicó

En

agregá-

1858 la pren-

caso de un reclamo de doña Juana María Carricart

el

por 4,500 reses,

en que

cifra

la

por la

originaria inflada ya

clamante había quedado transformada en

la

de

.'ló.OOft

re-

por efecto

de enmendaturas que se encargó de denunciar uno de los propios testigos

del

expediente ante

el

temor de

las

responsabilidades

en

que pudiera caer envuelto.

Cómo

repercute la (leniincia

La Comisión de los

la

(le

estos abusos en la Asamblea.

Cámara de Diputados

a

cuyo estudio pasaron

antecedentes que acabamos de relacionar produjo un dictamen

que era

el

proceso de los abusos reinantes.

«Hay que poner

coto



decía



al

escándalo y

al

fraude».

Ha

propuesto la Comisión revisora en su nota de renuncia «la quema de se

todos

los

expedientes

presentados a su

consideración, o que

reconozca por mitades las reclamaciones». Pero hay que optar

por la

quema, porque

tablecer el crédito y la

«esa medida

es

la

única que

moral pública altamente

podría res-

ofendidos».

Ha

demostrado el Jefe Político de la Colonia que en su departamento se han adulterado los reclamos mediante duplicación de capitales,

GOBIERNO DE PEREIRA

declaración

de

jamás han

existido y declaración

simulación

apócrifos,

capitales

ÓGÓ

de testigos

personas

de falsos

que

o supuestos.

El Jefe Político de Paysandú ha presentado una relación nominal

han entablado reclamos por

de los que fraudulentamente cios

de guerra.

Si

«que una hoguera

asomo de dudas

resultará sin

perjui-

a ello se agregan los demás hechos probados, es lo único

que

prudentemente cabe para que desaparezcan de esta sociedad hasta los últimos vestigios del escandaloso extravío que la ambición de interesados,

los

la

negligencia

de

Jueces

los

y

la

tolerancia

del

Peder Ejecutivo mantienen aun en pie». La Asamblea ha dictado varias leyes «para poner una barrera al escandaloso robo que la prensa denunciaba y el pueblo entero conocía». Pero esas leyes



concluía



informe

el

«reprimidas bajo

el

peso de falsas como

indebidas interpretaciones, 5ÓI0 han servido para alentar

Entre

las leyes a

que

blecía

que se refería

por perjuicios

de guerra

nalmente a

Junta

la

el

fraude».

informe había una que

esta-

que hubieran solicitado indemnización

propietarios

los

el

estaban

clasificadora,

obligados

a presentarse perso-

con sus títulos de propiedad o

contratos de arrendamiento, dentro de un término perentorio, pa-

sado

el

cual

deberían quemarse los expedientes de los omisos. Al uno de los senadores que deseaba abstenerse de

darle su voto dijo

expresar las causas determinantes del proyecto, «porque ellas no podían referirse sin arrojar una mancha sobre la sociedad». En la Cámara de Diputados hubo en cambio quien sostuvo que no pendía

ni

debía

que autorizaba a los

derogarse la disposición legal

hombres para hacerse representar, produciéndose con

motivo

tal

ardientes debates en que llegó a hablarse de la necesidad de que

fueran

«arcabuceados los autores de los robos y fraudes denun-

ciados».

Uno de fraudes,

los

diputados que

exhibió

ante

encabezaba esa

Cámara, según

la

la

campaña contra

los

crónica parlamentaria

de «El Comercio del Plata», varios expedientes con cifras enmendadas,

de Jueces

decretos

con

relación

a

existían y para las cuales había quedado

Comentando

el

mismo

diario al

habían vuelto a figurar en editoriales,

refiriéndose

a

la

los

año

orden del

vistas

fiscales

no

que

un espacio en blanco!

siguiente los fraudes que día, decía

en uno de sus

expedientes ya convertidos y

a

los

expedientes en trámite que se trataba de quemar:

«Se han visto reclamaciones de propietarios que nunca existieron, y pretensiones que reducidas a una cifra darían al territorio tres veces más extensión de la que tiene y cincuenta veces mayor ri-

HISTORIA DEL URUGUAY

56fi

nunca

que

Queza

que

tantos

millones y no

la

que representan

muy

expedientes

los

Quedan

poseyó.

debe estar

reconocidos

en trámite.

Doscientos

guerra

por

indemnizaciones

Ciue

no tiene con qué pagar a sus empleados».

por

perjuicios

La Asamblea declara cerrada perjuicios de

Como

de

contra

ciento

y

suma

la

millones

un erario

de los reclamos por

la conversión

guei'i-a.

resultado de

mediados de

de esta

distante

debates

estos

la

Asamblea dictó una

que declaraba terminadas

1857,

funciones

las

ley

a

de la

Comisión clasificadora y cerrada la conversión de la deuda por perjuicios de guerra. Los expedientes no convertidos presentados dentro de los plazos legales y en los que se hubieren llenado las

formalidades y

requisitos

correspondientes,

devolverían a los

se

reclamantes para la prosecución de sus gestiones. Los que no reunieran esas condiciones serían inutilizados. Las planchas para la

impresión de tulos »

títulos

los

existentes serían

Esa ley no era

el

bas Cámaras.

En

mar

cada

todos y

la

hubiera concluido. resolución

la

nado

con

ciera

la

tí-

resultado armónico de las decisiones de am-

uno

expedientes

de los

Pero como

de respetar los

propósito de que-

el

cuya

tramitación no

de Senadores había manifestado

la

expedientes en que se hubieren

legales,

aquélla

lle-

acabó por ceder como me-

Comisión en su dictamen la reunión de

demora y con

su

los

— la

«de que no se hi-

Asamblea General

República y a su historia que todo lo contempla que escándalo se aplaza, que el robo se protege y que la infamia

decir el

decía

deuda serían destruidas y

la

de Diputados predominaba

formalidades

las



dio

de

quemados.

a

la

queda en

pie».

Pocos días después eran inutilizadas las planchas litográficas y quemados los bonos en el patio de la Casa de Gobierno, con la sola

reserva

de

cuatro millones que la Junta de Crédito Público

resolvió retener a la espera de

una consulta acerca de varios

ex-

pedientes concluidos pero no convertidos todavía, que la Asamblea resolvió

ran a

la

negativamente

disponiendo

Así terminaron las emisiones de hasta ese seis

que

esos

expedientes

queda-

espera de ulteriores leyes de consolidación.

momento por

la

Deuda Consolidada, abiertas

efecto de la prórroga abusiva del plazo de

meses fijado en 1853 para

la

presentación de los reclamos.

567

GOBIERNO DE PEREIRA

Una

A

falsificación de bonos.

la

obra del fraude que se desarrollaba en los expedientes, vino

a agregarse en

1859

de los falsificadores de bonos.

la

Debían ser quemados 3.297,000 nominales destinados a una veintena de expedientes comprendidos en la ley que declaraba cerrada la

brió

el

al

ser rescatados por

Gobierno fué que

el

todos eran falsos, según una

fraude. Casi

en momentos

sido caucionados

bonos habían

conversión. Esos

de apremio y

se

descu-

de las informa-

ciones de la prensa.

El Gobierno

entonces un plazo para

fijó

dos los bonos circulantes, neral que determinase

investigadora

el

monto

del

intervención

dio

y

presentación de

la

to-

una revisión gefraude, nombró una Comisión

de

efecto

a

practicar

Crimen, quien de-

Juez del

al

de varias personas que aparecían complicadas, y adoptó otras medidas que propendían a circunscribir el fraude a

cretó la

lo

prisión

que ya estaba en circulación. 92 millones de pesos examinados por

De

más de

dora,

millones

27

Comisión investiga-

la

resultaron falsos.

El precio de la Consolidada. Reproducimos de

las

informaciones

procedentes

de

la

Sala de

Corredores de la época, estas cifras reveladoras del enorme y bien

Deuda Consolidada:

explicable desprestigio en que se mantenía la

1856

Marzo

Cantidad vendida:

5.

dos y medio millones a 10

y 11 reales por cada cien pesos de deuda. 1856 Junio 20 y 21. Cantidades vendidas: el

primer día y veintiséis millones

reales por cada

medio

veintiséis y

millones,

Cantidades vendidas:

üones a

A se

a

10 y 10

27.

razón de

a

Días 2S y

reales.

y^.

medio millones y trece

y

y 9

8

Cantidad vendida:

y

30.

medio mi-

tipos.

de junio de 1857, después de destruidas las planchas y

fines

quemado

mismo

los

siete

ocho millones

diez y

segundo,

deuda. Día

pesos de

cien

el

el

sobrante de bonos,

la

Consolidada, que seguía bajando,

cotizaba a 6 reales! I^no y

medio años más tarde, en enero de

día a 9 y

%

reales

el

Era bien explicable que

En marzo

de 1856

la

1859, todavía se

ven-

ciento. la

deuda se arrastrara

Cámara de Diputados

así

dirigió

por

el

suelo.

una minuta do

HISTORIA DEL UBUGUAT

5tj8

comunicación al gobierno de Pereira que acababa de estrenarse, en que le recomendaba el cumplimiento de la ley de 1854 sobre amortizaciones. solo habitante de la República

«No hay un



decía en esa mi-



que no clame y que no esté persuadido de la urgente necesidad de que se ponga un pronto y eficaz remedio al descrédito en que se encuentran los fondos públicos y a la espantosa bancarrota con que ese descrédito amenaza a nuestro debilitado comer-

nuta

cio.

La íntima convicción

del

desánimo y aniquilamiento en que halla dolorosamente confirmada

están nacionales y extranjeros se

por los valores que aquellos créditos tienen hoy en plaza.» Y contestó en el acto el Gobierno que la entrega mensual

de

suspendida desde largo tiempo atrás; que por el momento no era posible reanudarla por falta de recursos disponibles, pero que comprendiendo la impor10,000

que

pesos

tancia de objeto,

la

imponía estaba

ley

ese

indicación trataría de libertar alguna renta con

la

aunque sin contraer' compromiso de

La Comisión mixta para

el

plazo.

arreglo de las reclamaciones franco-

inglesas.

Hemos hablado ley

al

ocuparnos de

la

de julio de 1855, que autorizó

brar arreglos

con

encontrado

a

ambiente

administración Flores de

Poder Ejecutivo para

la

cele-

diplomáticos, «dando cuenta a la Comisión Permanente», sin que hubiera

agentes

los

Asamblea General o

al

la la

frase

final

«para

aprobación»,

su

pro-

puesta por un diputado.

A

raíz de esa ley las Legaciones

sieron

sus

al

Gobierno que

connacionales,

orientales,

en

quedaran

los

vez

de Francia e Inglaterra propu-

reclamos por perjuicios de guerra de de ser

sometidos

al

resueltos fallo

que designarían las mismas Legaciones

y

por

las

autoridades

una Comisión

de el

Gobierno,

mixta

propuesta

que fué aceptada por Flores según se encargó de comprobarlo cancillería

de

que enviaría

I.h

cuando urgida por las Legaciones contestó asunto al Cuerpo Legislativo, como efectivameni,?

Pereira el

lo hizo.

La Comisión Permanente pasó los antecedentes a estudio .le una subcomisión de la que formaba parte el doctor Pedro Bust.imante,

y

esa

subcomisión

e.«taba facultado por la ley

sostuvo

que

el

Poder

Ejecutivo

•!'

de 1855 para crear una Comisión mixta.

«Tiende a alterar por su base la citada ley



decía en su dicta-

GOBIEBXO DE PEREIRA



nien

569

y también a arrancar a la autoridad nacional la renuncia

o delegación de derechos

y facultades que no puede renunciar ni

aun delegar... Esto no puede consentirlo rública ni por

con acuerdo de

ni



la

Presidente de

el

Re-

la

Ccmisión Permanente,

ni

tampoco podría autorizarlo la misma Asamblea General, pues la Asamblea General no puede delegar sus atribuciones constitucionales,

y una de esas atribuciones es fijar los gastos públicos, es de-

cir,

determinar cuáles son

las

verdaderas

exigencias

del

servicio

rúblico.»

Dicho dictamen fué aprobado, y

corroborando sus

conclusiones

Permanente a la Asamblea en febrero de 1857: «La Comisión Permanente creyó y cree que el Poder Ejecutivo

decía la Comisión

debía haber desechado la proposición de los agentes de Francia e

como

Inglaterra

inconciliable con la ley fundamental de la Repú-

blica y con sus derechos de soberanía,

jarlo así

Poder

al

Ejecutivo en

mas

se abstuvo de aconse-

atención a

la

proximidad de la

reunión de las Honorables Cámaras y por un sentimiento de

res-

peto a ellas.» Parecía, pues,

dente Pereira por

el

un asunto enterrado. Pero

resolvió

darle

forma a

las

lejos

de ello

negociaciones

el

Presi-

iniciadas

gobierno de Plores y presentó a la Asamblea a mediados del ajuste diplomático que establecía lo siguiente:

mismo año un

Las reclamaciones por perjuicios de guerra serán resueltas «en cuanto a su justificación y monto», por una Comisión mixta árbitroarbitradora, compuesta de dos por

el

Francia

e

cuatro miembros, dos de ellos nombra-

Gobierno Oriental y

los

otros dos por los Gobiernos de

monto de las indemnizaciones que la Comisión mixta hubiere admitido como justificado, será reconocido por el Gobierno de la República como deuda nacional y su extinción será arreglada por una convención especial». Las reclamacioInglaterra.

«El

nes se presentarán dentro del plazo de 90 días tratándose de per-

sonas domiciliadas en la República y de 180 para los que residen en

el

extranjero.

cienda,

La Comisión será presidida por el Juez de HaEn caso de empate decidirá un quinto ar-

pero sin voto.

bitro sorteado de

una

lista

de ocho integrada la mitad por

el

Go-

bierno Oriental y la otra mitad por las Legaciones.

Ese monstruoso ajuste diplomático que sustraía a racional

el

la jurisdicción

conocimiento de todos los reclamos por perjuicios de

guerra que perteneciesen a subditos franceses

Cámaras y convertido en cultades de ninguna especie.

ficado por las

e

ingleses, fué rati-

ley de inmediato y

sii)

difi-

historia del URUGUAY

;j7U

Pide también

Brasil una Comisión mixta.

el

Apenas iniciadas e

negociaciones por los Gobiernos de Francia

las

Inglaterra, se apreáuró a pedir la Legación Brasileña que se ex-

tendiera a

connacionales

ííus

el

privilegio que aquéllos pretendían,

y la cancillería oriental accedió en tarde, en

mayo

de 1858,

el

el

acto a

suscribían un ajuste diplomático por

el

Y

ello.

Ministro Carreras v

el

un año más

Ministro Amaral

cual se establecía que los

leclaraos por perjuicios de guerra de los subditos brasileños serían

resueltos

en cuanto a su justificación y a su monto por una Conombrada por el Gobierno Oriental y el Gobierno

misión mixta Brasileño.

Los

de presión de las Legaciones de Francia y de

i>r¡merc:s actos

Inglaterra.

Casi al

mismo

tiempo, pues, que se

quemaban

bonos de

los

la

Consolidada y se destruían las planchas litográficas utilizadas para impresión,

.^^u

la

Asamblea

para que reanudara

instituía

una Comisión

emisión de bonos, ya sin

la

el

franco-inglesa

contralor de las

autoridades nacionales.

La primera Comisión mixta fué integrada por don Bernabé Caravia y don Patricio Vázquez en representación del Gobierno Oriental,

don Alfonso Daneant en representación del Gobierno Francés

y don Roberto Rouley en representación del Gobierno Inglés.

Empezó a actuar en

1859.

Pero sus trabajos quedaron truncados

desde los primeros momentos en razón de que los comisarios extranjeros pretendían llevarse por delante a los orientales contando

con las incalificables debilidades del Gobierno.



«Exigían

según

el

doctor Caravia



el

reconocimiento

llano y franco de las pretensiones deducidas, sin la

palabra del recurrente y sin

más prueba que

liso,

más trámite que la

que éste pre-

sentase.»

Don Patricio Vázquez planteó el manente de la que formaba parte. Al tratar de fijar

ciendo



los

travagantes

reglas

conflicto ante la

para nuestros

trabajos

Comisión Per-



empezó

di-

comisarios extranjeros promovieron pretensiones ex-

sobre

intereses

de las

cantidades

reclamadas,

sobre

conversión de bonos ya recibidos por algunos de los reclamantes y sobre asistencia del Presidente de la Comisión a los actos de

GOBIEKNO DE PEREIRA

No

prueba.

siendo

Gobierno y

posible

armonizar opiniones

y contrarias también a la

rias a las ya dadas,

consultamos

enteramente

instrucciones

recibimos

entonces

al

contra-

misma convención.

So nos prevenía, entre otras cosas, «que era extravagante

pre-

el

tender los comisarios orientales que los perjuicios que tenían que

debían ser de la clase de aquellos

los ingleses y franceses

reclamar

Se nos decía también «que

que se refería la ley de 1853».

a

si

franceses e ingleses no habían reclamado cuando todos reclama-

los

era porque no querían

ban,

participación en

tener

escandaloso

el

ffaude que se había cometido entonces, ni la más pequeña parte en

Nosotros reclamamos con-

descrédito que era consiguiente».

el

tra estas instrucciones y entonces el Gobierno nos declaró cesantes.

El doctor Caravia I



ermanente



tomó

que también formaba parte de

la

palabra

en

seguida

primeras instrucciones expedidas por

las

mente

que se ajustaban a

las

decían esas instrucciones

harán por

se

oilas

es

de

la letra

una manera

Comisión que

el

Gobierno eran precisa-

la

ley.

«La convención



especial de procedimiento

ha creado para estos casos: en cuanto a las justificaciones

se

(lue



la

para demostrar

muy

teniendo

las

disposiciones legales vigentes

y

sobre todo

presente la ley de perjuicios de 14 de julio de 1853

que debe servir de norma a las decisiones de la Comisión.» Eso fcs

lo

que prevenía

el

Gobierno

Y

principio.

al

eso era lo que co-

rrespondía. «Había que recibir pruebas sobre justificación

que como

lo

establecen las leyes

cuanto a

en

prueba

la

el

modo

porque como he dicho

país,

del

antes inmoral sería establecer para ceder

de per-

y estas informaciones no podían verificarse de otro

jiiicios

extranjero un

testimonial

modo de del

distinto

establecido por las disposiciones vigentes para todos.»

pro-

que está

De acuerdo,

pues, con esas instrucciones que eran las legales, cada expediente

tenía que ser tramitado y sustanciado por

entonces a

Pero

el

llamado

a

el

Juez y pasado recién

Comisión mixta para su examen y resolución. Ministro de Gobierno y Relaciones Exteriores que fué la

dar explicaciones, contestó que

la

convención franco-ingl'j-

sa era anulatoria del procedimiento establecido por la ley de 1853;

que

el

primer pliego de instrucciones se desviaba de

y por eso había sido modificado; que ni

de

examinar ni juzgar la Comisión mixta,

la

el

la

convención

Juez de Hacienda no podía

prueba porque era un mero agente ejecutor

a quien realmente correspondía

examinar y

juzgar.

Tales eran los términos del debate. Las primeras Instrucciones habían sido dictadas de acuerdo con la ley y la convención. Una

572

HISTORIA DEL UBUGUAÍ

cosa era la sustanciación del expediente y otra cosa era la sentenLa comisión sólo podía ocuparse de lo segundo. Pero las Lega-

cia.

que tenían interés en atender todos los reclamos de sus reinvindicaban también lo primero, como medio de que no se formaran expedientes que a la fuerza tenían que dejar ciones,

connacionales,

constancia de los actos de favoritismo a que desde se entregaron.

primer mo-

el

mento

El asunto fué pasado a estudio de una subcomisión, expidió diciendo que

bada por

el

mal estaba en

la

convención de

la

cual se apro-

18-57

Asamblea, y que por lo tanto no había margen para dirigir observaciones al Poder Ejecutivo. Y su dictamen fué aprobado por la Comisión Permanente, quedando así los Ministros de la

Inglaterra y de Francia triunfantes en sus pretensiones y en situación de seguir avanzando hasta los extremos brutales que cul-

minaron bajo

gobierno de Berro.

el

Conver.sión de la l)ou
El precio de cotización

gún hemos

A

de

Deuda

la

visto alrededor del 1

ese precio llegó a incautarse

lidad de la deuda, y

Uruguay

ristro del

el

Consolidada

oscilaba

se-

de su valor nominal.

Vr

barón de Mauá de

la casi tota-

una vez dueño de la plaza arribó con en Río de Janeiro don Andrés Lamas

el

al

Misi-

guiente ajuste:

Renuncia

%

y del 90

del

95

7¿

de deuda fundada con 6

Para garantizar

puja.

nominal de

del valor

adicional del 2

'A

el

%

te

Deuda Consolidada

el

servicio de la nueva

deuda se crearía un

sobre importación, un derecho del 4 ^U sobre la sobre la venta de bienes terri-

'A

producto de esos impuestos sería entregado directamen-

encargado de practicar

el

pago de

los

fueran

Mauá

del

servicio.

entregadas el

En

el

mismo Banco

intereses y amorti-

zación y percibiría por tal tarea una comisión del

monto

saldo títulos

de amortización a la

por las oficinas recaudadoras al Banco Mauá. El

sería

el

el

%

de interés y 1

exportación y un impuesto del 4 toriales. El

la

de la Deuda Exigible, entregándose por

2

%

y

9^ sobre

caso de que las rentas afectadas no

semanalmente

derecho de hacer cesar

la

al

'

Banco,

tendría

el

barón

de

violación con ayuda del Gobier-

no Brasileño. El Gobierno, que estaba de perfecto acuerdo con su representante

en Río de Janeiro, pasó

Comisión de Hacienda de observaciones.

el

la

contrato a la Asamblea, y entonces la

Cámara de Diputados formuló

varias

Ó73

GOBIERNO DE PEBEIRA

En primer lugar que Mauá sólo concurría con 56 millones y que por lo tanto no se trataba de un arreglo general, sino de un arreglo parcial de la Consolidada. En segundo lugar que el Banco Mauá quedaba transformado en una verdadera oficina pública, que recibiría directamente las rentas afectadas y las administraría sin garantía de ninguna especie. En tercer lugar que se autorizaba la intervención extranjera para dar efectividad al contrato mediante «una cláusula repelente». Apenas publicado el informe de rigió

el

Poder Ejecutivo a

la Comisión de Hacienda se Asamblea para manifestarle que

la

dioí

proponente aceptaba todas y cada una de las observaciones forni'iladas, obteniendo con ello que el contrato marchara sobre rieles

ambas Cámaras.

en

La

1859 aprobatoria del contrato establecía que

ley de junio de

Mauá

concurriría

al

canje

con

de pesos

millones

80

nominales;

acordaba un plazo de cinco años a los demás tenedores de títulos para

concurrir

ventas oficinas

a

conversión;

la

inmuebles;

de

receptoras

a

eliminaba

suprimía

entregar directamente

Mauá; y eliminaba también

la

el

artículo

el

impuesto sobre que

las

obligaba

rentas

al

a

las las

Banco

cláusula relativa a la intervención

brasileña en caso de violación del contrato.

Hubiera podido formularse y atenderse otra observación más: ganancia considerable que realizaba Mauá vendiendo al Estado por cinco lo que había comprado por uno. Pero es lo cierto que si

la

,

Mauá embolsaba

fuertes

utilidades,

Uruguay conseguía

el

la

re-

gularización de una deuda cien veces millonaria que se arrastraba

por

el

suelo y constituía

Por otra parte, como Senado,

las

señalaban

la

leyes

la

un

factor de bancarrota y de vergüenza.

hacía notar

la

Comisión de Hacienda del

aunque no cumplidas, mensual de 60,000 pesos para intereses y

hasta

cantidad

amortización de

lo

entonces

vigentes,

Consolidada con monto circulante de 89.546,000

pesos y de 5,000 para

la Exigible que subía a 3.433,000, mientras deuda Fundada en que habrían de refundirse esas dos tendría un monto de 4.790,713 pesos y un servicio mensual de 28,744 asegurado por rentas especiales.

que

la

Al abordar

la

Cámara de Diputados

el

estudio de esta operación

Hacienda don Federico Nin Reyes la sorpresa y desaliento con que los senadores y diputados de la primera Legislatura constitucional habían oído la lectura del de crédito, recordó

el

^Ministro de

mensaje en que el Poder Ejecutivo denunciaba la existencia de una deuda de 200,000 pesos. Pues bien, agregaba: al empezar la

HISTORIA DEL rKUGUAY

574

Guerra Grande ya la República debía 8 millones, y lo que es ahora hablamos de 100 millones sin que nadie se alarme!

Quedó resuelto que

Fundada empezaría

de la deuda

servicio

el

a hacerse efectivo desde enero de 1860.

—trunca

Oficina de Crédito Público

La que

desde octubre de 1856 en

Gobierno Brasileño retiró su comisario

el

estaba reconocida y liquidada tados de

— había

1851,-

invocandjo

deuda de conformidad a

la

que ya tra-

los

dejado de funcionar desde fines de 1858 «por

haber terminado su cometido», decía

el

decreto que la suprimía del

escenario administrativo.

Una

tentativa anterior de consolidación.

Dos años antes de la aprobación del contrato Mauá, un grupo formado por los principales comerciantes y capitalistas de Montevideo

se

había

presentado

entregar

ofreciendo

cien

millones

de

pesos nominales de las deudas Consolidada y Exigible, a cambio de

contribución directa y del papel sellado y patentes durante 35

la

años, rescatables en todo '

en dinero efectivo del

7

momento por 7c

del valor

el

Gobierno mediante

nominal de

el

pago

deudas materia

las

de la operación. Los proponentes se obligaban además a prestarle

Gobierno 15,000 pesos mensuales en

al

se

establecerían

A

la

la

forma y condiciones que

en contratos especiales.

propuesta

iba

adjunta

una

con

planilla

las

siguientes

cifras:

Deuda Consolidada emitida

.

.

.

.

f

92.000.000

Reclamos en trámite, Deuda Exijiil)le Intereses de 1854 a 1892

ó. 000. 000

3.000,000 al 2 °



v al 3 °'

102.000.000 $

202.000,000

El papel sellado y las patentes daban al año alrededor de 240,000 pesos y la contribución directa 70,000. Deduciendo el 5 'f por con-

cepto de gastos de

recaudación resultaba un producto líquido do

año y de 10.307,500 en los 35 años. Pero esa propuesta no fué considerada, juzgándose

294,500 pesos al

sin

duda que

en momentos de tan intensa crisis financiera no era posible des^ prenderse de rentas como las del papel sellado, patentes y contribución

directa.

575

GUBltK.NO DE PEHKIRÁ

Otras deudas.

Haciendo uso de la misma ley de 1855 que había servido para crear la Comisión mixta franco-inglesa, el gobierno de Pereira ajustó con la Legación de Francia un acuerdo que fijaba el monto de los créditos reclamados por don Domingo Gounouilhou en 1.297,000 pesos y garantizaba su pago con cuotas mensuales extraídas de la renta aduanera. Un año después quedó suspendida la entrega de las

cuotas mensuales y habiendo ello dado lugar a debates parla-

mentarios

el

millón

cuarto

y

Ministro sólo

Batlle

declaró

había

desembolsado

a

Gounouilhou

de

20

ese

a

pesos!

2d,000

El Poder Ejecutivo presentó en 1855 a por

Cámaras que por

las

que se establecía que

el

la

Asamblea un proyecto

la

Junta de Crédito Público clasificaría

impagos desde 1853, constituyéndose con que estaría provista de un fondo amortizante de 10,000 pesos mensuales. La Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados limitó el proyecto a los suely liquidaría los sueldos

ellos

una deuda que

se llamaría Exigible y

dos de 1855 y su dictamen dio lugar a que uno de los oradores, don José 1852,

Palomeque, hiciera presente que

G.

los

sueldos

impagos de

alrededor de dos y medio millones

1853 y 1854 giraban

de

pesos.

En

1859

fué

instituida

por

Gobierno una Comisión

el

para

el

examen, comprobación y liquidación de los créditos contra el Estado, y refiriéndose a uno de sus cometidos decía el Ministro de la Memoria del mismo año: La Deuda hipotecaria clasificada por la extinguida Junta de Crédito Público y no convertida en Deuda Consolidada por haberse ne-

Hacienda en

gado a

ello

sus tenedores, pasa de

.3

millones. Existen otros 4 mi-

llones que se están amortizando desde 1856 y

fué presentado a la Junta de Crédito.

dedor de

6

diferida gira alre-

millones, sin contar los intereses devengados.

además dos 50,000

un millón más que no

La deuda

libras

medio millones

y

a



concluía

que se están pagando, nadie tiene mente, puesto que es moralización

y

La Comisión

el

uno y medio

Brasil,

En conjunto

Inglaterra.

«De esa inmensa deuda

al

la

el

a

Debemos Francia y

alrededor de 14 millones.

Ministro



culpa o todos

y de las otras

la

tienen igual-

producto de 25 años de desaciertos, de des-

guerras civiles.» clasificadora

que presidía

algunos interesantes detalles acerca de

don Tomás Villalba la

dio

manera desordenada y

HISTOBIA DEL UEÜGUAT

576

abusiva como se habían ido formando algunas ce las deudas que

más abrumaban en ese momento. Muchos de los créditos clasificados como hipotecarios



decía



ni tenían autorización legislativa ni Comisión en su informe afectaban realmente rentas que ya estaban hipotecadas, ni prove-

la

nían de préstamos efectivos

gobierno de

al

la

«En

Defensa...

ge-

neral provenían de bancarrotas, indemnizaciones, expoliaciones, conusurarios,

tractos

cias,

tal

cual

podían hacerse en aquellas circunstan-

sobre víveres, vestuarios, equipos, armamento,

gastos generales de administración

municiones y

como liquidaciones de sueldos

libradas profusamente sobre la cuarta parte de la renta de Aduana,

contratos

muy

usuales entonces no sólo por

por los posteriores...

Una suma muy

el

año corriente sino

crecida de

este

capital

es-

taba representada por títulos de los directorios que se sucedían en

posesión y administración

la

oue libraba reservado en

el

de

la

Aduana de Montevideo,

expe-

de órdenes por sueldos, pensiones y otros gastos

didos en virtud

Gobierno sobre producto de

el

ban sustituyéndolos por

la

títulos

la

dicha cuarta parte que se había

renta. Los directorios los amortiza-

suyos,

los

cuales

deberían ser cu-

biertos cuando estuvieran satisfechas otras órdenes anteriores;

que era

tal

profusión de estos libramientos

la

que ni

la

por-

cuarta

parte reservada en un año ni todas las de los años siguientes

canzaban

a

pagarlos.

Así es que puede estimarse por millones

guarismo que representan estas órdenes respecto de

las

al-

el

cuales se

como hipotecarias... La Comisión, por otra parte, ha tenido oportunidad de ver letras firmadas por un personaje que sólo era colector, sin poder encontfene la pretensión original de hacerlas pasar

trar en los registros de aquel

que

lo

tiempo decreto u orden provisional

habilitase para ejercer interinamente

el

cargo de Ministro.

Las letras tenían una nota puesta por un empleado subalterno del Ministerio de Hacienda que decía así: esta letra debía ser firmada por el señor Ministro, pero hallándose enfermo firma el actual. Este actual no era otro que el Colector de la Aduana, que no revestía el carácter de Ministro.»

La montaña

crecía

unas veces por efecto de las leyes que

conocían capitales no adeudados por

la

Nación,

como en

el

re-

caso

de los perjuicios de guerra, y otras por efecto del incumplimiento

de los contratos

como en

este

caso que

reproducimos de un

in-

forme parlamentario de 1857:

En 1834 fueron tranzados los pleitos entre el Fisco y la sucesión de don Francisco Alzaibar sobre propiedad de campos, mediante la

COBltUNO UE PliKEIKA

577

cantidad de 55,000 pesos en letras a diferentes plazos y del

6

De

anual.

'.<_

interés

al

esas letras sólo alcanzó a percibir la sucesión

Alzáibar dos mil pesos, resultando de ello que su crédito ascienda {¡hora por efecto de la

La

acumulación de intereses a 602,946 pesos!

í'nscñaii/a prijuarla.

Dando 1858

cuenta

estado

del

de

enseñanza primaria

la

d*ecía

en

Prebidente del Instituto de Instrucción Pública don Manuel

el

Herrera y Obes:

Comprende naturas;

programa de

el

escritura,

lectura,

doctrina

gramática castellana, geografía de

República,

la

más

ciones de geometría en sus aplicaciones

cosmografía y de

numerosas

las escuelas públicas

aritmética,

asig-

moral,

cristiana,

dibujo lineal, no-

usuales,

ideas de la

geografía general, historia de la República y

la

Constitución. Pero este programa sólo se cumple en la escuela de

Universidad y en alguna otra más. «En

la

el

resto la enseñanza

reducida a lectura, escritura, doctrina cristiana, principios de

et-tá

aritmética

de gramática

y

castellana»,

por

efecto

de la falta de

maestros.

Don Manuel Herrera

y Obes, que era a la vez Rector de la Uni-

versidad, agregaba al reproducir ese párrafo en su informe anual

a

Sala de Doctores, que era urgente reaccionar contra

la

y que había que ampliar los programas mediante de la enseñanza industrial. Ministro

El

Memoria de acerca de cursos la

uniformar

enseñanza en

E

trial.

mismo año

la

los

del

mal

procuró en su

interesar la atención de la

Asamblea re-

planes y sistemas de enseñanza, difundir

campaña y crear

escuelas de enseñanza indus-

insistiendo acerca de algunos de estos temas decía en su

Memoria de 1859: «El programa que hoy tenemos para la?

Díaz

el

incorporación

necesidad de pagar bien a los maestros, adquirir

la

fijos,

Gobierno general Antonio

de

ese

la

Estado sería

suficiente

la

para llenar

enseñanza en los

objetos

las

escue-

de la edu-

cación primaria que tanto importa fomentar; pero nos faltan maestros

para desempeñar

todas las

que se han

establecido;

y para

tenerlos es indispensable dar a esa profesión la importancia y la

consideración con que es mirada en todas las naciones civilizadas: tener recursos fijos para pagarlos con puntualidad y para atender

con

la

misma

exactitud a los

de las escuelas.» IV -37.

demás gastos que demande

el

servicio

HISTORIA DEL URUGUAY

578

«Debo también en

establecer

por

ellos

c:ue

necesidad de

sobre la

de enseñanza industrial

escuelas

La población de

sostenidas

muy

poca y aundesean trabajar nunca podrán hacerlo con provecho si

Estado.

el

vuestra atención

llamar país

el

por ignorancia no conocen

hijos del país es

más que los medios comunes de más indispensables de la

satis-

facer con dificultad las necesidades

Apremiado por

la

crisis

financiera gestionó y obtuvo

el

vida.»

mismo

Ministro que los maestros de las escuelas públicas de Montevideo

quedaran .bajo la inmediata dirección y cuidado de las Juntas decía el decreto resEconómico- Administrativas, «principlmente





pectivo

en lo que se relaciona con los sueldos y gastos consi-

guientes».

En

reglamento que con

el

tal

motivo redactó

Junta

la

estable-

cíase que las Comisiones Auxiliares ejercerían la vigilancia de las

escuelas situadas en sus respectivas jurisdicciones, que los exáme-

nes tendrían lugar bajo la presidencia de las mismas Comisiones

en diciembre de cada año, empezando precisamente «en los

Santos

Cura

el

día de

que a los exámenes serían invitados padres de los alumnos; que en enero

si-

pasando luego

los

Inocentes»;

párroco y los

fiuiente tendría lugar la distribución de premios,

alumnos premiados «para agradecerle

la

al

domicilio

del

Presidente

de

la

República

munificencia nacional».

Pocas semanas después de haberse hecho cargo del pago de íHieldos

y gastos,

escuela en

Por

el

estas

el

los

hacía saber la Junta que había establecido una

Paso del Molino y otra en el Reducto. iniciativas puede formarse idea del extraordinario

abandono en que estaba la enseñanza primaria. En el Cerro había una escuela de varones que recién empezó a funcionar a principios de 1859. En la Unión funcionaban una escuela normal y primaria a cargo de don Juan Manuel Bonifaz y una escuela de niñas. En el Cordón había una escuela de varones y otra de niñas. En 3a Aguada, una de varones y otra de niñas. Y nada más en todos jOS

alrededores de la ciudad vieja.

Hemos hecho

referencia a

prestigioso de los maestros

don Juan Manuel Bonifaz, de las escuelas públicas de

el

la

más

época,

valgan estas dos notables opiniones que reproducimos de «El Iris» de

1864:

«Aquí tenemos muchos doctores, muchos poetas doctor

Florencio Várela hablando

de

la

legión

congregados en Montevideo desde los comienzos de de.

— Pero

sólo

— señalaba

un hombre

educación de nuestros hijos».

a

Bonifaz

—a



exclamaba

el

de intelectuales la

Guerra Gran-

quien confiar

la

GOBIERNO DE PEBEIRA

.



«El sistema del señor Bonifaz

de su «Método de lectui-a» ra eficacísima ejercicios

en

el

— es

el

579

escribía Sarmiento al ocuparse

primer paso dado de una mane-

método de enseñar gradualmente

a

con

leer,

preparados para cada combinación de sílabas, y

ins-

la

le debe un inmenso servicio. Lo que yo he hecho no es más que una aplicación de aquella invención, qu-e

trucción primaria desipués

me

hago un deber en encomiar».

Los alumnos de la escuela de varones de la Aguada fueron minados en 1859 de acuerdo con un programa que comprendía trina fía

cristiana,

lectura,

gramática,

escritura,

de la República, Constitución

aritmética,

exadoc-

geogra-

historia sagrada. El acto tuvo

e

lugar en la Iglesia, con asistencia de 98 alumnos de los 105 que figu-

raban en

la

matrícula.

Parte del vacío existente en la enseñanza primaria de Montevideo era llenado por

la

Comisión de Beneficencia de Señoras y por

Sociedad Filantrópica.

la

La Comisión de Señoras, dependiente de inició sus tareas en 1856

mediante

niñas, en la que inmediatamente ingresaron

después hacía constar nistrativa en su

el

alumnas.

62

Un año

Presidente de la Junta Económico-Admi-

Memoria anual que esa Comisión de Señoras que

presidía doña María Antonia Agell

cación

Comisión de Caridad, una escuela de

la

instalación de

la

de Hocquard, costeaba la edu-

de 220 niñas con ayuda de una suscripción

popular:

cien

de ellas en la escuela central y las demás en distintos estableci-

mientos escolares subvencionados.

La Sociedad Filantrópica organizada durante bre amarilla de

18-57

para combatir

el

flagelo

epidemia de

la

fie-

y prestar ayuda va-

liosa a la población de Montevideo, estableció a

principios de 1859

una escuela con destino principalmente a los niños que habían, quedado desamparados por efecto de la epidemia. Esa escuela que fué puesta bajo la dirección de don Jaime Roídos y Pons contaba finalizar

al

el

año con 120 alumnos.

Tales eran las corporaciones que ayudaban a la

Junta Econó-

mico-Administrativa, tan exhausta de recursos, a realizar una par-

mínima

te

del

programa que

ella

esbozaba a la Jefatura de Poli-

cía en 1857, al estudiar la situación las calles de

Montevideo.

«Bien querría la Junta las



de los niños que vagaban por

decía en su nota



establecer escue-

primarias de artes y oficios y dedicar atención a este ramo im-

portante de su

resorte»;

pero careciendo absolutamente de los

-cursos necesarios se ve obligada a pedir a la Jefatura

re-

que de acuer-

HISTORIA DEL URUGUAY

58U

do con

Juez de Menores cite a los padres, tutores o encargados

el

de los niños malentretenidos y los amoneste por su desidia y abandono, todo ello mientras no sea posible instalar una escuela correccional de niños con su taller de artes y oñcios.

Peor debía ser naturalmente

el

estado

de

la

enseñanza pública

en campaña. De los informes, correspondencias, actas y demás publicaciones de la época, extraemos los datos que siguen:

El Salto tenía

al

finalizar

el

año 1858 una escuela pública de San Eu-

niñas con 70 alumnas, y dos de varones, una de ellas en

genio con 25 alumnos, y una escuela particular mixta con 14 varo-

y

nes

30

niñas.

Contaba

además

con

el

Colegio

Humani-

de

dades de don Pedro Andreu, que tenía una sección de enseñanza primaria y otra de enseñanza media a las que concurrían 130

alumnos, que en 1858 fueron examinados bajo un programa comprendía lectura, escritura, gramática, aritmética, geografía

quie as-

tronómica, física y política, teneduría de libros y francés.

Canelones tenía entre establecimientos públicos

particulares

y

escuelas de varones, dos de niñas y un curso de latinidad.

tres

En Tacuarembó funcionaban

dos escuelas públicas, una de vaalumnos y otra de niñas con 44. Advertía la Junta Económico-Administrativa en la nota de donde extraemos estas cifras, que en 1858 se adeudaba a los maestros 10 meses de sueldo. Una Sociedad de Beneficencia de Señoras mantenía con el con-

rones con 71

curso de

la

Junta y de

la

Policía otras dos escuelas en las fron-

teras del departamento.

En Cerro Largo había cuatro escuelas públicas: dos de ellas en Meló y otras dos en Artigas. Estas últimas tenían según una comunicación de la Comisión Auxiliar, 32 varones y 46 niñas. En la escuela de varones se enseñaba escritura, lectura, aritmética, gramática, geografía general, geografía de la República, Constitución

y doctrina cristiana.

La escuela de niñas estaba bajo

ción de una Comisión de señoras, «que había alquilado

para

tilla

las

largas

el

transporte de 15 alumnas» que no podían

distancias.

principio por

Los sueldos de

los

ir

inspec-

la

una

carre-

a pie por

maestros se pagaban

al

Las

la-

bores de las niñas, expuestas en los exámenes de 1858, fueron

re-

matadas por fué donado a

En

el

el

vecindario y luego por

el

Tesoro público.

Comisión de Señoras, y su producto de 172 pesos la Comisión de Caridad de Montevideo. Departamento de la Colonia funcionaban a fines de 1856 la

seis escuelas públicas, cuatro de

varones con 120 alumnos y dos de niñas con 60 alumnas. Dos años después el número de los estable-

f;or?iEHNo

cimientos públicos había bajado a y dos de niñas con

En San

pereira

Di:

ó,

581

tres de varones con 82

alumnos

60.

José existían en 1858 tres escuelas públicas y seis par-

una inscripción total de 159 varones y 214 niñas. una sola escuela pública con 25 niños y dos escuelas privadas una de varones con 28 inscriptos y una de niñas ticulares con

Florida

con

tenía

16.

En Paysandú funcionaban

tres escuelas de varones,

con 74 alumnos y dos particulares con Tira pública

En

el

una pública

y dos escuelas de niñas,

40,

con 47 inscriptas y otra particular con 21. públicas, una de varones con

Durazno había dos escuelas

50 inscriptos y otra de niñas con 49.

Son

cifras de

las

extrema pobreza, que demuestran que nuestras

po-

abandonadas por efecto de estrecheces financieras que acentuaban de año en año las revo-

blaciones

rurales

estaban

luciones y los errores

totalmente

período de formación que

del

vamos

reco-

rriendo.

De vez en cuando era turbado

angustioso ambiente de esos

el

la prensa.

maestros rurales por graves denuncias que repercutían en

Don Melitón González

concretó una de ellas en 1859 desde las co-

lumnas de «El Comercio

del

Plata».

Pública se apresuró a estimular

Crimen, previa

la

la

El

Instituto

acción

sustanciación legal,

pública,

dictó

Y

el

y

Instrucción el

Juez del

sentencia condenando

denunciante a nombre de los principios de

al

satisfacción al magisterio.

de

justicia,

a dar

señor González declaró en

el

una acto

que sus Informes habían sido erróneos.

La

ens4Ȗanza miivei-sitaria.

Al empezar los cursos de 1856 publicó sidad don José G. lados,

del

el

Secretario de la Univer-

Palomeque un cuadro de

los

alumnos matricu-

que resultaba que en las clases, de enseñanza primaria

había 161 inscriptos y en las de enseñanza secundaria y profesioEn conjunto 351. He aquí cómo se distribuían los últimos:

nal 190.

Aula

de

jurisprudencia,

alumnos. Aula de

filosofía,

catedrático catedrático

doctor doctor

Tristán Plácido

Narvaja, Ellauri,

9

40

alumnos. Aula de físico-matemáticas, catedrático doctor Adolfo Pedralbes, 42 alumnos. Aula de latín, catedrático don Pedro Giralt, 42

alumnos. Aula de química, catedrático señor Lenoble, 20 alumnos.

HISTORIA DEL UBUGUAT

582

Aula de francés, catedrático señor Gounouilhou, 23 alumnos. Aula de Inglés, catedrático señor Morador, 14 alumnos. Al finalizar los cursos rindieron exámenes parciales 85 alumnos,

examen general de

bachiller 7

alumnos y examen general de

doc-

10 alumnos.

tor

Bajo

presión de las angustias del Tesoro público

la

el

Gobierno

un decreto a mediados de año estableciendo una matrícula de

dictó

40 pesos pagaderos la mitad al tiempo de la inscripción y la otra

mitad

tiempo de

al

exámenes, cuyo producto debía ser prorra-

los

teado entre los profesores a cuenta de sus sueldos; pero le Pereira

su mandato, invocando que había dificultado

En

el

Presiden-

derogó ese decrto pocos días antes de la conclusión de el

ingreso a las aulas.

derecho de matrícula se restableció

sustitución del

el

de gra-

dos universitarios que había dejado de cobrarse desde 1856.

A .

mediados de

18-58 tenía la

tribuían así según

Obes a

la

Sala de Doctores:

temáticas, 16;

latín,

Universidad 209 alumnos que se

dis-

informe del Rector don Manuel Herrera y

el

Jurisprudencia, 11;

química,

7;

3;

filosofiía,

idiomas vivos, 18;



3;

ma-

instrucción



Iñl. Nótase ag-regaba el Rector «una sorprendente y alarmante disminución» por efecto de la epidemia del año ante-

primaria,

de

fior,

la

revolución de principios de año y de los derechos de

matrícula.

Al año siguiente volvía a dirigirse Doctores, con acento

más pesimista

el

doctor Herrera a la Sala de

todavía.

«Tal como hoy existe la Universidad

va

el

propia destrucción...

decía



apenas conser-

Las aulas son cursadas por 16 alumnos

derecho, 9 en filosofía.

9

mica y 26 en idiomas

vivos.

la exactitud

y verdad de

en matemáticas, lo

Ck)nfeTencias de extensión

La Universidad de derecho

civil,

9

en latinidad,

7


en quí-

Estas cifras bastan para mostraros

que os dejo dicho.»

univei'.sit.aria.

inició a fines de 1859

una

serie de conferencias

de filosofía y de química a cargo de los

mismos

Las conferencias eran públicas y tenían lugar todas semanas. Uno de los alumnos actuaba como conferencista y loa

estudiantes. las



nombre y no hace más que prestar fuerza y medios para su

demás ampliaban o replicaban.

^83

GOBIERNO VE PEKEIRA

La

Univt'i'sitUul

Menor.

El Colegio Nacional -que después de la Guerra Grande fué trasladado a la villa de la Unión, quedó erigido por decreto de febrero de 1856 en Universidad Menor de la República.

Dio lugar ese decreto a una interpelación de la Cámara de Diputados, en la que sostuvo el orador interpelante que el Poder había invadido atribuciones privativas de la Asamblea.

Ejecutivo

Persuadido también de

anunció

ello

Ministro que volvería

el

so-

bre sus pasos, previo informe del Consejo Universitario. Pero durante varios meses siguió funcionando la Universidad Menor bajo el

siguiente plan de estudios según la matrícula de 18.57:

Instrucción primaria, latinidad, teneduría de libros, francés, filosofía,

glés,

quitectura,

En

el

historia

y geografía,

esgrima.

música, gimnástica,

dibujo,

mismo año

rindieron

in-

matemáticas, agrimensura, ar-

examen general de preparatorios

va-

alumnos y eso dio mérito para que el Rector de la Universidad dirigiera una nota de protesta al Ministerio de Gobierno. Para decía no resulte «una visible farsa», es neque la enseñanza cesario que la Universidad Menor suspenda en el día sus funciones rios





literarias

tomar

Y

y que

los

alumnos

ocurran

a

la

Universidad

^Mayor a

los grados.

recién entonces volvió

el

Colegio Nacional

al

rango subalterno

que tenía antes del resonante decreto.

Planes do reorganización universitaria. la Asamblea el Ministro de vasto plan de reorganizaun Gobierno general don Antonio Díaz

En

su

Memoria de

18.59

propuso a

por ción universitaria, que no alcanzó a tomarse en consideración época. la de financieras eschecheces las

La Universidad



según ese proyecto



debía abarcar toda la

República: la primaria, la industrial, la secundaria, la científica y la profesional. La enseñanza primaria comprendería las mismas materias ya incorporadas al Reglamento del Ins-

enseñanza de

tituto de

la

Instrucción Pública. La enseñanza industrial comprende-

ría agricultura, praderías y jardines, hortalizas, huertos, ganadería,

economía

rural, legislación y contabilidad rural, artes

y

oficios.

La

profesional se daría en las Facultades de ciencias exactas, de teología,

de derecho

cirugía.

civil,

de leyes y ciencias políticas, de medicina y

HISTORIA DEL URUGUAT

584

Esta última había sido ya objeto de dos representaciones: una el Senado en 1856 suscripta por varios ciudadanos que pedían

ante

planteamiento de una cátedra de medicina y cirugía;

el

ante

otra

y

Gobierno en 1858 suscripta por don Cándido Irazusta para

el

planteamiento de una escuela de medicina sobre la base de una

el

subvención de 300 pesos mensuales.

La enseñanza secundaria

privada.

El Colegio de los Padres Escolapios que dirigían don Pedro Giralt

y don Joaquín Riba, tenía

programa de

es-te

sección:

I."

los

amplio plan de estudios que revela

el

cursos de 1S57:

gramática castellana,

religión, lectura, escritura,

arit-

mética, historia sagrada, nociones de historia y geografía.

Gramática castellana

2."

analítica,

como introducción a

mas, poligrafía, caracteres dé adorno para tas

y

libros,

arbitraje,

idio-

los

rotulación de

la

cuen-

aritmética mercantil, teneduría de libros, cambios y

derecho mercantil, geografía

correspondencia

fabril,

co-

mercial, idiomas francés e inglés.

Matemáticas,

3."

náutica,

agrimensura,

latinidad,

literatura,

di-

bujo y música. El Liceo Montevideano que dirigían don José María Cordero y

don Cayetano Rivas complementó su programa en 1856 mediante

una «Sociedad de Buenos Modales», a base de tei'encaminadas a difundir «la práctica del trato fino y atento».

la instalación de

tulias

'Comentando esa

iniciativa,

decía

«El

Comercio del Plata»:

«Una sociedad presidida por gente que merece blica,

maneras de

los

debe llamar

mucho

por

y

pú-

confianza

puede tener una trascendencia

niños, la

social

las

que

atención de los padres que hacen sacrificios

buena educación de sus

la

los

la

que tiene por objeto distraer instruyendo y cultivando

hijos. Ella

es la llave del porvenir

primeros gustos deciden casi siempre en

la

vida de las

ca-

hombre. La educación solitaria, claustral, austera y preocupada engendra en el espíritu tendencias que no se olvidan, lidades

del

y de ahí muchas de esas pasiones rencorosas y algo salvajes que tanto

han dominado entre nosotros. Por

trato de los niños entre s

FU

sí,

el

contrario,

desempeñar en la buena sociedad el digno rol que Entre los colegios extranjeros se destacaba por

programa y

la

seriedad

el

roce,

el

dará gente culta, sociable y dispuesta

de su

dirigida por don Guillermo Rae.

disciplina

la

le

la

corresponda».

amplitud de

escuela

británica

58ñ

rORIEUNO HE PFRRTRA

Fuera de la Capital funcionaban el Colegio de Humanidades de don Pedro Andreu en el Salto, el Colegio de los Padres Jesuítas en la villa de Santa Lucía, y el curso de latín y matemáticas del pre?bítero don ¡Manuel Francés en Canelones. El Coleo-io de

Humanidades

tenia su asicnf» en el

escuela pública y funcionaba bajo

la

prnteccióu de

la

local de

.Innta

una

Rconó-

mico-Administrativa del Salto y de la -Sociedad Amistad y Progreso». En 1856, dos años después de su instalación, contaba con 111 ahunnos externos e internos, incluidos los de enseñanza primaria, y su

programa comprendía:

lectura,

escritura, aritmética,

gramática, geometría filosofía, álgebra, teneduría, doctrina cristia-

año siguiente subió el numere programa de enseñanza fué ampliado taquigrafía, el comercio y las matemáticas

na, música, geografía y francés. Al

de sus alumnos a 132 y

con

el latín, el

dibujo, la

para la práctica de

el

agrimensura, dando

la

realizar gestiones tendientes a obtener

menes por

la

I'^niversidad

el

ello base al director

para

reconocimiento de los exá-

de Montevideo.

El Colegio de los Padres Jesuítas de la

empezó a funcionar en 1856 a

raíz de

villa

un decreto

de Santa

Lucía

del gobierno de

Pereira que reconocía como universitarios sus cursos siempre que los

exámenes fueran presididos por delegados de la Universidad y Dejó de funcionar al año siguiente, dando

profesores del Colegio.

con ello lugar a un nuevo decreto por

el

cual

se

restablecía

el

colegio y se autorizaba a los jesuítas para fundar otros estableci-

mientos análogos en

Para librarlos de toda traba,

la Repiiblica.

se

acordaba a sus profesores «la más absoluta libertad de enseñanza y

la

completa independencia de todo cuerpo literario». Una sola el decreto: que los alumnos que aspirasen a

limitación establecía

grados universitarios quedaban obligados a rendir todas las pruebas exigidas por los estatutos oficiales.

Los cursos de latín y matemáticas del presbítero don Manuel Francés empezaron a funcionar en 1859 por iniciativa de la Jefatura de Policía. Al finalizar

el

año rindieron sus alumnos examen

con resultado satisfactorio.

La enseñanza pública El tegrún

«>u

185Í).

año 1859 fué de verdadera lo

zada publicación

Wonner

crisis

para

la

enseñanza pública,

revelan estos datos de la «Guía de Montevideo», autori-

de la

época que

dirigían

los

señores Horne y

HISTORIA DEL UBrGUAT

586

En

Universidad sólo funcionan 7 cátedras:

una de derecho Academia de Jurisprudencia, una de matemáticas, una de filosofía, una de química, una de latín, una de inglés y una de francés. ÍLa las

la

criminal complementada por

y

civil

enseñanza pública

primaria

en la Aguada, dos en

la

hállase

reducida

Cordón y dos en

el

la

a

Unión.

dos

escue^

En cambio

funcionan 38 escuelas privadas. Otros datos interesantes de

la

Horne y

estadística de los señores

Wonner

En

los

registros

37

abogados,

época j

profesionales 32

médicos,

de Montevideo 60

figuraban

agrimensores,

5

en

esa

arquitectos

y

escribanos.

9

La

Biblioteca Nacional tenía 6,000 volúmenes.

Un amplio programa de

solidaridacl americana.

Don Andrés Lamas, fundador fico de Montevideo,

del

propuso en 1856

Instituto Histórico al

y Geográ-

Instituto Histórico y Geo-

gráfico del Brasil de que era miembro, la fundación de una «asociación científica y literaria sudamericana para el estudio de las

siguientes

materias:

Arqueología,

de colonización Mii^eralogía,

Etnografía indígena. Etnografía europea con fines

americana,

Numismática,

Meteorología,

Geología,

Botánica, Zoología, Geografía física, política, histórica,

industrial y comercial. Biografía sudamericana. Bibliografía crítica.

Dividiríase la

fueran

los

Asociación proyectada

en tantas

secciones

como

Estados americanos que concurrieren a su sostenimiento

y su Junta directiva publicaría una revista bajo

el

título de

«Ana-

de la Asociación Científica y Literaria de Sud América».

les

Re::pondiendo seguramente a la iniciativa del doctor promovió en ese mismo año el general Mitre la fundación

Lamas, del Ins-

tituto Histórico Argentino.

Administi'ación

de

justicia.

Organizmción de Juzgados y Tribu-

nales.

La Legislatura de trados: tes

1854 elevó a cinco

el

número de Juzgados Le-

dos de ellos con asiento en Montevideo y los tres restan-

en Maldonado, Colonia y Paysandú, con jurisdicción sobre los

demás departamentos de campaña.

CiOBXEUXO

Los

Juzgados

tres

«Pero

ele

la imposibilidad

Üh.

PEREIRA

campaña quedaron

587

instalados de inmediato

de atender con regularidad

al

pago de suel-

dos y a los gastos necesarios para la seguridad de los presos decía

Ministro de Gobierno en su Memoria de 1856

el





hizo que

dos de esos Juzgados quedasen en acefalía. El Juez Letrado de la es

(Bolonia

único que

el

mismo Juzgado

permanece en

su destino,

abogados y graduados nombrados para

los

pero en ese

no haber aceptado reemplazar al que re-

falta el defensor de oficio, por

nunció.» el fracaso la Cámara de Diputados sancionó en un nuevo plan de cuatro Juzgados Letrados con asiento en Montevideo para el despacho de todos los asuntos civiles y cri-

Aleccionada por

1856

minales del

creyendo en la

el

Asamblea para expresarle

se dirigió a la

de abogados

falta

al

principio por

conveniencia de la

creada por la ¡ey de 1854. Pero

ción

la

Ese plan fué resistido

país.

que continuaba

en situación

de

ir

el

Senado

descentraliza-

Tribunal de Apelaciones la

dificultad que creaba

a los

departamentos, y

entonces desaparecieron las dudas y fué votada la reforma.

De acuerdo con

ella

dos de

los

Juzgados

atenderían

de Montevideo y Canelones, y los otros dos lor

tos

del

los

ayudados en sus tareas por un Fiscal de lo Crimen y por un Fiscal de Gobierno y Hacienda. Otra

campaña,

la

del

tada en

así

Civil y

ley dic-

separó las causas civiles de las causas criminales,

1859,

operando

asun-

resto de

una división

del trabajo que la experiencia señalaba

con urgencia.

En tres

1858 pidió

medio

el

Poder Ejecutivo a la Asamblea que redujera a del Tribunal de Apelaciones, como

número de miembros

el



restantes

decía en su Mensaje «sin

así lo resolvió

gravamen para en

el

— el

curso de ese

de aumentar

Tesoro público».

mismo

sueldo

el

Y

la

de los

Asamblea

año.

Gobierno derogaba el decreto-ley de 1854 que había suprimido el Juzgado de Comercio creado en 1838 y reinstalado el Tribunal Consular que funcionaba anteriormente. Invocaba el Poder Ejecutivo, como fundamento de su medida, la necePoco después

el

uniformar y armonizar la legislación dentro de cuyos modernos engranajes no encajaba ya la institución del Consulado. Era una razón atendible, sin duda alguna, pero con destino a una ley y no a un decreto administrativo como el que se sidad de

dictaba.

HISTORIA DEL URUGUAY

588

Destitución del Tribunal.

A

raíz de Quinteros y bajo la influencia de los sucesos políticos

que acababan de tener ticia

epílogo de sangre,

su

allí

Pereira dictó un decreto por

a la sazón

que funcionaba

liembre de 1853 por efecto de

y reponía al

la

cargos a

La 1858

la

Gobierno

el

lo

gobierno de

derribado

revolución contra Giró.

taba en situación de reanudar tareas de inmediato

dido Joanicó y

el

cual disolvía el Tribunal de Jus-

el

el

en

sep-'

Sólo es-

doctor Cán-

repuso dejando vacantes los demás

espera de los nombramientos que hiciera la Asamblea.



decía el decreto de febrero de Cámara de Justicia emana «del derrocamiento revolucionario e injustificado

actual



en 1853». Es un

de los legítimos magistrados que la constituían tribunal de hecho



agregaba



que ha perdido con sus procedi-

mientos inmorales la consideración pública.

Habían pasado ya cinco años (jue

el

del

derrumbe de

Giró. El Tribunal

gobierno de Pereira consideraba como de hecho había sido

las Legislaturas subsiguientes, y era simple decreto administrativo se hipor un wna monstruosidad que

respetado

mantenido por

y

ciera tabla rasa de la magistratura existente.

que habían resuelto solidarizarse con la no sólo designaron a los demás ministros que debían acompañar al doctor Joanicó, sino que resolvieron aplaudir el singular decreto y así lo hicieron al redactar la minuta de Pero

los

legisladores

octitud

del

Presidente,

comunicación

al

mensaje de apertura de

las sesiones ordinarias

de

Asamblea. Véase en qué forma: «El Tribunal de Apelaciones separado por V. E. no llenaba de condiciones ni el objeto de la ley. La necesidad de cierto las ia

constituirlo

debidamente era de todos sentida y

reclamada

y

la

Asamblea ha visto con satisfacción la reposición del ciudadano don Cándido Joanicó, cuya ilustración y rectitud son notorias.» ¡Con igual título pudo el Gobierno reponer al Presidente Giró y a la Asamblea de 1853!

RoslaiiK'ito

«'<'

•«

AdiuinistiaciíVn

<1«'

Justicia.

El Reglamento de la Administración de Justicia votado en 1853 quedó en suspenso al año siguiente por efecto de un decreto del gobierno de Flores. Devuelto por tal causa al Cuerpo Legislativo, fué sancionado por segunda vez en 1856. Ese Reglamento

COBIEIíNO DE PEREIBA

589

formaba parte integrante de una ley orgánica presentada por el doctor Eduardo Acevedo a la Legislatura de 1852. Por otra ley de 1856 la Asamblea puso en vigencia el «Manual ce

Procedimientos de

los

Jueces de

tuaba en

campo

el

El Código

sitiador durante la

obra del mismo juris-

Paz»,

consulto redactada en 1849 con destino a

magistratura que

la

ac-

Guerra Grande.

Cíestiones pai-a su sanción.

Civil.

El doctor Pedro Bustamante presentó en 1856 a la Cámara de Diputados de que formaba parto una moción tendiente a obtener que fuera sancionado el Proyecto de Código Civil del doctor

Eduardo Acevedo <>sobre todas las materias cnin prendidas desde su segundo libro inclusive' Quedaba excluido de esa moción el libro primero, el libro que establecía que las partidas del. estado civil debían ser asentadas en registros a cargo de los Jueces de Paz;

que

el

matrimonio era un

contrato de derecho natural cuyas formas se determinaban exclusi-

vamente por

el

derecho

sin perjuicio de la consagración reli-

civil,

giosa a que quisieran someterse los contrayentes: nio debía celebrarse ante trayentes;

que

la

filiación

se probaba por las

civil;

que ningún párroco podía proceder a

ciales

sin

monio

que se hubiera hecho constar

civil;

que sólo

para fallar en

las

los

que

el

matrimo-

Juez de Paz del domicilio de

el

relativas

las

bendiciones

celebración del

la

eran

tribunales civiles

reclamaciones

los

al

con-

partidas del estado

los

estado

nup-

matri-

competentes de

las

per-

sonas.

Todo eso debía quedar segregado para facilitar la sanción Código, empantanado por las influencias clericales.

del res-

to del

el

Al abrir las sesiones ordinarias del año siguiente decía también Presidente Pereira en mensaje refrendado por -el Ministro de

Gobierno doctor Joaquín Requena refiriéndose a reducir a un libro nuestro Derecho Civil:

la

necesidad

de

«El Código Civil redactado por el doctor Acevedo es ese libro que hará popular el conocimiento de los derechos y de los deberes

de los particulares en sus relaciones de la vida social... El Poder Ejecutivo pasó en años anteriores ese Proyecto al dictamen de una comisión de jurisconsultos, pero cualquiera que sea el estado de sus trabajos someterá

el

Proyecto a vuestra deliberación para

que sea sancionado.»

La prensa trabajaba en

el

mismo

sentido.

HISTORIA DEL "DRUGUAT

590





decía el doctor Miguel Cañé «Ese Código redactor de «El Comercio del Plata» como el Código napoleónico, como el prusiano y muchos otros calcados más o menos sobre el que lleva el nombre del gran hombre de este siglo, puede ser considerado como la



última exposición de

ciencia y de la sociabilidad del siglo

la

XIX.

Sin variar la base de la razón y de la justicia que es eterna y propiedad de todas las sociedades humanas, el Código Francés ha

traducido a los negocios de la vida práctica las especulaciones de filosofía y

la

hecho de

ellas

verdades y casos que se realizan dia-

riamente. El Código del doctor Acevedo no es una invención, sino

una

aplicación,

como

y

tal

debe consultarse

si

el

país

a que se

aplica se encuentra o no en estado de recibir las innovaciones que se pretende establecer y si ellas

costumbres, análisis tarle

su

a las

que

creencias

toca

le

hacer

o al

pueden implicar un ataque a

Cuerpo

para que tenga

sanción,

hábitos

los

dominantes. Tal es

Legislativo

fuerza y

la

la

las el

antes de pres-

autoridad de la

ley.»

«Ese trabajo



agregaba en otro editorial



calcado sobre

el

Código Francés, sufrirá sin duda contradicciones y acaso modifiQaciones en la discusión; pero vencerá por su buen método, por claridad

su

y por la evidente bondad de los principios que con-

tiene.»

La Cámara de Diputados sanciona La Comisión de Legislación de que formaba parte

el

el

la

Proyecto de Cótligo

Cámara de Diputados, de

primeras sesiones ordinarias de 1857. Pedía que

Código en

el

Proyecto fuera sancionado en globo, a libro cerrado.

«Debe tratarse las

la

doctor Mateo Magariños Cervantes, despachó

el

las

Civil.

de no

malograr

aquel trabajo,

exponiéndolo a

contingencias de una discusión prolongada y enfadosa, para la

que no siempre están habilitadas las Asambleas Legislativas». El Congreso de Chile sancionó en esa forma el Código Civil redacpor don Andrés Bello después del examen practicado por una comisión de abogados. Y el Código Francés no habría alcanzado a regir sin el inmenso ascendiente que ejercía Napoleón sobre

tado

todos los que estaban llamados a dictarlo.

Eso decía la Comisión con el aplauso de Sarmiento en «El NaBuenos Aires. en «El señor Acevedo decía el ilustre estadista argentino medio del estruendo de los combates había hecho esta grande obra

cional» de





CíOBlKKNO DE PEBEIRA

legislativa

sipaba

la

591

que presentó a su país cuando por un momento se diagregaba refiliumareda.». «Igual procedimiento .



.

riéndose a la votacióía en block



habrá de adoptarse luego con

Comercio, obra de

nuestro Código de

mismo señor Acevedo ayudado

por

el

la

asidua

contracción

del

actual Ministro de Gobierno

y que se halla en prensa ya.»

discusión

Puesto en

dictamen de

el

Comisión

la

de

Legisla-

produjo un largo y ardoroso debate en torno de las disposiciones fundamentales del libro primero. El diputado La Banción,

se

dera,

invocando que

matrimonio era un sacramento y que su

el

Juzgado de Paz constituiría una ofensa a la religión católica, hizo moción para que la Cámara prestara su voto al Código «en todo aquello que no se opusiera directamente a la celebración en

el

legislación canónica relativa al matrimonio».

Otro diputado pidió

según de

el

cual

derechos

los

modificación del artículo 81 del Proyecto,

la

«un extranjero se tendría por domiciliado, gozaría

las cargas de los

civiles

sin

naturales,

nes raíces en la República, poblada,

si

ejerciera

si

si

oficios

En

vendiera por menor».

y quedaría sujeto a todas adquiriese por cualquier título bie-

excepción

habitase en ella diez años con casa

mecánicos

o

tuviera

tienda

en

que

su lugar propuso que se dijera «un ex-

tranjero se tendrá por domiciliado y podrá gozar de los derechos civiles sin excepción,

quedando (u

gas de los naturales,

etc.».

La Comisión de Legislación con

este caso sujeto a todas las car-

el

propósito de armonizar pare-

ceres, aceptó la segregación del título 5." relativo al

también

el

cambio de redacción del articulo

81.

matrimonio y

Y

entonces

la

Cámara, sin más debates ni nuevas enmiendas, otorgó su voto a libro cerrado.

En

el

mismas

Senado volvió influencias

gregación del título

el

Código a empantanarse, por obra de que no se satisfacían ya con la

religiosas 5."

las se-

y que pretendían en consecuencia la elimina-

demás conquistas civiles que el Código realizaba. La Cámara de Diputados trató de moverlo en 1858, mediante una minuta de comunicación al Senado y con igual propósito escribió un artículo el director de «El Comercio del Plata», para quien el obstáculo continuaba siendo el capítulo del matrimonio ción de todas las

civil

resistido

Pero todo

por las influencias clericales.

ello sin resultado,

porque la mayoría del Senado estaba

resuelta a impedir que la cuestión religiosa pasara a la orden del día.

HISTORIA DEL URUGUAY

592

La obra de

cocUflcación en la Ai-gentina.

También en

A

Argentina se trató de adoptar ese Código

la

Civil.

Sarmiento en «El Nacional»: República de Chile ha convocado extraor-'

de 1856 escribía

principios

«El Presidente de

la

dinariamente a las Cámaras para

la

discusión del Código Civil cu-

los más eminentes Tenemos nosotros un Proyecto de Có-

ya confección había sido encargada a uno de jurisconsultos de aquel país.

digo Civil elaborado por

el

como una de

señala

ral

seis

Sala de Representantes

la

del Congreso la codiñmeses aquí entre varios di-

atribuciones

Hubo hace

cación de las leyes...

putados de

doctor Acevedo y la Constitución Fede-

las

idea de presentar

la

el

Có-

digo Acevedo y pedir su adopción pura y simple, de la que desis-

miemUruguay y en Chile

tieron por no encontrar dispuestos adoptarla a varios de sus

Tenemos hoy

bros...

la

obra ejecutada en

por jurisconsultos eminentes. ¿Vamos a

el

repetir

nosotros

la

afec-

tación de un nuevo trabajo que absorba seis u ocho años para lucirnos también en codificación, a fin de introducir unas pocas va-

que es todo

riantes,

*mos

lo

que puede hacerse? Nosotros aconsejaría-"

adopción de uno de

la

los dos

Códigos Civiles ya confecciona-

dos en los Estados vecinos, librando a

experiencia

la

aconsejar

el

correcciones».

las

Cuando esas

iniciativas ^surgían

en

el

Parlamento y en

sa argentina malográndose quizá por efecto de las cias

clericales

que aquí habían triunfado,

prendía por encargo del gobierno de

la

el

la

mismas

pren-

influen-

Acevedo em-

doctor

Provincia de Buenos Aires

redacción del Código de Comercio.

la

«Tan ducir

alto

la



honor

noticia



trado compatriota

decía «El Nacional» de Montevideo al repro-

concedido por aquel

-

el

Gobierno a nuestro

doctor Acevedo, es sin duda

mayor

la

ilus-,

distin-

ción a que pudiera aspirar aquél en la carrera a que se ve consa-

grado desde muchos años y que ha servido con altura y dignidad ,110 sólo en su patria sino fuera de ella, donde han sido tal vez mejor comprendidos sus méritos, su integridad y su honor que acaba de recibir el doctor Acevedo con le

ha confiado

el

llas

porque

vemos apreciado

el

El'

encargo que

Gobierno de Buenos Aires, nos hace sentir a

vez un legítimo envanecimiento y ro,

ilustración. el

un pesar profundo.

mérito, los conocimientos

la

Lo primey las be-

más esclarecidos de nuestros compasegundo porque no podemos dejar de lamentar c;ue

cualidades de uno de los

triotas,

y

lo

nuestras miserias

políticas

hayan

alejado de

nosotros

al

doctor

GOBIERNO DE PEEEIBA

593

Acevedo, privándonos de un hombre

útil a la patria y de un abogado ilustre, como de un ciudadano tan distinguido por sus talentos

sus virtudes».

y

Otra distinción

pués de

recibió

codificador

el

terminación de su obra:

la

la

pocos meses des-

oriental

presidencia del Colegio de

Abogados fundado en Buenos Aires a mediados de 1858. El Código de Comercio fué sancionado por las Cámaras de la Provincia de Buenos Aires en 1859 y por el Congreso Nacional en 1S62, marcha rápida que también habría seguido el otro Código sin sus adelantadas

disposiciones

acerca

del

estado civil

años más tarde habrían de incorporarse a

que sólo largos

la legislación

del Río de

Plata.

la

Efectos

de los

.juríílicos

iiiati'iiiionios

celebrados en el exti'an-

jero.

El tema del matrimonio dio lugar a nuevos debates en

motivo de un proyecto que

18.58,

Poder Ejecutivo presentó a

el

con

las Cá-

maras.



matrimonio produzca todos sus efectos civiles decía ese proyecto no es necesario que haya sido consagrado por «Para que

ritos da,

el



basta

especiales;

Fundándolo decía refrendado por

«Anhelando tos

que tenga lugar de una manera permiti-

tolerada o autorizada en

del

ligiosos

globo,

sin

los cultos y,

el

el

país en que se celebre».

el

Poder Ejecutivo a

país por inmigración

el

la

Asamblea en Mensaje

Ministro doctor Carreras: extranjera de todos los pun-

por consiguiente de todas las creencias y cultos

distinción,

por

la

tolerando

misma razón

en su seno

el

ejercicio de

re-

todos

la celebración bajo ellos del matri-

monio, no puede dejar de proveer desde ahora

lo

indispensable pa-

hayan celebrado fuera de la República, ya se celebren en ella, produzcan en cuanto contratos y nada más, los mismos efectos civiles que los matrimonios celebrados y consagrados bajo las solemnidades y ritos de la religión católica apostólica romana, que es la religión del Estado según la Consra que tales matrimonios, ya se

titución

Pero

política.» el

jefe de la Iglesia oriental pidió el

consecuencia de ese pedido

IV -38.

el

aplazamiento y como

asunto quedó encarpetado.

HISTORIA DEL XJBUGUAY

594

La

ley de hipotecas.

Varios capítulos del Código Civil alcanzaron



corporarse a

la legislación oriental:

los

sin

embarco

a

in-

de hipotecas, cuyas avanza-

das conquistas señalaba así don Hipólito Gallinal en su tesis para optar

al

grado de doctor en Jurisprudencia en 1859:

«Nuestros legisladores acaban de proclamar

el

doble principio

.le

puMiciáaú, y de la especialidad en las hipotecas. La ley de junio

la

de 1856 ha adoptado

como base

el

sistema hipotecario del Proyecto

de Código Acevedo.»

años

Varios

después,

bajo

el

gobierno

de

Flores,

se

dictó

;a

Comisión codificadora incorporó a^ que ella bastaba «para hainforme Código Civil expresando en su cer la gloria de una administración, aún en los países más adeley hipotecaria de

lantados».

He

18G5,

que

la

aquí los principios capitales de esa ley:

poteca debe recaer sobre determinados bienes;

que

la

hi-

que es indivisible;

que debe otorgarse por instrumento público; que debe anotarse en un registro público; que debe otorgarse por persona que sea capaz enajenar; que la acción del acreedor puede dirigirse contra quien-

^L'e

quiera que posea

el

bien raíz hipotecado.

Y

estos principios están

contenidos en la ley hipotecaria de 1856, sin que ello importe amen-

guar

el

mérito de

la ley

de 1865 ni la importancia de las mejoras

que ella introdujo en nuestra

A

legisilación.

raíz de la sanción de la ley de 1856, la

Cámara de Diputados

votó la creación del registro de hipotecas y privilegios legales des-

tinado a servir de base al régimen de publicidad esa

que establecía

ley,-

Estadística .iudicial.

En

el

curso del año 1856 tramitaron ante los Juzgados Letrados

y Tribunales de Montevideo 1,422 causas ci\ñles y 138 causas criminales (entre éstas 63 por muertes y heridas) quedando termi-

nadas 211 de las primeras y 50 de las segundas. Ante los Juzgados de Paz fueron interpuestas

1,022 demandas, quedando arregladas y concluidas 797 y prosiguiéndose bajo forma

de pleito las 225 restantes.

La Memoria tos

datos,

del

Ministerio de Gobierno, de donde extraemos es-

presentaba

un cuadro estadístico más general:

número de presos en toda así

por departamentos:

la

el

del

República durante ese año, clasificados

GOBIERNO DE PEREIRA

Montevideo

1,153

Paysandú Cerro Largo

73

595

Minas Durazno

(¡i

(il

Florida

46

Soriano

89

Canelones

30

Salto

65

Colonia

3H

Eran

.

1,728

.

los

".

.

111

.

presos clasificados y la cifra subía a 1,833 inclu-

yendo algunos ho comprendidos en el cuadro. He aquí les causas determinantes de la intervención policial:

pricipa-

las

Pelea

158

Rateria

133

Ebriedad

3U1

Abigeato

142

Robo

130

Hcmicidio

Desorden

289

28

estadística de la Policía de Montevideo correspondiente al -año

La

acusaba una entrada de

1859,

1,274

presos

y

el

siguiente

movi-

miento:

1,078

Salidos

Juzgado del Crimen Destinados a las armas Muertos en el Hospital Existencia que pasa a 1860 Pasados

115

al

31

3

47

El cuadro de la distribución por sexos arrojaba 1,178 hombres y

mujeres.

91.;

con

la cifra

Y

en

el

de las nacionalidades sobresalían los orientales

de 270, los españoles con

la

de 221 y los italianos con

de 204.

la

Una

ejecución de asesinos.

En

1858 fueron asesinados en Santa Lucia los

hermanos Arriaga, Fué un he-

dos industriales franceses vecinos de aquella localidad.

cho que produjo honda impresión por ser ¡isesinos.

Al entierro concurrieron

más de

oficiales

del

nos en son de protesta. El Gobierno dio intervención a militar y los oficiales

ron

Amado

ejército los

3,000 franceses e la

italia-

justicia

y Orellano, autores del asesinato, fue-

condenados a muerte.

Al dar cuenta de

la

sentencia relató la prensa de Entre Ríos un

incidente de la Guerra Grande,

muy

propio de

la

época y de núes-

HISTORIA DKL URUGUAY

596

tras guerras civiles en general. El oficial sitiados,

los

(le

sitiadores.

un hermano suyo

y

En una

Amado

servía en las filas

también, en las de los

oficial

de las guerrillas que a diario tenían lugar en-

tre las líneas, vinieron a las

hermanos Amado, y

manoj

las partidas riue

mandaban

los

éstos que estaban cubiertos de polvo y sangre

que no se habían reconocido absolutamente se separaron de sus

:'

respectivos

soldados para trenzarse en duelo a muerte. El

de la plaza sitiada mató a su adversario y recién

conoció •(adáver

al

hermano

sobre

su

y presa de

caballo

y

una gran agitación nerviosa

lo

trajo

a enterrar

oficial

al verlo caer

re-

alzó el

cementerio de

al

la plaza.

Los asesinos de plaza de Artola un

No

era

hermanos mes después

Arriaga

los

por su actividad,

sin

fueron

fusilados

en la

del crimen.

embargo, que brillaba la justicia

la Policía el asesino de don de la época. En ese Genaro de las Rivas, después de cuatro años de cárcel en que no había conseguido que su causa marchara adelante. Al tiempo de eva-

mismo año fugó de

dirse dirigió

una carta explicativa de su fuga

República, que éste pasó .

al

al

Presidente de la

Tribunal a título de recomendación de

pronto despacho de los procesos criminales.

Las

cái'celes.

No

era sólo por razones de justicia social que había que reaccio-

nar contra esa inconcebible pereza en

Lo

la

tramitación de las causas.

exigían también imperiosas razones de higiene moral, que en

dos oportunidades se encargaron de

mico-Administrativa de Montevideo y

He

exteriorizar el

la

Junta Econó-

Ministerio de Gobierno.

aquí lo que en 1857 decían al Gobierno don Juan

mez y don Juan Manuel Besnes rio respectivamente de la

e

Ramón

Irigoyen, Presidente y

Municipalidad de

Gó-

Secreta-

la Capital:

«Las cárceles han sido creadas para corregir y castigar a los lincuentes y de ningún modo para pervertirlos, privándolos de

delos

consuelos espirituales y de todo cuanto constituye y hace estima-

hombre civilizado. Abandonarlos a sí mismos, dedueños de sus inclinaciones en la holganza y en el vicio, dejarlos en contacto con sus iguales, es obrar contra la ley, contra ble la vida del jarlos

sociedad, es educar y fomentar el vicio. La Junta EconómicoAdministrativa que. tiene por la Constitución de la República el encargo de velar por la seguridad Individual, levanta su voz con toda la energía de la razón para pedirle a V. E. un pronto remedio la

597

GOBIERNO DE PEBEIRA

al

mal

para

social

que nos amenaza. Nuestra

país;

el

vivo dolor.

¿En qué

se,

un oprobio

cárcel, señor, es

no se puede penetrar en

ella

sin

ocupan esos hombres que

experimentar un la justicia

ha en-

cerrado en ella? Se ocupan, señor, en jugar y adiestrar en el crimen a los delincuentes incautos que por faltas leves están mezclados con los famosos criminales. Allí se endurecen en

el

mal,

allí

adquieren hábitos de contumacia, de allí salen como fieras tanto tiempo comprimidas a devorar a sus semejantes. Muchas veces la cárcel por crímenes que tal vez nunca hubieran cono hubiesen penetrado en ella... Una penitenciaría en pequeña escala sería un progreso digno del país que tanto ha he-

vuelven a

metido

si

cho en medio de sus desgracias.»

Dos años después decía el Ministro de Gobierno en su Memoria: «La cárcel establecida desde mucho tiempo en la casa del antiguo Cabildo hace un contraste tan repugnante con el servicio a que están destinadas otras habitaciones de ese edificio, que la civilización, la moral y el honor mismo del país exigen a la vez que se haga desaparecer lo más pronto que sea posible; pues no se

puede llegar hasta el recinto augusto de las leyes sin presenciar antes en sus umbrales el triste espectáculo de la degradación y do las cadenas. No hay hasta ahora en la República un presidio en vjue- los criminales sufran las penas a que fueron condenados y no sólo es necesario sino conveniente tener ble,

no para que vivan en

ellos

uno o más

entregados

al

fuera posi-

si

ocio y a sus fatales

consecuencias, sino para que trabajen en la agricultura, a

puedan

llegar a ser útiles para la sociedad

y para



fin

de que

mismos.»

Plazo pai'a los desalojos.

Una

ley

dictada en 1858 estableció que las estipulaciones sobre

plazos en los contratos de arrendamiento sólo tendrían efectos jurídicos

cuando constasen por

desalojo gozaría

habitación

el

escrito.

Y

agregó que en

los casos

de

inquilino de un plazo de 60 días tratándose de

para familias y de 90 tratándose

de establecimientos

comerciales o industriales, reduciéndose los plazos a 20 y 30 días

respectivamente cuando hubiese atraso en los pagos.

Con esa lugar

el

ley

combatía

empleo de

la

la

Asamblea

los

abusos a que venía dando

prueba testimonial para

justificar los contra-

tos de arrendamiento, a la vez que evitaba los lanzamientos inhu-

manos los

a

que en más de una oportunidad habían sido empujados

Jueces por falta de normas legales a que atenerse.

HISTORIA DEL UBUGUAT

f)98

La firma de El

letrado.

Reglamento de

la

Administración de Justicia sancionado su-

cesivamente en 1853 y en 1856, establecía letrado

pie

al

de todos

los

de la firma de

el requisito

no procuratorios que fueran

escritos

presentados ante los Tribunales y Juzgados Letrados.

Una

ley de 1856 excluyó de la obligatoriedad de la firma los es-

critos firmados

por las mismas partes litigantes.

Sobre embargo de rentas públicas.

A

fines

de 1858

el

Poder Ejecutivo dictó un decreto por

que

el

negaba cumplimiento a una sentencia de remate notificada a

se



recaudadoras de impuestos, «considerando decía fcl que las rentas públicas no son embargables, porque ellas

oficinas

las

decreto



están destinadas por la ley de Presupuesto a cubrir los gastos de la

Administración».

Los protocolos de los escribanos.

La Asamblea sancionó en 1858 un reglamento de el

teros de cinco pliegos cada uno, metido

manera que gada a

la

la

primera hoja del

décima del mismo, y

un pliego dentro de

cuaderno corresponda así

los

nombre de los otorgantes». Dando la razón de ésta y de

dijo el

el

otro,

y esté

demás, no pudiendo

cribano pasar adelante sin dejar asentado en el

protocolos, por

cual quedaban obligados los escribanos «a emplear cuadernos en-

anterior al

el

de li-

es-

menos

otras formalidades complementarias,

Ministro de Gobierno en la

Cámara de Diputados que

aca-

baban de descubrirse irregularidades en el protocolo de la Escribanía de Gobiprno y Hacienda: tales como hojas en blanco, desconcierto en las foliaturas y otras faltas

una preparación para tienen peñas

Los

muy

i)ro('iu'acloi'es

el

fraude, para

muy el

graves «que importaban

robo y para crímenes que

severas en nuestra legislación».

bajo

la

dependencia del Tribunal.

En 1856 fué suspendido por el Tril)unal uno de los procuradores de número más acreditados de Montevideo a título de que se había

GOBIEBNO DE PEBEIBA

599

ausentado del país sin permiso, incurriendo por

tal

causa en

re-

petidas inasistencias a los estrados en las horas del despacho pú-

Reclamó

blico.

el

interesado y la pena fué revocada, pero con la de que los procuradores de número estaban

expresa

advertencia

«por razón de su

oficio»,

bajo la dependencia inmediata de la alta

autoridad judicial.

servicios de la

Lo.s

asistencia pública.

Movimiento del Hospital

de Caridad

He

aquí

según

los

el

movimiento

del Hospital de Caridad

datos contenidos en la

en

18-06

y 1858,

del

primero

Memoria ministerial

de esos años y en la «Guía de Montevideo» del segundo:

1856

Entrados.

1.291

Salidos Fallecidos

1.038 188

.

Véase cuál era el número de asilados y empleados primero de esos dos años: 26

Militares

163

Civiles

Mujeres

43

Dementes

34

sala

del

Hospital

1,848 1,568

!

248

I

al

cerrar

el

Expósitos

64

Kmpleados

f)0

Nodrizas y amas secas

.

64

444

estadística completa de 1857, pero sí la

No hemos encontrado la de los meses de marzo y la

1858

I

abril,

durante

los

cuales ingresaron en

de Caridad 375 enfermos de fiebre amarilla,

de los que fallecieron 184.

Las hermanas de caridad.

La Junta Económico-Administrativa

autorizó en 1856 a la Comi-

sión del Hospital para contratar en Europa un plantel de S herma-

nas de caridad.

A

fines

del

mismo año

llegaron las

8

hermanas y a

la

vez tres

HISTORIA DEL UBUOUAT

600

monjas salesas para fundar un convento, contratadas en Roma por el presbítero don Isidoro Fernández. Dos años más tarde la Comisión de Caridad que presidía don Juan Ramón Gómez, pidió autorización a la Junta para aumentar el plantel de hermanas de San Vicente de Paul con varias señoritas uruguayas que habían realizado ya su noviciado. Decía en su nota las hermanas habían dado pruebas de heroísmo durante la epidemia de fiebre amarilla y que después de extirpado el flagelo habían organizado un asilo con destino a los niños desamparados. Las monjas salesas fundaron en el acto un colegio, con un pro-

que

grama de religión,

cinco años, en lectura,

italiano,

cés,

el

escritura,

geografía,

que figuraban las siguientes materias:

gramática castellana,

aritmética,

fran-

cosmografía, historia y labores.

El Lazareto.

Durante

la

época que examinamos existía un lazareto en la Isla

de la Libertad con instalaciones para cien personas.

Ci'eación de asilos especiales.

En

el

Hospital de Caridad estaban reconcentrados hasta 1S58

dos los servicios de la asistencia pública, sin excluir

el

to-

de demen-

que contaba 16 hombres y 24 mujeres. No había otro local disallí en 1857 a los mismos enfer-

tes

ponible y por eso hubo que alojar

mos de fiebre amarilla. La Junta Económico-Administrativa Unión un

asilo,

cidad pública. El ejemplo de

jios,

los

En

el

antiguo

Colegio

de la concur-

el

forma de una cuota mensual. Es necesario

decía la Junta en su exhortación

país.

el

para cuyo sostenimiento resolvió recabar

so de la población bajo



pidió y obtuvo en 1858 auto-

gubernativa para instalar en

rización

la



hacer desaparecer

Cipital

asilo serán recogidos y

mendi-

la

será seguido por todo

cuidados

los

mendigos,

los

el

cie-

los dementes y sus hijos menores de ocho ifc-s, dando a todos que puedan recibirla educación moral e industrial.

Y en 1859 la Comisión de Beneficencia de Señoras que presidía doña Eusebia Vidal y Zabala, propuso la creación del asilo de huérfanos, institución que ya existía en embrión desde la epidemia de 1857.

En

el

Hospital de Caridad se mantendría

el

torno para

la

re-

cepción de los niños de corta edad y en los alrededores de la ciu-

GOBIERNO DE PEBEIRA

601

dad se establecería el asilo de huérfanos y abandonados con elementos, para suministrar uua educación completa capaz de transformar esos niños en hombres útiles a la sociedad.

La Junta Económico-Administrativa autorizó

a

n

al

ir

de

Comisión

la

Señoras para llevar a ejecución el pensamiento. También para crear y sostener estos organismos hub'j

(lao

r^cu-

concurso del pueblo.

El presupuesto de beneficencia.

Empecemos por

el

de

Comisión de Beneficencia de S.^ñoras.

la



deHasta mediados de 1855 en que fué instalada la Comisión cía su Presidenta doña María Agell de Hocquard tn la Memoria de

1856



no alcanzaban

las

rentas a cubrir las atenciones

más

pre-

miosas del Hospital. Hoy se cubren con holgura todas las necesidades de los enfermos y son atendidos además los departamentos de dementes y de hiiérfanos, y los gastos de enseñanza de ima cuela que funciona en

la

mismo

'is-

local del Hospital

donde reciben

subvencionadas,

particulares

De

el

y siete escuelas educación 250 niñas.

importancia del concurso de la Sociedad de Señoras

truye este resumen recapitulativo

rrespondientes a los 20 meses transcurridos desde

ins-

y egresos

de los ingresos

mayo

de

(Co-

1S55

hasta diciembre de 1856:

Entradas: 15,636 pesos, correspondiendo a productos de bazares por la Comisión 13,024 y a suscripciones populares

organizados 2,612 pesos.

Salidas:

entregado a

Comisión de Caballeros para gastos

la

Hospital de Caridad 11,402;

Estos éxitos

trascendieron

dades análogas, entre ellas

del

aplicado a escuelas 1,740. a la

la

de

campaña promoviendo sociePaysandú fundada en 1858 por

iniciativa del Jefe Político don

Basilio Pinilla, y la de Tacuarembó creada en 1859 con un amplio programa que abarcaba el auxilio

a los enfermos,

el socorro a los menesterosos, y la difusión de la enseñanza, propósito este último que se exteriorizó en la fundación

de dos escuelas sobre la frontera.

Veamos ahora salidas

fondos

del

las

Hospital,

aportados por

cifras

del

movimiento general de entradas y

englobados la

los

recursos

Comisión de Señoras,

de

la

las

operaciones de

lotería,

los

crédito y los aportes gubernativos:

En

el

transcurso de los años 1855, 1856 y 1857,

ministradora

del

Hospital

recibió

195,778

pesos,

la

Comisión ad-

sobresaliendo

la

HISTORIA DEL UBUGÜAT

602

con 119,199, los bazares y legados con 21,273, el Gobierno el Banco Mauá por préstamos con 26,956 pesos.

lotería

con 15,078 y

En

los egresos del trienio

que subían a

sobresalían los siguientes rubros:

misma suma

de 195,778, pe-

alimentos 40,672, gastos diarios y extraordinarios 19,929, tra-

sos,

carpintería,

bajos

de albañilería,

8,024,

rescate de la lotería, 24,000.

La

la

empleados y nodrizas 44,636 pinturería,

22,068,

medicamentos

lotería.

Una

ley sancionada en 1856 declaró que

la

lotería pública y sus

productos constituían una propiedad exclusiva del Hospital de Caridad,

dejando así regularizada la situación del Hospital que has-

ta ese

momento

sólo podía enjugar sus constantes déficits

mediante

Comisión de Señoras y los aportes del Gobierno. Los remates anteriores a esa ley producían 2,500 pesos mensuales para cubrir un presupuesto que siempre excedía de 3,600. De las ventajas obtenidas por el cambio de régimen puede los

bazares organizados por

la

el resultado de la licitación a que se llamó en 1858: varios proponentes ofrecían sumas mensuales que oscilaban alrededor de 6,000 pesos; un proponente ofrecía pagar 144,000 por la concesión

dar idea

y otro 280,000 por la concesión de tres años.

de dos años;

La epidemia de

En marzo

flebre amarilla de 1857.

de 1857 dio la prensa noticias alarmantes acerca de

la difusión

de «la gripe» y poco después alzaba el diapasón ante rumor de casos de fiebre amarilla importados del Brasil.

La Junta de Higiene lanzó inmediatamente campaña contra el flagelo.

la

el

voz de alarma y se

trazó un plan de

Era

la

segunda vez que

de tiempo. Al finalizar

bus en

el

Brasil, había

lo hacía en el curso de

año 1855, ante

el

un corto período

la aparición del cólera

mor-

publicado un pliego de instrucciones en

el

que figuraban estas dos medidas reveladoras del estado lastimoso de la higiene pública en Montevideo:

«Cegar todos

más

tránsito,

los

pantanos que se encuentran

prefiriendo

para aquel

objeto

los

en las calles de

escombros de

la-

y cal o el pedregullo». «Para que en las calles no haya charcos de orines y de inmundicias se i)rohibirá hacer necesidades en ellas, y para conseguirlo se drillo

GOBIERNO DE PEBEIBA

fijarán

donde

parajes

avisos en aquellos

603

costumbre

ha hecho

se

orinar y se encargarán celadores para la vigilancia.»

Las medidas fueron más radicales en 1857. Véase taba

la

cer

los

Junta de Higiene que presidía

que

solici-

terrenos pantanosos».

los

«Cegar todos

caños maestros».

los

Gobierno dispuso que

ciudad

!a

lo

doctor Ferreira, al apare-

primeros casos de fiebre amarilla:

«Cegar todos El

el

intimara

f

nivelación

terrenos

de, sus

prolongación de

la

el

terraplenamiento

y a la empresa de caños

red hasta

la

Policía procediera a la limpieza de

propietarios

a los

el

mar

y

maestros la

o en su defecto el

cegamiento

de los caños.

Cuerpo Legislativo complementó estas medidas autorizando Poder Ejecutivo para terraplenar y nivelar las calles contiguas mar e impuso a los propietarios colindantes la ejecución de

El al al

obras análogas.

El contagio de la fiebre amarilla. El

doctor

Irineo

Pórtela,

Presidente del Consejo de Higiene de

Buenos Aires, que vino a Montevideo para estudiar dad

y

tiera

organizar

allí,

tamente

la

defensa en

publicó una extensa

establecimiento

el

caso

de

la

enferme-

que también repercu-

memoria en que

se oponía resuel-

cuarentenas a las procedencias de Montevideo, porque en su concepto la fiebre amarilla no era conal

tagiosa. Invocaba en

de

apoyo de su

tesis varias opiniones

de ciencia, entre ellas la que establecía que

la

de hombres

peste se transmitía

por la respiración en focos Infecciosos en medio de un estado

démico pero no de otro modo. Ni

mos transmitían de Montevideo

la

los objetos ni los

enfermedad, según

lo

mismos

demostraba

en cuyas salas bien ventiladas

el

ei)i-

enfer-

Hospital

se alojaban veinti-

tantos enfermos de fiebre amarilla.

Sus conclusiones encontraron resistencia entre nuestros médicos, y

el

doctor Odicini, exteriorizando las opiniones de varios de ellos,

])ublicó

un informe encaminado a probar

la

efectividad

del

con-

tagio.

El

número

tle

víctimas.

Tres meses duró

mas según Montevideo:

los

la

epidemia, con

registros

el

siguiente

número de

de defunciones a cargo de

la

vícti-

Policía

de

604

HISTORIA DEL URUGUAY

GOBIERNO DE PEREIRA

sacando

Iiiíal,

los

muchos de

caer

6UÓ

cadáveres de las camas y quemando ropas, hasta allí mismo víctimas de la epidemia que

ellos

combatían.

ciudadanos que estaban en todas partes donde había

los

E!ntr¡?

que llevar un auxilio o combatir un foco, figuraban don Juan D.

don Julio Mendeville, don Adolfo Lapuente y don Jacobo de tanto altruismo este último que al estallar un año

.lackson,

Várela,

D.

después la epidemia de fiebre amarilla en Buenos Aires, para allá

embarcó a

re

cional

fin

de reanudar su tarea, mereciendo por su excep-

consagración una nota de la Municipalidad bonaerense en

que se hacía constar reto

desde

dia de

el

que había atendido personalmente apertura

su

padre de José Pedro Várela,

el

hasta

de su

el

el

Laza-

clausura. Era

reformador de nuestra enseñanza

primaria.

Los recursos pecuniarios fueron obtenidos en buena parte por medio de suscripciones populares en Montevideo y Buenos Aires. En una publicación que hizo la Junta Económico-Administrativa se hacía ascender a 33,835 pesos lo recolectado en ambas márgenes del Plata y se establecía que luego de cubiertos todos los gastos había quedado en la Caja Municipal un remanente de 7,133 pesos,

l'rueba

de

forma en que

admirable

la

se

hablan

manejado

los

dineros del pueblo.

La Sociedad Filantrópica que también se encontró con un manente disponible después de terminada la campaña contra resolvió

flagelo,

crear

premios:

tres

mil

cuatro

patacones

a

reel

la

Memoria en que se describiera el tratamiento seguro de la enfermedad o bien su profilaxis en forma tan eficaz como la vacuna lara la viruela; mil patacones al autor de la Memoria que demostrara

causas de la epidemia en Montevideo y los medios

las

de evitar su reproducción;

y 500 patacones

al

autor de la mejor

historia médica de la epidemia reciente.

En cuanto la

al

enérgicas

tas

Asamblea

edificada

que

el

de

Gobierno, lejos de permanecer inacti'-o frente a es

manifestaciones

la creación

la

Capital,

de la actividad

privada,

propuso a

de una patente semanal sobre la propiedad

que

Senado rechazó, y

la

la

Cámara de Diputados votó pero

enajenación por 30,000

tercera parte de las utilidades que se había reservado

1856 al rematar por tres años las

pesos de

la

fisco

en

el

rentas de corrales y mercados.

HISTORIA DEL URUGUAY

606

La

ti'aqueotoiiiía

en Monte\ádeo.

La primera operación de traqueotomía corresponde

al

año

en Montevideo

realizada

Gualberto

doctor

El

1859.

operador, salvó entonces a una niña atacada de crup

bagaje

table viua

en

adquirido

las

clínicas

médico

Méndez,

gracias al no-

dando con

europeas,

ello

lección práctica que en seguida fué aprovechada por sus cole-

gas con excelente resultado.

Tentativa pai-a reglaniontar la prostitución. El

Jefe

Político

de

la

Capital

Económico-Administrativa, o registro de

se

pidiéndole

dirigió

que

en

mujeres públicas como base para

boletos e implantación de

un

se

a la

otorgamiento de

el

servicio de inspecciones médicas.

Contestó la Municipalidad que no era posible

forma velada en que

Junta un padrón

1857

estableciera

desenvolvía

la

el

registro por la

prostitución y por los es-

cándalos y protestas de todo género que produciría su reglament^ación.

Y

la

importante reforma quedó aplazada.

Servicios de higiene pública. Los caños maestros.

La construcción de caños maestros subterráneos en de Montevideo fué reglamentada finalmente por

Cada

propietario

quedaba

obligado

una

contribuir

ley

las

calles

de

1856.

de obra con doce pesos por cada vara lineal de caño construido en toda la extensión del frente de su propiedad, y desde el centro de la calle hasta la puerta de la casa. Excluíanse las casas que a

al

costo

la

luvieran letrina y los terrenos improductivos. La construcción de caños maestros debería hacerse sobre las bases propuestas por

den Juan José Arteaga. El Poder Ejecutivo se apresuró a vetar esa

ley,

invocando que

obligaba a contratar con empresario y por precio determinados, lo que excluía toda competencia. Agregaba que la propiedad

ella

le

muy deprimida en esos momentos soportaba ya el costo empedrado que era «obra de una utilidad más reconocida». Pero la Asamblea ratificó la sanción y el Poder Ejecutivo se vio obligado a ponerle el cúmplase a la ley. La forma defectuosa en que fueron reanudadas las obras dio luterritorial

del

607

GOBIERNO DE FEBEIRA

más

gar en

de una oportunidad a las protestas del vecindario per-

judicado y a campañas ardorosas que culminaron en 1857 durante la epidemia de fiebre amarilla, al saberse que algunos de los

caños maestros no llegaban

al

mar y que

otros

estaban rotos

y'

abiertos en distintas partes del trayecto.

Para algunos de rio

que

la

que actuaban en esas campañas era necesa-

red cloacal quedara reducida a las aguas servidas, con

exclusión de las materias fecales. Para otros era necesario

.'.Dsoluta

cerrar

los

la

comunicación de

casas y cegar sin demora los caños

¡as

con cal y arena.

Tan formidables exigencias repercutieron en el Senado, donde el Muñoz presentó un proyecto por el que se autori-

doctor Enrique

zaba

al

Poder Ejecutivo para rescindir el contrato Arteaga y a el mar.

la

vez para prolongar los caños hasta

«En presencia de

la

calamidad que hoy sufre

cía el autor del proyecto



la

Capital



de-

deber sagrado de todos es remover las

causas que pueden haber dado origen a aquel flagelo. Entre esas la existencia de los caños maestros por la

causas se ha señalado

Junta de Higiene Pública que desde la aparición de la epidemia pidió al Poder Ejecutivo que sin demora fuesen cegados». Al año siguiente

resolvió

Gobierno acumular elementos para

el

el

estudio de la influencia de los caños maestros sobre la salud de

la

población y se dirigió con

tal objeto a la

Junta Económico-Admi-

nistrativa de la Capital y a la Junta de Higiene.

La Junta Económico-Administrativa pasó

asunto a su Comi-

el

sión de Salubridad, y ésta pidió la presencia del doctor

rreira y de otros hombres de ciencia y de consejo. rreira

se

a la construcción de caños

declaró contrario

«por no creer que

el

Fermín Fe-

El doctor Fe-

maestros

país hubiera llegado al punto que debe alcan-i

mantener cual conviene esa clase de obras.» Hubo como la del Maestro Mayor de Obras Públicas, favorables a la red. Luego de oir a todos, la Comisión de Salubridad de que era Presidente don Luis Lerena y Secretario don Melitón González, concretó así sus opiniones: 'La población en general condena los caños maestros por creer zar para poder

otras opiniones técnicas,

que ellos contribuyeron a

la

propagación de

1857 y por la exorbitancia de sus precibs.

dimensiones que establece fecta. í

o

el

contrato.

Los registros abiertos en

con

todos sus

defectos

la

No

fiebre

amarilla en

tienen los caños las

Su construcción

las bocacalles infectan el

resultan preferibles

a

aguas sucias y de materias fecales que existen en

los el

es

imper-

aire.

depósitos

Pe-

de

interior de las

HISTORIA DEL URUGUAY

608

Lo que corresponde entonces

casas.

que se obligue

es

al

empresa-

a practicar las refacciones necesarias, a dar mayor capacidad

rio

a los caños y a suprimir las alcantarillas de las bocacalles.

Véase ahora cuál fué

el

dictamen de

la

Junta de Higiene en

que actuaban los doctores Fermín Ferreira y Enrique Muñoz,

la

res-

pectivamente como Presidente y Secretario: Sería

conveniencia pública la red cloacal

de

forme a

los preceptos del arte

Arteaga.

ta

y

como

tal

si

se

hiciera

con-

se detalla en la propues-

Su construcción está interrumpida desde

la

epidemia

de 1857 y una vez que se reanude deberá exigirse que todos los caños,

y

muy

especialmente los

mar hasta quedar

de la costa norte,

penetren en

el

cubiertos por las aguas en las bajantes. Pero la

Jiinta de Higiene, «a pesar de aceptar la existencia de los caños maestros subterráneos del modo que ya ha indicado, es de opinión que ellos no sirvan para el derrame de las materias fecales, porque

considera que después de algunos años se respirará ción un aire impuro y fétido, que

fermedades de un carácter los habitantes

si

especial,

en

la

pobla-

no es capaz de producir enmolestará indudablemente a

como sucede en Lisboa y

otras ciudades donde esas

construcciones existen».

En

presencia de opiniones tan contradictorias

el

Gobierno no

canzó a tomar resolución, dando con ello lugar a que cal

se

fuera

mejorando y a que desaparecieran

las

la

al-

red cloa-

prevenciones

contra esa gran obra de higiene pública, la primera de su género

que se abordaba en

el

Río de

la Plata, y

que forzosamente por eso

tenía que adolecer de toda clase de imperfecciones técnicas.

se

La Comisión de Salubridad que había dado la solución exacta, mostró incansable en la campaña emprendida para obtener el

mejoramiento

del servicio.

Véase

lo

que decía

al

Ministerio de Go-

bierno en 1859, señalando algunos de los defectos de mayor repercusión en

el

pueblo:

«Aún cuando una

resolución gubernativa no haya hecho saber si permanecer o no los caños maestros, es urgente atender que existen mientras aquella resolución no sea conocida. En la

deben los

?alle

Juncal y a inmediaciones de la esquina NO. del mercado pria-

cipal

hay un antiguo y malísimo caño que en

la

actualidad se ha-

completamente obstruido, habiendo reventado su bóveda, lo que causa emanaciones pestilenciales que amenazan muy seriamente lla

En la de Camacuá sucede lo mismo: exisun caño hundido en varias partes... la bóveda de ese caño está enteramente descubierta... Se resienten también varios barrios de

la

te

salud del vecindario...

GOBIERNO

DIC

PEREIKA

609

olores insoportables» por efecto de resumideros que vierten su con-

tenido en las casas que están a

Y

más bajo

nivel.

señalando y corrigiendo a diario las imperfecciones pudo obtener la Comisión de Salubridad que escapara nuestra red cloaasí,

campaña

cal a la

masa ignorante que

abolicionista iniciada' por la

preferible el régimen

encontraba

de los pozos negros,

y por los

hombres de ciencia que juzgaban que Montevideo no tenía todavía' la dosis necesaria de civilización como para darse el lujo de un servicio de que carecían todas las capitales de la América del Sur. Explicando algunas de esas denuncias, decía don Juan José Arteaga en 1859 que la empresa se había encontrado con caños subterráneos de épocas anteriores, cuyos propietarios no habían querido absolutamente entrar en modificaciones, viéndose por a

ello

obliga-la

conectar los caños nuevos a los viejos para poder hacer la pro-

longación hasta

En

el

mar.

mismo año

ese

estudió la empresa la construcción de un

po»-

zo artesiano en la Plaza Cagancha, destinado al suministro de agua

para

limpieza diaria de los caños. Adviértase que Montevideo no

la

entonces servicio de aguas corrientes y que el agua de loa aljibes, única de que se disponía, apenas bastaba para el consumo tenía

de las familias.

Vamos

a terminar con este pequeño cuadro que reproducimos de

un diario de 1859, en apoyo de

las ideas

sustentadas por la Comi-

sión de Salubridad:

El agua de aljibe de una de las casas de Montevideo empezó a

De acuerdo con

enturbiarse. resolvió

el

desagote a

fin

la

práctica seguida en tales casos se

de extraer

rea resultaba inacabable, porque a .-US

baldes volvía a llenarse

el

el

limo del fondo. Pero la

medida que

los

fondo por efecto de abundantes

traciones de una de las paredes del aljibe.

Y

ta-

peones extraían fil-

llevándose adelante

iiis

indagaciones se vino a descubrir que a una vara del aljibe

lía

un enorme pozo negro y que era de ese pozo que salían

exi.s-

las

fil-

traciones!

IjOS sei-vicios municipalí's. Descentraliza<3ión

Hemos hablado en

el

curso de este

departamental creado en reira.

Véase

de Diputados

lo al

los

capítulo del impuesto

comienzos de la administración Pe-

que decía la Comisión de Hacienda de la Cámara aconsejar la sanción de la ley:

«Los grandes beneficios que IV-39.

mismo

de rentas.

el

país

debía

reportar

con

la

ins-

610

rnsTouiA

iruguay

nicr,

titución de las Juntas Económico-Administrativas han sido hasta ahora completamente negativos por falta de leyes que complemen-

tasen

lentas

mismo en

él

que en

artículo

122

prosperidad

y

capaces

nos

falta

la

para

concebir

capacidad de

y por eso establecieron

el

mismo Código queda-

del

grandes acción,

si

bien somos bas-

elevados

ideas,

la

acción

Cumplamos

artículo 127.

de los

lo material, el bello pen-

sólo escrito para dar prueba de que

tantemente ceptos,

desarrollo

el

lo intelectual

í^amiento consignado en el

en

dichas corporaciones no contaban con

si

para opel'ar

suficientes

pueblos lo

ría

La sabiduría de nuestros

artículo 127 de la Constitución.

el

constituyentes previo que

de

con-

ejecución,

sus preceptos:

hagamos.»

Muchos años de

han corrido

esterilidad



agregaba



la

edu-

primaria se halla hoy como estaba hace treinta años: la feguridad individual espera aun el apoyo de la acción pública; cíicion

policías

las

son

débiles

Casi en los mismos hacía así

el

e

insuficientes.

momentos en que

proceso de los

servicios

la

Comisión de Hacienda un corresponsal de

locales,

Paysandú escribía al director de «El Comercio del Plata»: En este departamento no hay administración; las calles están llenas de zanjas; los malhechores recorren impunemente toda la campaña; el abigeato está a la orden del día. Encarando la institución municipal de otro punto de vista, decía

el

Presidente de la Junta "Económico-Administrativa de

tevideo don Juan

Ramón Gómez

«Entre nosotros hay

la

Mon-

en su Memoria de 1858:

equivocada de que estas corpora-

idea

ciones dependen del Poder EjfCLitivo y esto es un error que desííraciadamente han robustecido las antecesoras. Las Juntas son auxiliares administrativas del Gobierno y nada más. Su elección 3í)

hace o debe hacerla directamente

que

la

de sus representantes;

intereses

generales,

sentantes

inmediatos,

sus

los

miembros

agentes

el

de

de su

misma forma

pueblo en la

pues así como éstos las

Juntas

bienestar

y

lo

son del

son en los sus

repre-

progreso de

localidades. Subordinar las Juntas como simples Puder Ejecutivo sería falsear la Constitución del Es-

respectivas

agentes del

tado y en fin colocar a las policías

dependientes

del

Juntas en

Poder

corresponde exclusivamente a

él,

el

Ejecutivo,

puesto inferior de las y

cuyo nombramiento

siendo empleados a sueldo amo-,

vibles a su voluntad.»

Un grupo de respetables vecinos del Durazno que encabezaba don Carlos Reyles, se propuso hacer una demostración práctica

GOBIERNO DE PKREIRA

de

ventajas

las

que

611

un buen régimen de descentrali-

reportaría

xación de rentas, y pidió y obtuvo con tal objeto la recaudación e inversión del impuesto departamental que el país entero conside-

raba insuficiente a los nillas

fines

de su creación:

pago de

el

las

pla-

de la Policía y de la enseñanza primaria de cada departa

mentó. Pues bien:

durante

año que

el

comisión de vecinos ad-

la

ministró esa renta

fueron pagados mes a mes

instrucción

y

pública

de 50 pesos

al

cerrar

de el

la

sueldos

los

quedando apenas un

Policía,

de la déficit

ejercicio.

Pero las tendencias de la época concordaban poco con tan alto

grado de autonomía y romper de inmediato

el

fecundo ensayo del Durazno no consiguió

moldes del régimen aunque quedó sí como una prueba decisiva de aguardar de la acción particular en la vida de

fiscal

los

imperante,

que era

lo

dabU^

departamentos.

los

El alumbrado a gas. El servicio de alumbrado a gas iniciado en 1853 e interrumpido

por los trastornos políticos de ese año, volvió a toniar empuje du-

umte la administración como consecuencia de la

Pero

Pereira. fiebre

nuevo

de

amarilla

de

el Poder Ejecutivo empresa concesionaria,

cargó de hacerlo constar

rroga a favor de

la

interrumpió

se

Según se ensolicitar una pró-

1857. al

pueblo ignorante

el

había incluido la usina del gas entre los factores de la epidemia de aquel

año,

acabamos de licias

acusación a la que tampoco había escapado, según decirlo, la red cloacal, otra

ccn que Montevideo se ponía a

América del Sur. Sólo una pequeña parte de Todo lo demás continuaba con ptales de

tro que

de las grandes obras edi-

cabeza de todas las cá-

la

la

la

ciudad estaba iluminada

los

muchas veces no funcionaban

viejos faroles de

noche porque a esa hora debía alumbrar

la luna,

brara valgan las denuncias insistentes de

A

apagados

o eran

la

aceite

a gas. de po-

a las 10 de la

aunque no alum-

prensa.

mediados de 1859 se arribó finalmente a la regularización del mediante un contrato entre el Poder Ejecutivo y la em-

servicie

presa concesionaria, que la Asamblea ratificó.

Oe acuerde con

ese contrato la concesión del

alumbrado público

quedaba prorrogada por veinte años más; la usina sería trasladada a orillas del mar; el gas sería elaborado exclusivamente jon carbón mineral, quedando prohibida la utilización de materias animales y de cualesquiera otras nocivas a

la

salud pública; la ?ni-

DEL URUGUAY

HISTORIA

612

presa seguiíía percibiendo plazo de la concesión por

instalación

el

impuesto de alumbrado; y comprar el Gobierno

el

las

Juntas Económico-Adminis-

servicio de cementerios y carros fúnebres que estaba a

el

cargo de

la

edilicias.

Gobierno concedió en 1858 a

£¡1

toda

que se estableciera.

precio

Otros servicios y mejoras

trativas

final

al

podría

del

Policía.

la

El servicio de barrido y recolección de basuras continuó por

al-

Era muy pobre el material existente y a raíz de la epidemia de fiebre amarilla don Mateo Martínez tomó la iniciativa de una suscripción popular que permitió comprar 20 carros, 43 muías y los arreos correspondientes, por 2,300 patacones.

sún tiempo todavía a cargo de

En allí

fueron arrancados o cortados

1858

aceras

de Montevideo

desde

la Policía.

la



época colonial



todos

¿as

clavados

ellos

que servían para atar caballos, per-



mitir un respiro a los conductores de cargas y sotener

dad de

de

postes

los

cañones mucho de

viejos

integri-

la

las veredas.

Lia Policía.

Una buena reforma anunció Políticos en

marzo de 1858:

el

gobierno de Pereiru, a los Jefes

de entregar la policía «a

la

la

guardia

nacional de los departamentos, es decir a los mismos vecinos

in-

mejor servicio público y en la efectividad de las garantías constitucionales. Mientras no se lleve a cabo el cambio

teresados en

agregaba

el

— es

llenen «con



necesario

que

cuadros

los

servicio

del

policial

se

individuos cuyos antecedentes y cuya moralidad sean

elemento de progreso y de organización». En 1859 quedó instalado en la cárcel de Montevideo, por

iin

tiva

del

Jefe Político coronel Pablo Bermúdez,

y oficios con destino que espontáneamente

al

un

taller

inicia-

de artes

aprendizaje industrial de los encarcelados

quisieran

trabajar.

El

primer

estado

men-

sual de la Alcaidía arrojó 126 pesos por concepto de venta de artículos de sastrería, carpintería, escultura y dibujo de los 15 operarios

que ya había.

El coronel

Bermúdez creó en

padores bomberos que desde

importancia a la población.

el

ese

mismo

taller

una sección de

za-

primer momento prestó auxilios de

613

GOBIERNO DE PEBEIBA

Y organizó también el servicio de carruajes de alquiler en la Plaza Constitución, sobre la base de una propuesta de la Cochería de Passicot, que era la más importante de Montevideo, en la que se

establecía

siguiente tarifa por hora:

la

Carruajes de lujo: en días de fiesta bajo

%

2

patacones y en días de tra-

carruajes de primera, respectivamente

y carruajes de segunda y de tercera, desde 1 y 1

;

^A

1

y

V2

hasta

%

y 1

V^'

de pa-

tacón en días de trabajo.

Pero ciales

si en esto había progresos apreciables, otros servicios policontinuaban bajo los viejos moldes del coloniaje. El de ex-

tinción

de

perros,

por

ejemplo.

Los celadores, llamados «matape-

rros» por la prensa de la época, recorrían las calles de la ciudad

provistos de lazos y gruesos garrotes y machetes, con los que orga-

nizaban a la vista del público «espectáculos de carnicería horripilantes»,

según

El ejército

la frase

línea.

tle

de uno de los diarios.

Procedimientos de remonta.

El Poder Ejecutivo pidió a la Asamblea en 1857 la sanción de un proyecto de ley de remonta del ejército de línea. Las bajas serían llenadas, según ese proyecto, «con los individuos que por causa de

ebriedad,

denados

pendencia,

al servicio

raterías,

Fundando su proyecto «Hasta ahora,

obscenidad

y

vagancia,

fueran con-

de las armas por sentencia de Juez competente/). decía

sin gozar

el

Presidente Pereira:

de autorización expresa, han recurrido

nuestros gobiernos a la leva,

al

íibolida por la ley de 1853;

la

enganche y a la condena. La leva fué condena depende de los Tribunales;

enganche no produce aquí resultados. El sorteo sería el procedimiento más justo; «pero en el estado actual del país, sus hábitos, su educación y otras causas obstan por ahora a la adopción de ese el

sistema.»

Para eludir el sorteo, que era lo más justo, o por lo menos el enganche que si no daba resultado era por la exigüidad del sueldo, se convertía, pues, al ejército de línea en el receptáculo de todos los elementos que

la

sociedad excluía de su contacto por vicios o fallas

morales graves.

La Comisión la

conscripción

Cámara de Diputados encontró sin emfundamentos del proyecto. Xo puede aceptarse porque casi todos nuesdecía en su dictamen

Militar de la

bargo atendibles

los





conciudadanos han pagado ya tributo de sangre en nuestras guerras civiles y porque tenemos una mayoría de extranjeros que tros

HISTORIA

Gl4

escaparían

al

servicio;

del proletario es

muy

y

URUGUAY

1)EI.

tampoco

enganche, dado que

el

el

jornal

subido con relación a los recursos del Tesoro

público.

El pioyecto no encontró resistencia en

la

Cámara de Diputados,

manteniéndose entretanto 'los procedimientos de remonta a que iiabía hecho referencia el Mensaje. Un diputado pidió en 1857 que fuera interpelado el Ministro de Gobierno por la reiniciación de la leva. La moción pasó a informe pero

quedó olvidado en

el

de una comisión especial, ministeriales

montar

el

Pero

cual declaró que de las explicaciones

exacto

resultaba

personal de

la

Senado,

la

«haberse practicado

bitiva

existente.

en

Cámara hubo empate que

la

la

levas

para

re-

fuerza pública», no obstante la ley prohiinterpelación no se llevó a efecto, porque el

Presidente resolvió por

ne-

la

gativa.

Dos años después pidió

la

Legación de Portugal que fueran da-

dos de baja dos negros enrolados a la fuerza en los cuerpos de nea. El Ministro de la

Guerra se negó a

lí-

invocando que esos

ello,

negros procedían de los contratos celebrados bajo

el gobierno de Rivera con intervención de las autoridades portuguesas, habiendo pasado en consecuencia a ser uruguayos. Aunque la Legación re-

plicó

que continuaban bajo

la

protección

de

dente quedó terminado sin que se decretara

Ordenanzas

su la

bandera,

el

inci-

baja solicitada.

nülitai'es.

El coronel Francisco Lasala presentó yecto de Código Militar,

que en

el

al

Gobierno en 1857 un pro-

acto fué pasado a estudio de

una comisión compuesta de los generales Enrique Martínez, César Díaz, Antonio Díaz, y coroneles Salvador García, Andrés Gómez y

Santiago Labandera.

Tentativas pai-a realizar Mientras en ':;i

Iíí

refoi-nia.

Casa de Gobierno se abordaban esos estudios, en se buscaban medios prácticos para llevar reforma militar sancionada en 1853 bajo el gobierno la

Cámara de Diputados

a ejecución la

de Giró.

se

De acuerdo con el plan propuesto por la Comisión de Hacienda, crearía una contribución extraordinaria del 1 "/r por una sola

vez sobre todos los capitales existentes en la República. Calculábase su producto en dos millones de pesos. La reforma absorbería 10

co:!iici:.\u

i/,¿

y

uí:

pkkeika

615

Puro como no todos los oficiales

millunes.

liabri;»ii

de

.ser

eformados, y era necesario mantener a muchos de ellos en acti-



vidad, la operación podría realizarse con aquel impuesto y en todo

caso

culjrirse

la

üt-

déficit

el

planilla de

30,0U0

con amortizaciones graduales pesos mensuales que

a

expensas

Presupuesto asig-

el

a la lista militar.

.laba

ese plan, pero incorporando al 1 % !a emisión de una deuda de reforma militar, sin intereses, con un fondo amortizante de 5,000 pesos mensuales.

La Asamblea sancionó

Escuela Militar.

Lia

En

1858 creó

el

gobierno de Pereira por iniciativa del Ministro Antonio Díaz la «Escuela Militar Oriental»

de la Guerra general

designó

y

para

dirigirla

coronel

al

de

don José M.

ingenieros

Echandía.

«Considerando





decía el prsámbulo del decreto que el ejérno puede ocupar debidamente la distinguida posición que merece por sus grandes servicios a la causa t!e la libertad y

cito nacional

gloriosos antecedentes, ni perfeccionar su moral y disciplina mien-

que sus primeras clases no posean los conocimientos facultaen sus respectivas armas a la altura de la civilización del pueblo a que pertenecen y de los adelantos que la ciencia militras

tivos

ha hecho en los países más cultos de la Europa; y que el medio único de realizar tan digno objeto es ilust''ar en su noble profesión a la juventud militar, a cuya conducta y capacidad han de conferirse: algún día el honor y la salvación de la patria en los campos de batalla.» tar

Los cursos deberían durar cinco años con

siguiente

plan de

geometría,

trigono-

el

materias: 1."

año:

geometría;

aritmética, álgebra,

metría,

mecánica, estática;

plazas,

minas;

4.":

artillería,

2.":

fortificación,

3.":

pirotecnia

ataque y defensa de

bélica;

5.":

Historia mi-

litar.

Por otro decreto del mismo año quedó resuelto que todas las el cuadro de los oficiales del ejér-

vacantes que se produjeran en cito desde 1863

de

cursos,

Miliiír.

la primera rotación alumnos egresados de la Escut! a

en adelante en que terminaría

serían

llenadas

con

HISTORIA DEL URUGUAY

616

La

Guai'clia Nacional.

El proyecto de ley de reorganización de la Guardia Nacional íancionado por la Cámara de Diputados en 1853 quedó oivid.uio fii Pi Senado a la caída del gobierno de Giró y nadie vo^/ió a acordarse de él hasta 1858 en que el doctor Vázquez Sagastume pidió

a

la

Cámara que

pusiera de nuevo en

lo

la

orden del día

y lo reconsiderara.

«La existencia de cuerpos bien organizados de guardias naciodecía el doctor Vázquez Sagastume fundando su moción ba sido siempre un elemento de orden, de paz y de seguridad. L»,t

nales





sociedad y los gobiernos bien constituidos han encontrado siempre

on

los

ciudadanos

armados

los

más ardientes defensores de

las

instituciones de la iRepública y de los derechos del pueblo. Nuestro país la

tan combatido por la guerra

anarquía y las malas pasiones;

civil,

necesita

necesita un

un dique contra baluarte

para la

y las instituciones; necesita una garantía para la independencia y para el respeto a la autoridad; necesita un poder para parar los golpes que se asestan o que pueden asestarse a la paz libertad

:•;

el

a la tranquilidad pública; a la paz que constituye la esperanza y porvenir de la patria. Yo no encuentro un poder que represente

mejor la soberanía del pueblo y que sea la expresión más caraoterizada de la voluntad popular que los batallones de guardias nacionales.»

Como

consecuencia

de

esa

iniciativa

la

Asamblen

dictó

mismo año una ley que establecía lo siguiente: La Guardia Nacional se dividirá en activa y pasiva. Sus se

prestarán

Suplirá

al

en

-A

servicios

armas de infantería, artillería y caballería. de línea. Todo ciudadano es guardia nacional.

en las

ejército

El servicio activo correrá desde los 17 hasta los 47 años de edad y el pasivo hasta los 55. Las asambleas para la infantería y arti-

tendrán lugar los doming-os y dias festivos de los meses de marzo y abril. Las de la caballería durarán 15 días consecutivos. El nombramiento de jefe corresponderá al Presidente de

llería

febrero,

la

República y

propuesta de

el

los

de los

jefes.

oficiales

también

al

Presidente,

Habrá en Montevideo y en

las

pero a

demás

ciu-

dades y villas del Estado los batallones y compañías que permita o: número de sus habitantes. Cada batallón tendrá las piezas de

que sean necesarias. En las secciones rurales se organizarán los regimientos y escuadrones que la población permita. artillería

Al reglamentar la ley estableció

el

Poder Ejecutivo que en

el

GOBIEBNO DE PEBEIRA

6l7

departamente de Montevideo habría cuatro batallones de infante-

y un escuadrón de caballería. Acababa de estallar- la revolución del general César Díaz, -jn cuya oportunidad la plaza de Montevideo había estado a punto de ría y dos regimientos

caer por falta de fuerzas militares organizadas, y se deseaba na-

turalmente evitar la repetición de un riesgo que continuaba siendo inminente.

Por efecto de

convocatorias extraordinarias de la Guardia Na-

las

amagos de invasión daban lugar y de los aumentos realizados en el ejército de línea, hubo momentos en que el número de soldados llegó a niveles desconocidos para las adminis-

cional a que los

traciones posteriores a la pacificación de 1851.

A

Corpus Christi celebrada en junio de 1858 con-

la función del

currieron las siguientes unidades: l.er

batallón de guardias nacionales, 400 plazas; 2.° batallón de

200; Cazadores de la Unión, 210; Artillería Oriental, Cuerpo Municipal, 200; Dragones Orientales, 160; Caballerías de policía, 140. En conjunto, 1,460, hombres. Al iniciarse en 1859 los ejercicios ordinarios que prescribía la

Unión,

la

150;

ley,

ocurrió un incidente llamativo. Los batallones de guardias na-

cionales iban desfilando por

darse

de

su fusil al

armas

presentar

acababa de aparecer en nos, el

casa del Presidente Pereira, y al

la

al primer mandatario que uno de los soldados ciudadajoven Mariano Ferreira y Artigas, se dio vuelta y mantuvo

orden

la

hombro en

balcones,

los

señal de protesta contra los fusilamientos de

Quinteros, ocurriendo entonces un tumulto durante

fué

testante

sacado

de

la

el

cual

el

pro-

desarmado y conducido por

compañía,

soldados al Fuerte de San José.

4

Son trasladados

Hemos

al

cementerio los

restoss

de Artigas.

dicho en un capítulo anterior que

la

urna que contenía

de Artigas, traída de la Asunción en septiembre de 1855,

los restos

había quedado abandonada en la Capitanía del Puerto, a la espera d'-

una resolución

5U

traslado al

Ante

la

del

Gobierno o de

la

Asamblea que dispusiera

cementerio.

larga

inactividad

de

los

Poderes

públicos,

varios

ciu-

promover una suscripción popular para llenar ese gran deber. Véase lo que en abril de 1856 dadanos

tomaron

la

iniciativa

de

escribían «Los viejos orientales» en «El Mercurio»:

«¡Orientales!

los

venerables

restos

del

padre de la Patria, del

UUUGLAV

IIISTOUIA UEL

618

eiudadanu, del virtuoso patriota, del Washington oriental don

'¿ran

José Artigas, yacen insepultos, sin que de

iiumarlos

la

tierra

sagrada que

Gobierno que mandó

el

los

en

cubriera

ex-

Paraguay,

el

numerosos deudos, los dignatarios de la Iglesia, ni nadie en nosotros que somos libres por sus afanes y sacrificio,, recordase la obligación que nos cumple a todos de honrar sus cenizas. Ya es tiempo de llenarla, ciudadanos de todas clases y con(iiciones; ya es tiempo de lavar la negra mancha de la ingratitud :;us

entre

V.'.:

nue

nos

ante

afea

etfera a rendirles

morada en

el

mundo.

Contribuyamos dentro

nuestra

de

último homenaje, conduciéndolos a

el

eternn

la

suelo patrio.»

el

Ese llamado patriótico tuvo inmediata repercusión en

la

Cámara

de Diputados, donde don José E. Zas presentó un proyecto acor-

dando honores

«al

primer jefe de

conspicuo en

y

rito

la

historia

los orientales...

al

más

benem;.-

de nuestra emancipación política».

La Cámara, dándose cuenta de

enorme culpa de

la

todos,

resol-

asunto sobre tablas, y pasó a cuarto intermedio mientras se expedía la Comisión encargada de su estudio.

vió

entonces tratar

Reanudada

la

el

sesión fué aprobado

proyecto.

el

Y

su ejemplo fué

Senado pero con una enmienda que empequeñecía homenaje. Dos senadores invocaron el estado angustioso de la

seguido por fci

el

Hacienda pública para pedir que juera aplazaño

el

funeral, deposi-

tándose mientras tanto la urna en una Iglesia. Otro senador pr.>

puso y su indicación fué aceptada por mayoría, que la Asamblea en vez de decretar honores, lo que obligaba a tributarlos de inmedijera tribútense

diato,

Felizmente para

el

oportunamente

país triunfó

el

los

honores fúnebres,

proyecto originario de

etc.;.

la

Cá-

mara de Diputados y en consecuencia la Asamblea dictó en junio de 1856 una ley que estaba concebida en estos términos: «Tribútense los honores fúnebres que corresponden litar

del

primer jefe de

neral de la

al

rango mi-

Gobernador y Capitán Geantes Provincia constituida hoy República Oriental, ciulos

orientales.

dadano don José Artigas. Facúltase

al

Poder Ejecutivo para

los

de las exequias y competente depósito de los restos del expresado General en un lugar preferente del cementerio público».

.fastos

No

existía todavía la rotonda que

nacional.

La piedra fundamental de

hoy sirve de asiento al panteón ese templo fué colocada en ju-

de 1859. Por eso la ley se limitaba a disponer que la urna fuera clocada en un luyar preferente del cementerio.

lio i

Los restos de Artigas continuaron abandonados en la Capitanía Puerto hasta el mes de noviembre en que el Gobierno tiró los

del

6l9

üOBÍERÍiO DE PEBEIRA

damandaba

decretos que

cumplimiento de

el

la

dictada

ley

por la

Asamblea.

Por uno de

ellos se

designaba una comisión compuesta del gene-

Anacleto Medina y de los coroneles Velazco y Melilla para que presenciaran la traslación de la urna al cementerio. Por otro se

ral

establecía

el

programa de

formación de todo

honores:

los

conducción del féretro por

cito;

los

ejér-

el

generales y coroneles;

descar-

el brazo que llevarían todos empleados públicos por el término de 48 horas; una inscripción en la lápida que dijera «Artigas, fundador de la Nacionalidiio

gas de fusilería y de artillería; luto en los

Oriental».

finalmente

^'

el

20 de

Noviembre de

año largo de absoluto abandono en restos de Artigas fueron

1856, es decir, después de un la

conducidos a

Capitanía del la

Puerto,

Iglesia Matriz

los

donde se

un funeral, y luego al Cementerio Central. «La bandera decía «El Comercio del Plata» redactado entonce.? por el doctor Miguel Cañé símbolo de las hazañas del hér^^e

rezó





con la cual tantas victorias alcanzó, cubría las insignes

oriental,

cenizas del General Artigas.»

«Campeón

Buenos Aires

de

llamaba

ilustre»

planearse

al

doctor Cañé a Artigas en ese

el

el

homenaje.

<E1 Guillermo Tell de la libertad de los orientales,

nuestra independencia»,

de

ceremonia de

la

En

el

queña,

la

agregaba «La Nación»

el

Ministro de Gobierno doctor Ro-

«Los restos mortales del General don José Artigas

del

de Gobierno don Joaquín Requena

ilustre

scnibra del

campeón de nuestra sagrado estandarte

humano. Tenemos ya ese

ocuparse de

doctor Vázquez Sagastume y los señores Acha, Reyes y

Aguiar.

nistro

Washington

el

al

de los restos.

traslación

cementerio hablaron

el

ar-

apreciaciones deprimentes de un diario

rectificando a:I las

t'u'ulc,

el



libertad, del

divino

los



dijo el

gloriosos

descansan ahí bajo libertador

de^

Mi-

restos la

género

consuelo de custodiar por nosotros mismos

depósito santo, esas cenizas venerandas

restituidas

al

seno de

la patria. Ellas serán para nosotros un vínculo de unión, porque agrupados los orientales en derredor de la tumba del primero de sus héroes, del patriarca de la independencia, del fundador de su

nacionalidad, del padre de será

sofocado y

revivirá

la

solo,

patria,

todo sentimiento de división

vigoroso y radiante,

el

sentimiento

de nacionalidad, de independencia, de libertad; y los orientales para conservarnos independientes y libres necesitamos estar unidos».

HISTORIA DEL UEUQUAT

620

— —

Aguiar heroico soldado de la indeel general un patriotismo el más puro; así es que su nombre fué el más popular que se ha conocido y que en vano pretendieron aniquilar los enemigos de su época, por el cambio que la revolución América había producido, aunque en algunas circunstancias de«Poseía

pendencia

dijo

se pusieron de su parte para hacerlo aparecer despreciable ante el

mismos que se habían manifestado sus más aradmiradores cuando tenían algo que esperar o temer de sus virtudes cívicas... Sus servicios algún día deben formar la leyenda más edificante de entusiasmo y nacionalismo en la relación

mundo

aquellos

dientes

histórica de la emancipación política de esta parte del Sur.» «iSu

ría

nombre pasará



Reyes



don José Ma-

dijo el general de ingenieros

más remotas

a las

de la América

generaciones, grabado en el cora-

zón de todos los hijos de esta tierra.» Al organizarse los

más

oficiales

el

homenaje Leandro Gómez que figuraba entre

distinguidos del ejército, se dirigió al Presidente

Pereira para hacerle un obsequio valiosísimo:

«Mi constante admiración por el ilustre oriental don José Artigas decía en su nota hízome adquirir en Buenos Aires por el año







1842 la interesante noticia de la existencia de una prenda monu-

mental que

le pertenecía.

Era

ésta

una espada de honor que

le fue-

ra consagrada por la Provincia de Córdoba en gratitud a los emi-

nentes servicios del campeón oriental; joya dispersa como muchas por el huracán de la revolución que un día reunidas rán de diadema gloriosa a la República.»... La espada tiene inscripciones en la vaina:

protector la

el

«Córdoba en

los

Acompaño

inmortal General don José Artigas. esa espada



concluía Leandro

estas

primeros ensayos a su

Año

hoja «Córdoba independiente a su protector».

alta expresión de la admiración

otras servi-

Gómez

1815»,



profunda que debo a

y en

la más memoria

«con la

del patriarca de la libertad y la independencia de nuestra patria.»

Un año

después

la

Cámara de Diputados completaba

el

homenaje

sancionando un proyecto por el que se mandaba pagar a don José devengados C. Artigas en títulos de deuda pública los haberes por su abuelo

el

Jefe de los Orientales desde

de 1820 hasta

el

18 de septiembre de 1850.

el

1.'

de noviembre

Fundación de pueblos. El extenso territorio de San José fué dividido en dos departamentos a mediados de 1856: el de San José y el de Florida,

GOBIERNO DE PEBEIRA

621

Don Manuel Errasquin, en representación de un grupo de en 1859

pietarios, pidió

la

ill

Gobierno encontró atendible

de

la

dio margen a que en la Cámara de Diputados un proyecto de minuta observando al Poder Ejecutivo

ello

y

se presentara

que

ia

pedido y autorizó la fundación

el

Independencia. Tratábase de un simple decreto admi-

Villa

nistrativo,

pro-

creación de un pueblo en Fray Bentos.

de

creación

pueblos

era de

competencia del

exclusiva

la

(3uerpo Legislativo. Pero después de largo debate, la moción quedó

rechazada y

decreto gubernativo recibió

el

El Gobierno decretó luego

cumplimiento.

restablecimiento del pueblo de Be-

el

lén en los campos escriturados al general Lavalleja en 1838 y rescatados parcialmente después mediante una transacción con los

herederos del Jefe de los Treinta y Tres. Dentro de las seis suertes

de estancia que readquiría

fisco

el

establecerían numerosas chacras con

se

campo y

iiiismo

a las

demás familias

que quisieran avecindarse

pueblo y

el

Departamento

del

Se quería asegurar

allí.

impidiendo que

la agricultura

instalaría

se

destino a los intrusos del

el

las estancias llegaran

Salto

del

desarrollo de

hasta

radio

el

urbano.

Ya en meses anteriores tar

las

el

Gobierno se había preocupado de que era

invasiones de intrusos,

paña, mediante un decreto que

el

establecía

mal de toda que los ejidos

pueblos estaban destinados por nuestras leyes a las

Juntas

lo

evi-

cam-

de los

labranza y que exigir el cumpli-

la

debían

Económico-vA.dministrativas

miento estricto de

la

que aquéllas prescribían.

Obras públicas.

En

1857

presentaron

se

al

Gobierno

los

señores Roviría,

Gras

primero y arquitectos los segundos, como representantes del «Círculo Artemia». La Confederación ArAlfonso y Soler, ingeniero

gentina y la



el

República Oriental

podrían ser lo mejor

del



decían en

globo a

su

representación

condición de que

fomenta-

ran su población, establecieran carreteras, organizaran un servicio de aguas para la

agricultura

consumo de sus habitantes, dieran incremento

el

canalizaran sus

y

ríos

y arroyos.

Y

concluían

a

pi-

diendo una concesión por cincuenta años para construir y explotar

una carretera entre Montevideo y

tevideo y

para

el

la

Unión, y otra entre Mon-

Paso del Molino a base de un peaje de

los coches,

4

para

las carretas,

animales vacunos y caballares y

1

3

para los jinetes,

para

los

lanares.

6

vintenes

2

para los

622

iiiSTOiíiA

lürüi'AY

i)i:i,

Preparándose para estudiar esas y otras obras públicas, pidió el Gobierno a la Asamblea que con el personal técnico que acababa de trazar la línea divisoria con el Brasil se for-

en seguida

mara

Departamento de Ingenieros. Pero la época era de angusAsamblea no creyó prudente recargar con esa

el

tias financieras y la

nueva planilla

En

presupuesto.

el

mismo año

la .Junta Económico-Administrativa de la Capiuna propuesta de don Tomás Tomkinson para la construcción de un puente en el Paso del Molino y una calzada en el arenal del Arroyo Seco sobre la base de un peaje que regiría duel

aceptó

tal

cincuenta años.

rante

Ya en años construcción

anteriores había

de

Río Negro, sobre y un peaje

años

en

1

y

%

Los

en

trayecto

el

de

Montevideo a

base de una subvención anual de 18,000

la doble

pesos

propuesto don José Buschental la

puentes

varios

en cada puente que se cobraría durante veinte forma de asegurar a los empresarios el interés de mensual y la amortización del 2 '/.

'',''

señores

Navia y

Duplessis,

Hocquard,

gestiones

iniciaron

en 1859 para obtener la concesión de un ferrocarril de Montevideo a

a

la Unión. Contaban con un capital social de 200,000 pesos. Impulsado por esas iniciativas se dirigió el Presidente Pereira

Asamblea proponiéndole

la

bierno

en

donde a

de

local

el

funcionaba

la sazón

el

de

construcción

la

Cindadela,

la

la

Plaza

actual

Casa

Go-

de

Independencia,

mercado. En la Casa de Gobierno

Poder Ejecutivo, el Poder Legislativo y el Poder Judicial. En reemplazo del mercado de la Cindadela, se consíondrían cabida

truirían tres

el

establecimientos

«Fuerte» o Casa de

enajenado por todavía en 1859

el el

Gobierno,

más cómodos,

sitio

donde estaba

(.'olonia.

la

la

En

el

administración subsi-

idea de construir la Casa

Cindadela, resolviéndose en cambio hacerlo en

También

en

la Defensa y por el cual se abonaba mensual de 600 pesos. Ya la presidpncía

alquiler

guiente se reaccionó contra la

ellos

gobierno de

Pereira estaba en sus postrimerías y bajo

no en

uno de

hoy Plaza Zabala, que había sido

el

se ocupó

rio

e^

Gubi

,-r-

mismo

Fuerte. el

Gobierno del ensanche de

la

ciudad de

la

1859 ordenó la demolición de las murallas y baterías

de las fortificaciones de la época colonial, invocando que esas obras dificultaban

el

dtfcnsa

Estado.

efecto

del

Los

terrenos

de la demolición serían

se aplicaría al niiento.

desarrollo de la población

costo de la

que

y

eran

resultaran

iniitiles

para la

disponibles

por

vendidos en remate y su importe

demolición y

a

trabajos de terraplenn-

GOCTERNO DE PEREIRA

623

Espectáculos públicos. La inaugui'ación del Teatro Solís. Entre

festejos

los

conmemorativos

del

25

de

Agosto

ñguró en

iN56 la inauguración del Teatro Solís.

Empezó la fiesta inaugural con un programa literario en que marón parte don Cándido Joanicó, quien pidió desde su palco üue el nombre de los miembros de la Comisión Directiva que presidía don Juan Miguel Martínez fuera esculpido en las columnas ii¿ mármol del vestíbulo, don Heraclio Fajardo que leyó una poesía de Acuña de Figueroa, don Octavio Lapido y el Jefe Político te

don Luis Lamas. Y en seguida se dio la ópera «Ernani» por una compañía lírica de la que formaban parte la contralto Sofía Lorini, Camoli y Gentile y

los tenores

el

barítono Cima.



«La América del Sur escribía editorialmente el doctor Miguel Cañé en «El Comercio del Plata» no posee un solo teatro lue pueda presentarse como rival, y muchas grandes ciudades





europeas

desearían y

lo

mostrarían

lo

como obra digna

viajero

al

de examen.»

Hay que

1857 tuvo Buenos

efectivamente, que sólo en

advertir,

Aires su Teatro Colón.

Algunos meses después de vio

se

lís

debutó

quien

con

aconipañó hasta

gún

inauguración,

el

el

el

escenario del

So-

primer tenor del mundo,

un éxito tan extraordinario que el público hotel «en medio de hachones encendidos»,

lo se-

las crónicas de la época.

Desde que

rití

la

honrado por Taniberlick,

la

primera representación quedó establecida

la

Policía

on forma tan

cumplimiento i"jaba,

recogiera

los

bastones

de

los

la

costumbre

concurrentes

y

rigurosa que una noche fueron requeridos para su el

que le acompamandatario hiciera valer sus fueros contra el

Presidente Pereira y un general

sin que el alto

celador que lo detenía a la puerta del teatro.

Censui'a teaU'al.

El

gobierno de Pereira restableció

censura

bre

e

inspección

el

de teatros,

estimular las ventajosas disposiciones de al

decreto del

invocando la

la

año 1837 necesidad

so-

«de

juventud que se dedica

cultivo de la literatura dramática y garantir a la vez las exigen-

cias del decoro y la

El

moral pública».

cargo de inspector y

censor

fué

confiado

a

don

Francisco

HISTORIA DEL URUGUAY

624

Acuña de Figueroa, Tesorero jubilado decía el decreto de nombraDiiento, como para dar a entender que el gran poeta no recargaría

erario público con su

al

época

No

que prescribía

podrá

un reglamento que fué aprobado por

redactó

anterior,

Policía,

nueva comisión.

que ya había desempeñado iguales funciones en una

Figueroa,

ninguna

darse

representación

acuerdo del censor, a quien se remitirá anticipación.

podrá hacer

censor

El

la

siguiente:

lo

las

la

sin

teatral

previo

pieza con seis días de

supresiones

y

correccio-

nes que estime convenientes. Si algún actor faltare al decoro con acciones o movimientos que pudieran ofender la decencia pública,

misma

incurrirá en la

palabras imprudentes

responsabilidad que groseras.

o

que violen

el

reglamento.

Hablaba

el

decreto de la necesidad

disposiciones de

la

juventud.

Y

es

si

hubiera pronunciado

censor podrá corregir

El

a

los

de estimular las ventajosas que efectivamente en esos mo-

mentos se iniciaba un fuerte movimiento encabezado por el doctor José Pedro Ramírez con su drama «Espinas de la orfandad», estrenado con notable éxito en el Teatro San Felipe, y por el propio 'Acuña de Figueroa fundador de una sociedad de aficionados orienpara dar todos los meses funciones dramáticas seguidas de

tales bailes.

Centros de arte y sociabilidad.

En bajo

1857 se inició la fundación de un

conservatorio

nombre de «Sociedad Filarmónica», con

el

de piano, violoneello

También

se

e

intentó

tro de reuniones

clases

de música

superiores

instrumentos de viento. la

fundación

del

«Club Nacional», un cen-

sociales y de confraternidad

entre las familias

orientales «tan desligadas por las convulsiones políticas», decía

«La

Nación». Pero la idea no echó raíces por efecto de las agitaciones

que subsiguieron a Quinteros.

Las coiTidas de

toros.

Las corridas de toros reanudadas en 1855, prosiguieron durante el gobierno de Pereira. En 1857 fué herido un torero y comen-

todo

tando

el

suceso escribía

el

doctor Juan Carlos

Gómez en «El Na-

cional»:

«El sacrificio de la vida en las astas de un toro es un suicidio y

GOBIERNO DE PEBEIRA

religión

la

como una

tiene

razón

en negar

al

torero

625

el

entierro en sagrado

protesta de la moral ofendida. Las corridas de toros ha-

bían dejado ya de estar en nuestras costumbres. El pueblo las había olvidado y buscaba los placeres de los teatros, de los circos, o

de otros pasatiempos

educadores o inofensivos. Fueron restableci-

das las corridas a pretexto de fomentar a

la villa

decadencia se temía. Nos opusimos ^entonces las

porque creyéndolas ineficaces

corridas,

al

de

la

Unión, cuya

restablecimiento de

para

el

objeto que se

pretextaba iban a traernos sus males sin compensación de bienes

La experiencia ha probado nuestra previsión. La Unión no debe ningún progreso a la plaza de toros. Los ómnibus han valido para el adelanto de la Unión lo que no valde ningún género.

villa de la

drían 100 plazas de toros funcionando todos los días».

Fiestas conmemorativas de la independencia.

En

octubre de 1858 hubo festejos conmemorativos de la indepen-

dencia nacional, figurando en

que ocupaba

el

ta inscripción:

el

programa un monumento alegórico

centro de la Plaza Constitución, en

el

que se

leía es-

«Artigas fundador de la nacionalidad oriental» y nu-

merosas corridas de sortijas en la Plaza Independencia y en la Plaza Cagancha, cuyos alrededores entonces despoblados ofrecían espacio amplio a las maniobras de los jinetes.

Intereses eclesiásticos.

De

las

costumbres de

la

población de Montevideo durante la épo-

que recorremos da idea este párrafo que entresacamos del artículo que un diario de 1858 dedicó a los últimos momentos del doctor Francisco Solano de Antuña, una de las figuras consulares ct

del

Uruguay:

«Como hermano

del

Santísimo

el

señor Antuña recibió los divi-

de estilo. Un numeroso hermanos y porción de gente con hachas y velas encendidas acompañaban la Majestad bajo palio». Era así efectivamente cómo se administraba la extremaunción a los católicos de entonces. Salía de la iglesia un pequeño grupo, al que se iban incorporando hombres y mujeres durante el trayecto

nos auxilios con todas

las

formalidades

cortejo de

basta formar importantes columnas que penetraban en los dormito-

IV

- 40

HISTORIA DEL URUGUAY

(526

moribundo, o llenaban los zaguanes, patios y aceras, acompasacerdote con rezos y cánticos. Otra costumbre colonial que se había perpetuado en las iglesias

ríos del

ñando

al

de tercer orden era la de sustituir los santos de madera por santos de carne y hueso. Al trazar

el

programa de una procesión que

de-

bía celebrarse en la iglesia de los Ejercicios en diciembre de 1858,

advertía «La República» que no habría santos vivos

como

se pre-

tendía que los hubiera, en razón de haberlo prohibido la Vicaría pa-

un

ra evitar que se diera

De

salto atrás.

pecuniarios de la población

los aportes

al

fomento católico

instruye una suscripción levantada en 1859 para la construcción de Iglesia y Colegio de la Concepción, en la calle

la

Daymán, que en

breves semanas produjo los 40,000 pesos en que estaban calculadas las

obras.

La

según

Policía hacía también buenas migas con la Iglesia,

lo

acredita una ordenanza de 1859 que bajo pena de multa de cuatro pesos establecía que «todas las casas de negocio, artes o industrias de-

bían permanecer cerradas todos los doijiingos y días de fiesta des-

de las 10 de la

mañana hasta

las 4 de la tarde».

El Gobierno expulsa a los jesuítas. Este ambiente de

solidaridad de las autoridades civiles y

reli-

giosas quedó bruscamente alterado a principios de 1859, con motivo

de una correspondencia sensacional que llegó a

manos

del

Presi-

dente Pereira.

Hemos

dicho ya

que los jesuítas tenían un colegio en la villa

de Santa Lucía bajo un régimen de absoluta libertad y con privilegios que daban a los estudios que

allí se

hacían

el

mismo

sola condición de someterse los

los universitarios, bajo la

valor que

alimmos

a las pruebas que establecían los reglamentos oficiales. ¡Los

directores de

ese Colegio

localidad ingresara en la

de

la familia.

Y

trataron de que una señorita de la

Hermandad de Caridad, contra

la

véase lo que en una de sus cartas decía

voluntad el

padre

jesuíta a esa señorita para decidirla:

le

«Su mamita no puede en conciencia, de tomar el estado que más conforme

píos, ni negarle lo que

le

ni

según

le

parezca a la voluntad de

las

leyes, impedir-

pertenece por parte de su difunto padre,

y que por lo tanto aún contra la voluntad de ella puede usted seguir la vocación y debe obedecer antes a Dios que a ella, mucho más

cuando

la

expusiera

al

peligro de pecar.

Es necesario Anita que en

GOBIKBKO DE PEBEIBA

627

esta parte usted se arme de un santo valor y desprecie todo humano respeto, sabiendo que en esto va nada menos que su eterna salvación, cuando por seguir los consejos de la carne y de los hom-

bres se expusiera a desobedecer a Dios». El Ministro de Gobierno se dirigió en

José Sato que era

el

el

acto al presbítero don

superior de la Compañía, para adjuntarle la

manos del Presidente y pedirle que reprimiera y castigara tales avances, si quería evitar que el Gobierno recurriera a otras medidas. Censurando a los jesuítas decía en su nota el Ministro:

carta que había llegado a

Desvían su atención a otros objetos ajenos a aquellos propóque es más alarmante a objetos para cuya consecución se hace uso de teorías disolventes y desorganizadoras, que llegarían <'^

sitos y lo

hasta romper los vínculos de la familia,

arrebatando

la

esponta-

neidad a vocaciones que sólo deberían ser hijas de las convicciones individuales y no el resultado de una propaganda desquiciadora, disfrazada con el ropaje de doctrinas que llevan en sello de

el

la

el

fondo

seducción y llegan hasta aconsejar la desobediencia

a la potestad paterna.»

Pero

el

superior de la Compañía no sólo admitió la autenticidad de

la carta, sino

que emprendió su defensa mediante un largo alegato

en que invocaba los Santos Evangelios. Su contenido



«es

muy conforme

Ya no

cabían

a la moral

más pura de nuestra

contemplaciones y entonces

el



agregaba

fe católica».

Gobierno resolvió

dejar sin efecto la autorización acordada en 1858

a

la

Compañía

de Jesús para fundar escuelas y dispuso que en el más breve lapso tiempo salieran del territorio nacional todos los padres de la

d'..'

Compañía. Ese sensacional decreto que fué dictado en enero de 1859 con a la Asamblea General, como en efecto se hizo, estaba precedido del siguiente preámbulo: «Considerando que es un deber del Gobierno prevenir las con-

cargo de dar cuenta

secuencias

que podrían

perniciosas, que ya en

el

turbación a los espíritus

resultar

de

la

propagación

de

doctrinas

pulpito, ya en privado, llevarían la per-

y

despojarían de su verdadero carácter

de espontaneidad a vocaciones que sólo deben ser

el

resultado de

convicciones íntimas e individuales.»

Otro conflicto con ocasión de la elección de vicario.

A

raíz del fallecimiento del vicario

rrido a fines del

mismo

año,

el

don José Benito Lamas, ocu-

Gobierno, invocando sus derechos

HISTORIA DEL UflUGUAT

628

de patrono, se dirigió a monseñor Marini, delegado del Papa en el

Río de

la

Plata con asiento en la Argentina, proponiéndole para

don Santiago Estrázulas y Lamas, cura rector

llenar la vacante a

de la Matriz.

Monseñor Marini pretexto de

una bula por

falta la

excusó de confirmar

se

de

Pero

que confería

el

nombramiento bajo

mismo^ tiempo expidió vicariato a don Jacinto Vera, cura

facultades. el

al

de Canelones. El Gobierno en vez de exigir

el

retiro liso y llano de esa bula

una terna compuesta de don Santiago Estrázulas y Lamas, don Jacinto Vera y don Juan José Brid. Era lo que quería monseñor Marini, quien en el acto eligió a su candidato, quedando con ello don Jacinto Vera al frente de violatori^ del patronato, presentó

la Vicaría.

Alentado por

este

de

acto

un breve que concedía

debilidad,

cura del Salto

al

sin haber obtenido previamente

el

expidió la

monseñor Marini

facultad de confirmar

pase del patrono. Era

muy

sal-

desconocimiento de atribuciones y el Gobierno no tuvo más remedio que protestar con energía. Se trata decía el Mitante

el



Gobierno a la Vicaría en octubre de 1859

de

nistro

hecho grave y atentatorio a

prema

las

del Estado», y por lo tanto «debe suspenderse al

cura en

el

ejercicio de su

Estado.

de la Iglesia

Reconociendo

oriental el

«de un

mencionado

facultades parroquiales.»

IDon Jacinto Vera se estrenó en

de Jefe



prerrogativas de la autoridad su-

el

desempeño de sus funciones

bajo un ambiente de

patronato

propuso

al

paz con

Gobierno

la

el

desti-

tución del cura de la Colonia, el nombramiento de sustituto, el nombramiento de cura de San José y la designación de Secretario

de la Vicaría, obteniendo en todos los casos la aprobación gubernativa.

Ya veremos que por haber olvidado estas prácticas iniciales, promovió más tarde, durante la presidencia de Berro, un conflicto de

mucho mayor resonancia en que

el

Gobierno sostuvo con

gorosa energía sus derechos de patrono.

FIN DEL

TOMO

IV

vi-

índice

ÍNDICE DEL TOMO IV

Gobaiiio

i.



Giró.

(le

1852-1853 Págs.

CAPITULO

Movimiento político I. La lucha presidencial, pág. siones ordinarias, 9 tidos,

11





7



Apertura de

Adhesión de

los militares,



— Empiezan

— Prepa— La

la

los

elec-

La Asamblea habla

al

país,



La

ventanas,

23

contratos de enajenación de rentas, 18

abolición

impuesto de

del

—'Prosigue jubilación,

puertas

y

debate histórico con motivo de una

el



25

16

El gobierno de Giró anu-

conflictos.

los

se-

13

rativos para la elección presidencial. 14

ción de Giró, 15

las

El equilibrio de los dos par-

Los tratados con

ben ser sometidos a

Brasil,

el

El gobierno de Giró considera que

los

26



tratados de-

la ratificación legislativa, 29

— —

Los dos contendientes se dirigen a Urquiza, 30 la ayuda de Corrientes y Entre Ríos

El Brasil pide

contra la República Oriental, 30



Urquiza resuel-





La misión Peña, 35 La presión Coadyuvando a la misión Peña, 37 La prebrasileña por medio de las bayonetas, 39 sión brasileña por medio de la revolución colorada, 40 Otra forma de la presión brasileña: la susLa sanción legislapensión de los subsidios, 41 Entre presión y presión un pedazo de tiva, 43 La coparticipaterritorio pasaba al Brasil, 46 Empieza a ción de los partidos en el Poder, 48 Los primeros rumores sentirse el malestar, 50 ve apoyar

áJ

Brasil,

32

















de revolución, 51

—La

diputación

rales,

59

estudio

— a

la

El

— del

Evolución de los partidos, 53 Salto,

57



Reformas

electo-

Presidente Giró realiza un viaje de

campaña,

61



Campaña

contra

el

HISTORIA DEL UBUQUAT

632

Págs.

64



64





63

abigeato, tos,

Un

La prensa

mina



Nacional,



68

en



Organización de

Cómo la



75

ministerio,



72



Preparando

El motín militar, 78

-



79

ter-

Guardia

La obra de reconstrucción econóRenunal segundo plano, 70

mica queda relegada cia del

proyec-

vencedores de Caseros,

los

tercia en el debate, 66

incidente, 67

el

fecundo

interinato

La medalla a



la

revolución,

Sedimentos del motín,

El derrumbe del gobierno de Giró, 81



La

parte del Brasil en la caída del gobierno de Giró,



84

La confesión

brasileña,

86

ción ruidosa en Río de Janeiro,

Paranhos,

nistro

durante

gas,

CAPITULO



La



96

el

de

libertad

gobierno de Giró, 92

el

gentinos,

90

— Una interpelaMi88 — Habla

Glorificación



la

prensa

Los sucesos obra de

de la

ar-

Arti-

97.

Movimiento económico La población después de la Guerra Grande, pág. 99 Organización df^ la estadística, 102 La corriente II.





— Estímulos a colonización, 104 — La edificación, ritu de asociación, IOS — Todavía inmigratoria,

103

la

inmigración y El espí-

107



la esclavitud,

109

— Intereses comerciales. Cifras del censo de 1852, 110 —Número de patentables, 112 — El servicio domésen 1853, 112 — Gestiones comerciales, 113 — tico

Movimiento de buques en el puerto de ^Montevideo, Obras portuarias malogradas por efecto de la

115



— Controversias sobre jurisdicción — El debate se extiende a Martín Gar118 — A favor de la libre navegación del Plata y sus afluentes, 120 — Farolas y balizas para dar seguridad a la navegación, 120 — La navegación a vapor, 122 — La riqueza ganadera, 122 — Importación de ganados, 124 — Plagas de campaña, 125 guerra, vial,

116

flu-

117

cía,

la

—*Los

s.aladeros

orientales bajo la acción del trata-





La agricultura, 128 El Empresas de inmigración y colonización, 129 do de comercio de 1851, 126



Gobierno pide recursos para practicar estudios geológicos, 134

blea

dicta

— una

Diversas industrias, ley

de

privilegios

13.t



La Asam-

industriales,

136

99

633

íJíDicE

Págs. .

— Empresas

ómnibus y de

.de

Los intereses

la Guerra Grande, Movimiento administrativo

vengados durante

CAPITULO

III.

136

ferrocarriles,



Bancos, bolsas y monedas, 138



El producto de las rentas, pág. 140

— de-

139.

140

Sigue

Gobier-

el

— El atraso en — Empieza 147 — Los perjuicios

no endeudándose cada vez más, 142 los

pago-s,



14.5

El

146

déficit,

quidación de la deuda pública, de

la



149

guerra,



150

la deuda,

Proyectos



152

colonización,

Se

establece



el

155

156



155

— —

Legislación

Patentes

de

jenación

de

rentas,

162 la



159

Aduana,

de

ley

contribución directa, 158

la

160



Papel Sellado, 159





Ena-

Abolición de impuestos,

Creación de impuestos por simples decretos,



Presupuestos, 162

época, 166



primarias, 167 169

El monto de la

La

tributaria.

Se establece

— —

una caja de

Valor de los documentos de crédito,

giro,

161

ligada con

Tesoro especial pa-



deuda, 154

servicio de la

d^uda,

li-

de

consolidación

de

Una propuesta europea

amortización de la deuda, 153 ra

la



Una



pública.

mal de

el

Las escuelas

Contra las distinciones de 170



clases,



escuela de adultos de color, 169

de jurisdicción,

flictos

El déficit era

La enseñanza

La enseñanza

Con-

secun-

— Un plan de reorganización — Complemento de la ense176 — La población universita-

daria y superior, 170 de

la

enseñanza,

173

ñanza universitaria, ria,

177

178





Los abogados orientales en Buenos Aires, La enseñanza

Orientales en Europa, 179

agronómica, 180



ción de Justicia, 181

—'Las La

confiscaciones

de

ley

187

— 189

— de



con



el

Brasil,

la

la

Guerra Grande,

186



188

188





184

Los plazos de

El abigeato, 186







los

Cárceles,

Tratado de

Intereses

Obras de pavimentación, 191

vicio de serenos, 191

Administra-

Trabajos de edificación, 183

Estadística judicial,

tradición les,



expropiación,

arrendamientos, 186



Organización de

ex-

municipa-



El

El alumbrado a gas, 192

ser-



Higiene pública. El servicio de caños maestros, 193

—'Hospitales,

194



El servicio de correos, 195



HISTORIA

634

El

de

ejército



197

leva,

forma

URUGUAY

DE.L



196

línea,

Queda suprimida La



Los castigos corporales, 197 198

militar,

la re-

— Honores a los generales Ai— Servicios de la Policía, 199 abolir pasaporte, 201 — La

rear y Garzón, 199

—Tentativa

para

el

Iglesia y el Estado. El Gobierno hace valer sus de-



rechos de patrono, 202



203

dística,

—^Creación

El

creado



Muere

a



de

traslación 205.

1853 1856 -

el

derrumbe

del

un manifiesto

dirige





Gobierno,

Muere



214





Bajo

Actos



gene-

dictadura de Flo-

la

de

violencia

la

contra-

durante

la

Triunfan rápidamente las fuerzas del



219

El Brasil era



contrarrevolución, 219

Gómez, 220

el

El triunvirato degenera en dicta-

solo,

216

pág.

país,

El Presidente Giró se lanza a

rrevolución. lucha, 216



al

go-

del

contrarrevolución, 210

la

general Lavalleja, 212

dura de uno 214

209

raíz

Nadie piensa en

ral Rivera, 213

los

de

Durazno,

al

de Flores.

Giró

de

bierno

res,

esta-

la

Movimiento político

IV.

triunvirato

209

Proyecto

pueblos.

(JobieiTío

II.

CAPITULO

de

de la República

capital

la

Organización de

Teatros y espectáculos públicos, 204



^La

Habla

promotor de

el

la

doctor Juan Car-

el

confesión brasileña, 221

—Un

pe-

dido de intervención brasileña fomulado por los partidarios de Giró, 223

forma

en



^La

Legislatura

grande Asamblea se trans-

ordinaria,

225



Flores

es

Su programa de Ese programa de concordia

elegido Presidente de la República.

concordia cívica, 227



no era una novedad dentro la

época,

sión

entre

228 los



del

ambiente político de

Obstáculos que encontraba la fu-

revolucionarios,



229



El

Partido

propaganda exclusivista, 231 Cómo repercute entre los hombres del Partido Blanco esta propaganda partidista, 232 Trata el Brasil de afirmarse sobre su presa trans-

Conservador, 230



Renace

la

portando un ejército a Montevideo, 233





La

In-

ÍNDICE

635

Pág:s.



terveución brasileña ante la gran Asamblea, 236

Adhesiones que recibe

— Voces

de

la

Legación del Brasil, 238

contra

protesta

intervención, 239

la

— —

Entra la división brasileña en Montevideo, 241 La demarcación de límites, 242 La cuestión de Martín García, 245 La absorción comercial como





paso previo a de

Blanco,

250





¿Planes

Las elecciones

La abstención

fraude

El



248

Brasil?,

al

generales de 1854, 249

do



absorción política, 246

la

incorporación

oficial

bién disidencias entre los colorados,

del

Parti-

provoca



251

tam-

Contra

de la prensa. Medidas adoptadas a raíz derrumbe del gobierno de Giró, 254 Reglamentación monstruosa que contra la prensa propone el Gobierno, 255 La Asamblea sanciona con algunas enmiendas la ley de Imprenta, 256 La Asamblea reacciona contra su obra, 257 Vuelve el Gobierno a las medidas restrictivas, 257 Se inicia un fuerte movimiento de fusión entre los partidos tradicionales, 258 Nuevas y violentas medidas contra la prensa. 261 Para salvarse del la

libertad



del













desastre

el

Gobierno deroga su decreto, 263



revolución de agosto de 1855, 265 narios

un

organizan

La fusión entre

los

Flores renuncia y sidente

del

vor de

la

dicionales.

gobierno

Senado,

270

completa

el



de Flores,

poder ejecutivo de



274

liberal,

277



la

situación

— —

Pre-

partidos

los

fa-

tra-

Los generales

Flores y Oribe forman, a su turno, una

Vuelve a agravarse

269 el

Nuevos esfuerzos a

extinción

La unión

La

provisorio, 267

partidarios

asume



Los revolucio-

liga,

política

La revolución de noviembre, 278

276

del





país,

Los

di-

plomáticos extranjeros se dirigen a sus connacionales

pidiéndoles

278



abren

que

no intervengan

en

la

lucha,

Gracias a esa exhortación los contendientes

un

paréntesis

los

extranjeros

279



durante

festejen

Los revolucionarios

nos Aires, 280

diplomacia



Después

brasileña

tiroteo,

el

caída

la

para

que

Sebastopol,

embarcan para Bue-

se

del

durante

de

triunfo,

las

282



revoluciones

La que

HISTORIA DEL UErGTJAY

836

Págs.

acabamos de



282

historiar,

El gobierno

res pide el cese de la intervención, 2S5

Brasileña procura evitar

ción



vención, 286

cese

el

de Flo-



La Lega-

de

la

inter-

El gobierno de Flores da cuenta a

Comisión Permanente de la connivencia brasileEl retiro de las tropas ña con la revolución, 288

la





brasileñas, 289

El Brasil trataba de extender sus



garras al Paraguay, 290

El período complemen-

tario de la administración Giró, 291

palabras

CAPITULO

Movimiento

V.

La

constituyente

del

población,



296

Cuadro de

de comercio, 297

Montevideo, 297 Servici'^ de

tos a la



Las últimas 294

movimiento comercial,

El



las exportaciones, 297

— La navegación — Estimulando el

faros,

— 291.

económico 294

pág.

Masini,

298



Tratados puerto de

el

cabotaje, 298



Los ríos uruguayas abier-

mundo

navegación del

en

trucción de una dársena, 299

entero, 299

— Tentativa



Cons-

para for-

mar una compañía nacional de seguros marítimos, Número de los establecimientos de giro, 300 300 Intereses La agricultura y la colonización, 301







ganaderos, 302 rriles



(La

Otras industrias, 303



y telégrafos, 304

moneda

circulante,

La 308

— —

Ferroca-

tierra pública, 305





Los bancos y sus

emisiones, 309.

CAPITULO

VI.

Movimiento administrativo

Primeras medidas financieras

del

313

gobierno revolucio-

Enajenación de la renta aduanera, pág. 313 Son despojados los nuevos compradores de la La situación financiera en renta aduanera, 314

nario.





1854, el

316



La

situación financiera se

curso de 1855, 318

—El



producto de las rentas, 322

de 1855, 325



de guerra, 328



El Presupuesto

La deuda procedente de perjuicios Una excepción monstruosa a fa-



vor de los reclamantes extranjeros, 329 dación de

la

Proyectos

que

el

deuda,

derrumbe de

agrava en

El subsidio brasileño, 320

surgen

330 en

— la

la deuda, 333



La bancarrota,

Consoli-

332



Asamblea para evitar



El Poder Ejecutivo

se opone a esos proyectos invocando que le cercenan

ÍNDICE

637

Págs.



Queda la Caja de Amortización como única contribución del Estado al servicio de la deuda, 335 El monto de la deuda, 336 El precio de las deudas, 336 De empréstito en empréstito, 337 Los vales de Tesorería, 339 La deuda exigible, 340 Enjuiciamiento de un Ministro, 341 La enseñanza pública: escuelas primaSUS rentas, "333













343

rias,

niños

de

tros,

346

— —



juventud, 351



Instrucciones

enseñanza

universitaria,

Montevideana,

digo Civil, 352 353



345

La

La enseñanza Medicina



El estado de la enseñanza, 345

color,

Los

maes-

los

secundaria,

346





La Sociedad de La acción de la

347



350

a

— Administración — Reorganización

de Justicia:

de

el

Có-

magistratura

la

Los Registros de ventas y de hipotecas, 354

—Cárceles, 354 — Higiene pública, 356 — Hospita356 — Mejoras municipales, 357 — El Ejér359 — La reforma militar, 360 — La 360 — La Iglesia contra Masonería, 362 — Co362 — Centros y sociedades, 363 — Teatros y les,

cito,

Policía,

la

rreos,

espectáculos

públicos,

abandonado

gas

en

363 el

Gobierno de Pereira.

III.

CAPITULO VIL Movimiento candidatura



—^Los

don

de



1856

-

Antonio

del general

pú-

1860

de

1856.

Pereira,

las

Gabriel





Antonio

Presidente



373

Pereira.

La

elección de

Manifestaciones





electo



de

independizarse

Grave agresión contra

vadores, 379

die



Tra-

de

sus

Sus primeros actos administraDe nuevo bajo las agitaciones políticas,

dos tutores, 376 tivos, 377

pág.

presentan sus programas, 370 medidas de fuerza, 371 Compli-

confraternidad política a que da origen, 375 el

La

César Díaz, 370

candidatos

caciones del lado argentino,

379

Arti-

369 presidencial

Gabriel

La candidatura

Recrudecen

ta

de

político

Preliminares de la elección

don

cadáver

El

rincón de una oñcina

365.

blica,

369





los

diputados conser-

Una conjuración de

los

conservado-

HISTORIA DEL TJBUGUAY

638



381

res,

be

para

zación



382

general

El

dad.

Una manifestación de

Flores,

y

Flores

alejarse

los destierros,

387

los generales Ori-

Continúa

del

— Los

y

país,

385

obtiene

— Oribe



sale del país, 390

general Oribe,

el

— El

resultado de los

— El Senado anula uno de diplomas, — Elecciones de Alcalde Ordinario, 393 — Una no-

comicios, 391

392

autori-

De nuevo

comicios parciales de 1856.

El Presidente Pereira en lucha con 388

intranquili-

la

pide

los

ta tranquilizadora después de los comicios, 394

pieza de nuevo la agitación electoral, 394

paganda

partidista, 397



La anexión



del

—tEm-

La proUruguay



a las Provincias Unidas del Río de la Plata, 397

Toman rumbos Uno de ellos se



399

tor,

«Club de

dan

la

declara gubernista y

en

402



lentas,

pleno

CAPITULO

VIII.

pacto.

otro oposiel



Los conservadores funDefensa», 401 Un tercer grupo

Unión», 400

lucha,

el

del

Gobierno fundan

del

la

se coloca entre esos dos, 401

tidos

generales

los

Los partidarios

«Club de

el

distintos

402



— — Cuáles

Muere

el

eran los par-

general

Oribe,

El Presidente Pereira recurre a medidas vio-



403

Se realizan

los

comicios de 1857 en

ambiente revolucionario,

Movimiento

404.

406

político

— El alzamiento del coronel Erigido Silveira, 406 — Primeras medidas que adopta Gobierno, 407 — La columna del

El

de Quinteros, pá^. 406

episodio

el

coronel Erigido Silveira se presenta delante de Montevideo, 407

divisas

de



La defensa de 410

guerra,

de proscripción, 410 de renunciar, 410







la

plaza, 409

Decretos

de



Las

muerte y

El Presidente Pereira habla

El ejército revolucionario que-

da rápidamente vencido, 411



El gobierno de Pe-

rompe relaciones con el de Buenos Aires y pide su ayuda a los de la Confederación Argenti-

reira

na y del Brasil, 413

— ¿Fué



Los fusilamientos de Quin-



un crimen de partido?, 416 Los fusilamientos de Villamayor en Buenos Aires, 417 Villamayor era uno de los tantos episodios que ensangrentaban el gran escenario argentino. teros, 416



ese

639

ÍNDICE

Págs.



419

Tampoco escapa

general César Díaz a las

el



de la época, 424

influencias

¿Hubo

capitulación



La palabra del general Medien Quinteros?, 426 ¿Cuántos parlamentarios enviaron los rena, 426 Las propuestas de los parlavolucionarios?, 428





mentarios, 429





La palabra de

los prisioneros, 430

carta de don José María Castellanos, 432

Una





Cómo descriEl pasaporte de los prisioneros, 432 be la capitulación el sargento mayor don Juan MaLas órdenes de fusilamiennuel de la Sierra, 433



to,



434

bien con reitera

el

la

nativas

Un

paréntesis de clemencia para quedar

Presidente

del

Pereira,

ambiente del campamento del general El mensaje del Presidente a la 438

tolerable

el



Medina?,

Asamblea haciendo

—Un

— El Gobierno — Las alter437 — ¿Era más

Cuerpo Diplomático, 436

orden de fusilamiento, 437

debate

el

elogio de los fusilamientos, 439

sobre

periodístico

Quinteros, 440



Quinteros ante un tribunal de imprenta, 442



Des-



Después de Quinteros. pués de la polémica, 443 Manifestaciones de adhesión al Presidente Pereira,

CAPITULO

445.

IX. Movimiento

449

político

gobierno de Pereira. Rompimiento de relaciones con el Gobierno de BueActitud del Gobierno de la nos Aires, pág. 449

La

acción argentina durante

el



Confederación Argentina, 450 incidente del



La guerra

Su repercusión entre nosotros,

gentina.

ar-



Un



Un 452 Gómez sosteniendo

diplomático ruidoso,

doctor Juan Carlos

civil

4.51

artículo

que

el

Uruguay debía reincorporarse a la Confederación Queda subsistente el amago de reArgentina, 455 voluciones ayudadas por el Gobierno de Buenos Ai-



res,

456



La diplomacia

bierno de Pereira. 456



La

revisión

brasileña

durante

Liquidando agravios del

el

go-

anteriores,

tratado de alianza,

458



Uno de los tantos movimientos revolucionarios foA promentados por la Legación Brasileña, 458



pósito

Uruguay

de la exclusión del

1856 entre la Argentina y

el

del

Brasil, 459

tratado de



El trata-

HISTORIA DEL URUGUAY

640

do de comercio y El

Procedimientos de ejecución

tratado de límites.

durante

gobierno de Pereira, 463

el

que llegaba



histórica, 467



absorción brasileña, 465

la



de permuta de territorios, 462

el

Cuando

el

Extremos a



Un

acta

Brasil apretaba el torni-

quete era cuando nuestro Gobierno tenía mayor necesidad de recurrir a su tesoro y a su ejército, 467

— El

tratado de neutralización de la República Orien-



Resistencia que

tal,

468

las

Cámaras, 470

neutralización,

sancionado por

có es



gobierno

'El

tratado encuentra en

el

— Otro proyecto más amplio de 473 — El proyecto del doctor Joanila

Cámara de Diputados,

Pereira

de

473

reanuda su tentativa a



favor del tratado de permuta de territorios, 474

La

libertad de la prensa durante

gobierno de Pe-

el



Nuevas notificaciones a la prensa, 477. Movimiento económico Los esclavos del Cálculo de la población, pág. 479 reira, 475

CAPITULO

X.-

— 481 —

Brasil en territorio oriental,

migratoria,



483

482



Franquicias

Estímulos para

la

La corriente

a

in-

inmigración,

la

colonización,

484



La

edificación y la vialidad en la ciudad de Montevideo,

— La exportación — Un cuadro más amplio de las exportaciones, 490 — El comercio inte491 — Las exportaciones de tasajo, 492 — Imcarbón de piedra y madera, 493 — portación de Plata, 494 — Nuestro interGuerra de tarifas en cambio con Italia y España, 496 — Establecimientos —

486

El comercio exterior, 488

ganadera en 1856 y 1858, 489 rior,

sal,

el

— La crisis comercial La zona franca en la Colonia, 498 El Uruguay y el Brasil arriban en 1857 a un trata-

de giro que existían en 1856 de 1858, 497





do de comercio con tendencias

Trata

el

al libre

Gobierno de propiciarse

502



Pero

tra

el

tratado, 502

la

el

cambio, 498

apoyo del



país,

prensa de oposición dirige su proa con-



El tratado de comercio ante

el



Escasa duración de este tratado. 506 La cláusula de la nación más favorecida en Seguros marítimos, los tratados de comercio, 507

Parlamento, 504



507





Navegación de cabotaje,

."08



Obras de aba-

479

ÍNDICE

(i41

Págs.

— Servicios

lizamiento y de iluminación, 508



lemanes, 509

ticos

Adhesión

del

Uruguay a



greso de París, 510 ríos,



510

población, 514



pos, 514

nados,







La

in-



Carne para el consumo de Precios del ganado y de los cam-



Marcas y señales, 515



51(5

navegación de los

libre

Ferrocarriles y telégrafos, 511

dustria ganadera, 512 la



declaraciones del con-

las

La

de prác-

en 1858, 509

cabotaje

El

El robo de ga-

La doma de potros por

cloroformo,

el



Entre estancieros y Los El comercio interno, 519 agricultores, 519 La propiedad de las minas, montes públicos, 520

516

La

517

agricultura,







521





Otras industrias, 522

—Bancos



y monedas, 524

Tierras públicas, 523

La Sociedad de Cambios

— — Bancos departamentales, 528 — Otros bancos, 529 — Reglamentos bancarios de carácter general, 529 — Cifras de algunos balances bancarios, 529 — La tasa del 531 — Acuñación de monedas, 531 — El porcentaje de cobre en los pagos, 532 — El valor legal de las monedas de la época, 532 — Cambios sobre Lon-

y

el

Banco Comercial, 525



El Banco Mauá, 526

El Banco Nacional de Montevideo, 528

inte-

rés,

dres, 533

CAPITULO XL



Bolsa de Comercio, 533.

Movimiento administrativo

Cuál era

la

535

situación financiera al iniciarse

el

gobier-

— Un nuevo cuadro de la — Cómo cerró primer año de administración Pereira, 53S — Un detalle que 538 — Continúan revela la intensidad de la las estrecheces financieras en 1857. 539 — La 541 — El demia de fiebre amarilla agrava final crisis hasta oro brasileño, 542 — Prosigue del gobierno de Pereira, 542 — El producto de las

no de Pereira, pág. 535

si-

tuación financiera, 536

el

la

crisis,

epi-

crisis,

la

el

la

rentas 544



543

públicas,



Los

derechos

La Aduana en poder de

de

El producto de la renta de Aduana. 548 llado y patentes, 549

— El to

552 IV -41

impuesto

de



herencias,

Pesca



:

La Contribución

departamental,

de

551



El

anfibios,

Aduana,

particulares, 546

550



impuesto 552





Papel



se-

Directa. 550

El

de

impuesabasto,

Correos,

552

HISTORIA DEL URUGUAY

642

Págs.



—Descentralización de rentas, 5Ó3

— El

to de 1856, 555

reforma militar, 55S

yes de pensiones y de

Presupuesto de 1858, 559

—'Los rio

presupuestos



De



Cómo

en

déficit

subsiguientes,



de la deuda pública, 562

dada, 562

El Presupues-

Presupuesto de 1857, 557

Inventa-

La Deuda

Consoli-

repercute en la Asamblea



nuncia de estos abusos, 564

560

déficit,



561

— Le— El

de-

la

La Asamblea declara

cerrada la conversión de los reclamos por perjuicios



de guerra, 566

El

de

precio

mixta para





567

Pide también



sión mixta, 570 las

falsificación de bonos, 567

Brasil

el

una Comi-

Los primeros actos de presión de

tentativa anterior de la consolidación, 574



deudas, 575

señanza tensión

583

581

universitaria,

582



583



La enseñanza primaria, 577 -^ La

universitaria,

— —

Conferencias

privada, 584



Organización

justicia.

glamento de

— la



Un amplio



grama de solidaridad americana, 586 bunales, 586

ex-

Planes de reorganización universitaria,

La enseñanza secundaria

de

en-

de

La Universidad Me-

enseñanza pública en 1859, 585 ción

— — — Otras

Legaciones de Francia y de Inglaterra, 570 Una de la Deuda Consolidada, 572

Conversión

nor,

La pro-

Administra-

de Juzgados y

Destitución del Tribunal, 588

Tri-



Re-

Administración de Justicia, 588

El Código Civil. Gestiones para su sanción, 589

La Cámara de Diputados sanciona Código

590

Civil,

Argentina, 592



nios celebrados en hipotecas,

ejecución

594



— 'La



Proyecto de

el

obra de codificación en

el

extranjero,

Estadística

de asesinos,

593



judicial,

— Las 597 — La

La

594

cárceles,

595

la

ley de



Una

596



firma de letrado,



Los Sobre embargo de rentas públicas, 598 Los procurado-

protocolos de los escriba:nos, 598 res

— —

Efectos jurídicos de los matrimo-

Plazo para los desalojos, 598



La Comisión

arreglo de las reclamaciones franco-

el

568

inglesas,

Una

Consolidada,

la

bajo la dependencia

servicios

de

la

asistencia

Hospital de Caridad, 599

del



Tribunal,



598



Los

Movimiento del Las hermanas de cari-

pública.

ÍNDICE

C4.3

Págs

601



599 ^- El Lazareto, GOO

dad,

especiales,



La



600



lotería, 602



de 1857, 602

rilla

Creación de asilos

presupuesto de

El

beneficiencia,

La epidemia de

fiebre

ama-

El contagio de la fiebre amari-

— El número de víctimas, 603 — Los recur— La traqueotomía en Montevideo, 606 — Tentativa para reglamentar prostitución, 606 —

lla,

sos,

603

604

la

Servicios de higiene pública. Los caños maestros, 606

—Los



de

Descentralización

municipales.

servicios

rentas, 609

El alumbrado a gas, 611

vicios y mejoras edilicias, 612



La



Otros ser-

Policía, 612



El ejército de línea. Procedimientos de remonta, 613

—'Ordenanzas

militares,



614



Tentativas

para



La Escuela Militar, 615 La Guardia Nacional, 616 Son trasladados al

realizar la reforma,



cementerio

los

de pueblos, 620 los

614

públicos.

—Censura

restos de Artigas,



617

Obras públicas, 621

La inauguración

teatral, 623





del

— —

Fundación Espectácu-

Teatro

Solís,



624 Las corridas de toros, 624 conmemorativas de la independencia, 625

lidad,

reses eclesiásticos, 625 jesuítas, 626

ción



de vicario,



Fiestas



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El Gobierno expulsa a los

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Acevedo, Eduardo Manual de historia urufiiaya

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