xíiíSs*
ANALES DE LA UNIVERSIDAD
República Oriental del Uruguay
ANALES DE
LA UNIVERSIDAD Entrega N.o
Administrador:
SUMARIO:
119
MANUEL BABÍO
«Historia del Uruguay- Por
el
doctor Eduardo Acevedo,
AÑO 1926
MON TEVI DEO Imprenta Nacional 1926
tomo
VII.
r 'ds^
\
o.
\
UOGOOl
ADMINISTRACIÓN DEL CORONEL LORENZO L ATORRE. — 1876-1880
Digitized by the Internet Archive in
2010 with funding from University of Toronto
http://www.archive.org/details/manualdehistoria07acev
ANALES DE LA DMIVERSIDAD AÑO^OCXV
ENTREGA
MONTEVIDE01926
II
Ñ.° 119
URUGUAY
HISXORIA DELPOR EL
EDUARDO ACEVEDO
Doctor
CAPÍTULO Movimiento
I
politico
de 1876. El toionel Latorie asume la dictatluia el 10 de marzo
Ya hemos
que
dicho
buscó
Várela
Presidente
el
asilo
eu
la
maniLegación de Francia el 10 de marzo de 1876, a raíz del único Y el que fiesto en que protestaba contra ia aseveración de la de Ministro propio era su verdadero arbitro de la situación Guerra. coronel
El
Latorre
aprovechó
hábilmente
oportunidad
la
para
que ponerse en contacto con la población e inaugurar un régimen motín el desde salvara del desprestigio en que había caído lo del
15 de enero de
1875.'
Por indicación suya Vázquez, que era uno
el
Juez de Comercio doctor
Juan Andrés
miembros más prestigiosos de la su casa magistratura judicial, celebró una reunión política en de un organización para cambiar ideas acerca de la de
los
particular
Abierto el debate tomó la palabra el doctor de Latorre, para dar a conocer el proíntimo Querencio, amigo de grama del nuevo gobernante. Dijo que Latorre estaba cansado constimotines y revueltas: que anhelaba la rápida organización que en nombre del ejército pedía al pueblo país
gobierno
provisorio.
tucional
del
y
de esas que se reuniera y que adoptara decisiones. En presencia proVázquez doctor del invitadlos los resolvieron manifestaciones Constitución, para vocar una reunión más numerosa en la Plaza Querencio y pedirle divulgar el programa esbozado por el doctor •d\
Latorre que
coronel
Pocas horas
columna plan
de
de la
después 1.000
a
ante
lo
ratificara
se
formaba en
1,500
proclamación de
personas y la
la
el
pueblo.
Plaza
Constitución
una
empezaba a cumplirse
el
Latorre
es-
dictadura.
El
coroivel
Anales de
la
universidad
los manifestantes en la esquina de las calles Soriano y Convención, a pocos metros de su domicilio. Allí habló el doctor Vázquez a favor de la organización de un gobierno provisorio y
peraba a
en seguida tomó
la
palabra Latorre para dar a conocer su pro-
grama de gobierno. que
Dijo
asumir blo
dada
la
mando en
el
situación
triste
del
país
sólo
se
asegurarse que lo acompañaría en su administración;
le
él
quería liacer un gobierno honrado y no de ladrones
al
gobierno de Várela
mado
animaría
parte);
a
caso de que una comisión nacida del pue-
el
que
(aludiendo
por él y del que él había forgobernara no se cometerían robos;
instituido
que mientras
él
que era necesario que todos supieran que
el
Estado no tenía con
qué marchar ni con qué hacer frente a sus compromisos; que por le tanto, antes de asumir el mando quería contar con un apoyo efectivo y no de palabras, puesto que era con hechos y no con promesas cómo debía gobernarse. Varias personas hablaron luego y la última de ellas para proclamar a Latorre jefe del Poder Ejecutivo y pedirle que se pu-
popular
siera a la cabeza
de la columna y se dirigiera al Fuerte,
(Casa
de Gobierno que existía en la actual Plaza Zabala) para tomar posesión
del
El
cargo.
coronel
Latorre se apresuró a complacer
al
orador y llegado a su destino habló de nuevo, para expresar «que si no podía hacer un gobierno ilustrado haría uu gobierno hon-
rado que marcharía con
la
opinión del pueblo».
Circulaba entre los manifestantes en esos mismos momentos un boletín en rry,
el
tenientes
Máximo
que los coroneles Juan P. Goyeneche, José Etchevecoroneles
Santos
y
Casariego, Juan mayores Rudecindo
Plácido
sargentos
J.
Gomensoro y
Várela,
Emilio
Callorda y Pablo Ordóñez, Pedro Jefe Político de Montevideo el primero y jefes de los batallones de línea los demás, decían: «Que la guarnición de la Capital garantía a sus habitantes el más completo orden hasta que se orga-
Reynaud.
Manuel
nizase
nuevo gobierno
el
Rodríguez.
Como complemento
del
Estado».
programa de la ^proclamación de la dictadura, publicó Latorre un manifiesto en que decía: «No son estos los momentos de recapitular las desgracias que han pesado y pesan sobre el país, porque su contemplación no nos ofrece sino desesperación y desaliento. Tengo la convicción de que no hay un solo ciudadano que no reconozca como yo que del
sólo a fuerza de honradez, de civismo y de abnegación puede salHe atravesado varse el país de la disolución que le amenaza .
muchas veces
la
.
.
República de un extremo a otro y he podido
asis-
Anales de
la
Universidad
cerca la despersonalmente a todas sus desgracias, viendo de cada día aniquila la que ruina la y moralización, el desorden cuyo lección severa El año último ha sido para mí una más esos por Inspirado mente... recuerdo jamás se borrará de mi
tir
.
contra el he creído que puede y debe reaccionarse hapuedan que público bien de mal, haciendo todas las mejoras en Cámaras las de elecciones las lugar cerse hasta tanto tengan
sentimientos
estado del país lo permite, República entre cuanto porque tengo el más vivo deseo de que la constitucionales... ba antes en el libre régimen de las instituciones o inmorales, turbulentas facciones nueva situación no es obra de la convicción de tengo aún, Más intransigentes. de partidos n' partidos que dividen nuestra el poder de cualquiera de los
noviembre o antes de esa
que hoy patria no sería sino
fetíha si
el
o la tiranía en el gobierno, la emigración Mis país... el para martirio gobernados y el la
civil en los me honro en haber opiniones políticas son conocidas y así como parte activa en las tomando colorado individualmente sido y ser
guerra
batallas que
han ensangrentado
la
República, así también
me hago
prescindiré absolutamente un honor en declarar que en el gobierno todo favoritismo de parde de nuestras discordias anteriores y sino el gran partido de país mi en tido... No quiero inaugurar de la libertad administrativa, honradez la de pública, la
moral
en
el
orden,
del
respeto
a
'las
leyes
a
y
todos
los
derechos
a mis conciudadagarantidos por nuestra Constitución... Invito me patrióticamente porque nos a que se afilien en ese partido, dentro inexorablemente romper otro ¡y propongo no gobernar con El a su consolidación. de la ley todo obstáculo que se oponga es ya escándalos y mundo nos contempla asombrado de nuestros olvidando pasado, tiempo de que reaccionando contra nuestro familia, hagamos de nuestros odios, fraternizando en una sola de unión y de modelo un América, esta República mártir de Sud oprime y tonos externa interna y deuda enorme virtudes... Una para la mitad de nuestros das las rentas públicas apenas bastan tremendo... Ante ese abismo gastos con un déficit cada vez más día más, mi gobierno procada en que como nación nos hundimos posible. Reducción exeficaz inmediato y curará el remedio más
trema y enérgica de
los
gastos
públicos
y
fiscalización
vigilante
mis manos y en las de mis sue inexorable de las rentas. En castigando implacabordinados el Tesoro público herá un sagrado, ni me propongo puedo Yo no blemente al que intente profanarlo... haré un gobierno que respondo... os Pero hacer un gran gobierno. honrado
.y
decente.»
Anales ic
10
Dos días después de
Universidad
la
proclamación de
la
dictadura se dirigió
la
Latorre a los Jefes Políticos para amuiciarles que distribuiría las fuerzas de línea entre los departamentos y ordenarles que convoca-
ran a e
vecindarios de campaña y les pidieran que organizaran
los
hicieran efectivo
el
servicio
de policía prescripto por
Código
el
Rural.
«Debo
significar
invariable de mi
a
V.
una
como regla una rigu-
que observaré
agregaba,
S.,
gobierno
moralidad intachable,
rosa economía en los gastos y una escrupulosa fiscalización en la
percepción
de
mente
voto popular,
del
la libertad, Ties
las
la
rentas
honradez,
Nacido mi
públicas.
gobierno
directa-
he declarado ante mis compatriotas que
economía y
la
paz serán
la
aspiracio-
las
de todos mis actos administrativos, exigiendo de mis subordi-
nados iguales propósitos y escrupuloso sometimiento a todas esas prescripciones, porque todo mi anhelo es merecer así la simpatía de mis conciudadanos
ximo
al
al
entregar
el
mando
el
l.o
marzo
de
pró-
elegido de la Nación.»
Impresión de optimismo que esos rtocumentos produjeron.
Comentando
editorialmente
nueva
la
situación,
decía
«La De-
órgano del Partido Nacionalista:
riocracia».
«Por lo pronto sólo podemos decir que la causa del bien ha ganado una gran batalla, puesto que se ha realizado la condición previa de los mejoramientos ulteriores que consistía en la desaparición del gobierno que consumó todos los desastres y las ignominias que agobian a la República... En lo demás hay que esperar.»
«El
año terrible
muna. Nosotros podemos aplicar del
derrocamiento
de
—
agregaba «El Siglo»
que Francia presenció
1870 en
al
—
el
la
mismo nombre
autoridades
las
llama Víctor
invasión extranjera y al
1S75,
de
constitucionales,
Hugo la el
la
co-
año su-
presión de todas las garantías, del repudio de la deuda, de la bancarrota,
papel moneda.»
del
«El gobierno del coronel Latorre
Sagastume devolver libertad
al país la
en
libertades
En
—
decía
el
doctor José Vázquez
aceptar la Fiscalía de lo Civil y del Crimen
al
el
moral administrativa,
orden,
el
ejercicio
la
—
puede
justicia en la ley, la
garantido del derecho y de las
públicas.»
la sala de redacción
de hombres
notables,
en
de «La Democracia» hubo una reunión ia
que según
el
testimonio
del
doctor
Anales de
la
publicado dos años
José Sienra Carranza,
H
Universidad
más
tarde
en «La Ra-
Comisión encargada de apersonarse zón» se resolvió nombrar una parte su programa, de la cual formaban al dictador para conocer RaMana Carlos doctor el Carranza y propio doctor Sienra fe' Endictador. Don al desipacho su en mírez que no encontró misma la de nque'Anava aseguraba en «El Correo Uruguayo» se había llegado hasta Democracia» «La de reunión la en época, que al dictador para la realizahablar de ofrecimiento de cooperación ción de su programa.
la opinión optimista Los comienzos de la dictadura acentuaron del año terrible y por las producida por el derrumbe del gobierno contenidas en los documentos ofireiteradas promesas de reacción
"
batallones de línea de economía fueron disueltos los demás batallones los de personal el plazas y se redujo a 200
A^'título
y 8
7
de
guarnición.
la
enmudecido durante un ano La prensa independiente, que había
brillo
mas algunos de los periodistas que Batlle, Gode administraciones habían dado durante las
le
contar
a
volvió
entero,
con
mensoro y EUauri.
La lírúrrosa
dictaduia.
público Lo que más contribuía a acentuar el optimismo de inmediato convocar de dictador del promesa insistente
a elecciones y de restablecer
el
era la al país
imperio de la honradez adminis-
trativa.
¿De qué manera cumplió su primera promesa Dos meses después de vocado
a
país
el
sí^ñalándose para
la
proclamación de
elecciones la
generales
de
la
el
coronel La torre?
dictadura, era con-
diputados
efectividad de esa convocatoria la
y
senadores,
misma
fecha
Se adoptaba la ley prefijada por la Constitución de la República. de la administraLegislatura por la de Registro Cívico sancionada las funciones entre incompatibilidad la establecía ción Ellauri y se por un delegislativas que había sido derogada judiciales
creto de
Pero
las
y
dictadura de Flores.
la
raíz de la convocatoria los allegados a
a
1 trabajar a favor de la
ganizaron firmas, los
todos
en
promovieron
trabajos
y
los
la
lanzaron
Latorre empezaron la dictadura. Or-
prórroga indefinida de
departamentos Comisiones recolectoras de de una Comisión central de
organización la
idea
de
un plebiscito qui tendría por
Anales de
12
cbjeío
la
Universidad
mantenimiento del régimen cívico el movimiento
el
imperante,
político
que
niendo con ello
dete-
grandes espe-
tan
ranzan había despertado.
Nadie se inscribía, porque nadie tomaba a lo serio la convocaa elecciones en presencia de ese movimiento que contaba
toria
evidentemente era
con
todas
las
simpatías
desaliento que en junio tuvo
el
neríodo
de
ningún
departamento
invocando
inscripción
«podría
dictador.
del
Tan general
Gobierno que prorrogar
el
que según
legalmente
el
datos
oficiales
considerarse
represen-
los
tado».
Sólo don Jacinto Albístur seguía estimulando desde las columna.s
de «El Siglo.»
la
acción cívica de los partidos de principios. ¿Qué
—
que debe aconsejar la prensa,
—
decía, a los partidos desvinculados del gobierno? ¿iLa abstención que proclaman algues
lo
nos diarios o
la
concurrencia a los comicios y a la vida política
Y agregaba:
a<;tiva?
«Debe examinarse en cada caso
el
grado de libertad o
de opresión que exista para determinar ción
en a
la
Si
haiy
de
si
bajo
fundajda
Si
nada hay que
yugo de Rosas,
el
están
entonces
rotos,
mocracia», que
el
si
todos
será
el
edificio
se
libertad de la prensa, tar
grado
ella
vida pública...
la
el
procede o no la absten-
esiperanza de que la acción ha de puede eí*perarse mejora próxima o remota situación, será deber de los partidos prestar su cooperación
política.
fecunda,
.ser
si
los
esiperar,
derrumbe por
ha dicho alguien,
"y
país ha caído
el
de
la
como
caso de esperar,
demás libertades... La verdad de
las
si
resortes
sí
vida política
«La De-
dice
mismo.
Dadme
la
yo respondo de conquiseste aforismo estriba en
hecho de que mientras haya alguna esfera di acción en qué moverse, puede utilizarse para irla agrandando poco a poco el
.
Por otra parte, ¿de dónde se espera que venga la bien, si los que deben promoverla enmudecen y zos?...
.
.
reacción ihacia el se cruzan de bra-
El ideal de la perfección política debe tenerlo siempre pre-
hombre político; pero ¡a vida política se compone do Lo que se puede y debe exigir es que esas transacciones no importen prevaricación de prinicipios, abjuración de .ente
el
transacciones.
doctrinas
.
.
.
iSe
aspira al bien absoluto
Esa debe ser a nuestros ojos
;
se hace el bien posible.
partidos y de nuestros hombre.s políticos... Cuando ningún bien es posible hacer, la
regla de nuestros
entonces y sólo entonces encontramos justificada
Los reunión
estudiantes
ds la
Universidad
celebraron
para oponerse a la prórroga de
la
la
abstención.»
una
dictadura,
numerosa y
en ella
Anales de
Universidad
la
13
una
Comisión compuesta de los señores Juan Carlos Herrera y Obes, Octavio Ramírez, José María ViPrudencio Vázquez y Vega, Juan Gil y José Román Mendoza,
(lesignaron
Blanco, Miguel Cal,
Que en
acto se instaló
el
nueva asamblea a todos
y publicó un aviso invitando para una que simpatizaran con el pronto resta-
los
blecimiento de las instituciones. El coronel Latorre, que estaba de acuerdo con la prórroga, pero que no quería ponerse en contradicción con las declaraciones que había formulado en los comienzos de su nuevo gobierno, se apre-
suró a dirigir a
los
organizadores del plebiscito una nota en que
decía:
«Respondiendo a los severos deberes de mi conciencia y lleno más íntimo agradecimiento por las simpatía? personales de
del
que soy objeto, declaro con toda la
resolución de que soy capaz que desde ya resistiré toda aclamación en el sentido de la prórroga del actual gobierno provisorio que desempeño. Si se tratara .
.
por
ejemplo de facultar a mi
próximas elecciones con el una convención nacional para
las
gobierno fin
para
aplazamiento de
el
de convocar inmediatamente
a
reforma de nuestro código fundamental, haciendo condición indispensable de que las elecciones políticas
se practicasen
prendería que
el
la
infaliblemente en noviembre de 1877, com-
país se agitara y que esos millares de firmas que
suscriben las actuales manifestaciones tendrían un alte y honroso significado,
de
los
que podría ser en
patria...
Pero aún en este mismo caso de que
mi gobierno fuera
porvenir la resolución verdadera
el
grandes problemas de que está pendiente esa
gran bandera, sería preciso que
manifiestamente unánime
para hacerme
suerte de
la
la
pueblo diera a
el
voto
el
salir
de
paTblico
resolu-
la
ción en que he dicho antes estoy dispuesto a mantenerme.»
La Comisión Central toria con llinal,
las
acsiptó
la
variante y
publicó una
convoca-
firmas del general Felipe Fraga, doctor Hipólito Ga-
Manuel Pagóla, doctor Mateo Magariños Cervantes,
coronel
doctor Carlos de Castro, doctor Juan Pedro Salvañach, doctor José
María Vilaza del
y
otros
ciudadanos,
en
que prestigiaba
así
la
idea
plebiscito:
«0531
gobernador provisorio de
la
más puro patriotismo ha levantado
República inspirándose en
el
bandera de la reforma, haciendo suyo un pensamiento que bullía mucho tiempo ha en todos los espíritus serios, de
proclamando
En
la
modo que ha
necesidad
de
la
llegado
convocar
la
una
hora de robustecerla, convención
nacional.
campo todos los ciudadanos tendrán un gran que desempeñar como electores y como elegidos: allí vamos este
vasto
rol
a
Anales de
14
la
universidad
er.ianciparnos de las últimas sombras de la dominación extranjera que han quedado impresas en nuestras instituciones, a pesar
de la epopeya de glorias de los orientales que nos dieron la libertad y el rango de nación independiente; allí nos daremos las leyes consulten las exigencias de nuestra adelantada época, libertando a las generaciones que nos sucedan de los vínculos que las ligan a nuestra suerte, a nuestras preocupaciones, a nuestros errores, para que sin lucha sangrienta sean dueñas de sus destinos.»
que
Concluía la Comisión pidiendo
Latorre y
ronel
al
pueblo que se acercara
al
co-
continuación «al frente del gobier-
pidiera su
le
no hasta tanto que convocando una convención nacional que reformara la Constitución de la República, pudieran constituirse todos los Poderes del Estado en las condiciones y bajo la forma que designase el nuevo Código Fundamental». El
de
18
realizó
el
¿Cuántos
aniversario
julio,
acto
final
de
la
plebiscito
del
concurrieron?
manifestantes
Jura en,
de
la
Constitución,
la
Plaza
La prensa
latorrista
llegó
La
pren-
a estampar en sus columnas la cifra fantástica de 20,000. sa independiente aseguró que
núcleo más poderoso estaba cons-
por 1,500 paisanos reclutados por las policías de campaña
tituido
que acaudillaba Abierto al
el
se
Independencia.
el
coronel
el
acto
se
dirigió
Burgueño. el
doctor Mateo Magariños Cervantes
dictador en estos términos:
«El
pueblo
con
oriental,
ese
entusiasmo e
intuición
que
des-
anda por esas calles y plazas proclamando la conveniencia de convocar una convención nacional. Si V. E. despliega tanta energía para sostenerla como habilidad ha tenido para proclamarla, no sería vana la esperanza de entrar resueltamente en una era de regeneración.» «La convención nacional que nos pide la mayoría del país piertan todas
las
ideas
nobles y generosas,
—
—
uno de los grandes acontecimientos de nuestra vida nacional y como es consiguiente no desconoceréis la responsabilidad que en mí entraña, por cuya causa os suplico si necesario fuera me deis una tregua para contestar... Necesito,
contestó Latorre
es
señores, oir la opinión de mis res,
os felicito por
el
Estado... Yo, seño-
Secretarios de
pensamiento simpático de
la
idea y pido a
Dios ilumine a todos los orientales por qué todos, todos sin distinción de
honor
colores
y
debemos.»
gloria
políticos,
de
entren a la reconciliación nacional para
nuestra
querida
patria
a
la
que
todos
nos
Anales de la Universidad
Amenaza contra mismo
El
los diarios adversos a Latorre.
día del plebiscito circuló profusamente por las calles de
Mcntevideo un boletín en que se invitaba redactores de
«El
pueblo a pedir a los
al
Pueblo» «una
Democracia» y «El
«La
Siglo»,
satisfacción digna y completa»...
—
15
Y
¡guay de ellos!
—
agregaba
se
no lo hicieran; ¡guay de los insensatos que desconozcan lo que- puede un pueblo que se indigna ante el insulto y la villanía de los que lo escarnecen! si
así
Concluido
el
organización
mazorcada
plebiscito
y obedeciendo
mazorca contra
de la
a
esa consigna empezó la
prensa independiente y la
la
se habría llevado a cabo si el propio Latorre
no
se hu-
biera presentado en la Plaza para pedir a todas que se retiraran
a sus casas.
La Comisión organizadora de
de la prórroga publicó
los trabajos
entonces un manifiesto en que decía:
«En un arranque de justa indignación el pueblo que simpatiza la grande idea de convocar una convención nacional para dotar a la República de un código que refleje sus legítimas aspicon
raciones, las
reunió de nuevo para protestar enérgicamente contra
se
injurias
pretendido
imprudentemente
personificar
en
sí
por
inferidas solo
un
círculo
que
ha
representación de las ideas,
la
imaginándose en su loca intransigencia y presunción que sin su concurso no es posible constituir la patria, y sabe Dios a dónde nos habría conducido aquella indignación si las oportunas reflexiones de multitud de ciudadanos y la palabra del gobernador no hubieran apelado a
la
hidalguía, que es
el
atributo de los partidos
de fuerza, para pedirles que no se aparten de la senda de moderación de que vienen
dando elocuentes testimonios largo tiempo hace.»
Fracasan los coniicios
«le
l.S7<J
y
se
{)rorr<)}ia
natiiralnicnte
la
dictadura.
Como bilitada
consecuencia de estas amenazas quedó profundamente dela
acción
de la prensa. Desaparecieron algunos diarios y o dieron término a su prédica polí-
otros cambiaron de redacción tica.
El coronel Latorre que comprendía que la
sucesos conducía raciones,
prefirió
al
marcha natural de
los
fracaso de los comicios sin necesidad de decla-
aguardar tranquilo
el
resultado del
proceso elec-
Anales de
16
ya
toral
iniciado,
que debía
forma que pregonaban Llegó
día
el
la
Universidad
resolverse,
como
se
resolvió,
en la
partidarios de la dictadura.
los
de los comicios y como nadie apareciera en torno
mesas receptoras de votos, el coronel Latorre que quería mostrarse fiel al programa de los primeros días de la dictadura, de
las
resolvió
repetir
«Llamé
la
convocatoria.
país a elecciones generales
al
de diciembre de 1876...
La época
—
decía en su manifiesto
fijada para ejercitar el sufragio
ha pasado y mis conciudadanos han rehusado
ejercerlo,
tiendo a inscribirse en los registros electorales.
vamente
cumplimiento de este deber para
al
.
la
no
asis-
Los llamo nue-
.
fecha
que marca
nuestro código fundamental.»
Y
mases después, con el propósito de estimular una circular en que decía a los Jefes Políticos: «Esté V. S. seguro que el funcionario público que tome participación directa o indirecta en acto al que sólo deben concurrir los ciudadanos para ejercer el sagrado derecho del sufragio y ejerza la más mínima coacción en las reuniones populares o no haga efectivas las garantías individuales, será castigado con toda la
dirigió algunos
inscripción,
severidad.»
Por
misma causa fracasan
la
nuevo
los partidarios
de
1877 y triunfan de
los comicios (le
la
prórroga de
dictadura.
la
Pero los. partidarios de la prórroga de la dictadura se encargaron de acentuar la tendencia abstencionista del país, y con tal éxito que llegado por segunda vez a su término el proceso elec-
noviembre de 1877, hubo que suspender el funcionalas mesas por falta absoluta de votantes. \F¡n el mismo año en que aquí reinaba en esa forma el silencio supulcral en torno de las urnas, las calles de Buenos Aires toral
en
miento de
eran teatro de sangrientas escenas entre los partidarios del doctor del Valle acaudillados por el doctor Alem, y los partidarios del señor
ximas a
Cambaceres, formándose cantones en las azoteas prómesas receptoras de votos, desde donde se hacían
las
descargas de fusilería como en plena guerra table cortejo
El nuevo fracaso de los comicios era
raban
los
riorizar
el
civil,
con su inevi-
de muertos y iheridos. la
oportunidad que espe-
partidarios de la prórroga de la
resultado
de
su
labor,
dictadura para exte-
consistente
en
una represen-
Anales de
electorado
del
trición
íjTscriptos
de
y
'los
Universidad
la
que
Montevideo,
de
vecindarios
se
17
componía de
campaña movidos por
de
5
los
239 Je-
y por los grupos de ciudadanos que los secundaban. representación i:ué entregada al dictador por una comi-
Políticos
fes
Esa
Tomás Gomensoro, don Juan JD. Jackson, don Mateo Magariños Cervantes, don Agustín Castro, don Felipe Fraga y don .Hermenegildo Fuentes. El coronel Latorre reunió entonces en su domicilio a una treintena de ciudadanos con el propósito de cambiar ideas acersión compuesta de don
don iFederico
Cibils,
ca de la respuesta que debía dar. lEntre
figuraban
los asistentes
don Juan D. Jackson, don Juan Miguel Martínez, don Mauricio Llamas, don Aurelio Berro, don Luis Eduardo Pérez, don Juan
Vázquez iSagastume, don Lorenzo Manuel Herrera y Obes, don Federicj Cibils, don Hipólito Gallina!, don Eduardo Mac-Eaohen, don Pedro A''is
puntos sometidos por
Lo:!
conviene o no
«Si
en
Piñeyrúa, don
Pedro
don
Batlle.
persona
la
país
modo
qué
el
dictador eran estos:
la
prórroga
Latorre;
icorouel
del
nacional y en
al
y tiempo
del
gobierno
conviene
si
debe
la
entrarse en
provisorio
convencióa
camino
el
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A
de
faA'or
nado
quez, Carlos do
doctor
El
prórroga de
la
pronunciaron
se
los
la
dictadura por tiempo indetermi-
doctores Pedro Visca, Laudelino Váz-
Castro y Mateo Magariños Cervantes.
Váíiquez
Sagastume, combatiendo esa fórmula dijo el coi'onel Latorre había hecho uso
que aunque reconocía «que legítimo
de sus
naba que nal
tal
facultades
vez
un gobierno justo y nacional, opiel país al régimen constitucio-
y
pudiera volver
antes de un par
de años».
Don Aurelio Berro
se manifestó a favor de la prórroga, pero también del restablecimiento del régimen constitucional «cuando fuere factible.» a esta fórmula adhirió el doctor Lindoro Forteza. ^El
pio
doctor Manuel Herrera y Obes dijo que aunque en princi-
no estaba de acuerdo con
la
prórroga, lo estaba en
el
hecho
y que habiendo el gobierno provisorio afianzado la paz pública debía pedirse al coronel Latorre que continuara haciendo un
buen
gobierno.
perirdísticri
do
Rectificando la
sición en esta forma: T.
VII -2.
luego
algunas
reunión, concretó
que aceptaba
el la
frases
de
la
crónica
doctor Herrera su expo-
dictadura como un hecho;
Anales de
183
que
dictadura había salvado
la
Universidad
la
principio de autoridad, afian-
el
cráen y dado a la campaña la seguridad de que siempre había carecido; Que debía pedirse la prórroga, pero una prórroga limitada al menor tiempo posible. lEl doctor Brito del Pino expresó que en su opinión no tenia zado
el
lazón de ser consecuencia
la
continuación del gobierno provisorio y que en pedirse al coronel Latorre que cuanto antes
debía
encarrilara al país en la senda constitucional.
Don Mauricio Llamas expresó que era general el convencimiento de que debía volverse al régimen constitucional dentro plazo de un año. Luego se leyó una fórmula del coronel Latorre en que se establecía lo siguiente: prórroga de la dictadura por un año, realizándose los comicios al finalizar ese año; nombramiento por del
ciudadanos allí reunidos de un Consejo consultivo que formularía un proyecto de ley de elecciones encaminado a garanlos
tir
la
libertad del sufragio.
el debate fué aceptada por unanimidad de votos esa lórmula y se labró un acta con la firma de todos los asistentes en que se hacía constar el rechazo de la idea de la convención
Cerrado
nacional.
Y en el acto Latorre expidió un decreto por el que prorrogaba la dictadura hasta los comicios de IS'78 e instituía un Consejo Consultivo encargado de proyectar la ley de elecciones, con los siguientes ciudadanos: don Manuel Herrera y Obes, don Lorenzo Batlle, don Juan D. Jackson, don Juan José de Herrera, don Francisco A. Vidal, den Aurelio Berro, don Ernesto Velasco.
don Pedro Visca y don Mateo Magariños Cervantes. El «Club Nacional» de Paysandú que presidía el doctor Vicente Mongrell, que había levantado la bandera de la Convención Nacional, resolvió en vista de ese cambio de programa proclamar la candicatura preHidencial ds Latorre. Al abandonar su bandera
decía:
<:Ba;tante sev-eras la
los ,es
Constitución
gobiernos decirlo...
para armar la
el
de
pasado. ¿De qué sirvió ¿Qué bienes hicieron al país
sen las lecciones del la
República?
constitucionales
La Constitución
que fué
nos letra
Doloroso
sirviendo
sólo
brazo de los partidos que sobre los escombros de
patria se disputaron el poder en los
gcbieríios
precedieron? niuerta;,
constituidos
durante
j^arar los golpes que la
ese
campos de
período
batalla.
Y
no hicieron más
los
que
fracción disidente les asestaba y prepa-
Anales dé
los
raí-
Universidad
respondieran
que
elementos
la
19
candidato
al
de las afecciones políticas del cesante...
He
presidencial
compatriotas,
ahí,
que hemos 'hecho en cincuenta años de existencia de nación
lo
y en cuarenta y ocho de vida constitucional: destruir; habiendo llegado a los bordes del abismo en que la nacionalidad oriental
hundido
hubiérase descrédito,
si
al
las vestiduras
Los
<'i'ínienes
de
de
con
cubierta
caer una la
la
el
mano
polvo
del
más
vergonzoso
fuerte no se hubiera
asido
de
patria y la hubiera salvado de la ruina.»
('•i)o«a
de Latoire.
Un mes después de la erección de la dictadura fué asesinado don Eduardo Bertrán en ipleno día, a )a salida de la Casa de Gobierno, donde acababa de tener una ruda entrevista con el coronel Latorre.
Don Eduardo Bertrán era un hombre de acción, que había figurado como principal protagoniota en el proceso de la mina, durante la dictadura de Plores. Estaba sindicado, además, como amigo del coronel Gaudencio, el Jefe Político de la administrahabía int-entado evitar el golpe de maza del 10 marzo de 1876. Todo el vecindario de las proximidades de la Casa de Gobierno pudo contemplar el cuadro del asesinato, realizado por un oficial
ción Várela que
de
del
y algunos soldados que infirieron a Bertrán des baen la cabeza y una ipuñalada en el costado, de cuyas heri-
ejército
lazos
das falleció a las pocas horas. El capitán Valentín Martínez, del Batallón
5.°
de Cazadores quo
comandaba el coronel Máximo Santos, se declaró autor del asesinato en una carta a su jefe, en la que le hablaba de ofensas que H<e había visto precisado a castigar y de un viaje que emprendía inmediato al
de
sometió
a
la
extranjero.
justicia
Poco
penal, que lo
pretexto de que había asesinado a
defensa propia.
Y más
después
volvió
país
al
y se
culpa y pena a Bertrán frente a frente y en absolvió de
adelante todavía,
al
terminar
la
dictadura,
encargado de rendir honores a la Legislatura de Latorre, ganando con ello los despachos de sargento mayor.
fué
la
el
Después de ese asesinato en plena calle, a la luz del día, por fuerza de línea, empezaron las dcsapariciovrs misteriosas de los
caudillos
u hombres de
acción
que podían hacer trabajos revolu-
cionarios o que habían tenido algún
incidente con
el
dictador.
20
Aírales de la Universidad
El comandante don Lucai Bergara era otro de loá hombres paces de mirar frente a frente
ca-
dictador y de realizar trabajos
al
le tendió una celada y lo nizo conducir a uno de les cuarteles de la guarnición, donde fué ultimado, metido ea una bolsa y arrojado al fondo de las aguas de la bahía. Y no
para voltearlo. Latorre
contento con
que
obras
pendiente
tenía
prensa oficial que
de
altura
del
fusiló,
encargándose
Asilo
de
mes
y
tégico para
el
d€
el
la
oficial
de
el
asesinato
A
los
sus
a
ladrones sobre el
caudillo
ultimados, la
el
en
sitio
nacionalista Marino
en
la
los
el
de
cuartel
el
tercero en a.l
fondo
de Frenedoso que apareció
playa de Ramírez llevado por
agregábanse
y
el
Capitanía del Puerto y
el
estra-
terreno.
el
primero
el
presupuesto del
el
tiradores
de Cazadores, y sus cadáveres arrojados
les dcsajiarecidos
como
para robarse
Asilo
del
apostando a
explicar
los
que aparecía una gavilla de ladrones
la
bahía, zafando de las amarras
una mañana en
la
crónica
la
segundo en 5."
al
línea
exterminar
cuartel del
Bergara y llevados una noche hasta de
Mayada fueron
Dragones,
de
arrastrados
un piquete
comandante Frenedoso,
El
coronel
la
buscaba por todas partes. Fueron
donde
tesorería
dictador
el
allí
anunciar por
hizo
e
por
arrendamiento de
Huérfanos,
mediante una novela en asaltando la
ejecución,
le
Tribunales
los
un contrato de
compañeros
varios
Adoquines y de
Taller
ante
enjuiciar
de
Policía
la
aprehendido?
luego
mandó
lo
ello,
ausentado sin cumplir
liahcrse
el
fulminados a
comandante Irigcyen envenenado en
la
oleaje.
la luz del día,
Casa de Gobierno;
comandante Ibarra asesinado en San José; el comandante Ledesma asesinado en Fray Bentos; don Jaime Estapé apuñaleado a la salida del Taller de Adoquines donde purgaba su negativa a suscribir un arreglo de familia emanado del dictador y cuya libertad se había decretado a instancias de la Legación de España; Matta asesinado en una de las calles más centrales de Montevideo; el coronel Coronado asesinado en el Salto por la policía que e'
llevaba a declarar en el sumario instruido con motivo de la muerte de don Vicente Saraleguy; y centenares de otros en campaña o en los cuarteles de Montevideo, de escasa resonancia porque se realizaban en la sombra, de la que sólo salían por obra le
de
la
casualidad,
como
el
rapto de
Osvaldo
Servetti.
Servetti que había figurado entre les adeptos de se
encentraba
dole policial, la
Latorre y que
desempeñando en Buenos Aires comisiones de ínapareció complicado en una conspiración política, de
que participaban varios jefes colorados y blancos.
El
dictador
— Anales de
envió en
21
Buenos Aires una goleta a cargo del coronel
acto a
el
Universidad
la
Ernesto Courtín, con instrucciones para raptar a Servetti y traerlo a Montevideo. El coronel Courtín pudo obtener que Servetti fuera bordo de
a
y en
ción,
dujo
«Joven Rosalía» como
la
cuartel del
al
en
tcrturas
así
se llamaba
esa embarca-
acto levó anclas y lo trajo a Montevideo y lo con-
el
5."
de Cazadores, donde fué sometido a grandes
habría sucumbido
que
las
la
si
argentina
cancillería
enterada del secuestro no hubiera interpuesto sus reclamos, dando con
lugar a que Latorre hiciera firmar a Servetti un pedido
ello
de indulto datado en Yaguarón y
pueblo brasileño para demostrar
enviara luego al firmante a ese
falsedad del rapto y del cuadro martirio que ya había empezado también a trascender al público.
dtí
Algunos
asesinatos
de esos
la
tuvieron
fuerte
repercusión
en la
comandante Ibarra, por ejemplo. «La Democracia», diario dirigido por Eduardo Acevedo Díaz, afirmó que Ibarra había sido muerto después de preso por fuerzas dependientes del agregaba batallón del comandante Máximo Santos, ese jefe que lleva a la cintura una espada «como sarcasmo irrisorio del prensa. El
del
—
—
;>undonor
Diez jefes
militar».
del
ejército
publicaron
en
seguida
una protesta en que anunciaban que el coronel Máximo Santos, que estaba en campaña, repelei'ía el ataque, y el propio Latorre st apresuró a tomar cartas -en el asunto. «€omo «La Democradecía en una nota que pasó al Ministerio de la Guerra cia» insulta cobardemente y con la insidia que siempre emplea contra sus enemigos al comandante Santos, di&ponga V. E. que ese digno jefe baje inmediatamente a la Capital a levantar las injurias que pesan sobre su nombre». La empresa propietaria de «La Democracia» suspendió en el acto la publicación del diario y Santos recurrió al Jurado con un violento escrito «contra los
—
demclpdores de
A
la
lista
hay
día,
(jue
felicidad nacional».
la
desaparecidos y de
de los
agregar también
la
verdaderamente interminable, de de
licía
caparse».
había
la
su^;
muerte de personas por Era tan corriente de
tal
manera
larga, la
la
subalternos.
po-
propia policía que hecho y se habían esa
de los Jefes Políticos no vaci-
responsabilidad y
«Como
la el
poblaciones rurales con
las
de exterminio, que algunos
laban en asumir (le
los
en pleno
más presos que mataba
arrestado.
connaturalizado tornuí
asesinados
campaña bajo el pretexto «de que habían querido esNo pasaba una semana sin que los diarios del interior
denunciaran las
los
serie infinitamente
V. E. sabe
la
defensa de los atentado.s
—escribía
don Vicente Garzón
Anales de
eu su te
a
Memoria de
—
1877
al
la
la
üniversidtiá
Jefatura Política de Soriano correspondiense vio mi autoridad en el caso de
principio
castigar rígida y severamente
.a
algunos de los delincuentes, pero
medidas ique respondían al cumplimiento de un deber y encarnaban las mejores intenciones porque fueron tomadas en medio del caos y del desorden, dieron los resultados que V. E. conoce». Destacando los servicios del Jefe ¡Político de Maldodecía «lEl CDepartamento» de esa nado don Justo R. Pela/yo <'iE'l Chingólo y el Clinudo eran dos gauchos malos ciudad: estas
—
—
que merodeaban por las inmediaciones de José ilgnacio. El primero fué alcanzado y herido en una de las persecuciones, expirando luego en las inmediaciones de iMinas. El segundo fué aprehendido y su temeridad cuando era conducido puso a los conductores en el caso de adelantarse la
a al
la
Capital
de
castigo
justicia.»
El Taller de Adoquines.
Tal era
la
suerte de los cabecillas. Los demás eran conducidos
al
Taller Nacional, la gran cárcel de la dictadura, instalada en
la
calle Yí
la
Policía.
donde hoy funcionan algunas de
A mediados
de
18(78
en
presos distribuidos
adoquines
3
y zapatería
0, 2i6,
vivían los
en
el
siguientes
elaboración de ladrillos
obras de herrería
las
Taller
dependencias de
Adoquines
de
3 0,
12,
3
elaboración
talleres:
78
de
obras de talabartería
obras de carpintería
10.
vagos y malhechores, y algunas veces de gente buena, pero que no comulgaba con el criterio político reinante. El Taller de Adoquines llegó a constituir el terror de la cam-
Los Jefes
'Políticos
paña y a inspirar
al
hacían periódicamente remesas
paisanaje un miedo
mucho más
de
fuerte que
Prefería morir que hería en el camino. antes que pasarse los meses labrando piedra. Un día el preso Juan Quirós se resistía a trabajar y el capataz le pegó un varazo el
de
la
daga'
policial
y luego lo ultimó con la bayoneta a título de que lo había atropellado. Quirós estaba acusado de haber entrado a un velorio de Trinidad y alzado en la punta de su puñal allí se velaba.
el
cadáver de
la
criatura que iNo
escapaban a ese terror muchos de
los
pleitistas de
Monte-
video, porque Latorre hacía frecuentemente de juez y convocaba
Anales de
los
a
litigantes
y
23
proponía fói'mulas de arreglo que debían
les
inmediato
de
íjceptar
Universidad
la
apercibimiento
bajo
de
al
ir
Taller
de
de
la
AdOiQuines.
Una pretendida reperfusión
benéfica
de
ios
atentados
dictadura.
Véase de
la
que escribía en 1876 don Domingo Ordoñana, dirigente
lo
Sociedad
Rural,
don Francisco X. de Acha, redactor de
a
«El Ferrocarril» y Secretario privado del dictador "Latorre, a raíz
primeras desapariciones, de los primeros asesinatos y de al Taller de Adoquines: «Va siendo habitable la campaña, lo que significa decir que se van resolviendo para ella los problemas de seguridad en la vida y en la sociedad ... Es grande la confianza que va inspide
las
primeras remesas
las
lándonos la administración del coronel Latorre, porque encontramos en ella condiciones de aptitud con arreglo a las necesidades y soluciones modernas, porque los trabajadores de los campos no vivimos tanto de raformas y ardientes libertades patrióticas cuanto de libertad y reformas administrativas que dejen
en
paz
y
sosiego
culado por el
lazos
L-ampaña a
la
de armonía, lc3
más
redondeando mi
Ahora,
trabajo...
al
pensamiento, diré a usted que
intimes,
cual vivo vin-
la
necesita
saber
si
sosiego de que hoy disfruta con la justicia que se sigue haciendo
contra
los
maliicchorcs podrá disfrutarlo mañana,
cepto todo cuanto pueda escribirse, todo
en este con-
y
cuanto pueda hablarse
será poco para levantar el espíritu justamente abatido y desconfiado de las poblaciones rurales, para que sosegadamente pueda
entregarse a
ganadería raiormista y a la agricultura de su las cuales y sólo en ellas encuentro la soluhambrientos problemas que agitan a esta sociedad.»
consecuencia, ción de los
«Repetimos
la
en
—
agregaba
el
señor Ordoñana
en
18 77
—
que
canxpaña es habitable, y es habitable porque han desaparecido aquellas falanges de ladrones organizados, aquellas turbas de la
encubridores padritos
de
cueros
que hacían
robados
difícil
el
vuelven a establecerse en los dos
y
es
práicticos
necesario que para repoblar
encontrarse en otra
el
las
parte
y
aquellas
cuadrillas
de
com-
metodizado.
Las familias campos antes despoblados de ganatrabajo
Latorre piense en
los
medios
soledades, y esos medios no
pueden
coronel
que en un Banco Rural.»
Anales de
24
El dictador
fundador de
apresuró a
la
se
Universidad
prédica
explotar la
Sociedad Rural, haciendo de
la
ella
optimista
del
mérito prin-
el
de su administración.
cipal
En una
circular dirigida
los Jefes
a
en
Políticos
1S7 7 decía,
luego de aplaudir las medidas adoptadas contra los malhechores:
«Un
hacendado
respetable
defensor
incansable
de
tetizar
las
vistas
gobierno
del
de sin-
que todo
diciendo
provisorio
inte-
los
reses rurales y del bienestar de nuestra campaña, acaba
lo
hay que hacer por ella es hacerla liaMíable Cada día persuado más de que los males que presentemente abruman
que
.
me
.
.
país no se pueden reparar mientras no se desarrolle el pro-
al
greso de
dos
la
campaña y no
que sobre
desidia
desaciertos
todos
y
se
redima por
trabajo la enorme
el
pesa como consecuencia
él
del
quieran vivir a
hábito
ari'aigado
de nuestros pasa-
entre
nosotros
de
que
expensas del Estado.»
El 'Director de «El Nacional» de Buenos Aires visitó en 18 79 coronel
al
Latorre
en
nombre
del
Presidente
«Uno
Avellaneda.
—
más me han preocupado se apresuró ha sido la prosperidad y a decir Latorre en esa entrevista sobre todo la seguridad de la campaña. La campaña que consume poco, pero que produce mucho, ha tenido por parte de mi de los pensamientos que
—
gobierno una atención preferente y una constante adhesión. Usted puede cruzarla hoy sin temor a nada. He concluido con los salteadores
bajo
porque
mano
la
he
sido
con
inexorable
de la autoridad.
Hoy hay
los
que
respeto a
la
han caído propiedad
y doble respeto a la vida».
Esa prédica optimista tenía que provocar y provocó fuertes basadas en la índole de los procedimientos a que recu-
críticas
rría las
dictador para perseguir a los ladrones de ganados y a de salteadores que se habían ido formando a la som-
el
gavillas
bra de las guerras civiles y especialmente del desgobierno del año terrible. Y contestando a una de esas críticas, decía el señor
Ordoñana: «La campaña fué inhabitable,
se
hizo inhabitable para la gente
honesta, para Qas clases trabajadoras, porque las guerras y los nu-
merosos
ladrones
garon
necesidad
la
infundieron... la
campaña
la
y
asesinos
del
que
poblaban
abandono por
el
Los mismos estancieros
los
terror
-espacios,
extranjeros
que
abandonaron también, llevando por todos
bitos de la tierra la noticia de que la
propa-
y e\ espanto que
poblaban los
ám-
Banda Oriental era un
país
de cafres y en las cancillerías extranjeras pueden encontrarse los
Anales de
nombres de
la
Universidad
que cayeron víctimas del furor y de
los
no provisional, coronel
de
fui
que
Latorre,
haciendo justicia
que alentaron
los
hacer
quiso
contra
acto
el
el
gobier-
espíritu del gobernante
de buena
malhechores
los
que per-
los
Cuando surgió
dieron sus fortunas con sus pescuezos...
que
y
administración volviese
la
con-
fianza y que volviesen los estancieros a instalarse en sus estancias y las vivificasen con su presencia y con el prestigio de sus familias y que la vida de la producción y del trabajo fuese la vida regular de la República... Cuando esto se produjo, y «e produjo pronto,
yo dije como rural, como morador de
la campaña: la (xunpaña es puedo decir por vista de ojos y lo puedo decir por mi posición independiente y porque no tenía yo nada que esperar, ni moral ni materialmente que solicitar del gober-
habitable, y todo esto lo
nante que tan grande y patriótica misión
había llenado en
su
patria.»
Las medidas de terror implantadas por ron sin duda alguna a la disminución lugar por
el
exterminio
en primer
vandalaje,
que caían bajo las garras policiales
xie los
o su absorción por el Taller de
dictadura propendie-
la
del
Adoquines y en segundo lugar por
la
emigración que esas medidas tenían que provocar y provocaban. «Hace poco tiempo escribía el Secretario del Dictador en su
— —
diario «El Ferrocarril»
voz autorizada del Jefe de Policía de
la
Buenos Aires Ihacía fonstar en un documento público de
la
el
aumento
criminalidad en aquella ciudad, explicando como una de sus
causas la numerosa emigración de teda clase de delincuentes y de gente de mal vivir que huían de esta R&pública para asilarse en
Buenos Aires ante práctica por
el
«Los malhechores riscal Osorio en el
severas
el
medidas de represión puestas en
—
agregaba en esa misma oportunidad el iMaSenado Brasileño no se detienen mucho en
—
Estado Oriental, porque
nar su se
las
gobierno del coronel Latorre.»
territorio
habitable
el
gobierno de ese país queriendo
persigue
tor-
a los vándalos que entonces
refugian en territorio brasileño.»
Pero adviértase que
así
que cesaban
las
rachas de sangre o de
violencia por la aparente extinción del bandolerismo o por
sancio de las policías de campaña, volvía a agitarse
como
si
ninguna huella hubieran
dejado
los
el
el
can-
escenario
procedimientos
dic-
tatoriales.
Pocos días después del fusilamiento de Averías de que hablare-
¡emos más adelante, era apuñaleado
el dueño de una pulpería situada en Itapebí (departaniento del Salto), y aparecía en Castillos
Anales de
26
(departamento de Maldonado)
un
cola de
la
como
potro,
deo dudando de
la
Universidad
el
cadáver de un hombre atado en
hacía constar la prensa de Montevi-
lo
ejemplaridad del castigo que acababa de aplicarse.
la
La prensa de campaña clamaba en febrero de 1877 contra una gavilla de
25
forajidos capitaneados
30
a
hacía sus correrías desde
mismo año
del
por
el
Charqueado, que
Durazno hasta Cerro Largo.
el
Jefe Político del Salto se dirigía
el
Gobierno denunciando
existencia
la
de
otra
al'
A
fines
Ministro de
formada
gavilla
en
brasileño y que se corría a nuestro territorio a realizar
territorio
plan de saqueo.? y asesinatos. Dos años después, en octubre de
su
era
1879,
Ministro de Gobierno
él
que se dirigía
el
al
Jefe Polí-
departamento de Paysandú volvía a convertirse «en teatro de horrendos crímenes» y Etcheverry para decirle que
tico coronel
que era necesario que
Policía se
la
el
agitara
y recorriera
sec-
las
ciones para aprehender o ahuyentar a los criminales.
«La campaña ese motivo
repetía con
habitable para la gente de sable»,
es
redactor de «El Negro Timoteo», parodiando
el
la
frase
Domingo Ordoñana.
de don
¿Emanaban
crímenes
lo.s
de
dictadura
la
de
temores
de
revolución ?
Desde
comienzo de
el
la
dictadura fueron amnistiados todos los
ciudadanos que habían tomado parte en los sucesos políticos anteriores,
incluso
reconocía
por
el
En
el
jefes
los
y
oficiales
dados de baja, a quienes se
derecho de reincorporarse
simple hecho de presentarse
al
al
ejército y al presupuesto
Estado Mayor,
curso de 1876 corrieron rumores de revolución,
el
pero
la
paz pública permaneció inconmovible. Sólo hubo un pequeño motín
en
el
Paso del Molino
al
precederse
al
licénciamiento del
cuadrón de caballería de línea que mandaba
Un
oficial y
seguidos,
el
coronel
es-
Irigoyen.
varios soldados huyeron con sus armas y fueron per-
disueltos
o
exterminados por
las
fuerzas
de
los
demás
cuerpos.
En
1878 volvieron
a
correr
rumores de revolución señalándose
como instigadores a don Osvaldo Servetti y al coronel Pampillón. Con el propósito de averiguar el grado de consistencia de esos rumores marchó el coronel Latorre a la frontera acompañado <íe una pequeña escolta y luego de recorrer la mayor parte de la campaña dejó
comprobada
la
perfecta
estabilidad
d? la
paz.
Anales de
A
la
universidad
27
fines de 187i9 y principios de 1880, es decir,
Latorre
nainistración
tocaba
revolución y hasta de
entrerriana Coronel.
a su
término,
a
la
ad-
hablarse
de
existencia de grupos armados en la costa
la
en la frontera del Brasil, bajo
fj'
cuando ya
volvió
Máximo Pérez y Manuel
Caraballo,
mando
el
comité radicado en Buenos Aires del que formaban parte tor Ángel Floro Costo,
Xico
de
dependientes
un
de el
doc-
ex Presidente don Pedro Várela y don Os-
el
valdo Servetti. Era «la revolución de los cóndores», esí llamada
gún
la frase lapidaria de la
época porque
estaba constituido por cóndores
chilenos
doctor Costa, suministrador del
el
Várela ante
los
tribunales
uno de esos grupos, pero
la
que desaparecieron ante3
hecho a una demanda que dinero, entabló centra don Pedro
dando lugar
estallar la revolución,
ój;
se-
capital para realizarla
el
el
Ya caído
argentinos.
invadió
Latorre,
San Eugenio
policía de
disolvió en
lo
actc.
el
Puede decirse, pues, que durante la administración Latorre quedó de hecho interrumpido el período de nuestras revoluciones y que no emanaban de ahí los exterminios de la dictadura.
El olea.je de sangre y de violencia se extendía a todo
<.Ay+;r
-
Uío de
el
Plata.
la
hemos presenciado
doba en abril de 1876
—
la
—
dí-cía
venta de
últimamente invadieron cerca de
un hecho aislado... De
los
«El Pueblo Ca*61ico:> de Córla piel
de un indio de los que
Xo
Morteros...
las averiguaciones
se
de
traía
practicadas resulta que
entre los soldados de la frontera hay mantas, riendas y látigos he-
con piel de indios.»
chos
comandante Salvador Maldonado telegrafiaba lo siguiente al elector Adolfo Alsina, Ministro de Guerra del doctor A.vellanela, dár.dole cuenta de una batida contra los indios en abril de 1S77: «El triunfo es más completo de lo que yo creía... Los prisioneEl
ijue
rol-
me
traen los hago pasar 'por las armas.»
-fLo felicito por el
'
nica», decía
el
resultado del hecho de armas
doctor Alsina al
?.(usar
recibo de
qu*^
ese
ir.e
comu-
telegrama.
medio ambiente era todavía de barbarie y el coronel Latorre un temperamento (|ue armonizaba con ese ambiente. Varios meses antes del motín del 1" de enero dos soldados úv El
tenía
sv.
batallón
Latorre
hizo
se
trabaron
atar
al
en
pelea
muerto con
y el
uno de vivo,
ellos
boca
quedó muerto.
con
boca,
y
así
Anales
Universidad
la
:le
matador durante toda la ncche del velorio. A otro había violado a una niña de tres años, lo condenó a recibir once mil azotes que le fueron aplicados por sus compa-
mantuvo
al
soldado que
ñeros de servicio hasta dejarlo muerto.
Escogemos dos de
las
escenas
sombríos cuarteles que durante por
de Montevideo,
que
de
efecto
dictadura constituían desapariciones
las
dictador se deshacía de su
el
documentadas de aquellos
bien
la
más
terror
el
con
misteriosas
terribles enemigos.
Contra los ladrones de los dineros públicos. Latorre había prometido en su programa moralizar
adminis-
la
un gobierno honrado y no de ladrones» y en varias oportunidades dio resonancia al cumplimiento de esa
tración pública «haciendo
promesa.
A un
Comisario de
Garzón de
Vicente
Soriano acusado por
fraudes
años de trabajos forzados en lítico
el
Comandante Militar de
y
el
Jefe
don
Político
condenó a dos Taller de Adoquines. Al Jefe Po-
arbitrariedades,
y
la
lo
Colonia acusado por la Conta-
duría General de la Nación de graves irregularidades en el manejo de los fondos, lo hizo A'
Jefe Político
aprehender y
destacado lo suspendió
allí
sometió a los Tribunales.
lo
de Minas y Comandante del regimiento de línea en
sus funciones, hasta que
vindi-
se
mala administración que se le habían diriresidente en Tacuarembó que vivía retirado en su
case de los cargos de gido.
A
un
e:-tancia,
jefe
le
telegrafió
para
que
decirle
la
prensa
atribuía
local
robos de ganado a su peonada y que era necesario que acusara al diario y se vindicara, bajo apercibimiento de las medidas que co-
rrespondiera
ross-.
en
adoptar,
«a que
suelto
que
anticipándole
no figuraran en
el
el
escalafón
Gobierno militar
estaba
jefes
re-
cuatre-
Al Jefe Político del Salto que había arrestado y luego puesto a un vecino por haber carneado una vaca a fin de
libertad
dar carne a una madre viuda con cinco hijos que se morían de
hambre,
le
contestó que debía reintegrar a la
porque no era porque
el
permitido
hacer
hecho importaba falsear
ante todo quería que fuera efectivo
uno de ti
jefes de
cárcel
los
al
bienes
cuatrero,
ajenos
Gobierno
política
el
respeto a la propiedad».
del
batallón de Montevideo lo hizo procesar
y
«que
la
A
bajo
cargo de malversación del pre de la tropa, y luego de pronun-
ciada el
los
con
caridad
sentencia
condenatoria contra
el
verdadero culpable, decretó también
sargento la
mayor, que era
destitución
del
jefe
por
:
Anales de
la
29
Universidad
de su subalterno. de la debida vigilancia sobre la conducta un desfalco en de motivo con decía Salto le Ai Jefe Político del
falta
Aduana
I;t
ninguna escon energía y sin consideración de invocan mi e nombre mi toman pecie y haga entender a los que inflexible conser de he que picardías amistad para amparar sus rentas públicas, sean ellos quienes tra los defraudadores de las castigar a los culpables y sean, empezando por esa localidad a ella a los ladrones. Desde levantando una horca para colgar en de los culpables pretende alguno si y., hago responsable a V. S. «Proceda V.
B.
evadirse.»
Más de una vez fraudadores nales.
de
«Esa
Receptor
del
las
al
rentas,
práctica
Salto
Montevideo por
el
ser
puestos se
inmoral
en
libertad
bajo
lianza los
Jueces
de-
Tribu-
erguía
contra
-
en diciembre de 1877 al excarcelación decretada en
los
y
decía
comentando una doctor Berinduague
-
que ha venido sirviendo
debería haber quedado ya escudo a los criminales y ladrones, presencia de los esfuerzos que rota para siempre entre nosotros en d-^
Gobierno hace para moralizar al país». de honradez adminisPero no siempre prevaleció ese programa
e'
fativa.
renuncia de b?de 1879, o sea en la víspera de la pesos que era la más grande torre, se jugó la lotería de 100.000 Habiendo transcurrido dos meses de los programas de entonces. la del favorecido por la suerte, sin que se conociera el nombre hablara que exigir a empezó Razón», «La prensa, encabezada por atmósfera U Administración de Lotería. No tardó en caldearse la LeóniFrancisco Lotería don y tanto que el Administrador de la que en manifiesto un publicar das Barreto, se vio precisado a billetes de paquete el en figuraba decía que el número premiado Janeiro. Pocos días después devuelto por el agente de Río de según la cual el publicación, otra por noticia la era rectificada hasta ese momento premio había caído en Río de Janeiro sin que a la vez anóAparecieron se conociera el nombre del agraciado. PrudenRazón». «La de redactores nimos amenazantes contra los Alvarez. Dufort Anacleto y Muñoz y Daniel cio Vázquez y Vega, de reeditar «Los Princiy habló la prensa oficial de la necesidad cual volvió a hablar el pistas en Camisa», después de todo lo billete premiado Administrador de la Lotería para declarar que el los 100.000 pesos que Janeiro y había venido en el paquete de Río de La Junta Caridad! de Comisión la en los Estados de
En diciembre
figuraban
Económico -Administrativa nombró entonces
una comisión
inves-
Anales de
30
¡m
^"mmmm
la
universidad -
»
i
.-..-,--,
que examinó la contabilidad y los documentos de la Locomprobando que el premio figuraba en los libro-s, perb que
tigadora, tería,
por orden del coronel Latorre se había dado salida a la mitad de
Ya había
su monto. a
ción»,
había exigido
en
figuraban e;
el
caído Latorre en
órgano de
sazón
la
esos
de
Para
caja.
prensa,
la
que
ex
el
dictador
dinero a Barreto y entregado los documentos que
hombres
los
imparciales
premio sólo había aparecido por efecto de
cias
momentos y «La Na-
expresó
Santos,
las
de
con documentos
cubriéndose entonces
época.
la
reiteradas denunclaro
el
que realmente existía.
A
un segundo incidente de mucha resonancia aió lugar la Lote«La Razcn>> denunció a raíz de ia caída de Latorre que el concesionario de la venta de billetes don Francisco Vidiella, tenía que abonar al Capitán del Puerto coronel Ernesto Courtín, al comandante
mensual de sión crita rez,
de
2,300
La denuncia fué confirmada por la ComiPública en una publica,ción sus-
pesos.
Caridad y Beneficencia
por sus miembros don Julio E. Pereira, don Cayetano Alva-
den Joaquín
Suárez,
tuña y don Luis M.
don Manuel El
Surraco.
el
13
'^/r
Vidiella
—
publicación la Comisión de Caridad contratista de la Lotería
Buxareo,
seiior
del
don José F. An-
—
decía
esa
en
calidad
de
producto de la venta de
bi-
percibía
en su
y habiéndosele rebajado su comisión al 11 %, exhibió vadocumentos de los que resultaba que desde la época de Latorre estaba obligado a entregar mensualmente 1,800 pesos a los lletes
rios
coroneles Courtín y Santos y 500 al señor Barreto para
él
o
para
otra persona.
A
estas
acusaciones
comprobadas por
de la época, agregaba la
prensa
el
la
documentación
negocio de
las
oficial
liquidaciones.
El doctor Carlos María Ramírez redactor de «El Plata», fijaba en 4.000,000
de pesos las
salidas
del
Tesoro público por concepto de
pagc de liquidaciones que se compraban en plaza al 10 % de su vrilor y que los paniaguados de la dictadura cobraban por su valor escrito.
El Consejo Consultivo formula
el
proyecto de ley electoral y
el
dictador lo rechaza. El Consejo Consultivo instituido por caso de
los
comicios
de 1877
el
dictador a raíz del fra-
presentó a principios
del
año
si-
guiente un proyecto de ley de elecciones que declaraba obligatoria
Anales de
de los ciudadanos en
la inscripción rio
31
Registro Cívico y obligato-
el
bajo apercibimiento de
voto
el
Universidad
la
de multa o prisión
pesos
100
de dos meses, y que establecía la representación
de
proporcional
tcdos los partidos.
Esas dos importantes proyecto del
sistema Borely, el
innovaciones
dieron
parte
sugeridas en
Jiménez de Aréchaga
Justino
doctor
lugar
a
extensos
en
debates
la
un
por
en
calcado
el
prensa y
dictador aprovechó la oportunidad de esos debates para recha-
zar el proyecto.
—
«La prensa
decía en su nota
—
se
ha pronunciado contra
la
obligatoriedad de la inscripción y del voto, contra la proporciona-
penas impuestas a
y contra las
lidad
Y
omisos.
los
el
Gobierno
está de acuerdo' con la prensa. Son reformas para las que nuestro país no está preparado. Sírvase, pues,
Pero
Consejo
el
Consultivo
mandato. «No ha logrado persuadirse ei
Consejo redactar un nuevo
el
más en armonía con nuestro modo de
proyecto
general
Batlle y
y Secretario de la
optó
el
por
ser.»
declarar
Consejo
—
terminado su
decían en su nota
doctor Manuel Herrera y Obes, Presidente de que él sea el órgano más a corporación el
—
forma
Basado
éste
vagamente en ideas y apreciaciones de cuya exactitud y
apli-
para
propósito
dar
en este
cabilidad
caso
il
no
pensamiento
participa
esta
oficial.
corporación,
se
vería
expuesto ese pensamiento a ser de nuevo mal interpretado, mi-
norando
a
la
respeto que
vez que nuestra ingerencia en
la
él
adhesión y
el
Consejo desea conservarle por entero al acto poradicalmente reparador que con tal mala fortuna acaba
lítico
el
de aconsejar.»
comicios de 1878.
IjOS
Tenía razón
Consejo, y comprendiéndolo así expidió
el
ronel Latorre un nuevo decrsto por la
Los chas
sancionada
electoral
ley
tración
por
la
el
el
co-
que mantenía en vigencia
Legislatura
de
la
adminis-
Ellauri.
registros se
cívicos
se
abrirían
en agosto;
reuniría
las
en mayo;
Comisiones
el
jurado
instriptoras
de
ta-
y
los
jurados de tachas serían elegidos por las respectivas Juntas Económico-Administrativas entre los ciudadanos más res-petables de
cada localidad. Ya en Gobierno
vocando
había los
el
confiado
vicios
e
curso del proceso electoral de 1877 el a las Juntas esa misma facultad, in-
irregularidades del
Registro Cívico existente.
Anales de
3-2
Tampoco consiguió
el
la
Universidad
en
dictador
esa
oportunidad arrancar
a loa partidos de su abstención. Era tan general el retraimiento que Latorre se viú precisado a prorrogar el plazo de la inscrip-
—
—
que por parte de decía en gu decreto «considerando ciudadanos hábiles para ejercer en los comicios públicos el sagrado derecho que la Constitución les acuerda ha habido re-
ción, los
traimiento para concurrir a la inscripción».
de los comicios hubo una reunión en cambiar ideas acerca de la organización de los trabajos electorales, y en ella se resolvió hacer una convocatoria más amplia para la constitución de un club electoral, que fué firmada por colorados y por blancos entre los que figuraban el general Lorenzo Batlle. el doctor Francisco Antonino Vidal, el coronel Manuel Pagóla, el coronel Gervasio Burgueño, don José Cándido Bustamante, don Narciso del Castillo, don Juan Pedro Castro y el general Juan A. Possolo, sin que tam;
Recién en Teatro
el
víspera
la
para
Solís
aumentara
poco
el
número de concurrentes.
Llegada la etapa final de los comicios la Junta EconómicoAdministrativa de Montevideo estableció 6 mesas receptoras de votos en la ciudad y 8 en las afueras para estimular la concurrencia a las urnas, reaccionando así contra la reconcentración
un
de votantes en
dos había dado en
solo
local
que tan sangrientos resulta-
1.S7I5.
Pero no obstante esas facilidades y no obstante la circunsde que los nuevos representantes debían traer poderes especiales para abordar la revisión de la Constitución, los candidatos más votados apenas alcanzaron a obtener 3,895 votos según el acta de escrutinio de la elección de diputados, y 3,2 65 según el acta de escrutinio de la elección municipal. De la perfecta homogeneidad de las inscripciones del Registro Cívico, emanadas en su gran mayoría de los batallones de línea y de las policías, puede dar idea el hecho de que aparte de los candidatos triunfantes, el ciudadano más votado tenía apenas 3 votos en tancia
las
elecciones de
diputados y
Xo era mucho más de sufragantes
1
en las elecciones municipales.
apresurémonos
alto,
a
decirlo,
de la Provincia de Buenos Aires,
número
el
y ello
a
pesar
de que la Presidencia de la Nación estaba ejercida por
el
doctor
Nicolás Avellaneda y la gobernación de la Provincia por
el
doctor
Carlos Tejedor.
Computando
las
la ciudad y de los distritos de 19.74.5
inscriptos.
Pero a
los
inscripciones de las parroquias de
campaña contaba comicios
el
electorado con
de diputados
al
Congreso
Anales de
realizados
Eran
en febrero
de
más
elecciones lo
acredita este
al
escrutinio
votantes.
5,376
más edificantes que las cuadro de «La Nación» de Buenos pero
nuestras según
33
concurrieron
sólo
1878
reñidas,
Aires,
relativo
Universidad
la
no
practicado en
de la Legisla-
salón
el
tura Provincial en abril de 1879:
«La barra era compuesta en su gos
ladrones
hasta de
y
casi
criminales
y
totalidad
de ebrios, de va-
Hemos
conocidos...
per-
noche en la Legislatura y hemos visto y oído en su barra ejecutarse y pronunciarse las mayores obscenidades,
manecido toda
jugar a
como
naipes, comer, beber, gritar, reir y do'miir finalmente,
los
si
la
mesas en que vino y los
un bodegón
fuese
aquello
escriben
se
de
leyes
las
la
última
Sobre
clase...
las
turba ponía sus vasos de
pedazos de salchichón y de queso que se
repartía
le
para que cenase.»
El ambiente político
pero con la más
de fusión.
gobernaba a nombre
Latorre
coronel
El
ei-a
del
Partido
Colorado,
amplia colaboración del Partido Blanco.
Ya hemos dicho que desde
elecciones de 1872, a raíz de la
las
el segundo de esos partidos aproximadamente iguales, una de tradición de sangre, que mantenía la vieja deno-
conclusión de la guerra de Aparicio, bifurcó
se
ellas
en
dos fracciones
atada a la
minación del partido, y la otra desvinculada de esa tradición, que se trazaba un programa de principios bajo el nombre de Partido
Hemos
Nacionalista.
administración
dicho también que en las postrimerías de la
EUauri,
los
blancos
netos,
como
así
se
llamaban
unieron a los colorados netos y los nacionalistas se unieron a los colorados conservadores, y que producido el los
tradicionalistas.
motín
del
se
15 de enero
de
1875,
fracción
la
nacionalista fué perse-
guida y se hizo revolucionaria, mientras que la fracción neta se plegó a los motineroñ con su caudillo el genera! Aparicio a la cabeza.
Pero durante
gobierno de Latorre aumentó
el
el
concurso blanco
forma que según el cálculo producido por «La Razón» en 1884,
del
las siete
odavas
partido aceptaban y secundaban
dictador,
teniendo a su dispo-
en
tal
sición
casi
toda
nistrativos de
la
magistratura
al
doctor Martín
judicial,
Aguirre, jjartes
re-
de su
muchos empleos admi-
importancia, cuatro senadurías y doce diputaciones. tal manera el espíritu de fusión que hasta dos
Predominaba de centros sociales,
T.
Vil
-3.
el
«Club
Lil)ertad5'
de origen colorado, y
el
«Ca'
Anales
34
sino
Comercio»,
del
la
:le
origen
de
universidad
en
unirse
resolvieron
blanco,
ese
año de la administi-ación Latorre, y constituyeron un nuevo
liltimo
y más vigoroso organismo, el «Club Uruguay», que todavía existe. Agreguemos, sin embargo, en honor del país y de sus institu-
un fuerte núcleo de dirigentes de ambos partidos
ciones, que
servó vivo y
torre,
más
de los principios
culto
el
viva
protesta contra los
la
con-
durante la dictadura de Laactos
de esa dictadura,
aunque sin organizarse, porque la organización era imposible en esos momentos de predominio absoluto del sable.
mando en
ei
expuesta por
Presidente del
el
mismo
él
y por sus Ministros.
La Legislatura surgida de reunió
se
y el dictador i-esigna Senado. La obra de Latorre
entra en ejereicio
La nueva Legislatura
los
comicios
noviembre de
de
poder ejecutivo
1878
asumió el Presidente del Senado don Francisco Autonino
en febrero del año siguiente, y en el
el-
acto
Vidal. la obra
Sintetizando
torre al resignar
el
de sus tres
mando en
el
«Aniquilamiento o anulación de
años de dictadura
los
quicos que tantas veces conmovieron
elementos malvados y anárorden público, arruinando
el
fortuna nacional y atentando contra la
!a
de
de
ción
República;
la
tiene
el
sombras que oscurecían
el
país
el
actualmente
siendo
res,
el
principio de la
propiedades
las
y
consolida-
perturbada y disipación de
poder de conturbar;
horizonte de las relaciones exterio-
más
las
tución del crédito público;
sobre
vida y
restablecimiento
paz doméstica que por nada puede ser
la
que nadie en las
de
habitantes
los
La-
decía
Presidente del Senado:
perfectas
y
reconsti-
cordiales;
reorganización de la Hacienda nacional
más
estricta moralidad
en la recaudación
de las rentas y en su aplicación a los servicios públicos a qué están destinadas; eliminación del papel moneda, restableciendo con-
siguientemente
mento de
la
más decidida
la
base
instrucción
la
al
comercial y
legítima
de
en.
algunos
las
El
departamentos;
policiales
riéndose a
la
reconstrucción
que garantirán
personas y propiedades.» Ministro de Gobierno
Latorre en esa
circulación;
don
del
María
reor-
de jueces de derecho
aunadamente José
fo-
protección
pastoreo, a la agricultura y al comercio;
ganización de los Tribunales y establecimiento
fuerzas
la
de la beneficencia pública;
ejército la
paz,
y el
de
las
orden,
Montero dirigió a
misma oportunidad una Memoria en
acción política de la dictadura, decia:
la
que
refi-
Anales de
universidad
la
35
El gobierno actual surgió a raíz de un período humillante y desconsolador que la pr«nsa ha calificado sin exageración de año terrible, «época aciaga en que el repugnante consorcio del peculado y
anarquía amenazaba ahogar
la
pública,
cional
que había derrumbado todas
ción
en proporciones
mente
últimos
los
en mil pedazos
destrozada
fianza
las
de
restos
por
fortunas...
La
despobla-
empezaba a comprometer
aterradoras
con-
la
bancarrota na-
la
seria-
fundamentos de nuestra nacionalidad; el imperio de la ley era escarnecido en todos los ámbitos del país y el derecho más santo obligado a abdicar ante la prepotencia omnipotente del los
.
caudillaje,
verdadero feudalismo local ávido de todos los tributos
La
dignidad humana...
de la
autoridades
marcha de
autorida(d
la
violenta
sión
hacía
locales
e
campaña,
gravitar
sobre
más
día
central...
injustificada
nuestra
tradicional
cada
El robo,
hombre
al
eran la menor de esa
ella
desbordantes y de
red
las
triunfante,
la
abigeato,
el
de
embarazosa
y
la
las la
extor-
honrado y laborioso de calamidades que hacían
de ambiciones voraces y que elevaban la criminalicamipaña pasamos a la Ca-
inextricable
pasiones sin freno
dad a una cifra aterrante... Si de la pital, sólo veíamos el crédito destruido, oficial
insubordinación débil
propiedad
la
sofocada
corrupción y por
el
agiotaje
impuesto,
el
el
co-
mercio vulnerado por una serie de atentados sin ejemplo que se repetían hasta en los centros destinados a las transacciones, siem-
pre respetados por todos los gobiernos de la tierra...
de esa situación tuvo que recurrir
acaso inexorables,
pero que eran
el
Para
salir
Gobierno a medidas severas,
aconsejadas
por
una superior
necesidad de salud pública de que en circunstancias soberanas y excepcionales sólo ha podido ser juez el Gobierno Provisional, pe-
asimismo está en la coniciencia sana del país entero que la magnitud de los males que nos abrumaban, han sido únicas que en un período breve de tiempo han hecho posible
ro que ellas,
las e!
dada
imperio real y verdadero del
orden
público
y
caída para siempre de las insolentes prepotencias
precipitado
la
ante
la
locales
autoridad augusta del gobierno de la Nación».
Demostiacionos
<ju('
s«'
hacen
al
dictadoi" en osa oportunidad.
Una comisión de comerciantes entregó al dictador, al tiempo de el mando en el Presidente del Senado, un álbum con ha
resignar
siguiente dedicatoria:
«En un cortísimo período ha levantado usted
la
situación finan-
Anales de
36
ciera del país
absoluta postración en que se hallaba; ha
la
ele
tablecido en nuestros
propiedad y de
la
campos
la vida;
desiertos
casi
es-
respeto práctico de
el
y en medio de la exigencia de una épo-
anormal ha dado usted
ca
Universidad
la
un impulso extraordinario
a
ins-
la
trucción gratuita.»
Las dos primeras firmas eran
de don Juan Miguel Martínez
las
y don Jaime Cibils.
Entre
las
corporaciones que fueron
obra
por
versitario,
presidido a la sazón por
gariños
su
a
administrativa
felicitarle
saludar
al
dictador
para
figuraba
el
Consejo
Uni-
don Alejandro Ma-
rector
el
Cervantes.
«Las Facultades de Derecho y Ciencias Sociales y de Medicina que constituyen el primer decía el Rector en su discurso cuerpo científico de la República, no pueden menos de ver com-
—
—
placidas la realización de un interior
como en
hecho de tanta trascendencia en
el
porque para honra de todos habéis
exterior,
el
cumplido vuestra solemne promesa y el país vuelve a la vida normal de sus libres instituciones... En el carácter que invisto cumplo con un deber de estricta justicia al recordar en este día e! vigoroso impulso dado a la educación del pueblo por el Gobierno Provisorio, no sólo en la enseñanza primaria sino también en la superior, especialmente en la Facultad de Medicina que puede decirse le debe su existencia, y en las diversas liberales disposicio-
nes sobre la libertad de estudios que han abierto ancho cauce a la
juventud inteligente y estudiosa tanto en
departamentos y facilitádole
Ui
la
como en
Capital
acceso a las carreras
el
los
científicas.»
dictador transformado en Presidente constitucional. El
Presidente del Senado doctor Francisco Antonino Vidal per-
maneció
al frente
de
la
Casa de Gobierno durante
la
segunda quin-
cena del mes de febrero de 1879.
Llegado
el
1."
de marzo fué nombrado
el
coronel Latorre Presi
dente constitucional por los o2 legisladores que habían conciinido a la sesión.
«Tres país
—
años dijo
de
experiencia
Latorre
al
en
prestar
la
goI>ernación
juramento
—
prácticamente que por más glorias que refleje para la
elevación al
mando supremo
de
la
provisoria
dííi
me han ensañado el
ciudadano
República, gobernar bien
un problema rodeado siempre de espinosas
dificultades,
sin tregua de todos los días y de todos los
momentos, un afán
unía
-^s
lucíia ÍV:-
Anales de
Universidad
la
muchas veces
cesante en fin que hace
37
vacilar la voluntad y ener-
más bien prohadas.»
gía
Poco
después
Asamblea
la
ratificaba,
rácter legislativo de la dictadura, tras
mayoría de
disposiciones
las
Comisión de Legislación sostuvo
la
de
un breve debate en que sin
cala
éxito la tesis
de que los actos dictatoriales eran definitivos y no requerían sanción legislativa. Si hubiera necesidad de ratificarlos uiedianíe ".na
—
ley
—
decía en su informe
revivirían los pleitos, resultarían sin
efecto las sentencias de los Tribunales de todo
puesto
rial,
que
las
leyes
sólo
son
el
país
es
el
período dictato-
dejdo
obligatorias
-lía
<'l
de
su sanción.
Latorre
declara
que
ingobernable
y renuntia
la
Presidencia.
Apenas transcurridos cia
en
constitucional
demanda de Invocaba
en
el
las
diez
los
Latorre
primeros meses de su presiden-
dirigió
se
a
Permanente
Comisión
la
licencia.
fatigas
desempeño de
inherentes las
«La persuasión de que
tareas
a cinco años
no
inten^'inpidos
oficiales.
—
la paz pública
agregaba
—
es
inalte-
rable y que no hay nadie, ni dentro ni fuera del país, quo pueda
i.ometer el
atentado
de
quererla
perturbar, dan
al infrascrito la
seguridad de que V. H. se ha de dignar adherir a su pedido.» La Comisión Permanente se apresuró a deferir al pedido formulado, haciendo votos por el pronto y completo restablecimiento del Presidente, «a fin
de que cuanto antes
—
decía
—
pueda vol-
ver al ejercicio de sus funciones».
La licencia fué concedida en y el
como consecuencia de
ella
los
primeros días de enero de 1880 a asumir el poder ejecutivo
volvió
Presidente del Senado doctor Francisco Antonino Vidal. Constituía
esa
licencia
la
ocultado cuidadosamente por
La segunda etapa era
la
primera
renuncia de
sentada dos meses después,
etapa de un
Latorre a sus
el
13
la
plan
más íntimos
político
adeptoe.
Presidencia que fué pre-
de marzo.
•íObedeciendo a los dictados de mi conciencia y a los deberes de
mi dignidad
—
—
cívica decía en su nota a la Asamblea General puedo por más tií^mpo continuar al frente de los negocios públicos del país y vengo ante V. H. a elevar mi irrevocable renuncia del caroo de Presidente de la República con (|ue fui honrado el 1." de marzo de 1S79. En el retiro de la vida privada esperaré
no debo
ni
Anales de
38
tiempo marcado por
el
la
mi responsabicomo simple ciudadano mi acata-
ley para dejar a cubierto
lidad de gobernante, sin esq.uivar
miento a
la autoridad, ni
Universidad
la
mi concurso
mantenimiento
al
orden
del
público.»
Juntamente con su nota de renuncia publicó un manifiesto
al
país en que decía:
«Deberes de conciencia y de dignidad personal me imponen esta inquebrantable resolución, segregando de la escena pública mi persi ha pesado algo en la balanza de la es^ mejoramiento y del bienestar del país, me ha im-
sonalidad política que tabilidad,
puesto
a
del
grandes
vez
la
difamación,
porque tengo la conciencia
Al retirarme a de
que
creer
la
convicción no tengo
país
me impuso se me juzgue
Pero no
nal...
mi
de
los
de
su
el
hombres
he la
pú-
descrédito...
punto
el
Con
más tiempo
tal la
voto de la Representación Nacio-
mal: yo no quiero ni puedo ya ser
ninguna
bajo
país
de
el
desaliento hasta
el
valor civil de afrontar por
el
sacrificios
todos:
un país ingobernable...
es
ruda misión que gobernante
que
de
sacrificio
el
vida privada llevo
nuestro
esos
más penoso de
él
deben a su patria hasta
blicos
Entre
sacrificios...
arrostrado con ánimo tranquilo
forma
pretexto
so
ni
de
ninguna consideración.»
La renuncia de Latorre causó en
Asamblea
la
un.T
¡nip)-e-;;cu
indefinible de asombro. Nadie la esperaba, y esa impresión
todavía
tó
gaban
por boca de todos los legisladores
saberse
al
del domicilio del ex dictador
tada de inmediato, porque tal era
acostumbrado
estaba
a
mandar
y
que
la
renuncia debía
aumenque
í-er
lle-
acep-
la
voluntad irreductible del que
a
ser
obedecido.
La Comisión a cuyo estudio había pasado la nota se apresuró, pues, a despacharla sin dilaciones. «Por más que la Comisión
—
decía
en
el
los
informe actuales
cualquier otro
—
crea inconveniente para el país
momentos ciudadano,
del
ante
señor su
Presidente
voluntad
la
sustitución
renunciante
expresa
e
por
irrevocable
reputa inútil toda insistencia y piensa que no puede aconsejar a V. H. otro arbitrio que la aceptación inmediata de la renuncia;?.
Y
la
miento
Asamblea aceptó al
coronel
dos durante
el
la
Latorre
renuncia,
«por
los
con
un voto de
importantes
desempeño de su elevado cargo.»
agradeci-
servicios
presta-
guales de
¿A qué El
añcs
Latorre
declaraba
en
dictadura
de
ingobernable
hacer,
durante
año
el
cuanto había
todo
Guerra de
la
de
después
país,
al
hecho
había
que
como Ministro de
querido
Várela
administración
la
como Gobernador Provisorio du1878 y como Presidente constitucional
terrible,
rante los años 1876, 1877 y
durante
39
atribuirse la reniintiaV
iKxlíii
cüronel
cinco
Universidad
la
año 1879.
el
¿Cuáles podían ser entonces
causas de su reauncia?
las
«La Nación», que era el diario oficial de la época, invocaba «el cansancio de una lucha sin tregua... las decepciones y desencanexperimentados...
tos
la
indiferencia
—
agregaba
enemigos vulgar, de tirano, sin que Los
país»...
los
elemento
del
—
sano
del
acusan de ambicioso propietarios, los comerciantes y las lo
una sola protesta contra los que fomentan las perturbaciones y el desorden. Seis meses después de esa explicación dada a raíz de la aceptación de la renuncia, «La Nación» que ya no era diario oficial formulen
conservadoras
clases
así
sino diario
Latorre,
coronel
del
Máximo San-
del
coronel
tos,
explicaba en esta otra forma los sucesos del 13 de marzo:
,
Latorre intentó con la
dt5
Asamblea y
mismo
ese
isu
oficial
renuncia provocar
proclamación de
la
debía producirse
día
mazorcada contra
caos,
el
acuerdo con
de
disolución
la
En
dictadura.
la
Mi amigo: antes de
las imprentas...
horas
tres
será la gorda, había dicho al Jefe Político coronel Silveira.
Presidente en ejercicio doctor Vidal, sólo lo rodeaban en
Hordeñana,
señores
los
Zorrilla
Domingo
y
cuenta del vacío en que estaba, dijo
Hordeñana: tiranía
la
romería
la
esta es
y huyen
una ciudad
ciudadanos:
sin
combatirla.
en vez de
casa de Latorre...
.
dicen
Al darse al
señor
que temen
En cambio
.
Al
.
era
una
El Jefe de Serenos coronel Aguirre
acuarteló una
parte del cuerpo de su
mazorcada...
Al
día
Lanza...
.
Fuerte
el
Presidente Vidal
el
una
planes
sus
de
la tarde
vino
siguiente
mando
y con
coronel
el
ello
Santos
evitó
de
la
Pay-
sandú y algunos de sus amigos le ofrecieron la dictadura que él ff chazó... En una reunión que hubo ese mismo día en la Jefatura,
uno de
era
disolver
coronel (le
los
jefes
de batallón
sostuvo
doctor Vidal y del coronel Santos que
del
la
Santos
acatamiento El
Ministro
Legislatura
— al
de
y
proclamar
concluía «La
Nación»
lo
la
—
también en presencia que había que hacer dictadura...
Pero
el
mantuvo su propósito
Presidente Vidal y a las Cámaras.
Hacienda de
la
administración
Latorre.
don
Anales
40
Aurelio
Berro,
nifestó
que en
informado
ampliando
la
esas
víspera
la
su colega
po-r
cíe
de
Universidad
referencias
de
«La Nación», ma-
renuncia de Latorre había sido doctor Gualberto Méndez, Ministro de
el
la
Relaciones Exteriores, que
el Presidente Vidal estaba dispuesto a adoptar una serie de medidas contra la prensa y a concurrir con todos sus Ministros al domicilio de Latorre para concluir con las incertidumbres reinantes, a todo lo cual él se había opuesto.
Véase ahora la explicación de otro diario de la época: «Nos parece evidente decía «El Siglo' que el país postrado por los atentados y las insensateces del año terrible, acogió con simpatía y con esperanza la dictadura del 10 de marzo de 1876... Los procedimientos dictatoriales afirmaron la paz y purgaron la campaña de ladrones... Los habitantes de la campaña respiraron y aplaudieron... Aquel fué el apogeo de la popularidad de la dictadura. Comenzaron después a hacerse sentir los inconvenientes
—
.
de
—
.
dictadura agravados
—
—
¿por qué no decirlo? por el vaque se producía en torno del dictador, por el bajo nivel intelectual y moral de la mayoría de los elementos que lo apoyaban... El dictador no tuvo hombres de gobierno que lo auxila
cío
liaran,.
.
La adopción
.
de las formas
no alteró
constitucionales
Únicamente
radicalmente la situación de las cosas...
el
gobierno
manos un poco más atadas y la oposición con lengua un poco más suelta... El coronel Latorre... ha sen-
se encontró con las Id
tido
el
«No
—
vacío en derredor suyo y se ha retirado.»
obstante
restablecimiento
el
agregaba
—
de
las
formas
constituciona-
que reconocer que una parte considerable del pueblo ha entendido que la realidad ce las cosas no respondía a las formas y que el poder real y If's
efectivo
Siglo»
reconcentrado
estaba
mía
su coluntad
y
jefe del
el
«El
a
cuanto
le
todos
en
una
tienen
sola
rodeaba...
persona
La
que
oposición
impriarreció
poder ejecutivo desalentado y desesperando casi
la
suerte de la patria resignó sus funciones...
la
impotencia de
la
de
Se ha demostrado
fuerza para fundar nada estable.»
Un año despnés continuaba el misterio para «El Siglo». «Hoy mismo decía no hay opinión fija y bien formada sobre el verdadero origen de aquella resolución»... Pero examinando más
—
atentamente
—
el
cuadro político que tenía por delante, declaraba el diario en otro editorial, que todo el mundo
redactor en jefe del
estaba conteste en que
Máximo Santos
al
tiempo de producirse
la
crisis
el
coro-
de la situación y que también era notorio que Latorre empujaba a Santos hacia la dictadura. ne]
era
el
arbitro
Anales de
Para «La Razóm>,
el
la
41
Universidad
más formidable de
diarios independieu-
los
día de su renuncia era tes de la época, lo que esperaba Latorre haciendo votar desbarató éste que plan la dictadura de Santos, Tras la dictadura suyo. instrumento un a! doctor Vidal que era del mismo diario, la concepto en Latorre, aguardaba de Santos restauración de su propia dictadura. el
información de «La Coincidía con la tesi^ de «La Ra-zón» esta en que Lamomentos precisos Colonia Española» escrita en los General: Asamblea la a torre enviaba su renuncia manifestación popular «Se prepara por algunos ciudadanos una pedirá al coronel que supliendo la inercia del Poder Legislativo discreciofacultades con Latorre se ponga al frente del gobierno ciudadano único el ser por dimisión nales, suplicando retire su el país puede bacer que en los momentos difíciles que atraviesa el principio de autoridad.» sostener dificultades y las frente a todas
La adhesión del ejército de son las
Tales la
prensa.
momento
línea.
explicaciones y
comentarios más
iluminan suficientemente vamos a complementarlas con
No
autorizados de
cuadro
el
político
ayuda de
las
del
demás
y de información de la época. Uno de los últimos crímenes de la administración Latorre fué asesinato de don Carlos Soto en el Cuartel de Dragones. Ya
fuentes
el
se
había transformado
el
dictador
en
Presidente
constitucional.
por don José sangriento del Joaquín doctor al Latorre, de Gobierno de Ministro María Montero, prisecretario sazón la medicina a y de estudiante de Salterain,
Véase
la
suceso
explicación
dada
vado del mencionado Ministro: línea El comandante Rudecindo Várela, jefe de un batallón de migas buenas hacía que no que estaba destacado en San José y denuncon 6US colegas, bajó apresuradamente a la Capital, para Le militar. motín un tramando estaba se que Latorre ciarle a mostró que ©n la pared del Cuartel de Serenos, por donde transitoba ordinariamente,
había
un boquete y
le
previno que de
allí
antecedentes
partir la bala asesina. En presencia de que aseguraban la seriedad de la denuncia, Latorre se presentó una noche en el Cuartel de Dragones y allí sorprendió reunidos en un cuarto a Carlos Soto y a varios jefes de batallón que estaban dando la última mano a los trabajos del motín, teniendo pronta
debía
otros
sobre la mesa la proclama que debía lanzarse a raíz del asesinato.
Anales de
42
Cuando Latorre abrió desconcertados.
Universidad
la
violentamente
que
Soto,
era
puerta
la
que
el
quedaron
todos
exponiendo
estaba
plan
el
que en parte había oído Latorre, creyéndose traicionado por los posiblemente el nombre de sus cómplices, jefes quiso decir algo y en
acto
el
los
se precipitaron sobre
jefes
retiró
persuadido de
cuartel,
del
él
lo
j'
mataron con
Latorre dio entonces un portazo y se
sus espadas y sus pistolas.
absoluta. A^eracidad
la
de la de-
nuncia del ccmandante Várela. El cuadro trazado por el Ministro Montero coincide con
la
ver-
dominante y no discutida de que en las postrimerías de su presidencia constitucional Latorre ya no ejercía sobre el ejército sión
de
línea
«Llevo
desaliento
el
avasalladora
influencia
la
—
punto de creer que nuestro país de Latorre
constituía
lo
no -podía gobernar
él
Ya en y
la
tiva
el
el
de
época
la
el
de marzo de 1880! el
aniversario de la caída de Vare-
año anterior, en que todos
el
dictadura.
ejército de línea y era el ejército lo que
13
1879 no fué festejado
que en
la
un país ingobernable». El país
es
establecimiento de la dictadura en la
el
de
dicho en su manifiesto -^ hasta
había
misma forma batallones
los
llama-
habían
concurrido a la Plaza Independencia llevando cada soldado un ra-
mito de flores para formar en uno de
morada:
La
X
los
canteros
la
fecha reme-
de Marzo de 1876. Los jefes conspiraban.
dk oPosuróN.
IM:E^"SA
Al factor del ejército
'
:
.
*
:
que agregar otro factor poderoso:
tiay
el
de la prensa.
Latorre generales
se
abstuvo
contra
la
durante
prensa,
su
eií
dictadura
parte
porque
de los
adoptar
medidas
diarios
indepen-
diantes resolvieron observar una actitud circunspecta y hasta pres-
cindente de
la
política
a raíz de la tentativa de
mazorcada en
los
proclamación plebiscitaria de la prórroga de la dictadura, y en parte porque él no quería romper con las clases conservadoras y habría tenido que hacerlo si hubiera empas-
días
candentes de
telado la
imprentas
la
o
asesinado
que sin duda alguna detuvo
dictadura en 1876 y la de
la
periodistas.
Fué
esa
consideración
mazorcada de la prórroga de la renuncia de la presidencia en 1880, la
quedando reducida a consecuencia de ello la crónica de la época a la denuncia de una media docena de atentados, como el del director de «El Salteño» que acusaba en 1876 al Jefe Político del Salto de haberlo llamado a su despacho para darle puñetazos en
Anales de
universidad
la
castigo de su propaganda de oposición; greso»,
otro
diario
dos de línea en ese tallón
del
mismo
de Cazadores;
2."
del cronista de «El Pro-
el
gravemente por dos
herido
Salto,
43
solda-
año, a raíz de denuncias contra el ba-
amonestación seguida
la
de
prisión
de
otros dos periodistas del Salto en 1877; la clausura de la imprenta
«La Inquisición», diario y la prisión en
el
liberal,
mismo año
que se publicaba en Meló en 1878,
de los directores de «La Ley» de Ro-
doctor Constancio Vigil y don Pablo Mansot.
cha,
El doctor Vigil fué aprehendido y remitido a Montevideo a pre-
una ordenanza policial que prohibía el s€ñor Mansot a pretexto de que había sido sumariado largo tiempo atrás por un incidente de faque
de
texto
había
violado
cruzar la pista de las carreras y
Pero
milia.
dirigido
a
«había
Y
encargó respecto del
se
verdadera causa de
la
varios
la
hoja
suelta
.
que intercedían vejatoria
para
primero
un telegrama
en
prisión
que además de haber violado
una
publicado
de Rocha
vecinos
diciéndoles
periodista,
Latorre
dictador
el
de. establecer
a la
favor
del
ordenanza autoridad».
hi
Rocha don Vicente Garzón se encargó de hacerlo con el segundo en una nota en que decía al Oficial 1." de la Jefatura: «Mansot, como usted sabe, aparecía como director de «I>a Jefe Político de
el
Ley»,
que
periódico
sin
razón
plausible
autoridades del deipiartamento y
Puede incluirse entre «Los
Principistas
medidas similares
las
una revista
Camisa»,
en
tanto
volvió desde mediados de 1876
insultal)a
a
las
Gobierno mismo».
al
del
resurrección
la
de
año terrible que
a vomitar insultos contra los ad-
versarios de la prórroga de la dictadura, provocando varios meses
después,
por
sus
propios
una nota
excesos,
del
Ministro Montero
a la Policía que decía así: «El
lenguaje
«Los
titulado
procaz
e
tinguidos de esta sociedad, tar
con
empleado por el periódico Camisa» contra miembros muy
insolente
Principistas en
obligan
una enérgica resolución, que los
que
principios
nuestras leyes, a
lo
si
sobre
al
Gobierno Provisorio a
a
dic-
bien no armoniza por completo
libertad
menos viene
in-
dis-
llenar
imprenta consignan una exigencia social sfr de
riamente reclamada.» Repetimos, sin embargo, que por
la
si
no luibo mayores atentados fué
actitud circunspecta o prescindente observada
de Montevideo durante los primeros años de
sa
la
por la prendictadura.
Los doctores José Pedro y Carlos María Ranrírez que redat-tiban aK]
Siglo»,
Democracia»
y
el
doctor
tuvieron
José Sienra Carranza que
que retirarse ante
la
redactaba «La
aparición
de
la
lua-
8
Anales de
41
zorca
días
les
-en
—
contrarrestar
de
plebiscito
del
decían
universidad
la
«no pudiendo
dictadura,
la
primeros
los
—
en
las
actuales
circu
a los periodistas por abusos reales o
nar
vacante
la
abandonar servado
mente
supuestos de la libertad de
El señor Eduardo Acevedo Díaz que se apresuró a
escribir».
la
pluma
Carranza,
obligado
lle-
a
de
demasiado
imprenta que era
la
vehe-
tono de su propaganda política.
Más tarde abrió «La Democracia» un
b
vio
se
pocas semanas en razón de haberle ob-
las
a
propietario
el
el
Sieura
doctor
del
ií-
amenaza
tancias del país, las efervescencias populares con que se
para estimular
paréntesis
concurrencia de sus correligionarios a los comicios de 1877. «El Siglo» que había quedado a cargo de don Jacinto Albístur,
se limitaba a extractar los artículos de los
admirable Revista de
lla
demás
diarios en aque-
Prensa cue hacía decir
la
que tenía «sal y pimienta y a veces un poco de sacaba ronchas».
a
ají
«La Razón» cumbarí que
«La Razón», que apareció a fines de 1878 bajo la dirección de los Daniel Muñoz, Manuel B. Otero. Prudencio Vázquez y
señores
Veg'a y Anacleto Dufort y Alvarez, resolvió concretarse a las cues-
tiones religiosas.
«Hemos
—
todos los
su
al
pueblo los
Y
las
fE.lsos
viejas
número
preocupa-
fundamentos
del
inmoralidad presente y su am-
inicua historia, su
desmedida.»
decía en su primer
legítimos
medio.s
ciones religiosas, mostrando catolicismo, bición
—
creído de nuestro deber
combatir por
explicando por qué había resuelto prescindir
de la política, agregaba:
«La libertad de imprenta
es
uno de
los
más sagrados derechos
ciudadanos y puede ejercerse dentro de los límites que la misma ley señala. Pero una vez que ésta está en receso, una vez los
ifí
que se encuentra roto nosotros, ley
más
el
juego armónico
ciudadanos penetrados de
los
de nuestras instituciones,
deberes y derechos que la
nos asigna y concede, no podemos ampararnos a la tolerancia c menos lata que un gobierno anormal pueda concedernos...
Por consiguiente, nuestra actitud está definida:
la
más completa
ab-tención en todo lo que concierne a la política de actualidad.» Casi al
mismo
tiemipo que
co» redactado por el doctor
desde ese antes
momento
la
«La Razón» apareció el «Bien PúbliJuan Zorrilla de San Martín, llenando
cuestión
religiosa
había ocupado la cuestión
«El catolicismo
en este país
si
—
decía
no muerto,
el
lugar prominente que
política.
—
«La Razón» estaba hasta hace poco menos completamente desprestigiado.
al
Anales de
Componían su
Universidad
la
una docena
apostolado
40
de sacerdotes
nacionales
poco ilustrados, hasta cierto punto liberales, y algunos sacerdotes extranjeros que con
muy marcadas
más
excepciones
preocupaban
se
de adquirir medios de fortuna que de atender a la cura de almas.
La
mezquinas pensiones que le asignaba el regentada por un vicario que sabía hacerse respetar por su carácter afable, sus morales consejos Pero de reptente, aprovechando circunsy su pródiga caridad tancias que no es del caso enumerar... emprende una campañi empeñosa para ponerse nuevamente en auge. Funda liceos, estade
vivía
iglesia
pobre,
.presupuesto,
las
sin
.
blece
colegios
brillo,
.
.
abandonando
y
anatemas contra
columnas del periodonde fulmina
estrechas
las
más amplias
dismo, se lanza a las
del diario desde
no católicos, llegando en su intransigencia a
los
pedir se corten las maniíestaciones liberales invocando en su
un artículo de
xilio
Pero alejada
la
la Constitución
au-
de la República.>'>
prensa independiente de Montevideo que así permanecía
del
ambiente político desde mediados de 1876, con excepde «El Negro Timoteo» de Washington Bermúdez.
honrosa
ción
por sus fueros
resolvió volver
quedar restablecidas
al
las
autori-
dades constitucionales en febrero de 1879. de
Para «El Siglo» era necesario entrar de los partidos. Su primer editorial sobre que acababa de aplicarse en España a
blo
encabezaba
Republicano que
—
Castelar
lleno el
—
el
voca-
del
partido
principio
de una
actitud
la
fué
vida activa
la
a
posibili.smo
ardorosa polémica en la prensa y en los círculos políticos, sobre si
partidos orientales debían salir de
los
trazado
bían
mantenerse
o
Siglo», tiene o debe tener
golpe.
en
un
Pero
ideal.
El Partido Republicano español,
aprovechar todas las
oportunidades
abstención que se ha-
la
Cada agrupación,
ella.
el
que así
para
decía
«El
ideal no se realiza de lo entiende,
quiere
obra de
propa-
realizar
ganda y de ejecución, concurriendo por ejemplo a
los
comicios,
en vez de abstenerse.
Para «La Razón» había que voltear sidente
1" de enero
de
1880.
cumbre y oreado allí
se
la
laboriosa
podrá
dictador erigido en Pre-
al
no desmaya día la
ha
de
frente
descansar
—
decía al saludar
el
piedra a
la
llevar
la
por las puras brisas que
abarcando con
la
mirada
los
que su constancia y su firmeza han conquistado jornada.»
Los amigos del ese
Algún
sudor de
el
respiran,
vastos dominios
en
«Sísifo
constitucional.
coronel
resurgimiento de
la
Latorre
oposición
columnas de «La Nación», que era
resolvieron periodística el
órgano
poner
término
a
iniciando desde las oficial
del
Gobierno.
Anales de
4*3
la
Universidad
una campaña de insulte» que culminó en
la
víspera de la presen-
tación de la renuncia de Latorre con un editorial que incitaba a
mazorca.
la
«Qué hace a esa
«atrás»
perturbación, grillete
—
Gobierno
el
que no
le
da
de destinarla a los trabajos
1u
d-él
que
licenciosa
no
dice
prédica de
por premio de
y por misión más honrosa que
bierno que la acción
—
«La Nación»
decía
que no enfrena su
canalla,
la
públicos?
su nefanda obra un que viene desempeñando
¿O espera acaso
pueblo se haga sentir,
el
Go-
encargándose de
perturbadores de la paz, a los promovedores de la armada, de esa revolución que no puede tener más bandera que el l-obo de los que trabajan para favorecer a los holgazanes y a los malvados? Tal situación podría muy bien presencastigar a los
revolución
tarse, porque cuando los gobiernos no obran ante el peligro inminente de la paz pública y ei entronizamiento de la perturbación y el desorden, está la justicia del pueblo por el pueblo para
castigar llegar
.a
los
malvados.
;Ay de
ellos
si
indignación pública
la
a estallar!»
La mazorcada debió realizarse el 13 de marzo, es decir ei mismo día de la renuncia de Latorre, y sus víctimas debían ser tres diarios: «La Razón», «*E1 Diario del Comercio» y «El Siglo». Pero no se realizó por efecto del cambio político que en el ací» se produjo y el compás de espera que surgía de sucesos de tanto
bulto
El Al
como
caída de Latorre y la elevación de Santos.
desequilibrio vixaxciero. factor
financiero, del
la
de la prensa de oposición hay que agregar de
formidable
actuación
también
en
las
el
factor
postrimería'?
gobierno de Latorre.
Para combatir
crisis
la
económica
torre reducir los derechos de
tación y en un 75 violento
%
desequilibrio
que
arreciaba,
Aduana en un
para la exportación, y entre
los
ingresos
50
%
ello
y los
resolvió
para
la
La-
impor-
en medio de un gas.tos
públicos
que tenía que acentuarse y se acentuó de inmediato por efecto de esas mismas rebajas, quitando a la administración financiera la popularidad que durante algún tiempo había contado por efecto de la regularidad de los pagos.
Anales de
Ui
crisis
se soluciona sin sacutUdas.
Quedan ahora aclaradas cia
47
TJnivcrsiilad
la
de Latorre.
se
determinantes de
la
renun.
que
política
produjera
causas
que la en sm que solucionada renuncia planteaba quedó
como complemento sis
las
la
un
solo
de
ellas
es
interesante
agregar
disturbio.
de ansiedad paia toperíodo que acaba de terminar, la decía «El Siglo» a raíz de de zozobra para algunos dos fisonomía su Montevideo ha conservado solución de la crisis o violencia, ni incidente algia prcducido han se no ordinaria y las en imaginación la cree descubrir d. esos que generalmente en a precedidas por porfiadas luchas
«Durante
el
-
y
grandes prensa, esencia,
-
crisis
más
o
según
Es que en
políticas
menos el
modo
realidad
ardorosas en la
forma y exigentes
de ser habitual de cada
ningún cambio
político
se
en la
diario.»
había producido
pagado del ejército de línea que había .alvo el de la Jefatura del Cazadores con de del .. coronel ;ol^nel del 1.'' de Cazadores al motín del lo de demás coroneles que desde el el acuerdo de los de sus voluntad popular con la fuerza enero de 1875 ahogaban la bayonetas.
CAPITULO
II
Movimiento económico
Cálculo
tle
población existente en 1879.
la
El Director de la Oficina de Estadística formuló en 1879 un cálculo
df
la
ciales
de
población de
República sobre
la
por
levantados
las
policías
menores de 15 años y
los
últimos
obteniendo
años,
el
movimiento demográfico de
siguientes
las
base de los censos par-
la
campaña, un censo especial
de
departfimeiito de Montevideo
Para
el
Para
los
los
cifras:
departamentos de campaña
.
.
.
111,500
.
.
.
326,745 438,245
Dos años antes
calculado
liabía
misma
la
de Montevideo 110,000 que se repartían
to
de la división territorial: y
Aguada; 8,200 en
la
91,300 en
distrito;
Molino, Reducto y sus distritos; 2,800 en del
punto de vista de
la
así del
Departamen-
al
punto de vista
ciudad vieja, nueva, Cordón
la
Unión y su
población
Oficina la
de la República en 444,613 almas, correspondiendo
7,700
en
el
Paso del
Cerro y su distrito; y
el
nacionalidad en 71,100 orientales, 11,200
españoles, 11,100 italiano?, 5,600 franceses y
saldo a las demás
el
nacionalidades.
Entre Salto,
del
los
obra
policiales
Jefe
6,596,
de vista de
ños con
la
6,029,
niños
5,661,
dados
a
25,941
niñas
la
prensa
argentinos
con
1,505
públicas
y 11
particulares
(786 varones y 726 mujeres).
los
(hombres
en todo
con
15,215,
italianos
1,512
el
del
La población
sobresaliendo
nacionalidad los orientales con los
figuraba
Co:jta.
habitantes
5,322),
españoles con 1,016. Funcionaban
escuelas
a
don Juan Cruz
Político
departamento montaba
mujeres
los
censos del
del los
8,362,
punto brasile-
con 1.312 y
departamento 22 alumnos inscriptos
el
Anales de
la
49
Universidad
Movimiento vegetativo. quinquenio 1875-1879 fueron inscriptos en los libros parroquiales de toda la República los siguientes nacimientos
Durante
el
:
^^'373
1870 1876
19'5'3
1877
20,985
1878
21,663
1879
23,895
Según
de bautizos
registros
los
extractados
destino a la Exposición Continental de
rante
1873-1877
quinquenio
el
el
por
correspondiendo 25,662 a Montevideo y 70,253 departamentos restantes de campaña.
No
se
llevaba entonces
du-
1882,
fué
número de nacimientos
95,915,
con
Curia
la
Buenos Aires de a
los
de
doce
con igual regularidad la estadística
de
Departamento de Montevideo figuraba en mortalidad. Sólo época y a ellos solo debemos referirnos en conla de cuadros el
la
los
secuencia.
He
aquí las cifras del quinquenio 1875-1879:
1875.
3,293
1876
3'0^^
1877
M7T 2.937
1878.
3,275
1879
Destacamos de esas
cifras
las
correspondientes
a
los
menores
de 5 años: 1875
Nacidos sin vida De 1 dia a 12 meses
De
1
año a
5 año.s
.
244
1876
1877
1878
1879
Anales de
50
Universidad
y del punto de vista de la ubicación
3,281 blancos y 196 de color; territorial,
la
en 2,944 correspondientes a la zona urbana y 533 a la
zona rural.
La mortalidad de por «La
blicados
ciudad
la
de 6,751 en 1876
1875;
Buenos Aires era de
de
en
7,031
de 5,277 en 1877, según los estados pu-
y
Nación Argentina».
Alrededor del
doble
de
la
correspondiente a Montevideo. doctor Víctor Rappaz,
El
cuadros de
que con frecuencia estudiaba nuestros
examinar
mortalidaid, al
a
los
sostenía que las
de 1875
ciudad de Montevideo
defunciones correspondientes a la
llegaban
y descomponía así esa cifra sobre la base de las papeletas
2,72¡8
de la Oficina de Cementerios: circulación 106, cerebro y
sin
diagnóstico
médula espinal
nos digestivos y anexos 265, sistema nervioso y accidentes
141,
muertes violentas le daba
95,
La distribución por edades
diversos 223.
90,
fiebres
1,042,
231, respiración 535, órga-
un día a un año, 421 de uno a cinco años, y 44 de cinco a un año el 35.26 %. Los dte momentos considerados aisladamente (210) alcanzaban al 22.86 9^. Eso es atroz, decía el 962 de
diez años. Hasta
ilustrado médico.
más
Otro cuadro
detallado del médico municipal doctor Floren-
año
tino Ortega, correspondiente al
1877,
establecía que
número
el
de los nacidos sin vida o que no habían vivido diez días, era de
enorme también que señalaba la magnitud de que con razón preocupaba al doctor Rappaz.
la
cifra
349,
social
Xo
era esa una
Pista y véase
llaga
Se extendía a todo
local.
n-ienores asilos
los
matrimonios,
de
2
el
la
doctor Coni:
establecer
donde se
establecimientos
crear
Río de
el
programa de lucha que en esos mismos momentos
el
proponía a las autoridades argentinas «Facilitar
llaga
de maternidad;
asilos
reciban
durante
día
el
niños
años para que sus madres puedan trabajar, fundar
también durante
el
para niños de más de dos años,
día,
sa-
near las casas de injquilinato, reglamentar la prostitución, fomentar
la
creación
Comparando
de las
Rappaz, formulaba
sociedades protectoras de estadísticas
nuestra
del
Oficina
doctor
de
la
infancia.»
Wonner
Estadística
del
y el
doctor
siguiente
resumen:
Defunciones diagnosticadas
Exclusivamente por tuberculosis Proporción
....
1871
1873
2,940
2,596
251
280
8.53
9.27
1875
1,686
293 17.72
Anales de
La proporción era alarmante
la
universidad
y
51
con sobrado motivo interesaban
esos ilustrados médicos a las autoridades sanitarias para la adopción de medidas tendientes a disminuir la intensidad
En
del
mal.
1876 la tisis hizo 248 víctimas, según otro estado del doctor
En
Rappaz.
1877 la cifra subió a 369,
según la estadística muni-
Las enfermedades diagnosticadas habían ido aunrentando por efecto de las recomendaciones del Consejo de
cipal
doctor
del
Ortega.
Higiene y eso permitía tuberculosis: centaje
De
los
fijar
% en
12,24
más exactamente
18i76yl2,4i3
el
porcentaje de la
%
en 1877. El último porenfermedades diagnosticadas.
estaba calculado sobre 2,967
casos no diagnosticados, procedentes en su mayoría de
según
rrios antihigiénicos, la cuai'ta parte
atribuirse
a
la
elevándose con
tisis,
medad al 14.26 % de La viruela, otra de estudiosos,
causó en
la
ello
el el
h.:-
doctor Ortega debía aporte de
esa
enfer-
mortalidad general.
plagas que preocupaba a los médicos departamento de Montevideo 182 víctimas
las el
en 1876 y 444 en 1877.
Algunas
de
las
Municipalidades
de
campaña publicaban
tam-
bién sus estadísticas demográficas.
De
la
de Maldonado extraemos los siguientes datos:
Bautizos
Matrimonios
193
Defunciones
Anales de
He aquí finalmente
las
2a
cifras
universidad
de
la
1873
En Montevideo En los 12 departamentos
restaiues
nupcialidad:
1874
1875
1876
1879
I,lñ8
1,1-23
830
892
828
2,411
2,364
1.769
2,232
1.873
3,569
3,487
2,599
3,122
2,7U1
formidable descenso de 1S75 emana del motín militar de año y de los acontecimientos políticos, financieros y económicos que subsiguieron. 'El
ese
La inmigración. Corresponden
estas
cifras
movimiento de pasajeros entre
al
puerto de Montevideo y los puertos
mos
extranjeros
durante
los
el
últi-
tres años de la administración Latorre:
t
1877
El
Salidos
18,375
16.959
1,416
20,767
16,800
3,967
J879
25,787
22,297
3,440
64,879
56,056
8,823
.
excedente de las entradas se distribuía así según la Oficina
sin
de puertos europeos 7,046 y de puertos argentinos
deducir
el
excedente
de
las
Chile que ascendía a 348 y que reducía a
Exceso de entrados
1878
de Estadística: 2,125,
Entrados
salidas el
para
el
Brasil
y
saldo favorable al país
8,823.
A
mediados de 1878 expresaba
el
Gerente de
Inmigración don Lucio Rodríguez Diez
al
la
(Comisión de
Ministerio de
Gobierno
que a pesar de los 34 agentes diseminados en los departamentos de campaña, no se obtenía un pedido de brazos proporcional al arribo de inmigrantes, cada día mayor, y solicitaba como medio de intensificar la propaganda Véase, según los cuadros
el
concurso del personal de .correos.
de la Dirección de Estadística,
el
nú-
mero de pasajeros de ultramar desembarcados aquende y allende el iPlata durante los 12 años corridos desde 1867 hasta 1878:
Anales de
Universidad
la
53
Montevideo
Buenos Aires
18ti7
17,356
17,046
1868
16,892
29,234
1869
20,435
37,934
1870
21,148
39,667
1871
17,912
20,928
1872
11,516
37,037
1873
24,339
76,332
1874
13,757
68,277
1875
5,298
42,066
1876
5,570
30,965
1877
6,168
28,79«
1878
9,464
35,876
En
el
punto de partida llega
mismo
al
nivel el poder de
atrac-
ción de los dos puertos. Pero luego el nuestro se estanca y desciende
por efecto de las guerras civiles y demás
que agitan
ticos
Fundación de
el
pia'hlo.s.
Don Carlos Reyles presentó
Senado en 1879 un proyecto de
al
fundación de cinco pueblos en
la
frontera
a la vez en «La Nación» que
tar
Rivera como
trastornos polí-
escenario en ese período de tiempo.
Jefe
guiendo que se
Político
desistiera
durante del
él el
gobierno
de
de ceder
propósito
hizo cons-
brasileña e
había fundado
pueblo de
el
Flotes, al
consi-
Brasil,
con
destino a ensanche de Santa Ana, toda la fracción de terreno que "5e
es
extendía
li
integridad
dp.
Los esíiavos del El
Cuñapirú.
Haiy
—
que
nacionalizar
señor Reyles
—
esa
zona que
nacionalización
y agregaba el puede obtenerse a base de fundación de pueblos que aseguren
brasileiia
sólo
hasta
Vicecónsul
la
nuestro territorio.
lírasil.
Brasileño
del
presentó a mediados de 1876
al
Salto
don
Fermino da
Silva
se
Jefe Político de ese departamento,
la Policía le había entregado una morena esclava con dos hijas, una nacida en el Brasil y Grande, fugada de Río oriental durante la fuga; pero que el territorio en otra nacida
expresando que
Defensor de Menores había puesto trabas judiciales a
'la
salida
Anales de
54
con destino
Brasil,
al
Universidad
la
a título de que una de las hijas había na-
cido después de la ley brasileña de 1872, declaratoria de la libertad de vientres, y que la otra era oriental. El Vicecónsul sostenía
que
Defensor de Menores carecía de personería; que
el
dades judiciales
no podían oponerse a
de extradición
tado
sólo
autorizaba
la
el
remesa,
procedimiento
que las dos menores estaban y potestad de la madre, la cual podía por tivo;
sometidas lo
autori-
las
porque
tra-
el
administraa
patria
la
tanto llevarlas con-
sigo al Brasil.
No
resulta de la documentación de la época que ese monstruoso
por
razonamiento, desatendido
la
del
justicia
encontrara
Salto,
eco en la Legación del Brasil y fuera materia de intervención di-
plomática.
En cambio diato,
se
produjeron
reclamos
con
reiterados,
éxito
inme-
en varios casos de fuga de esclavos riograndenses a nues-
tro territorio, de acuerdo
con aquel célebre tratado de extradición
que convertía a las policías fronterizas en carceleras del Brasi!.
El toinei'cio
He
aquí
durante
el
el
e.xterioi'.
valor
de
oficial
1875 1876
1878
Total
$ 12.431,408
$ 12.693,610
$ 25.125,018
12.800,000
13.727,000
26.527,000
15.045,846
15.899,405
30.945,251
15.927,974
17.492,159
33.420,133
15.949,903
16.645,961
32.595,864
'.
1879
Adviértase
según
que
Director de
importaciones como
en un 33
%
la el
la
opinión
de las
exportaciones
para aproximarse a
Brasil,
España,
de
la
nuestro
manifestada
reiteradamente
Oficina de Estadística, tanto
Los principales países Francia,
exportaciones
y
Exportación
.
el
importaciones
Importación
1877
por
las
quinquenio 1875-1879:
el
valor de las
debía ser aumentado
realidad de los hechos.
eran
intercambio
Estados Unidos,
Italia
proporción que revelan las siguientes cifras:
y
Inglaterra.
Bélgica,
en
la
Anales de
En
importación
la
Francia
.
1
.
Estados Unidos
En
la
Inglaterra
Francia
Cuba.
.
Uiii'li .
Principales
cuadro el
,
982,175 1.125,454
839,086 1.042,998
(le
nuestra
exportación.
que subsigue
permite
apreciar
productos
en
sus
grandes
ru-
progreso de nuestro comercio de exportación:
, en Animales .
709,184
3.489,284 4.875,242 4.592,680 3.737,536 4.398,790 3.517.205 3.147,504 2.888,460 3.126',782 2.347,826 3.494,938 4.244,778 3.735,754 1.481,267 2.061,914 1.434,587 1.775,582 1.232,517 1.215.257 1.730^315 1.960,660 1.095,370 1.142,742 1.019,816 1.262,982 985,906 1.095,362 1.049,329 508,206 656|914
.
.
Estados
1.056,151
exportación:
Brasil
Bélgica
993,577 1.368,140 1.114,443 867,343 1.093,644 775,947
353,049 1.103,088 854,637
Italia
bros
1.955,254 2.010,001
2 033,198 1.716,628 1.941,941
España
1879
1878
1877
1875
4.901,288 3.927,737 2.489,862 4.245,369 4.884,878 2.666,631 4.023Í938 2.904,783 2.665,922 2.622,997
.
Brasil
El
Universidad
:
1874
Ing'laterra
la
pie
1878
1875
1877
604 843 du*,o'±o
162,883 *"
1.545,581
11-H«M35
13.051,313
15.006,247
^6,362
879,626
769,728
146,070
90,937
85,871
,
Productos de ganaderia y sala^l^ro
Producción rural Otros productos Exportación fronteriza (ganado, etc.)
Rancho
-
1-
'"2,249
__2_
^^,396
84,^31
12.693,510
15.899,404
17.492,158
Anales ie
56
Destacamos de esos rubros
Ja
los
Universidad
artículos
más
valiosos:
1877
Ganado vacuno, cabezas ídem ovino, Ídem Tasajo, ídem
....
Carnes conservadas, ídem Extracto de carne, idem
Cueros vacunos salados, unidades secos,
110,606
7,754
Cerda, kilogramos
ídem idem
1878
.
.
idem
Gordura vacuna, kilogramos
.
11,275
20,361
623,908
668.200
22.728,926
32.965,648
2.744,198
516,336
372,517
431,514
682,667
765,767
432,327
444,906
7.350,219
12.719,403
17.146,005
16 912,848
Harina, idem
8.755,460
8.406,875
Maiz, idem
6.251,892
8.929,089
Papas, idem
113,025
290,292
Trigo, idem
326.076
122,272
Lana, idem
La exportación lanar permaneció estancada durante todo el pevamos recorriendo. Lo demuestran estas cifras sin otra
ríodo que
excepción
que la del
año
del
motín caracterizada por
la
fuerte
depresión rural:
Lana
Cueros lanares
Valor
oficial
Kilogramos
Kilogramos
$
1872
16.256,839
3.164,144
4.394,955
1873
16,025,530
3.054,976
3.969,110
1874
16.947,001
3.166,147
3.952,474
1875
10.127,943
2.106,835
2.856,915
1877
17.146,005
3.469,374
3.159,708
1878
16.912,848
4.139,800
3 647,782
La Legación de Francia en Montevideo, que llevaba una dística
muy
prolija
de
nuestras
cuadro más amplio que reprodujo
Memoria de
1880:
exportaciones, el
confeccionó
esta-
este
Ministerio de Hacienda en su
.
Anales de
Universidad
la
Número de cueros
Número
Kilogramos de
decueros
tasajo
Kilogramos de
lana
vacunos secos vacunos salados
1869
32.4-25,944
637,774
499,981
19.132,240
1870
20.698,846
715,454
372,380
12.545,400
1871
25.899,834
881,440
396,733
15.604,750
34.157,444
514,520
782,005^
16.256,839
1873
36.570,999
419,969
799,084
16.025,530
1874
.35
891,153
531,438
727,438
16.947,701
....
1872
1875
22.552,927
415,329
619,633
10.127,943
1877
22.728,296
432,327
682,667
17.146,005
32.965,648
444,906
765,767
16.912,848
23.449,748
746,916
644,538
17.908,945
...
1878
.
1S79
Entre
puertos
los
raba alrededor de distribuía
puerto 25
'/-,
4
de 1874
cifras
la.';
así
la
muy aproximadas
(15.244,783)
Oficina
de el
60
Estadística las
%, por
por las demás receptorías
en
no así
1876
ejemplo,
—
—
ha triplicado en
cantidad de frutos.
la
el
15
el
El valor de nuestra exportación tica
destacábase
a
las
de
puerto de
año
el
Paysandú
el
'/
decía la Oficina de Estadís-
los
últimos
treinta
años.
Pero
Nuestra exportación de cueros, por
permanece estacionaria. En cambio
—
1877,
por
exportaciones:
cantidad
la
exportada hoy es 16 veces mayor que hace treinta años, y tidad de grasa y de sebo 4 veces mayor.
Las importaciones.
de
el
mercaderías salidas por ese puerto gimillones de pesos al año. Tomando por base las
Montevideo
de
exportación
de
fluviales
Faysandú. El valor de
Resulíados
la
lí'y
de
lana
la
proteccionista
can-
«leí
187."».
La Dirección de Estadística estudió en 18 79 los afectos de ley de aduana dictada bajo el gobierno de Várela por iniciativa del Ministro de Hacienda (ion Andrés Lamas. Véase los la
resultados
a
(lue
Ha disminuido calzado felpa,
en
ropa
arribaba: por efecto de
general,
hecha,
bolsas
ella
de
legumbres
la
importación de alpargatas,
arpillera secas,
vacias,
cebada,
fideos, suelas curtidas, velas estearinas, licores, rrillos,
terias
aumentando en cambio primas para
la
sombreros
afrecho,
de
cebollas,
Jgarros y ciga-
importación de géneros y maelaboración do artículos similares en el la
58
Alíales
En
país.
ciertos
importación
casos,
por
liaber
excedentes para
calzado,
vacías,
la
Universidad
la
como en el de las harinas, ha cesado la aumentado las cosechas hasta arrojar
exportación.
1877 sufrió
1875 a
iDe
de
zapatillas
importación de alpargatas,
la
suecos,
y
cigarros
y
hecha una baja de 287,354 pesos, dejando de tal concepto 146,887 pesos de derechos.
percibir
Pero
por
importación de
la
cos
sobre
y
todo
plantillas,
lo
Durante
Fisco
cambio
máquinas de coser, tabaun aumento de 1.376,158 de 419,000 pesos, o sea más del
elásticos,
perdido. 1872
cuatrienio
el
quinas de coser y durante
1875
-
fueron
despachadas
bienio 1877-78,
el
má-
7,456
4,613.
El consumo de vinos extranjeros declinó en demuestran las cifras que subsiguen:
lEl
el
en
experimentó
géneros,
pesos, con un rendimiento fiscal
doble de
bolsas
y ropa
cigarrillos
según
1875.
Litros
Valores
1872
23.640,310
$ 1.740.126
1873
20.609,030
2.011,334
1874
26.380,340
2 245,352
187Ó
22.178,978
1.740,363
1877
22.639,605
1.460,239
cerramiento de los campos fué otro de los resultados de de 1875 que declaraba libre de derechos
la ley
la
importación de
alambre, y de la ley de Contribución Directa que recargaba cuota correspondiente a los campos abiertos.
En
lo
curso
el
bre de
cerco
516,821
pesos,
13.321,720
21,837
del
sólo
toneladas
importación
de
cuatrienio 1872-1875
la
alcanzó a
kilogramos aforados en
mientras
kilogs..
la
que
aforados métricas.
1876.
8.515,059
que
en
en
el
se
1877-1878
bienio
765,498
Calculando no
importación de alam-
pesos.
en
publicó,
En 2,163
los
fué
seis
toneladas
resultaría
para
de
años la
los
años una entrada de 2'4,0 00 toneladas métricas de alambre con un valor oficial de 1.500,000 pesos, valor inmensamente más bajo que el desembolsado por los estancieros, que puede estisiete
marse en cinco millones. Durante el mismo cuatrienio 187 2-18 75 el comercio de Montevideo importó 9,6 5 arados y durante los dos años subsiguientes 14,808. Incorporando el cálculo de lo importado en 1876, resultaría para los siete años una entrada de 30,000 arados.
Anales de
59
Universidad
la
Metálico amonedado.
En 1878 importó (procedentes
puerto
el
ultramar
de
Montevideo
de
970,681
de
y
pesos
1.919,367
Argentina
la
948,686)
y exportó 2.890,157.
En :!.
18 79
íla
importación
de metálico
(procedentes
1.921,084
pesos
751,083
de la Argentina).
Y
Adviértase que
la
amonedado fué ultramar
de
de
1.829,999
y
exportó 2.748,046. estadística
amonedado ha
metálico
del
si-
do siempre entre nosotros muy deficiente por falta de contralor eficaz de las declaraciones de los comandantes de buques.
Comercio
En
interior.
curso del año 187 6 entraron a la (Estación Central del
el
Ferrocarril
y
a las
plazas
y Tres
Treinta
Sarandí,
y 20
de
Febrero 4-6,089 vehículos conduciendo frutos del país entre los que figuraban 313,600 cueros vacunos, 1.273.714 cueros lanares, 6.075
bas
cueros yeguarizos,
de
cerda,
385.120
9i38',OI6l
arrobas de lana, 29,002 arro-
fanegas de trigo y
fanegas
142,20-2
de
maíz.
En 1877 entraron 33,323 vehículos (5,073 vagones de ferroconduciendo entre otros y 28,250 carretas de campo)
carril
frutos
del
lana,
2i8í9,491
país
cueros lanares. 96,629
cueros
3-22, 050
kilogs.
hectolitros
de
vacunos,
de cerda, maíz,
112,727
docenas
de
kilogs.
de
10.015,161
694,140
de
kilogs.
trigo,
487,787 kilogs. de papas y 2'34j232 kilogs. de queso.
En
18 78
la
Oficina
Estadística
de
computando también
los
arribos por vía fluvial anotó entre los frutos transportados por
8,059 vagones de ferrocarril.
embarcaciones
de
carbón
hectolitros
de
3.179,029
kilogs.
de
32,955 carretas de campo y 1.567
&5'6.724
vela,
de
leña.
109,210
harina,
de
kilogs.
1.0üi9.294
afrecho, kilogs.
docenas
de
de
275,814 cebada.
huevos,
21.837.1206 kilogs. de maíz. 53.12.68,620 kilogs. de trigo. 1.166.034
de papas,
kilogs.
2616,274
kilogs.
de queso.
17,269
estéreos
de
leña.
En
fueron
18 77
paña en
la
Cerrito.
El
mal estado de
compradores Orillas
del
reconcentrados todos los arribos de
Plaza San Lorenzo
a
transportar
Plata
y
allí
los el
cani-
la
creada en las inmediaciones del
caminos obligó
a
vendedores y
asiento de sus negocios a
siguieron
reuniéndose,
hasta
que
la
la
calle L*?-
Anales de
60
gisiatura
de
elección
la
accediendo
1879,
Universidad
la
clamor
al
genera^,
declaró
libre
de plazas de frutos.
Sobre ventas de mei-caderías. Contra los mercachifles. El «Centro Mercantil» fué fundado en 1879 por un grupo de
plaza.
proponían
operaciones
de
Esos comerciantes se comprometieron a no operar en
los
que
comerciantes
se
muelles y ramblas rredores
de
Aduana,
la
en
Centro
del
de mercaderías y a
regularizar
todas
dar
a
las
intervención a los Co-
operaciones
las
estrictamente al
sujetarse
de compraventa
métrico
sistema
decimal. La organización que se daban era parecida a
la
de
la
Bolsa de Comercio y pudo y debió proyectarse como un compleque largos años más tarde se mento de ésta en la forma resolvió.
comercio
El
mayorista
también
resolvió
reaccionar
contra
remates de artículos importados que empezaban a generalizarse., obligándose los firmantes del documento a no comprar ni vender cosa alguna en los remates, salvo el caso de liquidalos
ción general
de una casa
de comercio o
de ventas judiciales o
de averías. Las casas importadoras quedaban, sin embargo, autorizadas para realizar remates de fin de estación.
También los
se
preocupó
el
comercio de Montevideo de combatir a
mercachifles o vendedores ambulantes de campaña. La patente
de los mercachifles era de 80 pesos y Latorre la elevó a 600 pesos
para
el
para
SO
sus
ambulante que llevara carro el
representaciones calculaba
el
las
poblaciones
rurales
los
la
manteniendo la d« En una de
mercadería.
2,000
el
nti-
departamentos.
provocó
esa patente exterminadora de
protestas las
carguero,
mismo comercio en
mero de ambulantes que recorrían Entre
o
que cargara per.sonalmente
grandes
y
justificadas
un gremio que
llevaba
a
puertas del estanciero y del agricultor las mercaderías de con-
sumo indispensable cereales
vables
y
aves,
y
cobraba su
que
eliminando
muchas veces para
ei
las
importe en
dificultades
del
cueros,
lanas,
transporte,
insal-
pequeño productor rural.
Ferias francas.
Desde mediados de 1877 empezaron a funcionar en la Plaza Inpor iniciativa de la Comisión de Agricultura de la Junta Económico Administrativa, ferias francas con diversas sec-
dependencia,
-
Anales de
la
universidad
en que se expendían flores, aves
oiones
instrumentos
reales,
agrícolas
y
hasta
61
de corral, legumbres,
ejemplares
caballerss
ce-
y
ovinos.
Su objeto era contribuir
al
abaratamiento de
los
consumos de
primera necesidad y fué alcanzado con tanto éxito que en el acto recibió esa nueva forma de venta la consagración popular y quedó incorporada a
la
vida comercial de Montevideo.
Los ramos patentados.
De que
la
en
relación
1879
de
pagaban
guientes datos:
establecimientos el
impuasto
de
comerciales patentes
e
industriales
extraemos
los
si-
Anales de
62
la
universidad
En
Agencias de seguros ^
vapores
»
Astilleros
Atahonas Barberias Carpinterías de carretas con fragua »
»
»
»
»
sin
»
ribera y de obra blanca
con máquina a vapor
»
.
Embarcaciones menores Fábricas de jabón y velas
....
»
»
licores y gaseosas
»
*
cerveza
»
»
extracto de carne
»
»
aguardiente
»
»
alpargatas
»
»
fideos
.
.
Fundiciones Graserias Herrerias y carpinterías
Imprentas
Máquinas de moler Molinos a viento
Abogados Agrimensores Arquitectos
Escribanos Ingenieros
Médicos Procuradores Casas de bailes públicos Caballerizas y cocherías
Canchas de pelotas Fondas Hoteles
.
la
Anales de
Universidad
Ja
Nuestro comercio con Francia e
63
Italia.
Los cuadros decenales del comercio de Francia, extractados por don Adolfo Valllant en 1879, arrojaban los siguientes promedios anuales:
En
exportación de artículos franceses con destino
la
francos
6.202,982
durante
-
decenio 1847-1856;
el
1857-1866;
decenio
el
1867
cenio
durante
La mitad
1876.
exportaciones
de esas
Uruguay, francos
durante
francos
29.839,365
al
18.221,205
de-
el
estaba
repre-
el vino, la ropa hecha y los géneros curso de los tres períodos decenales el
sentada por tres artículos: y tejidos de lana.
promedio anual
En
el
había
vino
del
primero;
seguido este
francos en
el
tercero;
de la ropa hecha 456,010 en
el
4.510,632
segundo y 4.233,734 en en
979,083
tercero;
el
primero,
el
en
2.827,104
el
y
en
1.624,836 el
primero, 2.127,666 en
el
el
de los géneros y
el el
progreso:
segundo y 8.603,160 en
tejidos,
segundo y 2.790.144 en
el
tercero.
En en
importación de productos del
la
el
en
41.258,405
ductos:
de y
1847-1856;
decenio
la
344,044
decenio 1867
el
-
lana y
los
cueros.
francos
en
el
el
1857-1866 y
sobresaliendo dos grandes pro-
El promedio
y
el
francos
4.0.54,479
decenio
anual de
la
primer decenio, 7.929.684 en
en el tercero;
17.672,384
1876,
Uruguay,
en
20.100,036
lana fué
segundo
el
de los cueros de 3.011,686 en
el
segundo y 15.543,976 en el tercero. En 1877 salieron de Francia con destino al puerto de Montevideo, según los informes de nuestros Cónsules, 157 buques con primero, 8.976,077 en
226,587
toneladas de
pondían a los
de
puertos
franceses toneladas.
235,273
cipalmente por lados, 85,396
servadas.
En
tolitros),
el
c'
azúcar
registro,
de las que solamente 37,977 corres-
despachada para
carga
la
el
18,402
La
el
Uruguay;
y
procedencia de Montevideo
con
a
buques
uruguaya estaba constituida prin261,627 cueros vacunos sa-
carga
fardos
entraron 154
de lana,
cueros vacunos secos y 44,839 cajones de carnes con-
carga francesa destacábanse
la
vermouth
(1,400
(6,000
barricas),
el
cajones), aceite
el
vino
ajenjo
el
de oliva
(3,950
hec-
(122,190
(5,850
cajones),
cajones).
Los informes estadísticos de la Legación Oriental en Italia hacían constar ique en 1877 habían entrado al puerto de Genova, con procedencia
de
Montevideo,
19
vapores
de
20,779
toneladas
de
registro con 1,862 toneladas de carga y 4,076 pasajeros; y salido del
mismo res
puerto
de
Genova, con
de 47,552 toneladas
de
destino a
rogistro
Montevideo, 37
con 7,393
toneladas
de
vapo-
carga
Anales de
64
ción
Los tres principales
pasajeros.
15,998
y
productos
destino a Montevideo
con
italiana
Universidad
la
(358,881 kilogs.), el arroz
eran
(2.120,332 kilogs.)
exporta-
de la
de comer
aceite
el
y los fósforos
(84,337
gruesas).
Y
que
año siguiente habían fondeado en Genova, con proce-
al
dencia de Montevideo, 20 buques de 21,182 con
de carga
toneladas
3,832
toneladas
de
de Genova con
salido
y
registro
destino
a
Montevideo 45 buques de 54,349 toneladas de registro con 10,831 toneladas de carga. Lais cargas uruguayas estaban iconstituídas principalmente por cueros lanares pesos)
sebo
y
(71,398
pesos);
frecuentemente
Hablan de
por
(120,884
(89,250 pesos),
(64,949 pesos).
1879.
ciisis fie
«crisis
pesos), bebidas
y frutas
(67,838 pesos)
ropa liecha
(165,2219
italianos
(184,285 pesos), tejidos
(90,98i8
pesos), velas y fósiforos
lanas
pesos),
cargamentos
los
(376,143 pesos), comestibles
aceite
Lii
(497,956
y
publicaciones
las
de
época
la
de
la
uno de sus
1879». El coronel Latorre la atribuía en
laensajes al retraimiento de los capitales. «El Siglo» a la elevación
de
las
aduaneras y al plan de medidas adoptadas que daba por resultado la paralización
tarifas
contrabando
contra
el
de las
mismas operaciones
a
la
que pesaba
tiva
gfp
política,
a
elevada
del ¡Comercio»
«El Diario
leg'ítimas.
la
talsa
de
derechos aduáne-
los
a la reducción de los consumos, a la fuerte cuota con.tribu-
los,
ai
tirantez
por mayor
¿.obre
—
habitante del país.
cada
Un almacenero
—
pagaba antes al año pesos de patente, mientras que hoy tiene que abonar 217 por
concepto
de
decía este último diario
impuesto de
instrucción
casa habitación, aUimbrad^o y
pública
sereno y
sobro
patente
de
el
almacén y
giro.
Debió darse por convencido el coronel Latorre, porque en un segundo mensaje a la Asamblea propuso como medida inmediata y salvadora la reducción a la mitad de los dereichos de importación y de las patentes de giro, sin advertir que con ello ahondaba el deseiouilibrio financiero por efecto de la acentuación
del
descenso rentístico.
Tratábase en sión
sobre todo
realidad el
viduos vinculados a
agravada por potencia
del
los
de
país por la
ley
una
crisis
financiera
con repercu-
intermedio de los millares de indide
Presupuesto General de Gastos, y especialmente por la pre-
factores políticos
militarismo o
del
motín cuartelero que seguía
in-
Anales de
Universidad
la
65
despecho de los comicios de 1878 y de la Legislatura de ellos. Latorre continuaba usando como Presidente mismo kepí y el mismo número de batallón con que había
tacto
a
surgida el
ahogado
la
aparecía
su Ministro
Guerra
de
el
1875
colocar su espada
a
por encima
y detrás de
él
Máximo Santos con
coronel
número de batallón en su kepí pronto
otro
y
enero de
popular en
soberanía
ocupar su lugar
a
Constitución y de las
de la
leyes.
El puei'to
Durante República
Montevideo y
(le
siguiente movimiento
el
A
República de
puertos
los
ÑOS
Jr^Sro
10,392
1.602,696
1876
11,106
2.002,273
1877
11,366
2.220,965
1878
10,574
2.173,427
1879
11,266
2.308,428
aumento
quinquenio con
do
tonelaje,
casi
constante,
como
las
cifras
más
el
índice
verdadero dada
que es
moderna
de la navegación
1&
de entradas:
1875
Se trata de un
las
tuvieron
la
Buques
c;l
ciente
demás puertos de
1875-1879
quinquenio
el
los
altas
al
del
se ve,
cerrando
cuadro en materia la
aumento de
tendencia la
cre-
capacidad de
bodegas.
Véase cómo
se
dividía
e¿e
movimiento
de
puerto de M.'iatevideo y los demás puertos de
entradas la
PUERTO DE MONTEVIDEO
entre
el
República:
PUERTOS FLUVIALES
Entradas de ultramar
De cabotaje
Buques
Buques
Tonelaje
Buques
Tonelaje
Tonelaje
y ríos
1875
1,667
947,976
2,026
198,577
6,699
456,143
1876
1,509
1.116.016
2,369
249,360
7,228
636,889
1877
1,175
864,^^41
2,655
599,434
7,536
756,890
1878
1,100
806,334
2,537
546,829
6,937
820,264
1879
1
.044
780,870
2,590
574,219
7,652
953,339
Adviértase
T: VII
-5.
que se trata del tonelaje de registro y no de
la
Anales de
66
la
Universidad
al puerto de Montevideo; que desde económica de 18 7 4 agravada por la crisis política de 18 75, quedó el país esiancadc» y en pleno período de ahorro y reconstitución de fuerzas, y que por otras circunstancias, entre las que de&cuella el peso de los derechos de faro, los buques de ultramar hacían escala en Montevideo o seguían de largo para Buenos Aires, según la cantidad de carga que traían para» el Uruguay. En el movimiento del puerto de Montevideo correspondiente al año de 1876 figuraban en las entradas de ultramar 5i31 vapo-
carga efectiva con destino
la
crisis
780.497 toneladas y 978 barcos de vela de 335,519 tone-
res de
ladas de registro, y en las entradas de cabotaje y ríos 458 vu 17i5,840 toneladas, y 1,911 barcos de vela de 73,520 toneladas de registro. Del punto de vista de la nacionalidad, des-
pores de
en
tacábanse
entradas
las
ultramar
de
415 buques de 4,62,110 toneladas, 195,505 toneladas, ladas,
y
el
pabellón
el
con
inglés
francés con 176 buques de
alemán con 143 buques de 136,455 toneladas. 166 buques de 9^9,2 8
el
italiano
el
tone-
con
En las entradas de cabotaje y ríos figuraban bajo el pabellón nacional 1,'566 barcos de 87,268 toneladas de registro. La bandera extranjera apenas flameaba en la mitad de ese número de pero en cambio tenía cerca del doble de tonelaje, porella figuraban muchos de los vapores de la carrera a
barcos,
que bajo
Buenos Aires
litoral.
y
La estadística entradas en
el
del
año
2,030
de cabotaje y
ríos
625
barcos de vela de
La de
1878
arrojaba
en
y en las entradas
436,75i6 toneladas y
La bandera nacional
vapores
En
de
entradas
las
movimiento de 3iS3
vapores
toneladas,
479,724,
j
de
ultramar
352
vapo-
buques de vela de 257,179 tone-
de cabotaje
y ríos
580
vapores
de
1,957 barcos de vela de 110,073 toneladas. era enarbolada
ese
buques de
año en
la
navegación
toneladas y la 1,025 buques de 4i66,222 toneladas.
de cabotaje y ríos por 1,512
extranjera por
el
119,710 toneladas.
res de 549,15^5 toneladas y 748
ladas;
así
de ultramar
792 barcos de vela de 2;91,592 tonela-
de 5713,049 toneladas y das;
1877 distribuía
puerto de Montevideo:
8
0,607
portuaria de 1879 la entrada de ultramar Montevideo estaba representada por 351 vapores de 528,619 toneladas y 693 buques de vela de 252,251 toneladas; y la de cabotaje y ríos por 666 vapores de 459,729 toneladas y 1,924 barcos de vela de 114,490 toneladas. Dentro de al
la
puerto
estadística
de
Anales de
navegación
ia
cabotaje
de
la
y
Universidad
67
bandera
llevaban
ríos
nacional
1.563 barcos de 89,192 toneladas, y bandera extranjera 1,027 de
485,027 toneladas, desproporción considerable debida, como heya, que la mayoría de los vapores de la carrera, de elevado tonelaje todos ellos, pertenecían a la matrícula ex-
mos dicho
r\
tranjera.
A
puertos
los
4,]
de
receptorías
las
subreceptorías
y
fluviales
mismo año 3,462 vapores de 807,851 toneladas y 90 barcos de vela de 145,488 toneladas. En conjunto 7,652
entraron
ese
buques de 953,339 toneladas, correspondiendo al pabellón nacior.al 3,188 buques de 351,126 toneladas y al pabellón extranj'ero 4,4 64 buques de 60 2,213 toneladas. El reglamento consular de 1S7S redujo al 5 % el monto de los
derechos a cargo
orientales,
liimpieza
con
del
de los buques
destinados
propósito de fomentar
el
puertos
a los
marina nacional.
¡a
puerto.
Los proyectos de construcción de un puerto artificial en la de Montevideo, tan debatidos en el año anterior, especialmente el del ingeniero Tusson, volvieron a preocupar la atención pública durante los primeros meses de la dictadura. Pero el coronel Latorre no tardó en dejarlos de lado, juzgando que bahía
•?1
tii
estado el
angustioso
de
la
Hacienda pública no permitía
interés de los capitales que
Estuvo en cambio
a
la
demandaban
orden del día
la
las
garan-
obras.
limpieza
del
puerto
contratada en 18 71 con una empresa particular, de conformidad
año 1869 que creaba un impuesto de 10 centesimos por tonelada de registro sobre los buques procedentes de cabos a la ley del
afuera y de 4 centesimos para los de cabos adentro. La empresa estaba comprometida a adquirir dos dragas a vapor para la extracción
fundidad le
diaria
de
1,200
mínima de
fallaron
sus
7
cálculos
metros cúbicos, metros en
en
razón,
el
hasta
curso
«egún
obtener
de el
20
una
años.
dictamen
pro-
Pero de
la
Dirección de Obras Públicas, de que las dragas y las chatas eran chicas y sólo podían extraer del fondo de la bahía la quinta p.irte
de
la
cantidad obligatoria.
Para mejorar su material y salir de esa situación de incumplimiento del contrato, pidió la empresa que se extendiera el impuesto a los paquetes postales que gozaban de exención de derechos portuarios, y
a
su turno pidieron los agentes de vapores
Anales de
6S
que uo se renovara 10 centesimos sobre
universidad
la
invocando que
impuesto
de
el
contrato,
el
tonelaje de registro equivalía a un peso
el
por tonelada efectiva de carga movilizada en el puerto de Montevideo ya muy encarecido por las empresas de faro. Y el asunto fluedó pendiente de resolución legislativa.
El impuesto de faros.
Con
de estimular el desenvolvimiento del comernavegación resolvió el gobierno de Latorre en 187 7 centesimos por tonelada de registro la cuota de 4
propósito
el
y d3
cio
la
reducir a
2
centesimos del faro
de
la
Colonia y que una vez vencidas las
concesiones del Banco Inglés y de Punta del Este quedara reducido a 1 y % centesimos el impuesto áe 1 y Vz centesimos que regía
a
sazón.
la
Dos años después, ampliando ma, suprimió el coronel Latorre nia y realizó un convenio con
considerablemente
ese
progra-
impuesto de faro de la Cololas empresas particulares que
el
permitió obtener las siguientes rebajas: los faros de José Ignacio,
Punta Brava, Panela y Farallón cobrarían
tonelada en vez de
7
que tenían derecho;
a
el
6
centesimos por
del
Banco Inglés
centesimo y el de Punta del Este que era de 2 centesimos, quedarían reducidos en conjunto a 1 y i/¿ centesimos; el de Polonio sería de 2 centesimos en vez de 2 y % por tonelada.
que era de
además
Establecía
pagarían
1
en
el
adelante
mos en vez de
7;
los
decreto
que
y los de procedencia extranjera
Naufragios en las costas
He aquí y
el
aguas de
hasta
la
por
concepto
de
abalizamiento
buques de ultramar 3 y % centesibuques de cabotaje nacional 1 centesimo,
ios
número de
rtel
los
2
y
^
centesimos.
Este.
naufragios ocurridos en las costas
Repiiblica durante los 6 años corridos desde 1872
1877: Naufragios
1872 1873 1874
1875 1876 1877
73
Pérdida total ,
Averia
Muertos
Anales de
En y
el
vapor
el
del
islotes
los
año 18 78:
la
universidad
Polonio se hundieron
vapor inglés «Hoogly»,
inglés
con
«Astarté»,
sin
pérdida
2
69
buques durante
desgra'cias
de
hombres,
32
el
personales, o
sea
que alcanzaron a llegar al puerto por ellos mismos. Todavía construida de La Paloma en una balsa sus tripulantes menos
todos
no funcionaba
Los
9'
los
faro de ese peligroso escollo.
de los vapores.
pi'ivilegios
Uno de
2
vapores de
Mala Real Inglesa
la
recoger
nuestro puerto sin
patente
la
de
salió en
sanidad.
18 77 de
Se trataba
de
reglamentos portuarios y el Gobierno resolvió castigar a la Compañía mediante el retiro de los privilegios de que venía gozando desde 1851. En su comunica-
una violaciéa flagrante de
ción a la agencia
que
tenido
el Gobierno que ya en 18 72 había una suspensión análoga por resistencia de
recordaba
dictarse
Compañía
la
los
a conducir la correspondencia.
Dio mérito esa resolución
a
dos representaciones coutradicto-
de los bancos y de las casas importadoras: una de ellas a favor y otra en contra del retiro general de sus privilegios a los lias
La primera se limitaba a pedir la suspensión de los pricomo medida general. La segunda, que era mucho más importante por el número y la calidad de las firmas, recordaba \'apores.
vilegios
que
el privilegio
consistía en la abreviación de los trámites para
operaciones de carga y descarga a raíz de la llegada del baren la exención de ciertos sellos y en la liberación de dere-
las co,
chos sobre obtenía
la
el
carbón de piedra;
baratura de los
comercio y de
la
portuario y
trabajo de
inmigración,
— agregaba —
3
00
la
y
de'cía
el
que gracias a
de
carga destinada
a
ello
mayor desenvolvimiento
intensificación
del
se
del
movimiento
estibadores. Suprimidos los privi-
no vendrán los vapores y quedará Montevideo reducido a los barcos de vela, desde
legios to
el
fletes,
nuestro puerto es
muy pequeña
con
el
puer-
que
la
relación
la que va consignada a Buenos Aires y puede ser movilizada por simples lanchas a través del Río de la Plata. a
Y viera
el la
incidente quedó sin solución a
la espera de lo que resolLegishitura que se incubaba en esos momentos.
Anales de
universidad
la
El dique del Cerro.
quedó terminado el dique de carena de los señorea Juan D. Jackson en la punta oeste del Puerto de Montevideo. Sus empresarios se presentaron en seguida pidiendo exención de derechos de aduana a favor de los materiales la destinados a la construcción de un puerto anexo al dique y la
En
18 78
Jaime
Cibils y
exención de contribución directa escrito que
daban en su
a
faA''or
de toda
Recor-
obra.
la
jamás habían pedido nada
al tesoro
buco, a pesar de haber inmovilizado gruesos capitales en
el
pü<
deseo
de ser útiles al país, apartándose de las colocaciones remunera-
doras del dinero para acometer una obra pública que en rigor rrespondería
proponían
se
grandes
barcos,
que
insumiría
La dictadura llegaba pedido
fué pasado
a
la
400,000
libras
esterlinas.
momentos y el Asamblea Legislativa que acababa de
a
su
donde encontró eco
constituirse,
co-
Estado; y agregaban que terminado ya el dique construir un puerto anexo para el atraque de
al
término
muy
en
esos
simpático y fué despachado
—
fa-
vorablemente. El dique de carena ya construido decía la Comisión de .Haicienda de la Cámara de Diputados que presidía fci ingeniero don Juan Alberto Capurro con su 120 metros de largo y 24 de anciho y su muelle anexo sobre fondos de 7
—
metros que permiten la entrada de los buques de mayor tonelaje que cruzan el océano, coloca al puerto de Montevideo a la cabeza
de todos los demás puertos de
El practicaje en
el
Río de
la
la
América
Plata.
Nuestros prácticos lemanes se presentaren
manifestando los
que
las
Sur.
del
autoridades
al
argentinas
Gobierno en 1876
habían
proihibido
utilización
de sus servicios para
dida atentatoria tratándose
de
habían publicado avisos en
los
la
travesía a Baenos Aires, me-
aguas comunes;
y
que más tarde
que se prevenía que
la
prohibición
sólo
rezaba
con los barcos que navegasen desde Punta del
con
rumbo
a
les
a
barcos de ultramar, bajo apercibimiento de fuertes multas, la
puertos argentinos. Proponían
los
que se colocara un pontón a la altura de
inmediata a
donde bajarían los así se resolvió. Pero
la Colonia,
la
prácticos isla
pilotos
del
Indio
orienta-
Farallón,
tomados en
el
las autoridades an,enCabo Santa María. Y tinas, que veían frustrados sus planes, reiniciaron entonces a.iguuas de las medidas que acababan de abandonar, dando lugar con
Anales de
la
Universidad
ello
a que nuestro gobierno dictara en 1877 un decreto de represalias
t)or
el
cual se establecía
que todo individuo que pilotease un barco en
aguas orientales sin estar patentado en
multa igual
mar que
al precio
del pilotaje y
dirigieran
se
a
la
República, pagaría una
que todos puertos
nuestros
tomar prácticos orientales hasta el pontón de El cambio de netas entre las cancillerías
los
buques de ultraobligados a
estaban la
del
Isla del Farallón.
Plata
iniciado a
primera de esas medidas, concluyó con la promesa del Gobierno Argentino de enviar instrucciones a su Legación para soraíz de
la
lucionar
incidente.
el
Temporales.
En
junio de 1877 cayó en
el
puerto y en la ciudad de Montevi-
una granizada formidable, precedida por un ruido lejano e imponente que avanzaba de la parte del mar. Las piedras eran de tamaño considerable y causaron grandes destrozos. Dos años después, en el curso del mismo mes, sobrevino un terrible temporal que se extendió a toda la campaña, provocando el desbande de los ganados en las zonas de campo todavía abiertas, con enormes mortandades que abatieron fuertemente el nivel de la riqueza pecuaria del país. Tan grande fué el desbande, que ei Gobierno dirigió una circular a los Jefes Políticos para que las policías ayudaran a los estancieros en la tarea de reconquistar deo
sus haciendas dispersas.
tranvías,
K(>i rotairile.s,
teléfírafos
y
teléfonos,
i'roíífesos
feí'fo-
viarios.
De
las
Memorias
del
Ferrocarril
Central del Uruguay, extracta-
das por la Oficina de Estadística, reproducimos a continuación las cifras
más
salientes:
1875
Número de Producto de
pasajeros los
.
pasajes
Toneladas de carga. Producto de las cargas. Total de entradas
.
Gastos de explotación (íanancia
lí(iuida
.
.
1876
1877
1878
1879
:
Anales de
En
presentó
1877
Compañía que
la
el
universidad
la
un plan de reconstrucción de
Directorio
Gobierno hizo estudiar por una comisión com-
el
puesta de don Joaquín Requena, don Daniel Zorrilla^ don Joaquín ííelgrano y don Melitón González, la cual introdujo varias modifi-
aceptadas quedando aprobada la propuesta en
caciones que fueron
forma
siguiente
1á
Transformación de rantía
la
empresa en compañía anónima sin la de dereclios aduaneros a favor
ga-
exención
Estado;
del
de
les materiales y útiles de construcción y consumo del ferrocarril;
entrega de 250,000 pesos
exención de impuestos durante 40 años;
durante
anuales
línea al
la
por las
el
otro
años,
10
la Compañía de llevar Compañía y destrucción
debiendo tratar
lado del Yi;
cesión a la
fuego de las 5,000 acciones del Gobierno;
garantías vencidas mediante
interés y 2
de amortización;
'/r
consolidación de
emisión de bonos de
la
4
%
de
reconocimiento del derecho del Es-
tado a intervenir en las tarifas cuando las utilidades llegaran
%
10
Las garantías vencidas ascendían, según una Contaduría,
ó
1.0?ri,938
negociación
C'tra
siguientes
bases:
importante reaJizó
exención
teriales, extracción gratuita
adyacentes,
otro puente
liquidación
át-
'.s
pesos.
Compañía en 1879: la construcción ciones del Dui^zno para trenes y
les
al
anual.
compromiso
Gobierno
el
del
niitma
general, mediante las aduaneros sobre los ma-
de arena y piedra de de no autorizar la de
la
tráfico
de derechoe
dentro del radio
^on
puente del Yi a inmedia-
dos
los
terrenos fisca-
de
construcción
leguas a cada lado del
con-
cedido y promulgación de una tarifa que establecía las cuotas dp un peso por cada carreta cargada. 70 centesimos por cada carreta vacía,
un peso por cada carruaje.
12
centesimos por cada persona
cada animal vacuno y 2 centesimos por cada animal lanar. El puente debía medir 623 metros de largo, tendría 41 tramos dje 15 m. 21 cada uno y era considerado en esos momentos, según el miembro informante de la Comisión de a
caballo,
10
centesimos por
la Cámara de Diputados ingeniero don Juan Alberto Capurro, como «el primero de su clase en la América del Sur».
Hacienda de
Eñ la asamblea de accionistas celebrada en Londres ese mismo año declaró el Presidente del Directorio señor Drable que era la primera vez que la empresa repartía un dividendo. ¿No emanaría esa escasez de ingresos de la elevación de las tarifas?
Según
los
astados
comparativos
de la
prensa de
la
época
el
•
Anales de
Universidad
la
transporte de 3 toneladas de carga de primera clase, desde el Durazno hasta Montevideo, costaba 16 pesos por carreta y 42 por ferrocarril;
transporte de 160 arrobas de carga de segunda
el
(mercaderías
costaba 16 pesos por carreta y
peso)
al
último de un peso de carretilla;
rrocarril, con el recargo este
transporte de 192 arrobas de carga de tercera clase
construcción)
clase
por
16
fe-
y el
(materiales de
costaba 16 pesos por carreta y 18.60 por ferrocarril
de carga y descarga.
incluidas las carretillas
Los trabajos de
líuea
la
a
Pando y Minas estaban paralizados
desde 1875. Para promover su reanudación otorgó
gobierno de
el
don José María Baisna una subvención de 53,000 pesos en cuotas mensuales de 2,000 pesos, reembolsable bajo forma de servicios oficiales en la misma línea. Gracias a ello Latorre
concesionario
al
fueron sacadas a licitación las obras hasta Toledo. Pero
línea vol-
la
empantanada y entonces resolvió el Gobierno gestionar su compra, aunque sin resultado por falta de ambiente en la Legislatura. El ingeniero don Juan Alberto Capurro, miembro informante de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados — que rechazaba la propuesta de compra y que atribuía el entorpevió a quedar
cimiento
de
nuestros
trabajos
los
empresa para
expropiar
ferrocarriles
determinaran
a
sólo
con
dificultades
las
sobre
terrenos
los
podrían
la
luchaba
—
la
que
decía
-
dar resultado una vez
caminos vecinales de acceso a
los
que
vía
que se
estaciones
las
y
se construyeran los puentes necesarios.
La línea del Salto a
altura
la
del
a
Santa Rosa estaba paralizada desde 18 75 de la imposibilidad
Arapey, como consecuencia
en que se había encontrado las
acciones a su
concluida y abierta
el
Estado para pagar
cargo y los intereses de al
servicio público.
la
importe de
el
ya
única sección
En cambio
el
ferrocarril
al Paso de los Libres llegaba ya a Canuestras viejas y remuneradoras corriende adueñaba y decía tees del comercio de tránsito. «En general en este país «La Democracia» comentando la actividad ferroviaria de allá no se ha hcdio más que pelear», y la apatía de acá Pero el Gobierno intervino también en este caso y luego de
argentino de Concordia seros
se
—
—
conseguir cuy,
brar
Santa
pidió
la
reanudación de
y obuvo
en
tendientes
arreglos
Rosa y
CuarcMm
los
a y
trabajos hasta
autorización
1879 la
prolongación
realizó
un
la
Estaiión
para
legislativa
de
contrato
los
rieles
definitivo
cual se regularizaba la situación de la empresa y se
en situación
de dar /nnipliniiiMito
a
sus obligaciones.
la
El
Yacele-
hasta por
el
colocaba
Estado
Anales
74
:le
adeudaba en esos momentos de
garantía
Universidad
por
concepto
concepto
por
pesos
1.028,460
200.000
intereses,
la
de
suscripción^ de
de
acciones y 1.200.000 por concepto de garantías futuras durante los 20 años de concesión a razón de 5.000 pesos mensuales. La
empresa
durante
pérdidas
tenido
había
sólo
sus
años de
seis
presumía que en adelante ocurriría lo mismo. funcionamiento Por el nuevo contrato el Estado entregaba 1.800,000 pesos en títulos de deuda de 4 ^"í de interés y 2 Cr de amortización, quey se
dando suprimida
de intereses.
garantía
la
Tranvías.
La red de tranvías de
la
ciudad de Montevideo contenía seis
líneas en la época de la administración Latorre: la del
Paso del Molino, del Buceo. Véase
y la primeras:
la del el
Reducto,
la
movimiento de pasajeros de
1S74
1.
las
del Molino
081.046
1.141,954
187ñ
884,828
940,993
187(5
772,001
769,059
1877
947.972
807.193
1878
1.295,328
lb79
.
.
demás
las
913,043
1.277,889
•
líneas sólo
dos
Paso
Unión
De
de la Unión,
la
del Este, la del Centro
081.751
1
hemos encontrado datos
trun:os. La
1S74
del Reducto transportó 1.1&S.672 y simplemente 600.800 y 623.373 en los años 1875 y 1876. La del Este transportó 969.334 pasajeros en 1S79. La del Buceo 328.012 en
pasajeros en
1877.
Y
del Centro 705.450 en ese
la
—
TeléííVíítos.
Una de al
las
Gobierno
chos.
La propit'dad úc
la
mismo
«h>i
año.
ri-spundtiuia
tt'lt.\s,rátita.
agencias telegráficas de Montevideo pidió en 1S7
medidas
protectoras
de
la
propiedad
El expediente fué pasado a estudio de
mercio, presidida a
mara produjo un
la
di?
los
7
despa-
Cámara de Co-
sazón por don Mauricio Llamas. Y la Cáinforme que de inmediato fué convertido en la
ley por la dictadura.
Anales de
Universidad
la
75
—
—
«Los despachos telegráficos decía el informe sólo pueden ser publicados por las personas, sociedades o empresas a quienes fueren nominativamente dirigidos, o con su autorización. Existe violación no sólo
por
bién
Hay también
literal, sino tamque sustancialmente contengan. trasmisión que las líneas telegrá-
por su reproducción
reproducción de
la
violación por
lo
la
hagan de los mismos telegramas. La infracción debe ser penada con multa de 100 a 500 pesos o en su defecto prisión de 30 a 60 días. Pasados cinco días de la publicación, los telegramas deben reputarse del dominio público y pueden ser reproducidos.» Por otro decreto se declaró que las líneas telegráficas eran ficas
de utilidad pública y que los propietarios de predios urbanos y rurales estaban obligados a soportar Ja servidumbre de postes con-
ductores de hilos, y se impuso
pena de dos años de prisión con comunicaciones, destruyen-
la
trabajos públicos al que trabara las
do los postes o cortando
o
desviando
alambres.
los
El telégrafo policial. El coronel
Latorre se dirigió
pidiéndoles
cos
señalamiento de las comisarías, a una red
de obra
—
de telégrafos
decía
blema de
1S78
en
a
todos
los
Jefes
Políti-
un plano de sus respectivos departamentos,
—
una
de estudiar
fin
en
policiales
vez
toda
la
vendrá a
realizada
la
con
construcción
campaña. «Esa resolver
el
pro-
podrán en cualquier momento comunicarse instantáneamente con todas las cola
seguridad, pues
Jefes
los
Políticos
misarías».
Un año después don Francisco do
el
asunto a estudio, presentó
gráfica
policial
A. Lanza, a quien había pasa-
presupuesto de
el
Establecía
proyectada.
135
la
estaciones
red tele-
con
el
Su Gobierno comprara
los
peones de trabajo con soldados de línea, en cuyo caso
millas
(le
alambre.
costo los
sería
de
materiales
1.074,354
en
pesos,
2,916
que
salvo
Europa y sustituyera la
obra
desembolso de 65 3,738 pesos. Ya había terminado la dictadura y la red sólo podía ser autorizada por el Cuerpo Legislativo. El coronel Latorre pasó. pues, sólo reclamaría el
la Asamblea el expediente y la Comisión de Hacienda de la Cámara de Senadores abordó su estudio, resolviendo aconsejar
a
de un
la
sanción
la
construcción
ximo de
proyecto restrictivo por
inmediata
134 pesos 25
el
de
/.,?.?.o
el
que se autorizaba al precio má-
k'thimrtros
kilóuK^tro de dos hilos y de 125 pesos
el
de
Anales de
76
un
hilo.
de
que
Los
otros
Universidad
la
kilómetros
3,632
en
construirían
se
demostrara su conveniencia. Pero encargó de imponer el aplazamiento general
práctica
la
financiera se
caso
el
crisis
la
pro-
del
yecto.
Él teléfono y
fonógrafo en Montevideo.
el
Graham
El teléfono de delfia en 1S7
5,
aparato accesible extensa
dos años
ciada
Desde del
de
red
las
Plata
figuró en la exposición
Bell
pero solo un año después obtuvo al
el
publico y se instaló en Chicago
comunicaciones.
más
el
Buenos Aires dentro
el
red
la
de
Mony
telegráfica
del
Platino
por don Francisco A.
lizándose
comunicaciones
las
-
público
empresario señor Mony establecimiento tipo-
del
gráfico del diario «The Standard» y en Montevideo a d:^
ini-
tarde.
maravilloso aparato que
hizo funcionar en
primera
la
La red de París recién fué
primeras semanas de 1878 pudo conocer
el
de Fila-
comercio un
Brasileño
largo
lo
puesta a disposición
Lanza, Inspector de esa red, rea-
con
Canelones
forma tan
en
con-
cluyente que de inmediato empezó a hablarse del establecimiento
de una línea entre ambas capitales Un año después don Eduardo Perris
grafo de Edison en la Sala de
do a
la
población de Montevideo
la
acababa de ser exhibida en
la
del
Plata.
hacía
funcionar
fonó-
el
Asociación Rural, sorprendiencon esa nueva maravilla
que
Exposición LTniversal de París.
Industria ganadera.
Véase cuál
era
existencia
la
de los
f'eclaraciones
estancieros
ganadera para
el
del
Uruguay se^Cm
pago de
la
las
Contribución
directa:
1876
Vacuno
.
.
Yeg:uarizo
Mular Ovino
.
.
.
.
Porcino. Cabrio
.
.
(cabezas) 4.873,994
1877
1878
1879
5.628,799
6.367,191
6.936.083
(
»
)
437,522
531.766
618,468
645,936
(
»
)
3.766
4,386
4,440
3,961
9.142,135
9.624,116
11.734,161
10.363,936
9,526
14,491
23,911
26,097
3,813
6,341
5,984
6,154
(
»
)
)
.
(
»
.
(
»
)
Anales de
La
estadística
Buenos Aires
la
argentina de
5.116,092
Universidad
1876
?7
asignaba a
la
Provincia de
vacunos y 45.511,358 ovinos, y
a
las
trece
Provincias restantes 8.221,770 vacunos y 11.989.S93 ovinos, con un
demás especies ganaderas, de
valor total, incluyendo las
101.432,918
pesos fuertes.
El rei'iamiento de los campos. Al hablar de vas
al
la
franquicias aduaneras recta.
hemos dado algunas cifras relaticampos bajo la doble influencia de las
importación
cerramiento de
los
y
esas
cifras
con
doctor Carlos María de Pena, inserto en
destinado a
la
Kilogs.
1872
1874
1875 1S7G 1877
1878 1879
1880
el el
siguiente
«Álbum
del
ExposicióiU Continental de Buenos Aires:
de alambre
1873
de la contribución
de las franquicias
Vamos a completar
di-
cuadro del
Uruguay»
Anales de
78
Líi
industria
la
Universidad
saladeril.
He aquí un cuadro de
la
exportación de carne tasajo durante un
período de 15 años comprendido de 1867 a 1881
Por
los saladeros
orientales
Al Brasil
1867
1868 1869
1870 1871
1872 1873 1874 1875 1876
1877
1878 1879
1880 1881
517,100
A La Habana
(quintales)
Por todos
:
los saladeros
del Plata
Al Brasil
A La Habana
Anales de
la
Universidad
Saladeros Orientales
1875
1877 1H78 1879
1880
79
Anales de
80
Universidad
la
Véase cómo explicaba su invento
el ingeniero Tellier a un pe^ Havre en momentos de partir para el Río de la Plata: «De las numerosas experiencias realizadas resulta que la carne conservada por el frío mantiene durante dos y tres meses todas
liodista del
sus condiciones y hasta tiene sobre la
carneados
cién
las
('fe
es
no
carne, y
la
pueden
que
va directamente a
en
caso
bodega donde está
la
que atraviesa
salina
una máquina
las
la
La
El
corriente fría
carne, sino a
de la
piezas
hay
enfriadora,
descompostura.
de
por medio del éter metílico.
se produce
ción
están aseguradas contra cual-
En vez de
reemplazarse
marino perjudica o vamos a realizar ahora.
viaje
el
si
«Frigorifique»
del
entorpecimiento.
tres frío
mar:
esa experiencia la que
es
Las instalaciones quier
re-
la acción
temperaturas. La única experiencia todavía pendiente
altas
relativa a la acción del
la
carne de los animales
más eficazmente a
ventaja de resistir
la
una
no
solu-
máquina, la cual se
enfría hasta 10 grados bajo cero y luego va a la bodega. En la bodega funcionan varios ventiladores que propagan por todas partes
la
acción
y
nuestro viaje
de
«El invento rí."^,
al
de una cámara la
es
esa
cantidad
la
ella
que
la
ingeniero Tellier
maquinaria
del
—
decía
Plata
de
en
—
de aire frío en la que se colocan las carnes des-
conservación y transporte, de un congelador provisto
ventilador que aspira lo
del
«Cosmos» de Pase compone
el
«Frigorifique»,
do una serie de tubos en donde circula
dor y
kilogramos
150,000
traeremos
retorno.»
del
describir
tinadas a
Caben en
frigorífica.
carne vacuna
aire
el
el
de la cámara y
gas amoníaco,
devuelve luego de enfriado otra vez a
temperatura se mantiene
así
Una comisión compuesta
de
un
dirige al congela-
lo
la
cámara cuya
bajo cero.»
de Milne Edwards, Peligot y Bouley de
Academia de París había declarado a Tellier inventor del sistema frigorífico por vaporización del éter metílico, después de varios ensayos que comprobaban la excelencia de las carnes conla
servadas.
Nuestro
compatriota
el
doctor
Nin Reyes, tan vincuhemos tenido oportunidad
Federico
lado a las experiencias de Tellier según
de demostrarlo en otro volumen de esta obra, publicó un artículo
con motivo de la llegada del «Frigorifique», en que atribuía también al ingeniero francés toda la gloria de
la
invención y recor-
daba que su procedimiento había sido ya juzgado por el Jurado de la Exposición de Londres de 1862, «como el que más honraba a'
espíritu
humano después
de
la
máquina de Watt.».
Anales de
Universidad
la
81
El vapor «Frigorifique» regresó a Francia a mediados de 1877 conduciendo en sus bodegas 2ü0 animales vacunos y 30 ovinos procedentes de Buenos Aires y de Montevideo. El jefe de la escuadra francesa de estación en Dakar entregó a Tellier un certificado en el que hacía constar que había comido carne del Río de la Plata que tenía 80 días de permanencia en
bodegas del «Frigorifique» «y que nunca había comido nada
las
mejor».
Agregaba
«Journal de Rouen» que las reses recién habían sido
el
descuartizadas
llegar
al
al
cedente de Montevideo «era
En
los
puerto de destino y que la carne proal parecer la más estimada».
mismos momentos en que
regresaba
«Frigorifique»
el
Francia con su primer cargamento de carne enfriada, llegaba
Río de
Plata otro buque francés, el vapor «Paraguay», de 1,500
la
toneladas de
registro
ensayos mucho
que
Carré»
En
y
más
lo
Pertenecía a
la
un
aplicaba
enfriamiento
el
variante
en condiciones, por
amplios.
procedimiento
de
tanto,
realizar
empresa
distinto
«JuUien
de
del
Tellier.
vapores la conservación de las carnes se rea,lizaba me-
los dos
diante
a al
producido
En
importancia.
de
por
el
amoníaco, pero
«Frigorifique»
ei
con
una
iba
col-
carne
la
gada en cámaras que tenían una temperatura de cero grado. En el «Paraguay» la carne iba a-pilada como se apilan los cueros, y la temperatura de las cámaras era de 30 grados bajo cero. Por procedimiento
el
Tellier
quedaba
carne
la
seca,
bajo
sin
Por
congelarla.
el
procedimiento
Jullien
Carré
acción
la
de una corriente de aire que la mantenía enteramente
fría,
pero
carne iba
la
dentro del agua congelada y se congelaba ella misma.
vapor «Paraguay» llenó una gran parte de sus bodegas con
El
carne
en
Buenos
Aires y
completó
un cargamento
en
nuestro
puerto a pedido del coronel Latorre, quien puso a disposición ás
empresa un
la
lote
de
suministrado
novillos
por
la
Asociación
Rural.
Tanto
el
«Frigorifique»
como
el
«Paraguay» volvieron
al
Plata
busca de nuevos cargamentos, venciendo sin ganancias y hasta con pérdidas las primeras dificultades inherentes a toda empresa en
grandemente revolucionaria, y abriendo con ello el camino a las empresas de los grandes rendimientos, a las empresas que debían embolsar ganancias multimillonarias en los mismos momentos en que
ingeniero
el
miseria,
como
lo
ción del general
T.
VH-G
Tellier,
«el
padre
hemos recordado BatUe.
al
del
frío»,
se
ocuparnos do
debatía la
en
la
admini?tra-
Anales de
82
la
Universidad
Las carnes cocidas. Al mismo tiempo que la industria frigorífica realizaba esos primeros ensayos erizados de dificultades, algunos de los establecimientos saladeriles del Uruguay trataban de abrirse camino en loimercados europeos mediante otros procedimientos. Entre ellos sobresalía la fábrica Trinidad de don Lucas Herrera y Obes, que para
contratos
varios
realizó ejército
grandes
con
francés,
provisión
la
de
carnes
que
esperanzas
cocidas
al
desgraciadamente
no alcanzaron a realizarse.
Corrales de Abasto y Tablada. ción de Montevideo.
He
aquí
—
Carne consumida por
número de animales introducidos a
el
Abasto y Tablada de Montevideo durante \? administración Latorre:
los
Vacunos Ovinos
dos
los
pobla-
la
Corrales de
últimos años de
1878
1879
281,086
272,fi40
78.184
66,784
20,085
28,385
Mulares
4,344
5,165
Cabrios
7,664
6,191
2,830
2,859
Yeguarizos
Porcinos
.
.
„
.
El consumo de ía población de Montevideo absorbió en el primero de esos años 93,051 vacunos, 59,918 ovinos, 7,66.4 cabríos y porcinos;
2,830 6.191
cabríos
y
en
segundo 82,622
el
vacunos,
60,637
ovinos,
y 2,859 porcinos.
matanza de vacas.
I^a
Por un decreto vacas
de
1877
multa por cada animal das
prohibió
la
dictadura
la
—
decía
consigo
el
el
decreto
faenado.
—
decrecimiento de
La
carne
de las
es nociva a la salud la
y
la
vacas
preña-
matanza trae
riqueza pública «por cuya conserva-
ción deben preocuparse seriamente ios mandatarios». lidad,
matanza de
en estado de preñez, bajo apercibimiento de cien pesos de
En
la
actua-
agregaba, son reales las garantías de las propiedad particu-
Anales de
habiendo
lar,
«desaparecido
los
a los hacendados a sacrificar exponerlos viles
los
contingencias
las
a
Universidad
la
83
motivos que obligaban con razón ganados y sus productos para no guerras
periódicas
nuestras
de
ci-
y a la continua rapacidad de los matreros».
Pero
peligros
apresuró a exponer
Rural se
Asociación
la
nientes y
Los estancieros
decreto.
del
—
inconve-
los
—
decía
entre-
garán sus vacas preñadas a vil precio a los saladeros riograndenses; construirán potreros segurísimos para impedir la fecundación, y destinarán al consumo un número grande de terneros lo que la matanza de vacas preñadas, porque reducirá la prima de los saladeros. Y el Gobierno, volviendo sobre sus pasos, derogó el decreto prohibitivo.
será peor que
materia
Mortandades de ganado en 1877, 1878 y 1879. Durante casi toda
una
intensa
haciendas
Las ta!
sequía, se
forma que
los
del
de
ese
seguida de
desparramaban por
los
podían invocarse contra
Código Rural que épocas
normales.
de ganado.
a.biertos,
relacionaba
esa
los
y
sequía
el
resultados
los
Néstor de
con
otras
en
artícu-
Don Juan Antonio Porrúa,
Domingo Ordoñana llamaba
uruguayos,
campos
campaña
la
mortandades
fuertes
Gobierno se vio precisado a suspender
el
hecho en
quien don ros
administración Latorre sufrió
la
los
cuatro
a
estancie-
que ya
desparramo de la mitad de los ganados; la de 1831 que dejó cortado el Río Negro desde el Palmar para arriba; la de 1847 durante la Guerra Grande; y la de 1863 bajo el gobierno de Berro, en que se agotaron las aguadas y quedó reducida la alimentación de los ganados a los cardales de la campaña. Fué sobre todo en el ganado ovino donde la mortandad hizo había sufrido
el
país:
la
de
1807 que causó
el
mayores estragos, y examinando sus causas decía el mismo señor Ordoñana que después de la crisis lanar del año 1869 en que los 28 millones de ovejas que tenía el país quedaron reducidos a la tercera parte, había empezado durante la administración Latorre, gracias a la paz y al cierre de las estancias, un movimiento de repoblación que luchaba con la falta de pastos tiernos. Los forrahan vencido en muagregaba jes duros, leñosos ly amargos
—
—
chas
zonas a las gramíneas
mueren
las
Como su
turno
madres y
consecuencia la
tiernas
y
es
por ello que
las crías.
de
nuestros
Junta Directiva de
la
trastornos
políticos
—
ahora se decía
a
Rural en su Memoria de 1877
Anales de
84
—
Universidad
la
surgieron cuadrillas de vagabundos
punidad y falta de estancias
estallaron
y
ganado ovino, hasta reducirlo a ello
el
recriar
rural
país
y decimos
rigió
de
el
Es necesario
haciendas.
son en favor de las invernadas».
Oficina de Estadística don Adolfo Vaillant di-
la
sus
de
calidad
la
las
«Por efecto de
parte.
más
lo
recio
de
planteles,
crisis
la
nota en que demostraba a nuestros estancieros
mejorar
im-
la
porque las tendencias que se han des-
Latorre en
coronel
al
tercera
la
despoblado
está
recriar
arrollado últimamente
El Director de
favorecidos por
ciue
como cuereadores sobre diversas epizootias que han diezmado pesaban
policías
siguiendo
la el
una
lanar
conveniencia de
ejemplo de
la
Australia.
El
mercado
Francia
de
—
decía
—
recibió
de
Montevideo
9.692,196 kilogramos de lana en 1868 y solamente 5.150,938 en 1875,
y de la Argentina 24.374,330 y 18.035,328 kilogramos en esos
la estadística
la
estaáistica francesa. Por su parte
uruguaya acusa
la
exportación general que subsigue:
los
Kilogramos
Kilogramos
de
lana
de cueros lanares
Valor oficial $
1872
.
16.256,839
3.164,144
4.394,955
1873
.
16.025,530
3.054,976
3.979,110
16.947,001
3.166,147
3.952,474
10.127,943
2.106,835
2.856,915
17.146,005
3.469,374
3.159,70»
1874 1875
.
.
1877
.
Nuestros principales compradores Vaillant
—
mis-
datos de
m.os años, spc/ihi
Francia,
son Bélgica,
dje
lana
Estados
—
agregaba
el
señor
Unidos e Inglaterra, y
véase la oscilación de sus compras de 1875 a 1877:
1877
1875
Bélgica
Francia
.... .
Estados Unidos
retroceso
.
...
Inglaterra El
.
de
las
Kilogramos
3.994,183
6.632,157
»
2.685,669
5.188,185
»
560,478
2.244,119
»
1.339,278
416,020
compras inglesas emanaba según
el
señor
Vaillant de la competencia de las lanas australianas.
El coronel Latorre pasó la nota del señor Vaillant a la Asocia-
Anales de
Rural con
clon
la
Universidad
85
recomendación de que estudiara el problema y el plan de medidas que juzgara conveniente
aconsejara al Gobierno cen
—
Es necesario
implantar.
reaccionar contra
a
agregaba
—
que
sistema
de
la
el
los
estancieros empie-
cría
a campo abierto:
nuestra industria se desarrolla todavía como en mitivos;
todo
espera de la bondad de
S2
los
tiempos
pri-
nuestro clima y de la
feracidad de nuestro suelo!
Marcas y señales.
La Asociación Rural abordó en 1S76
el
estudio de los proyectos
marcas y señales propuestos por don Faustino Méndez, don Murtín Menchaca y don Pablo Nin y González. Una subcomisión de su Directorio, compuesta de don Remigio Castellanos, don Lucio Rodríguez, don Aníbal Méncijez y don Juan Sampere, concretíiba así el plan de medidas resultante de ese estudio: Se establecerá de inmediato la Oficina General de Marcas y Señales. Las Juntas y Jefaturas, que hoy intervienen en la expedide
ción
y
reconocimiento de marcas y señales, nombrarán delegados
encargados de organizar
el
registro
general y
redactarán
el
pro-
yecto de reglamento de la oficina bajo la dirección de una Comisión
que designará
el
marcas en
departamentos. La misma Comisión, presidida por
los
Gobierno. Se prohibirá la expedición de boletos de el
Jefe Político de la Capital, decidirá las dudas o controversias que se
No se recargará con nuevos impuestos a la La Oficina Central formará el registro general.
susciten.
ganadera.
La Junta titutivo
sejar
al
Directiva,
presentado
por
luego de examinar
don
ese
proyecto
industria
y
el
sus-
Enrique Artagaveytia, resolvió acon-
Gobierno que restableciera
la
Oficina
Central de Marcas
y Señales creada en 1862 bajo la dirección de don Juan Ildefonso
Blanco; que cada Jefatura de Policía levantara el padrón de las marcas y señales de su departamento y con sus datos a la vista formulara la Oficina Central los registros departamentales con todas las observaciones pertinentes; que se publicaran las marcas y señales y se resolvieran los reclamos por comisiones de estancieros; ?iue
se
que se declarase en uso
los
sistemas de numeración progresiva
fueran aprobados por la Asociación Rural; que por cada marca
abonara
al
inventor la cuota de dos pesos, y que una vez
sueltos los reclamos se procediera a
ia
formación del registro
re-
ge-
neral.
Todas esas indicaciones fueron trasladadas a un decreto que se
Anales ie
86
de
principios
a
dictó
1877
y
Universidad
la
pocas semanas después empezaba
a
funcionar la Oficina Central y a ponerse en movimiento todos sus en los departamentos.
resortes
La Asociación Rural abordó más tarde
estudio
el
del
sistema
don Pablo Nin y González y resolvió aconsejar al Gobierno su adopción. Cada signo representaba un número y cada marca una cantidad que no podía repetirse porque la
marcas propuesto por
de
numeración era progresiva, evitándose con ello entonces de la existencia de marcas iguales.
el
hecho frecuente
caza de avestruces en las estancias.
IjH
Los Jefes Políticos de Salto y de Minas se dirigieron en 1877 Ministerio de Gobierno, recabando medidas encaminadas a evi-
al
Los cazadores mataban al avesplumas y en concepto de ambos funcionarios debían construirse rondas o mangueras que permitieran obtener el tar la extinción de los avestruces.
truz para extraer sus
mismo
resultado sin sacrificar
Pasado y
así
zara
resolvió
lo la
el
animal.
asunto a informe de
el
Gobierno
el
en mangas
caza
o
Sociedad Rural, ésta pidió
la
—
—
que en adelante sólo se autori-
bretes
especiales,
quedando prohibido
todo otro procedimiento capaz de matar o damnificar al avestruz.
Se
resolvió
ves fuera
asimismo que equiparada
al
la
destrucción
robo
de
de las
nidadas de hue-
animales y castigada
con sus
mismas penas. Les señores Galcerán y Giri pidieron y obtuvieron en autorización para
explotar la industria
en
que construirían con autorización de los estancieros. Tres años después la Sociedad Rural, reaccionando plan,
zada
pidió la
y
obtuvo que desde 1880
el
acto
mangueras apropiadas contra
ese
en adelante quedara autori-
matanza de avestruces, fuera de
les
meses de setiembre a
febrero en que la prohibición se mantenía.
La Agricultura.
—
Tentativa para organizar la enseñanza agro-
nómica.
ün la
decreto de marzo de 1876,
administración
mica» bajo que tuvo
1::
Latorre,
creó
dictado
una
en
los
«Dirección
primeros días de General
Agronó-
dependencia del Ministerio de Gobierno. Ese decreto, Asociación Rural quedaba encargada de reglamentar, no la
vjecución.
Anales de
87
Universidad
la
siguiente dispuso que mientras no Otro decreto dictado al año funcionaría como Ministerio de Agricultura, se estableciera el Comisión de ese nombre Comisión Central de Agricultura la Económico-Administrativa de Monteviorganizada por la Junta Departamentales in.«
,
„
,
Castro compuesta de don Agustín de don Torre, la Méndez, don Luis de romo Director, don Gualberto Rodríguez, Lucio Alberto Capurro. don Blas Vidal don Juan Juan don Modesto Cluzeau Mortet, don Canstatt. Alejandro don Juan don Várela, A. Jacobo don Mac Coll. don Pedro Margat. Sáenz de ZuAlejandro don Montano y Meckerberg don Manuel prograredactó y publicó de inmediato el Central,
Comisión
La
marán como
vocales,
cul-
la enseñanza agrícola, los de sus trabajos, que abarcaba vialidad y los mercados, el crédito tivos y las maquinarias, la epidemias de los animales y de los agrario, la inmigración, las aguas, los impuestos y exenvegetales, el aprovechamiento de las ferias las y los concursos agricultores, los CM.nes a favor de
ma
—
—
agregaba el informe agrícolas e industriales. La Comisión dirijan los agricultores; prac.tenderá cualquier consulta que le que se le envíen; insterreno análisis de las muestras de ticará
un químico experimentado que talará un laboratorio a cargo de su trabajo. Y advertía que por retribución cobrará una .pequeña de viña para vinificaví> había pedido al extranjero sarmientos maíz, de morera, de olivos, semillas de trigo, de ción,
de
plantones
quina,
de
lúpulo,
de
de sésamo, de colza, de acacia, distribución entre los agricultores. gestionó y obtuvo un decreto
índigo,
tabaco habano, para su Ampliando luego su programa, premios: G.OOa pesos gubernativo que concedía los siguientes oliprimer agricultor que presentara 6.000 y medalla de oro al l.oOO uno;... cada de 8 metros vos de cuatro años a distancia olivos... 750 y medalla de oro al que presentara 3.000
áe
pesos y
3.000 pesos y de 4 distancia a pinos laeduUa &'' oro al pinos y 375 al metros uno de otro; 750 al plantador de 5.000 de oro al que medalla plantador de 2'5ü pinos... 3.000 pesos y de distanmetros tres presentara 20.000 moreras de 3 años y a moreras; 375 al 10.000 de plantador cia una de otra; 750 al de oro medalla pesos 10.000 y moreras... plantador de 5.000 años y a 4 meplantador de 100,000 árboles maderables de S
medalla de oro
al
que presentara plantador
1..1
de
1,50'0
10,000
olivos...
Anales de
88
ürdversidad
la
tros de distancia; 2,500 al plantador de 50,000 árboles; 1,250 al plantador de 25,000 árboles... Y premios y medallas análogas para el primer destilador de 2,000 litros anuales de aguardiente
40 grados arriba, al primer fabricante de aceite de plantas
d'?
oleaginosas
produjera
que
240
hectolitros,
primer
al
fabricante
primer plantadcr de tabaco que obtuviera 22,000 kilogramos, al primer productor de l,00i0 hectolitros de vino, al primer fabricante de 140 hectolitros de aceite de oliva, al primer establecimiento de ela220.000: kilogramos,
de azúcar que obtuviera
boración brutos,
productos
de al
primer
con
cerdo
de
establecimiento
al
de
capital
pesos
40,000
modelo
agrícola
con
capital
al iniciador del primer sistema de irrigación, dueño de la primera cremería con producción bruta de 4 0,000 pesos, al dueño del primer plantel de mil avestruces domesticados en cercos para la fáicil explotación de la pluma... y 10,0 00
de 100,000 pesos,
al
pegos anuales para premios generailes que se adjudicarían mediante la
de ferias y concursos.
celebración
Otro beneficio acordó en esa cportunidaid
dictadura:
la
la
exen
tión de derechos de exportación a los productos agrícolas y rurales.
Por un cuarto decreto del mismo año 1877 pisn <1^
experimental propuesto
escuela
de
Agricultura para
el
— recaído
por
al
pie de
Comisión
la
un
Central
estudio práctico d? les sistemas y métodos
raodernos de agricultura y para el estudio y mejoramiento de las resolvió el Gobierno la creación de una granrazas ganaderas,
—
•
ja
experimental en una fracción de tierra municipal ubicada en
el
Cerrito, destinando a ese fin la cantidad de 30,000 pesos.
estudios
durarían
teórico -prácticos
do.s
un diploma de perito agrónomo. En Montevideo
más un
curso teórico de
dencia de la
Agronomía
Comisión Central
años y que daría derecho a perito agrónomo.
No
se
abriría ade-
y Zootecnia bajo la depen-
Agricultura,
obtención
del
que
duraría
dos
mismo diploma de
se estableció la Granja. Pero funcionaron de inmediato los
cursos teóricos:
el
dt Cominges, y
el
Miguel Muñoz. gar en
el
A
de agricultura general a cargo de don Juan de Zootecnia
los
mes de diciembre,
de los estudiantes,
planteamiento de
y Veterinaria
exámenes de
la
fin
a
cargo
7i8
aunque
éxito,
Granja Experimental.
las
lu-
Los estu-
renovándose entonces por sin
don
de
de curso, que tuvieron
asistió el coronel Latorre.
dios teóricos continuaron en I8 ciativa el
de
la
Los
darían derecho a
años y
gestiones
ini-
para
Anales de
A
la
Universidad
89
de la Comisión Central de Agricultura fué creado empleo de Inspector General de Agricultura para utilizar los serviciois del doctor Rene Sacc, autor de varias obras, que había sido contratado por el Gobierno del Brasil para erigir una
pedido
luego
el
que no llegó a instalarse. El doctor Sacc quedaba obtligado a dar conferencias de divulgación y propaganda en Montevideo y en los departamentos. To'do ese andamiaje fué cayendo poco a poco. Los cursos teóricos dejaron de funcionar faltos del campo de experimentación escuela agrícola
lue año tras año con tanto empeño se había buscado.
ma Comisión
quedó envuelta en
el
en 1879 para conjurar su
Y
la
mis-
Central de Agricultura, alma de todos los trabajos,
plan de economías a que recurrió Latorre crisis financiera
la
de las postrimerías de
administración.
De
concursos programados apenas alcanzó a realizarse
los
Exposición-IFeria del Salto, en enero de
la
1879, bajo la dirección
la Comisión Departamental de Agricultura, de acuerdo con un programa en que figuraban 5 secciones: la de sustancias no
de
elaboradas destinadas a
la
alimentación,
la
de sustancias desti-
nadas a la industria, la de productos de las industrias nacionales, la de productos elaborados destinados a la alimentación y la de bellas
artes.
La exposición nacional que
se
proponía realizar
mismo año
el
Sociedad Rural, y para cuya celebración había pedido Latorre a la Asamblea un crédito de 2 0,000 pesos, quedó pendiente la
de ejecución por efecto de la crisis financiera.
Corresponde a esta misma racha de mejoramiento agrícola la de la Escuela Agrícola de Palmira, bajo la dirección del agrónomo español don Juan de Cominges. El Gobierno invirtió allí fuertes sumas sin resultado práctico, como que jamás creación
llegó
a funcionar ese establecimiento.
ICstadísliíii
íjt;ríc<)lu.
La Comisión de Agricultura levantó en 1877 un censo agrícola con los siguientes resultados:
Número tevideo y
Número
de propietarios:
15,36i4,
correspondiendo 1,618 a Mon-
13,746 a los departamentos de campaña. de arrendatarios: 9,951, correspondiendo
750
a
Mon-
tevideo y 9.2 01 a los departamentos de campaña.
Número de peones: video y
18,429,
correspondiendo
2,347
16,082 a los departamentos de campaña.
a
Monte-
Anales de
90
Universidad
la
38,265 (10,685 de material y 27,580 correspondiendo a Montevideo 2,767 y a los departa-
Construcciones rurales: de barro)
mentos de campaña 35.498. cultivada:
Superficie
202,291
Montevideo y 201,185 a
a
los
correspondiendo
hectáreas,
l.lO'í
departamentos de campaña.
En la superficie cultivada figuraban 2*4,2, 541 pies de viña, correspondiendo 191,846 a Montevideo y 50,695 a los departamende campaña. Había además 1.826,902
tos
2.529,349
y
árboles de
árboles
diferentes
frutales,
559,168
eucaliptos
especies.
La proflucción agrícola de varios rlepartameiitos. La siembra de trigo del departamento de Canelones abarcó en 1877 una superficie de 59,122 cuadras, habiéndose empleado en ella 45,430 fanegas de semilla. La cosecha dio 310,913 fanegas, LGuivalente a 6.84
con relación a
una
có
la
con relación a
semilla empleada y a 5.26
la
superficie sembrada.
superficie
de
cuadras
59 146
La siembra de y
absorbió
187i8
40,831
abar-
fanegas
de semilla.
La de maíz 42 142 cuadras y 2,902 fanegas de semilla con una cosecha
en
1878
de
207,012
lación a la semilla y 4.9
1
fanegas,
equivalente
con relación a
la
a
l|o
7
con re-
superficie sembrada.
En conjunto
101,2'88 cuadras trabajadas por 4,842 agricultocon un rendimiento bruto de 1.347,000 pesos, según la estadística levantada por el Jefe Político del departamento don res,
Mariano Berro. La estadística de Maldonado levantada por don Elias Devincenzi en el mismo año, demostró la existencia de 88 chacras en explotación con una superficie de 3,780 cuadras, y de 53 chacras sin cultivo alguno con una superficie de 7,480 cuadras. Re-
además la existencia de 1,312 cuadras de obacras y terrenos absolutamente abandonados o sin poseedores. Otra estadística más general del mismo departamento, levan-
veló
tada por tes
la
Comisión de Agricultura en 18 78, arrojó
los siguien-
resultados:
Numere
de
arrendatarios
propietarios
607,
de
superficie
bienes
raíces
entregada
al
1,524,
número
pastoreo
de
1.441,000
cuadras, superficie destinada a la labranza 15,26!l, casas de material 616, casas de terrón 1,9'35, cabezas de ganado vacuno
327,923, de ganado ovino 396,154, de ganado yeguarizo y caba30,176.
llar
Anales de
La
Minas, levantada por
de
estadística
üniveisidad
la
ese departamento en 1S78, reveló
de trigo y una cosecha de
de cosecha en
Álbum
de
en
pública
6'3,4!97' al
í.a
Sociedad Rural de
una siembra de
fanegas
l,0i3 3
contra 1,040 de semillas y 7,720
7,0'6'6,
año anterior.
el
Uruguay» destinado a la Exposición ContinenBuenos Aires fijaba en 18 8 2 los cultivos de toda la Re-
«El tal
la
91
del
hectáreas,
211,569
maíz,
correspondiendo
96,249
manera de trabajar
al
trigo,
demás siembras.
a la cebada y 4^9,042 a las
2,i8i8il
la tierra.
Don Arsemio Lermitte,
el
más competente
y prolijo
de
nues-
tros corredores de cereales, decía que los agricultores uruguayos podían clasificarse en dos grupos, por la manera de trabajar la
los
tierra:
del
grupo
primer
encabezados por
canarios,
Zo.s
arañaban superficialmente la tierra hasta 12 o 15 centímetros, obtenían un rendimiento medio de 6 por 1 en cada cuadra de trigo y vivían en ranchos pelados; los del segundo grupo iban hasta 22 y 24 centímetros, obtenían rendimientos muy superiores y vivían en casas confortables con alguna arboleda y un complemento
de El
cerdos,
gallinas,
etc.
rutinario,
agricultor
agregaba,
que cultiva 12 cuadras de
que emplea 12 fanegas de semillas, recoge 6 fanegas por cuadra, que a razón de 3 pesos cada una arrojan un ingreso 207.60, anual de 216 pesos. Sus gastos pueden calcularse en distribuidos en esta forma: alimentación para el labrador y su tierra y
.$
familia ía 3 $
(a 7
pesos cada persona)
84 pesos;
gastos de la siega
36 peso?;
pe;-os)
$
12 fanegas de semillas
gastos de trilla
28.80;
contribuciones, desgastes de herramientas, 5 pesos;
43.80;
damiento 10 pesos. Ganancia líquida
$
8.40...
emplea procedimientos adelantados sólo emplea
El 9
arren-
agricultor
fanegas
de
que se-
milla y obtiene en cambio una casecha de 144 fanegas equivalentes a
432 pesos. Ese agricultor se alimentará y se tratará
mucho me-
que su colega y chtendrá asimismo ganancias muy superiores. Sus gastos pueden calcularse en $ 321,20 así distribuidos: alimen-
jor
tación
del
pesos;
9
jrastos
de
bueyes,
agri('ult(;r
fanegas de trilla,
etc.,
lo
$
su
y
72.60;
pesos;
familia
semilla,
27
(a
pesos;
12
pesos gastos
por persona),
de siega,
$
144
57.60;
contribuciones, desgastes de herramientas,
arrendamiento, 10 pesos. Ganancia
$
110.80,
rparte del maíz y de las papas, frutas, leche, huevos y aves de su granja.
92
Anales de
•
Vale la pena de destacar
hecho de que no obstante
el
técnicas de la explotación de esa época,
ciencias
tevideo
universidad
la
reputado como
era ya
primero de
el
y obtenía a ese título medalla de oro en
Colonización
A
fines
con
«Todavía
no
el
se
que
t'-anjeros
tan
han
ex^^elentes
existentes
de
concurso
una circular gubernativa a tierra,
Sur
del
Exposición Universal
Gobierno autorizar a
el
algunos
colonizar
departamentos rios.
de Mon-
campaña.
la
(le
de 1876 resolvió
para
America
¡a
defi-
las
año 1878.
de París del
ticos
la
trigo
el
entre
los
campos
de
los
habituado Jefes
los
respectivos
nuestros Políticos
rendimicntas nosotros y
paisanos
—
ofrece
liay
Jefes
los
fiscales
que
a los
sus
viecinda-
—
cultivo
al
Polí-
de
decía
de
colonos
inculcar
en
la
ex-
ellos
hábitos de trabajo para que sigan ese ejemplo».
Era un plan que respondía a
aspiraciones
las
de
la
campaña,
víctima en esos momentos de los millares de agregados arrojados
de las estancias por efecto de
construcción
la
de cercos y de la
consiguiente reducción de las peonadas.
En 1877 se organizó una comisión popular para la fundación de una colonia nacional con esos elementos dispersos. Más tarde algunos Jefes Políticos, el de Tacuarembó entre otros, pidieron y obtuvieron la adjudicación de campos fiscales con idéntico destino. Pero Latorre terminó su mandato sin realizar el plan fecundo que le habían sugerido los hombres progresistas de la Asociación Rural.
llí-tado
(lo
algunos
centi'o.s
agrícolas.
La Colonia Nueva Helvecia Jefe
Político
del
tenía
Departamento,
una superficie de 15,000 cuadras: al
en 1876, según
una
población
3,125
de
destinadas
ei
informe del
1.300 al
almas y
trigo,
2,900
maíz, 80 a papas, y 8,895 al pastoreo.
Esa colonia y la Valdense y la Española abarcaban en 1878, según los datos publicados por el Presidente de la primera don Federico Fisher, una superficie de 14 leguas cuadradas y una población tif 5,130 habitantes, que se clasificaban así: suizos 1,700. alemanes y
austríacos
La
150,
piamonteses
1,870;
canarios
1,200,
franceses y
ingleses y norteamericanos 34, otras nacionalidades 150. exportación oscilaba de 80 a 85,000 fanegas de trigo y maíz.
belgas
25,
Anales de
la
Universidad
93
—
decía don Modesto Cluzeau Mortet a raíz de Cada familia posee una casa de una jira de inspección por la Colonia Suiza material muy confortable, extremadamente limpia, con acopio de
—
provisiones y objetos para hacer agradable la vida, jardín, árboles frutales,
gallinas,
Más
norte
cerdos, vacas
lecheras, etc.
empezaba a desarrollarse la Colonia Porvenir en departamento de Pa/>'sandú. El número de sus habitantes era
el
al
de 244 en los comienzos de
Obras
irrigación.
(le
Un decreto -ley
año
del
1877,
que antes hemos
de
sequía
Dictadura.
la
exención de
la
dictado
hablado,
contribución directa
en
lo
acordó
durante
el
más crudo de
la
de
la
beneficio
el
plazo
de
10
años
a los capitales invertidos o que se invirtieran en canales, asequias,
pozos artesianos y demás obras de riego, y a las mismas tierras regadas.
Al publicarse ese
don Enrique
decreto
que había entregado a dió
que su ejemplo
agricultores
1876
la
el
don Domingo Ordoñana que
primer
propietario del
Uruguay
irrigación
100
cuadras de campo y
imitado
por
todos
fuera
los
estancieros
se
—
Carbón de piedra,
procedió al estudio
del
oro,
Cerro de
que
sultó
y
cobre y mármol.
subsuelo de los alrededores
Melones por una comisión compuesta por señores Arechavaleta, Honoré, Lamoile y Vald Hansem, en la peranza de encontrar carbón de piedra. Del examen practicado del
pi-
progresistas.
Diversas industrias.
En
advirtió
Artagaveytia era
los
allí
no había
lo
que se buscaba, pero
sí
los esre-
óxido de man-
ganeso que podía explotarse. Al año siguiente fué nombrada otra comisión compuesta de don
Mario
Isola,
don José Arechavaleta y
los
señores Fariña y Murac-
para practicar análogos estudios en la Sierra de Ríos y on alrededores de Meló, arribáindose a conclusiones muy optimis-
ciole, lo;.-
tas
que
indujeron
perforación,
al
Gobierno a ordenar sondajes y trabajos de practicados hasta alcanzar una profundi-
que fueron
dad de 110 metros, sin llegarse a resultados definitivos por efecto de la crisis financiera que sobrevino en 1879.
Cuando así se paralizaban los trabajos relativos al carbón de tomaba incremento la explotación de la.>í minas de oro de
piedra,
94
A7iaies de la
Universidad
Cuñapirú, gracias a los estudios practicados sobre
terreno por
el
ingeniero francés Olivier y a la organización de una compañía
e!
importante que en
el acto .levantó fondos que permitieron poner en movimiento un personal de 300 trabajadores. Los yacimientos de cobre de la Mina del Soldado del Departamento de Minas entraron en actividad durante la Dictadura como
consecuencia
de
los
favorables
análisis
practicados
y del aporte de algunos fondos de explotación. Otra del
mismo departamento,
la
en
Inglaterra
mina de cobre
de Eepuelitas, estuvo también a punto
de entrar en actividad, llegándose a organizar una empresa con capital de 10,000 pesos. Pero tampoco en este ramo se adelantó gran cesa.
Nuestras canteras de mármol dieron a su vez grandemente qué motivo de una carta de Bon Rafael de Peñalver al
hablar con
doctor Francisco Autouiíio Vidal, a raíz de la Exposición Internacional de París de 1878, en la que le decía que uno de los más
importantes peritos de Francia, que había examinado el muestrario del Uruguay, opinaba que había allí ejemplares superiores a los
mármoles
La
del
Jura.
industria molinera.
A
principios
de 1879 se presentaron
Gobierno
al
consignatarios y exportadores de harinas en
Decían que su industria estaba estancada y para pro-
protectoras.
barlo
invocaban
el
valor
1S78 que se descomponía
oficial
de
exportaciones
las
Maíz
S
Harina Nuestra industria molinera
para
la
más
ricas
—
decían
de América por
para
moler
tres
$
y
163,406
17,374
5,360
491,441
470,785
—
que podría figurar en-
calidad
la
buena molienda, languidece por
instalaciones
1877
1878
312,452
Trig-o
las
de
así:
1877
tre
molineros,
los
demanda de medidas
de
sus
falta de trabajo.
millones
de
hectolitros
elementos
Tenemos de trigo.
Los doce molinos a vapor que funcionan en el Departamento do Montevideo pueden ellos solas moler mucho más del trigo que produce el Uruguay. La cosecha de 1878 no excedió de 900,000 hectolitros
y la
de
1879
no excederá de
800,000.
El
consumo
ab-
Anales de
scrbe
500,000
y
resto
el
es
Universidad
la
que
lo
se
de ese trigo no da trabajo a la cuarta
Tenemos
país.
ellas grandes,
además y
La
elaboración
parte de los
molinos del
exporta.
fábricas
veintitrés
de
de
tres
fideos,
ocho destilerías, que necesitan materia prima que
producción nacional no alcanza a sembrar.
la
95
Han
corrido ya tres
años de esperanzas malogradas por faita de producción. La molineprogresa
que
argentina,
ría
un
de
modo asombroso,
va
se
apo-
derando del mercado del Brasil que siempre habíamos alimentado nosotros con harinas de superioridad reconocida. Hasta hace cuatro
años
Uruguay surtía de
el
argentinas,
cias
que hoy
trigo
lo
y
a las mismas provin-
harinas
desalojan
de los mercados del Brasil
y de Europa.
Como remedio que
fuera
bajo la
mal proponían
al
declarada
libre
exportar sus
de
obligación
los""
molineros
importación
la
de
productos
exportadores
y
extranjero,
trigo
dentro
plazo
del
de
meses.
6
Ya
la
Dictadura haína terminado y Latorre pasó
antecedentes
los
Cuerpo Legislativo, donde quedaron empantanados.
til
Un nño
antes la
clón de
Dictadura,
había impuesto a
uiolinero:,
estampar er
los
respondiendo a otra gestión de
los
exportadores de harina
la
envases la calidad del producto y
los
obligr.el
nom
tre de >u fabricante. El decreto invocaba las abusivas clasificacio-
nes a que recurrían algunos
especuladores de harina
en
perjuicio
mercado productor.
del
Varios
industriale.s
ensanchan
ol
campo
de
producción na-
la
cionaL
Don Francisco
Vidiella
granja de Colón tenía ya
expresó
al
Gobierno
plantados 5,000
olivos
en y
1876
que
su
50,000
pies
de
cepas.
Don Juan José de Arteaga realizó en 1877 en su chacra del Pantanoso varios plantíos de tabaco que según las informaciones de la prensa se asemejaban mucho a los de La Habana. Don Alfredo Trianón
estableció
una fábrica de salazón de
pes-
cado que empezó dando excelentes resultado.^ pecuniarios. El de
señor
ostras
Renaud, que gestionaba una concesión
en
las
costas
de Maldonado y
Rocha,
para
trajo
varios ejemplares de ostras y mejillones con destino al esa
rama de
la
riqueza
la
pescí
Europa fomento de de
pública.
Los señores Carrió instalaron en Pando una destilería de alcohol
Anales de
96
universidad
la
a base de maíz y de cebada, coa una capacidad productora de 500 diarios.
litros
trajo de Río de Janeiro con destino a su
Don Federico Ugarteche
chacra del Salto un centenar de naranjos de las mejores varieda-
obteniendo frutos
des,
En
un
tenía
1877
daba excelentes
que diferían muj- poco de
monte de
gran
naranjos
reveladores
productos,
de
del
los
Brasil.
años
6
que
le
ya del notable incremento
habría de tener esa industria en la zona norte de la República.
(¡ue
Don Carlos Martín
obtuvo autorización para establecer
solicitó y
en las cercanías de Punta del Éste estanques artificiales para la
marina.
de sal
extracción
Sacc resultaba que
magnesio,
do
0.60
y
practicado
de
por
0.16
sal,
el
doctor
de sulfato de
magnesio, áe potasio y bromuro
cloruro de
doctor Sacc, es casi
fico
2.35
de
trazas de sulfato de cal, y 96.89 de agua. Esa agua, decía
potasio, e!
Del análisis
agua tenía
el
e.s
Una
mái
sociedad
tan
en sal como
rica
la
del
Océano Pací-
en sulfato de magnssio.
rica
anónima estableció, bajo la denominación de CaHoffmann, una fábrica de cal y tierra romana
lera a vapcr s'stema
de bastante importancia para las necesidades de la época.
Den Juan
Irigaray, fuerte barraquero do la Colonia, que deseaba
implantar un gran establecimiento de elaboración de
humo
negro de
nas,
destinados a
les
la
de las garras de
que necesitaba
colas,
galati-
animal, lavaje de lanas y secamiento de cerea-
exportación,
solicitó
huesos,
cueros,
importar de
la
lanas
exención de derechos a favor y
demás materias primas el compromiso de
Argentina, bajo
exportar los productos elaborados previo pago de los derechos cales la
correspondientes.
alegando que
concesión,
boración de
La Administración de Aduana
la
señor Villalba,
barraca debía concr;.'tarse a
la
materia prima nacional. El Contador de opinó
en cambio que debía permitirse
ción libre de derechos, pero no en
de
Irigaray,
acogerse ley d(-
al
sino
a favor
beneficio.
Y
forma de privilegio
de todos los industriales que
así
lo
resolvió
el
la
la
ela-
Nación importa-
la a
fis-
opuso a
se
la
barraca
quisieran
Gobierno invocando
la
aduanera de 1875 al acordar a las barracas y establecimientos desecar granos y lavaderos de lanas y cueros, la facultad de
recibir del
bajo
el
secados
exterior lanas, cueros y granos con excepción del trigo,
compromiso de exportarlos limpios, acondicionados y abonando los derechos correspondientes.
de-
Anales de
la
Universidad
97
Explotación de montes naturales.
Los
de
estados
Receptoría
la
de
Mercedes
correspondientes
a
montes de las costas del Río Negro en 1877 y 1878, demuestran que las empresas concesionarias tenían en esa época bajo su dominio una exteBsión de 20 leguas que abarcaba toda la zona en que la profundidad de las aguas p-.írmitía el atraque de los barcos cargadores de leña. Durante de
la
explotación
el
primero de esos años entraron
los
una carga constituida rados
a
70
centesimos
209 goletas en busca de (afode carbón
allí
por
114,678
cada
uno),
hectolitros 1,395
estéreos
de leña
(afora-
cada uno), y diversas cantidades de plantillas para suecos, estacones para carretas y varas y trozos que en conjunto representaban un valor oficial de 85,412 pesos. Y durante
dos a
el
2,8
año siguiente
varas
brado,
y
una carga que
goletas con
de leña,
estéreos
5,563^2
34>8
constituida
pesos,
113,500
pcir
137,141
plantillas
se
hectolitros
estimaba en dej
carbón,
para suecos, postes de alam-
estacones.
una verdadera destrucción de ios montes naturales lo que denunciaban esos cuadros, que no comprendían toda la mad.3ra embarcada, sino puramente aquello que no podía escapar a la fiscalización aduanera o que voluntariamente anotaban los lEra
empresarios y consignatarios.
Las aguas del
Y
Negro.
ya que hablamos del río Negro, conviene también recordar
en esa
<]ue
río
misma época
el
doctor Serafín Rivas, presentó a
la
Rural un estudio de las aguas de dicho río en el que establecía que el químico Will de París, que había practicado su examen, las incluía en la clase de las sulfurosas y en Asociación
el
grupo de
las
sulfhídrico-sulfurosas,
acreditadas para
la
cura-
enfermedades sifilíticas y de la piel. Invocando su larga experiencia médica de veintitantos años, agregaba el doctor Rivas que las aguas del río Negro no satisfacían la sed, que a su contacto morían las plantas de huerta y de jardín, los manción
de
las
zanos y los naranjos, y enflaquecían los animales, y que para las personas débiles y sobre todo tuberculosas eran muy perjudiciales.
T.
VII -V.
Anales de la Universidad
9h
Premios internacionales.
En
Exposición
la
sección
Uruguaya
otorgado
al
de oro a
premios: por
Gobierno
ploma de esa índole llas
Internacional
118
el
conjunto
obtuvo
1878
la
de
la
(único
sección
di-
sudamericanas), cinco meda-
a las naciones
por sus lanas, a don Modesto
familia Jackson
la
de
París
de
uno de honor conmemorativo,
Cluzeau Mortet por su colección de productos agrícolas, al doctor Lucas Herrera y Obes por sus conservas alimenticias, a la Fábrica Liebig por sus extractos, a don Juan Latallaide por sus licores; 15 medallas de plata; 35 de bronce y 62 menciones honoríficas-
Esos premios fueron el
Teatro
distribuidos
en una gran ceremonia,
Solís,
de
18
el
a la
julio
de
Poderes nacionales y numeroso pueblo. dijo el coronel Latorre al abrir «La Repúbliica
—
el
sido
la
de expositores
porción relativa
la
lo3
—
acto
más favorecida entre todas las del continente americano, siendo mayor que el de ninguna el número de premios o medallas de oro que le han sido adjudicados y en
ha
en
1879
que concurrieron
sudlos
pro-
que ha obtenido también en
conjunto mayor cantidad de premios y menciones nonoríficas.»
En
febrero
s.jcciones
l^íarcas
En
18 8
terminar
al
0.
la
administración
Latorre,
en
transporte,
de
de
Paysandú una importante Exposición-Feria, con de agricultura, industria, artes, máquinas y vehículos
lugar
tuvo
productos
minerales,
ganadería
y
agricultura,
de fábrica y comercio.
1877 fué creado
el
registro de marcas de fábrica y de comer-
—
—
las decía el decreto Son marcas de fábrica o de comercio personas las nombres de los objetos o denominaciones de los bajo una forma particular, los emblemas, los monogramas, los grabados o estampados, los sellos, viñetas y relieves, las letras y números con dibujo especial, los envases y envolturas de los objetos y cualquier otro signo con que se quiera distinguir los cio.
artefactos de
La
Lijia
una fábrica
o
los
objetos de un comercio.
Industrial.
Los industriales resolvieron
en
1879
fundar una asociación
en-
Anales de
la
Universidad
99
nuevo organismo recibió caminada a proteger sus intereses. El fueron asi precinombre de «Liga Industrial» y sus cometidos 0,1 en los Estatutos: para propender al <^Emplear todos los medios a su alcance nacional ya exisindustria la desarrollo de todos los ramos de en el futuro se que otros aquellos tentes, fomentando todos abundantemenque primas materias las utilizar planteen, a fin de el bienestar de los Asegurar República... la de suelo te brinda el instruirse en cuanto los reartesanos, ofreciéndoles los medios de esfera a Asociación lo permitan y contribuir en su fcudos
de la mejoramiento de su posición todo aquello que pueda conducir al inteligentemente diritrabajo del ejercicio basado en el legítimo
cursos
gido.»
nuestras inRecién empezaba a acentuarse la diversificación de de 1875, proteccionista fabriles al amparo del decreto -ley
dustrias
orgamuchas personas entendían que faltaban elementos para trascendieron dudas Las Montevideo. nizar una liga industrial en propuso levantar una enla prensa y «El Telégrafo Marítimo» se
y
a
que no había tal escasez. Y lo consiguió, otros porque de uno de sus cuadros resultaba la existencia, entre grasecaleras, 1 establecimientos, de 4 alfarerías, 5 aserraderos, 7 viento, 5 molinos a agua, ría, 20 hornos de ladrillos, 15 molinos a
cuesta que demostrase
salademolinos a vapor, 18 mueblerías, 5 salazones de carne, 9 carruajes, de fábricas grasa, 10 velas jabón, y ros, 10 fábricas de alpargaterías, 5 fun11 fábricas de licores, 13 fábricas de fideos, 15 que sólo abardiciones, 19 curtidurías y 144 zapaterías; y de otro,
1.5
gacaba 60 establecimientos (ropa hecha, fidelerías, jabón y velas, que en aserraderos) lletitas, tabaco, licores, calzado, talabartería y
actuaba un personal de trabajo de 2,504 obreros.
Asociaciones obreras.
Los carpinteros de ribera formaron en 187 6 una asociación los cerrada sobre la base de un convenio en que se prohibía a asociados contratarse por menos de 3 5 reales diarios eu la bahía y 25 en tierra, bajo apercibimiento de 25 pesos de multa, conminaba a los patrones al rechazo de los servicios de obreen ros extraños a la asociación bajo apercibimiento de declararse
y se
nuelga los asociados.
Anales ie
üO
1
Cálculo
riqueza pública.
U»
tle
universidad
la
base las declaraciones para el pago de la Contribución Directa en 1S7 6, fijaba así la Dirección de Estadística el monto de miesti'a riqueza pública:
Tomando por
casas
11,752
de
propiedad
particular
edificar y tierras de labranza en el
un
con
afcro
de
total
pesos.
91.059,977
sin
terrenos
quintas,
y
departamento de Montevideo,
Y
fincas
2&,484
urbanas
y rurales, y tierras de pastoreo y de labranza en los departamentos de campaña con un aforo total de 81.9 5.8',83 7 pesos. Com-
putando
no declarados
bienes
los
en
(6.000,000
Montevideo
y
campaña), y aumentando en un 50 por ciento valor oficial, notoriamente bajo, de 3 pesos 7 7 centesimos la en
16.000,000 ei
hectárea de pastoreo y IG pesos 63 centesimos la de los de labranza, (40.979,418 pesos), resulta un valor territorial efectivo de pesos 236.598,232.
Valor de
ganados, 51.129,581 pesos.
los
un
(Capitales en giro, con
tación y avaluaciones
por ciento por concepto de ocul-
5
bajas,
3.3.67'5,9
42
pesos.
Valor del comercio de importación, aumentado en un diversas industrias
de
Capitales
puesto,
comercio de tránsito,
del
y
cieuto
33
que no paga
metálico
por
pesos.
im-
12.0'21,255 pesos.
En conjunto 355.000,000 por
y
21.574,9 90
de pesos, equivalentes a 806 pesos
habitante.
de
cabeza,
Adviértase que
el
censo
norteamericano de 18 70
arrojaba
la
cuota de 814 dólares por habitante.
Reparto de Los año
cuadros
1879 capital
Liv.
y
de
propietlad territorial.
la
de
la
demostraban de
26,659
Contribución pesos
97.319,200
contribuyentes
flepartamentos de campaña.
un
capital
existencia
la
en
En
el
un
con
Directa
de
correspondientes
8,276
contribuyentes
al
con
departamento de Montevideo capital
de
117.505,061
en
los
conjunto, 34,935 contribuyentes con
de 214.824,261 pesos.
Esos contribuyentes
se
distribuían
así
por
nacionalidadesf:
en Montevideo. 2,904 orieatales con un capital de 40.831,785 pesos y 5,3 72 extranjeros con un capital de 5 6.4/8<7,415. En los doce departamentos restantes, 12,450 contribuyentes orientales
con
48.780,592
pesos,
y
14,209
extranjeros
con
68.724,469
pe-
Anales de
En
&0S.
conjunto,
Predominaban bresaliendo S-í.
los
('Ilo.s
los
españoles
los
89.612,377
pesos
y
pesos.
como
extranjeros,
brasileños
(4,899 con 20.556,987);
101
con
orientales
125.211,884
fuertemente
entre pesos);
460,140
Italianos
(4,973
con 30.081,412
(5,684
los franceses
se
so-
ve,
contribuyentes
con
pesos);
los
(2,299 con 13.696,089)
(402 con 7.947,103 pesos).
y los ingleses
En
15,3 54
extranjeros con
19,581
Universidad
la
departamentos del norte era donde más
acentuaba mediados de 18 78 el recaudador de la Contribución Directa en el departamento de Tacuarembó don Isidoro Marfetán publicó un estado de las los
-jredominio
3l
declaraciones
de
los
prestadas
capitalistas
por los contribuyentes,
que dentro de un total de millones
de pesos
había
292 orientales con
se
A
extranjeros.
que
del
resultaba
propietarios con once y medio brasileños con 9.366,000 y sólo
2,0 74
1,541
1.632,000 pesos.
Tierras públicas.
Por un decreto de 18 7i8 estableció
la
Dictadura que
los
terre-
nos de los ejidos de los pueblos sujetos haista entonces a la docu-
mentación administrativa corriente, sólo podrían donarse por escritura pública. Invocaba el decreto la necesidad de dar al derecho de propiedad una seguridad permanente. Por un segundo decreto del mismo año quedó resuelto que las tierras
públicas
sobras
fiscales,
o
de pastoreo y de labranza, sólo
podrían
de tasación al tiempo de
enajenarse la
su
valor
entre
las
corriente
venta, derogándose así las dispo-
abusivas que permitían entregar
siciones
incluidas
por
Fisco
al
la
tercera
o
que se pagaba a los prapietarios particulares. También aboi-dó la Dictadura el estudio general de las tierras
cuarta parte de
públicas,
lo
inclinándose
a
favor
del
proyecto
presentado
por
el
Requena García a la Legislatura de 1873, con varias modificaciones que no eran de carácter fundamental. Los doctor
Joa.(|UÍn
poseedores de 10
años pagarían
6,000
pesos
por
suerte
de estan-
de 20 años pagarían 5.000; los de 30 años 3,000, y los de 40 años 2.0(00. Pero deberían presentarse dentro del plazo de un año. bajo apercibimiento de ser reputados detentadores de cia;
lOiS
tierra pública, perder todo derecho a los precios bajos establecidos y darse andamiento a las denuncias de terceros no poseedores. la
Anales de
102
Cuando tenminó
Universidad
la
estudio ya
ese
había concluido
Dictadura
la
y Latorre pasó entonces el proyecto a la Cámara de Diputados, donde fué rechazado a pesar del informe favorable de la Comi-
El coronel Latorre acababa de convocar extraordinariamente a la Asamblea para considerar diversos asuntos y contestó ese rechazo con un mensaje de clausura del pede Hacienda.
sión
extraordinario.
ríodo
después don Melitón Gonzáilez, que figuraba endel proyecto del doctor Requena y García, Cámara de Diputados un proyecto sustitutivo que
iPocos meses tre
partidarios
los
presentó a
la
el que se obligaba a todos juntamente con su declaración para
no alcanzó a discutirse, por
los propie-
tarios a presentar,
el
contribución
la
directa,
los
de pastoreo y de las tierras de labranza y
mismas
las
con
propiedades,
de
de 'propiedad
títulos
una
el
los
pago de campos
plano aprobado de
que
advertencia
prescribía
que en caso de existir excedentes gozarían los contribuyentes de un año para adquirirlos bajo apercibimiento de pasar al Gobierno
disponibilidad de esos excedentes.
la
Bancos y monedas. Varios
proyectos
fueron
durante
presentados
ción Latorre con destino a la fundación de el
la
administra-
un banco privilegiado:
de don Francisco Bauza en 1876 y 18 7 9 con capital de pesos que se obtendría mediante la enajenación de varias
20.000,000,
rentas;
el
10.000,000
doctor José Ladislao Terra con capital de pesos
del
que
pojd'ría
ser
suscrito
por
los
propietarios
de
bie-
de su capital y por los tenedores de títulos de deuda pública hasta las 7|8 partes de su valor; y el del
nes raíces hasta
el
50
'/
doctor Ángel Floro Costa y don Joaquín Belgrano. Pero aun cuando se discutió largamente acerca de en
país a
el
tado,
ambiente
todavía
existía
ni
en
la
Asamblea, ni
en
la
ellos,
prensa,
favor del establecimiento de un Banco ligado
al
no ni
Es-
y los proyectos quedaron olvidados.
La emisión de curso forzoso de 1875 extinguida por Pocos
fuego.
derrumbe de la administración Varel?, el ambiente la proclamación de la dicde Latorre, abordó la Comisión de Hacienda de la Cáma'a días
antes
pero cuando ya tadurr.
el
del
estaba en
Anales de
Diputados
de
ccn
radicales
con
ellos,
aconsejar
resolvió
la
anulación
la
convenio por falta
de autorización legislativa.
—
«Ese contrato
Poder Legislativo
—
Comisión en su dictamen
la
más gravosos que
de los el
decía
han estipulado hasta
.se
propó
los
de acuerdo
Comisión,
del
Gobiei-no
el
Se conocían ya
1875.
dictador en cierne y
del
103
celebrado por
convenio
del
Banco Mauá en octubre de
el
sitos
estudio
el
Universidad
la
el
uno
es
presente y
si
prestara su aprobación, dándole la validez
le
que hoy no tiene y elevándolo a la condición de contrato perfecto y obligatorio para la Nación, entonces se habría sancionado la ruina de la Hacienda pública, no sólo para
presente sino tam-
el
muchas de las futuras generaciones.» La ley a cuyo amparo había contratado el gobierno de Várela obligaba al Poder Ejecutivo «a dar cuenta a la Asamblea» y era bién para
mérito de esa frase, de alcance enteramente discutible, que
i¡
Comisión de Hacienda aconsejaba raba
al
orinando que lante
Mauá
habría
de
aportar.
Estado debía h:.cerse cargo de
el
proceder
y
la
censu-
Poder Ejecutivo por haber rehabilitado un Banco que esno nsber establecido el capital real y
en liquidación y por efectivo que el barón d3
taba
La Comisión
rechazo.
el
su
a
Y terminaba emisión circu-
la
exigiendo al Banco valores sufi-
extinción,
cientes para garantir la parte que era de su incumbencia exclusiva.
Proclamada
dictadura se procedió de inmediato a
la
la
rescisión
Banco Mauá. El Estado se hacía cargo de toda la emisión; entregaba al Banco por concepto de compensación 55 letras de 30,000 pesos cada una y otra de del
contrato y
20,000
ello
de acuerdo con
Aduana
por la
aceptadas
el
en pago de
cancelaba los anticipos cargados en su
prometía a no aumentar
derechos fiscales;
cuenta corriente;
com-
se
emisión inconvertible mientras no que-
la
dara extinguida la circulante en esos momentos:
y establecía que
impuestos de Aduana, alcabala y contribución directa creados por el convenio derogado, serían abonados en billetes al tipo ofi-
los
cial
día
del
que se entregarían a una Comisión
gada de extinguirlos por gaba a proseguir los
el
el
canje
El Banco por
fuego. o
sustitución
de
Especial
encar-
parte se
:ui
billetes
obli-
antiguos
por
de su propia emisión.
La Contaduría
General
practicó
emisión de que se hacía cargo 12.125,335 billetes
pesos
menores
Banco Mauá,
en seguida
que se distribuía 1.915,000;
2.571,000;
billetes
billetes
el
recuento de
Estado, llegando a la cifra
el
así:
billetes
mayores
5.000,000;
pendientes de sustitución por
que
el
la
de
Banco Mauá quedaba
el
facul-
Anales ie
104
tado para
universidad
en virtud
convenio
del
de rescisión
pesos.
2.639,284
Una
seguir emitiendo
¡a
vez instalada la Comisión Especial se dio principio al cum-
extinguiéndose por
convenio,
plimiento del
el
fuego todos
los
bi-
de los impuestos pagados en esa
percibidos por <;oncepto
lletes
especie y llamándose a propuestas para la venta del oro procedente
de
demás.
los
Vale
daba
pena de agregar que cuando el gobierno de Latorre abordesde sus comienzos el problema de la extinción del
la
así
papel inconvertible,
comunicaba a pendido
la
ratificaba
el
Gobierno de
las Cáaaiaras
que
conversión de sus suspensión,
esa
el
Provincia de Buenos Air3s
la
Banco
-Je
la
Provincia había sus-
y adjuntaba
"billetes,
un proyecto que
invocando en apoyo de ambas medidas
depreciación de les frutos del país en Europa, Ion cambios des-
la
favorables y las exportaciones de oro.
meses después, en setiembre de 187G, ya habían sido conel fuego 3.0'16,866 pesos y al fuego era entregado también por decreto gubernativo encaminado «a dar tranquilidad a Seis
sumidos por plaza»
la
todo
el
excedente del material de emisión encargado a
Estados Unidos por
el gobierno de Várela y pronto en el Banco para ser arrojadera la circulación. Otros tres millones de pesos quedaron extiuguidos por el fuego en 1877, y continuándose
Mauá
aunque en forma más moderada 1879,
último
lante
de
de
la
3.495,000
rescisión
la
A se
de
principios
extraía del
pesos
del
las
administración contra
convenio
de 1878
el
amortizaciones Latorre,
12.125,335
cerró
el
año
con un saldo circu-
que existían
al
tiempo
Mauá.
Gobierno dictó un decreto por
fondo amortizante 34,000
p,esos
el
que
mensuales' con des-
a otros compromisos del Estado, invocando que el papel moneda seguía rechazado por la plaza y excluido de los negocios y que sólo servía para las especulaciones bursátiles «en provecho ex-
tino
clusivo de un
corto
númiero de acaparadores».
estando ya en función
Y
a
fines
del
año
Cuerpo Legislativo, pidió autorización Latorre para reducir el fondo amortizante a 150,000 pesos anuales. Invocaba el mensaje la existencia de otros compromisos igualmente respetables y el hecho de que a pesar de los sacrif-iguiente,
ficios
ciado, tar
ei
que se imponía el Tesoro público el papel continuaba depreno se utilizaba en las transacciones y sólo servía para fomen-
las
es.peculaciones
bursátiles.
La Asamblea,
sin
atreverse
a
decretar la rebaja, autorizó al Poder Ejecutivo para celebrar arreglos con los tenedores de papel tendientes a obtener el mismo re-
Anales de
sultado que buscaba tC'üces
al
Centro
el
la
Universidad
mensaje. El coronal Latorre se dirigió «n-
Comercial, pidiéndole
nedores de billetes para
el
a la
Comisión
rias de 500
He aquí tevideo
la
cual se obligaba
el el
los
te-
acto a la formalización de
Poder Ejecutivo a entregar
la
Aduana.
las oscilaciones del iprecio del oró
durante
convocara a
cantidad mensual de 15,000 pesos en cuotas dia-
tomados de
1876
Marzo.
el
que
nombramiento de una Comisión Delegada,
y llenado ese trámite se procedió en
un convenio por
105
la
en
la
Bolsa de Mon-
administración Latorre:
1878
A7iales de la Universidad
lOti
mes
al
comienzo de
la
dictadura y al anuncio del coronel Latorre
de que haría «un (gobierno honrado y no de ladrones». La prima del oro continuó luego dentro de los límites normales regida por de
la la
especulación bursátil y bajo la influencia
contradictoria
extinción de los billetes y del cercenamiento de los fondos
aplicables
extinción.
esa
a
régimen metálico del Uruguay.
El
La
ley
de junio de
mos y
1862 estableció .orno moneda nacional
centesimos con peso de 25 gramos 48
poso plata de 10
el
miligra-
ley de 917 milésimos, y el doblón de oro de 10' pesos plata
con peso de 16 gramos
9 70 miligramos y ley de 917 milésimos. Los bancos podrían emitir billetes del valor mínimo de un doblón, sin perjuicio del dereoho transitorio de emitir billetes menores acordado por las leyes de su creación, pero a condición
de ajustarse al nuevo patrón nacional.
El reglamento bancario de 18'65 presciribió que los billetes mayores y menores serían convertibles a oro exclusivamente y no
como
a oro o plata
metalista
sufría
lo
autorizaba la ley anterior. El sistema
quedar derogado para todas ?.sí
continuaron
las
el
el
las
hasta
cosas
Que acabó de derogar en adelante regiría
sistema
oro
demás operaciones de el
decreto-ley
hiin»'t«
li.>
de
sin
plaza.
Y
de
1876
estableciendo
que
junio
como único patrón monetario y que
plata sólo podría imponerse hasta la cantidad de
la
bi-
una restricción considerable, pero
con ello
4
pesos 50
centesimos en los pagos de un doblón, hasta la cantidad de 10 pesos en los pagos que no excedieran de 1,000 pesos y hasta la
más de Fué esa una disposición oportuna que salvó
cantidad de 20 pesos en los pagos de
que se habría producido por efecto de
si.''
cial
la
1,00 al
pesos.
país de la cri-
depreciación comer-
de la plata con relación al valor legal o cancelatorio que
atribuía la ley de
Revisión de Resolvió a de la
Tabla
la
la
de
Tabla de Equivalencias. vez el Gobierno nombrar una Comisión revisora equivalencias de las monedas extranjeras
patrón nacional, fijando lación legítima
le
18 62.
la
en
el
comparación del
con
el
como única base de repeso y fino de las monedas
decreto
Anales de
Universidad
la
moneda
extranjeras con el peso y fino de la de
misión,
formaban
que
la
don
parte
107
nacional. Esa
Presidente y don Adolfo Vaillant como Secretario, de oro
el
águila
19.32,
precio de al
da alemana de cos
de
sileña
fijó
a la onza
libra esterlina 4.70, a
¡la
doblón español de 100 reales 4.S2, a
20<
marcos
En cuanto
3.73.
15.12, a
$
2,000
a y
reis
quedó resuelto que
fuerte o duro español
peso
el
la
doble
la la
moneda francesa de
4.60, a la
plata
la
Co-
como
Berro
Aurelio
mona»
20 franbra-
pieza
seguirían
circulando por un peso y que las piezas chilenas, peruanas y mejicanas sólo serían recibidas en las oficinas públicas por el valor
de 8 centesimos de nuestra moneda y no por el de un peso que habían tenido hasta entonces. La onza de oro, que era la más -abundante de nuestras monedas, sufría con ese decreto una merma importante, como que siempre había icirculado por % 15.3 6. La merma emanaba de la
péniida de peso ocasionada por de la rebaja
cada
acto
el
de
transacción,
desmonetización nes
de
el desgaste. Pero como a ojáar comercio continuaba apelando a la balanza en
de
el
así
y
el
mismo año
—
taje
la fi-
se
Extinción del coluc.
llamó a licitación para
millón de pesos de plata en piezas de simos,
Gobierno proceder a quedó acordado desde
1S76.
Acuñación de plata.
En
resolvió
onzas
las
1
la
acuñación de un
peso, 50, 20 y 10 cente-
con 900 milésimos de fino, modificándose así
de la
ley
Fué aceptada
de la
el
porcen-
1862 que era de 917 milésimos. propuesta de los señores Paullier Hncs.. quie-
nes se comprometían a entregar cada peso plata por 95
simos oro, realizando con
ello
el
Fisco un beneficio del 5
cente'/t
.
La
Casa de Moneda de París en forma irreprochable según un informe de la Contaduría. Las monedas emacuñación se hizo en
la
a llegar a mediados del año siguiente. Una de las remesas cayó envuelta en el naufragio del vapor «Paraná» y aunque luego se salvó dio origen en los primeros momentos de Incertidumbre a una nueva orden de acuñación, resultando de ello
pezaron
un excedente de 48.388 pesos sobre acto de la llegada to,
por
el
el
milón contratado.
En
el
de las primeras cantidades se dictó un decre-
que se desmonetizaban
centesimos, se mantenía
la
las
circulaición
piezas
extranjeras de
50
de las monedas brasileñas
de 2,000 reis y norteamericanas de un dólar y se establecía que en
1
Anales de
08
lodos los pagos podría
el
la
Universidad
deudor imponer
el
recibo de 30 pesos
tn monedas de un peso y de 2 en piezas de 10 a 50 centesimos. Transcurridos algunos meses más quedó limitada la circulación de las monedas extranjeras a las brasileñas de 2,000
reis.
La acuñación de pequeñas monedas de plata puso a la orden del día un problema que ya se había planteado varias veces por el
comercio detallista:
el
exceso de
la
moneda
de cobre que daba
origen a pérdidas sensibles, como se encargó de demostrarlo un
remate judicial de 1878, en ses en monedas de cobre ton
que aparecía un
el s]
descuento d^l
9
lote de 5,000 pe-
V
respecto del
La Contaduría General de la Nación, llamada a opinar sch bre el particular en 187 9, opinó que debía precederse al retiro
oro.
de la
220
a
260,000
circulación,
ese
y de
pesos
cobre para
acuerdo con
mismo año para combatir
la
ello
crisis
normalizar la condición de entre
las
medidas dictadas
entró a figurar un recargo
del 8 ^r sobre las patentes de giro, destinado precisamente al retiio
parcial
y
desmonetización
que
aconsejaba
la
Contaduría.
CAPITULO
III
Movimiento administrativo
Ingresos y egresos del año 1876. El producto de las rentas de 1876 alcanzó a 19.174,549 peso~
li-
quidadas a papel y a 8.973,142 liquidadas a oro.
La Aduana produjo generales
y
concepto de derechos
5.550,757 pesos oro por
adicionales
adscriptos
a
extinción
la
mo-
papel
del
neda (569.272).
La contribución directa
Departamento de
del
la
produjo
Capital
624,819 y la del resto del país 639,644.
Las patentes de
giro,
timbres produjeren
papel sellado y los
el
respectivamente 584,794,
236,096
41,958.
y
Entre
los
864,848
tres,
pesos.
El correo 96,777
pesos.
La Junta Económico -Administrativa de
Capital
la
in-
557,451,
La Tesorería General tuvo que entregarle 99,431 pesos con destino al pago de su
cluida
parte
de
contribución
directa
(109,764).
su presupuesto y hacerle un anticipo de 86,395 con cargo a las ren-
año
tas del
1877.
Los ingresos departamentales de campaña afectados los
presupuestos locales
ducto de lidad.
la
dieron
patente de rodados
Los gastos ascendieron
173,566
(60,924)
a 875,108
pago de
al
no incluido
pesos,
el
pro-
destinado a obras de via-
pesos.
La Tesorería General
tuvo que acordar a ios departamentos una subvención de 492,752 pesos.
El servicio de las deudas públicas y la extinción del papel mo-
neda
absorbieron
duría,
1.905,430
(luedando reducido
pesos, i
según
7.067,712
el
Estados de
los
la
Conta-
remanente destinado a
to-
dos los gastos de la Administración.
El ejercicio 1876 cerró con un déficit de 8.199,238 pesos oro otro
de
9.383,455
deuda flotante de del
contrato
pesos las
papel,
procedentes
en
su
mayoría de
administraciones anteriores y de
Mauá que impuso
al
Estado
el
rescate
la
y la
rescisión
de 12.125,335
Anales de
lio
pesos de emisión y
pugo de 1.070,000 pesos
el
figuraba
sólo
respectivos
Universidad
la
administración
la
En
oro.
los
Latorre
cuadros
con
367,775
pesos oro y 158,103 papel.
Ese
habría
déficit
practicadas durante
mucho
sido
el
mayor
sin
amortizaciones
las
año 1S76, que alcanzaron a 4.277,372 pesos
oro y 7.547,375 pesos papel en virtud de transacciones, pagos efectivos
quema de papel moneda.
y
Desde
los
comienzos de
dictadura
la
quedó reanudado
i:uutual
de los presupuestos, empezándose por
cido,
que significaba cargar
lo
déficit
al
los
pago
el
último mes ven-
el
sueldos de las admi-
nistraciones anteriores, y quedó reanudada también la práctica de
publicación de los gastos pagados por la Tesorería.
la
Para arribar
al equilibrio pasó el Ministerio de Gobierno a sus delegados en campaña una circular en que les decía: disminuyan
personal
si:
manera que
«de
puesto que sea desempeñado por
el
dos empleados de cualquier categoría que sea se reduzca a uno...
Hecha esa reducción en todas seguros los
tar
satisfechos
mensualmente en
Las planillas
del
mismo
Se propuso a
7 el
y
oficinas del
la
vez
pensiones.
la
S.,
como
Estado, pueden es-
los
demás, que serán
percepción de sus haberes».
Ministerio, que
quedaron reducidas a nomía de 945,000 pesos. sos,
jubilaciones
las
subalternos de V.
montaban
coronel Latorre cerrar
el
Y
para
a 2.477,085 pe-
realizándose con ello una eco-
1.522,825,
el
conseguirlo dictó
rubro de las el
decreto de
montepío y con el montepío otorgamiento de jubilaciones y pensiones a los empleados pú-
de setiembre de 1876, aboliendo
el
blicos.
«El montepío que se descuenta a los empleados
—
parte,
no debe constituirse en guardadora de progresivamente
toda persona que en rados recibirá su y quedará familias
guerra.»
de
lo
el
de-
las
economías de
a
aumentar.
país de
al
En
los
una
consecuencia,
sucesivo entre a prestZír servicios remune-
sueldo sin descuento por concepto de montepío
excluida de los
decía
el
empleados. Es necesario, finalmente, desembarazar
carga que tiende
—
monto de las pensiones, jubilas leyes. La Nación, por otra
no está en relación con laciones y retiros que acuerdan creto
pensión
militares
pasiva.
muertos
Sólo se
o invalidados
exceptuarán las en
función de
Anales de
la
Universidad
111
Los ingresos de 1877.
•
'
Los ingresos de este ejercicio ascendieron a 9.836,612 pesos, figurando
la
aduanera
renta
con
5.019,711
computar
sin
las
año anterior, y 5.209,306 computándolas. De la aplicación de esos recursos dan idea estos rubros que entresacamos de los cuadros generales de la Contaduría: existencias
del
Deudas
internas
.
.
;>
Franco-Inglesa
»
Italiana
»
Francesa
Extinción
año
984,000
.
.
.
501,549 660,777
.
militares
y
Montevideo
de
17,940
390.000
anterior
.
.
civiles
IVIunicipio
moneda
papel
del
flotante
Sueldos
188,377
.
....
Presupuestos del
Deuda
1.037,109
.
65,8 31
Mauá
Convenio
.
.
.
.3'.
697,811
.
campaña
»
Mejoras
locales,
servicios
503,0'65
vialidad
y
otro
departamentales
Da otro cuadro de
la
abarca, la totalidad del
606,5 2 7
237,798
Co^jtaduría General del
Estado, que no
movimiento de fondos, resultan como
in-
gresos efectivos 7.287,000 en 1875, 8.352,000 en 1876 y 8.009,000 en 1877, en la forma que se detalla a continuación:
Dorechos
e.«ipeciales
15 °/o importación 15
»
8
»
8
o
»
exportación »
—
1873
:
Capital
.
1876
$
S
l.títí4,881
1.645,211
1877
$
1.708,959'
— Receptorías
129.156
1!
4.840
121,844
—
529,523
510,495
495,407
362,309
355,755
305,000
15,132
24,994
53,485
37.204
26,897
30,213
543,742
515,490
Capital
.
— Receptorías
Tonelaje Extinción del papel moneda
—
2
:
Anales
1 1
Rentas {-enerales
Importación
Universidad
la
ele
1875
1876
1877
878,141
1.888,343
1.938,396
160,185
143,244
135,699
48,878
76,787
70,637
.
153,302
164,213
168,874
.
867,319
:
....
— Capital
1
Diversos ramos Contribución Directa, importación Importación, Receptorías
.
Sellados, patentes y timbres
793,094
862,829
Correos
100,187
96,779
111,363
Contribución Directa de Montevideo
415,327
624,819
487,351
.
419,760
639,644
599,479
Impuestos municipales y policiales de Montevideo
580,730
634,417
483,224
»
»
.
campaña
En un cuadro más amplio
presentaba así don A!dolfo Vaillant
los
ingresos de seis años, advirtiendo que en 1872 la estadística había excluido los
ingresos municipales que
alcanzaban a 600,000 pesos:
^^P^^^^
AÑOS 1872
En taba
monto la $
Incluso las de
.."..!»= „„,o. generales rentas $
8.604,350
$
Aduana
7.189,009 7.509,485
1873
9.609,710
1874
8.684,117
6.509,843
1875
7.287,815
4.978,715
1876
8.352,518
5.494,027
1877
8.092,757
5.544,019
todos estos cuadros había vacíos, y habilitado
para
apreciar
su
el
señor Vaillant que
importancia,
eso
esel
en nueve millones de pesos y calculaba cuota contributiva anual de cada habitante de la República en total de los ingresos
20,45 y la de
Prosiguiendo
cada familia de en
1877
el
plan
5
miembros en de economías
$
102,25.
iniciado
comienzos de su administración, suprimió Latorre de
por
fijaba
Cazadores,
invocando «los
seguridad en que reposaba
General de
Gastos en
(no incluidos
los
el
apremios
erario
orden público» y
4.546,403
servicios
del
pesos
fijó
distribuidos
de la deuda
pública)
desde los
el
Batallón
y
la
el
Presupuesto
6.°
completa
en esta forma
Anales de
Relaciones
de
Ministerio
la
»
»
Gobierno
»
»
Hacienda
»
»
Guerra
universidad
Efxteriores
113
23,860
$
1.622,895 695,940
2.203,707
'De la perfecta regularidad de los pagos
dan idea
habilitados llamiando en los primeros días de
les avisos de los
marzo para
del presupuesto de febrero y los de fines de junio para el los sueldos
mismo mes
de ese
Al terminar
el
el
pago
pago de
o sea antes de su vencimiento.
año 1877 quedaba un
déficit
de 11.547,119 pesos
oro y 6.229,556 pesos papel, que la Contaduría clasificaba así: Oro
Administraciones anteriores a
la
de
Latorre
Bonos
7.199,035
$
1854
de
de
créditos
y
—
138,857
— — —
623,074
57.811 26
adminis-
la
Latorre
tración
6.171,745
361,140
Gas
del
Sueldos
$
3.225,011
Ferrocarriles
Empresa
Pape!
de 1878.
líOS ingresos
Los ingresos de 1878 ascendieron a 10.406,840 pesos, correspondiendo a la Aduana 5.935,644, incluidas las partes afectadas a
la
llado,
extinjción
del
papel moneda;
a
patentes de giro, papel
se-
contribución directa y timbres 2.717,010; a impuestos mu-
nicipales
paña,
y
policiales
990,079.
de Montevideo
Véanse
principales
las
departamentos de cam-
y
aplicaciones
de
esos
re-
cursos:
Servicio de deuda.s internas
Contrato
$
Maná
1.234,268
280,000
Empréstito Uruguayo
408,000
Deuda Franco - Inglesa
197,047
Extinción de billetes
600,000
Dirección de Instrucción
Pública
(
no incluidos pe-
sos 90,000 qiie figuran en otra planilla)
SueUros de 1876 y 1877 Presupuesto de 1878 T.
VII
-8.
.
.
.
....
201,000
533,200
3.908,746
:
:
Anales de
114
universidad
la
de
Junta Económico - Administrativa Hospital de Caridad
la
Capital
y í
Jefaturas y Juntas de campaña
678,212 441,453
....
Mejoras, vialidad, etc
Suministros y sueldos anteriores a marzo de 1876
242,069 741,148
.
Otro cuadro de la Contaduría en el que no figuraban varias fuentes de recursos, limitaba los ingresos a S.9 62,000 pesos obtenidos por los siguientes conceptos:
Derechos especiales de
de importación
15 °'o 15 » 8
»
-
8
»
2
»
>'
Aduana
— Capital
$
1,7'J1,838
— Receptorías exportación — Capital
550,901
— Receptorías
407,237
173,683
^>
»
»
76,638
carnes
Tonelaje
«
32,054
.
Extinción del papel moneda
484,801
Rentas generales
Importación
— Capital
$
Diversos ramos Contribución directa sobre importación
.....
Importación y diversos ramos en Receptorías
.
.
.
1.967,888 149,500 74,489
276,493
Patentes de Giro
700,789
Papel Sellado
275,427
Timbres
143,857 138,933
Correos
Contribución
directa
»
»
— Montevideo —
...
.
.
476,992
.
678,597
Departamentos
632,560
Impuestos policiales y municipales de Montevideo
Los ingresos policiales y los ingresos municipales de los departamentos de campaña produjeron en el mismo año 784,000 y 248,000 pesos respectivamente, debiendo deducirse de la primera de esas partidas, para evitar duplic£;ciones, 95,208 pesos procedentes de contribución directa y 249,413 pesos procedentes de remesas directas de la Tesorería General de la Nación.
bución por departamentos:
He
aquí su distri-
Anales de
¡a
115
Universidad
Ingresos
Ingresos
policiales
municipales
$
89,478
Anales de
116
Universidad
la
El coronel L/atorrc hace el balance de su gestión financiera al pasar de la dictadura a la presidencia.
En
de
febrero
1879,
al
abrir
las
Legislatura elegida en el año anterior,
obra
efecto lletes
restablecido
emitidos
biendo
régimen de
tel
con
suma en
1.670,000
la la
para
ello
ha quedado mercado de
publicidad;
la
el
responsabilidad solidaria
la
habido necesidad
cional la
de
Mauá que había inundado
convenio
el
ordinarias
dictador concretó así
de su gobierno:
administratiA^a
iSe iha
sesiones el
de
.
ha-
reconocer como deuda
na-
Se ha arribado a acuerdos con
.
bi-
E'sitado,
del
de 12.000,000 en billetes y de entregar a
oro.
sin
IciS
Mauá
teneidoi-e?
de deudas internas y externas para la regularización del servicio de intereses y amortización suspendido en 18 75 bajo el gobierno
de Várela ... bierto
de
tituido el
flotante
primero por la emisión Mauá y el segunido por la deuda de suministros y sueldos que subía a 5.59 0,5 24 pesos,
crédito del
bl
Al iniciarse esta administra:ción existía un descupesos papel y 14.728,6130 pesos oro, cons-
12.56'4,42i4
Banco Alemán-Belga por 1.450,000,
los
Bonos Con-
solidados de 1854 por 2.015,63i3, los servicios suspendidos de las
deudas internas y externas por por 160,65(9 y otros créditos.
2.5 73,7 09,
los
depósitos judicia-
les
Durante
años corridos desde marzo de 187 6 hasta feTesoro público ha pagadio veintitrés y medio mi
los tres
brero do 1879
el
Uones de pesos por los siguientes conceptos: Presupuestos
marzo de
mamento
y departamentales, desde de guerra, equipo y ar-
g-enerales
1876, material
del Ejército y de la Policía
....
Servicio de bis deudas consolidadas
»
del Salto
:
Uruguayo
Ag-uas Corrientes
:
514,155
.
acciones del Este
:
.
subvenciones
.
.
subvenciones
Deuda
57,000 10,500
55,200
Compensación Mauá Créditos exig-ibles
14.277,2.34
3.790,286
Adquisición y reforma de edificios públicos Ferrocarril
$
920,000 .
58,761
.
Flotante. Sueldos de administraciones
riores, expropiaciones, construcción
ante-
de cuarteles,
fundación de hospicios, construcción de caminos.
3.827,000
7
Anales de
Se ha aplicado puestos vos,
rescate
al
Uruguayo
Empréstito
Universidad
la
moneda y
papel
del
producto
el
1
íntegro
de
servicio
al
las
rentas
correspondientes
a los
convenios
habiéndose ya quemado 7.488,386
pesos
de
adicionales
entregado por concepto
de
servicio
empréstito
del
comprendidos
de
500,000
derechos
los
del
im-
e
respecti-
moneda y
papel
La renta aduanera suministra un promedio de
1
400,042
pesos.
5.700,000
pesos
adicionales
afectados
a la extinción del papel moneda. Y las demás rentas (contribuición directa, papel isellado, timbres, patentes: de giro, co-
marcas de
puerto,
rreos,
fiaros,
otros
varios)
suministran
transversales
que
600,000
y sá
y gastos
sin la creación
élilo
incluidos
mismas localidades por concepto de hosd'e recaudación. En conjunto 9.246,000
invierten dentro de las pitales, taejoras
pesos, y
derechos
fá'jrica,
3.546.000
de Impuestos perjudiciales a
la
in-
dustria o al comercio. El derecho de firmas creado en 1877 y el
de marcas de fábricas creado en 1878, constituyen una simple compeniaación de servicios; ,el de marcas y señales ya existía Código
en
el
en
1877
ha
de aumento
Del monto
Rural;
quedado
el
impuesto de
refundido
on
la
tde
esas rentas
circta
bajo
instrucción pública creado
forma
de medio por mil
de la contribución directa-
—
concluía
el
mensaje
—
hay que
deducir: 690,000 de sueldos y gastos de recaudación de impuestos (correspoTidiendo 500,000 a la Aduana); 74'3,000 afectados
papel
moneda (correspondiendo 552,000
a los derechos adicionales);
2.000,000 del servicio de las deu-
a 6a amoirtización
del
das internas y externas; 3 60,000 de la comipensación a Mauá. Con el remanente deben ser atendidos los gastos de la administración pública, los créditos postergados, las pensiones de las clases pasivas que llegan a 1.40 0,000 pesos y los presupuestos departamentales de toda la República, que exceden de un *mi11
ón
La
mil pesos.
cien
crisis
financiera de 1870.
recurre
—
Al presentarse ese mensaje con
mación crisis
Medidas extraordinarias a que
Latorre pai'a conjurarla.
de
dictadura
la
financiera
empezaba
en a
el
que se marcaba
presidencia
preocupar
Latorre. con
honldamente
'la perspectiva de la pérdida de uno de que más se había esforzado en conquistar. Las matanzas policiales «que hacían habitable la
y
los
pagos
aJ
día que aseguraban
el
transfor-
la
constitucional,
ya
la
al
coronel
los
títulos
campaña*
bienestar de los empleados,
Anales de
118
la
Universidad
habían hecho olvidar a muchas personas la intensa gravedad de los males políticos y morales de la situación, y era evidente que ese olvido tenía que desaparecer en gran parte con los atrasos del Presupuesto. El problema estaba, pues, planteado y ha-
que resolverlo de inmediajto para que el dictador transforpresidente no cayera de su pedestail de barro. decía Latorre al clausurar en ju«La paz de que gozamos
bía
mado en
—
las sesiones
lio
—
ordinarias de la Asamblea
inalterable
es
y
está hecha la conciencia de que nada ni nadie puede hacerla Las garantías de que el Gobierno ha sabido rodear peligrar a íla campaña, fuente de nuestra riqueza, son más que nunca una .
.
.
verdad consoladora...
más
base de la
El orden
estricta
compromisos de su la
administración
bajo
la
Gobierno no sólo
al
el
presupuesto
de
la
deuda interna y externa,
financiera
situación
«la
la
misma, sino los continuando sin En cambio papel»... amortización del quema y
atender icon Teligiosidad alteración
en
moralidad permite
iy
comercial del país
es
lapremiante;
hemos retrocedido en vez de adelantar y el país pasa en estos momentos por una verdadera crisis, en (medio de la cual el comercio languidece, la producción ¿arece de aliento y la renta «A juicio del Gobierno sólo viene decreciendo»... ¿Causas?... una: el retraimiento del capital que no viene en ayuda de las fuerzas del país, aunándose a Tos esfuerzos de la acción oficial para levantar el .ánimo de las clases productoras, alentando al
comercio en
decadencia,
valorizando
la
propiedad, 'propendien-
do a la mejor producción posible y como consecuencia necesaria al aumento del trabajo w de la renta». Un mes después volvía el coronel Latorre a poner en actividad a la
Asamblea para conjurar
el
desequilibrio
entre los ingresov
y los egresos.
«La
crisis
general que hace años viene reinando en todos los
centros del globo
—
decía en su mensaje
—
extiende hasta nosotros
sus efectos y se aiduna con varias causas locales para combatir la fuerza de vitalidad de que nuestra joven nación ha dado tantas
pruebas.» iniciar la reacción proponía
Para de
reducción
ley:
venciones
de
ferrocarriles;
fundacit'n de un
rurales; las
los
de
los
una
serie de
derechos
fundación
'de
once proyertus
Aduana; subun banco de desde
banco hipotecario; fundación de bande la deuda flotante; consolidíición deudas preferentes; fomento de la colonización; reformas
cuencos; cos
a
sucesiva
consoiidaci'^n
Anales de
aduaneras;
en
rebajas
Universidad
la
fundación
sueldos;
los
119
docks en
de
el
Ceno La rebaja de estimularía
trabajo.
del
tes
derechos
los
desarrollo
el
importación
de
De acuerdo con
mente una rebaja de luego la reducción
%
V^
abarataría
ensancharía
comercio,
del
de los derechos en el
el
vida,
horizon-
se haría mensual-
proyecto
el
hasta obtener
la
los
5
'/(
continuándose
.
de
caso
permitirlo
el
prniucf-o del impuesto y el pago regular de los presupuestos.
La prolongación de del
tes
las líneas férreas acrecentaría
comercio de tránsito
con el
Brasil.
las corrien-
De acuerdo con
el
un millón de pesos ien forma de cuotas periódicas para obtener que las empresas del Central, del Salto a Santa Rosa y del Uruguayo extendieran sus rieles hasta la proyecto se acordaría
frontera.
La especialización de
operaciones bancarias era
las
medio
el
de ique hubiera una institución de crédito para cada fin deter-
minado y de que cada capitalista y cada productor encontraran respectivamente el género de colocación y el préstamo especial desearan
que
— busca
je
obtener. el
con lentitud;
lEl
comerciante
crédito a corto plazo;
el
agricultor y
el
activo el
—
decía
el
mensa-
propietario urbano paga
estanciero necesitan por lo me-
un año para liquidar sus productos. De acuerdo con el proyecto quedaba el Poder Ejecutivo autorizado para fundar un Banco de Depósitos, Emisión y Descuentos con dos y medio
nos
millones de pesos de capital,
provisto del
privilegio
exclusivo
de
emisión menor, del depósito de las rentas públicas y del servicio de la deuda; un Banco Hipotecario con un millón de pesos la
de capital y la facultad de emitir cédulas por un monto igual de 6US préstamos, pero sin poder exceder del décuplo de su
al
capital;
bancos
y
facultados también
hipotecarios
en
rurales
para emitir cédulas hasta
los
departamentos
el
monto de sus
préstamos.
En
de la deuda flotante entrarían los créditos Banco Alemán -¡Belga, Banco Comercial, Banco de Londres y Río de la Plata, empresas del Gas y de Aguas Corrientes. A la vez se haría una nueva emisión de deuda interna con la
esipeciales
destino a
Con pos
—
el
consolidación del
la
cancelación de los créditos y deudas anteriores a 1876.
desarrollo
proseguía
el
que va temando
mensaje
—
quedan
el
cerramiento de
sin
trabajo y en
los el
cam-
mayor
desamparo las numerosas familias que vivían en las estancias bajo forma de allegados, y hay conveniencia en reconcentrar esas fami-
Anales de
1-20
Universidad
la
en colonias agrícolas próximas a las vías férreas y fluviales. El proyecto acordaba al Poder Ejecutivo cien mil pesos para pro-
lias
mover
la
formación de empresas realizadoras de esa idea.
Para colocar leal,
pedía de
ley
la
el
al comercio lícito al abrigo de mensaje el restahlecimiento de
1861,
competencia desdisposiciones
como contrabando
que consideralban
fraudulentas
ciones
la
las
en materia de cantidad
o
de
declara-
las
de calidad
de
las
mercaderías sujetas a despacito.
En
caso
de insuficiencia
establecer
dos,
dietas y pensiones.
Poder
ÍHI
Eje\cu!tvo
sobre establecimiento
meses antes a Tales
eran
de
un impuesto
tivo
4
9c
sobre
finalmente
urigía
podría
rentas,
las
del
el
el
Poder Ejecu-
monto de
suel-
los
despacho del proyecto
el
en la punta del Cerro, presentado
de doJcs
la Legislatura. los
medios
reaccionar contra la
ayuda de
con
cuales
los
se
pretendía
crisis.
Empezaba su estudio
Cámara de Diputados cuando
la
el
coro-
Latorre resolvió proceder en forma más rápida y radical, urgido por la crisis financiera que arreciaba. nel
«Persuadido
de que
es
el
—
Poder Ejecutivo
una necesidad
vital
para
decía en su nuevo mensaje el
país poner
un pronto y
— efi-
caz remedio al
malestar económico que afecta a todas las clases; y convencido de que ¡una de las causas que más directamente influyen en ese 'malestar es el desequilibrio en que desde años atrás
encuentra el producto de las rentas con las enormes erogaciones del Presupuesto; recargados por razón de ese de.sequilibrio los
se
impuestos que pesan sobre derechos cree
el
el
pueblo como
están en general los
lo
de Aduana que han venido aumentando sucesivamente, Poder Ejecutivo llegado el momento de afrontar resuel-
el conflicto que como lo ha dicho afecta a todas las clade la sociedad y cuyos perniciosos efectos no dan ya espera, SD pena de consentir a sabiendas en los desarreglos que nos abru-
tamente ses
maban en un pasado no
lejano.»
Concluía Latorre pidiendo dos votos de confianza. Uno de ellos para «rebajar los impuestos que juzgare más convenientes y en
forma que mejor respondiese
la
ministrativa del país».
Y
el
a
otro
mas que considerase oportunas en tos,
seos,
la
necesidad de la marcha ad-
«para hacer el
las
rebajas y refor-
Presupuesto General de Gas-
excluir ninguno de sus rubros». De acuerdo con sus deambos votos de confianza debían acordarse en sesión secreta.
sin
Pedía también autorización para aplicar
el
8
%
del producto de
Anales de
Universidad
la
121
las patentes
de giro del año 1880 a la extinción parcial de la moneda de cobre y para rebajar las sumas destinadas a la amortización del papel moneda. Pero la influencia avasalladora de Latorre estaba en crisis tam-
bién y esos votos de confianza tenían que encontrar y encontraron resistencia
en
hasta
seno
el
de
los
más íntimos amigos
del
ex dictador. «El prestigio
ly
los
—
resultados benéficos de las leyes
Comisión de Hacienda de
Cámara de Diputados
la
el
deben esperarse no sólo por
la
—
estudio de los nuevois proyectos
decía la
terminar
al
materia que les sirve de base sino también por
la forma y regulaha echado en olvido estos principios las funestas consecuencias no se han hecho espei-ar. El proyecto del Poder Ejecutivo ofrece el inconveniente de que su forma no se armoniza muy bien con ese principio, ni con el precepto constitucional que atribuye a cada Poder las facultades que le incumben. Cuando el país está bajo un régimon constitucional los Poderes públicos deben mantener íntegras sus atribuciones, porque del juego armónico de esas facultades nace la verdadera
Cuando
ridad de sus disposiciones.
administración pública y con
ello
el
se
respeto y prestigio de la opi-
una verdadera prenda de confianza y seguridad. El Poder Legislativo no podría nunca despojarse de una atribución constitucional para delegarla en otro de
nión que ve en ese
los
ejerlcicio Ilibre
Poderes del Estado, sin establecer
la
confusión
y
excusar la
responsabilidadi que no debe ni puede eludir en ningún caso.»
La Comisión
proiponla en reemplazo de los dos votos de confianza
cuatro proyectes. El primero que coincidía con
el
de Latorre, au-
torizaba al Poder Ejecutivo para introducir rebajas en la ley de
Presupuesto «tanto en al
mismo Poder para
ción desde
el
5
portación desde
hasta el
5
como en
personal
el
autorizaba
%
50
el
hasta
de
75
el
El segundo
los sueldos».
rebajar los derechos de importalas cuotas vigentes
%. El
tercero creaba
y los de ex-
un impuesto
del 5 al 50 'A sobre los sueldos de las clases pasivas civiles y militares.
El cuarto autorizaiba
de patentes de giro y
el
la
reducción hasta
pago del
8
Ve de
s;u
el
50
%
del impuesto
producto en monedas
de cobre que serían desmonetizadas y fundidas en el acto. Este dictamen de la Comisión de Hacienda, firmado con
la
nota
de «conforme en parte» por los doctores Pedro Visca y Adolfo Pedralbes, y de «discorde» por el señor Francisco Bauza, fué pre-
viamente del
estudiado
coronel
Latorre;
en y
sesión
de
lo
secreta de
acuerdo con
los
deseos
que pasó en esa sesión secreta se
Anales de
122
encargó luego
Universidad
la
eu la subsiguiente
de dejar canstancia
sesión pú-
Véase en qué fonna: «Aun cuando el proyecto del Poder Ejecutivo por efecto del informe de las Comisiones de Legislación y Hacienda reunidas, está blica el último de dichos señores.
rechazado, y aun cuando de la conducta observada Honorable Asamblea General en la sesión secreta qUe ella tuvo pueda deducirse tácitamente que ei rechazo es pleno, conviene sin embargo como elemento de moral pública y como severa lección constitucional de los Poderes que piden lo que no deben
virtualmente por
la
que haga yo por mi parte
pedir, lo
que
a
hacer
pasó
resipecto
esa
historia,
a este
historia
la
proyecto.
PoJder
el
iporlqiue
aunque sucinta de
Y me
autorizado
creo
defiriendo
Ejecutivo,
a nuestra actitud, nos hizo saber poír el órgano de su Ministro, que no insistía en las facultades extraordinarias solicitadas en ese proyecto y al mismo tiempo defirió a la exigencia nuestra de que las sesiones de la Cámara o más bien dicho del Poder Legislativo en sus Iba,
ramas, fueran tan
respectivas
públicas
como
deseaba.
se
pues, a decir que el voto de confianza solicitado en el
saje que
men-
acaba de leerse fué rechazado de una manera tácita, por-
que en las discusiones a que dio origen se manifestó por mi parte
ninguna
y con la aquiescencia de mis honorables colegas que de
manera estaba
disipuesta la
Asamblea General a delegar
tiene y que
constitucional que
reservarse a toda
debe
la facultad
costa.
En
y aun cuando estoy discorde con el informe de las Comisiones reunidas respecto a los nuevos proyectos que ellas aconsejan, me ha parecido digno y necesario el hacer preeste concepto,
sente
esta
pues,
circunstancia,
sea cual fuere
el
para que
conozca en
se
el
país
todo y
la
anotación de nuestras deliberaciones que
sigilo
con que pu&da padírsenos cosas desarre-
quede constatado en
gladas, nunca estamos dispuestos a darlas y que en este caso el proyecto viene de suyo denegado de conformidad con la opinión
de
la
cutivo
Honorable Asamblea, y ha
deferido
a
como era natural y como hacer en
este
caso lo
al
mismo tiempo que
esa petición le sería
de
nuestra
el
Poder Eja-
parte,
dejándonos
reclamado, en plena libertad de
que sea de nuestra justa y soberana
vo.
luntad.»
ta
Los votos de confianza fueron acordados en la forma propuespor la Comisión de Hacienda y en el acto llevados a ejecución,
haciéndose
reducciones
graduales en
todos
los
sueldos,
pensiones
y jubilaciones desde el 10 hasta el .50 Vr de su monto, introduciéndose en los derechos de importación una rebaja del 50 y en
%
Anales de
de exportación del 75
loó
60
üiiiversidad
Ja
%
en las patentes
y
%
sin perjuicio del adicional del 8
9f,
123
de giro otra de
destinado al cobre.
Independientemente de esas medidas de carácter general practicó
coronel Latorre, en uso del voto de confianza que se
el
la
había acordado, fuertes reducciones en las planillas del Presupuesto.
Suprimió
gimiento dias
de
Batallón de
de la Policía
civiles
por
las
reparticiones
de
de Cazadores;
4.°
línea
N."
suprimió
suprimió todos
1;
de Montevideo
la
de
—
cía
la
en
de
^la
Administración y se dirigió al Consejo para el cumplimiento es-
de jubilaciones
ley
un
áo la fortuna
guar-
sustituyendo su servi-
de Higiene recabando su cooperación tricto
Re-
el
los
tropa de línea; suprimió numerosos empleos en
cio
el
el
Caballería
medio
fácil
pública,
de
«convertida hoy
1837,
y acomodaticio
según
de vivir
demuestra
lo
el
a
crecido
—
de-
expensas
número
de ciudadanos que disfrutan de jubilación a título de inutilizados
para
el
públicos
desempeñan puestos una salud y una robustez
servicio y que, sin embargo, aceptan y
y
particulares
que
requieren
perfectas.»
La Asamblea misma, cediendo d-ecretó una rebaja
economías se
a del
la
presión de esa oleada de
20
'A
sobre sus dietas.
El descenso rentístico del último año de la administración Latorre.
Los ingresos de 1879 quedaron reducidos, según
los
Estados
de la Contaduría, a 8.738,506 pesos.
La Aduanal produjo cálculos
putable
4.93(4,130.
de la Contaduría, a la crisis y a
la
Señalaba
esa
cifra,
según
los
una merma de 1.500,000 posos imrebaja de derechos
dictada para con-
trarrestarla.
Las patentes de giro dieron
683,163
pesos,
el
papel
sellado
284,6l38, los timbres 167,7i22, la contribución directa de la Capital
402,499 y la contribución directa de los departamentos de
campaña 692,959. El
Correo
139,693.
Las rentas de la Municipalidad y de la Jefatura de Policía de Montevideo produjeron respectivamente 3 60,0iS7 (no comprendida la Lotería de la Caridad) y 30.322. Las de las Juntas y Jefaturas de los departamentos de campaña 3 02,821. Las rentas de Instrucción Pública 62,015.
Anales de
124
He
la
ürdversidad
aquí algunas de las principales inversiones de las reutas
de ese año: de las deudas internas
Servicio
Extinción
Presupuesto
moneda
papel
del
213,982'
1878
y
Adumia:
$
— Capital — Receptorías Exportación — Capital »
— Receptorías de carnes
»
.
Tonelaje Extinción de papel moneda. Diversos ramos »
— Capital —Receptorías
Contribución Directa
.
Oficina de Crédito Público
:
Patentes de Giro
Papel Sellado
.
Timbres Contribución
Directa
—
Montevi-
Directa
—
Departa-
deo Contribución
mentos Junta y Jefatura de (
incluida la Lotería
Correo
.
7.576
1879:
Importación
»
82
.
Contaduría reproducimos el siguiente no están comprendidas todas las renitas fiscapermite seguir el movimiento rentístico de los años
1877
»
.
el ique
pero ,que
1877,
.
Estados de
los
cuadro, en les,
27S,4'92
3.68 8,311
Pública
Instrucción
1.614,189 155,585
....
.
Jefaturas y Juntas de campaña
De
$
408,000
Mauá
Contrato
....
Uruguayo
Empréstito
»
,
Montevideo )
.
.
.
.
1878
1879
Anales de
En números redondos
Universidad
la
pesos en
8.220,000
125
8.960,000 en
1S77,
1878 y 8.250,000 en 1879. En su Mf;moria de Hacienda de 18 79 hacía constar
el Mini-stro
don Aurelio Berro que las reducciones del Presupuesto habían sido calculaldais en 2.200,000 pesos y la merma del Tesoro por efecto d'e las rebajas de impuestos en 2.60 0,0 0, con la esperanza sin embargo de un repunte comercial que no alcanzó a proreagravándose con ello
ducirse,
El ejercicio
1879
desequilibrio financiero.
el
con
cerró
un
de
déficit
1.072,514
pesos,
correspondiendo las dos terceras partes de esa suma a sueldos civiles
y militares.
lEng'lobados los bía el déficit a
demás créditos exigibles contra pesos,
6.i3i32,7i3S
cuenta del Banco Alemán
Estado,
el
nio
por 740,600
Corrientes
Mauá
por
664,416,
pesos,
subvención
la
la
re.»^
cisión
Empresa
del
garantías del Ferrocarril a Higueriitas por
las
Empresa Conve-
del
Central
Ferrocarril
del
del Uruiguaiy por 22 5,000, la cuenta de la 292,01711,
la
Belga por 1.450,000 pesos de capital
-
y 1.08i9.5 75 de intereses, la subvención del lEstado a la
de Aguas
su-
destacándose entre aquéllos
Gais 18i9',7
por 62,
y el salido circulante de la emisión bancaria a cargo del Estado por 3.495,5 05 ipesos.
Tal era Poicos
diías
situación financiera en
la
'después se dirigía
el
31
de diciembre de
18 79.
coronel Latorre a la Comisión
Permanente en demanda de licencia, invocando razones de salud, pero en realidad con el propósito de no volver al ejercicio de la presidencia,
Legisliici*)!!
como efectivamente no
—
tributaria.
Hemos dado
ya
las
El ixnpuesto de Aduana. correspondientes
cifras
impuestos de acuerdo con
volvió.
los
Estados de
a
los
principales
Contaduría Oeneral
la
de la Nación.
Los cuadros de tes
la
Dirección de
ingresos en Jas oficinas
Aduanas arrojan
receptoras de
los
siguien-
Montevideo y de
los
departamentos de campaña: Montevideo y Receptorías
1877
%
5.568,822 5.910,213
Receptorías aisladamente $
6'6'7,049
1878 1879
4.930.737
8^611.720
1880
4.366,389
662,010
959,360
Anales de
1-26
la
Universidad
Este otro cuadro que reproducimos de la Memoria de Hacienda de 1878 demuestra la parte de las rentas de la Aduana de Montevideo afectadas al servicio de las
deudas públicas en
curso
el
aquel año:
de
generales
Derecihos
.
.
,
2.153,211
$
.
Deuda Fundada
49 3,7'5 7
541,734
Interna
»
iExtraordinaria
»
.
Extraordinario
Extinción
de
13 6,541
.
....
Empréstito Uruguayo »
.
.
.
.
bancarios
billetes
4i60,566
69 0,8
.
4
.
49
75,111
En conjunto 4.951,000 pesos. Aduana de BuenoiS Aires, regida por una ley .que establecía como derecího general de importación el 25 % j porcentajes es'La
peciales hasta
rruajes
1876 a 18 79
33
para los vinos, alcoholes, cervezas,
9/
tabacos
cigarros,
y
ropa
hecha,
ca-
produjo
de
siguientes cantidades en pesos fuertes:
las
1876
10.0-65,700
1877
10.733,460
1878 .
de
fósforos,
11.824,146
.
13.207,009
18T»-
La desigualdad entre
Aduana de Montevideo y
la
la de
Buenos
Aires estaba en esos momentos bien lejos de alcanzar las proporciones que presenta actualmente.
Dos Comisiones instituyó causas
del
el
coronel
Latorre
nuestro comercio
decaimiento de
para estudiar las de tránsito
con
el
que permitieron refetarifas riograndenses que
Brasil, obteniendo informes circunstanciados rir esas
causas a ^a baja operada en las
empujaba
el
contrabando hacia
el territorio oriental, a las
trabas
opuestas por nuestras ordenanzas aduaneras y a la escasez de los
puntos habilitados para de
acuerdo
con
las
el
pasaje de las corrientes de tránsito.
indicaciones
formuladas
en
esa
Y
oportunidad
fueron eliminadas algunas de las medidas fiscalizadcras y se aumentó el número de pasos fronterizos, consiguiéndose con ello
una mejora inmediata en sil.
el
con
Ya anteriormente reglamento de el
mismo
e]
intercambio de productos con
se habían introducido
importación y
exportación
propósito de estimular
el
el
Bra-
reformas radicales en de frutos
del
comercio de tránsito.
país,
Universidad
Alíales de la
127
El Gobierno Brasileño, después de realizar con
muy
buenos
re-
sultados un ensayo de derechos diferenciales en la aduana de Uru-
guayana, resolvió extender su régimen de franquicias a las demás aduanas fronterizas, dando lugar con ello a que el coronel Latorre acordara a la aduana del Salto una rebaja del oO % que produjo excelentes resultados del punto de vista de la renta aduanera, sela Memoria presentada en 1878 por el Colector GeneraT^-íle Aduana don Tomás Gomensoro. La brusca rebaja de 1879 puso en conmoción a nuestro mer-
gún
cado y a los mercados próximos.
La Liga Industrial, que acababa de fundarse bajo la presidencia de don Carlos Anselmi, se apresuró a manifestar al Gobierno que
%
reducción del 50
la
en
los
derechos de importación constituía
un golpe de muerte para las industrias nacionales. Pasada su nota estudio de
al
Tomás
Contaduría General de la Nació.n,
la
contestó don
autor de la ley de libre cambio de 1861, que los
Villalba,
cinco años de vigencia que llevaba la protección aduanera estable-
cida por reacción.
gobie/no de Várela, demostraban
el
Y
Gobierno, que así también
el
lo
la
necesidad da una
creía,
desestimó
la
gestión de la Liga Industrial.
Y
Cámara de Diputados de la Argentina, que revisaba momentos la ley de aduanas de 1880, resolvió suprimir
en
la
esos
tornaguías y
derecho de depósito sobre las mercaderías de Irán*
el
y reducir
sito,
ción, todo ello
sobre
Con
el el
las
el
porcentaje de varios de los rubros de importa*
para contrarrestar
la
repercusión del plan latorrista
comercio argentino. propósito
corregir
de
abusos,
combatir
ccntrabandos y
entonar los resortes todos de la fiscalización, resolvió también
Gobierno rematar
el
Receptorías de Cerro Largo y defraudación de los derechos aduaneros al
las rentas de las
Tacuarembó asimilar
la
hurto, restablecer la Inspección de Receptorías del río Uruguay, reinstalar la Oficina de registro i:ara
En
el
reglamentar en forma severa
el
despacho de mercaderías.
1879 se emprendió la reducción de la tarifa de avalúos, sus-
tituyéndose la Comisión
acuerdo con Integraban
el
la
ley
de
de Aforos que funcionaba a 1861,
instrucciones
Comisión revisora,
la
sazón de
que
comerciantes
matrícula de despachantes. De acuerdo con
que según la
ia
por un «Tribunal de Arbitraje»
Colector de Aduanas, dos Vistas y dos
sorteados entre los de 'as
Control,
de despachantes y habilitar a la Receptoría de Mercedes
tarifa
«El
Siglo»
habían
sido
debía ser proteccionista,
dadas
a
la
pero protec-
Anales ie
128
Universidad
la
bajo forma de rebaja o supresión de los derechos sobre materias primas o auxiliares de la industria nacional.
cionista las
Otra reforma importante se propuso realizar el Gobierno con la implantación del warrant, de acuerdo con el proyecto formulado por
Aduanas don Juan
Colector de
el
Cuestas y aceptado por
L.
Latorre.
La Aduana
registro
destinado a la inscripción de esos certificados y exigiría
para
autorizar
expediría certificados de depósito, abriría un
operaciones
de
transferen-
o
presentacica del certificado
la
comprobante de
u título de verdadero
reembarco
despacho,
de las mercaderías respectivas,
cias
la
propiedad de
las
mercade-
depositadas en los almacenes fiscales.
rías
Por diversos decretos de
la
dictadura fueron declarados libres
de derecho de importación la sal marina y
el
carbón de piedra y el ganado en
de derechos de exportación los productos agrícolas y pie
extraído por la vía
marítima.
Contribución directa.
En
el departamento de Montevideo 8,251 propietaun capital declarado de 88.617,000 pesos, sobresaliendo del
1879 había en
rios con
punto de vista de yentes y un
nacionalidad los orientales con 2,864 contribu-
la
capital
de 34.928,000
pesos;
los
italiafnos
contribuyentes y un capital de 17.004,000 pesos; 1,584
y
los
con 2,400
españoles con
contribuyentes y un capital de 12.236,000 pesos. había en los departamentos de campaña 32,576 propietarios
con un capital de
1.2
3.43 3,8 00 pesos, destacándose los orientales con
un capital de 53.324,006; los brasileños con un capital de 35.805,775 pesos; los españoles contribuyentes y un capital de 13.542,400, y los italianos contribuyentes y un capital de 5.762,280.
15,967 contribuyentes y 6
177 contribuyentes y
con 4,574 con 2,741
La 4
'/¿r
ley
de
contribución
directa
de 1876
establecía
la
cuota
de
para las chacras, campos de pastoreo cercados por todos sus
campos de pastoreo con cultivos forrajeros destinados al ganado y plantaciones de bosques, y la de 5 aV para la propiedad límites,
urbana, quintas de los alrededores de los pueblos, terrenos sin ficar,
campos de pastoreo
La de 1877
abiertos,
aplicó la cuota de 4
%<,
ganados y capitales
en
edi-
giro.
a las zonas provistas de irri-
gaciones artificiales con tomas de agua en los ríos o arroyos re-
La de 1879 estableció el 4 y % '/m para las chacras, campos cercados o sembrados y plantaciones de bosque en los departamentos de campaña; el 5 %c para las propiedades del depar-
presados.
Anales de
la
129
Universidad
la Capital; el 5 V^ para las propiedades en general de departamentos de campaña, quedando suprimido, en cambio, el
tamento de los
impuesto de instrucción pública. ''Z iDurante la dictadura de Latorre fueron rebajados en un 2 en operada baja la a consideración rurales en urbanos los aforos y valor de la propiedad.
el
Patentes, papel sellado y timbres.
La de
la
1S7S establecía 16 categorías, desde
ley de pafrentes de giro de
pesos aplicable
6
aplicable a
pesos
laderos,
neral;
a
los
pequeños
hasta la de 2,000
oficios,
bancos emisores. Pagaban 200 pesos los
los
sa-
molinos a vapor, casas de cambio; 250 los hoteles en ge300 las joyerías en general y las casas introductoras; 400
de lujo y las plazas de toros; 500 los bancos de depósito y descuentos, las empresas de gas y de tranvías y las joyerías y tiendas de primera clase; '600 los mercachifles o vendedores ambu-
los hoteles
de campaña.
lantes
La
timbres de 1877 establecía 21 catego-
ley del papel sellado y
desde la de 10 centesimos para las obligaciones de 25 a 100 pesos, hasta las de 30 y 4)5 pesos para las obligaciones de 2 5.000 rías
a 30,000 a ejecutarse dentro o fuera del plazo de seis meses, rigiendo el 1 Ve para las obligaciones mayores. Los vales y los con-
formes debían escribirse en papel timbrado. Los comerciantes defraudadores del impuesto de timbres serían castigados con la exhibición de sus libros ante el Juzgado de Paz y el pago de las
multas
correspondientes.
Creación y supresión de impuestos.
Desde 187 6 empezó a cobrarse
el
l
%
sobre todos los pagos
Tasorería y demás oficinas pagadoTas, poír concepto de f.ueldos, pensiones o cuentas, con destino a la extinción del papel
de
la
moneda. En cambio fué suprimido
al
año siguiente
el
impuesto de
cabala creado bajo la administración Vaneüa, invocando respectivo
creto
de
los
piedad Otro el
de
que
contratantes
inmueble».
pequeño 2 5
-9.
que
un
impuesto
impuesto
entorpecía
Producía
centésimois
T: VII
era y
«nocivo el
anualmente
estableció
el
a
la
el
moralidad
movimiento de 120.000 gobierno
al-
de-
la
pro-
pesos.
de
Latorre:
anuales por comcepto de visitas de inspec-
Anales de
130
Universidad
la
clon y comprobación de las pesas y medidas métricas de las caSiriS de comercio, y ello como medio de dar ejecución a la ley de 1874
que prescribía esa forma de contraste.
El Presupuesto General de Gastos. El primer Presupuesto de la administraición Datorre promulgado en imayo de 187i6 fijó e'l monto de los gastos públicos en 4.55:2,571 pesos. El Ministerio de la Guerra absorbía 2.20'5;000 pesos, el de Gobierno 1.599.000, el de Hacienda 696,000, el
Relaciones Exteriores
de
de
y la planilla
2i3,000
dictadura
la
27,000.
La
la
Penal,
Comercial,
y
Política 7
pesos tenía en ese Presupuelsito 21,0 remuneración de 6 catedráticos de Derecho
Derecho
y
de
catedráticos
cas,
estudios
Química,
de
Meidicina
Procedimientos
preparatoirios
Hisitoria
(iPilosofía,
;
Matemáti-
Natural y Geografía), y y Anatomía).
enseñanza superior,
de
Judiciales)
2
cate-
(Fisiología
pesos con
Da Enseñanza Primaria tenía 17 6,8 maestros
(Civil
Economía
Internacional,
Constitucional,
Administrativo,
Física,
dráticos
2
desti-
Uniíversiidaid
nados a
65
maestros
y
destino
65
a
ayudantes
enseñanza inferior, álauñer de 6i5 escuelas, textos y útiles ¡escolares en lel departamento de 'Morutevideo exclusitvamenite. Lois ideparitamentois de icampaña figurahan en rubro aparte. Oanelones recibía, por -ejemplo, 24,800 pesos para remunerar un die
personal
de
27
maestros
y
cubrir
alquileres
y
gastos,
y
Salto
14,300 para 12 maestros y 4 ayudantes y alquileres y gastos.
La
Policía
del
Departamento de
la
Capital
era
atendida por
15 comisarios, 16 subcomisarios, 16 sargentos, 365 guardias civiles y un batallón de serenos compuesto de 170 infantes y 21 soldados
de caballería.
El
.Eijérlcito
gimiento
de
constaba de artillería
y
2
s<eis
batallones
regimientos
de
de cazadores, un caballería
de
re-
línea.
Los batallones ide cazadores y el regimiento de artillería tenían alrededor de 260 plazas cada vino y los de caballería 190. Los militares en seirvicio activo absorbían 1.00¡2'.5 8 6 pesos pasivas 1.323,967. En conjunto 2.326,553. y los de las clases Deducidas las asignaciones de los jefes y oficiaües del Estado Mayor Pasivo utilizados en otros puestos de la Administración (12:l,2i3'6 pesos), quedaban los 2. 2 05, i3 O O pesos que el Presu-
puesto asignaba al Ministerio de la Guerra.
Anales de
Universidad
la
1
31
pesos. Más de subió a 6.794,903 de 1878 El Presupuesto 000,000 de pesos de aumento en relación al que acabamos de extractar. El Ministerio de Hacienda, que era el más abultado
2
por cos,
absorbía 2.342.00
Guerra el
de la reanudación del servicio de las deudas públi-
lefeoto
pesos,
pesos,
2.142,0
el
de Gobierno
el
de
Relaciones
de las oficinas de la dictadura
2.243,00 0,
Exteriores
3
de
el
0,9 00
y
3 5.i600.
•La planilla de la Universidad se elevaba a 3 5,800 pesos. Quedaban suprimidas todas las cátedrajs de estudios preparatorios. Pero en cambio se creaban 17 cátedras de Medicina incluidas las
Clínicas.
La planilla de Enseñanza Primaria absorbía 390,000 3S0s. Figuraban en ella la Escuela Normal con 10,00 pesos, .as escuelas comunes de 'Montevideo com 170,000 y las escuelas de campesos Canelones. 2 2,000 paña con cantidades variables; 28,00 pesos Pa'ysandú, 21,000 pesos Salto, 11,000 pesos Durazno y en ,
menoT eiscaLa La tropa de y
los
demás.
línea quedaba reducida a
un regimiiento de
.5
batallones de cazadores
artillería.
El cálculo de recursos cubría ampliamente los gastos. Se ele-
vaba a
7.0 62,0
00 pesos, destacándosie las siguientes fuentes
butarias:
Aduana: 5.000,000 a deducir 14 ra
servicio
el
de la
pa-
(/<-
deudas internas
($ 1.250,000). Saldo Patentes - Capital
$
368,562
164,100
Papel sellado
Timbres
54,441
Patentes,
Sellado
y
Timbres
departa-
de
la
Capital
los
departaanen-
mentales
394,2 20
Contribución ($
52 0,000)
tos
($
des'tino
Directa
ídem de
600,000).
A
deducir
a extinción del papel
(i373,300).
con
1|3
moneda
Saldo
746,700
Correos
Ramos
120,000 policiailes
y
municipales de cam-
paña
240,000
Ramos municipales »
3.750,000
policiales
de Montevideo »
*
.
.
.
578,000 27,000
tri-
Anales de
Entre
Universidad
la
rentas municipales de Montevideo figuraban
las
Lo-
la
de Caridad con 2'40,0'00 pesois, el abasto y tablada con 140,000, las patentes de rodaidos con 34,000, el alumbraido público tería
con 68,400 y
el
A mediados
impuesto de serenos con de 18 7 9 presentó
Ya
proyecto de Presupuesto para 1880.
el
dio 'de la crisis financiera que tanto
gundo semestre de ese lejos
Peiro
año.
74,000.
coronel Latorre a la Asamblea
el
estaba
de
corrientes
3
g-obieriio, culto,
subía a
8.748.6.5 4
3.325,25.?
425,328
.
municipales
Presupuestos
administración
la
recaudación, administración, pol
Pública
Instrucción
246,144
.
124,104
Jubilados
Menores I.,ista
pensionistas
y
Militar pasiva
75.996
ci'.
.185,379
.
Servicio de deudas y otros compromisos
El tálenlo de recursos asoendía a
Un mes después
se
dirigía
Asamblea, alarmado por
la
8.869,000.
de nuevo
crisis
.366,450
el
coronel Latorre a
Presupuesto y
el
uno de
otro para
el
ellos
de ique
para introducir rebajas en
rebajar los dereolios de aduana
v
demás impuestos.
El
Presupuesto
Ministeirio al
habladoi,
la
de cuya intensa gravedad re-
cién se daba cuenta, pidiendo los dos votos de confianza
antes hemos
los
se-
el
mensaje distribuía en esta forma:
el
Necesidad.
país en me-
proyecto del Poder Ejecutivo,
el
de responder a un plan de economía.
pesos que
el
debía acentuarse en
sancionado
en
de la Guerra 1.870,686
esa pfisos,
acordaba
oportunidad al
al
de Gobierno 1.832,248,
de Hacienda 696,873, al de Relaciones 47,548, al Cuerpo Legis-
lativo
14'2,640
y a
la
Presidencia de la República
conjunto 4.614,469 sin contar
el
24,480.
Ííl.
deudas públicas Presupuesto quedó fuer-
servicio de
lias
y demás cbligaciones de la Nación. Esie temente reducido a raíz del voto de confianza para introducir
sueldos y pensiones. rebajas y establecer descuentos sobre (Entre sus planillas figuraba el ejército de línea reducido 4 batallones
mero
di8
Icis
de cazadores, en vez de los 6 que había en presuipuestos, un regimiento de artillería y un
el
a
pri-
picjue-
te de treinta y tantos soldados de caballería en vez de los dos
regimientos ique antea había.
La misma
estrictez revelaban
las
planillas
del
Estado Mayor
Anales de
la
Universidad
133
Pasivo, según lo demuestran estas cifras del ejercicio 1S76-1877, el
primero de
la
dictadura de Latorre, y
el
de 1879-lSSO,
el
timo de su administración: 1876
35
1879
úl-
Anales de
134
la
Universidad
La Comisión de Tenedores recogería semanalmente de na ción
con destino
ción
del
de
la
Adua-
cuarta parte del producto general del derecho de importa-
la
Deuda
la
concluía
y
el
aceptan la
Interna
ción de las rentas
representa
—
—
memorándum
indica-
tenedores
los
de vigilar la percep-
facultad
de hacer por medio de la Comisión que ios
conducentes
observaciones
u
indicalciones
las
«A
de las deudas internas.
servicio
al
Gobierno
al
mejor servicio público en esa parte». Eran once las deudas internas comprendidas en esa propuesta,, con un monto total de 27. 121, 260 pesos. El nuevo servicio absorbería
1.647,692
pe.sos
íque se calculaban desde a amortización
(ique
se
año,
al el
3
correspondiendo
hasta
calculaba
el
6
desde
©1
a
intereses
pesos y
1.3 6 8,6 79
Tf)
hasta
Vz
el
2
%)
279.013 pesos.
-
Esta propuesta fué aceptada por el coronel Latorre y cumplida con dificultades por efecto de las estrecheces financieras de 5a
Había
época.
qu-e
entregar mensualmente a la Comisión de Tene-
dores 137,307 pesos, pero muchas veces no daba para tanto
ducto libre de la aduana, atrasándose con ello
extremo de originar un
déficit
el
pro-
servicio hasta el
el
equivalente al monto de cuatro
mensualidades.
En ron
1878,
los
yecto de
antes del vencimiento del plazo del convenio, resoh-ie-
tenedores de deuda interna proponer modificaciones por
el
que se
hasta diciembre de 1882. El aparte de
la
al
Gobierno un pro-
prorrogaba
concordato
el
renta de aduana quedaría
rebajado a 105,000 pesos mensuales en cuotas diarias de
.5,000
pe-
Los intereses de los cuatro meses vencidos y que estaban pendientes de pago, se pagarían con «Títulos Adicionales». Durante
sos.
cinco años de la prórroga se pagaría en oro la tercera parte de los intereses, en vez de pagarse la mitad como hasta entonces los
y lo demás con «Títulos Especiales», a los que se aseguraba un servicio de amortización de tres mil pesos mensuales.
El Gobierno se apresuró a aceptar la nueva fórmula de los
te-
nedores.
En
octubre del
año siguiente, ya en medio de
la
crisis
finan-
ciera que ponía en conmoción a los Poderes públicos, volvieron
a
reunirse los tenedores de deuda interna, surgiendo de esas reunio-
nes estas nuevas bases de arreglo que fueron propuestas
al
Go-
bierno:
Prórroga el
del
convenio
vigente
hasta 1887.
Desde
el
año 1883
Estaido pagaría en oro la mitad de los intereses fijados por las
Anales de
leyes de
parce
convenio de 1878, realizándose las amorti-
ei
i-or
con
zaciones
135
de las deudas internas, en vez de la tercera
creación
íijcid't
Universidad
la
sobrante
el
Xo
aparte aduanero.
de
105,000
los
mensuales del
pesos
nuevos «Títulos
emitirían
se
Especiales»
y
ya emitidos con monto de 3.287y6.74 pesos seguirían amortizándose .con ayuda de la partida de 3,000 pesos mensuales afec-
los
a ese fin. Los tenedores de deuda interna podrían optar pago de los servicios en las plazas (de Londres o de París, canjeando sus títulos por «Fondois Uruguayos».
tada al
Fundando
la localización del servicio en las plazas europeas don Juan Antonio Artagaveytia uno de los miembros ;;e Comisión de tenedores de deuda:
decía la
.Hay apatía en los negocios por falta de capitales y las deudas no se valorizan en la forma que correspondería atento «a
que
con
puntualidatd
exacta
el
cumple sus
Gobierno
la
compromi-
más extraño «Empréstito Uruguayo» radicado en Londres, que
sos con los tenedores de los títulos». Eso es tanto
cuanto que sólo
el
goza del
i/4
2
agosto
a fines de
^/í
28
anual
interés
de V2
sin
mientras que nuestras tdeudas internas del tiví'^ 4
'/c
y
1
%
amortización,
de
de interés temporario y 3¡4
lan del 28 al
3
mitiría alcanzar
no Ve
pasan al
1
9r
2
del
valía
31
%,
también de
in-
%
julio
18
a
%, y
las
de
de amortización osci-
%. La localización del servicio en Londres permínimum de 45 % a las deudas del 4 S¿ y el
el
del 25 a las del 2
Pero ya
amortización,
Ve habiendo estado en
'/c.
régimen constitucional y el término, no pudo atender esta gestión con la misma rapidez que en años anteriores y la nueva fórmula de iprórroga quedó olvidada. El servicio de la deuda externa, interrumpido bajo la administración Várela como consecuencia de la bancarrota del «año el
país había
vuelto
al
gobierno de Latorre, que tocaba a
terrible»,,
fué
también
reanudado
isu
por
el
gobierno
de
Latorre
desde enero de 1878.
En la asamblea de tenedores de Títulos Uruguayos celebrada en Londres en diciembre de 1877 bajo la -presidencia de Mr. L. J. Baker, recordó uno de los oradores que en 18 74 habían llegado
lallí dos comisionados uruguayos (los doctores Ellauri y Pérez Gomar) para negociar otro emprésnto de 5 a 6 millones de libras esterlinas y que uno de ellos había asegurado por la prensa que los intereses y la amortización del empréstito de
187il
serían
cubiertos
con
toda
puntualidatl,
agregando
estas
Anales de
136
Universidad
la
yo no trepidaría en hacerme personalmente responOtro orador expresó que debía aconsejarimporte». sable de su principio do la lioneetidad» y que debía gran «el Gobierno se al decírsele que el crédito de su país quedaba hundido «hasta que
lalabras:
«y
honestamente». Y un tercer orador sostuvo propuesta del gobierno de Latorre revelaba «el propósito agregó de volver al eamino de la honestidad». Ese gobierno de la mi«en el uso Argentina, República no imita al de la Montevideo «se en moneda»; Ihacer papel máquina de serable
comportara
se
el
que
la
—
—
amortiza y se quema el papel moneda, mientras que en Buenos Aires aumc-nta su monto con una nueva emisión de 10 millones de pesos fuertes». Don Jorge Drable Presidente del Directorio
Banco de Londres y Río de
del
Plata cerró el debate apoyan-
la
do al último de los oradores. La fórmula que votó esa asamblea y que fué tramitada por el .señor Morioe, representante de la casa Thomson, Bonar y Cía.,
de
Londres y
ajceptada
por
gobierno
el
de
Latorre, esta-
blecía lo siguiente:
Desde el
el
servicio
1.°
de febrero de 18 78 hasta
de 34,000 pesos, dores de títulos. brero de
el
31 de enero de 188 3
Uruguayo se hará por mensualidades cuya suma se pondrá a disposición de los teneEn pago de los intereses adeudados desde fe-
del Empréstito
1876
hasta enero de 1878,
se
entregarán títulos análo-
gos a los originarios. Los tenedores renuncian durante el plazo de cinco años a lo que les correspoaide por el contrato de 1S71
y renuncian para siempre al régimen de amortización por sorteo y a la par y aceptan en cambio el de la amortización a la puja.
En
1883 se restablecerá
el
servicio originario.
Es interesante agregar que no todos los tenedores de deuda terna
habían querido entrar
Latorre. Los señores Nocetti
en
los
concordatos
y Arzeno,
in-
de Várela y de
que figuraban en ese nú-
mero, se presentaron ante los Tribunajes exigiendo estricto de los contratos y leyes primitivas.
el
cujnplimiento
Pero sus acciones fue-
ron desestimadas declarándose por sentencia ejecutoriada que los arreglos hechos por
el
Gobierno con la mayoría de
los
acreeidores
tenían que declararse obligatorios para los demás, so pena de llevar el
desorden a la administración.
)
Anales de
Monto
tle
En
junio
cuadro
137
la (leuda pública.
de
circulaban
1876
de
oficial
Internas
Universidad
la
Consolidadas,
Externas del
%
6
las
de
9
6,
y
12
%
interés
de
(Empréstito Uruguayo)
(Franco-Inglesa e Italiana del
Internacionales
deudas
siguientes
según
un
Contaduría:
la
.
.
5
$
29.894,675
14.874,560
.
3.105,950
^c
f
47.875,185
Tres y medio años daspués, en diciembre de 1879, o sea al terminar la administración Latorre, el monto de la deuda consolidada marcaba exactamente el mismo nivel que en 1876, según lo demuesde la Memoria de Hacienda tra este resumen que reproducimos presentada por don Aurelio Berro a principios de 1880:
Deudas
internas
(13
Internacionales
»
deudas)
(Empréstito
externas
»
$
....
Uruguayo)
(Franco-Inglesa
e
Italiana)
14.551,200 2.497,150
.
$
;Ei
así
servicio de esos 47.861,0i62 pesos subía a
distribuidos:
Deudas
internas
1.320,000
30.812,712
47.861,062
2.016,000 anuales
pesos,
deudas
exter-
nas 408,000, deudas internacionales 276,000.
Prevenía el servicio
9l
Ministro de Hacienda en
la
misma Memoria que moneda
de amortización del saldo circulante del papel
(reducido a tres y medio millones gracias a las persistentes amorpracticadas desde 1876) insumía 180,000 pesos anuales; deuda francesa por 1.940,000 pesos, emipezaría a servirse de inmediato con un servicio de 4 % de interés y un fondo amortizante de 100,000 pesos anuales; y que estaban pendientes de coatizaciones
que
la
Bolidación la deuda brasileña por 3.168,746 de capital y la deuda flotante
por
1854 por
2.
5.650,000 pesos, en la que figuraban los Bonos de 115.000 pesos, varias liquidaciones procedentes de Go-
biernos anteriores por 1.097,000 y los sueldos anteriores febrero de
1876
por 1.226,000.
al
mes de
:
Anales de
138
la
Universidad
Tipos de amortización de las deudas.
Las amortizaciones de 1S78, que tomaremos como ejemplo de Irt^
realizadas
bajo
la
administración
Latorre,
alca-nzaron
a
1432,924 pesos nominaJes, habiéndose pagado los títulos a los siguientes precios según la Memoria de Hacienda del mismo año: Interés
Internas
Amortización
Precio pagado
Anales de
Los derecíios a ubicar tierras
La Coataduría Generaü de ubicar
a
títulos
los
tierras
Universidad
la
139
fiscales.
Nación hizo constar en 1879 que
la
entre
distribuidos
fiscales
los
parti-
14 leguas, pero que aparte
culares abarcaban una superficie de
de ellos existían autorizacioTies especiales dictadas por diversas Legislaturas
jenar tadas
favor
a
puede decirse, dada
judicación y
Juntas Económico - AdmiComisiones de Templos para ena-
Policías,
las
las
En conjunto
más.
leguas
61
de
campaña y de
iiistralivas de
la
leguas
75
fiscales,
malbara-
precios de ad-
insignificancia de los
improductividad de sus aplicaciones.
la
Relaciones internacionales.
Cox LA Argextixa. Tres ticos
d'j
decreto
la
importancia registran los anales diplomá-
de
incidentes
administralción Latorre:
relativo a la anuíaiclón del
eil
de expropiación de las aguas corrientes
gobierno de Vairela,
relativo al
el
por
dictado
abalizamiento del canal del
el
In-
fierno entre la Isla de Martín García y el litoral uruguayo, y el r-^iativo
al
servicio de práJoticos
Latorre anuló
el
dando con
ello pretexto
res Lezica,
Lanús y Fynn para
Gobierno Argentino. Pero
la
el
reclamo. «Es improceidente
lares
el
y contrario
proceder
Río de
empresa seño-
solicitar y obtener la protección del
CancilJ'ería
Uruguaya, desempeñada a
No a
es las
a
las
posible
—
—
decía
prácticas
según
aceptadas
el
en
derecho inter-
reclamaciones
diplomáticas,
particulares
demandan en favor de lEl
de
casos
tratándose de reclamaciones sin
hayan deducido sus derechos ante dades respectivas y que éstas les hayan denegado la
esos
Plata.
la
doctor Ambrosio A^elasco, se apresuró a rechazar
sazón por
naturaleza...
el
a los concesionarios de esa
la
nacional
lemanes en
decreto de expropiación de las aguas corrientes,
que las
esa
particu-
antes autori-
justicia
que
sus derechos».
canal del Infierno fué abalizado por las autoridades urugua-
yas a mediados de 1877, a raíz de un viaje de estudio confiado
comandante del vapor de guerra «Presidente», en el que quedó demostrado que allí había mayor volumen de agua que en el canal de Martín Gaircía. Como un diario de Bnenos Aires reivindicara para los marinos argentinos la prioridad del estudio, sostuvo un
al
Anales de
140
Universidad
la
remitidista de «El Siglo» que ya en 1S38, cuando
por la escuadrilla franco
ií-la
Las
y reconocido.
cubierto
-
el
ataque de
la
uruguaya, ese canal había sido des-
boyas
pocas semanas
desaparecieron
después y hubo que repetir su colocación en los mismos días «mi que aparecía la .Memoria del Ministro de Guerra de la República
Argentina doctor Adolfo Alsina, en la que se prestigiaba la idea de abrir a la navegación el nuevo canal, como si no estuviera dentro de nuestra exclusiva jurisdícció:i fluvial.
En
esa
misma época
una nota en
la
prácticos lemanes del
gentina
el
dirigió
nuestra Cancillería a
primer
argentina
año
anterior, por
cual se atribuía la Ar-
el
derecho de ex;pedir patentes de pilotaje para ía nave-
gación del Río de la Plata, «como dominio absoluto de las dos costas el
la
que reiteraba sus reclamos ^contra un reglamento de
reclamo,
decía
a ella sola perteneciera
si
gran
del
nota, contestó
la
río».
la
Al
el
entablarse Ar-
Cancillería
gentina, a «argo del doctor Bernardo de Irigoyen, que había autoal Encargado de Negocios en Montevideo «para proyectar considerando que la comunidad un acuerdo sobre el particular.
rizado
.
.
de intereses entre ambas Repúblicas y la cordialidad
de
relacio-
nes qu© mantenían sus gobiernos aconsejaban resolver esos puntos
de acuerdo con las conveniencias del comercio y de la navegación». Terminaba la Cancillería Uruguaya diciendo que a nada se había arribado todavía y que era ecaiveniente que autorizara a su Legación «piara concluir pilotaje,
los
ajustes
necesarios
Ide
instrucciones a la
el
Gobierno Argentino
bajo la base del libre
en beneficio del comercio y de "a
nuevo Canciller argentino que ya se habían dado Legación de Montevideo «para negociar un con-
navegación». Esa nota dio lugar a que doctor Rufino
aiquí,
Elizalde
venio sobre luces en
el
el
manifestara
Río de la Plata
(y
sus
afluentes» y
que
pronto se darían otras «para ajustar un tratado fluvial del Uru-
guay y Río de la Plata» y en cuanto a prácticos lemanes, que el Gobierno Argentino había dictado un decreto que podía considerarse
El
«como una solución incidente,
que no
satisfactoria de los incidentes pendientes».
fué
solucionado
de
inniediato,
dio
lugar
a dos decretos que se publicaron casi simultáneamente en Monte-
video y Buenos Aires, a la espera uno
fy
otro de
un convenio
di-
plomático sobre servicio de prácticos lemanes. El argentino establecía que los buques ide ultramar podrían ticos,
tomar o no tomar prácal Estado la mi-
pero que en caso de no tomarlos abonarían
tad de los derechos correspondientes y que las autoridades argentinas no cooperarían al cobro de los faros uruguayos. El decreto
Anales de
la
TJnwersidad
141
uruguayo declaraba también que no era obligatoria
la
contrata-
ción de prácticos, ipero que en caso de recurrirse a ellos deberían ser utilizados los patentados
por las autoridades uruguayas. Agre-
no patentados que ejercieran su profesión en la República pagarían una multa de 150 pesos y que la Comandancia de Marina de Montevideo no seguiría cobrando el derecho
gaba que
los
prácticos
de los faros argentinos.
De dos asuntos más nacidos en
los
se ocuparon las
otra, declarándose por el doctor tal
y
Gualberto Méndez
doctor M. A. Montes de Oca
el
nacimiento era
lugar del
Plata:
Cancillerías del
de la una y bautizados en el de
territorio
el
lo
de la
Ministro Orien-
Ministro Argentino, que
único que debía tOD)arse
en
el
cuenta
para la determinación de la nacionalidad, y que el bautizo o sea incorporación a un gremio religioso, carecía de alcance polí-
la
y del transporte de presos por las autoridades policiales de en buques que hicieran escalas en los puertos del otro
tico;
un
.país
acordándose que podría realizarse, pero «con custodias
país,
simpre que no se tratara de delitos
cientes», y
Cox
El.
sufi-
políticos.
Brasil.
Nuestra Cancillería arribó a un acuerdo con la del Brasil encaminado i 'solucionar las dificultades a que había darlo origen el
tratado de extradición de 1851, declarándose que procedería la
extrTdicicn
en los rasos de homicidio, aborto voluntario, lesiones
estupro,
griive:-;,
incendio,
po'i'.-.amia,
falsificación,
robo,
peculado,
piratería, bancarrota fraudulenta y perjurio, y conviniéndose
caso?
ü'^entes
podrían
los
gobiernos o
entablar gestiones para la aprehensión
sus
delegados
que on
fronterizos
de los delincuentes.
Cox EL Perú. El Gobierno del Perú invitó en 1876 a todos los gobiernos sud-
americanos para objeto
la
dar unidad a
celebración la
de
legislación.
un Congreso que tendría por Nuestra Cancillería contestó
adhiriendo a la idea del Congreso, paro sin nombrar delegados en raizón
de
las
dificultades
fniancieras
del
que se reunió dos años más tarde con Argentina,
Chile,
Bolivia,
la
momento.
Ecuador, Venezuela y
cionó un tratado de derecho internacional
El
Congreso,
concurrencia del Perú. Costa Rica, san-
privado con reglas uni-
Anales ie
142
Universidad
Ja
formes en materia de estado y capacidad jurídica de las personas, bienes situados en el territorio de cada Estado, contratos celebrados en un país para tener efecto en otro, sucesiones, competencia
Tribunales nacionales en
de los
extranjero,
en
el
jurisdicción
nacional
actos
jurídicos
realizados
en
el
en materia de delitos cometidos
extranjero, ejecución de sentencias y legalizaciones.
Cox LA Gkan Bretaña. Las relaciones diplomáticas del Uruguay con la Gran Bretaña el año 1871 bajo el gobierno del ge-
estaban interrumpidas desde
neral Batlle, como consecuencia de la violentísima nota del Cónsul señor Munro de que hemos hablado oportunamente, acerca
de
la
tentativa de asesinato del capitán de una barca inglesa por la
mismo buque y de nuestra justicia penal en general. Pero en 1879. a raíz del fallecimiento del señor Munro y del re-
tripulación del
cibimiento
cordial
británico ante
el
que
obertura de la que resultó tánica en Montevideo con a
Latorre hizo
coronel
el
Gobierno Argentino, el
el
al
representante
la Cancillería Inglesa hizo
una
restablecimiento de ia Legación Bri-
Ministro plenipotenciario Clare Ford
su frente.
El nuevo Ministro felicitó en su discurso de recepción al coronel Latorre «por la mejorada situación de la República Oriental en este
último año... El país
—
agregó
—
que tiene V. É.
la alta
misión
excede en extensión a Inglaterra y Gales y es cousiderablemente mayor que los tres reinos de Portugal, Grecia y Bélgica reunidos. El conjunto de los ricos y fértiles países que acabo do nombrar excede de 33 'y V2 millones, mientras que la Repú-
de-
presidir,
blica
Oriental 'apenas alcanza a medio millón de almas...
evidentemente
suprema
blación
es
blica...
Pero para traer la inmigración, y
la
necesidad lo
de
La
po-
esta Repú-
que no deja ds ser
menos preciso también, el capital superabundante en los países más ricos... dos cosas esenciales son precisas: la certidumbre del fiel
cumplimiento de
los contratos
que se establezcan y
la
perspec-
una completa seguridad en la vida y propiedad junto con confianza en la estabilidad de los poderes gubernativos... Las
tiva de la
pruebas de patriotismo y de habilidad administrativa ya desplegadas por V. E. son prendas para lo futuro y 110 me cabe duda de que con la ayuda de la Providencia y de los ilustrados conse-
de vuestros Ministros este país se elevará pronto al alto rango que por su posición geográfica y la prodigalidad de sus dotes na-
jos
Anales de
destinado
está
turales,
Universidad
la
ocupar en
a
la
143
familia
de las naciones».
Poco tiempo después firmaban nuestra Cancillería y la inglesa un ajuste 'diplomático por el cual se reanudaban las relaciones entre el
Uruguay y
indemnización
G-ran Bretaña y se acordaba por concepto de
la
de perjuicios
sufridos
por
subditos
los
británicos
documentados y 15,707 de créditos aprobación del Gobierno o de los Tribunales uruguayos.
13,693 pesos a título de créditos
sujetos a la
La Asamblea aprobó el ajuste y una vez canjeadas las ratificaciones, una batería de plaza y un buque de guerra inglés hicieron el saludo de ordenanza a los respectivos pabellones con una salva de ireintiún cañonazos.
Tres años antes, precisamente
el
día en que caía la administra-
ción de don Pedro Várela y surgía la dictadura de Latorre, había
ocurrido un grave (atentado en
Los
vapores «Enmore»
el
puerto de Montevideo.
(inglés)
y
«Hooper»
(norteamericano)
chocaron fuera de nuestras aguas jurisdiccionales. El primero
sa-
y arribó a nuestro puerto trayendo a remolque al otro. El capitán del «Hooper» entabló su protesta y pidió y obtuvo el embargo del barco causante de la colisión. Pero una cañonera inglesa que estaba fondeada en el puerto se puso al costado del valió
por
ileso
detenido y protegió su fuga. La especialidad del momento impidió que ese atentado de la marina de guerra inglesa
político
tuviera la resonancia que pudo y debió tener en salvaguardia de
soberanía uruguaya tan torpemente agredida.
la
La Enseñanza
—
Pi'imaria.
José Pedro Várela inicia
su gran
obra escolar. Al ocuparnos de! «año terrible» nos hemos referido a don José María Montero (hijo), antiguo gerente de «La Paz», el diario de José Pedro Várela, y a su actuación como vocal de la Junta Económico -Administrativa de Montevideo con el título de Director
Pública y posteriormente
de Instrucción
como
Ministro
de
Gobierno.
Montero, que era amigo íntimo de Latorre, quedó en Ministerio
cante en
después la
la
proclamación
Municipalidad,
ofrecida a José
Mucho
de
vaciló
de
la
dictadura
el
mismo
y
su va-
que todavía no se había llenado, fué
Pedro Várela. José
Pedro Várela antes de dar su contestación
La impresión
del país era optimista en esos momentos. Acababa de caer un régimen oprobioso y surgía otro que aunque
definitiva.
— Anales de
144
(imanado de
la
misma
universidad
la
fuente prometía reaccionar contra sus des-
bordes. Pero la dictadura tenía sus sombras y ellas predominaron durante varios días en el ánimo de Várela basta que el convenci-
miento firme y sereno de que la obra de
arma de defensa
ser el
la
del país contra los
educación podía y debía
malos gobiernos,
ob.ü-
le
porque era sacrificio y sacrificio enorme alejarse de todos sus amigos políticos y condenar a su físico nada
gú a
al
ir
sacrificio,
fuerte a una crisis necesariamente fatal, dada la tarea
había
que
«Volviendo
—
mo
a
nombre de elevadas consideraciones de
patriotis-
decía Várela al Ministro Montero en su nota de 27 de
—
de 1876
me
abrumadora
que abordar.
marzo
sobre una primera resolución tomada ya e imponiéndo-
hacerlo el arduo sacrificio de legítimos escrúpulos y de fun-
al
dadas resistencias, acepto
el
puesto para
el
cual se
me nombra
con
firme y decidido propósito de servirlo fielmente en la medida
el
de mis facultades, mientras crea poder hacerlo en pro de públicos y sin
lo&es
mengua de
la
los inte-
dignidad del ciudadano y del
hombre.»
la
Meses después, cuando desvanecidas las primeras esperanzas de dictadura tenía que ocuparse de los que censuraban su perma-
nencia
p,
al frente
de
la
instrucción pública, solía decir estas palabras
sus compañeros de la Sociedad de Amigos de la Educación Pos, pular, que uno de ellos, el doctor Francisco A. Berra, se encargó de publicar después de la muerte del reformador:
«Yo no soy en política,
mi
que está únicamente
en
sino
tierra
educacionista.
porque la política compromete
mi
actitud
que
si
la
salvación
a prestigiar
el
de
Prescindo
progreso de la
la
República...
dictadura,
de
la
escuela
Sé
que
pero sé también
la contribuye por este lado hago mal a mi país, por otro lado le hago bien.
El prestigio que puedo dar a este gobierno es transitorio. El influjo de
la
ciencia país
En
reforma escolar es duradero y profundo. Peso en mi conambos hechos y no tengo la menor duda de que hago a mi
mucho más bien que mal.» el
acto de ocupar su puesto trató de que circulara entre los
maestros «La Educación del Pueblo», obra de propaganda que él había escrito y donado a la Sociedad de Amigos de la Educación Popular.
«No he venido a desempeñar el puesto que se me ha confiado viéndome en la necesidad de improvisar opiniones y de averiguar la línea de conducta que debo trazarme.
decía en su nota
No,
traigo
—
opiniones
hechas,
ideas
formadas,
línea
de
conducta
Anales de la Universidad
145
perfectamente trazada desde hace largo tiempo. y a dónde quiero
ir;
me
de esta corporación lo sepan también que
tando resuelva
lo
Sé
a
dónde voy
y es para quo los maestros y dependientes dirijo a V. E. solici-
necesario para que la Sociedad de Amigos de la
Educación Popular entregue a esta Dirección el número de ejemde «La Educación del Pueblo» correspondiente a la suma
plares
votada por la Asamblea».
La Sociedad de Amigos de
la
Educación Popular que acababa
de recibir del Jurado de la Exposición de Cbile una medalla de
un diploma, destinó
plata y
la
medalla a José Pedro Várela por su
obra «La Educación del Pueblo», y el diploma a Emilio Romero por sus Carteles de Lectura, su Geografía Elemental y la traducción del
Manual de Lecciones sobre
—
«Es a usted tarle la medalla
Objetos.
decía la Comisión a José Pedro Várela al adjun-
—
es a usted a quien la República debe habe^ mostrado por primera vez ante un concurso de naciones hermanas y amigas, que hay espíritus elevados, que en medio de las agitaciones ardientes do la política y de las convulsiones de la guerra
prosiguec
civil
en
de
má.s,
la
esfera
la
ilustración no comiín,
el
científica,
con
clara
inteligencia
e
vasto problema, eolución de todos los de-
educación popular.»
Para integrar la Comisión de Instrucción Pública que había de acompañarle en sus trabajos, recabó el concurso de los señores IlJuan Alvarez y Pérez, Eliiilio Romero, defonso García Lagos, Pedro
Ricaldoni,
Víctor Rappaz
Carlos
María de
Pena,
Remigio
Castellanos
y
últimos en reemplazo de don Francisco A.
(los tres
don Enrique Estrázulas y don Federico E. Balparda que La Subinspeccióm de Escuelas fué confiada a don Juan Manuel de Vedia y la Inspección quedó a cargo de don Berra,
renunciaron).
Pedro
Giralt,
que ya
la
desempeñaba.
Las primeras resoluciones de la Comisión denunciaban ya la importancia del programa: construcción de edificios escolares, creación de una escuela normal de maestros, conferencias pedag;ógicas para la divulgación entre los miembros del personal enseñante de lof:
métodos y programas que habrían de implantarse eu
las
es-
cuelas.
«La
falta
de
recursos
—
decía Várela
trucción de edificios y a la Escaiela
refiriéndose
Normal
—
a la cons-
ese escollo a flor
de agua en que naufragan a menudo entre nosotros tantas buenas ideas
y
tantas
nobles
sible su realización.
T.
VII-
10.
a.spiraciones»,
ha hecho hasta ahora
impo-
Anales de
146
En cambio
la
universidad
que podían desarrollarse
las conferencias pedagógicas,
fuera de la zona de influencia de las maltrechas finanzas escolares, quedaron implantadas de inmediato y continuaron con toda regularidad en los meses y años subsiguientes. «Las conferencias
maestros y las ideas pedagógicas», «la gimnástica», «las lec«cómo Be debe enseñar a leer», «cómo se detales fueron los primeros temas enseñar la aritmética»,
de
ciones de memoria»,
be
—
de 1876.
En una
de las iconferencias de 1877 se discutió
si
las
maestras
temar parte en las disertaciones y a pedido de ellas mismas quedó resuelto el ipunto negativamente. Faltaba entonces el entrenamiento que hoy tiene la mujer. Recién empezaban los estudios intensos de los problemas escolares y la obligatoriamiente
debían
Comisión
de
Pública resolvió
Instrucción
atender
de la
voto
el
asamblea úe maestros.
Lii
Ley de Educación Común,
Tres meses después de su nombramiento presentaba José Pedro «La Legislación Escolar», obra esal Ministro de Gobierno
Várela
crita durante el
año 1875 «ocupando
—
— es
él
quien lo dice en
pró-
el
en su redacción las largas y monótonas horas de una prolongada reclusión que los sucesos de aquella época nos obligaron a soportar, ya que no queríamos tomar en ellos parte activa». logo
En
su nota de remisión hacía notar los vacíos y contradicciones
de las leyes y reglamentos
«Fuera
difícil
averiguar
escolares.
—
empezaba diciendo
—
a
qué
siste-
organización pública en nuestro país. El precepto constitucional que manda a las Juntas Económico- Administrativas velar por la instrucción pública en sus respectivos departamentos
ma
responde
la
y las disposiciones correlativas de los primeros gobiernos patrios dejan suponer que trataba de organizarse en la República la descentralización •con respecto a la organización de la enseñanza pública.
tituto
Por otra parte, de
Instrucción
el
decreto-ley creando y organizando
Pública reacciona
el
absolutamente contra
Ins-
un
sistema semejante y establece la organización más centralista que
imaginarse puede. Sin embargo las facultades autocráticas concedidas al Instituto de Instrucción Pública no van acompañadas de los medios coercitivos necesarios para que de ellas pudiera usar eficazmente blica
esa
corporación.
Es
quien nombra los maestros,
el
Instituto
quien
de
Instrucción
adopta los textos,
Pú-
quien
.
Anales de
programas;
los
fija
pero
Universidad
la
son
Económico-Administrati-
Juntas
las
147
vas quienes pagan sus sueldos a los maestros, quienes !proveen de textos a las escuelas y quienes hacen efectivo
el
programa
escolar.»
Señalada así una de las incongruencias más graves del régimen vi;;9nte,
entraba
el
Director de Instrucción Pública a explicar por
qué razón pedía la reforma de
ley
la
a la dictadura en vez de
aplazar su consideración hasta la vuelta del país al régimen cons-
«He revisarlo, decía, las colecciones de leyes patrias, los de sesiones de nuestro Cuerpo Legislativo y las publicaciones diarias o periódicas que pudieran darme alguna luz respecto ti1"üCional. di.irios
a
las
país y
.a
los trabajos
indepeindencia
tra
sobre instrucción pública
disposiciones
dictadas en
nuestro
sobre educación que desde la época de nues-
hubieran
pedido
realiifarse
entre
nosotro?j.
.
notar, señor Ministro, que he constarado con dolo-
Sékme permitido
rosa sorpresa que íen los 45 años de vida independiente que lleva-
mos, nuestras Asambleas no han dictado una sola ley sobre cuelas públicas... del presente,
Acaso en medio que llevan
los
la
al
es-
torbellino de las agitaciones
voz y la palabra en las manifesta-
no prestarán hoy toda la importancia a una resolución semejante tomada por el Grobierno Provisorio;
ciones de la vida pública
pero no es dudoso que
tomadas por
el
el
fallo tranquilo
como una de
dor futuro la juzgará
Gobierno de
las
e
imparcial del
más fecundas
para responder a las ne-
la Reipública
más permanentes, más supremas y más
cesidades
ililstor^a-
resoluciones
vitales
de
la
patria».
El pr-oyecto de Liey de Educación
Común
establecía un'a Comisión
Nacional de Educación encargada de administrar la escuela normal, adoptar una serie uniforme tecas
escolares,
examinar a
los
ríe
libros de textos, crear biblio-
aspirantes
al
título
de maestro;
un Inspector Nacional de Educación; un Tesorero Nacional de EduCííción; una Comisión Departamental de Educación y un Inspector Departamental en cada cabeza de departamento, ?)residida aquella por un miembro
de
la
respectiva
Junta Económico -Administra-
tiva;
y Comisiones de Distrito en las secciones de los departamen-
tos,
capacitadas
distritos cesarias.
para nombrar y destituir maestros. Todos los quedaban obligados a fundar y sostener las escuelas neEn las escuelas públicas se daría cuando menos un curso
completo de lectura, escritura, ortografía, composición, aritmética, principios
generales
de
moral y religión
natural,
elementos
de
historia nacional, Constitución de la Repúblicav fisiología e higiene
y
ejercicios
físicos
o
gimnásticos
de
salón.
Cada Comisión de
Anales de
148
El
tiempo de permanencia en
excluido
der,
menores de
la
reli-
años y de
8
la
no podría exce-
escuela
de cuatro horas diarias para los niños
descanso,
el
seis
horas para los demás. La escuela pú-
debiendo admitirse en
blica sería gratuita,
de
enseñanza de
condición de no exigir la asistencia obligatoria de los
a
y
niños.
la
catecismo católico, pero fuera del horario de
gión católica o del clase
Universidad
para establecer
tendría facultad
Distrito
la
a todos los niños
ella
a 15 años de edad. Los niños que no concurrieran a las
5
cuelas
examen anual ante
rendirían
públicas
las
comisiones
es-
de
Los padres o tutores de niños que no recibieran la enseñanza obligatoria sufrirían una multa de 2 a 20 pesos la primera vez y en caso de reincidencia de 20 a 100 siendo extranjeros, o distrito.
de
susipensión
la
ciudadanía por dos años
siendo
nacionales.
Se
una escuela normal. Se establecerían bibliotecas populares y escolares en todos los distritos. Al pago del presupuesto
fundaría escolar del
afectaría
se
producto de
tadas
y
Distrito
la
el
2
producto de
el
podrían
'/c
de la contribución directa,
el
10
%
venta de tierras públicas, las herencias inteslas
multas
policiales.
además convocar a
los
Las Comisiones de
ciudadanos
electores
de
extraordinarias
su jurisdicción para la creación de contribuciones
a construcción de edificios escolares y adquisición de menaje. Las mismas Comisiones de Distrito podrían abrir cursos
destinadas
nocturnos de adultos. Los empleados de Educación que no fueran
nombrados por término
fijo
—
•
amovibles a voluntad por lab
serían
autoridades escolares.
«Es deber de todos los maestros tratar de imprimir hondamente
—
agregaba José Pedro Várela
,en
el
espíritu y
en
corazón
el
de sus discípulos los principios y sentimientos de moralidad, justicia, verdad y patriotismo; enseñarles a huir de la pereza, de la mentira y de la profanación;
instruirlos en los principios del gobierno
libre y formarlos en la coimprensión
deberes y la dignidad de
la
verdadera de
los derechos, ios
ciudadanía oriental.»
Ese proyecto, luego de sometido a estudio de una comisión compuesta de don Juan M. Torres, don Alejandro Magariños Cervantes,
don Blas Vidal, don Agustín de Castro, don Francisco X. de Acha y don Jaime Roídos y Pons, que introdujo modificaciones de importancia, fué sancionado por la dictadura a media/ios de 1877.
Establecía
el
decrieto-ley
respectivo
una
Dirección de Instruc-
ción Pública «con superintendencia exclusiva y absoluta
das las demás autoridades de dirigir
la
la
enseñanza primaria en
República, todos
los
con
sobre
to-
facultades
para
departamentos,
nom-
Anales de
Universidad
la
149
brar y destituir maestros, adoptar una serie uniforme de libros de expedir diplomas de maestros previo examen, proponer al
textos,
Poder
Ejecutivo
destitución
la
de Inspectores, Dividía y comprendía
ense-
la
las siguientes asig-
ñanza en
tres grados y diez clases
naturas:
lecciones sobre objetos, lectura, escritura, dibujo, aritmé-
composición,
tica,
historia,
res
gramática,
con
geografía
retórica,
nociones
de
teneduría de libros y cálculo mercantil, derechos y debe-
del ciudadano,
historia de la República, moral y religión, no-
de álgebra y geometría, nociones ás fisiología e higiene, nociones de física e historia natural, nociones de agricultura, gim-
ciones
müsica
nasia,
más
vocal.
En
las
escuelas de niñas
Declaraba obligatoria y distritos rurales
sidades
la
enseñanza en
se
enseñaría ade-
máquina de coser y
labores de uso común, manejo de
las
corte.
ciudades, villas, pueblos
atendidos por escuelas en relación a las nece-
de la población y en
los
cuarteles,
cárceles
y
hospicios,
castigando la omisión con multas de 12 a 24 pesos. Los niños que
nc concurrieran a las escuelas públicas cumplirían del mismo modo concurriendo a las escuelas
particulares.
Declaraba también
obli-
gatorio en las escuelas públicas la enseñanza de la religión católica,
salvo para los alumnos disidentes cuyos padres se opusieran
esa enseñanza. Establecía un Inspector Nacional e Inspectores y
a
departamentales. Mandaba instalar una escuela normal y daba carácter amovible al cargo de maestro. La primera Dirección de Instrucción Pública quedó así constituida: Inspector Nacional José Pedro Várela, vocales Emilio Romero, Juan Alvarez y Pérez, Jaime Roídos y Pons y Remigio
Comisiones
Castellanos.
PJn les
comienzos de la reforma escolar.
Desde su incorporación a 1876,
como
la Dirección
de Instrucción Pública en
vocal de la Municipalidad de Montevideo, había empe-
zado José Pedro Várela
la
obra de transformación de las escuelas
públicas que debía ampliar y concluir una vez provisto de la Ley
Educación Común que acabamos de transcribir. Reproducimos de algunos de sus informes: «El programa de la escuela primaria que estaba reducido a
de
tura, la
escritura,
aritmética,
gramática,
geografía.
Constitución
lec-
de
República, moral y religión y nociones de geometría y álgebra,
ha sido ampliado con lecciones sobre
objetos,
dibujo,
composición,
Anales de
lóO
nociones de
la
universidad
de fisiología e higiene, de física e historia
historia,
gimnasia y música vocal. «Las lecciones sobre objetos que figuran en primer término en programa escolar no constituyen un ramo especial de los cono-
natural,
el
cimientos humanos, sino que son de preparar
ral
favoreciendo y
regulares,
En
facultades.
instrucción
ellas
la
medio más eficaz y más natu-
el
estimulando en
solo
capital de la
conocimientos
adquisición de
la
educación es
encuéntrase
«La importancia en
alumno para
el
el
el
de todas
desarrollo
elemento predominante;
sus la
segundo término.»
reforma que se inicia está no tanto
introducción de nuevas materias y en la mejor adaptación
la
Gc todas a las exigencias de la escuela
hace necesaria
cuanto en que
primaria,
a la enseñanza de métodos diametral-
la aplicación
niente opuestos a los que hasta ahora se han seguido en nuestro
En
país»...
todas nuestras escuelas,
Amigos de
dientes de la Sociedad de se buscaba era
perjuicio
de
Educación Popular,
que
del
físicas
alumno
instrucción que se trataba de comunicar.»
escuela primaria debe ser principalmente educadora y secun-
La
dariamente instructora. Pueden reducirse a estos tres ella
lo
desenvolvimiento asombroso de la memoria, en
demás facultades mentales y
las
misma
y de la
el
con excepción de las depenla
los fines
que
debe perseguir:
«La
ad:iuisición
ciones de oral
y uso
y escrito
del
lenguaje en sus
diversas
manifesta-
como instrumento indispensable para
prosecución de cualquier estudio
—
la
El ejercicio y nutrición de las
diversas facultades y poderes para darles salud, fuerza y habilidad,
creando buenos hábitos, así en las manifestaciones de leza
mental y moral
la
conservación
y
la
natura-
empleo de
la
—
La adquisición de aquellas ideas y conocimientos pueden iluminar la mente y darle los materiales necesarios
fuerza física <;;ue
como en
para la vida del pensamiento, habilitándonos para vencer con meros esfuerzo y mejor éxito las dificultades que se nos presenten.»
La población de Extraemos guientes
Ce
cifras
las escuelas públicas al
la
Memoria
relativas
a
las
empezar
correspondiente escuelas
a
públicas:
la reforma.
1876
-
77
las
si-
Anales de
DEPARTAMENTOS
Escuelas
la
Universidad
lól
Anales de
152
diendo subvenir a sus
la
Universidad
más apremiantes necesidades por
hallarse
impagos desde hace más de un año, vense obligados a alejarse en otros, como en
país o a buscar otra ocupación;
temporalmente la dirección de para venir a gestionar ante
maestros abandonan
que
les
central
estáu el
confiiad'as,
pago de
el
d©l
Durazno, los escuelas
las la
autoridad
por sueldos que tienen contra
los "créditos
el
y por todas partes los maestros, urgidos por las exigencias materiales de la vida, descuidan sus deberes o los cumplen sin entusiasmo, mientras que las escuelas sin útiles, sin. textos, Estado;
elementos, languidecen, agonizan y amenazan cerrarse a cada
sin
momento». Mientras tramitaba
la
gestión tendiente
del magisterio.
Había en
men
sus puestos el
comprobantes de haber adquirido su concurso
o
regularizacdón
de
de la regularización
52 sin título alguno. Exigió, pues,
y
a los que quisieTan continuar al frente de los
la
Departamento de Montevideo 75 maes-
el
tros y ayudantes con diploma
o
a
más urgente
pagos abordó Várela la obra
los
Y
de oposición.
cargo
examen
mediante
exa-
rápidamente quedaron ocupados
todos los puestos de maestros y ayudantes con personas diplomadas. lL<ey de Educación Común, establenombramiento de maestros se realizaría por concurso de oposición. Era el medio de abrir el camino a los más aptos.
iMás adelante, al reglaímentar la
que
ció
el
El horario escolar. El de
horario
la
publicado
por
la
Montevideo, corría de 10 a
4.
Departamental
a
los
raíz
de
Seis horas de permanencia en la es-
cuela, incluidos dos descansos de
cuales
Inspección
incorporación de José Pedro Várela a la Municipalidad
media hora cada uno durante los salones y caminar y correr
niños debían salir de los
mientras no se establecieran los ejercicios gimnásticos.
Las escuelas de entonces tenían una organización uniforme consocho s€iccionies dentro de las cuales eran distribuidos los alumnos con absoluta prescindencia de la edad. Al procederse a su reorgajnizacién de acuerdo con la Ley de Educación Común, tituida por
fueron clasificadas en tres categorías y los alumnos distribuidos en forma racional. Las de primera categoría que eran las escuelas mixtas quedaron a cargo de maestras, «pensamiento decía
Várela
—
—
ya prestigiado por la enseñanza en pequeña escala de
algunas de las escuelas de Montevideo». Y explicando la de los alumnos, decía en una circular dirigida padres:
bución
distri-
a
los
Anales de
«La nueva organización de
universidad
la
153
escuelas obligará a los padres a
las
cambiar de escuela, y ello es necesario. No es posible realizar ^a enseñanza cuando en un mismo establecimiento se encuentran loá niños de
a 6 años que empiezan a leer, y los de 13 a
5
!4
que
término de sus estudios. Las materias y métodos de enseñanza son distintos. Les pido, pues, que no protesten centra ya
e'^tán
al
innovación y distribuyan sus hijos entre las escuelas que les
la
corr(>spoude.»
La
(lístiibucióii
Durante
el
piemiors en 1876.
lie
año
obteniendo que
intensamente José Pedro Várela,
trabajó
1876
maestros
los
mudifioaran sus
enseñanza y aumentaran su bagaje mediante
procedimientos las
dagógicas y la lectura de libros nuevos.
¡La lectura de obras!
una
averiguar
levantada
encuesta
pedagogía
habían
leído
para
ento^nices
maestros,
los
escuela llena de arrogancia,
contestó
de
conferencias pe-
qué
En de
-libros
una directora de
de md experiemcia únicamentes'.
«el
exámenes de fin de año, que fueron presididos por los miembros de la Dirección, un grupo de maestros y comisioiies populares, pusieron de luanifiesto los progresos alcanzados, y en Los
Pedro Várela, como medio de estimular
vista de ello resolvió José
a los maiestros y a los alumnos, repartir premios en un
público de alta
repercusión en las
La ceremonia tuvo
lugar en
Teatro
el
Dictador Latorre y de sus ,'Ministros.
banderas
de
orientales
criada de flores: los
9,000
Los
3,000
los
las
del
escuela
Cerro,
superior
pú-
con asistencia de'
Solís
escenario había un trofeo
el
centro
se
y
de
a
escuelas
esta
leía
públicas
correspondían
idéntica
premios
adjudicados a don
fueron cuela
realizar
Consistían
cuelas.
En
axíto
de 1877.
inscripclóa
«Venid a mí». Por ahí desfilaron 6,000 niños de
que asistían a restantes, que
debían
tadas,
cuyo
en
tareas escolares
doña niñas;
a
ceremonia en
dos
José María
Gabriela
del
en
sus
más
apar-
respectivas
diplomas
de
López director
Champagne
me.ncio(nes
departamento.
zonas
las
honor,
de la
directora de
lionorífieas
a
los
es-
que Esla
demás
maestros y ayudantes que se habían distinguido en las tareas del año por su celo y competencia; y medallas de bronce y labros a los alumnos más notables y en general a todas las escuelas por cada centenar de alumnos de asistencia media.
En
esa magnífica fiesta, a la que asistió
nn público de
tres
mil
personas, hizo resaltar José Pedro Várela los progresos alcanzados
durante
el
primer año de la reforma.
Anales
154
Universidad
la
cLe
—
«El resultado que han hecho evidente los exámenes de ISTG
—
decía
es
nuestras
más
de
actual
por
escuelas
con
estado
el
fundadas
y
lejano.
públicas
escuelas
las
legítimas
las
un futuro
para
entrever
deja
aún que por
satisfactorio
Si
comparamos
que tenían
el
de
actual
esperanzas el
esas
que
estado
mismas
vemos que se han realizado progresos enseñante ha mejorado sensiblemente; los locales de escuela han mejorado; han mejorado también los útiles y el menaje escolar y se hace evidente para todos los espíritus imparciales que nuestras escuelas públicas caminan con paso rápido por la vía del mejoramiento y que la fuerza imescuelas hace 10 o 15 años,
El personal
notables y fecundos.
pulsiva
que arrastran
sacudimirento
nuestras
ninguna
ya para que
derosa
escuelas
públicas
convulsión,
pueda detenerlas en adelante en
zadora y ascendente.
.
Pero no es sólo con
.
evidente que no se malgastan los dineros que a la educación acto
el
«Ajl
bastante
choque,
su
marcha
po-
ningún civili-
propósito de hacer
el
el
Municipio destina
de sus hijos que hemos organizado en esta forma
de la reipartioión de premios.
tanta solemlnidad a este espectáculo liemos querido tam-
dlar
bién impresionar con des,
es
ningún
él
espíritu de los padres, de las autorida-
el
de la sociedad entera, para estimular
obra común de difundir y mejorar
la
el
celo
de todos en
educación del puebla...
la
La
escuela pública que se encontraba languideciente al solo calor de las
influencias
fecunda,
No ella,
del
oficiales,
concurso de
necesita las
para tener vida propia, activa,
simpatías y del interés del pueblo.
basta que abra sus puertas a todo
que
pidiendo
basta que
el
se
el
que viene a golpear en
apague su sed de saber y de estudio. No
maestro realice constantes y decididos esfuerzos. No
basta aún que las autoridades escolares la atiendan con solicitud y se afanen por mejorarla. ella
sus hijos;
que
la
Es necesario que
los
padres envíen a
familia la auxilie en su fecunda labor; digo
el hogar deméstico, los que molde en que ha de vaciarse el espíritu y el corazón de las generaciones nacientes. La escuela pública no es más que una simple prolongación del hogar doméstico y mientras los padres de familia la miren con indiferencia, no la auxilien y la amparen, sus resultados serán relativamente pequeños, mezquinos, raquíticos... Y sin embargo ninguna influencia puede ser más grande que la de la escuela para la transformación y fe-
mal, es necesario que sea la familia,
trabajen y preparen
el
licidad de la Nación.»
«jEmaneipar a la
mujer de
al
hombre de
la acción
la
servidumbre del mal, emancipar
corruptora que sobre ella ejerce
el
aire
»
Anales de
de
saturado
al
que se respira en las sociedades atrasaciudadano de las influenicias bastardas y a la
madre de familia de
de la tiranía de las grandeza de los pue-
los extravíos del error y
preocupaciones; he ahí
la gloria
el fin,
fuerza viva que
blos;
155
errores
emancipar
das;
Universidad
la
desiconoicen
derosísima palan'ca que mueve
el
y
la
las sociedades
ignorantes,
mundo moderno,
po-
de luz
foto
que disipa todas las tinieblas y que lleva a todas partes el calor Por eso, en presencia de los millares y la vida y la esiperanza! de alumnos cuyo corazón y cuyo espíritu estamois formando desde los mismos bancos de la escuela, de la prodigiosa fuerza ex.
pansiva
de
.
de
educación,
la
.
la
manera cómo
se
esparce
y se
apodera de todos los espíritus el convencimiento de que es la escuela la gran fuente de regeiieraición, de prorgreso y de felici-
dad para
en presencia de estos esipectáculos retém-
las naciones;
plense los
abatidos,
eisipíritus
reanimen.se
corazones acobar-
los
dados! Innúmeras legiones que salen transformadas de la escuela
avanzan para auxiliar con fuerza incontrastable regeneración y
nos
sombríos
cuelas,
dse
la libertad
nuestro
de
puede vivir aún
oi-ientales!
pasado,
puesto
esperanza en
la
Retémplense
da la patria!
los
espíiritus
A
la
causa de
la
pesar de los trastor-
que
viven
nuestras
es-
el pec/ho
de los ciudadanos
abatidos,
que en presencia
de éstos millares de niños que estamos educando, transformando
prenda segura de un porvenir mejor, las generaciones pueden repetir con verdad a los des/creídos y a los
y que son a.otuale(3
descorazonados
la
niegue su pecho a frente
magnífica la
esperanza
de Quintana:
— Hunda
en
el
polvo
—
El que
la
cobarde
!
Refiriéndose luego a
baba de per
estroía
visitar, a las
la falta
la
gruta del Cerro de Ai'equita que aca-
angustias que había sentido dentro de ella
de aire y de luz que hacía
rayera sobre
el
pecho y
lo
como
si la
montaña entera
sofocara, agregaba:
«Y bien, señores: en la naturaleza física de la Repñblioa no hay más que una sola cueva de Areíquita; pero en la naturaleza moral de nuestra patria hay millares, tal vez centenares de miles de inteili'geii,icias donde la oscuridad es más profunda que en la cueva de Arequita; donde falta más el calor y la vida: hay centenares de miles de inteligencias donde es más necesario hacer aue peneitre el rayo brillaaite ded estudio, para disipar las tinieblas. Y es en actos de esta naturaleza, recordando esas sombras que envuelven hi inteligencia de muchos de nuestros compatriotas, que es más necesario repetir las últimas palabras del gran
Anales ie
156
poeta
de
—
Alemania:
que viven en
las
universidad
la
más
Luz,
sombras de
la
luz...
ignorancia!
para
las
Más
inteligencias
luz para las so-
ciedades a quienes envuelve la oscurísima nocihe del error! luz
aún para
los
pueblos a quieneis aprime
de las preocupaciones!
bertad
.
.
.
para los oprimidos!
la
Más
fatídica lobreguez
¡Luz y calor para los espíritus! Praternidad para todos!»
¡Li-
¡
Una nota de Sarmiento. Sarmiento
había
sido
invitado
para
piresentiar
nuestros
exá-
menes y contestó que la noita había llegado con mucha demora a sus manos y que por eso no había podido venir. agregaba la marcha de ese gru«Sigo con comiplacenJcia
—
—
po de amigos del pueblo, a quienes no distrae de su propósito
el
de los desórdenes que causa y prolonga esa misima ignorancia de las mucheduimbreis que ustedes tratan de amengiuar». bullicio
Un año más
tarde,
al
aicusar recibo
de la Memoria de 1877,
José Pedro Várela;
de'cía a
«Con documentos de esta díase la obra de la educación tendrá modelos y guía seguro en su desarroUlo, pudientlo prometeree que este Consejo hallará en tan rico acoipio de datos, observaciones y experienicias, indicaiciones útiles cuando haya de resolver puntos análoigos a los que diciha Memoria trata.»
La obra de
la
reforma en
los
departamentos de campaña.
Después de la labor preliminar de 187 6 continuada con tesón el primer semestre de 1877, y mientras corría su trámite
durante
Ley de Educación Común que centralizaba la organizaición y la técnica de todas las escuelas de la República, trató José Pedro Vareila d;e mover a las Juntas Económico - Administrativas de la campaña. Les adjuntaba el reglamento de las escuelas de la Capital, pero les advertía que el medio ambiente rural tenía exigencias distintas del medio ambiente urbano y que en consecuencia era necesario que ellas modificaran su reglamento en armonía con las grandes exigenjcias de la campaña. «Aun cuando la organizalción general de la es'cueila y el programa deben ser sustancialmente iguales para toida la República la
dirección
—
les
decía en su nota
modificaciones
—
cree la Comisión que pueden s^lfrir
disposiciones
reglamenitarias y ique podrían acentuarse más o menos las materias de enseñanza según las exilas
^NoJí*
genoiaíí
prvHnasi
cada
d<»
<íí"
ri»í»yr*Waá
íii
En
doivtnaraeattvx
157
U
Mont'&vUlrXX Ocaulí»
grau mayoría de los habitanií»* $e dtxlioa al comeivio. el prxAjtrama se ha vieseuvuelto euoamiuauvlo los estuvlios s^i\alav1ameine hacia la ad^juisicióu de aquellos cv>iioicin\ie»ios ijtte itt4s iitlles son para el que ha de deilioarse al comercio. Eu las seccioJi
caminar
estudios en el sentido
los
de aquellas nociones
$Oii
conveixieixe en-
indispensaWes para
En
del suelo.
cultivo
más
de íavorec-er 1* adquisicicm
mejor y más
el
departajnentv^s que se de-
los
dican priucipal ya que no exclusivamente a la sranadería. el pro*
grama podría desexwolverse con más
ai>licacioa
que
comercio
al
o a la agricultura al cuidado y mejora de los sraaiados. siHaivr que su ia
a
faauilia
las
envta sus hijos es
me<,lio
ella
el
isrualmontc
henotlcos
sus
r-^ultados
la
y
dosw^itocer que generalmente so.n
errtVivoo
nece^dados- de
de conquistarse sinxiwtvas y de que
sejíuro
ra«As
estado rxísiHwda tlelmente a
más
ettvNas
ti>dvvs
sost eJXáTíin
,
y
is»pr<eciex\ .
iberia
.
torpes
pxvoctii>aciones
hijas de la ignorancia las que en la canxpaüa sobre todo iuduc^n a
\>adivs a
los
no enviar a sus
a la
bijivs
escuela;
en
ivrv^
el
que es resvütado no sólo de la ignorancia en los pavlws. sino también de
s mes más adovniados para v^onst^uir el fin que se í«>'>P'.^«e, Trasmite una iustruiNción escasa, tina educación deficiente y en la ijx^nerslidad de los cascas t\sa misma escasa ii\strucíCÍiVi\ no tiene una j*plk*acii\u práctica, no oft\xv ventajas apr>tx>iables para el que 1* desalen oon que la escuela se mira
recibe y para la fawilia a rjue oi\tsion<>8
^
.
.
.
De ahi que
hay
aljio
muy
sino en
perten«;X''e.
limitadas
paisano en su ignorancia no alcauvv
«xl
con<»hir bien los beneficios que la esouiUa pnvluce.
Bu ^Ua
&e enseiVa a leer. esn'riKlr. la aritmótiv-a, la ¿íramática. la s^HVítrafía;
peiv nada adelanta
que fonna
mismo. el
.
.
trabajo y
el
;Quión
pi>*lr
conocimiento de
la
v-^^n
a
asistir
dudar
scosrat'ia
de y
la
crito lld; rel="nofollow">tl
lo
ltn\tt»\'*
de
ciuuído salv
q\»e
«le
la
seria
la
jixHVirafia la
de orlar, curar
Kopnblix\H y ouc
havvrlo tm v
y
adlt^trar
ol
s^vio
óí
emplea
v\n\ocin\iento
>i;ui;>do
lo
no salva
sratnativa del
a
familia y de
rxv^>octo
que
sramáiica? Tciv
^^\^^^slHMU^ encías
Ui
adq«isicióí\
la
U>neficiv>s
U'»*
hijo del pueblo do nuestra catnivií\a, que \ty>es U\s
es^MuUa
la
interós diario de
el
,
.
reporta \VHra
lí*s
mas de
el
Unt^A^ajt^
íitmiHai>\s.
n\uv^ho
n\enor
prácitco
v'naud^^ el
la
dtxl
nííío
eí
las <\
utiq«;^
mv^do
vuelve
Anales de
1Ó8
Universidad
la
de la escuela al hogar doiméstico nada encuentra en la casa que le recuerde la escuela; nada en los recuendos de la escuela que se
ligue natural e intensamente a los qiueliaceres, a las preocu-
Cuando
paciones, a la vida toda de la familia.
mejorar en nada
a leer, no sabe
yores, ni podría ayudarlos
biera
más
sido
Es esa
práctica y
duda una de
sin
de
espíritu
mirar,
de que va a
diaria, el niñ'O a piesar
la laboi'
el
se trata de traba-
de acompañar a los padreis, aunque sea ocasionalmente en
jar,
hositilidad'
y aprende
de sus ma-
ednlcacdón de la familia no hu-
la
más
apliicable
que
de la escuela.
la
causas que obran con más fuerza en
habitantes
los
no "con
si
las
si
la escuela
los procedimientos
de
la
campaña para al menos la
con desdén
inducirlos
no se explican, ouyas ventajas son esicasas para todos
utilidad
no están llamados a elevarse en la escala social...
aquellos que
Pero
de
gran
masa
muy
manera
otra,
de
nuestra
distinta
será
cuando
población
aplicabilidad de los conocimientos
considerada
maestro
el
que
está el niño...
lo
eprende en y sin que
la
la
Se explica que
momen-
pobre peón de
el
cuando su hijo sólo nada esas habilidades que adquiere más que en muy
mire con indifetrencia
estancia
por
por
que trasmite, entre a formar
parte de la familia y se encuentre presente en toidos los tos en
a
escuela, cuya
la
eslciueila
ella a leer, a escribir, a contar, sin aplicación a
uitilice
raras ocasiones; pero
si
el
niño al volver de la esciiela pudiera
enseñarle a sus mismos padres
cómo
se
cura
el
animal enfermo,
cómo se hace más confortable la habitación; en una paílabra, cómo se vencen más fácilmente todas las dificultades que se les presentan, cómo se •cómo se aprovecha mejor la carne, la
pueden la
utilizar a
escuela; y
si
.leiche,
cada instante los couo;cimientoB adquiridos en
aplica su habilidad de leer, escribir y de calculara
mejor y más fácil solución de todos los mil pequeños problemas que diariamente se le presentan y que por más insignifi-
ia
cantes que sean son para ciera eso,
aun
el
más
él
Icis
má.s interesantes;
infeliz habitante de
si
la escuela hi-
nuestra campaña compren-
dería su utilidad y en vez de mirarla con indiferencia enviaría
tiempre sus hijos a
ella
y
en la
medida de sus
facultades
se
esforzaría por mejorarla y difundirla.»
r.!
Congreso de Inspectores Departamentales.
Las conferencias de desde 1876 hasta 1880.
maestro?
En
continuaron
sin
interrupción
presencia de sus excelentes resultados
Anales de
la
Universidad
159
José Pedro Várela de extenderlas a los departamentos de campaña, para cuyo efecto se decretaría a mediados de año una vacación de 15 a 20 días, durante la cual los maestros todos se trató
departamento de su residencia, durante el día y reunirse en asamblea durante la noche. Ese hermoso pensamiento no pudo realizarse por falta de recursos. En cambio funcionó en el Durazno un Congreso de Inspectores departamentales que abordó el
reconcentrarían en la
para visitar
del
caipital
urbanas
escuelas
las
temas:
estudio de los siguientes
mejor
Modificaciones al prog'rama de las escuelas públicas; tribución del tiempo en las escuelas públicas;
mantener las
m.ejor
respecto a la
pectores
escuelas rurales;
las
chacras;
escuelas
¿las
principios fundamentales
—
«Durante ocho días
sesiones de este CO'Ugi-eso
manera de
dis-
opinión de los Ins-
organizar y
establecer,
instalación de escuelas agrícolas en
rurales
deben ser
volantes?;
o
fijas
para la confección de los horarios. José Pedro
dijo
—
Várela
al
clausurar las
hemos trabajado a razón de
10 horas
medio de difundir la enseñanzia en la campaña. Hasta ahora sólo se han preocupado nuestras autoridades de diarias para buscar el
los
grandes centros y especialmente de Montevideo. El esfuerzo de
hoy tiende
establecimiento de las escuelas rurales.
al
En
los
dis-
donde puedan reunirse más de 20 niños se establecerá una
tritos
escuela
fija.
En
los
parajes
donde
la
poblacióli
está
mucho más
diseminada, se establecerán escuelas volantes a base de
6,
8
o 10
niños que puedan reunirse y recibir la enseñanza durante algunos el maestro a otros puntos cercanos a reanuEstamos trabajando en la más grande, en la "más colosal y en la más fecunda de todas las obras que ha ensayado jamás la osadía del espíritu humano, en la educación del pueblo.»
meses, pasando luego
dar su tarea.
IjOs
.
.
Concursos escolares de 1879.
exámenes anuales que fueron nuevamente regla acordándose a cada buena clase de las escuela^ públicas un premio de honor, una mención honorífica y un cuadro en que serían inscriptos los mejores alumnos de toda la escuela, esAparte de mentados en
los
1878,
tableció Várela concursos infantiles con blo
apreciara
enseñanza y
la los
el propósito de que el puereforma en los procedimientos de maestros conocieran y compararan ei estado de
bondad de
la
Cada maestro debía presentar d^el 5 al 10 % las clases. Para cada \ino de los grupos del concurso había una medalla de oro y dos medallas de plata. todas
de
las
sus
escuelas.
alumnos, según
Anales de
160
Tuvo lugar
el
torneo en
Universidad
la
Teatro Cibils con extraordinaria
el
ante un jurado que ocupaba
llantez,
bri-
escenario y un público nu-
el
meroso que durante catorce días seguidos acudió a presenciar el espectáculo, aplaudiendo con entusiasmo a los niños que allí exteriorizaban lo que sabían y lo que valían gracias a la reforma fundamental en los métodos de enseñanza que acababan de implantarse.
«Antes de inaugurar
la
los
reforma concursos
—
gramática,
Várela
Pedro
decía José
enseñaba en
se
aritmética,
escritura,
lectura,
escolar
—
escuelas
las
catecismo
g'eografía,
al
públicas
y
catecismo histórico. Todo se aprendía de memoria. El trabajo del maestro consistía en tomar las lecciones velando por que el alumno repitiera con toda fidelidad
las
palabras del texto. El trabajo del
niño era aprender de memoria, palabra por palabra, todos y cada uno de los libros de texto que en la mano le ponían, lo 'mismo el catecismo que la aritmética, la gramática y la geografía. L/Os niños odiaban así a la escuela. Ahora ¿qué se enseña, qué se qué se hace en las escuelas públicas? Es lo que estos concursos van a poner en evidencia a los ojos de todos es lo que
a.prende,
mismos niños van Una vez terminados
decirnos».
los
los
concursos,
—
dijo
volvió
a
hablar José Pedro
Várela.
«Estamos satisfechos cursos.
—
Hemos conseguido en gran
indujeron
a realizarlos.
Conocemos
con
el
parte
resultado los
de estos
propósitos
hoy con exactitud
con-
que nos el
estado
hemos visto confirmadas nuestras opiniones. Los alumnos que han revelado "mayor grado de desarrollo mental y más suma de conocimientos re1? ti vos son los que concurren a escuela donde se han aplicado con más fidelidad los nuevos métodos, donde se ha hecho más efectiva organización; y en sentido contrario, los alumnos que la nueva han revelado menos vida, menos actividad mental, menos conocimientos verdaderos, son los que asisten a escuelas donde aún continúa si no imperando ejerciendo al menos grandísima influencomparativo de
cia
el
viejo
las
escuelas y en la comparación
sistema...
Ha,y
dos puntos capitales fáciles de apre-
aun por aquellas personas no especialmente versadas en las cuestiones de educación... Refiérese el uno al método, el otro a ciar
la
organización...
Todos han podido notar
la
viveza,
la
vida,
acción qíie caracteriza a los alumnos de las escuelas públicas;
hay encogimiento, tido se ignora, ni
ni
repetición mecánica
vaga estupidez en
la
de palabras
cuyo
mirada resultado de
la
no sen-
parali-
Anales de
zación
Universidad
la
161
Cuando por acaso algún niño
intelectual...
mecá-
repetía
nicamente una lección de memoria o dejaba ver la fisonomía opificada de la infeliz criatura cuj'as facultades han sido atrofiadas por una educación torpe (y ha habido algunos que han concurrido a estos concursos que se han presentado así), cuando había algún
que
niño
tal
habremos
hacía,
podido
sentirnos
tristes,
no
p>ero
nos hemos sentido desalentados porque era ese un fruto seco del antiguo sistema conservado por por
el
por
hábito,
error en medio a la exuberancia
el
de
preocupación y Así en la
la
la vida.
apostura, en la fisonomía, en la mirada, en las contestaciones, en
todo
hacen evidentes
se
las
antiguo del nuevo sistema: alegría,
el
cuela;
el
vida,
la
radicales acción,
el
que separan
el
movimiento,
la
entusiasmo, la emulación, caracterizan a la nueva
quietismo,
el tedio,
de
todo
la adversión al estudio
es-
y al maestro,
y moral, la falta de todo estímulo, de toda
la parálisis intelectual
aspiración,
diferencias la
placer,
son los
rasgos
típicos
característicos,
de la antigua escuela, y estas diferencias todos han podido verlas, palparlas, apreciarlas, todos
escuela actual
la
todos los
pueden dar testimonio de niños tienen
el
mismo
ellas...
derecho,
En
a to-
dos se educa, con todos se trabaja, de todos se obtienen progresos y resultados. ¿Habéis visto las criaturas de 5 y 6 años asistiendo a este concurso, revelando en él que han desarrollado sus faculta-
vía
han sido educados, que han adquirido algunos conocihan dado coa paso firme los primeros po.sos en la perfeccionamiento y del saber y, por último, que no han
que
des,
mientos, del
qu-3
perdido su tiempo? Entretanto ¿qué sucedía con los niños de esa
edad en
la
antigua escuela? Pasaban dos, tres y hasta cuatro años
repitiendo estúpidamente las letras de un cartel o de un silabario, sin
que realizaran
el
menor progreso en años enteros y
aprendieran en realidad otra cosa que a odiar la escuela, tro,
estudio, en
al
una palabra todo
dura cárcel donde impíamente se rante
La
6
les
lo
sin al
que
maes-
que se relacionaba con
la
martirizaba todos los días du-
horas.»
repartición de
premios
(medallas de oro y de plata, libros,
premios de honor y menciones honoríficas) correspondientes a axámenes anuales y a los concursos infantiles tuvo lugar en
los el
Teatro Solís en mayo de 1879. Concurrieron a esa ceremonia 10,000 niños, pasando los premiados en número de 1,200 a la sala del
Teatro y recibiendo
los
demás cartuchos de
dulces.
«Modificar los sistemas generales de enseñanza
oportunidad José Pedro Várela
T.
VII-
II.
—
—
dijo
en esa
promulgar nuevos programas en
Anales de
1(52
la
Universidad
las exigencias de la época presente y de la sociedad en que se vive, adoptar ítextos en los que se encuentre retratada antila vida nueva en lugar de conservar los textos fósiles de la gua escuela, cambiar ilos prooedimientos que se han de seguir en
armonía con
trasmisión del saber, es sin duda realizar reformas de no pequeña importancia... Pero sustituir al viejo método mecánico el método racional, es p-enetrar en el alma misma de la escuela, aspirar la
a que &e transiformen los hábitos, las costumbres y las aspiraciocJones de la sociedad entera... La instrucción puede ser obra exclutáva del Poder público y de la escuela; la educación sólo es posirealizarla,
ble
conseguirla,
hacerla efectiva con
esfuerzo armó-
el
nico áe todos, de la familia, de la escuela, de la sociedad.» El resultado de los exámenes escolares y de los concursos infan-
constituyó el coronamiento de la lobra de la reforma escolar y por eso al comentar la ceremonia de la repartición de premios decía «El Diario del Comercio», reflejando la impresión del puetiles
blo
entero de Montevideo:
la apoteosis de una prop?. ganda constante en favor de una la redención del pueblo por la escuela reformada grandiosa, idea según el fespíritu del siglo y las neicesidades de nuestra época. Es
«Es
para un porvenir cercano la reparación de las injusticias, las deformidades y las angustias del tiempo presente.»
—
escribía «Así a veoes un solo día de regenerantes emociones que amarguras las compensa de Várela a su iturno José Pedro
—
deja en
el
Una de
las
alma
la
injusticia continuada.»
maestras que se destacaba en los comienzos de la
reforma.
Dirección
de
más
de los miembros
Don Emilio Romero, uno la
Instrucción
Pública,
resolvió
distinguidos de
aplicar
el
importe
íntegro de sus dietas a la compra de aparatos para la enseñanza
de la mecánica, neumática, liidrostática, óptica, magnetismo y galvanismo químico, geología y geografía, con destino a la escuela
que acababa de ganar por concurso doña María Stagnero de Munar. su donación decía al Presidente de la ComisióTJ Directiva de la 'Sociedad de Amigos de la Educación Popular que
Y fundando
esa señora figuraba entre las primeras
alumnas inscriptas en «Elbio Fernández».
los
cursos
\y
más asiduas
normales
anexos
a
140
de
las
la
Es'.uela
Anales de
la
163
Universidad
Las escuelas mixtas. discutidas figuraba la esuicla mixta implantó José Pedro Várela desde los
más
las innovaciones
Entre
dirigida por maestras que
la reforma. decía el reformador con«Sin discutir la doctrina general si en principio la muaveriguar sin testando a sus críticos la enseñanza primapara hombre el que apta menos más o
comienzos de
—
—
jer es
en creo que puede afirmarse sin duda que entre noíotros y menuestro estado actual la mujer responde con más fidelidad y pública. Los jor que el hombre a las exigencias de la instrucción tiempo al mucho por buenos maestros y los buenos ayudantes,
ria,
menos, hemos de contarlos con los dedos, mientras que las buenas maestras y sobre todo las buenas ayudantes puede y debe esperarse que se conviertan ©n 'legión en muy pocos años.»
—
argumentaba a su vez de columnas de «El Siglo»
«Se había hablado bístur desde las
—
don Jacinto la
Al-
precocidad de
nuestros niños y del peligro del contacto escolar, como si en el hogar no hubiera lese mismo contacto; pero la experiencia que se está
realizando
disipa
esos
temores.»
'La Enciclopedia de Educación".
Como medio
de
divulgación
de
los
nuevos
métodos
de
ense-
ñanza y de enriquecer el bagaje del personal enseñante, resolvió José Pedro Várela publicar «La Enciclopedia de Educación» de acuerdo con un vasto plan que comprendía las siguientes secciones; legislación e instituciones de enseñanza;
arquitectura de escuelas; daria,
historia de üa educación;
instrucción elemental;
instrucción superior y científica;
instrucción secun-
pTeparación de maestros;
•educación suplementaria; filantropía educacionista; tópicos diversos. Trataba por medio de esta obra «de acumular hechc?, ideas, opiniones,
generalizaciones
de
la
ciencia,
enseñanza de
la
expe-
en una palabra, reunir todo, sustancialmente al menos, lo que se ha escrito y se ha hecho en materia de educación, para que de ese modo cada uno piioda formarse por sí mismo opinión riencia;
consciente».
Anales de
164
la
universidad
Creación de rentas escolares. sueldos del personal
LiOS
enseñante sufrieron atrasos considera-
dando ello numerosos adversarios de la reforma escolar para supresión a título de economías necesarias de los
bles en algunos períodos de la administración Latorre,
argumento a
los
—
pedir la
—
Inspectores departamentales,
es
decir,
de los resortes
de
fiscali-
zación de la enseñanza y de difusión de los nuevos métodos.
Para combatir ese mal, que era un mal crónico en la adminisde la República, procuró desde el primer momento José Pedro Várela dotai de rentas propias a las escuelas, obteniendo iración
de inmediato en 1877 la creación de un impuesto sobre de
las
tablecimientos rreos;
urbanas y rurales
pro.piedadej
el
campaña;
industiiales
y
les
esr
renta libre
de
co-
couiorciales;
y
alquiler
el
lendimientos de la
derecho de abasto y ta'Dlada de los departamentos de patentes de perros; los proventos del faro ide la
las
Colonia, del faro
idel
Banco Inglés y del faro de Punta del Este;
derecho de exportación sobre la piedra' y arena: y el derecho de marcas de fábrica y comercio. Todos estos arbitrios estaban eJ
calculados
en
de 417,000
pesos
1S78,
309,0'0'0
El
pesos. la
ley
excedente,
hasta cubrir
la
suma
asignaba a la instrucción pública en
quedaba a cargo de rentas generales.
«Considerando
—
que
que
la
—
decía Latorre
a¡
adjudicar la renta de Correos,
intrucción pública social y políticamente es la base
dfel
engrandecimiento moral y de la felicidad de los pueblos, a la vez que de su cultura y civilización... Que el estado de desarrollo que ha adquirido en la República, y particularmente en el depar-
tamento de
la Capital,
reclama la aplicación de recursos especiales
para su soistenimiento, a fin de que no se esterilicen los beneficios alcanzados ni que permanezca lestacionaria en el grado de adelanto que hoy cuenta...
Que
si
bien
le
es
imposible
al
Gobierno
atender a toda ella con igual solicitud por la carencia de recursos en que se halla, no debe por eso omitir de hacerlo hasta donde al mismo tiempo que deja marcada completar su propósito cuando proseguirse para que debe la senda las circunstancias ssan más oportunas.» «tiene un Ese decreto decía a su turno «La Democnacia» •valiosísimo alcance que no desconocemos todos los buenos amigos
sus facultades se lo permitan,
—
—
de la educación, puesto que señala una importante reacción contra la
práctica seguida hasta ahora entre nosotros de dejar la instruc-
ción pública afligida, las
más que ningún
penurias del Tesoro público.»
otro
ramo
del servicio, por
Anales de
¿a
Universidad
165
Tres maestros de la época, doña Gabriela Champagne, don José María Cordero y don Cajyetano Rivas, promovieron en 1878 la formación de una sociedad de socorros mutuos del magisterio encaminada a socorrer al desvalido y a promover la dignificación del profesorado. Era la consecuencia del decreto de la dictadura que
suprimía las juBilaciones y pensiones y del atraso de los presuescolares. La sociedad se instaló en el acto y hasta se
puestos
nombró
depositario
Pero no alcanzó a elevar
Al
el
-de
los
reaJlizar
proiyecto
fondos
al
doctor don
Plácido Ellauri.
su programa.
Presupuesto para
de
1878,
que
subía
la contribución
pagos y
los
el
directa,
como medio de asegurar
creciente ensanche de
la
a
Vcc
de
la regularidad
de
403,952 pesos, pedía José Pedro Várela la adjudicación del 1
instrucción pública. Pero
Gobierno, que luchaba a su vez con las dificultades de los pa-
el
no se arriesgó a desprenderse de un ramo tan valioso y tan
gos,
seguro.
Número de En
escuelas y de alumnos.
Ley de Educación Común, funcionaban 6.2 escuelas públicas con un personal enseñante de 143 maestros, una inscripción de 8,313 alumnos y una asistencia media de 5,831,
en
1877, al publicarse la
el
departamento de Montevideo
Al terminar el 196
escuelas
criptos
mismo año
que se distribuían
subsigue:
DEPARTAMENTOS
funcionaban en toda
la
República
maestros y 17,541 alumnos inspor departamentos en la forma que
municipales con
29)8
Anales
lf)6
Abriéronse a
la
vez
14
ie
la
cursos
universidad
nocturnos
para adultos
en las
escuelas de Montevideo, con una inscripción de 508 alumnos y una asistencia dio
los
media de S80 hombres y mujeres. Pero
resultados que se esperaba, y los
el
ensayo no
cursos fueron clausura-
dos mientras se procedía a su reorganización.
Tres años después !•
310 y
el
el
número de escuelas públicas había subido
de los alumnos inscriptos a 24,785 en esta progresión
ascendente:
ANOS
:
Anales de
la
universidad
167
había tomado un desarrollo relativamente extraordinario
señanza públka y
Un
en-
la
privada.
texto de enseñanza cívica.
/Entre
durante este período
textos escolares adoptados
los
guraban «Los 'Elementos de Gobierno Propio» María Vidal.
Han
de recibir con aplauso esa obra
María de Pena
al
aconsejar su
—
a.dopción
danos, los que sienten las desigracias de presa en
alma
su
entristecida
decía
«los
la
patria,
angustiosa
la
el
—
fi-
José
doctor
del
doctor Carlos
buenos
ciuda-
y ll&van im-
memoria
de
sus
males».
La agricultura práctica en lEl
director de
ila
las
escuelas.
escuela de varones del ¡Cerro
López, que figuraba entre los maestros época, pidió
don José María
más competentes
de la
y obtuvo una manzana de terreno fiscal contigua a
su escuela para
la
realización de ejercicios práoticos de agricul-
tura, contando icon él concurso personal de dos 'hombres progresistas,
don Federico E. Balparda y don Lucio Rodríguez,
inicia-
dores del plan, y de una Comisión protectora de vecinos.
La
idea no tardó en repercutir en la enseñanza privada.
Guillermo IFernández
director
del
Colegio
del Camino Larrañaga una cuyo alcance educativo explicaba
su quinta
er
agrícola,
del Sajlvador, sec'ción
así
ail
Don
instaló
de enseñanza inaugurar las
clases
«Necesita la República ciudadanos trabajadores y no hombres d€'rramen inútilmente su sangre en los campos de batalla
que
por cuestiones de partidos...
El trabajador no
bates que los de la inteligencia, no usa razón. Hl buen patriota sólo
maneja
ama
otros com-
más armas que
las
de la
espada en defensa de la Integridad nacional, nunca pelea contra sus propios hermanos».
El idioma nacional
«-u
la
las escuelas i>rivadas.
A raíz de una jira a los departamentos de Cerro Largo, Maldonado, Tacuarembó y Salto, dirigió el coronel Latorre una circular a los Jefes Políticos de esos departamentos, en que decía
Anales de
Ifis
la
universidad
que había tenido oportunidad de observar que en las escuelas privadas se hablaba exclusivamente el portugués y que era necesario que previnieran a los maestros de esas escuelas que esta-
ban obligados de clausura
a
dar preferencia
al castellano bajo
apercibimiento
del establecimiento.
Poco después dictó un decreto cometiendo a
la
Direcición
Instrucción Pública la reglamentación de la medida.
Y
de
entonces
la Dirección estatbleció iQue las escuelas privadas deberían tener constantemente ^una persona dedicada a la enseñanza del castellano en su triple programa de hablarlo, leerlo y escribirlo, bajo pena de multa la primera vez y de clausura del establecimiento en caso contrario.
Destituciones ejemplarizadoras. iEl
reparto de premios a los maestros y ayudantes de I87i6 dio
mucha resonancia. El maestro don FeFernández Calvet devolvió con una nota descomedida la mención honoirífica que le había Oitorgado el jurado escolar. Y la Dirección de Instrucción Pública lo destituyó en el acto. Pocos meses después el Gobieirno nombró al señor Calvet Insi)eclugar a un incidente de derico
tor de Escuelas del Deipar,ta,mento de
taba
en vigencia la Ley de Educación
San José, Todavía no
Común que
es-
atribuía esas
designaciones a la Dirección de Inistrucción Pública. Pero José Pedro Várela, qué veía mermada su auitoridad y en grave peligro la disciplina escolar, elevó en el acto renuncia de su elevado cargo, oibteniendo con ese gesto enérgico y patriótico que el
el
dictador Latorre volviera sobre sus pasos y pidiera a Várela retiro de su renuncia.
«En
—
este caso decía Várela a raíz del incidente explicansu actitud en unai de las reuniones de maestros he creído ver una simple cuesitión de disicáiplina para la marcha regular de la enseñanza en nuestro país. Creo que así como no es posido-
—
ble que las espuelas funcionen con regularidad cuando las penas impuestos por lois maestros a los niños vayan a ser anula-
das poi? los padres, Lo mismo no es posible la marcha regular de la Comisión de Instrución Pública cuando las penas que ellia impone a aquellos que derinq"tien son desconocidas por las autoridades superiores». IAjI
año siguien.te renunció uno de los mejores maesitros de
escuela a raía de las sanciones dictadlas con motivo de
la
apli-
Anales de
¡a
Universidad
169
de castigos corporales y su renuncia fué aceptada en el «La Dirección, decía el decreto respectivo, lo,menta la renuncia de un maestro tan bien preparado, pero mantiene el principio de severa condenación de los castigos corporales». Y algo más adelante fueron destituidos dos Inspectores De-
cación, acto.
de acuerdo
partamentales,
que
Educaciónv Ooimún' militante,
política
con
prohibía!
Reglamento de
el
Initervención
la
como medio de obtener
el
la
Ley de
activa
en
la
concurso de to-
dos los habitantes.
liuchas sostenidas por José Petli-o Várela.
Una
sin
luicha
tuvo que sostener José Pedro Várela
tregua
años de su admirable apostolado. A la cabeza de todos los adversaTios de la Tefoirma escolao" estaba el clericalismo que no perdonaba al reformador que hu-
durante
tres
en su proyecto de Ley de Educación Común programa obligatorio sólo comprendería los principios
establecido
biera
que
lois
el
de moral y de religión natural y que sería facultativo de las Codisitiriito establecer también la enseñanza de la re-
misionéis de ligión
ca.tóliica,
pero
ai
condición de darse fuera del horario de
clase y sin carácter obligatorio para los niños.
Había consegui-
do la Comisión Revisora que la dictadura rechazara
y estableciera la católica. Pero la
siciones religión
porque
eso,
obligatoriedad
de
pí'.ña
la
áé
la
esicuiela
Inelinado a halagar a
lois proiho.mbres de las derogara la Ley de Educación Común.
Cuatro puntos fundamentales de la
las
la
Iglesia
antigua escuela en el olbservaidor y razoreformada, abrió contra Várela una camsin cuartel, en la esperanza de que el dictador Latorre, tan
nador de
ba
dispo-
esas
enseñanza de
que ya no se contentaba con con inquietud la transformación del repe-
m.iiraba
tidor mecánico
ras,
la
campaña
escuelas
grama
clerical:
mixtas,
Inspecciones
conservado-
reforma escolar abarca-
la
la centrali2iación
las
clalses
técnica de la enseñanza,
departamentales y
el
pro-
escolar.
En vez de
la Direccáón, que centralizaba todos los resortes de la enseñanza, pugnaba por el resltablecimiento de autonomía de las Comisiones de Instrucción Pública de las
técnicos la
Juntas
Econámico^AdminiS(tra.tivas,
cuelas habían llegado al
de
desquicio.
más
alto
cuyo imperio las esgrado de desorganización y
bajo
Anales de
170
Universidad
la
Las escuelas mixtas destinadas a los niños de corta edad debían desaparecer en absolu-to, porque en concepto del clericalis-
mo
reunión/ de
la
los
sexois
en
escuela constituía un grave
la
peligro social sabré el q.ue no cesaba de llamar la atención des-
de
pulpito y de las columnas de la prensa diaria. Inepeotores Depai-tamentales eran los que sufrían
el
Los
rudamente entero
el
que
cia
más
Por intermedio de ellos se extendía al país impulso de la reforma escolar y había en consecuenla carga.
para
eliminarlos
ran haciendo
lo
que
escuelas
las
que hacían antes, es
decir,
de
campaña
siguie-
siguieran no haciendo
nada.
Y
en
pa-ograma escolar había que barrer todas las nuevas
el
Nada de lecciones sobre objetos; nada de historia nada de todoi aquello que estaba llenando de asombro
asignaturas.
natural,
a las clases cultas de Mion'tevideo con la
actividad
el
despertar
fuerte
de
infatníál.
Cediendo .a la presión del clericalismo-, votó la Cámara de Diputados a mediaidos de 1879 un proyecto' de don Francisco Bauza ipor el cual se suprimían la Dirección General y los Inspectores Depar/tamentales, creándose en su lugar un. Consejo encargado de
adoptar textos y programas, y direcciones las Juntas Económico - Administrativas;
dependientes de
primían
las
enseñanza nacional.
a
mixtas,
escuelas lectura,
Constitución,
quedaba reducido
y
gramática,
escritura, religión,
historia
el
se
su-
programa de geografía
aritmética,
nacional,
locales
dibujo
y
gim-
nástica.
«La organizacióíi "nueva, dfecía «OEl Bien» desde su sección nos va a librar del señor Várela, que junto con ser un mal ciudadano es al mismo tiempo el peor de nuestros ad-
editorial,
versarios».
El
clericalismo
ai rollo
gracias
que había alcanzado
a las
energías
de
el
algunos
máximo de sacerdotes
su
des-
jóvenes
y
empuje como Soler, Isasa y Bentancor,, que fundaban Licecvs, que daban conferencias, que establecían diarios, conseguía abri'rse camino no sólo en la Cámara de Diputados, sino en la misma prensa oficial. «La Nación», diario latorrista ultra, acom(pañaba esa prédica demoledora con editoriales en llenos
de
que se pedía la supresión de las Inspecciones Departamentales y combatían las teorías del reformador, «que podrán ser apro-
.so
piadas
—
decía
el
articulista
—
yan tenido muestro mismo origen Pero Latorre resistió
el
para otros pueblos que no hani nuestra tradición».
pedido de sus amigos, maravillado por
Anales de la Universidad
que se daba cuenta de
apostolado de Várela, y éste
el
de
escribió
resistencia,
la
171
magnitud
la
dedicatoria en
siguiente
la
primer
el
ejemplar de su Memoria de 1878:
«Como recuerdo
Común
cación
magistrado que
al
de legítima gloria, resolviendo en
la
Ley de Edu-
sentido del progreso y de la
el
más Importantes problemas
de la Repúblioa uno de los
felicidad
promulgar
al
y mantenerla con inalterable firmeza, supo cubrirse
de nuestra época y de nuestro país.»
Ya
José Pedro Várela
enfermedad
en
estaba
habría
que
de
postrado
cania
llevarlo
tumba
la
a
por
grave meses
la
cuatro
después.
Pero desde
cama seguía
la
escribiendo día a día
como
hacía
lo
desde 1876, para contestar a sus críticos y para rectificar las apreciaciones erróneas de la prensa, sin descuidar sus tareas funda-
mentales de Director de Enseñanza y tampoco sin abandonar sus hábitos de hombre estudioso y de amplias vistas, como que hasta pocas semanas antes de morir leía y anotaba las obras de Darwin, más nutrida de Mcn-
Haekel, Broüa y otras de su Biblioteca, la en
tfvideo
en que Arechavaleta y Jurkouski
época
esa
ban a nuestros universitarios con
electriza-
divulgación y crítica de las
de la ciencia nueva.
teorías
«¿Por qué
las
reformas
no han
fecundos
y
la
de
benéficas,
más
ser
pensamientos patrióticos
los
más
pacientes,
tenaces para vencer que lo que son
el
abandono,
más
constantes, la
incuria y las
preocupaciones para resistir?»
Esa frase de José Pedro Várela exhibe
al
luchador formidable
y explica la rápida estabilización de su obra a despecho de todo esfuerzo
el
—
inmenso
esfuerzo
forma para obtener
apoyo
el
de
—
de
los
adversarios de
Latorre y
restaurar
la
re-
la
escuela
antigua. «Si por cía
en
el
el
estado de mi salud o por cualquier otra causa
prólogo de su última
Memoria
—
público que ocupo, abrigo la esperanza de que al moria,
que
he
servirá en cualquier
consagrado
de descanso
al
todo
—
menos
esta Me-
época para dar testimonio público de
mi tiempo
sin
servicio de la educación;
días
de fiesta ni
h.v\^,í
de que he hecho cuanto
he podido para responder cumplidamente al alto honor que se hizo confiándoseme el puesto más elevado de la dirección de la señanza pública en inteligencia;
que
tenía
país.
y
lo
me
Habrán podido faltarme aptitudes
pero no son esas faltas que
die está obligado a lo
el
de-
dejo pronto el puesto
dar más de
que tengo sin
lo
me
ene
sean imputables. Na-
que tiene y yo he dado todo reservas
egoístas
ni
desfallecí-
Anales de
172
la
Universidad
Alentábame y aliéntame el convencimiento de cumplo fielmente con los deberes del ciudadano c;ue ama a su país y del hombre que anhela la felicidad y el progreso de la sociedad en que vive.»
mientos que
cobardes.
hacerlo
al
La obra de Várela glorificada por Carlos
doctor
El
desde
raente
doctor Carlos María Ramírez.
María Ramírez
tribuna del
la
el
Club
que
había
combatido
Universitario
algunas
cruda-
de
las
conclusiones de «La Legislación Escolar» en una serie de conferen-
memorables,
cias
tribuna de
la
serie de
la
encargó de promover tres años después desdé
Sociedad Científico
-
Literaria de
Paysandú, otra
conferencias acerca de esa Memoria, desbordantes de
que José
gios,
se
Pedro Várela alcanzó
a leer
el
día
antes
de
elo-
su
muerte.
Luego de notar que el número de las escuelas había aumentado; la asistencia media había mejorado; que el costo medio de
que
enseñanza había disminuido;
la
campaña mediante
en la
dido
rurales;
que
la
enseñanza se había difun-
de las escuelas que había empezado la publicación de «La Enciclopedia de la
intensificación
«una grande obra que debe reunir los más notables contemporáneos sobre instrucción primaria, secubdaria
Educación» trabajos
,
y superior dando a
conocer la legislación y la estadística de
to-
materias y formando un inmenso archivo y repertorio, donde podrán estudiarse fácilmente dos
en
los
países
en esas importantísimas
estado actual de la ciencia y de los hechos todas las cues-
el
tiones que abraza
bre»;
que
el
ensañaba
se
t.-abajos los
en
el
vastísimo problema de la educación del hom-
cuerpo de Inspectores Departamentales contra la
la
el
que
había realizado grandes y positivos campaña a favor de la difusión y unificación 3e
crítica
clerical
métodos de enseñanza, agregaba, refiriéndose
al
Inspector Na-
cional:
«Sus informes, sus discursos, sus publicaciones de todo genere, que lo honran y que honran verdaderamente al país,
son obras
porque no es aventurado decir que en ningunai parte del mundo se habla de estas materias con mejores estudios o mayor compe-
Digamos también que en su defensa de las reformas reaen su largo duelo con les numerosos adversarios de esas reformas, el Inspector Nacional ha estado verdaderamente admirar ¡encia.
lizadas,
porque al sostener con entusiasmo sus principios y sus actos no ha perdido nunca la moderación y la calma que son atributos
l)le,
Anales de
Universidad
la
173
de la verdadera fuerza, porque ha reconocido siempre todos
d«
a la
ánimo y con
crítica
y
a
la
derecho
el
censura aceptando
con equidad de
mismo
todas las agita-
espíritu despreocupado de
sí
de la lucha, aun con sus injusticias y violencias tan
ciones
fre-
cuentes y tan disculpables en la vida de nuestra democracia embrionaria.
.
.
Hay
que personal y
muy
en nuestra raza un defecto de que debemos cu-
somos intemperantes en
rarnos:
avaros en
el
implacables en
la crítica,
mismo tiempo mu'y
al
parcos en
el
La bandera
homenaje desinteresado..
ata-
el
elogie
justo,
del
espí-
bandera de nuestra regeneración social está en las manos de José Pedro Várela. Si militamos bajo esa bandera no tengamos embarazo en honrar al abanderado. Yo, por mi parte, me complazco en saludarlo desde esta tribuna con el título que moderno,
litu
ya
la
han dicernido
le
Mann
racio
las
simpatías populares, con
el
Ho-
título de
oriental.»
La nmei'te de José Pedro Várela. 1876, sin una sola hermoso apostolado
La enorme tarea realizada desde marzo de llora
de descanso
NuUa
había imipuesto
que se
colocar al
I^ruguay,
dics sine
desde
como en
el
—
linea
comienzo de
efecto lo
hizo,
Dictadura
la
para
a la cabeza de todos
países sudamericanos en materia de enseñanza primaria, agotó
los
de Várela y provocó su muerte el 24 de octubre de 1879. la noticia desaparecieron las vallas entre los hom-
físico
el
—
Al divulgarse
bres del gobierno y los partidos de oposición, ción
de Montevideo por un
primer acercamiento
movida toda
mismo sentimiento de
que se producía desde
el
la pobla-
dolor.
Era
el
motín militar de
1875.
Latorre pidió y
obtuvo venia legislativa para
rendirle
honores
públicos.
«El
esclarecido
su mensaje
en
el
—
ciudadano
don José
Pedro
Várela
—
decía
en
acaba de fallecer cuando las semillas que arrojara
suelo de la patria en cumplimiento de su glorioso apostolado,
emipezaban recién a asomar sus frutos.
Ha
prestado
al país servicios
invalorables en la noble causa de la educación popular, cuya esta-
y progreso ha asegurado.
bilidad
Espíritu
profundo,
voluntad
in-
quebrantable, nada lo ha arredrado para realizar la idea grandiosa
que conicibiera, ni aUn la misma vida, cuyo saha hecho en holocausto a la eduicación. Personalidades de José Pedro Várela son acreedoras a la gratitud de
y regeneradora cviíicio
como
la
Anales le
174
universidad
la
en su modesta vida no consipremio que justamente merecieron sus importantes serel sentimiento que su prematura muerte ha causado debe
iodos sus conciudadanos, y ya que
guió
el
vicios,
la Nación en una de esas ceremonias imponentes de enseñanza moral y política.» La Universidaid, el Ateneo del Uruguaiy y la Socied'ad de Amigos de la Educación Popular publicaron avisos Invitando a la po-
demostrarlo
alta
blación
para
La
entierro.
el
Dirección
Instrucción
de
Pública
una suscripción nacional para erigirle un monumento en el Cementerio Central. En la calle 18 de JuliO' por donde desfiló el cortejo estaban formados en dos alas, los alumnos de 43 escuelas públücas'. La escuela «Ellbio Fernández» formaba parte d.el acompañamiento. Y detrás de ella 2 0,000 alimas. Lois alumnos de lais escuelas arrotomó
la
de
iniciativa
jaban flores
al
pasar
el
«Un pueblo inmenso que confundíanse
féretro.
—
decía
todas las
dad:es y todas las edades,
—
diario
el
clases
«La France» todas
sociales,
jóvenes, niños, viejos,
las
—
—
en
el
nacionali-
formaba
una ola humana que se agrandaba en cada esquina. Puede decirse que la ciu|daid entera, estaba de pie detrás del cortejo, en dondequiera que podía saludar al papara Siiempre inmortal». En el CementeriOi haibliaron el Ministro de Gobierno don Joteé María Montero, eí doictoir Francisco A. Berra en representación de la Sociedaid de Amigos de la Educación Popular, don Remilas
calles,
en las
azoteas,
sar ese gnan noimbre
gio
ción
en
Ca'steJlanos Públix;a,
el
ya.
de los amigos íntimos
ide
tal
El país,
Garlos
Vareliai,
representacióni del Ateneo del
la Dirección de InstrucBlanco en representación dootor Manuel B. Otero en
de
representaición
doctor Juan
el
Uruguay y de
la
Masonería Orien-
y otras personas. Ministro de Gobierno,
«que
anticipó
la
para satisfacer
bandera
que
el
anhelo de todo
muerte
la
acababa
el
de
arrancar de manos del apóstol y del mártir sería confiada por Gobierno a otro ciudadano que encarnara el mismo orden de
eí
ideas de la alta personalidad desaparecida».
«Nadie ignora
—
dijo en
seguida
el
gencia, el tino, la firmeza de carácter
que desde
el
doctor Berra
y
la
—
la
inteli-
honradez suma con
primer instante abordó esa empresa tan sembrada
de dificultades; y no es menos digno de la consideración de las el sublime sacrificio que verificó de sus comodidades, de su salud y de sentimientos caros en aras de su
generaciones venideras
Anales de
patria...
más
Cruel, de lo
universidad
la
iTó
cruel ha sido su larga enfermedad.
Le ha tenido padeciendo una serie continua de tormentos y sin embargo su monumental Memoria, sus publicaciones y sus más importantes discursos han sido escritos alternativamente con sus demás trabajos administrativos, aprovechando de día y de noche, a todas horas, las ligeras treguas que le daban los más agudos sufrimientos. Los reiterados consejos de la ciencia, las instancias de la familia y de los amigos no bastaron para persuadirle de que debía suspender temporariamente sus excesiva!?
tareas
sin
serias
como condición única de poderlas continuar más tarde inconveniencias. Se sentía comprometido en una obra
de cuyo éxito depende
pensamiento que
timo
existencia.
la
el
porvenir de la República y no tuvo otro
de consagrarle
todas sus fuerzas y por úlDesde hace quince días era un cadáver, pero
el
abandonó definitivamente su trabajo hasta
no
muy
pocas
horas
antes de exhalar su último suspiro.»
«Por su aJctividad enérgica
—
nos
afecto
por la
a.
su
—
inflexi'hilidad
agregó don Remigio Castella-
de
carácter,
por
entrañable
su
niñez de su patria en la cual veía la tabla salvadora
de nuestras libertades, la base robusta de nuestro progreso intelectual los cuales la
y moral, era uno de esos hombres excepcionales sin toda reforma es imposible, toda lucha para conseguir-
infructuosa.»
«Vengo en nombre del Ateneo del Uruguay y de la Masonería dijo luego el doctor Manuel B. Otero a tributar un homenaje a la memoria del hombre que se sacrificó legándonos con su muerte los esplendores de la victoria. Así debieron llorar los hijos de Inglaterra cuando Nelson moría y les entregaba el dominio de los mares. Así debieron llorar las mujeres espartaras cuando supieron la muerte de los hijos que habían perecido en los campos de batalla. Llanto de dolor y de orgullo. Elegía tristísima por una pérdida irreparable e himno de victoria por
—
—
que consigue
el
gran
la
causa liberal.» El
triunfo
doctor Juan
con
esta
Blanco cerró
Carlos
imponente manifestación los
discursos
con
estas
palabras:
«José Pedro Várela «ra
un tra-bajor que había arado hondo, hondo, y que había arrojado la simiente por sí mismo en tierra preparada por sus propias manos y que en medio del
muy la
dolor,
cosecha
de lo
la
angustia
sorprendió
y la
de
esperanzas
las
i;oche,
la
precursoras
eterna noche...
de
la
El martirio
Anales de
176
camino en
su
fué
la
gigantesca
todo
empresa
.
.
Enclavado en
.
el
de crueles sufrimientos, a todo aten-
lecho de acerbos dolores, día,
Universidad
la
prevenía sin exhalar una queja, y sus manos fuer-
lo
virilidad de su espíritu y el imperio
de su voluntad elaboraban las páginas de ilustración y de ciencia que la imprenta devoraba con igual febrilidad para reproducirlas y di' tes por la
fundirlas
en
los
ámbitos
de
la
República,
cesaba un instante, un breve instante
cuando
y
dolor
el
para volver después
¡ay!
con redoblada furia y una voz amiga le recordaba el padecimiento y el insomnio de la noche anterior, él decía: el dolor pasado sólo vive en la memoria; trabajemos en el presente y
pensemos en
no
angustia y
la
el
el
bálsamo de su amor
consuelo de sus dulces palabras para confortarlo,
ci
no es nada, otros sufren más que yo...
día:
dolor,
el
la
y cuando otra voz querida,
amantísima quería derramar
tierna,
Y más que
que viene.
dolor
fatiga mortal venían,
Quien
él
y
respon-
así
había
vivido, así debía morir, y las últimas líneas que firmó con pul-
so sereno y tranquilo fueron para ordenar que las Alemorias de
Inspectores Departamentales estuvieran
los
prontas sin
demora
y sin pretexto alguno el 1'5 de diciembre próximo, día en que él tendría también pronto su trabajo como Inspector Nacional, y
últimos vislumbres de su
los
cuando
espíritu,
las claridades de la vida se
sus
últimas palabras,
confundían con
las
sombras
de la muerte, fueron para pedir papel en qué escribir!, y hubo aún voluntad y fuerza y energía en aquella alma para tomarlo
con una de sus manos y acercar la otra a la pluma... Después... expiró. El supremo esfuerzo del pensamiento para pensar todavía, para esclarecer una idea, había consumido de golpe
toda
la
fuerza vital que
No menos
le
quedaba.»
expresiva fué la prensa de la época.
«Le patria está de luto
—
decía «El Siglo»
dido a uno de los hijos que con
decidida
—
porquie
ha per-
más noble abnegación y con más
perseverancia la han servido. El día en que Várela fué
colocado (1
al frente de la Dirección de Instrucción Pública ocupó puesto a que su estudio, sus aptitudes y sus gustos lo llamaban.
Se dedicó en cuerpo y alma a reformar la instrucción, a derramar en la medida de sus facultades y los recursos de que disponía país,
el
espíritu
de las
nuevas generaciones.
el
Tuvo que combatir
los há,bitos de rutina que se rebelaban contra la innovación del sistema escolar, tuvo que luchar cuerpo a cuerpo con el poder de 1?.
escuela clerical que se sentía herido;
tuvo que hacer algo
más
Anales de
que
difícil:
tuvo
amigos
políticos.
enérgica
voluntad,
de
cei'suras
sus
freate con su
a todo hizo
sobrepujó,
lo
177
sugestiones y las
las
resistir
Todo
Universidad
la
con su honrado patriotismo, con su arraigada
y profunda convicción. Día a día trabajaba, día a día luchaba, y ha trabajado y ha luchado hastja sus últimos momentos, cayendo
como
soldado valeroso
el
ha podido arrancar de
al
manos.
e&te
Repú-
la
glorioso
la
vida de la libertad cimentatla en
respeto a la ley
el
con
ámbitos de
los
será de
nombre será el emblema de la regeneración do pueblo por medio de la educación. Cuando las futuras gene-
Tu
raciones vivan
en
Tu nombre
¡Várela!
hoy más un nombre bendecido en todos blica.
muert9
pie de su bandera que sólo la
su.s
en
y
cuando
cumplimiento del deber;
el
de la dignidad
ciencia
rán con respeto,
ia>mor
del
ejercicio
el
el
la
e-ducación,
derecho armonizado
pueblo
tenga
la
con-
hombre y del ciudadano, todos saludagratitud la memoria del hombre que echó
del
y
por medio de la educación
cimientos de la grande obra de
los
la
regeneración de la patria».
—
—
agregaba
el
mismo
diario
domingo su homenaje de ad'heslón, respeto y simpatía a la memoria del esclarecido ciudadano qne ha bajado al sepulcro dejando estampada uaa huella imperecedera de su paso por el mundo. No sabemos, no podemos referirse
al
calcuJar
al
entierro
tributó
número de almas que
el
el
se habíia reunido en derredor"
de
aquel féretro que con cariñosa solicitud se disputaban los que ha-
bían sido amigos
de Várela y
admiradores de su indonna/ble
los
cumplimiento de la gloriosa tarea que se había impuesto. Nos pareció que toda la población de Montevideo asistía energía en
al
el
acto, unos marchando silenciosos en derredor del féreagrupándose en las calles para verlo pasar y entre esdamas más distinguidas de Montevideo coronando los bal-
solemne
tro,
tos
otros las
las ventanas y las azoteas del tránsito. Y el dolor estaba pintado en todos los semblantes y las flores preparadas por malíes piadosas cubrían los despojos del ilustre finado y en muchos
cones,
ojos
pugnaban
ahogo
tumbaba el laba como fuerza
las
manos contenidas para dar expansión y
des-
Gobierno había cumplido su deber. Recañón en señal de duelo; el pabellón nacional onduen los días en que la patria se viste de luto; la
sentimiento.
al
pública
hacía
El
los
honores
a
los
restos
estaban
de
también
Varelia.
Y
los
Los mis-
amigos políticos de le habían creído merecedor de baldón y de censura por no SQibemos qué escrúpulos y distingos que no comprendemos cuando se trata de prestar servicios a la patria, el domingo gloéste
antiguos
mos que antes
T.
VII-
12.
allí.
Anales de
178
riCicaban
memoria de
la
Universidad
la
Honrosa inconsecuencia que
Várela.
almas nobles y en los espíritus rectos muestra que en sugestiones de la pasión». las a sobrepone se dad «No se ha visto nunca en esta ciudad en un entierro 'as
—
—
de-
la ver-
decía
un acompañamiento más numeroso que el del cLa Razón» malogrado José Pedro Várela. Se calcula que sólo el acompañamiento pasaba de 20,000 personas, no bajando de un número igual el que inundaba ventanas, balcoxies y azoteas. Puede decirse que casi toda la poblaición de Montevideo se había vaciado en
el
trayecto que media entre la casa mortuoria y el cemeniterio.
Fué un
conmovedor
acto
im.ponente. El corazón
e
que sentirse enternecido. Cuando cayó sobre via
arrojada por los niños,
de flores
humedecidos por dos
cuerpos
los
resolvió
ir
las .
.
los
más
frío
una
féretro ojos
tuvo llu-
sintieron
se
lágrimas y un estremeicimiento recorrió toEntre los acompañantes había un grupo
que se distinguían por una siempreviva Representaban al Aiteneo del Uruguay que entierro en corporación. Igual representación te-
personas
de 300
i'omo
colocada en
.
todos
el
el
al
ojal.
nían los estudiantes de la Universidad, la Sociedad de Amigos de la
Educación Popular,
Masonería Uruguaya y muclias otras
la
corporaciones particulares.»
—
escribía el Direíctor de «La Nación» do Buenos «Prat y Grau muriendo como murieron sobre la cubierta del «Huáscar» sen héroes universales y no hay país alguno de la tierra que no
Aires
se
—
honrara de contarlos entre sus
menos
hacer en
Várela caído
hijos.
oriental.
Su
nombre
su
y
ejemplo
todos los pueblos que rinden culto a la honradez,
—
abnegación y «En medio de
de
al
las
—
las
él
pertenecen a al
talento,
desgracias y miserias del Estado
sembraba
generaciones
formaba en
no
a
patriotismo.»
decía el doctor Juan Carlos
nos Aires,
lid
vida por sus semejantes, no es tampoco una gloria
la
exclusivamente
la
en
después de haber hedho cuanto un hombre puede
noble,
del
Gómez en «El Nacional»
la semilla del
porvenir
y
Oriental,
de Bue-
bien en la tierra fecunda
desentendido
del
presente
derramados futuros ciudadanos que han de
las ideas de la libertad y de los deberes
en las cartillas de
la infancia los
redimir aquel noble y heroico pedazo del
mundo americano.»
«La Franjee» exteriorizaba el sentimiento público aplicando a la muerte de Várela estas palabras de Lord Byron: «Hay láigrimas para todos los que mueren. Para el más humilde sepulcro hay un duelo. Pero cuando son los triunfadores
Anales de
Universidad
la
que sucumben, entonces es de
los
los
179
pueblos que parte
el
grito
fúnebre. Hasta la victoria llora.»
El sucesor de José Pedro Várela.
Dos meses tardó
coronel Latorre en proveer la vacante pro-
el
por la muerte de José Pedro Várela, y ctiando llenó esa
ríucida
el hermano del reformador, no todos aplaudieron, porque Jacobo A. Várela que ocupaba en esos momentos el modesto puesto de Gerente del Tranvía del Norte, había estado alejado de la actividad escolar por la que no parecía tener voca-
vacante con
ción alguna.
—
dijo al aceptar el puesto «Creo hacer acto de valor cívico dando oídas a elevadas consideraciones y a sugesitiones que no podrían serme sospechosas para afrontar las múltiples res-
—
ponsabilidades de ese puesto sin la competencia necesaria y sin especial
la
con
preparación
ilustración
e
que
rectitud de mis intenciones y con
la
requiere
.
.
Cuento
.
mi trabajo para
levan-
tarme a un nivel en que pueda responder a las aspiralciones legítimas de mis conciudadanos y a la confianza que ein mí depoEducar el mayor número, levantando prosita el Gobierno gresivamente el nivel intelectual de las generaciones que han de sucedemos, es obra que merece Sin duda la cooperación de los que quieren bien a su patria, si aspiramos al menos a fundar la democracia sobre las únicas bases duraderas e inconmovibles, haciendo demócratas, formando ciudadanos conscientes que al aprender a gobernarse a sí mismos comprendan y aprecien las grandes conveniencias de las instituciones libres, así para las .
.
.
especulaciones del espíritu,
altas
como para
la satisfacción
de las
necesidades de la vida social.»
Tres años después, decía eximio en
j.iez
I'edagógico
materia,
el
—
doctor Carlos Marfa Ramírez
a raíz de las sesiones del
—
Congreso
reunido en Buenos Aires con motivo de la Exposique Jacobo Várela era en esos momentos «ei
Continental,
ción
oriental
mejor preparado para ocupar
eciucación brillado
común de
tanto
como
la él
el primer puesto en la Repúolica», y agregaba «que nadie había en las deliberaciones de aciuella memora-
Asamblea.»
ble
El el
la
Gobierao había, pues, cumplido
actc
del
la
promesa formulada en
oniierro de José Pedro Várela,
bandera ¿rrancada por
la
al anticipar «que la muerte de manos del apóstol y del
Anales de
180
Uiáítir
confiada
sería
orden de ideas que
lia
a la
otro alta
la
Universidad
ciudadano que encarnara el mismo personalidad desaparecida.»
Sociedad de Amigos de la Educación Popular.
La Sociedad de Amigos de
la. Educación Popular que con José cabeza había llevado los programas, los textos y los procedimientos de enseñanza de la Escuela «Elbio Fernández» a todas las escuelas de la República, seguía la obra con
I-edro
Várela a
entusiasmo,
la
a despecho
de
exigüidad
la
de
sus
recursos
finan-
cieros.
En
1876 sólo tenía 220 socios, entre los que figuraba
Latorre,
süscriptores
101
y
biblioteca
En conjunto apenas
de 3,573 voLúmenes. pesos
su
a
coronel
el
compuesta
circulante
alcanzaba a percibir 300
mensuales. Pero con ellos sostenía
el funcionamiento de la Escuela «Elbio Fernández», que s-eguía siendo la escuela modelo, y cursos normales a cargo de José Pedro Várela (lecciones sobre
Romero
Emilio
objetos),
Francisco,
Perrer
gramática y
(composición,
escritura),
(pedagogía), Juan Alvarez y Pérez
Juan Scarpa
naturales),
ventura
Berra
A.
(fisiología,
(aritmética
y
(ciencias
higiene y geografía).
Miguel
canto),
Jaume
Buena-
y
Bosch
(dibujo).
Uno de cando un
esos
Emilio Romero, coronó su curso publide texto «Lecciones progresivas de composición»,
profesores,
libro
destinado a facilitar
el
estudio
señanza que preconizaba en
Lia
enseñanza universitaria.
Un grupo
y divulgación del método de encátedra.
la
— Se
declai-a la libertad
de estudiantes tomó en 1876
yecto de
libertad
de estudios
seno del
Consejo
la,
de estudios.
iniciativa de
un pro-
que encontró buen ambiente en
Universitario,
a
despecho
de
los
trabajos
c;ro grupo de estudiantes, que aunque de perfecto acuerdo con referido
proyecto,
no
—
-
decían
los
el
Gobierno
en
miembros de ese segundo grupo
—
quería que
elevado
fuese
aJ
esos momentos.
«Pensamos
el
ce
que es más digno, justo y conveniente solicitar el ejercicio libre de a.quel derecho en una época tíe régimen constitucionail, cuando
imperando
la Constitución y las leyes tenga autoridad legal para consagrarlo.»
Poder que
el
El coronel Latorre se apresuró a dictar
el
lo
conceda
decreto solicitado por
Anales de
Universidad
la
—
—
decía un saPoder público tiene el imperioso deber d-e respetar y garantir». Pero a la vez suprimió las cátedras de estudios secundarios que funcionaban en la Universidad (filosofía, matemáticas, geografía, historia universal y latín). De acuerdo
estudiantes «siendo la libertad de estudios
los
grado derecho que
el
exámenes durarían una hora y potlrían realimesas examinadoras de los colegios de Montevideo serian designadas por la Universidad y por los directores de los mismos colegios, y las de los departamentos de campaña por las respectivas Juntas Econámico Adminiscon
decreto los
el
en
zarse
julio
en diciembre. Las
y
-
Se rendiría además en la Universidad un examen gene-
trativas. ral
de todas las materias de bachillerato para
tudios
reforma importante promovieron
Otra
Consejo
El
ingreso a los
el
js-
superiores.
era
Unlversitairio
estudiantes
los
en
1878.
una corporación cerrada que daba
muy
pocas señales de vida. La Sala de Doctores, dü la que tam-
bién
formaban parte
los
era en cambio una corpora-
bachilleres,
ción llena de elementos de vida, pero sin otra función que la de oir la lectura de tes
nal
Memoria anual
la
Los estudian-
y elegir Rector.
pidieron que se les concediera nombrar una parte del perso-
como medio de crear vínculos
Consejo Universitario^
del
cundos
entre
También en
dos
las
este
caso fué
invocaba
decreto
corporaciones
el
hasta
En
atendida la gestión estudiantil.
Gobierno
la
necesidad
de,
una
fe-
separadas.
entonces
su
reforma que
diera participación «al elemento nuevo, que sin motivo y sólo con notable perjuicio de la educación permanecía alejado de toda ingerencia, y establecía que en adeliante el Consejo Universitario se compondría de miembros natos (los catedráticos), miembros honorarios (los ex catedráticos y empleados superiores que por la
importancia de sus servicios fueran declarados tales) y 10 vocales elegidos por la Sala de Doctores.
De una dura: chos
la
tercera gestión de
del
doctorado y
grado o por
a todo en tor
y
lo
lo
menos
estudiantes
este
el
la
supresión de
del
traje de
traje
período,
versas asociaciones
cada
que
las
la
estudiante
ocupó
se
la
dicta-
rebaja de los dere-
la
colaciones
etiqueta.
fundamental, reduciendo
disponiendo
grados con
En
los
supresión del título de licenciado,
públicas
de
El Gobierno accedió
cuota del grado de docfuera
colación
de
dentro de las
di-
a
la
que tuviera.
que era de estudio particulares
ñanza secundaria que
el
decreto
puesto, se presentó a rendir
intenso
que tomaron a su cargo
la
de Latorre suprimía del
examen una mujer,
la
señorita
ensePr^ssi:-
Luisn
Anales de
\H2
la
ürdi'ersidad
Domínguez, la primera que afrontaba esa prueba en la Universidad aquende y allende el Plata. Esa señorita fué aprobada en filosofíu y vitoreada por la numerosa concurrencia que babía acudido examen.
presenciar su
a
En
Facultad de Medicina.
la
A
mediados de
empezaron
1876
funcionar
a
cátedras de la Facultad de Medicina:
de
la
dos
las
primeras
Anatomía a cargo
del
doctor Julio Jurkouski y la de Fisiología a cargo del doctor Suñer
La primera
Capdevila.
y
entre
proveyó
se
segunda un solo candidato. concurso de Anatomía hubo que luchar
por nombramiento directo en razón de
Para
realización
la
con enormes
concurso de oposición
por
Jurkouski, Masriera y Aguirre y la
doctores
los
díl
existir
Se requerían
dificultades.
tres
cadáveres
con des-
de los concursantes, y para conseguir esos cadáveres hubo necesidad de librar tres batallas con la
a
tino
Comisión
prácticos
ejercicios
los
Hosipital
del
de Caridad que hasta negó en absoluto su
anfiteatro para los trabajos de disección.
Un año después se aumentaba el número de las cátedras con el funcionamiento del curso de Patología General a cargo del doctor Serratosa, del curso de materia médica y terapéutica a cargo del Kemmerick,
doctor
cargo gica.
La Facultad
Ampliado dráticos
así
por
el
del
Diego
doctor
del
curso
Higiene
de
Pérez y
y
curso
del
Medicina
Legal a
de Patología Quirúr-
sólo contaba entonces con 20 alumnos.
el
médico publicaron un
cuadro
aviso ¡os
cate-
que prevenían que todos los días de 12 a
1
da-
rían consultas gratis en la Universidad.
Las crónicas de de
cirugía
del
fémur por
tomía por
la
realizadas
el
el
época hablan con elogio de dos operaciones en
el
Hospital:
doctor Brendell.
Ambas
constituían
nuestros médicos y fueron coronadas por
En
de
la
cabeza
el
una novedad
mejor
p?.ra
éxito.
Facultad de Derecho.
la
Un
resección
la
doctor Enrique Estrázulas y un caso de ovario-
mucha resonancia ocurrió en 1877. El catedráDerecho Penal doctor Gonzalo Ramírez resolvió donar sus
incidente de
tico de
Amigos de la Educación Popular, y explicando su actitud dijo por la prensa «que sólo a esa condición creía que podía y debía ocupar un puesto público en la situación del
sueldos a la Sociedad de
Anales de
la
Universidad
1^3
de dirigió en el acto aJ Reco:El Ministro de Gobierno se al doctor comunicara que para Berinduague la Universidad doctor motivo cátedra. Hubo con ese Ramírez que estaba separado de su reso:^ ^-versitano del Consejo acalorados debates en el seno decreto al cumplimiento votos dar viéndose al fin por mayoría de María de Pen. hizo. El doctor Carlos se así como dictadura, de la Política Economía y Finande su cátedra .e apresuró a renunciar mderesolución creía comprometida a zas invocando que con esa doctor el dignidad del ciudadano, y Tendencia del catedrático y la Procedimientos judiciales siguió de catedrático Adolfo Pedralbes
país».
su
ejemplo.
la Facultad de Derecho propuesto poEl plan de estudios de la la^ enextendía 1878, en Gobierno Universidad y aceptado por el De. -elas siguientes asignaturas: señanza a seis años y comprendía comerDerecho Derecho civil. cho natural. Derecho constitucio-nal. administrativo, Procedimientos .^adiDerecho penal. Derecho cial Derecho Historia general del Derecho,
Economía
c^ales
política,
como comparada. Medicina legal. Pero Presupuesto quedo al incorporadas fueron las cátedras nuevas no el a concurso que prescnb.a pendiente de ejecución el llamamiento
internacional.
mismo
Legislación
plan de estudios.
Contaba
el
país
nacionales. en esos momentos con 89 abogados
Otras carreras liberales. dirigía don Benito Riqué «Escuela Politécnica Oriental» que de Facultad de denominación en 1876 la le otorgó la dictaaura si fuera unique forma misma la Ciencias Físico-Matemáticas, en títulos de Agrimensor, Perito versitaria en cuanto a expedición de Ingeniero, ba30 la única Agrónomo. Perito Mercantil, Arquitecto e de carrera se realizaría anto condición de que el examen de fm una mesa que designaría el Gobierno. Dirección dispuso el Gobierno que la Tres años después, en 1879, de exaestudios de y programa un de Obrai. Públicas redactara una cátedra estableciera y construcción n.enes de arquitectura y ese programa. gratuita para la enseñanza de la profesión de Escribano reglamentó año mismo Una ley del exámenes que los aspirantes, los estableciendo las condiciones de no se creara mientras Justicia de debían rendirse ante el -Tribunal de llevar forma la profesional, práctica la el Colegio de Escribanos, anexas al responsabilidades y obligaciones los protocolos y las
A
la
ejercicio
del
cargo.
Anales de
]84
la
Universidad
Organización de la enseñanza universitaria en los centros y ciedades estudiantiles.
En ningún
período de nuestra historia se encuentran tantas ins-
como durante
culturales
tituciones
actividades
so-
excluidas
intelectuales
habían desbordado en
la
del
dictadura
de
escenario
Las donde
Latorre.
político,
anteriores, se reconcentraron en los cen-
los
tros científicos y literarios, único refugio que les estaba permitido,
alcanzando
notable brillo por la variedad e intensidad de sus
allí
nianifestaciones.
El Club Universitario,
el
Ateneo de Montevideo,
Sociedad Filo-
la
Club Católico, la Sociedad de Ciencias y Artes, la Sociedad Universitaria, el Club Fraternidad, la Sociedad de Estudios Iiistórica,
el
Preparatorios,
América, he ahí
el
Club
Fomento de
Club Literario Platense,
el
una docena de
El Club Universitario,
las el
la el
Educación,
Club
el
Joven
Club Literario Uruguayo;
de mayor actividad. más antiguo de esos
centros culturales,
organizaba animadas asambleas en las que ocupaban
la
tribuna
el
doctor Jurkouski para hablar de Las teorías de Darwin y de Hae-
Thonmson para hablar de religión, los señores CarAnselmo Dupont, Bartolomé Mitre y Vedia, Pablo De-María, Eduardo Flores, José Román Mendoza para ocuckel, los
el
pastor
María
Ramírez,
parse de temas históricos y literarios. Clausurados los cursos ciales
enseñanza preparatoria estableció
de
el
ofi-
Club Universitario
clases gratuitas de Filosofía a cargo de
blo
De -María; de Historia
a cargo de
de Matemáticas a cargo de Juan P.
Juan Carlos Blanco y PaJuan Gil y Enrique Azaróla;
Lamoille,
Sebastián Martorell
y E. Villegas Zúñiga, y de Geografía general a cargo de Manuel B. 01 ero y Baltasar Montero Vidaurreta, y más tarde también una
Academia de Legislación y Jurisprudencia cuyo alcance explicaba su Presidente el doctor Pablo De -María a la Subcomisión en-
atí
cargada de redactar los Estatutos:
«Todos
los
que se dedican a la carrera del foro podrán ser
alter-
nativamente maestros y discípulos realizando un estudio colectivo de los conocimientos que constituyen el vasto dominio del jurisconsulto y concurriendo así a la popularización de las ciencias jurídi-
cas que es
una aspiración de la época y una necesidad de la demoque no continúe siendo una amarga ironía el prin-
cracia, a fin de
cipio legal de
gún habitante
que
la
ignorancia de la ley no sirve de excusa a nin-
La abogacía, según el bello pensamiento de nuestros viejos códigos, debe ser un sacerdocio, un aposdel
Estado...
Anales de
18ó
Universidad
la
a ella consagran su inteligencia deben levantarla, para desmentir a los que quieren hacer aparecer a les graduados como espíritus retrógrados, adheridos al pasado, sin más criterio que vanos formulismos ni más ciencia que la argucia tolado, y los que
enaltecerla,
y
el
sofisma, especie de anacronismos vivientes perpetuados a des-
hecho del progreso en medio de
La Sociedad Universitaria cursos
también una tribuna
.activa y que más tarde comple-
secundarios,
estudios
de
regulares
sociedad contemporánea...»
la
tenía
mentó con una cátedra de agronomía a cargo de los peritos agrónomos don Federico N. Abadie, don Joaquín R. Sánchez y don Francisco A. Caffera, y clases de repaso de derecho y de medicina. El Club Católico, movido por el doctor Mariano Soler, mantenía su tribuna en constante actividad y organizaba cursos de enseñanza secundaria para contrarrestar la campaña de los elementos liberales.
La Sociedad de Ciencias Naturales fundada por don Pedro
Gi-
adquirió rápido desarrollo con la incorporación de don José Arechavaleta y del doctor Jurkouski que tomaron a su cargo la divulgación de las obras científicas más en boga rart y sus discípulos,
en
los
europeos de la época.
círculos
La Sociedad de Estudios Preparatorios que desde tiempo
atrás
mantenía cursos de repetición en todas las aulas de enseñanza secundaria, amplió fuertemente su programa bajo la denominación de «Socied'ad de Estudios Universitarios» así que el gobierno de Latorre declaró
libertad
la
de estudios.
El Ateneo del Uruguay en versitario,
la
Naturales
y
Sociedad
Filo
el -
Club Literario
el
que se refundieron
Histórica,
la
Platense,
organizó
de las tribunas de propaganda de la época y la las
universidades
libres
creadas
durante
el
la más activa más notable de
dictadura.
la
Club Uni-
de Ciencias
Sociedad
A
su
tri-
Prudencio Vázquez y Vega, Anacleto Dufort y Alvarez, EJduardo Flores, Daniel Muñoz, José G. Busto, José Arechavaleta, Manuel B. Otero, Julio Jurkouski, Julio Herrera y Obes, Carlos María de Pena, José Pe-
buna de fuerte orientación
dro
Ramírez,
«Esperemos;
La juventud
desalientos y
formación
dieron
brillo
Pedro Bustamante y José Sienra Carranza. decía en su Memoria la primera Junta Directiva
presidida por «1 doctor tro.
liberal,
las
del
Domingo Aramburú. El porvenir
ilustrada de nuestra patria derrotas,
Club
evitó
hace diez años
Universitario)
los
nues-
es
aleccionada por los
senderos
(se
refería
trillados,
a
la
dirigió
su vista hacia adelante y buscó un asilo donde dedicarse a la labor proficua
de
la
regeneración...
Mañana cuando
el
pensador
poli-
Anales ie
186
la
en
tico detenido por la decepción
universidad
mitad de 6U carrera, agobiada
la
su frente por la pena, sienta llegado
campo de
algún ti-empo el a su tienda:
les
el
momento
de abandonar por
ya no se retirará como Aqui-
la lucha,
encontrará un campo más vasto donde extender
dominio de su inteligencia. Vendrá aquí donde
el
inmortales
donde
derecho reciben
del
principios
los
más
consagración
su
pura,
abandona las miras ambiciosas para no mañana, aquí, donde la savia generosa de
más que en el siones más nobles ha^e
con
palpitar
violencia
pa-
las
corazón
el
aquí, fijarse
espíritu
el
de
la
juventud.»
La Universidad
Ateneo comprendía
libre del
cursos de Filo-
los
Prudencio Vázquez y Vega, Historia Natural a cargo del bachiller Manuel B. Otero, Geografía General a cargo del bachiller
sofía
cargo
a
Gregorio
bachiller
del
Daniel
doctor
Granada,
Física
Literatura
Pérez,
cargo
a
Felippone y del químico don Majrio
Isola,
cargo
a
de!
Florentino
bachiller
del
Química a cargo de
los
bachilleres Florentino Felippone y Garlos Regúnaga, Zoología y Bo-
cargo
tánica
a
Pedro
Hormaeche,,
Nicolás
N.
del
Profesor
Piaggio
y Javier
Arechavaleta
José
Matemáticas
a_
cargo
Alvarez
con cerca de 200 alumnos matriculados) a
Civil
de
del
y
(algunos
bachiller
agrimensores
los
de
ellos
hasta
y los cursos de Derecho
cargo del doctor Domingo Aramburú, Derecho Comercial
a cargo del doctor Ildefonso García Lagos, Derecho Constitucional a cargo del doctor José Pedro Ramírez, a
Derecho Natural
3"
Penal
cargo del doctor Gonzalo Ramírez, Procedimientos Judiciales a
cargo del doctor Rosendo Otero, Economía Política y Derecho Ad-
ministrativo
a
cargo
del
doctor
Carlos
María de Pena, Derecho
Internacional a cargo del doctor José Sienra Carranza.
Junto a esos grandes centros culturales y en comunicación conscon ellos funcionaba el Colegio Hispono-Uruguayo de don Baltasar Montero Vidaurreta, con su vasta sección de estudios
tante
I-reparatorios y su activa tribuna de propaganda.
Hasta en
el interior del
país repercutía el
movimiento a favor
ce la enseñanza secundaria y superior, haciendo cabeza la So-
ciedad ció
Científico
-
Artística
cursos de Derecho
temáticas, Dibujo, Idioma, res
del
y Pablo
de
Paysandú que en
Constitucional,
Filosofía,
1879
estable-
Fisiología,
Mi-
con ajuda de un cuerpo de profeso-
que formaban parte los doctores Carlos María Ramíre-2
De -María.
Anales de
la
universidad
187
La Escuela de Artes y Oficios. Entre
los establecimientos cultu7-ales de la
época merece figu-
rar también la Escuela de Artes y Oficios fundada por el coronel
Latorre a mediados de 1875, en
ocupa
Universidad,
la
habían pertenecido
Desde
utilizando Instituto
al
mismo paraje que hoy
el
vastas
las
construcciones que
Nacional de don Pedro Ricaldoni-
primer momento empezaron a funcionar
el
los
talleres
de herrería, carpintería, rodados, zapatería, platería, tipografía,
encuademación, dibujo, música y clases de instruccon 178 alumnos que el «Diario Oficial» clasifi-
escultura,
ción primaria,
caba
26
así:
dres a
título
enviados de
por
la
incorregibles
121 enviados por los papor carecer de medios de
Policía,
y
31
subsisten'cia.
Complementando
presentó
plan
el
el
coronel
Latorre
a
la
Asamblea un proyecto de ley que fué sancionado, por el que se putorizaba al Poder Ejecutivo para proyectar la fundación de Escuelas Talleres de artes y oficios €n todos Ioí; departamentos de campaña basadas en los sistemas más adelantados de Europa y Norte América, sirviendo la de Montevideo de Escuela Normal para la formatción del profesorado de esas otras institucio-
nes
filiales.
LPué tan rápido el crecimiento de la Escuela de Artes y Oficios
que
Gobierno resolvió abordar y, poniendo manos a
el
más amplio dedores
ocupa
de
PJaya
la
Ramírez
li
la
construcción de un edificio
la
obra, adquirió en los alre-
manzana
de
Escuela Industrial y dio comienzo a toda esa manzana utilizando en grande escala la
penados y de
los
Coninemorando Desde
'18
74
terreno la el
que hoy
edificación de
trabajo de los
prevenidos.
las
glorias
nacionales.
trabajaba en la Florida un grupo de ciudadanos
presidido por don Antolín Urioste en la tarea de recolección de
fondos con destino a la erección de un tivo de la Declaratoria
monumento conmemora-
de la Independencia en 1825.
Ese grupo se fué agrandando hasta formar una gran ComiMagariños Cervantes que en 1876 llamó a concurso fijando como costo del
sión Nacional bajo la presidencia del doctor Alejandro
monumento proyectos
la
cantidad de 30.000 pesos. Entre los veintitantos
presentados
prevalició
el
del
escultor
Ferrari.
Sólo
1
Anales de
88
alcanzaba a 10.000 pesos la
la
Universidad
suma recaudada hasta
gobierno de Latorre aseguró
ejecución
la
entonces; pero
el
de la obra mediante
entregas mensuales de 1,500 pesos hasta completar su pago.
La
inia.uguración
monumento tuvo
del
lugar
el
18
dé
mayo de
y en ella fueron Leídas las composiciones y repartidos los premios de un certamen poético que formaba parte del amplio programa que se había trazado la Comisión Popular, rscibiendo la 1879,
medalla de oro don Aurelio Berro por su composición «al Monumento de la Florida» y la de plata don Joaiquín de Salterain por su composición «I^a Lira rota». También se leyó en ese acto «La Leyenda Pafria» de don Juan Zorrilla de San Martín, que había Bido excluida del ooncurso porque sus dimensiOTies no se ajustaban a las bases publicadas, pero con
figurar en
el
voto del Jurado de que debía
el
monumento por
acto de la inauguración del
su alto
mérito literario.
mismo movimiento conmeimorativo de las cuadro de don Juan Manuel Blanes «El JuTreinta y Tries», que el gran artista resolvió di>
Corresponde a este nacionales
glorias
ramento de nar
al
los
el
Museo Nacional.
—
«No tuve nunca. Excelentísimo Señor íil
comunicar
la
—
donación
la idea de
decía Blanes a Latorre
exponer la imagen de los
Treinta y Tres a los azares de la fortuna, porque yo no debía ni podía contradecir la
denuedo y
el
fe,
el
patriotismo
con que los
patriotas rCipresentados en esa tela ejecutaron su pensamiento, del cual he participado en todo el tiempo consagrado a
rememorar su
juramento». El dictador Latorire con
el
propósito de estimular la enorme y
fecunda labor de Blanes, compró a éste otro gran cuadro que aca-
baba de concluir, «La Revista de Rancagua», y a'
Presidente
argentino
colocación honrosa en
doctor
el
Nicolás
lo
envió de regalo
Avellaneda,
quien
le
dio
salón de recepciones de la Casa de Go-
bierno.
«El vencedor de
Carranza sobre
el
—
Maypú
—
escribía con tal motivo
don Ángel
J.
que lloraba amargamente sepulcro de Aquiles envidiando el lugar que ocupaba en
más
feliz
que
el
Arbelas
puede seguir tranquilo el sueño eterno, que un cincel maestro acaba de legar a la piedad de la historia su noble fisonomía adunada con ventaja a los altos hechos, a los sacrificios desinteresados y a la abnegación cívica del americano esclarecido que la,
Ilíada,
nada amó tanto como
la
libertad
de su patria.»
Anales de
Un
universidad
El
Juan Carlos Gómez invitado
doctor
Monumento de
Florida,
la
al
patria,
la
habría
Florida
asociaría
se
tratara de solemnis^ar
con
entusiasmo
hecho de
el
que
monumento
en términos generales de erigir un la
la
al
de
inaugura-
la
que la Asamblea de
un crimen;
sido
la Florida.
acto
contestó
825 no había declarado la independencia;
despedazar
189
monumento de
debate histórico en torno del
ción del 3
la
declaración,
tal
que
si
al
tratara
se
a la Asamblea de
homenaje;
que
si
se
independencia sin conexión
ilguna con la tradición de los Treinta y Tres y de la Florida,
tal
tomándolo como un hecho consumado; pero que en tal caso habría que colocar en el monumento la estatua del Gobernador Dorrego y del Emperador Pedro I, los dos vez se
asociaría
factores
que
también,,
produjeron.
la
Esta contestación del doctor Gómez fué discutida en
Ateneo por
d'Bl
y
si
doctor
José Podro Ramírez
la
tribuna
que la impugnaba
Buetamante que la defendía. Para el doctor Asamblea de la Florida había votado la incorpora-
Pedro
doctor
el
Ramírez
el
la
ción a las Provincias Unidas del Río de la Plata a raíz de haber
declarado la Independencia, era a causa de
Estado
Oriental
para afrontar
¡a falta
lucha con
la
el
de fuerzas
Brasil.
de'l
Para
el
doctor Bustamante ni Artigas, ni les Treinta y Tres, ni la Asam-
de
blea
Florida querían la
la
independencia, y
ésta había sido
decretada por los brasileños y los argentinos que habían dispuesto
de nuestro derecho sin consultar
Dos en
el
La
igualmente
tesis
tomo
la
insostenibles
voluntad nacional.
como
lo
hemos demostrado
I.
tradición
de
Artigas,
que puede considerar.íe como
dición de todos los orientales, no
la
tra-
era a favor de la organización
un país independiente, sino a favor de la incorporación a un organismo federal conistituído por las Provincias dtl Río de la Plata. Y esa tradición seguía viva y vigorosa cuando la Asamblea de
de la Florida declaraba rotos los vínculos con
el
Brasil y en uso
soberanía nacional reivindicada dictaba la segunda declaratoria del 25 de Agosto de 1825, aunque coíi una grave desviación: de la
la
el Uruguay sin condiciones y no bajo el régide garantías federales siempre e invariablemente exigidas por
de reincorporar
men
Artigas.
Y
en cuanto a la Convención de 1828, arriba de la voluntad de I y del coronel Dorrego, estaba la Inglaterra que era
Don Pedro quien
exigía
a
los
combatientes
la
independencia de la Provin-
Anales de
190
la
universidad
cía Oriental. Pero aun cuando la Argentina y el Brasil hubieran podido acordar libremente su independencia por razones de equilibrio y hasta de recíproca conveniencia internacional, no por eso hu-
bieran impuesto a los orientales un liecho nuevo para
ellos, sino que habrían limitado a reconocer un hecho ya existente. Ninguna Asamblea anterior había pronunciado la palabra independencia.
se
Pero
pueblo oriental estaba ya fundido por Artigas en
el
molde
el
de los pueblos independientes, por más que como pueblo independiente quisiera ser cabeza de una gran liga federal y no pe-
queña república, de escasa resonancia, en
el
vasto escenario ame-
El pueblo oriental existía ya fuerte y unido por una tradición de glorias que arranca de 1811 en las batallas de la indericano.
pendencia,
qu'e
peregrinación
que
crece
al
con
Ayuí y
el
levantamiento
la reivindicación
del
primer
la
sitio,
de los fueros provincia-
durante el segando sitio hasta dar al fórmula más alta del régimen fed'aral y de las garantías constitucionales; y que sie agiganta luego de 1815 a 1820 oponiendo la fórmula republicana a la idea monárquica de les;
Río de
sigue
la
creciendo
Plata
la
todos los
proceres de Mayo,
tituciones
contra esos
a la voluntad
sas
sosteniendo la necesidad
personal de
tonomía
de las provincias al
Aires
defendiendo todas
y
de las ins-
mismos proceres que no admitían gobernantes,
los
centralismo
estas
ideas
en
oponiendo
absorbente
una guerra
cortapila
au-
de Buenos colosal
y
sin tregua que ella sola habría bastado para dar temple y relieve
a
cualquier nacionalidad
En
esos mism.os
de la tierra.
momentos en que
se agitaba la Sala del
Ateneo
bajo la palabra de los doctores José Pedro Ramírez y Pedro Bustaraante, otro distinguido ccmpatricta el doctor Gregorio Pérez
Gomar que acababa de llegar de Europa, se Gómez para hablarle de la patria
Carlos
dirigía al doctor
chica y
de 'la
Juan patria
(jrancle.
«He
recorrido la Italia, le decía,
h,e
visto de cerca y estudiado
drama d,e su unidad... En p-resencia de sus resultade mármol o de bronce quien no se entusiasma y quien no
ese grandioso
do? es
ambiciona para su patria igual grandeza e igual felicidad, sobre todo nosotros que a orillas del Plata hemos arrastrado una existencia no menos borrascosa que la Italia... Cada Provincia italiana ha ido a la unidad enaltecida con sus propias y gloriosas tradiciones. o'e
Cada una ha llevado a
la independencia,
pierias
la patria la cosecha de su período de sus poetas y de sus artistas, las y de sus luchas con el extranjero... La
la gloria
de sus soldados
Anales de
Universidad
la
191
República Oriental... ha hecho gran cosecha de glorias y de esfuer-
marcha
zos que nos tra-eirían en
milagro Montevideo
fué
de la
libertad?.
en ninguna localidad del territorio argentino había
el
.
unidad con
dríamos a
la
cillado su
honra
y
que
la altivez
nervio
el
viril,
Ven-
.
patrimonio de gloria
y de riqueza.... Pero la idea no tiene ambiente en
que dejar que
.
de una hermana que no ha man-
cointrario trae su
al
Porque
.
n y los elemeintos que había, en Montevideo.
ilusitració
la
¿Por qué
triunfal a la unidad...
santuario
el
el
pueblo y hay
tiempo haga su obra».
Honi*an(lo a los extranjeros ilustres.
Al llegar
la
noticia de la muerte de Thiers ordenó Latorre
que
bandera nacional a media asta en todos los edificios decía en su decreto que tribunar hopúblicos, «considerando menaje de honor a aquel ilustre finado no pertenece sólo al país se pusiera la
—
—
que honró con sus escritos y sus virtudes, sino también a los pueblos civilizaidos, por los servicios prestados al progreso humano». lEn esa
misma época
la
ción popular a favor de rís.
Y
prensa de Montevideo abrió una suscrip-
Roque
acusando recibo de
ilustre publicista español
la
Barcia, emigrado a la sazón en Pa-
primera remesa de fondos decía
«Mi desventura ha necesitado pasar zones que la recojan
con cairiño.»
que a esa ayuda debían <^E1
la
el
director de «El Siglo»:
al
océano para hallar cora-
el
En una segunda
carta,
decía
vida su esposa y su hijo, y agregaba:
nombre querido de Montevideo será para nosotros un nombre como la idea de Dios.»
sagrado, tan sagrado
Bibliotecas populares y salas de lectura.
Por iniciativa del doctor José María Vidal se estableció en San Fructuoso una Sala de Lectura cuyo objeto
fiijaba así
a^uel ciuda-
dano en una circular dirigida a,l vecindario en 1879: «Dormimos el sueño de la Anda y la calma y la monotonía del desierto reemplazan aquí a la agitación febril y tumultuosa de esas ciudades donde el cerebro humano e'U exaltación continua se agita y piensa... Reunámonos, pues, alrededor de un pensamiento co-
mún
y
fraternicemos
todos;
agolpados
entreguémonos a estudiemos la marcha de
sobre
una mesa cubierta
de periódicos
las
terés;
las naciones, sus
lecturas serias y llenas de in-
luchas y sus tur-
Anales de
192
Universidad
la
baciones políticas, sus triunfos de libei'tad, sus horas amargas de
interesémonos por
opresión;
la
de nuestros hermanos
suerte
demás hombres de la América, de sepamos y admiremos los prodigios
la
Europa, del
mundo
los
entero;
colosales que realizan en nues-
tro biglo las cienaias y las industrias y pensieimcs
como
los
hombr-es
de otros climas igualas a noscitrcis se emseñorean en esta naturaleza
que sin comprender miramos tantas veces;
escudriñan sus secre-
descubren sus leyes y luego horadan montañas, destruyen
tos,
rompen continentes, alteran
mos,
\an hasta
las
nubes en
los
Un
región de las estrellas... tará en
pueblo
el
las
globos y
de
corrientes
con
los
telescopios
los
gusto a la lectura, nos hará pensar en cosas
el
mucho más
edificantes por cierto que las que pueden procurarse ac-
tualmente en nuestras escasísimas Jefe
•El
hasta la
salón de lectura de periódicos desper-
serias y provocará a cada paso conversaciones amenas,
amenas y
ist-
mares y
una biblioteca
de
ciudadano había pasado a ocupar de Correos.
A
reuniones.»
San José don Reimigio Castellanos fundó popular, cuya inauguración se produjo cuando aquel
Político
puesto de Director
el
pedido de una comisión popular concurrió
General el
señor
Castellanos a presidir la ceremonia y a su llegada a la estación del ferrocarril
fué
recibido
por
el
pueblo en masa
que lo acompañó
hasta su alojamiento, exteriorizando así su agradecimiento por esa y las demás obras de progreso a que había vinculado su nombre.
La
Biblioteca y
el
Museo de Montevideo fueron colocados en 1879
bajo la dependencia de la Comisión de Instrucción Pública, con
el
propósito sin duda de vincular esos establecimientos sin vida a las
que
desbordaban de
escuelas
primarias
llenando
de asombro a propios
actividad
y
que
esfaban
y extraños.
administración de justicia.
Ija
El coronel Latorre al asumir la dictadura disolvió la Asamblea, el Tribunal, limitándose en materia de organización de
pero no así
administración de justicia a dictar un decreto por
la
autorizaba a dicho cuerpo para efectuar
Letrados el
e
inferiores.
Por
el
mismo
el
el
cual
se
nombramiento de Juecss
decreto se
mandaba
integrar
Tribunal con otro Ministro, como en efecto se hizo pocos días
después. inie
el
Ese nuevo Ministro propuso a raíz de su nombramiento los Jueces Letrados
Tribunal ratificara la permanencia de
en ejercicio o nombrara otros en su reemplazo, invocando la situación de hecho existente y la aceptación por
el
Tribunal del decreto
Anales de
la
Universidad
193
ca que se le autorizaba para uombrar Jueces. Pero la mayoría de Hus colegas prefirió la tesis de la inamovilidad de los Jueces, 6ii
no hubiera cambiado, y
la situación constitucional
como
la proposición
rechazada.
Cjuedó
Conflictos con la dictadura.
Pocas semanas después
Ministerio
el
de
Gobierno decretaba
la
un Juez de Paz, y éste desacataba la orden alegando que no dependía del Poder Ejecutivo y el Tribunal hacía suya la causa del Juez de Paz. La crisis parecía inminente. Pero el Tribunal resolvió escapar al derruni'be dictando una acordada por la destitución de
cual
ratificaba
la
destitución
Antes de terminar
del
año 1876
el
Juez de Paz. el
coronel
Latorre destituía
al
Jefe de Policía de Cerro Largo a raíz del asesinato de cuatro es-
pañoles por un grupo de bandoleros, y ordenaba
al
nuevo Jefe que
persiguiera a los malhechores y en caso de aprehenderlos los
éste
ejecutar en
hiciera
el
so-
hecho y probado lugar del suceso a los que resultaran
metiera «a un breve sumario para constatar
el
una nota al Presidente del como burlándose de su investidura: «Al dar esas órdenes en manera alguna he creído que invadía con ello en lo más mínimo las atribuciones de los Tribunales del país.» criminales.» El dictador pasó a la vez
Tribunal en que
Contestó
decía,
Presidente
el
satisfacoión» de
lois
del
Tribunal que se había
propósitos que anunciaba
el
«impuesto con
Gobisrno,
«en el
de hacer efectivas las garantías con que nuestras institu-
interés
amparan
ciones
le
la
vida de los habitantes de la República»;
pero
que mientras no se reformara nuestra legislación podía obtenerse el
mismo
con
fin
orden
«mediante
el
envío a Cerro Largo del Juez del Crimen,
expresa de proceder con la mayor celeridad
términos más abreviados».
Y
a esa indicación adhirió
el
y en los dictador.
un moreno brasileño residente en la campaña de Paysandú asaltó a una familia de su vecindad con ánimo de violarla, y habiendo encontrado resistencias degolló a una niña
A
principios de 1877
e incendió el rancho en que se había escondido la madre para que Pocos días después muriera carbonizada, como en efecto murió. preguntaba telegráficamente el Ministro de Gobierno al Jefe Político coronel Etcheverry en qué estado se encontraba el sumario
policial el
y qué distancia habría hasta el lugar del crimen. Contestó el criminal había confesado su delito. «El lugar
Jefe Político que
T.
VII-
13.
Anales de
]94
—
crimen
del
—
agregaba
ütiiversiúad
la
muy cerca, pero aún cuando me constituiría con el criminal
no está
fuera a los mismos infiernos,
allí
para hacerlo ejecutar en una horca.» La orden no se hizo esperar en el acto fué conducido el criminal hasta el teatro del crimen y ejecutado allí sin intervención alguna de la magistratura judiy
Al publicarse los primeros telegramas resolvió el Presidente del Tribunal doctor Porteza dirigirse a Latorre para pedirle que sometiera al delincuente a la justicia, como acababa de hacerlo cial.
ín otro sumario relativo al departamento de Cerro Largo. El fusilamiento no se había consumado todavía y podía, por lo tanto,
quedar sin
Pero
efecto.
el
Ministro contestó que ya estaba cumplida
que alarmado seriamente
a V. E.
para manifestar
«jAiprovecho eista oportunidad, agregaba,
orden.
\a
oue se suceden
el
Gobierno por
los crímenes, revistiendo
la frecuencia
muchos de
con
ellos caracteres
de inaudita y desconocida ferocidad y comprendiendo que los pro-
cedimientos que rigen en la materia no revisten la condición de
brevedad que aconsejan
los
bien entendidos intereses del país, se
preocupa actualmente de esa sentida reforma en
una manera
telar de
de
la
el
sentido de tu-
eficaz la vida y la propiedad de los habitantes
para cuya consecución está dispuesto
República,
a
utilizar
concurso del Tribunal de que V. E. forma parte.»
el
En
curso de ese
el
mismo año
decía
el
Ministro de Gobierno
al
Jefe Político de Durazno:
«Mientras
el
Gobierno hace esfuerzos y sacrificios de todo género
dictando medidas y poniendo a raya a los salteadores de la propiedad, algunos que por escarnio se llaman administradores de la l'usticia
favorecen a aquéllos, los apadrinan y en una palabra se bur-
lan del Gobierno interpretando la ley en la forma
para sus
intereses
último en
esto
el
personales.
más conveniente
Puedo garantirle que no sucederá
caso actual, pese a quien pese. Si el Alcalde
Durazno pone en libertad bajo fianza al ladrón reincidente de vacas Serafín Almada, no acate V. S. la orden y proceda a en'carcelar al Alcalde prevaricador. Lo que venga Ordinario
'lesipués
Oe lo;',
ci8
del
será de la responsabilidad del Gobierno.»
menera se relajaban las prácticas judiciales que eníre documentos de 187 6 fiígura una nota del Alicalde Ordinario Tacuarembó don Eralio Castro pidiendo autorización al Trital
bunal «para ejecutar feso
de
Guillermo El
haber
al
soldado Cipriano López, convicto y conalevosamente al vecino alemán don
asesinado
Buschell».
dictador
resolvió
reaccionar
después,
optando
en
los
casos
Anales de
Universidad
la
I9ó
de asesinatos comunes por pedir al Tribunal el envío de los Jueces del Crimen a campaña para instruir y fallar rápidamente los procesos. La prensa de la época registra varios casos de osa índole.
Recién al terminar la dictadura tuvieron dudas los Ministros del Tribunal acei-'ca de la subsistencia de sus títulos y entonces resolvieron dejar en libertad a
la
Legislatura, la cual se apresu-
ró a sustituirlos.
Pi'oniulgación de códigos y leyes.
cuerpos
Varios rante
la
de
fueron
leyes
redactados
y
promulgados du-
dictadura.
El Código de Procedimiento Civil redactado por
doctor Joa-
el
quín Reriuena y revisado por una Comisión compuesta, de los doctores
Ildefonso García Lagos, Manuel
Vila,
Hipólito
García,
Eduardo Brito
Código de
El
Herrera y Obes, José Luis
Román
Lindoro Forteza, Carlos Santurio,
Gallinal,
Pino y Martín Berinduague. Instrucción Criminal redactado por del
el
doctor
Laudelino Vázquez y revisado por una Comisión compuesta de los doctores Joaquín Requena, Carlos de Castro, Carlos Santurio, José
María Castellanos y Martín Aguirre. El Código Rural reformado por mía Comisión de la que formaban parts don Juan P. Caravia, don Juan Miguel Martínez, don José Ladislao Terra, don Domingo Piñeyrúa, don Amaro Sienra, don Carlos Reyles, don Francisco Errasquin y don Joaqiiín
las
Requena. Entre relativas
al
innovaciones
las
más importantes figuraban primitivo castigaba con
abigeato que «1 Código
multa y en su defecto prisión y trabajos públicos, resultando entonces que el estanciero rico eludía la cárcel y sólo el pobre iba a ella. Per la reforma se igualaban las penas para todos los ladrones.
La reforma
del Libro
IV
del
Código de Comercio mediante
la su-
presión de la institución del juez comisario y la enmienda de las relativas
disposiciones la
quiebra,
liquidación
moratorias. Al
suprimir
a
la
de el
suspensión de la
masa,
pagos
gradación
de
juez comisario, invocaba
calificación
acreedores el
de
y
decreto la
RiOrosidad con que actuaba en el ejercicio de sus funciones que podían y debían pasar al síndico y al Juez de Comercio, agregando qiie el síndico que era el verdadero representante de los acreedores
y
el
administrador de los bienes de
brado por
los
acreedores.
la
masa debía
ser
nom-
Anales de
196
Universidad
la
sueltas mencionaremos la de contrabando que qu-e Juzgado de lo Civil de la primera sección el conoadelante se denominaría de lo Civil y de Hacienda
Entre
leyes
las
adscribía
—
al
—
(1.
cimiento de
Aduana
las
las causas de más de 100 pesos, y al Colector de de suma menor; la ley de expropiación calcada en el
proyecto presentado a la Legislatura de la administración Ellauri paralizado desde entonces, por
:
propiación
sólo podría
que se prescribía que
el
en virtud de resolución
realizarse
la
ex-
legisla-
decreto del Poder Ejecutivo, publicación de edictos, sentencia
tiva,
judicial
y
pago de
glamentaria de
la
indemnización
correspondi^aite;
la
prenda comercial que autorizaba a
las
la
ley
re-
partes
extra judicial de la prenda, sin otra de hacerse la venta por intermedio de rematador tratándose de bienes muebles y de corredor de número tratándose de valores de Bolsa.
para
pactar la
formalidad que
realización
la
Después de establecida rre
al
bajo caución
juratoria
Legislatura consultó
la
en
el
coronel
Lato-
conveniencia de suprimir la libertad
materia de robo de ganados. «Una de
primeras cosas que preocupó
las •el
la
Tribunal acerca de
al
Ministro de Gobierno en su nota
—
Gobierno Provisional
— fué
la de
combatir
el
decía
abigeo,
castigando con severas penas y sin consideración de ninguna especie.
De
esa
librando
a
manera pudo obtenerse la casi extinción del abigeato, campaña de individuos viciosos y de pésimas
nujestra
costumbres que estaban habituados a vivir sin trabajar y sólo a expensas del vecino honrado»... Piro cer
el
mal ha vuelto a reapare-
por la benignidad de los Jueces que ponen en libertad a los
cuatreros bajo fianza o bajo caución juratoria.
El Fiscal a cuyo estudio pasó la nota, opinó que la gestión dsentablarse ante el Cuerpo Legislativo para obtener la deroga-
l)ía
—
tiene la
misma
seriedad
—
decía ao que entre nosotros que en Inglaterra y Estados Unidos, de
ción de la caución juratoria,
cuya legislación la tomamos. Y el Gobierno entonces dirigió un mensaje a la Aisamblea pidiendo que se castigara el abigeato con 8 a 24 meses de prisión y que se suprimiera en esos juicios la libertad bajo fianza y la caución juratoria.
Registros de embargos y de ventas.
Por un decreto de bargos
1'877
creó la dictadura dos
e interdicciones judiciales.
tevideo y Canelones y
el
Uno de
ellos
otro con destino a los
registros
de em-
con destino a Mon-
demás departamen-
Anales de
la
l->7
Universidad
solo coi) Esos dos registros fueron refundidos en 1879 en uno em sobre expedientes los a curso daría el agregado de que no se en el registro inscripción previa su sin interdicciones bargos e A raíz de establecida la Legislatura gestionó y obtuvo el <-oro tos.
de venta, permuta Jueces de Paz. actuaran y donaciones en todos los pueblos donde esa índole en de registros instituido La dictadura de Flores había o escriOrdinarios Alcaldes hubiera que en todas las localidades Jueces Departapor Alcaldes los de suplantación la pero banos; raentales los había hecho desaparecer.
nel
Latorre la
reinstalación
de
los
registros
Nombramiento de Jueces Letiados Departamentales en reemplazo de los Alcaldes Ordinarios.
Esa suplantación de
los
Departamentales, planeada
Alcaldes Ordinarios por Jueces Letrados por la Legislatura de la administra-
la dictadura de ción Ellauri, fué abordada desde los comienzos de
Latorre.
Por un primer decreto de 1876 quedaron suprimidos los Alcaldes Ordinarios de Montevideo y de la Unión, creándos-e en su lugar un Juzgado Letrado Departamental y un Juzgado de fuero las mixto, el primero para las causas civiles y el segundo para Juzgado causas comerciales y criminales. En 1877 fué creado el Nacional
de Hacienda
como parte integrante
del
Juzgado de
lo
Soriano, PayCivil, y fueron sustituidos los Alcaldes Ordinarios de con jurisdicDepartamentales Letrados Jueces por sandú y Salto preción en las causas civiles, comerciales y criminales. En 1878 reviéndose la dificultad de extender la reforma a todo el país,
Tribunales solvió la dictadura que en la Capital funcionarían dos cada miembros tres con existía, que de Apelación en vez del único Jueces de lo Civil, dos Jueces de Comercio y un Juez Letrado Departamental. Pero en el curso del mismo año fueron Tacuarembó y instalados los Juzgados Letrados de Cerro Largo y Florida y Durazno, Minas, en 1879 los de San José, Canelones, uno, tres
Maldonado. dos
También resolvió la dictadura que hubiera en Montevideo para bienes depositarios judiciales, uno para bienes muebles y otro raíc«s
bunal.
y
que
ambos funcionarios fueran nombrados por
el
Tri-
Anales de
,19S
Universidad
la
Un
informe del Tribunal acerca del estado de la administración de justicia.
Al finalizar el año 1878 se dirigió el Ministro de Gobierno al Tribunal en demanda de datos con destino a la Memoria que se proponía presentar a la Legislatura que acababa de elegirse. Véase
como contestó El
Tribunal:
el
Código de
Procedimientos
han mejorado notablemente dad de la administración de
la
y
Las trabas y la moroside lo reducido del tardío de los procedimientos de
justicia provenían
personal de la
nuevos Juzgados Letrados
los
situación.
la judicatura y de lo antigua legislación. El aumento de
Jueces do lo Civil y de
los
Comercio, la creación de los Jueces Letrados Departamentales, reorgaaización del Tribunal en dos cuerpos y la sanción digo de Prccedimientos han hecho desaparecer la esas trabas,
como
demuestra
lo
el
de
Interlocutorias
trámite
la
Có-
mayor parte de
siguiente i-esumen comparativo:
Año
Providencias
del
1871
.
....
Definitivas
Resoluciones administrativas
Causas terminadas
.
48.527
21,466
—
Pero urge realizar otras reformas
agregaba
el
Tribunal
—
entre ellas la supresión del sistema añejo de las costas judiciales
emolumento de
cue constituyen
el
Actuarios ganan
más que
los
escribanos
Actuarios.
Los
Jueces por efecto de ese régimsn y c!lo a despecho de cue son verd^derG^3 empleiadcs de la Nación. los
Es una observación que también alcanza a
les
Jueces de Paz. Para
suprimir las cosías y establecer sueldos a los Actuarios y Jueces de Paz habría que expropiar las tres escribanías que todavía pertenecen
a particulares
t'entésimos.
Sería esa
y
elevar
el
precio del papel sellado a 80
una reforma muy beneficiosa para
los
liti-
gantes que en vez de pagar la planilla de una sola vez, la irían
cubriendo gradualmente en bién limitar en
el
el
curso del pleito.
Departamento de
áe Paz a cuatro en la ciudad y otros
Convendría tam-
número de Jueces cuatro en las demás secciones;
la
Capital el
Anales de
la
1^9
Universidad
campaña, dado las largas dispero no así en los departamentos de Finalmente, sería necesario estatancias que habría que recoiTer. protocolos, de acuerdo con una blecer el archivo general de establece que los pronota del Tribunal del año 1874, en que se autorizantes. c-scribanos los no a tocolos pertenecen a la Nación y de Departamental Letrado Juzgado del Un cuadro estadístico ciestas correspondiente a 1877 arrojaba a su turno
Montevideo
resueltos 140, senresoluciones de trámite 18.365, incidentes 18,690. tencias dictadas 185. Total de providencias
fras:
Causas criminales de resonancia. Entre torre del
los
figura
procesos criminales el
relativo
Departamento
del
más sonados de
a don Vicente Saralegui,
Sailto,
asesinado
en
el
la época rico
trayecto
de
La-
es.tanciero
de
Santa
Rosa a su establecimiento de campo. matar al coroLatorre aprovechó esa oportunidad para mandar departamento, mismo del caudillo temible Coronado, nel Hipólito Saralegui. pretexto de que se le acusaba del asesinato de de Saralegui Largo tiempo después fueron encontrados los restos verdaderos los y únidescubiertos en una laguna de Santa Rosa y Cabrera, Barreiro Zugarrondo, y eran que cos autores del asesinato loctor Juan José Segando, exFiscal del Crimen í.
Véase cómo plicaba
el
el
lúgubre suceso invocando
Dos comerciantes de
Sa.nta
la
confesión de uno de los acu-
Rosa que estaban en situación apu-
vules a don Vicente Saralegui rr.da resolvieron hacer firmar varios Europa, y una vez obtenidos ir para a aprontaba que a la sazón se oportunidad fué seal firmante. Llegada la asesinar los
vales
dirigía de Santa Rosa cuestrado Saralegui en momentos en que se Se le condujo a la sobrino. a su estancia, acompañado de un de hacérsele firmar luego donde conjurados, chacra de uno de los juntamente con asesinado fué uno, cada pesos 82,500 dos vales de a una laguna, donde su sobrino, echándose luego los cadáveres víctimas. también fueron arrojados los caballos de las trabajos públicos. con prisión El Fiscal pedía diez años de Zugarrondo a y a Barreiro. pena esa impuso El Juez del Crimen compurgada declaraba se quien de favor a Cabrera pero no así a sufrido. Y la había que pri.sión de años tres los con pena la confirmada por el sentencia del Juez de primera instancia fué
Tribunal.
Anales ie
200
Universidad
Ja
Otro proceso de resonancia fué sinato
señor
del
instruido con motivo del ase-
el
Rücker en su quinta
Puente de las
del
Dura-
Eran cuatro los asesinos y los cuatro fueron condenados a muerte por los Tribunales. Pero cuando ya estaban los reos sentados en el banquillo con los ojos vendados y los tiradores al frente, Latorre conmutó la pena a dos de ellos. El fusilamiento nas.
tuvo lugar en
Y
otro
el
Taller de Adoquines de la calle del Yi.
asesinato
relativo al
el
de don
Ezequiel Grajalci.
El
matador Florencio Soto fué condenado a muerte por la justicia penal. Hubo un fuerte movimiento a favor de la conmutación de la pena, pero Latorre manifestó que sólo la decretaría en
que
también
do
en
su
adhesión
el
adhiriera
aoto
la
a
pluma
Y
padre de
el
escribió
para poder hacer
misericoridiai».
—
—
decía
víctima,
la
Grajales
señor
ai
habienido teoiido éxito el
pena de muerte por
la
ella
el
caso de
tomanrecabando y
«un acto de piadosa
pedido,
fué
conmutada
de diez años de prisión que era la
la
iinmediata.
La construcción de Durante Lapido,
Penitenciaría.
administracióm Latorre falleció
la
deja.ndo
de pesos.
la
una fortuna que
De acuerdo con
ccirresipondía
Integramente
la
al
se
el
aipreciaba
legislación
Fisco por
doctor Octavio
en medio millón
vigente
falta
de
esa
fortuna
parientes
con
Pero a despecho de ello la madre natural del do'ctor Lapido gestionó y obtuvo por transacción una parte importante de los bienes. Hubo que pagar además por concepto derecho a heredar.
de honorarios al curador de la herencia y a los abogados fuercantidades, quedando reducido el remanente libre del Esta-
tes
do a menos de la mitad de la suma asignada por la transacción, según resulta de las siguientes cifras que reproducimos de los estados de la Contaduría General de La Nación: Valores que corriesponden al Fisco por la transacción: en propiedades raíces 168,500 pesos, en títulos de deuda pública 266,186
nominales,
en efectivo cesorios
en valores de cartera e hipotecas 57,617, Valores egresados por concepto de gastos su-
y otros pagos:
da
públita
en
efectivo
valores
3 8,r3 6'5.
de
en propiedades
6,000,
en títulos de deu-
266486, en valores de cartera e hipotecas 48,567, 3i8,'828. Remanente: en propiedades 162,500, en cartera
La herencia
9,050,
en efectivo
537.
del doctor Lapido fué destinada por Latorre a la
Anales de
Universidad
la
201
—
construcción de una penitenciaría. «La opinión pública decreto
el
—
desde hace largo tiempo
elocuentemente en nitenciario».
de
tiva
la
El
sentido
el
del
se
decía
manifestando
viene
planteamiento del sistema pe-
mismo decreto designaba una Comisión Ejecu-
que formaban parte don Juan Miguel Martínez,
doctor Ildefonso García Lagos,
el
doctor Pedro Visca,
el
ingeniero
el
Rodolfo de Arteaga y don Pedro PiñejTúa.
Estadística de presos.
Bn 187G fracciones
ingresaron, a la Cárcel Central de Montevideo por inpoliciales
3,018
individuos
(esicándalo
916,
uso
de
ebriedad 194, etc.) y por causas graves 1,073 (muerte 29, heridas 30i8, golpes 120, etc.). Total de presos 4,091, de los cuales eran nacionales 780 y todos los demás
armas 40 7, pelea
3 01,
extranjeros
En
18'77
dp 3,93
6
el
número de presos por infracciones
y por causas graves 867.
En
policiales
conjunto, 4,8
0i3.
Es
fué
intere-
sante agregar que entre los primeros figuraban 431 y entre los segundos 178 «procedentes de los departamentos a disposición del Gobierno», según los términos de la Memoria Policial de donde extraemos estos datos. Eran los arreados con destino al Talleír
Lí»
de Ado
justicia
penal volviendo por sus fueros.
Tocaba ya la administración Latorre a su término cuando el Juez del Crimen doctor Carlos A. Fein se dirigió al Tribunal para comunicarle que las cárceles no estaban bajo su dependencia, como deberían estarlo de acuerdo con el Código de InstinicCriminal recientemente promulgado.
El Tribunal pasó esa Gobierno y éste dictó un decreto por el que se ponía la Cárcel del Crimen bajo la dependencia de los Jueces «con absoluta independencia de las de Policía.» El Juez del Crimen tomó en seguida posesión de la Cárcel ción
nota al Ministerio
de
y dirigió una nota al jefe del establecimiento en la que le daba
de la Cárcel no puede salir ningúa no se debe imponer a los presos trabajo alguno antes de su condena; tampoco debe cortarse el pelo
las
siguientes instrucciones:
preso sin orden judicial;
ni
afeitarse
a los
detenidos
a
su
entrada
a
la
Cárcel,
porque
Anales de
202
la
Uiiiversidad
constituye un mal gravísimo la emplica ya una pena; confusión de detenidos y de penados; debe proscribirse el uso de la vara en los casos de corrección, como depresivo de la dignidad humana. Y otra nota al Jefe Político de la Capital en ello
que
decía-.
«Se denuncia por la prensa que los procesados del crimen se hallan sometidos a trabajos forzados. Si esto es así, si el hecho
semejante
que
de
fin
cuanto
disponer inmediatamente
sírvase V. S.
diento,
es
se
lo
necesario a
completo
por
cese
cosas
en
refiere a los que están sometidos a la jurisdicción de
este Juzgado. Sabe V. S.
cuando
de
esitaido
ha sudo
ella
que a nadie puede aplicarse pena sino
deloretada
oompetente,
por Juez
c,ue
no
de-
ten considerarse como delinicuentes aquellos a quienes el interés soicial detiene en las cárceles hasta averiguar el grado de culpabilidad de que se les aousa. Debe V. S. tratar a los detenidos como tales, no p-ermitiendo que se les extraiga de las cárceles, ni que se les imponga pena alguna (el trabajo forzado es considerado como tal) sino cuando expresamente se les ponga a su disposición para
Ya
el
esie
fin».
coronel Latorre estaba con
el
pie en el estribo, resuelto
Casa de Gobierno. Las trabas opuestas por el Criminal al régimen atentatorio del TaInstrucción Código de ller de Adoquines no podían preocuparlo gran cosa y por efe'cto
a aban/donar la
de ello
el
pasaje de la Cárcel de la dependencia directa del Po-
der Ejecutivo a la dependencia directa del Podtr Judicial se pro-
dujo sin protestas, sin rozamiento y como en una situación perfectamente normal.
el
si
país
estuviera
servicio de Correos.
X:i
Por
un
importante
decreto
de
1877,
obra
del
Administrador
de Correos don Remigio Castellanos, nuestra administrafción pos-
quedó regida por un Director General con asiento en Monteun Administrador en cada cabeza de deipartamento y un Agente en los demás pueblos y centros de población de la Repiital
video,
blica.
cartas
Establecía el
mendadas o
suma
mismo
decreto
fija
certificadas
entile
otras
innovaciones las
además de las recopor cuya pérdida abonaba el Correo la
aseguradas por su valor
declarado,
de 10 pesos; las tarjetas postales o cartas abiertas con
mitad del franqueo de las cerradas; los giros postales para el pago y cobro de pequeñas cantidades; los buzones vecinales desla
Anales de
tinados a
i'ecibir
203
Universidad
la
correspondencia de todos los barrios de
la
la
Era una reglamentación calcada en la legislación belga y en la argentina tomada a su turno de la belga. En su primera Memoria correspondiente a los 18 meses transcurridos desde mediados de 1877 hasta fines de 1878 decía el sefiur Castellanos que al tiempo de asumir la Administración de ciudad.
Coi reos las administraciones departamentales y
las
sucursales
taban a cargo de comerciantes que recibían y entregaban rrespondencia en
es-
co-
mostradores de sus mismos desipacbos de merel servicio había quedado regularizado me-
pero que ya
caderías,
diante
los
la
establecimiento
el
estafetas
ambulantes en
los
de
insipecciones
generales,
ferrocarriles y vapores
sucursales,
de la carrera,
y alrededor de 20O agencias diseminadas en toda la República. La conducción de la correspondencia al sud del Rio Negro que
acababa
de
contratada
ser
por
paso?,
2,000
cada mes 346 correos redondos y exigía
el
mensuales,
abarcaba
funcionamiento de 55
y de varios hombres a caballo. en su segunda Memoria relativa a los años 1879 y 1880, anunciaba que el Uruguay aislado hasta entonces de casi todos los demás países del mundo, acababa de ingresar en la Unión General diligencias
Y
üo Correos celebrada en 1878, quedando con ese gran paso rebatodos los portes para el exterior y aceptado como peso de
jados
carta sencilla tarifa
de 15 gramos en vez del de
el
Estaban además
anterior.
zones en los barrios
en
que marcaba
8
pleno funcionamiento
más apartados de
26
la
bu-
ciudad, que habían mo-
la
meses corridos de octubre de 1879 a diciembre del año siguiente 113,473 piezas. La renta de correos había dado 134,807 pesos en 1878, 128,738 en 1879 y 115 931 en 1880, corres-
vilizado en
los
18
.
pondiendo de esta última cifra a presupuesto y gastos de correo y el saldo a existencias de 1881. primero de esos año-; procedían de las siguien-
92,i49, a instrucción pública 22,534
Los ingresos
del
tes fuentes:
lAbonados Listas
Domicilio
Buzones
5
30,782 2,058
12.222 2.448
Franqueo
2S,155
Interior
43,3ñ2
Diversos
15,785
El giro postal que sólo había movilizado 1,372 pesos en enero Je
914,448
Anales de
Universidad
205
avenidas y edificios públicos.
l'iíizas,
A
la
empezó
1876
de
fines
la
demolición del Mercado Viejo em-
La gran portada de piedra
plazado en la Cindadela del coloniaje.
que daba sobre
Sarandí fué reconstruida en
la calle
el
edificio de
Escuela de Artes y Oficios que en esos momentos se erigía en alrededores de la Playa Ramírez. La demolición terminó al
la Io¿
año siguiente en
la
víspera del aniversario de la declaratoria de
Independencia, y Latorre eligió esa efemérides para dictar un decreto por el qu8 anexaba la gran superficie de la Cindadela a la
ensanche de
Plaza Independencia, invocando razones de higiene
la
y de embellecimiento material de
la
ciudad. El resultado pecunia-
Estado con
la
venta de esa valiosa propie-
que obtendría
rio
—
dad
decía
el
el
—
decreto
plaza pública. Concluía
el
deseado solemnizar
la
bía
monumento
no es comparable a
la
decreto expresando que
efcméride de
utilidad de
el
Independencia
la
la
Gobierno hacon un
público que perpetuara su recuerdo.
Por un segundo decreto de fines de 1878 fué destinada toda la
manzana de terreno que ocupaba cionaba la Casa de Gobierno) Plaza Zabala.
de
ción
gran finca de
la
a
el
antiguo
en
Viejo se
razón
(donde fun-
Ya había comprado
coronel
el
Latorre la
Plaza Independencia para asiento de las depan-
dencias gubernativas, resolviendo con ello liazas,
Fuerte
plaza pública bajo la denomina-
que
de
al
había resuelto que
iniciarse allí
la
mismo
problema de
el
demolición sería
del
erigida
la
las
dos
Mercado Casa de
Gobierno.
En
ese
mismo año
fué autorizada
la
Dirección de
Obras Pú-
para trazar un bulevar de circunvalación de 50 metros de ancho en torno de la planta urbana del Departamento de Mon-
blicas
tevideo.
En l>v'-
el
programa de saneamiento de
emprendidos por
dios
el
la
cpoca figuran
estu-
nivelación de la calle Miguelete y vías transversales para im-
pedir
las
inundaciones que se producían en esa zona a raiz de
cada lluvia fuerte; y la campaña emprendida por la
los
ingeniero don Juan Alberto Capurro so-
Aguada para obtener
la
destrucción
de
los
el
vecindario de
numerosos cercos
de pitas que fijaban los límites de cada rolar y que constituían focos de Infección por efecto del amontonamiento de
oíros tantos
basuras y aguas sucias a que daban origen.
Anales de
206
La iluminación de
universidad
de Montevideo.
calles
las
la
Bajo la preáión de las economías impuestas por
la
finan-
crisis
ciera de
1879 fu'eron suprimidos 500 faroles de gas do la ya po-
brísima
red
reducido
a
las el
calles
y caminos de Montevideo, quedando los que seguían, funcionando y
número de
mismo a
eso
precios, o
de 2.24)2
peso-3
sos,
título precario por falta de a.cuerdo en materia de dado que la Junta Económico - Administrativa fijaba 50 mensuales por cada farol y la Empresa exigía cuatro po
en medio de un ardoroso debate durante
quedó
expuesta
la
acuerdo se agregaba
ciudad a
el
cual varias veces
qaedar a oscuras, porque
des-
al
incesante atraso de los pagos.
el
Pocos meses antes había publicado don Tomás Jtffries una lación
de
contratiempos
los
sufridos por
la
desde 1854 en cuyo año lusgo de consumirse
Compañía el
del
re-
Gas,
de
capital social
impaga una pequeELa cuenta de 824 peiios, basta 1857 en que un nuevo contratista, el señor Murguiondo, que había arrendado la empresa
Gó.OCO
p-eeos se
extremo
llegó al
dejar
de
por 8 años, aprovechó la epidemia de fiebre amarilla para rescincontrato, y hasta
dir su
Diego
Bell,
cañerías
se
sin
el
año 1861 en que otro contralista, don
obligó a trasladar
poderlo
hacer
por
la
a colocar numerosas
iisina y
de
falta
fondos,
dando con
ello
lugar a la intervención de don Federico Nin Reyes y finalmente a la del barón de Mauá, quien resultó acreedor de Bell y de Nin
Reyes por 415,161 pesos que debían cubrirse y diante
la
transferencia
de
la
usina,
de
las
se
cubrieron me-
propiedades
y
ense-
res de la empresa.
Aguas Corrientes. El coronel Litorre dejó sin efecto
el
contrato
:le
Empresa de Aguas Corrientes celebrado en 1875 por
compra de el
la
gobierno ae
Várela. Invocaba en su decreto la falta de autorización legislativa,
no
obstante
el
voto
tienipo había invocado
y
de confianza
de
la
Legislatura
que a su
aquel gobierno. Los señores Lezica, Lanús
Fynn protestaron contra
la
dictadura,
mación diplomática que fué rechazada por
promovieron una la
recla-
Cancillería a título
do que los reclamantes tenían abierta la puerta de los Tribunales
para deducir
las acciones a que se considerasen con derecho, y acabaron por suspender el servicio, auaique momentáneamente, porque la dictadura los compelió a su reanudación invocando los in-
tereses
públicos comprometidos.
Anales de
Una
Universidad
la
207
Empresa un nuevo Económico- Administrativa pasó a estudio de dos de sus miembros, don José Pedro Várela y don Pedro Carve. El señor Carve se mostró partidario de la adquisi-
plan
vez normalizada la situación presentó la
venta
de
que
la
Junta
ción sobre la doble basie de la obligatoriedad del servicio y de la
creación de un impuesto. El señor Várela, en cambio, juzgaba que
no convenía en esos momentos. Hacía notar que
expropiación
lu
obras habían sido tasadas por
las
por
pesos,
en
ingleses
tas
5.600,000
por
y
el
ingeniero Honoré en 3.750,000
ingeniero Carwford, representante de los prestamis-
el
por
2.036,293, la
escritura
rela en 8.600,000, o sea
3
de
el
ingeniero
millonias
más de
la
die
expropiación del
Empresa en
gobierno de Vá-
pedido por
lo
perito
el
Empresa; y termAnaba diciendo que sii a pesar de su opinión en contra juzgara la Junta convenierute la expropiación, no debela
ríe
ría pagarse arriba de 2.500,000 pesos, debiendo en tal caso crearse
un impuesto de 20 centesimos por cada mil pesos sujetos de
la
La Junta Económico - Administrativa aceptó ñor Várela y
pago
el
dictamen del
se-
expropiación fué desechada.
la
Don Santiago lizó
al
contribución directa.
Estrada, distinguido publicista argentino que rea-
en esa época una excursión a las instalaciones de las Aguas
Corrientes en Santa Lucía, acompañado de don Anarcarsis Lanús,
una de sus correspondencias que esas obras, que juzgaba como las más importantes de toda la
recordaba en
prensa
nuestra
América geniero
habían sido realizadas bajo la dirección del
Sur,
del
consultor don
Eduardo Woods
Newman
ingeniero don P.
radicado en
in-
Londres, del
residente en Montevideo y del mecánico
Morrison.
l;«)s
ingrosos municipales.
Durante
el
año
Administrativa
de
1877 tuvo
el
Montevideo
de
tesoro
un ingreso
El impuesto de abasto y tablada produjo
la
de
Económico-
Junta
1.086,652
146,051,
la
pesos.
lotería
de
Caridad
la
tas
un
106,671 y la contribución directa 129,164. Las rengeneral33 contribuyeren con 224,639, quedando a-simismo
déficit
En blada,
I1S179
de
2
las
serenos,
61,9 00
pesos.
rentas estrictamente
alumbrado,
rodados,
municipales cemienterios,
(abasto etc.)
y
ta-
produ-
jeron 377,263 pesos. El déficit de ese año fué de 416,070.
Los Ingresos de
la-s
Juntas Económico
-
Administrativas de cam-
Anales de
208
la
Universidad
paña ascendieron a 245,348 pesos en 1879, destacándose entre productoras
fuentes
sus
patentes
las
rodados
de
con
56,45b
pe-
derecho general de abasto con 54,668 y el impuesto de sos, alumbrado y limpieza con 19,206. el
Durante ese
año las Jefaturas correspondiendo a las
m'ismo
763,562
pesos,
234,294,
a
patentes
de giro
contribución
la
45,880,
directa
a las
de
229,5011,
guías
Policía
receptorías al
aduaneras
papel sellado
tornaguías
y
recaudaron
25,392,
a
y las
multas 22,886, a las patentes de perro 13,476 y a las entregas de Tesorería General 98,501.
la
Higiene pública.
A
prin'cipios
—
de
Medidas
conti'a la
fiebre amarilla.
187 8 ocurrieron dos casos de fiebre amarilla de Janeiro. Los enfermos y los habitantes
PTOcedentes de Río de
la
casa en que ellos vivían fueron llevados en el acto a la
Isla de Flores, dictándose a la vez
un decreto por
el
que se auto-
rizaba al Ministerio de la Guerra para ejecutar todas las medi-
das
nes
que acordasen las autoridades sanitarias «sin consideracioesipecie». Apareció otro caso en distinto punto
de ninguna
Mes y medio desprimera denuncia publicó el coronel Latorre un manifiesto en que establecía que la estadística sólo anotaba 11 casos fatales. Las informaciones de la prensa duíplicaron esa cifra de la ciudad. Pero la epidemia no se extendió.
pués de
varias
la
semanas después y
completar
la
nota
la
se encarigó en seguida de demostrando que en toda la
Policía
tranquilizadora,
ciudad de Montevideo y sus arrabales sólo habíla el día 1.° de mayo 13 2 enfermos (excluido el hospital) cada uno con su diagnóstico y ni uno solo de fiebre amarilla.
Los caños maestros. Entre los focos de infección volvió a figurar en esa época la red cloa'cal acerca de la cual tanto se había hablado en las epi-
demias anteriores. Con motivo de una nota de la Colecturía de Aduana denunciando que varios caños quedaban deistcubiertos durante la baja mar infectando toda la zona aduanera, el director de Obras Públicas don Melitón González produjo un informe en el que establecía que la red cloacal abarcaba ya 61 kilómetros y era utili-
Anales de
209
universidad
la
zuda por 10,371 casas de las que 589 eran de inq.uilinato y encerraban ellas solas una población de 17,024 habitantes. Los desembocan en la bahía donde agregaba caños maestros
—
—
depositan sus residuos que en gran parte son arrastrados por la corriente y en parte se depositan en el fondo del puerto constituyendo allí un foco de infección. La defensa de la salud pública exigía en su concepto la subdivisión de la planta urbana de
Mon-
en secciones independientes circunvaladas por caños colectores y la construcción de depósitos con máquinas absorben-
tevideo
tes
dad
y expelentes para traer y lanzar los residuos al sur de la ciuhasta ponerlos en contaírto con las corrientes de Punta
Carretas.
En una
conferencia
amagos
lOü
le
muy
un estudio
dada
en
acerca
prolijo
Uruguay durante
Ateneo del
el
amarilla había hecho
fiebre
de
la
mismo funcionario
el
condición
ciudad de Montevideo. AI planearse
en
González
el
Fuerte, hoy Casa de .Gobierno
oportunidad
esa
rumbos Norte, Sur, Este y de
Jefe ello
una
a
pero a
Plaza
la
la
real
—
orientado
fué
de
sanitaria
—
decía
el
edificio
el
la
señor a
los
Oeste. Pero apenas iniciadas las obras
resolvió
orden por
consultar la
España,
a
que se dejaba subsistente
vez se ordenaba que se hiciera
el
dando lugar con el
Fuerte,
trazado de Montevideo
el
y se cortasen sus calles a medios rumbos a fin de que sus moradores pudieran gozar de sombra en el verano y de sol en el invierno,
luedando a consecuencia de tinta a la de las
ello el
Fuerte con una delineación disA partir de ese mo-
de la ciudad vieja.
calles
empezaron los pobladores a contrariar los beneficios de la Las manzanas fueron divididas en solares cuyos fondos que coincidían con el centro de las mismas manzanas estaban hiento
naturaleza.
aguas servidas y
a recibir las
dí'Stinados
zos que se cavaban hasta encontrar
el
los
desperdicios en po-
agua, en la creencia sin duda
de que las corrientes subterráneas se encargarían de la limpieza, a corta distancia de esos pozos quedaban los aljibes destina-
y
dos a recibir las aguas pluviales de consumo. Más. tarde, al resol-
verse
el
ensanche de
la
zona Norte de
la
ciudad, fué terraplenada
bahía con ayuda de las basuras de las y calles y de las casas y así prosiguieron las obras hastn el año 1867 en que la epidemia de fiebre amarilla atacó fuiiosamente los barrios de esa zona. Las filtraciones de todos los pozos de la ladera alzada
la
orilla
de
la
Norte de la ciudad venían a morir precisamente en los terraplaen un nuevo concluía el señor GonzáJez Estamos ahora
—
nes.
T. VII
-14.
—
:
Anales de
'210
Universidad
la
período epidémico de fiebre amarilla y
el
foco principal es ia calle
riysandú, donde a diario pueden observarse filtraciones análogas.
Casas L,a
(le
estadística de conventillos de
acabamos de nacer referen-
589 con 17,024 almas.
Un reglamento municipal amarilla, .prescribía íei
1876 arrojaba 552 edificios con
habitantes y la de 1878, a que
Í0.274 cia,
inquilinato.
que
dictado
las
a
raíz
de material, con paredes revocadas,
taciones con ví'ntana
amago de
del
nuevas construcciones
una altura mínima de
patios
tres
y
fiebre
que
tendrían
enlosados y
habi-
medio metros y una
de ventilación. Deberían tener una o mas letrinas airea-
das en conexión con
el
caño maestro, lavaderos, servicio de aguas
corrientes, iluminación hasta las 12 de la noche.
Cada
seis
meses
deberían ser blanqueadas sus paredes y cada 12 pintadas sus puertas y ventanas. Todos los inquilinos deberían presentar el certificado
d-e
vacunación.
Hospitales y Asilos. El Hospital de Caridad tenía 414 enfermos 187G y
4.57
al
finalizar el año 1877.
tradas y fallecimientos en
ministración salidas
del
Latorre
(las
el
He
aquí
curso de ios
diferencias
al
el
finalizar
el
año
movimiento de
cuatro años de
corresponden a
¡as
la.
en-
ad-
altas
establecimiento)
Existencias al
empezar año
Entradas
el
4,728
Fallecimientos
o
Anales de
De
los 4,842
extranjeros
y
la
Universidad
211
enfermos ingresados en 18i77 eran nacionales (1,188), ios sobresal i endd los italianos 3,951, argentinos
los
franceses
8i9'l
es-
(393).
(1,112), y Los gastos mensuales del Hospital de Caridad ascendian en 1879 a 8,844 pesos ique se distribuían en e«ta forma: 6,144 en
pañoles
los
medicamentos, pinturas,
ros,
combustibles, etc.;
en
2,700
(-39
lavado^
6)
pan,
empleados
de sala, dos médicos de entrada,
7
carne,
de
hortalizas,
oficinas,
dos
géin?»
médicos
practicantes, sinrientes y 18
hermanas de caridad. de Huérfanos y Expósitos tenía al comenzar cada lEl Asilo uno de los años del trienio 18T7-79 una existencia de 471 niños en 1877, de 500 en 1878 y de 348 en 187'9, con un ingreso respectivamente de lO'l, 2il3 y '33 4 y una mortalidad de &9, 6(2 125.
y
El Asilo de Dementes tenia una existencia de 245 enfermos al empezar el año 1877. de 293 en 1878 y d¿ 348 en 1879; una entrada en el curso de esos tres años de 175, 19 3 y 19 4 y una mortalidad de 29. 38 y 38. En 1878 quedó terminado el primer
cuerpo del Manicomio. Hasta entonces los enfermos estaban haen una pequeña casa contigua al nuevo edificio. Una
cinados
del movimiento habido desde enero de reproducida por la prensa de la de 1879, época, acusaba una entrada en todo el período de 1,4 3 7 hombres y 789 mujeres. En conjunto 2,226. sobresaliendo entre los ¡hombres del punto de visita de la nacionalidad los italianos (451), estadíistica
18 60
hasta
particular
junio
españoles (350), los orientales (215) y los franceses (191). El Asilo de Mendigos tenía una existenteia de lft3 al empezar
los
año 18 7 7, ide 179 en 1878 y de 143 en 1879, con un ingreso respectivamente de 77, 59 y 12 6 y una mortalidad de 11, 9 y 9-
el
Corresponde a este mismo período de la administración Lala inaaguración del nuevo edificio del Asilo de Mendigos en la Unión, junto a la escuela primaria que dirigían las hermanas de caridad. torre
Creación de Asilos Maternales.
En 1877
fué creado
tino a los niños de 2 a
de
trabajadores.
el
8
primer Asilo Maternal diurno, con oesaños de edad pertenecientes a hogares
El decreto
ponía
ese
establecimiento
bajo
la
dirección del Hospital de Caridad y de una Comisión de señoras y
confiaba
l;i
parto
administrativa
a
las
hermanas de caridad
Anales ie
212
llamadas Hijas de María. prescribió que sólo
Un reglamento
dictado el año siguiente
serían admitidos los niños de padres jorna-
con ocupación forzosa fuera del hogar. el establecimiento que en 18 78 hubo
sil-vientes
leros o
universidad
Ja
Tuvo tan buena acogida
que crear otro y en 1879 otro más. Al finalizar el año 1879 tenían los tres Asilos las
corrientes y 75
'condiciones
depositados
allí
niños en
1,8 22
a
espera
la
de
resolución.
ulterior
Las damas de beneficencia. El Asilo de Huérfanos y Expósitos estaba a cargo de una Co-
misión de beneficencia de señoras que funcionaba de largo tiempo atrás. El coronel Latorre suprimió esa Comisión en confió su cometido a las
tendencia
del
hermanas de caridad bajo
lüG
de
las
siguientes
obras
el
sitio
por
ella
tal
realizadas,
motivo una reseña la qu3 extraemos
de
datos:
En 1855 fueron rante
1878 y superin-
Director del Hospital.
La Comisión de señoras publicó con listórica
la
invitadas a
una reunión
las
señoras que du-
de Montevideo habían formado parte de
la
«Soci;v
dad Filantrópica de Damas Orientales». Partía la iniciativa de don Juan Ramón Gómez miembro de la Junta Económico-Administrativa. La reunión tuvo lugar en la casa habitación de la señora María Quevedo de Lafone y allí quedó constituida la Sociedad de Beneficencia de Señoras bajo la presidencia de doña María Agell de Hocquard. Lí Sociedad se hizo cargo e/i el aicto de la sala de mujeres de Hospital de Caridad, de la niños expósitos y de la sección mujeres dementes, año 18 5 7, en que las hermanas de caridad recién llegadas tomaron una parte de la tarea quedando la Sociedad con i;; repartición de expósitos. La Sociedad estableció en 185 6 una escuela gratuita de niñas pobres que alcanzó a reunir hasta 150 alumnas y subvencionó diversas escuelas particulares por icada niña que admitían. En 1861 organizó el Asilo de Huérfanos y Expósitos con independencia de la Cuna. La Sociedad compr.6
de
sección
hasta
rredia
el
manzana de terreno en
la
calle
Uruguay con destino
a
un Hospital de Huérfanos que luego revendió para comprar otra manzana en la calle Cerro Largo y subsiguientemente otra más apropiada en la Aguada, hasta qu-i en 1873 donaron los seño-
Anales de
Arsenio
res <Í6
Lermitte
Playa
la
y
la
Martínez
Adolfo
donde
Ramírez,
Universidad
por
fin
213
manzana
una fué
edificado
al el
Este Asilo
acumulado en 15 años de bazares, rifas, teatrales. La construcción ascendió a 98,560 pesos y ese importe fué pagado en metálico y en terrenos que la Sociedad poseía entre la Aguada y el Cordón. Para c»".>n
ayuda
del producto
conciertos
y
completar
el
dos
dose
beneficios
precio
diversos
a
reembolso
su
fué necesario
-niños
expósitos
con
entregar 8,000
por sus
una propiedad en
pesos asigna-
adoptantes, el
garantién-
Camino Goes de
9.000 pesos de costo.
Servicio
inédico
de urgencia.
La Policía de Montevideo instaló en 1879 un servicio médico con un personajl icompuesto del doctor Diego Pérez cerno médico oficial, dos parteras y cuatro empleados. Esa nocturno,
oficina,
que funcionaba en
la
Plaza Independencia,
disponía
de
una botica y de tres carruajes.
Sociedades de socorros mutuos.
La Sociedad Española de Socorros Mutuos, una de las más antiguas y prestigiosas de Montevideo, tenía en 1878 cerca de 1,600 ¿ocios. De su movimiento siempre ascendente da idea el cuad:-o que subsigue:
Años
Anales de
214
El servicio
universidad
la
policial.
La tranquilidad de la campaña era una de las preocupacionsí* más constantes del coronel Latorre. A los perturbadores principales los hacía asesinar y a los demás los encerraba en el Taller de Adoquines de acuerdo con el programa que se trazara desde los primeros
de su
días
Para atraerse las simpatías programa de sangre y de
administración.
de las poblaciones rurales matizalba ese
Inmediato
atentados con decretos y disposiciones que obtenían de
aplauso popuiar.
el
Entre
destaca
se
ellos
una circular
del
Ministro de
la
Guerra
general Eduardo Vázquez en que se daba instrucciones a los Jeffí Políticos para asegurar la estabilidad de la vida rural «fuente prodi'.ctora .a
de la riqueza nacional».
Los Jefes Políticos debían llamar
campaña para
todos los militares avecindados en la
prevenirles,
bajo ai>eircibimiento de ser dados ds baja, «que estaban obligados a
cooperar en favor de las autoridades departamentales, constitu-
yéndose en sus propias habitaciones en otros tantos guardianes de la S'eguridad dtdl
orden público y con
el
deber forzoso de auxiliarlas
en todos los casos en que fueran requeridos», agregando «que siempre
que las
cuatreros
o
autoridades criminales
o
reclamaran cualquier
su
concurso
para
otra
comisión
estaban
perseguir obliga-
dos a prestar obediencia».
Por otro decreto prevenía que
las
policías
de los departamentos
estaban obligadas a auxiliarse en !a aprehensión de los delincuentc¿,
quedando
así
derogada una absurda reglamentación o prácti-
ca según la cual cada policía debía respetar la jurisdicción de las oi^as y sólo traspasar las fronteras de su departamento después de
entrablar una gestión que daba tiempo a los criminales para escapar a
la
acción de la justicia.
También derogó
el
coronel
Latorre la ley de 1874
reglamenta-
aprehensión de ciudadanos y de las responsabilidades de agentios policiales, invocando que de cumplirse esa ley resul-
ria de la los
tarían
ilusorias
Un ensayo de
las
garantías
de
los
derechos
individuales.
policía rural.
Desde los comienzos de la dictadura empezó en todo el país un movimiento de ideas a favor de la organización de las policías
rurales con motivo, de
una proposición de don Cirios Reyles
Anales de
que
Universidad
la
coronel Latorre aceptó de
el
21:')
inmediato, por la que se au-
torizaba a aquel ciudadano para organizar y costear dentro de
campo una partida
sus valiosos establecimientos de a
6
10 hombres, al
mando
de
policial
de un Comisario qne dependería d¿
Jefatura del Departamento respectivo.
la
Asociación Rural presentó al Gobierno un proyecto de reglamento de esas organizaciones policiales, en el que se establecían las bases del nuevo servicio. Los Comisarios debían sa-
La
ber leer y escribir y gozar de buena reputación. Todo el persode Policía debía rotar de una sección a otra cada seis meses.
iial
Las Comisarías debían instalarse en el centro de las secciones y haber en ellas un sargento. El Presupuesto fiompre debería debía asignar una partida para gastos de manutención de las policías. Los guardias rurales debían estar exentos del servicio militar.
Ese reglamento fué aprobado mediante un decreto por el que vez se creaban los puestos de Oficiales, Inspectores, ComiAlcaides, Subdelegado^ s.-.rios policía. de órdenes, Médicos de a
la
Comisarios urbanos y Comisarios rurales. En varios departamentos empezó de inmediato
la
organiza-
ción de las policías rurales, especialmente en Canelones bajo
el
impulso inteligente de su Jefe Político don Mariano Berro. Ei respetable estanciero don Dalmiro Veracierto, que actuaba de
Comisario rural en
metido escribía
«No
se
al
sección Cerrillos, dando cuenta de su coal
finalizar
el
año 1877:
ha inferido una puñalada a nadie...
un caballo, un objetos
dí?más
la
señor Berro
reloj de plata y
robadlos
A
excepción de
un cinto con 607 pesos, todos
los
han sido restituidos a sus dueñas y *aa
han conseguido escapar a la acción de la Poa los damnificados... El vecino es dueño de ^u propiedad y su hogar y no está amenazado hoy por las cuadrillas de malvados que se constituían en dueños absoluLos vagos ya no juegan a la taba o en las tos de todo carpetas el lucro del abigeo a que se entregaban las más de las ii'iches. Ni el vecino ni el transeúnte temen ser asailtados, ni a sólo
licía,
dos y
rateros
esto
mismo debido
.
a!
¡as
horas de
.
.
la
noche,
por
el
cuatrero de facón,
buco. Las sementeras no son diezmadas pillas y
manadas de
los
vagos y holgazanes.»
o
tra-
las
tro-
pistola
como antes por
Anales de
216
El
servicio
la
universidad
en Montevideo.
policial
—
ordenanzas y
Diversas
notas de la época.
Ya hemos dicho que bajo 18 7'9
coronel Latorre
el
de Montevideo por
mensualmente en bajo
presión del descenso rentístico de
personal
el
de
las
policías
de los batallones de línea que se turnaban
el el
la
reemplazó
servicio
de
la
ciudad y de
arrabales
sus
dirección de sus jefes respectivos. Sólo quedó en pie el
la
Cuerpo de Serenos que ejercía la vigilancia desde las 9 de la hasta las 4 de la madrugada, manteniendo inalterable el canto colonial de las horas con su aditamento del estado del sereno, nublado o lloviendo, a pesar de la crítitiempo, ca de la prensa que no cesaba de pedir la abolición de esa costumbre y de recordar a los serenos que miraran sin prevención
noche
—
—
a los transeúntes que se les acercaban después de las 11 o de
la
noche, evitando
así
incidentes
tan
graves como
hemos reseñado en volúmenes anteriores. Una ordenanza policial de 1877 prohibía
a
los
12
que
menores de
los
edad la venta de números de lotería y de cualqui-.-r otro objeto, excepto los diarios, cuya venta se toleraba hasta las 10 de la noche.
La matanza de perros
se
continuaba haciendo en
de Montevideo, por medio de carne envenenada que civiles
las
los
calles
guardias
arrojaban en las calzadas y aceras. Los perros se deba-
tían en terribles convulsiones a la vista de los transeúntes y sus
cadáveres quedaban
allí
hasta que
el
basurero los recogiera
al
día
siguiente.
Las casas de prostitución, sujetas hasta entonces a una
ins-
pección médica, quedaron exentas de esa forma de tutela a titulo de
que
ella
prostitución
atacaba
un derecho y deprimía a
reglamentada
—
decía
©1
decreto
la
autoridad.
de
Latorre
La
—
derecho de pedir que se proteja su desarrollo y esa protección sería contraria a la misión de la autoridad y agraviaría a la moral. adquiere
el
En 1877 ocurrió un gran incendio en la Barraca de Frutos de Walls y Cía., y el dictador Latorre concurrió al toque de alarma con la fuerza de línea y asumió personalmente los trabajos de extinción y salvamento.
Anales de
El ejército
tle
raíz
de
el
proclamación de
la
universidad
217
línea.
El escalafón formado por a
la
Estado Mayor en marzo de 18 7 6 la
Dictadura
contenía
jefes
1,205
y oficiales de las categorías que subsiguen:
3 brigadieres generales.
2ó9 capitanes.
16 generales.
7 idein
graduados.
35 ayudantes mayores
43 coroneles.
30 ídem graduados.
126 tenientes
68 tenientes coroneles.
149 idem
27 idem graduados.
177 subtenientes.
185 sargentos mayores.
i
.".
2.°.
20 portas.
55 idem graduados.
ó guardias marinas.
Hubo una parada ron
el
maban
miltar en esos mismos días en la que formaescuadrón de artillería y los 8 batallones de línea que for-
guarnición de Montevideo. Terminado
la
ren licenciados los batallones
7
y
el
reduciéndose a
8,
desfile
vez
la
fue-
el per-
demás cuerpos
a 2 00 plazas. Tres años después fuede Infantería y el l.o de Oaballería, invocándose en uno y otro caso razones de economía.
sonal de los
ron disueltos
el 4. o
Al terminar la administración Latorre el Ejército de línea se según la Memoria del Ministerio de la Guerra de 5 batallones de infantería, un regimiento de artillería y un
ccmponía
—
—
regimiento de caballería, con 15 jefes, dados.
En
conjunto,
2,343
1,38
oficiales y 2,190 sol-
hombres con un presupuesto de pesos
656,689.
El reclutamiento se hacía entonces, como en las épocas anteriores,
por
el
eniganche de mercenarios extranjeros, por las con-
denas judiciales y por la leva o caza de hombres. Los hombres de color, víctimas predilectas de ron
al
coronel
Feliciano
González,
la
leva,
moreno también, que
pidie-
interce-
diera a su favor, como en efecto lo hizo, dando con ello oportunidad al coronel Latorre para formular la siguiente declaración: «Hago cuestión de honor para mi gobierno el poner término a ese procedimiento abusivo que hasta aquí viene condenando a lop elucídanos de color a una imposición que no sólo se opone
a la ley fundamental del Estado que declara chos, sino que está en contradicción
democráticos que profesamos.»
la
igualdad de dere-
también con
los
principios
Anales de
218
Eu bina
la
Universidad
18 76 fueron adoptados para
Rémingtou,
prohibiéndose
la
el
cara-
ejército e! fusil y la
introducción
de
esas
armas
por los particulares.
De un Artillería
terrible accidente
fué víctima en
1878
el
Regimiento de
eu su cuartel de la Plaza de Artola. Hacían los solda-
dos sus preparativos para realizar ejercicios de fuego en Punta
Carretas cuando explotó
una granada,
se
comunicó
el
fuego
a
pólvora y cayó derrumbado el edificio resultando 23 muertos, SI heridos y numerosoá contusos segiin el parte del Jefe del Estado
•ji
Mayor. Invocando la frecuencia con que los jóvenes oficiales del ejérpedían su pase al Etetado Mayor Pasivo, «con mengua de la moralidad y de la disciplina que deben reinar en el ejército», dictó el coronel Latorre un de-creto que prescribía que en adeiante los oficiales ds cuerpo sólo podrían obtener su separación cito
casos
eii
de estar inutilizidos para
íicado del cirujano
mayor
ei
servicio,
mediante
el
eev.-i-
del ejército, o de hacerse indignos de
pertenecer al ejército por delitos punibles acreditados en mario resipeetivo o por causas justificadas que apreciaría
el el
su-
Go-
bierno.
A
mediados de 1879 un grupo de jefes del que formaban parte Máximo Santos, Máximo Tajes. Rudecindo Várela, Pablo Ordóñez y Ventura Torrens, resolvió iniciar trabajos a falos
coroneles
A'or
de
la
Honrando
fundación de un Hospital Militar y Cuartel de Inválidos.
la
momoiia de
lo.s
proceres.
La Comisión de Cementerios resolvió en 18 77 colocar los resuna urna de Jacaranda y plata, construida por con Pedro A. Bernat, poeta, periodista y a la vez propietario y tos de Artigas en
obrero de un taller de carpintería y ebanistería que figuraba entre los más importantes de Montevideo.
Doña Dolores Vidal de
Pereira, viuda del ex Presidente don Antonio Pereira, entregó al Gobierno en 187 6 la espacía legalada a Artigas por la Ciudad de Córdoba y la espada de La-
Ciabriel
valleja,
ambas con
destino al
Museo Nacional.
Los restos de los generales Eugenio Garzón y Melchor Pacheco y O'bes fueron en esta misma época trasladados al panteón * nacional por orden de la Dictadura.
Anales de
—
Espectáculos públicos.
Durante todo
Las
período de
el
ron las corridas de toros en
Universidad
la
de
covritlas
219
toros.
administración Latorre continua-
la
plaza de la Unión. Pero fué sobre
la
todo en enero de 1880, en ias postrimería;^ de esa administración,
cuando
llegaron a
corridas
las
tratación de grandes
su
máximo
con
desarrollo
y la importación de teros
toreros
con-
la
esipañoles
A una de lat; corridas initemporada asistieron más de 10,000 espectadores, cifra considerable para la población y los medios de locomoción de
de la ganadería del duque de Veraguas. de la
ciales
En
época.
ia
estaban algunas de las principales
palcos
los
de Montevideo que. contagiadas por
dre
patria,
ciue
hasta
intentaban entonces
fam.i-
mahondo arraigo al bárbaro espectáculo los hombres de Montevideo se resolvían
lias
entusiasmo de
el
la
dar
sólo
a presenciar.
—
«La pulcra dama
«La Razón»
escribía
—
"1
que languidece
ver la gota de sangre que brota del dedo herido por la punta del alfiler
con que arregla su tocado, mira con avidez
pobre caballo
al
arrastra por la arena sus destrozadas entrañas y oye sin
(¡ue
Ijorizarse
más
los
«El espectáculo es bárbaro
Bárbaro es llevar
accidentes.
ru-
soeces epítetos que salen de labios avinados.»
—
decía «El
¡os
caballos
—
Siglo» al
en todos sus
matadero. Bárbaro es
también enfurecer al toro clavándole en los costados algunas pulgadas de hierro y abrasándole a veces la carne viva con el fuego que arde dentro de ellas. Bárbaro es tambiéii traspasar al toro con '
el
Y
estoque.
bárbaro sobre todo hacer una fiesta del tormento
es
de los animales y del peligro de los hombres, excitar de esta ma-
nera todos los
instintos
hombre y lanzar griento
el
circo
del
inofensivos
nuiles
feroces
que duermen en
gritos de salvaje alegría ante
cubierto unos,
con
la
sangre
enfurecidos
los
y
otros
el
por
corazón
dal
espectáculo san-
el
despojos la
de
ani-
persecución
y
dolor.»
Gracias
a
esos
comentarios quedó detenida
monina y no alcanzó a echar
que tantos males morales debía ya
líaf
-
el
concurrencia
fe-
un espectáculo
al
país.
l'it.
Para
los
que no podí-an trasladarse a
presenciar
espectáculos
de
Rat
reñidero
ratas,
-
la
laíces en el hogar
Pit
o
d?
la
carnicería instalado
Unión
má,s
en
o que sólo podían
modestos,
un
local
estaba céntrico
el
Jo
Anales de
220
la
universidad
Montevideo, con sucursales de caza en I-unta Carreta. Y allí concurrían con
el
vaciadero de basuras de
sus
perros
a ese repugnante sport. El día de la inauguración
los
aficionados
mató un perrito
una veintena de ratas en dos minutos, embolsándose su dueño y sus partidarios gruesas
sumas de dinero como consecuencia de
las
formuladas.
apuestas
las carreras de caballos. El lie
coronel
caballos
üe jock-ey y
Latorre aprobó
por
el
se
en
1877
que se obligaba a
castigaba
el
juego
un reglamento de carreras los
corredores a usar traje
fraudulento
con
la
pena de
La mayoiía de los premios era para caballos criollos, que abundaban. En una de las grandes carreras nacionales
expulsión.
únicos
1877
de
caballos
figuraban cinco premios para caballos
criollos,
uno para
mestizos y uno para carreras de saltos. Las carreras
in-
ternacionales de 1878 llevaron al Circo Ituzaiugó una enorme con-
currencia que la prensa de la época calculaba en 20,000 personas.
La Comisión de carreras estaba presidida por Latorre.
Juegos
aííóticos.
Los juegos atléticos tenían también su cancha en la Blanqueada, «Montevideo Cricket Club» organizaba carreras a pie, el
donde
carreras cios
de saltos,
carreras
con zanja y barreras y
ctros
ejerci-
que atraían público numeroso y entusiasta.
Teatros y conciertos.
uno de sus primeros decretos suprimió Latorre el cargo Censor de Teatros restablecido durante el gobierno de Várela, con la civilización y la <í;de acuerdo decía en su decreto Por
ds:
—
libertad tal
—
cual lo exigen las prácticas democráticas de los países
más adelantados». Entre los cuadros llamativos de la época figura el estreno de «La Parisina» del maestro Tomás Giribaldi por la Compañía ie Opera que actuaba en Solís. El público ovacionó grandemente al autor. Don José Cándido Bustamante pidió desde su palco a la Empresa del Teatro que colocara el retrato de Giribaldi entre los (lue decoraban el edificio, y el dictador Latorre publicó un decreto
Anales de
por
que
el
universidad
la
asigniba una pensión de 1,200 pesos anuales para el Conservatorio
le
que pudiera proseguir sus estudios musicales en de Milán.
Los cultores del drama tenían en esa época dos centros importantes: la «Sociedad Talía» presidida por don Pablo Varzi que daba
Amedramas europeos preconizaba
frecuentes funciones en los teatros, y la «Sociedad Dramática
ricana»
que además de
representar
necesidad de estimular
la
el
arte dramático
nacional.
La Sociedad «La Lira» desarrollaba por su parte musical
obteniendo
personas,
700
permitieron
cambiar de
con
prestigios
ello
local
el
buen gusto
oue llegaban a congregar hasta
en frecuentes conciertos
en
iniciar
e
y
recursos
1878
que
le
programa de
el
música clásica que tantos aplausos habría de propiciarle.
La cuestión
religiosa
durante
la
dictadura de Latorre. Erección
del obispado de Montevidct).
Al asumir
el
Jacinto Vera
el
coronel Latorre la dictadura todavía ocupaba don vicariato
apostólico
de Montevideo con la investi-
dura «de Obispo de Megara in partibus infidelium». pués era enviado a
Roma
la
diócesis,
la
Un año
des-
presbítero don Inocencio Yéregui
por
obteniéndose
misión confidencial, de
el
designación
de
intermedio
su
Vera
para
el
la
en
erección
obispado y
'a
creación de los tribunales eclesiásticos necesarios a la tramitación
de todos los asuntos dentro de la jurisdicción nacional.
Un
fuerte rozamiento debió producir la documentación del Vati-
cano.
El hecho es que Latorre al comunicar a Vera que había decretapase de las bulas y breves pontificios, declaró que lo hacía «en
do
el
la
inteligencia
de que se
salvarían
nes y demás puntos observados por
Tribunal
de
niéndole que
Justicia el
relativos
al
convenientemente el
derecho
de
patronato»,
Gobierno deseaba «conservar incólume
de Vicario Capitular, sia y organización
el
omisio-
las
Fiscal de lo Civil y por el previ-
la provisión
nombramiento de dignidades de
la
Igle-
de los tribunales eclesiásticos, actos que debían
común acuerdo». Don Jacinto Vera, al tomar pasesión del obispado, prestó juramento de acuerdo con la siguiente fórmula ajustada en Roma:
practicarse de
«Juro y prometo por los Santos Evangelios obediencia y fidelial Gobierno de la República e igualmente prometo no coadyu-
dad
var a ninguna propuesta, persona o consejo que sea nocivo a tranquilidad
e
independencia de la República.»
'.a
Anales
222
La
como
obediencia,
ie
la
universidad
se ve, era al Gobierno y no a
la Constitu-
ción y a las leyes!
El ambiente oficial de la época era propicio a la Iglesia.
La fuerza de
línea concurría frecuentemente a la iglesia durante
dictadura de Latorre, para oir misa o para solemnizar las fun-
la
ciones
ción
La crónica
eclesiásticas.
bre todo
Santísimo
del
batallón
noticiosa del
concurrencia del batallón
la
vestido de
currencia
del
Artillería
para
en
solemnizar
la
la
de ese
asistencia
una de
gala a
misas y
las
procesión
so-
del
mismo la
cor»
Regimiento de
Cazadores y del
de
5.o
y del
3."
Matriz,
la
rigurosa
año 1877 destaca
de Cazadores a la fun-
5."
Corpus
Cbristi
pre-
senciada por los Ministros de Gobierno y de Guerra desde los balernes del Cabildo.
IX el coronel Latorre manmedia asta y dispuso que el Fuerte de San José, situado en las proximidades de la Aduana, hiciera un disparo de cañón cada cuarto de hora. Al día siguiente el Ministro de Relaciones Exteriores se dirigió al doctor MaAl ocurrir
dó colocar
fallecimiento de Pío
el
la
bandera nacional
a
riano Soler para felicitarlo «por la brillante oración fúnebre pronunciada en honor del gran Pontífice de nuestro siglo», agregando que tenía enicargo de expresar que tanto el coronel Lato-
como sus Ministros habían quedado «sumamente satisfechos». La Policía de Montevideo dictó una ordenanza en 18i77 por
rre
la
que establecía que
las
mercerías y zapaterías debe18 79 a todos los es-
tiendas,
rían clausurarse los domingos, y obligó en
pectadores
de
función
la
del
Plaza Constitución a sacarse Al autorizarse
en 18 7 8
el
la
Corpus Christi que rodeaban la sombrero al paso de la procesión. construcción
Aguada con fondos suministrados por sí^mente
el
coronel
Latorre
«que
el
el
de
la
de la
Iglesia
pueblo advirtió expre-
Gobierno
se
reservaba
con-
currir a la realización de esa obra así que las circunstancias del erario nacional lo consintiesen»;
y al declarar en
el
mismo año
de utilidad pública una finca situada a los fondos de la Matriz
con destino al Cabildo
Eclesiástico
dinero sería suministrado por
Con motivo de algunas
el
anticipó
el
dictador
que
el
Tesoro nacional.
visitas escolares realizadas por el InsDepartamental de Montevideo dictó el coronel Latorre un decreto por el que establecía que tratándose de escuelas di-
pector
Anales
Hermanas de Caridad debería
rígidas por
respectivas directoras y a cerciorarse de
limitarse
—
«Esta disposición de
espíritu
el
trario
hacer
a
si
el
Inspector
se enseñaba el idioma
con preferencia a otro.»
castellano
ría
223
simple toma de datos estadísticos proporcionados por las
la
<(.&
Universidad
¡a
ele
agregaba leyes
las
efeictivo
el
el
decreto
vigentes,
principio
—
en nada contra-
concurriendo
de
libertad
la
por
el
con-
de enseñanza
consagrado en esas mismas leyes».
Quedaban por f(;ra
tanto las escuelas religiosas fuera de la
lo
es-
de acción de las autoridades es^^olares.
muy
l'ero era
distinto
el
ambiente gieneial
;Jel
país.
Esa actitud constante del gobierno de Latorre encaminada a el apoyo de las clases conservadoras, promovió la orga-
obtener
nización
Partido
del
Católico
Club Católico,
ción,
el
Villa
Colón,
Frente
a
el
de
y
sois
fuertes
Liceo Universitario,
el
resortes
de
Colegio
Pío de
Seminario Conciliar y «El Bien Público». se colocó de inmediato la juventud universitaria
el
ella
de Montevideo con su portaestandarte «La Razón» a
«Hemos
ac-
hasta ahora
vivido
—
la
cabeza.
decía «La Razón» en 1879
—
eu una atmósfera viciada: convulsiones de todo género han trastornado nuestro tais, deslizándolo insensiblemente por la sar grienta era de las guerras civiles, y hoy...
de nuestra alma al mirar con los ojos
el
el
vértigo se apodera
abismo.
¡Hasta dónde
nos han llevado las pasiones del partidario! Por un hombre, por el
color de una divisa se ha sacrificado la
tuido
el
de
culto
los
deberes
cívicos.
patria,
se
Generaciones
ha
prosti-
aletargadas
gue habéis vivido en esos terribles momentos de la historia en que parece que la fatalidad se levanta convertida en ley inexoral)le para anonadar la libertad y el derecho: enseñad a nuestro pueblo cómo se sacuden los miembros más entumecidos por el marasmo. Decidle que cuando Carlos I amordazaba en Inglaterra la palabra de los reformadores
religiosos, unos cuantos puconducidos por una débil barca pasaban a la América del Norte, la tierra bendita de la libertad. Decidle que cuando Imperio Romano vegetaba en la ignorancia, fué la propaganel da religiosa la que mejoró la condición humana. La religión se
ritanos
cuna de todas las sociedades. En ella se conlos gérmenes de vida que más tarde desarrollan en las constituciones de Io/í pueblos. La religión
encuentra en
funden 3.^
con
la
un
principio
Anales de
2¿4
se
Vniversklaá
la
encuentra también en la cuna de todas las revoluciones. El Dios, causa de las causas, verdad de las verdades,
nombre de
enseña salvadora que ha guiado a los pueblos en la conel nombre que invocaron los pensa-
fué la
iiuista santa del derecho y
dores
propagar ideas
al
en
Si se resuelve si
de
libertad.
El
problema religioso es
importancia para la marcha de las sociedades modernas.
de vital
sentido liberal, es una fuente que purifica;
el
una atmósfera que
se resuelve en el sentido ultramontano, es
ahoga».
«La única aspiración legítima de los hombres en materia redebe ser agregaba completando su pensamiento
—
—
ligiosa
practicar la religión eterna es el la
del
deber.
.
.
La
del
deber
conjunto de las doctrinas morales que teniendo por base
idea de Dios aconseja practicar nuestras
tades.
religión
.
más sublimes
facul-
El culto que en las religiones positivas consiste en ce-
.
remonias,
cánticos
y
mojigangas
ridiculas,
en
la
religión
del
deber está expresado por la realización o por la práctica de) bien... Practicar el bien, amar y respetar a Dios, rendir ho-
menaje
a
ritas y
tratar de conocer
el
grandeza, reconocer su bondad y su justicia infisu naturaleza y sus atributos. He ahí
su
culto de la religión del deber».
el diputado don Francisco Bauza obtuvo el voto de la mayoría de la Cámara para echar abajo el edificio de la reforma esicolar, pudo verse con claridad cuál era el sentimiento del país en esa gran contienda entre el clericalismo y el liberalismo«La prensa montevideana decía «La Razón» caracterizando el cuadro del momento está hondamente dividida en
Cuando
— —
como el presente y toda con excepción del órgano ultramontano («El Bien Público») dirige sus fuegos hacia el mismo blanco, acallando toda pasión de partido para luchar por el triunfo de una causa en que va
cuestiones políticas, pero llega un caso ella
envuelto
el
Pero todo
porvenir del país». el
ardor con que luchaban
los liberales
aquende
el
plata no alcanzó felizmente a producir las lamentables escenas
que cuatro años antes habían provocado los liberales de Buenos Aires a raíz de una pastoral del arzobispo Aneiros contra «los impíos, incrédulos y malvados» que se oponían a la multiplica-
hermandades religiosas y a la entrega a los jesuítas y mercedarios de varios establecimientos religiosos argentinos, pastoral que fué seguida de un mitin de protesta compuesto por varios millares de personas que apedrearon el edificio del arción de las
Aliajes de la
'2ó
Universidad
zobispado y varios templos y que luego incendiaron el Colegio del Salvador y persiguieron a los frailes que allí se albergaban. Nuestras controversias se mantenían con altura, con tanta altura que
el
Ateneo
brindaba
su tribuna
a
los
oradores
del
Club Católico y éstos la suya a los del Ateneo, tolerancia admira^ ble a la que sólo fué fiel el Club Católico durante un año, pero que
Ateneo mantuvo siempre como un timbre de honor.
el
ley
liii
1861 estaban secularizados los cementerios en mérito
Desde del
decreto
expedido
cadáver de un
deifunciones
por
el
autoridades
de las
gativa del
Registro de Estado Civil.
(le
masón.
de Berro
gobierno
eclesiásticas
Pero
los
seguían en manos de
la
a
a raíz de la ne-
autorizar
registros Iglesia,
entierro
el
de matrimonios y
emanando de
ello
cuando trascendían a la prensa. Don Alfredo de Herrera, respetable hacendado de San José, fublicó en 1878 una carta en que hacía esta grave denuncia: «Se trata de una señora que murió algún tiempo después que conflictos graves que de vez en
su hijo. Pues bien, en el registro de la parroquia inscripta
con una fecha anterior
He
cómo podría originarse un
aquí
de ser
si
las
al
siu
fallecimiento de pleito
muerte está la
criatura.
que no tendría razón
inscripciones del señor cura estuvieran en regla».
Algunos meses después, en. enero de 1879, publicó «La Razón», una carta del obispo Vera a don Francisco Tapia, cura del Reducto, escrita en 1871, en la que figuraba este terrible párrafo: «Puede hacer
la alteración
tarán esta carta en fianza»
La el
el lil)rn
que piden las personas que de bautizados...
le
presen-
Son personas de con-
.
carta original fué entregada al Juzgado y en el acto pidió
Fiscal del
Crimen
la
instrucción de un sumario. «El Bien Pü-
órlgano oficial del Partido
bJico»,
Católico,
obispo con estas palabras que envolvían las alteraciones
la
salió
en defensa del
consagración de todas
habidas y por haber en los registros parroquiales: la mente del señor Fiscal no habrá sido poner
«Suponemos que en discusión
si
el
prelado tiene o no facultad
para ordenar que
haga una rectificación en cualquier libro parroquial. Cabalmente el examen de esos libros es una de las atribuciones de los obispos y en las misiones no es la que más desatienden. Conque repetimos: el señor Fiscal habrá pedido que se investigue «i hubo fraude, y nada más.»
se
l'.i
T.
Vil-
15.
Anales de
226
«La Razón»
publicó
Posteriormente
Universidad
la
tos
merecer
y
—
dón
—
ellos
cura
el
Cor-
del
de defunciones, se registra ia
8
26 años, casado con Justa Miranda. José María Ojeda.
Concuerda con el
primero de
el
en 23 de marzo de 1873 murió Fermín Henkloy,
.siguiente partida:
do
en
decía
que a fojas 191 del libro
oriental, de
asien-
lofc
parroquiales.
certificados
«Certifico
documentos
graves
otros
reveladoras del grado de confianza que podían
original
el
a
y
pedido de
interesada
parte
expi-
presente en Montevideo a 28 de noviembre de 1878.»
Hubo algunas dudas en la tramitación de la pensión que la viuda. Comparando la partida de matrimonio con
naba
gestio-
par-
la
marido había contraído enlace hicieron averiguaciones comprobándose ios 11 años de edad. Se a entonces que el matrimonio no se había celebrado en la iglesia del Cordón sino en la Matriz, donde la viuda obtuvo al fin la tida de defunción, resultaba que
como
partida verdadera. Pero y
partida ya estaba presentada
la otra
había que eliminarla, la viuda dirigió una carta
que éste contestó en «Al presentárseme
mente que no
primera vez
la
existía
en
mín Flagere, francés y
Como
señora
la
le
declaré abierta-
archivo la partida de
este
casado,
sin
el
nombre de
de
óbito
la la
s;j
de un Feresposa...
sucede frecuentemente que los que ocurren a pedir las pápede entierro na dan exactamente ni los apellidos, ni la edad,
ias
n;
cura Ojeda,
al
términos que subsiguen:
los
Pero volvió por segunda vez... y encontré
esposo...
le
el
ei
nombre de
hubieran
dado
Icñ
días,
y
día
era
la
los
los
cónyuges,
datos
por consiguiente que
que
al
fin
me
no
equivocados, la
fué
como
difícil
sucede,
partida que
la
que
suponer
todos
repito,
señora
me
pe-
expedí.»
Fué a raíz de la puldicación de la carta del obispo Vei'a y de enorme polvareda que ella levantó que el coronel Latorre se resolvió a tirar su famoso decreto ley de Registro de Estado
la
-
Civil.
Luego de declarar que
fe
la
de
bautismo constituía un medio
P"obatorio débilísimo que daba lugar a la consumación de fraudes
en perjuicio de nuestra nacionalidad y que lo único que acreditaba en realidad era la incorporación de tal o cual persona a tal o cual
gremio
religioso,
cimientos,
el
de
establecía ese decreto cuatro registros:
cimientos
el
de na-
de
y legitimaciones. per duplicado los cuatro registros.
cribirse dentro de los
ei
matrimonios y el de reconoCada Juzgado de Paz debería llevar
defunciones,
10
Los nacimientos deberían
ins-
días siguientes al parto en las secciones
Anales de
urbanas y de 20 en
Dentro de
tes
matrimonio entre
del
obligados
acta
presentarse
a
quedaban los contrayenJuzgado de Paz para extender el
al
sacerdotes
los
consagración religiosa dar aviso
mismo plazo. el mismo día de su inhumado sin haberse hecho el tro
días siguientes a la ce-
tres
los
católicos
que hubieran autorizado la Juzgado de Paz seccional denLos matrimonios entre no católicos deberían
debiendo
civil,
227
en ambos casos con la presenta-
rurales,
las
ción del recién nacido.
lebración
universidad
la
del
asentarse
al
celebración.
Ningún cadáver en
respectivo
asiento
el
sería
Registro
Civil.
La prensa
apoderó en
se
«El decreto en tólico
acto
el
pan
decreto
sensacional
del
alcance de sus disposiciones.
f'jar «1
ultra
—
—
mismo
sí
decía «El Bien Público», diario ca-
parece bueno. Al menos no es tan malo como era
d? temer en virtujd de la atmósfera moral en que ha nacido. -¿mpieza por respetar en
los
él
So
fueros de la conciencia cristiana;
no se legaliza el concubinato entre católicos, y si bien se abren algunas puertas a la inmoralidad, en general se ha procedido aco-
modándose
al
modo de
de
nacimientos
hacer
es
de un pueblo reconocido poco ha
ser
en su inmensa mayoría»
cialmente como católico
criticable
el
ninguna inscripción sin
cado de inscripción en
los
previa presentación del
En cambio hay
Registro Civil.
el
ofi-
En materia
que prohibe a
artículo la
...
curas certifi-
poco que
censurar en materia de matrimonios. El decreto no desliga a los esposos católicos de la obligación Sólo les
religioso.
tercero día en
El
Código
el
impone Juzgado establece
Civil
la d-e
de contraer
civil
el
matrimonio
de presentarse dentro de
obligación
Paz para levantar allí el acta civil. el matrimonio entre católicos ha
que
de celebrarse con arreglo a los cánones y la reciente ley deja subsistente
el
prescinden de
la
católicos ilícita
a agregar que el matrimonio Juzgado de Paz. De manera que si los ceremonia religiosa realizan una unión
esa disposición limitándose
debe ser registrado en y nula.
Para «La Razón»,
— diario
—
ultraliberal
los
verdaderos
católi-
cos no podían limitarse a la consagración civil y estaban obliga-
dos a contraer
el
el
según
el
la
rito
religión católico
.
.
.
hecho del bautismo
ese carácter a los contrayentes o es
profesando
¿Pero qué se entiende para dar necesario a la vez que sigan
matrimonio religioso
por católico?, agregaba. ¿Basita
católica?...
puede contraer
El el
que ha sido bautizado matrimonio civil prescin-
diendo de la Iglesia Católica. Los católicos sostienen que no invo-
Anales de
228
cando que
universidad
la
bautismo impone un
el
tan
casamiento
al
Para «El
a matrimonios
Comercio»
«El
innovación
consistía
limi-
en
— dos
del
inscripción
la
ultraliberales
diarios
decreto
en
ci\il
lo
que
respecta
contraídos
de los
Los bautizados en su concepto quedaban obliga-
ante la Iglesia.
dos a someterse a disposiciones
y
única
la
mayoría
abjuran por ese solo hecho la fe católica
civil
Siglo»
—
la
Los bautizados que se
sí.
y son disidentes.
también
Pero
sello indeleble.
de nuestros abogados contesta que
del
la
ceremonia religiosa de conformidad a las los cánones que los juzgaban
Código Civil y a
no disidentes.
La misma divergencia de opiniones de
ces
zaban
Paz, el
de
resultando
matrimonio
se
exclusivamente
produjo
mientras
que
ello
civil
de
entre
los
algunos los
Juereali-
bautizados,
otros se resistían a celebrarlo invocando que no eran disidentes sino
oatólicos.
lEn realidad el coronel Latorre no había querido atacar a loa
con quienes estaba en perfecta armonía. Había resuelto mantener el régimen sectario del Código en materia de matrimonies, con el único aditamento de la inscripción civil obligacatólicos,
toria dentro de los tres días siguientes a la
La innovación importante no estaba que
ceremonia religiosa.
sino en la inscripción
nacimientos que tenía que ser previa a
de los
civil
desde
ahí,
los
párrocos
podían
sólo
proceder
al
la
religiosa
bautizo
me-
diante la presentación del certificado del Juez de Paz respectivo.
Y
fué por ello que toído
gió
desde ese
plazo
para
impuesta
a
la
la
momento
el
esfuerzo del partido católico se diri-
a trabajar a favor de la prórroga del
inscripción
civil
celebración
del
y
de
la
paña que dirigió personalmente
el
supresión
de
la
traba
y ardorosa camdoctor Soler desde su banca
bautÍ7.o,
doble
de diputado.
Mientras se estabilizaba dentes reveladores de
la
la
nueva ley surgieron algunos
inci-
resistencia opuesta por las autoridades
al cumplimiento de las disposiciones que cercenaban los proventos parro
eclesiásticas
ADMINISTRACIÓN DEL DOCTOR FRANCISCO ANTONINO VIDAL— 1880-1882
CAPÍTULO Movimiento
IV
político
nombrado Presidente de
Vi rtoi'íor Fi-anfisco Antonino Vidal es
República.
líj
Al producirse Presidente
f.-l
la
del 13 de
crisis política
Senado
del
Latorre;
y
Asamblea;
la
frente
del
aceptar
al
renuncia
la
República por
sobre
votos
38
3(9
legisladores
El voto disidente, que pertenecía al doctor Blas Vidal, del
estaba
po-der al
de
eje-
coeste
confirió al doctor Vidal la efectividad de la Presidencia
liltimo,
de la
marzo de 18 8
al
acordada dos meses antes
cutivo, en virtud de la licencia
mnel
Vidal
dcctoi-
Presidente electo, fué dado a don de
presidencia
la
del
hermano
Alejandro Cbucarro. La
elección se hizo por tres años, o sea el
constitucional
presentes.
complemento del plazo
coronel
Latorre
que
sólo
había durado un año. El coronel
Máximo
Santos, que había sido
el
hombre de con-
fianza del coronel Latorre y que a ese título ocupaba el_ Ministerio
de la Guerra, era dueño de la situación el día de la crisis
presiden si
no
lo
(i;il
f'udo
de el—Mmictario de dico
por
lo
hacerse
tanto
nombrar Presidente y gobernando des-
hizo fué porque juzgó preferible seguir la
eminente pero
Guerra, a sin
sombra de otro ciudadano, mépropia como hombre de go-
la
voluntad
bierno.
Kl rlogio dr
la
dictadura.
Todavía se mantenía intacto
el
andamiaje latorrista y el nueel local de la Asamblea sin
vo Presidente no quiso abandonar hacer
el
elogio caluroso de su antecesor.
«Yo siento a
—
dijo
suceder a un gran
al
tiempo de prestar juramento
patriota,
el
coronel Latorre,
—
venir
que durante
cuatro años de administración nos ha dado orden y estabilidad
/
P
Anales de
232
Universidad
la
y a quien los orientales debemos estarle muy reconocidos porque ejerciendo las facultades extraordinarias se sometió a la ley sin que nadie lo impusiese. En los puestos que ha desempe-
ñado
coronel Latorre se cosecíia lo que se cosecha en estos
el
señor
puestos,
Presidente:
disgustos
Presidente oonstitucional,
nel Latorre,
aprovechar esta ocasión
ro
bien
aprecio
el
y
Después de integrado elogiar
a
«No desconoce
—
coro-
Poder y yo quiedeclarar que merece
para todos
al
conciudadanos.»
sus
volvió
Ministerio,
el
Presidente
Vidal
país.
Gobierno las graves responsabilidades que ese documento pero imperiosos debe
el
—
decía en
iei5
de civismo le han
cia
para obtener la
el
de
Latorre en su manifiesto
a
ha asumido
por
pública
estimación
la
El
ingratitudes!.
e
baja del
impuesto su aceptación como una exigenprogreso moral y material de la República
el
observancia
de la Constitución y la práctica
fiel
de
hir^
Los principios de moralidad y de justicia, base fundamental del sistema que nos rige y única guía del gobierno
instituciones...
del
pueblo
pcw
pueblo,
el
regulairán
los
actos
Gobierno
del
en
todo cuanto concierne a las garantías individuales, la libertad,
seguridad y
la
La educación,
propiedad...
la
atendidas... Si
De
labor patriótica nadie
esta
Gobierno es secundado en sus sanos
el
que felizmente goza
el
Pero
que
así
Santos,
el
paz
la
del
de
gobierno
fecunda en bienes de todo género que
el
anatema.
ex dictador huyó
al Brasil
y rompió con
el
coro-
ese lenguaje cambió radicalmente y al elogio sucedió
anatema contra «La gravedad de de marzo decía ei
—
de las sesiones
la
la el
misterio para nadie y ejerciendo
administración latorrista. situación por que pasaba
su
el
país
el
día 13
Presidente Vidal en su mensaje de apertura
extraordinarias de febrero de
me honró llamándoime que
empeños
porvenir de la República.»
el
Al elogio sucede
nel
la
queda excluido...
propóíiitos,
país mediante los
del coronel Latorre, será
labrarán
comercio,
el
serán empeñosamente
industria, la agricultura y la inmigración
al
eje-rcicio
del
1881
—
cuando se
poder ejecutivo, no era un
mucho menos para Vuestra Honorabilidad, autoridad
poderosa
contribuyó
a
contener
desborde que preparaba la irreflexión o el despecho... La digna actitud de la Asamblea, robustecida y apoyada por jefes patriotas el
y pundonorosos y por la dignidad y disciplina del ejército, fué
la
:
AnaJrs
fJi
'¡a
Uvirrrñdad
233
barrera insalvable que se opuso inmediatamente a aquellas miras siniestras
base sólida sobre que se apoyara la restauración
y la
orden con
el
Al pedir en
el
ílel
pleo de coronel
anhelado imperio de sus instituciones.»
mismo año venia para
conferir a Santos
em-
el
mayor destacaba su actuación «cuando acéfalo
el
país de sus primeras autoridades ejecutivas se encontraba poseída
de terror y de sangrientas aprensiones toda la población de la Capital»
se
y
dominaba
la
crisis
gracias
«al
desinterés con
que
el
Ministro de la Guerra ponía su espada y la influencia que ejercía en el ejército al siervicio de la Asamblea, dando así público testi-
monio de su acatamiento a
la
Constitución y a la soberanía na-
cional».
Pocas semanas después,
Asamblea,
1;)
decía
el
clausurar las sesiones ordinarias de
al
Vidal
doctor
refiriéndose
sentimiento
«al
qjcpular ávido de orden y de paz», que tenía la seguridad de que ese sentimiento habría de prevalecer en lo sucesivo
modo que
de ese
se
verifique la
legal de los Poderes públicos
a
jeción ii
la
que hoy ejercen su autoridad con su-
hemos coni;sguido
que
ley
«consintiendo
trasmisión pacífica, ordenada y sistema
al
s-ustituir
del
rror impu( sto poi' ¡a dictadura-».
Y
al
volvía
clausurar las sesiones extraordinarias de febrero de Vidal
doctor
el
a
emanaba su gobierno «A la XIII Legislatura
dar relieve a
—
la
crisis
po'lítica
—
decía en su Mensaje
la
gloria de haber devuelto a la República el 13 de
el
ejercicio de sus
le
1882,
de que
pertenece
marzo de 1880
instituciones y a los ciudadanos
el
pleno goce
de todas sus atribuciones políticas».
r;n
los
comienzos de
inejorainienlo
la
admimstrución Vidal.
—
Añílelos
de
iiistitueioiíal.
Al instalarse el nuevo Gobierno hubo alguna que otra exteriorización de anhelos de mejoramiento institucional entre ellas la del Consejo Universitario que designó una delegación presidida por
Rector don Alejandro Magariños Cervantes, con
el
saludar «,Si
al
doctor
alguna vez
el
encargo de
Vidal.
—
dijo el Rector en esa oportunidad
—
necesitan
gobernante y demostrarle así la importancia que dan a su proceder y el vivo interés que les inspira !a Eiierte de la patria, es sin duda en mcmentCo solsmncs como lof^
ciudadanos acercarse
lo.?
presentes...
al
Por grandes que sean
las dificultades, sabe el
que
Anaies de
2.^4
Universidad
ia
Gobernador Delegado en épocas
íué
siempre
es al
fácil
tamljiéiii
en
iaspiracicnes del patriotismo...
el
levantar
y
la
sobre
ley
no
si
las nobles
elevado propósito de hacer
cuanto sea humanamente posible para asegurar instituciones
que
difíciles,
menos posible encontrarle solución a
todas
las
el
reinado de las
como
cabezas
la
mejor garantía y el mejor escudo del derecho de todos». Pero eran manifestaciones aisladas porique el país y sus hom. bres dirigentes se daban cuenta de que ningún cambio saludable
había producido en
se
Lna
f^J/^
^
!
^P-
programa del motín.
del
primeros actos del nuevo Presidente fue confirmar
los
coronel Santos en
al
Jo
circular confirmatoria
Uno de
^v^ nA'^"^
escenario político.
el
el
Ministerio de la Guerra previa venia del
Senado para conferirle la efectividad de sus grados militares, hecho que dio pretexto a los jefes de batallón para dirigir una circular
han
a/l
a
los
Jefes
Políticos
haciéndoles
saber
que
acata'
ellos
Presidente Vidal.
El militarismo continuaba de el gobierno por
pie.
lepresentar en l)resentar
por
el
el
Sólo que en vez de hacerse
coronel Latorre, se hacía
re-
coronel Santos.
Ei corone! I^atorre se dirige a la frontera con propósitos revolucionarios.
LatGrr3 quedó algún tiempo en Montevideo rodeado
El co/onel
por casi todos los hombres de diplomático,
cerno
ia
la
ciemueitra
situación y hasta por el
gran banquete
cuerpo
el
organizado
sn
honor y sn el del Presidente Vidal por el Ministro del Brasil señor López Netto, todo lo cual daba pie a^tla creencia popular de que era el ex dictador quien se:giua gobernáiiido por intermesu
dio de su teniente el Ministro de la Guerra'.
Fué recién torre,
vió
a
los treinta
dándose cuenta de
pcaierse a
y tantos días de su renuncia que Lalos
movimientos de entretelones,
salvo de cualquier zarpazo
ñ>s\
Ministro de
la
resol-
Gue-
rra y dirigirse a la frontera para estar a la mira de los sucesos.
Pero aún en esos momentos estaba rodeado por la mayoría de los jefes de batallón que lo acompañaron desde su casa hasta 1?.
Estación Central del Ferrocarril. El propósito
de Latorre era
radicarse
en Cerro Largo. Pero
de
la
Universidad
severa vigilancia de que en
el
acto fué objeto
^\7ia¡es
la
pasar
maneció 16 manteniendo
obligó a tras-
le
Yaguarón, donde per-
línea fronteriza y domiciliarse en
la
'235
abril de 18 80 hasta agosto de 18 81, gobierno de Vidal durante todo ese tiempo bajo
meses,, desde al
constante amenaza de una invasión armada.
la
Attitítd
(loil
Gob!nipnazas
invasión latorrista.
(le
en primer término el gobierno de Vid'al atraerse i emigrados que vivían en Entre Ríos, Corrientes y la frontera
Procuró los
brasileña.
«De coniformidad con país con motivo de su
el
que
manifiesto
elevación al poder
notas al Cónsul Oriental en
la
Argentina
dio
— decía — y en
Gobierno
el
al
en una de sus deseo de
el
qu-e
puedan regresar a la madre patria los ciudadanos que están emigrados en el extranjero, procederá V. S. a expedir pasajes gratuitos a todos los ciudadanos a
la
vez
&n
nombre
cisl
que
Gobierno
lo
todas
ofreciéndoles
soliciten, las
garantías
que
exi-
giesen y que les acuerda nuestra Carta Fundamental. Esta resolución la comunicará V. S. a todos los Cónsules de nuestra R'i-
pública en esa, a fin de que procedan a su vez a darle cumpli-
miento.»
Y
en seguida creó
tre.-
escuadrones de caballería de línea con
destino al servicio de la frontera, empujó a la expatriación a
dos
los
que
podían
contribuir
al
restablecimiento
caído, dio de baja al coronel Latorre y a los Jefes
ñaban en
el
Brasil
decretó
y
ex dictador para averiguar
Uno de
esos
expatriados,
si el
una inspección en allí
del
to-
régimen acompa-
que lo domicnio del
el
había armas.
ex Ministro de Gobierno don Josó
María Montero, dirigió una nota a la Asamblea en nía que no podía permanecer en el país durante los
la
que preve-
seis
meses de
residencia prescriptos por la Constitución a causa de la falta de garantías. tie
Y
véase en qué forma comentaba esa nota
Legislación de la
tores
Cámara de Diputados
Martín Aguirre,
Blas
Vidal,
Mariano
la
compuesta de Soler,
Pablo
Comisión los
doc-
Otero y
Adolfo Pedralbes:
«La Comisión no cae en la ilusión de creer que nuestro país ha alcanzado la pleaiitud de seguridad, respeto mutuo, justicia individuos y los partidos que apenas si s? lo observa en algunos países como opimos frutos de los progresos realizados en la razón y on las costumbres políticas en luengos años de recíproca entre
;
Anales de
9'](j
Universidad
la
pero se atreve a afirmíi*
eusayot) civilizadores;
cjue
el
ex Ministro
Montero no ha contado con menos garantías que las que se daba en su administración a los demás ciudadanos.» de
Otro
expatriados,
los
Minas,
de
lítico
coronel
el
Nicasio
Galeano,
que
excusó su fuga diciendo
acor-
Po-
Jefe
Ministro de
el
ia
muerte y que el propio Presidente Vidal 1j había prevenido en uno de sus viajes que regresara a campaña porque en Montevideo no se le podían ofrecer garantías. Durante la permanencia de Latorre en Y aguaron no cesó nuestra Cancillería de pedir su internación. Pero inútilmente porque Guerra
perseguía
le
a
habiitanteis de Río Grande y el mismo Gobierno Brasileño maban y rodeaban al ex dictador. iCada vez «que el cocodrilo Yaguarón» — como le llamaba la prensa de Montevideo
mi-
lo?
del
—
iiiovía
de un pueblo a otro de la
todos
froteiira,
los
se
vecindarios
y autoridades se ponían también en movimiento para ovacionarlo.
Y
cada vez que se pedía su internación
—
cargo
a
con ese objeto especial a Río de Janeiro,
medidas de esa naturaleza. Era el momento culminante de Argentina, Chile y se
le
se
le
—
contestaba la Cancille-
que faltaban pruebas concretaéí para
Imiperial
rlí?
el
Brasil,
la contienda
simpatías
y
inclinaciones
la
acordada
protección
la
a
primera, al
la
adopción de
de límites entre
mientras que
y
atribuían veleidades a favor del último,
suponían
el
Legación Oriental
la
Vázquez Sagastume y luego por el Ministro Mateo Magariños Cervanties que se trasladó
doctor
del
Gobierno dootoT
dí^
que
adviértase
y
pedido se hizo insistentemente, primero por
al al
coronel
La
Latorre
Presidente Vidal
emanando de ahí
Centro Revolucionario
las in.-i-
tituído en la línea fronteriza.
Cuando
Gobierno Imperial se decidió
el
a
salir de su
a
Porto
para
inacción y ordenó
Alegre,
continuar
el
allí
al
sus
Cancillería de Vidal, que no
lo
fin
en agosto de 1881
traslado del foco revolucionario
Buenos Aires Pero la abandonaba, obtuvo una resolución
Latorre 'prefirió
coronel
desde
el
amenazas
irse
a
revolucionarias.
Gobierno Argentino por la que se prevenía al ex dictador que debía abstenerse de trabajes tendientes a perturbar la paz de su del
país
bajo apercibimiento de internación, esfumándose
con
ello
los
planes de restauración latorrista.
Una
tentativa
Antes de
la
de conciliación entre Santos y Latoi-re. salida
vista entre Latorre y
de
Yaguarón hubo de realizarse una
Santos.
entre-
Anales de
universidad
la
'287
El coronel Pablo Ordóñ^z, que actuaba como intermediario, pu-
una amplia información para demostrar que la iniciativa emanaba de Santos, quien no contento con asumirla hasta había blicó
corregido la carta del intermediario en que se gestionaba
leído y
entrevista.
e'ca
Latorre
mento de
resolución lo nista
aceptando
contestó
el mocomunicar su
llegado
en forma que importaba atribuir a su antago-
hizo
cuya
en
iniciativa
la
Pero
entrevista.
la
realizarla Santos se negó a concurrir y al
había actuado
tramitación
coron'^l
el
Ordóñez.
«En
el
estado de excitación
—
decía
—
Santos a Latorre
su permanencia en la frontera mantiene los
que
de nuestro
espíritus
y la agitación de una prensa que largo tiempo amordazada el Gobierno la ha devuelto para
país
por usted usa de la libertad que denostarlo. intereses
.
mismo que siente
se
explotaría con menoscabo de los bien entendidos
se
.
presentándome como un traidor vulgar por
país
del
nací
a
vida pública bajo sus auspicios...
la
animado de patriotismo.
frontera o lanzarse a
Gobierno
El
tiene
anárquica... arrastrar
al
los
Usted a
país
la
deber
su
.
medios para reprimir
carece la
.
de las
guerra
condiciones
civil ...
Y
alejarse
es
revolución para despejar
el
de
la
horizonte»...
cualquier de
lo
Si ust&il
tentativa
caudillo
para
Partido Colorado que
el
ya puso a raya la prepotencia del tirano argentino que disponía de elementos que usted jamás tendrá, está ahora reorganizado, lo cual
significa
que está «garantida
seguridad
y la
de que
la
independencia de
son imposibles
las
la
patria
restauraciones
de la
tiranía».
Las informaciones de ción fes
la
época están contestes en que la reac-
de Santos se produjo ante de
a una
batallón
la
entrevista
resistencia opuesta por los je-
de la
vuelta al país del ex dictador y con
comando de
la
ella
que podría posibles
resultar
la
cambios en
el
fuerza de línea.
Latorre se apresuró a rechazar
la iniciativa que se le atribuía. dada por Santos decía en un telegrama al señor Bahamonte pero como usted comprenderá deseo que el público sepa que yo no solicité conferencia alguna, sino que ise me propuso, y si yo acepté fué por;íiue para ello se invocaban intereses generales del país que no podía desatender. Usted sabe cuáles eram mis intenciones al acceder al pedádo de Santos y que en ello no me guiaba ningún interés personal. Deseaba sólo hfcer constar, en presencia del obstinado Ministro, que su presen^
«No conozco
la
—
contestación
—
Anales de
238
en
cia
universidad
la
gobierno es funesta a los intereses generales del país y para que nombrara al doctor Vidal
el
qu^ debía dejar en libertad Ministros que respondieran a
verdaderas exigencias de
las
la
Re-
pública.»
Jjit
i)ie¡)otencia tle Santos.
Las últimas palabras del telegrama de Latorre dieron lugar a manifiesto
u;i
Presidente
de]
no
quien
A^'idal,
quería
aparecer
como den Pedro Várela en 1S75. «Faltaría a uno de los primeros deberes que me impone
(oo.ctu
rácter que invisto
—
decía
el
—
doctor Vidaí
ciosamente que don Lorenzo Latorre proclame a en
me
que
ción -el
del poder
carteras
a
reuniesen condiciones icres.
Al
usar de
faz
^a
de la Na-
la
ejecutivo y por
personas que
más
en
eta
armonía con
prerrogativa
razón no confío
en concepto de las
la
la,~
oposición
aspiraciones poT,a-
constitucional
de nombrar
Mi-
interpretar la verdadera opinión del país conservando
nistros creo
mi lado como el más valioso y firme apoyo de como un elemento de orden y como la garantía más
a
libertades públicas
ciudadanas,
ca-
encuentro violentado por mi Ministro de la Guerra
ejercicio
respectivas
el
consintiera silen-
si
al
fianza y en quien está representado
Santos ejercía efectivamente
el
autoridad,
eficaz de ias
derechos políticos de los
y del ejercicio de ios
coronel Santos, que es
la
que merece mi entera con
el
ejército.»
el
dominio absoluto de
la
situación
no se había hecho proclamar dicta/dor era porque no lo necesi taba. Tenía de su lado al Presidente Vidal, disponía a su voluntad Si
todos los puestos públicos, los jefes del
di-
ciegamente l/drdinado.
mente
y
La
Cuerpo
el
Liegislativo
había quedado profunda-
dictadura, por otra parte,
desiprestigiada
con
los
actos
de
le respondían enteramente su-
ejército
estaba
1-e
barbarie
de
la
época
de
Latorre.
Por efecto de sus exigencias en
la
de Policía, renunció colectivamente sidente
Vidal aceptó todas las
Santos, porque sin sola hora
En
Santos no
provisión de varias Jefaturas el
Ministerio en 1S81. El Pre-
renuncias, le
con excepción áe
hubiera podido
co
la
de
en la Casa de Gobierno.
otra oportunidad corrió la noticia de desavenencias entre
Ministro de la Guerra y los jefes de batallón.
dada
la
permanecer una
absoluta homogeneidad y
reinantes,
y
el
No
el
podía haberlas
el perfecto acatamiento jorárqnicomandante Máximo Tajes, que era el jefe de
Anales de
nmyor
autoridad,
apresuró
se
Universidad
la
a
rectificar
i239
rumor
el
forma
en
concluyente.
—
—
agregaba puedo asegurar que hoy como «En cuanto a mí mañana como hoy mi aniistáti ai coronel S;.ntOá no variará.
ayer y
Es grande y sincera.» ¿Qué mayor í;uerza podía
apprta.rle
.
la
aiciadura?
«Hicieren su ¿poca los gobiernos personales y los dictadores
Santos
decía de
en
Itazón»
«Lili
mayo
—
y
de
1880
a
ios
para algo pueaen lecordais; en
si
para robastecer y estimular condenación más absoluta.»
es
patriotismo en
el
Foco tiempo después de escritas ssas líneas se tjlomé Bossi paia sugerirle la tadura de
109
cooperación del
de «El
directores
idiea
ie
el
—
Siglo» y
futuro
el
sentido de la
acercó don Bar-
de un prebiscito y de una
dic-
don Tomás Gomensoro con ia mismo Santos y de ciudadanos de la talla de José días
ejercida
por
Pedro Ramírez. La respuesta fué fulminante: el señor Bossi perdió el Consulado del Ecuador que desempeñaba y se emibarcó con
rumbo
Buenos Aires para escapar a
a
las
amenazas que había
recibido.
Pequeños
movimieiííos
revolucionaí'ios
que
en
estallan
este
peiíoíio.
A
principios de 1880, cuando Latorre se instalaba en
que todavía
pero sin
traspuso del
el
hecho hubiera
trascendido
una partida revolucionaria
Fr g,nciscfl^ Frp'n'
hijo del caudillo del
bre asesinado durante
h'
in^ii
ra
en
el
exterior,
mando mismo nomCuartel de Dragones. La
la frontera brasileña
pajr[já.n,
Yaguarón
al
al
San Eugenio dispersó a los revolucionarios después d«^ un tiroteo en que murió el capitán que los comandaba. Entre los papeles secuestrados a Fi'enedoso figuraba una proclama en la qus Policía de
O',
coronel Manusl Caraballo,, jefe del movimiento, hacía
el
proceso
de Latorre en la creencia de que Santos y Vidal gobernaban a aU
sombra.
—
de:ía Pisamos por tercera vez el suelo de nuestra patria para emprender una nueva cruzada libertadora contra la tiranía que la mancilla y la degrada... Es necesario derrocar la ominosa tiranía del coronel Latorre y de sus huestes pretorianas que aclaman ahora por su orden al senador
—
Caraballo
Vidal.
Y
adherir
a este el
movimiento que inicia el Partido Colorado puede Blanco, conservando si así lo desea sus en-
Partido
señas y sus divisas.
Anales
L^U
ie
la
üniversidaJ
Al año siguiente fué de nuevo invadido el departamento del por un grupo revolucionario de veintitantos hombres al
Salto
mando te
Simón Martínez. El grupo fué disuelto frenel campo tres muertos y
del coronel
Cerro del Bichadero, dejando en
al
dos heridos que fallecieron al día siguiente, según el parte comandante Leleu al coronel Villar, jefe del regimiento de
del ca-
ballería allí destacado.
Fuera de estos dos peiqueños movimientos ahogados al nacer, anotan los anales militares de la época un asalto de los secuaces de Nico Coronel con divisas verdes y el lema «Divino Espíritu Santo», a raíz del cual fueron muertos cinco de sus componentes y dispersados los demás por la Policía de Tacuarembó, y un incidente entre el Jefe Político de Cerro Largo don Coralio Pereira y el comandante Farías jefe del batallón de sólo
destacado
línea
en
las
inmediaciones
de
Meló,
a
de
propósito
compañía urbana, exigida y obtenida a viva fuerza por el comandante Farías en cumplimiento de un telegrama del Ministro de la Guerra que estaba desautorizado por la
entrega de la
otro
telegrama del mismo Ministro
señor Pereira.
al
Asesinatos y desapariciones.
En cambio hubo Que según cripto,
se
mensaj-e del
el
perturbaciones
violentas
nacionales con motivo de
la
populares
e
inter-
reaparición del sistema del terror,
que antes hemos trans-
doctor Vidal,
había hundido para siempre
con la dictadura.
Las matanzas del Paso Hondo.
A
fines de 1880
corrió la noticia de que el
comandante Joa-
quín Santos, hermano del Ministro de la Guerra y jefe del batallón 2." de Cazadores que estaba destacado en Tacuarembó, había aprehendido y hecho lis
desaparecer
capitán brasileño Fide-
al
y a tres compatriotas suyos. El comandante Santos se apre-
suró
a
rectificar
la
noti?ia
diciendo
que
el
capitán
Fideiis
y
sus tres parciales habían sido aiprehendidos por sus mauifiostas v'.nculaciones
aparecido,
con Latorre, pero que Fideiis,
estaba vivo
Contestando
una
en
el
cuartel
interpelación
dijo a su turno el Ministro de
del
de
2."
la
lejos
de haber
Comisión
Gobierno que
des-
de Cazadores.
Permanente
Fidelir. era ei
único
Anales de
Y en
preso.
Universidad
la
concepto de que era
el
único preso fué puesto en
el
en virtud de la tesis sustentada por
libertad
manente
negatoria
sustituirse
a
Pero de
derecho
del
tribunales
los
cioumente decreto
con
tal
para
batallón
militare^.
motivo un
sobreseimiento
de
Comisión Par-
más hasta
hablarse
a
volvió
Paso Hondo, que era predonde se habia efectuado la aprehensión,
paraje
el
instruyéndose
ia
de
jefes
los
presos no
otros tres
los
de
aparecieron tres cadáveres en
rjML'
241
el
terminó
que
sum.ario
pedido
a
Militar
Fiscal
del
un
con
coronel
E?rdas.
De
—
denuncias
las
—
decía
Bandas en su dictamen
coronel
el
en el Paso Hondo del Arroyo Malo por donde pasaron las fuerzas del Batallón 2." de Cazadores al mando del coronel Santos; pero nada saben acerca de ello los jefes, oficiales y clases del batallón que fueron resulta
llamados a quete
declarar,
cadáver
tercer
ui
hallazgo
e\
del
e
que
dos
cadilveres
igual
fué
puede
cosa
encoittrado
Cazadores
de
2.°
de
conducía
decirse
respecto
posteriormente.
varios
desertorc-
cuerpos de la guarnición, pero esos desertores fueron dos
a sus respectivas
Después de
que
el
ioí
entrega-
denuncias del Paso Hondo, se prorajeron las
las
como
pi
de
unidader-i.
de Corrales, otro de los campamentos del
aparecía
de
El
teatro
Gobierno
de
sangrientas
modificara sus
luta inocencia de
los
jefes
de Cazadores
2."
escenas,
declaraciones
sin
acerca
qu-.í
conseguirse de"
Ja
abso-
y oficiales responsables de las ma-
tanzas.
Consulado Brasileño no satisfecho con el testimonio de las protagonistas de esas matanzas, empezó a llamar testigos y a formar un nuevo expediente en el que los Pero
el
interesado
hechos latorio
de
sangre
aparecían
perfectamente
de la Cancillería Imperial
elevaba a 16
el
número de
los
aclarados.
El
correspondiente al año
ultimados en
el
Re-
1881
Paso Hondo y
Corrales.
Hubo que que
el
reabrir el sumario,
aunque
sin eficacia
alguna por-
auditor de guerra, dejando de lado las pruebas presen-
tadas por la Legación Brasileña, solicitó que se mantuviera decreto
a
el
de sobreseimiento.
Nuestro Ministro de Relaciones Exteriores se dirigió entonces la Legación Brasileña pidiéndole que diera por terminada su
reclamación,
como medio de que
desenvolver su acción con toda T.
VII-
16.
la
el
Gobierno
Oriental
tranquilidad que
el
pudiera país re-
Anales de
242
—
quería. «Las víctimas
acusar
para
levantar
contestó
—
Legación
la
Pero
verdugos...
sus
a
Universidad
la
no
el
pueden
se
Gobierno
no
puede tomar una decisión definitiva sin examinar por sí mismo todo el proceso en que se funda la inocencia del señor Joaquín El
Santos».
embargo, y
enterada
ser
nuestra Canciillería
a
del
ciales
de
degüello
vez que una
la
sobreseimiento
de
decreto al
de
su
nuevas
d-eclaraciones
soldados
brasileños
hizo la
de
en
el
sin
esperar,
Legación pasó presen-
testigos
Paso Hondo,
a
autoridades
decía que «las
protesta en la que
contener o castigar a los criminales instauprocuraban «por medio de suma-
orientales lejos de
rándoles procesos
no se
contenido
regulares»
defectuosos encubrir la verdad».
rios
de esa protesta el sumario entró en actividad por tercera y hasta por cuarta vez, sin que el Gobierno se dedidiera a castigar a los jefes y oficiales culpables, que eran re-
Como consecuencia
puestos en sus cargos a raíz de cada decreto de sobreseimiento. Al tener conocimiento del último de esos decretos, dictado
en setiembre de 18S3, la Legación Brasileña resolvió exigir la destitución de los culpables.
«Yo no juzgo coinducente tomada la resolución
—
cutir
decía
en
Ministro
el
consejo
últimas diligencias judiciales a que
el
—
dis-
sobre
.as
Alen^nr
Ministros
de
Gobierno Oriental mandó
conocer los atentados cometidos en 1880 en TaMi objeto es únicamente declarar a V. E. que el Gobierno Imperial no se conforma con la impunidad que la citada resolución decreta en favor de los oficiales acusados de los
para
pioceder
cuarembó...
referidos puestos,
inmediatamente son
el
litar
que ellos sean destituidos de sus eliminados del ejército o bien que salgan
atentados y exige
quedando
así
territorio
del
de
la
República.
comandante Joaquín Santos, primer
destacada
Corrales,
en
capitán
Esos oficiales
jefe de la fuerza mi-
Esteban
Cristy
que
susti-
tuyó al anterior en la primera noche de los atentados, teniente Alemán comaindante de la guardia de esa misma noche, y teniente Lagos jefe
de la escolta de los reclutas que
Paso Hondo.» Respondió nuestra fuerza intimidaba
interés
que el Poder Ejecutivo carecía que ya había pasado la época en que
Cancillería
de facultades judiciales; la
acampó en
a los países que carecían de ella;
nacional herido
producía prodigios
cuando
lo
«que
el
acompa-
ñaban la razón y la justicia»... Pero invocando a renglón seguido los intereses de la paz entre los dos países y la necesidad
»
Anales de
universidad
la
243
que ambos tenían de vincularse por intereses y conveniencias ccmunes, concluía por reconocer la procedencia de las medidas Legación. Véase en qué términos:
la
(!e
Gobierno decretó con fecha 18 del corriente y publicó en
«lEl
todos
diarios
los
de la Capital
Cazadores comandado por
el
disolución
la
coronel don
Batallón
de^l
2.'
de
Joaquín Santos, que-
dando por ese hecho separados del servicio activo del ejército los que fueron motivo de acusación por parte del Gobierno
oficiales
y aceptó la
Brasileño,
ese jefe, todo lo
petición
de baja
absoliita
cual importa una resolución
y trascendencia que las exigidas por
del
ejército
de
más extensión
de
Gobierno Imperial
el
Tres años había durado esta controversia diplomática, desde fines de
1880 en que se produjeron las escenas del Paso Hondo
y de Corrales, hasta fines 2.°
llón
de
en
1883
Cazadores, absorbiendo
de
el
que fué disuelto
último año
del
Bata-
el
gobierno
do Vidal y los dos primeros años del gobierno de Santos. Pero
hemos
hecho
todo
verdadero jefe de
le
teniendo
extracto
administrajción el
Vidal
Ministerio
había parecido oportuno pasar
que
cuenta
en era
el
propio
de la Guerra a
la
el
coronel
porque
Presidencia de
República, como recién lo hizo el 1." de marzo de 18 82. La prensa de la época está llena de cuadros espeluznantes de
sangrientas escenas del Paso
las
das la
los 1¿;
su
que entonc.es ocupaba
Santos,
todavía no la
la
Hondo
y
de
Corrales,
referi-
Consulado Brasileño, que explican insistencia de la Cancillería Imperial en pedir el castigo de autores a despecho de los sumarios con que el Ministro de Guerra quería salvarlos. Varios años después, en 1887, «El por los
declarantes
del
un testigo presencial de esos que decía en ellas: «Un mucihacho de 13 años, brasileño, que fué cazado con destino a la banda de música, fugó. Fué aprehendido y condenado a recibir 5 00 azotes que le fueron aplicados sin piedad hasta arrancarle pedazos de carne con las varas. Luego empezó la caza de hombres para la remonta del batallón Una ncdhe se denunció que trataban de evadirse los prisioneros, lo que bastó para que el señalado como cabecilla fuera condenado
Día» publicó cuadros.
Y
las
declaraciones
de
véase un extracto de
lo
.
.
.
a
sufrir las torturas
repeler
muertos otros
hasta
la
agresión
dos
de
los
del
.
.
cepo colombiano. La víctima trató de
entablándose brasileños.
una lucha en Poco
después
la
que
fueron
fueron acotados
cuatro brasileños y uno a uno derribados a garrotazos hacerles saltar los sesos. Después de degollados fueron
Afialea de
244
Universidad
la
arrastrados los seis cadáveres hasta y
denunoiante
El
enterrados.
alli
la
de
costa del arroyo Corrales la
conspiración
real
o
su-
puesta, que era brasileño, fué también ultimado a puñaladas...
Algunos días más tarde salió una remesa de cazados con destino fi. Montevideo y al llegar al Paso Hondo fueron asesinados tres ce ellos por la tropa que los conducía a título de que habían querido fuigarse».
La desaparición
fie
Sánchez Caballero y
el
asesinato de Saii'a-
sina.
Un año después, a fines de 1S81, durante la efervescencia producida por las sangrientas escenas de Paso Hondo y Corrales, clesapareció de San Fructuoso, donde estaba radicado, un joven español llamado El
Jefe
Manuel Sánchez Caballero. de Tacuarembó don Manuel
Político
arrestado a Sánchez Caballero bajo
soborno a
policía
la
la
Suárez
había
acusación de tentativa de
de su departamento, y luego de mantenerlo
varias semanas en la cárcel lo había enviado a Montevideo bajo
una segura
custodia a cargo del Comisario Juan Sosa.
Pero
el
preso no había alcanzado a llegar a su destino por haberse es-
capado juntamente con un guardia civil. Tal era la versión oficial. los que estaban al corrierute del asunto afirmaban en
?
Todos cambio
,que Sántliez Caballero
había sido martirizado en los ca-
labozos policiales y que el viaje a Montevideo había sido ideado con el único propósito de ultimarlo en el camino y hacer des-
aparecer su cadáver para que no quedaran rastros del crimen. El
doctor
mentos
la
Juan José Segundo,
Fiscalía
del
Crimen,
que se
desempeñaba
apresuró
a
en
pedir
esos la
mo-
instruc-
ción de un sumario en el que luego de acumulados todos los elementos de juicio que podían ilustrar a los Jueces, presentó un escrito por el qu3 imputaba a don Manuel Suárez. a la sazón
miembro de la
la
Cámara de Diputados,
el
atentado que envolvía
misteriosa desaparicióTi de Sánchez Caballero.
—
Todavía está por comprobarse el asesinato decía el doctor Segundo por no haberse hallado el cadáver. Pero lo de la fuga es una grosera farsa. Se trata de un homicidio alevoso en
—
que están complicados
el ex Jefe Político Suárez y el Comisario enemistad entre el Jefe Político y Sánchez Caballero y para la prisión se fraguó un conato de soborno al sargento del piquete urbano v una vez consumado el arresto vino la
Sosa. Existía
Anales de
desaparición del preso.
nencia en
cárcel de
la
víctima so quejara
la
pretexto de traerlo a
el
timarlo en
malos
se le sometió a
trado. Sán'Cihez Caballero fué sacado de la cárcel a
con
su perma-
Hay que agregar que durante San Fructuoso
dando lugar a que
tamientos,
"245
universidad
la
tra-
Juez Le-
al
media noche
Capital, pero realmente para ul-
la
camino.
el
La Cámara de Diputados no hizo lugar al pedido de desafuero del ex Jefe Político de Tacuarembó, invocando que no existían pruebas de culpabilidad y que tampoco estaba justificado el asede Sánchez Caballero, y para calmar el vocerío del país la prensa algunos de los antecedentes ?„
sinato
que exigía justicia envió del proceso
.
doctor Segundo, que juzgaba que sólo se había sacado copia de algunos párrafos truncos de su escrito de acusación, hizo llegar a la prensa el texto íntegro de ese escrito con
El
Fiscal
una carta en que rechazaba das contra
él
en
imputaciones de parcialidad lanza-
las
recinto parlamentario.
el
Esa publicación fué castigada
por
Cámara de
la
Diputados
con una ordsn de arresto por trointa días que la Policía tuvo que
cumplir a viva fuerza, porque
pañar
al
doctor Segundo se negó a acom-
el
«que
Comisario diciéndole
a
sólo
r;i.stro
lo
arrancarí&n
de la Fiscalía». El Tribunal se
en
dirigió
acto
el
Poder Ejecutivo advir.
al
tiéndole que había adoptado las
providencias del caso con motivo
de
fiscal
la
que
de
publicación
el
instituciones,
vista
la
debía dejarse
arresto
sin
doctor
del
efecto,
Segundo, pero
«en salvaguardia
de las
de las garantías individuales, de las atribuciones
de los Jueces y Tribunales y de la misma independencia de los Poderes públicos». Y ia Cámara de Diputados revocó entonces 3U orden.
Varios venia a estaba del
meses la
al
coronel
después
Cámara
frente
de
la
Fiscalía.
Manue^ Suárez pidió Segundo ya no
don
doctor
El
Había sido
Santos en otro incidente sobre
naremos al ocuparnos de e; nuevo Fiscal que era o!)tuvo
diputado
el
para vindicarse.
que fuera absuelto
la el
el
la
destituido
administración de doctor
dicho coronel, y
Muñoz Anaya
Carlos
a pedido
prensa, que exami-
pidió
acusado y que se sobreseyera en
y la
causa.
La desaparición de Sánchez Caballero
—
las desapariciones de la dictadura de Latorre
país y muy especialmente en el seno de española grandes y legítimas protestas.
^1
la
un
—
eslabón
más de
provocó en todo
nunievo.'^a
población
Anales de
24 (j
centenar de españoles de Tacuarembó se dirigió a la Lega-
Un
de
ción
universidad
la
su
afirmando que
país
la
prisión
Sánchez Caballai'O
de
que realizaba trabajos subversivos contra
bajo pretexto de
or-
el
den público, había sido dictada a raíz de una carta injuriosa contra el Jefe Político. Agregaban que el preso, que estaba sometido a
procedimientos pedido
había
sin
en la cárcel
inquisitoriales éxito
para comprobar personalmente que
ción
San Fructuoso,
de
que hiciera una
Juíz Letrado
al
lo
mantenían en
i'nspac-
cepo,
el
y que al tener noticias de que proyectaban trasladarlo a Montevideo y temiendo que lo asesinaran en el trayecto había pedido también sin éxito que lo enviaran a su costa en la diligencia de pasajeros.
En
Durazno,
el
donde con igual ardor se recogían adhesiones atacado
p-ara pedir el castigo de los autores de la desaparición, fué
muerto a balazos don Silverio Sarrasina, uno do los vecinos oue encabezaban la protesta. El Jefe Político don Juan José Mai'tínez al comunicar el suceso al Ministro de Gobierno lo atribuyó a querellas entre españoles y denunció como autores del asesinato a Ramón Maimó y y
a
individuo que había desaparecido.
otro
seccional
saría
establecíase
En
el
parte de la Comi-
Sarrasina había
que
herido
sido
por
noche y que habían sido arrestados Maimó y un sereno que a pesar de haber presenciado el incidente no había prendido a sus autores. Pero como la prensa y la opinión dos individuos a las 10 de
la
sostuvieran que las autoridades locales no eran ajenas
pública
asesinato,
fué
al
Durazno en 1883
Inspector de
el
Policía
a
al in.-5-
un sumario administrativo y ante ese funcionario declaró don Manuel de Campo, yerno de Sarrasina, que éste había sido llamado una noche al local de la Jefatura y allí amonestado y
truir
amenazado
consecuencia
a
pañola pensaba enviar a
de la
protesta
que la colectividad
es-
Legación con motivo de la muerte 'e Sánchez Caballero, agregando que el asesinato había ocurrido tres cuatro días
o
La denuncia
la
después de ese contra
llamado.
Maimó emanaba
del propio
Sarrasina, quien
había manifestado pocos momentos antes de morir que balazo tio
en que estaba apostado
uno Ce tamente días
los
segundo
participación
el
si-
sereno de aquella manzana» y que
en los sucesos
Maimó negaba aunque
se
absolu-
sabía
que
una de las reipresentaciones de los asesinato de Sánchez Caballero. Y en cuanto
había roto
pañoles contra su
el
dos agresores era Maimó. Pero
toda
antes
sereno
el
había recibido «como a seis pasos más o menos del
lo
declaración
se
limitaba
a
establecer
que
había
ss-
ul
perse-
Anales de
guido a
los
la
universidad
247
«que eran dos desconocidos». Pasado
asesinos,
Crimen
el
sii-
Juan José Segundo sostuvo decía este funcionario la inculpabilidad de Maimó. Sarrasina lia declarado que entre él y Maimó no existían moel Fiscal tivos de disgusto y su referencia puede emanar de confusiones explicables dada la obscuridad de la noche, ya que según el testimonio de los demás testigos al oirse las detonaciones estaba Maimó mai'io
Fiscal
al
del
doctor
—
—
a
cuadras de distancia del teatro del suceso.
varias
Hubo que dictamen
Juez del Crimen
conduzca
Y
al
desaparecido
manteniéndose
—
hasta
en reserva
los
parte
la
dos
la
—
causa
decía
el
aparición de algún nuevo dato que
la
esclarecimiento de los autores
terminó
así
de ese
dictar decreto de sobreseimiento en presencia
fiscal,
por
judicial
agresores
a,
d-el
vista
y
crimen. de
falta
Habían
pruebas.
paciencia
del
guardián
orden público, como luego desapareció, según las afirmaciones
del
mismo guardián, el único testigo predrama al que la justicia tenía que poner
insistentes de la prensa, ese sencial
sangriento
del
término en forma tan poco ejemplarizadora.
Quedaba todavía en juego la diplomacia, que no se resignaba a como hechos corrientes y normales la desaparición de
aceptar
Sánchez Caballero y el asesinato de Sarrasina. El Ministro Español señor Llórente Vázquez inició su reclamaen marzo de
ción
18íS2
con una nota
en
autoridades policiales de Tacuarembó por
que acusaba la
así
a las
desaparición de Sán-
chez Caballero: «V. E. sabe que en la cárcel de
de un mes
el
Tacuarembó gimió durante más
español Sánchez Caballero sometido a tratamientos
inhumanos, que
él
Manuel
Jefe
atribuía
a
la
enemistad que
le
profesaba don
departamento y actualmente diputado por el de Montevideo. La carta en que aquel desgraciado revelaba esos malos tratamientos está hoy original in mi poder y publicada en aquella época en un diario de la Capital a
Suárez,
Político
entonces
de
aquel
quien venía dirigida. Creí de mi deber llamar sobre su conte-
nido
la
llero
sería
atención
de V.
entregado
a
E.,
sus
quicen
me
jueces
ofreció
naturales.
que Sánchez Caba-
Lo
fué,
en
efecto,
pero sin cesar por eso de ser víctima de los mismos tratamientos,
como
lo consignaba en otra carta, también original, que como ía primera tengo en mi poder, sin que a sus quejas diese oídos el Juez Letrado que entendía en su causa. Llegó al fin el momento de trasladarlo a la Capital, momento temido por el preso que en
esa
misma
niendo
al
carta presentía que sería
el
señor Suárez animado de las
de su desaparición, supo-
más
siniestras intenciones.
Anales de
248
la
Universidad
Procura eu vano rodearse de mayores garantías que las de la Policía y pide en vano ai Juez que aunque a su costa le consienta hacer
viaje en diligencia
el
comodidad. Pero
1?.
sin descuidar las precauciones necesa-
para su custodia. Buscaba
rias
confía a ésta
la
seguridad para su persona, no
Juez que tenía ciega confianza en la Policía encargo de trasladar el preso, y las predicciones
el
el
de éste se cumplen. Desapareció entre las manos de sus guardiaesto es lo que conviene aclarar.
nes, y
Sosa,
y
Sábese que Sánchez Caba-
fué arrancado de su calabozo por los Comisarios Gaudencio
llero
el
negro Melitón ordenanza del señor
Suárez,
un Fe-
y
no faltando quien asegure que a esa nocturna expedición concurrió también el señor Suárez, y digo" nocturna, señor Ministro, porque la hora elegida para emprender el rreira alias «el rabioso»,
viaje fué la de 11 de la noche y no con el propósito de ocultarlo, puesto que llamó la atención por lo inusitado el redoble de tam-
con que sin duda quiso anunciarse
bores del
preso
de
Hasita
cárcel.
la
denuncia
prisión, notoria la
aquí
todo
al
vecindario la salida
es
notoria:
sometido, notoria la sospecha del preso sobre
aquí
el
todo
la
rencia de los encargados de custodiarlo, ante su
ella estaba
que &e
fin
hora extraña de su salida de aparece sombrío y solamente aparece
raba y notoria
la
sa
notoria
de los tormentos a que en
clara
la
depa-
le
cárcel.
Desde indife-
desaparición,
do
que no se hubiera tenido la menor noticia si la prensa no &9 hubiera hecho eco de los rumores siniestro-s que sobre ella circula
laban y
si
los
españoles
de Tacuarembó
no
hubieiran
los
con-
firmado.»
Ocupándose luego cía
el
como en todos
«Allí,
ren
del
asesinato de Sarrasina en
el
Durazno, de
Ministro Español:
de
reunirse
los
departamentos de la República,' trata-
españoles para firmar
una manifestación de que tiene la honra de representar al gobiierno de S. M con motivo de la tenebrosa desaparición de Sánchez Caballero. Por motivos que ellos y el Jefe Político conocerán, desistieron de adhesión
los
al
,
aquella idea y resolvieron recoger las fármas a domiciJio. No sé qué espíritu de desconfianza dominaba al Jefe Político. El caso es que hizo comparecer a su presencia a Sarrasina que tenía una
de las
listas,
tenido
y
le
exigió el escrito que llevaba, enteróse de su con-
encontrándolo
sin duda inocente se lo devolvió dejánHoras desipués aquel desgraciado caía herido d» dos balazos que una mano aleve le disparara, y slmultáneamenta
dolo en libertad.
desaparecía
el sereno que podía dar razón de los asesinos.» Transcurridas algunas semanas se dirigió nuevamente el señor
Anales üe
249
universidad
la
Liorente Vázquez a nuestra Cancillería soUcitanüo estas cinco cosuk:
miembro de
simietido
tón
Jfife Político de Tacuarembó don Manuel Cámara de Diputados a la sazón, para 33?
desafuero del ex
el
Suárez
a
la
justicia
la
ordinaria;
Comisario Gáu'dencio;
del
prisión
la
del
ordenanza Meli-
un exhorto a Buenos Aires para obtener
Silva;
susipensión
la
entrega
la
Juez Letrado de Ta-
del
cuarembó doctor Várela Stolle; la suspensión del Jefe Político de Durazno coronel Martínez. Esa nota fué juzgada en los primeros momentos como un ultipropio Ministro
El
viatum.
contestando
Exteriores
Relaciones
de
una comunicación de la Cámara de Diputados declaró que la Legación de España exigía entre otras cosas el desafuero del diputado Suárez, dando con ello lugar a que esa rama del Cueroo que tenía a estudio
Legislativo,
por
el
Fiscal
por
la
cual
se
desapareciera
la
suspendía
consideración
la
hasta que
asunto
d/el
exigencia diplomática.
Los términos de
la
sustancial.
dificación
pedido de desafuero solicitado
el
Orimen doctor Segundo, dictara una resolucióu
del
nota debieron en todo caso sufrir una mo-
que
El hecho es
Ministro Español solicitando y
publicarse
al
aparecía
el
no exigiendo.
Después de esa primera reacción vino otra más formidable todavía, por la que se echaba un velo sobre los asesinaitos mediante
un simple arreglo de intereses económicos.
De acuerdo con
el
protocolo
setiembre de 1882. la
suscripto en
España daba por terminadas las reclamaciones diplomáticas relativas a Sánchez Caballero y Sarrasina, dejando a
Legación las
do
autoridades
causas» y
país
del
judiciales
nar del Cuerpo Legislativo de
época colonial
la
República
labre
Oriental,
cuya
que
suma
el
del tratado
monto de
el
tratado
debería
emisión de títulos de deuda pública de
5
de
continuación
comprometía a
se
raítificación
la
1870 y se fijaba en 300,000 pesos
dentes
«la
Poder Ejecutivo a su turno
el
los
on
proce-
ponía a cargo de la
cancelarse 9/
ajustado
créditos
sus
gestio-
mediante
^a
%
de
de interés y
2
amortización.
La Asamblea
se apresuró a aprobar todo lo obrado y en el acto
fueron emitidos los Consolidados de 1882, terminándose con ello y en forma tan inesperada los fuertes y justificados reclamos por los sucesos de Tacuarembó y Durazno.
Como
en
caso
el
del
Paso
Hondo
y
Corrales,
esos
reclamos,
iniciados bajo el gobierno de Vidal, tuvieron que ser liquidados
durante
el
gol)ierno de Santos ligado
umbilical del lii
dirección
al
primero por
mismo y único funcionario que de
los
destinos públicos
en
tenía en
ambas
el
cordón
su
manos
administraoion'ís.
Anales le
250
El ambiento de
la
Universidad
la
épora.
La prensa iudapendiente de Montevideo que había cumplido deber pidiendo
sr.
dramas
de
castigo
el
Hondo,
Paso
del
autores de
ios
los
sangrientos
Tacuarembó y Durazno,
Corrales,
se
creyó obligada también a protestar contra los actos de barbarie oue en esos mismos momentos realizaba Chile en su lucha conBolivia y el Perú.
tra
En marzo palabra
la
1881
de
hubo un mitin de protesta en
—
«Talados los feraces plantíos su dis.cur30
-K
el
que llevó
Director de «La Razón».
el
—
Muñoz
decía el señor Daniel
incendiadas las espaciosas y cómodas vivien-
das de los cultivadores, arrasadas las costosas instalaciones de la industria, rotas y destruidas las poderosas máquinas que con-
vertían
extensos cultivos
lo3
saqueados
consumo,
en ricos
tesoros
los
productos de universai destruido
acaudalado,
da!
ei
tranquilo hogar del jornalero, los hombres mutilados, las mujeahí el violadas, los niños condenados a la orfandad... He cuadro horrible que nos ofrece el ejército de un pueblo que se llama culto y que pretende ocupar el primer puesto en la civi-
res
Ijzacicn
americana.»
Cuando
ese
nr.estra prensa
ciaba así
el
^Ministro
E]
Lima
la
discurso
pronunciaba ya
se
había
reproducido
un artículo en que «La Patria» de Chile anunla lucha: «La guerra será de exterminio. Guerra va animado del espíritu de llevar a
comienzo de de
guerra
la
sin
cuartel.
Lima
será
el
Calvario de la
expia-
ción y la hoguera del castigo y de la muerte».
Y
también
las
crónicas de
«El Heraldo», otro
diario
chileno,
que describían las batallas de San Juan y Miraflores, seguidas del incendio de las casas y de la matanza de sus habitantes a bala, a culatazos, a palos o en
medio de
las
brasas y las llamas, «porque
niidie escapaba».
Otios casos internacionales. El de
a
la
barca «Pensiero».
La República Argentina estaba en pleno estado de guerra civil mediados de 188 0, por efecto de un conflicto surgido entre el
Fiesidente de
nador de
la
la República doctor Nicolás Avellaneda y el GoberProvincia de Buenos Aires doctor Carlos Tejedor.
Durante esa lucha llegó
al
puerto de Montevideo
el
buque de
Anales de
Universidad
la
guerra argentino «Vigilante», se apoderó de «Pensiero» fondeada
que
iro,
bordo
su
a
tenía
treinta
a
441
balandra nacional
la
metros del muelle Capu-
tantos
y
251
rémington
cartuchos
de
cajones
una casa de comercio que en esos momentos tramitaba un permiso de despacho con destino a la Asunción, pertenecientes a
y regresó con su botín
Buenos
a
Aires.
Ante un acto tan claro de piratería dictó nuestro u,:
decreto por
mo
ante
de
la
que se mandaba entablar en
el
Argentino
Gobierno
el
balandra
con
su
carga,
Gobierno
un
acto
que se exigía
<:n
la
el
recla-
restitución
la
enjuiciamiento
suspensión,
y
castigo del jefe de! «iVigilante» y las satisfacciones consiguientes.
Contestó
la
castigaría
Legación que daría cuenta a su Cancillería y que se jefe del «Vigilante» siempre que hubiera habido
al
aunque advertía que
violación de jurisdicción,
el
parte de dicho
establecía que el apresamiento había ocurrido en aguas ar-
jefe
gentinas.
Nuestro Ministro de
Relaciones
Requena y García se apresuró piratería se había consumado frente quín
corta
distancia
de
Era tan notorio vió de
Exteriorep.
replicar
a al
doctor el
acto
Joa-
de
muelle de Capurro y a
tierra. el
atropello que
el
gobierno de Avellaneda en-
inmediato en misión extraordinaria
Irigoyen,
que
arribándose
que se daba solución
al
al
doctor Bernardo de
mediación a un protocolo por el incidente en esta forma: retiro de las
con
su
notas cambiadas entre nuestra Cancillería y la Legación Argentina; devolución de la balandra «Pensiero» y su cargamento al pterto de Montevideo; indemnización a cargo del tesoro argen-
tino de los daños causados al del
cargamento;
«Vigilante».
dueño de
El retiro de las
la
balandra y
al
dueño
buque de guerra notas emanaba de un pedido del
enjuiciamiento
del
jefe
del
fundado en que la Cancillería Oriental había dicho en una de ellas que no admitía discusión sobre el representante argentino
hcícho ocurrido, frase que dificultaba en su concepto el
miento de
la
misión que se
("omejitnrio.s ¡«jírcsivos
le
un empleado
úol
Otro incidente ocurrió antes de finalizar
dado del Batallón
5."
cumpli-
había confiado.
de Cazadores que
Consulado el
Ai'ííentino.
año 1880. Vn
comandaba
el
sol-
coronel
Esteban Martínez, se arrojó a la calle desde lo alto de la azotea del cuartel y buscó amparo en el Consulado Argentino. El Can-
Anales de
•¿o2
Consulado don Rafael Chilavert
del
'•iiler
Universidad
la
apresuró a poner
se
ti hecho eu conocimiento de la Legación de su país y no satisfecho con ello envió a la prensa una copia de su nota en la que
comentaba
historiaba y
Un soldado
del
así
suceso:
el
de Cazadores, de nacionalidad argentina,
5."
ha buscado asilo en el Consulado y me ha dicho que varias veces había pensado en el amparo de su Cónsul, pero que lo había
temor de ser castigado
dí'tenido el
con otro argentino en
pleado
larga
historia
de
los
el
del modo brutal y cruel em«Esa es la mismo cuartel .
.
.
padecen aquedesgracia de caer
que
inauditos
sufrimientos
os de nuestros compatriotas que tienen la Los batallones se cM esos tenebrosos y misteriosos cuarteles» forman con orientales y argentinos «arrancados por mil medios 1
.
cL
.
.
su trabajo y a su hogar».
Según
del batallón
jefe
el
sólo
trataba de un soldado ea
se
eítado de ebriedad que había atropellado a un oficial y que al ver que éste desenvainaba su esipada había emprendido la fuga. Eran demasiado notorias las crueldades de los cuarteles implanla época de La torre, para que pudiera caer en el del soldado. Pero eso no atenuaba la gravídenuncia vacío la sima incorrección del empleado del Consulado Argentino al publicar los comentarios que hemos transcripto.
tadas desde
Nuestra
Cancillería
pidió
a
Legación Argentina
la
declarando
día»
mento no
le
reconocía carácter público alguno.
do
el
Y
Encargado de Negocios que condenaba
Chilavert.
a
quien había suspendido
sepa-
«la
que desde ese mo-
el
contestó
de
Chilavert,
en
ifción
en
el
^
o';e
la
pedidq
conducta
ejercicio
de
su
cargo, pero sin aceptar la conminación que se le hacía «porque
soberanía de su nación quedaría amenguada
la
como
Las
la
declinaba perentoriamente».
islas
de Gorriti y San Gabriel.
La
de San Gabriel fué vendida en
isla
tarios los señores
quien res
la ofreció
con
destino
corporación cillería
si
tastación,
en
Quevedo y Lafone el
el
no
la
declinara
18 80 por sus propie-
un capitalista argentino,
acto a la Junta de Sanidad de Buenos Al-
a lazareto.
argentina
a
si
a
Gobierno
Antes
nuestro Oriental
de
pronunciarse
preguntó
la
Cónsul y luego a nuestra Canautorizaría
que fué negativa, dio lugar
a
que
la el
venta.
La
con-
ex Ministro de
k
Anales de
Universidad
la
admiuistraciün Latorre, don Aurelio Berro, recordara por Li prensa que la isla Gorriti, perteneciente también a la sucesión .U
cuyo
a!;te
ocupada en 1880 por
estaba
Tjafone,
liecíio
pedido
liabía
él
el
comprara por 9,800 pesos. Poco después la Asamblea dictaba una rizaba al Poder Ejecutivo para comprar que
almirante inglés Rose,
dictador,
al
conseguirlo,
sin
la
isla
la
rriti,
Contra
San Gabriel y
las
islas
del
ley por la cual se autoo
expropiar
Go-
isla
la
Queguay.
proiiaganda anexionista.
la
El doctor Vázquez Sagastume fué nombrado Ministro de Rela1881. Estaba a
ciones Exteriores a fines de
Legación Oriental en
la
di,'
el
sazón
la
frente
al
emprender prensa de Mon-
Brasil y se disponía a
tomar posesión de su cargo, cuando la una correspondencia de Río de Janeiro, en que atribuía a diciio diplomático una declaración a la Cancillería
viaje para
publicó
tevideo se
según
I-rasileña,
la
cual «el Gobierno Argentino de acuerdo en
sus propósitos con los emigrados orientales se preocupaba seria-
mente
del
pensamiento de
anexión».
la
Cuestas, oue desempeñaba interinamente la
Don Juan L.
lera de Relaciones Exteriores, se apresuró a
dirigirse
cai'-
doctor
al
Vázquez Sagastume para decirle que estaba obligado a desmentir la especie
«de la
manera más formal
no era posible que
el
y pública», advirtiendo que
Gobierno Argentino estuviera en ese orden
de ideas «no sólo porque no debe estarlo bién porque sabe que
el
i3idignación todo proceder, a coartar o
—
decía
menoscabar en .
vinier.=>
lo
sino tam-
de donde viniere, que tienda
más mínimo su soberanía
pendencia que tantos y tan cruentos sacrificios doctor Vázquez Sagastume desmintió
dadas por un diario, pero a
cias
—
pueblo uruguayo reehaí;a con profunda
la
la
le
e
inde-
El
cuesta».
versión según las noti-
vez renunció
el alto
cargo que
había aceptado días antes.
La correspondencia de que acabamos de hablar coincidió la
publicación de un artículo en que
elogiaba
al
cor.
doctor Ángel Floro Costa
Gobernador de Buenos Aires doctor Dardo Rocha un banquete dado en el acorazado «Brown?>.
haber dicho en
por
que adhería a das del Río de fica
el
.
Ocupaba
la la el
idea de la reconstitución de las provincias uni-
Plata mediante una evolución natural y pací-
doctor Costa
la
Fiscalía de Hacienda y en
el
.
Anales de
254
acto tiró
el
Universidad
la
gobierno de Vidal un decreto por
tuía de su cargo
el
cual lo
desti-
—
—
que el señor Fiscal ha decía el decreto lo que importa anexionistas, ideas prensa sus por la manifestado Connacional. soberanía la a instituciones y las a un atentado «Considerando
.
.
siderando que tolerar estos bechos por parte del Poder Ejecutivo en un alto funcionario como lo es el Fiscal de Hacienda doctor Costa, importaría su asentimiento tácito a esas ideas subConsiderando finalmente atentatorias y traidoras...
T/ersivas,
aue
el
Poder Ejecutivo
es el
primero que debe anatematizar esos
propósitos que importan un delito de lesa patria...»
El Ministro de la Guerra coronel Santos, que era
estimulado
bía
la
decía
destitución,
en
que ha-
el
una carta
al
Director
de «L»a Patria Uruguaya»: «Prefiero ver a mi país pobre y miserable, pero libre e inde-
mayor y más noble de
pendiente, que es la
las
grandezas, antes
que verlo esclavo del extranjero, por más que en este caso estuviera en
el
colmo de
Sobre captura
la
prosperidad y del esplendor.»
de desertores
malhechores
y
de
marinería
la
extranjera.
Los Cónsules extranjeros gozaban desde largo
tiempo
atrás
de una franquicia absolutamente inconciliable con nuestra sob-^ranía jurisdiccional. Cada vez que los capitanes de la marina de guerra o de la
marina mercante deseaban capturar un desertor
malhechor, se dirigían a la Policía, y ésta arrestaba en
el
o
ua
acto al
denunciado y lo enviaba a bordo o lo mantenía en la cárcel a la espera de indagaciones que muchas veces insumían semanas y meses
Eran verdaderos
enteros de tramitación.
actos de ex-
tradición en los que no intervenían ni las Legaciones extranjeras ni nuestra Cancillería y para los cuales no se requerían con-
venciones ni reglas de ninguna especie. El
gobierno
de
Vidal
reaccionar
resolvió
contra
esa
anomalía
de nuestra administración policial.
«Existe
—
decía
el
Ministro de Relaciones Exteriores al Jefe
de Policía en abril de
1881
—
la
práctica
abusiva
de aprehen-
der y conservar en la cárcel pública, muchas veces por tiempo indeterminado, a individuos cuya captura ha sido solicitada por los
Cónsules
extranjeros
sin
que
las
autoridades
nacionales
co-
Anales de
nozcan y aprecien
causa de
la
Nadie puede nacionales
abuso.
las
autoridades
encarcelar ni aún internacional,
en
a
La
.
ni
Hay que
Policía
cortar
por orden de
detsnido sino
para
no está facultada
desertores salvo que exista convención
los
cuyo caso
gubernativa.
detención...
la
ser preso
ese
autoridad
Universidad
la
la
Otro
tramitarse ante la
captura debe
error
de
Policía
la
en
consiste
su-
poner que ciertas faltas o delitas cometidos en tierra por marineros de los buques de guerra estacionados en nuestras aguas deben ser castigados a bordo. Tal procedimiento importa la abdicación
de
nacional y debe sustituirse
jurisdicción
la
por
el
d«
autoridades locales que «on las competentes».
las
Límites a
Una
la
consular.
intíH-vonción
1880 estableció como norma para
ley de julio de
los fu-
turos tratados internacionales la absoluta proscripción de cualQüier cláusula que autorizara a los agentes diplomáticos o consulares a invadir nuestra jurisdicción nacional tanto en lo relativo
a
protección
la
de las
personas,
como en
lo
relativo
a
ios
bienes de sus connacionales.
Gomias económicas para lE'stablecía esa
misma
los
tratados de comercio.
ley estos dos altos y fecundos principios
encaminados a evitar que las franquicias aduaneras acordadas a la Argentina y al Brasil pudieran ser reclamadas por los demás países
a título de cumplimiento de la cláusula de
la
nación más
favorecida.
«La proximidad de importantes del
país
para
los
las
fronteras o
productos
existencia
la
nacionales
con quien se trata, deoidirán de
dentro latitud
la
de
mercados
del
territorio
de las fran-
quicias comerciales que se concedan.»
«A no mediar cia,
ijitereses especiales
no se podrá conceder a
cho de quedar cidas
por
la
en
igualdad
República».
la
de
muy
señalada importan-
potencia con quien se trata
de
condiciones
con
las
más
el dere-
favore-
Anales de
2;)(5
Organización
A
sociedades de
(lo
Universidad
la
tiro.
un fuerte De
raíz de la caída de Latorre surgió en todo el país
Faysandú
las sociedades
a favor de
inovimieuto
gimnasia.
de tiro y
primer impulso en abril de 1880. Pocos días
salió el
después se reunían trescientos jóvenes de Montevideo por inicia-
Prudencio Váziquez y Vega y José G. del Busto Gimnasia Nacional bajo la pre-
tiva de los señores
y fundaban la Sociedad de Tiro y
glamento
—
manejo de
—
La Sociedad
doctor Constancio Vigil.
sidencia del
decía
el
tendrá por objeto «adiestrar a los ciudadanos en
armas y en todo cuanto contribuya
las
el
desarrollo
al
y no se considerará vinculada a ninguno
de las fuerzas físicas... de los partidos
re-
existentes
en
el
país».
Vázquez y Vega citó el día de la inauguración 'rl ejemplo de los países que habían defendido sable en mano sus libertades y dijo que los orientales debían estar preparados para doctor
El
caso de que llegara el
el
momento
de imitarlos. Ese
mismo
día
concurrió al local donde se celebraba la fiesta inaugural la banda del Batallón 5." de Cazadores. Había sido pedida por uno de los organizadores. Pero el Secretario la rechazó, dando con ello lu-
gar a una viva polémica seguida de la renuncia de varios socios.
En
Soriano, en
Salto y en otros departamentos organizáron-
el
Pero todas
sociedades análogas.
le
ellas
decayendo o
fueron
transformándose en otras sociedades por efecto de escisiones entre sus
componentes, hasta desaparecer del todo.
orientales emigrados organiziui
JiOS
un centro
cultural en Bue-
nos Aires.
Los orientales radicados en Buenos Aires con Gómez, José Mitre y Vedia a
Carlos
mé
E. la
Ellauri,
cabeza,
los señores
nidad, bajo las nuevas perspectivas a que daba origen
de
Latorre,
apí
la
constituir
«Deprimida nuestra
la
Oriental»,
cuyo
el
derrumbe
alcance
fijaba
Patria por
la
influencia
de
las
pasiones
cooperación de sus hijos bien intencionados
de las naciones más adelantadas de debemos contribuir y nuestra tarea empieza formación de un centro de conciudadanos que educándose
levantarla
Sud América. lor
Centro
convocatoria respectiva:
políticas, requiere la
para
«El
Juan
Gomar y Bartoloresolvieron en esa misma oportuGregorio Pérez
A
al
ello
nivel
Anales de
257
Universidad
la
intelectualmente lleven la luz da ¡os verdaderos aquella sociedad política tan abatida y extraviada.
comerciando
y
a
principios
Nuestra bandera es de fraternidad y en torno de ella pueden agruparse sin recelo los patriotas. Cada nación del continente ame-
debe esforzarse por aparecer digna y engrandecerse siguiendo de cerca los pasos de la civilización. Aspiremos, pues, a ricano
que nuestro país sea de los primeros en el concurso de la labor y del progreso por medio de la fraternidad que vigoriza la unión y constituye con ésta la base de su prosperidad y de su fuerza.
Nuestras discordias, que han estremecido siempre el corazón de pueden y deben ser sofocadas por un esfuerzo del pala Patria El «Centro Oriental» sólo tendrá por objeto la difutriotismo. sión recíproca de conocimientos en los diversos ramos de la .
.
cirncia y del arte, estrechando a la vez por ese
medio nuestros
vínculos de nacionalidad.»
Los comicios parciales de 1880.
Hubo que
realizar en
comicios parciales de senadores y
1S8
diputados por terminación
plazo
del
del
mandato en algunos
casos y agotamiento de las listas de titulares y suplentes en otros.
El
movimiento
electoral
debía
a estimular
la
empezar en Paysandú donde
Presidente Vidal se apresuró concurrencia a las urnas con este telegrama al
había que elegir un diputado, y
el
Jefe Político:
«El Gobierno ha prometido al país hacer efectivos los derechos individuales y políticos de los ciudadanos y su promesa quiere que sea una realidad. Quiere también que las libertades públicas sean respetadas y que cada ciudadano en ejercicio de sus derechos sea invulnerable. El momento de cumplir esa solemne
promesa
se
le
proporciona
al
Gobierno
con ocasión
de
la
elec-
departamento de Paysandú, y su delegado inspirado en idénticos sentimientos debe secundar fielEl derecho de reunión y asociación es una mente sus propósitos de
ción
representante por
.
el
.
facultad inherente a la naturaleza
humana que
derechos naturales y positivos, puede impedir... ridad
V. S.
como
auto-
y delegado del Gobierno, debe excusarse de entender en
lucha electoral, dejando los
nadie, sin atacar
al
ciudadanos que deben representarlo en
blea...
La misión de
vación del orden.» T.
VII-
17.
la
pueblo que libre y espontáneamente eliji el
recinto de la Asam-
V. S. en estos casos es velar por la conser-
Anales de
258
Un
grupo
doctor
ciel
de
la
Universidad
levantó
ciudadanos
candidatura
la
prestigiosa
Domingo Mendilaharsu. Pero de inmediato
prendió que no había ambiente para intensa
lismo y fué tan
la
lucha contra
la
que esa
abstención,
com-
se
oficia-
el
candidatura
tan
«eminentemente popular apenas alcanzó a reunir 14 votos en la ciudad de Paysandú y su ejido, en presencia de lo cual el doctor
Mendilaharsu se apresuró a dejar la banca a su antagonista. Y en la misma forma se desarrolló el proceso electoral en los demás departamentos. El «Centro Poli tico» de Meló que. pn^sidia don Manuel Corotuvo que aconsejar
nel,
a
los
nacionalistas
la
abstención en los
comicios del departamento.
En San
de don
José triunfó la candidatura senatorial
Alfredo
de Herrera. Pero el Senado se encargó de suTjsanar la omisión en
que había incurrido Ce ese ciudadano.
«Yo no reconozco proclamación
&a
legalidad
—
mediante
la
Policía,
—
había dicho
en los
actuales
convencional, legalidad
peranza de que
el
rechazo del diploma
señor Herrera Poderes
aceptar
al
públicos
sino
que todos acatamos en
nos ha de conducir
ella
el
a
la
legalidad
la
una es-
perfecta
que el país ambiciona, como el término de estas situaciones anómalas que con sus constantes sacudimientos mantienen agitados los
espíritus,
zada
la
dividida la sociedad, alejada
la
confianza,
parali-
industria e improductivos los tesoros que la naturaleza
esparció sin tasa sobre nuestro
desgraciado país. Los vicios de
cue adolecen los actuales Poderes públicos no podrán ser extirpados por completo hasta la próxima renovación de los registros cívicos que han de ser la base de las autoridades legítimas.»
La lucha electoral de 1881. Los partidos populares que se habían abstenido de todo acto metín del 15"'de enero de 1875, resolvieron vol-
político desde el
ver a la vida
cívica
cíe
1881.
El.
Partido Colorado.
y
concurrir a
los
comicios
La fuerte agrupación colorada que respondía dfe
«El Heraldo»
—
el
de noviembre
a la
propaganda Obes
diario del doctor Julio Herrera y
—
Anales de
en
se creyó
259
necesidad de dar un manifiesto para negar toda
la
con
solidaridad
Universidad
la
gobernantes que se habían sucedido desde
los
la
(uída de Ellauri.
Véase
mas
que decía en ese manifiesto prestigiado con
lo
Lorenzo
del "general
doctor
BiatUe,
las
fir-
Román Mendoza,
José
djctor Julio Herrera y Obes, doctor Pedro Bustamante, general
Enrique
don José
Castro,
Francisco
don Fernando Torres, don
Saavedra,
miembros de
Bauza,
de
Comisión organizadora
la
los
trabajos:
El Partido Colorado nació en 1832 con ocasión de
revolu-
la
ción que entonces estalló contra el gobierno de Rivera. Su pro-
grama
es
mismo de
el
moral y material del conducentes
a
de
tividaxi
de
imlprentá,
la
garantías
las
reiunión
de
libertad
que
libertades
tres
político,
como medios imperio de
el
realidad de las libertades públicas y
la
derechos y
los
engrandecimiento
el
y adopta y proclama consecución de tan gran fin:
la
las instituciones,
entonces:
país,
individuales;
y
de sufragio,
libertad
la
Partido Blanco y los gobiernos de
el
gidos combatieron siempre hasta suprimirlas;
efec-
la
libertad
la
él
sur
respeto por el
el
principio de autoridad derivado de la ley o de la soberanía po-
pular; la sucesión constitucional de los gobiernos; la moralidad
en
gobierno;
el
cionarios; las leyes ticia;
la
responsabilidad
la
supremacía de
la
secundarias;
reforma de
pronta y
la
y criminal de los fun-
civil
principios
los
recta
constitucionales
administración
sobre
de jus-
ley electoral en el sentido de dar repre-
la
sentación a las minorías; la libertad de asociación y la libertad
enseñanza;
progreso y difusión de
la
educación moral,
telectual, material y política del pueblo;
la
instrucción primaria
de-
gratuita
ly
el
obligatoria;
afianzamiento útiles
y
de
la
crédito
del
capitales
dustria
que proimeta
miento
de
sólidas
reforma financiera y económica; del
país;
extranjeros; al
país
la
introducción
la
riqueza
instituciones
importación
o
de
bienestar;
crédito;
de las vías y medios de comunicación a través
planteamiento de un sistema municipal ministración;
la
extranjero...
El
repatriación
de
los
la
del
de el
de
el
brazos
toda
in-
estableci-
multiplicación territorio;
que descentralice
orientales
in-
dispersos
la
en
el
adel
Partido Colorado condena los atentados y es-
cándalos que se produjeron durante
conato o pretensión
de imponer a
la la
pasada dictadura y todo el despotismo
República
condena asimismo toda fusión de partidos como una gran inmoralidad política y condena finalmente como un militar o civil;
Anales ie
260
universidad
la
delito de lesa patria toda tentativa encaminada a someter a la República a un protectorado extranjero o a dar intervención en sus disensiones internas a los gobiernos de otros Estados.
El Partido Nacionalista. La Comisión provisoria del Partido Nacionalista que presidía Juan P. Caravia, convocó también a sus correligionarios a una reunión pública con el propósito de constituir la Comisión rirectiva que habría de actuar durante el período electoral. La O.on
reunión
tuvo
en
lugar
la
Esperanza»,
«Barraca
con
asistencia
los
candidatos
600 ciudadanos.
dfi
Don
Agustín de
Vedia,
más
el
de
prestigioso
votados en esa reunión, que se había rehusado a redactar un diario
de
María
filiación
constitucionalista
invocando
Ramírez,
partido coincidía con cribir
estas
la
que
del
en compañía del idea
la
del
Carlos
nuevo
Partido Nacionalista, acababa
palabras a don Alfredo de Herrera
rección de «La
doctor
inspiradora
de
es-
aceptar la di-
al
Democracia»:
«Hace ya quince años más o menos toda tentativa de volver al
pasado, de hacer revivir la tradición del partido personal y la
memoria de cío,
los antiguos caudillos,
soportando
la
pena de
la
sucumbía
indiferencia
al
nacer, en el va-
pública.
Una nueva
de errores y preocupaciones, ávida de otros horizontes, sedienta de verdad. Ya ni la sombra de los antiguos caudillos personales se proyecta sobre riuestras cuchillas... ¿Y habríamos de ir a revolver las cenizas
generación se ha levantado
para reanimar sus sepulcros y
el
después,
antiguo incendio?
vamos
libre
Dejemos
a
los
muertos en
a ocuparnos de los vivos y a levantar
el
ánimo sobre esas preocupaciones a ique sólo un insensato puede soñar en esclavizarnos, para emprender el trabajo activo a que nos empuja el espíritu de la sociedad moderna.» decía más tarde el señor Vedia iBl pacto de abril de 1872 q|ue dio a la revolución cuatro de los trece en «La Democracia» departamentos de la República, ha seguido respetado por los
—
—
gobiernos de Ellauri, Várela, Latorre y Vidal. El pacto de abril prometió fundamentalmente establecer el sufragio libre y accidentalmente adjudicó a la revolución cuatro Jefaturas, pero esa cláusula accidental no puede hacerse permanente.
Lo que
inte-
resa a los nacionalistas es que los Jefes Políticos, sean del color
que fueren, sean hombres independientes, imparciales y honrades y ofrezcan a todos garantías.
Anales de
Ja
Universidad
261
La Comisión definitiva resolvió aconsejar a sus correligionarios
concurrencia a los registros, y ese consejo
la
de
roedio
ardorosos
los
oficialismo
debates
contra
elector
cometidos
provocados sufragio
el
ahora
hasta
—
por
campaña del «No obstante en marzo
popular.
—
los
fraudes
y el
temor fundado de que continúen en adelante, en
insiste
repitió en
lo
la
decía
la
Comisión
conveniencia de asistir tranquilamente a todos los
la
mengua de
artos de la lucha electoral mientras ello sea posible sin
dignidad del partido».
la
Partido Constitucional.
El
Partido
El
que
Constitucional,
recién
surgia
a
\ida
la
en
empezó por darse un programa, y de ese programa que fué redactado por el doctor Carlos María Ramírez y aprobado por aclamación en una asamblea de 1,500 personas celebrada 1:^8 0,
en
«Skating Ring» de la Plaza Constitución, reproducimos
el
Icts
dfclaraciones que subsiguen:
«El pacto de abril de 1872 había apartado de las armas fratricidas
a
de
disensiones
las
partidos
los
Parecía
tradicionales.
El
sangrientas.
cerrado
patriotismo
y
la
el
período
prudencia
habían arribado a fundar una legalidad incontestable; y dentro de esa legalidad podían subsanarse todas las deficiencias, corregirse todos los vicios y realizarse todas las reformas que
inrndase
el
interés
esperar que
para
de la
la
lucha
de
partidos,
los
de-
Había ya motivo fundado
República.
inseparable
de
la
vida democrática, asumiría formas regulares y orgánicas, empe-
zando por regimentarse el
que
sucesión
la
imperio
el
«Y
bien:
piedad de
e:iero
todas esas conquistas, sacrificados
1875.
así
como
de las instituciones libres
sana infinencia de una progresiva ('diu-ación
]a
sin
ciudadanos bajo nuevas banderas que
de los gobiernos se operase por los veredictos
sufragio popular bajo
del
y
los
símbolo de las varias aspiraciones sociales,
f.ieran
en
la
|)olitica.'
todos estos esfuerzos fueron
noche infausta del
Cuando despuntó
la
aurora,
la
14
al
fuerza
15
de
armada
Código fundamental coloca bajo el mando exclusivo del la República, había convertido en vivac la Plaza Constitución; había depuesto al Presidente; habíale dado sucesor; había ocupado el escenario de la República para instalar
que
el
Presidente de
en
él
recho,
sobre del
la
ruina de las instituciones, de la legalidad, del de-
honor
militar
y
de
todo
sentimiento
patriótico
el
Anales de
262
de
absoluto
reinado rreras
¡Todavía está
«Comenzó
aquel
Fué
enormes,
ciones
rumbos
ni
el
drama
doloroso
día
primero
aquellas
aberraciones
ba-
políticos.
imaginación
ya
aquellas
sociales,
lleva
violencia
y
exac-
aquel vértigo
una orgia grotesca, aquel
de maldad e insensatez que palpita todavía
coiijunto indefinible la
que
de
ejemplo,
sin
criminal que hundía la República en
feu
horizontes
desborde
aquel
corrupción
aquella
venganzas,
omnipotente, sin
sin
allí!
en
años.
tinco
descarada,
fuerza
la
morales,
frenos
ni
Universidad
la
del
pu/€blo
con
el
estigma justiciero de «año
Fué después la dictadura que surge para metodizar orgía que por el momento aplaca y pacifica; que no resiste
tfirrible» la
.
.
.
en seg-uida a
la embriag-TiPz de. la
fuerza;
que ahoga toda energía
que degrada y corrompe a los ciudadanos; que convierte a la culta Montevideo en teatro de crímenes de la antigua Venecia; ique implanta el régimen del terror en todo el país y lo condena a una a&fixia en que se ahotoda
ir.dividual.
iniciativa
popular;
gan y sucumben tanto como sus libertades y derechos, sus reses y riquezas
con
titucional,
.
.
.
la
ficción del gobierno cons-
orgánico de
la
misma
vicio
el
misma
inte-
Fué por último
pr'epotencia
perso-
mismos vejámenes, las mismas humillaciones y el mismo hundimiento de las fuerzas vivas de 'a República, hasta que un día, por causas que la historia descon
nal,
la
duda,
ciibrirá sin
el
depresión,
los
dictador sombrío parece repudiar su propia
abandona su vivac y deja por el momento a la sociedad en peligro de una anarquía aterradora y de una disolución inmi-
obra,
nente... pi!:an
secuencia rif.
Y
hasta
todos estos hechos que se encadenan, que se preciel
útimo instante de suprema angustia, son la cone in/eludible de aquel motín que echó por tie-
lógica
instituciones nacionales.»
las
Subsisten dos peligros
—
seguía diciendo
el
manifiesto:
«La restauración de la dictadura con el antiguo o un nuevo dictador; absoluto de las facciones políticas y el predominio que dieron al país y al mundo el escándalo del año terrible... Para conjurar esos peligras no es una pasión de partido ni una intuición
del
momento
lo
que despierta nuestro anhelo y deter-
mina nuestra acción. Es el llamado supremo de la patria amagada hasta en la esencia de su ser, en la ulterioridad de sus destinop,
y
servarlos
ciue
de
convoca a todos los ciudadanos honrados para prela
catástrofe
que los amenaza...
Respondemos
a
Anales de
la
llamado. Queremos llevar nuestro
es!
263
Universidad
concurso a esa obra por
han pactado con como ellos, los que
decirlo así piadosa; pero los ciudadanos que no
motín ni con la dictadura prepotente huyan llegado a convencerse de su error el
podemos por
puetos, no
el
momento
y,
al
consentir en esos
ofrecer otro concurso que el
una gran fuerza moral difundida en toda la República por propaganda oral y escrita en defensa de las instituciones, de kis garantías individuales y de aquellos principios de moralidad y de orden sin cuya observancia no hay ni puede haber pueblo de
lít
y decente en
civilizado
momentos
el
XIX... Ultrapasar ese comprometer inútilmente
límite
siglo
los
actuales
de
nuestras convicciones y la pureza de nuestros móviles.
«Hállanse
disueltos
sería
los
partidos
El
tradicionales.
la
en
verdad
interés
de
desangrada por sus luchas de cuarenta años, rechaza como un pensamiento sacrilego el de la reorganización de esos Los progresos de la razón pública permiten ya por p£-.rtidos. patria
lí'
otra
rumbos Nos consideramos
parte señalar otros
ciudadanos...
pensamiento político de los y solemnemente desliga-
al
total
dos de los antiguos partidos e invitamos a todos nuestros compatriotas de corazón bien puesto a formar y robustecer
el
gran
Partido de las Instituciones libres.» Describía luego
el
cuadro económico del monipntü
con su falta
de confianza, sus alarmas permanentes, la restricción del capital, la anulación del crédito, la paralización de los negocios, la postración y
el
desaliento.
«Y no veremos desaparecer
—
agregaba
—
to-
dos esos síntomas de muerte sino cuando empiece a restablecerse la
confianza, y la confianza no se restablecerá sino con
el
reinado
de las instituciones que encadenan la fuerza al servicio de la ley bajo «1
mando
exclusivo do los magistrados que la ley
El reinado de las instituciones qué reemplaza y paraliza
mecanismo siglos.
el
el
momento con
efecto de los extravíos del
consagra.
capricho individual las reglas del
social trazadas por la experiencia y la sabiduría de los
El reinado de las instituciones con sus libertades ordenadas,
sus derechos armónicos, sus garantías tutelares, sus responsabilidades severas, sus formas mesuradas y prudentes, que constituyen ala
vez
el
lastre y el
timón de
las sociedades
que debemos a la restauración de
las
modernas... Este esfuerzo
instituciones es una aspira-
ción de libertad, es un propósito de luciha. porque las instituciones
tienen todavía enemigos numeroso.^;
pero es también un propósito
de paz y una invitación a la concordia, porque no debemos ni podencos em^jüear sino los
medios rigurosamente
pacíficos,
rigurosamente
Anales de
264
legales, y bajo la
bandera que
ciudadanos ñonrados...
Ha
la
Universidad
se levanta
pueden cobijarse todos
llegado la hora de cerrar
el
los
período de
armadas y podemos asegurar que no se reabrirá hombres de principios. El supremo derecho de revolución, Que no desconocemos, queda por lo tanto excluido de nuestro programa actual». disensiones
las
por
-la
iniciativa de los
Destacaba finalmente el manifiesto entre las aspiraciones del nuevo partido, un sistema de vasta descentralización administrativa que fortaleciera las entidades departamentales, que creara órganos de acción democrática en todos los ámbitos de la República, y
terminaba
«¡A
así:
la obra,
compatriotas!,
y
si
así
como nosotros
cumplimos
nuestra misión, los que se encuentran en las regiones del Poder bt n cumplir la suya, si en noviembre de 1881 se encuentra
sala
República en condiciones de seria libertad electoral, el Partido de las Instituciones no dejará de llevar a «las urnas su bandera y su voto, cooperando a la renovación de los Poderes públicos bajo los auspicios de la paz, para fundar una base normal y legal que sea la te
obra y la esperanza de todos los orientales reunidos nuevamenen el campo fecundo de las instituciones libres».
Con
el
propósito de fijar
el
alcance
'de
ese
programa hubo
al
año
siguiente ana nueva y numerosa reunión en el «Skating Ring».
«Digámoslo bien rez
—
alto,
—
exclamaba
el
doctor Joáé Pedro Ramí-
nadie abjura, nadie apostata en nuestras
filas:
la
comunión
do los espíritus, realizada bajo la advocación del patriotismo para ei santo propósito de restaurar y afirmar el imperio de las instituciones no necesita de apostasías ni abjuraciones, sino de convic-
Hémonos convencido de que ]a organización actual de los partidn.s tradicionales con los vicios y las preocupaciones que se han sobrepuesto y subyugado a ciones sinceras y de voluntades conscientes...
todas
las
aspiraciones patrióticas es un obstáculo para la paz, para
la
estabilidad, para el desenvolvimiento reg-ular de las fuerzas vitales de la República, para el juego armónico de las instituciones libres, para ia
consecución de los alto© fines de la asociación política... Grandes
desastres, grandes infortunios, el espectáculo de la anarquía y de la
disolución social,
el recuerdo de la tiranía derrumbada y el temor de la tiranía en cierne; todo ese conjunto infernal de calamidades que ha pesado sobre el país ha hablado a los ciudadanos con la un-
ción del patriotismo
y nos ha hecho comprender que mientras nosabsorbíamos toda la vitalidad de nuestra alma en el culto mitológico de los recuerdos y tradiciones del pasado, los vampiros otros
Anales de
universidad
la
265
y los tiranuelos nos bebíala la sangre y nos imponían su yugo; nos
ha hecho comprender, señores, que hay un interés en la actualidad de la República,
necesario restaurar, robusteciendo
e;-
vital,
supremo
interés de las instituciones que
el
el
sentimiento de
la
dignida'l
personal de cada ciudadano y dando a los partidos una organización
más armónica con
los progresos de la razón pública y
con las
necesidades imperiosas de la época... Los partidos traaiclonales en
cincuenta años de 'luchas violentas y extravíos de las pasiones exa cerbadas por la guerra han adquirido tales vicios de organización,
han subvertido de
tal
nicdo las influencias legítimas y dado
cendiente a las vinculaciones del paaado y visas, ique las
se
al
tal as-
prestigio de las
di-
han inhabilitado para responder convenientemente a
exigencias
del
patriotismo,
para contrarrestar
las
tendencias
absorbentes del militarismo y poner a raya las ambiciones desbordadas de las entidades incubadas al calor de la nefanda tiranía que proyecta todavía sus siniestras sombras desde las fronteras de
la
patria».
«Oribe y Rivera, ¡medio siglo atrás! ría
—
decía
doctor Carlos
el
Ma
Ramírez. Todo se ha renovado, todo se ha transformado. Otras
generaciones, otra sociabilidad.
Nuevas necesidades, nuevos proble-
mas, nuevo amor y nuevos antagonismos, nuevos dolores y nuevas esperanzas, nuevos ideales; pero asimismo es menester que la opinión se petrifique en las cristalizaciones de los antiguos partidos
que recorra nuestro rosario político con los nombres de Oribe y los labios!... Esa es la superstición; ese es el pasado,
j-
Rivera en
«sos son Jos partidos
y su tarea.
tradicionales!
.
.
Es un absurdo acumular,
.
Cada época tiene su misión las
perturbaciones lejanas, ya
extinguidas, a las perturbaciones inevitables del momento.
La nue-
va vida requiere organismos nuevos. Las necesidades, las esperanzas, los ideales de una época deben siempre encarnarse en un partido so pena de morir en la desorganización y en la impoten cia...
Ese es
el
buen sentido;
es el presente y
el
porvenir;
es el
Partido Constitucional». «No, no proclamamos la fusión, sino la tregua,
Juan Carlos Blanco, tria. Y si no disentimos
tor
no por igual de
fundamos en
— el
—
decía
el
doc-
tregua santa para reconstruir la papasado, no es porque lo encontremos dig-
la apoteosis
la
y de la execración, porque todo lo con-
sibilinos juicios o en insensata soberbia;
—
es porque pasado es nuestro ayer y se liga al presente como un eslabón a otro eslabón de una cadena no interrumpida... Tocarlo es renoel
var la lucha, es buscar
el
predominio de un partido, resistiendo,
hi-
Anales de
266
universidad
la
riendo, lapidando otro partido, y cuando creemos que se lia obteni-
do
triunfo, siquiera sea el del
el
faltar de la escena
más
fuerte y
un magno imperator, pero
mos, permitidme la reminisc-encia histórica, recamada áe oro y erigida en cónsul».
La denominación de Partido de después por
más
el
vez nos encontre-
con
una cabalgadura
Instituciones
las
digno, podrá
tal
cambiada
fué
de Partido Constitucional, de acuerdo con
la
acon-
lo
sejado por «El Siglo» y por la Comisi'ón Organizadora de la asam-
departamental de Paysandú.
blea
Justificando
formación del nuevo partido decía «El Siglo»:
la
y los blancos discu'^en lo que van a hacer, no hay peligro de que se trencen; pero así que mutuamente se recuerdan lo que han hecho, ya están prontos a despedazarse».
«Mientras
m
los colorados
eiectov
oti^'iailismo
prepara
su obra
de sofisticación
úv
ios
a las urnas.
Pe-
rcgistio.s cívicos.
ro
Los partidos populares habían resuelto, pues, el oficialismo elector que tenía preparada
del
omnipotente Ministro de
la
Guerra
ir
la
transformación
gobierno de Vidal en
del
Presidente de la República, estaba resuelto a impedirlo.
Empezó
la
obra .Id fraude en la víspera Je
Estaba en vigencia
registros cívicos. el
procedimiento de
iiisciiptoras y
de
jurados de tachas. La Junta Económico -Ad
ministrativa de la Capital se dirigió al
desacuerdo acerca
existía
(14)
y
gstro Cívico vigente era
del
de las pcliciales
el
posible
aplicarlo
ipertura de los
insaculación de los miembrc^ de las Mesas
la
los
la
de 1874 que establecía
ley
la
Gobierno expresando que
número de
(15), y
secciones
las
judiciales
que habiéndose formado
el
Re-
yobre la base de las secciones policiales no a
las
Bastó esa discrepancia bien
judiciales fácil
como
lo
prescribía
de arreglar, para que
el
la
ley.
Gobie'-
no dictara un decreto mediante el cual quedaba autorizada la misma Junta para prescindir de la insaculación y nombrar directar.;ente
personal de las Mesas inscriptoras.
el
Al decretar esa
ma
Gobierno una resolución de la época de Latorre, que autorizaba a la Junta para efectuar los nombramientos en virtud de haberse agotado el Registro Cívico y ser de todo punto imposibles las insaculaciones. nifiesta
violación
Llegada rizó
la
también
proceder
al
de
la
ley
invocaba
el
oportunidad de contituir el
los; jurados de tachas autoGobierno a la Junta para prescindir del sorteo y
nombramiento directo de
los
miembros
del Jurado.
De
Anales de
manera
esa
aseguraba su
compuestas
criptoras
la
triunfo
oficialismo.
el
elementos
de
267
Universidad
adictos
Las Mesas
ins-
Gobierno expedían
al
balotas fraudulentas y los jurados de tachas confirmaban esas balotas a la vez
que eliminaban del registro a
adversarios.
los
prensa de
la
Hubo en
la
la
«Me-
decía con razón
sas inscriptoras del fraude y jurados del fraude» época.
tentativas aisladas para poner
Cámara de Senadores
Don Jacinto Figueroa
diques a ese plan de fraudes articulados.
pi
dio que se dirigiera al Poder Ejecutivo una minuta de comunica-
Económico Administra
ción por la que se le advertía que la Junta
-
tiva había violado la ley de 1874 al nombra^- en vez de nortear los
jurados de tachas. El doctor Cristóbal Salvañach presentó un proyecto de ley estableciendo
minuta
procedimiento de
el
mismo año de
Registro Cívico del
tro del
insaculación den-
la
Pero
elecciones.
las
la
Figueroa fué rechazada y el proyecto del doctor Salvañach no encontró eco en la Coanisión de Legislación, la cual juzgaba que el Registro Cívico sólo podía ser utilizado después del del señor
período de tachas y no antes.
La Comisión Directiva te
Junta
la
-
del
ilegalidad
presentó an-
Partido Nacionalista se
del
Económico Administrativa denunciando la absoluta nombramiento directo de los iurados de tachas. Y
habiendo sido devuelto su escrito a pretexto del rechazo de la minuta de comunicación del senado^ Figueroa pidió a 1 Cámara de 1
Diputados que declarara que ese rechazo no constituía una reso Ilición
del
por
el
Cuerpo Legislativo. Pero
No
asunto.
quería
destruir
oficialismo elector y
consistía
el
Cámara
la
debilitar
dio
U-
largas
ai
andamiaje combinado
el
medio níenos violento de conseguirlo
en dejar que corriera
período de tachas.
el
traiululenías.
inscripciones
Lívs
ni
de los partidos
Protestas
populares.
Los ocho secciones en que entonces de Montevideo arrojaban ra
del
6,41.")
se
así:
En
el
día
el
casco urbano
de
la
clausu-
Registro Cívico y 84o las secciones del Reducto, Paso del
Molino, Cerro, Miguelete, Unión y Manga. criptos
dividía
inscripciones
en
todo
nacionalistas 1S72,
el
departamento'
1,500,
que
constitucionalistas
año de intensa lucha
En
«El-
electoral,
conjunto, 7,258 ins-
Heraldo»
300, el
clasificaba
colorados 5,458.
Registro de Monte-
video cerró con 4,828 inscripciones incluidas las 800 balotas frau
dulentas que obraban en poder de la Jefatura de Policía y otras
Anales de
268
Universidad
la
mismo origen que andaban en diversas manos. La simple comparación entre ambas cifras revelaba a las claras la magnitud del fraude oficial. Debían contarse por millares las inscripciones
500 del
fraudulentas en conceipto de los dirigentes de los partidos de opoei-
Según «El Heraldo ascendían a
ción.
más
nes
pero otras apreciacio-
2,500,
corrientes las hacían subir a 3,000 y
«La
Razón»
circular
del
pudo
conseguir
de
Jefe
mismo Cuerpo, que
de Serenos
Oficina
la
concebida
estaba
3, .500.
reproducir
y
auto'litografiada
a
vigilantes
los
}a.
del
así:
«Por orden del señor Jefe del Cuerpo procederá usted a hacer citar a todos los serenos y suplentes que sepan leer y escribir
que
para
en
inscriban
se
recomienda a
Se
fecha.
todos
usted
Montevideo, Abril 28 de 1881.
los
—
Juzgados
puntualidad
la
en
en
el
día
de
la
—
orden.
esta
Por autorización, Pedro Bo. Jefe
de Oficina.»
¡Como loi-
se
ve,
inscripción debía
la
hacerse a
la
vez en
todos
Juzgados! fraudes se cometían en
Si estos
puede imaginarse pí;ña.
la
que ocurriría en
lo
Capital de la República yi los
departamentos de cam-
lo
siguiente en setiembre
Un jurado de imprenta declaró
d¿ 18'84 refiriéndose a un caso concreto de los comicios de 1881:
«Que está probado que Antonio Mirazo, Comisario del deparde Florida, acompañado de dos ex Comisario© intimó al Juez de Paz del Sauce del Yi que inscribiese una lista de individuos que le presentó, y que habiéndose negado el Juez de Faz, por reputar fraudulenta la inscripción, le intimó que lo tamento
hiciera el
orden
invocando
Que
Juez de Paz...
inutilizar
el
registro
del
Jefe
que contenía
accediendo
Político,
está probado
entonces
que después se procedió a
las
inscripciones legales y
a
que figuraba la lista que traía el Comisario... Que está probado que el Comisario obró asi obedeciendo órdenes verbales y escritas del Jefe Político de Florida don Donato Espina.» por otro en
sustituirlo
Ante
masa de
esa gran
diversos
círculos
el
la
fraudulentas
inscripciones
idea de un mitin, segam
surgió
unos para pedir
en la
renuncia o separación del Ministro de la Guerra; según otros para declarar simplemente que la presencia del coronel Santos al frente
de ese ¡Ministerio constituía una amenaza para
quilidad del país y la estabilidad de sus instituciones; otros para
protestar
jurados de
tachas
legalmente
los
contra
que
no
la
forma
respondía
Poderes públicos.
de al
la
tran-
y según
nombramiento de
propósito
de
los
reconstruir
Anales de
Universidad
la
269
encargó de disuadir a los iniciadores del decía respiramos la atmósfera que Nuestros colegas han denunciado los el m€.dio en que vivimos... fraudes que se han cometido en las inscripciones, presentándose sr.Mados, policianos y serenos disfrazados de particulares... ¿Se ha
Pero «El Siglo»
iKitin.
«No
tenido
presente
que
ocurriera
se
la
posibilidad
que en
de
fueran
mitin
al
—
—
olvide
se
envueltos
oleada
la
del
pueblo
para produ
individuos
y conflictos? ¿Se ha previsto la probabilidad m'tin se convirtiera en un nuevo 10 de enero?... Si
perturbaciones
cir
de que
el
gravísimo
e.=te
gran
hubiera previsto,
no se
peligro
perspicacia» 'los
iniciadores
del
no acreditarían Nosotros
pensamiento
.
.
.
por lo menos no tomaríamos por nada del mundo la responsabilidad de ser los ii.-iciadores de una escena que fácilmente puede
en tragedia... Los ánimos están exacerbadísimos. ilusiones nuestros amigos, contando con la unanihagan No se midad de la opinión. Aunque tenemos por cierto que la gran m.ayoría de ésta lamenta los desaciertos de los Poderes públicos, concluir
.
.
bien se ve que éstos están resueltos a des^entenderse de las dolo r^das quejas de que diariamente se hace eco la prensa.»
Pero
era
necesario
contra
piotesta
el
exteriorizar
en
cualquier
otra
forma
la
fraude triunfante.
La Comisión Directiva del Partido Constitucional de la que formaban parte los doctores Domingo Aramburú, José María Muñoz, Aureliano Rodríguez Larreta, Juan Carlos Blanco, José Pedro Ramírez, Miguel Herrera y Obes, Luis Mellan Lafinur. Carlos María de Pena, convocó a sus José Sienra Carranza y correligionarios a una reunión en el «Skatiiig- Ring», y allí fué sancionada por aclamación una protesta que fundaba en estos tér minos la Comisión Directiva: Es notorio «que uno de los miembros del Gobierno, persiguiendo reprobados propósitos, sin círculo
partido o
la
complicidad de
político,
fraudulenta en cuerpos de línea y de algunas reparticiones públicas da dependencia, multiplicando la inscripción en todas las sec-
la
inscripción
df^
los
su
concurso ni
el
había organizado y sostenido los registros cívicos del personal
alguno
ciones judiciales
elevar total
mismos individuos hasta
inscriptos
a
el
dos y tres veces
de los ciudadanos residentes en la sección»...
esperanzas ción
de los
número de
el
de
nistrativa
se
los
concretaron
jurados
lejos
de
entonces
tachas.
Pero
a la
los
trabajos
extremo de el
número
Todas de
las
depura
Junta Económico - Admi
de insacular los jurados de
acuerdo con
la
ley,
Anales de
270
universidad.
la
nombrarlos directamente y aceptó sin examen la lista do ciudadanos presentada por uno de sus miembros para que sf-an burlados los esfuerzos patrióticos de los ciudadanos de rtfcolvió
No
es
eso
declarado que
el
Ministro que ha creado esa
todos los partidos. pública ha
.
.
sólo.
El Presidente de la Resitua-
que conspira para perpetuar el régimen de la prepotencia personal que impera en la República desde enero de 18 75, «es la más fuerte columna del orden y el protector más ción
electoral
sólido
de
y
En
de los derechos políticos del ciudadano»...
ello,
¿debe
el
perseverar en
ción o
«No
ocultamos
a
la
proclamar
Constitucional
Partido
presencia absten-
la
lucha cívica?
nuestros
que
conciudadanos
palabra
la
abstención ha sido pronunciada en nuestro seno bajo la impresión dolorosa de la desesperación y el desencanto aue producen
hechos que estamos presenciando; pero nos es grato manitambién que pidiendo consejo al patriotismo y a las lecciones de la experiencia hemos estado todos de acuerdo para los
festarles
pensar que se debe
perseverar mientras
haya recursos legales
que ejercitar y exista la más remota posibilidad de vestable-íST IsF condiciones regulares de la lucha; que la abstención de los partidos es un recurso extremo que los aboca forzosamente a la conspiración si se trata de partidos personales y puede predisponerlos a la revolución si se trata de partidos de principios; que Ifi
abstención significa un divorcio absoluto con todo
lo
que
te constituido en el país y crea situaciones extremas que
mos
que
evitar a todo trance;
la
exis-
debe-
abstención sería hoy una acti-
tud poco simpática a la opinión general del país y que no estaría absolutamente justificada mientras se tolere la libertad de la prensa y no se impida a los ciudadanos el derecho de reunirse piiblicamente,
de
comunicarse
sus
ideas,
de
confortar
sus
de formular protestas colectivas y solemnes los usurpadores de la soberanía popular.» He aquí la protesta a que nos hemos referido:
vicciones y
«En presencia
del
fraude
sistemático
cometido por
el
con-
.:cutra
perso-
nal de los batallones de línea y de varias reparticiones públicas,
de la constitución de los jurados de tachas fuera
de toda base
legal o de imparcialidad política, hechos reagravados por el nifiesto
del
presentación clara
al
columna
Presidente de legal al
la
ejército
República en en
el
orden y
el
protector
cual reconoce
mare-
gobierno del país y se de-
autor de tan violenta situación del
el
más
electoral solícito
la
más
fuerte
de los derechos
Anales de
—
[olíticos de los ciudadanos,
ante
país la
el
en menoscabo
comete
d-e
protesta contra
soberanía
la
271
Partido Constitucicnalista formula
el
más solemne
universidad
la
que ejercitándose lealmente podría restablecer i:;stituciones, afianzar la paz pública y poner ciones
menguadas que deparan personal
pugilato
ui
ción
definitiva
a
dos
entre
la
atentado que se
el
el
imperio de las
a
raya las ambi-
República
entidades
único resorte
pueblo,
del
de
espectáculo
el
militares
o
radica-
la
régimen de fuerza que hoy impera, en vez
del
de la lucha franca y leal del sufragio popular.»
Apaleamientos policiales y empastelamiento de imprentas. Las perspectiva^ no podían ser, en consecuencia, más desalenLos millaresi de inscripciones fraudulentas admitidos per las Mesas nombradas a dedo por la Junta Económico Ajdfini
tadoras.
-
tenían que ser confirmados y legalizados por los ju-
nistrativa,
rados de tachas nombrados en
la
misma forma por
corpora-
la
ción municipal.
Pero los partidos populares no se resignaroii a sufrir la desilencio. Querían patentizar la enormidad del fraude
nota en oficial
fender las
y decidieron
bondad
la
concurrir a de
los
En
inscripciones ilegítimas.
esa
obra
ron las tres autoridades dirigentes de la
nacionalista
y
la
constitucional,
de tachas para
juicios
inscripciones
las
la
la
oposición:
sobre todc
tarea de
sanea
cívicos con que deseaba completar
su pra
delegaciones constitucionalistas compuesta
de los
los registros
grama de
la
colorada,
la
constitucional
que no se daba un momento de descanso en
miento de
de-
y combatii de patriotismo actua-
legítimas
principios.
Una de
las
señores Octavio Ramírez, Eduardo Sánchez, Ricardo Tajes. Fer-
níndo Nebel y Carlos Barros, denunció entre otros casos el de ou grupo de oficiales de línea que en un solo día y en un solo Juzgado
había
propósito
de
tachado
dejar
500
correr
el
inscripciones
término
de
fraudulentas
prueba
la
y
con
el
obtener
como obtuvo una sentencia que una manera definitiva, dado el
principio admitido de que nadie
podía ser tachado dos veces; y
de varios expedientes por falsedad
de
domicilio
con ayuda testigos
de
y que
que
había
certificados el
Jurado
el
probado
legalizaba
la
esas inscripciones de
delegación
constitucionalista
autorizados por escribano anuló
declarando sencillamente que
el
invocando domicilio
público
otros expedientes
en
casa
y c
determinada
Anaces de
universidad
la
carecía de importancia porque lo esencial era el domicilio dentro sección.
la
(]•
Una
segunda
delegación
comipuesta
de
Sáenz de Zumarán, Teodoro Villegas,
señores
los
Carlos
Carlos
Arocena,
José Busto, D. O. Le Bas, Enrique A. Thode, A. G. Carafí y Augusto Serralta, hizo conocer el caso de otro grupo oficialista A.
G.
tachado a 224 secuaces por no saber leer y escribir y no estar domiciliados en la sección, de acuerdo con el procedimiento ya empleado con éxito en diversos juzgados a favor de que había
soldados
Ici>.
de
línea
desbordaban
que
agregaba que en vista de
ello
en
todos
delegación
la
resolvió tachar también a esos inscriptos por las
y a la vez por no tener ciudadanía
Jurado
entonces
escribir
a título de
extremo
otro
rechazó de
desde
día
mismas causas
en ejercicio;
pero que
el
tacha de no saber leer y inscriptos tenían justificado uno y oficio
que los el
registros.
los
constitucionalista
de su
la
en
inácripción
Registro,
el
a
de sus tachas la Comisión oficialista ob-
raíz de lo cual desistió
teniendo que se diera por terminado su expediente y se decretara el archivo del otro.
Una
tercera
delegación
compuesta
constitucionalista
de
los
señores Luis Eduardo Piñeyro, José Antonio Ferreira, Juan An-
Escudero,
tonio
caso de un
Rómulo Pareja y
jurado constituido en
Julio
denunció
Vidal
F.
ardoroso
defensor
un
de
el
ins-
que había confesado que no vivía en el domicilio que dado y que además escribía su nombre y apellido en forma completamente diversa de la que aparecía en el Registro. cripto
había
La Comisión de Vigilancia de
enterarse
de
estas
del
Partido
Constitucional
comunicaciones
y otras
análogas
luego
resolvió
que hasta nueva resolución las Comisiones seccionales suspendieran sus giestiones ante los Jurados lidad de los esfuerzos
desplegados
escandalosa violación de
ley
la
Esa declaración fué dictada considerarse el oficialismo
el
—
de
tachas,
—
decía
dada
la
inuti-
«para evitar
la
de Registro Cívico». li9
elector
de
mayo de
1881.
dueño y señor de
Ya podía
urnas Pero sus resortes de presión contra el sufragio popular, que estaban prontos, comenzaron a moverse en los mismos momentos en que la prensa publicaba el retraimiento de las las
electorales.
delegaciones constitucionales.
A
las 2
de la tarde del día 20 llegaba tranquilamente
tor Carlos Sáenz de
Zumarán, miembro de una de
nes de tachas del Partido Constitucionalista,
a
la
las
el
doc-
Comisio-
esquina de
las?
Anales de
273
Universidad
Ja
Sarandí y Misiones, cuando fué asaltado por cuatro hombres,
calles
unciales de línea disfrazados según la creencia de todo Montevideo, que lo dejaron tendido en el suelo y bañado en sangre,
desapareciendo de
Que
luego sin
Policía
la
se
por
diera
entendida
que acababa de ocurrir.
lo
de mazorqueros organizada en
Y horas después una turba
Plaza Constitución, frente a la Policía,
s-e
la
dirigía a las imprentas
«La Razón» y de «El Plata», dos de los diarios constitucioen la primera mataban a Esteban Fontán único operario que trabajaba en esos momentos, y destruían
ríe
nalistas de la época, y cl
todo
que
lo
allí
destruían todo
había, y en la segunda, que carecía de imprenta,
material de las oficinas de administración
el
y
redacción.
Con
estos
dos
de
actos
mediante
completó
que
barbarie,
mordaza
la
a
la
oficialismo electo;
el
quedaba terminadr
prensa,
período de tachas.
ei
La consigna era organizar una Asam-blea que asegurara didatura presidencial del Ministro de esa consigna se iba
de
la
Guerra y
al
la
can-
cumplimiento
por todos los medios, costare lo que cos-
tare.
Nuevas protestas de
los
partidos de oposición.
—
La abstención
electoral.
Ante semejantes desbordes de de
paciencia
Policía,
nacionalistas
los
les,
la
Véase
lo
y
que decía
la
la
resolvieron los
mazorca organizada a vista protestar
los
y
colorados libera-
constitucionalistas.
Comisión Directiva del Partido Colorado
un manifiesto que llevaba las firmas del general Loy de los señores Pedro Bustamante, José L. Terra, Federico AJbín, Fflipe Praga, Nicasio Borges, Manuel Pagóla. Carlos Martínez Castro, José Román Mendoza, Luis Eduardo Pére, Julio Herrera y Ol^es, Juan M. de la Sierra, Pedro Zas, Andréi en
liberal
renzo
Batlle
Rivas, Teófilo E. F.
Rivera,
Fossolo,
Díaz,
Agustín Castro, Wenceslao Regules, Pable
Enrique Castro, Augusto Patino, Pedro
Nicomedes
Castro,
José B. Goniensoro, Carlos relló
Juan S.
Idiarte
Borda,
Carvie,
José
José A.
Saavedra,
Viana, Alberto Nin, José María Pe-
y Augusto Acosta y Lara:
«La Comisión Directiva del Partido Colorado en el departamento de la Capital, •en presencia de los sucesos acaecidos el viernes último, que importan un ataque incalificable a la libertad T.
VII-18.
.
Anales de
274
Universidad
la
de la prensa y a la seguridad individual, se cree en
el
para protestar a nombre de
triótico de levantar su voz
deber pa la
agrupa-
ción que representa contna esos actos vandálicos que nos han
lie-
tho retroceder cuarenta años a los tiempos en que los colorados lucha-
ban y morían por afianzar las libertades públicas... Esta Comisión expresando sus propios sentimientos y los de la colectividad representa y
Que
interpretar €n
cuyas ideas cree
este
momento,
protesta enérgicament'e contra esas ataques aleves y señala a sus
autores y ejecutores, sean ellos quienes fueren, a país,
para que sobre ellos necaiga
pública que
en ciertas épocas es
cue atacan impunemente
actos cuando
Silenciar
esos
mente
nombre
el
del
al
mayor de
el
la vida, la
desprecio
el
perpetrarlos
Partido Colorado, sería
la
los
propiedad y se
execración de]
la
y
indignación
a
castigo?
los
pensamiento.
el
invoca
rebajar
.
sacrílegí
nuestro
co-
metido, hacernos indignos del puesto que ocupamos y hacer dudar
de la sinceridad de los propósitos consignados en
programa sancionado en Partido Colorado que es
noche del
la el
consentir que invoquen su
2.5
el
manifiesto
próximo pasado.
.
.
-
El
partido de la libertad pública, no puede
nombre
fariseos que buscan las
los
ti-
noche para asaltar imprentas y la claridad del día para asaltar a palos a ciudadanos indefensos... Los que tal hanieblas de la
cen no pueden ser colorados y la Comisión Directiva al protestar
Nación contra
atentados perpetrados, que Immazorca como medio de vencer oposiciones, protesta ahora y para siempre contra toda suposición de hacer solidaria a nuestra organización política de todos o cuaa la faz
pertan
el
de
la
entronizamiento de
lesquiera de los sucesos o
ejecutores,
a
quienes
los
la
acaecidos, sólo
sean cuales fueren los autores
recordará
para
condenarlos
enérgi-
camente.»
La Comisión Directiva
del Partido Nacionalista, compuesta de Juan P. Caravia, Martín Aguirre, Agustín de Vedia, José L. Antuña, Justino J. de Aréchaga, Román García, Martín Aidecoa, Juan María Pérez, Nicolás Lenguas, Duvimioso Terra, los
señores
Juan José Brid y Ángel
J.
Moratorio, decía en su manifiesto:
«Es de pública notoriedad y ciales dados a la prensa, que en la
lo
la
confirman los documentos ofinoche del 20 fué organizada en
Plaza Constitución, o sea enfrente de la Jefatura de Policía,
muchedumbre armada que paseó por
las
calles
más
centrales
la
de
ciudad a los gritos de vivss y mueras, forzó las oficinas y las imprentas de algunos diarios, destruyó sus materiales y hasta en ia
sangrentó
el
sitio
de sus hazañas hiriendo y dando muerte a
al-
Anales de
universidad
la
275
guno de sus operarios. La autoridaid encargada de garantir guridad individual y lla
la
se-
orden públicD ha dejado organizar aque-
el
muchedumbre armada; ha oído
aescargas de sus armas de fuego;
sus gritos amenazvidores y las
ha asistido a
actos prepara-
los
ejecución de esas escenas sangrientas y salvajes, cu-
torios y a la
yos directores se designan públicamente, y sólo alega en justificación que mientras tenga que respetar el derecho de reunión y no se
que
prontais
preventivas,
y
autores
sus
o
instigadores,
convirtiendo
problema que requiere una solución legislativa esenciales del orden social, ción,
dejando así
y
propiedad
la
po-
es
sucesos se reproduzcan, sin que se pueda averiguai
los
son
quiénes
tomar medidas
para
habilite
le
sible
de
primeras conquisitas de
las
suspensa
una amenaza
habitantes
los
del
país
y
la
más
civiliza-
contra
terrible
un
en
así
garantías
las
vida
la
limitándose
entre-
tanto a asociarse espiritualmente a la penosa y justa indignación
que embarga a la sociedad!... La sociedad en efecto se halla profundamente conmovida. A la brutalidad de los hechos que han tenido lugar
de
hecho. a
la
se
agrega
complicidad o la impotencia
la
Los
vez sus
funciones.
efectos.
No
seguridad para
haiy
La Administración de
de sus
ejercicio
el
Justicia está paralizada o acéfala.
El Cuerpo Legislativo no puede deliberar bajo situación violenta...
presión de esa
la
Este estado de cosas creado por
la
doble in-
de los crímenes consumados y de las manifestaciones de
fluencia la
declarada
Las garantías individuales están suspendidas de Poderes públicos que autorizan esta situación sufren
autoridad.
la
que han
autoridad pública, es insostenible ante
el
nivel moral
humanas y ante
el
grado de civilización
alcanzado
sociedades
las
y de cultura de nuestro propio país. Los partidos populares despojados de toda influencia en la marcha actual de los Poderes públicos,
deben
menos salvar
al
la
moral
responsabilidad
que
el
silencio
ciándose
al
sentimiento de indignación profunda que domina a
población honesta y culta de
la
República
...
La Comisión
protestar
como
protesita
de la manera más solemne contra los
alentados inicuos que han llenado de asombro y de indignación país
y contra
hacer efectivas
dad su
de
'.a
Direc-
Partido Nacional se hace intérprete de esos sentimientos
tiva del al
im-
en presencia de esas graves iniquidades, aso-
portaría
los
la
las
complicidad
de las
autoridades
encargadas
garantías tutelares de la vida y de la propiesobre quienes pesa la responsabilidad de
habitantes,
impunidad absoluta. Al hacer pública esta protesta
Directiva
al
le
hace
presente
a
sus
corneligionarios
la
la
Comisión
necesidad
do
Anales de
276
conservar
más que
hoj-
nunca
su
organización,
estrechando sur
y manteniendo la pureza de sus principios y de sus propósi-
filas
influencia tranquila y poderosa en todo caso
inclinar su
tos para
y en todo tiempo en de
universidad
la
He
el
sentido de los grandes y vitales intereses
República.»
la
aquí finalmente
Directiva
lo
que decía
manifiesto de
el
Partido Constitucionalista
del
Comisión
la
que firmaban
los
señores
Domingo Aramburví, Miguel Herrera y Obes, Aureliano Rodríguez Larreta, Eduardo Brito del Pino, Juan Carlos Blaaco, José Sienra Carranza, -Enrique de Arrascaeta, José Pedro Ramírez, Amaro Sienra, Artagaveytia, Constancio C. Vigil, I.uis Melian Lafinur, Manuel Felipe Villegas Zúñiga, Lino G. Arroyo. Carlos María de Pena, EmiCastellanos. Jos-é María Muñoz, Ruperto Butler,
lio
Juan
Ramón Gómez, Antenor
Pereira.
R.
Daniel Muñoz,
Trianón
Alfredo
y
í-nrique Pereda:
«Los atentados cometidos en las sombras de luz
del
la
por bandas armadas que obedecen
día
propósitos a una
en
noche y sus
a
actos
la
y
consigna imperiosa, han llenado de consterna-
ción y sublevado la indignación de los habitantes de esta ciudad,
nacionales y extranjeros. Escenas de vandalismo, de terror, nun-
son
que ha presenciado
pueblo sin
saber
discernir de dóade estaban la autoridad y la ley. Se hiere a
mano
ca
desplegados,
las
el
armada a ciudadanos indefensos como el doctor Carlos Sáenz de Zumarán. arrojando así por tierra en uno a todos los ciudadanos dignos, a irnprentas,
las garantías civiles y políticas. Se asaltan las hiere y mata a inermes operarios en los talleres
se
y se arrojan por las calles los instrumentos de trabajo, los útiles
que sirven para elaborar
dignos
y
diarios
y
atentado
el
idea elaborada
la
Se asaltan
austeros ciudadanos.
en su
llega
las
en
la
mente de
redacciones de los
criminosidad hasta hollar
el
domicilio privado de uno de los redactores de «El Plata», órga-
no
del
Partido
Constitucional.
En una
palabra:
se ha
llevado
el
ataque por esas bandas organizadas al derecho privado, al derecho político y a la vida de los ciudadanos. Tal conjurito de la primera vez que los presencia el país. La protesComisión Directiva del Partido Constitucional no puede hacerse esperar en estos momentos y ella debe venir como viene
atentados es
ta de la
3
confortar
el
espíritu público
en su decidida actitud de repro-
bación y a decir solemnemente que cuando semejantes atentados se cometen,
del
petrado desde
el
modo y en día 20
que se han perno hay ya base para
las condiciones con
hasta
el
presente,
Anales de
trabajo
niiigúa
político
Universidad
la
pacífico
y
277
actualidad,
de
sino
que
los
ciudadanos deben cuidar de su vida y de su honor sin más amparo ni protección que
Ya de hecho
de sus propias fuerzas.»
la
se había producido la abstención.
Pero
la
Comi-
Directiva del Partido Nacionalista creyó necesario publicar
sión
un nuevo manifiesto
terminar los juicios de tachas y quedar el que aconsejaba esa actitud.
al
cerrados los registros cívicos, por
—
decía en nueva jornada electoral una violación manifiesta de la ley de Registro Cívico. Esta prescribe la forma de la insaculación para, ci'ímponer las Masas de inscripción que debían empezar a formar el Registro base de las elecciones futuras. Se reemplazó la forma legal con el nombramiento directo y arbitrario de los ius-
«El primer acto
éí56
de
—
documento
según es de notoriedad ha recibido milla
criptores. El Registro res
la
fué
de inscripciones fraudulentas
cipalmente soberanía
los
y
insaculación
entre las cuales figuran prin-
soldados que
paga
libertades
públicas.
las
defender su
para
La misma
formalidad
de
ley para constituir los Jurados de tachas,
la
re.::,uería
Nación
la
única esperanza de subsanar los fraudes escandalosos que vicia-
ban
desnaturalizaban
y
registros
los
cívicos,
verificó
se
y
el
nombramiento con la misma arbitrariedad, eligiéndose bajo la bí'.se de una lista confeccionada exprofeso personas que deberían niantsner
El
defendar
y
Centro Directivo
Pero
violación.
y falseado». reclamó contra esta Económico-Administrativa devolvió el
Partido
Junta
la
adulterado
registro así
el
del
Nacional
que estaba consignada. El Centro Directivo se dirigió entonces a la Cámara de Diputados. Pero a pesar de la urgencia dí.^ su decioión todavía el asunto no ha sido tomado en cuenta. escrito en
«Entretanto han estado funcionando rante
los
jurados de tachas du-
período que fija la ley y cue ha expirado en
el
ayer en que se ha declarado definitivamente cerrado Cívico.
En
apeivi?
concebibles
el
curso
oiganizados para derechos
ante
de
en la
esos
este
período
un país lucha
Jurados.
día
el
de
Registro
han tenido lugar sucesos
civilizado.
electoral
el
Los
diversos
ocurrieron
Los veredictos
a
partidos
ejercitar
publicados
y
sus
comen
tados han sido la última expresión de la burla y del e.'ioarnic que puede hacerse de las más nobles prerrogativas del pueblo. La coacción vino en auxilio del fraude, y los partidos que creyeron posible transigir con los jurados se abstuvieron y se retiri;ron de los Juzgados dejando dueño exclusivo del campo al
elemento oficial...
Qued.iha
a
los
partidos
la
propaganda por
Anales de
278
Universidad
la
prensa, y turbas inconscientes, organizadas en la Plaza Cons-
la
enfrente de la Jefatura Política
titución las
imprentas en
la
propiedad y
fueron lanzadas
contra
noche del 20 de mayo y cometieron contra
la
personas
las
atentados y
crímenes que superan
a las escenas más" innobles de los tiempos de barbarie y despo-
tismo que ha sufrido este país».
En
el
de los comicios sólo hicieron acto de presencia los
día
elementos del oficialismo elector. El candidato más votado obtuvo 4,79 6 sufragios según los escrutinios del departamento de Montevideo. Había votado en masa y por duplicado y triplicado personal de los batallones de línea. Adviértase que los dipu-
el
tados
y
senadores
en
elegidos
condiciones
esas
Asamblea con poderes especiales para abordar
la
llegaban
a
la
reforma de
la
Constitución y la consigna de proclamar y votar la candidatura del Ministro de la cia
Guerra coronel Máximo Santos
a la Presiden-
de la República.
I»roclaiiiación
de la candidatura presidencial del Ministro de la
Guerra.
La candidatura
presidencial
del
coronel
da en una reunión que tuvo lugar en
el
Santos
fué proclama
«Politeama 25 de Agos-
to» a raíz de esos comicios.
Uno de
sus órganos en la prensa había dicho a principios de
refiriéndose
año,
a
influencia
la
política
del
Ministro
de
1«
Guerra, que según sus críticos no podía ni debía prevalecer sobre
la
«Sí;
del Presidente Vidal:
hay inversión de autoridad,
lo
sabe
el
país entero, lo co-
han caído en ridículo nuestros impugnadores de estos días cuando pretendieron hacer nocen
los
partidos
políticos;
creer a la opinión que ael
eso
poder ejecutivo estaba en
las
manos
Presidente».
Desde este
el
por
caída de Latorre, obra de Santos, no había dejado
la
último de ser
clamateión
el
arbitro
exclusivo
de su candidatura tenía
sobre rieles,
como en
de
la
situación.
en consecuencia
La
pro-
que correr
corrió, con el apoyo de todos los también de una fuerte agrupación bj.anca encabezada por el general Timoteo Aparicio, que publi. có entre otros documentos de adhesión un manifiesto de 300 adíherentes del Durazno «que deponían ante el altar de la patria rus afecíciones partidarias y proclamaban la candidatura del
colorados
efecto
situacionistas
¡y
coronel blica,
La
Anales de
la
Universidad
Máximo Santos para
la
futura
creyéndola
propicia
a
279
Presidencia de la Repú-
comunes
intereses
los
del
país».
libertad de la prensa bajo el gobierno del doctor Vidal.
Los primeros meses de tranquilidad para
relativa
la la
Vidal fueron
de
encontramos en
los
administración prensa.
Sólo
anales de la époica tres protestas: la del señor Washington Bermúdez redactor de «El Negro Timoteo», quien en una carta dirigida al Ministro de Gobierno doctor Joaquín Requena y García decía que había tenido que rechazar revólver en mano a dos
hombres
habían
que
sospK^c'iosos
ido
su
a
casa
habitación;
que
«Da Nación» aparecía una permanente agresiva contra él, y que si no gozaba de garantías tendría que asilarse en una Legación, agregando que tales hechos no hablan en
el
diario oficial
durante
ocurrido ni
había
amenazado
la
dictadura de Latorre en que jamás se
directa
ni
indirectamente
le
forma; la Porongos, cuya
en esa
administrador de «iLa Prensa», diario de imprenta fué ataicada y destruida a raíz de la actitud amenazadora de otro diario de la misma localidad que respondía al del
Gobierno;
y
leamiento
de «La France», diario de Montevideo,
la
repartidor de
del
diarios
que pretendía impedir en esa forma los
diarios
Zunino por un la
circulación
sobre
apa-
Comisarle de uno de
de oposición.
Al clausurar
las
sesiones ordinarias de la Asamblea, en julio
de 1880, decía por eso
el
Presidente doctor Vidal:
Poder Ejecutivo manifestar que el programa de su gobierno se va alcanzando en la práctica, siendo ya una verdad las garantías individuales, la libertad de la prensa, la libertad de reunión, como la moralidad de la administración «Cree oportuno
el
pública».
Varios
después de
dlías
la
lectura
de
ese
mensaje hubo un
bariquete en la Legación del Perú donde se encontraron el Ministro de la .Guerra coronel Santos y el Director de «La Razón» don Daniel Muñoz, cambiánidose entre ambos algunas frases que constituyeron durante varios días el tema de todos los comentorios
políticos.
Según «La Nación», órgano
del
Gobierno,
el
coronel
Sanios
formulado en ese banquete un verdadero programa político: «Deseo que la fuerza fraternice con el pueblo eran sus palabras deseo que se respete el derecho v la libertad había
—
—
Alíales de la Universidad
280
ú¿ la prensa y del sufragio», dando con ello lugar a que el Director de «La Razón» cihocara su copa con la del Ministro de la Guerra y dijera que era por no haber conocido a éste que lo
había atacado
tanto.
Pero
el
Director
«La Razón»,
de
rectifi-
cando esa crónica, dijo que si bien las palabras del coronel Santos le habían impresionado él no había dejado de mostrarse consecuente con su actitud anterior. «El Ferrocarril», diario gubernista como «La Nación?', dijo que el Ministro de la Guerra había manifestado que procuraría vindicarse, que la prensa pocontinuar
día
propaganda,
su
que
el
ejército
garantiría
la
li-
bertad electoral.
ambiente se mostraba en general propicio propaganda política. «El Siglo» después de cuatro años de retraimiento empezó a preocuparse de los te. mas políticos de actualidad. El doctor Carlos María de Pena El hecho es que
el
de
resurgimiento
al
la
en <
entró
colaborar
a
María
Carlos
nas de «El Heraldo»
la
reorganización del Partido Colorado Li-
nueva denominación del Partido Conservador. los comandantes Máximo Tajes, MaAl finalizar el año 188 nuel Aguirre, José Villar, Manuel M. Rodríguez, Joaquín San-
beral,
Esteban Martínez y Valentín Martínez, jefes de
tos,
la
guarni-
ción militar y policial de Montevideo, publicaron un manifiesto de protesta contra «La Rasón» que fué tomado como un anuncio
de graves medidas contra la prensa. «La Razón»
—
decían
embargo
los
milita-
eses jefes,
—
insulta
a
los
militares y sin
res son los que salvaron el paffs el día de la renuncia de Latorre,
acatando
el
voto de la Asamblea. Lo que buscan los redactores
es escalar los puestos públicos para esquilmar y hundir a nuestra pobre patria, y combaten a los militares porque
de
ese
diario
ellos constituyen
El
Ministro
una barrara
de
la
a la i'ealización de ese
Guerra, que
promesas del banquete de
todavía
sueño dorado.
conservaba frescas
lar
Legación del Perú, resolvió tomar cartas en el asunto y suspendió por breves horas a los cuatro jefes de batallón, dando con ello una nota de tranquilidad ^ los
ia
la
periodistas.
El año 1881 fué en cambio un i^erdadero «año terrible» para prensa. La campaña se abrió en febrero a raíz de la publica.
Anales de
de documentos
ción
la
universidad
coimas en
sobre
s-eusacionale-s
28*I
la
Adminis
denuncias del Director de «La Razón» resultaba que los soldados penetraban de nociie en su quinta y secuestraban aJ personal de servicio. Bl Ministro de la Guerra tración de Lotería.
De
las
al Jefe Político que tomara medidas para averiguar el hecho y evitar su repetició.i a fin agre,gaba «de que el señor Daniel Muñoz pueda vivir tranquilo y atacar por la prensa al Poder Ejecutivo y a sus Ministros con toda seguridad y con la más alta libertad.» Pero el desborde recién se produjo er> el curso de los meses de abrü y mayo al prepararse el andamiaje electoral destinado a proclamar y a hacer triunfar la
ordenó
—
—
candidatura
presidenicial
—
«de
la
cabalgadura
recamada
de
or:
—
decía «El Plata» repitiendo la frase y erigida en cónsul» lapidaria arrancada a Juan Carlos Blanco por el lujosísimo apero de montar con que se eshibía el Ministro de la Guerra en las
.
revistas militares.
inazoicadas del 20 de
liJis
Ya heimos hablado de electoral
de
nia>().
las
mazorcadas
al
describir
el
proceso
l-SSil.
Dos días antes de que ellas se consumaran el Ministro de la Guerra había enviado su dimisión al Presidente de la República. Sabía que el doctor Vidal no la aceptaría, pero deseaba que el atentado contra la prensa lo encontrara nominalmente fuera de IciS
mayor responsabilidad. «No acepto en renuncia presentada le contestó el Presiy espero continuará usted al frente de los Ministerios
posiciones oficiales de
manera alguna dente
—
—
la
confiados a su lealtad, inteligencia misimo día en que se
El
y patriotismo.»
publicaba
carta los
esa
cuatro
ofi
hemos hablado dejaban sin sentido al doctor banda de forajidos formada frente a la Policía,
cíales de línea de quKs
Zumarán y
la
«que estaba atacada de la parálisis de la complicidad», según la f'-ase de «:E1 Heraldo», destruía las oficinas administrativas de «El Plata» y los talleres tipogi'áficos de «La Razón» y mataba a Esteban Fontán, el único tipógrafo que en esos momentos es-
taba rial
de
allí con el componedor en la mano dando formas al editoque debía aparecer al día siguiente; todo ello a lo3 gritos
¡Mueran
¡Viva
el
los
constitucionales!
¡Viva
el
Partido
Colorado!
Coronel Santos!
Al frente del i)r¡nicro de esos diarios estuhni los señores Daniel
Anales de
282
la
Universidad
G. del Busto y al frente d«l segundo los docMaría Ramírez y José Sienra Carranza. «La Nación» que todavía creía en la restauración de Latorre y que por eso no hacía buenas migas con Santos fué también empastelada y su redactor don Federico Dozo fué conducido al Cuartel de
Muñoz y Fructuoso
tores Carlos
Serenos y apaleado allí horriblemente. Más de una persona busicó asilo en las Legaciones en de que
la creencia
empastelamiento de imprentas y el asesinato de Foncán preliminares de un plan sangriento de vastas proporciones.
«1
eran los
Pero no fué
así,
y la mazorca lejos de alcanzar el fin que se pro-
ponían sus instigadores y organizadores enardeció a la prensa independiente que llegó entonces a su más alto grado de energía, aumen. el número de sus redactores con la incorporación del docto: Anacleto Dufort y Alvarez a «La Razón» y del doctor Alberto Paio-
tándose
meque a «La Tribuna Popular». «Mientras
—
Razón»
—
bruta no ahogue nuestra voz
fuerza
la
continuaremos como siempre sin miedos en
temores en
el
decía «Lh.
alma y
sin
corazón.»
el
tipógrafo Estaban
Al entierro del
El doctor Juan
600 personas.
Fontán concurrieron más de el encargado de
Carlos Blanco fué
pronunciar la oración fúnebre y
lo hizo
en estos términos vibrantes,
mismos mazorqueros que habían concurrido
frente a frente de los
también al Cementerio Central y que permanecían allí en actitud amenazadora, aunque sin atreverse a sacar sus armas porque Jos que rodeaban
orador estaban prontos para repeler
al
la
agresión
si
la agresión se producía:
«Es un obrero que
al
tuación sin ejemplo...
caer la
marca
la
huella terrible de una
huella del crimen
que...
llega
si-
desbor-
dando al banco del trabajo donde sin pasiones y sin odios brazas honrados dan forma imperecedera al pensamiento, elaborado en pa¡Ah! no ha habido diques ni barreras moralc: trióticos espíritus. .
para el
la
.
turba de&enf renada.
hombre indefenso y
el
.
.
que se ha precipitado delirante sobro
inerme industrial, sobre
la
idea simbo-
como medio de matar la libertad pública para consumar un ateniado más grande todavía... Por eso la muerte de Esteban Fontán asume el carácter de un lizada en
diario y las prensas,
el
acontecimiento blevand'O la
público
más
que contrista
a
todos
justa de las indignaiciones.
.
.
los
He
ciudadanos
su
aquí el epitafio
que cierra la corta vida de Esteban Fontán y que de inscribirse en otras igualmente humildes o suntuosas... ¿Abre o termina una época el obrero de «La Razón»?... de la lápida
tal
vez haya
Quizá
lo
diga
el
día
dé mañana con elocuencia aterradora...
De
Anales de
tcdos
la
modos confortémonos en
283
Universidad
dolor que provoca
el
esta
muerte
para que surja más probado y firme el corazón.» El Fiscal doctor Juan José Siegundo se presentó a raíz de
mazorcada sus
Crimen pidiendo
Juez del
al
castigo
el
«a
inmediato do
autores.
«La Capital de la República, trémula de indignación y de '«rerha presenciado ayer a güenza decía en su valiente escrito media tarde y durante las primeras horas de la noche, los más
—
—
Bajo
atentados.
vandálicos
garrote
el
de
aleves
cayó
agresoras
exánime, mal herido, en uno de los parajes más concurridos de y algunas horas la ciudad, el doctor Carlos Sáenz de Zumarán;
más tarde varias imprentas fueron atacadas y destruidas a mano armada por una turba desenfrenada que acreditó sus brutales instintos atentando a la vida de
reñor Juez, o miejor
mazorquera que
de
cajistas.
Ese atentado,
atentados inauditos,
ha
a la población cuanto que la manifestación
más
escandalizado tanto
inermes
dicho, €sta serie
cabo se organizó a las barbas de la Po-
los llevó a
y vino más tarde a disolverse, después de consumar su inicua y memorable hazaña, en la Plaza Constitución, vale decir a las mismas puertas del Cabildo. Esto lo ha presenciado el infrascriptc y gran núm)ero de vecinos de la citada plaza y de sus inmediaciones».
licía
Los
directores
de
redactores
y
«El
Siglo»,
«La
Razón».
«Diario «La España», del Comercio». «El Telégrafo Marítimo», «La Tribuna Popular», «El Heraldo», «L'Era Italiana». «El Bien Público», «La Patria»,
«La
Plata»,
«E'
Española»,
Colonia
<E1 Negro Timoteo» y «La Democracia» publicaron una protesta colectiva en que decían: «iCon motivo de la situación extraordinaria en que se halla
consagrar en un acto colectivo la prolos diarios que respectivamente dirigimos y redactamos contra los atentados que han conmovid(- esta sociedad y contra la impunidad en que los ha dejado hasta país,
e.l
hemos
resuelto
testa individual que
ahora bre
hemos hecho en
prensa
—
«El proceso doctor Segundo
público»... las
«El Plata» comentando
está iniciado. los
formulamos
institución
hilos
del la
palabra
oficial
¿Qué ha querido
el
coronel
Santos,
Justicia
furias
de
a
nom-
directa-
sus
el
escrito
del
La mano sangrienta del Miniscrinven está solemnemente de-
por
la
social
existencia.»
escribía
manejaba
nunciada ante decretar
—
colectiva
independiente como
mente amenazada en su
tro que
protesta
autoridad, cuya
la
de la
satélites
sobre
la
del
Ministerio
agregaba,
sociedad
a
aJ
quien
Anales ie
284
Donde caiga
pueblo...
un
No hay nadie que pueda
consternada?...
tiene
muera un ciudadano
libre
una se
pyriodistas libres, y contra la
rán en definitiva
soñado con
ha
la
üniversUlad
la
imprenta
pued-;
donde
alzarán otros ciudadanos y otros fuerza del militarismo prevalece-
fuerza y la voluntad del pueblo. Asi,
cumbre, será precipitado
la
que otra,
lo
surgirá
cima
la
a
que
el
del
abis-
Es el voto del pueblo, es la justicia de Dios!» Dentro de la misma Cámara de Diputados, que respondía ciegamente al Ministro de la Guerra, no faltó quien alzara la voz contra la mazorca. En los precisos momentos en que ocurría el empastelamíento de las imprentas y el asesinato de Esriü...
Fontán entraban
toban
miento c!
-
los
diputados
su
a
de sesiones,
sala
Francisco Bauza, pidió y obtuvo Comisión encargada de acercarse al
de ellos, don
UT'O
la
de
una
—
República para expresarle
decía la
moción
y
nombra-
el
Presidente
—
«el
dis-
alarma con que esta honorable corporación ha recibido las noticias que han llegado hasta ella respecto de atentacu s a personas y establecimientos de Montevideo, y que requiegusto y
Poder Ejecutivo que
del
re
la
los
perpetradores de tales
ssan quienes fueren, caigan bajo
el
imperio de
atentados,
ley para
la
ser
penados como ella ordena». La Comisión se entrevistó con el Presidente Vidal, quien contestó que recién tenía conocimiento de los hechos y que había llamado
al
ceder a
la
el
Jefe de Policía para
aprehensión
Presidente un mensaje refrendado por
coronel Santos JL/^
\^'^ -^
^
2
asociándose en
nación que embargaba a to»,
'
averiguar lo que ocurría y pro
Horas después enviaba
de los autores.
la
él
«a
el
la
sociedad por
y adjuntaba para su resolución
Ministro
ár-
la
Guerra
dolorosa y justa indigel
incalificable conflic-
una nota consulta del Jefe
don Francisco Leónidas Barreto. Jefe Político en esa nota que él había visto los grupos reunidos en la Plaza Constitución, pero que no había adoptado contra ellos ninguna medida en la creencia de que tenían relación con los asuntos de que se estaba ocupando la Cámara
Político
Decía
el
d(-
Diputados. Agregaba, y esa era la consulta,
de
lo
qute
en presencia
ocurrido y de una manifestación anterior en que hubo de
ser arrastrado por las calles el jefe del Cuerpo^ de Serenos, con-
sideraba que
len
adelante debía la Policía
exigir
que las reunio-
nes populares fueran presididas por un directorio que recabaría el
permiso respectivo y que se responsabilizaría a
desaciertos y atropellos que pudieran ocurrir.
la
vez por los
;
AnaUs La Cámara contestó que al
fi^licitaba
ocuparía de
se
285
consulta
la
al
dictar
derecho de reunión y que entretanto que Poder Ejecutivo por las medidas adoptadas
ley reglamentaria
ui.'a
Universidad
de la
consistían en la
del
—
promesa de castigar a los autores y en una nota Crimen poniendo a su disposición a los individuos
Juzgado del que hubieran sido aprehendidos o que se aprehendieran Algo más interesante había hecho el Gobierno, aunque sin atreverse por un resto de pudor a incluirlo entre la» medidas al
una circular del Jefe de Policía
adoptadas:
a
los
Comisarios a
de los empastelamientos pidiéndoles que trataran «de
raíz
riguar entne
los
vecinos
de
su
sección
promotores de aquellos atentados». Y con esto se dio por terminada
la
habían
quiénes
parte criminal
sido
del
avelos
asunto,
mazorca qu tííUía entorchados de teniente coronel y a tcdcs y a cada uno de sus secuaces, como era lógico que ocurriera desde que ellos constituían parte integrante de las mismas autoridades encargadas de garantir el orden público y defender la vida y la propiedad dejándose tranquilamente en
tít
los
su
casa
al
jefe
de
la
habitantes de Montevideo.
Después
las
í'iiipastelaclas
íle
imprentas
el
Poder
Ejecutivo
ainorda/a a la prensa.
Pero
el
si
Poder Ejecutivo daba por terminada su misión en
lo
relativo al castigo de los criminales, no sucedía lo
\''.
relativo a la libertad de la prensa.
Una semana después de tivamente un decreto por
los el
mismo en
empastelamientos dictábase efec-
cual se prohibía
«toda publicación
que directa o indirectamente se relacionara con las cuestiones políticas del país» y asimismo «todo ataque personal o político a las personas componentes de los Poderes públicos de la Nación», bajo apercibimiento efectiva en
donde
se
los
de cinco
mil pesos
de multa
que se haría
intereses de los multados o en las imprentas por
hubieran hecho
las publicaciones.
Poder Ejecutivo invocaba el artículo SI de la Constitución y el deber de garantir el orden y de aquietar lo? ánimos exaltados como consecuencia «del desborde de las pasiones excitaxlas por El
la
prensa». Exirticando su actitud, decía en su mensaje a la Asam-
blea:
«No es hoy para nadie un misterio que la prensa ha asumido una actitud hostil contra los Poderes públicos de la Nación y ha
Anales de
286
la
Universidad
ultrapasado los límites de todas las conveniencias sociales o políticas,
suplantando
triba
y
el
la
cultura y la decencia del lenguaje por la dia-
con
personal,
insulto
lo
que se ha logrado crear una
ha alarmado muy justamente a todo el país. Al Poder Ejecutivo le sería dado poner término a esa situación empleando los elementos de fuerza de que uispone, que son sobrados; pero no desea llegar a tales extremos situación de temores y desconfianzas que
considerando que ellos traerían siempre emergencias sensibles.»
Todo
lo
que
la
prensa in-dependiente había hecho era no enmiv
decer ante los empastelamientos, pedir
el
castigo de los mazor^ue-
protestar contra los atentados que la Policía dejaba impunes.
ros,
Y era para completar el plan de la mazorca que se establecía esa fcrmidable mordaza que llevaba anexa una multa fuertísima qua
más de una vez
trató el Poder Ejecutivo de hacer efectiva en la imprenta de «El Parlamento», diario de don Eduardo Flores, y sn
otras imprentas.
El Presidente Vidal dirigió también una circular a los Jefes Políticos inspirada"
se obligaba a los
en la nota consulta del señor Barrete, por la quepromotores o dirigentes de cualquier reunión pú-
a recabar permiso de la Jefatura con indicación expresa del forma de la reunión.
blica
objeto y
La mordaza continuó por espacio de dos semanas y a ella pusela Asamblea General mediante una minuta de comunica-
término
ción en que decía al Poder Ejecutivo: la intemperancia de una parte de la p.'-ensa Poder Ejecutivo deber adoptar en los primeros momentos y para evitar mayores males la medida sobre restricción de ai'uélla, a fin de dar tregua a la exaltación de las pasiones y res-
a causa de
«Si
creyó
el
tablecer la calma pública, hoy debe cesar ese decreto para que la
prensa
al
su
cer
amparo
elevado
del
141 de la Constitución pueda ejer-
artículo
ministerio,
confiando
en
preciosa prerrogativa sabrá inspirarse en
verdaderas conveniencias creto
de
esa libertad
sin
de»
país,
salir
que para conservar esa el
haciendo
patriotismo y en las uso
prudente y
dis-
de sns justos límites, recordando
con este motivo la Asamblea aquellas palabras de los constituyentes:
«La existencia de
la patria
depende del sacrificio que hacen para conservar
todos los individuos de una parte de su libertad el
resto».
legítimos
Y
desgraciadamente la voz del patriotismo y de los del país fuera desoída, la Asamblea excita celo del Poder Ejecutivo para que haga uso de los si
intereses
desde ya el medios que
la Constitución y las leyes le acuerdan, a efecto de reprimir los abusos de la libertad y de la fuerza, ínterin ella se
Anales de
preocupa con
la
que
urgencia
de la reforma de
cias
la
reciuieren
con la Constitución y que consulte
Después
siipi'ináda
(le
ios
altos intereses del Estado.»
concurso de
el
la
el Gobierno ahogar Asamblea.
el
Poder Ejecutivo a
procura
niordazi»
la
a la prensa mediante
circunstan-
actuales
las
de imprenta vigente en consonancia
ley
la
287
Universidad
Al dejar sin efecto la mordaza, pidió
'a
Asamblea la sanción de un proyecto de ley encaminado a suprimir de hecho la oposición de la prensa. establecía el proToda persona que quiera fundar un diario
—
yecto
—
deberá presentarse
al
Juez Letrado Departamental y cau-
cionar su responsabilidad con un depósito bancario de 1,000 a 5,000
y presentar un gerente o editor que posea un bien raíz cuyo valor no baje de 4,000 pesos, o en su defecto diploma científico o participación en el mismo establecimiento o en otro giro pesos
comercial o industrial cuyo capital no baje de 8,000 pesos. Entre los abusos de la libertad de imprenta incluía el proyecto «el
ultraje,
difamación y
la
narios públicos
como
injuria inferida tanto a los funcio-
la
a los particulares, zahiriendo o ridiculizando
sus personas». «El Gobierno considera saje ticos
—
qu'8
—
decía
el
Poder Ejecutivo en su men-
mayor parte de en diversas épocas han agitado al
que
origen
el
de
la
los
disturbios
han sido
país,
polílos
demagógicos y licenciosos de nuestra prensa... El primordial empeño del Gobierno actual ha sido el de restituir
hábitos
incultos,
honrada y lealmente al país todas las libei-tades de que estuvo el ominoso período de la pasada tiranía, para que
privado durante
mediante quila
y
el
libre ejercicio
normalmente
la
die
los
derechos políticos se opere tranlos Poderes públicos Para conseguir esa reejercicio de la primera y más
reconstrucción
de
sobre la base de la soberanía nacional...
construcción es necesario regular
fundamental de todas
las
el
libertades políticas,
como
es
libertad
la
de la prensa.»
Pero este proyecto encontró resistencias en misión de Legislación de
la
otro que d'?claraba la responsabilidad presor,
editor
y
propietario
el
Cámara de Diputados, del
seno la
de
la
subsidiaria del gerente,
establecimiento
Co-
cual redactó
tipográfico;
establecía que se abusaba contra la sociedad atacando de
im-
que
una ma-
nera violenta y subversiva los dogmas fundamentales de la religión, ofendiendo la moral pública y buenas costumbres, incitando
Anales
'j.-.s
ie
universidad
la
a la rebelión o provocando a la ruaciones contra
anarquía y haciendo falsas afirhonor y eT crédito de la República; y que fi-
el
jaba multas de 500 a 2,000 pesos y prisión o destierro desde cua-
meses hasta dos años.
tro
—
decía la Comisión de LegislaDentro de la ley fundamental que declara enteramente libre la comunicación en su informe
—
de los pensamientos por palabras, escritos privados o publi-
ción
cados
por
vedado
en toda materia
prensa
la
poner trabas
al
medida
toda
legislador
al
ejercicio
previa
sin
por
para
ej-emplo.
establecer
un
«está
viniera
Todas o casi todas
de ese derecho».
disposiciones de carácter preventivo están en zación,
censura,
indirectamente
que
ese
diario
caso.
L»a
autori-
hace depender
manos de
los
su
mo
publicación de la autoridad que debe concederla y la caución nopoliza la prensa en
a las
hombres de fortuna. Las me-
didas represivas son las únicas que pueden adoptarse.
Poder Ejecutivo, que no encontraba suficientemente eficaces
'El
disposiciones,
eí-:tas
se
en
dirigió
el
acto a
la
Cámara
Pero tres m>3ses después volvió a incluirlo en sesiones
a
—
saje
La
extraordinarias.
siembra
como
da
la
decía
las
clases
productoras,
que
deben
invadir
Gobierno,
al
convocatoria
la
—
en
legionies
las
deprime
y
prensa
desconfianza
organizadas
denigra
país,
solicitando
asunto.
retiro del
e!
en
su
men el
retrayendo los capitales,
paralizando las empresas y coartando la marcha gubernativa. De inmediato abordó la Asamblea el estudio del proyecto patrocinado por
Comisión de Legislación de la Cámara de Diputados. Su más lenta de lo que se esperaba y por efecto de recién alcanzó a quedar terminada a mediados de 1882, con-
la
tramitación fué ello
cluida
ya la
administración
Vidal y en
plena
presidencia
de
Santos.
La nueva
ley
exponía a los propietarios de establecimientos
pográficos a las continigenicias
de
la
propaganda
ti-
periodística;
jurados de imprenta amplia libertad para determinar el honor nacional; y amenazaba a los escritores con multas, prisiones y destierros. Véase cuáles eran
daba a
los
los casos
en que se ofendía
sus principales disposiciones:
Todo habitante
del Estado
puede por medio de
la
prensa pu-
blicar libremente sus opiniones sobre cualquier materia sin pre-
via
censura...
El autor de una obra, diario, periódico u hoja
suelta es respoinsaMe del delito que comete conforme a la ley y
subsidiariamente
el
director,
gerente o propietario del establecí-
Anales de
Ja
Universidad
'289
miento tipográfico, haciéndose en este último caso efectivas resiponsabilidades sobre los bienes salvo que se presente el
las ori-
ginal con la firma autógrafa de persona capaz de^bidamente re-
Los pasquines y publicaciones anónimas o proce. de imprentas desconocidas serán perseguidos por la Policía y sus autores pasados al Juez competente ... Se abusa contra la sociedad atacando de una manera violenta y subversiva los
conocida.
.
.
dentes
dogmas fundamentales de
la
religión,
ofendiendo
la
moral pú-
buenas costumbres, incitando a la rebelión o provocando a la anaPCfUía y haciendo falsas afií-maciones contra el honor y el créfdito de la República. Se abusa contra los particulares o funcionarios públicos cuando se les difama publicando blica y las
.
.
sus vicios o defeictos privados ique no son del resorte de la au-
cuando se les injuria con notas o atribuciones honor y la reputación, así como enrostrándoles delitos purgaidos o cuando se les calumnia imputándoles falsos crímenes, no siendo neicesario nombrarlos y bastando para que
toridad
pública,
que ofenden
el
represión del abuso proceda que se les dé a conocer por señas que induzícan a determinarlos... Tratándose de abusos contra
la
sociedad corresponde la acusación al Fiscal del Crimen y tratándose de abusos contra los particulares a la parte ofendida Los abusos contra la sociedad se castigan con multas de 500
la
.
a
.
.
pesos o prisión
2,00
dos
los
y
aiños,
o
destierro desde cuatro
abusos contra
los
500 a 3,000 pesos o prisión desde
Continúan
particulares seis
meses hasta
con multas de
meses hasta dos años.
atentados después de las niazorcadas do mayo.
los
En agosto de 18 81 fueron asaltadas y empasteladas las imprentas de «iLa República» y «El Naicionalista». diarios indepen. dientes que se publicaban en Meló, y ello a raíz de una circular del Ministro de Gobierno a los Jefes Políticos en la que se pro-
metía
a
los
vecindarios
de
campaña que sus derechos
serían
espetados y protegidos por las autoridades. El director de «El Republicano» don Juan D. Coronel publicó un manifiesto en que
1
deíoía
las
que
la
barbas de
mazorca había asaltado y destruido su imprenta «a la autoridad y en el centro de una ciudad qua aún
no dormía.» lEn setiembre volvieron a correr rumores de reaparición de la mazorca en Montevideo. «Estamos en nuestro puesto escribían los redactores de «La Razón» al comentar eso.'í rumores y en
—
T.
VII -19.
—
Anales de
290
él
permaneceremos
Universidad
la
mientras
humanamente
sea
con
posible,
tranquilidad del que cumple con su deber, sin miedos en
el
la
co-
razón y sin vértigos en la mente.» En octubre fué asaltada la casa habitación del general Lorenen
Batlle
zo a
quienes
momentos que
-entraba
mazorqueros
los
don Luis
confundieron
con
Batll-e
y
Ordóñez.
hermano don
su
José Batlle y Ordóñez que acababa de ingresar en el cuerpo de redactores de «La Razón». El general Batlle, que salió al patio de la casa para arveriguar t"ro
que ocurría, fué saludaido con un
lo
que no dio felizmente en
blanco.
el
noviembre fué asaltada y destruida
Ein
Estanciero»,
En
diario
cur^o de ese
el
que se
oposición
de
la
imprenta de «El
publicaba en Florida.
mismo mes hubo una
tentativa de asalto
a la imprenta de «El Bien Público» por donde se imprimía «¡El
Data». rí'os
Como
consecuencia
de
ello
resolvieron
ios
señores
Ba-
y Villalba, quie se habían hecho cargo da este último diario,
suspender su publicación.
Y
por la misima causa' dejó de apare-
cer «El Heraldo».
Con
propósito
el
de
se
creaba
el
infórmale ion es de la prensa Gobierno un decreto por el que con destino a la inserción de los
reducir las
independiente, dictó también
el
«Diario Oficial»,
documentos emanados de
las oficinas públicas,
bajo prohibición
expresa a estas últimas de suministrar dato alguno a los demás diarios.
La prohibición era tan absurda que pocas semanas desel Gobierno que volver sobre sus pasos. El nuevo de-
pués temía creto a
la
autorizaba a las oficinas públicas para suministrar datos prensa, sin perjuicio
de conceder la prioridad al «Diario
Oficial» para todo aquello que se juzgara digno de ese privilegio.
Organización de un jurado de honor para resolver los conllic tos de la prensa.
El Director de «El Heraldo» doctor Julio Herrera y Obes leunió en ISSl a todos sus colegas de Montevideo para propo. nerles la organización de un juraldo de honor compuesto de cinco periodistas, encargado de zanjar y terminar las disidencias entre
periodistas
y entre
periodistas
y
otras
personas,
emanadas de
ofensas, agravios o alusiones inferidos por la prensa.
Acaba de afirmarse en estos y Obes, frido
el
— que país.
Su culpa
es,
—
días, decía el doctor Herrera deben todos los males que ha susin embargo, la misma que la del
a la prensa se
Anales de
Universidad
la
-291
reproduce fielmente los objetos que a su cristal se Pero del seno mismo de la prensa puede salir el remedio a muolios de los males que a ella se le atribuyen si se espejo que reflejan.
sancionaran las cláusulas que subsiguen: «Los periodistas signatarios de este convienio
modo más formal
obligan
se
del
a proscribir absolutamente de la propaganda
y de la polémica por la prensa las personalidades insultantes, las expresiones ultrajantes y difamatorias y todo lo que pueda Se obligan igualmente a no hacer uso ni por vía de represalia de imputaciones injuriosas, enten-
ser calificado de diatriba.
.
.
ftiéndose por tales la revelacióB de vicios, faltas o defectos cuyo
no
conocimiento
interesa a
sociedad
la
ni
tiene
sanción
penal.
La imputaición de un vicio, falta o defecto, aún cuando no sea de los que dan lugar a un proicedimiento de oficio, no se reputará injuria cuando el vicio, falta o defecto imputados influya directamente en el buen desempeño de un cargo púlblico y la imputación se haga sin intención de agraviar y si solo con el de servir los intereses públicos. Se debelaran expresiones
fin
trajantes y difamatorias condenadas
de crápula, canalla, chusma, bribón,
las-
pido, cretino, animal, sinvergüenza y
índole
o
y
de las expresadas.
Se
proscritas pillo,
de
la
ul-
prensa
corro^mpido, estú-
demás de igual naturaleza
declaran injurias condenadas y
proscritas de la prensa las de sucio, cornudo, tramposo, mulato,
bastardo,
libertino,
embrollón, embustero y demás de igual na-
turaleza o índole de las expresadas».
La idea encontró ambient^e muy favorable y en una segunda reunión quedó sancionado un acuerdo por el que se creaba el jurado de honor llamado a juzgar todas las disidencias entre los periodistas por actos o palabras emanados del ejercicio de su profesión y se establecían las siguientes normas: «Se delclara que es deber del periodismo proscribir absoluta-
mente de
la
sonalidades
propaganda y de
rias y todo lo a
los
la
polémica por
la
prensa las per-
ultrajantes y
difamato-
que pueda ser calificado de diatriba, ya
se re(fiera
insultantes,
las
eccpresiones
individuos, a las colectividades o a las nacionalidades. Se
considera igualmente que es un deber no hacer uso ni por vía de represalia de imputalciones injuriosas, entendiéndose por tales
la
revelación de vicios, faltas o defectos cuyo conocimiento
y averigiialción
no interesan a
la
sociedad ni tienen sanción pe-
La Imputación concreta de un vicio, falta o defecto, aún cuando no sea de los que dan lugar a un procedimiento de oficio, nal.
Anales de
292
la
Universidad
reputará injuria cuando el vicio, falta o defecto imputado influya directamente en el buan desempeño de un cargo piiblico
uo y
se
imputación se haga sin intención de agraviar y sí solo a fir. los intereséis pxiblicos. Todo cuanto se relaciona con
la
servir
de
vida doméstica de los haibitantes
la
lable
deil
por consiguiente fuera de
eistá
y
país es satgrado e inviola
órbita de las atribu.
cjones de la prensa culta. Se considera que es deber del perio-
salvar en toida polémica la
disimo
que
sinceridad y la honra/dez del
lo contrario no existan pruebas concluyentes. Se considera que es deber del periodismo no dar a la publicidaid artículo alguno de
siempre
adversario,
para
a(firmar
justificaidoo o
hpicihos
co]abcración
nemitido
o
correspondencia
solicitado,
reproduc-
o
ción qne por su objeto o por su forma sean deniígrantes o injuriosos y no se ajusten a las
asociación de e
la
reglas de decoro aquí
prensa condena
el
provocar o aceptar duelos por cuestiones u ofensais que
traigan su origen de polémicas por
prensa.»
la
grandes conflictos del l'oder Ejecutivo con
Hemos hablado
ocuparnos
al
de las gestiones promovidas por A.
La
En consecuencia
inmoral de resolver las cuestiones de honor.
ei ilícito
I;OS
prescrita?.
duelo como un meidio bárbaro
para
Fein,
obtener ene les
de
de
el
la
cd
I'oder Jiiditial.
aidminisitración
Ladorre
Juez del Crimen doctor Carlos
criminales
quedaran bajo
la
ex
conformi-
elusiva
dependenicia
dad
y códigos vigentes. Etea campaña tuvo pleno éxito de la esifera de los decretos y notas públicas, pero no
autoridaides
judiciales
de
a las leyes
dentro asi
las
dentro de
cirlo
el
la
realidad de los hecihos, segiin se encargó de de-
propio doctor Fein al Tribunal en los comienzos de
la
administración Vidal.
Expresaba en su nota el Juez del Crimen que en febrero de denunciado al Tribunal la extracción de dos penados con destino al Batallón 5.0 de Cazadores y que en marzo había denunciado una tercera extraicción de la misma índole. Agregaba que el Tribunal ninguna resolución había adoptado, «tal I818O había
vez por sus muchas ocupaciones», y que en vista de ello había obtenido que el Presidente Vidal visitara la Cárcel de la calle Y i y pusiera en libertad a 18 individuos que estaban allí arres, tados
desde
puestos
a
uno, dos y
disposición
die
tres
sus
años atrás, sin haber sido jamás Jueces,
y
a
la
vez
celebrara
un
Anales de
293
Universidad
¡a
acuerdo de Ministros del que habían salido órdenes precisas que establecían que ei Director de la Cárcel dependía de los Tribunales,
que no
debían
otras
aplicarse
penas que
las
decretadas
por esos Tribunales y que los presos estaban bajo la exclusiva jurisdidción de sus Jueces. Con motivo de e&a nota ordenó el Tribunal la publicación de varios documentos entre los que figuraba
una denuncia formu-
Juez del Crimen doctor Vilaza sobre extracción de 20 criminales con destino al ejército de linea, denuncia que el Tribunal liabía pasaido en el acto al Ministerio de la Guerra sin conseguir que los criminales fueran
en marzo de 187 5 por
lada
el
devueltos a la cárcel y que liabía sido reiterada con igual resultado negativo en 18 76. No era ese ciertamente un antece-
dente honroso para las autoridades judiciales ajadas y menospneciadas por la dictadura. Pero el Tribunal debía juzgar las
de otro modo cuando lo exhumaba de su archivo para demostrar al doictor Fein que ya con muaha anterioridad había cosas
tvatado de corregir
La
arresto
ei
del
el
mal.
de la denuncia
publicalción
comandanta
de Trinidad, decretado por
cial
del
Ricardo el
doctor Fein coincidió con Etteban,
Subdelegado
propio doctor Fein
poli
en una de
causas del Juzgado a su cargo. Ante estos actos de resurgimiento de la autonomía judiciaJ llamó el Ministro de la Guerra coronel Santos al doctor Fein a su despacho de la Casa de Gobierao, y una vez allí lo atacó rudamente por jiaber decretado la prisión del Subdeleigado de Trinidad y por haber comunicado al Tribunal la extracción de penados con destino al Batallón 5." de Calzadores. Dando cuenta lr.s
al
Tril)unal
di^
doctor Fein que nalla,
que
lo
la el
escena
que acababa de desarrollarse
Ministro de la Guerra
había agarrado de los hombros y que
cho amenazas para cuando se encontraran en dole a la
la
le
calle,
el
ca-
había heobligán-
a contestar esos ultrajes en forma enérgica. Acompañaba vez los antecedentes relativos al arresto del Subdelegado y
en cuanto a las extracciones de a
de<:ía
había llamado
le
la
cárcel prevenía que llegaban
cinco los reos de homicidio llevados al cuartel, con el adita-
mento de que uno de
ellos haibía sido aigraciado con el nombramiento de cabo y que otro había entrado uniformado y armado como custodia de presos al propio despacho del Juez del Crimen! Era muy grave la denuncia y el Tribunal resolvió pasarla a la
Cámara de Diputados.
juz.2;ando
acusar a los Ministros de Estado.
que sólo
a
ella
correspondía
Anales ie
294
la
universidad
—
que sabía a qué atenerse respecto de la El coronel Santos actitud del Presidente y que estaba ya deicidido a quebrar todas renunció en el acto las resistencias costare lo que costare
—
el
mover los resortes de presión con más dueño y señor como era de todos los elementos de
Ministerio para poder
libertad,
fuerza.
—
—
«Deside hace tiempo
deeía en su nota al Presidente Vidal
me
atribuyen aspiraciones que no tengo y se lleva la au. daieia hasta el extremo de afirmar que me valgo de la posición se
oficial
que invisto para coadyuvar a
la
de esas mis
realización
mas aspiraciones. Hubiera hasta cierto punto silenciado todo mantenídome firme en el puesto que V. E. me confió; pero eomunicación
destemplada
del
Superior
Tribunal
de
Justicia
y la a]
Honorable Cuerpo Legislativo hace que quebrante aquella mi intención y eleve mi renuncia indeclinable del cargo de Ministro Secretario de Estado en el Departamento de Guerra y Marina e de Gobierno».
interino
Antes de abandonar su puesto
una veintena de
decretó
as-
censos militares a favor de los jefes y oficiales de ia guarnición
y en seguida envió sus padrinos acto
el
el
realizaría en la
donde
le
al
doctor Fein, quien aceptó en
como única condición que ei duelo se ciudad de Buenos Aires y no aquí en Montevideo, poniendo
reto
faltaban
las
seguridades personales necesarias.
Pero
'os
padrinos del coronel Santos dieron por terminada su misión con
una nota insultante.
Todo
esto ocurría el 18 de ma.yo de 1881.
tados se reunió
el
mismo
día.
En
La Cámara de Dipu-
opinión de algunos de los orado-
no había procedido correctamente al acoger ¿a denuncia del Juez del Crimen sin oir antes al Ministro de la Guerra y al ponerse al habla directamente con el Cuerpo Legislares
tivo
el
Tribunal
en vez de hacerlo por intermedio del Poder Ejecutivo. Juz-
gaban esos mismos diputados que diatamente del
la
Cámara debía ocuparse inm3-
asunto, pre\'io informe de la
Comisión respectiva
que debería expedirse en cuarto intermedio. El propósito era volver la nota
al
Tribunal como supremo
Ministro de la Guerra. del
En
de satisfacción
concepto de otros oradores
asunto debía hacerse con más calma, dándose
dictamíT-ante todo el tiempo
su estudio. El doctor así
acto
que
ella
a
la
el
deal
estudio
Comisión
considerara necesario para
Adolfo Pedralbes,
que era uno de
opi-aban, anticipó que en caso de rechazarse
la
los
que
nota del Tri-
Anales de
la.
2?ó
Universidad
en cumplimieuto de los deberes de su mientras no se le admicargo acusaría al Ministro de la Guerra mismo instante depositaba en la tiera la renuncia que en ese Pedralbes impresioMesa de la Cámara. Las palabras del doctor el asunto siguiera que resolvió se entonces mayoría y bunal,
como diputado
él
naron a
y
la
en cuarto intermedio. suF trámites normales en vez de despacliarse el coronel Santos retiel 20 de mayo después
-
-
Pocas horas Vidal. Se invoca el paraba su renuncia a pedido del Presidente religión más venerada mi es que decía en su nota triotismo vuelvo al Ministerio; resistencia y y en consecuencia doblego mi pido una licencia quebrantada, algo está pero como mi salud
-
-
temporal.
momento de que entraran en actividad anteriormente: la de presión de que hemos hablado
Había llegado sortes al
doctor
los
re-
el
Zumarán,
el
empasteilamiento y
destrucción
de
paliza los
ta-
«El Plata», el asesinato del tipólleres y oficinas áe «La Razón» y el asalto de la macoronamiento como grafo Esteban Fontán; y quien tuvo que refugiarse en zorca al domicilio del doctor Fein. una Legación extranjera. volvió el MiTerminadas las escenas de sangre y de violencias funciones sus oficialmente y volnistro de la Guerra a reanudar del Tridenuncias las de ocuparse a vió la Cámara de Diputados Poder Ejecutivo. Al expedir su bunal, resolviendo que se oyera al de Presidente Vidal que sólo lo hacía guiado
informe dijo
el
deferencia, pero que sentimientos de conciliación y como acto de por el Tribunal al empleado tenía que observar el procedimiento de Diputados Cámara misma constituirse en acusador y el de la Se trata Crimen. del .Juez del al dar curso a las acusaciones altos personajes dos entre desagradable «de un incidente decía mucho al ofendido acciones de la administración que daría cuando Tribunal, al clasificarlo para promover un juicio de injurias»; y el insinuado «un temerario de delito grave de carácter político, ha privativas de la Cámaatribuciones prejuzgamiento, invadiendo también que se trataba juzgando Legislación, ra». La Comisión de habido «impremehabía que de personal» y de «un mero incidente del Juez del Crimen, denuncia la acoger al Tribunal el ditación» en acusar ante el Senado. sostuvo que no había llegado el caso de que dejaba intacto fórmula Y la Cámara, muy contenta con esa a comunicar apresuró se Guerra, ?! omnipotente Ministro de la con las incidente el concluido por al Poder Ejecutivo que daba
-
—
explicaciones del mensaje.
A7iales de la Universidad
296
Acabamos de relatar el más grave de los conflictos de un régimen administrativo de que eran víctimas los Jueces de todos los demás departamentos de la República, a despecho de una cir-
del Ministro de Gobierno a los Jefes Políticos en q.ue se prevenía a estos funcionarios que estaban obligados a cumplir las disposiciones emanadas de los Jueces departamentales, y de otra circular en que se les advertía que la Policía no podía levantar
cular
sumariéis y que debía limitarse a aprehender a los delincuentes y a ponerlos a disposición de sus Jueces. En los mismos momentos
en que esas circulares se escribían y después de ellas dirigirse reiteradamente al Pod&r Ejecutivo
tenía que
el
Tribunal
denuncián-
que la Jefatura Política de Florida desconocía la autoridad Juez Letrado doctor Luie Gil; el Juez Letrado de Paysandú doctor Juan Gil tenía un violento cambio de notas con el Jefe dole
dej
de sus reiterados desacatos a los mandatos Letrado de la Colonia doctor A,lberto PalloJuez judiciales, y meque tenía que reclamar por igual causa contra la Policía de
Político
por
efecto
el
su
departamento.
CAPITULO Y Movimiento económico
Población de la República. Al
finalizar
el
año 1880
tenía la
República
Oriental
438,245
habitantes según los cálculos" de la Dirección General de Estadística.
He
aquí la clasificación
DEPARTAMENTOS
de
esos
habitantes:
Anales de
298
la
Universidad
ANOS
Nacimientos
Defunciones
1S79
23,895
7,323
1880
24.103
8,180
15,923
1881
21,658
8,923
]2,73'5
Excedentes
16,572
La estadística médica del doctor Wonner, correspondiente al departamento de Montevideo, señalaba así la parte de la tisis y de la viruela en un período de 11 años:
AÑOS
Anales de
con
los
argentinoá
puertos
En
salida.
la
Universidad
13,600
en
entrados
conjunto, 2il,909
la
299
entrada
y
14,930
en
la
contra 21,216 salidos.
Eran saldos de una pobreza extrema. Pero
el
gobierno del doc-
tor Vidal que quería evitar que se atribuyeran al malestar político
y
económico reinante, resolvió dar esta
mucha
curiosa
explicación a
la
Uruguay, según las comunicaciones de nuestro Cuerpo Consular, pero que el Gobierno había resuelto que no se autorizara el embarco de faAsamblea:
que
milias hasta después de sancionado nias
radicarse
gente deseaba
que tenía a estudio
la
el
en
el
proyecto de tierras y colo-
Asamblea!
Exti-adicióii (le esclavos.
Entre los pasajeros de 1880 figuraba un negro esclavo que en Río de Janeiro había logrado esconderse en las boJegas del vapor «Equateur». Apenas llegado el vapor a nuestro puerto inició el representante del Brasil la extradición de es^e esclavo. El doctor Diivimioso Terra tomó en pública esclavo.
para obtener
los
el
acto la iniciativa de una suscripción
500
pesos que
La suma fué cubierta en
constituían
breves
horas.
precio
el
Pero
del
no hubo
necesidad de contrarrestar con ella la acción diplomática, porque
con
simple abono del pasaje a Buenos Aires se obtuvo que
el
el
quedara libre de las vejatorias cláusulas del tratado de extradición de 1851 que convertían a nuestras autorida les en caresclavo
celeras del Brasil.
Cifras globales del comercio exterior.
Durante los dos años de la administración Vidal exterior marcó los siguientes valores oficiales:
Importación
Tomando
$
....
19.478,868 19.702,201
comero'O
1881
1880
Exportación
el
$
17.918,884
20.229,ñl2
por base los datos estadísticos de 1880 establecía «La
Sudamericana» en uno de sus artículos que cada oriental comerciaba al año por 453 francos, cada argentino por 179. cadi
Revista
chileno por 126 y cada brasileño por 71.
Los época:
principales
mercados de nuestro intercambio eran en
esa
Anales ie
300
Para
la
Universidad
importación:
la
1880
Inglaterra
$
Francia Brasil
Estados Unidos
....
1881
ñ. 814,076
5.381,054
3.371,200
2.906,949
2.430,662
2.193,492
1.270,642
1.269,778
España Alemania
1.563,160
1.894,463
1.103,261
1.181,145
Italia
1.523,380
1.032,194
Para
la exportación; 1880
Francia.
3.470,477
4.069,847
Brasil
3.941,411
3.519,639
.
4.266,043
3.191,959
Estados Unidos
2.847,137
3.867,494
Bélgica
2.116,740
1.875,730
Inglaterra
Cuba
.
.
.
.
Aro-entina
I,os
1881
«
.
899,311
689,302
928,550
1.040,302
grantles rubros del comercio exterior.
He aquí
los
grandes rubros en que
la
1877
$ Bebidas Comestibles
Tabacos
y cigarros ".
Géneros
.
Ropa hecha Materias para
estadística
aduanera
cla-
importaciones de 1877 a 1880:
sificaba las
la industria,
materiales de
construcción y máquinas
....
Varios
La misma
estadística
1878
1879
S
$
1880
$
2.043,671
2.3:36,223
2.220,2:38
2.722,975
3.051.089
3.388,014
3.
583,933
4.616,876
549,434
518,439
514,098
923,110
2.663,962
3.015,156
2 778,757
3.185,140
1.235,238
1.180,393
1
069,628
1.152,567
2.715,344
2.729,071
2 958,312
3.490,735
2.787,108
2.760,678
2 824,937
3.677,465
15.045,846
15.927,974
15.949,903
19.478,868
de Aduana clasificaba así las exportacio-
nes del período 1877 a 1880:
Anales
Universidad
la
ele
pie.
.
.
1879
1878
1877
Animales en
31)
1
1880
$
$
$
$
1.542,883
1.545,581
1.56-2,949
1.250,632
Productos de ganadería y saladeros
.
Otros productos
13.373,562 15.006,267 14.013,414 17.955,103
.
Productos rurales .
.
.
879,626
769,728
854,883
316,523
90,937
85,871
84,616
137,223
12,396
84,731
130,099
92,720
.
Rancho
15.899,404 17 492,158 16.645,961 19.752,201
Algunos
(le
los principales artículos
Véase cuáles eran
esos rubros.
partidas de
principales
las
fio
nuestro comercio
de exportación: 1880
1879
Carne tasajo
Kilogs.
conservada
"
>.
>
extracto
>
Cueros vacunos salados. secos
Número
.
....
de vaquillona y becerro »
yeguarizos secos
.
...
salados.
.
.
23.449,748
33.073,868
880,709
3.608,930
369,269
469,364 774,858
644,538
003,305
^
746,916
»
129,584
»
21,918
24,863
•
74,475
321,237
1
122,329
Kilogs.
3.275,014
3.306,709
Gordura vacuna
'
9.311,723
13 078,866
Lana
>
17.908,945
18.766,679
Harina de trigo
-
6.164,911
928,440
Maíz
'
9.054,795
1.0rl,649
lanares
«La Revista Mercantil periódico de
la
del
Centro de Corredores»,
época, publicó en 1881
un cuadro de
importante
las exportacio-
nes del Río de la Plata que no concuerda con las cifras oficiales
acabamos de reprwlucir, probablemente por referirse uno "1 movimiento del año civil y otro a las zafras ganaderas. De ese ciue
cuadro
reproducimos
las
figuientes
cifras:
Anales de
30Í
Por
el
.
Universidad
puerto de Montevideo
1880
Lana, fardos
la
1881
Por el puerto de Buenos Aires 1880
1881
Anales de
Nuestro intercambio con
De
la
Universidad
303
Italia.
cuadros recapltulativos del molimiento comercial de 1880
los
enviados a nuestra Cancillería por la Legación Oriental en Roma, resulta
que durante ese año fondearon
en
uruguaya 23 vapores y
velero
procedencia
1
puertos
con
italianos
toneladas
de 28,941
de registro, con 5,193 pasajeros y 2,997 toneladas de carga efectiva
aforada en 442,792
pesos;
que habían salido para
y
4o vapores y 4 veleros de
65,467
Uruguay
el
toneladas de registro con 24,291
pasajeros y 14,782 toneladas de carga aforada en 1.827,561 pesos.
Entre los
uruguayos sobresalían
productos
aforados en 235,396 pesos y la lana en productCKs
italianos
cueros pesos.
vacunos
Entre
los
aforado en 485,568 pesos, las bebidas
aceite
el
los
106,666
en 212,722, los comestibles en 302,998 y los tejidos en 210,633 pesos.
amonedado.
Metíilico
Corresponden
siguientes
las
metálico amonedado en 1J78
a
el
cifras
a
las
entradas y salidas del
Puerto de Montevideo durante
años
los
1881:
1878
1879
1881
1880
Importado
1.919,367
3.751,083
6.845,853
1.889,905
Exportad.)
2.890,157
2.718,046
3.986,601
2.468,114
En
las
cifras
los puertos de
del
año 1881 figuraba
ultramar con
entrada y 1.228,227 en la salida, y puertos
argentinos
con
el
movimiento relativo
las cantidades de 1.171, 55o pesos
718,150
en
el
la
movimiento relativo entrada
y
1.239,887
en a
en
a la los la
salida.
Comparados
los
dos
años
contrarios al país, mientras saldos cifras flete
son
favorables.
aduaneras
sólo
del
Es bueno advertir, traducían
y que buena parte del
estadística.
extremos
cuadro resultan
saldos
que en los dos años intermedios entonces
sin las
metálico escapaba
embargo,
remesas al
que
los
!as
sujetas
a
contralor de
la
Anales de
'¿[}i
El comercio de tránsito por
Una a
los
ley de del
pulsar
el
la
1S80 declaró libre
frontera.
la
y su salida para
país
TJniversklaá
ia
el
entrada de productos similares
como medio de
exterior,
im-
comercio de tránsito.
el año anterior la corriente de tránsito por el puerto Montevideo había morilizado 205,086 cueros vacunos secos y valor que se aproximaba a lana, con un kilogs. de 1.142,622
Durante
de
pesos.
800,000
Comercio interno. Durante
los
años 1S80 y ISSl llegaron a las Plazas de Frutos de la Estación Centi-al del Ferrocarril, con procedencia
Montevideo y a de la campaña,
los
productos rurales que indicamos a continuación:
1881
1880
Número
Cueros vacunos lanares
588,375
832,630
1.473,122
1.599,030
10.616,251
12.321.027
-
Lana
Kilogs.
Maíz
'>
Trigo
.
^
8 366,278
13.678,503
21.971,726
36 229,846
Esos productos fueron transportados por 35,480 carretas y vagones en 1880 y por 34,133 al año siguiente. Las ferias francas establecidas en la Plaza
rante
administración Latorre fueron
la
Independencia
reglamentadas
eii
pedido de la Comisión de Inmigración y Agricultura. De
con
el
nuevo reglamento podían venderse en
ellas
du-
1880
a
acueMo
vegetales,
pro-
animiles y objetos usados, pero no carne fresca, pescado, aves domésticas 5' ductos
pájaros
industriales,
má.quinas
y materiales
de
labor,
muertos.
Los patentables de toda
la
Repiiblica.
De un cuadro de los comerciantes abonaban el impuesto de patentes de tes cifras:
e
industriales
giro,
que
extraemos
las
en 18 79 siguien-
Anales de
la
Universidad
305
Almacenes por mayor
119
Acopladores de frutos
69 85
Barracas
Bodegones
180 136
Boticas
....
Casas introducitias y exportadoras Pulperías
.......
Zapaterías
!>
1»
>
293
.... .....
Fábricas de jabón y \c!a& »
-2,468
...
...
Tiendas de géiicioa
261
licores y gaseosas.
442
46 26
cerveza
'
14
...
lierrerias
Imprentas
234 13
.
Hoteles
111
Movimiento de navegación.
En d'í
el
curso del año 1880 fondearon en
de
procedencia
con
registro
(384
ultramar,
vapores
de
1,076
el
puerto de Montevideo,
buques
528,381
de
toneladas
toneladas
794,443
y
veleros
692
ds
Y
con procedencia de cabotaje y ríos 2,906 baques de 556,877 toneladas de registro (601 vapores de 438,800 to-
266,062 toneladas).
neladas y 2,305 veleros de 118,077 toneladas).
En blica
mismo año fondearon en
el
toneladas
y
4,297
veleros
llevaban carga 2,954 lastre
demás
los
buques de 823,692 toneladas
7,034
4,080
de
168,004
de 526,129 toneladas. La
presentada por
2,483
vapores de 665,688
toneladas).
de 297,563 toneladas
de
de la Repú-
puerto.i
(2,737
De
esos
buques
registro e iban en
bandera nacional estaba
barcos de 132,650
toneladas y
re-
extranjera
la
por 4,551 de 691,042 tonelátías.
En 1881 entraron al puerto Je Montevideo con procedencia de ultramar 1,170 buques de 903,685 toneladas de registro (444 \apores de 592,037 toneladas y 726
veleros
de 311,648).
Y
con pro-
cedencia de cabotaje y ríos 2,960 buques de 632,586 toneladas
(651
vapores de 501.481 toneladas, y 2,309 veleros de 131.105 toneladas).
La entrada en los demás puertos de la República fué de 7,334 buques de 700 039 toneladas de registro. Quiere decir que al puerto de Montevideo entraron 11,016 barcos de 2.175,012 toneladas de registro en 1880, y 11.464 barcos de 2.236,310 toneladas en T.
VII -20.
1881.
Anales de
bÜ6
En
el
último de esos años de
la
tonelaje
el
entrados
y
salidos
ultramar
y
1.340,709 a cabotaje)
caderías y frutos
fué
el
más de
el
616,595
1.762,363
a
puerto de Monte-
el
a
ultramar y 450,697
cálculo de la Oficina de Estadística,
cual los vapores traían en esa fecha
el
9.35
y llevaban
'/c
un
tonelaje de registro y los barcos de vela
10.24 de su
el
registro de los buques
tonelaje cfeciivo de las mer-
el
(correspondiendo
de acuerdo con
a cabotaje)
y
dtj
(cor respondiendo
3.103,072
descargados y cargados en
video de 1.067,292,
según
Universidad
%
30
ese porcentaje.
El servicio de faros.
Durante
gobierno de Latorre se arribó a un acuerdo con las
el
empresas de luces marítimas, mediante impuesto correspondiente
fcl
centesimos
6
tro a favor
el
impuesto de
el
de
faro
al
cual quedaba suprimido
la
Colonia,
reducía
se
centesimos por tonelada
7
a
de regis-
de las empresas concesionarias de los faros de José
Punta Brava, Panela y Farallón, y se rebajaba a 1 V? centesimos el impuesto de 3 centesimos que percibía el Estado por ios faros del Banco Ing'lés y Punta del Este. Ignacio,
El
gobierno de Vidal se dirigió
comunicarle que
la
en
1880
a
nas alcanzaba a cubrir los gastos de servicio;
Banco Inglés que per otro
más
se
fuerte;
pontón
el
que era necesario elevar a 4 centesimos
áe'r
el
de la Colonia.
esa
suba
En
la
considerable,
el
Cámara que
se
de paliar con el anuncio de que a medida que fueran ven-
ciendo las concesiones pasarían la
que
encontraba en mal estado debía ser reemplazado
impuesto existente y restablecer de Diputados encontró ambiente irató
Asamblea para
la
renta de los faros del Estado así reducida ape-
mayoría
los
del Senado, que juzgaba
faros al
dominio
fiscal.
Pero
que la suba pesaría como una
capa de plomo sobre la navegación de Montevideo, resolvió reducir el
impuesto a la mitad de
lo
programado por
la
otra
rama
del
Cuerpo Legislativo, quedando aplazado por efecto de esa discrepancia el recargo que pedía el Poder Ejecutivo. Lo singular es que la Comisión de Hacienda del Senado, que había aconsejado la sanción del proyecto de la
Cámara
de Dipu-
encargaba en su propio informe de dar la voz de alarma acerca de la dolorosa reipercusión del impuesto de faros sobre el
tados, se
movimiento ros
—
del
puerto
decía la Comisión
de Montevideo. Nuestros derechos de
—
son
muy
altos.
Ellos
fa-
han contribuido
Anales de
a
disminuir
la
afluencia
Océano hasta
el
representan un
«Tenemos
a
comprendidas desde Polonio
millas
ciudad de
la
gravamen
307
buques a nuestro puerto.
de
actualmente una zona de 217 sobre
Universidad
la
la
Colonia con
la
navegación
de 11
que
faros
li
%
centesimos
por cada tonelada, advirtiéndose que por los del Cerro y Colonia
no se abona
impuesto
por
§í.9.ba,
habría que
lo
Comisión no
ir
que
alguno,
menos de dos
sería
reales
de
a la supreeión del
aconseja así es porque
lo
otro
modo la erogación En rigor, agre-
por tonelada».
derecho de faros y estado de
el
si
la
Hacienda
ia
pública lo Impide.
Según
los datos insertos
en
la
Memoria
del Ministerio de
Guerra
y Marina correspondiente al ejercicio 1880-81, al finalizar este
mo año María,
funcionaban 10 faros: José
4
Punta Brava y Farallón)
Ignacio,
centesimos por tonelada de registro, y los Panela,
(Colonia,
Cerro,
que cobraban
Este)
El faro
del
3
Isla
6
que percibían 10
restantes del Estado
de Flores, Banco
Inglés,
Punta
del
porque
to-
centesimos.
Polonio,
no
computado en ese cálculo
davía estaba por inaugurarse, se encargó áe recai'gar le
últi-
de empresas concesionarias (Santa
el
costo de
navegación con dos centesimos más por tonelada. El
Poder Ejecutivo pidió en ese mismo ejercicio
restableci-
el
miento del derecho de abalizamiento suprimido en 1879 durante la administración Latorre, y que sólo había alcanzado a producir alrededor de 200 pesos mensuales, con sus cuotas de tres y medio
centesimos a los bukiues
de ultramar,
dos
y
medio a
los
buques
de cabotaje de procedencia argentina, uno y medio a los paquetes a vapor y uno a los buques de cabotaje nacional. Pero la Comisión
de Hacienda de la
y así
lo
Cámara de Diputados aconsejó en su dictamen,
resolvió la
Cámara, que
los gastos
de abalizamiento, que
absorbían alrededor de 400 pesos mensuales, fueran cargados a ia renta de faros.
Gastes
Con
(le
el
puerto.
propósito de explicar una de las causas del encarecimiento
de los fletes marítimos publicó en 1880
de Vapores del Pacífico, cepto
la
siguiente
de mercaderías desembarcadas en
el
agente de la Compañía
cuenta de el
gastos
por coa-
puerto de Montevid?o:
Anales de
308
Universidad
la
Carga en Liverpul para Montevideo:
Carga recibida en Liverpool para Montevideo
cascos
2
:
y derechos
$
En Burdeos: 53 cajones de vino En Pernambuco 200 barricas En Rio de Janeiro: 323 bultos. :
.
19
í)7
21 00
.
...
.
.
.
21 00 21
•
y patentes en Vigo, Carril, (Joruña, bautauder, Lisboa y Bahía
00
Manifiestos
42 00 $ 124 97
Acerca atención
de
de
llamaba
importante
punto
otro
prensa
nuestra
"a
Poderes públicos.
los
De acuerdo con
leyes
las
y
reglamentos
orientales
el
cabotaje
argentino, que estaba asimila-do al nacional, sólo tenía que abonar
un peso por derecho de peso por
salida y manifiesto, un centesimos por faros y dos
entrada,
visita,
patente de sanidad,
la
tres
y medio centesimos por abalizamiento. En cambio, de acuerdo con las leyes y reglamentos argentinos,
uruguayo estaba recargado en
cabotaje
oí
puertos
los
argentinos
con una patente anual de 10 pesos fuertes, un derecho de arqueo de 30 peses, un sellado de diez pesos para abrir registro y otro ue igual valor para cerrar registro al ser despachado con destino a
puertos orientales.
argentinas
mientras
Y
todo ello a causa de que las autoridades
consideraban
que
las
Montevideo como
a
nuestras
consideraban
a
puerto
ultramarino,
Buenos
Aires
como
puerto de cabotaje.
En
peores condiciones se encontraba todavía
Paraguay. esos
Un
mismos momentos
por sellado y sellos,
3
por
el
cabotaje con
el
barco oriental de 85 toneladas tenía que pagar en
rol
de
pesos fuertes por médico de sanidad, 2ó
4
de carga,
registro la
por gastos de despacho.
por guardias a bordo,
15
Capitanía,
por
6
por Consulado Oriental y i2
9
En conjunto
74 pesos
fuertes,
cifra
equi-
valente a la quinta parte del flete de un barco bien cargado desde
Asunción hasta Montevideo.
La Asamblea los
paquetes
dictó
en 1881
transatlánticos
una
aparte
por
ley
de
la
cual
se
conducción
la
imponía a gratuita
de
una patente fija de 90 pesos por cada viaje, a la vez que se les exoneraba de la obligación de suministrar al PJsífiüo varios pasajes de tercera clase con destino al fomento de la
correspondencia
la
i'orriente
Fomento de
inmigratoria. la
Esos pasajes
Cámara de Diputados
al
—
decía
la
Comisión de
aconsejar la sanción
de
Anales de
—
Ici
ley
el
erario
ftS
la
universidad
no han dado resultado de ninguna especie y en cambio público ha dejado de percibir alrededor de 35,000 pesos
año por concepto de patentes. Con el propósito de hacer resaltar
exenciones y privilegios acordados a lEl Siglo» el siguiente cuadro:
ANOS 1873
1874 1875
1876 1S77
309
Tonelaje
entrado
el
los
alcance financiero
de las
paquetes postales, publicó
Anales
310
ie
universidad
la
precios a cargo de los buques que quisieran utilizar sus obras, que
no
excedería
monto
del
de
millones
pasarían al
dominio
en
forma.
esa
de
estaban
pasar
plazos
los
legales
Pero
abordar
sin
a los
Poder
El
vigentes
tonelaje
calculadas
fiscal
y la Asamblea mantuvo su sanción.
ley
dejó
derechos
los
que
otorgada
fué
concesión la
pesos,
de
Las obras,
en esos momentos.
99
en
7
V2
años.
La
Ejecutivo
ejecución
la
vetó
concesionario
el
de
las
obras.
En
los
mismos
yecto Tusón, su
eo
que
ejecución,
Poder
el
días en que la
Cámara daba su voto
al
pro-
senador don Juan Alberto Capurro, que no creía
el
presentó
Ejecutivo
proyecto
otro
procedería
a
por
cual
el
practicar
el
se
disponía
estudio
del
puerto de Montevideo y al llamado a propuestas para la presen-
proyectos
de
tación
que tuvieran una base más seria que los la única manera de dar solu-
presentados hasta entonces. Era ción racional y científica al
pando
magno problema que venía
todos nuestros estadistas desde
a
preocu-
comienzos del go-
los
bierno de Rivera.
También figuró en
la
de tránsito en
puerto
orden
Nueva
del
día
Palmira.
la
construcción
de
un
Don Francisco Bravo,
autor del proyecto, pedia autorización para expropiar
6 cuadras cuadradas con frente al Uruguay. Esa superficie estaría circundada por una muralla de cinco metros de alto y un foso de gran profundidad y tendría dos compartimentos, uno de ellos
para
los
artículos
ultramarinos destinados a
los
territorios
de
Bolivia y Paraguay, y otro para los artículos destinados a nuestro
La empresa gozaría de absoluta exención de impuestos y portuarios. El proyecto encontró buen ambiente seno de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Dipu-
país.
territoriales
en
el
Pero falto de estudio y de base financiera, no tardó en quedar olvidado en las carpetas parlamentarias. El Director General de Obras Públicas, don Melitón González, lanzó en esa misma época la idea de canalizar el Río Negro mediante represas y esclusas, cuya ubicación se proponía estu-
tados.
diar en el caso de que así se le autorizase.
Salvatíijes.
La
C
:misión
de
íavoral.lemente en
Legislación
18 81
de
la
Cámara de Diputados acogió
un proyecto de salvataje ya informado
Anales de
clva-ante tci
el
Universidad
la
gobierno de Ellauri, sobre
la
311
base del establecimisn-
de un csutésimo por tonelada de registro a cargo de los bu-
ques de ultramar. Pero
proyecto no tuvo andamiento a causa
el
de la resistencia opuesta por los agentes de seguros y los
co-
merciantes de Montevideo, quienes alegaban que ya se contaba con medios suficientes de salvataje; que sería atentatorio obligar a las compañías a valerse de una empresa determinada, y que el nuevo impuesto sería muy gravoso para la navegación y
el
comercio.
En noviembre de 1881
desencadenó un formidable huracán
se
el puerto y destruyó un gran número de edificios viejos de la parte Sur de la ciudad. Dos meses después, en enero de 188 2, hubo otro temporal más for-
que ocasionó serios perjuicios en
midable, sólo comparable al de I8166, que ocasionó grandes perjuicios en
Montevideo y en todo
La entrada de un
el
litoral
hasta
el
Salto.
transatlántico al dique Jackson-Cibils.
En 1880 entró al dique Jackson - Cibils el vapor francés «Pampa», de 120 metros de eslora y 12 de manga, con 2,300 toneladas de registro, una carga efectiva de 600 toneladas y un calado de 15 pies ingleses. Pocas semanas antes otro transatlántico, el «Senegal», había sido descargado para entrar al dique y luego vuelto a cargar para salir
con
rumbo
al
de quedar varado en
de
astillero
Río
de
Janeiro,
canal dé acceso al diaue.
el
ante
el
riesgo
La entrada
del
como un gran acontecimiento. Verdad es que el «Senegal» calaba 17 pies, o sea dos más que ©1 «Pampa. Pero como lo observaba la prensa de la época los son-
«Pampa» fué saludada por
eso
dajes del canal de entrada daban cinco y medio metros de agua, o
sea la profundidad necesaria para
Eí viaje del "liconc di
En
el
viaje
do 27 pies de largo, el
de
3
movimiento del barco
Caprera".
los anales portuarios de la
de heroísmo,
el
del
época se destaca como un rasgo
«Leone
di
de puntal y
7
Caprera», V2
un
simple
bote
de ancho, tripulado por
capitán Fondacaro y los marineros Grassoni y Trócoli. El plan
Fondacaro era realizar
para entregar
el
el
viaje
de Montevideo hasta
bote al general Garibaldi.
Italia
Anales
312
¿Le
Universidad
la
Después de 95 días de viaje llegó el «Leoiie di Caprera» al puerto de Canarias y desde allí se dirigió a las costas de Barcelona donde sus tripulantes fueron grandemente ovacionados.
mar» los llamaba «El Liberal» de Madrid, al ponhazaña que habían realizado en una embarcación diminuta impulsados por la gloria y por su admiración a Garibaldi. Dos meses más tarde el bote de Fondacaro era transportado has«Héroes
derar
del
la
por un buque de vela, y conducido luego al lago áe la Villa Real de Milán, donde sus tripulantes fueron recibidos ta Livorno,
por el Reiy Humberto y la Reina Margarita en medio de las aclamaciones de un inmenso pueblo que los vitoreaba con entusiasmo. decía don Dermidio De - María en «El «El viejo Garibaldi
—
—
habrá experimentado proagasajos comentando funda emoción al ver en su puentecillo la bandera de su patria, procedente de su inolvidable Montevideo y flameanuo en los la que él empleó al mástiles de una nave tan pequeña como servicio de la libertad en las guerras de América.» esos
Siglo»
FeíTocarr iles
.
Las obras del Ferrocarril del Salto a Santa Rosa autorizadas 1871 durante la administración Batlle e inauguradas p 'Co después, quedaron interrumpidas durante varios años a caasa
en
áe las penurias financieras de el
cumplimiento de
la
época que impedían
las estipulaciones del
al
E.^tado
contrato de concesión.
El comercio del Salto se dirigió en 1880 a
la
Cámara de DipuLa
tados pidiéndole que impulsara la reanudación de los trabajos. línea argentina que arranca de Concordia
sentación
guay,
—
el
—
monopoliza hoy el mismo comercio de cargas a que servicio
decía en su repre-
de cargas del alto
ciudad del
la
UruSalto
debe todo su progreso. El gobierno del doctor Vidal se apresuró a suscribir un contrato ad - refei enduiru con la empresa. Y demostrando la necesidad de su sanción destacaba uno de los miembros de estas
la
cifras:
mento
del
población
Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados las 902 leguas cuadradas que abarca el departaSalto pertenecen en gran parte a extranjeros; la
del
mismo departamento
cionales
y
Directa
arrojan
n
2,687
20,725
extranjeros;
un
capital
propietarios, cifra
de esta
los
se
compone de 15,216 na-
cuadros
16.169,147
de
Contribución
la
pesos
perteneciente
última que se descompone así:
537 nacionales con un capital de
3.
459, 0-41
pesos;
1.191
bra-
Anales de
la
Universidad
sueños con
un capital de 9.127,962
un
de
capital
el
pesos;
316 españoles
proporciones
con
descendentes
las
nuevo contrato llamado a impulsar
lo.í
1.009,028
demás nacionalidades. La Asamblea aprobó trabajos. La concesión
en
313
y
extendía
se
a
cuarenta
añ&-.
Quedaban
pxentos de derecho.^ aduaneros los materiales destinados a la construcción,
uso y consumo del ferrocarril.
cláusulas
las
a
Estado
al
a
íleterminado
'del
fj-irantir el 7
número de
cancelaba
las
tarifas
llegaran al 12
El
garantías
una vez que
%
Ferrocarril
anual.
interés
%
a
y
de interés y
vencidas
de deuda de igual
con títulos
en
las
de
c/¿
suscribirse
a
un
acciones. El Estado, en cambio, entregaba
771,530 pesos en bonos de 4
y
La Compañía renunciaba
primitivo contrato de concesión oue obligabdu
A
Uruguayo
zadas por las estrecheces
por
servicio.
2
valor
El
% de
de amortización 1.028,460
utilidades líquidas de la
las
posoá
Gobierno intervendría
Compañía
40 años caducarían las franquicia.-i.
los
del
Este
cuyas
económicas de
la
obras
estaban
parali-
compañía concesiont-
fué objeto también de la atención de los Poderes públicas. Primeramente se pensó en su transferencia al Estado, pero el Senado rechazó la idea juzgando que si era conveniente garantir un mínimum de interés o pagar primas, ofrecía riesgos muy grandes la adquisición de líneas que no producían utilidad y que tenían en consecuencia que aumentar las penurias del Tesoro público. La Asamblea dictó finalmente una ley que acordaba a la empresa una subvención o prima de 6,000 pesos por kilóme'^i'o hasta que la línea llegara a Pando. Esa subvención sería reembolsada por la Compañía bajo forma de servicios ferrocarrileros. El Ferrocarril Central del Uruguay marchaba sin tropiezos, según lo revela este resumen de sus entradas brutas: ria,
1877
$
1878
431,545
456,280
1879
518,463
1880
572,347
1881
643,035
Los señores
Pereda y Villalba
fundaron en
1880
una empresa
de transportes terrestres para trabajar en combinación con rrocarril carretillas,
tación
del
el
Fe-
un fuerte material de carros, muías y caballos y una base de operaciones en la EsDurazno para el servicio de Tacuarembó Cuñapirú,
Central.
Disponían
de
Anales de
314
universidad
la
Cerro Largo y Treinta y Tres. Por cada cinco kilómetros de rrido y 100 liilogramos de peso cobraban 7 centesimos.
reo
Tranvía.s.
ciudad de Montevideo tenía en 1881 oclio empresas de tran-
L
con un recorrido total de 60 kilómetros y un movimiento de siete millones de pasajeros al año según el retrospecto publicado del por don Juan Antonio Artagaveytia en la «Revista Mercantil» vías
Centro de Corredores. Reproducimos a continuación
movimiento
el
de pasajeros de algunas de esas líneas:
1881
1880
Unión Paso del Molino
1.264,856
1.431,711
021,659
1.024,405
.S78,343
982,302
1
Este Pocitos, Buceo y
A
fines
mismo año
diaiics
los
936,134
de París describían coa
mecanismo de un tranvía eléctrico que en esos momenrecorría los contornos de los Campos Elíseos donde se reali-
alborozo tos
de este
—
...
Unión
el
zaba una
Exposición
nacional.
Puentes y peajes.
Una
ley
de 1881 autorizó a
la
del arroyo Rosario para cobrar
persona a caballo.
6
empresa concesionaria
durante ocho años
centesimos
2
del
puente
centesimos por
por vehículos de dos ruedas, 12
centesimos por vehículos de mayor número de ruedas, dos centesi-
mos por vehículos
vacíos y
un centesimo por cada cabeza de
ga-
nado.
Telégi'afos y teléfonos.
La Compañía Telegráfica nido durante
el
del
Río de
gobierno de Flores
Montevideo y Buenos Aires por
el
el
la Plata, que había obtemonopolio del servicio entre
plazo
de veinte años, solicitó
prórroga de su contrato y el gobierno del doctor Vidal se la otorgó per doce años más a título de compensación de perjuicios de guerra. Pero la empresa del Platino - Brasilero se presentó en el acto
Anales de
la
Universidad
315
a la Asamblea combatiendo esa prórroga que excedía de las facultades del Poder Ejecutivo, y pidiendo que se le concediera a ella
también autorización para establecer idéntico secuencia de esa representación fué anulada efecto
sin
servicio. la
Como
prórroga
y
con-
quedj
monopolio que había regido hasta ese momento.
el
La ganadería. La.-
para el pago de la Contribución Directa en una existencia de 6.791,778 animales vacunos de
declaraciones
arrojaban
1881
animales ovinos distribuidos en 6,623 suertes de alambrar y 1.248 alambradas. El valor de aforo de campos de pastoreo ascendía a 58. 485. 112 pesos, y el de los
cría y 10.530,042
eetancia los
sin
ganados a 39.256,881. Don Juan Ramón Gómez sostenía en ese mismo año en el retrospecto de la «Revista Mercantil» del Centro de Corredores que la existencia ganadera era realmente de 7.325,785 animales vacunos y 20.000,000 de animales ovinos. Los momentos eran de optimismo para naderos.
—
Se nota
decía
la
terratenientes y ga-
los
Comisión Directiva de
la
Sociedad
—
saba en el valor de los campos Rural en su Memoria de 1879 y en el nivel de los arrendamientos y esa suba que sobrepasa a todos hasta
conocidos
precios
los
namiento de
los ti-abajos
nuestros
días
es
debida
al
perfeccio-
rurales basados en la combin.ición de las
fuerzas vivas del país con las importadas del extranjero. Por ruin
que sea un campo, agregaba do;i Juan Ramón Gómez en la «Revista Mercantil», nadie vende hoy una suerte de estancia por menos de 8,000 pesos. Hasta hace algún tiempo las había por 2,000 y 4.000 pesos. Ahora, en cambio, acaban de realizarse ventas on Cerro Largo a razón de 16,000 pesos la suerte, y en Florida y
San José
a 20,000.
ventas
las
se
Y
lo
que es en
hacen por
la Capital y
cuadras a razón
Canelones, agregaba,
de
8,
12 y 20
peso'5
cada una. El
ex Presidente argentino doctor
principios al
los
Nicolás
Avellaneda
de 1882 las instalaciones de nuestra Sociedad
enterarse
de
campos
y del
visitó
a
Rural, y
que una parte importante de la valorización de mejoramiento de los ganados se debía al cierre
de las estancias estimulado por la exención de los derechos aduaneros y la rebaja de la contribución directa, dijo que esas mismas
medidas deberían aplicarse en la Argentina. Todavía faltaba mucho, sin embargo, para obtener
el
cerramiento
Anales
316
de
las
estancias,
del
Universidad
cümo se encargó de comprobarlo
de 1881, qua obligó a aj'tículos
la
dejar
en suspenso
gran sequía
la
cumplimiento de
el
Código Rural sobre marcación, medida
caminada a evitar los robos realizados a los ganados en busca de aguadas.
la
sombra
los
extrema en-
del
movimiento
de
La faena
He
«
saladeril.
aquí
el
número de animales vacunos faenados en
los
sala-
deros del Río de la Plata y Río Grande según el Retrospecto de la «Revista Mercantil» del Centro de Corredores: Quinquenio 1871-1875
Quinquenio 1876-1880
o; •"
o(
Uruguay
3.158,600
35.75
3.032,500
Argentina
3.421,800
38.71
2.845,700
35.77
Río
2.257,000
25.54
2.080,000
26.14
Granfe-
8.837,400
7.959,400
La Memoria de Hacienda de 1881 indicaba his
matanzas en
hasta
los
En
Río de
así la
la oscilación
Plata
desde
de
1874
1881:
ANOS
el
saladeros del
38.09
Saladeros
Saladeros
orientales
argentinos
1874
633,643
453,000
1875
521,300
586,700
1876
625,457
551,443
1877
527,600
662,500
1878
677,026
572,500
1879
556,500
539,000
1880
665,500
491,500
1881
576,170
399,000
las
litoral
proximidades de Montevideo funcionaban oriental
6,
en Buenos Aires
8
8
saladeros,
y en Entre Ríos
9,
en
corres-
pondiendo las cifras más altas al litoral oriental, que faenó 455,000 cabezas en 1880 y 359,000 en 1881. Las cifras globales demostraban estancamiento y tendencia a la baja, y como a pesar de todos los esfuerzos realizados no se conseguía ampliar los mercados
Anales de
del
317
Universidad
la
tenían nuestros industriales y exportadores que dirigir
tasajo,
demás procedimientos de conservación de carnes
sus miradas a los
que estaban en ensajo.
—
Río de Janeiro Brasil
del
—
1880,
Wagner,
Alejandro
casa
más importante de
el
recibió en
los
mercados tasajeros
según los cuadros estadísticos de procedentes
kilogs.
1.512,000
de
los
la sa-
y 27.745,000 de los saladeros del Río de la conjunto 29.257,000 kilogs., que fueron vendidos a los
laderos de Río Ctrande Ilata.
En
precios de 260 a 420 reis por kilog., del
el
A
Río de
la
el
de Río Grande y de 280 a 500
Plata.
mediados de 1881
a nuestra Cancillería
Consulado Uruguayo en Londres comunicó
el
resultado de un importante cargamento de
el
capones conducidos en perfecto estado por el vapor frigodecía el Cónsul don Guillermo «Paraguay». Hasta ahora luchaban las empresas con dificultades para mantener Cranwell 19,000
—
rífico
—
misma temperatura durante
la
fin
&
del
el
viaje y para escalonar las ventas
de asegurar la estabilidad de los precios.
mantenimiento de de
er.calonamiento depósitos
las
frigoríficos
Pero
problema
el
temperatura ha quedado resuelto ya y el ventas también mediante la creación de
la
en
tierra.
La carne
inglesa,
agregaba,
se
vende a once peniques y la del cargamento del «Paraguay» se ha vendido a cuatro y medio al por mayor, a siete en los mercados
y a once en algunas carnicerías, o sea do
las
carnes
El ganado para
A
la
al
mismo
tipo de cotización
inglesas.
el
abasto de
la
población.
Tablada de Montevideo entraron en 1880 y en 1881
los ani-
males que se detallan a continuación: 1830
Vacunos
1881
248,678
Ovinos Yeguarizos
Mulares Cabríos Porcinos
El consumo de la población absorbió en el primero de esos años 87,076 vacunos, 61,767 ovinos, 4,936 cabríos y 2,212 porcinos, y en el se.íundo 88,375 vacunos, 64,026 ovinos. 7.184 cabríos y
8
Anales de
3!
1,664
Todo
porcinos.
la
universidad
demás fué absorbido por
lo
los saladeros y la
exportación.
La Dirección de Estadística calculaba
la
carne de los ganados
de esa época a razón de 161 kilogs. tratándose de animales vacunos y de 23 tratándose de animales ovinos. Véase, de acuerdo con esos porcentajes,
número de
el
kilogs.
blación de Montevideo durante
ANOS
el
de carne consumidos por
la
Carne vacuna
Car;-e linar
Tital
1877
14.578,711
1.009,309
15.588,020
1878
15.205,543
1.378,114
16.586,657
14.863,206
1879
13.468,455
1.394,751
1880
14.019,236
1.420,641
15.439,877
1881
14.228,375
1.472,598
15.700,973
He aquí
los precios a
po-
quinquenio 1877-1881:
que se cotizaban
los
animales destinados
al
abasto de Montevideo en la segunda quincena de julio de 1880:
Vacas y novillos en tropa, de $ 16 a 16.50. Vacas y novillos más inferiores, de $ 14 a 14.50 Vacas d€ $ 14 a 15 Novillos de
$
15 a 16
Bueyes de $ 26 a 32 Terneros de $ 4.50 a
5.00
Lanares, capones gordos, de 2.70 a 2.75 El tránsito de ganados en la campaña fué reglamentado nuevamente en 188 0, mediante el establecimiento de certificados talonarios de numeración progresiva para la justificación de la propiedad en las transacciones rurales.
Cifras oficiales de la riqueza pública.
Las declaraciones para
el
pago de
la contribución directa
en 1880
arrojaban, según los cuadros elevados por la Dirección General de Estadística a la
Cámara de Senadores, un monto de
72.183,887 pesos
departamento de Montevideo, y de 123.911,654 pesos en los 12 departamentos restantes. En conjunto 196 millones en números en
el
redondos.
En
el
capitales
departamento de Montevideo había 8,121 propietarios y sus clasificábanse así: propiedad urbana, 61.220,798 pesos;
propiedad rural, 6.717,159;
capitales
en
giro,
4.191,430.
Anales de
la
319
Universidad
departamentos de campaña había 31,398 propietarios con 12,493 fincas urbanas aforadas en 17.852,809 pesos; 21,918 fincas rústicas en 9.012,737 pesos; 417,328 cuadras de labranza en 4.797,476 pesos; 7,871 suertes de estancia en 58.486,112
En
los
los siguientes valores:
pesos;
ganados en 29.256,881 pesos y el resto en capitales en giro. otra oportunidad que el Director de Estadís-
Ya hemos dicho en
don Adolfo Vaillant juzgaba que era necesario triplicar
tica
las de-
De
claraciones de los contribuyentes para aproximarse a la verdad.
acuerdo con
ello
la
riqueza pública del Uruguay subía en 1880 a
588.000,000 de pesos.
Veinte años antes, en 1860, oscilaba alrededor de 300.000,000.
]ja agricultura.
corredor de cereales
El
estadística así
el
muy
prolija
don Arsenio Lermitte que llevaba una
de la producción agrícola del país, fijaba
monto de nuestras cosechas de
trigo
(hectolitros calculados
a 80 kilogs.:
480,000
1S71
561,000
1872
1873
530,000
.
1874
562,000
1875
335,000
1876
890,000
1877
710,000
1878
695,000
1879
615,000
1880
495,000
El consumo nacional absorbía en esa época alrededor de 500,000 El excedente, cuando lo había, era exportado bajo for-
hectolitros.
ma
de granos o de harina. Una de las cosechas del decenio podía como buena según el señor Lermitte y las nueve
considerarse
como simplemente regulares. La cosecha agrícola de 1881 fué calculada por don Arsenio
restantes
mitte (hijo), en
la
forma que subsigue:
Ler-
Anales
320
700,000
fanegas de trigo a $ 4.50
arrobas
2,400
universidad
la
ele
a
de. alpiste
,150,000
0.70
$
1,680
.
500,000 ristras de ajo y cebolla a $ 0.15 20,000 fanegas de cebada a $
cajones de fruta a
50,000
1.40 2
$
300,000
fanegas de maíz a
$
1.80
30,000
fanegas de papas a
3
2.00
pasto
a
$
100,000
400 fanegas de
porotos a de
quintales
50,000
150,000
de
quintales
yuntas de aves
a
a
$
arrobas
de
lino
50,000 kilogs. de
a
60,000 50,000
0.50
116,000
50,000
1.00
180,000
1.00
$
el
100,000
ciení.
7,500 0.80
50,000
mazos de paja para escoba a kilogs.
a
$
.
.
50,000
queso
540,000
.
0.50
|
manteca a
de
100,000
1.20
$
100,000 centenas de huevos a $
15
28,000
.
.
4.00
$
alfalfa
.
.
75,000
0.30
$ .
40,000
.
12,500
0.25 .
15,000
.
$
4.425,080
Después de seis años de vivos y persistentes esfuerzos pudú don Francisco Vidiella anunciar al país en 1880 que había resuelto el problema de la implantación de la industria vitícola. Al enviar al Presidente Vidal la primera botella de vino elaborado en su granja de Villa Colón
compradores
40
bordelesas
—
—
decía
donde quedaban esperando que
de
las
57
clases
de
cepas que tenía a estudio sólo siete respondían a nuestras condiciones
80,000
Agregaba que su establecimiento tenía un almacigo de veintitantas mil para aumentos
climatéricas. cepas,
y repuestos, un olivar de 3,500 plantas y un almacigo de 10,000 para la venta.
Enseñanza
cina
agi'ícola.
El doctor Sacc, Director del Laboratorio Químico de la Ofide Agricultura e Inmigración, fué encargado en 1881 de
dictar
un curso de agronomía en la Escuela de Artes y Oficios. allí un laboratorio de química agronó-
El doctor Sacc organizó
mica que practicó 180 expresaba el deseo de
y al dar cuenta de sus trabajos que su curso y su laboratorio fueran incorporados a la Graiija - Escuela de Toledo. Los alumnos del curso de práctica agrícola anexo a la escuela análisis,
Anales de
la
Universidad
pública del Cerro que dirigía
el
maestro don José María López, año 18 81 ante una Comisión
rindieron
examen
al
finalizar
el
321
compuesta de don Modesto Cluzeaux Mortet, don Federico E. Balparda y don Lucio Rodríguez. El campo de experimentación compuesto de 10,000 varas cuadradas estaba a corta distancia de la Escuela y en él trabajaban los alumnos los jueves después de las 12 y los sábados después de las 3. Versó el examen acerCiX de los elementos componentes de la tierra, instrumentos de trabajo, abonos, riegos, sementeras realizadas en el campo de experimentación, injertos, todo ello complementado por trabajos prácticos que revelaban el aprovechamiento efectivo de la enseñanza.
Las casas importadoras contribuían al aprendizaje de nuestros mediante la exhibición y trabajo sobre el terreno del material técnico empleado en Inglaterra y Estados Unidos. Una de ellas hizo funcionar en los alrededores del Paso del Molino la májquina segadora y atadora Deering, dejando en los agricultores
espectadores
la
impresión
renovación de todo
el
de
que era necesario proceder a
la
utilaje de nuestras chacras.
Colonización.
La Asamblea sancionó en 1880 una ley por la que se autorial Poder Ejecutivo para fomentar la agricultura, formando empresas de colonización o ayudando o estimulando las iniciativas particulares. Las colonias deberían instalarse cerca de las vías fluviales, ferrocarriles, caminos nacionales de mayor tránsrito o de los pueblos, en terrenos fiscales o campos particulares que serían expropiados. Cada vez que dentro de un distrifamilias solicitando to pastoril se presentara un grupo de 2 tierras para cultivar, podría el Poder Ejecutivo adquirir o expropiar ios terrenos necesarios. Al cumplimiento de esta ley se zaba
destinaba de
la
partida de 200.000
pesos del impuesto de patentes
giro.
Accediendo a
las gestiones
de las autoridades locales de Mal-
Gobierno en ese mismo año la creación de una colonia en el Rincón de San Rafael. Las chacras se entregarían a los colonos al precio de cinco pesos la hectárea. Para la realización del plan destín Ahaae la cantidad de 6.000 pesos anua-
donado, autorizó
les llos
el
procedentes del arrendamiento de las y Coronilla. T.
VII -21.
islas
de Lobos, Casti-
Anales de
322
Don
la
Carassale realizó
Justo. R.
Universidad
a
su vez un contrato para im-
pulsar la Colonia Cosmopolita, fundada en el departamento de la Colonia, que tenía ya entesa época 175 familias y una supercultivada
ficie
de
4,2 73
cuadras.
El
Gobierno
anticipaiba
2
52
pesos por familia, con destino a bueyes, herramientas, semillas y gastos de alimentación durante el primer año de labor, cantidad que debería ser reembolsada por el colono; y a su turno
empresa se obligaba a dar en arrendamiento una chacra de 15 hectáreas y a vendérsela por
la
mo
de 15 pesos
El ción
de
la
En ción
coronel de
6
la
a el
cada colono precio máxi-
cuadra.
Gaudencio
Carlos
presentó
un plan de
coloniza-
leguas a inmediaciones del río Cuareim sobre
la
base
adjudicación de las tierras fiscales existentes en esa zona. 188 fué instituida una Comisión Honoraria de Inmigray
Agricultura
Comisión
Central
ba.io
de
quedó colocada la Respondía al propósito de
dependencia
cuya
Inmigración.
impulsar los trabajos agrícolas.
Industrias extractivas.
La Inspección de Minas fué creada en 1881. Su informe
inicial,
obra del ingeniero don Florencio Michaelson, relativo a las compañías «Minas de Oro del Uruguay» y «Minas de Oro de Corrales-), establecía que la primera de esas empresas tenía una concesión de
3,600
hectáreas
con
1,600
metros de galerías subterráneas,
un personal de 200 obreros y una población de 400 almas en Santa Ernestina y de 400 obreros y una población de 600 almas en Cuñapirii; y que la segunda empresa tenía una concesión de 2,425 hectáreas y estaba recién en el comienzo de sus trabajos. También se preocupó el Gobierno de la vigilancia de los montes fiscales y comunales. Por un decreto de 18 81 encomendó a las Juntas Económico - Administrativas el deslinde y alambrado de esos montes y el nombramiento de inspectores y guardabosques, todo ello de conformidad a las prescripciones del Código Rural, pero sin señalamiento de recursos, lo que equivalía a no ocuparse del importante asunto.
Anales de
la
Universidad
323
Uxposicioues nacionales.
La tiva
Asociación Rural en
para
1880
pidió
una
abrir
y
obtuvo
administra-
autorización
suscripción pública
con destino a
exposición feria nacional programada en 1872 y pendiende realización todavía. La suscripción sería por 20,000 pesos en acciones de 20 pesos reembolsables con el producto de la
la
-
te
misma duda en
La Cámara d-
Exposición.
Diputados,
no
creyendo sin
de ese arbitrio, votó un proyecto de ley por
eficacia
la
suma pedida por la Sociedad Rural. Pero rechazó invocando que estaba a punto de abrirse
el
cual se acordaba la
el
Senado
la
Exposición continental de Buenos Aires, a
lo
la
concurrirían
qu-?
suma de 20,000 pesos era muy peembargo nó era posible dar más sin menoscabo
nuestros industriales; que la
queña y que sin de otros compromisos existentes ineludibles; que convenía aplazar el pensamiento para épocas de mayor prosperidad materia' y económi'^a. La Junta Directiva de la Sociedad Rural siguió trabajando
despecho del rechazo del proyecto y obtuvo
a
un
Gobierno
del
mensuales de 5 00 pesos y una circular a las Jefaturas Políticas y Juntas Económico - Administrativas para que coadyuvaran al buen éxito de subsidio
de
3,000
pesos
en
cuotas
Exposición.
\c
Tal fué
el
punto de arranque de la Exposición Nacional realiel gobierno del general Santos, con
zada en abril de 1882 bajo
un amplio programa que 'concretaba así den Domingo Ordoñana: una revista agronómica que se ocupará de zootecnia (ganados; concursos de reproductores; concursos de razas obtenidas por cruzamiento;
cueros y
lanas), agricultura;
industrias
rurales;
maquinarias en general; enseñanza agrícola; construcciones rurales; animales silvestres. En los mismos momentos en que así se programaba la primera gran Exposición - Feria Nacional, tenía lugar en Paysandú
una exposición de lanas, harinas, aves, artículos de mueblería, artículos de talabartería, tejidos a mano, cueros curtidos, carnes conservadas, maquinaría agrícola, cereales, ganados de camimportados,
po,
reproductores
del
mismo departamento
en
la
que figuraban
los
productos
y también los de otros de la República,
especialmente ^lontevideo y Salto. La prensa de la época destacaba como una de las conquistas del cruzamiento de razas el peso
de
455
Eeaulieu, ^lue
kilogs.
fué
alcanzado por
sacrificado
al
un novillo de
clausurarse
la
la
estancia
exposición
y
de que
Anales
324
aló
ei
cuero
ie
Universidad
la
siguiente rendimiento:
carne y sebo 386 kilogs., cabeza
La Liga
el
25 de agosto de 1&80, con
veintena de secciones que abarcaban los fotografía
artes,
litografía,
tura;
aguardientes y bebidas
confitería;
tabacos;
tería y joyería;
las
imprenta;
e
y
floricultura
alcohólicas;
confección de ropas;
arboricul-
farináceos;
conservas;
productos químicos;
pla-
fundición y maquinarias; calderería y hojalatería;
sombrerería;
calzado;
una exposición una siguientes ramos: bellas
Industrial resolvió a su turno realizar
permanente, que fué inaug'urada
de
27,
42.
secciones
alfarería;
figuraban
objetos varios.
diversos
pagaba una cuota con destino
alquiler del
al
En
expositores.
generalidad
la
Cada
expositor
y gasto.^ de
edificio
funcionamiento.
Bancos y monecias. La cuestión bancaria estuvo permanentemente
a la orden del Gobierno pasó a las Cámaras el proyecto de Banco de Crédito Real Mixto del señor Vorragaude. hasta mediados de 1881, en que ese proyecto quedó san-
desde mediados
día
en que
de l&SO
el
cionado.
El
Banco de Crédito Real Mixto tendría según
capital
potecas les
el
proyecto un
de 50 millones de pesos, pero no en metálico, sino en
urbanas constituidas por todos
los
propietarios
que quisieran ser accionistas del establecimiento.
dades territoriales se de veinte
años de
emitir hasta
el
les
las
propie-
un valor equivalente al monto arrendamientos. El Banco podría
atribuía
alquileres
o
quíntuplo del valor de las hipotecas constituidas
por sus accionistas y abriría créditos a éstos hasta valor hipotecado.
A
hi-
territoria-
Sus billetes serían convertibles en
el
75
9<-
del
oro.
—
Era un proyecto monstruoso. El Uruguay, decía uno de los miembros de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados aconsejando su rechazo tiene una riqueza piiblica que puede estimarse en 218 millones de pesos, computados sus ganados (51.659,607). sus tierras de cultivo campos de (7.16,8,150), sus
—
pastoreo (4.3.704.000). sus construcciones de Montevideo (50.000(000),
sus construcciones de campaña légrafos y sus
tierras
no
(35.498,000), sus ferrocarriles y tJ-
denunciadas.
Pues
bien,
agregaba,
el
Banco Verragaude podría emitir una cantidad de billetes más alta que esa cifra: podría emitir hasta 250 millones, o sea el quíntuplo de su capital!
Anales de
Pero
el
la
Universidad
ambiente político y financiero de
325
época era propicio
la
a esa gran aventura y la Asamblea no tardó en dictar
por la cual se autorizaba bases, que eran
fundamentalmente iguales
nario:
cinco
capital,
bipotecas
millones
constituidas
una
ley
planteamiento del banco sobre estas
el
sobre
de
peso's
a las del proyecto origi-
oro y
el
monto ds
urbanas
propiedades
las
con
las
aforo
equivalente a veinte años de arrendamiento; emisión de billetes al
portador y a el
la
metálico y
vista por
las
urbana por
propiedad
quíntuplo del capital constituido por
el
hipotecas
préstamos a
;
la
propiedad rural y a
préstamos a los y pensionistas basta seis meses de sueldo; daración de la concesión, cincuenta años. Felizmente para el país estaba tan deprimido el crédito público y era tan grande el divorcio entre las autoridades y el puela
empleados
el
75
9o
de su valor;
ptiblicos
blo, que el concesionario no encontró quién le diera los 5 millones de pesos oro que exigía la ley y el Banco Verragaude se fué desprestigiando poco a poco hasta caducar del todo, como lo vere-
mos después. La emisión amortizada
inconvertible
durante
la
a
cargo
del
administración
Estado, tan fuertemente Latorre,
continuó desceidiendo durante la administración Vidal. En el transcurso de 1880 fueron extinguidos por el fuego 571,821 pesos, quedando en circulación un saldo de 2.736,909 pesos.
También prosiguió el retiro y desmonetización del excedente de piezas de cobre comenzados durante la administración Latorre. A mediados de 1880 la Comisión encargada de la extinción llamó propuestas para la transformación en lingotes de un conjunto de monedas que representaba el valor legal de 47,565 pesos.
a
A
pedido de la Cámara de Comercio pasó el Poder Ejecutivo a Asamblea un proyecto de ley por el cual se desmonetizaban las piezas de oro de menos de dos pesos. 'los décimos y quintos le cóndor, el dólar americano y las piezas francesas de cinco y diez la
francos,
rechazadas a diario por la aduana, por los bancos y por comercio y que eran ventajosamente reemplazadas por la moneda de plata nacional. El Senado encontró atendible la gestión. Pero no así la Cámara de Diputados, a pesar del dictamen de su Comisión de Hacienda. Y las pequeñas monedas de oro continuael
ron trabando
f]
movimiento transaccional de
la
plaza.
CAPÍTULO
VI
Movimiento administrativo
l/a
situación financiera en 1880 y 1881.
Al finalizar el año 1880 presentó el Ministro de Hacienda don Juan Peñalva un informe acerca de su actuación a partir del mes de marzo, en el que establecía que el ejercicio 1879, último de la
administración Latorre, arrojaba un déficit de 1.108,376 pesos y que esa misma administración había dejado impagas las planillas de enero y febrero siguientes y había consumido con destino a anteriores
sei-vicios
su turno un cerraría
déficit
Ante esas
pesos
cifras
resolvió
el
Poder Ejecutivo suspender
de todos los atrasos, a la espera
^
e'
el
pago
de deuda
que
el
crónico del desequilibrio finaucierc!
vicio
Pero
\^
de las emisiones
Cuerpo Legislativo, y aplicar las rentas de 18S1 exclu\sivamente a los sueldog y obligaciones que fueran venciendo. Tal era el admirable arbitrio que se había descubierto para combatir autorizara
^
el
con un descubierto de 1.773,244 pesos.
ejercicio 1880
el
de la
Contribución Directa y nuevo presupuesto arrojaba a 807,648 pesos y que por efecto de todo ello
508,653
Agregaba que
Patentes de Giro.
al
Legislativo
redactarse los
el
títulos
mensaje
destinado a obtener
do 1879, último de la administración Latorre, y
mero
del
de deuda necesarios para cubrir el
el
Cuerpo déficit
de 1880, pri-
gobierno de Vidal, resultó que el cálculo había quedado La deuda exigible subía realmente a dos millones de pesos computados los sueldos civiles y militares por 1.434,000 pesos, la del
corto.
planilla de la Junta
273,000
pesos,
Económico Administrativa de Montevideo por créditos por 293,000. La deuda debería -
diversos
y
cancelarse mediante la emisión de «Consolidados de 1880» con 4
%
do interés y 1 de amortización. Prevenía a la vez el mensaje que existía una deuda flotante con monto de 6.169,865 pesos que era urgente consolidar. Ya veremos que al autorizarse la consoU'"/r
dación
de
la
deuda exigible hubo que elevar esa misma
cifra
Y
Anales de
que
Universidad
la
la deuda flotaute quedaron sobrepujados los una proporción inmensamente mayor. De las angustias en que vivían ios empleados de la Nación en e\ curso del primer año de la administración Vidal dan idea una exposición de don Vicente Garzón, Jefe Político de Maldonado, da-
consolidarse
al
cálculos en
tada en junio, haciendo constar que al pei'sonal de Policía
se
le
adeudaba doce meses, y una nota del Tribunal de Justicia al Poder Ejecutivo datada en noviembre gestionando el pago de cinco meses de sueldos adeudados a los Jueces. Los pensionistas y acreedores se reunían a diario en los corredores y escaleras de
do
pago,
Casa
la
promoviendo
demanda de órdenes más de una vez tuvieron
de Gobierno en
tumultos
que
honda repercusión. En noviembre
llegó
a
tal
grado
la
excitación
de las viudas agolpadas a las puertas del Ministerio de la Guerra,
que
el
Máximo Santos salió de su muchedumbre penetró en el
coronel
a',
frente de la
el
Ministro de Hacienda
a
despaciio y poniéndose escritorio de su colega
señor Peñalva, quien en
firmar órdenes de pago que con la
misma
el
acto
empezó
rapidez eran cubier-
La prensa comentó el incidente y entonces Guerra dirigió una carta al de Hacienda, preguntándole si era cierto que había ido a su despacho con el solo oh jeto de ayaidarlo como colega, y contestó el señor Peñalva que efectivamente era así, que el coronel Santos había ido al Ministerio de Hacienda «para evitar que se aglomerara tanta gente y para evitar algún desorden». El ejercicio 1881 cerró a su turno con un déficit de 1.251,306 tas el
por la Tesorería.
Ministro de
la
pesos,
correspondiendo
4-51,394
según
ello a
los
a
sueldos
799,972
cuadros insertos en
la
«ya
conceptos
otros
Memoria de Hacienda, y
pesar de la consolidación de todos Ion atrasos de 1879 y 1S80
hemos
a que antes nos
referido.
Les ingresos del Tesoro público. Los ingresos estaban en tren de aumento
yendo algunos de
ellos fijaba la
sin
embargo. Exclu-
Memoria de Hacienda
df las recaudaciones de 1880 en 7.015,000 pesos, y 7 885,000
pesos.
el
el
producto
de 1881 en
Véase cómo se descomponían esas cifras:
328
Anales de
la
universidad
1880
S
4.319,776
1881
$
Anales de
de
saldo
pesos
163,595
reducía a
la
cantidad
y
el
de
Universidad
la
329
llamado empréstito del comercio pesos
63,000
se
un grupo de
por
suplida
comerciantes para ser reembolsada con ayuda de despachos aduaneros.
Son dos partidas que corresponden
grandes apremios
de
octubre'
de Aduana tuvo que dirigir una nota
Comercio para explicarle
las
sin
noviembre,
y
duda alguna a
en que
Gerente de
al
los
Colecturía
la la
Bolsa de
causas de la demora en la entrega
de los fondos destinados al servicio de la deuda pública y papel nacionalizado, que había causado grandes alarmas, y expresarle
que en adelante las entregas se harían con toda regularidad. vuelve a hablar el Contador de la NaLos ingresos de 1881
—
señor
ción
los
aduaneros,
derechos
así:
24,713.
133,500;
rentas
cuenta
aña,
del
anticipos del
comercio
corriente
en
el
compra de oro y cobre para desmoneEn conjunto 8.612,357, no incluidos ios ingresos de-
Banco de Londres, tizar,
descomponen
se
rentas del año anterior, 395,435;
7.998,818;
sobre
—
Villalba
59,000;
partamentales por falta de datos. Al resumir las cifras de 1881 preveuía
don Juan
L.
no medio de pesos dinarios
ficit
el
Ministro de Hacienda
Cuestas que los gastos presupuestados y los extraorpresupuestados habían sobrepujado en un millón y el
monto de
equivalente a ese
rentas, dejando para 1882
las
mismo
un
dé-
exceso.
Medidas de contralor financiero.
En una
los
ley
comienzos de
administración Vidal dictó
la
reglamentaria de
Comisión de Cuentas
la
la
Asamblea
del
Cuerpo Le-
se
compondría
gislativo.
De acuerdo con esa
ley
la
Comisión de Cuentas
de dos senadores y tres diputados. Todas las oficinas del Estado pasarían a la Comisión los informes, documentos y libros que ¡os
fueran solicitados y los Ministros de Estado cuantos datos y explicaciones se les pidieran. Anualmente informaría la Comisión a crida
Cámara acerca
3'iK'iiií's
del resultado de sus
tributarias.
La Aduana.
La renta aduanera de toda en
1879,
En
4.338,319
trabajos de contralor.
en
1880
y
la
República produjo 4.911.422 pesos
5.0'31,184
en 1881,
1880 figuraban la renta de importación con 3.223,494, la de ex-
portación con 941,283 y
el
almacenaje y eslingaje con
lo
demás.
A
Anales de
33U
Aduana de
h\
ceptorías
Capital correspondían 3.700,000 pesos y a las re-
la
fluviales
Al iniciarse
terrestres
y
fuerte
la
baja
doctor Vidal a la Asamblea
encaminadas
obtener
a
Establecíase
renta.
ropa hechja,
ros,
general;
en
20
el
de
vinos,
los
tabaco de hoja en
para
paños
los
producto
el
.le
cerveza,
calzado,
sombre-
%
para
rama y
géneros
y
de Aduana
ley
25
el
gobierno del
alcoholes,
cigarrillos,
y
carruajes;
velas,
reformas
las
el
enmiendas a
para
Ve
cigarros
aceite,
%
varias
40
el
fósforos,
yerba,
azúcar,
café,
resultado
1880,
millón de pesos más en
vin
tabaco,
galletitas,
fideos,
resto.
el
de
de la administración Latorre, presentó
tiibutarias
la
universidad
la
té,
el
comestililes
excepto
de
I0.5
%. La Asamblea redujo al 37 % el primero de esos derechos y aceptó en general les demás porcentaje?. Pocos meses después volvía el Poder Ejecutivo a pedir modifialgodón que pagarían
caciones
sustanciales.
categorías
la
3
f/f).
(37,
S'
rrillos,
30,
25,
de
%
.
Por
contiene 7
9,
6
6
1|2,
el
Mi-
trece 1|2,
5
categorías con
el
para los vinos, bebidas alcohólicas, tabacos, cigarros y cigasombreros, ropa hecha velas, muebles, queso, manteca,
calzado, carruajes;
el
10,
decía
•
—
nuevo proyecto establecíase como derecho 25 % y como derechos especiales el
el
el
20
%
para los tejidos de algodón;
para las maderas en bruto; y
12,
1|2,
—
d'^r-c'ios
argentina sólo contiene
la
importación
12
15,
20,
mientras que
base del 25
general 37
Nuestra escala de
de Hacienda don Juan Lindolfo Cuestas
nistro
y
15
el
el
5
%
para
los
postes de
el
15
%
ñandubay
alambre de cercos. La Asamblea sancionó también ese nuevo
proyecto
y
estableció
que
artículos
los
mercaderías
y
generales
una Comisión compuesta por el Colector de Inspector de Vistas, dos Vistas y un número igual de
serían avaluados por
Aduana,
el
comerciantes elegidos por
Ministro de Hacienda, sobre la base
el
de los valores en depósito con una rebaja del
La contribución De el
los
al
10
%.
directa.
cuadros del departamento de
año ISSO extraemos
las
la
Capital
correspondientes
siguientes cifras:
Propiedades urbanas y suburbanas sujetas »
5
rurales sujetas al 5 "/qq »
4
Capitales en giro sujetos al 5 °/oo
rel="nofollow">.
al 5 "/oq.
$ 61.200,796
3.528,750 3.188,409
4.191,930
Alíales
En números
redondos,
de la universidad
millones
72
331
que producían
de pesos
al
erario público 357,000 pesos anuales.
Había en esa época pesos, les
2,345
2,809 contribuyentes orientales con 23.306,310
contribuyentes
con
italianos
1,530
13.167,310,
españo-
con 9.468,470, 980 franceses con 8.578.080 pesos, y en propor
demás nacionalidades.
ción descendente las
Los cuadros
de los otros doce
arrojaban un capital de 122
i/¿
departamentos de
la
República
millones de pesos, y un rendimiento
de 675,043 pesos. Véase cómo se distribuía ese capital que
fiscal
estaba gravado con cuotas del 4
al 5
V2
%
%<>:
12,493 fincas urbanas
21,918
17,852,809
$
9.012,737
rústicas
>>
Tierras de labranza
4.797,500
pastoreo
58.486,112
»
»
6.791,778 animales vacunos 10.536,042
....
23.771,223
ovinos
»
3.160,812
Capitales en giro
3.136,433
En 1881 el valor de los capitales en el departamento de Montevideo era de 94.709,444 pesos con un producto fiscal de 470,000 pey
sos;
pesos,
el
de los doce departamentos
sobresaliendo en
tribuyentes (4,546
con un
estos
con
de campaña de los
de 51.370,080
capital
contribuyentes
últimos
y los
pesos),
pesos),
13.787,775
contribuyentes con 5.554,544)
nacionales
ingleses
121.012,444 (14,105
los
italianos
los
(330
con-
españoles (2.734
contribuyentes
con 5.086,996 pesos).
La Dirección de
Estadística publicó en 1881 un extracto que
jaba en 123.911,654 pesos los
con
el
monto de
ios capitales declarados
fi-
por
contribuyentes de campaña, cifra que no coincide exactamente la
del
Ministerio
de Hacienda que acabamos
de reproducir,
cuizá porque en un caso se computaban los pequeños capitales bres de impuesto y en
monto entre
los
el
otro no.
Véase cómo
departamentos respectivos:
se
li-
distribuía ese
Anales de
332
la
Universidad
Capitales
Población
Paysandú
36,000
Salto
36,000
16.260,906
Tacuarembó
22,000
13.081,911
Canelones
40,000
11.039,452
Cerro Largo
33,000
10.074,684
Soriano
25,600
9.228,835
22,500
8.223,027
20,500
7.568,567
San José Durazno
De cifras
.
declarados
.......
$
18.451,276
baldonado
27,863
7.425,407
Florida
21,500
7.069,789
Minas
21,500
6.752,845
Colonia
23,.S50
6.735,955
329,813
$ ]23.911,654
otro
cuadro
oficiíil
recapitulativas
guientes guarismos:
de
más amplio publicado en toda la
República,
1881
reproducimos
con los
las si-
Anales de
d(í
1869
Universidad
mercaderías de Aduana sujetas
las
De
la
ese
.
cuadro extraemos
.
.
los
al
siguientes
338
pago del mismo impuesto. datos:
Anales de
334
Montevideo Departamentos de campaña
La
.
ley de 1881 establecía
hasta
1879
1880
1881
S 358,623
% 243,486
$ 316,082
323,977
184,927
296,161
.
17 categorías, desde la de cinco pesoó
más
de 1,800. Las tres
la
Universidad
la
altas eran estas:
500 pesos a los
bancos de depósitos y descuentos, 1,000 pesos a las empresas de gas, 1,800 a los bancos de emisión.
Presupuesto General de Gastos.
La ley de Presupuesto General de Gastos del año 1881 fijó el monto de 'las erogaciones públicas en 7.857,000 pesos distribuidos de la siguiente manera: Cuerpo Legislativo
63,524
.
.
....
Presidencia de la República Ministerio
160,720
S
Ministerio de Relaciones Exteriores
29,446
de Guerra
1.785.027
»
»
Hacienda
»
,
Gobierno.
605,584 1.859,437
.
Oblig-aciones de la Nación
En
las
3.353,805
planillas del Ministerio de Gobierno figuraban la Univer-
sidad con un profesorado reducido a 6 catedráticos de Derecho y
de Medicina,
12
y
Instrucción
la
rrespondiendo a Montevideo paña. La a
gastos
misarios,
Policía
y
pesos
y
el
resto
personal
del
sargentos,
de servicio compuesto
Junta
la
297,864
En
Económico Administrativa
con
de
-
co-
cam-
la
La
Capital
17
co-
de sereplanilla
subid
a
pesos.
el
presupuesto
Guerra figuraban
de
cazadores, un regimiento de artillería y ría
la
de
132 guardias civiles y un cuerpo
nos de 32 hombres de caballería y 153 de infantería. de
a
de la Capital absorbía 47,000 pesos con destino
sueldos
24
Primaria con 355,533 pesos
142,000
cuatro
batallones
mayor
de línea, con un total de 2,000 plazas; la plana tres
brigadieres
Pasivo con
el
y
siguiente
7
coroneles
número de
mayores, y jefes
da
regimientos de caballe-
3
y
el
activa
Espado Mayor
oficiales:
Anales de
la
Universidad
335
28 coroneles. *
12
graduados.
»
50 tenientes 16
•
'
coroneles.
»
graduados.
;>
140 sargentos mayores. 47
graduados.
:>
,>
204 capitanes. 8
graduados.
»
33 ayudantes
106 tenientes 92
mayores. l.o.
»
2.°.
119 subtenientes.
Para
la
nes civiles,
reforma de este abultado Estado Mayor y el de pensi> propuso don Pedro Riva Zuchelli en 1880 la creación
una deuda de once millones de pesos. las obligaciones de la Nación figuraban el servicio de '.a p"esos), el deuda interna (1.260,000 del Empréstito Uruguayo (408,000), el de la Deuda Franco - Inglesa (191,000), el de la Deuda df
Entre
Italiana (75,000),
Amortizable y
el
el
contrato
Mauá
Deuda Francesa
de la
(200,000),
el
la
Deuda
(180,000)
7.890,000
pesos.
Véase cuá-
eran sus principales fuentes:
Aduana tes
de
el
moneda
(240,000).
Los recursos estaban calculados en les
(78,000),
de extinción dei papel
4:800,000
pesos;
Contribución
Directa
1.055,000;
Patea-
de giro 600,000; papel sellado 280,000; timbres 200,000; Correo
65,000,
herencias
la
Capital
de
campaña
transversales
335,000; 126,000;
impuestos
70,000;
municipales
impuestos
municipales
de
los
de
departamentos
impuesto de instrucción pública 112,000;
iai-
puestos policiaJes de toda la República 98,000 pesos.
El descuento a
los sueldos.
El impuesto de 5 a 50 tvación escala
cado
Latorre
fué
'/{
decretado en 1879 durante
reorganizado en
1881,
sobre
la
la
base
adminl'í-
de una
proporcional al nionto de las anualidades, y luego modifiradicalmente en 1882, reemplazándose la escala gradual por
ui.
descuento uniforme del 20
las
clases pasivas, civiles y militares.
''A
sobre todas las asignaciones de
Anales de
336
Deudas
A
universidad
la
públicas.
de
principios
1881
autorizó
créditos anteriores a febrero de
Asamblea
la
«Deuda Amortizable» con destino a
1879.
emisión de la
la
consolidación de
la
Ei*^
todos
de intereses, pero con una fuerte amortización de 4 %. El Poder Ejecutivo se apresuró a vetar esa ley invocando
— decía
puestadas de
sos
del
situación
tirante
la
Empresa
—
en su Mensaje
de inmigración,
ley
del
público
erario
los
Aparte de
las
hay que atender de
84,000
los
una deuda sin servicio
la
sumas
la
pre.su-
los 200,000 pe-
subvención
a
la
Ferrocarril a Pando, los 72,000 de la deuda del Fe-
Banco de Londres Banco Comercial por anticipos al Tesoro público, y el crédito del Banco Alemán - Belga. Pero la Asamblea mantuvo su sanción por una enorme mayoría de 28 legisladores contra 4. Un mes después comunicaba la Contaduría al Ministerio de Hacienda qufi había empezado la sustitución de documentos de crédito por resguardos provisorios que oportunamente serían canjeados por títulos de la Deuda Amortizable. Los resguardos canjeados rrocarril a Santa Rosa, los 80,000 adeudados al
y
al
ascendían a 892,632 pesos, correspondiendo a intereses ras partes de esa suma.
Y
afirmación citaba la Contaduría un crédito de
Wich por
adelante a
en
que con
51.999 pesos, las
tasas
dos terce-
las
para demostrar que no era exagerada la
de
los inttereses 6,
12,
18
la
sucesión García
devengados desde 1853
%
y 24
al
año
subía a
183,222.
El monto de la deuda flotante había sido calculado a mediados
de 1880 en 5.843,443 pesos, computados los bonos de la Consolidada liquidaciones
suministros
por
durante
de
1854
los
gobiernos de Batlle, Gomensoro, Ellauri y Várela, los sueldos
por
2.015,632,
las
militares adeudados hasta febrero de 1876 por 847,870 pesos y los civiles
por 379.800 pesos.
Al oponer •elevó
ese
el
veto a la ley de creación de la
cálculo
intencionalmente
el
las
Deuda Amortizable,
Poder Ejecutivo a 7.500,000 pesos, abultando cifras
con
el
objeto
de impresionar a
la
Asamblea.
No había terminado, sin embargo, el primer año de la sanción de la ley cuando ya el Ministerio de Hacienda tenía que anunciar en su Memoria que los créditos convertidos llegaban a 6.493,744 pesos distribuidos en 1,923 planillas, y que todavía había otras a estudio. al
Y
casi en seguida,
ocuparnos de
la
como tendremos oportunidad de
administración
Santos,
quedaban
verlo
triplicadas
Anales de
mismas abultadas
¡as
a
la
la
universidad
337
cifras con las que se había intentado asustar
Asamblea.
La Deuda Amortizable debía comprender de acuerdo con
texto
el
de la ley las dietas adeudadas a los legisladores. Pero la Asamblea
reaccionando en seguida contra ese texto y aplicando en su provecho la ley del embudo se apresuró en julio de 1881 a establecer que el
pago da
las dietas debía
hacerse en efectivo y no en títulos de
deuda.
A
de
raíz
torizó
ley
la
Asamblea
la
la
de
creación
emisión
üeuda Amortizable
la
d-e
au-
de la Deuda Consolidada de 1880
con monto de dos y medio millones de pesos y un servicio de 5 % % de amortización. lEstaba destinada esa Deuda a la cancelación de los déficits de 1879 y 1880, cuyas principales
de interés y 2
partidas fijaba así la Comisión de Hacienda de la putados:
Pública
Instrucción Lista
Cámara de
$
Civil
Durante
la
deudas.
(le
—
811,513
.....
Junta Económico-Administrativa
Amortización
145,939 655,792
Militar
»
Di-
247,779
Tipos de rescate.
administración Vidal circulaban quince deudas dife-
rentes, y véase a qué tipos -eran amortizadas esas deudas de acuerdo
con los llamados a propuiesta de rrespondientes al
1."
y
4."
Empréstito Extraordinario 32 y 35
%. En
%. En 1881 de Elmipréstito
2."
I."
serie
28
27
%
y 29
a
En
1880 de 25 y 27 a 31 y
%.
En
serie.
2."
serie.
En
1."
2."
slerie.
serie.
1880
de
26
a
%. En
30
1880 de 26 a 29.
En 1880 de 23 a En 1880 de 15
En
1881
27 9Í. a
19.
En
ISSl
de
En
1881
de 24
19
f/r.
Deuda extraordinaria. En ISSO de a
1880
%.
Deuda Interna Deuda Interna a 24
En
serie.
^Á-
Empréstito Pacificación de 30 a 35
1."
30 y 31 a 34
Pacificación
1881 de 30 a 35
de Crédito Público co-
1881 de 35 y 42 a 39 y 40 %.
Empréstito Extraordinario 35
la Oficina
trimestres de cada año:
Cr.
T.
VII-
22.
18
a
25
«Te.
Anales de
338
Deuda Fundada a 34
2L(
2.-'
Universidad
la
En
serie bis.
1880 de 25 a 29
En
'/r.
1881 de
V'..
Deuda
En
rescate de tierras.
En
Consolidados de 1872.
%.
1880 de 25 a 28
1880 de 18 a 20 %•
En 1880 de 5 a 6 %. En 1881 de 6 a En 1880 de 24 a 26 Vr. Deuda Franco-Inglesa. En 1880 -d^e 81 a 85. En 1881 de 86 Deuda Italiana. En 1880 de 75 a 76 %. Deuda Amortizable. En 1881 de 10 a 16 %. Títulos especiales.
8
%.
Títulos adicionales.
Reproducimos esos tipos de ramente con
los
cuadros
que registran las Memorias ministeriales, según las
los
cuales las deudas internas de 4
V'
fueron amortizadas durante
año 1880 a
el
máximos de
en 1881 a los tipos
de interés y
de
lasiiiternacionales fi9
a 76
';/
5 la
1
dje
Vf,
de interés de 81
'/r
1 Sr
los tipos
43 las de 2
35 y
ción y de 28 y 34 las de amortización
Inglesa v de
amortiza-
de
parciales
en la prensa de la época que no coinciden ente-
publicados
ción
a 93 %.
italiana en 1880, y
1¡2
a
85
de amortización de 25 y -30
''^ ;
''',:
de amortiza-
^/r
y
3¡4
la
Vr
ambas de
%
;
y
Franco-.
80 a 93
Ve
año siguiente
a!
Tomando por
base un grupo de once deudas internas de diversos
de interés y amortización, del que estaban excluidos los Tí-
tipos
tulos Especiales emitidos en
y
al
8
do
1881
9
pago de intereses que sólo se cotizaban
%, anotaba así el Ministro de Hacienda en su Memoria la marcha ascendente de los tipos de amortización.
ANOS 1878
Tipo mínimo
Tipo
máximo
17
'
1879 1880
.
.•
.
1881
•
.
.
1882 (Enero)
M l£.do
Deuda Franco-Inglesa había osci% el de la Deuda Italiana Empréstito Uruguayo en Londres de 30 a 40 %.
tipo de amortización
en
de 60 a
el
82,
mismo período y
el del
de la
de 81 a 94
;
Las emisiones en aiunento. Las mente
tres
columnas de cifras que subsiguen traducen respectiva-
los títulos
emitidos en
el
curso de cada año,
el
movimiento
Anales de
la
Universidad
progresivo de las emisiones a partir de 1859 y fcl
1."
339
el
monto circulante
de enero luego de practicadas las amortizaciones correspon-
dientes:
AÑOS
Anales de
340
la
universidad
ticadas desde 1878 a 1881 (que en
sumaban
cho
cerca
ús
el
que
6.000.000)
grupo de deudas el
crédito
a su car-
público
liabía
seguido valorizándose.
La enseñanza
— Xuevas
primaria.
rical contra la refoiina ríe
tentativas
José Pedro Várela.
Hemos hablado
al ocuparnos de la administración Latorre don Francisco Bauza, votado por la Cámara de Diputados en ISTií, por el q.ue se suprimían la centralización
del
proyecto
técnica
de la
de
enseñanza,
las
escuelas mixtas
y
las
Inspecciones
departamentales y se podaba el programa escola^ hasta dejarlo reducido a lectura, escritura, gramática, aritmética, geografía nacional,
Constitución,
historia
nacional,
dibujo,
religión
y
gimnástica.
No alcanzó el proyecto a quedar sancionado en esa oportnnidad y la reacción clerical lo puso nuevamente a la orden del día en 1880, caído ya Latorre, invocando la angustiosa situación financiera que obligaba a hacer economías, entre las cuales figuraban ]iaturalm}.-nte la autoridad técnica central y los Inspectores departamentales.
Pero con
Lia escuela antigua y la escuela
el
mismo
resultado negativo.
refonuada.
¿Se quiere saber qué es lo que quería impedir el clericalismo en esa ardorosa campaña contra la esicuela vareliana?
Que
el
niño se acostumbrara a pensar por
ra personalidad projpla;
que
sí
mismo y
escuela promoviera
adciuirie-
desarrode todas las facultades mentales y las pusiera en tren de activo movimiento como medio de formar cabezas dirigentes y no cabezas condenadas a recibir el impulso ajeno. la
el
llo
A
principios de 1881 vino Sarmiento a Montevideo y entre homenajes que se tributaron al eminente estadista argentino figuró un banquete organizado por la Sociedad de Amigos de la Educación Popular, el Ateneo y la Prensa. En ese banv quete habló don Jacobo A. Várela, Inspector Nacional de Enseñanza. Y véase cómo caracterizaba el ilustre continuador de José Pedro Várela la gran obra de la reforma escolar que Sarmiento no se cansaba de aplaudir: «.Saber leer y escribir es mejor sin duda alguna que no saber
los
nada;
pero esas aptitudes no modifican sustancialmente la
ig-
Anales de
norancia
del
hombre,
si
Universidad
la
no sé presupone para utilizarlas.
341
el
desarrollo
de fa-
¿Qué importancia relativa tiene en efecto saber traducir en sonidos un orden determinado de caracteres si no S3 ha contraído el hábito de asimilarse los pensamientos que en esa forma se trasmiten los hombrea enltre sí? ¿Qué importancia relativa tiene saber tracultades que
lo
habiliten
zar algunos signos sobre el papel
Son
.
.
no se tiene
si
ideas que ex-
en manos de un obrero inhábil que no salbe qué hacer con ellas sino cortarse muy a menudo Por eso la educación moderna enseña sí a leer y escribir, como un au.xiliar indispensable para adquirir conocimientos, pero en relación a la obra puede decirse que es ese un deitalle ... La frase vulgarizada de Franklin traduce mi pensaoniento: uní hombre inteligente serrucha con un baPenetrada de esa verdad rreno y barrena con un serrucho. la educación moderna estimula y vigoriza con el hábito el desarrollo armónico y progresivo de todas las aptitudes humanas. La actividad latente del alumno en sus sentidos, en sus múscupresar?.
.
.
herramientas
esas
.
.
perfeccionadas
.
.
en sus facultades morales
los,
e
intelectuales
es
observada con
y robustecida a medida que los fenómenos
disciplinada
atención,
.
de la vida se manifiestan por el desenvolvimiento del embrión de ciudadano. «¿Para qué y porqué pregunta el miopismo de las viejas escuelas le
de
y
las
queriendo encontrar-
prisocupaciones rutinarias,
aplicación inmediata en la vida práctica a todos los variados
conocimientos de que de un gran objeto?... enseñar íicar, 1h
alumno a
al
el
ver,
mano
pedagogista echa
La respuesta a
oir,
es
fácil
sin
en prosecución embai-go:
para
a observar, a comparar, a clasi-
a deducir, a reflexionar, a concebir, a pensar en fin con
mayor
primaria
precisión y
no
pretende
el
mayor
hacer
acierto
de los
posibles...
niños
o
de
las
La escuela señoritas
ni
pero en lugar de atrofiar un espíritu rudimentario con confusas abstracciones, lee y escoge sus temas en el más grandioso de los libros, elige por cam-
zoólogos,
ni
botánicos,
ni
fisiologistas;
po de acción el panorama que más impresiona a la mente, el de la naturaliza que nos rodea y de que formamos parte. «Todos nosotros tenemos grabada en la memoria la respuesta a una pregunta que nos hacían todos los días en la escuela cuando apenas teníamos 6 años... ¿Qué es gramática?... El ai le
de
hablar
Puede que
y
escribir
correctamente
la definición sea exacta;
pero
la
propiedad... y con verdad es que cuan-
Anales
342
En
Universidad
/a
sabíamos
no
do contestábamos
corrcctam-oitc
r.iíicaba
ie
ni
que
lo
que
lo
era
quiere
arte
ni
decir
que
lo
sig-
propieddú.
(-(jn
consecuencia no podiamos saber lo que era graimática oe procsde de otra manera. Se hace contraer al nino ei IiaTjito .
Hoy de
comprender ideas
se
le
.
.
ajer.as; se le ayuda a brotar las propias y acostumbra paulatinamente a expresarlas por escrito o de palabra con corrección y propiedad... Preguntadle entouices cuando vaya a salir de la escuela qué es gramática y puede que habiendo olvidado las palabras de la definición os conteste con un elocuenite escrito lleno de propiedad o con una im(provisación correcta... En el primer caso se define lo que no se sabe, porque se está mentalmente incapacitado de compren(der; en el segundo no se lee nada que no se comprenda o se
para
sepa
tillas
y
ia
que
variados
las fuerzas del niño.
.
músculos,
los
a
rol)Ust;£z
duda efectuar éstos
sin
cional
de
y
esfuerzos
los
¿Tendría-
propio...
criterio
el
bastante con decir a nuestros hijos que
elasticidad
da
con
después
definirse
mos acaso
gimnasia
la
definiendo
deben
pos-
las
Es más raen la medida
hacerse?
metódicamente y
.
«Enseñad preceptivamente la moral y habréis escrito sobre arena de una playa que el mar igualará en la misma noche,
Contrariad continuamente las mala-s tendencias, estimulad las bue-
nas formando bre justo
Aplicad
dido...
dos
en
hir
di?
entre las
nueves
los
fin
nuestros el
mismo
el
de
«evantan
viejos
esas
padres
y
de la
el
el
to-
que trasmite antagonismo en-
el
el
saber
ejercicio
de
y
escri-
nuestros
días;
leer
la
votante conscient;e
rohustas
escuela
ha apren-
lo
enseñanza de
pensar de
Ja1)er
el
nacionalidades
edificio
la
instructivos
mjétodos,
hombre incapaz para
el/
e
a
tendréis determinado
j
democracias enfermizas y
gible
criterio
educativos
¡os
y
sociedad un hom-
la
a
aunque no sepa en qué texto
conocimientos
los
la escuela primaria tre
morales y saldrá
hálbitos
virtuoso,
y
ciudadanía
que marcan
antes
nov y
elf
solar
el
empezar
de
do ele-
a
y
funda'"
una aldea.»
IjOs (lías eran
Cuando
a
de intensa lucha en
mediados de 18 80
nía la escuela vareliana contra
la la
el
mundo
entero.
prensa de Montevideo sostela Cámara de Di-
mayoría de
putados que respondía al resorte clerical, Víctor Hugo tenía que dirigirse a los maesitros de París desde la tribuna de la
Anales de
343
alentarlos
para
Primaria
Instrucción
de
Sociedad
Universidad
la
en
obra
su
dignificadora. estos mementos un combate, un combate desesperado. un combate superior entie dos enseñanzas: la enseñanza eclesiástica y la enseñanza universitaria... Dejo a un lado como No inviejo combatiente las expresiones más vivas del pueblo. en sobrada la hay las palabras, que ya cólera en troduzcamos la ias cosas... La seguridad del triunfo se mide por la dignidad del combate. .Estáis en el buen camino. El mal está detrás de vos-
Íes
en
decía,
.
.
.
El bien estt
otros.
C-mtinúa
el
Sarmiento,
progreso escola i-. había
que
varelianas,
cuelas
Oonthinad.»
delante.
presenciado
escribió
al
las
es-
llegar a Buenos Aires una carta
Cervantes en que
doctor Alejandro Magariños
de
funcionamiento de
el
le
al
decía:
«Vuelto a la vida real y prosaica me encuentro Superintendente Escuelas, con grandes e indefinidas funiciones y la esperanza
de poder hacer algo útil...
De Montevideo
traifjo
estímulos y mo-
0.elos».
Varios meses después,
Rivadavia
Instituto
el
al
del
inaugurar en
Maestro
que
el
salón de la Biblioteca
respondía
mismos
a los
fines que las conferencias pedagógicas que había visto en Montevideo, volvía
Sarmiento a hablar de
«Durante una en su discurso cas se hallan
escuelas varelianas.
las
—
decía hecha últimamente a Montevideo he podido cerciorarme de que las escuelas públi-
visita
—
allí
más adelantadas que
aquí. Es, pues, necesario es-
forzarse en poner pronto y eficaz remedio a los males señalados».
Un ei
año después vino a Montevideo otro ex Presidente argentino Nicolás Avellaneda, y desde su llegada empezó a reco-
doctor
irer las escuelas, sitaria.
Al
la
Universidad,
encontrarse en
el
el
salón
Ateneo y
la
Sociedad Univer-
de esta última institución,
ro-
había en dijo que no deado y aclamado por los estudiantes, Montevideo nada tan notable como la educación popular y que los
exámenes de las escuelas de niñas lo habían llenado de asombro. Esos exámenes que acababa de presenciar el ilustre estadista argentino
realmente
constituían
la
consagración
definitiva
de
la
escuela vareliana. «Risas, animación, chispazos de genio,
—
decía
exámenes de
la
escuela de doña María
«La Razón» reseñando Stagnero de Munar
—
los
se
Daniel Muñoz en
sorprenden a cada instante en
el
bri-
Anales de
344
Es de verse cómo brillan de entusiasmo aquellos
torneo...
liante
Universidad
la
vasos de luz para valemos de una expresión iudla».
ojos,
El doctor Carlos María Ramírez que presidía la Mesa Examina-
dora de esa escuela, resolvió que la concurrencia misma señalara los temas de las composiciones escritas, porque muclias personas se
negaban absolutamente a creer que
que se había leído gu
lo
Y
días anteriores era obra de las alumnas.
los
de los temas propuestos
fueron sorteados dos y desarrollados inmediatamente en forma que
produjo de
asombro de
el
actos
personas que habían acudido
las 500
de
públicos
la
Dirección
Instrucción
de
al
salón
Primaria
para
presenciar la prueba.
Terminado dente de
«Os
el
pido
acto en medio de grandes
aplausos,
dijo
el
Presi-
Mesa:
la
un último aplauso para estas niñas admirables, para para estos fecundos métodos de ilustra-
esta profesora benemérita,
ción cer
que tan alta y tan benéfica influencia están llamados a
en
los
destinos
señoras
y señores,
para
memoria
la
todos en la
Entre
los
de nuestra sociedad,
(señalando
del
de
retrato
el
glorioso y
muy
y
malogi-ado
ejer-
particularmente,
José
Pedro
iniciador
de
común de nuestra patria». examinadores de esa misma escuela figuraba
Várela) esos
mé-
instrucción
el
presi-
dente de la República doctor Francisco Antonino Vidal. El doctor
Vidal que era un médico de grande y merecida fama, pero muy dado a las chuscadas, interrumpió una noche 'el examen do geografía en
que las
estaban maravillando
niñas
guntar cuál era café,
contestó
la
a
la
concurrencia,
una niña;
el
tabaco,
contestaron las demás en coro.
No
dijo
—
otra;
replicó
la el
pre
caña de azúcar, doctor Vidal
ninguna de esas: la planta más productiva del Brasil de! pie! Pero recobrando luego su seriedad, dijo en el
para
planta que mayor riqueza producía al Brasil. El
es la
alta
—
planta
voz que
estado de la escuela era realmente notable.
Y
la
misma impresión
recibían
las
Comisiones examinadoras y
demás escuelas. Han concluido los exámenes escribía el Director de «El Siglo» den Jacinto Albístur, miembro de algunas Comisiones examinadoras, y «todos los que a ellas han asistido han quedado sorprenel
público de
las
—
didos y encantados del adelanto de los alumnos». Se había insinuado por la prensa clerical que la escuela vareliana descuidaba la educación moral. Pero el Director de «La Ra-
zón» se encargó de destruir ese error. «Precisamente decía he recogido
—
—
pruebas
personalmente
Anales de
todo
dri
Invitado
contrario.
lo
Urdversidad
la
a
concurrir
345
en
en
dora
escuela de la
la
distinguida ¿eñora
la
mis
de
conipaíiía
pmigos Arechavaleta y Pena a formar parte de
Mesa examina-
de Munar, tuve oca-
sión de aquilatar la pureza del criterio moral de las
alumnas
m
VM detenido examen que estudiadamente* hice, proponiendo cuestiones que fueron resueltas con argumentes profundamente filosóficos que pasmaban al auditorio viéndolos formulados por niñas de corta edad, demostrando así que al par que habían nutrido su inteligencon vastas nociones de las ciencias naiurales, habían cultivado moral, adquiriendo los principios fundamentales que es-
cia
parte
la
tatuyen los deberes del hombre y de
mujer en su estado
la
civi-
lizado.»
A
mediados de 1881 tuvo lugar una gran fiesta con motivo del de los premios escolares, completándose con ello el pro-
reparto
grama de estímulos que tan Los maestros
e
continuaban a
aumentaban su bagaje en
miento y
resultado
brillante
inspectores
vez su
conferencias
las
dando.
estaba
la
entrena-
pedagógicas
de actos públicos de la Dirección, cada año más interesantes por efecto de la intensificación creciente de los estudios.
del salón
Honrando
Ya
memoria
la
reforma
la
tle
José Pedio Várela. había
escolar
había derrumbado
Várela
sacrificio
su
el
impulso vigoroso y su heroico
personal.
Al llegar Ministro
con
todas las pruebas y légimen que José Pedro
por
pa.sado
nadie se atrevía a levantar contra ella
el
la muerte del reformador ol don Eduardo Mac-Eachen pasó una nota
primer aniversario de
Gobierno
de
recordatoria a la Dirección de Instruccióu Publica, en la que tra-
ducía así la impresión que
«Mucho habría que del
ción (¡ue
pueblo. Pero
Presidenta Vidal había recibido en
hablan
um más
decir
que experimentará
tiiste
pro
del
reformador de
la
educa-
Ellos
elocuencia.
la
la
constituyen
su
apología...
memoria de Várela une su pesar
Dirección de Instrucción Primaria en tan
fecha.»
«Pasarán dad
en
por encima de todo elogio están los hechos
Gobierno en homenaje a
E' al
el
últimos torneos escolares:
los
—
los
días
—
decía «El
Plata»
en esa misma oportuni-
y se agrandará la figura del educacionista eminente y
las
uruguayas seguirán glorificando su memoria.» Se había proyectado para ese día un homenaje en el Cementerio,
generaciones
Anales de
316
pronunciarse
debían
donde
la
universidad
varios
Por
discursos.
accidentales hubo que aplazar la demostración hasta
circunstancia que explotó
funtos,
el
de que ella
obstaculizaría la
En cambio quedó Ferrari:
tor
nio»
circulación dentro
el
a
la
día de di-
que
ceremonia a pretexto
la
proyecto
de la Necrópolis.
monumento
de
pirámide en cuya cúspide arde
«la
destinada
aceptado
el
Director de Cementerios,
un católico militante, para prohibir
era
circunstancias
la
del
escul-
llama del ge-
tumba de Várela.
Pero fué con ocasión del segundo aniverbario que
el
homenaje
adquirió las proporciones que correspondían a la magnitud
de
la-
obra realizada.
En
un porfiado debate, que estuvo a punto de ese centro cultural. Una primera asamblea de socios sancionó una moción del doctor Manuel Herrero y Espinosa que decía así: «Debiendo el Ateneo propender el
Ateneo dio lugar
provocar
de
la
a
disolución
mantener vivo en el sentimiento popular el recuerdo de aquehombres que más se han consagrado al progreso de las letras
3.
llos
en
la
República, en
aniversario del fallecimiento del ciudadana
el
don José Pedro Várela la
lectura
de
se
una velada
celebrará
hechos
trabajos
en
recuerdo
de
cuj^o
este
sea
objeto
preclaro
edu-
Y una segunda asamblea se encargó de dejar sin homenaje a nombre de razones políticas emanadas de la realización de la reforma escolar dentro del gobierno de Latorre y de la colaboración que en consecuencia de esa reforma
cacionista.» efecto
el
había prestado
La Sociedad
reformador a
el
la
Dictadura.
Universitaria, que era
el
otro gran centro cultural
el homenaje de que Ateneo y ampliarlo mediante una triple demostración en las calles de la ciudad, en el Cementerio y en el Teatro Solís. He aquí los términos en que la Comisión Directiva que pred(.
Montevideo,
resolvió
desistía
el
sidía
bachiller don
el
entonces
hacer suyo
José Scoseria recabó
el
concurso del pueblo
para realizarlo:
«La Comisión no necesita encarecer
los
méritos del gran ciuda-
dano, glorioso apóstol y reformador de la educación
República uruguaya, para demostrar el
el
común en
la
deber en que se encuentra
pueblo por quien se sacrificó en la realización de aquella gran precursora de días más felices, de concurrir a solemnizar el
idea
tiiunfo obtenido en
tel
campo de
la
lucha pacífica del pensamiento.»
compuesta por millares de personas, luego de recorrer las calles de Montevideo se dirigió al Cementerio Central, donde pronunciaron discursos don Manuel Herrero y Espinosa, don Jacinto Albístnr, don Tomás Claramunt. don Pedro
La procesión
cívica,
Anales de
don Mario
Ricaldoni,
«Dos
—
generaciones
universidad
347
dou Víctor Rappaz y
Isola,
Peyramale.
ría
la
dijo
el
señorita Ma-
la
Herrero y
doctor
en
Espinosa
—
vienen a descubrirse ante este sepulcro en cuyo seno yacen los despojes que encerraron en vida el alma gigante de uno de nuestros más grandes hombres, del más grande en la ingrata labor de la educación popular y
nombre de
Sociedad Universitaria
la
más grande en la religión del sacrificio por la patria.» Una Comisión delegada de la Sociedad Universitaria entregó
del
viuda del reformador un álbum que
ífi
estas
llovab:i
palabras
a a^
frente:
«Las madres y
niñas
las
escribirán
su
mejor que
historia
n-v-
pronunciando con respeto este nombre querido bajo el teoho del hogar y en los bancos de la escuela.» En la velada del Teatro Solís tomaron parte don José Scoseria, doña María Stagnero de Munar, don Jacinto Albístur, don Joaquín de Salterain, don José Mellado, don Ángel Brian, don Jorge H. Ballesteros, don Alcides De - María, don Segundo Posadas, doña
d.ie,
Sánchez y varias personas más. que estaba a la sazón en Buenos Aires, dirigió un telegrama a la Comisión organizadora en que decía: «Me asocio de todo corazón al homenaje que la Socio-
Carlota Lebrum, don Ricardo Carlos
doctor
El
María
Ramírez,
dad Universitaria tributa a reformador de
rioso
memoria
la
gran
del
ap>stol
y
Ya anteriormente en
curso de los ardorosos debates del Ate-
el
neo y de la Sociedad Universitaria había escrito el doctor mírez estas palabras en su diario «El Plata» glorificando la del
Rao])ra
reformador:
«Si
pusiésemos una de
una de tendríamos
a
de
glo-
educación común en nuestro piís».
la
un
nuestros
topo las
y
de
saladeros
Fray Bentos.
I/iebig de
muía,
de
fuerzas,
escuelas que Várela encontró frente
las
que ha dejado como glorioso testamento, caso análogo al que resultaría de comparar uno
escuelas
las
el
principios
Allí
la
sobrecargado
trabajo
esterilizada
del
riqueza...
la
con
siglo
la
fábrica
rutina con su doble naturaleza do e
inútil,
Aquí
desperdiciadas
todo?
los
adelan-
humanos discretamente aprovechados, el trabajo vivificante y fecundo las fuerzas llevadas al máximo de acción creadora y la tos
riqueza
explotada
toda
en
gimnástica intelectual nas!
No
es
uno valdría decisivas
posible diez,
hubiese
tan
la
entrar en
cien veces
extensión
admirable ellas
más
pasado por
la
sin
¡Qué
de
sus
veneros...
de
esas
escuelas varolia-
comprender y sentir que
en la edad de las iniciaciones aquel taller, contrayendo el hábito si
Anales de
348
Universidad
la
de observar, de razonar, de analizar y sintetizar las ideas que van
formando
trama
la
del espíritu, para que uo sean en él
acumulan en
trastos viejos que se
las
viltimas piezas do
como los una casa
da familia!»
La Sociedad de Amigos de
la
solvió ir ella sola a visitar la
—
cía en su manifiesto
neo,
porque
ello
Educación Popular, frente
grandes instituciones científico
entre las dos
flicto
tumba de
al
con-
literarias,
re-
—
de-
Várela, sin adherir
ni a la Sociedad Universitaria
envolvería en
la
-
cuestiones políticas
al
Ate-
de las
que
ni
deseaba permanecer alejada.
Kl horario escolar. El liorario de las escuelas públicas era de seis horas en ISSO.
mañana
Corría de nueve y media de la tarde con frecuentes intervalos
a tres y media de la para ejercicios fí&i'cois en lae clases, recreos en los patios y cantos y recitaciones de versos. Véase las asignaturas que abarcaba: Primer grado: Moral y religión Lectura y composición
—
—
—
Dibujo y escritura de palabras Eorma, tamaño, peso y color Objetos, su forma, color, tamaño, partes, cualidades Lectura Aritmética Escritiira y dibujo Cuerpo humano Lectura y gi-amática Geografía e ideas de y animales
—
— — — Plantas
lugar
—
—
y minerales.
—
Segundo grado: Moral y religión Escritura y
—
dibujo
—
Aritmética,
Gramática y composición
—
mapas
de
—
labores y
Tercer
Lectura y su explicación
forma,
color,
Geografía e historia y trazado de
humano
—
tamaño y peso
Plantas y minerales.
—
problemas y cálculos mentales
Lecciones sobre objetos, cuerpo
Lecciones sonidos
—
—
—
En
las
y
Canto
animales
—
ideas
de
e
de niñas además costura,
corte.
—
—
Moral y religión Historia Natural -Lec-^ Gramática y composición Aritmética, álgebra y geometría Principios Geografía y Cosjiiografía grado:
tura y su exprcación
elementales
—
—
de gobierno
propio
Fisiología e Higiene
de libros
—
Dibujo
—
—
—
— — — Escritura Meteorología — Teneduría
Inglés
Física y
Ejercicios físicos.
o
En
francés
las
de niñas además
costura y labores.
programa escolar de 18 80 comprendía
diez clases graduauno a cuatro para las escuelas de primer grado, de cinco a ojcho para las de segundo grado y de nueve a diez para
El
das
(de
Anales de
las
de
grado),
tercer
de
la
universidad
acuerdo con
el
349
plan
de
distribución
Manual de Métodos de Kiddle, Harrison y Calkins que acababa de traducir y publicar la Soiciedad de Amigos de la Edudel
Popular.
cación
Escuelas de varones dirigidas
i>or
maestras.
En 1880 quedaron vacantes dos direcciones de escuelas de varones y el Inspector Nacional don Jacobo A. Várela propuso y obtuvo que ambas direcciones fueran provistas con maestras. algunos de los considerandos que fundamentaban Véase esa importaate innovación: «Que en la práctica se hacen cada vez más notorias, lo mismo en la Repiúíblica que en las demás nacioineis en que la edu-
primaria
pública
cación
aptitudes
de
la
ha adquirido un gran desarrollo, las mujer cóimo educacionista, a causa sin duda
que limitan su esfera de acción a Que hay alilas conveniencias sociales en propender a que la mujer lleve a la escuela primaria la influencia de sus afectos sencillos y de sus sentimientos delicados, prolongando hasta donde sea posible en la vida del educando los cuidados, l0(S ejemplos y las afecciones de la madre de familia. Que tamibién hay elevadas consideraciones morales en propender a que la mujer oriental ende las condiciones la
soiciales
vez que especializan sus facultades...
.
cuentre
en la carrera
ción para
suis
del
.
magisterio
útil
y
provechosa
aplica-
aptitudes, que a la vez que llena sus necesidades
va levantando progresivamente su nivel intelectual con los estudios a que se entrega para mantener la coanpetencia y el roce soicial a que la condmce el ejercicio de esa dignificante profesión. Considerando demostrado por la experienicia que las .
.
asperezas varoniles y la energía de la forma en los maestros no superan para el buen manejo de las escuelas a la voluntad
persuasiva de las maestras, quienes en razón
conocida
detbilidad/
encuentran
el
é.xito
tall vez de su reconfiando principalmen-
te más que en la ruda im]posición de cada momento, en la organización metódica y en las insinuaciones reflexivas, perseverantes, racionales y sistemadas aconsejadas por la pedagogía,
que dominan y destruyen en germen las rebeldías infantiles... Que no se encuentra en la práctica general ni indicación siquiede que la educación dirigida por maestras contribuye al afeminamiento de los caracteres en los alumnos, fenómeno que
ra
Universidad
la
racionalmente por la repulisión y el desprocio qui-mujer el ñomibre apocado y tímido, en razón sin
explica
se
de
Alíales
350
inspira en
la
duda de que considera constantes,
débiles
sencillas
y
dadanos
viriles,
sexo
al
o'tro
por
eso
por
que forman
sin
contándose
cerebros!
como su apoyo millares
y protector
madres
las
tiernas,
embargo para su patria
robustos
y
caracteres
eleviadoe
.
ciu.
.»
Ambas escuelas estaban según el Inspector Nacional «en lamentable estado, con elementos anárquicos educados en el desorden
para
preparados
y
resistencia»
la
directores
sus
y
ha-
Las dos vacantes fueroi: llenadas con las señoritas María Zubillaga y Magdalena Bernat. Cuatro meses después del cambio, esas mismas escuelas, bían
destituidos
sido,
decía
por esa
causa.
señor Várela, «asombraban^ por su organizac'ón y dis-
el
ciplina».
Estadística escolar.
En
Jacobo A. Várela que en de
ños
das),
15
a
5
39,847
establecía el Inspector Nacional don
Memoria de 1880
su
años,
(24',i7S5
República había 110,77;i
la
cuales
sólo
escuelas públicas y
a.
queid^ando
toida
de los
consecuencia
en.
sin
concurrían
la
a
ni-
escuela
escuelas priva-
15,062
a
recibir
educación
70,936
niñOiS.
La
cerrar
al
Departamento de
don Juan Manuel de
Inslpector
datos
del
estadística
el
Veidia,
Montevideo a cargo arrojaba
cuarto trimestre de los años
1879
1879
Número de escuelas públicas Alumnos inscriptos
.
....
Asistencia media
Escuelas dirioidas por hombres »
»
»
mujeres
Visitas de los Inspectores
Sueldos de los Maestros »
»
»
Ayudantes
Alciuileres de casas
Gasto >
»
.
,
...
total
por alumno matriculado. »
asistencia media.
67
del
siguientes
los
y
1880:
1880
Anales de
universidad
la
El mismo Insopector don Juan ^Manuel de Vedia presentó un informe acerca de la enseñanza privada en el departamento de Montevideo, del que resulitaba que en 1880 funcionaban 175 escuelas.' con 4'o9 directores, ayudantes y profesores y 9,776 alumnos, incluidos 6 establecimientos (Asilos Maternales, Escuelas de Huérfanos y Esicuela de Artes y Oficios) con 2,692' niños, que no eran privadas sino públicas, aesde que el Estado era
el
que
dando educación, alimentos y
costeaba,
las
a esos niños.
Contra
la
vesti-dos
,
intervención
los Inspectores
en
la política militante.
Don í\
Felipe J. Moreira, Inspector Departamental de Escuelas Paysandú, resolvió -en 1880 concurrir a los trabajos de reor-
'
Nacionalista, y empezó por poner su de instalación del club local de esa filiación danido con ello lugar a que el Ministro de Gobierno
ganización
firma en política,
Partido
del
acta
el
se dirigiera a la Dirección de Instrucción Pública pidiendo su des-
titución
en nombre de la ley de Educación Común. El punto fué
seno de la Dirección, sin obtenersu Para la minoría la ley no era terminante; habría injusticia en privar al ciudadano del derecho de intervenir en la política, y el acta de Paysandú lo único que ampliaimente debatido en
armonía en
revelaba
era
el
opiniones.
las
propósito
el
del
Inspector
de
enrolarse
La
mayoría en cambio aceptaba inmediata del señor Moreira y justificando esa
tido
político.
la
en
un par-
destitución
tesis
decía
en
su dictamen:
«Que hay altas y trascendentales conveniencias generales en hacer un campo neutral de la educación pública primaria y que sólo a ese precio podrá salvarse la obra que ha de transformar porvenir a través de las infinitas convulsiones y vaivenes dje la política militante en una democracia todavía desgraciadamente embrionaria y tormentosa como la nuesla generaición dej
Que
de la ley han obedecido a ese vez a los ciudadanos encargados dt> la administración escolar condiciones rudas d« abstención en la tra. ..
alto criterio
el
esipíritu
política
activa, pero
sidades
cercenando
un limitado
de
Y
el
decreto
lai
le,tra
tal
que responde en
parte
y
a<
grandes y supremas necelos derechos
condicionalmente
número de ciudadanos en
cución de un fin
dictamen.
y
que impone
magno
holocausto a
la
perse-
y trascendental.»
de destitución
fué
dictado de
acuerdo ron ese
Anales de
352
I.O.S
Universidad
la
sueldos del magisterio.
Al finalizar tevideo
bajo
el
año 1880
se
reunieron los maestros de Mon-
presidencia de doña María
la
Stag-nero
de
Munar
para realizar trabajos a favor de la regularización de los pagos. De esa asamblea resultó una representación al Presidente Vidal en la
que
se decía lo siguiente:
«Nadie desconoce sociedad.
la
y
la
han
Forma
decisiva que
la influencia el
corazón do
la
niñe.^,
el
maestro ejerce en
cultiva su inteligencia
entrega a la sociedad enriquecida con todos los gérmenes que de
producir
viene a un
ciudadanos dignos, nobles y austeros, cual con-
Y
pueblo democrático.
si
los
alumnos son
claros
es-
pejos donde se reflejan durante toda la existencia las impresionas que recibieron en la escuela, fuerza es que el maestro pueda ser
y sea un modelo de virtudes... No basta que predique el arreglo, no basta que posea ios más ej aseo y la decencia a sus alumno.s;
no basta que su buen corazón
delicados sentimientos de probidad; le incline a la
enaltecen y
benevolencia y a
dignifican
la
práctica de todas las obras que
personalidad
la
enseñe con
iiumana,
vivo ejemplo;
no;
es
preciso
preciso es que
lo practique y lo cuente con los recursos necesarios para realizar esos santos debe res... Es indispensable que los alumnos al arrojar su mirada so-
que
el
bre todo aquello que pertenece al maestro no se sientan desagradablemente impresionados con cuadros de miseria... Es menester que el maestro se presente en clase limpio y decente para ejemplo de sus alumnos y para ganar a su simple aspecto la consideración y el afecto de las personas que visiten la escuela... Es preciso de todo punto que
el
hijo del almacenero, del tendero,
etc.,
maestro un deudor de su padre, y acaso un deudor recalcitrante que es preciso dar a conocer a los demás alumnos Es de absoluta necesidad en fin que para que se burlen de él se presente en sociedad modesto sí, pero sin un punto vulnerable
no vean en
el
.
.
.
pobre en buena hora, pero no mendigando pan que ha de llevar á su boca y a la de su familia.» Destacando la situación angustiosa del personal enseñante agregaba la representación: Hay maestros a quienes se debe hasta un año de sueldo. En 1876 fueron rebajadas las asignaciones de los ayudantes en un
en su representación;
e^
%. En 1877 quedaron aplazadas cinco, seis y más mensualidaEn 1878 se dictó una segunda rebaja a las maestras y ayudantes de las escuelas de niñas. En 1879 se efectuó una tercera 20
des.
Anales de
rebaja del 10
%
a todo
el
la
Universidad
Eu
personal escolar.
353
1880 hubo un nuevo
aplazamiento de tres meses de sueldo. Y ahora se adeu.Ian cuatro meses y vuelve a hablarse de aplazamiento de todo lo atrasado! Sólo obtuvieron los iniciadores del movimiento el pago de uno de los presupuestos y la promesa de que se adoptarían medidas tendientes a regularizar la situación. Del grado de eficacia de esa promesa instruye un escrito con la firma de ciento y tantos maespresentado a la Comisión de Presupuesto de la Cámara J» Diputados en noviembre 'de 1881, clamando contra la exigüidad de los sueldos «que han descendido hasta la última expresión» y contra el atraso de los pagos suspendidos desde el mes de setiembre; y una nota del personal enseñante a la Dirección de I. Pública do febrero de 1882, solicitando el salón de sesiones para una tros,
reunión encaminada a exteriorizar la crítica situación a que los condenaba la falta de regularidad de los pagos. Ya habían intentado los maestros, aunque sin resultado, fundar una Sociedad de Socorros Mutuos del Magisterio y una Caja de
Ahorros que tomaría a su cargo
el
pago de
los
sueldos.
Sociedad de Amigos de la Educación Popular.
A de
sus
publicaciones
anteriores
Educación Popular
la
agregó
en 1880
la
Sociedad
«Manual de
el
de Amigos
Métodos»
de
Harrison y Calkins, traducido del inglés por la señorita Joaquina Acevedo, don Emilio Romero y 'don Alfredo Vásquez AceKiddle,
vodo y arreglado a nuestras escuelas por don Francisco A. Berra. hizo constar en esa oportunidad que la
La Comisión Directiva
señorita de Acevedo «era la primera mujer entre las que no profesan la enseñanza en asociar su
nombre a
la
Sociedad de Amigos
de la Educación Popular».
En
su
Memoria de 1881
puesto maestras
'en
advertía
la
las clases inferiores
Comisión
que se habían
de la Escuela «Elbio Fer-
nández» en virtud del sorprendente resultado de esa innovación eu públicas de varones. Decía también que se Babíati las escuelas creado cursos normales de pedagogía a cargo del doctor Berra, de la República a cargo del doctor Vásquez Acevedo, de Historia Nacional y Economía Política y Doméstica a cargo del doctor Pena, sin alcanzarse los resultados que se buscaba, por
Constitución de
falta de
T.
alumnos.
VII -23.
Anales ie
354
la
Universidad
La Universidad. Don Alejandro Magariños Cervantes renunció en
1880
el
Recto-
Gentes para consarado y a otras tareas los últimos años de decía en su nota grar su vida. Al aceptar esa renuncia, que era indeclinable, firmaron todos los miembros del Consejo Universitario una nota laudatoria encaminada a llevar al ánimo del doctor Magariños «el convenla
cátedra
de
Derecho Natural y de
—
—
lo menos de todo el respeto y sentimiento con que Universidad veía separarse de su seno a su miembro más digno y a su obrero más incansable y mejor inspirado, que no satisfecho con la carga anexa al apostolado de la enseñanza había sido en estos dos últimos años de verdadera prueba por lo solemne del
cimiento por
la
momento histórico, su jefe y por decirlo así La vacante del doctor Magariños Cervantes
su piedra angular».
fué llenada por el doctor Alfredo Vásquez Acevedo, después de una elección muy reñida en la que votaron 92 miembros de la Sala de Doctores (57
por
el
doctor
Vásquez Acevedo y 35 per
doctor
el
Luis Mellan
Lafinur). articular la enseñanza primaria el nuevo Rector por enseñanza secundaria. Para rendir examen de las materias del bachillerato había que acreditar sufici^'ncia en las asignaturas de segundo grado ampliado de las escuelas públicas y desde 1832
Comenzó
con
la
en las de tercer grado, mediante pruebas de examen que reglamentaría la Universidad.
Abordó en seguida El
de preparatorios
reorganización del plan de estudios.
comprendía
las
siguientes
asignaturas:
Fí-
— Matemáti-ca (Aritmética, álgebra, geometría y trigonometría) — Geografía General — Cosmografía — Mineralogía — Botánica — Zoología — Anatomía — Fisiología — Higiene — Geología — Psicología — Lógica — Moral — Teodisea — Filosodel lenguaje — Estética y Retórica — Historia Nacional y Universal — Francés o Inglés o Alemán.
sica
—
la
Química
fía
Como
base
indeclinable
de
reorganización
resolvió
gestionar
?1
establecimiento de las cátedras de enseñanza secunda.ria suprimidas
por
un la
el
gobierno de Latorre.
edificio calle
la
construcción de
vieja sede
universitaria de
Gestionó también
con más capacidad que
la
Maciel y Sarandí donde estaban hacinados los estudiantes
de todas las Facultades, obteniendo de inmediato 12,000 pesos para la
compra
del
terreno y
obras. Corresponde a este
18,000
para iniciar
mismo período de
la
ejecución de
las
intensa labor la revisión
Anales de
de
especialmente
programas,
los
la
Universidad
hasta
reducido
Filosofía
de
el
355
Manual de Gerusés y al Manual de Jackes y converdesde '18&1 en un poderoso factor de estudios que contribuyó
entonces tido
al
intensamente a
la
difusión de todos los principios científicos que
maestros
en
boga con Darwin y Spencer a la cabeza. El plan de estudios de la Facultad de Derecho comprendía siguientes asignaturas: para el doctorado^ Derecho Natural o
las
en
momentos ponían
esos
a
orden
la
—
día
del
los
—
Fi-
— — Política —
De-
Derecho Comercial Derecho Civil Derecho Público Internacional Derecho recho Penal y Privado losofía del
—
—
recho Constitucional y Administrativo
Economía
DeLe-
—
—
Historia del Derecho y Medicina Legal ejercicio de la abogacía esas mismas asignaturas com-
Comparada
gislación
y para el plementadas por dos años de Procedimientos Judiciales y un año de ejercicios prácticos en
La
el
estudio de un abogado.
luchando con toda clase de Los estudiantes pedían sin conseguirlo que las autoridades del Hospital de Caridad les encomendaran la curación de los enfermos a cargo entonces de los llamados practicantes, moFacultad
de
Medicina seguía
dificultades.
destos empleados sin
más caudal que
que obtenían a expensas
el
de sus víctimas, equivocándose un día para hacer bien al
desear por el
cosas
las
día siguiente. Algunas de las clínicas dejaban grandemente quo insuficiencia
del
dándose
profesorado,
caso
el
de
que
alumno interno don Francisco Soca acorralara a un catedrático
demostrándole fermo.
El
error
el
de
su diagnóstico a la
primer egresado de
la
Facultad,
el
cabecera doctor
del
en-
José María
llevado a la cárcel el mismo día en que cochapa de médico, por orden del Consejo de Higiene, a titulo de que le faltaba el examen de reválida, habiendo tenido el Gobierno que dictar un decreto para evitar la repetición de tan
Muñoz Romarate, fué
locaba su
inconcebible atropello.
Pero a despecho de esos tropiezos de Facultad
desenvolviéndose
seguía
don Eugenio Piaggio, que
se
y
había
los
primeros momentos
en
ya
esa
trasladado
materia que había cursado
satisfait»,
aquí,
ante una mesa presidida por
de la Facultad y fisiologista de fama; taba de ponerse actuaba, época, simista,
como
al
lo
la el
y
a
las
París
la
alumno para
la
el
nuestro profesorado tra
día dentro de las deficiencias del
acreditan
el
examen de Fisionota de «Extremement doctor Vulpian, Decano
continuación de sus estudios, conquistaba en logía,
época
publicaciones
y
medio en quo
estadísticas
de
la
entre las que no ocultaremos, a pesar de su tendencia petina
sobre Ovariotomía,
en
la
que se hacía constar que
Anales de
356
la
Univcrs''lad
hasta 1881 se habían realizado seis operaciones, desde 187 tres de ellas con éxito satisfactorio y las otras tres con resul(i
tado
fatal.
Las
colaciones'
ríodo a raíz de
de
grado
fueron
una proposición
reglamentadas en
este
pe-
del bachiller Elias Regules, con-
de la ceremonia a que asistia como g-raduado. De acuerdo con el nuevo reglamento las proposiciones de ios gra finados deberia-n ser piesentadas previamente para su visación por el Consejo Universitario y por efecto de ello fué rechazada ese mismo año una ene estaiba concebida así: «La moral condenatoria
dena
el
proceder inicuo de los malos ciudadanos que ponen su
inteligencia y su ilustración a disposición de los Oiprobiosos gobiernos personales». Era un reflejo de la controversia plantea-
da desde
la
dictadura
de
Latorre
«oposicionistas sistemáticos»,
los «posibilistas» y los de actualidad y de honda
entre
todavía
resonan/cia en el ambiente estudiantil.
La Escuela
(íe
Artes y Oficios.
La Escuela de Artes y
me
Oficios tenía en 1880, según el infor-
don Juan Manuel de Vedia, 360 alumnos. La parte de enseñanza primaria se regla por el programa de las escuelas piúblicas. La parte profesional comdel
Inspector
Departaimental
—
—
Zapatería prendía las siguientes asignaturas: Litografía HerreCarpintería Escultura Telegrafía Platería Hojalatería Talabartería Ebanistería ría
— — — — — Música — Encuademación — Francés
Armería
—
Sastrería
—
Tornería
—
—
Dibujo
—
— — '
Pintura
—
e Inglés.
Los exámenes de 1881 abarcaron un programa amplísimo en que figuraban los siguientes números: Escultura en madera Encuademación Fotografía Relojería Trabajos en me-
— — -^ Tipografía — Litografía — Tornería — Platería — Zapatería — Carpintería — Mueblería — Mecánica — Herraría — Armería — Hojalatería — Marmolería — Sastrería. Para cada
—
—
tal
materia había una mesa examinadora. Cocurrieron a las pruebas 400 alumnos. El ex Presidente argentino doctor Nicolás Avella-
neda que formaba entre en este elogioso telegrama
los
examinadores, tradujo su impresión
al
Presidente Vidal, que fué trasmitido
por las líneas telegráficas que servían de aprendizaje a los alumnos: «Saludamos al señor Presidente de la República y lo felicitamos por el asombroso estado de la Escuela de Artes y Oficios,
que no tiene ejemplo en
la
América
del
Sur».
Anales de
Universidad
la
357
Escuela de Artes y Oficios en 1S81 los alumnos. La Escuela formaba y parte de las dependencias del Ministerio de la Guerra desde la época de Latorre y como castigo muchos menores eran llevados a ella para realizar tareas superiores a sus fuerzas, y esos menores recurrían a toda clase de medios para recuperar su libertad. SI
Dos incendios hubo en
la
ambos fueron atribuidos a
último incendio inutilizó gran parte del edificio que estaba ubicado en la misma manzana que 'hoy ocupa la Universidad, y en vez de refaccionarlo se resolvió construir uno nuevo en las proximidades
de la playa Ramírez.
Instituciones de carácter universitario.
El Ateneo del Uruguay y la Sociedad Universitaria proseguían con entusiasmo creciente su obra cultural. El primero inició la publicación de una importante revista bajo el título de «Anales del Ateneo»; abrió un concurso sobre temas:
cuatro
los
charrúas
comprendido de 1800 a de la fauna uruguaya
— —
—
período
el
1830
canto
al
de
arte;
nacional
historia
animales
los
útiles
y
dañinos
nombró una Comisión
Juan Carlos Blanco encargada de levan-
(presidida por el doctor
tar 30,000 pesos con destino a la construcción de un edificio, y resolvió dar a sus cursos de enseñanza secundaria una organi-
zación apropiada de
fué confiada La segunda
al
acuerdo con un programa cuya redacción
doctor Francisco A.
resolvió
también
reunir
Berra.
fondos
para
la
un edificio. En uno y otro centro continuaban funcionando con
construc-
ción de
cátedras
desde
la
de
enseñanza secundaria
separadas
de
la
brillo las
Universidad
administración Latorre, sin perjuicio de las tertulias
propaganda que movimiento intelectual de Montevideo.
literarias y de las conferencias de divulgación y
tanto impulso daban
al
Administración de Justicia.
Eleeci«')n
los
Magistrados infe-
rit>res.
La Legislatura de 1880 planteó
el problema de la creación Alta Corte de Justicia, tantas veces debatido, y lo resolvió declarando que ese cuerpo se crearía una vez sancionada la ley relativa a su funcionamiento y jurisdicción, para cuyo estu-
de
(iio
la
ncmbrüi
ía
(1
Todor Ejecutivo una Comisión de abogado*;.
Anales ñe
358
universidad
la
Por otra ley de ISSl restableció el régimen de la elección popular de los Tenientes Alcaldes y Jueces de Paz que el Código de Procedimiento Civil había abolido. Del resultado de esa ley en los comicios del mismo año instruyen elocuentemente las publicaciones de la prensa, con la demostración palmaria de que las designaciones habían sido hechas en todos los departamentos por los agentes del Poder Ejecutivo en medio de la excepción que la de San José luchar y los oficialistas querían donde los elementos populares secuestraron la urna para asegurarse el triunfo. abstención del electorado, sin
Trabajos
(ie
otra
codificación.
En 1880 fueron pasadas al Cu&rpo Legislativo varias reformas al Código de Minería, proyectadas por el doctor Joaquín Requena a pedido del Poder Ejecutivo. Abarcaban los capítulos relativos al descubrimiento de minas, registro denuncia, mensureconocimiento, posesión y propiedad de las concesiones, acuerdo con los códigos de Chile y de España y ello d3 lo aconsejado po-r el ingeniero Charlier de la Comipañía de Minas de Oro de Cuñipirú. También pasó el Poder Ejecutivo a las Cámaras en esa misra,
todo
ma
oportunidad varias enmiendas
Código Rural relativas a Asociación Rural. «La es decía el Gobierno en su mensaje legislación actual causa de continuas protestas y mantiene en constante alarma a los pequeños capitalistas expuestos a la ruina en el caso de de
cercos
estaiicia,
—
propuestas
al
por
la
—
que sus colindantes aborden construcciones costosas». El proyecto establecía el precio máximo de 20 pesos por cuadra lineal de cinco alambres y madera dura y 10 pesos por el mismo cerco con
madera
blanca.
El Poder Ejecutivo
nombró asimismo una comisión de abo-
doctores Gonzalo Ramírez, Ildefonso García Lagos, Manuel Herrera y Obes, Román García y Laudelino Vázquez para la redacción de un proyecto de Código Penal.
gados
compuesta
Contra
El
el
de
los
abigeato.
abigeato,
combatido
eficazmente
durante
ción Latorre por los medios bárbaros de la época zais
y
el
Taller de Adoquines
—
volvió a cobrar
la
—
administra-
las matanempuje desde
Anales de
Universidad
la
359
comienzos
de la administración Vidal. Para comTjatirlo en juagaba como causa generadora de ese delito, presentó el Gobierno a la Asamblea un "proyecto de ley que elevaba el mínimum y el máximum de la pena respectivamente a 8 y 24 meses, suprimía en absoluto la excarcelación bajo fianza o caución los
que
lo
se
y ponía todas las causas,
juratoria tancia,
bajo
la
jurisdicción
cualesquiera fuera
su impor-
Letrados Departamen-
de los Jueces
—
«Las proporciones alarmantes decía el Poder Ejecutivo en su mensaje que la frecuente comisión de ese delito va adtquiriendo en la campaña debido a la impunidad que con raras excepciones gozan sus perpetradores, nacida de la lenidad de la ley, hace que la actitud de las autoridades administrativas tales.
—
sea ineficaz para garantir al vecino pacífico y honrado peto de sus intereses».
res-
el
Conti'a la vagancia.
A
la
clutaba
sombra de
las
disposiciones legales sobre vagancia,
Ministerio de la Guerra
el
de línea y
el
tomamos
al
Con
la el
«En
azar una información de
de la 'época correspondiente a julio de 1880
vagos a
—
proyecto por
presentó el
el
Gobierno
a
la
cual se establecía que los
el
la
llegaron
orden del Ministerio de la Guerra». propósito de legalizar o regularizar ese
reclutamiento,
re-
personal de los batallones
personal de las policías de campaña.
—
bot Catalina»
el
paile-
prensa ayer 33
sistema
de
Asamblea en 1880 ua vagos serian amones-
por la Policía y en caso de persistir en la vagancia, come-
tados
Jueces Letrados Departamentales;
tidos a los sistiría
en dos años de servicio
y de un año tranjeros,
y
de
prisión
con
militar
trabajos
que
la
condena coa-
tratándose de nacionales
públicos
tratándose de
ex-
que en caso de reincidencia habría duplicación de
penas.
La Cámara de Diputados sancionó un proyecto más explícito que empezaba por caracterizar la vagancia. «Serán considerados vagos
— decía —
que no posean bienes o rentas y no ejerzan arte, ni oficio, ni tengan empleo, desindustria, ocupación lícita o algún otro medio legítimo y los
habitualmente profesión, tino,
conocido de subsistencia con o sin domicilio fijo». y mal entretenidos del cio,
artículo las
— agregaba —
anterior,
casas
o
los
.
.
«Serán vagos
que hallándose en
el caso frecuenten las pulperías o casas de nego-
parajes
donde se
juegue
con
interés
o
sin
él
Anales ie
360
la
universidad
Las penas coincidían con las del uno a dos años de servicio militar tratándose de nacionales y un año de prisión con trabajos públiccs tratándose de extranjeros. Los menores de 17 años serían y las casas de tolerancia»...
proyecto
gubernativo:
de
recluidos en la Escuela de Artes y Oficios.
Con
quedó este proyecto sancionado Poder Ejecutivo que había reaccionado ya contra su propia iniciativa y que deseaba tener a su alcance un medio rapidísimo de rementa del ejército de Urna,, vetó la ley invocando que el procedimiento ante los Jueces Letrados sería largo y haría fracasar la campana contra la vagancia, y que al mismo fracaso conduciría otra disposición de la nueva ley por la que se autorizaba el sobreseimiento en el caso de que el vago prometiera consagrarse a una tarea que le proporcionase medios de vida y obtuviera un fiador que abonara la efecmodificaciones
ligeras
por ambas Cámaras. Pero
el
tividad de su promesa.
Las causas con Jurado. El Tribunal dirigió una nota en 18 SO al Poder Ejecutivo manifestando que las causas criminales se retardaban de una maneja
considerable por efecto
la
ineficacia
de la inasistencia de los jurados y medidas coercitivas existentes a la sazón. En concepto del Tribunal el mal podría subsanarse mediante la sanción de una ley que aumentara el número de los jurados y aliviara una tarea que se juzgaba demasiado pesada. Era buena la indicación, sin duda alguna. Pero había en los procedimientos de la época otro vicio más grave que contribuía al desprestigio de la institución del Jurado, según se encargó de comprobarlo el Director de «La Razón» en una causa ruidosa del mismo año. La práctica legal de entonces, como la de ahora, consistía en la lectura de todo el sumario por el escribano, lecde
las
tura ordinariamente larga, monótona y
mecer
a los
Y
sumario.
muy
propia para ador-
jurados o hacerles olvidar los puntos esenciales del sacando partido de
ello
el
escribano que intervenía en
esa causa dobló todas las piezas que comprometían al acusado y limitó su
habría
lectura a las
pasado
que no tenían importancia, fraude que si el Director de «La Razón» que
inadvertido
actuaba como jurado no hubiera tenido el
expediente para averiguar qué es
dobladas.
lo
la
curiosidad
que contenían
de
abrir
las
hojas
t
Anales de
Universidad
la
361
Desde ese iucideute empezó a abrirse camino debían
concurrir
testigos
los
Jurado, como así lo consignó
miento
Penal
la
de que
tesis
ante
voz
viva
el
Proyecto de Código de Procedi,
Vásquez Acevedo
Alfredo
doctor
del
el
de
declarar
a
que
desde
hace largos años obra en las carpetas del Cuerpo Legislativo.
La
constniccióii de la Cárcel Penitenciaría.
A
raíz de la caída de Latorre, surgió
que
dictador
el
Honoré a íavor los
había
constituido
de la reforma
a
en
carcelaria
y
procedimientos empleados para obtener
reos:
la
Como
estaca,
las
palizas,
facón y
el
consecuencia de ese voto
misión encargada de
la
el
misma Legislatura
la
un voto
dedo,
de
del
la
diputado
supresión de
confesión
la
Taller
de los
de Adoquines.
Gobierno nombró una Co-
el
construcción de
la
«^ Jtft
Penitencia ría, de la
que formaban r'^arte el doctor Ildefonso García Lagos, el ingeriero Rodolfo de Arteaga, el general Luis Eduardo Pérez y don
— • Juan D. Jackson. Los bienes de la sucesión del doctor Octavio Lapido aplicados gobierno de Latorre a la realización de esa obra, habían consumidos en gran parte. Según un estado de la Contaduría General de la Nación de junio de 1880, la parte de bienes adjudicada al Fisco se componía de 530,000 pesos, [en bienes
por
el
<
/»
ñ
raíces
(168,500),
(57,617)
en y
títulos
en
de
efectivo
deuda
en
(266,186),
(38,365)].
De
esa
valores
'''^-'Y' 'Xiy( ^t^ ¿t^ ^
d?
suma habían
absorbido 358,000 los honorarios del Fiscal Especial, del Curador de bienes, de los médicos, las reparaciones de los edificios y un rubro «Varios» en el que figuraban cantidades entregadas
por orden superior, quedando reducido
el
remanente a 172,000 pesos.
Tal era la cantidad con que se contaba para abordar la construcción de la obra planeada por la administración Berro,
tenida
en
la
orden
del
día
por los
gobiernos
reclamada como un postulado nacional por todos del país y especialmente los de
man-
subsiguientes
y
los habitantes
campaña víctimas muchas veces
do los procedimientos inquisitoriales a que recurrían los Jefes Políticos para impedir las evasiones.
Uno de
esos medios era «la estaca» y otro «la jaula», aquell-i
famosa jaula de hierro de la policía de la Colonia que el Juez Letrado de dicho departamento doctor Alberto Palomeque se encargó de condenar en 1881,
^
'-**^*^
sido
cartera
.
i
I
.^^
Anales de
362
Una
Tribunal se dirigió
milia,
entre
Ministerio de Gobierno en 1880 pi-
sanción
la
una
de
no embargables
bienes
ley
encaminada a
mobiliario
de la facon excepción de las piezas de lujo o de simple ostentalos
de la salas o
ción
al
que promoviera
diéndole incluir
universidad
limita t iva de los embargos.
lej-
jíl
la
antesalas.
el
Luego de hacer referencia a
almacenes del depositario Judicial, decía
el
los
Tribunal:
«Conmueve, Excmo. Señor, ver allí amontonados efectos y mueque no teniendo otro destino racional que el de alimentar
bles
fuego,
el
serían
sin
embargo estimados y
utilizados
por
sus
dueños, quizá infelices a quienes la imprevisión o la desgracia
ha colocado en la desesperada condición de deudores ejecutados y que sin salir de ella tienen todavía que ver soportar en sus familias la privación del servicio que esos trastos les proporcionarían.»
Era pasó la
concluyente
tan la
que
nota
a
la
el
fundamento, que
Asamblea y ésta en
se declaraba
el
el
Poder
Ejecutivo
acto dictó una ley por
no embargables las prendas de uso personal los muebles y útiles de servicio conte-
deudor y su familia,
del
nidos en su casa habitación, excepto los de sala y antesala, siem-
que
pre
alquileres
lia
la
de
deuda proviniera de
los
mismos
muebles
o
de
casa.
inamovllidad de los Jueces y la reducción de los sueldos.
Con motivo de la diiscusión del Presupuesto de 1881 en que figuraba una rebaja a los sueldos de la magistratura judiiciaJ, se dirigió el Triounal al Poder Ejecutivo y por intermedio de éste a la Asamblea invocando contra esa rebaja el precepto constitucional de la inamovilidaid. El Poder Ejecutivo, que no comi&sl's del Tribunal, pasó la nota a la Asamblea, donde fué combatitda por la Comisión de Legislación de la Cáimara de Diputados y encairpetada por falta de ambiente.
partía la
Uno de
los diarios
que también combatía
la
tesas del Trilbunal
recordó que meses antes se ha^bía planteado la misma cuestión ante la Suíprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires iiLtegrada con abogados tan notables como los doctores Vicente Fidel Lctpez, José María Moreno, Antonio E. Malaver, Pe. dro Goyena y Carlos .Saavédra Zabaleta. La Constitución argentina,
análoga
a la
nuestra en esa materia, establecía
la
inamovi-
Anales de
lidad
de
Jueces,
los
pero
sin
doctor Saavedra
El
isueldos.
¡a
Universiclad
alguna acerca de
prescripción
Zabaleta sostuvo que
de
los sueldos vulnerat)a al inamoviliidad al
la
Legislatura
la
renuncia
363
de los
Jueces.
la
los
reducción
ponar al alcance de
Pero todos
los
dernás
mi'embros de la Corte declararon que ia reducción de los sueld j«, dentro de un plan general de eiconomias, no era contraria ni a inamovilidad ni a
la
Sumarios Los
la
Constitución.
policiales.
Jefes
Políticos
de
campaña
se
habían
acostumbrado
a
intervenir aictiva.mente en los sumarios criminales. Cada vez que ocurría un crimen eran ellos los que instruían el sumario y no los
Jueces
nisterio
a
de
quienes
Gobierno
legalmente resolvió
invasión de atribuciones.
La
en
correspondía 1881
Policía
—
— debe limitarse a
ese motivo se pasó
poner
intervenir.
El
Mi-
a esa evidente decía la circular que con fin
la prisión del
delincuenie
y a las primeras indagaciones, pasando de inmediato todo al Juzgado para que instruya el sumario dentro de las veinticuatro horas de la prisión.
Registros de Ventas.
La
ley
de creación del Registro General de Ventas fué mo1880.
dificada en
De acuerdo con
la
nueva organización, en todas
las
ciudades,
villas y pueblos de la
República habría un Registro para la toma de razón de las escrituras de división de bienes raíces entre condueños, ventas, permutas y donaciones de inmuebles, partición ae herencias y cesión de derechos. El Registro General de Mon. tevideo estaría a cargo del escribano que designara el Poder Ejecutivo. Los Registros locales estarían a cargo de los Actuarios de
los Juzgados Departamentales o Juzgados de Paz. Cuando Jugados de Paz actuaran sin Actuario, el registro estaría a cargo del mismo Juez de Paz. Los Actuarios de los Juzgados di los
Paz pasarían quincenalmente una copia literal de las anotacioal Actuario del Juzgado Departamental, y a i3u turno los Actuarios departamentales enviarían mensualmente al Registro central una copia de las anotaciones de todo el departamento.
nes
Anales de
364
Xios (lefiaudadoiü's
la
Universidad
impuestos.
El Jefe Político de Tacuarembó preguntó al Ministerio de Gobierno en 1881 qué pena se aplicaría a los que explotaran minas de oro sin abonar los imipuestos corresponidi:cntes. Pasadoi el expediente al Fiscal de Gobierno doctor José María Montero, dijo este funcionario que los defraudadores del Pisco debían ser con-
siderados como con.trabandistas o ladrones, según la naturaleza y circunstancias de cada caso, y que en consecuencia debían ser sumariados y presos si se les tomara infraganti delito y someti-
dos a los Jueces correspondiientes. Y dictamen fiscal.
el
Gobierno hizo suyo
oi
Intereses municipales.
La Asamblea autorizó blecer cuerpos de
al Poder Ejecutivo en 1880 para esta, serenos o guardianes nocturnos en todas las
poblaciones de campaña que
lo
solicitaran.
La organización de
esos cuerpos quedaría a cargo de las Jefaturas de Policía y la recaudación e inversión del impuesto consiístente en un dere-
—
cho que oscilaba
desde
centesimos a las casas de familia hasta 2 pesos a las casas introductoras y de consignación a cargo de las Juntas Económico - Administrativas. 30
—
Por otra ley del año siguiente adjudilcó la Asamblea a las Económico- Administrativas los impuestos de peaje, pon-
Juntas
tazgo y barcaje corresipondientes a los puentes, balsas., botes, caacueductos o calzadas que construyeran o plantearan las
nales,
mismas Juntas
o las emipresas concesionarias. El peaje no podría exceder de 40 centesimos por los rodados, 12 por las perdonas que transitaran a caballo y 2 por cada animal suelto.
El
de alumbrado a gas que en épocas anteriores halugar a vivas controversias, especiaLmente durante ia epidemia de 18 57, fué reglamentando en 18«0 por la Junta Ecoservicio
bía dado
nómico-Administrativa de
la Capital, sobre la base de una fiscalización técnica que se dejaba a cargo de la Socieir>d de Cien-
cias y Artes
por carecer
el
Estado
de organismo!
prcpios de
contralor.
También fué reglamentado
el comercio de carnes y verduras. nuevas disposiciones figuraba una que obligaha a los puesteros de las proximidades del Mercado Central a reconocen, trarse en dicho establecimiento. Los puesteros se presentaron en
Entre
las
Anales de
Universidad
la
365
la Comisión Permauente y ésta sostuvo que el reglamento originario de mercados no establecía radio aiguno de p,.ñvilegio y que en cambio la ley de patentes establecía la cuota que debían pagar los puestos situados fuera de los mercados, lo cual importaba autorizar su funcionamiento de un modo general. Pero el Poder Ejecutivo mantuvo su resolución invocando que el contrato celebrado con el concesionario del Mercado es-
queja a
el radio de privilegio y aue por otra parte se trataba de una medida de higiene pública que jamás había sido discu-
tablecía
tida ni puesta
en duda.
Por resolución de 188
el
informe
examen
ele
presentado
existencia de 469
Dirección de Salubridad
la
las
se
practicó
en
casas de inquilinato de iMontevideo. Del
por
don Carlos Búrmester una superficie
conventillos con
resultaba total
una
de 185,610
metros cuadrados, 699 pisos o plantas, 7,053 cuurtos habitables y una población de 14,8i59 almas que se distribuía asi: hombres 5,756, mujeres 4,117, niños 2,664, niñas 2,322. Del punto de
vista
de
los
italianos
las
casas
tamos, a
de la
la
nacionalidad
destacábanse
los
orientales
(i&,096),
(3,577). La población de según el informe que extrac-
esipañoles
(3,578) y los inquilnato ascendía,
quinta parte de
la
población de
la
ciudad de Mon-
tevideo en esos momentos.
El antiguo Fuerte donde funcionaban las oficinas dependien-
Poder Ejecutivo fué demolido en 1880 a raíz del trasoficinas a su nueva sede, destinándose la manzana que quedaba libre a plaza pública, todo ello de acuerdo con !o programado y resuelto durante la administración Latorre. tes del
lado
de esas
Higiene pública. Los establecimientos de beneficencia. El Hospital de Caridad tenía 478 camas ocupadas el 1." de «ñero de 1880 y 372 en igual fecha de 1881, con un movimiento de 4,631 enfermos entrados y 402 fallecimientos en el curso del
primero de esos años y de 4.211 entrados y 367 fallecimientos en el curso del segundo.
En el Asilo de Mendigos había 236 asilados el 1." de enero de 1880 y 223 en igual día de 18 81, con una entrada de 18 6 y una mortalidad de 3 9 en el primero de esos años y de 234 y dfi 28 en el segundo. En y 44 8
el
al
35 y 30.
INIanicomio había 399 enfermos el
1." de enero de 1880 año siguiente con una mortalidad respectivamente de
Anaces de
366
En
de
Asilo
el
431 niños
el
1."
Universidad
la
Expósitos y Huérfanos la existencia era de enero de 1880 y de 495 en 1881, con
movimiento respectivamente de 313 y 302 entrados, 86 y 78 llecimientos
163
y
314
y
por
altas
concepto de
pedidos de
de
ua falos
padres y adopciones.
La
estadística parcial
del
Departamento de mujeres
del
Hos-
de Caridad a cargo del doctor Jurkouski y de." bachiller un Brian, arrojaba de diciembre de 1879 a diciembre de 188
pital
movimiento de 5 79 enfermos, con 431 y una existencia de 88 al cerrar el año.
La pold
de la sala de Medicina a cargo del doctor Laoarrojaba en 18 80 un movimiento de 73 2 enfermos, des-
el
rei.raatismo,
A
la
policlínica
alcoholismo y
el
por loa doctores Luii
y
enfermos,
13,285
practicándose
12 amputaciones, 7 resecciones, 50
C09
extracciones,
tina
mortalidad de
El
sífilis.
la
Hospital, atendida
del
Pedro M. Castro y los estudiantes Brian, Fernández Felippone y Labora, concurrieron durante ese mismo
Fleuri
Espiro,
de diagnósticos la bronquitis aguda y cró-
lista
la
nica,
año
fallecimientos
60
estadística
tacándose en
A.
altas,
doctor
practicaron
2
Fleuri,
en
curaciones
1,131
uterinas,
reducciones, 20 extirpaciones,
punciones y 18 operaciones diversas, con hombres, 3 mujeres y 30 niños. doctor
el
Hospital de
el
5
Jurkouski y el bachiller Caridad una operación
Brian
nueva
entonces y que llamó mucho la atención de los médicos. El cocinero de una casa de familia se tragó un tenedor realizando
un grupo de niños a quienes desgraciadamente se produjo. Conducido al Hospital fué allí operado con pleno éxito. En 1880 quedó terminado el nuevo y grandioso MamcoirAú construido por la Comicomo así se le llamaba entonces sión de Caridad bajo* la dirección del ingeniero Canstatt, al lado del viejo asilo que ocupaban los dementes en la quinta de ejercicios de prestidigitación ante
pretendía
hacer
creer
hecho
el
—
que
—
Vilardebó.
Al entregar ese edificio Julio
Pereira en
su
al
discurso
servicio
público hizo constar don
inaugural
que
el
Hospital
Asilos de Huérfanos y Mendigos atendían en esos
1,500 personas y que los Asilos Maternales educaban cío
y
y los
momentos
a
y daban
comer a 2,000 niños. La Comisión de Caridad rindió en ese mismo año un justo merecido homenaje a la memoria de don Francisco Antonio
Maciel, fundador filántropo en
el
del
hall
Hospital, del
colocando
establecimiento.
el
busto
de
ese
gran
Anales de
Oniveraidad
la
367
El Poder Ejecutivo restableció en 1880 la Comisión de Benede Señoras suprimida durante la dicCadura de Latorre
ficencia
con
cometidos de superintendencia administrati-
anteriores
sus
Huérfanos "y Expósitos; y creó una Comisión Honoraria de Caridad y Beneficencia, con un amplio programa
va del Asilo
ele
de
administración
vigilancia,
asilos
y de sus rentas,
de
dirección
y
cesando
la
nomento
hospitales y que hasta ese Administrativa de la Capital. los
intervención
tenía la Junta Económico Eran dos medidas urgentemente reclamadas por
so
estado de
la
angustio-
el
beneficencia pública.
Asilos Maternales.
Don Pedro Bauza, Vocal trativa
encargado
y
de
de
la
Económico
Junta
dirección
la
de
-
Adminis-
maternales,
asilos
los
describía así en 1882 la organización de dichos establecimientos:
«Dos veces por semana concurre el médico. Las recetas sa despachan gratis por la farmacia del Hospital de Caridad. Se hacen ejercicios higiénicos varias veces al día. Los niños entran i/¿
de 6 a 8 y
entrada se
les
La enseñanza prende
las
mañana
de la
da su ración.
y salen a las
Hay
niños desde
está a cargo de las
siguientes
materias:
6
2
de la tarde.
A
la
y V2 años arriba.
hermanas de Caridad y comGramática
—
Aritmética
—
Geometría Historia natural — Geografía — Lecciones sobre — Nomenobjetos — División tiempo — Doctrina clatura — Lectura — Botánica — Historia sagrada — Mapa da República — Ejercicios gimnásticos y A 10
—
del
cristiana
canto.
la
S9
las
tomándose sopa, guiso, postre y pan. Después del almuerzo hay recreo seguido de una hora de siesta y a las cuatro tiene luego la comida con los mismos platos.» almuerza,
La campaña contra
hi
vimela.
El vacunador oficial don Hermenegildo Aramendi publicó en
1881
resumen
un
durante
el
decenio
estadístico
de
1870-1880,
del
las
vacunaciones
que
resultaban
practicadas 7,230
vacuna-
ciones en los departamentos
de Montevideo, San José, Soriano,
Paysandú. Durazno, Florida,
Minas y Cerro Largo.
Una
cifra
bien pobre que explica la actuación preponderante de la viruela
en las tablas de mortalidad de
la
época.
Anales de
368
universidad
la
El Consejo de Higiene gestionó y obtuvo en ese año blecimiento de
la
el
Administración General de Vacuna bajo
restala
de-
pendencia del mismo Consejo, como medio de vigilar eficazmente la conservación y distribución del virus en todo el país. También presentó
el
Consejo a
consideración del Gobierno un proyecto
la
de ley de vacunación obligatoria, que en el acto fué pasado al
Cuerpo Legislativo. Hay que advertir que el año 1881 era de epidemia en Montevideo y en algunos de los departamentos de campaña y que por eso procuraban las autoridades sanitarias salir de la modorra en que habían permanecido.
Estado El
caños maestros.
tle los
Consejo
de
Higiene y
la
Dirección
General
de
Obras
Pú-
un estudio de la red cloacal dó Montevideo. El doctor Diego Pérez, miembro de la primera de esas corporaciones, acompañado de otras personas, penetró por en
resolvieron
blicas
1880
realizar
uno de los caños de la parte sur de la calle Convención y recouna parte importante de la red. se encuendecía el doctor Pérez en su informe Los caños tran en buen estado. Aún los antiguos, que cuentan ya 24 años de rrió
—
servicios,
cambio norte;
tienen
—
sus
bóvedas,
hay que resolver hay que construir
el el
paredes y pisos sin alteración.
En
problema del desagüe en la costa caño colector; hay que reformar
algunos de los ramales que comunican con la red cloacal, varios de los caños maestros de propiedad particular que están llenos de filtraciones y muchos de los ramales que parten de los edificios al centro de la calle.
El vecindario de la planta solicitó
cloacal
gros
en
1881
como medio de
quie
vieja
que se declarara evitar
todavía existían en
la
de
la
ciudad
obligatorio
el
de Montevideo la red
uso de
contaminación de los pozos nefincas. El asunto pasó al
muchas
Cuerpo Legislativo, donde dio lugar a un informe de la Comisión de Legislación del Senado por el que se declaraba obligatorio el uso de los caños maestros, pero sólo después qut la empresa concesionaria construyera
La existencia de
los
el
gran caño colector que tenía a estudio. más combatida
pozos negros era cada vez
por las corporaciones sanitarias y los mismos vecindarios en nombre de la higiene pública y hasta de la seguridad individual más de una vez expuesta a graves contingencias. En la prensa de la
Anales de
la
369
Universidad
época encontramos la descripción del hundimiento del piso de tina de las letrinas de la ciudad y caída del jefe de la familia y de cinco personas que acudieron en su auxilio, que no m^urijeron asfixiados gracias a
rápidos y eficaces medios de salvamento
los
puestos en juego.
Ejército
(le
línea.
Uruguay, según los cuadros y oficiales de línea, de ¿el dislos cuales estaban en servicio activo 361 y en r4tuación de ponibiiidad 797. Había 10 generales en ese número. Los demás Al
finalizar
año 1881 tenía
el
de
Ministerio
la
Guerra,
el
jefes
1,158
distribuían entre las siguientes graduaciones:
se
^^
Coroneles
33
graduados
)/
^5
Tenientes coroneles
graduados
»
»
•
37
.
137
Sargentos mayores
59
graduados
»
»
25
Capitanes
40
Ayudantes mayores Tenientes ,
1."
127
2.°
136 157
Subtenientes
15
Portas
4
Guardiamarinas
Uno
<
5
graduados
»
de los diarios
más autorizados de
la época,
«E51
Heraldo»,
invocando datos que conceptuaba de fuente muy segura, afirmaba que el Uruguay podía poner en pie de guerra los siguientes elementos:
infantería
y
caballerías
tería
junto 36,100
La
8,000; 6,500;
Latorre,
ejército de
tropa
activa,
de línea
el
18,000; 3,600.
infan-
En
continuaba siendo, como durante procedimiento
los
con-
la
la
la
ad-
remonta
jefe de batallón reponer sus bajas
Cada
departamentos para
con «vagos» o «desertores», según VII -24.
normal para
línea y policía de campaña.
enviaba comisiones a
T.
caballería
soldados.
«caza de hombres»
ministración del
activa,
pasivas,
terminología corriente. Ante
Anales de
370
las tal,
Universidad
la
insistentes denuncias de la prensa de
campaña
y
de la Capi-
Comisión Permanente interpelar al MinisGuerra. Y véase lo que contestó el coronel Santos:
resolvió en 1880
la
de lia «Que los individuos conducidos de campaña en calidad de presos son aquellos a que se refiere el artículo 30 del Reglamento de Policías de 1827 y ley relativa a levas de 1853, por cuyo motro
tivo creía
que
el
Gobierno no
ñabía separado de las dióposicio-
se
nes legales cuando había pedido a los Jefes Políticos que
ran remitidos
vagos y mal
los
fue-
le
en la
que existían
entretenidos
campaña.»
La Comisión Permanente, que no quería romper lanzas con omnipotente Ministro de
la
el
Guerra, resolvió darse por satisfecha
y pasar a la orden del día. Con esa expresa ratificación de la caza de hombres, continuaron los jefes die batallón sus procedimientos de remonta y en tal
forma y con
publicidad que
tal
Ministro de la Guerra se vio
el
año 1880 a dar alguna satisfacción campaña, mea las denuncias que incesantemente llegaban de diante la instrucción de varios sumarios que naturalmente debían concluir y concluyeron con la absoluta absolución de los jefes obligado antes de finalizar
el
acusados.
La Escuela
Militar,
a figu-
que había sido clausurada, volvió
rar en la orden del día de la administración Vidal por efecto del
r.ormbramiento
grama
die
de
una comisión
ese establecimiento que
el
redactar
de
pro-
el
Poder Ejecutivo se proponía
consideración de la Asamblea.
someter a
la
líoiuaiiclo
a los prócei-es.
Un
encargada
grupo de diputados encabezado por don José Cándido Bus-
tamante presentó en 1881 dos proyectos, por los que se mandaba erigir en la Plaza de los Treinta y Tres un monumento «a la
memoria
ilustre
del
inscripción:
«Al
la Plaza Sarandí
guerrero
fundador otro
de
José la
monumento
Artigas»,
con
nacionalidad a la
valleja con la siguiente inscripción:
memoria
«Al General
y Tres libertadores». Otro grupo de diputados pidió que
se
la
siguiente
y
oriental»; del
en
general La-
de los Treintn
conmemorara
el
18
6.H
agosto de 1881, centenario del nacimiento de don Joaquín Suárez,
mediante
la
colocación
de
la
piedra
fundamental
de
una
estatua de ese procer que sería costeada por suscripción públic.i
Anales de
la
Universidad
371
y erigida en la Plaza Independencia, para cuya realización tribuiría
el
Tesoro público con 10,000
con-
pesos.
Esta última iniciativa fué acogida de inmediato por la Asamconvertida en ley. No así las dos primeras, que conti-
blea y
nuaron a
La
Comisiones dictaminantes.
isstudio de las
colocación
Suárez tuvo
de
lugar
piedra
la
de
25
el
fundamental
Agosto
del
del
mismo
monumento El
año.
a
Ministro
de la Guerra, invocando que la prioridad correspondía a Artigas y no a Suárez, hizo
Independencia
el
colocar en uno de los ángulos de la Plaza
busto del Jefe de los Orientales, y en los mis-
mos momentos en que su
ceremonia
,
él
la
dirigía
Comisión de homenaje oficial concluía palabras a los que rod-eaban el
estas
busto:
«Insigne Artigas! el Ejército Oriental que nunca olvidó los innumerables sacrificios que hicisteis a fin de realizar tu patriótico pensamiento, quiere, ya que no has merecido el justo tributo que tu acendrado patriotismo demanda, que tu simpático busto colocado sobre un pedestal de esta Plaza inmortalice tu gloriosa memoria.» Durante el gobierno de Vidal fueron también tributados
grandes honores a
ai
general San Martín con motivo de la llegada
nuestro puerto de
la
urna que contenía sus
restos.
El doctor
Vidal pidió y obtuvo autorización para bajar la urna a tierra conducirla hasta la Iglesia Matriz acompañada por todo el y
que estaba ese día bajo el mando del jefe del 3." de Cazadores coronel Máximo Tajes. La juventud universitaria designó al bachiller Jorge H. Ballesteros para que hiciera uso
ejército
una placa recordatoria en que se leía «Los catedráticos y estudiantes de la Universidad de Montevideo a la memoria del gran Capitán don José de San Martín». de
esta
la
palabra y envió
inscripción:
El Correo.
En 1880 recibió el Correo 938,402 cartas ordinarias, 15.020 recomendadas, 1.216,398 impresos, 2,489 paquetes de muestras y papeles de comercio, oficiales.
Y en 1881
11,767 tarjetas postales y
recibió
63,110 piezas
1-222,226 cartas ordinarias.
recomendadas, 15.541 tarjetas postales, 1.703,160 3,073 paquetes de muestras y 62.184 oficios.
34,248
impresos,
Anales de
372
obtenido
producto
lEl
buzones de
Los
entre ellas
La incorporación
rrespondencia
en
piezas
el
el
la
para
ría 0.02
proponía
franqueo a
sm gravamen
Unión Postal
la
dirigirse
Universal
Ministerio de
al
rebaja de franqueo para la coimponía esa incorporación, oblitarifa para la correspondencia del de que resultara
contrasientido
el
Director de
el
alguno. De acuerdo con
la
entonces
nueva
circulaban
tarifa se cobra-
centesimos por carta de 15 gramos y
por cada 50 gramos de impresos, de acuerdo con
Postal;
y
se
cobraría
desti-
evitar
Correos que se exten-
que hasta
impresos,
les
exterior 0:10
el
curso
la
quería evitar
desequilibrio
diera
de
cartas vecinales.
más barata la carta despachada para el extranjero que la nada a circular dentro de las fronteras nacionales. Para el
'y
exterior que
al
se
si
a
para
Correos
rebajar también
a
interior,
en 18S0
pesos
82,189
5,110
Uruguay
del
Director de
al
Gobierno manifestándole que
gaba
115,931
movilizaron
barrio
1880, figurando
dio base
de
fué
año siguiente.
118,624 al
cíe
Universidad
la
para
el
interior
0.05
la
por cartas
Unión 15
de
gramos y 0.01 por cada 50 gramos de impresos, papeles de negocios o muestras de mercaderías. La Cámara de Diputados votó en
el
acto
la
P-ero
tarifa.
Senado rechazó
el
el
impuesto a
los
impresos del interior juzgando que no era conveniente trabar la circulación de los diarios en la campaña, j la tesis del Senado prevaleció también en
seno de la Asamblea General, quedando
el
en consecuencia suprimido
el
proyectado derecho
a
los
impresos.
Creación de departamentos.
Dos nuevos departamentos fueron creados en el curso del año 1880: el de Río Negro con parte del territorio de Paysandú y el de Rocha con parte del territorio de Maldonado. El Poder Ejecutivo vetó las leyes respectivas invocando el recargo de gastos
que
originaría
impuestos que se
mantuvo
.su
la
subdivisión
creaban
con
y
ese
la
inconveniencia
motivo.
Pero
la
de
los
Asamblea
sanción.
Espectáculos públicos.
En
18 80 reabrió sus puertas
el
un largo paréntesis impuesto por modernización que reclamaba
el
Teatro San Felipe, después de las
obras de reconstrucción y
vetusto edificio.
Anales de
Pocos meses después
universidad
la
las oficinas técnicas
373
denunciaban
mal
el
Teatro Solís por haberse apolillado las vigas
erstado del techo del
de madera y agrietado las paredes, y se abordaba de inmediato el estudio de la armadura de hierro destinada a consolidar el edificio.
Dos obras nacionales fueron estrenadas en este período: el histórico de don Rafael Fragueiro «Lucrecia romana» que fué representado por la compañía Tessero, y la ópera «Ofelia» de don Carmelo Calvo y letra del doctor Juan Zorrilla de
drama
San Martín.
Hipódromo de Maroñas resultaba estrecho para
El
currencia que afluía a sus reuniones y
la
ministrativa acordó al coronel Manuel Aguirre la
un nuevo circo que
concesión
de
en Punta Carreta.
se construiría
contaba en esa época con un nuevo centro,
La educación
física
!a
«Sociedad
Atlética
de
residentes
saltos
con-
la
Junta Económico-Ad-
Montevideana», realizaban
que
ingleses
de barrera, carreras a
pie,
tiro
compuesta
principalmente
programas variados del
martillo,
tiro
de
de la
y saltos de la garrocha. Entre otros úe los establecimientos actualmente suprimidos por la acción moralizadora de nuestras leyes, fuguraban entonces la
pelota
Plaza de Toros de la Unión, donde había corridas con cuadrillas de
toreros
Minas,
españoles y
pertenecientes
a
ganados procedentes del departamento de don Juan M. Echenique; el Tiro a la
Prado torneos semanales que atraían reñideros de gallos, con anuncios muy llamativos algunos de ellos en que el propietario prevenía al público «que tenía gallos en gran número con plata y sin res-
Paloma, que organizaba en
numerosa
concurrencia;
el
y los
petar parada.»
La
cuestión
(le
la
Uno de
Jueces do
los
con motivo del cumplimiento Estado Civil.
Incidente
religiosa.
ley de Registro de
Paz de Montevideo denunció en 1S80 al el Cura del Cordón doctor Mariano So-
Ministerio de Gobierno que ler
había bautizado
niños
como
sin lo
la
previa
exigía
el
e
inscripto
inscripción
en los libros
parroquiales a tres
en los registros
de
estado
civil,
decreto -ley de la dictadura de Latorre.
Pasados los antecedentes al Juez del Crimen doctor Fein informó el cura párroco que se trataba de tres niños que estaban en peligro de muerte a la hora del bautizo. El Juez del Crim?!n,
Anales de
Universidad
Ja
no satisfecho con esa explicación, decretó una compulsa en los liEl teniente cura don Faustino Rospide, con parroquiales.
bros
quien se entendió expresó que
escribano actuario para llenar esa diligencia,
el
libros estaban en poder del doctor Soler, pero
los
que en
podía anticipar
no
ellos
figuraba
niño que previamente no hubiera sido inscripto en vil,
agregando que en una libreta de apuntes que
raba uno de los bautizos denunciados. Insistió
Pero
obispo.
sostuvo «que
inspección de los
e
atribuciones
inspección
la
armario
el
resistiéndose
privativas
el
acto
Juez,
el
registros
y archivos
obispo
diocesano*.
del
a
de
compulsa
la
libros
los
a pesar de obispo
Tribunal
protestó
recabó
la
contra
opinión
a
viva
el
inspección
la
del
Fiscal
de
teniente cura.
el
llevada Civil
lo
parroquial,
registro
el
que en contrario había asegurado
lo
Abierto
parroquiales.
— porque teniente cura seguía — quedó comprobado que los tres
archivo
del
bautizos denunciados estaban inscriptos en
El
Actuario y con-
mandatos judiciales pidió y obtuvo el Crimen doctor Juan José Segundo que se llevara ade-
Fiscal del lante
llevaba figu-
desacato a los
ese
fuerza
quien se dirigió en
obispo, a
el
examen
el
eran
eclesiásticos
Ante
Registro Ci-
el él
teniente cura que sólo podía exhibir los libros por orden
testó el
del
el
que
de ningún
asiento
el
a
y
caiio
el
doctor Alfredo
Vásquez Acevedo, quien contestó que los registros parroquiales no podían ser sustraídos a las compulsas judiciales. «Esos registros decía el doctor Vásquez Acevedo como los de cualquier oficina pública por el objeto que tienen y por los
—
—
efectos que la ley atribuye a sus anotaciones, están y deben estar
siempre a las
la
disposición
que sobre
cuestiones
de
las
tales
autoridades judiciales para todas anotaciones
podría la autoridad judicial investigar falsedad
minar
se
¿Cóiuo
susciten...
verdad sobre delitos de
de inscripciones si no le fuera dado exaen que ellas se encuentran? Se explicaría que la
o adulteración
los libros
autoridad eclesiástica resistiera
tado
la
civil
si
los
delitos
o
el
faltas
examen de sus
correspondieran privativamente a la
registros
de
es-
pueden cometerse jurisdicción eclesiástica. Pero
que en
ellos
no es así. Esos delitos y faltas caen bajo según se desprende de los artículos 32 y 33
la
jurisdicción
común
del Código de Instruc-
ción Criminal.»
Pocas semanas después el cura de la Matriz don Inocencio Yéreguy se negaba a expedir la patente de defunción de la esposa d'e don Federico Frugieri, alegando que el viudo pedía esa partida para
rroco
—
poderse casar civilmente ante decía
«El
Bien Público»
el
apoyando
Juez de Paz. «El páhace la negativa
—
Alíales de la Universidad
porque
bien,
católicos
y
la ley
sólo consiente el
señor Pedro Frugieri
el
eran católicos todos en consecuencia
el
los
matrimonio es
entre los no
civil
Para ese diario
católico».
que habían recibido
hecho de
375
bautismo y bastaba
el
bautismal para que los
la inscripción
no pudieran autorizar válidamente el matrimonio civil. Ese mismo órgano de publicidad llegó en diciembre de 1881 a acoger en sus columnas editoriales «como perfectamente legal»
Jueces de Paz
un aviso colocado por
el
cura de Paysandú en la puerta del tem-
plo que decía así:
«El matrimonio es un sacramento y como
puede
tólica
administrarlo
El
...
tal sólo la
matrimonio
entre
Iglesia Cacatólicos
o
entre católicos y no católicos no autorizado por ^a Iglesia, es con-
La palabra disidente para quien nació en el catoliimporta una apostasía y no basta para hacer válido ni aún ciimo el contrato civil... Los hijos de tales fieles nacidos en esa con-
cubinato...
dición no son legítimos.»
Pero esa tesis absolutamente insostenible quedó abandonada en seguida y los dirigentes católicos creyeron más práctico limitarse a exigir que el que se declarara disidente conociera y explicarai significado de ese vocablo en vez de pronunciarlo inconsciente-
el
mente,
j
de
ley
bancas
a
la
vez intensificaron su propaganda contra
administración
la
parlamentarias
Latorre,
donde
desde
Soler
doctor
el
pulpito
el
y
el
destacó
se
decreto-
desde
por
las la
vehemencia de su lenguaje.
Partido
El
Registro El
Católico
pide y obtiene la
lefonna de
la
Ley de
Civil.
Presidente Vidal,
cediendo a esa propaganda,
resolvió
pedir
Asamblea la derogación del artículo de la ley que Tiabía dado margen al examen de los liTiros parroquiales del Cordón. establece «que los cudecía en su mensaje Ese artículo
a
la
—
—
ras párrocos libros e;
do
no admitirán inscripción alguna de bautismo en sus sin que los interesados exhiban previamente*
parroquiales
correspondiente certificado
nacimientos»...
Prohibe
de la
inscripción
inscripción,
en no
el el
Registro Civil bautizo...
Los
párrocos tienen que hacer ia inscripción en sus libros de acuerdo con el derecho canónico vigente... Una vez creado el RegistroCivil
los
libros
parroquiales han
perdido sus efectos jurídicos...
para evitar cuestiones conviene modificar la ley en esta forma«Los curas párrocos podrán admitir el bautismo y hacer sus asien-
Y
Anales de la universidad
376
aúu antes de
tos
inscripción
la
del
recién
nacido en
Registro*
el
Civil».
Era eso precisamente
que pedían
lo
persuadido'"
católicos
los
de que una vez hecha la inscripción en ios libros parroquiales
no
tardaría en caer en desuso la inscripción en ei Registro Civil. La Comisión de Legislación de la Cámara de Diputados, que también
entendía
lo
Poder Ejecutivo.
el
«La garantía a Constitución
enmienda
se apresuró a aconsejar la sanción de la
así,
propuesta por
—
derechos
los
consagrada
individuales
decía en su informe
—
por
la
prohibe evidentemente po-
ner en tortura los deberes religiosos de los ciudadanos. El legislador, el delegado del pueblo, no puede invadir bajo ningún prederechos del ciudadano y del hombre en el orden los texto religioso, y antes bien, circunscribiéndonos a la presente Registro Ci\ál, debe garantir a los padres el derecho dbautizar a sus hijos cuando lo crean más conveniente, ya sea an-
meramente
ley
de
tee
o después
ciencia
de la
religiosa,
Estaba en
inscripción
como
mismo orden de
el
como consecuencia de
y
autorizaba sus
hricer
a
Así está garantida la con-
civil.
deber en toda nación civilizada.»
es
se
ello
de 1S80 una ley que
curas párrocos «para administrar
los
aun
asientos
ante.s
Parlamento
ideas la mayoría del dictó a fines
Je
la
inscripción
bautismo y
el
recién
del
nacido
el Registro Civil».
en
El cura del Cordón doctor Soler que encabezaba la mayoría pary cuyo desafuero había pedido el Tribunal a mérito
lamentaria los
úf:
rogado,
diversos sumarios instruidos por violación' del artículo dese encontró gracias a esa ley al abrigo de la acción de
justicia
la
y
así
lo
que fueran devueltos
Con sobrada razón
declaró la los
Cámara de Diputados
expedientes
decía,
pues,
el
relativos
doctor
al
ordenar
desafuero.
al
Soler al Redactor del
«Bien Público» en julio de 18S1:
tTengo para mí que ninguna de las Asambleas que han exisdespués de la Constituyente ha mostrado mayor energía e
tido
independencia
que
nes del déspota
Adviértase el
doctor
pota
que
resolvió los
hasta llegar
presente
a
trastornar
insigne que ha tenido nuestra
embargo que
sin
Soler
la
más
la
Legislatura
que así
babía sido nombrada a dedo por
ahora
vilipendiaba
y
que
transformarse de Dictador
cuando ese en
miembros de esa misma Legislatura
el
le
pla-
glorificaba
insigne
déspota
Presidente
los
patria.»
dés-
insigne
constitucional,
dieron sus votos, sin
discrepancia alguna, solidarizándose con la tradición de sangre y
de violencias que
el
siniestro personaje
simbolizaba.
Anales de
Envalentonados anteponía
los
la
universidad
377
con la derogación del artículo que
católicos
registro civil el registro eclesiástico, procuraron dar
al
un fuerte paso en materia de anulación del patronato. Monseñor Mattera, que acababa de llegar al Río de la Plata como delegado apostólico, se dirigió al gobierno del doctor Vidal preguntándole
si
sería
bien
recibido
y no promovería más tarde
obispo a favor don Inocencio Yéregui. Nuestra Cancillería, que se dio cuenta del alcance de la gestión, contostó en el acto que no
dificultades
creación del cargo
la
de auxiliar del
del presbítero "
había inconveniente en
ello,
pero que era entendido que en
de muerte del obispo titular terna de tiva.
estilo,
Gobierno presentaría
el
por tratarse de una atribución que
Ese primer cambio de notas, que
se
le
al
el
caso
Papa
ía
era priva-
produjo a mediados de
año siguiente, viéndose obligada nuestra Cancillería a rechazar de nuevo la teáis de que la acep1880,
tación
de
se
repitió
del
cargo
a
principios
de
del
coadjutor
dignificaba
designación
anticipada
sucesor del obispo.
El obispo Vera falleció varios meses deepués, en el curso de una de sus acostumbradas jiras a la campaña, y el Gobierno pidió y obtuvo venia legislativa para rendirle los honores corres-
pondientes a
la
más
alta
jerarquía militar.
ADMINISTRACIÓN DEL GENERAL SANTOS 1882-188(3
CAPÍTULO Movimiento
VII
político
El general Máximo Santos es elegido Presidente constitucional. Francisco Antoniuo
El doctor
Vidal
presentó
renuncia de su
de la alta investidura el 28 de febrero de 1882, como consecuencia Guerra de la Ministro y de su proclamación de la candidatura de venía hecho que de presidencia asumir la de éste la resolución de
ejerciendo desde marzo de 1880.
Había sido elegido el doctor Vidal por tres años o sea por el período complementario de la presidencia del coronel Latorre, y faltaba por lo tanto un año para la terminación del cuatrienio
De acuerdo con
constitucional.
la opinión
de cinco legisladores la
nueva elección debía hacerse por ese año. Pero la mayoría de la Asamblea, haciendo caso omiso del precedente que ella misma había establecido,
La
nombró
al
general
Máximo Santos por cuatro
elección del candidato fué canónica:
años.
50 votos sobre 51 legis-
ladores presentes. distinción no menos significativa acordó esa Legislatura gran elector de diputados y senadores: la creación de la banda con los colores de la patria y el escudo nacional en el centro, que
Otra
al
desde entonces llevan
los
Presidentes orientales.
«Como ciudadano y como prestar juramento
—
militar
—
dijo
el
general
Santos
al
pertenezco a un partido político que ha pro-
porcionado a la patria días de gloria y a los cuales no puedo ser insensible; pero como Presidente de la República no tengo mfts
honor nacional y mi guía será la Ley y la ser motivo de censura para un ciudadano la ambición de servir noblemente a su país, porque ella se encuadra siempre en las conveniencias públicas y en los intereses generales, y permitidme, señores, os declare: tengo eea ambición... Que la bandera que Justicia...
la
del
No puede
enseña de la paz. de la legalidad, del orden, del trabajo y de honradez en la administración, resplandezcan tuteladas por sabias y libres instituciones de la República.»
la las
Anales de
382
Pocos
después
dios
Ladislao Terra
eoi
decía
la
Universidad
su Ministro
una circular a
los
Gobierno doctor José
de
Políticos:
Jef-es
«Querer es poder tratándose del bien de divisa
raciones de
Poder Ejecutivo.
del
jefe
del
.
.
patria,
la
Una de
las
es
la
noble
primeras aspi-
E. al inaugurar su gobierno es llevar a la concien-
S.
pública que la actividad individual en todas sus manifestacio-
cia
nes solamente está limitada por la ley en
nacional.»
territorio
el
Las tres piónieras revoluciones contra Santos. gobierno
El
de
un gobierno de
Santos fué
intranquilidad,
un
gobierno de revoluciones.
Tres meses después de su encumbramiento tenía que gestionar de línea.
la
Presidente
el
creación de dos nuevos regimientos de caballería
Ya había
de esas unidades a lo largo de los depar-
tres
tamentos de Salto, Tacuarembó y Cerro Largo, y las que se pedían estaban destinadas a la vigilancia del litoral del Uruguay. La
Asamblea
No
se
se
ambiente.
ei
ximo
apresuró a votar las
planillas
trataba de temores fantásticos.
Y
respectivas.
La revolución estaba en
su primer estallido corrió a cargo del coronel Má-
Pérez, caudillo del departamento de Soriauo acostumbrado a
armas contra todos los gobiernos y a ejercer dura dondequiera que establecía su tienda de campaña.
alzarse en
Máximo Pérez desembarcó en
la
Playa de
la
dicta-
Agraciada con un
la
centenar de hombres, sin la enseña colorada que en las otras revoluciones
había ostentado, y ello porque tenía
declaraba en
lo
nuevo,
manifieeto
su
al
país,
de
el
propósito,
constituir
según
un partido
«un partido de patricios».
«Después
de muchos
pintoresco manifiesto
años de
—
ostracismo
—
agregaba
en su
resistiéndome a los llamados que se
me
han hecho para que volviera a mis lares, enristro por fin la tacuara para redimir los pueMos. Vengo a echar abajo el poder de los
gobiernos escandalosos e inmorales que con los tesoros públi-
cos
han arrastrado
descrédito, el
la
dignidad del país por
conduciéndoílo
al
el
inmundo
lodo del
último extremo de la degradación y
crimien.»
Los regimientos de línea que estaban escalonados a lo largo del litoral atacaron al grupo invasor en el acto de su desembarco y lo persiguieron con ahinco hasta darle alcance en la barra del arroyo Hospital, donde quedó muerto
A
principios de
1883
el
famoso caudillo que
lo
comandaba.
hubo un conato de sedición en
el
Regí-
Anales de
p.iiento
los
c\'
Universidad
la
de ArtilLería, que dio lugar a
la
383
prisión
y
enjuiciamiento
tenientes Daniel Castro y Antonio Pérez y del agrimensor
den Juan José Castro. Pero
el Gobierno, invocando luego la escasa importancia del suceso, se limitó a dar de baja a los dos oficiales que aparecían como jefes del movimi,;nto y pidió el sobreseimiento
de
la
Con
causa.
propósito de atraerse las simpatías de los jefes y oficiales que habían sido dados de baja en diversas oportunidades por no haber comparecido a los llamamientos del Estado Mayor, resolvió el
mismo año conmemorar
el
Presidente Santos en
la
efemérides del desembarco de los Treinta y Tres con un decreto
por
el
el
curso de ese
cual se acordaba la reincorporación y pago de haberes deven-
gados a todos
los
militares
abajo
coronel
die
Armas y
ante la Inspección de
que comparecieran
se recababa venia del
Senado para
igual cosa con los jefes superiores.
h.acer
Pero aparte de algunos amagos de revolución blanca que ron
base
a
para
Policía
la
practicar
registros
más
busca de armas que no se encontraron, y de sospechas
fundadas acerca de
nos
fueron sustituidos en -".
el
la
de
lealtad
acto,
dos
concluyó sin
die-
en
domiciliarios
o me-
de batallón que mayores conmociones
ji&fes
año 1883.
Más agitado escapando
al
fué
puñal
el
año 1884.
que
en
—
sargento mayor Visillac mismos momentos ultimaba
El
esos
a
Juan Noguera y Bibiano Antuco en las calles de Porongos al salir inició un movimiento de la Policía donde estaban detenidos blanco en los prinpros días de abril. Ese movimiento debía coinde fuerzas a cargo del coronel Juan cidir con un desembarco Pedro Salvañaoh según este mismo jefe se encargó de documentarlo en una carta escrita a don Agustín de Vedia al tiempo de salir (iel puierto de Buenos Aires. Pero la activa vigilancia de la escua-
—
drilla distribuida por el gobierno de
hizo
fracasar
mayor
Visillac
la
expedición
del
Santos a lo largo de las costas
coronel
Salvañach y
entonces
que se tencontraba aislado y reducido a
tencia después de
un infructuoso ataque a
la Jefatura d^
el
la
impo-
San
José,
pequeño grupo y se corrió a Montevideo y de Montevideo Buenos Aires, sin Sier reconocido por los que lo perseguían. El
disolvió su a
gieneral
Santos se apresuró a echar un velo sobre ese fracasado
movimientos, mediante un decreto
amplio de amnistía que gestionó y obtuvo de la Asamblea. No casaron por eso los trabajos revolucionarios a que respondía el movimiento del coronel Salvañach. Continuaron con mavor in-
Anales de
384
la
Universidad
tensidad, obligando al gieneral Santos a estrechar la vigilancia del
y a iniciar una activa campaña diplomática ante el Gobierno Argentino para la disolución de los grupos que maniobraban
litoral
en la Provincia de Entre Ríos a vista y paciencia de las autori-
dades locales. Recién
al
finalizar el año se resolvieron las autori-
dades de Gualeguaychú a notificar esos grupos, comandantes
Máximo
a
jefes
los
encabezaban
que
Lallera, Francisco J. Cortinas y
Juan Francisco Mena y doctor Carlos A. Berro, que debían abandonar la Provincia de Entre Ríos. Pero entonces mismo solo para llienar las apariencias,
pues los grupos volvieron a reunirse después
un breve paréntesis de
de
Las
don
blanco
diáolución.
aumentaron en 1885. El diputado Abdón Aroztegui, juzgándose perseguido, buscó asilo
agitaciones
políticas
em-
a principios de año en la Legación Argentina y desde
allí
barcó para Buenos Aires, dando lugar con ello a que
Cámara de
Diputados
lo
la
Dos meses después
expulsara de su seno.
se
salía
de
Entre Ríos y desembarcaba en el Hervidero una expedición blanca encabezada por los comandantes Mena. Martirena costa
la
die
y Lallera y los doctores Carlos A. Berro y Luis M. expedicionaria fué inmediatamente atacada,
por
Batallón
el
de Cazadores
3."
Tajes, que estaba
d'e
mando
al
Gil.
La columna
persieguida y del
disuelta
Salvador
coronel
guarnición en Paysandú, y por las divisiones
de caballería del coronel Viera y del comandante Villar, cayendo prisionera
la
mayoría de sus componentes.
La sociedad de Beneficencia de Tacuarembó dente
Santos
gteeitionando
indultos
para
se dirigió al
doctor
el
Presi-
M.
Luis
Gil,
comandante Máximo Lallera y otros jefes y oficiales que habían caído en manos de las autoridades de ese d«partamento. Santos contestó que todos los prisioneros saldrían en libertad, con excepción de Lallera que debía comparecer ante
por estar acusado de complicidad en
nancio Flores.
Y
el
el
Juzgado
del
Crimen
asesinato del general Ve-
en seguida cumplió su promesa y hasta
el
mismo
coronel Lallera obtuvo su libertad previa comprobación de la falta de fundamento legal de los hechos que habían dado
margen a su
acusac'ón.
Pero
En
julio
fermento revolucionario siguió actuando con vigor. hubo otro amago de invasión al Departamento de Salto,
el
con una tentativa contra la Santos que dio margen al arresto de don Buenos Aires. Y antes de finalizar el año manera los rumores de revolución que -el co,mp.licado
de arresto contra
el
vida
del
Presidente
Eduardo Carbajal en recrudecieron de tal libró orden
Gobierno
coronel Rafael Rodríguez, prestigioso cau-
Anales de
blanco
dillo
emigrar
a
la
Departamento
del
Universidad
San
de
Buenos Aires y fué borrado
385
José,
quien
consiguió
del escalafón militar poi*
esa causa.
La cuarta y última revolución. Llegamos
año 1886,
al
bfzas.
Ya no
el
caldeaba
revolucionaria
idea
último del gobierno de Santos. La en
momentos
esos
hablaba de revolución blanca ni
se
todas
de
las
ca-
revolución
Se habla.ba de la necesidad de un gran movimiento nacional para derribar al gobierno de Santos y salvar al país colorada.
de
la
gravísima
crisis
política,
administrativa y económica que
amenazaba arruinarlo por completo. Al frente de ese movimiento fué puesto el general Arredondo, jefe uruguayo al servicio del ejército argentino que se conservaba al margen de las contiendas partidistas entre Mancos y colorados y que por
lo
tanto a nadie podía infundir recelos o
rivalidades.
Desde los primeros días de enero empe-zó una fuerte corriende emigración a la Argentina, en pante para engrosar el ejército revolucionario que había comenzado a formarse, j' en parte te
para escapar a la movilización de por Santos camo medio de dirigir bre las costas del los
to-das las
Uruguay y sabré
emigrados figuraban
guardia nacional decreíada
la
la
los generales
fuerzas de línea so-
frontera terrestre. Entre
Lorenzo Batlle y Enrique
Castro que debían ocupar importantes puestos en las filas revolucionarias y mucltos jefes y oficiales que en el acto fueron el Eistado Mayor y borrados del escalafón mien razón de no haber coimparecido. El coronel Ángel Muniz, que estaba en Montevideo, fué aprehendido, y el coronel Paimpillón, que permanecía en su estancia de San José, esicapó
emplazados por litar
a duras penas a las partidas enicargadas de arrestarlo. las caballadas del litoral fueron internadas con el prode quitar medios de movilidad a los invasores que se agrupaban en la costa entrerriana y poderlos atacar y rodear
Todas
pósito
También procuró el Gobierno repaciudadanos que habían emigrado a la triar a Argentina y a la frontera brasileña mediante un decreto en que se decía que podían regresar libremente «en la seguridad de que no serían molestados en sus personas y derechos». Pero inútilel
cruzaran
día que
los
millares
mente, porque T. VII
-25.
la
el
río.
de
emigración era una protesta contra
el
régimen
Anales de
386
la
Universidad
político imperante y lo que se quería era producir el vacío ea torno del Gobierno para facilitar el triunfo d-e la revolución.
La intervenieión del general Arredondo y la formación de la columna revolucionaria a vista y paciencia de las autoridades argentinas, dieron lugar a reiteradas y enérgicas reclamaciones de la Cancillería de Santos. Cediendo a ellas se dirigió el Ministro de la Guerra de la República Argentina al Jefe del Es-
tado Mayor para
y
ordenarle que llamara
previniera que se consideraría
le
al
general Arredondo
como una
falta
toda inge-
rencia de un militar argentino en la revolución oriental y que Gobierno esperaba c,uc su conducta no daría lugar a que se el
—
decía en su nota el procediera contra él. La voz pública asigna al general Arredondo Ministro doctor Carlos Pellegrini
—
«una participación activa en la agitación política de la República Oriental del Uruguay, lo que podría comprometer por el carácter que inviste «la completa neutralidad en las cuestiones de la Refpública vecina que es la norma de la poMtica argentina».
¡La
Contra
argentina!
nciilralidaá
esa frase
Pellegrini se alzó «La Nación» de Montevideo, del
general
Santos,
recordando
tor Carlos Tejedor la
Ministro Oriental
que
el
doctor
Argentino
Canciller
el
del
diario oficial doc-
había rechazaido también en una nota
doictor
Pérez
Gomar
relativa
a
la
cA
/evolucióa
entrerriana, sosteniendo que los revoiucion.'irios de En' re Ríes eran rebeldes y no beligerantes con los que pudieran mantenei1
elación las naciones amigas.
El general Arredondo pidió y obtuvo su baja par-^ quf.dar en libertad de acción y de,9de ese momento asumió pú-
comipleta
la dirección de] movimiento revoiucij..'ra'ia sin que Gobierno Argentino opusiera nuevos repa-'os a su atnitud.
blicamente el
«El
15 de febrero
—
decía
—
al
coronel
Basilio
Muñoz en
carta
publicada en «La Nación» debe producirse el levantamiento general del país. En cada departamento se reunirán las fuerzas TJsited será comanen un punto dado y deSide allí marcharán dante en jefe del segundo cuerpo del ejército al sur del Río Negro y tratará de que el levantamiento no se precipite y coincida en lo posible con la invasión de la columna principal.» Esa y otras cartas a los jefes de nuestra campaña, que habían sido interceptad ais por los agentéis policiales, dieron base al Mi.
.
nistro Oriental señor Gayoso para peidir a la Cancillería Argentina la adopción de
medidas contra
el
general Arredondo y con-
Anales de
las
tra
Universidad
la
387
fuerzas acampadas en la costa entrerriana y en varios les daba instrucción mi-
corralones de Buenos Aires donde se
Pero
litar.
acuerdo con
Naíción doctor
Eduardo Costa,
(¡'•Uto
I
njuiciable
Kíos «que
y
en
dictaímen
el
al
general Arre-
Pro-curador de
dej
la
no constituían campamentos de Entre
las cartas exhibidas
cuanto a los
coimutiicaría»
se
cuanto
contestó en
Cancillería
la
dondo- que de
heicho
el
a
las
autoridades de esa
Provincia. .iadcs de febrero se levantaron en armas los coroneles Pampillóa y Trías y varios otros jefes de acuerdo con las instrucciones que lia-bían recibido. Pero coano la hora de la invasión no había llegado todavía esas partidas fueron fácilmente perseguidas y disaeltas. Entre los prisioneros de algunas de figuraíba
ellas
el
ingeniero Juan Hardy, tomado por
la
Policía
del Salto. Sarmiento ae interesó por la vida de ese joven y San-
ordenó en
tas
acto
el
que
se
le
expidiera pasa jo para Buenos
Aires y escribió una carta al estadista argentino diciéndole que aun cuando Hardy había tratado de sobornar a un jefe del ejér-
—
delito muy grave en aquellos momentos especialmente había querido atender su pedido. Durante la segunda quincena de febrero y todo el mes de
cito
—
marzo continuaron en Buenos Aires y en revoluicionario,
El ejército
nado, con
Siis
entrerriana, tal.
la
ía
costa
entrerriana
preparativos de la invasión.
los
perfectamente armado y municiomarchaba por la costa
jefes y oficiales a la cabeza,
amagando
día a día con el pasaje a la costa orien-
Y frente a ese ejército que el Gobierno Argentino dejaba en más absoluta tranquilidad, se movía el ejército gubernativo general iMáximo Tajes. El choque de ambos ejércitos, caída
del
día máis inminente, y que según todas las probabilidades debía ser favorable a la revolución, inspiró a don Andrés Lamas uu
encaminado a demostrar la necesidad de un avenimiento entre el general Santos y los partidos de oposición, que manifiesto evitase
torre la
al
país
toda
ail
de que había sufrido
revolución
las
calamidades en perspectiva, y al coronel Lacoronel Pedro de León en la que decía que Arredondo sería la más formidable de todas
las
una carta
seguridad;
que
el el
país;
que esa revolución triunfaría con
Partido Colorado
sería
desalojado del
poder y que lo que convenía era desarmar a la oposición llevando a don Tomás Gomensoro a la Presidencia de la Rep\iblica. Don Tomás Gomensoro, que estaba al frente de la Tesorería
Anales de
388
Universidad
la
General de la Nación y cu^'o nombre ya había figurado en algunas de las gravísimas crisis políticas en que se debatía el país, fué llamado blicara
despacho del Ministro de Gobierno para que pula proclamación de su candida-
al
una carta desautorizando
tura presidencial, y habiéndose resistido a ello fué en tituido
Pasa
el ejéi'cito
La
Cancillería
el
acto des-
que desempeñaba.
cargo
del
revolucionario al territorio oriental.
Santos no cesaba entretanto de exigir medi-
de
más
das de neutralidad cada día
inaplazables dada la imposibilidad
de negar actos de guerra que estaban desenvolviéndose a la vista
de todo
el
El 22
de
Relaciones las
mundo. marzo de 1886 anunciaba finalmente de
autoridades
«Como
República
la
de
el
al
el
Gobierno
Ministro Oriental
de
que
Entre Ríos se proponían entrar en actividad.
contestación
telegrama
Argentina
a
última nota de V. E.
la
doctor Francisco
J.
—
Ortiz
—
transcribo
en su
decía el
siguiente
telegrama que acabo de recibir del Gobernador de Corrientes que dice
así:
Jefe
Político
«Oficial,
de
Urgente.
Recibo
momento parte
este
mañana quedarán disueltos tiene. La disolución no
tado las órdenes y que pasado
mil
en
comunicándome que Arredondo ha
Caseros
hombres que próximamente
simultáneamente para evitar podrían producir
—
31.
los
que grandes
desórdenes
los
se
del
aca-
dos
hace
grupos
Derqta.^
El doctor José Pedro Ramírez había calculado días antes el número de combatientes en una cifra algo más baja porque todavía no se habían efectuado algunas incorporaciones. «En cuanto al
—
—
decía al doctor Julio Jurkouski desde Concordia puede precisarse su número, pues está casi reconstituido del otro ejército
lado de la frontera de esta Provincia a inmediaciones de Mocoretá.
Su número
es
de 1.400
a
1.500
hombres, sin contar
lo
prometido
generalísimo que no aparece hasta ahora y que dudo mucho que aparezca». por
el
Pero
Lo único que Arredondo es que apresurara el pasaje al territorio oriental porque ya resultaba imposible seguir negando la existencia de un fuerte ejército en pie de guerra pronto a invadir el país hermano. Todo ese ejército que estaba en Caseros fué transportado a
pedían
la
las
Concordia,
orden
de
disolución
autoridades
utilizándose
no se
argentinas
en
gran
al
había
dado.
general
parte
la
línea
ferroviaria
ar-
gentina
a.
había
que
Y una
rodante.
rial
vapores de
los
chatas
rias
la
acumulado
allá
Universidad,
con ese
übl)
oljjeto
todo
mate-
su
vez en Concordia subieron los revolucionirios
carrera «Júpiter», «Leda» y «Stella» y a va-
la
dirigieron
se
y
Anales de
aguas abajo hasta llegar a Guaviyú,
luchas de ninguna escamino con la cañonera «General Suárez», hecho que dio mérito a una enérgica nota de
donde desembarcaron pecie,
de marzo
sin
pesar de haberse cruzado en
a
Santos
28
el
ordenándole que acusara a
Militar
Fiscal
al
el
—
buque de guerra que habían recibido
ese
impedir
para
nes
el
atraque
de
decía
nuestra
a
costa y que a la altura de Guaviyú habían huido sin intentar
quiera una demostración de hostilidad
de
instruccio-
revolucionarios
los
jefes
los
—
si-
contra los invasores.
Actitud que asume la Asamblea.
La Legislatura dente
con
el
Presi-
decía en la minuta de comunicación
—
de los
resolvió
en
solidarizarse
acto
el
Santos.
—
«En presencia
acontecimientos a producirse en
país
el
con motivo de
inva-
la
armada y cuyo pasaje a la República se ha efectuado ya, la Asamblea Nacional, unidos sus miembro:- en un solo y único propó-
sión
pone
sito,
le
a,!5Í
servicio de la patria toda la fuerza de su autoridad y
al
cumple manifestarlo solemnemente
FI ejército
.Arr<»
Ya hemos dicho que
al
Poder Ejecutivo.»
es veiiciflo.
gobierno de Santos había hecho internar
el
todas las caballadas de las estancias del litoral para dificultar
marcha
prendía que sin ser
rápidamente
lodos
rodeada,
caballos
los
reunido en
había
que se encontrabaii
que su pasaje coincidiera con
del
el
la
costa
disponibles,
entrerriana
orden
con
de
no pudo
cosa que
ejército,
que actuó de una manera decisiva en
efectuarse y la
la
Arredondo que comesos medios de locomoción su columna tenía que
ejército revolucionario. El general
del
fracaso de
el
revolución.
Véase
lo
que decía don Eugenio Garzón, describiendo
miento del ejército revolucionario en cuyas El 28 de
marzo emprendimos
ballada
que
estaba
en
obligados a emprender
Entro In
viaje en
el
día desembarcamos en Guaviyú.
Allí
filas la
a
movi-
flotilla
y
el
mismo
dornnmos esa noche. La
Ríos no pudo
marcha
el
militaba:
pie.
pasar y nos
ca-
vimos
Después de algunas fuer-
Anales de
390
Universidad
la
se libró el 30 un combate de tres horas con una vanguardia de Tajes. El ejército revolucionario prosiguió luego su marcha siempre a pie. Desde el 28 no hubo propiamente reposo para nosotros. El 31 acampamos en la costa del
guerrillas
tes
parte
de
la
Quebracho. La idea de Arredonldo era seguir marchando hacia centro de la campaña. Pero apareció entonces
un
y después de
donde prosiguió cito
recio
el
tuvimos que entrar en un callejón
tiroteo
pelea desde las 12 hasta las 5 en que
la
de Tajes cesó
cesando también eu seguida
fuego,
el
€]
ejército de Tajes
ejér-
el
de la
el
revolución, que ya estaba en desbande.
—
El 30 de marzo
decía
el
—
general Tajes en su parte oficial
marchaba al sur de Guaviyú hizo alto en las Puntas de Soto, donde se empeñó la batalla. Pocas horas después la caballería revolucionaria se desbandaba y la infantería se rendía a discreción a raíz de una tentativa de retirada que no pudo efectuarse. Del ejército revolucionario han quedado doscientos muertos y seiscientos prisioneros. Las bajas nuestras revolucionario que
ejército
el
ascienden a 52 muertos y 73 heridos. Entre los muertos del ejército revolucionario tor Teófilo D.
Gil,
figuraba
doc-
el
ex director de «La Razón», periodista de garra
por su inteiligencia poderosa, su carácter inquebrantable y
la austeri-
dad de su vida.
Después
Terminado cionarios,
los
revolu-
honroso que puede y debe señalarse como la la
bría de salvar al
estaba
vifla rte lo.s prisioneros es respetada.
fuego fueron respetadas las vidas de
el
acto
mera etapa de
Ya no
La
batalla.
evolución
pri-
que pocos meses después hapaís de la gravísima crisis a que estaba abocado.
el
política
general Santos
al
frente del gobierno en
esos
momentos. Los cuatro años de su presidencia habían terminado el 1.° de marzo y al frente del poder ejecutivo estaba de nuevo el Presidente del Senado don Francisco Antonino Vidal. El general Santos que seguía siendo dueño y señor de la situación ha-
—
—
pasado a ocupar
bía
cargo de
el
general
en jefe
de todas
las
fuerzas militares, y véase en qué forma se gloriaba de haber sido el
autor de ese acto de confraternidad:
En telegrama dente
que
Vidal tu/iera
—
del
pedí
30 al
de marzo
—
general
Tajes
consideración
revolución y previendo
el
con
la
decía
en su nota
al
Presi-
que ordenara a su tropa juventud que militaba en la
resultado de la lucha pedí a V.
E.
fl
Anales de
Universidad
la
391
los vencidos. Ese perdón ha dado ya lugar a que hayan sido puestos en libertad más de mil prisioneros. Hoy vengo a pedir a V. E. que recabe de la Asamblea una ley de amnistía a favor de todos los orientales que por causas políticas están ale-
perdón de
jados de la patria.
El telegrama a que se refería Santos era del 31 de marzo o sea
mismo
del
desenlace
día del
aquí lo que decía
He
movimiento revolucionario.
del
general Tajes en ese telegrama:
al
«Probablemente a
hora
la
en
que
suscribo
telegrama
este
es-
una batalla decisiva contra las fuerzas revolucionarías. Entre los enemigos mercenarios ^n su mayor parte incluso el que los comanda, hay sin embargo muchos jóvenes orientales que engañados por su inexperiencia han ido a engrosar las filas de los traidores de la patria, de donde tal vez no hayan popor
tás
librar
dido desertar d^espués de reflexionar entre
zámosla es
les
nos... se
juventud hay grandes
esa
para
la
Ven-
patria.
pero vencida salvémosla, que la sangre de los orienta-
sí,
demasiado preciosa para que sea vertida por sus hermaRecomienda muy particularmente a todas tus tropas que
tenga
la
mayor
consideración
una
«Soy oriental» sea
grito
paso que daban.. Tal vez
el
esperanzas
con
nuestra juventud.
coraza invulnerable
para
el
Que
el
que
lo
exclame.»
Para «El Telégrafo Marítimo» ese telegrama no pudo llegar a tiempo a manos de su destinatario y el honor del tratamiento con los vencidos correspondía en consecuencia al general Tajes y no ai
Más terminante se mostró «El Día» en un ediaño siguiente escrito o inspirado por don José Batlle Ordóñez que figuraba entre los oficiales del ejército revolugeneral Santos. del
torial
y
Según ese
cionario.
con
generoso raba
—
los
editorial
el
general
Tajes se había
—
«desobedeciendo
vencidos
órdenes secretas que había recibido»...
agregaba en otro editorial
—
los
desaires
con
según
mostrado se
asegu-
Son notorios
—
que fué recibido
Tajes después del Quebracho.
En
los
Artillería» al
día
mar
a
apuntes
de
publicados
siguiente
de
«un
cartera
de
por
Telégrafo
la
los prisioneros y
«El
batalla les
el
del Regimiento de Marítimo» se decía que
oficial
general
Tajes
había
hecho
for-
había dicho: «Ustedes son prisioneros,
garantidos como nosotros mismos: el Partido Comata a nadie», provocando con esas palabras grandes
pero están tan lorado no
vivas al que las pronunciaba.
La Legislatura votó por aclamación una ley que declaraba o Santos «gran ciudadano y benemérito de la Patria» y lo elevaba
Anales de
392
Universidad
la
una segunda ley que confería a al rango de Capitán General; Tajes los despia;chos de Tenieate General, y otra ley más que amnistialja a todos los que directa o indireotamente hubieran tomado pai-'te en la revolución, pedida por un mensaje del Presidente Vidal datado
de
los
33
mensaje
del
19 de abril, aniversario de la cruzada
el
—
—
un homenaje»
orientales, «coimo
«a la grandiosa epopeya
de
son las palabras independencia que
la
la comunión de todos en una misma fe». Pero a despecho del triunfo obtenido por ia fuerza de las armas el ambiente continuó siendo de intranquilidad, y para mejorarlo no tuvo más remedio el vencedor que transigir con los vencidos y que llamarlos al gobierno, como lo veremos después.
surgió por
L."OS
incidentes diploniáticos de la época de Santos.
—
El caso
de Volpi y Patrone.
A
principios de
señores Platero y
1882 fué Cía.,
asa-lltada
situada en
la
la
de cambio de los
casa
Plaza Independencia. Los
al joven Betancoiur, depenidiente de la casa de cambio, y robaron el contenido de la caja de hierro consistente en tres mil pesos en metálico y alhajas.
asaltantes mataron
Pocas horas después fué aprehendido José Carbajal. quien por la Policía» según la terminología de la época, se confesó autor del asesinato y denunció como cómplices a los italianos Volpi y Patrone. En una segunda declaración retiró la referencia a sus cómplices y luego la -mantuvo ante el Juz«apretado
gado del Crimen. Carbajal fué condenado a muerte tanto en primera como en segunda instancia. Al pronunciar su fallo final hacía constar el
la
—
Tribunal que en el suimario existían datos confirmatorios de decía el Tribunal culpabilidad' de Volpi y Patrone. Volpi declara que no vio a Patrone el día del crimen y sin emibargo
—
está
probado que ese día comieron juntos;
ese día permaneció en su casa por razón
embargo
Patrone
declara
que
de enfermedad y sin
está probado que salió a la calle;
en
el
cuarto de Pa-
trone había una alpargata con manchas de sangre y esa alpargata era del propio Patrone según las declaraciones de Volpi y de Carbajal;
lleno de los el
Volpi
monedas de
tenía al oro,
datos confirmatorios Tribunal al confirmar
día
siguiente
según uno de dei
la
lai
declaración
sentencia
del
crimen un cinto Tales eran
los testigos.
de
Carbajal.
Pero
de primera instancia que
Anales de
Universidad
la
393
pena de muerte a Carbajal se abstenía de condenar alegando que éstos haibían sido puestos en libertad absoluta a raíz del sobreseimiento diotado en su causa. Advertiremos que el Fiscal del Crimen doctor Juan José Se-
imponía
la
a Vclpi y Patrone,
gundo
se
apresuró a
conclusiones del
rectificar
Tribunal.
En
en «La
Razón»
concepto
su
la
algunas
de las
adpargata
man-
chada de sangre no era de Patrone; las contradicciones en que habían inícurrido los dos italianos eran imiputables al desastroso estado de ánimo en que se encontraban, y Carbajal había formulado la
denuncia de comptlicidaJ, según
diendo
al
Carbajal
mismo
al
ser
el
mismo
de disminuir su propia
propósito
puesto
en
capilla,
declaró
lo
declaraba,
respon-
culpabilidad.
a
un
ivpórter
Císí
que los verdaderos asesinos eran Volpi y Patrono, pero que él había tenido que confesarse culpable bajo la presión de las torturas con que se le amenazaba. Llegado el momento de cumplir la sentencia ejecutoriada, hubo fuertes gestiones en favor de la conmutación de la pena, estimuladiario,
das par las declaraciones del Tribunal y por la circunstancia de encontrarse a la sazón Volipi y Patrone en Italia gozando de la absolución que habían obtenido de nuestras propias autoridades
El
judiciales.
Preisidemte
tratarse de
Santos,
que no
podía
un homicidio cometido con
conmutar
la
pena por
alevosía, ordenó la
s.us-
pensión del fusilamiento y que el reo fuera sacado de la capilla y vuelto a su celda ai la espera de un cambio de ideas con el Tribunal. Del cambio de ideas no surgió na.da que pudiera evitar el cuimplimiento de la cosa juzgada. Pero Carbajal estaba ya en la cárcel sin grillos y todo el mundo juzgaba como una verdadera atrocidad su reconducción a la capilla. Entonces surgió la idea de pedir al Presidente, que éste aceptó en el acto, de recurrir al Parlamento en demanda de una ley que. evitara el fusilamiento del reo y duplicara la pena de diez años de cárcel que la legislación vigente establecía como la subsiguiente a la de muerte. Y la Asamblea, que estaba en el mismo orden
de ideas, dictó en octubre de 1883 das leyes para solucionar el conflicto. La primera de cará¡cter general prevenía que la pena de muerte no era conmutable en los casos de premeditación y alevosía y que cuando subsiguiente de treinta
reo la
relativa al oaso concreto
condenados
a
fuera conmutable se aplicaría años
de
prisión.
La segunda
al
era
de Carbajal y establecía que lo;s reos muerte y cuya ejecución hubiera suspendido e'
Anales de
3Í)4
Universidad
la
Poder Ejecutivo «por causas extraordinarias consititucional»
artículo
del
interpretaición;
por una dudosa
o
sufrirían
pena de
la
treinta años de prisión.
Veamos ahora qué hasta
justicia
la
que había ocurrido para que los cómde permanecer a disposición de la
es lo
en vez
de Carbajal,
plices
terminación
de
la
fueran
causa,
absueltos
de
pena y se hubieran embarcado para Italia dando lugar con ello a que el Tribunal que los declaraba sospechosos de complicidad se abstuviera de condenarlos en su sentencia. culpa y
Las torturas. Volpi y Patrone habían sido a;prehendidos a raíz de la dede comiplicidad formulada por Carbajal en su primera
nuncia
y estaban, en
declaración,
sazón el
eran
encerrados
los
patios
criminales,
los
Cabildo
del
cuando
llegó
donde a
la
a
la
prens>t
eco de las torturas, de las torturas verdaderamente inquisi-
toriales que
para arrancarles una
Policía les había aplicado
la
de culpabilidad.
confesión
El Fiscal del Crimen doctor Juan José Segundo pidió en acto al Jue^ del
Crimen
el
instrucción de un sumario para la
la
averiguación de lo ocurrido.
—
«Se asegura
decía
en su escrito
han dado tormentos en
&e les
por
arrancarles
tan
la
medios
inicuos
—
que a
confesión
del crimen atroz de la calle Juncal.
reispecto
Volpi
y
Patrone
carecí con el reprobado fin de
.
de Si
.
culpabilidad a
esas esce-
nas de barbarie se ha descendido por los encargados de la custodia de aquellos imdividuos, olvidándose al par que de todo sentimiento humanitario de las terminantes disposiciones cons-
que
titucionates
establecen
y
que
preceptiian
las
cárceles
no
asegurar a lois detenidos, será preciso confesar con vergüenza e indignación que hamos retrocedido muchos siglos en cultura y civilización, aparte de para
servirán-
que
esos
delito que
Ante la
la
noticia
martirizar
hechos
sino
importarán
para
siempre
la
comisión
de
un grave
en manera alguna puede dejarse impune.»
enorme y
los
excitación
detalles
producida por
espeluznantes que
la
divulgación
registraba
la
de
prensa,
los dos toirturados fi.eron puestos en libertad provisional y lle-
vados al Círculo Napolitano y a fueron examinados por el doctor los repórteres de la
prensa.
la
Legación
Brendell
e
de
Italia,
donde
interrogados por
Anales de
la
Universidad
395
Establecía el certificado del doctor Breudell, prestigioso componente del cuerpo médico de Montevideo, que Volpi y Patrone presentaban heridas y surcos en las sangrías, en las piernas y en
piez;
los
que
los
antebrazos de Volpi estaban
como
paraliza-
dos y las manas, brazos y antebrazos de Patrone hinchados y paralizados. De las declaracion€s tomaxias por la Legación resultaba que Volpi y Patrone habían sufrido el martirio del cepo
colombiano (un fusil sobre el cuello y otro bajo las piernas atados con una cuerda que acercaba gradualmente los dos fusiles hasta que la cabeza y las piernas se tocaran) que habían sido amordazados; que se les había colocado fuego en la planta de los pies. La redacción de «La Razón» invocando las manifes;
taciones de
los
lombiano y
el
Volpi
torturados ratificaba la aplicación del cepo cofuego en la planta de los pies, y agregaba que Patrone habían sido colgados del techo, con la cabeza
y
para abajo, y oibligddos a comer alimentos salados sin permitirles beber el agua que se les ponía por delante para acrecensed devoradora.
su
tar
varias
de
esas
torturas
Algo más denunciaba «La Razón»: que habían sido presenciadas por el Jefe
de Policía. El módico de Policía doctor Diego Pérez a las víctimas, se vio precisado en
que había curado
curso del sumario a ex-
el
pedir un informe en el que establecía que Volpi «tenía en la parte media de los brazos las señales de las ataduras que se le habían aplicado consistentes en contusiones del tejido muscular y raspaduras de la piel». Y defendiéndose de paciones que le dirigía el Fiscal del Crimen por
de
haber denunciado
no la
las
torturas,
decía
las
graves
doctor en
las
incul-
Segundo columnas
prensa: «Si yo hubiera pretendido ocultar las huellas que
dejaban
los instrumentos de tortura no los hubiera dado de notándose coimo se notaban claramente las señales de tormento, puesto que con la intención que me atribuye el doctor
alta,
Segundo los hubiera detenido mayor tiempo en asistencia». ¿Estaban complicados en las torturas algunos funcionarios superiores?
de Policía don Francisco Leónidas Barreto responuna nota del Ministro de Guerra doctor José María Vilaza, trató de explicar las huellas que todavía presentaban los torturados, Volpi y Patrone según él habían tratado El Jefe
diendo
a
—
—
6.0
Insistir
autoridad
a
se
la
autoridad
había
visto
en
algunas de
obligada
a
las
atarles
indagaciones los
brazos.
y
la
Pero
de
Alíales
396
la
Universidad
persuadido de que nadie admitiría una explicación tan burda, procuró lavarse las manos y lanzar sobre otros funcionarlos poresjponsabilidad (delj crimen. «El que suscribe la liciales ignora si Volpi y Patrone han recibido o no malos decía -
—
—
es más: puede asegurar que ni los ha ordenado, ha presenciado». El Coinisfirio Buzón, uno de los funcionarios policiales complicados en las torturas, que a cierta altura del sumario huyó de Montevideo, sostuvo en un reportaje que le hizo <''La Nación»
tratamientos; ni
los
Buenos Aires que toda la responsabilidad correspondía al Jefe de Policía y que lo que éste había procurado averiguar era el sitio en que Volpi y Patrone tenían escondido el dinero de de
la
de
casa
cambio saqueada.
La prensa y un grupo de
ciutladaiios de significación protestan
contra los crímenes de la época. é
Las
ümo
torturas
eslabón
iníligiaas
a
Vo'lpi
Patrone
y
constituían
el
ú-V
matanzas del Paso Hondo y Corrales €n asesinatos de Sánchez Caballero y Sarrasina en
de
las
1S80 y de los año siguiente.
el
Condensando
la
protesta
pública
contra esa serie
de atenta-
autoridades
encargadas de reprimirlos, decían los Directores de «La Democracia», «El Siglo», «La Razón», «El Negro Timoteo», «La Colonia E.spañola», «El Telégrafo Marítimo», «La España*, «La Tribuna Popular», «El cometidos
dos
Bien «El
por
Pública»,
Ferrocarril»
las
propias
«La Italia», «La Patria», «Francia Uruguay», y «Comercio do Portugal», reunidos en la im-
prenta del primero de dichos diarios: «Esos delitos que son un ultraje a
la humanidad, la civilizahan conmovido hondamente a la sociedad, ataicando los prin-cipios conservadores en que reposa y arrancando a la prensa esta protesta colectiva con que se une al sen-
ción
y
la
timiento
justicia,
universal
que
mantendremos mientras
execra
a
los
verdugos,
protesta
que
una fórmula vana hecho práctico y fecundo a que aspiran
las instituciones sean
en la República y no el las naciones libres y civilizadas.»
En
la
misma Sala
nió un grupo de
de
Redacción de
«La
Democracia»
ciudadanos del que formaban parte
los
S3
reu-
señores
José Pedro Ramírez, Juan Carlos Blanco, Juan P. Caravia, PeAgustín de Vedia, José BatUe y Ordóñez, Car-
dro Bustamente,
Anales de
la
Universidad
'ó'¿ü
Rodríguez LaAureliano María de Pena, Pablo De-María, Lafinur, Mellan Muñoz, Luis Daniel Ramírez, rreta, Gonzalo PiEduardo Briío del Eduardo Flores, José Sienra Carranza, no, Carlos María Ramirez, Manuel Herrero y Espinosa y MauJos
Llamas, suscribiendo otra protesta en que decían: los atentados cometidos por agentes de la autoridad pública en las personas de algunos ciudadanos orientales y subricio
«Que
ditos extranjeros son la consecuencia prevista y necesaria del sistema de fuerza y de arbitrariedad inaugurado años atrás en Que es acto de patriotismo para todos los ciula República dadanos protestar contra los crímenes que se vienen sucediendo, .
.
.
perpetradoíí por
agentes de
pro^pios
los
autoridad
la
y
no re-
primidos por los Poderes Públicos como lo exigía la justicia... Que en previsión de que agravándose los conflictos pueda crearacto se una situación difícil y an*gustiosa para la República, es patriotismo
di'
adelantarse
a
eventualidades,
dolorosas
esas
co-
verdad y de la justicia, locándose a tiempo en perpetran se que y dan origen y crímenes los condenar para terreno de
el
causa tros
a
fortificando
esos conflictos,
conciudadanos
mente débiles no
la
se
convicción
conquistan
la
la conciencia de nuesque los pueblos relativa-
en
de la
consideración
y
el
respeto
de los poderosos sino a condición de ser justos y dignes y de que no pueden dar solución satisfactoria a las reclamaciones internacionales que provocan la arbitrariedad y la fuerza sino restableciendo secuencia
en
el
imperio de
estos
las
instituciones...
solemnes momentos todos
los
Que en conciudadanos,
pasiosin distinción de colores políticos, sobreponiéndose a las solo un perseguir deben internas, luchas las en exaltadas nes objetivo: alejar todo conflicto que pueda rozar el sentamiento nacional y comprometer la dignidad y el decoro de la patria,
persiguiendo ese objetivo con
no
se conseguirá sin
el
convencimiento íntimo de que el país por los medios le-
restablecer en
gítimos y por un esfuerzo común del patriotismo las condiciones regulares de su vida política, según lo imponen sus propias entre instituciones y lo requiere el puesto que ocupó siempre los puet)l0'S civilizados.»
prensa figuraba el a la vez Director de de «El Bien Público» y Juez Letrado de lo Civil. La Cámara llaque se la por Diputados votó una minuta de comunicación
Entre
los
doctor Juan
maba
la
firmantes de Zorrilla de
la
protesta
de
la
San Martín, que era
atención del Tribunal acerca de
la
gravedad de
la
ínter
Anales de
398
la
Universidad
vención de los magistrados judicialeis en una protesta que establecía «que las instituciones consitiituían una fórmula vana en la República». El Tribunal invocó contra esa minuta el principio de la división de los Poderes. Pero actuando a la vez
—
—
por inspiración propia y dentro del régimen de sus atribuciones privativas, resolivió amonestar al Juez y dirigir una circular a todos los magistrados judiciales recomen-
según declaraba
dándoles que se absituvieran de actos o manifestaciones de capolítico que no fueran indispensables para el tranquilo
rácter
ejercicio de los derechos cívicos, y recabar de la Asamblea la sanción de una ley que eataibleciera esa misma prohibición de
acuerdo con un dictamen del Fiscal de io Civil doctor Vásquez Acevedo, en el que luego de establecerse que no existía ley alguna q,ue prohibiera a los Jueces el ejercicio del periodismo político, se agregaba:
«La política en nuestro país como en todas partes impone preocupaciones incesantes, agitaciones constantes que absorben la atención y alejan el espíritu de la calma y serenidad que debe ser el estado de un Juez para asegurar la justicia y el
engendra odios y enemistades, crea vincompromisos de compañerismo, de que un Juez debe huir para garantir su imparcialidad en el ejercicio de su
acierto
de sus fallos;
ciilacicnes
y
austera misión.»
Entre
los
firmantes de
la
segunda protesta figurab-ai
coman-
los
dantes Trianón, Pereda, Robido, Arroyo y Octavio Ramírez de la plana mayor pasiva, quienes en el acto fueron arrestados y puestos a disposición de los Tribunales Militares bajo cuyo dominio permanecieron varios días hasta dictarse sentencia de sobreseimiento para cortar una contienda de competencia entablada por la justicia
El
civil.
Poder Ejecutivo aprovechó
la
oportunidad
de
ese
incidente
de competencia para pedir a la Asamblea la sanción de una '
confirmatoria de la de 1838 por la que se prescribía
la
ley
jurisdic-
ción militar para todos los jefes y oficiales de la plana mayor, estu-
vieran o no en actividad.
y
Completando esta serie de repercusiones de las torturas de Volpi Patrone dictó el Tribunal una acordada que establecía que 'a
intervención de las autoridades policiales y administrativas
debía
limitarse a la aprehensión de los delincuentes en los casos de inívaganti delito, poniendo inmediatamente
de
la
el
hecho en conocimiento
autoridad judicial con los presuntos reos y absteniéndose de
Anales de
Y
iustruir sumarios.
Universidad
la
por su parte
una minuta de comunicación laba la conveniencia
399
Cámara de Diputados
ia
Poder Ejecutivo en
al
dirigió
que seña-
la
de alejar de la planta baja del Cabildo
—
cía
la
—
deDetención y del Crimen, suprimiendo con ello «esa verdadera aberración que hiere la dignidad de la
Cárcel de
Asamblea».
Durante la instrucción del sumario. vos para nuestr;i justicia.
—
Procedimientos depresi-
Volpi y Patrone permanecieron algunos días en
la Legación .te y luego fueron llevados a bordo de un buque de guerra italiano. Cada v-ez que tenían que detílarar eran bajados a tierra,
Italia
pero más de una vez en forma depresiva para la jurisdicción nacional porque en lugar de tomarse las declaraciones en
encargado de instruir
Penar
diligencias
las
el
ocupaban algunas de
amparo eran colocados
Legaciones ex-
las
Son arrestados algunos en las torturas. El del
Fiscal
del
sumario
la
trativos
y
que
el
de
cia
1."
cial
tor
el
todos
los
el
de la
los
de
adminis-
Fué necesario
culpables.
el
Presidente
Sentos se resol-
arrestados
Policía
nominal
gándose luego
principio
sumario corriera libremente. Como consécucR-
Diego Pérez, aunque simplemente con
tisfacción
el
funcionarios
el Ministro doctor José María Vidon Francisco Leónidas Barreto, el OfiJefatura coronal Dupuy y el médico de Policía doc-
fueron
Jefe
por su complicidad
complicados en las torturas. Pero sin resul-
de gravedad, para que
ello
altos
sufrido.
diplomático de que hablaremos después llegara a
viera a dejar que
Inza,
de
Gobierno amparaba a
el
conflicto
máximo
su
funcionarios
Crimen doctor Segundo pidió desde prisión
policiales
tado, porque
altos
como
dos italianos,
los
se temiera la repetición de las torturas que habían
si
Juzgado
el
Juez del Crimen qae
el
en una pieza del «Hotel Oriental» contigua
a los departamentos que tranjeras bajo cuyo
sumario, tenía
el
a los
violentos
el
reclamos
propósito de dar sadiplomáticos,
Juez del Crimen de pronunciar
la
encar-
sentencia de
sobreseimiento encaminada a dejarlos en libertad absoluta. El
doctor Vilaza
acababa de elevar renuv.cia de su alto cargo
cuando fué arrestado. «Solapadamente llegado
voces
hasta
mí por
las
que
—
decía en su nota
parecería
se
quisiera
—
han
echar
Anales de
4ÜÜ
Universidad
la
mancha que mi
sobre mi honor una
conciencia de
hombre honrado
rechaza y que estoy pronto a destruir inmediatamente.
—
•iDe las declaraciones del proceso
de arresto
—
constata que al dar
se
atormentar a
detenidos
los
invocó la
señor
Dupuy
la
el
decreto
orden de
orden del señor doctor Vi-
como Ministro de Gobierno».
laza
Otro de los funcionarios arrestados
Diego
tor
decía a su turno, el
Pérez
torturados
—
según hemos
que
—
médico de Policía doc-
el
dicho
fué
curó
quien
los
a
de vindicarse por la prensa invocando «el
trató
se-
creto profesional» que había jurado guardar al recibir su diploma
de médico y la obligación moral de no comunicar
lo
que obser-
vase en sus funciones policiales a otro funcionario que a su supe-
inmediato
rior
de decirlo,
lo
Jefe
el
secreto
de familia,
secreto
no
el
que observa
de
relativo
hogar,
lo el
Pero como
Político.
profesional al
la
la prensa se encargó fórmula académica es el
secreto privado;
el
pero
médico en su calidad de funcionario público.
—
La contienda diploniática. El escudo bordo de un buque de guerra.
italic'ino
es llevado a
A raíz de las graves denuncias de la prensa pidió el Encargad o de Negocios de Italia señor Perrod autorización para entrevistarse con los torturados en la Cárcel del Cabildo. Pero la Cancillería se
negó a
invocando que
ella
para representar a los
la
Legación carecía de personería
encausados y
que
si
éstos
tenían
quejas
debían deducirlas ante nuestros propios Tribunales.
Pocos días después Volpi y Patrone salían en libertad, hacían relación de sus martirios ante el Consulado y obtenían que ¡a Legación formulara una protesta «contra todo perjuicio de índole moral o material procedente de los gravísimos hechos producidos». la
Nuestra Cancillería
contestó que enviaría la declaración de les torturados al Juez de la causa, pero que «o admitía la protesta
sin perjuicio del
derecho que tenían los interesados para presen-
tar
sus
quejas
ser
ella
admitida dentro del plazo perentorio de veinticuatro ho-
ras
el
Tribunales competentes. La Legación se apresuró a reiterar su protesta, previniendo que en el caso de uo ante los
escudo italiano sería llevado a bordo de un buque de gue-
a la espera de instrucciones que se pedirían a Roma Y entonces reaccionó nuestra Cancillería manifestando que aunque esa
rra
amenaza era ofensiva
<;para la dignidad y el honor del Uruguay» estaba pronta a entrar «en arreglos conciliatorios encaminados a
evitar
el
conflicto».
Anales de
Juntamente con
ultimátum de
el
401
universidad
la
la
Legación apareció en hoja
un manifiesto que llevaba las firmas del comandante Carlos de Amézaga jefe del buque de guerra «Caracciolo» y del Encargado de Negocios don Enrique de Perrod. El comandante firmaba suelta
primer término y debajo de su firma iba
en
como
Legación
Véase
que decía
lo
refrendar
para el
las
del
la
Jefe
del
declaraciones
de
Jai
primero.
autor del manifiesto:
Gobierno del Hey y ante la Colonia italiana en esta luctuosa circunstancia un elevado y sagrado deber que cumplir: el de protestar enérgicamente contra el atroz crimen come«Tenía ante
el
agentes del Gobierno Oriental en dos de nuestros conna-
tido por
Hoy os declaro que lie cumplido aquel imperioso debsf con rectitud de ánimo... Empero contra tedas mis esperanzas, en vez de hallar en quien tiene la alta responsabilidad de la aplicacionales...
ción estricta de las leyes del país en que se desenvuelve vuestra laboriosidad, el brazo fuerte de la justicia civil que no guarda consideración humana ni sofística, hallé la oferta de expedientes de leguleyos constituyendo expresamente una ofensa a la representación de una nación amiga e implícitamente una dene-
honesta
gación
a
las
decidido,
lo tanto,
pretensiones
justas
mañana
si
denegación, a bajar
el
el
vuestras
y
mías...
Estoy,
por
precitado Gobierno persiste en su
escudo de la Real Legación
y a llevarlo
buque de guerra italiano superior, a la espera Si esta región hospitainstruccion€s que arriba indico.
conmigo sobre de las
el
.
laria tiene leyes dignas de
un pueblo
.
culto y civilizado, esas leyes
tienen ejecutores infieles».
A
bordo de
—
cantes
los
concluía
buques de guerra y de los buques italianos merel manifiesto «la bandera de guerra ofrecerá
—
siempre un refugio seguro a tección
El
los
comandante de
la
«Caracciolo»
su sola firma para advertir que ficaba
que tuvieran necesidad de pro-
eficaz».
la
Vencido
publicó
otro
manifiesto
retiro de la Le2:ación
no
el
plazo
del
comandante superior de ultimátum,
a bordo en medio de
el
escudo de
con
signi-
desaparición «del protector natural de los intereses
lianos en la persona del
llevado
el
ita-
la fuerza naval». la
Legación fué
una gran excitación producida por
columnas de pueblo que recorrían las calles y que se estacionaban en torno de la Legación de Italia y también de la de España donde a la sazón estaban Volpi y Patrone. Todas las tropas permanecían acuarteladas en provisión de 'os
las
conflictos
T.
que pudieran sobrevenir.
VII -26.
Anales de
402
El
Presidente
fiesto
dirigido
«Vuestras
A
—
aseguraros
para
esas
circunstancias
un mani-
italianos.
—
les han desertado de sus decía abandono de sus deberes y obligaciones para el Presidente de la República toma el puesto
Y
con vosotros ...
clios
residentes
los
autoridaxies
aba'ndonado
Universidad
Santos publicó en a
haciendo
puestos,
la
el
en.
y garantías.» la vez dictó un decreto por
el
goce
de
todos
vuestros
dere-
que prohibía «'as publicacio-
nes de carácter político de autoridades extranjeras referentes a la
República o a sus autoridades sin autorización previa del Ministerio de Gobierno», y prevenía que las que aparecieran en adelante «serían recogidas por la Policía y cerrada la imprenta por la cual
se expidieran sin perjuicio de las
demás responsabilidades
de sus impresores como perturbadores del orden público»... «Conque el decía el Presidente al fundar su decreto siderando decoro nacional se encuentra rozado por la circulación de mani-
—
—
u otras publicaciones que agentes públicos extranjeros "se permiten hacer, concitando a sus connacionales a actitudes hostiles a las autoridades constituidas del país y que los agentes difiestos
plomáticos,
únicos representantes
de sus naciones, tienen los rae-
dios de comunicarse legítimamente con los gobiernos cerca de los cuales están acreditados y de cumplir con los deberes de su posición».
La Cámara de Diputados sancionó a su vez una minuta de co la que adhería a la actitud asumida por el Po-
municación por der Ejecutivo.
Queda solucionado Restablecida
el
conflicto.
calma,
la
vino
a
Montevideo
el
Barón
de
Cova.
Ministro de Italia en Buenos Aires, decidido a poner término al conflicto que en
forma tan censurable acababa de extremar su comodos a proponer solucio-
lega Perrod. El habría venido de todos nes.
Pero contribuyó a precipitar su viaje la intervención amis-
tosa
de
del la
Las bases el
Argentino
Presidente
documentación
oficial
del Ministro
de
General la
Roca,
según
as'í
resulta
época.
Cova no podían
ser
más
vejatorias para
gobierno de Santos. Véase en qué consistían: «Arresto, para
el
castigo ejemplar, de todos los que
resultaren complicados en
el
hecho de
los
resultan o
tratamientos infligidos
en la prisión del Cabildo a los individuos Volpi y Patrone, ciuda-
Anales de
universidad
la
403
danos italianos ...
El pago como testimonio de profundo pesar de parte del Gobierno Oriental por el hecho que se ha verificado en perjuicio de dos desgraciados inhabilitados, de la suma de 50,000
francos en oro pagadera íntegramente y sin demora y entregada señor Gerente del Consulado General de Italia en Montevideo... Rectificación pública en términos adecuados hecha en la resal
puesta a ciones
presente nota por su Excelencia
la
Exteriores
publicaciones
Oriental,
oficiales
de
respecto
ber manifiesto del Presidente
de
de
el
expresiones
las
las
Ministro de Relacontenidas
autoridades
reales
en
las
(a
;;a-
República a los italianos de Montevideo dando cuenta del abandono de la Legación; telegrama de la Cancillería Oriental a su Legación en Roma comunicando que el Ministro Italiano había pasado una nota descomedida; la
de la misma Cancillería a la Legación de Italia diciendo «en estos tiempos de justicia la fuerza no ocupa sino el último lugar para obtenerla de quien la debe, porque no se lastima impunemente la dignidad y la honra de las naciones»); visita oficial nota
Su
de
Excelencia
Excelencia Italia
en
el
el
Presidente
de
la
República
misión
en
Montevideo...
Saludo
a Su Rey de
Oriental
Enviado Extraordinario de Su Majestad recíproco
el
según
las
reglas de la marina.»
«Después
de
la
ejecución
inmediata
de este arreglo
—
terminaba
la
Italia
se
de
propuesta
todas
—
la
las condiciones Legación Real de
entenderá restablecida.»
El gobierno sin
exigir
insolentes
de Santos aceptó de plano todo cuanto se pedía, por lo menos a título de reciprocidad el retiro de las notas y manifiestos del Ministro Perrod y del coman-
dante Amézaga.
—
Desde el primer momento decía en su respuesta de Relaciones Exteriores don Manuel Herrera y Obes
el
—
Ministro resolvió
Poder Ejecutivo imponer pronto y ejemplar castigo a los perpetradores y cómplices de aquel horrible delito, según lo demuesel
tran las resoluciones adoptadas, y al admitirlo declara que no cede a otra imposición ni exigencia que las de sus propios deberes... Acepta también la entrega de los 50,000 francos, aunque no como exigencia para el arreglo de esta cuestión, ni nuic"ho
menos como un derecho ...
En cuanto a la tercera base el Gobierno declara que no ha tenido ni tiene discusión pendiente con Gobierno de Italia y que por el contrario siempre ha conservado, conserva y propenderá a conservar con él las más estrechas pl
y
cordiales
relaciones
de
amistad
de
que en
este
momento
RS
Anales Je
404
la
universidad
dau recíprocas pruebas... Las útimas dos bases no piiedeu ser nunca motivo de dificultades, como no han debido ser tampoco bases de arreglo. Las visitas diplomáticas de los jeíes de Estado a los representantes de las naciones amigas y las de éstos a aquéllos del
mismo modo que
saludos recíprocos y simultáneos
los
cuando ocurren casos como
de los pabellones,
el
que nos ocupa,
el
Barón de Cova
son prácticas universalmente admitidas.
Al acusar recibo de esa nota hacía constar
que las indicaciones de la Legación hahían quedado adm/itidas, y agregaba con referencia al pago de la indemnización acordada a Volpi
y Patrone:
«En respuesta igualmente hacérseme por orden de V. terio
de
la
a
la
E.,
demanda verbal que acaba de
no dejaré de concurrir
Minis-
al
de Relaciones Exteriores hoy a Ja una para asistir al acto
entrega
al
en Montevideo de arreglar
Gerente del
señor la
suma
definitivamente
Consulado General de
formalidades del arreglo de
las
Italia
como para
fijada de 50,000 francos, así
cues-
la
tión.»
A la hora prefijada concurrió el Ministro Cova a la Casa de Gobierno y el general Santos lo hizo pasar al Salón de Recepciones a tiempo que la banda del Batallón 3.° de Cazadores tocaba el himno italiano. Y un día desipués el general Santos y su Ministro
de Relaciones
Exteriores visitaban
Ministro
al
eu su alojamiento del «Hotel Oriental» acompañados de
mismo Una de
del
banda
el
Minis-
batallón. las
versiones
tro Italiano había ido a
Co>4«.
la
más
corrientes establecía
que
a la Casa de Gobierno en traje imrtic.ular
ultimar las negociaciones de acuerdo con los términos de su
no;ta,
en tanto que
el
Presidente Santos había concwrido
rnente a la Legación. Queríase
dar a
oficial-
que por efecto de una viveza criolla se había transformado una vi. sita particular en saludo oficial para que la concurrencia del general Santos al alojamiento del Ministro Cova apareciera entender
como una retribución de saludos y no comió único de que hablaban las bases pactaidas.
el
con
ello
saludo inicial y
diplomático parecía terminado sin embargo mecumplimiento efectivo de las demás cláusulas: la enConsulado Italiano de los 50,000 francos de indemniza-
conflicto
lEl
diante
el
trega al
ción y la prisión y enjuiciamiento del ex Ministro doctor Vilaza, del
Jefe
señor
Político
Dupuy y
señor
del
Barreto,
del
Oficial
1.°
médico forense doctor Pérez.
de
la
Jefatura
Anales de
Pero
el
la
Universidad
4üó
Santos se encangó de hacerlo
Presidente
Asamblea
dar cuenta a la El Poder Ejecutivo
del
—
arreglo
resurgir
al
celeibrado.
—
repelió las badecía en su mensaje que presentaba el Ministro Coya como exigencias para el arreglo de la cueístión. De acuerdo con la respuesta dada a su nota quedó admitida la base primera sólo como un deber que la República ya se había apresurado a cumplir poniendo los presuntos culpables a dispoisición de la justicia. La base segunda
ses
fué
admitida como
torturados.
una La tercera
dádiva ni
acordada
siquiera
fué
esipontáneamente a los
debatida
limitándose el
Gobierno Oriental a decir que no tenía disicusión pendiente con Gobierno Italiano. Y la cuarta tampoco fué admitida, sin perdel cambio de visitas entre el Presidente y el Ministro Cova que en el acto se produjo. El Ministro Coiva se apresuró a protestar contra esas afirmaciones. En su nota invocaba «la realidad, de los hechos»; recordaba que al acusar recibo de la respuesta de la Cancillería Oriental a sus bases de arreglo haJbía dejado constancia expresa de la ace^ptación de esas bases; y aigregaba que su presencia en la Casa
el
juicio
Gobierno había respondido exclusivamente a una invitación
de
verbal relacionada con la entrega de los glo
definitivo
del
5 0,0
00 francos y arre-
incidente.
Herrera y Obes ique los hechos habían forma que expresaba el mensaje presidencial que quería desmentir, dando con ello mérito a que el Ministro Cova, de acuerdo con las instrucciones que había recibido de Roma, deivoliviera la nota a nuestra Cancillería y fijara un plazo de cinco días para que se hiciera la siguiente declaración: «Si el Gobierno del Uruguay admite y confirma pura y simplemente aceptadas no tan sólo, pero lealmente ejecutadas las condiciones del acuerdo tal cual ellas verdaderamente resultan do las notas cambiadas el 6 y 8 de abril, de manera que el Gobierno Italiano pueda no tomar en cuenta cualquiera otra InterReplicó
pasado en
el
Ministro
la
s*-'
pretación».
Santos trató de dar intervención a la Legación Oriental en Aires, que estaba a cargo del doctor Pérez Gomar, y habiéndose opuesto el barón Cova transportó el incidente a Roma, donde el representante del ITruguay señor .Vntonini y Dit-z
Puenos
hizo llegar a la Cancillería Italiana un telegrama de su Gobierno
per
el
el heciho «de haber sido aceptadas y condiciones del acuerdo tal cual resul-
cual se coufirma'ba
cumplidas lealmente
las
taban del significado natural de las notas cambiadas.»
:
Anales de la universidad
4U6
El Gobierno Italiano dio por concluido
legrama que importaba
triunfo
el
incidente con ese
te-
ultimátum y la plena desautorización del mensaje gubernativo a la Asamblea Así terminó el vergonzoso conflicto: vergonzoso por sus causas el
y
liso
llano
del
originarias y vergonzoso por las afrentas que tuvo que soportar nuestro Gobierno como consecuencia del martirio impuesto a dos
hombres que según colaborado en
de
Plaza
la
el
vehementes sospechas
las
Independencia.
Algo más estaba reservado Volpi
indemnización
oficial
y
destinar
resolvió
lice
gobierno de Santos.
al
Patrone se negaron
y
Tribunal habían
del
plan de asesinato y saqueo de la casa de cambio
recibir
a
los
de
50,000 francos
¡a
Comité que presidía don Alejandro Tá-
el
suma
esa
diversos
a
establecimientos
'le
beneficencia y levantar con destino a los torturados una suscrip-
en
que en
popular
ción
bolsillo
el
el
ac-to
Con
produjo 8,247 pesos.
suma
esa
dos torturados embarcarse para Río
resolvieron los
de Janeiro donde se estaba levantando otra suscripción en su
La
vor.
emanados momentos. Pero el
judiciales
rla
los
pasajeros
impedir
de
trató
Policía
del
sumario que
c-apitán
por
el
del
orden
de
,'apor
viaje
volvía
que
Legación de
la
en esos
agitarie
a
contestó
fa-
mandatos
invocando
entrega-
sólo
en
y
Italia,
se-
guida levó anclas y salió para su destino.
iJquidaudo
—
ouena
la
renuncia a
la
del Paraguay. La República Oriental indemnización de guerra y devuelve los trofeos
conquistados.
Las Cancillerías
del
Uruguay y
del
Paraguay ajustaron en
un tratado que el Cuerpo Legislativo cual quedaba fijado en 3.390,000 pssos
el
guerra a cargo del tesoro paraguayo,
de
ratificó
en
el
monto de
18S:J
acto por
í-i
gastos
de
los
acuerdo con
el
tratado
de paz.
No
tenía
pactada
y
p] ementaba
ejército
bían
el
por
gobierno de Santos ello
incorporó
al
el
propósito de exigir
tratado
esta
cláusula
la
suma
que
coin-
forma honrosísima la intervención altruista del uruguayo en aquella gran contienda de la que sólo de-
sacar
en
resultados
materiales
sus
aliados
la
Argentina
y
d
Brasil
«La República Oriental del Uruguay cediendo a los deseos mapor el Gobierno del Paraguay y deseando dar a esta República una prueba de amistosa simpatía, a la vez que como nifest idos
Alíales de la Universidad
homenaje
ui!
a
presente que
i
confraternidad
la
sudamericana,
enuncia formalmente
rra a que se refiere
el
inciso
al
cobro de
devolución
la
de
por
U\
gastos de ¿ue-
gobierno de
el
conquistados
trofeos
los
declara
los
anterior.»
Otra iniciativa igualmente simpática tomó tos:
101
el
po'r
Sav.-
ejército
en los memorables combates de aquella guerra.
oriental
«Basta y sobra a
la
—
Asamblea
saje a la
República Oriental
—
decía
en
su
men-
haber coronado con su esfuerzo y cimen-
tado la victoria con su mejor sangre.
La admiración
y el res.peta
campos de batalla donde Jucharon confundiendo la buena fe en la defensa de un tirano con la del territorio de la patria, se impone como un instinto de la nobleza de carácter y como un deber de hidalguía. Los trofeos arrancados de Iss manos de los héroes moribundos cuyos semblantes reflejaban en vez del rencor y el odio al hermano vencedor la conciencia vencidos en
los
a
los
sentimiento del deber impuesto por
del
ía
fatalidad,
esos
trofeo,
no tienen colocación posible en nuestros museos y deben ser devueltos al noble pueblo que los sostuvo con gloria inmarcesible
aún en
hora suprema de
la
la
agonía.»
nombró el Gobierno una Comisión presidida por el Ministro de ia Guerra general Máximo Tajes que realizó el viaje en las cañoneras «Artigas» y «Rivera». La llegada de esa Comisión a la capital del Paraguay Obtenida
correspondiente
autorización
lugar a grandes demostraciones de confraternidad.
dio
—
la
«lEn
el
muelle
—
decía
nos esperaiba todo
un
senciado
el
espectáculo
el
general Tajes al Presidente Santos
pueblo de tan
la
Asunción. Nunca había pre-
conmovedor.
El
pueblo
vitoreaba
nuestra patria y a nuestras banderas y lovs que las llevaban fueron cubiertos de flores y coronas por las damas de la Asun-
a
ción.
Los viejos veteranos del Para/guaty doblaban sus rodillas y los ojos saludaban las banderas que les íbamos
con lágrimas en a
devolver».
Traduciendo el sentimiento do su pueblo decía el Presidente del Paraguay en un telegrama al Presidente Santos: «Los que en otra época esperaban oir el clarín guerrero para lanzarse al combate y choicar sus armas en defensa de los santos derechos que sostenían ambas filas, hoy al sonar el clarín saludando los
con
a los bienvenidos
fraternales
van
a encontrarlos
para estrechar-
Las damas paraguayas derramaban estas descoloridas banderas. Sus telas
brazos.
lágrimas al contemplar que ostentan sangre y recuerdos dolorosos para
la
patria;
sus
Anales de
408
Universidad
la
corazones despedazados por la bala y la metralla; los horrores de los hombres que sembraban odios, unos y otros borran los ve^stigios insuperables que dejaron en su larga carrera y abren
paso
al
cariño y
amor de
pueblos que en estos momentos se
los
estrechan».
El
Presidente del Uruguau' fué honrado por el Congreso con de ciudadano del Paraguay y general ad honorem de
título
el
los
ejércitos de ese
país.
ha Comisión aprovechó
oportunidad para visitar
la
la
quinta
en que había vivido Artigas durante los últimos años de su vida,
y luego de busicar y encontrar los cimientos de la casa habitación, labró un acta que fué firmada por el general Tajes y por
doctores Carlos de Castro y Lindoro Forteza.
loí
Las aguas del
río
El problema de
Uruguay. la
jurisdicción fluvial
fué puesto
nuevamente
orden del día en 18 8t4 por un artículo de «La Nación» de Buenos Aires, que la prensa de la vecina orilla atribuyó desde el primer momento al ex canciller argentino doctor Rufino de ElizaMe, quien no desconoció la paternidad de ese artículo. Según el articulista la República Oriental había surgido a la vida sin derecho alguno sobre las aguas «del Uruguay. «Este río a
la
—
decía refiriéndose al
tratado
de
1828
—
continuó
siendo ex-
clusivamente argentino y la nueva nacionalidad apenas tenía el derecho de navegación para sus puertos con su pabellón sujeto a la soberanía argentina como condición de la cesión que se haEl Ministerio de Guerra y Marina cía de parte de su territorio debiera empezar por tomar posesión real y efectiva del río Uru.
.
.
guay y de sus islas hasta el Ijimite con el Brasil y desde allí que están a la margen derecha del canal principal poniendo vapores necesarios y adecuados para hacer la policía del
las
los río,
sus islas y costas argentinas».
La
publicación
de
ese
artículo
causó
verdadera
indignación
en nuestra prensa y hubiera provocado graves incidentes diplo. máticos si el Presidente Roca no se hubiese apresurado a hacer llegar palabras tranquilizadoras, por intermedio de su Ministro diplomático en Montevideo, al Presidente Oriental.
Durante
el
gobierno de Artigas
—
recordaba «La Razón»
las
autoridades orientales ejercieron jurisdicción plena sobre
TÍO
Uruguay. Al pactarse
el
Tratado de Paz de
— el
1828 lejos de
Anales de
consagrarse risdicción
exclusividad
la
oriental,
según
encargado de publicar
Universidad
ki
quedó reconocida
argentina
ju-
la
acreditan los protocolos que se ha
lo
mismo
el
409
diario
argentino y
el
artículo
adicional del Tratado. Rosas reconoció en diciembre de 1849 la
comunidad de las aguas del río Uruguay y también reconocieron esa comunidad el Tratado de Comercio entre el Brasil y el Uruguay de 1851 garantido por Urquiza. que actuaba como Encargado
de las Relaciones
Exteriores
de la
Argentina;
la
Con-
vención Fluvial de 1857 entre el Brasil y la Argentina; el propio doctor Elizalde que desempeñó la cancillería del gobierno de Mitre, primero en 18 63 con motivo de la destrucción de los arre-
en 1865
mente
conocidos con
al
el
Corralito,
y luego y final-
gobierno
las
el
de Sarmiento en
Varios meses después ordenó
miento de
nombre de
celebrarse el Tratado de la Triple Alianza;
Salto
del
cifes
boyas que se
1873.
gobierno de Santos
el
hubieran
desviado en
el
el
restableci-
Canal del
el río Uruguay. La operación fué realizada por el Mayor don Manuel Sosa, quien fondeó la primera boya en los pozos de San Juan y las subsiguientes en el Globo, Punta df, Pereira, Banco de Santana, Banco de los dos Hermanos entre
Infierno y en
Práctico
Martín García y Martín Chico. Al fondear
minado Globo perteneciente a del
la
la
boya en
el
punto deno-
jurisdicción uruguaya y arranque
abalizamiento a su*cargo, hizo constar
el
señor Sosa que
allí
había también una boya argentina.
Las rontiendas de partidos durante
el
Los restos del general Leandro Gómez Defensa de Paysandú
—
salvados en
gobierno de
—
el
Santo.s.
heroico jefe de
1865 de la fosa
la
común por
una mano piadosa y que estaban en el extranjero desde entonces, fueron traídos a Montevideo a principios de 1884 para ser depositados
en
el
Cementerio Central.
La Comisión organizadora del homenaje que presidía don At-?lino Lerena, publicó una invitación a la población nacional y extranjera en la que recomendaba la mayor calma, «el mayor orden de decía y circunspección durante el trayecto como medio
—
—
que todo sea en
la
cívica
acto, de la cultura del
entre los
miembros de
ceremonia digno de
la
solemnidad dol
pueblo y de la benevolencia que debe reinar la
familia oriental toda
vez
que
los
con-
grega un motivo de alto patriotismo». El Gobierno, lejos 'de obstaculizar la ceremonia, se asoció a ella
U
Anales de
41
la
Universidad
mediante uu decreto por el que mandaba Paysandú honores de brigadier general.
La urna vientes
al
ds
héroe
fué llevada a la Catedral por cuatro morenos sobre
de la
meaba en
realizar
Defensa,
torreón de Paysandú
el
misma bandera que
cubierta por la
/i-
fla-
día de la caída de la Plaaa,
el
bandera que ^había pasado de manos de un soldado brasileño a! almirante Tamandaré y luego al Ministro don Andrés Lamas. Üi>trás de la urna marchaba una columna popular de dos mil personas y otra columna militar compuesta por todos los batallones
de
la
guarnición de Montevideo bajo
en
el
que así se asociaban
el
mando
el
Ningún incidente alcanzó a turbar
dei general Pagóla.
solemnidad del homenaje
la
Partido Blanco y
el
gobierno colo-
rado. Pero poces días después, al aproximarse el aniversario de Sa
hecatombe de Quinteros, siera la bandera
el
general
Sa.ntos
ordenaba que se pu-
nacional a media asta:
que se hicieran disparo'3 que hubiera una misa de réquiem;
media hora; un desfile del ejército; y pasaba a la vez un mensaje a la Asamblea pidienda que se declarara feriado el 3 de febrero, aniversario de Caseros y se acordara una pensión vitalicia a los doctores Manuel Herrera y Obes y Andrés Lamas, los dos negociadores del Tratado de Alianza que había dado en tierra cañón cada
de
que se
con
la
realizara
dictadura
de Rosas.
El antagonismo partidista estaba ya grandemente
debilitado
en
Los blancos netos, que habían acompañado a \os, colorados netos durante la administración Ellauri y durante el go-
esa
época.
bierno surgido del motín del 15 de enero de 1875, y qué habían conseguido atraer a su campo a una gran parte de los nacionalistas
bajo la dictadura de Latorre, acompañaban también
con su caudillo
el
Aplazamiento de Dentro cional,
la
general Aparicio a
a
la
iniciado
en
Legislatura de
puntos que debían ser reformados. dejar intacto
el
a
Santos
cabeza.
lefornia <'oiistitiicional.
proceso
del
tocaba
la
Í87?>
1882
reforma constitu-
para
la
la
tarea
de
precisar
los
Pero esa Legislatura resolvió
Código Político de 1830, adhiriendo a
ios
siguien-
fundamentos del informe de la Comisión de Legislación del Senado compuesta de los señores Blas Vidal, Cri.itóbaí Salvañach tes
y Alberto
«No cree
Flangini: la
siquiera puede Guponer, que nuesuna obra perfecta. Es y tiene que ser
Comisión, y ni
tro código fundamental sea
Anales de
susceptible
como todo
mejoras
ele
universidad
la
411
humano. No ts desde
io
.íste
punto de vista de perfección que debemos estudiar las reformas, sino también de su oportunidad, consultando el verdadero inte-
Y
rés nacional.
nuestra
los
pera y
la
verdad es que sin tocar uno solo de sus artícues «apaz de hacer esta República prós-
Constitución
Sus disposiciones encarnan
feliz.
manifestaciones y fué
y
adelantaron
se
hi
tal
tanto
a
previsión
época que
su
libertad
la
de
nuestros
algunas
bien
si
en todas sus constituyente.?
otras
repúblicas americanas han ¡necesitado reformar su Constitución, la
podemos y debemos conservarla íntegramente sin temor que se ncs tache de atrasados. El porvenir de nuestra República no está cifrado en la reforma, sino en el íiel cumplimiento
nuestra de
de
Constitución por gobernantes y gobernados.»
la
A
dietas
Legislatura corresponde la ley que transformó
misma
la
legislativas
en
de la elección hasta
sueldos el
fijos
y permanentes
desde
¡as
día
el
de la expiración efectiva del mandato.
Los comicios de 1884. Al cerrarse
Montevideo inscripciones
registro cívico de 18S4
el
9,3(86
inscripciones.
(5,018)
Una
tenía el
Departamento de
parte considerable
habían sido realizadas durante
de esas tres
los
pri-
meros días hábiles y ello Sin que estuvieran organizados los partidos ni existiera movimiento electoral alguno. Eran los soldados de los batallones y policías ique maniobraban en medio del marasmo del electorado. Llegado el final de la jornaida obtuvieron los candidatos más votados 6,063 sufragios en los comicios de diputados; 5,330 en los de colegio electoral de senador
Administrativa.
sy
5,362 en los de
clusiva del oficialismo sólo existía en
Lo prueba
lación. fi:era tos,
Junta Económico-
Adviértase que como las elecciones eran obra ex-
el
realidad una lista en circu-
hecho de que en los comicios de diputados
de los candidatos triunfantes sólo figuraba uno con 304 vo-
otro con 87, otro con 3 y varios con
1
o 2 votos;
en
los
Je
Ue senador sólo había una veintena de votos disidentes, y en los de Junta Económico - Administrativa no alcanzaban a una docena los votos dispersos. colegio
Entre
electoral
los
candidatos
triunfantes
Román Mendoza Antonio María y del
figuraban
los
Rodríguez, Carlos
doctores
Gómez
Jusé
Palacios
jóvenes colorados que habían permanecido distanciados Gobierno hasta entonces y que resolvieron en esa oportunidad
otros
Anales de
412
iniciar una formaba en
Univetsidad
la
de acercamiento que un año después se trans-
política política
rompimiento con
de
la expulsión úe sus "nihablamos en otro lugar.
ciadores a raíz de los incidentes de que
Vence
plazo
el
oonstitucioiiíjil
éste continúa en
terminaba
Santos
de
presidencia de .Santos. Pero
la
Poder.
el
mandaio en marzo de
su
Pero
1S86.
sus aceptos aceptaban la idea de ia rotación
ni
ni
él
gobierno.
de]
Desde fines de 1885 empezó por eso a hablarse de reelección y en su defecto de un nuevo interinato tonino de
sar
su calidad de
Asamblea tesis
y
la
el
militar
de
doctor Francisco
\del
Santos ingresaría
contra
rechazada
rieles
el
por
y
la
terminante
la
primera
la
de
En cambio
ambiente.
de
pe-
de
plan de una ley ^ov la cual se declararía
no rezaba con
militar
Presidente
muy
reelección
la
falta
\a-
Senado a
al
ocuparía como
y
incompatibilidad constitucional entre
mando de los
cual
iconstitucional
quedó
marchó sobre que
el
Presidencia de la República. Era
la
prescripción esas
durante
Vidal
cargo de legislador
el
que carecieran da tiempo de realizarse
generales
los
fuerza o destino administrativo
al
comicios.
Hubo dos reuniones políticas vergonzosas para impedir la. ro-tación gubernativa. Una de ellas en el cuartel del 5." de Cazadores en la que todos los militares con mando de fuerza acordaron al
general Santos «un voto de confianza».
de actos asistencia
públicos
de la
de liumerosos
funcionarios
de
la
Dirección
de
senadores,
Capital
y
de
los
'Y
diputados,
en
otra
la
el
salón
Primaria con
Instrucción
militares
departamentos
del
y
altos
interior,
la cual declararon el doctor Ángel Briau y los coroneles Carámbula y Rolando de los Campos a nombre de los concurrentes extraños al Cuerpo Legislativo, que ellos no tenían candidato er.
«.porque
de
su
sería
impropio de su
lealtad
al
general
Santos,
jefe
ya habían delegado en él y cuya delegación mantenían y solemnemente ratificaban»; y >el senador don Tulio Freiré a nombre de los leg-isladores «que ellos tampoco tenían candidato y que adherían al pensamiento de que una vez terminada la asamblea fuera el Cuerpo partido,
volver
a
hacer
uso
de
derechos
que
Legislativo a casa del general Santos a cumplimentarlo y a hacerle
presente su adhesión y simpatía», todo ello según la crónica de «La Nación», el diario oficial de la época, que agregaba que una veintena
de
legisladores
había
pedido
que
la
Asamblea
se
comprometiera
Anales de
votar
a
general
candidatura
la
pres-dencial
que
413
fuera
presentes
tificar
de
el
de
reuniones se dirigieron todos
estas
con
presidencial
domicilio
voto
el
allí
última
la al
el
delegación
Asamblea
la
eligiría
lanzó
recibida,
Antonino Vidal,
candidatura
la
doble
la
Francisco
doctor
por un grupo de legisladores
hizo proclamar
la
del
Partido
del
algunos días después, haciendo uso de
Colorado. Pero
de ra-
propósito
que habían acordado. El gene-
confianza
Santos so limitó en esos momentos a decir que un ciudadano qua asegurase el predominio
ral
por
indicada
Santos.
Terminada los
Universidad
la
y la comunicó a los Jefes Políticos mediante una circular en que decía «que era digna de felicitarse la actitud de la Asa^mblea».
'Cuarenta votos alcanzó de inmediato la candidatura del doc.
Vidal
lor
soro y del general Luis
Como
rales y el Colegio
Santos
ral
que Gomen-
minoría parlamentaria de
don Tomás
Eduardo Pérez.
parte integrante del plan adoptado la Legislatura votó
ley que abría las puertas del
la
la
populares
candidaturas
las
de
veintitantos
contra
prestigiaba
aguardar
sin
Parlamento
a los oficiales gene-
nombró senador al geneterminación de su mandato presi-
Electoral de Flores la
dencial.
Llegado 12
tra
1."
el
de marzo de
18'8 6
fué elegido Presidente de la
doctor Francisco Antonino Vidal por 53 votos conque oibtiivo el general Luis Eduardo Pérez y tres votos
República
el
perdidos que obtuvieron
La Asamblea sancionó cación al Presidente
otros el
ciudadanos.
mismo
saliente por
la
una minuta de comunique se reconocían «los i'e-
d5a
l?vantes y meritorios servicios que había prestado a la Nación», sei'vicios que le colocaban agregaba la minuta, «en el número
de
los
para
preclaros voluntald
Por su parte se
y meritorios orientales
y acción decididos en bien de ella y de sus habitantes».
talento,
apresuró
a
el
que deponían todo su el
altar
de
la
patria,
Presidente Vidal a.penas llegado a su despacho general Santos el mando en jefe de
conferir al
la República, con la advertencia de que esdependencia directa del Presidente y no del Estado tampoco del Ministerio de la Guerra. Era el medio de
todas las fuerzas de taría bajo la
Mayor
ni
que continuara gobernando sin interrupción. La revolución del Quebracho encontró al general Santos en ese nuevo puesto. Temiinada la revolución Santos presentó renuncia de su cargo y se incorporó
al
Senado, y en
el
acto
el
Anales de
414
Laviña,
senador
que
Universidad
la
ocupaba
Presidencia,
la
asiento.
«Acaba de ingresar en capitán general don
por
el
Sena'do
el
Máximo
—
dijo
dejó
le
—
el
libre
su
excelentísimo
Santos, en su carácter de senador
Departamento de Flores. El
es el director de nuestro gran
partido y ante esa figura no puedo permanecer por un momento más en el puesto que ocupo como Presidente de esta Honorable
Cámara. Por esta razón renuncio la Presiden'cia porque tengo firme convicción de que nadie mejor que él puede ocupar el puesto a que fui elevado por el voto de mis colegas». El Senado aceptó esa renuncia y nombró en su reemplazo al lu
general
Santos.
—
primer militar que tiene entrada en la Asamblea pero fueron las palabras de Santos al ocupar la Presidencia de Asamblea la porque respetar a tengo sabido he merelcido lo
mi
el
—
tierra.»
Tres días
después
alta investidura
el
y la Asamblea resolvía en
tomara posesión
del
la
el
presentaba
renuncia de su
tarea era superior a sus fuerz.as
acto que el Presidente del Senado
poder ejecutivo.
prensa en los comienzos
Jií?
Vidal
doctor
alegando que
.iel
gobierao de Santos.
La Sociedad de Economía
Pollítica que presidía el doctor CarMaría de Pena publicó en los comienzos del gobierno de Santos un cuadro estadístico del que resulta'ba que circulaban en toda la República 21 diarios y 40 periódicos o revistas (36 en Montevideo y 25 en los departamentos de campaña) con una tirada de SOjOOO ejemplares, cifra grandemente abultada si se considera que en esos mismos momentos «La Nación» de Buenos Aires, que era el diario de mayor circulación en el Río de la
los
Plata,
publicaba un
aviso
haciendo
constar
que su tirada
había
alcanzado a 8,000 ejemplares.
Las mazorcadas, los e-mpaRtela.mientos de imprentas y las mordazas por vía administratii\'a o por vía legislativa que sombrean la administración Vidal de la que era realmente jefe el general Santos, parecieron entrar en franco receso una vez que Ministro de la Guerra resolvió asumir a cara descubierta la <:'l
Presidencia de
la
Reípública.
Hubo más de un
salto
atávico en los departamentos de cam-
paña. Algunas palabras de la prensa de Paysandú contra los
fes-
Atiales de la Universidad
realizados
tejüs
de
raíz
a
elección
la
415
presidencial
del
general
Santos dieron lugar a que la oficialidad del batallón l;' de Caze'dores qua estaba destacado en aiquella ciuda'd, retara a duelo a
los
re'da'ctores
es tan ruin
—
oficiales
de «El Paysairdú» y de «El Pueblo». «Si usted
—
que se niegue a ir a ese terreno decía uno de los me dará el dereelio de matarlo como a un animal
dañino dondequiera
que
lo
encuentre»
No había
garantías
para
la
prensa porque
la
oficialidad desaíiante y los directores y redactores de aquellos
Jefatura de Policía estaba de acuerdo con
la
E. Pereda, don Máximo Bascáns, don don Luis Mongrell tuvieron que emigrar a Buenos Aires. Pocos meses después era brutalmente apaleado en San José el redactor de «El Maragato» don Liborio Pé^rez. La víctima so'stuvo por la prensa que entre los apaleadores figuraba el Jteife Político y un Comisario, y el Fiscal de lo Civil doctor Alfredo Vásiquez Acevedo dijo que en el sumario había muchas presunciones contra el primero de dichos funcionarios, no
diarios
don
Seteimbrino
Olivio Sandes y
obstante
fué
cual
lo
decretado
el
soibrestóimiento,
alentándose
con ello a los criminales que volvieron a su empresa y mataron al
que los había
periodista
nato nada nieno« que
mediados de
a
todavía,
fustigado,
Insipector de
el
1883,
era
encargándose del asesi-
Y más
Policías.
apuñaleado
en
el
adelante
Durazno
el
comandante Parodi, redactor de «.El Argos», diario situacionista pero que no hacía buenas migas con el Jejfe Político. La prensa de la Capital se veía li'biie de esos zarpazos. Pero vi\'1a en cambio bajo la permanente amenaza de las acusaciones
fiscales.
«El Siglo» y «El Hilo Elléctrico» publicaron a fines de 1882 un telegrama de Buenos Aires en que se hablaba de una negociación
con
la
para vincular el Uruguaiy al Brasil en caso de guerra agreigándose que el Presidente Santos había
Argentina,
secuestrado
una
correspondencia
cooniprometedora
para
su
Mi-
de Relaciones Exteriores don Manuel Herrera y Obes. El Ministro de Gobierno ordenó al Fiscal del Crimen doctor Se-
nistro
gundo que acusara a esos diarios por la vía popular. Pero el Fiscal contestó en cuanto al telegrama que el delito denunciado no era contra la
sino
Estado l>or
la
sociedatl,
único caso en que
le
correspondía acu-
y en cuanto a orden «que no debía ni podía recibirla de ningún Poder del
sar,
en
la ley
contra
el
el
fiel
funcionario
público
aludido,
desempeño de su ministerio, porque gozaba
de completa indepenvlencia para no seguir otra inspira-
Anales de
416
Universidad
la
que la de su criterio propio subordinado únicamente a las de las leyes.»
ción
prescripciones
Ante esa negativa pidió del
titución
el
Poder Ejecutivo
al
Tribunal
Segundo. El Triboinal dio vista de
doctor
la
des-
la
nota
al
Vásquez Acevedo, quien se mostró de acuerdo con la tesis del doctor Segundo. El Fiscal del Crimen no está obligado a entabl-ir decía el doctor Vásquez Acevedo acusación contra todas las publicaciones que le denuncie el Poder Ejecutivo «sino contra aquellas que según su criterio jurídico envuelven un delito contra la sociedad j' sólo puede incurrir en de
Fiscal
doctor
Civil
lo
—
—
pena de destitución inmediata cuando se niegue a acusar un de esa última categoría. Las publicaciones denunciadas no contienen abuso conagregaba el doctor Vásquez Acevedo tra la sociedad y en consecuencia el Fiscal no ha faltado a sus la
—
delito
—
deberes
La
y no procede su
destitución».
concluyente y
vista era
de decretar
Tribunal se abstuvo
el
aunque apercibiendo
la destitución,
al
doctor Segunde por los tér-
minos de su comunicación. El general
Santos lejos de darse por vencido se dirigió enton-
ces
en forma amenazadora al Cuerpo Legislativo.
sin
precedentes
—
cal
—
sir
quedara
ocultar a V.
den político
refiriéndose
correctivo
hoy,
a
la
«Si
este
permanencia
no debe
el
Poder
por ante
lo el
que
el
hecho
del
Fis-
Ejecutivo
H. los peligros que puediera traer aparejados social,
responsabilidad
su
decía
al
or-
Poder Ejecutivo salva desde ya
país».
Cuerpo Legislativo así presionado declaró entonces que de acuerdo con la ley de imprenta procedía la inmediata destitución El
del
Fiscal.
Puesto
el
cúmplase a
la
lej^
interpretativa
renunciaron los
ca-
maristas doctores Berinduague, Gallinal, Vázquez, Castro y Otero, pero no así
el
Conrado
y la Asamblea nombró para llenar Manuel Herrera y Obes, Ladislao Terra,
doctor Forteza;
las vacantes a los doctores
Rü-cker,
Ernesto
Velasco
y Cristóbal
Salvañach,
obte-
Segundo única cosa que buscaba, el Gobierno según lo comprueba el inmediato desistimiento de las acusaciones promovidas contra «El Siglo» y «El Hilo Eléctrico». Algunos de los Jueces Letrados, los doctores Juan Gil, Juan Zorrilla de 'San Martín y Francisco del Campo
niéndose con
ello
la
destitución del
entre otros, renunciaron a raíz de
Fiscal
esos
doctor
incidentes.
«La Razón» y «La Democracia» dijeron que era violatoria de la Constitución, y la
la ley
interpretativa
Cámara de Diputados quo
Anales de
r.j
éste
417
universidad
la
quería mostrarse menos celosa que el general Santos pidió a que estimulara la acusación fiscal contra esos dos diarios
—
—
decía la minuta de violación constitucional Nación y provocan de la el honor» crédito y atentan «contra el todo orden y gade demol^ídora demagogia la anarquía y «la
que
hablar
al
rantías».
Pero fuera de aquellos saltos atávicos en la campaña y de estas de acusación en Montevideo, podía considerarse la tentativas prensa en los primeros tiempos de la presidencia de Santos al abrigo de los manotones oficiales que tan triste relieve habían
dado a Véase
administración Vidal.
la
que a mediados
lo
18S3
de
deoía
formidable de los diarios de oposición de día a día hundía su escalpelo en el organismo desprestigio ante
el
exhibir
para
santismo,
nistrativo del
época, el
toda la superficie del
nos que abarcan a
los
prestigio de
intereses la
político
llagas
y
el
más
diario que y
admi-
provocar
su
país:
«Año y medio de propaganda aUWa ficiosa
sus
Razón»,
«La
la
prensa.
públicos,
A
la
vez
y viril ejercida por órgapaís y evidentemente 'bene-
ha rehabilitado las íuerzas y el debemos decirlo con franqueza:
general Santos ha tenido la habilidad o la virtud de respetíir último baluarte de las oposiciones y la libertad de la palabra escrita parece asegurada.»
B'
el
Después de ese paréntesis de tranquilidad reanuda el general Santos su campaña contra la prensa independiente. Eso decía «La Razón» en agosto de 1883. Pero antes de finaliórgano oficial del el mismo año publicaba «La Nación» un artículo con la firma «Garantido» en ol Presidente Santos que luego de compararse al doctor Carlos María Ramírez ledacde tor de «La Razón» con Acapulco Castro asesinado en Río Janeiro «frente a la Policía», se agregaba: «¿Por qué razón no duda se le mata como a ese miserable?» Y para que no quedara
—
zar
—
alguna de que oficial,
concluía
día en la
amenaza
la
el
articulista
de la Dirección diciendo:
misma
del diario
«Te esperamos
todo
el
Redacción de este diario».
Ya anteriormente sus
salía
colegas
de la
el
mismo
prensa
diario
oficial
independiente
«con
había
amenazado a
aplicaciones
de un-
güento de ñandubay». El
periodista
T.
VII
27.
ita,liano
Totó
Nicosía.
fuerte
esgrimista,
se
tn-
Anales de
418
más aún
caldear
de
cargó
En una
ambiente
el
caballerescos
retos
reiterados
universidad
la
a
de
con
sus
situacióa.
la
Nacionalista en
sus embestidas atacó al Partido
de
prensa
la
adversarios Üe
los
téf-
El joven don Juan Smith que un año antes había salido triunfante en un concurso de esgrima realizado en Buenos Aires, tomó la defensa de su partido, y en el acto recisangrientos.
rainos
bió
de su
padrinos
los
única condición falta
contrincante
de que
se
garantías con que se
de
aceptó
y
en
realizaría
el
bajo
la
dado
la
duelo,
Argentina
la
El duelo
luchaba en Montevideo.
fué a sable y terminó con una herida en la muñeca infligida al provocador. Fué ese un incidente que por espacio de varias horas absorbió
atención
la
Baste saber que «El
de
la
prensa
'ambas
en
Siglo» lanzó un
boletín
orillas
del
Plat?..
con los detalles del
duelo.
La Cámara de Diputados tuvo que ocuparse poco después de lance caballeresco entre uno de sus miembros y el mismo
otro
periodista italiano.
brados ción
los
diputado "rehusó
el
duelo después de nom-
lo haría mediante el pago ce que ascendían las dietas hasta la ter-
de la renuncia contestó t[ue
suma de
la
El
padrinos, y habiéndole exigido sus colegas la presenta-
minación
'de
pesos
2,500
a
su mandato, dando con
ello
lugar a que la Cáma.:a
expulsara de su seno «por razones de impedimento moral».
lo
Más tranquilamente Pero no así editorial
en
el
corrió ef año 1884.
de 1885 que inició «La Nación» con liu violento
que luego de atacarse 'áoezmente a
el
los
redactores
«La Razón», «La Tribuna» y «El Hilo Eléctrico» por sus comentarios a un simulacro militar realizado en él mes de enero, de
se
agregaba:
«No dores
se
de
sorprendan, no se llamen oficio
si
su violencia y de
pide cuenta de
lengua y deformándoles las canalla protestará de
«Explosión de
la
después víctimas
los
insulta-
un día un militar ofendido en su honor costillas.
injusticia
canalla»,
su cobardía,
era
e
Es entonces que esa chusma
inocencia. el
lej
arrancándoles la
epígrafe
Miserable crápula.» de otro editorial de
mediados de año en que el oficialismo atacaba a los redactores de «La Razón», «La Tribuna» y «El Telégrafo» por su propaganda, política y financiera. Era una cadena de palabrotas que al propio Presidente Santos debieron repugnar, según lo revela una carta en que pedía al Director de «La Nación» que pusiera término a su
polémica.
La
Fiscalía
del
Crimen,
desempeñada en esos
momentos por
Anales de
universidad
la
419
funcionarios que respondían al régimen imperante, no se cansaba
perseguir
de
a
Cada
independientes.
periodistas
los
resonancia era materia de un escrito de acusación.
con
que
sucedían
se
innocuidad
ante las amenazas sidente Santos de
como
perfecta
la
prensa no
la
necesidad de calmar paiíseis
nuestras
las
que
frecuencia
retrocedía
de que era objeto, debieron persuadir la
«Entiendo que en ciosas
todo
acusaciones y sobre
las
procedimiento desde
del
de
editorial
Líi
Pre-
al
celo del Fiscal.
el
con instituciones tan liberales y prese le decía en mayo de 1884
—
—
debe dejar a cualquiera de los habitantes de derectho de juzígar como mejor le parezca y se
la le
Repiáblica
e]
antoje la per-
Por consiguiente, alguna acusación contra los diarios de la República por ataques a mi persona, le pido que la retire y deside ya le declaro que la prensa puede tratar mi personalidad como quiera y mejor le parezca, que no echaré mano ni de la ley de imprenta ni de cualquier otro recurso para del
sonalliidaid
amigo
mío,
si
Presidente usted
de
la
República
.
.
.
entablaida
tiene
más mínimo las apreciaciones o insultos relativos mi persona». «Desde ya declaro repetía en octubre de 188 5 que la prensa puede tratar como quiera y mejor le parezca mi perso-
coartar en lo a
—
nalidald.
—
que no eciharé mano ni de
ciaciones e
insultos
reflativos
de imprenta ni de
ley
la
cualquier otro recurso para coartar en
lo
más mínimo
apre-
las
a mi persona».
Antes de finalizar
el año 1885 pudo el Presidente Santos darun desquite mayor. Don Melitón González que había desempeñado la secretaría de la Legación Uruguaya en Londres
—
s»^
durante
la
negociación
do MonteTTídeo
—
del
contrato
de
construcción
publicó un artículo sensa«ional en
del
puerto
el
que de-
mostraba que la Legación había firmado varios contratos y pliegos no autorizados por el Cuerpo Legislativo, en virtud de los cuales se facTiltaiba a la casa contratista para extraer del
monto
de la emisión un millón y medio de pesos con destino a gastos preliminares; se alteraba en forma sustancial el texto relativo al
caifio
presa,
colector
de circunvaBación
hasta dejar indeterminado
si
que deWía construir era a la empresa o
la
aü
emEJs-
tado a quien correspondía realizar la obra; se establecía que las exproipiaciones recaerían sobre el Estado cualquiera que fuera f,u monto, en vez de recaer sobre los tres millones fijados como I-recio
de las obras, etc.
La Comisión Permanente
que
presidía
ei
coronel
Joajquín
Anales
420
ele
Universidad
la
Santos, liermauo del Presidente de la República, se reunió en
acto
después de pedir explicateiones
y
al
Ministro
sancionó una minuta que declaraba «traidor a
la
el
Hacienda
de
patria» al ex
Secretario de la Legación «por haiber violado un sagrado secreto del
fJstado»,
enjuiciar
a
que estimulaba al Poder Ejecutivo para que habían publicado los artír-.u^os
a la vez los
periodistas
señor González.
del
El Fiscal entabló en bién
fueron llevados
a
acto
el
acusación y en
la
cárcel
la
señores
los
el
a'cto
tam-
Albístur. Gil, Casa-
mayou, Bermúdez, Destéffanis, Pesce, Lecocq y Reyuaud. El doctor Juan Zorrilla de San Mavíln, director de «El Bien Púbiicc», buscó iiisilo en una Legación, y fué destituido por esa causa ded cargo de Catedrático de Literatura de la Universidad. «¿Qué res-
—
qué garantía decía el general Saintos al dar cuenta Comisión Permanente de su de'creto de destitución puede o'freicer ese funcionario al estafblecimiento de enseñanza de que forma parte y a los alumnos que el Estado le confía si por huir de deberes que todos los ciudadanos de su país deben cumplir pasa por encima de toda clase de consideraciones sociales y se ampara como un criminal vulgar perseguido por la justicia de la primera puerta que encuentra abierta?» Los representantes de la prensa se reunieron para protestar peto ni
—
a la
contra ción
«La ca
estas
lisa
los
prisiones
atentatorias
que
importaban
ley de
imprenta vigente
procedimientos y
responsabilidad
jurídica
el
de
—
decían en su protesta
orden de los
la
la vía
deroga-
acusados,
—
mar-
acusación así como
ya
Ministerio público, ya sea entre particulares. o
la
y llana de los procedimientos de la ley de imprenta.
proceda E/1
ésta
la
del
jurado popular'
ordinaria con arreglo al Código de Procedimientos, son
sus términos y preceptos. Ni uno ni otro términos se han cumplido en la prisión de nuestros compañeros de la prensa. Esas se han realizado por orden judicial ab - irato. sin el procedimiento y garantlías jurídicas que la ley manda. Resulta de esto una infracción de la ley e injusticia notoria cometida contra el derecho público, así coono un atentado contra lais ga-
prisiones
rantías individuailes;
actos que coilocan a la sociedad en peligro
por los hechos consumados como por la reproducción de ellos que pueda originarse. En nombre, pues, del orden, la setanto
guridad individual y el respeto a las leyes protestamos enérgicamente como miembros de la prensa contra esos actos, apelando al fallo superior de la Nación y a su justicia soberana.»
Anales de
mismo Santos
El
Fiscal
el
obtuvo
debió
Crimen,
del
de
Uiüvcrsidad
la
421
hecho es quo
sentirse
avergonzado.
acuerdo
con sus instrucciones,
El
pidió
y
sobreseimiento en esa ruidosa causa.
el
mismo año
Corresponde a este
empastelamiento de
el
los
ta-
de «El Bien Público» por un hombre que penetró en ellos
lleres
a raíz de la salida de los -operarios sin dejar rastros reveladores df/l
A
origen
motivos del atentado.
y
principios
del
Quebracho,
que
el
de 188&, durante los preparativos de el
doctor Ángel
Ploro
Costa
la
publicó
revolucióji
un artículo
Gobierno castigó de inmediato haciendo encerrar a di3ho el Cuartel del 5.° de Cazadores. El doctor Costa se encargó algún tiempo después de referir las torturas sufridas. Fué
ciudadano en
en un
encerrado
donde se
vuelta a su calabozo
quien daga en
aunque
sin
tJeinta
y
Con
A
notificó que Iba a morir y que "podía escribir a su ía-
le
De
milia.
inmundo donde había cuatro leones y media noche fué conducido a la Mayoría
calabozo
dos tigres enjaulados.
mano
herirlo.
tantas
le
Y
en
el
la
mismo
sobre
calabozo
horas sin recibir agua
propósito de evitar
el
Gobierno, en
precipitó
se
él
un asesino
estuvo amenazando durante largo tiemp>:»
:ii
publicaciones
continuó
durante
alime-.itos.
análogas
prohibió
<-l
víspera del pasaje del ejército de Arredondo, dar
«noticias ya de carácter político ya de sensación)/, bajo apercibimiento de clausura inmediata de los establecimientos tipográficos
por donde se hubieran hecho las publicaciones respectivas.
A
mediados del mismo año, terminado ya el mandado presidende Santos, pero encontrándose éste de nuevo en el gobierno ccmo Presidente del Senado en ejercicio del poder ejecutivo, "e cial
presentó
el
Ministro de Italia señor Galletti Carabiagi denunciando
que un diario de Buenos Aires había lanzado contra varios diplomáticos «soeces calumnias» y que esas calumnias «habían sido reproducidas y comentadas más o meaos maJiciosameute» por los periodistas
de Montevideo.
Pedía
al
^Gobierno
que iniciara juicio
contra dichos periodistas, alegando que los diplomáticos ultrajador
—
no estaban en condición de defenderse. «Y este deseo agregaba esta esperanza la manifiesto no sóio en mi nombre sino en el de todos los italianos que aquí residen y que están justamente irritados sin distinción de clase o de partido contra los viles calumniadores de uno de sus representantes universalmente estimado, universalmente querido (referencia al Duque de Licignano,
—
antecesor de Galletti Cambiagi).
El
general Santos
ordenó en
el
acto
la
prisión
de los s.^ñores
José Batlle y Ordóñez Redactor de «El Día», Ruperto Pérez Mar-
Anales de
i2)
la
Universidad
«La Razón», Carlos Garet Redactor de «La Dura Redactor de «El Bien», Juan Fleches Redactor de «La EJspaña», y José Mellado Redactor de «La Colon-a Española»; y al comunicar el hecho al Juzgado de¡ Crimen de'úa en su nota el Ministro de Gobierno general Luis Eduardo Pérez: de
Redactor
tíuez
Franca»,
No
Francisco
se trata de
un abuso de
la
libertad de escribir sujeto
a
la
de imprenta que no contempla hechos de esa naturaleza, sino de un delito que la legislación de otros países incluye entre los que afectan la seguridad del Estado o el Derecho de Gentes. ley
Los periodistas
se
apresuraron a publicar una protesta contra
esa violación flagrante de la ley dé imprenta y de las disposiciones constitucionales relativas a la libre manifestación del pensa-
miento, en la que también hacían constar que habían sido colocados entre los reos de los delitos más atroces, cosa que no se había hecho con los
Pero en que
el
la
mismo torturadores de
cárcel habrían quedado
general
Santos k^uería congraciarse con
liana y a la vez
castigar a la
prensa de
Diplomático no hubiera resuelto pedir fué suscripta esta
ción
Volpi y Patrone.
durante largas semanas por-
el
Inglaterra, Argentina, Estados Unidos, Brasil,
lidades a que esta
Capital,
—
si
el
sobreseimiento.
vez por los Ministros
«Después de tomar en consideración
Cancillería
la
oposición,
de
Italia,
Ita-
Cuerpo
La
peti-
Francia,
España y Paraguay.
decían
—
las
responsabi-
han sido sometidos los redactores de los diarios de hemos resuelto unánimemente interponer nuestros
buenos
oficios
mande
relevarlos
a favor de
la
de los presos y suplicar
al
Gobierno que
acusación y los haga poner en libertad».
Y
el general Santos -que ya no tenía pretextos para el encarcelamiento resolvió adherir a la gestión de los diplomáticos y pasar los antecedentes al Juzgado del Crimen, quedando así terminado
incidente.
el
Contra
el
rtmrio
"La Libertad", órgano de
los
diputadcs de la
niinoria.
En ría
agosto de 1886 hubo una reunión de diputados de la minoindependiente con asistencia de los señores José Román Men-
doza, Antonio
María Rodríguez, Juan Idiarto Borda, Benito M. CuPedro E. Garve, Alberto J. Munilla, Juan J. Lacaze. Ja''• cinto de León., Isidro Viaña y Augusto Serralta. en la qus se solvió fundar un diario colorado independiente con el título ii(^ ñairro,
<sLa
Libertad».
Anales de
la
aparición
Rodríguez uno de saje a la
según del
ción
desmembración
la
nuevo diario;
redactores
Je
menun aviso amis-
se trataba sólo «de
grupo parlamentario
coronel Rodríguez era que
sus
trató
noticia y
la
Secretarios de la Presidencia. Siegún su
los
a evitar
el
423
nuevo diario por intermedio del coronol
del
Comisión Permanente
destinado
toso
Pero
Universidad
Santos se alarmó mucho con
general
El evitar
l'j.
que
había
trasmitido
1
Presidente no permitiría la publica-
el
«La Libertad» llegara a aparecer como traidores a la patria; quo
si
tratados
serían
Partido Colorado».
del
que
lo
aunque había tolerado a la prensa de oposición hasta la licencia estaba resuelto a emplear hasta el cuchillo con los diarios colorados de oposición; que fei el doctor Mendoza y sus compañeros' tenían
algún agravio
Santos estaba dispuesto a hacerse
general
el
debiendo advertirles que si la que asomaba tenía por objeto combatir su personalidad después de haberlo soportado (uatro años, por otro? cuatro años
pedazos
con
cualquiera de
ellos,
oposición
más tendrían que
soportarlo.
El hecho es que los diez diputados desistieron de en
la
publica-
de «La Libertad» por falta de garantías, y se embarcaron
ción el
El
Buenos
acto para
general
Santos
Aires.
pasó
entonces
todos
antecedentes
los
del
Comisión Permanente, con un mensaje en que pedía que fuera convocado extraordinariamente el Cuerpo Legislativo para que se le sometiera a juicio político si era culpable y en asunto a
caso diez
la
contrario
para
que fueran expulsados de
la
Cámara
loa
diputados calumniadores.
La Cámara Je Diputados declaró que no procedía
la
forma-
ción de causa y destituyó a los diez diputados causantes del inci-
dente alegando que habían hecho abandono de sus bancas.
Kl balazo del teniente
Oi'tiz.
—
En el curso de ese mismo mes de agosto pocos días después del zarpazo presidencial a los diputados de la minoria teniente
ei
Gregorio
general Santos en
el
Ortiz
momento que
para asistir a una función en comitiva
la
esa
oficial
misma arma
a
y
descerrajaba
por
la
el
su
sobre
el
éste descendía de su carruaje
Teatro Cibils, y perseguido por se suicidaba con ayuda de
Policía
pocos pasos del Teatro, en
calles Piedras y Treinta
—
revólver
la
esquina de las
y Tres.
Dos clases de heridas hábia recibido
el
general Santos según
Anales de
424
ei
informe de
bes en
la
la
los do'Ctores Vidal,
universidad
Rodríguez, Boscli y Briau, arriel agujero de entrada de
cara y en la cavidad bucal:
una bala
ordinaria y cuatro
cónica
producidos
arrancamientos
por
la
desgarros,
explosión
pronóstico era reservado y las heridas ceptibles de reparación
muy
dilaceraciones
o
proyectil.
El
del
graves aunque sus-
«con las deformidades consiguientes en
un tiempo que no podía precisarse». Terminaban su informe los médicos estableciendo que el general Santos al ser herido había pedido que no se hiciera daño a su heridor. Algunos días antes del suceso que narramos el teniente Ortiz había escrito una carta confidencial al Director de «El Día» don José Batlle y Ordóñez, en 3a que luego de advertirle que sólo lo conocía por su diario y por las verdades que en él estampaba, le decía que era descendiente directo de Juan Ortiz, uno de los
Treinta y Tres Orientales, y que tenía el propósito de matar a Santos, porque estaba persuadido de que la continuación de su
gobierno hasta podía poner en peligro nuestra misma nacionaLa carta respondía al propósito de promover el levan-
lidad.
tamiento de una suscripción. Numerosos ciudadanos fueron arrestados desde los primeros Director de «El Día» don José Batlle
momentos, entre
ellos
y Ordóñez.
Director
Uno de
y
el
el
de
los dos diarios oficiales
«La Tribuna» don Emilio Lecocq. decía que er.a, «La Nación»
—
—
—
que había movido el brazo de Ortiz. Y el otro en donde había levantado su carpa el grupo «La Situación» de jefes y oficiales que defendía al Presidente Santos por la prensa, acusaba directamente a los redactores de «El Día», «La Razón» y «La Tribuna»; decía que Santos había perdonado a los revolucionarios pero que la vindicta pública no podía perdonar; que era necesario proceder aquí como se procedía en Norte la
prensa
la
—
América, agarrando y colgando a los bandidos; que a todos «esos el plazo de ocho días para el pedido de
crápulas» les señalaba satisfacción,
en Dia»^
bajo apercibimiento
dondequiera que hacían una excepción: se
les
de aplicarles la ley de Linch
Con el Director de «El daban 48 horas para com-
encontrara. sólo
le
parecer.
El Presidente de la Cámara de Senadores, exteriorizando el Bentimiento de sus colegas, publicó una protesta en que decía
que era vergonzoso para cualquier hombre o colectividad polialcanzar victorias por tales medios. Más expresiva era todavía una protesta suscrita por centena-
tica
les de personas entre las
que figuraban muchos .legisladores.
Árlales de la universidad
—
«Un asesino
decía
—
425
acaba de alzar su mano aleve sobre
persona del benemérito jefe del gran Partido Colorado, sobre primer magistrado de la República, el capitáji general don
la el
Máximo
dando cumplimiento
Santos,
así
a
las
de
instrucciones
miserables que vencidos y perdonados por la sublime magnanimidad en los campos de batalla, pagan la deuda del Quebra-
loá
cho
armando
noble,
de un instrumento para que ultime al abnegado ciudadano en cuyas hermosas y
brazo
el
patriota, al
al
relevantes cualidades la patria cifra su venturoso porvenir.»
No
llegó
amenazas
caso felizmente
el
contra
evidenciado que
el
de
que se hicieran efectivas
hombres de
las
Pronto quedó teniente Ortiz había procedido por su cuenta
los
oposición.
la
que no era el brazo ejecutor de ningún grupo de conjurados. Por otra parte el santismo se derrumbaba y su jefe en vez de recurrir a los actos de violencia a que lo empujaban sus adeptos, resolvió inclinarse a las fórmulas de concordia, únicas y riesgo y
que en esos momentos podían sah'arlo a él y salvar a su país. Ocho días después del atenta/do se dirigía efectivamente el Presidente Santos al Juez de Crimen doctor Joaquín del Castillo,
para pedirle a terminación del proceso.
«Dado
de mi vida política
los precedentes
—
le
decía
—
las
garantías de que he rodeado a todos durante mi gobierno y aún
momentos
en los de
la
difíciles
dado
República,
en que llegó a ser perturbada cultura
la
de
nuestro
país
honestos y patrióticos que deben perseguir los campo de la política militante y dado por último altivo pero siempre noble de los orientales, yo no
la
pa:¿
y los anhelos partidos en el el
carácter
puedo admitir
que en tan nefando atentado haya cómplices conscientes entre mis conciudadanos.» Y el sumario terminó rápidamente con el sobreseimiento, de acuerdo con un dictamen del Fiscal del Crimen según el cual el
teniente Ortiz no había tenido cómplices y había actuado
como
único y exclusivo autor del atentado. La nota de Santos, datada en la víspera del aniversario de de
declaratoria
los
de
del
Ministro
Jefe.s
Político?,
una circular Pérez a
Sala
la
la
ño
la
complementada por Gobierno general Lui3 Eduardo
Florida,
fué
en que les decía que no había necesi-
dad de ejercer vigilancia alguna; que el atentado de Ortiz careantecedentes; que en consecuencia ?1 Gobierno responsabilizaba a los Jefes Políticos i)or cualquior transuresión que se c -metiera contra la seguridad, la li])ertad y la propiedad do todos cía de
los habitantes,
sin
excepción alguna.
Anales de
426
Universidad
Ja
caipinteros catalanes.
J^os
La campaña contra no
yufc
diarios independientes
los
como
interrupción
sufrido
liabía
de Montevideo,
demuestra
lo
el
se-
cuestro de las ediciones de «La Libertad» diario de caricaturas
y de «El dactores
Quebracho», complementado de
última hoja
esta
a
con
de
raíz
de los
arresto
el
circular
la
del
re-
general
Pérez que acabamos de reproducir, recrudeció excepcionalmente en
transcurso del mes de o-ctubre.
el
—
decía en las coDía», «La Razón» y «La Tribuna» lumnas de «La Situación», el grupo de militares que asumía la no cambian de tono, habrá que defensa del general Santos Si
<
—
proceder
al
linchamiínto
que
hssy ni leyes ni juicios
dóñez, que era
el
de
redactores,
sus
a
que
no
Don José
los castiguen.
más amenazado por
atento
la
Batlle y Ormazorca, tuvo tiempo
de emigrar a Buenos Aires, donde los orientales allí residentes le entregaron un álbum recordatorio de su valiente actuación peEmilio Lecocq, Director de «La Tribuna», riodística. Pero don
alcanzado por los sicarios, que
fué
golpes de garrote hasta
había publicado
la
dejarlo
voltearon en
lo
El
sentido.
diario
se trataba
permanente, dijo que
pinteros catalanes a quienes
I>íi
sin
la
calle
a
en que se
de UJios car-
señor Lecocq debía una cuenta!
el
nueva ley de impi-enta.
Los ataques y atropellos del oficialismo estaban destinados a la sanción de la nueva ley de imprenta que el Presidente Santos había resuelto obtener del Cuerpo Legislativo. fa'Cilitar
«No 1SS6 de
la
es posible permitir al
—
recabar esa sanción
ineficacia
práctica
cubriendo por más
decía a la
Asamblea en octubre de
que
impunidad, consecuencia de imprenta, continúe
—
nuestra ley
de
tiempo
desahogos y
cesos y desmanes de todo género
en
la
la
como
amenazas personales, exque se han producido
los
prensa con sorpresa de nuestra sociedad... No es posible que la diatriba y la invención lleven diariamente al
permitir
No es posible perla alarma y la zozobra. mitir que con la propaganda de fingidos temores se procure des-
pueblo trabajador poblar nuestra Cinco parar,
días
discutir
dente Santos.
fértil
escasos
.
.
campaña». bastaron
y sancionar
la
al Cuerpo Legislativo para premordaza que necesitaba el Presi-
Anales de
derecho
«El
de
apreciar
decáa la nueva ley
—
publique dentro de
la
Universidad
la
cuestiones
la«
427
políticas
del
—
país
en cualquier hoja, folleto o libro que se República, pertenece exclusivamente a sus
ciudadanos naturales o
Los extranijeros que contraanterior serán extrañados del territorio de la Repxiblica por el término de dos años previa sentencia de Juez competente. La imprenta por donde se edite un diario, revista, folleto o libro que sea abusado quedará afectada al pago de las conldenas a que diere lugar el juicio iniciado. Caso de no aparecer el autor de la publicación responderá solidariamente e'l dueño de la imprenta. Declarada acusable la publicación, se librará orden de arreisto contra el autor y embargo de la imprenta en el caso de tratarse de delitos convinieren
legales.
diSíposiciones
las
.
.
.
.
inciso
del
.
.
.
tra la patria, contra el crédito nacional o Si
fil
delito
fuera
contra
.
contra
la
sociedad...
esas medidas
particulares
sólo
se
adoptarán después que recaiga condena de primera instancia Para obtener la excarcelación bajo fianza será menester que .
ésta
llsgue
.
.
dos mil pesos».
a
Dos diputados más adictos a Santos habrían querido apretar más aun los resortes, según lo revela esta fórmula que encontró alguna resistencia y que por eso fué dejaida de lado: «La dirección, redacción y colaboración de cualquier hoja o folleto que se publique dentro de la República estará exclusivamente a cargo de ciudadanos naturales o legales, previa fianza de cinco mil pesos oro sellado o valores que tal suma representen. Los infractores a esta disposición serán expulsados del territorio de la República no pudiendo regresar a él durante el término de diez años, perdiendo también el valor de la fianza/>. El diputado don Carlos Gómez Palacios, que se había destacado por el radicalismo de sus opiniones contra el proyecto, elevó renuncia de su banca al cerrarse los debates y proclamarse la
sanción de la ley, dando con ello lugar a que
personas que ocupaban le
sacaran en andas hasta
Gravo
La garla,
crisis
iníiiisti>riiil
a
los
Ministro.-;
la
(jiif
niouslruosa ley estaba pi)r(|ue
la
barra en esos momentos
la
Plaza
vivaran y
Constitución.
da origen
dictada.
treintena de lo
v\
cúmplnso do esa
ley.
Pero era imposibl? promul-
que debían ponerle
el
ciimplase negá-
banse a hacerlo. El primero en renunciar fué
el
.Ministro
de Gobierno general
:
Anales de
428
Vniveí sitiad
la
Eduardo Pérez. «Yo entiendo
I.uis
—
—
en su nota
decía
que
que autoriza aquella promulgación, no ronque una ley semejante viola en mi concepto lo« preceptos fundamentales de nuestra Carta Política, desde que coarta la
debo suscribir el decreto
pensamiento y destruye de un solo y rudo golpe de libertad proclamada por los proceres de la inde-
libre e-misión del hi
tradición
pendencia nacional». «Yo no aguanto imposiciones en la
respuesta
En
Santos
seguida renunciaron
do que
nueva
la
ley
el
—
puesto que ejerzo»
fué
aceptar la renuncia del general Pérez.
al
doctor José Ladislao Terra, dicien-
el
«.pesaría
sobre
el
como una capa de
país
doctor Lindero Forteza, invocando su «inconstitucior.alidad»; y el doctor Manuel Herrera y Obes, para quien «esa maladada ley, producto sólo de cabezas voicanizadas por el fuego
plomo»;
el
de las pasiones, traerlía al país males sin cuento y de funesta e incailculable
A
em
trascendencia
su
presente y en su futuro». Santos manifestan-
los tres Ministros contestó el Presidente
extrañeza que le causaba
hecho de que ninguno de
do
la
le
hubiera formulado observaciones antes de la presentación de
el
ellos
sus renuncias.
Es que al
ley.
la
reacción recién se produjo al quedar sancionada
llegar el
momento de
asuanir ante
la
país la responsabi-
ell
lidad de su cumplimiento. El pro.pio Presidente Santos, que había
estado empujando a su mayoría parlamentaria para que yecto marchara a tambor batiente, no pudo
menos de
crúpulos en ese instante, como lo prueba su mensaje a
blea pidiendo
eliminación
la
escritor extranjero
fué votada por subsiguientes,
de
los
artículos
el
pro-
sentir es-
Asam-
la
que prohibían
al
ocuparse de temas políticos, eliminación que
ambas Cámaras dentro de las veinticuatro horas quedando en definitiva redactadas las disposicio-
nes sustanciales de la ley en esta
fornif:
El autor de una obra, diario, periódico u hoja suelta es responsaible la
del
delito
que comieta y subsidiariameoite
el
editor
publicación, gerente o propietario del establecimiento
fico.
de
tipoigrá-
thaciéndose efectivas en tal caso las responsabilidades en los
bienes 'de éstos...
Las publicaciones anónimas serán perseguidas
por la Policía y sus autores entregados a Juez competente.
sada una
publicación
de la patria,
el
si
crédito
el
delito
fuere
contra
la
.
nacional, la sociedad o el cuerpo
mático, se librará orden de arresto contra
el
.
Acu-
independencia
autor;
si
el
diplo-
delito
fuere contra particulares no se librará arresto hasta que recaiga
Anales de
condenatoria
sentencia
.
.
Para
.
429
Universidad
la
obtener
la
bajo
excarcelación
Queda
fianza será necesario que ésta llegue a dos mil pesos...
periódicos y hojas sueltas adoptar el título de de representantes o defensores desintereses extraños, pudiendo sin embargo usar el nombre de cualquier nacionalidad. Los Jueces dictarán sentencia de trámite dentro de proiiibido
.
los
a
colonias o
el
.
veinticuatro
horas,
dentro
tivas
interlocutorias dentro
de
días
tre^s
defini-
j^
diez días.
-de
La conciliación
política
de novienibi'e de
La situación
política
era,
muy
pues,
188(>.
grave
al
concluir el
mes
de o'ctubre de 18>S6.
Presidente
'El
Santos estaba recluido
en su casa
por efecto
de la terrible herida recibida en agosto.
La Cámara de Diputados había
sufrido
una formidable sacu-
dida con la emigración y cese de la minoría que presidía
José
el
doctor
Román Mendoza.
La campaña contra la prensa sublevaba al país entero. La renuncia del Ministerio, por la forma en que se producía, originaba una trisis insoluble desde que no era posible encontr-ir ciudadanos de mediana significación que arrostraran la responsabilidad de llenar las vacantes que dejaban el general Luis
Eduardo
doctor Manuel
Herrera
Pérez,
el
doctor José Ladislao Terra y
el
y Obes.
Era a la vez angustiosa la situación del erario público. El 4 de noviembre de 1886 decía un año después el general Tajes a ía
—
—
Asamblea sólo había en el tesoro G,552 pesos; la renta -ie aduana disminuía de un modo tan alarmante que sólo una vez alcanzó su producto mensual a 477,000 pesos; el crédito era nulo; había que pagar en noviembre 593,710 pesos por concepto de presupuesto
y
679,972
por
concepto
República estaba al borde de pesos por las listas civil
la
de
militar y
y
de
intereses
bancarrota; 648.258
las
deudas;
la
adeudábanse 738,174 por obras públicas,
y gastos extraordinarios. Sólo habían corrido cuatro concluía el mensaje meses del ejercicio 1886-1887 y ya ol déficit era de 1.386.433 pesos y por ese camino el descubierto haliquidaciones
—
—
b'-ía
llegado
al
finalizar
el
ejercicio
a
4.159.000
peso?.
Los orientales resid'ntes en la Argentina que no habían cesado de pensar en movimientos revolucionarios, intensificaban sus trabajos
en
esos
momentos con
la
colaboración de
los
diputados de
Anales de
430
Universidad
la
minoría que acababan de llegar a Buenos Aires obsesionados
la
con la idea de voltear a Santos.
Fué entonces, bajo
la presión
de todos esos factores, que
neral Santos se resolvió a transigir con
a
nisterio
los
doctores
Pedro Ramírez,
José
si
país ofreciendo
el
iC6-
Mi-
el
Juan Carlos Blanco
y Aureliano Rodríguez Larreta.
La primera contestación
don Teófilo Díaz, fué negativa. No de
distanciamieutos personales,
políticos.
Santos
ü
se trata
de
sino
prevalecería,
eso
y
conciliación
s-3r
general Pedro de León y
el
mis ideas prevalecieran,
Si
Ruien
aceptaríamos. «La la
José Pedro Ramírez al
doctor
del
consultado en nombre de Santos por
— decía
en su carta
sería
yo
ni
el
general
sólo
es
posible
^
antagonismos no el general
radicales y
Santos
—
yo
ni
a/gregaba
lo
—
condición de aproximarse realmente todos los ciudadanos por reacción generosa de los que están en
ticas
sinceras
el
de nuestras instituciones,
error hacia las prác-
único terreno
en que
todos nos encontraríamos bien y en que todos estaríiaimos habilitados para servir al país en la medida de nuestras aptitudes.»
Habiendo cretó
insistido
el
doctor Ramír-ez
el
Blanco y Rodríguez ley
irían
de imprenta últimamente de no ejercitar más
sanicionada la
la
y
con-
y los doctores
él
Eran
Ministerio.
al
como primeras medidas
presidencial
propósitos
sus
condiciones en que
Larreta
libertad de la preinsa, y líi
general Santos en las
estas:
abrogación de el
compromiso
acción fiscal por supuestos
abusos
de la libertad de escribir; observación estricta de la Constitución y por consiguiente del precepto que proüiibe la reelección de los Presidentes, debiendo precederse el 1." de marzo de
1SS7
a
la
elección de nuevo
hombres para
mandatario; proscripción abso-
remonta del ejército de linea; renovación del personal de las Jefaturas Políticas en forma de hacer prá;Cticas las garantJías de la campaña y promover la reluta de la caza de
patriación de los emigrados;
abandonando
la
regularización de la marciha finan-
régimen que
cureo de los años Hacienda pública, realizando economías y derogando el decreto que centraliza todas las rentas en Montevideo y priva a los departamentos de campaña de recursos que les pertenecen; reincorporación de todos los jeíes y oficiales dados de baja por razones políticas. Contestó el general Santos aceptando esas bases, pero con algunas consideraciones encaminadas a justificar su conducta anterior de gobernante y a dejar libradas las soluciones al nueciera
el
últimos ha agravado
la
situación de
en
la
el
Anales de
vo
Ministerio.
Universidad
Ramírez
doctor
El
la
insistió
eu
431
aceptación lisa
la
y llana de sus condiciones obteniendo entonces explicaciones que
ponían término a
controversia
la
forma enteramente
en
satis-
factoria para los ciudadanos que eran llamados a compartir las
lespon-sabilidadeB
gobierno
del
con enorme ansiedad
y para el país que aguardaba comienzo de una nueva y fecunda era
el
política.
Hubo sólo
raíz
de
ese
comparable
al
de
a
Guerra Grande
la
—
desenlace octubre
una explosión
de
entusiasmo
— que 'puso término — que puso término, a
de 1851
y al de abril de 1872
.a
la
revolución de Aparicio.
El comercio de Montevideo cerró sus puertas el día del juramento del nuevo Ministerio constituido por los doctores Ramíírez, Blanco y Rodríguez Larreta que desempeñaban respectivamente carteras
las
de
Gobierno,
Relaciones
Pública, por don Antonio María
Exteriores
e
Instrucción
Márquez que entraba a desemgeneral Máximo Tajes que venía
peñar la de Hacienda, y por el ocupando el Ministerio de Guerra desde los primeros días del gobierno de Santos; y promovió una gran manifestación popular para adherir decía su programa a la política de pa-
—
triótica conciliación
—
iniciada por el Presidente del Senado;
para manifestar las simpatías a que eran acreedores por su conducta los nuevos Ministros; para declarar como apremiante exigencia de patriotismo y como base del éxito en el poi-venir el cumpli-
miento enérgico y horizontes <
idad
abría
de la
del
fiel
para
la
pacto
de
coexistencia
concordia de
los
que tan vastos
partidos
y
la
feli-
República.
Otra gran manifestación encahezada por los estudiantes concurrió a felicitar al Presidente y a sus Ministros. «La patria de lo's
—
Treinta y Tres es
muy grande
—
dijo el generail Santos en esa oportunidad para que en ella no tenga cabida toda la fa-
oriental; tiene una historia demasiado gloriosa para que todos y cada uno de sus hijos aseguren el contingente de sus fuerzas a fin de hacerle ocupar el puesto y rango que le corresponde en el coutinente sudamericano».
milia
Bsas demostraciones se extendieron a los demás departamenporque en todo el país existía el convemcimieuto de que después de once años de gobiernos de cuartel y de subversiones tos
y adminislrativas, queda|l)a de nuevo en vigencia el de las instituciones y asegurado el resurgimiento de fuerzas económicas coimprimldas en el largo paréntesis que
pclíticas ré'jrimen 1;!';
permanecía abierto desde
el
15
de enero de 1S75.
Anales
432
y
ie
la
universidad
a raíz de la conciliación renuncia el general Santos y es ele. gido Presidente de la República el general Máximo Tajes.
La
conciliación tuvo lugar el 4 de noviembre de 1886. Catorce
días después el general Santos presentaiba renuncia de su cargo del Senado en ejercicio del poder ejecutivo. Deque sus médicos le prescribían el reposo más absoluto y una completa abstención de trabajos mentales, y agregaba que tenía el íntimo convencimiento de que la evolución política llevada a cabo por él y acogida con inmenso júbilo por la opinión pública alejaba hasta el más ligero temor de que la paz y
de
Presidente
cía
en
ella
orden en el país pudieran ser turbados. Juntamente con su renuncia de la presidencia del Senado envió a sus Ministros una nota colectiva en que les decía que su eiifermeidad al corazón y las heridas que tenía en el rostro le obligaban a alejarse por completo de todo trabajo. «Dejo la primera maigistratura, seguía diciendo, con la conciencia trancuila de haber hecho por el bienestar de mi patria cuanto me ha sido dado y en la seguridad de que el ciudadano que venga a reemplaízarme seguirá la misma política iniciada por mí, que reconoce por base la conciliación y que en torno suyo agrupará el
o bien
a nstedes cuyas
luces
y
hombres de su misma comunión
patriotismo son innegables, política,
o
a
a fin de que todos los
partidos tengan la justa y legítima participación en la cosa pú-
y bienestar de la patria.» renuncia «estimando en toda su im-
blica y contribuyan al engrantde'cimiento
La Asamblea aceptó
la
portancia los servicios prestados» por
el
general Santos y con-
cedió a éste la venia necesaria para alejarse del país antes del
vencimiento del año de residencia prescripta por la Constitución. La administración del general Santos, sumando al cuadrienio conistitucional las dos presidencias nominales del doctor Vidal, h.nbía
durado
seis
años y ocho meses, desde desde marzo de 1880
hasta noviembre de 1SS6.
<
CAPÍTULO
VIII
Movimiento económico
Población de
la
Repíiblica.
cálculos de la Dirección de Estadística la República en 187i3. El ttnfia 52 0,51316 habitantes en 18 8'3 contra 450,0'00 pero explipobre cifra almas, aumento del decenio era de 70,000
Según
los
caMe dentro de el
angustiosa crisis política en due se debatía
la
país.
El censo de Montevideo. El general Santos se propuso en 188 2 levantar el censo general de la República y pasó con eise objeto un proyecto de ley a la Asamblea. Pero habiendo demorado la tramita-cióu de ese proye-cto encomendó a don Nicolás Granada el levantamiento del obteniéndose censo parcial dea Departamento de Monteivideo, dicha operación, que fué realizada en setiembre de 18'8.4, la cifra de 164,0 2 8 habitantes. Véase cómo se clasificaban los habitantes del Departamento
como resultado
de
de"
Montevideo:
Por sexos
:
Varones
89,240
Mujeres
74,788
Por nacionalidad
:
Varones orientales
43,453
Mujeres
^l'i'd^
»
91,247
Varones extranjeros Mujeres extranjeras
•
45,78
2"i9°^ 72,781
T.
VII -28.
Anales Je
434
En
la
Universidad
población extranjera sobresalían los italianos
españoles
los
la
(22,122),
los
franceses
(7,383)
y los
(32,829), argentinos
(4,52i8).
Por periodos de edades
Menores de 1 año
1
De »
3,210 3,410
2
años
.
3
»
.
.
4,292
»
4
«
.
.
»
5
»
.
.
»
tí
4,525 4,641
4,695
a 14 años
35,476
*
15
»
30
»
52,365
^
31
»
50
»
38,585
»
51 años arriba
Entre los
año
.
los adultos
niños
10,960
había 52,786 que sabían leer y escribir y entre que concurrían a las escuelas públicas y
Labia 23,451
particulares.
Había en todo das
De
por
25,925
el
departamento 18,04S casas que estaban habita-
familias
compuestas de 158,035 individuos.
esas casas 16,12i3 eran de un solo piso, 2,647 de dos pisos y
278 de tres pisos.
L \ POBLACIÓN TRABAJADORA.
Tomando Granada
a
la
los
población de 15 años arriba clasificaba así el señor trabajadores:
Anales de
1
la
Universidad
primas
Producción de materias
[
435
Urbana
Rural
Total
hacen-
dados, agricultores, pescadores, barraqueros, etc.
)
509
2,965
3,474
14,109
2,329
16,438
•
•
2 Industrias 3
Comercio
6,780
1,273
8,053
4
Transporte
7,937
373
8,310
761
321
1,082
6,704
958
7,662
1,144
298
1,442
2,221
437
2,658
182
92
274
508
35
543
5 Propietarios (rentistas) 6 Personal
de servicio
planchadoras,
ros, lavanderas, 7
Defensa del país
sirvientes, cocine-
(
(
militares
)
etc.
)
(empleados).
8 Administración pública
.
.... .
9 Cultos
10 Jurisprudencia
(abogados,
escribanos,
procuradores, contadores, etc. 11
Profesiones
)
.
.
.
(médicos, farma-
sanitarias
265
36
301
12 Instrucción y educación
407
90
497
13 Bellas artes
314
21
335
céuticos, enfermeros
14 Letras
y ciencias
15 Profesiones
ingenieros, agrimen-
(
sores, periodistas
)
)
ambulantes
16 Jornaleros 17
Personal a cargo de otros
162
12
174
860
170
1,030
4,289
3,697
7,986
1,231
350
1,581
^íovimiento demográfico del Uruguay.
Durante pública
AÑOS
el
el
quinquenio
siguiente
1882
-
1886
tuvo
la
movimiento demográfico:
Matrimonios
población
de
la
Re-
de
Alíales
436
Tomando en cuenta
la
cálculos
los
Universidad
de
población y
la
el
promedio
anual de las cifras que anteceden establecía la Dirección General
ríe
que por cada grupo de mil habitantes
Estado Civil
de
Registro
había habido en toda la República Si^ nacimientos. La distribución por departamentos daba a la Capital el índice de 35 y al resto '/,'
país
del
de 42
el
'/¡-r.
índice de las defunciones
El
deo y de 17
La mortalidad de
5
1886
de 24
en Montevi-
",r
años abajo era de 3,419 en 1882, de en 1884. y de 4.782 en 1886. Un crecimiento
cinco
3.550 en 1883, de 4,141
como
continuo,
era en
en los departamentos de campaña.
'4,
se ve.
Véase la proporción de nacimientos inanimados y de menores de años por cada grupo de cien defunciones:
ANOS
En
28
35.47
ó.
49
39 47
1884
ó.
66
40 30
1886
4 20
41.46
la
hizo
viruela la
y
la
tisis
51,
129.
la
víctimas la
(450
fiebre
tisis
en Montevideo);
tifoidea
pumonar
981
y
el
(653
tifus
el
232,
en Monte-
laríngea 138.
1883 la viruela 42,
laríngea
621
escarlatina
bre tifoidea 175, las
el
demás
sarampión y fiebres 93,
la
la
escarlatina
tisis
12'5,
pulmonar 704
la
fie-
y la
96.
1885 la viruela 72,
teria
años
ó.
otras fiebres virulentas
En
5
1883
1882
En
de
1882
sarampión y video)
Menores
Inanimados
288,
la fiebre
el
sarampión y
tifoidea 245, la
la
escarlatina 102, la dif-
tuberculosis pulmonar y
larín-
gea 651.
Pero todo debiendo
ello
dentro de
advertirse
que
las
las
planillas con
papeletas
sin
diagnostico médico,
diagnóstico
ascendían
nada menos que a 3,681 sobre un total de 10,273 defunciones, y a cifras igualmente considerables en los demás años. Un informe de la 'Dirección del Registro de Estado Civil inserto en
1885
en
la
Memoria
del
Ministerio
diente al período 1885
-
de
Instrucción
Pública
correspon-
1888 asignaba a toña la República, por cada
cien defunciones, 21.90 Vr de partidas sin diagnóstico o sin asistencia
8.33
médica,
^..^l
de viruela, 7.32 de difteria, 3.61 de fiebre tifoidea,
de tuberculosis y 3.20 de meningitis tuberculosa.
Anales de
Véase
el
la
Universidad
437
movimiento de Montevideo considerado aisladamente:
ANOS 1881 1882 1883 1884 1885
1886
Matrimonios
Anales de
438
Movimiento
la
Universidad
inigi'atorio.
Establecen las cifras que subsiguen y
salidas de pasajeros entre
el
movimiento de entradas
puerto de Montevideo y los puertos
ei
de Ultramar y de 'a Argentina durante
decenio 1877-1886:
el
ULTRAMAR
ARGENTINA
Entrada
Salida
1877
6,168
6,376
12,207
10,583
1878
9,464
6,259
11,303
10,541
1879
10,710
7,009
15,027
15,288
1880
9,281
6,829
14,729
13,705
1881
8,336
6,339
13,600
14,930
43,959
32,812
66,866
65,047
10,116
6,179
17,382
19,762
11,086
6,089
15,076
17,698
28,882
Quinquenio
1882.
.......
1883
Entrada
Salida
1884
11,954
6,040
29,670
1885
15,679
6,729
31,281
30,048
1886
12,291
6,542
23,780
29,099
61,126
31,579
117,189
125,489
Quinquenio Durante
.
el
.,.
.
.
decenio entraron
al
puerto
de Montevideo con pro-
cedencia de Ultramar 105,085 pasajeros y salieron
un saldo favorable de Argentina (Je
184,05i5,
y
40,694.
salieron
Y
entraron
l'&0,o36
64,391
dejando
procedencia de
con
la
dejando un saldo contrario
6,481 pasajeros.
En liano
1885 arribó
«Matteo
al
Plata con procedencia de Genova
Bruzzo»
con
1,500
pasajeros
700
y
vapor
ita-
toneladas
de
el
bordo y por esa carga. Había habido algunos casos de Aires, ni en Río de en Buenos ni aquí, admitido causa no fué Janeiro, y tuvo que regresar al puerto de su procedencia en medio cólera
a
db las angusitias de los pasajeros condenados a seguir viviendo en foco de infección. Otro transatlántico América», corrió la misma suerte. aquel
italiano,
el
«Nord
439
A7ia¡es de la universidad
dinero remitido por los inmigrantes a su patria.
El
Nuestro Ministro en
Roma
don Pablo Antonini y Diez publicó
en 1882 un informe acerca de los fondos girados a Italia por los
inmigrantes italianos radicados en Tratábase
1^68-1880.
medio
Consulado
del
3.000,000 de
el
simplemente de
giros
hechos
Montevideo,
en
Italiano
Uruguay durante los
que
el
período
por
inter-
ascendían
a
pesos que se distribuían así:
Número de giros
ANOS
Su valor
en francos
7.144,572.32
1868-1872
21,507
1873-1877
23,996
6.263,225.95
ISl 8-1880.
14,065
1.158,840.00
59,568
14.566,638.27
En
la
estadística del señor Antonini no estaban
fondos girados por intermedio
tampoco
ni
La
los
conducidos
tle
los
computados
los
bancos y casas de comercio,
directamente por
sus
dueños.
edificación en Montevideo.
La Junta Económico-Administrativa de Montevideo rante
los
ANOS 1883
1884 1885 1886
años 1883-1886
los
Para
siguientes
edificar
permisos:
expidió
du-
Anales de
440
AÑOS
Universidad
la
Exportación
Importación
1881
17.918,884
$
$
Total
20.229,512
38.148,396
$
1582
18.174,800
22.062,934
40.237,734
1583
20.322,311
'25.221,664
45.543,975
1884
24.550,074
24.759,485
49.309,559
1885
25.275,476
25.253,036
50.528,512
1886
20.194,655
23.811,986
44.006,641
A
despecho de la acción disolvente de los factores políticos ema-
15 de enero de 1875, la capacidad económica del país había ido creciendo por efecto del aumento de la población y del impulso de las industrias nacionales. Lo demuestra este otro resumen del movimiento de los nueve años an-
nados del motín militar del
teriores:
AÑOS
Exportación
Importación
1872
18.859,724
$
$
Total
15.489,532
34.349,256
$
21.075,446
16.301,772
37.377,218
1874
17.181,672
15.244,783
32.426,455
1875
12.431,408
12.693,610
25.125,018
1876
12.800,000
13.727,000
26.527,000
1877
15.045,846
15.899,405
30.945,251
1878
15.927,974
17.492,159
33.420,133
1879
15.949,903
16.645,961
32.595,864
1S80
19.478,868
19.752,201
39.231,069
1873
La
,
revista sudamericana que dirigía en París don Pedro
Lamas
hacía notar en 1882 que la distribución del monto del comercio exterior la
entre todos los habitantes arrojaba en la República Oriental
proporción de 453 francos por cabeza, en la Argentina 179, en
Chile 126 y en
el
Braeil 71.
Nuestros principales mercados internacionales.
La
Inglaterra,
píiles
la
Francia,
el
Brasil,
la
España,
la
Italia,
los
Alemania eran en esa época nuestros princimercados de compra y de venta. A ellos enviábamos nuestros
Estados Unidos y
la
productos industriales y de mercaderías de consumo.
ellos
recibíamos
casi
todas
nuestras
Anales de
la
universidad
441
Véase en qué proporción concurrían a formar las cifras de nuestro
comercio
de
importación
1880
Inglaterra
1881
{.V')-
1882
1883
1884
1885
1886
Anales de
442
la
Universidad
1884
Bebidas
....
Comestibles
3.599,589
3.806,856
3.469,237
4.416,865
4.316,628
529,650
519,600
479,922
4.002,660
3.764,039
2.934,643
1.364,723
1.399,232
883,172
Géneros heclia
Materias
materiales
y
industriales
.
.
.
5.016,965
6.0V..G5::
4
5.209.924
5.283.231
4.093.488
$ 24.550,074
f 25.275,476
.
Varios
y
$
017, o65
20.194,655
cinco rubros en que la Oficina de Estadística clasificaba
los
nuestras mercaderías de
dades
1886
4.826,563
Tabacos y cigarros
Ropa
1885
exportación absorbían
otras
estas
canti-
:
1884
Animales
en
pie
1885
624,692
.
$
1886
762,255
$
656,246
Productos do ganadería
....
y saladero
Productos Otros
rurales
productos
23.336.420
23.462,518
302,537
633,797
976,041
384,232
313,904
393,968
111,604
80,562
50,466
.
.
21.735,265
Rancho y provisión de buques
24.759,485
$
Este nuevo cuadro refleja glones de nuestro
el
.
.
movimiento de
los
$
23.811,986
principales renlos
cinco años
.
1882
.
25.253,036
comercio de exportación durante
corridos de 1882 a 1886:
Carne tasajo.
$
Kilogs. 34.026,527
1883
1884
1885
1886
Anales de
Casi
todas las cifras del
la
Universidad
comercio exterior
miento de progreso que se venía operando bajo rro y del ensanche
de ello la
^e
situación
443
denuncian la
el
movi-
presión del aho-
la
capacidad productora del país. Si a pesar
del
mercado dejaba grandemente que desear
era por efecto de los factores políticos y financieros, que inclinaban desaliento cuando no a
las grandes alarmas. 1882-1886 nuestros saladeros exportaron 3.204,065 kilogs. de carne tasajo con destino al Brasil y 898.870 con destino a Lra Habana, úistribuídos así por años: ai
Durante
el
ANOS 1882 1883
1884 1885 1886
quinquenio
Al Brasil
Anales de
444
la
Universidad
ULTRAMAR
ARGENTINA
ANOS Entrada
1S81
1.171,755
%
Entrada
Salida
1.228,227
%
Salida
718,150
%
1.2i3'9,887
%
1882
2.222,308
1.385,029
699,482
1S83
1.360,043
2.862,709
2.348,a53
668,238
1884
4.736 853
6.864,615
2.266,341
1.274,763
1885
1.341,582
4.303,380
3.994,839
2.215,607
1886
873,744
5.210,706
4.015,267
1.519,972
La
444,576
estadística sólo anotaba entonces el metálico a flete declarado
en los manifiestos de carga y descarga y no todo y positivamente conducían los barcos.
iViiesti'o
De
].
con
terrestre
coiiiercio
el
el
oro que real
Brasil.
cuadros globales del comercio del Uruguay con
los
extraemos
las siguientes cifras relativas al
Brasil
el
intercambio realizado a
través de la frontera terrestre:
ANOS
Importado del Brasil
1883
Exportado
al Brasil
351,143
1
1884 1885 1886
Casi toda nuestra exportación estaba constituida en esa época por el
ganado vacuno destinado a
los
saladeros de Río Grande,
cuyo
valor era de 664,488. pesos en 1883, de 470,552 en 1884, de 499,840
en 1885 y de 510,817 en 1886, según ceptorías y
Subreceptorías y no
de.l
el cuadro oficial de las Removimiento efectivo realizado
dentro de una vasta zona 'fronteriza falta de vigilancia y estimula-
dora del comercio clandestino.
La
facilidad
ción Ellauri a
quedó limitado
del
contrabando dio origen durante la administra-
una reglamentación restringida en virtud de el
la cual
'comercio de tránsito fronterizo a las Receptorías
de Santa Rosa y San Eugenio y se impuso al comercio de Montevideo la obligación de 'presentar las tornaguías o sea la prueba efectiva leñas.
de
la
entrada de las mercaderías
en las aduanas brasi-
Anales de
Estudiando 1882
el
los
de
ef-ectos
Universidad
la
445
reglamentación
esa
hacía
notar
en
Inspector de Receptorías don Camilo Vila que nuestra an-
tigua corriente de tránsito había pasado al puerto de Buenos Aires
y a la costa argentina donde el comercio operaba sin trabas. Agregaba el mismo funcionario que durante la dictadura de Latorre se había intentado reconquistar el tránsito con
derechos
de
ayuda de una
tarifa
mercaderías
despa-
acordaba a las
que
diferenciales
departamento del Salto una rebaja del 50 % en la comercio de Corrientes y de Río allí el Grande, pero que lo único que se había conseguido era promover una gruesa corriente de mercaderías que luego de llegadas al Salto chadas para esperanza
el
de
retornaban a
localizar
demás departamentos de
los
la
República.
Habilitación del puerto de Maldonado.
Una
dictada por la Asamblea en 1884 autorizó la construc-
ley
ción de la
Aduana Ge Maldonado,
declaró libre
tránsito de mer-
el
caderías entre esa aduana y la frontera terrestre y acordó una sub-
vención de 300 pesos mensuales para estimular
navegación con
el
El vecindario de Maldonado, en
base a esa
ley,
movimiento de
el
puerto de Montevideo.
peidía
la
representación
que sirvió de
además exención de almacenaje durante un
semestre y habilitación de
la
Isla de Gorriti
para
el
establecimien-
de depósitos de carbón de piedra.
to
comercio interior por vía terrestre.
El
A
las Plazas
de Frutos de Montevideo y a
de Ferrocarriles entraron de 1883
la
Estación Central
a 1886 los siguientes productos
do los departamentos de campaña:
1883
JVúmero
Cueros vacunos
•
»
lanares
»
de corderito
....
Lana
>
Kilogs.
1884
1886
1885
243.483
266.984
369.303
258.490
2.026,593
2.231.683
2.389,039
2.502.729
141,314
173,960
280,314
519,211
20.682,750
15.433,141
18.101,026
19.971,393
•
1.105,277
1.054,219
423,130
453,600
Maíz
»
7. .390,250
691,110
14.125.523
14.700.572
Trigo
"
27.928.270
25.975.262
40.240,992
30.487.084
Harina
Para
la
movilización
•
de esos productos fueron utilizados
32,92o
Anales de
446
Universidad
bueyes y vagones en
de
carretas
la
f;U
1886.
Iil
nximero de patoiitables.
1884,
33,071
en
1885
y
33,629
La Sociedad de Economía Política de Montevideo publicó en un cuadro de los ramos sujetos a la Ley de Patentes de Giro en
1883
toda la República, y de ese cuadro que abarcaba llJiGl patenta'bleH
extraemos las siguientes cifras:
34 molinos
fi
48
»
»
426 acaparadores de frutos del
vapor.
pais.
viento.
68 registros y roperías,
199 atahonas.
120 abogados.
2 grandes diques. 1 fábrica 1
1
190 maestros constructores.
de extracto de carne
empresa de gas. »
»
120 escribanos.
500 procuradores.
ag'uas corrien-
100 médicos y cirujanos.
tes.
20 agrimensores e ingenieros.
9 empresas de tranvías. 2 bancos de emisión. 3
»
190 boticas.
descuentos y de-
»
3 teatros. 5 circos.
pósitos.
246 casas introductoras y
ex-
1
Un año
mayor
y
300 fábricas diversas.
bón.
50 graserias y saladeros.
75 barracas de frutos del país. »
por
menor.
78 barracas de madei'a y car-
153
plaza de toros.
849 almacenes
portadoras.
»
100 hoteles.
depósito.
después la Oficina
de
roas circunstanciada de todos los
Patentes publicaba una relación ramos gravados y a esa relación
pertenecen las cifras que subsiguen:
Anales de
la
Universidad
447
Departamento de Montevideo
Almacenes por mayor » al menudeo con despacho de bebidas
Almacenes
939
sin
despacho de bebidas
.
Acopiadores de frutos
Bancos Barracas de frutos Boticas
Casas importadoras y exportadoras Corredores de Bolsa
.
Cafés y confiterías Cigarrerías
Despachos de bebidas Mercachifles con carro sin
»
»
Mueblerías nacionales »
con mercaderías extranjeras
Mercerías Pulperías
Puestos de carne, verdura, Registros
etc.
por mayor
al
Roperías
Tiendas de géneros Zapaterías
Atahonas Barberías Carpinterías de ribera y obra blanca.
Embarcaciones menores del tráfico Fábricas de licores y aguas gaseosas .
Herrerías
Maestros constructores
Panaderías
Tambos Vendedores ambulantes »
de chucherías
Abogatlos
Médicos Procuradores
43
....
Los demás departamentos
98
Anales de
448
la
Universidad
3íoviiniento de navegación.
Durante video
y
expresa
el
a los el
quinquenio 1882
-
1886
entraron
demás puertos de nuestro
cuadro que subsigue:
al
litoral
puerto de Montelos
buques que
Anales de
vapores traían a Montevideo el
10.24
9r,
veleros
y los
la
el
esas
Universidad
9.35
%
449
de su tonelaje y llevaban
mismas proporciones ^aumentadas
eu un 30 %. De acuerdo con ello y previa deducción de los buques entrados y salidos en lastre o sin realizar operaciones las mercaderías descwrgadas y cargadaf en el puerto de Montevideo a la
llegada y a la salida de los buques subían en 1883 a 1.015,359
toneladas
métricas,
correspondiendo
585,219
a
la
navegación
de
ultramar y 430,140 a la de cabotaje; en 1884 a 1.312,396 torrespendiendo 730,910 a ultramar y 581,486 a cabotaje; en 1885 a 1.195,438 correspondiendo 679,820 a ultramar y 515,618 a cabotaje; 1886 a 1.052,113
y en
mar y La
461,202
a
clasificación
toneladas
correspondiendo 590,811 a ultra-
cabotaje.
por banderas
arrojaba
CON BANDERA NACIONAL
AÑOS
estas
nuevas cifras:
CON BANDERA EXTRANJERA
Anales de
450
Entre
datos encaminados
los
Universidad
la
demostrar
a.
proyecto figuraban el costo del lanchaje
por tonelada) y
eJ
practicabilidad dsl
la
(un peso diez centesimos
(once centesimos por tone
impuesto de faros
Hda) que sobre la carga movilizada en 1882 (1.700,000 toneladas) arrojaban una entrada de más de dos millones de pesos, con la cual
cubrir
podía
se
de las obras.
ejecución
la
amortización del
de intereses y
servicio
el
para
necesario
capital
Senado redujo a la mitad ese grueso guarismo, demostrando que el Pode- Ejecutivo tomaba por base el tonelaje de registro y no la carga realmente movilizada
La Comisión de Hacienda
en
el
lEn
del
puerto de Montevideo.
—
1880
empezaba diciendo
carga efectiva movilizada en
el
la
Comisión de Hacienda
—
y a la salida de los huques, era de 542,413 toneladas en la rriente de ultramar y de 415,105 en la de cabotaje; en 1881
pectivamente 479.374.
de
616,595
En conjunto
—
agregaba
—
setenta
por
cada cuarenta pies
cúbicos,
dentro
un recargo
del
50
y
en
%
fuera de la rada;
co-
res-
632,252
y
en 1881;
1.067,292
de sesenta centesimos
es
noventa
y
kilogs.,
rada interior,
de la
y
de
1882
cada mil
cúbico;
por cada por
450,697;
957,518 ton-eladas en 1880;
y 1.111,626 en 1882. El costo del lanchaje
metro
de
y
la
puerto de Montevideo, a la entrada,
con
de cuatro
-eslingaje
el
centesimos por «ada cien kilogs. o cada cien litros. Cada tonelada en la navegación de ultramar paga 1.53 (lanchaje 1 peso, eslingaje 0.40,
faros
Tomando
0.13).
por base
—
concluía la Comisión
—
el
1882 y suponiendo una tarifa uniforme de 1 peso 40
movimiento de para
cts.
la na-
vegación de ultramar y de 40 cts. para la de cabotaje, podría contar el Estado con 1.076,891 pesos y atender con su producto el servicio
de
%
12
sobre
un
capital
de
9.000,000
o
el
14.000,000
10
9f
sobre
de las obras portuarias.
según fuera el Pero como «La Razón» se encargó de comprobarlo, costo
ese
mismo
Comisión de Hacienda era exagerado y sólo podía esperarse un ingreso efectivo de 668,000 pesos, computando el impuesto de faros (108,000 pesos), el lanchaje (496,000) y el eslincálculo
gaje
de la
(64,000 pesos).
La Asamblea el
se
apresuró a conceder
Poder Ejecutivo. De acuerdo con
autorizaba
la
practicar los
construcción estudios y
del
la
puerto
la
autorización que pedía
ley
y
a
de abril de 1883 se la
vez
se
mandaba
levantar los planos correspondientes. De-
bería construirse un rompeolas y una
rambla de 40 metros de
Anales de
ancho en todo
la
Universidad
451
perímetro del puerto; excavarle un canal de ea-
el
trada de 22 a 25 pies de profundidad en mareas bajas ordinarias y
un
canal
de
interior
misma profundidad máxima donde
esa
fondearían los grandes buques y la mínima de 17 pies en los ieniás puntos; dragarse el arroyo Pantanoso desde su barra hasta
Boyada dándole una profundidad mínima de
el
paso de
y
construirse
la
para
necesarios
depósitos
los
10 pies;
administración
la
almacenes, diques y vías de empalme con ios ferrocay tranvías existentes. El costo total de las obras, incluida expropiación de faros, no podría exceder de tres millonee de li-
aduanera, rriles la
equivalentes
Estado garan-
El
bras
esterlinas
tiría
a los capitalistas un interés líquido del 10 Ve anual durante
a
14.100,000
pesos.
plazo de cincuenta años. Las tarifas portuarias no serían
el
yores que las vigentes a la sazón.
excediera
ma-
producto de las tarifas
el
garantido se adjudicaría al capital una %. Los gastos de conservación y administrapuerto se fijarían entre el Poder Ejecutivo y la Empresa, interés
del
bonificación ción del
Si
del
4
no pudiendo exceder del 2
%
anual del capital invertido en las
Para la ejecución de las obras podría el Poder Ejecutivo levantar un empréstito de 8 % de interés y 2 % de amortización acumulativa y a la puja que produjera los tres millones de libras esterlinas, o entenderse con una empresa 'constructora que tomara a su cargo la administración de las reutas portuarias. Los cbras.
planos del puerto deberían ser aprobados por
Poder Ejecutivo
el
y la Asamblea. El Gobierno resolvió contratar las obras de inmediato con una
compañía, dejando para después de celebrado de
dio
dirección
la
de
las
corrientes,
contrato
el
vientos,
mareas,
el
estu-
sondajes,
cclidad del fondo de la bahía, rompeolas, dragado y formación de
planos
y
Un año
presupuestos.
después presentaba Santos a la Asamblea un convenio
Amaro Carve y que se establecían varias
celebrado en Londres entre su representante don
casa Cutbill son and
la
Delungo por
el
modificaciones.
Durante
el
plazo de setenta y cinco años
constructora
casa
la
suma anual de
el
247,500
Estado pagaría a libras
esterlinas
la
o
%
sobre el capital de tres millones de libras. Esa y Vz suma se haría efectiva sobre la tarifa de carga y descarga de
sea
e\
S
mercaderías en del el
S
Vz
Estado y
el
puerto. Los
garantido
"/r
la
se
Ingresos del puerto que excedieran
repartirían
por
partes
iguales
Empresa. La Empresa quedaba eximida de
entre
la obliga-
Anales de
452
expropiar
de
ción
docks
y
gaba
faros
los
almacenes y plazo
el
Universidad
de
dragar
de
construir
ramblas,
las
Pantanoso y a
el
descargar las
mercaderías,
diqu-es,
vez
la
de la concesión hasta 75 años, obtenía
cargar y
de
exclusivo
y
la
alar-
derecho
el
derecho ex
el
elusivo de explotar y administrar las obras del puerto,
derecho
el
exclusivo d€ construir ferrocarriles y tranvías en la rambla y
el
dominio de Valiosos terrenos submarinos. El nuevo contrato tenía que levantar y levantó gran polvareda en los círculos comerciales, en la prensa y en el Parlamento mismo. Las principales casas de comercio dirigieron una iCipresentación a la AsamWea en la que llamaban la atención acerca de los peligros de la construcción de las obras sin la previa realización de
estudios y del irritante monopolio de la carga y descarga de mer-
caderías por espacio de tres cuartos de siglo. Esa voz de alarma
fué robustecida por
«Liga Industrial» mediante otra represen-
la
tación al Gobierno en la que se abogaba a favor de las empresas
de cabotaje y lanchaje. En el Senado se encargó
—
compuesta
del
la
Comisión de Hacienda en mayoría
ingeniero don Juan Alberto Capurro y
doctores Blas Vidal y Pedro Visca
nucioso
de
los
de realizar un estudio mi-
encaminado a demostrar que
contundente
y
—
el
proyecto
son and Delungo era insuficiente para el movimiento que
Cutb'll
ya tenía
puerto de Montevideo y que además carecía de estu-
el
dios previos según resultaba del propio dictamen del Director de
Obras Públicas, cuyo funcionarlo hacía constar que la casa constructora no indicaba en sus planos «ni los sondajes, ni la direcde
ción
planos
habían
se
corrientes»,
las
a
pesar
de
lo
cual
había
aprobado
los
invocando que esos estudios tan importantes .seguramente
hecho «y que sólo por
olvido
habían
dejado de pre-
sentarse».
Tan
argumentos y tan grande el eco que hubo necesidad de cerrar la barra, y cerrarla de una manera general mediante una resolución que estadecisivos
tenían en
el
eran
esos
pueblo, que
blecía que cada vez que se abordara
sólo
los
representantes
de
momento
de
la
el
estudio del asunto puerto
prensa podrían
presenciar
los
de-
bates!
Llegado del
En que
el
contrato, la
la
votación
pero a duras penas
—
triunfaron
los
partidarios
por siete yotos contra
Cámara de Diputados no hubo tantas
dificultades,
seis.
por-
Comisión informante, dando preferencia a la faz financiera sobre la faz técnica;, se contrajo sobre todo a demostrar la practila
Anales de
de
cabilidad
Luego de recordar que
obras.
las
movilizada en
453
ürdversidad
la
carga efectiva
la
puerto de Montevideo había sido de
el
957,518
to-
neladas eu 1880, de 1.067,292 en 1881, de 1.111,326 en 1882 y de 1.015,359 en 1884, y que los gastos de lanchaje tratándose - de bu-
ques 1
$
ultramar eran de 1 $ 20 por tonelada de 1,000 kilogs., por tonelada de 1,015 kilogs., de O $ 90 por metro cúbico 30 de
30 por 40 pies equivalentes a una tonelada, ? 40 por tonelada de artículos de peso y de 78 por l03 artículos ad valoreni, llegab.i al siguiente monto de recursos portuarios, con los que podría cubrirse el 10 % de un
de mercaderías y
y
los
1
$
de eslingaje a
O
%
empréstito de 20 millones de pesos:
1.116,476
toneladas de ultramar a $
de
»
575,512
cabotaje
a
.?
1.60 0.40
... .
.
1.786,761 69
$
230,284 80
.
2.017,046 40
$
La
ley
sión
de
setiembre
de
nuevas cláusulas:
estas
de la
de ingenieros
tantes de la
aprobatoria
1884,
del
contrato,
agregó
Poder Ejecutivo nombrará una Comi-
el
que podrán formar parte
Empresa para
examen de
el
las
los
represen-
obras proyectadas y
quo hubieran de introducirse; el costo total no podrá exceder de tres millones de libras esterlinas y esa suma será suministrada por la Empresa constructora corriendo a cargo del Estado el servicio de intereses (8 % anual) y de amortiza(desde ^4 hasta 5 %), con garantía de las tarifas de ción modificaciones
carga y descarga y derechos de puerto; las tarifas y los derechos serán establecidos por el Poder Ejecutivo señalándose como má-
ximum y
la
suma que asegure monto de
capital y el
del
administración
empleado;
el
del
servicio de intereses y amortización
el
puerto
que se
de que
movimiento
el
renta del puerto
prima
del
6
fija
en
el
%
2
cabotaje nacional estará libre de todo
cuanto fuere posible», imponiéndosele caso
Vr
exterior
produjere sobrantes del
capital;
sólo regirá respecto de la
obras
los gastos de conservación de las
el
del
capital
gravamen «en
derechos moderados en
no diere la
lo
necesario;
si
el
la
Empresa gozará de una
monopolio de
rambla
del
la
carga y descarga
puerto y muelles de la
Em-
pero no respecto de las lanchas y embarcaciones, menores; la administración de las obras portuarias y la percepción de las presa,
tarifas estarán
A
cambio de
a cargo de la Empresa. forzoso.^ retaceos, obtenían
los
concesionarios gran-
Anales de
454
des veulajas
la
Universidad
eu materia de tiempo, porcentajes en los proventos
portuarios y administración de las obras.
Pero esas ventajas, lejos de aplacar el apetito de la Empresa, lo estimularon de nuevo, y por efecto de ello tuvo el gobierno de Santos que dirigirse por segunda vez a la Asamblea eu de-
manda
de ampliaciones y modificaciones sustanciales.
iBn su mensaje de mediados de 1885 decía que
%
2
el
acordado
Empresa por concepto de gastos de conservación y administración de las obras se había calculado sobre un millón y a
la
entradas y salidas y que era excedente de tonelaje que
n?edio de toneladas de mercaderías
extender
equitativo
pudiera producirse en pedía: ios
porcentaje al
el
el
curso del plazo del contrato. Oti'a cosa
que se tuvieran en cuenta
días
hábiles
construcción por
de
de trabajo,
las los
contingencias resultantes deterioros
de los temporales y de
efecto
errores
los
liados de la creencia de que había arcilla y barro tían piedras salientes que dificultaran el dragado.
ciable voracidad de
la
al
Empresa y de
los
empa-
impulso
vez a punto de erguirse contra la
esta
áx^.
en
donde exis-
allí
La mayoría parlamentaria que obedecía ciegamente presidencial estuvo
obras
de las
insa-
agentes que compartían
sus beneficios. Para reducirla a la obediencia fué necesario que el general Santos presentara renuncia de su cargo, amagando con un
golpe teatral que bien podría
ir
hasta la disolución de la Asamblea
y la proclamación de la dictadura. trato pasó
Pero
como
más
Y
gracias a ello
el
nuevo con-
anterior.
apetitos no quedaban
los
acrecentar
el
las
saciados todavía.
ganancias y comisiones!
Y
¡Era necesario
ya hemos
dicho,
ocuparnos del movimiento político de la adminii^tración Santos, en q¡üé forma se hizo: mediante cuatro contratos' clandestinos a!
cuales se extraía del
por
los
mil
pesos,
con destino a gastos texto relativo
el
tuviera que
monto de
al
j)^'
catorce millones cien
obras,
millón
y
medio
eliminares; se alteraba en forma sustancial
Caño Colector a
fin
de que la Empresa
no
y se establecía que las exproEstado cualquiera que fuera su monto.
cargar con su costo;
piaciones recaerían sobre
el
La formidable protesta que levanté tratos
los
en que estaban calculadas las
la publicación
a fines de 1885 coincidió con los preparativos
de esos conde la revo-
y tanto el gobierno de Santos como la oasa Outbill son and Delungo tuvieron que aplazar la ejecución de Ifs obras y de aplazamiento en aplazamiento llegó el día
lución
del
del
Quebracho,
cambio de gobierno y con
él
un decreto que declaraba nulos
Anales de
Ij
Universidad
455
y no existentes todos y cada uno de las contratos celebrados, por las razones que diremos al ocuparnos de la administración Tajes.
Al tiempo mismo que malogrado por «fecto de
puerto
el
Montevideo quedaba así el Congreso Argen-
de
concupiscencia,
la
autorizaba la construcción del puerto de Buenos Aires por Empresa que encabezaba don Eduardo Madero.
tino la
Derechos de faros y de puerto. Once faros funcionaban en 1886: cinco oficiales (Colonia, Cerro, de Flores, Banco Inglés y Punta del Este) que gravitaban
Isla
sobre la navegación con la cuota de 3 centesimos por tonelada de
y
registro,
seis
particulares
(Santa María, Polonio, José Ignacio, la cuota de 12 centesimos.
Punta Brava, Farallón y Panela) con
En
conjunto 15 centesimos por tonelada de registro.
a
de Santos se
gobierno
El
Asamblea
la
propósito
de
la
estrenó
expropiación de
reducir
el
impuesto
a
presión de las estrecheces financieras mpetieron
los
gobiernos anteriores
el
un mensaje que pedía
con
cuatro
—
con
el
Bajo
la
—
co-
particulares
faros
los
centesimos.
decía ese mensaje
error
entregar
de
los
faros
a empresas particulares «en condiciones onerosas y leoninas».
—
—
La
mala y sin emdesembolso de más de ciento bargo impone a la navegación un cincuenta mil pesos al año. Pedía a la vez el Poder Ejecutivo un crédito suplementario de 150,000 pesos con destino a la compra de dragas para aumentar la profundidad del puerto de Montevideo y dar acceso fácil a los buques de mayor calado. Pero nada hizo el general Santos para mover esos proyectos en el Cuerpo Legis-lativo y el impuesto de faros siguió pesando sobre la navegación en la misma forma onerosa que censuraba iluminación de nuestras costas
el
es
mensaje.
La Asamblea vertirlo en ley,
se
ocupó en cambio, aunque sin alcanzar a con-
de un proyecto que suprimía
de registro y
laje
el
decía la
sobre vela.
Comisión
todo
Y
tuarios
de buques.
de Hacienda
necesario
el
derecho de tone-
impuesto de exportación sobre
arena destinados a lastre
dtí
agregaba
del
disminuir las
ese
piedra y proyecto
en
1884
que era
la
navegación a
Fundando Senado
carga-?
de
la
para demostrarlo ponía frente a frente los gastos pora cargo de
un vapor paquete de 500
un velero de igual
tonelaje,
al
o
más toneladas y
tiempo de su arribo
al
puerto
:
Anales de
456
Universidad
la
de Montevideo. El vapor tenía >que pagar 90 pesos por conceptc de privilegio de patente, 2 pesos por concepto de sellado y 1 peso por concepto de visita de descarga y de salida. En conjunto 93 pesos.
El velero tenía que pagar
pesos por concepto de tone-
.50
(a razón de 10 centesimos por tonelada)
laje
y cerrar
registro,
manifiesto
para cargar y visitas.
entrada
de
En conjunto
y 88 pesos por abrir
y
salida,
habilitación
138 pesos.
Doce naufragios ocurrieron dentro de nuestras aguas
jurisdic-
cionales en 1885 y 13 en 1886, salvándose seis buques en
mero y cinco en
el
el
pri-
segundo.
maremoto de 1884.
E3
En
enero
inmensa
de
1884,
durante
la
estación
balnearia,
avanzó
una
ola que inundó toda la costa sur de Montevideo, llenando
de pavor a las numerosas familias que estaban en la Playa Ramírez.
Todos
los
bañistas
describía
tiempo de ponerse
tuvieron
con excepción de una señora que
pereció
suceso una comunicación
el
salvo,
a
ahogada. Véase cómo
dirigida
a la Academia de
Ciencias de París
«En medio de una calma completa en que las playas estaban mar bajó rápidamente pudiendo hacerse pie
llenas de bañistas, el
parajes
ei!
que antes tenían
3
metros
de
agua.
En
ese
mismo
instante se vio venir en la dirección Sud Sudoeste una ola inmensa
que formaba como un círculo de varios kilómetros de extensión
que fué a deshacerse con violencia extraordinaria en la playa. Esa ola
fué
seguida por otras dos que se sucedieron con un minuto
de intervalo.
medio y
al
La
creciente del
cabo de un rato
Trabajos de canalización en
el
mar
fué entonces de un metro y agua recobró su estado normal.»
la Coronilla
y en
el río
Negro,
El ingeniero don Manuel García de Zúñiga se presentó en 18S2,
una empresa extranjera, proponiendo la consun canal desde el puerto de la Coronilla hasta la
en representación de
trucción
de
I.f.guna Merín, de 6 metros de profundidad por 30 de ancho. el
Pero
proyecto quedó aplazado en el Senado de acuerdo con un dic-
tamen de la Comisión de Hacienda, a título sin duda alguna de que no convenia discutirlo mientras siguiera rigiendo el Tratado de 1851 con
el
Brasil.
Anales de
En
Universidad
la
457
dispuso la Asamblea que se efectuaran estudios para
1885
canalización del río Negro desde la boca del Yaguarí hasta la
la
ciudad de Mercedes.
Feri'ocan'iles.
Un cuadro Economía
publicado en 188o por la Sociedad de Montevideo establecía que el Ferrocarril Cen-
estadístico
Política de
una red de 517 kilómetros
comprendidas la línea al ramal a San José y una nueva sección próxima a inaugurarse en esos momentos; el Fetenía
tral
Durazno,
la
rrocarril
del
lómetros;
el
extensión
hasta
Yí,
el
Este 35 kilómetros;
el
Ferrocarril del
el
Ferrocarril del Norte 21.
En
100 ki-
Salto
conjunto 673 kilómetros.
El ingeniero don Juan Alberto Capurro presentó en 1884 a la
Cámara de Senadores un proyecto de
ley
que establecía
plan
el
de líneas fundamentales, la trocha ancha y uniforme, la servidumbre de vías, la garantía del interés y el régimen de contralor de
Y ese ingeniero y sus colegas don Anden Carlos Olascoaga, don Eugenio Penot, don Emilio Dupré y don Carlos Honoré, redactaron otro proyecto más amplio que fué sancionado por ambas Cámaras en el curso del garantidas.
em,pr'esas
las
Montero,
tonio
mismo
año.
Establecía
6
fundamentales:
líneas
Ferrocarril
el
Uruguay desde Montevideo hasta Rivera, Paysaiidú y rrocarril
de
Montevideo a
la
Colonia;
el
Central Salto;
Ferrocarril
del
el
del
Fe-
Oeste
desde 25 de Agosto hasta Carmelo, Nueva Palmira y Mercedes; el Ferrocarril Nordeste desde Montevideo hasta Artigas y Treinta y Tres; f ín
;
el
Ferrocarril del Este desde Montevideo a la Ferrocarril
el
del
Salto
a
Santa
Rosa
Transcurridos 25 años de explotación podría por
el
el
e
el
%
7
de interés sobre
el
precio
Cabellos.
Estado expropiar 20 La Namáximo de 5,000
de tasación y una bonificación del
precio
ción garantiría
Laguna Me-
Isla
''/c.
Cuando el 'rendimiento neto excediera del 8 %. Empresa reintegraría al Tesoro público el monto de las garantías pagadas. Y cuando el mismo rendimiento excediera del 12 ''h
libras el kilómetro. la
adquiriría
En
el
Estado
el
derecho de intervenir en las tarifas.
1886 fué complementada la red
con la incorporación de un
ramal de Maldonado a Punta del Este.
Un año después se
dirigió
el
de la promulgación de
Poder Ejecutivo a
consecu-encia de las
la
la
ley
de ferrocarriles
Asamblea manifestando que a
concesiones otorgadas, algunas de las empre-
Anales de
458
eas que
se
sentado
juzgaban perjudicadas, ante
de apelación
único
curso
ante
Universidad
Ja
Jueces
los
en vez de
«ntablar
el
re-
Tribunal Peno, se habían pre-
el
Letrados,
no
accioiaando
contra
em-
las
como correspondía, sino contra el Estado. Peen consecuencia el Poder Ejecutivo que la Asamblea declarara
presas favorecidas día
que
la
contencioso
jurisdicción
abarcaba
general
ley
todas
-
administrativa
las
cuestiones
dieran suscitarse entre particulares y
el
que
establecía
Fisco y entre particula-
siempre que fueran motivadas por resoluciones de
res,
Y
dad administrativa.
así
se
la
que pu-
ferroviarias
autori-
la
declaró por vía de interpretación
da
ley de 1884.
la
Otro mensaje pasó en esa oportunidad el Poder Ejecutivo recabando varias enmiendas a la ley de expropiación, por las que sa establecía que los Jueces pondrían a las empresas en posesión de las
tierras cruzadas por la vía ante la simple presentación de las
concesiones y planos aprobados por el Poder Ejecutivo; que la? sumas a consignarse por las empresas serían fijadas de acuerdo
con
los
los
dos
el -valor
el pago de la contribución directa; y que las por concepto de daños serían resueltas recién a
aforos para
indemnizaciones afios
por
arbitros
que determinarían
la
diferencia
entre
de la tierra al tiempo de la consignación y su precio ai
tiempo del pago. La Empresa del Noroeste
—
decía el
mensaje
—
fundando el proyecto ha tenido que pagar los terrenos del Yacuy a razón de 600 pesos la cuadra, equivalentes a dos millones la legua, y sin embargo en muchos casos ha valorizado en vez de deprimirse.
He las
aquí
líneas
algunas
de
las
principales
en explotación durante
Ferrncnrril Cení ral del Urtigiiay
el
pasajeros
....
Producto de pasajes, pesos
.
Peso bruto transportado, toneladas Tráfico de mercaderías, pesos
Número de animales transportados Total de entradas, pesos
.
Gastos de explotación, pesos
Ganancia neta, pesos
.
....
cifras
resto
de
dei
los
campo
balances
se
de
período que examinamos:
:
1881
Número de
el
238,513
1882
1883-84
1884-85
1885-86
Alíales de la
Ferrocarril Noroeste del
Uruguay
(Salió
a
1883-84
Número
de
Producto de
pasajeros los
pasajes
Peso transportado. Ton.
Producto
de
la
Total de entradas
carga .
Gastos de explotación
.
450
Universidad
Isla
Cnhellos) 1884-85
1885-86
Anales
460
le
Universidad
la
zonas servidas por Ferrocarril; y la construcción de caminos rura-
de acceso a todas las estaciones de la línea. La Asamblea se limitó a autorizar la emisión de los bonos pedidos bajo la denomi-
les
nación de «Deuda Fomento 4
%
de
Ferrocarriles» con
un
de
servicio
de interés anual y una amortización que se realizaría con
el
%
excedente de la utilidad de toda la línea una vez cubierto el 8 de interés. Los trabajos de prolongación empezaron de inmediato y un
afio
después se inauguraba
Toros y se Negro.
echaban
La Empresa a
l5s
la
cimientos
del Ferrocarril
sección hasta del
Uruguayo
el
Paso de
puente sobre
gran
del Este
el
los
Río
inauguró en 18S2
sección comprendida entre Toledo y Pando.
En
1886 fué abierta al servicio público en la línea del Noroeste,
sección
la
comprendida entre
la
estación
Yacuy y
la
isla
Ca-
bellos.
Tianvías. Siete líneas
con
un
de tranvías tenía la ciudad de Montevideo en 1886
recorrido total de 138 kilómetros, un movimiento de pasa-
que oscilaba alrededor de doce millones y una venta de boletos que se aproximaba a 800,000 pesos. He aquí el movimiento de
je-ros
pasajeros de cuatro de esas líneas:
AÑOS
J
Anales de
con
Salto
privilegio
para
Universidad
la
conducción
la
46
de
carne
la
desde los
Mercado de la Ciudad, mediante la tarifa de 1 peso 20 centesimos cada animal vacuno, 30 centesimos cada animal porcino y 10 centesimos cada animal ovino, debiendo pasar la línea al dominio municipal a los veinticinco años, sin indemnización alguna. Corrales de Abasto hasta
el
Teléfonos. El servicio telefónico de la ciudad de Montevideo se hacía
como ahora, por dos compañías: una de
tonces,
que
1882,
es
que es
1884,
Cooperativa
actual
la
Uruguaya.
actual
la
y
El
extendía en 1886 a 450 abonados, y
de
el
en fundada primera se
otra
la
servicio
de
la
segunda a
la
en-
fundada en
ellas
1,416.
En
conjunto 1,866 suscriptores.
Telégrafos.
Ocho líneas telegráficas funcionaban en 1886: de Montevideo a Buenos Aires; la del Platino la
tal;
del
la
Este y
del
Salto a Concordia;
del
Uruguay;
la
-
River Píate,
la del
Brasileño; la Orien-
de Paysandú a Concepción del
la
Ferrocarril Central;
la
Uruguayo
del Ferrocarril
Nacional de Montevideo a la Isla de Flores y de
Artigas a Meló.
He
aquí
(interior,
el
número de despachos de
exterior
y
River Píate Platino -Brasileño.
.
.
.
mediante
la
cual
1883
1886
1884
24,303
29,036
28,577
32,100
39,857
29,254
32,642
36,272
34,208
45,878
9,092
5,712
8,814
9,392
8,450
Cancillerías de Montevideo
acto,
línea-s
1883
ron en 1883 una convención que el
primeras
tres
1882
Oriental
Las
las
tránsito):
el
el
Aires y Buenos Cuerpo Legislativo
Gobierno Oriental
de sus líneas hasta empalmar con
las
formalizaratificó
prolongaría
en una
argentinas en Martín García.
Caminos. Al
finalizar
el
año
1883
escribía
el
doctor
Carlos
María
Ra-
Anales de
4g2
la
Universidad
en «La Razón» reílejando las impresiones que acababa de de un viaje de descanso a la campaña:
iiiírez.
recibir en el curso
«Caminos, caminos, por Dios!
Todos
transeúntes
los
mismas
tienen
de una conveniencia, campos están alambrados.
se trata
vías
mejores
los
componen inmediatamente,
Si
pasos.
el
las
los
camino
—
campos estaban abiertos
componía un paso trilllado
los
no se
trazadas
vías
las dila-
invierno próximo será imposible
tíánsito.»
Cuando
por
pasar
que
precisamente
marcadas. No pueden como antes buscar en una
extensión
tada
No
absoluta. Los
una necesidad
trata de
6l'
veiiículos
y no volvían a
las
y él
—
agregaba
tropas
si
se
des-
desviaban
se
el
del
sino cuando la suspensión del
tránsito afirmaba y restablecía la parte descompuesta del camino.
Ajiora con
el
cierre
de
campos no puede hacerse eeo y
ilos
caminos están circunscriptos por
los
los
alambrados. El cierre de los
campos de pastoreo está enriqueciendo y civilizando
la
República,
pero a la vez directa o indirectamente plantea algunos problemas sociales que es necesario estudiar y
rilizados en gran parte los
resolver so pena de ver
inmensos beneficios de
la
es'te-
fundamental
el
régimen de nuestra propiedad
la
ardorosa campaña que dio por resul-
reforma que se opera en Tal fué el principio de
rural.
tado una circular del Ministerio de Gobierno a las Juntas Econó-
mico-Administrativas en que se ordenaba que
producto de las
el
Patentes de Rodados fuera totalmente invertido en obras de vialidad rural y la sanción de la ley de 1884 que creaba la Dirección
General de Caminos bajo la dependencia del Ministerio de Gobierno,
con importantes cometidos, entre los que figuraban
y amojonamiento de la red de departamentales y vecinales programada por
cíel
trazado
De
este
mismo impulso surgieron
prendidos en
1885
por
el
Director
los
de
caminos el
estudio
Código Rural.
trabajos
Obras
el
nacionales,
catastrales
Públicas
em-
ingeniero
don Eduardo Canstatt. Dando cuenta de los relativos al D^epartamento de Canelones, donde se había dado comienzo a la obra, decía el Ministro de Gobierno en su Memoria del mismo año «que una gran parte del área medida era fiscal».
La industria ganadera. Véase cuál era la existencia ganadera durante el período que examinamos, según las declaraciones prestadas por los estancieros para el pago de la contribución directa:
Anales de
464
encuesta dirigida por
el
Universidad
la
doctor Carlos María de Pena, Preside ntü
de la institución, dio lugar a una polémica por la prensa en que varios estancieros,
intervinieron
véase cómo tr€s de
y
Mac
señores Reyles, Carlevaro y
-
Coll
fijaban
el
ellos,
los
promedio de
los
precios corrientes de la época:
Novillos y vacas para saladero »
»
§>
de cría
»
6.16
Lanares
A
13.47
1
fines del año 1883
mencionaban
.
09
las crónicas comerciales
prensa ventas de novillos en Cerro Largo, con destino a
de la
los
sala-
deros de Río Grande, a precios excepcionales de 18 y 19 pesos, y
en Paysandú, con destino a nuestros saladeros, a 13 p-esos y por excepción a
15.
Adviértase que tenían un peso
ovinos.
En
que pesaba 969
1885
era
mencionado con asombro en
los
alrededores
el
caso
de un
de Montevideo
libras.
iniciaba
se
sista de los la
de las estancias de la época
criollos
calculado por nuestra Dirección de Es-
bajo,
engordado a pesebre
novillo
Ya
ganados
en 161 kilogs. de carne para los vacunos y en 23 para
tadística los
los
muy
entonces,
fundadores de
embargo, bajo
sin la
el
impulso
progre-
Sociedad Rural, la transformación de
antigua estancia para mejorar la carne, a la que abría nuevos
y fecundos
horizontes
la
industria frigorífica.
«No hay una sola estancia en que no Memoria de 1883
—
—
decía
la
Sociedad Rural en su
una gran chacra en que
se roture
cereales y leguminosas no alternen con los forrajes y con las plantaciones forestales, iniciándose puede decirse así el futuro fraccionamiento del predio agrícola, partiendo advertidalas simientes,
mente viste
del centro a la circunferencia. Nuestra ganadería rehoy dos categorías distintas, idirigiendo sus miras especula.
.
unos simplemente al engorde con forraje natural o armientras que los otros que son verdaderamente los repro-
tivas los tificial,
ductores,
los
tante,
preocupan y estudian
se
evolución y
estancieros
demanda
del
históricos, lo
continuadores del ganado
es-
que más conviene a la futura
comercio, tanto
más cuanto que
las
ex-
portaciones de carne fresca para los mercados europeos está pró-
xima a
iniciarse por nuevos métodos frigoríficos y habrá de responderse a sus demandas por calidad y cantidad de productos».
Anales de
Líi
carne para
Durante
ei
Montevideo
las
el
.
.
465
abasto de la población.
quinquenio siguientes
1882
Vacuno
universidad
la
1882
-
1886
entraron
a
la
Tablada de
tropas de ganados:
1883
1884
1885
1886
Anales de
4f6
SALADEROS Montevideo
1882
.
.
.
Oriental
Litoral
Buenos Aires Entre Ríos Río Grande .
.
Universidad
la
1883
1884
1885
1886
218,000
262,500
342,600
256,529
310,767
520,500
441,900
510,600
390,500
440,300
.
.
188,000
154,000
88.400
246,600
182,100
.
.
248,500
211,100
228,400
364,100
298,900
340,000
322,000
345,000
385.000
.
.
—
Durante todo el transcurso del quinquenio los saladeros orientase mantuvieron en el primer rango. Sus embarques se distribuían así entre los dos grandes mercados de consumo:
les
A
Al Brasil
1882
.......
Quintales
428, -270
248,800
"
479,070
2ñ5,000
»
801,680
242,100
»
671,800
53,060
»
823,245
99,910
3 204,065
89s,870
1883
...
1884. 1885
1886
De
-
mos
cuadros
prolijos
los
Matta y Garulla
—
las siguientes
Cuba
estadísticos
importantes
que llevaban
cifras relativas
a
la exportación
señores
los
—
corredores de tasajo
extracta-
de los salade-
ros orientales:
^flOS
^^ Brasil
:
A
Cuba
1860
Quintales
495,186
623,457
1861
»
528,285
429,874
3.413,236
3.569,635
Quinquenios
:
1862-1866
....
Quintales
1867-1871
2.309,600
1.649,700
1876
2.035,400
1.430,500
1877-1881
1.898,630
1.128,800
1886
3.204,065
898,870
1872
1882
-
-
Nuestro principal mercado de tasajo era el de Cuba hasta el del quinquenio 1862 - 1866 en que sus compras declinaron
final
fuertemente, dustria.
crisis en nuestra gran aunque no en forma tan enérgica,
causando una verdadera
La misma
baja,
inse-
Anales de
ñaló
el
mercado
del
Brasil
la
universidad
hasta
el
467
quinquenio
1882
-
1886
en
que se produjo una reacción favorable, aunque desgraciadamente pasajera,
He
como tendremos oportunidad de verlo más adelante. el mercado úe Río de Janeiro
aquí los precios del tasajo en
durante ese período:
Del Rio de la Plata
220 a 530 reis
120 a 450
1883
»
»
220 » 370
»
300 » 520
1884
»
»
160 » 300
»
200 » 470
1885
»
»
50 » 350
»
100 » 490
1882
Más nero
(por kilog.)
De Río Grande
fácil
de apreciar es esta otra tabla relativa al tasajo haba-
cotizado
en
metálico
y
no en papel moneda como
sileño:
ANOS
Promedio de compras en Montevideo por «quintal", en reales fuertes
1872 1873
1874 1875
1876
1877 1878
1879
1880 1881
1882 1883
el
bra-
Anales de
468
Don Francisco Gutiérrez caminada a
incorporación
la
Presidente de esa Sociedad,
Zorrilla,
para dirigir personalmente
a España
trasladó
universidad
la
se
propaganda en-
mesa
carne tasajo a la
de la
y otros agentes se encargaron
obrero;
la
del
de realizar análogos tra-
bajos en Italia, Francia y Alemania. Pero en todas partes la
an-
trada de la carne se estrellaba contra los diques aduaneros y ia
Sociedad tuvo que disolverse después de una larga
e
infructuosa
campaña a favor de la reducción de las tarifas. Juntamente con esos trabajos se iniciaron otros para dar mayor elasticidad y variedad a la acción saladeril, destacándose ende la «Sociedad Industrial de Ganaderos» que adqui-
tre
ellos
rió
el
en
Trinidad y
el
establecimiento de carnes del doctor Lrucas Herrera y Obes otro
saladero
nueva Sociedad, que rrera
Obes,
y
proponía
se
en
obedecía
medio de
Ija
impulso del
según sus estatutos buscar
zación de los ganados mediante
productos y
conquista
la
valori-
de
técnica
la
de los
como
saladeril,
mercados europsos.
Fábidca Liebig en Fia y Bentos.
Don Juan Ramón Gómez, dando cuenta de una brica Liebig allí
la
buen aprovechamiento de sus
el
perfeccionamiento
él
facilitar
proximidades del Cerro. La propio doctor He-
las
al
en 1884,
decía
visita
a
la
Fá-
que en épocas normales se faenaban
1,000 novillos ipor día hasta alcanzar
la
cifra de
160,000,
obte-
niéndose los siguientes productos:
160,000 cueros salados. 7,500
cascos de sebo.
580,000
libras
990,000
;>
de
refinada
en
de carne conservada
690,000
»
157,000
tarros
latas.
en
latas.
de lenguas.
10,000
quintales
86,000
bolsas
La Fábrica
grasa
de extracto de carne.
de
tasajo.
de guano pulverizado.
—
agregaba
—
emplea anualmente 3,500 toneladas
de sal y 7^500 toneladas de carbón
de
piedra.
Durante
la
faena
proporciona trabajo a 660 obreros y paga entre sueldos y gastos de 2'50 a 270,000 pesos anuales. Desembolsa además por concepto de derechos
aduaneros 138,000 pesos
cuyos muelles atracaron
el
al
año.
Tiene un puerto a
último año 26 buques de ultramar y
Anales de
22 rfs.
Universidad
la
469
vapores y veleros de trasbordo para Montevideo y Buenos AiLa Compañía posee seis grandes estancias en las que pastau
cuarenta mil animales vacunos. La población de los alrededores de
que no baja de 2,500 almas, cuenta con un club social
la Fábrica,
que hay mesas de lectura, billares y una orquesta de 25 profesores reclutados entre los mismos obreros; una escuela de enseñanza primaria a la que concurren de 110 a 120 niños hijos en
el
una Caja de ahorros cuya existencia asciende la Compañía concluía el sehan oscilado en los últimos años del 10 al 12 % acciones de la misma, de 20 libras esterlinas cada
de los obreros;
y
—
a 62,000 pesos. Los dividendos de
—
ñor Gómez anual y ur
a,
las
se cotizan
corrientemente a 40 y 42 libras.
Los comienzos de
La industria
la
industiia íi-igoiáfica.
emanada en parte
frigorífica,
principal
de la cola-
boración entusiasta y valiosa de nuestros compatriotas don Franicisco
Lecocq y don Federico Nin Reyes en los trabajos del ingeTellier, según antes lo hemos dicho, tuvo su pri-
niero francés
mera
exteriorización comercial en la «Compañía Inglesa de Carnes Congeladas del Río de la Plata». Esa Compañía estableció en 1883 una fábrica en Buenos Aires y al año siguiente otra en la Colonia. La exportaición quedó concretada entonces a la carne ovina, aplazándose la vacuna a
la
espera de una favorable adaptación del mercado inglés. Fue-
embarcados ese año 54,589 capones con resultado nada mercado de Londres decía el Directorio a los accionistas en su Memoria de 1884 no consumió rápidamente la carne, y ello unido a la alta temperatura del verano
ron
—
halagüeño. El
—
provocó baja
consumo y como a
—
en
los
agregaba
la
precios
pérdidas
y
Directorio
el
—
importantes. Pero el empieza a ensancharse,
vez los fletes se abaratan, es dable aguardar una
reacción favorable en nuestros negocios.
Y
la
reacción no tardó en producirse auxiliada por
tamiento frío.
de
Nevern
flota
procesos
El «Frigorifique» y
—
hablado «
los
»
el
«Paraguay»
éter
el
para
—
ácido
la
el
abara-
producción
de que antes
del
hemos
sulfúriico. El vapor que formaba parte de la Compañía Inglesa que presidía don Carlos Drable aire comprimido, que era menos caro. el
que vino después de
de la
utilizaba
utilizaban
industriales
y
el
ellos y
Anales de
470
Universidad
la
T,na ley de franquicias a la exportación
carnes.
(le
La Comisión de Fomento de la Cámara de Diputados abordó en 1885 el estudio de un proyecto de ley enicaminado a estimular la formación de grandes empresas de exportación de carnes. viene decía en su informe Desde hace varios años declinando el precio de nuestros ganados, y en forma tal que la
—
—
ganadera empieza ya a no dar beneficios.
industria
En
concepto
de algunas personas, por efecto de la disminución de la d-eman.la
emanada en el Brasil de la abolición de la Cuba de la terminación de una guerra en que actuaban ejércitos numerosos que se alimentaban con ese artículo, y de la competencia cada día más activa de los mericados productores de la Argentina, Río Grande y Estados Unidos. del tasajo uruguayo,
esclavitud y en
En
—
Comisión
la
nante de
no es
consumo
el
1883;
58.413,900
—
proseguía
47.488,773
en
de
está
ellas
tasajo
la
paz.
la
ascendente:
pi egresión
y con del
acuerdo determi-
causa
crecimiento asombroso de nuestro stock
la baja, sino el
ganadero al amparo de El consumo brasileño en
—
de otras personas
concepto
1SS4;
y
los
informe
€l
—
señala
en 1882;
kilogs.
precios
esta
e.^ta
56.366,GSG
otra
progresión kilog.
en
1882, de 400 a 500 en 1883, de 360 a 410 en 1884, y las de
2."
descendente: clase de
a 340 en
1
clase de 420
1.'
540 reis
a
el
240 a 360 en 1882, de 200 a 350 en 1883, y de 120 lSi84, debiéndose por lo tanto imputar la baja de los
precios al
aumento de
carne
la
cai'nes de
425,300,
de
la
1.26i2,100
impulso
producción tasajera que en 18 8 3 utilizó
vacunos
animales
notable
debido
los
a
en
y
1884
saladeros
la
de
orientales,
únicos que acrecentaron las matanzas.
Tenemos
—
sión
plétora de ganados
y para regularizar
—
la Comimercado se propomeneados del tasajo,
continuaba diciendo
condición
la
del
nen estos tres medios: el ensanche de los el fomento de las conservas y extractos y
la
sistema frigorífico. La exportación por
sistema frigorífico es
forma más
la
sumo
y además no abren
ovinos que existen en
Prc entaba luego del
rendimiento
del
exportación por
el
El tasajo y las conservas tienen un con-
eficaz.
restringido
el
la
el
salida
a
los
millones
de
país.
Comisión
tasajo
acuerdo con los resultados de
y
el
de la
siguiente estado comparativo las
última
Iss utilidades de las carnes frigoríficas:
carnes faena,
conservadas,
y un
cálculo
cié
de
Anales de
la
471
Universidad
Producto de un novillo destinado a tasajo: 15 $ 21, correspondiendo 6.30 al cuero, 5.19 a la -carne (75 kilogs. de tasajo), astas, aceite y 3 al sebo y lo demás a la lengua, huesos, cenizas, niarlos.
Producto del mismo novillo en vadas:
19
$
58,
la
fábrica
correspondiendo 9.50 a 80 y
de V2
carnes
kilogs.
conser-
de carne.
por novillo. de las utilidades de las carnes frigoríficas sobre la carne base del precio corriente de los capones de 40 libras de pesos), carne (16 V2 de libras y (2 pesos) y de los novillos de 400 seguros, fley de los gastos de matanza, congelación, embarque, capones al 150,000 de remesa Una venta: de comisiones tes y 4 $ 37
Diferencia
Cálculo
"
de 5 peniques (10 .centesimos ) la libra daría 8 63,297 una peso brutos. Deducidos los gastos (790,260' pesos) quedaría novillos de 10,000 remesa utilidad líquida de 73,0i37 pesos. Otra daría un producto bruto al mismo precio de 5 peniques la libra precio
535.531
de
dad
líquida
Como
pesos,
de
y
rebajados
84,892
resultado
de
los
una
gastos
(450,639)
fueron
sancionadas a
utili-
pesos. este
informe
fines
garan-
de 188 5 dos leyes de fomento. Una de ellas acordaba que por prodel 6 Vr de interés anual a todas las empresas industriales resultados de forma y cedimientos patentados en explotación la para y expaís el en establecieran la
tía
conocidos se medio portación de carnes frescas con un capital no menor de cuando el capimillón de pesos, elevándose la garantía al 7 La otra exoneraba tal fuera de tres o más millones de pesos. máquinas y materiales indusde derechos de importación a las conservadas y carnes de fábricas triales de instalación de las fabricación la a destinadas y enprimas tasajo y a las materias para Ejecutivo Poder al autorizaba productos, y vase de dichos de los estimular por medio de concursos y premios el adelanto organisistemas de conservación de carnes y para fomentar la base la sobre exportación zación de empresas de producción y la a sometidos ser deberían que de contratos ad rejcrenduvi
%
consideración
legislativa.
Dos años antes, en 1883, había
sido
suprimido
el
derecho de
7,500 de exportación sobre las carnes. Nuestro territorio de 2 decía la Comisión de Hacienda del Senado leguas cuadradas contiene alrededor de 8.000,000 de prestigiando la medida
%
—
—
imales vacunos. La matanza .saladeril es hoy de 73 8,000 cabenuestras zas en el Uruguay y 434,000 en la Argentina. El valor de ar,
Anales de
472
de
exportaciones
vadas charqui
el
universidad
(34.026.527
de
kilogs.),
Fisco percibe
el
de
kilogs.),
extractos
se eleva
kilogs.),
(9,16i2
suma que
esa
tasajo
(4. 61o, .559
la
carnes
(564,193
conser-
kilogs.)
y de 5.014,405 pesos, y es sobro
a 2
que conviene suprimir.
''/
Marcas de ganados.
La Asociación Rural se dirigió al Poder Ejecutivo en 1882 solicitando la reforma de las disposiciones legales sobre marcas ganado
del
De acuerdo con
mayor.
debía ponerse en
anca y
el
el Código Rural contramarca al lado de
la
marca marca
la
la
salvo que existiera ya otra marca en el anca, en cuyo caso po-
ponerse
dría
en
lEste
costillar.
el
Asociación Rural
lít
—
orden
de
—
colocación
produce deterioro en
el
decía
por un
cuero
monto anual que puede calcularse en medio millón de pesos, el medio de evitarlo consistiría en establecer que agotado el
y
anca debe continuarse en
espacio del
del animal, pero no en
Más
radical se mostró la Asamblea.
año estableció que riamente en del lado
Jado de ni en
ma
la
el
vaiouno
se
En
la
ley
de ese
mismo
ma-rcaria
y que la contramarca se ponidría del mismo a ella, pero nunca ni en las costillas,
marca y junto
la
anica.
taiidaron
Según
cabeza o en las piernas
a fuego y obligatopierna, descuezo o cabeza del animal y siempre
iziquierdo
el
No
la
costillar.
el
elllos
rutinario
estafncieros
lois
de'bía
de
en
reclamar contra
la
reforma.
autorizarse la marcación en el anca. El siste-
eMazar, pialar
animales para ha caído en desuso porque tortura mucho a los ganados, y hoy se usa el brete que no es adaptable a la marcación en la pierna, brazuelo, pescuezo o cabeza. .El pequeño beneficio que resiullte de un cuero más perfecto agregaban aprovecha al exportador más que al estanjciero que venide sus animales en pie. La Sociedad Rural opinó que lo mejor era dejaír en libertad al estanciero para marcar en la cabeza, pierna o anca, pero no en él costillar. Y como consecuencia de estas nueva/s gestiones fué derogada la ley a que acabamos de referirnos, dictándose marcarlos
—
decían
en
—
otia
en
1884
«a 'hierro
anca
más
los
—
—
cual
se
declaraba
obligatoria
canidente en la pierna, brazuelo
animad siempre del lado nueva ley que el tamaño de
deil
la
por la
y voltear representación
su
o
iziqTiierdo».
las
la
marcación
pescuezo, cabeza o Prescribía
marcas no
-podrlía
adeexce-
Anales de
de
cler
quince
pondría del
se
üniverñdad
ia
473
de diámetro y que la contramarca de la marca y lo más próximo a ella, no colocarse en las costillas, todo eso bajo pena
centímetros laido
pudiendo nunica
de mulita de cincuenta centesimos por cada animal.
Al año siguiente quedó regularizaido el registro de marcas mediante la aiprobación prestada por el Poder Ejecutivo al informe de la Comisión de Estancieros encargada de confrontar lois grupos de marcas y señales y eliminar los signos iguales o semejantes susceptibleis de producir confusión.
La Agricultura. Escuelas
tle
enseñanza.
Bl Gobierno adquirió en 188 5 la cbacra donde hoy funciona Vivero Nacional de Toledo, con ell propósito de establecer aillí una escuela práctica de agricultura. El Reglamento que fué confeccionado por el Director General de Colonización e Inel
don
migración
Modesto
Cluzeau
Mortet,
establecía
una
serie
de cursos de cuatro a seis á'ños según las aptitudes de los alumnos,
pa.ra
En
la
obtención del diploma de capataz agrónoimo.
mismo
ese
año
estableció
se
-en
el
Departamento
de
Florida, por iniciativa del Jefe Poilítico coronel don Luis Elduar-
do Pérez, otra escuela agrícola en una amplia chacra fiscal con concurso gubernativo y el del vecindario en dinero y ganado. Su objeto, segxin el reglamento, era iniciar «a los jóvenes de el
ambos sexos en estudios
los trabajos de
durarían
de
tres
a
campo
seis
e
industrias rurales.» Los
años y darían
derecho
a
un
agrónomo. La Asociación Rural, que había iniciado trabajos en ese mis-
diplloma
de
ca,pataz
mo
sentido desde los comienzos de la presidencia de Santos y que había lanzado sin éxito la idea de levantar fondos entre el puebllo para el planteamiento de una escuela práx;tica de agricultura, creó en 1886 un curso de Zootecnia a cargo del Veterinario casi
don Teodoro Visaires, en cuya matrícula se inscribieron los alumnos de las clases superiores de la Escuela
todos
<'Blbio
Fernández».
La superficie sembrada. Según los cuadros de la Sociedad de Evonomía Política de Montevideo la superficie destinada a pastoreo en 1S83 era de 14.000,000
de hectáreas y la destinada a agricultura de 200,000
hectáreas simpilemente.
Anales de
474
en
Lermitte
mismo aao
trigo de ese
La producción de Arsenio
Universidad
la
fué calculada por don
sobre la
hectolitros
54 8,000
base
de
las
entradas a las Plazas de Frutos de Montevideo y Estación Central
de Ferrocarriles
de
arribos
(321,000),
campaña
boración de harinas en
cabotaje
(87,600),
y
existencia
18 8
resolvió
agrícolas
todas
(80,000),
ela-
en plaza
(tiO.OOO).
liabajos
colonización.
(le
hwoicando
de
ley
la
Kjecutivo en
de
coiloni?.ación
destinar
1882
a
centros
el
las
Poder tierras
fiscales ocupadas por arrendatarios, y entregar a la Comisión de Inmigración y Cofronización la suma de 8 0,000 pesos votados con ese fin por la Asamblea. Por un segundo decreto de 18 84
que en
se
disipuso
se
establecería
con las
a
destino tierrais
un
uno de
caída
centro
nacionales
familias
fiscales o
los
agrario
las
departamentos de campaña
de
dos
leguas de
exclusivamente,
que se adquirieran con
eil
superficie,
utilizándose prodoicto de
venta de esas tierras. Los Jefes Políticos levantarían encuestas pai'a aíveriguar el nrúmero de las familias que estuvieran
3a
dispueistas
a
instalarse
en ios proyectados centrois agrarios. Alse publicaron. En Rocha, por ejemplo,
gunas de esas encuestas se
presíutaron 63 familias compuestas de
3
58
peiisonas,
de las
en conjunto 2,061 Oívejas, 7161 vacunos, 138 bueyes, 197 caballos, 14 arados y una carreta. Pero aparte de alguna que otra fracción de campo en que se dio comienzo de ejecución al plan programado, ningún impulso serio recibió la colonización. Nueve coilonias existían en 1:88 5, y véase cuál era su poiblación según la Memoria del Ministerio de Gobierno de ese año: cuales
178
eran aptas para
COLONIAS VaJMense Suiza
Quevedo Española Paullier.
Sauce Riachuelo
.
Cosmo'polita
Porvenir
el
trabajo
y poseían
Familias
Anales de
la
Universidad
Euti'e lai tierras adquiridas i-ov el Poder Ejecutiv;. figuraba una fracción de 2,130 cuadras de«tinaidas al excedente de familias de las colonias Suiza y Piamontssa próximas a emigrar a la Argentina y al Brarsil por falta de tierras en qué radicarse. La parte adjudicada a la Colonia Valdense fué vendida a los colonos a preicios que os'cillaban de siete a diez pesos cuadra en cinco anualidades, de acuerdo con el plan propuesto por el señor Armand Ugón, Pastor de la Collonia, quien obtuvo además auto-
rización
gubernativa
fo>mento
de
La
importación de trigos.
libre
la
misma
para
aplicar
producto
el
de
Los molinercs de Montevideo repitieron en 1883
de se-
años
Nuestra agricultura íde
gestiones
las
extranjeros con destino a la elaboración de harinas que
cuatro
antes
a
rían exportadas de acuerdo con
según
lanta,
al
importación
iniciadas trigos
venta
la
colonia.
80
lo
kilogs.)
—
demuestra
favor
el
de
la
libre
régimen aduanero
del
decían en su representación el
producidos,
siguiente
consumidos
cuadro de y
los
exportados
draw-bach. no ade-
—
hectolitros
en
el
úl-
timo decenio: PESCIOS MEDIOS Importación
AÑOS
Producción
Exportación
Anales de
476
Universidad
la
cuatro horas. Los molinos de Montevideo pueden elaborar 1.350,000 hectolitros de trigo por año y los de todos
máximum
e?
de
país 2.000,000. Pero
el
elaboración actual sólo es de 6.00,000 hectolitros.
la
El Presidente de la Sociedad de Economía Política doctor Gar-
María de Pena
los
una
publicó
de artículos
serie
tendientes
a
robustecer la gestión de los molineros. Recordaba que la estadística
de 1879 daba una superficie labrada de 274,152
policial
cua-
dras, mientras que las declaraciones para el
ción
que
atribuían
directa
mismo
año,
estadística
la
trada 1880,
de
país
al
y de
8,358
a
agricultura
la
en 1881,
366,865
aduanera de
arados,
73
606,509
y
18'S2
trilladoras
9
trilladoras
y
y
151
143
en 1883;
una
en-
segadoras
en
importación denunciaba
arados,
6,816
en
761,481
pago de la contribu52&,134 cuadras en es'3
segadoras en 1881;
y que la estadística industrial de 1879 demostraba una existencia de 194 molinos a viento, 44 molinos de agua, 11 molinos a vapor, 229 atahonas, 213 segadoras y trilladoras y 25,632 arados. Pero
producción de trigo
la
—
concluía
insuficiente y por efecto de los
ello
doctor Pena
el
país es
el
—
sigue siendo
todavía tributario de
Estados Unidos, de Chile y sobre todo de Santa Fe.
Contra la langosta y otras plagas. El Poder Ejecutivo instituyó a mediados de 1883 una Comisión
encargada de estudiar
medios más eficaces para combatir
los
la
langosta. Esa Comisión que estaba compuesta por los señores Blas
Domingo Ordoñana, Lucio Rodríguez, Carlos Reyles, MoMortet, Eduardo Mac - Eachen y Juan Mac Coll,
Vidal,
desto
Cluzeau
-
presentó en seguida un informe en
que durante
tres
los
que luego de hacer constar
el
corridos de junio de 1880 a junio
ejercicios
de 1883 la campaña había sido flagelada por la líjugosta criolla,
proponía que blica
y
currir
la
langosta
al
considerada como
fuera
que se impusiera a
los
calamidad
pú-
vecindarios la obligación de con-
llamamiento de comités
que presidirían
seccionales
los
Jueces de Paz y de subcomités de distrito que presidirían los Tenientes
Alcaldes,
omisos con multas
castigándose a los
de diez
pesos.
Fué aprobado
ese reglamento por
el
Poder Ejecutivo, promulgán-
dose a la vez otro que había gestionado y
Agricultura
con
el
propósito
de
la
gas y las lagartas, mediante la acción los habitantes
de la campaña.
En
Dirección de Inmigración
extirpar
los
la
langosta,
las
oru-
ñmultáne?. y uniforme de
ejidos de los pi'cblos
—
Je-
Anales de
cía
decreto
el
chacareros,
—
Universidad
en los centros agrarios del interior todos los
y
•
la
u ocupantes, de población quedan obligaformar fogatas al entrar 'a noche, debiendo alimentar e' fuego durante una hora por lo menos. La práctica de las fogatas agregaba será anual y se realizará desde el 15 de octubre dos
propietarios
a
—
—
hasta
15 de diciembre bajo la vigilancia
el
La Asociación Rural recabó en tra la extinción
de
los
cor.-
pájaros insectívoros, atribuyendo a la
'.aza
Inconsiderada que se realizaba durante
el
de las prescripciones del Código Rural,
que
larvas
mendar a
inmensos
ocasionaban
atendiendo
a
indicaciones
sus
los Jefes
de los Jefes Políticos.
misma época medidas
esa
desarrollo de numerosa."
el
daños
agricultores.
los
a
Y
Poder Ejecutivo recocumplimiento estricto de los reglaresolvió
Políticos el
año entero, a despecho
el
mentos vigentes.
Un
centenar de vecinos
ción de
medidas contra
Rocha pidió
de
a
turno
su
la
adop-
enjambres de abejas de los alrededores que destruían los parrales del casco urbano. Pasado ei asunto a informe de la Sociedad Rural se limitó ésta a decir que habiendo plantas apropiadas ningún daño podían causar las abejas, y entonces
el
los
Poder Ejecutivo envió
con un proyecto de ley por obligación
la
de
cultivar
forrajes
los
expediente a la Asamblea
el
cual se imponía a los agricultores
el
necesarios
para la
alimen-
a
Juntas
tación de sus abejas.
En
defensa de los montes. Ministerio
Bl
Gobierno
de
se
dirigió
en
18 S
5
las
Económico Administrativas denunciando el corte abusivo maderas de los bosques fiscales y comunales con destino a la -
de ela-
boración de postes y piques de exportación. Nada han hecho las decía para poner fin a esos aibusos que aicabarán con
Juntas
—
—
nuestros montes en breve término, y es necesario que salgan de su inacción
y
que
hagan
cumplir
Rural y que fomenten además
Industrias e.vtraetivas.
— La
la
las
disposiciones
de!
Código
plantación de árboles.
explotación niinei-a.
El Inspector General de Minas ingeniero Florencio IMichaelson atribuía el estancamiento de las explotaciones mineras en el Uru-
guay
a
la
deficiencia
de las usinas y de los proícedimientos téc-
Anales de
478
nicos en uso,
más que
usinas que tenemos de Cuñapirú
el
Universidad
la
a la pobreza del subsuelo.
— decía — pierden
Las dos grande®
muclho metal fino.
costo de elaboración asciende a la
En
la
enorme suma de
15 pesos por tone*rada y en la de Corrales, aunique el costo es menor, se pierde mucha cantidad de oro. Para cubrir los gastos es necesario que el mineral produzca treinta gramos de oro por diez por concepto de pérdidas y
beneficiada,
tonelajda
concepto
extracción
de
En conjunto
transporte.
y
doce por
gramos de
52
rarísima en Cuñapirú y en él munido entero. Felizgracias al molino recientemente instalado agregaba per la Compa'ñía Francesa se iha coinseguido aumentar loe rendiEse niientois y a la vez disminuir los gastos de explotaición. oro, riqueza
mente
—
—
molino tritura 20 toneladas de mineral cada veinticuatro horas, el costo que era hasta ahora de 40 gramos de oro (30 de elaboración y 10 de pérdida) queda iconsiderablemente reducido. En un segundo iniforme retLativo a los li8 meses transcurridos
y
desde enero de 18 8 5 hasta junio de 18 8 & fijaba así de la explotación de cuarzo auriífero en Cuñapirú,
el
resultado
Corrailes
y
Sierra de Areicuá:
Mineral
beneficiado
Rendimiento
Otras
.
.
.
.
5,116 toneladas
.
obtenido
$
115,706
intlusti'ias.
La industria
na^cional recibió fuerte
Que recorremos con
la incorpora'ción
impulso durante
el
período
de establecimientos tan im-
portantes coimo las destilerías de Corradi y Cía. en La Paz y de Meillet y Payssié en Pando;
las fábricas
de los señores Gioréllo;
fábrica de
la
de muebles y veihículos
calzados
de
lois
señores
Márexiano dooíde por primera vez entre nosotros se dio amplia entrada a la mujer en el personal obrero; la fábrica de tejidos de Adams Shenzer en el Durazno. En Nuevo París funcionaban 11 curtidurías con un personal de 109 obreros, de los cuales 40; pertenecían a la fábrica Lanza Hnos., la más importante de todas. Esas curtidurías atendían en 1S84 las dos terceras partes del consumo nacional, y la producción de ese año, que se apreciaba en 41.6,07i5 pesos, estaba constituida por 3 0.10 suelas, 6,650 docenas de cueros de carnero
Ayiales
de
la
479
Universidad
y badanas, 9,000 docenas de becerros, 4,060 cueros de potro, de ciervo, 200 de vaquillona y 2,000 2.000 de carpincho, 300
mamones.
de
Premios obtenidos en
las Exposiciones.
tuvo lugar en Buenos Aires una Exposición Continenen la que los expositores uruguayos obtuvieron 2 8 medallas oro (figurando entre los premiados la Instrucción Pública,
En 1882 tal
de
Sociedad de Amigos de
la
la
Educación Papular y
doctor Fran-
el
A. Berra), 66 medallas de plata, 91 de bronce y 126
ciSiCo
ciones hononíificas.
En
conjunto
3ill
men-
premios.
La Escuela de Artes y Oíicios que figuraba entre los establecimientos premiados y que tenía su banda de música a la entrada de la Sección Uruguaya, fué objeto de merecidas distincioEl
nes.
ex
Sarmiento,
Presidente
que
presidía
la
Exposición,
pidió a nuestro Gobierno que aplazara el regreso del Director de
Escuela señor Bélinzon. «Deseamos tributanle
la
En
la
obtuvo
el
—
—
decía en su
homenaje de nuestra estimación». Eixposición de Amsterdam, realizaida tres años después, Uruguay dos grandes dip^lomas por sus extractos de carne
telegrama
el
y sus preparaciones de carne seca, cinco medallas de oro por sus cueros curtidos y quesos, 15 medallas de plata, 8 medallas bronce y 11 menciones honoríficas. La Asociación Rural reailizó una nota-ble Exposición Agro-pe-
lanas, d-e
cuaria en 1883 en la Plaza de Artola, encaminada según
grama publicado estado
y
«a
estudiar
van
importadas
revistar los
las
diversas
adquiriendo en
ganados aptitudes la
criollos
que
República
las
por
el
pro-
en su natural
nuevas razas la
mestización
Los principales premios fueron adjudicados a don Carlos Reyles, por haber demostrado decía el jurado mediante el continuado culque presidía don Juan MacnCoill tivo de la raza Durham, «la eficacia de esa raza y su fácil aclimatación en el país, dando además pruebas de notable competenconnaturalización».
t)
—
cia
este
en
la
—
dirección de los trabajos necesarios en explotaciones de
género»;
a los señores Etchenique hermanos por ejemplares
a don León Ventura por sus animales Durham, y a los señores Hugo Tiddeniann, Fitz Herbert y Drablb Hermanos por sus razas Rambouillet y Lincoln.
de
El
la
raza
éxito
piamontesa;
alcanzado por esta Exposición
estimuló
al
Gobierno a
Anales de
480
universidad
la
promover un nuevo torneo agropecuario que tuvo lugar en 18S5 bajo la dirección de la Sociedad Rural de acuerdo con un programa formulado por la Dirección de Inmigración y Colonización qiíe
abarcaba seis seccion-es:
zootecnia,
maquinaria agrícola, animales
rales,
agricultura,
industrias
ru-
piscicultura.
silvestres,
Patentes industriales. ley
L»a
patentes
de
industriales
sancionada en 1885
autorizaba
Poder Ejecutivo para conceder privilegios exclusivos en los casos de invención, mejoras de invención e introducción de industrias pat-entadas en el extranjero y que fueran implantadas en el al
país
dentro
del
primer
año
de
su
Do acuerdo con
explotación.
esa ley se tendría por descubrimiento o invención los nuevos pro-
cedimientos industriales, los nuevos medios, las nuevas aplicaciones de medios conocidos para la obtención de un resultado o de
un producto
No
industrial.
sivo a favor de planes
se concedería patente de privilegio exclu-
financieros,
conocidos suficientemente en
el
descubrimientos e invenciones
país o fuera de
él,
los
puramente
y cuya buena aplicación no se hubiera demostrado prácticamente, las composiciones farmacéuticas y aquellas que fueran contrarias a las buenas costumbres o a las leyes de la República. teóricos
La Nación no garantiría cubrimientos seis
o
o nueve
cada año
el
ni el mérito ni la prioridad de los des-
invenciones.
años,
a
El
elección
privilegio
se
acordaría
por
tres,
de los interesados, abonándose por
impuesto de 25 pesos.
La propiedad
territorial.
Dos mensajes remitió
el
gobierno
de
Santos
a
la
Asamblea
acerca de las tierras públicas.
El primero para pedir Civil
la
determinación del alcance del Código
con relación a varias leyes anteriores.
segundo para presentar un proyecto de adjudicación de fiscales y saneamiento de la propiedad territorial. Todo ocupante de tierras no arrendadas por el Fisco podría adquirirlas en propiedad mediante el precio de treinta pesos la cuadra en el Departamento de la Capital y diez pesos en el de Canelones. En los demás departamentos el precio oscilaría de 7,000 a 10,000 pesos la suerte de estancia. El pago se efectuaría en diez años. El Poder Ejecutivo abriría a !a vez un Registro de El
tierras
Anales de
Universidad
la
íiiScriiKión de Bienes Inmuebles, al
que deberían concurrir todos
plazo
de
por ellos presentados se pasarían
al
Fiscal
el
dentro
propietarios
los
los
del
considerara buenos
481
cuatro años. Los títulos Juzgado de Hacienda. Si por
avisos
publicarían
se
espa-
de un año emplazando a los que se juzgasen con mejor de-
cio
plazo sin que se
dedujese oposición los
recho.
Transcurrido
títulos
serían archivados y canjeados por otros nuevos que go-
el
zarían de la garantía del Estado. Si
buenos
o
durante
si
el
plazo
el
Fiscal no los encontrara
pasarían los antecedentes al Juzgado de ción respectiva
sentaran
oposición
de los edictos hubiese lo
Civil
para
la resolu-
en juicio ordinario. Los títulos que no se pre-
Registro dentro del plazo de los cuatro años care-
al
cerían de efectos jurídicos, pero los interesados podrían en todo tiempo pedir su inscripción abonando una multa equivalente a
décima parte del valor de la propiedad. Gobierno buscaba con ello hacerse de recursos y para conseguirlo implantaba el sistema de saneamiento de la propiela
El
dad
territorial
Sólo
conocido
bajo
el
nombre de Registro Torrens.
derechos reales registrados
los
tendrían
efectos
jurídicos
de acuerdo con esa importante iniciativa que ya habían aplicado con gran éxito la Australia y algunos Estados de la Confederación Norteamericana.
El valor de la propiedad territorial movilizada en toda la República ascendió a 13.276,454 pesos en 1S8.5 y a 9.858,703 en 1S86. correspondiendo de estas cifras al Departamento de Mon-
9.253,730 y 5.194,344 respectivamente.
tevideo
— El
Legislación bancaria.
Santos pasó a
la
Banco del Uruguay.
Asamblea a principios de 18 8 3 cuatro pro-
yectos
de ley por los que se autorizaba
Banco
del
Uruguay,
se
establecimiento
el
del
decretaba la Unificación de las Deudas
Internas y Externas, se abordaba la construcción del Puerto de Montevideo y se establecía una comisión de cuatro millones de pesos a favor del sindicato o sindicatos que tomaran a su cargo la
realización de esas obras.
El
Banco
del
Uruguay tendría sogún
el
proyecto
un capital
de dos millones de libras esterlinas constituido por acciones. La cuarta parte de ese capital sería destinada a operaciones hipotecarias, la
a
ct'MliUa T. VII
cuyo efecto gozaría hipotpcnria. -31.
la
institución
del
monopolio de
El Banco podría emitir billetes hasta
el
Anales de
482
dría
de los depósitos judiciales.
privilegio
el
Universidad
monto destinado
del capital excluido el
triple
la
funciones adscriptas a
la
a hipotecas. TenDesempeñaría las
Oficina de Crédito Público. Abriría al
Gobierno una cuenta corriente en descubierto hasta la suma da un millón de pesos. «En ningún caso y bajo ningún pretexto podría gozar del privilegio del curso forzoso». El Banco seria regidi)
por un Consejo de tres miembros en Montevideo y un DirecDos de los miembros del Consejo Local serian
torio en Londres.
por
designados
Directorio
el
Londres y
de
el
por
tercero
el
Gobierno.
La Cámara Nacional miento general de
de
Comercio,
haciéndose
plaza, dirigió a la
la
eco
del
senti-
Asamblea una represen-
contra ese proyecto, que fué devuelta por los términos en
tación
que estaba decía
concebida.
La creación
Cámara de Comercio
la
del
—
Banco del Uruguay
obligaría
al
país
—
realizar
a
todas sus operaciones al contado o en su defecto con garantías reales y la cuenta corriente del Gobierno, dentro de una administración
acosada
inevitablemente
A
al
por
el
curso
Cámara de Diputados
la
secreta y cuatro
como
déficit
la
actual,
conduciría
forzoso. le
fueron suficientes una sesión
sesiones públicas para
sancionar en general y
en particular los cuatro proyectos. ¡Cinco días en todo! No fué tan galopante la marcha en la Cámara de Senadores. Un pequeño grupo en que descollaban el doctor Pedro Visca y don Pedro P-auzá impugnó con ardor el proyecto de creación del Banco del
promoviendo
Uruguay,
con
que
ello
manifestaciones
tan
violentas
segundo de dichos senadores se vio obligado a presentar renuncia de su cargo, invocando que e:as manifestaciones estaban «alcanzando límites que la cultura nacional rechazaba». Pero los proyectos triunfaron también en esa rama del Cuerpo Legislativo. La ley de abril de 188 3, calcada en el proyecto del Poder Ejecutivo, estableció que el Banco del Uruguay pondría el Escudo Nacional en todos sus documentos «con excepción de los billetes do emisión». Tendría cuarenta años de duración. Establecería agencias en el interior de la República y también en el exterior, dentro
pero
del
estas
capital».
oficialismo
últimas
«no
el
tendrían
ninguna: participación
en
el
El capital de dos millones de libras esterlinas se inte-
graría por acciones.
La cuarta parte
se destinaría a la
fundación
de un Banco Hipotecario que gozaría del monopolio de la cédula. E';
Banco podría emitir hasta
el
duplo del capital realizado ex-
Anales de
universidad
la
483
cluida la parte destinada a la institución hipotecaria y mantendría un encaje equivalente al 25 del monto circulante. Tendría
%
monopolio de
el
realizado.
la
emisión menor hasta
Administraría
los
depósitos
el
20
judiciales.
%
capital
del
Desempeñaría
funciones de la Oficina de Crédito Público. Abriría al Gobierno una cuenta corriente en descubierto hasta la suma de ua millón de pesos. En ningún caso y bajo ningún pretexto podría ei Banco gozar del curso forzoso. La administración correspon-
1&.S
dería a un Consejo Local de tres ei:tranjero
miembros y un Directorio en el miembros del Consejo
fuere necesario. Dos de los
si
Local serían nombrados por los accionistas y sidiría, por el Gobierno.
el
tercero, que pre-
Eran muy tentadores
los privilegios del Banco y muy tentacomisión del sindicato que tomara a su cargo fundación del establecimiento. Pero la administración finan-
dora también la
ciera
Uruguay estaba en esos momentos acosada por el como decía la Cámara Nacional de Comercio en su
del
déficit
la
—
— y nadie en
Londres quiso hacerse cargo de esa la que el gobierno de Santos pretendía salir del tembladeral en que estaba. Y gracias a ello escapó el país a una nueva crisis de curso forzoso que se habría producido a despecho de las manifestaciones y protestas del Poder Ejecutivo y de la Asamblea.
representación
disfrazada sucursal de la Tesorería, con
Fi saldo Circulante del anterior curso forzoso.
No obstante m.inistración
convertible
los enérgicos esfuerzos realizados
Latorre y
después para
«año terrible»,
del
todavía
extinguir
quedaba
durante
ad-
la
la
emisión
al
finalizar
inel
un saldo circulante de 1.905,312 pesos, según la Memoria de Hacienda de ese ejercicio. Y la presencia de ese saldo tenía que actuar y actuaba bajo forma de colaboración decisiva en la aictitud de la plaza contra la nueva aventura a que empujaban las descalabradas finanzas
año 1882
dt la época.
!<;'
Vítilor
(lo
En 1883 ción
de
las
se
nionodas de oro.
produjo en nuestro mercado una fuerte importa-
«alfonsinos»
de
oi-o
de 2o
pesetas,
por
efecto
del
tipo
Anales ie
484
cuatro
de
ochenta y
pesos
comercio no obstante
Universidad
la
centesimos
dos
que
a
los
el
i'ecibía
de peso con relación al do-
inferioridad
la
La Cámara de Comercio denunció el hecho al Poder Ejecutivo, y éste se dirigió a la Asamblea en demanda de una ley que fijara a dichas monedas y a los «argentinos» de blón de 100 reales.
cinco pesos el tipo de 4
Cámara de Comercio
la tal
fino
que
contienen.
$
66.
—
se
El valor de las monedas
determina por
Todas
de
cepción
Inglaterra y del Brasil
la
de 916
tipo
9 ¡10
—
decía
cantidad de me-
emisoras
naciones
las
intercambio han adoptado la proporción de
la
de nuestro
de fino con ex-
que mantienen su antiguo
2|3.
La Contaduría de
la Nación, a la que se le pasó el espediente, mostró de acuerdo agregando en cuanto a la coexistencia de dos porcentajes de fino que no podíamos inclinar nuestro patrón monetario del lado de la mayoría de los países del globo desde
se
que todas nuestras deudas y obligaciones comerciales estaban basadas sobre el peso oro nacional de 917 milésimos de fino.
En
el
deseo
de regularizar
equivalencia de
dos
los
asentar
y
de la Plata, se dirigió nuestra
sobre
bases
estables
en
monetarios vigentes
patrones
el
la
Río
Cámara de Comercio a la de Buemomento a otro quedaría con-
nos Aires anunciándole que de un vertido en ley
proyecto que fijaba
el
Para
valor de $ 4.66 uruguayos.
una y otra plaza
al
argentino de 5 pesos
operaciones de cambio
las
—
el
entre
—
esa relación de vaagregaba en su nota enteramente exacta, en virtud de haberse despreciado varias fracciones decimales y ha pensado entonces la Cámara de Comercio que sería conveniente establecer reglas fijas de cálculo mediante una planilla de equivalencias fundada exactamente en
lor
no
es
ambos países. la comparación de los patrones monetarios de Nuestro peso nacional (ley de 1862) es de 1 gramo 697 j ley de 917 milésimos. Contiene por consiguiente 1.556149 gramos de metal fino. El peso argentino de
900
milésimos.
Contiene
(ley
por
de 1881)
es
consiguiente
de 1.6129 y ley
de
1.45161
fino.
Quiere decir que un peso nacional oro oriental vale 1.0720159 en
moneda argentina
y que un peso oro argentino vale 0.9328220 en muy importantes habrá que
nuestra moneda. Tratándose de sumas
tomar bastará
estos
números
agregar
convertirlos
en
7
como
y 1|5
%
divisores,
a
pero
nuestros
argentinos y dividir
los
en pesos pesos
todas
las
demás
nacionales
argentinos
para por
para convertirlos en pesos orientales. Tales eran las bases propuestas y como estal>an bien estudiadas
1.072
:
A7iales
ele
Universidad
la
485
comercio se apresuró a adoptarlas y pronto quedaron incorpora-
el
das a las costumbres de plaza.
la.
La ley dictada por la Asamblea, de acuerdo con ei dictamen de Cámara de Comercio, fijó al argentino y al alfonsino el piftcio
de 4
$
66.
Otra ley de 1884, inspirada también por
la
Cámara Nacional de
Comercio, desmonetizó las pequeñas piezas de oro de menos de do3
que dificultaban las operaciones mercantiles por su misma pequenez y por su desgaste y que podían ser reemplazadas por las pesos
piezas de plata.
Acuñación de monedas de níquel. Desde el año 1875 estaba autorizado el Poder Ejecutivo para acuñar 600,000 pesos en piezas de níquel de 1, 2 y 5 centesimos. El Poder Ejecutivo sometió a la consideración de la Asamblea 3n 1885 una propuesta de acuñación por esa cantidad y pidió a la vez
de
autorización 1.500,000
para
acuñar piezas de plata hasta
Pero
pesos.
ni
una
ni
otra
iniciativa
la
cantidad a
alcanzaron
realizarse.
Al discutirse en
Cámara de Senadores el primero de esos el monto del cobre acuñado en y 1869, y en 134.320 pesos el monto de
la
proyectos se fijó en 512,800 pesos 1844, las
1854,
piezas
circulante
1857,
1867
retiradas
de
fundidas desde 1880 hasta 1884. El saldo
y
378,480
pesos
piezas de níquel según
el
era
lo
que debía sustituirse por
las
Senado.
Interés legal del dinero.
Una
ley
sancionada en 1882 estableció que en
no
se
al
año.
iJl
capital inglés en la
hubiere pactado
el
los
casos en que
tipo de interée, regiría la tasa del
América
9
del Sur.
Véase cómo fijaba «The Economist» de Londres en 1884, en víspera de la unificación de nuestras deudas, pitales ingleses colocados en la
%
América
del
el
monto de
los
la
ca-
Sur (libras esterlinas)
Anales de
486
Universidad
la
Fondos
Brasil
.
Argentina Chile
Ferrocarriles
del
y
Gobierno
otras empresas
Total
22.000,000
20.000,000
42.000,000
17.000,000
14.000,000
31.000,000
7.500,000
2.500,000
10.000,000
3.500,000
3.000,000
6.500,000
.
Uruguay
Situación de los bancos de emisión.
De
los balances de los bancos de emisión correspondientes al mes marzo del período 1883-1886 extraemos las siguientes cifras (Banco de Londres y Río de la Plata, Banco Comercial y Banco
de
Inglés del Río de la Plata):
ANt»S
Caja
Deudores
Emisión
Capital
Acreedores
1883
$ 3.296,327 $
1884
2.958,151
1885
5.933,313
9.653,900
3.094,000
4.588,030
7.905,183
1886
9.317,930
12.434,466
4.034,000
5.759,590
11.958,806
A
8.795,593 $ 2.436,042
9.469,067
2.436,042
despecho de las desconfianzas
$
3.647,610 $
6.008,268
4.128,990
5.862,177
reinantes y de
la
general de los negocios todas las cuentas bancarias
como
se ve,
el
paralización
denunciaban,
crecimiento de las fuerzas productoras,
una población
el
ahorro
en aumento,
la
acumulación de materiales de resurgimiento económico que sólo
es-
de!
país,
las
necesidades
de
peraban perspectivas favorables de saneamiento político y administrativo para comunicar al país un impulso fuerte y vigoroso, el impulso
fuerte
ocuparnos de
la
y vigoroso que veremos administración Tajes.
actuar
más adelante
al
CAPITULO IX Movimiento administrativo
lientas y gastos.
Al Vidal,
pasar
del
— El
Aliuisterio
donde ejercía
República,
resolvió
el
de
Guerra
la
mando
general
el
aumento,
déficit en constante
efectivo,
Santos
de los atrasos en que se debatía
a
la
la
Presidencia
gestionar
de la
regularización
la
a pesar del incre-
Gobierno
el
administración
de
y de la incesante consolidación de sus deudas. d€cía a la Asamblea Los pagos del Presupuesto de 1881 continuaron regularmente hasta el mes d.3 en marzo de 18 8 2 produjeroa setiembre en que ocurrió el atraso. Las rentas
mento de
las rentas
—
—
suma? del cálculo de recursos, pero los gastos aumentaron, surgiendo por efecto de ello un déficit de 800,000 pesos. El año actual cerrará a su turno con un desnivel de 300,000 pesos a causa de la e.xageración del cálculo de recursos. Para enjugar las
ambos
déficits habría
pesos;
elevar al
pasivas,
que introducir rebajas por valor de 300,000 % sobre las clases el descuento de 2
%
25
que redituaría 60,000 pesos;
neros (hasta
el
4^5
los vinos, calzado y
%
ropa hecha y
darían 500,000 pesos; portación
pagos
a
y
establecer
cargo
del
varios
alzar
derechos
adua-
40 9r
sobre
sobre los alcoholes y tabacos, el
8
%
sobre la exportación) que
crear un adicional del el
Tesoro
descuento
el
del
1
1
Ve
exceptuados los
%
relativos
de las deudas públicas. El Presupuesto de 1881 7.857,275 y el de 1882 subía a mensaje
—
—
la
im-
iodos
los
sobre
sobre
al
servicio
agregaba
está
fijado
el
en
9.094,872. No habiendo podido regularizarse los pagos del primero, menos podemos hacerlo con los del segundo que introduce aumentos por valor de uno y cuarto millones de pesos. Juntamente con el plan de recursos encaminado a obtener la
regularización
proyecto por
de los pagos presentaba el
que se autorizaba
1.000,000 de pesos con
9
r'f
la
el
Poder Ejecutivo otro de una deuda de
emisión
de interés y
5
'';
de amortización
Anales de
488
destinada calzadas,
al
trazado
la
amojonamiento
y
de faros,
expropiación
Universidad
de
caminos,
puentes
dragado del puerto de
y Montevi-
deo hasta ofrecer acceso fácil a los buques de mayor calado y rescate de la concesión para la pesca de lobos. Ocho meses después, en noviembre de 18 82, anunciaba el PreSantos a la Asamblea en un segundo mensaje, que el había crecido por efecto de los movimientos revolucionade los reclamos diplomáticos y de la demora en la sanción
sidente déficit rios,
Y
de los recursos pedidos.
para cancelar ese déficit proponía
la
emisión de una deuda de 3.000,000 de pesó~s titulada «Billetes del Tesoro», con 5 % de interés anual y 7
acumulativa y a la par. «Pero puedo aseguraros las
que
—
a la Asamblea al abrir que esa herencia del pasado solidaridad de los gobiernos que me
prevenía
—
sesiones ordinarias de 1883
me
fué impuesta por la
precedieron, no
producirá en
se
terminará,
aiio
el
porvenir y que el corriente extraordinarios que no
acontecimientos
salvo
pueden preverse, sin otras erogaciones que las votadas por V. H. en la ley de Presupuesto.» A mediados de 18&3 resolvió la Asamblea que el ejercicio económico, que hasta ese momento se computaba de enero a había dicho el diciembre, corriera de julio a junio como medio de que el Cuerpo LePresidente Santos fundando su pedido
—
—
gislativo
pudiera
ocuparse
del
presupuesto
desde sus primeras
mes de febrero y de que fuera posible formular cálculos exactos de recursos. Eran dos razones muy atendibles. Pero en el fondo lo que se ponía en juego era un resorte financiero encaminado a precipitar la recaudación de sesiones ordinarias en el
algunos impuestos directos.
Para articular los dos ejercicios se prorrogaba con varios aumentos el Presupuesto de 18 8i3 hasta junio de 18 84 y se establecía que las cuentas de cada ejercicio deberían ser sometidas a la Asamblea dentro de la primera quincena de la apertura de lae
sesiones ordinarias.
Al terminar
el
ejercicio
188 3-18 84, que era
el
primero de
la
publicó la Contaduría General de la Nación sus acostumbrados Estados anuales, de los que resultaba un ^'déficit de
serie,
1.166,403 pesos.
Los
Estados
del
ejercicio
1884-1885
señalaron
otro
déficit
monto de sueldos y obligaciones pendiente? de pago en 30 de junio de 1885 era de 2.043,;24 6 pesos. La Me-
más
considerable. El
•
Anales de
del
F.'.oria
Hacienda
de
¿Ministerio
Universidad
la
489
elevaba
lo
a
2.588,098
pero
(1.0.92,671 de la lista civil y 1.138,607 de la lista militar);
agregaba que había varias existencias a realizarse en la Aduana y otras oficinas recaudadoras por valor de 544,853, quedando entonces como déficit efectivo el de 2.043,246 pesos. En abril de 1886, a raíz de la revolución del Quebracho, durante el brevísimo interregno que separa las dos administraciones de Santos,
dirigió
el
Vidal un mensaje a la Asam-
doctor
blea en que fijaba el déficit en 9.557,000 pesos y proponía para
cancelarlo
de los
emisión de una
la
interés y 4
%
deuda de 8.000,000 de
8
Ve
de
de amortización y la Incorporación al Presupuesto restantes
1.557,000
en
el
de créditos
carácter
privilegia-
dos.
—
Pero en setiembre del mismo año el propio general Santos que ya había vuelto a ocupar la presidencia de la República se encargó de presentar un Estado de Contaduría del que resul-
—
taba que además de los ocho millones que debían cancelarse con deuda pública, existían otros tres y medio millones constituidos por
créditos
civiles
(1.259,882),
generales
liquidaciones
mico-Administrativa
de
la
800,000
Y
pesos
en
sin embai-go
Al
abrir
las
las
(189,949)
(1.282,699),
Junta Econó-
la
varios
y
créditos
promesas contenidas en
el
pri-
13.000,000
en
1886.
rentas estaban en tren de constante aumento.
la.s
sesiones
extraordinarias
Aduanas
$ .
de
1886
fijaba
así
-1
progreso de las rentas públicas:
el
1881
Junta de Crédito Público
de
ido creciendo constantemente desde
hasta
1882
Presidente Santos
créditos
Capital
más (137,404). En resumen, y no obstante mer mensaje, el déficit había
militares
créditos
(630,066),
.
4.960,603
1882
$
2.121.136
.
Patentes Sellado
(2.266.306)
6.981.300 (2.520.495)
$
7.987.842
(2 839,341)
629,180
664,924
765.354
.321.570
336.090
206,838
216.315
237,230
-
1.112.909
1.317,686
1.500,667
128.903
1.291.294
$10.630.698
$12.138.477
803.261
$
$
1884
317.379
.
Otras rentas
1883
— —
Timbres Contribución Directa.
5.388,542
7.885.000
887,520
$
8.542.368
1
de
Alíales
490
la
Universidad
La Comioióa de Hacienda de la Cámara de Diputados formuló 188 7 un Estado más amplio y más exacto del crecimiento de
ev
rentas públicas
las
1877 hasta 1886. He aquí
desde
las
cifras
globales de ese Estado:
1877
$
8.221,952
8.962,685
1878
8.252,087
1879 1880 (Rebaja aduanera de Latorre
)
.
.
7.015,558 7.885,012
1881
1882
9.095,409
1883
10.928,637
1884-1885 1885- 1886
12.373,689 (
Revolución del Quebracho
Quiere decir, pues, que
el
.
)
11.294,693
crecimiento formidable del déficit
—
obra de los gastos extra Presupuesto y del desorden administrativo
—
corría paralelamente con
el
crecimiento de las entradas del Te-
soro público, obra del ensanche de la población, del progreso de sus
fuentes de recursos y de la multiplicación de los impuestos
Las rentas por ejercicios económicos.
Hemos la
extractado dos cuadros de las rentas recaudadas durante
administración Santos:
1886 y
el
formulado por
el
la
presentado por
el
Poder Ejecutivo en
Comisión de Presupuesto de
la
Cámara
de Diputados en 1887.
Vamos rios
a extractar ahora de la
de Estadística y de
los
Memoria de Hacienda, de
Estados de
la
los
Anua-
Contaduría otras cifras
más detalladas, advirtiendo que entre ellas y las ya reproducidas hay divergencias a veces notables por efecto de la falta de cómputo de las existencias del año anterior, de los vales de tránsito rescatados, de las devoluciones y de ciertos ingresos que como los montepíos,
descuentos a las pensiones
y jubilados
en comisión,
apa-
recen en unos Estados y en otros no. Todas ellas son sin embargo
rigurosamente
oficiales.
He
aquí esas cifras:
Anales de
ia
universidad
49!
Anales de
492
Universidad
la
meses de atraso y
las clases pasivas tenían hasta 10
el
mismo
ejér-
base del militarismo prepotente, sufría hasta cinco meses de atraso en 1885. De vez en cuando los soldados de. los bade línea,
cito
por
desfilaban
tallones
casa habitación
la
donde recibían una moneda de plata a
Presidente
del
Santos,
título de dádiva. Adviértase
que era frecuente en esa época de miseria que
los
soldados pararan
a los transeúntes para pedirles algunos centesimos de limosna.
En
Memoria de Hacienda de
la
i;umina bien
tamo
del Capitán General
mismos
los
Er;
horcas
de
Pasiva,
la
una partida que
Máximo Santos
sin interés, 229,271 2>esos».
días en que los empleados tenían que pasar por las
caudinas
Arcos de
1885-86 figura
cuadro administrativo de la época. Es esta «Prés-
el
los el
compradores de sueldos ubicados
en
los
Presidente de la República tenía un cuarto
de millón disponible en su caja para sacar de apuros a la Tesorería
General de
Nación!
la
La situación de
Deuda
df
los
rrota
el
los
—
entrega de Títulos
El impuesto de aduana.
mediados de 1882 decretó (sobre la importación
nales:
la
reanudándose de nuevo con ese acto de bancapago mensual de los presupuestos. Pública,
Legislación tributaria.
A
fué regularizada a mediados de
ein^pleados
pero otra vez como en 1882 mediante
1886,
la
el
10
Asamblea varios derechos % al tabaco en rama, el
aguardientes, cigarros y tabacos en general,
%
polán, el 3
tación
el 2
%
el
5
S¿
al
adicio8
%
.a
mada-
a los vinos, calzados, ropa hecha, y sobre la expora las lanas y
destinado a enjugar
el
el
V2
déficit.
% Y
al tasajo),
se
ocupó a
cuyo producto estaba la
vez de una suba
general de derechos aduaneros tendiente a producir un excedente de 600,000 pesos.
La
ley
de
importación 37
''/c
aduana de 1884 establecía como derecho general de 25 % ad valorem y alzaba ese porcentaje hasta el
el
para los vinos, tabacos y cigarros, calzado, ropa hecha, fideos
y otros productos manufacturados similares a los de las industrias
nacionales.
En
la
Argentina regía también en
el
curso de ese año
como derecho general de importación, y como derechos
%
tratándose del tabaco y el 45
%
25
/ó
tratándose de la ropa hecha,
el
55
ei
calzado y otros productos que se elaboraban en
En
el
especiales
el
1885 la Asamblea votó un nuevo adicional del
país. 1
f/c
sobre la
Anales
iaiportación
y
mandó organizar
licores y bebidas
a la vez el
La
ley
bleció
empko
chocolates,
Oficina
1886,
especiales altos el 43
fósforos,
tabacos
el
país,
de
vinos,
prohibiendo
derogatoria de algunos de los adicio-
fideos,
suelas
ropa hecha, muebles, calzado;
alcohólicas,
de Análisis
derecho general de importación
velas,
493
de sustancias nocivas a la salud.
como derechos
los vinos,
la
importadas o producidas en
aduanera de
nales, elevó el
Universidad
la
cl'i
y
cigarros,
derechos especiales bajos
el
12
%
queso,
%
al
30
curtidas; el
51
i/¿
%
y
esta-
para las galletitas,
%
manteca,
para las papas y
el
%
47
para
para las bebidas cerveza; el
20
%
y
como
para las
maderas en bruto. Prescribía esa misma ley que los avalúos se practicarían por una Comisión compuesta del Colector de Aduana, el Inspector de Visias, los Vistas y un número igual de comerciantes elegidos por el Ministro de Hacienda.
La contribución
directa.
Los cuadros generales de este impuesto correspondientes al año arrojaban un capital de 211.991,679 pesos distribuidos entre 39,590 propietarios. Dentro de esas cifras, resultantes de las de1882
claraciones de
toda
la
República, figuraban 18,019
contribuyentes
con un capital de 95.000,000; 5,536 contribuyentes brasileños con un capital de 39.800,000; 6,171 contribuyentes españo-
orientales
lee
con un
ca^pital
de 26.500,000 pesos; 5,415 contribuyentes
nos con un capital de 20.700,000 pesos; ceses
con un capital de 12.700,000 pesos, y en proporción
ciente las
La
italia-
2,474 contribuyentes fran-
decre-
demás nacionalidades.
riqueza imponible de los Bepartamentos de
Campaña
ascen-
día en 1883 a 162.804,744 pesos, destacándose entre sus elementos
campos de pastoreo por 79.450,784 pesos; los campos de labranpor 10.655,000; el ganado vacuno (5.957,034 cabezas) por 29.785,170; el ganado ovino (14.595,495 cabezas) por 8.757,297. En 1884 había en el Departamento de Montevideo 12,320 contribuyentes con un capital de 93.289,11.5 pesos, y en los demás departamentos 42,718 contribuyentes con un capital de 164.025.190. En conjunto 55.038 propietarios con un capital de 257.314,305 pesos. Las declaraciones generales de 1886 elevaba.n el capital a los
za
282.030,143 pesosi y
el
número de contribuyentes a
57,411
(27,394
nacionales con un capital de 126.922,924 pesos y 30,017 extranjeruícon un capital de 155.107,219 pefeos). Sobresalían entre estos últimos las siguientes nacionalidades:
Anales de
494
Universidad
la
7,016 brasileños con
8,238 españoles
La
29.616,129
>>
3,044 franceses
->
16.381.266
»
13.324,875
Departam-ento
en el
Campaña para tículos
las
%
de
Capital
la
y
5
Vz
)cc
en
ae
los
propiedades urbanas, campos de pastoreo, ar-
de importación,
Capital y 4
^c
capitales
en la
en giro y ganados;
Campaña para
los
y
4
terrenos
en
'/ce
sin edi-
campos de pastoreo con cultivo de forrajes y campos sem-
ficio,
brados con cereales o plantas oleaginosas. La ley 1886 estableció la cuota uniforme de
República para
ia
cuotas de
ley de contribución directa de 18S3 establecía las
/'(f
la
32.222,574
9,266 italianos
516 ingleses
5
52. 2 14, 195
$
»
los
campos de pastoreo,
las
6
^2
%c
en toda
propiedades urba-
nas, los capitales en giro, los artículos de importación y los ganados, y
de 5
la
V2
%c
para las chacras y
los
campos de pastoreo
con sementeras.
1 'atantes
La
de giro.
ley de patentes de giro de 1883 dividía los patentables
en 17
categorías,
desde la de 5 pesos hasta la de 2,000. Las categoría»
más
eran la de 250 pesos a cargo de los hoteles, diques y
altas
empresas de
faros;
la
de
300 a cargo de las
joyerías, casas im-
portadoras o exportadoras, saladeros y tranvías; la dG 400 a cargo de los hoteles de lujo. Plazas de Toros y fábricas de extracto de carne; la de 500 a cargo de los bancos de depósitos y descuentos; la
de 600 a cargo de las casas de bailes públicos o academias;
la
de 1,500 a cargo de las empresas de gas y la de 2,000 a cargo de
bancos de emisión. Véase cómo se distribuía el impuesto de patentes en primeros años de la aciministración Santos: los
Departamento de la Capital Departamentos de Campaña
.
?
329,103
$
$
629,165
349,308
?
?
664,924
355,562 323,706
315,616
300,062
..
tres
1884
1883
1882
los
$
679,268
:
Anales
universidad
I2
(le
495
l'resupuesto General de Gastos.
ti
La ley de Presupuesto General de Gastos del año 1883 fijaba monto de las erogaciones en 9.920,413 pesos distribuidos en los
siguientes
rubros:
Cuerpo Legislativo Presidencia
de
Escolta de
ídem
Ministerio
de
Ministerio
de)
194,041
$
República
la
47,690
20,112
Relaciones Justicia,
Exteriores
Culto,
101,312
712,325
etc
Hacienda Ministerio de Gobierno
Ministerio
de
Ministerio
de
Obligaciones
En
2.732,732 .
3.481,650
.
Universidad con 40,820 pesos distribuidos en un personal
la
enseñante de torios,
1.778,491
Guerra de la Nación
Ministerio de Justicia, Culto e Instrucción Pública figu-
el
raban
857,052
catedráticos de Estudios Secundarios" o Prepara-
9
de Derecho y 14 de Medicina, y la instrucción primaria
6
suma absorbía
de toda la República con 447,3 65 pesos, de cuya el
Departamento de Montevideo 153,116.
En
de Gobierno figuraban
Ministerio
el
Administrativa de
Capital
la
Departamento úe
licía del
la Capital
todas
y
Juntas Económico-Administrativas y Jefaturas
Económico-
Junta
la
pesos)
(349,214
de
las
Policía.
demás La Po-
que absorbía 345,628 pesos
es-
taba a cargo de 6 comisarías urbanas y 11 de extramuros con 180
guardias
En
civiles,
205 serenos de infantería y 65 de caballería. de la Guerra figuraba la Escuela de Artes
Ministerio
el
y Oficios con 80,000 pesos.
por un regimiento de
El ejército de línea estaba constituido artillería,
drones
de
los
batallones de cazadores
caballería,
con
un
total
1,
de
y
3
2,
y
5,
2,417
cinco escua-
soldados
rasos
y
su correspondiente dotación de cabos y sargentos.
En
la
Plana
Mayor General revistaban
tres
brigadieres
ol
número de
7
de Setiembre
que no retiro)
podían
jefes
y
oficiales
creada por
ampararse a
que
subsigue
Latorre con los
(incluida
destino
beneficios
de
ge-
Mayor Pasivo
nerales y ocbo coroneles mayores y en el Estado
a la
los
la
Lista
militares
jubilación
o
Anales de
496
universidad
la
_
30 coroneles.
^ „ , ^ „ ^. Lista 7 de Sehemhre
37 coroneles graduados,
7 tenientes coroneles.
70 tenientes coroneles.
coroneles
40 tenientes
coroneles
2 tenientes
gra-
18 sargentos mayores.
177 sargentos mayores.
mayores
57 sargentos
gra-
mayores gra-
10 sargentos
duados.
duados,
103 capitanes.
263 capitanes. 5 capitanes graduados.
3
ayudantes mayores.
6 capitanes graduados.
38 ayudantes mayores.
123 tenientes
1.°.
70 tenientes
1.°.
129 tenientes
2.°.
54 tenientes
2.°.
78 subtenientes.
153 subtenientes.
La Lista
gra-
duados.
duados,
de Setiembre
7
absorbía 125,700
pesos,
el
Cuerpo
d-e
Inválidos 126,523, las viudas y menores militares 545,199.
De
la
pondía
Entre de
las
tito
suma
total del Ministerio
Nación
destacaba
el
servicio
deudae internas consolidadas por 1,261,800 pesos,
el
Emprés-
Obligaciones
las
Uruguayo por
amortización del por 264,000,
los
Inglesa por
El
de la Guerra (2.732,732) corres-
servicio activo 1.276,120 y al pasivo 1.456,610.
al
de
408,000,
paipel
la
Billetes
los
moneda por
se
del
180,000,
Tesoro por 375,000, la la Deuda Amortizable
Consolidados de 1880 por 125,000 y la deuda Franco-
1'93650.
recursos
de
cálculo
entre las rentas la
subía
Aduana por
a
la
destacándose
pesos
9.930,000
6.000,000,
Contribución Directa
de toda la República por 1.300,000 ¡pesos, las Patentes de Giro por 620,000,
el
Correo por 395,000,
Papel Sellado por 300,000, los Timbres por 220,000, 130,000,
los de
los
impuestos municipales
campaña por
66,000,
las
de
la
el
por
Capital
rentas afectadas a la ins-
trucción pública p5r 140,000 y los descuentos a los sueldos de las clases pasivas militares por 280,000 y
El
presupuesto extraordinario
de
a las
1883
-
civiles
1884
por 44,000.
correspondiente
a
meses transcurridos desde enero de 1883 hasta junio de en virtud del cambio de ejercicio económico, montaba a
18
les
1884
15.821,790 y
el
cálculo de recursos a 15.858,500.
El del ejercicio 1884-1885 subió a 11.523,591 pesos, realizándose con ello
un aumento de
1.600,000 sobre el de 1883
emanado entre
otros
factores de la suba de las dietas del Cuerpo Legislativo de 194,000
a
287,000,
de la
planilla de
guerra
que
pasaba
de 2.732,000 a
Anales de
2.&7G,00U,
Los
de
y
3.481,000
a
Universidad
la
obligaciones
las
de
497
Nación
la
que pasaban de
4.275,000.
recui'sos de ese
ejercicio
estaban
en
calculados
11.640,000
pesos y para obtener su aumento con relación al año anterior inflaba la renta aduanera
de 1.300,000 a 1.500,000,
Directa
bución
a
620,000
de 6.000,000
700,000,
el
Papel
Sellado
a 7.250,000, las
de
Patentes de Giro a 375,000
300,000
s-e
Contri-
la
y
de el
descuento de las clases pasivas a 326,000 pesos. !E1
presupuesto del ejercicio 1885-1886 subió a 13.365,107 pesos. Con
un aumento de tres y medio millones emanaba principalmente de estas planillas: Cuerpo
relación al de 1883 realizaba
üe pesos que
de 287,000 a 489,823 por efecto de la ley
Legislativo,
ccrrer las dietas de enero a diciembre;
tre las Obligaciones
de la Nación figuraban
consolidadas por 3.642,085; construcción
la
Oficios en
nos
la
1.778,000
a
del
nacionales
por
150,000
el servicio
de las deudas
amortización del papel moneda por edificio
de
Playa Ramírez por 50,000;
la
aduana por 'El
de
Obligaciones de la Nación de 3.481,000 a 4.732,000. En-
2.145,000;
180,000;
de Gobierno,
Ministerio
a 3.615,000;
2.732,000
que hacía
Ministerio de Guerra, de
y la
la la
Escuela
de
Artes
y
construcción de cami-
construcción
de
almacenes de
120,000.
de recursos que alcanzaba a cubrir
cálculo
el
monto de
las
erogaciones debía principalmente su aumento a la renta aduanera calculada en 7.960,000 pesos, a la Contribución Directa en 1.880,000
y a las Patentes de Giro en 760,000. Bajo la presión formidable de la crisis política de 1886 y del descenso rentístico que era su consecuencia, surgió por primera vez en la Casa de Gobierno un plan de economías cuya ejecución
por resultado que
trajo
Presupuesto del ejercicio 1886 - 87 que-' La rebaja era pequeña, alrede-
el
dura reducido a 13.018,530 pesos.
dor de 350,000 pesos con relación
al
el
tren
de
vez que se hacía alto. Véase
cómo
se
tonces
había prevalecido
año anterior, pero hasta enaumentos y era la primera distribuía esa suma:
Cuerpo Legislativo
493,793
$
Presidencia
124,786
de Gobierno
Ministerio Ministerio
1
Hacienda
de
de Guerra
Ministerio
de Relaciones de
Obligaciones •
T. VII
-
32.
la
911,123
986,009
Ministerio de Justicia, Culto e Instrucción Públic;i Ministerio
.
.
882,871
3.170,672
Exteriores
Nación
...
.
121,049
5.328,227
Anales de
498
la
universidad
Entre las ObligacioEes de la Nación figuraba Empréstito Unificado por 2.903,785 pesos y el de
el
los
servicio
del
Consolidados
de 1886 por 900,000. El cálculo de recursos mantenía con pequeñas variantes las fras del
Vamos
ci-
año anterior. a resumir ahora las diversas cifras que traducen
vimiento efectivo de rentas y gastos hasta último de la administración Santos, según oficiales extractados en este capítulo:
el
los
ejercicio
diversos
el
mo-
1885-1886,
cuadros
Anales de
Cesan
todos
empleados
los
de Presupuesto;
ley
Universidad
la
derógase
que
civiles
decreto
el
499
fuera
revistan
de
1884
de
la
que creó la
li-
branza de cheques contra la Tesorería restableciéndose la ley de 183 sobre intervención pbligatoria de la Contaduría en todos los pagos; cesan los giros sobre las oficinas receptoras de rtntas; los empleados que no asistan a sus oficinas, salvo caso de enfermedad grave, quedarán suspendidos. El general Santos, que acababa de bajar de
presidencia poj
la
expiración del plazo de su mandato y que se aprontaba a volver a la Casa de Gobierno como Presidente del Senado en ejercicio
poder
del
a
su
anunciando
financiera
el
propósito
«La
a
dirigió
y
un artículo
Nación»
de levantar los cargos que se
Cuestas
Ministro
El
gían.
en ese decreto una tentativa de proceso
vio
-ejecutivo,
gestión
tuvo
que
renunciar
a
raíz
le
de
diri-
ese
comentando el incidente decía luego en «La Nación» el general Santos que el Ministro dimítante había burlado la buena fe del doctor Vidal! Ya uno de sus más ilustrados Ministros, el doctor Carlos de Castro, se había encargado de fijar de una manera bien precisa artículo, y
f-l
y
de
alcance
Véase
dentro
funciones ministeriales
las
que decía
lo
santismo.
del
aceptar la cartera de Gobierno en 1882:
al
«He tenido ocasión de manifestar a V. E. mis ideas generales como entiendo que no sólo corresponde al Presidente de la
República ción
de
civiles
la
la
prerrogativa constitucional de política
también
sino
iniciativa y direc-
la
de
provisión
la
los
empleos
y militares, procuraré, pues, evitar en toda ocasión invadir
con proposiciones e insistencias indebidas las facultades que son propias
del
Poder
sometiendo
Ej-ecutivo,
no obstante
a
su
con-
sideración mi opinión con aquella franqueza y Iddltad que exigen el
honor,
el
deber
y
la
amistad...
mofa inocente, me
es
V.
E.
me
calificó
aunque alguien ha hecho de
del progreso y del bien y
bien placentero
de ello
manifestar que esa
jjeón
una cali-
ficación la considero altamente honrosa para mí.»
Tratá,base sin
embargo en
el
caso del Ministro Cuestas de un
excelente plan de medidas del que pocos meses después tuvo el propio
general
Santos
que
extraer
obligado a reaccionar contra
Todas decreto
el
alguna
que
otra
disposición,
caos financiero en que vivía.
—
de impuestos decía el nuevo dependerán del Ministerio de Harelativo a remisión de cuentas. Los fondos que
las oficinas receptoras
datado en junio
—
cienda en todo lo recauden esas oficinas, excepto
la
Aduana
y
la
Oficina
de Cré-
Alíales de la Universidad
500
deben verterse en
dito Público,
oficina
por
la ley incurrirá
tendrán
rúbrica
la
Todo encargado de
Tesorería.
Que sin autorización expresa
exceda
los
gastos votados
en responsabilidad. Las órdenes de pago condel
Presidente y la firma
Ministro res-
del
pectivo y se harán efectivas por el Ministerio de Hacienda.
Y
puesto que nos referimos
no determinar
origen
el
publicaciones de
al
contralor financiero, es oportu-
vocablo
del
empleado en
«playitas»
la?
época.
la
Las playitas. El Gobierno compró
en 1883 una
varas cuadradas, situada
al
playita
sunmarina de 384
costado del muelle viejo de la calle
Treinta y Tres, en 220,0 00 pesos, pagaderos en títulos de Deuda Amortizable que tenian en ese momento un valor efectivo de
60,000 pesos oro. El pequeño
terreno estaba aforado
en
7. 680
pago de la contribución directa. Fué esa una operación que toda la prensa comentó en térml-
pesos para
el
considerable
ros severos y que tuvo yita sirvió desde €se
momento
resonancia. El vocablo
para caracterizar
jjZa-
todos ios nego-
cios ruinosos de la época.
Uno de
ellos
—
de larga y resonante controversia
—
fué
pesca de lobos en las costas de Maldonado y Rocba que
la
el
el
de go-
bierno surgido del motín de 1875 había adjudicado a una empresa
por
el
término de di€z años y el precio de 6,000 pesos anuales, el régimen de la licitación proclamado por el
reaccionando contra gobierno concedió
de el
aproximarse
Ellauri. Al
general Santos
por otros diez años, funcionario hizo
al
el
vencimiento
el
precio de 7,000 pesos
constar
en
del
plazo
negocio a un alto funcionario público
el
protocolo
del
anuales, y ese alto Juzgado Letrado de
Paysandú, en marzo de 1883, que en su concesión tenían partes otros 10 personajes situacionistas que allí designaba con
iguales
nombres y
sus
apellidos.
Para apreciar
de riqueza que así malbarataba
el
la
importancia del
ramo
Gobierno bastará saber que según
informaciones corrientes de la época cada cuero de lobo valía
las
y hasta el doble y el triple los de varios pelos, promedio de 15,000 lobos por zafra daban al año la misma suma mínima que el sindicato se comprometía a abonar por todo
una
libra esterlina
que
al
el
período de la concesión.
Después vinieron otros como
el
de extracción de piedra y arena
Anales de
en
Universidad
501
de Colonia y Soriano por ocho años a razón de anuales pagaderos en documentos de crédito adquiri-
costas
las
pesos
2,000
la
dos a bajo precio, y ello en
momentos en que la fundación de un fuerte increniento en
ciudad de la Plata iba a promover exportación uruguaya;
concesión
la
del
derecho de tablada y
la
la co-
ganado menor durante diez añcs, -alculado en 1,500 pesos anuales, a cambio de la liberación del peaje en varios caminos del Departamento de Montevideo por obras que sólo habían rrales sobre el
absorbido
algunos centenares de carradas de piedra o ladrillo aforados por personas competentes entre 4 a 5,000 pesos; la venta de grandes zonas fiscales en Tacuarembó, Florida, Soriano, Rocha otros departamentos, y las gruesas comisiones de influencia a favor de personajes de la situación exigidas al con(!esionario de la vonta de billetes de Lotería de la Caridad, don Francisco Vidiella,
y
para
mantenimiento de su concesión.
el
Xúmei'o
fie
empleados públicos.
los
El doctor Teófilo D.
Gil,
Redactor de «La Razón»,
rublicó en número de empleados administración Santos. De ese estu-
1885 un cuadro del aumento progresivo del públicos en tOído
el curso de la concordante con las leyes de Presupuesto extraemos las siguien-
ciio
tes
cifras:
Presupuesto de 1881 »
»
El
'
número
empleados
11,860
empleados
1884-85
12,740
»
1885-86
14,134
»
»
del
último
ejercicio
de las instituciones de
subía
a
14,752
beneficencia,
y
computando ese
número
distribuía así:
Departamentos de campaña J
ersonal »
Jueces
de las Juntas »
y
>
Jefaturas
Actuarios
Ig2 2,516
34
Personal docente
454
Reparticiones
3Q7
aduaneras
Correos
Agentes de rentas
j^
2qq
ios
se
Anales de
502
Depar-tamento de
la
Universidad
Capital
la
M&rina
371
480
Artillería I'ifantería
1,428
Craballería
1,075
Junta
403
.
Jefatura
9-00
Poder Judicial
86
Pública
Instrucción
343
Aduana
370
Correo
100
Junta
de
Público
Crédito
Menores,
40
y Jubilados
Pensionistas
401
Beneficencia
618
Plana Mayor activa y pasiva, viudas y pensionistas Keparticiones diversas
Por un
que
..."
42
inamovilidad
la
que
rotación
—
un medio públicas.
Oficina
según
mantuviera
eficaz
de
co itralor
El decreto
concluía
de Crédito Público
la
—
decreto
el
.r.
la
correspondiente. La
podría
a
como
considerf.'.?'se
de
percepcióii
estimulando
asegu-
cambio de funcio-
el
r:ate:_íori.i
liasta
p''3ce:lente
Constitución
la
raba a los empleados públicos no impedía nes, siempre que se
como
quedo establecido
1882
de
decreto
3,793 711
Leg-acioues y Consulados
administrativo
.
la
rentas
kis
Aduana
y
a
la
part que propusieran los cambios o
traslados que juzgaren oportunos.
Transformación de las dietas legislativas en sueldos
En
1884 se
dictó
una
ley
que establecía que
las
fijos.
dietas
de los
senadores y diputados correrían sin solución de continuidad desde el día de la presentación de los diplomas hasta el día de expiración de los mandatos. Las dietas quedaban transformadas en
permanentes. Hasta entonces sólo recibían su remuneración dos legisladores durante el período de sesiones ordi-
sueldos fijos y
narias y durante la convocatoria a sesiones extraordinarias. Otra ley, ccmplementaria de la anterior, se encargó de elevar a 15 'peBos
diarios las
mentos.
dieta?
de 10
peso^,
que
se
pagaban en esos
mo-
Anales de
— Convenios
I.'eudas públicas.
del
Santos
gobierno de
El
convenio con
los
que había
ia
ó03
Universidad
con los tenedores de
realizó
títulos.
mediados de 1882 un nuevo
a
tenedores de títulos de deuda interna, sustitutivo llevado
a
administración
cabo la
L.atorre
que
y
vencía en diciembre de ese año.
De acuerdo con dicho convenio se entregaría a la Comisión de Tenedores la cantidad de 105,000 pesos mensuales mediante entregas diarias de cinco mil pesos durante el plazo de dioz años y además
de ocho' mil pesos mensuales con destino a ia
la cantidad
amortización de
emitidos anteriormente en pago de
títulos
los
% %
liquidarían a razón del 2 3
%
y
rrido
para
otras
y del
para algunas de las deudas, del
para
5
más
las
permaneciendo inalterables esos tipos hasta convenio.
Las amortizaciones
En resumen:
mente
pesos
1.356,000
Tesoro
el
Especiales
más
la
a
acordaban vas
las
pesos).
entre
los
los
al
4
3,
final
V^
del
por
6.
licitación
que pagar
intereses
y
plazo
y
%, del
pú-
anual-
amortización
y la amortización de los
Los tenedores renunciaban ade-
intereses
originarias y en
leyes
tendría
(1.260,000 pesos)
(96,000
diferencia
el
practicarían
público
comprendidos
de las deudas generales Títulos
se
Transcu-
favorecidas.
primer trienio subirían respectivamente
el
blica.
in-
o sea de los llamados Títulos Especiales. Los intereses se
tereses,
pactados
y
los
que
les
consecuencia no habría nue-
emisiones de títulos adicionales.
La Comisión de Tenedores de
Títulos que presidía don Augusto
Hoffmann, decía en su nota de ratificación que las nueve deudas internas comprendidas en el convenio tenían por las leyes y contratos de su creación un servicio de .'i.33ó,000 pesos y que por lo aproximaba a 3.000,000 al año. Y agregaba* 1878 - 1882 habían sido amortizados 7.044,145 pesos nominales, pero que a la vez se habían emitido por concepto de pago de interese? 2.786,235 pesos en Títulos Estanto la renuncia se
que
durante
el
quinquenio
peciales.
El Poder
Ejecutivo
Asamblea que
establecía
en
su
nota
de
remisión a la
sólo por concepto de intereses economizaría el erarl.o
más de diez millones de pesos en los diez años. Comisión de Hacienda del Senado, al aconsejar la sanción del convenio, hacía constar que desde diciembre de 1877 en que el monto de las deudas era de 26.838,382 pesos, hasta mediados de público
Y
1882
la
en
que
era
de
21.309,699,
el
E>stado
5.768,258 pesos, y en cuanto a tipos de Bolsa
había
amortizado
que mientras que en
Anales de
504
abril de 1878 la
más depreciada
la
Universidad
deuda más valorizada al
18
ojo,
se cotizaba
en agosto de 1882
la
al 33 o|o y primera valía
la el
48 ojo y la segunda el 28 o|o.
Los Tenedores de Títulos de Deuda Externa, cuyo convenio venuna nueva fórmula
cía en febrero de 1883, propusieron a su turno
de arreglo en virtud de •mensual de reses
42,0001
abonaría
la cual
el
Tesoro público
la cuota
pesos con destino al pago del servicio de inte-
equivalentes al 3
%
anual y amortización a la puja. Pero
Gobierno gestionó y obtuvo que la casa Tbomson Bonar y Cía., de la plaza de Londres, que representaba a los tenedores del Empréstito Uruguayo, consintiera eu la prórroga por tres años del
el
convenio realizado en 1878 bajo
la
administración Latorre.
Emisión de deudas.
La deuda pública consolidada de
la
creció
así
durante l03 seis años
administración efectiva del general Santos incluidos ios dos
interinatos del doctor Vidal:
ANOS 1881
.
%
12.468,150
Monto circulante
Emisión
Emisión anual
progresiva 88.730,213
$
el 1.°
$
de enero
57.834,611 57.679,896
1882
3.293,007
92.023,220
1883
5.460,197
97.483,418
59.275,903
1884
56.410,438
153.893,856
59.774,428
1885
1.364,501
155.558,358
60.174,294
1886
13.812,130
169.370,489
72.220,721
1887
333,653
169.704,142
71.145,176
La amortización de
la deuda! pública
no sufrió interrupción du-
rante ese período. Fué de 3.138,607 pesos
en 1881; de 3.447,720 en 1882; de 1.707,663 en 1885-86; y de 1.679,611 en 1886-87, según las respectivas Memoriafi del Ministerio de Hacienda. Pero mucho más fuertes que las amortizaciones eran las emisiones de nuevas deudas.
En
188,2
de 3.000,000
fueron emitidos de pesos
de 5
los «Billetes del V¿
%
de
Tesoro» con monto
interés y 7
zación acumulativa y a la par, para cubrir
el
%
de amorti-
déficit de ese ejer-
y del anterior. En ese mismo año fué creada la Deuda Española por 300,000 pesos con destino al pago de créditos procicio
cedentes del coloniaje.
Anales de
En 1883 fueron mediante
unificadas
emisión
la
de
Universidad
las
52.296,000
pesos destinada
por 700,000
la
deudas pesos
y
505
internas se
emitió
pago de compromisos
y
externas
una deuda la
em-
Ferrocarriles
por
pago de créditos pendientes. los Consolidados de ese año, 12.700,000 pesos en conjunto,
pri-
al
con
presa del ferrocarril a Higueritas.
En
1884
En niera
%
8
con
la
destino
fueron
1886
y
emitió
se
pesos,
94,478
segunda
deuda al
emitidos serie,
de interés y 4
Vr
por
Fomento de
con
de amortización acumulativa y a la par.
Dentro de esta deuda quedaron incluidos los créditos que por u)¡á ley anterior del mismo año debían ser cancelados mediante Vales del Tesoro con
8
%
de interés.
Desde fines de 188 5 quedó suspendida la emisión de títulos a ubicar tierras públicas. Era tanta la ligereza con que se había ;:vocedido que el mismo gobierno de Santos, tan dado en matefinanciera
lia
a
mantener abiertas todas
las
puertas de
salida
de la deuda, creyó que había llegado el momento de hacer alto de que el valor de la tierra fiscal no pí^ra conjurar el peligro
alcanzara a cubrir
el
monto de
los títulos circulantes y evitar la
para el Tesoro público de la venta de tierras por papeles que se cotizaban a precios de banpérdida
innega^ble
que
resultaba
carrota.
La unificación de deudas. Entre
las
deudas que acabamos de mencionar merece párrafo
considerable importancia, la Deuda Unificada. De acuerdo con las leyes de mediados de 1883 esa deuda tendría un servicio anual de 5 % de interés y % % de amortiza-
aparte, por su
ción a la par y se emitiría hasta ia cantidad necesaria para resCcitar
todas las deudas externas e internas con excepción de las
internacionales y las el
de ferrocarriles.
El canje se
precio que se el deudas internas, tomándose en cuenta
y
efectuaría pol
tratándose de la deuda externa y por conviniere con los tenedores tratándose de las
valor escrito o nominal
el
rio,
los
contratos en vigencia
precio efectivo de amortización. El canje no sería obligatosino
facultativo,
debiendo
continuarse
el
servicio
de las
deudas no convertidas. La suma votada en el Presupuesto GeneraJ de Gastos para el servicio de la deuda no podría ser aumentada en más de 300,000 pesos anuales. El canje sólo se consu-
maría en
el
caso
de que concurrieran
los
tenedores de deudas
;
Anales
506
iuternas
y
capaces
de
resultaran
Universidad
la
Poder Ejecutivo
del
juicio
a
compensar
ie
que
sacrificio
el
economías imponía
unificación
la
Tesoro público.
al
Una segunda
complementaria de
ley
dicato que
tomara a su cargo
puerto de Montevideo y
acabamos de
que
la
Deuda Unificada
tractar acordaba 4.000,000 de pesos en
ex-
Sin-
al
unificación, la construciión del
la
establecimiento de un Banco Na:iD-
el
nal privilegiado.
Para llevar a cabo la unificación de las deudas se entendió el Poder Ejecutivo con la firma Thumson Bonar y Cía., de Londres, sobre la base de una emisión de 11.127,000 libras L-sterlinas nominales que era efectividad
la
casa
contratista
suma que
la
canje.
del
sólo
juzgaba necesaria para asegurar
se
acordado
Se había
percibiría
comisión
la
al
principio
una vez que
que
la
los
tí-
nueva deuda alcanzaran el tipo mínimo de 60 % quedó más tarde prácticamente sin efecto. Llegado el momento de proceder al canje acordó f>l Gobierno C(>n diversos grupos de tenedores que ocho d-j las deudas serían recibidas por su valor escrito y las demás por el 85, el 80, el 75. tulos
de
la
pero esa
70 y
el
condición
%
30
el
de su valor. Pero
al
finalizar el
año 1883 y a que se ame-
raíz de la publicación de varias resoluciones en las
nazaba a los tenedores remisos con tipos más bajos, resolvió el Gobierno mejorar la tabla del canje. Los Billetes del Tesoro se recibirían por
narios
Deuda
1.a
y
el
2."
126
'"/f
de su valor;
serie, Pacificación 1.a
Fundada
y
Adicionales
Títulos
Consolidados de 1872 por
79;
el
Empréstitos Extraordi-
los
2.a serie,
y los
por
Rescate de Tierras, el
99
%
%
;
los
Consolidados de 1880 por
Deuda Interna 1." serie por el 85; la Deuda Interna el 69; la Deuda Extraordinaria por el 74; la Amortizable por el 48; los Títulos Especiales por el 29 %. El canje debía ser enteramente voluntario de acuerdo con la el
78;
2.a
serie por
ley
la
y decretos reglamentarios
correspondientes y en consecuen-
quedó establecido desde la primera reunión de Tenedores de Títulos convocada por el Poder Ejecutivo que se respetaría el derecho de los que no quisieran deshacerse de sus papeles y que cia
proseguiría respecto de ellos
nadas
al servicio
en
la
el
aparte diario de las rentas desti-
misma forma
establecida por los contratos
vigentes.
Pero ante
la
resistencia
birse en los registros de
otra actitud.
Desconoció
de centenares de tenedores a inscri-
conversión resolvió la
personería de
la
Gobierno asumir Comisión de Teñe-
el
Anales de
la
Universidad
507
que había estado actuando hasta entonces, a pretexto de una parte de sus representados haibía concurrido al canje; dejó de dar cumplimiento estricto al aparte de las rentas y endores
que
Banco de Londres de los fondos destinados al servicio deudas viejas; y dictó un decreto por el que se prevenía que los que no recurrieran por escrito ante el Ministerio de Hacienda manifestando su disconformidad, se tendrían por t-.ega
al
las
di'
adheridos
Dejamos
al
canje.
así
indicadas las primeras críticas que provocó la uni-
ficación.
Todas nuestras deudas estaban sometidas en ese momento al régimen de la amortización a la puja, que los convenios celebrados con al
los
tenedores de Montevideo y de Londres habían sustituido
de amortización a
bajos y debían por corto bajo rescate
el
\?
lo
par.
Los
títulos se cotizaban a precios
tanto extinguirse en un período
sistema dej rescate a la puja que bajo
el
muy
mucho más sistema del
a la par que volvía a instituir la ley de unificación de
deudas.
Durante
los
años
seis
Tesoro público
transcurridos
había amortizado de
vigentes 21.322,531
pesos nominales
desde
1S78
acuerdo con
hasta 1883 los
el
convenios
en títulos de deuda pública,
de cuya suma correspondían 15.756,718 pesos a las deudas internas comprendidas en
la
ley
de unificación. Véase cómo se
buía por años esta última cifra:
AÑOS
distri-
Anales de
508
las
15
deudas internas y
representaban
en
el
Universidad
la
empréstito externa entrados
un monto nominal de
1883
52Ji-52,(>11
al
canje
pesos
y
un valor efectivo en plaza de 1 1 .ó'M ,8't'ú pesos en el primer cri mestre (anterior a la ley de unificación) y deí 22.955,898 pesos en el cuarto trimestre (después de la ley de unificación). De ahí resulta la segunda objeción a que dio lugar la ley de que nos ocutpamos. Pendientes los plazos de la conversión se dio rienda derroche.
Entre
las
deudas comprendidas en
suelta al
canje figuraba la
el
Deuda Amortizarle que no devengaba vicio
de amortización del 4
'/c.
celar los créditos anteriores al
interés y que tenía un serEsa deuda estaba destinada a can1.5 de febrero de 1879 y su monto
no excedería de «tres millones de pesos como máximo y eso en el transcurso de algunos años» según decía el gobierno de Santos en marzo de 1883, o sea en la víspera de la unificación. Pues bien^ en octubre del mismo año llegaba a 5.498,497 pesos y en febrero de 1884, o sea tres meses después, a 8.848,810, según los cuadros que el propio gobierno de Santos se enca/rgó de presentar a la Asamblea. Tal es la tercera crítica que
En
operación provocó.
la
1887 publicó la Oficina de Crédito Público
tivo de la unificación.
Comprendía
de 57.673,614 pesos canjeados deside
to
cuadro defini-
el
18 grupos de títulos, con
130
el
%
hasta
el
mon30
%
de su valor por 47.413,401 pesos de Deuda Unif'cada. Agregando las
comisiones acordadas
Banco
(4.000,000),
los
al
sindicato de la unificación. Puerto y
títulos
pendientes
de
emisión
todavía
emanado de varias amortizaciones no comiputadias (320,000), resultaba un monto de 52.296,000 pesos con un servicio de intereses y amortización fundamentalmente (563,000)
y
el
sobrante
igual al de las deudas canjeadas.- El
principio
una economía de
IOS, 000
Gobierno había calculado
al
pesos anuales. Pero esa canti-
dad quedó reducida en los memsajes subsiguientes a 43,847 pesos. En resumen, se duplicaba el plazo de extinción de las deudas públicas sin otras ventajas que' la de hacer accesible la Bolsa de
Landres a nuestras deudas internas y la de suprimir momentáneamente la extrema diversidad de tipos de esas deudas. Entre
los
créditos incorporados a la unificación figuraban
Banco Alemán - Belga y Provenía
el
la
primero de un préstamo
destino a pagos del presupuesto, a interés,
garantido
con
el
del
reclamación Gounouilhou. al
gobierno de Ellauri con
un año de plazo y
fondos públicos,
que debía
al
12
%
de
reembolsarse
Anales de
con
el
efecto
suma
Universidad
509
producto del Empréstito Europeo proyectado en esa época.
No habiéndose por
la
de
efectuado dicho Empréstito creció
de la
capitalización
4.080,911
en
que
fué
de
intereses
arreglado,
el
saldo deudor
hasta,
llegar
pagándose
pesos con los fondos públicos dados en garantía por
el
a
la
2.830,000
gobierno
de Bllauri y los Títulos Adicionales y Especiales correspondientes a intereses de ios mismos, y 1.250,000 pesos en Deuda Unificada. Provenía la segunda de derechos a ubicar campos fiscales comprados por don
Domingo Gounouilhou a
la
Sucesión García Zú-
ñiga y de servicios de la Deuda Consolidada de 1854. El gobierno de Santos arregló la reclamación en 400,000 pesos efectivos pagaderos en Deuda Amortizable por su valor do plaza, lo que elevaba el
desembolso a 1.600,000 pesos nominales.
Precio
fie
los
fondos
piiblicos.
He el
aquí los tipos de amortización de la deuda pública durante primer semestre de 1882 y primer semestre de 1883 según los
datos
publicados
por
la
Oficina
de
Crédito
Público: TIPOS DE AMORTIZACIÓN
DEUDAS
Anales de
510
la
universidad
%. Se trata de uu descenso constante, como
49
advertirse que
caminada a demostrar que
el
había
sindicato
promiso que emanaba de su convenio con
Los
deuda sudamericana en
títulos tic
el
se
debiendo
ve,
de una inflazón en-
tipo inicial fué el resultado
el
cum^iplido
com-
el
gobierno de Santos.
mercado de Londres.
el
Refiriéndose a los fondos públicos localizados en Londres fijaba
«The Economiste»
así
la situación
de los cuatro principales países
de Sud América en 1886:
Empréstitos,
Su valor
Ferrocarriles,
en
bancos y otras
plaza
empresas
Libras
esterlinas
45.602,000
45.997,000
Brasil
»
»
46.984,000
46.551,000
Chile
»
»
9.744,000
8.445,00»
Uruguay
»
»
14.1^9,000
7.125,000
Argentina
Los fondos públicos uruguayos eran, como se
ve,
gio de los gobiernos subsiguientes,
más
los
ciados de tOidos por efecto de la bancarrota de 1875 y
el
depre-
despresti-
gobiernos de fuerza y despilfarro,
que no podían escapar a la sanción de la Bolsa a pesar de todos sus empeños en el cumplimiento riguroso del servicio de intereses y amortización pactado con los tenedores durante la bancarrota o impuestos por la ley después de
La enseñanza todo El
i>rimaria.
la
reanudación de
En blicas
escuelas y de niños en
demostró
existencia
el país.
censo
de
escolar
1883
la
En
de
55,201
va-
conjunto 109,921
de una población general de 466,972 habitantes. momentos funcionaban en todo el país 303 escuelas
dentro esos
con
26,169
conjunto 726 escuelas con 45,413 alumnos,
En
correspondiendo
esas
cifras
con
12,384
escuelas
con 13,091
pú-
alumnos inscriptos y 423 escuelas particulares
con 19,244 alumnos.
63
pagos.
Número de
rones y 54,723 niñas de 6 a 14 años de edad. niños
los
de
públicas
de Montevideo al Departamento alumnos y 220 escuelas privadas
alumnos. Pero hay que advertir que la estadística el rubro de enseñanza
colar
de la época hacía figurar bajo
vada
del
Departamento de Montevideo
6
establecimientos
es-
pri-
públi-
^
J
Anales de
eos:
Escuela de
la
Artes
Universidad
la
Oficios,
y
51
Maternales y
Asilos
los
el
Asilo de Huérfanos que tenían en conjunto 3,062 niños.
Dos terceras partes de
escuelas
las
públicas
mixtas.
e.'an
El personal enseñante se componía de 543 maestros y ayudantas.
La
dirección era ejercida por 152 mujeres y 68 hombres.
El
presupuesto
absorbía
escolar
454,214
correspondiendo
pesos,
sueldos 256,486 y a alquileres 77,555.
>:
Las
congregaciones
administraban
religiosas
veinte
establecí^
mientos escolares propios y seis del Estado (asilos maternales y de huérfanos) con un conjunto de 4,329 niños. Varios
de
establecimientos
los
Entre
versitarios.
ellos,
pano - Uruguayo, el Colegio Pío, de San Francisco, el Colegio
tenían
particulares
Montevideano,
Liceo
el
Salvadoi",
del
cursos
uni-
Colegio
His-
el
Colegio
Colegio
Normal
Nacional,
Instituto
el
el
el
Europeo. El
número de
año 1884 27,331 4.066
En 429
y
cifras
las
escuelas
urbanas
(159
que se distribuían
rurales)
así:
y
en
6,554
de
el
de varones,
escuelas
las
el
alumnos a
los
en las de niñas y 16,711 en las mixtas.
funcionaban
1885
escuelas al
354
escuelas públicas
particulares con
Departamento
Durante
el
de Montevideo
62
ultimo año de la administración Santos
Tomando por
base
Carlos María Ramírez de
cifras
las
sitio
el
de
de
número
el
señalaba así
1882
avanzado que ocupaba
el el
enseñanza primaria:
P^^-particulares
Brasil
Estado de Río de Janeiro
.
.
Argentina
Buenos Aires
.
Chile
Uruguay Departamento de Montevideo Ciudad de Buenos Aires
Ningún
país
doctor
Uruguay
Escuelas
de
con
de los alumnos a 28,380.
el
Población
Provincia
esas
públicas
escuelas
con 14,565.
de escuelas públicas bajó a 341 y
materia
con 30,302 alumnos
correspondiendo
20,899,
12,401 alumnos, y 229 particulares
en
subió a 320 al finalizar
públicas
171
y
.
.
.
Habitan
iíStos,^-PO^" alumno
11.800,000
5,6.61
:.75,714
67
938,900
640
21,109
44
2.983,434
1,985
128,919
23
526,581
486
27,651
18
2.183,434
703
42,803
51
500,000
682
42,546
11
111,500
283
25,853
4
300,000
264
28 634
11
de la América del Sur
—
decía
con razón
el
doc-
Anales
512
Ramírez
tor
en que
la
todos
d?
—
atañe a
cjue
la
ele
Universidad
nos aventaja en esas proporciones, ni menos en lo organización
la
de la enseñanza,
técnica
ramo
este
República Oriental figura indiscutiblemente a la cabeza
demás.
los
Creación del Instituto Xormal
ele
Señoritas.
Desde mediados de 1S82 empezó a funcionar el Intérnate y EsNormal de Señoritas. A cada uno Je los departamentos de
cuela
República se
la
reconoció
le
de
obligación
la
el
luego
actuar
derecho de enviar trej aliimnas bajo durante el plazo de dos años en
Las alumnas podían que abonar las primeras una cuota mensual de 10 pasos, pero esa cuota quedó suprimida en 1884. Las clases normales tenían al año siguiente de instituidas 40 alumnas internas y 30 externas con un plantel de las
escuelas
de
ser
internas
o
niñas
50
respectivas
sus
Al
externas.
para los
actualmente
cuela de Aplicación y
el el
la
de
la
enseñanza.
construcción del edificio donde
Instituto Normal de Museo Pedagógico.
«Necesitamos educar y educar bien nal don Jacobo A. Várela
tenían
prácticos
ejercicios
Dos años más tarde empezaba funcionan
localidades.
principio
al
—
decía
Señoritas,
el
la
Es-
Inspector Nacio-
colocar la piedra fundamental.
—
Allá
hombre medianamente instruido o cualel quier mujer medianamente piadosa podían servir para maestros. en
pasado,
cualquier
énfasis, la palabra y el hecho agrio de la bastaban y sobraban. Para los esbozos de la vieja estética era como ella tosco el pincel y la mano que lo manejaba. Aquello se extingue lentamente como una época, con sus méritos
El libro dictado con disciplina,
decadencia relativos
y su pero
la
al
medio
social,
educación moderna no es posible sin
y religioso; maestro moderno
político el
adaptado y con una personalidad definida y propia de su misión. Tiene que saber teóricamente y aplicar con minuciosidad en el hecho experimental así las leyes de la mente humana como todas las
condiciones
organismo
en
el
gradual y progresivo del El maestro de hoy es un f iló.íofo y un
desenvolvimiento
fisiológico ...
Debe conocer el diagnóstico del mal y a la v^^z colocar la compresa y aplicar la venda con su propia mano. Compositor y músico, complica y crea sus armonías; y en el más difícil de los teclados, en el cerebro humano, ejecuta su obra con las modulaciones propias para cada temperamento. ¡Y bien!: en la vida real ni el buen artista ni el filósofo provechoso se crean y se forman artista.
Anales de
sia
sus facultades,
de todas
especialización
la
como una profesión
513
universidad
-a
hacer de ello
r.in
o hábito.»
líeformas a la Ley de Educación Común.
La
creada
escolar
organizacióii
por
José
Pedro Vare'.i volvió
quedar en grave peligro a principios de 1883 con. motivo de la reanudación de los trabajos del clericalismo para dar andamiento la Cámara de Diputados en al proyecto de ley sancionado por a
suprimía
que
1S80
Dirección
la
Instrucción
de
que
Pública,
su-
Cuerpo de Inspectores Departamentales y que introducía otras alteraciones sustanciales en la Ley de Educación Común. Cediendo a esos trabajos la Comisión de Legislación del Senado resolvió mover el asunto y llevarlo a la orden del día. Pero el medio ambiente de la Casa de Gobierno había cambiado primía
y
peligro
otro
de
ción
grave había escapado meses antes
enseñanza
la
sueldos
los
Inspectores
y
a
nueve
fijaba
se
atrasados.
y
en
seguida
Secretario
de la Dirección y no contento con
Secretario
a
despecho
dicho funcionario
de
General
del
sería
Instrucción
de la
artículo
nombrado Pública».
ley
ello
Inspector
destituyó destituyó
a al
nombró nuevo
que prescribía que
«a propuesta El
organiza-
plazo perentorio para el
El Presidente Santos
maestros
la
una reunión
primaria a consecuencia de
personal enseñante en que
pago de dos
tuvo que retirarse a cuarteles de invierno.
clericalismo
el
De del
el
de la Dirección
Nacional
don
Ja-
cobo Várela y los miembros de la Dirección renunciaron a raíz de esa designación y entonces el general Santos ofreció la Inspección vacante a don Francisco Bauza, leader del Partido Cató-
Felizmente para
lico.
la
causa de
la
enseñanza
el
señor
Bauza
como paso previo la reforma sustancial de la Ley de Educación Común, dando con ello tiempo y oportunidad al Ministro de Gobierno don Carlos de Castro para obtener el nombramiento exigió
del
doctor
Jorge H.
fué llamado de nuevo
En un decía
el
Ballesteros, el
hasta mediados
de 1883
en
que
señor Várela.
manifiesto que subsiguió a los decretos de destitución magisterio de Montevideo que los maestros ganaban en-
tonces 32 pesos menos que al iniciarse la reforma escolar; que un ayudante recibía veintitantos pesos y un maestro rural treinta y tantos, asignaciones Inferiores a las de cualquier mozo de al-
macén
o
celados T.
que de año en año eran llevados al déficit meses de ese mismo miserable sueldo para ser can-
de tienda;
tres o cuatro
con liquidaciones o con títulos de deuda. VII -33.
Anales de
514
Universidad
la
ya la orientación de la reforma escolar sancionó Asamblea en 188i5 a propuesta del P. E. una nueva ley por la que se mantenían las disposiciones fundamentales de la de 1879, con diversas enmiendas encaminadas a dar preponderancia al MiEstabilizada
la
De acuerdo
nisterio de Instrucción Pública que acababa de crearse.
con
nueva ley
esa
dencia sobre
todas
dirigiría
blica;
la
General
Dirección
la las
ejercería
demás autoridades
a
los
la
Repú-
haría nombramientos
instrucción primaria;
suspendería
de
escolares
dando cuenta;
maestros
in-
nombramientos
terinos de maestros y solicitaría del Ministerio los definitivos;
superinten-
la
sometería
de los textos y programas escolares; presidiría los exámenes de maestros y concedería diplomas magisMinisterio la aprobación
al
teriales.
horario
L'i
escolai'.
El horario de seis horas que regía
fuertemente reducido
quedó
liana
al
Las clases debían funcionar de
1885.
comunicarlo
decía
en
su
circular
iniciarse la reforma vare-
aproximarse
al 8
Inspector
el
verano
el
de
a 12 de la mañana, y al
Nacional
don Ja-
escuela,
tratarán
cobo A. Várela:
«Aminoradas considerablemente los
maestros de que
las
horas
las
de
normal corresLos alumnos dispondrán de un recreo
clases tengan su asistencia
pondiente a las 8 en ipunto.
de 20 minutos entre las cuatro horas y de otros dos de 10 minutos
so
más breves
cada uno.»
Por una segunda resolución dictada a la conclusión del verano estableció que desde el l.o de abril hasta el 31 de octubre las
clases las
11
funcionarían sin de
abrirían a sus
las
interrupción
mañana hasta 10 y
30 y
las
4
todos
de
personal
el
la
punto.
El
horario de
cinco
horas
se
los
días
tarde.
enseñante
puestos a las 10 y 55 para empezar
iguales co?
la
el
hábiles
desde
Las escuelas pe debería
ocupar
trabajo a las 11 en
repartiría
en dos períodos
con un intervalo de 30 minutos para ejercicios gimnásti-
y dos recreos de 15 minutos cada uno al aire libre.
Articulación con la enseñanza secundaria.
De acuerdo con un pedido
de las autoridades escolares resol-
Poder Ejecutivo en 1885 que los alumnos de pi'tblicas que hubieran continuado sus cursos hasta
vió el
las escuelas la
clase
dé-
Anales de
la
universidad
515
cima del tercer grado quedarían exentos del examen universitario
de
ingreso.
Honores escolares.
Muchas de las escusias llevaban memoria se había resuelto
cuya
el
nombre de
honrar
los
ciudadanos
por las autoridades
escolares.
Por un decreto de octubre de 1885 resolvió el Gobierno que en adelante las escuelas se distinguirían exclusivamente por su número de orden con excepción de las dos de tercer grado que nevarían los nombres de José Artigas y de José Pedro Várela.
En
esa misma época Cementerio Central
el
escultor Ferrari concluyó y colocó en
el
monumento
el
a José Pedro Várela cosCuerpo Legislativo a pedido homenaje concediendo una pensión
teado por suscripción pública, y del
Gobierno complementó
de
3,600
«el
estudio,
anuales a
pesos la
el
la
perseverancia,
el
viuda del Reformador, invocando patriotismo del procer al abor-
el
reforma escolar». los maestros de más alta actuación dudon José María López rante el período de la reforma escolar Director de la escuela de varones del Cerro, muerto en 1882 mereció también el tributo de reconocimiento de esa misma Legislatura bajo forma de una pensión de 840 pesos anuales.
dar
la
obra de
la
La viuda de uno de
—
—
Palabras de un maestro de la época.
Don Juan Manuel
Bonifaz,
uno de
los
maestros que
hemos
murió
en 1886 y al honrar su memoria recordó el doctor Francisco A. Berra estas hermosas palabras que había oido de boca del distinguido educacionista: «El bien que se me hace lo consigno en láminas de bronce; las ofensas las escribo apenas en la arena para que el menor bajo
administraciones
visto
desfilar
scplo
borre sus vestigios.»
La
las
anteriores,
escuela de sordomudos.
El
Poder
vecindario de la Ejecutivo
en
jurisdicción de la
1885
gestionando
Aguada la
se presentó
creación
de
una
al es-
cuela
(le
Ja
universidad
Pasado
el
expediente
Ajiales
516
sordomudos.
de
pector Nacional don Jacobo A. Várela
informe
a
del
Ins-
sostuvo este funcionario
que convenía realizar un ensayo con los tres niños sordomudos que concurrían a la escuela que había dado base a la gestión vecindario. La clase funcionaría bajo la dirección del maesdon Manuel Collazo, fuera del horario escolar. Y el Poder Ejecutivo aprobó de inmediato el plan de la Inspección. del
tro
El Coligiese Pedagógico de 1882.
Durante
Exposición Continental que tuvo lugar en Buenos
la
1882 funcionó un Congreso Pedagógico
Aires en
que concu-
al
rrieron los señores Jacobo A. Várela, Francisco A. Berra, Carlos
María de Pena, Carlos María Ramírez y Alfredo Vásquez Acecomo delegados del Poder Ejecutivo unos, y como delegados de la Sociedad de Amigos de la Educación Popular otros. Los cinco miembros de la delegación uruguaya tuvieron una actuación descollante por sus informes y discursos sobre educación de la mujer, métodos de enseñanza, procedimientos de
vedo,
enseñanza,
lecciones
programa
escolar,
debate a
causa
de
cosas
tema
de
este
y exclusión de la religión en último que hubo que sustraer
agitaciones
las
extraordinarias
a
que
el
ai
daba
lugar.
He
las conclusiones
aiquí
votadas por
La educación común debe necesario
difundir las
nacional
en armonía
en
escuelas
sistemas de enseñanza
pública
Congreso:
el
gratuita
ser
y
obligatoria
distritos
los
rurales
— —
Es Los
deben responder a un propósito
con las instituciones de cada país
—
La
escuela primaria debe atender principalmente a la educación del
formar el carácter premios y prosDeben regir procribirse los castigos aflictivos y humillantes gramas y procedimientos idénticos para las escuelas de varones y de niñas sin perjuicio de los que exigen la cultura especial de Dela mujer en el hogar La escuela mixta es conveniente ben franquearse a la mujer los puestos adecuados de la admiDebe ser obligatoria la inspección higiénistración pública sentimiento
moral de
y
la
de
voluntad
la
—
juventud
cuidando
de
Deben desterrarse
los
—
—
—
nica
— propias —
y médica de
tener rentas
empeñada
por
una
las
—
La Instrucción pública d«be La administración escolar debe ser des-
escuelas
dirección
j'
por
inspectores
seccionales
y
Anales de
la
—
517
Universidad
Los programas de enseñanza deben ajustarse a Son materias indispensables: ur sistema gradual y uniforme
permanentes
i^obre
l(;CCÍones
tura,
aritmética,
geografía toria
—
lectura,
objetos,
política,
música, gimnasia, dibujo, escri-
gramática,
moral,
composición
nacional, nociones de
historia
oral
instrucción
y astronómica,
física
natural, de
y
escrita,
his-
cívica,
fisiología
e
hi-
giene, de física, de química, de geometría y álgebra, de tenedu-
de libros y de historia universal
ría
—
El maestro debe estimu-
alumnos y que
lar el ejercicio de las facultades de los
sición
de
alumno mismas
los
— El — El
conocimientos se haga por
de
estudio fin
las
cosas
la
propia
la
adqui-
actividad del
debe hacerse en las cosas
principal de las lecciones sobre objetos es la
educación de las facultades mentales de los niños.
Jjfí
Sociedad de Amigos de la Educación Popular. de los premios escolares.
—
Abolición
la Educación Popular resolvió en premios y establecer el veredicto escolar. Véase cómo fundaba la reforma el doctor Francisco A. Berra: Estimulan algo a los alumnos. Pero son inevitables las injusticias. Por otra parte, corrompen el criterio moral porque en vez de ser
La Sociedad de Amigos de
1SS4
abolir
los
tomados como símbolos de las buenas acciones, se les atribuye un valor intrínseco, acostumbran al niño a guiarse no por la bondad del acto, sino por su recompensa. En los exámenes sobresale a
más aventajado. Es imposible evitar ia repercusión de las simpatías o antipatías que el alumno inspira a su maestro. Es por ello que la Sociedad de Amigos de la Educación Popular ha instituido el veredicto escolar. Cada alumno dispondrá de tres
veces
no
el
blancas para inscribir los nombres de los tres corapañcque más se hayan distinguido por su moralidad, y de tres tarjetas celestes para inscribir los nombres de los tres que merezcan la calificación de sobresaliente por aplicación. Los maestros tarjetas roí,
consignarán su voto en sobre cerrado y en tarán
los
Cno de la
en
los
más
activos
Educación Popular, 1885
públicas.
la
misma forma
vo-
examinadores.
su
serie
de
el
miembros de
la
Sociedad de Amigos de
doctor Alfredo Vásquez Acevedo. publicó
libros
de lectura
para
uso
de
las
escuelas
Anales de
518
Sarmiento hace
ünivcrsirlad
la
elogio de la Sociedad de
el
Amigos de
la
Edu-
cación Popular.
Al llegar Sarmiento a
setenta y dos años
los
de edad
resolvie-
ron sus amigos y admiradores hacerle una manifestación pública y contestando a los oradores dijo el gran estadista argentino es-
honrosas para
tas palabras tan
«Constituios,
constituyámonos
Uruguay:
el
queréis que
si
aún
os
acompañe
algunos pasos más, en asociación, para promover
la
educación co-
mún
el
Uruguay una
en
la
de
ciudad
Buenos Aires...
Hay en
Sociedad de Amigos de la Educación que ha hecho con sus trabajos constantes, ya fundando escuelas, ya inspeccionando las exis-
progresar
tentes,
educación común, llevándola a
la
más que
mayor altura
Imitemos tan cercano ejemplo. Constituyámonos en Sociedad de Amigos de la Educación en esta ciudad de Buenos Aires, pongámonos en contacto con la de Montevideo que vendrá a visitar la Exposición Continental, de y difundiéndola
nosotror:
.
.
.
manera que cuando sus miembros lleguen encuentren una sociedad análoga que los reciba ... Si esta cordial visita de cumpleaños tuviera por resultado la creación de esta Sociedad para llevar ade-
más definido y mayor concurso empeño constante de mi vida, a;pliidea de una niña de 13 años de laa
lante con nuevos bríos, con objeto
de voluntad la obra que fué caría a
ese
acto
la
bella
el
escuelas de Montevideo definiendo
el
libro.
El libro
—
dijo
—
es
una generación trasmite a otra. Y bien, jóvenes: yo os diría: la Sociedad de Amigos de la Educación Popular de Buenos Aires tomará la antorcha que ll»vé durante cuarenta años, comibatida por los vientos, pero que os entrego aún pensamiento 'humano que
el
luminosa para que sociedad
tra
que
visitéis
con
empañan
la
ella
los
rincones oscuros de nues-
civilización
general
e
impiden
la
libertad.»
La Escuela de Artes y
Oficios.
Esta Escuela contaba alrededor de 400 alumnos internos durante la
época que recorremos. Los exámenes de 1883 fueron
luego
f^9
sordomudos,
df.
presididos por
Sarmiento, quien
presenciar las pruebas de enseñanza primaria, enseñanza telegrafía,
dibujo,
matemáticas,
francés,
geome-
esgrima y música, dijo que estaba delante «del mejor establecimiento de su género
tría.
en
la
Química, mecánica, fotografía, gimnástica,
América
del
Sur».
Anales de
En
funcionaban
1S84
los
Universidad
siguientes
019
en ma-
escultura
talleres:
en mármol, mecánica, relojería,
escultura
dera,
la
platería,
grabados
en metal, tornería, mueblería, escultura en yeso, carpintería genocarpintería
ral,
de
instrumentística,
ribera,
fundición,
modelos en madera, herrería, armería, sastrería,
talabartería,
pinturería,
za-
encuademación, tipografía. fueron construidos la cañonera «Gene-
patería, hojalatería, telegrafía, litografía,
En uno
de esos talleres
Rivera» y
ra'
vaporcitos «Paz y Trabajo», «General Palleja» y
los
«General Garibaldi».
La cañonera «General Rivera» fué transportada a pulso por soldados del ejército de línea desde
manzana que hoy ocupa
la
la
el
taller
Universidad
de la Escuela
—
—
los
nn
hasta la extremidad
la calle Sarandí en el mar. Todavía en esa época continuaban los trabajos de construcción del nuevo y amplio edificio de la Playa Ramírez iniciados du-
de
rante
la
administración
La Liga Industrial
Latorrc.
resolvió
en
instalar
188.5
una Escuela de
Artes y Oficios para mujeres y hasta nombró una Comisión encargada de la redacción de los estatutos compuesta de los señores Francisco A.
Berra,
Jacinto
dia,
alcanzó
a
Carlos
Albístur
tener
La enseñanza
María de Pena, Juan Manuel de Vepersonas. Pero el pensamiento no
otras
y
ejecución.
universitaria. Sii reoi-ganización.
El Poder Ejecutivo presentó a la Asamblea en 1882 un proyecto de
de reorganización
ley
dería cuatro Facultades:
cina
Ingeniería.
e
ratorios
Se
La Universidad compren-
universitaria.
Ciencias y Letras, Jurisprudencia, Medi-
restablecería
la
sección
de
estudios
prepa-
suprimida durante la administración Latorre. Habría un
Consejo superior constituido por un Rector y doce vocales designados por el Poder Ejecutivo y por los tres catedráticos más an-
Los
tiguos.
cursos
quedarían abiertos a la mujer tanto como
al
hombre. Ese
proyecto
Universidad.
El
había
sido
doctor
informado
José Pedro
desfavorablemente
Ramírez, que ocupaba
por el
la
rec-
torado, se encargó de su impugnación demostrando que lo que el Poder Ejecutivo pretendía era la supresión de la vieja autonomía universitaria.
Las clases preparatorias quedaron restablecidas en
De acuerdo con
el
reglamento dictado
al
18S.3.
año siguiente
los
es-
Anales de
520
reglamentados deberían hacerse
tiulios
en
universidad
la
en
cinco
cursándose
años
primero Latín, Matemáticas (Aritmética y Algebra), GeograFrancés; (física y política), en el 2." Latín y Literatura
el
fía
Matemáticas
Latina,
(Cosmografía), líquidos
(estudio
Meteorología
Química
(estudios
de los
Natural
(Zoología
y
Historia
Orgánica,
Y
anuales
con
primero
el
Francés;
4."
Universal,
Historia
(Mineralogía
Geología),
y
y Literatura
Historia Universal, Filosofía
5."
libres
en
debían hacerse
Química Filosofía,
cuatro períodos
un año de separación cada uno, correspondiendo Literatura Latina, las Matemáticas y la segundo Geografía General. Física y Química;
Latín,
al
Historia
tercero
Botánica);
estudios
los
(Magnetismo,
Física
3.'-
y Climatología), Historia Universal, metaloides y sus compuestos). Historia
Natural
Literatura General; General.
termología);
acústica,
gases,
y
Electricidad,
y Trigonometría), (Geografía completo de la mecánica, sólidos,
(Geometría
Física
Natural
e
Historia
Universal
y
al
cuarto
al el
al
Lite-
ratura y Filosofía.
Para ingresar
al
primer año de estudios preparatorios era
un examen previo de
cesario rendir
ne-
escritura al dictado,
lectura,
gramática, geografía y aritmética. Y una vez cursadas íntegramente las asignaturas del plan de estudios, era necesario rendir un examen general de todas las materias.
Posteriormente fué
incorporado
el
idioma
inglés,
se
redujo
a
dos años la Historia Universal creándose en su lugar un año de
Historia Nacional y se suprimió
El
Derecho
Con
el
también
«n
de
plan
estudios
el
examen general de
Medicina abarcaba
seis
bachillerato.
años y
el
de
cinco.
propósito la
de ampliar
Universidad,
1884, la creación de
ingresar
de
los
alumnos
y
un que
así
el
lo
cuadro del profesorado propuso resolvió
el
Cuerpo Legislativo
cuei-po de sustitutos en el que podrían
hubieran
tenido
clasificaciones
distin-
que dieran pruebas de competencia en un examen de dos horas y que asistieran durante dos años al curso respectivo en calidad de repetidores. guidas,
Reflejando impresiones personales acerca del ambiente de nuesUniversidad en esa época escribía un abogado argentino a «El Nacional» de Buenos Aires:
tra
Los programas son tan extensos que podrían servir para conde profesores y su estudio se realiza en forma tan completa que los alumnos rinden exámenes brillantes que llegan a una hora para los libres, durante la cual se pregunta incesantemente sin dejar divagar al examinando. cursos
Anales de
Un año
Universidad
la
después, en 1885, propuso
el
521
Rector doctor Alfredo Vas-"
quez Acevedo un amplio plan de reorganización universitaria
so-
bre las siguientes bases:
Autoridades
universitarias.
La
dirección
tará a cargo de un Rector que elegirá
el
de la Universidad esPoder Ejecutivo de una
terna votada por la Sala de Doctores. El Rector gozará del sueldo
que
asigne
le
la
de Presupuesto. La superintendencia de la
ley
Universidad estará a cargo de un Consejo compuesto del Rector,
Decanos de Enseñanza Secundaria y Facultades y de un igual de miembros elegidos por la Sala de Doctores. El Consejo estará facultado para formar los reglamentos generales de los
número de
aprobación
con
enstfianza
programas,
prescribir
los
del
Poder Ejecutivo, sancionar
los
nombrar
los
métodos
de
enseñanza
y
catedráticos con aprobación del Poder Ejecutivo.
profesorado sen acumulaLas rentas de la Universidad se destinarán exclusivamente al pago de los servicios de examinadores, preparadores, sustitutos y compra de libros, apara-
SurlüGs a
bles
tes
de cualquier
instrumentos
e
Los sueldos
rentas.
y
los
Enseñanza
del
empleo.
enseñanza.
de
secundaria y superior. Es libre
de la República
rio
otro
en
todo
territo-
el
establecimiento y funcionamiento de insti-
el
tituciones de enseñanza, sin perjuicio de
la
intervención del Estado
de impedir que se contraríen las prescripciones de
al
solo objeto
la
higiene o los principios "y dogmas de la Constitución y de las
Es obligación
leyes.
cimientos
de
del
enseñanza
Estado sostener a su costa secundaria y
estable-
los
que fueren
superior
nece-
sarios.
Objeto de la enseñanza secundaria. Ampliar y completar la enseñanza primaria y preparar para las carreras científicas y literarias. La enseñanza secundaria comprende materias obligatorias
y materias facultativas. Para ingresar a se
los
estudios
secundarios
requiere acreditar suficiencia en las materias del programa de
las
escuelas
de segundo
públicas
grado,
mediante examen
Universidad o certificado de la autoridad escolar. La
en
la
aprobacióa
en los exámenes de todas las asignaturas obligatorias de la ense-
ñanza secundaria dará derecho al diploma de Bachiller en Ciencias y Letras. Los que cursen libremente las materias del bachillerato podrán ser inscriptos entre los examinandos de la Universidad
a
acreditar
condición
que
lo
de
rendir
el
examen previo de ingreso
han prestado ante
la
autoridad
meterse a las prescripciones universitarias en den,
distribución
y
duración
de
los
estudios;
lo
eícolar:
que atañe
de
rendir
o
de
de
so-
al
or-
examen
Anales de
la
üniveisidad
durante doble tiempo del que corresponde a los matriculados de Universidad y de abonar una cuota de seis pesos por cada \:<.
examen.
Enseñanza de
cio
Tiene
super-ior.
profesiones
las
por
objeto
habilitar
para
Comprenderá por
científicas.
lo
el
ejerci-
menos
la
Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, la Facultad de Medicina y ramas anexas, la Facultad de Matemáticas y ramas anexas.
Para ingresar a cualquiera de salvo cuando se
ller,
como
ellas
se
requiere diploma de bachi-
de ramas anexas a Medicina o Mata-
trate
Dentista, Agrimensor, Parteras programas especiales. Los estudios profesionales deben hacerse en la Universidad y no en otra parte, no
máticas,
que
estarán
las
Farmacia,
de
sujetas
a
admitiéndose en consecuencia a examen a los estudiantes
Una
ley
sancionada
en
el
A5-;amblea declaró la libertad r'cicultades
y
Secciones
curso
de
ese
mismo
libres.
año por
la
de enseñanza a favor de todas las
universitarias
reprodujo
y
en
todo
lo
demás las disposiciones del proyecto del doctor Vásquez Acevedo. Poco después era trasladada la Universidad con excepción d(; la Facultad de Medicina que continuaba en la vieja sede de la calle Maciel a un amplio edificio de la Calle Uruguay; y explicando el alcance del cambio de local complementado con la
—
—
instalación
varias
de
gabinetes y
asignaturas,
decía
«En adelante será ya
laboratorios
el
Rector
para
el
aprendizaje
de
Vásquez Acevedo: enseñanza universitaria
doctor
posible dar a la
desenvolvimiento que reclaman las crecientes aspiraciones de la juventud en el sentido de aprender y profundizar los todo
el
conocimientos. La regularidad y amplitud de los cursos no estarán ya turbados por la deficiencia de aulas y la escasez del made
terial
enseñanza;
los
y
buenos métodos de instrucción
no
serán ya contenidos por la falta de aparatos y colecciones científicas.
casi
Atribuyo a esto
todas
las
la
mayor importancia. El aprendizaje de
no puede realizarse bien con el simple Los estudiantes no alcanzan a darse cuenta
ciencias
auxilio de los libros.
de las leyes que rigen los fenómenos físicos y naturales; y los glandes esfuerzos que necesariamente hacen para satisfacer las exigencias de sus maestros, acaban en ellos por despertar hastío o un profundo desagrado por el estudio. No se logra además el muy primordial objeto de educar todas sus facultades mentales,
preparándolas
para
muy
cuando
y
distintos
colecciones
los
se
científicas.
estudios
superiores.
Los resultados son
dispone para la enseñanza de aparatos El estudiaste aprende con
notable
fa-
Anales de
con satisfacción de
ciiidad, se apercibe
adquiere
desarrolla en él;
se
523
Universidad
la
energía intelectual que
la
hábito de observar los fenóme-
el
nos de la naturaleza; se acostumbra a constatar y confirmar por
mismo
sí
placer
las leyes y las hipótesis
por las investigaciones
cuando sale de
dvínar el estudio el
que
el
estudio le sugiere;
cientificas;
y
las aulas se
él según un verdade-
consagra a
giro y tendencias de su espíritu y se convierte en
auxiliar de la ciencia.
ro
gabinetes
c'.e
La mejora que envuelve
colecciones
y
otia trascendental
mejora:
toma
de aban-
en lugar
la
adquisición
conduce forzosamente a reforma de los métodos de ense-
científicas la
demás conquistas. Ya
ñcUiza, sin la cual serían estériles todas las
ha manifestado en nuestra Universidad el propósito de iniciar esa reforma y creo firmemente que no pasará mucho tiempo antes de que nos coloquemos a ese respecto al nivel de las mejores universidades americanas.» En 18 816 se aumentó el plan de estudios de la Facultad de Derecho con la incorporación de la cátedra de Práctica Forense 5C
cargo del Rector de la Universidad. Hasta entonces la práctica realizaba en los estudios de los abogados, o debía realizarse más bien diciio, porque como lo hacía constar el Poder Ejecutivo
a
se
decreto
práctica
esa
eludía
en
su
a¿
una manera deficiente, obteniendo
tes c'.o
se
sin
con
alguna
excepción la
se
certificado
el
nueva reglamentación
el
de
año de
siempre o se hacía
embargo
los estudian-
suficienci?. prá,ctica
de
efectivo
los
encaminados
De
c'.íbía
en la Universidad bajo la dirección del profesor de
Rtediante ejercicios orales y escritos to
casi
sin
al
la
acuer-
cursar-
materia,
conocimien-
procedimientos judiciales y aplicación de los
códigos.
Universidad, que había empezado regularizada y en tren de fuerces progresos, a la vez que abría horizontes a la juventud estudiosa con la creación de los estudios de ingeniería desconocidos hasta
Gracias
a
a
estas
reformas
la
decaer, quedó rápidamente
entonces.
Para llegar a
ello
repercusión hasta en
hubo que la
librar
rudos combates de honda
Cámara de Diputados, donde más de una
vez se alzó la voz contra las tendencias del doctor Vásquez Acea quien los espiritualistas combatientes de la época no perdonaban su predilección por el positivismo filosófico de que estaba infiltrado, y hasta en la Casa de Gobierno donde el Rector obtenía elementos y recursos para su obra de reorganización sin someterse a los incondicionalismos de la época, según se encar-
vedo
Anales de
524
universidad
la
documentarlo
el diario oficial «La Nación», al publicar una carta de don M'anuel Bandín denunciando que había enviado a la Universidad un retrato del Presidente
de
gó
en febrero de 1885
Santos y que
En
la
Rector
el
Facultad de Medicina.
No fueron favorables de que
titulo
Higiene,
le
faltaba
A
total
prisión del primer egresado a
la
examen de reválida
el
Consejo de
del
de que hemos hablado al ocuparnos de la administración
Vidal, siguió en la
da
a la Facultad de Medicina los comienzos
administración Santos.
la
'Je
había devuelto ese retrato.
le
Cámara de Senadores una
tentativa de barri-
de profesores a título de economías, y luego la creación
una cátedra de Homeopatía que fué causa de grandes disturUn día que el catedrático de la materia explicaba los efectof del agua en las preparaciones homeopáticas, empezó a funcionar una manga de aguas corrientes que tomó como blanco al orador y que fué el principio de una serie de conflictos que prod'.
bios.
siguieron hasta la
desaparición de
Pero en 188 C empezó Rectorado
doctor
del
cátedra respectiva.
la
reacción bajo
la
Vásquez Acevedo
el
impulso vigoroso del
y Decanato
doctor
del
José María Carafí.
Han ciones
sido
—
más frecuentes
decía
el
Rector
ejercicios
los
informe
en su
dificultades que se proponía vencer res de
cina
que han dispuesto
operatoria
a
pesar
autoridades del Hospital;
deja todavía que desear;
—
el
las
disección
anual,
opera-
y
señalando
las
gracias a los 96 cadáve-
los estudiantes de
de
de
anatomía y de medi-
resistencias
ni los catedráticos ni
por
opuestas
servicio de las clínicas en los
las
Hospital
el
alumnos go-
zan de facilidades; la Clínica Médica sólo dispone de una sala de 40 camas; la Clínica Quirúrgica de una salita de 20 a 30 camas; !a
Clínica Obstétrica está rodeada de trabas de todo género; nica
Médica sólo abarca realmente
bres, porque el estudiante lucha entrar en las salas de mujeres.
Hacía constar también cionar toria
el
el
las
con
grandes
la
Clí-i,
los
hom-
dificultades
para
enfermedades de
Rector que había empezado a fun-
laboratorio bacteriológico a cargo del profesor de his-
natural
médica don José
Areohavaleta, y
el
Instituto
Pas-
teur para la preparación del virus rábico.
El profesor Aretíhavaleta, consagrado en cuerpo y alma a
la
Anales de
acababa
investigación,
«hatobius
oterii»,.
de
la
Universidad
uu organismo
descubrir
dando con
525
inferior,
base al doctor Wegenbergh,
ello
cuerpo de sabios contratados por
el
del
Argentina, para expresarse
la
3n estos términos al acusar recibo de la nota bibliográfica: «Esta
me ha dado una
loctura
República Oriental
más
es
<'icos
En
la
libre y
vez
más
convicción
la
vida filosófica en
más avanzada que
que en
la
cienti-
aquí».
acordadas tres bolsas de viaje
1884 fueron
de
círculos
ciertos
a
doctores
los
Francisco Soca, Joaquín de Salterain y Enrique Pouey para completar
médicos, y otra en
sus estudios
1885
bachiller
al
Alfredo
Navarro para cursar sus estudios en Francia. El cuerpo médico sufrió un rudo golpe ese año con la desaparición del doctor Gualberto Méndez. «Nada le era desconocido en la ciencia médica decía el doc-
—
—
SiemNicanor García Leguizamón en su oración fúnebre. pre complaciente y alentador a la cabecera del enfermo llevalja en toda su fisonomía el espíritu humectante del alto sacerdocio, lo que unido a su robusto talento hacía que jamás se aproximara tor
al
un enfermo sin que
lecho de
el
Una palabra
del
moribundo que
doctor
sintiera volver a
paciente
vida la atenuación de sus fuerzas o
levantar
el
la
abatido espíritu.
Méndez era un rayo de luz hasta en el luchando más que con la propia vida
solía concluir
con el ansia de salvar en su fe aquella palabra suave y persuasiva que llevaba la unción de sentimientos delicadamente caritativos. 3>
Véase cuál era cina inscriptos en
el el
número de médicos y
auxiliares de la Medi-
año 1886: 263
Médicos Personas sin título universitario autorizadas para ejercer la
medicina y cirugía
32
Farmacéuticos
285
Parteras
103
Dentistas
44
Flebótonos
45
Practicantes de medicina
Las folacionos
(le
6
grados.
Las colaciones de grados que habían perdido toda su aparatosidad desde desde
1883.
la
y
dictadura
de Latorre, volvieron a cobrar su brillo
justificando
el
Ramírez que ocupaba ese año
cambio el
decía
Rectorado:
el
doctor
José Pedro
Anales de
526
«No he cedido
a móviles
así
de vulgar
fastuosos
sino al profundo convencimiento de que deben con-
significación,
servar los
proceder
al
Universidad
la
un culto fervoroso por sus progresos morales
pueblos
despecho de la ola inVasora del mercantilismo moderno que
a
pira
todas
traducir
a
manifestaciones de
las
actividad
la
.is-
social
en artes y en industrias, en acumulación de riquezas y en satisfacción de necesidades físicas... Para mí tengo por cierto que progreso material de un pueblo hubiera de producirse nece-
el
si
sariamente con
sacrificio
el
de
las
grandes satisfacciones del
es-
de su delicado cultivo, de su creciente desenvolvimiento y de su imperio y supremacía sobre todo lo que es orgánico y depíritu,
en la naturaleza humana, preciso fuera creer que debíamos conspirar sin tregua para destruir todos los progresos de la civilización moderna y volver a los tiempos en que el ciego de leznable
Chio que
cantaba en versos inmortales a
la
virgen
de Atenas forjaba en
su
mente
filósofo
el
pública
A
de los
Pública
y
de las
altas
nostálgica Re-
virtudes.»
grados de 1885 concurrió
colación de
la
trucción
ideales
altos
Naturaleza y en la
Ministro de Ins-
el
Juan Lindolfo Cuestas, quien aprovechó
don
oportunidad para hacer conocer
el
número de
los
la
diplomados con
que había contado y contaba el país. En los años que la Universidad lleva de existencia dijo han terminado sus estudios
—
144 doctores
de
título
—
en Jurisprudencia de los que sólo 92 adquirieron
abogado,
doctores
22
y
en
Medicina.
el
La matrícula de
abogados arroja 285 inscripciones y deduciendo de ellas las 9i2 que corresponden a los egresados de la Universidad, queda un saldo de
que corresponde a los
193
país
en
distintas
épocas
ya o han regresado
El
número de
En
al
llegados
al
no existen
extranjero.
1882 tenía la Facultad de Derecho 8 alumnos en la clase de la
de Derecho Natural y de Grentes, 62 en
de Derecho Civil y Comercial, 37 en
Constitucional,
dicina Legal; clases
gran mayoría
estudiantes.
Procedimientos, 40 en la
abogados extranjeros
y que en su
19
la
de Penal. 19
en la de
en la de Economía Política y 8 en la de Me-
y tenía la Facultad de Medicina 12 alumnos en las
de primer año, 7 en las de segundo, 7 en las de tercero,
en las de cuarto y uno en las de quinto. 1886 los cursos de enseñanza secundaria contaban con 210 alumnos, los de Derecho con 101 y los de Medicina con 9-2. En
11
En
conjunto 403 estudiantes.
Anales de
Universidad
la
527
Conflictos universitarios.
Don Luis
publicó
a
fines
en el diario promulgación
de 1884
de la
raíz
que acordaba honores al fundador de
ley
la
Montevideo,
un artículo contra Artigas a
«L'Italia»
de
Destéffanis, profesor de Historia Universal de la Uni-
de
versidad
nacionalidad
la
oriental.
El Presidente Santos destituyó eu con
de dar cuenta
cargo
antecedentes
a la
a
Universidad
que debía hacerse cargo de
el
acto al
señor Destéffanis,
Comisión Permanente y pasó los para que propusiera la persona
la
la cátedra vacante.
El Consejo Universitario, después de una larga deliberación en que se manifestaron opiniones contradictorias acerca del decreto do destitución, resolvió que
que
contestara
sin
Rector doctor José Pedro Ramírez
el
perjuicio
Destéffanis sería conveniente separar la Historia Na-
del profesor
de la R-'storia Universal, con
cional
catedrático
un sustituto
nombramiento de
del
al
frente de su
Esa nota fué devuelta por
lo
cual
podría quedar dicho
cátedra de Historia Universal. Ministerio a la
el
Universidad para
Consejo suprimiera varios párrafos tachados con lápiz azul, que eran precisamente los relativos a la división de cátedras encaminada a obtener el mantenimiento del señor Destéffanis. En
que
el
documento separado atribuidas
se
refería
el
Ministro a ciertas apreciaciones
doctor Justino Jiménez de Aréchaga,
al
Derecho Constitucional, deprimentes para los gobernantes de ese Partido. Contestó el doctor Ramírez, en cuanto a
el
catedrático
Partido
Colorado
de
y
lo primero que el Conno desconocía las facultades constitucionales del Poder Ejecutivo, pero que juzgando que no se le podían imponer los términos de sus notas mantenía esos términos en toda su integridad; y en cuanto a lo segundo, que el doctor Aréchaga no había pronunciado las palabras que se le atribuían. En nota separada
sejo
proponía
el
Rector
al
bachiller
Miguel
Lapeyre para
la
cátedra
vacante.
En los mismos momentos en que se cruzaban esas notas se reunían en tienda aparte los catedráticos de la Facultad de Meextranjeros en su generalidad, y publicab.in una declaraen la que hacían constar que ellos acataban las disposicio-
dicina,
ción
nes legales
paban
emanadas de
de asuntos
mérito a que
el
los
Poderes públicos y que sólo se ocuy científicos, dando con ello
administrativos
Rector
les
advirtiera que carecían
de personería
Anales de
528
Universidad
la
para definir actitudes universitarias, y pasara de
Ministerio
Presidente
El
Santos,
que
notas
úJtimas
previniéndole que
Universidad, y se dirigió a
lü.
ya
estaba
autoridades universitarias, devolvió
las
ios
antecedentes
al
Gobierno.
la
al
resuelto
a
cambiar
doctor Ramírez sus dos
estaban rotas sus relaciones con
Comisión Permanente en demanda
de autorización para destituir al Rector y al Consejo Universita-
y proceder a
rio
nombramiento
reorganización de las nuevas autoridades por
la
Y
una vez obtenida la venia destituyó al de Derecho Constitucional doctor Aréchaga y a los miembros del Consejo Universitario doctor-es Luis Melian Lafinur, Jacinto Casaravilla, Ángel Zoila, Juan Jo.sé doctor
directo.
Ramírez,
Segundo,
catedrático
al
Constancio
Vigil,
Saturnino Alvarez,
José
P.
Piaggio,
Martín Berinduague y Pedro Bustamante. El catedrático de Derecho 'Natural e Internacional doctor Mdv-
Teófilo
D.
Gil,
tía C. Martínez presentó renuncia a causa de ese decreto, y un grupo de estudiantes publicó un manifiesto de protesta «contra el proceder inicuo y arbitrario del Gobierno que sometía la Univer-
sidad a su dependencia a los vaivenes
de
la
inmediata y dejaba librada su existencia militante». Pero el Vicerrector doc-
política
Jaime Jhonson, que había continuado en su puesto a
tor
de los miembros del Consejo no incluidos en tución, al
se apresuró
a
el
la
par
decreto de desti-
reprimir esas protestas dando instrucciones
Secretario para que hiciera saber a los catedráticos que les es-
taba prohibido censurar los actos del Gobierno y que debían desterrar de la enseñanza jurídica y doctrinaria, todo lo relativo a la política militante.
Haciendo uso de la autorización concedida por la Comisión Permanente el Gobierno dictó en seguida un decreto por el que nombraba Rector de la Universidad al doctor .\lfredo Vásquez Acevedo, que ya había ocupado ese cargo, y miembros del Consejo a los doctores Cristóbal Salvañaoh. Manuel Garzón, Juan Saráchaga, Ernesto Frías, Arturo Terra, Manuel Hei-rero y Espinosa, Augusto Acosta y Lara, Segundo Posadas, Eugenio Piaggio y Luis Reggio.
Fué a su
raíz de este incidente que el doctor importante libro «La libertad política».
Algunos de El
los centros culturales
de
la
Aréchaga publicó
época.
Ateneo del Uruguay mantuvo durante todo este período un
Anales de
la
Universidad
gran treu de actividad con sus cursos
de
529
enseñanza secundaria,
plan de reuniones públicas encaminadas a enseñar a leer en alta
Sil
programa de conLa raza cbarrúa El período de la historia nacional comprendido de 1800 a 1830 - La Fauna útil y dañina de nuestro territorio Cantos al arte La insurrección del pueblo oriental en 1811 Cuadros de costumbres nacionales campestres El gaucho oriental en las luchas por la independencia El porvenir de Montevideo La industria ganadera El mejoramiento de la vialidad El Censo Las tierras fiscales El Gobierno municipal. La creciente prosvoz y a despertar interés por cursos en que figuraban
lectura y un
la
como temas
principales:
—
—
—
—
—
—
—
—
peridad de este centro cultural permitió a presidía
el
rreno en
el
Juan Carlos
doctor
centro de
la
—
—
Blanco
—
'a Junta Directiva que comprar un amplio te-
ciudad, con destino a la construcción de
un edificio adecuado a los fines de su instituto. La Sociedad Universitaria que mantenía ese
mismo tren de enseñanza secundaria
actividad,
especialmente con
pletóricos
de vida estudiantil, pudo también adquirir los recursos
sus
de
cursos
necesarios para abordar la construcción de su edificio.
Ambas
instituciones
se
desenvolvían
sobre
base
la
mismo
del
programa cultural y por eso surgió en 1883 la idea de refundirlas en un solo Centro bajo la denominación de «Ateneo de Montevideo», que se encontraría habilitado para construir un edificio de mayor importancia en el terreno de la Plaza Cagancha comprado por la Sociedad Universitaria. Pero la idea, aunque aceptada en principio, fué de lenta incubación y transcurrió el período que examinamos sin alcanzar a ser votada en definitiva por las dos instituciones
Otra
Artes
hermanas.
—
importancia
de
institución
organizar
resolvió
—
la
Sociedad de
Ciencias y
un concurso internacional sobre
los
Teoría y exposición científica sobre la correlaTeoría y exposición ciención y unidad de las fuerzas físicas tífica sobre el origen y naturaleza de la materia cósmica, orgá-
temas:
siguientes
nica y organizada posición
—
—
científico
lubres y 'peligrosas
-
Composición poética sobre
legal
—
sobre
Memoria
las
industrias
etiológica sobre
el
porvenir
—
incómodas,
Ex-
insa-
América indígena
antes de la época del descubrimiento. Los elementos dirigentes de este el
centro integraron la IComisión Oficial encargíida de
pasaje
de Venus sobre
disco del sol
T.
VII
-34
observar
en diciembre de 1882,
el mejor procedimiento conocido para media desde el centro de la Tierra al Sol.
aplicando (|ue
el
fijar
la
distancia
Anales de
530
Universidad
la
el Salón de Actos Públicos del Ateneo fué velado en 1883 cadáver del doctor Prudencio Vázquez y Vega, el más activo y ardoroso de los miembros de ese centro cultural.
En
e.i
—
decía el doctor Teófilo D. Gil «Era ante todo un carácter uno de esos caracteres altivos y viriles que no
—
en su discurso
ante
doblegan
so
el
atentado
contemporizan
ni
pactan con la arbitrariedad triunfante;
ni
de acción, templada para holocausto de
sus
el
con
mentira,
la
alma vaciada en molde
heroísmo y dispuesta al sacrificio en uno de esos espíritus estoicos que
era
ideas,
y aislados sacan del fondo de su propio ser una fuerza indomable para contrarrestar el mal que los rodea y los oprime y que en medio de la general corrupción saben conservavre puros, elevándose a la cúspide moral de la conciencia y contemplar desde
solos
esa altura con la censura en los labios y la serenidad en "a frente
drama de
el
un pueblo,
humillación de
la
los
crímenes
de
sus
déspotas.»
—
repetía el doctor Carlos María «Era ante todo un carácter un gran carácter, hecho para el aposRamírez en «La Razón»
—
tolado
para
y
la
práctica
severa de
las
más
altas
virtudes
cí-
Ningún halago de posición hacerle ceder un ápice de sus para bastado habría o de fortuna convicciones morales o una chispa de sus sentimientos íntimos. No tenía más que un tesoro en la tierra, el precioso tesoro de su Era
vicas...
la probidad
incorruptible.
alma, y de ese era tan adustamente avaro que no lo habría malgastado jamás en la adquisición de los bienes o placeres que col-
man La
anhelo de los egoístas y sibaritas del mundo.»
el
Biblioteca Nacional.
La Dirección de Gobierno
en
1885
Nacional
Biblioteca
la
para publicar bajo
el
autorizada
fué título
de
por
«Colección
el
de
documentos destinados al estudio de la Historia de la República» seis volúmenes anuales de 500 páginas cada uno. Destinábase '.a
suma
de
3,000
de
sufragar los gastos
anuales para
pesos
im-
presión.
Con
anterioridad y respondiendo al
ordenado
la
documentos
reconcentración relativos
a
la
en
el
mismo
propósito
se
había
Archivo Nacional de todos
historia
política,
los
económica y admi-
nistrativa del país, con excepción de los existentes en las Secretarías
de
Estado,
Hacienda.
Contaduría General y Escribanía
de Gobierno
y
A7iales de la universidad
531
Por un tercer decreto se instituyó una Comisión encargada de los trabajos de don Francisco Acuña de Figueroa y de
recopilar
publicarlos por cuenta de la Nación.
A
Sala
la
en
tores
Lectura
de
1881, '2,577
de
en
la
1882
Biblioteca
y 1,930
concurrieron
en 1883 según
3,499
lec-
Memo-
las
de esos años.
rias
Administración Alta Corte. Cuerpo
El
de
creación
de
Legislativo la
—
Justicia.
Alta
ocupó
se
Corte
de
Proyecto de
en
Justicia
1882
-
un
-de
la
proyecto
alcanzar
sin
de
creación
de
resolverlo
a
por falta de ambiente.
Un año desipués se ocupó el Cuerpo Legislativo de otro proyecto que atribuía al Tribunal de Apelaciones el conocimiento de las causas de almirantazgo que lá Constitución de la República incluía entre
las
facultades de la Alta Corte,
y ello con
fin
el
de solu-
cionar un reclamo de la Legación Argentina sobre embargo y en-
trega de
la
goleta «Rápida» que ni
bunal se consideraban
de Diputados sancionó
proyecto. Pero
el
—
inconstitucionalidad»
su
el
con facultades
Poder Ejecutivo ni el
Senado
lo
la
Tri-
rechazó «por
decía la Comisión informante
dando que varias otras de las facultades de sido ya concedidas al Tribunal.
el
La Cámara
para resolver.
—
olvi-
Alta Corte habían
(Yídigos y leyes.
El Código de Minería fué revisado en 1884 por una Comisión compuesta de los señores Joaquín Requena, Eduardo Canstatt, Florencio Michaelson, Lindoro Forteza y Mario Isola. Y las enmiendas propuestas por ella fueron sancionadas por la Asamblea
en
el
curso del
Todo con
mismo
habitante
esas
del
enmiendas
año.
Estado
—
quedaba
habilitado
para hacer calicatas
cubrir y reconocer criaderos
—
de
acuerdo
encaminadas a des-
minerales en terrenos abiertos o no,
destinados a cultivos, previa licencia de la Jefatura de Policía respectiva
rrenos del el
y pago de los daños y perjuicios originados. cerrados o cultivados sería necesario ademíis
En el
los
te-
permiso
dueño o en su defecto del Juez Letrado Departamental. Todo que pretendiese explotar una mina debería presentarse al Juz-
gado Departamental o
al
de Hacienda. El
dominio de
las
minas
Anales le
532
perdería
se
secutivos
Creábase a las
por despueble
hubiere
no
vez
la
funciones
de
la
en
sea cuando
o
cuatro
ellas
Oficina
contralor
Universidad
la
durante
Inspectora de
surgían
que
ciones incorporadas al Código
-de
de
meses con-
«eit
lo menos. Minas encargada de esas nuevas dispo;3i-
obreros
por
Minería.
Otra Comisión compuesta del doctor Joaquín Requena y de Ventura Torrens. Pantaleón Pérez, Juan Manuel de
coroneles
Máximo
ios la
Juan José Gomensoro, Carlos Lacalle, Nicolás Bardas y Emilio Reynaud presentó en el mismo año un Proyecto de Código Militar. Era el cuarto proyecto que se presentaba al Ministerio de la Guerra como lo advertía la Comisión. El primero había sido formulado en 1862 por los generales Antonio Díaz y José María Reyes, el doctor Joaquín Requena y los coroneles Pantaleón Pérez, Juan E. Lrenguas y Salvador García. El segundo en 1876 por el doctor Requena, el general Bernabé Magariños, los coroneles Pantaleón Pérez, Manuel de Clemente y Salvador García, y los señores Juan José Soto y Bernabé Bauza. El tercero por el coronel Juan Manuel de la Sierra. Sierra,
Tajes,
—
el Código entró a figurar en la orden del día de la Asamblea y fué rápidamente sancionado por ambas Cámaras. En 1885 resolvió el Podar Ejecutivo abordar la confección de un Código Adanimstrativo y designó con tal objeto a los doctores Joaquín Requena y Carlos de Castro y al Contador General de la Nación don Tomás Villalba. Entre las leyes dictadas durante el período que examinamos merecen destacarse: la reforma de numerosas disposiciones del Código de Procedimiento Civil encaminadas a dar mayor rapidez
Esta vez
y eficacia a los juicios; definitivos por res
el
acreedores
Juez
la
ide
presentada
elección la
quiebra
por
la
de los síndicos provisorios y de una terna de los mayo-
masa
del
concurso;
la
ley
de
abigeato que atribuía el conocimiento de ese delito a los Jueces
Letrados Departamentales, establecía que se cometía abigeato hurtando ganados, cueros y lanas, desfigurando o borrando las marcas, encubriendo productos hurtados, marcando animales orejanos en campo
ajeno o comprando
ajenos
castigaba a los
y
primera vez, 12 bajos piiblicos;
con
la segunda, 16 la tercera
la ampliación a 30 años
trabajos públicos;
azar o fortuna
animales a sabiendas
culpables
en
8
meses
y 20
de que eran,
de
prisión la
la cuarta»
con
tra-
de la pena de prisión y
la prohibición
absoluta de los juegos de suerte, que interviniera envite, con excepción de las
y rifas autorizadas, (aplicándose a los dueños de casas ;le juego multa de 500 pesos o seis meses de prisión y a los jugadores
loterías
Anales de
Universidad
la
multa de 200 pesos o des meses de prisión: con
gancia
nacionales
o destierro en
prisión
y
de las armas
servicio
el
en el
el
533
el
castigo
caso de
caso de
de la va-
tratarse de
repu-
extranjeros,
que careciendo de bienes o rentas y siendo aptos para el trabajo no ejercieran habitualmente profesión, arte a oficio, ni tuviesen empleo, destino, industria, ocupación lícita tándose vagos «a
/los
algún otro medio legítimo o conocido de subsistencia con o sin domicilio fijo».
publicidad
I/B
los suicidios.
(le
Los periodistas de Montevideo firmaron a fines de 1882 un comel que se obligaban a no publicar informaciones ni
promiso por comentarios
a suicidios,
referentes
«inspirados
—
en su
decían
—
en sentimientos propios de su alta misión y creyendo que para aminorar en la socie;dad los impulsos que conducen al manifiesto
además de
suicidio,
que
la
ocurren es uno de íel
contagio
criminales
.
los
re-
menos detallada de los casos de suicidio que más poderosos auxiliares del referido agente
funestas
vislumbrada
o
primordiales deberes y
o
como
dispuestos a acogerlos tida
los
concepto generalmente admitido úe
el
que por medio del ejemplo hace llegar sus sugestiones a los espíritus enfermos
moral)
cuanto
en
ly
.
más
publicación
enseñanza de
la
laciones del hombre.
revelación de una solución presen-
la
el
ipor
dolor,
el
o
infortun^'o
desespera-
la
ción ...»
Un año
antes
Consejo de Higiene se había dirigido
el
bierno pidiendo una acerca
noticias
moral o
de
resolución suicidios
prohibiera
como medio «de
bre cada individuo,
sas
a
obra
lugar hechos aquel
la
evitar
Go-
al
prensa dar el
contagio
siempre se propaga», invocando que causas predisponentes o individuales que pesan sode una
manera tan
ciosa sobre los cerebros débiles excitados
tenido
a
que
por imitación
«aparte de las
que
que
el
eficaz
como
y muchas veces por idénticas minando sus facultades afectivas y
idénticos
venía
perni-
conocimiento de haber caupsí-
quicas».
Recién
en
1885
se
Cámara de Diputados
1
la
Comisión
de
Legislación
En su informe
de
la
acon-
bajo apercibimiento de 200 pesos de multa primera vez y de 50O la segunda o en su defecto prisión de a 5 meses. Pero el proyecto volvió a quedar olvidado.
sejaba la prohibición la
decidió
a despachar el asunto.
Anales de
534
Universidad
la
Cárceles.
Al finalizar por
año 1882 dictó
el
que se mandaba
el
el
gobierno de Santos un decreto
proceder a
construcción
la
de la
Cárcel
una cuadra cuadrada de terreno que debía adquirirse dentro del radio de la novísima ciudad. Autorizábase por el mismo decreto la compra de 9 cuadras con destino a una Penitenciaría modelo que sería erigida de acuerdo con las conclusiones aconsejadas por una Comisión Asesora compuesta de los doctores Ildefonso García Uagos, Joaquín Requena, Carlos de Castro y Pedro Visca, ingenieros Juan Alberto Capurro y Rodolfo de Arteaga, gonora l Luís Eduardo Pérez y señores Juan D. Jackson y Pedro Piñeyrúa. En ed informe de esa Comien
Correccional,
.
¿^vV-""^'^
sión, obra
del
doctor García Lagos, luego de estudiarse
c
sistema
el
Auburn se proponía un sistema combinado progresivo con duración máxima de 25 años divididos en dos
de Filadelfia y
que
períodos
nuada desde del sueño y
regla
la
;del
del
condicional
y
fijaban
se 15
de
el
meses;
6
celular
absoluta
y
conti-
reclusión durante las horas
alimento, y trabajo en comíin en los talleres bajo
Los
silencio.
revocable de
período, cuando
reclusión
así:
hasta
días
se hicieren
penados
podrían
una parte de
la
obtener
pena en
acreedores a ello por
liberación
segundo buena con-
el
su
ducta.
Para dos La
la
de la
realización
sucesión
administración
de ambas obras indicaba doctor
del
Latorre
al
Octavio Lapido
mismo
fin
y
el
decreto los fon-
destinados
muy
durante
mermados ya
como hemos tenido oportunidad de decirlo. La Comisión se apresuró a manifestar al Gobierno que esos fondos apenas alcanzarían a cubrir «una mínima parte del costo de las obras», y entonces el Cuerpo Legislativo votó una minuta de comunicación en que se recordaba la ley de la administración
Berro que constituía el punto de arranque de la Penitenciaría, se pedían datos acerca del líquido producto de la sucesión Lapido y se anticipaba el propósito de proveer lo necesario a la ráfpida reade la Penitenciaría.
lización
Pocos meses después se dirigía blea exponiendo que
terminado la
obr-
que
'
240,001'
los
el
Poder Ejecutivo a
la
Asam-
planos de la Cárcel Preventiva y Correccional; que
co"taría 340,000 )s
el
ingeniero don Juan Alberto Caipurro había
fondos
pesos de
de
la
rentas
y que para cubrirla era necesario sucesión Lapido fueran reforzados con
pesos,
L»a Asamblea votó en el acto pudo colocarse la piedra fundamen-
generales.
esos recursos, y gracias a ello
Anales de
tal
y darse comienzo a
edificio
tlei
marzo de penados.
Celebrando
1885.
Uno de
el
vado en
De
la
el
dos
administración Latorre
la
e
que había obser-
valía esa segunda gracia.
le
Memoria
durante
La conducta ejemplar
dicta;dor.
Cárcel
la
ejecución de las obras en
la
acto fueron puestos en libertad
era Florencio Soto, matador del señor Gra-
ellos
condenado a muerte
jales,
indultado por
Ó3Ó
universidad
la
Ministerio
del
de
Gobierno
correspondiente a
1885 y del mensaje presidencial de apertura de las sesiones ordinarias de la Asamblea
muy
estadísticos
en 1886, reproducimos los siguientes datos
incompletos sin duda alguna,
pero
únicos que registran las publicaciones oficiales de 1882,
1883,
la
que son
los
(años
época
1884 y 1885):
DEPARTAMENTOS
Faltas
Canelones
442
-
408
-
408
-
Minas
Rocha Cerro Largo
—
Tacuarembó
205-181-116-70
35-33-26-8 20-17-14-11
36
80
-
-
-
34
-
32
13-27-11-8
-
64
-
64
3-5-0-0
-
71
-
62
16
-
10
-
89
53
-
22
-
-
50
146
710
71
-
109
-
69
-
Salto
44
58-23-0-15
68
240
40-74-55-23 46-45-50-46 30-20-20-11
Florida
Crímenes
Delitos
-
675
-
49
-
Artigas
673
29-25-
11
86
166
11
-
579
-
71
90-92-99-81
Paysandú Colonia
517
-
332
-
332
-
88
220
165
—
San José
Algo más completos son
105
-
124
-
92
131
-
los datos relativos al
Juzgados y Tribunales correspondiente
al
Causas
Tribunales
lo
»
.
.
Civil
98
81 -
-
-
39
-
-
89
5-6-3-1
83
76
57
-
62
-
43
movimiento de
-
30
los
año 1886. Helos aquí:
existentes
Juzgados de Comercio
-
108
Iniciadas
en
el
año
Falladas en definitiva
710
1,231
1,195
3,630
490
245
2,910
867
351
—
659
593
—
3,421
Juzgado Departamental de Montevideo
Juzgados Departanu'iitaU's
>•
paña Crimen
del
Juzgado Correccional
de
Cam1,190
—
Anales de
536
en
¡a
Universidad
Los Juzgados fie Paz del Departamento de Montevideo tuvieron el mismo año un movimiento de 2,815 (causas, de las cuales que-
daron conciliadas 1,843 y en trámite, 'paralizadas y apeladas
las
restantes.
Y
Juzgados de Paz de
los
los
demás Departamentos de
informaciones sumarias, 772 por desalojo
(y
dicciones, consignaciones y querellas públicas
Entre
Repú-
demás por
las
y
inter-
privadas.
causas de los Juzgados del Crimen figuraban 76 por
las
homicidio,
la
causas, de las cuales 4,481 por cobro de pesos, 998 por
7,275
blica,
por comiplicidad y
11
33
por conato de
homicidio,
83
por heridas, 35 por pelea, 11 por abigeato, 18 por estafa y 12 por falsificación.
(En la Cancel
d^el
Crimen había ese año 496 hombres y
mu-
35
destacándose entre los factores de ingreso 75 por homicidio,
jeres,
13 por sospecha de homicidio, 130 por heridas, 59 por robo, 32 por
estafa y 19 por vagancia.
A
las Cárceles de las Jefaturas de Policía de todo el país ingre-
el mismo año 6,783 hombres y 666 mujeres, correspondiendo Departamento de Montevideo 4,182 hombres y 475 mujeres y los demás a los Departamentos de campaña. Dentro de las cifras tota-
saron
al
sobresalían
les
124 hombres y
los 3
siguientes factores
de ingreso:
por homicidio
mujeres; por robo 605 (hombres y 56 mujeres; por
210 hombres y K9 mujeres; por escándalo 1,684 hombres y 207 mujeres; por pelea 834 hombres y 87 mujeres; por heridas 604 hombres y 54 mujeres; por ebriedad 231 hombres y 13 muje-
lesiones
res;
por
infracciones
policia/les
desacato 327 hombres y
y
8
498 hombres y
49
mujeres;
por
mujeres; por uso de armas 287 hombres
mujeres.
2
Abaratainiento de la aclininlsti'ación de justicia. El Poder Ejecutivo se dirigió en 1886
al
Tribunal de Apelaciones
insinuándole la conveniencia de adoptar medidas tendientes
al
aba-
ratamiento de la adminnistración de justicia, y
el
Tri-
cont-estó
bunal que ya se había preocupado del asunto. Al acusar recibo de esa contestación volvió a insistir el Poder Ejecutivo en sus Indicaciones, refiriéndose especialmente al arancel de costas, vieja herencia
de
(la
vida colonial que todavía pesa sobre los litigantes.
Una reforma más doctor José
aunque la
radical abordó en la
Román Mendoza:
sin conseguir que
orden del
día.
el
la
Cámara de Diputados
el
supresión de las costas judiciales,
importante tema fuera incorporado a
Anales de
'Estudiando
asunto d«cía
el
«La Razón» que en
5a
universidad
ia
537
doctor Carlos María Ramírez
el
en
aidministración de justicia había una parte
de gastos que beneficiaba a toda la sociedad y que en consecuencia debía correr a cargo del Tesoro público, y otra parte que bene-
ficiaba a los litigantes y que éstos debían soportar.
Hecha
la sepa-
ración, agregaba, podrá y deberá cobrarse la parte de los litigantes
bajo forma de
aumento en
precio del
el
papel
sellado y 'Con
el
producto de esa parte realizar la exproipiación de los oficios que todavía están en manos de particulares.
Intereses municipales.
—
Don Marcelino Díaz y
El alumbrado
García, en repres€ntación de «La Urugua-
ya» pidió y obtuvo en 1886 edificio
el
concesión
la
del
alumbrado
eléctrico
El capital de la Empresa ascendía a 260,000 pesos in-
particular.
cluido
elécti-ico.
de
la
Usina ubicado en
la
calle Yerbal.
Otra Empresa representada por don Juan Cruz Ocampo realizó en esa
misma época un ensayo de iluminación
eléctrica en la Plaza
Independencia, con ayuda de una torre de hierro de 47 metros de altura
provista de seis focos* de
Ambas empresas
se habían
2,000
bujías
cada
uno.
constituido a raíz de 'un aviso pu-
blicado por la Municipalidad de Montevideo en junio de 1885,
mando a propuestas para
la
lla-
iluminación de las calles de la ciudad
«por medio del gas o de todo otro sistema o medio de iluminación». Siete
empresas
concurrieron
a la
licitación,
prevaleciendo
la
don Marcelino Díaz y García. Pero sólo a mediados de 1887 qaedó aceptada en definitiva esa propuesta a causa de los entord
pecimientos
opuestos
por
la
Empresa
del
Gas que invocaba sus
veinte años de concesión a partir de 1867 y
el
régimen de igualle aseguraba
dad de condiciones con cualquier otra empresa que el
contrato firmado en aquella época.
Fl i)re<¡o
(le
las
aguas corrientes.
En 1882 se llevó a cabo un nuevo convenio con la Empresa de Aguas Corrientes en sustitución del celebrado durante la administración Flores en 1867. De acuerdo con sus estipulaciones la Empresa continuaría suministran/do gratuitamente a
la
Municipalidad
hasta 3,000 pipas diarias y concedería además una rebaja del 60 %, equivalente a cinco centesimos por cada 500 litros de la tarifa de loí:
grandes consumidores, a todas las dependencias
¡júblicas.
Los
Anales de
538
particulares
pagarían
20
cuando no excediera de
universidad
por cada 500
centesimos
consumo no excediera de
(íl
la
litros
80,000
mes;
litros
15
mientras
centesimos
10 centesimos en los consu-
y
'6/0,000 litros,
al
mos mayores. Adviértase
que recién en ese mismo año
de
la
renovación de
nuestro viejo convenio resolvía la Municipalidad de Buenos Aires seguir el
ejemplo de
de Montevideo y
la
Roque Sáenz Peña y Santiago Bengolea
acordaba a los señores
la concesión de las
aguas
un capital de 300,000 pesos fuertes en instalaciones para la toma del agua en el Río de la Plata y cañerías que deberían abarcar un perímetro de cien manzanas con 2,400 casas. ciudad, sobre la base de
corrientes de
.la
Cementerios.
—
La
Sociedad Italiana de
los
monuinentos.
Mutuos tenía en el Cemenuna estatua de mármol
Socorros
Central un panteón donde figuraba
terio
—
La psopiedad de
la
alegoría
deraba como
de un obrero rendido de fatiga
la
más
resolvieron los dirigentes de la Sociedad vender
varon
la
que era consi-
la
el
Un
día
panteón y
lle-
de remates de Ruano y modesta suma de 250 pesos.
casa
estatua a la
donde fué vendida por
—
artística de las^ obras allí existentes.
Gomensoro
Esa venta dio lugar a la Dirección de Cementerios para pedir Económico Administrativa una ordenanza que proihila Junta biera en lo sucesivo actos análogos. La Junta aceptó el dictamen del Director de Cementerios y elevó el expediente al Poder Ejea
-
Hubo
cutivo para su resolución definitiva.
nes entre los Fiscales del Estado:
discrepancia de opinio-
de Gobierno sostuvo que no
el
podía impedirse la extracción y venta de los monumentos;
Hacienda que debía gunos miembros de
proihibirse, pero
el
de
que habiéndose presentado
al-
la Sociedad Italiana ante los Tribunales era conveniente aguardar La resolución judicial; y el de lo Civil doctor Pérez Gomar que los locales de los cementerios vendidos a par-
ticulares no podían
cados
sobre una
cambiar de destino; que
sepultura formaban
parte
los
monumentos
integrante de
colo-
ella;
y Sociedad Italiana de Socorros Mutuos que carecía de facultades para vender su panteón con destino a otro objeto distinto,
que
la
también carecía de facultades para vender la estatua colocada en ese panteón. El Poder Ejecutivo que se inclinaba a los dos últimos dictámenes devolvió sin embargo el expediente a la corporación
municipal,
juzgando que
era a ella que
correspondía dictar
Anales de
Y
resolución.
Universidad
la
ñ39
Junta resolvió entonces de una manera general
¡a
monumentos de
los cementerios no podían venderse, salvo cuando fuera para sustituirlos por otros de mayor mérito artístico. La Asamblea a su turno dictó una ley en 1885 por la que exA cluía de los mandamientos de embargo todas y cada una de las
que
los
propiedades particulares existentes en los cementerios.
Mediante simple autorización administrativa fueron autorizadas en
1885
Económico- Administrativas
Juntas
las
para
establecer
cementerios rurales y para reglamentar e inspeccionar los cemen* terios formados por particulares.
Traslación del Cementerio Inglés.
En
terreno
el
de
de Julio destinado iioy a palacio
18
calle
la
municipal, estaba ubicado hasta 1884 ley de
año autorizó
ese
abarcaba
establecimiento
el
Cementerio Británico. Una
el
expropiación de las dos manzanas que
la
otra
y
ley
complementaria autorizó
expropiación de cuatro cuadras de terreno en
la
La
tino al nuevo Cementerio Británico.
hizo
efectiva
tres
Manifestaciones
el
Buceo con
des-
traslación de los restos se
años después.
y honores dentro
La Dirección de Cementerios
del cementerio.
una encuesta en 1884 acerca
hizo
de la procedencia o improcedencia de las manifestaciones y honores
dentro del
realizados
recinto de ios
cementerios.
La mayoría
de las personas consultadas opinó que deberían permitirse a
con-
dición de que los restos de las personas objeto de los homenajes
estuvieran el
sepultados
permiso
en
cementerio.
el
debía otorgarse
sin
ningún caso deberían tolerarse apreciar
distintos
esos
menterios,
y así Administrativa (le jes
públicos al
fallecimiento
lo
la
esa
Algunas contestaron que
restricción.
aconsejó
pareceres
Y
que en Después de
otras
manifestaciones.
las
la
Dirección
de Ce-
Junta EconómicoCapital, que deberían permitirse los homenaresolvió
tienxpo de
tratándose
de
la
en
definitiva
inhumación y en
restos
prohibirse en caso contrario salvo
nos de relevantes servicios
al
la
país.
existentes el
caso
en
el el
aniversario del
Cementerio y
de honores
a ciudada-
Anales de
540
la
Universidad
Impuestos municipales.
La Asamblea votó en 1885 un impuesto destinado mensualidad de
la
servi-
los
a
de salubridad y alumbrado de la Capital, que oscilaba desde
cios
hasta
Patentes,
los
pequeños
teatros,
ly
comercian-
Ese impuesto, que estaba calcado en quedó derogado un año después en virtud de
resistencias con
des
pesos aplicable a los hoteles, joyerías'
industriales.
e
tes
7
centesimos a cargo de
de 50
la
de
ley
la
gran-
las
que se luchaba para su cobranza, quedando
en vigencia de • nuevo las leyes tributarias anteriores. El contraste de pesas y medidas métricas fué adjudicado a una Empresa particular por diez años sobre la base de un im-
anual
puesto cargo
La de
de
de
centesimos
50
para
pesos
ticos y
4
las
1
T5
centesimos
en las
peso
Rodados de 1883 estableció
en
rurales,
la
a
cuota anual
campaña de dos ruedas
carretas de
sin
elás-
peses con elásticos; de 12 pesos' para los carros y carre-
de la Capital de
tillas
Capital,
la
cada comerciante.
ley de Patentes de
6
en
urbanas de campaña y
poblaciones
las
i2
ruedas sin elácticos y
con
6
elásiticos;
d&
pesos para los carros y carretillas de 4 ruedas sin elásticos y 8 con elásticos; de 16 pesos para los carruajes de paseo de 2 rue14
das y 25 para los de 4 ruedas.
l'ialidad.
Una laí-.
1885
autorizó -
Poder Ejecutivo para conceder a
al
Administrativas facultades amplias en ma-
construcción y refacción de
cercos
y
misma
ley
tura tros;
A
de
pueblos y villas de campaña. Esa
teria los
ley
Juntas Económico de
máxima de
los
edificios:
veredas
en todos
prescribió la
17 metros ea las calles de
17
al-
me-
21 en las más anchas; 22 en los bulevares y plazas. pedido de la Municipalidad de Montevideo se resolvió dar al
bulevar de circunvalación
el
nombre de «Bulevar
Desde 1885 quedó prohibido en
las calles
Artigas».
de Montevideo
el
trán-
sito
de caballos «con árganas» y también
yes,
después de las 10 de la mañana. Las árganas eran utilizadas
el
'de
carretas
de bue-
por los repartidores de pan y vendedores ambulantes de frutas y las carretas de bueyes por los proveedores de forrajes de las caballerizas
y
tambos y por
de la campaña.
los
consignatarios
de cueros y
frutos
Anales de
Higiene pública.
—
la
en
Montevideo
durante
quinquenio
el
Enfermos en
1."
de
Entrados
el
año
Fallecidos
"
1882
Hospital de Caridad:
en
número de
el
establecimientos
distintos
los
541
Hospitales y asilos.
El siguiente resumen establece dos
Universidad
enero .
488
¡anfermos
y asila-
de beneficencia pública
1882
-
de
1886:
1883
1884
1883
1886
Anales de
542
la
Universidad
ees y el dinero existente en el Banco disponía el Comité Ejecutivo de 110,000 peses representativos del esfuerzo ¡persistente de una vein-
tena de ajos.
Dos años después ñoles para imitar
el
se
ponían en movimiento
ejemplo de
los italianos
los
residentes espa-
y empezaban con gran
éxito la tarea de recolección de fondos para construir
el
Hospital-
Asilo del Reducto.
La «Asociación
Fraternidad», fundada en 1866 por
tres jóvenes
orientales encabezados por don
Juan Orceto Magariños, apenas tenía una treintena de adeptos en el curso de sus primeros años de funcionamiento. En 1873 el número de sus adberentes no pasaba de 60 Pero en 1882 subía a 563. Los ingresos trimestrales de ese año llegaban a 1,200 pesos y con ellos atendía 135 enfermos y le era dado inaugurar las obras de su edificio propio. Los cuadros de la Sociedad de Economía Política establecían oue en 1882 funcionaban en Montevideo cuarenta y tantas socie dades de todo género con 12,000 asociados.
Las rentas de
la Caridad.
La emisión de 1884 y a el
billetes
3.178,000
primer
de Lotería alcanzó a
en 1885.
año y 2.506,942
El público
en
el
sólo
segundo.
pesos
en
3.205,042
en
3.610,000
retuvo
Este descenso
había
empezado con mucha anterioridad, repercutiendo como es natural en forma dolorosa sobre los establecimientos de caridad que tenían en la' Lotería su única fuente de recursos. A mediaaus de 1882 el Director de los Asilos Maternales don Juan Manuel de la Sierra se dirigió la la Junta Económico-Administrativa de Montevideo para decirle que la carencia absoluta de
recursos le había obligado a pedir a los habitantes de la ciudad
un óbolo mensual de 4 a 20 centesimos y a
los padres
pudientes
de los niños asilados otro de 1 a 4 centesimos diarios. Los presupiíestcs
—
agregaba
mes después
dirigía
Municipalidad en
la
—
el
están impagos desde diciembre de 1881.
Un
señor de la .Sierra una nueva nota a la
que expresaba ¡que nada se había recibido por 9 meses; que el pro-
concepto de la Lotería durante los iJltimos
ducto de la suscripción pública había resultado insuficiente; que también era insuficiente el producto de la cuota impuesta a los padres de los niños; que en febrero al hacerse cargo de los tres Asilos regía
deuda de
un presupuesto de gastos de 3,000 pesos y
20,000;
que había reducido
el
-existía
una
presupuesto a 1,800 pesos
Anales de
la
543
U'/iiversidad
y amortizado con ello una parte de la deuda, pero que los atrasos
volvían a crecer y ascendían ya a 16,000 pesos, y que en consellegado el momento de clausurar los Asilos
énencia consideraba
Maternales.
Tres
más
años
nuevo Director de de
la situación
los
tarde, los
en
Municipalidad
decía a la
188'5,
Asilos Maternales don O.scar
cada vez más
establecimientos se hacía
gente y que de esa situación sólo podría salirse mediante una cuota mensual de 6 a 15 reales por cada niño. ('.e
No
más
er,a
tolerable la situación
caridad. El personal de servicio del Hospital y del
se
declaró
en
1882
el
afli-
pago
de los otros establecimientos
dt
en huelga
el
Hodeñana que
invocando
que
los
Manicomio
sueldos
tenían
ya un atraso de cuatro mes^s. En uno de sus mensajes del año 1S84 manifestaba el Poder Ejecutivo a la Asamblea que las dificultades con que se continuaba luchando «hacían imposible
el
sos-
tenimiento de los Asilos de Mendigos, Maternales y de Huérfanos'» y atribuía
hecho a las costosas obras del Manicomio y Asilo
el
de Mendigos que habían cercenado una parte de los proventos de la Caridad.
A mediados de maba la atención
1885 del
la
Junta
Gobierno
Económico Administrativa -
acerca
de
la
difícil
lla-
situación
—
decía Se adeudan los establecimientos de beneficencia. sumas bastante crecidas y el déficit aumenta mes a mes. Para a la Junta un remedio: la conjurar el mal sólo se le ocurría
d?
—
supresión recursos sin
de
en
la el
Comisión de Caridad y Tesoro Municipal.
Y
lo
Perjuicio de gestionar y obtener de la
reforzaba los fondos de la
centralización
la
así
resolvió
el
de eus
Gobierno
Asamblea una ley que
Caridad mediante un derecho
adicio-
nal de abasto de 50 centesimos por animal porcino, 20 por animal
vacuno y 5 por animal lanar. Los establecimientos de Caridad quedaron desde entonces bajo directa de la Junta Económico- Administrativa la dependencia hasta fines de 1886 en que el Gobierno del general Tajes volvió a ponerlos bajo el contralor de la Comisión de Caridad en virtud de haberse agravado los males que se pretendía combatir.
Amagos de
A
fines
amarilla
fiebre amarilla y cólera.
de 1883 ocurrieron algunos casos sospechosos de fiebre
en /Buenos Aires. Nuestras
autoridades
apresuraron a dictar medidas precaucionales contra
sanitarias las
se
proceden-
54
Anales de
\
Universidad
la
argentinas sin adoptarlas a la vez contra las brasileñas, que
cías
eran realmente las del contagio, dando lugar con
ello a represalias
que no tardaron en conducir a un cambio Tscundo de notas sobre adopción de medidas ccmunes en ambas márgenes del Plata. Algo
también entonces de
se habló
organización de un lazareto inter-
la
nacional en la Isla de Flores. Pero la idea encontró grandes reslbtencias
punto de vista de la inconveniencia de someter una argentina, ;y quedó
del
parte del territorio oriental a la jurisdicción
abandonada.
Un año
después era
el
cólera
que amenazaba desde
el
las costas
Francia y España. La Dirección de Salubridad adoptó en el acto lun plan de medidas del que formaban parte la inspección de comestibles y bebidas de plaza; la reglamentación de los de
Italia,
tambos;
la
.reglamentación de los lavaderos,
mar
hasta el
en las casas,
terraplenamiento de
el
reconstrucción y prolongación de los caños maestros; la colocación Ide resumideros
de
norte
playa
la
la
ciudad;
la
terraplenamiento y cercado
el
'de
todos los terrenos
de la ciudad y la inspección de las casas de inquilinato. Poder Ejecutivo dirigió en. esa oiportunidad un mensaje a
baldíos lEl
Asamblea en que expresaba
la
los
puertos de
la
Repiública a
temor de que
el lais
la
clausura de
procedencias de Francia, Es-
Italia produjera un descenso en la renta aduanera, y pecomo medio de contrarrestar los eifeictos de esa baja un voto
paña e día
confianza para disminuir la mayoría de los rubros de egre-
df-
Presupuesto General de Gastos.
sos del
Caños maestros. Nuestra red cloacal
—
decía en 18 8i3
tal
—
todavía
el
cales se
marea
el
Director de Salubri-
de la CapiEduardo Canstatt a contribuye a la higienización de la ciudad, pero le fallta
dad ingeniero
la
Municipalidad
caño colector que ha de impedir que las materias fela costa produciendo en los días de baja
derramen en
emanaciones
fétidas
que
hacen
inhabitables
ciertos
ba-
rrios de la ciudad, y ello a pesar de la prolongación de algunos
de los caños
Como de
mar
inmediato
el
andaba construir al desagüe de toda
rr;
aJdentro.
consecuencia
de
esa voz
estudio de el la
un
de alarma proyecto de
caño colector
de
la
Asamblea abordó ley por
circunvalación
el
que se
destinado
red y se imponía a los propietarios de
'edi-
Anales de
la
545
Universidad
situados en calles con caños maestros la obligación de pedir comunicación cloacal correspondiente y de cegar sus depósitos
ficios la,
negros.
hundimiento de la letrina de una casa de los alrededores de la ciudad, donde murieron asfixiados un niño y tres personas que acudieron en su auxilio, -dio ambiente prestigioso al cegalEl
miento de pozos negros que establecía
el
proyecto.
Diversas medidas de saneamiento.
Asamblea de abrir la campaña pantanos y lagunas infectas de anexos ganados al la Aguada y terrenos Ferrocarril Cendel construcción del muro
iRecién en 1884 se preocupó la
de saneamiento
que exigían
antigua Plalya de
la
mar con motivo de
la
los
Toda esa zona estaba cubierta por aguas estancadas donde
tral.
arrojaban diariamente toneladas de basura a título de materias de terraplenamiento. La Asamblea votó la suma de único 10,0001 pesos con destino al arreglo de las calles. Era el
los
carros
exigir a los propietarios la Municipalidad pudiera particulares la obligación de disecar y terraplenar sus manzanas
medio de que baldías.
acuerdo con lo aconsejado por la Dirección de Salubridad de establecimientos insalubres la se fijó para ©1 funcionamiento hasta Maroñas, Paso de CasaBuceo el desde comprendida zona 'De
de Juan Fernández y Cerro. numerosos tambos que funcionaban dentro del casco urbano fueron también reglamentados, estableciéndose la amplitud mínima de cada establo, el número de vacas que podían
valle,
Cucihilla
liOS
tener,
la
clase
de los pisos,
la
forma de
la
limpiez.a,
la
visita
diaria de los veterinarios y el análisis de la leche por la Oficina
Química Municipal.
La vacunación
obligatoria.
de la viruela en 18 82 indujo al Consejo presentar un proyecto de ley del que en a Pública de Higiene seguida empezó a ocuparse el Cuerpo Legislativo. iDe acuerdo con ese proyecto, modificado por la Cámara de Bl recrudecimiento
Diputados,
todo
niño
debería ser
?ño de su nacimiento en T.
VII
-
35.
los
vacunado
dentro
del
primer
centros urbanos y de los dos años
Anales de
516
universidad
la
en las zonas rurales, y además sería obligatoria la vacunación y revacunación decenal tratándose de escuelas públicas o particulares,
rasas
ho&pita'les,
asilos,
establecimiento comercial de
Número de En
saladeros
de
públicas,
o cualquier
otro
personas.
20
conventillos.
funcionaban en
1882
límite
más de
oficinas
cárceles,
cuarteles,
de inquilinato, fábricas, talleres,
Sierra)
calle
la
de
ciudad
la
452
Montevideo
conventillos
con
6,365
(hasta
el
cuartos
y
13,82 6 habitantes.
Un segundo perímetro
censo levantado en conventillos,
439
1\8
©,436
mismo
84 arrojó dentro del
cuartos y
habitantes,
14,(650
Hombres 5,370, mujeres 4,261, niños 5,019. El Municipio de Buenos Aires tenía en 1883, según un inf or-
distribuidos
ine
así:
Guillermo
doctor
del
cuartos y
Rawson,
conventillos
1,868
con
25,645
haibitantes.
64,i5C
Inspección de comestibles y bebidas.
La Municipalidad de Montevideo prohibió en 1SS3 el expejidio de bebidas en envases de cobre, bronce o plomo de baja ley y el
empleo de anilinas
bles.
tivo en 188 5
para
la
coloración
de
bebidas
mismo plan de medidas creó
Siguien'do el
el
comesti-
y
Poder Ejecu-
una Oficina de Análisis depen'diente de
la
Aduana
para la verificación de los vinos y bebidas extranjeros o de proinvocando la creciente adulteración de los ducción nacional, artículos
de
consumo.
Y
el
Cuerpo Legislativo, ampliando
fera de acción municipal, aibordó
regularizaba tación
de
la
las
facultades
venta
de
caces de 100 pesos de la
primera vez y
el
el
municipales
comestibles
y
la
es-
estudio de un proyecto que
en materia
bebidas,
con
de
reglamen-
sanciones
efi-
multa o en su defecto quince días de prisión doble en caso de reincidencia.
Reglamentación de la prostitución. lEn 188 2 fué puesto en ejecución un reglamento proyectado per la Policía durante la administración Latorre. De acuerdo con ese reglamento quedaba permitido el funcionamiento de las casas
de tolerancia
que se
sometieran a
la
revisión
médica
y
Anales de
contrajlor de la
luego
interno tendientes a facilitar
La prostitución clandestina era castide cárcel. Complementando sus disposiciones
Policía.
gada con tres días íijó
547
Universidad
disposiciones de orden
diversas
ii
el
la
Policía radios especiales para el establecimiento de
la
¡as casas de prostitución. ^Al
gesitionar
la
aprobación del reglamento
Jefe Político la difusión creciente de la
ei
en
el
ejército
de
de
sífilis,
1877 invocaba especialmente
línea.
Las Policías de campaña. los castigos infligidos a Volpi y Padurante la administración Vidal Cárcel del Cabildo trone en la
La enorme resonancia de
moralizó grandemente lo
acción
la
de
Policía
la
de
Montervideo.
Pero no sucedió los mismo con la Policía de campaña según revela la propia documentación oficial de la época. El Ministro de Gobierno doctor Carlos de Castro se vio obli-
gado en
188.3
Poilioía
la
a estimular
el
celo
Fiscal
del
del
Crimen contra
de Rociha que había torturado al preso Antonio Leal
«basta dejarlo expuesto a no recobrar
el
uso de las manos».
El Jurado llamado a actuar en la causa instruida en 1884 al Co-
en su vereSalto don Jacinto Andrada estableció que por orden de ese Coimisario había sido ultimado a balazos y degollado el preso Juan Mora por el guardia civil Juan Feliciano, y este último degollado por no haber a su turnos
misario del dicto
guardado
el
secreto de lo que había hecho.
El ejército de línea. El ejército presidencial
1884, según
de línea se componía en
de clausura
de
las
sesiones
el
ordinarias del
mensaje Cuerpo
Legislativo, de 3,260 soldados, 20.8 oficiales y 26 jefes distribuidos en un regimiento de artillería, la guarnición de la Fortaleza «General Artigas», 3 batallones de cazadores y 5 regimientos
de caballería. Las
unidades más numerosas eran
de artillería que tenía 65
6
plazas y
el
Batallón
5."
el
regimiento
de Cazadores
que tenía 594. Durante las fiestas del 2 5 de Agosto de ese año Punta Carreta un i>imulacro de combate realizó en el ejército en
el
que tomaron parte 3,23 3 soldados. además una flotilla compuesta de
Híi,bía
la
cañonera
«Gene
Anales de
518
ral
en
construida
Artigas»
universidad
la
Trieste,
la
cañonera
«General
Ri-
Escuela de Artes y Oficios, 5 vapor.citos y un pailebot, con una tripulación de 10 jefes, 15 oficiales, 35 maquinistas y 100 marineroo. Dos años después, en 18 8 6, al abrir las sesiones ordinarias
-vera»
o.el de-
en
construá'da
la
Cuerpo Legislativo decía componía de 26
de tropa distribuidos en
el
Presidente Santos que
ejército
el
jefes,
hubo en seguida un aumento con motivo de
saje anterior. Pero la
revolución del QuebracOio que elevó
el
de los oficiales a 230 y
En
el
190 oficiales y 3,323 soldados mismo número de unidades del men-
linea se
el
el
númeroi de jefes a
de los soldados de línea a
27,
3,795.
mes de su manldato presidencial, un decreto por el que se concedían los
18 8 6, último
febrero de
dictó el general Santos
8 coroneles y los de coronel coroneles graduados y tenientes coroneles. 43 as-
despacihos de general de brigada a efectivo
a
35
censos de golpe!
La Sociedad de iDurante
los
todo
el
13.
tiempo de su administración presidió
el
ge-
neral Santos una sociedad compuesta de 13 jefes de Cuerpo que se
reunían invariableimente
mesa para celebrar de marzo de 18 80.
opálpara
ffiüsa
que
feciha
el la
correspondía
13 de cada
mes en torno de una
caída de Latorre, ocurrida
al
entronizamiento
del
el
13
santismo
fué una vez dibujada en la Plaza Independencia con ayuda de ra-
mitos
de flores
desfilaban por
colocados allí
por
los
soldados
de
los
batallones
que
con ese objeto.
En 1885 al regresar el Presidente Santos de Maldonado donde había ido con motivo de la colocación de la piedra fundamental de la Aduana de Punta del Este, la Sociedad de los 13 colocó su retrato flores
al
frente
del
en cuyo centro se
Cabildo leía
esta
rodeado de inscripción
un gran arco
de
«Bienvenido sea».
La leva como procedimiento de remonta. La leva el
curso de
o caza de la
hombres continuó en vigencia durante todo
administración Santos. Era
el
único procedimiento
remonta del ejército de línea a despecho de las disposiciones legales que lo proscribían en absoluto. Y por efec-
aplicado para
la
Anales de
¡a
Universidad
049
la población de Montevideo más una vez luchas sangrientas. Es que los forzados preferían la muerte al rigor de los cuai'-teles. A mediados de 188 3 tres soldados del Regimiento de Artillería que estaban de servicio
de ello tuvo que presenciar
te
de
en
Cárcel de la calle Yi resolvieron evadirse, y así lo hicieron
la
corriendo con sus fusiles en dirección a
Playa Ramírez. Nu-
la
merosas partidas salieron en persecución de dieron
alcance
a
la
prófugos y
los
les
Tranvía de los una terrible lucha cuerpo a cuerpo en
altura
de la Estación
del
trabándose allí ene fueron ultimados, uno tras otro, los tres soldados. Pocitos,
I.a
enseñanza militar.
El Colegio Militar, eliminado durante varios años del mecanismo administrativo, volvió a funcionar en 1885 bajo la dirección del sargento mayor don Juan Bernassa y Jerez. El plan de estudios cO'mprendía un examen de ingreso basado en el programa de las escuelas públicas de 2." grado y cinco años de estudios superiores.
la
Dos años antes había sido aprobado el reglamento de de Marina que establecía cuatro años de estudios.
Honrando
la
Escue-
a los iirócercs.
La Asamblea votó en 1883 la suma de 80,000 pesos con desuna estatua ecuestre de Artigas en el centro de la Plaza Independencia. La estatua debería ser de bronce tino a la erección de
y el pedestal de granito extraído de las canteras de Las Piedras.
El proyecto primitivo sancionado por prescribía
agradecida
que a
la
don
estatua
José
tendría
Artigas,
esta
la
Cámara de Diputados
inscripción:
fundador
de
la
«La Patria Nacionalidad
del Uruguay». Pero la Comisión de Legislación del Secombatió victoriosamente. «JEl Greneral Artigas decía en su informe está reputado como la personalidad política nías levantada de nuestro país... Pero la inscripción no armoniza con la tendencia del procer a propósito de una confederación a favor de la que luchó hasta que abandonó el suelo de la patria»... Lo que corresponde es que simplemente se inscriba nombre de Artigas, porque tratándose de una personalidad e¡
Oriental ntido
Id
tan encumbrada su solo es
—
—
más solemne».
nombre simboliza todo
el
pensamiento y
Alíales
550
de la
ünivers^ocú
la Asamblea en 1884 que muerte de Artigas fuera declarado día de duelo nacional, y dando cumplimiento a esa ley resolvió el Presideíate Santos que la urna fuera traída a la Catedral para realizar un funeral y reconducida luego al Cementerio custodiada por el ejército y el pueblo. En el Cementerio hablaron el Ministro de Gobierno doctor Carlos de Castro, don José Cándido Buslámante, don Nicolás Granada, don Alcides De-María y el doctor Manuel Herrero y Espinosa. La prensa de Montevideo se asoció al homenaje con una corona que fué colocada sobre la urna. De otro homenaje más importante se encargó la prensa de Montevideo por intermedio de «La Razón» a cuyo frente editaba en esa época el doctor Carlos María Ramírez. Un diario de Buenos Aires. «Sud América», reproduciendo las diatribas con que los enemigos del procer habían tratado de hundirlo en el curso de sus grandes luchas por la libertad y las instituciones desde 1811 hasta 18^0, insertó un artículo titulado «La apoteosis de un bandolero», que fué el comienzo de una polémica que dio lugar al publicista oriental para exaltar en for-
Continuando
el
honores resolvió
los
de
aniversario
la
ma deifinitiva el programa de Artigas, de la Revolución Sudamericana.
el
Corresponden a este mismo período de
más grande y duradero la
administración San-
tos las leiyes de erección de estatuas a los generales Rivera, La-
valleja y la
Bruno Mauricio de Zabala, gestionada esta última por «Laurak Bat», y la donación al Estado del Monu-
Sociedad
mento
erigido a los Treinta y Tres en la Playa de la Agraciada
por don Domingo
La muerte la
Ordoñana.
del general Garibaldi,
Defensa de Montevideo, ocurrida
uno de los grandes jefes de mediados de 1S82, dio lu-
a
gar a numerosos homenajes oficiales y populares. El Gobierno decretó un funeral en la Matriz que fracasó por la
resistencia de la Iglesia,
guarnición y
el
un
desfile de todas las fuerzas de la
uso de las armas a la funerala durante cuatro días.
Cuerpo Legislativo votó 10,000 pesos como base de una suspública destinada a la erección de una estatua. Y los residentes italianos realizaron, con el concurso de una gran parte
El
cripción
del pueblo
de Montevideo, una procesión cívica digna del autor
de esta proclama
a
los
soldados italianos al darse en
señal de partida después de la entrada en
Roma, proclama inspirada en
pruebas había dado durante
la
las
1849
la
de las tropas francesas
mismas ideas de que tantas
Defensa de Montevideo:
mates de
«¡soldados!
he aquí
lo
sed.
No
me- hambre,
frío,
sino vigilias
continuas,
bayoneta. Aquel que
seguirque ofrezco a los que quieran municiones, ni cuartel, ni pan,
ofrezco
batallas,
ame
a
la
Varios tratados y resoluciones
La Legislatura de
este
5^1
Universidad
la
marchas forzadas y cargas a que me siga.»
la
patria,
(le
período
carácter internacional. aprobó:
el
ajustado
Tratado
indepenreconocimiento de con España en 1870 sobre hablahemos antes que de dencia y pago de deudas del coloniaje meBrasil el con Extradición de do' una ampliación al Tratado peligro de de o urgentes casos en diante la cual se autorizaba Largo Salto, Tacuarembó, Cerro evasión a los Jefes Políticos del para Grande de la Provincia de Río y Rocha y al Presidente pride órdenes las efectividad de obtener hasta por telégrafo la de compromiso el bajo competente, sión dictadas por autoridad resdocumentación la días treinta presentar dentro del plazo de con la Gran Bretaña que pectiva; un Tratado de Comercio favorecida el cabotaje de la cláusula de la nación más excluía que deberían afluentes sus ribereño de los ríos Paraná, Uruguay y Tratado de un países; respectivos regirse por las leyes de los los favocláusula misma la de Comercio con Italia que excluía el Uruguay por acordados privilegios res especiales, exenciones y comercio de frontera o al comercio n título de reciprocidad al sus afluentes siempre ribereño de los ríos Paraná, Uruguay y similares a los de Italia; una qve no recayeran sobre productos judicial que extendía a Convención con Francia sobre asistencia procuración la y la defensa franceses los indigentes uruguayos y las leyes de a arreglo con nacionales gratuitas de que gozaran los para la Argentina la con Telegráfico cada país; un Convenio las de con empalmai prolongación de las líneas orientales hasta en ajustada Latinoamericana Martín García; y la Convención Argentina Chile, y Uruguay. Chile entre los representantes del notoria de obras de protección Colombia para el fomento y "
nuestra
Desde 1881 haoían quedado derogadas
prácticas
mercantes,
anteriores
en
virtud
sobre de
desertores las
cuales
de
las
viejas
buques
nuestra
Policía
y
de
abusivas
guerra y
arrestaba
y
marineros que eran requeridos por
a bordo a todos los o Capitanes de Patrones Cónsules v hasta por los simples en 1885 esas restableció Santos de buques Pero el gobierno
mandaba los
Anales de
Universidad
la
derogadas invocando el Código de Comercio, las costumbres internacionales y ei interés de atraer al puerto de Montevideo el comercio marítimo. Una ley de 1886 reglamentó el uso de las banderas. Los pabe-
prácticas
extranjeros sólo
llones
podrían
enarbolarse
con
permiso
de
la
autoridad competente, salvo en las Legaciones y Consulados. La
bandera nacional podría enarbolarse en las fiestas patrias. En manifestaciones callejeras sólo podría figurar la bandera
la?
nacional.
Coi'i'eos.
Durante
el
quinquenio 18S2-1S86, que corresponde a
hubo en
nistración Santos,
que subsigue
miento
los
atendido
correos de la República
por
departamentales,
administraciones
una 41
Dirección
sucursales,
la
admi-
el
movi-
General,
11
18
estafetas
ambulantes y 382 agencias:
Cartas ordinarias
Cartas y
oficios
recomendados
.
1882
1883
1884
1883
1886
1.353.333
1.579,141
2.635,980
2.911,969
3.074,637
36.746
46,264
84,174
103,716
111,652
15,128
16,776
32,217
28,811
30,642
2.094,711
3.770,144
8.689,269
8.876,805
7.907,789
161,858
.
Tarjetas postales
Piezas impresas
muestras
Paquetes de
y
papeles
de negocios
Correspondencia
4,219
5,371
103,310
150.394
66,730
63,122
116,543
131,636
121,018
% 127,601
S 148,293
$ 170,539
$ 163,133
$ 164.762
....
oficial
Rentas
Creación de Departamentos.
En
creados por la Asamblea, a pedido del Poder Departamento de Artigas con una zona del Departamento del Salto, el de Rivera con una parte del Departamento de Tacuarembó, y el de Treinta y Tres con una parte de los Departamentos de Cerro Largo y Minas. Un año después fué creado el de Flores con una parte del Departamento de San José. Respondían en el fondo todas esas creaciones a intereses políticos vinculados al aumento de bancas legislativas y creación üe
fueron
1884
Ejecutivo,
elevados
el
cargos
de ella se valió
después
de
la
administrativos, el
la
última sobre todo,
general Santos para recuperar
terminación
de
su
mandato,
la
como que
Presidencia
como Senador por
Anales de
primero,
Flores
Presidente
Universidad
la
Senado
del
en
553
seguida,
encargado
y
luego del poder ejecutivo por renuncia del doctor Vidal.
Teatros y espectáculos.
Entre
los
dei
festejos
18
de
de
julio
fredi
en
Tomás
Giribaldi «Man-
Compañía Italiana de Opera que actuaba El autor fué grandemente ovacionado por el
Svevia», por la
di
Teatro
el
figuró la representa-
18b5
ción de la obra del maestro nacional don
Solís.
público.
En ese mismo año el doctor Carlos María Ramírez escribió un drama «Marta Vald«negros» con destino a la Compañía Dramática Italiana que encabázaba Eleonora Duse.
La Sociedad Musical «La Lira» inauguró en 1885 un Conservatode Música y un plan de veladas con parte de literatura y
rio
nivel
música tendiente a ilustrar
de
parte
de la cultura
Una
terrible
catástrofe
levantar
el
que ocupaba
la
auditorio
al
y
de Montevideo.
artística
en
ocurrida
local
el
Logia Masónica «Garibaldi» dio lugar a que Montevideo se preocupara de dictar algunas
la
Municipalidad de
medidas de seguridad de largo tiempo atrás reclamadas. La Logia rendía un homenaje a la
memoria
pedazo
de
queño y deró de cabeza
la
Tratábase de
localizar
de y
concurrencia y todo
de la columna
puerta de los
tela.
fácil
calle
numeroso público. De túmulo e incendió un
del general Garibaldi ante
pronto una lámpara de kerosene cayó
por
la
así
del
un principio de incendio muy peextinguir. Pero el pánico se apo-
mundo
el
desbordada
violencia
corrió a la escalera.
cerró
las
dos
que se precipitaba y sobre cayendo los demás hasta pro-
paredes de la escalera. Murieron
tres señoras, tres niños y trece lin
La
de la
con
que marchaban delante fueron
ducirse bajo la formidable presión de los cuerpos las
hojas
allí
el
derrumbe de y asfixiados
aplastados
hombres entre
ellos
el
médico
itsi-
nn ñq c.tnr Triani.
Fué con motivo de ese horrible accidente que la Policía dictó una ordenanza por la cual se prescribía que las puertas de loa templos y teatros deberían colocarse de modo que se abrieran para afuera y hacia adelante, sin cancelas ni rejas, debiendo per-
manecer siempre abiertas durante
los
espectáculos.
La cuestión
A
Anales de
"
551
—
religiosa.
üniversiclad
la
El niatrimonio
principios de 1S85 presentó
civil
obligatorio.
Presidente Santos con la firma
el
de su Ministro de Culto, Justicia e Instrucción Pública don Juan Lindolfo
que del
un proyecto de
Cuestas,
había
obstaculizado
de matrimonio civil obliga-
ley
poniendo así de nuevo sobre
torio,
tapete
el
sanción del
la
el
mismo problema
proyecto
de Código
Civil
doctor Eduardo Acevedo durante las cuatro legislaturas segui-
das de Giró, Flores, Pereira y Berro.
El
proyecto
brado dría
del
celebrar
divorcio,
dos
en
acto
podrían
civil
religioso,
ceremonia
la
certificado
declaraba
obligatorio
matrimonio
el
habitantes de la República. Después de cele-
los
matrimonio
el
celebración
del
gubernativo
para todos
civil
contrayentes
los
ningún párroco
pero
religiosa
sin
la
correspondiente al matrimonio
solicitar o
pastor
la
po-
previa presentación
Los juicios de
civil.
de disolución y de nulidad de matrimonios serían regipor
adelante
las
y tribunales
leyes
con
civiles
absoluta
prescindencia de las autoridades eclesiásticas.
Es incompleta
la
ley
por su fe de bautismo ^.
Iglesia
la
—
de Registro Civil de 1879
der Ejecutivo fundando ese proyecto. o
por
sus
—
^ecía
el
Po-
Sucede que personas que
prácticas
religiosas
Católica recurren al matrimonio civil
pertenecen
declarando que
no tienen ninguna religión o simplemente que no son católicas. Ocurre también con frecuencia que esas misma personas recurran luego a la iglesia para bautizar a sus hijos, la cual entonces objeta la legitimidad del matrimonio celebrado ante la autoridad civil.
Otros casos se ban dado:
berse
declarado
han presentado lico;
a
la
disidentes a
la
iglesia
el
para
de cónyuges que después de ha-
obtener
solicitando
el
matrimonio
de parientes colaterales que después
se
de haberse presentado
Curia en demanda de dispensas para contraer se han
civil
contraer matrimonio cató-
el
matrimonio
Juzgado de Paz" declarándose disidentes para la celebración del matrimonio civil; de viudos que luego de presentarse ai Juzgado para contraer el matrimonio civil sin cumplir previamente lo que previene el Código para salvaguardar los bienes de los interesados en la sucesión del primer católico,
presentado
al
matrimonio, se han presentado a la iglesia para celebrar el matrimonio religioso sin preocuparse de sus obligaciones jurídicas. La reforma emprendida por Latorre era efectivamente una re-
forma a medias. El dictador había sometido los nacimientos y las defunciones a la ley de Registro Civil. Pero el matrimonio conti-
de la Universidad
Alíales
nuaba sometido
a
salvo en
Iglesia,
la
555
no
caso de contraj'entes
el
católicos.
Las autoridades eclesiásticas resolvieron lanzarse a la lucha. Comprendían que el proyecto no atacaba ningún dogma desde que se limitaba a separar el contrato
que corresponde a la ley, del sacramento que corresponde a la Iglesia. Pero se daban cuenta de que arrebataba a la Iglesia una jurisdicción que ella estaba acostumbrada a ejercer sin limitación y de la que usaba y abusaba con fines financieros y sectarios. El obispado en una larga exposición decía que
ei
proyecto de matrimonio
dirigida a
la
Asamblea
«desconocía la validez
civil
y legitimidiad del sacramento al establecer que solamente sería legítimo el matrimonio celebrado ante la autoridad civil»; que atribuía «al sacramento la condición de calidad extrínseca o adjunta
contrato al declarar que celebrado
al
dad civil podrían monia religiosa»; cual
que
y
contrato
el
que negaba
atribuir
al
sin
civil
autoridad
a la
ante la Iglesia la cere-
de la Iglesia según la
doctrina
la
sacramento
el
nulo como
es
contrato;
determinación
la
civil
acto ante la autori-
el
solicitar los contrayentes
de los
impedimentos dirimentes «dejaba de reconocer como tales impedimentos aun para los católicos el voto religioso y algunos de los gi'ados
Y
de parentesco justamente prohibidos por la Iglesia».
procuró
reforzar
veintitantas mil
su
una
con
representación
'
olicitud
de
que la Cámara da Diputados
firmas de señoras,
mandó devolver por la forma irrespetuosa en que estaba redactada, y que el Senado mandó archivar por razones análogas. decían las señoras «A la par de la religión y de la libertad en su
representación
profanación
esa
del
—
—
será
la
mujer
sacramento
del
la víctima
matrimonio,
vina de Nuestro Señor Jesucristo a la cual debe elevación
y
dignidad con que nos honra
sacrificada institución
la
mujer toda
civilización
la
por li-
la
cristiana,
después de habernos librado de aquella ominosa postración, degradación y servilismo
en que yacía !a mujer pagana.
.
.
No
siendo
matrimonio sacramento, se legitimaría en su lugar una unión cuyo solo nombre repugna a nuestra dig-
ya venerado por la ley nidad:
el
el
concubinato legal.»
Fué rápida
la
marcha
del
proyecto
como
tenía que suceder des-
pués de promulgada y aclimatada la ley de registro cimientos y defunciones. Apenas duró dos meses su en
el
La
civil
de na-
tramitación
Cuerpo Legislativo. ley
de
1885,
surgida
de
esa
iniciativa,
daba obligatoriedad
Anales de
556
matrimcnio
al
prevenía
civil;
la
Universidad
que en adelante sólo se reconoce-
matrimonio celebrado con arreglo a la ley; y establecía que una vez efectuado el matrimonio civil podrían los contrayentes solicitar la ceremonia religiosa, pero que ningún
como
ría
legítinao
el
sacerdote o pastor podría autorizar
presentación
pena de
del
certificado
acto religioso sin la previa
el
probatorio
matrimonio
del
bajo
civil,
meses de prisión la primera vez y de un año la segunda, salvo el caso de matrimonio in extreíiiis que no produciría efectos civiles. Los juicios de divorcio, disolución y nulidad del matrimonio quedaban regidos por la justicia civil con absoluta seis
prescindencia de
A
estas
la
eclesiástica.
disposiciones
concordantes
con
el
proyecto
que
antes
hemos extractado agregaba la ley otras dos más. En primer lugar que el matrimonio era una unión indisoluble que sólo podía terminar en cuanto al vínculo por ia muerte de uno de los contrayentes. Con ello mantenía la Asamblea el mismo régimen establepor
cido
el
Código
lugar que los anterioridad
Civil,
matrimonios
negatorio civiles
divorcio.
del
eran válidos y legales desde
la
Y
segundo
en
celebrados con
entre católicos
fecha de su celebra-
Con ello ponía la Asamblea término a una insistente protaganda de las autcridades eclesiásticas, según las cuales el bautizo fijaba de una manera definitiva la filiación religiosa y ción.
sometía
al
bautizado a la jurisdicción exclusiva de la Iglesia Ca-
no siéndole permitido en consecuencia prescindir del sacramento a título de disidente, único caso en que el Código autorizaba tólica,
el
matrimonio
civil
sin
ceremonia
religiosa.
Entre los impedimentos dirimentes incluía la ley consagración religiosa cuando la ceremonia ante la biera sido estipulada
como condición
resolutoria del
y fuera reclamado su cumplimiento en la celebración del matrimonio.
el
curso del
la
falta
Iglesia
de hu-
contrato civil
mismo
día de
Habían sido vencidas las autoridades eclesiásticas. Pero la cam paña de la Iglesia continuó con el mismo ardor después de la promulgación de la ley. El obispo Yéregui publicó una pastoral en la que prevenía a los novios católicos que debían concurrir a la Curia y correr allí las
diligencias
esclesiásticas antes
que la concurrencia
al
de presentarse
Juzgado de Paz
—
les
decía
al
Juzgado,
—debe
sólo
por-
con-
como «un requisito al que la ley obliga antes de recibir sacramento del matrimonio que sólo ten-drá lugar cuando rsciban la lieniición del párroco o de quien haga sus veces».
siderarse el
Anales
— agregaba
«Considerando
pastoral
la
—
551
que
plimiento de un precepto meramente civil y no la sacramento, los que han practicado ese acto civil
común
vida
que contraigan
ha^ta
contrario
lo
d;;
acto
el
en
vivirían
pecado
de
la
cumrecepción de un no pueden hacer
matrimonio
el
estado
que
a
que van a contraer matrimonio es sólo
obliga a los
ley
Universidad
la
(le
el
pues
religioso,
mortal.
.
Tengan
.
presente los católicos que nada absolutamente se ha cambiado, ni
puede cambiarse en
la
Tengan bien presente los católicos que en el expediente acta que hagan ante el Juez de Paz debe hacerse constar como
Iglesia.
o
impedimen-
relativo a los esponsales, a los
lo
y demás cosas concernientes al matrimonio prescriptas por
tos
.
.
condición
—
resolutoria
—
esto
esencial
es
validez
a la
del
civil
compromiso mutuo de realizar en seguida el matrimonio religioso, pues de no hacerlo se expondrían a graves inconvenio
el
convenientes».
El doctor Mariano vicario
general,
prqpaganda contra de
Catedral
la
ley
la
dijo
que ocupaba entonces
Soier,
destacó
se
y
entre
todos
por
de matrimonio
sostuvo
que
el
dando lugar con
el
cargo
de
de
su
virulencia
la
Desde
civil.
matrimonio
el
civil
pulpito era
un
Poder Ejecutivo se dirigiera en términos enérgicos a la Curia para que llamara al orden al orador, y al Fiscal del Crimen y a la Policía para que adoptaran las medidas coercitivas de su resorte. «c'oncul)inato
legal»,
El doctor Soler
desde rios
—
Yéregui
obisipo
la
culta».
decía
el
a que
el
Ministro Cuestas
«eseaudaliza
a
en su nota al
sociedad casi diariamente
la
pulpito de la Catedral con discursos o sermones contra-
el
a
—
ello
.
.
moral y
a
Ataca
ley de
la
los
comete un
católicos,
que se deiben a una sociedad matrimonio civil que hoiy rige para los
respetos
que
acto
bien
pudiera
caer
bajo
ac-
la
ción de la justicia corrficcional o criminal y concita al desorden y
represalias,
público
obispo al
todo
lo
situacioines
y
permitir
cual
puede traer alteraciones del orden
violentas
de
las
que será responsable
como permite que su propio hermano
el
el
cura
la Catedral patrocine y aliente las exageraciones de ese orador sagrado «poseído de verdadera furia sectaria».
ü
En ción
su el
nota
al
Fiscal
del
Crimen llamaba también
Ministro Cuestas acerca de los sermones de
«pronunciados
que concurren cristiana
y
no
—
—
la
la
aten-
Catedral,
con escándalo de las familias honestas templo a oir palabras de enseñanza moral y exageraciones que conducen a extravíos lamen-
al
decía
Anales de
5p8
Concluía su nota manifestando que en
tables».
blaría el
propaganda
esa
tirse
Universidad
la
el
acción correspondiente con arreglo
la
proceso criminal a que diera lugar
No
ley
la
iniciando
acto».
el
doctor Soler. Del pulpito de la Cate-
el
Pero
propaganda.
su
a
de repe-
Fiscal «enta-
el
de la Iglesia del Condón con
piilpito
continuar
de
por eso
se contuvo
dral pasó al
caso
el
Gobierno esperaba que
el
que
Gobierno,
el
propósito
estaba
deci-
dido a llevar adelante sus decisiones, pasó una nueva nota a la
que luego de referirse a lois ataques que el orador dirigáa «a la sociedad, a la moral y al bonor de las familias, infiriendo a la vez injurias a la autoridad pública de que dependía y concitando con ello a la anarquía», terminaba con la preAcnción de que se había dado iustruociones a la Policía para Curia en
que en :o
la
Ya
la
que
y
la
dirigió
una nota
que había ordenado a
eíxipresaba
orador y
de matrimonio civil no podía
le^y
obispo Yéregui
el
al
Cárcel para ser sometido a la justicia.
la
propaganda contra
continuar la
de repetirse los avances arrestara
caso
el
condujera a
los
Gobierno en
al
sacerdotes que cesa-
ran en su prédica mientras la Iglesia no recobrara sus derechos. la vez suspendió el obispo Yéregui los sermones de Semana
A
Santa que coincidíaii con la fe'ciha de su nota. Otro incidente de resonanicia promovió la acatar
dispuso
i8'8 5
rior
y
matrimonio
de
ley
la
el
Gobierno que
Curia pasara
la
Iglesia
A
obligatorio.
civil
antes
de
mediados de
Tribunal Supe-
ai
de Justicia todos los expedientes en trámite sobre divorcio
nulidad
matrimonio, de
de
que hacía cesar
la
acuerdo
jurisdicción
La Curia no dio cumplimiento directamente
entonces
los
con
eclesiástica
decreto y
al
disposición
la
legal
en esos expedientes. el
Tribunal reclamó
y como tampoco fuera advertencia de que en caso de
expedientes,
atendido reiteró su nota con
la
las medidas necesarias. El coninminente y ante la gravedad de las medidas anunciadas se decidió la Curia a entregar los expedientes en trámite,
incumplimiento flicto
se
adoptarían
era
no sin una protesta en
la
que expresaha que esa entrega estaba
en pugna «con la doctrina dogmática de tenida el
cual:
tenecen
en
«Si a
rugna con la
religión
canon
el
alguien
los la
12,
sesión
dijese
tribunales
era
del
la
de
Católica con-
Iglesia
Trento
según
causas matrimoniales no per-
las
la
la
Concilio de
eclesiásticos
Constitución
católica
que
24
sea
excomulgado»,
y en
República que establecía que
religión
del
Estado.
El
matrimonio
Anales de
— agregaba —
üniverHidad
-a
un sacramento
es
quien
sólo
y
559
facultad
tiene
para administrarlo puede juzgar y resolver acerca de su validez nulidad.
o
La
ley de conventos.
Juntamente con presentó
gatorio
proyecto
el
Poder
el
de ley de
Eijecutivo
a
matrimonio civil obliAsamblea otro pro-
la
yecto de ley por el que se prohibía en lo sucesivo la fundación conventos,
de
de ejercicios
casas
contemplativa
disciplinaria,
o
miento de las que ya existían en
Dos meses antes habfa dictado por
el
que
la
que
funciona-
el
país.
el
el
a la vida
destinadas
reglamentaba
Poder Ejecutivo un decreto
fundación de nuevos conventos hasta Asamblea se ocupara del asunto. prohibía
se
la
Al proceder así invocaba constitucionales
u otras se
y
sociedad
y
—
Poder Ejecutivo
el
sobre
legales
el
decía en su mensaje a la
mente alarmada por
la
invasión
disposiciones
las
patronato.
de
Asamblea
fundaciones
—
•"
justa-
religiosas
sin
autoridad pública, sin control y sin reglamentos claros y precisos al alcance de las familias que han visto un d'ía y otro día desviarse del hogar a jóvenes casi niñas que
permiso previo de
hacían
felicidad
su
mandad, cofradía y de
la
la
buscando ciegamente
o la celda* del
ol
confesonario,
her-
la
convento y separándose de ellas impone solemnemente el ;um-
—
sociedad para siemipre
plimiento de deberes previstos por las leyes».
muy
lEstaba
caldeado
el
ambiente en esos momentos por
to del ingreso a los coraventos
potestad
y
reclamadas
proyecto del Poder
por
de varias
sus
padres
niña!.;
ante
efec-
sujatari a la patria
la
justicia
civil.
El
Ejecutivo marchó por eso rápidamente en las
Cámaras.
La ley de clarar sin eios
surgida de esa iniciativa, empezaba por detodos los conventos, casas de ejercr-
o cuales'juiera otras de religión destinadas a la vida contem-
plativa o
por
18'8i5,
existencia legal
el
di.sciplinaria
cuya creación no hubiera sido autorizada ejerícicio del patronato nacional; y
Poder Eijecutivo en
agregaba:
Los votos monásticos producen infectos civiles.
o
eclesiásticos
de
cualquier
Los conventos actuales en
género
no
caso
de
el
Anales de
ñ6u
la
Universidad
ccntinuar funcionandü no podrán aumentar dos ni admitir otros
como novicios
o
el
número de
asila-
profesos. Las casas de re-
ligiosos como hermanas de caridad, benedictinos, etc., xío podrán transformarse en conventos, 'y a ese efecto no se admitirá en indispensable para atender ellas sino el número estrictamente las
escuelas
blecimientos
o
en
establecimientos
religiosos
que
Todos
sirven.
bajo la
queldan
dejpendencia
esta-
los
del
Poder
Ejecutivo en cuanto atañe a higiene y orden público. En caso de infracción a la ley o resistencia a su cumplimiento, podrá el
Poder Ejecutivo clausurar los conventos. Al reglamentar la ley dispuso el Poder Ejecutivo que
la
Junta
Económico - Administrativa de ¡a Capital practicaría una inspeC' ción mensual en los conventos, en la que tomaría nota de tO' das las personas que hubiere en ellos con indicación de nombre l edad.
A
todas esas personas se les acordaba
el
derecho de recobrar
su libertad. Las novicias menores de edad serían devueltas a suí
Los castigos o penas corporales quedaban prohibidos. La Económico - Administrativa formularía y haría cumplir la ordenanza higiénica a que deban someterse los conventos. Y dispuso también que ia Dirección de Instrucción Pública practicafamilias.
Junta
ría
la
inspección
Todas gieron en
las el
tanto la ley
de
los
superioras
escolares
esta'blecimientO'S
de
los
conventos
religiosos.
monasterios
o
sie
diri-
acto a la Curia en son de protesta, declarando que
como
el
reglamento eran
viola-turios
de las leyes divi-
nas y humanas, como ya lo había dicho el Obispo mismo ante la Cámara de Diputados al iniciarse la discusión del proyecto.
Parecían
inminentes los
conílictos.
Pero
ante
la
actitud
re-
suelta de las autoridades gubernativas las inspecciones se reali-
zaron
tranquila
pecie,
salvo en
y serenamente, el
sin
resistencias
de
ninguna
es-
Asilo «Buen Pastor».
La Superiora
del «Buen Pastor» se negó a permitir la entrada Comisión Delegada de la Junta Económico - Administrativa encargada de la inspección. Hubo necesidad de allanar la casa
de
j'
la
abrir a viva fuerza las puertas y decretar
sura del edificio de acuerdo con
la
ley de
el desalojo y clauconventos. Al entrar
Comisión Inspectora para tomar posesión del establecimiento, once monjas y las treinta y nueve asiladas que allí' había se encerraron en dos piezas interiores y de ellas salieron con la
las
las
caras cubiertas sin querer oir la lectura de la ley cuyo cum-
plimiento se hacía efectivo en ese momento. Las monjas se
reti-
Anales de
raron en
mente
En
y
las
asiladas
Universidad
561
fueron conducidas pi'ovisional-
un departamento del Asilo de Mendigos.
a
patio del Monasterio había tres sepulcros. El Ministerio
el
indagó
acto
el
la
defunciones habían sido inscriptas en
las
si
el
Registro
y resultó que s,í. Los cadáveres fueron en el exhumados y conducidos al Cementerio. Vale la pena de
de ®3tado acto
Civil,
agregar que en setiembre del mismo año fué enterrado en el Cementerio el cadáver de la p-imera monja muerta después de la
pro'mulgación de
la
Ley de Conventos.
Pocas horas desipués de
barcaban
las
la
clausura del establecimiento se em-
monjas con rumbo a Buenos
Aires.
«La conciencia,
la dignidad personal y las reglas de su piadoso y caritativo insles decía el obispo Yéregui al despedirlas no permitituto
—
—
un sometimiento cual era el que requería el decreto reglamentario de la Ley de Conventos». Pero regresaron a mediados de 18 86 a mérito de una autorización concedida por el Presidente Vidal durante el corto tiempo que separa las dos admir.lstracioneis del general Santos. La autorización consistía en una tían
tarjeta del Presidente al obispo Yéregui
manas
que decía
así:
«Las her-
«Buen Pastor» pueden venir a Montevideo, que todo re arreglará del modo más conveniente». Vuelto él general Santos al gobierno se fijó a la Curia un plazo de cinco días para del
recabar sura
permiso reglamentario bajo apercibimiento
el
del
Monasterio.
La Superiora
solicitó
el
de clau-
permiso
dentro
de ese plazo y entonces el Poder Ejecutivo se dirigió a la Asamblea en demanda de una ley de reapertura que en el acto fué votada.
La
liiga
Libei-al
adhiere » las Leyes de Matrimonio Civil y de
Conventos.
La Liga Liberal fundada a mediados de 1884 por los doctores Juan Faullier y Manuel B. Otero como resultado de la intensa propaganda liberal realizada desde la tribuna del Ateneo, publicó su programa de principios en los mismos momentos en que el gobierno de Santos gestionaba ante la Asamblea las leyes de Matrimonio
Civil
obligatorio y de Conventos.
La soberanía de
—
—
decía en ese documento es la Nación esencialmente independiente de todo poder religioso. Las decla-
raciones
T.
del
Sifllrihiiü
VII -36.
han hecho
imposible toda
conciliación
en-
Anales de
562
tre
la
mo
y
Universidad
la
romana que anatematiza
Iglesia
progreso,
el
el
liberalis-
moderna, y la Nación Uruguaya cuya carta fundamental consagra la so^beranía del Estado y la libertad individual... Las congregaciones religiosas deben estar sujetas a
la
civilización
la
común.
le[y
La autoridad pública puede penetrar en los La dirección de ¡os estableicimientos de beneficen-
conventos...
.
.
debe ser
cia pública
laica.
primeros
Gorridos los
Comisión Directiva de sión
a
en esos momentos
lElstabaTi
la
Batlle
Oirdóñez
y
el
fesar
y
ellos
se
—
los
Razón»
se.ñores Teófilo
declararon
en
absoluta
—
el
ba-
Gil y José
oposición
Liga Liberal. «Sin embargo de prolas doctrinas fundamentales del liberalismo,
—
decían
la
que empezaba a ocuparse
frente de «La
al
oposición política
proyectado mitin de
—
resolvió
de Diputados.
luarte de
con
organización
de
proyectos gubernativos de
lo'S
Cámara
la
trámites
Liga realizar un acto público de adJie-
la
la
creemos de nuestro deber abstenernos de tomar participación en mitin que
el
directa blicos
o
v>a a celebrarse y en toda manifestación pública que indirectamente concurra a prestigiar los Poderes Pú-
existentes».
La Liga Liberal
reunió,
Circo «18 de Julio» y discurso
de
en
primer
el
Guttenberg, las
sin el
prolijas
y
copias
establecimiento
que
hermanas
embargo,
sus
a
adherentes
en
el
doctor Manuel B. Otero pronunció un
que se refirió a los monjes benedictinos, autores
el
correctas
allí
de
ellos
la
de
libros,
tipográ|fico
horas cada día postradas sobre
habían destruido del invento de
como obra
del demonio; a permanecían doce dura piedra vestidas de gruesa
consideraban
Perpetua
que
surgido
Adoración que la
verano y de delgada tela en el invierno; y a los cartujos que sólo podían hablar para recordar a sus hermanos que
lana en
el
habían de morir.
Terminados la
los
discursos la Asamblea votó una declaración por
que adhería a los proyectos de leyes de Matrimonio Civil y
Conventos y resolvió realizar un desfile por
las
calles
para
-le
vito-
rear a los diarios liberales.
Se restablece la disposición que prohibe a los párrocos administrar el bautismo antes de la inscripción civil.
Desde 1880 regía una
ley
dictada durante la administración Vi-
Anales de
¿al
que autorizaba a
sin
la
para administrar
párrocos
los
ótí8
el
ley,
decreto - ley del año anterior. reclamada insistentemente por
Y como consecuencia ios
cual había reaccionado
el
bautismo sin a
previa presentación del certificado
la
de
partir
misión
de
—
reforma
modificación de
la
de
Liegislación
«nuestra
Juz-
el
inscripción correspondiente.
la
allí
la
de 1879
ley
—
decía la Co-
Cámara de Diputados fundando
la
el
y acorió
civil
padres omisos un año de plazo para concurrir ante
los
gado de Paz y realizar
A
régimen con-
el
gobierno de Latorre.
el
de 1886 prohibió de nuevo a los párrocos administrar
ley
L
-le
había que^
clericales,
dado de hecho restablecido para muchas personas tra
bautismo
el
previa presentación del certificado de inscrip<;ión civil que
exigía
esa
Universidad
la
estadística
acusa
disminución
en
la
naci-
los
mientos en una cifra considerable, en medio de causas que debían
aumentarla como gados der
mayor número de matrimonios
el
párrocos de exigir
los
administrar
y
goce per-
el
de la salud. Todo induce a creer que desobli-
de la paz y
fecto
el
certificado
el
bautismo,
los
padres
de inscripción para podel
descuidm
bautizado
menosprecian su deber, inclinándose a seguir la costumbre antes que los preceptos legales, cuyas consecuencias desconocen
o
por
quizá
En
Registro El
mismos días apareció Estado Civil
de
de 7'
Memoria de al
la
Dirección
ejercicio
1885
-
d<3l
188o.
Paz de su Departamento era opinión general q\xe un nacimientos dejaba de anotarse porque los padrea
de los
juzgaban que era suficiente con era
la
correspondiente
Inspector de San José decía en su informe que entre los Jue-
ces 10
completo».
esos
compartida por
ración
en
ello
se
los
demás
de
mentos de
República:
los
.
1880
Y
misma opinión
que no había exage-
resumen
de estado íivil de todos los Departa-
libros
^ 1879
bautismo. E!sa
encargó de probarlo este concluyente
recapitulativo la
el
Inspectores.
j5 '^
,-,
" (j^
NaciniieDios inscriptos
23,895 .
23,846
1881
20,399
1882
21,714
1883
22,147
1884
21.781
Anales de
564
Universidad
la
descenso habia ¿ido notable a pesar del crecimiento no inte-
El
rrumpido de
la
alcanzaba
18
al
población
aumento de
del
y
los
matrimonios que
%.
Pero apenas restablecida
prohibición derogada en 1880 volvió
la
Registro de Estado Civil a recuperar la importancia que había
el
perdido bajo
doble
!a
estimulado por
los
presión
de
En
párrocos.
la
1886
ignorancia
del
y
número de
el
fanatismo
asientos subió
a 24,712 y en 1887 subió todavía a 25,132.
Es interesante agregar que nuestra gran reforma de 1879 alcanzó
cién
a repercutir
pués.
Fué efectivamente
pidió
al
Congreso
otro
del
lado
en 1882 cuando
establecimiento
el
del el
Plata
Gobierno
Argentino
que ya estaba
Plegistro
del
re-
años des-
tres
incorporado a nuestra legislación.
La
erección del obispado.
Al instalarse
el
obispado en 1882 ig,tentó la Curia
gran parte sin efecto
jar en
titución
el
Romana
Patronato establecido por
de-
la
Cons-
el
nom-
de la República.
Las bulas pontificias conferían bramiento
de
vicario
sin
al
Cabildo Eclesiástico
alguna del
intervención
Patrono;
al
clñspo la provisión de todas las demás dignidades y beneficios; a
Curia
la
co£,
Romana
la
organización de los
Tribunales
todo ello sin intervención de la autoridad
c'vil.
Esa invasión de atribuciones fué señalada por Civil.
Pero
—
perjuicio
obtener
el
Tribunal Pleno autorizó
decía en su decreto
—
el
pase
y
Eclesiá.sti-
Fiscal
el
de
las
de lo
bulas
sin
de los recursos necesarios para
reforma o aclaración de las cláusulas pertinentes. Y ello el gobierno de Santos concedió el pase advir-
la
acuerdo con
d"
tiendo a la Curia que
el Poder Ejecutivo se reservaba incólume su derecho en materia de nombramiento de vicario y dignidades eclesiásticas y organización de tribunales. El obispo Yéregui aceptó
decreto que contenía esa advertencia y sólo después de su acep-
e!
tación del
es
que
el
Gobierno
le
señaló audiencia para la prestación
juramento.
Al asumir
el
obispado dijo
lo
siguiente
el
señor Yéregui:
«Juro y prometo por los Santos Evangelios obediencia y fidelidad al Gobierno de la República e igualmente prometo no coadyu-
var a ninguna propuesta, persona o conseje que sea nocivo a la e independencia de la República».
tianquilidad
La toma de posesión
del
obispado fué solemnizada
con
el
des-
Anales de
un Tedeum en
La
frente
línea
a
Casa de Gobierno y
la
la Catedral al que asistió el Presidente Santos,
La enseñanza de
religión en las escuelas.
la
reanudó en 1883 su intensa campaña contra
Iglesia
En una
vareliana.
cuela
de
batallones
dos
de
file
óG5
Universidad
la
señoras de toda
representación
República se clamaba contra
la
lismo denominaba
lo
la
millares
por
suscrita
que
el
'es-
crerica-
«Escuela sin Dios».
Dirección de Instrucción Pública a cuyo frente se encontraba
La
en esos momentos el doctor Jorge H. Ballesteros demostró que de acuerdo con la ley de Educación Común se enseñaba religión a todos los niños, con exceipción de aquellos cuyos padres o tuto-
negaban a que la recibieran, y anunció también, para coajvirar la tormenta que parecía amenazadora, que el horario escosería alterado a fin de que la religión tuviera 20 minutos lar
res
se
No era eso. sin en%argo, lo que ansiaba el clericalismo, propaganda religiosa hecha por ios maestres y la segi-egación de todas aquellas asignaturas que habían contribuido a despertar los poderes mentales del niño y a transformar tan radicalmente la fisonomía de las escuelas públicas. Pero la reforma
diarios.
sino
la
de José Pedro Várela estaba ya
que contentarse con ción
del
cura
arraigada y la Iglesia tuvo tiempo destiniado a la repeti-
para
no
Iglesia.
la
de
párroco
menterio de esa otra
muy del
Catecismo.
Los cementerios y El
aumento
el
Maldonado resolvió en 1885 dividir el Ceen dos secciones: una para católicos y
ciudad
católicos.
La MunicipaTidad
protestó
naturalmente
Poder Ejecutivo para su redictamen del Fiscal de lo el con acuerdo solución definitiva. De Civil declaró entonces el Gobierno que los cementerios no ea-an contra ello y envió
el
religiosos sino civiles;
tendía;
que
los
sus
solicitaran
individuales
de
la
podían intervenir
sólo
oficios;
y
que
en
los
los
al
que era inadmisible
curas
episcopales
bendiciones
expediente
sepulcros
en
cuando no
adelante
cementerios y
cuyos
división que se pre-
dueños
sí
los
podrían solo
deudos hacerse
bendiciones
gestionaran
oficios
religiosos.
En
ese
mismo año hubo una contienda
de la ciudad de Minas y los
entre
el
cura párroco
deudos de una persona fallecida y
Anales de la universidad
566
enterrada en Migues. El cura de Minas reclamaba los derechos de sepultura
—
ascendían a 30 pesos)
(ique
—
por tratarse
decía
de una familia avecindada en su parroquia. La Curia dio
razón
que
párroco reclamante con
al
el
la
la
advertencia sin embargo de
reclamo en vez de interponerse contra
deudos debía
Iok
dirigirse contra el cura de Migues, que era quien había percibilos derechos de sepultura. Pero el Gobierno, tomando cartas en el asunto, resolvió previa vista fiscal desestimar el reclamo, declarando que dado el carácter laico y absolutamente municipal
do
do los cementerios, era un verdadero abuso
de sepultura por
—
Los curas
el
cobro de derechos
—
agregaba el decreto no deben ni pueden exigir otros derechos parroquiales que loíi correspondientes a los oficios u honores voluntariamentes solicitados por los deudos. Iglesia.
la
^
£1 homenaje fúnebre a Graribaldi.
Hemos
licho ya
que en
el
programa de honores
memoria
a la
del general Garibaldi decretado por el gobierno de Santos, figu-
raba un funeral en to de las
la
resistencias
Catedral que hubo que suprimir por efecde la Iglesia.
Fundando su negativa
decía
la
Curia que
general Garibakíi
el
sus actos políticos y sus repetidas manifestaciones por es-
crito
no pertenecía
al
número do
los
fieles
de la Iglesia».
Al dejar sin efecto ese número del programa resolvió
no dirigirse sión
a la Curia
obispado,
del
Romana
suspendiendo
entretanto
auxilio
el
con que contribuía a las ceremonias del Corpus
año quedaron circunscriptas por efecto de en
el
En entre
ello
a
Gobierla
deci-
pecuniario
que ese una procesión
Cristi,
interior de la Iglesia.
El pueblo y
Iglesia
el
en son de protesta contra
la Policía
en
el interior
de los templos.
1885, durante las ceremonias de la de el
la
Unión,
ocurrió
un
incidente
Semana Santa en la mucha resonancia
de
cura don Ricardo Isasa y algunos jóvenes que se enconel interior del templo. El cura exigió a esos jóvenes
traban en
que
se arrodillaran
cial
de Policía para que hiciera efectiva su intimación o en su
y no habiéndolo conseguido se dirigió
defecto expulsara a los omisos. Pero tampoco
el
al Ofi-
Oficial de Poli-
Anales de
cía
encontró atendible
ñ67
universidad
'a
exigencia invocando la actitud circuns-
la
pecta de los jóvenes sobre quienes se pretendía ejercer esa presión,
dio
y entonces se produjo un violento cambio de palabras que momentáneo arresto del señor Isasa. El Gobierno
lugar al
aprobó
la
conducta de su subalterno y desestimó los reclamos juzgando sin duda que dentro del escenario de un
del obispado,
acto público puede y debe exigirse circunspección de conducta, pero no sometimiento a dogmas o prácticas determinadas.
Casa de los
lia
Ejei'cicios.
La Curia intentó reivindicar en 1885
la
Casa o Iglesia de
los
Ejercicios de la calle Sarandí esquina Maciel ocupada a la sazón
por la Facultad de Medicina.
que
Adviértase en
que
el
desde
la
había
edificio
época
sido
de
la
destinado
Defensa
de
Montevideo
exclusivamente
a
aloja-
miento de familias pobres y al Instituto de Instrucción Pública, no se realizaban allí ejercicios et pirituales. El Gobierno se limitó a contestar que existía un litigio pendiente sobre mejor derecho cuya decisión había que aguardar, y que por otra parte la Cui-ia carecía de personería por tratarse
do una finca que cía
Compañía de transacción la
La
el
de Zúñiga en
testamento otorgado por don Francisco Gar»
1803 destinaba expresamente a
la
extinguida
Jesús. Pocos meses después el Estado adquiría por
esa
finca,
reclamación de
la
poniendo con
ello
término
al
y a
litigio
Curia.
Mixsoiiería inscribe sus Estatutos.
El Gobierno aprobó en 1882 los Estatutos de la Masonería Uruguaya. Era la primera vez que esa institución levantaba una parte del velo que la separaba de nuestro público. decían los Estatutos aproba«La Masonería del Uruguay dos es una institución filosófica, progresista, civilizadora y asociación de hombres honrados, filantrópica formada por la libres, independientes, observadores de la Constitución y de las
—
—
leyes del país, unidos en familia por los vínculos de la fraterni-
Su principio es la creencia en un Gran Arquitecto del Universo; su base
dad...
Dios, la
Ser
libertad
Supremo civil
y
y
de
Anales de
568
¡a
universidad
conciencia; su objeto conocer, profesar y propagar la verdad en
todas sus manifestaciones; práctica
el
estudio de la moral universal y la
de todas las virtudes;
el
ejercicio
de
la
caridad,
edu-
cando y enseñando al que no sabe, socorriendo sin humillación al enfermo pobre, al impedido de trabajar, a los huérfanos des-
amparados y a
las
viudas
dignas de respeto; sus fines
desgraciadas el
amor a
para que la
se
conserven
humanidad y su
feccionamiento moral y progreso material, combatiendo los vicios y las imperfecciones; sus preceptos la honradez, tración, el trabajo, el libertad,
respeto y consideralción mutuos;
igualdad, fraternidad.»
FIX DEL TOMO VII
el
per-
mal,
la ilus-
su lema
índice
índice del
TOxAÍO vil
—
Administración del coronel Lorenzo LatoiTC.
1876
-
1880 Págs.
CAPITULO
MoviMiEMo
1.
i-oi.ítko
El coronel Latorre asume
—
—
e sos
—
dictadura, 11
versos
Latorre,
a
Amenaza contra Fracasan
prorroga naturalmente
la
Por
la
misma causa fracasan
los
y triunfan de nuevo de
rroga
la
dictadura,
época de Latorre, 19
Una pretendida
—
de
nes
la
—
—
de
Río de
el
dineros
los
formula
tivo
tador
Plata, 27
la
públicos,
el
lo rechaza,
¿Emanaban
28
de
—
— —
Contra
mando
en
el
Presidente del
Latorre expuesta por 34
esa
—
mismo
él
35
—
en Presidente constitucional, 36 el
país
es
—
ingobernable y
extendía ladrones
y
el
1878,
31
dic-
—
La nueva
dictador resigna
el
La obra de
y por sus Ministros,
dictador
al
— Latorre
renuncia
en
transformado
dictador
El
críme-
se
—
Senado.
Demostraciones que se hacen
oportunidad,
aten-
)s
los
electoral
Los comicios de
Legislatura entra en ejercicio y
1
los
Consejo Consul-
El
El aml)iente político era de fusión, 33
el
la
revolución?, 26
violencia
proyecto de ley 3O.
15
de
Los crímenes de
de temores
El oleaje de sangre y de
a todo
.
comicios
repercusión benéfica de
dictadura
de
dictadura,
El Taller de Adoquines, 22
tados de la dictadura, 23
—
ad-
comicios
partidarios de la pró-
los
16
diarios
los
los
se
•1877
—
—
13
y
1876
—
10 de mar-
el
Impresión de optimismo que pág. 7 documentos produjeron, 10 La prórroga de
zo de 1876,
la
7
dictadura
la
la
declara que Presidencia,
—
37 ¿A qué podía atribuií-se la renuncia?. 39 La adhesión del ejército de línea, 41. La prensa de oposición, crisis
se
42.
El
soluciona
desequilibrio sin
financiero,
sacudidas.
47.
46.
i^a
^ * (^^^m'Cf^
Anales de
572
CAPITULO
Movimiento
II.
Universidad
la
48
jíco.xóíiico
Cálculo de la población existente en
vimiento
—
53
vegetativo,
Los esclavos
—
54
terior,
—
El comercio ex-
productos
de
nuestra
—
ley
55
—
—
amonedado, 59
Comercio
59
interior,
Contra
ventas de mercaderías.
— —
Fundación de pueblos,
del Brasil, 53
Principales
Mo-
ex-
Las importaciones. Resultados de proteccionista del año 1875, 57 Metálico
portación, la
—
49.
—
48
1879,
—
Sobre
mercachifles,
los
60
—
Los ramos patentados, 61 La Nuestro comercio con Francia e Italia, 63 crisis de 1879, 64 El puerto de Montevideo y los Ferias francas,
60
—
—
demás puertos de puerto,
—
67
la República,
—
los vapores, 69
en
—
El dique del Cerro, 70
—
—
Río de
el
Ferrocarriles,
la
Plata,
tranvías,
La propiedad de
—
75
—
76
La industria 79
fica,
—
78
teléfonos.
—
74
Telé-
—
—
La
Las carnes cocidas,
El
teléfono
Industria gana-
El cerramiento de los saladeril,
y
correspondencia telegrá-
—
dera,
El prac-
Temporales, 71
Tranvías,
El telégrafo policial,
74
el
—
70
fonógrafo en Montevideo, 76
fica,
y
la
NaufraLos privilegios de
—
telégrafos
—
Progresos ferroviarios, 71 grafos.
Limpieza del 68
gios en las costas del Este, 68
ticaje
—
65
El impuesto de faros,
campos, 77
industria
82
—
—
frigorí-
Corrales de
Abaste y Tablada. Carne consumida por la población de Montevideo, 82 La matanza de vacas, 82 Mortandades de ganado en 1877, 1878 y 1879, 83
—
— —
Marcas y señales, 85
—
—
La caza de avestruces en
La
Agricultura.
Tentativa para
organizar la enseñanza
agronómica,
86
estancias, 86
las
tica rios la
tierra,
91
89
•
Colonización de la campaña, 92
de irrigación, 93 piedra,
oro,
molinera,
94
campo de
la
cobre
—
— y
agrícolas,
92
—
—
Obras
Diversas industrias. Carbón de
mármol,
Varios
93
—
industriales
producción nacional, 95
de montes naturales, 97
—
Estadís-
—
—
Estado de algunos centros
97
—
—
La producción agrícola de vadepartamentos, 90 La manera de trabajar
agrícola,
—
La
industria
ensanchan
—
el
Explotación
Las aguas del río Negro, Premios internacionales, 98 Marcas de fá-
—
— Anales de
la
573
Universidad
Pág3.
Asociaciones
99
—
—
pública, 100
— —
102
La Liga
obreras,
comercio,
brica y
100
98
—
Industrial,
de
Cálculo
Reparto de
—
98
riqueza
la
propiedad territorial, Bancos y monedas,
la
—
Tierras públicas, 101
extin-
La emisión de curso forzoso de 1875
—
El régimen metálico del guida por el fuego, 102 de la Tabla de EquivaRevisión Uruguay, 106 plata. Extinción del de Acuñación 106 lencias,
—
107
cobre,
CAPITULO
109
.\dmixistkativo
Movimiento
III.
—
Los ingresos
Ingresos y egresos del año 1876, 109 Los ingresos de 1878, 113 de 1877, 191
—
—
hace
Latorre
nel
de
balance
el
El corofinan-
gestión
su
ciera al pasar de la dictadura a la presidencia, 116 La crisis financiera de 1879. Medidas extraordi-
—
narias a que recurre Latorre para conjurarla, 117 El descenso rentístico del último año de la ad-
—
directa,
—
impuesto de Aduana,
El
taria.
123
Latorre,
ministración
—
128
papel
Patentes,
tribu-
Legislación 12.5
—
Contribución y timbres,
sellado
—
—
Creación y supresión de impuestos. 129 El serviEl Presupuesto General de Gastos, 130 deuda la de Monto pública, 133 cio de la deuda 129
—
—
pública,
—
138
137—Tipos
Los derechos a ubicar tierras
el
Con
internacionales:
Relaciones
Con
de amortización de
Brasil,
141.
Con
el
la
las
Várela inicia
139
Argentina,
139.
Con
Gran
Perú, 141.
—
Bretaña, 142.
deudas,
fiscales,
la
La enseñanza primaria: José Pedro La Ley su gran obra escolar, 143
—
de Educación Común, 146 ,
—
En
los
comienzos de
—
La población de las esreforma escolar, 149 El públicas al empezar la reforma, 150 Las distribución de premios horario escolar, 152 la
—
cuelas
—
—
en 1876, 153
Una nota de Sarmiento,
156
—
La
departamentos de camobra de la El Congreso de Inspectores Departapaña, 156 Los Concursos escolares en 1879, mentales, 158 159 Una de las maestras que se destacaban en reforma en
los
—
—
—
los
comienzos de
mixtas, 163
—
la
reforma. 162
—
Las escuelas
«La Enciclopedia de EMuoación», 163
Anales de
574
Universidad
¡a
Págs.
—
Creación de rentas escolares,
escuelas y de alumnos, 165
—
za cívica, 167
privadas,
—
—
167
cuelas,
167
—
164
Un
idioma
El
texto de enseñan-
—
Várela, 173
la
las
ejemplarizadoras,
Destituciones
—
—
172
es-
en las escuelas
nacional
Luchas sostenidas por José Pedro Várela, 169
María Ramírez,
—
Número de
La agricultura práctica en
La obra de Várela glorificada por
lar,
—
.168
—
doctor Carlos
el
La muerte de José Pedro
El sucesor de José Pedro Várela, 179
La Sociedad de Amigos de la Educación PopuLa enseñanza universitaria. Se declara 180 En la Facultad de libertad de estudios, 180
—
—
Medicina,
—
182
En
Facultad
la
—
Otras carreras liberales, 183
la
enseñanza universitaria en
Derecho,
de
—
centros
los
182
Organización de socie-
y
—
La Escuela de Artes y Conmemorando las glorias nacionaOficios, 187 les. 187 Un debate histórico en torno del monuHonrando a los extranmento de la Florida, 189 dades
184
estudiantiles,
—
—
—
jeros
de
—
191
lectura,
Conflictos
192
—
191
ilustres,
populares y
Bibliotecas
La administración de
—
con la dictadura, 193
—
gación de códigos y leyes, 195
—
salas
justicia,
Promul-
Registros de em-
Nombramiento de Juebargos y de ventas, 196 ces Letrados Departamentales en reemplazo de los Ordinarios,
Alcaldes
nal acerca
—
198
ticia,
—
—
197
202
zación
lles
ca.
—
justicia
El
Tribu-
204
—
públicos, 205
Medidas contra maestros,
Hospitales
La
206
—
Plazas,
y
Maternales, 211
208
la
—
Asilos,
—
200
—
penal vol-
servicio
Intereses municipales.
Montevideo,
de
La
—
201
de
Co-
descentrali-
avenidas
y
La iluminación de las caAguas Corrientes, 206
—
—
Los ingresos municipales. 207
caños
—
—
fueros,
administrativa,
edificios
—
sus
Penintenciaría,
la
Estadística de presos, 201
rreos,
del
Causas criminales de resonancia, 199
La construcción de
viendo por
Un informe
estado de la administración de jus-
del
Casa?;
210
Higiene públi-
—
Los
inquilinato,
210
amarilla,
fiebre
•
—
de
208
Creación
de
Asilos
Las damas de beneficencia, 212
Anales de
575
universidad
la
Págs.
—
Servicio médico de
urgencia,
—
de socorros mutuos, 213
—
Un ensayo
cial
213
Sociedades
El servicio policial, 214
de policía rural, 214
—El
servicio poli-
en Montevideo. Diversas ordenanzas y notas de
—
época, 216
la
—
El ejército de línea,
rando la memoria
de
—
217
—
218
proceres,
los
—
táculos públicos. Las corridas de toros, 219^ Pit,
—
219
cuestión rre.
—
220
atléticos,
Erección
222
Iglesia,
Teatros
religiosa del
ambiente
El
—
Las carreras de caballos, 220 la
obispado
de
—
220
dictadura
Rat-
Juegos
de
Montevideo,
La
Lato-
221
—
de la época era propicio a la
oficial
—
conciertos,
y
durante
Hon-
Espec-
muy
Pero era
—
general del país, 223
La
distinto
ley
ambiente
el
de Registro de
EJs-
tado Civil, 225.
Administración del íloctor Francisco Antonino Vidal.
— 1880-
1882.
CAPITULO
Movimiento
IV.
POLÍnco
231
El doctor Francisco Antonino Vidal es nombrado Pre de
sidente
la
dictadura, 232
—
231
En
los
República^
—
Al
231
elogio
comienzos de
—
El
la
de la
elogio
sucede
el
anatema,
administración Vi-
—
Anhelos de mejoramiento institucional. 233 Una circular confirmatoria del programa del mo-
dal.
tín,
tera del
234
—
Gobierno ante
rrista,
—
2i35
Santos y tos,
El coronel Latorre se dirige a la fron-
—
con propósitos revolucionarios, 234
23'8
Una
tentativa de conciliación
236
Latorre,
—
Actitud
amenazas de invasión
las
—
lato-
eiitre
La prepotencia de San-
Pequeños movimientos
revolucionarios
—
Asesinatos y matanzas del Paso Hondo, 240 La desaparición de Sánchez CabaEl amasesinato de Sarrasina, 244 llero y el
que estallan en este desapariciones,
240
período.
—
Las
250
—
239
—
—
biente de la época,
Otros
casos
nales. El de la barca «Pensiero», 250
—
internacio-
Comentarios
agresivos de un empleado del Consulado .Argentino. 251
—
Las
islas
de Gorriti y San Gabriel. 262
—
Anales de
576
universidad
la
Págs.
Contra
propaganda
la
anexionista,
—
253
Sobre
captura de desertores y malhechores de la marine-
—
255
consular,
—
254
extranjera,
ría
Límites a la
—
tados de comercio, 255 des de
nizan
—
los
tra-
Organización de socieda-
Los orientales emigrados orgatiro, 256 un centro cultural en Buenos Aires, 256
Los comicios El
—
de
parciales
—
de 1881, 258
electoral
—
intervención
Normas económicas para
Partido
Constitucional,
—
para su obra de cos,
266
—
de
los
partidos
267
1880,
La lucha
El Partido Colorado, 258
El
—
260
Nacionalista,
261
—
oficialismo
sofisticación de
Partido
El
elector
pre-
los registros cívi-
Las inscripciones fraudulentas. Protestas populares, 267 Apaleamientos y empastelamiento de imprentas, 271
policiaJes
—
Nuevas pro+estas de abstención
273
electoral,
—
—
La
de oposición.
partidos
los
Proclamación
de
la
candidatura presidencial del Ministro de la Guerra, 278
—
La libertad de
doctor
Vidal.
prensa bajo el gobierno del Las mazorcadas del 20 de
la
—
279
—
mayo, 281 Después de empasteladas las imprenol Poder Ejecutivo amordaza a la prensa, 285 Después de suprimida la mordaza procura el Gobierno ahogar a la prensa mediante el concurso de la Asamblea, 287 Continúan los atentados
tas
—
—
después de las mazorcadas de mayo, 289 nización de un jurado de honor para conflictos de la ¡prensa, tos del
CAPITULO
V.
290
—
Poder Ejecutivo con
Moví:^! TEXTO
el
Población de la República, 297 297
gráfico,
rior,
299
rior,
300
esos
— — —
de
tránsito
292.
...
comercio exte-
Los grandes rubras del comercio exteAlgunos de los principales artículos de 301
—
Nuestro intercambio con
por la
frontera.
304
Ita-
— El comercio — Comercio
in-
—
Los patentables de toda la República, Movimiento de navegación, 305 El ser-
terno, 304
—
los
conflic-
Movimiento demoExtradición de
Metálico amonedado, 303
303
304
—
— Inmigración. — — Cifras globales del
rubros,
lia.
Orga-
Poder Judicial,
2i98
299
esclavos,
Los grandes
....
ecoxómico
—
rosoJveír
vicio de faros, 306
— Gastos
—
de puerto, 307
—
Obras
297
Anales de
57"
universidad
la
Págs.
portuarias
—
310
de
y
La entrada de un
Jackson
—
311
prera»,
—
311
Cibils,
-
—
309
canalización,
Salvatajes,
transatlántico
El
viaje
312
Ferrocarriles,
—
dique
al
«Leone
del
di
Ca-
Tranvías,
314
— Telégrafos y teléfonos, — La ganadería, 315 — La faena saladeril, abasto de la población, 316 — El ganado para 317 — Cifras oficiales de la riqueza pública, 318 — La agricultura, 319 — Enseñanza agrícola, 320 — Colonización, 32i — Industrias extractivas, 322 — Exposiciones nacionales, 323 — Bancos y mone-
—
Puentes y peajes, 314
314
el
das,
CAPITULO La
324.
Movimiento
VI.
—
Aduana, 329
—
334
Deudas
—
—
Los
Medidas de con-
Fuentes
La contribución
tentes de Giro, 333 tos,
—
329
finaciero,
—
326
1881,
y
ingresos del Tesoro público, 327 tralor
326
ad.ministkaxivo
financiera en 1880
situación
La
tributarias.
—
330
directa,
Pa-
Presupuesto General de Gas-
sueldos, 335 — los — Amortización de deudas. — Las emisiones en aumento,
descuento a
El
336
públicas,
Tipos de rescate, 337
—
338 La enseñanza primaiña. Nuevas tentativas de reacción clerical contra la reforma de José Pe-
— —
dro Várela, 340
La
escuela antigua y la escuela
Los días eran de intonsa lucha reformada, Continúa el progreso en ol mundo entero, 342 Honrando la memoria de José Peescolar, 343 340
—
—
dro Várela,
Estadística
sueldos
versidad.
—
El horario escolar,
—
la
354
del
por
dirigidas
—
350
escolar,
Amigos de 356
—
Inspectores en
de los
Los
345
de varones
cuelas
la
Contra
política
magisterio,
352
la
—
La Escuela de
—
—
—
vagancia. 359
construcción
T.
VII-
37.
Contra
— de
de
Artes y
Uni-
Oficio'^
357
de carácter universitario.
el
abigeato,
358
—
los
Cárcel
ma-
coclifica-
Contra
Las causas con Jurado, 360 la
—
351
La
—
358
—
Sociedad
Administración de Justicia. Elección de Trabajos de gistrados inferiores, 357 ción,
Esr
intervención
militante,
Educación Popular, 353
Instituciones
—
348
maestras, 349
Penitenciaría,
— :1(U
la
La
—
Anales
578
Una
le
de
Jueces
los
—
sueldos, 362
Sumarios
—
de Ventas, 363
y
reducción
la
policiales,
—
363
La
in-
de
los
Registro
Los defraudadores de impuestos,
—
—
Intereses municipales, 364 Higiene Los establecimientos de beneficencia, 365
blica.
—
Asilos Maternales, 367
La campaña contra
pii-
—
la vi-
caños maestros, 368 — — Honrando a los proceres, — El Correo, 371 — Creación de departamen372 — Espectáculos 372 — La cues-
Ejército
370 tos,
—
367
ruela,
Estado de
los
de línea, 369
piiljlicos,
tión
Incidente
religiosa.
miento de
—
—
limitativa de los embargos, 362
ley
amovilidad
364
Universidad
la
El
con
motivo
Partido
pide y
Católico
cumpli-
del
Ley de Registro de Estado
la
obtiene
Civil,
373
reforma
la
de la Ley de Registro de Estado Civil, 375.
—
Administración del general Santos.
CAPITULO
VII.
Máximo Santos
—
381
titucional,
contra Santos, 385
rritorio
—
389
—
diplomáticos Volpi y
el
—
ejército
—
de
revoluciones revolu-
revolucionario
Actitud
al
asume
que
te-
la
El ejército de Arredondo es ven-
Después de es
primeras
tres
La cuarta y última
388
oriental,
prisioneros
—
381
es elegido Presidente cons-
Las
382
Pasa
Asamblea, 389 cido,
1886
-
MoviiHE.xTo político
El general
ción,
1882
la
respetada,
época
la
Patrone, 392
—
batalla.
390
de
Las
La vida de
—
Los
Santos. torturas,
los
incidentes
El
caso
de
—
La
394
prensa y un grupo de ciudadanos de significación protestan contra los
Durante
la
crímenes de la época, 396
—
instrucción del sumario. Procedimientos
depresivos para nuestra justicia, 399
—
Son arres-
tados algunos altos funcionarios por su complicidad
en
las
torturas,
399
—
La contienda
diplomática.
El escudo italiano es llevado a bordo de un buque de guerra, 400 Queda solucionado el conflicto,
—
402
—
pública
Liquidando Oriental
la
guerra del Paraguay. La Re-
renuncia a
la indemnización de guerra y devuelve los trofeos conquistados, 406
—
Anales de
Universidad
la
579
—
Las contiendas Las aguas del río Uruguiajy, 408 de partidos durante el gobierno de Santos, 409 Aplazamiento de la reforma constitucional, 410
—
Los comicios de 1884, 411 de
titucional
mienzos
Vence
—
Poder, 412
el
gobierno de
del
plazo cons-
el
Pero éste
de Santos.
la presidencia
continúa en
— —
prensa en
L,a
—
414
Santos.
de un paréntesis de tranquilidad reaniwla ral
Santos
campaña
su
contra
pendiente,
417
—
órgano de
los
diputados de
balazo
del
teniente
—
catalanes, 426
Grave
Contra
La nueva
—
plase de esa ley, 427
renuncia
—
El
Los carpinteros
—
cúm-
el
conciliación política de
Presidente de la República jes,
—
— Ya
de la conci-
raíz
Santos y
general
el
inde-
ley de imprenta, 426
La
noviembre de 1886, 429 liación
gene-
a que da origen
ministerial
crisis
el
prensa
minoría, 422
la
423
co-
«La Libertad»,
diario
ei
Ortiz,
la
los
Después
elegido
es
general Máxijno Ta-
el
432.
CAPITULO VIH. Movimiento económico Población
República,
de
la
Montevideo,
433
dinero 439
Movimiento demográfico Movimiento migratorio, 438
La
—
439
Montevideo,
en
edificación
Nuestros
—
cados internacionales, 440
comercio
—
441
mercio terrestre con del
el
445
por vía terrestre, 445
—
tentables, 446
de
Contratación
exportación,
y
— 444 — — El
Nuestro
443
Brasil,
puerto de Maldonado,
terior
Co-
mer-
Principales rubros de
amonedado.
Metáilico
—
439
principales
importación
de
—
co-
Habilitación
comercio
in-
El número de pa-
Movimiento de navegación, 448 las
El
inmigrantes a su patria,
por los
mercio exterior, nuestro
del
—
remitido
—
de
censo
El
—
—
Uruguay, 435
433
—
433
obras
del
—
Montevi-
de
puerto
deo con la casa Cutbill son and Delungo. Incidente a
(lue
puerto, 1)
ijns
Negro.
— 461
da lugar. 455 de
—
449
—
La
—
Derechos
maremoto de
canalización
456
Telófonos.
—
El
en
el
Ferrocarriles, 461
—
Industria
de
1884,
Covralito
457
Telégrafos.
ganadera,
—
y
—
en
el
Tranvías,
461 462
faros y
456
de
Trarío
460
— Caminos, — La carne
Anales de
580
para
—
468
—
465
Lo3 comienzos de
—
Una
46/9
ción
de carnes, 470
sembrada,
supfcirficie
—
474
Contra
—
La
-
—
—
La
—
473
Trabajos
otras
—
La explotación
477
—
—
minera,
rritorial,
—
Uruguay,
480
industriales,
—
480
El
•
saldo
—
curso forzoso, 483
Otras
industrias,
exposiciones,
479
—
La propiedad
te-
circulante
América
anterior
del
del
de níquel, 485
— 485 —
Sur,
capital
Eil
in-
Situación de
bancos de emisión, 486.
los
CAPITULO
—
de-
El valor de las monedas de
—
la
En
las
oro, 483 Acuñación ce monedas ;— Interés legal del dinero, 485
^és en
—
Legislación bancaria. El Banco del
—
481
coloniza-
Industrias extractivas.
Premios obtenidos en
Patentes
de
476
plag2-s,
fensa de los montes, 477
478
47;-'
importación de trigos, 476
libre
langosta y
la
Movimiento administrativo Rentas y gastos. El déficit en constante aumento, 487 IX.
—
Y
embargo
sin
económicos,
cios
rentas
las
—
aumento, 489
constante
—
490
impuesto de aduana, 492 ta,
—
493
neral
—
495
Las playitas, 500
—
501
Convenios con
los
—
—
tributaria.
deudas
Londres, 510 escuelas y ción del
formas a
—
—
Número
de
502
de
—
empleados
los
dietas
las
Deudas
La unificación
le-
públicas.
—
de
Emi-
deudas,
—
Los tísudamericanas en el mercado de La enseñanza primaria. Número de
de niños en
Instituto la
El
direc-
Presupuesto GeMedidas de contralor. 498
fijos,
—
de
ejerci-
La contribución
Piecio de los fondos públicos, 509
de
tren
por
tenedores de títulos, 503
sión de deudas, 504
tulos
Legislación
Transformación
en sueldos
gislativas
— —
en
estaban
Las rentas
Patentes de giro, 494
de Gastos,
públicos,
505
'
frigorí-
Marcas de ganador., 472
Escuelas de enseñanza,
Agricíiltura.
ción,
industria
la
de frauquiciías a la exporta-
ley
fica,
La
—
La industria La Fábrica Liebig's en Fray Beh-
abasto de la población, 165
el
sala.deril, tos,
universidad
la
todo
Normal de
Ley de
horario escolar, 514
el
Educación
—
país,
510
— Crea— Re513 — El
Señoritas, 512
Común.
Articulación con la enseñan-
487
Anales de
581
universidad
la
Págs
za
—
514
secundaria,
Honores
Palabras de un maestro de
—
co de 1882, 516
La
de
—
La
es-
de Amigos
Sociedad
Educación Popular. Sarmiento hace lares, 517
—
Congreso Pedagógi-
El
Abolición
515
—
515
época,
la
—
cuela de sordomudos, 515
escolares,
de la
premios esco-
los
elogio de la Socie-
el
—
La dad de Amigos de la Educación Popular, 518 La enseñanza uniEscuela de Artes y Oficios, 518 En la Faculversitaria. Su reorganización, 519
—
—
—
tad de Medicina, 521 525
—
número de
El
universitarios.
de la época,
530
—
Algunos de
—
528
Administración
—
les,
534
La publicidad de
—
de
do 537 tos,
—
—
eléctrico, 537
—
los
—
Proyecto de
Códigos y leyes,
—
suicidios, 533
El alumbra-
precio de las aguas corrientes,
monumen-
Cementerios. La propiedad de los
—
538
Traslación
Manifestaciones
rio,
539
540
—
—
Cementerio Inglés,
del
honores
y
dentro
cemente-
—
Vialidad,
Caños
maestros,
—
de saneamiento, 545 545
—
Número
de
comestibles
de
la
paña,
de
ciedad
de
— los
El
546
—
Honrando a
—
Correos,
552
—
Las
—
de cam-
La
So-
tra-
—
de carácter internacional, 551
de 5.^3
El
547
— Li leva como procedi548 — La enseñanza militar, proceres, 549 — Varios Creación
relig'ioGa.
Inspección
Reglimentación
Policías
de línea,
Teatros y espectáculos.
'552
—
-
los
resoluciones
tados y
cólera,
medidas
548
13,
miento de remonta, 549
—
ejército
546
—
546
bebidas,
y
y
Diversas
La vacunación' obligatoria,
conventillos,
prostitución,
547
—
544
—
rentas de la Ca-
—
—
541
asilos,
La beneficencia privada, 541 Amagos de fiebre amarilla ridad, 542 I^as
539
del
Impuestos municipales, 540
Higiene pública. Hospitales y
—
543
Cárce-
administración de
la
municipales.
Intereses
— El
centros cultu-
los
Justicia.
Abaratamiento de
536
justicia,
grados,
Conflictos
La Biblioteca Nacional,
creación de la Alta Corte, 531 531
—
estudiantes, 526
—
527
rales
Las colaciones de
matrimonio
La Ley de Conventos, 559
civil
—
departamentos,
—
La
La Liga
cuestión 554
—
Libei-al
ad-
obligatorio,
Anales de
682
la
universidad
Págs.
hiere
leyes
a las
ventos,
561
prohibe
a
— los
antes de
la
obispado,
del
—
Bl
El
pueblo
Se
Matrimonio re&tablece
párrocos
de Con-
y
bautismo
el
civM, 562 — La — La enseñanza de 566 — Los cementerios y
erección religión
la
fúnebre
y la Policía en
©1
a
Iglesia,
la
Garibaldi,
interior
de
566 los
56'6 La Gasa de los Ejercicios, 567 Masonería inscribe sus estatutos, 567.
plos,
que
disposición
administrar
564
homenaje
—
la
Civil
inscripción
en las escuelas, 565
de
—
tem-
—
La
«i
i
Acevedo, Eduardo Mam;.al de historia uruguaya
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