La Presencia Del Doble

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Universidad Autónoma de Tlaxcala Facultad de Filosofía y Letras.

Licenciatura en Literatura Hispanoamericana.

“La presencia del doble en tres cuentos de Adela Fernández”.

TESIS QUE PARA OBTENER EL TÍTULO DE LICENCIADO EN LITERATURA HISPANOAMERICANA

PRESENTA Pablo Ignacio Pimentel Hernández

ASESORA DE TESIS Mtra. Marisol Nava Hernández

Tlaxcala de Xicohtencatl

mayo del 2007.

AGRADECIMIENTOS

A MIS ABUELOS Por cuidarme, ayudarme y brindarme todo el cariño y amor que les sobraba, en especial a mi abuela que rezó mucho por mi y se marcho de este mundo con la angustia de dejarme sin terminar la carrera. A MIS PADRES

Por darme la vida y la oportunidad de continuar mi carrera, por creer en mi a pesar de todos los errores que cometí a lo largo de todos mis estudios y de las murmuraciones de la gente que dudaban de mi capacidad. A MI AMIGA Y ESPOSA Bonizú Álvarez Canales por estar a mi lado en los momentos más difíciles de mi vida, su apoyo incondicional y amor han hecho que todo sea más llevadero. A MI HIJO IÑAKI Con su llegada cambio toda mi vida llevándome por nuevos y sinuosos caminos, enseñándome nuevas experiencias, por mostrarme el mejor lado de la vida pero sobre todo por ser ese rayito de luz y esperanza que ilumina mi apesadumbrada existencia. A TODA MI FAMILIA Y AM IGOS Gracias por su apoyo, cariño y comprensión, todos han hecho siempre algo por mí y a pesar de estar un poco distanciados, a todos mil gracias. También le agradezco a Chema por todos los consejos y apoyo incondicional en mis momentos de crisis y a Lilian por que gracias a ella conocí la obra de la escritora Adela Fernández.

CON MUCHO CARIÑO, RESPETO Y ADMIRACION A la Maestra Micaela Morales López y al Maestro Joel Dávila Gutiérrez por hacer que mi retorno a la facultad fuera más sencillo, a la Maestra Marisol Nava Hernández por introducirme al grandioso mundo de lo fantástico y por aceptar ser mi asesora ayudándome a realizar este trabajo. De igual manera a la Maestra Olimpia Guevara Flores por ayudarme a desarrollar el gusto por el teatro. Pero sobretodo GRACIAS a DIOS por darme la oportunidad de seguir disfrutando cada día.

A mis amores Iñaki y Boni

1

INTRODUCCIÓN

Desde finales del siglo XIX, surge en México una serie de escritores que cultivan el género fantástico como José María Roa Bárcena, Efrén Rebolledo, José Vasconcelos, Alfonso Reyes, Francisco Tario, Octavio Paz, Edmundo Valadés, María Elvira Bermúdez, Elena Garro, Juan Rulfo, Juan José Arreola, Guadalupe Dueñas, Augusto Monterroso, Adela Fernández, Ignacio Solares, Guillermo Samperio, Gustavo Sainz, entre otros1. Cada uno con un estilo y temáticas propio . Algunos de estos escritores pertenecen a la llamada Generación de Medio Siglo, la cual se convertiría en un parteaguas en la narrativa mexicana, ya que fue ésta una generación de renovadores de la literatura nacional, en la que se realizaron grandes aportes que facilitarían el camino a las generaciones siguientes y también, es con ellos, con quienes la vertiente fantástica cobra gran importancia en la literatura mexicana del siglo XX. Una de las escritoras que ha incursionado en la narrativa fantástica es Adela Fernández, autora casi desconocida y que , por lo mismo, ha pasado desapercibida, pero que , poco a poco, se ha ido ganando lectores y su obra, el lugar que merece. En mayo de 1993 se llevó acabo el V Encuentro de Investigadores del Cuento Mexicano en el estado de Tlaxcala auspiciado por la Universidad Autónoma de Tlaxcala y otras instituciones. Durante este encuentro el ensayista y escritor Edmundo Valadés presentó, al parecer, por primera vez en Tlaxcala la obra de la escritora Adela Fernández en su ensayo titulado: “El

Sara Poot Herrera, “Fantastic-Hitos Méxicanos Breve Apunte Bibliográfico”, en Las fronteras de lo fantástico, México, BUAP. 1

2

insólito mundo de Adela Fernández” , en el que dio un panorama general de 2

algunos de los cuentos contenidos en el libro titulado Duermevelas. 3 La obra de esta escritora incluye temas que son herencia de la Generación de Medio Siglo , tales como las caídas amorosas de la pareja, los retorcimientos de la familia, las precariedades de la vida moderna, el retorno a la provincia, la desesperanza, la desolación, entre otros; de igual manera, toca el discurso fantástico, sólo que la crítica no ha analizado esta parte de su cuentística. En este trabajo se analizará la presencia del doble, los tipos de desdoblamientos y mecanismos discursivos que apelan al tema en los cuentos “Cordelias”4, “La venganza de Flaubert” 5 y “El hallazgo”,6 así como se demuestra la función que este tema desempeña dentro de los relatos, ya que al menos en dos de ellos, al parecer la marginalidad, el aislamiento voluntario o forzado, la soledad y el individualismo son la causa del desdoblamiento y por ende, la presentación de la situación fantástica. Para realizar el análisis de los cuentos se usará la teoría sobre literatura fantástica creada por Louis Vax,7 Tzevetan Todorov,8 Flora Botton,9 Víctor Antonio Bravo10 y Víctor Herrera.11

2 Edmundo Valadés, “El insólito mundo de Adela Fernández”, en Hacerle al cuento (La ficción en México), pról. De Alfredo Pavón, México, UAT, 1994, p. 254. 3 Adela Fernández, Duermevelas, México, Katún, 1986. 4 Ibíd. 5 Adela Fernández, Vago Espinazo de la noche , México, Ed. de la autora, 2005. 6 Ibíd. 7 Louis Vax, Arte y literatura fantástica, Buenos Aires, Editorial Universitaria de Buenos Aires, 1963. 8 Tzvetan Todorov, Introducción a la literatura fantástica, traducción de Silvia Delpy (México: Ediciones de Coyoacán, 1994). 9 Flora Botton Burlá: Los juegos fantásticos, México UNAM 1994 10 Víctor Antonio Bravo, La irrupción y el límite, México, UNAM, 1988 11 Víctor Herrera, La sombra en el espejo, México, CONACULTA , 1997.

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C APÍTULO I C ONTEXTO LITERARIO L A GENERACIÓN DE MEDIO S IGLO A inicios de 1950, la ciudad de México vivía su recién estrenada modernidad que la llevó a convertirse en el centro cultural por excelencia. En ella se crearon espacios que sirvieron para fomentar la pluralidad de pensamiento, espacios que iban desde cafés, teatros y librerías, hasta los centros de cultura ya existentes como lo son el Palacio de Bellas Artes y la Universidad. Así mismo, el mundo literario se vio enriquecido desde finales de los cuarenta con la publicación de grandes obras como Al filo del agua de Agustín Yañez (1947), y a principios y mediados de los cincuenta con El laberinto de la soledad (1950) y ¿Águila o sol? (1951) ambas de Octavio Paz, Confabulario (1952) de Juan José Arreola, La x en la frente (1952) de Alfonso Reyes, siendo éste la figura rectora dentro de la esfera literaria; así como Los días enmascarados (1954) de Carlos Fuentes y Pedro Páramo (1955) de Juan Rulfo . A este ambiente cultural centralizado se incorporaron una serie de escritores venidos de provincia, que serían nombrados “La Generación de Medio Siglo”, cuyo encuentro más que al azar, se debió a una serie de características compartidas tales como lecturas, intereses y anhelos; como lo menciona Armando Pereira en su trabajo titulado “La Generación de Medio Siglo”:12 el encuentro entre ellos estuvo dictad o más bien por la necesidad, compartían demasiadas cosas entre sí: no sólo una misma voluntad de escribir, sino también una concepción semejante de la literatura; podrá decirse que una red de túneles y pasadizos secretos comunica la obra de Armando Pereira, “La Generación de Medio Siglo”, en Juan García Ponce y la generación de medio siglo, José Luis Martínez Morales, México, UV, 1998, p. 465. 12

4 Juan Vicente Melo e Inés Arredondo con la de García Ponce, Pitol, Elizondo o Sergio Fernández para citar algunos casos.13

De igual modo, compartían un pensamiento crítico hacia toda la cultura en que se desenvolvían, ésta abarcaba la música, el teatro, la pintura y el cine, pasando por la poesía, el cuento, la novela y el ensayo, a esto Pereira dice: “Podríamos afirmar que no hubo un solo territorio del quehacer intelectual que no hubiera sido tocado por la actividad crítica del grupo ”.14 Lo cual se tradujo en una “misma voluntad de decir y decir libremente”15 sin convencionalismos y fuera de las normas que la cultura establecía. De la misma manera, los unía una pretensión cosmopolita y antinacionalista. Los escritores de medio siglo marcarían de manera importante la historia de la literatura nacional, ya que sirvieron de “puente entre nuestros narradores actuales y latinoamericanos y mexicanos del boom. Gracias a ellos se comprenden también las resonancias de Ferdinand Ce line, James Joyce, Franz Kafka, William Faulkner, Joseph Conrad, Robert Musil, Cesare Pavese, Alain Robbe-Grillet, entre muchos otros” ,16ya que adoptaron las innovaciones que éstos realizaron, con lo que el relato mexicano se renueva dejando atrás el modelo cervantino donde se decía que “el cuento es aquello que se cuenta”17, modelo que vení a de la tradición oral careciendo de una escritura fija siguiendo el modelo aristotélico lineal de: principio, nudo y desenlace, volviéndose ahora más preciso y conciso de escritura única, rompe con la linealidad del modelo antiguo.

13 Ibíd.,

p.128.

14 Idem. 15 Ibíd.,

p.129. Alfredo Pavón, Contigo cuento y cebolla (La ficción en México), pról. de Alfredo Pavón, Tlaxcala, UAT, 2000, p. x. 17 Russell M. Cluff, Panorama crítico-bibliográfico del cuento mexicano (1950-1995) México: UAT/Brigham Young University, 1997, pp. 17-51. 16

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Por otro lado, el surgimiento de instituciones como el Centro Mexicano de Escritores (fundado en 1951 por Margaret Shedd), la Coordinación de Difusión Cultural de la UNAM (a cargo de Jaime García Terrés) y la publicación de las revistas Cuadernos en el viento (Dirigida por Huberto Batis y Carlos Valdés), la Revista de la Universidad (dirigida por Juan García Ponce) y la Revista Mexicana de Literatura (Fundada y dirigida por Carlos Fuentes y Emmanuel Carballo), sirvieron para facilitar la integración de los jóvenes escritores a esta generación y darle solidez al grupo. Fue ésta una generación de nuevos escritores renovadores de la literatura, en la que se realizaron grandes aportes y donde el camino a las generaciones siguientes será un poco más fácil, como lo afirma Alfredo Pavón en su prólogo al libro Contigo, Cuento y Cebolla (La ficción en México):18 Desde luego, el saber literario de los narradores de fin de siglo habría encontrado infinidad de obstáculos sin el aporte de los integrantes de la generación del medio siglo: la poligrafía de Salvador Elizondo, la anagnórisis erótica de Inés Arredondo y la erótica epifanía de Juan García Ponce, el humor y ácida ironía de Jorge Ibargüengoitia, las ansiedades del y hacia el otro de Juan Vicente Melo…19

Esta generación cosmopolita y de vastas perspectivas comenzó a tratar en sus obras temas que habían sido poco frecuentados por escritores anteriores, en los que se expresa el lado oculto del hombre y l a sociedad: La indagación de lo íntimo, el deslumbramiento y las caídas amorosas de la pareja (lésbica, hetero y homosexual), los retorcimientos y alegrías de la familia cercada por las precariedades modernas, el retorno a la provincia, los abigarramientos y las concupiscencias de las zonas fronterizas, la problemática de los marginados, las osadías contraculturales, los avatares juveniles, las configuraciones de lo femenino, los empalmes culturales venidos del proceso globalizador, la clausura del futuro y las esperanzas 18 Contigo 19 Ibíd.,

Cuento y Cebolla (La ficción en México), pról. de Alfredo Pavón, México, UAT, 2000, p. ix, x. p. x.

6 de las grandes masas sociales por parte de los mínimos potentados… los monopolios del poder, el manejo arbitrario y tendencioso de los hechos históricos por parte de quienes compraron los medios masivos… 20

Todos estos temas sirvieron para dar una nueva perspectiva de la realidad e imagen del país “múltiple y caótica para la cual una perspectiva unidimensional y unid ireccional resultaba raquítica”,21 de la misma forma gracias a ellos se dio una transformación de la literatura y el pensamiento nacional. El surgimiento de la generación de los cincuenta fue uno de los eventos de mayor importancia en el siglo pasado, ya que los aportes realizados por estos sirvieron para que las generaciones siguientes encontraran el camino libre al momento de dar a conocer su obra. Por otro lado, la literatura fantástica encontró el campo fértil para desarrollarse con los narradores de esta generación por el tipo de temas que se trataron durante este periodo y por eso es conveniente hacer énfasis en ello, ya que esta vertiente de la literatura cobró gran importancia en la narrativa mexicana creada en la segunda mitad del siglo XX. B REVE RECUENTO DE LA LITERATURA FANTÁSTICA EN MÉXICO Las propuestas de literatura fantástica en México tienen su apertura con la obra de José María Roa Bárcena (“Lanchitas”) y continúa con Carlos Díaz Duffoo padre (“El vendedor de inquietudes”), Julio Ruelas (“Último deseo”), Efrén Rebolledo (“A la Gioconda”), José Vasconcelos (“El fusilado”), Ángel María Garibay (“La señora de la tierra”), Carlos Díaz Duffoo hijo (“Epitafio”), Alfonso Reyes (“La cena”), Julio Torri (“Don”), Ermilo Abreu Gómez (“Huay poop”), José Gorostiza (“Otro tornillo”), Salvador Novo (“La Venus de Milo”), Xavier Villaurrutia (“La caída”), Agustín Yánez (“El 20 Ibíd.,

p. ix.

21 Ibidem.

7

señor y las virgenes”), Agustí Bartra (“Circe”), Francisco Tario (“ La noche de Margaret Rose”), Octavio Paz (“La búsqueda” y “Mi vida con la ola” ), Edmundo Valadés (“La incredula”), Elena Garro (“La culpa es de los tlaxcaltecas”), Juan José Arreola (“El guardagujas”), Augusto Monterroso (“El dinosaurio”), Jaime Sabines (“Petición”), Jorge Ibargüengoitia (“El buen decapitador”), Inés Arredondo (“Los hermanos”), Amparo Dávila (“La celda”), Carlos Fuentes (“Chac Mool”), Olga Harmony (“Penelope”), Salvador Elizondo (“La historia según Pao Cheng”), José de la Colina )“La culta dama”), Eraclio Zepeda (“Tienen el nombre”), Edmundo Domínguez Aragonés (“Culpable”), Carlos Monsivais (“A destiempo”), José Emilio Pacheco (“Tenga para que se entretenga”), Jesús Gardea (“Latitudes de Habacuc”),

Rene Áviles Fabila

(“La esfinge de Tebas ”),

Adela

Fernández (“Cordelias”), Gustavo Sainz (“Río de los sueños”), José Joaquín Blanco (“Los peces”), Gilberto Meza (“Laguna mental”), Fabio Morábito (“Los Vetriccioli”), Mauricio Molina (“El regreso”), Ana García Vergua (“La señorita”), Javier García Galiano (“Confesiones de Benito Souza, vendedor de muñecas”), Héctor de Mauleón (“Corrientes secretas”), Pedro Ángel Palou (“Parque del fin del mundo”), Eduardo Antonio Parra (“Los últimos”), Mario Gonzáles Suárez (“El goce blanco”), Cecilia Eudave (“El oculista”), entre otros.22?

22

Sara Poot Herrera, “Fantastic-Hitos Méxicanos Breve Apunte Bibliográfico”, en Las fronteras de lo fantástico, México, BUAP. ? También incluye la obra de los siguientes autores: Juan Rulfo. Pedro Páramo y El llano en llamas. México: Planeta, 1999. María Elvira Bermúdez. Soliloquio de un muerto. México: Los epígrafes, 1951. Ignacio Solares: El hombre habitado. México: Samo, 1975. Guillermo Samperio, Cuaderno imaginario: México:Grijalbo: 1990. Marta Cerda, La señora Rodríguez y otros mundos. México: Joaquín Mortiz, 1990. Emiliano González, Los sueños de la bella durmiente. México: Joaquín Mortiz, 1979. Mauricio Montiel Figueiras (Donde la piel es un tibio silencio. México: Gobierno del Estado de Sinaloa, 1992.). Adriana González Mateos, Cuentos para ciclista y jinetes. Culiac án: Aldus-Dicofur-Sinaloa, 1995.

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Como se puede observar, existe una gran gama de cultivadores de la llamada literatura fantástica en México, tanto masculinos como femeninos que tienen su antecedente desde finales del siglo XIX hasta nuestros días, pero ¿desde cuándo se puede hablar realmente de éste como un subgénero literario en nuestro país? Por un lado, Sara Poot Herrera en su trabajo titulado “Fantastic-Hitos Mexicanos Breve apunte bibliográfico”,23 da a conocer la obra de tres autores, como la apertura de la “dimensión fantástica contemporánea” ; 24 el primero es Francisco Tario y a principios de los cincuenta la obra de Guadalupe Dueñas y Amparo Dávila. Por otra parte, Augusto Monterroso marca a la Antología de literatura fantástica compilada por Jorge Luis Borges, Adolfo Bioy Casares y Silvina Ocampo como el detonante de la tradición fantástica en México, ya que este libro, junto con las obras traducidas de Kafka y la literatura de Borges, causaron gran impacto en los escritores que publicaban por esa época en México, y es entonces cuando esta generación “comenzó a liberarse del tradicional apego a los temas literarios realistas y circunscritos, a lo autóctono, a los problemas de la revolución para ir al encuentro de espacios más complejos en el mundo de la ciudad y la imaginación”,25 esta antología marca un punto de bifurcación en la literatura mexicana e hispanoamericana, ya que crea un gran interés en los narradores por la literatura fantástica. Para Monterroso, es Alfonso Reyes el primero en esbozar una definición de lo fantástico en México, en su obra “El deslinde de los prolegómenos a la teoría literaria”, de 1944, “La novela fantástica representa un esfuerzo de emancipación de lo histórico a lo puramente literario”.26 Y al referirse Reyes 23 Sara

Poot Herrera, “Fantastic -Hitos Méxicanos …” op.cit. pp. 123-129. pp. 123-124. 25 Augusto Monterroso, “La literatura fantástica en México”, en El relato fantástico en España e Hispanoamérica, Enriqueta Ventúa y otros, Madrid, SIRUELA, 1991, p.180. 26 Ibidem. 24 Ibíd.,

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a la obra de Borges comenta lo siguiente: “estas fantasías van mucho mas allá del humorismo y tienen un valor de verdaderas investigaciones sobre las posibilidades epistemológicas”.27 No obstante, resulta más valiosa la definición que da Reyes de lo que es lo fantástico en México en su cuento titulado “La cena”:28 “(cuya fantasía está hecha de cosas cotidianas y cuyo equívoco misterio crece sobre la humilde raíz de lo posible)…”29 La existencia de dos antologías que se centran en el relato fantástico muestran la presencia de la literatura fantástica mexicana, la primera es el libro Cuentos fantásticos mexicanos 30de María Elvira Bermúdez, en ella reúne los cuentos de Francisco Tario, José Emilio Pacheco, Elena Garro, Amparo Dávila, Juan José Arreola, Carlos fuentes y la misma María Elvira Bermúdez. La segunda antología pertenece a Edmundo Valadés: El libro de la imaginación. Antología de prodigios, fantasías, agudezas y ficciones breves, de 1970 (de dicha obra se realiza una reedición en 1976 y una reimpresión en 1990), 31 en la cual congrega a escritores de varias épocas y países, pero incluyendo a narradores mexicanos que marcaron una pauta importante en la narrativa nacional, lo mismo hace en la Revista de la imaginación. El cuento que se convierte en “un catálogo de lo fantástico de todos los tiempos”.32 Como se puede observar, en México existe una tradición y una serie de cultores de lo fantástico que se pueden contar desde finales del siglo XIX y que tienen su auge en la segunda mitad del siglo XX con el surgimiento de la llamada generación del medio siglo, tradición que se ha conservado hasta nuestros días.

27 Ibíd.,

p.181. Reyes, La cena y otras historias, México, FCE, 1956. Ibidem. 30 Monterroso, “La literatura fantástica en México”, Op. cit. p.183 31 Poot Herrera, op.cit, p.128. 32 Ibidem. 28 Alfonso 29

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Dentro del listado de nombres de autores que han incursionado en la narrativa fantástica aparece el de la escritora Adela Fernández, cuya obra incluye temas que son herencia de la Generación de Medio Siglo como lo es el aspecto amoroso en la pareja, los problemas familiares, las precariedades que trajo consigo la vida moderna, el mirar hacia la provincia, la desesperanza, la desolación, entre otros, así como el aspecto fantástico como discurso y temática, sólo que la crítica no ha tomado en cuenta esta parte de su obra cuentística. A continuación se darán los escasos datos biográficos encontrados y los comentarios de los pocos críticos que se han interesado en dicha autora y su obra.

11

C APITULO II

A DELA FERNÁNDEZ: VIDA, OBRA Y CRÍTICA Es difícil realizar la biografía de una escritora de la que sólo se conocen los datos que están escritos en la cuarta de forros de dos de sus libros y, sobre todo, si este mismo material ha servido para que los pocos críticos y estudiosos de su obra realicen sus trabajos logrando aportar sólo mínimas referencias nuevas , más sobre su vida, pero todo lo anterior se compensa cuando la crítica, que a pesar de ser igual de escasa, proporciona valiosa información sobre las características de la obra de la autora. Es por eso que en este intento biográfico se recopilará lo ya escrito sobre la vida de la escritora Adela Fernández y la crítica hacia su obra, agregando los comentarios que ella misma hace sobre su vida y cuentística contenidos en la ponencia dictada durante la realización del XVII festival La muerte tiene permiso en octubre de 2005 en la Universidad Autónoma de Tlaxcala y que lleva por título: “Selección y valor de las inclusiones”. 33 V IDA Y OBRA La escritora Adela Fernández nació un 6 de diciembre de 1942 en la ciudad de México; es hija del fallecido actor y director de cine Emilio Indio Fernández,34 por lo que su infancia se desarrolló dentro del ambiente cinematográfico; en su juventud viajó por casi toda la república.35

33 Adela

Fernández, Selección y valor de las inclusiones, Tlaxcala, 2005, ver anexo p. 35 vida de Adela Fernández siempre ha sido ligada a la historia de la vida de su padre, pero ella siempre ha buscado y pedido que se le valore haciendo a un lado esta relación. 35 En la cuarta de forros de su libro: El perro o el Hábito por la rosa, se menciona que fue una “nómada desesperada” ya que viajó por casi toda la república mexicana participando en la siembra de jitomate, sandía y cortando caña, además convivió con los mineros del Rosario, trabajó con pescadores, con una familia de trashumantes y vivió en las zonas más lejanas y áridas del Valle del Mezquital. 34 La

12

Ha dado conferencias en el país y el extranjero. Estuvo en contacto con los 36

surrealistas de su época como Remedios Varo, Leonora Carrintong, entre otros, que son influencias dentro de su obra. Adela Fernández es autora de los libros de cuentos: El perro o el Hábito por la rosa,37 Duermevelas, 38 y Vago espinazo de la noche.39 Por otro lado, es importante resaltar que ha incursionado en otros terrenos como la novela, el guionismo y la dramaturgia. 40

C RÍTICA Incluso a mis cuentos les debo que la gente me califique de azotada, truculenta y desquiciante… Adela Fernández

Toda la obra de Adela Fernández, en especial su cuentística, ha carecido de la atención que me rece, y sólo contados críticos han vuelto la cara hacia ella y se han dado a la tarea de darla a conocer proporcionando cada uno su punto de vista sobre ésta. Dentro de este contado número encontramos a Federico Patán, quien la considera como una agradable sorpresa; 41 para Edmundo 36 Entre los países que ha visitado se encuentran Santo Domingo, Dinamarca y Grecia hay que aclarar que la mayoría de las conferencias dictadas por ella tratan sobre la vida de su padre excepto la de Santo Domingo donde presentó su ensayo titulado Selección y valor de las inclusiones. 37 Adela Fernández, El perro o el Hábito por la rosa, México, Ed. De la autora, 1975. 38 Adela Fernández, Duermevelas, México, Ed. Katún, 1986. 39 Adela Fernández, Vago espinazo de la noche, México, Ed. de la autora, 1996, Cfr. La segunda edición, Adela Fernández, Vago espinazo de la noche , DF, Ed. ALIENTO , 2005. 40 Es conveniente remarcar que dentro de la narrativa escrita por la autora existen dos novelas que llevan por títulos: Sebastiana y Las lamentaciones de Herodes, ambas de 1975, pero como pasa con el resto de su obra es casi imposible conseguirlas. Asimismo escribió los guiones titulados: La tierra de Job (argumento para cine censurado), Claroscuro y Cotidiano surrealismo (cortometrajes). En teatro: La prodigiosa y La tercera soledad (monólogos teatrales). Éstas, al igual que su narrativa, son difíciles de conseguir. 41 Federico Patán, Duerme velas de Adela Fernández. De la crueldad como tema, Sábado, suplemento cultural del Unomásuno, núm. 547, México 12 de junio de 1986, p.12.

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Valadés, su obra tiene una rica invención de personajes insólitos; para 42

Manuel Capetillo su narrativa es una manera de descubrirnos y escuchar nuestra propia voz43; Javier Delgado la considera una búsqueda en los recovecos de las almas perdidas 44; para Tomás Hiriarte , sus cuentos son textos narrativos valiosos y sugerentes45, finalmente , Jacqueline Bernal Arana considera a sus cuentos como un enfrentamiento entre la ternura y lo amargo.46 Por otro lado, los cuentos presentan una estructura anecdótica, en los que la brevedad narrativa, el constante uso de difrasismos47 y el uso de un lenguaje directo y explícito, son su principal característica; en ellos el horror, lo fantástico, las metamorfosis, la alucinación, la muerte , el humor negro y el magismo 48 son parte esencial de los mismos; de igual manera, los cuentos son una constante denuncia de la crueldad y el desamor. Por otra parte, es interesante conocer cómo un escritor o escritora observa su obra y da sus juicios de valor sobre ésta, que muchas de las veces dista de lo que la crítica ha escrito sobre ella; del mismo modo, es interesante conocer el proceso creador y los motivos que le llevan a escribir de cierta manera y con determinado estilo, conocer la influencia de corrientes literarias y de otros escritores en su obra.

Edmundo Valadés, “El insólito mundo de Adela Fernández”, en Hacerle al cuento (La ficción en México), pról. de Alfredo Pavón, México, UAT, 1994, p.254 43 Manuel Capetillo, “Presencia oscura del poder ausente.” Novedades, El Semanario, núm. 738,México 9 de junio de 1996, pp.4-5. 44 Javier Delgado, “Vago espinazo de la noche, el regreso de Adela Fernández a las letras, después de diez años”, Unomásuno, núm. 19, 19 de mayo de 1996, p.21. 45 Tomas Hiriarte, Adela Frnández, en: Asociación Mexicana para la Prevención de Insuficiencia Cardiaca A.C. http://www.sistemas.fciencias.unam.mx:8080/ameppic/index.jsp?get=Cuentos –AdelaF -01.html 46 Jacqueline Bernal Arana, “Infancia y muerte en los cuentos de Adela Fernández,” en Literatura hispanoamericana fronteras e intersticios, México, Siena, UAT, BUAP. Col. Encuentros literarios, 2006, p.265 47 Difrasismo, según lo explica la autora, es cuando los antiguos nahuas “usaban dos palabras para expresar con ellas una tercera idea”. Ver anexo I p. 33 48 Término acuñado por la autora, según eso proviene de la magia del mundo indígena. 42

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Adela Fernández define en su ponencia titulada “Selección y valor de las inclusiones”49 a su narrativa, en general , como una constante denuncia del desamor y a la literatura como un desencadenamiento de ideas, emociones y sensaciones que llevan hacia la reflexión. Para Adela Fernández, el cuento es el género literario más espontáneo, ya que en él las ideas y emociones pueden surgir en cualquier momento de una forma inesperada. En específico considera que sus cuentos son “consecuencias de un acervo vivencial… Un juego de rompecabezas… un colage, un bordado”.50 Al parecer escribe sólo con la intención de desahogarse, durante este proceso menciona que se comunica con su subconsciente y utiliza todo aquello que le ha impactado en su vida. Sus cuentos son una mezcla de sueños y realidades. Con respecto a esto, Federico Patán ha dicho que Fernández escribe en la línea de Julio Cortázar, pero con un sabor propio,51 ya que se dice que él escribía también como una forma de desahogo. Como puede notarse, hasta este momento ni los críticos, ni ella misma han hecho algún comentario que haga referencia a la tendencia fantástica de su cuentística, y sólo Sara Poot la ha catalogado como tal en su ensayo titulado “Fantastic -Hitos Mexicanos Breve apunte bibliográfico”52. Es por ello que la importancia de este trabajo recae en que se dará otra perspectiva de su obra: la fantástica; ya que en los cuentos titulados “Cordelias”53, “La venganza de Flaubert”54 y “El hallazgo”,55 donde se presenta la situación fantástica a través del tema del doble.

49 Adela

Fernández, Selección y valor de las inclusiones, Tlaxcala, 2005, ver anexo p.35.

50 Idem. 51 Federico Patán, “Duermevelas de Adela Fernández. De la crueldad como tema”. Sábado, suplemento cultural de Uno más uno, núm. 547, 12 de junio de 1986, p. 12. 52 Sara Poot Herrera, “Fantastic -Hitos Méxicanos…” op.cit. p.130. 53 Ibíd. 54 Adela Fernández, Vago Espinazo de la noche , México, Ed. de la autora, 2005. 55 Ibíd.

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C APITULO III

L ITERATURA FANTÁSTICA Y MARCO TEÓRICO SOBRE EL DOBLE

Cuando oímos las palabras ? ? literatura fantástica? ? la mayoría de nosotros imagina saber de que se trata, e incluso algunos aceptamos invitaciones para disertar sobre ella como si lo supiéramos. Augusto Monterroso

3.1 LA LITERATURA F ANTÁSTICA Dentro del vasto campo literario existe una vertiente llamada Literatura Fantástica en la cual lo inconcebible es posible, aunque muchas veces no aceptado. En el relato fantástico, el hombre encuentra una manera de crear mundos que se rigen por reglas semejantes a las del nuestro, pero en él éstas pueden ser violadas, sometidas y cambiadas de forma inesperada. La literatura fantástica invita al lector a dejarse seducir por una realidad que en cualquier momento se puede transformar, de una manera violenta, en otra menos agradable. Y al concluir deja un sentimiento de desconcierto sobre el hecho que se ha leído. Esta parte del universo literario es indefinible, ya que todo intento por definición resulta siempre incompleta sin embargo , me permitiré hacer un intento de definición sobre lo que es lo fantástico basándome en los textos de LoisVax y Flora Botton Lois Vax, uno de los principales teóricos de lo fantástico, en su libro Arte y literatura fantástica 56 define a lo fantástico mediante una serie de

56

Louis Vax, Arte y literatura fantástica, Buenos Aires, Buenos Aires, Editorial Univ ersitaria de Buenos Aires, 1963.

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características esparcidas en todo el texto, para él el cuento fantástico debe introducir: terrores fantásticos en el seno del mundo real […] el “más allá” […] en realidad está muy próximo; y cuando revela en los seres civilizados que pretendemos ser, una tendencia inaceptable para la razón, nos horrorizamos como si se tratara de algo tan ajeno a nosotros que lo creemos venido del más allá. […] la razón que distinguía las cosas y subdividía el espacio, cede su lugar a la mentalidad mágica. En sentido estricto ?…? exige la irrupción de un elemento sobrenatural en un mundo sujeto a la razón 57

Por lo que un suceso es fantástico cuando se irrumpe la normalidad del mundo conocido y la razón es burlada. Las características que Vax menciona son retomadas por Flora Botton, una estudiosa de lo fantástico más reciente, y que condensa las teorías en un intento de definición. Según Botton, un relato es fantástico cuando se describe un mundo como el nuestro, regido por leyes y reglas inquebrantables y se presenta “un hecho o un ser insólitos, diferentes, que parecen no obedecer las reglas de la realidad objetiva, entran en esa realidad y existen ? o parecen existir? por un momento al menos, dentro de ella, transgrediendo alguna de sus leyes.”58 Al desglosar este intento de definición tenemos que la presencia de lo fantástico debe manifestarse de forma inexplicable dentro de la obra. Lo fantástico debe imponer un orden nuevo, totalmente diferente y no obedecer a las reglas establecidas por el mundo conocido: Cuando un fenómeno insólito no es explicable mediante las leyes del mundo, ni se nos da una explicación que lo colocaría clara y definitivamente dentro de un mundo otro, entonces nos encontramos en presencia de lo fantástico . 59

57

Ibíd.pp. 13,11 Botton Burlá: Los juegos fantásticos , México UNAM 1994, p.183. 59 Ibíd., p. 18. 58 Flora

17

La obra debe situarse dentro de la realidad, su contexto debe ser un mundo conocido por todos, el que se vive todos los días, del mismo modo todos los elementos deben ser tomados de la realidad y el evento fantástico debe contraponerse a dicha realidad. De igual manera, se nos presentan personajes que son como nosotros dentro de un mundo como el nuestro y que se encuentran de pronto dentro de una situación inexplicable. Al estar frente a un hecho fantástico se pueden tener dos opciones: o se trata de una jugarreta de los sentidos o de una ilusión producto de la imaginación, entonces las leyes que se conocen son rotas y el hecho puede suceder realmente e imponerse ante la realidad, y esta realidad se transforma dejando de ser la que conocíamos: Según la que se escoja se está frente al mundo de lo extraordinario o maravilloso y sólo si la duda permanece, si el texto es suficientemente ambiguo para no permitir esta elección, sólo entonces estaremos plenamente en el reino de lo fantástico.60

Lo fantástico es un hecho que no puede ser explicado por medio de las leyes conocidas en el mundo cotidiano, pero que se presenta dentro de éste. Por ello mismo, la trasgresión es otro elemento de lo fantástico, implica un quebrantamiento de las leyes de la vida cotidiana que se ve interrumpida por la aparición del hecho fantástico y los personajes se sienten agredidos, amenazados quedando impotentes ante el fenómeno extraño, que convierte el orden e n caos e imponiendo uno nuevo. En el desenlace, menciona Botton, debe existir la permanencia de lo misterioso, y al no tener una solución, no puede haber un desenlace, el misterio queda ahí para no ser resuelto, el texto termina pero el enigma no.61

60 Ibíd., 61 Ibid.,

p. 20. p. 40.

18

A partir de las características manejadas por ambos autores, Flora Botton propondrá en su obra Los juegos fantásticos, 62 diversas temáticas: una de ellas es la temática del doble incluida en los denominados “juegos con la personalidad”63, en donde se aborda el intercambio de personalidades y la fusión de un personaje con otro, sobre este tema se hablará en el siguiente apartado. 3.2 LA TEMÁTICA DEL DOBL E Desde su aparición , en el periodo romántico, el tema del doble en la literatura tiene varias acepciones; por un lado, está la dirigida hacia el psicoanálisis y aparece como una consecuencia del complejo narcisista en el que el individuo manifiesta su doble como una proyección de su yo: “la reflexión psicoanalista sitúa a la expresión del doble como una de las problematizaciones del yo”.64 Posteriormente, la literatura fantástica pasó a representar el mal, se tornó como una expresión de lo siniestro y que puede aparecer de manera interna o externa al sujeto, de manera “real” o alegórica, y que puede representar los deseos más oscuros que el hombre guarda. Louis Vax en su libro Arte y literatura fantástica 65 hace referencia al tema del doble en su apartado titulado “Algunos temas fantásticos” 66, él lo define como perturbaciones de la personalidad en las que la unidad

de la

personalidad del hombre está en peligro. Y menciona que la perturbación psíquica es más inquietante si va acompañada de una perturbación física, ya que “el hombre no se desdobla sólo en su interior sino que ve a su doble

62Flora

Botton Burlá, Los juegos fantásticos, Op.cit. p.194. 64 David Roas, Teorías de lo fantástico, Madrid, Arco, 2001. 65Louis Vax, Arte y literatura fantástica, Op.cit. p.9 66 Ibíd., p 28. 63 Ibíd.,

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fuera de él”. También retoma la tradición supersticiosa popular sobre la 67

creencia de que si alguna persona ve a su doble morirá pronto. En la Introducción a la literatura fantástica. 68 Todorov propone a este tema dentro de su apartado titulado los “Temas del yo”,69 en él hace referencia a varios temas que tienen que ver con la materialización de lo inexistente. Dentro de esta clasificación los siguientes apartados se relacionan con el desdoblamiento: la ruptura del límite entre la materia y el espíritu, las metamorfosis, la multiplicación de la personalidad, la ruptura entre el sujeto y el objeto. Del mismo modo Víctor Antonio Bravo en su libro La irrupción y el límite70 hace un estudio específico de la alteridad y en él propone al doble como la puesta en escena de la maldad y expresión de lo siniestro, como una proyección del yo y que se puede manifestar en el plano físico a través de la creación ya sea por medios científicos o mágicos de un “otro” o en la metamorfosis del personaje. Por su parte , Flora Botton Burlá en Los juegos fantásticos71 hace un apartado dedicado a los tipos de juegos que se presentan en la literatura fantástica, en ellos incluye lo que denomina “juegos con la personalidad”72 en estos la persona se puede desdoblar, intercambiar o fundirse con otra. Como se pudo notar los estudiosos de la literatura fantástica han tratado de diferente manera el tema del doble, cada uno adecuándolo al tiempo en que vive. El siguiente paso es hacer un recuento de los tipos de

67 Ibídem. 68 Tzvetan Todorov, Introducción a la literatura fantástica, traducción de Silvia Delpy (D.F: Ediciones de Coyoacán, 1994). 69 Ibíd., p. 87. 70 Víctor Antonio Bravo, La irrupción y el límite, DF, UNAM, 1988 71 Flora Botton Burlá, Los juegos fantásticos, D.F, FFy L/UNAM, 1994. 72 Ibíd., p.194.

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desdoblamiento y para ello se tomarán las propuestas que Víctor Herrera da en su libro La sombra en el espejo.73 3.3 TIPOLOGÍAS En el libro La sombra en el espejo, Víctor Herrera propone dos tipologí as relacionadas con el desdoblamiento de los personajes en la literatura; la primera pertenece a los desdoblamientos inte rnos y la segunda a los externos, para este trabajo sólo se definirá y utilizarán los que pertenecen únicamente al segundo grupo en el cual la división objetivada, las reproducciones, los desdoblamientos en el tiempo y el referente al creador y creación, tienen relación con el tema fantástico y se definen de la siguiente forma: Los desdoblamientos externos son los representados por proyecciones, coincidencias, influjos o fenómenos sobrenaturales, Víctor Herrera propone los siguientes subtipos: 1. La epipsique, éste es un motivo en el que se da la proyección en la mujer u hombre amado y del ideal al que se aspira; en él se borra a la persona “real” objeto de deseo, para convertirla en un instrumento de unificación consigo mismo. 2. División objetivada: se le considera el caso maestro del doble, ya que en él se separan la parte buena y la parte mala de la persona. En estos existen las siguientes subcategorías. 2.1 Desdoblamientos sobrenaturales: estos pueden presentarse como sombras, espectros y al ucinaciones autoscópicas y pueden representar el lado bueno o malo del alma. 3. Los pares complementarios: 3.1 Por afinidad: puede representarse por amistad o como coincidencia de objetivos que iguala y une a los protagonistas. 73 Víctor

Herrera, La sombra en el espejo, México, CONACULTA , 1997.

21

3.2 Por contrastes: los personajes se complementan por sus caracteres opuestos. 4. Los rivales: se da cuando dos protagonistas en una pugna por algo o alguien se prestan sentido el uno al otro. Su identidad y destino dependen de la existencia del otro. 4.1.

Por rivalidad en el amor: se da por oposición de caracteres, pero

por su afinidad de objetivos. 4.2. Desdoblamiento por perseguidor? perseguido: esta situación se da cuando el perseguidor suele encarnar una búsqueda de identidad, y el perseguido el miedo a conocerse a sí mismo. El encuentro suele tener a la muerte como desenlace. 4.3. Relación amo? siervo: en él la conciencia del amo es mediada por otra conciencia, en este caso la del siervo. 4.4. Por posesión: se da cuando un influjo sobrenatural o “magnético” es inducido de un personaje a otro. 5 Reproducciones: es el tema más recurrente en la literatura fantástica y se presenta en tres variantes: 5.1. Las reproducciones simples o efigies: estatuas de cera, cuadros, en las que se adjetiva o proyecta el conflicto entre el cuerpo y el alma. En este punto también se encuentra la presencia del doble como símbolo de muerte. 5.2. El Gólem, los autómatas, humúnculi y mandrágoras, las imitatios hominis son ejemplos de desdoblamiento porque son imágenes creadas a semejanza del hombre que toman vida propia. 5.3. Los espejos: estos tienen un valor simbólico de la conciencia de sí o de la muerte, muestran al protagonista su verdadero rostro.

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6.

Desdoblamientos en el tiempo: en estos, el sujeto o su alma trascienden en el tiempo encarnando en otro personaje y las hay de los siguientes tipos: 6.1. El sujeto que trasciende: en él la esencia del sujeto se reproduce en otro tiempo, después de su muerte. 6.2. Desdoblamientos por estirpe , son aquéllos en los que se da una fragmentación de almas en el individuo desdoblado. 6.3. Desdoblamientos por identidad de objetivos: dos personajes distantes en el tiempo eligen el mismo destino y son en el fondo el mismo sujeto. 6.4 La realización de un modelo textual o histórico: es la coincidencia inconsciente de un destino con un modelo textual histórico, es decir, se repiten las situaciones del pasado de manera coincidente en el presente .

7 Creador y creación: este es un desdoblamiento del narrador o del personaje en un producto de su imaginación.74 Como se puede observar, existen varios tipos y formas de desdoblamientos de los cuales la división del cuerpo y el alma, los desdoblamientos en los sueños, los desdoblamientos en el tiempo, las reproducciones y el desdoblamiento por creador y creación son propiamente fantásticos. En el siguiente capítulo se realizará el análisis de los cuentos “Cordelias”, “El hallazgo” y “La venganza de Flaubert”, ya que en ellos existe la presencia del doble con diferentes orígenes y connotaciones en cada uno.

74 Víctor

Herrera, op.cit. pp. 60-66

23 CAPITULO IV

A NÁLISIS DE LOS CUENTOS CON LA TEMÁTICA DEL DOBLE Como se pudo observar anteriormente , la obra de Adela Fernández se caracteriza por contener una gran variedad de posibilidades discursivas y temáticas, entre los cuales se destaca el de lo fantástico, en concreto la temática del doble. Así, en los cuentos de esta autora los personajes que padecen el desdoblamiento son seres marginados o que se marginan voluntariamente , son individuos solitarios o aislados

lo que propicia el

fenómeno fantástico. En sus cuentos se vale de diferentes elementos para introducir la fragmentación del cuerpo como lo son los espejos o a través del discurso deja al lector la insinuación de la existencia del otro, de igual manera los desechos de la ciudad sirven para ejemplificar la creciente individualización del hombre actual, como se analizará a continuación. “ EL HALLAZGO”75 O EL ENCUENTRO CON L A MUERTE El cuento “El hallazgo” ejemplifica perfectamente la presencia del doble con la acepción tradicional en que representa a la muerte . En este cuento se narra la historia de Gabriel Garzal, un hombre que durante largo tiempo padeció un ataque de rencor causado por el plagio de sus ideas por parte de uno de sus compañeros de trabajo, lo que lo lleva a la ruina, ya que al estar planeando su venganza, sin éxito , pierde a su esposa, hijo y trabajo, así como las ganas de seguir adelante . A partir de entonces se dedica a vagar ebrio por las calles de la ciudad, primero mendigando, pero después viviendo de lo que encontraba tirado en la calle, hasta que un día, cuando caminaba por el parque recogiendo 75 Fernández,

Vago espinazo de la noche, pp. 219-223.

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objetos, intuitivamente se dirige hacia donde termina la fuente del parque donde le llama la atención algo que está entre los matorrales; su sorpresa es enorme al encontrarse a sí mismo muerto, pero tranquilamente se sienta a un lado de su cuerpo a esperar a que lo encuentren y lo recojan como un desecho más de la ciudad. En lo que respecta al interior del cuento se encuentra que el personaje Gabriel Garzal sufre una degradación constante como consecuencia de su descuido y de su aparente búsqueda de venganza, la cual sirve también para abandonar la vida rutinaria que le representa el trabajo en la oficina y su familia: Esa traición en el trabajo lo llevó a la ruina, merecía una venganza, y por años, Gabriel Garzal se la pasó briago, elucubrando mil manera?s?76 de cobrarse los daños. Lo obsesionó tanto el ansia de vengarse, que no se dio cuenta cómo se fue a pique. De pronto lo había perdido todo, el prestigio, el trabajo, la mujer, los hijos, los amigos. 77

Esta degradación se da de manera gradual y es simbolizada por varios elementos que la escritora utiliza; esta es permitida por el mismo Gabriel, ya que comienza a mimetizarse con la mugre , la basura y los muros que están en constante deterioro: Para disimularse, como hacen todos los menesterosos, se apegó a los oscuros suburbios. Ser mugre en el todo mugre, abajito junto a las cloacas, en lo oscuro, hombre desmedrado recargado en el muro en deterioro, cáscara en la basura. 78

A pesar de hundirse cada vez más en la vida indigente , siempre hay algo que lo mantiene en contacto con el mundo en el que vivía, con lo que se puede notar la existencia de dos mundos diferentes; el primero es el mundo en el 76 Sic. 77 Ibíd., 78 Ibíd.,

p. 219. p. 220.

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que vivió durante su vida de oficinista y el otro es el de la pobreza y la indigencia en el que se encuentra actualmente, estos se presentan como símbolos, uno se muestra con las sábanas blancas colgadas en una azotea y el otro con un pañuelo recién planchado: Pero el alma no se le ha escapado del todo y a veces lo lleva al goce. Gabriel Garzal, en ocasiones se atreve a invadir las azoteas. Llega a los tendederos para oler la ropa limpia y recordarse que alguna vez fue un hombre erguido en el trabajo y galante en el amor. Y entre las sábanas recién lavadas reconoce que tiene nostalgia de sí, ay, es una nostalgia tan grande como la de la encarnada luciérnaga que recuerda que en pasados milenios fue el sol. ?…?79 Está de suerte al levantar una moneda; más allá recoge un pañuelo, doblado, todavía con el olor a plancha… 80

Dentro de esa vida busca una manera de sobrevivir y la encuentra en lo que la autora llama “el hallazgo” de cosas que la gente deja tiradas en la calle o en la basura, comerciando con ellas. Su degradación continúa hasta que se da el suceso fantástico con el encuentro de su doble al final de la fuente: Y de pronto, ahí, tras los matorrales hay algo que lo asombra, que lo estremece: es un cuerpo gastado en la fatiga y congelado por el frío, trágico yaciente: Es su propio cuerpo lo que ve, el hallazgo es su propio cadáver81

Su doble representa la muerte y finalmente su degradación es completada, ya que queda tirado en la calle como un desecho más y sólo espera sentado junto a sí mismo a que lo hallen y lo lleven a la morgue. Gabriel Garzal es un personaje que no se percata de cómo suceden las cosas que afectan su vida, lo que lo lleva a un final trágico. Esto se puede observar en las marcas que la escritora nos da al principio del relato : “Lo obsesionó tanto el ansia de vengarse, que no se dio cuenta cómo se fue a 79 Ibíd.,

p.220. p.222. 81 Ibíd., p.223. 80 Ibíd.,

26

pique …”

82

y al final: “no supo cómo ni cuando le llegó la muerte ”; él 83

termina aceptando su condición de desecho y se resigna a morir. Dentro de las categorías ya mencionadas que Víctor Herrera nos presenta, este cuento se encuentra en la que corresponde a las reproducciones simples o efigies en específico donde el encuentro con el doble representa la llegada de la muerte. Por otro lado Gabriel Garzal representa perfectamente al modelo del protagonista fantástico, ya que es un personaje solitario y marginado cuando se presenta el hecho fantástico y de igual manera es un ejemplo alegórico de la individualización y la pé rdida de la calidad de humano que está padeciendo el hombre moderno al degradarse hasta convertirse en sólo un desecho más.

82 Ibíd., 83 Ibíd.,

p.219. p.223.

27

“ CORDELIAS”: LA REPRODUCCIÓN HIPERBÓLICA En “Cordelias”84 se narra la historia de la misteriosa llegada de una niña a un pueblo hundido en la precariedad en el que no se puede cultivar nada. Esta niña hace su aparición dentro de una caja de madera que llevó un árabe que surtía de fruta a la bodega de la localidad y del cual nunca se vuelve a saber nada después de esa entrega. La llegada de la niña levanta en la gente una serie de suposiciones y supersticiones que profetizan desastres y maldad a la comunidad. La niña es adoptada por una mujer del lugar, quien le da el nombre de Cordelia y la mantiene encerrada hasta que desaparecen los rumores. Cuando sucede esto comienza a sacarla por las calles, pero , un día, mientras iban por agua a la fuente, la niña observa su reflejo dentro del agua y, casi de inmediato, sale de la fuente otra Cordelia. La madre finge no tener asombro alguno y se marcha en medio de los rumores de la gente que presenció el suceso. En otro momento, mientras el par de niñas se probaban los vestidos nuevos frente al espejo en la cas a de una costurera, surgen de él otro par de Cordelias. La gente sumida en la incertidumbre lleva a las niñas al atrio de la iglesia del pueblo y las colocan frente a un gran espejo en el que se comienzan a multiplicar, horrorizados por esto deciden rompe r el espejo, pero de los fragmentos surgen más niñas. Aterrorizada, la gente corrió a sus casas y comenzó a cubrir todo aquello que pudiera reflejar la imagen de las niñas para así evitar su reproducción. Finalmente , las Cordelias buscan desesperadamente el medio para multiplicarse y perpetuar su especie. El cuento pertenece a la variante que Víctor Herrera denomina “reproducciones simples” y utiliza como elemento de reproducción a los espejos y toda superficie que refleje dándole una acepción siniestra, en este tipo de relato se presenta lo que se llama una reproducción hiperbólica.

84 Adela

Fernández, Duerme velas, México, Katún, 1986.

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Desde el inicio del cuento se dan una serie de indicios que van preparando el camino para que se dé la aparición del suceso fantástico, ya que el acontecimiento comienza en un pueblo infértil donde nada se reproduce y el cambio es introducido por la llegada de un personaje de origen árabe, perteneciente a una cultura fértil y mística del cual no se vuelve a saber nada: El árabe llegó a nuestra aldea con su camioneta azul dando tumbos en la brecha pedregosa y mirando con enfado el paisaje baldío. Descargó en la bodega de Luciano 32 cajas de madera llenas de verdura y frutas, alimento apreciado en nuestra tierra infértil. 85

El siguiente símbolo es la caja en que llega la niña, ésta representa la abundancia que se opone a la carencia del pueblo, pero es tomada en sentido contrario, ya que se vuelve un signo de desgracias: ?…? hija de la deidad del maíz y que debía ser adorada como diosa; que tal era el mismito diablo que en imagen de aparente inocencia había llegado al pueblo para desatar la maldad y una cadena de desastres. 86

Como se puede notar, a partir de este momento, el personaje también es marcado por el llamado signum diaboli el cual Tobin Siebers define en Lo fantástico romántico87 como: “una marca o una censura ?que? antes considerada como natural se vuelve, de pronto, símbolo de lo sobrenatural.”88 Esta connotación es resultado de la forma en que aparece Cordelia en el pueblo causa que conlleva a aislarla para protegerla de la marginación: Decidió (la madre del narrador) llevarla a casa hasta que regresara el árabe para aclarar con él las cosas, pero el frutero jamás volvió al pueblo y ella tuvo que hacerse cargo de la niña ?…?89 85 Ibíd.,

p.15.

86 Ibidem. 87

Tobin Siebers, Lo fantástico romántico, México: FCE , 1989 p. 51.

88 Ibidem. 89 Adela

Fernández, Duermevelas México, Katún, 1986, p.16.

29 La gente del pueblo siguió historias posibles sobre su identidad, por lo que mi madre prefirió que Cordelia no saliera de casa, librándola así de los chismes populares.90

Cordelia es un personaje extranjero y como tal crea en los habitantes del pueblo un sentimiento de desconcierto y superstición, a esto Siebers menciona que “la superstición imbuye toda idea de extrañeza… los extranjeros, como lo ha demostrado la investigación antropológica, casi siempre son los acusados de tener poderes sobrenaturales”,91en este caso esta consigna se cumple del todo , ya que Cordelia es un personaje extranjero y tiene un poder sobrenatural, el de reproducirse a través de su reflejo. Cordelia hace su reaparición después de ser aislada con la finalidad de ser protegida de la crítica del pueblo y es entonces cuando sucede el hecho fantástico; los elementos que la autora utiliza para las reproducciones del personaje son simbólicos, el primero es el agua y ésta simboliza vida: “El día que fueron a traer agua a la fuente, Cordelia se sorprendió al ver por vez primera su rostro reflejado y comenzó a hablar consigo misma. A punto de retirarse del lugar, de la fuente salió el reflejo y adquirió cuerpo y alma”,92y el segundo es el espejo que representa lo siniestro: En el atrio habían colocado un enorme espejo antiguo, ante el cual enfrentaron a las niñas. Los reflejos adquirieron vida propia, y cuando estaban apunto de salir del azogue, Don Luciano aterrado lanzó una piedra rompiéndolo en pedazos que cayeron desparramados en el patio de adoquín. Brotaron tantas Cordelias como fragmentos de cristal había. 93

En esos fragmentos se presenta el suceso fantástico con la reproducción hiperbólica de las niñas surgida principalmente de los espejos, estos desde la

90 Idem. 91

Tobin Siebers, Lo fantástico romántico, p. 40.

92 Idem. 93 Ibíd.,

p.17.

30

antigüedad han tenido una connotación siniestra como lo menciona Román Gubern en Máscaras de la ficción:94 Al igual que la sombra, el espejo y sus reflejos poseen un denso contenido simbólico en muchas culturas…?ya que ? el reflejo revela el aspecto tenebroso del alma, coincidiendo con una interpretación psicoanalítica clásica del doble y la autoscopia, según la cual el doble sería una exteriorización de los aspectos negativos de la personalidad del sujeto, de su culpa o de lo reprimido, que se escinde en el espacio exterior como un yo autónomo, atormentando con su presencia al sujeto.” 95

Finalmente, la reproducción intenta ser detenida por los habitantes del pueblo ocultando todo aquello que pueda reflejar una imagen para evitar que las Cordelias se sigan reproduciendo. Como se pudo haber notado, el aislamiento que padece el personaje es tan sólo la antesala de la manifestación del hecho fantástico; de la misma manera, en el relato, la superstición toma un lugar importante para que lo fantástico suceda, ya que funciona como indicio de que el personaje tiene poderes sobrenaturales.

94 Román 95 Ibíd.,

Gubern, Máscaras de la ficción. España: ANAGRAMA , 2002. p. 20.

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“LA VENGANZA DE FLAUBERT ”: EL RESULTADO DEL ESCARNIO . 96

En este cuento los hechos se nos dan por un narrador personaje del q ue no se da a conocer el nombre, sólo se sabe que es un niño; éste padece el escarnio de su padre , ya que en todo momento el padre lo manda a buscarlo en alguna otra parte de la casa. El personaje siempre le obedece a pesar de la imposibilidad de dicha situación ; hasta que, una mañana, mientras desayunan en la terraza, el padre le manda a buscarlo en la recámara y cuando éste regresa le da la noticia de que esta vez sí lo ha encontrado, pero realizando un acto vergonzoso. La reacción del padre es ir hacia la recámara para ver qué es lo que estaba haciendo. En el relato la insistencia y la burla son elementos que propician el suceso fantástico; la primera se da cuando el padre manda insistentemente al hijo a buscarlo en otro lugar diferente del que se encuentra es lo que prepara el terreno para el suceso fantástico: Cuando mi padre estaba en el desván, solía mandarme a la cocina para que viera si él se encontraba allá… Insistía, me preguntaba si lo había buscado bien, y yo motivado por la duda, volvía al lugar para cerciorarme. Las idas y venidas podían repetirse tantas veces como mayor fuera mi angustia ante su desprecio por mi incapacidad para encontrarlo.97

La segunda da como resultado la aparición del doble, ya que al burlarse el padre de él: “‘¿No estoy allá? ¿Estás seguro? ¡Mira que eres un estúpido!’ Y diciendo esto soltaba una carcajada.” 98Otro día al mandarle nuevamente a buscarlo en la habitación se da el desdoblamiento del personaje: Hoy en la mañana, cuando desayunábamos en la terraza, mi padre me mandó a ver si él se enco ntraba en su recámara. Regresé corriendo y asustado le dije:

96 Fernández,

Vago espinazo de la noche., México, Ed. De la autora, 1975 p. 193. 98 Ibíd., p. 194. 97 Ibíd.,

32 sí, estás allá y lo que estás haciendo es lamentable y vergonzoso. No debiste mandarme a mirar eso. Jamás te perdonaré tan abominable acto.99

Lo que lleva a que la imposibilidad de la ubicuidad desaparece, se rompen los límites que la lógica propone y se vuelve posible la capacidad de poder estar en dos lugares diferentes al mismo tiempo, en este caso el desdoblamiento del personaje surge como resultado de la burla. Finalmente sólo queda la insinuación de la existencia del doble , ya que nunca se da a conocer alguna imagen que confirme su existencia pero tampoco se dice algo que nos haga dudar de ella: “Mi padre, turbado, enrojeció y rápidamente se fue a la recámara a ver qué era lo que él estaba haciendo allá y que a mí me había disgustado tanto.”100 Con lo que se apela a la incertidumbre , que es una característica propia del discurso fantástico. En este relato el uso del lenguaje es vital ya que la presencia del doble sólo se da a conocer por medio del uso de pronombres, verbos y adverbios: Mi padre me mandó a ver si él se encontraba en su recámara, estás allá y lo que estás haciendo es lamentable ?…? y rápidamente se fue a la recámara a ver qué era lo que él estaba haciendo allá y que a mí me había disgustado tanto.101

De esta manera el uso del lenguaje se es una forma de presentar la situación fantástica. Debido a lo corto de este relato todos los sucesos se dan a conocer de manera precisa y rápida y es con ayuda del uso del lenguaje con lo que predomina la incertidumbre en el lector lo que es una característica del relato fantástico.

99 Ibidem. 100

Ibidem.

101 Ibidem.

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C ONCLUSIONES Desde su aparición en el periodo romántico hasta nuestros días, el tema del doble es uno de los más interesantes dentro de la literatura fantástica, ya que en él se pone en escena la dualidad que siempre está presente en la vida del hombre y en su pensamiento, es decir, expone la existencia del cuerpo y el alma, de la vida y la muerte, de lo moral y amoral, del bien y del mal, lo interior y exterior, locura y cordura, etc., como una fragmentación de lo físico y la materialización de lo intangible. La existencia de la otredad es de lo más inquietante para el hombre y el creer en la posibilidad de la materialización de ésta le ha llevado a crear mitos en los que representa la fatalidad, la desventura o la muerte. En la obra de Adela Fernández , el doble es uno de los tantos temas que la autora trata; en ella la materialización de la alteridad sirve como medio para denunciar la marginación voluntaria o involuntaria a la que somete el hombre a sus congéneres; de igual manera, evidencia en el cuento “El hallazgo” el individualismo y el descuido en el que está cayendo el hombre moderno en especial el que vive en las grandes ciudades, ya que sólo se preocupa por sí mismo. Igualmente presenta el como la gente de escasos recursos se convierte en un desecho más de la ciudad con lo que pierde su calidad de humanos. De la misma manera en “Cordelias” pone en escena la superstición que se crea alrededor de los personajes extranjeros , a los cuales se les considera personas con capacidad de realizar actos sobrenaturales negativos en las comunidades en que llegan a radicar y, por otro lado, la reproducción hiperbólica del personaje le da un tinte siniestro al relato. Por último, en “La venganza de Flaubert” manifiesta la crueldad a la que está sometido el infante e n su propio hogar, ya que en él padece la burla, el maltrato y la falta de atención por parte de los padres y como la presencia

34

del doble no necesariamente debe quedar remarcada dentro del texto fantástico y solo basta con que quede sugerida por el narrador para así conservar la incertidumbre en el lector. En lo que respecta a las características propias del relato fantástico se encuentra por un lado la marginación un rasgo constante presentado en los personajes que se enfrentan

o presencian el suceso sobrenatural,

frecuentemente el personaje puede que no sea un marginado pero el mismo se aísla cuando esta en presencia del fenómeno; la soledad es una situación en la que están inmersos los protagonistas al momento de padecer la anomalía, con respecto a esto Flora Botton menciona que “Por lo general, los protagonistas de los cuentos fantásticos son seres solitarios, aislados, o si no lo son siempre en su vida, se encuentran solos en el momento en que se enfrentan al hecho fantástico.”102 Estos tres textos lleno s de crueldad y desesperanza padecida principalmente por personajes infantiles, presentan como espacios la ciudad y la provincia mexicana, con lo que queda clausurada toda esperanza

de

escapar a algún lugar donde se pueda encontrar una mejor forma de vid a. La brevedad es una característica principal de los relatos aquí expuestos ya que el más grande es de tres páginas y el más corto, esto obedece a que la autora sólo entrega al lector los datos necesarios sin rodeo alguno. De la misma manera, algunos de los protagonistas son sometidos por la crueldad de los personajes con quien conviven o por los ambientes y espacios en que se desarrollan, estas son dos características principales de los relatos de Adela Fernández los cuales son un claro ejemplo de la narrativa contemporánea y que merece mayor atención por parte de los críticos.

102

Flora Botton Burlá, Los juegos fantásticos, Op. cit. P.188

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ANEXOS A NEXO I Selección y valor de las inclusiones103 Adela Fernández Ante todo aclaro que no tengo formación académica, escribo por intuición, por inspiración, sin más conocimiento que la de observar la realidad y permitir que ésta vaya de la mano de mi fantasía, escribo por desahogo, porque deseo tender un puente entre mi intimidad y la percepción de algún lector lejano, yo también, como Gabriel García Márquez , escribo para que me quieran, contar historias que toquen el corazón de los otros es la mejor manera que he encontrado de no sentirme abismada. Claro que está por verse eso de que me quieran por mi literatura porque siendo ésta una constante denuncia del desamor, siendo que aborda personajes torturados por la vida misma, y son mis cuentos tan estridentes en sus reclamos, que no es precisamente amor a la escritora lo que inspiran. Incluso a mis cuentos les debo que la gente me califique de azotada, truculenta y desquiciante , y yo sostengo que no vivo como escribo, yo me muevo entre ternuras y voy hacia lo agradable, lo gozoso, quien me lee no lo adivina. ¿Qué clase de vida has llevado que escribes con dolor?, ¿por qué tanta amargura?, ¿de dónde te salen esas historias tan extrañas y retorcidas?, me preguntan con frecuencia. Debo decir que la primera sorprendida con mis cuentos soy yo misma, sin duda cuando escribo tengo una vena comunicante 103 Adela

Fernández, Selección y valor de las inclusiones, Tlaxcala, 2005.

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con el subconsciente, sin duda al escribir utilizo todo aquello que me ha impactado de la vida que vivo y de la que observo vivir, sin duda mezclo mis sueños con la realidad, para expresarme uso símbolos y metáforas. Cuando escribo acuden a mi mente recuerdos, imágenes que he visto, personas, olores, sensaciones, estados de inquietud, duda, sueños, ensoñaciones, ocurrencias, qué sé yo; todo al mismo tiempo brota como un paquetito. Es entonces en la reflexión donde yo bordo una historia, un cuento que contar y así, esto de ser cuentista, se convierte en un medio de conocerme a mí misma, para darme cuenta qué cosas de la vida cargo en mi memoria y sobre todo cómo han sido percibidas por mi sensibilidad. Así, voy conociendo qué es lo que me provoca una serie de emociones que muchas de las veces no son congruentes con lo que vivo al momento: comienzo a sentir una tristeza y no sé ni por qué o no comprendo por qué me duele el alma si todo está bien o traigo un coraje por algo que no logro definir. Resulta que son consecuencias de un acervo vivencial, esa carga que a pesar de mi esfuerzo por lograr el bienestar, persistentemente punza y duele. Percibo a mi mente como un gran receptáculo, una bodega, un archivo en completo desorden que me exige ordenamiento, distinción, discernimiento y sobre todo una visión comprensible para mí, esa visión es la literatura, es el cuento. Mis cuentos son un juego de rompecabezas en el que he acomodado las piezas fragmentadas, son un colage, son un bordado en el que tuve que elegir el color de los hilos consiguiendo los correctos matices para su narración. Con seguridad puedo decir que estoy marcada por el difrasismo del lenguaje culto de los antiguos nahuas, que usaban dos palabras para expresar con ellas una tercera idea, con niebla se podía describir el ambiente de una cumbre boscosa y con humo se aludía al fogón del hogar o a un incendio, pero decir humo y niebla significaba fama, otro ejemplo es sandalia para describir parte de un atuendo o hablar del caminante y ala para mencionar el vuelo del

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pájaro, pero al decir conjuntamente ala y sandalia significa libertad, el más conocido de los difrasismos nahuas es flor y canto para definir la palabra poesía. Resulta que mi mente al mezclar un sueño con una realidad vivida me da como resultado un cuento, enlazo un recuerdo con otro, mezclo a dos personajes conocidos en distintas épocas y los coloco en una circunstancia que habrán de compartir, acudo a situaciones que correspondieron a dos hechos y que juntas dan la descripción a un tercer hecho distinto, de mayor significado. Si quiero describir las emociones infernales de un personaje agobiado por su trabajo burocrático y por el hervidero de hijos que no lo dejan descansar en su casa, narro cómo el suelo de su oficina se convierte en zona pantanosa y cunden los mosquitos en su hogar. Si los analíticos de la literatura me califican de surrealista, o creen que el personaje es esquizofrénico, o que la autora desborda esquizofrenia pura, como lo han dicho, pues bueno este es un buen tema, es un buen material para otro cuento. Lo que a mí me fascina en la literatura es el desencadenamiento de ideas, emociones y sensaciones que nos llevan a la reflexión. Un día visitando un orfanato observé a un muchacho como de veinte años quien estaba barriendo el patio, físicamente se veía cargado de tristeza, su flacura mostraba una dolencia crónica, su mirada divagaba, “es el bobo de la escuela, me dijo el con serje, de niño cometió la pendejada de tragarse unas bolas de mezcalina y se le evaporó el cerebro, para lo único que sirve es para barrer, aquí está, así sigue, así seguirá siempre, barriendo”. Salí de ahí preguntándome en que pensaría ese joven autista, me estremecen los autistas, cuarenta años después, leo en el periódico la nota sobre el suicidio colectivo de unos niños en un internado, decido escribir un

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cuento, incluyo al bobo en el grupo de los niños suicidas, incluyo mi propio recuerdo cuando siendo niña, en un acto de profunda desolación, me tragué una vasta cantidad de éter, y por supuesto, incluyo la sensación de que se me evaporaba el cerebro, incluyo la experiencia de un amigo que ingirió peyote y le provocó una gran sed de Dios y en su viaje ascendió al universo a buscarlo, incluyo maravillosas fotografías del cosmos que recientemente había yo visto en una revista, resultado de esas inclusiones mi cuento: “Vago espinazo de la noche ”.104 Las ideas y emociones pueden tardar mucho en madurar, pero siempre han de salir a la luz de la reflexión, muchas veces de forma inesperada. Para mí entre todos los géneros literarios el cuento es el más espontáneo. Una sola única vez escribí un cuento por encargo para una revista temática, me pidieron un cuento sobre la indiferencia en la pareja humana; había fecha de entrega, había prisa, contra el reloj hice grandes esfuerzos y no supe cómo abordar el tema, fallé con la entrega y no fue hasta meses después que regañando a una amiga por tolerar a su marido desamoroso surgió el hilo conductor para un cuento sobre la displicencia matrimonial: “para él eres un mueble”, le dije, “es tan indiferente que si te faltara una mano no se daría cuenta”. Ese fue el punto, el hilo para bordar, “Ana y el tiempo” 105. Después de quince años de casados el marido se da cuenta que su mujer es manca, no sabe si cuando se casó con ella tenía o no tenía mano izquierda, no sabe si perdió la mano después, durante los años que llevaban de casados. ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Lo saben sus hijos? ¿Quién es esa Ana con la que ha convivido quince años? ¿Por qué se casó con ella?, y este hombre indolente en secreto, para no dejar ver su displicencia se dedica con obsesión a buscar en 104 Adela 105 Adela

Fernández, “Vago espinazo de la noche”, en Vago espinazo de la noche, DF:,Aliento, 2005, p. 8. Fernández, “Ana y el tiempo”, en Duerme velas, DF, Katún, 1986, p. 85.

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fotografías la presencia o la ausencia de esa mano, en vano porque en todas las fotos Ana aparece en perfil derecho, él habla disimuladamente con familiares y amigos, sin encontrar jamás respuesta, recorre todos los lugares por los que anduvo con su esposa. Para alargar la búsqueda obsesiva en el cuento, incluyo el rostro de una amiga mía que unos días es bellísima y otros horrorosa, y al no poder uno definirla resulta a la vista misteriosa y ambigua, incluyo un nocturno de Chopin, que estaba oyendo mientras escribía, para narrar la escena donde él, el marido, la descubre manca al tocar el piano con una sola mano, incluyo un barco de armar, mi tío Fernando siempre tenía estos juguetes donde la familia se reúne para armarlos, imagen que hace muy visible la carencia de mano de Ana, incluyo un viaje mío, a Valle de Bravo, para poder describir el paisaje, incluyo una noche lluviosa en que a punto de arrancar mi coche una mano se pegó al parabrisa, era la de un amigo que se acercó a despedirse pero el impacto fue espantoso, incluyo una mano de bronce de aquellas aldabas antiguas que uso al final del cuento, el personaje ha perdido las llaves de su casa, éste también es un símbolo, y tiene que llamar para entrar, al tocar la mano de bronce ésta se vuelve cálida, latente, viva, de carne, simboliza el grito de Ana: “yo estoy aquí, estoy viva, veme, estoy viva”, al menos el marido en su búsqueda ha roto su indiferencia y recobra la calidez, se ha humanizado. Como ven el cuento es una expresión que brota, van estallando venitas y se forma el charco de sangre, se enlaza una experiencia con otra, se hace urdimbre, se logra un bordado. Para que el escritor encuentre las situaciones necesarias para argumentar y dar acción a su narración debe contar con un acervo de experiencias , es de este fondo de donde, la labor narrativa, tomará lo necesario. Es por ello que a los escritores jóvenes les aconsejo no preocuparse por escribir, si tanto más, si no más por vivir las vivencias, y la observación de los

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hechos, y de la conducta humana son la sangre con la que se carga la pluma. Hay que vivir con intensidad, hay que observar la vida de los demás con atención, hay que aprehender, capturar experiencias y confiar en la memoria; los recuerdos, los impactos, las huellas salen a brote durante la labor creadora, es en la selección y uso de las experiencias donde hay que poner sensibilidad y talento.

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106Adela

Fernández: Vago espinazo de la noche (México DF. Ed de la autora, 2005), pp.219-223.

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107 Adela

Fernández: Duerme velas (México DF., Katun, 1986), pp. 13-17

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108 Adela

Fernández: Vago espinazo de la noche (México DF. Ed de la autora, 2005), pp.193-194.

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56 ÍNDICE

INTRODUCCIÓN

1

C APITULO I Contexto literario La generación del medio siglo

3

Breve recuento de la literatura fantástica en México

6

C APITULO II Adela Fernández: vida, obra y crítica Vida y obra

10

Crítica

11

C APITULO III Literatura fantástica y Marco teórico sobre la temática del doble. 3.2 La literatura fan tástica

15

3.3 La temática del doble

18

3.3.1 Tipologías

20

C APITULO IV Análisis de los cuentos con la temática del doble . “ EL HALLAZGO ” O EL ENCUENTRO CON LA MUERTE

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57

“ CORDELIAS”: LA REPRODUCCIÓN HIPERBÓLICA

27

“LA VENGANZA DE FLAUBERT”: EL RESULTADO DEL ESCARNIO

31

CONCLUSIONES

33

ANEXOS

ANEXO I

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ANEXO II

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BIBLIOGRAFIA

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HEMEROGRAFIA Y FUENTES DE INTERNET

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